PANORAMA DE LENGUAS DE LA INDIA Continúa en página 51 ➡ ÍNDICE 4 6 EL ASESINATO DE UN POETA: EN HOMENAJE A GARCÍA LORCA SUNIL GANGOPADHYAY CITA DE SWAMI VIVEKANANDA SEIS IMÁGENES DE DR. ÒSCAR PUJOL LA INDIA (1ª PARTE) 10 LA CONSTITUCIÓN DE LA INDIA DR. RAFAEL IRUZUBIETA 18 HINDI: EL APRENDIZAJE ANA THAPAR 21 25 32 PERPSPECTIVAS DE LA ECONOMÍA DE LA INDIA SEGÚN EL MINISTRO DE FINANZAS DE LA INDIA REDACCIÓN LA MÚSICA DE LA INDIA ORÍGENES, TRADICIÓN Y ENSEÑANZA FERNANDO DÍEZ LÓPEZ INDIA-OURENSE: ALGO MÁS QUE UN DE ESTUDIOS CÉSAR TABOADA INTERCAMBIO 35 38 39 43 45 47 CINCO ARTISTAS POR LA INDIA REDACCIÓN INSPIRADOS DADIMA KI RASOI REDACCIÓN VISITANDO NUESTRO PRADESH MADHYA PRADESH - VIAJAR POR LA INDIA CON HOLA NAMASTE CARTA DESDE “EL PROPÓSITO VIDA” ABIGAIL Y JUANCHO DEL ÁGUILA DE LA KHAJURAHO: ALGO MÁS QUE TEMPLOS SUSANA ÁVILA MADHYA PRADESH (EL SECRETO MEJOR FÉLIX ROIG GUARDADO) Redacción Directora: Suryakanthi Tripathi, Embajadora de la India Jefe de Redacción: Abdul Majid Padar, Primer Secretario Publicado por la Embajada de La India en España Avenida Pío XII, 30-32 - 28016 Madrid - página web: http://www.embajadaindia.net correo electrónico: [email protected] y [email protected] Fax: 913 451 112. D. Legal: M-7280-2006 - Imprime: Naturprint HOLA NAMASTE solicita a sus lectores contribución de notas, artículos y crónicas que se pueden dirigir al correo electrónico a [email protected] EL ASESINATO DE UN POETA EN HOMENAJE A LORCA Sunil Gangopadhyay De uniforme raído y verde, dos guardias condujeron al poeta. El poeta preguntó: ¿para qué estas cadenas en mis manos? Los guardias no respondieron. Los dos guardias tenían cortada la lengua. En la luz pálida del crepúsculo se escucha el ruido sordo de sus botas. Por su rostro la marca de una severa melancolía y en sus ojos el rojo fluorescente de un cartel publicitario... A su alrededor miles y miles de personas, hombres y mujeres. Algunos han hecho un largo camino por campos de trigo. Algunos antes de que la sirena sonara en su fábrica. Otros tras cerrar las contraventanas de sus tiendas. Algunos con carretes nuevos en sus máquinas de fotos. Otros con sus bastones de ciego. La madre no ha dejado a su hijo en casa. El joven ha venido con la joven. El viejo agarra por el hombro a otro viejo. Todos han venido a ver la escena del asesinato de un poeta. {...} El poeta alzó la vista de sus manos al centro del gentío. Entre el gentío buscó a un hombre. Entre las mujeres todas a una sola mujer. {...} La primera bala le pasó al lado de la oreja. El poeta esbozó una sonrisa. La segunda bala le atravesó el pecho. Peor el poeta seguía riendo. La tercera le entró por la garganta. Tranquilo, el poeta dijo: “no moriré”. ¡Error! los poetas no siempre son clarividentes. La cuarta bala le estalló la frente. 4 El poste de ejecución se rompió con las siguientes. La sexta le seccionó la mano que se había puesto en el pecho. El poeta se derrumbó. La gente acudió para tocar su sangre. El poeta no escuchó ningún ruido, ni parabienes ni sollozos. En el instante en que la sangre, el cerebro, la carne se esparcieron por el suelo comenzó a llover a cántaros. Nadie advirtió si antes de respirar por última vez se movieron o no los labios del poeta. En realidad, el último instante del poeta no fue desdichado: Con la vista puesta en su mano cortada que yacía por el suelo, quería decir: “Estaba convencido, mi mano no seguirá encadenada”. Traducción de Sumana Sinha, Lionel Ray y F. Torres Monreal De la antología “12 poetas bengalíes”, Lancelot. CITA “Cosechamos lo que sembramos. Somos los forjadores de nuestro propio destino. Sopla el viento; los barcos cuyas velas están desplegadas lo atrapan, y reman adelante, pero los que tienen sus velas plegadas no atrapan el viento. ¿Es culpa del viento?... Hacemos nuestro propio sino.” Swami Vivekananda 5 SEIS IMÁGENES DE LA INDIA (1ª Parte) Dr. Òscar Pujol ndia, al igual que China, forma parte del imaginario colectivo de la civilización occidental. No es solo un ámbito geográfico, histórico o cultural, sino que las memorias de la India están inscritas en el baúl de los recuerdos occidentales. Por eso, en los umbrales del siglo XXI convendrá sacar el polvo a este baúl y despejar las telarañas de la costumbre que tejen imágenes heredadas sobre una realidad siempre cambiante. I enemigo agazapado tras la frontera, sino el Otro Remoto que ocupa un lugar demasiado lejano y por lo tanto siempre abierto a la tergiversación de la fantasía. Es interesante constatar que la India era para los antiguos occidentales un lugar de riquezas fabulosas y de religiones extrañas. El misticismo y la opulencia eran dos conceptos claves para definir la India en el mundo occidental antiguo. Desde la antigüedad griega India ocupa un lugar en el seno de la cultura occidental y ha servido como contraste para la construcción de Occidente. India nunca ha sido para Occidente el Otro Inmediato, el vecino extraño, el El Occidente moderno, especialmente a partir del siglo XIX, cambió la opulencia por la pobreza y dejó intacta la idea del misticismo. Misticismo y miseria se convirtieron así, especialmente a lo largo del siglo XX, en dos de las eti- quetas más utilizadas cuando se hablaba del gran continente indostánico. El etiquetado no podía, sin embargo, ser más desafortunado, sobretodo si tenemos en cuenta que lo que los antiguos entendían por misticismo era algo muy distinto de la percepción moderna del mismo. Para los antiguos el misticismo era una forma de sabiduría, una forma de liberarse de las condiciones impuestas por las necesidades físicas, una apertura, en suma, a una dimensión más amplia. Para una buena parte del mundo moderno, en cambio, el misticismo o la espiritualidad serían en el mejor de los casos una huida de la realidad, un derivado virtual del opio que ayuda a dormir el sueño de los necios y en el peor de los casos, un instrumento de dominación en manos de las clases privilegiadas. La imagen resultante no podía ser por lo tanto más aterradora: la India es pobre porqué es religiosa o espiritual y porqué favorece una visión jerárquica del mundo para mantener a sus masas constantemente oprimidas. Finalmente cuando estas masas se rebelan la violencia contenida estalla en un millón de motines, para utilizar la famosa frase del escritor de origen indio: V.S. Naipaul. Por otro lado, sigue habiendo mucha gente que continua teniendo la imagen romántica de una India poblada de Maharajas, elefantes, encantadores de serpientes, sabios medio desnudos que 6 se alimentan exclusivamente de aire, yoguis con la cabeza al suelo y los pies al aire, tañedores de sitar con los ojos semicerrados en musical éxtasis, pavo reales que danzan en los mármoles irisados de jardines mogoles y para acabar de aderezar un plato tan exótico la guinda del pueblo indio como una masa apacible y sonriente, adoradora de la no-violencia, que todo lo arregla con un pacífico namaste y una ofrenda a los dioses. indias; una India habitada por los programadores de informática que viven en Bangalore, el llamado Silicon Valley de Asia, por las estrellas rutilantes de Bollywod con su estilo de vida opulento y escandaloso, por un ejército de licenciados dispuestos a conquistar el primer mundo con su conocimiento especializado. Al mismo tiempo los santos tradicionales de la antigua India parecen persistir en la figura de personas como Amritanandamayi Ma y en las grandes aglomeraciones de la Kumba Mela. ¿Es posible para un país enviar satélites al espacio y conservar al mismo tiempo la sabiduría ancestral del espíritu? Occidente ha construido la modernidad negando su propia tradición. ¿Podrá la India adaptarse a los retos del siglo XXI sin por ello dar la espalda a su propia cultura tradicional? No es una pregunta fácil de contestar, pero el ejemplo indio quizás sirva para entender que lo sagrado y lo secular No es pues de extrañar que la gente que piense así no consiga acoplar la imagen de una India moderna, de una nueva potencia emergente tanto en lo económico como en lo político-militar, con la imagen de una India ancestral entregada a la sabiduría milenaria. Por otro lado, a principios del siglo XXI el mundo mediático nos ofrece también una nueva visión que está emergiendo con fuerza y que quizás obligue a cambiar algunas de las dicotomías con que Occidente ha acostumbrado a pensar el mundo. Por ejemplo las dicotomías entre tradición y modernidad, entre ciencia y religión, entre espiritualidad y materialismo, para nombrar sólo unas cuantas. Esta nueva visión nos ofrece la imagen de una India moderna poblada por jóvenes ejecutivos de las pujantes compañías 7 sión y es capaz de elevar el placer mundano, efímero y relativo interpretándolo como un signo del gozo divino, que no es sino otro nombre para lo que algunos llaman “la alegría de vivir”. no son mutuamente excluyentes y que no se puede construir la modernidad más innovadora sin tener al mismo tiempo los pies fuertemente enraizados en el suelo de la propia cultura. ¿Son religión y ciencia realidades mutuamente excluyentes o quizás operen en terrenos distintos de la experiencia humana? En primer lugar podríamos hablar de la secularidad intrínseca de la India. La India no es un país de idealistas contemplativos, incapaces de actuar eficientemente o de pensar analíticamente, aunque haya todavía gente en Occidente que siga albergando esta idea. Ciertamente la India siente una debilidad especial por la religión, pero entiende la religión no exclusivamente como un dogma, sino también como una búsqueda. El objetivo de la religión en la India no es la solamente la virtud o la salvación, sino también el conocimiento y la liberación. Lo religioso no es tan sólo una obsesión ultramundana que frustra nuestra plenitud existencial aquí en la Tierra, sino la respuesta efectiva al problema del dolor, ya que es capaz de dar un sentido final a la tragedia de la muerte. La religión puede transmutar el sufrimiento en compren- Históricamente es en el siglo XIX cuando la imagen clásica de espiritualidad y riqueza se bifurca en dos direcciones del todo opuestas. En el siglo XIX la admiración que Occidente había sentido por la India remota parece desvanecerse debido a los cambios que se suceden dentro de la propia cultura occidental. La idea de progreso, la revolución industrial, la teoría de la evolución, la eclosión del pensamiento y de la visión científica, la emergencia de la democracia y el sufragio universal, el individualismo, el positivismo, el marxismo, etc., configuran una visión de la realidad que no parece encontrar su contrapartida en la India, que se ha convertido ella misma en un sujeto colonial y en un ejemplo de una civilización atrasada o hundida en el cenagal de la tradición. No es pues de extrañar que se produjese la doble sustitución mencionada más arriba y que el misticismo y la pobreza acabaran siendo las dos caras de una misma moneda. Pero el siglo XIX no es sólo el siglo del positivismo, sino también el siglo del romanticismo. Paralelamente a la actitud dominante, hay un grupo de estudiosos occidentales, los denominados orientalistas, que construyen una imagen de la India totalmente opuesta a la anterior. Se trata, una vez más, de la India espiritual, ya conocida por los griegos, pero basada ahora en la lectura de los textos clásicos, una India alejada de la realidad cotidiana donde todo tiene un valor simbólico y metafísico. El romanticismo alemán fue el principal agente en la construcción de esta otra India, hasta llegar a establecer una dicotomía entre la Europa materialista, decadente y perversa y la reserva espiritual de la India. La India se convierte entonces en un refugio para los occidentales cansados de su propio sistema de vida, un oasis en un mundo despiadado y competitivo. Si en el siglo XIX esta actitud estaba reservada a cierto sector de las elites intelectuales de Occidente, a partir de la Segunda Guerra Mundial se populariza entre las nuevas clases medias de Estados Unidos y Europa. El movimiento hippy de los años sesenta es el heredero principal de esta actitud hacia la India, todavía vigente y tan reductora como la visión negativa que hemos mencionado antes. Es esta visión romántica y estrecha de la India la que explica la contradicción que algunos amantes de este país sienten al visitar por primera vez el país de sus sueños. ¿Cómo es posible, se preguntan a menudo, que la India de los yoguis, de la sabiduría, de la paz interior y de la armonía universal se encuentre reflejada en la avidez, la corrupción y la dureza que a veces se hace patente en la vida contemporánea? de una India espiritual y una India próspera. Hasta bien entrado el siglo XVIII la imagen de las fabulosas riquezas de los mogoles indios seguía fascinando la imaginación europea. A partir del XIX la idea de opulencia es sustituida por el de pobreza. Hemos de tener en cuenta que la Revolución Industrial va a cambiar irremisiblemente el concepto de pobreza y desarrollo, y que por otro lado el expolio colonial influirá enormemente en la producción y la distribución de riqueza en la India del siglo XX. Pero más allá de estas tres imágenes que hemos barajado a lo largo de las páginas anteriores, hay tres imágenes más de la India que son propias de Occidente y que tienen hoy en día una importancia capital para entender ese gran país. Resumiendo podríamos decir, sin ánimo de ser exhaustivos ni de agotar todas las representaciones posibles, que las seis imágenes de la India en orden cronológico son las siguientes: La La La La La La India India India India India India espiritual exótica opulenta comerciante del conocimiento de la pobreza Las tres primeras nos vienen dadas ya a partir del mundo griego. La cuarta se hace realidad en la época romana, cuando el comercio entre la India y el Mediterráneo adquiere unas dimensiones que quizás no se vuelven a repetir hasta la llegada del mundo moderno. La cuarta de estas imágenes fue introducida en Occidente gracias al Islam de la Península Ibérica que hizo de puente entre el saber indio y el europeo. La última de las imágenes como hemos mencionado tiene sus orígenes en el siglo XIX. Examinaremos históricamente estás imágenes en la próxima entrega de este artículo. Fotos: Mercé Blasco En estas líneas proponemos desempolvar de prejuicios el desván de los recuerdos y mostrar cuales son las distintas imágenes que Occidente ha ido fabricando a lo largo de los siglos. Como he dicho las dos imágenes más consistentes en la antigüedad eran la 9 LA CONSTITUCIÓN DE LA INDIA Dr. Rafael Iruzubieta A ntecedentes Históricos. Impartiendo una serie de conferencias bajo el título “¿Qué es la India?” en el año 1888, John Strachey, administrador colonial experimentado y gran conocedor de la India, decía: “ese país no existe, y éste es el primero y más importante de los hechos que podamos aprender acerca de la India. La India es un nombre que damos a una dilatada región que comprende multitud de países diferentes”. Sostenía que a la India le faltaban la mayor parte de los factores de unidad habitualmente considerados como constitutivos de la nación: raza, lengua, religión e historia comunes. Posiblemente, no le faltaba razón en aquel momento. A finales del siglo XIX y principios del XX la India estaba dividida, desde el punto de vista religioso, en 239 millones de hindúes, 78 millones de musulmanes, 4 millones de sikhs y 6 millones de cristianos. Desde el año 1858 la comunidad musulmana mantenía con la autoridad colonial relaciones autónomas. El histórico antagonismo entre los hindues y los musulmanes erige a Gran Bretaña en guardiana de la paz. Es innegable que la India era (y es hoy) un mosaico racial, lingüístico y cultural. La diversidad étnica resulta de las mezclas entre las oleadas pobladoras que se han sucedido en el curso de la historia del subcontinente indio, entre ellas, la de los arios. Añádase que la segmentación de la sociedad en castas jerarquizadas y el 10 ostracismo de decenas de millones de taba incapaz de disponer de sí misma y intocables confirmaba la tesis de Stra- no podía aspirar a la independencia, y ni chey, compartida por la mayoría de los siquiera a la autonomía administrativa, ingleses. La India no podía formar una de Gran Bretaña. nación unificada. La consecuencia evidente de este postulado es que, como Nótese, sin embargo, que a pesar la India no constituía una nación, resul- de las diferencias de lengua, de raza y de tradiciones, ya se constataba en la época colonial una cierta homogeneidad, que hacía que el tamil transplantado a Bengala o al Punjab experimentase una sensación de familiaridad que no tendría, por ejemplo, en las antiguas Persia o Indochina, y esa familiaridad era principalmente de índole religiosa. Pero hay que reconocer que por entonces era imposible encerrar la definición de la nación en una numeración de criterios de unidad. La nación india ha sido el resultado del proceso de liberación, más que su punto de partida. La historia de la emancipación de la India lo demuestra, por ser en realidad la historia de una toma de conciencia nacional. Corona británica, y en las que se repetían las mismas peticiones: admisión de los hindúes en los consejos legislativos, imperial y provinciales, facilidades de acceso a los concursos para proveer plazas en la Administración Colonial, disminución del capítulo militar en el presupuesto de la colonia, rebaja de la fiscalidad territorial e instauración de una protección aduanera. En el fondo, el CNI se adhería sin restricciones a la ideología política liberal en vigor en la Inglaterra victoriana. Únicamente reprochaba a los ingleses que negasen esas mejoras a sus súbditos de ultramar. El carácter hindú del movimiento del Congreso se acentuó a medida que avanzaba el siglo XIX. En el año 1877 se creó un movimiento paralelo, el Arya Samaj, cuyo fundador fue Swami Dayananda Saraswati (1824-1833), un brahmán del Gujarat que predicaba un hinduismo reformado, la vuelta a la edad de oro védica y el desarrollo económico y cultural de la India por vías hindúes, abandonando los remedos occidentalistas. Este movimiento se adhirió en el año 1899 al CNI. El CNI a principios del siglo XX no es de hecho sino un amplio compromiso La ideología de los nacionalismos europeos impregnó el pensamiento político de una gran parte del movimiento indio por la liberación. La historia de la independencia americana y de la unidad italiana tuvieron valor de ejemplo para los luchadores indios por la independencia. En el año 1921, Gandhi recomendaba la lectura de los escritos de Mazzini sobre la vida de Garibaldi a los estudiantes que marchaban a las ciudades a predicar la resistencia. Aquellos intelectuales hindúes de Bombay, Calcuta y Madrás se nutrieron al mismo tiempo de la tradición liberal inglesa, y en particular de Burke y de John Stuart Mill. A finales del siglo XIX no pedían el fin del régimen colonial, sino, dentro del marco del Imperio Británico, la concesión de instituciones representativas modernas a lo occidental. Posteriormente, vino el verdadero movimiento de liberación, que se ha venido en llamar movimiento por la nación india, porque fue también un movimiento creador de la nación. Este movimiento fue liderado, principalmente, por el Congreso Nacional Indio (CNI), que se fundó en el año 1885, y comenzó a reunirse una vez al año. En esas reuniones se pronunciaban discursos y se votaban mociones teñidas de la más profunda lealtad a la Dr. Babasaheb Ambedkar 11 de participación política dentro del Imperio británico, y únicamente la generalidad de sus opciones y principios lo preservaba de la fragmentación. Pero avanza, en todo caso, hacía la independencia de la India, con la influencia de dos políticos de un gran arraigo popular que aparecen en la escena política india en el año 1914: el brahmán Bal Gangadhar Tilak (1856-1920) y la Señora Annie Besant (1847-1933). Tilak es un lider que utiliza las motivaciones religiosas como estímulo del sentimiento nacional. En el año 1916 creó la Liga del hogar indio. Annie Besant, con 66 años de edad en el año 1914, era una mujer de una personalidad excepcional. Perteneció a la élite intelectual radical y socializante. Atraída por la teosofía y seducida por la metafísica hindú, llegó a la India en el año 1893 para trabajar al servicio de la Sociedad Teosófica, de la que habría de ser posteriormente su Presidenta mundial. Fue la fundadora, también en el año 1916, de la Liga Autonomista Panindia, cuya consigna era el gobierno de la India por la India. En junio del año 1917 la detención por los ingleses de Annie Besant y sus principales lugartenientes provocó un verdadero clamor nacional y la adhesión de las dos ligas de Tilak y de Besant al Congreso. Al salir de prisión la Señora Besant unos meses después, y en la cima de la popularidad, fue designada para presidir la Asamblea del CNI, que tuvo lugar en Calcuta a finales del año 1917. Para completar el camino hacia la independencia de la India a principios del siglo XX, es interesante resaltar que, como algo equivalente en el lado musulmán del CNI, se constituyó en el año 1905 una fuerza política musulmana importante, uno de cuyos objetivos era la restauración de la monarquía musulmana, derrocada un siglo antes por la conquista inglesa. La élite musulmana temía haber perdido, junto con la confianza de los ingleses, toda posibilidad de conservar en la India un papel 12 de primer plano. Bajo la dirección del magistrado Sayyid Ahmad Khan (18181898) se desarrolla un movimiento modernista que pretendía convertir a los musulmanes a la educación occidental, para permitirles colaborar en todos los niveles con el poder colonial, y conservar así un estatuto prestigioso en el país, superando las prevenciones británicas respecto a ellos. Esto provocó el enfrentamiento de Sayyid Ahmad Khan y sus afines con el CNI y con el movimiento nacionalista. Pero en el año 1917, coincidiendo con el clamor nacional por la detención de Annie Besant, se produjo un acercamiento imprevisto entre musulmanes e hindúes, lo que dio lugar a que se despertara entre los musulmanes de la India una corriente de solidaridad con el movimiento panislámico. Previamente, en el año 1916, el Congreso y la Liga Musulmana celebraron una sesión común, proponiéndose como fin último obtener para la India el Estatuto de autonomía de los dominios del Imperio británico. Este llamado “pacto de Lucknow” se realizó sobre la base de un doble compromiso: el Congreso admitía el principio de la representación separada de los musulmanes en los Consejos gubernamentales y la Liga Musulmana aceptaba el principio de un Gobierno representativo. En el año 1906 se fundó una organización llamada Hindú Mahasabha, que era el órgano político de los comunalistas hindúes. Muchos miembros del Congreso Nacional hindú se afiliaron a esta organización. En ese mismo año se fundó una milicia de militantes hindúes, el Rashtriya Svayamsevak Sangh (en anagrama, R.S.S.), que ha tenido una importancia relevante en la vida política india después de la Constitución. Su brazo político (el Bharatiya Janata Party, o partido del pueblo indio) ha gobernado el país durante los años 1996 al 2004. En 1914, hace aparición en la escena política la figura de Mohandas Karamchand Gandhi, a quien Rabindranath Tagore puso el apelativo de Mahatma (alma grande). Cuando Gandhi, que a la sazón tiene 45 años, regresa de Sudáfrica a la India e irrumpe en la política del país, la escena política la ocupan unos grandes líderes moderados y radicales como Lajpaat Rai, S.N. Banerjee, Gokhale, Tilak y Annie Besant, cuyo estilo y perspectivas políticas son mucho más clásicas y menos exigentes que las de Gandhi. Gandhi viene con un ideal forjado en África del Sur, que se concreta en la palabra satyagraha, que significa abrazo de la verdad (del sánscrito satya, que significa verdad, y agraha, que significa presa). Es una técnica de dominación moral o agitación no violenta al servicio de la verdad. Este movimiento se inicia en diferentes partes de la India. Un satyagraha muy significativo fue el que se inició en el año 1918, en el distrito de Kaira, en el Gujarat natal de Gandhi. Los campesinos, abrumados por una cosecha desastrosa y un periodo de alza vertiginosa de los precios, además de una grave epidemia de peste, pedían una condonación de impuestos, a lo que se oponía la Administración colonial. Otro saatyagraha importante fue el de Ahmadabad, la gran ciudad algodonera, en la que se desarrollaba un conflicto salarial entre patronos y obreros. En el satyagraha de Kaira, Gandhi organizó la resistencia pasiva de los campesinos, que dejaron de pagar el impuesto. En Ahmadabad organizó la huelga obrera y consiguió una solución al conflicto, tomando parte él mismo en una huelga de hambre. En ambos casos contrasta con los líderes políticos tradicionales, por la elección que hace de las causas que ha de defender, por sus métodos de agitación, por la connotación moral de sus consignas y por el fervor excepcional que suscita en las masas. Llegamos al mes de agosto de 1942, cuando Gandhi promovió el movimiento “Quit India” (dejen India). Decía Gandhi: “quiero libertad inmediatamente, esta misma noche, antes del amanecer, si fuera posible. Libraremos a la India o moriremos en el intento, no viviremos para ver la perpetuación de nuestra esclavitud”. Esto lo dijo el Mahatma cuando los británicos acudieron a una represión brutal contra los pacíficos seguidores del Satyagraha. La India logró su independencia de Gran Bretaña el día 15 de agosto de 1947. Pero, antes de que se aprobara su Constitución, hubo de pasar por el trauma que supuso el asesinato de Gandhi el día 30 de enero de 1948, a manos de unos fanáticos hindúes que no le perdonaron que permitiera la existencia de Pakistán, que, según ellos, suponía un gran sufrimiento para todos los indios de credo hindú. Hace poco que falleció el último superviviente de los que perpetraron y ejecutaron el crimen, Gopal Godse. El fanatismo de los asesinos de Gandhi era tal que el Señor Godse llegó a decir “si me preguntas si siento arrepentimiento, mi respuesta es no. Tomamos la decisión a sabiendas de lo que estábamos haciendo. Sabíamos que si permitíamos a Gandhi seguir viviendo, haría más y más daño a los hindúes, y no podíamos permitirlo”. Una de las tareas más importante que se presentó en 1947 a los nuevos responsables de la India era la integración política de los 554 Estados regidos por Príncipes (o maharajás) que habían sobrevivido bajo la protección británica. La Ley de Independencia de la India, votada en 1947 por el Parlamento británico, eximía a todos esos Estados de su obligación de juramento de fidelidad a la Corona británica, y los hacía libres de disponer por sí mismos de su suerte. Pero, un mes antes de la proclamación de la independencia, el CNI rechazó categóricamente las pretensiones de los Príncipes a la emancipación. De hecho, al día 15 de agosto de 1947, todos los Estados regidos por Príncipes, excepto tres, habían aceptado ya su anexión a la Unión India. Reconocieron así la plena soberanía del nuevo Gobierno indio en materia de relaciones exteriores, de defensa y de comunicaciones en todo el territorio de la India, comprendidos sus Estados. El artífice de la unificación territorial fue Sardar Patel (1875-1950), que encabezaba el ala derecha del Congreso Nacional. A la muerte de Patel, en 1950, la obra de unificación territorial estaba terminada en sus líneas generales. La India, por primera vez en su historia, era verdaderamente una nación unificada. Estudio sumario de la Constitución de la India Una vez cumplida la unificación territorial, la construcción política de la India independiente implicaba la elaboración de una Constitución. Más que una simple colección de reglas relativas al fun- cionamiento del Estado y de los poderes públicos, la Constitución promulgada el 26 de noviembre de 1949 (y que entró en vigor el 26 de enero de 1950) es una carta de los grandes principios sobre los cuales había de construirse la nación india y, en cierta medida, un programa de acción social y económica. Refleja casi exclusivamente los criterios del CNI sobre el futuro de la India. La Asamblea constituyente se formó en el año 1946 (casi un año antes de la independencia) y se eligió por las Asambleas provinciales en las que los congresistas eran por lo general mayoritarios. Ello explica la oposición de los comunistas y de los socialistas a la elaboración inmediata de una Constitución, la cual, según ellos, hubiera debido ser redactada por una Asamblea elegida por sufragio universal. La Asamblea constituyente necesitó tres años para redactar el texto de la Constitución. El comité de redacción estaba integrado por destacados abogados, miembros de la pequeña clase media india. Lo presidía Babasaheb Bhimrao Ambedkar. Las ideas directrices de la Constitución fueron formuladas por Nehru en la apertura de la Asamblea constituyente: la India –dijo Nehru- “será una República independiente soberana, en la que todo poder y autoridad procederán del pueblo. La Constitución garantizará a todo el pueblo de la India la justicia social, económica y política; igualdad de estatuto, igualdad de oportunidades, igualdad ante la Ley, libertad de pensamiento, de expresión, de creencias, de fe, de culto, de vocación, de asociación y de acción, dentro de los límites impuestos por la Ley y la moral pública. La Constitución proporcionará garantías adecuadas a las minorías, a las zonas más atrasadas y tribales y a las clases de bajo nivel, así como a otras categorías inferiores”. Tales directrices se concretan en los principios de democracia, laicismo, abo- 14 lición de la casta y de la intocabilidad que luego consagraría la Constitución, desde su preámbulo, que dice: Nos, el pueblo de la India, habiendo solemnemente decidido constituir la India como república democrática soberana y asegurar a todos sus ciudadanos: JUSTICIA, social, económica y política. LIBERTAD, de pensamiento, de expresión, de creencias, de fe y de culto. IGUALDAD, de condición y de oportunidades. FRATERNID DAD, que aseguré la dignidad del individuo y la unidad de la Nación. EN NUESTRA ASAMBLEA CONSITUYENTE A LOS 26 DÍAS DEL MES DE NOVIEMBRE DE 1949, ADOPTAMOS, PROMU ULGAMOS Y NOS DAMOS ESTA CONSTITUCIÓN. Se ve enseguida que esos principios esenciales (libertad, igualdad y fraternidad) están tomados de la Constitución francesa aprobada tras la revolución de 1789. La Constitución de la India consta de 395 artículos y 9 anexos. Es una de las Constituciones más largas del mundo, junto a la de Venezuela. Nuestra vigente Constitución española consta de 169 artículos. Está dividida en 21 Partes. La parte primera se dedica a la Unión y su territorio. La segunda a la ciudadanía. La tercera a los derechos fundamentales. La cuarta a los principios directivos de la política del Estado. La quinta a la Unión. La sexta y séptima a los Estados. La octava y la novena a los territorios de la Unión. La décima a las áreas registradas y tribales. La undécima a las relaciones entre la Unión y los Estados. La duodécima a las finanzas, propiedades, contratos y litigios. La decimotercera al tránsi- to, comercio e intercambio dentro del territorio de la Unión. La decimocuarta a los servicios prestados a la Unión y a los Estados. La decimoquinta a las elecciones. La decimosexta a las disposiciones especiales relativas a ciertas clases. La decimoséptima al idioma oficial. La decimoctava a las disposiciones para emergencia. La decimonovena a disposiciones diversas. La vigésima a la reforma de la Constitución, y la vigésimo primera a su entrada en vigor. En su complejo articulado recoge las dos Partes principales de las Constituciones, la parte programática o dogmática, que reconoce los derechos fundamentales propios de cualquier democracia moderna, y la parte orgánica, que regula la Constitución y el funcionamiento del Estado y de los tres poderes tradicionales que lo integran: el legislativo, el ejecutivo y el judicial. Vamos a ocuparnos en primer lugar de la parte orgánica. Las disposiciones relativas al fundamento y al ejercicio de los poderes no son en modo alguno originales. Lo esencial está tomado del Acta sobre el Gobierno de la India de 1935 y, en cuanto al resto, está tomado de diversas Constituciones de Europa, de América o de la Commonwealth. Los constituyentes, líderes políticos formados en la tradición liberal democrática inglesa (entre ellos, muchos abogados), rechazaron los propósitos de una minoría de gandhianos que deseaban una organización muy descentralizada, cuya célula de base habría sido el Consejo local o de aldea. Por el contrario, la centralización es uno de los objetivos de la Constitución. La India nueva se define como una democracia parlamentaria y republicana de tipo federal. Pero en el Gobierno Central se concentran todos los poderes en materia de defensa, de relaciones exteriores, de comunicaciones, de moneda y, en cierta medida, de desarrollo económico. Por lo demás, en caso de urgencia, el poder central puede asumir, durante un periodo inicial de seis meses ulteriormente amplia- ble, el Gobierno directo de un Estado. Los casos de urgencia previstos son las situaciones amenazantes para la seguridad, como la agresión exterior o los desórdenes interiores, las crisis financieras y el Gobierno que no actúe según las cláusulas de la Constitución. El uso ha establecido asimilar a este último caso las situaciones de inestabilidad política crónica. La India se convierte en una República libre e independiente, integrada por 28 Estados y 7 Territorios de la Unión. La Constitución configura un sistema parlamentario, donde la soberanía reside en el pueblo a través de las Cámaras baja y alta, con un poder ejecutivo que asume un Jefe de Gobierno elegido por la Cámara baja. La Cámara popular o baja de la India se denomina Lok Sabha, y está compuesta por representantes del pueblo elegidos directamente por sufragio universal. Pueden votar todos los ciudadanos mayores de 18 años. Rige el sistema electoral de mayoría. Cuando se redactó la Constitución, se dudó del establecimiento de un sistema proporcional, que se consideró en principio adecuado dada la diversidad multiétnica de la sociedad india, pero al fin se optó por el sistema mayoritario para evitar legislaturas fragmentadas y procurar la formación de gobiernos estables. La Cámara baja está compuesta por 545 miembros, con dos miembros nombrados por el Presidente de la República para representar a la comunidad angloindia. Las elecciones se celebran cada cinco años, pero el Presidente de la República tiene la facultad de disolver el Lok Sabha, con el visto bueno del Jefe de Gobierno. Así ocurrió en los años 1971 y 1997. También puede disolver la Cámara cuando no se puede formar Gobierno estable, como sucedió en el año 1991. Como es propio de todo régimen parlamentario, el Primer Ministro ocupa su puesto tanto en cuanto disponga de la mayoría suficiente que le apoye. La Cámara alta (o Rajya Sabha) está constituida por 254 miembros. De éstos, 233 representan a los Estados y los territorios de la Unión y 12 miembros son designados por el Presidente de la India. Las elecciones de la Rajya Sabha son indirectas. Los miembros son elegidos por los miembros electos de la Asamblea Legislativa de los respectivos Estados. La Rajya Sabha no está sujeta a disolución, aunque un tercio de sus escaños se renueva cada dos años. Los procesos legislativos requieren del consenso de ambas Cámaras del Parlamento, pero cuando se trata de legislar en materia monetaria, siempre prevalece la decisión de la Cámara alta. El Consejo de Ministros, como es propio de los regímenes parlamentarios, está encabezado por el Jefe de Gobierno que designa el Parlamento. En los Estados, el Gobernador, como representante del Presidente, es el Jefe del ejecutivo, pero el verdadero poder ejecutivo descansa en el Ministro Jefe, que encabeza el Consejo de Ministros de cada Estado. El Presidente de la República se elige por un colegio electoral integrado por miembros elegidos de ambas Cámaras del Parlamento y por las Asambleas Legislativas de los Estados, con un voto ponderado a cada Estado en función de su importancia. El mandato del Presidente de la República dura cinco años. El artículo 52 de la Constitución proclama lacónicamente que habrá un Presidente de la India. El artículo 53 concede al Presidente la titularidad del poder ejecutivo, aunque a continuación se dice que dicho poder “será ejercido por él directamente o por medio de funcionarios subordinados a él de acuerdo con esta Constitución”. Pero, en realidad, sus funciones reales son eminentemente arbitrales y simbólicas, salvo la de Jefe de las Fuerzas Armadas, que le reconoce expresamente el artículo 53. El juramento del Presidente (que regula el artículo 60) explica bastante bien cuáles son sus funciones. Dice así: “yo afirmo solemnemente desempeñar fielmente el cargo de Presidente de la India, y dentro de lo que me sea posible, preservar, proteger y defender la Constitución y las Leyes y dedicarme al servicio y bienestar del pueblo de la India”. El sistema de gobierno en los Estados integrantes de la Federación se asemejan mucho al Gobierno de la Unión. A esto dedica la Constitución su Parte 6ª. Desde que se aprobó la Constitución hasta ahora se han producido 92 enmiendas, la última en el año 2003, que entró en vigor el día 7 de enero de 2004. Pero nos vamos a referir únicamente por su interés a la enmienda 73, que se aprobó en el año 1992 y entró en vigor el 24 de abril de 1993. Esta enmienda otorgó validez constitucional a los panchayats, estableciendo una democracia en el nivel de bases, igual que se da en el nivel estatal o nacional. Con excepción de los tres Estados del nordeste (que tienen consejos tribales) y dos Territorios de Unión Urbanos, todos los Estados y Territorios de Unión han adaptado sus panchayats conforme a la citada enmienda 73. ¿En qué consisten los panchayats? Cerca del 75% de la población de la India vive en más de medio millón de pueblos y aldeas. Pero las comunidades de aldea y sus organizaciones han existido en la India a lo largo de siglos. En tiempos antiguos, los panchayats fueron instituciones funcionales que existían en casi cada aldea, y cuya forma de gobierno salía de las bases. El panchayat (que viene a ser un Consejo electivo de la aldea) tenía grandes poderes, tanto en el plano ejecutivo como en el judicial, pero su autonomía fue desapareciendo gradualmente hasta que se introdujo en la Constitución la enmienda 73. Hay tres niveles de panchayats: el de aldea (Gram Panchayat), el intermedio (Panchayat samiti) y el de distrito (Zilla Parishad). Todos los escaños de un 15 panchayat en cualquiera de estos niveles se eligen en las respectivas circunscripciones. Este sistema permite estimular la participación democrática en las zonas rurales, dotar a las aldeas y distritos de una cierta autonomía y estimular las posibilidades económicas y financieras, promoviendo una planificación de abajo a arriba. Justicia y Fiscal General:- El artículo 50 de la Constitución establece que el Estado tomará medidas para separar lo judicial de lo ejecutivo en los servicios públicos del Estado. Es decir, proclama la independencia judicial, que es consustancial a un Estado de Derecho. En el vértice del sistema judicial está el Tribunal Supremo de la India, con un Tribunal Superior para cada Estado y otros Tribunales subordinados. Por ejemplo, los panchayats, a los que antes he aludido, que también tienen funciones jurisdiccionales para decidir cuestiones menores de carácter civil y penal de naturaleza local. Cada Estado se halla dividido en diferentes distritos judiciales presididos por un Juez de distrito, que es el representante de la Jurisdicción civil principal y puede juzgar todo tipo de delitos. Subordinados a estos Jueces de distritos están los llamados munsifs, los subjueces y los jueces civiles. También hay Tribunales especializados, como, por ejemplo, los de familia, que se crearon en el año 1984, y persiguen la conciliación y la rapidez de los procedimientos en las diferencias relativas al matrimonio y a los asuntos familiares. El artículo 141 de la Constitución establece que la jurisprudencia de la Suprema Corte será obligatoria para todos los Tribunales dentro del territorio de la India. Es curioso señalar que el artículo 215 de la Constitución dice que “cada Tribunal Superior será Tribunal de casación”. Aquí se ve la influencia francesa, porque 16 este recurso extraordinario de casación es producto de la Revolución Francesa. Casación viene del término latino casare, que significa anulación. Los revolucionarios franceses eran absolutamente desconfiados con los Jueces, y trataban de asegurar el sometimiento de los Jueces a la Ley mediante este recurso extraordinario de casación, que tiene por objeto depurar la mala praxis de los Jueces y Tribunales inferiores cuando fallan sin ajustarse rigurosamente a la Ley. Fueron los franceses quienes institucionalizaron la expresión la bouche de la loi (la boca de la Ley) como atributo y a la vez obligación de los Jueces. Se conjuraba así cualquier tipo de veleidad o desvío en la aplicación de la Ley con otros fines, es decir, el uso alternativo del Derecho. El artículo 76 de la Constitución recoge la figura del Procurador o Fiscal General del Estado, nombrado por el Presidente de la República, que le mantiene en el cargo mientras lo considere oportuno. Debe ser una persona que cumpla con los requisitos indispensables para ser designado Juez del Tribunal Supremo. El deber del Fiscal General o Procurador General es aconsejar al Gobierno sobre asuntos legales y realizar funciones de carácter legal que le sean asignadas por el Presidente. En el desempeño de sus funciones, tiene el derecho de audiencia de todos los Tribunales, así como el derecho a participar en los procesos parlamentarios de elaboración de las Leyes, pero sin voto. El Fiscal General está asistido por un Abogado General y por cuatro Abogados Generales asistentes. Respecto la parte dogmática, la Constitución expresa también una voluntad de cambio profundo del orden social y de los derechos humanos. Éste cambio se manifiesta en dos niveles: el de los derechos fundamentales y el de los principios directivos del Gobierno de la Nación. Los derechos fundamentales se distribuyen en siete categorías: derecho a la igualdad, a la resistencia contra la explotación, a la libertad de religión, derechos relativos a la cultura, derecho a la educación, derecho de propiedad y derecho al recurso constitucional. En cuanto a los principios directivos, se asemejan mucho a los emanados del CNI: el Gobierno habrá de actuar procurando el bienestar del pueblo, y desarrollando, en la medida de lo posible, un orden presidido por la Justicia social, económica y política (artículo 38 de la Constitución). Aparentemente obvios en su formulación, esos principios adquieren en el contexto hindú un alcance revolucionario. Constituyen la culminación de la complejísima evolución ideológica del nacionalismo hindú frente al problema de la modernidad. Marcan el triunfo final en esa evolución de las tendencias reformadoras y de las tendencias modernistas. Uno de los aspectos reformistas más notables es la insistencia en la noción de igualdad, que lleva consigo una condena inequívoca de la ideología jerarquizante del sistema de castas, y particularmente de la intocabilidad, que queda abolida y prohibida en el artículo 17 de la Constitución. Los constituyentes coincidieron en este punto con uno de los principios dominantes del pensamiento social de Gandhi. Esta abolición del sistema de castas irá seguida de varias Leyes, destinadas a modernizar las costumbres hindúes, como la Ley sobre el divorcio y la edad para contraer el matrimonio, del año 1955, y la Ley de defensa de los derechos de las viudas y de las divorciadas en materia de sucesiones, aprobada en el año 1956. A partir de estas Leyes, la oposición de los hindúes ortodoxos se hace cada vez más radical, pero siempre se superó gracias a Nehru, cuya popularidad resultaba más fuerte que las voces disidentes. Como es obvio, estas normas, y el propio artículo 17 de la Constitución, no tienen poder inmediato sobre las conciencias. Por eso, la abolición de la intocabilidad no ha suprimido de hecho la discriminación de las clases más bajas. Sin duda para contrarrestar esa prevista situación de hecho, la Constitución (sin Pandit Nehru con Gandhiji perjuicio de garantizar la igualdad ante la Ley y el principio de no discriminación) establece la llamada discriminación positiva o, con mayor precisión, la llamada discriminación inversa, o acción positiva. Esta discriminación la lleva a cabo en los mismos artículos que consagran el derecho a la igualdad, concretamente en los artículos 15 y 16, bajo la siguiente fórmula: “ninguna de las disposiciones del presente artículo podrá impedir al Estado tomar medidas especiales para el progreso de cualquiera de las clases de ciudadanos más atrasadas social o educacionalmente, o de las castas registradas o tribus registradas”. Esta declaración se incluye en el artículo 15 (no discriminación por razón de religión, raza, casta, sexo, o lugar de nacimiento) y en el 16, que garantiza la igualdad de acceso para todos los ciudadanos en materia de empleo o nombramiento para cualquier cargo público. Esta acción positiva se materializa, sobre todo, en la reserva de plazos para los intocables en la Administración Pública y en la Universidad. Por lo que respecta a los cargos públicos, la Constitución llegó incluso a reservar bancas (escaños) en la Cámara popular para las castas y tribus registradas y para la comunidad anglo-india, aunque la reserva duró sólo veinte años, como dispone el artículo 334, salvo la reserva de dos escaños para esta última comunidad, que sigue vigente. Resulta esencial entre los principios de la Constitución el laicismo del Estado, con su corolario, la libertad de creencias y de cultos. En la atmósfera de tensión religiosa que acompañaba el trabajo de la Asamblea constituyente, la derecha hindú tradicional, conducida por el Sardar Patel, reclamaba la creación de un Estado hindú (Bharat), contrapeso del Pakistán islámico. Bajo la influencia decisiva de Nehru, la Asamblea constituyen- te optó, sin embargo, por la garantía de la libertad religiosa y por la protección imparcial de todas las convicciones religiosas. Pero también sobre este punto la Constitución es a la vez una declaración de intenciones, un programa de acción y una reforma efectiva. El tradicionalismo hindú sigue siendo una fuerza importante en la vida política hindú. Casi todas las tendencias políticas a raíz de la Constitución de la India se consideraron una parte de la herencia espiritual del Mahatma Gandhi. Pero, de hecho, únicamente se han conservado los elementos de su pensamiento fácilmente conciliables con una visión moderna del porvenir de la India: abolición de las castas, tolerancia religiosa y promoción social. El proyecto político de Gandhi, fundamentalmente anarquista, su concepción arcaizante del desarrollo económico y su insistencia en cuanto a la formación moral de los individuos, son ya historia. 17 HINDI: EL APRENDIZAJE Ana Thapar C uando llegué a la India, en los años sesenta, recién casada, decidí que, aunque la familia de mi marido era bilingüe, tenía que aprender lo antes posible a hablar hindi para poder comunicarme con la mayoría de las personas que me rodeaban. Lo primero que se me ocurrió fue comprar un libro de “Teach Yourself Hindi”. La tarea no resultó fácil. En aque- lla época no habían pasado todavía ni veinte años desde la dominación inglesa y como la mayoría de los indios educados estaban muy anglizados no le prestaban al hindi la importancia que se merecía. El resultado de aquella actitud era que prácticamente no existían libros de hindi para extranjeros. Cuando finalmente encontré uno en una librería de Connaught Place, llegué a casa feliz con él en mi bolso y me puse afanosamente a estudiar la primera lección que resultó ser el imperativo de los verbos pero ¡Sorpresa! Sus primeras frases eran las siguientes: ¡Poned las tiendas de campaña! ¡Cargad las mulas! ¡Apunten! ¡Fuego!... Poco a poco descubrí que era un manual de hindustani para oficiales del ejército inglés y que su vocabulario no iba a servir para mucho para una persona tan pacífica como yo. Un día, Bibijí, la tía de mi marido que hacía conmigo las veces de suegra “maravillosa” y resalto lo de maravillosa porque las suegras no son siempre maravillosas, al oír que me dirigía a un criado como si fuese un coronel mandando a un sipahi, se quedó tan asombrada que me buscó un profesor particular de hindi para que me enseñase el vocabulario y la entonación adecuados. A la semana siguiente se presentó en casa mi flamante profesor a quien todos llamábamos Panditjí. El Panditjí era 18 un hindivala de Uttar Pradesh y hablaba inglés victoriano con un fuerte acento indio. Era un hombre menudito, llevaba el gorro de los Congresvalas, un dhoti blanco con kurta y unos zapatos negros y puntiagudos sin calcetines. El Panditjí solo había enseñado a leer y escribir a niños indios que ya hablaban hindi y no tenía ni la más mínima idea de cómo se enseña a un adulto. Me enseñó a leer y escribir perfectamente pero cuando le preguntaba cosas tan básicas de gramática como por qué los nombres masculinos al ponerse en plural unas veces cambiaban su terminación y otras no, me miraba maravillado de mi espíritu de observación y decía: “Es así. Nunca me había fijado.” Aunque yo vivía con la familia de mi marido la situación en mi casa no me ayudaba lo más mínimo porque mi familia es punjabi y, en casa, aunque todos sabían hindustani, corrientemente se hablaba inglés o punjabi. Dado que el punjabi y el hindi se parecen tanto entre sí como el español y el italiano empecé a mezclar los dos, inventándome un nuevo y pintoresco lenguaje. Bueno, al menos ahora que ya sabía leer y escribir, podría comprarme un diccionario y todos los días aprender diez palabras nuevas… Dicho y hecho. Volví a la librería de Connaught Place donde me habían vendido el “Teach Yourself” y me compré un diccionario hindi-inglés. La primera barrera que encontré fue que los diccionarios de hindi no siguen el orden de letras de nuestro diccionario, es decir: a, b, c, d, e, f… En ellos lo primero que vienen son las vocales en el orden siguiente: a, i, u, ri, e, o, au, y después las consonantes: k, kh, g, gh, ch…en un orden totalmente nuevo para mí. Me armé de paciencia y poco a poco me hice con él. poner el “Central Hindi Institute” un instituto que iba a impartir clases a extranjeros. Las dos nos matriculamos allí y fue un gran acierto. Por fin tuvimos excelentes profesores que nos enseñaron a hablar y traducir, nos dieron unos buenos apuntes de gramática, nos aconsejaron donde comprar el mejor diccionario y nos guiaron por la complicada fonética del hindi. Pero más adelante descubrí que, de nuevo me había equivocado en la elección de diccionario porque su autor, aunque hablaba muy bien el hindi, indudablemente tenía un conocimiento muy limitado del inglés y, cuando no se sabía la traducción exacta de una palabra al inglés, la explicaba. Un día buscando el significado de la palabra “jhum” encontré lo siguiente: Vigor que sienten los labradores en el cuerpo con la llegada de la primavera y que los hace dar saltos de alegría al contemplar las cosechas (!). Nuestro pequeño grupo de alumnas, a excepción de una francesa que trabajaba en la Embajada de Francia y una española que era profesora en Jawaharlal Nehru University, estaba formado por europeas casadas con indios. Había dos irlandesas, una francesa, una alemana, una jovencísima italiana recién llegada a la India llamada Sonia Gandhi y yo. Finalmente una amiga mía irlandesa, casada también con un indio y que había pasado por peripecias semejantes a las mías para aprender hindi, me comentó que en Hauz Khas iban a EL HINDI EN ESPAÑA De todas mis vicisitudes con el aprendizaje del hindi, casi sin darme cuenta, salieron unos voluminosos apuntes que dieron lugar a mi libro “Gramática de hindi” que fue la primera gramática de hindi que hubo en el mundo para hispanohablantes. Cuando volví a España me dediqué con ilusión a escribirla para que los hispanohablantes que deseasen hablar hindi no se encontrasen con los problemas que tuve yo y no precisasen saber inglés para aprenderlo. Simultáneamente el profesor Luis Beltrán que era por entonces Director del Colegio Mayor Nuestra Señora de África consciente del vacío que había en España en la enseñanza de lenguas africanas y orientales había comenzado la encomiable labor de, con pocos medios y una gran ilusión, organizar la enseñanza de dichas lenguas. El primer profesor de hindi que hubo en Madrid fue el profesor Susnigdha Dey, Catedrático de Letras Hispánicas y Decano de la Facultad de Letras de la Universidad Jawaharlal Nehru de Nueva Delhi, que, junto con su hija Sona Dey, impartió clases durante un año. Seguidamente yo le sustituí durante cuatro años, época en que también la Editorial Alhambra de Madrid publicó mi libro “Gramática de Hindi” que en breve se va a volver a editar, revisado y ampliado, por la Editorial GRAM bajo el nombre “Curso de Hindi”. Un año después Enrique 19 Gallud publicó su diccionario españolhindi, hindi-español y, gracias a estos dos libros, el hindi dejó de ser “ese idioma inalcanzable para los españoles”. Mis alumnos aprendieron hindi por motivos muy variados. Algunos eran expertos en aprender idiomas y hablaban ya seis o siete idiomas. Otros querían viajar a la India para aprender baile clásico indio, otros por curiosidad y algunos simplemente porque estaban enamorados del país. Tengo muchas anécdotas sobre mis alumnos y el uso que hicieron de él pero quizá la más bonita es la de un joven de un pueblo de Guadalajara que, a pesar de que nunca había salido de España y de que no hablaba más idioma que el castellano, siempre había sentido unas enormes ganas de conocer la India. Este joven, tras estudiar un año conmigo en Ntra. Sra. De África, fue a pasar un mes a la India. A poco de llegar, viajando en tren, pegó la hebra con otro joven indio de un pueblo, como él, que le invitó a su casa. Pasó el resto de sus vacaciones con la familia de aquel muchacho en aquel pequeño pueblo y, cuando volvió me dijo que había sido una experiencia muy enriquecedora. llamada brahmi, de origen sánscrito, y se escribe de derecha a izquierda bajo una raya horizontal que une las palabras. Pertenece a la rama de idiomas indoeuropeos y proviene del sánscrito. El sánscrito védico llegó al noroeste de la India en el segundo milenio antes de Cristo con la expansión de los pueblos arios. En la antigüedad fue la lengua utilizada por las clases que ostentaban el poder pero, con el paso del tiempo, únicamente lo siguieron empleando los brahmanes y los eruditos. Simultáneamente, entre el siglo VI a. de C. y el siglo X d. de C. entre la gente común fue tomando auge el prácrito, forma popular del sánscrito. A su vez el prácrito sufrió diversas variaciones dando lugar a nuevas lenguas. Entre ellas las principales fueron: el shauraseni y el magadhi, lengua utilizada por el Buda. El pali, idioma en que se escribieron los textos religiosos budistas, fue también otra de las lenguas populares derivadas del sánscrito. A partir del siglo X se fueron formando las lenguas actuales del subcontinente. En el norte, además del hindi, surgieron el panllabi, el gullerati, el marathi, el oriya, el asamés y el urdu; y en el sur: el támil, el telugu, el kannada y el malayalam. EL HINDI El hindi es una lengua bellísima, en la actualidad la hablan 630 millones de personas. Su escritura llamada “Dev naguiri” (de la ciudad de los dioses) es una adaptación de una escritura anterior Durante la dominación musulmana de la India, el hindi quedó relegado a segundo lugar, utilizándose como idioma culto en las cortes musulmanas el urdu, lengua que proviene del persa. El urdu aportó al hindi una gran cantidad de vocablos nuevos, sobre todo los relacionados con la administración pública. A su vez, la dominación inglesa trajo, por una parte los términos nuevos empleados en su extensa democracia y, por otra, las nuevas palabras científicas de los avances tecnológicos de finales del siglo XIX y principios del XX. Todos estos términos quedaron asimilados en un conglomerado muy dinámico mezcla de hindi, urdu e inglés que es lo que, en la actualidad, se llama hindustani y que se emplea coloquialmente en las zonas hindihablantes del país. Tras la Independencia de la India en 1947, los estados del norte del país decidieron hacer lengua oficial al hindi. Pero como este idioma se hablaba en una zona extensísima y había sufrido diferentes modificaciones dando lugar a numerosos dialectos en cada región, se acordó elegir como “hindi modelo” al Khari Boli, la lengua hablada al norte y al este de Delhi. En la actualidad se está intentando sustituir los barbarismos del hindustani por las palabras originales del hindi, en caso de que existieran, o por palabras sánscritas o sanscritizadas en el caso de palabras nuevas. Este hindi puro es el que se enseña a los niños en los colegios y también en el que se dan las noticias por radio y televisión. Pero, pese a todo esto, las nuevas generaciones siguen utilizando coloquialmente el hindustani cada vez más salpicado de palabras y expresiones inglesas. ERRATA DEL ÚLTIMO NÚMERO HOLA NAMASTE lamenta que en la nota LA MIRADA SE DESNUDA: INDIA Y YO publicada en el número anterior de esta revista se omitieron por error las siguientes frases que constituían su conclusión. “Así permanezco unos minutos más hasta que, al comprobar que ya no llueve y que quizá es hora de salir hacia el punto de encuentro con mis amigos, se lo indico al guía. Éste, como si hubiera estado esperando esa orden, con un riguroso sentido de disciplina, actúa como un resorte y le da instrucciones al conductor. Salimos los tres de la choza, dejándola para siempre, atrás, y deejando para siempre, en su oscuro rincón, al hombre de la sonrisa amiga”. 20 PERSPECTIVAS DE LA ECONOMÍA DE LA INDIA Redacción E l Informe sobre las perspectivas de la economía de la India, presentado el pasado mes de febrero por el Ministro de Finanzas de la India, Señor P. Chidambaram, ante el Parlamento vaticina una tasa de crecimiento del 8,1 por ciento durante el 2006. El mismo Informe exige una profundización del proceso de reformas relativas al régimen impositivo y la política laboral así como plantea la imperiosa necesidad de una solución veloz y valiente al sector de hidrocarburos. Contrastando con las fluctuaciones agudas de la agricultura, la industria y los servicios continuaron ampliando ininterrumpidamente. De hecho, desde Como una sólida demostración de sus fortalezas nacientes, la economía de la India tras crecer a un ritmo del 8,5% y el 7,5% en los dos últimos años, crecerá previsiblemente en un 8,1% durante el corriente año. El crecimiento del PIB excediendo el 8% a base de los precios constantes ha sido logrado por la economía de la India durante solo cinco años en su memoria documentada y dos de estos han sido en los últimos tres años. Tras haber caído a menos del 1% en 2004-05, principalmente a causa de lluvias irregulares, el crecimiento del sector agrícola y los sectores afines está previsto en un 2,3% en 2006. Con buenas cosechas en kharif (primavera) y rabi (otoño), la producción de granos alimenticios se incrementará en cinco millones de toneladas. Señor P. Chidambaram, Ministro de Finanzas 21 “Agujero en la pared”, Programa de Informática para niños menos privilegiados el comienzo del 10º Plan Quinquenal en 2002-03 que obtuvo un crecimiento del 7 por ciento, la industria y los servicios han sido los ejes gemelos para propulsar el crecimiento economico. En un horizonte poco más amplio de seis años entre 2000 y 2006, los servicios han aumentado su parte en el PIB del 49,8% al 54,1%. Durante el mismo periodo, la industria con una parte constituido en un 25,8% del PIB, incrementó su parte, contribuyendo al 28%, en el PIB. La racha de la recuperación industrial a partir de 2002-2003 se ha mantenido. Tras una aceleración de crecimiento del 7% en 2002-03 al 7,6% y el 8,6% en los dos años siguientes del PIB industrial en coste factor a precios constantes de 1999-2000, el resurgir industrial queda patente en el crecimiento previsto en un 9% para el año en marcha. El motor de este crecimiento industrial yace en el desempeño de la manufactura y la construcción. Si bien en la industria, el crecimiento de la manufactura aceleró del 7,1% en 2003-04 al 9,4% en 200506, el aumento en la construcción ha 22 sido de dos dígitos en cada uno de los últimos tres años. El flujo de préstamos sustanciales de la banca comercial a los sectores de la vivienda, la inmobiliaria y de venta minorista han contribuido al alza en la construcción y bienes de consumo. Por el lado negativo, se registró una desaceleración en el crecimiento del sector minero y cantero, en parte por la caída de los niveles de producción del crudo como consecuencia del incendio en julio de 2005 en la Plataforma Norte de Mumbai High que mermó el crecimiento industrial en todas sus dimensiones. El crecimiento del sector servicios siguió a sus anchas. Entre los tres subsectores de servicios, el comercio, los hoteles, el transporte y las prestaciones de servicios de comunicación siguieron al frente con un crecimiento a una tasa de dos dígitos durante el tercer año consecutivo. El progreso impactante en la expansión de la red de ferrocarril de pasaje y la producción de vehículos comerciales y la ampliación rápida del stock existente de conexiones de telefonía, particularmente los móviles, jugaron un papel clave en este crecimiento. El crecimiento en los servicios financieros (incluyendo la banca, las aseguradoras y la inmobiliaria), que tras su caída en 2003-04 se había recuperado al año siguiente, mantuvieron el ritmo con la progresiva maduración de los mercados financieros indios y el boom en la construcción. No obstante, los servicios comunitarios, sociales y personales, que incluyen administración pública y defensa, como reflejo del proceso de la consolidación fiscal y la creciente eficacia de la gestión del gasto fiscal sufrieron una deceleración en su crecimiento que superaba un punto percentil. El arranque en la inversiones, como reflejo del alto optimismo empresarial, no solo fortaleció el desempeño industrial sino que también reforzó las expectativas del crecimiento en sí mismo. El rally en la formación de capital interno bruto(CIB) que comenzó en 2002-03 sigue en plena marcha. EL CIB, como proporción del PIB sobre precios corrientes, había disminuido del 26% en 1999-2000 al 23% en 2001-2002 antes del comienzo de la recuperación industrial en 2002-2003. Aumentando de nuevo el 25,3% y el 27,2% en los dos años siguientes, esa proporción alcanzó el alto porcentaje del 30,1 en 2004-05. El índice de rendimiento del 11% de la bolsa en 2004 seguido por el 36% en 2005 facilita apreciar en gran medida el sentimiento inversor. La bien dispuesta BSE Sensex (Bolsa de Bombay/Mumbai) superó la marca 10.000 puntos el 6 de febrero de 2006. En 2005, recursos valorados en 30.325 Crores de Rupias (1 Crore=10 millones) se juntaron en el mercado primario de acciones ordinarias. En alza desde 2002, aumentó el número de ofertas públicas iniciales (OPI) por año, de 26 a 55 entre 2004 y 2005. En consonancia con el rally en las inversiones, el préstamo bancario al sector comercial se incrementó hasta el 22,8% durante 2004-05 y continuó con un 21,2% entre fin de marzo 2005 y el 20 de enero de 2006. cia. Representando un aumento del 49%, hizo que el 31 de marzo de 2005 casi 1,7 millones de Grupos AutoAyuda llegasen a cubrir más de 24 millones de familias pobres con un préstamo promedio de 3.044 de Rupias. El apoyo para la refinanciación prestado por la Junta para el Desarrollo Rural Nacional (NABARD) alcanzó la cifra de 3.082 Crores de Rupias destacando que el 90% de los grupos con este enlace con los bancos eran de mujeres. Cabe resaltar que el 90% del objetivo de enlazar 300.000 GAA a este programa durante 2005-06 ya había sido realizado en diciembre de 2005. Al son de la clasificación de industrias según su uso, el crecimiento del 15,7% en el sector de bienes capitales entre abril y diciembre de 2005 marcó una mejora sustancial sobre el 13,8% del periodo correspondiente anterior. El boyante crecimiento del 21% en la importación de bienes capitales en 2004-05, sobre el 40% en 2003-04, constituyo un reflejo de la inversión Al lado del sólido crecimiento del sector industrial y la consciente decisión gubernamental en aras de incrementar crédito al sector agrícola condujo al aumento rápido en los préstamos bancarios. Préstamos no alimenticios por los Bancos Comerciales Regulares ampliaron en 2.21.802 Crores de Rupias en 2004-05 ante el incremento de 1.25.088 Crores en 2003-04. Durante el periodo finalizado el 20 de enero de 2006, los préstamos no alimenticios aumentaron aún más en 2.66.857 Crores, un aumento del 25,2 por ciento a 1.68.188 Crores de Rupias en el periodo correspondiente del año pasado. Durante el año 2004-05 fueron añadidos 5.39.365 nuevos Grupos Auto-Ayuda (GAA) a la cadena crediti- Parque Eólico Indio interna superior. La maquinaria no electrica, el equipo de transporte, la manufactura de metales y máquina herramienta fueron las principales fuentes del incremento de la importación de bienes capitales. La inflación en la mayor parte del mundo demostró una creciente tendencia a causa del aumento en los precios de la gasolina globalmente. Esta tendencia aún más complicada por la volatilidad que se experimentó casi semanalmente a partir de 2003 actuó como un gran desafío al mantener la estabilidad macroeconómica. Sin embargo, la India pudo seguir con la expansión económica sin una escala indebida en el índice de precios. De hecho, la inflación en la India, medida punto por punto en el Índice de Precios Al Por Mayor (WPI) disminuyó del 5,7% el 2 de abril de 2005 al 3,3% el 27 de agosto de 2005. Pese a la subida desde entonces, se mantuvo estable y el 4 de febrero la inflación era del 4,1%. Mantener la estabilidad en este sentido ha sido uno de los objetivos de la política monetaria. Para lograrlo, junto con otros objetivos de 24 facilitar un ambiente hábil para una mayor inversión y crecimiento, las variables de la política fueron recalibrados adecuadamente. Mientras la ratio de los tipos y las reservas (CRR) se mantuvó sin cambio durante el año 2005 en 6% y 5% respectivamente, la tasa repo inversa fija bajo la Facilidad de Ajuste de Liquidez (LAF) de la Banca de Reserva de la India (RBI) fue incrementada tres veces, con 25 puntos base cada vez, para alcanzar 5,50% el 24 de enero de 2006, cuando se fijo la tasa repo en el 6,50%. La respuesta de RBI siguió el alineamiento general de la política monetaria del Gobierno de la India. En resumidas cuentas, los siguientes son puntos sobresalientes del Informe presentado por el Ministro de Finanzas: El crecimiento proyectado será del 8,1% en 2006 La inflación modesta pese a los precios galopantes del crudo globalmente Desarrollo más rápido de la infraestructura física Progreso en la consolidación fiscal Industria y los servicios como motor del crecimiento de la economía Crecimiento del sector de servicios a sus anchas Aumento de granos alimenticios en un 2,3% del 204 TM a 210TM en 2006 Reducción continuada de la tasa de pobreza Aumento en las inversiones Ciclo favorecedor virtuoso de crecimiento y ahorro sostenible durante los años venideros Marco de política adecuado para aprovechar el talento latente de la fuerza de mano de obra y del empresariado a fin de conducir la economía en una trayectoria de alto crecimiento Provisión acelerada de infraestructura de calidad siguiendo una política adecuada Énfasis en revertir la ralentización en el sector minero, particularmente del carbón Reforma del sistema impositivo Lanzamiento del Programa de Garantía de Empleo Rural Nacional con fines de crecimiento inclusivo y seguridad social. LA MÚSICA DE LA INDIA: ORÍGENES, TRADICIÓN Y ENSEÑANZA Fernando Díez López L a música, en especial la vocal, es el arte sagrado de la India por excelencia. Su importancia ya en los rituales de la antigüedad fue decisiva, y en el transcurso de los siglos nunca ha perdido esta consideración. Aún en la actualidad, los conciertos de música clásica siempre van revestidos de un cierto tono religioso, devoto y sacramental, y los músicos, incluso los musulmanes, siempre hacen ofrenda de su arte a sus respectivas deidades o santos. La música india, hasta que se traslada en el siglo XX a los grandes escenarios públicos, siempre se interpretó en templos. Sin olvidar, como veremos, que a partir de la Edad Media también se escucha en las cortes de los reyes, tanto hindúes como musulmanes. Contemplada a la luz de la tradición, se puede decir que el acto musical es un acto sacramental. El altar es el instrumento, la ofrenda es la música, y el músico es el sacerdote que trata de establecer las conexiones entre los elementos o entidades cósmicas y los sentimientos humanos. Igual que el sacerdote no involucra nada personal en los rituales, ya que es un puro vehículo o medio, el músico hindú no entona sentimientos personales, sino que busca los universales escondidos en la esencia del sonido. Con la inspiración penetra en las profundidades del sonido a la búsqueda de los tonos más cercanos a los específicos sentimientos arquetípicos para sacarlos a la luz; no parte de una idea preconcebida, aunque cada sinfonía, siendo improvisada, tenga sus demarcaciones, como los mismos sentimientos o emociones humanas. Cada sinfonía corresponde a un sentimiento. dieron origen a la actual es una aventura bastante arriesgada, aunque el carácter hindú, conservador, tradicionalista y especialmente dotado para la transmisión oral fidedigna, permite inferir que tiene que haber mantenido, a lo largo del tiempo y en buena medida, su carácter, forma y esencia musical. Cada contenido de consciencia, cada emoción, está sustentada en un nivel de frecuencias cerebrales, como las músicas lo están en sus correspondiente ondas y frecuencias. Por lo tanto, hay una correlación entre contenidos de consciencia y sonido, o música; en esto se basa la musicoterapia. Por ejemplo, es muy probable que las frecuencias cerebrales que sustentan un sentimiento de tristeza sean semejantes o idénticas en lo esencial a las frecuencias que sustentan una música que despierte la melancolía. Por ello cada música despierta un tipo de emociones, unas apuntan hacia el sentimiento romántico, otras hacia la excitación, otras hacia la agresividad y otras hacia la serenidad o la devoción. Y es obvio que la trascendencia no alcanza a todas por igual. Desde la perspectiva legendaria, se cuenta que antes de que existiera el tiempo, cuando la eternidad no se había cristalizado todavía, Shiva y Shakti vivían en plena armonía en su morada del monte Kailâsa. En cierta ocasión, al contemplar Shiva el esplendoroso cuerpo La leyenda En la India no ha habido lenguaje musical escrito. Por tanto, intentar saber con certeza cómo eran las músicas que 25 dormido y desnudo de su amada, fue tal el sentimiento de amor que le invadió y sobrecogió que de esa emoción espontánea nacieron las primeras seis râgas. Para ser expresadas se necesitaba crear un instrumento, y para ello le sirvió el modelo que tenía delante: los grandes pechos de Pârvâti serían las cajas de resonancia, y el brazo con el que los cubría y los brazaletes que lo adornaban serían el cuello y los trastes del primer instrumento, la vina. Y de los sentimientos expresados en las râgas y del orden rítmico-matemático de su tambor damaru, nacía no sólo la música y la danza, sino el universo entero y sus categorías mediante la vibración. Las seis primeras râgas son correspondencias de las estaciones de la naturaleza, el ámbito del universo, el reino intermedio upanishádico de los antepasados entre los dioses arriba y los hombres abajo. En la antigua tradición védica, el cielo estrellado es una cúpula cerrada, el Sol es la única tapadera, y por él salen los seres puros en su camino hacia la eternidad después de morir. Los que todavía tienen deudas que pagar se quedan en el reino intermedio de los antepasados esperando la reencarnación. Estas almas pasan primero a la Luna en forma de vapor, de donde descienden en forma de lluvia, que absorbida por las plantas se transforma en semen, que al ser comido por los hombres y depositado en una matriz, se convierte en una nueva vida. sentimientos y estados de ánimo capaces de ser experimentados por un ser humano. En la práctica existen varios miles de râgas, con uniones y parentescos de todo tipo al gusto del artista de turno. Râga, el nombre que se da a las composiciones musicales indias, no tiene una traducción fácil. Más o menos significa emoción, o estado de ánimo específico, sentimiento que se erige en esencia de la composición, y que es lo que el artista quiere evocar, despertar y transmitir a su audiencia. Existe una tradición, que describe el carácter de cada una de las doce notas de la escala de una manera no sólo muy hermosa, sino muy acertada. Yo, como músico, puedo dar fe de ello. Las notas indias son las mismas doce notas que utilizamos en Occidente, es decir, siete tonos – sa, re, ga, ma, pa, dha, ni y cinco semitonos. La escala es la misma, aunque el Do lo fija cada músico de acuerdo a su tono natural; un hecho fundamental para los músicos indios, en particular para los vocalistas, que consideran que cada ser humano tiene su Do particular en el que debe cantar para estar realmente afinado y sentirse cómodo, pues de lo contrario sería como cantar en falsete. Las peculiaridades de cada nota son las siguientes: Sa (que corresponde a Do). Evoca la tranquilidad y un estado de beatitud eterna. Re (Re). Simboliza una doncella tímida que acaba de despertarse y no quiere ser importunada. Se aferra a Sa, que es su amado señor en un estado de semi-inconsciencia. Sus emociones son también simpatía y piedad. Medio Re. Perfectamente despierta y alerta, con una tendencia a la pregunta. El sentimiento es de heroísmo y admiración. Ga (Mi). Simboliza una pena y abandono inmitigables. Se trata de un carácter vacilante. Su emoción principal es el desencanto. Es hermosa, pero está frus- Shiva, al comprender que faltaba el elemento femenino para poblar la tierra, concede a cada râga seis esposas para que puedan perpetuar el linaje; seis râginîs plenas de sentimientos humanos. De las uniones descienden todas las râgas subsiguientes, los putras o hijos, y probable y correlativamente, todas las categorías de nuestra existencia, todas las emociones o estados de ánimo. El árbol genealógico de las râgas, en teoría, no va más allá de doscientos y pico elementos, que representarían todos los Saravasti: La Diosa del Conocimiento y Bellas Artes 26 trada por sus aspiraciones insatisfechas, también denota compasión. Medio Ga. Es como una doncella coqueta, ingeniosa y decidida de firmes intenciones, aunque esté siempre mirando hacia la siguiente nota, con sentimiento de amor y entrega esperando ser reclamada por ella. Ma (Fa). Digna e independiente, pero amable, noble y constante. Tiene fuerza para permanecer sola e impregnar la atmósfera. Sus valores son la serenidad, el amor puro y la devoción. Medio Ma. Tiene una naturaleza seductora, impetuosa y sensual. Provoca a las notas vecinas. Tiene lealtades variables y puede mezclarse con ambas. Su valor emotivo es el erotismo y la alegría. Pa (Sol). Es el aliado perfecto de Sa y siempre está en armonía con él. Es inalterable y, como Do, da asilo a cualquier nota débil. Es digna, amable e iluminadora. Tiene la fuerza y la virtud de Sa, y su contenido emotivo irradia dignidad y heroísmo. Dha (La). Es esencialmente contradictoria de su semitono, en carácter y composición. Es indefensa y triste. Manifesta un total desánimo. Medio Dha. Todo lo contrario de la anterior. Comunica valor y parece estar diciendo que no tiene miedo. Habla de furia y lujuria. Ni (Si). Muestra gran entereza incluso en la desgracia. Patética, sin abandonarse, gentil y afectuosa. Emana resignación y apatía. Medio Ni. Implora por sus aspiraciones frustradas. Le hace a uno sentirse incómodo por su anhelo de Sa. Emana dolor. Por otro lado, a cada nota de la escala musical le da origen algún elemento de la naturaleza. Sa - Pavo Real Re - Vaca llamando a su ternero Ga - El balido de la cabra Ma - Garza Real Pa - Ruiseñor Dha - Relincho del caballo Ni - Elefante Características La música india tiene una peculiaridad relacionada con sus orígenes cósmicos, con las entidades celestes y las estaciones del año, que consiste en que cada râga tiene una hora específica del día para ser ejecutada, y una estación, pues así se establece la correspondencia adecuada entre el elemento cósmico y el humano. Ciertas horas del día son más adecuadas a unos elementos que a otros, y lo mismo ocurre con los sentimientos. La astrología, como marco de referencia, es una ciencia auxiliar de la tradición védica, del vedânga, como lo son la gramática, la lingüística, la entonación de los himnos y la etimología de las palabras sánscritas. Sobre el tema de la hora existen numerosas leyendas y cuentos de cosas que ocurrieron en el pasado motivadas por una râga tocada a destiempo. Se cuenta que, una vez, el célebre músico Tansen, de la corte del emperador Akbar, fue requerido por éste para que cantara a mediodía una râga de noche; según cantaba la oscuridad se fue cerniendo sobre el entorno hasta el lugar donde la música dejaba de oírse. Mi maestro me contó que, en cierta ocasión, enseñando por la noche a un alumno la râga Bhairava, que es de mañana y dedicada al aspecto feroz de Shiva, la bombona de gas de la cocina explotó repentinamente. Una râga, además del sentimiento que se encuentra detrás y de una zona horaria del día específica, es una escala de notas elegida entre las doce posibles, el mínimo son cinco, con menos no hay música. Las râgas se ejecutan a lo largo de unos movimientos estrictamente fijados. Comienza con un solo vocal o instru- mental, que se llama alap y es la parte esencial de la râga, la más profunda, inspirada y abstracta. El artista no se ve sometido a ninguna presión, no hay ritmo ni medida ni letras previas, es una improvisación pura que permite al artista escaparse de todo proceso mental condicionante. Los siguientes movimientos van acompañados de percusión, hay ritmo, medida y composiciones fijas. Los movimientos se van haciendo cada vez más rápidos y complejos, la música más concreta, y aunque siempre pueda haber improvisación ésta se hace más escasa, la música cede su paso poco a poco al ritmo, que se acaba erigiendo en rey y señor hacia el final de la râga, cuando se hace vivísimo y casi, se puede decir, frenético. Cada râga tiene una infraestructura particular, es decir, una nota predominante, también algún grupo de notas, notas que conviene tocar después de otras, otras a las que no se puede llegar desde cualquiera, etc. Sobre esta infraestructura improvisa el músico indio. La música india no tiene armonía, sólo sinfonía, es una música plana, nota tras nota; por eso sus sonidos son muy puros y penetrantes. Los sentimientos adscritos a las râgas suelen ser sentimientos universales no contaminados por la experiencia individual del artista, siempre limitada por la cárcel espacio-temporal del ego. Por eso se supone que la música india clásica es una música sin ego, no hay nada personal ni conceptual en ella como ocurre con la música occidental, y por eso puede llegar a ser una especie de yoga. La categoría de un músico está determinada por el pedigrí de su línea 27 discipular, por su reputación de devoto de su arte, por su sabiduría personal y su maestría artística. Los sentimientos que soportan las râgas varían, desde los relacionados con los elementos cósmicos, como son las estaciones o los cuerpos celestes, que se corresponden con funciones vitales humanas, hasta los sentimientos más místicos, como la renuncia o la devoción, pasando por todo tipo de emociones y pasiones, como el coraje, el ímpetu amoroso, el espíritu heroico o la melancolía. En algunos estilos de música, como el thumri y el hori dhamar, los sentimientos giran entorno a los amores de Râdhâ y Krishna, y el estilo drupad tiene a Shiva como objeto de alabanza. El arte musical de la India se expresa de tres maneras: el canto, la música instrumental y la danza; sus correspondencias sagradas, según las Upanishad, son los gandharvas, apsarâs y kinnaras, músicos y ninfas del paraíso de Indra, el rey de los dioses, y sólo asequibles a ellos. El sabio Narada, sin embargo, se la transmite a los hombres según la tradición. Como es lógico, teniendo en cuenta que la música surge, o más bien se organiza y construye en torno a los himnos védicos y, sobre todo a los cantos del Sâmaveda, el arte vocal es el fundamental. Indudablemente la voz es el instrumento más cercano a nuestro ser interior, y por tanto el más directo e inmediato. Como dato curioso, puedo comentar que en la India los vocalistas suelen tener un brillo y un lustre singular. A continuación, jerárquicamente, vendría la música instrumental, la danza y por último el drama. Su historia Desde un punto de vista histórico, cabe afirmar con seguridad que el origen remoto de lo que conocemos hoy como música de la India es el Sâmaveda, el Veda que se encarga de los cantos, específicos y complejos, y sobre todo con un gran rigor tonal, ya que comienzan siendo palabras de poder que hay que transmitir oralmente con toda minuciosidad. Dice la Brihadâranyaka Upanishad, “La riqueza del saman, que canta los himnos, es su tono en sí mismo, cuando se dispone a realizar sus funciones sacerdotales alberga siempre la esperanza de entonar las notas más perfectas de manera que pueda realizar sus funciones sacerdotales con una voz rica en tono”. “Un sacerdote que tiene este conocimiento es capaz de procurar, mediante su canto, cualquier cosa que desee, para sí mismo o para el patrón del sacrificio”. La escala musical y las primeras teorías musicales van un poco a la zaga de los griegos, (aunque hay quien piensa lo contrario) e igual que éstos nunca utilizaron la armonía, la música es una sucesión lineal de notas. Nada se puede saber con certeza acerca de influencias o simultaneidades indo-griegas, no obstante, hay referencias de músicos griegos en la India, igual que de instrumentos, pues no se puede olvidar que los griegos estuvieron un par de siglos por el noroeste de la India a partir de la llegada de Alejandro. Todo esto se refiere solamente a partir del siglo IV a. c., pero antes ¿quién sabe? ¿No habrá ocurrido, como cuenta Voltaire en su Filosofía de la Historia, que ya antes de los presocráticos los griegos habrían viajado a la India en busca de instrucción? Abierto queda el debate. Las primeras referencias a la música se encuentran en la gramática de Pânini en la época en que Alejandro está en Taxila, capital de Gandhâra en el noroeste de la India, y la más temprana referencia a una teoría musical se encuentra en el Rikpratisakhya (400 a. c.), en donde ya se mencionan las siete notas, igual que en el Mahâbhârata. En los primeros siglos de nuestra era surgen varios textos musicales, siendo el más famoso con diferencia el adscrito al sabio Bharata en el siglo VI d. C., el Nat- Tyagaraja, Muthuswami Dikshitar y Shyama Shastri, tres maestros compositores del siglo XIX de la música Carnátic. yashâstra, donde se establecen las bases de la música india, las siete notas o suaras y, sobre todo, el arte de la danza y de la emoción estética. También menciona que en cada octeto hay 22 srutis o microtonos, que un músico debe percibir y distinguir, una tarea realmente difícil. También se transmite por su lado la música folclórica, diferente a la clásica. La diferencia estriba en si las composiciones musicales están o no incluidas en alguna râga canónica. La devoción ha sido siempre la fuente fundamental de la música india. En los siglos VII y VIII, con el nacimiento de los cultos devocionales a Shiva o Vishnu, o Devi, es decir, los âlvâr, nayanar y shâkta, la música se utiliza como medio de transmisión de ideas, más bien de sentimientos, en forma de canciones creadas por los líderes de las sectas, experimenta un gran desarrollo. También posteriormente, con otro resurgir del movimiento bhakti en el norte de la India y Bengala en tiempos de Chaytania, siglos XV y XVI, se produce una enorme actividad musical. La heroína Mirabhai, mujer de un príncipe del clan de Udaipur y devota de Krishna, es una figura musical de esta época; como Tulsi Das, que compone y canta en Benarés el Râmâyana en hindî; o Jayadeva, con su Gîtâgovinda, o el famoso Haridas Swami, maestro de Tansen. También los poemas del texto sikh, el Guru Granth Sahib, y las canciones de Kâbira. El texto Brihad-desi, de los siglos VIII o IX, se supone que escrito por un tal Matanga, menciona la palabra râga por primera vez, afirmando él mismo su novedad y recordando que no había sido estudiado el tema en el anterior Natyashâstra, en donde el término más cercano es jati, un término más amplio y general que el de râga. En este texto aparecen también por primera vez teorías del sonido basadas en los principios metafísicos y fisiológicos del tantra, así como de las entidades asignadas a las râgas. Muchos nombres actuales de râgas se originan aquí. En cuanto a instrumentos, en el índice védico se mencionan varios tipos de tambores y cimbales, varios tipos de laúd, de cuello corto primero y largo después, y de instrumentos de cuerda, algunos muy sofisticados como la vina de cien cuerdas, lo cual habla del necesario desarrollo en paralelo que la música tuvo que haber experimentado ya en aquellos tiempos. A partir del siglo II, la iconografía nos permite conocer los instrumentos en boga, aunque la vina fue siempre el instrumento de referencia. El primer músico a quien se puede localizar en tiempo y espacio es Jayadeva, siglo XII, que escribió y cantó el bello poema Gîtâ Govinda, la romántica historia de los amores de Râdha y Krishna que conmueven el corazón de los indios; y pertenece, por tanto, al culto bhakti. En el siglo XIII surge el músico más admirado y reverenciado en la India, Sarngadeva, que vivió en Devagiri, en la corte yadava, el clan de Krishna. Su obra es el Sangitaratnakara, donde trata de unificar las diversas escuelas ya existentes en la India de música clásica y organiza todo el material musicológico hasta entonces existente. El Sangitaratnakara determina a partir de ese momento las categorías de la música clásica de la India, y todos los posteriores textos sólo son comentarios sobre ella. Una música, para ser considerada clásica (shastriya-sangita, o râgadar), especialmente en el sur, tiene que reunir dos condiciones básicas. Primero, pertenecer a un shâstra y a una râga canónica, lo que quiere decir estar incluida en un grupo de textos reconocidos que conforman una teoría o doctrina autorizada, como el Natya-shâstra, que es la teoría de la dramaturgia, o el Sangita-shâstra, que gobierna la música vocal, la instrumental y la danza. La segunda condición es contar con una tradición, sampralaya, garana o familia, que es un extenso encadenamiento temporal maestro-alumno. Un artista no sólo necesita un buen maestro, sino que ese maestro pertenezca a una tradición de maestros reconocidos, a una garana. Entre los musulmanes, la música se solía transmitir de padre a hijo mayor como una propiedad hereditaria y casi secreta, mientras que entre hindúes el alumno no solía pertenecer a la familia, aunque se acabara por incorporar a ella. No obstante, ninguna tradición, o sampradaya, reclama la conexión directa con la época antigua, cuyas fuentes de información sólo son textos e iconografías. Desde el punto de vista histórico, se puede clasificar la música de la India en tres épocas. Primera, hasta la mitad del siglo XIII, la antigua, de origen nétamente hindú; segunda, de la mitad del siglo XIII a la mitad del XVI, que comienza con la llegada de turcos, persas y afganos; y tercera, de la mitad del siglo XVI en adelante, la moderna, que incluye la influencia persa-turca de los mongoles. El primer cambio importante en la música india se produce con la llegada de los musulmanes a partir del siglo XI. Ellos traen las músicas árabe, turca y, sobre todo, la persa, e inevitablemente la música india se ve influenciada por ella, aunque no de una manera dramática. Los sultanes afganos y turcos traen sus músicas e instrumentos, aunque acaban por incorporar la música india a sus cortes. El artífice más importante de la influencia musical musulmana es Amir Khusrau, de finales del siglo XIII, de origen persa aunque nacido en Delhi durante el reinado de sultán Alaudin Khan de los khilji, para quien trabaja. Amir Khusrau es hombre de armas, cortesano, lingüista, historiador, escritor tanto en persa como hindî y el más afamado músico de su época. Mantiene debates musicológicos con el músico hindú de la época, Naik-gopal de la corte hindú de Vijayanagar. Una historia de una contienda musical entre ambos genios cuenta que Amir Khusrau, escondido en algún sitio, fue capaz de repetir nota a nota la música que Gopal Naik 29 Maestro Bismillah Khan con Shehnaí había cantado. Amir introduce nuevas râgas, nuevos movimientos, técnicas e instrumentos que ponen la base a la música que ha llegado hasta nosotros. Crea el estilo de música vocal qawali, de tipo devocional y canta la poesía sufí en alabanza a Dios. Amir Khusrau es discípulo del famoso santo sufí Hazrat Nizamudin Aulia de Delhi. El estilo qawali, de razonable mezcla de persa e hindú, es el precursor del moderno gazal, de carácter tanto sensual como espiritual. El estilo más importante, probablemente, en la música del norte de la India es el khayal, heredero del drupad, que es más antiguo. A Khusrau también se le atribuye la creación de la sitar, que en persa significa treinta y tres cuerdas, y está basada probablemente en algún instrumento anterior hindú. En las cuevas de Ajanta y Ellora hay pinturas de Sarasvtî con un instrumento de cuerda y trastes en las manos. Otro instrumento que se le atribuye es la tabla, también de nombre persa, procedente de partir en dos el miridangan, o el pakavach, un gran tam- 30 bor con dos caras que todavía se utiliza, sobre todo en el estilo drupad. En el siglo XIV, época de la dominación musulmana, las escuelas se delimitan en dos estilos, en el sur la música karnatica, que se mantiene fiel a la tradición y textos musicales hindúes, se transmite por medio exclusivo de brahmanes de casta alta y en líneas o sampradayas de conocido y extenso linaje hindú, y su medio y entorno es principalmente el del templo, y su lengua el sánscrito o el telugu. La música karnática que se hace actualmente se remonta al siglo XVI, a la desarrollada en Tanjore (después Travancore y Trivandum); el violín se introduce a comienzos del siglo XIX, como el harmonium, un pequeño teclado de viento. El músico más importante es Tyagaraja (1767-1837), también un gran devoto, igual que sus alumnos. Los músicos del sur actuales afirman pertenecer a su sampradaya. En el norte se desarrolla la música hindostánica, influenciada por los turcos y afganos primero y mongoles después, y ejecutada mayoritariamente por ellos. La música hindostánica, entre los siglos XVII y XIX estuvo prácticamente en su totalidad en manos musulmanas y relacionada con las cortes, (Delhi, Gwalior, Jaipur, Agra, Lucknow, etc.) y los músicos solían pertenecer a castas bajas, más preocupados por la tradición oral que por la doctrina. Si en la tradición del Sur, la relación maestro alumno se corresponde con la de maestro espiritual-discípulo, en el norte, esa relación, llamada ustad-shagird, significa más bien maestro artesano-aprendiz. Lo que representa Tyagaraja para la música karnática lo es Tansen para la hindostánica, y sus raíces están en Gwalior. Para los hindúes, la música siempre fue una parte integral del culto, para los musulmanes incluso la música clásica era denostada por los ulemas como medio religioso. Las músicas del norte y del sur son muy similares, difieren en la interpretación de los mismos temas, o râgas, y en las medidas del ritmo. Genéticamente son idénticas, pero son mutuamente ininteligibles por una diferente interpretación de tiempo y tono. Ambas tienen los mismos textos aunque sean dos tradiciones diferentes. Todos los sultanes turcos y emperadores mongoles, excepto Aurangzeb, igual que los reyes hindúes en el Sur, patrocinaron las artes y sostuvieron materialmente a los artistas, que no tenían que preocuparse por la existencia física. El emperador Akbar era un ferviente amante de la música. En el sur de la India, el rey maratha de Tanjore, Tulajaji, al final del siglo XVIII, ofrecía a todos los músicos de la India regalos y tierra para que se asentaran en su corte, y el mismo creó un tratado de música, el Sangitamritan. El último rey maratha, Saraboji II, renuncia al poder frente a los ingleses a cambio de mantener su prestigio y corte, y se dedica a patronizar las artes hasta 1833. El músico Tyagaraja pertenece a su reino. Cuando los musulmanes completan la conquista del sur de la India se llevan con ellos al norte a los más importantes músicos de la época. De esta manera, la música alcanza un refinamiento y unos niveles de difícil aproximación hoy en día. Cuando se completa la colonización inglesa, los músicos pierden la mayoría de sus patrocinadores, excepto algunos maharajás, nawabs y ricos terratenientes. También se forman algunas sociedades musicales sustentadas por brahmanes, hombres de negocios y profesionales que apoyan a los músicos y la música, especialmente en Madrás y Calcuta, y a partir de la Independencia el apoyo viene de la mano de All India Radio, la emisora de radio nacional que organiza audiciones y sustenta a muchos músicos. de las cortes y castas bajas y devolverle su antiguo status y prestigio, y que también cambió el sentido erótico del estilo thumri -asociado con las muchachas cantoras y un tanto escandaloso para un brahmanpara convertirlo en canciones devocionales. Como dato curioso diremos que Vishnu Digambar ofreció el primer concierto de la historia en el que la entrada era por medio de pago y no de invitación. La enseñanza Aunque en el presente siglo hayan ido surgiendo escuelas de música por todas partes, la enseñanza musical de la India siempre se ha transmitido en el marco de la peculiar relación guru-chela o maestroalumno. El maestro no sólo enseña, sino que se convierte en modelo para su alumno, más que eso, es una encarnación del dios personal. La jerarquía y el respeto son totales, como la devoción y sumisión. El alumno vive con su maestro, a quien sirve en cualquier manera. Esta diferencia de potencial entre ambos es la esencia de la enseñanza en la India, y sin ella la transmisión se hace muy difícil. En esa actitud, el alumno absorbe sin barreras egóicas la enseñanza. Ese desequilibrio, como en física, es lo que genera las grandes corrientes y transferencias. En el lado del maestro, el vínculo se establece no sólo por la responsabilidad, por el dharma que tiene como gurú, sino porque la categoría de los alumnos construye de alguna manera la categoría del maestro. En la actualidad, la música india no es privilegio de nadie en particular, aunque en el norte abunden más los musulmanes, sobre todo instrumentalistas; al contrario que los vocalistas, donde abundan los brahmanes; y de la mayoría de ellos, como de los musulmanes, se puede trazar la línea discipular, su garana o sampradaya, hasta el comienza del siglo pasado. El ámbito de la enseñanza sigue estando dentro de la devoción al maestro, al instrumento y a la divinidad Sarasvtî, la diosa de la música y esposa de Brahma. Por otro lado, y esto es curioso e importante, la música ha sido el único campo en donde se han hermanado castas y religiones, ahí está el ejemplo de Ravi Sankar y Ali Akbar Khan, dos de los más grandes músicos del siglo XX, uno hindú y el otro musulmán, y ambos con un mismo maestro, el gran Baba, padre de Alí Akbar. Ravi Sankar se casó con su hija y, por tanto, se convirtió en cuñado de Alí. Los otros dos grandes instrumentalistas de la India del siglo XX fueron Nikhil Banerjee, hindú, y Vilayat Khan, musulmán, ambos sitaristas. Mi maestro de música fue Sree T.N. Nagar, de la Universidad de Benarés, discípulo de Vilayat Khan. En tiempos de la dominación inglesa la música se confina a las cortes de los príncipes hindúes, pues los ingleses la consideran primitiva e irracional. El músico de la era moderna que más hizo por la música de la India fue Vishnu Digambar (1872-1931), un nacionalista convencido que intentó sacar la música Músicos escultóricos 31 INDIA-OURENSE ALGO MÁS QUE UN INTERCAMBIO DE ESTUDIOS César Taboada L os programas europeos de estudio promovidos por la Dirección Xeral de Educación, dentro de las actividades de los centros escolares gallegos, buscan incentivar nuevos métodos de trabajo, nuevas fronteras en educación y sobre todo potenciar los valores no sólo académicos de los alumnos que hoy tutelamos. En este marco, la Escola de Artes “Antonio Failde” está desarrollando desde hace años varios proyectos de estancias en el extranjero, ya sea en prácticas de empresas o en centros de estudios, que ya ha llevado a algunos de nuestros alumnos a empresas de EE.UU., Italia, Francia, Portugal, Polonia etc., y también a centros de estudio de Dinamarca, Finlandia, Malta e Italia, así como a exposiciones internacionales en Paris, Nüremberg, Estambul…, y a participar en programas de desarrollo e investigación como el “Leonardo da Vinci”. El objetivo ahora es la India, donde los alumnos podrán aprender mucho más que disciplinas artísticas. Desde el centro hemos diseñado una estrategia para potenciar no sólo las actividades didácticas sino también ciertos valores, hoy, difuminados. Nos referimos a la comprensión de varias materias diferentes, al sentido del grupo, a la solidaridad , y al respeto de las opiniones y gustos de otros. 32 Pero hacer una visita preparatoria a universidades de India no es fácil. Supone un esfuerzo económico y físico, además de un ejercicio de adaptación y manejo de herramientas que no son sólo idiomáticas. Los viajes de trabajo, se diferencian, en este caso, un poco. VENTANA A EUROPA Sinceramente pienso que a nuestros alumnos lo exótico del destino les gustará, pero hay temas que no se les pueden escapar y quedarán atrapados, quizás transformados y verán bajo otro prisma lo más próximo. Me refiero a su entorno, la naturaleza, sus comodidades, su familia, amigos, estudios. Para los estudiantes de estos países, el intercambio en nuestro centro puede servir de ventana a Europa, utilización de recursos nuevos y acercamiento a nuestra cultura. Desde el punto de vista de un forastero crítico y observador, la India de hoy no está tan lejos como pensamos con respecto a la España de unos años atrás. Incluso no exageraría si dijera que nos llevan cierta ventaja. Sobre todo después de ver telefonía e Internet en los puntos más apartados. No hace falta que nos remontemos muchos años para recordar cómo los españoles de a pie mezclábamos el trabajo con el menú de mediodía, cómo el comerciante comía en la trastienda mientras el local permanecía abierto, cómo la seguridad en el trabajo era inexistente y los derechos del trabajador del campo acababan con un billete para Alemania. Tampoco hace mucho tiempo que las tiendas que vendían ropa, calzado y alimentación parecían mercadillos, con un montón de empleados, probablemente con un sueldo mísero. O que las peluquerías de caballeros eran el centro de reunión por excelencia. Y que los cigarrillos se repartían por unidades y las ferreterías vendían las puntas y tornillos al peso. O que se envolvían los productos con papel de periódico, un modo de reciclar, bastante sencillo. Desde el “Broadway Hotel” sencillo, céntrico, con un estilo propio, heredado de la época en que Calcuta, competía en modernidad con Nueva York, París o Shangay, tuve la sensación de estar entre amigos y desplazarme a los diferentes puntos sin perder el contacto con la calle y gente de todos los niveles. SERENIDAD Pues bien, en la India todo esto sigue siendo natural. Todo ello se hace y se soporta con la misma serenidad. El campo se acerca a la ciudad, El autor con su homólogo indio la vida diaria comulga con la fiesta, y al revés; el restaurante callejero con el templo, la vida con la enfermedad, la belleza con el horror, el cuervo con el perro callejero, el incienso con la basura y las flores en medio del suelo polvoriento. A esto se puede añadir una viva actividad comercial, social, colorista y amable -siempre al aire libre- rodeada de árboles que se encaraman a las casas en medio de “diafembaquias” que crecen en cualquier lugar. Gente que se baña en medio de un surtidor de agua. Orquídeas, rosas, nardos, crisantemos y los insectos más brillantes que las colonizan crecen en cualquier parte, aunque sea agua encharcada. Pero lo más importante es que es una población con hábitos culinarios vegetarianos, con pocas grasas y cuerpos atléticos, proporcionados y elásticos –hasta los de los más ancianos-, y todos ellos con un color bronceado permanente que constituyen la envidia de un occidental y supondrían la ruina de los balnearios dermo-estéticos. Esto es lo que hace a la India más moderna y envidiable. Apenas llego a Calcuta, me pongo a trabajar. Mi trabajo comienza con la UNIVERSIDAD DE JADAVPUR. La facultad de arquitectura de Jadavpur está en un campus magnífico, rodeado de jardines, con rododendros, magnolios y árboles centenarios. El rectorado esta situado en el centro en un edificio de estilo hindú como un palacete colonial en color arena y naranja. Me recibe el Decano Somen Chacraborty en un sobrio despacho. Con su ayudante y sus secretarias nos llevan en medio de oficinas llenas de documentos. La entrevista es larga y pasa por un montón de pasos e intercambios de documentación. El paseo por las aulas y la presentación de profesores se hace de una manera bastante protocolaria. Sin embargo los estudiantes están deseando conocer los centros españoles y todos se esfuerzan en presentar de la mejor manera todo lo que hacen. ACCADEMY OF ARTS & KRAFTS Situada al lado del Museo de Bellas Artes de Calcuta, es un edificio de finales del XIX, mezcla de ornamentación india y victoriana. El gran portalón tiene un pavimento de baldosas decoradas en forma geométrica con una amplia escalera llena de cuadros de pintura renacentista italiana y alemana. Podría ser una escuela sueca de diseño de la misma época. Con el Principal Manoj Sarkar, que se formó en Roma, es muy fácil trabajar y nuestro encuentro es muy cordial. Podría ser un compañero de estudios. Su despacho recuerda los severos espacios de las antiguas aulas de Harry Potter, sin embargo a los modelos que usan y a la escenografía sí estamos acostumbrados. Pues si bien, nuestros centros tienen un lenguaje visual muy común, que pueden parecer más atractivos o más modernos, la trayectoria de unas aulas que desde la época de la reina Victoria estaban en funcionamiento, con sus modelos, que hoy no existen, con sus tórculos de fundición, sus caballetes de roble, poco tienen que envidiar a una facultad creada en los últimos años del siglo XX, como suelen ser la mayoría de las que tenemos en nuestro país. TALLERES DE KALI Coincidiendo con la estancia las celebraciones de “Ramadán”y “Diwali” me acercan a los entramados de culturas diferentes relacionadas entre sí con sus peculiaridades. La más impresionante colección de figuras de arte sacro recién hechas, creo, las he visto en los talleres de artesanos que preparan las imágenes de Kali y Shiva para adornar las Pandalas en las fiestas. Nunca hubiese imaginado tal cantidad de operarios trabajando hasta altas horas de la noche en una frenética actividad, acelerando los procesos de secado del barro, cubriendo el armazón de bambú con paja trenzada y los colores hechos con pigmentos naturales que rematan al final con coronas y atrezzo dorado sobre capas de papel parafinado. No es posible que este inmenso trabajo sea llevado al Ganges en procesión festiva y se lo trague el agua. Seguro que los dioses lo transforman en otro tipo de bienes a sus creyentes, a sus hacedores y a su entorno. 33 FACULTAD DE BELLAS ARTES DE SANTINIKETAN No hay mejor experiencia para un extranjero que estudie en India que pasar por esta Universidad diseñada y fundada por Tagore con la idea de aglutinar sinergias de todas partes, del mundo universitario a las tradiciones milenarias del país. El parque central de los estudiantes es un jardín botánico singular. Santiniketán es apenas una gran aldea. La única tienda dentro del recinto universitario es una librería, que lleva Bemol, gran amigo de nuestro paisano José Paz, gran admirador de Tagore. En la zona colindante a la estación hay multitud de puestos y comercios de todo tipo, a parte de numerosas residencias para estudiantes residentes. Los edificios de la Universidad son pequeñas construcciones para aulas, algunas de las cuales están decoradas con extraordinarios mosaicos o pinturas murales como las aulas de la Facultad de Bellas Artes. Y mucho espacio para pasear y trabajar debajo de camelios llenos de flores en medio de un campo en el que tanto puede aparecer un jabalí domesticado como un grupo de monos de gran tamaño, o una gallina suelta de un corral vecino. Las bicicletas, como en toda la India, son el medio de transporte de todos y su uso no está limitado a los estudiantes y profesores. Es frecuente ver a un padre con su niño en el brazo y su hermosa mujer con un “sari” de seda sentada delicadamente en la parte de atrás. Todo un ejercicio de equilibrio y armonía. Sil, sólo que con monjes y aprendices de monje de siete años en adelante en plenas actividades religiosas y con un fervor que supera fríos y heladas, a pesar de vestirse sólo con túnicas de algodón y llevar un hombro al aire. Despertarse a las tres de la mañana para ver cómo ilumina el sol el Monte sagrado es algo que no le extraña a nadie. Hay más tráfico a esa hora que un fin de semana en el aparcamiento de mi calle. COROLARIO DARJEELING El punto más alto que se puede alcanzar por el Este de la India está en High Hill. El viaje en autobús de más de ocho horas merece la pena, puesto que el mejor té del mundo se cosecha en estas latitudes, bosques de teca y maderas aromáticas por todas partes, a mi se me antoja como la Ribeira Sacra, pero a lo bestia. El color y el paisaje son paralelos, la proporción es la diferencia. El monasterio budista en las laderas del Himalaya podría ser un San Esteban de Ribas de Después de participar en una extraordinaria cena con platos típicos de cocina tradicional en el club de golf “Toolly Gunge Club”, uno de los clubs más selectos y antiguos de Asia, la oportunidad de convivir con diferentes sectores me ha servido para hacer un chequeo a los distintos modos de vida, valorar a todos con cierta distancia y compararlos con la vida de nuestras ciudades y nuestras aldeas de Galicia. No todo ha sido por el efecto fascinante que puede causar a un despistado paisano un continente extraño, extasiado por costumbres nuevas o paisajes y entornos singulares. No estaría nada mal recordar que somos restos culturales de una herencia que proviene de allí, de unos dioses, de una ética, de un idioma, de muchas costumbres, hoy en desuso. A algunos convendría advertirles que no solo el té y la tónica, que experimentaron los británicos, son los productos que hemos adoptado. Tal vez sería un ejercicio saludable que muchas de sus actuales costumbres las recobrásemos en nuestra vida cotidiana. El uso equilibrado del tiempo, el trabajo bien hecho, la generosidad, la honradez, el respeto a los demás, la fuerza de los sentimientos, lo efímero de la belleza, el aprecio sincero a la naturaleza..., y muchas cosas más. Antigua Casa de Gurudev Rabindranath Tagore en Shantiniketan 34 CINCO ARTISTAS INSPIRADOS POR LA INDIA Redacción L a Galería Alexandra Irigoyen, en colaboración con la Embajada de la India, inauguró el pasado día 7 de marzo la exposición colectiva “PASAJE A LA INDIA” que permaneció hasta el 12 de abril. La exposición ofrecía una visión, a través de los ojos de los artistas españoles, del interés que suscita la cultura de la India. La muestra dio a conocer la pintura de cinco artistas inspirados tanto en las costumbres como en las tierras y las gentes de la India. Se trata de las obras de María José Aoiz, Celeste Maia, José Luis Fuentetaja, Carlota Ríos y José Luis Muñoz. Mª José Aoiz (Madrid, 1963) presentó su obra pictórica como un recuerdo de sus estancias por la India. Nos abre una ventana, a modo de cuaderno de viaje en grandes dimensiones, a los colores y aromas del Rajastán. Podría decirse que sus cuadros se respiran, dejándonos la sensación de haber viajado a través de su mirada ingenua y familiar. Las calles con vendedores en los puestos de frutas, los niños saliendo de la escuela, las casas pintadas de bellos colores y, por supuesto, el transporte de los típicos rickshaws. Toda esta temática se entrelaza coexistiendo en un mismo espacio pictórico y con diversas técnicas de representación: pintura, foto y transfer se funden con armonía. También muestra pequeñas cajitas listas para convertirse en cuadro en las que la impresión digital, el collage y pequeños objetos nos atraen hacia su interior. Un pequeño y apetecible viaje a la India. Licenciada en Bellas Artes por la Universidad Complutense de Madrid, Mª José Aoiz ejerce como profesora de Arte en Madrid. Es seleccionada durante tres años en el certamen de Pintura Rápida del Parque del Retiro (Madrid, 19971999). En 1997 recibe el premio Punto de la Artes (Madrid, 1997). De sus exposiciones realizadas destacan: Estampa (Madrid, 2001), Feria De Arte (Madrid, 2001), Galería La Nave del Arte (Madrid, 2001), Galería Can Haifa (Ibiza, 2002), Galería Balboa 13 (Madrid, 2003 y 2004), Centro Cultural de Ucle (Bruselas, 2004), Galería Alexandra Irigoyen (Madrid, 2005) y Estampa (Madrid, 2005). La puerta de la escuela, M.ª José Aoiz Celeste Maia (Mozambique, 1941) El embrujo y la magia de sus cuadros ha viajado por todo el planeta dejando una huella de sabiduría y a la vez de sorpresa. Sus vigorosas composiciones contrastan con la serenidad de los colores que emplea con sobriedad y elegancia. El dominio entre la luz y las sombras transforman su universo imaginario en real y viceversa, explorando con avidez el mundo exterior y el mundo interior, lo público y lo privado, la realidad y los 35 sueños. Su pintura trasciende como un misterioso enigma a nuestros sentidos. El espectador permanece seducido y atrapado en múltiples sensaciones. Comienza Historia del Arte en la Sorbonne de París en 1962 para trasladarse en 1972 a Estados Unidos donde asiste a la Universidad de Maryland y consigue en 1974 el Master of Art con la calificación de”Summa Cum Laude”. Su primera exposición colectiva la realiza en1974 en Martin Luther King Library - Smithsonian Institution, Washington DC (USA). En 1976 participa en la Bienal Latino-Americana de Saõ Paulo( Brasil) y tiene su primera exposición individual en el Museo de Arte Assis Chateaubriand (Saõ Paulo, Brasil 1978). De sus incontables exposiciones a lo largo de treinta años, cabe destacar las más actuales: Individual - Forum Arte de Macao ( China 1994), Entre 1996-97 Individual - Itinerante por ocho ciudades de distintos países: Academia de Bellas Artes de Nueva Delhi (India), Galería de Arte (Goa, India), Antigua Feitoria Portuguesa (Bangkok, Tailandia), Galería Wang Fung (Pekín, China), Galería Dong-A IL BO (Seul, Corea), Galería Sumida Riverside (Tokio, Japón), Centro Cultural Akarenga (Fukuoka, Japón), Galería Municipal de Arte (Tokushima, Japón), Galería Saõ Mamede (Lisboa, Portugal, 1998), KarshMasson Gallery (Ottawa, Canadá1999) e Individual Retrospectiva - Cordoaria Nacional (Lisboa, Portugal 2000). José Luis Fuentetaja (Madrid, 1951) Este prolífico artista ha viajado por todo el mundo. Ha recorrido la India en veinte ocasiones en los últimos veinticinco años. Sus ciudades y sus gentes han sido motivo de inspiración para sus cuadros. Artista completo que domina todas las técnicas, José Luis Fuentetaja retrata el mundo maravilloso de la India con sus variados ambientes en un estallido de colores tanto cuando retrata fantásticos monumentos como cuando retrata su pobreza. Un vibrante realismo aparece en su universo pictórico: hombres y mujeres, ancianos y niños, casas y mercados, sorprendentes paisajes, rituales y liturgias. Su visión de la vida en Oriente consigue adentrarse en la conciencia de Occidente. A los 13 años Fuentetaja asiste a la Escuela de Artes y Oficios de Vallecas. Tras un viaje a Suiza donde decide dedicarse definitivamente a la pintura, ingresa en Bellas Artes donde recibe clases de Pedro Mozas. En Madrid comienza a vender sus cuadros en el Rastro. En 1966 toma contacto con Sitges y empieza a realizar retratos callejeros. Viaja por Europa y con 18 años expone por primera vez en Toronto (Canadá, 1969) y en el Ateneo (Barcelona, 1970). A lo largo de su dilatada carrera artística ha realizado más de 100 exposiciones individuales y Ferias Internacionales, de las que destacan las más recientes: Torreón Lozoya (Segovia, 2000), Galería Xifell (Manresa, 2000), Galería Amat (Lleida, 2000), Sala Articolor (Vic, 2000, 2001 y 2003), Artexpo Barcelona (Barcelona, 2000-2003), Interart (Valencia, 2000 y 2001), Feria De Arte (Madrid, 2001), Artexpo California (EEUU, 2001), Art Chicago (EEUU, 2001), Artexpo Internacional Nueva York (EEUU, 2001), Galería Margarita Summers (Madrid, 2001), Arte Sevilla (Sevilla, 2001), El Quatre Sala d’Art (Granollers, 2001 y 2004), Galería Gonzalo Olivan (Sitges, 2002), Sala Gabernia (Valencia, 2002 Cochin, Celeste Maia 36 Transparencias en Jodhpur, José Luis Fuentetaja y 2004), Galería Mellado (Madrid, 2003), Galería Van Gogh (Barcelona, 2004), Galería San Antón (Pamplona, 2004). En las escenas cotidianas de la India de Carlota Ríos (Madrid, 1964) se simplifican las formas geométricas. La gracia con la que reduce las figuras y distorsiona la perspectiva, unida a su paleta de vivos colores, con claras influencias fauvistas, nos traslada a la India más fantástica y mágica, impregnada de vida y rebosante de fuerza. Utiliza verdes azulados que contrastan con colores más intensos como magentas, amarillos y rojos que combina con soltura y espontaneidad. Carlota Ríos es Licenciada en la especialidad de Pintura por la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid. Ha recibido numerosos premios en concursos como: Parque del Buen Retiro (Madrid, 1990 y 2002), Premio Diario de León (1997), Mención Especial Ayuntamiento de Riaza (1998), 1º Premio Ayuntamiento de León (2000), 1º Premio Ciudad de Tres Cantos (2000), 1º Premio Boadilla dibujo y pintura en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando en 1979, obteniendo Matrícula de Honor en Dibujo. Ha sido seleccionado dos veces en el Premio de Pintura L’Oreal (Madrid, 19851987) y una en la 4ª Bienal del Deporte en Bellas Artes de Madrid (1973). Expuso de forma individual en la Galería Arte-Novo (Madrid, 1990), Galería Elvira Carreras (Madrid, 1999 y 2001) y Corrala de Santiago (Universidad de Granada, 2000). Cruce en Udaipur, Carlota Ríos del Monte (2001), 1º Premio Ayuntamiento de Fuenlabrada (2003) y Mención de Honor Ciudad de Salamanca (2003). Es seleccionada, entre otros Certámenes en: la VI Exposición de Artes Plásticas de Castilla-La Mancha, (Museo de Santa Cruz, 1991), Premio Francisco de Goya (1991, 1996), Premio Blanco y Negro (1992) y el Certamen de Arte Gráfico para Jóvenes Creadores, Calcografía Nacional (2004). Su primera exposición individual llega de la mano de la Galería Milán (Madrid, 1995) seguida de la Galería Victoria Hidalgo (Madrid, 2002) y de Galería Balboa 13 (Madrid, 2002). Ha participado en numerosas exposiciones colectivas, destacando la Galería Zenhid (Madrid, 1991), Galería Duayer (Madrid, 1992, 1993,1994, 1995 y 1996), Galería Recoletos (Madrid, 1993, 1994, 1995 y 1996), Galería Milán (Madrid, 1994 y 1996), Galería Balboa 13 (Madrid, 1997, 2002), Galería Alexandra Irigoyen (Madrid, 2005) y Feria de Grabado Estampa (2005). Hace cuatro años empezó a asistir al taller de Grabado Brita Prinz, dirigido por José Rincón, de quien actualmente recibe clases en su nuevo taller. La pintura del artista José Luis Muñoz (Granada, 1953) evoca los colores y el sabor de la India. Sus gentes son plasma- das con frescura y sinceridad. Retrata el ambiente de la calle, mostrándonos su lado más humano. El artista explora tanto la pureza e inocencia de los niños como la sabiduría de los mayores. Presenta una selección de obras figurativas al óleo, en el que el dibujo es algo más que un mero soporte, preciso e impecable, frente a la original textura de los fondos de sus lienzos. Sus obras tienen el aspecto de pinturas al fresco donde sus figuras aparecen precisas y recortadas. Sus fondos coloridos son trabajados con múltiples capas superpuestas, dejando espacios vacíos y huellas matéricas creando un ambiente invisible. Se trata de un universo fragmentado donde sus personajes son los protagonistas absolutos. De sus exposiciones colectivas destacan: Feria Internacional de Arte Contemporáneo Marbella con la Galería Elvira Carreras (Marbella, 1998), Galería Elvira Carreras (Madrid, 1998 y 2000), Galería Ton Warndorff (Haarlem, Holanda, 2000), Galería Éboli (Madrid, 2005) y la Feria Internacional de Arte, LINEART con la Galería Sardón (Gante, Bélgica, 2005). Natural de Granada, afincado en Madrid, realiza estudios de Ganges, José Luis Muñoz 37 DÀDIMÁ KI RASOI SAMOSA: LA EMPANADA INDIA Para 20 samosas Ingredientes: ☞ 3 patatas grandes ☞ 100 grs. de guisantes ☞ 1 kg. de pasta de hojaldre ☞ 2 cucharadas de zumo de limón ☞ 1 cucharada de comino molido ☞ 2 guindilla frescas ☞ 2 cucharadas de hojas de cilantro fresco ☞ 1/4 cucharadita de canela molida ☞ aceite para freír ☞ sal Elaboración: Trocear las patatas y picar la guindilla y las hojas de cilantro. Cocer las patatas y dejar enfriar. Picarlas fino y mezclar con los guisantes, el zumo de limón, el comino, el cilantro, la guindilla fresca y la canela. Cortar la pasta de hojaldre en redondeles de unos 10 cms. Rellenarla con la mezcla y cerrar en semicírculo, apretando bien. Vierta el aceite en una sartén y fría las samosas durante 2 minutos por cada lado. Escurrir sobre papel de cocina. Servir con salsa de yogur y hierbabuena u otra salsa picante o ketchup. SAAG PANIR (Queso con Espinacas) Para 4 personas Ingredientes: ☞ 500 grs. de espinacas ☞ 2 litros de leche ☞ 1 cebolla mediana ☞ 125 ml. de nata ☞ 5 cucharadas de yogur natural ☞ 2 dientes de ajo ☞ 4 cucharadas de zumo de limón ☞ 1 trozo jengibre fresco ☞ 2 guindillas frescas ☞ 1 cucharada de comino molido ☞ 1/4 cucharada de nuez moscada ☞ 2 cucharadas de aceite ☞ sal ☞ 250 ml. de agua Elaboración: Calentar la leche en un recipiente. Cuando hierva, reducir el fuego, añadir el limón y dos cucharadas de yogur y hacer cuajar la mezcla. Retirar del fuego y dejar reposar hasta que empiece a formarse el requesón. Colar la mezcla en un escurridor y dejarlo en un lugar fresco durante 3 horas hasta que solidifique. Cortar el queso en dados grandes. Reservar. Cocer las espinacas, colar y picarlas fino. Picar el ajo, el jengibre, la guindilla y la cebolla y freír a fuego lento en mantequilla clarificada durante 5 minutos. Añadir la sal, el comino, la nuez moscada, el resto del yogur y el agua. Cocer a fuego lento durante 5 minutos. Triturar en un robot de cocina e incorporar las espinacas. Poner en la sartén y añadir el queso. Cocer durante 10 minutos. Servir con arroz. 38 VISITANDO NUESTRO PRADESH: MADHYA PRADESH CON HOLA NAMASTE M adhya Pradesh, en su forma actual cobró cuerpo el 1 de noviembre de 2000 tras su partición con la que surgió un nuevo estado en el mapa de la India- Chhattisgarh. El antiguo Madhya Pradesh se había fundado como estado de la Unión justamente el 1 de noviembre de 1956, diez años después de la independencia de la India. Gracias a su ubicación en el centro de la India, Madhya Pradesh ha seguido como el crisol de todos los eventos históricos en los cuatro puntos cardinales de la latitud de todo el país. remontan a 300 años antes de Cristo. La pur ya tenemos muestras en esta estupa de mayor envergadura fue cons- misma revista. Estos templos construi- truida por el emperador Ashoka. Bhoj- dos por los Reyes Chandela entre 950- pur, en el mismo distrito tiene fama por 1050 d.C., constituyen un estallido de su templo de Shiva construido por el creatividad lo que les hace un regalo legendario Rey Parmar King de Dhar único para el mundo. Orchha en el dis- mejor conocido como Raja Bhoj (1010- trito Tikamgarh es el legado medieval en 53). De Khajuraho en el distrito Chhatar- piedra construido por los Reyes Bundela En Madhya Pradesh han prosperado las culturas paleoliticas, mesoliticas, neoliticas, chalcoliticas y de la edad de hierro a lo largo del Valle de Narmada y los tributarios de este río. Por ende no es nada extraño que esté lleno de una asombrosa riqueza arqueológica. Se han descubierto 600 asentamientos humanos en roca en Bhimbethika. Casi 500 cuevas cuentan con pinturas y dibujos que tratan de los habitantes de cuevas prehistóricos. Quién no ha oído hablar del internacionalmente conocido Sanchi en el distrito Raisen como el centro Budista de estupas, templos, monasterios y pilares que se 39 Capital Población Varones Mujeres Tribales Castas protegidas Area (kms2) Distritos de ingreso Districts administrativos Comarcas por desarrollo Pueblos Gram Panchayats (Consejos de pueblos) Alfabetismo Varones Mujeres Densidad de población Ratio Varón: Mujer Carreteras Idioma principal Aeropuertos en los siglos XVI y XVII. Plagado de un gran número de sitios sagrados, Ujjain y Omkareshwar gozan de una importancia especial en Madhya Pradesh gracias a dos de los doce templos con jyotirlingas Chanderi Sari 40 Bhopal 60.385.118 (Census 2001) 31.456.873 (52,09 %) 28.928.245 (47,91 %) 9.682.000 (19,94 %) 7.478.000 (15,40 %) 308.000 9 45 313 51.806 21.999 64,11 % 76,80 % 50,28 % 196 por km2 1000 : 933 67.600 kms Hindi Bhopal, Gwalior, Indore & Khajuraho que son Mahakalam en Ujjain y Omkaram en Omkareshwar. Madhya Pradesh es tierra de literatura y música. Kalidasa, el inmortal poeta y dramaturgo nació en Ujjain y Tansen, el gran músico de todos los tiempos de la India nació en Gwalior. Con una extension de 308.000 kms cuadrados, Madhya Pradesh es el Segundo más grande estado de la India. Está vigente Gram Swaraj, el sistema de gobierno a nivel de pueblo/aldea a partir del 26 de enero de 2001. Agricultura La agricultura constituye la principal fuente de economía del estado. Casi el 74.73 por ciento de la población del estado vive en zonas rurales. Aproximadamente el 49 por ciento de la tierra de Madhya Pradesh es cultivable. Industria y Minerales Madhya Pradesh se ha incorporado plenamente a la era de industrias de alta tecnología como la electrónica, telecomunicaciones, automóvil, etc. Madhya Pradesh cuenta con yacimientos de 21 clases de minerales distintos. Madhya Pradesh cuenta con importantes depositos de carbon para la producción de electricidad además de tener gran potencial de hydro-electricidad. Más de 50,000 de sus 51,806 pueblos están electrificados. timenta. Los saris Chanderi se destacan por sus complejos bordado en oro hechos a mano y con tonos fuertes.. Artesanías Tourismo Madhya Pradesh tiene fama por sus artesanías y arte tribal. Pero el sari Chanderi ocupa un lugar especial en el mundo textil que se dedica a la ves- Madhya Pradesh tiene la distinción de haber preservado sus ciudades medievales, además está dotado de parques naturales, vida silvestres y algunos de los templos y centros de peregrinaje más sagrados para lograr las experiencias que llenan de satisfacción. Entre sus numerosas atracciones destacan la belleza tranquilizante de Pachmarhi, el esplendor reluciente de las rocas de mármol, el rugiente sonido de las Cataratas de Dhuandhar Fall en Bhedaghat, el parque nacional de Kanha, con sus únicas especies de LOS SITIOS/CIRCUITOS PREFERIBLES PARA TURISMO DE MADHYA PRADESH Bandhavgarh Gwalior Orchha Kanha Khajuraho Bhopal Pachmarhi Indore Ujjain Sanchi Shivpuri Mandu Jabalpur Palacio de Panna Barasingha y el Parque Nacional de Bandhavgarh con sus cuevas prehistóricas y vida silvestre. Entre sus ciuades más famosas por sus monumentos se encuentran Gwalior, Mandu, Datia, Chanderi, Jabalpur, Orchha, Raisen, Sanchi, Vidisha, Udaygiri, Bhimbetka, Indore y Bhopal. Maheshwar, Omkareshwar, Ujjain, Chitrakoot y Amarkantak son los lugares eternos de peregrinaje. Sus tesoros arqueológicos brindan prestigio a los museos de Satna, Sanchi, Vidisha, Gwalior, Indore, Mandsaur, Ujjain, Rajgarh, Bhopal, Jabalpur y Rewa. Festival de Danzas de Khajuraho Khajuraho, la antigua capital de los Reyes Chandela, es hoy en día un pueblo de unos cuantos miles de habitantes. Por sus renombrados templos este pueblo es el sitio de Festival de Danzas que atrae a los mejores bailarines de danza clásica de toda la India cada año para hacer sus mejores presentaciones en el trasfondo de los majestuosos templos. Este espectáculo de siete días ha sido reconocido por el Gobierno de la India con rango internacional. Festival de Música Tansen Festivales de Madhya Pradesh Ademas de los festivales tradicionales como Bhagoriya, Shivratri, Ramnavami en Khajuraho, Bhojpur, Pachmarhi, Ujjain, Chitrakoot, Orchha, Malwa y Pachmarhi y Festival de Música Tansen en Gwalior; Festival de Música Ustad Allauddin Khan en Maihar; el Samaroh Kalidas de Ujjain, y el Festival de Danzas de Khajuraho están entre los más famosos de Madhya Pradesh. Madhya Pradesh ocupa un lugar especial en la historia de la música de la India. El gharana (escuela) Gwalior se cuenta entre los más prominentes en la tradición clásica de música. El grande de todos los tiempos en la música de la India, Tansen, también conocido como una de las “nueve joyas” en la Corte del Gran Mogol Akbar yace en Gwalior. La Tumba de Tansen forma parte del patrimonio de la herencia viva de Gwalior. Es el lugar del festival anual de música celebrado en noviembre-diciembre. Los artistas más famosos de la música de la India entretienen a los asistentes durante cinco noches con las ragas clásicas. Bhagoria Haat, Jhabua Este colorido festival de los Bhils y Bhilalas, en el distrito de Nimar Oeste y Jhabua, tiene el efecto de un svayamvara masivo, o un Mercado de matrimonio, habitualmente celebrado durante varios días antes de la fiesta de Holi en marzo. Como señala el nombre del festival, Bhag o corre, los jóvenes después de elegir su pareja, se fugan y subsiguientemente son aceptados como marido y mujer tras cumplir con una serie de ritos. Es un testimonio público de contraer matrimonio cuando el hombre interesado pinta a la chica que le gusta de gulal y si la chica responde pintando al chico se confirma el matrimonio. Anteriormente, se celebraba este mercado para resolver las disputas entre contrincantes FRASES ÚTILES EN ESPAÑOL E HINDI 42 Español Hindi Yo Meen Nosotros Ham Tú Tum Vosotros Tum Sab Vd. Aap Ustedes Aap sab Él/ella Voh Ellos/ellas Voh sab Dígame por dónde llego a Taj Mahal? Taj Mahal yaneka rásta (la ´y´ como j en Jon) bataiye Tengo hambre. Muyhe bhuk lagui hee. Tengo sed Muyhe pyas lagui hee. Quiero dormir. Mee sona chahta hún. Va a llover. Baarish hone valí hee. Cállate Chup rahiye Tenga cuidado! Sanbhal ke! Preste atención Dhyan dhiyiye (primera `y` como J en Jon) Te echaré de menos Meen tumhen yaad karónga/karóngui. Vuestra ciudad es muy bonita Aapka nagar bahut sundar he. Ustedes son muy hospitalarios Aap bahut meman nawaz hen Eres muy simpático/a Aap bahut achche hen/achchi hen. Tu sari es muy bonito Aapki sari bahut sundar he. CARTA DESDE “EL PROPÓSITO DE LA VIDA” N AMASTE desde Chhattisgarh, el corazón de la India ! Siento no tener más tiempo para escribir, pero ser esposa, viajar de un lado al otro, montar campamento para 10 personas y una elefanta, llevar la producción del documental, ser cámara profesional y ser la protagonista de uno de los capítulos de esta serie. Pues, como comprenderás se me acumula mucho trabajo. Después de un año en la India, por fin hemos conseguido una elefanta! Se llama Champa, aunque la llamamos cariñosamente Champita. Su mahout se llama Yunus. Le llamamos Yunus Mahout. Siempre que nos oye llamarle, sea la hora que sea, él contesta rápidamente: “Yi Madam. Good morning, Madam”. No habla inglés pero siempre tiene una gran sonrisa y ganas de agradar. Mi hindi es muy escaso “thora thora”. Así que precisamos de traductor. A veces me resulta muy cómico hablar como Tarzan y parece como si estuviera jugando a las adivinanzas de películas sin palabras, solo con mímica. “El Quijote de Chhattisgarh”. Alguna vez podríais imaginaros un hombre físicamente parecido al Quijote de la Mancha pero en Indio y que, en vez de ir montado en Rocinante, vaya montado en una elefanta? Su montura, aunque vieja y letárgica, es físicamente la antitesis de Rocinante. Pero, cuidado! No os acerquéis a Yunus Mahout delante de ella y le deis un abrazo, lo más probable es que os envista! Juancho ya ha probado un par de buenos empujones y yo una patada trasera. Le protege celosamente, más que Rocinante al Caballero de la Mancha. Este hidalgo vestido con kurta y pijama, en una mano lleva una lanza y en la otra una vara de caña de azúcar; una para castigar y la otra para premiar. Al fin Yunus, el mahout. y al cabo si se enfada, un pequeño empujoncito de su trompa puede ser causa de algún disgusto. Yunus Mahout, en vez de casco de caballero, lleva bandana de Bengala; erguido y orgulloso de su antigua y heredada casta de mahouts, parece “crecer” encima de su compañera de aventuras! “La niña de sus ojos, su inseparable Champa (Flor de Jazmín), es una Diosa viviente, el mismísimo Ganesha. Cuando vamos de una aldea a la siguiente, decenas de personas se postran ante ella y le entregan dinero que ella recoge con su trompa y delicadamente se lo deposita a Yunus Mahout en su mano. Este dinero se junta para mantener el volumen de lo que una elefanta hambrienta ingiere cada día! Por poner algunos ejemplos: 20 kg de plátanos (sin pelar), 100 kg de caña de azúcar y 20 kg de hojas de algún árbol sabroso que encuentre por el camino. Si se queda insatisfecha, también tiene otros menús apetecibles como pueden ser: Repollo estallado. Esta redonda verdura la estalla con un poquito de presión plantar, así el “guisantito” no se le atasca en la garganta. Luego la recoge con la extremidad de su trompa y que introduce con delicadeza en su boca. 43 La L a autora con su vehículo Papaya con Sorpresa. La sorpresa te la llevas cuando la pisa y revienta como come por kilos! Yunus Mahout se lo prepara entre las brasas y piedras calientes. una bolsa de patatas fritas cerrada y decenas de pepitas redondas salen disparadas rodando por doquier! Roti calentito: Le pirra recién hecho!! Es un estilo de pan Indio que ella se Lenguaje de Elefante: Yunus Mahout se comunica con Champa con unas 30 palabras. Algunas las hemos aprendido cuando vamos montados en ella. Agat: camina. Hat: para (esta es fundamental!) Dire: coge. Tre: duerme. Piche: atrás etc. Una anécdota graciosa es que Yunus le llama a Juancho cariñosamente “Chota Hathi”. La traducción es “Pequeño elefante”. La primera vez que lo oí no podía parar de reírme. La verdad es que Juancho ocupa 3 Yunus Mahouts juntos! En un largo día de rodaje, Juancho inventó un trípode urbano (con un cochecito de un chico afectado de polio 44 Chota Hathi que estaba encantado de participar en nuestra aventura) para hacer un “traveling” y los planos rodados quedaron fantásticos. Es genial ver como mahout y elefanta se compenetran y sincronizan los movimientos. Yunus está siempre atento a la palabra “Rolling”, o sea “Rodando”. Inocentemente Juancho se acercó a Yunus Mahout al acabar la tarea y le dio un abrazo. Y entonces Champa, que protege celosamente a Yunus, le envistió. Menudo susto! Mientras sacaba estas fotos, me lanzó una patada trasera que si no me aparto, salgo volando como las pepitas de papaya. Así que cuidado con la amiga! Pronto os seguiré contando historias de otros personajes curiosos que nos vamos encontrado por estos caminos calientes y polvorientos del verano Indio. Un abrazo! Aguila. Abigail y Juancho del KHAJURAHO: ALGO MÁS QUE TEMPLOS Susana Ávila E s un error delimitar las fronteras del arte en lo que los cánones de la cultura occidental nos han enseñado. El mundo de Oriente va cargado de una plasticidad que no nos pasa inadvertida y, cada año, miles de turistas se desplazan al otro extremo del mundo para ver esas maravillas, pero siempre el racionalismo y la educación –que no tienen necesariamente que ver con la cultura– marcan unos arquetipos de los que es preciso desprenderse si se quiere conocer plenamente su significado. encontraron en el cenit de su creación la de formas arquitectónicas poco ágiles artística bajo la dinastía Chandela. (el estilo indo-ario), que se alzan como espectros montados sobre enormes plata- Pocas cosas explican, a simple vista, la formas en medio de campos de cultivo. Es, elección de Khajuraho como capital del al acercarse más, cuando se observa que imperio Chandela, pero lo cierto es que las abruptas paredes están recubiertas de entre el año 950 y 1050 llegaron a cons- esculturas, centímetro a centímetro, casi truirse un total de ochenta y cinco templos sin resquicios, formando parte integrante divididos en tres grupos: oeste, sur y este, de la estructura general, dando imagen de de los cuales hoy en día quedan veintidós. la vida mundana de aquel tiempo. Pero La primera impresión que producen es rebasando la belleza plástica, mirando Muchas son las cosas que se han dicho de la India: o gusta terriblemente o resulta profundamente agobiante, pero difícilmente se rebasa la costra de superficialidad del criterio y se comprende al mundo que hay detrás de ello. En el estado de Madhya Pradesh se alzan los templos de Khajuraho, un conjunto arquitectónico de los siglos X y XI, incluidos en la mayoría de los itinerarios turísticos por constituir un claro exponente de la arquitectura medieval hindú. Pero su construcción no surgió, un buen día, del genio de un artista, sino que hubo una motivación más profunda de origen filosófico. Al cumplir el primer milenio de nuestra Era, los maestros hindúes habían pasado ya del clasicismo al barroco y se 45 más dentro, se observa que cada detalle cincelado en la piedra entronca en las raíces mismas de la filosofía. Bajo todo el artificio de un hinduismo eminentemente filosófico late un fuerte estrato de adoración fálica. La tradición védica enseña que hay que conocer el trivarga (las tres cosas): dharma (el deber), las obligaciones religiosas, derechos y deberes del hombre; artha (lo útil), conjunto de reglas convenientes a la vida y que atañen especialmente al mundo material; y kâma (el amor). De modo que la filosofía del kâma (deseo, placer, amor, sensualidad) se desarrolló durante el periodo védico hasta el punto de que de los ciento treinta y seis himnos de que consta el Atharva-Veda, cuarenta y uno están dedicados a esta materia, desde la fórmula para atraer a las mujeres, las maldiciones que impiden casarse, hasta cantos que aumentan la potencia y que anulan la del rival. Posteriormente, hacia el siglo V, la obra de Vatsyayana, el Kâma-Sûtra, ha recopilado todo el conocimiento sobre el tema, pasando a ser un clásico. Así pues, las representaciones de parejas en composturas amorosas (mithuna) han sido frecuentes a lo largo de la iconografía hindú. No se trata como en nuestras catedrales góticas en las que se encuentran figuras en ademanes satírico-eróticos, en capiteles, apoyabrazos o gárgolas, pero siempre como motivos dispersos. Esta representación de la actitud amorosa como uno de los episodios de la vida cotidiana cobra aspectos transcendentales cuando la unión hombre-mujer rebasa el límite carnal y se transporta a términos filosóficos como la unión entre el Purusha (espíritu) y la Prakriti (materia). La irrupción del Tantrismo coincidió con las postrimerías del imperio Gupta hacia finales del siglo VI de nuestra Era y fue cobrando fuerza hasta lograr sus máximas representaciones en los templos de Khajuraho. Sin ser uno de los seis Darshanas o grandes sistemas filosóficos de la India, el Tantrismo conecta con ellos. El principio de la dualidad, tan controvertida en toda la filosofía oriental, toma aquí a la deidad Shiva como el principio masculino, representando la conciencia pura, el pensamiento abstracto, asociado al Purusha, el cual permanece inerte hasta que la energía activadora de Shakti, principio femenino, asociado al Prakriti, lo ponga en funcionamiento. Shiva es Mahâkala (el tiempo) que al activarse por la energía cósmica de Shakti da lugar a periodos de existencia y de no-existencia, que nos remonta al eterno principio de la sucesión de las cosas, de la Rueda de la Vida. El Tantrismo dejó sentir su influencia en todo el arte de la India destacando el aspecto erótico. En uno de los frisos de los templos de Khajuraho nos encontramos a Kâlî (uno de los nombres de Shakti) pisando a Shiva como símbolo de su poder. Y junto con las representaciones de las parejas divinas: Shiva-Shakti, VishnuLakshmî o Brahma-Sarasvatî, se suceden las de los semidioses: Apsarâs, Gandharvas etc. y las de los simples mortales. Los textos sagrados se han encargado de prescribir detalladamente la elaboración de las imágenes según su jerarquía. La religión y la sexualidad estaban ligadas en estrecha simbología en el pensamiento de la India. Los templos medievales no se pueden considerar exclusivamente como lugares de culto, sino que eran centros de la vida social, cultural y política. De manera que no se puede obviar tan complejo trasfondo e intentar catalogarlos de acuerdo a los patrones establecidos. 46 MADHYA PRADESH EL SECRETO MEJOR GUARDADO Félix Roig A pretados en la parte trasera de un jeep, media docena de pasajeros remontábamos la abrupta carretera hacia Gangotri. Uno de ellos, un insidioso turista inglés, no había dejado de observarme desde que saliéramos de Uttarkashi. Mientras yo adivinaba las altas montañas y los abismos que sorteábamos en nuestra ascensión, un hombre de Calcuta me enumeraba los distintos tipos de plantas medicinales que se pueden encontrar en aquella parte de los Himalaya. Yo no hablo bengalí, pero mi hindi y el del botánico, eran lo bastante crípticos como para llevar un intercambio de impresiones. Finalmente, el inglés me preguntó lo que parecía llevar tiempo pensando: -¿Cómo había aprendido aquella lengua? Tal vez porque nunca me lo habían preguntado antes, me quedé en blanco. Sencillamente, no lo sabía. Jamás me había tomado la molestia de estudiarlo. Pero el hindi no es difícil si uno está abierto a escuchar sus sonidos y a repetirlos en el momento oportuno. Luego, claro está, uno cuenta con Bollywood. La meca del cine en hindi que se produce en Mumbai, no conoce rival en el mundo. Realiza más de 900 películas al año y si uno pasa suficiente tiempo en India, resulta imposible no hacer un pacto con ellas. En India el cine está en todas partes. En los autobuses, en las salas de espera de las estaciones de tren, en restaurantes de carretera y salas de aeropuertos, siempre hay un televisor o vídeo encendido con una película de Bollywood. Me he pasado horas en los lugares más insospechados del país, mirando sus increíbles coreografías, siguiendo el hilo de sus tortuosas historias, escuchando los sonoros diálogos. Al principio sin entender nada, luego descubriendo frases hechas, seguidamente haciéndolas mías, soñando a menudo con ellas. El cine de Bollywood es escapista, hecho para distraer. A sus películas se las llama “masala movies” porque son una mezcla a partes iguales de cuatro elementos imprescindibles: baile, canciones, drama y comedia. Al espectador occidental le choca la falta de prejuicios con que se mezcla todo ello, y suele resultarles incomprensibles y ajenas. Sin embargo, se pierde la esencia vital de lo que le rodea. En India todo tiene un carácter integrador, orgánico. El cine de Bollywood lo lleva al extremo. Y así, una historia puede pasar de un baile desenfrenado a una pelea apocalíptica, de una escena íntima a otra descabellada. 47 A los actores y actrices principales se les llama más apropiadamente “héroes” y “heroínas” porque exceden su papel de transmisores. Son semidioses con capacidad para hacerlo y vivirlo todo; el reflejo de una experiencia sublime. El cine de Bollywood no solo me enseñó el poco hindi que sé, sino que me dio la clave que sustenta los latidos del país: reinventarse a uno mismo. El primer año que pasé en India el gran éxito de Bollywood era “Raja Hindustani”, un título con sugerentes resonancias pan-indias. El héroe era un excelente actor musulmán, la heroína una ascendente estrella hindú. Una pareja explosiva. Se trataba de una gran tragedia, pero con infinidad de momentos cómicos y canciones muy pegadizas. La vi por primera vez en Kolkatta (Calcuta), luego en Delhi, y meses más tarde, andando por los valles de Sikkim, oí a los montañeses “bhutia” cantando sus canciones. Aquel año toda India cantaba “Raja Hindustani”. Entonces, mi subconsciente me mandó un par de mensajes: en adelante solo hablaría hindi y yo pasaría a llamarme Raja, príncipe. Un 48 título sin posesiones y unas prerrogativas a determinar. voy a alcanzar mi objetivo y sin embargo, la recompensa final siempre supera con creces los inconvenientes. UN MUNDO EN SÍ MISMO Años más tarde, en aquel viaje en jeep a Gangotri, yo no sacié la curiosidad del turista inglés. Pero con renovada insistencia, me hizo otra pregunta: -¿Por qué venía a India? A continuación añadió él mismo tres posibilidades: ¿Tenía un “guru”? ¿Pertenecía a una secta? ¿Era adicto a alguna práctica tántrica? En una ocasión, la secretaria de mi embajada en Delhi, también hizo todo un alarde de síntesis, confesándome que a India iban dos clases de visitantes: uno, el tipo “hippy” y dos, los enganchados a un viaje espiritual. Mucha gente me ha preguntado lo mismo: ¿por qué vuelvo una y otra vez a India? Y si me encuentro lúcido, suelo tener una respuesta contundente: Cuando estoy aquí, no quiero ir a ninguna otra parte. Así de sencillo. Y no es que el país me de un estado particular de paz. En absoluto. Viajar por India, como lo hago yo, no es exactamente una tarea fácil. Suelo moverme con la sospecha de que no India no es un país, sino un mundo en sí mismo. No sólo es físicamente inmensa y de una orografía tan variada como no existe en otra latitud, sino que es un calidoscopio efervescente y multicolor de culturas, razas, idiomas y creencias. Todo manifestándose por medio de la multiplicidad, el movimiento y la transformación continua. Nadie duda que India está cómoda con su diversidad porque ésta es la base de su identidad. El gran dios hindú Shiva lo ejemplifica a la perfección. Es el dios de la creación pero también el de la destrucción. Símbolo de la duplicidad y de los opuestos. Y en su forma de Shiva-Nataraja, o el dios de la danza cósmica, es el gran referente al continuo fluir de toda existencia. Los indios son por naturaleza apasionados, pero en el fondo tremendamente estoicos pues saben que su realidad no es la única existente. En el país hay 18 idiomas oficiales, pero se hablan unas 700 lenguas y dialectos. La religión mayoritaria, el hinduismo, con sus millones de dioses, favorece la inclusión de la diversidad. El 70% de la población todavía vive en áreas rurales, lo que mantiene la intensidad de sus creencias ancestrales, convirtiendo a India en un auténtico museo viviente de la historia de la humanidad. En un orden opuesto al espiritual, India es así mismo todo un éxito. A pesar de contar con más de 1000 millones de habitantes, el país es autosuficiente en materia de alimentación, exportando inclusive a sus países vecinos. Lo produce prácticamente todo, desde tornillos y chancletas de goma hasta los más sofisticados sistemas de informática en “software” y energía nuclear. Quizás por el antiguo sistema de castas o la división de labores, India es el país de la especialización por antonomasia; referente insustituible para los amantes, no solo de la espiritualidad, sino también de los más altos hitos conseguidos por el hombre en materia de arte, arquitectura, ingeniería, literatura, música y danza. India ha dado a la humanidad los más elaborados sistemas filosóficos y éticos, resultando en los más ricos y complejos análisis sobre cosmología, astronomía, astrología, anatomía, filología y medicina preventiva. mismo, es la zona menos conocida y visitada. En muchos aspectos, Madhya Pradesh destila la magia más estilizada del país. Sus ciudades son relativamente escasas y poco pobladas. Dominan los paisajes quebrados y cobrizos de su alta meseta, salpicados de los últimos espacios auténticamente vírgenes del país. A Madhya Pradesh se le conoce como el “cinturón tribal” pues alberga el 40% de población realmente autóctona de India, llamados “adivasi” o “primeros habitantes”. Excluidos del sistema védico de castas, estos “adivasi” comprenden tribus como los Muria, Gond y Bhils, cuyas creencias ancestrales aun hoy están fuera de la esfera hindú. ESTILIZADA MAGIA Debo ser uno más de la larga lista de admiradores que creen que India es básicamente un gigante poliédrico y polivalente de formas, contenidos y resultados. Y sin embargo, soy un firme partidario de que el mejor viaje por India es aquel carente de propósito; el que no debe llevarte a ninguna parte. Este vasto país está tan sobrado de lugares fascinantes, que toda región justifica cualquier itinerario tomado al azar. Para el viajero que le apetezca viajar a India con este tipo de brújula, no hay nada como su secreto mejor guardado: el estado de Madhya Pradesh. Geográficamente, está situado justo en el corazón del subcontinente Indio. No obstante, debido a la tradicional dinámica centrífuga del Así mismo al estado se le llama la “tierra madre del hindi”, pues es de las pocas zonas donde ésta es la lengua madre de su gente. El hindi más dulce y correcto se habla en Bhopal, la resplandeciente ciudad de las sultanas. Como corresponde a territorio tan estratégico, todos los ejércitos e invasores pasaron por aquí, dejando fuertes tan majestuosos como los de Gwalior, Mandu y Dhar. Todas las religiones hicieron lo propio, y además de las impresionantes mezquitas de Bhopal, Madhya Pradesh cuenta con el centro budista de Sanchi, el más antiguo e importante del país, levantado por el emperador Ashoka en el s.III a.C. La arquitectura hindú más delirante puede contemplarse en los célebres templos de Khajuraho, y uno de los cen- tros de peregrinación más venerados es Ujjain, una de las siete ciudades que confieren la salvación al creyente. Pero la verdadera esencia de la India se encuentra en su subyugante naturaleza. En el Parque Nacional de Kanha, el más extenso de India, una quietud trascendente impregna sus bosques y selvas durante las tórridas horas del día. No sorprende que este santuario natural fuera la fuente de inspiración para que Rudyar Kipling escribiera sobre las aventuras de su entrañable personaje, Mowgli. El niño criado por una loba conoce en cada animal de la selva, los rasgos más característicos del ser humano: la perseverancia de la pantera, el orgullo del tigre, la simpleza de la osa, la opacidad de la serpiente, la vanidad del rey de los monos. Mowgli aprende de cada uno de ellos, con el fin de poder sobrevivir a la “ley de la selva”, un bonito eufemismo para describir la aventura iniciática de la vida. Y tal vez éste sea el mejor regalo de la India; la imposibilidad de realizar en ella un viaje en vano. Por más que a uno le inspire lo contrario, la trascendencia que impregna todas sus formas, acaba atrapando al viajero, pues al final del camino siempre te espera un descubrimiento, un nuevo hallazgo. En India me ocurrió lo más insospechado. Había ido a visitar el fuerte de Mandu, uno de los lugares más hechizantes de Madhya Pradesh. Mandu es 49 una solitaria e imponente fortaleza medieval que se extiende a lo largo de 20km2, sobre una recortada meseta. Debe ser el único destino de India que se recomienda visitar durante los monzones, pues las profundas quebradas que rodean la fortaleza, se llenan de agua con las fuertes lluvias. Entonces las misteriosas edificaciones quedan reflejadas en el espejo de atractivos lagos. Había pasado el día inspeccionando los viejos palacios, los mausoleos y las mezquitas del complejo, cuando me sorprendió la noche. Pensé que me quedaba un largo paseo de vuelta al pueblo y entonces oí el providencial timbrazo de una “rickshaw”. Pacté el precio y pronto estuve deslizándome a través de la vibrante oscuridad. El campo tenía ese intenso olor a lilas y tamarisco, tan propio de la India en época de lluvias. Súbitamente, el graznido de un pavo real añadió una nota inquietante al melancólico perfume de la vegetación. Las copas de los árboles cobraban vida a nuestro paso, bajo el sueño agitado de los langures y el vuelo de los murciélagos. Pensé acerca de las miles de historias que se han escrito sobre la noche india. Desde el alba de 50 los tiempos, refugio ideal de todo tipo de espíritus maléficos, embrujados y burlones. De repente, sucedió algo. Me invadió la más extraña sensación: no sabía dónde estaba. Me movía en el espacio, sí, pero era incapaz de decirme en qué lugar y hacia qué dirección. encadenado, hipnotizante. Abajo, la tierra y todas las criaturas del mundo, no hacían otra cosa que esperar, en un sereno estado de eterna expectación. Aunque no sabía dónde estaba ni quién era, prevalecía una sensación de plenitud, de íntimo contacto con todo. Experimentaba la certeza de que por más que me interrogara, la respuesta que hubiera de recibir a cambio, no se correspondería con la realidad, o mejor dicho, con la verdad. ¿Y cuál era ésta al fin y al cabo? No se trataba de que el espacio a mí alrededor me resultara desconocido, sino que, de hecho, éste no existía en modo alguno, en ninguna parte. A esta revelación se añadió otra nueva, menos terrible, más sutil y reconfortante. Ahora era incapaz de identificarme a mí mismo, de saber quién era yo. Toda referencia había desaparecido como una pompa de jabón en una tormenta. Mi cerebro físico estaba en cierto sentido adormecido, incapaz de registrar nada, y sin embargo, lo más sorprendente era que me sentía al mismo tiempo, extraordinariamente alerta. Arriba, la cúpula celestial zumbaba con un sonido No sé el tiempo que duró esto, pero cuando vi las luces del pueblo, volví a escuchar el sonido que nunca me había abandonado: el oxidado pedaleo de la vieja “rickshaw”. Pagué al conductor frente a mi hotel y oí las sonoras voces procedentes del televisor encendido en la recepción. Sin duda, estaba en Mandu, había llegado a tiempo para ver la última película de Bollywood, y yo era una vez más Raja. Y en ese momento, no me sentí ni mejor ni peor que antes, pero recordé un versículo del Rig-Veda que dice. “El que tenía ojos lo vio; los ciegos no lo entendieron El poeta, que es un niño, sí lo ha percibido; señor de su señor, será quien lo comprenda” ➡ Viene de página 2 LENGUAS TRIBALES Y FRONTERIZAS LENGUAS INDIAS