Gaceta Parlamentaria de la ALDF 26 de abril de 2011. Núm. 138-A. Año 02 DIP. RAFAEL MEDINA PEDERZINI DIP. ROCÍO BARRERA BADILLO PRESIDENTE DE LA MESA DIRECTIVA DE LA ASAMBLEA LEGISLATIVA DEL DISTRITO FEDERAL, V LEGISLATURA. Los que suscriben, Diputados de la V Legislatura de la Honorable Asamblea Legislativa del Distrito Federal, con fundamento en lo dispuesto por los artículos 122, apartado C., Base Primera, fracción V, inciso h) de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; 42 fracción XI del Estatuto de Gobierno del Distrito Federal; 10, fracción I, 17 fracción IV de la Ley Orgánica; y, 85 fracción I del Reglamento para el Gobierno Interior ambos de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal; someto a la consideración del Honorable Pleno de este Órgano Legislativo, la presente: “INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE REFORMA EL ARTICULO 2431 DEL CODIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL” bajo la siguiente: EXPOSICIÓN DE MOTIVOS.La resolución de los contratos es un tópico que en el Derecho Civil tiene una larga historia y tradición, tan viejo como el propio contrato, se revela de suma importancia hoy en día. Con la complejidad que han ido cobrando los contratos a lo largo del transcurso del tiempo, tanto en su propia naturaleza, como en su reglamentación, la resolución se ha vuelto, a su vez, un tema complejo tanto conceptualmente como en la práctica diaria del Derecho. “INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE REFORMA EL ARTICULO 2431 DEL CODIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL” DIP. RAFAEL MEDINA PEDERZINI Segundo Periodo Ordinario, Segundo Año de Ejercicio. 1 Pag. 314 Gaceta Parlamentaria de la ALDF 26 de abril de 2011. Núm. 138-A. Año 02 DIP. RAFAEL MEDINA PEDERZINI Atendiendo al texto de los artículos 1792 y 1793 del Código Civil para el Distrito Federal, un contrato es el acuerdo de dos o más voluntades que tiene como objeto producir o transferir derechos y obligaciones, y se le distingue del convenio por ser este último el género y el primero la especie. De lo anterior se desprende que mediante el contrato se pretende producir consecuencias de derecho Ahora, para que un acto jurídico exista y sea plenamente válido necesita cumplir con los requisitos que marcan los artículos 1794 y 1795 del mismo Código Civil, los cuales son: consentimiento y objeto que pueda ser materia del acto, como elementos de existencia; y como elementos de validez: la capacidad, ausencia de vicios en el consentimiento que otorguen las partes, la licitud en el motivo o fin y la forma. De modo que, si un acto jurídico posee y cumple cabalmente con los elementos enunciados será plenamente eficaz y obligatorio. Atendiendo a los criterios establecidos en el código civil, un contrato puede terminar, es decir, deja de producir sus efectos por diversas hipótesis jurídicas: primero, por el cumplimiento libre y espontáneo, luego, por que se declare su nulidad o inexistencia, en cuyo caso las partes deberán restituirse las prestaciones que se hubieren hecho a causa del contrato, respetando los derechos de terceros, también por que suceda el acontecimiento que actualiza una condición resolutoria o por que transcurra el término de su vigencia, por que su cumplimiento se vuelve imposible por causa de fuerza mayor o de un suceso fortuito, en algunos casos por muerte de algunos los contratantes y, finalmente, por que se declare rescindido.1 1 Ver articulo 2483 del Código Civil para el Distrito Federal. “INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE REFORMA EL ARTICULO 2431 DEL CODIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL” DIP. RAFAEL MEDINA PEDERZINI Segundo Periodo Ordinario, Segundo Año de Ejercicio. 2 Pag. 315 Gaceta Parlamentaria de la ALDF 26 de abril de 2011. Núm. 138-A. Año 02 DIP. RAFAEL MEDINA PEDERZINI Cada una de las maneras en que un contrato deja de producir efectos, tiene orígenes y consecuencias definidas, por ejemplo si el contrato termina por el cumplimiento libre y espontáneo de las obligaciones de él derivadas, los efectos cesan por que las partes, mediante sus conducta diligente, realizan o llevan a cabo el objeto del contrato, de modo que al ser alcanzado dicho objetivo los efectos del acto jurídico de agotan. En cambio, si los efectos del contrato cesan por que el cumplimiento se vuelve imposible a causa de un caso fortuito, las consecuencias serán distintas: el deudor quedará liberado de sus obligaciones sin ningún tipo de responsabilidad y cada parte deberá soportar sus respectivas pérdidas. Sin embargo, existen supuestos donde se puede presentar ambigüedad al momento de considerarlos como formas de rescindir un contrato, concretamente por lo que hace a los casos fortuitos o de fuerza mayor. En la doctrina civilista se señala que el caso fortuito es un acontecimiento de la naturaleza, mientras que la fuerza mayor es un hecho del hombre; en ambos casos es además necesario que el suceso no se haya podido prever o que previéndose, no se haya podido resistir2. La distinción sin embargo, no tiene relevancia práctica, toda vez que los efectos de ambos son los mismos, es decir, que cuando se configura cualquiera de ellos, el deudor queda liberado de la obligación. 2 Borja Soriano, Manual, Teoría general de las obligaciones, Ed: Porrúa, México, 2001 “INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE REFORMA EL ARTICULO 2431 DEL CODIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL” DIP. RAFAEL MEDINA PEDERZINI Segundo Periodo Ordinario, Segundo Año de Ejercicio. 3 Pag. 316 Gaceta Parlamentaria de la ALDF 26 de abril de 2011. Núm. 138-A. Año 02 DIP. RAFAEL MEDINA PEDERZINI Así pues, se entiende el caso fortuito o fuerza mayor toda situación o acontecimiento imprevisible y excepcional, o independiente de la voluntad de las partes contratantes, que impida a cualquiera de las partes contratantes llevar a cabo alguna de sus obligaciones contractuales, que no es imputable a una falta o negligencia de una de ellas y que no pudiera haberse evitado aplicando la mayor diligencia posible. De lo anterior se desprenden varios elementos que deben asumirse para que se configure la fuerza mayor: 1) Acontecimientos excepcionales o impredecibles ajenos a la voluntad de las partes; 2) No imputable a la falta o negligencia de una de las partes; 3) No puede evitarse En los casos concretos de arrendamiento de inmuebles para fines comerciales, puede darse que un establecimiento mercantil pueda ser sujeto a una clausura por parte de las autoridades correspondientes, derivado de alguna infracción o del incumplimiento de alguna norma de carácter administrativo por parte del arrendatario. En la práctica, este supuesto se ha utilizado como argumento para que el arrendatario se exima del cumplimiento del pago de la renta del inmueble, argumentando ser un caso fortuito o de fuerza mayor. No obstante, del análisis de los elementos que caracterizan las figuras de caso fortuito o fuerza mayor, podemos inferir que en este tipo de supuestos resulta por “INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE REFORMA EL ARTICULO 2431 DEL CODIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL” DIP. RAFAEL MEDINA PEDERZINI Segundo Periodo Ordinario, Segundo Año de Ejercicio. 4 Pag. 317 Gaceta Parlamentaria de la ALDF 26 de abril de 2011. Núm. 138-A. Año 02 DIP. RAFAEL MEDINA PEDERZINI demás injusto atribuir como caso fortuito la clausura de un establecimiento, toda vez que es clara la obligación, de quien inicia una actividad comercial, de cumplir con todos los requisitos administrativos, jurídicos, sanitarios, etc. que las diversos ordenamientos establecen; de tal suerte que una clausura derivada del incumplimiento de una de estas normas, no puede considerarse un caso fortuito, pues en ese caso nos encontramos ante un acontecimiento que si bien es ajeno a la voluntad de las partes, no es de ninguna manera impredecible y este puede preverse. Es por ello, que la iniciativa que se presenta busca reformar el artículo 2431 del Código Civil para el Distrito Federal, con el objeto de señalar como excepción a los casos fortuitos o de fuerza mayor, el caso de las clausuras de los bienes arrendados, cuando estas son producto de la falta de cumplimiento de las normas administrativas que el arrendatario está obligado a prever y satisfacer. En atención con lo anterior, se propone la siguiente iniciativa con proyecto de decreto: Artículo Único.- Se adiciona un párrafo al artículo 2431 del Código Civil para el Distrito Federal los siguientes términos: Artículo 2431. Si por caso fortuito o fuerza mayor se impide totalmente al arrendatario el uso de la cosa arrendada, no se causará renta mientras dure el impedimento, y si éste dura más de dos meses, podrá pedir la rescisión del contrato. No constituye caso fortuito o fuerza mayor la clausura del bien arrendado efectuada por una autoridad, si del contenido de las “INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE REFORMA EL ARTICULO 2431 DEL CODIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL” DIP. RAFAEL MEDINA PEDERZINI Segundo Periodo Ordinario, Segundo Año de Ejercicio. 5 Pag. 318 Gaceta Parlamentaria de la ALDF 26 de abril de 2011. Núm. 138-A. Año 02 DIP. RAFAEL MEDINA PEDERZINI pruebas que se ofrezcan deriva que dicha clausura tiene su causa en el incumplimiento o infracción a las normas de carácter administrativo que regulan el funcionamiento de la actividad comercial de la arrendataria. TRANSITORIOS.PRIMERO. Publíquese en la Gaceta Oficial del Distrito Federal y para su mayor difusión en el Diario Oficial de la Federación. SEGUNDO. El presente Decreto entrará en vigor al día siguiente de su publicación en la Gaceta Oficial del Distrito Federal. Dado en el Recinto Legislativo de Donceles, México, Distrito Federal, a los diecinueve días del mes de abril de dos mil once. DIP. RAFAEL MEDINA PEDERZINI “INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR EL QUE SE REFORMA EL ARTICULO 2431 DEL CODIGO CIVIL PARA EL DISTRITO FEDERAL” DIP. RAFAEL MEDINA PEDERZINI Segundo Periodo Ordinario, Segundo Año de Ejercicio. 6 Pag. 319