El enigma de la noche de San Juan

“POLIEDROS”
Revista mensual de Sociedad y Cultura
AÑO I – Número 4
JUNIO 2013
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POLIEDROS
No se identifica con el contenido de los artículos publicados, ni con las opiniones de sus autores.
EDITORIAL
LA NOCHE DE SAN JUAN. ENTRE MITO Y TRADICIÓN
En la noche de San Juan, España arde en llamas, las hogueras se suceden por
todas partes en una manifestación llena de encanto y buenos presagios. En la
noche más corta del año, el solsticio de verano, la oscuridad se reduce a su
mínima expresión, dando a la luz su mayor protagonismo.
En torno a esta noche de magia y amor, se han ido tejiendo un sinfin de leyendas,
supersticiones y creencias; canciones, coplas, dichos y refranes; bailes, danzas y
manifestaciones varias, que en tiempos pretéritos a nuestros antepasados, les
hacían creer y soñar en cosas beneficiosas y en un bello futuro, ya que en esta
noche mágica nunca aparecen seres malignos ni malos espíritus.
Esta vieja y ancestral tradición en la que se encienden grandes fuegos, se hacen
en las calles de pueblos y ciudades, en parques públicos o en la cima de las
colinas; se canta y se baila a su alrededor, a menudo se salta por encima de las
llamas o se encienden tizones que luego se llevan por los campos, ya que las
tradiciones de muchos pueblos aseguran que los tizones y cenizas preservan de
las enfermedades y de las desgracias y alejan a las brujas y a otros seres
malignos. Según la teoría de Wilhelm Mannhardt, las hogueras se encienden en
las festividades que coinciden con los solsticios y equinocios y representan un
hechizo del sol basado en la magia imitativa.
Otras teorías purificadoras, aseguran que por coincidir con el comienzo y el fin de
los ciclos estacionales, tienen la misión de purificar a los hombres y a las cosas,
de las culpas pasadas, para que puedan iniciar un nuevo período de renovación.
El ancestral rito de adorar al fuego, con el transcurso de los tiempos, se convirtió
en hábito doméstico de quemar los trastos viejos apilados, en acto de purificación
gozosa. Además del fuego, es también un elemento fundamental el agua, a la
cual, se la atribuyen propiedades curativas en esta noche llena de buenos
augurios, y así por ejemplo varias localidades de Zaragoza, las muchachas en la
media noche van a bañarse al río.
El agua, en la mañana de San Juan, da el amor, la fecundidad y la fortuna.
¡Dichosa la moza que coge en ese día la flor del agua al rayar el alba!, y ¡Dichoso
el hombre que la bebe!.
También era beneficioso para los hombres darse un chapuzón en la cabeza, y
por ejemplo, los madrileños lo hacían en la fuente que hubo en la Puerta del Sol
llamada Mariblanca. Es muy larga la lista de festejos a lo largo y ancho de la
geografía hispana, y a modo de “botón de muestra” quiero citar las "Fogueres de
Sant Joan" de Alicante, en donde el ancestral rito del fuego se ha convertido en
estética, en monumento y en crítica social. En San Pedro Manrique (Soria), se
efectúa la tradicional "Pasada del fuego" con los pies descalzos sobre brasas
encendidas y el rito de "Las Móndidas", tres mozas que en la mañana de San
Juan, vestidas de blanco, portan un canastillo de pan en la cabeza. En Sanabria
(Zamora), según cuenta la leyenda, se puede escuchar el sonido de las
campanas del pueblo sumergido en el lago, que tocan para las almas limpias. En
La Lanzada (Pontevedra), en las noches de luna llena, y sobre todo en la noche
de San Juan las mujeres estériles, que desean ser fecundadas, van a la playa a
buscar el milagro.
Esta festividad de San Juan está considerada como la más celebrada en España
y en Europa.
TRIBUNA LIBRE
LA VERBENA DE SAN ANTONIO DE LA FLORIDA
L. REGINO MATEO DEL PERAL
Del Instituto de Estudios Madrileños
San Antonio de la Florida constituye una de las festividades más relevantes de
Madrid, que siempre ha suscitado una corriente de simpatía entre los
madrileños y ello debido a varios motivo. Se trata de: la primera verbena que
inicia el ciclo de la celebración de este tipo modalidad festiva. : La verbena se
realiza bajo la advocación del Santo Antonio de Padua, uno de los santos más
carismáticos, taumaturgo universal, en la historia del cristianismo, hasta tal
punto que el Papa León XIII, como señala Francisco Moreno Chicharro, le
otorgó, el 18 de octubre de 1881, el calificativo de “Santo de todo el mundo”, al
tratarse del santo al que más se intercede para remediar cualquier dificultad.
La ermita, en donde se le rinde veneración a San Antonio de la Florida, fue
donde Jovellanos encargó a Goya su ornamentación, dejando al pintor entera
libertad para que diera rienda suelta a su fantasía y la decorara como estimara
conveniente. Finalmente el hecho de que el panteón de Goya esté junto al
presbiterio en la Ermita desde 1919.
San Antonio de la Florida, como así se le
conoce en Madrid, es San Antonio de Padua (
Lisboa,1195 - Padua ,1231) que en Portugal es
llamado San Antonio de Lisboa. Así
lo
denominan sus paisanos lusos a “nosso Santo
António” que es “do santo casamenteiro”, como
describe Valentín Strappazzon , en su biografía
del Santo: “Petite vie de saint Antoine de
Padoue”. Es para los lusitanos como de su propiedade, algo seu .
Otra denominación en Madrid menos conocida del Santo es la de San
Antonio el “Guindero” y este adjetivo, según Natacha Seseña, (“ Folklore”
Madrid y su provincia. Agedime. S.L. Editorial Mediterráneo. Madrid,1991) se
debe a uno de los milagros que conforme a la tradición realizó en Madrid en la
Cuesta de la Vega, cuando ayudó a un campesino que conducía un carro
tirado por un asno a recoger las guindas que se le habían desparramado por el
suelo, debido a que su jumento se asustó . Afligido el campesino procedió a
recoger ese fruto y en ese momento apareció un fraile que se prestó ayudarle
para efectuar esa sufrida labor y las guindas repuestas eran más grandes y de
mayor calidad que las primitivas. Cuando el labriego entró en la Iglesia de San
Nicolás para agradecer al fraile su gesto contempló asombrado un retablo en el
que estaba la efigie de San Antonio, cuyo rostro era igual al del fraile que le
había proporcionado auxilio. Precisamente en la Parroquia de Santa Cruz
existe un retablo que narra el milagro mencionado. En 1720 era tal la
veneración y popularidad del Santo que se creó la Congregación de San
Antonio en la capital. Los componentes de dicha entidad fueron denominados
los “guinderos”, al portar un escapulario con la efigie de una guinda y el día de
su conmemoración festiva, el 13 de junio, distribuían limosnas y alimentos a
los más desfavorecidos.
En 1850 Pedro Felipe Monlau ( en Madrid en la mano o El amigo del forastero
en Madrid y sus cercanías) especificaba en relación con los diferentes actos
festivos que tenían lugar en Madrid, los relativos a los días 12 y 13 de junio
que se celebran para conmemorar la fiesta de San Antonio de la Florida. Es
cuando se procede a la “ inauguración de la verbena “ y comenta las
cualidades de la planta denominada verbena, con “cien virtudes medicinales“,
lo que motiva que un nutrido grupo de personas se dediquen a su búsqueda,
aunque en lugar de “un verbenal” se topan con una pradera repleta de
“buñuelos, rosquillas, albahaca, garbanzos tostados, santitos de barro,
juguetes, licores y...mucha gente”. Se trata del primer acontecimiento festivo
del ciclo de verbenas y al que Monlau le otorga: “honores de romería”. La
ermita es el principal polo de atracción y donde se conmemora con mayor
solemnidad la festividad y el escritor finaliza su descripción manifestando que
los que deseen acudir al recinto “descansados” tiene la opción de coger un
ómnibus en la Puerta del Sol y abonar por ese servicio cuatro reales y así tener
el derecho a poder desplazarse sentado.
A comienzos del siglo XX existía un famoso un tranvía, el número ocho, que
partía de la Puerta del Sol y que transportaba a la verbena a los pasajeros
que se desplazaban a la Ermita para honrar al Santo y disfrutar con las
atracciones y bailes. En ese sentido, para glosar la prestancia y el garbo del
viajero se acuñó el famoso dicho popular: “Más chulo que un ocho”.
José Gutiérrez Solana, en una excelente descripción de la que él denomina
“Romería de San Antonio de la Florida”, relata pormenorizadamente las
características de esta manifestación festiva, en su inolvidable libro: “MADRIDCallejero, Escenas y Costumbres”. Destaca como ya desde la estación del
Norte se inicia la feria, en donde se podían contemplar puestos de flores
especialmente de claveles y geranios, así como botijos adornados y puestos
ambulantes de refrescos, vendedores de mojama y de cacahuetes. Otros, ya
de carácter fijo, en los que se pueden adquirir frutos secos. Barracas en las que
figura la caricatura de personalidades de la política confeccionados con barro,
juguetes infantiles, muñecas, peponas, columpios, el Tío-Vivo con caballos de
cartón. Asimismo, precisa como se freían de los churros, la humareda negra
que salía de las calderas y, por otra parte, de qué forma se realizaba el tiro por
medio de escopetas de perdigones, ofreciendo como blanco a una gallina
viva, atada con una cuerda o , también, otras aves como pichones o perdices,
quienes morían víctimas de la perfidia de sus verdugos que acertaban en el
blanco. Miguel de Unamuno, que publicó diversos artículos sobre Madrid, en el
diario “El Sol” , con la denominación de “Comentario”. En el artículo, del 10 de
junio de 1932, : “Orillas del Manzanares”, menciona a Antonio Trueba, su
paisano, conocido popularmente con el apelativo de “Antón el de los
Cantares””. Es famoso el cantar de Trueba sobre la verbena con la que se
procede a la apertura del ciclo festivo de verbenas en Madrid,, canto del
siguiente tenor literal, como indica Pedro de Répide (en su obra: Madrid, Visto y
Sentido): “La primera verbena/Que dios envía/Es la de San Antonio/De la
Florida”. Asimismo, Bonifacio Gil alude a la famosa copla , ya citada , de
Trueba sobre la Primera verbena... ,que aparece recogida en el Diccionario
geográfico popular de cantares, refranes, adagios, proverbios, locuciones
proverbiales y modismos españoles, de Vergara Martín, de 1923 .
Gil cita un bello poema de Trueba sobre la llegada de la festividad de San
Antonio de La Florida, verbena que alcanza su auge en la década de los años
1850 en las cercanías de la ermita, como se refleja en otra bella copla: “Ya
bajan por la cuesta/de San Vicente/doncellas y mancebos/cantando alegres;/ya
el pueblo invade/la florida ribera/del Manzanares./Repican las campanas/ de
San Antonio/ y el templo abre sus puertas/ a los devotos…/¡Bendito sea/ el
patrón de los niños/y las doncellas!.”
Además de Trueba, Mariano Sánchez de Palacios (en “Madrid y sus
verbenas”) se hace eco del inicio de las verbenas, cuando matiza: “13 de junio
La primera verbena que Dios envía es la de San Antonio de la Florida-reza el
decir popular”. A partir de esa fecha “estalla la verbena en ese Madrid
jacarandoso y popular” que es tanto como decir que el magnetismo de esa
fiesta atrae a los madrileños de todos los rincones de la ciudad.
En la víspera nocturna del día 13 se iba
ya a la verbena y desde esa noche
comienza
el acontecimiento de las
verbenas por orden cronológico, como
dice
la
copla:
“¡Oh
vísperas
celebradas/de San Juan y San Pedro...¡”.
En esa víspera se ponía ya de releve el
entusiasmo de los que acudían a la
Florida, procedentes de todo Madrid, en
especial de los barrios bajos, hasta que la
popularidad de la verbena motivó paulatinamente que todas las clases
sociales asistieran a esta fiesta. Un numeroso colectivo de gentes: jóvenes,
niños, personas maduras que portan su indumentaria con garbo y entre bromas
y risas amenizan el ambiente verbenero.
Diferentes aspectos de la verbena, según Sánchez Palacios, singularizan a
esta manifestación festiva, en la que se detecta cuando se llega al recinto el
clásico olor a churros y existían diferentes puestos para degustar los productos
gastronómicos típicos como los de las gallinejas, y las rosquillas. En cuanto a
la bebida no podía faltar ni el vino de Arganda, ni el anís de Chinchón y
refrescos como la limonada, la aloja (bebida refrescante cuyos ingredientes
eran arroz, miel y especias). Se oyen las melodías del popular organillo y se
bailan, como indica Palacios, el “schotis el pasodoble, la mazurca y la
habanera”. En el siglo XVIII los bailes de moda eran las seguidillas, el bolero, el
fandango, la tirana y el baile de candil y como danzas cortesanas las pavanas o
gallardas y bailes como jácaras, la chacona y la zarabanda.
Bella prosa poética la de Palacios , cuando manifiesta que: “En el atardecer de
esa orgía verbenera, entre el día y la noche, el farol de la luna, luna lunera
cascabelera, pone su claridad, sus tonos plateados sobre la ermita y los
contornos costumbristas de la Florida, mientras suben y bajan los caballitos,
dando vueltas y vueltas como un viaje de noria sin final ni destino...”
En cuanto a las obras de Goya que más se identifican con esta verbena se
encuentra: “EL Baile a orillas del Manzanares”. Constituye la pintura que mejor
refleja una de las escenas campestres más ilustrativas de cómo se divertían los
madrileños en la festividad de San Antonio. Este cartón lo entregó el pintor en
1977 .La pintura es conocida, también, con la denominación de “Baile de San
Antonio de la Florida”. Francisco Moreno, en “San Antonio de la Florida:
Historia y Arte -Los festejos de junio” , menciona la descripción literal que el
genial artista aragonés realiza de su obra pictórica, manifestando (Goya) que
se trata de “... (sic) un bayle a orillas del Río Manzanares: dos Majas y dos
Majos que baylen seguidillas y otros que hazen Música, uno de ellos canta con
la guitarra, otro acompaña con una bandurria y otro en el mismo término que
con las manos lleva el compás. Detrás de estas hay otra Maja y otras dos que
se ven por entre medio que están en el mismo grupo. Más cerca del Río hay
un Militar con una Maja en conversación y otra que de el bayle(sic) ha ido a
beber (sic) al Río: hay varios despojos de Capas y Sombreros a primer término
y los lexos (sic) se ve un poco de Madrid por San Francisco”.(Era habitual que
el pintor cometiera numerosas faltas de ortografía).
El cartón para tapiz de Goya fue una muestra de cómo unos personajes los
majos ( L. Regino Mateo del Peral.. Tipos Populares de Madrid del Siglo XVIII.
Revista Madrid Histórico) disfrutaran de ese acontecimiento de la verbena,
mediante el baile de las seguidillas, en donde no faltaban instrumentos
musicales como la guitarra y la bandurria y canciones que amenizan el acto,
así como la conversación que se entabla entre esos majos y majas, en ese
marco tan bello junto al río , desde donde a lo lejos se contempla la Basílica de
San Francisco El Grande, cuya autoría correspondió al arquitecto real Sabatini.
Nina Epton, en la segunda mitad del siglo XIX, describe, en un breve texto, que
incorpora Hugh Thomas en su obra: “MADRID-Una Antología para un viajero”,
sus impresiones sobre la celebración de la festividad de San Antonio de la
Florida en la capital del Reino. En este sentido, manifiesta que los que acuden
a la verbena son componentes de todo un abanico social “desde los refinados
adolescentes de la calle Serrano hasta las gitanas de Altamira que acuden para
decir la buenaventura...” Prosigue su relato manifestando que era habitual
ataviarse de manolo y respecto a las jóvenes pone de manifiesto las
características de su atuendo con sus “mantones de Manila y flores en el pelo”
que les confiere un aspecto elegante y vistoso. Se detecta la huella de Goya en
“...las alegres escenas pintadas...en la cúpula que se alza al otro lado de la
calzada”.
Continua Epton su narración haciendo especial hincapié en el significado e
importancia de los alfileres que portan esas jóvenes que “son pequeños
imanes que, una vez santificados con agua bendita y acompañados de una
ferviente plegaria a San Antonio, le proporcionarán sin falta un novio a la
muchacha...”, aunque manifiesta Epton las más hermosas son las primeras a “
las que aguardan una multitud de muchachos dispuestos a lanzarles piropos y
a invitar a bailar...”.
Sigue la escritora detallando otros pormenores de la fiesta como “cuando las
muchachas “ponen una vela” al Santo y el momento en que un sacerdote les
presenta una reliquia para que la besen”. Asimismo, Epton describe como la
pila del agua del agua bendita donde van a parar los alfileres de las jóvenes se
halla “ya medio llena”. Igualmente, llamó su atención el hecho de contemplar a
“una muchacha rolliza que parecía rozar la treintena y que, por consiguiente,
necesitaba un novio con urgencia” Epson queda sorprendida “por la fe de esta
mujer que después de rezar al Santo mete su mano en la pila y se le adhieren
tres alfileres...Tres alfileres colgaban de su palma...y se alzó la falda y prendió
los alfileres en el dobladillo de la enagua”. La curiosidad de Epson motivó que
preguntara a la mujer a que se debía esa acción de recoger los alfileres y
guardarlos de esta forma y esta le manifestó que era “para estar más segura” .
Lógicamente esta acción garantizaba que ese año encontrara el novio que
deseaba sin necesidad de tener que volver al año siguiente para realizar el
mismo ritual.
La popularidad de la
verbena propició que
la misma fuera fuente
de inspiración para
compositores
y
libretistas
de
zarzuelas,
piezas
musicales que a partir
de la segunda mitad
del
siglo
XIX
adquirieron
gran
difusión. Entre ellas,
destacan las escenas
que hacen referencia a
la verbena de San Antonio. Así, .el 26 de octubre de 1894 se estrenó la
zarzuela: “San Antonio de la Florida” en el Teatro Apolo., como reseña Pedro
Montoliú, en. Fiestas Y Tradiciones Madrileñas, Otras zarzuelas que recogen
escenas y diálogos relativos a la verbena fueron Las Leandras y Luisa
Fernanda, estrenadas, respectivamente, en 1931 y 1932, en el Teatro Pavón y
en el Teatro Calderón.
La figura de San Antonio ha propiciado la existencia de numerosas obras
sobre el Santo como biografías, ensayos, artículos, conferencias, poemas,
composiciones musicales e, además de una variada y bella iconografía. En
este sentido, podemos destacar a autores como Basilio Sebastián Castellanos,
quien en “Costumbres españolas” “De las verbenas de S. Antonio, S. Juan y
san Pedro en Madrid”, en 1841, analiza y describe cómo eran esas verbenas.
También, Pascual Madoz, en 1847, en su “Diccionario Geográfico-EstadísticoHistórico” , reseña, en el apartado: “Romerías, verbenas y otros regocijos” ,
las características de las verbenas madrileñas, en concreto se refiere a las de
“San Antonio de Padua, San Juan Bautista, San Pedro Apóstol y Ntra, Sra, del
Carmen”. Igualmente, Ángel Fernández de los Ríos, en su “Guía de MadridManual del Madrileño y del Forastero”, de MDCCCLXXVI, realiza una breve
historia de las diferentes ermitas construidas en honor de San Antonio desde
1720 hasta 1792, concluyendo su descripción al manifestar que:” el día 12 y 13
de junio se celebra junto a la ermita de San Antonio una romería que, si no es
tan concurrida como la de San Isidro, tiene el doble carácter de verbena”.
Asimismo, ya más recientemente, destaca la conferencia que impartió Luis
Miguel Aparisi Laporta, con el título de “La Ermita de San Antonio de la Florida
en el Madrid de Alfonso XIII”, editada en Madrid (con el nº 6, en 1997) por
Artes Gráficas Municipales y programada dentro del Ciclo de Conferencias: el
Madrid de Alfonso XIII, del Aula de Cultura, organizado por el Ayuntamiento de
Madrid y el Instituto de Estudios Madrileños.
ENTREVISTA A…
LUIS PRADOS DE LA PLAZA
de la Real Academia de Doctores
El pasado año, se cumplió el centenario de la muerte del gran escritor,
académico, polígrafo e investigador de las Letras, Marcelino Menéndez y
Pelayo. Exceptuando su tierra natal, Santander y algunos foros literarios, poca
repercusión tuvo, a pesar de su enorme bagaje cultural. Para saber algo más
de cuanto pudo haber aportado un centenario de esta categoría, he querido
invitar a este no menos conocedor de la vida y obra de tan insigne polígrafo.
Nació en Málaga en 1937. Periodista de los de raza, tiene en su haber
existencial una larga y prolífica actuación en diversos campos. Es Doctor en
Ciencias de la Información por la Universidad Complutense, Licenciado en
Derecho, miembro del Instituto de Estudios Madrileños y Cronista Oficial de la
Villa de Madrid. Fue el primer director del Centro Cultural de la Villa, hoy
llamado Fernán Gómez y cuenta en su haber con numerosos reconocimientos
culturales. En 2006 publicó el libro “Memoria de Marcelino Menéndez y Pelayo”,
para recordar a la figura de quien lleva su nombre en la Universidad
santanderina, hoy nuestro invitado nos habla de quien fue y que representó en
la vida literaria de España.
¿Qué repercusión ha tenido el Centenario de Menéndez Pelayo en
España?
Desgraciadamente muy poca. Muchísimo menos que lo que se dice sobre este
gran intelectual y polígrafo.
Su memoria ¿sigue causando polémica?
Han querido pasarle factura como un hombre muy conservador, pero
Menéndez Pelayo fue una persona de altísima altura. Tuvo un gran
reconocimiento a lo largo de su vida. Fue una persona bastante rara, pero
nunca se guardó la lengua, pues contestaba a todo, incluso lo que no le
parecía bien, pues creía que estaba en la obligación de hacerlo.
¿Se le sigue recordando o está en el más puro ostracismo?
En el ostracismo no está, pues hay una parte que lo mantiene vivo. Ahí está
Santander, que lo considera entre los mas brillantes sabios del siglo XIX, junto
a Santiago Ramón y Cajal. Son sin duda los más eminentes. Fue un personaje
que, lo único que hizo fue trabajar. Prueba de ello fue la cantidad de
publicaciones que realizó en una vida tan corta, pues murió a los 56 años.
Perteneció nada menos que a cuatro
Reales Academias ¿Alguna de ellas le
ha recordado?
Le recordó la Real Academia de la
Historia, pero en general el resto lo ha
hecho recordándolo debido a que llegó a
contestar a muchos Académicos en su
entrada como Recipiendarios.
¿En que fue más destacado en la escritura o en la oratoria?
Sobre todo en la escritura, en la lectura y en el reconocimiento, pues dominaba
ocho idiomas, entre lenguas clásicas y modernas, a principios del siglo XX.
Toda la generación del 98, lo estimó muchísimo.
En Política ¿Fue progresista o conservador?
Excesivamente conservador, pero sin menospreciar a nadie. Nunca se metió
con los que pertenecían a otras tendencias. Tuvo la virtud de estudiar alemán y
marchó a Alemania, para conocer a la perfección el idioma y poder leer sus
obras en aquel país. Todo ello, dio como resultado, hacer una serie de
rectificaciones importantes y su labor está reconocida en su obra en su famosa
obra Historia de los Heterodoxos. Fue ante todo, un investigador infatigable.
¿Qué significó esta obra que acaba de mencionar?
Eso significó que aún podemos leerlo y nos sigue sirviendo de estudio.
Sabemos que cuesta leerlo, pues son nada menos que 23 volúmenes. Es un
libro muy denso y no es para todos los públicos, pues es necesario analizarlo
muy detenidamente, para alcanzar su comprensión.
¿Cuántas obras llegó a publicar?
Entre las más importantes unas veinte aproximadamente, pero luego hizo
algunos fascículos y corrigió mucho al mismo tiempo. De todas formas no ha
merecido el reconocimiento que merecía.
¿Era amante y escritor de la Prensa o lo vio como algo sin futuro?
La Prensa era una realidad, lo que ocurrió es que dijo determinadas
manifestaciones contra ella. La atacaba de manera muy dura, porque el no la
trataba. Le tocó una etapa de trato difícil, pues o lo admiraban mucho o por el
contrario le odiaban.
¿Llegó a pertenecer a un determinado grupo de escritores?
A ningún grupo. El siempre fue por libre, aunque siempre admiró mucho a la
generación del 98 en determinadas cosas, pero como era muy crítico,
consiguió al mismo tiempo que no faltaran roces.
Se identificó bien con la Historia y el Pensamiento de Cataluña ¿Tuvo
alguna disensión con sus habitantes?
Tuvo entonces su mejor época y la admisión de carácter con los demás. Vivió
en Barcelona tiempos muy felices con Fontanals y otro grupo de profesores de
la Universidad.
¿Fue amante de practicar la epístola?
Por supuesto. Lo que ocurre que en ese aspecto, no se dio a conocer hasta el
siglo XX. Se carteó con todo el mundo, incluso con Emilia Pardo Bazán, a
pesar de tratarse muy mal.
Escribió “Historia de la Estética en España”. ¿Fue exigente a la hora de
llevarla en práctica o sólo era en teoría?
Era exigente consigo mismo y por tanto, no disimulaba nada. El siempre
defendió todo lo relacionado con la Cultura.
¿Fue un asiduo asistente al Ateneo de Madrid?
Lo hizo por épocas. En el Centenario de la muerte de Miguel de Cervantes, le
encargaron una serie de conferencias y fue muy elogiado, pues era partidario
de todas las figuras relacionadas con el tema literario. Fue un historiador de
verdadero alcance, siendo esta una de sus virtudes.
Pedro Sainz Rodríguez, Ministro de Educación
Nacional en 1938, ordenó publicar sus Obras
Completas, ¿Con ello estuvo todo acabado o
quedó cosas pendientes?
No quedó nada por hacer, pues en aquella época
aún se recogieron muchísimas cosas. Sainz
Rodríguez que vivió en Santander mucho tiempo,
admiraba a Menéndez Pelayo, pues el padre de
Pedro Sainz, fue amigo suyo. El comunicó a su
hijo el fallecimiento del eminente polígrafo. El fue
uno de los difusores de las cartas del escritor
santanderino.
¿Cómo son sus Bibliotecas de Santander y Madrid?
Impresionante la de Santander. Fue gracias a su hermano Enrique qué se
encargó de revisarla y tenerla siempre al día. La de Madrid, donde estuvo
viviendo en el Hotel Las Cuatro Estaciones, situado en la calle del Arena, allí
tuvo pocos espacio, tan solo una habitación y no pudo tener una biblioteca. Los
libros los tenía en el suelo y amontonados. Después, en los veinte años que
vivió en el ático de la Real Academia de la Historia, allí pudo preparar una
enorme biblioteca privada.
¿Se relacionó bien con Juan Varela?
Se entendió a la perfección, pues fue el quien le descubrió. Le llevó a la Real
Academia. También le ayudó a ganar la Cátedra en la Universidad Central. El
no fue un pesado por el Conservadurismo, si lo fue sin embargo por luchar por
la cultura.
Emilia Pardon Bazán y él ¿fueron buenos amigos o discrepaban con
frecuencia?
Discrepaban frecuentemente, pues doña Emilia se metía mucho con él en
cartas que le enviaba, recibiendo contestación por su parte con un mejor
talante que Pardo Bazán, que tenía un pronto muy violento. Cuando escribía
Menéndez Pelayo a su hermano en Santander, le decía “Esta Emilia Pardo
Bazán, es tan pesada como siempre. No hay quien la aguante”.
¿Qué significó su etapa como Director de la Biblioteca Nacional?
Aquello fue un hecho muy positivo. Hubo mucho orden. La Biblioteca estaba
muy cerca de la plaza de Isabel II. El trajo muchos libros que no estaban allí y
que el consideraba que eran fundamentales traerlos para analizarlos y leerlos,
aportando la modernidad que hoy tiene esta institución. Fue la primera persona
que cambió el estilo de esta Biblioteca. La primera en número de volúmenes
que hay en España hoy.
La Universidad que
lleva su nombre en
Santander ¿Cómo ha
conmemorado
su
centenario?
Es
la
que
ha
conmemorado
de
formas diversas, toda
su historia, vida y
trascendencia
relacionadas con el.
Para escribir mi libro
relacionado con su
vida, me trasladé a
Santander y allí tenían
todas
las
publicaciones
referidas él. Allí se conserva toda su Biblioteca íntegra y ordenada, gracias al
esmero que durante años realizó su hermano. Creo que Santander es el lugar
donde ha recibido más homenajes. Prueba de ello son las huellas que hay
referentes a él en aquella ciudad.
¿Sigue existiendo ese comentario silencioso en torno a él o hay más
ignorancia que maldad?
Posiblemente la maldad esté escondida y la ignorancia manifiesta. Nadie va a
reconocer que nunca supo nada o lo hizo mal. Por tanto, hay que decir que
Santander se ha volcado con mantener su figura y sigue siendo profeta en su
tierra.
Toponímicamente ¿Hay referencias de su nombre en algún lugar de
España?
Hay muchos sitios. Yo lo recojo en mi libro Memoria de Menéndez y Pelayo.
Aquí, en Madrid, tiene una calle muy amplia, que no la han podido quitar, pues
con ese personaje no se atreven. Hay muchas personas, de todas las
tendencias que han hecho un gran elogio de él.
¿Llegó a ser sobre todo un hombre de paz?
Nunca fue agresivo, todo lo contrario que Valle-Inclán, pues no se le conoce
haber dado bastonazos a nadie, si bien es cierto que tenía unos prontos muy
fuertes.
Mariano Azores
El balcón de Madrid
UNA FAMILIA EN LOS ALTARES
EMILIO JORRIN
Del Instituto de Estudios Madrileños
ISIDRO MERLO QUINTANA. SANTO, MILAGRERO, PADRE, LABRADOR Y POCERO
MARIA TORIBIA. SANTA, MADRE, AMA DE CASA Y ERMITAÑA.
ILLAN, SANTO, hijo de ambos.
El pueblo tomó a los esposos como medianeros con Dios para casos
milagrosos; por, ejemplo, a San Isidro para enfermedades infantiles, como
abogado contra las calenturas y, sobretodo, su advocación más conocida,
patrón y protector de campesinos y labradores y a Santa María de la Cabeza,
reclama su intercesión para los matrimonios estériles y para los partos
peligrosos.
SAN ISIDRO, fue un seglar, casado y padre de familia, y un obrero asalariado.
Un hombre sencillo que se entregó a los demás con todas sus fuerzas.
Tierras, Virtudes y Cielo. Labré, cultivé, cogí. Con Piedad, con fe, con Celo.
San Isidro de Madrid. En 1589 comienzan los trámites de la canonización de
San Isidro, con la petición incluida del rey Felipe II, si bien los madrileños ya le
consideraban santo desde muy antiguo. El 14 de Junio de 1619 es beatificado
por el Papa Paulo V, que fija como fecha de su fiesta el 15 de Mayo. Y es
canonizado por Gregorio XV el 14 de Junio de 1622. Sin embargo, la muerte
del Pontífice hizo que se retrasara la Bula de Canonización (Rationi Congruit)
hasta el 4 de Junio de 1624; siendo entonces firmada por Benedicto XIII.San
Isidro es patrón de Madrid y día de precepto en la Capital desde 1621. El Papa
Juan XXIII extendió su patronazgo a todos los agricultores y campesinos
españoles por Bula ("Agri Culturam") dada en Roma el 16 de Diciembre de
1960. Su cuerpo se trasladó a la Colegiata, en tiempos de Carlos III. El Papa
Juan XXIII extendió el patronazgo de San Isidro a los agricultores y campesinos
españoles por Bula "Agri Culturam" dada en Roma el 16 de diciembre de 1960.
SANTA MARIA DE LA CABEZA
El 11 de Agosto de 1697, Inocencio XII la declara Beata y en 1752 es
proclamada como Santa María de la Cabeza.
A María Toribia le vino el sobre nombre “de la Cabeza”, por el hecho de que
algunos años después de su muerte fue colocada su cabeza en el altar de la
ermita de Caraquiz, su ermita que tanto cuidó, la cual se llamó Nuestra Señora
de la Piedad, en cuyo altar gozó por muy dilatado tiempo de una alta
veneración y fama, por los prodigios que obraba.
Así consta por la declaración efectuada por el cura de Torrelaguna D.Esteban
de Velasco, calificador de la Santa Inquisición, examinador del Arzobispado y
primer testigo en la información solemne del culto inmemorial de aquella sierva
de Dios que en el lugar citado se hizo con autoridad apostólica.
Con las gloriosas honras que se comenzaron a hacer a Isidro Labrador, ya
considerado santo a nivel popular, fue también creciendo la devoción de los
fieles a María de la Cabeza y muy especialmente en las riveras del río Jarama.
Se determinó entonces hacerla un mausoleo dentro de la ermita, el cual le fue
atribuido al rey Alfonso VIII el Bueno, que como en Madrid había honrado a
San Isidro con una capilla quiso no dejar menos honrada la memoria de su
santa esposa y se comenzó a celebrar su festividad el día 8 de septiembre.
No confundir con La Virgen de la Cabeza, venerada en la Basílica Nuestra
Señora de la Cabeza. Patrona de Andújar (Jaén) por bula del papa Pío X en
1.909 y de la Diócesis de Jaén por bula de Juan XXIII en 1.959. Goza de una
profunda devoción por su historia y su gran romería popular, que es la más
antigua de España.
EL ARCA DE SAN ISIDRO.
Ya se ha comentado que Alfonso VIII, el rey, ordenó que se construyera un
arca de cuatro llaves, para guardar el cuerpo incorrupto del santo, se tallase
una imagen del santo revestida de plata y se construyera una capilla en la
iglesia de San Andrés para mejor contemplación.
En el año 1.620, fue sustituida por otra de plata donada por la cofradía de de
los orfebres de Madrid, bajo la advocación de San Eloy, con motivo de su
canonización, formada por tablones de pino y forrada de cuero estucado..
A los lados figuraban dos cuartetas de Lope de Vega:
"Esta urna sacra encierra más cielo que tierra, y fue de un labrador cuya fe
labraba cielo a su tierra.
"Imitando a Eloy en celo, sus plateros la labraron, para decir que engastaron de
todo Madrid el cielo ".
Dibujos de M.D.Fuster. Están representados varios milagros: Los bueyes
arando, observados por Iván de Vargas a caballo. Isidro alimenta a las
palomas. Santa María de la Cabeza extrae de una olla vacía la comida
suficiente para un pobre. El arca, considerada de gran valor artístico, era y es
propiedad de la iglesia de San Andrés que lleva siglos reclamando su
devolución. Fue trasladada al palacio arzobispal y, tras ser restaurada
recientemente, se halla en la actualidad en la Catedral de la Almudena.
Las diferentes arcas, urnas y cofres, en los que se han conservado los restos
de San Isidro y Santa María de la Cabeza, se cerraban con cerraduras y
candados cuyas llaves eran repartidas entre diferentes depositarios para
proteger las reliquias. Una de las arcas interiores, encargada en 1692 por
Mariana de Neoburgo, esposa de Carlos II, en acto de agradecimiento al Santo
por mejorar su salud, es la que se conserva en la actualidad en la Colegiata de
San Isidro.
ROGATIVAS Y SUPERSTICIONES.
Recogido está en las crónicas de la Villa que ambos santos fueron sacados en
procesión en diversas ocasiones para pedir la lluvia.
En 1.709, se ordenó una procesión con el cuerpo del santo y las reliquias de
Santa María de la Cabeza, con salida por la Puerta de la Vega y en presencia
de los santos cuerpos se bendijeron los campos.
En la colegiata de San Isidro, entonces catedral, se efectuó en 1896 la
exposición del cuerpo de San Isidro, en el altar mayor. El motivo fue pedir al
santo la lluvia y el final de la guerra de Cuba. El día 4 de mayo se realizó una
procesión y comenzó a llover. Uno de los prodigios que le valió a San Isidro su
beatificación fue el hecho de que habiendo caído gravemente enfermo el
monarca Felipe III en Casarrubios del Monte (Toledo), a su regreso de Lisboa,
le fue llevado el cuerpo incorrupto del santo y el rey sanó milagrosamente.
Durante el reinado de Carlos II, el cerrajero del Rey, llamado Tomás, tomó
ocultamente un diente del santo y lo tuvo bajo su almohada en su última
enfermedad. A comienzos del siglo XVIII la reina María Luisa de Saboya, contó
al cardenal D'Estrée que una duquesa, muy preocupada por la poca salud de
su hijo, había obtenido un dedo de San Isidro. Una vez triturado, se lo había
hecho aplicar al muchacho, a partes iguales, en forma de pomada y lavativa.
Durante el reinado de Carlos III el cuerpo de San Isidro fue trasladado por
enfermedad de la reina Doña Amalia, el 19 de septiembre de 1760 al Palacio
del Buen Retiro, donde permaneció unos días.
LAS RELIQUIAS
Como nuestros lectores ya conocen el cuerpo incorrupto de
San Isidro ha gozado de distintos lugares de descanso y en la
actualidad se halla en la colegiata de San Isidro, junto con las
reliquias que se conservan de Santa María de la Cabeza.
Su talla de 1,75m. nos indica que fue un hombre muy alto
para la época. El 14 de mayo de 1.896 se abrió el arca y se
cambió el sudario.
SANTA MARIA DE LA CABEZA.
En 1.645, lunes día 27 de febrero, reinando Felipe IV, los
restos de María de la Cabeza fueron trasladados a Madrid, no
sin un verdadero disgusto y desaprobación de los ciudadanos
de Torrelaguna para mejor tratar los asuntos de su canonización. Las reliquias
se hallaban en una urna de ébano y marfil, que había sido donada, en 1.615,
por el Señor de Torote, don Fernando de Mendoza.
Se colocaron en el archivo de la Casa Consistorial, que se encontraba aún en
obras. Con este motivo se abrió la urna y se colocaron la cabeza y los huesos
en un cofre forrado de terciopelo carmesí con galones y clavazón de oro.
Terminadas las obras de la Casa de la Villa, se colocaron en el Oratorio.
Se efectuaron diversas gestiones del clero y pueblo de Torrelaguna para tratar
de la devolución pero el rey insistió en que se quedaran en Madrid, para mejor
tratar los trámites de su beatificación y canonización. Sin embargo, la muerte
de varios papas y reyes españoles, dilató en el tiempo la causa de la
canonización. En 1.729, el día 4 de febrero, se recogieron en el Oratorio del
Ayuntamiento los citados restos de Sata María de la Cabeza y junto con los de
San Isidro que estaban en la capilla de San Andrés, fueron trasladados a la
Colegiata de San Isidro en la calle de Toledo.
LOS MILAGROS.
La tradición devota le atribuye a san Isidro más de 400 milagros, que se
recogieron y estudiaron en su proceso de canonización. Milagros muy
populares que corrían de boca en boca. Quizás los más populares sean
aquellos que nos narran que los ángeles conducían sus bueyes mientras Isidro
rezaba; el milagro del pozo, salvando a su hijo; y en otra ocasión también
devuelve a la vida a María de Vargas, hija de su patrón y ahijada suya. Todos
ellos ya comentados en páginas precedentes.
Otros milagros también muy populares, pero quizás menos conocidos son estos:
Multiplicación de la harina en el molino después de haber dado de comer a unas
palomas hambrientas por la nevada existente.
1. Aconteció asimismo un día de fiesta en tiempo de verano que, habiendo
entrado como de costumbre a rezar en la iglesia de Santa María Magdalena,
dejó el borriquillo a la puerta. En esto entran en la iglesia unos muchachos y le
dicen: «Levántese corriendo, padre Isidro, que viene un lobo a comer a su
burro”. El santo varón les respondió: «Hijos, id en paz. Hágase la voluntad de
Dios.». Acabada la oración, salió tranquilo y halló al lobo muerto, y junto a él
ileso a su jumento.
2. Tenía el varón justo muy presente el dicho de Tobías a su hijo: «Si tuvieres
mucho, da en abundancia; si poco, precíate de dar de buena gana algo de eso
poco” (Tob. 4, 9). Acaeció un sábado que habiendo distribuido a los pobres
todo lo que había en la cocina, llegó un pordiosero pidiendo le diese algo; y no
teniendo a la mano otra cosa, compadecido, dijo a su esposa: «Te ruego,
querida esposa, que des a este pobre lo que haya sobrado del puchero.»
3. Isidro fue, según costumbre, hermano de una cofradía. Acostumbran los
cofrades a reunirse a comer juntos un día prefijado. Llegado éste, se juntaron
los hermanos; pero Isidro, como antes tenía que visitar las iglesias, llegó
cuando ya se había terminado la comida. A la puerta del recinto encontró unos
pobres que esperaban las sobras y los introdujo consigo. Al ver esto, algunos
de los cofrades le dijeron: «Pero, varón de Dios, ¿a qué traes contigo esos
pobres, si no hemos dejado más que tu ración?». A lo que replicó Isidro con
paciencia:
«Repartiremos
lo
que
haya
entre
todos.»
Entonces los que servían a la mesa fueron por la olla, a traerle la parte que se
le había guardado, y la hallaron llena de carne. Su glorioso cuerpo descansa
colocado en la iglesia de San Andrés, entre los gloriosos príncipes de los
Apóstoles, en un sepulcro hermoso; También a Santa María de la Cabeza, se
le atribuyen los suyos, como “el paso del río Jarama”.
SAN ILLAN, el hijo.
Ya vimos en el número anterior que nació en la casa de Iván de Vargas y de
niño fue protagonista del “milagro del pozo”. A la muerte de su padre se quedó
en Madrid al cuidado de la corta herencia que había recibido.
Posteriormente se desplazó al pueblo manchego de Cebolla, en tierras de
Toledo, se hizo ermitaño y fundó una ermita, en la cual fueron encontrados sus
restos. Dio nombre al pueblo de Illán de Vacas (Toledo).
Bellas Artes
MARIA ROSA CALVO-MANZANO
Arpista
Nacida por y para la música. Es la única presentación que haría y reconocerá
cualquier persona que tenga un conocimiento mínimo de nuestra entrevistada.
Pura naturaleza lírica desde los primeros pasos que dio a la vida y al mundo en
general. Nació en Madrid, en 1946, desde los cuatro años de edad, ya se
inclinó por la música. Con un largo curriculum, hemos de presentarla como
miembro de de la Cátedra de Arpa del Real Conservatorio Superior de Música
de Madrid. Ganó las oposiciones con el número uno de su promoción al cumplir
la mayoría de edad. Graduada en Arpa, Piano, Armonía, Contrapunto y Fuga.
Paralelo a ello cursó estudios Universitarios y por ello es Licenciada en
Filosofía y Letras y Doctora en Arquitectura por la Universidad Politécnica de
Madrid. En el terreno musical tiene más de 30 discos grabados y más de 150
libros sobre la Música publicados. Su trayectoria artística descrita sería
inabarcable. Ha sido fundadora y directora de la Asociación Arpista “Ludovico”
y es por este motivo, por el que el próximo día 13 de este mes de junio, recibirá
un merecido, admirado y cálido homenaje en la sede incomparable de la
Sociedad General de Autores.
¿Qué representa el arpa en la actualidad?
Para mí, es el centro y eje de mi vida. Desde muy niña tuve siempre una gran
pasión por la música, gracias a mi madre, desde la edad de cuatro años. En
aquel tiempo el arpa ha pasado de ser una absoluta desconocida a un
instrumento. Pues ya se la conoce, tiene público, seguidores, se compran
discos, libros y hay muchos estudiantes que siguen este instrumento musical.
Cuando gané la cátedra en 1965, fui la única catedrática de España, fuera de
Cataluña. No había estudiantes de arpa. Ese mismo año, también gané las
oposiciones de RTVE.
¿Qué significó para usted trabajar en Televisión Española?
Fue una gran oportunidad a la hora de actuar. Mi vida entonces era viajar por
los cinco continentes, pues hubo años, en mi época más álgida de conciertos,
que en un solo año llegué a dar nada menos que doscientos. ¡Una barbaridad!
¿Cómo empezó a tener alumnos?
En un principio solamente tuve dos alumnos. Pocos años después, me
encontré totalmente desbordada. De tal cantidad ha quedado la calidad.
Actualmente dejo 25 alumnas, que son catedráticas en toda España. Para mí,
lo más bonito de esta carrera didáctica ha sido la enseñanza, pues o lo vives
con pasión o es preferible no dedicarse a ella. Hay que estar al lado del
alumno, hay que ayudarle a crecer, como persona y llegar a conseguir que su
calidad profesional también sea humana.
En el Real Conservatorio de Madrid, trabajó junto a grandes músicos,
como Jesús Guridi, Federico Sopeña o Cristiobal Halffter ¿qué representó
aquella etapa?
He de decir que en mi época de estudiante, fui una auténtica afortunada.
Conseguí estar formándome junto a los mejores profesores y maestros del
siglo XX, como los que usted ha mencionado, entre muchos otros. Eran unas
personas, de una enorme formación humanística impresionante. El hombre,
para ser buen profesional, en cualquier área, primero ha de formarse como
humanista, pues el orden debe ser: intelectual, músico y buen intérprete.
Italia no sería nada sin la música. ¿Cómo fue su estancia allí?
Me fui a Siena, porque en Compostela no había arpa. Me fui becada para ir a
Italia. Aquello me resultó algo mágico, pues la ciudad es bellísima y aquello me
despertó el conocimiento de un país fascinante. Aquello es como un museo en
la calle.
¿Prefiere actuar de solista con el arpa o en conjunto con música de
Cámara?
Me gustan las dos formas. Si el repertorio que toco como solista es bello,
entonces soy muy feliz, porque puedo lucir mucho los efectos y los colores del
arpa, pero si la música de Cámara es apasionante, allí un músico se siente
mucho más lleno, hay más diálogo y más contrastes entre los timbres y los
efectos. Es, en suma un mundo apasionante.
Ha sudo miembro fundador de la Orquesta Sinfónica de Radio Televisión
Española, ¿Por qué no la vemos actuar más en la televisión?
He actuado muchísimo en la Orquesta. Me prejubilaron por Ley de
Incompatibilidades y lo dejé con mucha pena, pues la televisión para mí
actuación en el terreno artístico, ha sido un verdadero trampolín. Al salir de la
Orquesta, preparé el Doctorado y me lectura fue sobresaliente “Cum Laude”.
¿Sigue investigando en el arpa o ya está todo hecho?
Está todo por hacer. No se trata de números sino de calidad. Creo que he
aportado una buena bibliografía a la literatura artística de todos los tiempos y
también a la universal. He escrito una historia del arpa en distintas etapas,
como la Edad Media, Renacimiento, Barroco, Clasicismo, Romanticismo,
Impresionismo, etc. Hay mucho por hacer todavía. Mi ilusión es no morirme sin
hacer una Historia del Arpa en un solo Corpus.
En diversas ocasiones ha acompañado a los Reyes de España, en viajes
oficiales ¿Cómo es el programa de sus actuaciones?
He estado en importantes acontecimientos oficiales, representando a España
en el extranjero. Estuve en el Segundo Centenario de de la Nación Americana,
acompañando a Sus Majestades los Reyes Juan Carlos y Sofía. Aquello tuvo
una relevancia enorme.
¿Qué significa su Cátedra en el Real Conservatorio?
Creo que he aportado una filosofía nueva. El arpa fu considerado como un
instrumento romántico y ñoño. He investigado mucho en dos aspectos
concretos: En el sonido, en cantidad, sin perder la calidad. Para acercar al oído
del público, el instrumento y la calidad. Respecto al efecto que el arpa, se
puede tratar con un mismo criterio.
¿Cuántos años son necesarios para
la formación musical?
Toda la vida. Aún no me considero
formada (risas). Digo siempre que un
artista tiene que ser toda su vida
estudiante.
¿Tiene
asignaturas
musicales
pendientes de aprobar aún?
Siempre falta, pero depende de la
inquietud de cada persona, pues cada
uno de nosotros somos diferentes. Por
fortuna. En personal criterio, digo que
me gustaría mucho vivir más años, para
aprender aún más.
¿Cuántas horas hay que ensayar
diariamente?
No hay un número determinado.
Depende de las habilidades de cada
persona. Personalmente tengo mucha
facilidad para aprender. No me cuesta mucho tiempo. No necesito tanta
dedicación.
¿Qué nivel tenemos actualmente en nuestro país?
Yo diría que un nivel muy alto. El nuestro es uno de los mejores países del
mundo en el terreno musical. Tenemos alumnos de mucha calidad, formados
con unas determinadas facultades, tales como que sean intelectuales, músicos
e intérpretes.
¿Cuál es la cuna del arpa?
Desde el punto de vista histórico es Mesopotamia. Como toda la cultura
humana. En época más reciente, Francia, que a partir del siglo XVIII, tuvo
mucho que decir en los avatares organológicos. Al amparo de todo esto
nacieron muchos arpistas y surgió entonces un gran repertorio.
¿Con que instrumento se acomoda mejor el arpa para una actuación
brillante y notoria?
Con los de viento-madera. A mi particularmente me encanta con el violoncelo.
Es una combinación perfecta y muy atractiva.
¿Qué tipo de música prefiere para acompañar?
Me gusta mucho el barroco, quizá por ser yo misma muy barroca escribiendo.
Es un estilo en el que me encuentro muy cómoda, pues me gusta ornamentar y
glosar. He escrito mucho sobre ese estilo. Siempre digo que el profesor que
enseña a estudiar, enseña también a enseñar. Por tanto enseño en mil formas
diferentes.
Tecla, vihuela y arpa ¿combinan bien?
Esto fue un maridaje que se vivió en el Renacimiento español, con estos tres
instrumentos. Eran los que podían producir polifonía, provocando un trasvase
de lo que en un principio fue polifonía vocal, después de la música gregoriana,
que era de una sola voz.
¿Combina con la zanfonía?
En la Edad Media y después, si se tocaba en conjunto ese instrumento, donde
la zanfonía estaba en ese bloque de instrumentos. Actualmente, se utiliza
cuando hay un pensamiento historicista, para tocar el repertorio de épocas
pasadas, con instrumentos de rigor históricos.
Es también Presidenta de la Asociación Arpista “Ludovico”. ¿Qué
significa esta Fundación?
Es en principio una Asociación y de ahí nació la Fundación que lleva mi
nombre. Fue un movimiento que intenté poner en marcha y ahora estamos
celebrando el 25 aniversario de su existencia. Se hizo para engrandecer lo que
fue el Arpa Española, cuyo patrimonio es de una riqueza enorme. Tanto en
instrumentos históricos, antes de que Francia fuera importante en el siglo XVIII.
España tuvo también mucho que decir en la Edad Media, en la evolución de
este instrumento.
¿Han llegado a promocionar futuras generaciones?
Así es. Para ello, hemos creado un Concurso que ha sido realmente estelar.
Tuvo unos premios tan importantes que atrajo a los mejores arpistas del
mundo. El primer premio es un arpa de la más alta gama, de conciertos. De un
valor de unos 60.000 €. Incluye también una gira de conciertos por España;
otro con la Orquesta de Radio Televisión Española; otro concierto con
Televisión Española, solamente como recital y finalmente, la grabación de un
disco. Lo cual, el conjunto de este Premio ha sido un trampolín a la fama.
¿Cuántos instrumentos ha podido recopilar a lo largo de su carrera?
Tengo más de cuatrocientos, de los que una cuarta parte son de arpas. Por
ello, pensé crear una Fundación para dar vida a este enorme patrimonio. Está
amparado por una magnífica biblioteca, compuesta por unos 20.000 volúmenes
de Historia, Arte, Filosofía y naturalmente Arpa. Sobre este instrumento he de
decir que está publicado todo lo que se ha escrito. Todo esto en bloque, ha
pasado a ser la Fundación que lleva mi nombre.
Su Majestad la Reina Sofía es amante de la Música y una gran melómana
¿Qué le ha dicho por sus interpretaciones?
En primer lugar, he de decir que Su Majestad la Reina, es de una sensibilidad
exquisita y artísticamente excepcional. Aprecia muchísimo la calidad musical.
Además, se emociona. La Música la conmueve. Por tanto, ha sido muy
agradable tocar para ella, pues cuando tocas para un público que reconoce y
agradece lo que haces, para el artista es la mejor recompensa que recibe.
¿Seguirá su trayectoria de
actuaciones para combatir
el tedio o sin la música no
sabría usted vivir?
Afortunadamente no se lo que
es el tedio, ni tampoco el
aburrimiento. Me interesan
demasiadas cosas como para
comprender que significa el
aburrimiento. Mi problema ha
sido que, tengo interés por
todo y en una vida no caben
tantas aficiones.
¿Ha actuado en aspectos
benéficos en algunas ocasiones?
Actúo de esta forma desde siempre. Lo he hecho toda mi vida y ahora que
estoy jubilada, pienso que es la mejor forma de colaborar. Lo hago con un gran
sentido de amor.
Mariano Azores
Nuestro Patrimonio
LA REAL CASA DE CORREOS
MARIANO AZORES
Del Instituto de Estudios Madrileños
Después de idas y venidas a lo largo de la Historia, en la existencia de varios
inmuebles que han transformado la Puerta del Sol y su entorno, he de decir
que, este palacio que se erige ante nosotros, hoy acoge en su interior, la sede
de la Comunidad Autónoma de Madrid, cuyo Presidente es Ignacio González
González, desde el 20 de septiembre de 2012. Este edificio, es obra del
arquitecto francés Jaime Marquet, que había sido en un principio, el autor de
adoquinar las calles principales de nuestra Villa y Corte. Al haber sido
designado en un principio, para realizar este tarea, el arquitecto madrileño,
nacido en Ciempozuelos, Ventura Rodríguez Tizón. Pero una serie de
circunstancias adversas a él, tales como el apoyo incondicional de Fernando
Silva y Álvarez de Toledo, Duque de Alba, a favor de Marquet, y la muerte del
Rey Fernando VI, dio como resultado el descabalgamiento de Ventura
Rodríguez de aquel proyecto, pese a ver analizado y revisado todo para llevarlo
a cabo. Esta decisión final, causó un gran impacto a todos los habitantes de
Madrid, provocando grandes críticas y dando lugar al famoso dicho:”Al
arquitecto la piedra y la casa al empedrador”.
Pese a esos cambios inesperados, hemos de señalar que, la designación de
Jaime Marquet, se debió a la decisión que había tomado la Casa de Alba, pues
con anterioridad, este arquitecto, había
construido el magnífico palacio existente en
Piedrahita (Ávila) y en el Palacio Real de
Aranjuez (Madrid). Por todo lo aquí expuesto,
el Rey Fernando VI, le había concedido el
título de Director Honorario de la Real
Academia de Bellas Artes de San Fernando.
La Real Casa de Correos, que ahora tenemos
frente a nosotros, es un edificio de líneas
sencillas, que integra paneles de ladrillo rojo con rececados de caliza blanca,
procedentes de Colmenar de Oreja (Madrid). Lo que da como resultado un
conjunto agradable. En su parte central, podemos contemplar la enorme puerta
principal, formada por un arco de medio punto, con un medallón en el centro,
en el que figura Hércules, rematado por un frontón triangular, con el Escudo
Real, con trofeos y leones. Este conjunto de esculturas, fueron realizados por el
escultor de la época, Antonio Primo. En un principio, se instalaron en este
edificio, dependencias como la Dirección General de Correos y algunas
dependencias del Gobierno Militar. Al terminar la Guerra Civil, se instaló la
Dirección General de Seguridad. Actualmente es la sede de la Comunidad
Autónoma de Madrid. Corona el edificio su famoso reloj, obra de José
Rodríguez Losada, que fue inaugurado en noviembre de 1866.
Libro Recomendado
EL COLOR DE LA TINTA
Nicolás del Hierro. Vitrubio. Madrid, 2012
598 páginas. 21 €
Este hermoso volumen es sin duda un regalo para los ojos de quien se atreve a
bucear en su interior. La riqueza de su contenido, es un verdadero placer para
los amantes de la lírica, que arranca y reúne ahora nada menos que en
cincuenta años. Toda una vida, que nos ofrece todo el abanico de quien ha
sido capaz de aunar la riqueza de este conjunto de pensamiento, contenido
nada menos que en la poesía pura. Su autor, es un perseguidor de este estilo
literario, comenzando desde sus orígenes a confeccionar algo tan difícil y con
estilos diferentes este precioso conjunto que recoge en este gran volumen.
Su labor es de cosecha propia y ha sabido huir de esos estilos, muchas veces
indefinidos o mezclados para dar la sensación de un estilo novedoso y
presentarlo a los amantes de la escritura poética. Pertenece a esa generación
denominada por él, como de flor de bala. No ha querido nunca encuadrarse en
pertenecer a grupos o generaciones, provenientes de determinadas modas o
clases, que pasados los años, han sido conocidas como la generación tal o
cual, en consonancia a los años de sus
nacimientos.
Su labor ha sido creada a sí misma y nunca ha
“copiado” estilos o parecidos ya realizados años o
siglos atrás. Ha sido el día a día lo que ha ido
plasmando en esas casi seiscientas páginas que
ahora ven la luz, para el deleite y el análisis de lo
plasmado. Por analizar una antología mínima de su
vasta obra, comentaremos por ejemplo Lectura de
la niebla, en la que hay miles de preguntas y
respuestas, con el ánimo de intentar ver la claridad
de las tinieblas que en tantas ocasiones nos
acosan y acompañan al mismo tiempo. ¿Estaremos
permanentemente en la confusión de nuestro ser
vivo? ¿Las preguntas que nos hacemos cada día
son lógicas o es la permanente duda aún no
despejada a pesar de los años cumplidos?
¿Sentimos la soledad como algo natural y dentro de nuestra forma de ser o es
algo doloroso que tenemos que intentar combatir día a día y habituarnos a
nuestro pesar en cada día? Quizás estas dudas nos la pueda despejar en El
dolor de la ausencia
La obra es al mismo tiempo la conjunción de una nostalgia, evocación,
sufrimiento, evocación, nostalgia o consecuencias de una feroz experiencia de
diferentes guerras vividas en primera persona, el haber sentido determinado
tipo de hambre o la también llamada la mordedura de los pucheros. Todo esto
y mucho más podremos analizarlo de forma tranquila y detenida, leyendo este
conjunto de verdaderos poemas, nacidos de la verdad sincera de Nicolás del
Hierro. Felicidades, Maestro.
Laura Azores
Mesa y Mantel
por Misericordia Torres
Es en la época de verano cuando mejor se consumen, pero actualmente se puede
hacer durante todo el año. No sabe realmente su procedencia, pero a nuestro país
llegó a través de los árabes en la Edad Media. Actualmente los países de mayor
producción en el Mediterráneo, son España, Francia y Marruecos, pues es
necesario que crezca en regiones cálidas.
“CÁPSULAS DE CALABACIN CON QUESO”
Para 6 comensales
INGREDIENTES
1 calabacín largo y delgado
100 grs. de queso gruyere rallado
50 grs. de queso manchego rallado
Mantequilla
Sal
En primer lugar lavaremos el calabacín, lo cortaremos en rodajas de un centímetro de
grosor y las coceremos en agua hirviendo con sal durante unos minutos.
Después las escurriremos y las sazonaremos con sal, pintándolas con mantequilla, las
rebozaremos con queso manchego y las espolvoaremos con el de gruyere.
Las colocaremos en placa de horno engrasada y gratinadas. Colocar dos rodajas en cada
cápsula y las serviremos calientes como aperitivo.
Poemas de Siempre
La piel de toro
Negra quietud que salpicas la sangre
con manto de amapolas
dulce piedad de astas rotundas
tu piel fundó Cartago tira a tira
divina perfección que inauguras la noche
celeste toro rumor de arena,
rumor de agua.
Cabeza sosegada en el dolor
sudas y respiras en gotas de rocío
alma encendida el cuerpo acribillado
desgarro de la noche
no mueres de agonía,
mueres de rabia.
Cristina Matilla