Boletín de Lecturas Sociales y Económicas • UCA • FCSE • Año 2 • N° 7 El Régimen Penal Tributario-Previsional y el Desempeño de los Auditores Externos y Síndicos. por Alberto Carlos Troiano 1) INTRODUCCION Art. 12. " Cuando se trate de personas jurídicas de derecho privado, sociedades, asociaciones u otras entidades de la misma índole, la pena de prisión por los delitos previstos en esta ley corresponderá a los directores, gerentes, síndicos, miembros del consejo de vigilancia, administradores, mandatarios o representantes que hubiesen intervenido en el hecho punible". El presente trabajo tiene por finalidad, concientizar a aquellos colegas, especialmente jóvenes graduados o a quienes no ejercen habitualmente la función de auditoría de estados contables y/o sindicatura de empresas, y naturalmente alumnos respecto de las materias que contemplen estas cuestiones, de las graves responsabilidades y muy severas penas previstas en la norma que estudiaremos. En efecto, la Ley Penal Tributaria y Previsional Nro. 23.771 (ya que esta es su denominación completa), promulgada el 27/2/90; y modificada en algunos aspectos no esenciales por la Ley Nro. 23.871 promulgada el 31-10-90, es fuertemente represiva, incorporando la pena de prisión en casi todos sus artículos -que va desde 15 días hasta 8 años según la gravedad de la falta-, a quienes cometan delitos que comporten un perjuicio patrimonial al erario tanto de tipo impositivo como previsional, cuyas principales figuras son: doble contabilidad; declaraciones, liquidaciones, registraciones contables o balances engañosos o falsos; no emisión de facturas o documentos equivalentes cuando hubiere obligación de hacerlo; omitir inscripciones o presentación de declaraciones juradas; no actuar como agente de retención o percepción; sobre o subfacturaciones o valuaciones; etcétera. Art.13. "A los funcionarios públicos, escribanos, contadores públicos, o apoderados que a sabiendas dictaminen, informen, den fe, autoricen, o certifiquen actos jurídicos, balances, cuadros contables o documentación para cometer los delitos previstos en esta ley, se les aplicará, además de la pena que les corresponda por su participación criminal en el hecho, la de inhabilitación por el doble de la condena." Los párrafos destacados en ambos artículos son nuestros. En los capítulos siguientes, se tratarán las principales características de las actividades profesionales del título, y en especial, lo concerniente a cómo actuar de manera correcta, a fin de evitar quedar involucrados en las figuras delictivas que prevé la ley. Por lo que respecta a nuestra profesión, la ley efectúa precisas menciones en dos artículos que, para mayor ilustración del lector conviene transcribir íntegramente. Ellos son pues: Finalmente, el autor desea dejar constancia de lo útil que fue para él asistir a una Media Jornada que, sobre este mismo tema, se desarrolló en el Consejo Profesional de Ciencias 31 Boletín de Lecturas Sociales y Económicas • UCA • FCSE • Año 2 • N° 7 Económicas de la Capital Federal, coordinada por el Dr. C. P. Ignacio González García y con la participación de los Ores. Cs. Ps. Juan C. Repila y Jorge Voss. opiniones vertidas en su informe. El profesional deberá proceder conforme el principio de economía aplicable a todo control (RT7, II, B, 4), esto es, concentrar esfuerzos en aquellos aspectos que sean significativos. Recordamos de paso, que la aplicación de este principio se logra mediante la verificación de la existencia y satisfactorio funcionamiento de los llamados controles clave. Allí tomamos conciencia de la importancia de esta problemática -cuyos principales temas han sido recogidos casi fielmente en las líneas que siguen-, así como la necesidad de proceder por todos los medios posibles a su divulgación. Esta última circunstancia, unida al haber advertido en colegas y alumnos no poca ignorancia y hasta sorpresa y preocupación en algunos casos, nos movió a prepararar el muy modesto trabajo que ahora ofrecemos, esperando así cumplir un servicio de advertencia, al par que ilustrar y orientar. f. Los papeles de trabajo (RT7, B, 3), son el medio de prueba por excelencia para justificar el desempeño de su tarea de acuerdo con normas profesionales, debiéndose conservar los mismos por el plazo que fijen las normas legales o por seis (6) años, el que fuera mayor (RT7, B, 8.). Los papeles de trabajo (o legajo de antecedentes y tareas referido a determinada labor profesional respecto de un cliente) deben, según las normas, contener mínimamente los siguientes aspectos: planeamiento, descripción de lo realizado, documentación y demás información reunida vinculada con cada componente de análisis, elaboraciones del propio auditor (cálculos, análisis, resúmenes, referencias, etc.) y, finalmente, conclusiones en particular y general. 2. ACTUACION DEL CONTADOR PUBLICO COMO AUDITOR EXTERNO El profesional deberá tener presente en relación con su desempeño, las siguientes cuestiones: g. Resulta de suma importancia que los profesionales conozcan muy bien las Normas de Auditoría vigentes en sus respectivas jurisdicciones. Esta cuestión que casi parece obvia, a menudo o es descuidada o bien se ignora, producto muchas veces de la actividad del colega alejada de la auditoria o sindicatura de sociedades. (Muchísimos aspectos contenidos en la RT7, son de aplicación al desempeño de un síndico; por ejemplo, todo lo dicho en el apartado precedente). 2.1. En general: a. Cuando el contador público emite una opinión o realiza afirmaciones sobre estados contables u otra documentación en general, se está pronunciando sobre instrumentos que han sido preparados y son de propiedad de un ente (su cliente), respecto de los cuales él es ajeno. b. Debe recordarse que los estados contables no son exactos sino RAZONABLES. Esto supone que ellos son producto de ponderaciones, estimaciones, juicios de valor, a través de los cuales se habrá procurado superar de la mejor forma posible las incertidumbres que naturalmente afectan a la mayoría de las mediciones contables. h. Los profesionales deben cumplir también una función educativa respecto del medio en el cual se desempeñan: pensamos en la comunidad de negocios usuaria de los distintos informes y /o certificaciones que son emitidos por ellos, y muy particularmente con relación a ley que tratamos, jueces y abogados. En efecto, no siempre se conoce bien cuál es el vínculo del profesional actuante como auditor externo con relación a la documentación que se le solicita dictamine o certifique (más adelante se volverá sobre esta importante cuestión). Por de pronto, adelantamos que hay dos formas de cumplir aquella función divulgatoria: a) A través de los Consejos Profesionales, mediante publicaciones y conferencias. En este sentido, el Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal lo ha hecho y lo continúa haciendo. Por ejemplo, resulta oportuno citar un trabajo muy esclarecedor producido por la Comisión de Estudios de Auditoría: "Informe N° 21 - El Contador Público Independiente y la Comunidad de Negocios - Un Análisis sobre los aspectos trascendentes de esta relación" (Abril 1993); y b) Mediante la emisión de los llamados "Informes educativos, didácticos o de divulgación", en los cuales se explicita de manera sintética y precisa el susodicho vínculo y las características esenciales de la labor desarrollada. Como se comprenderá, estas cuestiones resultan decisivas en función del riguroso marco legal que tratamos, a_ efectos de deslindar claramente las responsabilidades y deberes que las normas imponen a cada sujeto actuante. c. La condición básica e indispensable para el ejercicio de la auditoría -cualquiera sea el campo de actuación o forma de desempeño-, es la independencia con relación al sistema objeto de la auditoría (Primera de las reiteradas menciones referidas a esta trascendente cuestión, contenidas en la Resolución Técnica Nro. 7 de la F.A.C.P.C.E. Normas de Auditoría-, puesta en vigencia para los matriculados en la Capital Federal por la Resolución Nro. 267/85 del C.P.C.E.C.F.; en adelante RT7). Parece oportuno aclarar: independencia intelectual y funcional respecto de los sistemas; y económica, consanguínea y por afinidad con respecto a las personas que los operan y/o tienen poder decisorio en ellos. d. La tarea de auditoria se desarrolla siguiendo normas aprobadas por los Consejos Profesionales de cada jurisdicción, siendo obligatoria su observancia por los profesionales inscriptos en ellas. En la Capital Federal como recién quedó dicho, rige la RT7 convalidada por la Res.C.267/85. e. La tarea a realizar se orienta hacia la obtención de elementos de juicio válidos y suficientes, permitiéndole así al profesional fundamentar consistentemente las 32 Boletín de Lecturas Sociales y Económicas • UCA • FCSE • Año 2 • N"7 2.2. Con relación a la ejecución y documentación de la tarea de auditoría pero sobre todo haciéndole entender que no se trata de ninguna responsabilidad adicional, sino como el mismo nombre lo dice, confirmar cuestiones que naturalmente debieron explicitarse, y que ahora se presentan sistemáticamente a modo de resumen, facilitando así un repaso del cuadro general de la tarea, ayudando a ambas partes -cliente y profesional- a no olvidar ninguna cuestión relevante que pueda comprometerlos. (En el capítulo 4. de este trabajo, se desarrolla ampliamente todo lo atinente a la obtención de este importante elemento de juicio adicional). a. El régimen penal tributario y previsional vigente, no requiere que se efectúen cambios en las actuales Normas de Auditoria (RT7). Sí en vez requiere, a nuestro entender, que ellas sean cumplidas. En efecto, baste con recordar o repasar sus contenidos, para advertir lo suficiente de sus sabias disposiciones, tendientes a guiar y a orientar al profesional a fin de neutralizar todo lo posible el llamado "riesgo de auditoría". (Ver por ejemplo, la parte III, B, "Normas para el desarrollo de la Auditoria", que constituye toda una precisa metodología de desempeño. Metodología = camino a seguir). b.4. Tal como se expuso en el punto 2.1.f., toda la tarea debe quedar claramente documentada en papeles de trabajo, obrando éstos como medio de prueba de que el auditor procedió de manera racional y sistemática. b. Sin embargo, atento la naturaleza de los requerimientos de la ley que tratamos, resulta de especial importancia no omitir los siguientes pasos: En tal sentido, se considera altamente recomendable, teniendo en cuenta el tema sub-examen, que los programas de trabajo contemplen la existencia de procedimientos de revisión encaminados a detectar la eventual existencia del tipo de irregularidades mencionadas en la ley. b.l. La emisión de una "Carta Convenio" o "Contrato de auditoría", en la que se defina lo mejor posible: objetivos, alcance, y servicio profesional a brindar. c. En aquellos casos en que el auditor externo no ejerza también la asesoría impositiva y/o previsional de su cliente, o que en estas cuestiones advierta la existencia de situaciones de cierta complejidad (juicios y/o reclamos de i mportes y/o inspecciones en curso), que superen sus conocimientos por no ser él un especialista, es conveniente estudiar detenidamente cada tema y, de considerarlo necesario, entrevistarse con el colega experto, solicitándole explicaciones y/u opinión por escrito. b.2. La evaluación del sistema de control interno relacionado con la determinación, registración, devengamiento y cancelación de las obligaciones tributarias y previsionales. En este sentido, el auditor evaluará si las decisiones sobre política tributaria y previsional son tomadas por los máximos responsables del ente, y si quedan debidas constancias de ello mediante adecuada documentación. Por -ejemplo, autorización de borradores de declaraciones juradas, minutas contables, etcétera. d. Finalmente, conviene recordar las siguientes cuestiones clave que le permitirán al auditor ubicarse estratégicamente en el contexto de la empresa cliente, y así delinear de la manera más eficaz y eficiente posible el alcance de sus procedimientos. Así entonces: b.3. La obtención de la confirmación escrita de la dirección del ente ( también denominada Carta de Gerencia o mediante el acrónimo C.E.D.E.), de las explicaciones e informaciones oportunamente suministradas al auditor durante el desarrollo de su tarea (RT7, B, 2.5.12.). d.l. Tratar de obtener el mejor conocimiento posible del ente en cuestión, esto es, comprender -en terminología de la obra de Slosse-, el negocio, la actividad total que desarrolla el cliente; Este procedimiento, a menudo omitido, adquiere, bajo el contexto normativo que se estudia, especial importancia, ya que la obtención de la misma, -sin suplir ningún otro procedimiento de auditoría que deba aplicarse-, refuerza notablemente las evidencias que obtiene el auditor, además de probar que actuó con la debida diligencia profesional al cumplir con lo que prescriben las normas de auditoría. d.2. Evaluar el control interno vigente; pero particularmente en lo que concierne la actitud de los dueños y/o directivos y/o gerentes, frente a las normas de la ley que se estudia: adhesión plena a ella o mentalidad evasora. d.3. Evaluar consecuentemente, el grado de las distintas naturalezas de riesgos que acechan la tarea: inherentes (como el recién expuesto, en caso de existir la segunda de las actitudes) o, de control, cuando fallan los sub-sistemas administrativo-contables de captura de información y adecuado y oportuno registro. Cabe agregar, que el otorgamiento de este documento por parte del cliente puede ofrecer resistencias, ya motivadas por ignorar su naturaleza y alcances, ya porque han existido falsedades u omisiones no sinceradas oportunamente al auditor. Como se ve pues, este documento constituye un complemento indispensable para perfeccionar la tarea del profesional, y además un reactivo que permite probar si el cliente está procediendo con honestidad. d.4. Luego de ponderar las circunstancias mencionadas en los puntos precedentes, planificar por escrito los componentes más sensitivos a examinar -para el tema que se estudia todas las cuentas vinculadas con créditos y deudas impositivas, previsionales y sociales-. estableciendo los procedimientos y el alcance más conveniente a dar a los mismos. También en este aspecto, el auditor debe realizar nuevamente una "labor educativa", instruyendo a su cliente acerca de la finalidad que cumple este documento, 33 Boletín de Lecturas Sociales y Económicas • UCA • FCSE • Año 2 • N° 7 2.3 Con relación a la preparación de informes o certificaciones Penal de la Nación. Es interesante destacar, que el auditor externo (o el servicio de auditoría externa) no está previsto en él, por lo que no le alcanza esta figura. En cuanto a la sindicatura, sí está expresamente mencionada, si bien como se verá más adelante, y a juicio de FOWLER NEWTON, ella no desempeña ninguna de las funciones que prevé la norma que estamos glosando, por lo cual tampoco cabría su incriminación por la causal que se estudia. Es conveniente que en los textos de informes o certificaciones en su caso, del auditor independiente explicite claramente: En el párrafo introductorio a. Quiénes son los emisores de los estados contables, o, lo que es lo mismo, los responsables de la información suministrada a dictaminar o certificar; Por lo que respecta al régimen penal-tributario-previsional, la exclusiva responsabilidad de los administradores/ emisores de información contable y/o documentación comercial, impositiva o previsional, se desprende claramente de la lectura del Art 1°. de la ley que se estudia. b. Cuál es la precisa responsabilidad que asume el profesional con relación a la tarea solicitada; En el párrafo de alcance b) Naturaleza de la relación que vincula a un profesional independiente, con los estados contables u otra información emitida por su cliente. Describir de manera concisa ciertos aspectos importantes de las normas de auditoría, destacando en especial que el examen se efectúa sobre la base de pruebas selectivas, orientadas a establecer, con razonable seguridad, que la información suministrada por los estados contables en su conjunto, carece de errores o irregularidades significativas. (En el caso de certificaciones u otro tipo de informes especiales, esta última parte naturalmente no será de aplicación). Ante todo, debe tenerse claro que los profesionales son contratados para emitir una opinión o certificar cierta información, que son hechura y propiedad de quien solicita el servicio. Por consiguiente, la responsabilidad del contador público nace una vez que, luego de aplicar los procedimientos de auditoria que juzgue pertinentes, emite el informe o certificación correspondiente. Así entonces, sólo será responsable por estos documentos creados por él, los que, de probarse que fueron emitidos incurriendo en falsedades, reticencias u omisiones, sí podrían dar lugar a las figuras de Informe o Certificación Falsos. Cabe destacar, que en el Código Penal de la Nación estas tipificaciones delictivas no están expresamente previstas. Empero, la incriminación podria proceder vía aplicación del Art.172 (delito de defraudación), a través de algunas de las menciones de su texto: "calidad simulada" o "abuso de confianza"; o también vía el Art. 45, que contempla la complicidad o participación criminal necesaria en el fraude; esto es, que los estados contables no se viabilizarfan en la comunidad de negocios, sin un informe profesional que les transmitiese confiabilidad, valor técnico, a sus contenidos. (Recordar en este sentido, que el Auditor Externo está haciendo fe pública -se le llama "fedatario"- mediante la emisión de su opinión). En el párrafo de opinión Destacar en este párrafo, que la opinión acerca de la razonabilidad de la información que se presenta, se refiere a los aspectos significativos de ella. O, en otras palabras, que aquellos rubros, conceptos e importes de los estados contables que mayor influencia pueden tener en un decididor, han sido adecuadamente medidos, valuados y expuestos. 2.4. Necesidad de distinguir claramente las figuras penales del Balance Falso e Informe o Dictamen Falso. En efecto, una cuestión muy importante, es que los jueces, abogados, emisores y usuarios habituales de estados contables, los entes de control y toda la comunidad de negocios en general, distingan claramente entre la figura delictiva del Balance Falso (en rigor mejor sería decir estados contables falsos) y lo que podría denominarse Dictamen o Informe Falso. Precisamente y en este sentido, es que en el párrafo introductorio del Informe del Auditor mencionado en el punto precedente, se ha sugerido deben destacarse claramente los conceptos que seguidamente consignamos y procedemos a ampliar: Finalmente, una cuestión importante a tener presente, es que el profesional actuante puede -si así lo cree conveniente- limitar su responsabilidad sobre los estados contables que habrá de dictaminar. En efecto, la RT7, punto 11.3., prevé estas situaciones cuando parte del trabajo de auditoría se apoye en la intervención de otro colega (por ejemplo, al determinar una sociedad controlante su Valor Patrimonial Proporcional según los estados contables de la controlada). En estos casos, si en el párrafo de alcance no se incluye mención limitativa alguna, el auditor (en el ejemplo, el de la sociedad controlante), asume toda la responsabilidad por la información en ellos contenida. De lo contrario, deberá aclarar en este párrafo, que determinada información ha sido tomada de los estados contables auditados (sin o con salvedades), por el otro colega. a) Quién es el emisor, propietario, responsable en suma de los estados contables. Lo es el comerciante en la letra de varios arts. del Código de Comercio, a saber: 33; 43; 44; 48; 52; y 62 y, por extensión, también los administradores: directores y gerentes. Estos pues, en caso de probarse su participación delictual, serían los únicos responsables por el delito del Balance Falso conforme el Art. 300, Inc. 3° del Código 34 Boletín de Lecturas Sociales y Económicas • UCA • FCSE • Año 2 • N° 7 propia L.P.T. y P. en su art.16, establece que es la autoridad administrativa pertinente, de oficio, o a instancia de un particular..., quien de inmediato lo comunicará al juez competente,...); 2.5. Con relación a su responsabilidad frente a la Ley a) Cabe reiterar la importancia de la tarea del contador independiente en lo concerniente a la labor docenteque el mismo puede y debe ejercer sobre los socios y/o directores y/o gerentes del ente, respecto de disposiciones, efectos y penalidades de la legislación penal tributaria vigente. Sin duda creemos que una cabal comprensión de aquellas por parte de ellos, transmitidas por su asesor de confianza en esta materia con sinceridad y claridad, facilitará en mucho la tarea profesional, con indudable beneficio para ambas partes. - Si se tuviese la certeza respecto del encuadre jurídico del delito y además se poseyeran fundadas sospechas de la actuación de niveles intermedios de la administración del ente en el mismo (o en los mismos), trasladar la cuestión a los propietarios o a la dirección superior, recomendando se consulte de inmediato el problema con los asesores legales; - Si en vez la presunción de actuación delictiva compromete a los propios dueños y/o integrantes de la dirección superior, y/o el profesional no fuese experto en la cuestión o tuviese dudas respecto de la correcta aplicación de la norma y/o tipificación delictual, deberá requerir él mismo asesoramiento legal para proceder. En este sentido podrá recurrir a profesionales de la abogacía competentes y honestos, preferentemente de su conocimiento, o también al Servicio de Asesoramiento Técnico que brinda el Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal, que precisamente posee una asesoría especializada en Ley Penal Tributaria. b) Debe recordarse, que la actuación del profesional independiente penalizada, es aquella que ha configurado delito, esto es participación, intervención consciente en el acto criminoso. Nos parece pertinente transcribir aquí el concepto de delito conforme el art. 1072 del Código Civil de la Nación: "El acto ilícito cometido a sabiendas y con la intención de dañar la persona o derechos de otro, se llama en este Código delito". En consecuencia, el profesional independiente que actuó de buena fe, debe estar en condiciones de probar, llegada la circunstancia, que su informe ha sido veraz y sin participación delictiva, habiéndole sido razonablemente difícil -no obstante aplicar con diligencia y responsabilidad los procedimientos de auditoría prescritos en la RT7 (III., B., puntos 2.1. a 2.5.12.)-, detectar las falsedades y/u omisiones contenidas en la documentación examinada. En esta importante cuestión -vale la pena reiterarlo- resulta decisivo que el auditor posea, por parte de su cliente, la denominada: " Confirmación escrita de los directivos del ente" (Norma RT7, procedimiento 2.5.12. 3) ACTUACION DEL CONTADOR PUBLICO COMO SINDICO SOCIETARIO 3.1. Posibles alternativas de desempeño profesional Es sabido que la Ley de Sociedades Comerciales, en su Art. 285, Inciso 1), prevé, como uno de los requisitos para ser síndico, poseer el título de abogado o contador público, o sociedad civil constituida exclusivamente por estos profesionales. c) Ante la detección de presuntas figuras delictivas durante la realización de su tarea, el profesional actuante debe recordar, en primer lugar, los criterios rectores del Código de Etica que, en sus arts. 19 y 20 -consagrando el principio del secreto profesional-, nos dice: Por otra parte, debe recordarse, que el contador público que se desempeñe como auditor externo dictaminante de estados contables, también puede desempeñar acumulativamente las funciones de síndico. - Debe mantenerse absoluta reserva respecto de cualquier conocimiento adquirido como consecuencia de la relación profesional con el cliente; - La norma anterior cede sólo ante las siguientes circunstancias: 1) Cuando el propio cliente lo autoriza expresamente; y 2) Cuando el profesional deba ejercer su legítima defensa, y en la medida que ello sea i mprescindible y la información en cuestión insustituible por otra fuente. En consecuencia, una conducta prudente frente a la presunta comisión de un ilícito previsto en esta ley (y en cualquier otra naturalmente), aconsejaría observar estas pautas : - Tratar de comprender bien cuál ha sido la naturaleza y alcances de la infracción; - No proceder a formular denuncias en forma directa a ninguna autoridad, ni judicial ni administrativa; (la 35 Boletín de Lecturas Sociales y Económicas • UCA • FCSE • Año 2 • N° 7 Finalmente, resulta pertinente destacar, que el Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal, ha manifestado, mediante su Resolución C. 240/85, que el Contador Público que se desempeña como síndico societario está realizando ejercicio profesional. 3.2. Nuevas responsabilidades emergentes de la acumulación de las funciones de auditor externo y síndico societario En efecto, cuando se presenta esta doble función, y por i mperio del Art. 300, Inciso 3° del Código Penal Argentino, el contador público que se desempeñe como síndico societario podría verse involucrado en la figura delictual conocida como "balance falso". Como se ve pues, a la responsabilidad por emitir informe falso se le acumularía la de balance falso. Resulta importante comentar, que FOWLER NEWTON, en su obra "Cuestiones Fundamentales de Auditoría", Edic. Macchi, Buenos Aires, págs. 449/50; sostiene que los síndicos no estarían alcanzados por el delito que nos ocupa, ya que ellos: - No realizan ninguna de las actividades previstas en la norma que puedan configurar tal delito, a saber: publicar, certificar o autorizar un inventario, un balance, una cuenta de ganancias y pérdidas o los correspondientes informes..."; - Inciso 2. Examinar las disponibilidades, títulos valores, así como las obligaciones y su cumplimiento, además solicitar periódicamente balances de comprobación; - Inciso 4. Controlar la constitución y subsistencia de la garantía de los directores; - Inciso 5. Opinar sobre los estados contables emitidos por la sociedad, incluso el inventario. Asimismo, deberá hacerlo sobre la Memoria, pero sólo en las materias que sean de su competencia (recordar que el síndico no ejerce el control de gestión, sino sólo un control formal de legalidad). - Inciso 10. En su caso, fiscalizar la liquidación de la sociedad. b) Control de órganos sociales - Inciso 3. Asistir con voz, aunque sin voto, a las reuniones del directorio, comité ejecutivo en su caso, y asamblea; - Inciso 7. Convocar a asambleas ordinaria, extraordinaria, o especial, cuando omitiere hacerlo el directorio; - Inciso 8. En conexión con el punto precedente: hacer incluir en el orden del día los puntos que considere procedentes; - No certifican, sino que opinan sobre los estados contables sometidos a su consideración (la firma que debe aparecer en cada hoja de los estados contables publicados, es al sólo efecto de vincular al profesional con su Informe que necesariamente debe acompañarlos); - Inciso 9. Vigilar que los órganos sociales den debido cumplimiento a la ley, estatuto, reglamento y decisiones asamblearias. Esta es a nuestro juicio, la norma que plasma cabalmente la amplísima responsabilidad que le cabe al síndico. Sin embargo, resulta oportuno mencionar, que la doctrina acepta casi sin discusión, que la función del sindical debe ceñirse exclusivamente a un "control formal de legalidad"; y que en consecuencia, la ley (o leyes) que el síndico debe velar por que se cumplan son aquellas que rigen la vida de las sociedades en general y particular según su actividad. En este sentido, pensamos en el Código de Comercio, y las leyes de: Sociedades Comerciales, Orgánica de la Inspección General de Justicia (y equivalentes en las jurisdicciones provinciales), de Oferta Pública de Títulos Valores, Orgánica de la Comisión Nacional de Valores, de Entidades Financieras, de Seguros, de Cooperativas, Penal-Tributaria, etcétera. - No administran sino que vigilan, por lo que no cabe confundir su función fiscalizadora con la de los administradores. Sin embargo, agrega finalmente este autor, cualquier síndico podría ser procesado por el delito de "balance falso", ya que hay jueces en lo penal que no distinguen claramente las funciones de administrar y de fiscalizar. 3.3. Las funciones del síndico en el marco de la Ley de Sociedades Comerciales N° 19.550. Art. 294 Este artículo, que consideramos de especial interés para el lector, trata de las atribuciones y deberes del síndico. En esta extensa norma se recogen "sin perjuicio de los demás que esta ley determina y los que le confiera el estatuto", funciones de distinta naturaleza que conviene, para su estudio, sistematizar de la siguiente forma: Citaremos la función, los incisos respectivos, y una breve ilustración acerca del contenido de cada uno: c) Información a accionistas a) Control contable Otros artículos - Inciso 1. Fiscalizar periódicamente la administración de la sociedad, mediante el examen de los libros y la respectiva documentación respaldatoria; - Art. 203. Ante la decisión societaria de la reducción voluntaria del capital (reducción real), el síndico deberá emitir un informe fundado; - Inciso 6. Suministrar información en materia de su competencia, a accionistas que representen no menos del 2% del capital; - Inciso II. Investigar las denuncias que le formulen por escrito, accionistas que representen no menos del 2% del capital; 36 Boletín de Lecturas Sociales y Económicas • UCA • FCSE • Año 2 • N° 7 - Art. 212. Suscribir con firma autógrafa, acompañando a actuaciones observen las respectivas prescripciones legales; un director, los títulos accionarios representativos del capital que emita la sociedad; - Por consiguiente, y a modo de resumen conceptual, la sindicatura es el órgano de la sociedad que tiene por función el control de legalidad (no de mérito o gestión) de los actos de administración y de gobierno de la misma, en resguardo tanto de los intereses societarios como del de los terceros que interactúen con ella, incluido el orden social general; - Art. 224. Establece la responsabilidad ilimitada y solidaria del síndico, conjuntamente con los directores y miembros del consejo de vigilancia en su caso, cuando la sociedad (únicamente las que pertenezcan al art. 299 de la ley que estamos glosando), decida distribuir dividendos provisionales. En estas situaciones, además de su firma autorizando el acta de directorio en la cual se plasme tal decisión, el síndico deberá emitir el respectivo informe técnico (tal como el que manda el art. 294, inc. 5 °), sobre los estados contables especiales que para este fin deberán confeccionarse. - El síndico actuante -tal como lo hace el auditor externo cuando no se trate del mismo profesional-, procede también mediante pruebas selectivas (aplicando el principio de economicidad o productividad relativo a toda tarea de control: RT7, II, B, 4.); - Art. 258. Este artículo establece, que en caso de producirse un caso de vacancia en el directorio, y existiendo a su vez silencio en el estatuto a este respecto, el síndico debe proceder a designar un reemplazante hasta la reunión de la próxima asamblea. - Art. 301. Contempla esta norma en su inciso I°, que el síndico podrá solicitar la intervención del órgano de control, a fin de que ejerza funciones de vigilancia sobre los hechos consignados por él en su presentación. d) Redacción del Informe del Síndico prescrito por el Art. 294, Inciso 5°. Resulta de suma importancia, por todo lo expresado precedentemente, tanto en resguardo de su propia responsabilidad como de advertencia e ilustración hacia terceros, que el síndico (o la comisión fiscalizadora en su caso), emita el documento que tratamos de la manera más completa, clara y educativa posible. 3.4. La sindicatura frente al régimen penal-tributario en vigor En efecto, destacaremos a continuación qué aspectos de los mismos ameritan recordarse y/o ser debidamente explicitados en sus textos: a) Enfoque global Como principio general, tal como se afirmara respecto de la actuación del auditor externo, apreciamos que la sanción de la normativa penal-tributaria no ha alterado la función profesional de la sindicatura. Sí en cambio puede afirmarse, que ha aumentado el nivel de riesgo de su actuación, esto es, la posibilidad de emitir informes favorables sin advertir errores y/o falsedades de carácter significativo que, de haberse detectado a tiempo, hubiesen modificado el sentido de aquéllos. - En primer lugar, no obstante ser el síndico y el auditor externo el mismo profesional, deben emitirse documentos independientes, uno por cada función: Informe del Auditor e Informe del Síndico; - Afirmar, en un primer párrafo introductorio, que la preparación de los estados contables es responsabilidad de la dirección de la sociedad; y, seguidamente, agregar que la responsabilidad del síndico es sólo pronunciarse a través de la emisión de una opinión sobre ellos; b) Naturaleza del vínculo entre la sindicatura y el ente Teniendo en cuenta que muchos usuarios de los estados contables -y para el tema que nos ocupa en particular, los poderes públicos-, no tienen una adecuada comprensión de la naturaleza y características de la función ni del vínculo entre la sindicatura y el ente, resulta conveniente, aún pecando en algunos aspectos de ser reiterativos, recordar las siguientes importantes cuestiones: - En el párrafo de alcance, de indispensable confección, expresar de manera sucinta y precisa las siguientes cuestiones básicas: a) Que se han aplicado a la tarea normas de auditoría vigentes en la respectiva jurisdicción: RT7 de la EA.C.P.C.E., convalidada por el Consejo Profesional correspondiente (en la Capital Federal la Resolución N° 267/85 del C.P.C.E.C.F.); - La sindicatura es un órgano societario independiente, con responsabilidades claramente diferenciadas de las del directorio y la gerencia, autónomo, con voluntad propia emanada de la Ley, y con funciones que son de orden público, ya que las partes interesadas no las pueden modificar); b) Que la precitada norma profesional (recordar: III, B, puntos 2. a 2.9.) prescribe en síntesis: planificarla tarea; actuar mediante pruebas selectivas tendientes a obtener satisfacción respecto de que las afirmaciones contenidas en los principales componentes de los estados contables (en particular aquellos que comprendan naturales estimaciones tales como: incobrabilidades, no realizaciones de stocks, vidas útiles de bienes, resultados - La sindicatura no es mandataria ni representante de la sociedad en la que actúa; tampoco lo es de los accionistas o socios. Antes bien, fiscaliza que sus 37 Boletín de Lecturas Sociales y Económicas • UCA • FCSE • Año 2 • N° 7 de litigios), estén exentas de errores o falsedades de carácter significativo que las invaliden; c) Que existe congruencia entre la información verificada según se expresó en el punto anterior, y la que pudo verificar en oportunidad de asistir -en ejercicio del control formal de legalidad-, a las reuniones de directorio y asamblea. Finalmente, entendemos que el síndico debería abstenerse de aconsejar a los accionistas o socios tomar decisión alguna respecto de los estados contables en cuestión. Fundamentamos este aserto, atento la naturaleza de la función sindical que se ha descrito, y las características técnicas de la redacción del su informe, donde, en un párrafo específico de 61 (el del dictamen), se manifiesta una opinión objetiva sobre determinada documentación contable. Por otra parte, ni en el propio Art. 294, ni en el Inc. 5° ni en otro, existe mención alguna a este pronunciamiento. Tampoco en el resto del articulado referido ala sindicatura. 4) EMISION DE LA CARTA DE GERENCIA O CONFIRMACION ESCRITA DE LOS DIRECTIVOS DEL ENTE Hemos considerado conveniente la inclusión de este tema, por cuanto pese a ser un procedimiento de auditoria prescrito por la RT7 -que deberían utilizar tanto auditores externos como síndicos-, muchos colegas lo ignoran o. conociéndolo, por diversas razones dejan de aplicarlo. Así y a grandes trazos, en este documento debería lograrse se le consigne al auditor que, toda la documentación, registraciones, y/o manifestaciones verbales brindadas oportunamente no han excluido nada (al menos de carácter significativo). Por ejemplo, que se han considerado como corresponde todas las cuentas bancarias y/o inversiones; todas las transacciones; todos los stocks y sus posibles degradaciones; todos los juicios; todos los contratos importantes de los que puedan derivarse responsabilidades; todos los compromisos ciertos hacia terceros; todas las actas de directorio; todos los hechos posteriores al cierre de ejercicio (significativos); etcétera. c) Relación con el régimen penal-tributario que se estudia Vistas las precisas responsabilidades y consecuentes penalidades que por no cumplirlas pueden sufrir los auditores externos y/ o síndicos, más que nunca cobra i mportancia la obtención de este refuerzo documental, ya que el profesional interviniente podrá demostrar, llegada la circunstancia, que procedió diligentemente, aplicando los procedimientos de auditoría que determinan las normas regulatorias de su profesión. Es más, al proceder a su redacción, opinamos será prudente incluir específicas manifestaciones concernientes al cumplimiento de las disposiciones previstas en la ley. Por otra parte debe tenerse presente, que la rotunda negativa o resistencia a otorgar esta manifestación sin fundamentos consistentes, (pese a las explicaciones dadas acerca de sus alcances que más adelante se ilustran), puede estarle indicando al profesional mala fe de la otra parte, debiéndose en estos casos ponderar qué incidencia puede tener en la formación de su opinión, pudiéndose incluso por esta causa tomar salvedades o, en caso extremo, a abstenerse de opinar. 4.1. Concepto, finalidad. Relación con el régimen penal-tributario que se estudia. a) Concepto Como se expresara, la propia RT7, en su norma B. Auditoría de estados contables, punto 2.5.12., prescribe entre los elementos de juicio válidos y suficientes a reunir por el auditor, "la obtención de una confirmación escrita de la dirección del ente de las explicaciones e informaciones suministradas". 4.2. Características principales de su contenido; aspectos formales; oportunidad de su requerimiento. a) Contenido b) Finalidad El conjunto de manifestaciones a incluir, conviene que sean redactadas por el propio profesional, de acuerdo con las caracteristicas y particulares situaciones vividas durante el trabajo desarrollado, debiendo consignar especialmente aquellas cuestiones en las que haya recibido sólo explicaciones verbales y/o tratado situaciones donde aprecie se necesita de este refuerzo probatorio. Este documento debería solicitarse siempre, ya que mediante él el auditor se satisfaría de que la afirmación de integridad contenida en los estados contables haya sido cabalmente cumplida. En efecto, de lo que se trata, es obtener una ratificación, por parte de los administradores responsables de la emisión de dichos estados, de circunstancias, hechos u operaciones que, ya por sus características intrínsecas o bien teniendo presente las naturales limitaciones de toda auditoría, resulta difícil o imposible verificar y/o evaluar siquiera "razonablemente". Como regla general para la redacción de este documento, sépase que el mismo no debe constituir un mero 38 Boletín de Lecturas Sociales y Económicas • UCA • FCSE • Año 2 • N° 7 formulismo. Muy por el contrario, para cada caso conviene que exista una específica redacción que lo "personalice". En este sentido, creemos que el enfoque mencionado contribuirá a que la Gerencia del ente acepte de mejor grado firmarlo. (Pueden consultarse las siguientes obras en lo relativo a las manifestaciones que, por vía analógica, podrán incluirse: Informe N° 5 de la FACPCE - Manual de Auditoría, Capítulo 5 - Papeles de trabajo, pág. 131. fra. edición, 1988; y en C. Slosse y colaboradores, Auditoría: Un nuevo enfoque empresarial, Ediciones Macchi, 1990; Capítulo 28, Conclusión del examen, página 599). b) Aspectos formales El documento en cuestión, debe ser extendido en papel con membrete de la sociedad que se ha auditado o de la que se es síndico. Deberá ser firmada por los máximos niveles de responsabilidad, por ejemplo: Presidente del Directorio, o Presidente del Directorio y Gerencia General, o Gerencia General y Gerencia Administrativa. También podría acompañar en firma, algún responsable de una importante área específica auditada, como Gerencia de Fábrica o Gerencia de Operaciones. Naturalmente cuando se trate de Pymes o negocios de menor porte, podrá hacerlo el propio titular, o un socio gerente debidamente apoderado. y para tranquilidad y seguridad de quienes deben confiar en nuestra profesión. b) Respecto del auditor externo o síndico La obtención de este documento, de manera alguna exime al auditor o síndico en su caso, de aplicar cualquier procedimiento directo (de validación o sustantivo), que para cada caso corresponda. Constituye eso sí, un importante elemento adicional de juicio que perfecciona su tarea ante determinadas circunstancias para las que no existe o resulta difícil documentarse, demostrando así una actuación profesional diligente, al cumplir estrictamente con las disposiciones normativas en vigor (la RT7). Por lo tanto, cabe aquí también concluir, que su responsabilidad por la actuación profesional tampoco se verá alterada; aunque sí merece destacarse, que el respaldo documental de sus tareas resultará claramente fortalecida. 5) BIBLIOGRAFIA CONSULTADA c) Oportunidad de su requerimiento -Específica respecto del tema central tratado Un aspecto importante a tener en cuenta es la fecha que debe llevar esta pieza. En efecto, por la naturaleza de este documento, la época en que es preparado -casi al concluir la auditoría-, y su necesaria consideración antes de plasmarse la opininión final, la fecha deberá coincidir o ser inmediatamente anterior a la que el auditor o síndico fije como conclusión de su propia tarea, y que será la que en definitiva lleve su informe profesional. 5.1. Federación Argentina de Consejos Profesionales de Ciencias Económicas; Ley Penal Tributaria y Previsional; Buenos Aires, Agosto de 1990. 5.2. Material distribuido en la Media Jornada realizada en el Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal; "El Contador Público frente al régimen penal tributario y previsional"; Noviembre de 1990. -De tipo general 4.3. Responsabilidad de los otorgantes del documento y del auditor externo o síndico 5.3. Federación Argentina de Consejos Profesionales de Ciencias Económicas; Resolución Técnica N° 7 - Normas de Auditoria. a) Respecto de los otorgantes del documento Por una parte, si se tiene presente que los emisores de los estados contables tienen una primaria e insoslayable responsabilidad legal por el contenido de las afirmaciones contenidas en ellos; y por la otra, que en los términos de la Carta de Gerencia que habrán de emitir -de hacerlo como corresponde-, sólo estarán confirmando por escrito manifestaciones verbales dadas en igual sentido respecto de determinada información y/o documentación sustentatoria contable suministrada; cabe concluir que no se está en presencia de nueva o diferente responsabilidad, así como tampoco frente a un cambio de grado en ella (ni mayor ni menor). 5.4. Federación Argentina de Consejos Profesionales de Ciencias Económicas; Manual de Auditoria - Area Auditoria -Informe N° 5; Edición 1988; Capítulo 5, página 131, punto 7.1.4.b.l . y Capítulo 19, página 453, punto 1.6. 5.5. Enrique Fowler Newton; Cuestiones Fundamentales de Auditoría; Ediciones Macchi, Buenos Aires, 1993; Capítulo 11, Responsabilidad del Auditor, págs. 439 y sigtes. 5.6. Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal; Informe N° 21 de la Comisión de Estudios de Auditoría; El Contador Público Independiente y la Comunidad de Negocios - Un Análisis sobre los aspectos trascendentes de esta relación; Abril de 1993. Como se ve, los conceptos recién expuestos, de no siempre fácil comprensión, deberían ser explicados por el profesional a los propietarios o autoridades del ente, no sólo naturalmente cuando hubiera resistencias a su firma, sino en todos los casos (al implantarse el procedimiento) como un servicio más, ilustrando sobre sus características 5.7. Battaglia, Juan Manuel; Práctica Societaria; La Sindicatura. Alcances de sus funciones; Revista La Información, Editorial Cangallo, Buenos Aires; N° 753. Septiembre de 1992. 39