Área Gestión de Recursos Humanos y Legislación Laboral Pública VIII VIII Las Licencias y Permisos Ficha Técnica Autor : Dr. Tulio M. Obregón Sevillano* Título : Las Licencias y Permisos Fuente : Actualidad Gubernamental, Nº 19 - Mayo 2010 Sumario 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. 11. 12. 13. 14. 15. 16. 17. 18. 19. 20. 21. 22. 23. Introducción Permisos o Licencias Las Vacaciones Licencia por Enfermedad Licencia por Gravidez Por Fallecimiento del Cónyuge, Padres, Hijos o Hermanos Por Capacitación Oficializada Por Citación Expresa; Judicial, Militar o Policial Por Función Edil Por Motivos Particulares Por Capacitación No Oficializada Por Matrimonio Por Enfermedad Grave del Cónyuge, Padres o Hijos Licencias por Ejercicio de Cargos Electivos Desempeño de Docencia Universitaria Derecho de Huelga Hora de Lactancia Servicio Militar Licencia por Paternidad Licencia por Adopción Permisos y Licencias para Donar Órganos y Tejidos Humanos Eventos Deportivos Suspensión en Caso de Procesos Administrativos Disciplinarios 1. Introducción Dentro de los diversos derechos de los servidores públicos, está el de gozar de permisos y licencias. Es decir, lo que comúnmente se conoce como las suspensiones de los contratos de trabajo. * Abogado egresado de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Posgrado en Derecho del Trabajo en la Universidad de Salamanca - España. Las causas, formas, plazos, etc., son diversos. Algunas serán pagadas, otras no. En el presente informe detallamos todos estos casos de suspensión de las prestaciones de servicios de los servidores públicos. 2. Permisos o Licencias Las licencias son las autorizaciones para no asistir al centro de trabajo uno o más días. Los permisos son las autorizaciones para ausentarse, durante la jornada laboral, por cierto tiempo (horas o minutos). Los servidores públicos tienen derecho a hacer uso de estos permisos o licencias por causas justificadas o motivos personales. 2.1. Permisos justificados Los servidores, en casos excepcionales debidamente fundamentados, pueden solicitar permiso a la autoridad respectiva para ausentarse por horas del centro laboral durante la jornada de trabajo. Estos permisos debidamente justificados, acumulados durante un mes no podrán exceder del equivalente a un día de trabajo. 2.2. Licencias El uso del derecho de licencia se inicia a petición de parte y está condicionado a la conformidad institucional. La licencia se formaliza con la resolución correspondiente. Los casos son múltiples, y son de tres clases: a. Con goce de remuneraciones: • Por enfermedad; • Por gravidez; • Por fallecimiento del cónyuge, padres, hijos o hermanos; • Por capacitación oficializada; • Por citación expresa; judicial, militar o policial. • Por función edil. b) Sin goce de remuneraciones: • Por motivos particulares; • Por capacitación no oficializada. Actualidad Gubernamental Los períodos de licencia sin goce de remuneraciones no son computables como tiempo de servicios en la Administración Pública, para ningún efecto. c) A cuenta del período vacacional: • Por matrimonio; • Por enfermedad grave del cónyuge, padres o hijos. 3. Las Vacaciones Es un derecho de los servidores públicos de carrera gozar anualmente de treinta días de vacaciones remuneradas. 3.1. Características a. Acumulación: previo acuerdo con la entidad preferentemente por razones del servicio, se puede acumular dos períodos vacacionales. b. Las vacaciones son anuales y remuneradas. c. Son de goce obligatorio e irrenunciable. d. El derecho al descanso vacacional se alcanzan después de cumplir el ciclo laboral, el ciclo laboral se obtiene al acumular doce meses de trabajo efectivo, computándose para este efecto las licencias remuneradas y el mes de vacaciones del período anterior, cuando corresponda. 3.2. Rol vacacional Las entidades públicas tienen la obligación de aprobar en el mes de noviembre de cada año el rol de vacaciones para el año siguiente, en función del ciclo laboral completo, siempre teniendo en cuenta las necesidades del servicio y el interés del servidor. Cualquier variación posterior de las vacaciones deberá efectuarse en forma regular y con la debida fundamentación. 3.3. Cese del trabajador Si el servidor cesa en el servicio antes de hacer uso de sus vacaciones tiene derecho a percibir una remuneración mensual N° 19 - Mayo 2010 VIII 1 Informes Especiales Gestión de Recursos Humanos y Legislación Laboral Pública VIII Informes Especiales total por ciclo laboral acumulado, como compensación vacacional. Si cesa sin haber cumplido el ciclo laboral anual, se le otorgará la compensación proporcionalmente al tiempo trabajado, a razón de tantas dozavas partes como meses de ciclo laboral tenga. 3.4. Fallecimiento del servidor En caso de fallecimiento, la compensación vacacional, sea por ciclo laboral completo cumplido o por ciclo laboral incompleto, se otorga a sus familiares directos en el siguiente orden excluyente: cónyuge, hijos, padres o hermanos. 4. Licencia por Enfermedad La licencia por enfermedad se otorga conforme a lo dispuesto por las normas del Seguro Social de Salud. En caso de enfermedad, el asegurado obligatorio o facultativo que cuente con tres aportaciones mensuales consecutivas o cuatro aportaciones mensuales no consecutivas en el curso de los seis meses calendario anteriores al mes en que se inicie la enfermedad, tiene derecho a recibir un subsidio por enfermedad. En el caso de accidente, basta que esté afiliado para percibir el subsidio del Seguro Social en Salud. El empleador debe pagar la remuneración al trabajador durante los primeros veinte días de incapacidad acumulados dentro del año calendario, del 1 de enero al 31 de diciembre (suspensión imperfecta). EsSalud otorgará el subsidio a partir del vigésimo primer día y seguirá otorgándolo hasta la terminación de la incapacidad temporal para el trabajo, la cual no podrá prorrogarse por un período mayor de once meses y diez días consecutivos. 5. Licencia por Gravidez La licencia por gravidez se otorga conforme a las normas del Seguro Social de Salud. Según estas normas, la servidora gestante tiene derecho a gozar de 45 días de descanso prenatal y de 45 días de descanso posnatal. El descanso posnatal se extenderá por treinta días naturales adicionales en los casos de parto múltiple. El goce del descanso prenatal puede ser diferido parcial o totalmente, y acumulado con el posnatal, a decisión de la trabajadora gestante. La decisión debe ser comunicada al empleador con una antelación no menor de dos meses a la fecha probable del parto. La comunicación debe ser acompañada del informe médico que certifique que la postergación del descanso prenatal no afectará en modo alguno a la trabajadora gestante o al concebido. VIII 2 La postergación del descanso prenatal no autoriza a la trabajadora gestante a variar o abstenerse del cumplimiento de sus labores, salvo que medie acuerdo con el empleador. el documento oficial respectivo. Abarca el tiempo de concurrencia más los términos de la distancia. De haber adelanto del alumbramiento, los días de adelanto se acumularán al descanso posnatal. Para el ejercicio de la función edil, los regidores que trabajan como dependientes en el Sector Público gozan de licencia con goce de haber hasta por 20 horas semanales, tiempo que será dedicado exclusivamente a sus labores municipales. El empleador está obligado a conceder dicha licencia y a preservar su nivel remunerativo, así como a no trasladarlos ni reasignarlos sin su expreso consentimiento mientras ejerzan función municipal, bajo responsabilidad. De haber atraso del alumbramiento, los días de retraso serán considerados como descanso médico por incapacidad temporal para el trabajo y pagados como tales. La asegurada que cuente con tres aportaciones mensuales consecutivas o cuatro aportaciones mensuales no consecutivas en el curso de los seis meses anteriores a la fecha probable del parto y que haya estado inscrita por lo menos nueve meses antes de dicha fecha (excepto caso comprobado de prematuridad), tiene derecho a percibir durante el descanso (los 90 días y los 30 días adicionales en caso de parto múltiple) un subsidio por maternidad pagado por el Seguro Social en Salud administrado por EsSalud a condición de que se abstenga de todo trabajo remunerado. 6. Por Fallecimiento del Cónyuge, Padres, Hijos o Hermanos Los servidores públicos tienen derecho a una licencia por fallecimiento del cónyuge, padres, hijos o hermanos; se otorga por cinco días en cada caso, pudiendo extenderse hasta tres días más cuando el deceso se produce en lugar geográfico diferente donde labora el servidor. Esta licencia es con goce de remuneración. 7. Por Capacitación Oficializada Los servidores públicos tienen derecho a licencia por capacitación oficializada, en el país o el extranjero, se otorga hasta por dos años al servidor de carrera. Para el goce de esta licencia, deben darse las condiciones siguientes: a. Contar con el auspicio o propuesta de la entidad; b. Estar referida al campo de acción institucional y especialidad del servidor; y c. Compromiso de servir a su entidad por el doble del tiempo de licencia, contado a partir de su reincorporación. Esta licencia no es aplicable a los estudios de formación general cursados regularmente dentro del sistema educativo nacional o en el extranjero. 8. Por Citación Expresa; Judicial, Militar o Policial Los servidores públicos tienen derecho a licencia por citación expresa de la autoridad judicial, militar o policial competente. Esta licencia se otorga al funcionario o servidor que acredite la notificación con Actualidad Gubernamental N° 19 - Mayo 2010 9. Por Función Edil 10. Por Motivos Particulares Los servidores públicos tienen derecho a licencia por motivos particulares, la que podrá ser otorgada hasta por noventa días, en un período no mayor de un año de acuerdo con las razones que exponga el servidor y las necesidades del servicio. Esta licencia es sin goce de haber. 11. Por Capacitación No Oficializada Los servidores públicos tienen derecho a licencia no remunerada por capacitación no oficializada que se otorga hasta por doce meses, y que obedece al interés personal del servidor de carrera y no cuenta con el auspicio institucional. 12. Por Matrimonio Los servidores públicos tienen derecho a licencia por matrimonio, que se otorga a cuenta de las vacaciones del servidor. Esta licencia se deduce del período vacacional inmediato siguiente del funcionario o servidor, y no excede de treinta días. 13. Por Enfermedad Grave del Cónyuge, Padres o Hijos Los servidores públicos tienen derecho a una licencia por enfermedad grave del cónyuge, padres o hijos, la que se otorga a cuenta de las vacaciones del servidor. Debemos entender que también se debe otorgar en caso de enfermedad grave del conviviente, teniendo en cuenta el reconocimiento a las uniones de hecho por la Constitución. Esta licencia se deduce del período vacacional inmediato siguiente del funcionario o servidor, y no debe exceder de treinta días. 14. Licencias por Ejercicio de Cargos Electivos Los servidores públicos tienen derecho a reincorporarse a la carrera pública al término del desempeño de cargos electivos. Gestión de Recursos Humanos y Legislación Laboral Pública Los trabajadores que resulten elegidos miembros del Poder Legislativo disfrutarán de licencia sin goce de remuneración por todo el tiempo de su mandato, pero sin pérdida de ninguno de sus derechos sociales y laborales, siempre que lo soliciten. 15. Desempeño de Docencia Universitaria Los servidores tendrán derecho a gozar de permisos para ejercer la docencia universitaria hasta por un máximo de seis horas semanales, el mismo que deberá ser compensado por el servidor. Similar derecho se concederá a los servidores que sigan estudios superiores con éxito. 16. Derecho de Huelga Los servidores públicos tienen derecho al uso de la huelga. 16.1. Condiciones para el ejercicio de la huelga Para la declaración de huelga se requiere: a) Que tenga por objeto la defensa de los derechos e intereses socioeconómicos o profesionales de los trabajadores en ella comprendidos. b) Que la decisión sea adoptada en la forma que expresamente determinen los estatutos y que en todo caso representen la voluntad mayoritaria de los trabajadores comprendidos en su ámbito. El acta de asamblea deberá ser refrendada por Notario Público o, a falta de éste, por el Juez de Paz de la localidad. Tratándose de sindicatos de actividad o gremio, cuya asamblea esté conformada por delegados, la decisión será adoptada en asamblea convocada expresamente y ratificada por las bases. c) Que sea comunicada al empleador y a la Autoridad de Trabajo, por lo menos con cinco (5) días útiles de antelación o con diez (10) tratándose de servicios públicos esenciales, acompañando copia del acta de votación. d) Que la negociación colectiva no haya sido sometida a arbitraje. 16.2. Efectos de la huelga La huelga declarada observando lo prescrito en los párrafos anteriores, produce los siguientes efectos: a) Determina la abstención total de las actividades de los trabajadores en ella comprendidos, con excepción del personal de dirección o de confianza y del personal comprendido en aquellas labores indispensables para la empresa cuya paralización ponga en peligro a las personas, la seguridad o la conservación de los bienes o impida la reanudación inmediata de la activi- dad ordinaria de la empresa una vez concluida la huelga. b) Suspende todos los efectos de los contratos individuales de trabajo, inclusive la obligación de abonar la remuneración, sin afectar la subsistencia del vínculo laboral. c) Impide retirar del centro de trabajo las maquinarias, materias primas u otros bienes, salvo circunstancias excepcionales con conocimiento previo de la Autoridad de Trabajo. d) No afecta la acumulación de antigüedad a efectos de la Compensación por Tiempo de Servicios. 17. Hora de Lactancia Las servidoras públicas, al término del período posnatal, tienen derecho a una hora diaria de permiso por lactancia hasta que el hijo cumpla un año de edad. a. Esta hora es parte de la jornada de trabajo de la madre. b. Esta hora será remunerada. c. Esta hora dará derecho al goce de todos los demás beneficios sociales. 18. Servicio Militar Los servidores de carrera obligados a cumplir servicio militar, mantienen sus derechos; el tiempo que dure el servicio es computable como permanencia en el nivel. VIII 19.1. Duración La licencia por paternidad es otorgada por el empleador (él asume el pago) al padre, y dura cuatro días hábiles, los que deben ser consecutivos, y se inicia desde la fecha que el trabajador indique. El inicio de la licencia, que debe ser indicada por el trabajador, debe estar comprendido entre la fecha de nacimiento del hijo o hija y la fecha en que la madre o el hijo o hija sean dados de alta por el centro médico respectivo. Es decir, el trabajador podrá solicitar que la licencia por paternidad se inicie el día del nacimiento de su hijo, los días siguientes, o, finalmente, hasta el día en que son dados de alta la madre o el hijo, o ambos. 19.2. Comunicación al empleador A efectos de gozar de la licencia por paternidad, el trabajador debe comunicar a su empleador la fecha probable del parto, con una anticipación no menor de quince días naturales. 19.3. Irrenunciabilidad del beneficio Por la naturaleza y fines del beneficio, es de carácter irrenunciable y no puede ser cambiado o sustituido por pago en efectivo u otro beneficio. Es decir, no se puede establecer compensación, reducción o compra de este beneficio. Los servidores públicos que estando en la Reserva sean llamados a cumplir períodos de instrucción y entrenamiento o sean requeridos en casos de movilización o de grave amenaza o peligro inminente para la Seguridad y Defensa Nacional, tienen derecho, entre otros, a: 19.4. Derechos mayores Si hubiera trabajadores con mayores o mejores beneficios en materia de licencia por paternidad, éstos mantienen su vigencia, en cuanto sean más favorables para dichos trabajadores. a. Licencia con goce de haber durante el período, la cual será acreditada con la constancia respectiva, si labora en el Sector Público. b. Licencia con goce de haber hasta por un máximo de 30 (treinta) días si se trata de trabajador dependiente en el Sector Privado. Vencido el plazo, el Estado asumirá el pago de las remuneraciones y bonificaciones por intermedio de la Institución de las Fuerzas Armadas respectiva. 20. Licencia por Adopción 19. Licencia por Paternidad Los trabajadores sujetos a los regímenes laborales del Sector Público y del Sector Privado, incluidos los miembros de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional del Perú, tienen derecho a una licencia remunerada por paternidad, en caso de alumbramiento de su cónyuge o conviviente. Ello con la finalidad de promover y fortalecer el desarrollo de la familia. Queda claro, que si el hijo del trabajador no es engendrado dentro de una relación de matrimonio o de convivencia, no se goza de este beneficio. Actualidad Gubernamental 20.1. Servidores con derecho Tienen derecho a licencia por adopción los servidores siguientes: a. Los peticionarios de adopción, siempre que el niño a adoptar no tenga más de 12 años de edad. b. El padrastro o la madrastra del niño ha adoptar, como el pariente hasta el cuarto grado de consanguinidad o segundo de afinidad con el niño a adoptar, siempre que el niño a adoptar no tenga más de 12 años de edad. c. Si los trabajadores peticionarios de adopción son cónyuges, la licencia será tomada por la mujer. 20.2. Duración La licencia dura treinta días naturales, contados a partir del día siguiente de expedida la Resolución Administrativa de Colocación Familiar y suscrita la respectiva Acta de Entrega del Niño o de la Resolución Judicial consentida o ejecutoriada de adopción. La licencia no podrá exceder en conjunto el plazo de treinta días naturales durante N° 19 - Mayo 2010 VIII 3 VIII Informes Especiales un año calendario independientemente del número de adopciones que el trabajador efectúe. 20.3. Requisitos El servidor debe comunicar en forma expresa a la entidad mínimo con quince días naturales de anticipación a la entrega física del niño. Si no se cumple con la comunicación, el trabajador peticionario de adopción no gozará de la licencia. Si se revocara la resolución que otorgó la Colocación Familiar, la licencia concluye de pleno derecho. Los días ya gozados de licencia serán contabilizados para otra licencia si el trabajador efectuase otra petición de adopción dentro del mismo año calendario. Durante el tiempo que dura el proceso administrativo disciplinario, el servidor procesado, según la falta cometida, puede ser separado de su función y puesto a disposición de la Oficina de Personal para realizar trabajos que le sean asignados de acuerdo con su nivel de carrera y especialidad. Mientras se resuelve su situación, el servidor tiene derecho al goce de sus remuneraciones, estando impedido de hacer uso de sus vacaciones, licencias por motivos particulares mayores a cinco días o presentar renuncia. En este supuesto hay dos posibilidades de suspensión: la suspensión o cese temporal como sanción y la suspensión durante el proceso disciplinario. 21. Permisos y Licencias para Donar Órganos y Tejidos Humanos El servidor público que incurra en falta de carácter disciplinario, según la gravedad, puede ser sancionado con cese temporal o destitución. Todo servidor público que desee donar sangre tiene derecho a que su centro laboral le otorgue permiso por el tiempo que demande el proceso de la donación. Esto incluye las donaciones especiales como las aféresis y las autólogas. La sanción se impone previo proceso administrativo disciplinario que no excederá de treinta (30) días hábiles improrrogables. La entidad otorgará permiso si la institución de salud donde se ubica el Banco de Sangre no contase con horarios de atención fuera de horas de trabajo y siempre que ello no afecte la producción de su centro laboral. El donante debe presentar a su centro de trabajo, obligatoriamente, el certificado o constancia emitida por la Institución donde se ubica el Banco de Sangre. 22. Eventos Deportivos Los trabajadores de los sectores Público y Privado y los miembros de las Fuerzas Armadas y Policiales que sean seleccionados para representar al Perú en eventos deportivos internacionales, tienen derecho a licencia con goce de haber ―de ser el caso― y a facilidades para entrenar, desplazarse, permanecer en concentración y competir. Este derecho se extiende a dirigentes y especialistas deportivos. Los deportistas, dirigentes y especialistas deportivos que participen en eventos deportivos oficiales autorizados por Federaciones Deportivas Nacionales tienen igualmente derecho a licencia con goce de haber. 23. Suspensión en Caso de Procesos Administrativos Disciplinarios 23.1. El proceso administrativo El proceso administrativo disciplinario será escrito y sumario y estará a cargo de una Comisión de carácter permanente, y cuyos integrantes son designados por resolución del titular de la entidad. La Comisión Permanente de Procesos Administrativos Disciplinarios estará constituida por tres (3) miembros titulares y contará con tres (3) miembros suplentes. La Comisión es presidida por un funcionario designado por el titular de la entidad y la integran el Jefe de Personal y un servidor de carrera designado por los servidores. La Comisión podrá contar con el asesoramiento de los profesionales que resulten necesarios. Para el proceso de funcionarios, se constituye una Comisión Especial integrada por tres miembros acordes con la jerarquía del procesado. Esta Comisión tendrá las mismas facultades y observará similar procedimiento que la Comisión Permanente de Procesos Administrativos Disciplinarios. 23.2. Derechos del servidor El servidor procesado tiene derecho a presentar el descargo y las pruebas que crea conveniente en su defensa, para lo cual tomará conocimiento de los antecedentes que dan lugar al proceso. El servidor público que incurra en falta de carácter disciplinario, cuya gravedad puede originar el cese temporal o la destitución. El descargo deberá hacerse por escrito y contener la exposición ordenada de los hechos, los fundamentos legales y pruebas con que se desvirtúen los cargos materia del proceso o el reconocimiento de su legalidad. La sanción se impone previo proceso administrativo disciplinario que no excederá de treinta (30) días hábiles improrrogables. El plazo de presentación es cinco días hábiles contados a partir del día siguiente de la notificación, excepcionalmente cuando exista causa justificada y a petición VIII 4 Actualidad Gubernamental N° 19 - Mayo 2010 del interesado se prorrogará cinco días hábiles más. Previo al pronunciamiento de la Comisión de Procesos Administrativos Disciplinarios, el servidor podrá hacer uso de sus derechos a través de un informe oral efectuado personalmente o por medio de un apoderado, para lo que se señalará fecha y hora única. 23.3. Pronunciamiento La Comisión hará las investigaciones del caso, solicitando los informes respectivos, examinará las pruebas y elevará un informe al titular de la entidad, recomendando las sanciones que sean de aplicación. Es prerrogativa del titular de la entidad determinar el tipo de sanción a aplicarse: suspensión o destitución. 23.4. Puesta a disposición durante el proceso Durante el tiempo que dura el proceso administrativo disciplinario, el servidor procesado, según la falta cometida, podrá ser separado de su función y puesto a disposición de la Oficina de Personal para realizar trabajos que le sean asignados de acuerdo con su nivel de carrera y especialidad. Mientras se resuelve su situación, el servidor tiene derecho al goce de sus remuneraciones, estando impedido de hacer uso de sus vacaciones, licencias por motivos particulares mayores a cinco días o presentar renuncia. 23.5. Rehabilitación Para que un servidor sea rehabilitado de las sanciones administrativas que se le hayan impuesto en el curso de su Carrera Administrativa, debe haber observado buena conducta y obtenida evaluación favorable desde la aplicación de la sanción. La rehabilitación deja sin efecto toda mención o constancia de la sanción impuesta proveniente de falta disciplinaria en el Registro de Funcionarios y Servidores y el correspondiente legajo personal. Se formaliza mediante resolución del funcionario competente. El servidor de carrera queda rehabilitado de las sanciones administrativas que se le hubieren aplicado durante su permanencia en un nivel de carrera cuando obtenga su ascenso al nivel inmediato superior; salvo que no hubiere transcurrido cuando menos un año de haberse cumplido con la sanción impuesta, en cuyo caso deberá esperarse dicho plazo. Para el efecto los procesos de ascenso deberán considerar las sanciones impuestas como deméritos. La rehabilitación del servidor que no hubiese ascendido de nivel sólo procederá transcurrida un año de su postulación a dicho ascenso, debiendo tenerse en cuenta la salvedad a que se refiere el artículo anterior. Gestión de Recursos Humanos y Legislación Laboral Pública VIII Los Actos de Hostilidad Contra el Trabajador Ficha Técnica Autor : Dr. Enrique Guerrero González* Título : Los Actos de Hostilidad Contra el Trabajador Fuente : Actualidad Gubernamental, Nº 19 - Mayo 2010 Sumario 1. 2. 3. Introducción Actos de hostilidad a la luz del Decreto Supremo Nº 003-97-TR, TUO del Decreto Legislativo Nº 728, Ley de Productividad y Competitividad Laboral Marco Jurisprudencial 1. Introducción La legislación y doctrina laboral es uniforme en otorgarle a toda entidad empleadora las facultades de dirección, de organización, así como facultades disciplinarias. Asimismo, la legislación comparada reconoce como necesario el ejercicio del ius variandi como facultad de la entidad empleadora para modificar en forma unilateral la forma, modo, así como el lugar de la prestación del trabajo por parte del trabajador. Sin embargo, como ya hemos señalado anteriormente, dichas facultades no tienen el carácter de absolutas sino que, para ello, el ordenamiento jurídico ha establecido un límite razonable. Es esta la razón por la cual el ordenamiento jurídico ha otorgado al empleador el ejercicio de determinadas “facultades” y no “derechos”. Consideramos que los límites al ejercicio de estas facultades lo constituyen la dignidad del trabajador y aquellas establecidas por las normas laborales. Los actos de hostilidad muchas veces originan la renuncia del trabajador. Por esta razón, la legislación comparada denomina también a esta forma de extinción del vínculo laboral como “despido indirecto”. Para Caldera, será despido indirecto aquellas “modificaciones impuestas por el patrono, sin consentimiento del trabajador, que envuelvan una alteración sustancial de las condiciones de trabajo”1. Conforme señala este autor: “En rigor, cualquier modificación de las condiciones de trabajo por voluntad unilateral del patrono, importaría el derecho del trabajador a no aceptarla y, en consecuencia, a retirarse justificadamente del trabajo”2, claro está que este autor hace * Abogado – UIGV. Maestría en Derecho – Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social – UNMSM. Catedrático – Facultad de Derecho – UCV Lima. 1 CALDERA, Rafael. Derecho del Trabajo, Tomo II. Editorial El Ateneo, 2ª Edición. Buenos Aires – Argentina, 1981. 2 CALDERA, Rafael. Ob. Cit. la advertencia de que tal rigidez podría poner en serio riesgo la marcha de la empresa, puesto que podría generar un abuso por parte del trabajador. Siguiendo el Principio de Legalidad, los actos de hostilidad equiparables al despido se encuentran expresamente señalados en la Ley, de manera que el trabajador afectado solamente podrá señalar como actos de hostilidad aquellos que se encuentren previamente regulados por el artículo 30º de la Ley. Si bien la ley regula los actos de hostilidad, quedará a criterio del trabajador limitarse en formular solamente su renuncia al cargo o demandar adicionalmente ante el Juzgado de Trabajo la terminación del contrato de trabajo exigiendo además se ordene el pago de la indemnización prevista en el artículo 38º de esta Ley. Claro está, los actos de hostilización al trabajador no se producen de pleno derecho. Para su consumación, será necesario que el trabajador afectado requiera a su empleador a fin de que cese los actos que considere hostilizantes. 2. Actos de hostilidad a la luz del Decreto Supremo Nº 00397-TR, TUO del Decreto Legislativo Nº 728, Ley de Productividad y Competitividad Laboral Artículo 30º.- Son actos de hostilidad equiparables al despido los siguientes: a) La falta de pago de la remuneración en la oportunidad correspondiente, salvo razones de fuerza mayor o caso fortuito debidamente comprobados por el empleador El pago de la remuneración constituye la principal obligación a cargo de la entidad empleadora, la cual se efectúa en forma mensual o con adelanto del 50% en la primera quincena, dependiendo de la política remunerativa establecida por cada entidad empleadora. En primer lugar, el legislador ha establecido como regla general que la falta de pago de la remuneración en su debida oportunidad será asumido como un acto de hostilización hacia el trabajador. No obstante ello, se establece una excepción: Que la falta de pago de la remuneración se encuentre debidamente justificado y comprobado por el empleador, pudiendo basar la falta de pago en razones de fuerza mayor o caso fortuito. Siguiendo a Rendón Vásquez, “El caso fortuito y la fuerza mayor son hechos imprevisibles o que pudiendo ser previstos no pueden ser evitados. El caso fortuito es un Actualidad Gubernamental hecho de la naturaleza, como un sismo, un aluvión, un incendio, un accidente, una plaga; y la fuerza mayor un hecho de los hombres, como un tumulto del que se derivan estragos, una ley u otra forma legal que impida realizar una actividad”3. Ahora bien, no basta invocar el caso fortuito y la fuerza mayor. La ley exige que la causa invocada por el empleador sea debidamente comprobada. Ello significa que la causa invocada deberá necesariamente ser sustentada ante el trabajador afectado o Sindicato o trabajador designado por ellos en caso que no haya sindicato; de no ser así, el o los trabajadores afectados tendrán expedito su derecho para iniciar exigir del empleador el cese de los actos de hostilización, bajo apercibimiento de recurrir ante el Juzgado de Trabajo o de recurrir ante la Autoridad Administrativa de Trabajos, a fin de que imponga las multas correspondientes. b) La reducción inmotivada de la remuneración o de la categoría Conforme se ha señalado con anterioridad, la remuneración obedece a razones alimentistas en la medida que permitirá al trabajador su desarrollo y estabilidad personal, familiar o incluso profesional. De acuerdo a lo establecido por el numeral 2 del artículo 26º de la Constitución Política de 1993, los derechos laborales tienen el carácter de ser irrenunciables. Ello significa que los derechos laborales garantizados por la Constitución, la Ley o por Convenio Colectivo no pueden ser objeto de negociación o apropiación a favor del empleador. Es decir, que aún en el hipotético caso de formularse un acuerdo o convenio privado que tenga por finalidad la renuncia o condonación de algún derecho de naturaleza laboral entre el trabajador y su empleador, dicho acuerdo será nulo de pleno derecho, teniendo el trabajador expedito su derecho para recurrir ante la autoridad administrativa o judicial para que, en ejercicio de su derecho de acción, exija el cese de los actos de hostilidad. La teoría de los derechos adquiridos aún mantiene vigencia a través del artículo 62º de la Constitución Política de 1993; sin embargo, los efectos o consecuencias del contrato de trabajo podrían verse afectados por la reciente vigencia de la modificación del artículo 103º de la Constitución a través de la Ley Nº 28389, que establece que la ley, desde su entrada en vigencia, se aplica a las consecuencias de las relaciones y situaciones jurídicas existentes y no tiene fuerza ni efectos retroactivos. 3 RENDÓN VÁSQUEZ, Jorge. Derecho del Trabajo Individual. 5ª Edición, Editorial Edial, Lima, 2001. Págs. 287–288. N° 19 - Mayo 2010 VIII 5 VIII Informes Especiales En este orden, la remuneración así como el cargo desempeñado no podrán ser objeto de reducción por parte del empleador, de manera que el derecho mismo a la remuneración no podrá ser objeto de modificación o disminución, salvo que una ley posterior disponga modificaciones a los efectos o consecuencias del contrato, pero no podrá modificar el derecho a la remuneración ya adquirido por el trabajador. Las facultades concedidas por la Ley al empleador no le alcanzan en forma suficiente para poder disminuir la categoría y/o remuneración del trabajador de manera unilateral, puesto que dichos derechos se encuentran protegidos por la Constitución al tener también la categoría jurídica de irrenunciables. No obstante la regla genérica, el legislador ha establecido una excepción: Que la reducción de la categoría o de la remuneración sea “motivada”. Consideramos que este concepto alude a cuestiones subjetivas más que objetivas por lo que el empleador podrá justificar la reducción del cargo o remuneración atendiendo a razones que para él sean suficientes. Hubiera sido mejor que la reducción obedezca a razones debidamente comprobadas y justificadas por el derecho positivo, de manera que se encuentren en relación directa a la situación económica de la empresa o a una situación coyuntural, vg.r. una crisis económica mundial o nacional. No somos de la opinión que la reducción de la categoría o de la remuneración deba obedecer a razones estructurales, puesto que ello no significa necesariamente una situación económicamente delicada de la empresa, puesto que la reestructuración de una empresa puede tener por finalidad, más bien, el incremento de la producción o de la calidad ya existente, situación que no justifica la disminución de derechos del trabajador. En todo, la causa que origine la reducción de derechos deberá estar debidamente justificada y comprobada, atendiendo a razones económicas o estructurales que pongan en serio riesgo la existencia de la empresa, motivo por el cual no quede otra alternativa que la reducción de remuneraciones. c) El traslado del trabajador a lugar distinto de aquel en el que preste habitualmente servicios, con el propósito de ocasionarle perjuicio Por lo general, el lugar de la prestación del servicio es el señalado en el respectivo contrato de trabajo o el indicado por el empleador a su trabajador antes de celebrar el contrato de trabajo. Sin embargo, ello no significa que deba ser una regla inmutable toda vez que puede haber situaciones de orden estructural u organizativos de la empresa que requieran VIII 6 el traslado del trabajador a otro local, ante cuya circunstancia el trabajador se encontrará obligado a acatar el traslado. El artículo 41º del Estatuto de Trabajo español reconoce la facultad del empleador de poder modificar condiciones de trabajo no sustanciales a lo cual el trabajador estará obligado a acatar los cambios dispuestos. El problema es hallar qué modificaciones son sustanciales o qué modificaciones no son sustanciales. Al respecto, Martínez Vivot, citando a Alonso Olea, sostiene que se puede entender como modificación sustancial a la modificación no baladí, “que implique para el trabajador una mayor onerosidad de sus prestaciones con perjuicio comprobable”4. Conforme está plasmado en nuestra norma sustantiva laboral, se admite en principio el traslado del trabajador a un lugar distinto de aquel en el que preste habitualmente su trabajo, estando prohibido aquel traslado que tenga por objeto causarle un perjuicio al trabajador, probanza que recaerá en el trabajador durante el proceso laboral ordinario (carga de la prueba). En estos casos, será la jurisprudencia laboral la que determine en qué casos el traslado del trabajador a un lugar distinto a aquel en el que habitualmente presta su trabajo será considerado como un acto de hostilización. Para tal efecto, será necesario tener muy en cuenta la afirmación hecha por Krotoschin: “El cambio de lugar, o el traslado, debe hacerse siempre de modo que se concilien los intereses legítimos de la empresa con los del trabajador. El principio de la buena fe debe regir, mutuamente, también a este respecto. De este modo no serían admisibles, a menos que se hubieran previsto expresamente en el contrato, los cambios de lugar que influyan desfavorablemente en el desenvolvimiento de la vida del trabajador, de un modo no exigible equitativamente”5. d) La inobservancia de medidas de higiene y seguridad que pueda afectar o poner en riesgo la vida y la salud del trabajador Uno de los elementos básicos para el desarrollo de las actividades a cargo del trabajador lo constituyen las medidas de higiene y seguridad. El término “higiene” comprende todos aquellos aspectos que forman parte de la salubridad necesaria para el desempeño óptimo del trabajador. En este orden, podemos señalar que el centro de trabajo debe contar no sólo con los elementos básicos (servicios de agua, desagüe y energía necesarios para un sistema de limpieza), sino además de un sistema óptimo de higiene que le permita 4 MARTÍNEZ VIVOT, Julio. Elementos del Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social. 2ª Edición. Editorial Astrea. Buenos Aires, 1988. Pág. 134. 5 KROTOSCHIN, Ernesto. Tratado Práctico de Derecho del Trabajo. Volumen I. Editorial Depalma. Buenos Aires, 1955. Pág. 204. Actualidad Gubernamental N° 19 - Mayo 2010 al trabajador prestar su energía laboral en un ambiente óptimo de trabajo a fin de no contraer enfermedades propias de un ambiente insalubre. Otro aspecto importante lo constituye la seguridad del trabajador. La entidad empleadora se encuentra en el imperativo de proveer al trabajador de los elementos necesarios que le permitan prestar su energía laboral sin un mínimo riesgo hacia su integridad física y/o sicológica. En tal sentido, la entidad empleadora no podrá ejercer su facultad de dirección en tanto no provea al trabajador de la seguridad necesaria para el desarrollo del trabajo; asimismo, el trabajador no se encuentra en el deber de acatar una orden si la empresa no le ha proveído de los elementos necesarios de seguridad que permitan salvaguardar la integridad física o sicológica del trabajador. Las medidas de seguridad e higiene resultan ser sumamente necesarias y de vital importancia para el trabajador. En efecto, el sólo hecho de estar en permantente contacto con todo tipo de maquinarias o incluso con máquinas de oficina, obliga al empleador a adoptar todo tipo de medidas de seguridad e higiene, a fin de no poner en riesgo la integridad del trabajador. Visto así, las medidas de seguridad e higiene constituyen el ejercicio legítimo de control que ejerce el Estado hacia el empleador, a fin de no poner en riesgo la salud de sus trabajadores durante el ejercicio de la jornada de trabajo; es esta la razón por la cual el Estado se encuentra en el deber de imponer una multa en caso advierta, a través de una inspección de trabajo, el incumplimiento de las medidas de seguridad e higiene en el centro de trabajo. Visto así, la prestación de la energía laboral sin las medidas necesarias de higiene y/o seguridad será entendido como un acto de hostilidad equiparables al despido del trabajador, el cual tendrá el legítimo derecho de emplazar a su empleador, a fin de que cesen los actos de hostilidad. Ahora bien, si bien de la lectura de la norma se podría establecer que basta que se haya configurado el riesgo hacia la salud e integridad del trabajador para asumir que estamos ante un acto de hostilización, creemos que será necesaria una reiterancia para que se configure el acto hostilizatorio; ello no significa que el trabajador deba ser expuesto en riesgo para su salud o su integridad física más de una vez, toda vez que el trabajador no se encuentra obligado a prestar su energía laboral sin el mínimo de condiciones óptimas para su salud o integridad, por lo que deberá exigir las condiciones óptimas de seguridad e higiene para su trabajo. Gestión de Recursos Humanos y Legislación Laboral Pública e) El acto de violencia o el faltamiento grave de palabra en agravio del trabajador o de su familia Las facultades del empleador tienen un límite: La Dignidad del Trabajador. El trabajador es, ante todo, un ser humano que así como tiene el deber de cumplir el mandato del empleador, tiene el derecho a ser respetado en su dignidad como persona. En primer lugar, ningún mandato debe ser ejercido con violencia hacia el trabajador. Nada justifica que el empleador ejerza violencia contra su trabajador bajo el argumento de ejercer sus facultades de dirección, organización o disciplinarias. Cualquier medida que adopte el empleador no debe ser ejercida con violencia física sobre su trabajador. En segundo lugar, la ley sanciona el faltamiento “grave” de palabra en agravio del trabajador o de su familia. Todo faltamiento de palabra implica una falta de respeto hacia la dignidad del trabajador; sin embargo, la norma exige para la consumación de un acto de hostilización, que el faltamiento de palabra sea “grave”. Ahora bien, la duda surge respecto a cómo podemos advertir que un faltamiento de palabra puede ser considerado como grave o leve. A nuestro modo de ver, el faltamiento “grave” de palabra dependerá principalmente del nivel sociocultural del trabajador y no del empleador, toda vez que éste, como ente agresor, no puede determinar qué faltamiento de palabra puede o no ser considerado como grave. En efecto, debemos tener presente que cada trabajador, como ser humano, tiene una determinado nivel sociocultural, dependiendo de su origen familiar, así como del lugar de su procedencia. Estos factores, a nuestro modo de ver, serán los determinantes para que un trabajador se considere gravemente afectado con un faltamiento de palabra. f) Los actos de discriminación por razón de sexo, raza, religión, opinión o idioma La tendencia del Derecho del Trabajo de constitucionalizar los principios que regulan a dicha disciplina jurídica no es otra que la de garantizar y elevar a un grado constitucional aquellos principios y derechos de vital importancia para el trabajador, a fin de que sean observados y cumplidos por el Estado como dador de normas e incluso cuando asume la condición de empleador, así como por las entidades empleadoras privadas. En este orden, el legislador así como los funcionarios públicos en el ejercicio de sus funciones, se encuentran en el imperativo jurídico de velar por el cumplimiento de los preceptos de grado constitucional. El numeral 1 del artículo 26º de la Constitución Política de 1993 establece que en la relación laboral se respetan, entre otros principios, el de igualdad de oportunidades sin discriminación. A simple vista, el texto constitucional consagraría el derecho de todo trabajador a gozar de las mismas condiciones y beneficios propios de la relación laboral con relación a la generalidad de trabajadores, prohibiéndose todo tipo de discriminación, ya sea por cuestiones de género, condición social o económica. Sin embargo, la norma constitucional encierra además dos principios que merecen ser tratados individualmente a fin de tener una mayor comprensión del tema objeto del presente informe. Conforme señala Plá Rodríguez, el Principio de Igualdad resulta más amplio y ambicioso que el Principio de la No Discriminación, ya que conlleva a “(...) tener que conceder a todo trabajador la misma ventaja o beneficio (generalmente el problema se plantea en relación al salario) que percibe un compañero de tareas que realiza una labor equivalente o del mismo valor”. Sin embargo, Plá Rodríguez hace una advertencia: “Si todo beneficio que se concediera a un trabajador debiera extenderse a todos los demás, no habría límites mínimos sino que habría niveles únicos o comunes a todos los trabajadores”. En efecto, si asumimos como válida la afirmación que todos los trabajadores son iguales ante la ley, no podría haber un marco mínimo de protección, lo cual contrastaría con la esencia misma del Derecho del Trabajo habida cuenta que puede haber “protecciones más amplias o más generosas o más enérgicas”, y es que para el derecho del trabajo, el problema no lo constituiría en sí si un determinado trabajador resulta ser más favorecido con relación a los demás compañeros de trabajo. El problema en sí, lo constituiría si un trabajador fuera discriminado con relación a los demás, es decir, que no alcance los beneficios otorgados a la generalidad de trabajadores. Visto así y, siguiendo a Plá Rodríguez, el Principio de No Discriminación “(...) lleva a excluir todas aquellas diferenciaciones que colocan a un trabajador en situación inferior o más desfavorable que el conjunto. Y sin una razón válida ni legítima”. En tal sentido, el Principio de No Discriminación tiene por objeto impedir diferencias inadmisibles para el derecho y para la razón humana que vayan en perjuicio de un trabajador con relación a la generalidad. El ordenamiento jurídico no permite el establecimiento de diferencias que reduzcan derechos o beneficios, lo cual, incluso, atentaría contra la dignidad del trabajador. Actualidad Gubernamental VIII Ahora bien, ¿podríamos asumir que el Constituyente de 1993 ha pretendido consagrar el Principio de Igualdad de Remuneraciones en el texto constitucional regulado en el numeral 1 del artículo 126º? El Principio de Igualdad de Remuneraciones implica que frente a dos o más trabajos iguales, deberá corresponderse con la misma remuneración. Este principio se traduce en la práctica cuando se advierte que existen dos o más trabajadores que realizan la misma labor y que ocupan el mismo cargo. Conforme fuera señalado en forma precedente, puede presentarse el caso que un trabajador resulte favorecido frente a la generalidad de acuerdo a alguna condición profesional o debido a alguna virtud o destreza; lo que no permite el derecho es que un trabajador reciba condiciones inferiores a las establecidas para la generalidad de trabajadores. Sin embargo, ello no significa que se desconozcan condiciones mínimas que el Derecho establece y que la Constitución Política consagra. En este sentido, para el caso de la política remunerativa del Estado, se establecen condiciones mínimas a nivel remunerativo para la generalidad de los servidores públicos, lo cual se traduce en la remuneración básica y que debe ser percibida por todos los servidores públicos. Ahora bien, si bien es cierto que el Principio de Igualdad de Remuneraciones no ha sido expresamente consagrado por el Constituyente de 1993, se puede asumir que el marco constitucional establecido en el numeral 1 del artículo 26º de la Constitución tiene la finalidad implícita de lograr no sólo una igualdad de remuneraciones de todos los servidores públicos, sino además, la de evitar un trato discriminatorio entre ellos. En este sentido, la Constitución Política no permite que un servidor público pueda percibir una remuneración u otro beneficio económico mayor de lo que percibe otro servidor de la misma categoría ocupacional, lo cual tiene sustento jurídico si se considera que para el caso del Estado existe un Sistema Único de Remuneraciones. En efecto, si el Principio de No Discriminación pretende “excluir todas aquellas diferenciaciones que colocan a un trabajador en situación inferior o más desfavorable que el conjunto y sin una razón válida ni legítima”, no sería válido asumir que por no haber sido consagrado expresamente en la Constitución, se permita que un servidor público sea disminuido en la percepción de su remuneración con relación a la generalidad. Pretender ello significaría vaciar el contenido constitucional que encierra el numeral 1 del artículo 26º de la Constitución que, si bien constituye un marco constitucional N° 19 - Mayo 2010 VIII 7 VIII Informes Especiales abierto y no restrictivo en sus alcances, debe ser interpretado siempre a favor del trabajador, considerado la parte débil de la relación laboral. En tal sentido, para el caso del Estado –como entidad empleadora– no sería posible asumir que un determinado servidor pueda tener algún tipo de favoritismo con relación a la generalidad de servidores públicos, toda vez que a diferencia de una empresa privada en la cual el titular o dueño puede establecer un determinado beneficio a favor de un trabajador “x” con relación a la generalidad de trabajadores, dado que como titular o dueño la ley le otorga dicha facultad por él ser titular del patrimonio de la empresa, para el caso del Estado existe Sistema Único de Remuneraciones que no permite el otorgamiento de algún beneficio a favor de un determinado trabajador frente a la generalidad de servidores públicos. g) Los actos contra la moral y todos aquellos que afecten la dignidad del trabajador El trabajador, antes de accionar judicialmente deberá emplazar por escrito a su empleador imputándole el acto de hostilidad correspondiente, otorgándole un plazo razonable no menor de seis días naturales para que, efectúe su descargo o enmiende su conducta, según sea el caso6. Los actos de hostigamiento sexual se investigan y sancionan conforme a la ley sobre la materia7. De acuerdo con la Ley Nº 27942, el hostigamiento sexual típico o chantaje sexual consiste en la conducta física o verbal reiterada de naturaleza sexual no deseada y/o rechazada, realizada por una o más personas que se aprovechan de una posición de autoridad o jerarquía o cualquier otra situación ventajosa, en contra de otra u otras, quienes rechazan estas conductas por considerar que afectan su dignidad, así como sus derechos fundamentales. De acuerdo con esta Ley, para que se configure el hostigamiento sexual debe presentarse alguno de los elementos constitutivos siguientes: a) El sometimiento a los actos de hostigamiento sexual es condición a través del cual la víctima accede, mantiene o modifica su situación laboral, educativa, policial, militar, contractual o de otra índole. b) El rechazo a los actos de hostigamiento sexual genera que se tomen decisiones que conlleven a afectar a la víctima en cuanto a su situación laboral, educativa, policial, militar, contractual o de otra índole de la víctima. 6 Inciso modificado por la Primera Disposición Final y Complementaria de la Ley N° 27942. 7 Párrafo adicionado por la Primera Disposición Final y Complementaria de la Ley N° 27942. VIII 8 En este orden, para los efectos de la Ley, el hostigamiento sexual puede manifestarse por medio de las conductas siguientes: a) Promesa implícita o expresa a la víctima de un trato preferente y/o beneficioso respecto a su situación actual o futura a cambio de favores sexuales. b) Amenazas mediante las cuales se exija en forma implícita o explícita una conducta no deseada por la víctima que atente o agravie su dignidad. c) Uso de términos de naturaleza o connotación sexual (escritos o verbales), insinuaciones sexuales, proposiciones sexuales, gestos obscenos que resulten insoportables, hostiles, humillantes u ofensivos para la víctima. d) Acercamientos corporales, roces, tocamientos u otras conductas físicas de naturaleza sexual que resulten ofensivos y no deseados por la víctima. e) Trato ofensivo u hostil por el rechazo de las conductas señaladas en este artículo. Respecto a las sanciones, la Ley establece que si el hostigador es el empleador, personal de dirección, personal de confianza, titular, asociado, director o accionista, el hostigado puede optar entre accionar el cese de la hostilidad o el pago de la indemnización, dando por terminado el contrato de trabajo, conforme al artículo 35º de esta Ley. En este supuesto, no será exigible la comunicación al empleador por cese de hostilidad señalado en el artículo 30º de la Ley de Productividad y Competitividad Laboral. El título II de la Ley ha establecido lo concerniente a las investigaciones y sanciones aplicables para los causantes de actos de hostilidad sexual. 3. Marco Jurisprudencial EXP. N.° 04468-2008-PA/TC LIMA JUAN EVENECER TORRES REÁTEGUI Y OTROS “4. El artículo 28° de la Constitución de 1993 señala “El Estado reconoce los derechos de sindicación, negociación colectiva y huelga. Cautela su ejercicio democrático: 1) Garantiza la libertad sindical (...)” (cursiva nuestra). En lo que concierne al desarrollo de esta norma constitucional, en la STC N.° 00082005-PI este Tribunal tuvo oportunidad de precisar los alcances de la libertad sindical, en armonía con los tratados internacionales sobre la materia. Así, este derecho fundamental, definido como la capacidad autoderminativa para participar en la constitución y desarrollo de la actividad Actualidad Gubernamental N° 19 - Mayo 2010 sindical, se manifiesta en dos planos: (i) la libertad sindical intuito personae, que comprende, en su faceta positiva, el derecho de un trabajador a constituir organizaciones sindicales y a afiliarse a los sindicatos ya constituidos y, en su faceta negativa, el derecho de un trabajador a no afiliarse o a desafiliarse de una organización sindical; (u) la libertad sindical plural, la misma que plantea tres aspectos: 1) ante el Estado (comprende la autonomía sindical, la personalidad jurídica y la diversidad sindical); 2) ante los empleadores (comprende el fuero sindical y la proscripción de prácticas desleales); y, 3) ante las otras organizaciones sindicales (comprende la diversidad sindical, la proscripción de las cláusulas sindicales, etc.). 5. Por otro lado, a nivel internacional en el ámbito laboral, los Convenios de la OIT N° 151 sobre las Relaciones de Trabajo en la Administración Pública, suscrito y ratificado por el Perú; y el Convenio N° 98, sobre el derecho de sindicación y la negociación colectiva, han previsto en sus textos preceptos que pretenden precisamente brindar protección a los trabajadores en el ejercicio de su derecho a la libertad sindical, protegiéndolo ante posibles actos de discriminación o actos que lo perjudiquen por causa precisamente de tener afiliación sindical (STC 8330-2006-PA. F. J. 4). En ese sentido el Convenio 98 sobre el derecho de sindicación y la negociación colectiva, en su artículo 1° establece que: “1. Los trabajadores deberán gozar de adecuada protección contra todo acto de discriminación tendiente a menoscabar la libertad sindical en relación con su empleo. 2. Dicha protección deberá ejercerse especialmente contra todo acto que tenga por objeto: (...) b) Despedir a un trabajador o perjudicarlo en cualquier otra forma a causa de su afiliación sindical o de su participación en actividades sindicales fuera de las horas de trabajo o, con el consentimiento del empleador, durante las horas de trabajo” (subrayado agregado). A su vez el Convenio 151, sobre las relaciones de trabajo en la Administración Pública, señala en su artículo 4° que: “1. Los empleados públicos gozarán de protección adecuada contra todo acto de discriminación antisindical en relación con su empleo. 2. Dicha protección se ejercerá especialmente contra todo acto que tenga por objeto: (..) b) Despedir a un empleado público, o perjudicarlo de cualquier otra forma, a causa de su afiliación a una organización de empleados públicos o de su participación en las actividades normales de tal organización” (subrayado agregado).