DERECHO LOCAL EDE 2013/1492 Comunidad Valenciana. Solicitud por funcionario de permiso por lactancia acumulado en jornadas completas Fecha de la consulta: 25/1/2013 Planteamiento Un funcionario de este Ayuntamiento valenciano, ha sido padre. Su mujer trabaja por cuenta ajena y, por lo tanto, le es aplicación el Estatuto de los Trabajadores. La madre ha disfrutado de su permiso por maternidad y ahora el funcionario ha solicitado el permiso de lactancia y solicita también la acumulación de las horas en jornadas completas. Acompaña certificado de la empresa de su mujer, que acredita que la madre no ha solicitado ni disfrutado del periodo de lactancia que legalmente corresponde. El Ayuntamiento considera correcto conceder dicho permiso, si bien no está de acuerdo con la acumulación por considerar que se pretende disfrutar de unas vacaciones encubiertas y teniendo en cuenta que no justifica ningún peligro para el niño. ¿Cuál es su opinión? ¿Puede el Ayuntamiento denegar dicha acumulación? Respuesta El art. 142 del RDLeg 781/1986, de 18 de abril, por el que se aprueba el texto refundido de las Disposiciones Legales Vigentes en materia de Régimen Local -TRRL- establece que los permisos de los funcionarios locales serán los mismos que los que se establezcan en la legislación de la función pública de la Comunidad y en la legislación básica del Estado. Concretamente, la acumulación de lactancia la encontramos regulada en elart. 48.f) del Estatuto Básico del Empleado Público -EBEP-, aprobado por Ley 7/2007: "f) Por lactancia de un hijo menor de doce meses tendrá derecho a una hora de ausencia del trabajo que podrá dividir en dos fracciones. Este derecho podrá sustituirse por una reducción de la jornada normal en media hora al inicio y al final de la jornada o, en una hora al inicio o al final de la jornada, con la misma finalidad. Este derecho podrá ser ejercido indistintamente por uno u otro de los progenitores, en el caso de que ambos trabajen. Igualmente la funcionaria podrá solicitar la sustitución del tiempo de lactancia por un permiso retribuido que acumule en jornadas completas el tiempo correspondiente. Este permiso se incrementará proporcionalmente en los casos de parto múltiple." No obstante, en el ámbito de la administración local de la Comunidad Valenciana, leída la Circular "Incidencia en la función pública local de las novedades legislativas en materia de jornada y condiciones de trabajo", continuamos aplicando el Decreto 175/2006, de 24 de noviembre: "...para los municipios de la Comunitat Valenciana y en tanto en cuanto no se dicte una nueva normativa de desarrollo tal como se prevé en la disposición final tercera de la Ley 10/2010, de 9 de julio de Ordenación y Gestión de la Función Pública Valenciana, resultará de aplicación el Decreto 175/2006, de 24 de noviembre, del Consell, por el que se regulan las condiciones de trabajo del personal al servicio de la administración del Consell, modificado recientemente por el Decreto 68/2012, de 4 de mayo, con excepción de lo dispuesto en el Capítulo II que trata sobre la jornada de trabajo y horarios, materias éstas sobre las que son aplicables la legislación estatal". El art. 28 del Decreto 175/2006 recoge el "permiso por lactantes" en los términos siguientes: "1. El personal, por lactancia de un menor de 12 meses o por acogimiento o adopción en idéntico supuesto, tendrá derecho a una hora diaria de ausencia del trabajo, que podrá dividir en dos fracciones. 2. Este permiso será ampliable en la misma proporción por parto, adopción o acogimiento familiar múltiple. 3. Este permiso podrá ser disfrutado indistintamente por la madre o por el padre, en el caso de que ambos trabajen, pero, en cualquier caso, sólo por uno de ellos. Previa renuncia del padre, este permiso podrá disfrutarlo el cónyuge o pareja de hecho de la madre. 4. El personal podrá solicitar la sustitución del tiempo de lactancia por un permiso retribuido que acumule en jornadas completas el tiempo correspondiente." Al respecto, consideramos de interés la lectura de la Sentencia del TSJ Madrid de 5 de abril de 2011: "...entrando en el análisis de la verdadera causa por la que fue denegado el permiso acumulado al hoy recurrente, hemos de decir que si nos atenemos a la disposición con rango de Ley aplicable, ciertamente señala el artículo 48.1, respecto de "Permisos de los funcionarios públicos", que "Las Administraciones Públicas determinarán los supuestos de concesión de permisos a los funcionarios públicos y sus requisitos, efectos y duración. En defecto de legislación aplicable los permisos y su duración serán, al menos, los siguientes:(....) f) Por lactancia de un hijo menor de doce meses tendrá derecho a una hora de ausencia del trabajo que podrá dividir en dos fracciones. Este derecho podrá sustituirse por una reducción de la jornada normal en media hora al inicio y al final de la jornada o, en una hora al inicio o al final de la jornada, con la misma finalidad. Este derecho podrá ser ejercido indistintamente por uno u otro de los progenitores, en el caso de que ambos trabajen. Igualmente la funcionaria podrá solicitar la sustitución del tiempo de lactancia por un permiso retribuido que acumule en jornadas completas el tiempo correspondiente." Sin embargo, se interpreta erróneamente esa disposición cuando se entiende, -y así parece hacerlo en este caso el órgano administrativo denegante-, que esa norma faculta a la Administración para decidir si otorga o no dicho permiso en función de las circunstancias organizativas que puedan tenerse en consideración, (siquiera en función de requisitos dados por Circular interna o por informes consultivos de órganos especializados), con lo cual, la previsión legal de mínimos a que alude la propia Abogacía del Estado no sería más que un desiderato o una cláusula meramente programática. Antes bien, hay que decir, -y no solo porque el art. 6 EBEP llame a la Ley de Cortes Generales para el desarrollo del mismo en la Administración General del Estado-, que la previsión básica opera siempre y con toda la energía,"en defecto de legislación aplicable", y que no cabe entender que la mención a "requisitos", -que el Estatuto Básico remite a su desarrollo normativo completo-, pueda reconducirse a la aislada emisión de meros criterios administrativos internos que condicionen, limiten o anulen el derecho básico. Habrá de ser una normativa general del debido rango la que contenga las reglas sobre el momento idóneo para solicitar el disfrute del derecho y la que pueda limitar su ejercicio, es decir, una cosa es que la Administración pueda establecer criterios para organizar la concesión de las licencias y permisos, y otra muy distinta que al amparo de esa potestad de autoorganización se pretendan incluir condiciones no previstas en la Ley, sin darles la debida cobertura legal. No estamos diciendo que no se pueda imponer la condición que se ha exigido,- el art. 48 EBEP lo permitiría-, lo que no se puede es exigir el cumplimiento de una condición cuando no se ha divulgado dicha exigencia a través de la publicidad de las instrucciones". Por lo anteriormente expuesto, a nuestro juicio, tiene derecho el padre al permiso de lactancia, previa renuncia de la madre, y este derecho puede usarse en las diferentes formas que se regulan, sin imponer condiciones que no especifica la norma, puesto que corresponde a los progenitores determinar la conveniencia de disfrutar el permiso en una modalidad u otra. En términos similares lo entiende el TS, en este caso en sentencia sobre convenio colectivo laboral, de 20 de junio de 2005: "...conforme a la realidad social del momento en que ha de ser aplicada la ley constituye un hecho notorio que en la sociedad actual y en un entorno urbano que obliga a la inversión de considerable tiempo en los desplazamientos -máxime en un supuesto como el de ALDEASA, en el que la mayor parte de los trabajadores prestan sus servicios en aeropuertos, cuya sede está lejos de los domicilios urbanos- la ausencia del trabajo en dos fracciones de media hora, constituye un derecho prácticamente inejercitable para el fin previsto, ya que en la mayor parte de los casos el tiempo invertido en los desplazamientos del centro de trabajo al domicilio es superior al tiempo de interrupción de la jornada laboral. De otra parte, es evidente que la asistencia que se puede dar al hijo durante la media hora de disminución de la jornada es sensiblemente menor a la que reconoce la norma paccionada, que alcanza a un mes completo sin obligaciones laborales. Es sintomático, al efecto (hecho probado tercero) que trabajadores de Aldeasa han optado por ejercitar de esta forma el permiso de lactancia en forma mayoritaria"