Tiempos de conducción y descanso: La conducción semanal y bisemanal Una vez establecidos los tiempos máximos en la conducción diaria, nos centraremos ahora en la conducción semanal y bisemanal. Se trata de comprender bien los límites de esta actividad en el plazo más amplio recogido en el reglamento. Para comenzar vamos a referirnos a las definiciones recogidas en el propio reglamento CE 561/2006 en su artículo 4º: “«tiempo semanal de conducción»: el tiempo acumulado total de conducción durante una semana” “«semana»: el período de tiempo comprendido entre las 00.00 del lunes y las 24.00 del domingo” Con esto tenemos las definiciones exactas en lo referente a la conducción semanal, que queda perfectamente delimitada dentro de la semana natural, es decir, el periodo de tiempo que se extiende desde las 00:00 horas de un lunes hasta las 24:00 horas del domingo siguiente. Es muy importante entender bien este concepto y no confundirlo con la semana de trabajo delimitada por los descansos semanales, ya que podría derivar en un error de cómputo y la consecuente infracción del reglamento. Una vez definido el periodo de cómputo, vamos a ver las disposiciones concretas en cuanto a los límites establecidos en el artículo 6º: “El tiempo de conducción semanal no superará las 56 horas y no implicará que se exceda el tiempo semanal de trabajo máximo, fijado en la Directiva 2002/15/CE. El tiempo total acumulado de conducción durante dos semanas consecutivas no será superior a 90 horas. Los tiempos diario y semanal de conducción incluirán todas las horas de conducción en el territorio comunitario o de un país tercero.” En primer lugar ya tenemos un límite de conducción en una semana, que bajo ningún concepto excederá de 56 horas como máximo, pero además de esto, no se podrá superar el límite de horas de trabajo (no solamente de conducción) establecido en la directiva 2002/15/CE. Esta norma laboral está incorporada al ordenamiento jurídico español y reflejada en los convenios laborales de cada sector. De todas formas, en la citada directiva comunitaria se establece como límite máximo las 60 horas semanales de trabajo, por lo que si un conductor conduce 56 horas en una semana, no podrá realizar más de 4 horas de otros trabajos, como cargas y descargas, mantenimiento del vehículo, etc. En algunos países de nuestro entorno ya se están poniendo serios en este sentido y en los controles en carretera computan, además de los tiempos de conducción y descanso, todas las horas dedicadas al trabajo en cada semana. Por lo tanto, en una semana, no podemos excedernos del límite de 56 horas conducidas (60 de trabajo efectivo), pero como el reglamento solamente computa las horas enmarcadas dentro de la semana (lunes-domingo), se puede dar el caso que en una semana de trabajo, es decir, entre dos descansos semanales, tengamos hasta 58 horas de conducción y al mismo tiempo, cumplir escrupulosamente el reglamento. Por otra parte ya habíamos visto en la conducción diaria, que el reglamento incluye toda conducción de un vehículo incluído en el ámbito de aplicación del reglamento, ya sea dentro del territorio de aplicación (Comunidad Europea, Suíza y países firmantes del Espacio Económico Europeo) así como de cualquier otro estado tercero, ya sea firmante del Acuerdo Europeo sobre el Trabajo de las Tripulaciones AETR u otro estado no incluído en este acuerdo. Además del límite semanal, hay que contar con el impuesto a nivel bisemanal, que es de 90 horas cada dos semanas consecutivas. Para poder tener en cuenta el cómputo correctamente tomaremos una semana cualquiera y sumaremos las horas conducidas en esta semana y en su antecesora, y luego repetiremos con la semana posterior y así sucesivamente.