Poder Judicial de la Nación

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Poder Judicial de la Nación
DAÑOS Y PERJUICIOS. MUERTE POR DISPARO DE ARMA EN
UNIDAD MILITAR. INAPLICABILIDAD DE LA LEY 19.101.
FALLOS
“VALENZUELA”
y
“BERTINOTTI”
CSJN.INCAPACIDAD QUE SUPERA EL 66 %.APLICACIÓN EN
EL
CASO
DE
LAS
NORMAS
DEL
DERECHO
COMÚN.
RESPONSABILIDAD DEL ESTADO COMO DUEÑO DE LA COSA
RIESGOSA
Y
LA
CULPA
CONCURRENTE
DE
LA
VÍCTIMA.
VALOR VIDA. PÉRDIDA DE CHANCE.REPARACIÓN.HECHO DE
LOS
DEPENDIENTES.
DEBER
DE
GARANTÍA.FALLOS
“VADELL” Y “COSSIO” CSJN.
PODER JUDICIAL DE LA NACIÓN R.S3T.164f*2/11
///la ciudad de La Plata, a los
23
días
del
mes
de diciembre del año dos mil ocho, reunidos en
Acuerdo los señores Jueces que integran la Sala
Tercera de esta Cámara Federal de Apelaciones de
La Plata, toman en consideración el expediente n°
15.386/08:
Nacional
“Matilla,
s/Daños
Héctor
y
J.
Y
Perjuicios”,
otro
c/Estado
procedente
del
Juzgado Federal de Primera Instancia de la ciudad
de Junín. Practicado el pertinente sorteo el orden
de
votación
resultó:
Carlos
Alberto
Nogueira,
Carlos Alberto Vallefín y Antonio Pacilio.
El doctor Nogueira dijo:
I. Antecedentes.
1. Conforme se desprende del
escrito de demanda, el 13 de agosto del año 1994,
M. se encontraba en la sala de armas, de la Unidad
Grupo
de
Artillería
N°
101
de
Junín,
cuando
recibió un disparo de arma de fuego, producido por
una
pistola
reglamentaria
1
marca
“Browning”,
Poder Judicial de la Nación
calibre 9 mm (manipulada por el cabo G.), que le
causó su muerte de manera instantánea (...).
2.
A
su
turno
el
a
quo
resolvió hacer lugar a la demanda deducida contra
el Estado Nacional (Ministerio de Defensa-Estado
Mayor General del Ejército) y G., condenándolos
solidariamente al pago, dentro de los diez días de
quedar firme la sentencia, de la suma de (...) con
más los intereses desde el fallecimiento y hasta
su
efectivo
pago,
aplicando
la
tasa
activa
promedio mensual que percibe el Banco de la Nación
Argentina
para
sus
operaciones
de
descuento
de
documentos comerciales (...).
3.
Contra
dicha
resolución,
dedujeron recurso de apelación la parte actora, el
Estado Nacional y G.(...).
4. Asimismo, los abogados de
la parte actora (...) apelaron sus honorarios por
bajos, (...).
II. Los agravios.
1. De la parte actora.
Se limitan al quantum de los
montos
ya
indemnizatorios,
que
entre
no
el
existiría
daño
y
por
una
las
considerarlos
relación
sumas
bajos,
proporcional
fijadas,
tanto
en
concepto de daño patrimonial como de daño moral
(...).
1.1.
patrimonial,
expresó
que
Con
relación
al
daño
el
magistrado
no
tuvo
presente la edad de la víctima, su óptimo estado
2
Poder Judicial de la Nación
de
salud,
su
posible
ascenso
en
la
carrera
militar, la excelente relación que tenía con su
familia,
así
como
progenitores
no
tampoco
han
consideró
que
realizado
los
aportes
previsionales suficientes que puedan asegurar un
sustento
mínimo
de
la
tercera
edad
(ya
que
su
padre es taxista y su madre, ama de casa). Por
ello, concluyó que la suma de (...) para cada uno
es exigua, en comparación con otros precedentes en
donde se fijaron montos mayores.
1.2. En cuanto al daño moral,
manifestó que la desproporción en su cuantía es
evidente
con
respecto
a
otros
precedentes,
de
circunstancias similares (...).
2. Del Estado Nacional.
2.1. El Estado Nacional alegó
la ausencia de responsabilidad de su parte en el
hecho
dañoso,
argumentando
responsabilidad
directa
que
de
existiría
G.,
ya
una
que
la
manipulación del arma por parte de éste se realizó
incumpliendo
negligencia
instrucciones
e
inobservancia
recibidas,
de
los
con
reglamentos.
Agregó que al haber excedido su función, G. dejó
de
ser
un
dependiente
para
convertirse
en
un
extraño.
También
consideró
que
existe
culpa
concurrente de la víctima, ya que al momento de
entrar
a
la
sala
de
armas,
se
encontraba
franco, y sin la debida autorización.
3
de
Poder Judicial de la Nación
2.2. En segundo lugar, se agravió de
la
fijación
de
una
indemnización
del
derecho
civil, al entender que el supuesto encuadra en una
obligación contractual regida por la ley 19.101.
Explicó que los beneficios de esta ley constituyen
un régimen específico y excluyente, que revisten
un doble carácter: “resarcitorio y previsional”,
citando en su apoyo el fallo “Bertinotti” de la
Corte Suprema de Justicia de la Nación.
2.3.
“(p)onderada
y
Por
último,
prudencial
solicitó
reducción
de
una
la
indemnización fijada en concepto de daño moral”
(...).
2.4. La actora contestó los agravios
del Estado Nacional (...). En su escrito, pidió se
declare la deserción del recurso de apelación del
Estado
Nacional,
sostuvo
que
la
por
extemporáneo.
actuación
de
Al
respecto,
oficio
de
este
Tribunal por la cual declaró inválida la cédula
(...) y se tuvo por presentado el memorial (...)
vulnera
el
derecho
de
defensa,
las
normas
del
debido proceso y de igualdad de las partes, porque
otorga un beneficio a una de ellas en desmedro de
las demás.
3. De G..
3.1.
La
defensora
oficial
de
G.
solicitó la modificación de la condena en atención
a la culpabilidad de la víctima en el hecho; lo
hizo
por entender que M. conocía el riesgo que
implicaba entrar a la sala de armas.
4
Poder Judicial de la Nación
3.2.
del
quantum
Asimismo,
reclamó
indemnizatorio
la
por
reducción
considerarlo
excesivo (...).
III. Consideración de los agravios.
1. La deserción del recurso del Estado
Nacional.
1.1.
examinar
el
Como
pedido
cuestión
preliminar,
formulado
por
la
cabe
parte
actora(...), relativo a la extemporaneidad de la
expresión de agravios presentada, en su momento,
por el Estado Nacional (...).
1.2.
Dicha
pretensión,
en
rigor,
carece de sustento y no puede prosperar. Ello es
así,
toda
vez
que
la
actora
no
se
opuso
oportunamente a la resolución (...), por la que se
declaró inválida la notificación (...). En
virtud
del principio de preclusión -que rige los procesos
civiles-
el
planteo
consecuencia, ha de
resulta
extemporáneo
y,
en
rechazarse.
2. La normativa aplicable.
El
Estado
Nacional
alegó
que
la
aplicación al sub lite de las normas de derecho
civil no corresponde, en virtud de la existencia
de un régimen específico la ley 19.101, según
el cual los beneficios otorgados revisten un doble
carácter
postura
(resarcitorio
en
el
fallo
y
previsional).
“Bertinotti”
de
Fundó
la
su
Corte
Suprema de Justicia de la Nación.
2.1. La Corte Suprema de Justicia de
la
Nación,
en
sus
precedentes
5
“Valenzuela”
Poder Judicial de la Nación
(Fallos:
315:1732)
y
“Bertinotti”
(Fallos:
315:2207), resolvió que no corresponde otorgar a
un
conscripto,
consecuencia
servicio,
cuando
que
de
una
ha
la
sufrido
realización
indemnización
ellas
lesiones
le
de
del
hubiesen
como
actos
derecho
de
común
causado
“(u)na
disminución menor del sesenta y seis por ciento
para el trabajo en la vida civil”, esto es, cuando
la ley militar no prevé un haber de retiro, sino,
antes bien, un régimen de indemnización específico
que,
precisamente,
desplaza
al
sistema
resarcitorio del derecho común.
La
doctrina
judicial
que
emana
de
estos fallos ha sido confirmada recientemente por
la Corte Suprema (en causa “Morelli, José María
c/Estado Nacional- Ministerio de Defensa- Ejército
Argentino
fuerzas
s/Accidente
de
Tribunal,
diversas
en
seguridad”,
ha
ámbito
Fallos:
mantenido
causas(conf.,
el
un
326:407).
criterio
“Ramua,
militar
Este
similar
Hipólito
y
y
en
otra
c/Correa C. Y Prefectura naval Argentina s/daños y
Perjuicios”, del 12/09/1996; “Sosa, Daniel Alberto
c/Ejército
Argentino
s/daños
y
perjuicios”,
del
11/05/1999, entre otros).
2.2. Sentado ello, se advierte que, si
bien
el
criterio
antes
reseñado
no
incluye
el
supuesto de muerte, es dable concluir como lo
hizo el juez de grado que es asimilable a un
supuesto
de
incapacidad
del
6
100
%,
en
el
que
Poder Judicial de la Nación
resulta aplicable el régimen de derecho común, al
superar el 66 %.
2.3. En consecuencia, el planteo de la
codemandada debe ser rechazado.
3.
La
responsabilidad
del
Estado
Nacional.
Despejada la cuestión relativa a la
aplicabilidad
de
las
corresponde
analizar
Nacional,
relativos
normas
los
de
derecho
agravios
a
la
común,
del
Estado
ausencia
de
Nacional
alegó
su
fundamento
de
la
responsabilidad de su parte.
El
Estado
irresponsabilidad,
con
el
que
manipulación del arma, por parte del cabo G., se
realizó
incumpliendo
negligencia
e
instrucciones,
inobservancia
de
los
con
reglamentos,
por lo que le cabría una responsabilidad directa y
exclusiva.
Asimismo,
argumentó
que
al
haber
excedido la función, el cabo G. dejó de ser un
dependiente para convertirse en un extraño.
Tampoco este agravio tendrá acogida en
este Tribunal.
3. 1. Responsabilidad del Estado por
los hechos de sus dependientes.
3.1.1. En efecto, de la lectura de las
constancias
de
la
causa
surge
que
resulta
aplicable a este supuesto el art. 1113, del Código
Civil,
que
en
su
primera
parte
dispone
“(L)a
obligación del que ha causado un daño se extiende
7
Poder Judicial de la Nación
a los daños que causaren los que están bajo su
dependencia...”.
El fundamento de esta norma no puede
hallarse
en
garantizar
la
culpa,
a
los
sino
en
la
terceros
necesidad
por
la
de
acción
eventualmente dañosa de las personas que actúan en
el interés del otro. El subordinado aparece así a
los ojos de los demás actuando como si fuese el
principal mismo, la prolongación de su persona o
su “longa manu” (confr., BUSTAMANTE ALSINA, Jorge,
Teoría General de la Responsabilidad Civil, Octava
Edición
Ampliada
y
Actualizada,
Ed.
Abeledo-
Perrot, Buenos Aires, 1992, p. 377).
Para
decir,
para
factor
de
siguientes
que
funcione
se
considere
que
responsabilidadcondiciones:
la
garantía
verificado
deben
1)
-es
este
reunirse
relación
las
de
dependencia; 2) ejercicio de la función; 3) acto
ilícito del subordinado.
Si esta responsabilidad se funda en un
deber
daño
de
garantía,
ocasionado
por
el
principal
su
debe
dependiente
asumir
el
actuando
en
vista del fin fijado por aquél, o utilizando los
medios puestos a su disposición, aunque hubiese
actuado contra la prohibición del principal o con
abuso de las funciones (confr. BUSTAMANTE ALSINA,
op. cit., p. 380).
3.1.2.
Sentado
ello,
corresponde
examinar si las condiciones exigidas se cumplen en
el sub examine.
8
Poder Judicial de la Nación
No se encuentra controvertido que
G.
se encontraba al momento del hecho dañoso bajo
la dependencia del Ministerio de Defensa, Estado
Mayor
General
del
Ejército.
Ello
ha
sido
reconocido por el Estado Nacional (...), y, está
probado con las declaraciones testimoniales (...),
así como con el oficio contestado por el Ejército
Argentino (...).
3.1.3.
El
Estado
Nacional
pretende
atribuir una responsabilidad directa y exclusiva
al
cabo
Guzmán,
instrucciones
por
haber
recibidas,
actuado
con
incumpliendo
negligencia
e
inobservancia de los reglamentos.
3.1.3.1 .Los argumentos mencionados no
son suficientes para exonerar de responsabilidad
al
Estado
por
el
hecho
cometido
por
su
dependiente.
3.1.3.2
En
efecto,
quedó
demostrado
que, al momento del hecho, G. era auxiliar de la
sala de armas, que fue especialmente instruido por
el encargado de dicha sala (...) para el manipuleo
de armas y, asimismo, que entre sus funciones se
encontraban las de recibir y entregar armamento,
como de su limpieza y mantenimiento (...).
3.1.3.3. Resulta claro, entonces, que
no existen dudas de la existencia de una relación
de
causalidad
entre
la
función
que
tenía
encomendada el demandado y el daño producido, que
autoriza a responsabilizar al Estado en virtud del
art. 1113, primera parte, del Código Civil.
9
Poder Judicial de la Nación
3.1.4. En este sentido, cabe recordar
que la Corte suprema de Justicia de la Nación ha
dicho que: “(E)l principal responde no sólo por
los hechos de los dependientes realizados en el
desempeño de las tareas a su cargo sino también
por
aquellos
actos
practicados
con
abuso
de
la
función, sea que el subordinado haya contrariado
expresas
instrucciones,
sea
que
haya
asumido
tareas que podrían considerarse no comprendidas en
el
encargo
o
que
haya
violado
disposiciones
reglamentarias” (confr., Fallos: 317:146).
3.1.5.
existencia
de
un
Por
último,
en
hecho
ilícito
cometido
subordinado,
cabe
certificación
(...)
autor
penalmente
recordar
G.,
ha
cuanto
que,
sido
responsable
a
la
por
el
según
la
condenado
del
como
delito
de
homicidio culposo acaecido en Junín el día 13 de
agosto de 1994, del que fuera víctima M., a la
pena de seis meses de prisión en suspenso y cinco
años de inhabilitación especial.
3.1.6. En conclusión, y encontrándose
cumplidas las tres condiciones necesarias para que
el
Estado
responda
dependientes,
por
los
corresponde
hechos
desestimar
de
el
sus
agravio
planteado por el codemandado.
3.2. Responsabilidad del Estado como
dueño
de
la
cosa
riesgosa
(arma)
y
la
culpa
concurrente de la víctima.
El
responsabilidad
juez
al
de
grado
Estado
10
también
Nacional
por
atribuyó
ser
el
Poder Judicial de la Nación
dueño del arma que ocasionó la muerte de M.(art.
1113, 2do. párrafo, del Código Civil). Entendió
que el dueño o guardián de la cosa, para eximirse
de
responsabilidad
o
disminuir
la
que
se
le
atribuye, debe demostrar la culpa de la víctima o
de un tercero por quien no deba responder, y que
ello no había ocurrido en la causa.
El Estado Nacional expuso que “(a) la
luz
del
art.
1113
del
Código
Civil
el
Estado
Nacional se encuentra exento de responsabilidad,
no hubo culpa de su parte, sino que fue el obrar
dañoso de G. quien dio lugar al hecho dañoso” y
que existió culpa concurrente de la víctima por
encontrarse
en
un
lugar
de
acceso
restringido,
vestido de civil, en uso de franco y fuera del
servicio.
También
una
morigeración
el
de
concurrencia
de
culpa
ingresado
la
sala
a
codemandado
G.
pretendió
su
responsabilidad,
de
la
de
armas
víctima
con
al
por
haber
conocimiento
(como integrante del ejército) de los riesgos que
ello podía implicar.
Se
adelanta
que
los
susodichos
agravios tampoco han de prosperar.
3.2.1. En efecto, la responsabilidad
del dueño o guardián por el daño causado por el
vicio o riesgo de la cosa, es una responsabilidad
personal
frente
a
la
víctima,
porque
el
factor
objetivo de la misma está dado por la utilización
de una cosa con aquella naturaleza.
11
Poder Judicial de la Nación
Teniendo en cuenta que el fundamento
de la responsabilidad tiene carácter objetivo y el
factor
atributivo
es
el
riesgo
creado,
de
nada
sirve al dueño o guardián probar que de su parte
no hubo culpa. Para eximirse de responsabilidad
sólo le resta demostrar la interrupción del nexo
causal, mediante la alegación y prueba de un hecho
extraño al riesgo de la cosa, que interfiera en el
proceso
y
tenga
virtualidad
suficiente
para
determinar por sí solo el daño ocasionado (confr.
BUSTAMANTE
ALSINA,
Jorge,
Teoría
General
de
la
Responsabilidad Civil, op. cit, p. 407 y ss.).
3.2.2.
El
hecho
de
que
M.
haya
entrado a la sala de armas, mientras se encontraba
fuera de servicio, no aparece como suficiente para
interrumpir
el
nexo
causal
y
considerar
que
existió culpa concurrente de su parte.
3.2.3. Por otra parte, no es cierto
que la víctima ingresó a la sala de armas sin la
debida autorización, ya que al momento de hacerlo
se
encontraba
acompañado
por
G.,
quien,
precisamente, se desempeñaba como auxiliar de esa
dependencia.
El ingreso de M. a la sala de armas se
debió, entonces, a una imprudencia de G., que de
ningún modo puede imputársele a la víctima como un
factor
concurrente
que
permita
limitar
su
en
las
responsabilidad o la del Estado.
3.2.4.
consideraciones
Con
expuestas,
12
sustento
propongo
que
se
Poder Judicial de la Nación
confirme
la
sentencia
de
grado
en
cuanto
responsabiliza, solidariamente, al Estado Nacional
y a G., en los términos del art. 1113 del Código
Civil por el hecho dañoso del que resultó víctima
M..
4. La cuantificación del daño.
Ambas partes reprochan el monto de
la condena fijada por el juez de grado.
4.1. El daño material.
La parte actora consideró que el monto
indemnizatorio
fijado
en
concepto
de
daño
patrimonial, resulta extremadamente bajo.
Entendió que el juez de grado no tuvo
presente la edad de la víctima, su óptimo estado
de salud, la excelente relación que tenía con su
familia, su posible ascenso en la carrera militar
y que los progenitores no han realizados aportes
de previsión suficientes que puedan asegurar un
sustento mínimo de la tercera edad.
Citó en apoyo precedentes que fijaron
sumas mayores a la del presente.
4.1.1. Con respecto al llamado “valor
vida-pérdida de chance”, cabe recordar que no es
discutible hoy que la vida humana no tiene en sí
misma un valor económico y que lo que se debe
reparar a los damnificados indirectos en el caso,
los
actores
es
la
pérdida
de
los
beneficios
patrimoniales que éstos recibían del occiso y que
en el futuro dejarán de obtener. En tal sentido se
ha expedido también la Corte Suprema de Justicia
13
Poder Judicial de la Nación
de la Nación, al decir que “(l)a vida humana no
tiene
valor
económico
en
sí
misma,
sino
en
consideración a lo que produce o puede producir”
(in
re
Balbuena,
Blanca
Gladys
c/
Misiones,
Provincia s/ daños y perjuicios”, sentencia del 5
de julio de 1994, Fallos 317:728).
4.1.2. Pues bien, de las declaraciones
testimoniales
agregadas
(...),
surge,
en
forma
coincidente, que M. brindaba un gran apoyo tanto
en
lo
moral
cuanto
en
lo
económico
a
sus
progenitores. En particular, para la crianza de la
hija más pequeña del grupo familiar. Asimismo, de
la
documentación
agregada(...),
surge
que
el
sueldo percibido por M., a la época del accidente,
era de (...) mensuales.
4.1.3. Sin perjuicio de ello, no se
encuentra probado que M. era el único sostén del
hogar,
ya
que
según
las
manifestaciones
de
los
testigos, su padre se desempeñaba como taxista y
su madre percibe una pensión.
A
ello
se
agrega
que,
si
bien
es
cierto que el fallecimiento de M. se dio en plena
juventud
y
expectativa
que
de
sus
padres
recibir
tenían
futura
una
ayuda
de
razonable
su
hijo
para sobrellevar contingencias innegables del paso
del tiempo, también lo es que los hijos no aportan
a su hogar la totalidad de su sueldo y por el
resto de su vida, en vista de que es usual que
alcanzada la edad adulta contraigan matrimonio y
sustraigan
la
ayuda
económica
14
que
pueden
Poder Judicial de la Nación
eventualmente aportar a sus padres para destinarla
a su propia familia.
4.1.4.
Con
consideraciones,
estimo
base
en
ajustado
a
tales
derecho
confirmar el valor vida fijado por el a quo en
(...), a distribuir en partes iguales entre los
progenitores.
4.2. El daño moral.
La
actora
y
agraviaron del quantum
los
demandados
se
de indemnización fijado
por el juez de grado en concepto de daño moral.
La parte actora consideró que el monto
establecido en la sentencia no condice con el daño
efectivamente padecido y probado con la pericia
psiquiátrica(...)y las declaraciones testimoniales
(...).
Alegó
cuantificación
que
del
la
daño
desproporción
con
respecto
en
a
la
otros
precedentes, de similares circunstancias, en los
que
se
fijaron
sumas
mayores,
atenta
contra
el
principio de seguridad jurídica.
Por
su
parte,
el
Estado
Nacional
solicitó una ponderada y prudencial reducción de
la
indemnización
manifestó
que
el
fijada
monto
en
este
debía
concepto
disminuirse
y
G.
por
resultar excesivo.
4.2.1 El juez a quo, al momento de
determinar la cuantía del monto, en concepto de
daño moral, tuvo en consideración que el Estado
Nacional no aportó pruebas que permitan sostener
15
Poder Judicial de la Nación
su inexistencia, y que la única prueba relevante
producida
(...)
al
la
respecto
evidenció
las
pericia
vivencias
psiquiátrica
psicotraumáticas
extraordinarias sufridas por la actora. A ello,
agregó como fundamento la corta edad del causante
y la relación de parentesco con los actores.
4.2.2.
El
daño
moral
no
resulta
susceptible de apreciación económica. Por tanto,
sólo habrá de buscarse una relativa satisfacción
del agraviado, proporcionándole una suma de dinero
que
no
deje
represente
finalidad
jueces
indemne
un
de
lucro
la
gozan
el
agravio
capaz
reparación.
de
amplio
y
de
que
tampoco
desvirtuar
Sobre
tal
criterio
la
base
los
para
su
determinación conforme lo establecido por
la ley
procesal (art. 165 del CPCC).
En
ese
plano,
equivoca
la
actora
al
agraviarse con sustento en que la suma fijada es
desproporcionada
en
comparación
con
los
montos
establecidos en otros precedentes. Es sabido que
las circunstancias fácticas y jurídicas varían en
cada caso.
4.2.3. Al respecto cabe recordar que la
Corte
Suprema
dicho
que:
de
“(A)
Justicia
los
fines
de
de
la
la
Nación,
tiene
fijación
del
quantum del daño moral, debe tenerse en cuenta el
carácter resarcitorio de este rubro, la índole del
hecho generador de la responsabilidad, la edad de
la
víctima
y
la
entidad
causado...” (Fallos: 326: 847).
16
del
sufrimiento
Poder Judicial de la Nación
4.2.4. De acuerdo con estas pautas, el
monto
establecido
surge
de
una
ponderación
prudencial del daño inferido y, en razón de ello,
corresponde
rechazar
el
agravio
de
la
actora
relativo a este punto.
4.2.5. En cuanto a la impugnación del
daño
moral
efectuada
por
los
demandados,
este
Tribunal advierte que solo pusieron de manifiesto
un mero desacuerdo con la opinión adoptada que,
como
tal,
crítica
a
no
llega
a
configurar
los
fundamentos
En
tal
no
pueden
una
razonable
exteriorizados
en
la
sentencia.
genéricas
sentido,
las
constituir
objeciones
una
suficiente
crítica razonada que pueda demostrar el error del
fallo, por lo que el agravio –en la forma que fue
formulado por los recurrentes- deviene inadmisible
por no proponer puntualmente los elementos mínimos
que permitan cuestionar la valoración hecha por el
a
quo.
Ello
está
impuesto
por
la
ley
procesal
(arts. 265 y 266, CPCC).
En
consideraciones
consecuencia,
expresadas,
y
el
en
mérito
monto
a
las
de(...)para
cada uno de los progenitores, decidido (...)debe
ser confirmado.
5. Los honorarios apelados.
5.1. El monto indemnizatorio acordado en
la sentencia de primera instancia que se propicia
confirmar en la alzada contiene sumas líquidas
17
Poder Judicial de la Nación
(valor
vida
y
daño
moral)
y
suma
ilíquida
(intereses).
5.2. Sentado ello, se advierte que el
juzgador
determinó
honorarios
sin
que,
en
la
causa, exista liquidación firme que abarque todos
los rubros de la condena, debiéndose recordar que
la
regulación
de
estipendios
profesionales
debe
tener como base la suma final indemnizatoria. Ello
es
así,
de
conformidad
a
la
ley
arancelaria
vigente (art.6, inc.a) y al criterio reiterado de
esta Sala en cuanto a que, en los casos en los que
prospera la acción, los intereses deben incluirse
en el monto de la base regulatoria.
5.3.
dejar
sin
Tal
efecto
disponiéndose
que
correspondiente
arancelarias
circunstancia
los
se
conlleva
honorarios
determine
-con
arreglo
vigentes-
una
la
a
fijados,
regulación
a
las
pautas
vez
que
exista
liquidación firme del monto de la condena.
IV. Conclusión.
En
mérito
a
las
consideraciones
precedentes, propicio: 1º confirmar la sentencia
apelada en punto a la responsabilidad atribuida al
Estado
Nacional
y
a
G.
y
a
los
rubros
indemnizatorios fijados; 2º dejar sin efecto la
regulación
de
los
honorarios
hecha
en
favor
de(...), la cual se deberá postergar hasta tanto
se cuente con la liquidación firme del monto de la
condena.
Así lo voto.
18
Poder Judicial de la Nación
El doctor Vallefín dijo:
1. Arribo a la misma conclusión que el
señor
juez
que
ha
emitido
su
voto
en
primer
término y estimo que la demanda debe progresar y
confirmarse
los
rubros
que
integran
la
indemnización acordada.
2.
Ahora
fundamentos
que
Nacional
ceñiré
sobre
me
la
bien,
hacen
materia
a
en
cuanto
responsable
los
al
principios
desarrollados
por
a
los
Estado
generales
la
Corte
Suprema de Justicia de la Nación a partir del caso
decidido
en
“Fallos”
306:2030
-in
re
"Jorge
Fernando Vadell v. Provincia de Buenos Aires"- en
el que, según su propia definición, “se adoptó el
criterio orgánico de imputación de conductas del
Estado, a la vez que se dejaron de lado,
expresamente, los fundamentos civilistas de su
responsabilidad extracontractual” (véase “Fallos”
327:5295, in re “Cossio, Susana Inés c. Policía
Federal”).
3. Conviene recordar que sobre este
aspecto, la Corte Suprema, en el primero de los
precedentes
citados,
ha
dejado
claramente
establecido -tras recordar lo resuelto en “Fallos”
182:5- que “quien contrae la obligación de prestar
un
servicio
lo
debe
realizar
en
condiciones
adecuadas para llenar el fin para el que ha sido
establecido, siendo responsable de los perjuicios
que
causare
su
incumplimiento
ejecución”.
19
o
su
irregular
Poder Judicial de la Nación
Añadió que “esta idea objetiva de la
falta
de
servicio
encuentra
fundamento
en
la
aplicación por vía subsidiaria del art. 1112 del
Código
Civil
que
establece
un
régimen
de
responsabilidad ‘por los hechos y las omisiones de
los funcionarios públicos en el ejercicio de sus
funciones,
por
no
cumplir
sino
de
una
manera
irregular las obligaciones legales que les están
impuestas´”.
“Ello
-continuó-
pone
en
juego
la
responsabilidad extracontractual del Estado en el
ámbito del derecho público que no requiere, como
fundamento
art.1113
desde
de
del
derecho
Código
antiguo,
positivo,
Civil
al
exclusiva
o
que
recurrir
han
al
remitido
concurrentemente,
sentencias anteriores de esta Corte”.
Y
concluyó:
“no
se
trata
de
una responsabilidad indirecta la que en el caso se
compromete,
toda
vez
que
la
actividad
de
los
órganos o funcionarios del Estado realizada para
el desenvolvimiento de los fines de las entidades
de las que dependen, ha de ser considerada propia
de éstas, que deben responder de modo principal y
directo por sus consecuencias dañosas”.
4.
En
este
marco,
los
antecedentes de la causa evidencian que los hechos
probados justifican la solución alcanzada en el
voto precedente. Es que –señalo finalmente para
concluir- basta que la función desempeñada haya
dado la ocasión para cometer el acto dañoso para
que surja la responsabilidad del Estado, pues es
obvio que el hecho no se habría producido de no
20
Poder Judicial de la Nación
haberse
suministrado
al
agente
el
arma
en
cuestión.
Así lo voto.
EL doctor Pacilio dijo:
Que adhiere al voto del doctor
Vallefin.
Con
lo
que
terminó
el
acto
firmando los señores Jueces intervinientes y la
Secretaria
Nogueira
autorizante.
–
Antonio
Fdo.
Pacilio
Carlos
–
Alberto
Carlos
Alberto
Vallefín(Jueces de Cámara). Concepción Di Piazza
de Fortín (Secretaria de Camara).
// Plata, 23 de diciembre de 2.008.
Y VISTOS.
POR TANTO: en mérito de lo que resulta del
Acuerdo
cuya
copia
autenticada
antecede,
SE
RESUELVE: 1) Confirmar la sentencia apelada en
punto a la responsabilidad atribuida al Estado
Nacional y a G. y a los rubros indemnizatorios
fijados; 2) dejar sin efecto la regulación de los
honorarios hecha a favor de(...), la cual se
deberá postergar hasta tanto se cuente con la
liquidación firme del monto de la condena.
Regístrese,
notifíquese
y
devuélvase.Firmado
Jueces
Alberto
–
Nogueira
Sala
Antonio
III
Dres.
Pacilio
–
Carlos
Carlos
Alberto Vallefín.
Dr. Concepción Di Piazza de Fortín.Secretaria.
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