LOS OBREROS. LOS COMERCIANTES DE BURGOS. m MONJES

MADRID.-LUNES 14 DE ENERO DE 1884.
A^O III.
PaeCIOS DS atTaCtliaiON'.—Ün M\nKin: l peseta 50 cents, .li JUIH.—Sn
PKOvrNC[A.s: 5 posattts el trimestre, jr 19 unaño. haciendo directamente e! pai;o:
por conducto (ío los corresponsales, 6 y 21 respeotivamonto.—EsrHANrEno: 13
peseías ti-irnostre.—HADVNA V PUEKTO fiíco: 18 pesetas setaeátre.—FIUPI.N.ÍS:
23 x>e8etas semestre.
ADVERTENCIAS —Toda la coi-Peipondoneia dcbel-á dirigirsa alí3r. Director Gerente do IJA. XJsiós.—No se devuelven los manuscritos que se envien.—
El importo de la siisorioion e» siempre JidelmtadO'.H-Al remitir sellos dtfl)erá
ouidar.so de ctvtilicíir Jíi curta.—Anuncio!), preeios 'éeavengionales.—Dirocóián,
Kedacfción y Adininiiitración.
HÚM. 609.
fiamaque, es lo relativOi & ía.éoi^i^Cta dej g'o- Fernandez Migroel.—Eladio Escudero,—^Ju*
biernoI lian Fonrnier.—^Jacinto Güell.—José Herre¿Qué hará? pregunta todo el mdlido. ¿Qué ro.—Vicente Pereda.—Secretario, MarianoLa Federación de Trabajadoros Cí-lebró
ha de hacer, se conte.-sta en el acto, sino-preayer una nueva reunión. Ya sabe el lector que
Ro<iriguez Migue]„—.¿'í cojiia.»—
sentar Ja dimisión?
los obrero-s que la componen, jautamente con
Los ^ae pretenden pasar por bieu enteraotros que la descomponen, tienen agrias condo.<i de lOif misterios de la política, asegura»
m MONJES DE LA TRAPA.
que ocurrirá eso. La noticia no es »fel mayor
trOTersÍ!\s en esas juntas dominicale». Délas
interés. aM como la de que eso se resolvió eu
,, notieias que alg"anos periódicos dan acerca de
Instaladas la piadosa Comunidad de Monjes
el último Consejo de ministros.
los desabridos debates que esos buenos compade- Nuestra fcíeñora de la Trapa en el mouast&^
rio de Bellpiúg, desde el 17 del último mes de
ñeros celebrün, resulta que su congresillo doTodo lo que pasó en la sesión del sábado N<iTÍembre, nos hacemos un deber el comuniminical-se da un aire al Congreso parlamentnvo por orrgen el propósito del Sr. G&stelar car á nuestros lectores las noticias mas i n t e tario.
de no hablar hasta hoy.
resantes sobre esta traslación, como todas la»
La cosa pasa ya de castaño oscurrv. No que se refieren á tan estrechísima y edificante
En efecto, los compañeros no discuten por
comprendemos
que
se
pare
la
máquina
[^«rlaOrd«n religiosa', y á la nueva inorada que el
lo común altas cuestiones de principios, si es
mentaria, sólo porque haya un dijiutado fre- Señor se ha servi4o destinarles en e.sta bendi-que esta /rase se compadece bien con la anarpublicáno, demócrata y enemigo de las tira
ta tierra de María.
quía, el colectivismo y la revolución social,
nías} á'quien se le antoja señalar dia y h»ra
Mas de medí»' siglo a-asentes de nuestra
para hacer su papeLDc tal exigencia pudo patria los Religiosos Trapenses, tan sólo eran
ideales de esos obreros «parlamentarizadores.»
reíjíiítar
el
sábailo
nada
menos
que
ura
crisis
Entretiénense un día y otro dia en tratar de
eonocixfos en España por las relaciones ISinpretítatufá', y "Suaique en esto caso hubiera tásticas y caprichosas de ciertos poetas de
asuntos personales y en lanzarse mutuamente
sido ventajosa, en otro quizá fuera perjudii^ imaginación exaltada; sieiKlo por desgracia
las más crueles acusaciones, expresadas en un
cial. ;Y todo porque nno de los actores no sa repetidas sus consejas hasta por escritores
había aprendido aún eí papel!
•lenguaje verdaderamente anarquista por lo
dignisímes y verdaderamente crÍJ>tiauos, que
Y nos parece que el Sr. Castelar ha tenido' contribuyeron no ^oeo, creemos que siu l a
-Crudo.
•jí> .'i.iiuiiiiir I (' í i i < »
—
tiempov él. tan grande orador, para preparar
• Esto que parece un daño no lo es. Porque
Con referencia á una carta escrita por un la improvisación qu« pronunciará hoy. Qne menor intención, á sadicar la creencia de s e r
• sirve para aleccionar á los obreros de buena diplomático español, hemos oído asegurar que pronunciará hoy, décimo;», sin contar con que los Trapenses unas personas distintas del co—
mun de loühombres,, condenados á una vida
fé que caj'esen en la tentación de asistir á esas está mas próximo de lo que generalmente se acaso esta tarde salga alguien diciendo, como triste, inisíeríosa y llena de iaoomprensi blescree
la
elevación
del
principe
Federico
Guien el teatro Real:
juntas, pues en ellas verán cómo esos nivelaabsurdos.
llermo de Prusia al trono real é imperial que
—Por indisposición del Sr. Castelar, se susdores que pretenden establecer sobre la tierra ocupa el emperador Guillermo. La avanzada
Como su instalación definitiv'a en Bellpuigha de producir un bien inmenso en el país quela paz universal y la igualdad mas perfecta, ed<id de éste, su falta de salud, lo mucho que pende la representación. .
Lo que más nos gusta en todo ello son las tiene la dicha de alberg^arles, convieiíe selesaparecen liencbidos de orgullo, de odio y de , le perjudica el menor trabajo, justificarían improvisaciones de este calibre.
conozca en 3U verdadera existencia, para que
-dasamor hacia sus hermanos. Si esto hacen una abdicncLóu próxima, de la que se inues •
Esperamos que alguri dia se anunciarán se sepa agradecer á Dios la merced que acabatra además gran partidario, según p^arece, el por carteles en las esquinas.
cuando se hallan caldos, ¿qué harían si consi- principe de IJismarck. La cordialidad que reimos de recibir con su venida á la patria.
.guieran levantarse sobre todas las clases so- nó eu la visita que el príncipe Federico GuiQuizás algunos de osos espíritus amantes
ciales, A quienes corresponde la dirección de llermo hizo últifnaiueute á León XUl; el camuno délos temas más interesantes de las de su Dios y de la perfección de su alma, que
' l o s negocios públicos par su intelígenc'i-, po- bio favorable á la paz religiosa que se nota eonversíicibnes políticas, fué ayer cierto te- .se mantenían retraídos por el espanto que falsas narraciones les habían inculsado, conoVsición, .-¡aber y demás condic ones verdadera- en estos últimos dins en la política religiosu legrama enviado desde Madrid al Times, y en ciendo la verdad llegu.;n á decidirse á formar
del gabinete de Berlín, permiten esjterar que el cual 56' habla de una conversación entre
mente directrices?
parte de una comunidad en I.H que- sus indiviel gobierno del nuevo rey y emperador seria el corresponsal y un general izquierdista.
, Ya lo ha dicho con notable buen sentido favorable á los altos intereses de que la IgleParece qne éste se explayó más de lo debi- duos han de ser santos por necesidad, y cuyos
sia es fiel guardia y defensora.
do, diciendo que .-i él y los suyos no reciben ruegos incesantes y iienitencias continuas
; raiguno do esos compañeros:
el decreto d» disolución, ya tienen resuelto lo atraerán, eguramente, las miseiicordias del
—«¡Ah! si vosotros subierais al poder, g u s ."-••
X ••¡I
¡
I
que han d» hacer, y que se reduce á «echarse cielo sobre nuestra pobre España.
taríais de él lo mismo que los demá-s partidos
El fiscal ds PaUna, de Mallorca p\de cuatro á la calle,>
Por esto es que ante todo vamos á dar á
años de prisión correccional, multa de ochoViOS convertiríais en burgueses.
'
—Pero,, hombre «le Dios, le objetaron al jje- nuestros amigos noticia exacta del género de
Ül que tal dijo conoce bien el corazón hu- cientas peseías y pago de costas procesales neral, jno conoce V. que los hombres de bien vida que llevan los Padres de la Trapa. Les
para el autor del articulo Las sandeces de Jií
advertimos que estos artículos, por les relamano. Y, ánn ctiando no, le basta conocerla Ancora, in.-erto ea La Aulonomia ás aquella se opondrían á nuevos trastornos?
ciones de cariño que nos unen á estos saiitos
—Los
hombres
de
bien,
contestó
el
otro,
• íiiítoria de las revoluciones, aun cuando sea ciudad, periódico condenado por el venerable
religiosos, y por otras circunstancias, piiedea
sólo se cuidarían de encerrarse en su casa.
por encima. Porque esa historia está llena de Sr. Obispo d é l a d ócesis. Considera el fiscal
El público preguntaba; ¿quién es el otrofl[ tenerse perfectamente por oficiales, como se
«jemplüs, lo mismo en lo que se refiere á la que en dicho escrito se emiten conceptos con no se satisfacia la curiosidad por nadie, aun- acostumbra decir.
los que stí escarnecen públicamente algunos
Sepamos, pues, en que consiste el ser t r a antigüedad que á la edad moderna, y aun á la de los doguias de la Ileíigióu católica, que es que las sospechas se enderezaban contra vapense.
ríes
personajes
de
la
situación
que
ciñen
escontemporánea, que prueban la facilidad con la ilel Estado j ' de la casi totalid-id de los esLos religiosos, vulgarmente conoeidos con
pada.
que los hijos del pueblo, luego que se elevan, pañoles
el nombre de Trapenses, pertenecen á la OrEste
tele.:"
rama
causó
mucho
disgusto
en
El eje npln del ministerio fiscal de Palma
se olvidan de su procedencia y de sus doctriden del Cister. tan célebre en nuestra España.
de
es digno de ser imitado i)or los las filas izquierdistas, que lo atribuyen á una Observan las constituciones primitivas de los
nas, y caen en el-pecado del orgullo y de In que Mallorca
maldad
de
pura
raza
fusinnista.
están obligados á velar por el exacto
En el Consejo de ministros se trató tam- Cisterciensps, es dacir, 1.5- que practicaban
ítmbición. En la historia de nuestros dias hay cumplimiento de las leyes.
San Bernardo y sus monjes en Clarav-il, San
bién de ello.
también muchos Rienzis y Masaniellos (en caRaimundo y los primeros caballeros de Calaricatura, por supuesto) que después de haber
trava en España, y toda aquella pléyade de
Según las cartas y periódicos que e;i estos
Santos que, en los primei-os tiempos de la Orproclaaiado á trabucazos la emancipación de dias hemos recibido de provincias, algunos
LOS COMERCIANTES DE BURGOS.
den, le dieron en la Iglesia un esplendor comlas últimas clases, viven hoy como persona- gobernadores han tomado tan por lo serio el
parado por la Santidad de Benedicto XU con
jes y hasta pasan por ser personajes, quizá de encargo que al parecer les ha dado «I gobierHemos recibido, y publicamos con el ma- el del astro de la m-añana.
no
de
procurar
la
conciliación
por
todos
los
los de primera üla.
yor gusto, la siguiente circular:
líl tiempo y las vicisitudes que atravesó
medios posibles, que han reunido en su des«vsoci.vf.róv DE roMF.noi.vNXEs É iN'nusTni.\LEs.
Europa causaron la decadencia de este ilusLos obreros deben pensar bien en esto. pacho á los jefís de la» dos fraccíoues del par))La Junta directiva de la mis'na en esta tre instituto, pero el fuego sagrado no ces6
Ellos deben tener siempre en cuenta que, por tido liberal dinástico, y hau procurado hacerles
eompreuder
los
grandes
peligros
que
á
ciudad, nombrada en 28 de Julio del corriente de arder nunca en el borazón de sus hijos. Vavirtud de leyei superiores é indeclinables, la
rías reformas se intentaron: algunas se llevaunos
y
otros
amenazan
.-i
oersister;
en
seguir
año en junta general habida en las Salas Con- ron á cabo, como la de Martin de Vargas en
desigualdad es propia de la naturaleza humatratándose con irreconciliable encono. Lo
na y de la organización de las sociedades. mismo eu Sevilla, que eu las Baleares, que en sistoriales, usando de los poderes amplios que España, y ia de los Fuldenses y estrecha obDonde más domina la igualdad es en los pue- las demás provincias en que esto se ha inten- la dieron para la resolución de la solicitud servancia de Claraval en Francia; pero todas,
blos salvajes, porque la ignorancia, la tira- tado, se ha conseg'uido lo que el sábado se con- de los dependientes de comercio relativa al después de una existencia más ó menos larga
y gloriosa, han desaparecido. Sola la que
nía y la desdicha, son los grandes elementos siguió eu Madrid con el discurso del Sr. Be- cierro de los establecimientos de industria y principió D. Juan Armando le Bouthillier de
cerra. Todos hau contestudo que pretieren
niveladores.
veinte años de oposición, al gobierno de sus comercio durante todos los domingos y fies- Raneé, en el monasterio de la Trapa, del que
tas solemnes del año, después de haber oido era Abad comandatario, h» permanecido h a s Jamás, jamás se verá el caso, á no ser por adversarios del mismo campo.
primeriimeate en la junta general el pare- ta nue-stros dias, dividida en dos Congregaciobreve i dias, de que triunfen los obreros. Aspines, con observancias poco diferentes.
rar á esto es un ideal imposible, injusto y
Los periódicos van dando ya importancia cer de la mayoría de los allí reunidos, y en
La comunidad que, expulsada de Francia
además perniciosí.sitno. Porque si alguna vez á las reuniones dominicales de los obreros segundo término particularmente la de una por ser compuesta da españoles, estuvo motriunfasen, ¿no se convertirían al punto en anarquistas, de cuj^o asunto hablamos en otro S'ran mayoría de comerciantes é industria- mentáneamente en San Pedro de Cárdena,
burgueses, volviendo á restablecer de ese mo- lugar. No hace esto la prensa en general para les de esta plaza, y en vista del asentimien- y después de haber permanecido dos afloa
combatir las doctrinas perniciosas que los
do esa desigualdad de que ahora se lamentan? compaiitros proclaman, sino para satisfacer la to de todos ellos á que se lleve ¿ efecto lo pro- en Nuestra Señora de Hort, i'.iócesis-de Sol-~
se acaba de instalar, esperamos que
En otro orden de principios y por otros curiosidad de los lectores que desean enterar- puesto por Ins dependientes en su solicitud sona,
definitivamente, en el monasterio de Nuesmedios más eficaces y prácticos que el de vo- se de cuanto ocurre, bueno ó malo, interesan- de 16 de Julio, y teniendo además presente tra Señora de Bellpuig, provincia de Lérique el cierre unánime de todos los estableci- da y obispado de Urgel, pertenece á una
ciferar é injuriarse mutuamente un dia de la te ó liviano.
De e.ste modo se conseguirá dar á esas re- mientos no causa perjuicios á ninguno de de estas dos Congreg-aciones; la llamada de
semana, podrá vei^ir la reliabilitación de los
uniones una iuiportaucía que quizá uo tenobreros. Eu su mano tienen el ser dignos de gan. Los oradores anarqui.stas llegarán á te- sus dueños, ni en la persona, ni en el capi- la Gran Trapa, por ser el monasterio que
lleva este nombre la casa matriz. Observa, seestimación y de respeto. Sean honrados tra- ner público, y esto en vez de amilanarlos, les tal, ha acordado primeramente invitar á to- gún el tenor del decreto Apostólico dado en 25
bajadores y sumisos á la ley de la necesidad, enardecerá mas y acabaremos en el restable- dos los comerciantes é industriales de esta de Febrero del año 1847, no las Constituciones
contra la que es inútil rebelarse, y alcanzarán cimiento de los famosos clubs de las calles del ciudad á que (usando de la amabilidad y del Abad de Lestranges, superior d-í los t r a dííferencia con que siempre han honrado á penses durante la revolución francesa, el cual
el aprecio de las demás clases sociales, no tan Lobo y de la Hiedra.
De' la sesión de ayer dan noticias muchos
estableció una regla que la Santa Sede no quiinjustas, ni tan tiránicas como sus compañe- periódicos. Hé aquí cómo refieren que acabó: esta Junta y á los dependientes causavien- so aproar y los Trapenses mismos dejaron
ros dicen.
«El compañero Doctor.—Cierta» exagera- tes de la solicitud), á partir desde el primer en 1834, sino la regla de San Benito, con las
primitivas Constituciones de los Cisterciensss
ciones
son propias, mas que de obreros, de dia inclusive del año 1884. tengan cerradas
No hay nada que rvíhabilito tanto como el
hambrientos. La historia levanta pedestales á sus tiendas y talleres durante los dias arriba aprobadas por la Santa Sede, salvo algunas
ejercicio de la virtud. Cuando se ve un obrero los hombres.
mencionados, con lo cual ganarán mucho la prescripciones contenidas en el mismo decreto
religioso, honrado, so.sten de su familia, enfl(Rumores, gritos. Un socio se desmaya. moral pública y la salud individual, y en se- y en un indulto de la Siintidad de Pió IX, relativo á los votos iiNoit consíiiutiones Abbatis
migo de bullas y jaranas patrioteras, todo el Por foituna el accidento no tuvo consecuengundo lugar dar las gracias á todos los co- »de Lestra7tff\<}, á (¡uibus ab anno 1834 recessit,
cias
tristes.)
mundo le respeta, alienta y consuela si lo há
El compañero Doctor.—Sí (juereis mortifi- merciantes é industriales de esta ciudad, sin nsei Regulam 6'uricti Btnedicti cum primitivis
menester. Cierto es que en esa clase hay g r a n car al compañero Iglesias, es inútil; está so- distinción, por la honra inmerecida que h i - aCisttrciensiuiii, Gonsiitutioidbus a S. Sede
des dolores, pero ¿están libres de ellos ó de bre vosotros.
»aj)probatis obstrvabit, salvis x-'rascriplionibus
cieron á los firmantes, que por ahora tienen »gu<]s koc Decreto Continentur,» (Decreto aposotros quizá más amargos las clases acomoUna voz.—;Que se calle!
cumplido el cometido especial que so les en- tólico del 25 de Febrero de 1847.)
adas?
Otra.—No me da la gana.
comendó, en la seguridad de que siempre esOtra.—íFarsautcs, á la calle!»
Pero ninguna idea rehabilita más á los
Basta, pues, conocer la regla de San Benitarán gustosos á las órdenes de todos sus com- to para
y
se
marcharon
todos,
no
los
farsantes,
tener una idea de la vida de los Tratrabajadores que la religión cristiana. Para
sino cuantos estaban en el local.
pañeros para cuantos asuntos sean necesarios. penses, sabiendo que estos la observan tan l i ponerse al nivel de los m4s altos potentados,
«Burgos 21 de Diciembre de ISS3.—Pre- teralmente como es posible en nuestros dias.
no necesita el obrero cristiano de metarse en
sidente, Juan José Arroyo Ontoria.— Vocales, El santo Legi.slador de los monjes de OccidenLo
primero
y
principal
en
que
se
piensa,
y
asociaciones tenebrosas, ni de andar á tiro»
que ha de ocurrir en cuanto termine la vota- Pascual .Moliner.—Eugenio Oru«.—Maurieio te se propuso llevar á los suyos á la perfecen las barricadas, ni de disparatar en las re- ción, favorable al voto particular del 8r. Cación alejándolos del mundo y de sus máximfts»
LOS OBREROS.
uniones públicns: le basta con cabijarse á la
sombra del templo. Allí no hay distinciones;
allí subimos todos hasta él último escalón de
lagerarquia; allí se dice al rico que es hermano d«l pobre; allj se dice al poderoso que
debe secar las lágrimas del infortunado.
Sucede esto en el eampo de la política? I>e
ninguna inauera. Bien lo ven los obrero» y
bien demuestran saberlo cuando truínan contra todos los partidos políticos que, después
de encaramarse á las altas esferas, se olvidan
de los que estí'in abajo. Los obreros están de
tal modo persuadidos de esto, que quizá se
funda en «Uo su actitud contraria á todas las
ascuelas políticas, de las que nada esperan y
de las que blasfeman. "~ '
~' ~ '
Si esto creen y dicen ¿por qué no bascan
el remedio en otra parte, en esos mismos principios religiosos que han olvidado? Si la política les es enemiga ¿porqué no buscan el amparo de 1^ relig^ion?,.
y dedicáudolos á la oración y á la penitencia.
Oración que comprende, ya el oficio divino,
en el cual pasan gran parte deldia. ya la oración mental ó privada, a la quer han de aplicarse con frecuencia, dicela regla; y como
Í(reparación indispensable, la soledad, el siendo y las santas lecturas. Penitencia, que
«ompitíijJc él tialiajo manual, ponitencia im)uesta al hombre por Dios mismo, las vigriias, el ayuno y la abstinencia.
Los monasterios de la Trapa están, pue»,
como lo exig-e la regla, con.struidos fuera de
(Oblado, y encierran lo indispensable para que
os monjes tangán que salir lo mas raramente
posible. £¡stos guardan silencio, y sói^ hablan
cuando hay necesidad ó utilidad, y con permiso del Superior. Tienen vida cemán, en toda
la acepción de la palabra, pues ninguno posee nada propio. No hay celdas: y en el coro,
en la lectura, pu el trabajo, en el dormitorio,
siempre se halla la comunidad reunida, ó paróte de ella, pudiendo á cada instante recordar
los religiosos con el mayor consuelo la palabra del ¡áalvador: «Donde se hallan dos ó tres
reuiddos en mi nomirf, alli estoy en, medio de
ellos.» (Mat. XVIII—20.) Como consecuencia
de esto hay una gran igualdad, pues todos,
desde el Abad hasta el último hermano, tienen
la misma comida, la misma cama, y las mismas privaciones.
' Hay sin embargo dos categorías de religiosos: los de coro, dedicados priflcipalmente al
oficio divino, y los legos ó conversos que se
• ocupan más en el trabajo. Los primeros cantan cotidianamente todas las horas canonica.s,
excepto Maitines en los dias de trabajo; tienen
además la misa conventual cantada, rezan todos los dias en el coro el oficio parvo de la
Santísima Virgen, y una ó dos veces por semana ei de diiuntos. Pasan por consiguiente
en el coro cinco, seis, y aun siete horas al dia,
y trabajan cuatro ó cinco, ordinariamente en
el campo, quedándoles libres para la lectura y
sus devociones particulares tres ó cuatro horas diarias.
Los conversos tiesen un rezo mucho más
corto y sencillo, pues consiste en cierto número de Padres nuestros y Ave Marías; oyen misa todos los dias y tienen sus horas de oración
y lectura, pero pasan la mayor parte del dia
en el trabajo.
Todos, religiosos de coro y conversos, salvo los enfermos, se levantan á la misma hora,
es decir, á las dos los dias de trabajo, y á la
una los de fiesta; pero como se acuestan á las
siete en invierno y á las ocho en verano, y en
esta estación toman una hora de siesta, siempre suelen tener siete horas de sueño.
En verano se come á las once y media y se
cena á las seis de la tarde. En invierno se hace
una sola comida, que es desde el 14 de setiembre hasta el primer domingo de cuaresma á
las dos y media, y desde éste hasta Pascua á
las cuatro y cuarto de la tarde. íío obstante,
á los que carecen ae fuerzas suficientes para
pasar con una sola comida al dia, se les permite tomar por la mañana seis onzas de pan
y un poco de vino.
La abstinencia para los que tienen salud,
es perpetua, y no sólo se pmhibe la carne, sino
también el pescado y los huevos, así mismo el
aceite, á no ser para ensalada. Ko hay mas
condimento que la l»che, de que puede u.sar la
comunidad todos los dias, excepto durante el
Adviento, la Cuaresma y los viernes del afio.
Sin embargo, como los Trapenses no hacen
voto de abstinencia, se les permite en caso de
enfermedad toda clase de alimentos, incluso
la carne.
La comida de los religiosos se compone de
una sopa, na potage de legumbres y postre,
los dias que no son de ayuno.
La cena consiste en un potage ó ensalada
y postre. Cada cual tiene al dia doce ó diez y
seis onzas de pan y medio litro de vino.
Los Trapenses tienen dos años de noviciado, pasados los cuales hacen votos simples, y
tres ó cinco años después de éstos, pronuncian
los solemnes.
En clase de religiosos de coro se admite á
los sacerdotes y personas instruidas, ó que
saben al menos el latín. Kstas, si el Prelado lo
juzga conveniente, puede» continuar los estudios en el ruonasterio y ser promovidas á las
ordenes sagradas; y sino, permanecen corista» durante toda su vida. Los que no tienen
instrucción suficiente, son admitidos como
conversos, si pueden dedicarse á un trabajo
cualquiera.
{
{
Cuesta abajo.
La última sesión ha sido refleje exactísimo
de la decadencia del sistema parlamentario.
Un orador teatral, que no habla sino eu dias
y horas determinadas, con todo aparato externo, y cuando tiene aprendida de memorial su
improvisücióu; unos diputados tan complacientes que se prestan al triste papel de hacer
tiempo k fin de que se inviertan las últimas
horas de un dia y las prinieras de otro hasta
que suene la prefijada por el orador para dar
comienzo á su discurso; unos oradores parlamentarios que desconociéndose, se prestan á
servir para este paso de .saínete, entreteniendo agradablemente al concurso, y que carecen del gran talento, habilidad é instrucción
necesaria para desempeñar el entremés; un
gobierno pidiendo á todos que hablen para que
se prolongue su existencia; y un presidente de
la comisión de respuesta al discurso de la Corona, que declara a la faz del país que el motivo de no concillarse izquierdistas y fusionistas, es que no hay destinos para todos, y como argumento Aquiies, acude ul Uamamieuto
al presupuesto y al egoísmo, conjurando por
el estómago y el turrón, no merecen los honores de una crónica seria.
Basta con la simple exposición de los hechos para que nuestros lectores juzguen si es
inexacta ó verdadera nuestra critica.
Consejo de ministros.
Que se reúnan los miaisiros: que discuten
con calor: que se esfuerzan en salir del callojóii en que están metidos, y por consiguiente
^ u e los Consejos de ministros ticneu ahora
mucMÜmpórtancia política, sucesos .«on muy
naturales.
Asl,eS que nadie jiegaba anoche que el
Consejó celebra lo en las últimas horas de la
tarde habia ofrecido singular interés. El agua
va subiendo, subiendo, y ya le llega al cuello
al gabinete. .Insto es que éste vea el modo de
librarse de una desgiacia inminente y al parecer indudable. ; . .
-,
Trataron, pues," los ministros de su situación y de lo que han de hacer cuando les caiga encima la temerosa votación cont»aria.
Examinaron el carácter y tendencia de los
discursos pronunciados en el Parlamento, singularmente el del Sr. Navarro Rodrigo, y de
lo que han de contestar á ciertas insinuaciones mortificantes dsl mismo. Y como los más
mortificados son los Sres. Posada y Gallostra,
ellos se encargaron de la contestación, sia
perjuicio de que hablen también los Sres. Moret y algún otro de sus colegas, como el de
Estado.
Por supuesto que es seguro que éste ha de
hablar, porque el cisne de la democracia tratará en su improvisación del viaje del Rey á
Alemania y del Príncipe alemán á Madrid,
para lo cual el Sr. Ruiz Gómez ha estudiado
el asunto con mucho detenimiento. Ya expuso
ayer en el Consejo las ideas generales que expondrá y la» autorizó con la lectura de varios
documentos relativos á los viajes y que presentó al Ccnsejo.
Después del examen de las cuestiones políticas, varios ministros dieron cuenta de sus
proyectos, alguno» de los cuales presentarán
á la regia aprobación sin perder tiempo. Les
urge mucho ganar la fama de reformistas y
no quieren perder ripio.
Ellos dirán: para lo que nos queda...
A esto contesta muy atinadamenta
Gorjrto.
/• % i,
Bl
-—^«¡Poro-hombre de Dios!'¿Hasta este punto se
fxa!<era? Lo que pa.só ea Badajoz, no acusa disiíusto en el país, que lo rechazo con indignación, ni
falta de libertad poliiica, que harta habia y hay.
«Además rni'; en Rach.jo/, lo que pnsó, fué que
unos cuantos ofici.iles y sargentos, que quieren
hacer rápidamente Ja carrera, se rebelaron dando
estos gritos: oiVivá Zorrilla y la Constitución de
18G9!»
«¿Quiere esto El Piogvsoh
EL Progreso PU t:ite punto no sabe precisamente lo que quiere.
Pero ya lo sabrá con A tiempo.
^
El Correo hacia anoche de la situación actual este retrato:
—«Ya las cáb.ilíi.s van desapareciendo. Se dijo
primero que ia mayoría parlamentaria estaba hecha pedazos, y Juego ¡ia¿ta los ciegos se están enterando de que no h.'y tal cosa. Luego se afirmó
que el dictamen c^cl Mcnsuje lo suscriblrian seis individuos de la comisión, y se ha visto que era imposible con las interpretaciones del Directorio.
Y, por último, se Jiioiero;i profecías para el curso del debate, y del deb:íte lo única que va saliendo es que no liay izquierda, y que cada ministro
piensa de distinto modo.
Pero queda ei postrer recurso; el que cuenta
la fama empleaban los persas en la huida, haciendo
de flechas lo señores duque de la Torre, Cánovas
y Martos, á quienes se presenta unidos en una confabulación, semejante á tantas otras, todas tristes
y demoledoras, como nos ofrece nuestra historia
parlamentaria.»
¿Confabulación tenemos? No será fábula,
de seguro.
ü CARTA DEL EÜPERADOR BE A M I A AL PAPA.
CARTA DE ROMA.
Lo que ayer oyó un periodista al terminar
TJn»
decUración
nobilísima.—La
Santa Red» y lai potenel Consejo:
cias católica*. —Efecto producido por la declaración antre
«Al salir del Consejo se entabló entre un
los rerolacionarioa.- Satisfacción de loa católicos.—Uá*
periodista y un ministro el siguiente diálogo:
sobre la TÍsita del priociite imperial de Alemaaia.— Un
fracaso <e loa reTolucionsríos.
—¡Cuándo terminará el debate?
—Casi con seguridad, el miércoles.
Nos escriben do Roma con facha 9 de Enero
—¿Y después?
do
1881:
—Después, nos derrotarán.
—»E1 autorizado Afoiitieur de Romt ha desmenti—¿Y luego?
do
de una manera absoluta y categórica los rumo—Dimitiremos.
res de una próxima visita del emperador Francisco
—¿T enseguida?
José do Austria al palacio del Quirinal.
—Knseguidri... cada mochuelo á su olivo.
El ministro no dijo si los mochuelos sal«Puedo confirmar á mi vez lo dicho por el Modrían de la calle de Alcalá ó de la plaza de las nit»v,r de fíame, con un hecho ciertísimo y de la más
Cortes.»
alta importancia.
O de ambas partes.
»El Soberano Pontifico ha recibido, con motivo
•
de la entrada do año, una carta autógrafa del emUn argumento á favor de los izcjuierdistas.
Todos los diputados, funcionarios, que por perador do Austria-Hungría. Su Majestad Apostóhaber admitido carga acaban de sujetarse á 'ica exprosa on ella los sentimientos de la piedad
nueva elección, han sido reelegidos, en sus más filial y declara solemnemente que jamás hará
respectivos distritos, y creemos que sin opo- al Padre Santo la afrenta de venir á Roma á visitar
sición.
¿ los principes qu« ocupan el palacio del Quirinal.
Ahora, que hablen los fusionistas de que
»La carta impori.d es on este punto muy explíel cuerpo electoral no es demócrata-dinás- cita y revela una voluntad decidida, al mismo tiemtico.
po que una perfecta inteligencia do las circunstanRíen que lo mismo les pasarla á ellos, y á
cias exeepcionales y do los partioularÍBimos motilos otros y á los de más allá.
£l Globo pretende mortificar al Sr. Cañamaque, publicando hoy un escrito de este señor favorable al sufragio universal, tan favorable, que en él se dice que es faccioso todo
gobierno enemigo de ese precioso derecho.
El Sr. Cañamaque tiena á la mano la venganza. Con publicar cualquier discurso del
Sr. Castelar, antiguo ó moderno, cogerá en
contradicción notoria al ídolo de El Globo.
Hay un conflicto pendiente entre el señor
Moret y el cuerpo de auxiliares de telégrafos.
Una comisión del misino se presentó anteayer al ministro, en demanda formulada
muy respetuosamente, de que se les aumente
el escaso haber que perciben.
Parece que el ministro trató muy mal á los
reclamantes y al cuerpo que representan, dirigiéndoles frases y cargos muy duros, y llevando su mal humor ha.stael punto de autorizarles para que hiciesen público el agravio.
Y lo hicieron como es natural. Y enseguida trataron de que un dijiutado suscitase el
asunto en el Congreso, además de dimitir sus
puestos.
Suponemos que se arreglará el confli:to.
•
El Motin, dirigiéndose á los suyos:
«F¿ y esperanza.»
¿Fó y esperanza? Esas son virtudes neocatólicas, impropias de monos perfeccionados, según sus propins darvinianas teorías.
i ^
El mismo periódico, no pudiendo presenciar desde la tribuna de la prensa las sesiones do Cortes, .se promete en compensación
frecuentar por las mañanas las plazuelas.
También podía el colega sustituir esta diversión fácilmente, con leer .sus propios escritos.
•
LTiUransigcant, de Mr. Rochefort, ha dicho que, siendo el mayor peligro para la república francesa la existencia de la monarquía en España, dehe combatírsela, añadieudo que ningún empleo mejor que ese pueden
tener los fondos secretos de que el gobierno de
su país dispone.
Otros perióíiicos republicanos de París, t a les eomo La Republique Eraucalse y El iVational, relativamente moderados, dicen que
todo lo que no sna la continuación de los izquierdistas en el poder, es un peligro para
Francia.
De todo lo cual resulta que ya tienen los
izquierdistas españoles un nuevo y poderoso
aliado: la república de los Grévj', cíe los Ferry
y de los Thibaudin.
Que es un aliado dignísimo.
Ahora salimos con que los sucesos de Agosto ocurrieron porque el Sr. Sagasta no concedió mucha libertad.
Á»í lo dice El Progreso en las siguientes
líneas:
—«¿A qué llegó elSr. Sagasta al Gobierno? A dar
espan.sión, y por «lo reemplazó ni Sr. Cánovas.
»¿Dió cspansión?—Badajoz ha dicho que no.»
vos que han h»cho posible para un príncipe protestante, y en ia forma más atenuada posible, lo que
no lo seria en ningún caso para un soberano catóhco.
»La carta de S. M. el Emperador Francisco José
fué entregada al Padre Santo el 29 de Diciembre en
la primera de las audiencias particulares concedidas á los miembros del cuerpo diplomático acreditado cerca de la Santa Sede.
»En este dia so notó, en efecto, que era más larga que do costumbre la audiencia concedida al excelentísimo seiíor conde do Paar, embajador de
Austria-Hungría y decano del cuerpo diplomático
acreditado en el Vaticano, Al principio no pudo
saber nadie de qué se trató en dicha audiencia.
»IIoy la noticia es conocida de pocas personas,
pero no la ignora ninguna do los personajes que gozan de alguna autoridad y que están alrededor del
Papa.
»La notici.a aquí ha causado tan buena impresión entre los católicos como mala entro los partidarios de la unidad italiana. Los católicos no temieron nunca en realidad que S. M. el Emperador
Francisco José do Austria viniese á visitar a los
Príncipes de la casa do Saboya en el Qvurinal. Pero
les ha satisfecho mucho que á pesar de la alionza
de Austria eon Ralia para cuestiones de orden puaamente internacional, no quiera el Emperador de
Austria-Hungría dar un disgusto tan grave á la
Iglesia, como seria la indicada visita.
oLos partidarios de la unidad italiana llegaron á
creer que, no sólo vendría el emperador Fra'cisco
,Tosc', sino que so encontraría en el Quirinal con
otros príncipes de naciones católicas. Do aquí quo
hoy su disgusto no reconozca límites, y que alguno
de esos periódicos dirija terribles amenazas, no ya
sólo á Austria, sino también á la misma Alemania.
«Después de tantos dias, hasta estos momentos
no han reconocido muchos peri ¿dices liberales que
!a visita dol príncipe imperial do Alemania al Papa
ha tenido excepcional importancia.
¡)Al ver cómo S. M. IVancisco José escribe á
León XIII; cómo en Prusia hace el gobierno de Dismarck nuevas concesiones á la Iglesia; cómo el seiíor Schioczcr recibe instrucciones satisfactorias
para el arreglo completo y definitivo de las diócesis de Prusia, la prensa radical reconoce qu*i so ha
engañado, y no encuentrA mejor medio de salir del
paso quo descargar su furor on forma de groseros
insultos, sobro el Padro Santo, sobre el emperador
de Astria-Hungría, sobro el omoerador Guillermo,
sobre Bisinarcli y aun sobro Humberto do Saboyí ,
que «ha tenido do huésped á un principo quo ha
avenido á Roma para ver al Pontilice."
»E1 lenguaje de la presa oficiosa de Rusia y Borhn no es la mas apropósito para tranquiUzar á los
partidarios de la unid.id itahana. Esta prensa trata
cada dia conmas consideración á la Santa Sede; reconoce la alta inteligencia y el espíritu de paz y de
concordia que anima á León XIII; no desconoce la
necesidad de apoyar á la Iglesia, para que ésta con
su fuerza moral venza h la revolución, y se muestra dispuesta en Aloiuatüu á hacer concesiones á
los católicos, y en Austria á proteger cada voz ma*
decidamento la acción social del catolicismo.
«Tampoco puede tranquilizar á los partidarios
de la unidad itahana el espectáculo que hoy ofrece
Roma. A pesar de los grandes medios de que dispone el gobierno, no pasan do ocho mil los revolucionarlos que están dispuestos á acudir como peregrinos laicos á visitar el supulti'o de Víctor Manuel. ¡Y la prensa liberal que aun anteayer anunciaba quo iban á llegar de sesenta á setenta mil peregrinos laicos!
»Si la gran rebaja de precios líécha por los ferrocarriles á estos peregrinos se hubiese hecho también á los católicos, ¿cuántos hubieran venido á visitar á León XIII á mas de los treinta rail que vinieron? Adviértase además quo el municipio y el
gobierno pagan el hospedaje á muchísimos de los
quo han venido á rendir homenaje á la memoria de
Víctor Manuel.
«Debo advertir á Vd., para que nadie se deje
sorprender en España, que los libéralas disponen
aquí de todas las agencias telegráficas que envían
despachos á los periódicos de París, de los cuales
suele tomar la Agencia Fabra las noticias que publica de esta capital.
»La llamada gran peregrinación laica ha fracasado, digan lo quo quieran las agencias telegráficas
amigas dol Quirinal. Aquí lo reconocen así aun lo»
más enemigos de la Santa Sede.»—
La acción monárquica en Francia.
La Oazetle de France publica un artículo en el
cual enumera alguno de los resultados obtenidos
y de los progresos realizados en estos últimos
tiempos por el partido legitimista de Francia.
Dice el citado periódico:
oCatorco diarios realistas han sido croados en
estos últimos tiempos para reemplazar á los que
desaparecieron. Todos representan el acuerdo definitivo de los monárquicos, la unión absoluta alrededor del señor Conde de París, el olvido de las
pasadas disidencias; todos practican una política
franca y do elevadas miras.»—
Hay más todavía: diversos diarios bonapartistas de verdadera Importancia, acaban de aceptar
la monarquía hereditaria quo representa el señor
Conde de París.
A este propósito, escribo la Gazette de Frmce:
—«Esta agrupación de las fuerzas bonapartistas conservadoras ha sido lacilitada do un modo
especi»! por la política de fecunda unión y de conciliación que practica la prensa realista. Como el
señor conde üe Chambord quo dijo: «No quiero ser
rey do un partido;» el señor conde de París pretende sor rey do todos.»—
Mientras aparecía este artículo del decano de la
prensa legitimista y sucesor de L'Unión, M. Paul
de Cassagiiac decia cu el Pays:
—aNoB encorramcs en nosotros mismos y reconocomos quo hoy por hoy no hay entro nuestro»
principes bonapartistas uno sólo que por la claridad Uo su actitud ó por la confianza que inspira á
sus amigos, merezca que se grite ¡viva el emperador! »—
Tenemos verdadera satisfacción en levantar
acta de la declaración que se encierra en lits lineas
quo dejamos trascritas, y que parocen indicar que
al iin M. l'aul de Cassngnac se decide á etectuar la
evolución en sentido realista, que hace tiempo se
indicaba como probable.
La crisis p a r l a m e n t a r i a en H u n g r í a .
La Cámara do los señores, de Hungría, ha derrotado nuevamente al ministorio do M. Tisza,
La Cámara de lo» diputados habia devuelto á la
de los boñores el proyecto de ley de los matrimonios mi.\tos, rogándole que volviera sobre su
ikcuerdo. El gobierno, con objeto do ganar tiempo,
quería que ul proyecto pasase nuevauíenio á una
vumisión.
Li* Cámara decidió contra oslo parecer que el
proyecto so discutiera en el acto. Votaion con el
gobierno l"i!¿ señores y en contra 135.
Cuando el presidente proclamó este resultado,
so produjo un escándalo mayúsculo en la Cámara.
El sábado debió empezar de nuLVo la discusión, y
de un momento á otro sabremos si los católicos ó
«I Sr. Tisza y sus auiigo», han ganado lu Jaatalla definitiva.
L a Santa Sede y Prusia.
La Germanií!, do 13trlin, del dia 10 de esto mes,
pubhca una correspondencia do Roma, según la
cual el Papa, en su entrevista con el principo Federico Guillermo do Prusia, insistió acerca do los
gerviciüs que la Iglesia y el Pontificado pueden
prestar á la causa conservadora y monárquica en
su luclia contra el radicalismo y la revolución.
La cuestión romana fué abordada tiuiibion en i l
sentido que hizo notar León XIII, quo la resistencia á los elementos de desorden estaría más segura
del éxito si el Pontificado gozase de toda su libertad y si terminase el Kulturkampf.
Añade la Germauia que el Sr. Schloser ha expresado pdblicamento su esperanza do que en la
próxima primavera se habrá llegado á la completa
terminación de la paz religiosa entro la Iglesia y el
Estado en Prusia.
Los nihilistas rusos.
Parece que el procurador imperial, Sr. Monrevvioff, y su auxfiiar, Sr. Dobrochinsky; ol jefe de los
gendarmes y el ministro del Interior, señor conde
de Fulstoy, han sido condenados á muerte por el
comité ejecutivo do los nihihstas.
El Br. iMonrewieff so lia negado á hacerse acompañar, como medida do precaución, por una guardia particular.
^
El soñor conde de P a r í s y los legitímistas ^
franceses.
Escriben de Paría al Mo.iitcw de Romet:
—«Do pat>o para España, el suñor oonde de P a -
rís se ha deíenido algunos dias en esta capital, para'
conferenciar con sus antiguos amigos y recibir á
muchos antiguos servidores.
»La impresión producida por el Príncipe en los
q u e le hsn visitado, es buena. Uno de sus amigos
-de la víspera, nos decia: ISo le habéis visto desde
hace largo tiempo; encontrareis otro hombre.
»El hecho es que la actitud del Príncipe se ha
modificado. Mientras el señor conde de Chambord
"vivió, evitó todo lo posible hablar de política; preguntaba á todos, pero no se dejaba preguntar.
«Hoy, el señor conde de París habla, no como
amo, sino como jefe. Sabe que los que van á visitarle ven en él al heredero del trono, y los recibe
como un rey. A toda cuestión precisa da una respuesta clara.
»¿Quó debemos hacer en nuestra provincia? Tal
es generalmente la primera pregunta que se le dirig e por los que le visitan. El príncipe empieza por
preguntar acerca del espíritu de la provincia. Así
que le c'ono':e, ordena lo que debe hacerse ó lo que
debe omitirse.
»En general recomienda la formación de Comités, pero advierte que quiere ser jefe de todos. El
«eñor conde de París habla con gran moderación
de forma do la actual situación de Francia. La gestión económica le inquieta; la persecución religiosa
le irrita; la política e.xtranjera de la república le
alarma. nEsto no puede seguir así,» dijo últimamente.»
Parece que antes de salir el señor conde de P a rís para España, recibió una carta de Monseñor
Froppel, pidiéndole una audiencia. Ignoramos si la
entrevista pudo tener lugar.
NOTICIIS:
La Sociedad Protectora de los animales y de las
plantas ha rogado al señor alcalde que (hete laa
disposiciones necesarias, á fin de que se cumpla la
que los reglamentos y las ordenanzas municipales
disponen en lo relativo á tranvías y toda clase do
carruajes, para evitar los grandes abusos que hoy
Me cometen, pues unas veces por exceso de carga y
otras por debilidad del ganado, lo cierto es que en
las principales calles de Madrid se presencian escenas impropias de una capital culta. '
Bien hará el Sr. Maítinez Brau atendiendo la peíición que le hace la Sociedad Protectora.
mismo, 2'i4; por Fuente el Fresno, D. Emilio Nieto,
31; por el de Daimicl, el mismo, 629; por Soria,don
José Canaiejas, por unanimidad; por el de Jetafe,
D. José López Püigcerver, 665.
Í/l¥Pobo frustrado.
*:
Teniendo noticia el señor gobernador civil de la
provincia de que se iba á cometer un robo de gran
importancia en la casa-banca de D. Juan Villanova, donde están instaladas las oficinas y caja respectivas, dio instrucciones al primer jefe de orden
público Sr. Oliver, el que, en compañía del capitánayudante Sr. Rodríguez Palma, inspector especial
Sr, Zavala, teniente graduado alférez de ejército,
sargento de la Guardia civil Sr. González Hernández, y teniente D. Pedro Martínez, se constituyeron
on dicha casa, donde les manifestó el dueño lo que
iba á suceder, en virtud de lo cual se retiraron al
piso principal de la misma casa.
Colocados convenientemente dichos señores, y
dejando á !a espectativa en la calle al guardia civil
Valentín Vázquez y vigilante Antonio Pedresa.
Aún no serian las siete, cuando se oyó abrir la
puerta del piso segundo, penetrando en el de la izquierda y procediendo acto continuo á romper cajones d é l o s escritorios, asi como la caja de caudales.
Al cabo de un gran rato y de haberlos dejado
llegar á la mitad de su faena, el Sr. Oliver penetró
el primero en la habitación donde se estaba cometiendo el robo, dando la voz do «¡alto á la autoridad!» secundándole los que le acompañaban, contostando los líídrones con un continuado tiroteo de
pistolas, y haciendo armas además con navajas,
tacas y barras de hierro, acometiendo con fiereza
á los que iban representando la autoridad, viéndose precisados éstos á hacer uso de los revólvers,
descargándolos sobre los que acometían, entablándose una verdadera lucha que duró más de diez
minutos, resultando de ella tres ladrones heridos.
El Sr. Oliver sufrió una contusión en la mano
derecha, y el inspector Sr. Zavala dos navajazos en
el brazo izquierdo, otro en el pecho y un proyectil
que, además, le pasó el sombrero.
Los criminales iban provistos de pistolas de dos
cañones Lafochés y navajas de muelles de grandes
dimensiones, facaí,' palanquetas, limas, escoplos y
demás herramientas propias de la industria.
Acto seguido, acudió al sitio do la ocurrencia el
señor gobernador civil y el señor juez de guardia,
el quo dispuso fueran conducidos á la Casa de Socorro todos los que fueron heiiaos, y el ileso al
juzgado de guardia, devolviendo al dueño de la
casa el dinero quo le fué ocupado al que descerrajó
los cajones y arca de caudales.
Han fallecido:
En Santiago, doña Juana Pazos del Real; en
Pamplona, D. Valentín Salboch y doña Tomasa
Ruiz; en Tudela, el Canónigo D. Juan Francisco
Pérez de Laborda; en Barcelona, D. José Rivera y
Planas y D. Ramón Cuadras y Prin; en San Sebastian, D. José Juan Santesteban, y en la Coruña, don
Pedro Zugasti.
Dice un periódico que el capitán general de esto
distrito había ordenacio ayer el arresto do cinco ó
aeis sargentos da artillería, por haber ido estos á
visitar, según se decía, á los sargentos procedentes
del regimiento de Numancia, quo se encuentran on
el Saladero, de paso para el presidio do Valencia.
Los condes de París y sus hijas, que llegaron el
sábado, visitaron el mismo dia el Museo do Pinturas y por la noche asistieron á la ópera. Un periódico dice que la princesa Amelia, hija de los condes y de diez y ocho años de edad, es de gran belleza, y su hermsna Elena, de trece, es también
muy bella.
El Consejo de guerra de Badpjoz ha condenado
á seis años y un tlia de prisión mayor h D. Diego
Puentes, inspector de la guardia municipal d« dicha ciudad por creerle compHcado en los sucesos
del 5 de Agosto.
SEGUNDA EDICIÓN.
Empieza á sentirse fatig-a, entre los hombres políticos por lo mucho que dura la discusióu del Mensaje, hasta el punto de que, seg ú n se asegura, hoy se acordará por los jefes
de todas las fracciones de la Cámara, en unión
del tír. Sagasta y el gobierno, terminarla el
miércoles, aunque ac& ne(;;esario prorogar las
sesionei de los tres dias que faltan.
Es, pues, seguro que la crisis se planteará
el jueves, siendo muy verosímil qué los ministros, en el largo Consejo de ayer, se hayan
puesto de acuerdo sobre el modo de presentar
al rey sus dimisiones, y sobre lo que han de
aconsejarle si éste los consultase después de
admitírselas.
En los círculos políticos se hablaba con variedad de esta contingencia; pero los rumores
que circulan suponiendo unos que propondrán
al rey el llamamiento de los conservadores-, y
otros que le pedirán el decreto de disolución,
los creemos por hoy desprovistos de fundapiento.
_Los dos últimos números de la Ilustración Española y Americana prueban que la empresa de este
periódico no es do las que lo lian todo al prestigio
de la reputación, por solida y bien conquistada que
ésta sea. Entre los grabados de interés de actualidad, contenidos en dichos números, señalaremos:
los retratos del marqués de Tseng, el habilísimo
diplomático chino; el de !a nplaudida artista OrsiniMazzoli; el de D. Julián Prats, antiguo presidente
del Círculo de la Unión Mercantil, y el del eminente
poeta Zorrilla; la nueva Cárcel-modelo; el incendio
del arsenal do Lisboa, etc. Los grabados consagrados al arte son dignos de figurar al lado de los mejores que La Ilv.siración ha publicado, y lleva» las
lirmas de Plasencia, Leighton, Matejko, Rico, Soverini, Riudavets, Capuz, Vela y Carretero.
En cuanto al texto, con decir que es de Castro y
Serrano, Fernandez Bremón, el doctor Thobussem,
Menendez Pelayo, Velarde y otros do nuestros más
distinguidos escritores, basta para que coraprerH
d a n nuestros lectores que no es el menor atractivo
d e los números á que nos referimos.
La Gaceta de ayer contiene las siguientes disposiciones:
Presidencia.—Real decreto decidiendo á favor
d e la autoridad judicial una competencia promovÍT
d a entre el gobernador de la provincia de. Málaga
y v'l juez de primera instancia del di.strito de la Alameda de dicha ciudad.
Estado.—Reales decretos disponiendo la pre•ontación á las Cortes do un proyecto de ley pidiendo autorización para rectificar el tratado de
comercio y navegación entre España y Portugal,
los Países Bajos,"lnglaterra y los Estados-Uniüos.
Ultramar.—Real decreto disponiendo se proced a á la elección de un diputado a Cortes por el distrito de Puerto-Principe.
La Gacela de hoy contiene lo siguiente:
Presidencia.—iieal decreto decidiendo á favor
d e la autoridad judicial una competencia entre el
gobernador de la provincia de Barcelona y el juez
d e primera instancia do las afueras de dicha capital.
—Otro declarando mal suscitada y que no há
lugar á decidir otra competencia promovida entre
«1 delegado de Hacienda do Málaga y el juez do primera instancia do Honda.
Marina.—Real orden mandando proceder á la
publicación de convocatoria para cubrir por oposi«lon seis plazas de vigías en el cuerpo de Somiifo'"***'*"^f arreglo al programa quo es adjuato.
fomento.—Roal ói den dando en nombre de su
majestad las grüoias al conde de VcUe en su calid a d üe presidente delCon-sejode Administración de
la laonca de San Juan de Alcaraz, por los especiales servicios que ¿ iji, industria metalúrgica ha prestado y viene prestando.
En las elecciones verificadas ayer por el distrito
d e Laredo, obtu% o el candidato ministerial, señor
Lguiyor, 748 votos, y el Sr. Balagser ha obtenido
por el distrito de ViÜanueva y Geltrú 1.320 votos.
, Por el distrito de Aviles h« obtenido el Sr. García San Miguel 208 votos; por el de Castellón, el
mueven el corazón, ponen al que escucha en movimiento sobre el'banco.
El Sr. Navarro asienta que es partidario de la
conciliación, que acepta los principios del gabinete, pero acusa al Sr. Posada Herrera de ser, en vez
de concillado»-, nTnizm:! de disf^ordia.
Cree que en voz de resolver el conllicto se ha
metido en él y puesto en grave situación la regia
prerrogativa. Anima á la mayoría á votar contra el
gabinete, porque esta votación no significa el abandono de la conciliación, sino la censura del Sr. Posada Herrera.
Llama al duque d é l a Torre personalidad ilusire y gloriosa. Asienta que España es el pais de la
formalidad, y refiere la siguiente leyenda:
«Cierto Pontífice fué condenado en un concilio;
la sentencia habia de ser confirmada por él, y la
confirmó, pero ai ver aquel rasgo de modestia, el
Concilio canonizó al Papa después de haberle ahorcado.
Escusado es decir qtié el pontífice del cuento es
el proto-calamar Sr. ¡¿agasta. El cuento, como se
vé, es fantástico; ta^to valdría decir que en China
hubo un personaje político que convidó á sus amigos en la oposición, obligándose á pagar los obsequios el dia del triunfo; pero el dia del triunfo se
olvidaron de el los mandarines, sin acordarse de
los obsequios.
Anuncia el Sr. Navarro que va á decir la verdad,
y cuando la espoctacion es maj'or, prosigue... Fernando el Católico (risas). Cita el tratado de Utrech
y la invasión francesa, para concluir que las intluencias de Francia se conocen en la marcda politica de España.
(El público de las tribunas convidado del señor Castelar, se impacienta y empieza á toser estrepitosamente.)
Con voz enérgica dice el Sr.'Navarro que va á
continuar. (En la tribuna de ia prensa: Muy bien,
muy bien.)
El Sr. Navarro prosigue manifestando que la
revisión constitucional la desea á la inglesa; la
universalización del sufragio , pero moralizado.
(Por supuesto que lo que desea el Sr. Navarro por
patriotismo puro, ya lo sabemos; Sagasta le calabaceó, á pesar de sus tercios, y Posada siguió en
este punto las huellas de Sagasta). Jura un diputado asi quo concluye el discurso del dr. Navarro y
Rodrigo; pero como tardase mucho en venir el
electo, la minoría posibilista pega en los pupitres
golpes. La tribuna do la prensa protesta. D. Emilio se va á mí;rchar del salón.
El Sr. Posada Herrera le hace señas para que
so espere. Rectifica el Sr. Posada. Empieza recordando que en los antiguos grados de doctor habia
uno encaigado de anotar las faltas del graduando;
que en las canonizaciones hay fiscal del diablo;
que los triunfadores romanos llevaban detrás un
esclavo que les recordase las verdades que más
pudieran amargarles. Ei tenia su fiscal del diablo:
BU esclavo que le dijera verdades amargas é insultos á taita de verdades (risas; señales de aprobación). Dice que el Sr. N»varr«es el enfant terrible
de la mayoría (grandes risas), y que él al calificarle asi no hace sino revelar un secreto público. Recoge la afirmación del lar. Navarro do que no hay
división de principios entre él y el gobierno y la
mayoría, y le pregunta si lo que Iti estorban son
las personas, porque entonces los tres ministros
fusionistas y él presentarán la dimisión hoy mismo
par» que entre en el gobierno el Sr, Navarro
(grandes risas, aplausos on algunos bancos y señales do aprobación.)
demostró cuando fué gobierno y en este sentido va
á expresarse ahora.
Yo os conjuro para quo miréis la situación en
que nos encontramos, y penséis gravemeate sobre
nuestro estado actual.
Recuerda la situación en quo se encontró en
1873. y dice que él estableció un gobierno patriótico y no so dejó llevar del prurito de aparecer innovador en todo.
Para saber lo que seremos es necesario g.iber
lo que somes; nuestra patria es una democracia;
y debemos organizamos democráticamente, pues
si no no estareíuos debid.nmente constituidos.
Se lamenta de que el absolutismo haya tenido
preponderancia en España.
Dice que la democracia, si se la da ingreso en
el poder, encarnará eri la monarquía; pero que si
se le niega ingreso en el poder se encarnará en la
forma republicana.
Indica cuales han sido las bases do su poiitica
desde quo vino la restauración. Afirma que ei aconsejó á su partico que apoyase al constitucionnlismo, porque era el partido más liberal.
Ahora bien: ¿el partido constitucional á quien
yo ofrecí la benevolencia, representa ahora las
mismas ideas y tiene el mismo programa? No, porque hoy el partido constitucional ha recibido una
trasformación con la unión á él del grupo centralista.
Afirma que el partido constitucional ha sido absorvido por el grupo centralista.
Anuncia el orador quo va á tratar mañana del
viaje á Alemania, y pide y obtiene que se levante la
sesión.
• ' i ' - ^ "
TELEGRAMAS.
AGITACIÓN EN IRLANDA:
Dublin, 14.—Reina grande agitación en Irlanda
con motivo de los meelings que, tanto los nacionalistas como los orangistas preparan para pasado
mañana.
En Blacklión, cerca de Enniskien, se temen serios desórdenes.
Para evitarlos, se ha dispuesto que salga inmediatamente una columna do mil hombres con dirección á Enniskien, apesar de que ya habia allí
una guarnición de 500.
PORTUGAL.
Iiisboa 13 —En la sesión de aye.r de la Cámara
de diputados, el Sr. Mariano Carvalho preguntó al
gobierno si Paimogo era el punto indicado cerca de
la frontera para la unión del forro-carril del Sur de
Portugal con el delluelva.
ESTADOS-UNIROS.
Iióndres 14. — Un despacho de Nueva-York
anuncia para prineipios de esta semana una nueva
tempestad en el Noroeste de Europa.
BOLETÍN BE L.^ BOLSA.
COTIZACIÓN OFICIAL DEL l'i DE EN'ERO DE
FONDOS PÚBLICOS.
Ult precio.
MCVIMIENTO.
A/za
Deuda porp.» al 4 0,0 int
Id. id fin corriente
Id. id. fin próximo
Id. id. al 4 0;0 exterior, p
3 OTO exterior
2 OjO amortizable exterior.
Deuda amortiz. al 4 0[0.
Billetes hipot. de Cuba..
Cédulas hipot. al 7 OíO..
Id. id. aieOiO
Id. id. ai 59i0. p
AccionesBanco de España
Id. id. de Castilla
Id. id. Hispano Colonial
Carreteras, A g o s t o . . . .
Personal
57-80
57-80
58-15
56-90
18S3.
45
50
40
»
»
»
75
60
Bibja
10
Manifiesta que su gabinete era de concihación,
9
»
de transición y de nrgocios, porque habia de darse
»
preferencia á asuntos administrativos, que preocu5
71-25
pan más al pais que las cuestiones personales,
5
89-00
que parece son las que únicamente preocupan á la
Cámara. (Allá va esa.) Afirma que para la forma00-00
ción del gabinete puso en conocimiento del Sr. Sa101-80
gasta los nombres de los ministros fusionistas con
252-00
4-00
que contaba, pero que los escogió sin que la dore00-00
cha ni la izquierda se los impusieran. Defendiendo
00-00
á los ministros fusionistas, de los cuales había di00-00
cho el Sr. Navarro que la representaoión del par00-00
Apesar de lo que en contrario se aseguraba tido estaba oscurecida y apagada, dice que no
el sábado en el salón de conferencias, el señor los escogió hombres políticos íníluyentes, porque
CAMBIOS.
Sagasta abandonará el sillón presidencial y no convenía que fuesen apasionados. Pnosigue ma47-35
bajará á los escafio.« de los diputados á con- nilestando que no es hombre que le jfuste buscar Londres, á 90 dias fecha,
4-93 li2
testar las muchas alusiones que se han hecho figuras pequeñas á su lado; y que quiere tener á su París, á 8 dias vista
á su persona y á su política en el curso del lado hombres grandes; pero cuando las circunstancias no lo permiten... (antes de concluir la frase
debate del voto particular.
RELIGIOSO.
hay una explosión de risa en la Cámara. Los minisConstitucionales muy caracterizados ase- tros se quedan como quien ve visiones). El S. PoSANTO DE MAÑANA -San Pallo, primer herguraban esta tarde que guardaría en su dis- sada, imperturbable, prosigue diciendo que buscó milano, y San Mauro, abad
curso una gran templanza y moderación, sos- hombros de administración. Y no los elogia por no
CULTOS.—Parroquia de San Martin. Se gana el
teniendo la tesis de que habiendo fracasado el ofender su modestia. Indica los merecimientos de jubileo de Lis Cuarenta Horas, y continua el segobierno en su política de conciliación, hace los Sres. Moret y López Domínguez.
tenario á Nuestra Señora del Destierro. A las diez
Hablando do los ministros lu.sionistas pregunta habrá misa mayor, en la aue será orador, D. Mafalta otro ministerio que lleve á cabo lo que
quien puede dudar de la talla ó importancia políti- nuej Urihe, y por la tarde á las cuatro en los
no ha satildo realizar el Sr. Posada Herrera.
ca del Sr. Suarez Inclán (risas) ¡un hombre, prosi- ejercicios predicará el P. Hidalgo, concluyendo con
No ha producido muy buen efecto entre la gue diciendo, catorce veces diputado por sn pais! la procesión y reserva.
que el Sr. Gallostra es hombre de administraEn San Antonio Abad, continúa la novena de su
mayoría el discurso del Sr. Navarro Rodrigo: Dice
ción y quo el ministro de Estado conoce casi todas santo titular y predicará el Padre Pompillo Diaa.
en realidad, la mejor parte de la discusión la las lenguas extranjeras como la suya propia, (riEn San Ignacio, continúa el ejercicio del mes
ha llevado el S»". Posada Herrera, que le ha sas) y es competentísimo en asuntos mercantiles á del Niño Jesús.
contestado en nombre del gobierno, batiendo los que España ha de dar la preferencia; para que
En San Antonio de los Portugueses, culto como
en toda regla al ex-mÍHÍstro constitucional, ser amiga de todas las naciones pero sin intimidad todos los martes.
y dejándole bastante mal parado, sobre todo con ninguna.
San Luis, al toque de oraciones, se rezará el RoDice que comparados con el gigante de la ma- sario y Meditación.
al rebatir sus singulares teorías acerca de la
VISITA DE LA CORTE DE MARÍA.—Nuestra Seintervención del rey en la política, y las obli- yoría, Sr. Navarro y Rodrigo, claro es que los migaciones que puede contraer después de apro- nistros resultarán enanos. Se vindica de haber di- ñora del Tránsito en San Millan, ó en el Carmen
cho que el monarca aprobó el programa del gabi- Calzado.
bar el programa del gobierno.
nete, arguyendo con las mismas palabras del señor
Misa y oficio divino, son do San Pablo, con
El antiguo ministro de la Gobernación ha Navarro, que cree que los jefes de partido presen- ritoLa
doble y color blanco y conmemoración do San
estado muy hábil, habiendo sido felicitado por tan un programa, y que el que no era jefe departi- Mauro' abad.
los demócratas.
do, tenia que presentarse al suyo.
Para todo, añade, se requiere práctica, y para
BOLETÍN BE ESPECTÁCULOS.
El Sr. Castelnr ha comenzado hoy su discur- saber los deberes de un ministro monárquico y
so, empezando por examinar la situación po- parlamentario, haberlo sido (risas).
FUNCIONES PARA MAÑANA.
Dice que los ministros no son como los cómicos;
lítica y atacar con bastante vigor al segundo
que
hablan
cuando
les
interpelan
y
no
puedan
susministerio constitucional, acusando al Sr. Sa- pender sus discursos hasta otro día (risas) y que
T e a t r o Beal.—Alas ocho y media.—Función 64
gasta de haber renunciado á los principios terminará pronto porque ha dado esa palabra al do abono, turno 1." par.—Lucrezia.
democráticos al aliarse con los centralistas, Sr. Castelar. Dice que el Sr. Navarro está anticuaEspañol.—A las ocho y media.—4.* serie.—
tomando en cambio su aspecto reaccionario. do. Expone que el Gabinete solo ha afirmado los Función 15 de abono, turno 3.° 'rapar.—16 de marEl orador posibilista ha interrumpido su principios del sufragio universal, que|no se dará al tes.—La feria de las mujeres.—La Taberna.
Comedia.—A las ocho y modia.—Función 28 do
discurso para continuarlo mañana, prome- ejército, á los iiijos do famili:i, á los bohemios do
que hay tantos en este pais. (Ya lo creo) y que pue- abono, turno 11.o par.—El octavo no mentir.-¡Un
tiendo ocuparse de la política extranjera.
año más!—Intermedio por el sexteto.
de sor indirecto ó por dobles elecciones.
El Sr. Navarro itodrigo se levanta descompuesApolo.—A las ocho y media.—Turno par.—6.*
Hoy á las cinco se ha administrado el San- to, y en un largo párrafo en que las frases precipide
seis.—La
Tempestad.
to Viático al Sr. Romero Ortiz.
tadas salen con espuma de ia boca, dice: Salud al
Lara.—A las ocho y media.—Turno 2." par.—
Rogamos á nuestros amigos pidan á Dios triunfador constante, triunfador con moderados y
progresistas (etcc.era); el esclavo te dicelas verda- I dilletanti.—Sanguijuelas del Estado.—Ni visto ni
por la salud del enfermo.
des. Después manifiesta que cuando él era ministro oído.
Variedades.—A las ocho y media.—Un cabo
de la república deseaba la venida del principe AlCOítGHESOfonso. (Y sin embargo, condenó la restauración en suelto.—Trabajo perdido.—Do la noche á la mañala Gacela, y enviaba al duque de la Torre un tele- na.—Segundo acto.
(Sesión del 14 d e Knero d e 1884).
Eslava.—A las ocho y media.—Turno 1.°—CóAnunciado on los carteles democráticos quo grama, diciendo: «Ni monárquicos, ni alfonsinos.»)
mo está la sociedad.—Guerra al novio.—Hatohis.
hoy hablaba el Sr. Castelar, estaban llenas las tri- Esa no cuela, Sr. Navarro.
Navarro Rodrigo en la rectificación: parece im- —Segundo acto.
bunas, habíase aumentado el número de ugiores, y
M a r t i n . - A las ocho y media.—Se cede una hase adoptaron cuantas medidas do precaución exi- posible que un diputado de la historia del Sr. Pobitación.—Hija única.—La perla do Triana.—Segía el caso. Pero el Sr. Navarro y Rodrigo no qui- sada, hayase expresado como lo ha hecho.
El Sr. Castelar: Saquemos la cuestión del calor gundo acto.
so prestarse al papel de relleno hasta las cuatro de
la tarde, hora en que el sol dá de lleno en los esca- do las pasiones, y elevémosla á la región de los
P r i c e . - A las ocho y media.—Función 76 de
ños de la minoría democrática, y que es por consi- principios; yo no tengo ninguna rivalidad ni odio de abono, turno par.—El dia y la noche.
guiente la hora elegida por el Sr. Castelar para ha- fas parcialidades políticas que so disputan el goN o v e d a d e s . - A las ocho y media.—Gran r e bierno. Yo he de decir algo en nombre de mis corblar en esta época del año.
baja de precios.—Las mil y una noches.—Mis Leoreligionarios;
yo
no
quiero
que
mi
discurso
atize
El Sr. Navarro estuvo muy pesado y machacón.
na Daré.
Como las condiciones vocales no le favorecen y re- el fuego que nos devora en estos zozobrosos inspite las ideas doscientas veces, y usa mucha fra- tantes.
Imp. de Diego Valero.—San J u r a o s , '26.
Dice que para él la patria es lo primero y así lo
Boologia, sus discursos son insoportables, y SI n o
BOLETÍN
DE A N U N C I O S .
^nOE LA VISTA
ASMA
T
\N\PuHi ' Ní't.
ENFERMOS
u umm u wm.
N O M A S OIKGOS-OON'-CHA O K G Ü E R \ .
Precioso específico a!eman dol Dr. Nikels, de Berlín,
para la completa y radiual cur.ición de todas las enfermedades de la vista, por crónicas y antiguas que sean,
EJste purgante, en concurrencia con, los d'. «« clax', fué
Y SUPRIMIENDO EN AbSOLUTO TODAS
declarado ú mejor en la Gr^^n Exposición Especial Inter- CONDENANDO
LAS OPERACIONES, por considerarlas, no tan sólo de
nacional Balneológica de Francfort (Alemania), en 188! y
grandes sufrimientos pnra el eníoriao y muy costosos,
premiada con la
SINO INÚTILES Y ALTAMENTE PEUJUDICIALI'JS, pues
agravan la doloncia por lu irritación quo producon, sienUran Medalla deOro.
do causa la mayoría de ¡as voces de lodas las dolencias
Declinada la honra d« igual premio aue le adjudicó la graves y pérdida compleia de la vista. Este especifico está
Sociedad Científica Earopea, y otras do la misma índole, recomendado por las lumbreras do la ciencia médica de
ha obtenido
Europa y aprobado por las Academias do Medicina de
Medalla de Oro
Berlín, Viena y San Petersburgo. Los profesores Uicoff y
on b Exposición de Minoría y Aguas minerales de Ma- Bourgni, médicos adjuntos del hospital Imperial de Berdrid, siendo todos ÍIM compoa'ñtes de tal índole y tan gran- lín, han reconocido en el (.-'ontra-cegucra el mejor y único
preparado conocido para las enfermedades de la vista.—
de su míneralir-.-xcíón, que no tiene otro rival hasta ahora
conocido, y cada botella por estas razon-'t vale por dos de Medicación interna.—Pi-ospootos españoles. — Caja, 5
pesetas.
las otras, resultando á mitad de precio la do La ólargarita. Una larga, constante, y general c inica de treinta y dos
Vista cansada, Vi,sta corta y presbicia
años cada dia mas extendida, garantiza la bondad do oste
iurgantepara curar cjn facilidad y prontitud las cscrófuSE CÜRAV RADICALMENTK.
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en giro ó sellos de franqueo.
so pidan. Ftitrse bien.
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f
CUESTIONES LITORGICAS.
Esta obra excolonte, recomendada por casi todos
nuest'-os Prelados de E.spaña, Ultramar y Filipinas al Clero: declarada clásica en su gcnoro, on los Boletines
Elclesiásticos; tomad ^ por cuenta de Fábrica on los Obispados do Jaca, Astorga, Iju-b^stro, 2'"'i"ra, Barcelona,
Habana, Nucva-Cáceres (Filipina): mandada tomar en
otros muchos; adquirida por los Superiores do las Ordenes Religiosas de tos i:;st;olapi<)s, Redcntoristas y Misionuros do Tierra-Santn; yst iblocida como de TrxSo en algunos .Soininario.s; o-\:¡.oiinada y juzgada por la prensa
católica do Mí.drid. Provincias y hasta del E:i;tranjero en
sentido idéntico al ju;c:'.' de! Jipi.scopndo; es y debe ser
considerada, como dice el lOpi^copado. >IND[SPENSABLÍÍ. DE UTILISI.M \ NtiCESlÜAD Y CON LA CUAL APE-
t
EL E X C E L E N T Í S I M O SEÑOR
Y ETULAIN
PRKSRITEnO, DIuNIDAO DE TESORKHO QUE FtIÉ DE LA
S. I. M. DE MAN'ILA, PIlOflSOR Y VlCAHIO GENEilAL
DE AQUEL AHZOBISH.IDO, MÁS TAHOE DIGNIDAD DE
MAESTRESCUELA DE LA S. 1. C. DE VITORIA, Y ÍJLTIMAMENTE CAPELLÁN DE HONOR DE NÚ.yERO DE
S. U. Y RECEPTOR DE SV CAPILLA REAL, C.vBALLERO
GR.\N CRUZ DE LA REAL Y DISTINGUIDA ORDEN DE
IS.VItKL LA CATÓLICA.
IBA
F^L.E^):CIO«P.
d e s p u é s d e recibir los Santos Sacramentos en
esta Corte,
el dia 12 de Enero de 1884.
R. I. P.
N.vs SE üFRi;i;i;ii.-\. U N A D U D A A L O S PARROCXDS, E N
EL CUMPLIMIENTO DE S i S í EBEKES, QUE NO LA
HALLEN RESUELT.V.» A^I consta de los Boletines Eclesiásticos, de las carlai do ios Rli. Prolados dirigidas al
autor, -lo los perióciitai.11 y Uevi.st-.s católicas do Madrid,
Provincias, Ultramar y .Vro.'iipiálago Filipino, que hemos
tenido á la vist.» —l^a e-^ipoudición dy tan magnifica obra,
honra y gloria de E.ip-ui. sub ' á millares de ejemplares.
—Su precio 8 poset-is on España.—9, cortificnda.—En Ultramar, 16.—Certific:ici,a. '8.—NOTA. SC ha publicado por
el autor un svjiU>a'»¡o ni capítulo IV do la primera parto,
qup enviará^jr/'á.'js á los susoritorcs que le reelamen.
La oorrespóndeníi' y pedidos al autor I), l^orenzo
Sancho, Pro>!):tero, callo de las Aguss, núm. 4, Madrid.
ESTUDIO PR.VCTiCO DEL ENJUICIAMIENTO
^l Excmo. é limo. Sr. Patriarca ie las Indias, las hermanas, sobrinos y demás parientes, testamentarios y amigos del finado,
Suplican á Vd. .se sirva encomendarle .i
Dios, y asistir á la conducción del cadáver,
que tendrá lugar el dia 13 del actual á las
dos de la tarde, desdo la casa mortuoria,
calle del Lobo, núm. 32, al cementerio de
la Sacramental de San Isidro, y el lunes 14
á las once de la mañana, h la misa de Réquiem que on sufragio de su airan se ha de
celebrar en la iglesia parroquial do San Sebastian, «n lo que recibirán especial favor.
Criminal; por D. Victinto Ainat y Furió. abog.ido do los
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por el Excmo. Sr. D. Ti'initario Ruiz Capdopont, fisvsal
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Foüetin 11
LA USlÓy¡.
Enero 14
BERNABÉ RUDGE
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POR CHñRLES DICKENS
ESTRACTADA T TRADUCIDA EXPRESAMENTE P.» KA
EL F O L L E T Í N DB L á . U N I Ó N
PORD.J.A. A.
(CouliimacionJ
—¡Tiene saagre! dijo Bernabé extremeciéndose. Eso no lo puedo sufrir.
—¿Y de dónde procede esa sangre?
—De hierro, de hierro, de hierro, respondió
Bernabé con acento feroz, é imitando con la
mano la acción de dar puñaladas.
—Alg-un Iñdron, dijo Varden.
Bernabé, cog-iéndole el brazo, hizo un gesto afirmativo, y le indicó con el dedo la dirección de la ciudad.
—Ya, ¿conque ha escapado por allí el ladrón? Bien, no pensemos por ahora en él. Ten
quieta la antorcha mientras examino la herida.
Inclinósf) sobre el tendido y se puso á buscar sus heridas, mientras Bernabé miraba ea
silencio, fascinado por el interés y la curiosidad, pero repelido por un poderoso y secreto
horror, que imprimía á cada uno de sus nervios un movlmienío convulsivo.
Era este un joven de unos veintitrés años,
y aunque delg"fldo tenia muy buena estatura,
y el aspecto de constitución vigforosa. Pen- i
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tialmenta el empleo del J/inMOCydelarAO
IM
c/. PIEññE
LAMOUñOUX
Para evitar las falsificaciones, deberi exigir el Público
la Firma y Seña» del Inventor :
PZSBKB IiADCOirSOII'X,farm", ii.t.Tagrillieri.París
dia en desorden, alrededor de su cabeza, una
rubia «abellera, que dabaá su.? miradas de continuo inquietas, una expresión sing-ular, qua
no parecía rosa de este mundo, á lo cual contribuía también la palidez de su rostro y el
brillo vidrioso de sus grandes ojos. Aunque no
se le podia mirar sin cierta sensación extraña,
su fisonomía era buena, y hasta se notaba cierta cosa plañidera en aquel ro.stro descolorido
y huraño. La ausencia del alma, si es lícito
hablar así de quien tiene perdido el juicio, es
mucho mas terrible en un vivo que en un
muerto.
—Bernabé, dijo el cerrajero después de an
rápklo pero atento reconocimiento, este hombre no está muerto; tiene una herida en el
lado, y solo está desma3'ado.
—¡Le cono-^íco! ¡le conozco! gritó Bernabé.
—¿Le conoces'
—¡Chisí! Habia salido hoy de Londres para
ir á hablar con su novia... Por todo el oro del
mundo no quisiera yo que volviese á ir, pues
si vuelve yo conozco unos ojos que pronto se
cerrarían... A propósito de ojos: ¿veis las estrellas que hay allá arriba? ¿De quién »on
ojos esas estrellas? Si son los ojos de los ángeles que miran hacia abajo, ¿cómo se ocupan
solo en pestañear toda la noche cuando ven
dar puñaladas á los buenos?
—¡Dios se compadezca del pobre loco!—
murmuró el cerrajero muy perplejo.— ¿Conocerá en efecto á este gentlemau? La casa de
su madre no está lejos- Mejor será que ella
me diga quién es.—Rsrnabé, hijo mió, ayúdame á colocar á este hombre en el carruaje,
y lueg'o nos iremos todos juntos á tu casa.
—¡Yo no puedo... no puedo tocarlel—ex-
•r.Oíijííííl
•M'>:. . n '
CATitM, OPMSMR, \
JAQUECAS, DOLORES,^
TOS.PALPITACIONIS,
DE ESTOMAGO
y todas las afeccioy todas las afeccioiMít lie las v í a s r o a p i r a t o r i a » , se cal- nes nerviosas, se curan inmediatamente c o n
man inmediatamente j »e curan usando l«s ._
]a« PILDORAS _A N T I - N E U R A L e i C A S
T U B O S LEVAS3EUR.
I del D ' CRONIBR.
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do la Orden de .S.an Agustin, no se oculta su interés general, histórico y literario, sobro todo á las personas ilustradas. Avalora su mérito la publicación tle manuscritos
de nuestros Archivos de Indias y Simancas, ele las Bibliotecas de la Academia de la Historia y do la Nacional da
Madrid, de la Nacional de París, de la Angélica do Roma^
y otras y otr.ns. Su interés y valía han de ser crecientes,
por la inserción do artículos de todo linaje do ciencias,
escritos ya en latín, ya en nuestro rom.nco. Publícase en
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clamó el demente retrocediendo y extremeciéndose como en un violento accidente. ¡Está
ensangrentado!
—Es verdad; no me acordaba,—pensó Gabriel: la sangre inspira una invencible repugnancia á este muchacho. Sería una crueldad
obligarle, pero necesito absolutamente de su
ayuda,—Y añadió en voz alta: ¡Bernabél ¡Buen
Bernabé! ¡Mi querido Bernabé! Puesto que conoces á este getleman, en nombre de su propia vida, y de la vida de los que le aman, ayúdame á ponerle en el carruaje.
—¡Tapadle! ¡Envolvedle del todo!... ¡Que yo
no vea, no, que yo no lo huela, que no lo oiga
nombrar siquiera!... ¡No pronunciéis .sn nombre!...
—Corriente, no temas. Mira, ya está bien
tapado.
—Bueno, despacito... Así; así.
Colocáronle en el carruaje con facilidad,
pueci Bernabé era fuerte y activo; pero todo
el tiempo que duró la operación estuvo estremeciéndose desde la cabeza hasta los pies,
experimentando visiblemente un terror tan
angustioso, que el cerrajero podia soportar
apenas-el e.spectáculo de su sufrimiento.
Ya colocado el herido, y cubierto con el
abrigo de Varden, emprendieron la marcha
á paso largo, Bernabé contando alegremente
las estrellas ccn los dedos, y Gabriel felicitándose interiormente porque ahora tenia una
aventura qiiie contar que,, sin género de duda,
impondría silencio á Mistress Varden respecto al Maypole, 6 ya no hay en el mund» modo
de fiarse de las mujeres.
CAPÍTULO IV.
Donde se verá que ser aprendiz de cerrajero
no impide estar enamorado.
Entremos en el antiguo arrabal de Clerkenwell, pues un arrabal de Londres era á la
sazón, y en su confín más próximo á CharterHoiise, en una de sus calles frescas y sombrías .
En la época de que se trata, aunque sólo
se trata de setenta años atrás (1), aún no existia una gran parte de la Londres actual, y ni
aun los más ardientes e-speculadores Imbian
concebido en sus cerebros las inmensas líneas
de calle« que enlazan á Flighgate con Whitechapel. Esta parte de la ciudad estaba ya^ sin
embargo, muy poblada antiguamente, y habia
tomado asiento en ella una multitud de industrias fabrile.s.
En la calle donde hemos penetrado, la más
limpia de todas, habia una casa de que vamo&
á ocuparnos.
Era un modesto edificio, no de iiltíma
moda, ni muy ancho, ni muy estrecho, n i
muy alto; su fachada no era de esas atrevidas con sus grandes ventanas que os miraa
con desvergüenza; era una easa tími'ia, p u dorosa, con el techo cónico que se elevaba en
punta encima de la ventana del desván, cercada con una vidriera de cuatro pequeños v i drios como un sombrero de candil sobre la cabeza de UH «caballero que no tuviese mas qu»
un ojo. No era su fábrica de ladrillo ni de s i llares, sino de madera y yeso; y por último,
no habia sido proyectada con monótono y eno(I) taadMa esto^elautor en 1SÍ5.