For Peer Review Only - Ruidera - Universidad de Castilla

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UNIVERSIDAD DE CASTILLA – LA MANCHA
FACULTAD DE CIENCIAS DEL DEPORTE
DEPARTAMENTO DE ACTIVIDAD FÍSICA Y CIENCIAS DEL DEPORTE
Programa de Doctorado en Ciencias del Deporte
Seguridad en instalaciones deportivas desde el
punto de vista del gestor deportivo; el caso de
las piscinas climatizadas de uso colectivo
Tesis Doctoral desarrollada por:
Isidro Verdú Conesa
Dirigida por:
Dra. Dª. Leonor Gallardo Guerrero
Dr. D. Eduardo Segarra Vicens
Toledo, 2015
Todas las islas, incluso las conocidas,
son desconocidas mientras no
desembarquemos en ellas.
José Saramago
El cuento de la isla desconocida
A Lucía
A la fecha de depósito de esta memoria de Tesis Doctoral, y
fruto de la investigación realizada, ha sido enviado a la revista
“International Journal of Injury Control and Safety Promotion” el
artículo “Comprehensive assessment of indoor pools in the
Region
of
Murcia
(Spain)
and
effects
on
user´s
satisfaction”, que se incluye en el Anexo 3 de este documento.
Dra. Dª. Leonor Gallardo Guerrero, Profesora Titular
de la Universidad de Castilla - La Mancha en la
Facultad de Ciencias del Deporte de Toledo,
Certifica
Que el trabajo de Tesis Doctoral desarrollado por D.
Isidro Verdú Conesa, titulado Seguridad en
instalaciones deportivas desde el punto de vista del
gestor deportivo; el caso de las piscinas
climatizadas de uso colectivo, ha sido realizado bajo
mi dirección. En mi opinión, reúne los requisitos para
proceder a iniciar los trámites pertinentes para la
Comisión de Doctorado de la Universidad de Castilla La Mancha y su posterior defensa ante tribunal.
Y para que conste, expido la presente certificación
en Toledo, a octubre de 2015
Fdo. Dra. Dª. Leonor Gallardo Guerrero
Dr. D. Eduardo Segarra Vicens, Profesor
Asociado de la Universidad de Murcia en la
Facultad de Ciencias del Deporte,
Certifica
Que el trabajo de Tesis Doctoral desarrollado por D.
Isidro Verdú Conesa, titulado Seguridad en
instalaciones deportivas desde el punto de vista del
gestor deportivo; el caso de las piscinas
climatizadas de uso colectivo, ha sido realizado bajo
mi dirección. En mi opinión, reúne los requisitos para
proceder a iniciar los trámites pertinentes para la
Comisión de Doctorado de la Universidad de Castilla La Mancha y su posterior defensa ante tribunal.
Y para que conste, expido la presente certificación
en Murcia, a octubre de 2015
Fdo. Dr. D. Eduardo Segarra Vicens
Agradecimientos
En primer lugar dar mi especial agradecimiento a Leonor y Eduardo, directores
de esta Tesis Doctoral. Ambos pusieron su confianza en mí, y gracias a ellos
he podido realizar esta nueva andadura. He sentido su apoyo de forma
continua, y he tenido su ayuda inmediata siempre que la he necesitado. Mi
agradecimiento de corazón a los dos.
Mi agradecimiento también a los alumnos de tercer curso del Grado en
Ciencias de la Actividad Física y el Deporte de la Universidad de Murcia en el
curso 2014/15, por su colaboración en la realización del trabajo de campo. A su
profesorado, en especial a Arturo y Enrique, que me abrieron las puertas de su
facultad, y cuya colaboración ha sido fundamental para el desarrollo de este
trabajo. A los miembros de las corporaciones municipales de la Región de
Murcia: alcaldes, concejales y personal de gestión administrativa y deportiva,
por facilitar el acceso a sus instalaciones deportivas y aportar la información
necesaria para la realización de los estudios de investigación. A los gestores y
trabajadores de las piscinas climatizadas de titularidad municipal de la Región
de Murcia, por su amabilidad en el trato y su transparencia profesional. A los
miembros del grupo de investigación IGOID de la Universidad de Castilla – La
Mancha, por su apoyo, especialmente en las últimas fases de esta tesis.
A mis amigos y mi familia, por saber ser…eso… amigos y familia.
Y por supuesto, a mi madre y a mi hija, pilares de mi vida.
Resumen
La presente Tesis Doctoral aborda la problemática de la seguridad en
instalaciones deportivas desde el punto de vista del gestor deportivo, y la
particulariza para el caso de las piscinas cubiertas climatizadas de uso
colectivo.
La gestión deportiva abarca y unifica múltiples campos de actuación. Sin
embargo, los aspectos referidos a la seguridad en las instalaciones deportivas
suelen tratarse desde el punto de vista de cada especialista en seguridad,
siendo minoritarios los trabajos desde una perspectiva propia del mundo del
deporte. Por ello, en este trabajo realizamos un conjunto de estudios sobre esta
temática. Dada la novedad del tema, el primer estudio es del tipo exploratorio y
de carácter cualitativo: una investigación documental que cubre un amplio
espectro de documentos y aporta una buena base para los estudios
posteriores.
Los dos siguientes son descriptivos y de tipo cuantitativo. El primero de ellos
consiste en una auditoría a piscinas climatizadas mediante un cuestionario de
validación (también llamado lista de control o check list), estudio que incluye el
desarrollo de una herramienta para tal efecto. El segundo complementa el
anterior con una investigación sobre percepción de seguridad de los usuarios
de piscinas.
Si bien el propósito de esta Tesis Doctoral es generalista, el ámbito de nuestros
estudios se centra en las piscinas climatizadas de uso colectivo y titularidad
municipal de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, presentando un
ranking de estas instalaciones basado en los estudios realizados. Nuestra
intención ha sido analizar en profundidad esta cuestión, reflejar la situación de
la seguridad en nuestro ámbito geográfico, proponer herramientas y
metodologías, y abrir líneas de investigación en el campo la gestión de la
seguridad en instalaciones deportivas.
Palabras clave:
gestión deportiva, deporte, seguridad, instalaciones
deportivas, piscinas, piscinas climatizadas, investigación
documental, cuestionario de validación, lista de control,
check list, estudio cuantitativo, estudio cualitativo, estudios
de percepción, percepción de la seguridad.
Abstract
This PhD Thesis deals with the problem of security in sports facilities from the
viewpoint of sports manager. The work is particularized for heated indoor pools
for collective use.
The sports management include and unifies multiple work fields. However,
aspects related to safety in sports facilities are usually managed from the
viewpoint of each safety specialists. Then, It is minority a perspective from the
world of sport. Therefore, we present a set of studies about this subject.
Due to the newness of this subject, the first study is exploratory and qualitative:
a documentary research about safety in sports facilities, covering a wide range
of documents. This study provides good basis for the following two studies.
The next two are descriptive and quantitative. The second work is a safety audit
of a set of heated swimming pools using a check list. This work includes the
development and validation of the check list. The third study complements the
above with a research about safety perception of users of this kind of facilities.
Although the purpose of this PhD Thesis is general, the scope of our studies
focuses on heated swimming pools of municipal property and collective use in
the "Comunidad Autónoma de la Region de Murcia", presenting a ranking of
these facilities based on the studies.
Our interest is to analyze in depth that problem, to describe safety in heated
swimming pools in our geographic area, to propose instruments and
methodologies, and to open research lines in the field of security management
in sports facilities from the viewpoint of the sports managers.
Keywords:
sports management, sport, safety, sports facilities, swimming
pools, heated swimming pools, sports halls, documentary
research, check-list, quantitative research, qualitative
research, perception, perception of safety.
Contenidos
1. Introducción
2. Planteamiento del problema
37
43
2.1 El marco del problema
2.2 El método científico en la investigación en gestión deportiva
2.3 Planteamiento del trabajo de investigación
43
61
69
3. Un acercamiento a la seguridad en instalaciones deportivas
desde el punto de vista del gestor deportivo mediante un estudio
exploratorio documental
75
3.1 Planteamiento
3.2 Búsqueda y clasificación de documentos
3.3 Resultados
3.4 Evaluación del trabajo
3.5 Conclusiones
4. Diseño de una herramienta cuantitativa para analizar las
condiciones de seguridad en piscinas climatizadas de uso
colectivo
4.1 Planteamiento
4.2 Extracción de la información
4.3 Construcción del cuestionario
5. Condiciones de seguridad en piscinas climatizadas de uso
colectivo y titularidad municipal de la Comunidad Autónoma de la
Región de Murcia
5.1 Planteamiento
5.2 La organización y el trabajo de campo
5.3 Resultados
5.4 Análisis de resultados
5.5 Discusión
5.6 Conclusiones
6. Percepción de seguridad de los usuarios de las piscinas
climatizadas de uso colectivo y titularidad municipal de la
Comunidad Autónoma de la Región de Murcia
6.1 Percepción de usuarios y seguridad
6.2 Planificación del estudio
6.3 Evaluación de las propiedades métricas de la herramienta
6.4 La organización y el trabajo de campo
6.5 Análisis de resultados
6.6 Discusión
6.7 Conclusiones
7. Ranking de seguridad en las piscinas climatizadas de uso
colectivo y titularidad municipal de la Comunidad Autónoma de la
Región de Murcia
7.1 Introducción
7.2 Indicadores
7.3 El indicador y el ranking
7.4 Conclusiones
8. Conclusiones y trabajos futuros
8.1 Introducción
8.2 Conclusiones
8.3 Trabajos futuros
Referencias bibliográficas
Anexos
75
81
89
117
119
125
125
135
143
157
157
167
177
185
225
233
239
239
247
257
265
271
307
313
319
319
319
320
327
331
331
333
337
341
371
Índice
1 INTRODUCCIÓN ....................................................................................................................37
2 PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA ...................................................................................43
2.1 EL MARCO DEL PROBLEMA ................................................................................................... 43
Deporte ............................................................................................................................... 43
Instalaciones deportivas cubiertas ..................................................................................... 44
Piscinas .............................................................................................................................. 45
Deporte para todos, instalaciones para todos .................................................................... 48
La gestión deportiva ........................................................................................................... 49
La seguridad ....................................................................................................................... 51
Seguridad en la gestión de instalaciones deportivas ......................................................... 52
Seguridad en piscinas climatizadas ................................................................................... 54
¿La accesibilidad es también parte de la seguridad? ........................................................ 55
El ámbito geográfico: La Región de Murcia ....................................................................... 57
2.2 EL MÉTODO CIENTÍFICO EN LA INVESTIGACIÓN EN GESTIÓN DEPORTIVA................................... 61
2.3 PLANTEAMIENTO DEL TRABAJO DE INVESTIGACIÓN ................................................................ 69
Objetivo general de la investigación ................................................................................... 69
Objetivo específico: el ámbito............................................................................................. 69
Los trabajos de investigación ............................................................................................. 69
3 UN ACERCAMIENTO A LA SEGURIDAD EN INSTALACIONES DEPORTIVAS
DESDE EL PUNTO DE VISTA DEL GESTOR DEPORTIVO MEDIANTE UN
ESTUDIO EXPLORATORIO DOCUMENTAL........................................................................75
3.1 PLANTEAMIENTO ................................................................................................................. 75
Introducción ........................................................................................................................ 75
La investigación exploratoria .............................................................................................. 75
La investigación documental .............................................................................................. 76
La clasificación de documentos ......................................................................................... 78
El objetivo: seguridad en instalaciones deportivas desde el punto de vista del gestor
deportivo ............................................................................................................................. 79
3.2 BÚSQUEDA Y CLASIFICACIÓN DE DOCUMENTOS ..................................................................... 81
Búsqueda y selección ......................................................................................................... 81
Legislación .......................................................................................................................... 81
Normas técnicas ................................................................................................................. 82
Códigos y guías de buenas prácticas ................................................................................ 83
Trabajos de investigación ................................................................................................... 83
Documentos profesionales ................................................................................................. 83
Documentos de temáticas específicas ............................................................................... 84
La clasificación de los documentos .................................................................................... 84
Notación del cuadro de clasificación de documentos ........................................................ 86
3.3 RESULTADOS ...................................................................................................................... 89
Cuatro libros importantes .................................................................................................... 89
El programa MAID .............................................................................................................. 92
Otros esfuerzos de las administraciones ............................................................................ 93
El ámbito privado ................................................................................................................ 95
Legislación .......................................................................................................................... 98
Trabajos de investigación ................................................................................................. 106
Riesgos laborales ............................................................................................................. 108
Emergencias sanitarias .................................................................................................... 109
Gestión de riesgos ............................................................................................................ 110
Planes de autoprotección ................................................................................................. 112
Evacuación ....................................................................................................................... 113
Psicología de emergencias y de masas ........................................................................... 114
Simulaciones computacionales ........................................................................................ 115
3.4 EVALUACIÓN DEL TRABAJO ................................................................................................. 117
3.5 CONCLUSIONES ................................................................................................................. 119
4 DISEÑO DE UNA HERRAMIENTA CUANTITATIVA PARA ANALIZAR LAS
CONDICIONES DE SEGURIDAD EN PISCINAS CLIMATIZADAS DE USO
COLECTIVO......................................................................................................................... 125
4.1 PLANTEAMIENTO................................................................................................................ 125
Introducción ...................................................................................................................... 125
La investigación descriptiva .............................................................................................. 126
Usos y usuarios de la herramienta ................................................................................... 126
Selección del tipo de herramienta .................................................................................... 127
Las fuentes de conocimiento para el desarrollo del cuestionario ..................................... 129
Una herramienta también para la gestión de la calidad ................................................... 130
4.2 EXTRACCIÓN DE LA INFORMACIÓN....................................................................................... 135
El proceso de construcción de la herramienta ................................................................. 135
Localización de la documentación para la construcción de la herramienta ..................... 135
Análisis preliminar de la documentación .......................................................................... 136
Estudio detallado de las normativas y extracción de la información ................................ 140
Guías y documentos de buenas prácticas ....................................................................... 141
4.3 CONSTRUCCIÓN DEL CUESTIONARIO ................................................................................... 143
Características del cuestionario ........................................................................................ 143
El cuestionario de validación ............................................................................................ 149
Evaluación de las propiedades métricas de la herramienta: validación del
cuestionario ....................................................................................................................... 151
Auditores, revisores o investigadores necesarios ............................................................ 153
5 CONDICIONES DE SEGURIDAD EN PISCINAS CLIMATIZADAS DE USO
COLECTIVO Y TITULARIDAD MUNICIPAL DE LA COMUNIDAD AUTÓNOMA
DE LA REGIÓN DE MURCIA .............................................................................................. 157
5.1 PLANTEAMIENTO................................................................................................................ 157
Introducción ...................................................................................................................... 157
Metodología de la investigación ....................................................................................... 158
Población objeto de estudio ............................................................................................. 158
5.2 LA ORGANIZACIÓN Y EL TRABAJO DE CAMPO ........................................................................ 167
La muestra del estudio ..................................................................................................... 167
El tamaño de la muestra ................................................................................................... 167
El Instrumento de recogida de datos ................................................................................ 168
Anonimato de las instalaciones ........................................................................................ 168
Codificación del cuestionario ............................................................................................ 169
El modelo digital ............................................................................................................... 170
Procedimiento de recogida de información ...................................................................... 172
5.3 RESULTADOS .................................................................................................................... 177
5.4 ANÁLISIS DE RESULTADOS.................................................................................................. 185
Resultados globales ......................................................................................................... 185
Clasificación según seguridad / accesibilidad .................................................................. 189
Clasificación según la ubicación espacial ........................................................................ 195
Clasificación según el riesgo ............................................................................................ 205
Clasificación por edad de la instalación ........................................................................... 212
Puntos débiles del conjunto de instalaciones ................................................................... 217
Informes personalizados .................................................................................................. 222
5.5 DISCUSIÓN ........................................................................................................................ 225
5.6 CONCLUSIONES................................................................................................................. 233
6 PERCEPCIÓN DE SEGURIDAD DE LOS USUARIOS DE LAS PISCINAS
CLIMATIZADAS DE USO COLECTIVO Y TITULARIDAD MUNICIPAL DE LA
COMUNIDAD AUTÓNOMA DE LA REGIÓN DE MURCIA .................................................239
6.1 PERCEPCIÓN DEL USUARIO Y SEGURIDAD ........................................................................... 239
Introducción ...................................................................................................................... 239
Percepción, satisfacción y calidad ................................................................................... 240
Percepción del riesgo y de la seguridad .......................................................................... 242
6.2 PLANIFICACIÓN DEL ESTUDIO.............................................................................................. 247
Objetivos de la investigación ............................................................................................ 247
El ámbito y la población .................................................................................................... 247
La herramienta de recogida de datos ............................................................................... 248
Definición del constructo .................................................................................................. 248
Dimensiones del constructo ............................................................................................. 248
Forma de administración .................................................................................................. 249
Número de ítems .............................................................................................................. 249
Variables del estudio ........................................................................................................ 250
Tipo de respuestas ........................................................................................................... 252
Redacción del cuestionario .............................................................................................. 254
6.3 EVALUACIÓN DE LAS PROPIEDADES MÉTRICAS DE LA HERRAMIENTA ..................................... 257
Prueba piloto..................................................................................................................... 257
Fiabilidad de la herramienta ............................................................................................. 258
Consistencia interna ......................................................................................................... 259
Estabilidad temporal y concordancia interobservadores .................................................. 259
Validación del cuestionario ............................................................................................... 260
Validez de contenido ........................................................................................................ 260
Validez de constructo ....................................................................................................... 261
Validez de criterio ............................................................................................................. 262
6.4 LA ORGANIZACIÓN Y EL TRABAJO DE CAMPO ........................................................................ 265
La muestra ........................................................................................................................ 265
Codificación y gestión del cuestionario ............................................................................ 267
El modelo digital................................................................................................................ 268
Procedimiento de recogida de la información .................................................................. 269
6.5 ANÁLISIS DE RESULTADOS .................................................................................................. 271
Resultados globales ......................................................................................................... 271
Resultados por instalaciones ............................................................................................ 274
Resultados por variables .................................................................................................. 277
Resultados por variables e instalaciones ......................................................................... 278
Resultados por sexos y grupos de edad .......................................................................... 297
Resultados por antigüedad de la instalación .................................................................... 300
Relación entre los estudios realizados mediante el cuestionario de validación y el
cuestionario de percepción ............................................................................................... 300
6.6 DISCUSIÓN ........................................................................................................................ 307
6.7 CONCLUSIONES ................................................................................................................. 313
7 RANKING DE SEGURIDAD EN LAS PISCINAS CLIMATIZADAS DE USO
COLECTIVO Y TITULARIDAD MUNICIPAL DE LA COMUNIDAD AUTÓNOMA
DE LA REGIÓN DE MURCIA .............................................................................................. 319
7.1 INTRODUCCIÓN .................................................................................................................. 319
7.2 INDICADORES .................................................................................................................... 319
7.3 EL INDICADOR Y EL RANKING .............................................................................................. 320
7.4 CONCLUSIONES ................................................................................................................. 327
8 CONCLUSIONES Y TRABAJOS FUTUROS ........................................................................ 331
8.1 INTRODUCCIÓN .................................................................................................................. 331
8.2 CONCLUSIONES ................................................................................................................. 333
8.3 TRABAJOS FUTUROS .......................................................................................................... 337
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS ......................................................................................... 341
ANEXOS.................................................................................................................................... 371
Índice de Tablas
Tabla 1.
Algunos perfiles profesionales involucrados en la seguridad en
la gestión de instalaciones deportivas .............................................. 52
Tabla 2.
Municipios de la Región de Murcia................................................... 59
Tabla 3.
Resumen de objetivos y estudios del presente trabajo .................... 71
Tabla 4.
Siglas de primer y segundo nivel para la notación de las
signaturas de los documentos .......................................................... 87
Tabla 5.
Tipos de riesgos y planes de seguridad correspondientes............... 97
Tabla 6.
Normativa legal y técnica que afecta a la seguridad (incluyendo
la accesibilidad) en piscinas climatizadas de uso colectivo............ 138
Tabla 7.
Guías y códigos de buenas prácticas en seguridad (incluyendo
la accesibilidad) en piscinas climatizadas de uso colectivo............ 142
Tabla 8.
Criterios de clasificación del cuestionario de validación, con sus
categorías y la clave de denominación .......................................... 143
Tabla 9.
Número de ítems del cuestionario de validación, por categorías
de los distintos criterios de clasificación ......................................... 150
Tabla 10. Municipios de la Región de Murcia: datos generales y relativos
a sus piscinas climatizadas de uso colectivo ................................. 162
Tabla 11. Ranking de municipios por número de piscinas, habitantes por
piscina y superficie del territorio municipal por piscina ................... 163
Tabla 12. Resumen de características de las piscinas objeto de estudio ...... 164
Tabla 13. Denominación de las instalaciones objeto de estudio .................... 165
Tabla 14. Tamaños de la muestra con distintos niveles de confianza y de
error, considerando una población de 37 instalaciones ................. 168
Tabla 15. Relación de nombres de sedes olímpicas utilizados para
nombrar las instalaciones estudiadas y así mantener su
anonimato ...................................................................................... 169
Tabla 16. Descripción de la estructura de datos utilizada para la
explotación del cuestionario de validación ..................................... 170
Tabla 17. Zonas del criterio de clasificación de ubicación espacial ............... 171
Tabla 18. Estadísticos descriptivos del cuestionario de validación ................ 179
Tabla 19. Cumplimiento global del cuestionario por instalaciones ................. 180
Tabla 20. Estadísticos descriptivos del cuestionario según el criterio de
clasificación básico de seguridad / accesibilidad ........................... 181
Tabla 21. Cumplimiento del cuestionario según el criterio de clasificación
básico de seguridad / accesibilidad, por instalaciones .................. 181
Tabla 22. Estadísticos descriptivos según el criterio de clasificación de
riesgo ............................................................................................. 182
Tabla 23. Cumplimiento del cuestionario según el criterio de clasificación
de riesgo, por instalaciones ........................................................... 182
Tabla 24. Estadísticos descriptivos según el criterio de clasificación de
zona de la instalación (I) ................................................................ 183
Tabla 25. Cumplimiento del cuestionario según el criterio de clasificación
de zona de la instalación (I), por instalaciones .............................. 183
Tabla 26. Estadísticos descriptivos según el criterio de clasificación de
zona de la instalación (II) ............................................................... 184
Tabla 27. Cumplimiento del cuestionario según el criterio de clasificación
de zona de la instalación, (II) por instalaciones ............................. 184
Tabla 28. Grado global de cumplimiento del cuestionario de validación
por instalaciones, y diferencia entre grados de cumplimiento
consecutivos, ordenado por cumplimiento global .......................... 187
Tabla 29. Número de Ítems del cuestionario que son cumplidos por un
determinado número N de instalaciones ....................................... 218
Tabla 30. Ítems del cuestionario cumplidos por cinco o menos
instalaciones .................................................................................. 218
Tabla 31. Ítems del cuestionario cumplidos por entre quince y cinco
instalaciones .................................................................................. 220
Tabla 32. Categorías del criterio Riesgo utilizadas en el cuestionario de
validación desarrollado en el Capítulo 3 ........................................ 249
Tabla 33. Variables utilizadas en el estudio de percepción ........................... 252
Tabla 34. Niveles de la escala de Likert original............................................ 252
Tabla 35. Escala de 6 niveles utilizada en nuestro cuestionario de
percepción ..................................................................................... 254
Tabla 36. Enunciados para las variables del cuestionario ............................. 255
Tabla 37. Cuestionario de percepción maquetado ........................................ 256
Tabla 38. Tamaños de la muestra con distintos niveles de confianza y de
error, considerando una población de 37.000 usuarios ................. 266
Tabla 39. Tamaños de la muestra con distintos niveles de confianza y de
error, considerando una población de 1.000 usuarios.................... 266
Tabla 40. Relación de nombres de sedes olímpicas utilizados para
nombrar las instalaciones estudiadas y así mantener su
anonimato ...................................................................................... 270
Tabla 41. Perfil de la muestra del estudio de precepción ............................... 271
Tabla 42. Estadísticos descriptivos generales del estudio de percepción ...... 272
Tabla 43. Número de sujetos con una cierta valoración media, por
intervalos de un punto .................................................................... 272
Tabla 44. Estadísticos descriptivos para cada una de las variables .............. 278
Tabla 45. Indicador PerSeg por variables e instalaciones. Ordenación de
instalaciones por su valor medio .................................................... 279
Tabla 46. Indicador Pearson por variables e instalaciones. Ordenación
alfabética de instalaciones ............................................................. 280
Tabla 47. Indicadores PerSeg y Pearson para cada variable, por sexos ....... 297
Tabla 48. Indicadores PerSeg y Pearson para cada variable, por rangos
de edad .......................................................................................... 298
Tabla 49. Ranking de seguridad en piscinas climatizadas de uso colectivo
y titularidad municipal de la Región de Murcia, incluyendo los
valores de los indicadores básicos (GraCu y PerSeg) y el
indicador compuesto NiSeg ........................................................... 322
Tabla 50. Rankings de seguridad de las instalaciones según los dos
indicadores simples y el indicador compuesto ............................... 323
Tabla 51. Ranking de seguridad en piscinas climatizadas de uso colectivo
y titularidad municipal de la Comunidad Autónoma de la Región
de Murcia ....................................................................................... 324
Índice de Figuras
Figura 1. Proceso de mejora continua de la seguridad en piscinas
climatizadas de uso colectivo. ........................................................ 134
Figura 2. Estructura de datos utilizada la explotación del cuestionario de
validación. ...................................................................................... 170
Figura 3. Distintos tipos de curtosis. .............................................................. 178
Figura 4. Tipos de asimetría. ......................................................................... 179
Figura 5. Curva de distribución del grado de cumplimiento de las
instalaciones, agrupados en bloques del 5%. ................................ 185
Figura 6. Grado de cumplimiento del cuestionario, por instalaciones. Se
indica el grado medio y los valores comprendidos en el
intervalo [media ± σ]. ...................................................................... 188
Figura 7. Grado medio de cumplimiento global del cuestionario y
desglose según las categorías de seguridad y de accesibilidad. ... 189
Figura 8. Grados de cumplimiento global del cuestionario, de
accesibilidad y de seguridad, por instalaciones.............................. 190
Figura 9. Grado de cumplimiento del cuestionario en el criterio seguridad,
por instalaciones. Se indica el grado medio y los valores
comprendidos en el intervalo [media ± σ]....................................... 192
Figura 10. Grado de cumplimiento del cuestionario en el criterio
accesibilidad, por instalaciones. Se indica el grado medio y los
valores comprendidos en el intervalo [media ± σ]. ......................... 193
Figura 11. Diferencia ente el grado de cumplimiento del cuestionario en
seguridad y en accesibilidad, por instalaciones. ............................ 194
Figura 12. Grado medio de cumplimiento del cuestionario, por zonas de la
instalación, con el origen de ordenadas situado en el grado
global de cumplimiento................................................................... 196
Figura 13. Coeficiente de Variación de Pearson de los grados de
cumplimiento de las instalaciones, por zonas. La línea
horizontal punteada marca el coeficiente del grado de
cumplimiento global de las instalaciones. ...................................... 196
Figura 14. Máximos, mínimos y rangos de los grados de cumplimiento de
las instalaciones, por zonas.. ......................................................... 197
Figura 15. Curtosis de los grados de cumplimiento de las instalaciones,
por zonas. Leyenda: la misma que la figura anterior. ..................... 197
Figura 16. Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría de vías
de evacuación (en gris), sobre el grado de cumplimiento global
(en blanco), por instalaciones. ....................................................... 199
Figura 17. Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría de
organización (en gris), sobre el grado de cumplimiento global
(en blanco), por instalaciones. ....................................................... 201
Figura 18. Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría de
dependencias técnicas (en gris), sobre el grado de
cumplimiento global (en blanco), por instalaciones. ...................... 203
Figura 19. Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría de
oficinas (en blanco), sobre el grado de cumplimiento global (en
gris), por instalaciones. .................................................................. 204
Figura 20. Grado medio de cumplimiento del cuestionario en las diferentes
categorías del criterio de clasificación de riesgo. El origen de
ordenadas se ha situado en el valor del grado medio de
cumplimiento global. ...................................................................... 206
Figura 21. Coeficiente de Variación de Pearson del cuestionario en las
diferentes categorías del criterio de clasificación de riesgo. La
línea horizontal punteada marca el C.V. de Pearson para el
cumplimiento global de las instalaciones. ...................................... 206
Figura 22. Máximos, mínimos y rangos de los grados de cumplimiento de
las instalaciones, por riesgo. ......................................................... 207
Figura 23. Curtosis de los grados de cumplimiento de las instalaciones,
por riesgo. Leyenda: igual que la figura anterior. ........................... 207
Figura 24. Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría de
emergencias (en gris), sobre el grado de cumplimiento global
(en blanco), por instalaciones. ....................................................... 208
Figura 25. Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría de
violencia (en gris), sobre el grado de cumplimiento global (en
blanco), por instalaciones. ............................................................. 210
Figura 26. Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría de
Higiene (en gris), sobre el grado de cumplimiento global (en
blanco), por instalaciones. ............................................................. 211
Figura 27. Evolución en el tiempo del grado global de cumplimiento de las
instalaciones, acompañado de la línea de tendencia. ................... 212
Figura 28. Pendientes de las líneas de tendencia de las distintas
categorías del criterio riesgo, de las curvas de evolución del
grado de cumplimiento en función de la antigüedad de la
instalación. ..................................................................................... 213
Figura 29. Evolución en el tiempo del grado de cumplimiento en la
categoría violencia de las instalaciones, acompañado de la
línea de tendencia. ......................................................................... 214
Figura 30. Evolución en el tiempo del grado de cumplimiento en la
categoría Higiene de las instalaciones, acompañado de la línea
de tendencia. .................................................................................. 214
Figura 31. Evolución en el tiempo del grado de cumplimiento en la
categoría Accidentes de las instalaciones, acompañado de la
línea de tendencia. ......................................................................... 214
Figura 32. Pendientes de las líneas de tendencia de las distintas
categorías del criterio Zona, de las curvas de evolución del
grado de cumplimiento en función de la antigüedad de la
instalación.. .................................................................................... 215
Figura 33. Evolución en el tiempo del grado de cumplimiento en la
categoría Botiquín de las instalaciones, acompañado de la
línea de tendencia. ......................................................................... 216
Figura 34. Evolución en el tiempo del grado de cumplimiento en la
categoría Organización de las instalaciones, acompañado de la
línea de tendencia. ......................................................................... 216
Figura 35. Pendientes de las líneas de tendencia de las categorías de
seguridad y de accesibilidad, de las curvas de evolución del
grado de cumplimiento en función de la antigüedad de la
instalación. ..................................................................................... 217
Figura 36. Estructura de datos utilizada la explotación de la encuesta de
percepción. ..................................................................................... 268
Figura 37. Representación gráfica número de sujetos (eje de ordenadas)
con una cierta valoración media (eje de abscisas), por
intervalos de un punto. ................................................................... 273
Figura 38. Indicador PerSeg para la media de las variables, por
instalaciones. ................................................................................. 275
Figura 39. CV de Pearson por instalaciones. Las líneas verticales indican
una división por cuartiles. ............................................................... 276
Figura 40. Indicador PerSeg para las distintas variables en la población
total analizada. La línea discontinua representa el valor medio
del indicador. .................................................................................. 278
Figura 41. Indicador PerSeg para la variable V1 (competencia de los
socorristas). Las instalaciones aparecen ordenadas por su
media global. La doble línea rayada indica la media general, y
la línea simple punteada la media de la variable estudiada. .......... 281
Figura 42. Indicador PerSeg para la variable V2 (seguridad ante
equipamientos y accesorios). Las instalaciones aparecen
ordenadas por su media global. La doble línea rayada indica la
media general, y la línea simple punteada la media de la
variable estudiada.......................................................................... 283
Figura 43. Indicador PerSeg para la variable V3 (facilidad de evacuación).
Las instalaciones aparecen ordenadas por su media global. La
doble línea rayada indica la media general, y la línea simple
punteada la media de la variable estudiada. ................................. 284
Figura 44. Indicador PerSeg para la variable V4 (Seguridad frente a robos
in situ). Las instalaciones aparecen ordenadas por su media
global. La doble línea rayada indica la media general, y la línea
simple punteada la media de la variable estudiada. ...................... 286
Figura 45. Indicador PerSeg para la variable V5 (integridad como
persona). Las instalaciones aparecen ordenadas por su media
global. La doble línea rayada indica la media general, y la línea
simple punteada la media de la variable estudiada. ...................... 287
Figura 46. Indicador PerSeg para la variable V6 (salubridad del agua del
vaso de la piscina). Las instalaciones aparecen ordenadas por
su media global. La doble línea rayada indica la media general,
y la línea simple punteada la media de la variable estudiada. ....... 289
Figura 47. Indicador PerSeg para la variable V7 (higiene y salubridad de la
instalación). Las instalaciones aparecen ordenadas por su
media global. La doble línea rayada indica la media general, y
la línea simple punteada la media de la variable estudiada........... 290
Figura 48. Indicador PerSeg para la variable V8 (integridad del edificio).
Las instalaciones aparecen ordenadas por su media global. La
doble línea rayada indica la media general, y la línea simple
punteada la media de la variable estudiada. ................................. 291
Figura 49. Indicador PerSeg para la variable V9 (accesibilidad general de
la instalación). Las instalaciones aparecen ordenadas por su
media global. La doble línea rayada indica la media general, y
la línea simple punteada la media de la variable estudiada........... 293
Figura 50. Indicador PerSeg para la variable V10 (disponibilidad del
personal ante situaciones problemáticas). Las instalaciones
aparecen ordenadas por su media global. La doble línea
rayada indica la media general, y la línea simple punteada la
media de la variable estudiada. ..................................................... 294
Figura 51. Indicador PerSeg para la variable V11 (percepción global del
concepto de seguridad). Las instalaciones aparecen ordenadas
por su media global. La doble línea rayada indica la media
general, y la línea simple punteada la media de la variable
estudiada........................................................................................ 296
Figura 52. Indicador PerSeg, para cada variable, por sexos. ......................... 297
Figura 53. Indicador PerSeg de la media de las variables, por rangos de
edad. .............................................................................................. 299
Figura 54. Indicador PerSeg de las variables 1 a 5, por rangos de edad. ....... 299
Figura 55. Indicador PerSeg de las variables 6 a 11, por rangos de edad. ..... 299
Figura 56. Indicador PerSeg por antigüedad de la instalación. ....................... 300
Figura 57. Percepción de usuarios por instalaciones respecto a los
resultados del cuestionario de validación del Capítulo 5, y sus
líneas de tendencia. ....................................................................... 302
Figura 58. Resultados del Cuestionario de Validación del Capítulo 5, por
instalaciones, respecto a los resultados del estudio de
percepción, y sus líneas de tendencia. .......................................... 302
Figura 59. Líneas de tendencia de la percepción de usuarios por
instalaciones respecto a los resultados del cuestionario de
validación del Capítulo 5. ............................................................... 303
Figura 60. Líneas de tendencia de los resultados del Cuestionario de
Validación del Capítulo 5, por instalaciones, respecto a los
resultados del estudio de percepción. ............................................ 303
Figura 61. Comparación de la variable 9 del estudio de percepción (línea
punteada) y la categoría accesibilidad del cuestionario de
validación (línea continua), por instalaciones. ................................ 304
Figura 62. Comparación de la variable 7 del estudio de percepción (línea
punteada) y la categoría higiene y salud del cuestionario de
validación (línea continua), por instalaciones. ................................ 304
Figura 63. Comparación de la categoría higiene y salud de cuestionario de
validación (línea punteada) y la variable 6 de salubridad del
agua del vaso del estudio de percepción (línea continua), por
instalaciones. ................................................................................. 305
Capítulo 1
Introducción
1. Introducción
Página | 36
1. Introducción
1 Introducción
El Consejo de Europa formuló por primera vez en 1966 el concepto de
deporte para todos (Mestre, 2004), abundando en ello en su carta del deporte
de 1992 (Comunidad Europea, 1992, 2007) y aportando una acertada
definición para el difícil término “deporte”:
“Cualquier forma de actividad física que, a través de la participación
organizada o no, tiene por objeto la expresión o mejoría de la condición
física y psíquica, el desarrollo de las relaciones sociales o la obtención
de resultados en competición a todos los niveles.”
Fruto del esfuerzo institucional en la promoción del deporte para todos,
actualmente el deporte se ha introducido en la sociedad española de forma
muy destacada, como demuestran las sucesivas encuestas de hábitos
deportivos del Consejo Superior de Deportes (García-Ferrando & Llopis-Goig,
2006, 2011). Es por esto que son muy abundantes las instalaciones deportivas,
de ámbito público y privado, para la práctica deportiva competitiva y recreativa.
El impulso de la práctica deportiva y la creciente complejidad de la
organización de ésta, creó a mediados de los años 80 (Costa, 2005) un nuevo
campo de trabajo, la gestión deportiva, que como toda área es susceptible de
tener un soporte investigador (Pitts, 2001). La gestión deportiva abarca y
unifica múltiples campos de actuación. Las actuaciones predominantes de los
gestores deportivos en España desde la aparición en 1987 de este perfil
profesional (Mestre, 2013) consistían en meros trabajos técnicos (A. Gómez,
Mundian, & Calabuig, 2004; A. Gómez & Núñez, 2011). Sin embargo, la actual
complejidad de las instalaciones y eventos hace necesarios unos mayores
niveles de competencia y responsabilidad en la gestión deportiva.
Entre las actividades deportivas más demandadas destacan las
realizadas en instalaciones deportivas cubiertas, y entre ellas las realizadas en
piscinas de uso colectivo. Destaca la demanda de actividad en piscinas
climatizadas (Colado, 2005), especialmente la natación recreativa con fines
saludables, el aprendizaje y perfeccionamiento de la natación, las actividades
acuáticas fitness y la natación competitiva (García-Ferrando & Llopis-Goig,
2011). El crecimiento de la práctica de las actividades acuáticas en piscinas ha
Página | 37
1. Introducción
venido acompañado de la construcción de un gran número de piscinas
climatizadas en un breve espacio de tiempo (L. Gallardo, 2007; Trianti-Stourna
et al., 1998).
Las instalaciones deportivas en general, y las piscinas climatizadas en
particular, son sensibles a un gran número de normas técnicas y legislativas
que afectan, entre otras, a cuestiones constructivas, de gestión de
espectáculos deportivos, de mantenimiento de la higiene y la salud, de
accesibilidad o de competiciones deportivas de todos los ámbitos. Sumado a
ello, la disparidad de administraciones municipales y autonómicas y la sujeción
de los piscinas a reglamentaciones municipales, autonómicas y estatales, ha
producido una situación de gran diversidad en la configuración, gestión y
estado de mantenimiento de éstos (L. Gallardo, Burillo, García-Tascón, &
Salinero, 2009).
Así, en el ámbito de la promoción del deporte para todos y de la gestión
de piscinas de uso colectivo, y teniendo en cuenta el objetivo permanente de la
mejora de la calidad de vida de los ciudadanos (Consejo Superior de Deportes,
2010b), las cuestiones relativas a la seguridad han cobrado importancia.
La seguridad es una necesidad básica de todo humano, como confirma
su segunda posición en la pirámide de Maslow (Maslow, 1943) tras las
necesidades fisiológicas (respiración, alimentación, hidratación). La propia
Constitución Española (1978) en su sección primera sobre “Derechos
fundamentales y libertades públicas”, reconoce la seguridad como un derecho,
indicando en su artículo 17.1 que “toda persona tiene derecho a la libertad y a
la seguridad”. Es por ello que la seguridad, en sus múltiples facetas, es un
elemento fundamental en la práctica de actividades deportivas en instalaciones
cubiertas.
El gestor deportivo a menudo realiza tareas complejas de gestión
presupuestaria, posee amplios conocimientos de la legislación que le compete,
o realiza importantes actuaciones en áreas de marketing o recursos humanos
(J. García, Lago, & Fernández, 2011). Por contra, las actuaciones referentes a
la seguridad suelen considerarse fuera de las competencias de los gestores
deportivos, quedando en manos de otros especialistas. Una muestra de ello es
Página | 38
1. Introducción
la no aparición de este elemento entre las competencias del perfil profesional
de gestor deportivo en el libro blanco sobre el título de licenciado en ciencias
de la actividad física y del deporte (ANECA, 2004).
Sin embargo esta exclusión no está justificada. El Reglamento General
de Policía de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas (RD 2816,
1982) establece que la entidad organizadora es la responsable de los daños
que se produzcan en un evento (artículo 51d). Asimismo, la Norma Básica de
Autoprotección (RD 393, 2007) establece como responsable del correcto
funcionamiento de la autoprotección al titular de la actividad, que deberá
designar una persona responsable de la gestión de las actuaciones
encaminadas a la prevención y el control de riesgos.
En el caso de actividades y eventos deportivos, esta responsabilidad
corresponde a menudo al gestor deportivo, como coordinador global de la
actividad. Trabajos de investigación recientes a nivel nacional ya detectan que
la “seguridad global de la instalación deportiva” es la segunda mayor
problemática del gestor deportivo en referencia a los recursos materiales (M.
García, 2008). A nivel internacional, la gestión deportiva en USA ya incluía en
1987 la seguridad como una de las doce grandes áreas de trabajo de los
gestores deportivos (Jamieson, 1987), apareciendo en los rankings de
competencias del gestor deportivo (Lambrecht, 1987). Trabajos más recientes
avalan este mismo hecho (Farzalipour et al., 2012; Goodarzi, Asadi, Nasrollah,
& Moradi, 2012; Tripolitsioti, Moudakis, Konstantinakos, & Theodorikakos,
2007).
Es por todo lo anterior que se ha considerado de interés estudiar la
problemática de la seguridad en las instalaciones deportivas desde el punto de
vista del gestor deportivo. Por ser un tema poco tratado desde un punto de
vista investigador, hemos realizado un conjunto de estudios que comienzan
siendo exploratorios, para posteriormente tener carácter descriptivo.
En el capítulo 2 de este documento se realiza el planteamiento de la
investigación, enmarcando en este estudio el deporte, la seguridad, la gestión
deportiva, las instalaciones deportivas en general y las piscinas climatizadas en
particular. Además, analizamos las vinculaciones entre la seguridad y la
Página | 39
1. Introducción
accesibilidad en el ámbito del deporte para todos. A continuación se plantean
los objetivos de la investigación, los estudios realizados y las metodologías
empleadas.
Dada la novedad de este tema y la poca producción científica existente,
hemos preferido realizar un estudio exploratorio de tipo documental en vez de
la tradicional fundamentación investigadora, de lo que se encarga el capítulo 3
de este documento.
Con el conocimiento obtenido del estudio exploratorio, en el capítulo 4
presentamos el diseño y validación de un instrumento de análisis de la
seguridad en piscinas climatizadas de uso colectivo, instrumento que puede ser
utilizado bien para hacer trabajos de investigación descriptivos bien como
herramienta de auditoría para la mejora de la seguridad de este tipo de
instalaciones.
Los capítulos 5 y 6 se dedican a sendos estudios descriptivos sobre el
conjunto de piscinas climatizadas de uso colectivo de titularidad municipal de la
Comunidad Autónoma de la Región de Murcia. El capítulo 5 utiliza el
cuestionario de validación descrito en el capítulo anterior para analizar la
seguridad (que incluye la accesibilidad) de estas instalaciones, y el capítulo 6
se dedica al estudio de la percepción de seguridad de los usuarios de este
grupo de piscinas, mediante la construcción, validación y aplicación de una
encuesta de percepción basada en una escala de Likert. En el breve capítulo 7
utilizamos los resultados de los estudios anteriores para diseñar un indicador
compuesto y crear un ranking de seguridad entre las piscinas objeto de este
estudio.
En el capítulo 8 presentamos las conclusiones globales obtenidas tras la
realización del conjunto de estudios, si bien las conclusiones particulares de
cada estudio se describen en el capítulo dedicado a él. Creemos que con esta
Tesis Doctoral se abre una amplia línea de investigación en seguridad en
instalaciones deportivas, que profundizará y ampliará muchos de los aspectos
tratados en la investigación presentada aquí; esto se trata en el apartado de
trabajos futuros incluido en este mismo capítulo 8. El documento finaliza con la
bibliografía referenciada y una relación de los anexos necesarios.
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Capítulo 2
Planteamiento del problema
2. Planteamiento
Página | 42
2. Planteamiento
2 Planteamiento del problema
2.1 El marco del problema
Deporte
Aunque existen algunas referencias de hace 25.000 años (Blanchard &
Chesca, 1986), los primeros indicios sólidos de la práctica del deporte se datan
en China sobre el año 4.000 a. C., donde se realizaban actividades del tipo
gimnástico (Morris, 2004). La civilización egipcia también incluyó la actividad
deportiva en su sociedad (Decker, 1992), y la cultura griega la desarrolló
enormemente debido especialmente a las vinculaciones entre el entrenamiento
militar y el deporte (Blanchard & Chesca, 1986), llegando a la organización de
los Juegos Olímpicos de la Antigüedad en el 776 a. C. (Durántez, 1977).
Y vinculadas al deporte surgieron las instalaciones deportivas. Las
primeras instalaciones deportivas griegas fueron los dromoi, lugares abiertos
exentos de edificaciones, que fueron derivando por motivos prácticos a lugares
edificados, convirtiéndose en gimnasios y palestras sobre el siglo VI a. C.
Sin embargo, atendiendo a la etimología, el término deporte no comenzó
a utilizarse hasta la edad media, no estando claramente delimitada su
etimología. Tal y como describe G. Ramírez (2006), Peñavieja encuentra su
primera utilización en un poema de Guillermo de Aquitania datado en 1117, con
el sentido de diversión o recreo, y en castellano en el Cantar del Mio Cid con la
acepción “deportar” y en otros escritos con el término “depuerto”, con el
significado de transportar. Interesante es la aportación de Ortega y Gasset
referenciada por G. Ramírez (2006), que plantea la posibilidad de que
provenga de “estar de portu", término con que los marineros mediterráneos
nombraban las actividades de ocio y recreación que realizaban mientras
descansaban en los puertos. El término cayó en el olvido sobre el siglo XVI y
no se recuperó hasta el siglo XIX, que se tomó del inglés “sport”. Y este
término, “sport”, derivó del llevado a Inglaterra en el siglo XIII por los
normandos, “deport”.
Página | 43
2. Planteamiento
Instalaciones deportivas cubiertas
Las palestras fueron las primeras instalaciones deportivas cubiertas, que
podían ser independientes o ir unidas a un gimnasio (Rodríguez, 2000). Los
gimnasios griegos tuvieron cuatro etapas: en la etapa Doria no había
construcciones. En la Arcadia había, junto a los espacios al aire libre, una
sencilla palestra para la lucha. En el periodo Helenístico se desarrollan más los
espacios, con edificios de piedra, una palestra completa y estadio para juegos;
ejemplos son el Liceo de Atenas o el Gimnasio de Olimpia (Durántez, 2004).
Por último, en la época Grecorromana los gimnasios ya disponían de termas,
sirviendo de transición a la terma romana.
Todas las ciudades griegas importantes tenían un gimnasio: Delfos,
Mileto, Pérgamo, Hierápolis, Éfeso… en Atenas había tres gimnasios: la
Academia, el Liceo y el Cinosargos. Además del uso deportivo, los gimnasios
servían como centro de reunión y especialmente como lugar de enseñanza.
Aun así, las grandes instalaciones griegas eran al aire libre: el estadio y el
hipódromo.
En la época romana la instalación preponderante fue la terma, de la que
hablaremos en la siguiente sección. No obstante, en la época de la Roma
tardía las termas tenían un gimnasio anexo, y los hipódromos siempre fueron
parte de las ciudades romanas.
Si queremos localizar instalaciones para juegos de pelota debemos
trasladarnos a las culturas precolombinas, allá sobre el 1500 a.C. (Lüschen &
Weis, 1979). Aztecas y mayas practicaban juegos de pelota, y el campo de
juego más antiguo conocido es el de La Venta, en la costa del Golfo de Méjico,
del 760 a.C. Se data en dicha zona un gran número de campos de juego, y si
bien sus dimensiones no eran muy grandes, éstas eran muy variables,
oscilando entre los 15x4 y los 35x10 metros aproximadamente. En épocas
posteriores, sobre el 1100 d.C., los campos aumentaron su tamaño llegando
hasta los aproximadamente 100x30 metros de Chichén Itzá, en Yucatán, que
además poseían edificaciones (Blanchard & Chesca, 1986).
La Edad Media no fue buena para el deporte, y por tanto tampoco para
las instalaciones deportivas. Sí que existen noticias de algunos juegos, como el
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2. Planteamiento
patinaje o algún juego de pelota, que se practicaba al aire libre en calles y
plazas. También el tiro con arco o ballesta, y en algunos lugares juegos
parecidos al críquet o incluso carreras de caballos como las de Constantinopla.
Pero el juego más conocido de la época es “la palma”, juego de pelota
practicado hasta por la nobleza (De Andrés, 1997). El juego de la palma recibe
este nombre por jugarse con la palma de la mano, y posteriormente con
raqueta. En el siglo XIV comienzan a construirse instalaciones cubiertas, para
protegerse de las inclemencias meteorológicas y probablemente como
evolución de juegos que se practicaban en improvisados espacios cerrados
anexos a castillos y catedrales. En el siglo XVI se contabilizan cientos de pistas
en Francia.
Ya en el siglo XVIII vuelve a surgir la gimnástica, con escuelas bien
diferenciadas como la inglesa, alemana, sueca o francesa (Langlade, 1970),
que en general comenzó practicándose al aire libre para posteriormente ir
pasando a lugares cerrados, bien por cuestiones meteorológicas, bien por
prohibiciones gubernamentales, como es el caso del bloqueo gimnástico de
1820 en Alemania.
Para la llegada de instalaciones deportivas específicas hay que esperar
hasta el nacimiento del deporte moderno y especialmente a la creación los
Juegos Olímpicos a finales del siglo XIX. Los primeros Juegos Olímpicos de
1896 trajeron consigo la reconstrucción del estadio de Panathinaiko en Atenas,
siendo la primera gran instalación deportiva del deporte moderno.
Las primeras ediciones de deportes de cancha, como el baloncesto en
las Olimpiadas de 1936 en Berlín, se celebraron al aire libre. Se utilizó un
pabellón cubierto en las de Londres de 1948 tras la segunda guerra mundial;
este hecho marcaría el inicio de la utilización de pabellones deportivos
cubiertos para la práctica de deportes de equipo en pistas pequeñas.
Piscinas
La natación se desarrolla con las primeras civilizaciones y con el
deporte. Los primeros deportes practicados en el Antiguo Egipto fueron del tipo
atlético, lucha y natación (Decker, 1992). Además, los egipcios incluían la
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2. Planteamiento
natación en la educación pública (Navarro, Arellano, Carnero, & Gosálvez,
1990; Rodríguez, 2000), como queda reflejado en jeroglíficos del 2500 a. C.
Los fenicios formaban equipos de nadadores para actuar como socorristas en
casos de tragedias en el mar o para hacer trabajos de limpieza en los puertos.
En las culturas griega y romana las actividades acuáticas formaron parte del
entrenamiento militar (Vázquez, 2006) y del conjunto de ejercicios que se
practicaban para la mejora de la forma física. Estos ejemplos ponen de
manifiesto el origen de la natación como actividad de supervivencia,
salvamento, mejora de la actividad física y adaptación al medio acuático.
Y si la historia de la natación discurre paralela a la del deporte y la
civilización, la historia de las piscinas también lo hace, siendo Egipto, Grecia y
Roma las culturas que desarrollaron su construcción.
Las primeras piscinas se utilizaban para fines de almacenamiento de
agua, terapéuticos, recreativos o religiosos. Las piscinas en la cultura egipcia
eran de gran importancia, tanto que su símbolo “she” aparece en numerosas
inscripciones; el dibujo “she” representa el agua, escasa y vital para la vida en
el desierto. La posesión de una piscina en una casa egipcia demostraba
opulencia (Decker, 1992). Es famosa para el turismo la piscina circular de Siwa,
en Egipto, donde al parecer se bañó Cleopatra en su visita a esta localidad.
Grecia desarrolló enormemente la tecnología de la utilización del agua
(Vázquez, 2006) creando, en lo que se refiere al ocio y la salud, las termas. Las
termas en un principio usaban exclusivamente agua fría y eran sencillas
dependencias de los gimnasios. A partir del siglo V a.C. dispusieron de
sistemas de calentamiento del agua, y se convirtieron en complejas
instalaciones públicas para la realización de actividades atléticas rituales o
sanitarias.
Las termas romanas, adoptadas de las griegas, eran locales públicos
muy relevantes con connotaciones sociales, de higiene y de salud (Tuero,
2013). La arquitectura de estas instalaciones estaba muy desarrollada,
contando con tres espacios acuáticos climatizados a distintas temperaturas. En
el “caldarium” había agua caliente, templada en el “tepidarium” y fría en el
“fridgidarium”. Además de los vasos de piscina, las termas contaban con
Página | 46
2. Planteamiento
instalaciones
gimnásticas
(palestra),
vestuarios
(apodyterium),
tiendas
(tabernae) y otras salas sociales, pudiendo considerar las termas romanas el
origen de los actuales centros deportivos. El agua se calentaba mediante el
“hypocaustum”, un sistema formado por una caldera que producía vapor, y por
un conjunto de túneles y canalizaciones bajo la superficie del suelo y del vaso
que lo distribuyen por toda la estancia.
Como puede observarse, el término piscina pese a ser latín no proviene
de la terminología de las termas. La palabra piscina tiene su origen en “piscis”
(pez), en relación a los estanques de agua con peces utilizados para
decoración en los jardines. Este hecho pone de manifiesto que las piscinas
para natación eran en sus inicios estanques y recintos al aire libre (Höcker,
2004).
En la edad media decayó el desarrollo de la natación y por tanto de las
piscinas, especialmente en Europa, donde meterse en el agua se relacionaba
con el contagio de las enfermedades epidémicas. En el renacimiento (siglo XIV)
la natación resurge como actividad física saludable (Reyes, 1998; Vicente,
1988), hecho que se ejemplifica en la labor investigadora que de ésta realiza
Leonardo Da Vinci (Cecchini, 1993; Rodríguez, 2000). Pero es en el siglo XIX
cuando la natación toma forma como deporte de competición. La primera
piscina cubierta se construye en Londres en 1828, y en 1837 ya existen seis en
esta ciudad, creándose el primer club, la National Swimming Society de
Londres, y la primera competición organizada. La complejidad de una
instalación para la práctica de la natación como deporte regulado hizo que
muchas de las primeras competiciones se desarrollaran en el mar, lagos, ríos o
estanques naturales, pero a partir de entonces natación y piscina cubierta son
dos términos que irían unidos.
En 1869 se constituye la primera asociación de clubes, la Metropolitan
Swimming Club Association y ese mismo año se realiza el primer campeonato
nacional (Llana, Pérez, Del Valle, & Sala, 2012). A partir de ese momento la
natación comenzó su camino como deporte de competición, formando parte de
los Juegos Olímpicos Modernos en su primera edición de 1896 en Pekín, y
estando incluida desde entonces en el programa olímpico.
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2. Planteamiento
Deporte para todos, instalaciones para todos
En los tiempos actuales hasta el 60% de la población europea practica
deporte (Comunidad Europea, 2007), si bien con la ampliación de la comunidad
europea los datos medios de práctica deportiva han empeorado (Comisión
Europea, 2014). La amplia práctica deportiva es fruto de la evolución del
deporte, que ha asimilado el concepto de “deporte para todos” poniendo de
manifiesto beneficios de la actividad física tales como el bienestar, la salud o
las relaciones sociales, sin dejar de lado los aspectos lúdicos o competitivos.
La práctica del deporte está ampliamente fomentada por las instituciones,
habiéndose realizado grandes inversiones en instalaciones deportivas para dar
cabida a todos los niveles y modalidades deportivas.
En España, la conocida encuesta de García-Ferrando y Llopis-Goig
(2011) pone de manifiesto que el 43% de la población (de entre 15 y 75 años)
practica deporte, habiendo aumentado un 6% en solo cinco años (2005-2010).
El eurobarómetro de práctica deportiva de 2014 (Comisión Europea, 2014)
mantiene esta tendencia, ya que el 46% de la población española practica
deporte regularmente o con cierta regularidad, mientras que el 44% no practica
deporte nunca, y el 10% restante solo de forma esporádica.
El número de espacios deportivos para dar cabida a tal cantidad de
práctica deportiva asciende a cerca de 180.000 (datos de 2005) (L. Gallardo,
2007), obteniendo una proporción de 39,4 espacios deportivos por cada 10.000
habitantes. Del total, un 65,5% son instalaciones de titularidad pública, la
inmensa mayoría municipales.
Respecto a las piscinas, el Censo Nacional de Instalaciones Deportivas
de 2005 (L. Gallardo, 2007) arroja el número de 31.686 vasos, en una
proporción de aproximadamente un vaso deportivo por cada tres recreativos.
Solo 2.751 son vasos cubiertos, esto es, piscinas climatizadas. No obstante, las
piscinas cubiertas no están distribuidas uniformemente en función de la
población española, sino que existen diferencias importantes entre regiones,
como se pone de manifiesto por Burillo et al. (2008).
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2. Planteamiento
En el caso de pistas deportivas1, en 2005 existían en España 73.742
pistas, de las cuales 27.888 eran pistas polideportivas descubiertas
(excluyendo tenis, pádel, squash, pistas de hielo, petanca, etc.), y 4.073
pabellones polideportivos.
La gestión deportiva
Es seguro que el deporte se gestiona desde su nacimiento. Las primeras
manifestaciones deportivas griegas debían ser organizadas, y las primeras
instalaciones deportivas gestionadas. Sin embargo, se considera que la gestión
deportiva, como disciplina, nace a mediados de los años 80 (Costa, 2005) con
la fundación de la Sociedad Americana para la Gestión Deportiva (NASSM) en
1985. Posteriormente se fundó en 1993 la Asociación Europea de Gestión
Deportiva (EASM) y en 1995 la homóloga australiana (Edwards & Skinner,
2009).
Son muchas las publicaciones sobre cuestiones de gestión deportiva
procedentes de diferentes áreas como economía, psicología o sociología, que
reflejan la realidad desde sus puntos de vista particulares (J. Moreno &
Gutierrez, 1999), pero es importante constituir una disciplina específica, con un
enfoque propio del mundo de la gestión del deporte.
Es a partir de esta fecha, mediados de los años 80, cuando aparecen las
primeras definiciones de término gestión deportiva, con la aportación en USA
de Chelladurai (1985), que la define como “La planificación, organización,
liderazgo y evaluación de la actividad deportiva”. Otros términos usados por
otros autores definen la misma actividad: operaciones técnicas, comerciales y
de marketing (Aragón, 1992), planificación de recursos (Consejo Superior de
Deportes, 1995), recursos, eficacia y eficiencia (L. Gallardo & Jiménez, 2004).
1
Las pistas son espacios deportivos de forma rectangular definidos por el pavimento y la delimitación
perimetral. Normalmente incorporan los elementos y marcajes de las actividades que se pueden
desarrollar en los mismos. Las pistas polideportivas en recintos cerrados se denominan pabellones. Las
pistas tienen una limitación de superficie, normalmente a partir de 1.500 m2 pasan a considerarse como
campos. (L. Gallardo, 2007)
Página | 49
2. Planteamiento
Como podemos observar, la gestión deportiva abarca y unifica múltiples
campos de actuación. Las actuaciones predominantes de los gestores
deportivos en España desde la aparición de este perfil profesional (Mestre,
2013) consistían en meros trabajos técnicos (A. Gómez et al., 2004; A. Gómez
& Núñez, 2011) . La gestión deportiva en España se asienta con el impulso
dado en la consolidación democrática y el desarrollo de la actividad municipal
(Martínez, 2000), apareciendo las figuras de director técnico, director gerente,
coordinador, director o director de instalaciones (L. Gallardo, 2002). La
formación de este tipo de profesional en España era muy deficitaria en estos
primeros años, mejorando paulatinamente con la incorporación de materias de
gestión deportiva en los estudios universitarios de licenciatura y grado en
ciencias de la actividad física y el deporte.
Sin embargo, la actual complejidad de las instalaciones y eventos hace
necesarios unos mayores niveles de competencia y responsabilidad en la
gestión deportiva. El gestor deportivo a menudo realiza tareas complejas de
gestión
presupuestaria,
planificación
o
mantenimiento,
posee
amplios
conocimientos de la legislación que le compete, o realiza importantes
actuaciones en áreas de marketing, recursos humanos o comunicación, (J.
García et al., 2011). La gestión deportiva abarca campos tan diversos como la
gestión de grandes eventos deportivos, las actividades para la lucha contra la
obesidad y el sedentarismo, la coordinación de servicios municipales, o la
gestión de grandes complejos deportivos. Así, los nuevos gestores deportivos
deben ser personas altamente formadas y especializadas, como pone de
manifiesto la actual proliferación de oferta de másteres en gestión deportiva.
Las ya mencionadas asociaciones de gestión deportiva, Sociedad
Americana para la Gestión Deportiva, Asociación Europea de Gestión
Deportiva y Asociación de Gestión Deportiva de Australia y Nueva Zelanda, con
sus respectivas publicaciones de investigación Journal of Sport Management,
European Sports Management Quarterly, y Sport Management Review, han
producido un gran impulso en el establecimiento de la gestión deportiva como
una disciplina propia con un ámbito investigador particular. En España existe
una organización similar, la Federación de Asociaciones de Gestores de
Deporte de España (FAGDE), que coordina asociaciones de gestores locales,
Página | 50
2. Planteamiento
si bien su ámbito de actuación es más profesional que investigador. Otras
asociaciones actuales de importancia son la africana (African Sport
Management Association), latinoamericana (Latin American Association for
Sport Management) y asiática (Asian Association for Sport Management),
agrupadas en la asociación mundial para la gestión deportiva (World
Association for Sport Management).
La seguridad
La seguridad, como necesidad básica de todo ser humano, (Maslow,
1943; Taormina & Gao, 2013) es precisa para el desarrollo de cualquier
actividad. Sin embargo, la interpretación de este término es muy amplia:
seguridad en el desempeño del trabajo, de protección frente a robos o
vandalismo, de fiabilidad de una construcción o de medidas de protección de la
salud de las personas, son algunos enfoques de la seguridad (Gómez-Calvo,
2007f). La Real Academia de la Lengua Española (2014) define el término
seguridad como cualidad de seguro, y seguro como libre y exento de todo
peligro, daño o riesgo. Por tanto, en nuestro contexto podremos decir que la
seguridad es la ausencia de peligros o riesgos, o más bien la minimización de
los peligros o riesgos.
Según Gómez-Calvo (2007f), podemos encontrar un gran repertorio
tanto de elementos a proteger como de riesgos. Los elementos más usuales a
proteger son: instalaciones, bienes y equipamientos, personas, actividades,
datos e información o medio ambiente, frente a riesgos producidos por
personas, la naturaleza o por anomalías tecnológicas. Algunos de los riesgos
más comunes se listan a continuación:
-
Violencia, racismo, xenofobia, intolerancia
-
Intrusión, robo, sabotaje, atentado
-
Intromisión en el derecho al honor, la intimidad, a la imagen
-
Actos contra la moral
-
Incendios, explosiones, derrumbes, inundaciones por tuberías
-
Riesgos por agentes químicos, físicos o biológicos
-
Vendaval, tormenta, lluvia, rayos
-
Avalanchas, corrimientos, terremotos
Página | 51
2. Planteamiento
-
Accidentes personales o enfermedades súbitas
-
Situaciones de evacuación por emergencia
-
Manipulación de datos personales
La importancia y amplitud del concepto de seguridad ha llevado a una
gran dispersión y especialización en las distintas áreas de la seguridad. Así, si
abordamos la seguridad desde el punto de vista de los perfiles profesionales
involucrados en ella, podemos encontrar, sin ánimo de ser exhaustivos las que
se muestran en la Tabla 1.
Tabla 1.
Algunos perfiles profesionales involucrados en la seguridad en la
gestión de instalaciones deportivas
Cuerpos de seguridad del estado
Técnicos sanitarios para emergencias
Cuerpos de extinción de incendios
Arquitectos
Psicólogos
Empresas de seguridad
Técnicos en prevención de riesgos laborales
Técnicos en protección Civil
Seguridad privada
Ingenieros
Sociólogos
Profesionales de la legislación y administración
Seguridad en la gestión de instalaciones deportivas
La seguridad en el deporte tiene una especial relevancia, como pone de
manifiesto la nueva Ley del Deporte de la Región de Murcia (Ley 8, 2015), que
entre sus principios generales de actuación establece, en su artículo 3, como
línea de actuación del gobierno regional:
“La garantía de la práctica del deporte y la actividad física en adecuadas
condiciones de seguridad y salud, dentro del respeto y la protección
medioambiental de los espacios, del derecho a la accesibilidad, y
garantizando la supresión de las barreras arquitectónicas y la aplicación
de los planes sobre movilidad sostenible”
También destacar el Proyecto de Ley del Deporte de Andalucía (BOJA,
2014) que coloca en su artículo 5 la seguridad como el segundo requisito de la
práctica deportiva:
“Los poderes públicos de Andalucía, en el marco de sus respectivas
competencias, fomentarán el deporte en sus diferentes niveles y ámbitos
deportivos con el fin de alcanzar estándares de calidad, la satisfacción y la
fidelización de los y las deportistas a través de una práctica deportiva
saludable, segura y excelente y tutelarán su ejercicio, de acuerdo con los
siguientes principios rectores:”
Página | 52
2. Planteamiento
Sin embargo, el término seguridad en ocasiones se utiliza en un sentido
limitado; cuando se trata la seguridad en el ámbito del deporte municipal se
trabaja sobre la seguridad en instalaciones. En el contexto del deporte como
espectáculo de competición se piensa en la prevención de la violencia, o
cuando se menciona la seguridad en un entorno sanitario deportivo se trata de
salubridad, salud o emergencias sanitarias. Las agrupaciones más comunes de
riesgos, según el enfoque de la normativa legislativa y de los documentos y
guías de buenas prácticas son (Gómez-Calvo, 2011c) :
-
Diseño de la instalación para la protección de usuarios, público, y la propia
instalación frente a accidentes, riesgos naturales y artificiales.
-
Protección de instalaciones, bienes, equipamientos y personas frente a robos,
vandalismo y todo tipo de actos malintencionados.
-
Protección de personas, instalaciones, bienes y equipamientos frente a
cualquier tipo de emergencia.
-
Protección de los trabajadores en su actividad laboral.
-
Protección de usuarios y público en actividades deportivas, frente a
vandalismo, racismo, y xenofobia.
-
Protección de datos e información frente a actos malintencionados
-
Protección del medio ambiente mediante buenas prácticas o frente a
accidentes.
Las actuaciones referentes a la seguridad suelen considerarse fuera de
las competencias de los gestores deportivos. Una muestra de ello es la no
aparición de este elemento entre las competencias del perfil profesional de
gestor deportivo en el libro blanco sobre el título de licenciado en ciencias de la
actividad física y del deporte (ANECA, 2004).
Sin embargo esta exclusión no está justificada. El Reglamento General
de Policía de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas (RD 2816,
1982) establece que la entidad organizadora es la responsable de los daños
que se produzcan en un evento (artículo 51d). Asimismo, la Norma Básica de
Autoprotección (RD 393, 2007) establece como responsable del correcto
funcionamiento de la autoprotección al titular de la actividad, que deberá
designar una persona responsable de la gestión de las actuaciones
encaminadas a la prevención y el control de riesgos.
Página | 53
2. Planteamiento
En el caso de la gestión de instalaciones y sus actividades deportivas,
esta responsabilidad corresponde a menudo al gestor deportivo, como
coordinador global de la actividad. Trabajos de investigación recientes a nivel
nacional ya detectan que la “seguridad global de la instalación deportiva” es la
segunda mayor problemática del gestor deportivo en referencia a los recursos
materiales (M. García, 2008). A nivel internacional, la gestión deportiva en USA
ya incluía en 1987 la seguridad como una de las doce grandes áreas de trabajo
de los gestores deportivos (Jamieson, 1987) apareciendo en los rankings de
competencias del gestor deportivo (Lambrecht, 1987). Trabajos más recientes
avalan este mismo hecho (Farzalipour et al., 2012; Goodarzi et al., 2012;
Tripolitsioti et al., 2007). Sirvan estos ejemplos para justificar la importancia del
estudio de la seguridad en instalaciones deportivas desde el punto de vista de
la gestión deportiva.
Seguridad en piscinas climatizadas
Las piscinas climatizadas son unas instalaciones complejas en su
construcción y en su mantenimiento, por los niveles de calidad requeridos y su
influencia tan directa sobre la salud de los usuarios (Cerezo, 2010). La
seguridad en la utilización es un requisito fundamental en la gestión de este
tipo de instalaciones (Consejo Superior de Deportes, 2010b). Las cuestiones de
seguridad que deben considerarse en las piscinas climatizadas son muchas y
variadas. La sensación de indefensión que produce la falta de vestimenta
habitual de los usuarios ante cualquier tipo de situación irregular requiere unas
condiciones del entorno muy cuidadas, que aporten seguridad, y sensación de
seguridad. La utilización de sistemas eléctricos en ambientes generalmente
muy húmedos, de calderas para climatización del agua del vaso de piscina, de
agua caliente sanitaria, o de maquinaria para control de la humedad, requieren
de una instalación y mantenimiento muy estricto.
Por supuesto que las cuestiones de calidad del agua y aire son
fundamentales en las piscinas climatizadas, pero no se deberían descuidar
cuestiones como el estado, mantenimiento y cuidado de los vestuarios, el
correcto estado y señalización de las vías de evacuación, el cuidado de los
Página | 54
2. Planteamiento
botiquines o del material deportivo, la protección ante incendios o las
cuestiones estructurales de la edificación. Otros aspectos a tener en cuenta
son los relativos a la protección de la propia instalación y sus equipos frente a
intrusiones y robos, o los referidos a la organización de espectáculos para la
prevención de la violencia, la intolerancia, o los accidentes derivados de estos.
Debemos mencionar también los aspectos de intromisión en el derecho a la
imagen, la intimidad o el honor, que a veces producen situaciones complicadas,
por la falta de vestimenta habitual (Gómez-Calvo, 2007f). El colectivo de
trabajadores de piscinas se enfrenta a riesgos específicos que también deben
ser tenidos en cuenta.
Muchas de las cuestiones de seguridad que atañen a piscinas
climatizadas están fuertemente reguladas por normativas técnicas y legislación,
teniendo este hecho efectos tanto positivos como negativos. En el lado positivo,
los constructores, fabricantes y gestores tienen unas reglas definidas a las que
atenerse. Sin embargo, la Asociación de Fabricantes de Piscinas de España
(ASOFAP) denuncia la situación especialmente grave al respecto de la falta de
homogeneización en las regulaciones técnicas y legislativas en cuestiones de
seguridad, higiene y confort en piscinas (Consejo Superior de Deportes, 2008).
La legislación es muy amplia, alguna muy antigua y parcialmente modificada, y
además las distintas competencias autonómicas regulan muchos aspectos de
una forma distinta.
Por otro lado, una consecuencia de la existencia de tantas regulaciones
a veces algo confusas, es que los gestores pueden tender a olvidarse de los
códigos de buenas prácticas, ciñéndose al cumplimiento de la normativa
vigente, especialmente aquella sobre la que las administraciones realizan
inspecciones periódicas.
¿La accesibilidad es también parte de la seguridad?
Si la seguridad es necesaria para la práctica del deporte, en la práctica
del “deporte para todos” es necesaria la “seguridad para todos”. La utilización
segura de instalaciones, equipamientos y servicios por parte de ciudadanos de
Página | 55
2. Planteamiento
todas las características, debe ser un objetivo prioritario en la gestión deportiva
de la sociedad actual.
El disfrute de los ciudadanos de unos servicios accesibles, eliminando
las barreras que impidan la autonomía personal de las personas, debe ser un
objetivo
primordial
de
una
sociedad
avanzada.
Cualquier
persona,
independientemente de sus capacidades, debe poder utilizar la ciudad y sus
servicios, especialmente los públicos (Herreros, 2003).
Para conseguir este objetivo es necesario que las administraciones
públicas realicen una labor activa de regulación normativa, pero sobre todo de
sensibilización, concienciación y comunicación (J. Fernández, García, Juncá,
De Rojas, & Santos, 2005). Es preciso incorporar a todos los sectores
involucrados de la sociedad en la tarea de impulsar iniciativas para la mejora
de las condiciones de uso y acceso de los servicios.
La primera imagen que suele formarse en la mente al pensar en el
término accesibilidad es la de una persona en silla de ruedas; es cierto que en
un primer momento se asociaba este término a la eliminación de las barreras
físicas más importantes, que correspondían a este colectivo. Sin embargo el
concepto de accesibilidad se ha ido enriqueciendo, abarcando en la actualidad
todo el entorno en el que se mueven las personas.
Este hecho queda corroborado por la definición de accesibilidad
universal dada en la Ley de Igualdad de Oportunidades (artículo 2, apartado c,
de la Ley 51/2003) que nos aporta un punto de vista mucho más amplio,
incluyendo en el término a “todas las personas”:
“la condición que deben cumplir los entornos, procesos, bienes,
productos y servicios, así como los objetos o instrumentos,
herramientas y dispositivos, para ser comprensibles, utilizables y
practicables por todas las personas en condiciones de seguridad y
comodidad y de la forma más autónoma y natural posible”.
El deporte para todos está por tanto íntimamente ligado al acceso para
todos. Las instalaciones deportivas y las actividades que en ellas se realizan
deben adecuarse para dar cabida a cualquier tipo de usuario (Rovira-Beleta,
2003).
Página | 56
2. Planteamiento
Es
también
muy común
vincular los
términos
accesibilidad
y
discapacidad. Existen múltiples clasificaciones de discapacidades, siendo
particularmente interesante por su sencillez la clasificación de la Guía Datus
(Instituto de Biomecánica de Valencia, 2003a) obtenida desde un conjunto de
seminarios de consenso de expertos en discapacidad. Sin embargo, personas
embarazadas, niños, personas muy altas o bajas, o personas empujando
carritos de bebés, no siendo discapacitadas quedan incluidas como objetivo de
la accesibilidad (Herreros, 2003).
Otra vinculación muy común, que justifica la existencia de muchas guías
específicas, centra los esfuerzos en la accesibilidad de la edificación (J.
Fernández et al., 2005). Sin embargo el término es actualmente mucho más
amplio, vinculándose a la idea de “diseño para todos” desarrollada en el Plan
Nacional de Accesibilidad 2004 – 2012 (Ministerio de Trabajo y Asuntos
Sociales, 2003). En cualquier acción gestora, el diseño para todos tiene en
cuenta no al usuario estándar, sino a todos los tipos de usuarios posibles.
El ámbito geográfico: La Región de Murcia
La Región de Murcia es una Comunidad Autónoma uniprovincial situada
en el sureste de la Península Ibérica, lindando con Andalucía, la comunidad
Valenciana y Castilla – La Mancha. Su población es de 1.466.818 habitantes, el
3,12% de la población nacional (RD 1007, 2014) y su extensión de 11.313 km2,
el 2,2 % del territorio nacional, resultando una densidad de 130,11 hab/km2
(Wikipedia, 2015). Su capital es la ciudad de Murcia. La Región de Murcia se
compone de 45 municipios, con población y extensión que se muestra en la
Tabla 2.
El deporte en la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia se reguló
inicialmente por la Ley 2/2000, de 12 de Julio, del Deporte de La Región de
Murcia, y actualmente por la Ley 8/2015, de 24 de marzo, de la Actividad Física
y el Deporte (Ley 8, 2015). La organización del deporte en la región se
compone
de
un
conjunto
de
elementos
interrelacionados,
como
el
ordenamiento jurídico, la estructura del deporte, las instalaciones deportivas,
los recursos económicos y los recursos humanos. La estructura deportiva es
Página | 57
2. Planteamiento
compleja, interviniendo deportistas, clubes, federaciones, empresas deportivas,
ayuntamientos, gobierno de la comunidad, patrocinadores, y un largo etcétera.
El sistema es público – privado. En cuanto al sector público, los
organismos más destacados en la gestión del deporte son la Dirección General
de Deportes del Gobierno de la Comunidad Autónoma, los 45 Ayuntamientos
de la Región, las universidades de Murcia y Cartagena y la Academia General
del Aire.
Las Federaciones Deportivas se regulan actualmente por el Decreto
220/2006 de 27 de Octubre. De las 65 federaciones nacionales existentes, la
región cuenta con 57 federaciones autonómicas, con 89.838 licencias según el
Consejo Superior de Deportes (2013a). Los clubes deportivos se regulan en la
Región de Murcia por el Decreto 221/2006 de 27 de Octubre, que establece el
marco normativo y crea un Registro de Clubes Deportivos. Este registro
alcanza los 2.595 clubes deportivos federados.
En deportes de equipo el mayor número de licencias las tiene el fútbol;
1.283 clubes y 23.484 deportistas. Le sigue el baloncesto con 54 clubes y
4.080 federados. En deportes individuales el mayor número de licencias la
tiene caza, por su obligatoriedad, con 8.196 federados, seguido de montaña y
golf con aproximadamente 5.000 licencias por federación.
Pero el deporte federado no es actualmente el mayoritario. En la Región
de Murcia, el 36% de la población dice practicar deporte, valor que se
encuentra por debajo de la media nacional. Y por encima de todos, la actividad
física más demandada es la natación recreativa (Ministerio de Educación
Cultura y Deporte, 2013). Por otro lado, según los estudios realizados por
Hellín (2003) para la Región de Murcia, el 76% de la población murciana
defiende que debe promocionarse más el deporte para todos que el deporte de
competición, frente el 12% que cree lo contrario.
Página | 58
2. Planteamiento
Tabla 2. Municipios de la Región de Murcia
Población
Municipio
Abanilla
Abarán
Águilas
Albudeite
Alcantarilla
Aledo
Alguazas
Alhama de Murcia
Archena
Beniel
Blanca
Bullas
Calasparra
Campos del Río
Caravaca de la Cruz
Cartagena
Cehegín
Ceutí
Cieza
Fortuna
Fuente Álamo
Jumilla
La Unión
Las Torres de Cotillas
Librilla
Lorca
Lorquí
Los Alcázares
Mazarrón
Molina de Segura
Moratalla
Mula
Murcia
Ojós
Pliego
Puerto Lumbreras
Ricote
San Javier
San Pedro del Pinatar
Santomera
Torre Pacheco
Totana
Ulea
Villanueva del Segura
Yecla
Región de Murcia
6.569
13.110
34.828
1.404
41.381
1.025
9.460
20.915
18.496
11.198
6.493
12.321
10.661
2.220
26.415
216.655
16.248
10.881
35.351
10.098
16.175
25.711
19.009
21.608
4.842
92.865
6.983
16.251
35.408
67.382
8.290
16.968
441.354
562
4.051
14.742
1.452
32.641
24.285
15.709
33.911
30.549
926
2.445
34.601
1.474.449
2
Superficie
Densidad
236
115
252
17
16
50
24
312
16
10
87
82
185
47
859
558
299
10
367
149
274
969
25
39
57
1.675
16
20
319
170
955
634
886
45
29
145
87
75
22
44
189
289
40
13
606
11.313
27,88
114,06
138,33
82,49
2548,09
20,61
398,48
67,13
1127,80
1113,12
74,36
149,95
57,66
46,94
30,76
388,21
54,29
1061,56
96,32
67,62
59,14
26,53
766,80
557,19
85,70
55,43
443,37
819,93
111,04
397,53
8,68
26,76
498,14
12,41
137,65
101,80
16,75
434,63
1088,04
355,41
179,04
105,73
23,13
185,51
57,13
130,33
Población en habitantes, superficie en Km y densidad en habitantes por km
2
Página | 59
2. Planteamiento
En cuanto a instalaciones deportivas, la Región de Murcia contaba en
2005 (Segarra, 2006) con 3.748 espacios deportivos, 27,4 espacios deportivos
por cada 10.000 habitantes, habiendo sufrido una fortísima evolución en los
últimos 25 años. La Región contaba con 491 vasos de piscina, de los cuales
443 eran de aire libre y 48 cubiertos. Cabe esperar un número bastante mayor
de vasos cubiertos en la actualidad, debido al gran crecimiento en la
construcción de este tipo de instalaciones en los últimos 10 años. En cuanto a
pistas polideportivas y pabellones, la Región de Murcia contaba con 1.249
pistas polideportivas descubiertas y 87 pabellones, la gran mayoría de
titularidad pública.
Página | 60
2. Planteamiento
2.2 El método científico en la investigación en
gestión deportiva
En
este
apartado
realizamos
una
breve
disertación
sobre
la
investigación, el método científico y la investigación en gestión deportiva. El
autor de esta Tesis Doctoral ha realizado previamente trabajos de investigación
en ramas de la ciencia bien distintas a ésta, motivo por el que ha sentido la
necesidad de ahondar humildemente sobre el método científico y las técnicas
de investigación al abordar ahora trabajos en el campo de la gestión deportiva,
situada dentro del área de las ciencias de la actividad física y del deporte,
tradicionalmente consideradas en la rama de las ciencias sociales.
Quizás podamos considerar a Descartes como el padre de la ciencia
moderna, precisamente por sentar las bases del método científico en su obra
inconclusa “Reglas para la dirección de la mente” (Descartes, 1628), tratado en
el que desarrollaba el método investigador que previamente había descrito en
su “Discurso del método”.
En su primera regla, Descartes ya definía el concepto de realización de
un estudio como “Dirigir la mente de forma que forme juicios sólidos y
verdaderos de todos los objetos que se presentan”. A partir de la suya, han
llegado cientos de definiciones del concepto investigación, como la segunda
acepción del Diccionario de la Real Academia de la Lengua (2014) de “Realizar
actividades intelectuales y experimentales de modo sistemático con el
propósito de aumentar los conocimientos sobre una determinada materia”, o la
de Sierra (1991): ”Genéricamente, la investigación es una actividad del hombre
orientada a descubrir algo desconocido”, la de Sabino (1992): “Una
investigación puede definirse como un esfuerzo que se emprende para resolver
un problema”, o la de Chapouthier (1991): “La investigación es considerada una
actividad humana orientada a la obtención de nuevos conocimientos y su
aplicación para la solución a problemas o interrogantes”.
Página | 61
2. Planteamiento
Parece que, dicho de una forma u otra, hay acuerdo en lo que es
“investigar”. Además, cuando se habla de “investigación científica”, a estas
definiciones se les suele añadir el sufijo de “usando el método científico”, y aquí
es dónde me surgen las primeras interrogantes, ya que ahora tendremos que
hablar de qué es la ciencia y cuál es el método de la ciencia.
Ciencia, conocimiento (de su traducción del latín) (Glare, 1983). Llama la
atención la doble acepción de la palabra ciencia (Real Academia de la Lengua
Española, 2014). Por un lado se hace referencia con este término al “conjunto
de conocimientos obtenidos mediante la observación y el razonamiento,
sistemáticamente estructurados y de los que se deducen principios y leyes
generales”, y por otro, solo a una parcela del conocimiento: “Conjunto de
conocimientos relativos a las ciencias exactas, fisicoquímicas y naturales”.
Además, la primera acepción es incluso excluyente, ya que solo se considera
ciencia aquel conocimiento del que se deducen principios y leyes. La definición
del diccionario Espasa Calpe (2005) parece más acertada, por más generalista:
“Conocimiento ordenado y, generalmente experimentado, de las cosas”, si bien
este
diccionario
también
considera
ciencia
solo
algunas
ramas
del
conocimiento: “Conjunto de conocimientos relativos a las matemáticas, física,
química, biología y geología”. De la primera de las acepciones debe venir la
clásica distinción entre ciencias puras, naturales, sociales, exactas o incluso
aplicadas, si bien hay ciencias que no son racionalistas2, como la ciencia infusa
o las ciencias ocultas.
Si bien antes del renacimiento podemos decir que el conocimiento se
clasificaba en arte, filosofía y técnica. Después de la revolución científica del
siglo XVII (Shapin, 2000) la filosofía se separa de la ciencia y comienza la
fragmentación y la interdisciplinariedad de la ciencia (Gimeno, 2002).
Una clasificación generalmente aceptada en la actualidad está a medio
camino entre la clasificación de Carnap (2002) (formales, naturales y sociales),
y las basadas en las teorías de Bunge (1969) (experimental, aplicada y formal),
y clasifica las ciencias en formales, naturales, sociales y aplicadas:
2
Racionalismo: doctrina filosófica que sostiene que la realidad es racional y, por tanto,
comprensible a través de la razón (Espasa Calpe, 2005)
Página | 62
2. Planteamiento
Ciencias formales:
basadas estrictamente en la lógica y la matemática.
Ciencias naturales:
tienen por objeto el estudio de la naturaleza. Son entre
otras la biología, física, química física, geología o
geografía física. También suelen llamarse ciencias
experimentales.
Ciencias sociales:
se ocupan de los aspectos del ser humano. Son entre
otras la economía, administración, ciencia política,
antropología, demografía, historia, derecho, sociología,
psicología, o geografía humana.
Ciencias aplicadas:
aplicación del conocimiento teórico a las necesidades
humanas y al desarrollo tecnológico. Son entre otras la
ingeniería, la arquitectura, la medicina, o la informática.
¿Y el método de la ciencia? Si bien es claro que es necesario un método
(Regla 4 de las reglas para la dirección de la mente de Descartes: “El método
es necesario para la investigación de la verdad”), cuál es ese método no es tan
sencillo de dilucidar. Cada una de estas ramas de la ciencia posee métodos
distintos (Diaz, 2009), incluso dentro de una de ellas, según la disciplina o el
problema concreto, se utilizan métodos diferentes. Es por esto que no hay un
solo método para la investigación científica.
Por método científico se suele entender el método más consolidado en
las ciencias experimentales (o naturales), esto es, el método hipotéticodeductivo. El método hipotético-deductivo (Popper, 1994) combina la reflexión
racional con la observación de la realidad, y se basa en cuatro etapas:
observación del fenómeno a estudiar, obtención de una hipótesis sobre dicho
fenómeno, deducción de consecuencias desde la hipótesis, y verificación o
denegación de la hipótesis en base a la realidad. En este sentido se habla de
que un experimento debe ser reproducible y refutable para ser científico,
características que pueden contrastarse gracias a la divulgación de los
resultados obtenidos (por ejemplo mediante la publicación de artículos de
investigación).
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2. Planteamiento
Sin embargo este no es, ni mucho menos, el único método científico.
Existen una multitud de métodos científicos y no existe un acuerdo unánime
ente la comunidad científica sobre su clasificación. Algunos otros métodos
científicos, sin ánimo de ser exhaustivo (Achinstein, 2004; Salkind, 1999;
Sampieri, 2003) son :
Método empírico-analítico: muy usado en las ciencias sociales y en las
ciencias descriptivas. Está basado en los hechos que ocurren y en la
experiencia o la experimentación, seguido de un análisis riguroso, a
menudo con técnicas estadísticas.
Método axiomático: basado en el establecimiento de axiomas
(elementos considerados verdaderos), que pueden estar en leguaje
formal o en lenguaje natural, y a partir de ellos obtener demostraciones.
Método sistémico: Está basado en modelar entes a partir de sus
componentes y las relaciones entre ellos, determinando la estructura y
dinámica de los objetos.
Método inductivo: Este método parte de casos particulares para llegar
a conocimientos generales. En ocasiones basado en la lógica y la
matemática y en otras en estrecha relación con el método empírico.
Método de extrapolación: la extrapolación afirma que existen ciertos
axiomas, que pueden aplicarse a una nueva situación (extrapolables) o a
una situación cronológicamente futura. La base para una extrapolación
es la información sobre el comportamiento de un fenómeno.
Método histórico: basado en revelar el pasado, la evolución
cronológica y las conexiones históricas del fenómeno objeto de la
investigación para llegar al conocimiento de éste e incluso realizar
predicciones.
Método sintético: se relacionan hechos aparentemente aislados,
formulando una teoría unificadora de ellos, que probará.
También puede ser interesante nombrar algunos métodos no científicos,
como la tenacidad, la intuición o la autoridad (Thomas & Nelson, 2007).
Página | 64
2. Planteamiento
Tenacidad: establece la verdad por simple creencia, sin la búsqueda de
pruebas o demostraciones.
Intuición: basada en el llamado “sentido común”, sin mayor
profundización ni prueba. Un ejemplo habitual de intuición es la creencia
de que la tierra era plana.
Autoridad: algo es cierto o falso por la persona que lo dice. Es una
técnica claramente no científica y sin embargo continuamente utilizada
pudiendo plantear serios problemas a aquellas personas que no la
acepten.
Sini (1999) exige que el método científico tenga concordancia con la
realidad, por lo que en ocasiones incluso se pone en duda que el método
racionalista puro sea científico, si no se contrasta con la realidad (Thomas &
Nelson, 2007). Igualmente, el puro método empírico puede no ser válido si no
se acompaña de un estricto rigor y una desconfianza crítica de la simple
percepción, aunque vaya acompañada de información cuantitativa.
Ahora que nos vamos acercando a la problemática de la investigación
científica, volvamos por un momento al punto en el que mencionaba que hay
acuerdo en lo que es “investigar”. Cierto que hay acuerdo, pero, ¿qué tipos de
investigación existen? Ante esta pregunta surgen de nuevo múltiples
clasificaciones de los tipos de investigación, que a menudo se confunden con
los métodos de investigación. Algunas de las múltiples clasificaciones
existentes en la literatura (Tamayo, 2001) son:
-
Según el objeto de estudio: básica, analítica, aplicada o de campo.
-
Según el tipo de medición: cuantitativa, cualitativa o mixta.
-
Según el objetivo: exploratoria, descriptiva, explicativa, predicativa,
confirmatoria.
-
Según la obtención de datos: alta o baja estructuración, participante o
participativa, proyectiva, alta o baja interferencia
-
Según el alcance: estudio de caso o censal.
Últimos conceptos: la técnica de investigación y la herramienta de
investigación.
Podemos
definir la
técnica
de
investigación
como
un
Página | 65
2. Planteamiento
procedimiento a aplicar en un método de investigación. Este término nos es
más familiar. Son técnicas de investigación la observación, la encuesta, la
entrevista o la investigación documental. También la exploración médica, la
demostración matemática o el análisis estadístico. Y son herramientas o
instrumentos para la investigación todas aquellas ayudas, dispositivos o
programas que facilitan el proceso investigador. Son herramientas por tanto el
microscopio, el cronómetro, muchos tipos de software, una encuesta, o un
procedimiento.
A menudo al abordar un estudio de investigación parece indispensable
plantear una hipótesis que confirmar o refutar. Sin embargo, no siempre es
necesario disponer de una hipótesis para realizar una investigación. Autores
como Sampieri (2003) , Trochim y Donnelly (2007) o Supo (2012) indican que
la existencia o no de una hipótesis depende del enfoque y alcance del estudio.
Los estudios cualitativos a menudo no plantean hipótesis, especialmente
cuando su enfoque es inductivo y la investigación exploratoria o descriptiva. Un
estudio mixto cualitativo-cuantitativo también puede no presentar hipótesis, e
incluso tampoco los estudios cualitativos cuyo fin no sea correlacional o
explicativo.
Y ahora, ¿qué tipo de investigación utiliza la gestión deportiva? ¿Cuáles
son sus técnicas?
Escojamos primero la rama de la ciencia. Es fácil inclinarse en primer
lugar por las ciencias sociales, la rama por excelencia de las ciencias de la
actividad física y del deporte. Pero quizás hay una segunda, las ciencias
aplicadas. Si examinamos los trabajos existentes sobre las funciones del gestor
deportivo, tanto en los inicios de esta materia (Jamieson, 1987; Lambrecht,
1987) como en los tiempos actuales (Farzalipour et al., 2012; M. García, 2008;
A. Gómez & Núñez, 2011; Goodarzi et al., 2012; Tripolitsioti et al., 2007)
comprobamos claramente que los gestores deportivos aplican la conjugación
de un gran número de disciplinas con el objetivo de la gestión del deporte. Por
tanto, la investigación en gestión deportiva debe encargarse de esto mismo.
Existen diversos trabajos que analizan la investigación en gestión deportiva
(Balduck, Parmentier, & Buelens, 2004; Barber, Parkhouse, & Tedrick, 2001;
Olafson, 1990, 1995; Paton, 1987; Zeigler, 1987). En ellos podemos encontrar
Página | 66
2. Planteamiento
los
elementos
que
caracterizan
a
la
ciencia
aplicada,
que
como
mencionábamos anteriormente consiste en la “aplicación del conocimiento
teórico a las necesidades humanas y al desarrollo tecnológico”.
Sin pretender hacer un estudio de investigación al respecto, pero no
descartando hacerlo en el futuro, una revisión de los trabajos citados en el
párrafo anterior, y de los artículos publicados en las revistas de investigación
internacionales más específicas y relevantes3, nos muestra que no suele
hacerse explícito el método científico utilizado; frecuentemente suele
presuponerse que se utiliza el método hipotético – deductivo, aunque podemos
encontrar otras metodologías subyacentes. Los trabajos suelen hacer
referencia al tipo de investigación, principalmente a la clasificación según el
objetivo (exploratoria, descriptiva, correlacional, explicativa o confirmatoria), al
tipo de medición efectuado (cuantitativa, cualitativa o mixta) y al alcance
(estudio de caso o censal).
Según Amis y Silk (2005), los enfoques cuantitativos positivistas han
sido los enfoques predominantes en la investigación en gestión deportiva. La
Asociación Americana para la Gestión Deportiva defiende con firmeza la
investigación cualitativa en la gestión deportiva, aunque reconoce asimismo
que la investigación cuantitativa sigue dominando la disciplina (Edwards &
Skinner, 2009). Esta asociación considera que hay una importante presión
académica, que erróneamente considera que la investigación cuantitativa
aporta un “aura” de respetabilidad.
Al respecto de la técnica empleada, en el estudio de Balduck et al.
(2004), se pone de manifiesto el mayor uso de cuestionarios (30,7%) frente a
entrevistas (22,4%) y técnicas documentales (19,9%). Otras técnicas como
simulaciones, experimentos de campos, observación o grupos de discusión
quedan para el 21% restante.
Rudda y Johnson (2010) analizan las mismas tres revistas al respecto
de la clasificación por tipo de medición, citando que un 9% de trabajos son
cualitativos, un 55% cuantitativos, únicamente un 2% mixtos y un 34%
conceptuales.
3
Journal of sport management, European Sports Management Quarterly, y Sport Management
Review
Página | 67
2. Planteamiento
Concluyendo, existen varias consideraciones de lo que es ciencia y
varios tipos de ciencia, existe variedad de métodos científicos y de tipos de
investigación en función de diversas clasificaciones, y una gran cantidad de
técnicas de investigación y aún mayor de herramientas. La gestión deportiva se
centra fundamentalmente en las ciencias sociales y las ciencias aplicadas,
definiendo su investigación en función del objetivo y del tipo de medición, y
evitando explicitar la metodología científica subyacente. Además, utiliza las
técnicas y herramientas propias de las ciencias sociales, adaptándolas a sus
peculiaridades, y en menor medida las de las ciencias aplicadas, mucho menos
definidas.
Nada de esto es verdaderamente útil si no se aplica el rigor, el trabajo
sistemático, y los fundamentos del ya citado método de Descartes (1628):
•
El primero, no admitir jamás cosa alguna como verdadera sin haber conocido
con evidencia que así era.
•
El segundo, en dividir cada una de las dificultades que examinare, en tantas
partes fuere posible y en cuantas requiriese su mejor solución.
•
El tercero, en conducir con orden mis pensamientos, empezando por los
objetos más simples y más fáciles de conocer, para ascender poco a poco,
gradualmente, hasta el conocimiento de los más compuestos, e incluso
suponiendo un orden entre los que no se preceden naturalmente.
•
Y el último, en hacer en todo recuentos tan integrales y unas revisiones tan
generales, que llegase a estar seguro de no omitir nada.
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2. Planteamiento
2.3 Planteamiento del trabajo de investigación
La gran dispersión de perfiles profesionales, administraciones, riesgos y
organismos involucrados en la materia de la seguridad, junto con los niveles de
responsabilidad que sobre las instalaciones deportivas y sus eventos se exigen
en la actualidad a los gestores deportivos, hace que consideremos necesario el
estudio de la seguridad en instalaciones deportivas desde el punto de vista de
su gestor. Con este enfoque se coloca en el centro del problema el deporte y
su gestión, buscando todas las implicaciones que la seguridad tiene en él. Por
ello, nuestro objetivo general es el siguiente:
Objetivo general de la investigación
Analizar el problema de la seguridad en instalaciones deportivas
desde el punto de vista de la investigación en gestión deportiva, y
proponer técnicas para su gestión.
Objetivo específico: el ámbito
En esta Tesis Doctoral, por tanto, nos hemos planteado la realización de
un conjunto de estudios de investigación en la materia de seguridad en
instalaciones deportivas desde el punto de vista de la gestión deportiva. Sin
embargo, la gran diversidad geográfica, de tipologías de instalaciones y de
tipos de titularidad nos obliga a delimitar el ámbito de los estudios particulares
que hemos realizado, siendo nuestro objetivo específico:
Analizar el problema de la seguridad, y proponer técnicas para su
gestión, en las piscinas climatizadas de uso colectivo y titularidad
municipal de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, desde
el punto de vista de la investigación en gestión deportiva.
Los trabajos de investigación
Dada la novedad de esta temática, y la poca producción científica
existente sobre ella, planteamos una investigación en dos fases, cada una de
ellas con un enfoque distinto en cuanto a las técnicas de investigación.
Página | 69
2. Planteamiento
Fase 1. Investigación exploratoria
Como en toda investigación exploratoria, con esta primera fase se
pretende adquirir un conocimiento más profundo sobre la materia que nos
ocupa, generando documentación para facilitar la realización de trabajos
futuros. El objetivo y el estudio para su consecución es el siguiente:
Objetivo 1: Caracterizar4 el problema de la seguridad en instalaciones
deportivas desde el punto de vista del gestor deportivo.
Estudio 1:
Un acercamiento a la seguridad en instalaciones deportivas
desde el punto de vista del gestor deportivo mediante un
estudio exploratorio documental.
Fase 2. Investigación descriptiva
El conocimiento adquirido en la fase anterior nos ha permitido abordar el
problema específico de las piscinas climatizadas, proponiéndonos como
objetivos los siguientes:
Objetivo 2: Desarrollar un instrumento para analizar la seguridad en
piscinas climatizadas de uso colectivo.
Objetivo 3: Analizar la seguridad en las piscinas climatizadas de uso
colectivo y titularidad municipal de la Comunidad Autónoma de
la Región de Murcia.
Objetivo 4: Conocer la percepción de seguridad de los usuarios de las
piscinas climatizadas de uso colectivo y titularidad municipal de
la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
Estos objetivos dan lugar a los correspondientes estudios:
Estudio 2:
4
Diseño de una herramienta cuantitativa para analizar las
condiciones de seguridad en piscinas climatizadas de uso
colectivo.
Por caracterización se entiende “Determinación de los atributos peculiares de una persona o
cosa, de modo que se distinga claramente de las demás” (Real Academia de la Lengua
Española, 2014).
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2. Planteamiento
Estudio 3:
Condiciones de seguridad en piscinas climatizadas de uso
colectivo y titularidad municipal de la Comunidad Autónoma de
la Región de Murcia.
Estudio 4:
Percepción de seguridad de los usuarios de las piscinas
climatizadas de uso colectivo y titularidad municipal de la
Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
La Tabla 3 presenta de forma agrupada los objetivos y estudios de esta tesis
doctoral.
Tabla 3. Resumen de objetivos y estudios del presente trabajo
Objetivo general
Analizar el problema de la seguridad en instalaciones deportivas desde el
punto de vista de la investigación en gestión deportiva, y proponer técnicas
para su gestión.
Objetivo específico: el ámbito
Analizar el problema de la seguridad, y proponer técnicas para su gestión,
en las piscinas climatizadas de uso colectivo y titularidad municipal de la
Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, desde el punto de vista de la
investigación en gestión deportiva.
Objetivos
1. Caracterizar el problema de la seguridad en instalaciones deportivas
desde el punto de vista del gestor deportivo.
2. Desarrollar un instrumento para analizar la seguridad en piscinas
climatizadas de uso colectivo.
3. Analizar la seguridad en las piscinas climatizadas de uso colectivo y
titularidad municipal de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
4. Conocer la percepción de seguridad de los usuarios de las piscinas
climatizadas de uso colectivo y titularidad municipal de la Comunidad
Autónoma de la Región de Murcia.
Estudios
1. Un acercamiento a la seguridad en instalaciones deportivas desde el
punto de vista del gestor deportivo mediante un estudio exploratorio
documental.
2. Diseño de una herramienta cuantitativa para analizar las condiciones de
seguridad en piscinas climatizadas de uso colectivo.
3. Condiciones de seguridad en piscinas climatizadas de uso colectivo y
titularidad municipal de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
4. Percepción de seguridad de los usuarios de las piscinas climatizadas de
uso colectivo y titularidad municipal de la Comunidad Autónoma de la
Región de Murcia.
Página | 71
2. Planteamiento
Página | 72
Capítulo 3
Un acercamiento a la seguridad en
instalaciones deportivas desde el punto
de vista del gestor deportivo mediante
un estudio exploratorio documental
3. Un acercamiento a la seguridad…
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3. Un acercamiento a la seguridad…
3 Un acercamiento a la seguridad en
instalaciones deportivas desde el punto
de vista del gestor deportivo mediante
un estudio exploratorio documental
3.1 Planteamiento
Introducción
En el capítulo anterior hemos mencionado la escasez de estudios de
investigación en la materia de seguridad en instalaciones deportivas desde el
punto de vista del gestor deportivo. Teniendo en cuenta esto, hemos planteado
una investigación exploratoria sobre tal cuestión, disponiendo así de una
primera aproximación mediante un estudio de investigación documental, que es
el que presentamos en este capítulo.
La investigación exploratoria
La investigación exploratoria se suele efectuar sobre temas u objetos
poco conocidos o que no han sido abordados con anterioridad (R. Hernández,
Fernández, & Baptista, 1997; Selltiz, Wrightsman, & Cook, 1980). Este tipo de
investigación no suele constituir un fin en sí mismo, sino que sirve para
aumentar el grado de familiaridad con los fenómenos objeto de estudio y a
menudo para obtener información para llevar a cabo una investigación más
completa (Dankhe, 1989). Este tipo de estudios suele servir bien para hacer
una formulación más precisa de un problema de investigación, bien para
conducir al planteamiento de una hipótesis (Selltiz et al., 1980).
No hay un campo metodológico bien definido para este tipo de estudios.
Son investigaciones más flexibles en comparación con los estudios descriptivos
o explicativos, y los estudios son más amplios y dispersos que en los casos
anteriores (Dankhe, 1989; R. Hernández et al., 1997).
Página | 75
3. Un acercamiento a la seguridad…
Según V. Fernández (2006) es falsa la creencia de que una
investigación exploratoria es más sencilla que una confirmatoria; la primera
tiene un grado de dificultad superior debido a su poca estructuración. Por ello,
se necesita experiencia investigadora para conseguir una buena investigación
exploratoria (Zubizarreta, 2003).
La investigación documental
La investigación documental es una técnica cualitativa a menudo usada
en estudios exploratorios. Se dedica a reunir, seleccionar y analizar datos que
están en forma de “documentos” producidos por la sociedad para estudiar un
fenómeno determinado (Olabuénaga, 1989). La documentación puede provenir
de fuentes primarias (documentos originales) o de fuentes secundarias
(documentos elaborados a partir de fuentes primarias, como libros, ensayos,
artículos,
biografías,
monografías,
etc.)
(Buonocuore,
1980).
Existen
investigaciones documentales de carácter cualitativo, como los estudios de
medición de variables independientes o los correlacionales, pero los que nos
ocupan aquí son los llamados “monográficos” (Arias, 2006).
La investigación documental a veces se confunde con la documentación
bibliográfica sobre un tema. En la documentación bibliográfica la información de
consulta suele estar producida con fines de investigación, por lo que mantiene
criterios muy rigurosos. Sin embargo, la investigación documental es
susceptible de utilizar todo tipo de documentos, a menudo procedentes de
fuentes muy diversas (Vallés, 2009).
Es interesante la observación de Olabuénaga (1989): “A los documentos
se les puede “entrevistar” mediante preguntas implícitas y se les puede
“observar” con la misma intensidad y emoción con la que se observa un rito
nupcial, una pelea callejera o una manifestación popular”. En este caso la
lectura es una mezcla de entrevista/observación y puede desarrollarse como
cualquiera de ellas”. Esta cita sugiere una metodología de investigación similar
a la utilizada en la técnica de observación o de entrevista.
De los distintos procedimientos de trabajo de la literatura, nos parece
especialmente útil el presentado por Arellano (2001), que divide una
Página | 76
3. Un acercamiento a la seguridad…
investigación documental genérica en siete sencillas etapas. Esta planificación
deberá adaptarse a cada estudio documental específico. Utilizaremos este
enfoque para nuestro estudio de investigación, con las adaptaciones
necesarias. Las etapas de la investigación documental monográfica serán
entonces:
1. Definición del objetivo. Esto implica formular la pregunta de
investigación, seleccionar y delimitar el tema o problema, y definir el
universo del material documental (Grawitz, 2002).
2. Búsqueda de los documentos. Para estudios con un número de
documentos ilimitado es una buena técnica la de saturación de
información (Andreu, 2002). También debe escogerse una técnica para
la clasificación de los documentos.
3. Selección de los documentos. Es necesario realizar un cribado de
documentos, utilizando unos criterios bien definidos para seleccionar
qué documentos son interesantes para nuestro estudio y cuáles quedan
excluidos (Darrobers, 1994).
4. Obtención de la información. Dependiendo de la complejidad del
problema y de la cantidad y variedad de documentación, puede ser
necesaria la utilización de técnicas de extracción de información
similares a las de la técnica de la entrevista, como la codificación y
categorización de la información (R. López & Deslauriers, 2011).
5. Presentación de la información. En el formato requerido en función del
tipo de trabajo a realizar (monografía escrita, presentación oral, artículo
de investigación, etc.) (Hochman & Montero, 1996).
6. Evaluación el trabajo. Finalizado el trabajo, es conveniente evaluar
todo el proceso verificando la consecución de objetivos, identificando
dificultades surgidas, identificando puntos fuertes y débiles del proceso y
proponiendo mejoras para posteriores estudios.
Página | 77
3. Un acercamiento a la seguridad…
La clasificación de documentos
Uno de los aspectos de importancia en la investigación documental es la
clasificación de documentos. Con los actuales niveles de tecnificación en el
acceso a la información, y para nuestro caso particular, la inmensa mayoría de
documentos que manejamos son digitales. Por tanto, nuestra primera decisión
a este respecto es utilizar un repositorio digital para el estudio documental.
Aquellos documentos que, de forma extraordinaria no estén en soporte digital
serán digitalizados para su incorporación al sistema, con la única excepción de
documentos que legalmente no permitan esta opción.
Existen multitud de herramientas software para el almacenamiento,
clasificación y búsqueda de documentos digitales; se trata de los gestores
documentales y gestores de contenidos (Pinto, 1996). Facilitan la clasificación
de los documentos, y además poseen potentes herramientas de búsqueda
basadas en etiquetas, campos y/o contenido de los documentos. Los gestores
documentales actuales son aplicaciones bastante complejas destinadas a la
gestión de elevados volúmenes de documentos para trabajo en red y acceso
de múltiples usuarios con diferentes niveles de acceso. En ocasiones, para
entornos monousuario y un volumen de documentos no excesivamente grande
(no de miles de archivos) el propio gestor de archivos del sistema operativo del
ordenador es suficiente, más operativo y económico. En este último caso se
hace necesario utilizar algún criterio para la clasificación de los documentos.
Un caso distinto son los llamados gestores de referencias bibliográficas
(o simplemente gestores bibliográficos). En ellos, los documentos referenciados
no tienen por qué estar en formato digital, e incluso no tienen ni siquiera por
qué estar en posesión del autor del trabajo. Los gestores bibliográficos son
herramientas que permiten gestionar la información referencial de todo tipo de
documentos.
Así,
la
referencia
bibliográfica
se
puede
almacenar
y
posteriormente ser insertada en un texto en una gran variedad de formatos
estándar. Son muy valoradas en este tipo de herramientas las capacidades de
importación y exportación de referencias, y la adaptación a la forma estándar
de referenciar en cada una de las ramas del conocimiento (Gilmour & Cobuskuo, 2011).
Página | 78
3. Un acercamiento a la seguridad…
Los sistemas de clasificación de documentos digitales se adaptan a
menudo desde los sistemas de clasificación de documentos en papel.
Dependiendo de la naturaleza del problema, las clasificaciones serán
alfabéticas, numéricas, geográficas, cronológicas, o temáticas (Batley, 2004).
Nuestro interés se centra en las clasificaciones temáticas, que se distinguen
entre sí por la forma de estructurar las materias. Podemos encontrar entre las
clasificaciones temáticas las jerárquicas (una jerarquía de conceptos y
subconceptos) o por facetas (técnica más compleja que clasifica en función de
las relaciones entre del documentos y sus propiedades o partes). Son
habituales las clasificaciones temáticas jerárquicas, como las decimales (CDU
o de Dewey) u otras como la de la Biblioteca del Congreso de Washington o la
de Bliss (Armenteros & Alfonso, 2008).
No obstante, estas son clasificaciones con una relación de materias
preestablecidas. Para clasificar documentos de una organización o temática
particular según una clasificación temática jerárquica se establece un “cuadro
de clasificación“ específico, que predefine los términos de clasificación y su
jerarquía así como la estructura de la codificación (Cruz, 2006). Los cuadros de
clasificación son igualmente útiles para documentos en papel o digitales.
El objetivo: seguridad en instalaciones deportivas desde el
punto de vista del gestor deportivo
El apartado 3 del Capítulo 2 establece el objetivo general de esta Tesis
Doctoral, el ámbito de la investigación y su objetivo específico, y los objetivos
de cada una de las fases de la investigación. Recordemos que el objetivo de
esta investigación exploratoria es:
Caracterizar el problema de la seguridad en instalaciones deportivas
desde el punto de vista del gestor deportivo.
Partiendo de este objetivo, con el presente estudio documental nos
proponemos:
Página | 79
3. Un acercamiento a la seguridad…
-
Establecer qué aspectos se deben tener en cuenta en la seguridad
en instalaciones deportivas.
-
Identificar los
deportivas.
-
Conocer la normativa legal y técnica relativa a la seguridad en
instalaciones deportivas.
-
Conocer las recomendaciones más importantes en materia de
seguridad en instalaciones deportivas.
-
Localizar y obtener los documentos existentes útiles para el gestor
deportivo sobre seguridad en instalaciones deportivas.
-
Particularizar al caso de piscinas climatizadas de uso colectivo.
riesgos
para
la
seguridad
en
instalaciones
Para ello el universo del material documental será:
-
Legislación (nacional y autonómica de la Región de Murcia)
-
Normas técnicas (deportivas y constructivas nacional y autonómica)
-
Códigos y guías de buenas prácticas
-
Trabajos de investigación
-
Documentos profesionales
-
Documentos de temáticas específicas
Página | 80
3. Un acercamiento a la seguridad…
3.2 Búsqueda y clasificación de documentos
Búsqueda y selección
Se ha realizado una búsqueda exhaustiva de documentos mediante la
técnica de saturación, una posterior selección por cribado y una clasificación
temática jerárquica mediante un cuadro de clasificación propio. Salvo en la
categoría de artículos de investigación, se han buscado únicamente
documentos en castellano, en su gran mayoría de ámbito nacional. Las
características legislativas, culturales, geográficas y profesionales de cada país
dificultan la homogeneización de este tipo de documentos y la aplicabilidad a
nuestro caso particular es dudosa. Sin embargo, por la internacionalización de
la investigación, la unificación de técnicas y criterios, y el rigor utilizado, los
artículos de investigación sí tienen interés.
Se han seleccionado un total de 463 documentos. Hemos excluido las
cuestiones referidas a seguridad ambiental y a protección de datos por
pertenecer a un ámbito muy particular que queda fuera de nuestra
investigación.
Legislación
Existe una enorme cantidad de normativa relacionada con la seguridad
en instalaciones deportivas. Esto es debido a que cada normativa de aplicación
específica hace referencia a otras más generalistas, interrelacionándose las
distintas temáticas. En cuanto a la legislación estrictamente deportiva, se ha
seleccionado aquella que contiene elementos importantes relacionados con la
seguridad. Se ha seleccionado también una normativa básica genérica sobre el
deporte (como por ejemplo la Ley del Deporte nacional, y la autonómica), por
su importancia y por emanar de ella otros aspectos relacionados con la
seguridad en el deporte. Hemos incluido normativa relacionada con protección
al ciudadano, prevención de la violencia, protección frente a catástrofes y
protección laboral. También hemos revisado legislación técnica aprobada en
boletines oficiales, sin llegar a incluir normas muy específicas (como ciertas
normas UNE de obligado cumplimiento, que afectan más bien a equipamientos,
Página | 81
3. Un acercamiento a la seguridad…
y de las que hablaremos más adelante), ya que la cantidad de ellas es ingente
y solo es preciso consultarla para cuestiones muy particulares. Sobre materia
constructiva se ha seleccionado aquella normativa más relevante para la
seguridad, como el Código Técnico de la Edificación en sus aspectos de
incendios, accesibilidad, salubridad y ruidos. Se ha incluido también legislación
básica sobre accesibilidad y habitabilidad.
Se ha cribado la normativa de ahorro de energía, y cierta legislación
seleccionada inicialmente pero que después de su estudio ha resultado que no
es de aplicación, como las normativas nacional y europea sobre salubridad de
aguas de baño. También se han cribado leyes de protección ambiental o
cuestiones menores en temas de edificación o accesibilidad. Obviamente se ha
descartado la legislación derogada, aunque está problemática se comenta más
adelante. Sobre la legislación autonómica, se ha optado por incluir únicamente
la de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, por ser el ámbito
específico de aplicación.
Normas técnicas
En esta categoría se han incluido la normativa técnica para edificaciones
más relevante, y normas UNE, normas NIDE y normas federativas (estas
últimas solo al respecto de piscinas). Sobre las normas UNE, debido a sus
condiciones de privacidad, solo se han incluido las referencias a las normas, no
las propias normas; se han incluido los documentos descriptivos que al
respecto publica en su Web el Consejo Superior de Deportes y una selección
de las normas que cita, escogiendo solo aquellas aplicables a deportes
practicables en piscinas.
Respecto a las normas NIDE, normas de no obligado cumplimiento, se
han incluido exclusivamente las normas reglamentarias para piscinas; normas
de proyecto de piscinas cubiertas (cribando las de aire libre) y normas
reglamentarias para piscinas de natación, polivalentes y vasos de enseñanza
(cribando las relativas a natación sincronizada, saltos, waterpolo, y algunas
otras de actividades muy específicas de nula o escasa repercusión en la
Página | 82
3. Un acercamiento a la seguridad…
Región de Murcia). Se ha incluido además el reglamento de instalaciones de la
federación española de natación.
Códigos y guías de buenas prácticas
Los códigos y guías de buenas prácticas más importantes de los últimos
años se encuentran en gran número y en formato digital. Hemos seleccionado
los documentos más relevantes, con formato de publicación digital. Se han
incluido por tanto guías producidas por entidades gubernamentales nacionales
o autonómicas (de cualquier Comunidad Autónoma), guías producidas por
entidades municipales de cierta entidad y libros digitales de entidades
gubernamentales nacionales o autonómicas.
Trabajos de investigación
Ya
hemos
comentado
anteriormente
la
escasez
de
literatura
investigadora sobre este tema. Se ha incluido toda la literatura relacionada
directamente con la seguridad en instalaciones deportivas, y también trabajos
de investigación relacionados indirectamente con nuestro tema. Así mismo,
hemos incluido un repertorio de tesis doctorales y tesis de máster españolas
con relación con la seguridad en instalaciones deportivas; estos documentos
son de muy variadas áreas de conocimiento: derecho, sociología, ingeniería,
educación, sanidad o ciencias del deporte son algunas de ellas. Se han cribado
trabajos muy específicos de ciertas áreas como medicina, psicología o
informática.
Documentos profesionales
Hemos seleccionado aquellas monografías y trabajos sobre seguridad
abordados desde el punto de vista profesional, bien por instituciones bien por
entidades privadas. También hemos considerado útil incluir un cierto conjunto
de documentos consistentes en información obtenida de Internet y trabajos no
formalmente editados (artículos en revistas digitales divulgativas, capítulos de
libros, material documental de charlas cursos y conferencias, etc.) Este tipo de
documentos han sido los de más difícil selección o cribado. La dificultad estriba
en establecer los criterios para discernir qué documentos deben pertenecer a la
Página | 83
3. Un acercamiento a la seguridad…
investigación documental y cuáles no. Siempre relativos a seguridad en
instalaciones deportivas, se han incluido:
-
-
Documentos electrónicos independientes en los que figure un
título, autores, entidad editora o financiadora y año de
publicación, todo ello en el propio documento.
Documentos de instituciones gubernamentales nacionales,
autonómicas y locales.
Documentos de entidades o profesionales de reconocida
relevancia.
Documentos de temáticas específicas
Además de las categorías anteriores hemos incluido una última sobre
temas específicos. Los múltiples ámbitos, ramas de conocimiento y perfiles
profesionales de la seguridad nos han acercado a multitud de documentos no
estrictamente vinculados con la gestión deportiva, pero sí con algún aspecto
específico de la seguridad. Con el fin de poder relacionar cada una de estas
temáticas con la gestión deportiva hemos optado por incluir una selección de
estos documentos, referentes a temas como realización de auditorías,
certificaciones, gestión de riesgos, planes de autoprotección y emergencias,
riesgos laborales, evacuación de personas, o psicología de emergencias y de
masas.
Además, se ha realizado una búsqueda de libros exclusivamente en
formato papel, con una antigüedad menor de 10 años y directamente
relacionados con la seguridad en instalaciones deportivas. La búsqueda no ha
producido nuevas aportaciones de relevancia.
La clasificación de los documentos
Para el almacenamiento y tratamiento de los documentos hemos
utilizado un doble sistema. En primer lugar hemos establecido un sistema de
clasificación temática jerárquica de documentos digitales, con un cuadro de
clasificación que utiliza una notación propia. Los archivos digitales se han
organizado en carpetas y subcarpetas siguiendo la estructura temática, y los
Página | 84
3. Un acercamiento a la seguridad…
archivos se han renombrado, de forma que el nombre de cada archivo
comienza con la signatura del documento a lo que le sigue un nombre
descriptivo del documento. Este nombre generalmente es el título abreviado del
documento, aunque en ocasiones refleja el autor, la institución u otro elemento
que facilite la identificación del documento. Este sencillo sistema permite, tras
una pequeña fase de aprendizaje, localizar con relativa facilidad un documento
utilizando los sistemas de gestión de archivos habituales de los sistemas
operativos, sin disponer de un gestor documental.
En segundo lugar, hemos utilizado un gestor documental para tratar los
documentos. Para casos como el que nos ocupa no es necesario un gestor
documental excesivamente potente, ya que no se van a realizar trabajos
colaborativos en línea, no es necesario un sistema multipuesto, y se gestionan
solo unos cientos de documentos. De entre los gestores documentales
disponibles actualmente (F. Moreno, 2015) hemos escogido AvanBox. AvanBox
un gestor documental que aloja los documentos en la nube, es software libre,
nos aporta la potencia necesaria y no es excesivamente complejo en su uso y
configuración. Una importante característica a destacar es que aquellos
documentos que se introducen escaneados son convertidos automáticamente a
texto con un potente OCR, lo que facilita enormemente ser localizados en
búsquedas de todo tipo. Cada uno de los documentos se inserta en el gestor
documental siguiendo la clasificación jerárquica temática y el nombre de
archivo que hemos establecido. Además, se insertan una serie de etiquetas (o
tags) para facilitar las búsquedas. La versión que hemos utilizado es gratuita, y
por lo tanto está limitada en el número de archivos que puede gestionar y en el
acceso remoto. Nos planteamos para un futuro conseguir financiación para
crear un repositorio digital abierto.
La notación del cuadro de clasificación de documentos se indica a
continuación. Para referenciar los documentos en esta memoria de tesis
doctoral se ha utilizado la notación habitual APA. Además, en los resultados y
discusión desarrollada a continuación no se referencian todos los documentos
de la base de datos, sino únicamente los considerados de mayor interés.
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3. Un acercamiento a la seguridad…
Notación del cuadro de clasificación de documentos
Para nombrar un documento se utiliza la siguiente notación:
signatura + “_” + texto libre
donde :
-
signatura es:
siglas primer nivel + [siglas segundo nivel] + número de orden
-
“siglas primer nivel” son dos caracteres alfabéticos, ambos en
mayúsculas, identificadores de la categoría de primer nivel. Las posibles
siglas se muestran en la Tabla 4.
-
Los corchetes indican opcionalidad, esto es, no es necesario si la
categoría de primer nivel no dispone de segundo nivel.
-
“siglas segundo nivel” son dos caracteres alfabéticos, ambos en
minúsculas, identificadores de la categoría de segundo nivel. Las
posibles siglas se muestran en la Tabla 4.
-
“número de orden” es un número de tres dígitos establecido con el
simple criterio de orden de utilización.
-
“_” es el carácter guión bajo, sin las comillas.
-
“texto libre” es un nombre descriptivo del documento. Generalmente es
el título abreviado del documento. Sin embargo, en ocasiones refleja el
autor, la institución u otro elemento que facilite la mejor identificación del
documento. Contiene únicamente caracteres alfabéticos y numéricos (no
contiene símbolos). Se evita el uso del espacio en blanco y se suele
colocar la primera letra de cada palabra en mayúscula, y el resto en
minúscula.
Ejemplo 1:
Documento:
BP011_ManualInstalacionesNavarra
Ejemplo 2:
Documento:
Página | 86
EScc005_DgDeportesMadridCalidadServicios
3. Un acercamiento a la seguridad…
Tabla 4.
1º
BP
DP
LE
NT
IN
ES
Siglas de primer y segundo nivel para la notación de las
signaturas de los documentos
2º
Descripción
Buenas prácticas
Documentos profesionales
Legislación
Normativa técnica
fe
Normativa federativa
ni
Normas nide
un
Normas une
Trabajos de investigación
Temáticas específicas
au
Auditorías seguridad
cc
Certificaciones de calidad
ev
Evacuación
ri
Gestión de riesgos
in
Incendios
pa
Planes de autoprotección
ps
Psicología de emergencias
rl
Riesgos laborales
sa
Emergencias sanitarias
Página | 87
3. Un acercamiento a la seguridad…
Página | 88
3. Un acercamiento a la seguridad…
3.3 Resultados
Cuatro libros importantes
La primera referencia encontrada cuando se busca en internet el término
“seguridad en instalaciones deportivas” en castellano5 es sin duda la del
Consejo Superior de Deportes (CSD). El CSD publicó en 2010 un libro con el
propio título “Seguridad en instalaciones deportivas” (Consejo Superior de
Deportes, 2010b), fruto de los trabajos realizados a partir de 2005 debidos a
una preocupación creciente por este problema. Este libro se ha extendido
enormemente debido tanto a su importancia como a su divulgación como
documento digital. El libro es parte de un conjunto de publicaciones, que
incluyen el libro “Legislación y documentos técnicos de referencia en
instalaciones deportivas” (Consejo Superior de Deportes, 2010a), “Buenas
prácticas en instalaciones deportivas” (Consejo Superior de Deportes, 2009a) y
“De la planificación a la gestión de las instalaciones deportivas” (Consejo
Superior de Deportes, 2011) además de otros específicos para campos de
fútbol y pistas de pádel.
El libro sobre seguridad en instalaciones deportivas está dividido
fundamentalmente en dos partes, la primera dedicada a la edificación y la
segunda al equipamiento deportivo de distintos tipos de instalaciones. En
ambos casos se va indicando qué elementos y aspectos deben revisarse para
mejorar la seguridad en las distintas dependencias e instalaciones, incluyendo
referencias al código técnico de edificación (RD 314, 2006) y a las normas UNE
correspondientes. El documento finaliza con la presentación de unas fichas modelo para la revisión de las instalaciones.
Por su parte, la publicación sobre legislación y documentos técnicos
(Consejo Superior de Deportes, 2010a) es en gran parte un documento sobre
seguridad en instalaciones deportivas ya que tanto en la parte dedicada a
espacios complementarios como a la de espacios deportivos hace referencia a
las características constructivas y elementos de la instalación para mantener
5
Utilizando el buscador “google.com” en una búsqueda estándar sin historial previo.
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3. Un acercamiento a la seguridad…
las propiedades de seguridad y de accesibilidad de ella. En el documento se
pone de manifiesto, tal y como se indica en la sección 2.1 de esta tesis
doctoral, la continua interrelación entre la seguridad y la accesibilidad. Este
libro indica las características más importantes que deben tener cada elemento
constructivo de la edificación o cada instalación deportiva específica para
mantener las condiciones de seguridad (y de accesibilidad) necesarias,
haciendo referencia continuamente a la normativa de obligado cumplimiento
correspondiente. El libro también incluye aspectos normativos establecidos por
las normas NIDE y por las normas de las distintas federaciones, para distintos
tipos de instalaciones deportivas.
El libro “Buenas prácticas en instalaciones deportivas” (Consejo Superior
de Deportes, 2009a) complementa el anterior. Si el anterior está redactado en
un tono más normativo, este realiza una serie de recomendaciones para la
buena organización y gestión de las instalaciones y sus actividades. Al
respecto de las instalaciones, se trata en primer lugar el tema de la
accesibilidad, marcando así su importancia. Le sigue el mantenimiento y la
gestión de recursos materiales. La parte de recursos humanos trata también en
primer lugar la seguridad laboral, y la tercera parte se dedica tanto a la
satisfacción del usuario como a la gestión de riesgos, entre las que se tratan
los riesgos por la instalación, por el material, y por las propias condiciones del
usuario. Observamos por tanto, que en las buenas prácticas las cuestiones de
seguridad, en distintos ámbitos, son primordiales: accesibilidad, seguridad
laboral, gestión de riesgos, y la satisfacción del usuario en estas y otras
cuestiones.
Estos tres libros se complementan con un cuarto aparecido en el año
2012, “De la planificación a la gestión de las instalaciones deportivas”, que
intenta marcar las directrices de la gestión de las instalaciones deportivas
desde un punto de vista global, comenzando en la planificación de la
instalación, continuando con la construcción y finalizando con la gestión integral
de la instalación y sus actividades (Consejo Superior de Deportes, 2011). Los
aspectos relativos a seguridad tratados en los anteriores libros se citan aquí, a
tener en cuenta en el momento de la construcción y gestión de la instalación.
Página | 90
3. Un acercamiento a la seguridad…
Aparece el problema de la diversidad de normativas aplicables, debido en gran
parte a la distinta legislación aplicable en cada Comunidad Autónoma.
Los anexos de este libro presentan tres cuestiones dignas de mención.
La primera aparece bajo el interesante título “Propuesta de decreto de
seguridad en instalaciones deportivas”. En la propia introducción se indica la
necesidad, y la vez la dificultad de tratar este tema de un modo global,
principalmente por la variabilidad autonómica ya comentada. Puede que por
estas dificultades, este anexo no culmina la propuesta de decreto, aparentando
ser más bien un estudio preliminar que abre las puertas a una mayor
profundización en el problema de la armonización de instalaciones. El anexo 4
aborda el mismo problema, en esta ocasión bajo el enfoque de la gestión de
riesgos. Su título pretende elevar al rango de normativa la gestión de los
riesgos, pero en realidad presenta una propuesta de gestión de riesgos con un
ciclo clásico “Análisis de riesgos – Valoración - Control - Seguimiento”. El
propio anexo presenta un sub-anexo en el que brevemente se presenta la
metodología FMEA (failure mode and effect análisis), proveniente del campo de
la ingeniería y basada en el cálculo de un indicador de prioridad de riesgo. De
nuevo la propuesta queda poco concreta, siendo un esbozo en el que se
comenta la necesidad de la intervención de expertos. Nuestra consideración es
que este documento reconoce la necesidad de tratar el tema de la seguridad y
el control de los riesgos de un modo global, y deja entrever también la enorme
complejidad del problema, si se intenta tratar de un modo global para todo tipo
de instalaciones, deportes y actividades.
El anexo 5 aborda la accesibilidad, otra de las cuestiones importantes en
este conjunto de libros del CSD. Sin embargo, el anexo es de nuevo algo
pobre, quedando únicamente en un cuestionario de validación genérico sobre
accesibilidad, de escasa utilidad.
El conjunto de estos cuatro libros pone de manifiesto la enorme
importancia que las cuestiones de armonización constructiva y legislativa, de
gestión integral de las instalaciones y sus actividades, y en particular de la
gestión de los riesgos (seguridad constructiva, de equipamientos, laboral, de la
integridad física, de las actividades y de la accesibilidad), aunque también deja
entrever que es un largo y complejo camino que está en sus inicios.
Página | 91
3. Un acercamiento a la seguridad…
El programa MAID
Continuando con las actividades del CSD en esta materia, debemos
mencionar el programa MAID (Mejora y Armonización de las Instalaciones
Deportivas en España), presentado en el número especial de 2008 de la revista
“Instalaciones deportivas XXI” (Consejo Superior de Deportes, 2008), en el que
el CSD realiza un esfuerzo por coordinar con todas las comunidades
autónomas y con las principales asociaciones involucradas en la construcción y
gestión de instalaciones, equipamientos y servicios deportivos para armonizar
las
normativas
reguladoras
en
cuestiones
de
seguridad,
salubridad,
accesibilidad, gestión de riesgos de las instalaciones deportivas y protección
del medio ambiente. Una vez más se reconoce lo ambicioso y complejo del
proceso de armonización, por la dispersión normativa y la transversalidad de la
materia. Se pretendió que todos estos principios se eleven a norma técnica
AENOR.
En el marco del propio programa MAID, el Consejo Superior de Deportes
ha desarrollado un ambicioso proyecto, de forma paralela a la publicación de
los libros mencionados anteriormente, que ha seguido la estrategia de análisis
de riesgos para evaluar instalaciones deportivas. Este proyecto pretende la
“implantación de un sistema de gestión de riesgos en las instalaciones
deportivas encaminado a aumentar la seguridad y la accesibilidad” (Consejo
Superior de Deportes, 2009b). Se realizó un proyecto piloto con un conjunto de
48 instalaciones de todas las Comunidades Autónomas, escogidas por las
Direcciones Generales de Deportes de cada comunidad y la Federación
Española de Municipios y Provincias. La Región de Murcia participó con 5
instalaciones, tres de las cuales disponen de piscina. Si bien el informe no es
muy riguroso, se realizaron revisiones, en base a listas de control (que no se
aportan) y reuniones con gestores, a equipamientos e instalaciones de distintas
modalidades
deportivas.
Las
conclusiones
informan
del
abundante
incumplimiento de la normativa técnica, y de la falta de formación de los
gestores en estas materias. El proyecto pretendía utilizar o implantar un
sistema de recogida de incidencias, objetivo que no fue conseguido. Paralelo a
Página | 92
3. Un acercamiento a la seguridad…
este proyecto, el CSD ha desarrollado unos test de control de distintos
equipamientos deportivos, en base a cuestionarios de validación, entre los que
se encuentran algunos equipamientos y accesorios de piscinas, como
corcheras, pódiums de salida, escaleras o placas de giro.
Otros esfuerzos de las administraciones
La problemática de la correcta gestión de las instalaciones deportivas y
el impulso dado a estas cuestiones por el programa MAID y la publicación
digital gratuita de los libros citados se ha visto reflejado en la generación de
otros muchos documentos al respecto por parte de las administraciones. Como
ejemplo, la Comunidad Valenciana, enmarcado en su política deportiva
municipal, ha producido en 2011 un manual de mantenimiento de instalaciones
deportivas, con la idea de la armonización y la búsqueda de estándares de
calidad (Cerezo, 2010). En este documento se abordan en detalle
descripciones, recomendaciones y normas relativas al mantenimiento de
distintos tipos de pavimentos deportivos, instalaciones técnicas (fontanería,
electricidad, ventilación, calefacción), equipamientos, limpieza o vestuarios.
El documento hace referencia al mantenimiento de piscinas climatizadas
en varias de sus secciones: en la referente a instalaciones se reconoce la
amplitud del problema, y hay una pequeña lista de operaciones de
mantenimiento. En la sección de limpieza y desinfección de nuevo hay un
apartado que finalmente es una brevísima referencia a las normas aplicables
para el agua de piscinas. Y al final del documento se dedica un capítulo a
piscinas, dando una serie de listas de mantenimiento para distintos aspectos de
la instalación. El capítulo resulta finalmente muy genérico, ya que este tipo de
instalaciones tiene más complejidad y requiere de mayor profundización.
La Diputación Foral de Guipúzcoa creó en 2009 una guía digital para el
autocontrol de la seguridad en instalaciones deportivas (Instituto de
Biomecánica de Valencia, 2009), contando como órgano consultor con el
Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV). El documento distingue la
edificación y los espacios deportivos, y aporta algunas referencias normativas.
Contiene numerosas fichas a modo de manual de mantenimiento, buscando
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3. Un acercamiento a la seguridad…
anomalías y proponiendo medidas correctoras. La parte dedicada a piscinas es
de nuevo escasa, debido a lo general del documento. El Gobierno de
Extremadura ha puesto en marcha un plan de mejora de la seguridad en
instalaciones deportivas (Gobierno de Extremadura, s.f.) basado en un conjunto
de medidas de mejora y cursos de formación, con el objeto final de dar unas
“acreditaciones de centros deportivos”, como sello propio de calidad. El
Gobierno de Navarra también ha generado un documento sobre instalaciones
deportivas con el mismo interés de armonización y normalización (Ruano,
2006), si bien se centra más en las cuestiones referentes a las características
de las distintas instalaciones deportivas, que a cuestiones de mantenimiento o
seguridad.
En la línea de definición de un plan de mantenimiento, pero en este caso
exclusivamente para piscinas, es el documento de 2010 del Instituto Andaluz
del Deporte que lleva por título “Mantenimiento de instalaciones acuáticas”
(Conesa, 2010). En él se reconoce la obligación de los gestores de
proporcionar un “entorno seguro” y se comenta una vez más la novedad y
complejidad de este tema. El documento consiste en un conjunto de fichas de
revisión agrupadas por las distintas instalaciones técnicas de las piscinas
(electricidad, hidráulicas, combustibles, etc.) Contiene un anexo que introduce
el problema de la seguridad laboral y sus vinculaciones con las piscinas.
El mismo año 2010, la institución “Procurador del Común de Castilla y
León” ha producido el documento “La seguridad en las zonas deportivas
municipales de Castilla y León” (Procurador del Común de Castilla y León,
2010). Es un trabajo que se enmarca en la preocupación surgida en estos años
en cuanto a armonización y seguridad, poniendo de manifiesto la falta de
regulaciones concretas y la responsabilidad de las administraciones públicas
en la protección de los usuarios de instalaciones deportivas. El documento
utiliza un enfoque basado en el derecho, analizando las problemáticas en lo
referente a lesiones de deportistas y usuarios, problemas con las instalaciones,
problemas de organización, cuestiones de accesibilidad, obligatoriedad de las
normalizaciones, y cuestiones similares. El documento pone de manifiesto la
necesidad de disponer de planes de planes de mantenimiento y de abordar las
cuestiones de seguridad laboral.
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3. Un acercamiento a la seguridad…
Valgan todos estos ejemplos anteriores para poner de manifiesto la
preocupación de las administraciones públicas por el mantenimiento de las
instalaciones deportivas, la armonización de criterios, el control de riesgos y en
general la problemática de la seguridad.
Recientemente (en junio de 2015) se ha publicado un importante libro
digital sobre piscinas de uso colectivo. Se trata del libro de Fernández-Luna y
Gallardo (2015). Este libro es de interés tanto investigador como profesional, ya
que refleja el trabajo de los últimos años a este respecto del Grupo de
Investigación en la Gestión de Instalaciones y Organizaciones Deportivas
(IGOID) de la Universidad de Castilla – La Mancha.
Este documento comienza con un bloque dedicado a las tipologías de
piscinas en todos sus aspectos, incluyendo sus características espaciales y
funcionales, materiales constructivos, tipos de cubiertas, etc. El segundo
bloque se dedica fundamentalmente al tratamiento del agua, aunque también
incluye un apartado sobre mantenimiento de las instalaciones. A este respecto,
los autores ponen de manifiesto la necesidad de realizar una recopilación
documental, especialmente normativa, y la creación, implantación, control y
evaluación de un plan de mantenimiento.
El bloque 3 aborda el tema que nos ocupa de la seguridad en piscinas,
ahondando en la seguridad obligatoria y seguridad necesaria. Se trata la gran
dispersión normativa autonómica, y el aporte de calidad que el correcto
tratamiento de la seguridad aporta. Se establece una clasificación de tipos de
riesgos y se da una relación de acciones preventivas sobre ellos. Asimismo, se
incluye la accesibilidad como parte de la seguridad de una instalación
deportiva. Finalmente, los bloques 4 y 5 tratan sobre la fidelización de usuarios
y la gestión sostenible de este tipo de instalaciones.
El ámbito privado
En el ámbito de la actividad privada en materia de seguridad en
instalaciones deportivas y sus actividades, destacan enormemente los trabajos
desarrollados por el profesional Jose Luis Gómez-Calvo, por lo que
entendemos merecen reseñarlos. La mayoría de documentación encontrada se
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3. Un acercamiento a la seguridad…
corresponde
con
documentos
profesionales,
si
bien
existen
algunas
aportaciones en revisas de divulgación.
Sus trabajos sobre seguridad y deporte arrancan en 2004, con el
documento “Seguridad y Gestión Deportiva” (Gómez-Calvo, 2004c), en el que
ya marca como “esencial” la ocupación del gestor deportivo en los temas de
seguridad, tanto de las personas como del patrimonio tangible e intangible. El
enfoque de la seguridad es integral, proponiendo la gestión global de
cuestiones como violencia, emergencias sanitarias, prevención de incendios,
evacuaciones de emergencia, etc. (Gómez-Calvo, 2004d).
Gómez-Calvo (2006a) Indica que el gestor deportivo no tiene por qué ser
un especialista en seguridad, pero sí un buen gestor de la seguridad. La
seguridad es necesaria en todos los niveles de práctica deportiva,
proporcionalmente a la complejidad de la instalación o evento deportivo. Un
caso especial son los espectáculos deportivos, en eventos en los que
progresivamente se ha ido reconociendo y consolidando la figura del Director
de Seguridad (Gómez-Calvo, 2008f, 2011a).
Distingue entre seguridad obligatoria (normativa) y seguridad necesaria
(no obligatoria) (Gómez-Calvo, 2005b) y entre seguridad general (la propia de
los recintos, como elementos anti-incendios, vías de evacuación o protección
de datos) y la seguridad específica (de actividades o eventos concretos), y
establece como prioritaria (y en muchas ocasiones obligatoria) el cuidado de la
seguridad de las personas (Gómez-Calvo, 2006d, 2007d, 2009b).
Gómez-Calvo (2004b) afirma que “Limitarse a cumplir las obligaciones
es quedarse en el umbral de las necesidades”, abordando el hecho de que en
muchos casos se entiende que cumplir las necesidades de seguridad consiste
en cumplir las normativas, y sin embargo esto no debe ser así.
Aproximadamente entre los años 2007 y 2013 establece clasificaciones
y contenidos en la materia, abundando en la legislación aplicable (GómezCalvo, 2007e), dudando de que los planes de autoprotección (Gómez-Calvo,
s.f.) regulados por la Norma Básica de Autoprotección sean suficientes
(Gómez-Calvo, 2012c). Gómez-Calvo trabaja en este campo, proponiendo
herramientas para evaluar las condiciones de evacuación y emergencia de
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3. Un acercamiento a la seguridad…
instalaciones (Gómez-Calvo, 2008a), analizando problemáticas concretas como
la protección contra incendios en instalaciones deportivas (Gómez-Calvo,
2009a), la seguridad en centros de fitness (Gómez-Calvo, 2005c) o el
equipamiento de seguridad para instalaciones deportivas (Gómez-Calvo,
2008e), y aportando numerosa documentación a lo largo de distintos artículos,
cursos y seminarios (Gómez-Calvo, 2007a, 2007b, 2008b). Otros autores
presentan información similar, como Otaola (2013), Subjefe de la Unidad de
Juego y Espectáculos de la Ertzaintza, que aporta un documento resumen
sobre seguridad en instalaciones deportivas, especialmente centrado en el
caso de emergencias y evacuación.
Al final de esta etapa, Gómez-Calvo propone un nuevo enfoque basado
en la gestión de riesgos (Gómez-Calvo, 2013b). Realizados los pertinentes
análisis (Gómez-Calvo, 2011b) distingue 5 grandes tipos de riesgos y propone
la confección de un plan de seguridad para cada uno de ellos, como se
observan en la Tabla 5 (Gómez-Calvo, 2013c).
Tabla 5. Tipos de riesgos y planes de seguridad correspondientes
Riesgo
Riesgos de daños por actos deliberados o
incívicos
Riesgo de graves daños colectivos
Riesgo de accidentes personales de los
concurrentes y/o intervinientes
Riesgos de los derechos de los usuarios
Riesgos laborales
Fuente : (Gómez-Calvo, 2013b)
Plan
Plan de seguridad
Plan de autoprotección o plan de emergencia
y evacuación
Plan de atención a personas accidentadas
Plan de atención y cumplimiento de los
derechos de los usuarios
Plan de riesgos laborales.
Gómez-Calvo (2008d) pone de manifiesto las relaciones entre la gestión
de la seguridad y la calidad, indicando que la percepción del usuario sobre la
seguridad comienza a ser la de “sentirse protegido”, y no “sentirse vigilado”.
Según este autor, es válido el caso de la Junta de Andalucía, que ha
establecido en 2006 un registro de centros deportivos con tres distintos niveles
de calidad donde en los niveles superior y excelente tiene un gran peso los
sistemas
de
seguridad
y
su
gestión
(Gómez-Calvo,
2008h).
Otros
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3. Un acercamiento a la seguridad…
profesionales, como Peñas (2008) también realizan aportaciones documentales
vinculando la seguridad y la calidad.
Los grandes eventos son un capítulo de interés especial para GómezCalvo, a lo que dedica trabajos genéricos para distintos tipos de instalaciones y
actividades (Gómez-Calvo, 2006c, 2007c, 2007g), y específicos para eventos
como los Juegos Olímpicos de Atenas (Gómez-Calvo, 2004a), Pekín (GómezCalvo, 2008c, 2008g), o Londres (Gómez-Calvo, 2012b), el mundial de fútbol
de Alemania (Gómez-Calvo, 2006b), los Juegos del Mediterráneo de Almería
2005 (Gómez-Calvo, 2005a), los incidentes del Madrid Arena (Gómez-Calvo,
2012a), la maratón de Boston (Gómez-Calvo, 2013a) , o el recinto de
Duisburgo (Alemania) (Gómez-Calvo, 2010).
A este respecto de los grandes eventos, y en el campo específico del
fútbol, el grupo de investigación de gestión deportiva IGOID de la Universidad
de Castilla – La Mancha ha colaborado con Gómez-Calvo en la realización de
un estudio sobre la seguridad en los estadios de fútbol de 1ª y 2ª división
(Sánchez-Sánchez et al., 2013) poniendo de manifiesto la necesidad de una
seguridad necesaria además de la seguridad obligatoria.
Legislación
El derecho a la seguridad queda establecido en España por la
Constitución Española (1978), que en su capítulo dedicado a derechos y
libertades (artículo 17.1) indica que “Toda persona tiene derecho a la libertad y
a la seguridad”. Para hacer cumplir tal derecho en lo referente al deporte, el
Reglamento General de Policía de Espectáculos Públicos y Actividades
Recreativas de 1982 (RD 2816, 1982) regula las características de los recintos
para espectáculos y actividades deportivas en locales o recintos tanto cerrados
como abiertos. En él se establecen las condiciones de los locales, los servicios
de atención médica e higiénica necesarios, y los medios contra incendios.
También los derechos y deberes de las personas que intervienen en los
espectáculos, ya sean deportistas, técnicos, usuarios o espectadores, así como
las condiciones de organización y venta de localidades para los eventos.
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3. Un acercamiento a la seguridad…
Complementan al reglamento de policía de espectáculos la Ley de
Protección de la Seguridad Ciudadana de 1992 (Ley 1, 1992), que afecta
globalmente a las actividades deportivas pero lo hace especialmente en su
sección segunda, dedicada a espectáculos públicos y actividades recreativas.
Y la Ley de Seguridad Privada (Ley 23, 1992) que establece las competencias
de
las
empresas
de
seguridad,
como
servicios
complementarios
y
subordinados a los de la seguridad pública.
La Ley de Protección Civil (Ley 2, 1985) se dedica especialmente a
establecer el marco de actuación en situaciones de emergencia y se apoya en
el concepto de autoprotección, y la autoprotección está regulada por la “Norma
Básica de autoprotección de los centros, establecimientos y dependencias
dedicados a actividades que puedan dar origen a situaciones de emergencia”
(RD 393, 2007). Esta norma obliga a elaborar, implantar y mantener planes de
autoprotección, marcando el contenido mínimo que deben poseer los planes de
las instalaciones que puedan estar afectados por situaciones de emergencia.
Para el caso de espectáculos y actividades recreativas establece la obligación
de disponer de un plan de autoprotección cuando el aforo sea mayor o igual a
2.000 personas para recintos cerrados, y a 20.000 para recintos abiertos. La
norma hace énfasis en el análisis previo de los riesgos, en la prevención y
control de éstos, y en las relaciones de los planes de autoprotección con los
planes de emergencia de Protección Civil. Asimismo, regula la existencia de un
registro de establecimientos con planes de autoprotección, estableciendo el
contenido mínimo de este registro.
Al respecto de la violencia en las actividades deportivas cabe mencionar
la Ley contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte
(Ley 19, 2007), nacida en 2007 con los objetivos de fomentar el juego limpio,
erradicar las actitudes racistas y la violencia en el deporte, mantener el orden
público, y establecer las responsabilidades al respecto de este tipo de
situaciones. Establece las condiciones de acceso y permanencia a los recintos,
fija la declaración de eventos de alto riesgo y los sistemas de control mínimos
para distintos tipos de eventos. Asimismo, crea una comisión estatal encargada
de promover políticas activas contra la violencia, la intolerancia, el racismo y la
xenofobia.
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3. Un acercamiento a la seguridad…
Esta ley está complementada por el posterior reglamento de prevención
de la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte (RD 203,
2010), que desarrolla la ley y pone énfasis en aspectos como la regulación de
las entradas de los espectáculos, establecimiento de libros de registro de
seguidores, regulación de planes de riesgos y protocolos de seguridad, y otras
cuestiones similares. El derecho al honor y la intimidad está regulado por la Ley
Orgánica de protección civil del derecho al honor, a la intimidad personal y
familiar y a la propia imagen (Ley 1, 1982), que establece los límites entre el
derecho a la intimidad y las grabaciones audiovisuales o la aportación de
información con motivos de seguridad, de información o casual.
En el ámbito profesional debemos mencionar la Ley de prevención de
riesgos laborales (Ley 31, 1995) y la reforma del marco normativo de ella de
2003 (Ley 54, 2003). La Ley de prevención de 1995 desarrolla la obligación
establecida por la Constitución Española de velar por la seguridad e higiene en
el trabajo. Faculta a las administraciones públicas a actuar en materia de salud
laboral, especialmente a través del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene
en el Trabajo y también de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Se
establecen los derechos y obligaciones de los trabajadores y empresas en
materia de seguridad y salud laboral, y la necesidad de formación en este
sentido. Se regulan los servicios de prevención y los comités de seguridad y
salud en las empresas, y se establecen las responsabilidades y sanciones ante
los incumplimientos de las normativas. Complementariamente a la Ley,
destacan los Reales Decretos de mínimos de seguridad y salud en el trabajo
(RD 486, 1997), de señalizaciones (RD 485, 1997), de manipulación de cargas
(RD 487, 1997), de uso de pantallas de visualización (RD 488, 1997) o a la
exposición a agentes biológicos (RD 664, 1997).
Nombrábamos, en el apartado 3 del Capítulo 2, la accesibilidad como
otra gran cuestión vinculada a la seguridad en instalaciones deportivas, y en
este sentido y en lo referente a la normativa debemos destacar el Real Decreto
de condiciones básicas de accesibilidad en espacios públicos urbanizados y
edificaciones (RD 505, 2007). Establece los conceptos de itinerarios accesibles
y edificios accesibles, regulando todo tipo de espacios públicos urbanizados y
sus señalizaciones, incluidos los itinerarios peatonales, aparcamientos,
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3. Un acercamiento a la seguridad…
mobiliario urbano, etc. La integración de los discapacitados se regula con el
Real Decreto de consideración de discapacitado (RD 1414, 2006), la Ley de
integración social de los minusválidos (Ley 13, 1982) y la Ley de igualdad en la
discapacidad (Ley 51, 2003). Esta última ley establece con claridad el concepto
de accesibilidad universal, definiéndolo como:
La condición que deben cumplir los entornos, procesos, bienes, productos
y servicios, así como los objetos o instrumentos, herramientas y
dispositivos, para ser comprensibles, utilizables y practicables por todas las
personas en condiciones de seguridad y comodidad y de la forma más
autónoma y natural posible. Presupone la estrategia de «diseño para
todos» y se entiende sin perjuicio de los ajustes razonables que deban
adoptarse.
Buena parte de las competencias en materia de accesibilidad están en
manos de las comunidades autónomas. Para la Región de Murcia la primera
referencia legislativa la encontramos en 1987, con el Decreto de supresión de
barreras arquitectónicas (Decreto 39, 1987), que establece los criterios para
suprimir las barreras arquitectónicas en espacios y edificaciones de acceso
público, entre los que se citan las instalaciones deportivas y recreativas.
Posteriormente la Orden sobre accesibilidad en espacio públicos (Orden 15/oct,
1991) detalla los criterios técnicos para la mejora de la accesibilidad, y la Ley
de habitabilidad de la Región de Murcia (Ley 5, 1995) se centra especialmente
en las edificaciones destinadas a vivienda y no residencial de uso privado. Por
otro lado, la Ley autonómica de usuarios de perros – guía (Ley 3, 1994) permite
el acceso de estos animales prácticamente a cualquier lugar público citando
específicamente los “centros de recreo y tiempo libre”.
La normativa técnica para edificaciones es extensa, y viene regulada por
el Real Decreto que aprueba del Código Técnico de la Edificación (RD 314,
2006). Este documento dispone de un anexo con la documentación técnica,
que ha sufrido diversas modificaciones desde su aprobación. Dada la
importancia de este reglamento, existe un portal web del Ministerio de Fomento
(http://www.codigotecnico.org) en el que se recoge toda la normativa vigente
actualizada, así como cualquier otra noticia y novedad de interés. Este portal
incluye los documentos digitales necesarios, entre los que los más importantes
para nosotros son el Documento básico de seguridad en caso de incendio
(Ministerio de fomento, 2010c), el Documento de seguridad de utilización y
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3. Un acercamiento a la seguridad…
accesibilidad (Ministerio de fomento, 2010b), el Documento de salubridad
(Ministerio de fomento, 2010a), y el de Protección frente al ruido (Ministerio de
fomento, 2009). Además debemos mencionar el Reglamento de instalaciones
térmicas (RD 1027, 2007), el de Instalaciones de protección contra incendios
(RD 1942, 1993), el Reglamento electrotécnico de baja tensión (RD 842, 2002)
y el Reglamento de combustibles gaseosos (RD 919, 2006).
Dadas las características particulares de las piscinas climatizadas de
uso colectivo, existen normativas específicas para ellas. La Región de Murcia,
al igual que el resto de comunidades, dispone de un Reglamento de
Condiciones Higiénico – Sanitarias de Piscinas. El primer reglamento
autonómico a este respecto es de 1989 (derogado), y el Decreto vigente data
de 1992 (Decreto 58, 1992). En él se establece el concepto y ámbito de piscina
de uso colectivo, distinguiéndolas de las piscinas familiares, comunitarias o
termales. Y se regulan las características de los vasos y sus accesorios de uso
y seguridad, los parámetros de humedad y temperatura del agua y del
ambiente, y todas las características relativas a la salubridad y calidad del agua
(renovaciones y recirculaciones, depuración, desinfección…) Además se
establecen los aforos, características de los accesos y vestuarios, libros
oficiales, documentos informativos al público, personal encargado y otras
cuestiones que afectan a la instalación.
La normativa a nivel nacional al respecto de piscinas de uso colectivo
estaba sin actualizar desde el año 1960. La Orden de 31 de mayo de 1960
sobre piscinas públicas (derogada) sentaba las bases de las condiciones
constructivas e higiénico - sanitarias de este tipo de instalaciones. Esta
normativa daba cuerpo a unas disposiciones muy generales dictadas en 1935
en el Reglamento de espectáculos públicos (derogado), y a la Orden 23 de
octubre de 1958 sobre regulación de piscinas (derogada).
En el 2013 se publicó un nuevo reglamento nacional para piscinas de
uso colectivo, el Real Decreto 742/2013, de 27 de septiembre, por el que se
establecen los criterios técnico-sanitarios de las piscinas (RD 742, 2013). Este
reglamento
enmarca
todos
los
reglamentos
autonómicos
previamente
existentes, unificando algunos criterios. La aprobación de este reglamento ha
producido cierta confusión entre los gestores de piscinas climatizadas, por la
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3. Un acercamiento a la seguridad…
duplicidad de regulación nacional – autonómica. Para el caso de la Región de
Murcia ha obligado a la administración regional a publicar un extenso
documento informativo “Manual de Piscinas” (D. Gómez et al., 2014), que
aclara entre otras cosas los artículos vigentes del decreto autonómico, y
aquellos que han sido modificados. Los artículos modificados hacen referencia
especialmente
a
ciertas
características
constructivas
de
los
vasos
(profundidades, pendientes, señalizaciones, andenes, escalera…), a las
características del aire (humedad y temperatura), a algunos aspectos del
tratamiento del agua y a otras cuestiones como aforos máximos.
Una de las novedades del reglamento nacional es la obligación del titular
de la piscina de disponer de un protocolo de la instalación, que incluye
aspectos importantes como la existencia de documentos con planes de
mantenimiento, puntos de revisión diaria, protocolos escritos de limpieza y
desinfección, tratamiento del agua, planes de evaluación de riesgos y gestión
de proveedores y servicios, entre otros… Se espera que las instalaciones
vayan creando paulatinamente estos protocolos.
El resto del documento trata los riesgos más importantes para los
usuarios (lesiones y ahogamientos, contaminación del agua y riesgos químicos)
y los sistemas y productos químicos más habituales de desinfección del agua,
así como los aspectos de prevención de la legionelosis que afectan a este tipo
de instalaciones, con referencias a la nueva legislación nacional.
Al respecto de la prevención de la legionelosis, la normativa vigente
corresponde al Real Decreto 865/2003, con modificaciones, que se recoge en
la legislación consolidada con modificaciones hasta el año 2010 (RD 865,
2003). El documento recoge las actuaciones que en materia de prevención
deben realizarse ante la peligrosidad de esta enfermedad bacteriana,
especialmente en sistemas de agua caliente sanitaria, torres de refrigeración y
condensadores evaporativos.
La importancia del mantenimiento de las piscinas expresada en el
Decreto autonómico 58/1992 queda reflejada en la orden, también autonómica,
de junio de 1997, que establece la necesidad de que estas instalaciones
dispongan de personal en posesión del carné de cuidador de piscinas (Orden
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3. Un acercamiento a la seguridad…
16/jun, 1997). Esta orden, y su modificación de 2002 (Orden 27/nov, 2002)
regulan la formación y pruebas de aptitud que se deben superar para poseer
este carné, obligatorio para los cuidadores de piscinas de uso colectivo.
La obligación de presencia permanente de un socorrista en la instalación
viene impuesta por el decreto autonómico, no así por el nacional. Este
socorrista debe estar oficialmente acreditado y disponer de su carné en todo
momento. Además, la actual incorporación de desfibriladores semiautomáticos
a las instalaciones deportivas ha venido regulada en la Región de Murcia por el
decreto 349/2007 (Decreto 349, 2007). Este decreto regula el uso de estos
aparatos, permitiendo su utilización exclusivamente a personas acreditadas
mediante programas de formación regulados por el propio decreto. Además, se
regula la instalación y mantenimiento de estos aparatos.
Por su parte, el Consejo Superior de Deportes elaboró las normas NIDE
(Normativa sobre Instalaciones Deportivas y para el Esparcimiento). Estas
normas no son de obligado cumplimiento, salvo que la legislación autonómica o
nacional así lo
establezca.
Sin
embargo,
sí deben
cumplirse
para
competiciones oficiales regidas por las federaciones nacionales. NIDE
establece las condiciones que debe requerir cada instalación deportiva. Las
normas NIDE se dividen en normas reglamentarias y normas de proyecto. Las
reglamentarias normalizan las características de cada instalación de acuerdo a
los deportes que se van a practicar en ellas, y tienen en cuenta los reglamentos
de las federaciones correspondientes. Las normas de proyecto facilitan la
realización de proyectos de construcción de instalaciones, teniendo en cuenta
las características funcionales y deportivas de los espacios.
Las NIDE (Consejo Superior de Deportes, 2013c) se dividen en cuatro
apartados, existiendo uno específico para piscinas. Se distinguen los deportes
de natación, natación sincronizada, saltos y waterpolo. Y los vasos de
chapoteo, enseñanza, polivalentes y de recreo. Las normas establecen con
todo detalle las dimensiones y características de los vasos, playas y
rebosaderos, orientación y características del agua y el aire, iluminación,
señalización, etc. aportando datos redundantes, y a veces conflictivos, con la
legislación autonómica y nacional para piscinas de uso colectivo. Las normas
de proyecto tratan todo lo relativo a la construcción de una instalación acuática,
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3. Un acercamiento a la seguridad…
desde el cálculo de necesidades según la población o el tipo de emplazamiento
hasta los espacios necesarios para cada servicio o los equipamientos
necesarios.
Por su parte, las normas UNE (Una Norma Española) son un extenso
conjunto de normas técnicas sobre equipos, procesos o servicios. Están
creadas por comités técnicos en los que están implicados todos los agentes
interesados en cada norma. La ENAC (Entidad Nacional para de Acreditación)
se encarga de coordinar todo el proceso, desde la creación hasta su prueba y
actualización. Las normas UNE no son de obligado cumplimiento, salvo que la
legislación así lo establezca, cosa que ocurre en multitud de casos. Las normas
UNE no son información pública y gratuita, sino que su adquisición tiene un
coste económico. Por este motivo, no hemos podido incluir estas normas en
nuestra base de datos documental, sino tan solo la referencia a ellas (Consejo
Superior de Deportes, 2013b).
Al respecto de piscinas y sus equipamientos, las series de normas UNE
más importantes son: serie 15288 para diseño y funcionamiento de piscinas,
serie 13451 de equipamiento de piscinas, serie 13138 para ayudas a la
flotación, series 12193 y 1838 de iluminación deportiva y emergencia, serie
13200 y 41910 relativas a espacios para espectadores, series 21542, 170001 y
170006 relativas a accesibilidad, y la serie 139980 relativas a informática y
discapacidad.
Para finalizar con las normas técnicas, debemos mencionar el
reglamento de la federación de natación (RFEN, 2015), que su libro XII
describe en detalle los requisitos que deben reunir las piscinas que contengan
vasos para la práctica de la natación y para la realización de competiciones de
la federación española de natación.
Al respecto de la legislación sobre privacidad de imagen y la información
personal, cabe mencionar la Ley de protección de datos de carácter personal,
que ha recibido modificaciones hasta el año 2011 (Ley 15, 1999), su
reglamento asociado (RD 1720, 2007), y la instrucción de la Agencia Española
de Protección de Datos 1/2006 sobre vigilancia a través de sistemas de
cámaras. Estos documentos vienen a regular el derecho a la intimidad y la
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3. Un acercamiento a la seguridad…
privacidad de la información personal, estableciendo con claridad el derecho de
información de recogida de datos (incluidos datos de vídeo), y de acceso,
modificación y cancelación de los datos personales. Y también las medidas de
protección de ficheros de datos, en función de su importancia.
Finalmente, como regulaciones básicas del deporte, citamos la Ley del
deporte (Ley 10, 1990), de ámbito nacional, que además de ser el pilar de
todas las regulaciones deportivas, en su Título X sobre instalaciones deportivas
aborda aspectos tanto de accesibilidad (artículo 70) como de seguridad en lo
que se refiere a prevención de la violencia (artículo 71). A nivel autonómico, la
recién derogada Ley del deporte de la Región de Murcia (Ley 2/2000,
derogada) establecía entre sus competencias el “control de las medidas de
seguridad y salubridad de las instalaciones” (artículos 3, 27 y 75). En marzo de
2015 ha sido aprobada la nueva Ley de la actividad física y el deporte de la
Región de Murcia (Ley 8, 2015) en la que la seguridad en las instalaciones
deportivas está mucho más presente. En ella se reconoce el derecho de los
deportistas a practicar deporte en condiciones adecuadas de seguridad, tanto
de instalaciones como de equipamientos. A la no discriminación y la igualdad, y
a la correcta accesibilidad de las instalaciones, a la protección de la salud y la
higiene, y al control de la violencia en el deporte.
Además, la Ley de la actividad física y el deporte de la Región de Murcia
en su artículo 37 obliga a la aprobación de una normativa de instalaciones y
equipamientos deportivos en la se incluyen de forma importante aspectos de
condiciones de seguridad y salud, accesibilidad, protección laboral y
elaboración de planes de emergencias. El control de estas cuestiones se verá
reforzado mediante la creación de un registro de instalaciones deportivas, que
contendrá información pormenorizada y que servirá para que la administración
regional pueda cumplir con sus competencias atribuidas.
Trabajos de investigación
Existen pocos trabajos de investigación de relevancia internacional al
respecto de la seguridad en las instalaciones deportivas comunitarias, como
ponen manifiesto Finch, Donaldson, Mahoney y Otago (2009), autores que
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3. Un acercamiento a la seguridad…
junto con otros, abordan algunas cuestiones de seguridad ante lesiones en
deporte comunitario, (Donaldson, Borys, & Finch, 2013; Finch et al., 2011).
Algunos trabajos tratan sobre actuaciones y protocolos de revisión y mejora de
la seguridad en eventos deportivos (Hall, 2010; Schwarz, Hall, & Shibli, 2010).
La inmensa mayoría de los trabajos específicos sobre seguridad en
piscinas climatizadas se refieren a cuestiones de salubridad, especialmente en
lo que respecta a los sistemas de filtración y desinfección y sus problemas
derivados
(Aggazzotti,
Fantuzzi,
Righi,
&
Predieri,
1998; Chowdhury,
Alhooshani, & Karanfil, 2014; Gámez & Padilla, 2012; Hery et al., 1995;
Nemery,
Hoet, & Nowak,
2002;
Nikaeen, Hatamzadeh, Dastjerdi, &
Hassanzadeh, 2009).
Destacan a este respecto los trabajos del grupo de investigación IGOID,
que abordan tanto los problemas de calidad del agua como el aire respirado
(Fernández-Luna, 2012; Fernández-Luna et al., 2015; Fernández-Luna, Burillo,
Felipe, Gallardo, & Tamaral, 2013; Fernández-Luna et al., 2011; FernándezLuna, Felipe, et al., 2013; Fernández-Luna, Gallardo, et al., 2013).
Esta temática eclipsa el resto de cuestiones relativas a la seguridad,
quedando en minoría cuestiones como la creación de planes de control de la
seguridad (Vyles, 2009), estudios cualitativos sobre las características de
diseño de piscinas para una mayor seguridad en la utilización (Blitvich,
McElroy, & Blanksby, 2009) o la aplicación de planes de seguridad para la
prevención de ahogamientos (Bierens & Scapigliati, 2014). En referencia de
nuevo al grupo de investigación IGOID, la Tesis Doctoral de Tamaral (2012)
aborda un estudio integral de las piscinas climatizadas de Castilla – La
Mancha.
Otros trabajos se centran en los servicios de socorrismo, como los de
Sanz (2011) o Winkler et al. (2013), o el de Finch (2011), que menciona la
importancia de que los gestores y trabajadores de piscinas cambien sus
comportamientos para mejorar la seguridad en las instalaciones. Dada la
diversidad de temáticas abarcadas por el tema que nos ocupa, encontramos
bibliografía específica, como los trabajos de Fisher, Burkert y Mietz (2011) en
los que se analizan los problemas de seguridad debidos a la corrosión del
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3. Un acercamiento a la seguridad…
acero inoxidable en piscinas climatizadas, o los relativos a prevención de
ahogamientos en piscinas (Bugeja & Franklin, 2013; Crawford et al., 2014;
Geerardyn, Boulanger, & Kuijk, 2015)
En la literatura investigadora internacional existen referencias a estudios
comparativos de la accesibilidad en distintas instalaciones deportivas (Arbour &
Martin-Ginis, 2011; Hawes, 2001; Nary, Froehlich, & White, 2000; RivanoFischer, 2004), y algunos trabajos ponen de manifiesto la importancia del nivel
de accesibilidad de las instalaciones para la práctica deportiva de los
discapacitados (Arbour & Martin-Ginis, 2009; Karusisi, Thomas, Méline, &
Chaix, 2013). Se han desarrollado instrumentos para medir el grado de
accesibilidad de acuerdo a varios criterios (Rimmer, Riley, Wang, & Rauworth,
2004), y propuestas globales para abordar el problema (Riley, Rimmer, Wang,
& Schiller, 2008).
En cuanto a estudios nacionales, el interés en cuestiones de
accesibilidad en deporte es creciente, como se comprueba en trabajos
referentes a discapacitados sensoriales y piscinas (A. López, 2003; A. López &
Alejandre, 2006) o más recientes sobre accesibilidad en espacios deportivos (L.
Gallardo et al., 2009; Zarco-Pérez et al., 2012).
Riesgos laborales
Quizás el documento más destacado en este apartado es el que se
dedica a riesgos laborales en piscinas climatizadas, producido en 2007 por la
Fundación MAPFRE “Trabaja sin riesgos: en la piscina, precaución” (Mapfre
servicio de prevención, 2007). Este extenso documento, realizado en
colaboración con la Asociación Española de Industriales y Técnicos de Piscinas
e Instalaciones Deportivas (ATEP) se introduce en la problemática específica
de los trabajadores de piscinas y la protección de su salud y seguridad. Se
pone de manifiesto la falta de herramientas de gestión en esta materia
específica y el desconocimiento de las acciones de prevención propias de esta
profesión. En la primera parte del documento se analizan en detalle los riesgos
propios de cada uno de los perfiles profesionales de los trabajadores de
piscinas climatizadas, y en la segunda se aportan un conjunto de fichas
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3. Un acercamiento a la seguridad…
asociando a cada perfil profesional los riesgos asociados a su puesto, la
formación que requieren, los equipos de protección a utilizar, y otras
características importantes a tener en cuenta.
Un documento desatacado sobre riesgos laborales, esta vez en
instalaciones deportivas genéricas, es el “Manual básico de prevención de
riesgos laborales: familia actividad física y deportiva”, del Instituto de Seguridad
y Salud laboral, adaptado para la Región de Murcia (Gobierno de la Comunidad
Autónoma de la Región de Murcia, s.f.). Se analizan los principales riesgos
laborales en esta familia, las actuaciones a tomar en caso de accidentes,
señalizaciones, normativas aplicables, y una breve reseña sobre cómo crear un
plan de autoprotección. De características similares es el documento
“Prevención de Riesgos Laborales para trabajadores y trabajadoras de
instalaciones deportivas”, de la Comunidad de Madrid (Mancomunidad “La
Maliciosa”) (Álvarez, s.f.). Y el documento del Instituto de Biomecánica de
Valencia “Riesgos laborales en instalaciones deportivas” (Instituto de
Biomecánica de Valencia, 2010). Existen otros documentos similares que no
consideramos preciso mencionar. Como documento no específico de la
actividad deportiva, sirva como referencia el extenso “Manual para la
identificación y evaluación de riesgos laborales” editado por la Generalitat de
Cataluña (2006).
Emergencias sanitarias
Las lesiones y otras cuestiones sanitarias de los deportistas es un tema
amplísimamente tratado por su gran importancia, si bien queda en gran parte
fuera del ámbito de la seguridad en instalaciones deportivas. Sí tiene interés
aquella faceta que tiene que ver estrictamente con la gestión de las
emergencias sanitarias en instalaciones deportivas. Fruto de esta importancia,
existen guías con protocolos de actuación y buenas prácticas en emergencias
sanitarias, como la publicada por la Junta de Andalucía en 2011, “Emergencias
sanitarias en centros deportivos y educativos andaluces” (Fernández-Martínez
& Porcel-Gálvez, 2011). Tal y como se cita en dicha guía, editada en formato
digital, “la universalización de la práctica deportiva no puede dejar pasar por
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3. Un acercamiento a la seguridad…
unos requisitos previos, como las garantías de seguridad en las instalaciones”.
El documento se centra en definir protocolos de actuación para las distintas
situaciones de emergencia sanitaria que se pueden dar, como situaciones que
comprometen la vida, lesiones, heridas, quemaduras, intoxicaciones, etc.
Incluye también un amplio repertorio de trastornos psicosociales (alimenticios,
de conducta y psicofísicos, entre otros).
Un estudio profesional de dos técnicos de servicios de salud en el
ámbito de la Comunidad Andaluza, Gámez y Padilla (2011b) analiza el
cumplimento de los proyectos de construcción de piscinas en la demarcación
de la Costa del Sol. El estudio se realizó en 30 piscinas de uso colectivo de
distintas características y titularidad, encontrando una gran cantidad de
disconformidades leves y graves respecto a la normativa andaluza, y propone
el fomento de una mayor cultura interpretativa de las normas, la elaboración de
guías oficiales y un mayor control de los proyectos de construcción, para evitar
problemas en la construcción de difícil subsanación posterior.
Por su parte, Padrós (s.f.) la directora de seguridad del Campeonato
mundial de natación de Barcelona 2013, en un documento profesional de la
revista digital Seguritecnia.es aborda las cuestiones principales del análisis de
riesgos de un evento deportivos de esta envergadura, centrándose sobre todo
en los aspectos de seguridad relativos a protección ante la violencia,
vandalismo o actos terroristas.
Gestión de riesgos
La multidisciplinariedad de la seguridad conlleva una alta especialización
de cada una de sus áreas. Uno de los enfoques del tratamiento de la seguridad
es la “gestión del riesgo” a través del “análisis del riesgo”. Esta forma de
abordar la seguridad se trata habitualmente, entre otros, en los campos de la
protección civil y la gestión de emergencias en industrias y otras instalaciones.
Como documentos generales sobre este enfoque destacamos la guía
técnica de métodos cuantitativos para el análisis de riesgos (Dirección General
de Protección Civil, 1994b) y su equivalente de métodos cualitativos (Dirección
General de Protección Civil, 1994a). Se han localizado otros documentos
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3. Un acercamiento a la seguridad…
similares de interés, destacando entre ellos tanto las aportaciones de la
Dirección General de Protección Civil y Emergencias (Dirección General de
Protección Civil, 2014a), como las aportaciones de la Dra. Cristina Nerín,
directora del grupo de “Investigación en Análisis de Riesgos” de la Universidad
de Zaragoza (Nerín, 2013, 2014) .
Al respecto de los cuantitativos (Dirección General de Protección Civil,
1994b), se establece toda una metodología de trabajo basada en los conceptos
de “iniciadores”, “sucesos básicos” y “sucesos complejos” y apoyada en la
teoría de probabilidades y el álgebra de Boole. Se definen los “componentes”
de un sistema, sus interconexiones y la “fiabilidad” de cada uno de ellos, de lo
que se obtienen tasas de fallos los de los sistemas.
Consideramos interesante conocer esta forma de abordar la seguridad,
buscando sus posibles aplicaciones a la seguridad en instalaciones deportivas,
y más en concreto a las piscinas climatizadas, instalaciones con mayor
complejidad técnica debido al aparataje necesario y a la utilización de
productos químicos. Se introducen métodos como la técnica del “árbol de
fallos”, el “árbol de sucesos” o el “análisis de causas – consecuencias”. Y se
proponen técnicas para el cálculo del riesgo.
Sobre los métodos cualitativos (Dirección General de Protección Civil,
1994a) se describen las técnicas de “análisis histórico de sucesos”, “análisis
preliminar”, “¿Qué pasa si…?”, “análisis funcional de operatividad”, o “análisis
del modo o efecto de fallos”. Mencionar que se incluyen entre los métodos
cualitativos las “check – list”, (listas de control o cuestionarios de validación),
como un método adecuado para evaluar los niveles mínimos aceptables de
riesgo en un proyecto. Y las “auditorías de seguridad”, como un conjunto de
inspecciones para revisar el estado y funcionamiento de protocolos e
instalaciones. Finalmente se describen algunas técnicas semicuantitativas
como el índice DOW o el MOND (para incendios y explosiones).
Pero lejos de las estrategias aplicadas a la industria, la gestión del
riesgo se aplica también en otras áreas, cada una con sus técnicas
particulares, siendo ejemplos de ello los trabajos relativos a instituciones
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3. Un acercamiento a la seguridad…
escolares (Ariza, González, & Rojas, 2010; J. Sánchez, 2011) o al mundo
empresarial (Comunidad de Madrid, 2014).
Planes de autoprotección
La regulación legal de los sistemas de autoprotección de entidades a
través de los planes de autoprotección, ha dado lugar a un buen número de
documentos al respecto. A nivel regional destaca la “Guía para la elaboración
de un plan de autoprotección” de la unidad de protección civil de la Región de
Murcia (Dirección General de Protección Civil, 2012), documento muy orientado
a la confección de planes de autoprotección según la normativa. El colegio de
ingenieros técnicos industriales de Barcelona ha desarrollado un documento
similar al anterior, pero orientado específicamente a instalaciones deportivas
(Corominas,
Nogueras,
Pedreny,
Pineda,
&
Sabaté,
2006).
Por
la
obligatoriedad de implantación en centros educativos, los manuales de
implantación para este tipo de centros es habitual, como el caso de los
documentos del Gobierno de la Región de Murcia (Díaz, Limorte, Martínez, &
Hidalgo, 2004; Dirección General de Protección Civil, 2010; M. García, 2010;
Mínguez, 2009) o la experiencia del Gobierno de Extremadura (Unidad de
Protección Civil de Extremadura, 2013). La consecuencia es la elaboración de
planes individuales para cada centro, de lo que se encuentra abundante
información (Gobierno de Cantabria, 2009; Gobierno de Extremadura, 2012).
El porcentaje de instalaciones deportivas en los que es obligatorio un
plan de protección es bajo, pero en grandes instalaciones encontramos los
propios planes en la red, como el Plan de Autoprotección del Madrid Arena
(Gobierno de la Comunidad de Madrid, 2012) o de las instalaciones deportivas
de la Universidad de Valladolid (Universidad de Valladolid, 2005). Algunos
trabajos académicos desarrollan planes de autoprotección para pabellones,
como es el caso del trabajo de Álvarez (2013). Algunos municipios han
desarrollado planes integrales de seguridad eventos deportivos, como es el
caso del municipio de Getxo (I. Gónzalez, 2012).
Para el apoyo a la realización de simulacros hemos localizado
documentos como el de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía
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3. Un acercamiento a la seguridad…
(Calatrava, 2008) y algunos tantos en centros deportivos y educativos fuera del
territorio español (Epsom College, 2011; University of Exeter, 2010) y también
de ámbito superior, como el documento de la Organización Panamericana de la
Salud (2010), el de Cruz Roja Internacional (2009), o el de la oficina de las
Naciones Unidas (EIRD, 2008).
Evacuación
El momento de la evacuación en caso de emergencia es de particular
importancia. Por ello, además la normativa obligatoria del Código Técnico de la
Edificación (RD 314, 2006) existe gran cantidad de documentos a este
respecto.
El INSHT (Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el trabajo),
organismo estatal dependiente actualmente del Ministerio de Empleo y
Seguridad Social ha elaborado una colección “Notas Técnicas de Prevención”
(NTP) con la finalidad de ser un manual de consulta para técnicos
prevencionistas. Las NTP no son vinculantes ni de obligado cumplimiento. La
nota NTP 361, “Planes de emergencia en lugares de pública concurrencia”
(NTP 361, 1995) justifica y orienta sobre el establecimiento de planes de
emergencia específicos de edificios e instalaciones de riesgo. Tales
instalaciones de riesgo vienen identificadas por una serie de factores de riesgo
que se describen en el documento, seguido de una guía para la elaboración de
los planes de emergencia. Otras notas del INSHT pueden ser la antigua NTP4
o las recientes NTP888 y NTP889 sobre señalización en vías (NTP 4, 1984;
NTP 888, 2010; NTP 889, 2010), la NTP436 (NTP 436, 1997) sobre cálculo de
tiempos de evacuación, la NTP46 sobre evacuación de edificios o la reciente
NTP 884 sobre evaluación de condiciones de evacuación (NTP 884, 2010).
Mencionando documentos de otras entidades, la mutua de accidentes de
trabajo Asepeyo ha publicado un documento “Planes de evacuación y
emergencia en edificios de elevada aglomeración pública” (Asepeyo, 2007).
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3. Un acercamiento a la seguridad…
Psicología de emergencias y de masas
La notas NTP390 y NTP395 (NTP 390, 1995; NTP 395, 1995) abordan
la cuestión del comportamiento de las personas tanto colectiva como
individualmente ante situaciones de emergencia, identificando los distintos tipos
de comportamiento, los factores que intervienen e influyen sobre el
comportamiento y los criterios preventivos aplicables. La conducta colectiva no
es la suma de las conductas individuales, sino que debe estudiarse como un
fenómeno
propio.
El
comportamiento
colectivo
tiene
una
serie
de
características, identificándose distintos tipos de multitudes y debiendo
actuarse de forma distinta dependiendo de su caracterización y de otros
condicionantes de la emergencia. Debe evitarse a toda costa que los individuos
entren en situación de pánico, ya que actuarán descontroladamente, por
encima de cualquier condicionamiento social, y se producirá el efecto de
contagio mental.
A este fenómeno se le llama psicología de masas, y en el aspecto
particular que nos ocupa se nombra como psicología de emergencias. A
diferencia de otras áreas, sobre esta materia existe gran cantidad de
producción científica. En el trabajo de Berlonghi (1995) se analizan los
diferentes tipos de espectadores. Sobre la disposición psicológica ante
situaciones de emergencia trata el trabajo de Vicuña, Hernández, Paredes,
Solís y Pecho (1999), que comparan mediante un experimento la disposición
ante situaciones de origen natural y social. Zeitz, Tan y Zeitz (2009) presentan
una buena revisión de la literatura sobre comportamiento de las multitudes ante
situaciones de aglomeraciones de masas, y Marín una buena introducción a la
psicología de emergencias (Marín, 2015).
Pero el momento de la evacuación es estudiado desde diversos puntos
de vista. En trabajos como el de Dias, Sarvi, Shiwakoti, Ejtemai y Burd (2013)
se analiza el comportamiento de las masas en situaciones de escape. Las
vueltas atrás, cambios de dirección y cruces con otros individuos son
determinantes en el estudio de las estrategias reales de las masas en las
evacuaciones de emergencias. En este y otros trabajos (Shiwakoti & Sarvi,
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3. Un acercamiento a la seguridad…
2013; Shiwakoti, Sarvi, Rose, & Burd, 2011) se realizan experimentos con
hormigas para analizar el comportamiento real de las masas, obteniendo datos
para la creación de modelos válidos de evacuación de masas. Otros trabajos
analizan un histórico de estampidas para obtener conclusiones útiles para el
futuro (Illiyas, Mani, Pradeepkumar, & Mohan, 2013).
Simulaciones computacionales
En el trabajo “Crowd psychology and engineering” (Sime, 1995) se
establece un puente entre el enfoque de psicología de masas y el de la
ingeniería, concluyendo la necesidad de integrar ambas estrategias para el
desarrollo de modelos efectivos de evacuación. Desde un enfoque más
ingenieril, existen multitud de trabajos que desarrollan modelos de evacuación.
Podemos destacar estrategias más habituales basadas en autómatas celulares
(Bode & Codling, 2013; Wei-Guo, Yan-Fei, Bing-Hong, & Wei-Cheng, 2006) o
novedosos y complejos modelos matemáticos basados en la introducción de
tiempos de espera para una evacuación más rápida en estadios deportivos
(Fang, Li, Han, & Wang, 2011). En el trabajo de Xiaoping, Tingkuan y Mengting
(2009) se analizan hasta siete estrategias metodológicas para analizar la
evacuación en edificios.
Lee y Hughes (2006) presentan en la revista “Accident Analysis &
Prevention” un modelo de cálculo de las presiones soportadas en situaciones
de multitudes, en orden a tomar acciones preventivas antes de que estas
presiones sean críticas. Y Liu y Lo (2011) generan interesantes modelos de
comportamiento en la pre-evacuación, esto es, del comportamiento de los
individuos que no están en un momento de evacuación activa pero sí próxima
en el tiempo.
Los modelos de evacuación suelen convertirse en modelos de
simulación e introducirse en aplicaciones informáticas para simulación de
evacuaciones en instalaciones. La producción científica de artículos de este
tipo abarca revistas tanto de temáticas estrictamente computacionales (Capote,
Alvear, Abreu, Cuesta, & Alonso, 2013; Capote, Alvear, Abreu, Lázaro, &
Cuesta, 2009; Casadesús & Garriga, 2009; Dilip, Sriram, & Pradeep, 2007;
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3. Un acercamiento a la seguridad…
Gelenbe & Wu, 2012; Ronchi & Kinsey, 2011; Santos, Marietto, Born, & Omar,
2012; Wu, 2013) como mixtas. Ejemplo de esto último es la revista “AI &
Society” (Inteligencia artificial y sociedad) en la que se publican trabajos sobre
simulaciones para evacuaciones en emergencias (Pan, Han, Dauber, & Law,
2007). A menudo se utilizan como ejemplos instalaciones deportivas (Graat,
Midden, & Bockholts, 1999; Wei, Hui, & Tong, 2009; Wu, 2013; Zhang, Liu, Wu,
& Zhao, 2007).
Otros documentos al respecto, pero no tan vinculados al ámbito
investigador, tratan de aportar orientaciones a profesionales que lo necesitan.
Es el caso del trabajo de Soria (2007) para MAPFRE sobre gestión de masas,
los trabajos para Protección Civil (Dirección General de Protección Civil, 2014b;
Vera & Puertas, 2009), otros como el de Aguado (2014) o los de Burkle y Hsu
(2011), Ospina (2014) o el más genérico sobre procesos colectivos de Muñoz y
Vázquez (2002). Citar también el trabajo de Javaloy (1989) sobre el
comportamiento colectivo en el deporte, el de Bousquet (2010) sobre fanatismo
deportivo, y el libro “Security management for sports and special events: An
interagency approach to creating safe facilities” (Hall, Cooper, Marciani, &
McGee, 2012), que aborda específicamente cuestiones de seguridad en
espectáculos deportivos, especialmente a lo que se refiere a gestión de
multitudes. Este libro utiliza la perspectiva de la legislación y organización de
los Estados Unidos de América, con sus propias particularidades, al igual que
ocurre con “Legal Concepts in Sport: A Primer” (Carpenter, 2008), que aborda
la legislación deportiva de aquel país. Moscoso realiza una interesante revisión
sobre la sociología del deporte en España, cuestión ligada a este tema
(Moscoso, 2006).
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3. Un acercamiento a la seguridad…
3.4 Evaluación del trabajo
Los objetivos de este estudio documental se han descrito en el apartado
3.1 sobre el planteamiento de la investigación. Los objetivos han sido
cumplidos. El estudio documental ha establecido el repertorio de aspectos
vinculados con la seguridad en instalaciones deportivas, poniendo de
manifiesto la heterogeneidad de este concepto. Estos aspectos vinculados a la
seguridad nos han aportado información desde el punto de vista de
identificación de los riesgos.
Hemos realizado una búsqueda y análisis exhaustivo sobre la normativa
legal y técnica aplicable, encontrando que es muy abundante y diversa. Se ha
filtrado aquella que no es de aplicación y aquella derogada, actualizando la
información de las normativas modificadas, mediante el uso de la “legislación
consolidada” compilada por el Boletín Oficial del Estado.
Hemos conocido el punto de vista profesional a través de distintos
documentos en una gran variedad de ámbitos. Y hemos recopilado un gran
número de documentos de todo tipo, que consideramos refleja la situación
actual de la seguridad en instalaciones deportivas en España.
El caso particular de las piscinas climatizadas de uso colectivo también
ha sido trabajado, ya que es de particular interés para el resto de estudios de
esta investigación.
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3. Un acercamiento a la seguridad…
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3. Un acercamiento a la seguridad…
3.5 Conclusiones
1.
Existe gran cantidad de normativa de obligado cumplimiento
relacionada con la seguridad en instalaciones deportivas. Esta
normativa proviene de distintos estamentos del gobierno y la
administración, y es distinta dependiendo de la Comunidad
Autónoma y en muchos casos también del municipio. Además,
la normativa proviene de distintas temáticas (constructivas,
deportivas, laborales, etc.).
2.
El Estado y las Comunidades Autónomas están aportando
paulatinamente importancia a la cuestión de la seguridad, lo
que queda reflejado en nuevas leyes y normativas sobre
actividad física y deporte.
3.
Existen pocos estudios de investigación sobre seguridad en
instalaciones deportivas desde el punto de vista del gestor
deportivo. Podemos considerar este campo muy reciente y muy
específico de cada país.
4.
En el ámbito de la empresa privada y la actividad profesional
tampoco hay un conjunto de conocimiento sólido, unificado y
coherente; es una materia por desarrollar en la que proliferan
multitud de trabajos particulares, pendientes de consolidación.
5.
Gran número de instituciones han desarrollado documentos al
respecto, siguiendo el enfoque iniciado por el Consejo Superior
de Deportes, adaptándolo a sus peculiaridades y a la tipología
de sus instalaciones deportivas.
6.
Existe una seguridad necesaria pero no obligatoria que aporta
el valor añadido a las instalaciones deportivas. Se suele
promover a través de códigos de buenas prácticas, promoción
de planes de mantenimiento, y estrategias de mejora de la
calidad.
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3. Un acercamiento a la seguridad…
7.
Existe una gran cantidad de disciplinas vinculadas con la
seguridad en instalaciones deportivas, cada una con enfoques
y estrategias diferentes.
8.
Entre los enfoques para abordar la seguridad destaca el
tratamiento de los riesgos, la implantación de distintos tipos de
planes de seguridad, o la realización de chequeos de revisión,
mantenimiento y mejora.
9.
El concepto amplio del “deporte para todos” conlleva que la
accesibilidad sea parte de la seguridad. El tratamiento de la
accesibilidad es fundamental en el tratamiento de la seguridad.
Por ser un concepto más reciente, el cuerpo legislativo es
mucho menor en cuestiones de accesibilidad que de seguridad.
10. Tradicionalmente la accesibilidad ha estado asimilada a
discapacidades físicas y sensoriales importantes, pero el nuevo
concepto de accesibilidad hace referencia a todo tipo de
usuarios que queden fuera de las características medias, ya
sea temporal o permanentemente.
11. Es fundamental un acercamiento a la seguridad desde el punto
de
vista
del
gestor
deportivo,
ya
que
las
entidades
organizadoras son las responsables de las actividades que se
desarrollan. El gestor deportivo no debe ser un experto en
todas las disciplinas de seguridad, pero sí debe ser un
conocedor de todas ellas.
12. Debe abordarse el problema de la seguridad desde todos los
tipos de usuarios: deportistas, público, trabajadores y otros
tipos de usuarios,
13. Las piscinas climatizadas son unas instalaciones deportivas
especialmente sensibles al problema de la seguridad, por su
gran cantidad de aparataje y la utilización de productos
químicos. Además, tienen normativas y sistemas de control
específicos y adicionales al resto de instalaciones deportivas.
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3. Un acercamiento a la seguridad…
14. La importancia de las cuestiones de salubridad del agua y el
ambiente, y la prevención de ahogamientos en las piscinas
eclipsa el tratamiento de otros problemas de seguridad en
piscinas de uso colectivo.
15. Además de las múltiples áreas de la seguridad, existen otras
temáticas específicas vinculadas con este problema, como
pueden ser la psicología de masas o de emergencias, los
protocolos de seguridad basados en ingeniería, la utilización de
modelos computacionales para la simulación de evacuaciones
de
emergencias,
el
estudio
de
las
evacuaciones
de
emergencia, etc.
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3. Un acercamiento a la seguridad…
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Capítulo 4
Diseño de una herramienta cuantitativa
para analizar las condiciones de
seguridad en piscinas climatizadas de
uso colectivo
4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
4 Diseño de una herramienta cuantitativa
para analizar las condiciones de
seguridad en piscinas climatizadas de
uso colectivo
4.1 Planteamiento
Introducción
El estudio del capítulo 3 ha puesto de manifiesto la necesidad de
gestionar la seguridad de las instalaciones deportivas desde el punto de vista
del gestor deportivo. Hemos tratado la seguridad desde un enfoque global y al
respecto de cualquier tipo de instalación, si bien también hemos referencia a
las piscinas climatizadas de uso colectivo. Hemos mencionado que el interés
de la realización de una investigación exploratoria consiste en profundizar
sobre un fenómeno objeto de estudio. Realizado dicho estudio documental,
hemos estado en situación de realizar la siguiente fase que nos ocupa, una
investigación descriptiva.
En este contexto, la fase 2 de esta Tesis Doctoral, fase de tipo
descriptivo, incluye el objetivo de “Desarrollar un instrumento para analizar la
seguridad en piscinas climatizadas de uso colectivo”, cuestión que abordamos
en este capítulo. Esta herramienta deberá poder ser aplicada en cualquier
ámbito municipal, autonómico, y nacional. No obstante, puede ser que requiera
ciertas adaptaciones dependiendo de la legislación aplicable en cada
comunidad autónoma, y de otras situaciones particulares.
Nuestra pretensión ha sido que la herramienta pueda tener un doble
uso, investigador y profesional. Hemos desarrollado una herramienta
cuantitativa, y se trata de un cuestionario de validación (check-list) que posee
un sistema de clasificación multidimensional.
Página | 125
4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
La investigación descriptiva
La investigación descriptiva pretende caracterizar el objeto de estudio,
indicando los rasgos más particulares, peculiares o diferenciadores que posee.
(Arias, 2006; Pardinas, 2005; Sampieri, 2003). Se busca especificar las
propiedades más importantes de un constructo (Dankhe, 1989), midiendo o
evaluando una serie de aspectos, componentes o dimensiones del fenómeno a
investigar. Simplificadamente, persigue describir lo que se investiga (Navas,
2001) y extraer generalizaciones significativas que contribuyan al conocimiento.
Las estrategias que se utilizan más frecuentemente en la investigación
descriptiva son de tipo cuantitativo, con explotación de datos estadísticos
(Thomas & Nelson, 2007). Una técnica empleada frecuentemente para la
realización de estudios descriptivos cuantitativos es la encuesta (M. Martín,
2004). Se introducen por tanto los conceptos de población y muestra, como el
conjunto de elementos a caracterizar, y una selección correctamente escogida
de sujetos que representen a la población total.
Usos y usuarios de la herramienta
Para cumplir nuestro objetivo de analizar el problema de la seguridad en
las piscinas climatizadas de uso colectivo nos planteamos desarrollar
herramientas o instrumentos que nos permitan realizar estudios descriptivos
para caracterizar un conjunto de instalaciones de este tipo. Pero pretendemos
que el instrumento desarrollado tenga mayor alcance, persiguiendo que la
herramienta pueda ser utilizada también con fines profesionales, entre otros:
-
Para verificar los niveles de seguridad de una piscina climatizada de uso
colectivo, de un modo global y en función de distintos criterios de
clasificación.
-
Para realizar estudios comparativos de seguridad entre un grupo de
piscinas climatizadas.
-
Para identificar los puntos fuertes y débiles de una instalación para la
mejora de su seguridad.
Página | 126
4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
-
Para realizar revisiones de mantenimiento en piscinas, en lo referente a
seguridad.
De esta variedad de usos se desprende que necesitamos una
herramienta que pueda ser utilizada por distintos tipos de personas:
investigadores en cuestiones de gestión deportiva, responsables de piscinas
climatizadas, gestores deportivos, auditores de instalaciones, etc.
Los resultados esperados de los estudios y análisis que se hagan con
ella deben ser rigurosos, cuantificables y comparables, y respetar el principio
de replicabilidad científica. Escoger el tipo de herramienta más adecuada es
por tanto fundamental.
Selección del tipo de herramienta
Establecidos los objetivos de la investigación y los posibles usos de la
herramienta que se pretende construir, el siguiente paso consiste en
seleccionar el tipo de herramienta a desarrollar.
Nuestro problema de investigación se mueve en los ámbitos de las
ciencias sociales, de la salud, de economía y empresa, e incluso en algunos
casos en el ámbito industrial (por su relación con la edificación y el amplio
repertorio de equipamiento y productos técnicos). En estos ámbitos existe una
gran variedad de técnicas de extracción de información, como puede ser la
observación sistemática, las técnicas sociométricas o proyectivas, las
entrevistas, los cuestionarios, los grupos de discusión, los análisis de
documentos, etc. (Pardinas, 2005).
En el contexto que nos ocupa, parece razonable la utilización de
cuestionarios. Los cuestionarios son herramientas de observación compuestas
por una relación de preguntas diseñadas para obtener los datos necesarios
para conseguir los objetivos del estudio. Son altamente estructurados y
permiten la cuantificación de la información, ya que permiten estandarizar la
información recogida. Si el proceso completo de realización de las encuestas
Página | 127
4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
está bien realizado, los cuestionarios son métodos que cumplen la condición de
replicabilidad.
Respecto al tipo de cuestionario a escoger, una primera elección debe
ser establecer el tipo de sujeto que se interroga. La realización de estudios en
el sentido propuesto por C. Martín (2007), en los que los encuestados son los
usuarios de las instalaciones deportivas, parece más adecuado para la
realización de trabajos de investigación en la materia de satisfacción; los
estudios de usuarios podrían ser adecuados para analizar la percepción de
seguridad de una instalación, cuestión que abordamos en el Capítulo 6 de esta
memoria. Pero si se pretende reflejar la realidad objetiva, como es nuestro caso
en el presente estudio, la realización de encuestas de usuarios puede
proporcionar una información sesgada.
Otra opción podría ser la realización de encuestas a los propios gestores
o trabajadores de las piscinas climatizadas. Sin embargo, entendemos que no
parece ser una fuente objetiva de información, ya que puede venir fuertemente
influida por la independencia del encuestado o las estrategias de marketing del
organismo gestor.
Entonces, parece acertada la opción de usar un enfoque del tipo
auditoría, utilizando como herramienta un cuestionario de validación (check-list
o lista de control), en el que no se interroga a personas sobre el objeto del
estudio sino al propio objeto del estudio. Los cuestionarios de validación
ofrecen múltiples ventajas: constituyen un proceso sistemático, permiten
cuantificar los resultados, están basados en evidencias, eliminan el sesgo del
encuestado (no tanto el del encuestador), utilizan mínimos recursos, etc. (Gan
& Triginé, 2006).
Si hay un campo en el que los cuestionarios de validación se han usado
extensivamente es en el de la aeronáutica, precisamente por las altas
exigencias de seguridad necesarias. En 2004 se comenzó a trasladar el uso de
este tipo de herramientas a otro campo tan riguroso como la cirugía (Berenholtz
et al, 2004), reduciéndose la mortalidad en cierto tipo de operaciones.
Posteriormente fueron impulsadas por la Organización Mundial de la Salud
(OMS, 2009) en su programa “La cirugía segura salva vidas”. Su utilización en
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
algunas otras disciplinas es habitual, como en las auditorías en gestión de la
calidad. Sin embargo, su uso en ciencias sociales suele ser menor (Tavares,
2011).
De entre los distintos tipos de cuestionarios de validación, las check-list
de rango ofrecen mayor precisión al poder graduar la intensidad de la
respuesta; por el contrario son mucho más dependientes del encuestador
(auditor) (Gan & Triginé, 2006). Las check-list binarias son cuestionarios
cerrados dicotómicos que obligan al auditor a escoger entre las dos opciones
“cumple / no cumple”, “si / no”, “cierto / falso”, produciéndose en general menos
distorsiones o variaciones en las respuestas entre distintos auditores. Creemos,
por lo tanto, que una herramienta adecuada para nuestro problema son los
cuestionarios de validación dicotómicos.
Las fuentes de conocimiento para el desarrollo del
cuestionario
Como se ha puesto de manifiesto en los Capítulos 2 y 3, la literatura
investigadora sobre seguridad y/o accesibilidad en piscinas es muy escasa, no
existiendo cuestionarios de validación consolidados. Por ello, no podemos
basar nuestros estudios en ninguna herramienta rigurosa y debemos
desarrollar un cuestionario propio.
La
siguiente
cuestión
consiste en determinar qué fuentes
de
conocimiento usaremos para desarrollar nuestro cuestionario. Una alternativa
podría ser la obtención de información a través de un panel de expertos.
Existen diversos métodos para ello como presenta Pardinas (2005): grupos de
discusión, entrevistas individuales, entrevistas guiadas, panel de expertos, etc.
Una de las dificultades para utilizar este sistema estriba en seleccionar qué
expertos deberían tenerse en cuenta, y de qué materias dentro del gran ámbito
de la seguridad.
Otra alternativa consiste en utilizar la información escrita por los
expertos en la materia. Y esto nos lleva a normativas técnicas, regulaciones
legislativas y códigos de buenas prácticas.
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
Históricamente, el conocimiento sobre seguridad se ha ido creando a
partir de un conjunto de buenas prácticas, seleccionándose de forma natural
los aspectos más relevantes y la “forma de resolver” más efectiva. Estas
buenas prácticas han terminado pasando a formar parte de regulaciones
jurídicas o normas técnicas en muchos casos de obligado cumplimiento.
Las cuestiones ligadas a la seguridad tienen más antigüedad que las de
accesibilidad, por lo que estas primeras tienen un cuerpo normativo más
grande y consolidado, y las de accesibilidad una mayor dispersión normativa y
de guías de buenas prácticas.
Por todo lo anterior, nos parece interesante tomar como fuentes de
conocimiento
los
documentos
normativos
y
legislativos
de
obligado
cumplimiento. Ahora bien, un cuestionario basado únicamente en estos
documentos constituiría un cuestionario de mínimos ya que, en principio, todas
las instalaciones sujetas a una normativa deben cumplirla.
Para darle mayor riqueza al cuestionario de validación consideramos
importante añadir varios elementos más. En primer lugar, normativas de no
obligado cumplimiento. La propia existencia de estas normativas supone que
son fruto de un amplio consenso de expertos en la materia. También
consideramos de interés añadir cuestiones de seguridad tomadas de guías y
códigos de buenas prácticas. Este último bloque de información es el menos
contrastado y consolidado de los tres. Por ello, utilizaremos exclusivamente los
códigos de buenas prácticas producidos por los organismos más relevantes en
los campos relativos al deporte y la seguridad, incluyendo también la
accesibilidad. El conjunto de documentos utilizado se detalla en el apartado 2
de este Capítulo.
Una herramienta también para la gestión de la calidad
En la sección “Usos y usuarios de la herramienta”, de este mismo
apartado, se describe el doble uso, investigador y profesional de la
herramienta. Si bien la utilización de la herramienta con un interés investigador
es su aplicación más directa, el resto de usos citados en dicha sección se
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
orientan al enfoque de gestión de la calidad, evitando orientaciones de
inspección o certificación.
Ya que disponemos de la legislación vigente al respecto, podría resultar
tentador plantear haber planteado la herramienta como una medida del grado
de cumplimiento de la normativa, como ocurre en algunos trabajos (Gámez &
Padilla, 2011a). Sin embargo, esta orientación no nos parece adecuada para
nuestro caso. La legislación aplicable es muy amplia, abarca diversos campos
muy específicos y es muy técnica en ocasiones; no creemos que corresponda
a un gestor deportivo realizar acciones inspectoras en campos tales como la
sanidad o la edificación, por citar algunos.
Ilustraremos esta idea con dos ejemplos, el primero de ellos al respecto
de la normativa de edificación. La normativa de edificación es un conjunto muy
amplio de documentos muy técnicos (el Código Técnico de la Edificación, entre
otros), que requieren ser analizados, interpretados y aplicados por arquitectos o
ingenieros técnicos. Podría ser pretencioso que un gestor deportivo realizase
“dictámenes” sobre la adecuación técnica de una edificación en materia de
seguridad. Además, el conjunto de planos de una edificación está supervisado
por los organismos correspondientes, y posee las certificaciones adecuadas en
el momento de la construcción. Otro aspecto a tener en cuenta son las
modificaciones legislativas en esta materia una vez construida la instalación.
No es sencillo discernir en qué medida esas modificaciones afectan a la
instalación, qué actuaciones deben realizase, y cuando. Esta labor debe
quedar en manos de los especialistas.
Un segundo ejemplo pueden ser las cuestiones de seguridad en la salud
e higiene del agua del vaso de la piscina. Las piscinas de uso colectivo están
sometidas a una normativa al respecto, supervisada mediante controles
estrictos de la administración sanitaria correspondiente. Los técnicos que
realizan estos controles tienen una cualificación específica en materia sanitaria.
De nuevo no nos parece adecuado que un gestor deportivo realice una
medición del cumplimiento normativo al respecto.
También
evitamos
orientaciones
de
nuestro
trabajo
hacia
las
certificaciones de calidad, como la ISO 9001, certificación general de calidad, o
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
las ISO 170001 y 170006 de accesibilidad integral. Estas certificaciones de
calidad tienen sus propias técnicas de trabajo y están sujetas a sus propios
procedimientos organizativos,
requiriendo un tratamiento especial. Sin
embargo, sí se han tenido en cuenta normas técnicas como la UNE-EN 152881:2009+A1 sobre requisitos de seguridad en piscinas, o la UNE-ISO 21542 de
accesibilidad en la edificación, ya que son normas constructivas normalmente
integradas dentro del Código Técnico de la Edificación.
Por tanto la estrategia que utilizaremos en la construcción de nuestra
herramienta se basará en el concepto de auditoría, que incluso puede verse en
el contexto de auditoría industrial. Una auditoría, en sentido amplio, consiste en
un análisis sistemático y crítico de un sistema de cualquier tipo. De hecho, este
término proviene del verbo inglés “to audit” (hacer una inspección) y éste del
Latín “audire” (oír), Originalmente se utilizó el término en el sentido de
inspección financiera, pero actualmente su uso se ha extendido a cualquier
revisión exhaustiva y sistemática, normalmente con fines de mejora. Algunas
auditorías habituales son, además de las financieras, las administrativas (para
evaluar el funcionamiento óptimo de una entidad), energéticas, informáticas, o
auditorías de calidad. Las auditorías de calidad persiguen realizar un análisis
exhaustivo de un sistema para mejorar su funcionamiento en las facetas de
interés. Las auditorías industriales suelen estar orientadas a la detección de
posibles problemas que afecten a la seguridad de las instalaciones o sus
procesos, y por tanto a la calidad de las actividades desarrolladas.
En cualquiera de estos aspectos, el auditor es un elemento fundamental
en la auditoría, y debe ser una persona capacitada y experta en el ámbito de
sus funciones y debe actuar con un protocolo preestablecido. En las auditorías
industriales se suelen utilizar listas de control para realizar una revisión
sistemática de todos aquellos elementos que pueden afectar a la seguridad de
una actividad en una instalación (C. Ramírez, 2005). De esta forma se podrá
obtener una valoración general del estado de una instalación o un conjunto de
instalaciones, detectar los puntos fuertes y débiles, o hacer revisiones rutinarias
de mantenimiento. Es por ello que podemos decir que la herramienta pretende
ser una ayuda en la gestión de la calidad de piscinas climatizadas de uso
colectivo.
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
La Figura 1 muestra la posible utilización de la herramienta en un
proceso global de mejora de la seguridad en piscinas climatizadas de uso
colectivo. El proceso se realizaría en dos etapas: la primera de ellas es un
análisis y proceso interno de mejora; la segunda una etapa de mejora a través
de la percepción de calidad de los usuarios.
En la primera etapa se plantea una revisión interna objetiva de los
niveles de seguridad mediante la utilización de la herramienta que en este
trabajo desarrollamos. Detectadas las fortalezas y debilidades de la instalación,
se procedería a la corrección de los defectos (debilidades) susceptibles de ser
subsanables a corto plazo. Para aquellos problemas no subsanables a corto
plazo se plantearían acciones paliativas que ayuden a reducir el problema y se
generaría una documentación sobre mejoras a medio y largo plazo, para ser
tenidas en cuenta en próximas actuaciones.
Finalizada la primera etapa y transcurrido un cierto plazo de tiempo, la
segunda etapa se plantearía desde el punto de vista de la percepción de la
satisfacción del usuario en seguridad de la instalación, indagando en base a un
cuestionario de satisfacción (desarrollamos uno en el Capítulo 6). Un posterior
análisis de esta encuesta permitiría identificar falsas percepciones negativas a
las que debería buscarse la reorientación adecuada para dejen de percibirse.
También identificaría percepciones negativas reales, sobre las cuales se
realizaría el mismo proceso que en la primera etapa, subsanando las posibles a
corto plazo, y para las de medio y largo plazo encontrar acciones mitigantes
generando documentación para el futuro.
Finalizadas ambas etapas y transcurrido un cierto tiempo, el ciclo debe
volver a comenzar, realizando de nuevo la primera etapa y con ello aplicando el
principio de mejora continua.
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
Figura 1. Proceso de mejora continua de la seguridad en piscinas climatizadas
de uso colectivo.
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
4.2 Extracción de la información
El proceso de construcción de la herramienta
Para la construcción de la herramienta hemos realizado un proceso en
varias etapas. La primera consistió en la localización de la legislación y
normativa técnica referente a piscinas climatizadas de uso colectivo.
Posteriormente hemos realizado un análisis preliminar de estos documentos,
seguido de un estudio detallado en el que se han seleccionado todos aquellos
ítems que afectan a la seguridad de piscinas climatizadas de uso colectivo,
incluyendo la accesibilidad. Después hemos localizado y seleccionado las
guías y documentos de buenas prácticas más relevantes, analizándolas y
extrayendo aquellas cuestiones relativas a nuestro estudio que no están
incluidas en la legislación y normativa técnica. A partir de toda esta información
hemos construido la herramienta, que posteriormente hemos validado. En los
siguientes apartados detallamos cada una de estas fases.
Localización de la documentación para la construcción de
la herramienta
Para la localización de la legislación y documentos técnicos se ha
utilizado la base de datos documental presentada en el capítulo anterior.
Podemos considerar que hemos utilizado la técnica de recogida de información
por saturación (Olabuénaga, 1996); hemos realizado una búsqueda exhaustiva
a través de numerosas y distintas fuentes, extrayendo las referencias
legislativas y técnicas hasta el punto de saturación, esto es, cuando la lectura
de los documentos localizados deja de aportar nuevas referencias.
Entre las fuentes para la extracción de las referencias se encuentran
textos de gran credibilidad muy directamente relacionados con la temática, así
como otros documentos menos habituales o los resultantes de búsquedas
exhaustivas por internet. Para aquellos casos que las competencias son
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
autonómicas recordemos que se han considerado las regulaciones de la
Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
Los documentos utilizados se pueden clasificar de acuerdo a la siguiente
tipología:
-
Legislación fundamental deportiva
-
Legislación sobre seguridad ciudadana
-
Legislación sobre salubridad de las instalaciones y actividades
-
Normativas para trabajadores
-
Legislación sobre accesibilidad
-
Regulaciones técnicas sobre edificación
-
Normalización técnica de equipamientos y elementos constructivos
-
Normativas técnicas de carácter deportivo / federativo
Análisis preliminar de la documentación
Recordando ciertos aspectos descritos en el estudio documental del
capítulo anterior, ahora a modo de primer análisis de la documentación
seleccionada, hemos detectado diversas situaciones y tomado decisiones
sobre ellas:
-
Alguna normativa seleccionada no es de nuestro ámbito de aplicación,
por lo que se ha descartado. Ejemplos son las directrices europeas
referentes a aguas de baño, que han sido seleccionadas inicialmente y
descartadas posteriormente por no afectar a las piscinas climatizadas de
uso colectivo.
-
Algunas normativas referenciadas en las fuentes consultadas están
actualmente derogadas, sustituyéndose por una normativa posterior.
Hemos detectado que en algunos casos la normativa estaba derogada
incluso en el momento de publicación del documento que hace
referencia a ella.
-
Se ha utilizado la “Normativa Consolidada”. Ya citábamos en el capítulo
anterior que mucha de la legislación localizada ha sido modificada
parcialmente con posterioridad. Esta situación produce mucha distorsión
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
entre la situación real y la información que se publica en diversos
documentos, ya que los autores de las fuentes consultadas desconocen
dichas modificaciones. Para subsanar estos problemas, hemos acudido
a una utilidad de los servicios del Boletín Oficial de Estado (Gobierno de
España, 2015) llamada “Normativa
Consolidada”. La
Normativa
Consolidada consiste en un documento que contiene la normativa inicial
con las eliminaciones y añadidos de textos producidos por las
posteriores modificaciones. Este texto no es estrictamente legal, pero
aporta una información de grandísima utilidad para nuestro propósito.
-
Las regulaciones relativas a normas de edificación son muy extensas, y
de un carácter muy técnico (Código Técnico de la Edificación). Ocurre lo
mismo con las normativas de equipamientos y material de todo tipo
(normas UNE), añadiendo además la dificultad de acceso a esta
información por ser de pago. Estas dos situaciones nos obligarán a
analizar los elementos constructivos y equipamientos desde un nivel de
abstracción mayor.
-
Existen normativas que no son de obligado cumplimiento (no forman
parte de la legislación), pero las federaciones deportivas o el Consejo
Superior de Deportes las considera obligatorias para la realización de
cierto tipo de competiciones deportivas. Ejemplo de ello son las normas
NIDE publicadas por el Consejo Superior de Deportes.
-
Las piscinas climatizadas de uso colectivo están sujetas a una gran
cantidad de normativa jurídica y técnica, no siempre armonizada.
Además, las normativas de competencia autonómica tienen diferencias
sustanciales entre comunidades.
La Tabla 6 presenta la normativa seleccionada después del análisis
preliminar. Debido a su extensión, presentamos aquí la normativa seleccionada
en notación simplificada, acompañada de su referencia bibliográfica
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
Tabla 6.
Normativa legal y técnica que afecta a la seguridad (incluyendo la
accesibilidad) en piscinas climatizadas de uso colectivo
Salubridad de la actividad
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Reglamento de condiciones Higiénico-Sanitarias de Piscinas (Decreto 58, 1992)
-
Criterios Técnico - Sanitarios de las Piscinas (RD 742, 2013)
-
Prevención y Control de Legionelosis (RD 865, 2003)
-
Requisitos del Carné de Cuidador de Piscinas (Orden 16/jun, 1997)
Seguridad ciudadana y prevención de la violencia
-
Reglamento de Policía de Espectáculos (RD 2816, 1982)
-
Norma Básica de Autoprotección (RD 393, 2007)
-
Ley Contra la Violencia en el Deporte (Ley 19, 2007)
-
Reglamento de Prevención de la Violencia (RD 203, 2010)
-
Ley de Protección de la Seguridad Ciudadana (Ley 1, 1992)
-
Ley de Seguridad Privada (Ley 23, 1992)
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Ley de Protección Civil (Ley 2, 1985)
Normas técnicas
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Documento de Seguridad en caso de Incendio (RD 314, 2006)
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Documento de Seguridad de Utilización y Accesibilidad (RD 314, 2006)
-
Documento de Salubridad (RD 314, 2006)
-
Documento de Protección frente al Ruido (RD 314, 2006)
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Documento de Ahorro de Energía (RD 314, 2006)
-
Reglamento de Instalaciones Térmicas (RD 1027, 2007)
-
Reglamento de Baja Tensión (RD 842, 2002)
-
Reglamento Técnico de Combustibles Gaseosos (RD 919, 2006)
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Reglamento de Protección contra Incendios (RD 1942, 1993)
Normas técnicas NIDE, UNE y federativas
-
Normas Reglamentarias NIDE 3 para piscinas (Consejo Superior de Deportes,
2013c)
-
Normas de Proyectos NIDE 3 para piscinas (Consejo Superior de Deportes, 2013c)
/…
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
…/
-
Normas UNE-EN para diseño y funcionamiento de piscinas (serie 15288)
-
Normas UNE-EN de equipamiento de piscinas (serie 13451)
-
Normas UNE-EN para ayudas a la flotación (serie 13138)
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Normas UNE-EN de iluminación deportiva y emergencia (series 12193 y 1838)
-
Normas UNE-EN relativas a espacios para espectadores (serie 13200 y 41910)
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Normas UNE-EN relativas a accesibilidad (serie 21542, 170001 y 170006)
-
Normas UNE-EN relativas a informática y discapacidad (serie 139980)
-
Reglamento de la Federación de Natación. Libro XII (RFEN, 2015)
Normas de accesibilidad
-
Ley de Integración Social de los Minusválidos (Ley 13, 1982)
-
Ley de Igualdad en la Discapacidad (Ley 51, 2003)
-
Real Decreto de Condiciones Básicas de Accesibilidad (RD 505, 2007)
-
Real Decreto de Consideración de Discapacitado (RD 1414, 2006)
-
Ley de Habitabilidad de la Región de Murcia (Ley 5, 1995)
-
Decreto de Supresión de Barreras (Decreto 39, 1987)
-
Accesibilidad en Espacios Públicos y Edificación (Orden 15/oct, 1991)
-
Ley de Perros Guía (Ley 3, 1994)
Normativas para trabajadores
-
Ley de Prevención de Riesgos Laborales (Ley 31, 1995)
-
Real Decreto de mínimos de seguridad y salud en el trabajo (RD 486, 1997)
-
Real Decreto para uso de pantallas de visualización (RD 488, 1997)
-
Real Decreto para manipulación de cargas (RD 487, 1997)
-
Real Decreto de señalización en seguridad y salud en el trabajo (RD 485, 1997)
Legislación fundamental deportiva
-
Ley del Deporte (Ley 10, 1990)
-
Ley de la Actividad Física y el Deporte de la Región de Murcia (Ley 8, 2015)
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
Estudio detallado de las normativas y extracción de la
información
En esta fase hemos procedido a la extracción de la información
necesaria para construir la herramienta mediante el estudio detallado de cada
una de las normativas, seleccionando toda aquella relativa a nuestro campo de
aplicación. De algunos documentos hemos extraído gran cantidad de
información, como los del “Reglamento de condiciones Higiénico-Sanitarias de
Piscinas” (Decreto 58, 1992), o el “Código Técnico de la Edificación” (RD 314,
2006). Otras normativas tienen muy poca repercusión directa en la actividad
que se desarrolla en piscinas climatizadas, como el “Reglamento de
Prevención de la Violencia” (RD 203, 2010) o la “Ley del Deporte” (Ley 10,
1990). Por otro lado, gran cantidad de regulaciones se refieren a elementos
constructivos o equipamientos, disponiendo que multitud de requisitos técnicos
interrelacionados entre sí. Veremos más adelante que este hecho nos obliga a
elevar el nivel de abstracción de la información.
Para el caso de las normativas que regulan la realización eventos
deportivos hemos tenido que realizar ciertas consideraciones. Por ejemplo, el
“Reglamento de Policía de Espectáculos” regula el tipo y cantidad de medidas
a tomar en función de la capacidad de cada instalación. Para adaptar la
información a nuestra herramienta hemos tenido en cuenta las características
habituales de las piscinas climatizadas de uso colectivo, sin considerar
instalaciones singulares a nivel nacional que entendemos deben ser tratadas
de forma particular. Hemos seleccionado cuestiones que entendemos son
importantes para la seguridad y que pueden darse con frecuencia en las
piscinas climatizadas. Un ejemplo puede ser el chequeo de la existencia de
máquinas expendedoras de bebidas en envases peligrosos (arrojables).
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
Guías y documentos de buenas prácticas
Además de la legislación y normativa técnica, en el capítulo anterior
presentábamos un conjunto de códigos y guías de buenas prácticas, así como
un repertorio de documentos profesionales y otro tipo de documentos que son
de gran interés para la creación del cuestionario de validación. Las guías son
documentos que a menudo recogen de forma resumida los aspectos
legislativos más importantes de un tema concreto, y suelen presentarse de
forma amena y bien estructurada, mucho más asequible que la reglamentación
legislativa. Además, suelen incluir otro tipo de recomendaciones, las buenas
prácticas, que enriquecen y mejoran la cuestión tratada.
Si bien los temas correspondientes a la seguridad están bastante
consolidados, no ocurre así con los de accesibilidad; la accesibilidad es una
cuestión relativamente reciente sobre la que todavía queda mucho por legislar.
Por ello, las guías de buenas prácticas en accesibilidad son muchas y muy
variadas; algunas son generalistas mientras que otras y se dedican a colectivos
sociales muy específicos.
Tras el estudio documental del capítulo 3 hemos seleccionando aquellas
guías, códigos de buenas prácticas, y documentos profesionales que provienen
de fuentes más consolidadas y más reconocidas. La Tabla 7 presenta, en
notación simplificada, las guías de buenas prácticas utilizadas, que van
acompañadas de su referencia bibliográfica. De estas guías hemos extraído la
información de interés en la seguridad en piscinas climatizadas de uso
colectivo que no está contenida en las regulaciones analizadas con
anterioridad. Además, hemos tenido en cuenta otras consideraciones
consecuencia del estudio documental.
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
Tabla 7.
Guías y códigos de buenas prácticas en seguridad (incluyendo la
accesibilidad) en piscinas climatizadas de uso colectivo
-
Seguridad en instalaciones deportivas (Consejo Superior de Deportes, 2010b)
-
Legislación y documentos técnicos de referencia en instalaciones deportivas
(Consejo Superior de Deportes, 2010a)
-
Buenas prácticas en instalaciones deportivas (Consejo Superior de Deportes,
2009a)
-
De la Planificación a la gestión de las instalaciones deportivas. Un camino hacia la
sostenibilidad (Consejo Superior de Deportes, 2011)
-
Desarrollo e implantación de un sistema de gestión de riesgos en las instalaciones
deportivas (Consejo Superior de Deportes, 2009b)
-
Emergencias sanitarias en centros deportivos y educativos andaluces. Junta de
Andalucía (Fernández-Martínez & Porcel-Gálvez, 2011)
-
Guía para el autocontrol de la seguridad en instalaciones deportivas. Diputación
foral de Guipúzcoa (Instituto de Biomecánica de Valencia, 2009)
-
Guia per a l’elaboració de plans d’autoprotecció en installacions esportives
(Corominas et al., 2006)
-
Trabaja sin riesgos. En la piscina, precaución (Mapfre servicio de prevención,
2007)
-
Guía Técnica de Accesibilidad en la Edificación (Fomento, 2002)
-
Guía de accesibilidad de la Región de Murcia (Famdif-Cocemfe, 1997)
-
Guia d’accesibilitat de material i ajudes tecniques per a centres esportius (RoviraBeleta, 2012)
-
Guía ¡Pregúntame sobre accesibilidad y ayudas técnicas! (Instituto de Biomecánica
de Valencia, 2005)
-
Libro blanco I+D+I al servicio de las personas con discapacidad y personas
mayores (Instituto de Biomecánica de Valencia, 2003b)
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
4.3 Construcción del cuestionario
Características del cuestionario
El siguiente paso es la construcción del cuestionario de validación. El
proceso ha consistido en tomar la información extraída, clasificarla, refinarla,
agruparla, filtrarla y darle forma. Los criterios más relevantes tenidos en cuenta
han sido:
Utilizar un enfoque multidimensional. Cada variable se ha catalogado
en función de tres criterios de clasificación, de forma que los datos obtenidos
se puedan posteriormente agrupar de diferentes maneras. La Tabla 8 muestra
los tres criterios de clasificación con sus correspondientes categorías y una
palabra clave para nombrar cada una de ellas.
Tabla 8.
Criterios de clasificación del cuestionario de validación, con sus
categorías y la clave de denominación
Criterio básico de seguridad / accesibilidad
Categoría
Clave
Seguridad
Seguridad
Accesibilidad
Accesibilidad
Criterio de zona de la piscina
Categoría
Clave
Exteriores y zona de acceso a la instalación
Acceso
Botiquín y primeros auxilios
Botiquín
Espacios de deambulación
Deambulación
Emergencias y protección ante incendios
Emergencias
Vías de evacuación
Evacuación
Dependencias administrativas
Oficinas
Organización
Cuestiones organizativas
Público
Zonas para público y graderíos
Recepción
Recepción
Dependencias técnicas
Técnicas
Vaso principal y secundarios
Vaso
Aseos y vestuarios para nadadores
Vestuarios
Criterio de riesgo
Categoría
Clave
Accidente personal, enfermedad
Accidente
Emergencia, evacuación
Emergencia
Robo, hurto, intrusión, sabotaje, atentado
Intrusión
Violencia, racismo, xenofobia, intolerancia
Violencia
Higiene, salud
Higiene
Integridad del edificio
Edificio
Accesibilidad
Accesibilidad
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
Por ejemplo, la cuestión “Existen señalizaciones de indicación de
profundidad en todas las zonas del vaso”, se asocia según el criterio de
clasificación a las categorías siguientes:
Criterio
Categoría
Según su aplicación:
Seguridad
Según la zona de la piscina:
Vaso
Según el riesgo:
Accidente
Cabe señalar que una cuestión puede referirse a dos o más categorías
en el mismo criterio. Contemplaremos esta posibilidad, enriqueciendo así el
ámbito de cada elemento. Por ejemplo, la cuestión “La zona circundante a la
entrada a la instalación está bien iluminada”, es relativa a las categorías
siguientes:
Criterio
Categoría
Según su aplicación:
Seguridad
Accesibilidad
Según el riesgo:
Accidente
Intrusión
Accesibilidad
Mencionar también que si bien la categoría “Seguridad” se ha
desglosado según el riesgo, la categoría “Accesibilidad” no ha sido desglosada.
En un primer momento se planteó el desglose de la accesibilidad en función de
la guía Datus (Instituto de Biomecánica de Valencia, 2003a). Sin embargo, el
enfoque de accesibilidad universal o accesibilidad para todos dificulta la
clasificación de cada uno de los ítems del cuestionario, ya que estos están
enfocados de modo global. Son muy pocas las cuestiones que afectan a
colectivos muy específicos (como las deficiencias visuales o auditivas), y estas
cuestiones serán analizadas de modo particular.
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
El cuestionario de validación contendrá un gran número de ítems.
Como hemos descrito en apartados anteriores, son muy diversos tanto los tipos
de riesgos a cubrir en el ámbito de la seguridad, como las cuestiones a tener
en cuenta para una accesibilidad para todos. Esto da lugar a un número alto de
categorías. También son muchos los documentos analizados y los elementos
contenidos en cada uno de ellos. Aprovechando la sencillez de las auditorías
mediante cuestionarios de validación, preferimos que la lista de validación
contenga tantos ítems como de la información extraída se desprenda,
estimando que será un número alto. De este modo además, cada categoría de
un determinado criterio de clasificación tendrá los suficientes ítems como para
que los resultados sean significativos.
Proporcionalidad en el número de preguntas por categoría, y
simplicidad de las preguntas. En ocasiones, la complejidad técnica de las
características de un determinado elemento puede hacernos tender a la
realización de un elevado número de preguntas sobre él, aumentando
anormalmente su peso en el cuestionario. Debemos procurar que el número de
preguntas relativas a cada categoría sea proporcional a su relevancia dentro
del conjunto, aún a pesar de que una pregunta deba agrupar un gran número
de características. Asimismo, la medición por parte del auditor de gran número
de parámetros puede hacer tediosa la inspección. Por ambos motivos, las
preguntas se han orientado a la funcionalidad en mayor medida que a la
medición de valores. Esta estrategia requiere que el auditor tenga cierta
formación o experiencia.
Por ejemplo: las características técnicas de una escalera pueden
requerir de decenas de cuestiones para ser correctamente tenidas en cuenta,
siendo prácticamente imposible cuantificarlas todas. Para solventar estas
cuestiones, el ítem del cuestionario de validación se referirá a la funcionalidad
de la escalera, formulándose una cuestión del tipo “Las escaleras de acceso a
las plantas altas son accesibles”. El auditor debe “ponerse en el lugar del
usuario” para tener en cuenta la anchura de los escalones, las mesetas, los
cambios de dirección, las barandillas, la iluminación, la resbaladicidad, la
discriminación visual y táctil, etc. Para ayudar en este tipo de cuestiones, en
ocasiones al texto le acompañará en letra pequeña una descripción de los
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
elementos más relevantes, sin ánimo de ser exhaustivo. Por ejemplo para el
caso anterior de la escalera, la cuestión será la siguiente:
Las escaleras de acceso a las plantas altas son accesibles
(Anchura mínima de 1,20m. Mínimo 3 peldaños y máximo de 16, con descansos si hay más
peldaños. Pavimento táctil en el arranque superior. Pasamanos a ambos lados. Banda
antideslizante en cada escalón)
Redacción en sentido positivo. Todas las cuestiones deben estar
redactadas en sentido positivo, reformulando aquellas que sea necesario. De
este modo se evitan confusiones, especialmente en un cuestionario de gran
tamaño como el que nos ocupa. Por ejemplo, la pregunta “Los aseos y
vestuarios no tienen objetos cortantes u oxidados” se reformula a “Los aseos y
vestuarios están libres de objetos cortantes u oxidados”.
“Doble preguntado” o refuerzo de las preguntas para analizar el
grado de cumplimiento. Utilizando cuestionarios con respuestas dicotómicas
puede ocurrir que en ciertos casos sea complejo decidir si la respuesta correcta
es “cumple” o “no cumple”, porque el ítem se cumple solo en cierto grado o
porque se cumple pero hay cierta característica que presenta problemas. Para
minimizar estas situaciones, en cuestiones consideradas importantes o que
pueden presentar problemas se recurre al “doble preguntado”; se realizan dos
preguntas sobre la misma cuestión; la primera es de mínimos y la segunda de
máximos. De esta forma, en los casos comentados anteriormente, es muy
probable que al menos la primera cuestión tenga respuesta positiva. Por
ejemplo:
-
Los vestuarios tienen taquillas
Los vestuarios tienen taquillas, numeradas en relieve o braille,
y a baja altura
Eliminación de preguntas condicionadas e introducción de los
“grupos de preguntas no aplicables”. Uno de los problemas que se
presentan a menudo en los cuestionarios de validación son las preguntas
sujetas a condiciones. Por ejemplo “Si hay gradas, estas tienen asientos
individuales”. Este tipo de preguntas presenta un problema estadístico, a
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
menudo no resuelto. Si “no hay gradas” no hay una respuesta adecuada. Para
solucionar este problema, los autores a menudo incluyen un comentario
indicando “si no hay gradas marcar sí (o no)”; esto no deja de ser un artificio. Si
el número de preguntas condicionadas es alto, afecta en gran medida a los
porcentajes de cumplimiento de la lista de validación.
También puede ocurrir en algunos cuestionarios que una pregunta
condicione otras. Por ejemplo la cuestión A sería “Existen gradas”. La cuestión
B sería “En caso afirmativo, el acceso está señalizado”, y la cuestión C “En
caso afirmativo, con asientos individuales”. Si la respuesta de A es negativa,
esto obliga a dos respuestas negativas más, B y C, y no debido a ellas mismas,
sino a la cuestión A. De nuevo este tipo de situaciones afecta negativamente a
los porcentajes de cumplimiento.
Una tercera situación ocurre en cuestionarios con elementos del tipo “Si
la respuesta es no, pasar a la pregunta x”. Estas situaciones producen muchas
preguntas no respondidas. A menudo no existe un tratamiento estadístico
específico para estas situaciones, provocando reducciones no reales en el
grado de cumplimiento.
Nuestra herramienta elimina las preguntas condicionadas. Cada
pregunta aporta algo positivo si “cumple”, o negativo si “no cumple”. Sí ocurre
que utilizamos el recurso del doble preguntado para analizar el grado de
cumplimiento (descrito en el apartado anterior). Por ejemplo, un enfoque
incorrecto sería:
A. Existen aseos específicos para el público
Si existen:
B. Están separados por sexos
C. Están ventilados
D. Tienen luces de emergencia
E. Sus paredes están recubiertas de azulejos
La no existencia de aseos para el público aporta hasta 5 respuestas
negativas, quizás demasiado para este concepto. En nuestra estrategia, las
cuestiones serían:
A. Existen aseos específicos para el público
B. Existen aseos específicos para el público y están separados
por sexos, ventilados, tienen luces de emergencia y sus
paredes están recubiertas de azulejos.
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
Podemos observar que utilizamos el doble preguntado para refuerzo. La
primera pregunta exige que existan vestuarios y que sean específicos para el
público (accesibilidad y cuidado de la higiene y la salud). La segunda pregunta
refuerza la primera, tratando más en profundidad cuestiones de seguridad
como la luces de emergencia, de salubridad (azulejos en las paredes y
ventilación) o protección de la intimidad (separación por sexos).
Un problema adicional viene dado por la diversidad de tipos de
instalaciones. Algunas instalaciones, por ejemplo, no tienen graderío o vasos
de enseñanza. Este hecho lleva a ciertos grupos de preguntas relativas a esos
elementos que deben tener un tratamiento adecuado. Se ha optado por
establecer lo que llamamos “grupos de preguntas no aplicables”. Así, el
cuestionario tendrá apartados específicos para estos tipos de elementos. Si
una instalación, por ejemplo, no dispone de graderío, el apartado completo se
dejará sin rellenar. El sistema desarrollado para la explotación de datos
contempla estas situaciones, no afectando en absoluto a los porcentajes
globales de cumplimiento. Esto es, una instalación podrá tener un 100% de
cumplimiento sin disponer de gradas o vasos de enseñanza. Se han clasificado
tres tipos de elementos con este tipo de consideraciones:
-
Zonas de público y gradas
Plantas altas
Vasos de enseñanza
Suavización
de
la
auditoría
en
aspectos
periódicamente
inspeccionados de forma oficial. Teniendo en cuenta las consideraciones de
“no inspección” realizadas en el apartado 1 de este mismo Capítulo, optamos
por que nuestro cuestionario de validación no incida especialmente en aquellos
aspectos sobre los que ya existe un fuerte control periódico por parte de
organismos oficiales.
Un buen ejemplo de ello lo constituyen los parámetros de control de la
calidad del agua. Existe la obligatoriedad de que los técnicos de mantenimiento
de una piscina anoten en un libro oficial los resultados de realizar varias
mediciones al día de la calidad del agua del vaso. También existen fuertes
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
inspecciones de la administración pública en las que se revisan estos libros y
se toman muestras de agua. Estas inspecciones son susceptibles de provocar
multas e incluso el cierre temporal de la instalación. No consideramos
adecuado que nuestro cuestionario de validación incida en este mismo
aspecto: el carácter de orientación a la mejora de la calidad de la herramienta y
el uso voluntario de ella por parte de los gestores de instalaciones deportivas
no lo hacen recomendable. Requerir documentos oficiales para su inspección
no es el fin de esta herramienta. Otros ejemplos de esta misma situación puede
ser la comprobación de las fechas de caducidad de los extintores, o las
revisiones periódicas obligatorias de las instalaciones eléctricas.
El orden de realización de la auditoría atenderá al recorrido físico
razonable por la instalación. Las cuestiones se ordenarán en la herramienta
según un recorrido lógico por la instalación. Esta situación aprovecha además
que uno de los criterios de clasificación es la ubicación física.
Se comienza por los exteriores y el acceso a la instalación, continuando
por la recepción, zonas de público y oficinas. Se revisan a continuación los
espacios de deambulación y los vestuarios, para llegar al recinto de los vasos.
Revisado el vaso se pasa al botiquín (generalmente accesible desde el vaso) y
a las dependencias técnicas. Una vez revisadas todas estas zonas se tiene una
idea muy concreta sobre el estado de la instalación, por lo que se pueden
analizar las vías de evacuación y los servicios para emergencias. Una vez
revisados todos los espacios físicos, se analizarán las cuestiones de
organización.
El cuestionario de validación
Hemos construido el cuestionario de validación teniendo en cuenta todas
las consideraciones previas. Consta de 280 ítems (o cuestiones) que pueden
agruparse según distintos criterios. La Tabla 9 muestra el número de
cuestiones según los distintos criterios de clasificación. Mencionar que la suma
de los items de las categorías de cada criterio puede superar el número total de
items, ya que hay items que pertenecen a dos o más categorías.
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
Por ejemplo, para el criterio básico de seguridad y accesibilidad hay 236
items referidos a seguridad y 136 a accesibilidad, haciendo un total de 372
items; este valor es superior a los 280 items del cuestionario. Esto es debido a
que hay items que se corresponden con ambas categorías, seguridad y
accesibilidad. Este efecto afecta también a la columna de porcentajes de la
misma tabla.
Puede observarse que los propios porcentajes de cada categoría
aportan información sobre la complejidad en seguridad o accesibilidad de cada
una de ellas. Por ejemplo, en la clasificación por espacios, la zona de baño
(vasos) y los vestuarios tienen un alto número de cuestiones, seguidas de los
exteriores y accesos, las dependencias técnicas y las cuestiones organizativas.
Tabla 9.
Número de ítems del cuestionario de validación, por categorías
de los distintos criterios de clasificación
Básica
Seguridad
Accesibilidad
Total
Zona
Vaso
Vestuarios
Acceso
Técnicas
Organización
Deambulación
Público
Recepción
Emergencias
Botiquín
Evacuación
Oficinas
Total
Riesgo
Accidente
Emergencia
Intrusión
Violencia
Higiene
Edificio
Total
*
Ítems
236
136
372
Ítems
47
40
29
26
25
23
21
19
15
13
12
10
280
Ítems
101
68
26
18
119
17
350
%
84%
49%
133%
%
17%
14%
10%
9%
9%
8%
7%
7%
5%
5%
4%
4%
100%
*
%
43%
29%
11%
8%
50%
7%
148%
El porcentaje en cada categoría del criterio riesgo se calcula sobre el total de items relativos a
seguridad (236)
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
Un 49% son cuestiones de accesibilidad, frente al 84 que lo son de
seguridad. Puede notarse un fuerte solapamiento de cuestiones que atañen a
ambos conceptos, un 33%.
En cuanto a los tipos de riesgos en seguridad, las cuestiones de higiene
y salud son preponderantes (50%, sobre el total de ítems de seguridad),
seguidas de las relativas a accidentes (43%) y de emergencias (29%).
El cuestionario de validación completo se encuentra en el Anexo 1.
Muestra el documento que se utilizará para realizar una revisión de una
instalación. El Anexo 2 muestra el cuestionario en el formato interno de trabajo,
donde cada cuestión tiene asociada sus categorías en base a los distintos
criterios de clasificación.
Evaluación de las propiedades métricas de la herramienta:
validación del cuestionario
Las propiedades métricas de una herramienta como la que nos ocupa se
suele evaluar mediante estudios de validez y fiabilidad (Thomas & Nelson,
2007). Una prueba es válida si mide el constructo que pretende medir, y es
fiable si lo mide siempre de igual manera, dando medidas consistentes y
estables. En la validez de un cuestionario suelen analizarse tres componentes:
validez de contenido, de constructo y de criterio, y para la fiabilidad las
componentes más usuales son la concordancia interobservadores, la
consistencia interna y la estabilidad temporal (M. Martín, 2004).
Para evaluar las propiedades métricas de nuestro cuestionario de
validación se solicitó la revisión de éste por cuatro expertos: dos doctores en
ciencias del deporte con experiencia en creación de cuestionarios de validación
y dos expertos gestores de piscinas climatizadas. Además, se realizó una
prueba piloto en una instalación. La prueba piloto consistió en una primera
auditoría a la instalación mediante la herramienta desarrollada, que fue
realizada por el propio autor de este trabajo. Pasadas dos semanas se realizó
una segunda auditoría, a la misma instalación, y en este caso la auditoría la
realizó el propio gestor de la piscina climatizada. Posteriormente a la prueba
piloto, se realizó una entrevista con el gestor de la piscina auditada. Además de
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
utilizar la prueba piloto para evaluar las propiedades métricas de validez y
fiabilidad, ésta se utilizó también para revisar la redacción de los ítems y el
orden en el que se presentan en el cuestionario, realizándose algunas
modificaciones menores en este sentido, tras la entrevista con el gestor de la
piscina auditada.
La validez de constructo (establece si el instrumento refleja el concepto
que se quiere medir) y de contenido (establece si los ítems elegidos son
indicadores válidos de lo que se pretende medir) (Babbie, 1990; Goodwin,
1995) se ha evaluado mediante la revisión de los expertos. En todos los casos
los expertos reflejaron que el constructo era correcto. Al respecto del contenido,
los expertos revisaron los ítems y sus clasificaciones, dando su aprobación al
contenido y realizando sugerencias sobre la redacción de ciertas preguntas o
su forma de inclusión en el cuestionario de validación. Estas sugerencias
fueron tenidas en cuentas en la redacción y organización final del cuestionario.
Además, los resultados de la propia prueba piloto fue información significativa
para algunos de los expertos.
La validez de criterio establece la relación entre la herramienta y otras
formas de medición del constructo (Shuttleworth, 2009). No conocemos otro
instrumento para medir la seguridad en piscinas climatizadas de uso colectivo,
por lo que la validez de criterio no podemos verificarla. Únicamente podemos
aportar como argumento las fuentes de las que se ha obtenido la información, y
el método de saturación utilizado para seleccionar toda la información
relevante.
La fiabilidad fundamentalmente ha sido comprobada mediante la prueba
piloto. La estabilidad temporal (coherencia en los resultados con el paso de un
pequeño intervalo de tiempo) se evaluó con el método del test – retest; se
volvió a auditar la instalación pasadas dos semanas. Se evaluó el porcentaje
de ítems con respuesta distinta en el test y en el retest, resultando ser un 3%,
valor que consideramos muy adecuado. La concordancia interobservadores (en
nuestro caso, comparación del cuestionario de validación si se realiza por dos
auditores distintos) fue evaluada al tiempo que el test – retest, ya que el retest
además fue realizado por un auditor distinto. El porcentaje del 3% de
respuestas distintas vuelve a avalar la fiabilidad de la herramienta.
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4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
Como último parámetro de fiabilidad, la consistencia interna mide el
grado en el que los ítems de una escala se correlacionan, lo que indica en qué
magnitud los ítems miden el mismo constructo. Es habitual evaluar la
consistencia interna mediante el cálculo del Coeficiente de Cronbach. Sin
embargo, un análisis detallado de las características estadísticas de nuestra
herramienta nos indica que no es posible utilizar este coeficiente para nuestro
cuestionario de validación (Campo-Arias & Oviedo, 2008; Cervantes, 2005;
Charter, 1999). Para que el coeficiente de Cronbach sea válido el número de
muestras debe ser mayor que el de ítems del cuestionario (se suele
recomendar que sea 5 veces mayor); nuestro cuestionario de validación tiene
280 items, y el número de piscinas de uso colectivo analizables nunca superará
este valor). Por tanto, para la validez de contenido debemos basarnos de
nuevo en la opinión de la revisión realizada por los expertos, que resultó
positiva.
Auditores, revisores o investigadores necesarios
El cuestionario de validación está redactado en un estilo sencillo de
comprender y no contiene complejidades técnicas de importancia para su
aplicación. No obstante, la persona que vaya a realizar una revisión, auditoria o
estudio de investigación a una o varias piscinas debe tener cierta formación en
gestión deportiva, en piscinas climatizadas y en cuestiones de accesibilidad y
seguridad. Si no es el caso, se recomienda realizar previamente una sesión de
formación teórica y si es necesario, una auditoría de prueba a una piscina
climatizada.
Página | 153
4. Diseño de una herramienta cuantitativa…
Página | 154
Capítulo 5
Condiciones de seguridad en piscinas
climatizadas de uso colectivo y
titularidad municipal de la Comunidad
Autónoma de la Región de Murcia
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Página | 156
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
5 Condiciones de seguridad en piscinas
climatizadas de uso colectivo y
titularidad municipal de la Comunidad
Autónoma de la Región de Murcia
5.1 Planteamiento
Introducción
En el marco del deporte para todos, las actividades acuáticas en
piscinas climatizadas de uso colectivo han sufrido un gran aumento de usuarios
(Colado, 2005), acompañadas de un relevante crecimiento de instalaciones (L.
Gallardo, 2007). La seguridad y la accesibilidad son dos pilares fundamentales
del concepto de deporte para todos, y las piscinas climatizadas son un tipo de
instalaciones muy sensibles a ambas cuestiones: la seguridad en cuanto que
es una necesidad básica del ser humano, y la accesibilidad como objetivo de
uso universal de instalaciones y servicios deportivos con independencia de las
características individuales de las personas (Rovira-Beleta, 2003). La
disparidad de administraciones gestoras y reguladoras ha producido una
importante diversidad en los criterios constructivos, de mantenimiento y de
gestión de piscinas, afectando de diferente forma a la seguridad. Es
responsabilidad del gestor deportivo ofrecer, en la mayor medida posible,
seguridad (incluyendo la accesibilidad) a los usuarios de una instalación.
Creemos
que
es
importante
poder
obtener
una
visión
real,
independiente, rigurosa, comparable y equitativa de la seguridad de las
piscinas climatizadas de uso colectivo, y la investigación desarrollada y descrita
en los capítulos anteriores nos ha puesto en situación de poder utilizar el
conocimiento acumulado para estudiarla, por lo que dedicamos el presente
capítulo a ello.
Hemos escogido el ámbito geográfico de la Comunidad Autónoma de la
Región de Murcia, y las instalaciones deportivas de titularidad municipal. Las
piscinas de titularidad municipal forman un conjunto homogéneo y a la vez
Página | 157
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
diverso. Homogéneo porque los municipios confluyen en el objetivo de realizar
una oferta de deporte y actividad física de calidad para todos los ciudadanos,
así como de contribuir en el proceso de educación e integración a través del
deporte (M. Gónzalez, Manrique, & López, 2012). Y diverso porque las
competencias en la gestión del deporte son propias de cada municipio, si bien
están sujetas a las normativas comunes vigentes. No existe ningún estudio
sobre seguridad en piscinas climatizadas en la Región de Murcia, por lo que
nos parece de gran interés la realización de éste.
Utilizamos la herramienta descrita en el capítulo 4, y presentamos el
proceso completo del estudio realizado. El presente estudio cubre el objetivo 3,
presentado en el apartado 3 del Capítulo 2, es decir:
Analizar la seguridad en las piscinas climatizadas de uso
colectivo y titularidad municipal de la Comunidad Autónoma de la
Región de Murcia.
Metodología de la investigación
Una vez concluido el estudio exploratorio descrito en el capítulo 3,
hemos realizado en esta ocasión un estudio descriptivo de carácter
cuantitativo, ya que nuestra intención es describir de un modo sistemático las
características de unas instalaciones en función de unos datos seleccionados,
recogidos y procesados de forma rigurosa.
En concreto, realizamos una investigación descriptiva mediante
medición de variables, por lo que no se formulan hipótesis (Arias, 2006). Es un
estudio descriptivo del tipo cuantitativo, ya que nuestro interés es recoger datos
cuantificables sobre los distintos aspectos de seguridad de las instalaciones
estudiadas.
Población objeto de estudio
Las características generales de la Región de Murcia han quedado
descritas en el apartado 1 del Capítulo 2 de este documento. En lo que atañe a
la población de nuestro estudio, según el censo de instalaciones deportivas del
Página | 158
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Gobierno de la Comunidad (Segarra, 2006), la Región de Murcia cuenta con un
total de 43 piscinas climatizadas de titularidad municipal. Estas tienen distintos
modelos de gestión: concesión de la gestión, construcción y concesión de la
gestión, contratos de gestión y en algún caso gestión directa parcial.
De las 43 piscinas, a fecha de octubre de 2015 estaban operativas 37.
No obstante, si bien el dato del número de piscinas es en la actualidad muy
estable (no existen nuevas instalaciones en construcción), el número de
instalaciones operativas es variable. Debido a la crisis económica que sufre el
país, existen numerosas instalaciones con problemas de viabilidad económica.
Por ello, en la actualidad se están renegociando contratos de gestión,
produciendo cierres temporales de instalaciones, cierres estacionales, y cierres
definitivos. Además, dos instalaciones permanecen cerradas temporalmente
por motivos distintos a los económicos (reformas o remodelaciones).
Por tanto, la población objeto de estudio la centraremos en las 37
piscinas climatizadas operativas en la Región de Murcia.
Cabe señalar que el gobierno de la Comunidad Autónoma de la Región
de Murcia ha incluido las piscinas climatizadas entre los “valores guía de los
indicadores de funciones urbanas de la Región de Murcia” (Orden 20/sep,
2010). Estos indicadores se establecen en el marco de la estrategia territorial
europea para la realización de estudios de impacto territorial, y como
instrumentos de ordenación territorial o planeamiento urbanístico, para la
mejora de la calidad de vida de la población europea.
En concreto, se establecen 16 funciones urbanas, siendo la sexta la
función deportiva. La función deportiva consta de tres indicadores, uno
dedicado a pabellones deportivos (metros cuadrados por cada mil habitantes),
otro a áreas deportivas descubiertas, y un tercero referente a piscinas
climatizadas. Este último indicador establece como valor guía (como objetivo)
el de una piscina cubierta climatizada por cada 20.000 habitantes. Si
atendemos únicamente a piscinas de titularidad municipal, actualmente este
indicador es de 34.290 personas por piscina climatizada.
La Tabla 10 recoge la distribución de piscinas climatizadas de titularidad
municipal por municipios, incluyendo todas las instalaciones censadas, estén
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5. Condiciones de seguridad en piscinas …
operativas o no. La Tabla 11 presenta el ranking de municipios en función de
criterios como número de piscinas, habitantes por piscina, o superficie de
territorio por piscina. El examen de datos relativos a piscinas en función de
municipios no es totalmente significativo, ya que influye la forma de distribución
de la población en el territorio municipal. Sin embargo, sí consideramos que
son datos relevantes, debido a que las piscinas que estamos evaluando son de
titularidad municipal.
Debido a su mayor población, el municipio de Murcia es con diferencia el
que más instalaciones posee (10), seguido de Cartagena con 4 y de Lorca con
2. Sin embargo, estos tres municipios encabezan, junto con Molina de Segura,
la lista de municipios con mayor número de habitantes por piscina. La media
regional es de 34.290 habitantes por piscina, quedando estos tres municipios
con un número de habitantes por piscina sustancialmente mayor.
Observamos también que los municipios que no disponen de piscina
climatizada coinciden con aquellos de una población menor de 10.000
habitantes aproximadamente, salvo el caso de Mazarrón, que con 35.408
habitantes no posee piscina, y Blanca y Abanilla que disponiendo de unos
6.500 habitantes sí poseen una instalación. No obstante, debemos remarcar
que estos dos municipios no tenían sus piscinas operativas en el momento de
realización de este trabajo.
Otros municipios con instalaciones no operativas son: Santomera, que
con aproximadamente 16.000 habitantes posee una piscina de longitud
olímpica, Mula con 17.000 habitantes, Lorca que solo dispone de una de sus
dos instalaciones operativas debido al reciente terremoto sufrido, y Murcia, con
alguna instalación no operativa por reformas.
Si clasificamos los municipios por el número de habitantes por piscina,
encabezan el ranking Blanca y Abanilla con unos 6500 habitantes por piscina
(ya hemos comentado que estas instalaciones están actualmente cerradas),
seguidas de Ceutí, Beniel, Bullas, Abarán y Puerto Lumbreras, con menos de
15.000 habitantes por piscina. Este indicador aumenta linealmente hasta los
35.500 habitantes de Cieza, quedando en la parte más desfavorable de la tabla
Página | 160
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Alcantarilla, Murcia, Lorca, Cartagena y Molina, este último con 67.382
habitantes por piscina.
Observamos que tanto en la parte favorable como en la desfavorable,
los datos por municipios distan del valor medio regional (34.290) como del valor
guía establecido (20.000). La titularidad municipal y no provincial de este tipo
de instalaciones es responsable de este hecho.
El dato de superficie territorial por piscina nos da una idea aproximada
de la accesibilidad de toda su población a la instalación; municipios con una
superficie territorial grande por piscina indican dificultad de acceso de parte de
sus habitantes a este tipo de servicios, si bien depende de la distribución
territorial que la población afectada sea mayor o menor. Beniel, Ceutí,
Alcantarilla y Archena son los municipios más beneficiados, con entre 10 y 16
Km2 por piscina. En el otro extremo, Jumilla, Caravaca, Lorca, Mula y Yecla,
grandes municipios en extensión con entre 600 y 1000 Km2 por instalación.
Página | 161
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Tabla 10. Municipios de la Región de Murcia: datos generales y relativos a sus
piscinas climatizadas de uso colectivo
Municipio
Población Superficie Densidad Piscinas Pobl/pis Sup/Pis Operativa
Abanilla
6.569
236
27,88
1
6.569
236
No
Abarán
13.110
115
114,06
1
13.110
115
Águilas
34.828
252
138,33
1
34.828
252
Albudeite
1.404
17
82,49
0
Alcantarilla
41.381
16
2548,09
1
41.381
16
Aledo
1.025
50
20,61
0
Alguazas
9.460
24
398,48
0
Alhama de Murcia
20.915
312
67,13
1
20.915
312
Archena
18.496
16
1127,80
1
18.496
16
Beniel
11.198
10
1113,12
1
11.198
10
Blanca
6.493
87
74,36
1
6.493
87
No
Bullas
12.321
82
149,95
1
12.321
82
Calasparra
10.661
185
57,66
0
Campos del Río
2.220
47
46,94
0
Caravaca de la Cruz
26.415
859
30,76
1
26.415
859
Cartagena
216.655
558
388,21
4
54.164
140
Cehegín
16.248
299
54,29
1
16.248
299
Ceutí
10.881
10
1061,56
1
10.881
10
Cieza
35.351
367
96,32
1
35.351
367
Fortuna
10.098
149
67,62
0
Fuente Álamo
16.175
274
59,14
1
16.175
274
Jumilla
25.711
969
26,53
1
25.711
969
La Unión
19.009
25
766,80
1
19.009
25
Las Torres de Cotillas
21.608
39
557,19
1
21.608
39
Librilla
4.842
57
85,70
0
Lorca
92.865
1.675
55,43
2
46.433
838
1
Lorquí
6.983
16
443,37
0
Los Alcázares
16.251
20
819,93
1
16.251
20
Mazarrón
35.408
319
111,04
0
Molina de Segura
67.382
170
397,53
1
67.382
170
Moratalla
8.290
955
8,68
0
Mula
16.968
634
26,76
1
16.968
634
No
Murcia
441.354
886
498,14
10
44.135
89
9
Ojós
562
45
12,41
0
Pliego
4.051
29
137,65
0
Puerto Lumbreras
14.742
145
101,80
1
14.742
145
Ricote
1.452
87
16,75
0
San Javier
32.641
75
434,63
1
32.641
75
San Pedro del Pinatar
24.285
22
1088,04
1
24.285
22
Santomera
15.709
44
355,41
1
15.709
44
No
Torre Pacheco
33.911
189
179,04
1
33.911
189
Totana
30.549
289
105,73
1
30.549
289
Ulea
926
40
23,13
0
Villanueva del Segura
2.445
13
185,51
0
Yecla
34.601
606
57,13
1
34.601
606
Región de Murcia
1.474.449
11.313
130,33
43
34.290
263
2
2
Leyenda: Población en habitantes. Superficie en Km . Densidad en habitantes por Km . Pobl/pis en
2
habitantes por piscina climatizada de uso colectivo. Sup/pis en Km por piscina. Operativa: se indica un
“no” si solo hay una piscina y no está en funcionamiento. Si hay varias instalaciones se indica el número
de instalaciones en funcionamiento. Un valor vacío indica que todas las instalaciones están en
funcionamiento.
Página | 162
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Tabla 11. Ranking de municipios por número de piscinas, habitantes por
piscina y superficie del territorio municipal por piscina
Piscinas
Murcia
Cartagena
Lorca
Abanilla
Abarán
Águilas
Alcantarilla
Alhama …
Archena
Beniel
Blanca
Bullas
Caravaca …
Cehegín
Ceutí
Cieza
Fuente Álamo
Jumilla
La Unión
Las Torres …
Los Alcázares
Molina …
Mula
Puerto Lumbreras
San Javier
San Pedro …
Santomera
Torre Pacheco
Totana
Yecla
10
4
2
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
Pobl/pis
Molina …
Cartagena
Lorca
Murcia
Alcantarilla
Cieza
Águilas
Yecla
Torre Pacheco
San Javier
Totana
Caravaca …
Jumilla
San Pedro …
Las Torres …
Alhama …
La Unión
Archena
Mula
Los Alcázares
Cehegín
Fuente Álamo
Santomera
Puerto Lumbreras
Abarán
Bullas
Beniel
Ceutí
Abanilla
Blanca
67.382
54.164
46.433
44.135
41.381
35.351
34.828
34.601
33.911
32.641
30.549
26.415
25.711
24.285
21.608
20.915
19.009
18.496
16.968
16.251
16.248
16.175
15.709
14.742
13.110
12.321
11.198
10.881
6.569
6.493
Sup/Pis
Jumilla
Caravaca …
Lorca
Mula
Yecla
Cieza
Alhama …
Cehegín
Totana
Fuente Álamo
Águilas
Abanilla
Torre Pacheco
Molina …
Puerto Lumbreras
Cartagena
Abarán
Murcia
Blanca
Bullas
San Javier
Santomera
Las Torres …
La Unión
San Pedro …
Los Alcázares
Archena
Alcantarilla
Ceutí
Beniel
969
859
838
634
606
367
312
299
289
274
252
236
189
170
145
140
115
89
87
82
75
44
39
25
22
20
16
16
10
10
2
Leyenda: Pobl/pis en habitantes por piscina. Sup/pis en Km por piscina. Datos referidos únicamente a
piscinas climatizadas de titularidad municipal.
Página | 163
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Las características más importantes de las instalaciones se describen en
la Tabla 12. Destaca que únicamente existen dos piscinas de longitud olímpica,
que cuatro instalaciones tienen una cubierta textil desmontable, y que trece de
ellas carecen de vaso de enseñanza. Las denominaciones de las instalaciones
se muestran en la Tabla 13.
Tabla 12. Resumen de características de las piscinas objeto de estudio
Concepto
Cantidad
Instalaciones totales
43
Con vasos de enseñanza
Sin vasos de enseñanza
30
13
Con cubierta fija
Con cubierta textil desmontable
39
4
Con vaso principal de 25 metros
Con vaso principal de 50 metros
41
2
Instalaciones operativas
37
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5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Tabla 13. Denominación de las instalaciones objeto de estudio
Municipio
Denominación
Piscina municipal climatizada
Abarán
Piscina polideportivo municipal
Águilas
Piscina municipal cubierta
Alcantarilla
Piscina municipal cubierta
Alhama
Piscina municipal climatizada
Archena
Complejo deportivo
Beniel
Piscina municipal climatizada
Bullas
Centro deportivo
Caravaca
Centro deportivo Mediterráneo
Cartagena
Piscina municipal La Aljorra
Cartagena
Piscina municipal
Cartagena
Piscina municipal Pozo Estrecho
Cartagena
Pabellón de deportes “Loli de Gea”
Cehegín
Complejo deportivo Antonio Peñalver
Ceutí
Piscina climatizada Municipal
Cieza
Piscina municipal cubierta
Fuente Álamo
Piscina municipal climatizada
Jumilla
Piscina municipal cubierta
La Unión
Centro deportivo Las Torres
Las Torres de Cotillas
Piscina municipal de San Antonio
Lorca
Piscina polideportivo municipal
Los Alcázares
Piscina Santiago Vidal
Molina
Centro deportivo Cabezo de Torres
Murcia
Centro deportivo Inacua
Murcia
Centro deportivo JC1
Murcia
Centro deportivo La Flota
Murcia
Centro deportivo Verdolay
Murcia
Piscina polideportivo El Palmar
Murcia
Piscina municipal Infante J. Manuel
Murcia
Piscina municipal Puente Tocinos
Murcia
Piscina municipal Espinardo
Murcia
Piscina municipal climatizada
Puerto Lumbreras
Piscina polideportivo pdm
San Javier
Piscina municipal climatizada
San Pedro del Pinatar
Piscina municipal cubierta
Torre Pacheco
Centro deportivo Move
Totana
Piscina cubierta municipal
Yecla
Página | 165
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Página | 166
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
5.2 La organización y el trabajo de campo
La muestra del estudio
El muestreo es una herramienta estadística de la investigación científica
que sirve para seleccionar una muestra a partir de una población (Ritchey,
2008). Con la elección de una muestra se espera que sus propiedades sean
extrapolables a toda la población, para lo que se deben estimar también los
márgenes de error de las estimaciones que se realicen. Entre las técnicas de
muestreo, las dos grandes clasificaciones son los muestreos aleatorios y no
aleatorios. En el primero todos los elementos de la población tienen alguna
probabilidad de ser escogidos, siendo el muestreo aleatorio simple es el más
aconsejable. Cuando existen grupos bien definidos dentro de la muestra, puede
realizarse muestreo estratificado o por conglomerados, dependiendo del
problema a abordar (Ritchey, 2008).
El tamaño de la muestra
Para el cálculo del tamaño de la muestra utilizaremos la fórmula habitual
indicada en la Expresión 1
Expresión 1. Tamaño de la muestra
donde :
n es el tamaño de la muestra que se quiere calcular
N es el tamaño del universo
Z es la desviación del valor medio que se acepta para lograr el nivel de
confianza deseado. En función del nivel de confianza que se desee,
se usará un valor determinado que viene dado por la forma que tiene
la distribución de Gauss. Los valores más frecuentes son:
Nivel de confianza 90% -> Z=1,645
Nivel de confianza 95% -> Z=1,96
Nivel de confianza 99% -> Z=2,575
e es el margen de error máximo que se desea admitir (p.e. 5%)
p es la heterogeneidad: proporción que se espera encontrar. Como regla
general se usa p=50% si no se tiene ninguna información sobre el
valor que se espera encontrar.
Página | 167
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Para nuestro problema y distintos niveles de confianza y error,
obtenemos los tamaños de muestra que se presentan en la Tabla 14,
considerando como población únicamente las piscinas operativas.
Tabla 14. Tamaños de la muestra con distintos niveles de confianza
y de error, considerando una población de 37 instalaciones
Error / confianza
90%
95%
99%
5%
33
34
36
3%
36
36
37
1%
37
37
37
Observamos que los valores del tamaño muestral oscilan entre las 33 y
las 37 piscinas para valores de error y confianza habituales, es decir, la
totalidad de las instalaciones, o dejar únicamente 4 piscinas fuera de la
muestra. Esto es debido al bajo número de instalaciones con que contamos.
Ante esta situación nos ha parecido más aconsejable auditar todas las
instalaciones, es decir, toda la población. De este modo hemos obtenido
conclusiones tanto sobre la seguridad del conjunto de instalaciones como de
cada una de ellas individualmente, cumpliendo en este segundo caso la misión
de servir como auditoría individual.
El Instrumento de recogida de datos
Para la recogida de datos se utilizará el cuestionario de validación
presentado en el capítulo anterior. En dicho capítulo se justifica la utilización de
este tipo de instrumento para analizar la seguridad de instalaciones.
Anonimato de las instalaciones
En el presente estudio, además de resultados globales sobre el conjunto
de instalaciones, se presentan datos de instalaciones individuales. Se ha
optado por mantener el anonimato de las instalaciones auditadas. Esto
facilitará la relación de confianza con los gestores privados y públicos, evitando
situaciones de competencia y buscando la aportación de información fidedigna.
Página | 168
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
A cada instalación se le ha asignado un nombre de una ciudad, sede de
Juegos Olímpicos de verano y de invierno. La asignación de ciudades a
piscinas climatizadas ha sido totalmente aleatoria. La relación de ciudades se
presenta en la Tabla 15. Además, a cada instalación se le asignó un código
numérico para uso interno.
Tabla 15. Relación de nombres de sedes olímpicas utilizados para nombrar las
instalaciones estudiadas y así mantener su anonimato
Atenas
París
San Luis
Londres
Estocolmo
Amberes
Ámsterdam
Los Ángeles
Berlín
Helsinki
Melbourne
Roma
Tokio
México
Múnich
Montreal
Moscú
Seúl
Barcelona
Atlanta
Sídney
Pekín
Río
Innsbruck
Grenoble
Sapporo
Chamonix
Lake Placid
Sarajevo
Calgary
Albertville
Lillehammer
Nagano
Salt Lake
Turín
Vancouver
Sochi
Codificación del cuestionario
Para realizar la revisión de una instalación se usará un cuestionario de
validación en papel. Se ha valorado la posibilidad de construir un cuestionario
digital, para realizar la revisión mediante dispositivos tablet, pero se ha
desestimado. La construcción del cuestionario digital, la realización de la
pasarela de datos para incorporarlos al modelo digital para el tratamiento de la
información, requiere más tiempo que mecanizar los cuestionarios una vez
confeccionados. Además, la necesidad de disponer de un número determinado
de tablets para la visita simultánea a instalaciones es otro motivo para
desechar esta opción.
Sin embargo, la opción de utilizar un cuestionario digital sí es
recomendable en el caso de la utilización de la herramienta de forma regulada
y habitual como sistema de revisión de la seguridad de instalaciones.
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5. Condiciones de seguridad en piscinas …
El modelo digital
Los datos obtenidos de las auditorías se digitalizaron para su
procesamiento, representándolos en una hoja de cálculo. Cada fila de la hoja
se corresponde con una variable del cuestionario de validación. La hoja tiene la
estructura de datos que se muestra en la Figura 2, y la descripción de los
campos se da en la Tabla 16.
N
Z
Zn
Seg
Ace
Aci
Em
Int
Vio
Hig
Ace
I1
I2
I3
…
…
…
I36
I37
Figura 2. Estructura de datos utilizada la explotación del cuestionario de
validación.
Tabla 16. Descripción de la estructura de datos utilizada para la explotación del
cuestionario de validación
1
2
3
Campo
N
Z
Zn
Nombre
Número
Zona
Número en zona
Descripción
Número de cuestión
Zona de la instalación
Número relativo a la zona
4
5
6
7
8
9
10
11
Seg
Ace
Aci
Eme
Int
Vio
Hig
Ace
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Emergencias
Intrusión
Violencia
Higiene
Accesibilidad
Clasif: básica. Criterio: Seguridad. Si o No.
Clasif: básica. Criterio: Accesibilidad. Si o No.
Clasif: riesgo. Criterio: Accidente. Si o No.
Clasif: riesgo. Criterio: Emergencias. Si o No.
Clasif: riesgo. Criterio: Intrusión. Si o No.
Clasif: riesgo. Criterio: Violencia. Si o No.
Clasif: riesgo. Criterio: Higiene y salud. Si o No.
Clasif: riesgo. Criterio: Accesibilidad. Si o No
[0,1]
[0,1]
[0,1]
[0,1]
[0,1]
[0,1]
[0,1]
[0,1]
12
13
14
15
..
I1
I2
I3
I4
…
…
…
I 36
I 37
Instalación 1
Instalación 2
Instalación 3
Instalación 4
…
…
…
Instalación 36
Instalación 37
Instalación Nº 1
Instalación Nº 2
Instalación Nº 3
Instalación Nº 4
[0,1]
[0,1]
[0,1]
[0,1]
[0,1]
[0,1]
[0,1]
[0,1]
[0,1]
..
..
48
49
Página | 170
Cumple o no cumple
Cumple o no cumple
Cumple o no cumple
Cumple o no cumple
…
…
…
Instalación Nº 36
Instalación Nº 37
Cumple o no cumple
Cumple o no cumple
Valores
[1..280]
[1..12]
[1..42]
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
El campo N sirve para ordenar e identificar las cuestiones, siendo el
número de orden global (de 1 a 280 preguntas). Con Z y Zn se establece el
criterio de clasificación de ubicación espacial, siendo Z el número de zona y Zn
El orden de la cuestión (variable) dentro de la zona. El orden de estas dos
columnas establece además el recorrido por la instalación en la visita de
auditoría. Las zonas son las que se listan en la Tabla 17.
Tabla 17. Zonas del criterio de clasificación de ubicación espacial
Z
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
Zona de la instalación
Exteriores y zona de acceso a la instalación
Hall y recepción
Zonas para público y graderíos
Dependencias administrativas
Espacios de deambulación
Vestuarios y aseos para nadadores
Vaso principal y secundarios
Botiquín y primeros auxilios
Dependencias técnicas
Vías de evacuación
Emergencias y protección ante incendios
Cuestiones organizativas
Clave
Ace
Rec
Pub
Ofi
Deam
Vest
Vaso
Boti
Tec
Evac
Eme
Org
Denominación
Acceso
Recepción
Público
Oficinas
Deambulación
Vestuarios
Vaso
Botiquín
Técnicas
Evacuación
Emergencias
Organización
Los campos 12 al 49 hacen referencia a cada una de las 37
instalaciones. Un valor numérico 1 en una casilla indica que una cuestión de la
fila se cumple por la instalación identificada en la columna. Un valor 0 indica
que no se cumple. Con esta codificación binaria es muy sencillo calcular el
número de cuestiones cumplidas por una instalación o el número de
instalaciones que cumplen una cuestión, con tan solo sumar la columna o la fila
correspondiente.
Para calcular porcentajes de cumplimiento del cuestionario de una
instalación, o porcentajes de instalaciones que cumplen una cuestión,
simplemente se debe dividir esta suma por el número de cuestiones o de
instalaciones respectivamente. Cabe mencionar que para el cálculo del número
de cuestiones deben tenerse en cuenta los conjuntos de datos “no aplicables”
comentados en el apartado 3 del Capítulo 4.
Los campos 4 y 5 hacen referencia al criterio de clasificación básico de
accesibilidad / seguridad. La columna 4 corresponde a la seguridad y la 5 a la
Página | 171
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
accesibilidad. Un 1 en una casilla indica que la cuestión (variable) corresponde
con la categoría y un 0 que no corresponde. Se ha escogido esta forma de
codificación por dos motivos: una misma cuestión puede corresponder a las
dos categorías, codificándose entonces un 1 tanto en la casilla correspondiente
a la seguridad como a la accesibilidad. Además, con esta codificación 1 / 0 es
sencillo calcular el número de cuestiones que, de un grupo, corresponden a
una
categoría,
simplemente
obteniendo
la
suma
de
la
columna
correspondiente.
Los campos 6 al 11 siguen el mismo esquema que los anteriores, pero
para el criterio de clasificación “tipo de riesgo”. Un 1 en la columna
correspondiente a un riesgo significa que la cuestión es relativa a él, y un 0 que
no lo es. Al igual que en el criterio básico, de este modo una cuestión puede
ser relativa a varios riesgos, pudiéndose asimismo hacer ciertos cálculos de
forma sencilla. Todos los riesgos son relativos a cuestiones de seguridad,
añadiendo un único campo, el 11, para agrupar todas las cuestiones de
accesibilidad.
La hoja de cálculo se ha procesado en el software libre calc, aunque
puede ser manipulada en cualquier otra aplicación que interprete el formato csv
(campos separados por el identificador “;”), como puede ser el software
comercial excel.
Procedimiento de recogida de información
La recogida de información se ha realizado en dos etapas. La primera de
ellas fue entre junio y julio de 2013, y fue realizada directamente por el autor de
este trabajo. De este modo se adquirió experiencia en el proceso. Se auditaron
las 9 instalaciones del municipio de Murcia, que forman un conjunto
homogéneo. El procedimiento ha sido el siguiente:
-
Coordinación con la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de
Murcia: contacto con la Concejalía, presentación del estudio,
solicitud y obtención de la autorización para la realización de las
auditorías, y determinación de la persona de contacto en la
concejalía.
Página | 172
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
-
Contacto paulatino con las instalaciones a visitar. La Concejalía de
Deportes informa a los gestores de las piscinas climatizadas de la
realización del estudio. Días antes de cada visita, el auditor realiza
una llamada telefónica al gestor deportivo correspondiente para
presentarse y concertar día y hora para la visita.
-
Visita a la instalación. Presentación al gestor deportivo, y
realización de la visita a la instalación para la cumplimentación del
cuestionario de validación.
-
Digitalización del cuestionario. Inmediato tras cada visita, de forma
que se puedan realizar comprobaciones y matizaciones sobre las
respuestas al cuestionario.
-
Revisión
global
de
los
cuestionarios.
Para
comprobar
la
consistencia de los datos.
Se utilizaron preferentemente horarios de media mañana, horarios en los
que existían usuarios en la instalación, pero no entorpeciendo la actividad en
los horarios de mayor afluencia (horarios de tarde y noche en los turnos de
escolares y adultos).
En el momento de iniciar la visita se realizó una pequeña reunión con el
gestor deportivo, en la que se explicó detalladamente el objeto del estudio y el
anonimato de las piscinas, así como la no finalidad de inspección ni de
publicación de clasificaciones de instalaciones. Esta pequeña reunión ha sido
de importancia, ya que ha servido para entablar confianza con el gestor
deportivo y distinguir nuestra visita de las inspecciones oficiales que reciben
estas instalaciones, relajando las relaciones y obteniendo así información
fidedigna.
Terminada la breve entrevista con el gestor deportivo, éste muestra la
instalación al auditor y facilita el acceso libre a todas las zonas (salvo la de
maquinaria). El auditor realiza libremente el recorrido por la instalación (salvo
en algún caso excepcional), cumplimentando el cuestionario. En la fase final de
la visita, el auditor se hace acompañar del técnico de mantenimiento (o el
gestor deportivo) para visitar las salas de maquinaria, y finalizar la visita
Página | 173
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
consultando tanto las cuestiones sobre las que existan dudas como las
cuestiones finales referentes a la organización de la instalación.
La acogida del personal de las instalaciones fue en todos los casos
positiva y colaboradora. El efecto de la entrevista inicial de presentación y
explicación, en el tono amable y distendido, facilitó en gran medida la
deambulación libre por las dependencias de la instalación, la colaboración de
socorristas, administrativos, personal de recepción y de mantenimiento.
En la mayoría de los casos se pudo realizar la visita libre por las
dependencias, según lo planeado. En algún caso excepcional, y entendiendo
que fue por criterios de amabilidad más que de supervisión, el encuestador fue
acompañado durante toda la visita por el responsable de la instalación.
Aunque hubiera sido deseable, no se realizaron fotografías de los
detalles de las instalaciones. La realización de fotografías produce presión
sobre los gestores de piscinas, dificultando el buen desarrollo de la auditoría.
La localización de la instalación se realizó siguiendo las indicaciones viales,
comprobando así algunos aspectos del cuestionario.
Para la segunda etapa, las 28 instalaciones restantes, dispersas por
toda la Comunidad Autónoma, se contó con la colaboración voluntaria de
alumnos de tercero del Grado en Ciencias del Deporte de la Universidad de
Murcia, en el marco de las asignaturas de Gestión Deportiva e Instalaciones
Deportivas. Se llevó a cabo entre septiembre y diciembre de 2014.
Se realizó una selección de alumnos voluntarios y se les impartió un
seminario de formación sobre el objetivo del trabajo y sobre la forma de realizar
la revisión de las instalaciones. Entre ellos, se nombraron cuatro alumnos
coordinadores. Cada coordinador recibió formación y atención especial, y se
encargaron de servir de enlace entre los alumnos y el autor de este trabajo,
velando por la homogeneidad de criterios y solucionando dudas puntuales.
Todos los alumnos dispusieron de contacto directo con el autor de este trabajo.
Teléfono personal, email y mensajería móvil instantánea.
Cada alumno recibió una carpeta que contenía: instrucciones detalladas
sobre el procedimiento a seguir, la forma de realización de la revisión y datos
de contacto con el autor de este trabajo ante cualquier necesidad. Relación de
Página | 174
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
piscinas climatizadas, con las direcciones geográficas y los códigos de las
instalaciones. Cuestionarios de validación preparados para ser rellenados.
Carta de presentación firmada para entregar al responsable de la instalación,
en la que se detalla los objetivos del trabajo, el anonimato de las instalaciones
auditadas, y los datos del responsable del estudio.
En ocasiones los gestores o responsables de las instalaciones tuvieron
reticencias para autorizar la realización de la autoría. En estos casos, el alumno
se ponía en contacto con el autor de este trabajo, que telefónicamente, por
correo electrónico o presencialmente daba las explicaciones pertinentes y
solucionaba el problema. Podemos decir que en todo el proceso de recogida de
información la parte con mayores dificultades ha sido la de obtención de las
autorizaciones para el acceso. Finalmente, todas las instalaciones han podido
ser revisadas.
Los cuestionarios de validación rellenos han sido digitalizados por el
autor de este trabajo. La digitalización fue acompañada de un control
exhaustivo del cuestionario para detectar posibles irregularidades. El control
alerta de posibles irregularidades si:
-
El cuestionario carece de datos identificativos (código de instalación,
fecha de revisión, autor de la revisión)
-
El cuestionario tiene cuestiones sin cumplimentar.
-
Existe un número muy elevado de cuestiones afirmativas, o
secciones con todas las cuestiones afirmativas.
-
Sensación de marcado aleatorio de cuestiones.
-
El cuestionario está marcado en distintas zonas con diferente tinta, o
las marcas dan sensación de haber sido hechas precipitadamente.
-
Algunos datos clave son inconsistentes con respecto a la instalación.
Para comprobar esto, para todas las instalaciones se contactó con
una persona conocedora de la instalación, y se le preguntaron
cuestiones claves para esa instalación. Y en algunos casos el propio
autor de este trabajo visitó las instalaciones como usuario. Algunos
ejemplos de cuestiones clave son: disponibilidad de gradas y
tipología de estas (3). Disponibilidad de vaso de enseñanza (7.46).
Existencia de máquinas de vending con botes o botellas (2.15).
Página | 175
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Existencia de ascensores (5.18). Existencia de cabina de vestuario
individual (6.03). Existencia de secadores de pelo (6.36). Existencia
de señalización acústica en vías de evacuación (10.07). Existencia
de rociadores automáticos (11.03).
En caso de alerta en la realización del control, se procedió a hablar con
el coordinador y con el propio alumno auditor. Con el auditor para recabar
referencias sobre el alumno; su comportamiento general, si ha hecho preguntas
al coordinador, forma de realizar el proceso, relación con la instalación,
comentarios a título personal, etc. Con el alumno para comprobar cómo se ha
realizado del proceso, quién ha acompañado al auditor durante la revisión, si
ha habido presiones en la confección del cuestionario, exceso de familiaridad
con la instalación, etc.
Si tras estas entrevistas no quedó clara la veracidad de la información
recogida, se procedió a repetir la auditoría, en este caso por el propio autor de
este trabajo. De las 28 instalaciones no han pasado el control 7, y tras la
entrevista con coordinador y alumno hubo que repetir las revisiones de 5
piscinas.
Finalizado el proceso de digitalización, control y revisión de los
cuestionarios, se procedió a la conformación definitiva de la base de datos,
comprobación de coherencia de los datos (totalizaciones, agrupaciones y
comprobaciones aleatorias de datos individuales)
Página | 176
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
5.3 Resultados
En este apartado se presentan, a modo de resumen, los resultados más
relevantes. El análisis de estos resultados, su pormenorización, y su discusión
e interpretación se presentan en el siguiente apartado.
La Tabla 18 muestra los estadísticos descriptivos más destacados.
Como medidas de posición central utilizamos la media (en este caso la media
poblacional: la suma de todos los valores de la población dividido por el número
total de datos), la mediana (el elemento de un conjunto de datos ordenados
que deja a izquierda y derecha la mitad de valores), y la moda (el valor más
repetido). Para el caso de la moda, debido al bajo tamaño de la población,
utilizamos la moda en redondeos al 5% de cumplimiento.
Como medidas de dispersión, mostramos el mínimo, máximo y rango
(diferencia entre el valor máximo y mínimo de un conjunto de datos) así como
la desviación estándar (el promedio de las desviaciones de los datos de la
población, ilustrado en la Expresión 2). El Coeficiente de Variación de Pearson
(Expresión 3) mide la variación de los datos respecto a la media, sin tener en
cuenta las unidades en la que esta última está. Toma valores entre 0 y 1; si el
coeficiente es próximo al 0, significa que existe poca variabilidad en los datos y
es una muestra muy compacta. En cambio, si tienden a 1 es una muestra muy
dispersa. Esta característica lo hace una medida de dispersión muy ilustrativa,
motivo por el que lo hemos incluido.
∑ Expresión 2. Desviación estándar
|̅ |
Expresión 3. Coeficiente de Variación de Pearson
Para analizar la forma de la distribución de los datos de las variables de
interés utilizamos la curtosis y la asimetría. La curtosis es una medida que mide
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5. Condiciones de seguridad en piscinas …
cuán escarpada o achatada está la curva de la distribución de los datos. Indica
la cantidad de datos que hay cercanos al valor medio, de manera que a mayor
grado de curtosis, más escarpada será la forma de la curva. Se mide utilizando
las cuartas potencias de la diferencia entre la media y cada dato y la desviación
estándar. La Expresión 4 muestra la formulación de la curtosis. Un valor
cercano a cero (+-0,5) indica semejanza con la distribución normal. Un valor
mayor que cero indica una curva más escarpada, y uno menor que cero más
achatada, tal y como se muestra en la Figura 3.
Por su parte, la asimetría (Expresión 5) indica cuán simétrica es la
distribución de una variable respecto a la media aritmética, mostrando si hay el
mismo número de elementos a izquierda y derecha de la media. Como se
observa en la Figura 4, en la asimetría negativa existen mayor cantidad de
datos con valores inferiores a la media, y en la asimetría positiva existen más
datos con valores superiores. Si existe simetría quiere decir que hay el mismo
número de elementos a izquierda y derecha de la media, y en este caso
coinciden la media, la mediana y la moda.
∑
̅ 3
Expresión 4. Curtosis
Figura 3. Distintos tipos de curtosis.
1 ∑& ̅ %
í" ∙
%
Página | 178
Expresión 5. Asimetría
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Figura 4. Tipos de asimetría.
La Tabla 19 presenta, ordenado de menor a mayor, el grado de
cumplimiento del cuestionario para cada una de las instalaciones, en valor
absoluto y porcentaje. La Tabla 21 desglosa los resultados de cada instalación
según la clasificación básica de seguridad / accesibilidad, y la Tabla 20 sus
estadísticos descriptivos. La Tabla 22 y la Tabla 23 según el criterio de
clasificación de riesgo, y las tablas Tabla 24, Tabla 25, Tabla 26 y Tabla 27
según el criterio de clasificación de zona de la instalación. En el caso de la
Tabla 24 no se han calculado los estadísticos descriptivos zona de público por
ser un número muy bajo de instalaciones las que poseen dichas zonas.
Tabla 18. Estadísticos descriptivos del cuestionario de validación
Media del grado de cumplimiento
69%
Mediana del grado de cumplimiento
71%
Moda en bloques de 5%
70-74
Desviación estándar
Coeficiente de Variación de Pearson
Mínimo
Máximo
Rango
8,58%
0.12
44
82
38
Curtosis
Asimetría
2,05
-1,38
Página | 179
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Tabla 19. Cumplimiento global del cuestionario por instalaciones
Aciertos
Totales
Instalación
Cumplim
Estocolmo
44%
109
248
Nagano
46%
113
248
Vancouver
51%
127
248
Moscú
57%
156
274
Calgary
63%
175
280
Barcelona
63%
160
253
Los Ángeles
64%
176
275
Berlín
64%
180
280
Montreal
64%
163
253
Río
65%
165
253
San Luis
65%
180
275
Lillehammer
68%
176
259
Londres
68%
172
253
Turín
68%
172
253
Sapporo
69%
171
248
Helsinki
69%
172
248
Grenoble
70%
176
253
París
71%
175
248
Roma
71%
179
253
Albertville
71%
184
259
Sydney
72%
182
253
México
72%
202
280
Sochi
73%
205
280
Amberes
74%
206
280
Chamonix
74%
206
280
Atenas
74%
187
253
Innsbruck
74%
208
280
Seúl
74%
208
280
Tokio
75%
186
248
Atlanta
75%
191
253
Lake Placid
76%
212
280
Salt Lake
76%
214
280
Sarajevo
77%
208
269
Ámsterdam
78%
217
280
Munich
78%
198
253
Melbourne
79%
221
280
Pekín
82%
229
280
Leyenda: Cumplim: Porcentaje de cumplimiento del cuestionario. Aciertos:
Número de valores “cumple” en el cuestionario. Totales: Número total de
cuestiones a considerar (se descartan los bloques de cuestiones no aplicables).
Página | 180
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Tabla 20. Estadísticos descriptivos del cuestionario según el criterio de
clasificación básico de seguridad / accesibilidad
Media
Desv. estándar
C.V. Pearson
Mínimo
Máximo
Rango
Curtosis
Asimetría
Global
69%
8,57%
0,12
44%
82%
38%
2,05
-1,38
Seguridad
72%
8,41%
0.12
46%
82%
36%
3,03
-1,69
Accesibilidad
63%
9,93%
0,16%
37%
80%
43%
0,83
-0,81
Tabla 21. Cumplimiento del cuestionario según el criterio de clasificación
básico de seguridad / accesibilidad, por instalaciones
Instalación
Global*
Seguridad*
Accesibilidad*
Estocolmo
44%
46%
38%
Nagano
46%
47%
42%
Vancouver
51%
56%
37%
Moscú
57%
59%
53%
Calgary
63%
66%
54%
Barcelona
63%
67%
55%
Los Ángeles
64%
69%
57%
Berlín
64%
66%
57%
Montreal
64%
67%
56%
Río
65%
69%
57%
San Luis
65%
68%
53%
Lillehammer
68%
72%
57%
Londres
68%
72%
61%
Turín
68%
73%
60%
Sapporo
69%
72%
62%
Helsinki
69%
74%
63%
Grenoble
70%
72%
61%
París
71%
74%
68%
Roma
71%
72%
66%
Albertville
71%
74%
63%
Sydney
72%
75%
61%
México
72%
75%
68%
Sochi
73%
76%
68%
Chamonix
74%
75%
68%
Amberes
74%
76%
66%
Atenas
74%
75%
68%
Innsbruck
74%
80%
65%
Seúl
74%
77%
68%
Tokio
75%
77%
70%
Atlanta
75%
78%
70%
Lake Placid
76%
79%
68%
Salt Lake
76%
78%
74%
Sarajevo
77%
78%
77%
Ámsterdam
78%
81%
71%
Munich
78%
79%
74%
Melbourne
79%
81%
76%
Pekín
82%
82%
80%
* porcentaje de cumplimiento sobre el total de preguntas aplicables para cada instalación
Página | 181
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Tabla 22. Estadísticos descriptivos según el criterio de clasificación de
riesgo
Global
Aci
Eme
Int
Vio
Hig
Edi
Media
69%
75%
60%
52%
49%
79%
88%
Desv. estándar
8,6%
7,7
10,7
13,0
16,8
8,9
13,4
C.V. Pearson
0,12
0,10
0,18
0,25
0,34
0,11
0,15
Mínimo
44%
51
28
27
17
46
50
Máximo
82%
85
75
73
73
89
100
Rango
38%
34
47
46
56
43
50
Curtosis
2,1
3,1
1,3
-1,1
-1,0
5,1
2,4
Asimetría
-1,38
-1,58
-1,27
-0,48
-0,34
-1,98
-1,65
Leyenda: Aci: accidente; Eme: emergencias; Int: intrusión; Vio: violencia; Hig:higiene;
Edi: edificación
Tabla 23. Cumplimiento del cuestionario según el criterio de clasificación de
riesgo, por instalaciones
Instalación
Global Aci
Eme
Int
Vio
Hig
Edi
Estocolmo
44%
52%
28%
30%
36%
53%
50%
Nagano
46%
51%
42%
35%
27%
46%
50%
Vancouver
51%
67%
37%
30%
27%
68%
75%
Moscú
57%
62%
39%
27%
17%
71%
82%
Calgary
63%
77%
46%
35%
22%
75%
88%
Barcelona
63%
68%
55%
52%
55%
75%
100%
Los Ángeles
64%
75%
60%
54%
67%
76%
71%
Berlín
64%
70%
56%
42%
33%
71%
76%
Montreal
64%
67%
58%
39%
36%
72%
94%
Río
65%
74%
65%
43%
45%
75%
56%
San Luis
65%
80%
51%
46%
44%
84%
88%
Lillehammer
68%
71%
57%
61%
45%
82%
100%
Londres
68%
77%
60%
30%
27%
81%
88%
Turín
68%
79%
63%
48%
73%
77%
100%
Sapporo
69%
75%
62%
39%
18%
74%
100%
Helsinki
69%
84%
62%
39%
45%
77%
94%
Grenoble
70%
71%
45%
61%
45%
85%
88%
París
71%
76%
63%
52%
36%
75%
94%
Roma
71%
77%
53%
35%
27%
83%
94%
Albertville
71%
71%
64%
65%
73%
80%
94%
Sydney
72%
76%
67%
65%
55%
79%
100%
México
72%
82%
68%
58%
67%
83%
82%
Sochi
73%
77%
60%
62%
56%
85%
82%
Chamonix
74%
75%
66%
54%
61%
80%
94%
Amberes
74%
78%
66%
62%
67%
83%
88%
Atenas
74%
73%
68%
61%
55%
75%
81%
Innsbruck
74%
79%
68%
62%
61%
86%
82%
Seúl
74%
76%
66%
58%
61%
83%
100%
Tokio
75%
77%
67%
57%
55%
82%
94%
Atlanta
75%
77%
67%
57%
45%
83%
94%
Lake Placid
76%
79%
71%
69%
72%
88%
94%
Salt Lake
76%
79%
68%
65%
72%
83%
94%
Sarajevo
77%
82%
64%
62%
61%
87%
94%
Ámsterdam
78%
85%
66%
62%
56%
89%
100%
Munich
78%
83%
67%
65%
55%
84%
100%
Melbourne
79%
81%
74%
62%
56%
87%
100%
Pekín
82%
84%
75%
73%
72%
88%
94%
Leyenda:
Aci: accidente; Eme: emergencias; Int: intrusión; Vio: violencia; Hig:higiene;
Edi: edificación
Página | 182
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Tabla 24. Estadísticos descriptivos según el criterio de clasificación de
zona de la instalación (I)
Global
Ace
Rec
Pub
Ofi
Deam
Media
69%
61%
78%
82%
78%
Desv. estándar
8,6%
14,3
9,5
16,9
12,2
C.V Pearson
0,12
0,23
0,12
0,20
0,16
Mínimo
44%
24
63
20
47
Máximo
82%
83
100
100
100
Rango
38%
55
37
80
53
Curtosis
2,1
-0,2
-0,3
4,6
-0,2
Asimetría
-1,38
-0,43
0,12
-1,76
-0,42
Leyenda: Ace: accesos; Rec: recepción; Pub: público; Ofi: oficinas; Deam:
deambulación; Vest:vestuarios
Vest
71%
10,6
0,15
43
90
47
0,8
-0,63
Tabla 25. Cumplimiento del cuestionario según el criterio de clasificación de
zona de la instalación (I), por instalaciones
Instalación
Global Ace
Rec
Pub
Ofi
Deam Vest
Estocolmo
44%
45%
63%
80%
47%
Nagano
46%
31%
68%
20%
65%
Vancouver
51%
28%
68%
40%
59%
Moscú
57%
48%
74%
33%
80%
82%
Calgary
63%
48%
79%
33%
70%
70%
Barcelona
63%
55%
68%
60%
71%
Los Ángeles
64%
41%
74%
52%
70%
57%
Berlín
64%
62%
84%
48%
70%
65%
Montreal
64%
62%
63%
80%
76%
Río
65%
34%
79%
100%
71%
San Luis
65%
62%
74%
29%
80%
65%
Lillehammer
68%
48%
79%
80%
70%
Londres
68%
59%
63%
70%
88%
Turín
68%
59%
63%
70%
82%
Sapporo
69%
66%
79%
90%
82%
Helsinki
69%
48%
68%
100%
94%
Grenoble
70%
76%
79%
90%
82%
París
71%
55%
74%
100%
88%
Roma
71%
69%
63%
90%
82%
Albertville
71%
62%
84%
80%
78%
Sydney
72%
55%
79%
90%
82%
México
72%
59%
84%
43%
100%
83%
Sochi
73%
59%
79%
81%
90%
74%
Chamonix
74%
59%
74%
81%
90%
87%
Amberes
74%
76%
79%
67%
100%
74%
Atenas
74%
76%
84%
80%
76%
Innsbruck
74%
62%
95%
43%
70%
65%
Seúl
74%
69%
95%
52%
80%
96%
Tokio
75%
66%
84%
80%
82%
Atlanta
75%
79%
74%
90%
88%
Lake Placid
76%
83%
89%
57%
90%
65%
Salt Lake
76%
76%
89%
81%
80%
91%
Sarajevo
77%
76%
84%
76%
90%
94%
Ámsterdam
78%
59%
84%
81%
100%
83%
Munich
78%
83%
84%
100%
100%
Melbourne
79%
72%
84%
81%
90%
91%
Pekín
82%
83%
100%
86%
100%
96%
Leyenda: Ace: accesos; Rec: recepción; Pub: público; Ofi: oficinas; Deam:
deambulación; Vest:vestuarios
45%
43%
58%
63%
60%
63%
60%
78%
65%
60%
73%
73%
70%
60%
68%
68%
70%
68%
73%
75%
68%
75%
83%
73%
75%
68%
90%
73%
78%
83%
75%
78%
80%
80%
83%
83%
90%
Página | 183
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Tabla 26. Estadísticos descriptivos según el criterio de clasificación de
zona de la instalación (II)
Global
Vaso
Boti
Tec
Evac
Eme
Org
Media
69%
77%
68%
83%
60%
56%
45%
Desv. estándar
8,6%
9,6
13,4
10,3
23,9
13,2
11,2
C.V. Pearson
0,12
0,12
0,20
0,12
0,39
0,23
0,25
Mínimo
44%
40
38
46
0
33
20
Máximo
82%
90
85
96
100
87
68
Rango
38%
50
47
50
100
54
48
Curtosis
2,1
5,7
-0,6
4,6
0,6
0,1
-0,2
Asimetría
-1,38
-2,12
-0,67
-1,89
-1,01
0,07
-0,42
Leyenda: Vaso: vaso de piscina; Boti: botiquín; Téc: dependencias técnicas; Evac: vías
de evacuación; Eme: emergencias; Org: cuestiones de organización
Tabla 27. Cumplimiento del cuestionario según el criterio de clasificación de
zona de la instalación, (II) por instalaciones
Instalación
Global Vaso Boti
Tec Evac Eme
Org
Estocolmo
44%
40%
46%
46%
8%
33%
36%
Nagano
46%
52%
46%
65%
33%
47%
20%
Vancouver
51%
71%
77%
58%
0%
33%
36%
Moscú
57%
60%
69%
77%
33%
33%
32%
Calgary
63%
83%
77%
85%
58%
33%
36%
Barcelona
63%
70%
62%
81%
33%
60%
52%
Los Ángeles
64%
79%
77%
88%
67%
47%
56%
Berlín
64%
72%
46%
65%
33%
53%
56%
Montreal
64%
77%
54%
81%
75%
47%
24%
Río
65%
70%
77%
85%
67%
60%
48%
San Luis
65%
83%
85%
88%
8%
33%
60%
Lillehammer
68%
81%
69%
81%
58%
60%
40%
Londres
68%
72%
77%
88%
67%
60%
36%
Turín
68%
81%
69%
81%
58%
60%
56%
Sapporo
69%
79%
69%
81%
83%
53%
24%
Helsinki
69%
86%
85%
88%
67%
53%
24%
Grenoble
70%
66%
38%
85%
17%
47%
44%
París
71%
79%
54%
85%
67%
80%
44%
Roma
71%
79%
85%
88%
67%
53%
32%
Albertville
71%
77%
46%
88%
58%
60%
52%
Sydney
72%
77%
62%
96%
67%
60%
60%
México
72%
79%
85%
85%
67%
60%
56%
Sochi
73%
83%
69%
85%
83%
47%
40%
Chamonix
74%
77%
62%
96%
92%
53%
48%
Amberes
74%
77%
77%
88%
50%
67%
52%
Atenas
74%
85%
46%
88%
83%
80%
40%
Innsbruck
74%
85%
62%
96%
83%
67%
48%
Seúl
74%
79%
77%
88%
67%
60%
52%
Tokio
75%
83%
77%
81%
100%
67%
40%
Atlanta
75%
77%
62%
88%
67%
67%
48%
Lake Placid
76%
81%
85%
92%
67%
47%
68%
Salt Lake
76%
79%
62%
88%
67%
67%
48%
Sarajevo
77%
90%
77%
77%
67%
60%
48%
Ámsterdam
78%
87%
77%
96%
67%
67%
48%
Munich
78%
83%
77%
81%
67%
47%
52%
Melbourne
79%
81%
77%
85%
83%
87%
44%
Pekín
82%
79%
77%
85%
83%
53%
52%
Leyenda: Vaso: vaso de piscina; Boti: botiquín; Téc: dependencias técnicas; Evac: vías
de evacuación; Eme: emergencias; Org: cuestiones de organización
Página | 184
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
5.4 Análisis de resultados
Resultados globales
La Tabla 18 muestra que la media de cumplimiento del cuestionario de
validación en las piscinas climatizadas de uso colectivo de titularidad municipal
de la Región de Murcia es del 69%, quedando a un 31% del cumplimiento total.
La instalación con mayores niveles de seguridad es Pekín, con un 82%, y la de
menor cumplimiento, Estocolmo, queda en un valor tan bajo como el 44%
(Tabla 19). Estos dos datos nos dan un rango de variación de valores del 38%,
valor que nos parece elevado para ser instalaciones que comparten la misma
filosofía por ser todas de titularidad municipal. La distancia de la media al
menor valor es del 25%, y al mayor valor solo del 13%. La mediana esta
desplazada a la derecha respecto a la media, situándose en el 71%, y la moda
por grupos del 5% se establece en el 70%-74%.
La Figura 5 muestra la distribución de los datos, agrupados en bloques
del 5%. Es una distribución próxima a la distribución normal, con una curtosis
positiva (2,05), que indica una distribución de los datos más escarpada
(leptocúrtica), esto es, mayor concentración de valores cerca de la media,
como viene avalado también por el Coeficiente de Variación de Pearson, de
valor 0,12, que representa una población relativamente compacta. Además, la
distribución tiene asimetría negativa, existiendo mayor número de instalaciones
con valores inferiores a la media.
Figura 5. Curva
de distribución del grado de
cumplimiento de las instalaciones, agrupados
en bloques del 5%.
Página | 185
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Con un rango del 38%, existen variaciones de entre el 0% y el 6% entre
cumplimiento de instalaciones ordenadas consecutivamente, como se observa
en la Tabla 28, de diferencias entre un valor de cumplimiento y el siguiente. Las
instalaciones con mayores diferencias respecto a la anterior están en la parte
baja de la tabla (peores resultados); entre las cuatro instalaciones Nagano,
Vancouver, Moscú y Calgary hay diferencias sucesivas del 5 y 6%, pasando de
un valor absoluto de cumplimiento del 46% Nagano al 63% de Calgary. El resto
de la tabla presenta diferencias mínimas, entre el 0% y el 2% con la anterior,
salvo el caso de Lillehammer con un 3% y en la primera posición, Pekín, que
difiere un 3% con su anterior, Melbourne.
La desviación estándar respecto a la media es del 8,58%. Utilizamos
este estadístico por su definición intuitiva de la medida de desviación de los
datos respecto a la media. La Figura 6 muestra el diagrama de barras de
cumplimiento de las instalaciones. La zona coloreada en gris es el intervalo
[media ± σ], en este caso [60,4 … 77,6], intervalo que se puede considerar
normal para este conjunto de datos. Se observa que las instalaciones Pekín,
Melbourne, Munich, y Ámsterdam quedan fuera de este rango por la parte
superior, y Moscú, Vancouver, Nagano y Estocolmo por la parte inferior.
Podemos realizar la consideración de que las primeras sobresalen sobre lo
más extendido, y las cuatro últimas quedan por debajo de lo que
comparativamente parece razonable.
Las columnas “aciertos” y “totales” de la Tabla 19, ponen de manifiesto
el efecto de los “grupos de preguntas no aplicables”, discutido en el apartado 3
del Capítulo 4. El número de ítems del cuestionario de cada instalación es
distinto, dependiendo de sus características. Este número varía entre las 248 y
las 280 cuestiones, variación que produce situaciones como la de las
instalaciones Sarajevo y Salt Lake; Salt Lake presenta un número de aciertos
mayor que Sarajevo, quedando sin embargo con un menor porcentaje de
cumplimiento, 76% frente a 77%. La instalación Salt Lake es más completa y
por tanto requiere la evaluación de más cuestiones de seguridad, en este caso
el cuestionario completo (las 280 cuestiones).
Página | 186
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Tabla 28. Grado global de cumplimiento del cuestionario de validación
por instalaciones, y diferencia entre grados de cumplimiento
consecutivos, ordenado por cumplimiento global
Instalación
Cumplimiento
Diferencia*
Estocolmo
Nagano
Vancouver
Moscú
Calgary
Barcelona
Los Ángeles
Berlín
Montreal
Río
San Luis
Lillehammer
Londres
Turín
Sapporo
Helsinki
Grenoble
París
Roma
Albertville
Sydney
México
Sochi
Chamonix
Amberes
Atenas
Innsbruck
Seúl
Tokio
Atlanta
Lake Placid
Salt Lake
Sarajevo
Ámsterdam
Munich
Melbourne
Pekín
44%
46%
2%
51%
5%
57%
6%
63%
6%
63%
0%
64%
1%
64%
0%
64%
0%
65%
1%
65%
0%
68%
3%
68%
0%
68%
0%
69%
1%
69%
0%
70%
1%
71%
1%
71%
0%
71%
0%
72%
1%
72%
0%
73%
1%
74%
1%
74%
0%
74%
0%
74%
0%
74%
0%
75%
1%
75%
0%
76%
1%
76%
0%
77%
1%
78%
1%
78%
0%
79%
1%
82%
3%
* La diferencia para una instalación se calcula respecto al grado de cumplimiento de
la instalación inmediatamente anterior
Página | 187
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Pekín
Melbourne
Munich
Ámsterdam
Sarajevo
Salt Lake
Lake Placid
Atlanta
Tokio
Seúl
Innsbruck
Atenas
Amberes
Chamonix
Sochi
México
Sydney
Albertville
Roma
París
Grenoble
Helsinki
Sapporo
Turín
Londres
Lillehammer
San Luis
Río
Montreal
Berlín
Los Ángeles
Barcelona
Calgary
Moscú
Vancouver
Nagano
Estocolmo
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
80%
90%
Figura 6. Grado de cumplimiento del cuestionario, por
instalaciones. Se indica el grado medio y los valores
comprendidos en el intervalo [media ± σ].
Página | 188
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Clasificación según seguridad / accesibilidad
En atención a la Tabla 20 y Tabla 21, en las que se desglosa el grado de
cumplimiento según el criterio de clasificación básico de seguridad /
accesibilidad, se comprueba que el grado medio de cumplimiento en seguridad
es mayor que el global en un 9%, diferencia que nos parece bastante sensible.
Además, el cumplimiento en accesibilidad disminuye un 6% siendo por tanto un
3% superior a la media el cumplimiento en seguridad respecto al global. La
Figura 7 muestra esta situación de una forma gráfica.
Además, el Coeficiente de Variación de Pearson es algo mayor para la
accesibilidad, presentando por tanto mayor variabilidad de datos en esta
categoría. El rango de cumplimiento del cuestionario en accesibilidad alcanza
el 43%, con un preocupante valor mínimo del 37%. Sin embargo, en la
categoría de seguridad, el valor mínimo se sitúa en el 46%, un 9% más que la
accesibilidad. Siendo en ambos distribuciones leptocúrticas, la curtosis es
menor para la accesibilidad, manteniéndose la asimetría negativa para las dos
categorías.
74%
72%
70%
68%
66%
64%
62%
60%
58%
Global
Seguridad
Accesibilidad
Figura 7. Grado medio de cumplimiento global del
cuestionario y desglose según las categorías
de seguridad y de accesibilidad.
Página | 189
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Figura 8. Grados de cumplimiento global del cuestionario, de accesibilidad y
de seguridad, por instalaciones.
Se muestran especialmente preocupantes los resultados de las
instalaciones Vancouver, Estocolmo y Nagano, que quedan con valores de
accesibilidad por debajo del 43% (37%, 38% y 42% respectivamente). La
Figura 8 muestra de forma gráfica los grados de cumplimiento de las
instalaciones de forma global, por accesibilidad y por seguridad, pudiendo
observarse con claridad que los grados de cumplimiento de seguridad son
levemente mayores que los globales en todos los casos, y por tanto, que los de
accesibilidad. La curva de seguridad global es obviamente creciente por estar
ordenada de esta forma la tabla; además, se observa la misma tendencia
creciente para la curvas de seguridad y de accesibilidad, si bien, en ambas
categoría queda alterada la ordenación de las instalaciones.
Las figuras Figura 9 y Figura 10 muestran las instalaciones que quedan
dentro del intervalo [media ± σ], que aportan los valores que podemos
considerar normales para este conjunto de datos. Respecto a seguridad, se
observa que las instalaciones Ámsterdam, Melbourne y Pekín destacan
favorablemente, quedando las piscinas Estocolmo, Nagano, Vancouver y
Moscú lo hacen desfavorablemente. En accesibilidad, son ahora Munich,
Melbourne y Pekín las que destacan positivamente, y desfavorablemente las
mismas cuatro que en el caso de la seguridad.
Página | 190
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Es también interesante analizar las instalaciones que tienen más
descompensada sus condiciones de seguridad frente a las de accesibilidad. La
Figura 11 muestra de forma gráfica las diferencias entre el cumplimiento del
cuestionario en seguridad y en accesibilidad. Destaca de forma negativa la
instalación Vancouver, con una diferencia del 19%. Le siguen Lillehammer, San
Luis e Innsbruck con entre un 15% y un 14%. Las instalaciones más
compensadas en estas dos categorías son Sarajevo, Pekín y Salt Lake, con
diferencias menores del 5%; notar que estas tres instalaciones tienen un
porcentaje de cumplimiento global de los mayores.
También destacar Ámsterdam, Lake Placid e Innsbruck, que en la
clasificación global están en la parte alta de la tabla, pero sin embargo tienen
una descompensación significativa de las categorías de seguridad y de
accesibilidad (10%, 10% y 14% respectivamente)
Página | 191
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Pekín
Melbourne
Munich
Ámsterdam
Sarajevo
Salt Lake
Lake Placid
Atlanta
Tokio
Seúl
Innsbruck
Atenas
Amberes
Chamonix
Sochi
México
Sydney
Albertville
Roma
París
Grenoble
Helsinki
Sapporo
Turín
Londres
Lillehammer
San Luis
Río
Montreal
Berlín
Los Ángeles
Barcelona
Calgary
Moscú
Vancouver
Nagano
Estocolmo
40%
50%
60%
70%
80%
90%
Figura 9. Grado de cumplimiento del cuestionario en el criterio
seguridad, por instalaciones. Se indica el grado medio
y los valores comprendidos en el intervalo [media ± σ].
Página | 192
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Pekín
Melbourne
Munich
Ámsterdam
Sarajevo
Salt Lake
Lake Placid
Atlanta
Tokio
Seúl
Innsbruck
Atenas
Amberes
Chamonix
Sochi
México
Sydney
Albertville
Roma
París
Grenoble
Helsinki
Sapporo
Turín
Londres
Lillehammer
San Luis
Río
Montreal
Berlín
Los Ángeles
Barcelona
Calgary
Moscú
Vancouver
Nagano
Estocolmo
30% 35% 40% 45% 50% 55% 60% 65% 70% 75% 80%
Figura 10. Grado de cumplimiento del cuestionario en el criterio
accesibilidad, por instalaciones. Se indica el grado
medio y los valores comprendidos en el intervalo
[media ± σ].
Página | 193
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Pekín
Melbourne
Munich
Ámsterdam
Sarajevo
Salt Lake
Lake Placid
Atlanta
Tokio
Seúl
Innsbruck
Atenas
Amberes
Chamonix
Sochi
México
Sydney
Albertville
Roma
París
Grenoble
Helsinki
Sapporo
Turín
Londres
Lillehammer
San Luis
Río
Montreal
Berlín
Los Ángeles
Barcelona
Calgary
Moscú
Vancouver
Nagano
Estocolmo
0%
5%
10%
15%
20%
Figura 11. Diferencia ente el grado de cumplimiento del
cuestionario en seguridad y en accesibilidad, por
instalaciones.
Página | 194
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Clasificación según la ubicación espacial
Las tablas Tabla 24 y Tabla 26 muestran los estadísticos descriptivos si
clasificamos las instalaciones en función del criterio de ubicación espacial, y las
tablas Tabla 25 y Tabla 27 nos muestran el desglose por instalaciones según
este mismo criterio. Los datos representados en el diagrama de barras de la
Figura 12 son los valores medios de cada una de las categorías. El origen de
ordenadas se ha situado en el valor medio global de cumplimiento del
cuestionario (69%), pudiendo de este modo observar las diferencias entre cada
categoría y este valor medio global.
Destacamos la heterogeneidad de los valores medios de las categorías,
en un rango del 38%, desde el 45% de cumplimiento medio de las cuestiones
organizativas hasta el 83% en la categoría de dependencias técnicas.
Analizando el comportamiento del cumplimiento en las diferentes categorías
observamos una agrupación natural, y a la vez preocupante, de los resultados:
las categorías que hacen referencia a aquellos espacios de uso continuo, tales
como el vaso y los vestuarios, la recepción, oficinas y zonas de deambulación,
y las dependencias técnicas, tienen valores superiores a la media. Sin
embargo, los aspectos referidos a situaciones de emergencias o poco
habituales (emergencias, vías de evacuación y cuestiones organizativas de
seguridad y de accesibilidad), quedan en segundo plano, obteniendo valores
medios sensiblemente por debajo de la media. Finalmente, las zonas de
acceso a la instalación presentan valores medios también bajos, hecho que
quizás pudiera achacarse a cierta despreocupación de aquellos aspectos que
ocurren “de puertas afuera”, junto con la imposibilidad de actuación de los
gestores de la instalación sobre muchos aspectos que tienen que ver con la
seguridad en el exterior.
Consideramos excesivamente bajos los valores medios del 56% para el
control de las emergencias o del 60% de las vías de evacuación, dada la
importancia de estas categorías; entendemos que esta cuestión es un punto
débil del conjunto de instalaciones.
Página | 195
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Org
45%
Eme
56%
60%
Evac
Tec
83%
68% Boti
Vaso
77%
Vest
71%
Deam
78%
Ofi
60%
82%
Pub
Rec
61%
40%
45%
50%
55%
60%
78%
Ace
65%
70%
75%
80%
85%
90%
Figura 12. Grado medio de cumplimiento del cuestionario, por zonas de
la instalación, con el origen de ordenadas situado en el
grado global de cumplimiento. Leyenda: Org: cuestiones de
organización; Eme: emergencias; Evac: vías de evacuación; Téc:
dependencias técnicas; Boti: botiquín; Vaso: vaso de piscina; Vest:
vestuarios; Deam: deambulación; Ofi: oficinas; Pub: público; Rec:
recepción; Ace: accesos.
0,5
0,45
0,4
0,35
0,3
0,25
0,2
0,15
0,1
0,05
0
Ace
Rec
Ofi
Deam
Vest
Vaso
Boti
Tec
Evac
Eme
Org
Figura 13. Coeficiente de Variación de Pearson de los grados de cumplimiento de
las instalaciones, por zonas. La línea horizontal punteada marca el
coeficiente del grado de cumplimiento global de las instalaciones.
Leyenda: la misma que la Figura anterior.
Página | 196
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Las figuras Figura 13, Figura 14 y Figura 15 nos aportan información
interesante, representando respectivamente el Coeficiente de Variación de
Pearson, los máximos, mínimos y rangos, y la curtosis, todo ello sobre los
porcentajes de cumplimiento de cada categoría de zona de la instalación.
100
90
80
70
60
50
40
30
20
10
0
Ace
Figura 14.
Rec
Ofi
Deam Vest
Vaso
Boti
Tec
Evac
Eme
Org
Máximos, mínimos y rangos de los grados de
cumplimiento de las instalaciones, por zonas. Leyenda:
Org: cuestiones de organización; Eme: emergencias; Evac: vías
de evacuación; Téc: dependencias técnicas; Boti: botiquín; Vaso:
vaso de piscina; Vest: vestuarios; Deam: deambulación; Ofi:
oficinas; Pub: público; Rec: recepción; Ace: accesos.
6
5
4
3
2
1
0
-1
-2
Ace
Rec
Ofi
Deam Vest
Vaso
Boti
Tec
Evac
Eme
Org
Figura 15. Curtosis de los grados de cumplimiento de las
instalaciones, por zonas. Leyenda: la misma que la figura
anterior.
Página | 197
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Destacan los parámetros de las vías de evacuación; un elevado
Coeficiente de Variación de Pearson (0,39) respecto al resto, y un rango (100)
que abarca todo el espectro de cumplimiento. Esto viene provocado por la
instalación Vancouver, que posee un grado de cumplimiento del 0%, y la Tokio,
al 100% en vías de evacuación. La distribución del resto de instalaciones es
similar a la normal, ya que posee una curtosis baja (0,6).
Observamos que la categoría oficinas presenta una distribución muy
escarpada, con una curtosis del 4,6. Es decir, sus datos están muy
concentrados. Sin embargo el rango es grande (80%), teniendo instalaciones
con un máximo de cumplimiento del 100% y otras con un bajo 20%. En
realidad, descartando dos casos particulares de cumplimiento del 20% y 40%
(Nagano y Vancouver respectivamente), el resto de instalaciones varía entre el
70% y 100%, estando la mayoría en el rango 80% - 100%. La existencia de
estándares de calidad para la realización de trabajos de oficina, y las
normativas de obligado cumplimiento al respecto de la salud y seguridad
laboral puede explicar los elevados valores obtenidos en esta categoría en la
mayoría de los casos.
Las dependencias técnicas son otra categoría con una curtosis alta, en
este caso con un Coeficiente de Variación de Pearson muy similar a los valores
globales (0,12) y unos valores máximos que llegan al 96% (Sydney); esto es,
poca variabilidad en los datos, concentrados en la parte alta de la zona de
cumplimiento.
Y la categoría con mayor curtosis es la correspondiente al vaso de
piscina, con un valor de 5,70; la mayoría de las instalaciones tienen un grado
de cumplimiento entre el 70% y el 85%, siendo 90% el mayor grado de
cumplimiento.
Página | 198
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Pekín
Melbourne
Munich
Ámsterdam
Sarajevo
Salt Lake
Lake Placid
Atlanta
Tokio
Seúl
Innsbruck
Atenas
Amberes
Chamonix
Sochi
México
Sydney
Albertville
Roma
París
Grenoble
Helsinki
Sapporo
Turín
Londres
Lillehammer
San Luis
Río
Montreal
Berlín
Los Ángeles
Barcelona
Calgary
Moscú
Vancouver
Nagano
Estocolmo
Evacuación
Global
0%
20%
40%
60%
80%
100%
Figura 16. Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría de vías de
evacuación (en gris), sobre el grado de cumplimiento global (en
blanco), por instalaciones.
Página | 199
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
En atención a la categoría de vías de evacuación, con elevado
Coeficiente de Variación de Pearson (0,39) y rango completo (100), la Figura
16 muestra el grado de cumplimiento del cuestionario en esta categoría para
cada instalación (barra oscura), y las diferencias respecto al valor medio (barra
blanca). Observamos que la mayoría de las instalaciones (26) tienen valores en
las vías de evacuación inferiores al grado medio de cumplimiento, obteniendo
tan solo 11 instalaciones valores mayores.
Por la parte positiva encontramos la instalación Tokio, que con un buen
cumplimiento global (75%) cumple además, en esta categoría, con el 100% de
las cuestiones. Destacar también Chamonix, con valores globales del 74% y
del 92% en vías de evacuación. Sapporo, Sochi, Atenas, Innsbruck y
Melbourne son instalaciones con elevados valores en vías de evacuación y
cumplimientos globales satisfactorios.
Especialmente preocupante es el caso de Vancouver, cuyo grado de
cumplimiento en vías de evacuación es del 0%, con un modesto 51% de
cumplimiento global. Prácticamente igual de preocupante son San Luis y
Estocolmo, ambas con un 8% en vías de evacuación. Estocolmo presenta el
cumplimiento global más bajo de las 37 instalaciones (44%), lo que explica este
8%. Sin embargo, San Luis posee un mínimamente aceptable cumplimiento
global del 65%, descuidando claramente el aspecto particular de vías de
evacuación. Otras instalaciones con cumplimientos negativos en vías de
evacuación son Nagano, Moscú, Barcelona, Berlín y Grenoble; las cuatro
primeras instalaciones de este grupo tienen también bajos valores de
cumplimiento global. Sin embargo, sorprende una instalación como Grenoble,
en posiciones medias de la clasificación global, y sin embargo con bajos
valores para vías de evacuación (17%).
Página | 200
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Pekín
Melbourne
Munich
Ámsterdam
Sarajevo
Salt Lake
Lake Placid
Atlanta
Tokio
Seúl
Innsbruck
Atenas
Amberes
Chamonix
Sochi
México
Sydney
Albertville
Roma
París
Grenoble
Helsinki
Sapporo
Turín
Londres
Lillehammer
San Luis
Río
Montreal
Berlín
Los Ángeles
Barcelona
Calgary
Moscú
Vancouver
Nagano
Estocolmo
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
80%
90%
Figura 17. Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría
de organización (en gris), sobre el grado de
cumplimiento global (en blanco), por instalaciones.
Página | 201
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
La Figura 17 muestra por instalaciones el grado de cumplimiento del
cuestionario en cuestiones organizativas respecto al cumplimiento global. Esta
categoría es la de menor cumplimiento medio (45%), y observamos que queda
por debajo del cumplimiento global en todas las instalaciones. De nuevo
Nagano (una de las instalaciones peor clasificadas) obtiene además el peor
cumplimiento en esta categoría (20%), y le siguen Montreal, Sapporo y
Helsinki, instalaciones con cumplimientos globales muy superiores al
cumplimiento en esta categoría.
La instalación con mejor resultados es Lake Placid (68%), y le siguen
Sydney y San Luis, instalaciones que se encuentran respectivamente en el
segundo y tercer tercio respecto a la clasificación por cumplimiento global.
Las dos categorías con el mayor grado de cumplimento en esta
clasificación por zonas de la instalación son las dependencias técnicas (83%) y
las oficinas de trabajadores (82%). Además, estas dos zonas tienen elevadas
curtosis (concentración de datos alrededor de la media) junto con la zona de
vasos de la piscina. Las figuras Figura 18 y Figura 19 desglosan estas dos
categorías por instalaciones.
Página | 202
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Pekín
Melbourne
Munich
Ámsterdam
Sarajevo
Salt Lake
Lake Placid
Atlanta
Tokio
Seúl
Innsbruck
Atenas
Amberes
Chamonix
Sochi
México
Sydney
Albertville
Roma
París
Grenoble
Helsinki
Sapporo
Turín
Londres
Lillehammer
San Luis
Río
Montreal
Berlín
Los Ángeles
Barcelona
Calgary
Moscú
Vancouver
Nagano
Estocolmo
0%
Figura 18.
20%
40%
60%
80%
100%
Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría
de dependencias técnicas (en gris), sobre el grado de
cumplimiento global (en blanco), por instalaciones.
Página | 203
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Pekín
Melbourne
Munich
Ámsterdam
Sarajevo
Salt Lake
Lake Placid
Atlanta
Tokio
Seúl
Innsbruck
Atenas
Amberes
Chamonix
Sochi
México
Sydney
Albertville
Roma
París
Grenoble
Helsinki
Sapporo
Turín
Londres
Lillehammer
San Luis
Río
Montreal
Berlín
Los Ángeles
Barcelona
Calgary
Moscú
Vancouver
Nagano
Estocolmo
0%
20%
40%
60%
80%
100%
Figura 19. Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría
de oficinas (en blanco), sobre el grado de cumplimiento
global (en gris), por instalaciones.
Página | 204
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Clasificación según el riesgo
Recordemos que la clasificación según riesgo afecta exclusivamente a
las cuestiones de seguridad. Si se observan los valores medios de riesgo de
las piscinas climatizadas (en la Figura 20 con el origen de ordenadas en el
valor medio global), puede comprobarse que los mejores valores se
encuentran, por este orden, para las categorías de edificación, salud e higiene,
y prevención de accidentes. Esta situación parece razonable, ya que son tres
categorías de importancia en las piscinas climatizadas de uso colectivo. De
menor importancia pueden entenderse las cuestiones de prevención de la
violencia (por el bajo número de competiciones de riesgo que en este tipo de
instalaciones se dan), o de intrusión (que en todo caso no afecta
excesivamente a los usuarios), siendo los valores medios de estas dos
categorías los más bajos (49% y 52% respectivamente). Solo llama la atención
que el riesgo de emergencias (60%) esté por debajo de la media de
cumplimiento, lo que confirma los preocupantes valores obtenidos para los
espacios relativos a emergencias y vías de evacuación en el apartado anterior.
Respecto al Coeficiente de Variación de Pearson, ilustrado en la Figura
21, citar que el coeficiente es bajo en los mismos tres criterios que la media era
superior a la media global (comentado en el párrafo anterior), esto es,
prevención de accidentes, higiene y salud y edificación. Y la variación de los
datos es mayor en los tres restantes. El mismo esquema se reproduce en la
curtosis de la Figura 23, siendo positiva y mayor en los mismos tres casos.
Los rangos representados en la Figura 22 no poseen valores
especialmente destacables, oscilando los rangos entre el 34% y el 56%.
Merece la pena mencionar que las categorías de higiene y salud y la de
edificación obtienen valores máximos altos (89% en higiene para la instalación
Ámsterdam, y 100% hasta en 9 instalaciones).
Página | 205
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Figura 20. Grado medio de cumplimiento del cuestionario
en las diferentes categorías del criterio de
clasificación de riesgo. El origen de
ordenadas se ha situado en el valor del grado
medio de cumplimiento global. Leyenda: Aci:
accidente; Eme: emergencias; Int: intrusión; Vio:
violencia; Hig: higiene; Edi: edificación.
Figura 21. Coeficiente de Variación de Pearson del
cuestionario en las diferentes categorías del
criterio de clasificación de riesgo. La línea
horizontal punteada marca el C.V. de Pearson
para el cumplimiento global de las
instalaciones. Leyenda: igual que la figura anterior.
Página | 206
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Figura 22. Máximos, mínimos y rangos de los grados de
cumplimiento de las instalaciones, por riesgo.
Leyenda: Aci: accidente; Eme: emergencias; Int:
intrusión; Vio: violencia; Hig: higiene; Edi: edificación.
Figura 23. Curtosis de los grados de cumplimiento de las
instalaciones, por riesgo. Leyenda: igual que la
figura anterior.
Página | 207
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Figura 24. Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría
de emergencias (en gris), sobre el grado de
cumplimiento global (en blanco), por instalaciones.
Página | 208
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
La categoría emergencias es de gran importancia en cuestiones de
seguridad, y sin embargo tiene un valor medio menor que la media de
cumplimiento global, por lo que merece la pena analizarla un poco más. La
Figura 24 muestra el desglose de esta categoría por instalaciones.
Puede observarse que todas las instalaciones tienen esta categoría por
debajo de su grado global de cumplimiento y en algunos casos con valores
muy bajos, como Estocolmo (28%), Vancouver (37%) o Moscú (39%),
instalaciones que se sitúan en la parte baja de la tabla por grado global de
cumplimiento.
Llaman la atención instalaciones como Grenoble, Roma o San Luis, que
estando en la zona media de la tabla de cumplimiento global tienen valores
bajos para esta categoría. Las figuras Figura 25 y Figura 26 ilustran el desglose
por instalaciones de las categorías de prevención de violencia e higiene y
salud.
Página | 209
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Pekín
Melbourne
Munich
Ámsterdam
Sarajevo
Salt Lake
Lake Placid
Atlanta
Tokio
Seúl
Innsbruck
Atenas
Amberes
Chamonix
Sochi
México
Sydney
Albertville
Roma
París
Grenoble
Helsinki
Sapporo
Turín
Londres
Lillehammer
San Luis
Río
Montreal
Berlín
Los Ángeles
Barcelona
Calgary
Moscú
Vancouver
Nagano
Estocolmo
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
80%
90%
Figura 25. Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría
de violencia (en gris), sobre el grado de cumplimiento
global (en blanco), por instalaciones.
Página | 210
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Pekín
Melbourne
Munich
Ámsterdam
Sarajevo
Salt Lake
Lake Placid
Atlanta
Tokio
Seúl
Innsbruck
Atenas
Amberes
Chamonix
Sochi
México
Sydney
Albertville
Roma
París
Grenoble
Helsinki
Sapporo
Turín
Londres
Lillehammer
San Luis
Río
Montreal
Berlín
Los Ángeles
Barcelona
Calgary
Moscú
Vancouver
Nagano
Estocolmo
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
80%
90%
Figura 26. Grado de cumplimiento del cuestionario en la categoría
de Higiene (en gris), sobre el grado de cumplimiento
global (en blanco), por instalaciones.
Página | 211
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Clasificación por edad de la instalación
Parece interesante evaluar el grado de cumplimiento del cuestionario en
función de otros parámetros. Uno de ellos es la antigüedad de la instalación. La
Figura 27 muestra, ordenados por fecha de inauguración y en forma de curva,
la evolución del grado global de cumplimiento del cuestionario. Se acompaña
también la línea de tendencia. Se puede observar que si bien existe una
tendencia al aumento de la seguridad en función de la modernidad de la
instalación, las oscilaciones sobre esta tendencia son bastante importantes,
pudiendo considerar que la antigüedad de la instalación es un factor a tener en
cuenta, pero no es el más relevante.
90%
80%
70%
60%
50%
40%
1980
1985
1990
1995
2000
2005
2010
2015
Figura 27. Evolución en el tiempo del grado global de cumplimiento de las
instalaciones, acompañado de la línea de tendencia.
La Figura 28 muestra las pendientes de las líneas de tendencia de las
curvas de evolución de las distintas categorías del criterio riesgo. Observamos
que en todas las categorías existe una tendencia positiva, esto es, una mejora
(una tendencia a la mejora) en los grados de cumplimiento a medida que las
instalaciones son más recientes. Sin embargo, este grado de mejora varía en
función del riesgo analizado.
Página | 212
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
1
0,92
0,9
0,8
0,72
0,7
0,68
0,55
0,6
0,5
0,4
0,3
0,31
0,29
0,2
0,1
0
Aci
Eme
Int
Vio
Hig
Edi
Figura 28. Pendientes de las líneas de tendencia de las distintas
categorías del criterio riesgo, de las curvas de
evolución del grado de cumplimiento en función de la
antigüedad de la instalación. Leyenda: Aci: accidente;
Eme: emergencias; Int: intrusión; Vio: violencia; Hig: higiene; Edi:
edificación.
Es significativo y satisfactorio que la mayor pendiente en las líneas de
tendencia se da en la categoría de edificación, esto es, a mayor novedad de la
instalación mayor grado de cumplimiento del cuestionario en esta categoría. Le
siguen las cuestiones relativas a emergencias, lo que indica una evolución
general positiva en el cuidado de estas cuestiones.
La menor pendiente se da en las cuestiones relativas a accidentes,
seguido de las cuestiones de higiene y salud. Estos dos casos también reflejan
una situación lógica, ya que son cuestiones más de mantenimiento y
organización que de antigüedad de la instalación.
No obstante, no olvidemos que estos datos son sobre las líneas de
tendencia; la variabilidad sobre la tendencia es muy grande en algunas
ocasiones, como puede observarse en la Figura 29, que representa la
evolución del grado global de cumplimiento del cuestionario en el criterio
violencia. Esta variación es mucho menor en categorías como higiene (Figura
30) o accidentes (Figura 31).
Página | 213
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
100%
80%
60%
40%
20%
0%
1980
1985
1990
1995
2000
2005
2010
2015
Figura 29. Evolución en el tiempo del grado de cumplimiento en la
categoría violencia de las instalaciones, acompañado de la
línea de tendencia.
100%
80%
60%
40%
20%
0%
1980
1985
1990
1995
2000
2005
2010
2015
Figura 30. Evolución en el tiempo del grado de cumplimiento en la
categoría Higiene de las instalaciones, acompañado de la
línea de tendencia.
100%
80%
60%
40%
20%
0%
1980
Figura 31.
Página | 214
1985
1990
1995
2000
2005
2010
2015
Evolución en el tiempo del grado de cumplimiento en la
categoría Accidentes de las instalaciones, acompañado
de la línea de tendencia.
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
La Figura 32 muestra las pendientes de las líneas de tendencia de las
curvas de evolución de las distintas categorías del criterio zona de la
instalación. Destacar la categoría vaso, con una pendiente positiva pero baja,
mostrando una mejora muy suave con la edad de la instalación, hecho que se
puede explicar por la importancia de su correcto mantenimiento.
Las categorías Botiquín y Organización muestran tendencias levemente
negativas, si bien las gráficas de cada una de ellas muestran más bien que no
hay relación aparente con la edad de la instalación (figuras Figura 33 y Figura
34).
2
1,74
1,5
0,99
1
0,89
0,82
0,55
0,54
0,47
0,5
0,35
0,28
0
-0,15
-0,5
Ace
Figura 32.
Rec
Ofi
Deam
Vest
Vaso
-0,39
Boti
Tec
Evac
Eme
Org
Pendientes de las líneas de tendencia de las distintas
categorías del criterio Zona, de las curvas de evolución del
grado de cumplimiento en función de la antigüedad de la
instalación.Leyenda: Org: cuestiones de organización; Eme: emergencias;
Evac: vías de evacuación; Téc: dependencias técnicas; Boti: botiquín; Vaso:
vaso de piscina; Vest: vestuarios; Deam: deambulación; Ofi: oficinas; Pub:
público; Rec: recepción; Ace: accesos.
Página | 215
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
90%
80%
70%
60%
50%
40%
30%
1980
1985
1990
1995
2000
2005
2010
2015
Figura 33. Evolución en el tiempo del grado de cumplimiento en la
categoría Botiquín de las instalaciones, acompañado
de la línea de tendencia.
70%
60%
50%
40%
30%
20%
10%
1980
1985
1990
1995
2000
2005
2010
2015
Figura 34. Evolución en el tiempo del grado de cumplimiento en la
categoría
Organización
de
las
instalaciones,
acompañado de la línea de tendencia.
Por último, las pendientes de las curvas de tendencia atendiendo a
seguridad / accesibilidad se muestran en la Figura 35, mostrando cómo,
lógicamente, en línea general el cumplimiento de la accesibilidad ha crecido
más a lo largo del tiempo que el de la seguridad.
Página | 216
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
0,8
0,7
0,6
0,5
0,4
0,3
0,2
0,1
0
Seguridad
Accesibilidad
Figura 35. Pendientes de las líneas de tendencia de
las categorías de seguridad y de
accesibilidad, de las curvas de evolución
del grado de cumplimiento en función de
la antigüedad de la instalación.
Puntos débiles del conjunto de instalaciones
Ninguna instalación obtiene valores de cumplimiento superiores al 82%
en el cuestionario. Tiene interés estudiar qué cuestiones no son cumplidas por
ninguna instalación, o lo son por un número muy bajo de ellas. La Tabla 29
muestra cuántas cuestiones son cumplidas por un cierto número de
instalaciones. Para este estudio se han descartado los bloques de preguntas
opcionales.
La Tabla 29 muestra que solo 4 cuestiones no son cumplidas por
ninguna instalación. Cumplidas por cinco o menos instalaciones hay 19
cuestiones (el 7,7%), que se detallan en la Tabla 30. Estas se reparten de
forma homogénea entre cuestiones de accesibilidad (12) y seguridad (11). Por
tipo de riesgo destacan seis cuestiones sobre emergencias y cinco sobre
intrusión. Sin embargo, cabe destacar que 10 cuestiones se corresponden con
cuestiones de organización.
Página | 217
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Tabla 29. Número de Ítems del cuestionario que son cumplidos por un
determinado número N de instalaciones
Cumplidos por N
instalaciones
N
0
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
Ítems
Cumplidos por N
instalaciones
N
ítems
4
4
4
5
1
1
3
3
0
3
3
2
3
3
5
1
2
2
5
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
31
32
33
34
35
36
37
8
2
3
5
6
10
6
4
6
3
7
14
15
13
14
21
24
16
17
Tabla 30. Ítems del cuestionario cumplidos por cinco o menos instalaciones
Núm
5
25
33
116
124
154
193
235
255
258
267
270
271
272
273
277
278
279
280
Ítem
La instalación dispone de aparcamiento para vehículos eléctricos, con sistema de carga
El edificio dispone del símbolo de accesibilidad en la fachada principal
Los trabajadores de recepción tienen un conocimiento básico de la lengua de signos
Los vestuarios tienen taquillas, numeradas en relieve o braille, y a baja altura
Los lavabos de los vestuarios tienen jabón líquido y toallas de un solo uso, a baja altura
Existe una rampa de acceso al vaso, para personas con movilidad reducida, de
pendiente menor del 8%
El botiquín dispone de inodoro, ducha, espacio de cambio de ropa, mesa y silla y
teléfono
Las vías de evacuación están señalizadas acústicamente
Se dispone de megafonía portátil
Existen protocolos escritos de utilización de la instalación por usuarios con perros - guía
Se dispone de un plan de emergencias general
Los trabajadores se han formado en el uso de la lengua de signos
Existe un plan de formación en comunicación para distintas discapacidades
Existe un protocolo de seguridad, prevención y control para espectáculos
Existe un reglamento interno del recinto deportivo para la realización de espectáculos
Existen protocolos documentados de evacuación de discapacitados en caso de
emergencia
La instalación dispone de vigilante de seguridad diurno
La instalación dispone de vigilante de seguridad nocturno
La instalación dispone de un protocolo de actuación en caso de intrusión o robo
Página | 218
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
La falta de respuestas positivas en cuestiones organizativas pone de
manifiesto la necesidad de una mayor “gestión deportiva”. Las cuestiones no
cumplidas por las instalaciones no están contempladas en normativas de
obligado cumplimiento. Se cuidan, en mayor o menor medida, las instalaciones
y las actividades que en ellas se realizan. Sin embargo, el papel del buen
gestor
deportivo
se
descuida,
no
existiendo
demasiadas
cuestiones
organizativas fuera de las legalmente obligatorias en cuanto a seguridad.
De las cuestiones de accesibilidad, cabe resaltar que 5 cuestiones
corresponden a discapacidad visual y acústica, y sin embargo, ninguna
cuestión corresponde estrictamente a cuestiones relativas a discapacitados en
sillas de ruedas. Las cuestiones relativas a discapacidad visual y acústica son
un punto débil en todas las instalaciones. Además, fallan cuestiones formativas
para la información y el trato de discapacitados. Las cuestiones 5 y 154 son de
máximos, por lo que no es de extrañar que no se cumplan por ninguna
instalación. El resto de cuestiones de accesibilidad son temas organizativos no
obligatorios.
Sobre las cuestiones de seguridad, sin tener en cuenta las organizativas,
observamos que existen cuestiones de máximos (como un botiquín mejor
dotado), de emergencias (como la megafonía portátil, que no es de obligado
cumplimiento), o de higiene y salud. Sobre las cuestiones organizativas,
destaca la falta de vigilancia y de protocolos de todo tipo.
Comentar también que la cuestión 25 queda regulada por la normativa
de accesibilidad en espacios públicos y edificación (Orden 15/oct, 1991),
capítulo IV, artículo 12, y apenas se utiliza en las instalaciones auditadas.
La Tabla 31 presenta los ítems cumplidos por entre quince y cinco 15
instalaciones. En este caso la mayoría son cuestiones relativas a seguridad
(21), frente a las de accesibilidad (12). De las 21 cuestiones de seguridad, 11
son sobre emergencias: ausencia de rociadores automáticos, de sectorización
con puertas antiincendios, de sistema de megafonía para emergencias, de
linternas o de chalecos para trabajadores.
Página | 219
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Tabla 31. Ítems del cuestionario cumplidos por entre quince y cinco
instalaciones
Num
4
20
23
27
79
95
103
117
123
135
142
152
181
199
201
225
232
240
243
245
246
253
254
259
266
268
Cuestión
La instalación dispone de aparcamiento específico para trabajadores, o muy abundante
El umbral dispone de rejilla limpiabarros (o similar accesible), para evitar resbalamientos
en el interior
Las puertas de acceso son correderas y de apertura automática
El exterior de la instalación dispone cámaras de seguridad
La disposición del mobiliario y los espacios alrededor de las oficinas facilitan la
utilización segura de los discapacitados…
Existe pavimento táctil en los cambios de los itinerarios
Las puertas de los vestuarios tienen algún tipo de señalización táctil para indicar
“hombres” y “mujeres”
Los vestuarios están libres de ropa y macutos de usuarios
Los lavabos de los vestuarios tienen jabón líquido y toallas de un solo uso
Existen perchas a baja altura (1,10m)
Existen cambiadores de bebé en los vestuarios de ambos sexos (o un espacio común)
Al menos una escalera alcanza el fondo, para labores de limpieza
Existe un almacén de material que comunica directamente con el vaso, de puertas de
más de 2,40 de ancho, de fácil comunicación con el exterior
El botiquín dispone de un contenedor para residuos especiales
El local cuenta con desfibrilador automático y personal autorizado a utilizarlo
El edificio dispone de un local de descanso para los trabajadores, correctamente
equipado
La instalación dispone de planos de situación con recorridos de evacuación
La instalación dispone de ayudas técnicas para la evacuación de personas con
movilidad reducida
La instalación dispone de rociadores automáticos
La instalación esta sectorizada para incendios, con puertas RF
La instalación dispone de sistema de megafonía para emergencias
Existen linternas para emergencias a disposición de los trabajadores, y están cargadas
Existen chalecos de emergencia a disposición de los trabajadores
La instalación dispone de un Plan de Autoprotección
El servicio de extinción de incendios tiene copia de los planos del local y de los medios
de extinción con que cuenta
Se dispone de un plan de actuación en incendios
Todas estas son cuestiones no obligatorias, que ponen de manifiesto de
nuevo la falta de aplicación de protocolos de buenas prácticas que aporten
valor añadido en la seguridad de las instalaciones. Por supuesto, que también
son puntos débiles las cuestiones organizativas al respecto de las
emergencias, como la ausencia de planes de actuación frente a incendios,
planes de autoprotección, o coordinación con los cuerpos de extinción de
incendios.
Junto con la falta de medios humanos para la vigilancia de la instalación,
aparece ahora la ausencia de cámaras de video vigilancia. Además, otra
situación que se produce gran parte de las instalaciones visitadas consiste en
que los usuarios no utilizan las taquillas existentes (que en la mayoría de los
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5. Condiciones de seguridad en piscinas …
casos las hay), dejando sus ropas y bolsas deportivas en perchas y bancos del
vestuario. Esto da lugar a dos situaciones: la primera es relativa a la seguridad,
en lo que respecta a posibles hurtos. La segunda y más importante es de
higiene, por el amontonamiento de ropa y la falta de espacio para otros
usuarios.
Los almacenes de material suelen ser un punto débil de muchas de las
instalaciones auditadas; suelen construirse mal dimensionados y con puertas
estrechas, lo que provoca que habitualmente el material se coloque en distintos
tipos de contenedores en la zona de playa del recinto de piscina, molestando a
los usuarios y reduciendo su seguridad.
Respecto a cuestiones de higiene y salud, destacar la ausencia de
contenedores de residuos especiales (jeringuillas, gasas o algodones con
sangre, etc.) en los botiquines, que se suelen limitar a una papelera con o sin
una bolsa de plástico. En otro orden de cosas, no es habitual la existencia de
locales debidamente acondicionados para el descanso de los trabajadores,
siendo sin embargo una situación muy frecuente en este tipo de instalaciones
que haya “tiempos muertos” en el trabajo de los monitores. Y finalmente al
respecto de las cuestiones de higiene y salud, es habitual la ausencia de
fungibles de baño, como jabón o toallas de papel, así como la incorrecta
gestión de los cambiadores para bebés, normalmente existentes únicamente
en los vestuarios femeninos, y habitualmente sin un habitáculo especial (suele
existir únicamente un cambiador portátil colocado en algún lugar del interior del
vestuario)
El respecto de los puntos débiles de accesibilidad podemos destacar la
falta de ayudas técnicas para la evacuación de personas con movilidad
reducida, el mal acondicionamiento de las puertas de entrada a la instalación
junto con la falta de rejillas limpiabarros, el mal acondicionamiento de las
oficinas para el acceso de sillas de ruedas, o la falta de señalización para
personas con discapacidades sensoriales. También se echa en falta la
existencia de aparcamientos específicos para trabajadores en un gran número
de instalaciones.
Página | 221
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Por otro lado, el respecto de la categoría de emergencias, las cuestiones
236 y 237 son de vital importancia (puertas de emergencias y vías de
evacuación), y únicamente son cumplidas por 19 y 25 instalaciones
respectivamente. Los recorridos de evacuación no están correctamente
acondicionados, en especial en lo que respecta a las puertas de emergencia y
otras puertas en estos recorridos. Los casos más relevantes encontrados son:
-
Salidas de emergencia bloqueadas con cadenas y candados.
-
Puertas de emergencia con cerraduras instaladas con posterioridad.
-
Vías de evacuación con obstáculos importantes (motos o bicicletas en
las puertas de emergencia)
-
Vías de evacuación parcialmente utilizadas como vestuarios de
trabajadores.
-
Salidas de emergencia abiertas para producir ventilación pero
bloqueadas con vallas para limitar el acceso.
-
Vías de evacuación que desembocan a un área de seguridad al aire
libre, pero el área de seguridad, bien no tiene acceso a la vía pública,
bien tiene un acceso cerrado con candados.
Todas estas situaciones son alarmantes. El intento de control de los
accesos a la instalación, la ausencia de inspecciones periódicas a este
respecto, y la relajación de los gestores por la ausencia de emergencias de
consideración dan lugar a todas las situaciones descritas. Casos como los
bloqueos de las áreas de seguridad pueden producir problemas gravísimos en
sucesos de escapes de gases tóxicos, bien de la propia instalación bien de
zonas industriales colindantes. Los cierres de las salidas de emergencia
producirían situaciones de encerramiento en casos de incendios o derrumbes.
Las vías de acceso no despejadas pueden producir caídas y amontonamiento
de personas en casos de evacuaciones de emergencia.
Informes personalizados
Los apartados anteriores de este capítulo presentan los resultados,
análisis de datos y discusión relativos al conjunto de piscinas climatizadas de
titularidad municipal de la Región de Murcia. No obstante, tal y como se
comenta en el apartado 1 del Capítulo 4, es posible utilizar la herramienta como
Página | 222
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
parte de un sistema de calidad de una instalación. Los datos obtenidos en este
estudio para una instalación individual pueden servir para realizar un informe
personalizado, como parte de la etapa 1 del proceso de mejora continua de la
seguridad (y la accesibilidad) que se muestra en la Figura 1.
Página | 223
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Página | 224
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
5.5 Discusión
En apartados anteriores hemos puesto de manifiesto la escasez de
trabajos de investigación en el campo de la seguridad en piscinas climatizadas,
hecho que nos ha llevado a la realización del estudio documental presentado
en el Capítulo 3 de esta Tesis Doctoral. Es por ello que no es posible realizar
una comparación exhaustiva de los resultados del estudio presentado en este
capítulo con otros estudios similares. No obstante, en este apartado se expone
el contraste de los aspectos más importantes tratados en este estudio.
Costa (2005) sugiere que el inicio de la gestión deportiva como una
disciplina propia se produce a mediados de los años 80 con la aparición de
trabajos académicos en este campo, tal y como citan Edwards y Skinner
(2009). A partir de esa fecha la disciplina se ha ido consolidando, agrupando y
relacionando gran cantidad de temáticas, como indican J. García et al. (2011).
Como pone de manifiesto en repetidas ocasiones Gómez-Calvo en sus
documentos de carácter profesional (Gómez-Calvo, 2008d, 2011c, 2013c), el
correcto tratamiento de la seguridad en las instalaciones deportivas es un factor
fundamental, obligatorio, y también complementario y necesario, y es el gestor
deportivo a quién corresponde la coordinación de todos los ámbitos de la
seguridad y la correcta aplicación al caso particular de las instalaciones objeto
de su competencia (Farzalipour et al., 2012).
Esta
cuestión
ha
ido
cobrando
importancia
paulatinamente,
convirtiéndose en una de las principales problemáticas de los gestores
deportivos (M. García, 2008; Goodarzi et al., 2012). Y una de las instalaciones
más sensibles en materia de seguridad son las piscinas climatizadas, caso que
nos ocupa (Consejo Superior de Deportes, 2010b). No obstante, la importancia
del estudio de la calidad del agua y el aire (Fernández-Luna et al., 2015)
eclipsa a menudo el resto de cuestiones de seguridad.
Una de las pocas referencias investigadoras que aborda la seguridad en
piscinas climatizadas la aporta el grupo de investigación IGOID de la
Universidad de Castilla – La Mancha mediante la aportación de una Tesis
Doctoral y algunos trabajos derivados (Fernández-Luna & Gallardo, 2015;
Tamaral, 2012). Aunque el trabajo no es específico sobre la temática de la
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5. Condiciones de seguridad en piscinas …
seguridad, ya que aborda todos los aspectos relacionados con la gestión de
piscinas climatizadas, muchas de las cuestiones tratadas son relativas a esta
cuestión. Los estudios de esta Tesis Doctoral se ciñen al ámbito geográfico de
Castilla – La Mancha, y el segundo de los tres estudios que comprende utiliza
un cuestionario de validación propio para realizar un “Análisis de las
características técnicas de las piscinas climatizadas de Castilla - La Mancha”. A
diferencia de nuestro trabajo, el estudio analiza el grado de cumplimiento de las
normativas vigentes, alcanzando éste tan solo un 55%. Recordar que en
nuestro estudio el grado de cumplimiento del cuestionario es del 69%, si bien
nuestra herramienta no analiza estrictamente el cumplimiento de normativas
(hecho justificado en los apartados 1 y 3 del Capítulo 4).
Debido al diferente enfoque entre el estudio de Tamaral (2012) para las
piscinas de Castilla – La Mancha y el nuestro para la Región de Murcia, no es
posible realizar comparaciones directas y estrictas, pero sí pueden encontrarse
algunos paralelismos y diferencias. Ambos estudios coinciden en la baja
preocupación por las zonas de acceso a la instalación, que descuidan a
menudo elementos importantes como la señalización, los aparcamientos o la
accesibilidad a la instalación. Igualmente, cuestiones organizativas importantes
como la existencia protocolos para emergencias aparecen como descuidadas
en ambos estudios. Se encuentran similitudes igualmente en el tratamiento de
la acústica de la instalación, con una media en este aspecto Castilla – La
Mancha del 51,43% y un 64,86% en nuestro estudio de la Región de Murcia.
De los resultados y discusión del estudio de Castilla – La Mancha parece
desprenderse que, al igual que en nuestro estudio, tanto las cuestiones
fuertemente inspeccionadas como aquellas de utilización continua por parte de
los usuarios son las que mayor cumplimiento tienen, descuidándose aquellas
que, siendo obligatorias o de importancia, bien no son inspeccionadas, bien no
se utilizan con frecuencia. Ejemplos de cuestiones cuidadas son las escaleras
de acceso al vaso, la limpieza de los vestuarios, la existencia y señalización de
sistemas de emergencia, o por supuesto el control de los parámetros de
calidad del agua o la presencia de socorristas en el recinto: este último aspecto
además de ser una medida de seguridad necesaria (Pelletier & Gilchrist, 2011)
es obligatoria según la legislación. Ejemplos de lo contrario son la señalización
Página | 226
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
del acceso a las gradas, la existencia de planes de evacuación o las
características de los almacenes de material.
En cambio, se detectan diferencias en ambos estudios en algunas
cuestiones, poniendo de manifiesto las diferencias en las normativas
autonómicas o en la forma de inspección de cada Comunidad Autónoma.
Ejemplo de ello es la falta de señalización de las profundidades del vaso en un
36,4% de los casos de Castilla – La Mancha, frente solo un 8% en la Región de
Murcia.
El Servicio Andaluz de Salud, a través de sus especialistas Gámez y
Padilla (2011a), ha realizado un estudio de condiciones higiénico – sanitarias
de piscinas de uso colectivo. En este caso se analiza un conjunto de piscinas,
de uso colectivo pero en gran medida piscinas al aire libre, a través de sus
proyectos de construcción o reforma, por lo que no existe un trabajo de campo
a pie de instalación que verifique que los proyectos de construcción se
correspondan con las características definitivas de la instalación. Se utiliza un
cuestionario de validación para comprobar el cumplimiento del reglamento
sanitario de piscinas de la Comunidad Autónoma Andaluza, y se seleccionaron
una treintena de instalaciones al azar de la zona geográfica de la Costa del Sol.
Aún sobre proyecto, este trabajo encuentra un elevado número de no
conformidades, que clasifica en cuatro grupos. A diferencia de nuestro estudio,
en el de la Costa del Sol el mayor número de disconformidades es relativo al
diseño de la zona de baño (un 49,13% sobre el total de disconformidades). Sin
embargo, en nuestro estudio para piscinas de la Región de Murcia el diseño del
vaso, la zona de playa y zonas circundantes es mayoritariamente correcto. Este
hecho puede ser debido a la distinta naturaleza de las piscinas; mientras que
en nuestro estudio son piscinas climatizadas para natación, en el de Gámez y
Padilla (2011a) se analizan proyectos de hoteles, clubes de playa,
urbanizaciones, etc., con un carácter más de baño lúdico, habitualmente al aire
libre, y de titularidad mayoritariamente no municipal.
De nuevo el aspecto de la señalización de profundidades y cambios de
pendientes
no
es
satisfactoriamente
cumplido,
mientras
que
en
las
instalaciones de nuestro estudio el 92% de las instalaciones cumplen
Página | 227
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
adecuadamente este requisito. En las instalaciones auditadas en la Costa del
Sol las pendientes del vaso estaban fuera de normativa, y existen obstáculos
que entorpecen la circulación del agua. Además, en muchas de estas
instalaciones no existen ayudas técnicas para discapacitados, las superficies
no son antideslizantes, la zona de playa presenta obstáculos, o las escaleras
no son las adecuadas, careciendo de pasamanos o sobresaliendo del plano de
pared del vaso. Sin embargo, la gran mayoría de estos casos se cumplen
satisfactoriamente en las piscinas climatizadas de nuestro estudio.
Otras cuestiones que reflejan la distinta naturaleza de uno y otro tipo de
instalación, o quizá de la falta de inspecciones sistemáticas en las piscinas del
estudio de Gámez y Padilla (2011a), son relativas a problemas de servicios e
higiene del agua, tratamiento del agua y de vigilancia. Mientras que la
existencia de socorrista en la instalación es prácticamente plena en nuestro
estudio, algunos proyectos de la Costa del Sol no contemplan la dotación de
este tipo de personal. Además, otras no conformidades son la falta de botiquín
o salas de enfermería, insuficiente dotación de aseos, o problemas en el diseño
del circuito hidráulico y el tratamiento del agua.
Ambos estudios sí coinciden en los problemas con los vasos infantiles o
de enseñanza. Para vasos infantiles la profundidad máxima se sitúa en ambas
comunidades autónomas en 40cm, aspecto que se incumple en casos de la
Costa del Sol. No podemos considerar que las piscinas climatizadas de la
Región de Murcia dispongan de vaso infantil, ya que aquellas que tienen un
segundo vaso en ningún caso tienen una profundidad menor de 40cm. Por lo
tanto, debemos considerar estos vasos como vasos de enseñanza, y en estos
caso el número de no conformidades es también alto (48,15% de no
conformidades en el ítem 7.46 de nuestro cuestionario de validación).
El estudio de Gámez y Padilla (2011a) argumenta por parte de los
constructores de estas instalaciones la ambigüedad legislativa y del personal
responsable de su control, tal y como también concluye en el proyecto MAID
(Consejo Superior de Deportes, 2008), sin embargo, los autores del trabajo de
la Costa del Sol apelan al deber profesional de constructores y proyectistas, y a
la vista de los resultados concluyen que debe aumentarse el control de las
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5. Condiciones de seguridad en piscinas …
administraciones sobre el diseño, construcción y mantenimiento de las piscinas
de uso colectivo.
Si bien el estudio aquí presentado no se enfoca desde el punto de vista
de los distintos tipos de usuarios de las piscinas climatizadas (nadadores,
público, trabajadores, visitantes…) sino que se hace desde el punto de vista
global de la instalación, sí podemos decir que el cuestionario contiene items
relativos a todos los colectivos involucrados. Atendiendo a los trabajadores,
podemos destacar que el 75,68% de las instalaciones no posee un local de
descanso específico para ellos (cuestión 9.23); sin embargo, la cuestión de la
realización de descansos es de importancia para el correcto desempeño del
trabajo y la evitación de accidentes laborales en las piscinas, tal y como se
hace patente en el estudio que realiza Mapfre para la prevención de riesgos
laborales en piscinas (Mapfre servicio de prevención, 2007).
En este estudio se indica que la recuperación tras un esfuerzo de
atención mental se realiza más mediante y un descanso que por un cambio de
actividad, por lo que se hace importante la existencia de locales de descanso.
Los descansos tienen distinta naturaleza en función del tipo de trabajo
realizado en la piscina. Así, los socorristas a menudo no tienen descansos,
salvo que se trate de instalaciones muy grandes; la atención disminuye
enormemente si el trabajador no puede descansar para comer o relajarse. Los
monitores deportivos suelen descansar únicamente si no existe trabajo para
ellos en un momento dado, no de forma programada, por lo que su rendimiento
ante los usuarios puede disminuir drásticamente si este descanso no se
produce. Otros colectivos, como los de limpieza o mantenimiento, requieren de
descansos físicos, y en todos los casos la existencia de un local correctamente
acondicionado para ello contribuye enormemente a la salud laboral.
Los colectivos de socorristas y monitores en particular tienen riesgos
especiales derivados de las largas estancias en el vaso de piscina y sus
cercanías; los problemas derivados del uso del cloro y otros desinfectantes, en
la piel, por inhalación, por irritación de los ojos o vías nasales ocurre con
frecuencia. Recientemente este problema ha sido tratado en profundidad en
España por el grupo de investigación IGOID de la Universidad de Castilla - La
Mancha, tanto en lo relativo al efecto del cloro en el aire para trabajadores
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5. Condiciones de seguridad en piscinas …
(Fernández-Luna, Burillo, et al., 2013) como en general sobre la utilización de
cloro para el tratamiento del agua (Fernández-Luna, 2012; Fernández-Luna et
al., 2015; Fernández-Luna et al., 2011). Si bien nuestro estudio no tiene esta
orientación los datos sobre el diseño y mantenimiento de las instalaciones
parecen correctos; la gran mayoría de piscinas disponen de sistemas
reglamentarios de renovación de aire (91,89%), y se producen condensaciones
de agua en el recinto solo en un 13,51% de los casos. Sin embargo,
consideramos de interés contrastar la cuestión de los efectos de los sistemas
de tratamiento del agua sobre los trabajadores de piscinas climatizadas en la
Región de Murcia.
Algunas cuestiones que afectan a los trabajadores, al no ser exigidas en
los proyectos de diseño, suelen quedar descuidadas. Ejemplo de ello es que
una de las escalerillas del vaso alcance el fondo de éste, facilitando así el
acceso para labores de limpieza y mantenimiento. En nuestro estudio solo el
35,14% de las piscinas de titularidad pública de la Región de Murcia dispone de
esta facilidad, dificultando las labores del perfil profesional de limpiador de
piscinas (Mapfre servicio de prevención, 2007). Otro ejemplo, en la categoría
de accesibilidad, es la despreocupación por el aparcamiento de los
trabajadores, donde solo el 29,73% de las instalaciones visitadas dispone de
aparcamiento específico para trabajadores o muy abundante, y la observación
nos indica que en la inmensa mayoría de estos casos positivos se trata de un
aparcamiento muy abundante en los alrededores de la instalación, no de
aparcamiento específico para trabajadores.
Otras cuestiones descuidadas para trabajadores son relativas a la
formación no reglamentariamente obligatoria. Si el 100% de las instalaciones
realizan un control periódico de la salud de los trabajadores, o la inmensa
mayoría de ellas aportan formación en prevención de riesgos laborales a sus
trabajadores, cuestiones ambas de importancia y obligatorias, en cambio, otros
aspectos en la formación de los trabajadores son descuidados. En lo referente
a cuestiones de accesibilidad universal (Arbour & Martin-Ginis, 2011), solo 3 de
las 37 instalaciones disponen de trabajadores formados en el uso de la lengua
de signos, ninguna de las 37 instalaciones dispone de un protocolo para
usuarios con perros-guía, ni hay planes de formación para la comunicación con
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5. Condiciones de seguridad en piscinas …
personas de diferentes discapacidades en ninguna instalación. Además, otras
cuestiones descuidadas que afectan a los trabajadores es la baja existencia de
protocolos de seguridad o reglamentos para espectáculos (8,11% y 2,70%
respectivamente), aspecto de gran importancia tal y como reflejan las Notas
Técnicas del Instituto Nacional para la Seguridad e Higiene en el Trabajo (NTP
361, 1995; NTP 884, 2010) , o la falta de información en algunas instalaciones
(27,03%) sobre las normas de manipulación de los productos químicos, riesgo
que también se indica por Fernández-Luna y Gallardo (2015) en su reciente
libro “Las piscinas en 360º: consejos y propuestas para su correcto diseño,
mantenimiento y explotación”.
Otro trabajo del grupo IGOID realiza un estudio de accesibilidad en diez
piscinas climatizadas de Castilla – La Mancha (C. Gallardo, 2008; C. Gallardo,
Felipe, Burillo, & Gallardo, 2010). El estudio utiliza un cuestionario de validación
propio consistente en 196 items organizados en 17 categorías. El cuestionario
está basado en las normativas de accesibilidad de la Comunidad Autónoma de
Castilla – La Mancha y en un conjunto de guías de buenas prácticas. Si el
grado de cumplimiento de nuestro cuestionario para el criterio de accesibilidad
es el 63%, en las diez piscinas analizadas en el trabajo de C. Gallardo (2008) el
grado de cumplimiento global es del 65%. Podemos comprobar los valores muy
similares obtenidos por ambos estudios. Los cuestionarios de ambos estudios
están construidos de forma muy distinta (el cuestionario de Castilla – La
Mancha contiene gran cantidad de ítems condicionales), y las normativas y
códigos de buenas prácticas utilizados no tienen por qué coincidir (no se
detallan en el trabajo de Castilla – La Mancha), por lo que no es posible realizar
ningún comentario riguroso sobre esta similitud. Sin embargo, sí creemos
interesante hacer notar la coincidencia de este dato.
Otras similitudes encontradas en ambos estudios son la baja adecuación
de las instalaciones para las discapacidades visuales y auditivas, o los mejores
resultados para la zona del vaso de la instalación, fuertemente regulada e
inspeccionada. Si bien el estudio de C. Gallardo (2008) se refiere sólo a
accesibilidad, también comparte con el nuestro el pobre resultado en lo
referente a vías de evacuación.
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5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Para conseguir la adecuada salida de los usuarios en casos de
evacuaciones de emergencia, las vías de evacuación de la instalación
deportiva deben tener suficiente capacidad de salida (Graat et al., 1999). Esta
capacidad de salida se ve gravemente disminuida si las vías de evacuación no
están libres de obstáculos, o por algún motivo no son utilizables. Esto ocurre en
el 21.62% de las piscinas climatizadas de titularidad pública de la Región de
Murcia. Además, el 48,65% de las instalaciones tienen alguna de sus puertas
de emergencia bloqueadas o faltas de señalización. Estos porcentajes nos
parecen excesivamente elevados, dado que las instalaciones deportivas son
consideradas como susceptibles de provocar grandes catástrofes (Asepeyo,
2007).
En lo referente a evacuación de personas con movilidad reducida,
mencionar que únicamente un 29,73% de las piscinas de nuestro estudio
disponen de ayudas técnicas específicas para su evacuación, tales como sillas
de ruedas especiales, camillas, arneses, etc. obviando la importancia de
disponer de un plan de evacuación adaptado (Fernández-Luna & Gallardo,
2015).
Página | 232
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
5.6 Conclusiones
1.
El grado medio de cumplimiento del cuestionario de seguridad para las
37 piscinas climatizadas de uso colectivo y titularidad municipal de la
Comunidad Autónoma de la Región de Murcia auditadas no refleja una
situación especialmente preocupante, pero se comprueba que la
seguridad de estas instalaciones puede mejorar sustancialmente.
2.
El grado medio de cumplimiento del cuestionario de validación es del
69%, con un rango de variación del 38% y una desviación estándar del
8,58%. Pekín destaca como la mejor instalación en seguridad, con el
82% de cumplimiento, y Estocolmo como la peor, un con 44%.
3.
Distinguiendo entre aspectos de seguridad y de accesibilidad, los
valores medios en seguridad superan a los de accesibilidad en un 9%,
poniendo de manifiesto que las cuestiones de seguridad son más
tenidas en cuenta y provienen de un cuerpo normativo más antiguo, y
por lo tanto más consolidado.
4.
Las cuestiones de seguridad que son inspeccionadas por la
administración de forma periódica se cumplen de forma rigurosa, no
ocurriendo lo mismo con otras cuestiones no inspeccionadas.
5.
Se observa heterogeneidad respecto a los valores medios de las
distintas zonas de las instalaciones; las cuestiones organizativas
quedan en un valor medio de cumplimiento del 45% y las dependencias
técnicas alcanzan hasta un 83% de cumplimiento, recordando la media
está en el 69%.
6.
Según las distintas zonas de las instalaciones se observa que los
espacios de uso continuo (vaso, vestuarios, dependencias técnicas,
etc.) tienen valores de cumplimiento del cuestionario superiores que los
relativos a situaciones de emergencia (emergencias y vías de
evacuación), siendo este hecho preocupante.
7.
Algunas
de
las
piscinas
analizadas
tienen
descompensada,
negativamente, la situación de sus vías de evacuación y emergencias
respecto a su propio valor medio. El día a día de la vida de las
Página | 233
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
instalaciones, la falta de inspecciones periódicas, y las estrategias de
gestión y control de cada instalación produce, en algunos casos,
situaciones no deseadas de bloqueo y obstrucción de salidas de
emergencia y áreas de seguridad. Existe un caso extremo de un 0% de
cumplimiento en vías de evacuación, y otro de un 100% de
cumplimiento.
8.
La categoría de oficinas posee una curtosis alta, lo que indica poca
variabilidad de los datos. Entendemos que las normativas de salud
laboral tienen que ver en esto. Ocurre algo similar con las
dependencias técnicas, justificándose en este caso por la elevada
importancia de este espacio en la seguridad de la instalación y la
existencia de inspecciones administrativas exigentes.
9.
En la categoría de cuestiones organizativas todas las instalaciones
tienen un grado de cumplimiento claramente por debajo de su propio
grado medio de cumplimiento, ocurriendo totalmente lo contrario en la
categoría de dependencias técnicas.
10. En una clasificación por el criterio de riesgo, podemos destacar que la
naturaleza de las actividades que se realizan en las piscinas
climatizadas objeto del estudio da lugar a unos resultados pobres del
cuestionario en aspectos de prevención de la violencia en el deporte, o
protección frente a vandalismo e intrusión.
11. Son igualmente bajos los valores de cumplimiento obtenidos para la
categoría de emergencias, en la que los grados de cumplimiento están
en todas las instalaciones por debajo de su valor medio.
12. Las cuestiones relativas a la edificación, al control de la higiene y salud
de los usuarios y trabajadores, o a la prevención de accidentes en el
recinto, están bastante bien controladas por los gestores deportivos,
obteniéndose valores por encima de la media de cada instalación. En
las cuestiones organizativas se descuidan los asuntos relativos a
accesibilidad y seguridad.
13. Las discapacidades sensoriales, visuales y auditivas, son poco tenidas
en cuenta en la gestión de las piscinas climatizadas, por contra de lo
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5. Condiciones de seguridad en piscinas …
que sucede con las discapacidades motoras graves (personas en sillas
de ruedas).
14. La curva de tendencia indica que los niveles de seguridad aumentan en
relación a la edad de la instalación; esto es, mayor seguridad en
instalaciones de más reciente construcción. Sin embargo, esta
tendencia no se cumple en todos los casos.
Página | 235
5. Condiciones de seguridad en piscinas …
Página | 236
Capítulo 6
Percepción de seguridad de los
usuarios de las piscinas climatizadas
de uso colectivo y titularidad municipal
de la Comunidad Autónoma de la
Región de Murcia
6. Percepción de seguridad …
Página | 238
6. Percepción de seguridad…
6 Percepción de seguridad de los
usuarios de las piscinas climatizadas de
uso colectivo y titularidad municipal de
la Comunidad Autónoma de la Región
de Murcia
6.1 Percepción del usuario y seguridad
Introducción
Los estudios anteriores analizan la seguridad como una necesidad
básica del ser humano, midiendo el grado de seguridad de una instalación en
sus múltiples dimensiones y encontrando sus puntos fuertes y débiles. Sin
embargo, aquellos no miden la percepción de seguridad del usuario. El fin de
las instalaciones deportivas y sus actividades asociadas es prestar un servicio
a la ciudadanía, y como tal la percepción de seguridad es una necesidad tan
importante como la seguridad en sí misma para el correcto desarrollo de las
actividades (Latorre, Cámara, & Pantoja, 2015; Mun, 2004).
Los estudios de percepción a menudo se ligan a los de satisfacción y por
tanto al campo de la calidad. Para el gestor deportivo es otro ángulo desde el
que observar el problema de la seguridad en instalaciones deportivas. Se
tiende a menudo a encasillar excesivamente los campos de trabajo, y se puede
cometer el error de considerar que la temática de “percepción” pertenece al
campo de “la calidad”, y por tanto queda fuera del ámbito de este estudio de
seguridad. Sin embargo, corresponde a la gestión deportiva, como materia
interdisciplinar, la tarea de integrar todos aquellos elementos útiles.
El presente estudio analiza la seguridad en piscinas climatizadas desde
el punto de vista de la percepción de seguridad del usuario. No se han
localizado en la literatura investigadora instrumentos específicos para realizar
este tipo de mediciones, por lo que hemos construido y validado un instrumento
propio. Con él, hemos realizado un estudio para las piscinas climatizadas de
Página | 239
6. Percepción de seguridad …
uso colectivo y titularidad municipal de la Región de Murcia, presentando los
resultados y su discusión.
Percepción, satisfacción y calidad
La percepción puede definirse como el proceso cognoscitivo mediante el
cual un individuo tiene conocimiento del mundo partiendo de la información que
les aportan los sentidos. Permite comprender e interpretar el entorno y
proporciona experiencias significativas al individuo. Es habitual que personas
diferentes perciban de forma diferente una misma situación, tanto lo que
perciben como la interpretación de lo percibido (Neisser, 2014). La percepción
se basa en sensaciones más o menos caóticas que el individuo ordenará
posteriormente. Esta organización se efectúa siempre a partir de una
experiencia o conocimiento de la realidad. La percepción es un proceso de
carácter espontáneo e inmediato, y el individuo realiza estimaciones y juicios
sobre las situaciones, personas u objetos que le rodean.
La percepción es selectiva, esto es, solo percibimos una pequeña parte
de lo que existe y ocurre a nuestro alrededor. Y la percepción depende de las
actitudes, necesidades e intereses de los individuos (Neisser, 2014). En base a
esto se produce un procesamiento de la información mediante el cual se
produce en el individuo una serie de juicios de valor que se pueden traducir en
reacciones de muy distinto tipo.
Estos juicios de valor derivados de la percepción, son muy importantes
en el ámbito que nos ocupa, los servicios deportivos. A menudo los estudios
sobre percepción de los usuarios en servicios deportivos se orientan a la
medición de la satisfacción de estos. Y la mejora de la satisfacción de los
usuarios de aborda a través de la mejora de la calidad de los servicios.
Hace algunas décadas, los servicios deportivos, especialmente los de
titularidad municipal que son los que nos ocupan, se centraban en la
construcción de instalaciones, en la oferta de actividades y en la promoción del
deporte, mostrando poca atención tanto a la calidad del servicio prestado como
a la satisfacción de los usuarios (Morales & Correal, 2003).
Los usuarios quedaban satisfechos con la simple disposición de una
oferta, especialmente si ésta tenía precios reducidos. Sin embargo,
Página | 240
6. Percepción de seguridad…
actualmente las exigencias de los usuarios son mucho mayores, requiriendo
que las instalaciones y servicios deportivos reúnan requisitos de limpieza,
higiene, organización, atención, etc. Colocar al usuario como elemento clave de
la propia gestión del servicio es fundamental para aumentar los niveles (Vila,
Sánchez, & Manassero, 2009).
La aportación de Parasuraman, Zeithaml y Berry (1985) fue fundamental
en el estudio de la calidad del servicio. Crean un modelo de percepción de
calidad, llamado SERVQUAL (service quality), basado en cinco desajustes
motivo de la calidad o no calidad. El último desajuste, la diferencia entre el
servicio esperado y el percibido es la clave de este modelo (Mundina &
Calabuig, 2011). La escala contiene 22 items que hacen referencia a las
expectativas de los usuarios, y se emparejan con otros 22 items sobre la
percepción del usuario del servicio evaluado. Se utiliza una escala de Likert de
7 niveles, y los 22 items se corresponden con 5 dimensiones: elementos
tangibles empatía, fiabilidad, capacidad de respuesta y seguridad. La suma de
las diferencias de cada pareja percepción – expectativa establece el indicador
de calidad.
El modelo SERVQUAL ha sido adaptado y aplicado con buenos
resultados a diferentes tipos de servicios, aunque ha sido criticado
especialmente por la inclusión de las expectativas en la escala (Brady, Cronin,
& Brand, 2002). Se puede afirmar que existen dos líneas, la que adapta este
instrumento y la que crea otras herramientas específicas (Mundina & Calabuig,
2011).
La percepción de calidad en los servicios deportivos ha sido estudiada
con interés en los últimos tiempos. Son muestra de ello el trabajo sobre
instalaciones deportivas municipales de Vila et al. (2009), la aportación de
Serrano, Rial, García y Hernández (2010) sobre gestión de clubes de golf, o la
de Nuviala, Tamayo, Iranzo y Falcón (2008) sobre la creación y utilización de
un cuestionario de medición de satisfacción de usuarios de servicios
deportivos. Igualmente, Morales y Gálvez (2011) realizan un estudio de
percepción de la calidad de un servicio deportivo municipal en la provincia de
Málaga. Calabuig, Núñez-Pomar, Prado-Gascó y Añó (2014) analizan las
relaciones entre la satisfacción, el valor percibido y las intenciones de usuarios
Página | 241
6. Percepción de seguridad …
frente a un incremento de precio en los servicios y recientemente también la
relación entre las emociones en espectáculos de baloncesto, el valor percibido,
la satisfacción y las intenciones futuras (Calabuig, Prado-Gascó, Crespo,
Núñez-Pomar, & Añó, 2015). En el mismo sentido de la percepción de los
espectadores encontramos estudios para el caso del fútbol (Theodorakis,
Alexandris, Tsigilis, & Karvounis, 2013).
Theodorakis, Kambitsis, Laios y Koustelios (2001) crean a partir de
SERVQUAL y con la mismas cinco dimensiones de calidad, una herramienta,
SPORTSERV, adaptada a servicios deportivos. Calabuig, Michele, Gómez y
Crespo (2009) analizan la percepción de calidad del servicio en espectadores
de baloncesto con una escala, EVENTQUAL. Calabuig también presenta otros
trabajos al respecto, como el caso del estudio de percepción de calidad en
espectadores de atletismo (Calabuig, Burillo, Crespo, Mundina, & Gallardo,
2010), o aplicado a usuarios de centros deportivos privados (Calabuig, Molina,
& Núñez, 2012).
Otros estudios, de entre un número considerable, pueden ser los de
Kelley y Turley (2001), que desarrollan una escala de medida propia con nueve
dimensiones de calidad para eventos deportivos, o los de Agudo y Toyos
(2003), que adaptan la escala SERVQUAL a eventos de fútbol. Por su parte,
Rial, Varela, Rial y Real (2010) crean una escala propia llamada Q-Sport10
para centros deportivos. Es interesante la contribución realizada por Wakefield
y Blodgett (1994), que comprueban cómo la calidad de los elementos
constructivos de un estadio deportivo influye forma significativa en la
satisfacción de los espectadores.
Percepción del riesgo y de la seguridad
Nuestro interés no se centra en la percepción de calidad del servicio,
sino en la percepción de seguridad, o del riesgo. Esta es una cuestión mucho
menos analizada.
Página | 242
6. Percepción de seguridad…
La actividad diaria de cualquier individuo conlleva la percepción del
riesgo de dicha actividad, e influye en el comportamiento de las personas. En la
percepción del riesgo influyen los factores culturales y sociales, y en muchas
ocasiones se forma después de experiencias propias o de aprendizaje. La
percepción del riesgo puede conllevar su aceptación, y en este caso los
individuos se someterán al riesgo con más frecuencia y tomando menos
precauciones (Cámara, 2011).
El modelo SERVQUAL tiene una dimensión referida a la seguridad. Sin
embargo, la seguridad es referida más bien a la confianza que aportan las
actitudes del personal: amabilidad, confianza, disponibilidad o competencia.
Debemos tener en cuenta las múltiples dimensiones de la seguridad descritas
en el Capítulo 3.
No se ha encontrado bibliografía de investigación que aporte
instrumentos u otro tipo de estudios al respecto de la percepción de seguridad
en instalaciones. Sí existen algunos trabajos relativos a la percepción de riesgo
en la dimensión de integridad personal y lesiones. Latorre y Pantoja (2012)
diseñan una herramienta para conocer la percepción del riesgo en actividades
deportivas escolares de los alumnos de centros escolares de edades
comprendidas entre 8 y 14 años. El instrumento se basa en un cuestionario de
reactivos, esto es, una serie de imágenes sobre situaciones relacionadas con el
deporte escolar, ante las que los alumnos seleccionaban un valor de una
escala de Likert desde 1 “Nada peligroso” a 5 “Muy peligroso”. La herramienta
se utilizó en un estudio aplicado a una muestra de 637 escolares. En la misma
línea podemos destacar el trabajo de García-Ros, Molina y Ferrando (2001),
que utilizan escalas basadas en la apreciación de riesgo sobre imágenes en
escolares, en este caso aplicadas a la percepción de riesgo en cuestiones de
seguridad vial.
Similar es también el estudio de Greening, Stoppelbein, Chandler y Elkin
(2005). Se estudian los mecanismos psicológicos subyacentes a la percepción
de riesgo en niños de núcleos suburbanos entre 9 y 17 años. El estudio incluye
la percepción de riesgo en ciertas actividades acuáticas. En la misma categoría
Página | 243
6. Percepción de seguridad …
entra también el estudio de Little y Wyver (2010) para analizar la percepción de
riesgo de niños en actividades físicas al aire libre.
Relativo a percepción de riesgo en piscinas, encontramos el reciente
trabajo de Amodio et al. (2014) en el que se evalúa la percepción de riesgo de
usuarios de piscinas en Palermo. El estudio se realiza mediante un cuestionario
autoadministrado y no evalúa la seguridad de la instalación, como es nuestro
interés, sino el comportamiento saludable o no saludable de los usuarios.
En España destaca el trabajo de Fernández-Luna et al. (2011), sobre la
satisfacción de los usuarios al respecto del tratamiento químico de cloro en
piscinas climatizadas y su percepción sobre los problemas de salud derivados
de este tratamiento del agua. Como herramienta se utiliza una encuesta de
satisfacción desarrollada y validada al efecto. Los resultados aportan en
general una percepción negativa de los usuarios sobre el uso de cloro para el
tratamiento del agua.
Un trabajo interesante, si bien no ha sido publicado en formato de
investigación, es el aportado por Alfonso y Gracia (2010). En él se analiza la
percepción de riesgo, orientando el estudio a la seguridad laboral. Como factor
asociado a la percepción del riesgo en el ámbito laboral se consideran las
actitudes sociales fuera de dicho ámbito, entre las que se encuentra la
actividad deportiva. En el estudio se utiliza un extenso cuestionario de 45
preguntas con una escala de Likert de cinco niveles. El cuestionario dedica un
gran número de ítems al análisis del perfil del encuestado, dedicando a la
percepción de riesgo las últimas 17 preguntas. Utilizando este instrumento se
realizan distintos estudios a trabajadores de diferentes sectores laborales.
Montalbetti y Chamarro (2010) nos presentan un trabajo de percepción
del riesgo en el deporte de escalada en roca. Utilizan un cuestionario de 80
items y una escala de Likert de 7 puntos. El cuestionario plantea situaciones
propias de la escalada en roca, y los encuestados valoran el nivel de riesgo de
cada
situación.
El
estudio
concluye
que
los
escaladores
valoran
adecuadamente los riesgos a que se exponen, aumentando la percepción de
riesgo con la dificultad de la escalada. Sin embargo, los escaladores de vías de
un grado de dificultad mayor percibían menor riesgo globalmente. De forma
Página | 244
6. Percepción de seguridad…
similar, White, Finch, Dennis y Siesmaa (2011) realizan un trabajo sobre
percepción de riesgo de lesiones en críquet entre niños, analizando situaciones
propias del juego.
Como podemos comprobar la gran mayoría de los estudios de
percepción de riesgo analizan a los usuarios en vez de intentar sacar
conclusiones sobre la satisfacción del usuario en la práctica de actividades,
sobre la calidad de los servicios o sobre las instalaciones que se utilizan.
Página | 245
6. Percepción de seguridad …
Página | 246
6. Percepción de seguridad…
6.2 Planificación del estudio
Objetivos de la investigación
El apartado 3 del Capítulo 2 de este documento establece los objetivos y
estudios de la fase 2 de esta investigación. Es el objetivo 4 el que se cubre con
el presente estudio, que recordemos era el siguiente:
Conocer la percepción de seguridad de los usuarios de las
piscinas climatizadas de uso colectivo y titularidad municipal de
la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
Para cumplir con este objetivo nos hemos propuesto:
•
Desarrollar y validar una herramienta para medir el grado de percepción
de seguridad de usuarios de piscinas climatizadas.
•
Conocer el grado de seguridad percibida por los usuarios en piscinas
climatizadas de uso colectivo y titularidad municipal de la Región de
Murcia.
•
Contrastar el grado de seguridad percibida con la seguridad auditada.
El ámbito y la población
El presente estudio se ciñe a las piscinas climatizadas de uso colectivo y
titularidad municipal de la Región de Murcia. La sección “Población objeto de
estudio”, del apartado 1 del Capítulo 5 detalla las características de este
conjunto de instalaciones.
La población de interés la forman los usuarios que habitualmente
practican actividades acuáticas en estas piscinas climatizadas. Quedan
excluidos por tanto los trabajadores y gestores, el público espectador de
actividades y eventos, y cualquier otro tipo de visitantes que no practique
actividad deportiva en el interior de la instalación. Quedan también excluidos
los menores de 18 años y los practicantes ocasionales, entendidos estos como
aquellas personas que utilizan la piscina climatizada sobre la que se entrevista
menos de 5 veces en un curso académico.
Página | 247
6. Percepción de seguridad …
Hemos estimado la población en base a información semicuantitativa
aportadas por los gestores de las piscinas objeto de estudio. Podemos estimar
una media de 1.000 usuarios por instalación, sumando aproximadamente un
total de 37.000 usuarios.
La herramienta de recogida de datos
En el apartado anterior hemos puesto de manifiesto la inexistencia de
herramientas para medir la percepción de seguridad global de los usuarios de
piscinas climatizadas. Por ello en esta sección se presenta el diseño y
validación de una herramienta propia. Como hemos analizado anteriormente,
para ello habitualmente se utilizan cuestionarios de percepción con escalas de
Likert, que serán los que también se utilizarán aquí.
Definición del constructo
En capítulos anteriores hemos abordado en profundidad los conceptos
de seguridad y de percepción, hemos caracterizado adecuadamente las
piscinas climatizadas de uso colectivo y titularidad municipal, y hemos definido
el ámbito geopolítico de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia y sus
instalaciones afectadas. Por ello, no creemos necesario abundar más en la
definición del constructo que queremos estudiar, enunciándolo como:
Conocer el grado de seguridad percibida por los usuarios de piscinas
climatizadas de uso colectivo y titularidad municipal de la Comunidad
Autónoma de la Región de Murcia.
Dimensiones del constructo
La seguridad es una variable de estudio compleja. Para estudiar este
tipo de variables suele ser necesario especificar distintos aspectos, facetas o
dimensiones
de
estudio,
y
en
ocasiones
muy
complejas
incluso
subdimensiones (Cazau, 2006).
En el apartado 4 del Capítulo 3 de este documento, “Construcción del
cuestionario de validación”, quedaron definidos los criterios de riesgo y zona
espacial de la instalación, y para ambos casos se establecieron sus distintas
Página | 248
6. Percepción de seguridad…
categorías, que se detallaban en la Tabla 8. Parece razonable utilizar el criterio
riesgo y sus categorías como facetas de nuestro estudio de percepción. La
Tabla 32 muestra las categorías del criterio riesgo de la Tabla 8.
Tabla 32. Categorías del criterio Riesgo utilizadas en el cuestionario de
validación desarrollado en el Capítulo 3
Categoría
Accidente personal, enfermedad
Emergencia, evacuación
Robo, hurto, intrusión, sabotaje, atentado
Violencia, racismo, xenofobia, intolerancia
Higiene, salud
Integridad del edificio
Accesibilidad
Clave
Accidente
Emergencia
Intrusión
Violencia
Higiene
Edificio
Accesibilidad
Forma de administración
De entre las formas más habituales de administración de cuestionarios,
para nuestro estudio realizaremos cuestionarios administrados mediante
entrevistas cara a cara presenciales realizadas por encuestadores. Los
cuestionarios se cumplimentarán en la propia instalación, a la entrada o salida
de los usuarios. Para prevenir el sesgo de responder preguntas socialmente
aceptables, las encuestas se realizarán individualmente, de forma anónima y
buscando la confidencialidad.
Número de ítems
Somos conscientes de la saturación de encuestas que sufren los
ciudadanos, y de la multitud de vías de publicidad directa (telefónicas o
presenciales) a las que están sometidos. Consideramos que la forma de
administración escogida es adecuada para favorecer la certeza de las
respuestas, debido al trato personal y a la administración en el mismo momento
de utilizar la instalación. Sin embargo, es frecuente que los usuarios dispongan
de poco tiempo para dedicar al encuestador, por lo que este tipo de encuestas
requiere poder ser cumplimentada en un tiempo mínimo. Creemos que más de
dos minutos sería excesivo, entorpeciendo la encuesta. Escogemos por tanto
una encuesta muy corta de menos de 15 preguntas de sencilla redacción.
Página | 249
6. Percepción de seguridad …
Igualmente,
es
habitual
desear
obtener
gran
cantidad
de
datos
sociodemográficos de los encuestados, pero esto aumenta considerablemente
el tiempo de cumplimentación y aumenta también la sensación de invasión de
la privacidad. Por ello, únicamente solicitaremos sexo y edad del encuestado.
Variables del estudio
Establecemos las variables a partir de las dimensiones del constructo. A
los usuarios de las instalaciones no se les puede requerir información técnica ni
sobre cuestiones particulares de elementos de seguridad específicos. Por
ejemplo, los usuarios no tienen por qué saber si los elementos antiincendios
(extintores, bocas de incendio, hidrantes, rociadores, etc.) son los adecuados
en cantidad y ubicación, y si su estado de mantenimiento es el correcto. Ese
tipo de cuestiones tendría sentido en estudios de percepción de trabajadores o
técnicos.
Debemos escoger un conjunto reducido de sencillas cuestiones que
reflejen la percepción del usuario de cada dimensión a tratar. Las variables que
seleccionamos se resumen en la Tabla 33 y son las siguientes:
-
Accidente personal, enfermedad
Variable 1: Competencia de los socorristas. Esta variable hace
referencia a la seguridad de los propios usuarios frente a accidentes y
enfermedades súbitas.
Variable 2: Seguridad ante equipamientos y accesorios. Percepción
de protección ante heridas y accidentes personales debido al estado del
equipamiento y los accesorios de la instalación.
-
Emergencia, evacuación
Variable 3: Facilidad de evacuación. Percepción del usuario de la
facilidad para salir con seguridad de la instalación en caso de
emergencia.
-
Robo, hurto, intrusión, sabotaje, atentado
Variable 4: Seguridad frente a robos in situ. El riesgo de mayor
impacto directo para el usuario en esta dimensión es la sustracción de
sus objetos personales. Casos de sabotaje o atentado quedan
descartados por ser muy lejanos al usuario. Por ello, estudiaremos la
Página | 250
6. Percepción de seguridad…
percepción del usuario ante el robo o hurto de sus objetos personales en
el lugar donde los dejan solos: los vestuarios de las instalaciones y sus
taquillas.
-
Violencia, racismo, xenofobia, intolerancia
Variable 5: Integridad como persona. Indagaremos sobre la
percepción del usuario al respecto de la protección de su honor e
integridad
como persona,
haciendo referencia
a
posibles
discriminaciones por apariencia física, raza, sexo, capacidades físicas,
etc.
-
Higiene, salud
Variable 6: Salubridad del agua del vaso de la piscina. El elemento
fundamental en cuestiones de higiene y salubridad en piscinas es el
estado del agua. No se preguntará por cuestiones particulares, sino por
la percepción general.
Variable 7: Higiene y salubridad de la instalación. Consideramos que
esta dimensión tiene dos aspectos importantes: el estado del agua del
vaso (variable 6), y el estado general de la higiene y salubridad de la
instalación.
-
Integridad del edificio
Variable 8: Integridad del edificio. Se requerirá una percepción global
del estado de conservación y mantenimiento de la instalación.
-
Accesibilidad
Variable 9: Accesibilidad general de la instalación. Se solicitará al
usuario su percepción sobre la facilidad de uso y la accesibilidad de la
instalación.
-
Seguridad general
Además de los ítems anteriores sobre las dimensiones de la seguridad,
se solicitarán al usuario dos valoraciones generales sobre seguridad,
una sobre la percepción de gestión de la seguridad en el servicio y otra
sobre la percepción de seguridad de la instalación.
Variable 10: Disponibilidad del personal del servicio ante
situaciones problemáticas. Como medida de percepción de seguridad
referente al servicio, consideramos que lo más pertinente es preguntar
sobre la percepción de disponibilidad del personal ante cualquier
situación.
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6. Percepción de seguridad …
Variable 11: Percepción global del concepto de seguridad. Este ítem
recoge la percepción global de seguridad del usuario al respecto de la
instalación. Entendemos que subyacentemente este ítem incluye
también una valoración del servicio, por lo que consideramos esta
variable como la percepción global de seguridad.
Tabla 33. Variables utilizadas en el estudio de percepción
Variable
Descripción
1
Competencia de los socorristas
2
Seguridad ante equipamientos y accesorios
3
Facilidad de evacuación
4
Seguridad frente a robos in situ
5
Integridad como persona
6
Salubridad del agua del vaso de la piscina
7
Higiene y salubridad de la instalación
8
Integridad del edificio
9
Accesibilidad general de la instalación
10
Disponibilidad del personal ante situaciones problemáticas
11
Percepción global del concepto de seguridad
Datos sociodemográficos
Edad
Sexo
Tipo de respuestas
En este estudio utilizaremos una escala de Likert de seis niveles, con
consideración de escala cardinal. La escala de Likert (Likert, 1932) es una
escala psicométrica ampliamente utilizada en cuestionarios, y de gran uso en
investigación en ciencias sociales. En ella, el encuestado especifica el nivel de
acuerdo o desacuerdo con una declaración. La escala de likert original contenía
5 niveles, que normalmente son los que se muestran en la Tabla 34.
Tabla 34. Niveles de la escala de Likert original
1. Totalmente en desacuerdo
2. En desacuerdo
3. Ni de acuerdo ni en desacuerdo
4. De acuerdo
5. Totalmente de acuerdo
Un vez completo el cuestionario las variables se pueden analizar
individuamente, o se puede sumar respuestas de todos los ítems para obtener
Página | 252
6. Percepción de seguridad…
una puntuación global grupo de variables. En este último caso se les llama
escalas sumativas de Likert.
La escala de Likert suele considerarse una escala ordinal, ya que no se
puede asumir que los individuos perciban las respuestas como equidistantes.
Sin embargo, se puede considerar una escala cardinal si se acompaña de una
escala visual horizontal en la que se coloquen los valores equidistantes (Supo,
2012).
En ciertas ocasiones se utilizan escalas de un número de niveles distinto
de 5, siendo generalmente 7 o 9 si se usa un número impar de niveles. Algunos
estudios demuestran que las escalas de 7 o 9 niveles aportan las mismas
características de media, varianza, asimetría y curtosis que la escala de 5
niveles (F. Sánchez, 1998). Se recomienda no ofrecer más de 7 opciones, pues
los encuestados no suelen ser capaces de asignar su opinión entre tantas
categorías. Por otro lado, si se utilizan escalas de 10 niveles se tiende a no
indicar nunca los valores extremos.
Las escalas con valores de números impares tienen siempre un valor de
respuesta central, un punto medio, que suele asignarse a la categoría “Ni de
acuerdo ni en desacuerdo”, “No estoy seguro” o “Indiferente”, y esta categoría
es difícil de tratar (Rojas & Fernández, 2000). Algunos resultados de
investigación cuestionan seriamente la utilidad de la categoría de respuesta
central (A. Hernández, Espejo, González, & Gómez, 2001). Las categorías
centrales pueden ser escogidas por motivos distintos a su posición frente a la
cuestión (Dubois & Burns, 1975), como la ambivalencia, la indiferencia, falta de
comprensión, falta de competencia, sensación de invasión de la privacidad,
falta de familiaridad, etc. (A. Hernández et al., 2001). Algunos estudios
recientes incluso han mostrado que los individuos con nivel medio en la
variable medida tienen una baja probabilidad de contestar la respuesta central
(Andrich, Jong, & Sheridan, 1997). Por todo ello, hemos escogido una escala
de 6 niveles, que son los de la Tabla 35.
Por último, para los datos sociodemográficos, el sexo se codificará como
hombre o mujer, y la edad en franjas de edad. 18 a 29, 30 a 39, 40 a 49, 50 a
59, 60 o más. No se contemplarán menores de 18 años.
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6. Percepción de seguridad …
Tabla 35. Escala de 6 niveles utilizada en nuestro cuestionario
de percepción
1. Muy en desacuerdo
2. Bastante en desacuerdo
3. Algo en desacuerdo
4. Algo de acuerdo
5. Bastante de acuerdo
6. Muy de acuerdo
Redacción del cuestionario
En las escalas tipo Likert descritas en el apartado anterior se deben
presentar unos enunciados a los que el encuestado muestre su acuerdo o
desacuerdo. En ocasiones se recomienda intercalar enunciados positivos con
enunciados negativos, debiendo mostrar el encuestado siempre el acuerdo o
desacuerdo con el enunciado. Otra opción utilizada en ocasiones consiste en
una redacción neutra, pero en ese caso el usuario no mostraría su acuerdo o
desacuerdo, sino su valoración sobre el ítem.
Por ejemplo, para nuestra variable 7: Higiene y salubridad de la
instalación, los tres estilos podrían ser:
-
Estilo negativo:
Indique su acuerdo o desacuerdo:
La instalación está muy sucia y es muy poco higiénica.
-
Estilo positivo:
Indique su acuerdo o desacuerdo:
La instalación está muy limpia y es muy higiénica.
-
Estilo neutro:
Valore del 1 al 6:
La limpieza e higiene de la instalación
En nuestro cuestionario utilizamos el esquema clásico de acuerdo o
desacuerdo con un enunciado, y redactamos todos los enunciados en sentido
positivo. Con ello pretendemos tanto facilitar la comprensión al encuestado
como establecer una línea de medición negativa-positiva entre el valor de
respuesta 1 y 6 que facilite la cardinalidad de la escala. Los enunciados del
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6. Percepción de seguridad…
cuestionario se describen en la Tabla 36 y el cuestionario completo maquetado
en la Tabla 37.
Tabla 36. Enunciados para las variables del cuestionario
N
1
Variable Enunciado
Competencia de los Los socorristas están siempre pendientes
socorristas de los nadadores y me parecen muy
competentes
2
Seguridad ante El equipamiento, los aparatos y todos los
equipamientos y accesorios están en muy buen estado y son
accesorios muy seguros y fáciles de usar
3
Facilidad de evacuación Podré salir del edificio rápidamente en caso
de cualquier emergencia
4
Seguridad frente a robos Mi bolsa de deporte y mis pertenencias
in situ están muy seguras en esta instalación
5
Integridad como persona En esta instalación nunca me he sentido
ofendido ni discriminado por ningún motivo
(apariencia física, raza, sexo, orientación
sexual, capacidades físicas)
6
Salubridad del agua del El agua de la piscina está en muy buenas
vaso de la piscina condiciones
7
8
Higiene y salubridad de la La instalación está muy limpia y es muy
instalación higiénica
Integridad del edificio El edificio y sus dependencias están muy
bien conservadas y mantenidas
9
Accesibilidad general de la Las instalaciones son muy cómodas,
instalación accesibles y fáciles de utilizar
10
Disponibilidad del personal Si tengo cualquier problema siempre habrá
ante situaciones alguien que me atienda y me lo solucione
problemáticas
11
Percepción global del Esta es una instalación muy segura
concepto de seguridad
Página | 255
6. Percepción de seguridad …
Tabla 37. Cuestionario de percepción maquetado
Página | 256
6. Percepción de seguridad…
6.3 Evaluación de las propiedades métricas de
la herramienta
En las ciencias sociales y humanas, como el caso que nos ocupa, se
utilizan herramientas tales como encuestas para obtener información acerca de
actitudes, percepciones, habilidades u opiniones. Los cuestionarios basan su
información en la validez de la información verbal de percepciones,
sentimientos, actitudes o conductas que transmite el encuestado. Esta
información en muchos casos es difícil de contrastar y traducir a un sistema de
medida, a una puntuación. Es esta característica la que hace complejo
establecer los criterios de calidad de este tipo de instrumentos (M. Martín,
2004).
Comprobar las propiedades métricas de estas herramientas es una
cuestión básica para justificar su utilización. Con el análisis de las propiedades
métricas de una herramienta se aplican procedimientos, estadísticos o no, que
permiten determinar si una prueba es válida para medir un constructo
previamente definido.
Los conceptos clave del análisis de las propiedades métricas son la
fiabilidad y la validez. Una prueba es fiable (o confiable) si mide un fenómeno
siempre de igual manera, dando medidas consistentes y estables. Es válido si
mide el atributo que pretende medir. Para medir la fiabilidad y validez de
nuestra encuesta utilizamos, entre otros elementos, los datos aportados por
una prueba piloto.
Prueba piloto
Con el fin de determinar parte de las propiedades métricas de la
herramienta, se realizó una prueba piloto mediante encuesta a 40 usuarios de
una piscina climatizada distinta de las objeto de este estudio.
Con el objeto de poder hacer estudios de fiabilidad (estabilidad temporal
en este caso, desarrollado más adelante), los usuarios fueron seleccionados de
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6. Percepción de seguridad …
determinadas franjas horarias e identificados para poder realizarles un retest.
Se les explicó el objeto de la prueba piloto y se marcaron en la encuesta las
iniciales de su nombre y apellidos (o un nick cualquiera); se les emplazó para el
mismo día de la siguiente semana en la misma franja horaria. En el momento
de realizar el retest, una vez identificado el test del mismo encuestado, se
destruyeron las cabeceras que contenían el nick del encuestado. De este modo
se consiguió repetir el test a 32 de los 40 usuarios de la primera prueba piloto,
utilizando las 32 parejas test-retest para los estudios de estabilidad temporal.
Además, el retest fue realizado por un encuestador distinto, para
analizar la concordancia inter-observadores, otra medida de fiabilidad (tratada
más adelante en este mismo apartado). Con posterioridad a la realización de la
segunda encuesta se preguntó a los encuestados una serie de cuestiones
cualitativas para analizar las posibilidades de mejora del cuestionario:
Si los enunciados se comprenden con facilidad.
Si la extensión de los enunciados es correcta.
Si la escala de respuestas les parece adecuada.
Si han sentido rechazo a ciertas preguntas.
Si cambiarían el orden de las preguntas.
Si la duración de la encuesta es adecuada.
Cualquier otra consideración que desearan hacer.
El cuestionario fue, en general, bien considerado por los usuarios de la
prueba piloto. Con la información cualitativa aportada se realizaron pequeños
retoques en la redacción de los enunciados y en la maquetación del
cuestionario.
Fiabilidad de la herramienta
La fiabilidad de un instrumento nos informa del grado en que lo que mide
lo hace con precisión, con el menor error de medida posible (Pérez, 2012).
También llamada técnicamente confiabilidad, es una propiedad métrica que
hace referencia a la ausencia de errores de medida, o lo que es lo mismo, al
grado de consistencia y estabilidad de las puntuaciones obtenidas a lo largo de
Página | 258
6. Percepción de seguridad…
sucesivos procesos de medición con un mismo instrumento. La fiabilidad se
mide a través de varias propiedades, como la consistencia interna, la
estabilidad temporal o la concordancia interobservadores.
Consistencia interna
La consistencia interna de un cuestionario se refiere al grado en el que
las cuestiones de una escala se correlacionan entre ellas, es decir, en qué
magnitud las distintas cuestiones están midiendo el mismo constructo. Si miden
el mismo constructo deben tener una gran correlación, es decir, la escala debe
ser muy homogénea (Sun et al., 2007).
La consistencia interna se suele medir mediante el parámetro Alfa de
Cronbach, y usualmente se utiliza el método de la Expresión 6. Alfa produce
valores entre 0 y 1, y generalmente la consistencia interna de una escala se
considera aceptable cuando este valor se encuentra entre 0,70 y 0,90. Valores
superiores a 0,90 no tienen por qué ser buenos, ya que indican una excesiva
correlación entre las cuestiones. Hemos calculado el Alfa de Cronbach a
nuestra prueba piloto, obteniendo un valor de 0,817, lo que nos da una buena
consistencia interna.
∑* (
'
∙)
,
(1
+ donde:
k es el número total de ítems
2
Si es la varianza del ítem i
2
St es la varianza de la suma de los valores
Expresión 6. Alfa de Cronbach para la medida de la consistencia interna
Estabilidad temporal y concordancia interobservadores
Con la estabilidad temporal se analiza la coherencia de opinión de los
encuestados con el paso de un pequeño intervalo de tiempo. Suele usarse la
técnica del test-retest, en la que el mismo evaluador pasa la encuesta a los
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6. Percepción de seguridad …
mismos sujetos en dos momentos o situaciones distintas. Después se halla el
coeficiente de correlación entre las dos aplicaciones, obteniendo el coeficiente
de estabilidad temporal.
En nuestro caso, mediante el procedimiento descrito para la prueba
piloto se realizó un test-retest a 32 usuarios. A los datos obtenidos se les
calculó el coeficiente de estabilidad temporal, resultando un valor de 0,943, lo
que nos da una estabilidad temporal alta. La brevedad del cuestionario y la
sencillez de sus enunciados deben ser responsables de los buenos valores de
este coeficiente.
Por otro lado, los estudios de concordancia tienen como objetivo estimar
hasta qué punto dos observadores (encuestadores en nuestro caso) coinciden
en su medición (Cerda & Villarroel, 2008). En nuestro caso, el retest fue
realizado por un encuestador distinto, sirviéndonos por tanto la correlación
entre las dos aplicaciones como medida de la concordancia interobservadores.
El coeficiente de estabilidad temporal podría haberse visto afectado por el
cambio de encuestador, pero sin embargo, el buen valor 0,943 obtenido
justifica la fiabilidad del instrumento.
Validación del cuestionario
Como ya se ha descrito en la sección “Evaluación de las propiedades
métricas de la herramienta: validación del cuestionario”, del apartado 3 del
Capítulo 4, la validación del cuestionario establece si el cuestionario mide lo
que se pretende medir (M. Martín, 2004). Esto, que parece una obviedad, es
una afirmación difícil de mantener con pruebas. Se suele considerar que la
validez tiene tres componentes, validez de constructo, de contenido y de
criterio.
Validez de contenido
La validez de contenido se ha establecido mediante el estudio del
cuestionario por parte de 5 expertos: tres gestores de piscinas climatizadas y
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6. Percepción de seguridad…
dos doctores en ciencias del deporte con experiencia en cuestionarios de
satisfacción. En este caso se utilizó el método de Lawshe (Lawshe, 1975), en el
que se solicitó a cada experto indicar sí cada ítem es “innecesario, útil o
esencial”. Con esta información se calcula el índice con la expresión llamada
“razón de validez de contenido”, que se muestra en la Expresión 7.
- . ⁄2
⁄2
Expresión 7. Razón de validez de contenido
ne es el número de expertos que han valorado el ítem como esencial y N
es el número total de expertos que han evaluado el ítem. Un índice RVC = 0
indica que la mitad de los expertos han evaluado el ítem como esencial. Los
ítems con una bajo RVC deberían ser eliminados.
Para nuestro caso, con 5 expertos (N=5), para que se obtengan valores
positivos en RVC deben considerarse 3 consideraciones de esencial
(RVC=0,2), 4 consideraciones esenciales (RVC=0,6) o las 5 (RVC=1). El bajo
número de ítems de nuestro cuestionario requiere una selección muy detallada
de ellos.
Para todos los ítems se ha encontrado un RVC igual o superior a 0,6,
con un RVC medio de 0,89, valor que consideramos muy adecuado. Por tanto,
las variables objeto de estudio se consideraron correctas, si bien se
modificaron algunos aspectos de redacción.
Validez de constructo
La validez de constructo define si el instrumento refleja el concepto que
se quiere medir. Con ella se analiza si la definición operacional de una variable
refleja el significado teórico pretendido, es decir, evalúa si el experimento se
ocupa de la variable que se está probando.
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6. Percepción de seguridad …
La validez de constructo se utiliza habitualmente en casos donde existe
una gran cantidad de subjetividad de los conceptos. Es frecuente que no exista
una unidad aceptada para medir un constructo; están abiertos a debate hasta
casos tan extendidos como el cálculo del Coeficiente de Inteligencia (CI)
(Shuttleworth, 2009).
El término “constructo” se refiere a un concepto teórico (como por
ejemplo la percepción de seguridad). La correcta definición operativa de un
constructo tiene grandes dificultades en la práctica, ya que los constructos no
son directamente observables. Por ello, la validez de un constructo es un
proceso laborioso y difícil.
En nuestro caso, la validez de constructo tratará si la herramienta
desarrollada realmente mide la percepción de seguridad de los usuarios de
piscinas climatizadas de uso colectivo. Para valorar la validez de constructo de
nuestra herramienta hemos utilizado los datos obtenidos en la prueba piloto.
Hemos considerado que el ítem 11, relativo a seguridad global “Esta es una
instalación muy segura”, define con precisión el constructo. Hemos analizado la
correlación entre la suma de las variables 1 al 10 relativas a distintos aspectos
de percepción de seguridad y la variable 11. Esta forma de analizar la validez
es similar a la propuesta por Calabuig et al. (2010) para la medida de la
satisfacción de espectadores de atletismo. Se ha obtenido una correlación
significativa de 0,756 (p<0,01), por lo que podemos afirmar que la escala posee
validez de constructo.
Validez de criterio
La validez de criterio establece una relación entre la herramienta
construida y otras variables ajenas a ella (otros criterios), ya sean otros
instrumentos (validez concurrente) o mediciones posteriores (validez predictiva)
(Shuttleworth, 2009). Un criterio es una variable distinta al test, variable que se
sabe que es un indicador de aquello que el test pretende medir, o que se sabe
que debe presentar una relación determinada con lo que el test pretende medir.
Se llama coeficiente de validez a la correlación del test con esta variable
externa.
Página | 262
6. Percepción de seguridad…
En nuestro caso, no conocemos otro instrumento para medir la
percepción de seguridad en piscinas climatizadas de uso colectivo, ni otros
estudios sobre percepción de seguridad en este tipo de instalaciones, por lo
que no podemos verificar la validez de criterio.
Página | 263
6. Percepción de seguridad …
Página | 264
6. Percepción de seguridad…
6.4 La organización y el trabajo de campo
La muestra
El apartado 2 del Capítulo 5 describe las consideraciones generales
sobre la selección de una muestra de una población. Para el caso del estudio
de percepción de usuarios que nos ocupa, disponemos de una población
dividida en distintas piscinas climatizadas, por lo que debemos considerar la
realización de un muestreo estratificado.
El muestreo estratificado consiste en considerar categorías diferentes
entre sí, llamadas estratos. Estos estratos deben poseer una gran
homogeneidad al respecto de alguna característica. Con este tipo de muestreo
se
pretende
asegurar
que
todos
los
estratos
están
representados
adecuadamente en la muestra.
Habitualmente dentro de cada estrato se seleccionan los elementos
utilizando muestreo aleatorio simple, aunque también se pueden utilizar otros
tipos de muestreo. A veces aparecen algunos problemas para realizar
muestreo estratificado, pues no se conoce lo suficiente las características de la
población.
La distribución de la muestra en los diferentes estratos se llama
afijación, y puede ser simple, done cada a estrato le corresponde el mismo
número de elementos muéstrales. Proporcional, realizándose la distribución en
función del tamaño de la población en cada estrato. U óptima, que no se suele
utilizar ya que debe tenerse en cuenta la dispersión previsible de los
resultados.
Para nuestro caso, los grandes estratos de la población son claramente
las distintas piscinas climatizadas de la Región de Murcia. Los resultados
obtenidos en cada una de ellas pueden variar significativamente, dependiendo
del estado y forma de gestión de la instalación. Entendemos que otros posibles
estratos como el sexo, la edad o la condición física tienen muy baja relevancia
comparado con éste.
Página | 265
6. Percepción de seguridad …
Utilizaremos afijación simple. Es decir, en cada piscina climatizada
encuestaremos el mismo número de usuarios. Una alternativa a esto sería una
afijación proporcional al número de usuarios de cada instalación. Sin embargo,
obtener este dato no es tarea fácil. La dispersión de administraciones gestoras
dificulta la aportación de esta información. Queda para el futuro la realización
de un estudio general en profundidad sobre las piscinas de la Región de
Murcia, ocupándonos en este caso únicamente aquellas cuestiones relativas a
la seguridad de las instalaciones.
Para el cálculo del tamaño de la muestra utilizaremos la fórmula
habitual, utilizada también para el estudio del Capítulo 5, que se da en la
Expresión 1. Para nuestro problema y distintos niveles de confianza y error,
obtenemos los tamaños de muestra presentados en la Tabla 38, considerando
una población de N=37.000 usuarios.
Tabla 38. Tamaños de la muestra con distintos niveles de confianza y de error,
considerando una población de 37.000 usuarios
Error / confianza
90%
95%
99%
5%
269
380
652
4%
418
591
1007
3%
736
1036
1751
Pero además, dada la fuerte estratificación de nuestro problema, nos
interesa poder obtener resultados específicos de cada estrato, esto es, de cada
piscina climatizada. Si consideramos una media de 1.000 usuarios por
instalación (ver sección “El ámbito y la población” del apartado 2 de este mismo
Capítulo), esto es, una población de 1.000 usuarios, los tamaños de muestra
para ciertos valores de error y confianza resultan los que se dan en la Tabla 39.
Tabla 39. Tamaños de la muestra con distintos niveles de confianza y de error,
considerando una población de 1.000 usuarios
Error / confianza
80%
85%
90%
15%
18
23
30
10%
40
50
64
5%
142
172
214
Página | 266
6. Percepción de seguridad…
De estas dos tablas (Tabla 38 y Tabla 39), se encuentra que utilizando
una muestra de 50 usuarios por instalación se puede realizar el estudio de
percepción de una sola instalación con un nivel de confianza del 85% y un
margen de error del 10%. Pero además, estas 50 encuestas por instalación se
convierten en una muestra de 1.850 usuarios en total, valor que nos ha
permitido realizar el estudio de percepción de la Región de Murcia con un
elevado nivel de confianza del 99% y un margen del error de tan solo el 3%.
Si bien es cierto que los parámetros obtenidos para una sola instalación
no son muy altos (nivel de confianza del 85%, margen de error del 10%), este
tamaño de muestra resulta un compromiso razonable entre aplicabilidad y
confianza/error.
Por tanto, la muestra estratificada la obtendremos con una población de
1.850 usuarios, estratificados por afijación simple en muestras de 50 usuarios
por instalación.
Podemos considerar que la muestra en cada estrato se obtiene por
muestreo aleatorio simple. En la Sección “Procedimiento de recogida de
información” del apartado 2 del Capítulo 5 se describe la forma de
administración del cuestionario. Para un muestreo aleatorio simple ideal
deberíamos disponer de la base de datos de usuarios de cada instalación y su
forma de contacto, seleccionando por un procedimiento aleatorio los 50
usuarios. Obtener esta información es muy complejo, debido a la ausencia de
datos agrupados, a la dispersión de organismos gestores, y a las políticas de
protección de datos de cada instalación. Sin embargo, podemos considerar la
forma de administración escogida como una selección aleatoria.
Codificación y gestión del cuestionario
Al igual que en el caso del cuestionario de validación desarrollado en el
Capítulo 5, se ha utilizado un cuestionario de percepción en papel. Los
argumentos para desestimar el uso de sistemas de cumplimentación digital
encuestas son los mismos que en el anterior caso. Además, en el anterior caso
el cuestionario se cumplimentaba exclusivamente por parte del propio
encuestador. En este caso, el cuestionario será visionado por ambas personas,
Página | 267
6. Percepción de seguridad …
encuestador y encuestado, por lo que la manipulación en papel parece más
sencilla y conveniente.
El modelo digital
Los datos obtenidos de las encuestas se digitalizan en una sencilla hoja
de cálculo que posteriormente puede ser manipulada e importada de múltiples
formas y por distinto software para realizar la explotación de los datos. La hoja
de cálculo original se ha obtenido con el software libre Calc, pudiendo ser
manipulada en cualquier otra aplicación que interprete el formato csv o xls,
como puede ser la hoja de cálculo Excel o el software estadístico SPSS.
Código
Sexo
Edad
P01
P02
P03
P04
P05
P06
P07
P08
P09
P10
P11
Figura 36. Estructura de datos utilizada la explotación de la encuesta de
percepción.
El esquema de la hoja de cálculo se presenta en la Figura 36. Las tres
primeras columnas codifican respectivamente el código de la instalación, el
sexo del encuestado y su edad. A continuación las siguientes once columnas
codifican las repuestas de cada encuestado a los once ítems del cuestionario,
en escala de Likert. Todas las columnas tienen formato numérico, salvo la de
sexo que es alfanumérico. La hoja de cálculo tendrá tantas filas como
encuestados existan. Una vez revisados y filtrados los datos en bruto contendrá
37 (instalaciones) x 50 (cuestionarios) filas de datos, esto es, 1850 filas de
datos.
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6. Percepción de seguridad…
Procedimiento de recogida de la información
El trabajo de campo de recogida de información se realizó entre
noviembre de 2014 y febrero de 2015, de forma simultánea con la auditoría de
las piscinas climatizadas para la confección del cuestionario de validación y
utilizando los mismos encuestadores. Valga lo dicho en el capítulo 5 sobre la
formación, y documentos aportados a los encuestadores. Para este caso se
auditaron en el mismo período las 37 instalaciones. La cumplimentación de
estos cuestionarios tuvo menos reticencias por parte de los gestores de las
instalaciones, ya que la encuesta se administraba habitualmente, bien en el
exterior de la instalación, bien en el hall de ésta. Además, el cuestionario era de
sencilla lectura y comprensión y no requería información técnica.
Si bien la encuesta requiere 50 cuestionarios por instalación, los
encuestadores disponían de 60 cuestionarios y tenían instrucciones de
cumplimentarlos todos. El motivo de esto es asegurar 50 cuestionarios
correctamente cumplimentados. En algunos casos, y por distintos motivos, el
encuestador no pudo cumplimentar todos los cuestionarios disponibles, por lo
que hubo que repetir la visita a la instalación para obtenerlos todos. Hubo tres
casos en los que el procedimiento de administración no fue el correcto, ya que
los encuestadores dejaron al personal de la instalación los cuestionarios para
que los usuarios los autocumplimentaran. Estos casos fueron detectados y
descartados los cuestionarios, repitiendo la toma de datos en la instalación,
esta vez de forma correcta.
Los cuestionarios de percepción cumplimentados han sido digitalizados
por el autor de este trabajo. La digitalización fue acompañada de un control
exhaustivo de los documentos, desechando aquellos cuestionarios que tuvieran
irregularidades. Fueron desechados los cuestionarios a los que les faltara algún
ítem por cumplimentar, y los que tenían dos marcas en el mismo ítem
(confusiones en la marcación del encuestador) o borrones que provocaran
dudas sobre la respuesta marcada.
Página | 269
6. Percepción de seguridad …
Para todas las instalaciones, el número de cuestionarios válidos superó
los 50. Se realizó una selección aleatoria para descartar los cuestionarios
sobrantes, quedando 50 cuestionarios por cada piscina climatizada.
Citar que las instalaciones utilizadas en el estudio de percepción no
coinciden plenamente con las utilizadas en el cuestionario de validación. Los
continuos cambios en aperturas y cierres de instalaciones llevaron a que la
instalación “Estocolmo” no estuviera disponible para el estudio de percepción.
Sin embargo, sí lo estuvo una nueva instalación, que hemos llamado “Oslo”.
Por lo tanto, continuamos disponiendo de una población de 37 instalaciones,
cuyos nombres anónimos se listan en la Tabla 40.
Tabla 40. Relación de nombres de sedes olímpicas utilizados para nombrar las
instalaciones estudiadas y así mantener su anonimato
Atenas
París
San Luis
Londres
Oslo
Página | 270
Berlín
Helsinki
Melbourne
Roma
Tokio
Moscú
Seúl
Barcelona
Atlanta
Sídney
Grenoble
Sapporo
Chamonix
Lake Placid
Sarajevo
Nagano
Salt Lake
Turín
Vancouver
Sochi
6. Percepción de seguridad…
6.5 Análisis de resultados
Resultados globales
El perfil de la muestra se presenta en la Tabla 41. Si bien no se ha
buscado exactamente una distribución proporcional en rangos de edad y sexo,
sí se recomendó a los encuestadores una muestra lo más variada y equilibrada
posible. De ello ha resultado que se han encuestado un 8% más de mujeres
que de hombres, siendo la media de edad ligeramente superior en las
primeras, rondando en general los 35 años. Se observa una distribución
desigual de entrevistados si atendemos a los rangos de edad, siendo la
máxima en la primera categoría (31%) y descendiendo progresivamente en las
siguientes hasta el 9% de los usuarios de 60 años y más.
Tabla 41. Perfil de la muestra del estudio de precepción
Numero de
encuestados
Edad media
Sexo
Edad media
Edad
1850
34,4
Hombres
46%
33,1
18 a 29
30 a 39
31%
26%
Mujeres
54%
35,5
40 a 49 50 a 59
22%
12%
>60
9%
Presentamos en primer lugar los estadísticos descriptivos más
generales. Se ha calculado el valor medio de todas las variables de cada
encuestado, valor que oscilará entre 1 y 6, y a partir de dichas medias hemos
calculado los estadísticos que se presentan en la Tabla 42. Se observa un valor
relativamente alto (4,79) con una desviación estándar relativamente baja (0,72).
Estos datos nos indican un grado de percepción de seguridad relativamente
alto. La curtosis acompaña a la desviación estándar baja, mostrando un
comportamiento de datos más concentrados alrededor de la media que una
distribución normal, si bien el rango (4,55) comprende la mayor parte de los
valores posibles (de 1,45 a 6)
Página | 271
6. Percepción de seguridad …
Tabla 42. Estadísticos descriptivos generales del estudio de
percepción
Estadístico
Valor
Media
4,79
Desviación estándar
0,72
Mínimo
1,45
Máximo
6,00
Rango
4,55
Curtosis
1,15
Asimetría
-0,92
C.V Pearson
0,15
PerSeg
0,76
La Tabla 43 presenta el número de sujetos con una cierta valoración
media, por intervalos de un punto, y la Figura 37 los mismos datos en forma
gráfica. Observamos la elevada concentración de datos en los rangos [4-5) y
[5-6], y un fuerte crecimiento continuo del 1 al 6. La mayor pendiente se da en
el rango [4-5), suavizándose para el [5-6].
Tabla 43. Número de sujetos con una cierta
valoración media, por intervalos de un
punto
Valoración
Sujetos
1-2
5
2-3
35
3-4
187
4-5
757
5-6
866
Total
1850
Página | 272
6. Percepción de seguridad…
1000
900
800
700
600
500
400
300
200
100
0
1-2
2-3
3-4
4-5
5-6
Figura 37. Representación gráfica número de sujetos (eje
de ordenadas) con una cierta valoración media
(eje de abscisas), por intervalos de un punto.
A efectos de realización de comparaciones hemos seleccionado dos
estadísticos
descriptivos
de
entre
los
habituales,
convirtiéndolos
en
indicadores.
El estadístico media, ya sea la media de las 11 variables para un cierto
sujeto o la media de las respuestas de distintos sujetos para una variable,
como medida de centralización, es un buen indicador de la percepción de
seguridad. Sin embargo, proponemos como indicador una transformación de la
media, obteniendo un valor normalizado en rango desde 0 hasta 1. Ya hemos
comentado (y utilizado para los estadísticos anteriores) que podemos tratar la
escala de respuestas de Likert como valor cuantitativo cardinal. Para establecer
la normalización de la media, basta con trasladar la escala al origen (del 1 al 0),
y escalar el valor máximo de la media a 1. De ello resulta el indicador que
llamaremos PerSeg (por percepción de seguridad), que viene expresado por la
Expresión 8.
1 2 3 4" 1
5
Expresión 8. Indicador PerSeg
Es habitual acompañar la media de una medida de dispersión de los
datos, habitualmente la desviación estándar. Sin embargo, para su uso como
indicador, acompañado de PerSeg, es más adecuada la utilización del
Página | 273
6. Percepción de seguridad …
Coeficiente de Variación de Pearson, que normaliza la desviación estándar a
un rango de 0 a 1, relacionándolo con la media.
Por tanto, utilizaremos estos dos valores, el indicador PerSeg y el
Coeficiente de Variación de Pearson (en adelante “Pearson”) como principales
indicadores en los datos presentados en adelante, sin menoscabo de aportar
otros estadísticos que puedan aportar información. Teniendo en cuenta esto,
los indicadores de percepción global de seguridad del conjunto de instalaciones
son los que se indican en la Expresión 9.
1 2 0,76
1 " 0,15
Expresión 9. Indicadores de percepción global del
conjunto de instalaciones
Resultados por instalaciones
La Figura 38 presenta el indicador PerSeg para la media de las
variables, por instalaciones. La línea vertical discontinua representa la media
global, de forma que se pueden observar las instalaciones que quedan situadas
por encima y por debajo de la media. La instalación de peor percepción general
de seguridad es Montreal, con un bajo valor de 0,51. Le siguen Vancouver,
Albertville, Barcelona y Chamonix, con valores inferiores a 0,70. Como
instalación mejor posicionada mencionamos Helsinki (0,87), distante aún 0,13
puntos de la máxima puntuación (1,00), y le siguen Londres, Amberes,
Melbourne y Sochi.
La Figura 39 muestra el indicador Pearson, con líneas de división
vertical por cuartiles. Montreal, la instalación de peor indicador PerSeg tiene sin
embargo su Pearson en el cuarto cuartil (los datos más dispersos), es decir,
hay mayor diversidad de opiniones que en otras instalaciones (teniendo en
cuenta que en general Pearson tiene un valor bajo). Barcelona es otra
instalación con baja percepción de seguridad y cuarto cuartil en dispersión, y
Chamonix y Albertville están respectivamente en el tercer y segundo cuartil.
Helsinki, la instalación mejor posicionada en el indicador PerSeg está
además en el primer cuartil con un bajo Pearson de 0,07, es decir, mucha
uniformidad en opiniones. Y tres de las cuatro instalaciones mejor posicionadas
Página | 274
6. Percepción de seguridad…
nombradas anteriormente, Londres, Amberes y Melbourne, también están en el
primer cuartil, estando Sochi en el segundo.
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Oslo
Ámsterdam
Moscú
Atenas
Calgary
Atlanta
Sapporo
Sydney
Innsbruck
Lillehammer
México
Nagano
Munich
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Salt Lake
Tokio
París
Berlín
Seúl
Sarajevo
Turín
Roma
Grenoble
Chamonix
Barcelona
Albertville
Vancouver
Montreal
0,40
0,50
0,60
0,70
0,80
0,90
Figura 38. Indicador PerSeg para la media de las variables, por
instalaciones.
Página | 275
6. Percepción de seguridad …
Barcelona
Grenoble
Tokio
Sydney
Montreal
Sarajevo
Turín
Chamonix
Seúl
México
París
Salt Lake
Vancouver
Atenas
Atlanta
Munich
Los Ángeles
San Luis
Sochi
Berlín
Río
Lake Placid
Innsbruck
Nagano
Albertville
Ámsterdam
Lillehammer
Pekín
Londres
Melbourne
Oslo
Amberes
Helsinki
Roma
Moscú
Sapporo
Calgary
0,05
0,10
0,14
0,19
0,23
Figura 39. CV de Pearson por instalaciones. Las líneas verticales
indican una división por cuartiles.
Página | 276
6. Percepción de seguridad…
Resultados por variables
La Tabla 44 muestra los descriptivos de la población total analizada para
cada una de las variables, y la Figura 40 presenta gráficamente el indicador
PerSeg. Observamos en todas las variables el rango completo de posibles
respuestas (5), y una mediana centrada en el valor 5 para todos los casos
excepto en la variable 4 (seguridad frente a robos in situ) que es inferior (4) y
en la variable 5 (integridad como persona), que obtiene el valor máximo de
seis. La respuesta más repetida (la moda) tiene el valor 5 (opción “bastante de
acuerdo”) salvo tres casos en los que se obtiene el valor de seis (variables V1,
V5 y V11).
En cuanto al indicador PerSeg, comprobamos que la variable de
integridad como persona (V5) obtiene la mayor valoración, alcanzando los 0,89
puntos, reforzado con el Coeficiente de Variación de Pearson más bajo (0,16),
siguiéndoles la competencia de los socorristas, la disponibilidad del personal
ante situaciones problemáticas, y la percepción global del concepto de
seguridad. Observamos que están por encima de la media todas las variables
en las que está implicado el personal de las instalaciones (V1, V5 y V10), de lo
que podemos indicar una buena percepción de los usuarios al respecto del
comportamiento de los trabajadores en lo que respecta a aportación de
seguridad.
En la parte negativa, la peor valoración con diferencia la obtiene la
variable 4, de seguridad frente a robos in situ (0,65), que también tiene el
mayor Pearson. Le siguen las cuestiones de integridad del edificio y de
salubridad del agua (V8 y V6), dos cuestiones de apreciación muy directa por
parte de los usuarios, así como las de higiene y salubridad de la instalación y
estado del equipamiento (seguridad ante equipamientos y accesorios). En
valores muy próximos a la media se encuentra la accesibilidad general de la
instalación y la de facilidad de evacuación (variables V9 y V3).
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6. Percepción de seguridad …
Resultados por variables e instalaciones
Las tablas Tabla 45 y Tabla 46 presentan, respectivamente, el indicador
PerSeg y el Pearson distinguiendo por instalaciones. Las instalaciones Helsinki
y Londres, además de ser las dos mejor posicionadas en lo que se refiere a los
valores medios de las variables, también son dos instalaciones que están más
número de veces entre las cinco primeras posiciones de cada una de las
variables (8 veces cada instalación). Por su parte, ocurre también que Montreal
está 8 veces entre las cinco peores posiciones en cada una de las variables,
seguida por Vancouver, que lo está en seis. Debido a la importancia y a la vez
poca legibilidad de los datos de la Tabla 45 se hace necesario mostrar
gráficamente el comportamiento por instalaciones de cada una de las variables,
lo que se presenta en las figuras Figura 41 a Figura 51.
Tabla 44. Estadísticos descriptivos para cada una de las variables
V1
V2
V3
V4
V5
V6
V7
V8
V9
V10
V11
Media
5,05
4,64
4,77
4,27
5,45
4,62
4,65
4,58
4,77
5,04
4,86
Mediana
5
5
5
4
6
5
5
5
5
5
5
Moda
6
5
5
5
6
5
5
5
5
6
5
Desv estándar
1,02
1,10
1,09
1,36
0,89
1,13
1,13
1,16
1,09
1,02
1,02
Mínimo
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
Máximo
6
6
6
6
6
6
6
6
6
6
6
Rango
5
5
5
5
5
5
5
5
5
5
5
Curtosis
1,86
0,61
0,71 -0,36
5,92
0,46
0,79
0,50
0,78
1,11
1,47
Asimetría
-1,27 -0,87 -0,91 -0,57 -2,17 -0,79 -0,92 -0,88 -0,96 -1,11 -1,07
PerSeg
0,81
0,73
0,75
0,65
0,89
0,72
0,73
0,72
0,75
0,81
0,77
C.V Pearson
0,20
0,24
0,23
0,32
0,16
0,24
0,24
0,25
0,23
0,20
0,21
Leyenda: V1: Competencia de los socorristas ; V2: Seguridad ante equipamientos y accesorios; V3:
Facilidad de evacuación; V4: Seguridad frente a robos in situ; V5: Integridad como persona; V6:
Salubridad del agua del vaso de la piscina; V7: Higiene y salubridad de la instalación; V8: Integridad del
edificio; V9: Accesibilidad general de la instalación; V10: Disponibilidad del personal ante situaciones
problemáticas; V11: Percepción global del concepto de seguridad.
0,95
0,90
0,85
0,80
0,75
0,70
0,65
0,60
V1
Figura 40.
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V2
V3
V4
V5
V6
V7
V8
V9
V10
V11
Indicador PerSeg para las distintas variables en la población
total analizada. La línea discontinua representa el valor medio
del indicador.
6. Percepción de seguridad…
Tabla 45. Indicador PerSeg por variables e instalaciones. Ordenación de
instalaciones por su valor medio
Instalación
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Ámsterdam
Oslo
Atenas
Moscú
Calgary
Atlanta
Sapporo
Innsbruck
Lillehammer
Sydney
México
Munich
Nagano
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Salt Lake
Tokio
Berlín
París
Grenoble
Roma
Sarajevo
Seúl
Turín
Barcelona
Chamonix
Albertville
Vancouver
Montreal
V1
0,88
0,94
0,83
0,85
0,82
0,88
0,87
0,85
0,78
0,84
0,87
0,74
0,76
0,93
0,82
0,80
0,87
0,84
0,88
0,89
0,76
0,80
0,74
0,74
0,90
0,73
0,92
0,78
0,75
0,74
0,79
0,74
0,74
0,78
0,44
0,82
0,89
V2
0,82
0,83
0,79
0,81
0,81
0,84
0,84
0,82
0,73
0,83
0,82
0,76
0,76
0,78
0,76
0,76
0,76
0,68
0,64
0,63
0,73
0,76
0,73
0,68
0,70
0,65
0,66
0,69
0,71
0,72
0,65
0,67
0,73
0,72
0,62
0,61
0,38
V3
0,82
0,86
0,77
0,86
0,92
0,89
0,76
0,64
0,84
0,83
0,86
0,72
0,80
0,84
0,80
0,73
0,74
0,70
0,83
0,71
0,74
0,61
0,76
0,73
0,71
0,76
0,78
0,69
0,68
0,77
0,74
0,68
0,67
0,72
0,73
0,81
0,42
V4
0,84
0,86
0,74
0,75
0,75
0,67
0,77
0,60
0,80
0,83
0,63
0,80
0,72
0,70
0,66
0,74
0,69
0,51
0,61
0,70
0,48
0,47
0,75
0,62
0,70
0,56
0,74
0,74
0,57
0,62
0,58
0,66
0,50
0,45
0,65
0,44
0,31
V5
0,90
0,98
0,94
0,98
0,89
0,94
0,89
0,99
0,93
0,91
0,86
0,92
0,86
0,78
0,82
0,89
0,80
0,99
0,97
0,92
0,82
0,97
0,73
0,88
0,84
0,88
0,89
0,92
0,90
0,72
0,85
0,89
0,94
0,86
0,96
0,90
0,83
V6
0,86
0,70
0,82
0,87
0,80
0,70
0,83
0,79
0,69
0,77
0,78
0,78
0,78
0,73
0,78
0,80
0,68
0,75
0,62
0,76
0,78
0,79
0,76
0,63
0,64
0,65
0,52
0,66
0,78
0,70
0,67
0,71
0,65
0,57
0,66
0,72
0,62
V7
0,87
0,82
0,82
0,77
0,84
0,75
0,79
0,90
0,77
0,78
0,65
0,75
0,78
0,76
0,74
0,78
0,80
0,73
0,74
0,74
0,77
0,77
0,75
0,76
0,62
0,71
0,64
0,66
0,68
0,71
0,69
0,66
0,59
0,70
0,74
0,60
0,33
V8
0,87
0,81
0,90
0,80
0,81
0,83
0,81
0,82
0,77
0,74
0,75
0,82
0,82
0,69
0,73
0,78
0,79
0,74
0,66
0,58
0,73
0,74
0,74
0,78
0,69
0,70
0,54
0,60
0,62
0,71
0,70
0,67
0,60
0,68
0,66
0,53
0,28
V9
0,87
0,81
0,89
0,85
0,90
0,88
0,81
0,82
0,86
0,78
0,84
0,83
0,79
0,77
0,78
0,80
0,79
0,75
0,69
0,72
0,82
0,76
0,73
0,77
0,75
0,73
0,72
0,63
0,71
0,70
0,71
0,69
0,70
0,64
0,67
0,54
0,39
V10
0,90
0,92
0,86
0,85
0,86
0,91
0,88
0,96
0,86
0,81
0,85
0,81
0,78
0,72
0,83
0,75
0,84
0,88
0,92
0,88
0,85
0,82
0,75
0,78
0,82
0,78
0,75
0,72
0,70
0,69
0,76
0,76
0,74
0,70
0,64
0,76
0,80
V11
0,90
0,87
0,88
0,84
0,81
0,86
0,82
0,88
0,86
0,84
0,89
0,81
0,84
0,85
0,82
0,79
0,76
0,78
0,80
0,78
0,80
0,77
0,76
0,76
0,76
0,73
0,72
0,69
0,70
0,73
0,69
0,69
0,69
0,74
0,72
0,58
0,38
Media
0,87
0,85
0,84
0,84
0,84
0,83
0,82
0,82
0,81
0,81
0,80
0,79
0,79
0,78
0,78
0,78
0,77
0,76
0,76
0,76
0,75
0,75
0,75
0,74
0,74
0,72
0,72
0,71
0,71
0,71
0,71
0,71
0,69
0,69
0,68
0,67
0,51
Leyenda: V1: Competencia de los socorristas ; V2: Seguridad ante equipamientos y accesorios; V3:
Facilidad de evacuación; V4: Seguridad frente a robos in situ; V5: Integridad como persona; V6:
Salubridad del agua del vaso de la piscina; V7: Higiene y salubridad de la instalación; V8: Integridad del
edificio; V9: Accesibilidad general de la instalación; V10: Disponibilidad del personal ante situaciones
problemáticas; V11: Percepción global del concepto de seguridad.
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6. Percepción de seguridad …
Tabla 46. Indicador Pearson por variables e instalaciones. Ordenación
alfabética de instalaciones
Instalación
Albertville
Amberes
Ámsterdam
Atenas
Atlanta
Barcelona
Berlín
Calgary
Chamonix
Grenoble
Helsinki
Innsbruck
Lake Placid
Lillehammer
Londres
Los Ángeles
Melbourne
México
Montreal
Moscú
Munich
Nagano
Oslo
París
Pekín
Río
Roma
Salt Lake
San Luis
Sapporo
Sarajevo
Seúl
Sochi
Sydney
Tokio
Turín
Vancouver
V1
0,38
0,22
0,12
0,21
0,28
0,29
0,24
0,09
0,21
0,26
0,13
0,10
0,18
0,14
0,10
0,19
0,17
0,15
0,11
0,09
0,17
0,13
0,18
0,15
0,14
0,15
0,16
0,23
0,10
0,20
0,25
0,19
0,21
0,24
0,12
0,25
0,19
V2
0,19
0,16
0,14
0,26
0,20
0,29
0,19
0,13
0,21
0,29
0,15
0,17
0,17
0,16
0,18
0,22
0,17
0,23
0,44
0,10
0,23
0,27
0,21
0,33
0,15
0,16
0,14
0,29
0,31
0,10
0,27
0,25
0,23
0,25
0,26
0,29
0,29
V3
0,19
0,21
0,22
0,20
0,23
0,36
0,17
0,11
0,24
0,32
0,17
0,18
0,19
0,14
0,16
0,25
0,13
0,24
0,47
0,16
0,25
0,17
0,21
0,21
0,12
0,16
0,17
0,25
0,24
0,16
0,19
0,25
0,13
0,26
0,27
0,28
0,18
V4
0,32
0,32
0,17
0,21
0,27
0,48
0,38
0,14
0,48
0,28
0,15
0,20
0,47
0,22
0,17
0,45
0,21
0,29
0,45
0,18
0,40
0,35
0,29
0,24
0,19
0,16
0,32
0,30
0,22
0,20
0,34
0,34
0,31
0,27
0,28
0,31
0,42
V5
0,10
0,10
0,10
0,13
0,11
0,15
0,19
0,13
0,24
0,14
0,12
0,20
0,22
0,15
0,05
0,06
0,06
0,28
0,19
0,09
0,03
0,07
0,03
0,15
0,08
0,15
0,13
0,18
0,10
0,12
0,21
0,26
0,26
0,23
0,22
0,18
0,14
V6
0,18
0,18
0,12
0,28
0,22
0,33
0,24
0,14
0,41
0,29
0,17
0,18
0,18
0,15
0,21
0,21
0,13
0,26
0,23
0,14
0,26
0,26
0,25
0,43
0,19
0,20
0,14
0,29
0,17
0,18
0,26
0,31
0,19
0,24
0,38
0,26
0,25
V7
0,17
0,15
0,17
0,25
0,22
0,41
0,21
0,18
0,26
0,30
0,14
0,19
0,16
0,17
0,16
0,21
0,18
0,18
0,48
0,17
0,22
0,23
0,11
0,33
0,14
0,19
0,17
0,19
0,20
0,15
0,20
0,29
0,19
0,22
0,46
0,28
0,31
V8
0,20
0,13
0,16
0,24
0,19
0,37
0,24
0,13
0,30
0,34
0,12
0,24
0,18
0,18
0,19
0,22
0,14
0,18
0,47
0,18
0,18
0,27
0,19
0,38
0,13
0,19
0,17
0,16
0,32
0,18
0,17
0,24
0,23
0,22
0,34
0,26
0,31
V9
0,17
0,12
0,16
0,17
0,22
0,28
0,18
0,09
0,35
0,38
0,11
0,19
0,15
0,14
0,20
0,20
0,13
0,18
0,43
0,16
0,21
0,27
0,15
0,27
0,12
0,18
0,13
0,23
0,23
0,13
0,18
0,24
0,11
0,21
0,29
0,24
0,35
V10
0,24
0,19
0,10
0,14
0,21
0,31
0,24
0,13
0,28
0,26
0,13
0,27
0,15
0,13
0,13
0,23
0,16
0,19
0,17
0,17
0,18
0,11
0,11
0,21
0,11
0,20
0,20
0,21
0,11
0,17
0,24
0,21
0,19
0,27
0,22
0,21
0,23
V11
0,15
0,12
0,15
0,16
0,18
0,29
0,19
0,11
0,21
0,27
0,10
0,15
0,13
0,17
0,14
0,15
0,13
0,20
0,46
0,13
0,21
0,16
0,15
0,21
0,15
0,20
0,14
0,19
0,14
0,14
0,22
0,25
0,22
0,23
0,25
0,23
0,29
Media
0,11
0,08
0,11
0,14
0,14
0,23
0,13
0,05
0,17
0,21
0,07
0,12
0,12
0,10
0,09
0,14
0,08
0,16
0,19
0,07
0,14
0,12
0,08
0,15
0,10
0,12
0,07
0,15
0,13
0,07
0,19
0,17
0,13
0,19
0,19
0,18
0,14
Leyenda: V1: Competencia de los socorristas ; V2: Seguridad ante equipamientos y accesorios; V3:
Facilidad de evacuación; V4: Seguridad frente a robos in situ; V5: Integridad como persona; V6:
Salubridad del agua del vaso de la piscina; V7: Higiene y salubridad de la instalación; V8: Integridad del
edificio; V9: Accesibilidad general de la instalación; V10: Disponibilidad del personal ante situaciones
problemáticas; V11: Percepción global del concepto de seguridad.
Página | 280
6. Percepción de seguridad…
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Oslo
Ámsterdam
Moscú
Atenas
Calgary
Atlanta
Sapporo
Sydney
Innsbruck
Lillehammer
México
Nagano
Munich
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Tokio
Salt Lake
París
Berlín
Seúl
Sarajevo
Turín
Roma
Grenoble
Chamonix
Barcelona
Albertville
Vancouver
Montreal
0,20
0,30
0,40
0,50
0,60
0,70
0,80
0,90
1,00
Figura 41. Indicador PerSeg para la variable V1 (competencia de
los socorristas). Las instalaciones aparecen ordenadas
por su media global. La doble línea rayada indica la
media general, y la línea simple punteada la media de
la variable estudiada.
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6. Percepción de seguridad …
En la variable 1, competencia de los socorristas (Figura 41), podemos
destacar que Montreal, que ocupa el último puesto en el orden general, obtiene
aquí una buena puntuación (0,89), quedando en el primer cuartil de mejores
percepciones. En esta ocasión se pone de manifiesto la sensibilidad de los
usuarios ante cada cuestión particular relativa a seguridad, aportando una
valoración general negativa, pero destacando aquellos puntos fuertes de la
instalación, como es el caso de la competencia de los socorristas.
Distinto es el caso de Albertville que, teniendo valor global bajo respecto
a sus compañeras (0,68) pone de manifiesto problemas con la competencia de
sus socorristas, ya que aporta el valor más bajo de todas las instalaciones
(0,44), con una discrepancia entre los usuarios relativamente amplia (Pearson
de 0,38, el mayor para esta categoría)
Para esta variable, cuyo valor medio supera la media global, podemos
destacar, en general, que su comportamiento es bastante independiente del
valor medio, encontrando las instalaciones con los mejores resultados en V1
repartidas por todos los cuartiles, como son el caso de Montreal, París, Tokio,
San Luis, Innsbruck, Calgary o Londres.
En el caso de la seguridad ante equipamientos y accesorios (variable 2,
Figura 42) la media de esta categoría es menor que media global, y de nuevo
es Montreal la instalación que destaca muy negativamente (PerSeg = 0,38). Sin
embargo, para este caso la clasificación respecto a la media de la variable no
difiere demasiado de la clasificación global, estando prácticamente las mismas
instalaciones en los dos primeros cuartiles. Pekín y Ámsterdam son las dos
instalaciones con mejor percepción de mantenimiento de equipamientos y
accesorios, seguidos a una mínima distancia por Londres, Moscú, Helsinki,
Calgary y Oslo.
En cuanto a las piscinas climatizadas comparativamente peor situadas,
podemos nombrar, además de Montreal, a Vancouver (0,61) y Alberville (0,62),
del cuarto cuartil global, y San Luis (0,63) y Nagano (0,64) del tercero y finales
del segundo respectivamente.
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6. Percepción de seguridad…
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Oslo
Ámsterdam
Moscú
Atenas
Calgary
Atlanta
Sapporo
Sydney
Innsbruck
Lillehammer
México
Nagano
Munich
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Tokio
Salt Lake
París
Berlín
Seúl
Sarajevo
Turín
Roma
Grenoble
Chamonix
Barcelona
Albertville
Vancouver
Montreal
0,20
0,30
0,40
0,50
0,60
0,70
0,80
0,90
1,00
Figura 42. Indicador PerSeg para la variable V2 (seguridad ante
equipamientos y accesorios). Las instalaciones
aparecen ordenadas por su media global. La doble
línea rayada indica la media general, y la línea simple
punteada la media de la variable estudiada.
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6. Percepción de seguridad …
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Oslo
Ámsterdam
Moscú
Atenas
Calgary
Atlanta
Sapporo
Sydney
Innsbruck
Lillehammer
México
Nagano
Munich
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Tokio
Salt Lake
París
Berlín
Seúl
Sarajevo
Turín
Roma
Grenoble
Chamonix
Barcelona
Albertville
Vancouver
Montreal
0,20
0,30
0,40
0,50
0,60
0,70
0,80
0,90
1,00
Figura 43. Indicador PerSeg para la variable V3 (facilidad de
evacuación). Las instalaciones aparecen ordenadas por
su media global. La doble línea rayada indica la media
general, y la línea simple punteada la media de la
variable estudiada.
Página | 284
6. Percepción de seguridad…
La tercera variable (facilidad de evacuación, representada en la Figura
43) se refiere a la percepción de seguridad en las vías de evacuación. La
pregunta indaga en la sensación de fácil evacuación en caso de emergencia, y
observamos diferencias entre en la clasificación respecto a la seguridad global
y respecto a esta variable, si bien las medias de una y otra son muy similares
(0,75 y 0,76). Las instalaciones mejor clasificadas en la variable 3 se
entremezclan entre el primer y segundo cuartil de la clasificación respecto a la
media global. Y de forma más o menos similar las peor clasificadas en ésta
variable con el tercer y cuarto cuartil.
En cuanto a las peor situadas, además de Montreal que vuelve a ocupar
el último lugar (0,42), destacamos Oslo, antepenúltima en esta clasificación y
situada en el primer cuartil en la clasificación global, y Los Ángeles, penúltima
aquí y por la mitad de la tabla en la general. En la zona positiva, Sochi, del
primer cuartil, queda la mejor clasificada, con un 92%, y a continuación Pekín,
Londres, Calgary y Melbourne.
La seguridad frente a robos in situ (variable 4, Figura 44) es la peor
considerada por los usuarios de piscinas climatizadas de uso colectivo. Hace
referencia en gran medida a la custodia de la ropa y las pertenencias de los
nadadores en taquillas, vestuarios o conserjerías. La media de esta categoría
es la más baja de todas, con un 0,65, 11 puntos por debajo de la media global.
Las instalaciones con resultados por debajo de la media se reparten por todos
los cuartiles, como Oslo o Pekín del primer cuartil, Calgary, Lillehammer,
Nagano o Munich del segundo, Lake Placid, Los Ángeles, Salt Lake, Berlín o
Seúl del tercero, y todas salvo Grenoble del cuarto.
Destacamos positivamente Londres, Helsinki y Moscú, con valores
superiores a 0,80. Negativamente Montreal, Vancouver, Chamonix, Los
Ángeles y Lake Placid con valores por debajo de 0,50, especialmente Montreal
con el mínimo de 0,31, el segundo valor más bajo de toda la Tabla 45.
El problema de la gestión de las pertenencias de los usuarios en las
piscinas climatizadas es conocido, y paulatinamente se ha ido cambiando de
un sistema de custodia en la conserjería al uso de taquillas en los vestuarios,
pero destaca como un problema no resuelto que debería abordarse con rigor.
Página | 285
6. Percepción de seguridad …
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Oslo
Ámsterdam
Moscú
Atenas
Calgary
Atlanta
Sapporo
Sydney
Innsbruck
Lillehammer
México
Nagano
Munich
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Tokio
Salt Lake
París
Berlín
Seúl
Sarajevo
Turín
Roma
Grenoble
Chamonix
Barcelona
Albertville
Vancouver
Montreal
0,20
0,30
0,40
0,50
0,60
0,70
0,80
0,90
1,00
Figura 44. Indicador PerSeg para la variable V4 (Seguridad
frente a robos in situ). Las instalaciones aparecen
ordenadas por su media global. La doble línea rayada
indica la media general, y la línea simple punteada la
media de la variable estudiada.
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6. Percepción de seguridad…
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Oslo
Ámsterdam
Moscú
Atenas
Calgary
Atlanta
Sapporo
Sydney
Innsbruck
Lillehammer
México
Nagano
Munich
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Tokio
Salt Lake
París
Berlín
Seúl
Sarajevo
Turín
Roma
Grenoble
Chamonix
Barcelona
Albertville
Vancouver
Montreal
0,20
0,30
0,40
0,50
0,60
0,70
0,80
0,90
1,00
Figura 45. Indicador PerSeg para la variable V5 (integridad como
persona). Las instalaciones aparecen ordenadas por su
media global. La doble línea rayada indica la media
general, y la línea simple punteada la media de la
variable estudiada.
Página | 287
6. Percepción de seguridad …
La Figura 45 muestra la variable 5 por instalaciones. Esta variable,
integridad como persona, que hace referencia a la discriminación por sexo,
edad, raza o cualquier cuestión física o psicológica, tiene un valor medio alto,
que además es el mayor de todas las variables (0,89). Es un valor bastante
satisfactorio.
Además, el rango de variación no es alto (0,27), concentrando todos los
valores para las distintas instalaciones en la parte alta de la tabla; ninguna
piscina tiene un valor inferior a 0,72 (que se corresponde con Sarajevo), y el
máximo valor es de 0,99, en las instalaciones Munich y Oslo, lo que denota un
trato excelente por parte del personal en lo que respecta a esta cuestión. Los
valores más altos se distribuyen de forma relativamente uniforme entre los
cuatro cuartiles de la clasificación global. Destacar que todas las instalaciones
del primer cuartil tienen valores por encima de la media. Los valores más bajos
se corresponden con Sarajevo, Río e Innsbruck, por debajo de 0,80, siendo
todos los valores restantes superiores a este valor.
La variable de salubridad del agua del vaso (variable 6, Figura 46)
presenta valores irregulares, siendo su rango de 0,35. Existen trece
instalaciones por valores por debajo de 0,70, y hasta 20 por debajo de la media
global de 0,76. Las instalaciones peor consideradas por los usuarios son
Montreal y Chamonix del cuarto cuartil, París, Tokio y Salt Lake del tercero y
Nagano del segundo, todas con valores por debajo de 0,65. Como mejores
instalaciones en lo referente a percepción de calidad del agua aparecen
Melbourne y Helsinki (0,87 y 0,86), piscinas situadas en las mejores posiciones
en la clasificación global, seguidas de Ámsterdam, Amberes y Sochi,
igualmente instalaciones del primer cuartil.
En cuanto a la higiene y salubridad de la instalación (variable 7, Figura
47), la instalación Montreal obtiene valores de percepción muy desfavorables
(0,33) lo que aconsejaría una revisión de esta situación. Descartando Montreal,
las instalaciones varían en esta variable de los 0,59 de Barcelona (cuarto
cuartil) a los 0,90 de Oslo, y sigue una distribución muy similar a la clasificación
global.
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6. Percepción de seguridad…
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Oslo
Ámsterdam
Moscú
Atenas
Calgary
Atlanta
Sapporo
Sydney
Innsbruck
Lillehammer
México
Nagano
Munich
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Tokio
Salt Lake
París
Berlín
Seúl
Sarajevo
Turín
Roma
Grenoble
Chamonix
Barcelona
Albertville
Vancouver
Montreal
0,20
0,30
0,40
0,50
0,60
0,70
0,80
0,90
1,00
Figura 46. Indicador PerSeg para la variable V6 (salubridad del
agua del vaso de la piscina). Las instalaciones
aparecen ordenadas por su media global. La doble
línea rayada indica la media general, y la línea simple
punteada la media de la variable estudiada.
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6. Percepción de seguridad …
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Oslo
Ámsterdam
Moscú
Atenas
Calgary
Atlanta
Sapporo
Sydney
Innsbruck
Lillehammer
México
Nagano
Munich
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Tokio
Salt Lake
París
Berlín
Seúl
Sarajevo
Turín
Roma
Grenoble
Chamonix
Barcelona
Albertville
Vancouver
Montreal
0,20
0,30
0,40
0,50
0,60
0,70
0,80
0,90
1,00
Figura 47. Indicador PerSeg para la variable V7 (higiene y
salubridad de la instalación). Las instalaciones
aparecen ordenadas por su media global. La doble
línea rayada indica la media general, y la línea simple
punteada la media de la variable estudiada.
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6. Percepción de seguridad…
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Oslo
Ámsterdam
Moscú
Atenas
Calgary
Atlanta
Sapporo
Sydney
Innsbruck
Lillehammer
México
Nagano
Munich
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Tokio
Salt Lake
París
Berlín
Seúl
Sarajevo
Turín
Roma
Grenoble
Chamonix
Barcelona
Albertville
Vancouver
Montreal
0,20
0,30
0,40
0,50
0,60
0,70
0,80
0,90
1,00
Figura 48. Indicador PerSeg para la variable V8 (integridad del
edificio). Las instalaciones aparecen ordenadas por su
media global. La doble línea rayada indica la media
general, y la línea simple punteada la media de la
variable estudiada.
Página | 291
6. Percepción de seguridad …
Las variables 7, 8 y 9 (Figura 47, Figura 48 y Figura 49
respectivamente), relativas a cuestiones de la instalación y su mantenimiento,
presentan un comportamiento muy similar. Las instalaciones mejor clasificadas
en estas variables son muy similares, y coinciden con instalaciones del primer
cuartil en la clasificación general. Lo mismo ocurre con las peor clasificadas,
que lo hacen en general en las tres variables, y con aquellas piscinas que
quedan en el cuarto cuartil de la media global.
Montreal obtiene en los tres casos la peor valoración, llegando a un
preocupante 0,28 en las cuestiones de integridad del edificio. En higiene de la
instalación destacan por su asintonía en la tendencia general Atenas y Tokio,
con valores que no se corresponden con su posición en la clasificación general.
En lo que respecta a la integridad del edificio (variable 8), la disonancia es
principalmente de San Luis y París. Sobre la percepción de accesibilidad
podemos decir que prácticamente todas las instalaciones siguen la tendencia
general, de nuevo con Montreal y Vancouver en una situación de mala
consideración.
La
variable
10
(disponibilidad
del
personal
ante
situaciones
problemáticas, Figura 50) se centra en la disponibilidad del personal de la
instalación para la solución de problemas de cualquier índole en cualquier
momento. Cabe destacar aquí que Montreal y Vancouver, las piscinas peor
consideradas en la mayoría de los casos, obtienen en este caso una buena
valoración, lo que pone de manifiesto la distinción en los aspectos que se
refieren a la instalación y a los trabajadores.
En general la percepción de los usuarios en este aspecto supera la
valoración general, con casos destacados como Oslo (0,96) y Londres,
Nagano, Pekín o Helsinki (0,92 a 0,90) y un rango de tan solo 0,32. Los valores
más bajos se obtienen en Albertville y Sarajevo, ambos levemente por debajo
de 0,70.
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6. Percepción de seguridad…
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Oslo
Ámsterdam
Moscú
Atenas
Calgary
Atlanta
Sapporo
Sydney
Innsbruck
Lillehammer
México
Nagano
Munich
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Tokio
Salt Lake
París
Berlín
Seúl
Sarajevo
Turín
Roma
Grenoble
Chamonix
Barcelona
Albertville
Vancouver
Montreal
0,20
0,30
0,40
0,50
0,60
0,70
0,80
0,90
1,00
Figura 49. Indicador PerSeg para la variable V9 (accesibilidad
general de la instalación). Las instalaciones aparecen
ordenadas por su media global. La doble línea rayada
indica la media general, y la línea simple punteada la
media de la variable estudiada.
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6. Percepción de seguridad …
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Oslo
Ámsterdam
Moscú
Atenas
Calgary
Atlanta
Sapporo
Sydney
Innsbruck
Lillehammer
México
Nagano
Munich
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Tokio
Salt Lake
París
Berlín
Seúl
Sarajevo
Turín
Roma
Grenoble
Chamonix
Barcelona
Albertville
Vancouver
Montreal
0,20
0,30
0,40
0,50
0,60
0,70
0,80
0,90
1,00
Figura 50. Indicador PerSeg para la variable V10 (disponibilidad
del personal ante situaciones problemáticas). Las
instalaciones aparecen ordenadas por su media global.
La doble línea rayada indica la media general, y la línea
simple punteada la media de la variable estudiada.
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6. Percepción de seguridad…
La variable 11 (percepción global del concepto de seguridad, Figura 51)
presenta la valoración general de los usuarios, con una pregunta tan definida
como “Esta es una instalación muy segura”. Valora la instalación, el personal y
el servicio prestado, pero también es relativa a la comprensión de los usuarios
del ambiguo constructo “seguridad”. Observamos por una parte que el valor
medio de esta variable (0,77) es muy cercano al valor medio del conjunto de
variables (0,76), lo que nos da una primera impresión de que esta variable
puede en gran medida agrupar al conjunto de ellas.
La instalación peor valorada, Montreal, es castigada aquí por los
usuarios con un valor (0,38) por debajo de su propio valor medio (0,51),
indicando una percepción de seguridad muy pobre. La sigue Vancouver, que
de forma similar aunque menos acusada tiene su valor en esta variable (0,58)
por debajo del 0,67 medio. La variable 11 tiene un amplio recorrido de 0,52,
aunque si descartamos las dos instalaciones peor valoradas se queda tan solo
en 0,21. No teniendo en cuenta Montreal y Vancouver, el coeficiente de
variación de Pearson de los valores de esta variable para las distintas
instalaciones es de tan solo 0,08, lo que nos indica una muy baja dispersión de
los datos.
Por la parte positiva, mencionar que todas las instalaciones que en la
media general tiene más de 0,80 puntos (11 instalaciones), en la variable 11
también los tienen, situándose entre las 15 primeras instalaciones. Destacar el
caso de Calgary, que en la media general se sitúa en la posición 11, y en la
media de esta variable obtiene un segundo puesto (0,89).
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6. Percepción de seguridad …
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Oslo
Ámsterdam
Moscú
Atenas
Calgary
Atlanta
Sapporo
Sydney
Innsbruck
Lillehammer
México
Nagano
Munich
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Tokio
Salt Lake
París
Berlín
Seúl
Sarajevo
Turín
Roma
Grenoble
Chamonix
Barcelona
Albertville
Vancouver
Montreal
0,20
0,30
0,40
0,50
0,60
0,70
0,80
0,90
1,00
Figura 51. Indicador PerSeg para la variable V11 (percepción
global del concepto de seguridad). Las instalaciones
aparecen ordenadas por su media global. La doble
línea rayada indica la media general, y la línea simple
punteada la media de la variable estudiada.
Página | 296
6. Percepción de seguridad…
Resultados por sexos y grupos de edad
Si analizamos la percepción de seguridad por sexos en el conjunto de
instalaciones, observamos que no existen apenas diferencias en la media
global, y que las diferencias son muy pequeñas en cada una de las variables.
Tampoco en los coeficientes de Pearson. La Tabla 47 y la Figura 52 ilustran
esta situación. Existe una mínima peor valoración de las mujeres en la
variables 6 y 7, higiene y salubridad del agua y de la instalación, siendo en el
resto de variables igual o mejor la valoración de éstas.
Tabla 47. Indicadores PerSeg y Pearson para cada variable, por sexos
PerSeg
Hombres
Mujeres
V1 V2
V3 V4 V5 V6 V7
V8
0,79 0,72 0,75 0,65 0,89 0,74 0,75 0,72
0,83 0,73 0,76 0,66 0,89 0,71 0,72 0,72
V9 V10 V11
0,75 0,80 0,77
0,75 0,82 0,78
Media
0,756
0,760
Pearson
Hombres
Mujeres
V1 V2
V3 V4 V5 V6 V7
V8
0,21 0,24 0,23 0,32 0,16 0,23 0,22 0,25
0,19 0,24 0,23 0,32 0,17 0,26 0,26 0,26
V9 V10 V11
0,23 0,21 0,21
0,22 0,20 0,21
Media
0,15
0,15
Leyenda: V1: Competencia de los socorristas ; V2: Seguridad ante equipamientos y accesorios; V3: Facilidad de
evacuación; V4: Seguridad frente a robos in situ; V5: Integridad como persona; V6: Salubridad del agua del vaso de la
piscina; V7: Higiene y salubridad de la instalación; V8: Integridad del edificio; V9: Accesibilidad general de la
instalación; V10: Disponibilidad del personal ante situaciones problemáticas; V11: Percepción global del concepto de
seguridad.
V11
V10
V9
Mujeres
V8
Hombres
V7
V6
V5
V4
V3
V2
V1
0,5
0,55
0,6
0,65
0,7
0,75
0,8
0,85
0,9
0,95
Figura 52. Indicador PerSeg, para cada variable, por sexos.
Página | 297
6. Percepción de seguridad …
La Tabla 48 muestra los datos agrupados por rangos de edad. Si
examinamos los datos clasificados por rangos de edad encontramos, a medida
que los usuarios tienen mayor edad, una tendencia de suave crecimiento en la
percepción global de seguridad, que en total difiere 7 centésimas (0,07). La
Figura 53 muestra esta evolución. Podríamos interpretar esto como unos
mayores niveles de exigencia en los usuarios más jóvenes.
Y si analizamos la información por variables observamos, en general, la
misma tendencia de leve crecimiento de la percepción de seguridad a medida
que los usuarios tienen mayor edad. Esto se muestra en las figuras Figura 54 y
Figura 55 . Si bien la tendencia es generalizada, hay casos particulares. Como
ejemplo, la variable 2, percepción de seguridad ante equipamientos y
accesorios, tiene un suave decrecimiento (0,02) de la percepción de seguridad
en los dos primeros intervalos para luego crecer hasta en 0,06 respecto a la
primera franja de edad.
Tabla 48. Indicadores PerSeg y Pearson para cada variable, por rangos de
edad
PerSeg
18 a 29
30 a 39
40 a 49
50 a 59
60 o más
V1
0,78
0,80
0,82
0,83
0,91
V2
0,73
0,71
0,70
0,75
0,79
V3
0,75
0,74
0,75
0,77
0,80
V4
0,63
0,64
0,67
0,66
0,73
V5
0,88
0,88
0,91
0,89
0,91
V6
0,72
0,72
0,73
0,72
0,75
V7
0,72
0,71
0,74
0,73
0,81
V8
0,71
0,70
0,72
0,72
0,78
V9
0,75
0,73
0,74
0,76
0,83
V10
0,80
0,78
0,81
0,83
0,89
V11
0,76
0,76
0,76
0,79
0,84
Media
0,75
0,74
0,76
0,77
0,82
Pearson
18 a 29
30 a 39
40 a 49
50 a 59
60 o más
V1
0,22
0,21
0,19
0,19
0,13
V2
0,23
0,24
0,25
0,23
0,21
V3
0,22
0,23
0,23
0,24
0,22
V4
0,33
0,32
0,32
0,32
0,27
V5
0,18
0,17
0,13
0,17
0,15
V6
0,25
0,23
0,26
0,24
0,24
V7
0,25
0,24
0,25
0,24
0,20
V8
0,26
0,25
0,26
0,25
0,22
V9
0,22
0,23
0,25
0,22
0,19
V10
0,22
0,21
0,19
0,19
0,16
V11
0,22
0,21
0,22
0,19
0,17
Media
0,16
0,15
0,15
0,15
0,12
Leyenda: V1: Competencia de los socorristas ; V2: Seguridad ante equipamientos y accesorios; V3: Facilidad de
evacuación; V4: Seguridad frente a robos in situ; V5: Integridad como persona; V6: Salubridad del agua del vaso de la
piscina; V7: Higiene y salubridad de la instalación; V8: Integridad del edificio; V9: Accesibilidad general de la
instalación; V10: Disponibilidad del personal ante situaciones problemáticas; V11: Percepción global del concepto de
seguridad.
Página | 298
6. Percepción de seguridad…
0,90
0,85
0,80
0,75
0,70
18 a 29
30 a 39
40 a 49
50 a 59
60 o mas
Figura 53. Indicador PerSeg de la media de las variables, por
rangos de edad.
1,00
0,90
V1
0,80
V2
V3
0,70
V4
V5
0,60
0,50
18 a 29
30 a 39
40 a 49
50 a 59
60 o mas
Figura 54. Indicador PerSeg de las variables 1 a 5, por
rangos de edad.
0,90
0,85
V6
V7
0,80
V8
0,75
V9
V10
0,70
V11
0,65
18 a 29
30 a 39
40 a 49
50 a 59
60 o mas
Figura 55. Indicador PerSeg de las variables 6 a 11, por
rangos de edad.
Página | 299
6. Percepción de seguridad …
Resultados por antigüedad de la instalación
Otro estudio interesante puede ser analizar la seguridad percibida en las
instalaciones en función de la antigüedad de éstas. La Figura 56 muestra la
curva producida por esta información y la línea de tendencia. A tenor de la
información mostrada podemos decir que la antigüedad de la instalación no
tiene clara influencia en la seguridad percibida. La línea de tendencia es
prácticamente horizontal, con una levísima disminución de la seguridad
percibida con la novedad de la piscina. Pero observando la gráfica
comprobamos que no existe relación entre la edad de la instalación y la
seguridad percibida por los usuarios.
0,95
0,90
0,85
0,80
0,75
0,70
0,65
0,60
0,55
0,50
1975
1980
1985
1990
1995
2000
2005
2010
2015
Figura 56. Indicador PerSeg por antigüedad de la instalación.
Relación entre los estudios realizados mediante el
cuestionario de validación y el cuestionario de percepción
Si bien las herramientas de auditoría a través del cuestionario de
validación (presentadas en los Capítulos 4 y 5) y la presente herramienta no
están diseñadas con criterios que permitan relacionarlas entre sí, puede ser
interesante examinar la evolución de una y otra en las distintas instalaciones.
Para realizar esta comparación se han eliminado dos instalaciones, ya
que una de ellas solo participó en el primer estudio (Estocolmo) y la otra solo
en el segundo (Oslo).
Página | 300
6. Percepción de seguridad…
Para el caso del cuestionario de validación, recordemos que nos
aportaba un porcentaje de cumplimiento de la seguridad por instalaciones. Por
tanto, disponemos de una medida normalizada en rango 0 a 1. Para la
percepción de seguridad, disponemos igualmente del parámetro PerSeg,
normalizado en rango 0 a 1. Si bien ambos parámetros están normalizados, las
escalas entre ellos no tienen por qué ser equivalentes ni proporcionales, por lo
que no se pueden establecer comparaciones absolutas.
Sí podemos analizar la evolución de un parámetro respecto al otro, y
para ello escalamos los rangos de cada parámetro de la siguiente forma: la
instalación con el mínimo porcentaje de cumplimiento del cuestionario de
validación (la instalación Nagano, con 0,46) tendrá un valor 0 y la instalación
con el máximo porcentaje de cumplimiento (Pekín) tendrá valor 1. Igualmente,
en la seguridad percibida, el mínimo valor de PerSeg (0,51 para Montreal) se
escala a un valor 0 y el máximo (Helsinki, con 0,87) a 1.
De este modo, insistimos en que no podemos hacer comparaciones
formales entre parámetros, pero sí podemos ver la evolución de uno y otro
parámetro. La Figura 57 presenta una gráfica en la que se han ordenado las
instalaciones por el grado de cumplimiento del cuestionario de validación y se
han representado como una línea (línea continua). De este modo, la línea es
creciente. La línea punteada representa los valores de percepción de los
usuarios para las mismas instalaciones. Observamos que la línea punteada no
sigue ninguna trayectoria proporcional continua. La Figura 58 es similar, pero
ahora las instalaciones están ordenadas ahora por el indicador PerSeg. Es
ahora la línea continua la que no sigue ninguna trayectoria proporcional a la
punteada.
Por ello, no encontramos relación clara entre la seguridad de la
instalación medida mediante el cuestionario de validación, y la seguridad
percibida por los usuarios. Esto puede ser un tema interesante para futuras
investigaciones: la seguridad real frente a la percibida.
Sin embargo, si observamos las líneas de tendencia, sí comprobamos
que la indiscutible tendencia al crecimiento de la ordenación de la gráfica por
orden creciente de cumplimiento del cuestionario de validación viene
Página | 301
6. Percepción de seguridad …
acompañada de una tendencia al crecimiento en el cumplimiento de la
seguridad percibida, como puede comprobarse en la Figura 59, en la que se
muestran únicamente, para mayor claridad, las líneas de tendencia de la Figura
57. De una manera muy aproximada, sí podemos decir que un aumento en el
grado de cumplimiento del cuestionario de validación viene acompañado de
“una tendencia” al aumento en la seguridad percibida por los usuarios.
1,20
1,00
0,80
0,60
CheckList
0,40
Percepción
Lineal (CheckList)
0,20
Lineal (Percepción)
0,00
Figura 57. Percepción de usuarios por instalaciones respecto a los resultados
del cuestionario de validación del Capítulo 5, y sus líneas de
tendencia.
1,20
1,00
0,80
0,60
0,40
CheckList
Percepción
0,20
Lineal (CheckList)
Lineal (Percepción)
0,00
Figura 58.
Página | 302
Resultados del Cuestionario de Validación del Capítulo 5, por
instalaciones, respecto a los resultados del estudio de percepción,
y sus líneas de tendencia.
6. Percepción de seguridad…
1,20
1,00
0,80
0,60
Lineal (CheckList)
0,40
Lineal (Percepción)
0,20
0,00
Figura 59. Líneas de tendencia de la percepción de usuarios por
instalaciones respecto a los resultados del cuestionario de
validación del Capítulo 5.
1,20
1,00
0,80
0,60
Lineal (CheckList)
0,40
Lineal (Percepción)
0,20
0,00
Figura 60. Líneas de tendencia de los resultados del Cuestionario de
Validación del Capítulo 5, por instalaciones, respecto a los
resultados del estudio de percepción.
Buscando relaciones más detalladas entre las dos herramientas,
comparamos El criterio accesibilidad del cuestionario de validación con la
variable 9 (accesibilidad de la instalación) del instrumento de percepción. Si
bien sigue sin haber una relación directa, sí encontramos unas tendencias más
definidas, como muestra la Figura 61.
Página | 303
6. Percepción de seguridad …
1,00
0,90
0,80
0,70
0,60
0,50
0,40
0,30
0,20
0,10
0,00
Figura 61.
Comparación de la variable 9 del estudio de percepción
(línea punteada) y la categoría accesibilidad del cuestionario
de validación (línea continua), por instalaciones.
También se ha encontrado cierta relación entre la categoría higiene y
salud del cuestionario de validación y la variable 7 de higiene y salubridad
general de la instalación, como se observa en la Figura 62. Otra cierta relación
se da confrontando la variable 6 de salubridad del agua del vaso del estudio de
percepción con la categoría vaso del criterio por zonas del cuestionario de
validación, Figura 63.
1,00
0,90
0,80
0,70
0,60
0,50
0,40
0,30
0,20
0,10
0,00
Figura 62. Comparación de la variable 7 del estudio de percepción (línea
punteada) y la categoría higiene y salud del cuestionario de
validación (línea continua), por instalaciones.
Página | 304
6. Percepción de seguridad…
1,00
0,90
0,80
0,70
0,60
0,50
0,40
Figura 63. Comparación de la categoría higiene y salud de
cuestionario de validación (línea punteada) y la variable 6
de salubridad del agua del vaso del estudio de percepción
(línea continua), por instalaciones.
Página | 305
6. Percepción de seguridad …
Página | 306
6. Percepción de seguridad…
6.6 Discusión
Si existen muy pocos trabajos de investigación sobre seguridad en
instalaciones deportivas (Finch et al., 2009), la situación no es mejor en lo
referente a la existencia de estudios sobre percepción de seguridad de
usuarios de piscinas. Este hecho ya se ha puesto de manifiesto en el apartado
1 de este Capítulo, y dificulta contrastar los resultados de nuestro estudio con
el de otros autores. Sin embargo, el campo de los estudios de percepción de
usuarios orientado a la calidad sí es abundante en la literatura investigadora
(Calabuig et al., 2015).
En el estudio de Vila et al. (2009) sobre satisfacción de usuarios de
centros deportivos municipales se muestra que, en general, las mujeres están
más satisfechas que los hombres con el servicio recibido, perciben menos
problemas y consideran que reciben una mayor calidad. Este hecho también se
manifiesta en nuestro estudio, pero con una diferencia mínima. En nuestro
estudio la percepción de seguridad media es casi idéntica en hombres y
mujeres, superando la de las mujeres en 0,004 puntos a los hombres en el
indicador PerSeg. Por variables, en nuestro estudio las mayores diferencias se
encuentran en los dos aspectos relacionados con el personal de la instalación:
la percepción de competencia de los socorristas (con una diferencia de PerSeg
de 0,04) y la disponibilidad del personal (diferencia de 0,02).
En este mismo estudio de Vila et al. (2009), referido a instalaciones
deportivas municipales de Palma de Mallorca, se encontró que ante ítems
como “La calidad ha sido mejor de la esperada”, “Las ventajas han sido
mayores de las esperadas”, o “Los problemas han sido menores de los
esperados”, la mayoría de los encuestados dieron una valoración de entre 6 y 7
puntos en una escala de Likert de 7 niveles. Si consideramos estos valores
como datos globales de satisfacción de los usuarios con el servicio, resultan
similares a los de percepción de seguridad de nuestro estudio, donde la
mayoría de usuarios da una valoración media de entre 5 y 6 sobre una escala
de 6, como puede comprobarse en la Tabla 43.
El trabajo de Vila et al. (2009) parece no contener cuestiones referidas a
la seguridad en las instalaciones o servicios prestados, citándose en éste que
Página | 307
6. Percepción de seguridad …
se utiliza un cuestionario adaptado de uno anterior desarrollado por las
universidades de Valencia, Castellón y Baleares para medir la calidad de
servicio y la satisfacción de los usuarios en hoteles y restaurantes. Sí analiza la
atención que prestan los empleados a los usuarios, encontrando una
mayoritaria valoración de 7 sobre la escala de Likert de 7, dato que no
contrasta con nuestro PerSeg de 0,81 y una mayoritaria valoración de 6 para la
variable 10 de disponibilidad del personal ante situaciones problemáticas.
Tampoco dispone de cuestiones específicas sobre seguridad el
cuestionario de percepción para centros deportivos privados de Pontevedra del
estudio de Rial et al. (2010), ni el de calidad elaborado para un club de golf
gallego (Serrano et al., 2010). En este último trabajo se analizan cinco
categorías a través de un cuestionario Likert de 31 ítems de 5 niveles. Las
cinco categorías son: “personal”, “condiciones físicas”, “organización y gestión”,
“instalaciones y servicios complementarios”, y “vestuarios y taquillas”. Cabe
resaltar que ninguno de los 31 ítems hace referencia a cuestiones de seguridad
tales como botiquín, protección frente a robos, evacuación u otras, ni tampoco
a cuestiones de accesibilidad, quedando estos conceptos implícitos en la
percepción del usuario en cuando a los servicios ofrecidos. Agradeciendo que
este trabajo incluya los ítems utilizados, los usuarios aportaron una valoración
global de un PerSeg equivalente de 0,59 (hemos calculado el indicador PerSeg
para el trabajo de Serrano et al, considerando su media aritmética y los 5
niveles de su escala de Likert, motivo por el que lo llamamos “PerSeg
equivalente”).
De nuevo las cuestiones de seguridad no son explícitas en el trabajo
sobre la percepción de usuarios de los servicios deportivos de la Universidad
de Vigo (Alonso, Rial, & Rial, 2013). No obstante, el estudio dispone de dos
grandes criterios, personal e instalaciones, y especialmente las categorías del
criterio de instalaciones permiten implícitamente analizar cuestiones de
seguridad. Algunas de ellas son “ambiente físico”, “higiene y limpieza”,
“mantenimiento y estado de conservación” o el genérico de “vestuarios, aseos y
duchas”. El PerSeg equivalente para las instalaciones es en este estudio de
0,43, con valores por debajo de 0,5 en todas las categorías salvo en “higiene y
limpieza” y “vestuarios, aseos y duchas”.
Página | 308
6. Percepción de seguridad…
El estudio de percepción de calidad de los usuarios de un centro
deportivo de Huelva publicado en 2008 (Nuviala et al., 2008) sí incluye un ítem
sobre seguridad con un enunciado tan directo como ambiguo: “La seguridad de
la instalación es la adecuada” dentro de la categoría “Instalaciones y material”.
El ítem deja a la libertad del encuestado decidir si se refiere a la seguridad del
material utilizado, a la protección frente a robos, a la seguridad con la que se
realizan las actividades, a las medidas de protección y evacuación frente a
emergencias, o a cualquier otra cuestión. Este ítem obtuvo un PerSeg
equivalente de 0,79 cuando el PerSeg equivalente global de estudio fue de
0,75 y el específico de la categoría de instalaciones y material de 0,70.
Los trabajos publicados por Morales y Gálvez sobre percepción de
calidad de servicios municipales (Morales & Gálvez, 2011, 2012) se derivan de
la Tesis Doctoral del segundo autor (Gálvez, 2011). La Tesis Doctoral está
centrada en desarrollar un cuestionario de percepción de usuarios de centros
deportivos municipales y medir las propiedades psicométricas de éste. Como
parte de ello se realizó un estudio para dos centros deportivos municipales de
la provincia de Málaga, cuyos resultados se detallan en la memoria de Tesis
Doctoral. El cuestionario desarrollado por Gálvez (2011) contiene algunas
preguntas relativas a seguridad, algunas otras son similares a las de nuestro
cuestionario, y grupos de ellas pueden ser contrastadas con nuestros
resultados.
En el estudio de Málaga el PerSeg equivalente global es de 0,68,
cercano al 0,76 de nuestro estudio de percepción de seguridad. El ítem
“Considera que el espacio deportivo le ofrece seguridad” del estudio de Gálvez
(2011) se puntúa con un PerSeg equivalente de 0,59, 0,17 puntos menos que
el global. De nuevo queda en el aire el concepto de seguridad, si bien el ítem
está englobado en el grupo “Espacios Deportivos”, haciendo referencia
estrictamente al recinto donde se desarrolla la acción deportiva. Este ítem
podría compararse con nuestra variable 11, percepción global del concepto de
seguridad, que los usuarios puntúan en nuestro caso con un PerSeg de 0,77.
La cuestión 23 del estudio de Málaga, “Considera que las taquillas son
seguras”, está directamente relacionada con nuestra cuestión 4, “Mi bolsa de
deporte y mis pertenencias están muy seguras en esta instalación”. En el caso
Página | 309
6. Percepción de seguridad …
del trabajo de Gálvez (2011) es parte de una batería de ítems sobre los
vestuarios, cuando en nuestro caso la pretensión es medir la percepción de
seguridad frente a robos in situ. En los centros deportivos de Málaga esta
cuestión se puntúa con un PerSeg equivalente 0,11 puntos por debajo de la
media (Perseg equivalente de 0,57 para el ítem 23), exactamente la misma
cantidad que nuestra variable 4 (puntuada con un PerSeg de 0,65 cuando la
media global es de 0,76).
Otras cuestiones comparables entre los dos estudios pueden ser el ítem
8 del estudio de Gálvez (2011) “En caso de existir algún problema usted sabe a
quién dirigirse” con nuestra variable 10 (si tengo cualquier problema siempre
habrá alguien que me atienda y me lo solucione), puntuando un PerSeg
equivalente de 0,52 en aquel estudio y de 0,81 en el nuestro. También son
similares las cuestiones “Considera que la limpieza de los espacios deportivos
es buena” del estudio de Gálvez y “La instalación está muy limpia y es muy
higiénica” del nuestro. Y “Opina que el material está en buenas condiciones” en
aquel estudio y “El equipamiento, los aparatos y todos los accesorios están en
muy buen estado y son muy seguros y fáciles de usar” en el nuestro.
A nivel internacional, en 2005 Afthinos, Theodorakis y Nassi (2005)
publicaron un trabajo que analiza las expectativas de los usuarios de seis
centros fitness de Atenas. El cuestionario, de 42 ítems en una escala de Likert
de 5 niveles, se modificó a partir del cuestionario QUESC de 1995 (Kim & Kim,
1995). Encontramos dos ítems directamente ligados con la seguridad:
“Protocolos de emergencia” y “Medidas de seguridad”; De los 42 ítems, el de
“medidas de seguridad” es el cuarto ítem más deseado por los usuarios, detrás
de aspectos como la limpieza, profesionalidad y atención de los trabajadores o
la modernidad de la instalación. Es clara la importancia que los usuarios dan a
la seguridad cuando se incluyen en el enunciado términos tan explícitos como
“emergencia”. Sin embargo, las “medidas de seguridad”, siendo un concepto
muy similar al de “protocolos de emergencia”, es un ítem que queda
aproximadamente en la mitad de la tabla de importancia dada por los usuarios,
quizás por asociarse más a conceptos de intrusión, robo o violencia.
Otros trabajos más recientes de Theodorakis se refieren a la satisfacción
y expectativas del público de espectáculos deportivos (Theodorakis et al., 2013;
Página | 310
6. Percepción de seguridad…
Theodorakis et al., 2001). En el trabajo de 2013, el autor se plantea si los
resultados de los encuentros deportivos aportan más satisfacción que la
calidad del servicio ofrecida, estando entre la calidad del servicio cuestiones
relativas a la seguridad (sentirse seguro). El estudio concluye que
efectivamente el resultado deportivo parece ser más importante.
Kelley y Turley (2001) han realizado un estudio sobre la percepción de
los espectadores de calidad en espectáculos deportivos, encontrando que las
cuestiones de higiene y seguridad están entre las más importantes, después de
la evidente de la calidad y espectacularidad del juego. Estudios relacionados
con la percepción del público han sido desarrollados en el ámbito español
analizando las relaciones entre las emociones, la calidad y la satisfacción en
eventos tales como atletismo (Calabuig et al., 2010), baloncesto (Calabuig et
al., 2009; Calabuig et al., 2015), o los Juegos Deportivos del Mediterráneo de
2005 (Mundina & Calabuig, 2011). En este último trabajo se analiza también a
los deportistas, existiendo una dimensión de seguridad en el estudio. La
seguridad alcanzó aquí un PerSeg equivalente de 0,75, valor por encima de la
calidad percibida global. El trabajo no aporta los ítems relativos a seguridad,
por lo que no podemos realizar un mayor contraste con nuestro estudio.
El trabajo de Greening et al. (2005) justifica la comprobación de la
tendencia de las personas a percibir su propio riesgo por debajo del riesgo
medio real. Este hecho, al que llama “optimismo irreal”, podría tener relación
con los resultados de nuestro estudio, relativamente satisfactorios, ya que
provocaría resultados “optimistas” al respecto de la percepción de seguridad de
los usuarios de piscinas climatizadas de uso colectivo de la Región de Murcia.
Según el estudio de Greening (realizado con adolescentes), el contacto
personal con las actividades y sus riesgos aumenta, en general, la percepción
de riesgo en los individuos. En un sentido similar, White et al. (2011)
comprueban una percepción de riesgo menor en jugadores de cricket con
menores experiencias negativas (más jóvenes) que la percepción de riesgo
media.
En la sección “Percepción del riesgo y la seguridad” del apartado 1 de
este Capítulo hemos puesto de manifiesto que los estudios sobre percepción
de seguridad encontrados en la literatura investigadora se centran en analizar
Página | 311
6. Percepción de seguridad …
el comportamiento, la intención o la actitud de las personas, y no en valorar la
seguridad de la instalación deportiva. Ejemplos de ello relativos a piscinas son
el trabajo de Amodio et al. (2014), que analiza el comportamiento de los
usuarios, o el de Fernández-Luna et al. (2011), que estudia la satisfacción de
los usuarios de piscinas al respecto del uso de cloro para el tratamiento del
agua. Los resultados de este último trabajo, en el que los usuarios perciben
que los problemas de salud sufridos en la piscina se deben en parte al
tratamiento con cloro, justifican el valor PerSeg de 0,72 obtenido en nuestro
estudio para la variable 6, “salubridad del agua del vaso de la piscina”. Este
dato muestra la preocupación relativa de los usuarios por la calidad del agua,
en la que estos parecen asumir las consecuencias sobre su salud del
tratamiento del agua de la piscina (los usuarios indican una cierta satisfacción
por el estado del agua). Sin embargo, al mismo tiempo valoran este ítem con el
segundo peor resultado (después de la seguridad frente a robos in situ) del
conjunto de variables del estudio de percepción.
Página | 312
6. Percepción de seguridad…
6.7 Conclusiones
1.
En este estudio sobre sobre la percepción de seguridad de los
usuarios de piscinas climatizadas de uso colectivo y titularidad
municipal de la Región de Murcia, los usuarios indican en general
una percepción de seguridad media-alta.
2.
La herramienta que hemos construido, un cuestionario de
percepción de 11 ítems que utiliza una escala de Likert de 6
valores ha resultado válido tras la evaluación de sus propiedades
psicométricas.
3.
El nivel de confianza estadística obtenido de las 1850 encuestas
útiles, realizadas de forma presencial mediante encuestadores a
razón de 50 encuestas por instalación, es suficientemente alto
tanto para analizar el conjunto de las instalaciones como para
poder aportar datos de cada una de ellas individualmente.
4.
Los valores globales obtenidos en el estudio indican una
percepción de seguridad media-alta de los usuarios, con un
PerSeg de 0,76, y una no muy alta dispersión de la percepción,
con un Pearson de 0,15. El indicador de tendencia central,
PerSeg, aporta valores normalizados de la media aritmética en
rango 0 a 1.
5.
Por variables, la percepción de integridad como persona obtiene
el valor más alto, con un PerSeg de 0,89, y la peor valoración la
obtiene la percepción de seguridad frente a robos in situ (0,65). La
salubridad del agua del vaso de piscina es también una de las
variables de peor consideración, con un PerSeg de 0,72.
Página | 313
6. Percepción de seguridad …
6.
Por instalaciones, la piscina con peor percepción de seguridad de
sus usuarios es Montreal, con un preocupante PerSeg de 0,51.
No obstante, existe una dispersión de opiniones mayor que en
otras instalaciones, ya que su Coeficiente de Variación de
Pearson está en el cuarto cuartil.
7.
También muestran percepciones preocupantes las piscinas
Vancouver, Albertville, Barcelona y Chamonix, con valores de
PerSeg por debajo de 0,70.
8.
La piscina con mejor percepción de seguridad de sus usuarios es
Helsinki, con un PerSeg de 0,87. Le siguen Londres, Amberes,
Melbourne y Sochi, con valores mayores o iguales a 0,84.
9.
Por variables e instalaciones destacan varias situaciones: Si
Montreal tiene el peor resultado en 7 de las 11 variables, en
competencia de los socorristas alcanza uno de los mejores
resultados (PerSeg de 0,89). La valoración más baja la tiene
Montreal en la integridad del edificio, con 0,28. Paris destaca
como la instalación con peor valoración en la calidad del agua del
vaso, y los usuarios de Alberville tienen una mala percepción de la
competencia de los socorristas de su instalación (0,44).
10. Como datos positivos, Oslo y Munich tienen un elevado PerSeg
en la variable integridad como persona alcanzando un valor de
0,99. Además los usuarios de la propia Oslo valoran con 0,96 la
disponibilidad del personal ante situaciones problemáticas.
11. No se aprecian diferencias significativas de los indicadores si se
distingue por sexos, tanto en el valor global de percepción como
examinando la situación por variables.
12. Sin embargo, sí se aprecia una suave tendencia a una mejor
valoración en la clasificación por rangos de edad. El valor global
de percepción pasa de un PerSeg de 0,75 en el grupo de edad de
18 a 29 años, a un valor 0,82 en la grupo de 60 o más años. Esta
Página | 314
6. Percepción de seguridad…
tendencia es similar para todas las variables, si bien es más
acentuada para la competencia de los socorristas y la seguridad
frente a robos en situ, con un rango de 0,13 y 0,10
respectivamente. La tendencia se da mucho menos en la
integridad como persona y la salubridad del agua del vaso (rango
de 0,03 en ambos casos).
Página | 315
6. Percepción de seguridad …
Página | 316
Capítulo 7
Ranking de seguridad
en las piscinas climatizadas
de uso colectivo y titularidad
municipal de la Comunidad
Autónoma de la Región de Murcia
7. Ranking de seguridad …
Página | 318
7. Ranking de seguridad …
7 Ranking de seguridad en las piscinas
climatizadas de uso colectivo y
titularidad municipal de la Comunidad
Autónoma de la Región de Murcia
7.1 Introducción
Este breve capítulo presenta un indicador creado a partir de los
resultados de los dos estudios anteriores como medida del nivel de seguridad
en piscinas climatizadas de uso colectivo. Este indicador se utiliza para
establecer un ranking entre las piscinas de titularidad municipal de la
Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
7.2 Indicadores
Tal y como describe Deming (1982), uno de los pilares básicos de la
gestión de la calidad es la medición. Si no se realizan medidas no se tienen
valores de referencia para realizar dictámenes, comparaciones o análisis. Y
este proceso de cuantificación a menudo se realiza a través de indicadores.
Uno de los beneficios de la utilización de indicadores es la ayuda para la
mejora de la satisfacción del cliente (Rincón, 2012), y por tanto, de su
percepción de calidad.
Un
observable
indicador puede definirse
que
permite
describir
como
una
características,
expresión
cuantitativa
comportamientos
o
fenómenos de la realidad a través de una variable (Maldonado, 2006). Son
instrumentos de medida que permiten expresar cuantitativamente aspectos
organizativos o de gestión, y sirven como guía para evaluar actividad realizada.
Un indicador puede ser compuesto; los indicadores compuestos son la
combinación matemática de un grupo de indicadores básicos. Los indicadores
compuestos se usan para sintetizar o compendiar en una sola dimensión un
concepto multidimensional, representando un constructo subyacente (Nardo et
al., 2008)
Página | 319
7. Ranking de seguridad …
Por su parte, la norma UNE 66175 define el término indicador como
“Datos o conjunto de datos que ayudan a medir objetivamente la evolución de
un proceso o de una actividad” (UNE66175, 2003). La norma cita como
relevante que un indicador no debe dar lugar a distintas interpretaciones, y que
debe especificarse su forma de cálculo y sus umbrales, así como las fuentes de
información utilizadas.
Para seleccionar qué indicadores son necesarios debe tenerse en
cuenta que valoren el grado de cumplimiento de los objetivos planteados, que
midan la evolución de los procesos más conflictivos existentes, y de los
factores de éxito de la entidad. Además, la norma recomienda la revisión
periódica de los indicadores, analizando su pertinencia y la necesidad de la
modificación o ampliación de ellos. Sobre las fuentes de datos para la
construcción de indicadores relacionados con servicios asistenciales, Saturno
indica que pueden utilizarse encuestas, entrevistas estructuradas, auditorías,
inspecciones, observación o revisión de historiales y otros documentos
(Saturno, 2008).
7.3 El indicador y el ranking
Con la intención en mente de la mejora de la seguridad en las
instalaciones deportivas en general, y de las piscinas climatizadas en particular,
no parece interesante la creación de un ranking entre las piscinas auditadas.
Para ello, hemos diseñado un sencillo indicador compuesto (Nardo et al.,
2008), que utiliza resultados de los estudios presentados en los Capítulos 5 y 6
de este documento. El indicador, por tanto, tiene en cuenta tanto la auditoría de
seguridad realizada a las instalaciones como la percepción de seguridad de los
usuarios de éstas.
Para la auditoría de seguridad utilizamos como indicador simple el grado
medio de cumplimiento del cuestionario de validación, que llamaremos GraCu
(por grado de cumplimiento) y que es una medida normalizada en rango 0 a 1.
Para la percepción de seguridad de los usuarios utilizamos de indicador simple
el parámetro PerSeg (percepción de seguridad) definido en el capítulo anterior
y que por su construcción se mueve igualmente en rango 0 a 1.
Página | 320
7. Ranking de seguridad …
Al indicador compuesto lo llamaremos Nivel de Seguridad (NiSeg) y
trabajará igualmente en rango 0 a 1, siendo una combinación lineal de ambos
indicadores simples. Para el establecimiento de la proporción o “peso” de cada
indicador simple hemos consultados a los cinco expertos que colaboraron en la
validación del cuestionario de percepción (presentado en el Capítulo 6) y
obteniendo por consenso entre ellos una ponderación de 0,75 para GraCu y
0,25 para PerSeg. Por tanto, el indicador que utilizaremos para el ranking es el
que se da en la Expresión 10.
: ;4 24"4 0.75 > ?" @ 0.25 > 1 2
Expresión 10. Indicador Nivel de Seguridad
Con este indicador podemos crear el ranking de piscinas climatizadas de
uso colectivo de titularidad municipal de la Comunidad Autónoma de la Región
de Murcia. Citar que, al igual que en la sección “Relación entre los estudios
realizados mediante el cuestionario de validación y el cuestionario de
percepción” del apartado 5 del Capítulo 6, para este ranking no hemos tenido
en cuenta las instalaciones Estocolmo y Oslo, ya que solo participaron en uno
de los estudios.
La Tabla 49 presenta el ranking. La primera columna indica la posición
en el ranking de cada instalación, la segunda indica el pseudónimo de la
instalación, la tercera es el valor para el indicador compuesto Nivel de
Seguridad, y la cuarta y quinta son los indicadores simples GraCu y PerSeg. La
Tabla 50 muestra tres columnas; en cada columna están todas las
instalaciones. En la columna central (en negrita) las piscinas están ordenadas
por el indicador compuesto Nivel de Seguridad (NiSeg), a su izquierda, el
ranking utilizando únicamente el indicador Grado de Cumplimiento (GraCu) y a
su derecha utilizando el indicador Percepción de Seguridad (PerSeg). De este
modo, se pueden comparar fácilmente los resultados de uno y otro estudio, y
del indicador compuesto. Finalmente, para más claridad, la Tabla 51 muestra
únicamente el ranking de piscinas climatizadas, sin incluir los valores de los
indicadores ni el resto de indicadores.
Página | 321
7. Ranking de seguridad …
Tabla 49. Ranking de seguridad en piscinas climatizadas de uso colectivo
y titularidad municipal de la Región de Murcia, incluyendo los
valores de los indicadores básicos (GraCu y PerSeg) y el
indicador compuesto NiSeg
Posición
Sede
NiSeg
GraCu
PerSeg
1
Pekín
0,82
0,82
0,83
2
Melbourne
0,80
0,79
0,84
3
Ámsterdam
0,79
0,78
0,82
4
Munich
0,77
0,78
0,76
5
Amberes
0,77
0,74
0,84
6
Atlanta
0,76
0,75
0,79
7
Lake Placid
0,76
0,76
0,75
8
Atenas
0,76
0,74
0,81
9
Sochi
0,76
0,73
0,84
10
Sarajevo
0,76
0,77
0,71
11
Salt Lake
0,75
0,76
0,74
12
Innsbruck
0,75
0,74
0,78
13
Tokio
0,75
0,75
0,74
14
Sydney
0,74
0,72
0,78
15
Helsinki
0,73
0,69
0,87
16
México
0,73
0,72
0,77
17
Seúl
0,73
0,74
0,71
18
Chamonix
0,73
0,74
0,69
19
Londres
0,72
0,68
0,85
20
Sapporo
0,72
0,69
0,79
21
París
0,71
0,71
0,72
22
Roma
0,71
0,71
0,71
23
Lillehammer
0,70
0,68
0,78
24
Albertville
0,70
0,71
0,68
25
Grenoble
0,70
0,70
0,71
26
Turín
0,69
0,68
0,71
27
San Luis
0,68
0,65
0,76
28
Río
0,67
0,65
0,75
29
Calgary
0,67
0,63
0,80
30
Los Ángeles
0,67
0,64
0,75
31
Berlín
0,66
0,64
0,72
32
Barcelona
0,64
0,63
0,69
33
Moscú
0,63
0,57
0,81
34
Montreal
0,61
0,64
0,51
35
Vancouver
0,55
0,51
0,67
36
Nagano
0,53
0,46
0,76
Página | 322
7. Ranking de seguridad …
Tabla 50. Rankings de seguridad de las instalaciones según los
dos indicadores simples y el indicador compuesto
Pos
Grado de
Cumplimiento
Nivel de
Seguridad
Percepción
de seguridad
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
31
32
33
34
35
36
Pekín
Melbourne
Ámsterdam
Munich
Sarajevo
Lake Placid
Salt Lake
Atlanta
Tokio
Amberes
Atenas
Innsbruck
Seúl
Chamonix
Sochi
Sydney
México
París
Roma
Albertville
Grenoble
Helsinki
Sapporo
Londres
Lillehammer
Turín
San Luis
Río
Los Ángeles
Berlín
Montreal
Calgary
Barcelona
Moscú
Vancouver
Nagano
Pekín
Melbourne
Ámsterdam
Munich
Amberes
Atlanta
Lake Placid
Atenas
Sochi
Sarajevo
Salt Lake
Innsbruck
Tokio
Sydney
Helsinki
México
Seúl
Chamonix
Londres
Sapporo
París
Roma
Lillehammer
Albertville
Grenoble
Turín
San Luis
Río
Calgary
Los Ángeles
Berlín
Barcelona
Moscú
Montreal
Vancouver
Nagano
Helsinki
Londres
Amberes
Melbourne
Sochi
Pekín
Ámsterdam
Moscú
Atenas
Calgary
Atlanta
Sapporo
Sydney
Innsbruck
Lillehammer
México
Nagano
Munich
San Luis
Lake Placid
Los Ángeles
Río
Salt Lake
Tokio
París
Berlín
Seúl
Sarajevo
Turín
Roma
Grenoble
Chamonix
Barcelona
Albertville
Vancouver
Montreal
Página | 323
7. Ranking de seguridad …
Tabla 51. Ranking de seguridad en piscinas climatizadas
de uso colectivo y titularidad municipal de la
Comunidad Autónoma de la Región de Murcia
Página | 324
1
Pekín
19
Londres
2
Melbourne
20
Sapporo
3 Ámsterdam
21
París
4
Munich
22
Roma
5
Amberes
23
Lillehammer
6
Atlanta
24
Albertville
7 Lake Placid
25
Grenoble
8
Atenas
26
Turín
9
Sochi
27
San Luis
10
Sarajevo
28
Río
11
Salt Lake
29
Calgary
12
Innsbruck
30
Los Ángeles
13
Tokio
31
Berlín
14
Sydney
32
Barcelona
15
Helsinki
33
Moscú
16
México
34
Montreal
17
Seúl
35
Vancouver
18
Chamonix
36
Nagano
7. Ranking de seguridad …
Observamos que el indicador Nivel de Seguridad (NiSeg) de las
instalaciones oscila entre los 0,82 puntos de Pekín y los 0,53 de Nagano, en un
rango de 0,29 puntos. El Nivel de Seguridad no tiene grandes discontinuidades
de una instalación a otra no superando los 0,02 puntos de diferencia entre
instalaciones con NiSeg consecutivo, salvo en los dos últimos casos,
Vancouver y Nagano, que distan 0,06 y 0,08 puntos de su anterior Montreal.
Esta situación señala claramente a estas dos instalaciones como las más
desfavorecidas, con un índice que apenas supera el 50% de cumplimiento en
ambas piscinas.
Las instalaciones mejor posicionadas en este ranking son Pekín,
Melbourne, Amsterdam, Munich y Amberes, con índices que oscilan entre
NiSeg de 0,82 y 0,77. Les siguen cinco piscinas con igual índice de 0,76
(Atlanta, Lake Placid, Atenas, Sochi y Sarajevo) y tres más con valor 0,75 (Salt
Lake, Innsbruck y Tokio). El resto de piscinas en la parte central del ranking se
mueven entre los 0,74 de Sydney y los 0,70 de Lillehammer, Albertville y
Grenoble. Las últimas diez posiciones comienzan con los 0,69 de Turín,
seguidos de San Luis, Río, Calgary y Los Ángeles. Entre 0,66 y 0.60 de Berlín,
Barcelona y Moscú, y los ya comentados bajos valores de Vancouver y
Nagano.
Si observamos la Tabla 50 comprobamos que las primeras cuatro
instalaciones no varían entre el ranking del indicador GraCu (la auditoría de
seguridad mediante del cuestionario de validación) y el indicador compuesto
Nivel de Seguridad (indicador NiSeg). Sin embargo, Sarajevo pasa de la quinta
posición en GraCu a la décima en NiSeg. Otra instalación que pierde
posiciones es Salt Lake, que pasa de la posición 7 en GraCu a la 11 en NiSeg,
o Tokio, que pasa de la posición 9 a la 13. Vancouver y Nagano se mantienen
en las últimas posiciones en los dos rankings. Escalan posiciones de forma
significativa Sochi y Helsinki, que suben 6 posiciones y Amberes y Londres que
lo hacen en 5 posiciones.
En cuanto a la comparación de los rankings obtenidos con el indicador
Percepción de Seguridad y el indicador compuesto Nivel de Seguridad,
podemos destacar que, debido al menor peso del indicador básico Percepción
de Seguridad en el indicador compuesto, se producen cambios importantes en
Página | 325
7. Ranking de seguridad …
la posición de las instalaciones en uno y otro ranking. Helsinki y Londres, que
son las dos primeras instalaciones según la percepción de los usuarios, pasan
a las posiciones 15 y 19 respectivamente, en la mitad de la tabla. Y Calgary y
Nagano (posiciones 10 y 17 en el ranking de Percepción de Seguridad) se
desploman hasta las posiciones 29 y 36 respectivamente en el ranking del
indicador compuesto Nivel de Seguridad.
La percepción de seguridad de los usuarios hace ganar posiciones de
forma destacada en el ranking general de Nivel de Seguridad a Munich, que
pasa de la posición 18 en el de percepción a la 4 en el de Nivel de Seguridad.
También a Lake Placid (que pasa de la 20 a la 7), o a Seúl, Saravejo y
Chamonix. Destaca Sarajevo, que pasa de la posición 28 en Percepción de
Seguridad a la 10 en el ranking general de Nivel de Seguridad.
Página | 326
7. Ranking de seguridad …
7.4 Conclusiones
1. En el ranking general de nivel de seguridad, construido a partir de
un indicador compuesto basado en los estudios anteriores sobre
auditorias de seguridad y percepción de los usuarios, las
instalaciones Pekín, Melbourne y Ámsterdam quedan en las
primeras tres posiciones.
2. Destacan negativamente las piscinas climatizadas Vancouver y
Nagano, que ocupan las dos últimas posiciones, distanciándose
además del resto.
3. Las instalaciones tienen un rango de variación de 0,29 puntos en el
ranking de nivel de seguridad; consideramos este valor de cerca
del 30% como significativo, debiendo realizarse esfuerzos por
obtener una mayor homogeneización en este índice.
4. Las cuatro primeras y las dos últimas instalaciones del ranking son
las mismas que en la clasificación que solo tiene en cuenta el
Grado de Cumplimiento de las auditorías de seguridad. En cambio,
el efecto del indicador de Percepción de los Usuarios, produce que
algunas instalaciones escalen cinco y hasta seis puestos en el
ranking.
5. El menor peso en el ranking del indicador simple de Percepción de
Seguridad de los usuarios produce que instalaciones como Calgary
o Nagano, que están en posiciones medias de la clasificación por
Percepción de los Usuarios, se desplomen 19 posiciones,
ocupando los puestos más bajos del ranking general de Nivel de
Seguridad desarrollado en este capítulo.
Página | 327
7. Ranking de seguridad …
Página | 328
Capítulo 8
Conclusiones y trabajos futuros
8. Conclusiones y trabajos futuros
Página | 330
8. Conclusiones y trabajos futuros
8 Conclusiones y trabajos futuros
8.1 Introducción
En este trabajo hemos abordado la problemática de la seguridad en
instalaciones deportivas desde el punto de vista del gestor deportivo,
proponiendo técnicas para su gestión, que particularizándolas para el caso de
las piscinas climatizadas de uso colectivo en el ámbito geográfico de la
Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
Hemos realizado cuatro estudios para cubrir los cuatro objetivos de esta
Tesis Doctoral. El primero ha sido un estudio documental para caracterizar de
una forma genérica el problema que nos ocupa, y en el segundo hemos
desarrollado un cuestionario de validación para analizar las condiciones de
seguridad de las piscinas climatizadas de uso colectivo. En el tercer estudio se
ha aplicado esta herramienta para estudiar las piscinas de titularidad municipal
de la Región de Murcia y en el último hemos realizado un estudio de
percepción de seguridad de los usuarios de estas mismas instalaciones,
utilizando un cuestionario de percepción de seguridad propio. Finalmente, en
base a los resultados del tercer y cuarto estudio, se ha obtenido un ranking de
seguridad de piscinas para la Región de Murcia.
Los estudios se han presentado en esta memoria por capítulos,
incluyendo al final de cada uno de ellos las conclusiones correspondientes. Por
ello, en el presente Capítulo incluimos únicamente las conclusiones más
relevantes del trabajo realizado, seguidas del apartado de trabajos futuros.
Página | 331
8. Conclusiones y trabajos futuros
Página | 332
8. Conclusiones y trabajos futuros
8.2 Conclusiones
1.
La investigación en gestión deportiva es un campo relativamente
nuevo, que se nutre de diversas disciplinas para constituir una
materia en sí misma. Las actuaciones referentes a la seguridad en
la gestión de las instalaciones deportivas suelen considerarse fuera
de las competencias de los gestores deportivos, pero esta
exclusión no está justificada. Consecuencia de estos hechos es la
existencia de muy pocos estudios de investigación en seguridad en
instalaciones deportivas desde el punto de vista de la gestión
deportiva.
2.
El estudio exploratorio documental realizado ha puesto de
manifiesto la gran dispersión de normativa vinculada con la
seguridad en las instalaciones deportivas, y la existencia de una
seguridad necesaria más allá de la seguridad obligatoria. La
importancia
de
esta
cuestión
ha
llevado
a
las
distintas
administraciones y organismos relacionados con el deporte a la
generación de múltiples documentos informativos y de buenas
prácticas, no constituyendo por ahora un cuerpo de conocimiento
definido y coherente.
3.
La accesibilidad es parte de la seguridad en las instalaciones
deportivas; La accesibilidad debe entenderse en el concepto amplio
del “deporte para todos”, en referencia a todo tipo de usuarios que
quedan fuera de las características medias físicas, sensoriales o
psíquicas.
4.
Existe una gran cantidad de disciplinas vinculadas con la
seguridad. Algunas son parte integrante de ésta, como las referidas
a cuestiones constructivas, de emergencias, protección de las
personas o bienes, y otras pertenecen a temáticas específicas
relacionadas con la seguridad, como la psicología de masas en
emergencias, las cuestiones sanitarias o la utilización de
simulaciones computacionales para evacuaciones. En el estudio
Página | 333
8. Conclusiones y trabajos futuros
realizado se han recogido gran cantidad de documentos relativos a
una gran variación de temáticas relacionadas con este tema.
5.
Las piscinas climatizadas de uso colectivo son un tipo de
instalaciones especialmente sensibles al problema de la seguridad,
por lo que tienen normativas y sistemas de control propios. Las
cuestiones de salubridad del agua no deben eclipsar otros
aspectos de la seguridad.
6.
El grado de cumplimiento del cuestionario de seguridad que hemos
desarrollado para piscinas climatizadas de uso colectivo se cifra en
el 69% para las 37 piscinas de titularidad municipal de la
Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, dato que refleja una
situación no preocupante pero sustancialmente mejorable. El rango
de cumplimiento por instalaciones abarca desde piscinas con un
desfavorable 44% hasta instalaciones con un satisfactorio valor del
82%.
7.
La multidimensionalidad del cuestionario de validación construido
ha puesto de manifiesto que, en general, las cuestiones de
seguridad tienen mayor grado de cumplimiento que a las de
accesibilidad, con una diferencia entre ambas de un 9%.
Descuidándose especialmente los aspectos relacionados con las
discapacidades sensoriales. También que los espacios de uso
habitual y las cuestiones directamente inspeccionadas por la
administración tienen niveles de seguridad mayores que aquellos
que no lo son, de lo que resulta que las cuestiones relativas a
emergencias y evacuación quedan más descuidadas. A este
respecto de las vías de evacuación, hemos detectado casos
extremos de incumplimiento total del cuestionario. La violencia, la
intrusión y el vandalismo son otras cuestiones descuidadas en
general en las instalaciones analizadas.
8.
Las cuestiones de organización al respecto de la seguridad tienen
un grado de cumplimiento por debajo de la media para todas las
Página | 334
8. Conclusiones y trabajos futuros
instalaciones auditadas, lo que pone de manifiesto la necesidad de
una mayor gestión deportiva a este respecto.
9.
Los usuarios de las piscinas climatizadas de uso colectivo y
titularidad municipal de la Comunidad Autónoma de la Región de
Murcia tienen una percepción global media-alta de seguridad de la
instalación que utilizan, aportando un valor de percepción de
seguridad del 76%. Este valor se ha obtenido de la realización de
un estudio de percepción basado en la utilización de un
instrumento de medición que utiliza una escala de Likert de 6
niveles y 11 ítems.
10.
Se han encontrado algunas instalaciones con una baja valoración
en seguridad de sus usuarios, existiendo un caso con un valor
medio del 51% y valores no aceptables en algunas variables, como
el 28% en la percepción de integridad del edificio, 33% en la
higiene y salubridad de la instalación, 38% en la percepción de
seguridad de equipamientos y accesorios o 39% en la accesibilidad
de la instalación.
11.
Por variables, la percepción de integridad como persona obtiene el
valor medio más alto, con un PerSeg de 0,89, y la peor valoración
la obtiene la percepción de seguridad frente a robos in situ (0,65).
La salubridad del agua del vaso de piscina es también una de las
variables de peor consideración, con un PerSeg de 0,72.
12.
Si bien la percepción media es satisfactoria, un análisis
pormenorizado
deseables.
Se
pone
han
de
manifiesto
encontrado
casos
casos
de
particulares
no
percepción
no
satisfactoria, como puede ser instalaciones con baja percepción de
la calidad del agua (51%), mala percepción de la competencia de
los socorristas (44%) o percepción de dificultades para la
evacuación en caso necesario (42%). La importancia de la
seguridad en las piscinas de uso colectivo obliga a niveles altos de
exigencia, que deben ser percibidos por los usuarios.
Página | 335
8. Conclusiones y trabajos futuros
13.
No se aprecian diferencias significativas de percepción de
seguridad entre sexos, y por rangos de edad la percepción de
seguridad aumenta levemente con el aumento de la edad.
14.
En el ranking general de nivel de seguridad que hemos construido
a partir de un indicador compuesto basado en los estudios
anteriores sobre auditorias de seguridad y percepción de los
usuarios, las instalaciones Pekín, Melbourne y Ámsterdam quedan
en las primeras tres posiciones. Destacan negativamente las
piscinas climatizadas Vancouver y Nagano, que ocupan las dos
últimas posiciones, distanciándose del resto.
Página | 336
8. Conclusiones y trabajos futuros
8.3 Trabajos futuros
La novedad del campo de la seguridad en instalaciones deportivas
ofrece un gran abanico de posibles trabajos como continuación de los aquí
presentados. Esta Tesis Doctoral abre el camino para la creación de una línea
de investigación estable en este campo. Entre otros posibles trabajos futuros
podemos mencionar los siguientes:
•
Extensión de los estudios de percepción de seguridad de los
usuarios y de análisis de seguridad de las instalaciones al ámbito
de las piscinas climatizadas de uso colectivo y titularidad privada,
y al ámbito estatal. La extensión al ámbito estatal permitiría la
realización
de
estudios
comparativos
entre
Comunidades
Autónomas, y a largo plazo contribuiría a uniformar los niveles,
calidades y criterios de seguridad.
•
Consolidación de los instrumentos desarrollados como estándares
para la medición y mejora continua de la seguridad en piscinas
climatizadas de uso colectivo.
•
Adaptación de los cuestionarios para analizar piscinas no
climatizadas, instalaciones éstas con menor complejidad pero
mayor variabilidad de configuraciones. Consecuentemente, esta
adaptación conllevaría la posterior realización de estudios a nivel
municipal, autonómico y nacional.
•
Creación y normalización de herramientas para la realización de
estudios en otro tipo de instalaciones, especialmente pabellones
deportivos y grandes campos, abordando el problema de la
seguridad en instalaciones de gran afluencia de público.
•
La realización de comparaciones a nivel internacional sobre la
seguridad
en
piscinas
climatizadas
en
particular,
y
en
instalaciones deportivas en general. Es seguro que esto
contribuiría a una ampliación de conocimientos, a conocer otros
enfoques y protocolos.
Página | 337
8. Conclusiones y trabajos futuros
•
Estudio del momento de evacuación en piscinas climatizadas y
otras instalaciones deportivas mediante modelos de simulación
computacionales. En este sentido ya hemos realizado pruebas
piloto tanto con software libre como con software privado.
•
Diseño e implantación de protocolos de gestión de la seguridad
integral en piscinas climatizadas (y otras instalaciones deportivas);
realización de experiencias piloto, consolidación de los protocolos
y creación de estándares.
•
Diseño de una batería de indicadores para la medición de los
niveles de calidad en piscinas climatizadas en particular, y en
instalaciones deportivas en general.
•
Creación
de
un
repositorio
digital,
de
uso
público,
de
documentación y legislación sobre seguridad en instalaciones
deportivas.
•
Abordar aspectos de seguridad no tratados en el estudio
documental ni en los posteriores estudios, como la seguridad
ambiental y la seguridad de la información en las instalaciones
deportivas.
•
Creación de una red de entidades sobre gestión deportiva en
seguridad en instalaciones deportivas; realización de congresos,
grupos de trabajo, creación de una revista digital, gestión de
documentación, etc.
Página | 338
Referencias bibliográficas
Referencias bibliográficas
Página | 340
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Anexos
Anexo 1. Cuestionario de validación … 373
Anexo 2. Cuestionario técnico de validación … 385
Anexo 3. Artículo enviado a revista internacional … 411
Página | 371
Página | 372
Anexo 1
Cuestionario de validación
Página | 373
Página | 374
Anexo 1. Cuestionario
Código
Año
Seguridad y Accesibilidad en Piscinas Climatizadas
1
Exteriores y Acceso
1.01
Existen paradas de transporte público en las cercanías de la instalación
1.02
Existe una adecuada señalización de la instalación en la vía pública circundante
1.03
La instalación dispone de aparcamiento propio, o muy abundante
1.04
La instalación dispone de aparcamiento específico para trabajadores, o muy
abundante
Si
No
(a menos de 300 metros)
(indicaciones para vehículos, visibles para peatones)
(abundante: más de 25 plazas libres en el momento de la visita)
(abundante: más de 25 plazas libres en el momento de la visita)
1.05
La instalación dispone de aparcamiento para vehículos eléctricos, con sistema de
carga
1.06
La instalación dispone de plazas de aparcamiento adaptadas
1.07
Dispone de plazas de aparcamiento adaptadas, de dimensiones mayores de 3.30 x
4.50, con la señalización reglamentaria (símbolo de accesibilidad) horizontal y
vertical
1.08
Existe un itinerario adaptado desde el aparcamiento hasta la instalación
(anchura 1.50, no desniveles, rampas del 6% si desniveles, y pasamanos si las rampas son de mas de
1 m)
1.09
Existe un itinerario adaptado desde la vía pública circundante hasta la instalación
(anchura 1.50, no desniveles, rampas del 6% si desniveles, y pasamanos si las rampas son de mas de
1 m)
1.10
La instalación dispone de aparcabicis
1.11
Existe un hidrante de incendios a menos de 100 metros
1.12
La instalación dispone de una zona libre de obstáculos para acceso o
acercamiento de vehículos de emergencia
1.13
La fachada del edificio está libre de grietas y fisuras
1.14
Los metales de la fachada de la instalación están libres de óxido y herrumbre
1.15
Los vidrios del exterior de la instalación están libres de fisuras y bien fijados
1.16
Todos los elementos arquitectónicos de la fachada están en buen estado
1.17
La zona de acceso a la instalación está libre de suciedad y basuras
1.18
El pavimento circundante a la zona de acceso no tiene desconchados ni
discontinuidades
1.19
El umbral de acceso a la piscina está libre de desnivel, o este es menor de 3 cm
1.20
El umbral dispone de rejilla limpiabarros (o similar accesible), para evitar
resbalamientos en el interior
1.21
Las puertas de acceso disponen de señalización e iluminación para su
reconocimiento desde el exterior
1.22
El umbral de entrada tiene al menos 80cm de paso libre
1.23
Las puertas de acceso son correderas y de apertura automática
1.24
Las puertas de acceso son de fácil manejo, no giratorias, y los tiradores son de
manivela o fácilmente accionables.
Página | 375
Anexo 1. Cuestionario
1.25
El edificio dispone del símbolo de accesibilidad en la fachada principal
1.26
El acceso a la instalación dispone de puertas y cerraduras de seguridad
1.27
El exterior de la instalación dispone cámaras de seguridad
1.28
La instalación dispone de alarma de intrusión
1.29
La zona circundante a la entrada a la instalación está bien iluminada
2
Recepción
2.01
La recepción está suficientemente iluminada. No hay zonas de penumbra y el
punto de información está ampliamente iluminado
2.02
El pavimento no tiene desconchados ni discontinuidades
2.03
Los trabajadores de recepción están protegidos de las corrientes de aire
2.04
Los trabajadores de recepción tienen un conocimiento básico de la lengua de
signos
2.05
La temperatura de la recepción está entre 17º y 27º
2.06
La humedad relativa de la recepción está entre el 30% y el 70%
2.07
El mobiliario fijo, y los elementos de información y comunicación permiten su uso a
personas con diferentes discapacidades
2.08
Dispone de un sistema de comunicación, y cerca de él, direcciones y teléfonos de
hospitales, ambulancia y emergencia
2.09
Existe un sistema de control de accesos, con identificación de usuarios
2.10
Los sistemas de control de entrada y salida (tornos y otros) son accesibles o se
dispone de un sistema accesible alternativo
2.11
La sala de recepción está libre de tabiques y puertas transparentes, o si los hay,
están señalizados a la altura de los ojos.
2.12
Todos los interruptores y enchufes eléctricos están bien anclados, protegidos, y
están en buen estado
2.13
El reglamento de régimen interno de la piscina está visible
2.14
Existen hojas de reclamaciones a disposición de los usuarios y público
2.15
La instalación está libre de venta de productos que puedan producir daños al ser
arrojados
2.16
Existen bancos o sillas para el descanso y espera de los usuarios y el público
2.17
Existe señalización para el acceso a las distintas zonas de la instalación
2.18
La recepción dispone de videocámaras de seguridad
2.19
Se dispone de cajas de seguridad para almacenar el dinero en metálico, o no se
maneja metálico
3
Público y Gradas (si no hay zona de público, no rellenar nada)
3.01
Existen aseos específicos para el público
3.02
Existen aseos específicos para el público, y están separados por sexos, ventilados,
tienen luces de emergencia y sus paredes están recubiertas de azulejos
3.03
Existen aseos adaptados para el público
3.04
Desde la recepción, existen recorridos independientes para el público y los
usuarios
3.05
Todas las zonas de acceso al público son accesibles desde itinerarios adaptados
3.06
Los accesos a las gradas (o zona de público) están señalizados en la recepción
3.07
Existe un itinerario accesible hasta las gradas (o zona de público)
Página | 376
Si
No
Anexo 1. Cuestionario
3.08
Las gradas están en planta baja, o hay un ascensor de emergencia para
evacuación prioritaria de personas con discapacidad resistente al fuego, o una
zona refugio resistente al fuego
3.09
Las gradas tienen asientos individuales, y todos los asientos están bien anclados y
en buen estado
3.10
Las gradas con asientos fijos disponen de una zona para el uso de todo tipo de
discapacitados, próxima a las vías de salida. Al menos una plaza adaptada cada
100 plazas.
3.11
Todos los interruptores y enchufes eléctricos están bien anclados, protegidos, y
están en buen estado
3.12
El pavimento no tiene desconchados ni discontinuidades
3.13
Las zonas de graderío permiten una perfecta visibilidad del vaso y la playa desde
cualquier zona.
3.14
Existe megafonía para el público, y funciona correctamente
3.15
El graderío tiene mecanismos de ventilación
3.16
Los techos están libres de humedades
3.17
El graderío tiene Iluminación artificial
3.18
Las vías de evacuación están señalizadas con rotulación
3.19
Las vías de evacuación disponen de iluminación de emergencia
3.20
El pavimento dispone de señalización táctil en los cambios de nivel o cambio de
dependencia
3.21
Existen cámaras de seguridad en las gradas
4
Oficinas
4.01
La temperatura de las oficinas está entre 17º y 27º
4.01
La humedad relativa de las oficinas están entre el 30% y el 70%
4.03
El ruido ambiente de las oficinas no supera los 45 decibelios
4.04
Las oficinas disponen de iluminación natural adecuada
4.05
Las oficinas disponen de iluminación artificial adecuada
4.06
Los puestos de trabajo son ergonómicos: la espalda queda recta, las pantallas
están a la altura de los ojos, las mesas y sillas tienen alturas proporcionales.
4.07
Los techos están libres de humedades
4.08
Todos los interruptores y enchufes eléctricos están bien anclados, protegidos, y
están en buen estado
4.09
Existe un itinerario adaptado hasta las oficinas
4.10
La disposición del mobiliario y los espacios alrededor de las oficinas facilitan la
utilización segura de los discapacitados, existiendo un diámetro libre de 1.50m (sin
contar el barrido de la puerta) en la zona de confidente
5
Deambulación (excepto las gradas)
5.01
Todas las puertas tienen al menos 0.80m de paso libre
5.02
Los tiradores de las puertas son de manivela o fácilmente accionables
5.03
A ambos lados de cualquier puerta hay un espacio libre de 1.20m, sin incluir el
barrido de las puertas
5.04
La anchura de los pasillos de los itinerarios principales es al menos de 1.50m, y en
cualquier cambio de dirección hay un círculo libre de diámetro 1.50m
5.05
La anchura mínima de los pasillos no principales es de 1m
5.06
Se dispone de un sistema de señalización de los itinerarios accesibles, o estos
Página | 377
Anexo 1. Cuestionario
coinciden plenamente con los de los usuarios no discapacitados.
5.07
Todas las zonas de deambulación están libres de obstáculos en 2.20m de altura
5.08
Los espacios de tránsito están limpios
5.09
Los espacios de tránsito están libres de obstáculos
5.10
Las zonas de tránsito están bien iluminadas
5.11
Los suelos están libres de irregularidades
5.12
Los techos están libres de humedades
5.13
Todos los interruptores y enchufes eléctricos están bien anclados, protegidos, y
están en buen estado
5.14
Todas las zonas de la planta baja están al mismo nivel
5.15
Todas las zonas de la planta baja están al mismo nivel, o las zonas a desnivel son
accesibles
(si menos de 4 escalones, solucionar con rampas, con pasamanos, de 0.80 de ancho y 6% de desnivel.
Si más de 3 escalones, rampas o ascensor)
5.16
Existe pavimento táctil en los cambios de los itinerarios
(bandas guía o rodapiés diferenciados)
5.17
Las zonas de tránsito están libres de tabiques transparentes, o si los hay, están
señalizados a la altura de los ojos.
Deambulación en plantas altas (Si no hay plantas altas, no rellenar)
5.18
Hay ascensor entre la planta baja y el resto de plantas
5.19
Hay ascensor, y el camino desde el umbral del edificio hasta el ascensor está libre
de desniveles
5.20
Hay ascensor adaptado
(botonera a menos de 1.40m, en relieve. Mínimo 1.40m x 1.10m, pasamanos. 1.50 libre en puerta)
5.21
Las escaleras de acceso a las plantas altas son accesibles
(anchura mínima de 1.20m. Mínimo 3 peldaños y máximo de 16, con descansos si hay más peldaños.
Pavimento táctil en el arranque superior. Pasamanos a ambos lados. Banda antideslizante en cada
escalón.
5.22
El acceso a las plantas altas está libres de rampas, o estas tienen una pendiente
menor del 6%, y pasamanos
5.23
Se dispone de elementos de información que permiten la orientación y el uso de
las escaleras, las rampas y los ascensores.
6
Vestuarios y Aseos
6.01
Las puertas de los vestuarios tienen algún tipo de señalización táctil para indicar
“hombres” y “mujeres”
6.02
Los vestuarios tienen dos accesos y circuitos independientes: usuarios vestidos /
en ropa de baño
6.03
Hay al menos una cabina de vestuario de uso individual, por cada sexo
6.04
Hay al menos un aseo, una ducha y una cabina de vestuario plenamente
adaptadas, por cada sexo
(barras en pared inodoro, lavabo altura libre 0.70, diámetro libre 1.50, antideslizante, ducha con
taburete, sin resaltes, pendiente 2%, barras)
6.05
El pavimento es antideslizante
6.06
Los aseos y vestuarios están limpios
6.07
Los aseos y vestuarios se limpian al menos una vez al día
6.08
Los aseos y vestuarios están libres de zonas de penumbra y están suficientemente
iluminados
6.09
Los aseos y vestuarios están libres de objetos cortantes u oxidados
Página | 378
Anexo 1. Cuestionario
6.10
Los vestuarios y aseos tienen sistemas de ventilación
6.11
Los techos están libres de humedades
6.12
Las paredes están alicatadas al menos hasta 2m de altura, o utilizan pinturas
plásticas hidrófugas
6.13
Los vestuarios tienen taquillas
6.14
Los vestuarios tienen taquillas, numeradas en relieve o braille, y a baja altura
6.15
Los vestuarios están libres de ropa y macutos de usuarios (que no están
presentes)
6.16
Los grifos de las duchas son de fácil accionamiento
6.17
Los sistemas de drenaje de las duchas funcionan correctamente
6.18
Las duchas disponen de agua caliente
6.19
Las duchas cuentan con jabonera y toallero
6.20
Los cabezales de las duchas son antivandálicos
6.21
Los lavabos de los vestuarios tienen jabón líquido y toallas de un solo uso
6.22
Los lavabos de los vestuarios tienen jabón líquido y toallas de un solo uso, a baja
altura
(1.20m o menos)
6.23
Los lavabos tienen espejos que empiezan a 0.95m de altura
6.24
Los grifos de los lavabos son de pulsador o de palanca hidromezcla
6.25
Los lavabos tienen una altura libre de 0.70m
6.26
Los bancos no tienen patas y están anclados a la pared
6.27
Los interruptores y enchufes están bien anclados y libres de deterioros
6.28
Hay un minino de cuatro retretes por cada vestuario (m/f)
(En vestuarios masculinos, la mitad pueden ser urinarios)
6.29
Hay al menos seis duchas por cada vestuario (m/f)
(una ducha por cada 20 personas de aforo. Estimado 120 personas para 8x25)
6.30
La capacidad de los aseos y vestuarios es de al menos 40 personas por vestuario
(m/f)
(1/3 del aforo, contando 1m2/persona. Estimado 120 personas para 8x25)
6.31
Los vestuarios y aseos se desinsectan cada 6 meses
(según comentario del gestor)
6.32
Existen perchas y están situadas a 1.40m como máximo
6.33
Existen perchas a baja altura (1.10m)
6.34
La instalación está libre de tuberías de agua caliente a la vista
6.35
La disposición del mobiliario y los espacios alrededor facilitan la utilización segura
de los discapacitados
(hueco en zona de banco, con 1.50m de diámetro libre, antideslizante, con asideros, etc.)
6.36
Hay secadores de pelo en los vestuarios, y funcionan
6.37
Hay secadores de pelo a baja altura, y funcionan
6.38
Existen vestuarios y taquillas específicos para los trabajadores, correctamente
equipados
(banco, perchas, taquillas, lavabo, jabón, toallas papel)
6.39
Existen cambiadores de bebé en los vestuarios
6.40
Existen cambiadores de bebé en los vestuarios de ambos sexos (o un espacio
común)
Página | 379
Anexo 1. Cuestionario
7
Vaso principal y su espacio
7.01
El vaso tiene unas características adecuadas
(estable, resistente, estanco, sin recodos, sin obstáculos, sin obstrucciones subacuáticas, con
materiales lisos, claros y de fácil limpieza)
7.02
El vaso y su alrededor se mantiene en un estado de conservación correcto
(sin fisuras, deformaciones, manchas, hongos)
7.03
El vaso está libre de trampolines, toboganes u otros accesorios similares
7.04
Existen señalizaciones legibles de indicación de profundidad en todas las zonas
del vaso
(cada vez que hay un cambio de profundidad)
7.05
El paseo que rodea el vaso es higiénico, antideslizante e impermeable. Está libre
de impedimentos y tiene una anchura mínima de 1m, con ligera pendiente hacia el
exterior del vaso, y con sistema de drenaje
7.06
El paseo que rodea el vaso está en buen estado de mantenimiento y conservación
(sin roturas ni fisuras, sin hongos, limpio, sin encharcamientos, sin desniveles)
7.07
Existen escaleras en los 4 ángulos del vaso, en los puntos de cambio de
pendiente, y cada 15 metros de perímetro
7.08
Las escaleras de acceso al vaso siguen la normativa (ver anexo)
(están empotradas, son inoxidables, sin aristas, con peldaños antideslizantes y permiten subir con
comodidad)
7.09
Las escaleras de acceso al vaso están en buen estado, bien ancladas, libres de
óxido y deterioros
7.10
Al menos una escalera alcanza el fondo, para labores de limpieza
7.11
La piscina tiene previsto un sistema acceso al vaso para personas de movilidad
reducida y sillas de ruedas
7.12
Existe una rampa de acceso al vaso, para personas con movilidad reducida, de
pendiente menor del 8%
7.13
El vaso tiene un sistema de salida de aguas por rebosamiento
7.14
El vaso está lleno al máximo del nivel de recogida
7.15
El rebosadero limita el nivel máximo de agua, desagua la película superficial de
impurezas, sirve de agarre a los usuarios y cumple la función de rompeolas
(ver anexo)
7.16
Las rejillas de los rebosaderos están en buen estado, alineadas y libres de tramos
rotos
7.17
Las líneas del fondo del vaso están en buen estado y son reglamentarias
(ver anexo)
7.18
Las corcheras son reglamentarias
(sucesión continua de flotadores, diámetro 0.05m a 0.15m, tensores empotrados. Distinto color los
últimos 5 m )
7.19
Las corcheras están en buen estado
(libres de roturas, sin separaciones, no quemadas, tensores y cables no oxidados)
7.20
Existen plataformas de salida y son reglamentarias
(ver anexo)
7.21
Existen plataformas de salida y están libres de óxido y deterioros
7.22
Existen líneas de banderolas reglamentarias indicadoras de viraje en espalda
(anclaje con tapa, a 5m, altura 1.80-2.50, con banderines )
7.23
Existen líneas de banderolas y están libres de óxido y deterioros
7.24
Existen dos flotadores salvavidas, con rabiza de longitud superior a la anchura de
la piscina
7.25
Existe una zona de duchas en el recinto del vaso y está en buen estado
7.26
La zona de duchas en el recinto del vaso dispone de sistemas de drenaje
Página | 380
Anexo 1. Cuestionario
7.27
En la zona de playa hay tomas de agua para su limpieza
7.28
Cualquier otro servicio distinto al baño está fuera de la zona de bañistas
7.29
La piscina dispone de sistemas de renovación de aire
7.30
La piscina dispone de sistemas de medida de la humedad del aire
7.31
La climatización y ventilación es poco ruidosa
(menor de 45 db en cualquier zona de la playa)
7.32
La piscina dispone de sistemas automáticos de medida y control de la temperatura
del agua
7.33
La piscina dispone de sistemas automáticos de medida y control de la temperatura
ambiente
7.34
Existe un socorrista en el recinto del vaso
7.35
El socorrista dispone de su documentación en el momento de la visita
7.36
Las luminarias están colocadas alejadas de la vertical del vaso
7.37
Los interruptores y enchufes están bien anclados y libres de deterioros
7.38
El material deportivo está ordenado y no molesta a los usuarios
7.39
Existe un almacén de material que comunica directamente con el vaso, de puertas
de más de 2.40m de ancho, de fácil comunicación con el exterior
7.40
El recinto de piscina dispone de megafonía
7.41
Si hay tabiques transparentes, están señalizados a la altura de los ojos
7.42
El recinto está libre de condensación de vapor de agua
Vasos pequeños (Si no hay ninguno, no rellenar)
7.43
Hay vasos infantiles, y tienen una profundidad máxima de 0.40m y pendientes
menores del 6%
7.44
Hay vasos infantiles (profundidad máxima 0.40m), y están separados de los de
adultos al menos 10m, o por elementos arquitectónicos.
7.45
Hay vasos infantiles (profundidad máxima 0.40m), y tienen la zona de entrada al
vaso con escalones.
7.46
Hay vasos de enseñanza, y tienen profundidad mínima de 0.70m y pendiente
suave (6%) hasta 1.40 como máximo.
7.47
Hay vasos de enseñanza, y están separados al menos 5m del resto.
8
Botiquín y emergencias sanitarias
8.01
Existe un local para primeros auxilios accesible directamente desde el vaso
8.02
El botiquín dispone de un cuadro de instrucciones de primeros auxilios, de lavabo y
agua corriente, camilla, dispositivo para respiración artificial y armario de urgencias
8.03
El armario de urgencias dispone al menos de: pinzas de un solo uso, tijeras de
acero, H2O2, yodo, tiritas, vendas, gasas, algodón, esparadrapo, guantes, jeringas,
analgésico.
8.04
El botiquín dispone de inodoro, ducha, espacio de cambio de ropa, mesa y silla y
teléfono
8.05
Los interruptores y enchufes están bien anclados y libres de deterioros
8.06
El botiquín dispone de ventilación natural o forzada
8.07
El botiquín está correctamente iluminado
8.08
La dependencia está libre de humedades en techos
8.09
El botiquín está limpio y ordenado
8.10
El botiquín dispone de un contenedor para residuos especiales
Página | 381
Anexo 1. Cuestionario
8.11
Existe un botiquín portátil con material adecuado
8.12
El local cuenta con desfibrilador automático y personal autorizado a utilizarlo
8.13
Existen equipos de protección personal para manipulaciones de riesgo o
emergencias
(mascarillas, gafas, guantes de seguridad, mantas)
9
Dependencias técnicas y otros
9.01
Existe señalización en la puerta de las dependencias técnicas prohibiendo el paso
a los usuarios y al público
9.02
Las instalaciones anexas y de maquinaria están en lugares independientes no
accesibles por los usuarios
9.03
Se produce al menos la renovación diaria del 2.5% del agua del vaso
9.04
La capacidad de entrada de agua al vaso permite la recirculación total en 8 horas
9.05
Existen contadores de agua del vaso renovada y depurada, y están en
funcionamiento
9.06
El vaso se vacía al menos una vez al año
9.07
Existen sistemas automáticos de dosificación de desinfectantes, y se usan
habitualmente
9.08
Los productos para el tratamiento del agua están legalmente autorizados
(marcado CE)
9.09
El sistema de depuración de agua está en funcionamiento mientras la piscina está
abierta al público
9.10
Los productos químicos se almacenan y manipulan de forma segura, y no están
accesibles a los usuarios
(guantes, gafas, ropa protectora, herramientas, o sistemas automáticos de almacenaje)
9.11
Se mide tres veces al día (mañana, tarde y máxima concurrencia) el cloro residual,
ph, turbidez, temperatura del agua y ambiente, y se anota en el libro de registro
oficial
9.12
Los sistemas de depuración, dosificación, alimentación y evacuación son
independientes en cada vaso (si solo hay un vaso, indicar “si”)
9.13
Los sistemas de calefacción están libres de la acción directa del fuego
9.14
Las instalaciones técnicas están limpias y ordenadas
9.15
Las dependencias están libres de humedades en techos y paredes
9.16
Todos los interruptores y enchufes están bien anclados, protegidos, y en buen
estado
9.17
Las instalaciones técnicas tienen dispositivos de detección de incendios
9.18
Existe un protocolo documentado para el tratamiento de los residuos técnicos
9.19
Existen carteles indicadores de las normas de manipulación de los diferentes
productos químicos.
9.20
Los cuartos de limpieza son independientes de los de maquinaria
9.21
Los cuartos de limpieza están ordenados y bien iluminados
9.22
Se almacenan productos de limpieza únicamente en los cuartos de limpieza
9.23
El edificio dispone de un local de descanso para los trabajadores, correctamente
equipado
(sillones cómodos, iluminación cenital y lateral, mesa, enchufes, iluminación natural)
9.24
Página | 382
Los cuadros eléctricos están totalmente libres de oxidaciones, deterioros y objetos
peligrosos alrededor
Anexo 1. Cuestionario
9.25
Las puertas y ventanas funcionan con normalidad y están libres de deformaciones
9.26
El edificio está libre de fisuras en tabiques
10
Vías de evacuación
10.01
Las vías de evacuación están libres de obstáculos y utilizables en cualquier
momento
10.02
Las vías de evacuación desembocan en una zona de seguridad
10.03
La señalización “salida” - “sin salida” – “salida con escaleras” etc. es visible e
identificable en toda la instalación
10.04
La instalación dispone de planos de situación con recorridos de evacuación
10.05
Las vías de evacuación están señalizadas visualmente, con lo símbolos
reglamentarios fotoluminescentes
10.06
Las vías de evacuación están señalizadas luminosamente
10.07
Las vías de evacuación están señalizadas acústicamente
10.08
Las puertas de emergencia abren hacia el exterior, no están bloqueadas y
disponen del símbolo “salida de emergencia”
10.09
Las puertas de los recorridos de evacuación están señalizadas y se abren en
cualquier momento desde el interior
10.10
Los mecanismos de las puertas de emergencia son antipánico, están en buen
estado, libres de óxido y engrasados
10.11
Las vías de evacuación están adaptadas a personas en sillas de ruedas
(no escaleras, rampas < 6%, anchura >1.50m)
10.12
La instalación dispone de ayudas técnicas para la evacuación de personas con
movilidad reducida
(sillas de ruedas, camillas, arneses, otros dispositivos)
11
Emergencias
11.01
La instalación dispone de sistema de detección de incendios
11.02
La instalación dispone de sistema de detección de incendios con alarmas ópticas y
acústicas
11.03
La instalación dispone de rociadores automáticos
11.04
La instalación dispone de pulsadores de incendios
11.05
La instalación esta sectorizada para incendios, con puertas RF
11.06
La instalación dispone de sistema de megafonía para emergencias
11.07
La instalación dispone de alumbrado de emergencia, que de forma automática
genera luz suficiente para la salida de las personas. Sobre las puertas de las
salidas, puertas, pasillos, vestíbulos y dependencias accesorias
11.08
La instalación está libre de escaleras, o estas disponen de iluminación de
emergencia en los escalones
11.09
La instalación dispone de extintores visibles y accesibles, cada 15 metros, y están
en vigor
(se revisan cada año, etiquetándolos, y se retimbran cada 5 años)
11.10
Las bocas de incendio equipadas son visibles y accesibles, y están en buen estado
aparente
11.11
Las bocas de incendio equipadas no obstaculizan el paso de usuarios
11.12
Todos los elementos de protección (extintores, bocas de incendio) están
señalizados individualmente con la señal UNE, fotoluminescente
11.13
Existen linternas para emergencias a disposición de los trabajadores, y están
cargadas
Página | 383
Anexo 1. Cuestionario
11.14
Existen chalecos de emergencia a disposición de los trabajadores
11.15
Se dispone de megafonía portátil
12
Organización
12.01
La piscina dispone de un responsable de mantenimiento con carné de cuidador en
vigor
12.02
La entidad realiza tratamientos de legionelosis en la instalación
12.03
Existen protocolos escritos de utilización de la instalación por usuarios con perros guía
12.04
La instalación dispone de un Plan de Autoprotección
12.05
Los empleados reciben formación sobre seguridad y emergencias
12.06
Existen documentos a disposición de los trabajadores que manipulan productos
químicos sobre su correcta utilización
12.07
Existe un plan documentado de evaluación de los riesgos en el trabajo y
prevención de riesgos laborales
12.08
Los trabajadores reciben formación en prevención de riesgos laborales
12.09
Existe un control periódico regulado de la salud de los trabajadores
12.10
Los planos y documentos descriptivos de la instalación están disponibles en las
instalaciones
12.11
El servicio de extinción de incendios tiene copia de los planos del local y de los
medios de extinción con que cuenta.
12.12
Se dispone de un plan de emergencias general
12.13
Se dispone de un plan de actuación en incendios
12.14
Se dispone de un plan de evacuación
12.15
Los trabajadores se han formado en el uso de la lengua de signos
12.16
Existe un plan de formación en comunicación para distintas discapacidades
12.17
Existe un protocolo de seguridad, prevención y control para espectáculos
12.18
Existe un reglamento interno del recinto deportivo para la realización de
espectáculos
12.19
Existe un protocolo de limpieza documentado
12.20
Existe un plan documentado de mantenimiento de la instalación
12.21
Se dispone de un reglamento de régimen interno y está visible
12.22
Existen protocolos documentados de evacuación de discapacitados en caso de
emergencia
12.23
La instalación dispone de vigilante de seguridad diurno
12.24
La instalación dispone de vigilante de seguridad nocturno
12.25
La instalación dispone de un protocolo de actuación en caso de intrusión o robo
---
Página | 384
Anexo 2
Cuestionario técnico
de validación
Página | 385
Página | 386
Anexo 2. Cuestionario técnico
Cuestionario de validación con categorías por criterio de clasificación
Criterios de clasificación del cuestionario de validación, con sus categorías y
la clave de denominación
Criterio básico de seguridad / accesibilidad
Categoría
Clave
Seguridad
Seguridad
Accesibilidad
Accesibilidad
Criterio de zona de la piscina
Categoría
Clave
Exteriores y zona de acceso a la instalación
Acceso
Botiquín y primeros auxilios
Botiquín
Espacios de deambulación
Deambulación
Emergencias y protección ante incendios
Emergencias
Vías de evacuación
Evacuación
Dependencias administrativas
Oficinas
Cuestiones organizativas
Organización
Zonas para público y graderíos
Público
Recepción
Recepción
Dependencias técnicas
Técnicas
Vaso principal y secundarios
Vaso
Aseos y vestuarios para nadadores
Vestuarios
Criterio de riesgo
Categoría
Clave
Accidente personal, enfermedad
Accidente
Emergencia, evacuación
Emergencia
Robo, hurto, intrusión, sabotaje, atentado
Intrusión
Violencia, racismo, xenofobia, intolerancia
Violencia
Higiene, salud
Higiene
Integridad del edificio
Edificio
Accesibilidad
Accesibilidad
Página | 387
Anexo 2. Cuestionario técnico
1
N
1.01
1
Exteriores y Acceso
Existen paradas de transporte público en las cercanías de
la instalación
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
En la vía pública circundante existe una adecuada
señalización de la instalación
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
La instalación dispone de aparcamiento propio, o muy
abundante
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
La instalación dispone de aparcamiento específico para
trabajadores, o muy abundante
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Acceso
Acceso
Seguridad
Emergencia
Acceso
Seguridad
Edificio
Acceso
Básica
Riesgo
Zonas
(a menos de 300 metros)
1.02
2
(indicaciones para vehículos, visibles para peatones)
1.03
3
(abundante: más de 25 plazas libres en el momento de la visita)
1.04
4
(abundante: más de 25 plazas libres en el momento de la visita)
1.05
5
1.06
6
1.07
7
1.08
8
La instalación dispone de aparcamiento para vehículos
eléctricos, con sistema de carga
La instalación dispone de plazas de aparcamiento
adaptadas
Dispone de plazas de aparcamiento adaptadas, de
dimensiones mayores de 3.30 x 4.50, con la señalización
reglamentaria (símbolo de accesibilidad) horizontal y
vertical
Existe un itinerario adaptado desde el aparcamiento hasta
la instalación
1.09
9
Existe un itinerario adaptado desde la vía pública
circundante hasta la instalación (anchura 1.50, no desniveles,
1.10
1.11
10
11
1.12
12
1.13
13
(anchura 1.50, no desniveles, rampas del 6% si desniveles, y pasamanos si
las rampas son de mas de 1 m)
rampas del 6% si desniveles, y pasamanos si las rampas son de mas de 1 m)
La instalación dispone de aparcabicis
Existe un hidrante de incendios a menos de 100 metros
La instalación dispone de una zona libre de obstáculos
para acceso o acercamiento de vehículos de emergencia
La fachada del edificio está libre de grietas y fisuras
Página | 388
Anexo 2. Cuestionario técnico
1.14
14
1.15
15
1.16
16
1.17
17
1.18
18
1.19
19
1.20
20
1.21
21
1.22
22
1.23
23
1.24
24
1.25
25
1.26
26
1.27
1.28
27
28
Los metales de la fachada de la instalación están libres de
óxido y herrumbre
Los vidrios del exterior de la instalación están libres de
fisuras y bien fijados
Todos los elementos arquitectónicos de la fachada están
en buen estado
La zona de acceso a la instalación está libre de suciedad y
basuras
El pavimento circundante a la zona de acceso no tiene
desconchados ni discontinuidades
El umbral de acceso a la piscina está libre de desnivel, o
este es menor de 3 cm
El umbral dispone de rejilla limpiabarros (o similar
accesible), para evitar resbalamientos en el interior
Las puertas de acceso disponen de señalización e
iluminación para su reconocimiento desde el exterior
El umbral de entrada tiene al menos 80cm de paso libre
Las puertas de acceso son correderas y de apertura
automática
Las puertas de acceso son de fácil manejo, no giratorias, y
los tiradores son de manivela o fácilmente accionables.
El edificio dispone del símbolo de accesibilidad en la
fachada principal
El acceso a la instalación dispone de puertas y cerraduras
de seguridad
El exterior de la instalación dispone cámaras de seguridad
La instalación dispone de alarma de intrusión
1.29
29
La zona circundante a la entrada a la instalación está bien
iluminada
Página | 389
Seguridad
Edificio
Acceso
Seguridad
Edificio
Acceso
Seguridad
Edificio
Acceso
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Higiene
Accesibilidad
Accidente
Accesibilidad
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
Accesibilidad
Seguridad
Accidente
Accesibilidad
Acceso
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Acceso
Accesibilidad
Accesibilidad
Acceso
Seguridad
Intrusión
Acceso
Seguridad
Seguridad
Intrusión
Intrusión
Acceso
Acceso
Accesibilidad
Seguridad
Intrusión
Accidente
Accesibilidad
Acceso
Acceso
Acceso
Anexo 2. Cuestionario técnico
2
2.01
30
2.02
31
2.03
32
2.04
33
2.05
34
2.06
35
2.07
36
2.08
37
2.09
38
2.10
39
2.11
40
2.12
41
2.13
42
Recepción
La recepción está suficientemente iluminada. No hay
zonas de penumbra y el punto de información está
ampliamente iluminado
El pavimento no tiene desconchados ni discontinuidades
Los trabajadores de recepción están protegidos de las
corrientes de aire
Los trabajadores de recepción tienen un conocimiento
básico de la lengua de signos
La temperatura de la recepción está entre 17 y 27
La humedad relativa de la recepción está entre el 30 y el
70%
El mobiliario fijo, y los elementos de información y
comunicación permiten su uso a personas con diferentes
discapacidades
Dispone de un sistema de comunicación, y cerca de él,
direcciones y teléfonos de hospitales, ambulancia y
emergencia
Existe un sistema de control de accesos, con identificación
de usuarios
Los sistemas de control de entrada y salida (tornos y
otros) son accesibles o se dispone de un sistema
accesible alternativo
La sala de recepción está libre de tabiques y puertas
transparentes, o si los hay, están señalizados a la altura
de los ojos.
Todos los interruptores y enchufes eléctricos están bien
anclados, protegidos, y están en buen estado
El reglamento de régimen interno de la piscina está visible
Página | 390
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Seguridad
Accesibilidad
Accesibilidad
Accidente
Higiene
Accidente
Accesibilidad
Higiene
Recepción
Recepción
Recepción
Accesibilidad
Recepción
Seguridad
Higiene
Recepción
Seguridad
Higiene
Recepción
Accesibilidad
Recepción
Seguridad
Emergencia
Intrusión
Violencia
Recepción
Seguridad
Intrusión
Recepción
Accesibilidad
Accesibilidad
Recepción
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Recepción
Seguridad
Accidente
Recepción
Seguridad
Accidente
Emergencias
Higiene
Recepción
Accesibilidad
Anexo 2. Cuestionario técnico
2.14
43
2.15
44
2.16
45
2.17
46
2.18
47
2.19
48
3
Existen hojas de reclamaciones a disposición de los
usuarios y público
La instalación está libre de venta de productos que
puedan producir daños al ser arrojados
Existen bancos o sillas para el descanso y espera de los
usuarios y el público
Existe señalización para el acceso a las distintas zonas de
la instalación
La recepción dispone de videocámaras de seguridad
Se dispone de cajas de seguridad para almacenar el
dinero en metálico, o no se maneja metálico
Público y Gradas (si no hay zona de público, no
rellenar)
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Higiene
Edificio
Accesibilidad
Recepción
Seguridad
Violencia
Recepción
Accesibilidad
Accesibilidad
Recepción
Accesibilidad
Accesibilidad
Recepción
Seguridad
Intrusión
Emergencia
Recepción
Seguridad
Intrusión
Recepción
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Violencia
Higiene
Violencia
Higiene
Emergencia
Accesibilidad
Higiene
Violencia
Accesibilidad
Accesibilidad
Accesibilidad
Público
Accesibilidad
Accesibilidad
Público
Accesibilidad
Accesibilidad
Público
49
Existen aseos específicos para el público
Accesibilidad
Seguridad
3.02
50
Existen aseos específicos para el público, y están
separados por sexos, ventilados, tienen luces de
emergencia y sus paredes están recubiertas de azulejos
Accesibilidad
Seguridad
3.03
51
Existen aseos adaptados para el público
3.04
52
3.05
53
3.06
54
3.07
55
3.01
Desde la recepción, existen recorridos independientes
para el público y los usuarios
Todas las zonas de acceso al público son accesibles
desde itinerarios adaptados
Los accesos a las gradas (o zona de público) están
señalizados en la recepción
Existe un itinerario accesible hasta las gradas (o zona de
público)
Página | 391
Público
Público
Público
Público
Anexo 2. Cuestionario técnico
Las gradas están en planta baja, o hay un ascensor de
emergencia para evacuación prioritaria de personas con
discapacidad resistente al fuego, o una zona refugio
resistente al fuego
Las gradas tienen asientos individuales, y todos los
asientos están bien anclados y en buen estado
Las gradas con asientos fijos disponen de una zona para
el uso de todo tipo de discapacitados, próxima a las vías
de salida. Al menos una plaza adaptada cada 100 plazas.
Todos los interruptores y enchufes eléctricos están bien
anclados, protegidos, y están en buen estado
Accesibilidad
Seguridad
3.08
56
3.09
57
3.10
58
3.11
59
3.12
60
El pavimento no tiene desconchados ni discontinuidades
3.13
61
Las zonas de graderío permiten una perfecta visibilidad
del vaso y la playa desde cualquier zona.
3.14
62
Existe megafonía para el público, y funciona
correctamente
Seguridad
3.15
63
El graderío tiene mecanismos de ventilación
Seguridad
3.16
64
Los techos están libres de humedades
Seguridad
3.17
65
El graderío tiene Iluminación artificial
Accesibilidad
Seguridad
3.18
66
3.19
67
3.20
68
Las vías de evacuación están señalizadas con rotulación
Las vías de evacuación disponen de iluminación de
emergencia
El pavimento dispone de señalización táctil en los cambios
de nivel o cambio de dependencia
Página | 392
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Accidente
Público
Público
Accesibilidad
Accesibilidad
Público
Seguridad
Accidente
Público
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Accidente
Accesibilidad
Accesibilidad
Accidente
Emergencia
Accidente
Violencia
Intrusión
Higiene
Higiene
Edificio
Accesibilidad
Accidente
Intrusión
Violencia
Emergencia
Emergencia
Emergencia
Accesibilidad
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Público
Público
Público
Público
Público
Público
Público
Público
Público
Anexo 2. Cuestionario técnico
3.21
69
4
4.01
70
4.01
71
4.03
72
4.04
4.05
73
74
4.06
75
4.07
76
4.08
77
4.09
78
4.10
79
5
5.01
80
5.02
81
5.03
82
5.04
83
Existen cámaras de seguridad en las gradas
Oficinas
La temperatura de las oficinas está entre 17 y 27
La humedad relativa de las oficinas están entre el 30 y el
70%
El ruido ambiente de las oficinas no supera los 45
decibelios
Las oficinas disponen de iluminación natural adecuada
Las oficinas disponen de iluminación artificial adecuada
Los puestos de trabajo son ergonómicos: la espalda
queda recta, las pantallas están a la altura de los ojos, las
mesas y sillas tienen alturas proporcionales.
Los techos están libres de humedades
Todos los interruptores y enchufes eléctricos están bien
anclados, protegidos, y están en buen estado
Existe un itinerario adaptado hasta las oficinas
La disposición del mobiliario y los espacios alrededor de
las oficinas facilitan la utilización segura de los
discapacitados, existiendo un diámetro libre de 1.50m (sin
contar el barrido de la puerta) en la zona de confidente
Deambulación (excepto las gradas)
Todas las puertas tienen al menos 0.80 de paso libre
Los tiradores de las puertas son de manivela o fácilmente
accionables
A ambos lados de cualquier puerta hay un espacio libre de
1.20 m, sin incluir el barrido de las puertas
La anchura de los pasillos de los itinerarios principales es
al menos de 1.50, y en cualquier cambio de dirección, hay
un círculo libre de diámetro 1.50 m
Página | 393
Seguridad
Intrusión
Violencia
Emergencia
Público
Seguridad
Higiene
Oficinas
Seguridad
Higiene
Oficinas
Seguridad
Higiene
Oficinas
Seguridad
Seguridad
Higiene
Higiene
Oficinas
Oficinas
Seguridad
Higiene
Oficinas
Seguridad
Higiene
Edificio
Oficinas
Seguridad
Accidente
Oficinas
Accesibilidad
Accesibilidad
Oficinas
Accesibilidad
Accesibilidad
Oficinas
Accesibilidad
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Accesibilidad
Emergencia
Deambulación
Accesibilidad
Accesibilidad
Deambulación
Accesibilidad
Accesibilidad
Deambulación
Deambulación
Anexo 2. Cuestionario técnico
La anchura mínima de los pasillos no principales es de 1
m
Se dispone de un sistema de señalización de los
itinerarios accesibles, o estos coinciden plenamente con
los de los usuarios no discapacitados.
5.05
84
Accesibilidad
Accesibilidad
Deambulación
5.06
85
Accesibilidad
Accesibilidad
Deambulación
5.07
86
Todas las zonas de deambulación están libres de
obstáculos en 2.20 m de altura
Accesibilidad
Seguridad
5.08
87
Los espacios de tránsito están limpios
Accesibilidad
Seguridad
5.09
88
Los espacios de tránsito están libres de obstáculos
Accesibilidad
Seguridad
5.10
89
Las zonas de tránsito están bien iluminadas
Accesibilidad
Seguridad
5.11
90
Los suelos están libres de irregularidades
Accesibilidad
Seguridad
5.12
91
Los techos están libres de humedades
Seguridad
5.13
92
5.14
93
5.15
94
5.16
95
Todos los interruptores y enchufes eléctricos están bien
anclados, protegidos, y están en buen estado
Todas las zonas de la planta baja están al mismo nivel
Todas las zonas de la planta baja están al mismo nivel, o
las zonas a desnivel son accesibles (si menos de 4
escalones, solucionar con rampas, con pasamanos, de
0.80 de ancho y 6% de desnivel. Si más de 3 escalones,
rampas o ascensor)
Existe pavimento táctil en los cambios de los itinerarios
(bandas guía o rodapiés diferenciados)
Página | 394
Accesibilidad
Accidente
Emergencia
Higiene
Accesibilidad
Accesibilidad
Accidente
Emergencia
Accesibilidad
Accidente
Emergencia
Accesibilidad
Accidente
Emergencia
Higiene
Edificio
Deambulación
Deambulación
Deambulación
Deambulación
Deambulación
Deambulación
Seguridad
Accidente
Deambulación
Accesibilidad
Accesibilidad
Deambulación
Accesibilidad
Accesibilidad
Deambulación
Accesibilidad
Accesibilidad
Deambulación
Anexo 2. Cuestionario técnico
5.17
96
5
5.18
97
5.19
98
5.20
99
5.21
100
5.22
101
5.23
102
Las zonas de tránsito están libres de tabiques
transparentes, o si los hay, están señalizados a la altura
de los ojos.
Deambulación en plantas altas (Si no hay plantas
altas, no rellenar)
Hay ascensor entre la planta baja y el resto de plantas
Hay ascensor, y el camino desde el umbral del edificio
hasta el ascensor está libre de desniveles
Hay ascensor adaptado
(botonera a menos de 1.40, en relieve. Mínimo 1.40 x 1.10, pasamanos. 1.50
libre en puerta)
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Accesibilidad
Accidente
Accesibilidad
Accesibilidad
Deambulación
Accesibilidad
Accesibilidad
Deambulación
Accesibilidad
Accesibilidad
Deambulación
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Deambulación
Accesibilidad
Accesibilidad
Vestuarios
Deambulación
Deambulación
Deambulación
Las escaleras de acceso a las plantas altas son accesibles
6
6.01
103
6.02
104
6.03
105
6.04
106
(anchura mínima de 1.20m. Mínimo 3 peldaños y máximo de 16, con descansos si hay
más peldaños. Pavimento táctil en el arranque superior. Pasamanos a ambos lados.
Banda antideslizante en cada escalón.
El acceso a las plantas altas está libres de rampas, o
estas tienen una pendiente menor del 6%, y pasamanos
Se dispone de elementos de información que permiten la
orientación y el uso de las escaleras, las rampas y los
ascensores.
Vestuarios y Aseos
Las puertas de los vestuarios tienen algún tipo de
señalización táctil para indicar “hombres” y “mujeres”
Los vestuarios tienen dos accesos y circuitos
independientes: usuarios vestidos / en ropa de baño
Hay al menos una cabina de vestuario de uso individual,
por cada sexo
Hay al menos un aseo, una ducha y una cabina de
vestuario plenamente adaptadas, por cada sexo
(barras en pared inodoro, lavabo altura libre 0.70, diámetro libre 1.50,
antideslizante, ducha con taburete, sin resaltes, pendiente 2%, barras)
Página | 395
Accesibilidad
Seguridad
Higiene
Accidente
Accesibilidad
Higiene
Accesibilidad
Accesibilidad
Seguridad
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Anexo 2. Cuestionario técnico
6.05
107
El pavimento es antideslizante
Accesibilidad
Seguridad
6.06
108
Los aseos y vestuarios están limpios
Seguridad
6.07
109
Los aseos y vestuarios se limpian al menos una vez al día
Seguridad
6.08
110
Los aseos y vestuarios están libres de zonas de penumbra Accesibilidad
Seguridad
y están suficientemente iluminados
6.09
111
6.10
112
Los aseos y vestuarios están libres de objetos cortantes u
oxidados
Los vestuarios y aseos tienen sistemas de ventilación
6.11
113
Los techos están libres de humedades
6.12
114
6.13
115
6.14
116
6.15
117
Los vestuarios están libres de ropa y macutos de usuarios
(que no están presentes)
Accesibilidad
Seguridad
6.16
118
Los grifos de las duchas son de fácil accionamiento
Accesibilidad
Seguridad
6.17
6.18
6.19
6.20
119
120
121
122
6.21
123
6.22
124
El drenaje de las duchas funciona correctamente
Las duchas disponen de agua caliente
Las duchas cuentan con jabonera y toallero
Los cabezales de las duchas son antivandálicos
Los lavabos de los vestuarios tienen jabón líquido y toallas
de un solo uso
Los lavabos de los vestuarios tienen jabón líquido y toallas
de un solo uso, a baja altura
Seguridad
Seguridad
Seguridad
Las paredes están alicatadas al menos hasta 2m de
altura, o utilizan pinturas plásticas hidrófugas
Los vestuarios tienen taquillas
Los vestuarios tienen taquillas, numeradas en relieve o
braille, y a baja altura
Página | 396
Accesibilidad
Accidente
Higiene
Accidente
Higiene
Accidente
Accesibilidad
Intrusión
Higiene
Accidente
Higiene
Higiene
Higiene
Edificio
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Seguridad
Higiene
Vestuarios
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Vestuarios
Seguridad
Seguridad
Seguridad
Seguridad
Higiene
Higiene
Accesibilidad
Higiene
Accesibilidad
Intrusión
Accesibilidad
Higiene
Accidente
Higiene
Higiene
Higiene
Intrusión
Seguridad
Higiene
Vestuarios
Accesibilidad
Seguridad
Higiene
Accesibilidad
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Anexo 2. Cuestionario técnico
6.23
125
Los lavabos tienen espejos que empiezan a 0.95m de
altura
Accesibilidad
Seguridad
6.24
126
Los grifos de los lavabos son de pulsador o de palanca
hidromezcla
Accesibilidad
Seguridad
6.25
127
Los lavabos tienen una altura libre de 0.70m
6.26
128
6.27
129
Los bancos no tienen patas y están anclados a la pared
Los interruptores y enchufes están bien anclados y libres
de deterioros
6.28
130
6.29
6.30
Accesibilidad
Seguridad
Seguridad
Accesibilidad
Higiene
Higiene
Accesibilidad
Accidente
Accesibilidad
Higiene
Higiene
Seguridad
Accidente
Vestuarios
Hay un minino de cuatro retretes por cada vestuario (m/f)
Seguridad
Higiene
Vestuarios
131
Hay al menos seis duchas por cada vestuario (m/f)
Seguridad
Higiene
Vestuarios
132
La capacidad de los aseos y vestuarios es de al menos 40 personas
por vestuario (m/f)
Accesibilidad
Seguridad
Higiene
Accesibilidad
Vestuarios
Seguridad
Higiene
Vestuarios
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Higiene
Accesibilidad
Accesibilidad
Higiene
Seguridad
Accidente
Vestuarios
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Vestuarios
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Higiene
Accesibilidad
Higiene
Vestuarios
Seguridad
Higiene
Intrusión
(En vestuarios masculinos, la mitad pueden ser urinarios)
(una ducha por cada 20 personas de aforo. Estimado 120 personas para 8x25)
2
(1/3 del aforo, contando 1m /persona. Estimado 120 personas para 8x25)
6.31
133
Los vestuarios y aseos se desinsectan cada 6 meses
6.32
134
Existen perchas y están situadas a 1.40m como máximo
6.33
135
Existen perchas a baja altura (1.10m)
6.34
136
6.35
137
La instalación está libre de tuberías de agua caliente a la
vista
La disposición del mobiliario y los espacios alrededor
facilitan la utilización segura de los discapacitados
6.36
138
Hay secadores de pelo en los vestuarios, y funcionan
6.37
139
Hay secadores de pelo a baja altura, y funcionan
6.38
140
Existen vestuarios y taquillas específicos para los
trabajadores, correctamente equipados
(según comentario del gestor)
(hueco en zona de banco, con 1.50m de diámetro libre, antideslizante, con
asideros, etc.)
(banco, perchas, taquillas, lavabo, jabón, toallas papel)
Página | 397
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Vestuarios
Anexo 2. Cuestionario técnico
6.39
141
Existen cambiadores de bebé en los vestuarios
Accesibilidad
Seguridad
6.40
142
Existen cambiadores de bebé en los vestuarios de ambos
sexos (o un espacio común)
Accesibilidad
Seguridad
7
7.01
143
7.02
144
Vaso principal y su espacio
El vaso tiene unas características adecuadas
(estable, resistente, estanco, sin recodos, sin obstáculos, sin obstrucciones
subacuáticas, con materiales lisos, claros y de fácil limpieza)
El vaso y su alrededor se mantiene en un estado de
conservación correcto
145
7.04
146
El vaso está libre de trampolines, toboganes u otros
accesorios similares
Existen señalizaciones de indicación de profundidad en
todas las zonas del vaso
Vestuarios
Vestuarios
Seguridad
Accidente
Higiene
Vaso
Seguridad
Higiene
Accidente
Edificio
Vaso
Seguridad
Accidente
Vaso
Seguridad
Accidente
Vaso
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Higiene
Vaso
(sin fisuras, deformaciones, manchas, hongos)
7.03
Accesibilidad
Accidente
Higiene
Accesibilidad
Accidente
Higiene
(cada vez que hay un cambio de profundidad)
7.05
147
7.06
148
El paseo que rodea el vaso es higiénico, antideslizante e
impermeable. Está libre de impedimentos y tiene una
anchura mínima de 1m, con ligera pendiente hacia el
exterior del vaso, y con sistema de drenaje
El paseo que rodea el vaso está en buen estado de
mantenimiento y conservación
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Higiene
Accesibilidad
Accidente
(están empotradas, son inoxidables, sin aristas, con peldaños antideslizantes
y permiten subir con comodidad)
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Vaso
Las escaleras de acceso al vaso están en buen estado,
bien ancladas, libres de óxido y deterioros
Seguridad
Higiene
Accidente
Vaso
(sin roturas ni fisuras, sin hongos, limpio, sin encharcamientos, sin desniveles)
7.07
149
7.08
150
7.09
151
Existen escaleras en los 4 ángulos del vaso, en los puntos
de cambio de pendiente, y cada 15 metros de perímetro
Las escaleras de acceso al vaso siguen la normativa
Página | 398
Accesibilidad
Seguridad
Vaso
Vaso
Anexo 2. Cuestionario técnico
Al menos una escalera alcanza el fondo, para labores de
limpieza
La piscina tiene previsto un sistema acceso al vaso para
personas de movilidad reducida y sillas de ruedas
Existe una rampa de acceso al vaso, para personas con
movilidad reducida, de pendiente menor del 8%
El vaso tiene un sistema de salida de aguas por
rebosamiento
El vaso está lleno al máximo del nivel de recogida
El rebosadero limita el nivel máximo de agua, desagua la
película superficial de impurezas, sirve de agarre a los
usuarios y cumple la función de rompeolas
7.10
152
7.11
153
7.12
154
7.13
155
7.14
156
7.15
157
7.16
158
Las rejillas de los rebosaderos están en buen estado,
alineadas y libres de tramos rotos
Seguridad
Accesibilidad
7.17
159
Las líneas del fondo del vaso están en buen estado y son
reglamentarias
Seguridad
Accesibilidad
(ver documento adjunto)
Seguridad
Accidente
Vaso
Accesibilidad
Accesibilidad
Vaso
Accesibilidad
Accesibilidad
Vaso
Seguridad
Higiene
Vaso
Seguridad
Higiene
Vaso
Seguridad
Higiene
Vaso
Higiene
Accidente
Accesibilidad
Higiene
Accidente
Accesibilidad
Higiene
Accidente
Accesibilidad
Higiene
Accidente
Accesibilidad
Vaso
Vaso
Las corcheras son reglamentarias
Seguridad
Accesibilidad
Las corcheras están en buen estado
Seguridad
Accesibilidad
162
Existen plataformas de salida y son reglamentarias
Seguridad
Accidente
Vaso
7.21
163
Existen plataformas de salida y están libres de óxido y
deterioros
Seguridad
Accidente
Higiene
Vaso
7.22
164
Existen líneas de banderolas reglamentarias indicadoras
de viraje en espalda
Seguridad
Accidente
Vaso
7.18
160
7.19
161
7.20
(sucesión continua de flotadores, diámetro 0.05 a 0.15, tensores empotrados.
Distinto color los últimos 5 m )
(libres de roturas, sin separaciones, no quemadas, tensores y cables no
oxidados)
(ver documento adjunto)
(anclaje con tapa, a 5m, altura 1.80-2.50, con banderines )
Página | 399
Vaso
Vaso
Anexo 2. Cuestionario técnico
Existen líneas de banderolas y están libres de óxido y
deterioros
Existen dos flotadores salvavidas, con rabiza de longitud
superior a la anchura de la piscina
Existe una zona de duchas en el recinto del vaso y está en
buen estado
7.23
165
7.24
166
7.25
167
7.26
168
La zona de duchas en el recinto del vaso dispone de
sistemas de drenaje
7.27
169
En la zona de playa hay tomas de agua para su limpieza
7.28
170
7.29
171
7.30
172
7.31
173
7.32
174
7.33
175
Cualquier otro servicio distinto al baño está fuera de la
zona de bañistas
La piscina dispone de sistemas de renovación de aire
La piscina dispone de sistemas de medida de la humedad
del aire
La climatización y ventilación es poco ruidosa
(menor de 45 db en cualquier zona de la playa)
La piscina dispone de sistemas automáticos de medida y
control de la temperatura del agua
La piscina dispone de sistemas automáticos de medida y
control de la temperatura ambiente
Seguridad
Seguridad
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Higiene
Vaso
Vaso
Vaso
Vaso
Vaso
Seguridad
Higiene
Accidente
Higiene
Seguridad
Higiene
Vaso
Seguridad
Higiene
Vaso
Seguridad
Higiene
Vaso
Seguridad
Higiene
Vaso
Seguridad
7.34
176
Existe un socorrista en el recinto del vaso
Seguridad
Accesibilidad
7.35
177
El socorrista dispone de su documentación en el momento
de la visita
Seguridad
7.36
178
Las luminarias están colocadas alejadas de la vertical del
vaso
Seguridad
Página | 400
Accidente
Higiene
Accidente
Emergencias
Higiene
Accidente
Higiene
Accidente
Accesibilidad
Accidente
Accesibilidad
Emergencia
Higiene
Accidente
Accesibilidad
Emergencia
Higiene
Edificio
Higiene
Vaso
Vaso
Vaso
Vaso
Vaso
Anexo 2. Cuestionario técnico
7.37
179
7.38
180
7.39
181
7.40
182
7.41
183
7.42
7
184
7.43
185
7.44
186
7.45
187
7.46
188
7.47
189
8
8.01
190
Los interruptores y enchufes están bien anclados y libres
de deterioros
El material deportivo está ordenado y no molesta a los
usuarios
Existe un almacén de material que comunica directamente
con el vaso, de puertas de más de 2.40 de ancho, de fácil
comunicación con el exterior
Seguridad
Accidente
Vaso
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Accesibilidad
Vaso
Seguridad
Intrusión
Accidente
Vaso
Si hay tabiques transparentes, están señalizados a la
altura de los ojos
El recinto está libre de condensación de vapor de agua
Vasos pequeños (Si no hay ninguno, no rellenar)
Hay vasos infantiles, y tienen una profundidad máxima de
0.40m y pendientes menores del 6%
Hay vasos infantiles (profundidad máxima 0.40m), y están
separados de los de adultos al menos 10m, o por
elementos arquitectónicos.
Hay vasos infantiles (profundidad máxima 0.40m), y tienen
la zona de entrada al vaso con escalones.
Hay vasos de enseñanza, y tienen profundidad mínima de
0.70m y pendiente suave (6%) hasta 1.40 como máximo.
Hay vasos de enseñanza, y están separados al menos 5m
del resto.
Botiquín y emergencias sanitarias
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Accidente
Emergencia
Intrusión
Violencia
Accidente
Accesibilidad
Higiene
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Accesibilidad
Vaso
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Accesibilidad
Vaso
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Accesibilidad
Accidente
Accesibilidad
Accidente
Accesibilidad
Existe un local para primeros auxilios accesible
directamente desde el vaso
Seguridad
Accesibilidad
Accidente
Emergencia
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
El recinto de piscina dispone de megafonía
Página | 401
Vaso
Vaso
General
Vaso
Vaso
Vaso
Botiquín
Anexo 2. Cuestionario técnico
El botiquín dispone de un cuadro de instrucciones de
primeros auxilios, de lavabo y agua corriente, camilla,
dispositivo para respiración artificial y armario de
urgencias
El armario de urgencias dispone al menos de: pinzas de
un solo uso, tijeras de acero, H2O2, yodo, tiritas, vendas,
gasas, algodón, esparadrapo, guantes, jeringas,
analgésico.
El botiquín dispone de inodoro, ducha, espacio de cambio
de ropa, mesa y silla y teléfono
Los interruptores y enchufes están bien anclados y libres
de deterioros
Seguridad
Accidente
Emergencia
Botiquín
Seguridad
Accidente
Emergencia
Botiquín
Seguridad
Accidente
Botiquín
Seguridad
Accidente
Botiquín
8.02
191
8.03
192
8.04
193
8.05
194
8.06
195
El botiquín dispone de ventilación natural o forzada
Seguridad
8.07
196
El botiquín está correctamente iluminado
Seguridad
8.08
197
La dependencia está libre de humedades en techos
Seguridad
8.09
198
El botiquín está limpio y ordenado
Seguridad
Accesibilidad
8.10
199
El botiquín dispone de un contenedor para residuos
especiales
Seguridad
8.11
200
Existe un botiquín portátil con material adecuado
Seguridad
Accesibilidad
8.12
201
El local cuenta con desfibrilador automático y personal
autorizado a utilizarlo
Seguridad
8.13
202
Existen equipos de protección personal para
manipulaciones de riesgo o emergencias
Seguridad
(mascarillas, gafas, guantes de seguridad, mantas, etc.)
Página | 402
Higiene
Accidente
Higiene
Accidente
Intrusión
Higiene
Edificio
Higiene
Accidente
Accesibilidad
Higiene
Accidente
Higiene
Accidente
Accesibilidad
Accidente
Emergencia
Higiene
Higiene
Emergencia
Accidente
Botiquín
Botiquín
Botiquín
Botiquín
Botiquín
Botiquín
Botiquín
Botiquín
Anexo 2. Cuestionario técnico
9
9.01
203
9.02
204
9.03
205
9.04
206
9.05
207
9.06
208
9.07
209
9.08
210
Dependencias técnicas y otros
Existe señalización en la puerta de las dependencias
técnicas prohibiendo el paso a los usuarios y público
Las instalaciones anexas y de maquinaria están en
lugares independientes no accesibles por los usuarios
Se produce al menos la renovación diaria del 2.5% del
agua del vaso
La capacidad de entrada de agua al vaso permite la
recirculación total en 8 horas
Existen contadores de agua del vaso renovada y
depurada, y están en funcionamiento
El vaso se vacía al menos una vez al año
Existen sistemas automáticos de dosificación de
desinfectantes, y se usan habitualmente
Los productos para el tratamiento del agua están
legalmente autorizados
Seguridad
Accidente
Técnicas
Seguridad
Accidente
Técnicas
Seguridad
Higiene
Técnicas
Seguridad
Higiene
Técnicas
Seguridad
Higiene
Técnicas
Seguridad
Higiene
Accidente
Higiene
Técnicas
Seguridad
Técnicas
Seguridad
Higiene
Técnicas
Seguridad
Higiene
Técnicas
Seguridad
Accidente
Higiene
Técnicas
Seguridad
Higiene
Técnicas
Seguridad
Higiene
Técnicas
Seguridad
Accidente
Técnicas
(marcado CE)
9.09
211
9.10
212
9.11
213
9.12
214
9.13
215
El sistema de depuración de agua está en funcionamiento
mientras la piscina está abierta al público
Los productos químicos se almacenan y manipulan de
forma segura, y no están accesibles a los usuarios
(guantes, gafas, ropa protectora, herramientas, o sistemas automáticos de
almacenaje)
Se mide tres veces al día (mañana, tarde y máxima
concurrencia) el cloro residual, ph, turbidez, temperatura
del agua y ambiente, y se anota en el libro de registro
oficial
Los sistemas de depuración, dosificación, alimentación y
evacuación son independientes en cada vaso (si solo hay
un vaso, indicar “si”)
Los sistemas de calefacción están libres de la acción
directa del fuego
Página | 403
Anexo 2. Cuestionario técnico
9.14
216
9.15
217
9.16
218
9.17
219
9.18
220
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9.20
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9.26
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228
10.01
229
10.02
230
Las instalaciones técnicas están limpias y ordenadas
Las dependencias están libres de humedades en techos y
paredes
Todos los interruptores y enchufes eléctricos están bien
anclados, protegidos, y en buen estado
Las instalaciones técnicas tienen dispositivos de detección
de incendios
Existe un protocolo documentado para el tratamiento de
los residuos técnicos
Existen carteles indicadores de las normas de
manipulación de los diferentes productos químicos.
Los cuartos de limpieza son independientes de los de
maquinaria
Los cuartos de limpieza están ordenados y bien
iluminados
Se almacenan productos de limpieza únicamente en los
cuartos de limpieza
El edificio dispone de un local de descanso para los
trabajadores, correctamente equipado
(sillones cómodos, iluminación cenital y lateral, mesa, enchufes, iluminación
natural)
Los cuadros eléctricos están totalmente libres de
oxidaciones, deterioros y objetos peligrosos alrededor
Las puertas y ventanas funcionan con normalidad y están
libres de deformaciones
El edificio está libre de fisuras en tabiques
Vías de evacuación
Las vías de evacuación están libres de obstáculos y
utilizables en cualquier momento
Las vías de evacuación desembocan en una zona de
seguridad
Página | 404
Seguridad
Seguridad
Higiene
Higiene
Edificio
Técnicas
Técnicas
Seguridad
Accidente
Técnicas
Seguridad
Emergencia
Técnicas
Seguridad
Higiene
Accidente
Técnicas
Seguridad
Higiene
Accidente
Técnicas
Seguridad
Higiene
Técnicas
Seguridad
Higiene
Técnicas
Seguridad
Higiene
Técnicas
Seguridad
Higiene
Técnicas
Seguridad
Edificio
General
Seguridad
Edificio
General
Seguridad
Edificio
General
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Evacuación
Evacuación
Anexo 2. Cuestionario técnico
La señalización “salida” - “sin salida” – “salida con
escaleras” etc. es visible e identificable en toda la
instalación
La instalación dispone de planos de situación con
recorridos de evacuación
Las vías de evacuación están señalizadas visualmente,
con lo símbolos reglamentarios fotoluminescentes
10.03
231
10.04
232
10.05
233
10.06
234
Las vías de evacuación están señalizadas luminosamente
10.07
235
Las vías de evacuación están señalizadas acústicamente
10.08
236
10.09
237
10.10
238
10.11
239
Las puertas de emergencia abren hacia el exterior, no
están bloqueadas y disponen del símbolo “salida de
emergencia”
Las puertas de los recorridos de evacuación están
señalizadas y se abren en cualquier momento desde el
interior
Los mecanismos de las puertas de emergencia son
antipánico, están en buen estado, libres de óxido y
engrasados
Las vías de evacuación están adaptadas a personas en
sillas de ruedas
(no escaleras, rampas < 6%, anchura >1.50)
10.12
240
11
11.01
241
11.02
242
11.03
243
La instalación dispone de ayudas técnicas para la
evacuación de personas con movilidad reducida
Emergencias
La instalación dispone de sistema de detección de
incendios
La instalación dispone de sistema de detección de
incendios con alarmas ópticas y acústicas
La instalación dispone de rociadores automáticos
Página | 405
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Evacuación
Seguridad
Emergencia
Evacuación
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Evacuación
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Evacuación
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Evacuación
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Evacuación
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Evacuación
Seguridad
Emergencia
Emergencias
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Emergencia
Accesibilidad
Emergencia
Evacuación
Evacuación
Evacuación
Emergencias
Emergencias
Anexo 2. Cuestionario técnico
11.04
244
11.05
245
11.06
246
11.07
247
11.08
248
11.09
249
La instalación dispone de pulsadores de incendios
La instalación esta sectorizada para incendios, con
puertas RF
La instalación dispone de sistema de megafonía para
emergencias
La instalación dispone de alumbrado de emergencia, que
de forma automática genera luz suficiente para la salida
de las personas. Sobre las puertas de las salidas, puertas,
pasillos, vestíbulos y dependencias accesorias.
La instalación está libre de escaleras, o estas disponen de
iluminación de emergencia en los escalones
La instalación dispone de extintores visibles y accesibles,
cada 15 metros, y están en vigor
Seguridad
Emergencia
Emergencias
Seguridad
Emergencia
Emergencias
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Emergencias
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Emergencias
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Emergencias
Seguridad
Emergencia
Emergencias
Seguridad
Emergencia
Emergencias
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Emergencias
Seguridad
Emergencia
Emergencias
Seguridad
Emergencia
Emergencias
Seguridad
Emergencia
Emergencias
Seguridad
Emergencia
Emergencias
Seguridad
Higiene
Accidente
Organización
Seguridad
Higiene
Organización
(se revisan cada año, etiquetándolos, y se retimbran cada 5)
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255
12.01
256
12.02
257
Las bocas de incendio equipadas son visibles y
accesibles, y están en buen estado aparente
Las bocas de incendio equipadas no obstaculizan el paso
de usuarios
Todos los elementos de protección (extintores, bocas de
incendio) están señalizados individualmente con la señal
UNE, fotoluminescente
Existen linternas para emergencias a disposición de los
trabajadores, y están cargadas
Existen chalecos de emergencia a disposición de los
trabajadores
Se dispone de megafonía portátil
Organización
La piscina dispone de un responsable de mantenimiento
con carné de cuidador en vigor
La entidad realiza tratamientos de legionelosis en la
instalación
Página | 406
Anexo 2. Cuestionario técnico
12.03
258
Existen protocolos escritos de utilización de la instalación
por usuarios con perros - guía
Accesibilidad
12.04
259
La instalación dispone de un Plan de Autoprotección
Seguridad
Accesibilidad
12.05
260
Los empleados reciben formación sobre seguridad y
emergencias
Seguridad
Accesibilidad
12.06
261
12.07
262
12.08
263
12.09
264
12.10
265
Los planos y documentos descriptivos de la instalación
están disponibles en las instalaciones
Seguridad
Accisibilidad
12.11
266
El servicio de extinción de incendios tiene copia de los
planos del local y de los medios de extinción con que
cuenta.
Seguridad
Existen documentos a disposición de los trabajadores que
manipulan productos químicos sobre su correcta
utilización
Existe un plan documentado de evaluación de los riesgos
en el trabajo y prevención de riesgos laborales
Los trabajadores reciben formación en prevención de
riesgos laborales
Existe un control periódico regulado de la salud de los
trabajadores
Página | 407
Accesibilidad
Emergencia
Accidente
Intrusión
Violencia
Higiene
Accesibilidad
Emergencia
Accidente
Intrusión
Violencia
Higiene
Accesibilidad
Organización
Organización
Organización
Seguridad
Accidente
Higiene
Organización
Seguridad
Accidente
Higiene
Organización
Seguridad
Seguridad
Accidente
Higiene
Accidente
Higiene
Emergencia
Intrusión
Violencia
Accesibilidad
Emergencia
Organización
Organización
Organización
Organización
Anexo 2. Cuestionario técnico
12.12
267
Se dispone de un plan de emergencias general
Seguridad
Accesibilidad
12.13
268
Se dispone de un plan de actuación en incendios
Seguridad
Accesibilidad
12.14
269
Se dispone de un plan de evacuación
Seguridad
Accesibilidad
12.15
270
12.16
271
12.17
272
12.18
273
12.19
274
Los trabajadores se han formado en el uso de la lengua
de signos
Existe un plan de formación en comunicación para
distintas discapacidades
Existe un protocolo de seguridad, prevención y control
para espectáculos
Existe un reglamento interno del recinto deportivo, para la
realización de espectáculos
Existe un protocolo de limpieza documentado
12.20
275
Existe un plan documentado de mantenimiento de la
instalación
12.21
276
Se dispone de un reglamento de régimen interno y está
visible
Página | 408
Emergencia
Accidente
Intrusión
Violencia
Higiene
Accesibilidad
Emergencia
Accesibilidad
Emergencia
Violencia
Accesibilidad
Organización
Organización
Organización
Accesibilidad
Accesibilidad
Organización
Accesibilidad
Accesibilidad
Organización
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Emergencia
Accidente
Intrusión
Violencia
Higiene
Accesibilidad
Emergencia
Violencia
Organización
Organización
Seguridad
Higiene
Organización
Seguridad
Edificio
Higiene
Accidente
Emergencia
Organización
Seguridad
Higiene
Emergencia
Violencia
Organización
Anexo 2. Cuestionario técnico
12.22
277
12.23
12.24
278
279
12.25
280
Existen protocolos documentados de evacuación de
discapacitados en caso de emergencia
La instalación dispone de vigilante de seguridad diurno
La instalación dispone de vigilante de seguridad nocturno
La instalación dispone de un protocolo de actuación en
caso de intrusión o robo
---
Página | 409
Seguridad
Accesibilidad
Seguridad
Seguridad
Accesibilidad
Emergencia
Intrusión
Intrusión
Seguridad
Intrusión
Organización
Organización
Organización
Organización
Anexo 2. Cuestionario técnico
Página | 410
Anexo 3
Artículo enviado a
revista internacional
Página | 411
Página | 412
International Journal of Injury Control and Safety Promotion
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COMPREHENSIVE ASSESSMENT OF INDOOR POOLS IN THE
REGION OF MURCIA (SPAIN) AND EFFECTS ON USER’S
SATISFACTION
Manuscript Type:
Complete List of Authors:
Draft
Original Research Article
n/a
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Date Submitted by the Author:
International Journal of Injury Control and Safety Promotion
rR
Manuscript ID
ee
Journal:
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Verdu, Isidro; University of Murcia, Computer Science Faculty
García-Unanue, Jorge; University of Castilla-La Mancha, IGOID Research
Group
Ubago-Guisado, Esther; University of Castilla-La Mancha, IGOID Research
Group
Segarra, Eduardo; University of Murcia, Sports Science Faculty
Gallardo, Leonor; University of Castilla-La Mancha, IGOID Research Group
Fernández-Luna, Álvaro; European University, School of Sport Science
Checklist, Hygiene, Safety, Swimming pools, Security
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Keywords:
URL: http://mc.manuscriptcentral.com/nics
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COMPREHENSIVE ASSESSMENT OF INDOOR POOLS IN THE REGION OF
MURCIA (SPAIN) AND EFFECTS ON USER’S SATISFACTION
ABSTRACT
The aim of this research is to evaluate the level of compliance of all aspects based on
the recent Spanish laws of safety, security, accessibility and hygiene, and international
standards of design in indoor swimming pools, and its possible influence on the
perception of safety of swimming pool users. The study was developed in Region of
Murcia (Spain) in 37 pools. In addition, 1850 users (52% men) were interviewed in the
facilities. The checklist showed that the prevention of Intrusion and Violence items had
lower percentage of compliance with the regulation. The integrity of the building was
the variable with higher percentage of items fulfilled. Regarding to the area of the
facility, the pool area, organizational and informational aspects perceived and
emergency and fire protection showed lower level of compliance with the normative.
There was weak evidence that the level of compliance of the safety, security,
accessibility and hygiene has a direct impact on the satisfaction of the users of
swimming pools.
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KEYWORDS: Checklist; Hygiene; Safety; Satisfaction; Security; Swimming pools.
1. Introduction
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Sports facilities safety has been a major concern issue in a modern society. In this line,
the authorities responsible for sports facilities and legislations in the civil society
needing to formulate policies and allocate resources based on structural normative and
educational programs, because of the fact that they control many of the central safety
determinants in the sporting environment (Timpka, Ekstrand, Svanström, 2006).
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Among the sports facilities we can highlight the swimming pools as venues with a
greater possibility of having accidents. In Spain, the importance of swimming pools
safety is demonstrated by every region having its own legislation, which in turn depends
on a general national normative. This situation also demonstrates that the pools are very
sensitive and different to other sports venues and their needs.
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When establishing safety in the swimming pools, managers often use almost exclusively
mandatory rules, and if they incorporate some extra measures it is because they intended
to protect the assets of the organization. This is mainly due to two reasons: they
consider that the measures established by the different regulations are sufficient, and
secondly because they do not consider security as a key aspect in sports management.
However, if the security of the people who are in the facility is not guaranteed, whether
workers or not, the assets and business continuity eventually may have important
consequences at various levels, particularly in economic terms and the quality of service
(Carpenter, 2008; Hall, Cooper, Marciani & McGee, 2012; Ramsaran - Fowdar , 2006).
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International Journal of Injury Control and Safety Promotion
Among the different types of risk in swimming pools, there are 6 groups that are
particularly important, being responsible for major damage experienced by those who
use them or play their professional activity there. These risks include: chemical risk,
biological risks, physical risks, anthropogenic risks, drowning and occupational hazards
(table 1).
URL: http://mc.manuscriptcentral.com/nics
International Journal of Injury Control and Safety Promotion
***Table 1 near here***
Drowning maybe the most recognized risk that we can find in swimming pools. It
causes the death of 372,000 people each year worldwide, according to the report of
November 2014 of the World Health Organization. In fact, in 2014 in Spain there were
532 accidents, 96 in swimming pools (Spanish National Association of Lifeguards,
2015). Currently, most swimming pools only use lifeguards to detect people drowning
(Lin, Wang, Lu, & Kawach, 2015). Nevertheless, as this conventional system is prone
to error due to human nature of decreasing attention due to fatigue (Miller, Smith, &
McCauley, 1998) the need for an offtime swimming pool surveillance system as
cameras arise could be an option (Wong, Hui, Loo, & Lim, 2011). In addition, some
studies focused on the perception of lifeguards according to their workplace,
highlighting a recent research where lifeguards argued that there is a job scheduling
system for the lifeguards, but most of them do not follow the work-handover system
(Shen, 2014).
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Fo
However, several studies are focused on the chemical risks for swimmers due to the
effects of chlorine and other chemical disinfectants (Chowdhury, 2015; FernándezLuna, Burillo, Felipe, Del Corral, García-Unanue & Gallardo, 2015; Bernard,
Nickmilder & Dumon, 2015) and occupational hazards (Fernández-Luna, Burillo,
Felipe, Gallardo & Tamaral, 2013; Jacobs, Spaan, Van Rooy, Meliefste, Zaat,
Rooyackers & Heederik, 2007). All these literature are based on the ‘chlorine
hypothesis’ (Bernard, Carbonnelle, de Burbure, Michel, & Nickmilder, 2006) whose
findings led to propose that the rise of allergic diseases could result less from the
declining exposure to microbial agents than from the increasing and largely
uncontrolled exposure to products of chlorination.
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Despite these, there are only a few investigations that evaluate the characteristics of
swimming pools according to these kinds of risks. Only we can find studies where the
air contaminants are evaluated (Nordberg et al., 2015; Westerlund, Graff, Bryngelsson,
Westberg, Eriksson, & Löfstedt, 2015) or a basic checklist of characteristics of the
facility is used (Jacobs et al., 2007). In addition, the perception of users and workers
using a questionnaire have been evaluated several times (Fernández-Luna et al., 2015;
Ferrari et al., 2011; Jacobs et al., 2007) but are always related to the perception of
health problems.
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Finally, another aspect that is a very important issue for sport practice in swimming
pools is the accessibility. Although policy and legislation have helped to remove various
environmental barriers, there remains to be a substantial number of inaccessible features
in sport facilities because of an inefficient design or incorrect management (Riley,
Rimmer, Wang, & Schiller, 2008)
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Thus, this study aims to use an observatory tool that includes all aspects linked to the
risks described above in indoor swimming pools (checklist) based on the compliance
with the actual laws of safety, security, accessibility and hygiene in Spain, and
international standards of design. Also the results obtained will be related with the
perception of safety of their users, measured by a questionnaire.
URL: http://mc.manuscriptcentral.com/nics
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Page 3 of 15
2. Method
2.1.
Research design
The research design was a descriptive study comprising the population of all the
swimming pools of the Region of Murcia (Spain) (n=37). In addition, 1850 users (52%
men) were interviewed in the facilities (50 members per swimming pool) based on a
theoretical population of 35.000 users of the 37 facilities included in the previous phase.
The error of both studies was 2% and a level of confidence of 95% was used. The first
part of the study was developed between 1st June and 31st July of 2013, and the second
between 1st November of 2014 and 28th February of 2015.
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Fo
2.2.
Sample inclusion and exclusion criteria
Swimming pools were included if the following criteria were met: all of them were
indoor; these could be municipal or private, but these must be operative at the moment
of the study and open for public access, and finally the age of the facilities must be
higher than 2 years. In addition, swimming pools users included in the second part of
the study had the basic requirement of a minimum age of 18 years and attend regularly
to the swimming pool (more than twice per week). Occasional users, who attend less
than once per week, were excluded.
2.3.
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Checklist and questionnaire
The degree of compliance with the swimming-pool health regulation was assessed by
means of a checklist, like in a previous research (Liguori et al., 2014). A standardized
set of 280 items were derived and defined based on a review of the technical
documentation and current Spanish legislation (Table 2), pinpointing any breaches with
the specifications laid down in the articles, defining these as any nonconformance or
deviation from each legal precept of the regulation by error or omission. Each item is
related to one or more groups of risks. Specifically, these are the different groups and
areas of risk assessment as well as the number of items associated with the evaluation of
each group: Integrity of building (17 items) accessibility (136), accidents (102),
emergency (68), intrusion (26), violence (18), and hygiene (119). In addition, these
groups of variables were taken into account in different zones: pools (47), first aid room
(13), engine and technical rooms (26), emergency signals (15), offices (10), reception
desk (19), escape routes (12), locker rooms (40), corridors (23), organization aspects
(25) and entries (29). The stands area was considered in the study but finally it wasn't
included in the analysis because only a few facilities have this space. The complete
checklist is available on the following link: http://www.webcitation.org/6cKPHly5k
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International Journal of Injury Control and Safety Promotion
***Table 2 near here***
For this study, guidelines similar to those of others developed in swimming pools were
followed (Fernández-Luna et al., 2015; Ferrari et al., 2011). A quantitative method was
used through a questionnaire based on scales. The following variables were evaluated:
competence of lifeguards, safety in equipment’s and materials, ease of evacuation,
security against theft, general security for the users, quality and health standards of the
water in the pool, general hygiene of the facility, integrity of the building, general
accessibility, availability of staff in risk situations, general perception of security. A six-
URL: http://mc.manuscriptcentral.com/nics
International Journal of Injury Control and Safety Promotion
point Likert-type scale was used for the responses. With the next meanings (completely
disagree: 1, disagree: 2, somewhat disagree: 3, somewhat agree: 4, agree: 5, strongly
agree: 6).
In order to evaluate the validity and reliability of the questionnaire, it was first reviewed
by a group of experts (15 heads of maintenance with more than five years’ experience in
aquatic installations). Subsequently, a pilot questionnaire was carried out with
participants from one swimming pool (n = 50). The questionnaire was selfadministered. Bartlett’s test of sphericity was applied in order to evaluate the validity of
the results (χ² (15) = 271.91; p < 0.001), and Cronbach’s alpha was used to estimate a
reliability of 0.817.
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2.4.
Data collection and analysis
Descriptive data obtained from the checklist were expressed in percentages. Results of
the questionnaire are presented as a mean ± SD, if not otherwise stated. All the residuals
showed a satisfactory pattern (normal distribution). A multiple linear regression was
applied to identify the relationship among the variables of risk found in the swimming
pools and the perception of users. Variables like sex of the users (dummy variable), age
of the users and the antiquity of the facility were included as control variables in all
regression models. SPSS 21.0 package (IBM, Chicago, USA) for personal computers
was used for the statistical analysis. Level of significance was assumed when p<0.05.
2.5. Limitations
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Some limitations of this study deserve comments. One of those is that some important
demographic data were not measured, as experience in the facility and type of user (e.g.
competitive swimmers) It would have been interesting to extend the study to other types
of facilities with the same regulations (open swimming pools and spa). On the other
hand, due to the cross-sectional design of this study we cannot assure the causality of
the observations.
3. Results
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Table 3 summarizes general results in swimming pools. We can observe that there are
some groups of variables that have a very low percentage of compliance with the
regulation, such as Intrusion and Violence. On the other side, the integrity of the
building is the variable with higher percentage of items fulfilled. Regarding to the area
of the facility, we can observe very low percentages in the pool area, organizational
aspects perceived and emergency and fire protection.
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***Table 3 near here***
Table 4 resumes users’ perception of safety and hygiene according to the 11 items
described previously. We can observe that users have a medium value of ‘strongly
agree’ or ‘agree’ with most of the variables analyzed; highlighting the availability of the
staff in risk situations, the general feeling of safety and the competence of lifeguards. In
the opposite way, the integrity of the building is the variable with the worst result.
***Table 4 near here***
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We can find the first part of the regression model above (table 5). In general, the
relationship between compliance and the perception of safety and accessibility for users
is very weak if you look at the values of R2. However, there is a significant influence of
certain variables at the individual level. Inside the model we should highlight the
positive relation among the perception of competence of lifeguards and the accident
items of the checklist (p<0.001). The perception of safety in materials and equipment
has a positive relation with the building and swimming pool area items (p<0.001).
Moreover, the security against theft is influenced by the items of intrusion and violence
(p<0.01). In the variable of general security, we can observe that the explanatory
variables are in compliance with the accident, accessibility and prevention of violence
items (p<0.001). Also the items of the organizational aspects (p<0.01) influence in the
general perception of security (p<0.05). Furthermore, in this model we can observe that
the items that affect more the health standards and hygiene of the water are the items
located in the swimming pool area (p<0.001).
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***Table 5 near here***
In table 6 we can observe the results of the regression model for variables 7 to 11, and
the mean of perception obtained. Again the general influence observed through the R2
is very weak, although there are some variables to highlight a significant relationship. In
this case perception of hygiene in the facility is more dependent on the compliance of
the items in the pool (p<0.001) and also in the offices (p<0.01). The perception of
integrity of the building has a positive relation with accessibility and swimming pool
area items (p<0.001). Additionally, the perception of accessibility is influenced by the
items of accessibility and violence (p<0.001), highlighting the areas of swimming pool
and offices (p<0.001). Furthermore, the perception of availability of the staff in risk
situations could be explained through the compliance of violence items (p<0.001).
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***Table 6 near here***
4. Discussion
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The control of safety, security and accessibility are determinant factors in the quality of
aquatic installations, given that they can cause unsatisfaction and produce accidents in
the users and workers. Our results suggest that the probability of perceiving these kinds
of problems is greater in swimming pools where the level of compliance with the
different regulation is lower.
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As we observed in the results, violence and intrusion are three groups of items with
lower levels of compliance in all swimming pools. This could be explained through the
fact that Spanish regulation of safety and prevention of violence in sport facilities is
more focused in sport spectacles. In addition, public and private pools usually do not
have security guards and their functions are developed by the lifeguards or other type of
staff.
According to the integrity of the building, the group of items with higher levels of
compliance found different results compared to other previous studies (Gámez &
Padilla, 2011) where the number of breaches in the swimming pool area is very
significant (up to 60%) using a checklist based on the official standards UNE and the
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International Journal of Injury Control and Safety Promotion
regulation of Andalucía in swimming pools as reference. However, we must say that our
study complies with all the elements of design of the entire building, where only 47
items are referred to the swimming pool area. Despite of these, in the research of
Tamaral (2013), where another similar checklist was used, the group of items only
reaches the level of compliance of 47%. In this aspect, we have to mark that the
mentioned studies were developed in other regions of Spain and in other years, so the
regulation could change between them, because in Spain 17 different decrees for every
Region exist. The main argument for this situation is the contrast between the
compositions of water in every zone of Spain (Font-Ribera, et al. 2010). Moreover, this
aspect tried to be fixed through the appearance of a national regulation in 2013, but the
decrees of every Region are still in place.
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In regard to the area of the pool analyzed, we found some similitudes with other studies,
especially in the lack of protocols and signals in different zones of the pool (Tamaral,
2013). In this aspect, it is important to mention a recent study developed in Italy where
users do not comply with some of the basic rules of hygiene and safety because the lack
of information (Amodio et al., 2014). Another interesting aspect in the design of the
pool is the limited parking near the facility and if they are adapted (Gallardo, 2008). In
our case, we found exactly the same results as Tamaral (2013), with only 56% level of
compliance. An important element found is the case of the technical facilities where the
engines are and the maintenance staff work, where the level of compliance of the items
is very high. This situation contrasts sharply with the study of Tamaral (2013) where the
engines where not in the best condition, and also with the qualitative research of
Fernández-Luna et al. (2013) where 90% of maintenance managers stated that they
don’t comply with the safety regulations of wearing proper workwear.
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We must also highlight that one of the group of items with the best results are the pool
area and its hygiene. This could be explained because the Regional Decrees and also the
National Decrees are focused on the maintenance of the pool area, and auxiliary
facilities (restroom, locker room, first aid room…), and they use other types of general
regulations for other prevention and maintenance aspects. So, it is very complex for the
manager of the facility to comprehend all the regulations necessary to develop a correct
management of the swimming pool (Gómez-Calvo, 2011c).
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Unfortunately we haven’t found any research where the perception of users according to
the safety, security and accessibility of swimming pools was evaluated using a survey.
The most similar and recent study were developed by Fernández-Luna et al. (2015)
where they measured the perception of health problems in users of swimming pools
treated with different disinfection methods. In this case the average satisfaction was
lower than the present study despite all facilities complied with the current regulation
when the evaluation was carried out. In this line, due to the general content of our
questionnaire, the variable that obtained less value (security against theft) is explained
by the usual thefts that occur in locker rooms in public facilities.
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The Regression model shows contradictory results. On one hand, we found logic
relations between explanatory variables and the results of questionnaires for users, like
when the security against theft is influenced when the items of intrusion and violence
have a high level of compliance. By contrast, others variables show a negative relation,
so the increase of the compliance of the rules could even lead to a worse perception of
users in some cases. Despite of this, the value of R2 is not high, and we found some
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incongruence in the results, like negative values in some coefficients. Therefore, the
conclusion is that there isn’t a clear and direct relationship, so we cannot confirm that an
increase in the investment in security and accessibility can be used as a tool to improve
the user experience. The investment could meet compulsorily by legislation and ensure
proper operation of the facility, but additional efforts are needed to comply with the
rules and improve the perception of users and therefore their experiences and
satisfaction. Due to the questionnaire was based on positive affirmations and the grade
of agreement of the users, on future research we have to apply a more complex survey,
including more demographic data and variables, such as experience in the facility and
type of activity developed in the pool to know if these aspects could influence in the
perception of users like other previous studies (Fernández-Luna et al., 2015).
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Thus, the main conclusion of this research is the difficulty of control of all aspects of
design, safety, security, accessibility and hygiene in swimming pools due to the
complex and multiple regulations that we can find in Spain, as it happens in other
European countries such as Italy (Liguori et al., 2014). In this sense, Gámez & Padilla
(2011) argued that overly specific rules cannot do real justice to the internal logic of the
sector, with the concomitant risk of gearing the Health Regulation towards satisfaction
of the professional sector by paring down the risk situations rather than providing a real
safeguard for users. For that reason, a more unified and revised regulation of swimming
pools becomes necessary in Spain. As a second conclusion, we can establish weak
evidence that the level of compliance of the safety, security, accessibility and hygiene
have a direct impact on the satisfaction of the users of swimming pools.
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Table 1. Swimming pool risks (Amodio et al, 2014; Bierens and Scapigliati, 2014; Chowdhury,
Alhooshani and Karanfil, 2014; World Health Organization, 2014).
Type of Risk
Anthropogenic risks
Biological risks
Chemical risks
Physical Risk
Drowning
Description (Examples)
Those caused directly by people. Often they are caused by inappropriate
behavior, which may have been made voluntarily or unconsciously
(vandalism, violence, theft, etc.).
Caused by microorganisms such as viruses, bacteria, fungi and protozoa
(infections).
Risks from substances and chemicals used in the installation (poisoning,
skin damage, etc.).
Those that only affect people, causing physical damage.
(falls, cuts, wounds, broken bones , etc.).
Risk of incident caused by a respiratory problem as a result of immersion
in water. These can be fatal or leave temporary or permanent sequelae.
Threats or events that can affect workers in the pool, either during their
business (accident), such as those that may occur over time, even when
they stop working for the organization (occupational disease).
Occupational Hazards
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Table 2. Spanish and International Regulations used for the checklist design.
Type
Health Activity
Citizen security
and violence
prevention
Technical
standards
Main regulations
- Regulations of sanitary conditions of Pools (Decree 58, 1992) (RD, 742/2013).
- Technical Criteria – toilets of pools (RD 742, 2013)
- Legionella Prevention and Control (RD 865, 2003)
- Requirements Identity Card Handler in swimming pools (Order 16 / June, 1997)
- Police Regulation in Shows (RD 2816, 1982)
- Basic Self-Protection Standards (RD 393, 2007)
- Act Against Violence in Sport (Act 19, 2007)
- Regulations for the Prevention of Violence (RD 203, 2010)
- Law on Protection of Public Security (Law 1, 1992)
- Private Security Act (Act 23, 1992)
- Civil Protection Act (Law 2, 1985)
- Security Document in case of Fire (RD 314, 2006)
- Document of Security and Accessibility (RD 314, 2006)
- Health Document (RD 314, 2006)
- Document of protection against noise (RD 314, 2006)
- Energy Saving Document (RD 314, 2006)
- Regulation of Thermal Facilities (RD 1027, 2007)
- Low Voltage Regulation (RD 842, 2002)
- Technical Regulations of Gaseous Fuels (RD 919, 2006)
- Fire Protection Regulations (RD 1942, 1993)
- Standards NIDE 3 for pools (Higher Sports Council, 2013c)
- Standards Project NIDE 3 for pools (Higher Sports Council, 2013c)
- UNE-EN for design and operation of pools (number 15288)
- UNE-EN of swimming pools (number 13451)
- UNE-EN for buoyancy aids (number 13138)
- UNE-EN sports lighting and emergency (series 12193 and 1838)
- UNE-EN concerning spaces for spectators (series 13200 and 41910)
- UNE-EN regarding accessibility (series 21542, 170001 and 170006)
- UNE-EN on computing and disability (number 139980)
- Regulation of the Swimming Federation. Book XII (Spanish Swimming Federation, 2015)
- Law on Social Integration of the Disabled (Law 13, 1982)
- Disability Equity Act (Law 51, 2003)
- Royal Decree of Basic Conditions of Accessibility (RD 505, 2007)
- Royal Decree of Consideration of Disabled (RD 1414, 2006)
- Habitability Law of the Region of Murcia (Act 5, 1995)
- Elimination of Barriers Act (Decree 39, 1987)
- Accessibility and Building Public Spaces (Order 15 / oct, 1991)
- Guide Dogs Act (Law 3, 1994)
Regulations for workers
- Law on Prevention of Occupational Risks (Law 31, 1995)
- Royal Decree of minimum safety and health at work (RD 486, 1997)
- Royal Decree for use of display screens (RD 488, 1997)
- Royal Decree for cargo handling (RD 487, 1997)
- Royal Decree of signaling safety and health at work (RD 485, 1997)
NIDE and UNE
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Table 3. Average percentages of compliance of facilities studied depending on the type of risk and the
area of the facility.
Groups of variables
short Items
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Type of
Building (integrity of the building)
bui
17
88 (13.4)
risk
Emergency (protocol of evacuation and other emergencies)
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68
60 (10.7)
Intrusion (Theft, sabotage, bombing and others)
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26
52 (13.0)
Accessibility
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136
63 (9.9)
Accidents (sickness, personal accident)
acc2
102
75 (7.7)
Violence (racism, xenophobia , intolerance and others)
vio
18
49 (16.8)
Hygiene (health of the users and general hygiene)
hyg
119
79 (8.9)
Area
Pool: primary and secondary pools
poo
47
77 (9.6)
First aid room
aid
13
68 (13.4)
Access: Outside and entries (signals, accessibility, parking)
ent
29
61 (14.3)
Emergency: emergency and fire protection
eme
15
56 (13.2)
Engine and technical rooms
eng
26
83 (10.3)
Reception room
rec
19
78 (9.5)
Offices
off
10
82 (16.9)
Locker rooms and restrooms
loc
40
71 (10.6)
Organizational aspects perceived (information and protocols)
org
25
45 (11.2)
Corridors
cor
23
78 (12.2)
Escape routes
esc
12
75 (10.2)
w
ie
ev
rR
ee
rP
Fo
ly
On
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
31
32
33
34
35
36
37
38
39
40
41
42
43
44
45
46
47
48
49
50
51
52
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Table 4. Swimming pool users’ perception of safety and hygiene (Likert 1-6)
m (SD)
q1. competence of lifeguards
5.05 (1.02)
q2. safety in equipment and materials
4.64 (1.10)
q3. ease of evacuation
4.77 (1.09)
q4. security against theft
4.27 (1.36)
q5. general security for the users
5.45 (0.89)
q6. quality and health standard of the water in the pool
4.62 (1.13)
q7. general hygiene of the facility
4.65 (1.13)
q8. integrity of the building
4.58 (1.16)
q9. general accessibility
4.77 (1.09)
q10. availability of the staff in any situation
5.04 (1.02)
q11. general perception of safety
4.86 (1.02)
w
ie
ev
rR
ee
rP
Fo
ly
On
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
31
32
33
34
35
36
37
38
39
40
41
42
43
44
45
46
47
48
49
50
51
52
53
54
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International Journal of Injury Control and Safety Promotion
URL: http://mc.manuscriptcentral.com/nics
International Journal of Injury Control and Safety Promotion
Table 5. Regression model. Influence of variables and zones analyzed in the perception of safety of users (questions
1-6).
q1
q2
q3
q4
q5
q6
short b
se
b
se
b
se
B
se
b
se
b
se
acc1
0.199
(0.313)
0.085
(0.299)
-0.475
(0.326)
0.305
(0.412)
1.553***
(0.269)
1.273***
(1.519)
acc2
8.492***
(1.392)
-1.555
(1.488)
7.036***
(1.405)
6.056***
(1.803)
5.618***
(1.225)
-2.053
(1.125)
eme1
-5.092***
(1.080)
-3.897***
(1.134)
-3.088**
(1.170)
-1.620
(1.416)
0.426
(0.991)
2.195
(0.658)
int
0.793
(0.573)
-2.229***
(0.624)
-4.107***
(0.633)
2.395**
(0.731)
-3.414***
(0.523)
0.158
(0.378)
vio
-0.118
(0.325)
1.376***
(0.346)
1.047**
(0.352)
1.288**
(0.431)
1.845***
(0.297)
0.042
(1.291)
hig
-1.288
(1.102)
1.666
(1.281)
8.366***
(1.252)
3.354*
(1.543)
1.171
(1.166)
-0.365
(0.461)
bui
rec
off
cor
res
poo
aid
rP
Fo
1.406***
(0.356)
1.723***
(0.406)
1.669***
(0.419)
1.929***
(0.507)
-0.161
(0.383)
-1.856***
(0.335)
2.975***
(0.475)
1.013*
(0.503)
3.400***
(0.508)
1.536*
(0.638)
-0.864*
(0.429)
-0.603
(0.531)
-1.090***
(0.203)
1.283***
(0.257)
1.133***
(0.251)
1.874***
(0.296)
0.014
(0.188)
0.536*
(0.253)
-0.382
(0.376)
-0.907*
(0.454)
0.936*
(0.401)
-3.560***
(0.504)
0.402
(0.390)
-0.396
(0.454)
-2.690***
(0.657)
-0.890
(0.680)
-3.046***
(0.712)
1.110
(0.846)
0.433
(0.621)
-0.302
(0.733)
-3.979***
(0.815)
4.165***
(0.868)
3.254***
(0.812)
3.922***
(1.112)
1.104
(0.732)
5.245***
(0.875)
(0.330)
-0.567
0.787*
(0.337)
-0.553
(0.353)
0.706
(0.439)
0.825**
(0.261)
-0.181
(0.346)
eng
-0.861
(0.523)
-1.322*
(0.593)
-3.043***
(0.566)
-2.226**
(0.716)
0.074
(0.555)
1.112
(0.594)
ent
0.704**
(0.242)
0.013
(0.257)
0.610*
(0.268)
-0.454
(0.318)
0.274
(0.226)
-1.604***
(0.267)
eme2
2.196***
(0.411)
1.373***
(0.407)
1.301**
(0.413)
1.238*
(0.529)
0.616
(0.323)
-0.255
(0.415)
rR
ee
org
0.392
(0.445)
1.024*
(0.459)
2.191***
(0.498)
-1.485*
(0.595)
1.001*
(0.420)
-0.883
(0.498)
esc
0.239
(0.245)
0.224
(0.321)
0.992*
(0.498)
-0.455
(0.295)
0.998*
(0.320)
0.536
(0.204)
Const
3.386***
(0.365)
2.452***
(0.421)
2.294***
(0.400)
3.839***
(0.468)
6.221***
(0.325)
2.658***
(0.414)
“N”
1800.000
1800.000
1800.000
1800.000
ev
1800.000
1800.000
R2
0.124
0.118
0.117
0.127
0.093
0.089
* p<0.05 ** p<0.01 *** p<0.001. Sex, age of the users or old installation ratios are not showed, but all models include these variables as
independent control variable.
.
w
ie
ly
On
1
2
3
4
5
6
7
8
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10
11
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Table 6. Regression model. Influence of variables and zones analyzed in the perception of safety of users (questions
7-10).
q7
q8
q9
q10
q11
short
b
se
b
se
b
se
b
se
b
se
acc1
-3.161*
(1.525)
6.725***
(1.568)
-5.098***
(1.407)
-1.635
(1.397)
-1.189
(1.357)
acc2
1.026
(1.273)
1.090
(1.235)
-2.320*
(1.107)
0.519
(1.148)
-2.793**
(1.061)
eme1
-2.759***
(0.623)
-3.152***
(0.626)
-3.095***
(0.639)
-2.001***
(0.588)
-3.137***
(0.595)
int
1.323***
(0.365)
1.397***
(0.356)
1.687***
(0.355)
1.370***
(0.330)
0.875**
(0.321)
vio
6.600***
(1.293)
5.099***
(1.290)
4.410***
(1.222)
3.897***
(1.130)
3.776**
(1.206)
hig
0.604
(0.471)
0.606
(0.438)
0.530
(0.422)
0.383
(0.395)
1.773***
(0.388)
bui
-0.352
(0.326)
-0.328
(0.314)
0.638*
(0.296)
0.311
(0.317)
0.246
(0.290)
rec
off
corr
res
poo
aid
rP
Fo
0.169
(0.555)
0.639
(0.536)
0.985
(0.527)
1.425**
(0.520)
1.260**
(0.480)
0.789**
(0.257)
1.823***
(0.258)
1.723***
(0.254)
-0.549**
(0.206)
1.314***
(0.227)
-0.155
(0.464)
0.092
(0.471)
0.083
(0.420)
1.187**
(0.394)
-0.877*
(0.418)
-1.423
(0.755)
-1.662*
(0.740)
-1.731*
(0.693)
-2.342***
(0.680)
-1.598*
(0.655)
3.916***
(0.892)
7.527***
(0.932)
5.598***
(0.792)
0.106
(0.800)
3.016***
(0.765)
(0.364)
-3.036***
(0.600)
-0.522
(0.332)
0.499
(0.331)
-1.114***
(0.327)
-2.646***
-1.114**
(0.620)
acc3
-0.526*
(0.264)
eme2
-0.291
(0.422)
org
0.354
(0.518)
1.000*
esc
0.212
(0.322)
0.299
Const
2.583***
(0.410)
2.199***
“N”
1800.000
(0.363)
-2.729***
(0.545)
-1.500**
(0.543)
-2.041***
(0.562)
-1.080***
(0.271)
-0.290
(0.252)
-0.711**
(0.260)
0.151
(0.239)
0.119
(0.418)
1.104**
(0.386)
1.375***
(0.407)
1.343***
(0.372)
rR
1800.000
(0.510)
0.872
(0.478)
-0.468
(0.453)
1.449**
(0.443)
(0.510)
0.723
(0.349)
0.226
(0.123)
2.924***
(0.243)
(0.416)
3.155***
(0.408)
3.741***
(0.378)
2.527***
(0.378)
1800.000
ev
-1.145**
eng
ee
1800.000
1800.000
R2
0.124
0.118
0.117
0.127
0.093
* p<0.05 ** p<0.01 *** p<0.001. Sex, age of the users or old installation ratios are not showed, but all models include these variables as independent
control variable.
w
ie
ly
On
1
2
3
4
5
6
7
8
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10
11
12
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