¿Cómo puedo protegerme en caso de ser víctima de violencia familiar? La violencia familiar, constituye cualquier acción u omisión que cause daño físico o psicológico, maltrato sin lesión, inclusive la amenaza o coacción graves y/o reiteradas, así como la violencia sexual, que se produzcan entre: Cónyuges o excónyuges; Convivientes o exconvivientes; Ascendientes; Descendientes; Parientes colaterales hasta el cuarto grado de consanguinidad y segunda de afinidad; Quienes habitan en el mismo hogar, siempre que no medien relaciones contractuales o laborales; Quienes hayan procreado hijos en común, independientemente que convivan o no, al momento de producirse la violencia. ¿Qué puede hacer una persona que sufre de un acto de violencia familiar? Podrá acudir ante cualquier delegación policial a sentar la denuncia (en forma verbal o por escrito). La Policía Nacional será la responsable de realizar las investigaciones preliminares y practicar las notificaciones correspondientes, sin perjuicio de ordenar medidas de protección en favor del denunciante, si hubiere lugar. Para facilitar las denuncias, en caso de querer hacerlo por escrito, el Ministerio del Interior expide formularios modelo, así como también cartillas informativas de difusión masiva. Una vez realizada la investigación por parte de la Policía, ésta elabora un atestado que será remitido al Juez de Paz o Fiscal Provincial en lo Penal (según corresponda) y al Fiscal de Familia. ¿Cuáles son las medidas de protección que pueden ser dictadas en beneficio de la víctima? El Fiscal Provincial podrá dictar las siguientes medidas de protección en resguardo de la víctima, medidas que deben ser comunicadas al Juez de Familia, en caso de formalizarse la denuncia: 1. Retiro del victimario del domicilio de la persona agredida, 2. Impedimento del acoso de la víctima, 3. Suspensión temporal de las visitas, 4. Inventario de los bienes o, 5. Cualquier otra medida que permita proteger la integridad física, psíquica y moral de la víctima.