MEMORANDUM LEGAL EL AVISO DE DESPIDO DE UN DOCENTE QUE SE ENCUENTRA HACIENDO USO DE LICENCIA MÉDICA I. Situación práctica: A fines de diciembre de cada año, las administraciones de los colegios deben notificar como último plazo, el despido de los docentes que no están considerados en la planificación del año escolar siguiente, avisando que su contrato de trabajo expirará el 28 de febrero del año próximo. Así, lo normal será que el Colegio invoque como causal de despido la contenida en el artículo 161 inciso primero del Código del Trabajo, esto es, necesidades de la empresa. De esta forma, el Colegio cumple con la formalidad establecida en el artículo 87 del Estatuto Docente para no verse obligado a indemnizar al docente con el pago de las remuneraciones del año escolar siguiente. La controversia se presenta si a la fecha del aviso previo, el docente está haciendo uso de licencia médica, sea por enfermedad común o profesional. Respecto a esta situación, existen dos posiciones: una, que considera que el aviso en este caso es ineficaz, de modo que el docente seguirá vinculado al Colegio un año escolar más, o bien, de perseverar el empleador en el despido, el docente podrá demandar además en sede judicial el pago de las remuneraciones por el siguiente año escolar; y segunda, que el aviso cumple con la formalidad exigida por la ley y que la licencia médica intermedia no altera en nada su validez y eficacia. II. Alcance del cumplimiento del aviso oportuno: El hecho que el empleador cumpla oportunamente con el aviso previo al docente, únicamente implica la obligación, o no, de pagar la indemnización especial del artículo 87 del Estatuto Docente, esto es, las remuneraciones correspondientes al año escolar siguiente. Así, por una parte, no obstante que el empleador cumpla con dar oportunamente el aviso previo, el Tribunal podrá declarar de igual modo el despido del docente como injustificado, ordenando en tal caso que se pague el incremento de un 30% respecto de la indemnización por años de servicio que corresponda. Es importante señalar que la Corte Suprema sostiene la doctrina que aunque el despido se declare como injustificado, indebido o improcedente, si el empleador dio el aviso con la antelación exigida en la ley, no existe obligación de pagar la indemnización especial del artículo 87 del Estatuto Docente. III. Dirección del Trabajo: La Dirección del Trabajo sostiene en Ordinario Nº 5882/367 de 02.12.1999, que el aviso de despido enviado mientras el docente hace uso de licencia médica es ineficaz y debe entenderse que el contrato de trabajo debe mantenerse vigente. En efecto, dicho dictamen razona en este sentido: “… forzoso resulta concluir que tratándose de un dependiente acogido a licencia por enfermedad profesional no procede poner término a la respectiva relación laboral por las causales antes mencionadas, como tampoco dar el aviso pertinente invocando tales causales, de manera que si un empleador invoca alguna de tales causales en las circunstancias señaladas, dicho despido, en opinión de este Servicio, no produciría efecto alguno, toda vez que con ello se estaría infringiendo una norma de carácter prohibitivo, cuya sanción es la nulidad//. Con todo, es necesario puntualizar que la nulidad, de acuerdo a las reglas generales, debe ser declarada por los tribunales de justicia, careciendo este Servicio, de consiguiente, de facultades para pronunciarse sobre el particular//. Al tenor de lo expuesto, posible es afirmar que para que el referido aviso surta efecto, el empleador debería darlo una vez que el trabajador se reintegre a sus labores, después de expirado el plazo de la aludida licencia//. Todo ello, sin perjuicio del derecho del trabajador de reclamar ante el Juzgado del Trabajo competente, en conformidad al ordenamiento jurídico laboral vigente, en el evento de que en la práctica se haya materializado el despido//. No obstante lo expuesto precedentemente y atendida la calidad de profesional de la educación de las trabajadoras por las cuales se consulta, se hace necesario señalar que la aplicación de las causales de necesidades de la empresa y desahucio, tienen una reglamentación especial en el Estatuto Docente, cuyo artículo 87 al efecto dispone: "Si el empleador pusiere término al contrato de trabajo de un profesor" por cualquiera de las causales señaladas en el artículo 161 del Código del Trabajo, deberá pagarle, además, de la indemnización por años de servicios a que se refiere el artículo 163 de ese mismo Código, otra adicional equivalente al total de las remuneraciones que habría tenido derecho a percibir si dicho contrato hubiese durado hasta el término del año laboral en curso. "Esta indemnización adicional será incompatible con el derecho establecido en el artículo 75 del Código del Trabajo. "El empleador podrá poner término al contrato por la causal señalada en el inciso primero, sin incurrir en la obligación precedente, siempre que la terminación de los servicios se haga efectiva el día anterior al primero del mes en que se inician las clases en el año escolar siguiente y el aviso de tal desahucio haya sido otorgado con no menos de sesenta días de anticipación a esta misma fecha. De no ser así, tal desahucio no producirá efecto alguno y el contrato continuará vigente".”. Al respecto, es importante hacer notar algunos alcances a la doctrina de la Dirección del Trabajo: a) En primer término, el Dictamen confunde los efectos jurídicos de la terminación efectiva del contrato de trabajo con los propios del aviso previo de terminación; b) En segundo lugar, la propia Dirección del Trabajo reconoce que no tiene competencia para declarar nulo el aviso de despido y mantener vigente el contrato de trabajo, señalando expresamente que dicha facultad es privativa de los tribunales de justicia. c) La Dirección del Trabajo no se hace cargo del sentido práctico que tiene el aviso previo, y más aún de porqué el Legislador lo aumenta a 60 días, caso especial dentro de la normativa laboral. IV. Tribunales de Justicia: En cuanto al criterio de la jurisprudencia judicial, es importante tener presente que en definitiva son los tribunales ordinarios de justicia (de competencia laboral, Corte de Apelaciones y Corte Suprema) los que resolverán la eficacia de un aviso de despido de un docente con licencia médica. En este punto, cabe considerar que la Excma. Corte Suprema ha mantenido invariable el criterio que la validez y eficacia del aviso de despido dado en tiempo oportuno, no se altera en nada si el docente a esa fecha hacía uso de licencia médica. Así, el aviso de desahucio dado a un profesor por necesidades de la empresa, para que produzca efecto, debe ser hecho para que se haga efectivo el día anterior al primero del mes siguiente y otorgado con no menos de sesenta días de anticipación a esta misma fecha. Dándose ambos presupuestos, es irrelevante que el actor se hubiese encontrado con licencia médica al momento de comunicársele el término de sus servicios, puesto que dicha licencia sólo faculta al trabajador para no concurrir al desempeño de sus funciones con el fin de restablecer su salud, pero no lo exonera del cumplimiento de los restantes deberes inherentes al cargo. Los fundamentos prácticos para tal decisión, la Corte Suprema los resume en que “Toda vez que el empleador dio conocimiento oportuno a la docente sobre el término del contrato y la fecha en que éste se haría efectivo, si ello no pudo verificarse en la forma prevista por hechos que no fueron imputables a ninguna de las partes -la existencia de la licencia médica de la actora-, no puede considerarse negligente la actuación de aquél y que haya impedido a la actora, en forma oportuna, tomar conocimiento del cese de su vínculo contractual y obtener una nueva fuente de ingresos”. En otro caso, la doctrina que se resalta es que “La empleadora que envía un aviso en el cual se comunica al empleado -profesional de la educación en el caso- sobre la terminación del contrato por necesidades de la empresa, con un plazo de sesenta días de anticipación, queda eximida del pago de la indemnización adicional prevista en el inciso primero del artículo 87 del Estatuto Docente, aun cuando el empleado, a la fecha que se produce la notificación se encontraba gozando de una licencia médica por enfermedad”. V. Conclusión De lo expuesto, no cabe sino concluir que el aviso de despido de un docente dentro del plazo establecido en el artículo 87 del Estatuto Docente, aún cuando a la sazón éste haga uso de licencia médica, tiene la eficacia por una parte de dar por cumplida la obligación de parte del empleador y por otra, de exonerarlo del pago de las remuneraciones por el año lectivo siguiente. En efecto, el aviso con 60 días de anticipación no tiene otro objetivo que informar debidamente al docente que no continuará el año lectivo siguiente y darle la posibilidad de buscar un empleo en tiempo oportuno. Así, lo que el Legislador ha protegido es la información del docente a dicha situación, ya que un aviso tardío precisamente puede generar la imposibilidad de encontrar otra fuente de trabajo en el ámbito docente. En este punto, es importante destacar los siguientes considerandos de una sentencia de la Excma. Corte Suprema: Séptimo: Que en la sentencia que se revisa, aún cuando se estableció que el aviso a la actora se dio el día 29 de diciembre de 2.003 y que el contrato de trabajo terminó el 29 de febrero de 2.004, se estimó que encontrándose ella con licencia médica, el cómputo del plazo de sesenta días sólo podía iniciarse a la fecha del término del beneficio. Para ello se invocó el inciso tercero del artículo 161 del Código del Trabajo el que previene que "Las causales señalada en los incisos anteriores no podrán ser invocadas con respecto de los trabajadores que gocen de licencia médica por enfermedad común, accidente del trabajo o enfermedad profesional, otorgada en conformidad a las normas legales vigentes que regulan la materia." Octavo: Que, interpretando la norma en estudio, al tenor de los artículos 19 y 20 del Código Civil cabe consignar que en ella no se consulta ningún hecho o situación que produzca la suspensión del plazo de sesenta días de antelación con que debe otorgarse el aviso a la actora, para eximir al empleador del pago de la indemnización. De este modo, no es posible aplicar por analogía la situación a que se refiere el inciso final del artículo 161 del Código del Trabajo ya referida en el motivo anterior, pues tratándose de una norma prohibitiva, ella es de alcance restrictivo. Noveno: Que, por otro lado, si bien el artículo 87 tantas veces citado alude al artículo 161 del Código del Trabajo, esta referencia sólo dice relación con las causales que autorizan el pago de la indemnización adicional y especial que prevé la primera de las disposiciones señaladas, la que, por una parte, tiene por objeto otorgar al profesional de la educación la posibilidad de sustentarse durante el tiempo en que se produce una nueva fuente de ingresos y, por la otra, sancionar la falta de aviso previo oportuno. Décimo: Que, por todo lo anteriormente razonado, debe concluirse que los sentenciadores del grado, al decidir que es procedente la indemnización adicional, al haberse suspendido el plazo de desahucio por encontrarse la actora con licencia médica, han infringido dicha norma legal, y que esta contravención tuvo influencia sustancial en lo dispositivo del fallo al condenar a la demandada al pago de una indemnización que era del todo improcedente. Camilo Cortés Bosques Abogado