Maratón - Santiago Runners

S a n t i a g o
R u n n e r s
El camino al cielo se asemeja a un arquero que
tensa su arco.
Rebaja lo alto.
Eleva lo bajo.
Aminora lo excesivo.
Completa lo insuficiente.
Porque la vía al cielo consiste justamente en
aminorar lo excesivo y completar lo insuficiente.
Tao Te King – LXXVII
Editorial
orrial
Por Alberto Achondo
Sabiduría del
Correr, Encanto
del Runner
F
ue Alejandro Ulloa a quien
le escuché decir que el éxito de un
maratón es el camino al cielo. El
Runner, me dijo, es el arquero que
se ciñe a un programa establecido,
él conoce su cuerpo como el arquero
a su arco, en la preparación y en
carrera, sabiamente aminora lo
excesivo y completa lo insuficiente.
Sabiduría que se aprende con el
tiempo, intentándolo, insistiendo
una y otra vez con conciencia de sí
mismo, de sus virtudes y debilidades,
de sus capacidades crecientes, de
su esfuerzo y persistencia que le
caracteriza.
El maratón representa la vida y las
gratas sorpresas que nos depara el
DIRECTOR EJECUTIVO
René Ramírez
EDITOR GENERAL
Alberto Achondo
día a día; enseñanza de sabiduría
que nos sirve para vivir en armonía
con la naturaleza de desafío del ser
humano en su conciencia terrenal,
exigiéndonos profundidad en la
reflexión, en el conocimiento de
nuestras capacidades y conciencia
de aquellas propias sombras que
vinimos a superar. No hay otra
explicación más válida para correr
maratones.
Sabiduría, la que se logra después
de muchas carreras, de muchos
planes de entrenamiento
efectivamente completados, de
conocer nuestro cuerpo al haber
aprendido a escucharlo.
La concentración parece ser la clave.
Sabemos que la concentración es un
arte; el callar viene antes que el saber,
el poder y el osar. La voluntad es un
factor determinante en la
concentración, ya que suele ser la
única vía de dominar la mente que
a su vez nos domina, la voluntad es
la que le infunde calma y una
dirección definida. Sólo una voluntad
silenciosa provoca el silencio del
intelecto y de la imaginación en el
proceso de la concentración.
Necesitamos llegar a concentrarnos
sin esfuerzo, ello sucede cuando ya
no queda nada por suprimir y el
recogimiemto se vuelve tan natural
como el respirar o los latidos del
corazón, ya que actúa un estado de
conciencia simultáneamente con el
COMITE EDITORIAL
Isabel González
Gabriela Muñoz
Paula Vildósola
Sergio Mujica
PERIODISTA
Begoña Bofill
DISEÑO Y PRODUCCION
Publisiga Ltda.
intelecto, imaginación, sentimiento
y voluntad en perfecta armonía y
calma.
Esta situación es la antesala a la
meditación, es el juego del Runner
que cada mañana amanece para
correr; el subconsciente de cada
uno de nosotros es el que clama
por salir a entrenar a pesar de que
el consciente muchas veces se
niega; al correr callamos, con el
correr y el callar aprendemos que
el saber, el poder y el osar vienen
después. Corremos, nos
concentramos sin que requiera de
un gran esfuerzo, volamos por
sobre el suelo, es un juego,
meditamos jugando, meditamos,
así nos acercamos al Ser interno
y, por ende, al Señor.
Sabiduría, aminorando lo excesivo
y completando lo insuficiente; co
– creando la propia senda y lo que
lo rodea en consecuencia. El
camino al cielo se asemeja al
arquero que tensa su arco y al
Runner que cumple a diario su
programa prolijamente; sabiduría,
voluntad de acción, sabiduría que
trasciende el correr para quienes
corremos, un regalo para lo que
iniciamos y terminamos, sabiduría
que está en el entorno del correr,
a la que nos podemos montar y
adoptarla fácilmente así para
nuestra vida, sólo corriendo por
el amor a hacerlo. SRN
SANTIAGO RUNNERS CLUB
[email protected]
www.santiagorunners.cl
Con Temple
de Acero
• Más de 150 triatlones en el cuerpo, 16 ironman (siete en
Hawai y nueve en otros lugares del mundo), avalan la
personalidad persistente de Juan Antonio Arrasate, la
misma que le permitió –en gran parte- salir del coma que
lo tuvo un accidente en bicicleta a fines del año pasado.
• Hoy en franca recuperación, tuvo que suspender –con
mucho dolor– su participación en Hawai. De hecho su carta
a los organizadores de la prueba dice “petición odiada”.
Pero él sabe que debe tomarse las cosas con calma para
volver a las pistas. Y en eso está. Agradeciendo a Dios y
volviendo a entrenar suavemente.
Perfil Humano
Entrevista: Isabel González
Redacción: Begoña Bofill
Santiago Runners
P
4
erseverancia, resistencia,
tenacidad, valor… Todas estas
palabras son capaces de definir a
Juan Antonio Arrasate (casado,
tres hijas, 52 años), que como
buen descendiente de vascos
parece tener temple de acero
incluso desde antes de comenzar
a correr el ironman.
Porque desde muy joven, cuando
estudiaba su MBA en el IESE de la
Universidad de Navarra en
Barcelona, Juan Antonio, demostró
ser un hombre de mucha constancia.
Hasta se le acortó la vista mientras
estudiaba horas y horas para sacar
adelante su master. Luego, de
regreso a Chile en 1975, comenzó a
trabajar en los bosques y aserraderos
de su familia en el sur. Allá pasaba
toda la semana y no paraba de
trabajar. Tenía jornadas de trabajo
de hasta15 horas. Venía a Santiago
los fines de semana para estar con
su familia y con su futura señora,
Lorena.
alguna preparación, “pero quedé
muerto”, según sus propias palabras.
Luego vinieron los ironman, donde
su mejor tiempo es de 9 horas y 41
minutos.
Luego, en al ámbito deportivo,
comenzó a correr triatlones
prácticamente de la noche a la
mañana. “Yo era un deportista de
fin de semana. Jugaba raquetball…
lo bueno es que tenía mucha
resistencia”. Cuando escuchó a unos
amigos, entre ellos a Rafael Quiroga,
que instaurarían el triatlón en Chile
se entusiasmó. Se lanzó a la aventura
sin saber a lo que iba. Semanas antes
comenzó a nadar para contar con
“Antes de 1984, cuando comencé a
participar en triatlones, me gustaba
mucho correr. Participé en carreras
como la del Roto Chileno. Además
corrí unos tres maratones en
Santiago, pero con muy malos
tiempos. No bajé de las 3: 30 horas”.
Su primer maratón fue el de San
Sebastián, España, que lo corrió
mientras vivía en ese país, “de puro
patudo”, según confiesa. Con mucho
sacrificio llegó a la meta en cerca de
Hace poco menos de un año un
accidente en bicicleta lo dejó en
estado de coma por días, del cual
logró salir en gran parte gracias a su
“temple de acero”. Hoy está en
franca recuperación, volviendo poco
a poco a las pistas. Pero debe tener
cuidado y tomar su reencuentro con
el deporte con mucha calma.
“SIEMPRE HE SIDO TRIATLETA”
“Jugando raquetball me di cuenta
que tenía resistencia, la que me
permitía llegar hasta el tercer juego.
En el primer set generalmente
perdía, en el segundo la peleaba de
tal forma que a veces ganaba y ya
en el tercero no me ganaba nadie”.
Esa resistencia fue la que le permitió
enfrentar otros desafíos como el
triatlón.
Juan Antonio comenta cómo llegó
a ser triatleta. “Estando en una fiesta,
en octubre de 1984, comenzamos a
conversar en un grupo de amigos,
entre los cuales se encontraba Rafael
Quiroga, quien con otro amigo
habían estado en California, Estados
Unidos, y habían visto el triatlón y
estaban preparando la primera
prueba de este tipo en Chile para
noviembre de ese año.
Sus amigos lo invitaron a participar.
Sólo quedaban dos semanas para la
prueba, pero Juan Antonio se
entusiasmó con este tema y se lanzó
a una aventura. En el nado no le fue
bien. De los 150 que deben haber
participado salió en el lugar 145.
Luego en la bicicleta comenzó a
pasar gente y quedó en el lugar 120.
Pero en el trote comenzó poco a
poco a pasar a muchos de los que
lo habían dejado atrás en las otras
dos pruebas. Finalmente, llegó en
el lugar 75. Ahí se dio cuenta de una
gran verdad que lo acompaña hasta
ahora: “la resistencia y el correr son
mi fortaleza”. Confiesa tener mucha
resistencia y por eso en el trote es
capaz de dar lo mejor de sí mismo,
incluso, hasta el día de hoy que ha
perfeccionado las otras dos pruebas.
Después de esta experiencia se
apasionó con los triatlones, ya que
vivió una sensación muy especial
que fue darse cuenta que éste era
su deporte “porque aunque me vaya
mal en el nado y en la bicicleta,
después cuando comienzo a pasar
gente en el trote puedo sentir que
al final lo hice bien”.
Continuó participando en triatlones.
Entrenaba todo el año. Partía a las
cinco y media de la mañana, algunas
veces hasta con dos grados bajo
cero, y pedaleaba una hora por la
Arturo Merino Benítez, para luego
dirigirse a su trabajo. Esto lo hizo
durante unos cinco a seis años hasta
que en 1991 vendió su empresa y
pudo reestructurar su tiempo para
entrenar.
Ya perdió la cuenta de cuántos
triatlones ha corrido, ya que durante
años participó en todas las que se
organizaban. “Creo que debo haber
corrido más de 150”.
Su incursión en triatlones implicó
todo un proceso de acomodo
familiar. En todo caso, cuenta, “mi
transformación a triatleta no fue
absoluta, ya que la edad, el cuerpo
y los recursos no daban para tanto.
La idea siempre fue entrenar por las
mañanas, para dejar rerservada la
tarde para la familia y 2 horas para
el trabajo de inversiones en bolsa,
construcción y terrenos. Así es que
mis mujeres se empezaron a
acostumbrar a que estuviera “el
peludo” en casa. Incluso una vez
que mis niñitas no me encontraron
en la casa retaron a mi señora”.
Santiago Runners
4 horas y 10 minutos. Después corrió
otro en Barcelona, mientras
estudiaba el Master.
EL SALTO AL IRONMAN
5
Estando en Tahiti, en la isla de Morea,
entrenando junto a un amigo para
participar en un triatlón, se topó con
un corredor llamado Elliot Robinson,
de unos 53 años. “Nos pusimos a
conversar, me comentó que estaba
retirado, y que había tomado esta
decisión luego de sacar cuentas de
cuántos años viviría y la cantidad de
plata que tenía para financiarlos.
Teniendo claro que podía vivir hasta
los 75 años, decidió vender su
empresa, con la certeza de que si
vivía más, alguien lo cuidaría. Vivía
en Palm Spring, cerca de Los
Angeles, a tres minutos de la piscina,
con todos los caminos imaginables
para andar en bicicleta y había
corrido seis ironman”. Luego de su
historia personal, le comentó a Juan
Antonio, quien tenía 37 años, que
la única posibilidad para dedicarse
de lleno a esta disciplina era tener
algo que me quitara menos tiempo,
lo que me permitió a temprana edad
poder disfrutar de mi familia y que
ella disfrutara de mí, ¿o me sufriera?...
En realidad, esa pregunta se la debes
hacer a mis mujeres”.
más tiempo. Lo miró y le dijo: “vende
inmediatamente tu empresa”.
Perfil Humano
“En 1991 vendí la empresa y tuve
más tiempo. Un año antes se me
había ocurrido correr el primer
ironman, en Nueva Zelanda, con un
recorrido muy complicado. Llegué
a la meta en 11 horas 03 minutos, y
esta prueba se convirtió en una
pasión”. Con este tiempo clasificó
para Hawai. Desde ese momento
hasta ahora ha corrido siete ironman
en Hawai, clasificando para la
prueba. Por eso cuando envió su
carta para suspender su participación
este año, debido al accidente,
escribió “petición odiada”.
Aunque le costó decir que no, y no
le importaba hacer 17 horas, incluso
teniendo un record de 9 horas y 50
minutos, cuando subió el cerro San
Cristóbal y corrió 20 kilómetros,
quedó muy cansado y adolorido los
días posteriores. Ahí se dio cuenta
que no podía ir a Hawai.
Ha corrido siete ironman en Hawai
y nueve en otros países. Su mejor
tiempo es de 9:41 horas en Australia
2000. “Esto es difícil que lo vuelva
a repetir. Van pasando los años y es
lógico que esto suceda”.
Su preparación para el ironman es
diaria. “La bicicleta exige mucho. Mi
entrenamiento es de cuatro horas al
día durante seis días a la semana. El
séptimo día es para descansar, lo
que en el caso de deportistas
mayores de 40 años es muy
importante. Hay que recuperarse
para seguir adelante”.
Santiago Runners
El accidente que sufrió le ha
permitido enfocar la vida de otra
manera. Tengo un agradecimiento
6
diario. Todo lo veo bajo un prisma
positivo, aunque se presenten
problemas en el camino. Confiesa
que el proceso que está viviendo es
lento. Tanto que “de pronto se me
olvida y me pongo a hacer cosas
que no debiera y ahí mi cuerpo me
pasa la cuenta”.
Al recordar el accidente no puede
pasar por alto lo agradecido que
está de los Runners. “Siempre me
había sentido un poco lejano al
grupo, pero mientras estuve en la
clínica e, incluso, al volver a casa,
tanto yo como mi familia sentimos
el apoyo del Santiago Runners. Es
un recuerdo que queda para toda la
vida. El Santiago Runners como
grupo se portó increíble”.
DISFRUTAR DE LA FAMILIA
A pesar de la intensa actividad física
a que está sometido Juan Antonio,
ha logrado dejar tiempo para su
familia. Reconoce que “tuve la suerte
de poder hacer plata e invertirla en
En cuanto al deporte, confiesa que
no lo acompañan mucho. “Con un
loco en casa, es más que suficiente.
Cuando participo en un Ironman, mi
señora opta por no viajar, o bien, va
a ver la carrera y después nos
quedamos algunos días
descansando y pasándolo bien. El
grado de profesionalismo y
dedicación con que me agarró el
triatlón no fue tan sano. Cuando iba
a un Ironman, los días previos eran
de full concentración, en todo tipo
de cosas: alimentación, horarios de
comida, hora de levantarse y de
acostarse, depilación, masajes,
charlas, estudiar el estado de la
competencia...”.
“En todo caso, el ejemplo algo ha
cundido, ya que todas mi mujeres:
Lorena, Cocó (María Ignacia), Fer
(Fernanda) y Cuki (Victoria), comen
súper sano y hacen deporte (nadan
en la UC, practican mountainbike o
aeróbica y ahora les ha dado con la
elíptica o cross-trainer). Además,
cultivamos una vida súper sana. Nos
acostamos antes de las 23:00 P.M.,
vemos poca televisión, nadie fuma,
a excepción de la Cuki (15 años),
quien es sólo fumadora social de
fines de semana y se marea”.
Tal parece que la pasión por el
deporte, de alguna manera Juan
Antonio la ha transmitido a sus
hijas. A quienes, al igual que a su
señora, agradece por la paciencia
que han tenido con su actividad
deportiva. SRN
Maratón de
Chicago
La Emoción de Recibir la Primera Medalla
Por David Farcas
• “En la milla 25 todavía me sentía bien, y por sobre todo feliz porque estaba corriendo
mejor de lo que me había imaginado. El sueño de terminar se estaba cumpliendo”.
• “De la bestia no sabía nada todavía. El cuerpo me ayudaba; sin embargo, a la vuelta
de una esquina me saludó con un calambrito”.
M
A esas alturas ya había una meta
clara: La Maratón de Chicago en
Octubre de 2003. Para el mes de
julio ya hacía frío y las levantadas en
las mañanas eran cada vez más
difíciles.
Hace un poco más de un año corrí
el media maratón de Santiago. Era
un lindo día, y yo consideraba que
había entrenado bien y que estaba
bien preparado. Sin embargo, los
resultados fueron “malitos”. En el
camino de vuelta a la casa
conversando con mi señora, me dijo
que ella pensaba que yo tenía que
unirme a los Santiago Runners, que
era un grupo del que había
escuchado hablar varias veces, y
entrenar en serio para correr un
maratón. Como en muchas ocasiones
de mi vida, le hice caso, y postulé
en mayo de 2003.
Pero como todo plazo llega, la
esperada fecha finalmente también
llegó, y un día miércoles de octubre
nos embarcamos en el aeropuerto
de Santiago para empezar el viaje.
La verdad es que más parecía un
viaje de estudios de colegio que una
delegación deportiva, pues todos se
conocían muy bien. Nos subimos 65
chilenos en un avión y nos fuimos
todos juntos al mismo hotel. Estaba
claro que el grupo de los Runners
era súper unido, compuesto por
gente que además de entrenar juntos
eran muy amigos, y con una historia
recorrida en común.
Debutaron un Día
uchas veces había
escuchado que lo más difícil de un
maratón era pararse en la línea de
partida el día de la carrera. Si hoy
alguien me preguntara qué es lo más
difícil, yo contestaría lo mismo.
Un par de semanas después me llegó
un e-mail diciendo que se había
reunido el directorio del Club y que
mi solicitud había sido aceptada.
Empecé a correr con un grupo de
personas sumamente diverso, cuyo
punto de encuentro era el famoso
“hoyo”, y cuyos temas de
conversación eran 90% en base a las
carreras que tales personas habían
corrido, los tiempos de carrera, los
entrenamientos, las lesiones…
Resultó ser un grupo de personas
súper bueno y un excelente referente
para alguien como yo que quería
aprender a correr. Ahí estaban los
expertos dando consejos “gratis”.
Ahora que escribo estas líneas resulta
increíble recordar, por ejemplo, que
cuando se comentaba de los
entrenamientos o carreras se hablaba
de 4 ó 5 el mil, y yo tenía que traducir
esto a kilómetros por hora para
entender de qué se hablaba.
Un par de meses después las palabras
“repeticiones” y “largos” ya eran parte
de mi rutina semanal. Las levantadas
en las mañanas eran a las 5 A.M.
Después de comer algo, me juntaba
con mi amigo Germán Olave a hacer
las famosas "repeticiones" y correr
"largos" los fines de semana. Estas
dos palabras hoy significan algo muy
distinto para mí.
El día de la carrera llegamos al Grand
Park después de una agradable pero
a la vez tensa y emocionante
caminata desde el hotel. Ya se notaba
mucha gente en las calles, pero como
pocas veces, no circulaban autos.
Mientras nos acercábamos a la
partida, el número de personas crecía
exponencialmente. Es bastante difícil
entender qué significan 35.000
personas y sentirse parte de eso.
Debutaron un Día
Había participantes de todas partes
del mundo, todos enfrentando un
gran desafío personal. En la línea de
la partida me sentí un poco más
optimista de lo que iba, y en lugar
de colocarme al lado del pacer de
las 3:30 (que era mi meta), me
acerqué al pacer de las 3:25.
Probablemente esto se debió a que,
durante los últimos minutos, recibí
unos consejos que resultaron
bastante buenos y que se
complementaron muy bien con los
tiempos por milla respectivos que
aparecían en la pulsera que llevaba
en mi muñeca.
La carrera partió y fue impresionante
desde el principio. Las calles se
llenaron de gente animando la
carrera: los mexicanos al estilo
mexicano, los italianos al estilo
italiano y así, era casi un carnaval.
Uno de los consejos que más había
escuchado era no apurarse en el
comienzo y guardar energías para el
final. Sin embargo, era algo muy
difícil de mantener, dado el nivel de
adrenalina que había en el ambiente.
Yo partí con Lázaro Calderón, pero
a las pocas cuadras lo perdí.
Santiago Runners
El recorrido de esta carrera es muy
escénico. Las primeras millas nos
llevaron por River North y Lincon
Park, todo esto con un día precioso.
El recorrido luego siguió por el centro
histórico de Chicago, que es
realmente hermoso, y después por
los barrios griego, italiano, chino e
hispano. Todos éstos con sus calles
colmadas de gente.
8
En muchos lugares nos esperaban
bandas de música que animaban a
los corredores y espectadores. En
los barrios italiano y latino había
bailarines, mariachis, y personas
vistiendo los trajes típicos. Por
supuesto que todo esto acompañado
de sus comidas tradicionales. A esas
a l t u r a s l a c a r re r a s e h a b í a
transformado para mí en un city tour
por Chicago y sus barrios “vestidos
de fiesta”.
Volviendo a la carrera misma, les
cuento que en la milla 20, además
de agua y gatorade,
aparecieron plátanos y
naranjas. Yo creo que
f u e ro n s ú p e r ú t i l e s
porque a esas alturas
sentí unos pequeños
calambres. En la milla 25
todavía me sentía bien,
y por sobre todo feliz
porque estaba corriendo
mejor de lo que me
había imaginado. El
sueño de terminar se
estaba cumpliendo.
Además había pasado al
pacer de las 3:25 y tenía
como meta acercarme al
pacer de las 3:20.
De la bestia no sabía
nada todavía. El cuerpo
me ayudaba; sin
embargo, a la vuelta de
una esquina me saludó
con un calambrito. En
esa parte de la carrera
se veían varios
corredores que estaban
parando por calambres
y d o l o r. Yo e s t a b a
cansado y perdí un poco
de velocidad. Pero no
me quedaba nada para
llegar a la meta. La meta se veía a
la distancia.
Chicago
En la milla 26 me sentía realmente
cansado. Un poquito antes de llegar
a la meta divisé a mi señora que
me había seguido durante todo el
trayecto con unos amigos gringos.
Yo estaba súper emocionado de
terminar la carrera. Mientras escribo
estas líneas recuerdo perfectamente
todo.
Estaba terminando la carrera, un
sueño, y un gran proceso de
entrenamiento. La llegada fue
tremendamente emocionante. La
gente apoyaba desde las tribunas
con mucho entusiasmo, y la carrera
(y todo el entrenamiento)
terminaba.
Después de cruzar la meta sentí
una gran alegría, emoción, la
sensación de misión cumplida. Un
poco más allá me encontré con mi
amigo Pablo Budnik quien me
felicitó como si yo fuera un
campeón como Kanuchi. Y así me
sentí: como si hubiera sido yo el
p r i m e ro e n c r u z a r l a m e t a .
Unos metros después de la llegada
entregaban las medallas. Para mí
ésta era la primera vez en mi vida
que recibía una medalla, así es que
la emoción se multiplicó. Mientras
avanzaba por el corredor de la
llegada me fui encontrando con los
otros corredores con los que fuimos
juntos durante la carrera, con los
pacers y con los amigos. Nos
abrazamos y felicitamos, como si
fuéramos los gladiadores que
salieron vivos del Coliseo Romano.
Todos éramos ganadores. Ahí estaba
también mi señora, esperándome
para felicitarme, y yo para
agradecerle por todo el apoyo que
me dio y que me sigue dando. SRN
Los Tres
Cuentos del
Tío Julio
Por Julio Calisto
Turismo Aventura
• Luego de una lesión en la rodilla izquierda, este año Julio Calisto
quiso recuperar el tiempo perdido. Sus logros: hizo cumbre en
el Aconcagua, participó en varias carreras en bicicleta y en el
maratón Líder.
Febrero: Ascenso al Aconcagua
L
a temprana y grave
lesión de mi rodilla izquierda en el
segundo semestre del año pasado
me impidió entrenar y prepararme
para poder correr un maratón,
pensé en el triatlón de Pucón para
la cual nadé y anduve en bicicleta,
pero estaba muy limitado para la
tercera prueba.
Con pena y dolor renuncié a estas
competencias. En ese momento
pensé que podría ser mi oportunidad
de sacarme la espina del Aconcagua
clavada en mi cuerpo hace varios
años, por lo cual empecé a preparar
mi cuerpo y mente para estar en las
alturas.
En pocos meses traté de ponerme
la careta de montañista, visité el
Cajón del Maipo y lo alto de la Parva
en reiteradas oportunidades logrando
experiencia y adecuando mi equipo
a las exigencias, dormí y cociné con
viento y frío, desarrollé la paciencia,
la contemplación y permanecí sobre
los 3.000 metros de altura el mayor
tiempo posible y fui haciendo
cumbres para estar bien preparado
para la batalla final.
Viajé a Mendoza a obtener mi
permiso de entrada al parque
provincial Aconcagua. El 1 de febrero
estaba acampando en el Puente del
Inca junto a dos amigos montañistas.
Luego seguimos el camino por la ruta
normal y dormimos dos noches en
Confluencias para darle más tiempo
a nuestro cuerpo para adaptarse a
la altura. Estuvimos cuatro días en
Plaza de Mulas, sitio donde se hace
el campamento base a los 4.400
metros de altura. Hasta ese momento
el tiempo se presentaba bueno y
como es habitual en las tardes el
cielo se cubrió de nubes
impidiéndonos ver la cabeza de
nuestro objetivo, pero a pesar del
frente de mal tiempo, seguimos
ascendiendo e hicimos el próximo
campamento en Nido de Cóndores
a 5.400 metros donde nos quedamos
esperando que el tiempo mejorara
y nos permitiera continuar. La espera
fue larga, tediosa y llena de
incertidumbre, con días y noches con
mucho frío, fuimos impedidos de
acampar en Berlín. Finalmente,
cuando ya no nos quedaba comida
ni fuerzas para un día más, la
tormenta amainó y amaneció
despejado, la diosa madre nos
estaba dando la oportunidad.
Partimos a las 4 de la madrugada
alumbrados por una maravillosa luna
llena, fuimos paso a paso avanzando
en el medio de la nada, donde no
hay flora ni fauna, todo es tierra,
piedras y rocas. En Independencia
a 6.300 metros encontramos todo
cubierto de nieve lo que hizo
necesario el uso de grampones.
Santiago Runners
A las 9 de la mañana llegamos a la
larga travesía del gran acarreo con
luz solar, pero con mucho viento y
frío; éste era el sitio donde tuve que
abandonar la vez anterior. En esta
oportunidad caminé con mucha
fuerza y decisión dispuesto a superar
mi marca.
10
Tras dos horas de marcha la
atravesamos, nos encontramos al
final del gran acarreo y bajo la temida
canaleta -dificultad extrema a esta
altura-, donde cada paso es difícil y
el cuerpo lucha por rescatar el escaso
oxígeno del medio, otro y otro paso
más, cada centímetro me coloca más
cerca de la cumbre. Son dos horas
de marcha la que me separa del tan
deseado techo de América, la
expectación y adrenalina me dan
fuerzas, se aceleran mis pulsaciones,
debo hacer pausas para poder
continuar.
Son las 13 horas del día 9 de febrero
de 2004, he llegado a los 6.959
metros de altura sobre el nivel del
mar, estoy muy feliz y orgulloso de
haber ido bien preparado lo que me
permitió disfrutar el viaje, la montaña
y, por añadidura, haber podido llegar
a la punta cumpliendo mi objetivo.
P.D.: Agradezco a Dios y a la
montaña. Sin el apoyo de ellos no
hubiera sido posible.
M a r z o : C a r re r a s e n
Bicicleta
Como ustedes saben varios runners
nos reunimos con frecuencia para
andar en bicicleta para así
preparar nos para el triatlón,
descansar del trote o simplemente
por el gusto de pasear.
A l e j a n d r o L o a í z a ( Ta n i ) s e
autoproclamó presidente; Paula
Ibáñez, secretaria ejecutiva, y todos
nosotros les seguimos para poder
reclamar si las distancias son muy
largas o está baja la frecuencia de
los asados.
Enganchamos Manuel Cubillos y yo.
Sería la primera carrera en nuestras
vidas; el circuito era en la cuesta
Barriga siguiendo para María Pinto
y retorno, total 80 kms., nos
inscribimos en la categoría
principiantes.
Y tal como vemos en las películas o
en los noticieros íbamos los dos
metidos en el pelotón siguiendo
fielmente los consejos de Tani,
soportando estoicamente las
escapadas, debo confesarles que no
me sentía cómodo ni seguro entre
tantas bicicletas a mi alrededor por lo
que prefería irme en la cola del grupo.
Cuando llegamos a la mitad, el giro
es en U, me complico y pierdo
valiosos segundos que fueron
suficientes para quedar rezagado,
lucho por pillarlos pero nada logro,
se me fueron, lo que me dio mucha
rabia porque estaba advertido que
esto iba a pasar, me consuelo
justificando mi actuar por mi total
inexperiencia en estas lides.
Sigo pedaleando y veo delante a un
ciclista, me esfuerzo por alcanzarlo,
con mucha satisfacción lo logro y
tengo una tremenda sorpresa: era
Manolito. Qué alegría encontrame
con mi partner; 50 metros delante
nuestro iban cuatro ciclistas, nuestro
objetivo inmediato fue acoplarnos a
ellos lo que fue posible después de
un par de kilómetros y así llegamos
al inicio del ascenso a la cuesta
donde cada uno hizo su carrera,
llegando a la meta en buena forma.
El domingo 14 de marzo
participamos en la carrrera en un
nuevo circuito, Lo Echevers. Esta vez
nos inscribimos en la categoría que
nos corresponde: la master, éstos
son los jóvenes de los viejos.
Partimos aproximadamente unos 50
corredores, con Cubillos y yo metidos
“Son dos horas de marcha
la que me separa del tan
deseado techo de
América, la expectación y
adrenalina me dan fuerzas,
se aceleran mis
pulsaciones, debo hacer
pausas para poder
continuar”.
Turismo Aventura
Nos avisan que sólo faltan 10 kms.,
orgullosos seguimos metidos en el
pelotón. En los últimos 500 metros
viene el embalaje final; toda la carne
a la parrilla, a concho, súper
entretenido.
Esta vez me sentí real participante
en una carrera de bicicletas, sumando
una nueva y entretenida experiencia
deportiva.
Abril: Maratón Líder
Hace cinco semanas que he podido
regresar a mi mayor pasión deportiva
que es el trote, mi plan es y será no
superar los 60 Kms. semanales,
posiblemente de esta forma mi
rodilla resista más tiempo.
Por motivos obvios tenía descartado
correr algún maratón durante este
semestre y así pasaron por mi lado
Paris y Santiago. Me mantuve
físicamente bien, alter nando
ciclismo y trote, pensando en
muscularme al máximo para poder
enfrentar de la mejor forma posible
el maratón de Atenas en el segundo
semestre.
El sábado 17 de abril adjunto a El
Mercurio venía un suplemento con
todos los pormenores del maratón
organizado por Líder que se correría
en ocho días más, lo leí y lo volví a
hacer, se me grabó en mi cabeza y
me quedó dando vueltas. Con esa
idea partí el domingo a encontrarme
con los runners (el día anterior había
Santiago Runners
Tío Julio
Este circuito es absolutamente plano
y los palos, que son los aumentos
de velocidad en jerga ciclista, los
soportábamos bien; lo mismo ocurrió
cuando hicimos el giro en U. A veces
el esfuerzo es muy largo y pareciera
que uno ya no puede aguantar el
ritmo, pero a los otros les pasa lo
mismo y bajan la velocidad,
existiendo un momento para la
recuperación.
Los Tres Cuentos del
al medio, esta vez mostrábamos más
confianza.
11
hecho bicicleta con Chaguito
Gordon y su team), donde todavía
se comentaba de la gran actuación
de los runners en las maratones
recién corridas, allí me encuentro
con Paulina que me cuenta con
emoción que ella correrá su
segundo maratón el domingo
próximo, no sabía de otros. Voy a
entrenar el martes al Stade y me
encuentro con Rodolfo Meyer quien
ya hacía collera con Malio Tremolini
para el domingo, sumado a Sergio
Lagos que ya había superado su
gripe; en resumen seríamos cinco
runners que estaríamos presentes
en el maratón Líder, y las siempre
entusiastas Rosita y Paty, que
partirían la carrera con la intención
de hacer un largo.
Confirmo mi participación entre
locura e irresponsabilidad y me
inscribo, olvidando todo lo
a p re n d i d o e n m i s a ñ o s d e
maratonista.
Tenemos nuestra propia “tallarinata”
donde en la apuesta de tiempos
declaro 3:30 hrs., es decir, a 5
minutos por km., un paso que me
debería ser cómodo.
En mi contra estaba mi rodilla y no
haber hecho ningún largo en el
último año (uno solo de 21K); a mi
favor estaba mi alegría de poder
correr otra vez un maratón (tantos
meses pensando con angustia en mi
anticipada jubilación) y poder por
primera vez en mi vida saber lo que
es correr sin luchar por obtener el
menor tiempo posible, simplemente
tendría la gran satisfacción de poder
participar en ella.
Km. 40, ya diviso el Estadio Nacional,
los últimos dos kilómetros he bajado
mi ritmo, no tengo fuerzas para
reaccionar, pero ¡Que importa! Trato
de mantenerme y entrar erguido a
la pista de recortán; últimos 200
metros, qué emoción el público
aplaude, hay buenas vibraciones, me
siento un triunfador.
Domingo 25 de abril, 10 horas, se
inicia el maratón Líder bajo un bello
día otoñal y un marco impresionante
de público que participaba en la
corrida de los 4 kms. Partimos por
Av. Grecia, suficientemente ancha
para permitirnos a todos un buen
inicio, desde un comienzo regulo mi
paso y voy a un ritmo parejito
recorriendo las calles de Santiago
apoyado por muchos runners que
han salido a las calles a brindarnos
su apoyo. Paso la mitad en 1.45 hrs.
Perfecto, y sigo el camino por
Vespucio en busca de llegar a los
30 K con su temida muralla, el “viejo
del palo” no logra pegarme, voy
bien y me siento bien, no sé si me
veré igual.
Tiempo 3:32 hrs., segundo en mi
categoría y 200 lucas al bolsillo. SRN
Obligado a ir a
Grecia
La Columna de Hermógenes
E
l otro día volvió al Cerro
un trotador más joven que yo, al cual
hace años le tuve vendidos 100 pinos
oregón que tenía en Riñihue, pero
cuando el negocio parecía cerrado,
él desapareció del Cerro. A todo
esto, yo vendí la propiedad porque
mi mujer me tenía hasta más arriba
del paracaídas, ya que el lugar era
muy solo y los mapuches nos podían
quemar la casa con nosotros adentro.
Yo le tenía encargada su venta a otro
corredor, tanto del Cerro como de
propiedades, pero como no la
vendía le reclamé. Me dijo que debía
subirla de precio. Seguí su consejo
y entonces apareció, por otro lado
y sin intervención suya, un
comprador.
Como el corredor (del Cerro y de
propiedades) no intervino y no tenía
exclusividad, no le pagué comisión,
pero para evitar resquemores lo
convidé a perpetuidad a almorzar al
Carrousel, lo que no es una mala
solución para él, porque es un
restaurante bueno y bastante caro.
Hasta ahora hemos ido una vez al
mes y no crean ustedes que no he
pensado que, según cuántos años
vivamos, a lo mejor me habría salido
más a cuenta pagarle su comisión.
No el 2% que pretenden los
corredores (de propiedades), que
por lo demás no existe legalmente,
porque fue derogado durante el
gobierno de don Augusto, durante
el cual, además, se derogaron otras
cosas que a mí siempre me habían
Por Hermógenes Pérez de Arce
molestado, como los carnets para
ejercer oficios, la afiliación obligatoria
a colegios profesionales, los precios
fijados, el sistema previsional de
reparto, la sindicalización forzosa y
el impuesto a las ganancias de
capital.
El hecho es que cuando volvió al
Cerro el corredor (no de
propiedades) más joven que yo,
dimos vueltas a la coronilla,
incluyendo una subida a Antilén,
sabiendo que cuando troto largo me
meto en problemas, como cuando
le compré a Mañungo una moto rusa
con side-car, que después me costó
mucho vender.
Lo que sucede es que el mundo me
cambia a partir de los 40 minutos
de trote.
Las endorfinas me alteran la
personalidad. Llevábamos 40
minutos y Mañungo dijo que estaba
trayendo motos rusas con side-car.
Yo en ese momento pensé que si
lograba tener una no iba a pedirle
nada más a la vida, y le insistí, con
tono amenazador, que me la debía
reservar. Cuando al tiempo me llamó
para decirme que la moto estaba
lista y costaba un millón y medio o
algo así (de esto hace como 10 años),
como no estaba trotando y, por
tanto, en estado nor mal de
temperancia, me pregunté en qué
minuto podía haberla comprado. No
tenía dónde guardarla ni
oportunidad de usarla y, además,
cuando doblaba a la izquierda el
side-car se elevaba en el aire y yo
terminaba arriba de alguna vereda
o a punto de chocar o atropellar a
alguien. Por suerte después se
presentó un comprador. Me faltó
poco para darle plata encima.
Bueno, el hecho es que tras 40
minutos trotando con el joven
corredor (no de propiedades),
hablamos del maratón-maratón, el
de Grecia, entre maratón y Atenas,
que corrió Felípedes 300 ó 400 años
A.C., y al final de la cual cayó muerto
tras gritar dos veces “Nike”, que en
griego quiere decir “Victoria”, para
anunciar que habían derrotado a los
persas. Como yo estaba en el estado
de conciencia alterado, me
entusiasmé y lo entusiasmé y
sellamos el pacto de correrlo en
abril próximo y empezar desde ya
a hacer 60 kilómetros a la semana
(cosa que no he logrado en mi vida).
Esto fue el domingo. Hoy es viernes
y corrí los únicos cinco kilómetros
de esta semana. Jamás podría hacer
siquiera 30. Pero fui tan asertivo y
exigente en sellar mi compromiso
con el corredor (no de propiedades),
que no encuentro cómo decirle que
abortemos el plan. Ojalá lea esto y
me ofrezca una salida. En realidad,
nada de lo que yo resuelva,
prometa, disponga u ofrezca
después de 40 minutos de trote
tiene validez alguna. Por favor
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Vegetarianismo
y Ejercicio
Dr. Norman Mac Millan
Profesor de Nutrición
Universidad Católica de Valparaíso
[email protected]
• Los vegetarianos estrictos pueden sufrir carencias proteicas severas si no tienen los
conocimientos nutricionales adecuados y, aún así, corren el riesgo de un déficit en
minerales y oligoelementos, por lo que es una práctica poco compatible con un
programa de entrenamiento y máximo rendimiento deportivo.
• Los atletas vegetarianos estrictos son el grupo de más riesgo y deben optimizar sus
conocimientos acerca de nutrición.
E
l vegetarianismo es un
hábito alimentario basado en la
restricción total o parcial de alimentos
de origen animal. En la actualidad
existen muchas personas que asocian
este modo de alimentación a un
hábito de vida sana, por lo que no es
infrecuente encontrar deportistas que
han adoptado algunas formas de
vegetarianismo. Dada la importancia
de las proteínas en el metabolismo
de un atleta, es que se requiere de
un gran conocimiento nutricional para
encontrar un equilibrio alimentario
luego de establecer las restricciones.
Para el interés de todos los deportistas
vegetarianos o con hábitos
vegetarianos, se presenta esta revisión
del tema.
Existen diferentes formas de
vegetarianismo, de acuerdo al tipo
de restricción:
Vegetariano estricto: No consume
carnes de ningún tipo, ni huevos, ni
lácteos.
Lacto vegetariano: La única forma de
proteína animal que consume son los
lácteos.
Santiago Runners
Vegetariano ovo lácteo: Elimina todo
tipo de carnes de la alimentación, pero
consume huevos y lácteos.
Hábitos vegetarianos: se restringe de
comer carne, especialmente carne roja.
14
Los orígenes de esta corriente
alimentaria se remontan a la
antigüedad, lo que ha quedado de
manifiesto en algunas citas y
referencias de importantes personajes
de la historia humana.
BUDA
“Por miedo a causar terror a los seres
vivientes... Que se abstenga de comer
carne la persona que se está
disciplinando a sí misma para lograr
compasión”.
JESÚS
“Y la carne de las bestias asesinadas
se convertirá en la propia tumba dentro
del cuerpo de quien la consuma.
Porque en verdad os digo, aquel que
mata se mata a sí mismo y quien come
la carne de bestias asesinadas come
el cuerpo de la muerte”.
Leonardo da Vinci (1452-1519)
“Desde muy joven he abjurado del
consumo de carne y llegará el tiempo
en que así como yo, otros hombres
mirarán el asesinato de animales igual
que hoy miran el asesinato de
hombres”.
Mahatma Gandhi (1869-1948)
“La grandeza de una nación y su
progreso moral se pueden juzgar de
acuerdo a la manera en que trata a
sus animales”.
Franz Kafka (1883-1924)
“Ahora puedo mirarlos en paz... ya no
me los como”.
(Comentario hecho mientras admiraba
los peces de un acuario).
FUNDAMENTOS
Algunos tipos de religiones consideran
impropio el consumo de carne animal.
Como quedó de manifiesto en los
párrafos anteriores, maestros de
diferentes religiones se declararon
partidarios del vegetarianismo.
Desde una perspectiva nutricional
además, algunas for mas de
vegetarianismo pueden tener un
fundamento aceptable si
consideramos que las carnes animales
contienen una determinada cantidad
de grasa saturada y una cantidad
variable de colesterol, con el
consecuente riesgo de generar
enfermedades cardiovasculares y
algunos tipos de cáncer. Puede ser
también válido el argumento de que
en presencia de alternativas vegetales,
se considere inmoral el consumir
animales como fuente de proteína.
Otro punto de vista es el económico
puesto que por ejemplo en el caso
del vacuno, para generar finalmente
1kg de carne es necesario alimentar
al animal con 16 kg. de cereal durante
su período de crecimiento.
PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS
ESENCIALES
Las proteínas son nutrientes (como
carbohidratos y grasas) necesarios
para la vida, que participan
fundamentalmente en la formación y
regeneración de células y tejidos
(músculo, piel, etc.). Los
requerimientos diarios de proteína,
que en un sedentario son de
aproximadamente 1 gramo por
kilogramo de peso corporal, en un
deportista alcanzan de 1,2 a 1,6 gr/kg
de peso/día. En la tabla 1 se resume
el contenido de proteína de alimentos
de uso habitual.
Las proteínas están conformadas por
combinaciones de algunos de los 22
aminoácidos existentes. De ellos,
ocho son esenciales y dentro de éstos
existen cuatro (lysina, isoleucina,
tryptofano y metionina) que son
particularmente escasos en los
alimentos vegetales. Los aminoácidos
esenciales están todos presentes en
algunos alimentos como lácteos,
huevos y carnes. Algunos tipos de
vegetarianos, entonces, que han
eliminado la carne (roja y/o blanca),
pero que ingieren equilibradamente
huevos o lácteos en su alimentación,
no deberían presentar deficiencias
proteicas. Los atletas vegetarianos
estrictos son el grupo de más riesgo
y deben optimizar sus conocimientos
acerca de nutrición.
Consejo Profesional
Así, por ejemplo, los requerimientos
proteicos mencionados pueden verse
incrementados en personas que
restringen su ingesta calórica o de
carbohidratos, por lo que los
vegetarianos no solo deben
preocuparse de una buena elección
de proteínas vegetales sino también
de una alimentación energética y
nutricionalmente equilibrada. La
asimilación de proteínas es por otra
parte mayor mientras más variedad
de aminoácidos exista en la ración,
por lo que es de suma importancia
en el vegetariano asociar fuentes
alimentarias, como por ejemplo un
cereal con legumbre (poroto +
choclo, arroz + lenteja, arroz + soya).
En este caso se busca compensar el
aporte del tryptofano que es escaso
en los cereales, pero abundante en
legumbres. Otra mezcla propuesta
es la de pan integral (carente de
lysina) y queso (rico en lysina) o pan
integral y mantequilla de maní. La
soya es un producto vegetal
a l t a m e n t e re c o m e n d a b l e e n
vegetarianos por su gran contenido
en proteína y riqueza en aminoácidos
esenciales. Existe en forma natural
(porotos verdes), como leche o como
productos procesados (carne vegetal,
tofu, entre otros). Es además rico en
calcio (500 mg/15gr polvo) y fierro
(4 mg en 1/2 taza de porotos de
soya).
Respecto a las vitaminas y minerales
que pueden faltar en los
vegetarianos, merece destacarse el
fierro abundante en las carnes rojas
y que puede ser reemplazado con
fuentes vegetales como algunas
pastas, cereales, legumbres o pan
integral, teniendo la precaución de
ingerir una adecuada cantidad de
vitamina C para mejorar la absorción
intestinal del mineral. Más
complicada es la situación de la
vitamina B12 y del zinc, presentes
casi exclusivamente en alimentos de
origen animal. Los vegetarianos
estrictos deben utilizar levadura o
consumir preparados de la vitamina
B12 (2 microgramos/día) y agregar
salvado de trigo, semillas de
calabaza, nueces o algún preparado
(12 mg/día) en el caso del zinc.
En resumen, los deportistas con
hábitos vegetarianos pueden
compensar las carencias producidas
por los alimentos ausentes, si
consumen adecuada cantidad de
lácteos o huevos junto a fuentes
v e g e t a l e s d e p ro t e í n a . L o s
vegetarianos estrictos pueden sufrir
carencias proteicas severas si no
tienen los conocimientos
nutricionales adecuados y, aún así,
corren el riesgo de un déficit en
Tabla 1: Contenido de
minerales y oligoelementos, por lo
proteína en alimentos
que es una práctica poco compatible
con un programa de
ALIMENTO
CANTIDAD PROTEINA
entrenamiento y máximo
Carne (vacuno, pollo, pescado) 100g 20-25g
rendimiento deportivo.
Huevo
1 mediano 6g
Leche (entera o descremada)
250cc
8g
Arroz cocido
1 taza
4g
Porotos cocidos
1 taza
12g
Lentejas cocidas
1 taza
6g
Cereal (corn flakes)
1/2 taza
2g
Pan blanco (molde)
2 rebanadas 4g
Pan integral (molde)
2 rebanadas 6g
Maní salado
100g
25g
Soya (porotos cocidos)
1 taza
22g
Papa mediana
1
2g
Referencias
G e r b e V. I n i t i a t i o n a u
végétarianisme. Editions
Dangles, 1983, France.
Riché D. Guide nutritionnel des
sports d’endurance. 2eme
edition. Vigot Ed., 1998, France.
Santiago Runners
Sociales
París
16
Vancouver
Sociales
17
Santiago
Pucón
Varios
Santiago Runners
C
omo dato inicial diremos
que las publicaciones científicas entre
1970 y 2000 en este campo alcanzaron
a cerca de 1.200, mientras que entre
el año 2000 y 2003 éstas han superado
la cifra de 14.000, es decir, en tres años
se ha publicado 10 veces más que en
los 30 años anteriores.
¿Qué Relación
existe entre
Ciencia y
Maratón?
La vida sedentaria ha impulsado uno
de los fenómenos más sorprendentes
en el ambiente científico. Junto a todas
las enfermedades causadas directa o
indirectamente por el sedentarismo, ha
dado un impulso sin comparación a la
investigación científica en materia de
ejercicio y mecanismos de adaptación
del cuerpo humano.
Por Carlos Saavedra MSc.*
El objeto de este dato es poder
encontrar una razón justificable por la
cual ignoramos tantos aspectos
científicos ligados a la actividad física.
Los aspectos de la investigación
relacionados con las carreras de larga
distancia que sintetizaremos en este
artículo son básicamente tres:
• Mecanismos de adaptación efectivos
del músculo entrenado.
• Manejo de las fuentes y depósitos
energéticos.
• Aspectos de la genética y del
entrenamiento.
¿Cómo el músculo puede adquirir una
mayor capacidad de trabajo o de
esfuerzo?
La respuesta es muy simple: mejorando
sus proteínas estructurales y
funcionales. Pero esta respuesta
envuelve complejos fenómenos
fisiológicos, bioquímicos y moleculares.
Hay una secuencia bien estudiada,
que describiremos de manera
esquemática.
1. El primer mecanismo gatillador de
todos los procesos enunciados en
el esquema es el entrenamiento
adecuado. ¿Por qué adecuado? Por
que hay una serie de esfuerzos
efectuados en los deportistas que
no apuntan hacia objetivos precisos.
Esto se produce porque, en primer
lugar se desconoce la verdadera
característica funcional del deportista
y porque las intensidades del
entrenamiento deben ser dosificadas
de acuerdo a qué estructura
orgánica u organuelo del tejido
muscular debemos o queremos
modificar para aumentar su
rendimiento.
El entrenamiento posee tres
posibilidades de efectos: uno
indiferente, otro que lesiona y el
que mejora. Esto va a depender no
sólo de la dosis adecuada de carga
de trabajo, sino también del tipo de
respuesta del atleta. Un mismo
entrenamiento a un grupo similar
de sujetos, puede provocar en
algunos una lesión, en otros puede
producir un aumento mínimo y otros
pueden responder con una gran
m a rc a . L a s re s p u e s t a s a l
entrenamiento permiten catalogar
a los deportistas al igual que a los
pacientes a los fármacos:
Grandes respondedores (high
responders), deportistas que
responden muy poco (low
responders); los que responden
rápidamente (early responders) y los
que responden mas tardíamente
(later responders).
Además existe una combinación
entre éstos, es decir, un high and
later responder...
RESUMEN
• Los entrenamientos deben ser
dosificados.
• De acuerdo a la capacidad del
músculo del deportista.
• De acuerdo al cambio que
deseamos en una parte específica
del músculo.
• No todos responden de igual
manera.
• La entrenabilidad está presente en
t o d o s l o s s e re s h u m a n o s
independiente del sexo, edad o raza
con diferentes velocidades y
magnitudes de respuesta.
2.Para poder lograr un cambio, como
por ejemplo, aumentar la capacidad
de los depósitos de glicógeno,
debemos tener un entrenamiento
que deplete los depósitos de
glicógeno y que no sea uno en que
se gasten grasas o glucosa
plasmática. O si deseamos mejorar
la capacidad de oxidación de grasas
y las responsables son las enzimas
respectivas, debemos tener un
ejercicio que "gaste" las enzimas
correspondientes para poder
reponerlas en mayor cantidad de
días después de ese entrenamiento.
Esto es llamado un mecanismo de
microlesión específica que gatilla
la síntesis de las proteínas
específicas que van a mejorar
también una función puntual de la
célula.
Entrenamiento
adecuado
Microlesión
celular
Liberación de hormonas
Síntesis de proteínas
reparadoras
estructurales y
funcionales
RESUMEN
• El producir una micro lesión, es decir,
no una lesión, representa un
beneficio para el sistema y es
necesario para repararla y renovarla.
• Existirán entrenamientos diferentes
para aumentar los distintos factores
de los cuales depende la capacidad
funcional de la célula.
• En estos aspectos es básico la
especificidad del entrenamiento y
la intensidad.
3. Esta micro destrucción va a lanzar
al torrente sanguíneo una serie de
metabolitos o subproductos que
permitirán ser identificados por el
sistema endocrino y, por lo tanto, la
cantidad de metabolitos y el tipo
de éstos, indicará la cantidad de
hormona liberada para reparar dicho
daño celular y también la
sensibilidad de los receptores
hormonales. Veamos un ejemplo, si
hacemos un ejercicio de pesas
adecuado, se destruirá actina y
miosina, por lo que el torrente
sanguíneo estará con un
subproducto de la degradación de
estas proteínas. Este es identificado
como un metabolito llamado 3metil-histidina y que es reconocido
por el sistema endocrino.
RESUMEN
• Nuestro torrente sanguíneo después
del entrenamiento adecuado y
durante varias horas estará con una
serie de alteraciones bioquímicas,
pero totalmente lógico.
• Estas serviran de señal para liberar
durante el sueño a la hormona de
crecimiento que mandará a reparar
dicho daño.
• Está demás decir lo importante que
es dor mir después de un
entrenamiento "destructor".
Aumento de la
capacidad funcional
del músculo
4. La hormona de crecimiento no actúa
de manera directa sobre esta acción
reparadora. Esta debe metabolizarse
para la formación de
somatomedinas que son el principio
activo de la hormona de crecimiento
lo cual ocurre en el hígado y éstas
a su vez estimularán la formación
de otras moléculas específicamente
activas que van a reparar y aumentar
la formación de estructuras proteicas
en el tendón, cartílago, hueso y
músculo. Para tales efectos estas
hormonas deben ser liberadas,
transportadas, metabolizadas y
encontrar sus receptores específicos
para ejercer la acción que buscamos.
RESUMEN
• Como vemos es un proceso y no
un evento. Esto quiere decir que no
se puede lograr en pocas horas o
inmediatamente después del
entrenamiento.
• Este fenómeno principalmente
es dependiente de una acción
integrada de un sistema que
hoy
se
denomina
sicoinmunoneuroendocrino, es decir,
la liberación y acción de una
hormona va a depender de los
seres psicológicos, del estado
inmunitario y del estado de función
neuronal del deportista el cual se
descompensa con el entrenamiento
inadecuado.
• Altas dosis de entrenamiento alteran
el sistema inmunológico
significativamente.
5. IGF, insulino-growth-factor, o factores
de crecimiento son esenciales en la
mejoría de la performace del sujeto.
Tienen un efecto local y específico.
Las hay del tipo IGF1, IGF2, IGF3,
entre otras, y cada una de ellas actúa
en puntos específicos de nuestro
cuerpo por inter medio de
mecanismos de trascripción genética
que, por supuesto, no abordaremos
en este artículo.
Son semi-dependientes de la
hormona de crecimiento, ya que
también se generan por sí solas
después de un entrenamiento en el
músculo. Lo mismo pasa con el
hueso, los ligamentos o el tendón.
El recorrido que han hecho estas
hormonas es largo; el acto de
reparación de las estructuras
"destruidas" con el ejercicio demora
entre 36 y 48 horas.
RESUMEN
• Este fenómeno de reparación, si
bien se maneja por flujos
hormonales que parten con el
sueño, el acto de reparación
propiamente tal demora más de 24
horas por lo que no es posible
entrenar adecuadamente todos los
días y se debe descansar para poder
progresar, es decir, al entrenamiento
siguiente se debe hacer con
estructuras "nuevas y reparadas".
• Los estudios efectuados con el
modelo "una pierna", es decir, que
dejan una pierna del mismo sujeto
como control y la otra experimental,
son fundamentales para comprender
y aceptar esta premisa de descanso.
Cuando a un sujeto se le entrenan
las dos piernas y al día siguiente se
entrena una sola y la otra se deja
descansar, se puede observar que
la que reposó, posee un mejor
rendimiento que la pierna que no
d e s c a n s ó . A l m i c ro s c o p i o
electrónico y el normal, el músculo
descansado morfométrica y
estructuralmente está mejor
visualizado y sus depósitos
energéticos mejor abastecidos.
6.La reparación consiste básicamente
en conformar dentro de la célula
una cadena de aminoácidos que
conforman una proteína igual a la
que el entrenamiento anterior
"rompió". Como sabemos, el
organero mayormente responsable
del rendimiento de un maratonista
es la mitocondria. Mientras más
grande y más numerosas son las
mitocondrias dentro del músculo,
mayor será la posibilidad de
producir energía de manera
aeróbica en la unidad de tiempo y
por lo tanto la velocidad será mayor
Santiago Runners
CUADRO ESQUEMÁTICO DEL ENTRENAMIENTO
EFICIENTE EN LA SUPERACIÓN DEL RENDIMIENTO
19
y se correrá en un tiempo menor.
Pues bien, los procesos de
biogénesis mitocondrial son
fundamentales. Se puede destruir
la membrana mitocondrial, las
crestas mitocondriales o las enzimas
mitocondriales con el
entrenamiento. Cada una de estas
partes es responsable del
rendimiento y éste va a ser mayor
en la medida que podamos mejorar
la calidad y cantidad de las
moléculas que conforman de este
organelo.
Santiago Runners
RESUMEN
• Debemos periódicamente hacer
estos entrenamientos para poder
renovar nuestras proteínas
estructurales y funcionales.
• Es necesario ingerir proteínas, pero
no más que las que necesita un
sujeto normal no deportista, es decir,
1 gramo por kilo de peso
diariamente.
• Nuevamente, después de este tipo
de entrenamiento se necesita
descansar.
20
7. El aumento del rendimiento es
tratado acá desde un punto de vista
netamente histoquímico y muscular,
es decir de la cantidad y calidad del
tejido muscular. La única forma en
que el rendimiento pueda
consolidarse en una marca es
mediante la interacción de aspectos
histoquímicos, fisiológicos,
biomecánicos y de metabolización
o utilización de las fuentes
energéticas. Además, tenemos que
considerar los procesos de
mineralización ósea y de fortificación
de cartílagos, ligamentos y tendones,
los cuales poseen procesos similares
a los descritos, pero los tiempos en
que estos procesos se consolidan
son significativamente diferentes
entre uno y otro órgano como lo es,
por ejemplo, entre el hueso y el
músculo. Finalmente, debemos
agregar que nunca habrá "un gen
del deportista" como muchos
pretenden y así asombrar y dar
expectativas espectaculares a la vida
de los deportistas. El rendimiento
deportivo es la resultante de una
interacción de fenómenos biológicos
y cada fenómeno posee una
dependencia genética específica,
es decir, el rendimiento depende de
una interacción de muchos genes.
Sólo queda por preguntarse, ante
estos avances en el área del ejercicio
físico, ¿cuándo la actividad física y
el deporte será una preocupación
académica e intelectual seria y
responsable por parte de las
universidades?
MECANISMOS DE UTILIZACIÓN DE
LAS FUENTES ENERGÉTICAS
Este es otro aspecto tremendamente
abordado hoy por los investigadores,
gracias al fenómeno epidemiológico
que se ha generado en nuestra
sociedad: el de la obesidad. Las
publicaciones sobre utilización de
substratos energéticos son muchos,
los modelos y protocolos ya no dejan
espacio a la simple imaginación.
Observemos este fenómeno mediante
un cuadro comparativo del fisiólogo,
Dr. Peronet, entre el gasto que efectúa
un mismo sujeto de 70 kilos,
alimentado de igual forma para cada
experimento y que corre una misma
distancia pero a diferentes velocidades.
Como podemos observar, el gasto
calórico para ambas carreras es el
mismo ya que el trabajo es el mismo,
es decir, peso corporal por distancia.
Sin embargo, la sensación de fatiga
es diferente y se debe básicamente a
que este mismo atleta utiliza vías
metabólicas diferentes y tipos de
fuentes energéticas en proporciones
o porcentajes diferentes. Vemos que
en la carrera de 30 minutos ocupó más
hidratos de carbono que grasas,
mientras que en la carrera lenta ocupó
más grasas que azúcares. Esto ya nos
deja una reflexión sobre lo que
debemos comer después de un
entrenamiento efectuado a diferentes
intensidades.
Pero lo que me motiva a presentar
este fenómeno, el de utilización de las
diferentes fuentes de energía, es que
es un fenómeno significativamente
modificable en el ser humano con el
entrenamiento adecuado, con mucha
rentabilidad en el rendimiento y, por
sobre todo, deseo recalcar que estas
modificaciones dependen, una vez
más, de la posibilidad que le demos
al organismo con el entrenamiento
adecuado, de renovar sus proteínas
estructurales y funcionales. Para una
mayor y simple comprensión, veamos
el siguiente esquema que nos permitirá
comprender lo esencial del fenómeno
de síntesis de proteínas:
Al comenzar el ejercicio, se produce
una liberación de catecolaminas por
parte de la glándula suprarrenal entre
las cuales está la adrenalina. Esta viaja
hasta el hígado y el tejido adiposo
para gatillar en estos dos órganos la
salida de grasas y azúcares para poder
entregárselas al músculo. Estos dos
órganos, el hígado y el tejido adiposo
-ahora llamado órgano endocrino por
las múltiples funciones que tiene-,
libera al torrente sanguíneo sus
reservas. En este solo proceso se
requieren señales endocrinas que son
proteínas, transportadores, que son
proteínas, receptores hormonales, que
son proteínas, enzimas que liberan los
depósitos que son proteínas y
transportadores en sangre de grasa y
azúcar que también son proteínas. La
cantidad de grasa a disposición del
músculo va a depender de la cantidad
de hormona y de la cantidad de
receptores y enzimas que posee el
tejido adiposo para su liberación
(proceso llamado lipólisis) y que como
ya sabemos son proteínas.
Sigamos adelante: Una vez que están
en la sangre, estos substratos
energéticos deben atravesar las
membranas de los capilares y del
músculo y se requieren de
transportadores, los que también son
GASTO ENERGETICO (g) Y ORIGEN DE SUBSTRATOS
para una carrera de 10 kilómetros corrida en 30 y 60 minutos
30 min
60 min
Glucosa
8.7
12
Glucógeno muscular
137
121
9.7
Glucógeno hepático
18
Grasas
5.5
10.3
1
1
Proteínas
Glicemia final
C
C A
A LL O
O RR II A
A SS
1.9
700
700
1.03
700
700
Hígado
Glucosa
Tejido
Adiposo
Grasas
Sangre
de ingesta alimenticia que
tendremos.
• Según el tipo de entrenamiento,
deberemos descansar 24 ó 48 horas.
• El tipo de entrenamiento nos
asegura en un 33% el éxito
deportivo, el resto posee una
dependencia genética and genetic
is not democratic. SRN
Músculo
Adrenalina
E
Suprarenales
CO2
proteínas. Una vez en el músculo, estas
grasa y azúcares deben degradarse y
esto es gracias a las enzimas que son
proteínas, luego deben entrar en la
mitocondria, señalada en el círculo
blanco, para producir energía (E). La
mitocondria es el organelo único capaz
de metabolizar los azúcares y las grasas
combinándolos con el oxígeno
(metabolismo aeróbico) y las
mitocondrias aumentan con el
entrenamiento y con ellas su contenido
enzimático. Mitocondria y enzimas,
son proteínas. Estas grasas, dentro del
músculo, una vez más requieren de
transportadores de membrana. Una
vez dentro de la mitocondria las grasas
y los azúcares ya degradados deben
ser convertidos en energía y para eso
se requieren enzimas que también
son proteínas. Luego los desechos
de esta combustión deben ser
transportados por otras proteínas, los
citocromos.
H2O
Para finalizar diremos que en este
resumen de cómo se produce la
energía, hay entre medio unos 50
fenómenos bioquímicos más que
guardan relación con la cantidad y tipo
de energía que el corredor va, puede
y/o debe utilizar.
Su éxito va a depender de cómo su
genética está acondicionada para
poder reparar con el entrenamiento y
aumentar cada proteína de la cual
depende el fenómeno de producción
de energía.
SINTESIS
• Debemos entrenar adecuadamente.
• Según el tipo de entrenamiento,
será el tipo de recambio que
experimentaremos.
• Según el tipo de entrenamiento,
será el tipo de recurso energético
que utilizaremos.
• Según el entrenamiento, será el tipo
REFERENCIAS: www.fisiogym.cl
*Carlos Saavedra posee el grado
de Master en Fisiología del Ejercicio
de la Universidad Laval de Canadá
y actualmente es profesor e
investigador invitado del
Laboratorio de Nutrición Humana
de la Universidad de Clermont
Ferrand, Francia. Ha proseguido
estudios de Post Grado en
Argentina, Brasil, Colombia,
Canadá, Japón, Estonia, Finlandia
y Suiza. Pertenece a diversas
Sociedades Científicas Nacionales
e Internacionales y actualmente es
profesor adjunto del Laboratorio
de Metabolismo Energético del
INTA y conferencista de diversas
Sociedades en Latinoamérica. Ha
sido atleta seleccionado nacional
(campeón Sudamericano Juvenil
de los 400 mts. vallas) y participante
en maratones y triatlones.
Actualmente, su tema central de
estudio, es el de los triglicéridos
intramusculares y su relación con
insulino-sensibilidad.
Santiago Runners
¿CÓMO ELIGE EL MÚSCULO CUÁNTA Y QUÉ TIPO
DE ENERGIA UTILIZAR?
21
Maratón de Tromso, Noruega:
Un Chileno en el
Círculo Polar
• Sólo 238 son los valientes que enfrentarán
este desafío, provenientes de más de 30
países. Latinoamérica está representada por
un par de brasileñas, un argentino y un chileno.
Por Francisco López
1
4.405 kilómetros. Esa es la
distancia que hay entre Santiago de
Chile y Tromso, la ciudad Noruega,
ubicada 1.700 kms. al norte de Oslo,
en donde me encuentro para correr
el “Midnight Sun Marathon”, la única
prueba certificada que se corre en el
Círculo Polar Artico el día 19 de junio.
Cuando los amigables noruegos me
preguntan si he venido directamente
desde Chile sólo a correr esta carrera,
se me ablanda el corazón y les digo
que sí. Aprovecho la oportunidad de
decirlo de una vez para sacar el tema
del camino:
Miesposaesfinlandesaporloquetod
oslosañostomovacacionesenjunioy
viajamosasupaísavisitarsufamilia.
Ya está. El capítulo de cómo la conocí
lo dejaré para otra ocasión.
Santiago Runners
Es 17 de junio y tomo en Helsinki el
avión que me llevará primero a Oslo
y luego a Tromso. Esta es una
pequeña ciudad (61.000 habitantes,
o sea, más del 1% de los noruegos),
ubicada a 70 grados latitud norte.
Algo así como a dos mil kilómetros
del Polo Norte. Es un lugar frío, de
veranos muy cortos. Por ejemplo, el
de este año fue un día miércoles.
22
Bueno, en realidad no son tan cortos;
tiene dos meses de verano, en los
cuales el sol no se pone y luego ocho
meses de invierno y oscuridad en la
cual hay apenas 3 horitas de luz al
día. El taxista que me lleva al hotel,
un hombre de unos 30 años, con
tatuajes en ambos brazos y aritos en
la oreja, nariz, ceja y labio, me
pregunta si vengo a la carrera. Le digo
que sí, y a los pocos minutos, ante mi
interés, me lleva a ver –free of charge,
menos mal- la principal dificultad de
la carrera: el puente de 1.060 metros
de largo y 60 metros de elevación
que une Tromso con la isla adyacente
y que los corredores debemos cruzar
en los kilómetros 2 y 19.
Llego al hotel que reservé vía internet,
Rainbow Hotel. Mi habitación es
minúscula, sin closet, pero bastante
acogedora y con un gran blackout,
elemento imprescindible para poder
dormir cuando la noche es tan
iluminada como una tarde primaveral
en Santiago.
Salgo a recorrer la ciudad. El centro
se agota en un par de calles y unas
pocas cuadras. Todo es muy bonito,
ordenado y CARO. Una lata de Coca
Cola Light, que cuesta 1 euro (casi
800 pesos) sabe bastante parecida a
las que en Chile compramos por $300,
pero… en fin.
El 18 de junio en la mañana salgo a
buscar mi número al KulturHuuset,
lugar que constituirá el centro
neurálgico de esta competencia. Allí
está la partida, la llegada, y todo el
equipo organizador. Descubro que
seremos 238 los valientes que
enfrentaremos el desafío,
provenientes de más de 30 países.
Latinoamérica está representada por
un par de brasileñas, un argentino y
este humilde servidor.
Empiezo a reconocer caras que ya
había visto en el avión y en el hotel.
Es imposible evitar entablar una
conversación. Conversamos sobre la
carrera americanos, suizos, francesas,
inglesas, escoceses... Todos hemos
llegado atraídos por la perspectiva
de correr un maratón en el borde
norte del planeta (donde el diablo
perdió la parka) y llegar cerca de la
medianoche a la meta con el sol en
alto (la carrera se inicia a las 20:30
P.M. del 19). En la noche, dado que
no hay pasta party incluida, la
organización invita –es un decir– a un
buffet que por módicos 30 euros nos
per mitirá comer los últimos
carbohidratos antes del evento.
Me siento en una mesa en la que hay
un escocés, un galés, dos irlandeses
con sus señoras, un noruego de origen
africano y un americano.
Chachareamos alegremente cada uno
contando quién es, de dónde viene,
a qué aspira en la carrera y, bueno,
los mismos temas que hablamos
siempre los maratonistas. El escocés
-que anda vestido como tal, con
faldita- me cuenta que correrá a
beneficio de una organización
disfrazado de pingüino. El noruego-
Estamos presentes unos 150
corredores en el buffet, o sea, el 70%
de los competidores. Después de
una hora de comida, el director de la
carrera toma la palabra para destacar
a algunos corredores. Se levanta un
señor mayor (no como Ulloa y
Chaguito, sino mayor. Por lo menos
tres meses más) que ha corrido las
15 versiones de la prueba, según se
nos traduce. Curioso. El señor habla
cerca de tres minutos y la traducción
dura algo así como diez segundos.
Hago una nota mental: aprender
noruego, al parecer, es un idioma
muy sintético. Se levanta un inglés
que ha corrido este maratón 12 veces,
y promociona otra carrera en Tromso
que se corre en invierno, destacando
lo hermoso que es correr con nieve,
viento, temperaturas bajo cero y
oscuridad total. Yo le creo. Cerca de
la medianoche me voy al sobre.
Día del evento y me baja la ansiedad:
¿Cómo matar todo un día para
empezar la carrera a las 20:30 P.M.?
El pronóstico del tiempo es bueno:
8 grados a la partida, con leve baja
durante el transcurso de la carrera,
viento de 0,3 m/s y sin lluvia. Me baja
la duda: ¿Qué ponerme? Mal que
mal, estoy al ladito del Polo Norte.
¿Deberé usar camiseta térmica, gorro,
orejeras, guantes, tights…?
Por las dudas, pongo todo en un
bolso y me voy a la partida. Allí decido
vestirme como los demás: pantalones
cortos, guantes y una camiseta debajo
de la gloriosa amarilla, por supuesto.
Partimos a las 20:30 en punto y
empiezo a ver cosas raras: los
kilómetros están marcados al revés.
Indican lo que falta para la meta. Veo
un 42 al lado del camino. En fin. En
el kilómetro dos, está el famoso
puente. Estoy fresco –en todo
sentido-, así es que subo a toda
máquina: con 60 metros de elevación
en 500 metros (como un 12% de
pendientes), lo paso en 4:15’’.
Perfecto, no noté mucho daño.
Entramos a otra isla de paisajes más
campestres. Allí los kilómetros
empiezan a salir con fluidez. Del 3 al
15 los paso en un rango de entre
4.09 y 4:15. En el Km. 16 nos
devolvemos camino al puente para
cruzarlo nuevamente y volver a la isla
con viento en contra. Del 16 al 19
corro a 4:25. Paso el media maratón
en 1:28, un poco apretado, eso sí.
Entre el kilómetro 23 al 26, noto que
algo le pasó a mi Polar: me muestra
que los corrí a 4:35. Me pregunto:
¿se habrá acabado la pila?
me saluda con un alegre aleteo. Faltan
10 kilómetros.
Kilómetro 27: 4:50. Ya caché: la pila
que se acabó es la mía. Esta sensación
la he vivido antes. ¡Qué diablos! Un
runner debe estar siempre listo.
Me tomo el cuarto Power-Gel. Hago
otra anotación mental: no comprar
más estas cosas. Las tomo y no pasa
nada.
Plan B: hacer turismo. Reparo en lo
bello que son los paisajes noruegos.
Este es un maratón solitario. La mayor
parte del tiempo voy corriendo solo.
Unicamente me guío por una línea
azul en el suelo para no perder el
camino.
Empiezo a reparar en las subidas y
bajadas que he tenido que enfrentar
desde el kilómetro 22 que no estaban
en el mapa de la carrera. Otra
anotación mental. No confiar nunca
más en la altimetría de la carrera
Durante toda la carrera han salido
pocos, pero entusiastas seguidores
(niños, adultos, ancianos) que nos
alientan diciendo algo así como ¡Ella!,
¡Ella!, ¡Ella! Hasta hace un rato era
minimalista para saludarlos. Ahora
que voy en modo de turismo,
devuelvo sonrisas, digo algunas
palabras, levanto brazos.
En el kilómetro 31, a la vuelta de un
loop de la carrera, veo a mi amigo
escocés, vestido de pingüino, que
Voy a 5:10 - 5:20, la temperatura ha
bajado bastante y miro con envidia a
los que están corriendo con patas,
chaquetas y buzos.
Me pasa un corredor en el kilómetro
35. Me imagino que nos une un
elástico grueso y que él me va tirando.
Subo mi ritmo por unos cinco minutos,
pero el elástico se estiiiiiira y se corta.
De vuelta a correr solito.
Faltan dos kilómetros y un calambre
fuerte me viene a la pierna izquierda.
Esto es nuevo. Me resisto a caminar.
No lo he hecho en siete maratones y
no será ésta la ocasión de hacerlo.
Falta un kilómetro. Trato de apurarme,
pero el calambre se extiende a la otra
pierna. Ummm, mejor sigo despacito,
total ya estoy cerca.
Una multitud (unas 100 personas) nos
espera en la meta coreando el ¡Ella!,
¡Ella!, ¡Ella! famoso.
Cruzo en 3:15’:21’’. La temperatura
es de 2 grados, me pasan una frazada
y un vaso de champaña frío. Un
periodista local me entrevista. Al
parecer no es frecuente ver un chileno
por estos lares.
Me gustaría quedarme, pero el frío
puede más y me voy tranquilito con
mi medalla al cuello.
La noche es clara; pienso en que no
volveré a este lugar, pero un pedacito
de mi corazón se ha quedado en
Tromso. Y nuestro Club ha clavado
otra bandera en un rincón de este
planeta. SRN
Santiago Runners
africano dice que apunta a 2:25, y los
irlandeses quieren terminar rápido
para irse a los pubs que pueda haber
en la ciudad.
23
El
24
a las
4
Q
uien haya seguido los
pasos de nuestro club, habrá
encontrado sin duda una huella
amarilla en los principales escenarios
maratónicos del mundo. Reconocerá
verdaderos surcos en Santiago y en
Nueva York, pero también líneas
indelebles de perseverancia y de
virtud en Amsterdam, Paris, Boston,
Buenos Aires o Berlín.
Cada circuito ha sabido de nuestros
carros de fuego, entrenados para
alcanzar intangibles afanes de logro,
todos íntimos y personales.
• Todo Runner sabe que una vez
al año, a esa hora en que se va
terminando el calendario y en la
que el entorno corre hacia todas
y a la vez ninguna parte, ahí, en
ese preciso y único momento, el
Club hace una convocatoria a la
amistad, para “subir al alma”.
Por Sergio Germain
En efecto, nuestras páginas se han
ido colmando de marcas logradas y
también de frustraciones, acaecidas
sabiamente para servir de fragua a
desafíos mayores. Muchos nombres
de grandes amigos, deportistas de
estirpe, que no pasarán a la historia,
sino más bien directo a la tradición.
Pero de todas las partidas, hay una
que se encuentra anclada en el
“Espíritu Runner” como ícono y
emblema, batiendo a las que se
encuentran desprendidas de marcas
y de tiempos. Me refiero a la partida
del “24 a las 4”.
Todo Runner sabe que una vez al
año, a esa hora en que se va
terminando el calendario y en la que
el entorno corre hacia todas y a la
vez ninguna parte, ahí, en ese preciso
y único momento, el Club hace una
convocatoria a la amistad, para “subir
al alma”.
Entonces se detiene el tiempo y los
gloriosos colores amarillos dibujan
una estela inconfundible, que
avanzando por Escrivá de Balaguer,
enrostra Vespucio y luego se lanza
hacia su destino: la Virgen.
Esa es una corrida de amistad,
porque no tiene más razón de
convocatoria que la de agradecer.
Si se pudieran escudriñar los
pensamientos aflorados durante el
ascenso caluroso de 7,5 kilómetros,
veríamos balances del actuar y del
ser, expuestos al silencio de la
naturaleza y engarzados en la fe.
Externamente, los que hablan dejan
escurrir trivialidades porque en el
ejercicio de la amistad, muchas
veces lo profundo se refiere al estar
y no al decir. Se sube con sentido
de pertenencia. Se comparte el
agua, la alegría, el calor y la ruta
que pareciera ser exclusiva de
Runners, no por su uso pero sí por
su sentido.
La corrida del “24 a las 4” es también
un ejercicio de humildad y de
perseverancia. Ahí, nadie carga sus
medallas. Se llega con poco aliento
al último peldaño y si uno aquieta el
corazón, alcanza a escuchar desde
toda opción de fe, los latidos, esos
pulsos nítidos, verdaderos
agradeceres de silencio y de pausa.
Luego se da cabida al rito de la foto
que retratará la cara de ese “Espíritu
Runner” y el registro de su mística
de cuerpo entero.
Habrá de alegrarse la Virgen y, sin
duda, templará las voluntades de
sus invitados. Para que se repita la
visita dirá.
Un manto de magia nos acompaña
durante el descenso. Arriba quedan
los encargos y las gratitudes de todo
un año. El encuentro se va cerrando.
Ya abajo, nunca falta algún engañito
de licor y de dulce. Se acerca la
Noche Buena.
Nos vamos despidiendo de la gran
fiesta del “Espíritu Runner”. El “24
a las 4” ocurren cosas fuera de
época. Se respiran cuesta arriba las
virtudes más nobles y después
regresamos a nuestras casas sin caer
quizás totalmente en la cuenta, del
privilegio accedido en esa hora en
que detenemos el tiempo, mientras
la ciudad corre. SRN
pág.25
Aviso
Avery
Dennison
Algo más que otro
Maratón
M
aratón de París, Abril
2004
• “El maratón de París permanece
para mí como un recuerdo
imborrable. Tal vez haya sido
mi despedida en esa actividad,
ya que en los meses siguientes
a la carrera tuve que someterme
a una cirugía en mi rodilla
izquierda, y el pronóstico de
mis posibilidades de correr en
el futuro, aún no es claro”.
• “Pero confío en recibir, si pongo
de mi parte, el don de estar
algún día parado de nuevo en
Santiago Runners
el punto de partida”.
26
UN REGALO DIVINO
Soy de la opinión que cada vez que
la vida te permite llegar a pararte en
la partida de un maratón, estás
recibiendo un importante regalo de
Dios. En efecto, son tantos los
imponderables que pueden ocurrir
desde que tomas la primera decisión
de intentarlo hasta que llegas a estar
ahí parado, que no puedes dejar de
sentir un profundo agradecimiento
cada una de las 13 veces –en mi casoque lo he logrado antes. Queda, por
supuesto, la carrera misma, pero ése
ya es otro tema, otro desafío.
En mi concepto, si llegas a estar en
el punto de partida, es porque estás
preparado para correrla, ya que el
maratón no permite improvisar.
Hechas las tareas, al comenzar la
carrera debes simplemente salir al
frente y hacer aquello para lo que te
has preparado, teniendo cuidado de
no equivocarte.
LO ESPECIAL DE PARÍS
Llegar a correr París había sido un
anhelo que tenía desde hacía largo
tiempo. Desde el año 1998, en que
habíamos entrenado con Felipe
Cabello y Jaime Winter con la
intención de romper allí, por primera
vez, la barrera de las tres horas. Ellos
llegaron y cumplieron su objetivo. En
tanto yo, por alguna razón, no pude
viajar, pese a que logré cumplir lo
p ro p u e s t o a c á e n S a n t i a g o .
Por Enrique Urrejola
Había escuchado que el maratón de
París era una carrera bastante plana,
llena de encanto, cálida, bien
organizada y un verdadero recorrido
turístico por los puntos más atractivos
de la Ciudad Luz. Allá por noviembre
de 2003 se empezó a organizar un
grupo de amigos que firmamos el
compromiso. Fui uno de los primeros
en inscribirme, ilusionado con la
perspectiva de un hermoso viaje a
Europa, de una espléndida carrera,
con la posibilidad de un buen tiempo,
y de unos momentos inolvidables con
un grupo de buenos amigos.
En esta oportunidad la realidad
superaría la expectativa. París no nos
defraudaría.
EL ENTRENAMIENTO
Como en otras oportunidades,
desarrollé un programa con el
objetivo de bajar las tres horas. Sabía
que eso era riesgoso. Las últimas
veces que había entrenado a ese
nivel, había sufrido frecuentes
lesiones. Traté de introducir algunas
modificaciones protectivas al
programa: pretemporada de
musculación, trabajos de pista a
menos velocidad que en el pasado,
mayor kilometraje total. El conjunto
funcionó. Pese a molestias en las
rodillas que fueron siempre en
aumento, los meses de verano fueron
pasando y el programa se cumplía.
Soy de la opinión que, si se logra
entrenar durante cuatro o cinco
meses en forma consistente de
acuerdo a un programa y sin lesiones,
un maratonista experimentado está
LLEGAR A PARÍS
El hombre propone y Dios dispone.
A principios de marzo, por razones
de fuerza mayor, me había visto en la
obligación de anular mis pasajes e
informar a todos mis amigos que no
asistiría. Sorpresivamente, apenas dos
semanas antes de la carrera, las cosas
se fueron dando favorablemente, y
con gran alegría pude incorporarme
de nuevo al grupo de los viajeros. El
jueves 1 de abril, en una lluviosa
mañana parisina, me encontraba con
Ricardo Montero y Carlos Serrano
frente a la pirámide de cristal del
Louvre, con el finde hacer el único
trote previo a la carrera, hasta el Arco
de Triunfo. Atrás quedaban Frankfurt,
la Alsacia francesa, con el pueblito
medieval de Riquewhir, y la catedral
de Reims, donde tantos reyes de
Francia fueron coronados. Habíamos
llegado al maratón de París, y sólo
faltaba correrla.
LA CARRERA
El domingo 4 de abril amaneció con
lluvia y viento sobre París. Tomé el
metro en la estación de Saint
Germain des Prés, y al llegar al Arco
de Triunfo, punto de partida, vi que
ya no llovía. Encuentros fugaces con
algunos compañeros de equipo, de
pocas palabras, y ya estaba en el
corral de los “ballons rouges” para
corredores de tres horas. Sabía que
habría tres “pacers” que correrían
justo al paso para bajar las tres horas.
Ellos irían con unos globos rojos
amarrados a la espalda con un mástil,
para que pudieran verse de lejos.
Me había propuesto no seguir a esos
tipos, ya que sabía que yo no estaba
para esa marca ese día. En la partida,
ya con sol, tenía a uno de los
“pacers” casi a mi lado. Me repetí
varias veces que no caería en la
tentación de seguirlo. Sonó el
disparo a las 8:30 horas en punto y
nos fuimos en bajada por la ancha
avenida. Fue un verdadero esfuerzo
dejar alejarse gradualmente a los
globos rojos, pero ya en el kilómetro
3, en la hermosa Rue Rívoli, estaba
corriendo al paso de 4:23 por
kilómetro que me había propuesto,
para un objetivo de 3:05’.
Para mí fue uno de los mejores
maratones que he corrido. Ritmo
parejo a lo largo de todo el recorrido,
autocontrol permanente, y adecuado
manejo del cansancio en los últimos
kilómetros para no caer en el paso.
Segunda mitad más rápida que la
primera. En realidad, habría sido algo
perfecto, a no ser por un detalle.
EL DETALLE
Desde el kilómetro 20 o algo así me
había dado cuenta que delante mío
iban Gabriel Ruiz Tagle y Raimundo
Valenzuela. Gabriel es un maratonista
difícil, con marca previa de 3:11 en
Concepción, y muchas posibilidades
de mejorar. Raimundo o “Paila” es
temperamental, y estaba corriendo
rápido como nunca lo había hecho,
al lado de su amigo. Los alcancé en
el kilómetro 22. Corrimos los tres
juntos sin hablarnos, ayudándonos
mutuamente a marcar ritmo, hasta
el kilómetro 37. En ese momento, vi
que empezaban a rezagarse, y de
allí en adelante mi única
preocupación iba a ser, creía yo,
mantener el ritmo hasta la meta.
El ritmo lo mantuve, pero alguien hizo
más que eso. En plena Rue Foch,
justo en la marca del kilómetro 42,
con la meta a la vista, sentí algo así
como unos gruñidos guturales a mi
lado y vi pasar, a toda velocidad, a
Raimundo. Traté de resistirle, pero la
verdad es que no estaba preparado
para correr una carrera de 100 metros
planos al final de un maratón. Crucé
la meta en 3:05:00, un segundo
después del Paila. Gabriel llegó
apenas 20 segundos detrás nuestro.
En la meta nos esperaban José Luis
González y Fernando Guzmán, que
pese a haber llegado hacía un rato,
no se habían movido de la meta para
recibir a sus compañeros.
LA REUNIÓN POSTERIOR
La gran mayoría de los Runners
estaban muy satisfechos con su
resultado. Se lograron cosas
importantes, como las 2:33 de José
Luis González, récord absoluto del
Club; las 2:46 de Raimundo Errázuriz;
2:56 de Guzmán; Juan Carlos
Fernández había quebrado por fin
la marca de las tres horas. Gabriel y
Raimundo habían mejorado
muchísimo sus marcas personales.
Aquella noche nos reunimos casi
todos, con nuestras familias, en un
restaurante del Barrio Latino, del cual
habíamos reservado un privado para
nosotros. Fueron momentos de gran
alegría, no exentos de humor e ironía.
Nadie se quedó sin hablar.
EL DÍA DESPUÉS
París permanece para mí como un
recuerdo imborrable, de grandes
satisfacciones y momentos felices que
se pueden vivir como maratonista.
Tal vez haya sido mi despedida en
esa actividad. Aún no lo se. En los
meses siguientes tuve que someterme
a cirugía en mi rodilla izquierda, y el
pronóstico de mis posibilidades de
correr en el futuro, aún no es claro.
Tengo una fe ciega de que Dios me
permitirá seguir corriendo, aunque
sea en el futuro a menor exigencia
y solamente por diversión. Pero
confío en recibir, si pongo de mi
parte, el don de estar algún día
parado nuevamente en el punto de
partida. Confiemos que así sea. SRN
Santiago Runners
capacitado para correr un buen
maratón. En mi caso, esta vez, el
entrenamiento se pudo realizar sin
problemas. El control de medio
maratón en marzo sería el indicador
de mi capacidad. Llegado el día del
control, terminé en 1:25:29. De
acuerdo a mi experiencia, ese tiempo
proyectaba para mí un maratón de
algo más de tres horas.
27
AVISO
3 ERA MARATHON
Santiago Runners
Suspiro
Cocinando con...
de Limeña
29
Por: Rosita Villanueva
INGREDIENTES:
Dos latas de leche evaporada Ideal
Una lata de leche condensada Nestlé
Dos yemas de huevo
Una cucharadita de esencia de
vainilla
1/4 de taza de azúcar
1/2 taza de oporto
3 claras de huevo
canela en polvo
PREPARACIÓN:
En una olla poner la leche evaporada
Ideal junto con la leche condensada,
llevar a fuego bajo revolviendo
constantemente hasta formar un
manjar blanco suave. Retirar del
fuego, agregar las yemas batidas y
coladas con la esencia de vainilla en
forma de hilo, llevar nuevamente
al fuego por unos minutos más. Verter
esta preparación en copas
individuales. Poner el azúcar con el
oporto y dejar en el fuego hasta
que obtenga consistencia de
almíbar. Batir las claras a punto de
nieve y agregar gradualmente el
almíbar. Distribuir este merengue
sobre las copas y espolvorear con la
canela en polvo.
Tiempo de Preparación: 20 minutos
Tiempo de Cocción: 20 Minutos
Tips: al momento de incorporar las
yemas a una preparación caliente,
hacerlo en forma de hilo moviendo
vigorosamente, así evitará que se
cocinen. SRN
Nacimientos
KINESIOLOGO DEPORTIVO
Jorge Aldunate Hidalgo
Tratamientos a domicilio $12.000 la
sesión (Ultrasonido, ultratermia,
ejercicios, etc). Llamar al 98432672
MASAJISTA DEPORTIVO
Sergio Aguayo Bustamante,
Quiromasajista, fono 95997829
Precio socios Santiago Runners:
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sus mellizos Matías y Paula"
Santiago Runners
Nuevos Socios
30
Nelson Díaz
45 años, soltero, una hija, Erika, estudiante
de veterinaria. Ingeniero Comercial, con
especialización en negocios internacionales.
Sus hobbies son la música clásica, folklórica
y últimamente la romántica; también disfruta
del cine y el tenis. Se declara un velocista
de juventud, siendo su especialidad los 1.500
metros planos. Espera debutar en el próximo
maratón de Santiago y dejar su estreno
internacional para 2005.
Daniel Ubilla
33 años, soltero. De profesión Ingeniero Civil
en Informática, con magíster en
Administración de Empresas. Sus hobbies
son leer de todo y ver deportes. Tiene seis
maratones (tres veces Santiago, dos veces
Puerto Varas y una vez Viña del Mar).
Actualmente se está preparando para su
debut internacional en Chicago 2004. Se
declara hincha de Cobreloa, valdiviano de
corazón, fanático de sus sobrinos y amante
de los tallarines.
Fabio Bertranou
38 años, nació en Mendoza, Argentina.
Casado con Lucía, tiene dos hijos, Camila
(6) y Matías (6), ambos entusiastas “kid
runners” de los 7K de Nike. Economista de
profesión. Sus hobbies son la lectura y viajar,
ex remista del Club Regatas de Mendoza.
Espera debutar en Nueva York el próximo 2
de noviembre. Se declara hincha de San
Lorenzo de Almagro (Argentina).
Jorge Blanco
43 años, casado con María Soledad Leal
(artista y profesora de artes visuales), tres
hijos: Mariana (13), Jorge (10) y Gonzalo (5).
De profesión Ingeniero Civil. Sus hobbies
son la música (está aprendiendo a tocar
batería) y la vida al aire libre. Debutó en abril
pasado en el maratón Líder y quiere hacer
su debut internacional en Chicago. Se declara
“ex” hincha de la “U”.
Sergio Naranjo
40 años, casado con Mariluz Verdugo
(abogado), una hija, Francisca (3 años) y un
hijo que viene en camino. De profesión
abogado. Sus hobbies son la docencia, el
tenis, la natación y el buceo. Ha corrido nueve
maratones y por el año 1992 corrió una en
2 horas y 41 minutos. El año pasado redebutó en el maratón de Nueva York y espera
poco a poco acercarse a sus mejores marcas.
Se declara hincha de la “U”.
Andrés Calderón
44 años, casado con Claudia (arquitecto).
Tiene dos hijos, Nicolás (16) y Denisse (13).
De profesión Contador Auditor. Sus hobbies
son el tenis, el ski y los deportes en general.
Ha entrenado para muchas maratones, sin
embargo, continuas lesiones lo han dejado
a mitad de camino, su perseverancia lo llevará
a terminar en un futuro cercano el sueño de
correr sus primeros 42K y de ahí, no parar
más. Se declara hincha de la “U”.
Raúl Jara
46 años, casado con Silvia Pinilla, tres hijas,
Daniela (ingeniero comercial), Ximena
(estudiante de medicina) y Natalia (4° medio).
De profesión Contador Auditor con magíster
en Administración. Sus hobbies son el
trecking y el montañismo. Tiene dos
maratones en el cuerpo (Viña del Mar y
Santiago) y ahora se está preparando para
su debut internacional en Chicago 2004.
Reneé Hill
Gringa de nacimiento, soltera con pololo
(Christian Lühr). De profesión nutricionista.
Sus hobbies son el triatlón, mountanbike,
windsurf, yoga, leer, tejer, coser y la artesanía.
Debutó en el maratón de Sacramento
(California, U.S.A.) y espera correr varios
triatlones durante la temporada 2004-2005.
Se declara hincha de la “U” para no pelear
con su pololo.
Antonio Quer
44 años, soltero declarado y libre de
compromiso. “Catalán”, nació en España y
está avecindado en Chile desde hace siete
años. De profesión Ingeniero Civil Industrial.
Sus hobbies son el ski, jugar Squash y fútbol.
Debutó como maratonista el año 2003
(Santiago y Viña del Mar) y fue profeta en
su tierra, corrió el maratón de Barcelona este
año y se está preparando para Nueva York
2004. Se declara hincha del Barcelona FC
(España).
Rolando Maturana
46 años, casado con Ximena Ortega, dos
hijos, Rolando (16) y Paulina (15). De profesión
Ingeniero Agrónomo y Contador Auditor. Su
hobbie es el estudio. Cuenta con dos
profesiones, dos postítulos, dos diplomados
y sigue cuanto curso de especialización le
ofrecen. Con varias maratones en el cuerpo,
espera debutar internacionalmente el año
2005. Se declara hincha del estudio y del
trote (después de entrenar se va corriendo
a la casa a estudiar).
Claudia Calvo
26 años, soltera y vive con sus papás (Miguel
y Rosalba), tiene 2 hermanas Silvana y
Caterina. De profesión Kinesiólogo (al igual
que su papá). Sus hobbies son el ski, la
lectura y el karate; además, juega tenis (es
jugadora de escalafón nacional) y asiste a
talleres de poesía. Espera debutar en el
maratón de Madrid de abril 2005.
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