IX EDICIÓN DE LOS CURSOS DE VERANO “BILBAO ARTE ETA CULTURA” Seminario DEPORTE, GESTIÓN Y MUNICIPIO: VALOR, COSTES Y PRECIO DEL DEPORTE. Ponencia: LOS MUNICIPIOS COMO ÁMBITO DE GESTIÓN DEPORTIVA Fernando París Socio Director de AFPGRUPO CONSULTORES DEL DEPORTE 1 1. El papel de los Ayuntamientos en el desarrollo del deporte en España. Los municipios han sido, en el conjunto del Estado, y casi sin exclusión, los grandes dinamizadores de la práctica deportiva orientada al conjunto de la población en los últimos 30 años. No puede entenderse el desarrollo del deporte en el Estado sin analizar el papel de los Ayuntamientos asociado al desarrollo de la práctica de la actividad física y del deporte. Algunos puntos previos ilustran de mejor manera la situación actual y la contribución de los Ayuntamientos y el resto de las Corporaciones Locales. 1.1 La evolución de la práctica deportiva en España. Las encuestas que analizan la práctica deportiva en el Estado y que nos permiten disponer de un perspectiva histórica son las realizadas por el Consejo Superior de Deportes y el CIS (y organismos afines en épocas anteriores) y dirigidas por el catedrático Manuel García Ferrando, desde el año 1975, con una periodicidad quinquenal. Un resumen de los principales datos queda reflejado en la siguiente tabla (pendiente de incorporar los datos de la encuesta de 2010, que señala un incremento ligero en relación a los datos de 2005).1 Evolución de la práctica deportiva de los españoles, 2005-1975. Población entre 15 y 65 años. Práctica deportiva 2005 2000 1995 1900 1985 1980 1975 Practica uno 24 22 23 18 17 16 15 Practica varios 16 16 16 17 17 9 7 No practica ninguno 60 62 61 65 66 75 78 “Tanto a través de los datos porcentuales que se presentan en la Tabla 8 como sobre todo en el correspondiente Gráfico 3, se pueden seguir las dos fases de evolución de la práctica deportiva en España en los últimos 30 años. En una primera fase que abarca la primera década de este periodo, la que transcurre entre 1975 y 1985, se produce un fuerte incremento de la práctica deportiva, del 22% al 34% de practicantes, siguiendo el impulso de la transición y de la democratización de los ayuntamientos, auténticos motores de esta mejora. En una segunda fase que comprende las dos décadas siguientes, las que transcurren entre 1985 y 2005, se estabiliza el ritmo de crecimiento de la práctica en España, pues se pasa del 34% al 40% de practicantes, una mejora de aproximadamente 1,5% cada cinco años por término medio, mejora que se concentra sobre todo en el número de los que practican un solo deporte, puesto que el crecimiento de los que practican dos o más deportes se hace más lentamente”. 1 Encuesta de hábitos deportivos de los españoles 2005. Consejo Superior de Deportes. 2005. Madrid. http://www.csd.gob.es/csd/sociedad/encuesta-de-habitos-deportivos/3-las-practicasdeportivas-de-la-poblacion-espanola-deportes-mas-practicados 2 1.2. El concepto de la sociedad en torno a la práctica del deporte Paralelamente, la valoración social del deporte ha cambiado significativamente en estos años; de ser una actividad marginal, complementaria en el día a día, la práctica deportiva y el espectáculo deportivo forman parte hoy en día de la vida de las personas. Y su valoración es –con excepciones relativa a la profesionalización y mercantilización del espectáculos - positiva. No hay nadie que no quiera que sus hijos e hijas practiquen una actividad deportiva en un marco ordenado; la práctica deportiva se ve como uno de los elementos fundamentales de salud de las personas; el espectáculo deportivo se ha convertido en uno de los ejes fundamentales de la industria del entretenimiento y su vinculación a los sentimiento nacionales – en un Estado, una Comunidad autónoma, un territorio, un País – hace de este un elemento de uso político. La misma encuesta señalada con anterioridad nos muestra la evolución del interés de los ciudadanos en relación al deporte: Evolución del interés de los españoles por el deporte en el periodo 2005-1975 (con edades entre 15 y 65 años) 3 Cuando se inició la serie histórica de las encuestas en 1975, la población española estaba dividida en partes iguales entre los muy y bastante interesados por el deporte de un lado, y los poco o nada interesados de otro. En la encuesta de 1980 se deshace el empate, 51% de interesados y 49% de no interesados, para ir creciendo de forma sostenida el interés por el deporte hasta la encuesta de 1990, el 65% de muy o bastante interesados, que es el mismo porcentaje obtenido en la presente encuesta de 2005. 1.3. La red de instalaciones y equipamientos deportivos. La inversión general. La inversión en el FEIL. Los Ayuntamientos son los poseedores de la principal red de infraestructuras deportivas del Estado. Poseen el mayor nº de espacios deportivos, los de mayor calidad y los más modernos, aunque en los últimos años se ha notado una disminución en la inversión nueva, un envejecimiento del parque de instalaciones y, también en muchos casos, un aumento en la inversión de reposición. Según el Censo Nacional de Instalaciones deportivas del 2005 2, el 52% de las instalaciones deportivas del Estado pertenecen, en propiedad, a los Ayuntamientos, con más de 75.000 espacios deportivos de diferente tipología, uso y calidad, representando el 61% de los m2 de instalación deportiva.. En todos los períodos, los Municipios han sido, además, las entidades con más instalaciones creadas, el 26,55% en el período 19761985, el 29,84% en 1986-1995 y el 22,52% en el periodo 1996-2005. Así mismo, en los años 2009 y 2010 – sorprendentemente los años de la dura crisis y del ajuste- se ha producido en el Estado el mayor esfuerzo inversor hecho nunca en España en instalaciones deportivas, a través de la aplicación del llamado Fondo Estatal de Inversión Local – FEIL- con, aproximadamente, más de 1.000 millones de inversión –solo del Estado- en instalaciones deportivas, el 12% del total del citado fondo, en el año 2009. Nunca en España, ni durante el periodo previo a los Juegos Olímpicos, se había efectuado tal esfuerzo; desgraciadamente, la “velocidad” de desarrollo en la aplicación del citado Fondo –en sentido opuesto y pendular a la exasperante lentitud de la administración española- ha supuesto –en mi opinión - la pérdida de una oportunidad para mejorar, de verdad, las instalaciones deportivas municipales y cambiar los parámetros que podrían facilitar una mejor gestión, más eficaz y eficiente, y un mayor uso. 1.4. Las oficinas municipales de deportes, las personas que “trabajan en el sector público”. Por último, señalar que uno de los elementos también que han cambiado en la organización y percepción del deporte de participación en nuestro país ha sido la conversión de los Ayuntamientos en los “referentes” deportivos locales, hecho que no ocurría hace 30 años, en los que el papel 2 Ver en http://www.csd.gob.es/csd/instalaciones/espana.pdf 4 de municipios era minoritario, marginal, selectivo y, en la mayoría de los casos, inexistente. Hoy en día, el lugar donde los deportistas, clubes, ciudadanos, recurren en torno al fomento de la práctica deportiva, es el Ayuntamiento (como en el resto de los servicios). El Servicio deportivo municipal –Patronato, instituto, etc…- es el referente del deporte en nuestras ciudades y pueblos –excepto, claro está, en los más pequeños-. Prácticamente todas las ciudades y pueblos de nuestro Estado, a partir de una determinada dimensión, poseen estructuras públicas de apoyo y desarrollo del deporte, especialmente del deporte de participación y práctica; y donde no las hay por dimensión, existe de manera compartida con otros municipios, en servicios mancomunados apoyados por Diputaciones, Cabildos, Consells y Comarcas. Miles de personas, técnicos, operarios generalistas o especializados, cuadros intermedios, trabajan para el deporte en las estructuras municipales. Un valor y una riqueza de presente y futuro nada desdeñable. Sin embargo, y a pesar de esta perspectiva, todavía queda mucho camino por recorrer …………… 2. Los aciertos y los errores del deporte municipal.3 A continuación plantearé los aciertos y errores del deporte municipal, que ya identificaron hacer muchos años…. Pero que, en algunos casos siguen vigentes. Podríamos considerar aciertos los siguientes 4 puntos: Las infraestructuras deportivas. La democratización de la práctica deportiva en el Estado ha sido posible, fundamentalmente, al esfuerzo inversor de las corporaciones locales en la creación de una red potente de infraestructuras deportivas; aunque luego identificaremos errores asociados a ese esfuerzo municipal, el impulso ha sido tal que, en estos momentos, y en la mayoría de las ciudades españolas, la no existencia de instalaciones deportivas es una circunstancia marginal en relación a las razones por las que los ciudadanos no practican actividad física. Las Oficinas municipales de deportes –los equipos, las personas, los programas, los presupuestos………. - . El segundo acierto de estas décadas ha sido también el hecho de incorporar el servicio deportivo a los servicios propios de los Ayuntamientos, mediante la creación de unidades administrativas –con mayor o menor autonomía, Patronatos, institutos, Sociedades, Servicios - , con equipos de trabajo 3 Ya hace muchos años esos aciertos y errores ya fueron formulados por diferentes autores; aun hoy, 20 años después, muchos de los errores entonces formulados se siguen manifestando de igual manera. Ver Eduardo Blanco, ponencia sobre “Municipios Grandes” en las V Jornadas de Deporte y Corporaciones Locales, Palencia 1988 5 especializados -miles de personas trabajando por la promoción de la actividad física y el deporte, en el funcionamiento de las instalaciones - , con programas presupuestarios integrados y consolidados en los presupuestos municipales, en definitiva, con el servicio deportivo municipal consolidado como el resto de los servicios públicos de cercanía y ocupando importantes parcelas presupuestarias, personales y políticas en la gestión pública. La orientación, prioritaria, al denominado “deporte para todos” –aun sin distinguir recreación, salud, educación…- . Los Ayuntamientos – con carácter general – han orientado su labor hacia el llamado “deporte para todos”, concepto antiguo importado de la Europa desarrollada, pero siempre vigente (ahora con la incorporación de un parámetro temporal: “deporte para todos y para siempre”). Aunque esto en ocasiones haya podido ser criticado –en relación a enfrentar “deporte federado” versus “deporte para todos” – la realidad es que el deporte organizado a través del movimiento clubístico y federativo también es, en su mayoría, deporte para todos. Este impulso por parte de los Ayuntamientos al deporte para todos ha ayudado a la transición, en 30 años, de tener una estructura de nuestra organización deportiva vertical, lineal, asociada al deporte federado, a disponer de una estructura transversal, horizontal, con muchas realidades a veces superpuestas, en las que el deporte federado es una más, pero no la única… La política desarrollada por los Ayuntamientos ha sido fundamental para propiciar ese cambio. Búsqueda de modelos propios. El cuarto acierto ha sido, en mi opinión, la constatación por parte de los Ayuntamientos de las diversas realidades y modelos de nuestros pueblos, ciudades y territorios. Hace ya más de 20 años los responsables públicos – institucionales y profesionales- asumieron la realidad de que no hay modelos uniformadores a trasladar; que cada ciudad o pueblo debe de encontrar su propio modelo (para lo cual debe de conocer qué hacen los demás y cómo lo hacen). Que lo que puede ser útil en un municipio no tiene porque funcionar en el municipio de al lado, aunque los vecinos sean parecidos y los mismos en número. Que los sistemas deportivos de cada municipio son propios, específicos, distintos y únicos: Y que incluso en el mismo municipio, realidades distintas exigen actuaciones diferentes. Y si hablamos de los errores podríamos señalar, con carácter general, dos errores que se complementan, que son contradictorios, que son como la pescadilla que se muerde la cola: 1. En primer lugar, y porque es de actualidad, asociado a la realidad de la crisis actual que nos golpea – y golpea a los Ayuntamientos con mayor énfasis -, hay que hablar de los errores asociados al componente económico del servicio deportivo y de la gestión del mismo. 6 2. Y en segundo lugar, y precisamente por un efecto pendular para corregir el error anterior, se ha producido un “abandono de la política” deportiva de los Ayuntamientos por la orientación exclusiva a la gestión que algunos denominan peyorativamente, “economicista”. Errores que han desembocado en una situación de dificultad económica podemos señalar varios que, además, están todos interrelacionados: - En primer lugar, la atención exclusiva a la creación de instalaciones y servicios por atender demandas muchas veces exclusivamente electorales y no reales, sin tener en cuenta el incremento del gasto corriente. El problema nunca es la inversión, el problema es el mantenimiento, el día a día. Cada vez que una administración pública construye un equipamiento del tipo que sea para gestión propia, está incurriendo en un incremento de la “mochila de gastos corrientes que se echa a la espalda”. Mochila que cada vez es más pesada y está llegando a paralizar a los Ayuntamientos, que no pueden moverse. Como no liberen la carga de esa mochila, no podrán seguir avanzando ni cumpliendo sus servicios esenciales, cuya calidad se irá deteriorando inexorablemente. - Asociado a lo anterior, el segundo error son los servicios excesivamente subvencionados: poner en marcha servicios muy subvencionados que tengan éxito es un desastre económico del que los Ayuntamientos no aprenden (eso está pasando actualmente en muchas ciudades con los servicios de bicicletas de alquiler, que han tenido un éxito mayor de lo esperado y que son altamente subvencionados) y difícil de corregir desde una óptica política, ya que tiene un coste político que nuestros representantes no se atreven a asumir. - Y como elemento inseparable de este componente económico, el coste excesivo del servicio deportivo, especialmente cuando la gestión es directa. Hay que tener en cuenta que la administración pública es, con carácter general, la peor gestora de muchos de los servicios de “cercanía” al ciudadano. Con carácter general, en la administración pública no existe conciencia del coste de los servicios. Muchas unidades gestoras solo gestionan el gasto, no el ingreso; en muchas unidades lo importante es luchar y conseguir un presupuesto de gastos elevado, una plantilla de personal más que suficiente. En muchas unidades de gestión directa, el ahorrar en gasto corriente –el no agotar el presupuesto- no se identifica como un valor positivo y se penaliza en el presupuesto siguiente; al revés, el ejecutar el presupuesto de gasto corriente en un 100% es signo de buena gestión (cosa que sí sería aplicable a la inversión). El luchar por incrementar los ingresos propios no se ve reflejado luego en un incremento de los recursos disponibles. Además, los servicios públicos deportivos siguen teniendo un “perfil patrimonialista” : cuantas más 7 instalaciones y personas, más gasto, más inversión, más “fuerte e importante” soy en mi administración de referencia. Precisamente, la constatación de los errores -políticos o de gestión- que han desembocado en una situación compleja en los aspectos económicos, han generado en los últimos años un proceso donde, en muchos casos, se ha renunciado a la “política” y se ha sustituido exclusivamente por la gestión: los Ayuntamientos, en su afán por corregir los desequilibrios financieros que representa el servicio deportivo se han convertido en entidades obsesionadas por el resultado económico –con razón – pero no se atreven a tomar las medidas necesarias para mejorar esa economía. O se han convertido en empresas prestadoras de unos servicios en competencia directa –y en ocasiones no siempre justa- con el sector privado, asociativo o comercial; el haber recurrido a la gestión indirecta solo es posible poniendo en marcha servicios de fitness, padel, agua…, que es lo que demandan los ciudadanos, pero que la iniciativa privada ya se había dado cuenta con anterioridad. De repente, lo importante de la política deportiva municipal es construir fitness, spas y padel… por terceros, que te resuelven el problema…. Es como si en muchos Ayuntamientos “se hubiese tirado la toalla” en relación a la función pública de fomento de la actividad física y el deporte que legalmente tienen asignados los poderes públicos. Ese concepto de abandono de la “política deportiva municipal” viene asociado también a la apatía en relación al concepto de Animación deportiva. Salir a calle a promover la práctica de la actividad física y el deporte. Hace años se cultivó el concepto de Animación deportiva…… ir a los sitios, “predicar”, “hacer apostolado”. Hoy se crean servicios e instalaciones y la gente viene y los usa, pero no se sale a buscarla, excepto si los servicios son de gestión indirecta, cuyos propietarios, obviamente, desarrollan políticas comerciales asociadas a su centro y a sus servicios… En la quinta ciudad de España, con una plantilla de 250 personas vinculadas al área deportiva municipal, no hay ninguna asignada al trabajo de carácter comercial, encargada de intentar incrementar los usos de la extensa red de instalaciones deportivas. Nadie se preocupa de ir a buscar entidades, personas, grupos, equipos, clubes, ciudadanos, que usen las instalaciones –especialmente las menos utilizadas-. Los servicios deportivos municipales funcionan bien el los despachos, pero no en la calle. El abandono de la política deportiva municipal también supone la renuncia al concepto de Sistema Deportivo de ciudad, y al olvido de la sociedad civil deportiva, por la atención exclusiva –o casi exclusiva- a los servicios deportivos que presta el propio Ayuntamiento, que, siempre suele ser ineficiente y no siempre muy eficaz…. Hay que recordar que el deporte en un territorio, en este caso en un municipio, es el resultado de la acción –a veces coordinada, otras no- de los diferentes agentes que conforman su sistema deportivo, articulado sobre 4 patas: el propiamente municipal, el asociativo (clubes y federaciones), el escolar y el comercial (gimnasios y centros de actividad física). Liderar el sistema deportivo del municipio es intervenir – de diferentes formas y maneras – en el conjunto del mismo, verlo todo como un conjunto interrelacionado, y no solo centrarse en los propios servicios municipales. 8 Asociado al hecho de la participación en el sistema deportivo local, en muchas ciudades, sus Ayuntamientos se han convertido en soportes directos de la actividad deportiva profesional y mercantil de los equipos “representativos” del municipio. ¿Cuánto dinero gastan las administraciones públicas locales en el apoyo directo a los clubes deportivos…? ¿e indirecto: instalaciones gratuitas, concesiones, tratos de favor, etc? Cuanto más uno piensa en cómo está organizado el deporte profesional, más uno se da cuenta del disparate que supone que las administraciones públicas aporten recursos de los ciudadanos a esas actividades. El soniquete de “vender ciudad”, o de que “los ciudadanos se sienten más satisfechos de vivir en una ciudad que tiene equipos en las primeras divisiones” hay que relativizarlo. “Vender ciudad “ es un concepto que solo puede ir asociado a ciudades que planifiquen sus políticas turísticas, de desarrollo territorial o económicas, y donde se analice y se mida, realmente, el esfuerzo y el retorno objetivo que ese apoyo al deporte profesional o a los eventos deportivos hace el Ayuntamiento. En ocasiones, esa acción deportiva municipal sobre el deporte profesional o “para profesional” ha supuesto el olvido, el abandono o la limitación de los proyectos de desarrollo deportivo específicos, en colectivos, barrios, poblaciones especiales, que en muchas ciudades son cada vez más marginales y/o testimoniales. 3.- Recomendaciones para el futuro. Así pues, en este marco, ¿qué hacer…? Es importante que previamente a la formulación de recomendaciones u orientaciones para el futuro, tengamos en cuenta que las barreras que impiden o limitan la práctica de la actividad física y el deporte hoy en día a la mayoría de los ciudadanos de nuestro país no son estructurales sino culturales y educativas: no dependen de la existencia o no de instalaciones o del coste económico de las mismas o de los programas (encuestas en Zaragoza y en Andalucía), dependen de la educación: tiempo para esa práctica; percepción de tener poca salud para la actividad física; pereza y desidia …. Factores culturales…. Sobre los que las administraciones deberían de actuar, y, entre ellas los Ayuntamientos. En consecuencia se hace necesaria una profunda reflexión que pasa adoptar, total o parcialmente, algunos de los 10 puntos a continuación señalados: 1. El primero, se hace preciso recuperar el concepto de Política deportiva municipal …. más allá de la gestión de uno servicios o instalaciones determinados. Política destinada a eliminar las barreras que impiden o limitan a los ciudadanos en su práctica deportiva. Sin querer caer en recuerdos de “tiempos mejores” en estos momentos se echa en falta el concepto de Política deportiva municipal, con mayúsculas, que es mucho más que la existencia de servicios públicos deportivos –del tipo que sea- utilizados por los ciudadanos. Se echa en falta un “discurso” propio sobre la actuación pública en materia deportiva. 9 En la ciudad en la que yo vivo y donde empecé mis responsabilidades de gestión deportiva pública hace 30 años, los diferentes cambios en la gestión política del deporte municipal apenas han significado cambios en el día a día de los servicios. El paso de la política del partido socialista al partido popular, de éste a una formación de izquierda nacionalista , y de éste a una formación de centro derecha regionalista, no han modificado – a fecha de hoy- en absoluto el día a día de los servicios públicos y de las actuaciones públicas en materia deportiva: los mismos criterios de decir que sí a todo, la atomización de instalaciones deportivas, el satisfacer intereses concretos de determinados grupos con apoyos mediáticos, la demagogia de determinados precios públicos, la necesidad de dejar por el camino unas obras …. Solamente ahora, después de realizar un análisis profundo de la realidad y un Plan Director orientado al futuro, es posible que –también ayudados por la crisis- se aborden cambios estructurales importantes. Y la inexistencia de políticas diferenciadas, propias, solventes, ha ido asociada asimismo a una obsesión exclusiva por la gestión: a los responsables institucionales en realidad lo que realmente les gusta es ser gerentes; y a los gerentes, a veces, lo que en realidad les gusta es ser políticos. Cada uno debe de jugar el papel que le corresponde, eso sí, desde la horizontalidad y el trabajo conjunto. Pero da la sensación de que nuestros discursos se articulan, exclusivamente, en los aspectos mecánicos y planificadores de la gestión, de la autofinanciación, de los procesos, procedimientos, de la calidad. Y no digo que esto no es importante, se da por hecho que la gestión pública tiene que ser eficaz y eficiente, no puede concebirse de otra manera, pero sí se echa en falta un mayor componente de Política deportiva municipal: objetivos claros, líneas de acción definidas, proyectos nuevos y distintos, saber donde vamos. 2. Concebir la ciudad (el municipio) como un territorio donde existe un Sistema deportivo que debe coordinarse, trabajar juntos, competir – porqué no-, complementarse. El resultado del deporte en un territorio es el resultado de la acción de un conjunto muy numeroso de agentes diversos que conforman el sistema deportivo de ese territorio, en nuestro caso, de una ciudad o un pueblo. El Sistema deportivo de un territorio es un concepto complejo pero a la vez muy didáctico. Cuando uno analiza porqué surge un deportista de competición o porqué una persona de 50 años participa activa y asiduamente en una actividad, puede observar toda la cadena de circunstancias, instalaciones, personas, entidades, situaciones diversas que hacen que esa persona llegue a esa situación. Por ese motivo la política deportiva municipal –y consecuencia de esta, la gestión deportiva municipal- debe de articularse teniendo en cuenta el conjunto de los agentes que conforman ese sistema deportivo: el sistema escolar, el sistema deportivo asociativo –competitivo o no-, el sistema deportivo comercial o empresarial, en algunos lugares el sistema deportivo turístico; diferentes patas que sostienen la actividad en un territorio. Eso no 10 significa que los Ayuntamientos tengan que renunciar a sus competencias, pero sí que no deben de renunciar a ver la ciudad en su conjunto y analizar las realidades diversas del rico mundo del deporte. Como señala Luis Solar4, “Es igualmente obvio que son las ciudades de mayor oferta pública las que más y mejor cantidad de gimnasios privados poseen, por el contrario, donde escasean las instalaciones de titularidad municipal, no prolifera el negocio privado de la actividad física o del deporte para todos”. 3. Y asociado a lo anterior, liderar, desde el Ayuntamiento, ese Sistema deportivo de Ciudad. Liderar es algo más que ir al palco de los equipos de fútbol…. (aunque eso también es importante) o acompañar a los equipos de competición de la ciudad o del pueblo cuando se juegan algo importante. No hay que olvidar que el Concejal de Deportes de un municipio es el Concejal de todo el municipio, no solo de los servicios o instalaciones deportivas que el ayuntamiento ofrece. Y como autoridad elegida por los ciudadanos para liderar la política de ese Ayuntamiento en materia deportiva debe de tener una visión amplia. Los clubes deportivos, los centros de actividad física, las asociaciones de padres, otras entidades que ponen en marcha servicios deportivos quieren tener una autoridad deportiva implicada, coherente, seria, que les escuche, que tome decisiones, que sea empática. Ese liderazgo debe de ser ejercido desde los Ayuntamientos. 4. Rediseñar todo, cuestionarse todo con espíritu crítico, revisar, reconstruir, reorientar: las instalaciones, los servicios, las organizaciones y las personas. La burocracia de la administración pública es una rémora para la política y la acción ejecutiva de la misma, que es la gestión. Pero a veces esa burocracia es una perfecta excusa para el inmovilismo inherente a muchos funcionarios públicos. La rutina es segura, es cómoda. Adentrarse en terrenos no conocidos, difíciles, no siempre planificados, puede ser peligroso o exige mucho trabajo. Pero solo así progresaremos, replanteándonos, con espíritu crítico lo que hacemos en nuestra ciudad o en nuestro pueblo: los programas y las actividades, los eventos, las instalaciones y sus servicios, la forma de gestionarlos, los precios, la comunicación y nuestra relación con el ciudadano, nuestra organización y su funcionamiento….. Luis Solar Cubillas. Deporte y Municipio ¿Hacia donde vamos?.IV Encuentro de Políticas deportivas en los municipios. Actas. Bilbao Kirolak y Kait, 2007 4 11 5. Poner al ciudadano en el eje de las políticas deportivas. En una sociedad en la que las redes sociales juegan un papel cada vez más importante, en el que los ciudadanos participan en las decisiones comerciales, de servicios, introduciendo un concepto de democratización más allá de la elección cuatrienal de nuestros representantes institucionales, para el servicio deportivo municipal es una oportunidad. Pero poner al ciudadano en el eje de las políticas no es “darle lo que nosotros consideramos que necesita”, no es actuar desde la altura profesional del que considera que conoce lo que le conviene al otro, sino interactuar con él, conocer sus necesidades, intereses, demandas, tendencias –más allá de las encuestas de satisfacción-; las redes sociales están cambiando la forma de plantear nuestras relaciones sociales. En la educación estamos pasando del profesor considerado “amo del saber”, que impone sus conocimientos al alumno que escucha y comulga con lo que le toca - la “enseñanza autoritaria y unidireccional ya se revela un inútil vejestorio que aumenta el fracaso y la abstención”5 - a una educación basada en la transversalidad, en el diálogo alumno –profesor, en el afrontamiento de los problemas que no siempre tienen una única solución ; en la sanidad, más lentamente, estamos pasando del modelo del médico que con su discurso profesional impone al paciente sus saberes y sentencias –a veces sin conocer nada del paciente, de su vida, de sus costumbres – a una medicina más personalizada en la que a través del diálogo y la interacción horizontal o transversal el médico obtiene mucha más información que la que generarían pruebas costosas, desvíos a especialistas. En nuestro campo vamos a tener que actuar de otra forma, interactuando transversalmente, no solo con otros servicios públicos municipales, si no, sobre todo, con los ciudadanos; no se trata de poner instalaciones y servicios, hacer publicidad y lograr un número de usos y un montante de ingresos aceptable; se trata de, con el ciudadano, interactuar permanentemente y tomar las decisiones de acuerdo con él. 6. Hacer pedagogía con los servicios públicos. Precisamente por la necesidad de hacerlos sostenibles económicamente, en este caso los servicios deportivos, es más necesario que nunca hacer pedagogía de la política y de la gestión pública. Uno de los aspectos más insatisfactorios de la política actual es la falta de pedagogía. Muchas de las acciones que toman los gobiernos –de todos los colores y en todos los niveles territoriales- serían comprendidas de otra Vicente Verdú “Facebook y la postuniversidad”. Artículo aparecido en El País, sábado 3 de julio de 2010, página 38. 5 12 manera si se destinase tiempo y método a hacer pedagogía, a explicarlos6. Pedagogía y comunicación adecuada de los servicios públicos deportivos. Porque, además, no nos olvidemos, los profesionales del deporte –o de esta tipología de servicios deportivos- somos los peores vendedores de lo nuestro. 7. Poner el tema económico –de racionalidad económica – en un lugar preferente de la gestión. La crisis ha agudizado el problema y ha puesto este apartado –allí donde no lo estaba- en el foco de las políticas deportivas municipales. Ya hemos hablado anteriormente de los errores con impacto económico, pero la racionalidad económica y la necesidad de una mayor y mejor eficiencia y eficacia en la gestión, van a dominar los años venideros – o por lo menos, el intento tiene que ser ese………..8. Las estrategias deportivas públicas asociadas a la salud deben de convertirse en ejes de las políticas municipales en materia deportiva. La actividad física cada vez está más asociada a la salud. Lo señalan los ciudadanos y lo recomiendan las autoridades y los profesionales sanitarios. En el caso de los ciudadanos, encuestas realizadas en diferentes ciudades y regiones ratifican esta afirmación. En la Encuesta Percepciones, Demandas y Tendencias del deporte en la ciudad de Zaragoza (2009), el 99% de los encuestados señalan la práctica deportiva como fuente de salud. 7 Datos similares de obtienen en encuestas realizadas en Andalucía para la elaboración del Plan Estratégico del Deporte andaluz. Por parte de los profesionales, cada vez son más las recomendaciones de todos los organismos internacionales de salud sobre la conveniencia de práctica de la actividad física por parte de las personas como elemento de prevención de las enfermedades. La evidencia científica sobre la relación actividad física y salud es abrumadora. Referencias a los estudios científicos sobre la relación entre actividad física y salud pueden obtenerse en el Plan Integral para la Actividad Física y el Deporte (PLAN A+ D) del Consejo Superior de Deportes. 8 6 Un nuevo planteamiento del Sistema actual de Pensiones en España sería perfectamente entendido por la mayoría de los ciudadanos si se explica bien –incluido el retraso de la edad de jubilación, o la extensión del periodo de cotización- . Pero si no se explica con pedagogía nunca será aceptado. 7 El resumen ejecutivo de la encuesta, sobre 1200 ciudadanos, puede consultarse en http://www.deporteenzaragoza2010-2020.com/docs/el_dpt_en_zaragoza_final.pdf 8 Plan Integral para la Actividad Física y el Deporte PLAN A + D versión 1. Consejo Superior de Deportes 2009. Puede obtenerse en http://www.csd.gob.es/csd/sociedad/plan-integral-parala-actividad-fisica-y-el-deporte-plan-a-d/plan-integral-para-la-actividad-fisica-y-el-deporte/ 13 En el marco europeo, la propia Comisión Europea ha elaborado unas recomendaciones para los Estados miembros que reafirman la asociación entre actividad física y salud, y orientan a estos y a las administraciones públicas en general –incluidos Ayuntamientos – hacia políticas concretas de incremento de la actividad física saludable. 9 Estamos en un momento en el que la conciencia ciudadana (y la institucional) avanzan en la consideración de la actividad física y el deporte como elemento fundamental de salud. No es que la actividad física y el deporte no sean interesantes en sí mismos - divertida, relajante – si no que su asociación a la salud brinda a los Ayuntamientos (y a los profesionales) una oportunidad fantástica de desarrollar políticas deportivas de verdad. Utilizar el concepto “Actividad Física y deporte como Medicamento genérico universal” o poner en marcha “Estrategias de ciudad saludable a través del deporte” son líneas de trabajo y oportunidades de futuro para nuestras corporaciones locales. 9. Recuperar la participación municipal en materia deportiva en la Escuela (que no significa asumir competencias de otras administraciones). Con carácter general, en los últimos años, estamos asistiendo a una cada vez menor participación de la administración local en las acciones deportivas asociadas a la Escuela (al centro escolar como marco y lugar de referencia), especialmente en los centros públicos. Algunos Ayuntamientos consideran que es “meterse en otro frente” que no les corresponde y no han sido invitados; que la educación es responsabilidad de los gobiernos autonómicos (si y no…); o que supone otro gasto excesivo. Muchos Ayuntamientos tienen “miedo” de meterse en el deporte en edad escolar. Pero, como señala Luis Solar 10, “…….el actual sistema de iniciación deportiva, dejado en manos del deporte escolar, es de muy dudosa efectividad en su función de crear adherencia al deporte…. Como promotores del deporte para todos ¿cómo nos podemos permitir perder las edades de conformación de hábitos sin hacer nada? … Sencilla respuesta: no podemos permitírnoslo…. Somos, en la gestión municipal, receptores pasivos de los resultados de otros agentes del deporte, a los que podemos criticar por su proceder, sin reparar en lo nefasto de nuestra pasividad….” . Efectivamente, no se trata de que los Ayuntamiento asuman todas las competencia de deporte escolar (quizá lo haríamos igual de mal que los demás), se trata de implicarse en mayor medida –con el resto de las entidades del sistema deportivo con competencias en la materia- en el impulso al centro educativo como marco de referencia del deporte, en la generación de hábitos de práctica y de la adherencia, en la compensación de la discriminación que se produce en los procesos selectivos del llamado “deporte escolar” (de competición), en el intento de Puede obtenerse en http://www.csd.gob.es/csd/estaticos/dep-salud/Directrices-ActividadFisica-UE-web.pdf 10 Luis Solar Cubillas. Deporte y Municipio ¿Hacia donde vamos?.IV Encuentro de Políticas deportivas en los municipios. Actas. Bilbao Kirolak y Kait, 2007 9 14 ayudar a disminuir el abandono de la práctica deportiva especialmente por las mujeres en las edades de la adolescencia….. 10. Decir que NO a muchas cosas ……………. Para terminar, señalar que muchos de los problemas, dificultades o disfunciones que, en materia deportiva, tienen hoy los Ayuntamientos, se deben, fundamentalmente, al conflicto que supone decir NO a muchas cosas …. A veces uno piensa que la actuación municipal –política y de gestión- semeja a uno de esos malabaristas chinos que sostienen simultáneamente decenas de platos girando sobre varillas, a los que permanentemente hay que estar dando impulso para que no se caigan, solo para que se mantengan… Y hay que saber decir que no a muchas cosas. Los Ayuntamientos no pueden ser el cajón de sastre que solucione todos los problemas de todos los sectores, en este caso, del deportivo. Decir que no significa Priorizar, tener claro unos objetivos, unas líneas de acción y unos programas a desarrollar, pero no todos los que se nos ocurran, ni todo lo que se nos pide….. Los Ayuntamientos tienen, en nuestro Estado, un amplio recorrido ya de pasado –tres décadas de gestión deportiva- , un presente muy potente no exento de problemas agudizados por la crisis económica y los necesarios ajustes de los presupuestos públicos – y un futuro de oportunidad si sabemos reinventarnos, si tenemos el coraje suficiente para abordar cambios, y tenemos claros nuestros objetivos y nuestra prioridades, que, recordemos, no pueden ser todas ….. Muchas gracias. Fernando París Roche. Bilbao, 19 de julio de 2010 15