CREACIN DEL CALENDARIO DE CONTROL AUDITIVO Y

Senado de la Nación
Secretaria Parlamentaria
Dirección General de Publicaciones
(S-2546/10)
PROYECTO DE LEY
El Senado y Cámara de Diputados,...
CAPÍTULO I – DEL TÍTULO
Artículo 1°: Declárase obligatoria, a partir de la sanción de la presente
ley, la creación del Calendario de Control Auditivo y Exámenes
Audiofonológicos, en cumplimiento de la recomendación efectuada por
la Comisión para la Detección Precoz de la Hipoacusia - CODEPEH -.
CAPÍTULO II – DE LOS OBJETIVOS
Artículo 2°: La presente ley tiene por objeto la detección y el
diagnóstico precoz de la sordera, a los efectos de prevenir retrasos en
el comportamiento auditivo, vocal y del lenguaje, que alteren la
integración escolar y social del niño.
CAPÍTULO III – DE LA IMPLEMENTACIÓN
Artículo 3°: En concordancia con el desarrollo evolutivo del niño, el
calendario mencionado en el Artículo 1° de la presente ley, deberá
ajustarse al siguiente cronograma:
•
Primera Infancia
Examen de Potenciales Evocados Auditivos.
Implementación de Técnicas de Detección Temprana:
Audiometría del comportamiento auditivo
Otoemisiones Acústicas Provocadas
Control del Comportamiento Audiofonológico del niño.
Artículo 4°: En coincidencia con el ingreso a la Escolaridad Primaria, la
CODEPEH recomienda la realización del estudio de Timpanometría o
Impedanciometría, medición fisiológica del aparato de transmisión
(reflejos motores/neurovegetativos a estímulos sonoros), a los efectos
de facilitar a los niños que presenten problemas auditivos, el acceso al
lenguaje oral y al desarrollo de los aprendizajes posteriores que de él
dependen
(lectura-razonamiento-comprensión),
permitiéndoles
mejores y mayores posibilidades de integración escolar y social.
CAPÍTULO IV – DE LA AUTORIDAD DE APLICACIÓN
Artículo 5°: El Ministerio de Salud de la Nación, a través de los
respectivos ministerios provinciales con competencia en la materia, se
constituye en la autoridad de aplicación de la presente norma.
CAPÍTULO V – DE LA ADHESIÓN
Artículo 6°: Invítase a las provincias y a la Ciudad Autónoma de
Buenos Aires a adherir a los alcances de la presente ley.
Artículo 7°: Comuníquese al Poder Ejecutivo.
Mario J. Colazo.FUNDAMENTOS
Sr. Presidente:
La detección y el diagnóstico precoz de una deficiencia auditiva
implican una labor audiofonológica que permita prevenir un retraso del
lenguaje y de las dificultades escolares y de integración social de los
niños afectados.
De acuerdo con las últimas recomendaciones de la Comisión para la
Detección Precoz de la Hipoacusia (CODEPEH), es primordial hacer
un diagnóstico precoz de la sordera para prevenir sus consecuencias.
En el transcurso de la primera infancia, la escucha de las señales de
llamada y la simple observación clínica por cualquier persona en
contacto con el niño, constituyen la base de la detección. Es
indispensable una observación constante del comportamiento auditivo,
vocal y del lenguaje del niño.
Además del examen clínico llevado a cabo por el pediatra, las técnicas
de detección y de confirmación de diagnóstico de hipoacusia infantil
son múltiples y en constante evolución: audiometría del
comportamiento,
impedanciometría,
otoemisiones
acústicas
provocadas, potenciales evocados auditivos, etc. Su puesta en
funcionamiento por un equipo especializado sigue siendo el único
método fiable, y autorizará el anuncio de un diagnóstico o la aclaración
de una duda.
En el momento en que se reconoce una deficiencia auditiva, es
indispensable llevar a cabo un seguimiento audiofonológico inmediato
y adecuado al grado de la deficiencia. Deberá ser completado por una
investigación etiológica.
Sin embargo, en los países o regiones donde el seguimiento
audiológico es imposible o difícil debido a la ausencia de estructuras
adecuadas, la detección y el diagnóstico precoz se recomienda para
que los niños afectados puedan gozar de las medidas adecuadas que
les permitan el acceso a un lenguaje oral o de señas.
En la actualidad, en oposición a los exámenes audiométricos
subjetivos, que implican la participación del paciente, existen otros
métodos, llamados "objetivos", cuyas respuestas al estímulo sonoro
son independientes de la conciencia del sujeto.
Estos métodos tienen por objeto estudiar los mecanismos fisiológicos
del aparato de transmisión, los mecanismos reflejos motores o
neurovegetativos a los estímulos sonoros, y por último, el
funcionamiento neurofisiológico de las vías auditivas a partir de los
potenciales eléctricos emitidos por estas estructuras en el momento de
su estimulación.
En este sentido, uno de los estudios que arroja mayor certeza sobre la
deficiencia auditiva es el Timpanometría o Impedanciometría.
Se trata de una prueba objetiva que mide la función del oído medio en
lo que respecta a su presión, función de la trompa de Eustaquio,
integridad y movilidad de la membrana timpánica y continuidad de la
cadena de huesecillos. La prueba se realiza registrando la movilidad
del tímpano, introduciendo modificaciones artificiales de presión en el
CAE (timpanometría), y registrando la contracción del músculo del
estribo en respuesta a estímulos sonoros intensos (reflejo acústico).
Resulta sumamente útil para el estudio de hipoacusias de conducción
y neurosensoriales.
La noción de impedancia acústica deriva por analogía de la
impedancia eléctrica y de la impedancia mecánica.
Cuando una fuerza se ejerce sobre un cuerpo, cuando una corriente
continua recorre un circuito, una y otra deben vencer un factor de
oposición constituido por los rozamientos en el primer caso y la
resistencia eléctrica en el segundo. Pero si se trata de una corriente y
de una fuerza alternativa, el problema es más complejo.
El conjunto tímpano-osicular constituye un sistema acústico de alta
complejidad, cuya impedancia representa la reacción propia en
relación con la estimulación sonora que la afecta.
La Comisión para la Detección Precoz de la Hipoacusia (CODEPEH)
considera que la experiencia de los programas consolidados,
demuestra que la detección precoz de la hipoacusia es posible y que
una atención temprana, con intervención logopédica y audioprótesica,
posibilita que los niños con problemas auditivos accedan al lenguaje
oral en las primeras edades y, en consecuencia, al desarrollo de los
aprendizajes posteriores que de él dependen (lectura, razonamiento y
comprensión), permitiéndoles mayores posibilidades de integración
familiar, educativa y laboral en una sociedad eminentemente oralista.
Gracias a su pronta identificación, la educación a estos niños les
permite un nivel de integración impensable hace unos años. Existen
diferencias significativas entre aquellos niños que reciben una atención
temprana y aquellos casos en los que dicha atención se retrasa por
culpa de una identificación tardía.
Sr. Presidente, por todo lo expuesto, solicito a mis pares me
acompañen en la aprobación del presente Proyecto de Ley.
Mario J. Colazo.-