499-CAS-2010 SALA DE LO PENAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las ocho horas y treinta y ocho minutos del día treinta y uno de agosto de dos mil doce. El anterior escrito ha sido interpuesto por el Licenciado Julio Cándido Reyes Ventura, en calidad de Defensor Particular, contra la sentencia definitiva condenatoria, pronunciada por el Tribunal de Sentencia de San Francisco Gotera, Departamento de Morazán, a las quince horas con cincuenta minutos del día ocho de julio del año dos mil diez, en el proceso penal instruido en contra de EDWIN ALEXI PONCE LOZA, por el delito de ROBO, Art. 212 Pn., en perjuicio de la víctima identificada con clave "Abril". Examinado el recurso y habiéndose cumplido con los requisitos que establece el Art. 423 Pr. Pn., ADMÍTASE éste. RESULTANDO: I) Que mediante la resolución dictada, se resolvió: "POR TANTO: De conformidad a los razonamientos hechos, las disposiciones legales citadas y a los artículos 1 Inc. 1°, 11, 12, 13, 14, 15, 27, 74 Ord. 1° y 75 Ord. 2° de la Constitución de la República; del 1 al 6, 33, 44, 45 No, 1, 46 No. 1, 58 Nos. 1 y 3, 62, 63, 68, 212 del Código Penal y 1, 2, 3, 4, 6, 15, 19, 130, 162, 356, 357, 358, 359 y 361 del Código Procesal Penal, este Tribunal por unanimidad EN NOMBRE DE LA REPÚBLICA DE EL SALVADOR FALLA: A) CONDÉNASE al imputado EDWIN ALEXI PONCE LOZA, de las generales antes expresadas, a la pena de SEIS AÑOS DE PRISIÓN por el delito de ROBO, en perjuicio de la víctima identificada con clave "ABRIL"; la cual cumplirá a partir del día cuatro de marzo del año dos mil diez...". II) El impugnante invoca como primer motivo la errónea aplicación del Art. 212 Pn., argumentando lo siguiente: "Se demostrará partiendo de hechos probados y sin alterarlos que en el juicio de tipicidad que realizó el A quo, no establece con claridad la conducta realizada por mi defendido, que le haya permitido colmar la parte objetiva del tipo penal, pues al momento de realizar la calificación jurídica del delito y de dictar el fallo, emplea razonamientos confusos y contradictorios lo cual ha traído como consecuencia que se haya responsabilizado penalmente a mi representado....--- Por lo anterior se partirá del cuadro fáctico acreditado por el A quo sin alterarlo en las páginas 9 y 10 de la sentencia, el A quo tuvo como acreditado: --- """ 2"ABRIL". que el día cuatro de marzo del corriente año a eso de las dos y veinte de la tarde la dicente iba con "Pájaro" para la casa de un familiar… cuando un hombre le pidió la hora, diciéndole después, que le diera las cosas, sino la iba a puyar, pero no le vieron ningún cuchillo, aunque andaba un palo con punta y una tenaza y como la dicente tenía miedo le dio la cadena y un anillo, después de esto se fue por un falso y la dicente se fue con Pájaro.””” 3- PÁJARO", que el día cuatro de marzo...el dicente se dirigía junto a Abril hacia la casa de un familiar, cuando un hombre los alcanzó diciéndole a Abril que le diera la cadena y anillo porque si no la iba a puyar ya que andaba un palo con punta y una tenaza, por lo que Abril le entregó el objeto". Luego, el recurrente señala los presupuestos que se fijan para afirmar que una conducta es antijurídica y expone que: "En cuanto a un delito de Robo como afectados, la víctima con clave "ABRIL", se ha fijado con la prueba relacionada en el delito que se cometió, que el comportamiento realizado es contrario con el ordenamiento jurídico y que mi defendido ha sido autor de ese ilícito, pero la situación se toma diferente en el sentido que con ninguno de los dos testigos se estableció que mi representado la haya amenazado con el palo con punta o la tenaza, ya que ambos son contestes en expresar que solamente los andaba, destruyéndose con eso el elemento de violencia que conlleva el delito de Robo, ya que ninguno de los testigos acreditó en vista pública, caso contrario de la formación material relevante para tomar como parámetro, que mi defendido primeramente anduviere dichas cosas, porque en vista pública no se tuvo acreditado por ningún otro medio probatorio lo relativo a dichos instrumentos.--- Como puede apreciarse en los fragmentos transcritos el A quo, no elaboró un verdadero juicio de tipicidad, ya que mi representado en el caso concreto de la víctima con clave "ABRIL", concretamente se estableció con la prueba tanto documental, existe la denuncia en sobre cerrado de la víctima, que nos vertió, una situación diferente expresando en dicho libelo, que mi defendido andaba cuchillo, lo cual consta en página tres de la sentencia que dice: """A) Prueba Documental: 1 """ A) Prueba Documental: 1- Denuncia, la cual se encuentra en sobre cerrado interpuesta por la víctima identificada con clave "ABRIL"... "diciéndole además que si no lo hacia la iba a puyar, le enseñó el cuchillo que andaba, aparte una tenaza y una vara""".--- Realizando el verdadero juicio de tipicidad y valorando los elementos de prueba ofertados y desfilados en vista pública, se puede advertir legítimamente, utilizando el principio de la lógica y la razón suficiente, que las víctimas "ABRIL" y "PÁJARO" mencionan que mi representado portaba un palo con punta y con la denuncia de la testigo y víctima "ABRIL", se desprende que ella expresó claramente que lo que expresaba (sic) era una vara, que son situaciones distantes para poder establecer que dicha vara podría ser un medio intimidatorio para causar un delito como el que se le ha condenado a mi representado.— ... El agravio, se demuestra por medio del método de la supresión mental hipotética mediante el cual se establece que si el A quo no hubiere realizado el defectuoso juicio de tipicidad derivando erróneamente de la plataforma fáctica acreditada en la sentencia colmaba la concurrencia de elementos objetivos y subjetivos del tipo penal de ROBO, hubiese calificado dicho accionar en el delito de HURTO, establecido en el Art. 207 Pn....". Como segundo motivo, invoca la violación al principio de congruencia, Art. 362 No. 8 Pr. Pn., en su fundamentación manifiesta: "En la producción de la sentencia de condena en contra de mi defendido, existe inobservancia o violación a las reglas relativas al principio de congruencia, es decir, que se irrespetó la correlación que debe tener la sentencia con la acusación y el auto de apertura a juicio, se advierte en folios 1 de la sentencia que se acreditó como fecha de los hechos, el día cuatro de abril del presente año, asimismo se acreditó """dame la cadena y el anillo y si no lo hacía le iba puyar con un cuchillo, por lo que al observar "ABRIL" que dicho sujeto se le acercó nuevamente, repitiéndole me la vas a dar o te puyo""", lo anterior es incongruente con la prueba desfilada en vista pública, tanto documental como testimonial, ya que la fecha que se menciona tanto en la denuncia de hoja 3 de la sentencia, la denunciante "ABRIL" menciona que los hechos fueron ocurridos el día cuatro de marzo del corriente año, no como mencionó el fiscal tanto en su acusación, de fecha cuatro de abril y lo que quedó plasmado en el auto de elevación a plenario, y lo que se tuvo como fijado para la iniciación de la vista pública y de la sentencia en folios 1. Asimismo, quedó demostrado que en ningún momento lo que se mencionó en los hechos que se tuvieron a consideración, en lo referente a """me la vas a dar o te puyo""", quedó desacreditado que no ocurrió dicho acontecimiento porque los testigos "ABRIL" y "PÀJARO " jamás expresaron en sus declaraciones semejante cosa. Y lo más grave de la incongruencia es que se expresa en los hechos que todo ocurrió a presencia de "PÁJARO", lo que es destruido con la prueba documental que corre agregada a hoja tres, """A) Prueba Documental: 1) Denuncia, la cual se encuentra en sobre cerrado interpuesta por la víctima... diciéndole además que ella iba acompañada de su primo "DANIEL", lo anterior ya no concuerda con los hechos establecidos porque lo anterior fue expresado por dicha persona el día siete de marzo... o sea tres días después de que sucedieran los hechos y que no existía ningún contacto anterior con elementos tanto fiscales como policiales para presumir que estaba mintiendo o que estuviese diciendo verdad, lo que no introduce en ningún momento. Como elemento vinculatorio para poder creer que "DANIEL" sea la misma persona que "PÁJARO", porque de acuerdo a lo que consta en esta sentencia y en pruebas diferentes son dos personas diferentes.--- Es por ello, que el Tribunal Sentenciador incurrió en violación del Art. 362 No. 8 CPP. por inobservancia del Art. 359 CPP, pues no existe congruencia entre la sentencia, la acusación y el auto de apertura a juicio, cuya disposición prohíbe al sentenciador condenar al imputado "en virtud de una violación al precepto penal por el cual fue condenado mi representado, ya que en la acusación, en el auto de apertura a juicio, no fue previamente advertido por la fiscalía el error sobre la fecha en que ocurrieron los hechos, por lo cual quedó establecido que eso se iba a probar en juicio y que no se comprobó dicha fecha sino que una diferente a la establecida en los hechos, los cuales en ningún momento se pueden modificar por el juzgador, ya que ésta es la plataforma fáctica a establecer sobre la historia jurídica que fue puesta ante los señores Honorables del Tribunal de Sentencia de San Francisco Gotera, quienes en ningún momento pueden cambiar los hechos puestos a su conocimiento, sobre los cuales se tuvo que haber sentenciado."...--- El agravio, se demuestra por medio del método de la supresión mental hipotética mediante el cual se establece que si el A quo no hubiese relacionado los hechos puestos a su conocimiento la fecha cuatro de abril... y la cual en ningún momento, se acreditó en vista pública ni tampoco se acreditó sin ninguna duda lo referente a la persona que acompañase a "ABRIL" el día de los supuestos hechos, ya que se confronta la prueba documental con la testimonial de "ABRIL" las cuales son diferentes, por lo antes dicho se tuvo que haber resuelto con una sentencia absolutoria a favor de mi defendido...". III) Por su parte, la Agente Auxiliar del Fiscal General de la República, al ser emplazada contestó el recurso, expresando lo siguiente: “... la parte recurrente ... quiere hacer ver que ha existido una errónea aplicación del Art. 212 Cd. Pn.. Aduciendo que no se ha establecido con claridad la conducta realizada por el imputado... ante lo cual considera esta representación fiscal que sí ha fundamentado la sentencia como es debido y conforme a lo prescrito en el Art. 212 C. Pn., lo que sucede es que la parte impetrante deja por un lado lo que es el significado "MOTIVACIÓN" pues la Sala de lo Penal ha dejado clara su posición sobre dicho concepto así...--- En cuanto al segundo motivo invocado por el impetrante el cual, según el escrito presentado manifestó que existe "violación al Principio de Congruencia" o error de fondo, motivo que alega la parte recurrente que a consideración de esta representación fiscal no está suficientemente fundado pues el impetrante hace referencia a que la fecha de los hechos sucedieron el día cuatro de abril del presente año y al producirse juicio oral y público se subsana verbalmente el error material de la acusación por parte de la representación fiscal y aunado a ello tanto la víctima con clave "Abril" y del testigo presencial de los hechos con clave "Pájaro" quienes unánimemente expresaron que los hechos ocurrieron el día cuatro de marzo de los corrientes, así como también de las amenazas a que fueron sometidos tanto la víctima como el testigo presencial de los hechos, detalles de los cuales no puede hacer alusión el recurrente pues dicha prueba no fue inmediata (sic) ni controvertida por éste, por otra parte en el texto se vislumbra la mala intención del recurrente de inducir al tribunal de casación a que entre a valorar la veracidad de los testimonios digo mala intención ya que pretender que en casación se haga el reexamen de la deposición tanto de la víctima con clave "Abril" como del testigo presencial, de los hechos con clave "Pájaro" resulta ajeno a la competencia y los límites impuestos por el legislador en el recurso de casación, en virtud de los principios de oralidad y de inmediación...--- Por todo lo antes relacionado.., con el debido respeto PIDO: --- Se declare la inadmisibilidad del recurso de casación...". IV) Como primer motivo, el reclamante invoca la errónea aplicación del Art. 212 Pn., y para ello, afirma, partirá del cuadro fáctico acreditado, sin embargo, -desconociendo el proceso fáctico tenido por demostrado- lo que transcribe son las páginas 9 y 10 de la sentencia, donde se encuentra la descripción de la prueba testimonial, específicamente lo relatado por los testigos "Abril" y "Pájaro", considerando que con la prueba relacionada no se estableció que el imputado haya amenazado con el palo con punta o la tenaza a la víctima, ya que ambos son contestes en expresar que sólo los andaba, destruyéndose con eso el elemento de violencia que conlleva el delito de Robo. En la casación por el fondo, corresponde controlar si se ha aplicado correctamente la ley sustantiva. Los hechos probados en el fallo deben respetarse, ya que no es posible sustituirlos, ni modificarlos, tampoco se puede valorar prueba. En el caso en estudio, consta en la página 14, que el Tribunal tiene como "hechos acreditados, los siguientes: 1) Que el día cuatro de marzo del año dos mil diez, a eso de las catorce horas con veinte minutos, la testigo "Abril", fue despojada de algunos objetos de su propiedad, de parte de un sujeto, quien mediante violencia se apoderó de los mismos, sustrayéndolos de quien los tenía en su poder, es decir, a la víctima, siendo entre otras cosas, una cadena con un dije en forma de delfín y un anillo; 2) Que el apoderamiento violento de los objetos a los que la víctima "Abril" y testigos "Cielo" y "Pájaro", han hecho referencia, le produjo a la víctima en referencia, por una parte una afectación patrimonial, pues dichos objetos eran parte de ese conjunto de bienes con un valor económico que estaban bajo su esfera dominical; y por otra parte, una afectación emocional producto de la intimidación ejercida por el imputado sobre su persona; 3) Que de la acción realizada por el sujeto activo se desprende el ánimo de lucro, interpretado éste, como cualquier tipo de ventaja o beneficio patrimonial que el sujeto activo se propone conseguir, pues también se demostró que el empeño que el imputado hizo de las prendas, produjo a éste un beneficio económico, al obtener la cantidad de setenta dólares, siendo esa cantidad por la que dejó en prensa o empeño los objetos". Estos hechos así determinados, asevera el sentenciador, "encajan en la figura típica del Robo, tipificado en el Art. 212 Pn., en perjuicio de la víctima identificada con clave "Abril, pues en esta acción de ataque al patrimonio de ésta, concurren todos los elementos objetivos y subjetivos del tipo penal acreditado, pues, ha quedado demostrado que el imputado ejerció intimidación en la víctima "Abril" y el testigo "Pájaro" cuando les dijo "Que si no le daban las cosas, los iba a puyar", no obstante el imputado no portaba un cuchillo, pero si andaba un palo con punta y una tenaza, lo cual generó en el sujeto pasivo, el convencimiento de que se encontraba frente a un elemento que lo tornaba vulnerable, porque podía producirle un daño físico en caso de oposición, afectándole además en el aspecto psicológico". De lo antes citado, se desprende que el tribunal de juicio sí acreditó la violencia, como elemento objetivo del tipo de Robo, con el testimonio de la víctima y el testigo de cargo, quienes manifestaron en la vista pública, según consta en la resolución -además ha sido relacionado por el impugnante en su libelo al transcribir las declaraciones-, que el imputado les dijo "que si no le daban las cosas, los iba a puya” y aunque no portaba un cuchillo, sí andaba un palo con punta y una tenaza. Tal hecho, evidencia en forma clara y precisa la conducta desarrollada por el encartado, con lo cual logró atemorizar a la ofendida, para lograr su propósito. El marco fáctico se sustenta fundamentalmente en los testimonios de la víctima y el testigo, quienes relataron los actos llevados a cabo por el acusado, haciendo mención de la violencia ejercida en su contra, para despojarla de sus prendas personales, al amenazarlos con puyarlos; resultando un palo con punta, una herramienta con la que se puede herir o utilizar para una efectiva intimidación, por ende un instrumento de coacción, capaz de causar un daño, es decir, un medio idóneo para viciar la voluntad de una persona, por lo tanto, no se puede calificar el ilícito como hurto como lo pretende la defensa. En consecuencia, esta Sala no encuentra infracción o errónea aplicación de la norma sustantiva, por lo que no es procedente acceder a la petición del recurrente. Se alega como segundo motivo, la violación del Art. 362 No. 8 Pr. Pn., por inobservancia del Art. 359 Pr. Pn., porque en Fs. 1 de la sentencia se acreditó como fecha de la comisión del hecho el cuatro de abril del año dos mil diez, lo cual es incongruente con la prueba destilada, donde se menciona que el mismo sucedió el cuatro de marzo del referido año, no como lo mencionó la fiscalía en su acusación y que fue plasmado en el auto de elevación a plenario y lo que se tuvo como fijado para la iniciación de la vista pública. Tampoco, quedó demostrado que el imputado haya expresado "me la vas a dar o te puyo", porque los testigos jamás manifestaron semejante cosa. Esta Sala, estima pertinente señalar que en virtud del principio de correlación entre acusación y sentencia, regulado en el Art. 359 Pr. Pn., lo que se prohíbe es que la condena se dicte por un hecho diverso del que fuera objeto de la imputación o haciendo mérito de alguna circunstancia ajena a la atribuida, de tal manera, que se modifique el hecho en su propia esencia, tampoco se debe imponer una pena superior a la que los acusadores solicitaron; es decir, este principio impide que se sancione por un ilícito más grave, se aprecien agravantes o formas de ejecución y participación más gravosas que las planteadas en la acusación o que condene por delito distinto que no sea homogéneo, esto es, que contenga elementos que no hayan sido objeto del juicio y de los que el encartado no haya podido defenderse. Por ello, se exige que en toda resolución se determine en forma precisa y detallada el hecho que se tiene por probado. La enunciación fáctica, es un requisito fundamental de aquella, es decir, se deben exponer con claridad y certeza todas las circunstancias (tiempo, modo y lugar) que la rodean, a fin de que no se altere la necesaria concordancia que debe existir entre acusación y sentencia. En el presente caso, es preciso aclarar que, si bien es cierto, se indicó en la acusación y en la trascripción que hace el tribunal del hecho acusado, que éste ocurrió el cuatro de abril del año dos mil diez, en vez de cuatro de marzo del mismo año, -como lo denunció la víctima, lo declararon los testigos y como consta en la restante prueba vertida en la vista pública-, se colige sin duda alguna, que tal defecto obedece a un error material de la fiscalía, el cual, además, quedó subsanado en el juicio, al expresar el fiscal en sus alegatos finales, "que se ha establecido que los hechos ocurrieron el cuatro de marzo...". De lo expuesto, podemos afirmar, que la situación descrita no constituye perjuicio o desventaja procesal para la parte reclamante, ya que no se evidencia violación al derecho de defensa, porque la fecha que alude, no surgió en el debate, por lo tanto, no fue una sorpresa en la vista pública, ni para la defensa material, ni técnica, pues como se indicó anteriormente, consta que desde la denuncia se manifestó que el hecho sucedió el cuatro de marzo del año dos mil diez, y así fue plasmado también en el auto de apertura a juicio, en el considerando I, en el apartado denominado "Relación de los Hechos", donde se lee: "Que según denuncia interpuesta por la denunciante con clave "Cielo", representante legal de la víctima "Abril", manifiesta: "Que el día cuatro de marzo...", Fs. 73, por lo tanto, el equívoco de la fiscalía de relacionar que el ilícito sucedió el cuatro de abril, no imposibilitaba al imputado a ofrecer prueba, tampoco explica el recurrente la esencialidad de este yerro en la sentencia, ni qué perjuicio se le ocasionó con el mismo. Asimismo, se deduce que los hechos esenciales de este caso no han sido calificados en forma distinta, ni se ha condenado por un ilícito más grave que el invocado en la acusación, tampoco la pena impuesta es superior a la solicitada por el ente fiscal, razones suficientes para concluir que no existe vicio alguno en la actuación del A quo. Respecto a que la víctima mencionó en la denuncia que iba acompañada de su primo "Daniel", lo cual no concuerda con los hechos establecidos, cabe recordar, que la denuncia es la transmisión de la "notis criminis", una mera declaración de conocimiento de la noticia de un hecho constitutivo de delito, que como regla general, provocará el acto promotor de la acción penal, régimen general que manda en la persecución de delitos públicos. Pero, cuando la imputación es corroborada por el denunciante durante el juicio oral, tal ratificación se convierte en un elemento que habilita a las partes, para que durante el transcurso de la vista pública, puedan confrontar algún aspecto que fue manifestado por éste y que no sea consecuente con lo que fue expresado y plasmado al momento de materializar la denuncia, teniendo el defensor la oportunidad de cuestionar la versión en la audiencia oral, y de haber inconsistencias, confrontarlo para impugnar su credibilidad, por ser el momento procesal oportuno para tal efecto, y no alegarlo en esta Sede, pues no es competencia de este tribunal, el hacer una revaloración de la prueba aportada al juicio. En consecuencia, el reclamo deberá desestimarse, en virtud de no existir la infracción denunciada. POR TANTO: De conformidad a las razones expresadas, disposiciones legales citadas y Arts. 50 Inc. 2° No. 1, 130, 357, 407, 421, 423 y 427 Pr. Pn., derogado y aplicable, en nombre de la República de El Salvador, esta Sala RESUELVE: DECLÁRASE NO HA LUGAR A CASAR la sentencia de mérito, por los motivos invocados. Remítase el proceso al tribunal de origen, para los efectos legales consiguientes. NOTIFÍQUESE.--------R. M. FORTIN H.-------------M. TREJO.------------D. L. R. GALINDO.--------PRONUNCIADO POR LOS SEÑORES MAGISTRADOS QUE LO SUSCRIBEN-------------RUBRICADAS-----------ILEGIBLE.