N.° 37 39 De los inventarios de las pinturas de los palacios de los

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N.° 37
G. CRUZADA V1LLAAM1L.
PINTURAS DE RUBENS EN ESPAÑA.
por una puerta falsa de la tienda para entrar con
otra invención; y así corrió este caballero con su
ayudante, al cual le ganó una salvilla de plata
contra unos guantes de ámbar, que él puso, y
ambas preseas las presentó á su dama, con cuyo
favor ganó, y por las señas de su pensamiento se
conoce quién era. Antes que acabase de correr sus
lanzas, entró por la plaza una tienda asentada eri
un carro, que la traian en peso como las demás.
Y era la tienda un pabellón bordado con muchos
pájaros, y dentro venia el Caballero Venturoso
con una dama vestida muy galanamente. Él traía
un vestido muy justo, morado, sembrado de rosas
amarillas, y una máscara de la misma color; venian las alas de la tienda abiertas, y en medio de
él y de ella se mostraba la rueda de la Fortuna,
que el caballero fuertemente venia teniendo, porque no diese la vuelta; y su letra decia:
Fortuna tendrá este sor,
Yo la firmeza que ahora
Y la cumbre mi Señora.
La dama, que era un barbado con arandela y copete, echó también su letra acomodada al sujeto,
y por meterse en el campo de Venus no se refiere,
aunque era extremada. Este aventurero, que era
un capitán de Chile, no sacó más acompañamiento que atabales y ministriles, y un padrino; pero
lo que en esto le faltó suplió lo bien que lo hizo
en las carreras, porque es muy buen hombre de
á caballo de la brida; y así le ganó al dios Baco
el precio, que fue un corte de jubón de tela, y le
presentó á mi señora, Doña Mariana de Larrea.
Luego entró por otra esquina de la plaza El
Dudado Furibundo, con atabales y ministriles
delante, y él en traje de moro, con siete moras á
caballo, muy bien aderezadas, todas de máscara,
que representaban otras tantas mujeres suyas,
porque en el Alkoran de Mahoma se permiten
tener las que pudiere sustentar cada uno. Salió
en un buen caballo, y la letra que su padrino presentó era:
Aunque con traje de moro,
No soy Muley ni Hamete,
Pero no me bastan siete.
Corrió sus tres lanzas, y aunque el buen caballo
le ayudó, él hizo tan poco de su parte, que el
dios Baeo le ganó seis varas de tafetán que puso
por precio, y las presentó á mi señora Doña Clara
de Peralta.
A esta hora se habia ya puesto el sol, y á más
andar se iba llegando la noche; pero no faltó tiempo para que se dejase demostrar un carro en la
forma que los pasados, donde venia un, aparador
y mesa puesta, con una merienda, y colación y
todos los aparejos que para servirla eran necesarios, sin que faltasen pajes para este ministerio.
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El caballero de este carro fue el mantenedor, que,
hecho bodegonero, se mostraba disfrazado. Traía
por mozas del bodegón á la Gula y á la Enfermedad, y él el traje acomodado al sujeto, y una música de flautas debajo del carro, que al tiempo que
emparejó con las damas sonó muy suavemente.
Su letra decia:
Si mi invención no llevare
El premio por ingeniosa,
Ganará por provechosa.
Y porque ya se habia cerrado la noche, no hubo
lugar de que este aventurero comiese, y así, dio
de merendar á las damas con mucha ostentación
y cumplimiento, á la lumbre de muchos hachones
y candelas que se encendieron; y los Jueces desde su andamio alcanzaron un bocado, y después
de haber tenido entre sí algunas diferencias sobre
el de los premios de invención, letra y gala, se resolvieron en esta forma: Que el de invención, por
haber sido todas tan buenas y reconocerse poca ó
ninguna ventaja en ellas, se le diese al Caballero
de la Triste Figura por la propiedad con que hizo
la suya y la risa que en todos causó verle, el cual
dio cuatro varas de raso morado que le tocaron á
su escudero Sancho, para que las presentase en
su nombre cuando la viese, diciéndole que el su
caballero las habia ganado con el ardid y esfuerzo
que su memoria le habia prestado. Y al Caballero
de la Selva le dieron unos guantes de ámbar por
la mejor letra que presentó al sujeto de ella. Y al
mantenedor le cupo el premio de la gala, y presentó á mi señora Doña María de Peralta una caldereta de plata.
Y con esto se acabaron las fiestas, que fueron
tan bueijss, que podían parecer en Lima: sólo
faltó auditorio pleno, pero á la cantidad suplió la
calidad de las pocas damas que hubo*
A. RODRÍGUEZ VILLA.
PINTURAS DE RUBENS EN ESPAÑA,
SEGÚN LOS INVENTARIOS DE LAS CASAS REALES DE
AUSTRIA Y DE BORBON.
De los inventarios de las pinturas de los
palacios de los reyes de España, hechos en
diferentes ocasiones, ya con motivo de las
muertes de los monarcas, ya por cesar en
sus cargos aquellos servidores de los reyes
que á su cuidado las tenían, ó por cualquiera otro motivo, se desprenden una multitud de datos que, aun cuando no del todo
claros y terminantes porque están redactados los inventarios de una manera demasía-
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do informal ó por lo menos muy bárbara en
sus descripciones, sirven, sin embargo,
para venir en conocimiento de la existencia
de muchísimos lienzos que hoy por completo desconocemos ó que no vemos en los
museos y palacios que aún guardan obras
de arte de aquellos tiempos. Del estudio
de estos inventarios, hecho exclusivamente
buscando aquellas obras que á Rubens se
atribuyen, resulta el presente estudio. No
se ha de dar aquí noticia ninguna sobre
Rubens y sus obras, de las que ya hayan
dado otros escritores nacionales ó extranjeros, ni comentar ó desvirtuar tampoco lo
que todos ellos hayan dicho sobre ellas:
el propósito de este estudio no es otro más
que presentar, principalmente, uua como
relación de los cuadros de Rubens que poseyeron los reyes de España, desde que por
primera vez estuvo aquí aquel pintor, hasta
la fecha, y de los que hoy día ya no poseemos, ó al menos no se sabe oficialmente que
poseamos. Y esta lista no será hecha á guisa
de catálogo de museo', puesto que de cuadros que no posee España ó que no existen
se ha de tratar, y puesto que de tos cuadros
que aquí se registran y que guarda nuestro
Museo del Prado, ya está hecho ó próximo
á hacerse el oficial y extenso que describe
la escuela de pintura á que Rubens pertenece.
Varios son los inventarios en que se r e gistran obras de Rubens. De todos los que
guarda el archivo del Palacio Real de Madrid, el primero en que se encuentran clara
y terminantemente inventariados cuadros á
nombre de Rubens, escrito unas veces
Jirubines y otras Rrubenes, es de fecha 6
de Octubre de 1 6 2 1 , y comprende los cuadros de la Casa de la Ribera de Valladolid,
el cual empieza de este modo:
Gerónimo de Ángulo. Pinturas, mesas de jaspe, bufetes y otras cosas que hay en el Alcázar, Casa Real
y Jardines que tiene en la ciudad de Valladolid, camino de Nuestra Señora de Prado, que llaman La Ribera, y están á cargo de Gerónimo Ángulo, casero y
jardinero de la dicha casa y jardines.
Y concluye así:
Recibi yo Gerónimo de Ángulo casero del Alcázar
Real, Casa y Jardines que S. M. tiene en la ciudad de
Valladolid y camino de Nuestra Señora de Prado que
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llaman La Ribera, del Sr. Hernando de Espejo, comisionado de Cañamares, guardajoyas que fue del
Rey Nuestro Señor, todas las pinturas, retratos etc.
por cuanto todo lo susodicho esta a mi cargo en el
dicho Alcázar, Casa Real y Ribera, para el servicio
de S. M., y por verdad lo firmo en Madrid á seis de
Octubre de 1621 años. Gerónimo de Ángulo.
Este inventario no registra más que los
dos retratos hechos por Rubens del duque
de Lerma y del duque de Mantua.
En otros inventarios de Valladolid, también anteriores, se incluyen cuadros que,
por ser retratos de los gobernadores de
Flandes, pudieran creerse de Rubens; pero
como no se les da autor, sena temerario suponerlo, careciendo el registro de dichos
lienzos de detalles que autoricen tal suposición, siempre infundada.
Otro inventario, ya con muchos cuadros
de Rubens, se comenzó en '1636, y empieza así:
Año de 1636. Simón Rodríguez, ayuda de la Furriera de S. M. Cargo que se le hace de las pinturas y
otras cosas de la guardajoyas que estaban al de Juan
Gómez de Mora, lo cual se hace por orden de S. M.,
que Dios guarde. =l)e las cuales dichas pinturas, mapas, dibujos, iluminaciones, estatuas, bufetes y demás
cosas contenidas en 820 partidas escritas en 56 pliegos de papel como este, en todo y en parte se hace
cargo de ellos al dicho Simón Rodríguez, con declaración de que en cuanto ú lasmedidas que en algunos
se declara, se midieron estando colgados, y así se han
de entender poco nias ó menos, en que entran las
molduras de los que las tienen. Y así mismo que algunas pinturas que dice ser en tabla, puede no ser
sino en lienzo ú otra cosa pegada en ello, como hay
otras; y en esta conformidad lo firmaron D. Gerónimo de Villafuerte, guardajoyas de S. M. y el dicho
Simón Rodríguez, ayuda de su Real Furriera, en Madrid en 17 de Marzo de 1637.
Este
inventario
es el más curioso de-
cuantos se guardan en el archivo de Palacio, así por su fecha como por ser el p r i mero que más detalladamente enseña la distribución de las piezas del Alcázar de Madrid, precisamente en los buenos tiempos de
aquella corle, cuando era Velasquez quien
llevaba la dirección artística del Alcázar.
El antiguo Alcázar, como el actual, tenia su
principal fachada á la plaza que hoy llamamos de la Armería, y se hallaba igualmente
orientado, formando cada uno de sus ángulos una torre, de las cuales algunas se lia—
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O. CRUZADA VILLAAMIL.
PINTURAS 7VE RUBENS EN ESPAÑA.
maban como se llamaron en el siglo pasado.
Empieza este inventario por la escalera de
la Reina, y sigue registrando las habitaciones del pasadizo que conducía á San Gil, y
de los que llegaban al Consejo de Ordenes
y al de Hacienda. Pasa luego á la piezanueva sobre el zaguán y puerta principal
del Palacio, que es el sitio correspondiente
al que hoy ocupa el llamado Salón del Trono. Desde este salón se pasaba á la Galería
de los Trucos, y después seguia al salón
grande de la Galería de los Retratos. Pasada la Galería del Mediodía, que miraba
sobre el Jardin de los Emperadores, llamado
así por los muchos bustos y estatuas antiguas que de ellos en el había, se entraba en
el Salón grande de las Fiestas públicas, tan
célebre por las que en él se celebraron , y
salón que más tarde hemos de ver trasformado por Velasquez mismo. Umd,o á este
salón estaba el Oratorio de S. M. En esta
lachada, que era la que caia sobre el hoy
llamado Campo del Moro, se alzaba la torre
en que S. M. tenia el despacho, y cerca de
él la librería, que dirigieron hombres como
Rioja. Esta torre, orientada como la que
hoy se llama Punta del diamante, daba
vuelta al Norte, ó Cierzo, como en aquel
tiempo se decía. Este lado era el que contenía las habitaciones de verano del Alcázar, con sus bóvedas y piezas destinadas al
despacho de S. M., á su dormitorio, á su
comedor y á su habitación para leer y solazarse, la cual daba vistas á otro jardin, que
se llamaba de la Priora, que daba vuelta á
la parte de Levante, hoy plaza de Oriente.
Después de las habitaciones del Rey, inventaríanse las de la Reina, que igualmente
se componen de piezas de invierno y de verano. Ño tan sólo se comprenden en este
inventario los cuadros colgados en aquellas
cámaras, sino también los bufetes, escritorios, bustos y demás alhajas.
Por muerte de Felipe IV se hicieron inventarios generales, y el de las habitaciones
del difunto monarca en el alcázar de Madrid,
empieza diciendo:
En la villa de Madrid a 17 do Setiembre de 1666
años anto el dicho Sr. D. B. Garcífl de Medrano, prosiguiendo en el dicho inventario, estando en el cuarto
bajo en que vivió el Rey N. S. Don Felipe cuarlo de
este nombre, que santa gloria haya (que se abrió por
Don José Espachen, caballero de la orden de Santiago
y Aposentador de Palaeio) y estando en una pieza
pequeña donde el Rey N. S. se retiraba, en1 que están
dos estantes pequeños do libros, que llama Elretiradico, se inventarió y apreció por Juan Bautista del
Mazo, pintor de cámara lo siguiente:
Este inventario acaba el dia 27 de Octubre de 1666, pero no comprende todo el
Alcázar, porque faltan las pinturas de la
capilla real y sacristía, las del salón de los
espejos, pieza de la cámara y gabinete del.
salón; las del salón dorado y cuarto bajo
del príncipe y pasadizo de la Encarnación,
que todo pertenece al cuarto del rey nuestro señor y otras muchas sueltas que están
en las bóvedas del Ticiano y de la Priora
y otras partes, y las de los oratorios. Y se
hizo otro inventario nuevo de pinturas y
alhajas, comprendiendo lodo lo referido en
el año de 1686, que es al que se debe citar, según se lee en una nota puesta en. este
mencionado inventario. Sumamente curioso
y fehaciente es éste, porque las tasaciones
son de Juan Bautista del Mazo, el yerno de
Velasquez, que es, para atestiguar la autenticidad de los cuadros que á Rubens atribuye, grandísima autoridad é irrecusable juez,
porque además de sus propios conocimien-tos reúne en su abono que sabría por dicho
del mismo Velasquez. su suegro, cuáles fuesen tod*s ellos, de los cuales él mismo Mazo
habia copiado más de cincuenta.
Más formal como inventario, aunque no
tan autorizado bajo el punto de vista artístico, por no firmarlo ó acusar que lo haga
persona tan competente como lo era Juan
Bautista del Mazo, es el citado de 1686.
Largo es su encabezamiento ó índices, pero
es todo tan curioso que merece la pena de
trascribirse aquí. Es de este modo:
Relaciones generales. =Una de las pinturas y otra
de los adornos que hay, fuera de los relojes, en la Capilla Real, Sacristía, Oratorios y cuartos Reales del
Rey N. S. Don Carlos Segundo, que Dios guarde, en
el Alcázar y Palacio de Mndrid, incluso el pasadizo de
la Encarnación, Casa del Tesoro y pinturas desmontadas en diferentes partes, con tres resúmenes que
van al principio; uno del número de pinturas y cuántas en cada cuarto y piezas: otro de las alhajas y
adornos con distinción de géneros y su número: y el
tercero de las pinturas originales y cuántas de cada
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autor, y las que hay copias y de escuelas diferentes.
Ejecutado de orden del Excmo. Sr. Condestable de
Castilla y de León, Mayordomo mayor de S. M., por
Don Bernabé Ochoa, siendo jefe de la Cerería este
año de <l 686.
Resumen del número de las pinturas que contiene
esta relación:
Capilla real y Sacristía, 24.—Oratorios, 32.—Cuarto principal, 36.
Pinturas en las piezas siguientes:
Salón de los espejos, 31.—Gabinete, 29.—Pieza
de la cámara y salón dorado, 46.—Pieza ochavada, 21.—Pasillo de la Madonna, 3Í3.—Galería de¡
Mediodía, 30.—Alcoba de esta galería, 21.—Pieza
oscura, 13.—Paso junto al cubillo de la Audiencia, 30.—Pieza antes de la Galería del Cierzo, 16.—
Galería del Cierzo, S1.=Son las pinturas, 363.
Cuarto bajo que cae á la Priora: hay 218 pinturas
en las piezas siguientes:
Pieza primera de la Audiencia, 20.—Pieza donde S. M. cenaba, 16.—Pieza donde S. M. comía, 19.—
Pieza de la Aurora, 17.—Pieza del despacho, 33.—
Pasillo que va á la escalera, 10.—Pieza pequeña sobre
cljardin, H.—Pieza donde S. M. se vestia, 27.—
Pieza de la librería, 40.—Pieza donde S. M. dormía, IB.—Escalerilla secreta, 10.
Bóvedas de la Priora: hay 199 pinturas en las piezas siguientes:
Pieza de la Torre, 23.—Pieza larga, 41.—Pieza de
los cubiertos, 17.—Pieza inmediata, 31.—Pieza debajo del despacho de verano, 13.—Piezas pequeñas
junto á la antecedente, 21.—Pieza primera bajando
por la escalera ancha del Patio, 2.—Pasillos al pió de
la escalera del Cierzo y la misma escalera, Si.
Escalera del Zaguanete junto á la pieza ochavada y
bóvedas del Ticiano: hay 52 pinturas en esta forma:
En el tránsito del Salón dorado, 1.—En la escalera, 17.—Bóvedas del Ticiano, 34.
Cuarto bajo que llaman del Príncipe: hay 58 pintuturas en esta forma:
Pieza principal, 40.—Pieza de la torre, 8.—Alcoba
de dicha torre, 5.—Pieza que servia de obrador de los
pintores de cámarf¡ (1), 5.
Pasadizo de la Encarnación: hay 490 pinturas, inclusas en ellas algunas que están desmontadas.
Casa del Tesoro, cuarto que habita el Aposentador
de Palacio: hay 10 pinturas.
Pinturas desmontadas además de todas las referidas que están en diferentes partes de Palacio:
hay 101.
Son todas 1.847 pinturas.
Siguen los resúmenes de las alhajas, adornos, bu(1) Esta pieía era el estudio de Velasquez, y hay inventario especial de ella, hecho á la muerto de D. Diego, ya publicado por el estudioso
Sr. Zarco del Valle.
N.° 37
fetes, escritorios, esculturas, etc., que componen
. trescientos cuarenta y un adornos. Continúa el inventario con el siguiente
Abecedario de los autores y profesores más clásicos
de el arte de la pintura que ha habido en Europa,
y resumen de las pinturas originales que hay de
cada uno en las comprendida» en esta relación de
los cuartos reales del Palacio de Madrid, que son
del Rey N. S. Don Carlos Segundo (que Dios
guarde).
A. Alberto Durero, 8.—Andrea del Sarto, 2.—
Aníbal Caracho, 4.—Antonio Moro, 4.—Alonso Sánchez, 12.—Alonso Cano, 3.
B. Basan, el viejo, 15.—Basan, el mozo, 11.—
Broncino, 1.—Ban Dick, 19.—Braegel, 38.—Burjano,l.—Bartolomé González, 4.
C. Cerezo (Corregió), 5,—Casimiano, 1.—Cangiaso, 1.—Caballero Máximo, 3.
D. Dominico Greco, 8.—Diego Velasquez, pintor
de Cámara, 43.—Daniel de Volterra, 2.—David Theniers, 7.
•
•
E. Esnesle (Snyders), 26.
F. Federico Barrocio, 2.—Federico Zucaro, 2.—
Francisco Bizi, 2.—Francisco de Herrera, 1.
G. Guido Bolones, 12.—Guercino, 2.—Gerónimo
Bosco, 6.—Golcio, 1.
H. Hermitaño, 4.
J. Joseph de Bibera, llamado el Españoleto, 36.—
Jacobo Espalma, 2.—Joseph Leonardo, 1.—Juan Balesio, 1.—Juan Pantoja de la Cruz, 16.—Juan Bautista del Mazo, pintor de Cámara, 12.—Juan Carreño,
pintor de Cámara, 6.
L. Leonardo de Avinci, 7.—Lúeas de Holanda, 4.—Lugueto, 1.—León Franco, 1.—Lúeas Jordán, 6.
M. Micael Angelo, 3.—Maestro del Ticiano, 1.—
M&rchino, 2.—Mario, 11.—Matías de Acevedo, 2.—
Martra de Vos, 2.—Micael Hamin, l.—Mosin Pusin, 3.—Mosin Brun, 1.
P . Pablo Verones, 29.—Parmesano, 6.—Polidoro, 2.—Pedro de Cortona, 2.—Palma, el Viejo, 1.—
Paulo Buil, 3.—Porquechin, 2.—Pomaranche, 3.—
Puchnio, 1.
R. Bafael de Urbino, 7.—BUBEHS, 62.
S. Fray Sebastian del Piombo, 1.
T. Ticiano, 76.—Tintoreto, 43.—Teati.no, 4.—
Tempesta, 2.
V. Vicencio Carducho, 1.
X . Xptobal García, 1.
Son 614 pinturas originales de los autores nombrados.
Más pinturas-copias de originales de los autores
referidos:
Copias de Alberto Durero, 4.—ídem de Alonso
Cano, 1.—ídem de Aníbal Caracho, 14.—ídem de Van
Dick, 4.—ídem de Basan, el viejo, 4.—ídem de Cerezo, 2.—ídem de Esneile, 3.—ídem de Guido Bolo-
N.° 37
(i. CRUZADA VILLAAMIL.
PINTORAS DE RUBENS EN ESPAÑA.
ñes, 3.—ídem de Joseph de Ribera, 2.—ídem de
Martin de Vos, 2.—ídem del Parmesano, 2.—ídem
de Rafael de Urbino, 6.—ídem de RUBENS, 45.—
ídem del Ticiano, 28.
Son 120 pinturas-copias de los originales de los
autores referidos.
Más pinturas de diferentes escuelas conocidas, hechas
de excelente manera.
De la escuela española, 3b.—ídem italiana, 33.—
ídem de Francia, 22.—Ídem Flamenca, 103.—Ídem
de Alberto, 22.—Ídem del Bosco, 10.—ídem de Ticiano, 1.—ídem de Tintoreto, 3.—ídem de Leonardo
deVinci,!.—ídem de Guido Bolones, 1.—ídem de
Carreño, 3.
Son 234 pinturas de las escuelas referidas.
Compendio de todas las pinturas.
Pinturas originales de los mejores autores de
Europa
614
Pinturas-copias de originales de los,mismos..
120
Pinturas de diferentes escuelas conocidas...
234
Pinturas de autores y manos no conocidas,
en que entran muchos países, al temple,
descripciones, mapas y retratos muy antiguos
S79
Son todas
1.S47
pinturas, las mismas que contiene por menor la relación siguiente de ellas. Número, especialmente en las
originales, mayor que ha tenido junto, ni tiene algún monarca ó príncipe, como lo confiesan aun los
extraños; esto después de tantas y tan singulares
como Su Magestad tiene en los palacios de Buen Retiro y los Bosques, y las del primer lugar en San Lorenzo el Real, adonde sobre el afio de 1686 mandó
llevar el Rey Nuestro Señor Don Felipe IV (que esté
en gloria) cuarenta y una pinturas originales de los
mayores autores y estimación. Y el Rey Nuestro Señor
(que Dios guarde) envió el año de 1675, veinte pinturas, y otras tantas que después en diferentes partidas
se han llevado, todas originales.
Relación general de las pinturas que hay en el
alcázar y palacio de Madrid y son de el Rey Nuestro
Señor Don Carlos segundo (que Dios guarde) y están
en su Real Capilla y Sacristía, Oratorios, cuarto principal, cuartos bajos, bóvedas, pasadizo de la Encarnación y casa del Tesoro, y las que están en diferentes partes sueltas y desmontadas; con otra relación siguiente á esta, de los adornos que hay en los mismos
cuartos reales, hechas de orden del Excelentísimo Señor Condestable de Castilla y de León, Mayordomo de
Su Magestad, este año de 1686.»
Y acaba diciendo:
«Aquí da fin el inventario y relación general de las
pinturas que en todas son mil quinientas y cuarenta y
siete, y constan por menor desde el folio 1 ° hasta este
43
de 82, y en el resumen que va al principio de esta
relación. Bernabé Ochoa.»
Si este minucioso inventario tuviera las
descripciones de los cuadros y sus medidas
hechas con la exactitud y extensión que se
empleó en los índices de autores y recuento
de pinturas, sena un inventario-catálogo
modelo, y nos revelaría noticias de suma
curiosidad para la historia de cada lienzo.
De todos modos, tal y como es, resulta importantísimo, ya porque para la designación
de autores de los cuadros debió servir de
guía la opinión que tuvieran Carreño y Mazo, ya también porque da á conocer la inmensa riqueza, el sin igual tesoro de pinturas que guardaba el Alcázar, que no sin
falta de razón dice Bernabé de Ochoa, que
es el mayor número de originales que ha
tenido junto y tiene algún monarca ó prí—
cipe. De Rubens registra nada menos que
sesenta y dos originales y cuarenta y cinco
copias. Lástima grande que este inventario
carezca de las tasaciones de los cuadros,
pues seria curioso también que los tuviera
para seguir el curso del valor de estas obras
de arte en estos tres últimos siglos. En Setiembre de este mismo año se hace cargo de
las pinturas todas del Alcázar de Madrid el
guarda-joyas de S. M. D. Bernardo Tamayo de Villalva por el inventario citado de
Bernabé^de Ochoa, y en él se tasan las pinturas, como las tasó Mazo veinte años antes,
en 1666.
Con mayor formalidad, exactitud y aparato, se hacen los inventarios de todos los
bienes de la Corona á la muerte del último
monarca de la casa de Austria. La reina gobernadora, madre de Carlos II, da la comisión de hacer el inventario de los bienes
que dejó su hijo, á D. Tomás Jiménez Pantoja, conde de la Estrella, de los consejos
de Castilla, Guerra y Hacienda, y asesor del
Bureo (oficina de Palacio), autorizándole
para delegar el de los alcaceres, palacios
y sitios reales eji quien le pareciere. Esto
manda S. M. en 15 de Noviembre del año
de 1700, y lo firman con el cardenal Portocarrero, fray D. Manuel Arias, D. Fernando de Aragón, el obispo Inquisidor General, D. Rodrigo Manuel Manrique de
Lara, v el conde de Benavente. En 17 de
i i
REVISTA EUROPEA.
8 DE NOVIEMBRE BE 1 8 7 4 .
Noviembre se prepara el conde á hacer su
cometido, según auto de dicho día que
dice así:
AUTO. En el Palacio y Alcázar Real de Su Mageslad el Señor Rey D. Carlos segundo nuestro señor
(que santa gloria aya) á diez y siete dias del mes de
Noviembre año de mili y setecientos =* El Señor Don
Thomas Jiménez Pantoja Cauallero de la Orden de
Santiago, Conde de la Estrella délos Consejos de Castilla, Guerra y Hacienda de Su Magestad y Asesor de
su Real Bureo y Casa en virtud de la Real orden y
cédula antecedente: Y para 'efectto de executar el
Imbentario de los bienes que dejó Su Magestad que
por dicha Real Orden y zedula se manda y la tasación
do ellos, y que sea con toda clariday y distinción y
verdadero conocimiento; Mándame y mando se requiera al señor Don Juan de Velasco Secretario y Contralor de Su Magestay y á Don Francisco Caruajal Secretario y Grefier y al aposentador mayor, y a todas
las demás personas y Gefes a cuio cargo esta la guarda
y custodia de dichos bienes manifiesten los cargos que
les esta echo y a cada uno al respectibe á su ocupación y empleo y todos* los demás papeles que conduzgan a la discrizion de dichos bienes, para en su vista
hazer el Roconocimiento y cottejo que combenga; Y
para la tasación nombraba y nombro por tasadores á.
Alberto de Aranda Contraste y tasador de joyas, á Mathias Vallejo Plattero de plata y á Bernardo Vázquez,
Platero de oro=a Manuel Fernandez Carrillo Ebanista—a Ambrosio Gil y Juan Panizo Caldereros=a Juan
Fernandez de la Torre Cofrero=a Balentin de Esol
Vidriero=a Joseph de Santiago Reiojero=<i don Lucas Jordán Pintor de Cámara=Don Francisco Ignacio Rizi y Don Isidro Arredondo Pintores de Su
Mugestay=% Esteuan Banderberquoy y Francisco
Cardiel Retupidores,=a Manuel Gutiérrez, Casullero^
a Francisco Dauila y Francisco de Salas Bordadores, =
á Joseph Lucido Cor<ioriero=a Francisco de Ángulo
Lenzero=y a Juan de litarte Camero=a Thomas de
Flores Cerrajero=a Carlos Gauttier Marmolista=a
Pedro Alonso de los Rios Escultor=a Juan de Tablares Maestro de hazer coches=a Juan Fernandez Guarnizionero=a Miguel Vayon y Juan de Vega Herradores y Albeitares de las Reales Caballerizas=a Manuel
Aluarez Tapizero y a Manuel Alonso Cordonero: y
mando se les notifique lo aceptten y juren y lo señalo
su señoria=Y asimismo nombro a Agustín López Cuchillero fecha ut supra Esta rubricado de su señoría—
Antonio Francisco Mayoral.
Deben tasar y describir las pinturas en
este inventario, Lúeas Jordán, Francisco
• Rizi y Arredondo, como pintores .de Su
Majestad, teniendo á la vista el inventario
de 1G86 que exhibió D. Juan de Velasco,
N.° 37
contralor de Palacio, empezando el mismo
dia del auto anterior, y acabando las del
alcázar y palacio de Madrid el dia 22 de
Noviembre,'en cuya fecha se lee:
Y en tal estado quedó por hoy este inventario y las
pinturas en ¡as piezas que se ha referido, y todas las
que se han inventariado hasta este dia se tasaron por
D. Francisco Ignacio Rizi y D. Isidro Arredondo, pintores de S. M.
Como se ve, el nombramiento de Jordán no fue más que honorífico.
Bastante tiempo tardó en comenzarse el
inventario de las pinturas del palacio del
Buen Retiro, pues no se verifica hasta los
dias 14, 4 8, 19 y 20 de Mayo del año siguiente de 1 7 0 1 , en que se hace del mismo
modo y manera que se hizo el de las del palacio de Madrid.
Antes de este inventario se hizo el del
Pardo, cuya primera acta lleva la fecha de
6 deAbrÜ.de 1 7 0 1 .
El dia de Navidad del año de 1734, reinando pacíficamente en España el primero
de los monarcas de la casa de Borbon, Don
Felipe V, un horrible incendio estalló en
el alcázar y palacio de Madrid, que por
completo lo inutilizó para morada real, y
redujo á cenizas grandes tesoros artísticos.
De este terrible fuego se salvaron dos mil
cuarenta y ocho cuadros, más ó menos maltratados de las llamas; unos librándose con
ei marco, otros sin él, y más que muchos
sacados del palacio incendiado sin bastidor
y en rollos. La Armería Real, el convento,
hoy cuartel de San Gil, la casa donde vivió
el marqués de Bedmar, y las bóvedas de
palacio fueron depósito de más de 1.130
cuadros, donde inmediatamente después, el
dia 28 de Diciembre, se comenzaron á inventariar, según consta del siguiente
Inventario general de todas las pinturas que se han
libertado del incendio acaecido en el real palacio de
Madrid, el que se ha ejecutado en virtud de orden
del Excmo. Sr. Marqués de Villena, Mayordomo mayor
de S. M. en fecha de 28 de Diciembre del año próximo
pasado de 1734, con asistencia de D. Juan Ranc, don
Alonso de Thobar y D. Pedro de Peralta, pintores de
cámara, D. Pedro Calabria, pintor de S. M., D. Juan
de Miranda, pintor <1e la Reina Nuestra Señora, y don
Francisco de Ortega, ayuda de trazador mayor, quienes han declarado las medidas de cada una, la historia
que significa y la mano de quién es, todo hecho y
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G. CRUZADA VILLAAMIL.
PINTURAS DE RUBENS EN ESPAÑA.
reconocido en presencia del Sr. Conde de Cogorani,
Mayordomo de S. M. en consesuencia de la orden que
el señor Mayordomo mayor le dio para este fin y de
los oficios de Contralor y Grcíier, cumpliendo con la
que tuvieron para la ejecución de este reconocimiento.
Numéranse las pinturas en este inventa—
. rio, pero no se detallan ni se explican con
mayor claridad en el fondo y la forma de su
redacción que en los inventarios anteriores,
y se hace de tal manera este recuento, que
no se verifica el resumen claro y terminante
de lo salvado y lo perdido hasta más adelante
en la testamentaría del rey D. Felipe V,
hecha con verdadera formalidad, y en la que
hállase clara luz sobre los resultados d e s a s trosos del incendio.
E n la Memoria con que comienza este inventario, se dice con respecto á pinturas lo
siguiente:
La partida núm. 2 de, el Plan que dice Pinturas á
cargo de la intervención son las que havia colgadas
en él Real Palacio y al presente se hallan recogidas y
custodiadas en las Casas Arzobispales, de donde con
Reales Ordenes se entregaron algunas para adorno de
losquartos de el Real Retiro: en estas se comprehenden las antiguas de su Inventario de el Sr. Carlos 2.°
importantes 11.022750 rs. que por hauer padecido
en el incendio y recogidos en lugares y sitios no proporcionados para su conservación fue preciso componerlas á costa de crecidos gastos en virtud de Reales
Ordenes, sin que por entonces ni después se hiciese
xustifleacion de las que perezieron, ni confrontación
de las que quedaron con el Inventario del Sr. Carlos 2.» hauiendolas por este motiuo variado de forma,
y aun cortado y añadido muchas de ellas; en atención
á todo esto, dejaron de tasarse con la calidad de por
aora, las que por de aquel tiempo permanecen y componen en el número de 1.038 pinturas que cotejadas
con 1.878 que son todos los que se inventariaron en
el referido Palacio por fallecimiento de el Sr. Carlos 2.° resulta faltar de ellas 837: pero hauiendo hecho presente á V. M. en la citada consulta de 4 de
Mayo de 1747 y en otras posteriores; Por resolución
de V. M. que posteriormente me comunicó la Junta en
6 de Septiembre de 1748 mandó tasar y apreciar
todas las que se pudieron reservar del referido incendio de Palacio que importan 4.138730 rs. faltando
para completar las que habia 6.884020 reales de
vellón.
Sigue luego el auto de Tasadores, que
dice:
Mediante la Respuesta antecedente se entregué
copia testimoniada del auto que en ella se espresa a
los oficios de Contralor Grefier, Aposentador Tapizero
45
maior y á los demás que la pidan y nezesiten para
que exhivan sus respectivos cargos de los vienes y
alajas que han quedado por fallecimiento del Rey
nuestro señor Don Phelipe quinto (que está en gloria)
con la distinción de tiempos que está mandado y las
pongan todos presentes para Imbentariarlos dejándolas en poder de los mismos Jefes que firmen sus
recepciones y sirunn de obligación y deposiltos para
entregarlas y responder de ellas quando se les mande
poniéndose por aora las que existan de las que quedaron por fallecimiento del Sr. Rey D. Carlos segundo
(que santa gloria aya) y demás señores sus predecesores con las espresiones con que entonces se inventariaron, y por los mismos aprecios y tasación que se
hallan en el último Imbenlario que se tiene presente
para este á escepeion de los que ayan tenido variación
ó aumento apreciándose éste con la misma distinción;
Y todas las aumentadas en el reinado del Sr. D. Phelipe quinto se tassen y aprecien nuebamente á cuio
fin S. S. desde luego nombra por tasadores á Santiago
Sánchez, Thasador de joyas—Miguel Colmenares,
Platero de oro—Lázaro Fernandez de Leonardo, Platero de plata—Bernardo Muñoz Amador, Contraste
público—Manuel Mozoncillo, 'Evanista—Juan Fernandez de Moya, Calderero—Pedro Pérez de la Mesa,
Cofrero—Francisco Vitarque, Vidriero—D. Simón
Martínez Sanz, Relojero—D. Juan de Miranda y don
Andrés Calleja, Pintores de Cámara—Pedro Diez,
Casullero—Antonio Gómez de los Rios, Bordador—
Matilias de Labrada, Cordonero—Juan Antonio Basualdo Lencero—Franco Bayo, Camero—Francisco
Barranco, Cerrajero—D. Alfonso de Grana, Scultor
de marfil, madera, piedra, bronce, barro, yeso y otras
cosas de seultura—Manuel Pérez, maestro de hacer
coches^). Francisco Corral, Ayuda más antiguo de
Espagírico maior, y Miguel Bez Guarnicionero—Julián de Frises y el Bachiller Francisco García Cabero,
Erradores y Alveitares de las Reales Cauallerizas—
D. Santiago y D. Francisco Bandergottin, fabricantes
de tapices de la Real Casa—Vicente Fernandez Villarejo, Carpintero y Hipólito Rodríguez, Librero, todos
criados de S. M. á los quales se requiera comparezcan
ante S. S. en el día ó dias que se les mande para
hazer la aceptación y juramento correspondiente, á
cuio fin se entregue lista á el Alguacil del Real Bureo
firmada del presente Escribano del número y de esta
comisión—El Sr. D. Cristóbal de Monsourin y Castelsi, Cauallero de la Orden de Santiago del Consejo
de s. M—en los de Castilla y Santa Cruzada Asesor
de su Real Casa y Bureo y de la policía de esta Corte
y su Jurisdicción lo mandó en Buen Rettiro á trece de
Diciembre año de mil settecientos quarenta y s e i s Está rubricado—Agustín Beleño y Acosta.
El título del inventario, por lo que á
cuadros atañe, es así:
46
REVISTA EUROPEA.
8 DE NOVIEMBRE DJ¿ 1 8 7 4 .
Resumen X° de el Inventario de las pinturas que se
reservaron de el incendio de el Real Palacio de
Madriz y existen al presente en las Casas Arzobispales de donde se han sacado algunos para el
Retiro, sin distinzion de clases, tiempos y precios,
á saber:
Pinturas antiguas al tiempo del fallecimiento
de Carlos 2.° en el Palacio de Madriz
1 .,178
Existentes antiguos en las Casas Arzobispales.
Entregadas para colocar en el Retiro.
Entregadas á D. Santiago Bonani
Pinturas antiguas existentes
Faltan de todas las pinturas antiguas
67S
68
298
1.038
S37
1.575
Queda de este modo demostrado, que el
terrible incendio consumió nada menos que
537 cuadros antiguos, en 1734, de los mejores autores, no tocando poca parte á los
de nuestro Rubens.
Dicho inventario de las pinturas comenzó
en 27 de Febrero de 1747, y se suspendió
en 1 8 de Marzo siguiente. Posteriormente,
en 18 de Setiembre de 1748, se mandó
que se tasaran y apreciaran todas las pinturas y alhajas que no se habian tasado el
año anterior, y para verificarlo se ordenó
proceder á los inventarios del Buen Retiro,
encargando la parte de pinturas á los pintores de Cámara, Juan de Miranda y Andrés
de la Calleja, que empezaron su tarea en 17
de Octubre de 1748, é hicieron el
Inventario y tasación de las Pinturas
que se entregaron á D. Bartolomé Rusca
y ü. Santiago Bonavia para colocar en el
Real Sitio del Buen Retiro, donde existen.
Siguen corriendo los años y no se halla
nuevo recuento ni inventerio de pinturas en
el archivo de la real casa, hasta que terminado, si no completamente en gran parte,
el nuevo real palacio que hoy tanto embellece á la capital de España, se trasladan á
él gran número de pinturas, sacándolas, ya
de la residencia del Buen Retiro, ya de los
puntos en donde habían estado custodiadas.
El laborioso cuanto adocenado pintor de Su
Majestad, D. Andrés de la Calleja, cayó
sobre todas estas pinturas como pedrisco
sobre árboles frutales, retocando con colores al óleo y barriendo, más que limpiando,
muchas de ellas, con la mejor buena fe y
más plausible celo del mundo, al mismo
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tiempo que con prolijo cuidado hacia de todas ellas listas y descripciones algún tanto
detalladas, aunque tan candorosas y poco
literarias como las de sus "predecesores.
Todo esto se halla en el—a Reconocimiento
de las pinturas del rey nuestro señor (Carlos III) que se hallan colocadas en el nuevo
real palacio, oratorio, capilla, parroquia
ministerial y estudio del pintor de Cámara
D. Andrés de la Calleja, executado en
virtud de orden verbal del E. S. marqués de Montealegre, mayordomo mayor
deS.M., á 9 de Marzo de 1772, con distinción de tamaños y autores, asi como los
parajes de donde han sido traídas en la
forma siguiente: «este recuento fue» fenecido en 14 de Julio de 1772, habiendo
además una adición de 7 de Agosto de
1773.» En uno y en otro se advierte que
todas las pinturas, cuyos números son de
color blanco, proceden del real palacio del
Buen Retiro, y las que de allí no vinieron
á la nueva mansión y carecían de número,
lo tienen de otro color y se indica al margen
su procedencia. Resiéntese este reconocimiento de los defectos de su inocente y poco
concienzudo autor, sobre todo en la designación de autores á los cuadros antiguos.
Baste un ejemplo para demostrarlo. Uno de
los mejores, si ncel mejor de los cuadros
de Rubens, el conocido por el nombre de
La Serpiente de metal, firmado en letras
bien grandes por cierto, la inventaría y no
lo reconoce Calleja en este reconocimiento,
como cuadro original flamenco. ¡Qué restauraciones y qué limpias de cuadros baria
este pobre hombre cuando no paraba los ojos
en este lienzo ni veia la firma de su autor!
Esto eran y esto sabían los pintores espa-.
ñoles del reinado de Carlos III. Salta á la
vista en este reconocimiento el olvido, más
aún, el odio en que habia caido en la corte
de los Borbones la memoria de la extinguida casa de Austria española. El cuadro
del acto piadoso del conde Rodulfo, con
tanto cariño, respeto, y aun si se quiere
adulación, inventariado en el siglo XVII, se
desconoce por completo y se ignora lo que
representa en esta lista de cuadros de Calleja, y hasta se equivocan lastimosamente
Jos retratos de los Felipes,, confundiéndolos
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G. CRUZADA VILLAAMIL.
PINTURAS DE RUBENS EN ESPAÑA.
unos con otros.¿Qué sena la riqueza inmensa
que aún posee España en pinturas, á qué
quedaría reducido nuestro museo del Prado
si no existieran en él las adquisiciones de
nuestra casa de Austria y no contara más
que con las compras hechas por todos los
monarcas de la casa de Borbon?
Por muerte de Carlos III se hace un
Inventario y tasación general de los muebles pertenecientes al real oficio de furreira de los reales Palacios de Madrid, Retiro, Sitios y Casas de Campo,
cuyos muebles quedaron por fallecimiento del Señor
Rey^D. Carlos III, que en paz descanse, formado en
virtud de orden de 10 de Enero de 1789 y ejecutado
por los oficios de la Real Casa.
Al pié del inventario de los cuadros del
palacio n u e v o ' se autoriza su tasación del
modo siguiente:
Como pintores de cámara de S. M. certificamos
haber tasado y reconocido todo lo que expresa esta
relación, la que asciende á seis millones ochocientos
sesenta y seis mil quinientos treinta reales de vellón.
Y para que conste lo firmamos en Madrid a 25 de
Febrero de 1794.
Las pinturas del palacio del Buen Retiro,
cuya tasación llegó á 1.248.330 rs. vn.
fueron revisadas en la misma fecha por
Mariano Salvador Maella, Francisco Xavier
Ramos y Eugenio Giménez de Cisneros.
Las del Escorial, que estaban en palacio,
montaron á 292.600 rs., según tasación de
los tres pintores últimamente indicados. Las
del Palacio tienen el siguiente certificado:
Como pintores de cámara de S. M., certificamos
haber reconocido y tasado todas las pinturas que expresa esta relación, las que hemos tasado, y asciende
su valor á 1.430.640 reales. Y para que constelo
firmamos en Madrid, á 25 de Febrero de 1794.—
Francisco Bayeu.—Francisco Goya.—Jacinto Gómez.
En el Sitio del Pardo no consta que se
hiciera inventario más que de las esculturas
y muebles, sin duda por hallarse las paredes de las habitaciones reales todas cubiertas con los tapices nuevos que por entonces
se tejieron.
Y termina el inventario por un resumen
general del valor de las pinturas halladas á
la muerte de Carlos III, que para que se
conozca á lo que asciende conviene conocer á la letra:
«Importa este Imbentario general de los muebles,
pinturas esculturas y demás efectos correspondientes
47
al Real Oficio de Furriera existentes en los Palacios
de Madrid, Sitios Reales y Casas de Campo 38.300,898
reales 28 mrs. vn. Advirtiendo que en el palacio de
Buen Retiro después de concluido el Imbentario se
hizo repartimiento de pinturas y otras cosas de que
no he tenido ninguna noticia: En el Real Sitio de San
Ildefonso después de concluido el Imbentario se han
sacado para el Sitio de Aranjuez gran número de pinturas como también varias piedras de marmol, etc.
y otras cosas de que no he tenido noticia como gefe
del Real Oficio de Furriera, por cuyas razones no se
me debe formar cargo ninguno de los dos mencionados Sitios. San Ildefonso 28 de Agosto de 1794.—Antonio María de Cisneros.
Muerto el rey Carlos IV en tierra extranjera, después de elevado al trono su hijo
Fernando VII, por la fuerza de las armas,
no se hicieron en aquellos cambios de reinados inventarios de las obras de arte. El
extranjero invasor quiso llevarse de España,
como habia» querido de Italia , las obras
maestras del arte, para que diesen testimonio do sus conquistas é hiciesen más brillante el esplendor de su gloria; y á Francia fueron más que muchas tablas y lienzos
de los alcázares reales, de los palacios de
los magnates y de las iglesias de los más
ricos cabildos catedrales de España. Sometido al fin aquel perturbador del mundo, por
el mundo todo contra él coaligado, volvieron las cosas á buscar sus antiguos centros,
y volvieron también en gran parte, si no
todos,v-ios objetos artísticos á buscar sus perdidos sitios, regresando alguno que otro en
bastante mejor estado que aquel en que se
hallaban al emprender su forzado viaje.
Tranquilo y en paz el reino, muere D. Fernando VII, después de haber secundado la
feliz idea de fundar un museo de pintura y
escultura con los más selectos cuadros y estatuas que se guardaban en sus palacios. A
la muerte del rey ae hacen inventarios de
orden de su viuda la reina gobernadora doña
María Cristina, y en 28 de Mayo de 1834
se acaba el del Real Museo, y se tasan todos
sus cuadros por los Sres. D. Vicente López,
D. José de Madrazo, D. Bartolomé Montalbo, D. José Aparicio, D. Blas Ametller,
D. Ramón Lletget, D. José Leoncio Peros,
D. Juan Gal vez y D. Carlos Mariani.
Al pasar á ser de dominio directo de la
nación en 4 868 los cuadros del Museo, no
48
REVISTA EUROPEA.
8 DE NOVIEMBRE DE 1 8 7 4 .
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pronto una situación que las leyes tuvieron necesidad de regular, y de aquí se originó el anómalo y singular carácter con que aparece la esclavitud en las Antillas; porque las pragmáticas
y reglamentos que se dictaron, aceptando por una
parte las costumbres de antiguo observadas, y
ateniéndose por otra á las Leyes de Partida, desconocieron muchas veces la personalidad de los
esclavos; pero al mismo tiempo, no sólo les otorgaron, aunque mermados, sus derechos civiles,
sino que consideraron en ellos la esclavitud como
una obligación de respeto, de obediencia y de
trabajo para con sus amos, derivada del sustento
y de la educación que de ellos recibían.
La coartación, autorizada ya en alguna Cédula
del siglo XVII, antes de las de 1708 y 1768 que
se citan sobre el caso, da derecho al esclavo para
redimirse parcial y sucesivamente, comprando
su emancipación á plazo, medíante la entrega
de 50 pesos, y modifica de tal manera la esclaviGr. CRUZADA VILLAAMIL.
tud, que en realidad sólo otorga al dueño, como
(Continuará.)
derecho dominico, el de aprovecharse del trabajo
forzoso dei siervo. El coartado no puede ser vendido en más precio que el fijado en su primera
APUNTES'
coartación; cambia de amo siempre que lo soliciSOBRE LOS PROYECTOS DE ABOLICIÓN DE LA ESCLAVITUD ta; trabaja, si así lo desea, fuera de la casa del
amo, con la sola obligación de pagarle una cuota
EN LAS ISLAS DE CUBA Y PUERTO RICO.
fija, equivalente á 12 centavos de peso por cada
100 de su valor, haciendo suyo lo demás que
La publicación de estos apuntes tiene el ob- produzca su trabajo; y adquiere la libertad desde
jeto de dar á conocer, en una breve relación, á los que entrega la cantidad restante de su estimación.
lectores de la REVISTA EUROPEA los proyectos forPor esto sostienen algunos escritores que la
mados hasta el día para abolir la esclavitud en
las islas de Cuba y Puerto Rico, omitiendo la coartación establece una especie de condominio
comparación y examen de ellos, que ha de ser el en que el dueño representa el precio no pagado
del esclavo, y éste la parte de su tasación ya saasunto de un trabajo más serio y meditado.
Conviene antes advertir que la esclavitud tiene tisfecha; y por esto también, decia D. Pedro Ceen aquellas provincias un carácter que la distin- ballos, primer secretario de Estado, al contestar
gue esencialmente de la establecida en otras na- en 1815 á una reclamación de Inglaterra sobre el
ciones. «La imposibilidad en que estaban los in- tráfico: «No es culpa de la España el que la suerdios,» dice la Real Cédula de 1817, «de ocupar- te de sus negros se haya confundido con la de los
se en diferentes trabajos útiles, aunque penosos, ingleses y franceses, cuando es esencialmente
nacida del ningún conocimiento que tenían de las diversa; aunque unos y otros se llaman esclavos,
comodidades de la vida, y de los cortísimos pro- esto procede de la pobreza de la lengua, que
gresos que entre ellos habia hecho la sociedad carece de otra palabra para señalar todas las mocivil, exigió, poco tiempo después de la conquis- dificaciones de la servidumbre ó dependencia de
ta, que el beneficio de las minas y el rompimiento unos hombres para con otros.»
y cultivo de las tierras se entregaran á brazos
Estas circunstancias con que existe la esclavimás robustos y activos.» Aprovechóse entonces tud en las Antillas han impedido que los prola esclavitud que existia en las regiones de Áfri- yectos formados para su abolición se acomoden á
ca, y se dio principio al execrable tranco de ne- los diversos sistemas de emancipación admitidos
gros, que, consentido por el Gobierno, aunque por otras naciones, y fuerzan á que la clasificacon repugnancia siempre y con recelo, y por me- ción de ellos se ordene en dos grupos, comprendio de permisos de introducción, limitados y ex- sivo el uno de los de origen oficial, esto es, de los
cepcionales, fue sometiendo al trabajo á aquellos hechos en las Cortes, en las dependencias del
desgraciados. Su número considerable constituyó Gobierno, ó en las Corporaciones consultivas del
se han hecho, que separaos, nuevas tasaciones de los cuadros.
Registradas quedan ya las fuentes donde
constan las obras de Rubens, que á la casa
real de España pertenecieron: hora es ya
de registrarlas una por una. Parece más
oportuno comenzar por las obras que se han
perdido, comprendiendo bajo esta denominación aquellas cuyo paradero se ignora,
porque muy bien pudiera suceder que, después de doscientos cincuenta años, en los
(|ue tantas y tantas cosas han pasado y tantas
vicisitudes han corrido las alhajas de la corona real de España, algunos de estos cuadros de Rubens existieran en alguna parte,
aunque en ella no tengan perfecto derecho
de encontrarse.
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