mièrcoles, 01 de octubre de 2014

2014eko urriaren 01a
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Actualidad informativa
01 de octubre de 2014
01 de octubre de 2014
Ciudadanos pág. 6
Muere un trabajador en Elorrio al quedar
atrapado en la máquina en la que trabajaba
El accidente laboral se ha producido la noche de este martes en una
empresa dedicada al tratamiento del metal. La víctima tenía 30 años y
era natural de esta localidad vizcaína
Un operario de 30 años y natural de Elorrio ha fallecido la noche de este martes en esta
localidad vizcaína tras quedar atrapado en la maquinaria en la que se encontraba
trabajando en una empresa de calderería y tratamiento de metales, según informaron
fuentes del Departamento vasco de Seguridad.
El accidente laboral se ha producido sobre las 21.25 horas cuando por causas que están
siendo investigadas el trabajador quedó atrapado en la maquinaria que manipulaba.
Fueron empleados de la propia calderería quienes llamaron al servicio de SOS Deiak
para alertar de que se había producido el siniestro. Cuando llegaron los equipos
sanitarios, la víctima se encontraba tendida en el suelo y no pudieron hacer nada por
salvar su vida. El cadáver fue trasladado al Instituto Forense de Bilbao.
Además, una ambulancia tuvo que trasladar a un compañero del operario fallecido hasta
el ambulatorio más cercano para que recibiera asistencia médica.
01 de octubre de 2014
SOCIEDAD
Un trabajador fallece
laboral en Elorrio
en
accidente
El operario quedó atrapado en la máquina que
trabajaba en una empresa de metal
Un operario ha fallecido la noche de este martes en la localidad vizcaína de
Elorrio tras quedar atrapado en la maquinaria en la que se encontraba
trabajando en una empresa dedicada al tratamiento del metal, según
informaron a Europa Press fuentes del Departamento vasco de Seguridad.
El accidente laboral se ha producido sobre las 21.25 horas cuando por
causas que están siendo investigadas el trabajador quedó atrapado en la
maquinaria que manipulaba.
Además, una ambulancia tuvo que trasladar a un compañero del operario
fallecido hasta el ambulatorio más cercano para que recibiera asistencia
médica.
2014/10/01
EKONOMIA
Langile bat hil da Elorrion, makina batek
harrapatuta
Metalgintzako enpresa batean ari zen lanean.
Bart gauean gertatu da istripua, Eusko Jaurlaritzako Segurtasun Sailak
jakinarazi duenez. Makina batean lan egiten ari zela, makina horretan
bertan harrapatuta geratu da.
Horrez gain, haren lankide bat erietxera eraman dute. Ikertzen ari dira
ezbeharra zer dela-eta gertatu den.
01 de octubre de 2014
Margen derecha
GETXO
Minuto de silencio por el operario
fallecido
El pleno guardó ayer un minuto de silencio por el fallecimiento en accidente
laboral el 26 de agosto del conductor de camiones que trabajaba en el montaje
de la carpa gigante del festival de Folk. La Corporación expresó su solidaridad
con los familiares de este trabajador y pidió a Osalan que esclarezca lo
sucedido y se tomen las medidas necesarias, incluso recurrir a la vía judicial.
01/10/2014
GIZARTEA Pag. 16
Mirar más de dos horas una pantalla
electrónica afecta a los ojos
El denominado Síndrome Visual Informático causa picor, enrojecimiento,
sequedad y visión borrosa
Las pantallas requieren un sobreesfuerzo visual.
Según esta encuesta, realizada en línea a 1.400 personas de 14 a 70 años,
entre el 50 y el 90% de la población mira una pantalla más de dos horas al
día, el tiempo máximo recomendado.
Los menores de 30 años son los que más se exceden, con una media de diez
horas y media frente a un ordenador, móvil, libro electrónico o consola,
entre otras pantallas. Les siguen, con 9,3 horas, las personas de entre 31 y
45 años; con 8,3, las de 46 a 60 años, e incluso los mayores de 60 años, con
3,8 horas, superan las dos horas máximas recomendadas. “Las cifras son
escandalosas”, aseguró Alfonso Bielsa, presidente del Coooc, que presentó
ayer en Barcelona la campaña Visión y pantallas junto con la Facultad de
Óptica y Optometría de Terrassa de la Universidad Politécnica de
Cataluña-BarcelonaTech.
El objetivo de la campaña es concienciar a la población de que hay que
tener una buena visión de cerca y adaptar los ojos a los cambios producidos
desde la implantación de las pantallas. El primero de los cinco consejos del
Coooc para prevenir la SVI es seguir la regla del 20-20-20 y apartar la
mirada durante veinte segundos cada veinte minutos enfocando a una
distancia de veinte pies (seis metros). Otros consejos son evitar los reflejos
en la pantalla, especialmente de luces superiores o ventanas; mantener una
postura correcta; situar el monitor por debajo de la altura de los ojos o su
parte superior a la altura de nuestros ojos y forzar el parpadeo voluntario o
mantener cerrados los ojos veinte segundos.
Esfuerzo adicional El presidente del Coooc explicó que “las pantallas
obligan a los ojos a hacer un esfuerzo constante en unas condiciones
extremas que muchas veces se traduce en una sobrecarga fruto de las
muchas horas que pasamos delante de ellas”. “Una visión nítida no
equivale a una buena visión”, subrayó Bielsa, que explicó que “podemos no
notar la necesidad de llevar gafas al hacer otras actividades, pero el
esfuerzo adicional que supone mirar una pantalla sin corrección óptica
provocará más síntomas de fatiga ocular”.
El decano de la Facultad de Óptica y Optometría de Terrassa, Joan Gispets,
puso el énfasis en que “con tantas pantallas en nuestra vida cotidiana, el
uso de la visión de cerca ha aumentado de forma exponencial, y que sea
eficiente es fundamental”. “La visión humana está diseñada para ver bien
de lejos. Hace sólo un siglo, la mayoría de la población hacía muchos
trabajos al aire libre, en espacios abiertos, que requerían visión de lejos y
con las que los ojos estaban relajados casi durante todo el día”, según
Gispets. El decano señaló que “mirar una pantalla de cerca y durante tantas
horas seguidas supone que nuestro sistema óptico haga un sobreesfuerzo
muy importante”.
LaCerca.com
José Luis Gómez: “Los empresarios que más
saben de riesgos laborales son, por desgracia,
los que han sufrido en su ámbito un accidente
grave”
El director gerente de “PSI, Prevención y Sanidad Industrial, analiza la situación
de la prevención de riesgos laborales y la implicación que en ella tienen
empresarios y trabajadores
Las instalaciones del Grupo Multimedia de Comunicación La Cerca reciben la visita de
José Luis Gómez, director gerente de „PSI, Prevención y Sanidad Industrial‟. En una
nueva entrega de nuestros “Encuentros Digitales”, aborda cuestiones tan interesantes
como el origen de la prevención de riesgos en el ámbito laboral; el desarrollo que está
teniendo la Ley que, en este sentido, nacía en 1995 y la implicación de empresarios y
trabajadores en el conocimiento y la aplicación de la misma (a través, por ejemplo, de
grupos especializados como el que representa nuestro invitado). Una conversación que
les ofrecemos íntegramente en el vídeo que acompaña a este texto.
Conversamos con José Luis Gómez, director gerente de PSI -Prevención y Sanidad
Industrial- con el fin de Arrojar algo de luz sobre un ámbito con el que, en teoría (y,
sobre todo, en la práctica), trabajadores y empresarios debiéramos estar muy
familiarizados, pero con el que no lo estamos tanto, por desgracia: el de la Sanidad o
la salud en el ámbito del trabajo.
Nos comenta Gómez, para empezar, que “en sí, la prevención de riesgos laborales es
algo de lo que cada uno, hoy por hoy, parece hacer sus propias interpretaciones (en
función de la relación que tenga con quien le asista en la prevención de riesgos
laborales o de las circunstancias que le hayan acaecido) pero, después de llevar catorce
años en este sector, creo que ha tomado una deriva no constructiva con respecto a la
relación que tiene que existir (por parte del empresario) con sus servicios de
prevención de riesgos laborales”.
El director gerente de PSI entiende que “es una crisis propia del sector engullida en
otra mayor (que es la del empresario); afortunadamente, esto no se está reflejando en
un gran incremento de la siniestralidad laboral ni de las enfermedades profesionales
(hoy por hoy), pero sí que es cierto que, después de tantos años, yo creo que el
empresario no sabe lo que compra cuando contrata proveedores de prevención de
riesgos laborales”, advierte.
“La prevención de riesgos laborales es algo que no hemos
sabido plasmar al empresariado ni tampoco a los trabajadores
convenientemente”
José Luis Gómez nos detalla, por ejemplo, las diferencias más importantes que se dan
entre lo que conocemos como una mutua y lo que conocemos como un servicio de
prevención. “Una mutua de accidentes de trabajo y de enfermedades profesionales comienza-, establece como prestación de servicio aquello que se deriva de una acción
o de una enfermedad profesional (hablamos de cubrir, indemnizar, los daños que se
producen); es algo que está en marcha desde hace décadas porque el mutualismo en
España empezó a principios del siglo XX y, hoy por hoy, esas entidades se han
convertido en colaboradoras de la Seguridad Social; no obstante, estamos hablando de
algo que tiene carácter indemnizatorio porque nos hemos preocupado más de
indemnizar cuando asumimos que va a haber accidentes, asumimos que va a haber
víctimas (y que las vamos a tener que aliviar en el drama…)”.
En cuanto a la prevención de riesgos laborales, Gómez nos señala que “es todo lo que
hay que hacer para que la mutua tenga menos casos que tratar, y es algo que no
terminamos de enfocar…”. Nos explica que viene determinada por una Ley del año
1995 y reglamentada en 1997 que, de alguna manera, “no hemos sabido plasmar al
empresariado ni tampoco a los trabajadores porque, aparentemente, se ha convertido
en algo negativo ya desde el momento en el que se nombra: la prevención en sí, ya
tiene unas connotaciones que son muy negativas en la interpretación, y no ha tenido
oportunidad de desarrollarse su objetivo de poner eso antes de lo que ya venimos
pagando (que son cantidad de accidentes, cantidad de absentismo laboral por bajas,
enfermedades profesionales que todavía están ahí latentes y que antes o después van
a dar la cara…); se ha quedado en una relación entre empresarios y prestadores de
servicios (entre los que me incluyo) y en una supervisión por parte de la
Administración (en la medida que les es posible)”, señala añadiendo, no obstante, que
“esto es de cumplimiento para el 100% de las estructuras empresariales, y es necesario
que evolucione más”.
Hace especial hincapié en el mensaje de “generalizar (que es lo que estoy haciendo) es
injusto, porque hay muchos empresarios que verdaderamente esto lo sienten y a los
que les preocupa muchísimo la seguridad y la salud de sus trabajadores pero, en sí, el
perfil medio del empresario que tenemos lo ve como una pagamenta más”, lamenta.
“Me consta que se 4está fomentando la renuncia forzosa de los
trabajadores al reconocimiento médico”
José Luis apunta que “antes de esta Ley, existían otros reglamentos, directivas… el
Instituto de Higiene, Seguridad y Salud estaba muy presente pero, el empresario, en
función de su actividad, adoptaba unas normas de comportamiento que eran
diferentes entre unas actividades y otras pero, desde que surge la Ley, ésta es igual
para todo tipo de empresarios”, explica.
Esa Ley determina “que el empresario organice, dentro de su centro de trabajo, la
actividad de la prevención”. El director gerente de PSI señala que “esto en sí es algo
muy extenso, aunque hablemos de una empresa pequeña; solamente en cuanto a
documentación, es extenso: desarrollar una evaluación de riesgos en la que se reflejen
exactamente las características de esa empresa (la relación que tiene con sus
proveedores, los productos químicos, los productos con riesgos biológicos, el estado
de salud de sus trabajadores…), es algo que no se puede resumir sólo con decir es que
tengo una empresa de prevención de riesgos”, destaca.
Tal y como Gómez desarrolla, “la Ley ha tenido bastante tiempo para ser interpretada
por el empresario, y para ser asumida poco a poco pero, en algún sitio, se ha parado;
incluso la Administración ha sido bastante benevolente a la hora de hacer cumplir
determinadas normativas (y luego se han seguido haciendo interpretaciones que, a mi
juicio, no son las adecuadas)”, opina.
Por ejemplo, destaca que en la Ley “se contempla la medicina del trabajo y vigilancia
de la salud (que debe de incluir unos reconocimientos médicos para que, realmente,
podamos vigilar la salud de los trabajadores); sin embargo, hoy por hoy, puedo decir
que el 80% de las empresas entienden que la renuncia del reconocimiento médico por
parte del trabajador es estar cumpliendo con la vigilancia de la salud… Yo desde aquí
denuncio muy claramente que me consta que se 4está fomentando la renuncia forzosa
de los trabajadores al reconocimiento médico; si el empresario (cumpliendo con su
obligación) tiene que ofrecer al trabajador el reconocimiento médico, lo natural es que
el trabajador se lo haga (porque es en beneficio para él) pero, sin embargo, el 80%
están renunciando (además, por escrito)”.
Subraya que algo así “es un mala interpretación porque, en sí, el empresario tiene que
vigilar la seguridad del trabajador (y nosotros somos el servicio que le puede
garantizar esa vigilancia)”. Pormenorizadamente, José Luis enumera que “nosotros lo
que hacemos es establecer cuáles son los riesgos que pueden perjudicar a la salud del
trabajador; obtenemos una serie de información de su puesto de trabajo, y hacemos
un reconocimiento médico con el que, además de las pruebas específicas, obtenemos
una serie de información (que sólo se puede obtener en el centro médico, por el
personal cualificado a nivel sanitario, de manera totalmente confidencial) y que es la
que a nosotros nos hace falta para saber si esa persona está apta o tiene alguna
limitación para su puesto de trabajo pero, si no se somete a ese reconocimiento
médico que nos ayuda a desarrollar ese historial clínico-laboral, no podemos hacer
nada”.
Asegura que “una media muy alta de los trabajadores que se someten al
reconocimiento médico, tienen alteraciones auditivas (porque es normal, porque en
España vivimos con mucho ruido y porque hay puestos de trabajo que tienen ese
riesgo objetivo) y, sin embargo, no podemos hacer un seguimiento porque no somos
capaces de seguirlo pero, en un momento dado, detectar algo así y aconsejar por muy
poco dinero al empresario sobre cómo evitar ese tipo de alteraciones, puede evitar un
prejuicio muy alto (con unas consecuencias económicas bastante importantes)… Pero,
todo eso, en algún momento se ha parado”.
Sobre esa renuncia forzada al reconocimiento médico que se viene detectando en
muchos casos, José Luis Gómez señala una causa económica basada en otras dos
cuestiones: “una, el coste directo de ese servicio; otra, que la prestación del
reconocimiento médico también conlleva la necesidad de ausentarse del puesto de
trabajo durante unas horas: la mayoría de los empresarios, en su momento, eso lo fue
aceptando (aunque fue costoso) pero, ahora, en algún sitio del camino de estas crisis,
se ha parado y se ha vuelto atrás”, reitera, “y, el problema, es que cuando se produce
eso, nosotros no hemos podido seguir informando al empresario de lo necesario que
es continuar realizando esos reconocimientos médicos para obtener la información del
estado de salud de los trabajadores con el fin de anticiparnos a situaciones que, antes
o después, si se tienen que manifestar, lo van a hacer (con el que ese ahorro
económico se le vuelve en contra al empresario de todas, todas), amén de los
perjuicios que va a sufrir el trabajador que, es siempre la primera víctima”.
“La inversión en prevención de riesgos laborales no debe
considerarse un gasto”
No se puede (o no se debe) considerar como un gasto lo que un empresario destine a
la prevención de los riesgos laborales de sus trabajadores y a su sanidad industrial. Tal
y como recalca José Luis Gómez, “es una inversión (y no a largo plazo, sino inmediata);
no obstante, de alguna manera, la imposición o el hecho de ser una cosa obligatoria,
tiene unas connotaciones negativas tremendas que tapan los ojos”.
Prosigue manifestando que “el hecho de que un Servicio de Prevención (como el
nuestro, que es un Servicio de Prevención de Riesgos Laborales de entidades ajenas, es
decir, que nos encargamos de organizar la prevención en centros ajenos al nuestro), es
poner a disposición de ese empresario una cantidad de profesionales muy alta y muy
valiosa: es enviar técnicos de prevención con cualificación previa (ingenieros, químicos,
profesionales sanitarios…), algo que difícilmente han tenido nunca; que esas personas
vengan a mi casa, vean mis instalaciones, me aconsejen, me asesoren… y que sea un
servicio que yo tengo a mi lado para mi desarrollo empresarial… es muy importante”.
Nos cuenta que en La Roda (que es donde están implantados inicialmente, aunque
estén presentes en toda Castilla-la Mancha), “el empresario está muy cerca de
nosotros y sabe que debe pedirnos asesoramiento en casi cualquier cuestión que vaya
a hacer porque, por ejemplo, solamente por el hecho de hacer una pequeña obra en
mis instalaciones conlleva que yo voy a tener allí trabajadores de otras empresas (de
los que no me puedo desentender: tango que saber en qué condiciones esa gente
viene a trabajar en mi casa porque, de laguna manera, están en mi casa, y la Ley así lo
dice, lo que ocurre es que nosotros o hemos sabido explicar qué aplicación práctica
tiene cada párrafo de la Ley…)”, lamenta.
“En La Roda llevamos muchos años y, de alguna manera, hemos tenido tiempo para
que el empresario lo vaya asumiendo poco a poco y sin problemas, pero sí que noto
que ahí hay un punto de vista más favorable a la generalidad”, comenta.
“Los empresarios que más saben de riesgos laborales, por
desgracia, son aquellos que han sufrido en su ámbito un
accidente grave”
José Luis Gómez afirma algo que, no por impactante, deja ser real: “Creo sinceramente
que los empresarios que más saben de riesgos laborales, por desgracia, son aquellos
que han sufrido en su ámbito un accidente grave y han descubierto así a quién tenían
al lado en ese momento (y que lamentan no haber sido más críticos y más exigentes
con su equipo de prevención y en la implantación de las medidas de seguridad y de
protección)…”, comenta.
En este sentido, es consciente de que “el accidente, como algo súbito e imprevisto, va
a seguir existiendo… pero se pueden evitar muchos accidentes (y, repito, a un coste de
inversión mínimo)”.
En referencia a los costes, nos comenta (para hacernos una idea) que “un servicio de
prevención medio como el nuestro, puede prestar (sin que pongamos ningún tipo de
limitación ni de tiempo, ni de visitas, ni de prestaciones, ni de documentación…) por
menos de 500 euros al año (y tienes un servicio de prevención completo, con
instalaciones en diferentes puntos para asistirte en cuantos actos formativos quieras,
en los reconocimientos médicos que necesites…), en cantidad de cosas; pero no deja
de ser percibido como algo negativo”.
Al hilo de esto, Gómez comenta que “hay otras leyes que son de obligado
cumplimiento también para el empresario (relacionadas, por ejemplo, con el medio
ambiente y la calidad, o con la protección de datos…) pero, a la cola está la prevención
de riesgos laborales que tiene, como víctimas al empresario y al trabajador, pero no
obstante no existe esa correlación… algo no se entiende bien cuando, la empresa,
gasta en cualquier cosa mucho más que en prevención de riesgos laborales”.
Toda esta situación, real, es resumida por Gómez en la sensación de que “un
empresario parece muchas veces no saber qué comprar ni qué está comprando cuando
adquiere las prestaciones de un servicio de prevención de riesgos laborales”.
Asegura que ha habido muchos tipos de interpretaciones que “han creado escuela
interesada” que, por ejemplo, ha llevado a muchos empresarios a confundir este tipo
de servicios con una especie de seguro. El director gerente de PSI explica que “la
relación contractual que tiene un servicio como el mío con el cliente tiene un formato
parecido al del seguro (porque son contratos anuales que se pueden ir prorrogando de
una forma tácita), pero la sensación que percibe el empresario al contratar eso, es de
que está derivando responsabilidad o de Estar cubierto… esa frase es la prueba
evidente de que no sabe nada (y a alguien le interesa mantenerlo ahí, en esa
relación…). Afirma que romper esa interpretación “está en manos del sector (o de
aquellos a los que nos interesa romperla, porque a otros no les interesa mucho)”,
repite.
También apunta a otro aspecto que, dice, también “confunde al empresario”: el de la
formación bonificada. Manifiesta que “hay personas que ofertan servicios de formación
mezclándolos o confundiéndolos con el contrato de prevención de riesgos laborales, y
esto se está haciendo así; con esa práctica, se devalúa al máximo la prevención de
riesgos laborales y se pone de manifiesto que el prestador de servicios no tiene mucho
interés en que ese empresario evolucione en el conocimiento de la Ley (y mucho
menos en convencerlo para que se atreva a hacer mejoras e inversiones)”, lamenta.
“En el momento en el que se eleve el número de puestos de
trabajo, va a haber un repunte de siniestralidad”
José Luis Gómez nos explica que “hablando de siniestralidad laboral, se ha dado una
reducción de unos años a esta parte (sobre todo en accidentes muy graves y graves);
yo quiero pensar que nuestra acción no es inocua y que algo hemos hecho para
mejorar y evitar situaciones peligrosas… y creo que sí, porque hemos informado
debidamente y el empresario ha ido respondiendo en la medida de lo posible”.
No obstante, también señala otro factor: “Todo el mundo sabemos también que hoy
día existen muchos menos puestos de trabajo, muchos menos trabajadores y que, la
reducción, también puede deberse a eso… nos ha quitado valor”. Al margen de eso,
señala que “determinar exactamente a qué proporción de causalidad tiene un factor u
otro en la reducción de la siniestralidad… no es posible; pero estoy convencido de que,
en el momento en el que se eleve (y ojalá sea pronto) el número de puestos de trabajo,
va a haber un repunte de siniestralidad, porque los empresarios estamos con un pie
atrás… esperemos que no, pero es muy posible que eso ocurra”, advierte.
Además, señala que “también se consideran accidentes de trabajo (y es lo que más
produce) el que se produce in itinere (yendo o volviendo al trabajo, o realizando alguna
tarea conduciendo; si atendemos que, según la Dirección General de Tráfico, se están
reduciendo los accidentes de tráfico, lo que compete a la parte de aquellos que están
trabajando (en este tipo de situaciones, las medidas de un servicio de prevención con
respecto a quien conduce, tienen menos incidencia…)”.
En este sentido, reitera que “hay cantidad de factores que, hoy por hoy, no vemos pero
que en el futuro yo sé que, si esto evoluciona positivamente, nos los vamos a
encontrar: hay cantidad de comportamientos en la vida privada de todos que, antes o
después, tienen incidencia en tu puesto de trabajo; y creo que el seguimiento de la
salud laboral de los trabajadores, antes o después va a determinar también el
comportamiento que tienen en sus ámbitos privados”.
“Nuestro objetivo es ser el referente en prevención de riesgos
laborales en C-LM”
Su empresa fue pionera en España en el hecho de que una mutua vendiese su servicio
de prevención. Gómez nos explica que “hace ya varios años que desde PSI, Prevención
y Sanidad Industrial iniciamos conversaciones con la mutua Solimat (que nos facilitó un
acuerdo para que nosotros aquí diéramos la parte de prevención de riesgos laborales
de esta mutua); en sí, fue algo de carácter voluntario por su parte (pero que ya se
atisba que va a ser obligatorio para las mutuas, porque ya hay un proyecto de Ley
pendiente de ser aprobado y que van a tener que cumplir vendiendo definitivamente
esa parte de su trabajo); la mutua Solimat se desprendió de él con carácter voluntario y
nos facilitó un acuerdo para constituir un proyecto”.
El director gerente de PSI explica que han planteado “una fusión de medios porque,
nosotros, como Prevención y Sanidad Industrial , estábamos muy implantados en la
provincia de Albacete, en la provincia de Ciudad Real y en la de Cuenca; y ellos estaban
muy implantados en Toledo, parte de Madrid y parte de Guadalajara”. De este modo,
se sitúan en conjunto “en un buen punto de partida para conseguir ser, dentro de unos
años, un referente en prevención de riesgos laborales en este territorio”.
No obstante, advierte que “es un proyecto difícil porque trabajar en Castilla-la Mancha
es complicado porque tenemos que llegar a muchas localidades, a muchos sitios, de
difícil prestación… pero nosotros llevamos tanto tiempo haciéndolo, que creemos que
tenemos un modelo que funciona: tenemos muchas inversiones a nivel municipal y
creo que ya podemos prestar un servicio homogéneo en casi cualquier localidad de
Castilla-la Mancha (y eso nos da mucha ventaja con respecto a mi competencia, uno
por uno); entiendo que en los próximos años (porque lo vamos a ir potenciando),
podemos ser el referente en prevención de riesgos laborales (por medios, por recursos
y por interpretación de la relación que se tiene con el cliente)”.
Bajo esa premisa, pues, ha nacido este proyecto cuya razón social, hoy por hoy, es
Protección y Sanidad Industrial pero que, próximamente (como adelanta su director
gerente) va a incorporar “una marca que nos englobe a todos, con una plantilla que,
ahora mismo, engloba a unos 50 profesionales ubicados en toda Castilla-la Mancha y
Madrid”, concluye.
INFORMAZIO TEKNIKO ETA ZIENTIFIKOA
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INFORMACIÓN TÉCNICA Y CIENTÍFICA
“Factores asociados al desgaste profesional en los trabajadores del
soporte vital básico del País Vasco: Un estudio cualitativo”
Resumen:
Objetivos: Identificar factores de riesgo de desgaste profesional percibidos por los
técnicos en emergencias sanitarias de las unidades de soporte vital básico del País
Vasco.
Metodología: Investigación cualitativa realizada mediante análisis de discurso en
ocho entrevistas individuales a trabajadores del soporte vital básico con
puntuaciones compatibles con afectación por desgaste profesional en el Inventario
de Burnout de Maslach. Las variables estructurales tenidas en cuenta para la
elección de los participantes fueron la antigüedad profesional (superior o inferior a
10 años) y el centro de trabajo.
Resultados: Los trabajadores presentan disconformidad con la actual estructura
organizacional del sistema de emergencias y falta de proyección y reconocimiento
de su rol profesional. Además manifiestan un progresivo distanciamiento afectivo
para con los pacientes, con quienes ha aumentado el número de enfrentamientos
debidos a dificultades de entendimiento causadas por situaciones de inadecuación
del uso de los recursos asistenciales.
Conclusiones: La estructura de organización del sistema de emergencias, el trato
con el paciente y su familia y la situación profesional del técnico en emergencias
son percibidos como elementos clave predisponentes de desgaste profesional.
“Código Europeo Contra el Cáncer y Salud Laboral. Actuación de la
Enfermería del Trabajo”
Resumen:
El cáncer se ha convertido en una de las principales causas de morbi-mortalidad de
la sociedad actual, afectando cada vez a un mayor número de personas y a un
grupo de edades mucho más amplio, incluyéndose de forma importante la edad
laboral. El Código Europeo Contra el Cáncer, constituye una herramienta eficaz
para el profesional de la salud laboral, teniendo aplicación dentro de las
competencias específicas otorgadas al especialista en Enfermería del Trabajo, y
facilitando la realización de estudios e investigaciones epidemiológicas, que
permitan obtener una estrategia de actuación preventiva eficaz, ante múltiples
factores de riesgo de cáncer laboral presentes en determinadas industrias,
contribuyendo a una correcta vigilancia y control de la salud.