© 2008 por Gospel Publishing House, 1445 N. Boonville Ave., Springfield, Missouri 65802. Todos los derechos reservados. Se concede permiso para reproducir para uso exclusivo en la iglesia local. Impreso en E.U.A. Boletín de Winnie para niños Visitas a cenar Cuando Latifah llega de la escuela, se alegra de ver que su prima Zia y los padres de ésta han venido a visitar a su familia y a tomar el té. A los pakistaníes les encanta hacer visitas informales a la familia y a los amigos. Cuando el padre de Latifah llega de la manufacturera de acero donde trabaja, todos disfrutan de una deliciosa cena. Mamá ha preparado pillau (arroz frito con verduras) y kebabs (brocheta de carne asada). Siempre hay chapati, pan en forma de tortilla. Lo usan para comer o comen con los dedos. A los pakistaníes les gusta la comida bien condimentada. Cuando el padre tiene invitados, él y los otros hombres comen y conversan en una habitación aparte. Latifah PAKISTÁN Latifah vive en Rawalpindi (también conocido como Pindi), una gran ciudad cerca de la capital de Pakistán, Islamabad. Ella vive en una casa de concreto con sus padres, sus abuelos, tres hermanos, y dos hermanas. Una casa llena de gente pero acogedora. Tiempo para el esparcimiento Mientras que los adultos conversan, Latifah y su prima Zia miran televisión. A la gente le gusta mirar televisión y películas. Algunas películas son hechas en la ciudad de Lahore, que alguien llamó “Lollywood”. Los pakistatníes también son muy aficionados a la música folclórica. Muchos tocan la cítara (una especie de guitarra larga con una caja de resonancia redonda) y la tabla (un par de tambores de mano). Les gustan los bailes, los festivales, y las historias. Centenares de personas se reúnen para los mushaira, lecturas públicas de poesía. Pindi tiene un estadio para juegos de cricket (parecido al béisbol) y otro para hockey. Otros deportes conocidos son la lucha y el polo. Vestidos para la ocasión Latifah y los demás niños usan uniforme para ir a la escuela. En otros momentos, a ella le gusta vestir su shalwar-qameez. Esta es un cómodo conjunto que consiste de una sencilla túnica de mangas largas que llega a las rodillas y un pantalón amplio que haga juego. La gente de la ciudad y de los sectores rurales usa con frecuencia este tipo de vestimenta. Para ir a trabajar, papá usa un chaleco sobre la túnica. Los hombres de Pakistán usan diferentes sombreros, conforme al grupo que pertenecen. Las mujeres visten también el shalwar-qameez. A ellas les gustan los colores alegres y los diseños. Mamá usa un dupatta (bufanda) para cubrirse la cabeza. © 2008 por Gospel Publishing House, 1445 N. Boonville Ave., Springfield, Missouri 65802. Todos los derechos reservados. Se concede permiso para reproducir para uso exclusivo en la iglesia local. Impreso en E.U.A. Los pakistaníes necesitan a Cristo Cuando los mercaderes árabes llegaron a Pakistán y a la India en los 700, algunos pakistaníes se convirtieron en musulmanes y siguieron la nueva religión, el Islam. Los guerreros musulmanes dominaban gran parte del territorio en los 900. A pesar de eso, muchos indios no dejaron de practicar su religión el hinduismo, y los musulmanes quisieron vivir separados. En 1947, Pakistán se convirtió en una nación musulmana. Los musulmanes creen en un dios, Alá, y en las enseñanzas de su profeta Mahoma. Creen que Jesús vivió, pero no están de acuerdo con los cristianos en que Él es el Hijo de Dios. Aunque las leyes en Pakistán afirman que los cristianos pueden reunirse en iglesias, a veces son blanco de ataques. Aún así, los cristianos se reúnen para adorar a Dios y aprender de Él. Algunas iglesias tienen un edificio donde se reúnen. Otras se reúnen en secreto en una casa o en el patio de una casa. Por seguridad, a veces cambian la noche y la hora de reunión. Los miembros de la iglesia hacen buenas cosas por sus vecinos, tal como Cristo mandó. Los cristianos ayudaron a la gente que tuvo que salir de su hogar en Afganistán para huir a Pakistán. Más de tres millones de pakistaníes perdieron su casa como resultado del terrible terremoto de 2005. Las iglesias y las Asambleas de Dios de los Estados Unidos distribuyeron carpas, cobertores, y estufas de leña, una manera de mostrar el amor de Dios. Personas de los Estados Unidos viajan para ayudar a los pastores locales y a las iglesias. En la ciudad de Quetta se abrió un nuevo instituto bíblico para ayudar a preparar pastores. Los primeros 24 alumnos se graduaron en 2006. Hay algunas imprentas donde se imprime literatura cristiana y Biblias para enseñar a la gente acerca de Cristo, aunque la mayoría de la población no lee ni escribe. Con las ofrendas de BGMC, los obreros compraron juegos de “la Biblia en fieltro”. Estos juegos consisten de figuras en fieltro de personajes bíblicos y telones para ayudar a los maestros a contar las historias bíblicas a los niños que asisten a la escuela dominical. ¡Gracias, BGMC! Un gran problema en Pakistán son las drogas. La marihuana y la heroína son fácil de conseguir, y millones de personas las consumen. El gobierno ha permitido que se establezcan dos centros de Reto Juvenil para ayudar a hombres, y un centro llamado Nueva Esperanza para ayudar a mujeres. Estos centros ayudan a los adictos a encontrar nueva esperanza en Dios. BGMC ha ayudado a estos centros, proveyendo libros y material de enseñanza. ¡Gracias, BGMC! ¡Oremos todos por la gente de Pakistán! OREMOS… • por los obreros en Pakistán, que Dios los proteja y les dé salud. • por los pastores y las iglesias en misión de mostrar el amor de Dios a quienes los rodean. • por los niños de Pakistán. • por los alumnos y los maestros de institutos bíblicos. • por los programas de Teen Challenge [Reto Juvenil] que están cambiando vidas. Lección objetiva misionera PAKISTÁN Un corazón misionero Versículo clave Mateo 10:8 Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia. Materiales necesarios Un par de anteojos de sol con lentes color rosa El Texto Bíblico ha sido tomado de la versión Reina-Valera © 1960 Sociedades Bíblicas en América Latina; © renovado 1988 Sociedades Bíblicas Unidas. Utilizado con permiso. Lección 12: PAKISTÁN © 2008 por Gospel Publishing House, 1445 N. Boonville Ave., Springfield, Missouri 65802. Todos los derechos reservados. Se concede permiso para reproducir para uso exclusivo en la iglesia local. Impreso en E.U.A. Presentación Hoy, traje mis anteojos de sol. (Póngaselos.) Me gustan estos anteojos porque cuando miro a través de ellos el color de las cosas cambia. ¿Han tenido alguna vez un par de anteojos como este? Estos lentes me permiten ver todo con un tinte rosa. Se dice que las persona que siempre ven el lado bueno de las cosas “ven la vida color de rosa”. Trabajar para Jesús en otros países, donde las condiciones de vida no son las mejores, puede ser difícil. El trabajo puede resultar más si se tiene presente que todo se hace en el nombre de Jesús. Es como ponerse estos anteojos. Las cosas parecen mejor cuando miramos a través de ellos. La madre Teresa usaba anteojos con lentes color rosa. Bueno, no era así en realidad, pero ella vivía como si los hubiera usado. Ella pasaba sus días en las calles de Calcuta, India, ayudando a los enfermos y a los moribundos. Pasó mucho tiempo con los leprosos, en condiciones de suciedad y hedor. La madre Teresa no notaba estas cosas alrededor de ella. Solo veía las necesidades de las personas a quienes estaba ayudando. Ella sabía que Jesús ama a todas las personas; si Él estuviera aquí en la tierra, los dos estarían trabajando juntos. Toda la creación de Dios fue hermosa para ella. ¿Tienes tú un corazón que ve las cosas a través de lentes color rosa, o sólo ves lo difícil del trabajo o las malas cosas que te rodean? Hay muchas personas en nuestra ciudad que necesitan a Jesús. Tal vez no viven en una casa hermosa o huelen bien, pero Jesús los ama tal como te ama a ti. ¿Quieres pedir a Jesús que te dé un verdadero corazón misionero? ¿Estás dispuesto a usar anteojos color rosa? ¿Harás tu parte para ganarlos? Oremos y pidamos a Jesús que nos ayude a compartir su amor. Manual misionero BGMC 2008, Vol. 10 © 2008 por Gospel Publishing House, 1445 N. Boonville Ave., Springfield, Missouri 65802. Todos los derechos reservados. Se concede permiso para reproducir para uso exclusivo en la iglesia local. Impreso en E.U.A. Historia misionera PAKISTÁN El poder de Jesús (Lámina 1) Saleem* tenía un problema. Durante cinco años, había sido adicto a drogas de prescripción clínicas. Su jefe le pidió que dejara de trabajar para que ingresara al programa Teen Challenge [Reto Juvenil]. Después de tres meses en Reto Juvenil, Saleem aceptó a Cristo. (Lámina 1) El cambio en la vida de Saleem es sorprendente. Testifica abiertamente de Cristo. En su trabajo en el ministerio de gobierno, siempre habla a sus colegas acerca del poder salvador y sanador de Cristo. (Lámina 2) (Lámina 2) Uno de los colegas de Saleem era sordo de un oído. Saleem escribió en un papel las palabras: El Todopoderoso Dios puede sanarme. Dijo al hombre que repitiera estas palabras en su oración cada día. Después de un par de semanas, todos los demás colegas vinieron a su oficina y le dijeron que Dios no podría sanar a este hombre. El hombre había sido sordo toda su vida; era inútil que orara. Frente a todos, Saleem dijo al hombre que se sentara. Le preguntó si podía orar por él. El hombre respondió que sí. Saleem sabía que lo que estaba a punto de hacer era peligroso. Él vive en Pakistán, un país estrictamente musulmán, y el denuedo por la fe cristiana puede significar problema. Pero Saleem estaba seguro de que Jesús sanaría al hombre, y se sintió fortalecido. *El nombre ha sido cambiado Lección 12: PAKISTÁN © 2008 por Gospel Publishing House, 1445 N. Boonville Ave., Springfield, Missouri 65802. Todos los derechos reservados. Se concede permiso para reproducir para uso exclusivo en la iglesia local. Impreso en E.U.A. Saleem comenzó a orar que Jesús sanara al hombre sordo y mostrara su poder a estos hombres. Después de unos momentos, el hombre dijo: “Puedo oír el ventilador”. Después dijo: “Puedo oír el acondicionador de aire”. El hombre saltó de su silla y comenzó a bailar ante todos. (Lámina 3) (Lámina 3) Todos estaban impresionados y maravillados por el poder de Jesús. Los hombres se sintieron atemorizados. Pensaron que que Saleem era un hombre sagrado sufi. Pero Saleem les dijo que no era debido a poder suyo, sino el poder de Cristo. Saleem después oró con el hombre para que aceptara a Cristo como su Sanador y Salvador. Le dio un libro al hombre para que leyera en la Biblia acerca de Jesús y sus enseñanzas. Jesús había sanado a Saleem de la adicción a las drogas, y lo usó como instrumento para sanar a otra persona. Ahora Saleem ayuda a dirigir un grupo de discipulado en Islamabad. En este grupo se discipula a personas que fueron adictas a las drogas. Recuerda a Saleem en tus oraciones. Él es una luz en las tinieblas. La información en esta historia fue provista por obreros cristianos en Pakistán y se ha usado con permiso de Misiones Mundiales de las Asambleas de Dios. Manual misionero BGMC 2008, Vol. 10 © 2008 por Gospel Publishing House, 1445 N. Boonville Ave., Springfield, Missouri 65802. Todos los derechos reservados. Se concede permiso para reproducir para uso exclusivo en la iglesia local. Impreso en E.U.A. Después de tres meses en Reto Juvenil, Saleem aceptó a Cristo. Lección 12: PAKISTÁN © 2008 por Gospel Publishing House, 1445 N. Boonville Ave., Springfield, Missouri 65802. Todos los derechos reservados. Se concede permiso para reproducir para uso exclusivo en la iglesia local. Impreso en E.U.A. Un colega de Saleem era sordo de un oído. Saleem escribió las siguientes palabras en un papel: “El Dios todopoderoso puede sanarme”. Manual misionero BGMC 2008, Vol. 10 © 2008 por Gospel Publishing House, 1445 N. Boonville Ave., Springfield, Missouri 65802. Todos los derechos reservados. Se concede permiso para reproducir para uso exclusivo en la iglesia local. Impreso en E.U.A. El hombre fue sanado. Todos estaban impresionados y maravillados ante el poder de Jesús. Lección 12: PAKISTÁN © 2008 por Gospel Publishing House, 1445 N. Boonville Ave., Springfield, Missouri 65802. Todos los derechos reservados. Se concede permiso para reproducir para uso exclusivo en la iglesia local. Impreso en E.U.A.