Historia Tradicional de la Orden Rosacruz AMORC

Historia Tradicional de la Orden Rosacruz AMORC.
Año Nuevo Rosacruz 3368
Estimados amigos y hermanos en el sendero, tradicionalmente los Rosacruces siempre
hemos señalado el equinoccio de primavera como el inicio del nuevo año. Es en el
momento preciso cuando el Sol penetra en el signo zodiacal de Aries que nuestra Orden
sitúa oficialmente el inicio del Nuevo Año Rosacruz. La razón es porque marca el fin del
invierno y el principio de un nuevo ciclo natural. En el hemisferio Norte, corresponde a una
renovación de la Naturaleza. Es en esta época cuando los árboles y las flores recobran su
vitalidad y dan al paisaje una belleza resplandeciente. Mientras que en el hemisferio Sur,
este periodo del año coincide con el Otoño y se traduce en cambios diferentes.
Se le llama equinoccio porque la duración del día y de la noche es igual; en cambio, en el
solsticio de invierno la permanencia de la noche es mayor que la del día; y por el contrario,
en el solsticio de verano, la duración del día es mayor que la de la noche. Entonces
equinoccio es “día igual”.
En todos los Centros Culturales Rosacruces afiliados a la A.M.O.R.C. los miembros de la
fraternidad se reúnen para celebrar el inicio de este nuevo ciclo.
Este año, el equinoccio de primavera ocurrirá a las 16:45 horas del viernes 20 de marzo
(hora del centro de México), cuando el sol arribe al punto cardinal Este.
Reciban todos nuestros hermanos y amigos nuestros mejores deseos de bienestar y plenitud
para este próximo año rosacruz 3368 que está por iniciar.
Sincera y fraternalmente
Gran Logia AMORC Jurisdicción de Habla Hispana para las Américas A.C.
La Historia Tradicional de la Orden Rosacruz AMORC, viene en el libro: "Preguntas y Respuestas
Rosacruces, con la historia completa de la Orden Rosacruz". (capítulo I).
La Orden Rosacruz tuvo su tradicional concepción y nacimiento en Egipto, en las actividades de la
Gran Logia Blanca.
En Egipto estaban en la XVIII dinastía y habían alcanzado un muy alto nivel de civilización y
adelantada cultura, comparable tan sólo con el renacimiento europeo.
A los once años de edad se coronó como Faraón a Amenhotep IV, a quien debemos las filosofías y
escritos admirables, usados tan universalmente en los trabajos de Logia, en todos los países del
mundo entero.
Nacido en un país donde las gentes estaban dadas a la idolatría y cuyos principales esfuerzos se
contraían a construir templos dedicados a toda clase de dioses, es fácil comprender su actitud
respecto a la religión o religiones dominantes, después de haber sido iniciado enteramente en la
secreta filosofía. Era de agudo entendimiento, y a los quince años de edad compuso algunos de los
bellísimos salmos, oraciones e himnos que aun hoy se usan en la Orden, así como también
contribuyó al adelanto de la filosofía y las ciencias.
A continuación un fragmento de uno de los muchos himnos escritos por Amenhotep IV, y cantados
a la gloria del Dios único:
¡Qué múltiples son tus obras!
Están ante el hombre escondidas
¡Oh Dios único!, a cuyo lado
No hay otro ninguno.
Tú creaste la tierra
Según tu corazón.
Recibió la inspiración de abolir el culto de los ídolos y sustituirlo por la religión y culto de un solo
Dios, de una suprema Deidad cuyo espíritu residía en el cielo y cuya manifestación física era el Sol,
el símbolo de la Vida, en consonancia con las doctrinas Secretas; y así cambió el culto al Sol como
un dios al culto del Único Dios simbolizado por el Sol. Tal fue el comienzo del monoteísmo en
Egipto, y el origen de la adoración de una deidad espiritual que existía en todas partes y en todas
las cosas, pero que no era nada de la tierra, es decir, que no tenía existencia física terrenal en la
forma de imágenes inanimadas construidas con diversos materiales.
Amenhotep IV cambió su nombre que significaba “Amón está satisfecho” por el de Akhnaton o
Akhenaton, que significa”piadoso con Aton” o “Gloria a Aton”. Construyó un templo en forma de
cruz para la Hermandad y añadió la cruz y la rosa como símbolos. (Año 1353 a. de c.).