globeras - Ultramagic Experience

Anuncio
en directo
“globeras”
a favor
del
vient
Las hermanas Lladó comparten una pasión: pilotar globos aerostáticos.
Con ellas nos hemos subido a la cesta para hacer (sin vértigo)
un reportaje de altura. por Merecedes Goiz /Fotos: paola de grenet
Montserrat, adriana
y neus lladó.
L
as Lladó son herederas de una afición genética que
las ha llevado a crecer, y casi a nacer, a lomos de un
globo. “Tenemos la suerte de que a nuestro padre
le encanta viajar y compartirlo con la familia. Casi
nacemos en un globo, si no fuera porque mi madre
padece vértigo. Con dos años, como no llegábamos para asomarnos, nos poníamos a mirar por los agujeros de la cesta. De hecho,
nos hemos sacado el título de piloto antes que el carné de conducir”, dice Montse, la segunda de las cuatro hermanas.
Son las siete de la mañana de un sábado de verano y la ciudad
de Igualada, donde se celebra el festival europeo de globos aerostáticos, no se ha despertado aún. Sin embargo, en esta pista
de despegue bulle la actividad y el parte de vientos anuncia una
mañana perfecta para la competición. “Los globos de aire caliente funcionan mejor y con más seguridad cuando las condiciones
atmosféricas del aire son secas y estables, con vientos ligeros”,
nos explica José María Lladó, organizador, alma mater del evento y padre de las únicas mujeres que pilotan a nivel deportivo
globos aerostáticos en nuestro país.
Tras la liebre. Montse y Adriana Lladó, junto a su
madre Neus Gambín, bajan de la “pick-up” (a la que hace poco
han incorporado un sistema automático para subir y bajar la
barquilla, o cesta) todos los componentes del sencillo y pesado
sistema que conforma un globo aerostático: los quemadores, las
bombonas, la cesta, los amarres, la vela... Solamente la tela puede
llegar a pesar 300 kilos, aunque la suya, que es de un tamaño de
globo mediano, no pasa de los 80. Ejecutan el ritual con rapidez
y precisión, haciendo gala de conocer el oficio. Mientras Adriana, su madre y otros miembros del equipo enganchan la
montse ha hecho
barquilla y abren la boca de la
un master de
vela, Montse la ahueca con el
piano en londres
aire de un enorme ventilador
y es concertista;
neus es ingeniera para insuflarle las imponentes
llamaradas de fuego que proaeronáutica y
pulsadas por el propano conadriana estudia
seguirán que se eleve.
lo mismo.
Nos subimos a la cesta justo
en el último minuto antes de soltar cuerdas y somos casi las últimas en despegar. La mayoría de los aerostáticos ya han elevado
vuelo tras “la liebre” (la presa), un globo que marca el pistoletazo
de salida de la competición y al que no hay que perder de vista
en toda la travesía. Cuando aterriza “la liebre” señala el objetivo
de la prueba, una diana a la que los globos han de acercarse al
máximo, y lo antes posible, para lanzar el testigo, que da fe de la
pericia de cada equipo.
Nos elevamos de un tirón y, a medida que las personas, vehículos
y casas se empequeñecen, aumenta la quietud. Sobrevolamos la
ciudad aún dormida. Los tejados de los edificios, la ropa tendida,
las casas con piscina, los contenedores de basura con sus tapas
de distintos colores, todo parece de juguete, piezas de un lego
perfectamente ensamblado. Solo el ladrido de algunos perros y
los rugidos de los fogonazos que Montse acciona en el quemador para pilotar el globo rompen la paz del amanecer.
“Estamos haciendo un vuelo raso por Igualada, que es el que »
.
7:00 h hangar
En el
7:30 h.nchando
Enga
uilla”
la “barq
7:30 h. ando
Hinch
la vela
00 h. hangar
En el
8 h.
7:00 h. Adriana,
Constanza (la pequeña
de las hermanas lladó),
Montse y, detrás, Neus
y el padre , Jose María
Lladó, en el hangar de
UltraMagic, la empresa
que fabrica y distribuye
aerostáticos en todo el
mundo.
7:30 h. montse lladó
engancha la barquilla
(cesta).
7:45 h. la “globera”
ahueca con el aire de
un ventilador la vela.
8:00 h. El resto de
competidores también
insufla el fuego con
propano para conseguir
que se eleve el globo.
l globo
sa
Pasajero
18 de agosto de 2012
mujerhoy.com1117
en directo
» me más me gusta, porque te permite rodar a centímetros de
la superficie –dice Montse–. Espero que no despertemos a la
gente con el ruido”. Mientras contemplamos el pico de Montserrat, nos cuenta que hace tan solo dos días que ha regresado de
Taiwán adonde ha viajado con su padre para llevar dos globos.
Nos habla de los paisajes fantásticos que ha visto: arrozales infinitos, montañas escarpadas sobre exuberantes valles. “Mi padre
siempre nos lleva a alguna en sus viajes. Esta vez he sido yo, pero
el año pasado le tocó a Neus, la mayor, ir al Kilimanjaro”.
8:30 h. Los
aerostatos
empiezan a elevarse.
8:45 h. la tierra
está cada vez más
lejos.
9 h. Adriana, y
montse vuelan
sobre igualada.
10 h. aterrizan
en un campo al lado
de la carretera y
les recoge la madre
con la “pick-up”.
10:30 h.
guardando las
bombonas.
n
.
8:30 h za la competició
Empie
8:45 h. vez más alto
Cada
9 h.
l cielo
e
Cerca d
10 h.
ate”
El “resc
18
mujerhoy.com 18 de agosto de 2012
Del cielo al piano. Montse acaba de termi-
nar un master de interpretación de piano en el Trinity College
de Londres. Ahora piensa instalarse en Barcelona y desarrollar
su carrera como concertista. Todas las hermanas Lladó han estudiado la carrera de piano, ella es la única que va a dedicarse
profesionalmente a la música. “Además de piano, cada una de
nosotras ha estudiado un segundo grado de otro instrumento.
Neus, el violín, Adriana, la guitarra y yo, el clarinete”.
Por culpa de la charla hemos perdido de vista a “la liebre”.
Montse –que confiesa que le gusta volar sola– llama a Adriana
para preguntarle si desde su globo lo han visto. Pero “la presa”
ha aterrizado ya y, para cuando divisamos la diana, una cruz de
unos cuatro por cuatro metros dibujada con cinta roja en un
campo contiguo al del despegue, nos hemos pasado de largo
para tirar el testigo y puntuar, así que decidimos aterrizar. “Es
que ahora es difícil corregir. Pero, bueno, me lo tomo con calma”, concluye estoicamente nuestra joven “globera”, mientras
inicia el descenso tirando con una cuerda de la válvula del paracaídas, de forma que entra aire de fuera, enfría la vela y así va
perdiendo altura.
Aterrizamos suavemente en
“el año pasado
un campo al borde de la casobrevolé el
rretera, de pie. Casi al mismo
kilimanjaro
tiempo acuden al rescate con
en globo con
la “pick-up” Neus y Adriana
mi padre –dice
para plegar y recoger el maneus–. hemos
terial y llevarnos a desayunar
sido los únicos
de nuevo a una masía cercaen la historia”.
na. “Durante las competiciones comes todo el tiempo porque desayunas dos veces, comes,
meriendas tras la necesaria siesta, vuelas a última hora de la
tarde y, claro está, cenas después”, nos explica al volante Neus
Gambin, la madre, que reivindica su miedo a volar a causa del
vértigo en una familia que vive del aire. Ella es quien dirige la
operación “rescate”, función que para ella es tan importante,
arriesgada y emocionante como volar. “Perderlo de vista puede
ser fatal pues, si el vuelo es al atardecer, la noche puede sorprenderte en un lugar inaccesible, sin cobertura, y complicar la
tarea de recogida”.
Neus hija se reúne con nosotras más tarde. Hoy no vuela porque
tiene una boda en Barcelona. Con 25 años, es ingeniera aeronáutica y vive en Puertollano, donde trabaja preparando el Demos
2, un satélite de observación de la Tierra que se lanzará en 2013.
Al igual que a sus hermanas Adriana y Montse, le gusta pilotar
sola. “Normalmente hablo mucho, pero cuando vuelo no. Me
gusta hacerlo en silencio”. Durante la entrevista sostiene que la
elección de la ingeniera aeronáutica no tiene nada que ver
con dirigir un globo –“es como
diseñar un avión o pilotarlo”–,
pero al final reconoce que su
perspectiva facilita mucho
la tarea. “Durante la competición tienes una subida de
adrenalina –dice Neus– porque has de concentrarte a fondo e ir con la mente clara para
controlar la dirección de los vientos, elegir tu campo de salida,
manejar el altímetro y el GPS. Hay que tener mucha precisión;
a veces errar o acertar las pruebas es cuestión de pocos metros.
Es lo que más me gusta en el mundo, volar en globo”.
La aventura. Hablamos de la parte aventurera y
Fotograf: Pelle Bergström
viajera que tiene este deporte y de su buena suerte al acompañar
a su padre el verano pasado a Tanzania. “Sobrevolar el Kilimanjaro a 7.300 km de altitud ha sido una experiencia maravillosa.
Además, hemos sido los únicos en conseguirlo. Otros lo habían
intentado antes, pero se quedaron a unos ocho kilómetros de
la cima”. ¿Repetirá? “No creo, porque la preparación que exige
una expedición como ésta es tremenda: conseguir los permisos,
trasladar los globos, encontrar el día preciso para despegar. Es una de esas cosas
que haces una vez en toda tu
vida y ya está”.
Sin embargo, puede que
.
10:30 h ando
Neus se equivoque. En 1978
Guard
s
a
n
o
b
un intrépido joven de Igualam
las bo
da, Jose Mª Lladó, su padre,
decidió que quería subir en moto el Kilimanjaro. Y lo consiguió.
Nadie más lo ha vuelto a lograr. Dos años después, con un grupo
de amigos, aventureros y locos como él por el continente africano, decidió emular a Julio Verne y dar la vuelta en globo de costa
a costa en cinco semanas. La expedición duró 11 meses y en los
40 vuelos desde Zanzíbar, en Tanzania, hasta Kisiangani, en el
Zaire, se fraguó lo que hoy es Globos Ultramagic, una empresa
familiar que construye todo tipo de aerostáticos y los distribuye
por todo el mundo.
Adriana, que tiene 21 años y es la que más carácter muestra de
las cuatro hermanas, estudia también ingeniería aeronáutica,
como su padre y Neus. No tiene aún claro por dónde enfilará
su carrera pero, sin duda, estará relacionada con las pasiones
familiares: el cielo y la aventura. ¿Quién dijo miedo? n
3 bolsas de
leche terapéutica
Forsman & Bodenfors
5,40€
1.000 sobres de
sales de rehidratación oral
58€
90 vacunas contra
el sarampión
20€
1.000 lápices
15€
10.000 pastillas
potabilizadoras
de agua
44€
Escuela en
una maleta
173€
Tratamiento antimalaria
para 30 niños
23€
50 bolsas de alimento
terapéutico listo para comer
54€
Sorprender a una persona especial con un regalo
que le guste es emocionante, cambiar la vida de
un niño con ese mismo gesto es una experiencia
única. Ahora con el Regalo Azul de UNICEF puedes
hacerlo. Un sólo gesto, dos sonrisas.
Entra en regalo.unicef.es, escoge un producto y
nosotros se lo enviaremos a los niños que más lo
necesitan. Además, esa persona especial recibirá
una tarjeta que le informará del magnifico regalo
que has hecho en su nombre.
Tus regalos llegarán muy lejos
Descargar