QUE REFORMA Y ADICIONA DIVERSAS DISPOSICIONES DEL CÓDIGO PENAL FEDERAL, A CARGO DEL DIPUTADO ADOLFO MOTA HERNÁNDEZ, DEL GRUPO PARLAMENTARIO DEL PRI El suscrito, diputado Adolfo Mota Hernandez, integrante del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, en la LX Legislatura de la Cámara de Diputados al honorable Congreso de la Unión, con fundamento en lo establecido en los artículos 71, fracción II, y 72 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y los artículos 55 y 56 del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso de los Estados Unidos Mexicanos, presenta ante el pleno de esta soberanía, la presente propuesta de iniciativa de decreto que adiciona la fracción XXII al artículo 387; un tercer y cuarto párrafos al artículo 390 y un tercer párrafo al artículo 399 Bis, del Código Penal Federal. Lo anterior con base en la siguiente: Exposición de Motivos De forma preocupante, en los últimos años, se detonó una conducta que lacera terriblemente a las familias mexicanas en su patrimonio y estabilidad emocional. La extorsión telefónica genera en la víctima, sensaciones de angustia y de emoción, ya sea por el supuesto afán de "salvar" a un familiar, como por el de "obtener" el premio que se les ha prometido. De acuerdo al Consejo para la Ley y los Derechos Humanos, AC, mediante investigaciones efectuadas, informes oficiales, fuentes oficiales y testimonios de las víctimas, señalan que: Al menos 240 bandas de extorsionadores operan en los distintos penales del país; 15 de las más activas operan en penales del DF. Cada 24 horas se intentan 760 extorsiones. En el 2005 el 37% de las víctimas pagaban la extorsión o fueron defraudados. En el 2006, 20% de las víctimas pierde su dinero al pagar la extorsión. Hasta el 23 de febrero de 2008, se han intentado 41,040 extorsiones, el 34% han pagado la extorsión. De 2001 a febrero de 2008; 98,256 personas han perdido entre mil y 30 mil pesos. De 2001 a 2008, el monto a nivel nacional obtenido por extorsionadores, supera los 249 millones de pesos. Se emplean más de 35,600 celulares para cometer este delito, el 60% son del DF. Las modalidades de extorsión más lucrativas son: a) Concurso Boletazo b) Supuesto hijo secuestrado c) Amenazas de secuestro o muerte d) Amenazas de supuestos "Zetas" e) Hijo detenido en centro comercial por robo En lugar de utilizar tarjetas telefónicas Ladatel, recurren a tarjetas Multifón, que enlazan las llamadas a una central desde la cual se contacta el destinatario. También llaman a un cómplice que les enlaza con el destinatario por medio de un conmutador. Informes de reos refieren que los custodios de los centros penitenciarios están al corriente de las llamadas de extorsión e incluso protegen a los delincuentes, negándole a los reclusos el uso de las cabinas telefónicas que son utilizadas por los extorsionadores. Además de esta técnica, informes de la misma ONG señalan que afuera de los reclusorios capitalinos existe venta de chips de teléfono celular con un costo de 150 pesos con 300 pesos de tiempo aire. Así, los internos no necesitan comprar tarjetas de prepago. Cada banda de extorsionadores posee hasta 80 chips, lo cual dificulta rastrear llamadas. Según datos de la misma organización, en promedio se realizan 200 intentos de extorsión cada 24 horas en el Distrito Federal y área conurbada. En aras de lograr disminuir el índice delictivo relacionado con la extorsión telefónica, recientemente, la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, acordó tipificarlo como delito grave. En los considerados del dictamen de la reforma señalada, se precisan datos estadísticos como el que, durante los primeros ocho meses de 2006, se reportaron un total de 487 extorsiones telefónicas, lo que significa 1.8 diarias. Otro ejemplo de la necesidad de dar mayor atención a este tipo de delitos, es el concerniente a una detención de un extorsionador que operaba desde el estado de Jalisco hacia el Distrito Federal. El delincuente amenazó a una mujer de tener secuestrado a un familiar. Ésta depositó 13 mil pesos en un banco y posteriormente se comunicó al centro telefónico y con la información proporcionada las procuradurías estatal y de la capital de la República, lograron detener al presunto delincuente que cobró la suma en una sucursal Banamex en Jalisco. Ejemplos de la forma en la que se extorsiona a diversas familias hay muchos, uno de los mas recurridos, es el que se refiere al concurso Boletazo, donde se llega a involucrar a la actual esposa del Presidente de la República y a la Fundación Vamos México, donde un supuesto patrocinio de productos que deben ser comprados, comprados, incluye para obtener una camioneta, la compra de 5 o más tarjetas de prepago telefónico con un valor cada una de 500 pesos. Está de más decir que hay personas que, desgraciadamente, han creído en éste tipo de supuestos concursos y después de haber otorgado al extorsionador los números de las tarjetas de prepago, obviamente no reciben ningún premio por ello. Los Capítulos III y III Bis del Código Penal Federal, establecen los delitos de fraude y de extorsión de la siguiente manera: "... Capítulo III Fraude Artículo 386. Comete el delito de fraude el que engañando a uno o aprovechándose del error en que éste se halla, se hace ilícitamente de alguna cosa o alcanza un lucro indebido. El delito de fraude se castigará con las penas siguientes: I. Con prisión de 3 días a 6 meses o de 30 a 180 días de multa, cuando el valor de lo defraudado no exceda de 10 veces el salario; II. Con prisión de 6 meses a 3 años y multa de 10 a 100 veces el salario, cuando el valor de lo defraudado excedería de 10, pero no de 500 veces el salario; III. Con prisión de tres a doce años y multa hasta de ciento veinte veces el salario si el valor de lo defraudado fuere mayor de quinientas veces el salario. Artículo 387. Las mismas penas señaladas en el artículo anterior, se impondrán: I. Al que obtenga dinero, valores o cualquier otra cosa ofreciendo encargarse de la defensa de un procesado o de un reo, o de la dirección o patrocinio en un asunto civil o administrativo, si no efectúa aquella o no realiza ésta, sea porque no se haga cargo legalmente de la misma, o porque renuncie o abandone el negocio o la causa sin motivo justificado; II. Al que por título oneroso enajene alguna cosa con conocimiento de que no tiene derecho para disponer de ella, o la arriende, hipoteque, empeñe o grave de cualquier modo, si ha recibido el precio, el alquiler, la cantidad en la que gravó, parte de ellos o un lucro equivalente; III. Al que obtenga de otro una cantidad de dinero o cualquiera otro lucro, otorgándole o endosándole a nombre propio o de otro, un documento nominativo, a la orden o al portador contra una persona supuesta o que el otorgante sabe que no ha de pagarle; IV. Al que se haga servir alguna cosa o admita un servicio en cualquier establecimiento comercial y no pague el importe; V. Al que compre una cosa mueble ofreciendo pagar su precio al contado y rehúse después de recibirla, hacer el pago o devolver la cosa, si el vendedor le exigiere lo primero dentro de quince días de haber recibido la cosa del comprador; VI. Al que hubiere vendido una cosa mueble y recibido su precio, si no la entrega dentro de los quince días del plazo convenido o no devuelve su importe en el mismo término, en el caso de que se le exija lo último; VII. Al que vende a dos personas una misma cosa, sea mueble o raíz y recibe el precio de la primera o de la segunda enajenación, de ambas o parte de él, o cualquier otro lucro con perjuicio del primer o del segundo comprador. VIII. Al que valiéndose de la ignorancia o de las malas condiciones económicas de una persona, obtenga de ésta ventajas usuarias por medio de contratos o convenios en los cuales se estipulen réditos o lucros superiores a los usuales en el mercado. IX. Al que para obtener un lucro indebido, ponga en circulación fichas, tarjetas, planchuelas u otros objetos de cualquier materia como signos convencionales en substitución de la moneda legal. X. Al que simulare un contrato, un acto o escrito judicial, con perjuicio de otro o para obtener cualquier beneficio indebido. XI. Al que por sorteos, rifas, loterías, promesas de venta o por cualquiera otro medio, se quede en todo o en parte con las cantidades recibidas, sin entregar la mercancía u objeto ofrecido. XII. Al fabricante, empresario, contratista, o constructor de una obra cualquiera, que emplee en la construcción de la misma, materiales en cantidad o calidad inferior a la estipulada, siempre que haya recibido el precio o parte de él; XIII. Al vendedor de materiales de construcción o cualquiera especie, que habiendo recibido el precio de los mismos, no los entregare en su totalidad o calidad convenidos; XIV. Al que venda o traspase una negociación sin autorización de los acreedores de ella, o sin que el nuevo adquiriente se comprometa a responder los créditos, siempre que estos últimos resulten insolutos. Cuando la enajenación sea hecha por una persona moral, serán penalmente responsables los que autoricen aquella y los dirigentes, administradores o mandatarios que la efectúen; XV. Al que explote las preocupaciones, la superstición o la ignorancia del pueblo, por medio de supuesta evocación de espíritus, adivinaciones o curaciones. XVI. (Se deroga) XVII. Al que valiéndose de la ignorancia o de las malas condiciones económicas de un trabajador a su servicio, le pague cantidades inferiores a las que legalmente le corresponden por las labores que ejecuta o le haga otorgar recibos o comprobantes de pago de cualquier clase que amparen sumas de dinero superiores a las que efectivamente entrega. XVIII. Al que habiendo recibido mercancías con subsidio o franquicia para darles un destino determinado, las distrajere de este destino o en cualquier forma desvirtúe los fines perseguidos con el subsidio o la franquicia. A los intermediarios en operaciones de traslación de dominio de bienes inmuebles o ha (sic) de gravámenes reales sobre éstos, que obtengan dinero, títulos o valores por el importe de su precio, a cuenta de él o para constituir ese gravamen, si no los destinaren, en todo o en parte, al objeto de la operación concertada, por su disposición en provecho propio o de otro. Para los efectos de este delito se entenderá que un intermediario no ha dado su destino, o ha dispuesto, en todo o en parte, del dinero, títulos o valores obtenidos por el importe del precio o a cuenta del inmueble objeto de la traslación de dominio o del gravamen real, si no realiza un depósito en Nacional Financiera, SA, o en cualquier institución de depósito, dentro de los treinta días siguientes a su recepción a favor de su propietario o poseedor, a menos que lo hubiese entregado, dentro de ese término, al vendedor o al deudor del gravamen real, o devuelto al comprador o al acreedor del mismo gravamen. Las mismas sanciones se impondrán a los gerentes, directivos, mandatarios con facultades de dominio o de administración, administradores de las personas morales que no cumplan o hagan cumplir la obligación a que se refiere el párrafo anterior. El depósito se entregará por Nacional Financiera, SA, o la institución de depósito de que se trate, a su propietario o al comprador. Cuando el sujeto activo del delito devuelva a los interesados las cantidades de dinero obtenidas con su actuación, antes de que se formulen conclusiones en el proceso respectivo, la pena que se le aplicará será la de tres días a seis meses de prisión. XX. A los constructores o vendedores de edificios en condominio que obtengan dinero, títulos o valores por el importe de su precio o a cuenta de él, si no los destinaren, en todo o en parte, al objeto de la operación concertada por su disposición en provecho propio o de otro. Es aplicable a lo dispuesto en esta fracción, lo determinado en los párrafos segundo a quinto en la fracción anterior. XXI. Al que libre un cheque contra una cuenta bancaria, que sea rechazado por la institución o sociedad nacional de crédito correspondiente, en los términos de la legislación aplicable, por no tener el librador cuenta en la institución o sociedad respectiva o por carecer éste de fondos suficientes para el pago. La certificación relativa a la inexistencia de la cuenta o a la falta de fondos suficientes para el pago, deberá realizarse exclusivamente por personal específicamente autorizado para tal efecto por la institución o sociedad nacional de crédito de que se trate. No se procederá contra el agente cuando el libramiento no hubiese tenido como fin el procurarse ilícitamente una cosa u obtener un lucro indebido. Las instituciones, sociedades nacionales y organizaciones auxiliares de crédito, las de fianzas y las de seguros, así como los organismos oficiales y descentralizados, autorizados legalmente para operar con inmuebles, quedan exceptuados de la obligación de constituir el depósito a que se refiere la fracción XIX. Artículo 388. Al que por cualquier motivo teniendo a su cargo la administración o el cuidado de bienes ajenos, con ánimo de lucro perjudique al titular de éstos, alterando las cuentas o condiciones de los contratos, haciendo aparecer operaciones o gastos inexistentes o exagerando los reales, ocultando o reteniendo valores o empleándolos indebidamente, o a sabiendas realice operaciones perjudiciales al patrimonio del titular en beneficio propio o de un tercero, se le impondrán las penas previstas para el delito de fraude. Artículo 388 Bis. Al que se coloque en estado de insolvencia, con el objeto de eludir las obligaciones a su cargo con respecto a sus acreedores, se le impondrá pena de seis meses a cuatro años de prisión y de cincuenta a trescientos días multa. En caso de quiebra se atenderá a lo previsto por la ley especial. Artículo 389. Se equipara al delito de fraude y se sancionará con prisión de seis meses a diez años y multa de cuatrocientos a cuatro mil pesos, el valerse del cargo que se ocupe en el gobierno, en una empresa descentralizada o de participación estatal, o en cualquiera agrupación de carácter sindical, o de sus relaciones con los funcionarios o dirigentes de dichos organismos, para obtener dinero, valores, dádivas, obsequios o cualquier otro beneficio, a cambio de prometer o proporcionar un trabajo, un ascenso o aumento de salario en tales organismos. Artículo 389 Bis. Comete delito de fraude el que por sí o por interpósita persona, cause perjuicio público o privado al fraccionar y transferir o prometer transferir la propiedad, la posesión o cualquier otro derecho sobre un terreno urbano o rústico, propio o ajeno, con o sin construcciones sin el previo permiso de las autoridades administrativas competentes, o cuando existiendo éste no se hayan satisfecho los requisitos en él señalados. Este delito se sancionará aún en el caso de falta de pago total o parcial. Para los efectos penales se entiende por fraccionar la división de terrenos en lotes. Este delito se sancionará con las penas previstas en el artículo 386 de este Código, con la salvedad de la multa mencionada en la fracción tercera de dicho precepto, que se elevará hasta cincuenta mil pesos. Capítulo III Bis Extorsión Artículo 390. Al que sin derecho obligue a otro a dar, hacer, dejar de hacer o tolerar algo, obteniendo un lucro para sí o para otro o causando a alguien un perjuicio patrimonial, se le aplicarán de dos a ocho años de prisión y de cuarenta a ciento sesenta días multa. Las penas se aumentarán hasta un tanto más si el constreñimiento se realiza por una asociación delictuoso, o por servidor público o ex servidor público, o por miembro o ex miembro de alguna corporación policial o de las Fuerzas Armadas Mexicanas. En este caso, se impondrá además al servidor o ex servidor público y al miembro o ex miembro de alguna corporación policial, la destitución del empleo, cargo o comisión y la inhabilitación de uno a cinco años para desempeñar cargo o comisión público, y si se tratare de un miembro de las Fuerzas Armadas Mexicanas en situación de retiro, de reserva o en activo, la baja definitiva de la Fuerza Armada a que pertenezca y se le inhabilitará de uno a cinco años para desempeñar cargos o comisión públicos..." De lo anterior, tanto el delito de fraude como el de extorsión, no contemplan las conductas antisociales señaladas, puesto que, dada la característica de este daño patrimonial hacia las personas que consideran viable el poder "ganarse" un premio como el de verse inmersos en una situación de crisis familiar, al intentar desmedidamente "salvar" a su consanguíneo. Cuando hablamos de este tipo de conductas, al referirnos al fraude telefónico con el supuesto objetivo de obtener algún dinero o las tarjetas de prepago, nos encontramos que existe el consentimiento del sujeto pasivo, al verse engañado por quien le promete el premio. En el caso de la extorsión, donde bajo una mentira, se busca obtener una cantidad de dinero a modo de pago del rescate. En ambos casos, se ha venido utilizando diversos medios tecnológicos, pudiendo ser éstos a través de una llamada telefónica, un mensaje telefónico, un correo electrónico, un fax, un telegrama, etcétera. Al emplearse este tipo de mecanismos, la autoridad del fuero común encargada de investigar los delitos, se ve imposibilitada, puesto que la información, como el medio electrónico usado, se encuentra regulado por normatividades de carácter federal. De ahí, que en primer término establecemos la jurisdicción, que en este caso corresponde a la autoridad federal. Al tener conocimiento de la autoridad federal, encargada de investigar los delitos, llámese Procuraduría General de la República, ésta podrá solicitar al proveedor del servicio, que otorgue el nombre y si es posible la ubicación y el domicilio de quien comete dicho fraude, como de quien se encuentra cometiendo la extorsión. Asimismo, podrá la autoridad federal, solicitar a dicho proveedor que se bloquee o se suspenda el servicio hasta en tanto se deslinden responsabilidades. Sabemos que es difícil, cuando hablamos de este tipo de conductas antisociales, llegar a detectar en el caso del pago del "rescate" o como medio para "ganarse" un premio, cuando se hace por la compra de las tarjetas de prepago; sin embargo; en algunas ocasiones, como el ejemplo que se ha citado líneas arriba, los extorsionadores envían a la víctima, a depositar alguna cantidad de dinero y es ahí, donde se podría lograr a la detención de el o los probables responsables. Sin embargo, también nos enfrentamos al hecho, de que quienes se han visto timados por estos sujetos, prefieren no denunciar, debido a la vergüenza que les ocasiona el haberse visto involucrados en tal situación. Con fecha de 9 de febrero del año en curso fue publicada en el Diario Oficial de la Federación el decreto que reforma los artículos 52; 64, fracción XV, y se adiciona una fracción XIII, recorriéndose la actual XIII para pasar a ser XIV al artículo 7; un inciso d a la fracción I, recorriéndose el actual d para pasar a ser e, al artículo 16, las fracciones XI, XII, XIII, XIV y XV. Al artículo 44; una fracción XVI, recorriéndose la actual XVI para pasar a ser XVII al artículo 64 y una fracción VI al apartado a del artículo 71 de la Ley Federal de Telecomunicaciones. Dicha reforma tiene como objetivo, el reglar la obtención de estos medios o herramientas que en lugar de servir para acortar distancias entre los seres queridos, se emplean para engañar o asustar a la población, con el único fin, de obtener dinero. Ambas propuestas forman parte de la respuesta para poder combatir este tipo de conductas antisociales; puesto que, de inicio se reglamenta el como obtener el medio de comunicación con el que se realiza tal ilícito y, con la propuesta que hoy se presenta, se prevé la sanción cuando a pesar de la existencia de estos mecanismos, se pudo realizar. Por tal motivo, se propone tipificar el fraude que se efectúa a través de estos medios electrónicos y también, tipificar el delito de extorsión en la misma modalidad. El Código Penal Federal, no contempla dentro de este título de delitos patrimoniales, un apartado relacionado a las disposiciones; sin embargo, al final de éste, existen algunos artículos que nos dan la pauta, de colocar en ese lugar, disposiciones relacionadas con esta nueva reforma y que se han señalado. En razón de lo anterior, de conformidad con la motivación antes expuesta, someto a esta honorable asamblea, la presente iniciativa de Decreto que adiciona la fracción XXII al artículo 387; un tercer y cuarto párrafos al artículo 390 y un tercer párrafo al artículo 399 Bis y se reforma el segundo párrafo del artículo 399 Bis del Código Penal Federal. Articulo Único. Se adiciona la fracción XXII al artículo 387; un tercer y cuarto párrafos al artículo 390 y un tercer párrafo al artículo 399 BIS y se reforma el segundo párrafo del artículo 399 BIS, del Código Penal Federal, para quedar como sigue: Artículo 387. Las mismas penas señaladas en el artículo anterior se impondrán: I. a XXI. ... XXII. Al que utilizando cualquier medio electrónico o tecnológico, suponga o haga suponer a una persona que se encuentra participando en un concurso donde a cambio, le solicite la compra de diversos productos o en su caso, le solicite algún bien inmueble. Artículo 390. ... ... Además de las penas señaladas en el primer párrafo, se impondrá de tres a siete años de prisión, cuando en la comisión del delito: I. Intervenga una o más personas armadas, o portando instrumentos peligrosos; o II. Se emplee violencia física o psicológica. Asimismo, las penas se incrementarán en una mitad cuando se utilice como medio comisivo la vía telefónica, el correo electrónico o cualquier otro medio de comunicación electrónica. Artículo 399 Bis. ... Se perseguirán por querella los delitos previstos en los artículos 380 y 382 a 399, exceptuando la fracción XII del artículo 387, 390 y los casos a que se refieren los dos últimos párrafos del artículo 395. Para el caso de los delitos de fraude y extorsión por vía telefónica fija o móvil, correo electrónico o cualquier medio de comunicación electrónica o tecnológico, establecidos en la fracción XXII del artículo 387 y 390 tercer y cuarto párrafos, el Ministerio Público deberá solicitar a los proveedores del servicio la información relacionada con el nombre y lugar de quien lo contrató. Asimismo, previa denuncia presentada ante el Ministerio Público, éste deberá solicitar la cancelación del servicio otorgado, hasta en tanto se deslinden responsabilidades. Transitorio Único. El presente decreto entrará en vigor a partir del día siguiente de su publicación en el Diario Oficial de la Federación. Palacio Legislativo de San Lázaro a 23 de abril de 2009. Diputado Adolfo Mota Hernández (rúbrica)