Guía Práctica de Milán

Guía Práctica de Milán
Guía Práctica de Milán – Milán donde nace y reside la
moda, la ciudad más rica de la Unión Europea que se
reúne muchos diseñadores, modelos, artistas y
fotógrafos es un lugar perfecto para una escapada de
fin de semana para conocer la ciudad más importante de
Italia norte. Milán no es solo de moda, también cuenta
con un valioso patrimonio cultural que seguro te va a
impresionar.
Milán – Foto: Filippo Salamone
¿Cómo llegar a Milán?
Desde España a Milan vuelan muchas aerolíneas de bajo coste y
es muy fácil de encontrar un vuelo económico. La ciudad
dispone de tres aeropuertos. El Aeropuerto Milan-Malpensa es
uno de los más transitados. Desde su Terminal 1 hay dos líneas
de tren que comunican con el centro. El Aeropuerto MilanLinate es más bien solo utilizado para vuelos domésticos y de
corta distancia, y el Aeropuerto Milán Bérgamo conocido como
Orio al Serio es el más utiliza por las compañías de bajo
coste como Ryanair etc. Desde este aeropuerto hay servicios
directos de autobuses hacia la Estación Central de Milán, que
salen cada media hora y el trayecto dura aproximadamente 60
minutos.
¿Qué ver en Milán?
Duomo autor vivianamartinelli
Catedral de Milán – Duomo de Milano
Sin ninguna duda, el símbolo
de Milán es su Duomo,
la
segunda catedral católica más grande del mundo después del
Vaticano.
Construido durante más de 500 años de estilo
gótico, su longitud es de 157 metros y tiene capacitad de
albergar 40.000 personas. Sobre su aguja principal se puede
ver su famosa estatua de cobre dorado “La Madonnina”. En la
parte superior del monumento tiene una azotea abierta donde
se puede subir tanto por las escaleras (158 escalones!) o en
ascensor y disfrutar unas vistas panorámicas sobre la ciudad.
Horario: Diario 7:00 – 18:40
Precio: Gratuito,
ascensor 12 euro
Terraza Panorámica – escaleras 7 euros,
Gallerias autor Filip Maljkovic
Galerías Vittorio Emanuelle
En esta Galería comercial se puede encontrar las tiendas más
elegantes de la ciudad como de firmas de Gucci, Prada o Louis
Vuitton. El edificio de cuatro pisos fue diseñado en el siglo
XIX, tiene dos arcadas perpendiculares cubiertas por una
bóveda de vidrio y se sitúa entre dos monumentos importantes
de Milán, la Catedral y el Teatro alla Scala, y suele ser
llamado también como “El Salón de Milán”. Es el lugar
neurálgico del centro de la ciudad con sus joyerías, tiendas
de moda, libros y pinturas también tiene muchos cafés, bares y
restaurantes e incluso hoteles.
Castillo Sforzesco –
Castello Sforzesco
Construido en el siglo XV por la familia Sfroza como una
fortaleza, el Castillo se encuentra en el casco antiguo de la
ciudad. Actualmente alberga los tres mejores museos de la
ciudad, el Museo de Arte Antiguo, el Museo de Artes Aplicadas
y el Museo Arqueológico.
Iglesia de Santa María della Grazie – la Ultima Cena de
Leonardo Da Vinci
Una de las joyas de Milán esconde la Iglesia de Santa María
della Grazie del siglo XV, declarada Patrimonio de la
Humanidad por el Unesco en 1980.
En el interior de su
Refectorio se encuentra el famoso fresco pintado por Leonardo
Da Vinci la Última Cena. Para poder visitarlo tienes que hacer
la reserva de las entradas con suficiente antelación.
¿Cómo moverte en Milán?
El transporte público de la ciudad es muy bueno, tanto por su
eficacia como por su bajo coste. El Tranvía es el transporte
más preferido entre los turistas y el Metro con sus tres
Líneas ofrece una red amplia para visitar los importantes
lugares turísticos.
¿Dónde alojarte en Milán?
Grand Hotel Puccini –
Este hotel de 4 estrellas cuenta con una ubicación
excelente en una zona céntrica, a 30 metros de distancia de la estación metro Lima
y cuatro paradas de la catedral de Milán. Todas las habitaciones están
insonorizadas y tienen conexión Wi-Fi gratuita.
¿Qué se debe tener en cuenta?
A la hora de visitar la Catedral, aunque sea la época de
verano y mucho calor, debes llevar cubierto los hombros y las
rodillas ya que es un lugar de culto.
Uno de los teatros más famosos del mundo es el Teatro alla
Scala, si tienes la oportunidad de ver una obra allí no la
pierdas.