OPINIÓN Carlos Barroso [email protected] Director KPMG Valencia El Nuevo Plan General Contable (PGC) y las implicaciones en la gestión empresarial E n este artículo, continuamos con la serie de artículos en los que vamos a centrarnos en los aspectos novedosos del nuevo PGC con respecto al PGC anterior (en adelante PGC90) y las implicaciones que dichas modificaciones pueden tener ya sea en el análisis financiero, de gestión, de sistemas contables o fiscal. En este caso, exponemos los aspectos principales derivados de los ingresos por ventas y prestación de servicios. INGRESOS POR VENTAS Y PRESTACIÓN DE SERVICIOS 1.1. Permutas de bienes o servicios por operaciones de tráfico En relación a las permutas de bienes o servicios por operaciones de tráfico de similar naturaleza y valor, y a diferencia de las permutas en las que se recibe un inmovilizado, no se debe reconocer ningún ingreso. No obstante, el PGC no desarrolla el concepto de naturaleza. En esta medida, cabría preguntarse si la permuta de una materia prima por un producto terminado debería considerarse de similar naturaleza. 1.2. Tratamiento contable de gastos relacionados con acontecimientos deportivos En la consulta 7 del BOICAC 74, el ICAC ha respondido a la consulta sobre el tratamiento contable de los gastos relacionados con acontecimientos deportivos. Octubre El especialista aborda, en este artículo, los aspectos principales derivados de los ingresos por ventas y prestación de servicios del nuevo PGC 096 La respuesta a la consulta manifiesta que el contrato con la Federación Internacional constituye un proyecto en curso y, por tanto, los gastos necesarios para llevar a cabo el evento desde la fecha de designación se deben reconocer como existencias en curso, excluyendo los gastos de comercialización y los gastos generales de administración o dirección. En el Plan Sectorial de Federaciones Deportivas vigente, los gastos efectuados para la obtención de derechos sobre organización de acontecimientos deportivos o el precio de adquisición de estos mismos derechos cuando, siendo susceptibles de transmisión hayan sido adquiridos, se reconocían como inmovilizado inmaterial y los gastos necesa- rios para la organización de futuros acontecimientos deportivos tenían la consideración de “Gastos a distribuir” en varios ejercicios. A nuestro juicio, es complicado entender el cambio en el tratamiento contable de un mismo hecho económico, máxime cuando aparentemente los gastos no deberían presentarse como existencias si se trata realmente de la prestación de un servicio, tal y como se ha desarrollado previamente. En este sentido, si el resultado de la transacción puede ser estimado con fiabilidad, se debe aplicar el método de grado de realización, no figurando existencias en curso bajo este método. Si el resultado de la transacción no puede ser medido con fiabilidad, entonces los gastos incurridos se reconocen en resultados a medida que se incurren, no figurando existencias, y sólo se reconocen ingresos en la medida en que los gastos sean recuperables. La respuesta manifiesta igualmente que no se incluirán dentro del coste de producción aquellos gastos incurridos con anterioridad a la designación ni otros que tengan una naturaleza análoga a gastos de establecimiento. Esto parecería ser contrario igualmente al tratamiento expuesto anteriormente sobre los gastos iniciales de proyecto o anteproyecto de obras. La consulta del ICAC pudiera plantear algunas dudas interpretativas, ya que lo verdaderamente importante es evaluar si nos encontramos ante un contrato de prestación de servicios. La firma del contrato con la Federación Internacional no establece ni garantiza unos ingresos mínimos, por lo que sería al menos cuestionable la calificación de contrato de prestación de servicios cuando pudiera concluirse que la sustancia de la transacción no es sino la adquisición de un derecho a organizar un evento bajo el auspicio y control de la Federación Internacional. Como consecuencia de ello, resulta complicado desarrollar los argumentos para justificar el cambio de criterio contable con respecto al PGC90 y si el criterio vertido en esta consulta podría ser extrapolable a otras circunstancias similares. 1.3. Valoración Los ingresos por ventas se deben considerar por el valor razonable de la contraprestación recibida o a recibir que, salvo evidencia en contrario, es el precio acordado, deducidos descuentos e intereses incorporados al nominal de los créditos, ex- OPINIÓN cepto cuando se trate de créditos comerciales con un vencimiento no superior al año y el efecto de la actualización de los flujos futuros que se vayan a cobrar no sea material. Los ingresos se deben reconocer atendiendo al fondo económico de las transacciones, por lo que se deben identificar los diferentes componentes o entregables de las mismas que se deben valorar y reconocer separadamente. Asimismo, se deben reconocer conjuntamente aquellas transacciones que se considere que están ligadas entre sí, por haberse contratado simultáneamente y por carecer de sentido económico si se analizan aisladamente. NOVEDADES Los impactos más relevantes de estos cambios son los siguientes: a) Cuando exista evidencia de que el precio acordado en una transacción no es el valor razonable, se debe analizar la sustancia de la misma con el objeto de evaluar si existen otros elementos que deban ser objeto de reconocimiento y valoración separada (por ejemplo: si se venden productos a un precio inferior al de mercado, existiendo un compromiso del vendedor a comprar productos al comprador con un descuento significativo sobre el mercado, el diferencial entre el precio de venta y el valor razonable podría ser en sustancia un anticipo de existencias futuras). b) Los descuentos por pronto pago se reconocen como una minoración de las ventas y no como un gasto en el margen financiero. c) Se debe analizar los diferentes elementos que se entregan a los clientes para reconocerlos y valorarlos por separado (por ejemplo: ventas de productos, instalación, mantenimiento periódico o alquiler por servicio de almacén). d) Se debe analizar las transacciones concatenadas con el objeto de contabilizarlas de acuerdo a su sustancia (por ejemplo: venta de productos con un pacto de recompra posterior por el vendedor podría ser en sustancia un arrendamiento que habrá que analizar de acuerdo con dicha norma o una venta de productos con una opción de ven- “Los descuentos por pronto pago se reconocen como una minoración de las ventas y no como un gasto en el margen financiero” ta por el comprador podría ser en sustancia una operación de financiación). e) Con el PGC90, los descuentos relacionados con las ventas con tarjetas de crédito se contabilizaban como un gasto financiero. Con el PGC, estos descuentos se deben registrar como servicios exteriores en la medida en que corresponden al coste derivado de la gestión de cobro o facilitar un medio de pago a los clientes. No obstante, tratándose de una operación de factoring sin recurso por la que el vendedor cobra por anticipado el importe de la venta, el descuento se reconoce como un resultado del margen financiero por la baja de un activo financiero. Asimismo, con el PGC90, los solares adquiridos a cambio de construcciones futuras se valoraban por la mejor estimación del coste de construcción futuro, con el límite del valor de mercado del solar con abono a una cuenta acreedora que reflejaba la deuda no monetaria contraída. Las disminuciones en el coste de la construcción implicaban una corrección valorativa del terreno. Sin embargo, los aumentos en el coste de la construcción solo debían ser objeto de reconocimiento como mayor valor del solar, con el límite del valor de mercado, en el momento de la entrega de la construcción. Con el PGC, esta operación se considera una transacción de venta de construcciones futuras, que se debe considerar por el valor razonable de la contraprestación recibida. Por lo tanto, el terreno se debe reconocer por su valor razonable o por el valor razonable de la construcción, si este fuera más fiable, con abono a una cuenta de anticipos de clientes que se aplicará a ingresos por ventas en el momento en el que se cumplan los criterios de reconocimiento expuestos anteriormente para la venta de la construcción.