Volumen 26 (4); 2014 Nº 91 Sociedad Española de Transfusión Sanguínea y Terapia Celular En Portada Reflexiones “críticas” sobre nuestro actual sistema de hemoterapia N uestra Sociedad ha cumplido 25 años de existencia. En su trayectoria ha cubierto significativamente las expectativas creadas, aquellas que obedecían a los objetivos impulsados entonces por el Plan nacional de Hemoterapia, habiéndose alcanzado un alto nivel de seguridad y calidad transfusional. Hemos asistido a la creación de los Centros de Transfusión Sanguínea (CTS), se ha conseguido un pleno abastecimiento de productos lábiles como consecuencia del aumento del índice de donación, se ha garantizado la seguridad del donante y del receptor y la utilización óptima de la sangre y sus componentes, todo ello en consonancia con las directrices de la Unión Europea. A pesar de estos avances no podemos dejar de percibir algún aspecto “sui géneris” de nuestra organización como la atomización de los CTS, hecho consustancial con nuestra organización en Comunidades Autónomas (CCAA) que cuentan con competencias en materia de Sanidad. En nuestro entorno, los componentes sanguíneos, sin llegar a ser considerados como “medicamentos”, se tratan con el mismo rigor que si lo fueran recibiendo un estricto y necesario control que inevitablemente ha condicionado la concentración de la producción en muy pocos centros, no sólo por razones obvias de economía de escala, sino por motivos de eficiencia y como garantía de uniformidad en la calidad de los mismos. En Francia hoy se han reducido a cuatro los CTS de producción, y se ha centralizado en uno solo el tratamiento de todo el plasma para su uso transfusional. En Inglaterra y Gales son dos los centros productores, en Escocia uno. Las estrictas normas, bien definidas por la guía del Consejo de Europa y los aspectos regulatorios de la comisión europea, son fieles indicadores de ello. Tenemos pues ante nosotros un reto porque los requisitos de calidad van a ser cada vez más exigentes, y con nuestra actual estructura estamos lejos de contar con la capacidad de cumplirlos. Sirva un ejemplo: Dentro de la regulación del plasma destinado a la obtención de hemoderivados, el plasma como materia prima para la obtención de medicamentos debe cumplir con la Guía de normas de correcta fabricación (Anexo 14 de las NCF), lo que se establece a partir de la Directiva 2003/94/CE, no siendo suficientes las correspondientes a la sangre y los componentes sanguíneos para uso transfusional (Directiva 2002/98/CE y sus anexos técnicos Directiva 2004/33/CE, 2005/61/CE y 2005/62/CE) en las que las certificaciones ISO por ejemplo, sí serían suficientes. Las instalaciones de los CTS han sido las idóneas para el tratamiento y conservación de tejidos, y por ello la mayoría de los CTS son también Bancos de Tejidos, habiéndoseles dotado de instalaciones y sistemas de calidad que permiten la correcta manipulación de tejidos y células, entre ellos progenitores hematopoyéticos, desde su extracción, manipulación, selección y conservación, hasta su infusión o implante. Sin ánimo de crear polémica estéril, creemos que en los CTS éstas técnicas se realizan de forma más idónea que en el ambiente hospitalario. No es raro que actividades de terapias avanzadas, lo que llamamos medicamentos celulares o constructos de ingeniería tisular estén desarrollándose en éste contexto. De hecho la Sociedad llegó a incorporar a su nombre el de Terapia Celular y nos encontramos a medio camino, no sabemos en qué punto, del desarrollo de la Medicina Transfusional. Con la nueva ley de especialidades y ateniéndonos al modelo de troncalidad que incluye la de Hematología y Hemoterapia en el tronco médico, la formación de los especialistas en laboratorios biológicos, donde incluimos desde el Servicio de Transfusión (ST) al de trasplante de progenitores y otras terapias avanzadas, queda en franca desventaja, como superespecialización pues se aleja del bloque médico, resultando por tanto incongruente e ineficaz. Es en este sentido por lo que en estos últimos años hemos abordado la necesidad de la existencia de la Medicina Transfusional como especialidad, siendo objeto de debate en el seno de la Junta Directiva de la SETS en varias ocasiones. Otro aspecto que ha caracterizado a los CTS ha sido la distancia mantenida con los Servicios de Transfusión. Hay varios modelos, pero esa línea a veces convertida en foso, en nada ha contribuido a una hemoterapia más integral incluida su formación. Algunas CCAA han logrado sobrepasar esa línea y establecer una organización que garantiza la trazabilidad y la conexión de Continúa en página 3 Sumario Dirección: José Manuel Cárdenas Equipo de Redacción: Erkuden Aranburu Miquel Lozano Carmen Martín Vega Eduardo Muñiz-Díaz Julia Rodríguez Villanueva Iñigo Romón Miguel Angel Vesga EN PORTADA Reflexiones “críticas” sobre nuestro actual sistema de hemoterapia ARTÍCULOS Resultados de una encuesta sobre el proceso de lavado de concentrados de hematíes (CH) a los responsables de Procesamiento de los Centros de Transfusión de España. . . . . . . . . . . . . . . 4 Complicaciones pulmonares relacionadas con la transfusión: LPART, EPC y Disnea asociada a la transfusión. . . . . . . . . . 7 Educación: ahora más que nunca . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 10 Colaboran en este número: Erkuden Aranburu (Pamplona) Virginia Callao (Valencia) Azucena Castrillo (Santiago de Compostela) Iman Ghali (Palma de Mallorca) José Eugenio Guerra (Sevilla - Huelva) Teresa Jiménez-Marco (Palma de Mallorca) Maria Mercedes López Soques (Barcelona) Carmen Mª Martínez-Sánchez (Sevilla Huelva) Salvador Oyonarte (Sevilla) Iñigo Romón (Santander) Edita: SETS - Sociedad Española de Transfusión Sanguínea y Terapia Celular C/ Mariano Cubí, 4 08006 – Barcelona [email protected] Correspondencia con el Editor: josemanuel.cardenasdiazdeespada @osakidetza.net Metabolismo molecular del hierro I . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 14 Una imagen vale más que mil palabras . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18 Organización Mundial de la Salud. A propósito del día mundial del donante. Año 2015 – 14 de junio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 19 Formación en los servicios de transfusión: de la peculiar transcripción de la Directiva Europea 1343/2007 a la nueva norma ISO 9001:2015. . . . . 20 INFORME Cambios y mejoras en el boletín de la SETS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 22 HEMEROTECA Donación y procesamiento. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 24 Clínica. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 28 NORMAS DE PUBLICACIÓN. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 32 BOLETÍN DE INSCRIPCIÓN DE LA SETS. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33 Imprime: Texto y Color 65, s.l. [email protected] Depósito Legal: B46.283/99 2 AGENDA. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 34 Editorial los sistemas de información, facilitando la gestión de existencias, pacientes, necesidades y requerimientos. De nuevo cuando uno tiene como referencia países de nuestro entorno, observamos como el CTS y ST son la misma institución. Uno de los aspectos desde mi punto de vista más oscuros, ha sido la evolución de la relación de la SETS y el CAT. Aún recuerdo la mañana que entré en el Hospital de la Princesa para acudir a mi primera reunión de lo que era el PABAS. Pues bien, a los pocos meses solo quedábamos dos de los allí presentes en lo que decidimos llamar CAT y en la que he vivido “avatares” y situaciones que han traslucido el intento de manipular, dividir o privatizar una institución de larga y prestigiosa evolución científica. Desafortunadamente, durante estos años se han tomado decisiones que hoy se ven equivocadas, algunas de ellas yo diría que por inacción e incomunicación. La crítica a una estructura que parecía insostenible económicamente y la crítica a ciertos cambios, han logrado alejarnos demasiado a pesar de intentos frustrados de acercamiento. Esperemos que los egos personalismos que nos caracterizan o la pugna entre siglas, no nos aleje de una institución que hemos construido con mimo entre todos. Hoy parece que la SETS no ha sabido ocupar el papel que le corresponde por historia y por derecho. Se ha hecho mal, pero estamos destinados a entendernos, a cuidar y ocuparnos de la calidad de nuestra hemoterapia de forma conjunta. Hemos cambiado y tenemos la obligación de ser sostenibles e igualitarios. A veces se ha echado en falta la creación de una “Agencia Española de Transfusión” en nuestro sistema organizativo. Como ejemplo, hemos citado en no pocas ocasiones a la eficiente y prestigiosa forma de organización de la ONT. Es curioso como en algunas cosas lo hacemos bien y en otras no tanto. La falta de una estructura de organización mas coordinada ha condicionado que se tomen medidas relativamente diferenciadas relativas a la seguridad de la sangre y al tratamiento o selección de los donantes. En un Boletín reciente se apelaba a la “Alianza entre los CTS” refiriéndose al propio Comité Técnico de Directores, que a pesar de su buena contribución, dista mucho de ser una organización dinámica, ágil y con las competencias suficientes para una coordinación eficiente. El Comité Científico para la Seguridad Transfusional (CCST) en el contexto del Ministerio de Sanidad no ha podido evitar estas diferencias, y como consecuencia que haya diferentes medidas de cribado respecto del HTLV, Chagas, Paludismo, anti-HBc, distintos criterios de selección de donantes por viajes, ausencia de mapas de zonas endémicas unificados, cuestionarios unificados, etc… a pesar de ser un órgano institucional que ha merecido todo nuestro respeto y ha dado respuesta oficial a muchos de los debates que nos acosan. Bien es verdad que a veces el CCST va por detrás o tarda en dar sus recomendaciones, pero soy un defensor de sus aportaciones, y más en un contexto como el actual, desprovisto de una participación más activa de los gestores de los CTS. Nos vamos asociando, ampliamos áreas y rompemos barreras. Así fue una acertada idea tener una revista oficial de difusión en Blood Transfusion, junto a otras sociedades científicas. La necesidad de hacer nuestra actividad más sostenible nos llevó a las alianzas con otras Sociedades afines; así en el Congreso de Murcia, tuvimos un simposio conjunto con la Asociación Portuguesa de Inmuno Hemoterapia (APIH) de donde surgió la idea de hacer congresos conjuntos. Nuestra Sociedad tiene que dar respuesta a la sostenibilidad de nuestras reuniones, algo que la industria nos ha pedido en varias ocasiones. La realidad es que si no fuera por su financiación no serian posibles nuestros congresos. También sabemos que nuestra reunión es la más importante de nuestras fuentes de financiación, pero ello no debe alejarnos de la realidad actual en la que para la difusión de la ciencia, de la Medicina Transfusional, no es necesario un congreso anual, más que cuando hay ISBT. De nuevo observamos que nuestros vecinos, Francia o Portugal lo hacen cada dos años. Es decir, no estamos planteando una rareza, lo raro es que sigamos haciendo una reunión anual cuando no hay tiempo de producir ciencia o de aportar nuevos conocimientos. Por ello la idea de hacer una reunión con la APIH y la SETS en principio parece buena, pero no para aumentar congresos sino para plantear una reducción de los mismos, cosa que nos agradecería la industria que es la que los mantiene, y la propia ciencia. Establecer Alianzas con el Mediterráneo no parece acertado en tanto en cuanto ya las tenemos en el marco de la ISBT donde la lengua es el inglés. Es aquí, en la experiencia ibérica, vehiculizados por las dos lenguas que utilicemos, en donde podemos pretender que se abra un ámbito muy significativo en el que compartir ciencia y desarrollos tecnológicos con los países de influencia de ambas lenguas; esto supondría una oportunidad para las regiones africanas y latinoamericanas, algo verdaderamente novedoso y necesario, cuya difusión además puede ser atractiva para la industria y para los profesionales de estas regiones. La transferencia del conocimiento se facilita entre otras cosas, cuando no hay barreras lingüísticas. Vemos que son varios los retos que tenemos ante nosotros en una Sociedad que si bien es antigua, no es poderosa ni en número de asociados, ni en ámbito territorial, ni en el económico. No es una Sociedad relacionada con la Farmacoindustria sino más bien con el diagnóstico y los productos sanitarios. Una Sociedad con mucho campo por delante, el de la Medicina Transfusional, que seguirá atomizada entre varias Sociedades. Una formación de la especialidad que acaba de cambiar y donde nuestra actividad brilla por su ausencia, un recambio de profesionales complicado, en parte por desconocimiento de nuestra actividad. Una atomización que pide una reordenación y una concentración sin prejuicios ni ambages. Para finalizar un ejemplo. Llevamos más de 25 años sin poder articular eficientemente el abastecimiento de plasma por la absurda falta de capacidad de acuerdos. Antes no era posible por la falta de plasma, pero ahora el absurdo hace que no podamos ir a la autosuficiencia hoy marcada por las gammaglobulinas, una vez llegados a la suficiencia de albúmina. Son tantos los retos y el trabajo por hacer que parece que hayamos hecho nada, pero no es así. Simplemente estamos en un mundo que cambia a gran velocidad y o lo hacemos nosotros al mismo ritmo, o nos quedamos anclados y sin dar respuesta a situaciones que seguirán siendo insostenibles per secula seculorum. j Salvador Oyonarte CRTS de Sevilla 3 Artículo Resultados de una encuesta sobre el proceso de lavado de concentrados de hematíes (CH) a los responsables de Procesamiento de los Centros de Transfusión de España A. Castrillo, M.A. Pérez, J.L. Arroyo, M.L. Ayape, J.M. Aznar, Y. Cabanillas, A. Castro, E. Girona, M. Jurado, L. Larrea, M.R. Maymo, C. Muñoz, M. Ortiz, A. Pajares, A.I. Pérez, J. Rivera, M.J. Rodriguez, E. Romero, M. Yáñez. El objetivo de realizar esta encuesta ha sido intentar conocer los aspectos más relevantes en la estrategia del lavado de CH en los Centros de transfusión (CT) del país, como la selección del CH, el sistema utilizado, días de almacenamiento, indicaciones, personal que lo realiza o frecuencia con que se realiza. Se procedió al envío de esta encuesta mediante correo electrónico a los profesionales encargados del procesamiento de componentes sanguíneos de los 22 CT de España. La encuesta consta de 19 preguntas, cuya respuesta consiste en un número, en seis cuestiones, y en marcar una de las opciones propuestas en el resto. Completaron el formulario 18 (82% de los encuestados) de los CT donde se efectúa lavado de CH, en dos no se realiza este proceso y dos no contestaron. Las preguntas 2ª, 3ª y 4ª 1ª pregunta Las cuestiones 6ª, 7ª y 8ª En la selección de CH para proceder a su lavado, ¿qué periodo máximo de días se acepta desde la extracción? - 5 días (33,3% de las respuestas) - 3 días (22,2%) - 14 días (16,6%) - 7 días (11,1%) - 48 horas (11,1%) • En resumen, el 77.8% de los CT seleccionan CH con un periodo máximo de 7 días desde la extracción para proceder al lavado. Hacen referencia a: - Si se hacen los dos procesos (lavado 4 Están relacionadas: (Tabla 1) • En todos los casos de utilización de sistemas manual o automático en sistema abierto se usa salina como solución conservante y el período máximo de almacenamiento postlavado es de 24 horas. • El 87,5 % de los usuarios de sistema automático cerrado utilizan SAG-M como solución conservante y el período máximo del almacenamiento post-lavado es variable, asignando 7 días en el 50 % de los casos. Pregunta 5ª En el caso de precisar lavado e irradiación, ¿cuál hace primero? - Irradiación (61,1 % de las respuestas) -L avado (27,7 %) -N o se lo han planteado (11,1 %) - Hay algún CT que recibe el CH irradiado desde el hospital, para proceder al lavado. e irradiación), ¿cambia el periodo de tiempo para la selección de CH desde la extracción? La respuesta general es que no cambia. El 66.6% de los CT selecciona CH con un periodo máximo de 7 días desde la extracción. - En el caso de hacer primero el lavado, ¿en qué periodo de tiempo máximo irradia los CH? En el 100% de los casos se procede a la irradiación de inmediato o en las 24 horas siguientes, excepcionalmente 48 horas. - El periodo máximo de almacenamiento, en el caso de realizar los dos procesos, va a estar condicionado por el sistema utilizado. En caso del abierto, siempre es de 24 horas. En el sistema cerrado, el periodo asignado en las respuestas es variable: 24 h, 48 h, 3 días, 7 días. Esto puede responder a que la realización de ambos procesos es infrecuente y no se han publicado pautas para ello. Es preciso considerar algunas indicaciones especiales, como puede ser para prematuros o recién nacidos. Tabla I ¿Qué sistema utiliza? % de CT ¿Qué solución conservante? % de CT Período máximo de almacenamiento post-lavado % de CT Manual (sistema abierto) 33,3 Salina 33,3 24 horas 33,3 Automático (sistema abierto) 22,2 Salina 22,2 24 horas 22,2 Automático (sistema cerrado) 44,4 Salina SAG-M 5,5 38,9 24-48 horas 7 días 14 días 11,1 22,2 11,1 Artículo En estos casos, si se hacen los dos procesos, aunque el lavado sea en sistema cerrado, la caducidad máxima será de 24 horas postirradiación. - Personal específico (38,9 % de las respuestas) -P ool de técnicos que rotan (55,5 %) -O tras situaciones (5,5 %) Las preguntas 9ª, 10ª, 14ª y 15ª 15ª pregunta Tienen relación con la parte técnica del proceso. - Los CT que utilizan máquina de lavado disponen de un único procesador. En sistema abierto se utiliza IBM COBE 2991, y en sistema cerrado ACP 215 Haemonetics. - El tiempo estimado de procesamiento para una unidad de CH • lavado manual es de 90–120 min en el 83,3% de los CT que usan este sistema • lavado automático es de: 60-70 min en el 50 % de los CT que usan este sistema, sea abierto o cerrado. 45 min en el el 37.5 % de los CT que usan este sistema, en modo cerrado. 90-120 min en el resto de los CT que usan este sistema. El proceso de lavado de CH, ¿se realiza de urgencia? -S Í (72,2 % de las respuestas) -N O (27,7 %) • Si se requiere de urgencia este proceso, en general se asume. En relación con esto, algunos CT hacen la observación de las dificultades que tiene el personal, por la falta de práctica, en especial con el manejo de los procesadores automáticos. Hay CT que, aunque disponen de dispositivos automáticos, utilizan el sistema manual para las urgencias. Las preguntas 11ª, 12ª y 13ª Abordan aspectos sobre indicaciones para transfundir CH lavados y sobre control de calidad de los componentes. - El 94,4 % de los CT sí conoce las indicaciones clínicas para el lavado de CH. - Las indicaciones comprenden déficit de Ig A e historia previa de reacciones alergicas (83 % de los CT) y otras, como evitar sobrecarga de K+ en neonatos o HPN (22% de los CT). - El 61,1 % de los CT hacen todas las determinaciones que se indican en los parámetros de control de calidad de las Guías y estándares. El 55,5 % de los CT siguen los requerimientos de la Guía del CE y/o del CAT. En relación con este apartado algunos CT comentan la dificultad de alcanzar los valores de hematocrito que figuran en las especificaciones. Las cuestiones 16ª y 17ª Se refieren al número de CH lavados en el año 2013 y el porcentaje que supone sobre el total de CH distribuidos. (Tabla II) - El número de CH lavados en los CT es variable y puede cambiar de unos años a otros, pero se puede considerar insignificante (< 0,05 % de los CH distribuidos) en el 94,4 % de los CT. La última cuestión (18ª) Se dirige a conocer si el dispositivo automático se utiliza para el lavado de plaquetas. -L o usan el 11 % de los CT. Resumen De los datos comunicados se desprende que: • Se considera que los resultados de la encuesta reflejan la realidad de los CT en España , al haber respuesta de 20/22 (91%). • Las indicaciones clínicas de lavado de CH están en general bien establecidas. • El control de calidad de dicho componente cumple con los requerimientos de guías y estándares aceptados. • Se da respuesta a peticiones urgentes, aunque en estas situaciones hay ciertas dificultades con la formación del personal. • El número de CH lavados anualmente es bajo en la mayoría de los CT. • En la selección de CH para proceder a su lavado, el período máximo de días que se acepta desde su extracción es menor o igual a 7 días en el 77,8 % de los CT, si bien está aceptado que puede ser válido hasta 14 días. Se deben tener en cuenta circunstancias concretas, como puede ser un determinado fenotipo eritrocitario o la indicación en prematuros. • Cuando el proceso se hace en sistema abierto, bien sea manual o automático, la solución de conservación es salina y el período máximo de almacenamiento post-lavado es de 24 horas, e igual sucede cuando se aplica además la irradiación. • Cuando el proceso se hace en sistema cerrado, la solución de conservación es SAG-M y el periodo máximo de almacenamiento post-lavado no es homogéneo. Lo más frecuente es 7 días (50% de los CT que usan este sistema), que es el periodo más aceptado para este sistema y SAG-M según una publicación reciente1. • En el caso de tener que realizar lavado e irradiación, el 61 % de los CT realiza primero la irradiación. • Cuando se irradia en primer lugar y después se procede al lavado en sistema cerrado, no hay uniformidad en la cuantificación del periodo máximo de almacenamiento post-tratamiento. Lo razonable es asignar el periodo de almacenamiento más restrictivo teniendo en cuenta las indicaciones. • Si la indicación es por deficiencia Tabla II 14ª pregunta Nº CH lavados en 2013 En cuanto a la formación del personal para asumir este proceso, se cuenta con: CT (%) 0 de 1-10 de 20-30 de 40-50 más de 150 27,7 33,3 16,6 16,6 5.5 5 Artículo selectiva de Ig A, el número de lavados manuales debe ser al menos de tres, y con dispositivos automáticos pautar varios ciclos. • El llevar a cabo el proceso en sistema cerrado tiene ventajas de índole logística muy importantes en la organización de los centros y servicios de transfusión. • La calidad de los CH lavados es similar en los dos dispositivos automáticos (sistema abierto y cerrado). En la revisión de la bibliografía de los últimos años en relación con el proceso de lavado en sistema cerrado, existe una publicación1 referida a un estudio in vitro de CH que son lavados en distintos días de almacenamiento. Valoran el contenido de hemoglobina, la hemólisis, el contenido de K+ en el sobrenadante y la concentración de ATP, y concluyen que se acepta un 6 periodo máximo de 14 días desde la donación al día del lavado, y un periodo máximo de 7 días postlavado cuando se conservan los CH en SAG-M. En relación con la aplicación de los dos procesos, lavado e irradiación, hay un trabajo2 en el que primero lavan y después irradian, cuyos resultados indican que se debería establecer una caducidad de 48 horas postirradiación o 7 días postlavado, lo que primero ocurra. No obstante, el estudio tiene limitaciones como, por ejemplo, que usa muestras muy pequeñas. En este estudio se indica que el lavado hace a los CH más susceptibles al daño causado por la irradiación. En varios trabajos3 se objetiva que hay una disminución del K+ después del lavado, por lo que esto podría apoyar que se haga primero la irradiación, ya que, al menos conceptualmente, el K+ extracelular que se libera por la irradiación podría ser separado en el proceso del lavado. Esta estrategia de irradiación y posterior lavado de CH en SAG-M, aun no está estudiada. j Referencias 1.Hansen AL, Yi QL, Acker JP. Quality of red blood cells washed using the ACP 215 cell processor: Assessment of optimal pre- and postwash storage times and conditions. Transfusion 2013; 53: 1772-79. 2.Hansen AL, Turner TR, Yi QL, Acker JP. Quality of red blood cells washed using an automated cell processor with and without irradiation. Transfusion 2014; 54: 1585-94. 3.Weiskopf RB, Schnapp S, Rouine-Rapp K, et al. Extracellular potassium concentrations in red blood cell suspensions after irradiation and washing. Transfusion 2005; 45: 1295-301. Artículo Complicaciones pulmonares relacionadas con la transfusión: LPART, EPC y Disnea asociada a la transfusión T. Jimenez-Marco / Fundació Banc de Sang i Teixits de les Illes Balears. Introducción La lesión pulmonar aguda relacionada con la transfusión (LPART) o Transfusion–related acute lung injury (TRALI) de acuerdo con la nomenclatura anglosajona, comparte características comunes con el edema pulmonar cardiogénico (EPC) asociado a la transfusión y con la recientemente descrita entidad, la disnea asociada a la transfusión. Ello puede dificultar en ocasiones el diagnóstico. De hecho, no es infrecuente que estos síndromes se den simultáneamente en un mismo paciente, ya que no son mutuamente excluyentes. La lesión pulmonar aguda relacionada con la transfusión (LPART) De acuerdo con el modelo de los dos estímulos (two-hit model)1, la LPART se produce por la activación de los neutrófilos y/o las células endoteliales en el pulmón en un paciente susceptible, que tras la infusión de determinadas sustancias presentes en el componente sanguíneo transfundido, desarrolla un daño alveolar grave y edema pulmonar. Entre estas sustancias destacan los anticuerpos frente a los antígenos específicos de los neutrófilos (HNA), los anticuerpos anti-HLA I y II, el ligando de la molécula CD40 (CD40L) y los lípidos biológicamente activos. Aproximadamente, el 80% de los casos descritos, se deben a la presencia de anticuerpos anti-leucocitarios, siendo los más frecuentes los anticuerpos anti-HLA I y II, seguidos por los anti-HNA. El diagnóstico de la LPART es clínico, ya que no existe ninguna prueba de laboratorio específica. Así como tampoco existe un tratamiento específico, por lo que suele aplicarse un tratamiento de soporte. En alguna series de casos, entre el 70 al 90% de los pacientes precisan ventilación mecánica. El pronóstico es relativamente bueno, ya que la mortalidad descrita está entre 5-10% de los casos, siendo esta mayor en pacientes quirúrgicos y en enfermos muy graves 2,3. Se estima que la incidencia de LPART es de aproximadamente 0,08% a 15% de los pacientes que reciben una transfusión2. Este amplio margen se debe a las diferentes características de los sistemas de notificación y de Hemovigilancia4,5, y al hecho de que durante muchos años no ha habido una definición de la LPART ampliamente consensuada. Una de las definiciones más empleadas en la actualidad es la realizada por el equipo de tra- bajo de la NHLBI en el año 2004 (NHLBI, National Heart, Lung and Blood Institute Working Group) (Tabla I)2,3. De acuerdo con los datos del último informe español de Hemovigilancia disponible (año 2012), la ocurrencia de LPART, es de 1 por cada 101.161 unidades, y 1 fallecimiento por esta causa por cada 1.922.065 unidades transfundidas6. En casi todos los sistemas de Hemovigilancia se ha constatado que el plasma es el componente sanguíneo que conlleva mayor riesgo, particularmente el plasma procedente de mujeres, por la mayor probabilidad de que posean anticuerpos anti-leucocitarios. Algunos países han puesto en práctica la estrategia de transfundir preferentemente plasma de varón con la consiguiente reducción de casos de LPART4. Tabla I. Definición de Lesión Pulmonar Aguda Relacionada con la Transfusión (LPART) propuesto por el grupo de trabajo de NHLBI (National Heart, Lung and Blood Institute Working Group, 2004). Clasificación Hallazgos Comienzo agudo: LPART Posible LPART LPART retardada dentro de las 6 horas del inicio de la transfusión Hipoxemia: Pa O2/FI O2≤ 300 mm Hg o saturación de oxígeno ≤ 90% respirando aire ambiente u otra evidencia clínica de hipoxemia Radiografía de tórax Infiltrados bilaterales No signos de hipertensión auricular izquierda No signos de sobrecarga circulatoria o presión de enclavamiento de la arteria pulmonar ≤ 18 mmHg No otros factores de riesgo de Sepsis, traumatismo torácico, by pass carlesión pulmonar agua diopulmonar, shock, transfusión masiva, etc. Los mismos criterios de LPART pero con otro factor de riesgo de lesión pulmonar aguda Los mismos criterios de posible LPART y un comienzo entre 6 y 72 horas después del inicio de la transfusión 7 Artículo Edema pulmonar cardiogénico (EPC) El EPC secundario a transfusión ocurre cuando el ritmo y/o el volumen de infusión del componente sanguíneo transfundido superan la capacidad del sistema cardiopulmonar del paciente. Los pacientes vulnerables a esta complicación son los ancianos, los recién nacidos, las mujeres embarazadas y los enfermos con insuficiencia renal y/o cardiaca. El diagnóstico es clínico. La Sociedad Internacional de Transfusión (ISBT) propuso una definición en el 2006, basán- dose en la aparición, en las primeras 6 horas tras el inicio de la transfusión, de los siguientes signos: disnea, taquicardia, hipertensión, empeoramiento de un cuadro de edema pulmonar o aparición de un cuadro agudo de edema pulmonar y evidencia de un balance positivo de líquidos4. Algunos de estos signos coinciden con la LPART, es por ello que algunas pruebas como la determinación de la presión de oclusión de la arteria pulmonar y de los niveles de péptido nautriurético puede ayudar a realizar Tabla II. Diagnóstico diferencial entre LPART y EPC. Hallazgos Factores de riesgo Tipo de componente implicado Comienzo Cuadro Clínico LPART Paciente anciano Insuficiencia renal aguda Sepsis Enfermedades hematológicas malignas Ventilación mecánica Transfusión masiva Alcoholismo Shock Enfermedad hepática grave Cirugía de columna Cirugía hepática Balance positivo de líquidos Todos, pero con mayor frecuencia plasma y plaquetas Dentro de las 6 horas del inicio de la transfusión, habitualmente en las 2 horas siguientes al inicio Disnea Hipoxia Signos de edema pulmonar en la radiografía de tórax Hipotensión (habitualmente) No ingurgitación de vena yugular interna Fiebre EPC Ancianos Recién nacidos Insuficiencia renal Embarazo Insuficiencia cardiaca Todos Dentro de las 6 horas del inicio de la transfusión. Disnea Hipoxia Signos de edema pulmonar en la radiografía de tórax Hipertensión(habitualmente) Ingurgitación de vena yugular interna No suele haber fiebre Ecocardiograma Normal Normal o Anormal Función ventricular izquierda normal, aun- Normal o disminuida la función que si está alterada no puede descartarse ventricular izquierda LPART Presión de oclusión de Baja Aumentada la arteria pulmonar Hemograma Puede haber leucopenia y trombopenia, No cambios específicos seguida de una leucocitosis Respuesta a sobrePuede empeorar(ya que es un factor de Empeoramiento carga de fluidos riesgo) Péptido nautriurético Normal (si no se acompaña de sobrecarga) Elevado Respuesta a diuréPuede mejorar Mejoría ticos AAS Efectividad probada en modelos animales No probado 8 un adecuado diagnostico diferencial (Tabla II)7-9.No obstante, hay que tener en cuenta que no hay ninguna prueba de laboratorio patognomónica de EPC. La determinación del péptido nautriurético puede ser orientativa pero no definitiva del diagnóstico de EPC, ya que niveles elevados pueden encontrarse también en otras patologías. Lo que sí parece que puede tener más valor son las determinaciones seriadas del péptido nautriurético antes y después de la transfusión10. Un aspecto también fundamental es que ambos cuadros clínicos, la LPART y el EPC, pueden coincidir en el mismo enfermo, especialmente en el caso de pacientes muy graves. Si bien es cierto que se ha descrito que la incidencia de EPC secundario a transfusión puede ser tan alta como del 1% de los pacientes transfundidos, conocer la frecuencia exacta es muy difícil, ya que posiblemente la mayoría de los casos no se notifiquen. Según los datos del último informe español de Hemovigilancia, la ocurrencia de EPC, es de 1 por cada 30.509 unidades transfundidas, y 1 fallecimiento por esta causa por cada 961.032, es decir, es mucho más frecuente que la LPART6. El concentrado de hematíes es el componente sanguíneo más frecuentemente implicado. Establecer pautas de transfusión más conservadoras en pacientes susceptibles, así como la administración de diuréticos puede ayudar a prevenir esta complicación. Precisamente, en el último informe del SHOT 2013 (Serious Hazards of Transfusion) se recomienda no transfundir necesariamente dos unidades de hematíes sin antes revisar la historia clínica del paciente y descartar factores de riesgo para desarrollar EPC (“Do not give two without review”)11. La disnea asociada a la transfusión Esta entidad ha sido recientemente acuñada por la Red Internacional de Hemovigilancia (International Haemovigilancia Network, IHN, 2011), que la define como un síndrome de distress respiratorio agudo que ocurre en las 24 horas siguientes al inicio de la transfusión, que no reúne los crite- Artículo rios de LPART, EPC o reacción alérgica. Además, el distress respiratorio debe ser la característica fundamental del cuadro y no debe ser achacable a ninguna otra patología que padezca el paciente8. Conclusión El pulmón puede ser considerado como uno de los órganos diana que sufre el impacto de algunos efectos adversos asociados a la transfusión, como son la LPART, el EPC o la disnea asociada transfusión. Estos tres síndromes engloban signos y síntomas similares, pero también presentan características definitorias que nos ayudan a realizar un correcto diagnóstico diferencial. Es importante que el personal sanita- rio que indica y que administra las transfusiones conozca estas complicaciones, para poder detectarlas y, en la medida de lo posible, prevenirlas. El conocimiento de estas entidades debería incluirse en los programas de formación y de entrenamiento del personal médico que prescribe y del personal de enfermería que realiza las transfusiones. j Referencias 1. Silliman CC. The two-event model of transfusion-related acute lung injury. Crit Care Med 2006; 34: S124-31. 2. Vlaar AP, Juffermans NP. Transfusion-related acute lung injury: a clinical review. The Lancet 2013; 382: 984-994. 3. Shaz BH. Stowell SR, Hillyer CD. Transfusionrelated acute lung injury: from bedside to bench and back. Blood 2010; 117: 14631471. 4. Bolton-Maggs PHB, Cohen H. Serious Hazards of Transfusion (SHOT) Haemovigilance and progress is improving transfusion safety. British Journal of Haematology 2013; 163:303-314. 5. Vamvakas EC, Blajchman MA. Transfusionrelated mortality: the ongoing risks of allo- geneic blood transfusion and the available strategies for their prevention. Blood 2009; 113: 3406-3417. 6. Informe de Hemovigilancia 2012. Área de Hemoterapia Ministerio de Sanidad y Política Social.http://www.msssi.gob.es/profesionales/saludPublica/medicinaTransfusional/ hemovigilancia/docs/Informe2012.pdf. 7. Zhou L, Giacherio D, Cooling L Davenport RD. Use of B-natriuretic peptide as a diagnostic marker in the differential diagnosis of transfusion-associated circulatory overload. Transfusion 2005; 45: 1056-1063. 8. Guideline on the investigation and management of acute transfusion reactions. Prepared by BCSH Blood Transfusion Task Force. 2012. http://www.bcshguidelines.com/documents/ATR_final_version_to_pdf.pdf 9. Zhou L, Giacherio D, Colling L, Davenport RD. Use of B-natriuretic peptide as a diagnostic marker in the differential diagnosis of transfusion-associated circulatory overload. Transfusion 2005; 45:1056-1063. 10. Andrzejewski Jr C, Casey M A, Popovsky MA. How we view and approach transfusion –associated circulatory overload: pathogenesis, diagnosis, management, mitigation, and prevention. Transfusion 2013; 53:30373047. 11. Annual SHOT Report 2013: http://www. shotuk.org/shot-reports/report-summarysupplement-2013/ Æ Bienvenida a los nuevos socios de la SETS Acosta Puig, María. Rubí, Barcelona Afonso Ferrández, Víctor. Santa Cruz de Tenerife Alvarado Quintero, Celia Beatríz. Ocaña, COLOMBIA Ansola Claudia, Maizu. Mendoza, ARGENTINA Argüello Junquera, María. Salinas, Asturias Bautista Claver, Teresa. Valencia Biritxinaga Rodríguez, Laura. Durango, Bizkaia Blanco Gurruchaga, Sara Inés. Bernal, ARGENTINA Buenasmañanas Cervantes, Diana. Manzanares, Ciudad Real Camacho Rodríguez, Bernardo. Bogotá, COLOMBIA Cobas Freire, Mª de los Ángeles. Lugo Collado Cebrián, Miriam. El Campello, Alicante Corbillón García, María Loida. Gijón, Asturias Cortez Rodríguez, Rosana. Valencia, VENEZUELA Ene Gabriela Simona. Barcelona Espinosa Monsalve, María Renata. Machali, CHILE Fernández Fernández, Esther. Valladolid Fernández Román, Isabel. Sevilla Fonseca Cipagauta, Javier Alexander. Madrid García Bautista, Jesús Alejo. Granada Gómez Luz Marly. Río de Oro, COLOMBIA González Gómez, Elzier Manuel. Huxquilucan, MEXICO Gordillo Martín, Marina. Playa Honda, Lanzarote Hernández López, Irina. Santa Coloma de Gramenet, Barcelona Huelva López, Laura. Huelva Iglesias Fernández, Miriam. Ourense Jiménez Martín, Ana. Madrid López Parra, Miriam. Salamanca Luís Hidalgo, María del Mar. Valencia Manubens Guarch, Andrea. Madrid Martínez Pons, Patricia. Castellón Mateo Pujol, Dolors. Barcelona Orduna Arnal, María Teresa. Alicante Paciello Coronel, María Liz. Madrid Patrignani De la Fuente, Noelia. Valdemoro, Madrid Pecos Dorta, Patricia. La Laguna, Tenerife Peñalver Molla, María Isabel. Bétera, Valencia Pérez Vicente, María Cruz. Santiago De Compostela Pinto Sierra, Jésus Aquilino. Salamanca Pirazzini Evelin Luciana. Córdoba, ARGENTINA Prieto Larred, Mª Jesús. Badalona, Barcelona Quiñones Füllgraff, Silvia. Montevideo, URUGUAY Rodríguez Gambarte, Juan Diego. Madrid Salvatierra Calderón, María Gabriela. Madrid Sánchez Ramos, Carolina. Armilla, Granada Sancho Ponce, Esther. Sabadell, Barcelona Santa Cruz Guerrero, Tulio José Enrique. Lima, PERU Torres Jimenez, Williana Melissa. Madrid Torres Ribas, Lourdes. Palma de Mallorca Vargas Pabón, Manuel. Navia, Asturias Ventura Duarte Fonseca, Augusta Zulmira. Coimbra, PORTUGAL Vicente García, José María. Oviedo 9 Artículo Educación: ahora más que nunca C.D. Sánchez (Comunicación y Marketing), R. Hernández (Educador social, Á. González (Docente), A. Pírez (Educadora social), R. Corcuera (Técnico de Marketing), I. Reyes (Técnico de Marketing) Instituto Canario de Hemodonación y Hemoterapia. Departamento de comunicación, marketing y promoción. Este trabajo ha sido galardonado con el premio Mejor Iniciativa de Promoción en el XXV Congreso de la SETS. Oviedo, 2014 En una sociedad como la actual, llena de incertidumbres y escenarios que recogen cambios vertiginosos, la sociedad requiere de las Administraciones Públicas esfuerzos nuevos y renovados que aporten valor añadido a la trascendental labor que la sociedad demanda del sector público. La intervención social cobra así un mayor protagonismo dado que tiene como objetivo a medio y largo plazo el desarrollo humano y como interés inmediato de cualquier intervención, producir un cambio de conducta social a través de una renovación formativa. Vivimos nuevos escenarios económicos, sociales, culturales y educativos, cada vez más complejos, que requieren de lo público la puesta en marcha de proyectos y líneas estratégicas de actuación más globales e integradoras y donde adquieren valor las sinergias, la coordinación, la responsabilidad compartida, la aportación de equipos multidisciplinares y todo con el fin de ganar en eficacia, optimizar recursos y contribuir al servicio y bienestar de los ciudadanos. Conseguir reclutar a los donantes necesarios que permitan obtener las donaciones requeridas para cada red transfusional no es fácil y obliga a departamentos y voluntarios de promoción a superar cada día numerosos obstáculos que van desde presupuestos insuficientes que obligan a un desarrollo low cost de la promoción hasta la incomprensión propia de los ciudadanos y, a veces, también de aquellos que infravaloran esta actividad sin entender la trascendencia que tiene para cualquier Centro Regional de Transfusión, excelentes 10 motivos para deducir que ésta actividad requiere también de la aplicación de la gestión del conocimiento como principal valor añadido, con el fin de ser eficaz y obtener los mejores resultados, incluso en situaciones adversas. Se podría decir, que estos profesionales hacen fácil, sin demasiados medios, lo que es francamente difícil: conseguir una donación voluntaria, altruista y responsable. Porque es de suponer que a nadie se le escapa que la donación de sangre es una obligación “moral” de los ciudadanos y para ello hay que concienciarlos pero no una obligación “legal” y conseguir lo primero, requiere formar parte de la realidad diaria de la ciudadanía, con la misión expresa de poder cubrir el consumo de cada sistema sanitario. Para conseguirlo se necesitan políticas de intervención que ayuden a la sociedad a interiorizar esa necesidad diaria y a fomentar su verdadero valor social para la comunidad. La solidaridad y el altruismo son muy adecuados y deben entenderse como un paso necesario para que el hábito sea adquirido por los individuos y asumido por la conciencia colectiva, lo que lo acabará convirtiendo en un deber social. En el XXV Congreso de la SETS de Oviedo quedó evidencia del difícil escenario que el macro-entorno presenta y que nos acompañará durante los próximos años. Una tormenta que sólo con la gestión del conocimiento y las decisiones no cortoplacistas será posible superar. Educación: ahora más que nunca Con este panorama, se hace evidente que son necesarias y urgentes acciones que van común hasta la utilización de mayores sinergias entre los diferentes centros de transfusión y, por supuesto, entre los propios componentes de cada red transfusional regional que deberán establecer protocolos con respecto al consumo, pasando por una inversión adecuada en comunicación y marketing social, en cada una de sus especificidades y, por supuesto, participar del desarrollo de una adecuada política de formación dirigida a nuestros jóvenes, como estrategia clave para el futuro. En este sentido, el Instituto Canario de Hemodonación y Hemoterapia (ICHH), en su Plan Estratégico (PE) 20122015 define su misión como “abastecer al sistema sanitario de productos derivados de la sangre y servicios relacionados, mediante la concienciación social sobre la donación, garantizando la calidad y la seguridad transfusional y aplicando criterios de eficiencia”. Uno de los ejes estratégicos de este PE es la concienciación social sobre la donación. Sensibilizar, formar y capacitar a la población infanto-juvenil en lo concerniente a la donación, utilizando técnicas y recursos educativos del ámbito escolar y socio-comunitario. Educar en valores es uno de los retos de la sociedad y, el nuestro, trasladarles la trascendencia social de la donación, ya que nuestro deber como centro de transfusión nos obliga a tomar decisiones estratégicas no sólo como visión a corto plazo, sino a medio y largo plazo, claves para la organización. Con este fin , el Instituto Canario de Hemodonación y Hemoterapia, ha continuado avanzando en la estructura del proyecto educativo que comenzó en 2005 con “Educar para la donación”, ampliando desde 2011, los distintos formatos de sus unidades didácticas, configurando un “eje transversal educativo” dirigido a la concienciación social, presente y futura, desde la pedagogía, los valores y la educación para la salud hacia la población Artículo infanto-juvenil de Canarias que sirva para colaborar con el logro de la demanda social de abastecimiento de donaciones. Eje transversal educativo sobre la donación de sangre para alumnos de 5-8/9-12/13-16 y de 17 a 30 Para este proyecto, se elaboraron tres unidades didácticas en consonancia con las necesidades de los segmentos y públicos objetivos (5-8/9-12/13-16 Y DE 17 a 30) a los que nos debíamos dirigir: 1. “Educar para la donación” Se trata de un proyecto de sensibilización y concienciación acerca de la donación de sangre dentro del ámbito de la enseñanza de carácter formal. Su unidad didáctica persigue la transmisión de una serie de conceptos, procedimientos y actitudes relacionados con su importancia y su necesidad. Dirigido a escolares del 3º ciclo de educación primaria (5º y 6º), su unidad didáctica junto con el cuento “El viaje de Jonay” (Carola Sánchez), sirven para acercar la donación de sangre a los escolares de 3º ciclo de Primaria, impartiendo los contenidos relacionados con la circulación sanguínea. Como objetivo general, se busca concienciar a los alumnos desde la infancia, de forma lúdica y sencilla. Este material dota al profesional de una guía de trabajo que sirve para orientarle en la implementación de dicho proyecto en el aula. Permite la optimización de la acción educativa, ofrece seguridad y conocimientos para ofrecer una acción adecuada, lograr resultados exitosos en su ejecución y servir como guía para el equipo educativo. Los objetivos específicos permiten conocer el nombre, descripción y funciones de los órganos que intervienen en el aparato circulatorio, descripción y funciones de los órganos que intervienen en el aparato circulatorio, identificar los movimientos que realiza el corazón en la circulación sanguínea, conocer los tipos de circulación que realiza la sangre para transportar nutrientes y sustancias de deshecho, identificar los componentes de la sangre y los distintos grupos sanguíneos, las funciones que desempeñan y la forma que tienen, entender la información que nos proporcionan los análisis de sangre, interpretar esquemas anatómicos, adquirir un nuevo vocabulario referido a órganos y procesos relacionados con la circulación, adoptar hábitos saludables para nuestro organismo en relación con la nutrición, debatir y entender la información sobre la donación de sangre, describir los pasos que realiza la Red Transfusional Canaria y leer y realizar una lectura comprensiva del cuento “El viaje de Jonay”. 11 Artículo 2. Proyecto educativo “El Gran Día” 3.-Proyecto Educativo “ValorHemos” Se dirige a jóvenes de la ESO cercanos a cumplir la mayoría de edad. Pretende desarrollar sinergias con la Comunidad Educativa. Nos ayuda a adaptarnos al target de edad superior que se centra en los jóvenes próximos a la “mayoría de edad” y, por tanto, mas cercanos a poder donar de modo voluntario, altruista y responsable. Su objetivo es reconocer y transmitir el significado y la trascendencia de la donación y el valor social que tiene un donante habitual. Como objetivo tiene el reconocer y transmitir el significado y la trascendencia de la donación y el valor social que tiene un donante habitual para todos. Como objetivos específicos, destacar el valor del acto de cualquier tipo de donación, descubrir nuevas sensaciones, solidarias y altruistas, adquirir hábitos hacia la donación de forma natural y habitual, consiguiendo autonomía para ser donantes con la mayoría de edad y tomar conciencia de la influencia de la publicidad de modo positivo desarrollando actitudes solidarias con los más desfavorecidos o aquellos que más lo necesitan. En esta Unidad Didáctica aparecen actividades motivadoras e ilustradas, que sirven para ayudar al alumno/a para trabajar los contenidos y que hacen “reflexionar” con el fin de tomar conciencia sobe la donación y “experimentar” a través de las actividades que se proponen en clase, experimentando con conceptos propios del tema que estamos tratando, “la donación de sangre”. 1. Actividades previas: detectar los conocimientos de los alumnos/as. 2. Actividades de motivación, razonamiento y reflexión: estimulando la atención del alumno/a. 3. Actividades de aplicación de los contenidos: permiten reforzar lo aprendido. 4. Actividades que trabajan los procedimientos. 5. Actividades finales: consolidan los conocimientos adquiridos. Los materiales de trabajo del aula se documentan sobre fuentes de información, libros, artículos, documentos de revistas especializadas, páginas web, etc. Se trata de un proyecto de sensibilización infanto-juvenil en educación no formal. Promueve y transmite conocimientos y valores relacionados con la promoción. La formación busca crear una red de jóvenes colaboradores y dinamizadores de la acción de donar, capacitándoles y dotándoles de contenidos y herramientas educativas. Se dirige a jóvenes entre 17 y 30 años, con el fin de dar a conocer, intervenir y concienciar a los distintos grupos infantiles y juveniles a través de juegos y talleres (las edades de estos grupos infantiles y juveniles oscilan entre los 5 hasta los 16 años). Como objetivo destaca promover la formación y la capacitación de los jóvenes canarios para que ellos mismos sean autores y promotores del proceso de la transmisión y socialización del conocimiento, motivando la sensibilización de la acción de donar entre niños y niñas de su entorno más cercano, además de potenciar el “uso de los valores” como elemento socializador comunitario. Su ámbito de actuación incluye a escolares de 5-8, de 9-12 y de 13-16 y a los jóvenes, en general. En cuanto a objetivos específicos destacan, concienciar a los niños y jóvenes sobre la importancia de la “acción de donar” puesto que nos permite descubrir nuevas sensaciones solidarias y altruistas; familiarizar a los niños y niñas (a lo largo de su proceso evolutivo), con todo lo relacionado con la donación, con el fin de que al cumplir la mayoría de edad sean capaces de ser donantes, adquiriendo hábitos para serlo de forma habitual y natural y potenciar en el niño, en la niña y en el joven las actitudes, aptitudes y valores necesarios para comprometerse y responsabilizarse con su papel social y comunitario. Este proyecto consta en la actualidad de más de seis unidades didácticas y su finalidad es transmitir conceptos, procedimientos y actitudes relacionados con la importancia y necesidad de la “acción de donar” resaltando la repercusión que podrá tener en la población general a corto, medio y largo plazo. Además cada 12 unidad se divide en temáticas y su contenido se relaciona con un valor diferente. Las unidades y valores que se trabajan son lao siguientes: Compromiso (Unidad 1º ICHH), Identidad (Unidad 2º La sangre y sus componentes), Solidaridad (Unidad 3º La donación de sangre y plaquetas), Realización (Unidad 4º El procesamiento de la sangre), Altruismo (Unidad 5º La importancia de la donación) y Cooperación (Unidad 6º La Red Transfusional de Canarias). Cada unidad didáctica consta de diferentes juegos y actividades, adaptadas por edades y etapas evolutivas, detallándose en cada unidad, una media de tres actividades y/o juegos en función a las siguientes franjas de edades: de 5 a 8 años, de 9 a 12 años y de 13 a 16 años, juegos y actividades que sirven de modelo y/o manual orientativo a la hora de transmitir los conocimientos. Cada unidad se distingue por colores, según los tramos de edad a quien va destinada. Se utilizan, tanto el trabajo individual como el grupal, además de técnicas que permiten trabajar sistemática y estructuradamente. Las técnicas que se utilizan son: la exposición del coordinador, la lluvia de ideas, los ejercicios de papel y lápiz, los diálogos simultáneos, el trabajo individual y en grupo, la discusión dirigida, los juegos cooperativos, los juegos de lógica, los talleres y manualidades, los juegos matemáticos y los juegos de rol playing. Se imparte en dos fases, una primera impartida por el profesional de la organización mediante sesiones formativas dirigidas al grupo de jóvenes, cuyo fin es transmitir la parte teórica que luego ellos deberán desarrollar. Y una segunda fase, en la que ellos mismos pondrán en marcha lo aprendido mediante una sesión práctica formando y capacitando a los jóvenes dinamizadores. Desde Enero de 2012, estos tres proyectos educativos han sido ejecutados en Canarias incluidos en la línea estratégica de concienciación que recoge nuestro PE 2012-2015, habiéndose contabilizado hasta Junio de 2014, 130 intervenciones, de las cuales corresponden 78 dentro del contexto formal y 52 en el contexto no formal. j Artículo Metabolismo molecular del hierro I I. Ghali, T. Jimenez-Marco / Fundació Banc de Sang i Teixits de les Illes Balears. Introducción El hierro es un nutriente esencial requerido en muchos procesos biosintéticos celulares y metabólicos. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) aproximadamente 1.400 millones de personas en el mundo sufren anemia por déficit de hierro. En países en vías de desarrollo, la mortalidad asociada a anemia ferropénica es especialmente elevada en gestantes y en niños menores de 5 años. Así mismo, en los países desarrollados la anemia ferropénica es una condición muy prevalente. De hecho, en los EEUU, hasta el 12% de las mujeres entre 12 y 49 años padecen anemia por falta de hierro.1,2 Biodisponibilidad de hierro y requerimientos diario Un varón sano de 75 kg posee un promedio de 3-4 g de hierro en su organismo. Esta cantidad es algo menor en las mujeres, aproximadamente entre 2 y 3g, ello es debido a que las mujeres tienen menor concentración de hemoglobina, menor masa muscular y menor volumen intravascular. La biodisponibilidad del hierro está muy influenciada por la presencia de factores inhibidores y potenciadores de su absorción. Entre los factores inhibidores se incluyen los fitatos, los polifenoles, el calcio, las proteínas de la leche bovina (caseína), la clara y la yema del huevo, y la albúmina. Por otro lado, el ácido ascórbico destaca por ser uno de los potenciadores de la absorción del hierro más importantes.3 Función del hierro El hierro se incorpora a la estructura de proteínas del llamado grupo hem, como son: la hemoglobina, la mioglobina, los citocromos, las mieloperoxidasas, la peroxidada eosinofílica, las catalasas y peroxidasas. Así mismo, también forma parte de enzimas no pertenecientes 14 al grupo hem como la ribonucleótido reductasa, proteínas de unión de nucleótidos y los complejos de hierro y azufre (complejos respiratorios I-III, flavoproteína transferidora de electrones, ferrodoxina 1, fosforibosil-pirofosfato amidotransferasa, ADN primasa, etc.). Las proteínas que contienen hierro ejercen una gran variedad de funciones, que incluyen el transporte de gases, la transferencia de electrones en la cadena respiratoria, la catalización de reacciones de biodegeneración o biosíntesis, la intervención en reacciones como factores de transcripción o de represión, o como enzimas en el metabolismo intermedio, y en la síntesis y reparación del ADN.4 La capacidad del hierro para aceptar y donar electrones hace que sea un componente esencial de las moléculas que ligan oxígeno, de los citocromos en la cadena de transporte de electrones, y que actúe como cofactor junto con una gran variedad de enzimas. El exceso de hierro puede ser sumamente tóxico, debido a que participa en la catalización de la reacción de Fenton, en la cual, el H2O2 se convierte en el radical hidroxilo altamente reactivo (OH-). Los radicales hidroxilos pueden oxidar proteínas, ácidos grasos y ácidos nucleicos, dando lugar a disfunción celular.5 Absorción intestinal Los mamíferos absorben el hierro de la dieta en el duodeno y el yeyuno superior a través de los enterocitos. El hierro de la dieta se presenta en dos formas: 1) el hierro en su forma metálica u inorgánica que se encuentra en las legumbres, verduras y frutos secos y 2) el hierro orgánico incorporado en el hem en las carnes rojas. El hierro inorgánico férrico (Fe3+) es reducido por el citocromo duodenal B (Duodenal Cytochrome B, Dcytb) y una vez reducido, el hierro inorgánico ferroso (Fe2+) entra en el enterocito a través de un transportador de metal divalente 1 (DMT-1, Divalente Metal Transporter-1). Los ratones que carecen de este transportador DMT1 intestinal mueren al poco tiempo de nacer debido a una deficiencia severa de hierro. El hierro orgánico, que es el que esta unido a proteínas del grupo hem, se absorbe a través de la acción de una proteína intestinal transportadora del grupo hem, llamada HCP-1 (Heme Carrier Protein 1) o también llamada SLC46A1 (Solute Carrier Family Member 46 A1). Una vez dentro de la célula el hierro se libera del grupo hem por la acción de la enzima hemoxigenasa (HO-1). No se conoce aún con exactitud el proceso de absorción intestinal de la ferritina, un hetero-multímero proteico con 24 subunidades de polipéptidos ligeros (L) y pesados (H), que tiene una gran capacidad para ligar los óxidos férricos. Una posibilidad es que la ferritina sea degradada por la actividad de las proteasas en el tracto gastrointestinal superior y el hierro liberado sea absorbido a través de la ruta Dcytb/ DMT1. Otra posibilidad es que la ferritina sea absorbida intacta y se descomponga intracelularmente en los lisosomas, liberando así su carga de hierro. No obstante, se desconoce la naturaleza del receptor específico para la ferritina en el epitelio intestinal. Todo el hierro que proviene de las diferentes vías se reúne en una zona citosólica llamada el pool lábil de hierro. El hierro del pool lábil tiene tres vías de uso en la célula: puede ser empleado para fines metabólicos (principalmente por la mitocondria), se puede almacenar en forma de ferritina, o bien puede ser transferido al torrente circulatorio para ser utilizado en otros tejidos. El hierro pasa a la circulación por el canal de flujo de salida de la ferroportina basolateral (FPN), también conocida como SLC40A1 (Solute Carrier Family 40 member 1) junto con la Artículo Figura 1. Mecanismos de absorción y transporte del hierro en el enterocito. Enterocito: el hierro de la dieta inorgánico férrico, (Fe3+) debe ser reducido a ferroso (Fe2+) por Dcytb para ser transportado a través de la DMT-1 ubicada en el borde apical del enterocito. El hierro orgánico ingerido con la dieta en forma de proteínas con el grupo hem se transporta a través de la proteína intestinal HCP-1. Una vez dentro de la célula, el hierro del grupo hem se libera mediante la acción de la enzima hemoxigenasa 1 (HO-1).La ferritina ingerida por la dieta entra en el enterocito vía endosómica, pero se desconoce aún su receptor específico y el mecanismo de su degradación. El hierro del pool lábil se utiliza para fines metabólicos (principalmente por la mitocondria), se almacena en la ferritina, o pasa a la circulación a través de la ferroportina. El hierro ferroso exportado se oxida por la hephaestin y posteriormente se une a la transferrina (Tf). Las moléculas de hierro almacenadas dentro del enterocito en forma de ferritina, se pierden al descamarse el epitelio intestinal. hephaestin (una multicobre ferroxidasa) uniéndose posteriormente a la transferrina (Tf). En relación con esta función ferroxidasa, se ha observado que en los ratones hephaestin-deficientes el hierro es retenido en el enterocito no pudiendo pasar al torrente circulatorio, dando lugar a una severa anemia ferropénica (Fig.1).6,7 Homeostasis del hierro El metabolismo del hierro es inusual. Se diferencia del de otros metales en que no existe un mecanismo fisiológico para la excreción y cerca de 90% de las necesidades diarias de hierro se obtienen de la fuente endógena. La mayoría del hierro está distribuido en los eritrocitos, que contienen alrededor de 2,1 g de hierro. Los macrófagos del sistema retículoendotelial (SRE) contienen más de 600 mg y los músculos alrededor de 300 mg. El exceso de hierro está almacenado en el hígado (1g) y los otros tejidos contienen una cantidad de hierro menor pero no despreciable. Los macrófagos del SRE son esenciales en el mantenimiento de la homeostasis del hierro. El hierro es captado por los macrófagos por diferentes vías. Tras la eritrofagocitosis, la digestión proteolítica de la hemoglobina libera el hem, que atraviesa la membrana fagolisosómica, ya sea por difusión o por un transportador específico, con el fin de llegar a la hemoxigenasa. En caso de hemólisis la hemoglobina liberada se une rápidamente a la haptoglobina, y se elimina de la circulación por las células retículoendoteliales del hígado. El receptor CD163 de las células retículoendoteliales une el complejo haptoglobina-hemoglobina y es internalizado por endocitosis. En caso de hemólisis patológica (anemia hemolítica, talasemia, infecciones bacterianas, etc.), el proceso de captación de la hemoglobina por la haptoglobina se ve superado, de modo que algunas moléculas de hemoglobina se degradan en el torrente circulatorio, uniéndose el hem a la glicoproteína plasmática hemopexina. Los receptores específicos de la hemopexina, el CD91, en los hepatocitos captan el complejo heme-hemopexina y lo retiran de la circulación. El mecanismo de absorción del hierro por la célula mejor caracterizado es el que se produce a través del receptor de la transferrina-1 (TfR1; CD71). Este receptor une dos moléculas de transferrina (Tf), y tiene una mayor afinidad por la Tf diférrica. Los complejos TfR1-TF se concentran en depresiones de membrana revestidas de la proteína clatrina en la superficie celular, posteriormente el proceso de invaginación se completa, dando origen a una endocitosis. Una vez que los complejos se internalizan, una bomba de protones ATPasa asociada a la membrana disminuye el pH en el endosoma para crear un entorno ácido, en el cual el hierro férrico se libera de la Tf. Para ser transportado fuera del endosoma, el hierro debe reducirse antes. En los glóbulos rojos en desarrollo, este paso se realiza por la proteína STEAP3 (Six-Transmembrane Epithelial Antigen of Prostate). El hierro reducido se exporta fuera del endosoma por el transportador de metal divalente NRAMP1 (Natural Resistance Associated Macrophage Pprotein 1) en el macrófago o DMT1 en otras células. La TfR1 se devuelve a la membrana plasmática, donde puede participar en otra ronda de captación de hierro.8 El hierro del SRE que no se utiliza está destinado en primer lugar al almacenamiento en forma de ferritina. A medida que la cantidad de hierro en la 15 Artículo Figura 2. La Homeostasis del hierro. Biología normal del hierro. Este proceso implica el tránsito del hierro de los glóbulos rojos a los macrófagos en el bazo y el transporte de hierro reciclado a la médula ósea vía transferrina. Este balance está equilibrado por la absorción intestinal del hierro. La hepcidina hormona esencial en la regulación de la homeostasis del hierro, se une a la ferroportina y promueve su fosforilación, internalización y degradación. La inhibición de la ferroportina por la hepcidina causa: (1) la inhibición de la absorción intestinal del hierro; (2) reduce la salida del hierro almacenado en el hígado (3) bloquea la salida del hierro reciclado de los macrófagos. célula aumenta, se deposita en un gran porcentaje en forma de hemosiderina. La desviación del exceso de hierro en la hemosiderina permite el almacenamiento de más hierro por unidad de volumen en la célula. De hecho, las mayores concentraciones de hemosiderina en el cuerpo se encuentran en el SRE. Cuando los requisitos del cuerpo aumentan, fundamentalmente en la médula ósea, la liberación del hierro también aumenta, y sale a la circulación por la vía de la ferroportina. El hierro ferroso (Fe2+) exportado es posteriormente oxidado (Fe3+) por la ceruloplasmina y se une a la Tf. Cabe señalar que la mayoría de la ferritina en el plasma proviene de los macrófagos. Pero la ruta exacta de exportación todavía no está claramente definida.9,10 Como ya se ha mencionado, la mayoría del hierro absorbido entra en una zona metabólicamente activa en el citosol llamada el pool lábil de hierro que es usada por la mitocondria, donde se puede incorporar a centros mononucleares o dinucleares de hierro utilizado en la producción de complejos de hierroazufre, o insertarse en la protoporfirina IX para formar el hem, Regulación celular del metabolismo de hierro El metabolismo del hierro se controla a diferentes niveles y por diversos mecanismos. La ferroportina es la mediadora del flujo de salida del hierro ferroso (Fe2+) de los enterocitos, hepatocitos y Fig 3. El control post-transcripcional por el sistema regulador IRE-IRP La interacción del IRP/IRE regula la expresión de estas proteínas en direcciones opuestas por 2 mecanismos diferentes para mantener el equilibrio entre la captación y almacenamiento. Cuando los niveles de hierro son bajos, La unión del IRP/IRE en la región 5´ de los RNAm de las cadenas L y H de la ferritina inhibe la traducción del RNAm de la ferritina Por su parte, la región 3´ no traducida del RNAm del receptor de transferrina contiene 5 IREs, en este caso, la unión del IRP protege los mRNA de la degradación, con lo cual estimula la expresión del receptor. Cuando los niveles intracelulares de hierro están elevados, el IRP se disocia de los IREs, con lo que aumenta la traducción del RNAm de la ferritina y se acelera la degradación del RNAm de los receptores de transferrina. 16 Artículo los macrófagos, al torrente circulatorio y es fundamental para la homeostasis del hierro. Este proceso está regulado negativamente por la hepcidina, una hormona peptídica derivada del hígado que se une a la ferroportina y promueve su fosforilación, internalización y degradación lisosomal (Fig.2). Si el metabolismo sistémico del hierro se regula predominantemente a nivel transcripcional, el equilibrio celular del hierro está controlado en gran parte por mecanismos post-transcripcionales (fig 3). Los RNAms responsables de la síntesis de las proteínas involucradas en la homeostasis del hierro como las proteínas transportadoras de metales divalentes, el citocromo duodenal B, la ferritina, la ferroportina, la transferrina y receptores de transferrina, poseen en las regiones no codificantes unas secuencias de nucleótidos filogenéticamente conservadas denominadas IRE (Iron Responsive Element). Estas regiones IRE interactúan con unas proteínas presentes en el citoplasma denominadas IRP (Iron Regulatory Proteins); que se comportan como sensores del hierro. Se han hallado dos tipos de IRP: IRP-1 e IRP-2.13 De modo que las proteínas reguladoras del hierro citoplasmáticas (IRP, Iron Regulatory Protein) determinan el destino de varios RNAms tras la unión a sus elementos sensibles al hierro (IRES, Iron Responsive Elements). Conclusion El hierro es vital para el organismo, sin embargo, tiene poca biodisponibilidad y es potencialmente tóxico. Por estas razones las células y los organismos multicelulares han desarrollado unos mecanismos sofisticados para hacer frente a los desafíos de la adquisición del hierro y su manipulación. Se han hecho progresos muy notables en el conocimiento de la regulación del metabolismo del hierro en los mamíferos. Pero hay todavía mucho más por descubrir y comprender. j Referencias 1.World Health Organization; Centers for Disease Control and Prevention Atlanta. Worldwide Prevalence of Anaemia 1993– 2005: WHO. Global Database on Anaemia; World Health Organization: Geneva, Switzerland, 2008. Available online: http:// www. who.int/nutrition/ publications/ micronutrients/anaemia_iron_deficiency/9789241596657/ 2. McLean E, Cogswell M, Egli I, Woidyla D, de Benoist B. Worldwide prevalence of anaemia, WHO Vitamin and Mineral Nutrition Information System, 1993–2005. Public Health Nutr. 2009; 12: 444–454. 3. Petry N, Egli I, Zeder C, Walczyk T, Hurrell R. Polyphenols and phytic acid contribute to the low iron bioavailability from common beans in young women. J Nutr. 2010;140 (11):1977-82 4. Koppenol WH. The Habere Weiss cycle e 70 years later. Redox Rep 2001; 6: 229-234. 5. Evstatiev R, Gasche C. Iron sensing and signalling Gut. 2012; 61:933-952. 6. William E. Winter, Lindsay A. L. Bazydlo, and Neil S. Harris. The Molecular Biology of Human Iron Metabolism. Lab Med Spring 2014;45:92-102 7.Gozzelino R, Jeney V, Soares MP. Mechanisms of cell protection by heme oxygenase-1. Annu Rev Pharmacol Toxicol. 2010; 50: 323-354. 8. Sharp P, Srai S.K. Molecular mechanisms involved in intestinal iron absorption. World J Gastroenterology. 2007; 13(35): 47164724. 9.Knutson M. and Wessling-Resnick M. Iron Metabolism in the Reticuloendothelial System. Critical Reviews in Biochemistry and Molecular Biology. 2003, 38(1):61-88. 10. Philpott. C. C., and Ryu, M. S. Special delivery: distributing iron in the cytosol of mammalian cells. Frontier in pharmacology.2014;5: 173 11. Andrews NC. Ferrit(in)ing Out New Mechanisms in Iron Homeostasis. Cell Metabolism 2010. 12, Elsevier Inc. 12.Hentze MW. Muckenthaler MU, Galy B, and Camaschella C. Two to Tango: Regulation of mammalian Iron Metabolism. 2010 Cell 142, Elsevier Inc. 13.Wilkinson N. and Pantopoulos K. The IRP/ IRE system in vivo: insights from mouse models. Frontier in pharmacology.2014;5: 176 Æ Socios protectores de la SETS - Octapharma, S.A - Novartis Vaccines and Diagnostics S.L. - Diagast Ibérica, S.L - Terumo Europe España - Fenwal España, S.L - Grupo Grífols - Cerus - Movaco - Abbott - Maco Spania - Menarini - Gambro - Ortho - Immucor, S.L. 17 Artículo Una imagen vale más que mil palabras V. Callao. Se presenta en esta ocasión unas imágenes proporcionadas a la CGIAMT por Luisa Más, Casi Riol, Virginia Callao y Roberto Roig, del Centro de Transfusión de la Comunidad Valenciana Varón de 86 años de edad con antecedentes transfusionales 3 años antes, que presenta una prueba de detección de anticuerpos irregulares positiva. En el estudio inmunohematológico se observó: - Grupo ABO-Rh(D): O positivo - Escrutinio positivo (en las 3 células) - Autocontrol negativo. Prueba directa de antiglobulina negativa - Identificación de anticuerpos irregulares (AI) con diferentes paneles en fase de antiglobulina (AHG): alguna célula negativa, resto positivas débiles con diferentes grados de intensidad (Figura 1). - Identificación de AI en fase de enzimas: negativo (figura 2) Ante estos resultados se puede sospechar: 1. Varios aloanticuerpos: una mezcla de anti-Fyª, anti-M, anti-S en base al estudio del fenotipo del paciente (Fy(a-b+), NN y ss) y el de las unidades transfundidas (Fyª,M,S). 2. Anticuerpo frente antígeno de alta incidencia con patrón de alto título y baja avidez (HTLA) que desaparece en técnica enzimática. Conclusión obtenida por la visualización de reactividades débiles y heterogéneas en los paneles de identificación. Posibilidades más frecuentes: Chido/Rodgers, Yta, Gerbich 3, Lan, JMH, Jsa… Se realizaron las siguientes determinaciones: 1. Pruebas cruzadas utilizando hematíes con diferentes combinaciones antigénicas, siendo los resultados no concluyentes para ninguna especificidad 18 Figura 1. Panel de identificación del suero en gel-antiglobulina Figura 2. Panel de identificación del suero en fase de enzimas 2. Aloadsorciones diferenciales utilizando un panel de 3 hematíes de fenotipo complementario: tras la quinta adsorción el resultado de la identificación de los tres sueros adsorbidos es negativo. 3. Varias pruebas cruzadas y fenotipo al paciente, descartando la presencia de anti - Ytª, anti - Lan, anti- JMH. En resumen: • Se descartó la presencia de mezcla de aloanticuerpos. • Se observó una reactividad con un patrón sugestivo de anticuerpo frente antígeno de alta incidencia que se inhibe en enzimas. • Se descartó anti - Lan, anti - Ytª, anti - JHM. Cuál es el siguiente paso? Descartar la presencia de anticuerpos de especificidad anti Chido-Rodgers: Técnica de Neutralización de la reactividad del suero con plasma Se realizó una incubación (30 min) del suero en estudio con un pool de 6 Figura 3: Suero del paciente tras la incubación con albúmina Figura 4: Suero del paciente incubado con un pool de plasmas Artículo plasmas de donantes AB. En paralelo realizamos la misma incubación del suero pero con albúmina 6%. A continuación realizamos un proceso de titulación y vemos como la reactividad que aparece en el suero tratado con albúmina (Fig. 3) desaparece al tratar con plasma (Fig. 4). Esta neutralización es sugestiva de la presencia en el suero de anticuerpos de especificidad anti Chido-Rodgers. Sistema Chido-Rodgers Los antígenos del sistema ChidoRodgers no son verdaderos antígenos eritrocitarios. Se localizan en un fragmento del componente 4 del complemento (C4d), que se adsorbe a los glóbulos rojos desde el plasma. Su expresión sobre los hematíes se inhibe si se tratan con enzimas. El 95% de individuos de raza blanca son Ch+Rg+. Los anticuerpos frente a los antígenos Chido/Rodgers no se han relacionado con reacciones hemolíticas transfusionales ni enfermedad hemolítica del feto y del recién nacido, pero complican en ocasiones las pruebas inmunohematológicas. Tienen un comportamiento de HTLA y su reactividad desaparece en enzimas. La unión de los anticuerpos a los hematíes es rápidamente inhibida al añadir plasma de individuos Ch+Rg+. j Referencias 1. Roos MH, Giles CM, Demant P, Mollenhauer E, Rittner C. Rodgers (Rg) and Chido (Ch) determinants on human C4: characterization of two C4 B5 subtypes, one of which contains Rg and Ch determinants. J Immunol. 1984 Nov;133(5):2634-40. 2.AABB Technical Manual. 17th edition. Chapter 14: Other blood groups. 3. Nordhagen R, Heier Larsen AM, Beckers D. Chi- do, Rodgers and C4. In vivo and in vitro coating of red blood cells, grou- ping and antibody detection. Vox Sang. 1979;37(3):170-8. 4.Moulds MK. Serological investigation and clinical significance of high-titer, low-avidity (HTLA) antibodies.. Am J Med Technol. 1981 Oct;47(10):789-95 Organización Mundial de la Salud A propósito del día mundial del donante Año 2015 – 14 de junio La OMS - Organización Mundial de la Salud promueve cada año la celebración del DIA DEL DONANTE DE SANGRE cada 14 DE JUNIO en todo el mundo. La idea es que se celebre a nivel local, comarcal, regional, nacional, en todas partes, para así actuar sinérgicamente con un doble objetivo, el agradecimiento público a los donantes de sangre y la promoción de la donación regular, voluntaria y altruista. Cada año se elige un lugar de la Tierra para el acto central. En 2010 lo fue Barcelona, este año 2015 será Shanghai el punto de encuentro el 14 de junio, con una invitación para que en todas partes resuene como un eco a nivel local. El lema de la campaña de este año es Gracias por salvar mi vida, Thank you for saving my life. La idea es resaltar el agradecimiento a los donantes que sal- van vidas a diario a través de sus donaciones de sangre, y animar a más personas a donar voluntaria y regularmente. El slogan es Dona con libertad, dona con frecuencia. La donación de sangre es importante. La campaña presentará historias de personas cuyas vidas se han salvado gracias a la donación de sangre, promover que donantes voluntarios y regulares continúen donando sangre, y que personas que gozan de buena salud y que nunca han donado con anterioridad se animen a empezar, sobre todo los jóvenes. Las actividades incluyen acontecimientos conmemorativos, encuentros, difusión de historias a través de publicaciones y folletos. En 2015 los objetivos operativos de la campaña son: • Agradecer a los donantes por salvar vidas. • Promover la donación habitual, voluntaria y altruista. • Sensibilizar al público sobre la necesidad de donantes que donen a intervalos regulares; la sangre tiene una viabilidad limitada en el tiempo. No basta con la donación puntual, sino que se requiere una atención permanente. • Llamar la atención sobre la importancia de la buena salud y de la calidad del cuidado al donante como elementos de importancia crítica que contribuyen al compromiso de las personas para que sigan siendo donantes. • Recordar a los organismos oficiales y gubernativos lo importante que es el reconocimiento público de la donación de sangre regular, voluntaria y altruista, y que el cuidado al donante debe de estar provisto de los recursos necesarios. j 19 Artículo Formación en los servicios de transfusión: de la peculiar transcripción de la Directiva Europea 1343/2007 a la nueva norma ISO 9001:2015 M.M López / Hospital del Mar. Barcelona. Con el advenimiento de la nueva norma ISO (ISO 9001:2015)1, que se está ultimando actualmente, en los Servicios de Transfusión se nos presentará una nueva tarea, la gestión de los riesgos asociados a cada proceso que llevamos a cabo. En pocos meses habremos de realizar la previsión de los riesgos, palabra que aparece 18 veces en el nuevo texto: tendremos que calcular por adelantado la frecuencia de cada riesgo potencial y seleccionar medidas destinadas a evitarlos. Con toda seguridad un programa de formación estructurado y respetado puede convertirse en un potente mitigador de riesgos, llegando incluso a eliminarlos. Creemos que una estrategia para mitigar los riesgos en los servicios de transfusión pasa por establecer un programa de formación adecuado, flexible respecto a los cambios, resiliente ante el exceso de trabajo, y férreo en cuanto a la comprobación del efecto de la formación en el personal. Con esta perspectiva, en nuestro servicio que abarca 2 hospitales con un total de 500 camas y dispone de certificación ISO 9001:2008 en vigor, revisamos la documentación legal española relativa a la formación, considerando que constituye el primer instrumento o patrón para verificar y mejorar nuestro programa de formación. Observamos que el Real Decreto 1343/2007 del Ministerio de Sanidad y Consumo, “por el que se establecen normas y especificaciones relativas al sistema de calidad de los centros de transfusión y servicios de transfusión”2, recoge en 2 anexos diferentes los aspectos de formación; vemos que las normas no son idénticas para los centros y para los servicios de transfusión. Así, destaca que mientras en el Anexo 1, dedicado al sistema de calidad de los centros de transfusión, se expresa que “el contenido de los programas de formación se definirá periódicamente, y la competencia del personal se evaluará con regularidad” (punto 4), en el Anexo II, dedicado a los servicios de transfusión, este enunciado ha desaparecido. De esta manera, con la ley en la mano, parece que en los servicios de transfusión no existe la obligatoriedad de definir periódicamente el contenido de los programas Tabla nº1. El Anexo II, que hace referencia a los servicios de transfusión, no menciona la necesidad de evaluar regularmente la competencia del personal, que en cambio sí consta explícitamente en la normativa de los centros de transfusión REAL DECRETO 1343/2007, de 11 de octubre, por el que se establecen normas y especificaciones relativas al sistema de calidad de los centros y servicios de transfusión. ANEXO I Normas y especificaciones del sistema de calidad del centro de transfusión 1. Personal y organización 1.3. El personal recibirá formación y asesoramiento para el ejercicio competente de sus tareas. Para ello se planificarán acciones de formación inicial y continua adecuadas a las tareas específicas, las cuales serán debidamente documentadas y registradas. Se introducirán, así mismo, programas de formación que incluyan «buenas prácticas». 1.4. El contenido de los programas de formación se definirá periódicamente, y la competencia del personal se evaluará con regularidad. ANEXO II Normas y especificaciones del sistema de calidad de los servicios de transfusión 1. Personal y organización 1.2. El personal recibirá formación y asesoramiento para el ejercicio competente de sus tareas. 1.4. El personal recibirá formación inicial y continua adecuada a sus tareas, así como programas de formación que incluyan «buenas prácticas». 20 Artículo de formación ni de evaluar con regularidad la competencia del personal, mientras que en los afortunados centros de transfusión sí que existe esta cláusula. Por otra parte, ambos anexos I y II comparten una cláusula que reza “el personal recibirá formación y asesoramiento para el ejercicio competente de sus tareas”. ¿Asesoramiento? Seguramente debe haber otro término más explícito para esta tarea, ya que llegada la hora, un auditor interno o externo nos podría solicitar que demostráramos el asesoramiento, obligatorio según la directiva. En nuestro hospital no tenemos actividades de asesoramiento registradas como tales, pero después de esta lectura, sin duda vamos a tener que abrir una nueva carpeta, si aceptamos que las normas de la Directiva no son orientativas, sino obligatorias. Afortunadamente los estándares de formación del CAT3 son más explícitos y universales, enfocados tanto para centros como para servicios de transfusión, y nos pueden ayudar a revisar la estructura del programa de formación. Por otra parte, en el Reino Unido se publicaron en 2009 unas recomendaciones a modo de requisitos mínimos para reducir los errores de los laboratorios de transfusión4. Las recomendaciones se centran en tres aspectos concretos: las cualifica- ciones del personal, el uso de la tecnología informática, y la formación. En 2014 estas recomendaciones se han tenido que fortalecer convirtiéndose en estándares mínimos5, tras comprobarse en sucesivos informes SHOT que en el Reino Unido no se ha conseguido rebajar la tasa de error contribuida por los laboratorios de transfusión. Es interesante tener en cuenta estos recientes estándares británicos, porque incluyen una interesante referencia al personal que trabaja pocos días al año, o en solitario, o sin supervisión. Finalmente, todas estas publicaciones se complementan entre sí y nos pueden ser útiles en nuestro programa de gestión de riesgos. j Referencias 1. http://www.iso.org/iso/iso_9000 2. Real Decreto 1343/2007 del Ministerio de Sanidad y Consumo. http://www.msssi.gob. es/profesionales/saludPublica/medicinaTransfusional/legislacion/docs/RD_13432007.pdf 3. http://www.catransfusion.es/fundacion/ actualidad/41/nueva-edicion-de-estandares- 4. en-transfusion-sanguinea-cat UK Transfusion Laboratory Collaborative: Recommended minimum standards for hospital transfusion laboratories. B Chaffe, J Jones, C Milkins, C Taylor, D Asher, H Glencross, M Murphy, H Cohen. Transfus Med. 2009 August; 19(4): 156–158. doi: 10.1111 5. UK Transfusion Laboratory Collaborative: minimum standards for staff qualifications, training, competency and the use of information technology in hospital transfusion laboratories 2014.Chaffe B, Glencross H, Jones J, Staves J, Capps-Jenner A, Mistry H, Bolton-Maggs P, McQuade M, Asher D.Transfus Med. 2014 Oct 29. doi: 10.1111/tme .12153. 21 informes Cambios y mejoras en el boletín de la SETS Por encargo de la Junta de la SETS, durante el año 2014 se ha realizado una encuesta entre los socios para conocer sus preferencias en cuanto al formato y contenidos del Boletín. De acuerdo con los resultados y la deliberación de la propia Junta, la conclusión es que a partir de los números correspondientes al año 2015 el Boletín se difundirá únicamente en formato digital j 22 Volumen 26 (4); 2014 Nº Sociedad Española de Transfusión Sanguínea y Terapia Celular Informes Centro Vasco de Transfusión y Tejidos Humanos. Díptico que resume la información sobre la donación de sangre que hay que dar al donante (RD 1088/2005 Anexo-I Parte A-1) 23 Hemeroteca Hemeroteca Donación y procesamiento Dra. Erkuden Aranburu / Centro de Transfusión de Navarra. COMMENTARY: CONCERNING IRON BALANCE IN BLOOD DONORS. Merlyn Sayers and Jeff Centilli. Transfusion Volume 54, November 2014 La aparición de un balance negativo de hierro en los donantes habituales es un tema de sobra conocido, pero la experiencia de los centros que tomaron parte en el estudio REDS-II ha provocado una honda inquietud acerca de este problema y la necesidad de conocer más a fondo su significado clínico. Este estudio confirma la relación entre la depleción de hierro de los depósitos y una eritropoyesis deficitaria en un número significativo de donantes habituales lo que insta a los autores a poner más atención en la seguridad del donante considerando la frecuencia de las donaciones y la administración rutinaria de hierro. La publicación en el Bulletin #12-03 de la AABB Interorganizational Task Force on Donor Hemoglobin Deferrals del articulo Strategies to Monitor, Limit , or Prevent Iron Deficiency in Blood Donors viene a reforzar las conclusiones del estudio anteriormente citado, afirmando que existe suficiente evidencia para admitir que “El déficit de hierro en ausencia de anemia, esta siendo cada vez mas identificado como un problema” y detallan recomendaciones concretas como la prolongación del tiempo de intervalo entre donaciones, la realización del estudio de la ferritina, y la valoración del papel de la terapia con hierro. Su aplicación la dejan abierta bien a todos los donantes o a un grupo seleccionado. La prolongación del intervalo entre donaciones afecta significativamente al mantenimiento del stock de eritrocitos. Los autores ponen por ejemplo que doblar el intervalo entre dos donaciones (8 semanas según la norma americana) hasta ponerlo en 112 días disminuiría las reservas de O negativo en un 10 %. Mientras el Bulletin propone examinar de nuevo el intervalo entre donaciones de los donantes habituales, no dice nada sobre el tiempo de exclusión cuando se vea que el donante tiene una hemoglobina baja, lo que es lógico porque las diferencias de este plazo entre centros oscila entre tres días y seis meses . Los autores deciden abordar este tema con dos intenciones: Comunicar al donante rechazado cuándo podría volver a donar, y cómo ajustar las convocatorias para no enviar prematuramente mensajes a donantes 24 con tendrán pocas posibilidades de donar. Empiezan por revisar la experiencia entre los años 2005 y 2013, periodo en el que 78.489 mujeres y 13.642 hombres tuvieron Hb inferiores a 12.5 gr/dl (en EEUU límite mínimo tanto para hombres como para mujeres). Las 47.764 mujeres que volvieron (60% del grupo original) fueron divididas según los rangos de la cifra de hemoglobina que presentaban cuando fueron rechazadas y divididas después en grupos de acuerdo con la que tuvieron al regreso y si donaron o no. Los resultados confirmaron que una mujer que es rechazada tiene más posibilidades de donar cuanto más se acerca su Hb al umbral de 12.5 g/dL y cuanto más tarda en acudir a donar. Este análisis les permitió dar una respuesta más informada acerca de cuando van a poder volver a donar. Así por ejemplo pueden comunicar a los donantes con niveles de Hb por debajo de 10.9 gr/dl que a pesar de un intervalo de 21 a 24 semanas no conseguirán donar en un 50% de los casos. También confirma que para un determinado grupo de donantes rechazado, el prolongar el tiempo entre donaciones no es suficiente. De las 1.681 mujeres que fueron desechadas por Hb entre 12.2 y 12.4 gr/dl un 26 % fueron desechadas de nuevo tras un intervalo de 21 a 24 semanas. Este grupo plantea la cuestión de que el imbalance de hierro no está restringido solo a las mujeres donantes con anemia demostrada. Este grupo entraría en el caso que plantea el Bulletin como segunda recomendación: el estudio de ferritina. Si este estudio se adopta de forma selectiva sobre este grupo obviaríamos el grupo de donantes rechazados con Hb muy bajas con respecto al umbral, que podían incluir individuos con anemia de otra etiología. Esta posibilidad habla a favor de realizar el estudio de los depósitos de hierro a todos los donantes rechazados para asegurarse de que aquellos que necesitan una evaluación clínica, como los individuos con anemia y depósitos de hierro normales, están controlados. Otro tema a considerar es el propio test de ferritina ya que algunos investigadores muestran mucha cautela acerca de la confianza en él como medida exclusiva de la situación de los depósitos de hierro. Los autores se plantean que si los estudios confirman que el depósito de hierro bajo en ausencia de anemia afecta a la seguridad del donante, entonces la ferritina debería de Hemeroteca considerarse como un estudio previo a la donación, lo que aseguraría que donantes con depósitos de hierro bajos no donaran. Proponen otra medida de análisis para el screening de donantes que actúa con la misma rapidez de ejecución que la determinación de la ferritina. Comparativamente el test de protoporfirina eritrocitaria-zinc tiene un tiempo de ejecución aceptable. Es barato y rápido y fue propuesto hace más de treinta años como screening predonación. La experiencia actual confirma que puede ser útil en el estudio previo a la donación para identificar donantes con eritropoyesis deficitaria en hierro. Otro objetivo del estudio es el mensaje que se da a los donantes. En algunos bastaría con hacer hincapié en el aporte nutricional mientras que a los donantes que muestran de forma repetida depósitos bajos de hierro sería más aconsejable prolongar el intervalo entre donaciones. La tercera estrategia que planteaba el boletín citado era el aporte de hierro y presentaban un número de opciones: desde enviar la medicación hasta incluir recomendaciones acerca de la ingesta de hierro por vía oral. Con cualquier medida que se tome, el centro adquiere una responsabilidad nueva al tener que tratar a donantes en los que se ha detectado falta de hierro en los depósitos. Esto puede tener una lectura no muy amable si se interpreta como que el centro esta tratando de mantener al donante para que done o una más bondadosa que contempla que vela por su seguridad. Para apoyar esta segunda opción tenemos el problema de que no hay estudios con conclusiones claras acerca de la relación entre déficit de hierro de deposito y patología, en ausencia de anemia. Hay dos áreas en la que las conclusiones de estudios más específicos pudieran influir notablemente en la opinión acerca de la seguridad del donante y el tratamiento del déficit de hierro. La primera concierne a la posibilidad de que el déficit de hierro altere la función neurocognitiva. Para explorar esta posibilidad el REDS-III investigará la donación de sangre donante entre 16 y 18 años. La otra área de estudio tiene relación con la donación de sangre, el consiguiente déficit de hierro y su asociación con un aumento del riesgo de partos prematuros y recién nacidos de bajo peso. Un grupo de investigadores de Quebec está trabajando en ello La decisión de medir los depósitos de hierro en los donantes de sangre tanto en un grupo seleccionado como en todo el colectivo tiene significativas ramificaciones especialmente si los resultados se utilizan para enviar mensajes, para elaborar guías de tratamiento del déficit de hierro o identificar al candidato que debe de ser derivado para estudio más amplio. Mientras que el Bulletin 12-03 sugiere que el estudio sea selectivo se podría argumentar que si es preciso corregir los depósitos de hierro entonces todos los donantes deberían de ser evaluados. Los autores destacan la repercusión de estas medidas en cuanto a su relación con la mejora de la Salud Pública objetivando que los resultados del REDS_II muestran que el déficit de hierro es muy común entre la población sana: Niveles de ferritina de menos de 12 ng/mL en el 6,4% de mujeres que nunca han donado o lo han hecho hace mucho tiempo. Es de destacar que uno de los objetivos de la US Health and Human Services Department National Health Objetives sea reducir el déficit de hierro en las poblaciones vulnerables, por lo que los centros de transfusión mediante el diagnostico de déficit de hierro y una política de tratamiento contribuirían su cumplimiento. STORAGE AND HANDLING OF BLOOD COMPONENTS. PERSPECTIVES. Tor Hervig, Silje Kaada, Jerard Seghatchian Transfusion and Apheresis Science 51(2014) 103-106 Las condiciones de almacenamiento y distribución de los diferentes componentes sanguíneos son tan rigurosas que a menudo obligan a eliminar unidades que pueden ser aceptables desde el punto de vista de su calidad, aunque estas condiciones están más basadas en la rutina que en las investigaciones científicas. Esta breve revisión viene a demostrar que deberían de reconsiderarse algunas de estas normas a la luz del análisis de estudios realizados también aporta nuevas sugerencias para ayudar a mantener el delicado balance entre la optimización de los recursos, procedentes de la donación altruista y el aseguramiento de la calidad de la transfusión. A lo largo de la historia de los Bancos de sangre se han ido incorporando medidas para mejorar la conservación de la sangre: soluciones de almacenamiento, separación de sus componentes que permitió conservar los concentrados de hematíes a 2-6 º C, los concentrados de plaquetas a 20-24 º C y el PFC a-20º C, el fraccionamiento plasmático, la introducción de la agitación durante el almacenamiento de los concentrados de plaquetas… También se ha mejorado en el intento de mantener las mejores condiciones durante el transporte y la entrega en las unidades clínicas. El objetivo de esta revisión es plantear la necesidad de iniciar nuevas investigaciones para revisar las actuales reglas de almacenamiento y distribución de 25 Hemeroteca los componentes sanguíneos que permitan asegurar una transfusión con bajo riesgo y alta calidad de los productos y que no conlleven una destrucción elevada de productos sanguíneos. Como ejemplo recogen que en Noruega en los últimos 10 años se han eliminado un total de 15000 unidades de CH de un total de 200000. Revisión de la situación actual por componentes. El almacenamiento de los concentrados de hematíes según la Guía del Comité Europeo de Transfusión Sanguínea debe de realizarse entre 2-6 º C y durante el transporte no se deben sobrepasar los 10 º C en 24 h. Tanto la AABB como la guía de UK recomiendan realizar el trasporte tratando de cumplir los requisitos generales de almacenamiento. Australia mantiene la regla de los 30 minutos fuera del almacenamiento recomendado. Hancok et al han realizado estudios manteniendo los concentrados de hematíes a temperaturas superiores durante intervalos diferentes sin detectarse alteraciones en la calidad del producto. El estudio de Ramírez-Arcos aborda el problema de la contaminación bacteriana concluyendo que el almacenamiento durante 3 h a TA es seguro y no modifica la calidad del componente. Por el contrario múltiples exposiciones a TA. sí modifican su calidad. La tecnología actualmente disponible permite conservar durante el trasporte las mismas condiciones que las del almacenamiento, lo que reduce de forma significativa el deterioro de los productos sanguíneos Concentrados de plaquetas. En UK, la AABB y en Australia son obligatorios el almacenamiento entre 20-24 º C así como la agitación, pero no se dice nada de las condiciones de transporte. Como es inevitable transportar estos componentes sin agitación se acepta que la hipoxia pueda producir cierta reducción de la función plaquetar. Antes de colocar el CP en agitación un periodo de reposo mejora la calidad de las plaquetas (Skripchenko et al). En 2013 este mismo equipo realizo un estudio indicando que el uso de soluciones aditivas como medio de almacenamiento de los CP sin agitación, podía producir más alteraciones en la función plaquetar que con los CP mantenidos en plasma. Plasma: En lo que respecta a este componente la guía europea es clara: el plasma descongelado tiene que ser utilizado tan pronto como sea posible y no se debe de congelar de nuevo. Existen publicaciones que indican que esta normativa es demasiado estricta ya que conlleva la eliminación de unidades que pueden ser útiles. Numerosos estudios han demostrado que no hay pérdida significativa de la actividad de los factores de coagulación en el plasma descongelado mantenido durante 7 días en la nevera. Lo mismo ocurre con el 26 plasma tratado con SD: El almacenamiento de plasma líquido para las urgencias puede tener incluso sus ventajas con respecto al plasma fresco congelado. Manejo de los componentes sanguíneos fuera del banco de sangre. Los artículos publicados coinciden en indicar que las guías actuales son demasiado estrictas en cuanto a la readmisión de los CS distribuidos. Se ha observado que la tasa de unidades eliminadas está por encima de lo que sería razonable teniendo en cuenta su origen altruista. No obstante si las guías se elaboraran al objeto de proteger el depósito podríamos tener serios problemas en cuanto a la seguridad de los pacientes. Para los concentrados de hematíes parece razonable que se adopte la regla de 60 minutos fuera del BS. Esta avalada por numerosos estudios aunque recomiendan mas información en cuanto a las alteraciones de los hematíes producidos durante el almacenamiento y su repercusión clínica. El uso de sistemas de control de temperaturas puede ser útil para establecer las regulaciones locales en base a la información que nos aporta acerca de las condiciones de transporte En cuanto a los concentrados de plaquetas, en base a previos estudios se considera que el almacenamiento durante 24 h sin agitación puede ser seguro. La temperatura a la que debe de mantenerse está menos clara ya que el frío mantiene mejor la calidad de la plaquetas in vitro pero la lesión del almacenamiento en frío puede reducir la vida media en pacientes transfundidos de forma profiláctica. Se debe de estudiar el efecto negativo del almacenamiento de plaquetas en solución aditiva ya que este su uso está extendiéndose al objeto de ir reduciendo el contenido de plasma. La experiencia clínica y numerosos estudios avalan la utilización de plasma descongelado y conservado en nevera durante 7 días. En cuanto al plasma tratado de forma comercial estos resultados también son aplicables, pero la normativa legal puede dificultar el almacenamiento líquido de este producto si fuera de aplicación la regulación de productos farmacéuticos. En conclusión, el balance entre el mantenimiento del depósito de cara a optimizar cada producto procedente de una donación altruista y asegurar la optimizar calidad de la transfusión a los pacientes es muy delicado. Es necesario realizar más estudios aunque en base a la información actual se puede afirmar que los concentrados de hematíes pueden ser readmitidos en el depósito del Banco de sangre si han estado hasta 60 minutos fuera de las condiciones controladas de almacenamiento. Los concentrados de plaquetas pueden ser transfundidos después de 24 sin que se haya mantenido las condiciones estándar de almacenamiento. El plasma fresco congelado puede conservarse en nevera durante 7 días antes de transfundir. j Hemeroteca Hemeroteca Clínica Dr. Iñigo Romón / Hospital Marqués de Valdecilla. Santander. Medicina Transfusional en los pacientes geriátricos: Necesidades específicas Ya es un lugar común hablar del envejecimiento poblacional y las demandas específicas que supondrá para el sistema transfusional a nivel mundial. Sin embargo, y a pesar de que los hospitales están poblados mayoritariamente por pacientes añosos, son relativamente pocas las publicaciones que estudian los efectos de la trasfusión sanguínea en este segmento de población. Dado que nuestro país es uno de los más envejecidos de Europa, y con tasas de natalidad muy inferiores al resto de los países, este debería ser un tema de estudio serio para nosotros. Aunque para variar, la falta de datos de nuestro país o la dificultad para reunirlos o trabajar sobre ellos de forma coordinada no parecen presagiar resultados por nuestra parte. A finales de año han aparecido algunas publicaciones que quisiera comentar. Odds of transfusión for older patients compare to younger adults undergoing surgery. Brown Ch 4th, Savage WJ et al. Anesth Analg. 2014 Jun; 1108/ (6):1168-78. Los autores (Hospital Johns Hopkins de Baltimore y Brigham and Women’s General de Boston) se plantean si los pacientes mayores tienen más posibilidades de ser trasfundidos que el resto en el periodo perioperatorio, a pesar de la evidencia que muestra trasfundir con hemoglobinas g/dl no aporta beneficio. Este es una pregunta sin responder, por lo que desarrollan este estudio retrospectivo. Para responder a esta pregunta, los autores realizan un estudio retrospectivo de cohortes en un hospital terciario. Incluyen pacientes ingresados para cirugía entre 2010 y 2012. El análisis primario compara las probabilidades de ser trasfundido para los pacientes > 65 años con respecto a los más jóvenes. Para ellos, hacen un análisis multinivel y multivariable de regresión logística, incluyendo el ajuste par comorbilidad, servicio quirúrgico, nadir de hemoglobina durante el ingreso, género, estimación de sangrado quirúrgico y agregación por cirujano y procedimiento quirúrgico. Finalmente, se incluyen en el estudio más de 20.000 28 pacientes. En el estudio multinivel, ajustando las variables antes mencionadas, si se consideran el cirujano y el procedimiento quirúrgico como eventos aleatorios, los pacientes de > 65 años tienen un 62% más de probabilidades de ser trasfundidos que los pacientes más jóvenes (OR, 1.62, CI 95% 1.40 – 1.88, P >0.0001). Cuando los pacientes se estratificaron según la hemoglobina más baja del ingreso (7.00-7.99, 8.00-8.99, 9.0 - 9.99 >10 g/dl), las probabilidades por lo general crecieron con cada década de edad, excepto para aquellos en los que la hemoglobina no baja de 10 g/dl. Cuando las diferencias de probabilidad de ser trasfundido se analizaron entre pacientes jóvenes y mayores, se observaron diferencias entre servicios quirúrgicos (P=0.02), pero no ente especialidades de anestesia (P=0.9) Los autores concluyen que los pacientes más añosos tienen más probabilidades de ser trasfundidos que los más jóvenes, a pesar de la falta de evidencia que apoye los niveles de hemoglobina más altos en ancianos. Se necesitan más estudios para determinar si la hemoterapia en los ancianos representa una oportunidad de mejora educativa para la gestión de la sangre. En resumen: un artículo interesante sobre un segmento de población creciente y en el que no se suele poner interés. Dado que está sólidamente estructurado, mitiga las limitaciones habituales de los estudios retrospectivos. Como crítica a los autores, sería interesante conocer los niveles de trasfusión de cada servicio y cada patología y también saber si todos siguen una misma guía trasfusional. Por otra parte, también sería interesante conocer algún dato sobre el tipo de recuperación post quirúrgica (¿se recuperan mejor los pacientes con régimen liberal? ¿tienen un alta más precoz?), el tipo de componentes sanguíneos que manejan, datos de supervivencia, etc. más detallados. Massive blood transfusións post trauma in the elderly compared to younger patients. Mitra B, Olaussen A, Cameron PA, O’Donohoe T, Fitzgerald M. Injury. 2014 Sep; 45(9):10296 – 300 Tanto la ancianidad como la transfusión sanguínea se han asociado con una mayor mortalidad post traumáti- Hemeroteca ca y la combinación probablemente termine en resultados catastróficos dado que incluso con traumas menos severos los pacientes mayores evolucionan peor. Por otra parte, el pronóstico de los pacientes con hemorragia masiva ha mejorado con el tiempo. Los investigadores de este trabajo intentan por una parte determinar las diferencias de mortalidad entre pacientes jóvenes y mayores en el momento del alta, y por otra, detectar datos clínicos o indicadores que se asocien con una mayor mortalidad. Se realiza una revisión retrospectiva (2006 – 2011) de todos los pacientes con trauma severo que llegan a un centro de traumatología de nivel I. En el Estado de Victoria, Australia, se guardan datos de todos los pacientes con trauma grave, definido como aquellos pacientes con un índice de severidad del accidente (ISS) mayor de 15, que precisan cirugía o ingreso en intensivos, o que mueren en el hospital. Durante el periodo de estudio, se puso en marcha una guía de hemorragia masiva que recomendaba una infusión grande de hematíes con plasma a un ratio de 4:2 unidades, y plaquetas con un ratio 1:1 con respecto a los hematíes, y crioprecipitado si el fibrinógeno es <1g/ dl. Se compara la mortalidad al alta de los pacientes > 65 años con la de la cohorte más joven. Se elaboró un modelo de regresión logística multivariable para determinar factores de riesgo independientes para la mortalidad de los pacientes mayores. Como resultado, de los más de 5000 pacientes con trauma tratados se detectaron 311 con trasfusión masiva. De ellos, se detectaron 51 (16.4%) pacientes >65 años que recibieron transfusión masiva, aunque no cumplieran la definición oficial del protocolo, sino sólo la trasfusión de más de 5 hematíes en las primeras 4 horas de llegada al hospital, incluyendo las trasfusiones previas. Murieron 20 (39.2%), una proporción significativamente más alta que entre los pacientes más jóvenes (p<0.01). Como resultado, el valor de la escala de Glasgow pre ingreso, la presencia de coagulopatía post traumática y la tensión arterial alta aparecieron asociados independientemente con una mortalidad mayor. La edad y el volumen de hematíes trasfundido no se asociaron significativamente con la mortalidad. Los autores concluyen por tanto, que los pacientes mayores con hemorragia masiva post traumática no son frecuentes en este contexto, pero se ha visto que son capaces de sobrevivir incluso en presencia de múltiples factores de riesgo de mortalidad. Por este motivo, no se puede hacer una resucitación o transfusión restrictivas basándose sólo en el criterio de edad. Constatan que aunque se han puesto en marcha protocolos de hemorragia masiva, la coagulopatía traumática aguda con frecuencia sigue sin tratar. La resucitación agresiva precoz en el paciente mayor, siguiendo unas guías específicas está justificada, y puede mejorar aún más los resultados. Evidentemente, de nuevo nos encontramos ante un estudio retrospectivo, con los problemas que acarrea: la falta de poder estadístico para detectar diferencias pequeñas en el resultado, la falta parámetros más significativos como el grado de déficit funcional al alta (que quizás sean mejor medidores del resultado al alta y a largo plazo) o la falta de muchos datos de las maniobras de resucitación previas al ingreso hospitalario. En resumen: a pesar de las limitaciones metodológicas, un artículo que merece la pena leer tener datos más reales de los pacientes ancianos que cada vez más son los protagonistas de la asistencia sanitaria y de la medicina trasfusional. Why has demand for platelet components increased?L. J. Estcourt. Transfusion Medicine, 2014, 24, 260–268 doi: 10.1111/tme.12155 Why has the demand for platelet components increased? A commentary. A. Greinacher &W.Hoffmann. Transfusion Medicine,2014,24, 257–259doi: 10.1111/ tme.12154 Artículo publicado por LJ Estcourt sobre el incremento del consumo de plaquetas en el Reino Unido, en línea con lo que también está sucediendo en los países de Europa Occidental (24 – 32% en 10 años, según países), junto con un comentario de Greinacher y Hoffmann. Los principales consumidores son los pacientes con procesos hematológicos malignos (67%), cirugía cardiovascular (10%) y en unidades de cuidados intensivos (8%). Además, la mayoría delas trasfusiones de plaquetas (85%) en hematología se hacen profilácticamente. El consumo aumenta tanto por el aumento de la población, como por el envejecimiento de la población, lo que provoca un aumento de las hemopatías malignas, 29 Hemeroteca como por el cambio en el manejo de estos pacientes, sin que tengamos datos suficientes para aclarar las causas, dado que casi sólo disponemos de datos poblacionales globales. 1. Aumento de la población general: se trata de un hecho cierto en algunos países, pero no de otros. Sin embargo, no es esta la única causa, dado que cuando se ajusta el consumo por millar de habitantes, el aumento se mantiene pero no en la misma proporción. 2. Envejecimiento poblacional: es cierto que la población anciana crece en muchos países, pero en el Reino Unido (donde el autor tiene datos) la población anciana no ha crecido tanto como la población global. Como problema adicional, no se sabe con precisión la edad de los pacientes que reciben CPs. En el resto del mundo, no hay datos. 3. Cambios en la proporción de CP administrados inadecuadamente: si bien la adecuación de la trasfusión varía con la formación de cada país, no hay datos que hagan pensar en un aumento de la prescripción errónea. Es cierto que se sigue prescribiendo erróneamente, pero las auditorías no reflejan un cambio sustantivo en la mala práctica. 4. Cambios en las características de los CP: tampoco disponemos de datos que asocien los cambios en los CP con el aumento de la demanda. Las plaquetas inactivadas pueden resultar incrementos de la trasfusión, pero no sabemos el impacto de las plaquetas de aféresis, la solución aditiva empleada, la dosis por componente, etc. Se sabe que el aumento de dosis aumenta el periodo entre trasfusiones, pero no las reduce. 5. Cambios en la incidencia o prevalencia de las hemopatías: la incidencia de mieloma y linfoma está aumentando. No hay datos fiables sobre los síndromes mielodisplásicos, pero sí que su incidencia aumenta con la edad. A la vez, estos pacientes se tratan cada vez con más frecuencia, lo que induce un aumento de la demanda, y dado que sobreviven más, aumentan las posibilidades de tratamientos secuenciales o recaídas que a su vez requieran trasfusiones. Dado que estas hemopatías (linfoma, leucemia aguda y SMD) consumen más del 50% de las plaquetas, cualquier aumento en su incidencia y prevalencia resulta en un aumento del consumo de CP. 6. La introducción de regímenes de tratamiento más agresivos para las hemopatías: como ya hemos men- 30 cionado, el tratamiento agresivo de las hemopatías conlleva periodos de trombopenia severa durante los cuales se trasfunden CP profilácticamente, lo que se asocia también con mayores recaídas, posibilidad de tratamientos de rescate... Dado que en Europa el número de trasplantes hemopoyéticos ha aumentado dramáticamente, esto conlleva aumentos de los consumos. 7. Cambios en el manejo del paciente de cirugía cardiovascular: los datos son confusos, pudiendo variar tanto al alza como a la baja, pero dados los cambios recientes (stents, antiagregantes...) parece que el consumo no ha aumentado. 8. Cambios en el número de pacientes bajo cuidados intensivos: no se han documentado aumentos en los ingresos o en la duración de los mismos, pero debe ser objeto de vigilancia. En contraste, el número de hematíes no ha aumentado. Esto se atribuye en gran medida a que sólo el 18% de los hematíes en el UK se administran a pacientes hematológicos, por lo que los incrementos en sus números no tienen gran impacto sobre el consumo global, ensombrecidos por el uso quirúrgico. Además, se trasfunden muchas más CPs por ingreso con quimioterapia que hematíes. A la inversa, dado que el grueso del consumo de CPs se produce en pacientes hematológicos, cualquier incremento en ellos tendrá un impacto notable. Por tanto, el aumento del consumo se explica por un aumento de la población, su envejecimiento, el aumento de hemopatías que éste conlleva y el aumento de la agresividad en su tratamiento, que a su vez aumenta la supervivencia, las posibilidades de uso continuado, etc. Planificar el suministro requiere datos detallados. El autor acaba planteando preguntas: - ¿Cuál es el uso de plaquetas por edad, diagnóstico, tratamiento? - Podemos recoger datos estandarizados en Europa para comparar, predecir y gestionar la demanda de plaquetas? - Cuáles son los dinteles apropiados para trasfundir plaquetas por diagnóstico, tratamiento y enfermedad? - ¿Pueden usarse otros tratamientos adyuvantes para prevenir el sangrado y el uso de plaquetas? Sería interesante responderlas en nuestro país, y responder entre todos en forma de publicación en esta misma revista. j Normas Artículo de publicación Normas de publicación en el boletín de la SETS Presentación y estructura de los trabajos. Los trabajos se acompañarán de una carta de presentación en la que conste la aceptación de su envío por parte de todos los autores, la aseveración de no haber sido publicados anteriormente ni estar simultáneamente enviados a otra publicación. Todos los originales aceptados quedan como propiedad permanente del Boletín de la SETS y no podrán ser reproducidos en parte o totalmente sin permiso del director y del equipo de redacción del mismo. El autor cede, en el supuesto de publicación de su trabajo, de forma exclusiva al Boletín de la SETS todos los derechos de reproducción, distribución, traducción, comunicación pública, transformación y colección (por cualquier medio o soporte, incluso sonoro, audiovisual o electrónico) de su trabajo durante el plazo máximo de vigencia que en cada momento fije la ley para estos derechos, y para todo el mundo. Los trabajos se enviarán mecanografiados en hojas de tamaño DIN A4, a doble espacio (30 líneas de 70 pulsaciones), dejando un margen a la izquierda de, al menos, 3 cm. Las hojas irán numeradas correlativamente en el ángulo superior derecho. En la primera hoja se indicarán, en el orden que aquí se establece, los siguientes datos: título del artículo, nombre y apellidos de los autores, nombre completo de centro en que se ha realizado el trabajo y dirección completa del mismo. A continuación se especificará la persona con la que debe mantenerse la correspondencia, su dirección completa, correo electrónico, un número de teléfono y de FAX donde pueda ser más fácil contactar con el autor. Originales. Vendrán acompañados de un resumen que deberá estructurarse en: Introducción, Material y métodos, Resultados y Discusión y tener una extensión aproximada de 250 palabras. En dicha página se incluirán de tres a diez palabras claves obtenidas del Medical Subject Headings (MeSH) del Index Medicus/Medline, disponible en: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/entrez/meshbrowser,cgi, en inglés y español. A continuación seguirán las hojas con el texto del artículo en el que los distintos apartados (Introducción, Material y métodos, Resultados, discusión, Bibliografía) se sucederán sin interrumpir página. La bibliografía se comenzará en hoja aparte y se redactará de acuerdo con los “Requisitos de uniformidad para manuscritos presentados para publicación en revistas biomédicas” elaborados por el Comité Internacional de Editores de Revistas Médicas y conocidos como normas de Vancouver. Seguidamente se incluirán las tablas (cada una en una hoja) y ordenadas correlativamente. Al final se incluirán las figuras, gráficos, fotografías, etc., presentadas dentro de un sobre y convenientemente identificadas indicando con una flecha en el reverso su adecuada orientación. En dicho sobre, en hojas aparte, se incluirá una lista con los pies de tablas y figuras. Se aceptarán diapositivas o fotografías. Las fotografías se remitirán en blanco y negro o bien en archivo fotográfico electrónico con una resolución de 300 puntos por pulgada. Los gráficos deben realizarse con ordenador. La extensión máxima del texto será de 12 páginas y se admitirán hasta 6 figuras y 6 tablas. Sólo extraordinariamente se permitirá rebasar esta extensión. Se aconseja que el número de firmantes no sea superior a seis. Casos clínicos. Se aceptarán fundamentalmente los casos que destaquen por su carácter insólito o su interés práctico. La extensión máxima del texto será de 5 páginas y se admitirán hasta 2 figuras y 2 tablas. El orden a seguir será el mismo que en los Originales, pero disminuyendo al mínimo los detalles metodológicos. Se aconseja que el número de firmantes no sea superior a cuatro. Cartas al director. Podrán aportarse como tales comentarios a artículos publicados recientemente en el Boletín y observaciones o experiencias no relacionadas con material publicado a condición de que sean resumidas en un breve texto. La extensión máxima del 32 texto será de 2 páginas y podrá admitirse hasta una figura y una tabla. Si es preciso, puede incluirse bibliografía que en ningún caso superará las 5 citas. Se aconseja que el número de firmantes no sea superior a cuatro. Revisiones. Aunque habitualmente se efectuarán por encargo, podrán aceptarse revisiones que intenten poner al día un tema de interés en medicina transfusional acompañadas de detalle bibliográfico más extenso. La extensión máxima del texto será de 10 páginas y se admitirán hasta 4 figuras y 4 tablas. Solo extraordinariamente se permitirá rebasar esta extensión. Otras instrucciones a considerar Unidades. La revista aceptará unidades convencionales de medida. Agradecimientos. Cuando se considere necesario se citará a las personas centros o entidades que hayan colaborado en la realización del trabajo. Bibliografía. Se presentará según el orden de aparición en el texto con la correspondiente numeración correlativa. En el texto constará siempre la numeración de la cita en números volados. Los nombres de las revistas deber abreviarse de acuerdo con el Index Medicus/Medline; consultar “List of Journal Indexed” que publica todos los años el Index Medicus en el número de enero, o bien consultar la base de datos de revistas disponible en: http://ncbi.nlm.nih.gov/entrez/jrbrowser,cgi. Las citas deberán comprobarse sobre los artículos originales y se elaborarán según normas de Vancouver, disponibles en http://www.icmje.org/ Se evitará el uso de frases imprecisas como citas bibliográficas. No pueden emplearse como tales “observaciones no publicadas” ni “comunicación personal”, pero sí pueden citarse entre paréntesis dentro del texto. Los trabajos aceptados, pero aún no publicados, se incluyen en citas bibliográficas como “en prensa”, especificando el nombre de la revista precedido por la expresión (en prensa) entre paréntesis. Las citas bibliográficas deben comprobarse por comparación con los documentos originales, indicando siempre la página inicial y final de la cita. Información para los autores 1. El consejo de Redacción acusará recibo de los trabajos enviados a la Revista e informará de su aceptación. 2. Los manuscritos serán revisados anónimamente por dos expertos en el tema tratado. El Equipo de Redacción ser reserva el derecho de rechazar los artículos que no juzgue apropiados, así como de introducir modificaciones de estilo y /o acortar los textos que lo precisen. comprometiéndose a respetar el contenido del original. El Boletín de la SETS no acepta la responsabilidad de las afirmaciones realizadas por los autores. 3. Los manuscritos se enviarán por una de estas dos vías: – Por correo postal, por triplicado, acompañados de un disquette o CD conteniendo el documento en formato WORD, junto con una carta de presentación en la que se solicite el examen de los mismos para su publicación en alguna de las secciones de la Revista con indicación expresa de tratarse de un trabajo original, no haber sido publicado excepto en forma de resumen y que sólo es enviado al Boletín de la SETS. La dirección es: Dr. José Manuel Cárdenas. Centro Vasco de Transfusión. Zuatzu, 4 - bajo. 20018 – SAN SEBASTIÁN. – Por correo electrónico a la dirección [email protected] incluyendo la carta de presentación. j Normas Boletín de de publicación inscripción Informes Boletín de inscripción de la SETS Remitir a: SETS – C/ Marià Cubí, 4 – 08006 Barcelona Tel. 932 388 777 – Fax 932 387 488 [email protected] DATOS PERSONALES 1. Apellidos y nombre:___________________________________________________________________________________ 2. Domicilio particular:________________________________________________________ D.P.:____________________ Localidad:________________________________ Provincia:________________________ Teléfono:________________ Email:____________________________________ DATOS DE LA INSTITUCIÓN O LUGAR DE TRABAJO 3.Denominación________________________________________________________________________________________: Dirección:________________________________________________________________________ D.P.:______________ Localidad:________________________________ Provincia:________________________ Teléfono:________________ E-mail____________________________________ 4. Indique la dirección preferida para su correspondencia: c Particular c Laboral 5. Marque si desea recibir publicidad de las empresas del sector: c SI c NO CURRICULUM DEL SOLICITANTE: Profesión:___________________________________ Título:________________ Grado académico:____________________ Especialidad:_________________________________________ Otros títulos:______________________________________ Puesto que ocupa en su organización:____________________________________________________________________ Áreas principales de trabajo:_____________________________________________________________________________ Otros puestos desempeñados con anterioridad y fechas:__________________________________________________ SOCIOS QUE AVALAN SU SOLICITUD DE INGRESO EN LA SETS: A) Apellidos y nombre:_____________________________________________ Lugar de trabajo:_________________________________________________ Provincia:____________________________ B) Apellidos y nombre:_____________________________________________ Lugar de trabajo:_________________________________________________ Provincia:____________________________ De ser admitida mi solicitud, declaro aceptar los estatutos de la SETS y comprometerme a su cumplimiento. Adjunto orden a mi entidad bancaria para el cobro de las cuotas de la SETS. ! Fecha:_______________________________________________ Firma:____________________________________________ Sr. Director: Entidad:___________________________________________________________ Oficina:_______________________________ Domicilio:______________________________________ Localidad:_____________________ Provincia:________________ Autorizo el cobro de los recibos que con cargo a mi cuenta bancaria cuyo código IBAN es:__________________ de esa entidad, pase periódicamente la Sociedad Española de Transfusión Sanguínea. Fecha:_______________________________________________ Firma:____________________________________________ NOTA: Los datos que nos facilite el usuario se incorporarán a un fichero de Grupo Pacífico, inscrita en el Registro General de Protección de Datos (Agencia de Protección de datos). Grupo Pacífico es una mera depositaria del fichero de datos, la propiedad pertenece a la SETS y lo utilizará con el fin exclusivo de mantener informado al usuario de actividades relacionadas con la Sociedad Española de Transfusión Sanguínea y Terapia Celular. De conformidad con la Ley Orgánica 15/1999 de Protección de Datos de Carácter Personal. Cualquier usuario puede ejercitar los derechos de oposición, acceso, rectificación y cancelación de los datos facilitados dirigiéndose por escrito al siguiente domicilio: Grupo Pacífico, Marià Cubí, 4. 08006 Barcelona. 33 Agenda Agenda de eventos Æ 1 6 Seminario Internacional de Hemovigilancia. Rio de Janeiro, 18 – 20 de marzo 2015. Información contactar con [email protected] Æ 5 º Curso de Herramientas Básicas de Gestión (Banco de Sangre). Valladolid, 20 – 22 de abril de 2015. Información en www.sets.es Æ 1 9th Training Course on Haemopietic Stem Cell Transplantation. ESH – European School of Haematology. Málaga 6 – 8 de mayo de 2015. Información en www.esh.org Æ 2 6 Congreso Anual de la SETS. (Congreso Hispano – Portugués). Sevilla, 11-12-13 de junio de 2015. Información en www.sets.es Visita nuestra web: www.sets.es 34 Æ 2 5 Congreso Regional de la ISBT. Londres, 28 de junio – 1 de julio de 2015. Información, en www.eurocongres.com Æ L VII Congreso Nacional de la SEHH. Valencia, 22 – 24 de octubre de 2015. Información en [email protected] Æ 2 015 AABB Annual Meeting. Anaheim, California. EEUU. 24 - 27 de octubre de 2015. Información en www.aabb.org Æ 2 6 Congreso Regional de la ISBT. Bali, Indonesia, 14 – 16 de noviembre de 2015 Todos los asociados que deseen ver publicados en la Agenda los eventos que organicen o tengan noticia de ellos, se ruega comunicarlo a: cmartinvega@ telefonica.net