Entrevista por Charles H. Oppenheim Pierre Tercier: “El conflicto es parte de la naturaleza del ser humano” De visita en México para intercambiar puntos de vista con grupos empresariales afiliados a la Cámara de Comercio Internacional, el Presidente de la Corte Internacional de Arbitraje charló con ENTORNO sobre las crecientes actividades de arbitraje en la resolución de controversias en México y América Latina. Tengo entendido que la Corte Internacional de Arbitraje se fundó en 1923. ¿Qué eventos llevaron a la creación de la Corte y cómo se concibió desde sus orígenes? La CCI se fundó en 1919, al finalizar la Primera Guerra Mundial, con la idea de contar con una organización no gubernamental que fomentara el comercio internacional. Los fundadores se conocían originalmente como “los comerciantes de la paz”, porque consideraban que el comercio libre y justo entre naciones era un ingrediente fundamental para promover y mantener la paz. 14 ENTORNO Pocos años después, en 1923, crearon la Corte como un mecanismo para lograr la buena resolución de controversias y disputas comerciales. Ahora existen otras instancias para la resolución de controversias a nivel mundial, algunas de ellas estatales. Hoy en día existen varias instituciones para la resolución alternativa de controversias. Nuestra Corte de Arbitraje es única en el mundo, porque ofrece un verdadero “sistema”: la Corte juega un rol desde el inicio de cada caso hasta su conclusión, y no sólo es un mero espectador desde las trincheras. No interferimos en las decisiones que toman los tribunales de arbitraje, aunque tenemos la facultad de nombrar y reconfirmar a los árbitros, y supervisamos el procedimiento de los casos. En París, donde está la sede de la Corte, tenemos 60 personas que trabajan permanentemente con los casos que se presentan. De modo que el arbitraje existe prácticamente desde que se instituyeron las reglas del comercio internacional. ¿Eso quiere decir que el libre comercio necesariamente implica la controversia y la disputa entre una parte en litigio y otra? Quiere decir eso y más: el conflicto es parte de la naturaleza del ser humano. Con más razón surgen disputas entre, por ejemplo, empresas firmantes de un contrato de compra-venta. Es más, diría que el conflicto —y su resolución— juegan un papel clave en el comercio justo. Uno puede tener un buen contrato, pero si no hay manera de obligar que la otra parte cumpla su parte, se convierte en un pedazo de papel sin valor alguno. Por eso digo que el mecanismo de resolución de disputas es una parte absolutamente fotos: Ana Lourdes Herrera ¿A qué debemos su visita a México en esta ocasión? Una de las funciones de la Corte implica viajar para explicar nuestra función y escuchar a los empresarios de los distintos países, para obtener su retroalimentación sobre nuestra actividad. Nos interesa saber cuáles son sus expectativas. Los fundadores de la CCI se conocían originalmente como “los comerciantes de la paz” ENTORNO 15 Es imposible saberlo, porque los contratos por lo general son confidenciales. Sólo le puedo mencionar cuántos casos nos llegan a través de la CCI, y de entrada le puedo asegurar que somos una de las instancias de arbitraje más grandes o de las más grandes en el mundo. Sólo el año pasado recibimos 599 casos nuevos, para un total de 1,315 en curso. “El mecanismo de resolución de disputas es una parte absolutamente indispensable de un sistema de comercio internacional” indispensable de un sistema de comercio internacional. También existen cortes estatales, y son buenas, pero no deja de ser cierto que una corte estatal está ligada a un país y puede ser difícil, en casos de disputas internacionales, que la parte en litigio de un país acepte la jurisdicción de otro país donde reside la parte contrincante. De ahí que el arbitraje internacional es una gran creación desde el punto de vista de las partes en conflicto. Porque ellos pueden nombrar a los árbitros en quienes pueden confiar, y aceptan comprometerse con la resolución a la que lleguen dichos árbitros. Pero no deja de tener sus riesgos, ya que uno pone el destino de su caso en las manos de uno a tres individuos. El 16 ENTORNO sistema de la CCI garantiza una mayor neutralidad y generamos confianza en las partes en conflicto, porque supervisamos la selección de los árbitros, el procedimiento mismo y los costos generados, así como la suma de la indemnización decidida. Revisamos con cautela cada una de las resoluciones de los árbitros antes de que sean enviadas a las partes en conflicto, y les damos el visto bueno. En caso de detectar algún problema o inconsistencia, tenemos la facultad de devolver la resolución para su corrección. En términos generales, ¿se puede hablar de alguna proporción de contratos internacionales que incluyen una cláusula de resolución de controversias a través de la Corte? Son muchos casos. ¿Qué tanto ha crecido el arbitraje conforme la economía del mundo se ha globalizado? Desde luego, el arbitraje está ligado a la globalización en cierta medida, pero en ciertos países sigue habiendo resistencia al arbitraje internacional, y se puede decir que la evolución para encontrar mecanismos para la solución de controversias es más veloz en unos países que en otros. Lo fascinante es que el arbitraje precede la globalización. Un factor que lo demuestra es que la llamada “Convención de Nueva York” de 1958, auspiciada por la CCI, ha sido suscrita por 142 países. Llamada oficialmente la Convención de las Naciones Unidas sobre el Reconocimiento y la Ejecución de las Sentencias Arbitrales Extranjeras, esta convención obliga a los estados signatarios a reconocer por escrito los acuerdos de arbitraje, y a rehusarse a litigar disputas sujetas a acuerdos arbitrales. Los estados miembro también están obligados a reconocer y aplicar las decisiones arbitrales. Hoy día el arbitraje internacional se ha convertido en el mecanismo estándar para la solución de disputas comerciales en el mundo de los negocios. En el último cuarto de siglo México ha ido encaminándose cada vez hacia la apertura comercial con otras naciones, tanto a través de sus tratados bilaterales de libre comercio, como a través de acuerdos multilaterales. ¿El arbitraje es una figura jurídica incluida a nivel global en dichos tratados y acuerdos, o es exclusivamente una cláusula que se añade en cada vez más contratos entre particulares? Hay de dos tipos: el arbitraje tradicional, suscrito por empresas y relacionado con transacciones comerciales internacionales, pero también es importante decir que ahora los estados también pueden estar sujetos a cláusulas de arbitraje. De todas las partes en conflicto registradas el año pasado por la CCI, 11.3% correspondían a estados o entidades estatales. Y esto lo atribuyo a la confianza que ha sido depositada en la CCI hasta por diversos gobiernos nacionales. También existe otro tipo de arbitraje relacionado con los estados, más específico y que maneja pocos casos, pero que es importante porque tiene que ver con garantías para la inversión extranjera. ¿Cómo funciona el arbitraje? Si una disputa ocurre entre dos empresas internacionales, ¿pueden acordar en ese momento sujetarse a la Corte, o tiene que estar previamente acordado esta alternativa en los contratos suscritos por las partes en conflicto? Por lo regular, los contratos incluyen de antemano una cláusula de arbitraje como garantía adicional y factor de confianza entre las partes. Pero también puede ocurrir —aunque es raro— que las partes no hayan incluido una cláusula de arbitraje en sus contratos y que una vez surgida la disputa acuerden someterla a arbitraje. Una vez que sea resuelta la controversia y se haya declarado el monto de la indemnización, ¿es obligatorio para las partes aceptarlo? Totalmente. ¿Es exigible legalmente que las partes acepten la resolución? Desde luego, particularmente en los 142 estados sujetos a la mencionada Convención de Nueva York. ¿Cuántos casos han sido tratados desde la creación de la Corte? Más de 15,000 casos. El caso número 15,000 se registró el año pasado, entre una compañía sudcoreana y una compañía de Uzbekistán con oficinas en Londres: un caso muy internacional. Pero resolvieron el conflicto fuera de tribunales, antes de la resolución de la corte. ¿Eso es muy común? Sí, claro. Alrededor de una tercera parte de los casos que se someten a la Corte se resuelven por acuerdo de las partes durante el proceso y antes de la resolución arbitral. Y también significa que, de los 15,000 casos que han sido abiertos en la CIA, no todos han sido resueltos… Así es. ¿Qué ocurre cuando una parte en conflicto no acepta la resolución del árbitro? ¿Hay manera de apelar la decisión? Hay dos posibilidades: en primer lugar, hay que determinar si en la sede del arbitraje (cada caso tiene una sede, aceptada por las partes o decidida por la Corte), la Ley del país contempla la figura de la apelación, y si es así, puede proceder. En segundo lugar, gracias también a la Convención de Nueva York, las partes pueden hacer exigible la resolución de los árbitros de manera muy expedita. Las causales de la denegación de reconocimiento y ejecución de un laudo son muy limitadas. ¿Qué beneficios reciben las empresas que se sujetan al arbitrio de la Corte? Son varias: en primer lugar, las partes pueden escoger a sus Capítulo Mexicano de la Cámara de Comercio Internacional (CCI México) La Cámara de Comercio Internacional, con sede en París, Francia, es la mayor organización empresarial y más representativa del mundo. Los intereses de sus empresas asociadas —diseminadas en más de 130 países— cubren todos los rubros posibles del sector privado. En nuestro país, el Capítulo Mexicano de la CCI es la instancia que reúne y representa a las empresas establecidas en México ante nuestra sede. Es así como la CCI, a través de sus comisiones de trabajo, actúa como portavoz de la comunidad empresarial mundial, cuando las decisiones que toman las instancias internacionales y nacionales afecgtan de forma crucial a las estrategias y decisiones corporativas. Para mayor información, visite: www.iccmex.org.mx árbitros, que son abogados (u otros profesionales, no necesariamente abogados) con experiencia en la materia, que hablan varios idiomas, que conocen las leyes nacionales e internacionales; que sus discusiones y resoluciones se realizan con confidencialidad; que resuelven una disputa en el menor tiempo posible, lo que genera importantes ahorros a las partes… Además, la Corte ofrece el sistema que mencionaba anteriormente, según el cual la Corte supervisa el trabajo de los árbitros a lo largo de todo el proceso. ¿Es más barato sujetarse al arbitraje de la Corte que a otras instancias? En general sí, pero depende. A través de la Corte el costo más alto son los abogados: sus honorarios y gastos relativos a la presentación ENTORNO 17 del caso representan, en promedio, el 82% del total del costo de un caso de arbitraje. Los honorarios de los árbitros representan un 16% y los gastos administrativos de la institución representan un 2%. En los arbitrajes estatales hay varios niveles o instancias de apelación, hasta llegar a la Suprema Corte de Justicia, en algunos casos. Por lo mismo, estos casos se resuelven en mucho más tiempo y cuestan mucho más dinero. Y los resultados hablan por sí mismos: las resoluciones finales alcanzadas en el sistema estatal son muy pocas. En México se sigue discutiendo mucho en torno a la necesidad de reformar el sistema judicial, de introducir juicios orales, etcétera. En términos de arbitraje, ¿cómo ve usted a México? ¿Qué tan evolucionado somos como país en materia de arbitraje? México es uno de los países que inició la cultura de arbitraje en América Latina. Fue el primer país de la región que adoptó la ley modelo de arbitraje de la UNCITRAL (la Comisión de las Naciones Unidas para la Legislación del Comercio Internacional). Además, las estadísticas de la CCI muestran que México es de los países que más utiliza el arbitraje en comparación con los demás de América Latina. Tradicionalmente estuvo en primer lugar entre los países de la región, aunque recientemente Brasil lo ha desplazado al segundo lugar, por la gran acogida que ha tenido el arbitraje en ese país sudamericano. ¿Cuántos casos de arbitraje hay en México manejados actualmente por la Corte? En el año 2006, se presentaron casos nuevos con 45 partes mexicanas en conflicto. También es interesante decir que, del total de casos nuevos 18 ENTORNO abiertos, alrededor de 13% proceden de América Latina. ¿De los casos mencionados, se puede saber cuántos han sido resueltos y en qué tiempo? Es muy difícil hablar de un tiempo porque cada caso es distinto y depende de muchos factores, pero a muy grandes rasgos puedo decir que hay casos relativamente sencillos que se resuelven en nueves meses o menos, y casos más complejos que se tardan en resolver entre 18 y 24 meses, a veces más. De acuerdo con las reglas de arbitraje, las partes también pueden acordar resolver el conflicto en un marco temporal determinado. Las reglas permiten establecer esos límites de tiempo. Por ejemplo, el tribunal de arbitraje tiene equis número de meses para resolver un caso, pero las partes pueden ponerse de acuerdo para resolver el conflicto en menos tiempo. Hay casos que se resuelven en nueve meses o menos. Finalmente, ¿las resoluciones que determinan los árbitros implican que hay siempre un ganador y un perdedor, o más bien se busca una solución salomónica, más justa, que busca encontrar razón en las dos partes del conflicto? Una vez más, cada caso es distinto y depende de muchos factores. Hay casos en donde claramente el ganador 100 por ciento es uno y el perdedor es el otro. No podemos decir tampoco que el árbitro trata de llegar a una solución salomónica, aunque en algunos casos contados la resolución es de 50-50. La gran mayoría de los casos no se resuelven en los extremos.E Pierre Tercier Pierre Tercier fue nombrado presidente de la Corte Internacional de Arbitraje el 1° de marzo de 2006. De nacionalidad suiza y profesor de la Universidad de Friburgo, el señor Tercier tiene una extensa experiencia en arbitraje internacional y resolución de disputas, y ha servido en numerosas ocasiones con el ICC, el ICSID y otras instituciones. Es altamente respetado en el derecho internacional y en la comunidad empresarial como árbitro, profesor y autor. Anteriormente, Tercier presidió la Comisión de Competencia Suiza y la Sociedad Suiza de Derecho de Seguros. Es profesor invitado de derecho en muchas universidades, incluyendo Ginebra y París. Se graduó de la Universidad de Friburgo summa cum laude y fue admitido a la barra en 1969. En 2004, le fue otorgado un doctorado Honoris Causa por la Universidad de Paris II.