La enseñanza de la historia para los estudiantes normalistas Maricarmen Cantú Valadez, Posgrado de la Facultad de Filosofía y Letras de la UANL Resumen Con la finalidad de conocer las representaciones que sobre la enseñanza de la Historia han desarrollado los alumnos de educación normal, se realizó un estudio exploratorio. Se trabajó con una muestra no probabilística conformada por grupos intactos de 3er. semestre de dos carreras de una escuela normal pública en Nuevo León (164 participantes). Los resultados muestran desafíos evidentes para llevar a cabo una educación histórica desde la perspectiva de la construcción de conocimiento: inacabada, que permita diversas interpretaciones, la crítica y la constante renovación. Palabras clave Formación docente, enseñanza de la historia, representación social Antecedentes La enseñanza de la historia ha ido evolucionando en la forma en que se interpreta qué y cómo debe enseñanse ese conocimiento en educación básica. En diversos países, al igual que en México, han surgido debates (académicos y políticos) sobre cuáles son los propósitos, contenidos y enfoques en la educación histórica. En Canadá, Ken Osborne1 identifica tres concepciones sobre las formas de educación histórica: 1) la transmisión de la narrativa de la construcción de nación, 2) el análisis de problemas contemporáneos en un contexto histórico, y 3) la educación histórica “como el proceso mediante el cual los estudiantes llegan a entender la historia como una forma de indagación disciplinada y con ello aprender a pensar 1 Osborne, K. (2006). Teaching Canadian History in Schools. The Historica Foundation. históricamente” (p. 1017)2. En España, Joan Pagès3, de la Universidad Autónoma de Barcelona, ha distinguido tres curriculums de historia: el técnico, el práctico y el crítico; estableciendo cuatro características para establecer las diferencias: finalidad reproductora, conocimiento, enseñanza, aprendizaje; resultado de una evolución en las formación de los profesores y los planes y programas de estudio establecidos. A nivel internacional, se está promoviendo un aprendizaje de la Historia basada en la forma en que los historiadores profesionales construyen y validan los conocimientos. Seixas considera que para la construcción del conocimiento histórico deben haber un acercamiento hacia la forma en que los profesionales de la disciplina lo hacen, por ejemplo: usando fuentes historicas y ejercicios de cuestionamientos a las evidencias. Cabe mencionar que en algunos países europeos ofrecen servicios educativos en los archivos históricos, permitiendo a los estudiantes prácticas de trabajo con fuentes históricas4. En México, actualmente, en educación básica y normal se promueve un aprendizaje de la Historia hacia un enfoque que consiera que el conocimiento histórico está sujeto a diversas interpretaciones y en constante renovación; donde es imprescindible el uso de las estrategias y recursos propias de la disciplina5. En los últimos años, investigadores reconocidos y ubicados en los Estados del Conocimiento del COMIE(1992-2002) Volumen 76, ha señalado la necesidad de renovar la perspectiva de cómo se enseña y aprende la Historia, resaltando: 2 Peck, Carla, & Seixas, Peter. (2008). Benchmarks of Historical Thinking: First Steps. Canadian Journal of Education, 31(4), 1015-1038. 3 Pagès, J. (1994). La didáctica de las Ciencias Sociales, el curriculum de historia y la formación del profesorado. Signos. Teoría y práctica de la educación (13), 38-51 4 Seixas, P. (1993). The Community of Inquiry as a Basis for Knowledge and Learning: The Case of History. American Educational Research Journal, v30 n2 p305-24 5 SEP. (2008). Plan de estudios 2009. Educación básica. Primaria. Etapa prueba. México, D.F.: Secretaría de Educación Pública. 6 López y Mota, Ángel Daniel. (2003). Volumen 7: Saberes científicos, humanísticos y tecnológicos. Tomo II (Vol. 7). México: Consejo Mexicano de Investigación Educativa, A.C. a) La necesidad de superar la concepción de historia única y verdadera por parte de los docentes, donde el cuestionamiento y la duda son inadmisibles (Sánchez, 2001). b) La existencia de una brecha entre los avances científicos y la práctica cotidiana persistiendo como formas de enseñanza la memorización de fechas y datos (Sánchez, 2001; Florescano, 2000; Salazar, 1999; Lerner, 1998; López, 1996) c) La ausencia de comprensión, conocimiento y/o necesidad para aplicar estrategias específicas y propias de la disciplina (Sánchez, 2001; Elizalde, 2001; López, 1996). Como supuesto de este trabajo de investigación que tiene como finalidad contar con evidencia empírica de la nociones que los estudiantes normalistas tienen sobre la enseñanza de la Historia, se plantea la posibilidad que la existencia de rasgos de un modelo de la enseñanza de la Historia como una narrativa hegemónica sobre la construcción de nación, tendiente a la memoriazación y excluyendo aspectos didácticos propios de la disciplina. Metodología Este ejercicio de investigación tiene un alcance exploratorio, bajo un enfoque mixto. Se llevó a cabo en una escuela normal pública del estado de Nuevo León. Institución centenaria que ofrece actualmente tres carreras de educación: educación física, educación preescolar y educación primaria. Los participantes del estudio son estudiantes normalistas de tercer semestre de las licenciaturas en educación preescolar (Plan 1999) y primaria (Plan 1997), con al menos trece años de escolaridad y habiendo cursado un curso de historia de la educación en México en la escuela normal. La técnica de selección de la muestra fue no probabilística, trabajando con grupos intactos. Se aplicó un cuestionario que se conformó tomando en cuenta en su construcción, los métodos de encuesta y de redes semánticas. El cuestionario fue autoadministrado, utilizando un servicio gratuito de Internet para aplicación de encuestas. El cuestionario se conformó por una red semántica, preguntas abiertas y preguntas de opción múltiple; divididas en las siguientes dimensiones: 1) la importancia de la enseñanza de la Historia en educación básica, 2) las prácticas de enseñanza como profesor de Historia: los elementos para la preparación de una secuencia para la enseñanza de un contenido del programa de Historia y la gestión de la clase, y 3) los saberes, competencias generales o específicas a la Historia. Este cuestionario es una adaptación de la propuesta de Joan Pagès, titulado “Las representaciones sobre a enseñanza de la Historia de los y las estudiantes de maestro o maestra de educación primaria”. Para el análisis del cuestionario se aplicó el método híbrido de redes semánticas y se aplicó estadística descriptva. Para la tercera dimensión del cuestionario: los saberes, competencias generales o específicas a la Historia; por estar conformado por variables de razón, se calculó el coeficiente de confiabilidad de Alfa de Cronbach. El coeficiente obtenido fue de 0.91, interpretándose que existe un alto nivel de consistencia en la dimensión del conjunto de 24 ítems del bloque: la conformación de ítems de la dimensión logra medir lo que se pretende. Resultados 1. La Historia para los normalistas: Red semántica Los diez conceptos que conforman el campo semántico para el concepto Historia, son: pasado, acontecimientos + suceso + hechos, México, personajes + heroes, fechas, guerras, tiempo, revolución, libros, antiguo. (Véase Figura 1). El total del conjunto de conceptos enunciados por los alumnos se conformó por 262 palabras. 100% PASADO 100% 82% ANTIGUO 75% ACONTECIMIENTO S + SUCESOS + HECHOS 50% LIBROS 30% PERSONAJES + HEROES 21% 25% 75% 0% 31% 57% REVOLUCION 35% 40% TIEMPO MEXICO 42% FECHAS GUERRAS Porcentaje relativo a las palabras Figura 1. Red Semántica Historia Los conceptos héroes, personajes y hechos pueden ser relacionados con un modelo ejemplarizante para la enseñanza de la Historia donde a través de conocer la vida de los de los héroes. Los conceptos hechos, fechas, guerras y personajes nos remite al modelo de los acontecimientos donde se abordan el estudio de batallas, biografías e historia nacional7. Encontrar los conceptos de tiempo y libros no parece relevante. Quizá por que el primero se asocia a una forma tradicional los contenidos de Historia en la educación básica, donde la línea del tiempo es una estrategia promovida a través de los planes de estudio y recurrentemente usada por los docentes. El segundo es reconocido por estudiantes y docentes como “el instrumento”, probablemente el 7 Amaro Aranda, M. E. (s.f.). Aportes de la historiografía mexicana al aprendizaje de la historia. Recuperado el 10 de enero de 2013, de Dirección General de Educación Superior para Profesionales de la Educación. Comunidad Normalista para la Educación Histórica: http://www.dgespe.sep.gob.mx/public/comunidades/historia/actualizacion/Encuentros%20Nacionale s/I%20Encuentro/Seminario%20de%20Educacion%20Historica/Aportes_de_la_historiografia_mexi cana_Ma_Eugenia.pdf único para la mayoría de estudiantes de educación básica para acercarse y conocer la historia8. 2. Enseñanza de la Historia: su importancia en educación básica En un ejercicio de opción múltiple para señalar la importancia de la enseñanza de la Historia, en las selecciones de mayor peso (3) de los estudiantes normalistas predominan las respuestas que favorecen la trasmisión de conocimientos, el ejercicio de una responsabilidad y la facilitación del acceso a todas las clases sociales a la educación. (Veáse Tabla 1). En las justificaciones que enuncian libremente, predominantemente encontramos: el desarrollo de un juicio crítico, la formación de “buenos” ciudadanos y el evitar la discriminación. Sin embargo, también encontramos justificaciones orietadas hacia la transmisión y adquisición de conocimientos. Tabla 1. ¿Por qué cree que es imporante la enseñanza de la Historia en la educación básica? Opciones Más seleccionada (f) Promedio Transmitir conocimientos 107 2.68 Ejercer una responsabilidad educativa 68 2.45 63 2.40 63 2.38 Facilitar el acceso a la educación de los alumnos de todas las clases sociales Poder transmitir una concepción de justicia social e igualitaria de la escuela Nota: Escala: 3 para la opción más importante, 2 para la siguiente y 1 para la menos importante. En la tabla se presentan las frecuencias para la escala 3 y el promedio obtenido en total. 3. Prácticas docentes para la enseñanza de la Historia 8 ídem. Los recursos y elementos que consideraría los estudiantes normalistas para preparar una secuencia didáctica donde se aborde un contenido de Historia, desde la perspectiva de la enseñanza, más recurrentes son: 1) uso de la tecnología, 2) selección de material didáctico, 3) evaluación de los aprendizajes de los alumnos, y 4) uso de videos, películas, ilustraciones, paseos, visitas a museos, etc. Observándose la ausencia de los recursos propios de la didáctica de la Historia propuestos en los planes de educación básica: líneas del tiempo, fuentes escritas y orales, mapas, gráficas y estadísticas9,10. La justificación para estas elecciones obedece a que la enseñanza de la Historia sea: 1) menos aburrida, 2) más dinámica, 3) menos teoría-más práctica y 4) menos texto, resúmenes largos y cuestionarios. Respuestas que contrastan con la inclinación de que predomina en los estudiantes normalistas para la transmisión del saber para la enseñanza de la Historia. Probablemente, el deseo de incorporar y buscar recursos innovadores para hacer entretenida y amena el estudio de la historia, eviten que los futuros docentes favorezcan el desarrollo del pensamiento crítico11. Para conocer los elementos guía para preparar una secuencia didáctica para la enseñanza de la Historia, se ofreció un listado de 11 opciones de sugerencias de elemntos guía, donde las más seleccionadas por los alumnos fueron: 1) los objetivos que deseo alcanzar, 2) los intereses de los alumnos y 3) el grado escolar del grupo (Véase Tabla 2). Tabla 2. Elementos guía para preparar una secuencia didáctica. 9 SEP. (2008). Plan de estudios 2009. Educación básica. Primaria. Etapa prueba. México, D.F.: Secretaría de Educación Pública. 10 Amaro Aranda, M. E. (s.f.). Aportes de la historiografía mexicana al aprendizaje de la historia. Recuperado el 10 de enero de 2013, de Dirección General de Educación Superior para Profesionales de la Educación. Comunidad Normalista para la Educación Histórica: http://www.dgespe.sep.gob.mx/public/comunidades/historia/actualizacion/Encuentros%20Nacionale s/I%20Encuentro/Seminario%20de%20Educacion%20Historica/Aportes_de_la_historiografia_mexi cana_Ma_Eugenia.pdf 11 Lee, P. (2011). History education and historical literacy. En I. Davies, Debates in History Teaching (págs. 63-72). New York, USA: Routledge. Taylor and Francis Group. Más Elementos guía seleccionada (f) Promedio El planteamiento que juzgo más adecuado 29 2.09 La problemática del tema 52 2.38 El capítulo del libro de texto 36 2.12 El grado escolar del grupo 92 2.52 El tiempo que dispongo 50 2.34 Los documentos de que dispongo 41 2.23 Los temas que mejor conozco 32 2.14 Los temas que más me agradan 16 1.69 Los objetivos que deseo alcanzar 111 2.69 Las recomendaciones del documento que 38 2.22 89 2.61 acompaña a los programas Los intereses de mis alumnos Nota: Escala: 3 para la opción más importante, 2 para la siguiente y 1 para la menos importante. En la tabla se presentan las frecuencias para la escala 3 y el promedio obtenido en total. Sobre las situaciones que los estudiantes normalistas desearía fueran más frecuentes durante la gestión de la clase, sobresalen: 1) el interrogar a los alumnos al inicio de la sesión sobre lo que saben, conocida como rescate de los conocimientos previos y 2) la transmisión de conocimientos que los alumnos deben adquirir (Véase Tabla 3). Nuevamente aparece la transmisión de conocimientos, rasgo del modelo catequístico para la enseñanza de la Historia12. Tabla 3. 12 Amaro Aranda, M. E. (s.f.). Aportes de la historiografía mexicana al aprendizaje de la historia. Recuperado el 10 de enero de 2013, de Dirección General de Educación Superior para Profesionales de la Educación. Comunidad Normalista para la Educación Histórica: http://www.dgespe.sep.gob.mx/public/comunidades/historia/actualizacion/Encuentros%20Nacionale s/I%20Encuentro/Seminario%20de%20Educacion%20Historica/Aportes_de_la_historiografia_mexi cana_Ma_Eugenia.pdf Situaciones que me gustarían fueran frecuentes en la clase. Situaciones Doy métodos para que los alumnos se los apropien Hago utilizar a los alumnos la tecnología Al principio de la sesión interrogo a los alumnos sobre lo que saben Pongo a los alumnos en situación para los intercambios orales Prongo a los alumnos en situación para elaborar su saber a partir de situaciones problema Cuestiono puntualmente a los alumnos sobre los contenidos del curso Transmito conocimientos que los alumnos deben adquirir Más seleccionada (f) Promedio 47 2.13 42 2.14 114 2.72 61 2.30 60 2.41 37 2.16 78 2.52 Nota: Escala: 3 para la opción más importante, 2 para la siguiente y 1 para la menos importante. En la tabla se presentan las frecuencias para la escala 3 y el promedio obtenido en total. 4. Saberes y competencias a la Historia Con la finalidad de conocer qué saberes y competencias relacionadas con la Historia consideraban fáciles y difíciles, se presentó un conjunto de 24 opciones de saberes, competencias generales y específicas relativas a la Historia (Véase Tablas 4 y 5). Es probable que al ser estos estudiantes, una generación que creció con la televisión y la cámara fotográfica, exista un grado mayor de familiaridad con estos saberes y competencias. Observando los resultados de las tablas, se visualiza un contraste en las respuestas que dan los alumnos en el caso de construcción de líneas del tiempo y la lectura de grandes referencias espaciales. Existe la posibilidad que el uso de líneas de tiempo sea para la ubicación de sucesos y situaciones, no necesariamente como recurso para desarrollar la noción del tiempo histórico, dejando de lado procesos de desarrollo como cambios y continuidades en la sociedad y la correlación de sucesos13. Tabla 4. Saberes, competencias generales o específicas relativas a la Historia: Muy Fáciles Saberes y competencias Frecuencia Prom. Gral. 1 2 3 4 54 91 18 0 1.78 61 78 21 3 1.79 La construcción de líneas del tiempo 55 85 19 4 1.83 La lectura de imágenes 49 83 29 2 1.90 La lectura de imágenes en movimiento (videos, películas, cortometrajes, etc.) La utilización de las tecnologías de información y comunicación Nota: Escala de 1 a 4; donde: 1 es muy fácil, 2 es fácil, 3 es difícil y 4 es muy difícil. Tabla 5. Saberes, competencias generales o específicas relativas a la Historia: Muy Difíciles. Saberes y competencias La lectura o el estudio de las grandes referencias espaciales La lectura o el estudio de los documentos patrimoniales La descripción de obras de arquitectura 13 ídem. Frecuencia Prom. Gral. 1 2 3 4 9 55 81 18 2.66 9 58 86 10 2.60 13 64 65 21 2.58 La extracción de información de documentos de carácter histórico 11 68 76 8 2.50 Nota: Escala de 1 a 4; donde: 1 es muy fácil, 2 es fácil, 3 es difícil y 4 es muy difícil. Entre los saberes y compentecias más difíciles, se señala la lectura de fuentes escritas (patrimoniales o históricas). Probablemente, la dificultad radique en la falta del hábito de la lectura, aunado a la ausencia de una experiencia lectora enriquecida por el acceso a diversos textos. Además, que la lectura de estos documentos requiere de otras habilidades y más tiempo para comprender su contenido; por ejemplo: la diferencia de escritura y el vocabulario. Este saber y/o competencia representa un reto que debe plantearse con cierta seriedad en la formación de docentes, debido a que es una fuente de información básica para el estudio de la Historia14. Reflexión final Los estudios señalan que los docentes con poco conocimiento de la disciplina de la historia, pocas habilidades de lectura y didáctica difícilmente promoverán el desarrollo de un modelo de educación histórica no basado en la memorización de datos y fechas15, 16, 17. Ante estos hallazgos, se visualiza un reto en la formación docente de los estudiantes normalistas dentro de la disciplina de la Historia. El reto es transitar de aquello aprendido a través de diversas experiencias escolares para el 14 SEP. (2008). Plan de estudios 2009. Educación básica. Primaria. Etapa prueba. México, D.F.: Secretaría de Educación Pública. 15 Dalongeville, A. (2003). Noción y práctica de la situación-problema en historia. Revista de Investigación. Enseñanza de las Ciencias Sociales. (2). Recuperado el 2 de julio de 2012 en http://www.situationsproblemes.com/espagnol/page1esp.htm 16 Wineburg, S. (2001). Historical thinking and other unnatural acts: charting the future of teaching the past. Philadelphia: Temple University Press. 17 Pagès, J. (1996): “Las representaciones de los estudiantes de maestro sobre las Ciencias Sociales: ¿cuáles son?, ¿cómo aprovecharlas?”. Investigación en la Escuela nº 28, p. 103-114 aprendizaje de la historia basados en modelos tradicionales a un modelo que favorece la construcción de conocimiento histórico, que se interpreta, que no es único y tampoco es acabado. Referencias Amaro Aranda, M. E. (s.f.). Aportes de la historiografía mexicana al aprendizaje de la historia. Recuperado el 10 de enero de 2013, de Dirección General de Educación Superior para Profesionales de la Educación. Comunidad Normalista para la Educación Histórica: http://www.dgespe.sep.gob.mx/public/comunidades/historia/actualizacion/En cuentros%20Nacionales/I%20Encuentro/Seminario%20de%20Educacion% 20Historica/Aportes_de_la_historiografia_mexicana_Ma_Eugenia.pdf Dalongeville, A. (2003). Noción y práctica de la situación-problema en historia. Revista de Investigación. 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