IMPORTANCIA DEL PARAMETRO MACROESCALA EN LOS ENSAYOS ESTRUCTURALES EN TUNEL DE VIENTO Y SU DETERMINACIÓN * M. De Bortoli, A. Wittwer, M. Natalini Facultad de Ingeniería, Universidad Nacional del Nordeste Av. Las Heras 727, 3500 Resistencia, Chaco, Argentina. Tel. 0722-39039, Fax: 0722-20076 E-mail: [email protected] RESUMEN Para la determinación de las cargas de viento a través de ensayos sobre modelos estructurales en túneles de viento es necesario realizar simulaciones de la capa límite atmosférica, que reproduzcan el perfil de velocidades medias y los parámetros turbulentos. Aún para el caso de ensayos de tipo estático, es fundamental la determinación, a través de mediciones, de un parámetro de la turbulencia llamado macroescala. Este parámetro está asociado al tamaño medio de los remolinos más grandes presentes en la capa límite, que son los que producen efectos globales en la estructura o modelo estructural, y además determina el factor de escala de la simulación y la escala geométrica del modelo. Existen distintos procedimientos que permiten obtener la macroescala y posteriormente, determinar el factor de escala de la simulación. En este trabajo se comparan valores de la macroescala obtenidos en distintas simulaciones de la capa límite atmosférica correspondientes a terreno suburbano α = 0,25, rural α = 0,14 y campo abierto α = 0,09 utilizando tres procedimientos diferentes. Los tres terrenos simulados corresponden a las categorías III, II y I respectivamente, de acuerdo al Reglamento CIRSOC 102: Acción del Viento sobre las Construcciones. El análisis de los resultados permite evaluar los procedimientos empleados por otros autores y brindar algunos criterios sobre la conveniencia de implementar uno u otro. * Trabajo presentado en el Congreso de la AIES de 1998 INTRODUCCION El túnel de viento es una herramienta fundamental en el estudio de acción del viento sobre las estructuras. Específicamente, el túnel de viento de capa límite “Prof. Jacek Piotr Gorecki” de la UNNE está destinado a ensayos sobre modelos estructurales a partir de la reproducción de la capa límite atmosférica. El primer problema que se presenta cuando se consigue la simulación de la capa límite atmosférica en un túnel de viento es como obtener el factor de escala de la simulación, que determina las dimensiones geométricas del modelo. Los primeros ensayos estructurales en túneles de viento se realizaron con flujo uniforme y suave. Las comparaciones entre los resultados obtenidos en modelos y estructuras reales mostraron la necesidad de reproducir la variación de las velocidades medias con la altura, que es una función del tipo de terreno a simular. En 1958, Jensen [1] estableció que para realizar ensayos estructurales en túneles de viento es necesario simular una capa límite turbulenta asociada a la capa límite atmosférica a través de un parámetro que es la longitud de rugosidad z0. De esta manera el factor de escala quedaba definido por la relación entre una dimensión geométrica de la estructura y un parámetro del perfil logarítmico de velocidades medias que es z0. Estudios posteriores intentaron reproducir lo más cercanamente posible el flujo medio y la estructura de la turbulencia del viento atmosférico, en particular, aquellas propiedades relacionadas a cargas de viento. En líneas generales, el viento natural consiste en un flujo de aire medio al que se le superponen las fluctuaciones del flujo. Se puede decir entonces que las cargas de viento están determinadas por el perfil velocidades medias y las fluctuaciones de velocidad, y considerando a las fluctuaciones como los remolinos presentes en el escurrimiento, producirán efectos globales sobre una estructura aquellos cuya dimensión sea sensiblemente mayor que la construcción [2]. La macroescala es un parámetro usado para describir las características de la turbulencia y representa el tamaño de los remolinos predominantes, por lo que debería ser considerado en el análisis de efectos de carga globales sobre una estructura. Cook [3] propuso un procedimiento para determinar el factor de escala de simulación considerando dos parámetros llave que describen la velocidad media y las características turbulentas del flujo, que son la longitud de rugosidad z0 y la macroescala Lxu. Existen distintos procedimientos para determinar el valor de la macroescala de acuerdo al criterio de análisis de la turbulencia utilizado por cada autor [4,5]. En este trabajo se presentan tres métodos para calcular este parámetro, como así también los valores obtenidos en distintas simulaciones de la capa límite atmosférica. Por último, se establecen comparaciones de resultados y algunos criterios referidos a la utilización de estos procedimientos. MATERIALES Y METODOS Los resultados presentados en este trabajo fueron obtenidos en el túnel de viento de capa límite “Prof. Jacek Piotr Gorecki” de la UNNE, que es de circuito abierto y tiene una cámara de ensayos de 2,40 m de ancho × 1,80 m de altura × 22,80 m de longitud. La velocidad máxima con el túnel en vacío es de 25 m/s y utiliza ventilador axial de 2,25 m de diámetro accionado por un motor trifásico de 92 kW. La simulación de viento natural es el modelado físico del escurrimiento turbulento de capa límite atmosférica en un túnel de viento, y consiste en reproducir los parámetros que caracterizan a ese escurrimiento lo más fielmente posible dentro del túnel. La capa límite atmosférica concuerda con la capa límite que se desarrolla sobre una placa plana con cierta rugosidad, bajo la condición de gradiente de presión nulo. La rugosidad tiene el mismo rol que los obstáculos del terreno en la atmósfera, es decir, establece el perfil de velocidades medias y las características de la turbulencia del escurrimiento. Sin embargo, simular la capa límite atmosférica en un túnel de viento utilizando solamente elementos de rugosidad requiere cámaras de ensayo de grandes longitudes porque el crecimiento de la capa límite hasta llegar a las escalas usuales para los ensayos es muy lento. Para evitar este problema se colocan otros dispositivos a la entrada de la cámara de ensayos del túnel denominados simuladores, que fuerzan a un crecimiento más rápido de la capa límite. En este trabajo se utilizó la técnica de simulación implementada por Standen [6], que hace uso de un dispositivo que se coloca al inicio de la cámara de ensayo y se conviene en llamar aguja (en la bibliografía es denominado “spire”), seguido de elementos de rugosidad distribuidos en el piso de la cámara de ensayos. Cada aguja consiste en una placa triangular muy esbelta con una cara enfrentada al escurrimiento y que en la cara a sotavento tiene adherida una placa de refuerzo. En el caso de simulaciones de capa límite de espesor parcial, la placa en lugar de ser triangular es un trapecio. La altura y el ancho de base de las agujas, como así también la ubicación se calculan mediante las expresiones propuestas por Irwin [7] a partir del espesor de capa límite y el perfil de velocidades medias que se pretende conseguir. Estas expresiones permiten el diseño de agujas destinadas a simulaciones de espesor total y de espesor parcial de la capa límite atmosférica. Se analizaron tres simulaciones de espesor parcial de la capa límite atmosférica correspondientes respectivamente a terreno suburbano α = 0,25, rural α = 0,14 y campo abierto α = 0,09, siendo α el exponente de la ley potencial que caracteriza el perfil de velocidades. La simulación de exponente α = 0,25 responde a un terreno de categoría III (áreas industriales, suburbios de grandes ciudades), α = 0,14 responde a un terreno de categoría II (zonas llanas poco onduladas con obstrucciones dispersas), y α = 0,09 responde a un terreno de categoría I (llanuras planas con pocas o ninguna obstrucción) de acuerdo al Reglamento CIRSOC 102 [8]. El sistema de medición está constituido por un anemómetro de hilo caliente Dantec 56C, un osciloscopio digital de dos canales Tektronic TDS 320, un amplificador Stanford SR560 con filtros analógicos pasa-bajos y pasa-altos, una plaqueta conversora analógico-digital Keithley Metrabyte DAS-1600 instalada en un computador personal y un multímetro digital Keithley-2000. Este sistema permite la determinación de velocidades medias, intensidades de turbulencia, funciones de autocorrelación y espectros. Para el análisis espectral y de autocorrelación se obtienen series numéricas a partir de la digitalización de la señal de salida del anemómetro que luego son procesadas mediante programas computacionales. DETERMINACION DEL FACTOR DE ESCALA EN UNA SIMULACION DE CAPA LIMITE ATMOSFERICA Para obtener el factor de escala del modelo en simulaciones de la capa límite atmosférica se utiliza el procedimiento propuesto por Cook [3] que emplea la longitud de rugosidad z0 y la macroescala o escala integral Lxu como parámetros llave. La longitud de rugosidad es un valor único para una capa límite dada, está directamente ligado a la altura media de los obstáculos que forman la rugosidad de la superficie terrestre y es un parámetro relacionado a las velocidades medias que define el perfil logarítmico de las velocidades. La escala integral es un parámetro que varía con la altura sobre el terreno, está vinculado a las características turbulentas del flujo y es una dimensión promedio de los remolinos más grandes presentes en el flujo. El parámetro z0 se determina ajustando los valores del perfil de velocidades u z − zd , siendo U la velocidad media, medias a la ley logarítmica de la pared U = * ln κ z0 κ la constante de von Kármán, zd el desplazamiento del plano cero y z la altura medida desde la superficie. La escala integral puede determinarse de tres maneras distintas: 1. Integrando la función de autocorrelación se obtiene la escala temporal y asumiendo la validez de la hipótesis de Taylor se puede determinar la macroescala como Lxu = UTu , siendo Tu = ∫0∞ Cu (τ )dτ la escala temporal y Cu la función del coeficiente de autocorrelación. Taylor, estudiando la turbulencia, admitió que los remolinos se desplazan con la velocidad media del viento y sin alteración sensible en una corta distancia. En otras palabras, la alteración en la forma de un remolino cuando el mismo pasa en la zona de medidas es tan suave que puede ser considerado “congelado” durante su pasaje, deslizándose con la velocidad media del viento [9]. 2. A través del pico espectral utilizando la expresión Lxu = λ p / 2π , siendo la longitud de onda para el valor pico del espectro de la componente longitudinal medido λ p = U / f , y f la frecuencia correspondiente a ese pico [4,9]. 3. Ajustando el espectro de la componente longitudinal medido al espectro de diseño representativo de los valores atmosféricos también se puede obtener la macroescala. Más aún, cuando la forma del espectro no coincide en su totalidad, el ajuste se puede “desviar” al rango de frecuencias de interés (por ejemplo, la frecuencia natural de la estructura modelada), dándole cierta flexibilidad al método [3]. Con el valor fLxu / U = 1 en el espectro de diseño, se obtiene la correspondiente frecuencia f en el espectro medido con la que se puede determinar la escala integral como Lxu = U / f . Como se ha dicho, la altura de rugosidad es constante, pero la escala integral guarda una dependencia funcional con la altura efectiva z-zd, y la longitud de rugosidad z0, que según datos de ESDU (Engineering Sciences Data Unit) dados por Cook [1977], queda establecida por la expresión empírica Lxu = 25( z − zd )0,35 z0 −0,063 . Una vez obtenidos los parámetros llave, el factor de escala del modelo S puede determinarse de dos maneras distintas. A través de un método de iteraciones gráficas considerando un valor inicial para S, o en forma determinística a partir de la ecuación anterior. Utilizando esta última forma, si se reemplaza cada parámetro a escala real por el producto del factor de escala S por el valor a escala de modelo (subíndice M), se obtiene que SLxuM = 25[ S ( z − z d ) M ]0 ,35 [ Sz0 M ]−0 ,063 y se llega a una solución para S en términos de los valores en escala de modelo: S = 91,3( z − z d ) M 0, 491 LxuM 1, 403 z0 M 0 ,088 RESULTADOS En primer lugar, se presenta en forma detallada el procedimiento para la obtención de la longitud de rugosidad y la macroescala, en un punto de medición, por los tres métodos mencionados para el caso de la simulación de espesor parcial de la capa límite atmosférica, correspondiente a terreno categoría III (α = 0,25). Los valores que se muestran corresponden a la altura z = 0,384 m. a- Determinación de los parámetros de la ley de la pared A partir de los valores medidos de velocidad media ajustados a la ley de la pared hasta 0,15 zg, siendo zg la altura gradiente se obtuvieron los valores z0 = 0,0011 m y zd = 0,0154 m. b- Determinación de la escala integral 1. Integrando la curva de autocorrelación de la Fig. 1 se obtuvo el valor de la escala temporal Tc = 0,042seg y mediante la aplicación de la hipótesis de Taylor se determinó el valor de la macroescala Lxu = 0,77 m. 2. Mediante el análisis del pico espectral de la Fig. 2, se obtuvo el valor Lxu = 0,724 m. 3. Ajustando el espectro experimental al espectro de diseño como se indica en la Fig. 3 se obtuvo el valor Lxu = 0,653 m. En este caso, el ajuste fue “desviado” al sub-rango inercial del espectro caracterizado por el exponente –2/3. 1,0 z=0,384 m U=18,21 m/s 0,8 Cu(τ) 0,6 0,4 0,2 0,0 0,0 0,1 0,2 τ [s] Fig. 1: Curva de autocorrelación 0,3 0,3 f Φ(f) /σu2 fp =4 Hz 0,2 0,1 0,0 1 10 100 1000 f [Hz] Fig. 2: Análisis de la frecuencia de pico espectral valores experimentales ____ espectro de diseño 0,3 f=27,89 Hz f Φ / σu2 0,2 z=0,384 m U=18,21 m/s 0,1 0,0 1 10 100 1000 f [Hz] Fig. 3: Ajuste al espectro de diseño[ESDU] En las tablas 1, 2 y 3 se presentan los valores de macroescala para las simulaciones correspondientes a terrenos de categorías III, II y I. En la tabla 1, que corresponde a terreno categoría III (α = 0,25), se muestran los valores del factor de escala de la simulación obtenidos a partir de los parámetros z0, zd y Lxu , mediante la expresión dada por Cook [3]. En las últimas dos simulaciones, correspondientes a terreno categoría II (α = 0,14) y categoría I (α = 0,09), no se determinaron los valores del factor de escala porque el procedimiento detallado anteriormente no permite calcular el valor de la longitud de rugosidad. Tabla1. Terreno categoría III Autocorrelación S Pico espectral Altura [m] Lxu [m] 0,233 0,62 0,72 0,57 0,384 0,77 0,72 0,65 0,582 0,69 0,800 0,70 0,83 0,79 0,966 0,60 0,56 0,49 180 S Ajuste espectral Lxu [m] 0,76 165 Lxu [m] 0,67 S 200 Tabla 2. Terreno categoría II Autocorrelación Pico espectral Ajuste espectral Altura [m] Lxu [m] Lxu [m] Lxu [m] 0,11 0,61 0,55 0,47 0,34 0,64 0,69 0,60 0,57 0,57 0,67 0,55 0,80 0,45 0,61 0,57 Autocorrelación Pico espectral Ajuste espectral Altura [m] Lxu [m] Lxu [m] Lxu [m] 0,10 0,46 0,45 0,40 0,40 0,43 0,58 0,49 0,74 0,49 0,57 0,51 Tabla 3. Terreno categoría I CONCLUSIONES El análisis de los resultados indica que a través del procedimiento del pico espectral se obtienen mayores valores de macroescala. Si bien, en general, existe mayor semejanza de los resultados obtenidos de esta forma con los determinados a partir de la función de autocorrelación, es necesario destacar la regularidad observada en la diferencia entre los valores obtenidos a partir del ajuste espectral y del pico espectral. El hecho de obtener mayores valores mediante el análisis de pico espectral, bien podría ser atribuido a que el análisis se centra en la frecuencia correspondiente a los mayores remolinos, en cambio en el otro caso el ajuste se hace considerando todo el espectro o al menos un amplio rango del mismo. Los valores que se muestran en la tabla 1 indican la sensibilidad del factor de escala S respecto al valor de la macroescala, lo cual refleja la importancia que le asigna el procedimiento de Cook a este parámetro en el análisis de una simulación. Por último, conviene señalar que el procedimiento de obtención de macroescala a partir del ajuste espectral presenta la ventaja de cierta flexibilidad que permite darle preponderancia a las frecuencias naturales de la estructura que se pretenda analizar. Además, como se observa en la Fig. 2, la técnica de medición implementada no permite obtener una buena resolución del espectro en la zona del pico, lo cual trae aparejada cierta incertidumbre en los resultados obtenidos mediante el procedimiento del pico espectral. REFERENCIAS [1] D. Surry, "CONSEQUENCES OF DISTORSIONS IN THE FLOW INCLUDING MISMATCHING SCALES AND INTENSITIES OF TURBULENCE", Proceedings of the International Workshop on Wind Tunnel Modeling Criteria and Techniques in Civil Engineering Applications, Gaithersburg, Maryland, USA, April 1982 p. 137-185. [2] J. Blessmann, “INTERVALO DE TEMPO PARA CÁLCULO DA VELOCIDADE BÁSICA DO VENTO”, Editora da Universidade, Universidad Federal do Rio grande do Sul, Brasil, Terceira edição atualizada, 1988. [3] N. J. Cook, “DETERMINATION OF THE MODEL SCALE FACTOR IN WIND-TUNNEL SIMULATIONS OF THE ADIABATIC ATMOSPHERIC BOUNDARY LAYER”, Journal of Industrial Aerodynamics, 2 (1977/1978) 311-321. [4] C. Farell and A.K.S. Iyengar, “ON THE EXPERIMENTAL DETERMINATION OF ROUGHNESSS LENGTH AND INTEGRAL LENGTH SCALES IN ATMOSPHERIC BOUNDARY LAYER SIMULATIONS”, Proceedings of the 2nd European & African Conference on wind Engineering, Genova, Italy June 1997, Volume 1 p. 267-274. [5] J. Blessmann, “THE USE OF CROSS-JETS TO SIMULATE WIND CHARACTERISTICS”, Journal of Industrial Aerodynamics, 2 (1977) 37-47. [6] N. Standen, “A SPIRE ARRAY FOR GENERATING THICK TURBULENT SHEAR LAYERS FOR NATURAL WIND SIMULATION IN WIND TUNNELS”, National Research Council of Canada, NAE, Report LTR-LA-94, 1972. [7] H. P. Irwin, “DESIGN AND USE OF SPIRES FOR NATURAL WIND SIMULATIONS”, National Research Council of Canada, NAE, Report LTR-LA-233, 1979. [8] Reglamento CIRSOC 102: “ACCIÓN DEL VIENTO SOBRE LAS CONSTRUCCIONES”, Instituto Nacional de Tecnología Industrial, 1983. [9] J. Blessmann, “SIMULAÇÃO DA ESTRUTURA DO VENTO NATURAL EM UM TUNEL AERODINÂMICO”, São José dos campos, Estado de São Paulo, Brasil, 1973.Tesis Doctoral.