Protocolo facultativo para los derechos económicos, sociales y culturales: análisis de su contenido para hacerlo efectivo. Ivet Martínez Miranda INTRODUCCIÓN La Declaración Universal de los Derechos Humanos, adoptada por la Asamblea General de Naciones Unidas en la Resolución 217ª (III) de 1ro de Diciembre de 1948, consta de 30 artículos, partiendo de los principios de libertad, igualdad, no discriminación, cooperación entre los Estados, entre otros, en la misma se recoge de forma conjunta los Derechos Civiles y Políticos, su Protocolo Facultativo y los Derechos Económicos Sociales y Culturales. La Declaración hace énfasis en los Derechos Civiles y Políticos (arts3-21), dedicándole a los Derechos Económicos Sociales y Culturales solo seis arts. (22 -27). Por lo que algunos autores expresan que esta situación presenta desventajas entre unos y otros derechos, es decir, un desbalance a la hora de la protección de los mismos en la Jurisdicción Internacional, que no es casual ni olvido del legislador, más bien responde a los intereses de los llamados “poderosos capitalistas” en beneficio de sus Estados. Estos derechos se incluyen también en dos instrumentos legales internacionales como son: el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PIDCP) y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC); los cuales surgen con el fin de precisar su naturaleza, principalmente en relación con sus medios de implementación. Ambos Pactos, conocidos también como Pactos de New York, se establecen por la Resolución 2200 (XXI) de la Asamblea General de Naciones Unidas de 16 de diciembre de 1966, entrando en vigor diez años después, en 1976. Estos Pactos recogen la práctica de los derechos humanos enunciados en la Declaración Universal anteriormente citada, desarrollándolos, dotándolos de unidad desde una perspectiva común muy importante que se evidencia en sus primeros artículos como es la libre determinación de los pueblos como un derecho humano y la dignidad humana. La división entre las diferentes categorías de derechos humanos – derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales – no implica de ninguna manera que una categoría sea más importante que otra. En efecto, en el preámbulo de los dos Pactos de 1966, se afirma que todos los derechos humanos están interrelacionados, y son indivisibles, interdependientes e igualmente importantes. Los Estados han confirmado este principio en varias ocasiones, como por ejemplo en la Declaración y el Programa de Acción de Viena aprobado en la Conferencia Mundial de Derechos Humanos (Viena 1993). Sin embargo, la práctica muestra que las diferentes categorías de derechos humanos no se han desarrollado de igual manera. Comparado a los derechos civiles y políticos, las categorías de derechos económicos, sociales y culturales están menos desarrolladas. Esto se debe en parte a que los derechos económicos, sociales y culturales se han considerado durante mucho tiempo como derechos secundarios con respecto a los derechos civiles y políticos. Su denominada “imprecisa redacción”, su naturaleza programática y la problemática de su justiciabilidad son las razones por las cuales se les ha atribuido tal estatus. Todavía existe una incomprensión acerca de estos derechos en relación con su contenido y con la naturaleza de las obligaciones del Estado. El Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (llamados PIDESC) es el único Tratado Internacional que cubre en su totalidad los derechos económicos sociales y culturales. Los define y estipula principalmente como parte integrante e indisoluble de los derechos humanos. La siguiente investigación se estructura sobre la base del problema de investigación: insuficiente análisis del Protocolo Facultativo para los Derechos Económicos, Sociales y Culturales, así como su contenido que demuestre su efectividad. Objeto: Protocolo Facultativo para los Derechos Económicos, Sociales y Culturales y su contenido. Objetivo general: Analizar las bases teóricas e internacionales del Protocolo Facultativo para los Derechos Económicos, Sociales y Culturales, así como de su contenido, partiendo de la importancia de hacerlos efectivos. Objetivos Específicos: 1. Actualizar el marco teórico doctrinal desde el punto de vista internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales, que se regulan en el protocolo para la protección de los mismos. 2. Analizar el contenido del Protocolo Facultativo para los Derechos Económicos, Sociales y Culturales que garantice la efectividad de los mismos. Hipótesis: La firma y ratificación del Protocolo Facultativo para los Derechos Económicos, Sociales y Culturales, así como de su contenido, garantiza la efectividad y protección de tales derechos. Metodología: Análisis Histórico, para profundizar en la búsqueda o conformación de las instituciones, conceptos o principios jurídicos a tratar, así como en el estudio de evolución de las mismas, teniendo en cuenta la doctrina general y especializada, disposiciones vigentes y los sistemas de derecho. Técnicas: Información documental, comentarios de expertos en el tema y revisiones bibliográficas, entre otras. Resultados esperados: 1. Actualización del marco teórico doctrinal en esta temática, lo cual redundará en una complementación del caudal de conocimientos ya existentes. 2. Identificación de las principales necesidades, que se presentan desde el punto de vista práctico e internacional del contenido del Protocolo Facultativo para los Derechos Económicos, Sociales y Culturales . Estructura de la investigación. CAPITULO I: Marco teórico-doctrinal desde el punto de vista internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales, que se regulan en el PIDESC para la protección de los mismos. CAPITULO II: Análisis del contenido del Protocolo Facultativo para los Derechos Económicos, Sociales y Culturales que garantice la efectividad de los mismos. DESARROLLO CAPITULO I: Marco teórico-doctrinal desde el punto de vista internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales, que se regulan en el PIDESC para la protección de los mismos. Se han llevado a cabo esfuerzos para fortalecer la implementación de los derechos económicos, sociales y culturales mediante una aclaración más detallada de su contenido normativo y mediante la especificación de la naturaleza y contenido de las obligaciones del Estado. Las contribuciones a este cambio de perspectiva provienen de académicos, de Relatores Especiales de las Naciones Unidas que poseen un mandato en el área de los derechos económicos, sociales y culturales, y del cuerpo de expertos que controla la implementación del PIDESC, del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de las Naciones Unidas (CDESC), en particular a través de sus Observaciones Generales. Los Derechos Económicos, Sociales y Culturales hablan de cuestiones tan básicas para la dignidad humana como la alimentación, la salud, la vivienda, el trabajo, la educación y el agua. Todos los derechos humanos son indivisibles e interdependientes. Las violaciones de los DESC (por ejemplo, no proteger los derechos sobre las tierras de los pueblos indígenas, negar los derechos de educación a las minorías y prestar servicios de atención médica de manera no equitativa) a menudo están relacionadas con violaciones de los derechos civiles y políticos en forma de negaciones reiteradas. Del mismo modo que para el pleno disfrute del derecho a la libertad de expresión es necesario concertar esfuerzos en favor del derecho a la educación, para el disfrute del derecho a la vida es preciso tomar medidas encaminadas a la reducción de la mortalidad infantil, las epidemias y la malnutrición. El reconocimiento de los DESC no es un mero catálogo de buenas intenciones por parte de los Estados. Son derechos que se derivan directamente de tratados internacionales de derechos humanos, como el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la ONU (1966) y las normas establecidas por organismos especializados como la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). La jurisprudencia interna de muchos países y la tendencia a incluir estos derechos en las reformas constitucionales demuestran que estos derechos se pueden hacer cumplir mediante recursos legales. Sin embargo, queda mucho por hacer para que estos derechos se equiparen a los civiles y políticos en lo que se refiere a su exigencia jurídica internacional. Los Derechos Económicos, Sociales y Culturales reconocidos son: -El derecho a un nivel de vida adecuado. -El derecho a la alimentación que incluye el derecho a no pasar hambre y el acceso permanente a comida nutritiva suficiente o a los medios para obtenerla. -Derecho a la vivienda que incluye la seguridad de tenencia, la protección contra desalojos forzosos y el acceso a una vivienda asequible, habitable, bien situada y culturalmente satisfactoria. -Derecho a la salud incluidas unas condiciones de vida saludables y la disponibilidad de servicios de salud accesibles, aceptables y de buena calidad. -Derecho al trabajo, en el cual se hace referencia a condiciones laborales justas y equitativas, a la protección contra el trabajo forzado y obligatorio y a crear sindicatos y formar parte de ellos. -Derecho a la educación garantizando, por ejemplo, el derecho a una educación primaria gratuita y obligatoria y a una educación suficientemente disponible, accesible, aceptable y adaptable a cada persona concreta; -Derecho a la cultura de las minorías y de los pueblos indígenas. -Derecho a participar y beneficiarse del progreso científico. El Derecho Internacional y los Derechos Humanos, regulan que el Estado es el que tiene la responsabilidad de proteger estos derechos y garantizarlos a los ciudadanos, sin distinción de raza, color, sexo, creencias religiosas, etc. Garantizarlos precisa un rol pro-activo de los Estados en materia de financiación y de recursos materiales, por lo que su efectividad estará relacionada al principio de realización progresiva. No obstante, las provisiones del PIDESC fueron formuladas de una manera programática, así los Estados deben promocionar estos derechos y a la vez tener en cuenta las circunstancias nacionales, evidenciándose la inmediata obligación de los gobiernos de respetarlos y protegerlos, no constituyendo la falta de recursos una excusa para ignorar el cumplimiento de los mismos. Sin dudas, la legislación internacional ofrece mayor tratamiento a los derechos políticos y civiles, pues son los que más interesan a la mayoría de los Estados y los que lógicamente se protegen con menos recursos, dado a que los derechos económicos, sociales y culturales constituyen un gasto público para cualquier gobierno, lo que representa un gasto del presupuesto nacional que no todos están dispuestos a garantizar, de ahí el que estos derechos no se encuentren en el mismo nivel de protección de aquellos e incluso cuenten con un mecanismo de supervisión más modesto, consistente únicamente en un procedimiento de informes (artículo 16). Necesidad de un Protocolo Facultativo del PIDESC A partir de todo esto es que se pone de manifiesto la necesidad de un Protocolo Facultativo del PIDESC, ya que hay que dejar bien claro que los derechos humanos son universales, indivisibles, interdependientes y se relacionan entre si, por lo que todos son iguales, tienen la misma importancia y son titular de la dignidad humana, requiriendo la misma protección, todo lo cual se estableció en la Declaración de Viena perneada de la opinión pública internacional, con la participación de las Organizaciones No Gubernamentales, en la Conferencia Mundial de los Derechos Humanos. El Protocolo Facultativo como Instrumento adicional a un Tratado Internacional, ya sea para establecer un mecanismo de seguimiento de dicho Tratado, o para reforzarlos o ambas cosas, no sólo permitirá invertir el desequilibrio histórico que ha existido entre la protección de los derechos civiles y políticos y los DESC, lo cual constituye un avance histórico para los derechos humanos, sino que a su vez potenciará el desarrollo de una jurisprudencia en esta materia y posibilitará implementar mecanismos coercitivos para el cumplimiento por parte de los Estados de estos Derechos que está obligados a garantizar. Ya son varios los años en los que en el seno de la ONU se debate el mecanismo o procedimiento para el establecimiento de un Protocolo análogo al del Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos: • “En el año 2004, los miembros de las Naciones Unidas se reunieron en el marco de un grupo de trabajo para discutir la posibilidad de elaborar el Protocolo Facultativo. • En junio de 2006, durante la primera sesión del Consejo de Derechos Humanos (que reemplazó a la Comisión de Derechos Humanos) se decidió finalmente autorizar al grupo de trabajo a comenzar negociaciones concretas sobre el texto del Protocolo Facultativo. • En abril de 2008, el grupo de trabajo finalmente aceptó trasladar el proyecto de protocolo al Consejo de Derechos Humanos de la ONU”1. Como resultado al esfuerzo de tantos años de trabajo donde han tenido un papel protagónico la sociedad civil y la Coalición Internacional de ONG, en junio de 2008, el Consejo de Derechos Humanos aprobó por consenso el Protocolo Facultativo del PIDESC, abriendo la posibilidad de acercar la justicia internacional a millones de personas, grupos, comunidades y pueblos excluidos de todo el mundo. Por lo que, cuarenta y dos años después de que se adoptara un mecanismo similar para los derechos civiles y políticos, quienes sufren violaciones de sus derechos económicos, sociales y culturales finalmente acceden al mismo estatus en el sistema de los derechos humanos de la ONU, a partir del reconocimiento de su derecho por un recurso efectivo. Adopción de un Protocolo Facultativo del PIDSC por la ONU El 10 de diciembre de 2008, día del 60 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, las Naciones Unidas adoptó “el Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC), aprobado por la Asamblea General, tomando nota de la aprobación por el Consejo de Derechos Humanos, en virtud de su resolución 8/2, de 18 de junio de 2008”2. 1 Sitio Web: http://www2.ohchr.org/english/issues/escr/intro.htm 2 Íbidem. CAPITULO II: Análisis del contenido del Protocolo Facultativo para los Derechos Económicos, Sociales y Culturales que garantice la efectividad de los mismos. El Protocolo instaura tres nuevos procedimientos de protección de los DESC: comunicaciones individuales, comunicaciones interestatales y un procedimiento de investigación de violaciones graves o sistemáticas de los DESC. El texto del Protocolo Facultativo adoptado en la versión final incluye disposiciones importantes para una mejor protección de los DESC: • “Los Estados Parte del PIDESC que adopten el Protocolo Facultativo reconocen la competencia del Comité de la ONU de DESC para recibir y evaluar comunicaciones referidas a violaciones de los derechos económicos, sociales y culturales estipulados en el Pacto. • El Protocolo abre la posibilidad de que se tomen "medidas cautelares", facultando al Comité para enviar al Estado Parte correspondiente una solicitud urgente para que adopte tales medidas cautelares, a fin de evitar que las víctimas de las presuntas violaciones sufran posibles perjuicios irreparables. • El Protocolo también crea un procedimiento de investigación, estableciendo que, si el Comité recibe información confiable referida a violaciones graves o sistemáticas del PIDESC, deberá invitar al Estado Parte a cooperar en la evaluación de la información y, para ello, a presentar observaciones respecto de la información. La investigación puede incluir una visita al territorio del Estado Parte afectado. • El Protocolo exige que los Estados tomen todas las medidas apropiadas para asegurar que las personas bajo su jurisdicción no sean sometidas a ninguna forma de maltrato o intimidación como consecuencia de las comunicaciones que se presenten ante el Comité en virtud del Protocolo Facultativo”3. El Protocolo Facultativo para los Derechos Económicos, Sociales y Culturales está estructurado por 22 artículos: a continuación se comentarán varios de ellos: Artículo1.Competencia del Comité para recibir y examinar comunicaciones, planteándose que todo Estado Parte en el Pacto que se haga Parte en el presente Protocolo reconocerá la competencia del Comité para recibir y examinar comunicaciones conforme a lo dispuesto en el presente Protocolo, y que el Comité no recibirá ninguna comunicación que concierna a un Estado Parte en el Pacto que no sea parte en el presente Protocolo. Artículo 2, sobre las comunicaciones, las cuales podrán ser presentadas por personas o grupos de personas que se hallen bajo la jurisdicción de un Estado parte y que aleguen ser victimas de una violación por ese Estado parte de los derechos económicos sociales y culturales enunciados en el Pacto. Para presentar una comunicación se puede realizar en nombre de personas o grupos de personas, en la cual se requerirá de su consentimiento, a menos que el autor pueda justificar que actúa en su nombre sin tal consentimiento. 3 El protocolo facultativo al PIDESC: Un paso histórico en la defensa de los derechos humanos. 10 de diciembre de 2008. El artículo 3: sobre la Admisibilidad, el Comité no examinará una comunicación sin antes haberse cerciorado de que se han agotado todos los recursos disponibles en la jurisdicción interna. No se aplicará esta norma cuando la tramitación de esos recursos se prolongue injustificadamente. Para declarar inadmisible tendrá en cuenta una serie de requisitos entre los que están: a) No se haya presentado en el plazo de un año tras el agotamiento de los recursos internos, salvo en los casos en que el autor pueda demostrar que no fue posible presentarla dentro de ese plazo b) Se refiera a hechos sucedidos antes de la fecha de entrada en vigor del presente Protocolo para el Estado Parte interesado, salvo que esos hechos hayan continuado después de esa fecha; c) Se refiera a una cuestión que ya haya sido examinada por el Comité o haya sido o esté siendo examinada con arreglo a otro procedimiento de examen o arreglo internacional; d) Sea incompatible con las disposiciones del Pacto; e) Sea manifiestamente infundada, no esté suficientemente fundamentada o se base exclusivamente en informes difundidos por los medios de comunicación; f) Constituya un abuso del derecho a presentar una comunicación, o g) Sea anónima o no se haya presentado por escrito. En el artículo 4, hace referencia a las comunicaciones que no revelen una clara desventaja, el artículo 5 se expresan por su parte las medidas provisionales y en el artículo 6 se comenta lo referente a la transmisión de la comunicación. A menos que el Comité considere que una comunicación es inadmisible sin remisión al Estado Parte interesado, el Comité pondrá en conocimiento del Estado Parte, de forma confidencial, toda comunicación que reciba con arreglo al presente Protocolo. En un plazo de seis meses, el Estado Parte receptor presentará al Comité por escrito explicaciones o declaraciones en que se aclare la cuestión y se indiquen, en su caso, las medidas correctivas que haya adoptado el Estado Parte. En el artículo 7, se plantea una solución amigable ante tales cuestiones y conflictos que se puedan suscitar. El artículo 8.al examinar las comunicaciones, tendrá en cuenta: Las comunicaciones que reciba en virtud del artículo 2 del presente Protocolo a la luz de toda la documentación que se haya puesto a su disposición, siempre que esa documentación sea transmitida a las partes interesadas. El Comité examinará en sesiones privadas las comunicaciones que reciba en virtud del presente Protocolo. Al examinar las comunicaciones recibidas en virtud del presente Protocolo, el Comité podrá consultar, según convenga, la documentación pertinente procedente de otros órganos, organismos especializados, fondos, programas y mecanismos de las Naciones Unidas y de otras organizaciones internacionales, incluidos los sistemas regionales de derechos humanos, y cualesquiera observaciones y comentarios del Estado Parte interesado. Al examinar las comunicaciones recibidas en virtud del presente Protocolo, el Comité considerará hasta qué punto son razonables las medidas adoptadas por el Estado Parte de conformidad con la parte II del Pacto. Al hacerlo, el Comité tendrá presente que el Estado Parte puede adoptar toda una serie de posibles medidas de política para hacer efectivos los derechos enunciados en el Pacto. El artículo 9 refleja el seguimiento de las observaciones del Comité, siguiendo los pasos correspondientes entre los que están: -Tras examinar una comunicación, el Comité hará llegar a las partes interesadas su dictamen sobre la comunicación, junto con sus recomendaciones, si las hubiere. -El Estado Parte dará la debida consideración al dictamen del Comité, así como a sus recomendaciones, si las hubiere, y enviará al Comité, en un plazo de seis meses, una respuesta por escrito que incluya información sobre toda medida que haya adoptado a la luz del dictamen y las recomendaciones del Comité. El Comité podrá invitar al Estado Parte a presentar más información sobre cualesquiera medidas que el Estado Parte haya adoptado en respuesta a su dictamen o sus recomendaciones, si las hubiere, incluso, si el Comité lo considera apropiado, en los informes que presente ulteriormente el Estado Parte de conformidad con los artículos del Pacto. En el artículo 10 sobre las comunicaciones entre Estados, deja clara que el Comité es el que tiene competencia y facultades para recibir y examinar comunicaciones en las que un Estado Parte alegue que otro Estado Parte no cumple sus obligaciones dimanantes del Pacto. Las comunicaciones presentadas conforme a este artículo sólo se recibirán y examinarán si las presenta un Estado Parte que haya reconocido con respecto a sí mismo la competencia del Comité en una declaración al efecto. El Comité no recibirá ninguna comunicación que se refiera a un Estado Parte que no haya hecho tal declaración. Las comunicaciones que se reciban conforme a este artículo quedarán sujetas al siguiente procedimiento: -Si un Estado Parte en el presente Protocolo considera que otro Estado Parte no está cumpliendo con sus obligaciones en virtud del Pacto, podrá, mediante comunicación por escrito, señalar el asunto a la atención de ese Estado Parte. El Estado Parte podrá también informar al Comité del asunto. En un plazo de tres meses contado desde la recepción de la comunicación, el Estado receptor ofrecerá al Estado que haya enviado la comunicación una explicación u otra declaración por escrito en la que aclare el asunto y, en la medida de lo posible y pertinente, haga referencia a los procedimientos y recursos internos hechos valer, pendientes o disponibles sobre la materia; -Si el asunto no se resuelve a satisfacción de ambos Estados Partes interesados dentro de seis meses de recibida la comunicación inicial por el Estado receptor, cualquiera de ellos podrá remitir el asunto al Comité mediante notificación cursada al Comité y al otro Estado; -El Comité examinará el asunto que se le haya remitido sólo después de haberse cerciorado de que se han hecho valer y se han agotado todos los recursos internos sobre la materia. No se aplicará esta norma cuando la tramitación de esos recursos se prolongue injustificadamente; -Con sujeción a lo dispuesto en el apartado c) del presente párrafo, el Comité pondrá sus buenos oficios a disposición de los Estados Partes interesados con miras a llegar a una solución amigable de la cuestión sobre la base del respeto de las obligaciones establecidas en el Pacto; -El Comité celebrará sesiones privadas cuando examine las comunicaciones a que se refiere el presente artículo; - En todo asunto que se le remita de conformidad con el apartado b) del presente párrafo, el Comité podrá pedir a los Estados Partes interesados que se mencionan en el apartado b) que faciliten cualquier otra información pertinente; - Los Estados Partes interesados que se mencionan en el apartado b) del presente párrafo tendrán derecho a estar representados cuando el asunto sea examinado por el Comité y a hacer declaraciones oralmente y/o por escrito; - El Comité presentará, a la mayor brevedad posible a partir de la fecha de recepción de la notificación a que se refiere el apartado b) del presente párrafo, un informe, como se indica a continuación: -Si se llega al tipo de solución previsto en el apartado d) del presente párrafo, el Comité limitará su informe a una breve exposición de los hechos y de la solución a que se haya llegado. -Si no se llega al tipo de solución previsto en el apartado d), el Comité expondrá en su informe los hechos pertinentes al asunto entre los Estados Partes interesados. Se adjuntarán al informe las declaraciones por escrito y una relación de las declaraciones orales hechas por los Estados Partes interesados. El Comité podrá también transmitir únicamente a los Estados Partes interesados cualesquiera observaciones que considere pertinentes al asunto entre ambos. En todos los casos, el informe se transmitirá a los Estados Partes interesados, los cuales depositarán la declaración prevista en el párrafo 1 del presente artículo en poder del Secretario General de las Naciones Unidas, quien remitirá copias de la misma a los demás Estados Partes. La declaración podrá retirarse en cualquier momento mediante notificación al Secretario General. Dicho retiro se hará sin perjuicio del examen de asunto alguno que sea objeto de una comunicación ya transmitida en virtud del presente artículo; después de que el Secretario General haya recibido la notificación de retiro de la declaración, no se recibirán nuevas comunicaciones de ningún Estado Parte en virtud del presente artículo, a menos que el Estado Parte interesado haya hecho una nueva declaración. Todo ello se logra a través del Procedimiento de investigación, previsto en el artículo 11: Cualquier Estado Parte en el presente Protocolo podrá en cualquier momento declarar que reconoce la competencia del Comité prevista en el presente artículo. Si el Comité recibe información fidedigna que da cuenta de violaciones graves o sistemáticas por un Estado Parte de cualquiera de los derechos económicos, sociales y culturales enunciados en el Pacto, el Comité invitará a ese Estado Parte a colaborar en el examen de la información y, a esos efectos, a presentar sus observaciones sobre dicha información. El Comité, tomando en consideración las observaciones que haya presentado el Estado Parte interesado, así como cualquier otra información fidedigna puesta a su disposición, podrá encargar a uno o más de sus miembros que realice una investigación y presente con carácter urgente un informe al Comité. Cuando se justifique y con el consentimiento del Estado Parte, la investigación podrá incluir una visita a su territorio. La investigación será de carácter confidencial y se solicitará la colaboración del Estado Parte en todas las etapas del procedimiento. Tras examinar las conclusiones de la investigación, el Comité las transmitirá al Estado Parte interesado junto con las observaciones y recomendaciones que estime oportunas. En un plazo de seis meses después de recibir los resultados de la investigación y las observaciones y recomendaciones que le transmita el Comité, el Estado Parte interesado presentará sus propias observaciones al Comité. Cuando hayan concluido las actuaciones relacionadas con una investigación hecha conforme al párrafo 2 del presente artículo, el Comité podrá, tras celebrar consultas con el Estado Parte interesado, tomar la decisión de incluir un resumen de los resultados del procedimiento en su informe anual previsto en el artículo 15 del presente Protocolo. Todo Estado Parte que haya hecho una declaración con arreglo al párrafo 1 del presente artículo podrá retirar dicha declaración en cualquier momento mediante notificación al Secretario General. En el artículo 12 se continúa con el seguimiento del procedimiento de investigación, artículo 13 refleja las medidas de protección, el artículo 14 refiere la asistencia y cooperación internacional, y el artículo 15, recoge la forma y estructuración del Informe anual. En el artículo 16, sobre la divulgación e información cada Estado Parte se compromete a dar a conocer y divulgar ampliamente el Pacto y el presente Protocolo, así como a facilitar el acceso a información sobre los dictámenes y recomendaciones del Comité, en particular respecto de las cuestiones que guarden relación con tal Estado Parte, y a hacerlo en formatos accesibles a las personas con discapacidad. En el artículo 17, sobre la firma, ratificación y adhesión: el presente Protocolo estará abierto a la firma de cualquier Estado que haya firmado el Pacto, lo haya ratificado o se haya adherido a él. El presente Protocolo estará sujeto a ratificación por cualquier Estado que haya ratificado el Pacto o se haya adherido a él. Los instrumentos de ratificación se depositarán en poder del Secretario General de las Naciones Unidas. El presente Protocolo4 quedará abierto a la adhesión de cualquier Estado que haya ratificado el Pacto o se haya adherido a él. La adhesión se hará efectiva mediante el depósito del instrumento correspondiente en poder del Secretario General de las Naciones Unidas. Artículo 18. Entrada en vigor. El presente Protocolo entrará en vigor tres meses después de la fecha en que haya sido depositado en poder del Secretario General de las Naciones Unidas el décimo instrumento de ratificación o de adhesión. Para cada Estado que ratifique el presente Protocolo o se adhiera a él después del depósito del décimo instrumento de ratificación o adhesión, el Protocolo entrará en vigor tres meses después de la fecha en que tal Estado haya depositado su propio instrumento de ratificación o de adhesión. El artículo 19, refiere las enmiendas, artículo 20 el procedimiento de denuncia, el artículo 21 la notificación del Secretario General, y el artículo 22. Idiomas oficiales que tendrá en cuanta el Protocolo. El Protocolo Facultativo no entra en vigencia inmediatamente pues antes debe ser ratificado por 10 Estados. Las víctimas de las violaciones de los derechos ESC solamente pueden utilizar el procedimiento después de que su Estado haya ratificado el Protocolo Facultativo. El Protocolo Facultativo quedó abierto para su firma en una ceremonia que se celebró en Nueva York en septiembre de 2009. Haciéndose campaña en aquellos momentos para que la mayor cantidad posible de Estados lo firmaran. La reciente aprobación de este instrumento internacional, junto con el trabajo realizado por el Comité DESC de la ONU, estas últimas décadas, y la inestimable labor desarrollada por la sociedad civil internacional, tienen como objetivo “situar a los DESC al mismo nivel de obligatoriedad para los Estados que los derechos civiles y políticos, respetando y haciendo efectiva la indivisibilidad proclamada por la Declaración Universal y la Conferencia Mundial de Viena de 1993, en cuya declaración final se subraya que la comunidad internacional debe tratar los derechos humanos en forma global y de manera justa y equitativa, en pie de igualdad y dándoles a todos el mismo peso”5. El Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (CESCR) “es el órgano de expertos independientes que supervisa la aplicación del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales por sus Estados Partes. El Comité se estableció en virtud de la resolución 1985/17, de 28 de mayo de 1985, del Consejo 4 5 Sitio Web: www.protectallhumanrights.org/es. Actualización 2010. Informe del Consejo de Derechos Humanos. Proyecto de resolución del Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. Sexagésimo tercer período de sesiones, por la Asamblea General Naciones Unidas A/C.3/63/L.47, 31 de octubre de 2008. Económico y Social de las Naciones Unidas (ECOSOC) para desempeñar las funciones de supervisión asignadas a este Consejo en la parte IV del Pacto”6. Todos los Estados Partes deben presentar al Comité "informes periódicos sobre la manera en que se ejercitan esos derechos. Inicialmente, los Estados deben presentar informes a los dos años de la aceptación del Pacto y luego cada cinco años. El Comité examina cada informe y expresa sus preocupaciones y recomendaciones al Estado Parte en forma de observaciones finales"7. El Comité no puede "examinar las denuncias de los particulares, aunque se está estudiando un proyecto de Protocolo Facultativo del Pacto que facultaría al Comité para ello. La Comisión de Derechos Humanos ha establecido un grupo de trabajo al respecto. Sin embargo, es posible que otro comité con competencia para examinar comunicaciones de los particulares considere cuestiones relacionadas con los derechos económicos, sociales y culturales en el contexto de su tratado"8. El Comité se reúne en Ginebra y normalmente "celebra dos períodos de sesiones al año, que constan de una sesión plenaria de tres semanas y un grupo de trabajo anterior al período de sesiones que se reúne durante una semana. El Comité también publica su interpretación de las disposiciones del Pacto, en forma de observaciones generales"9. El Protocolo Facultativo no entra en vigencia hasta no ser ratificado por 10 Estados. Las víctimas de las violaciones de los derechos económicos, sociales y culturales solamente pueden utilizar el procedimiento después de que su Estado haya ratificado el Protocolo Facultativo10. Por ello, nos debemos unir como Estados a la campaña de lograr que la mayor cantidad de Estados posible firme y ratifique el Protocolo Facultativo. Los Estados solamente ratificarán el Protocolo Facultativo si los grupos de la sociedad civil les comunican la importancia de hacerlo, y es ahí donde nuestras sociedades deben unirse en pos de enriquecimientos de conocimientos y análisis teóricos profundos en estas materias, para la protección de estos derechos en nuestros ciudadanos, y que mejor forma sería que el reconocimiento por parte de nuestros Estados de firmar y ratificar este Protocolo Facultativo para los Derechos Económicos, sociales y Culturales (PIDESC) y de su Comité Ejecutivo. Dentro de esta campaña a la cual nos referimos para la adopción de un Protocolo Facultativo no se puede dejar de mencionar a la Coalición Internacional de Organización No Gubernamentales por un Protocolo Facultativo al Pacto Internacional sobre los Derechos Económicos, Sociales y Culturales (o la Coalición por un PFPIDESC)11, la cual va a estar integrada por organizaciones nacionales, regionales e internacionales, individuos, movimientos sociales y comunidades de base comprometidas por hacer del Protocolo Facultativo una realidad. Puesto que se 6 Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Consultado el 7 de julio de 2009. 7 Íbidem. 8 Íbidem. 9 Íbidem. 10 Ver: Situación de ratificación del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (en inglés). Colección de tratados de las Naciones Unidas. Consultado el 7 de julio de 2009. 11 Ver: Derechos Económicos, Sociales y Culturales, UNESCO 1995-2009 Actualización: 2006-03-15 1:48 pm. necesitan unir esfuerzos, la Coalición desarrolla una estrategia o posición común y distribuye información acerca del proceso. Indudablemente, la principal contribución del Protocolo es transformar el articulado del PIDESC en verdaderos derechos exigibles y construir un nuevo espacio en el que las víctimas de abusos puedan reclamar responsabilidades a los Estados que han incumplido sus obligaciones. El Protocolo Facultativo es importante además, porque proporcionará a las víctimas de violaciones de los derechos económicos, sociales y culturales que no pueden obtener un recurso efectivo en sus sistemas legales nacionales, “un medio donde solicitar una reparación. De tal manera, corregirá un desequilibrio que existe desde hace mucho tiempo en la protección de los diferentes derechos humanos que margina a los derechos económicos, sociales y culturales”12. Contar con un mecanismo de presentación de reclamos internacionales como este también contribuirá a desarrollar el contenido de los derechos económicos, sociales y culturales, así como las correspondientes obligaciones de los Estados, y también se convertirá en guía para los tribunales nacionales e instituciones de derechos humanos. CONCLUSIONES 1. La efectividad del PIDESC, se ha convertido en un reto actual para todos los estados, ya no en el plano de la creación, lo cual se demostró, sino en la adhesión, ratificación y su firma por los estados parte. 2. El contenido del PIDESC, garantiza sin duda alguna la protección de los derechos económicos, sociales y culturales, tal protección se concreta además con el Comité del PIDESC, que es el encargado de llevar a vías de hecho las reclamaciones ante las violaciones de tales derechos por los Estados Partes del Protocolo. 3. Urg e la necesidad real e inminente de la concientización por parte de los estados del reconocimiento efectivo de la Existencia del PIDESC, así como de su Comité, que proteja tales derechos ante las violaciones que se cometan y los garantice como esenciales para los seres humanos. RECOMENDACIONES 12 Íbidem. 1. Que se continúe profundizando en el análisis y contenido del PIDESC que garantizar el conocimiento y la efectividad del mismo, para lograr la adhesión, firma y ratificación del mismo. 2. Búsqueda de alternativas que logren la identificación y concientización de los estados parte que aun no han firmado el PIDESC, basadas en una revisión, sistematización y organización de los principales derechos económicos, sociales y culturales esenciales como partes de los derechos humanos que deben ser garantizados por los estados a sus pueblos y qué mejor que con el PIDESC, que garantiza su protección ante las violaciones que se puedan producir. BIBLIOGRAFÍA Carrillo Salcedo, J.A. (2001). Soberanía de los Estados y Derechos Humanos en Derecho internacional contemporáneo. Madrid: Tecnos. Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Consultado el 7 de julio de 2009. Derechos Económicos, Sociales Actualización: 2006-03-15 1:48 pm. y Culturales, UNESCO 1995-2009 Hoja Informativa N º 2 (Rev.1), La Carta Internacional de Derechos Humanos (en inglés). Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Consultado el 7 de julio de 2009. Informe del Consejo de Derechos Humanos. Proyecto de resolución del Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. Sexagésimo tercer período de sesiones, por la Asamblea General Naciones Unidas A/C.3/63/L.47, 31 de octubre de 2008. Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión por la asamblea general en su resolución 2200 a (xxi), de 16 de diciembre de 1966, entrada en vigor: 3 de enero de 1976, de conformidad con el artículo 27. Protocolo Facultativo al PIDESC: ¡un paso histórico en la defensa de los derechos humanos, 10 de diciembre de 2008. Resolución 345 (Inclusión en el pacto o los pactos internacionales de derechos del hombre de un artículo sobre el derecho de libre determinación de los pueblos). Documentos Oficiales de la Asamblea General (5 de febrero de 1952). Consultado el 7 de julio de 2009. Resolución 353 (Redacción de dos proyectos de pactos internacionales de derechos del hombre). Documentos Oficiales de la Asamblea General (5 de febrero de 1952). Consultado el 7 de julio de 2009. Sieghart, Paul (1983). The International Law of Human Rights. Oxford University Press. p. 25. Situación de ratificación del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (en inglés). Colección de tratados de las Naciones Unidas. Consultado el 7 de julio de 2009. Sitio Web: http://www2.ohchr.org/english/issues/escr/intro.htm www.protectallhumanrights.org/es. Actualización 2010. http://es.wikipedia.org/wiki/Protocolo_Facultativo_del_Pacto_Internacional_de _Derechos_Econ%C3%B3micos,_Sociales_y_Culturales. Esta página fue modificada por última vez el 03:07, 5 ene 2010. http://es.wikipedia.org/wiki/Pacto_Internacional_de_Derechos_Econ %C3%B3micos,_Sociales_y_Culturales.Categoría: Tratados sobre derechos humanos.