PROGRAMA DE LAS NACIONES UNIDAS PARA EL MEDIO AMBIENTE MARCO FLEXIBLE PARA LA PREVENCIÓN Y PREPARACIÓN EN CASO DE ACCIDENTES CON PRODUCTOS QUÍMICOS Documento de orientación IOMC PROGRAMA INTERINSTITUCIONAL DE GESTIÓN RACIONAL DE LOS PRODUCTOS QUÍMICOS Un esfuerzo de cooperación entre la FAO, la OIT, el PNUMA, la ONUDI, el UNITAR, la OMS y la OCDE Derecho de reproducción © Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, 2010 Está autorizada la reproducción total o parcial y de otra cualquier forma para fines educativos o sin fines de lucro, sin ningún otro permiso del titular de los derechos de autor, siempre y cuando se indique la fuente de la que proviene. El PNUMA agradecerá que se le remita un ejemplar de cualquier texto cuya fuente haya sido la presente publicación. No está autorizado el empleo de esta publicación para su venta o para otros usos comerciales sin el permiso previo por escrito del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. Descargo de responsabilidad Las designaciones empleadas y la presentación del material en esta publicación no reflejan de ninguna manera la opinión del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente en lo que concierne a la condición jurídica de un país, territorio, ciudad o área, sus autoridades o con respecto a la delimitación de sus límites o de sus fronteras. Asimismo, las opiniones vertidas no representan necesariamente la decisión o la política declarada del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, ni tampoco constituye endoso la citación de marcas o procesos comerciales. El PNUMA promueve prácticas ambientalmente racionales a nivel mundial y en sus propias actividades. Esta publicación está impresa en papel 100% reciclado, usando tintes de base vegetal y otras prácticas ecoamigables. Nuestra política de distribución pretende reducir la huella de carbono del PNUMA ISBN: 978-92-807-3094-4 II MARCO FLEXIBLE PARA LA PREVENCIÓN Y PREPARACIÓN EN CASO DE ACCIDENTES CON PRODUCTOS QUÍMICOS Un documento de orientación DTIE - PNUMA División de Producción y Consumo Sostenible (SCP) 15 rue de Milan 75441 Paris CEDEX 09 Francia Tel: +33 1 4437 1450 Fax: +33 1 4437 1474 Correo electrónico: [email protected] www.unep.fr I Esta Guía fue desarrollada por un grupo de expertos internacionales bajo los auspicios de la División de Tecnología, Industria y Economía del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (DTIE PNUMA), como parte de su trabajo de conformidad con el Enfoque Estratégico para la Gestión de las Sustancias Químicas a Nivel Internacional (SAICM) adoptado en febrero del 2006. El propósito del SAICM es “lograr para el 2020, el uso y la producción de químicos en formas que lleven a la minimización de efectos adversos significativos en la salud humana y el ambiente”. Una de las áreas de trabajo identificadas del SAICM es la “formulación de medidas de prevención y respuesta para mitigar los impactos ambientales y de la salud de emergencias que involucran los productos químicos”. Para más información sobre el SAICM, véase: www.saicm.org. El DTIE-PNUMA insta a los tomadores de decisiones en el gobierno, las autoridades locales y la industria a desarrollar e implementar políticas, estrategias y prácticas que son más limpias y más seguras, a hacer uso eficiente de los recursos naturales, a garantizar la gestión ambientalmente racional de los productos químicos, reducir la contaminación y los riesgos para los humanos y el medio ambiente, permitir la implementación de las convenciones y los acuerdos internacionales e incorporar los costos ambientales. La estrategia del DTIE-PNUMA consiste en influenciar la toma de decisiones informadas mediante asociaciones con otras organizaciones internacionales, las autoridades gubernamentales, los negocios, la industria y las organizaciones no gubernamentales; apoyar la implementación de convenciones y crear capacidad en países en vías de desarrollo. Esta publicación se produce en el contexto del IOMC. El contenido no necesariamente refleja las opiniones o políticas de las organizaciones individuales que participan del IOMC. El Programa Interinstitucional de Gestión Racional de los Productos Químicos (IOMC) fue establecido en 1995 en cumplimiento de las recomendaciones formuladas en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo en 1992 para fortalecer la cooperación y aumentar la coordinación internacional en el campo de la seguridad química. Las organizaciones que participan son la FAO, la OIT, el PNUMA, la ONUDI, el UNITAR, la OMS y la OCDE. El Banco Mundial y el PNUD son observadores. El propósito del IOMC es promover la coordinación de las políticas y actividades que persiguen las Organizaciones Participantes, conjuntamente o por separado, para lograr la gestión racional de los productos químicos con relación a la salud humana y el medio ambiente. II PRÓLOGO El crecimiento en el sector industrial ha sido un elemento valioso de las estrategias de desarrollo económico en muchos países en vías de desarrollo en todo el mundo. Sin embargo, muchos de los productos químicos utilizados en operaciones industriales presentan riesgos de accidentes, ya que pueden causar graves daños a las personas, el medio ambiente, y a la economía local, o incluso a la nacional. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) reconoce la necesidad de apoyar más el desarrollo de la capacidad en el área de gestión de productos químicos, particularmente en economías de rápido crecimiento que están experimentando una industrialización acelerada y necesitan apoyo para tratar la prevención y preparación en caso de accidentes con productos químicos en la industria. Para el control del riesgo de accidentes químicos, es crucial que los gobiernos desarrollen programas de prevención y preparación en caso de accidentes químicos, para reducir la probabilidad de accidentes y limitar las consecuencias de los accidentes que ocurran. Esta guía fue diseñada para ayudar a los gobiernos que desean desarrollar, revisar o fortalecer sus programas de prevención y preparación para casos de accidentes con productos químicos. Si bien hay muchos aspectos de la prevención de accidentes químicos que serán similares independientemente de la ubicación, es importante reconocer que cada país es diferente con relación a los riesgos químicos presentes, los recursos disponibles para hacer frente a estos riesgos, y su situación política, cultural y económica. Por esta razón, esta guía ha sido diseñada para ser lo suficientemente flexible, de forma tal que se adapte a las circunstancias de un país determinado. Las ventajas de la reducción de la probabilidad de ocurrencia y consecuencias de los accidentes químicos, que incluye una mejor protección de la salud humana, el medio ambiente y los recursos económicos, son bien conocidas. Sin embargo, el PNUMA cree que los beneficios del desarrollo de un programa nacional de prevención y preparación para casos de accidentes con productos químicos, van más allá de la reducción del número de accidentes industriales en un determinado país, ya que tales programas nacionales suelen ser un aspecto importante del desarrollo sostenible y una forma a través de la cual los gobiernos podrán responder a presiones internacionales para la promoción de sistema industriales responsables y enfrentar los retos de una economía verde. Las políticas integradas y robustas para la gestión de productos químicos son un componente vital del compromiso hacia un futuro más sostenible. Mediante el uso de este documento, esperamos que los gobiernos mejoren su capacidad para gestionar de forma proactiva los riesgos de productos químicos en sus países y exhorten a las industrias a participar en las actividades de prevención y preparación en caso de accidentes químicos, lo cual redundará en un aumento de la capacidad para el desarrollo sostenible. Sylvie Lemmet, Director División de Tecnología, Industria y Economía Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente III RECONOCIMIENTO Esta publicación (llamada la “Guía”) es el resultado de una iniciativa internacional lanzada por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) en el 2007 para mejorar la seguridad química, particularmente en economías de rápido crecimiento que están experimentando una rápida industrialización y necesitan apoyo para la prevención y preparación para accidentes con productos químicos. La Guía refleja más de 30 años de experiencia en el tratamiento de la prevención de accidentes con productos químicos y toma en cuenta varios acuerdos internacionales en esta área, las leyes y reglamentos clave nacionales y regionales, y otros materiales de guía internacional. Para desarrollar la Guía, el PNUMA estableció un Grupo de Trabajo de Expertos con profesionales seleccionados en el área de seguridad química y prevención y preparación de accidentes industriales. El Grupo incluyó a representantes de agencias relevantes de las Naciones Unidas, entre las cuales estaban la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Comisión Económica para Europa de las Naciones Unidas (CEPE/ONU), la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI), el Instituto de las Naciones Unidas para la Formación Profesional e Investigaciones (UNITAR), la Organización Mundial de la Salud (OMS), y la Unidad Conjunta para el Medio Ambiente de la Oficina del PNUMA para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCAH), conocida como la Unidad Conjunta para el Medio Ambiente PNUMA/OCHA (JEU). También había representantes de otras organizaciones intergubernamentales, que incluyen la Comisión Europea (CE) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), así como las organizaciones no gubernamentales tales como el Centro Asiático de Preparación para Desastres (ADPC). Otros participantes incluían el Consejo Internacional de Asociaciones Químicas (ICCA) y el Centro de Tecnología Mineral/Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo (CETEM/CYTED); representantes gubernamentales selectos de organizaciones nacionales, inclusive de los Países Bajos, la Agencia de Contingencia Civil de Suecia (MSB), Tailandia, la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (US EPA) y expertos independientes. Esta Guía ha sido publicada dentro del marco del Programa Interinstitucional de Gestión Racional de los Productos Químicos (IOMC). Las organizaciones de la IOMC que participan incluyen la Organización para Agricultura y la Alimentación (FAO), la OIT, el PNUMA, ONUDI, UNITAR, la OMS y la OCDE. El Grupo de Trabajo de Expertos se reunió cinco veces entre noviembre del 2007 y abril del 2010 para preparar y terminar esta Guía. El Grupo estaba conformado por las siguientes personas: ▪ Sra. Sandra Averous (PNUMA) ▪ Sr. Rainar All (MSB) ▪ Sra. Helen Arromdee (Tailandia) ▪ Sr. Tobias Biermann (CE) ▪ Sr. Ralph Brieskorn (Países Bajos) ▪ Dr. Chalermchai Chaikittiporn (Tailandia) ▪ Sra. Sophie Dunkerley (PNUMA) ▪ Sr. Luciano Fabbri (CE- Centro Inv. Conjunto) ▪ Sra. Carina Fredström (MSB) ▪ Sra. Virginia Fusé (CEPE/ONU) ▪ Dr. Kersten Gutschmidt (OMS) ▪ Sr. Mark Hailwood (Experto independiente) ▪ Sr. John Haines (UNITAR) ▪ Sr. Leo Heileman (PNUMA) ▪ Sr. Arab Hoballah (PNUMA) ▪ Sra. Marie-Chantal Huet (OCDE) ▪ Sra. Kim Jennings (EPA Estados Unidos) ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ Sra. Kathy Jones (EPA Estados Unidos) Sr. Marcelo Kós Silveira dos Campos (ICCA) Sr. Seiji Machida (OIT) Sr. Kaj Madsen (PNUMA) Sr. Tomas Marques (PNUMA) Sr. Desta Mebratu (PNUMA) Sr. Alain Pierrat (ICCA) Sr. Loy Rego (ADPC) Sra. Vanda Santos (JEU) Sra. Fran Schulberg (Consultora independiente) Sra. Julie Shortridge (PNUMA) Sr. Rene Van Berkel (ONUDI) Sr. Roberto Villas Boas (CETEM/CYTED) Sra. Maureen Wood (CE - Centro de Inv. Conjunto) Sr. Lukasz Wyroswski (CEPE/ONU) Sra. Ruth Zugman Do Coutto (PNUMA) IV La señora Ruth Zugman Do Coutto y el señor Kaj Madsen fueron responsables de gestionar este proyecto con el apoyo del señor Tomas Marques. La principal escritora y editora de la Guía fue la señora Fran Schulberg. El señor Mark Hailwood, Maureen Wood, y la señora Kim Jennings proporcionaron contribuciones técnicas sustantivas. La diagramación y el diseño de esta Guía fueron posibles gracias a la contribución de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de los Estados Unidos, dirigido por las señoras Kim Jennings y Kathy Jones de esta misma agencia, conjuntamente con el trabajo realizado por Katie Garvey y Chris Herman de la SRA International, Inc. V Marco para la prevención y preparación en caso de accidentes con productos químicos Documento de orientación preparado por el PNUMA ÍNDICE RESUMEN EJECUTIVO....................................................................................................................... 1 CAPÍTULO A: INTRODUCCIÓN A1: A2: A3: A4: A5: Propósito de esta Guía de Marco Flexible.............................................................................................. Por qué establecer un programa de accidentes con productos químicos.......................................... Ámbito de aplicación de la presente Guía.............................................................................................. Quién debe utilizar la presente Guía........................................................................................................ Cómo usar la presente Guía...................................................................................................................... 3 7 9 13 17 CAPÍTULO B: CÓMO DESARROLLAR O MEJORAR UN PROGRAMA DE PREVENCIÓN Y PREPARACIÓN PARA CASOS DE ACCIDENTES CON PRODUCTOS QUÍMICOS B1: Introducción................................................................................................................................................. 38 B2: Fase inicial ................................................................................................................................................. 41 a. Compromisos............................................................................................................................................. 41 b. Cooperación entre organismos gubernamentales..................................................................................... 42 c. Consultas con otros actores....................................................................................................................... 43 B3: Fase de evaluación...................................................................................................................................... 47 a. Potencial de accidente................................................................................................................................ 48 b. Contexto jurídico......................................................................................................................................... 49 c. Recursos disponibles.................................................................................................................................... 51 B4: Fase de desarrollo........................................................................................................................................ 55 a. Definición de prioridades............................................................................................................................ 56 b. Selección o adaptación de elementos de un programa para casos de accidentes con productos químicos.........................................................................................................................................57 B5: Fase de implementación.............................................................................................................................. 62 a. Requisitos de recursos (humanos, financieros, técnicos)........................................................................... 64 b. Acceso e intercambio de información .............................................................................................................. 70 c. Estructuras jurídicas y administrativas........................................................................................................... 71 d. Liderazgo: facilitación de la implementación por la industria y otros............................................................. 73 e. Cumplimiento..................................................................................................................................................76 B6: Fase de análisis y revisión ........................................................................................................................... 79 CAPÍTULO C: ELEMENTOS DE UN PROGRAMA PARA CASOS DE ACCIDENTES CON PRODUCTOS QUÍMICOS C1: Introducción.................................................................................................................................................... 80 C2: Ámbito de aplicación del programa.................................................................................................................83 C3: Función de las autoridades competentes (gobierno)....................................................................................94 a. Información general........................................................................................................................................ 94 b. Manejo de la información................................................................................................................................96 c. Inspecciones.....................................................................................................................................................97 d. Planificación de la preparación ....................................................................................................................... 103 e. Identificación del sitio y planificación del uso de suelo .............................................................................. 114 VI C4: Requisitos de la industria (instalaciones peligrosas)........................................................................... a. Información general.................................................................................................................................. b. Cláusula de obligación general ................................................................................................................ c. Notificación............................................................................................................................................... d. Política de prevención y sistemas de gestión de la seguridad................................................................. e. Identificación del peligro y evaluación del riesgo...................................................................................... f. Informes de seguridad.............................................................................................................................. g. Planificación de la preparación................................................................................................................ C5: Información para el público...................................................................................................................... C6: Informes de accidentes, investigación y seguimiento........................................................................... 117 117 119 122 125 131 134 147 153 160 GUÍA COMPLEMENTARIA SG-1: Guía sobre sistemas de gestión de la seguridad....................................................................................... SG-2: Guía sobre evaluación de riesgo............................................................................................................... SG-3: Guía sobre planificación de emergencias.................................................................................................. SG-4: Guía sobre aspectos de salud de accidentes con productos químicos...................................................... SG-5: Guía sobre conductos................................................................................................................................ SG-6: Guía sobre investigación de accidentes.................................................................................................... 165 171 178 182 186 189 ANEXOS Anexo I: Definición de términos........................................................................................................................ 191 Anexo II: Siglas................................................................................................................................................... 194 a. Siglas generales......................................................................................................................................... 196 b. Siglas de organizaciones a las que se hace referencia en esta Guía....................................................... 196 Anexo III: Listas de sustancias químicas de interés ............................................................................................ 200 a. Unión Europea: Lista de sustancias químicas y umbrales (Directiva Seveso II).................................................. 201 b. Estados Unidos: Lista de sustancias químicas y umbrales (Programa del Plan de Gestión de Riesgos)..................................................................................................................................................... 208 c. Suiza: Criterios para umbrales y lista de excepciones (Ordenanza sobre protección contra los accidentes mayores – MAO 1991............................................................................................................... 217 d. Corea: Lista de sustancias químicas y umbrales (Ley de Seguridad Industrial y Salud)........................... 219 Anexo IV: Lista consolidada de actividades para desarrollar un programa para casos de accidentes con productos químicos....................................................................................................... 220 Anexo V: Otras iniciativas internacionales............................................................................................................. 224 Anexo VI: Bibliografía seleccionada....................................................................................................................... 235 a. Publicaciones.............................................................................................................................................. 235 b. Instrumentos jurídicos.................................................................................................................................. 242 c. Informes de accidentes y estudios de casos............................................................................................... 243 d. Organizaciones y sus sitios Web................................................................................................................ 244 TABLAS Tabla I: Información general de algunos accidentes notables..................................................................... Tabla II: Actividades de interés y sus peligros típicos................................................................................... Tabla III: Pérdida de la contención.................................................................................................................... Tabla IV: Etapas en el desarrollo e implementación de un programa para casos de accidentes con productos químicos.................................................................................... Tabla V: Elementos de un programa de prevención y preparación para casos de accidentes con productos químicos.................................................................................................................. CUADROS DE TEXTO Cuadro 1: El Marco Flexible en un contexto internacional.......................................................................... Cuadro 2: Funciones de los actores............................................................................................................... VII 20 28 31 39 81 5 15 Cuadro 3: Consultas con actores claves no gubernamentales................................................................... 44 Cuadro 4: Perfiles nacionales para la gestión de sustancias químicas .................................................... 50 Cuadro 5: Recursos usados en la implementación de un programa para casos de accidentes con productos químicos (Código de Prácticas de la OIT para la Prevención de Accidentes Industriales Mayores) .................................................................................................... 67 Cuadro 6: Rol de liderazgo......................................................................................................................... 76 Cuadro 7: Sistema Globalmente Armonizado de Clasificación y Etiquetado de Productos Químicos (GHS)....................................................................................................................................... 86 Cuadro 8: Enfoques alternativos para especificar el ámbito de aplicación de un programa para casos de accidentes con productos químicos........................................................................ 87 Cuadro 9: Funciones claves de las autoridades competentes (gobierno)........................................................95 Cuadro 10: Temas que deben tratarse en la planificación para la preparación en casos de emergencia…......................................................................................................................................... 105 Cuadro 11: Ayuda internacional en caso de una emergencia ambiental / accidente industrial de gran magnitud..............................................................................................................112 Cuadro 12: Sistemas de gestión de seguridad ....................................................................................................... 129 Cuadro 13: Prevención de accidentes con sustancias químicas: seguridad inherente.............................. 130 Cuadro 14: Informes de seguridad ............................................................................................................................ 136 Cuadro 15: Información para el público...............................................................................................................154 VIII RESUMEN EJECUTIVO Es importante que cada país considere si debiera iniciar un esfuerzo para desarrollar, revisar y/o mejorar su programa de accidentes con productos químicos. El PNUMA creó esta Guía para apoyar dichos esfuerzos. Casi todos los países experimentan accidentes con productos químicos cada año. Estos ocurren en pequeñas instalaciones como depósitos de pesticidas y en instalaciones grandes como refinerías, en instalaciones públicas que incluyen plantas de tratamiento de agua con cloro o fábricas privadas para las industrias químicas, farmacéuticas y de productos de consumo, en lugares urbanos y parques industriales o en áreas rurales donde pudiera haber operaciones mineras o establecimientos de refrigeración. Algunos de estos accidentes son bien conocidos: Seveso, Bhopal, Schweizerhalle, Baia 1 Mare, etc. La mayoría de los accidentes no reciben buena publicidad y probablemente no sean conocidos más allá de sus fronteras. Sin embargo, los accidentes a menudo tienen consecuencias graves, hasta devastadoras: los trabajadores resultan heridos o mueren; el público está expuesto a productos químicos o incendios que resultan en lesiones inmediatas o impactos sobre la salud a largo plazo, los ríos y fuentes de agua subterráneas son contaminados y, a su vez, impactan el agua potable y las industrias que dependen del agua, esto incluye la pesca y la agricultura; las instalaciones y obras cercanas sufren daño significativo lo que resulta en el cierre de compañías o el cierre temporal de las operaciones; y otros efectos adversos sobre la salud, el ambiente y la propiedad. Los líderes políticos a menudo son acusados cuando sucede un accidente debido a una falla en reconocer los riesgos y tomar acción adecuada para proteger a sus ciudadanos y comunidades. La acción efectiva para tratar los temas concernientes a la prevención y preparación de accidentes requiere de un compromiso político y los esfuerzos coordinados de diferentes agencias y organizaciones que tienen una función que desempeñar que incluye a las entidades gubernamentales responsables de la protección ambiental, la seguridad y salud ocupacional, la salud pública, la defensa civil, la respuesta a emergencias y el desarrollo industrial, así como la industria, los trabajadores, los grupos comunitarios y otras organizaciones no gubernamentales. Se debiera coordinar un esfuerzo para desarrollar un programa en caso de accidentes con productos 2 químicos y éste debiera ser parte de un esfuerzo general para tratar la seguridad química. Con base en el interés de los países por tratar de reducir los accidentes con productos químicos y mitigar los impactos de aquellos accidentes que ocurren, el PNUMA reunió a un grupo de expertos para que prepararan esta Guía. Los miembros del Grupo de Trabajo de Expertos tienen vasta experiencia en la implementación de programas nacionales e internacionales para la prevención y preparación de accidentes con productos químicos. Esta Guía se centra en la prevención y preparación en instalaciones fijas y está diseñada para ayudar a los países a establecer un programa que sea adecuado para sus circunstancias particulares, incluidos el nivel y la naturaleza de los riesgos, los recursos disponibles y el contexto jurídico y cultural. Por consiguiente, se titula “Marco Flexible” y refleja el hecho de que está hecho para ser usado por cualquier país, independientemente de su ubicación, tamaño o nivel de industrialización, con la expectativa de que cada país diseñe su propio programa. Además, se reconoce que muchos países comenzarán con un programa pequeño y limitado y lo expandirán conforme la experiencia y los recursos lo permitan. Específicamente, esta Guía establece un proceso para ayudar a los países, por ejemplo: ▪ obtener los compromisos necesarios y establecer mecanismos de coordinación; 1 La Tabla 1 en la página 20 proporciona información adicional (Aspectos generales de algunos accidentes notables). Esto es consistente con el objetivo de la iniciativa internacional titulada SAICM – Enfoque Estratégico para la Gestión de las Sustancias Químicas a Nivel Internacional (véase la página II). 2 1 ▪ identificar y priorizar los peligros y riesgos en su país; ▪ determinar qué autoridad y recursos existen y dónde están las brechas; ▪ identificar qué aspectos de un programa en caso de accidentes químicos se adecuan a sus circunstancias (proporcionando guía sobre cómo implementar cada uno de estos aspectos); e ▪ implementar el programa. Esta Guía ofrece ejemplos de cómo las leyes y los acuerdos internacionales existentes tratan varios aspectos de un programa en caso de accidentes con productos químicos. También contiene información sobre otros materiales y recursos que están disponibles para apoyar el esfuerzo de un país. La presente Guía reconoce que puede ser difícil atraer la atención hacia este tema hasta que ocurra un accidente considerable, y que existen muchos temas que compiten por recursos limitados, pero las consecuencias potenciales de la falta de acción son muy graves y los beneficios de la implementación de un programa son claros. Estos beneficios no solamente incluyen el daño que se evita al prevenir o mitigar los accidentes, sino también de los ahorros financieros indirectos debido, por ejemplo, a una mayor eficiencia y costos de producción más bajos, mejoras en el desempeño ambiental en general, y mayor buena voluntad y apoyo comunitario. 2 Capítulo A: Introducción A1: Propósito de esta Guía de Marco Flexible El propósito de esta Guía es apoyar a cualquier gobierno que quiera desarrollar, mejorar o revisar su programa para la prevención y preparación en caso de accidentes con productos químicos en instalaciones peligrosas. Todos los países deberían revisar su programa de accidentes químicos a fin de identificar las oportunidades para prevenir o reducir la probabilidad de accidentes químicos y mejorar la preparación con el propósito de minimizar cualquier impacto en las personas, las comunidades, el medio ambiente y la propiedad en caso de que ocurra un accidente. Esto incluye grandes y pequeños países, ya sea que tengan riesgos significativos de accidentes con productos químicos (por ejemplo, un país con grandes instalaciones químicas) o con riesgos más limitados (por ejemplo, un país sin industrias de fabricación de productos químicos o de procesamiento pero que tiene varios depósitos o pesticidas, instalaciones para el tratamiento de agua que usan cloro y/o un puerto que recibe productos químicos a granel en tránsito hacia otros países). Los accidentes químicos, tales como un incendio en un depósito de pesticidas, fugas en un contenedor que está siendo descargado de un buque, una explosión en una refinería, un derrame en un oleoducto vandalizado, una fuga en un tanque o poza de relave de minería, un nube de vapor que resulta de un problema en el proceso de mantenimiento o una explosión de polvo en un silo de granos, pueden causar la muerte y graves heridas a los trabajadores y a la población local, así como efectos significativos a largo plazo en la salud de la población. Los accidentes con productos químicos pueden afectar al ganado, las cosechas y los suministros de agua y pueden causar daño ambiental considerable. También pueden resultar en pérdidas económicas de consideración para la empresa involucrada o para toda la comunidad. Esta Guía se centra solamente en los temas relacionados con la prevención y preparación de accidentes con productos químicos. Por consiguiente, no trata sobre los temas más amplios de la salud ocupacional y la seguridad, ni tampoco sobre la contaminación crónica y continua que pudiera darse en las mismas instalaciones que son el objetivo de un programa de accidentes con productos químicos. Esta Guía está diseñada específicamente para brindar orientación práctica y puede ser usada en distintos países. Por lo tanto, este documento contiene mucha información. Su tamaño y la cantidad de detalles que contiene no implican que un país tenga que tratar todos los temas descritos en el mismo. Cada país puede usar esta Guía para desarrollar un programa en caso de accidentes con productos químicos que se adecue a sus riesgos particulares y sea consistente con su cultura local, su sistema jurídico y la disponibilidad de recursos. La presente Guía refleja más de 30 años de experiencia de países y organizaciones internacionales y, específicamente, se basa en varios acuerdos internacionales, así como en la legislación de la Unión Europea (la Directiva Seveso II) y de los Estados Unidos. En el Cuadro de texto 1 de la Todos los países se enfrentan con limitaciones en la cantidad de personal, fondos, equipo y otros recursos. Esta guía ayuda a los países a comprender cómo pueden identificar los riesgos y evaluar y tratar las prioridades, para lograr el uso más eficiente de los recursos disponibles. Esta Guía tiene como fin animar a los países a hacer lo mejor que puedan en las circunstancias que tienen al centrarse en los temas más importantes, aprovechando la información y asistencia que está disponible, y estar dispuestos a pedir apoyo e involucrar a actores dentro del país (por ejemplo, de la industria, los trabajadores, el campo médico, los académicos, las organizaciones no gubernamentales), para que se puedan beneficiar de sus ideas y experiencia. Más aún, esta Guía reconoce que la implementación de un programa en caso de accidentes con productos químicos es un proceso, que puede comenzar con pequeños pasos y crecer y mejorar con el tiempo. 3 página 5 aparece información adicional (Marco Flexible en un Contexto Internacional). Para ayudar a los países a usar esta Guía, el PNUMA está desarrollando materiales de capacitación y estudios de casos relacionados. Además, existen otras fuentes internacionales de asistencia e información de apoyo a los esfuerzos de un país para tratar la prevención y preparación de accidentes con productos químicos. Algunos de estos están descritos en esta Guía y en el Anexo VI (Bibliografía seleccionada). ¿Por qué un “Marco Flexible”? Esta Guía se titula “Marco Flexible” porque puede ser usada por cualquier país para desarrollar un programa para casos de accidentes con productos químicos que se adecue a sus circunstancias locales. Por lo tanto, NO proporciona un texto jurídico que pueda ser tomado e implementado como un todo. En su lugar, la presente Guía se diseñó como una herramienta para ayudar a los gobiernos en la identificación de sus necesidades y prioridades, y luego crear e implementar instrumentos y mecanismos pertinentes. Cada país debería escoger las partes relevantes de esta Guía y adaptarlas a la luz de factores tales como el tamaño y la naturaleza de sus riesgos químicos, sus estructuras jurídicas y administrativas, la cultura local, los idiomas locales y los recursos disponibles. Se espera que la mayoría de los países implementen su programa de accidentes con productos químicos en etapas, conforme lo permitan las prioridades, los recursos y la experiencia. Específicamente, la presente Guía brinda un marco mediante: la descripción de los pasos que son necesarios para desarrollar, implementar y analizar las leyes, reglamentaciones, políticas, asesoramiento u otros instrumentos que podrían constituir un programa eficaz para casos de accidentes con productos químicos; la determinación de los elementos posibles de esos instrumentos; y el suministro de material de consulta relacionado con el modo en que esos elementos pueden implementarse, basados en iniciativas internacionales, y la experiencia adquirida en aquellos países que han desarrollado durante algunos años programas para casos de accidentes con productos químicos. Para ayudar al lector, a continuación se encuentran las definiciones de algunos términos. Estas definiciones han sido preparadas para los fines de este documento (y no deberían ser consideradas como definiciones acordadas entre organizaciones internacionales o países). Las definiciones han sido tomadas de la publicación OECD Guiding Principles on Chemical nd Accident Prevention, Preparedness and Response (2 ed., 2003) (Principios rectores de la OCDE sobre la prevención, la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos, 2ª edición, 2003), salvo que se indique lo contrario. Los diferentes documentos de la referencia en esta Guía podrían usar distintas definiciones de estos términos. Accidente químico: es un acontecimiento no planificado que involucra sustancias peligrosas que causan o son propensas a causar daño a la salud, el medio ambiente o la propiedad, tales como un derrame, un escape, incendio o explosión. Esto excluye cualquier evento a largo plazo (como la contaminación crónica). Peligro: es la propiedad intrínseca de una sustancia, agente, fuente de energía o situación que tiene el potencial de causar consecuencias no deseadas. 4 Instalación peligrosa: es una planta o sitio industrial fijo en el cual se producen sustancias peligrosas, procesadas, manejadas, almacenadas, usadas o dispuestas de tal manera y cantidad que existe el riesgo de un accidente que involucre sustancia(s) peligrosa(s) que podrían causar daños graves a la salud humana o el medio ambiente, inclusive la propiedad. Sustancia peligrosa: es un elemento, compuesto, mezcla o preparación que por virtud de sus propiedades químicas, físicas, o (eco) toxicológicas, constituye un peligro. Las sustancias peligrosas también incluyen sustancias que normalmente no se consideran peligrosas pero que bajo circunstancias específicas (por ejemplo, incendio o reacciones descontroladas) reaccionan contra otras sustancias o condiciones de operación (como la temperatura o presión) para generar sustancias peligrosas. Programa de accidentes con productos químicos: este documento procura incluir la recopilación de leyes, reglamentos, políticas, orientación y demás instrumentos desarrollados por un país para tratar los diversos aspectos de la prevención y preparación de accidente con productos químicos. Estos aspectos pueden ser administrados por diferentes autoridades a nivel nacional, regional y/o local. Es necesario reconocer que aunque esta Guía no trate sobre la respuesta y recuperación de accidentes con productos químicos, estos constituyen aspectos importantes de un programa completo de accidentes con productos químicos (Nota: esta definición fue desarrollada solamente para esta Guía). Estas definiciones fueron extraídas del Anexo I (Definición de términos). contiene una lista de siglas. El Anexo II (Siglas) Cuadro de texto 1 EL MARCO FLEXIBLE EN UN CONTEXTO INTERNACIONAL Esta Guía de Marco Flexible refleja más de 30 años de experiencia en el tratamiento de la prevención y preparación de accidentes con productos químicos. Específicamente, esta Guía toma en cuenta varios acuerdos internacionales, así como una serie de iniciativas internacionales. También toma en cuenta los enfoques utilizados por los países miembros de la Unión Europa, (como se refleja en la Directiva Seveso II) y otros países como los Estados Unidos. Los acuerdos internacionales relevantes incluyen: – El Convenio 174 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre Prevención de Accidentes Industriales Mayores (adoptado en 1993), que trata tanto la prevención como la limitación de las consecuencias de accidentes mayores que involucran sustancias peligrosas. Se aplica a toda instalación expuesta a peligros mayores, que se define por la presencia de cantidades de sustancias peligrosas que exceden un umbral específico. Se permite que los estados que lo ratificaron apliquen una gran discrecionalidad en la aplicación del Convenio (y, por ende, este Marco Flexible puede asistir en la implementación del Convenio de la OIT). El texto completo se encuentra disponible en inglés en: http://www.ilo.org/ilolex/english/convdisp1.htm. En el sitio Web de la OIT se encuentran disponibles una serie de convenios, recomendaciones y documentos de orientación de la OIT. Algunos de ellos están enumerados en el Anexo VI (Bibliografía seleccionada). – El Convenio de la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa (CEPE/ONU) sobre los efectos transfronterizos de los accidentes industriales 5 (firmado en 1992) que se elaboró para proteger la salud humana y el medio ambiente de los accidentes industriales. El Convenio promueve la cooperación activa entre países antes, durante y después que ocurre un accidente industrial. El enfoque del Convenio es en accidentes industriales con consecuencias transfronterizas. El texto completo está disponible en: http://www.unece.org/env/teia/about.html. La Guía relacionada con este convenio está disponible en la página Web de la CEPE/ONU. Con respecto a los enfoques nacionales, esta Guía se centra en la experiencia de Europa y de los Estados Unidos: – En la Unión Europea, la legislación clave es la Directiva Seveso II. El accidente de Seveso en 1976 motivó la adopción de legislación dirigida a la prevención y control de dichos accidentes. En 1982, se adoptó la primera Directiva de la Unión Europea 82/501/CEE – la llamada Directiva Seveso. El 9 de diciembre de 1996, la Directiva Seveso fue reemplazada por la Directiva de Consejo 96/82/CE, la llamada Directiva Seveso II. Esta directiva fue extendida por la Directiva 2003/105/CE. La Directiva Seveso II se aplica a algunos miles de establecimientos industriales donde existen sustancias peligrosas en cantidades que exceden los umbrales en la Directiva. El texto completo de la Directiva está disponible en: http://ec.europa.eu/environment/seveso/index.htm. Con el fin de asistir a los países con la aplicación de la Directiva Seveso II, el Comité Europeo, principalmente a través de su Oficina de Riesgos de Accidentes Graves (MAHB) en el Centro de Investigación Conjunta, ha elaborado varios documentos de orientación y bases de datos. Estos se encuentran disponibles en: http://mahb.jrc.ec.europa.eu. – En los Estados Unidos, el Congreso aprobó una serie de leyes cuya intención era minimizar la probabilidad y las consecuencias de los accidentes químicos catastróficos. La primera ley importante fue la Ley de Planificación de las Emergencias y del Derecho a la Información Comunitaria de 1986 (EPCRA, por su sigla en inglés), que se centraba en la planificación de emergencia en las comunidades. Las Enmiendas de la Ley de Aire Limpio (CAA) de 1990 (sección 112(r)) le solicitó a la EPA que desarrollara reglamentos y orientación para prevenir accidentes con productos químicos en instalaciones que utilizan sustancias peligrosas que pudieran afectar al público y al ambiente fuera del sitio. La Regla del Plan de Gestión de Riesgos (Regla PGR), redactada para implementar la sección 112(r), requiere que las compañías de todos los tamaños que usan ciertas sustancias inflamables y tóxicas desarrollen un Programa de Gestión de Riesgo. Los detalles sobre estas leyes y la Regla PGR, así como una serie de documentos de orientación, se pueden encontrar en: www.epa.gov/emergencies. Esta Guía fue diseñada para complementar otras iniciativas internacionales relacionadas con la prevención y preparación de accidentes con productos químicos. Además de la OIT y la CEPE/ONU, otros organismos de Naciones Unidas y organizaciones intergubernamentales han preparado materiales que brindan consejos y recursos valiosos para aquellos países que quieren crear o mejorar su programa de accidentes con productos químicos. Estas organizaciones incluyen: • El PNUMA y, en particular, su Programa de Concientización y Preparación para 3 Emergencias a Nivel Local (APELL); 3 Mientras que el Marco Flexible está diseñado para apoyar los esfuerzos nacionales para mejorar la prevención y preparación de accidentes con productos químicos, el enfoque de APELL es en las comunidades donde están ubicadas las instalaciones peligrosas, creando un proceso para construir asociaciones entre las industrias, las autoridades locales y el público. Como un proceso local para la comunicación y coordinación de peligro, en tierra el APELL es un marco compartido „de propiedad‟ de la comunidad local y de sus servicios de rescate. El proceso APELL consiste de una herramienta metodológica flexible y modular para prepararse para accidentes y, en caso de que esto falle, minimiza sus impactos, 6 • • • 4 la Organización Mundial de la Salud; la Unidad Conjunta para el Medio Ambiente del PNUMA/OCAH; y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico. También existe información valiosa de iniciativas no gubernamentales y de países en particular. La página 225 del Anexo V (Otras iniciativas internacionales) contiene más información, y en el Anexo VI (Bibliografía seleccionada) en la página 235 aparecen listadas las direcciones de la Web de varias de estas organizaciones. A2: ¿Por qué establecer un programa de accidentes con productos químicos? Dichos programas ayudan a prevenir los accidentes y limitar cualquier impacto que estos puedan causar y, de esa manera evitar o minimizar el riesgo para las personas y el daño al medio ambiente y la propiedad. Hay muchos ejemplos de accidentes con productos químicos: derrames no intencionados, escapes, incendios y explosiones que han resultado en lesiones graves, catástrofes ambientales, dificultades económicas y otros daños significativos. Mientras que algunos de estos accidentes son bien conocidos y hasta identificados internacionalmente solamente con mencionar el lugar (Bhopal, Seveso, Baia Mare), han habido muchos más a los que no se les ha dado mucha publicidad. Además, siguen ocurriendo accidentes significativos en todo el mundo en pequeños y grandes países y en pequeñas y grandes instalaciones. Véase las Tablas I, II y III al final de este Capítulo, para obtener información sobre accidentes más conocidos, en actividades potencialmente peligrosas y ejemplos de pérdida de contención, respectivamente. Salvando vidas, protegiendo la salud y el ambiente Los accidentes con productos químicos pueden causar impactos devastadores en la salud humana y el ambiente. Pueden provocar, por ejemplo, daño directo e inmediato a los trabajadores y a otras personas en los alrededores que están expuestos a los químicos nocivos o que son lesionados por una explosión o incendio. Las exposiciones agudas a los productos químicos también pueden provocar consecuencias a largo plazo sobre la salud, que incluyen enfermedades crónicas y cáncer. Las personas también pueden verse afectadas por el contacto indirecto a través de su dieta como resultado de agua potable contaminada, productos agrícolas, peces, ganado y otros alimentos, debido al aire contaminado, al agua de superficie y al suelo. permite que los tomadores de decisiones y el personal técnico aumenten la concientización de la comunidad y preparen planes de respuesta coordinados. 4 Los eventos químicos que son motivo de preocupación de la salud pública internacional están sujetos a los Reglamentos Internacionales de Salud revisados del 2005 (IHR 2005) que entraron en vigencia el 15 de junio del 2007. El propósito y alcance del nuevo IHR consiste en la prevención, protección contra, control y suministro de una respuesta de salud pública a la propagación internacional de una enfermedad. El alcance de las obligaciones no está limitado a una enfermedad específica o forma de transmisión, sino a condiciones, independientemente de la fuente, que pudiera presentar un daño significativo a los seres humanos. Por consiguiente, los eventos que caen bajo los IHR (2005), no están restringidos a las enfermedades transmisibles con potencial epidémico y pandémico, sino también incluyen emergencias debido a la contaminación con toxinas, químicos o material radiactivo debido a fugas industriales. Por consiguiente, se requiere que los estados desarrollen una capacidad básica para manejar los eventos químicos que pueden constituir una emergencia a la salud pública de preocupación internacional (PHEIC). 7 La liberación de sustancias peligrosas al aire, agua y suelo puede tener consecuencias ambientales graves, matando a animales y a la vegetación, envenenando los suministros de agua para beber, pescar y la irrigación, y haciendo que el suelo no sea adecuado para la agricultura. Impactos económicos Es difícil calcular los costos y beneficios de implementar un programa de accidentes con productos químicos. Sin embargo, existen pruebas convincentes que indican que la prevención y preparación de accidentes es una sabia inversión, ya que los costos para mejorar la seguridad son menores 5 que los costos ocasionados por los accidentes . Además del impacto potencial sobre la salud humana, los accidentes pueden causar daño económico considerable, tanto para la empresa como para la comunidad. Los costos asociados con la respuesta, limpieza y recuperación, inclusive la respuesta de salud, como por ejemplo, el tratamiento médico, pueden ser bastante significativos. Es obvio que la empresa donde ocurrió el accidente puede sufrir pérdidas económicas significativas (desde por ejemplo, daño a la propiedad, pérdida de empleos, tener que detener las operaciones por un largo período o hasta irse a la bancarrota). Lo que no es tan obvio son los costos para otras industrias en los alrededores del accidente. Por ejemplo, un accidente puede contaminar las vías acuáticas locales haciendo que aumenten los costos del agua para beber y para la agricultura y provocar un daño significativo a la industria de la pesca. Los proveedores y clientes de la empresa también se verán impactados. Además del ahorro directo que deriva de evitar un accidente, existen beneficios financieros indirectos de un programa para casos de accidentes con productos químicos. Por ejemplo, esos programas con frecuencia conducen a mejorar la eficiencia y disminuir los costos de producción, así como a mejorar la salud en general, la seguridad y el desempeño ambiental de las empresas. Las operaciones seguras también protegen la buena voluntad y la reputación de la industria y de las autoridades públicas, y fomentan mejores relaciones con los miembros de las comunidades locales. Beneficios políticos Existen beneficios políticos significativos al tener un programa eficaz de accidentes con productos químicos. A nivel internacional, dichos programas pueden ayudar a los países a cumplir con acuerdos internacionales o recomendaciones relacionados con la reducción de riesgos químicos que incluyen los convenios de la OIT y la CEPE/ONU y el Reglamento Sanitario Internacional de la OMS del 2005. Este Marco Flexible también debería ayudar a los países a participar eficazmente en los esfuerzos de cooperación internacional bajo los auspicios del PNUMA, la OIT, la OMS, la CEPE/ONU, la OCDE y otras organizaciones internacionales. A nivel nacional, un programa de accidentes con productos químicos puede ayudar a mejorar la cooperación y la coordinación entre las muchas agencias y organismos con responsabilidades relevantes, inclusive aquellos con mandatos relacionados con la protección ambiental, la salud ocupacional y la seguridad, la salud pública, la defensa civil, la respuesta a emergencias (incendio, policía, médico, materiales peligrosos [HAZMAT]), la planificación de uso de suelo, el desarrollo industrial, la minería y la agricultura. A nivel local, el desarrollo de un programa eficaz de accidentes con productos químicos tiene implicaciones políticas significativas. El programa brinda una plataforma para mejorar la comunicación y la confianza entre los líderes locales, el público y otros actores. Además, las 5 Véase, por ejemplo, CCPS, The Business Case for Process Safety, (2a edición, 2006). 8 comunidades normalmente culpan a los líderes locales por los accidentes si no ha habido una advertencia adecuada o una respuesta apropiada. A3: Ámbito de aplicación de la presente Guía El presente documento brinda asesoramiento a los gobiernos que deseen tratar los riesgos asociadas con “instalaciones peligrosas”. Específicamente, esta Guía se centra en: ▪ la prevención de accidentes con productos químicos, v.gr., evitar incidentes y disminuir los impactos de cualquier incidente, así como aprender de la experiencia 6 para controlar los peligros y reducir los riesgos; y ▪ la preparación para accidentes con productos químicos, v.gr., estar listo para accidentes, y capacitados para actuar, antes que inicie un incidente. Esto involucra establecer los sistemas y recursos necesarios para una respuesta de emergencia adecuada en caso de un accidente, que incluye el diagnóstico y tratamiento de personas lesionadas y la comunicación con el público. ¿Qué son los accidentes con productos químicos? Para fines de esta Guía, un accidente con productos químicos se define como cualquier evento no planificado que involucra sustancias peligrosas que causan o es probable que provoquen daños a la salud, el ambiente o la propiedad. Esto excluye cualquier evento a largo plazo o vigente (como la contaminación crónica). Los tipos de accidentes tratados en esta Guía incluyen cualquier pérdida repentina de contención, explosión o incendio que involucre productos químicos en instalaciones fijas. Generalmente, la causa de los accidentes con productos químicos son las fallas tecnológicas no intencionales, la negligencia o los errores humanos (o una combinación de ellos). Pero también puede ser el resultado de desastres naturales o de acciones intencionales (como sabotaje, vandalismo o robo). La Tabla I (Información general de algunos accidentes notables) en la página 20 describe varios accidentes con productos químicos muy conocidos, como: Flixborough (Reino Unido 1974); Seveso (Italia 1976); Bhopal (India 1984); Ciudad de México (México 1984); Basilea (Suiza 1986); Pasadena (EE.UU. 1989); Baia Mare (Rumania 2000); Enschede (los Países Bajos 2000); Toulouse (Francia 2001); ciudad de Texas (EE.UU. 2005); Jilin, río Songhua (China 2005); y Buncefield (Reino Unido 2005). Como se ha observado, han habido y siguen ocurriendo a nuestro entender, muchos accidentes con productos químicos que no se divulgan y ocurren en todo el mundo, cuyo origen se encuentra tanto en establecimientos grandes como en pequeños. ¿Qué son instalaciones peligrosas? Las instalaciones peligrosas son definidas como plantas o sitios industriales fijos en donde se producen, procesan, manipulan, almacenan, usan o desechan sustancias peligrosas, en formas y 6 Para propósitos de esta Guía, los términos peligro y riesgo se definen de la siguiente manera: • peligro es la propiedad inherente a una sustancia, un agente, una fuente de energía o una situación que tiene el potencial de provocar consecuencias no deseadas; y • riesgo es la combinación de una consecuencia y la probabilidad de que ocurra. Estas definiciones se basan en la publicación Principios rectores de la OCDE sobre la prevención, la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos, 2ª edición, 2003. 9 volúmenes que presentan un riesgo de accidente que involucre sustancia(s) peligrosa(s) y que puede provocar un daño grave a la salud humana o al medio ambiente, incluso a la propiedad. Esta Guía está centrada en las instalaciones fijas tales como fábricas, instalaciones de 7 almacenamiento y conexiones de transporte. Cuando se considera si un tipo determinado de instalación debe estar sujeto a controles como parte de un programa para casos de accidentes con productos químicos, el criterio principal debe ser el nivel de riesgo que representa dicha instalación, El nivel de riesgo no depende del tamaño de la operación, sino de: las sustancias peligrosas específicas que se encuentran en la instalación; la cantidad de esas sustancias; la naturaleza de los procesos y los sistemas de seguridad involucrados; y el alcance y la naturaleza de la población, el medio ambiente y la propiedad que podría recibir el impacto en caso de accidente. Por lo tanto, los programas para casos de accidentes con productos químicos no deben limitarse a las grandes empresas. También deben incluirse las pequeñas y medianas empresas que podrían constituir riesgos significativos de accidentes con productos químicos. Además, las instalaciones peligrosas no están limitadas a la industria química, de pesticidas y petroquímica. Existen muchos tipos de industrias y establecimientos que usan, almacenan o fabrican productos químicos peligrosos y, por consiguiente, representan un riesgo de accidente con productos químicos significativo. Según los antecedentes de accidentes previos, estos podrían incluir: la producción de sustancias químicas de especialidad y a granel; productores y embaladores de pesticidas; plantas de fertilizantes; establecimientos farmacéuticos; fabricantes de plástico y caucho; generadores de energía; almacenamiento de gas licuado de petróleo (GLP) y gas natural licuado (GNL), establecimientos de suministro y distribución de energía; conductos de petróleo y sustancias químicas; conexiones de transporte; establecimientos de procesamiento de sustancias químicas asociadas a la minería; depósitos de productos químicos o pesticidas a granel o como productos embalados; fabricantes o depósitos de explosivos / pirotecnia; instalaciones de refrigeración; fabricantes de productos de consumo tales como electrodomésticos o materiales pintados; refinamiento y procesamiento de metales; fabricantes de cerámicas; establecimientos de disposición de residuos; plantas de tratamiento de agua y establecimientos que utilicen o almacenan cloro o propano. También es importante recordar que los accidentes con productos químicos no se limitan a instalaciones de propiedad privada. Los establecimientos públicos o las instalaciones operadas por organizaciones gubernamentales, quizás también pueden representar riesgos importantes (por ejemplo, establecimientos donde se realiza el tratamiento de aguas o la disposición de residuos, el almacenamiento de cloro u otras sustancias químicas peligrosas, los generadores de energía, los centros de clasificación, y las empresas de servicios públicos). 7 Las conexiones de transporte se definen como: áreas fijas (identificadas) donde las sustancias peligrosas (bienes peligrosos) se transfieren de un tipo de transporte a otro (por ejemplo, carretera a ferrocarril, o de buque a conducto); dentro de un mismo tipo de transporte, de un equipo a otro (de un camión a otro); de un tipo de transporte a una instalación fija o de la instalación a un tipo de transporte; o se almacenan en forma temporal durante la transferencia entre tipos de transporte o equipos. Por consiguiente, las conexiones de transporte incluyen los establecimientos de transferencia, la retención o el mantenimiento temporal de sustancias peligrosas durante la transferencia de la carga (por ejemplo, depósito), y la manipulación de vehículos dañados o bienes derramados. Entre los ejemplos se incluyen: centros ferroviarios de clasificación, zonas portuarias, dársenas de recepción / carga en instalaciones peligrosas; terminales para carreteras y para transporte intermodal entre carretera, ferrocarril, aeropuertos y establecimientos de transferencia en instalaciones fijas. 10 El transporte de sustancias peligrosas: esta Guía se centra en las instalaciones fijas y, por lo tanto, esta Guía no trata temas que se relacionan únicamente con accidentes de transporte tales como la condición de los vehículos para circular, la carga y descarga de sustancias peligrosas (por ejemplo, no a la sobrecarga, estabilidad de la carga), capacidad de los conductores o la identificación de rutas adecuadas. Sin embargo, muchos de los aspectos de la Guía se aplican a accidentes de transporte, particularmente con respecto a la planificación de la preparación. También existe una correlación entre la seguridad del transporte y la seguridad de los establecimientos. No obstante no haya sido tratado específicamente en el presente documento, el transporte de mercancías peligrosas por carretera/camiones, trenes, barcos o aviones es un tema importante y 8 debería ser abordado en el programa general de un país para tratar los riesgos químicos. Aunque muchos países tratan temas relacionados con el transporte de mercancías peligrosas en 9 legislaciones diferentes del tema de la seguridad de las instalaciones peligrosas, es posible tener una sola ley o política que trate con ambos aspectos. Por ejemplo, la Ordenanza suiza sobre protección contra los accidentes mayores (MAO 1991), se aplica tanto a instalaciones fijas donde están ubicadas las sustancias peligrosas especificadas por encima de las cantidades umbral establecidas (véase Anexo III [Listas de sustancias químicas de interés]) en la página 200 que muestra el concepto suizo para definir las cantidades umbral), así como para rutas de transporte utilizadas para el embarque de bienes peligrosos por líneas de 10 ferrocarril, carreteras y el río Rin. En cualquiera de los casos (ya sea que haya un sistema para instalaciones fijas y transporte o si son tratadas en diferentes instrumentos jurídicos con diferentes autoridades principales), es importante que los funcionarios pertinentes coordinen sus esfuerzos para lograr objetivos de seguridad integrales y eviten tomar la decisión de aumentar la seguridad en un sector y tener como resultado el aumento en los riesgos en otro. Por ejemplo, la decisión de reducir inventarios de sustancias peligrosas en una planta de procesamiento de productos químicos pudiera tener como resultado una instalación más segura pero aumentaría el riesgo de accidentes de transporte debido a la necesidad de entregas más frecuentes. Conductos: Las sustancias petroquímicas y otras sustancias peligrosas con frecuencia son transportadas a través de conductos que cuentan con algunas de las características de las instalaciones fijas pero también plantean una preocupación especial con respecto a la prevención y preparación para casos de accidentes con productos químicos. La Guía Complementaria (SG) 5 (Guía sobre conductos) en la página 186 contiene más información sobre cómo mejorar la seguridad de los conductos. 8 Las Naciones Unidas ha desarrollado mecanismos para ayudar a reducir el riesgo de accidentes de transporte que involucren bienes peligrosos y promuevan la consistencia entre los sistemas reguladores en diferentes países y entre distintos tipos de transporte. Los mecanismos de las Naciones Unidas incluyen la armonización de los reglamentos que conciernen los criterios de clasificación de peligros y las herramientas de comunicación de peligro (GHS) y reglamentos armonizados concernientes a las condiciones para todos los tipos de transporte (TDG). Además, las Naciones Unidas ha desarrollado reglamentos para el transporte terrestre, marítimo y aéreo. Estos incluyen: • • • • ADR para transporte terrestre internacional (principalmente en Europa); RID para el transporte ferroviario internacional (principalmente en Europa); Código Marítimo Internacional de Mercancías Peligrosas (IMDG) para transporte marítimo; y ICAO-TI (IATA-DGR) para transporte aéreo. Para guía adicional para tratar el transporte de bienes peligrosos, véase el Anexo VI (Bibliografía seleccionada) en la página 235. 9 Los documentos clave que aparecen como referencia en esta Guía, incluso los Convenios de la OIT y la CEPE, la Directiva Seveso y las leyes de los Estados Unidos, se centran en las instalaciones fijas. 10 La Ordenanza Suiza también se aplica a las instalaciones que contienen microorganismos peligrosos naturales o genéticamente modificados. 11 ¿Qué no incluye esta Guía? Esta Guía se centra en la prevención y preparación para casos de accidentes con productos químicos en instalaciones fijas, y por lo tanto, no trata los siguientes temas: ▪ Temas generales relacionados con la salud ocupacional y la seguridad, inclusive por ejemplo, los accidentes que no involucran sustancias peligrosas (tales como empleados que sufren heridas a consecuencia de una caída o un shock eléctrico). ▪ Contaminación crónica (emisiones regulares o continuas) o la disposición de desperdicios peligrosos. ▪ Respuesta de emergencia – mientras que un enfoque integral de los accidentes en caso de productos químicos involucraría la constancia de seguridad total (por ejemplo: la prevención, preparación, respuesta y recuperación), esta Guía se enfoca en la prevención y preparación, a la vez que reconoce que la atención a la prevención y preparación lleva a una mejor 11 respuesta. Una razón por la cual no se incluye un capítulo sobre respuesta en esta Guía es porque, en la mayoría de los países, el tema de la respuesta de emergencia es tratado en un contexto regulador diferente que la prevención y la preparación. A menudo la respuesta es una responsabilidad compartida entre organismos locales, nacionales y regionales 12 (bomberos, policía, médicos y de materiales peligrosos). Además, existen otras organizaciones internacionales que cuentan con programas que tratan la respuesta de emergencia. ▪ Recuperación de accidentes con productos químicos incluyen la limpieza y restauración a largo plazo. ▪ Transporte de sustancias peligrosas (mercancías peligrosas), conforme se describe a continuación. ▪ Instalaciones o plantas nucleares que procesan materiales radiactivos (excepto que 13 también involucren productos químicos peligrosos). ▪ Seguridad del sitio, por ejemplo, accidentes que resulten de fallas en la seguridad (como por ejemplo, el terrorismo y el vandalismo). Aunque gran parte de lo que se incluye en esta Guía se aplica a cualquier accidente con producto químico, independientemente de la causa, existen consideraciones especiales relacionadas con el tema de seguridad. 11 La preparación crea el marco para la respuesta (y no debe ser solamente un ejercicio en papel). Es importante que la planificación de preparación tome en consideración una evaluación realista de recursos de respuesta y sea consistente con el sistema de respuesta que existe en el país o región. Todos los que pudieran estar involucrados en la respuesta de emergencia debería participar en el proceso de planificación. Y cualquiera que tenga un papel en la prevención, preparación y respuesta de accidentes debería estar coordinando sus esfuerzos y trabajando hacia una visión compartida de los riesgos existentes, las prioridades para tratar estos riesgos, y las implicaciones prácticas de cualquier acción. Además, un aspecto importante de la planificación de preparación son las pruebas de los planes y aprender de la experiencia obtenida en respuesta a los accidentes e incidentes. 12 Las referencias a la orientación relacionada con la respuesta de emergencia están incluidas en el Anexo VI (Bibliografía seleccionada) en la página 235. 13 Una serie de publicaciones concernientes a la seguridad nuclear están disponibles en la página del Organismo Internacional de Energía Atómica. Véase: http://www.iaea.org/Publications/Standards/index.html. 12 A4: Quién debe utilizar la presente Guía La presente Guía está dirigida principalmente a las autoridades gubernamentales que buscan desarrollar o mejorar sus programas para casos de accidentes con productos químicos. También puede utilizarse para examinar los programas existentes para realizar mejoras, identificar vacíos o facilitar la implementación de acuerdos internacionales y normas. Por consiguiente, esta Guía debe ser una ayuda para los países con pocos sistemas o actividades en funcionamiento destinados a tratar la prevención y la preparación para casos de accidentes con productos químicos, así como para países que cuenten con algunas competencias en esta área y deseen determinar si se pueden realizar las mejoras. Esta Guía describe cómo los gobiernos pueden establecer leyes, reglamentos, políticas, programas y otros instrumentos que identifican acciones que deben ser tomadas por la industria, las autoridades y otras instancias para reducir la probabilidad de accidentes con productos químicos y mejorar la preparación para aquellos accidentes que puedan ocurrir. Esta Guía reconoce que los riesgos presentados por las instalaciones peligrosas generalmente no son generados por las autoridades de gobierno y que las empresas tienen la responsabilidad primaria por la seguridad de sus instalaciones peligrosas y por el establecimiento de políticas, 14 programas y procedimientos adecuados de prevención de accidentes. Sin embargo, las autoridades de gobierno deberían tomar medidas para identificar la ubicación de instalaciones peligrosas y establecer sistemas para garantizar que las industrias tratan de forma adecuada la seguridad química y la preparación de emergencia. Esta Guía también reconoce que las autoridades gubernamentales (y otros actores) tienen papeles y responsabilidades importantes para proteger las comunidades, el ambiente y la propiedad. Además, esta Guía enfatiza la importancia de la cooperación y la comunicación entre la industria, las autoridades y otros. El desarrollo e implementación de leyes, reglamentos, políticas y otros instrumentos, no afecta la responsabilidad de los dueños/operadores de instalaciones peligrosas para operar con seguridad. En general, el papel y las responsabilidades del gobierno son compartidos entre diversas autoridades (por ejemplo, ministerios, agencias), así como autoridades de los distintos niveles (nacional, regional y local). Entre ellas, se podría incluir a autoridades responsables de: la protección del medio ambiente, la salud y la seguridad ocupacional, la salud pública, la defensa civil, la respuesta a emergencias (incendio, policía, médico, materiales peligrosos), la planificación del uso de la tierra y el desarrollo industrial. Las leyes, los reglamentos, las políticas y demás instrumentos a menudo son adoptados a nivel nacional (con papeles identificados para las autoridades locales y regionales). Sin embargo, en algunos países las autoridades locales/regionales (por ejemplo, estados, provincias) pueden asumir el liderazgo por algunos o todos los temas tratados en esta Guía. Es imposible recomendar un enfoque particular, ya que la designación de papeles y responsabilidades para los distintos aspectos de la prevención y preparación dependerá del contexto legal, administrativo y cultural de cada país. 14 Véase el Cuadro de texto 2 (Funciones de los actores) en la página 15 para obtener información general sobre las funciones de los actores (industria, autoridades gubernamentales y la población) con respecto a la prevención y preparación de accidentes. 13 Una verdad común para todos los países es la importancia de contar con que todas las autoridades relevantes coordinen sus actividades y cooperen para maximizar la eficiencia de los recursos disponibles, así como de mejorar la eficacia integral del programa para casos de accidentes con productos químicos. También es importante que las autoridades gubernamentales cooperen con los actores no gubernamentales, incluso la industria, los trabajadores, las organizaciones no gubernamentales y las comunidades en riesgo, en caso de un accidente. La coordinación y la cooperación pueden ser difíciles dadas las limitaciones de tiempo y recursos, así como posibles responsabilidades y presiones políticas que se traslapan. Sin embargo, la coordinación eficaz es clave para un programa exitoso en caso de accidentes con productos químicos. 14 Cuadro de texto 2 FUNCIONES DE LOS ACTORES Un aspecto importante de cualquier programa eficaz para la prevención y la preparación en caso de accidentes con productos químicos es la participación de todas las partes interesadas relevantes. En general, la industria tiene una responsabilidad primaria por la seguridad de sus instalaciones peligrosas. Las autoridades gubernamentales son responsables por establecer políticas y objetivos, mediante el desarrollo e implementación de leyes y programas que ayuden a proteger la salud humana, el medio ambiente y la propiedad, así como mediante la motivación de todas las partes interesadas para que procedan de manera segura. También existen otras partes interesadas que tienen funciones que cumplir y, en particular, las comunidades en donde se encuentran ubicadas las instalaciones. A continuación, aparece un resumen de las “mejores prácticas” relacionadas con las funciones y las responsabilidades de las distintas partes interesadas (es decir, los objetivos que deben alcanzarse con el tiempo) extraído de la publicación Principios rectores de la OCDE sobre la prevención, la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos, 2ª edición, 2003. Función de todos los actores • Hacer que la reducción de los riesgos y la prevención de accidentes con productos químicos, así como la preparación y la respuesta eficaz en caso de emergencia sean prioridades a fin de proteger la salud, el medio ambiente y la propiedad. • Comunicar y cooperar con otras partes interesadas respecto de todos los aspectos relativos a la prevención, la preparación y la respuesta en caso de accidente. Función de la industria (incluso de la gerencia y de los trabajadores) Gerencia • Conocer los peligros y los riesgos en los establecimientos en donde se encuentran las sustancias peligrosas. • Promover una “cultura de seguridad” que sea conocida y aceptada en toda la empresa. • Crear sistemas de gestión de la seguridad y monitorear / examinar su implementación. • Utilizar principios “tecnológicos intrínsecamente más seguros” en el diseño y la operación de instalaciones peligrosas. • Ser especialmente cuidadoso con el manejo del cambio. • Prepararse para cualquier clase de accidente que pudiera ocurrir. • Ayudar a otros a cumplir con sus respectivas funciones y responsabilidades. • Buscar el perfeccionamiento continuo. Trabajadores • Actuar conforme a la cultura de seguridad, los procedimientos de seguridad y la capacitación de la empresa. • Hacer todos los esfuerzos posibles por mantenerse informado y suministrar información e intercambiar información con la gerencia. • Ser proactivo con el objeto de ayudar a informar y educar a su comunidad. 15 Función de las autoridades gubernamentales • Buscar desarrollar, hacer cumplir y perfeccionar en forma continua la normativa, las políticas y las prácticas. • Proporcionar el liderazgo necesario a fin de motivar a todos los actores para que cumplan con sus funciones y responsabilidades. • Monitorear la industria con el objeto de asegurar que los riesgos sean tratados en forma adecuada. • Ayudar a asegurar que la comunicación y la cooperación entre los actores sea eficaz. • Promover la coordinación entre las distintas agencias. • Conocer los riesgos que existen dentro de su área de responsabilidad y planificar según corresponda. • Mitigar los efectos de los accidentes a través de medidas de respuesta adecuadas. • Establecer políticas y convenios apropiados y coherentes respecto de la planificación de uso del suelo. Función de otros actores (por ejemplo, las comunidades o la población) • Tener conciencia de los riesgos que existen en su comunidad y saber qué hacer en caso de que se produzca un accidente. • Participar en la toma de decisiones relacionada con instalaciones peligrosas. • Cooperar con las autoridades locales y con la industria en la planificación y la respuesta en caso de emergencia. 16 A5: Cómo usar la presente Guía Esta Guía: ▪ describe un proceso para desarrollar o examinar un programa en caso de accidentes con productos químicos (véase Capítulo B); ▪ establece elementos claves de un programa en caso de accidentes con productos químicos que puede ser adaptado por cualquier país (véase Capítulo C); ▪ proporciona material de consulta adicional (véase Guía Complementaria); e ▪ incluye materiales de referencia (véase Anexos). Contenido del Capítulo B (Cómo desarrollar o mejorar un programa de prevención y preparación para casos de accidentes con productos químicos) El proceso establecido en el Capítulo B incluye una serie de pasos con miras a: ▪ asumir los compromisos necesarios e identificar las agencias relevantes que deben participar en el proceso; ▪ establecer mecanismos de consulta y coordinación adecuados; ▪ identificar las iniciativas locales y relacionadas con la seguridad química; ▪ describir el contexto jurídico existente; ▪ evaluar los riesgos y los recursos disponibles que ayuden a establecer las prioridades; ▪ revisar los posibles elementos de un programa en caso de accidentes con productos químicos, conforme se describe en el Capítulo C, para determinar cuáles son relevantes a la luz de las prioridades; ▪ desarrollar el contenido del programa que podría incluir leyes, reglamentos, políticas y demás instrumentos; ▪ crear las estructuras administrativas, herramientas y procedimientos necesarios; ▪ determinar los necesidad de recursos; ▪ implementar un programa en caso de accidentes con productos químicos que sea específico del país; y ▪ examinar y revisar el programa periódicamente para asegurarse que está funcionando según la intención, y actualizar los instrumentos jurídicos y las políticas a la luz de la experiencia y las prioridades cambiantes. Estas etapas son descritas en cinco fases: Fase inicial; Fase de evaluación; Fase de desarrollo; Fase de implementación y Fase de análisis y revisión. Estas fases están ilustradas en un flujograma que aparece en la Tabla IV (Etapas en el desarrollo e implementación de un programa para casos de accidentes con productos químicos) en la página 39. El Anexo IV (Lista consolidada de actividades para desarrollar un programa para casos de accidentes con productos químicos) que aparece en la página 221, incluye un resumen de los objetivos y las actividades para cada una de estas fases. Las cinco fases no son necesariamente lineales; algunas partes del proceso son iterativas y tendrán que repetirse, y algunos pasos son continuos en lugar de algo que puede ser completado en 17 determinado punto. Por ejemplo, es importante hacer que todas las agencias relevantes y los actores no gubernamentales participen por medio de mecanismos consultivos y de coordinación, y mantener permanentemente dicha cooperación. En esta Guía se enfatiza la implementación. Al tener establecidas leyes y políticas, no importa cuán bien hechas estén, pueden ser insignificantes si no hay suficiente implementación, inclusive cumplimiento. Por lo tanto, es crucial que se le preste atención a los sistemas y procedimientos para la implementación y asignación de recursos adecuados. Contenido del Capítulo C (Elementos de un programa para casos de accidentes con productos químicos) El Capítulo C describe los elementos de la mayoría de los programas en caso de accidentes con productos químicos. Este Capítulo se basa en acuerdos internacionales y la experiencia de varios países que tienen programas de accidentes con productos químicos desde hace varios años. Se recomienda que aquellos países que usen esta Guía examinen los elementos descritos en el Capítulo C, con miras a decidir cuáles son relevantes para su situación con base en sus prioridades actuales. Cada elemento listado en el Capítulo C contiene la siguiente información: ▪ ▪ ▪ ▪ la meta del elemento; por qué el elemento es importante; cómo el elemento podría ser implementado; y posibles dificultades en la implementación. Además, existen referencias a las secciones relacionadas en los Convenios de la OIT y la CEPE/ONU, así como la Directiva Seveso II y las leyes/reglamentos de los Estados Unidos. El Capítulo C no pretende proporcionar texto que pueda ser copiado directamente; más bien los países deberían examinar la lista de posibles elementos para tener un punto de partida, y luego adaptar los elementos escogidos, teniendo en cuenta sus prioridades, así como la disponibilidad de recursos y el contexto cultural / jurídico. Al examinar los posibles elementos de un programa en caso de accidentes con productos químicos, deberían tener en cuenta que pueden comenzar con un programa de accidentes con productos químicos limitado, en vista del personal y otros recursos que pudieran estar disponibles y la naturaleza de los riesgos. Esto se puede hacer por ejemplo, mediante la definición ajustada del alcance del programa para que incluya solamente las instalaciones de más alta prioridad, al adoptar solamente aquellos elementos que serían más efectivos dados los recursos que están disponibles, y/o al establecer niveles de requisitos para distintos tipos de instalaciones. El programa entonces podrá ser ampliado a lo largo del tiempo en la medida en que los recursos y la experiencia lo permitan. 18 En las siguientes Tablas se detallan algunas apreciaciones sobre los tipos de establecimientos e industrias que podrían plantear un riesgo de accidente con productos 15 químicos: Tabla I: Información general de algunos accidentes notables Tabla II: Actividades de interés y sus peligros típicos Tabla III: Pérdida de la contención La Tabla III tiene tres partes: • la Tabla IIIa describe a los “precursores” o tipos de eventos que podrían llevar a la pérdida de contención de sustancias peligrosas; • • la Tabla IIIb describe los tipos de pérdida de contención primaria; la Tabla IIIc describe los tipos de consecuencias de la pérdida de contención. Estas Tablas brindan ejemplos y no están supuestas a proporcionar una lista completa de todas las posibles actividades que podrían crear un riesgo de accidente con productos químicos. Cada país deberá considerar qué instalaciones suscitan preocupación en su área. 15 Estas tablas fueron creadas por el señor Mark Hailwood para los propósitos de esta guía. 19 TABLA I Información general de algunos accidentes notables Esta Tabla proporciona algunos ejemplos de accidentes con productos químicos que han sucedido hasta el 2009, en orden cronológico. Esta tabla se centra en accidentes que han ocurrido en instalaciones fijas, pero también incluye varios accidentes que involucran el transporte de sustancias peligrosas. No obstante esta Guía no trate los temas de transporte en detalle, un enfoque integral de los accidentes con productos químicos debería tratar tanto las instalaciones fijas como el transporte. Es importante observar que muchos accidentes de transporte que involucran sustancias peligrosas son causados por los mismos problemas que los accidentes de tráfico común (por ejemplo, el estado de los vehículos, las carreteras, los conductores) pero tienen consecuencias más graves debido a la naturaleza de los bienes que están siendo transportados por carretera, ferrocarril, barco o avión. La mayoría de los accidentes en esta lista involucran accidentes muy grandes en países desarrollados, en gran medida porque existe información más prontamente disponible sobre dichos accidentes. Esto no refleja la naturaleza y tamaño de los accidentes que ocurren cada año. Existen accidentes mucho menores que aunque no aparezcan en los titulares internacionales, generan costos significativos para la salud, el medio ambiente y la economía. Los accidentes con productos químicos ocurren en todas partes, inclusive en países en vías de desarrollo y países donde no hay industrias químicas o petroquímicas significativas. Fecha Lugar Descripción Muertes/ Consecuencias 1 de junio de 1974 Flixborough, Reino Unido El diseño inadecuado junto con una pobre gestión del cambio llevó a un escape de aproximadamente 30 toneladas de ciclohexano en una instalación de productos químicos, lo cual resultó en la explosión de una nube de vapor que destruyó la instalación y causó daños hasta varios kilómetros de distancia. • 28 muertos • 89 heridos 10 de julio de 1976 Seveso, Italia La pérdida de control de una reacción química exotérmica llevó a la pérdida del contenido del reactor por medio de un disco que estalló y del sistema de alivio de presión en una pequeña fábrica de productos químicos. Se formó una nube química tóxica y corrosiva que contenía fenoles, hidróxido de sodio y aproximadamente 2 kg de 2, 3, 7, 8tetraclorodibenzo-p-dioxina (TCDD) “Seveso Dioxina”. • Gran número de casos de Chloracne debido a la contaminación de TCDD Entre las causas estuvieron el uso de una ruta de reacción inherentemente más peligrosa para producir el triclorofenol (TCP) que las compañías de la competencia y prácticas de operación peligrosas que permitieron que el turno de producción dejara el reactor con enfriamiento insuficiente al final del turno de la mañana del sábado. La falta de responsabilidad de gestión y comunicación pobre por parte de la administración de la compañía y las autoridades locales una vez que se dio el accidente, significó que las medidas para prevenir la exposición de la población y descontaminar el área fueron activadas de manera extremadamente lenta. • Aproximadament e 410 casos de quemaduras químicas (probablemente cáustica). • Evacuación de más de 5,700 personas del área inmediatamente afectada por la nube tóxica. • Contaminación generalizada del campo en los alrededores • Gran número de ganado fue sacrificado 20 11 de julio de 1978 Los Afaques, San Carlos de la Rápita, España Un camión cisterna que transportaba 23 toneladas de propileno licuado altamente inflamable se salió de la carretera y entró a un campamento de veraneantes. Una nube de propileno gaseoso se formó de la cisterna con escape y entró parcialmente al lugar del campamento y también se desplazó con el viento hacia una discoteca al noreste. La nube blanca atrajo la atención de los clientes del campamento, quienes se aproximaron a la nube con curiosidad, conforme se seguía esparciendo. A medida que la nube comenzó a permear en la discoteca abarrotada, llegó a una fuente de ignición e inmediatamente se produjo el flujo inverso del fuego a la cisterna, causando un incendio que casi instantáneamente reventó la cisterna debilitada e incendió la carga completa del gas en una explosión de tipo BLEVE masivo. Las causas han sido atribuidas a la sobrecarga del camión cisterna aunado a la falla del tanque y posiblemente también a un accidente de tráfico en la carretera como una falla en los frenos. 10 de noviembre de 1979 Mississauga, Ontario, Canadá Un tren de carga de 106 vagones que transportaba explosivos y químicos tóxicos desde Windsor, Ontario, se descarriló; lo que resultó en la mayor evacuación en tiempo de paz en América del Norte hasta la evacuación de Nueva Orleans en el 2005. como medida de precaución. • 217 muertos (inclusive el conductor) • 200 personas severamente quemadas • 200,000 evacuados El accidente fue causado en el vagón 33 en la mitad de la carga del tren. El calor comenzó a aumentar en un cojinete liso mal lubricado en una de las llantas, resultando en una condición conocida entre los trabajadores de ferrocarril como una caja caliente. Los residentes que vivían cerca de la vía ferroviaria reportaron que salía humo y chispas del vagón, y aquellos que estaban cerca de Mississauga pensaban que el tren se había incendiado. La fricción eventualmente llegó hasta al eje y el cojinete, y en el momento en el que el tren pasaba por el paso a nivel de la carretera Burnhamthorpe, un eje y un par de llantas se le salieron por completo. El descarrilamiento provocó que varios tanques que contenían químicos peligrosos inclusive cloro, se rompieran. El tanque roto que contenía cloro presentaba el riesgo de una nube de gas tóxico que requirió la evacuación masiva de los residentes del poblado. 10 de noviembre de Mississauga, Ontario, 1979 Canadá 19 de noviembre de 1984 Mississauga fue prácticamente un pueblo fantasma hasta que se limpió la contaminación, se neutralizó el peligro y se le permitió a los residentes regresar a sus hogares. Finalmente, en la noche del 16 de noviembre, la ciudad fue reabierta. El tanque de cloro fue vaciado el 19 de noviembre. Ciudad de Una tubería de 200 mm entre un cilindro de México, México almacenamiento y una esfera rota, permitió un escape de GLP. El escape continuó por aproximadamente 5 a 10 minutos, lo cual resultó en • 650 muertos • 6,400 heridos 21 una gran nube de gas que se incendió, causando una explosión y muchos incendios terrestres. Estos incendios terrestres llevaron a una serie de BLEVE en la terminal GLP. La causa principal de la escalada fue el sistema ineficaz de detección de gas, y como resultado, una falta de aislamiento de emergencia. La alta tasa de muertes se dio debido a la proximidad de la planta a las áreas residenciales. La destrucción total de la instalación ocurrió porque había una falla del sistema general de protección, que incluye la disposición, el aislamiento de emergencia, y sistemas de rociadores de agua. El sistema de agua para incendio de la terminal quedó deshabilitado en la explosión inicial. La fábrica no tenía un sistema de detección de gas y, por lo tanto, cuando se inició el aislamiento de emergencia probablemente era muy tarde. 1º de noviembre de Schweizerhalle, Un incendio estalló en un depósito que almacenaba grandes cantidades de agentes agroquímicos. Los 1986 Basilea intentos por extinguir el fuego con agente espumante fueron ineficaces y se usaron grandes cantidades de agua. La incapacidad para contener el agua utilizada contra el incendio en el lugar significó que 10,000 m³ de aguas contaminadas con 30 toneladas de productos químicos, con alrededor de 150 kg de compuestos de mercurio, fueran vertidas en el río Rin. 1º de noviembre de Pasadena, 1986 Texas, Estados Unidos Se produjo un escape de sustancias químicas en una planta de polietileno de un complejo dedicado a la producción de productos químicos. Se formó una nube de vapor inflamable que luego se encendió, y resultó en la explosión masiva de la nube de vapor. Tras la explosión inicial, hubo una serie de explosiones e incendios. Interrupción considerable del suministro de agua potable a lo largo del Rin. Daño ecológico generalizado. La contaminación viajó más de 500 km. 23 muertos 130 a 300 heridos Las fallas de una serie de aspectos técnicos y organizativos fueron la causa de este accidente, entre las que se incluyen: preparación inadecuada de la instalación para el trabajo de mantenimiento que se llevaban a cabo (permiso de obra, aislamiento); capacitación y supervisión inadecuadas; falta de un sistema de detección de pérdida de gas para gases inflamables; así como un sistema de combate contra incendio insuficiente que también estaba parcialmente fuera de servicio o susceptible de sufrir daños por el incendio en sí. 3 de diciembre de 1990 ChavanayLoira, Francia Un tren de 22 vagones que pasaba por el valle del Rhone se descarrilló cuando cruzaba por el poblado. Nueve vagones de 80 m³ con gasolina sin plomo se derramaron, se incendiaron y explotaron. El incendio se propagó hacia las residencias aledañas a las vías del ferrocarril y las alcantarillas de la ciudad. El área del accidente era de 1 km de largo por 400 Un herido Ocho viviendas, dos talleres y 30 vehículos fueron destruidos 34 personas fueron evacuadas y reubicadas. 22 m de ancho. Fuera de los 720 m³ de gasolina en los 9 vagones, una gran porción fue consumida por el incendio, pero de 250 a 300 m³ se filtraron en el suelo y contaminaron 2 hectáreas de tierra. El suministro de energía eléctrica fue cortado y el tráfico de la carretera fue interrumpido. Ciento ochenta bomberos usaron medios autónomos (bombas contra incendios, etc.) para combatir las llamas y prevenir que éstas se esparcieran hacia otras partes del pueblo. El informe de una investigación administrativa sugería que el accidente pudo haber ocurrido debido al paso del tren a una velocidad excesivamente alta sobre el riel deformado de la vía ferroviaria. El defecto apareció luego del debilitamiento de las placas de asiento de la vía férrea debido a lluvias torrenciales. 20 de agosto de 1997 Blaye, Francia Una explosión dentro de un complejo de silos de hormigón para granos llevó al derrumbe de la estructura de los silos. Los empleados murieron porque la estructura de hormigón y los granos dentro del silo colapsaron encima de los edificios administrativos y técnicos que estaban en la base de los silos. Se interrumpió el tráfico en tren por una semana Dos hectáreas de tierra resultaron contaminadas Se cerraron los pozos para la agricultura ubicados río abajo y se redujeron las operaciones de bombeo de agua potable. • El consumo de frutas y vegetales fue prohibido dentro de un perímetro de 12.5 hectáreas. • 11 muertos • 1 herido Lo más probable es que la causa de la explosión se debió a la ignición de una mezcla explosiva de polvo y aire. El diseño deficiente del lugar hizo que una gran cantidad de personas fueran expuestas innecesariamente a los riesgos del silo. La recolección eficaz del polvo, la supresión de las chispas y los sistemas de monitoreo de incendios podrían haber evitado este accidente. 25 de septiembre de Longford, 1998 Australia La rotura de un intercambiador de calor liberó una nube de hidrocarbono (aproximadamente 10 toneladas) que se dispersó y encendió a 170 m de distancia. Esa nube se encendió nuevamente mientras una deflagración se transformó en una lengua de fuego que después ardió durante dos días antes de que se pudiera extinguir. La Comisión Real que investigó el accidente estableció que las siguientes causas, entre otras, provocaron el accidente: el mal diseño dificultó el aislamiento de los materiales peligrosos; la capacitación inadecuada del personal en los procedimientos normales de operación; el exceso de señales de alarma y advertencia hizo que los trabajadores carecieran de la sensibilidad necesaria ante situaciones peligrosas; la comunicación deficiente; la falta del análisis del riesgo y operabilidad (Hazard and Operability Studies, HAZOP) del intercambiador de calor hizo que no se • 2 muertos • 8 heridos • Interrupción en el suministro de gas en el estado de Victoria por 20 días. 23 reconocieran los riesgos; la cultura de seguridad de la compañía no era la adecuada para proteger a los trabajadores ni para prevenir accidentes en el proceso. 10 de octubre de Jesse, 1998 Nigeria Se produjo una explosión de una tubería con escape que había sido provocada intencionalmente. Más de 1,000 personas se habían reunido para recoger el combustible y venderlo en el mercado negro. • > 700 muertos • > 100 heridos 16 de mayo de 1999 Pakistán Un camión cisterna que transportaba gasolina se viró bruscamente para esquivar a un ciclista y se volteó. La gasolina se derramó en un área grande cerca de las tiendas. Los moradores del lugar estaban recogiendo la gasolina derramada cuando ésta explotó en llamas y mató a todos los que estaban en las inmediaciones. Se cree que el fuego fue causado por un cigarrillo o un fósforo encendido. • > 60 muertos • > 150 heridos 30 de enero de 2000 Baia Mare, Rumania El derrumbe de un dique de contención alrededor de una laguna de escorias de un establecimiento de recuperación de metales preciosos produjo el vertido de aproximadamente 100,000 metros cúbicos de líquido y entre 50 y 100 toneladas de cianuro, así como de cobre y otros metales pesados en el río de la localidad, lo cual provocó la contaminación de los ríos Somes, Tisza y Danubio. • Interrupción de los suministros de agua a lo largo de la red del río El derrame comenzó con una fuerte lluvia y el derretimiento de la nieve, lo cual llevó al derrumbe. No había un plan de emergencia y no se previeron los riesgos de la lluvia o del agua de deshielo. • Contaminación de alrededor de 2,000 km de cuenca del río Enschede, los Países Bajos Un incendio menor detonó una reserva de aproximadamente 100 toneladas de explosivos. Esa detonación llevó a una explosión masiva y una bola de fuego masiva que destruyó y dañó los inmuebles dentro de una vasta zona colindante con el sitio. El control deficiente del depósito, así como la falta de control con respecto a la ubicación de las instalaciones contribuyeron en manera determinante con el accidente. • 21 muertos • > 900 heridos 21 de septiembre de 2001 Toulouse, Francia Una explosión en una fábrica de fertilizantes a base de nitrato de amonio destruyó el establecimiento y causó daños generalizados en el área circundante. La mala gestión de la planificación del uso del suelo contribuyó con la envergadura de los daños y la cantidad de heridos. • 29 muertos • casi 2,500 heridos 28 de junio de 2004 Macdona, Texas, Estados Unidos Dos trenes colisionaron, resultando en el descarrilamiento de 4 locomotoras y 35 vagones del tren. Un vagón del tren que contenía 90 toneladas de cloro se rompió y se derramaron 60 toneladas de cloro. Además, se derramaron alrededor de 78,000 galones de fertilizante de urea, así como de combustible dísel de las locomotoras. • 3 muertos • 43 heridos (inclusive seis miembros del personal de respuestas) 13 de 2000 mayo de La colisión fue atribuida a la fatiga de la tripulación. 30 de julio de 2004 Ghislenghien, Bélgica El gaseoducto de alta presión de ZeebruggeBlaregnies (presión de operación de 80 bar, 1,000 mm de diámetro) falló, lo cual causó una explosión masiva e incendio. La falla ocurrió en el parque • 24 muertos • 132 heridos • Cráter > 400 m 24 industrial Ghislenghien, cerca de Ath, próximo a la instalación de una compañía dedicada al corte de diamantes, que estaba en construcción. Los bomberos recibieron un reporte de fuga a las 08:30 hora local, y la explosión ocurrió a las 09:00. Muchas de las víctimas eran bomberos y policías que respondieron a la fuga de gas. de diámetro • Daños > €100 millones 6 de enero de 2005 Graniteville, Carolina del Sur, Estados Unidos Alrededor de las 2:40 a.m. Hora Estándar del Este, dos trenes se chocaron en Graniteville. Una locomotora estaba estacionada en el apartadero. El otro tren, que transportaba cloro gaseoso, hidróxido de sodio y cresol, fue desviado por un interruptor de ferrocarril mal alineado hacia el apartadero, donde se chocó con el tren que estaba estacionado. La colisión descarriló ambas locomotoras y 17 vagones de carga. Un vagón cargado con cloro se rompió y se derramaron al menos 90 toneladas del gas. • 9 muertos • 250 heridos (tratados por exposición al cloro) • 5,400 residentes dentro de una milla del lugar del choque fueron obligados a evacuar por casi dos semanas mientras los equipos de HAZMAT y las cuadrillas de limpieza descontaminaban el área. 23 de marzo de 2005 Ciudad de Texas, Texas, Estados Unidos Una gran explosión ocurrió en una unidad de isomerización de la refinería. Dicha explosión fue causada por el llenado excesivo del divisor de refinado, con el sobrecalentamiento del líquido y la liberación de hidrocarbono a través del tambor de purga (blowdown drum) con una chimenea de ventilación abierta a la atmósfera. La ignición de esta nube de vapor produjo daños generalizados al establecimiento y las víctimas, muchas de las cuales se encontraban en edificios temporales ubicados en una construcción cercana. Entre los problemas que se identificaron en el transcurso de las investigaciones del incidente podemos mencionar: numerosas fallas en los equipos, administración del riesgo, el manejo del personal, la cultura de trabajo del sitio, el mantenimiento y la inspección, así como las evaluaciones generales sanitarias y de seguridad. • 15 muertos • 170 heridos 13 de noviembre de 2005 Jilin, China Una explosión en una planta petroquímica produjo la contaminación del río Songhua con aproximadamente 100 toneladas de benceno, anilina y nitrobenceno. La columna de contaminantes alcanzó una extensión de más de 150 km y avanzó muy lentamente a lo largo del río congelado. • 6 muertos • Alrededor de 70 heridos • 10,000 evacuados • Interrupción del suministro de agua potable a lo largo del río Songhua • Contaminación transfronteriza en la Federación Rusa 25 11 de diciembre de 2005 Buncefield, Reino Unido La sobrecarga de un gran tanque de almacenamiento de petróleo por tubería en un depósito de almacenamiento de combustible llevó a que se produjeran varias explosiones y un incendio que incluyó 22 tanques de almacenamiento. El control inadecuado de la verificación y medición del nivel del tanque, así como un sistema ineficaz de protección contra la sobrecarga fueron las causas principales del incidente. La proximidad a las oficinas que se encontraban cerca y propiedades residenciales hizo que se produjeran daños considerables. • Problemas en la red de distribución de combustible, particularmente la distribución del combustible de aviación para el aeropuerto de Heathrow No hubo pérdida de vidas y relativamente pocos heridos debido a que el incidente se produjo un día domingo temprano en la mañana. 23 de abril de 2007 Mongolia (200 km al norte de Ulan Bator) Sucedió un accidente en una operación informal para procesar mineral de oro usando mercurio y cianuro de sodio. El procesamiento del mineral de oro con mercurio comenzó en el 2006 y se había acumulado una gran cantidad de desechos que contenían mercurio. El procesamiento de este desecho con cianuro de sodio para extraer el oro restante comenzó en febrero del 2007. El agua servida que contenía cianuro y mercurio fue vertida posteriormente directamente en la planta de tratamiento de aguas servidas. Esa planta, ubicada en las afueras del pueblo, se desbordó y creó una laguna con un área de superficie estimada de 2 aproximadamente 560 m . • > 200 heridos 2 • > 44,000 m de suelo contaminado con mercurio y cianuro de sodio • Contaminación de agua subterránea y suministros de agua potable • Planta de tratamiento de aguas servidas contaminadas Como resultado, el agua potable del pozo y del sistema de suministro de agua estaba contaminada. Además, el suelo del pueblo estaba contaminado con mercurio, en vista de que el desecho no estaba cubierto y el viento lo dispersó. 29 de junio de 2009 Viareggio, Italia Cinco de 14 vagones cisterna que transportaban GLP se descarrilaron cerca de la estación del ferrocarril de Viareggio antes de la medianoche. El GLP se derramó del primer vagón, se incendió y explotó. Se reportaron otras explosiones. La rápida acción del jefe de la estación en detener a los trenes de pasajeros fuera de la estación impidió que se dieran más muertes. • 32 muertos • 26 heridos • Varias casas destruidas La causa del descarrilamiento se atribuye a la rotura de un eje del vagón cisterna delantero de GLP. Fuentes de información usadas para elaborar esta tabla • • • • Health and Safety Executive (HSE), Safety report assessment guidance (Technical aspects), Case Studies http://www.hse.gov.uk/comah/sragtech/casestudyind.htm Lees, F.P., „Loss Prevention in the Process Industries – Hazard Identification, Assessment and Control‟, Volume 3, Appendix 1, Butterworth Heinemann, ISBN 0 7506 1547 8, 1996. UNEP (2006) The Songhua River Spill China, December 2005 – Field Mission Report. Murray, V., Goodfellow, F. (2002) Mass casualty incidents – towards guidance for public health management, Public Health 116, 2-14. http://www.spoedeisendehulp.org/site/sites/default/files/masscasualtiechemicalincidents.pdf 26 • • Ministerio francés del Medio Ambiente – DPPR / SEI / BARPI – IMPEL http://www.aria.developpementdurable.gouv.fr/ Wikipedia: http://en.wikipedia.org 27 TABLA II: Actividades de interés y sus peligros típicos La siguiente tabla enumera las actividades industriales o comerciales típicas que utilizan sustancias peligrosas, y por consiguiente, pueden crear un riesgo de accidente con productos químicos con efectos adversos sobre las personas, el medio ambiente y/o la propiedad. La naturaleza y el alcance del riesgo dependen de un número de factores, que incluye las sustancias peligrosas específicas, la cantidad de sustancias, el tipo de procesos involucrados y las medidas de seguridad establecidas, etc. Ésta no es una lista cerrada, existen otras actividades que representan un riesgo de que ocurra un accidente con productos químicos y estas actividades pueden tener riesgos adicionales asociados además de aquellos que aparecen enumerados en esta lista. Actividad Peligros típicos (ejemplos) Procesamiento de productos químicos inorgánicos y orgánicos con reacciones químicas • reacciones que involucran productos químicos peligrosos (por ejemplo, tóxicos, inflamables, explosivos, peligrosos para el medio ambiente) • reacciones que incluyen temperatura y/o presión alta • reacciones que liberan grandes cantidades de energía (exotérmica) Combinación, mezcla, • procesos que incluyen polvos que pueden conducir a mezclas explosivas de polvo y formulación o reembalaje aire de productos químicos (por ejemplo, pesticidas, • procesos que incluyen solventes con características inflamables o explosivas productos farmacéuticos, • procesos que incluyen sustancias químicas y productos que son peligrosos para el pinturas, lacas, barnices, medio ambiente etc.) Destilación, refinamiento • procesos que incluyen sustancias altamente inflamables o procesamiento del petróleo o productos del • procesos que incluyen presión y temperatura altas petróleo • procesos que incluyen compuestos pirofóricos (de ignición espontánea) • procesos que incluyen productos químicos tóxicos (por ejemplo, fluoruro de hidrógeno, sulfuro de hidrógeno) La disposición o el tratamiento de residuos líquidos o sólidos mediante la incineración o la reacción química • procesos que incluyen sustancias peligrosas, en general mezclas de sustancias, a menudo las propiedades no están definidas con precisión Producción, almacenamiento o envasado de gases combustibles (por ejemplo, GLP, GNL, GNC) • los gases son muy inflamables y en contacto con el aire crean una atmósfera explosiva Producción, almacenamiento o envasado de gases técnicos con propiedades peligrosas (por ejemplo, inflamables, tóxicos, oxidantes, explosivos) • instalaciones de almacenamiento contienen grandes cantidades de sustancias peligrosas • la mezcla de residuos puede conducir a la producción de sustancias peligrosas • las instalaciones de almacenamiento contienen grandes cantidades de gas y pueden estar ubicadas relativamente cerca de un área residencial, particularmente cuando se trata del suministro directo de combustible para calefacción o cocinar • las operaciones de transferencia potencialmente pueden liberar sustancias peligrosas 28 Tabla II: Actividades de interés y sus peligros típicos (continuación) Actividad Peligros típicos (ejemplos) Enfriamiento o refrigeración con sustancias peligrosas, (por ejemplo, amoníaco) • la liberación potencial de sustancias peligrosas bajo presión puede representar un riesgo sustancial para una gran cantidad de personas Almacenamiento de sustancias peligrosas en depósitos (incluso pesticidas, productos farmacéuticos, etc.) • el almacenamiento de grandes cantidades de sustancias puede presentar un peligro para las personas y el medio ambiente si están involucradas en un incendio u otro acontecimiento que conduzca a una emanación o derrame. Tratamiento superficial de metales con sustancias peligrosas • las actividades pueden incluir, por ejemplo, el endurecimiento de la superficie con cianuros, el decapado o la galvanoplastia Generación de energía eléctrica con combustibles fósiles • los combustibles líquidos representan un riesgo potencial de incendio debido a su capacidad de combustión y son potencialmente peligrosos para el medio ambiente. • las instalaciones De-NOx para el tratamiento de gases de combustión que incluye el uso de gas amoníaco o amoníaco en solución son fuentes de peligro Almacenamiento a granel de líquidos peligrosos en tanques • la pérdida potencial de contención puede representar un riesgo para el medio ambiente • la pérdida potencial de contención de líquidos inflamables representa riesgo de incendio Conexiones de transporte (como centros de clasificación, estacionamientos para camiones, terminales de contenedores y aeropuertos, donde se cargan y descargan los productos químicos o donde se les transfiere de un vehículo a otro) • el impacto de los vehículos o la carga/descarga de maquinaria, grúas, etc. con contenedores o tanques pueden provocar roturas y hacer que se liberen grandes cantidades de sustancias peligrosas Transporte de sustancias peligrosas • accidentes, tales como la colisión del vehículo sobre el cual están cargados los productos químicos, puede llevar al escape de dichos químicos. Si más de una sustancia está siendo transportada y estas sustancias son incompatibles, entonces existe un potencial para una reacción química peligrosa, además del escape del químico al medio ambiente, lo cual puede contaminar el suelo y/o el agua • el almacenamiento de productos incompatibles en lugares muy próximos • los contenedores o tanques pueden haberse dañado durante el traslado y, por ende, ya plantear un peligro de accidente con productos químicos peligrosos al llegar • en las terminales químicas, por ejemplo, las sustancias químicas pueden ser descargadas por conductos. Es necesario tener cuidado de que los vehículos en movimiento (por ejemplo, un vagón de ferrocarril en movimiento, el desatraque de un barco del muelle, etc.) no causen un derrame de material peligroso • en terminales y puertos marítimos o ríos tierra adentro, el derrame de químicos tiene el potencial de causar un impacto ambiental a los ecosistemas marinos y fluviales • cuando los vehículos llegan a su destino, deben ser descargados. Muchos accidentes ocurren porque se han descargado los camiones cisterna o vagones de tren en el tanque equivocado. Esto se debe a muchas razones: • el camión cisterna ha ido al destino equivocado, y como el receptor estaba esperando una entrega, supuso que la carga era el producto químico esperado • el camión cisterna llegó al establecimiento correcto, pero fue enviado al punto de descarga equivocado 29 Tabla II: Actividades de interés y sus peligros típicos (continuación) Actividad Peligros típicos (ejemplos) • se equivocaron en la identidad de los químicos, confundieron por ejemplo, la lejía de cloro y el ácido clorhídrico, y la carga fue descargada en el tanque equivocado Transporte de sustancias peligrosas • si se sobrellena un contenedor de transporte (cisterna, tambor, etc.), luego esto puede tener consecuencias graves: • si se sobrellenan los contenedores, entonces la integridad estructural del contenedor puede estar en peligro y puede colapsar y dejar que se fuguen los productos químicos • si se sobrecargan los contenedores, entonces el vehículo puede estar sobrecargado y, por consiguiente, su integridad estará en peligro, además de hacer que sea más difícil controlar el vehículo (frenar, conducir y maniobrar) • el sobrellenado con gases o líquidos puede llevar al escape de sustancias químicas peligrosas si hay un cambio repentino de temperatura debido a la expansión térmica del material. Si las cargas son transportadas grandes distancias, entonces es bastante probable que los cambios de temperatura sean de más de 40°C. Conductos que transportan sustancias químicas peligros, inclusive oleoductos y gaseoductos • en vista de que los conductos recorren largas distancias, los volúmenes bloqueados por dos válvulas pueden ser muy grandes (distancias normalmente de más de 10 km). Por lo tanto, cualquier daño a los conductos tiene el potencial de hacer que se derramen grandes cantidades de sustancias químicas • para conductos subterráneos, los riesgos de daño se deben a: • corrosión • sobrecarga desde arriba (por ejemplo, vehículos pesados y trabajos de construcción) • daños durante la excavación para trabajo de construcción o trabajo en otros conductos, cables, etc. • para conductos sobre tierra, los riesgos de daños se pueden deber a: • sabotaje o vandalismo con el propósito de robar el producto que está siendo transportado • corrosión debido al ambiente • impacto con vehículos u otros objetos en movimiento • las tuberías también pueden sufrir daños por cambios en el suelo y en su estabilidad debido a: • temblores • hundimiento debido a las actividades de minería • (estacional) derretimiento del permahielo • inundación. 30 TABLA III: Pérdida de la contención Para prevenir accidentes químicos, es necesario identificar y comprender los peligros asociados con las sustancias químicas y sus procesos, así como los escenarios potenciales que pueden llevar a un accidente. La investigación de accidentes pasados ha demostrado que es raro que un accidente químico tenga una causa solamente. Normalmente, existe una combinación de factores que incluyen fallas técnicas, organizacionales y de gestión. Las siguientes tres tablas describen los escenarios de accidentes con respecto a las tres etapas: a. b. c. episodios o procesos que pueden llevar a una pérdida de contención primaria, pero se pueden controlar si son identificados y comprendidos pérdida de contención primaria, a través de la cual la energía o las sustancias peligrosas son liberadas hacia los alrededores, y las consecuencias o los efectos que dependen de la cantidad de energía o sustancia liberada y en el tipo, así como en la proximidad, de las personas y los ambientes o propiedad sensitiva al escape. TABLA IIIa: Episodios o procesos típicos que pueden conducir a una pérdida de contención primaria (precursores) Evento/proceso Descripción Mecanismo de control Corrosión Pérdida de material de las paredes de los conductos, los tanques y demás infraestructura de una instalación debido a una reacción química (también con la atmósfera) Elección correcta de los materiales adecuados para la construcción, conocimiento de los índices de corrosión esperados, inspecciones periódicas. Erosión Pérdida de material de las paredes de los conductos, tanques y demás infraestructura debido a una abrasión mecánica Elección correcta del material, comprensión del efecto de las distintas características del flujo sobre la pérdida de material, inspecciones periódicas. Exceso de carga o llenado Pérdida de control del flujo del material en una unidad (de almacenamiento) con respecto a su capacidad máxima Utilización de equipos de calibración y medición confiables para establecer el nivel de llenado, implementación de procedimientos de operación estándares para los procesos, instalación de suficientes sistemas confiables de protección por exceso de llenado. Sobrepresión La sobrepresión puede ser el resultado de una expansión del contenido de un recipiente debido al calor o debido a una reacción química descontrolada dentro del recipiente (por ejemplo, polimerización o descomposición) Los niveles máximos de llenado deben contemplar la expansión térmica esperada debido a los cambios de temperatura estacionales; los recipientes deben protegerse contra los efectos del fuego; los tanques de almacenamiento de petróleo deben instalarse con válvulas PV a fin de prevenir la generación de una sobrepresión peligrosa mientras se llena el tanque. Los recipientes a presión deben instalarse con sistemas de liberación de presión adecuados. “Gestión del cambio” inadecuada La gestión del cambio inadecuada puede conducir a la liberación de sustancias Identificación de los cambios (intencionales) antes de su implementación. 31 químicas peligrosas. Cuando se realizan cambios en el equipo, las sustancias químicas, los procedimientos de operación, los empleados, el nivel del personal, etc., se producen cambios en los peligros y los riesgos asociados con el proceso. Evaluación de la relevancia para la seguridad de cualquier cambio. Tomar las medidas adecuadas para tratar los cambios en los peligros y los riesgos. Comunicar los cambios al personal de planta y de la gerencia. Las empresas deben estar conscientes de que los cambios en el nivel del personal, los niveles de mantenimiento, la seguridad financiera, la estructura de la empresa, todos, pueden producir un efecto sobre la seguridad del establecimiento. Vacío Los tanques de fondo plano (y otros equipos no diseñados para vacíos) quizás no resistan incluso vacíos leves, que pueden conducir al colapso del equipo y a la liberación de sustancias peligrosas. Los tanques deben instalarse con válvulas PV a fin de prevenir la creación de un vacío peligroso debido a operaciones de enfriamiento o de descarga. El tamaño de la válvula debe ser adecuado para el ritmo de descarga del flujo; y se debe realizar la limpieza y el mantenimiento periódicos. Daño mecánico La función o la integridad del equipo pueden dañarse por el impacto de objetos (vehículos, carga de las grúas, etc.) o por el uso indebido de herramientas, por ejemplo, el uso de martillos para ajustar ensambles a rosca. El equipo debe estar protegido de los vehículos en movimiento, las rutas de transporte en el sitio deben definirse, el uso de grúas y el control de las cargas deben estar claramente reglamentados y se deben suministrar las herramientas adecuadas para llevar a cabo el trabajo manual. Reacciones químicas inesperadas La pérdida de control de reacciones químicas exotérmicas, la polimerización espontánea, la descomposición espontánea, la cristalización espontánea, etc., todas pueden conducir a que ocurra un accidente con productos químicos. Es importante comprender la cinética de las reacciones químicas producidas, mediante el uso de datos calorimétricos. Se debe proporcionar el enfriamiento y liberación de presión adecuados para el reactor químico. Es necesario evaluar y documentar las consecuencias de los cambios en las concentraciones y las impurezas sobre la velocidad de reacción y las trayectorias. Efectos de condiciones climáticas extremas o de eventos sísmicos El impacto de las condiciones climáticas extremas (viento, lluvia, nieve, calor o frío intensos) o eventos sísmicos (terremoto, tsunami, erupción volcánica) o similares sobre las instalaciones químicas puede dañar la estabilidad física de la construcción de la planta o conducir a una falla en el suministro de energía o servicios públicos. A su vez, eso puede llevar a que ocurra un accidente con productos químicos. La ubicación de instalaciones peligrosas debe tener en cuenta las características naturales locales (ríos que pueden inundarse, pendientes empinadas proclives a las avalanchas o al deslizamiento de barro, etc.). La construcción de instalaciones debe contemplar las condiciones climáticas que pueden esperarse en 32 Se deben definir los antecedentes necesarios para la operación y el mantenimiento de las instalaciones. Los empleados deben contar con la capacitación necesaria y periódica así como con procedimientos claros que garanticen que las instalaciones se mantienen y operan Error humano en el mantenimiento o la operación El error humano debido a malos entendidos o a la inhabilidad o la incapacidad de operar puede conducir a que se produzcan accidentes con productos químicos. esa región geográfica, incluso las extremas. Debe haber procedimientos de emergencia para tratar con las consecuencias previsibles de eventos naturales. Se debe prever el cierre de la instalación en caso de emergencia debido a condiciones climáticas naturales extremas. Se deben definir los antecedentes necesarios para la operación y el mantenimiento de las instalaciones. Los empleados deben contar con la capacitación necesaria y periódica, así como con procedimientos claros que garanticen que las instalaciones son debidamente mantenidas y operadas. Identificación equivocada de sustancias químicas Los errores ocurridos en la identificación de sustancias químicas o de tanques o con la conexión de conductos asociados a ellos pueden llevar a que se produzcan reacciones químicas con el incendio, la explosión o la liberación de sustancias químicas peligrosas. Un incidente común es la combinación de solución de hipoclorito de sodio (lejía) con una solución ácida (por ejemplo, ácido clorhídrico, cloruro de hierro (III), utilizados para el tratamiento del agua) y obtener como resultado la liberación de cloro gaseoso. Capacitar a los operadores, a fin de que comprendan los peligros potenciales y la necesidad de identificar las sustancias químicas correctamente. Etiquetar en forma clara las sustancias químicas, los tanques y la conexión (especialmente, en las unidades de carga y descarga). Procedimientos claros y control por parte de dos personas de las operaciones de traslado potencialmente peligrosas. Colapso de estructuras (por ejemplo, tanques) debido a la pérdida de estabilidad Se han dado varios accidentes en los cuales las estructuras han colapsado porque han perdido estabilidad mecánica. El suelo y/o las fundaciones sobre las cuales se fundamentaban las estructuras han sido lavados y debido a la cavidad creada debajo de la estructura, ésta eventualmente colapsó. Vale la pena tomar en consideración dos fenómenos en particular: Los efectos pueden variar desde la pérdida total de contención debido al colapso del tanque, a la pérdida de material peligroso derramado en el suelo (a través de fugas de corrosión en la base del tanque). Las consecuencias secundarias pueden variar dependiendo de las características de la sustancia peligrosa almacenada en el tanque. a. los escapes de tuberías subterráneas debajo o muy cerca de la estructura. En este caso, una fuga de agua o de agua servida puede ser suficiente para socavar la estabilidad de un tanque. La corrosión de la tubería o las juntas mal hechas pueden ser la causa de la fuga o daño mecánico debido a sobrecarga, impacto, etc. b. las fugas de los tanques (sustancias peligrosas) debido a corrosión en la base del tanque pueden hacer que se derrame líquido debajo de las fundaciones. Si las fundaciones son un 33 círculo, en vez de una base cerrada de concreto, entonces la fuga puede lavar el suelo/arena debajo del círculo y el tanque colapsará (caerá) liberando el contenido del tanque. Control inadecuado de operación Si existen procedimientos inadecuados, instrucciones o capacitación (por ejemplo, están incompletos, errados, son engañosos o están desfasados), es probable que el personal de operación no pueda llevar a cabo su trabajo de forma adecuada y puede que no entiendan la forma correcta de acción o de los riesgos relacionados. Esto puede llevar a fallas y a la exposición de personas y el ambiente a las sustancias peligrosas. El control operacional debería estar reglamentado dentro del sistema de gestión de seguridad, y debería haber mecanismos establecidos para definir los procedimientos de operación. Estos deberían incluir el control de documentos para mantener los procedimientos actualizados y la capacitación o nueva capacitación para asegurarse que los trabajadores siguen siendo capaces de llevar a cabo sus tareas de manera segura. Falla de los componentes Aún dentro de instalaciones que funcionan y está bien mantenidas, los componentes pueden fallar debido a, por ejemplo, desgaste, carga inesperada y las incertidumbres relacionadas con el diseño mecánico. El diseño general de la instalación debiera ser tal que la falla del equipo no debería, en la medida de lo posible, llevar al daño de otros componentes o la fuga incontrolada de sustancias peligrosas. Esto involucra, por ejemplo, la adopción de tecnologías intrínseca-mente más seguras como un principio para el diseño del proceso, o el uso de equipo de seguridad que cuando falle lleve a una condición segura como el cierre automático de válvulas cuando hay una pérdida de energía. 34 TABLA IIIb: Pérdida de contención primaria Pérdida de contención primaria Liberación de presión a través de una válvula de seguridad Avería de las tuberías Avería de los precintos Explosión sobretensión por Colapso o derrumbe por vacío Abertura de tuberías o recipiente debido a un error en el mantenimiento o en el funcionamiento Descripción Éste es el modo de funcionamiento deseado; sin embargo, es necesario tener conciencia de cuáles son las sustancias peligrosas que pueden emitirse y las zonas de impacto Existen una cantidad de causas que pueden provocar averías en las tuberías. El alcance de la avería puede abarcar desde filtraciones de microagujeros (por ejemplo, debido a la corrosión o a la erosión) hasta emisiones o escapes mayúsculos (por ejemplo, roturas de guillotinas 2F). Entre las secciones de las tuberías, válvulas, recipientes y demás equipos, los precintos fabricados de diversos materiales se utilizan para asegurar la integridad de la contención de sustancias peligrosas dentro de la instalación. Si los precintos se averían debido a la fatiga, el daño, la incompatibilidad con sustancias químicas, la sobretensión, etc., entonces se puede producir una pérdida de contención primaria. La sobrepresión dentro de un recipiente o una sección cerrada de las tuberías, por encima de la presión de diseño de construcción, puede llevar a la avería y a la liberación de sustancias peligrosas. El vacío aplicado a un recipiente (debido por ejemplo a las fluctuaciones de la temperatura o a la descarga de líquido de un tanque) puede llevar a una avería de una instalación y a la liberación de materiales peligrosos. Cuando se realizan actividades relacionadas con el mantenimiento o durante ciertos pasos del proceso dentro del funcionamiento normal, es posible que deba abrirse la instalación o la tubería. Si no se adoptan las medidas necesarias para asegurar que esa actividad se lleve a cabo de manera correcta, entonces es posible que se produzca una liberación de sustancias peligrosas de, por ejemplo, las tuberías (liberación de 2F bajo presión de funcionamiento), boca de inspección abierta. TABLA IIIc: Consecuencias de la pérdida de la contención primaria Consecuencias de la pérdida de la contención primaria Descripción Criterios para determinar los efectos Incendio La liberación de gases, vapores o líquidos inflamables a la atmósfera en presencia de fuentes de ignición (por ejemplo, superficies calientes, motores, interruptores eléctricos) puede provocar un incendio. • Radiación térmica Explosión (VCE, UVCE, BLEVE) La liberación de un gas inflamable a la atmósfera con la ignición de la mezcla puede provocar una bola de fuego y una onda de presión. Esto es conocido como explosión de nube de vapor (VCE). Si esa explosión se produce fuera de edificios, de la planta, etc., es posible que sea una explosión de nube de vapor no confinada (UVCE) para la cual existen modelos de estimación. Las explosiones de nube de vapor de gas (VCE) confinadas conducen • Sobrepresión • Radiación térmica 35 a picos de sobrepresión más altos y es más complejo elaborar un modelo para ellas. Si un recipiente a presión que contiene líquido, por ejemplo GLP, se expone a un incendio, puede producirse una explosión denominada (BLEVE), que hace que el tanque explote y en el caso de un líquido inflamable también se presenta acompañada por una bola de fuego y la propagación del gas inflamable. Escape de un gas tóxico El escape de un gas tóxico puede producir efectos sobre la población local y el medio ambiente a distancias considerables del punto donde ocurrió el escape. Eso depende de las características físicoquímicas de la sustancia peligrosa y de la toxicidad del gas, así como de la ubicación exacta, la altura, la dirección y el tipo de escape en cuestión. Existen modelos de dispersión de gas que permiten realizar estimaciones sobre la distancia hasta la cual pueden esperarse efectos específicos. • Modelos de dispersión de gas (requieren información sobre el gas tóxico y el escape en sí) • Datos sobre la toxicidad, por ejemplo los valores AEGL (Acute Exposure Guideline Levels) relacionados con los umbrales biológicos de exposición para la población en general o los valores ERPG (Emergency Response and Planning Guidance) relacionados con los lineamientos para planes de respuesta a emergencias. Esos valores ofrecen niveles de concentración vinculados con la duración de la exposición y los efectos tóxicos esperados. Derrame de líquidos peligrosos en el agua o el suelo La avería o rotura de una tubería o recipientes puede llevar al derramamiento de grandes cantidades de líquidos. Si excede los volúmenes de retención planificados, entonces existe riesgo de contaminación del suelo o de los cursos de agua. También las medidas para combatir el fuego pueden dar lugar a la presencia de grandes volúmenes de líquidos peligrosos que plantean un riesgo para el medio ambiente o el suministro de agua potable. Siempre que sea posible, deben adoptarse medidas para contener el derramamiento de líquidos dentro de las áreas de contención diseñadas. Deben planificarse medidas de emergencia para erigir diques temporarios y piletas de retención, y para recuperar líquidos peligrosos y prevenir la contaminación del medio ambiente o de las fuentes de suministro de agua potable. Los criterios pueden ser bastante variados e incluyen: • Velocidad del caudal fluvial con relación a la dispersión de una contaminación de las aguas superficiales. • Niveles de contaminación del agua potable permitidos, cuando se evalúa la potabilidad del agua. • Nivel de contaminación de cultivos o vegetales en relación a si es apropiado como alimento para animales o para el consumo humano. • Evaluación de la biodegradabilidad o la persistencia de la contaminación al momento de considerar zonas de exclusión o remediación. • Niveles de ecotoxicidad para diversas especies, al momento de considerar los efectos de la contaminación con sustancias químicas a más largo plazo. Derrame de una gran masa de líquido o de sólidos fluentes Las explosiones u otros daños mecánicos a las instalaciones pueden provocar el derrame de grandes masas de líquido o de • Consideración del impacto del fuego o la explosión en la estabilidad de las instalaciones 36 sólidos fluentes. Es posible que esos derrames secundarios no necesariamente se consideren “peligrosos” en condiciones normales, por ejemplo, la destrucción de un silo de granos por una explosión de polvo puede llevar a una avalancha de granos que puede ahogar a los trabajadores que se encuentren en las inmediaciones. junto con su posible impacto en el área circunvecina. Desechos voladores (causantes de otros accidentes) Los desechos debido a falla del equipo o explosión pueden llevar al daño secundario de otros equipos e instalaciones, con un nuevo derrame de sustancias peligrosas que tengan el potencial de causar incendios, explosiones o derrames tóxicos. • Los modelos no están prontamente disponibles. La experiencia ha demostrado por ejemplo, que las botellas de gas (como el GLP) salen como cohetes a casi 150 m cuando son envueltos por el incendio. Tiempo de producción perdido Ésta puede ser una de las más grandes consecuencias financieras. El accidente puede resultar en la pérdida de personal, equipo, instalaciones, producto, y/o capacidad de producción resultante en la reducción o interrupción de las operaciones (sobre una base temporal o permanente). • El tiempo de producción perdido se mide en días de producción y costo por día (en dólares/euros) como el valor de producción. 37 Capítulo B: CÓMO DESARROLLAR O MEJORAR UN PROGRAMA DE PREVENCIÓN Y PREPARACIÓN PARA CASOS DE ACCIDENTES CON PRODUCTOS QUÍMICOS B1: Introducción Este capítulo presenta un proceso para desarrollar, implementar y/o examinar un programa para casos de accidentes con productos químicos, que puede ser adaptado por cualquier país a sus propias circunstancias. Este proceso consiste de cinco fases, y cada una contiene una serie de pasos. En la Tabla IV (Etapas en el desarrollo e implementación de un programa para casos de accidentes con productos químicos) en la página 39 aparece un resumen de cada una de estas fases. Se presenta un ejemplo ficticio para ilustrar cómo un país pudiera implementar algunos de estos pasos. Si bien los pasos se presentan en orden, es importante observar que se supone que éste es un proceso iterativo y que quizás sea necesario volver a aplicar o repetir los pasos en distintos momentos. Además, algunos de los pasos son una continuación natural, incluso, por ejemplo: la necesidad de lograr y mantener el compromiso político y la necesidad de la cooperación entre las partes interesadas claves dentro y fuera del gobierno. La fase final trata sobre la necesidad de examinar periódicamente y revisar todo programa sobre accidentes con productos químicos, según corresponda, a fin de tener en cuenta cambios importantes en la legislación, la tecnología, la naturaleza de los riesgos, la experiencia, la disponibilidad de recursos, el desarrollo industrial, el tamaño o distribución de la población y otros eventos de consideración. Se supone que el proceso expuesto en este Capítulo debe ser flexible de modo que pueda ser adaptado por: los países que no cuentan con programas para accidentes con productos químicos o que pueden tener instrumentos jurídicos o de políticas limitados relacionados con la seguridad química; los países con capacidad existente que desean evaluar y, según corresponda, fortalecer sus programas; los países con una cantidad limitada de instalaciones peligrosas; y los países que tienen una industria importante con instalaciones peligrosas. Igualmente, este proceso está diseñado para ser flexible y permitir que cada país desarrolle un programa coherente con su cultura normativa y sus propios procedimientos para el desarrollo o la revisión de instrumentos jurídicos y políticas. Se reconoce que los países poseen sistemas y procedimientos diferentes para el desarrollo de instrumentos jurídicos y de políticas gubernamentales, en particular, con respecto a qué organismos participan en el proceso de iniciar y elaborar borradores de leyes, reglamentos, políticas y otros instrumentos. Por ese motivo, es importante que cada país evalúe cómo adaptar la presente Guía a fin de trabajar dentro de su propio contexto jurídico, normativo y cultural. 38 TABLA IV: Etapas en el desarrollo e implementación de un programa para casos de accidentes con productos químicos FASE INICIAL (Continua) • Garantizar y mantener los compromisos políticos • Identificar organismos gubernamentales para la cooperación • Establecer un proceso de consulta entre las partes interesadas claves • FASE DE EVALUACIÓN FASE DE DESARROLLO • Consultar las partes interesadas claves • Consultar con los actores claves • Evaluar el potencial e impacto del accidente • Examinar los imperativos políticos • Comprender el contexto jurídico • Desarrollar una estrategia y un cronograma • Identificar los recursos disponibles • Definir prioridades FASE DE IMPLEMENTACIÓN • Asegurar los recursos (personal, financiamiento, etc.) • Acceder e intercambiar información • Crear estructuras administrativas y jurídicas • Escoger/adaptar elementos del programa • Facilitar la implementación por otros (liderazgo) • Hacer que se cumplan los requisitos FASE DE ANÁLISIS Y REVISIÓN * También se deberían continuar y mantener estas actividades a lo largo de otras fases del proyecto. 39 EJEMPLO FICTICIO PARA USAR ESTA GUÍA PARA DESARROLLAR UN PROGRAMA PARA CASOS DE ACCIDENTES QUÍMICOS Nota: A lo largo de este Capítulo, se utiliza un ejemplo ficticio con el objeto de ilustrar cómo un país ficticio podría utilizar la presente Guía. Se incluyen cuadros de texto en este capítulo con información sobre cómo el “País X” lleva adelante esfuerzos para desarrollar un programa para casos de accidentes químicos. Este ejemplo sólo procura ser ilustrativo. Como se observó, es fundamental que cada país comprenda el mejor modo de adaptar esta Guía, a fin de satisfacer sus propias necesidades y circunstancias particulares. ANTECEDENTES El País X es un país en desarrollo. Es esencialmente agricultor y proyecta atraer nuevas industrias en el transcurso de la próxima década. En la actualidad, tiene un fabricante de pesticidas y un formulador de pesticidas, así como una cantidad de establecimientos de almacenamiento de envergadura. También tiene una refinería y un puerto grande que presta servicios a algunos países que no cuentan con una salida al mar y están ubicados hacia el Este. El País X no ha tenido ningún accidente importante con productos químicos durante los últimos dieciocho meses. Sin embargo, los países vecinos han tenido varios accidentes graves con productos químicos que provocaron muertes y daño ambiental fuera del sitio. Uno de ellos se produjo sobre la frontera y contaminó un lago del País X, lo cual originó una pérdida significativa de la reserva de peces. El Ministro de Defensa Civil concluyó que el País X debía crear un programa para casos de accidentes con productos químicos a fin de mejorar la prevención y la preparación. Se le informó respecto del esfuerzo del PNUMA por crear el “Marco flexible” y ha estado examinando la guía del PNUMA, así como otras iniciativas internacionales, incluso el Convenio 174 de la OIT y guías de la OIT que están relacionadas, publicaciones de la OMS que incluyen el Reglamento Sanitario Internacional de la OMS (2005), materiales de la CEPE/ONU y Principios rectores de la OCDE sobre la prevención, la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos, 2ª edición, 2003. 40 B2: Fase inicial Esta Fase inicial consiste de tres etapas, que conducen al desarrollo de un plan de trabajo para avanzar: a. compromisos: obtener (y mantener) los compromisos gubernamentales necesarios para crear o mejorar un programa para casos de accidentes con productos químicos; inclusive una asignación de personal y recursos necesarios para avanzar; b. cooperación: identificar todos los organismos gubernamentales relevantes a fin de asegurar una cooperación adecuada a lo largo del proceso; y c. consultas: establecer un mecanismo de consulta con partes interesadas no gubernamentales (la industria, los trabajadores, las comunidades, otras organizaciones no gubernamentales); El plan de trabajo que resulte debería incluir una declaración de intención acordada por escrito, al igual que un calendario de las actividades anticipadas y objetivos (discutidos en las fases de evaluación, desarrollo e implementación, así como en el Anexo IV (Lista consolidada de actividades para desarrollar un programa para casos de accidentes con productos químicos) en la página 221). a. Compromisos El apoyo político continuo es clave para que el esfuerzo de crear un programa para casos de accidentes con productos químicos sea exitoso. Además de esto, se necesitan los medios y la intención para implementar el programa de forma significativa. Por consiguiente, es fundamental que haya un acuerdo por parte de la(s) autoridad(es) correspondiente(s) de alto nivel con relación a que debe desarrollarse (o, si corresponde, revisarse) un “programa para casos de accidentes con productos químicos” y que los esfuerzos al respecto recibirán el apoyo político necesario y una asignación de recursos adecuada (inclusive personal y un 16 presupuesto) Como parte de este proceso, es importante considerar los recursos que probablemente se necesiten durante el proceso de evaluación y desarrollo de un programa para casos de accidentes con productos químicos. Esto incluye, por ejemplo, las competencias que se Fase inicial: Compromisos, cooperación y consultas OBJETIVOS y ACTIVIDADES OBJETIVOS: ▪ Disponer de todos los prerrequisitos administrativos necesarios para desarrollar, perfeccionar o examinar un programa para casos de accidentes con productos químicos. ▪ Preparar un plan de trabajo para desarrollar el programa. ACTIVIDADES SUGERIDAS: ▪ Asegurar el compromiso político adecuado para este esfuerzo. ▪ Identificar las autoridades gubernamentales clave a nivel nacional, local y regional y establecer un proceso de cooperación. ▪ Organizar consultas dentro del gobierno y con otras partes interesadas a fin de aumentar el nivel de conciencia y evaluar las necesidades y los riesgos. ▪ Identificar los recursos necesarios (personas, fondos, tiempo) para cada etapa del proceso con el objeto de desarrollar o examinar un programa para casos de accidentes con productos químicos. ▪ Elaborar por escrito una declaración de intención y un plan de trabajo, incluso un calendario y metas intermedias. 16 Esto se refiere a una asignación provisional al presupuesto y al personal para trate con las fases de evaluación y desarrollo. Es imposible calcular el costo total de implementar un programa para casos de accidentes con productos químicos desde el principio. Esto solamente se puede hacer luego de etapas posteriores en las cuales se ha identificado el nivel de riesgo, se han establecido las prioridades, y se han llevado a cabo otros análisis. 41 requieren, dónde existe el personal disponible con la pericia adecuada en el gobierno o en el sector privado; cuánto tiempo debería asignarse para este trabajo; y si existe la necesidad de contratar consultores para asumir tareas específicas, y si la hay, cómo se puede financiar. Es imposible suministrar orientación sobre quiénes son “las autoridades idóneas” de cada país para obtener el compromiso político para la elaboración de un programa para casos de accidentes con productos químicos. Por ejemplo, en algunos países, es posible que sea necesario que el compromiso provenga del poder legislativo; en otros, quizás deba provenir de la cúpula de un organismo o de un ministerio clave. En algunos países, la agencia ambiental tendrá el liderazgo sobre este tema; en otros países, quizás sea la autoridad de defensa civil, el ministerio de industria u otro organismo. Posiblemente sea difícil llamar la atención de los líderes políticos, especialmente si no ha habido un accidente en el pasado reciente. Por consiguiente, es importante presentar un argumento convincente al aumentar la comprensión de los riesgos de accidentes, y el costo para la salud humana y la economía en caso de un accidente mayor. Algunas de las formas para atraer y mantener el interés de los líderes políticos incluyen: describir la relación entre la seguridad química y el desarrollo sostenible; proporcionarles datos en los que se muestre que el costo de la seguridad es menor que el costo de los accidentes; observar que la seguridad química no es un obstáculo para avanzar y, de hecho, podría atraer los negocios; reconocer que un programa para casos de accidentes químicos puede tener beneficios económicos en términos, por ejemplo, de aumentar la eficiencia de las operaciones y facilitar el acceso al financiamiento; e identificar los enlaces de acuerdos internacionales (tales como los convenios de la OIT y la CEPE/ONU y el Reglamento Sanitario de la OMS) e iniciativas en esta área (inclusive de marcos de cooperación tales como SAICM, IOMC, el Foro Intergubernamental sobre Seguridad Química (FISQ), etc.). En este sentido, la ratificación de un convenio o la participación activa en actividades internacionales puede proporcionar un medio para acceder a recursos adicionales para apoyar un programa nacional para casos de accidentes con productos químicos. Es importante que se mantenga el compromiso político para que el proceso se pueda completar y el programa resultante tenga el apoyo necesario para la implementación. b. Cooperación entre organismos gubernamentales La cooperación entre las agencias, los ministerios y otros organismos gubernamentales relevantes es otra clave para el éxito. Ser inclusivos debe ser el objetivo y también se debiera tener un sistema de consultas periódicas en funcionamiento. Para lograr esto, es importante identificar a todas las autoridades relevantes y establecer un proceso consultivo. La participación y coordinación continua son importantes porque los temas relacionados con la prevención y preparación para casos de accidentes con productos químicos son la preocupación de muchas autoridades gubernamentales a nivel nacional, regional y local, incluso a aquellos responsables de, por ejemplo: la protección ambiental; la salud y seguridad ocupacional; la salud pública; la defensa civil; la respuesta para casos de emergencia (bomberos, policía, médicos, tratamiento de materiales peligrosos); la planificación del uso de suelo y el desarrollo industrial. 42 La coordinación también ayuda a minimizar cualquier conflicto o superposición con las políticas existentes o los requisitos jurídicos. Además de las autoridades nacionales, también deben considerarse los organismos que a nivel local o regional tienen funciones y responsabilidades y de qué forma deben participar en el proceso. En muchos países, por ejemplo, la planificación del uso del suelo, el monitoreo de instalaciones, la preparación y la respuesta para casos de emergencia son responsabilidades de las autoridades locales o regionales. Cada país debe considerar cuál es la mejor manera de iniciar y mantener el esfuerzo de cooperación en su propio contexto. Por ejemplo, podría organizarse una reunión de consulta, presidida por algún sector independiente. O bien, podría identificarse alguna de las agencias principales a fin de que convoque una reunión con otras autoridades o podría haber un grupo de trabajo interinstitucional que tenga como responsabilidad dar inicio a las discusiones. En algunos casos, pudiera ser necesario tener a una autoridad jurídica en particular, para poder crear un organismo interinstitucional que sea responsable de dicha cooperación. c. Consultas con otros actores La experiencia muestra que un programa para casos de accidentes con productos químicos se beneficia de la participación activa de las partes interesadas claves, incluso de representantes de: las empresas que administran las instalaciones peligrosas, los trabajadores de dichas instalaciones; las organizaciones de la industria; los sindicatos y las comunidades próximas a las instalaciones peligrosas. Además, es posible que se encuentren competencias y recursos valiosos en las universidades, los institutos de investigación, los establecimientos de salud, los grupos ambientales y otras organizaciones no gubernamentales. Las agencias de las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales representadas en el país, también pueden ser un recurso valioso cuando se desarrolla un programa para casos de accidentes con productos químicos. El Cuadro de texto 3 (Consultas con actores claves no gubernamentales) a continuación, contiene más información sobre consultas con los actores. Deben crearse los mecanismos para la realización periódica y continua de consultas con esos actores y para crear la sensación que éste es un esfuerzo conjunto para lograr objetivos comunes. Las consultas debieran comenzar temprano en el proceso de evaluación y desarrollo de un programa para accidentes químicos. El establecimiento de sociedades con estas partes interesadas resultará en un sentido de pertenencia que lleve a una implementación más eficaz del programa por aquellos con funciones y responsabilidades relacionados con la prevención y preparación para accidentes químicos. 43 Cuadro de texto 3 CONSULTAS CON ACTORES CLAVES NO GUBERNAMENTALES La consulta y la coordinación son cruciales para el desarrollo y la implementación exitosa de un programa para casos de accidentes con productos químicos. Cuando se determinen las prioridades y se desarrolle un plan de acción, es extremadamente valioso obtener retroalimentación de actores claves, incluso de diferentes agencias con responsabilidades relevantes, así como de representantes de la industria, trabajadores, organizaciones no gubernamentales y comunidades próximas a las instalaciones peligrosas. También es importante involucrar a las personas con competencias en áreas claves, tales como químicos, ingenieros de proceso y especialistas de seguridad. Existen muchas ventajas de consultar con actores no gubernamentales. A menudo, estos actores tendrán información crucial que generalmente no está disponible para las autoridades. Además, varios actores tienen comprensión cabal sobre qué tipo de enfoques normativos pudieran ser los más eficaces en la práctica. Otro beneficio es que los actores probablemente cumplan con (y hasta promuevan) los requisitos y las recomendaciones si fueran parte del proceso de desarrollo. Con frecuencia, los actores no gubernamentales son un buen enlace con las comunidades potencialmente afectadas en caso de un accidente. Existen varias maneras de garantizar la consulta adecuada, y los países pueden escoger una o varias de ellas. Un enfoque es hacer que los borradores de documentos relevantes sean públicos, lo que le da al público la oportunidad de examinar y comentar estos borradores. Otro enfoque es mantener una serie de reuniones públicas en varios lugares o sostener pequeños grupos de trabajo con representantes de varios grupos de actores. EJEMPLO FICTICIO FASE INICIAL Consultas informales: El Ministro de Defensa Civil está comprometido con el avance para la creación de un programa para casos de accidentes con productos químicos y le solicitó a su viceministro que inicie un proceso a fin de desarrollar un nuevo enfoque de la prevención y la preparación para casos de accidentes con productos químicos. El viceministro comenzó por convocar a una reunión informal de representantes de las agencias claves con el objeto de evaluar si otros funcionarios estaban de acuerdo con que el tratamiento de los accidentes con productos químicos fuera una prioridad y, en ese caso, discutir sobre el modo de avanzar. En la reunión, participaron funcionarios del Ministerio de Defensa Civil, el Ministerio de Medio Ambiente, el Ministerio de Salud, el Ministerio de Trabajo, el servicio de bomberos y la policía. El viceministro también invitó a un experto internacional del PNUMA a fin de analizar el tema de la prevención y la preparación para casos de accidentes con productos químicos, mediante la descripción respecto de cómo evaluar los riesgos y las consecuencias ambientales, sanitarias y financieras de esa clase de accidentes. Además, compartió la experiencia de otros países con relación al tratamiento de los riesgos de accidentes. La representante del PNUMA también describió los materiales de orientación que están disponibles para ayudar a los países en sus esfuerzos y explicó los recursos internacionales disponibles para ayudar al País X. 44 Durante esa reunión inicial, hubo consenso respecto de que el País X debía avanzar en la identificación de los riesgos presentes en su país (actuales y esperados en el futuro), a fin de determinar qué elementos de un programa para casos de accidentes con productos químicos serían adecuados. También se acordó que el Ministerio de Medio Ambiente debía tomar la iniciativa en estrecha cooperación con el Ministerio de Salud. Existían varias razones para tomar esa decisión: la principal fue la necesidad de comprender los riesgos asociados con los productos químicos. Asimismo, el Ministerio de Medio Ambiente cuenta con algunos recursos y personal que podría reasignarse a este esfuerzo, entre los que se incluyen químicos, un experto ambientalista y un ingeniero químico, mientras que el Ministerio de Salud podría proporcionar asesoría epidemiológica y toxicológica. La reunión concluyó que se debía crear un Grupo de trabajo para casos de accidentes con productos químicos y que la primera reunión del Grupo de trabajo debía convocarse dentro de las dos semanas siguientes. Cada una de las agencias acordó participar e incluir a especialistas técnicos como químicos e ingenieros, si estuvieran disponibles. La reunión también decidió que el grupo de trabajo debía incluir a una serie de organizaciones adicionales, como: otros organismos gubernamentales, incluso el Ministerio de Agricultura, el Ministerio de Justicia y la agencia de energía; personal perteneciente a la autoridad portuaria; representantes de los gobiernos locales a cargo de la respuesta médica para casos de emergencia y de inspecciones de los lugares de trabajo; compañías que administran las instalaciones peligrosas del país (incluso gerentes y trabajadores); ingenieros y químicos de la universidad nacional; y organizaciones no gubernamentales, incluso la cámara de comercio, los sindicatos y los grupos ambientales más grandes. Primera reunión del grupo de trabajo: El Director de Políticas del Ministerio de Medio Ambiente quedó a cargo de este esfuerzo. El Director de Políticas y su equipo enviaron notificaciones y prepararon una agenda para la primera reunión oficial. Esta reunión oficial se centró en: presentar a los participantes, cada uno de los cuales brindó una descripción de sus funciones relacionadas con la prevención y la preparación para casos de accidentes con productos químicos; analizar, en términos generales, la naturaleza y el alcance de los riesgos en el país y los antecedentes de accidentes; considerar qué otros actores deberían participar en el proceso; desarrollar un plan para avanzar, asignar las responsabilidades a las distintas partes y establecer un cronograma para alcanzar las metas intermedias; crear subcomisiones para tareas diversas; convenir que deben prepararse tres informes para analizar en la próxima reunión del Grupo de trabajo. Esos informes tratarían: las probabilidades de que se produzcan accidentes con productos químicos en el País X, el estado actual de las leyes y los reglamentos del país, así como la disponibilidad de recursos para implementarlas y los enfoques existentes para la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos en otros países e iniciativas internacionales relacionadas; el modo de conseguir todos los recursos necesarios adicionales, incluso los relacionados 45 con la competencia. La reunión concluyó que mediante la creación de un fondo común de recursos provenientes de los ministerios, contarían con personal y financiamiento suficiente para avanzar con este esfuerzo. Además, acordaron que la subcomisión a cargo de la evaluación de posibles accidentes debía elaborar su informe en un plazo de tres meses. Al mismo tiempo, el Departamento de Justicia debía dar una idea general sobre las leyes, los reglamentos y las políticas existentes relacionadas con la prevención y la preparación para casos de accidentes. El representante de la universidad se ofreció a preparar un informe sobre los enfoques existentes de las iniciativas internacionales y de otros países, apoyándose en la Guía de Marco Flexible del PNUMA. Se acordó que se llevaría a cabo una segunda reunión del Grupo de trabajo en cuatro meses. 46 B3: Fase de evaluación La Fase de Evaluación consiste de tres pasos diseñados para recopilar información como un prerrequisito para aclarar las prioridades y tomar decisiones en cuanto al alcance y el contenido de un programa adecuado para casos de accidentes con productos químicos. Específicamente, esta fase trata sobre: a. potencial de un accidente: evaluación de la naturaleza y el alcance del riesgo de los accidentes químicos en el país; b. contexto jurídico: identificación de los instrumentos jurídicos y las políticas existentes que se pueden usar para tratar aspectos de un programa para casos de accidentes con productos químicos, qué organizaciones son responsables de implementarlas y qué brechas existen; y c. recursos disponibles: determinación de qué recursos pueden estar disponibles en el gobierno, y qué programas y recursos existen fuera del gobierno, que pudieran estar disponibles para apoyar el programa para casos de accidentes con productos químicos. Fase de evaluación OBJETIVO y ACTIVIDADES OBJETIVO: Lograr una comprensión general de la naturaleza y el alcance de los riesgos de los accidentes con productos químicos en el país; el contexto jurídico y de las políticas existentes relacionadas con la seguridad química; y los recursos que podrían estar disponibles para apoyar un programa para casos de accidentes con productos químicos. ACTIVIDADES SUGERIDAS: Consultar con los actores. Considerar las preguntas identificadas en esta Guía. Identificar las fuentes de información disponibles dentro de las agencias del gobierno, las autoridades locales y otras fuentes (incluso los registros industriales). Designar personal experto para recabar y examinar la información. Establecer criterios/modelos para determinar qué instalaciones son de gran interés. Preparar una lista de instalaciones de interés, y, si es posible, identificar las más importantes y mapear su ubicación. Hacer una encuesta de los mandatos de organismos gubernamentales relevantes. Hacer una encuesta de los programas, las leyes, los reglamentos, las políticas, las obligaciones internacionales, y otros instrumentos existentes (evaluarlos para identificar sobreposiciones, vacíos, inconsistencias, etc.). Identificar recursos que podrían estar disponibles (humanos, financieros, técnicos, etc.) desde el país o de fuentes externas. Desarrollar una matriz, tabla, base de datos o informe con esta información. 47 Con esta información disponible, los países pueden identificar qué instrumentos jurídicos y de políticas podrían requerir de enmiendas, actualización o complementos; comprender las interrelaciones y sobreposiciones; reconocer las oportunidades para mejorar la implementación y la coordinación; e identificar los vacíos que deberían ser tratadas. La información ayuda a los países a tomar una decisión política informada sobre qué acciones serían las más adecuadas en vista de los recursos disponibles dentro de un cierto período de tiempo y cómo hacer uso de la forma más eficaz posible de estos recursos. Durante esta fase, es importante mantener la cooperación entre los organismos gubernamentales relevantes, y garantizar que se sigan dando oportunidades de consultar con actores claves no gubernamentales, incluso representantes de la industria, los trabajadores, las comunidades, y otros. Estas consultas ayudarán a proporcionar mayor comprensión en cuanto a los riesgos, recursos e imperativos políticos que se deben tener en cuenta. Además, la participación de los actores claves debería ayudar considerablemente en su participación cuando llegue el momento de implementar el programa para casos de accidentes con productos químicos. a. Potencial de un accidente En esta etapa, el objetivo no es tener un inventario completo de las instalaciones peligrosas (lo cual se puede hacer como parte de la implementación del programa). La atención más bien debería centrarse en comprender la naturaleza y el alcance de los peligros y riesgos locales que involucren a los sectores de la población más vulnerables y el medio ambiente. Esta evaluación será crucial tanto para definir el alcance y el contenido del programa para casos de accidentes con productos químicos como para elaborar un cronograma y establecer las prioridades para su implementación. En la sección B4 (Fase de desarrollo en la página 55) aparece más información. En general, esta evaluación puede realizarse por medio de la recolección y el análisis de información que se encuentra disponible en los registros del gobierno. También es valioso comprometer al sector privado, que tendrá información sobre sus actividades y probablemente 17 tendrá las competencias necesarias para evaluar los riesgos. Los tipos de información que podrían ser útiles para determinar el potencial de accidente incluyen: listados de todos los establecimientos industriales; registros de la cantidad de productos químicos fabricados en el país y de los productos importados; información sobre el porcentaje de la industria que utiliza y maneja productos químicos peligrosos; perfiles de datos sobre productos químicos que 18 recaba información sobre la naturaleza y el alcance de los productos químicos en el país y datos generales sobre la industria y el comercio. Además, las autoridades locales y los cuarteles de bomberos pueden mantener inventarios de los establecimientos industriales u otros registros de interés. Es posible que las organizaciones no gubernamentales (tales como las asociaciones industriales, institutos de investigación y grupos ambientalistas) también cuenten con información relevante. También puede usarse la información conocida para generar esta comprensión general del potencial local de que se produzcan accidentes. Podría ser útil considerar las siguientes preguntas al momento de realizar dichas evaluaciones: 17 Las Tablas I (página 20), II (página 28), y III (página 31) en el Capítulo A pueden ayudar a identificar instalaciones potencialmente peligrosas. 18 Véase el Cuadro de texto 4 (Perfiles nacionales para la gestión de sustancias químicas) en la página 50, que está relacionado con el programa del UNITAR para apoyar a los países en el desarrollo de los Perfiles nacionales de sustancias químicas. 48 ¿Qué establecimientos peligrosos del país plantean los mayores riesgos? Además de los establecimientos fabriles, quizás pueden incluirse depósitos, refinerías, establecimientos asociados con actividades mineras, instalaciones para el tratamiento de desechos o agua, puertos u otras conexiones de transporte. ¿Existen distintas clases de instalaciones peligrosas diseminadas a lo largo del país? (por ejemplo, almacenamiento de pesticidas, conductos o ciertas pequeñas empresas que utilizan productos químicos tóxicos, inflamables o ambientalmente peligrosos); ¿Qué sustancias químicas se producen, importan o usan en el país? (véase Anexo III (Listas de sustancias químicas de interés) en la página 200 que contiene listas de productos químicos y procedimientos usados por los países de la Unión Europea, así como en Estados Unidos, Suiza y Corea, para identificar los establecimientos cubiertos por sus reglamentos en casos de accidentes); ¿Dónde están ubicadas las instalaciones peligrosas? (¿Se encuentran en zonas urbanas o rurales? ¿Se encuentran próximas a núcleos poblacionales o zonas ambientalmente susceptibles, incluso ríos y otras fuentes de agua?); ¿Existen instalaciones que pueden verse involucradas en el efecto dominó? Es decir, potencialmente, un accidente en un establecimiento puede iniciar un accidente que incluya productos químicos peligrosos de otro establecimiento; ¿Qué desarrollo industrial se puede esperar que se realice en el futuro cercano que pudiera involucrar sustancias peligrosas?; ¿Cuáles han sido los antecedentes de accidentes en el país o en los países vecinos (que quizás puedan predecir los problemas futuros)?; ¿Existe un potencial para que se produzcan desastres naturales que quizás puedan causar accidentes con productos químicos (como terremotos, huracanes, inundaciones, tsunamis)?; ¿Qué clase de impactos adversos podrían esperarse si ocurre un accidente (inmediatos y en el largo plazo, directos e indirectos)?; ¿Existen planes de respuesta y recursos disponibles en el caso de que se produzca un accidente? Además, es importante tomar en cuenta cualquier imperativo o restricción pragmática o política. Por ejemplo, si ha habido accidentes que han recibido gran publicidad en otros países, pudiera haber presión sobre un país para tratar el mismo tipo de instalaciones como una prioridad, aunque un análisis objetivo concluya que no está representando el mayor riesgo. Esta evaluación del potencial de accidente debería ser examinada y actualizada periódicamente a fin de tomar en consideración cualquier cambio relevante en los avances industriales y de otros tipos, así como nueva información y experiencia. b. Contexto jurídico El análisis de las leyes, reglamentos, políticas y otros instrumentos existentes, y de la infraestructura asociada, ofrecerá una base para la comprensión de qué aspectos de la prevención y la preparación para casos de accidentes ya se están tratando. También puede identificar instrumentos y políticas que quizás puedan adaptarse o ampliarse para tratar riesgos accidentales. De acuerdo con los procedimientos del país, es posible que sea más sencillo adaptar o ampliar los reglamentos, las políticas y los programas existentes que crear nuevos. 49 Cuadro de texto 4 PERFILES NACIONALES PARA LA GESTIÓN DE SUSTANCIAS QUÍMICAS A través de su Programa de apoyo de perfiles nacionales, el UNITAR (Instituto de las Naciones Unidas para la Formación Profesional e Investigaciones) ofrece orientación, capacitación y apoyo técnico para ayudar a los países en la evaluación de su infraestructura jurídica, institucional, administrativa y técnica relevante vinculada con la gestión racional de los productos químicos. A la fecha, alrededor de 120 países están preparando un Documento de Orientación sobre el Perfil Nacional de UNITAR/IOMC (Programa Interinstitucional de Gestión Racional de los Productos Químicos). A nivel internacional, los Perfiles Nacionales ofrecen a los demás una mejor comprensión de las capacidades existentes en los países, así como de sus necesidades. Véase: http://www2.unitar.org/cwm/nphomepage/index.html. Si bien el Perfil Nacional aborda un área temática amplia y pueden asistir en la identificación de prioridades nacionales, también puede ofrecer una comprensión importante durante el desarrollo y la implementación de un programa para casos de accidentes con productos químicos (por ejemplo, mediante la inclusión de un nuevo capítulo sobre Preparación, respuesta y seguimiento a casos de emergencia con productos químicos (Chemical Emergency Preparedness, Response, and Follow-up) que hará parte de un documento de orientación revisado). Esta revisión también ayudará a identificar brechas y desarrollar cualquier instrumento jurídico o de políticas nuevo. La evaluación permitirá que los nuevos instrumentos y políticas hagan buen uso de las capacidades existentes, y se integren eficazmente al contexto existente. Como parte de este proceso de revisión, debería haber consultas con todas las autoridades relevantes y otros organismos para obtener una comprensión de cómo los instrumentos relevantes están siendo implementados/aplicados. En muchos países, las leyes y los reglamentos están establecidos, pero no están siendo implementados eficazmente. En tales casos, es importante preguntar si estas leyes y reglamentos son válidos y adecuados y si lo son, ¿qué está atrasando su implementación? Existen varios temas que pueden ser útiles de considerar durante este examen, entre ellos: ¿Qué aspectos de la preparación y prevención para casos de accidentes con productos químicos ya están regulados o tratados de otra forma en los instrumentos o programas jurídicos y de políticas? Considere qué instrumento(s) y programa(s) pudieran ser aplicados a temas de accidentes en el futuro aunque no lo hayan sido en el pasado, tales como los que tratan con los productos químicos en general o la seguridad ambiental, la defensa civil, la salud ocupacional y la seguridad, la planificación de uso de suelo, etc. ¿Están siendo implementados eficazmente los instrumentos y programas jurídicos y de políticas relevantes? ¿Cuál es la experiencia con la puesta en vigencia de cualquier instrumento relevante? 50 ¿Existen superposiciones o superposiciones potenciales o inconsistencias/conflictos (por ejemplo, esto pudiera incluir requisitos de presentación de informes que se superpongan, programas de inspección duplicados, etc.)? ¿Cuáles son las obligaciones internacionales del país (por ejemplo, es país signatario o parte de un convenio que trata con temas de seguridad de productos químicos o accidentes?, ¿existe un acuerdo bilateral con un país vecino)? ¿Ya están establecidas fuerzas de tarea interagenciales o comités relevantes? ¿Qué iniciativas voluntarias o no gubernamentales relevantes existen en el sector público o privado (por ejemplo, programas de cuidado responsable, acuerdos entre empresas dentro de un área geográfica, etc.)? Es útil recabar la información recopilada durante esta evaluación en una matriz que identifica cada instrumento jurídico o política existente, su alcance y objetivo, los ministerios o agencias responsables, la participación de otros actores, y otra información relevante sobre contenido e implementación. c. Recursos disponibles Este análisis debe centrarse en lograr una comprensión de los recursos que se encuentran disponibles para la implementación y puesta en vigencia de los requisitos, las políticas y los programas actuales (tanto dentro como fuera del gobierno), así como los recursos que quizás puedan estar disponibles para cualquier compromiso nuevo. Para ello, entre los recursos más importantes se incluyen: el personal que cuenta con experiencia adecuada o puede ser capacitado para que sea competente para las responsabilidades asignadas; los recursos financieros (por ejemplo, qué tipo de presupuesto se encuentra disponible para las autoridades públicas, a quienes se asignaron responsabilidades conforme con las leyes, los reglamentos, las políticas y otros instrumentos); la idoneidad disponible fuera del gobierno, por ejemplo, de la industria, las universidades, los institutos de investigación, los consultores y las organizaciones no gubernamentales. Esa clase de recursos externos con frecuencia son fundamentales, especialmente durante el proceso de desarrollo o para tareas a corto plazo o intermitentes tales como la ayuda para desarrollar una base de datos o los programas de capacitación periódicos; los recursos técnicos, como computadoras, software, establecimientos para equipos de comunicación y respuesta, suministros para capacitación, etc.; y los datos y el material de referencia que pudieran ser necesarios, así como la identificación de las organizaciones que pueden contactarse para obtener información u otra asistencia (como organismos de Naciones Unidas, agencias de otros países, etc.). El Anexo VI (Bibliografía seleccionada) en la página 235 puede ser útil para la identificación de estos recursos internacionales. Es importante que esta información sea plasmada en un informe en el que se resuma los hallazgos de la evaluación, y que el informe presente un panorama de lo que actualmente está disponible o a lo que se puede tener acceso para abordar los temas de seguridad de las sustancias químicas. Puede ser tentador elaborar un informe que identifique qué debe funcionar, en lugar de qué funciona. Se necesita una evaluación realista para identificar vacíos, establecer prioridades y determinar cuál es la mejor manera de avanzar. 51 EJEMPLO FICTICIO FASE DE EVALUACIÓN El Ministerio de Medio Ambiente presidió la subcomisión a cargo de la evaluación del potencial de que ocurran accidentes en su país. Una vez que se reconoció que no existe un registro central del gobierno sobre las instalaciones peligrosas, se concluyó que la mejor información para la evaluación la tienen los gobiernos provinciales. La subcomisión preparó una encuesta para pedir a los gobiernos provinciales que identifiquen establecimientos de posible riesgo. Con el objeto de desarrollar la encuesta, el Ministerio creó los criterios para describir las instalaciones de posible riesgo mediante el análisis de la lista de sustancias presentes en las leyes de otros países y los tipos de instalaciones peligrosas descritas en el Marco flexible del PNUMA. La encuesta solicitó a los gobiernos provinciales que identificaran, si conocían su existencia: • las instalaciones (incluso fábricas, depósitos, conexiones de transporte, etc.) que pudieran crear el riesgo de un accidente con productos químicos, mediante la identificación de la naturaleza del riesgo y el tamaño de las instalaciones; • la ubicación de esas instalaciones en relación a los centros de población, los edificios comerciales o públicos, otras industrias, los cursos de agua, los entornos más susceptibles; • los antecedentes de todo accidente o incidente con productos químicos ocurrido durante los últimos cinco años; y • todos los planes de preparación y los recursos disponibles en el caso de que ocurra un accidente con productos químicos. Además de recabar información de todos los gobiernos provinciales, la subcomisión revisó datos de importación y exportación y entrevistó a individuos claves que pudieran tener una comprensión cabal respecto de la naturaleza y los tipos de instalaciones peligrosas en su país, incluso: exportadores e importadores, dirigentes industriales y sindicales, funcionarios de la autoridad portuaria, personal de los hospitales y funcionarios de los países vecinos. Después de recopilar los resultados de la encuesta, la comisión consultó a expertos de la universidad nacional, a fin de aprender más sobre los riesgos de los terremotos, los monzones y otros desastres naturales en las áreas donde están ubicadas las instalaciones peligrosas. Con toda esa información, la subcomisión elaboró un informe para el Grupo de trabajo, en el que se identifican las cuestiones claves, se describen las personas, las propiedades y las áreas en riesgo en caso de un accidente y se crea un mapa con las instalaciones de posible riesgo y los desarrollos urbanos cercanos. El informe llegó a varias conclusiones importantes: • Las áreas primarias de posible riesgo se encuentran situadas a lo largo de la costa, debido a los establecimientos portuarios, los depósitos y las conexiones de transporte, y a los grupos poblacionales ubicados allí. Además, el área costera es más vulnerable a las inundaciones, lo cual podría contribuir con los riesgos de accidentes. • Existen dos establecimientos grandes de pesticidas, uno es productor y el otro es reformulador/embalador. Ambos establecimientos se construyeron hace más de 20 años en áreas relativamente rurales pero, desde entonces, se han creado servicios públicos comunitarios y de vivienda importantes (escuelas, mercados, campos de juego, etc.), próximos a los establecimientos. • Existen 15 depósitos grandes que contienen pesticidas a granel y embalados. Mientras que la mezcla exacta de productos se modifica periódicamente, los depósitos generalmente almacenan una cantidad considerable de sustancias que son tóxicas y peligrosas para el medio ambiente. Dos de esos depósitos están ubicados en lugares adyacentes a ríos. • La refinería ha tenido seis emisiones accidentales durante los últimos 10 años pero solo una generó efectos fuera del sitio que hizo que 10 personas tuvieran que ir al hospital. • Existe un depósito para explosivos que se utilizan en la construcción de calles y túneles. 52 • Hay una gran actividad de importación y exportación en el puerto pero no hay buenos registros respecto de las cantidades de sustancias peligrosas que pasan por él cada mes. Además, el puerto no tiene buenos procedimientos de control de calidad que ayuden a asegurar que no se dañen los contenedores. • Cada una de las ciudades grandes tiene cantidades sustanciales de cloro almacenadas para el tratamiento de agua y otros fines. El informe del Grupo de trabajo también observó que el Ministerio de Industria ha elaborado un plan quinquenal para atraer nuevos emprendimientos industriales al País X. Si tiene éxito, algunos de esos nuevos emprendimientos industriales crearían nuevos riesgos de accidentes con productos químicos. Por consiguiente, el informe recomendó que se incluyera al Ministerio de Industria en el Grupo de trabajo. Al tiempo que el trabajo avanzaba con el objeto de desarrollar el estudio de las instalaciones peligrosas, el Ministerio de Justicia elaboró un informe que identifica los instrumentos jurídicos y de políticas relevantes, así como los recursos relacionados. El estudio identificó una serie de instrumentos y políticas, entre los que se incluyen: • Una ley general que estipula que los propietarios/operadores de establecimientos industriales son los responsables de asegurar que sus establecimientos no lastimen a los trabajadores, al público o al medio ambiente (conocida en algunos casos como la Cláusula de Obligación General); • Una ley que protege a los trabajadores de condiciones de trabajo inseguras, lo cual incluye la previsión de inspecciones; • Una ley que otorga a los servicios de bomberos el derecho de ingresar a los establecimientos a fin de determinar los riesgos de incendio y exigir a los propietarios/operadores que brinden la información necesaria para dar respuesta a esos incendios. Además, el País X es un Estado miembro de los siguientes Convenios: • el Convenio de Basilea sobre el control de los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y su eliminación; • el Convenio de Rotterdam sobre el procedimiento de consentimiento informado previo aplicable a ciertos plaguicidas y productos químicos peligrosos objeto de comercio internacional; y • el Convenio de Estocolmo sobre contaminantes orgánicos persistentes. El estudio también identificó instrumentos del país relacionados con la gestión de sustancias químicas en forma más general. En particular, existen reglamentaciones para tratar la importación y la exportación de sustancias químicas peligrosas y la disposición de residuos peligrosos. Dichas normativas se desarrollaron como parte de las responsabilidades del País X de conformidad con los convenios de Rotterdam y Basilea. El informe del Ministerio de Justicia observó que el País X es un participante activo de las actividades de la OIT. Si bien no ratificaron el Convenio 174, han apoyado el esfuerzo. El País X también participa en las actividades de la OMS y trabaja con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) sobre cuestiones relativas a la gestión de pesticidas. Con respecto a los recursos, el Ministerio de Justicia leyó el Convenio de la OIT para poder comprender los tipos de recursos que generalmente están involucrados en el desarrollo e implementación de los programas para casos de accidentes con productos químicos (nota: en el Cuadro de texto 5 en la página 67 – Recursos usados en la implementación de un programa para casos de accidentes con productos químicos), aparecen extractos relevantes de dicho Convenio. El estudio también identificó una lista de los expertos técnicos que trabajan para el gobierno que podrían reclutarse para ayudar con el programa para casos de accidentes con productos químicos. Entre ellos se incluyó a cuatro químicos e ingenieros químicos del Ministerio de Medio Ambiente, tres toxicólogos y médicos expertos del Centro Nacional de Envenenamiento (Ministerio de Medio Ambiente), dos ingenieros de procesos (Ministerio de Trabajo) y tres inspectores capacitados y responsables de hacer cumplir las leyes laborales (Ministerio de Trabajo). 53 El estudio observó que existe un programa de capacitación para los inspectores nuevos en el Ministerio de Trabajo; sin embargo, la capacitación ofrece información muy limitada sobre los riesgos de las sustancias químicas. El estudio también observó que los servicios de respuesta del país (bomberos, policía y de emergencia médica) prácticamente no tienen capacitación sobre tratamiento de materiales peligrosos. Dentro del sector privado, los establecimientos productores de pesticidas tienen personal que está capacitado para dar respuesta en caso de accidentes con productos químicos en sus instalaciones. Además, hay varios ingenieros de procesos e ingenieros químicos en la Universidad que también trabajan como consultores. Con respecto a los recursos financieros, el estudio observó que sería difícil obtener alguna clase de asignación de los presupuestos ordinarios de los ministerios claves, ya que esto le quitaría financiamiento a los otros programas. Por consiguiente, el estudio sugirió que los ministerios claves, en forma conjunta, soliciten al Ministerio de Finanzas recursos presupuestarios adicionales a fin de pagar el costo de desarrollar e implementar un programa para casos de accidentes con productos químicos. El estudio incluyó una propuesta de presupuesto que sería revisado por el Grupo de trabajo, así como una matriz en la que se resume las competencias que existen y las leyes, políticas y programas relevantes. 54 B4: Fase de desarrollo La Fase de desarrollo consiste de dos etapas: a. prioridades: definir las prioridades y establecer una estrategia realista para avanzar, tomando en cuenta la comprensión adquirida en la fase de evaluación, los imperativos políticos y las consultas con los actores claves; y b. elementos del programa: implementar la estrategia al escoger/adaptar elementos de un programa para casos de accidentes con productos químicos (usando el resumen de posibles elementos contenidos en el Capítulo C). Durante esta fase, es importante mantener un mecanismo de coordinación entre organismos gubernamentales interesados a fin de evitar conflictos, asegurar la consistencia, hacer el mejor uso de los recursos y minimizar cualquier peso sobre la industria. Es beneficioso para establecer mecanismos formales para la coordinación permanente y facilitar el aprendizaje mutuo. También es importante asegurar la continuidad del compromiso político para este esfuerzo y la consulta permanente con los actores claves no gubernamentales para obtener perspectivas valiosas y lograr un consenso político. Existen muchas maneras de hacer esto y el enfoque específico seleccionado debería ser coherente con la cultura y las costumbres locales. Lo importante es estar seguro de que existe la oportunidad adecuada para efectuar el análisis y el aporte de todos los grupos de actores más importantes. El Cuadro de texto 3 en la página 44, proporciona información adicional (Consultas con actores claves no gubernamentales). Fase de desarrollo OBJETIVOS y ACTIVIDADES OBJETIVOS: Desarrollar una estrategia y un cronograma para avanzar, basado en la determinación de prioridades, recursos, y el contexto político, jurídico y cultural. Implementar el plan de trabajo (desde la Fase Inicial) y desarrollar un programa adecuado para casos de accidentes con productos químicos. ACTIVIDADES SUGERIDAS: Examinar la información recabada en la Fase de Evaluación. Consultar con los actores claves. Asegurar la continuidad del compromiso político. Examinar los imperativos políticos, las consideraciones locales y las actividades relacionadas dentro y fuera del gobierno. Desarrollar una estrategia para avanzar, mediante la identificación de los pasos a seguir, las cuestiones que deben tratarse, la necesidad de recursos, las metas intermedias y los plazos. Revisar el Capítulo C para escoger elementos y adaptarlos a las circunstancias específicas del país. Preparar un borrador del programa para casos de accidentes con productos químicos (para revisión de otras agencias y grupos de actores). 55 a. Definición de prioridades Como parte de este paso, la comprensión adquirida durante la fase de evaluación debería ser usada para: identificar las prioridades nacionales relacionadas con la prevención y la preparación para casos de accidentes con productos químicos; y desarrollar un cronograma y una estrategia realista para avanzar en el tratamiento de esas prioridades dada la disponibilidad de recursos, así como el contexto político y cultural; y Las evaluaciones relacionadas con los riesgos, el contexto jurídico y los recursos, deberían informar sobre las decisiones con respecto al ámbito de aplicación del programa para casos de accidentes con productos químicos, incluso decisiones sobre si debiera basarse en productos químicos especificados o clases de productos químicos con cantidades umbral o si debiera centrarse en industrias en particular o quizás deben priorizarse ciertos tipos de accidentes o lugares en particular. Estas evaluaciones también pueden ayudar a identificar qué elementos del programa para casos de accidentes con productos químicos deben desarrollarse más e implementarse como primera prioridad y, a la vez reconocer que normalmente es imposible establecer un programa amplio en cierto momento y que un programa puede ampliarse en la medida que los recursos y la experiencia lo permitan. En este punto se deben tener en cuenta la dotación de personal y otras limitaciones de recursos para que cualquier programa que esté establecido pueda ser implementado y cumplido eficazmente. A continuación aparecen algunos ejemplos de cómo un país podría pensar con respecto al establecimiento de prioridades basado en el resultado de las evaluaciones: un país puede descubrir que ya tiene un sistema eficaz para realizar inspecciones laborales que podrían ajustarse para que incluyan un elemento de seguridad de proceso y, por lo tanto, no existe la necesidad de tener un nuevo programa de inspección de accidentes; un país puede descubrir que varios organismos del gobierno ya se ocupan de recabar mucha información útil pero la información no está catalogada ni la comparten las agencias y, por lo tanto, concluyen que una prioridad fundamental debe ser establecer sistemas de manejo y distribución de la información (en el Capítulo C, Sección C3, parte (b) Manejo de la Información) en la página 96, aparece información adicional; si los recursos son muy limitados, es posible que un país decida fortalecer la cláusula de obligación general e imponerle ciertas responsabilidades a la industria, mientras que inicialmente centre sus esfuerzos en perfeccionar la planificación de la preparación y la información pública a las comunidades; y un país puede concluir que debiera comenzar con un ámbito de aplicación limitado (por ejemplo, centrándose en una industria en particular o un lugar muy desarrollado) para poder adquirir experiencia antes de implementar totalmente su programa. Existe una serie de consideraciones locales e imperativos políticos que quizás intervengan sobre las decisiones relacionadas con las prioridades. Por ejemplo: Si recientemente hubo una serie de accidentes en los depósitos ferroviarios, habrá presión para asegurar que los accidentes en las conexiones de transporte sean tratados como una prioridad, aunque existan otras instalaciones que planteen un nivel de riesgo más alto. Es posible que el público tenga inquietudes acerca de ciertos productos químicos debido a accidentes muy publicitados ocurridos en otros países, lo cual ejerce presión sobre los 56 gobiernos para que se regulen (incluso en el caso de que no sean los productos químicos más peligrosos). En una comunidad donde el suministro de la información al público es difícil (por ejemplo, debido a una tasa de analfabetismo alta o a la existencia de una multiplicidad de lenguas dentro de un área pequeña), quizás haya más presión para que se asigne un nivel de recursos más alto destinado a ayudar a que el público potencialmente afectado esté preparado en caso de que se produzca un accidente, que en el caso donde fuera posible divulgar la información con mayor facilidad. b. Selección o adaptación de elementos de un programa para casos de accidentes con productos químicos En este punto, el país debería trabajar para implementar la estrategia desarrollada en el paso anterior. Para apoyar este esfuerzo, el Capítulo C de esta Guía contiene información sobre posibles elementos de un programa para casos de accidentes con productos químicos, tales como requisitos de la industria (notificación, sistemas de gestión de seguridad, etc.), la función de las autoridades (manejo de la información, inspecciones, planificación de uso de suelo, etc.), y métodos para comunicarse con el público. Las autoridades pueden comparar los resultados de la Fase de evaluación con los componentes esbozados en el Capítulo C, así como las prioridades y estrategia definidas en el paso anterior, para identificar elementos del programa que deberían ser desarrollados o incorporados. Las decisiones concernientes al contenido y al ámbito de aplicación del programa debería reflejar una evaluación realista de qué puede hacerse, según los recursos disponibles: humanos, financieros y técnicos, y el contexto político y regulador. Puede comenzar con un número limitado de elementos para tratar las necesidades más apremiantes y ampliarse, según lo permitan la experiencia y los recursos. Cada país debe considerar cuidadosamente cuál es la mejor manera de crear y mantener su programa para casos de accidentes con productos químicos. Esta decisión no se toma una sola vez; más bien es “un proceso iterativo que evolucionará con el tiempo. Es fundamental que se revise el programa periódicamente a fin de determinar si está logrando sus objetivos y si es necesario modificar o ampliar el programa a la luz de los cambios en lo que respecta a la nueva información, los riesgos, los recursos, las prioridades y la experiencia. Los siguientes son puntos que deben tenerse en cuenta al momento de considerar qué elementos deben incluirse en el programa: • No es necesario que el programa para casos de accidentes con productos químicos sea un programa independiente, distinto. Puede estar incorporado a los contextos jurídicos existentes, como leyes y programas ambientales, sanitarios, laborales y de otros temas. • Puede incorporar instrumentos jurídicos y de políticas existentes (modificados según corresponda) y/o el desarrollo de nuevos instrumentos. Debido a que la aprobación de la legislación nueva o el desarrollo de nuevos reglamentos pueden ser un proceso arduo y que lleve tiempo, tal vez sea más eficiente utilizar autoridades jurídicas existentes para tratar la seguridad química tanto como sea posible. • Cuando se establecen los requisitos para instalaciones peligrosas, puede haber distintos niveles (o “escalones”), basados en la naturaleza y el alcance de los riesgos planteados por la instalación. Algunos países establecen diferentes requisitos de presentación de informes y obligaciones jurídicas para instalaciones en categorías de riesgo más bajas y más altas. 57 • El programa debe tener en cuenta qué actividades están llevando a cabo las organizaciones no gubernamentales (incluso iniciativas voluntarias de la industria, investigación en las universidades, programas de información a la comunidad, etc.) que apoyan la prevención y preparación de accidentes, así como otras actividades no gubernamentales que podrían incentivarse por parte de las autoridades gubernamentales. • La integración de aspectos relacionados con la planificación de emergencias para instalaciones peligrosas con la planificación de emergencias para desastres naturales (tales como inundaciones, terremotos y tormentas) y la defensa civil, en vista de que estas actividades involucran muchos de los mismos requisitos. Se debe tener en cuenta que los desastres naturales pueden desencadenar accidentes con sustancias químicas en instalaciones peligrosas, y pueden impedir las actividades de respuesta de emergencias. • La información y el apoyo que puede estar disponible de fuentes internacionales. EJEMPLO FICTICIO FASE DE DESARROLLO DEFINICIÓN DE PRIORIDADES La segunda reunión del Grupo de Trabajo fue convocada a fin de examinar los informes elaborados como resultado de la Fase de evaluación, y definir las prioridades nacionales para la acción. Después de examinar y analizar esos informes, así como de obtener retroalimentación sobre las consultas en curso, el Grupo de Trabajo llegó a las siguientes conclusiones: • Aún cuentan con el compromiso político necesario para seguir avanzando • Deben desarrollar un marco relacionado con la prevención y la preparación para casos de accidentes con productos químicos, a la vez que admiten que la legislación existente ofrece una base suficiente para hacerlo. • Dada la cantidad limitada de instalaciones peligrosas del país, el ámbito de aplicación del programa para casos de accidentes con productos químicos debe definirse mediante la identificación de las industrias pertinentes. El Ministerio de Medio Ambiente efectuará la revisión dentro de un lapso de tres años a fin de determinar si el País X debe cambiar el ámbito de aplicación del programa mediante el desarrollo de una lista de sustancias químicas y cantidades umbrales para definir las instalaciones que serán cubiertas. • La prioridad debe establecerse en: los establecimientos de almacenamiento, que deben estar sujetos a controles que especifiquen que el propietario/operador conoce las sustancias químicas almacenadas y sus propiedades, evalúa los riesgos y determina procedimientos para ayudar a asegurar la ubicación adecuada de las sustancias químicas, y el puerto y otras conexiones de transporte que deben estar sujetos a controles a fin de asegurar que se conserve la información relativa a la carga, mejorar las operaciones de carga y descarga, y preservar la integridad de los contenedores. • El fabricante y formulador de pesticidas, y la refinería, también deben estar sujetos a los requisitos de presentación de informes e inspecciones periódicas. Sin embargo, se observó que los propietarios/operadores de esos establecimientos tienen sistemas de gestión de la seguridad en funcionamiento, así como los recursos necesarios para una operación segura. • El programa debe incluir los requerimientos de informes y un sistema de inspecciones. • Las autoridades deben divulgar la cláusula de obligación general que ya existe en su legislación. 58 • El programa también debe contener disposiciones relativas a la consulta y la coordinación con los países vecinos, dada la ubicación de los establecimientos próximos a la frontera y a los ríos. El Convenio de la Comisión Económica para Europa de las Naciones Unidas (CEPE/ONU) y demás documentación relacionada podría ofrecer un modelo para ello. • Dada la proximidad de los desarrollos cerca de instalaciones peligrosas, deben realizarse esfuerzos para reducir los riesgos de los efectos fuera del sitio y educar al público en riesgo sobre las acciones que deben tomar en caso de que ocurra un accidente. • Dado el plan de desarrollo industrial para los cinco años siguientes, deben determinarse los reglamentos sobre planificación del uso del suelo a fin de guiar la selección del lugar para establecimientos nuevos y evitar la invasión de viviendas y otras construcciones cercanas a instalaciones peligrosas. Además, cualquier propuesta de instalaciones peligrosas nuevas o de ampliaciones de éstas, deben estar sujetas a los requisitos de información antes de obtener la aprobación para su construcción. • Se deben realizar esfuerzos para encontrar los recursos para contratar, capacitar y equipar personal de apoyo técnico adicional e inspectores. • Dado el número limitado de personal prontamente disponible para actividades técnicas, se debe desarrollar un plan para identificar cómo implementar el programa en etapas, comenzando con la redacción de reglamentos y material de orientación e inspecciones limitadas cuando haya información que indique que un problema pudiera existir. Las inspecciones regulares de las instalaciones más peligrosas serán incorporadas por fase a medida que haya más personal capacitado disponible. • Las necesidades de capacitación de los inspectores deben ampliarse para que incluyan temas relacionados con la seguridad en casos de accidentes con productos químicos. • Es necesario que el personal de respuesta tenga una capacitación adicional, y equipo, a fin de responder en forma adecuada en caso de que se produzca un accidente con productos químicos. • Dada la gran cantidad de agencias involucradas, el programa para casos de accidentes con productos químicos debe incorporar un mecanismo de coordinación permanente a fin de evitar superposiciones y conflictos en la implementación de leyes, reglamentos y políticas. • Los registros vinculados con accidentes anteriores no son suficientes. Debe establecerse un sistema de informes e investigarse los accidentes claves. También deben hacerse esfuerzos para aprender de la experiencia de otros países. • El gobierno debe mantener una serie de programas de capacitación para los funcionarios locales. • Todo borrador de reglamentaciones y políticas nuevo debe estar disponible y ofrecer una oportunidad al público para que realice comentarios. Se hizo circular el borrador de una estrategia para avanzar en el Grupo de Trabajo. La misma establece una agenda de cuatro meses destinada al desarrollo del programa para casos de accidentes con productos químicos, asigna responsabilidades a los distintos aspectos, crea un mecanismo de consultas con los actores del sector público y privado, y propone una agenda para alcanzar metas intermedias específicas. SELECCIÓN O ADAPTACIÓN DE LOS ELEMENTOS DEL PROGRAMA Provisto de las conclusiones de la segunda reunión del Grupo de Trabajo y la estrategia, el Director de Políticas (DP) del Ministerio de Medio Ambiente y su equipo fueron los responsables de desarrollar un primer borrador del programa para casos de accidentes con productos químicos. Con el objeto de facilitar el proceso, el Director de Políticas utilizó una serie de materiales internacionales de orientación, incluso el Marco flexible del PNUMA, el Convenio de la OIT y material de apoyo, los Principios rectores de la OCDE para la prevención, la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos, la Directiva Seveso II y otras guías relacionadas disponibles en la página Web de la Oficina de Riesgos de Accidentes Graves y en la página Web de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos. El equipo tomó varias decisiones sobre el primer borrador: 59 • El programa podría desarrollarse a través de reglamentaciones y declaraciones de políticas. No es necesario crear legislación nueva porque las leyes existentes delegan responsabilidad suficiente a los ministerios. • El programa debe ser simple en el inicio, especialmente debido al desarrollo limitado de la industria en el país, y admitir que el programa puede ampliarse con el tiempo, según sea necesario. • No es necesario crear una nueva cláusula de obligación general si ya existe pero será mencionada en los reglamentos y ampliamente divulgada. • Se exigirá que los propietarios/operadores de instalaciones peligrosas sujetos a los reglamentos suministren la información específica a las autoridades dentro de un plazo de seis meses. Además, la notificación de nuevas instalaciones y las modificaciones de consideración se harán efectivas un año antes del inicio estimado de la construcción. • Se exigirá que dentro de un año, los propietarios/operadores presenten un informe de seguridad que contenga información básica y, si se solicita, información adicional. Si bien el equipo consideró establecer un sistema de niveles, concluyó que con tan solo un puñado de instalaciones peligrosas, debían tener un solo nivel con información adicional requerida caso por caso, después del estudio del informe de seguridad. • Se requerirá que los propietarios/operadores emprendan una evaluación de los riesgos, por medio de una metodología reconocida. • La guía se desarrollará a fin de ayudar a que los propietarios/operadores establezcan una política de prevención de accidentes e implementen un sistema de gestión de la seguridad. • Se requerirá que los propietarios / operadores establezcan y mantengan un plan de preparación dentro del sitio. • También se requerirá que los propietarios / operadores suministren la información necesaria por parte de las autoridades para desarrollar planes fuera del sitio. • Se requerirá que los propietarios/operadores suministren información al público en los alrededores de su instalación, conforme a la guía que debe elaborar el Ministerio de Medio Ambiente. • Se requerirá que toda instalación (inclusive aquellas que no están cubiertas de otra forma por el programa) informe al Ministerio de Medio Ambiente cualquier accidente que reúna los criterios especificados. También se les requerirá que investiguen accidentes de consideración y que proporcionen los informes de investigación al Ministerio, con protección de la información de negocios confidencial. • La Guía relacionada con la implementación del programa se desarrollará en los dos idiomas nacionales. • Se establecerán los requerimientos sobre la planificación de uso del suelo respecto de nuevas instalaciones en el sitio a una distancia adecuada de las áreas públicas y medio ambientes susceptibles. Tal requerimiento corresponde a las modificaciones mayores que se realicen en instalaciones existentes. Se analizarán las obras existentes a fin de determinar si es necesario eliminar edificios de los alrededores de las instalaciones peligrosas o si es posible que sean necesarias medidas adicionales para proteger a las personas y los ambientes susceptibles. La responsabilidad de la implementación para la planificación del uso del suelo se delegará a las autoridades locales. • El Ministerio de Trabajo llevará a cabo las inspecciones, con el apoyo de expertos técnicos de otros ministerios. Así, las inspecciones relacionadas con la seguridad química pueden coordinarse con inspecciones laborales más generales. • La planificación de la preparación fuera del sitio se delegará a las autoridades locales. Se ofrecerá orientación a fin de asegurar que se realicen las acciones correspondientes. El Ministerio de Defensa Civil ofrecerá programas de capacitación sobre materiales peligrosos a las autoridades locales. Se pondrán a disposición subsidios para la compra de equipos. 60 • El Ministerio de Medio Ambiente liderará la investigación de accidentes, en colaboración con otras agencias, toda vez que crea que una investigación mejorará en forma significativa las prácticas de prevención o si cree que es necesario para hacer cumplir la ley. • El gobierno iniciará consultas con los países vecinos que pudieran tener instalaciones que podrían afectar al País X en caso de que se produzca un accidente y con países que quizás puedan verse afectados negativamente por un accidente ocurrido en el País X. • La asignación de las responsabilidades de las autoridades NO serán indicadas en la normativa pero, en cambio, será delegada al Grupo de Trabajo para que decida. El Grupo de Trabajo también evaluará si algún ministerio necesitará recursos adicionales (incluso personal) para cumplir con sus responsabilidades. • Se establecerá por ley un mecanismo de coordinación permanente. • Se establecerá contactos con el PNUMA y la OMS para determinar si estas organizaciones pueden brindar algún apoyo a las actividades de capacitación. El Grupo de Trabajo analizará y, por consiguiente, revisará el programa para casos de accidentes con productos químicos (incluso los borradores de reglamentos y declaraciones de políticas). Luego de ese proceso, el borrador estará disponible para que el público pueda analizarlo y hacer los comentarios correspondientes. Después de tres meses, el Grupo de Trabajo se volverá a reunir para analizar los comentarios y revisar la reglamentación antes de que finalmente sea adoptada. 61 B5: Fase de implementación Está fase es presentada en cinco pasos, que captan las actividades claves que un país tendrá que abordar para implementar su programa para casos de accidentes con productos químicos y por lo tanto lograr lo que se espera del programa. En este punto, se supone que un programa para casos de accidentes con productos químicos ha sido desarrollado y se refleja en la combinación de documentos jurídicos – leyes, reglamentos, órdenes u otros instrumentos de políticas o programas por escrito. No se debe suponer que los pasos descritos a continuación se tengan que tomar en orden secuencial. De hecho, muchas de las actividades esbozadas en estos pasos están estrechamente relacionadas e interdependientes. En muchos casos, los pasos serán tomados simultáneamente. Además, la mayoría de las actividades de implementación son de naturaleza permanente. Cada país tendrá que decidir cómo abordar la fase de implementación; el trabajo realizado durante las fases de evaluación y desarrollo debería permitir la comprensión sobre cómo proceder con la fase de implementación. Los cinco pasos son: a. requisitos de recursos: identificar y mantener los recursos necesarios para la implementación, que debe incluir personal, presupuesto y equipo; b. acceso e intercambio de información: determinar qué tipos de información es necesaria para apoyar la implementación y crear los medios para recabar o generar esta información. Este paso incluye el desarrollo de una base de datos de instalaciones peligrosas y divulgación de información al público; c. estructuras jurídicas y administrativas: asegurar que están establecidas las estructuras adecuadas y que las responsabilidades están asignadas para cada aspecto del programa; d. liderazgo: inspirar y facilitar la implementación por la industria y otros con funciones en la prevención y reparación de accidentes con productos químicos; y e. cumplimiento: crear medios para identificar el no cumplimiento, incluso el monitoreo y la inspección de programas, e imponer sanciones adecuadas por el incumplimiento. La palabra “implementación” se utiliza aquí para incluir una amplia gama de actividades que ayudan a poner en práctica los elementos del programa. Esta Guía se centra en la función de los organismos gubernamentales en la implementación de un programa para casos de accidentes con productos químicos, incluso su función en facilitar la implementación de otros al proporcionar guía, 19 por ejemplo. Para ser eficaz, cada país debería adaptar sus actividades de implementación a su contexto específico, tomando en cuenta su contexto jurídico y cultural, la naturaleza y el alcance de los riesgos, los recursos disponibles, etc. Además, se debe tener en mente los objetivos de cada elemento del programa, para que las actividades de implementación estén orientadas hacia el cumplimiento de estos objetivos. 19 Se entiende que las empresas tienen la responsabilidad primaria por la seguridad de sus instalaciones peligrosas. Los propietarios/gerentes deberían asegurar que todas las empresas tienen una cultura de seguridad que promueve la actitud que la seguridad es una prioridad, así como un sistema de gestión de seguridad (incluso la organización adecuada, procedimientos tecnológicos) que minimiza los riesgos relacionados con los accidentes químicos. En el Cuadro de texto 2 (Funciones de los actores) en la página 15, aparece información adicional, Cuadro de texto 12 (Sistemas de gestión de la seguridad) en la página 129, SG-1 (Guía sobre sistemas de gestión de la seguridad) en la página 165, y el Anexo VI (Bibliografía seleccionada) en la página 235 para fuentes de orientación concernientes a la función de la industria en la prevención y preparación de accidentes. 62 Es probable que las listas de actividades esbozadas en los cinco pasos descritos a continuación puedan parecer difíciles de lograr. Pero estas listas son proporcionadas para guiar la toma de decisiones y no pretenden ser una lista de verificación que tiene que ser hecha de una sola vez. Mientras algunas de las actividades son claves, cada país necesita decidir qué actividades son las más importantes y adaptarlas a las circunstancias locales. Estas actividades también se pueden llevar a cabo más adelante por etapas. Por lo tanto, parte de este proceso consiste en identificar prioridades y considerar el mejor orden para avanzar. En la mayoría de los países, la realidad es que no hay suficiente personal u otros recursos para hacer todo lo que se pretende. El objetivo debería ser realista, y, a la misma vez, garantizar que están disponibles suficientes recursos para una implementación significativa del programa, aunque esté limitado al inicio. 63 a. Requisitos de recursos (humanos, financieros y técnicos) Para avanzar con la implementación, el primer paso es desarrollar un plan que identifique los recursos necesarios para implementar los diferentes aspectos del programa para casos de accidentes recientemente desarrollado, y cómo se pueden cumplir y mantener estas necesidades a lo largo del tiempo (por ejemplo, personal, presupuesto, tecnología y equipo). La información, un recurso clave, será tratada por separado a continuación. Es importante considerar cómo hacer el mejor uso del personal que está disponible aunque no se cumplan plenamente las necesidades identificadas. Esto se puede hacer mediante la capacitación en el lugar de trabajo, los programas de tutoría y el intercambio de experiencias. Además, se debe pensar en qué acciones se deben tomar a corto plazo y qué se puede incorporar por fases. Los países también debieran tomar en consideración cómo minimizar la duplicación de esfuerzos. Fase de implementación: Requisitos de recursos OBJETIVOS y ACTIVIDADES OBJETIVO: Identificar y luego asegurar los recursos necesarios para implementar eficazmente el programa para casos de accidentes con productos químicos. Los recursos incluyen el personal, el presupuesto y el equipo/tecnología (en el siguiente paso se abordará la información). ACTIVIDADES SUGERIDAS: Personal: Identificar las cantidades y los tipos de personal que se necesitan teniendo en cuenta las funciones identificadas en el programa para casos de accidentes con productos químicos, y la naturaleza y el alcance de los riesgos. Asignar o contratar a más personal (o, según sea necesario, usar consultores) para cumplir con estas necesidades. Establecer y mantener un programa adecuado de capacitación de personal. Presupuesto: Preparar un presupuesto realista para llevar a cabo las responsabilidades asignadas. Revisar las opciones que existen para asegurar los fondos. Tecnología, equipo, etc.: Identificar la tecnología, el equipo y otros recursos necesarios (además del personal, el financiamiento y la información). Determinar dónde y cómo se puede tener acceso a estos recursos, conforme se necesitan. Tal vez sea necesario decidir qué actividades tienen precedencia y reevaluar las prioridades. Por ejemplo, si no es posible dotar de suficiente personal los programas de inspección, puede que haya la necesidad de decidir cambiar la frecuencia o metas de las inspecciones. Si se hacen disponibles más fondos de los que se anticipaban, pudiera haber la necesidad de decidir cómo expandir el programa o qué actividades se beneficiarían más de estos recursos adicionales. Los países también deberían considerar qué recursos no gubernamentales podrían estar disponibles en el país, así como de fuentes externas. Por ejemplo, pudiera haber asistencia disponible a través de programas de asistencia bilateral o de varios organismos de Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales. 64 El Cuadro de texto 5 (Recursos usados en la implementación de un programa para casos de accidentes con productos químicos) en la página 67 contiene un extracto del Código de Prácticas de la OIT para la prevención de accidentes industriales mayores, que describe el tipo de recursos que idealmente se deben tener para la implementación de un programa para casos de accidentes con productos químicos. Pudiera ser útil utilizar este texto cuando se examinen las necesidades de recursos. No es de esperarse que cuando un país establezca su programa, pueda tener acceso a la gama completa de recursos que se describen en el Cuadro de texto 5. Personal: Los organismos gubernamentales deberían esforzarse por tener suficiente personal calificado disponible para llevar a cabo sus funciones y responsabilidades, según se establece en el programa para casos de accidentes con productos químicos. El objetivo debería ser contar con personal que posea la combinación apropiada de competencia, conocimiento y experiencia, y tener la educación adecuada (por ejemplo, tener el conocimiento necesario, los antecedentes y destrezas) y estar capacitados para desempeñar su trabajo. Un perfil de la experiencia profesional disponible y los vacíos que existen, ayudarán a desarrollar una estrategia para tratar las necesidades de dotación de personal. Los requisitos de personal incluirán a personas con experiencia científica y técnica que pueda llevar a cabo las tareas necesarias para implementar el programa, como por ejemplo, preparar reglamentos y materiales de orientación, revisar informes de seguridad, llevar a cabo inspecciones, y comprender cómo los productos químicos peligrosos podrían impactar en la salud humana y el medio ambiente. Además, es probable que sea necesario tener experiencia jurídica para las actividades normativas y de cumplimiento y personal médico para los esfuerzos de preparación y respuesta de emergencia. Este personal puede consistir de nuevo personal contratado o existente, a quienes se les han asignado nuevas responsabilidades. En algunos casos, se le puede dar asignaciones específicas a empleados temporales o consultores externos. La contratación se puede hacer por etapas, conjuntamente con la implementación por fases del programa. Por ejemplo, no es posible llevar a cabo inspecciones y otras actividades asociadas al cumplimiento hasta que exista suficiente personal competente, lo cual involucra una combinación de contratación, capacitación y tal vez, la contratación de expertos. Por otro lado, es posible crear un equipo de inspección en fases con la primera contratación que se centra en las instalaciones de más alta prioridad. Se puede ampliar el programa de inspección a medida que haya personal disponible y capacitado. La capacitación es importante para ayudar a asegurar que los miembros del personal en general están familiarizados con el programa para casos de accidentes con productos químicos, y que tienen una comprensión de sus funciones y responsabilidades específicas y de las leyes, los reglamentos y las políticas relacionadas. El objetivo debería ser capacitar al personal cuando asuma nuevas responsabilidades y periódicamente después para ayudar a asegurar una competencia continua. Los programas de capacitación deberían ser revisados regularmente y actualizados para estar seguro que están logrando los resultados deseados. Los países deberían considerar cómo podrían llevar a cabo las actividades de capacitación. No es necesario hacerlo internamente. Se le puede pedir, por ejemplo, a la industria que ayude a dar alguna capacitación técnica y científica, o se pudiera involucrar a las universidades locales u organizaciones no gubernamentales. Además, existe material disponible de las organizaciones internacionales y otros recursos para apoyar las actividades de capacitación. Los países vecinos podrían pensar en tener programas de capacitación conjunta, por ejemplo, para compartir experiencias con respecto a las inspecciones o investigación de accidentes. 65 La mayoría de los países enfrentan la retención de personal calificado. Para ayudar con esto, la administración debería proporcionar el apoyo y los recursos adecuados a su personal y establecer procedimientos para los miembros del personal para dar y recibir retroalimentación. El personal debería recibir un reconocimiento adecuado por hacer bien su trabajo. Presupuesto: Es importante analizar qué recursos financieros serían necesarios para implementar el programa para casos de accidentes con productos químicos y establecer prioridades de acción basadas en los recursos que pueden estar disponibles. Todas las organizaciones tienen limitaciones de recursos y, por lo tanto, es necesario establecer prioridades para poder hacer una asignación más eficiente de los recursos limitados. El presupuesto debería tomar en cuenta todos los costos relacionados, tales como el salario del personal, los honorarios de los consultores y la capacitación, así como los gastos relacionados con las actividades de información pública y comunicación; como por ejemplo, el manejo de la información y de la base de datos, el transporte, las actividades de cumplimiento (incluso las inspecciones), la preparación de emergencia y las investigaciones de accidente y el seguimiento. Mediante la colaboración, los organismos gubernamentales pueden ser capaces de mejorar la eficiencia, evitar las superposiciones y compartir las responsabilidades, y así reducir las necesidades presupuestarias en general. Por ejemplo, puede que sea posible llevar a cabo inspecciones de seguridad de sustancias químicas conjuntamente con las inspecciones de trabajo y, de esta forma, reducir la necesidad de realizar múltiples inspecciones de una instalación peligrosa. Existen distintos mecanismos que se han utilizado para generar financiamiento destinado a programas para casos de accidentes con productos químicos. Cada país debería considerar lo que es mejor dadas sus circunstancias. Éstas incluyen alguna combinación de: asignaciones de presupuestos generales; costos compartidos entre aportes de múltiples agencias; multas (sanciones por incumplimiento); impuestos sobre ciertos productos químicos o sobre los residuos; otorgamiento de permisos (permisos para operar); y honorarios por servicios (honorarios por inspecciones, capacitación y servicios de laboratorio). Equipo y otros recursos: Esta categoría trata sobre equipo, tecnología y otros materiales necesarios para implementar un programa para casos de accidentes con productos químicos. Esto podría incluir, por ejemplo: hardware y software de computadora que se necesita para manejar las bases de datos y otra información y crear un sitio Web; el transporte y equipo de protección personal para que los inspectores visiten las instalaciones; y suministros médicos y equipo especializado de respuesta y descontaminación, según se establece en los planes de preparación de emergencias. Algunos tipos de equipo se pueden necesitar en forma periódica, y por lo tanto, pudiera ser compartido entre organizaciones dentro del mismo país o más allá de sus fronteras, o se pudiera comprar según se requiera, en vez de mantenerlo en el inventario. Como un ejemplo, como parte de su planificación de preparación, los gobiernos pueden estar de acuerdo en compartir el equipo de HAZMAT entre las comunidades vecinas. 66 Cuadro de texto 5 RECURSOS USADOS EN LA IMPLEMENTACIÓN DE UN PROGRAMA PARA CASOS DE ACCIDENTES CON PRODUCTOS QUÍMICOS (Código de Prácticas de la OIT para la prevención de accidentes industriales mayores) El Capítulo 4 del Código de Prácticas de la OIT, que se presenta a continuación, describe los tipos de recursos involucrados en el desarrollo e implementación de un programa para casos de accidentes con productos químicos que incluye la experiencia profesional, el equipo y la información. Esta lista representa lo que idealmente estaría disponible para un país. En la práctica, todos los países enfrentan limitaciones presupuestarias. Esta lista puede ser una herramienta valiosa para ayudar a los países a identificar lo que está disponible y pudieran necesitar de acuerdo con sus circunstancias. También podría ayudar a determinar cómo avanzar con un enfoque por fases hacia la implementación. 4.1. General 4.1.1. Los prerrequisitos para la operación de un sistema de control de peligros mayores son: a. la mano de obra dentro de la industria, así como dentro de las autoridades competentes, incluso experiencia profesional externa, en caso de que sea necesario; b. el equipo; c. las fuentes de información. 4.2. Requisitos de la mano de obra 4.2.1. General 4.2.1.1. La administración de las obras debería asegurarse que cuenta con un número adecuado de trabajadores con suficiente experiencia profesional antes de operar una instalación de peligros. El diseño de trabajos y sistemas de horas de trabajo debiera arreglarse para que no aumente el riesgo de accidentes. 4.2.1.2. Para que un sistema de control de riesgo mayor sea totalmente operacional, las autoridades competentes deberían asegurar la disponibilidad de la siguiente mano de obra especializada: a. inspectores del gobierno con apoyo de especialistas; b. especialistas en evaluación de peligro y de riesgo; c. especialistas en examen y pruebas de recipientes a presión; d. planificadores de emergencia; e. expertos en planificación de uso de suelo; f. servicios de emergencia, policía, autoridades de bomberos y servicios médicos. 4.2.1.3. Las autoridades competentes no deberían esperar para que la mano de obra especializada esté disponible en todos los campos antes de comenzar un sistema de control de peligros mayores. Deberían establecer prioridades realistas basadas en la mano de obra disponible. 4.2.2. Cuerpo de inspectores del gobierno 4.2.2.1. Las autoridades competentes deben poner a la disposición personal idóneo, incluso el apoyo de especialistas para la inspección de instalaciones de peligros mayores y brindarles la capacitación adecuada para que puedan realizar sus tareas. 4.2.3. Grupo de expertos 4.2.3.1. Las autoridades competentes deberían hacer que haya recursos disponibles para 67 establecer un Grupo de expertos en el país, particularmente cuando hay una escasez de experiencia técnica dentro del cuerpo de inspectores de la fábrica. Este Grupo debería incluir ingenieros y científicos con experiencia. 4.2.3.2. Si procede, este Grupo debería ser apoyado desde instancias externas a las autoridades competentes, tales como la industria, los sindicatos o consultorías especializadas. 4.2.4. Comité de asesoría 4.2.4.1. Las autoridades competentes deberían considerar el establecimiento de un comité asesor sobre peligros mayores. Este comité debería incluir a representantes de todas las organizaciones involucradas o con experiencia en el control de peligros mayores, incluso: a. b. c. d. e. las autoridades competentes; las administraciones de obras y las organizaciones de empleadores; los sindicatos o representantes de los trabajadores; las autoridades locales; las instituciones científicas. 4.2.4.2. Los objetivos de este comité deberían incluir: a. la discusión de las prioridades para el sistema de control de peligros mayores en el país, según los requisitos nacionales; b. la discusión de temas técnicos con respecto a la implementación del sistema de control de peligros mayores; c. hacer recomendaciones sobre todos los aspectos de la seguridad de las instalaciones de peligros mayores. 4.3. Equipo 4.3.1. Las autoridades competentes deberían considerar si los elementos del sistema de control de peligros mayores requieren el uso de sistemas de computación, especialmente en el establecimiento de bancos de datos e inventarios nacionales o estatales de instalaciones de peligros mayores. 4.3.2. Dependiendo de los arreglos locales, la administración de las obras o de las autoridades locales debería poner a la disposición equipo técnico para uso en una situación de emergencia, de acuerdo con las necesidades de los planes de emergencia. Dicho equipo debería incluir: a. material de primeros auxilios y rescate; b. equipo contra incendio; c. contención de derrames y equipo de control; d. equipo de protección personal para personal de rescate; e. instrumentos de medición para varios materiales tóxicos; f. antídotos para el tratamiento de personas afectadas por las sustancias tóxicas. 4.4. Fuentes de información 4.4.1. Las autoridades competentes deben determinar sus necesidades de información para establecer un sistema de control de peligros mayores. Estos pueden incluir: a. b. c. d. e. avances tecnológicos en las industrias de proceso; adelantos en el control de peligros mayores; códigos de prácticas de temas técnicos relacionados con la seguridad; informes de accidentes, estudios de evaluación, y lecciones aprendidas; inventario de expertos y especialistas sobre control de peligros mayores. 4.4.2. Las autoridades competentes deberían considerar fuentes adecuadas para esta 68 información, la cual pudiera incluir: a. expertos e investigadores de la industria; b. organizaciones industriales y comerciales; c. organizaciones nacionales e internacionales que establecen las normativas; d. organizaciones sindicales; e. consultores; f. universidades e institutos de investigación; g. instituciones profesionales; h. códigos de prácticas internacionales y principios rectores; i. códigos nacionales y reglamentos de países altamente industrializados; j. informes de accidentes; k. informes publicados sobre evaluaciones de peligros mayores; l. actas de seminarios y conferencias; m. libros de texto específicos; n. publicaciones y artículos en revistas que tratan sobre peligros mayores. 69 b. Acceso e intercambio de información La información es un componente crucial de la implementación exitosa de cualquier programa para casos de accidentes con productos químicos. Se necesitan muchos tipos de información, incluso, por ejemplo: un diccionario o tesauro con los nombres locales de los productos químicos peligrosos; información sobre las características de productos químicos peligrosos (como por ejemplo, cómo reaccionan cuando se derraman y sus posibles efectos adversos en caso de un accidente); metodologías para la evaluación de riesgos; medidas de primeros auxilios; la ubicación de instalaciones peligrosas y los informes de accidentes. Gran parte de esto está disponible en las fuentes existentes y, por lo tanto, solamente necesita ser recabado y organizado. La industria regulada debería poder brindar información sobre sus actividades específicas. Por medio de la Internet, es posible tener acceso a una gran cantidad de información de fuentes internacionales para apoyar el programa para casos de accidentes con productos químicos, tales como información sobre metodologías de evaluación de riesgo, características químicas, impactos sanitarios, y tratamiento por envenenamiento. Fase de implementación: Acceso e intercambio de información OBJETIVO y ACTIVIDADES OBJETIVO: Asegurar que la información necesaria para la implementación eficaz del programa para casos de accidentes con productos químicos esté disponible y desarrollar mecanismos para compartir información con otros actores. ACTIVIDADES SUGERIDAS: Categorizar los tipos de información que se necesita para el programa para casos de accidentes con productos químicos. Identificar las fuentes de información. Recabar y registrar información sistemáticamente. Establecer un inventario de instalaciones peligrosas. Establecer estructuras administrativas, bases de datos y otros mecanismos para facilitar la recolección, revisión, mantenimiento y actualización de información de notificaciones e informes de seguridad. Establecer un accidentes. esquema para informar sobre los Establecer un mecanismo para compartir información entre los organismos gubernamentales involucrados en el programa para casos de accidentes con productos químicos. Crear procedimientos para compartir información y consultas, con todos los actores, incluso la industria, los trabajadores, el público y las organizaciones no gubernamentales. Asegurar que la información le llegue de forma eficaz al público potencialmente afectado. Establecer mecanismos para el intercambio información dentro del país y entre países. de La información sobre Promover el intercambio de las experiencias y las productos químicos de interés lecciones aprendidas. y sus impactos potenciales en caso de un accidente está disponible en los países que han tenido programas para casos de accidentes con productos químicos, y también de organizaciones internacionales. 70 Las universidades y las instituciones de investigación también cuentan con información disponible para el público sobre los productos químicos. Parte de esta información solamente estará disponible en un número limitado de lenguas, y por lo tanto, es probable que haya que traducirla para uso local. Cada país deberá establecer bases de datos específicas a su situación, incluso: ▪ un inventario de instalaciones peligrosas sujetas al programa para casos de accidentes con productos químicos, junto con información relevante sobre cada instalación; y ▪ un mecanismo para reportar accidentes que permita que la información sobre accidentes con productos químicos sea recabada, almacenada y se pueda tener acceso a ella. Se puede crear un inventario de las instalaciones con información recabada en la fase de evaluación, y complementarlo con información suministrada directamente de la industria (por ejemplo, de notificaciones, informes de seguridad e informes de accidentes) y de inspecciones. Este inventario puede ayudar a tomar decisiones informadas sobre cómo asignar los recursos disponibles para la implementación y el cumplimiento (incluso las inspecciones). También puede ayudar a la planificación para la preparación. Con respecto a los informes de accidentes, debería haber criterios claros sobre qué accidentes se deben reportar a las autoridades y cuáles deberían estar sujetos a investigaciones por la industria y/o las autoridades. El esquema de informe de accidentes es muy valioso para aprender lecciones para reducir la probabilidad de futuros accidentes, así como para tomar decisiones informadas sobre las prioridades y la planificación de inspecciones y otras actividades de cumplimiento. También ofrece una forma de medir el éxito de las actividades de planificación para la prevención y preparación. Promoción del intercambio de información eficaz: Como se enfatizara anteriormente, la cooperación entre organismos gubernamentales, así como entre las autoridades y otros actores, es crucial para la implementación eficiente y eficaz de un programa para casos de accidentes con productos químicos. La prevención y preparación de accidentes químicos es, por naturaleza, una actividad interdisciplinaria que involucra un número de organismos gubernamentales a nivel local, regional y nacional. Siempre que haya más de un organismo gubernamental involucrado, los organismos gubernamentales relevantes deberán coordinar sus actividades e intercambio de información. Esto maximizará la eficiencia de los recursos disponibles, y también mejorará la eficacia general del programa para casos de accidentes con productos químicos. Al hacerlo, los reglamentos, guías y políticas pueden ser complementarios, no repetitivos o contradictorios. Dicha cooperación también permite el uso eficiente de los escasos recursos, y brinda una base para aprender de las experiencias de otros. c. Estructuras jurídicas y administrativas Las estructuras jurídicas, administrativas, y consultivas adecuadas necesitan estar establecidas a fin de implementar y hacer cumplir cada aspecto del programa para casos de accidentes con productos químicos. Estas estructuras deberían ser consistentes con los sistemas existentes y tomar en cuenta la cultura local y los procesos políticos/normativos. El término “estructuras” se usa aquí para referirse a los distintos organismos que podrían estar involucrados. Dependiendo de las circunstancias locales, esto pudiera incluir los ministerios, las agencias, departamentos u oficinas. También podría involucrar un Grupo de trabajo u otro mecanismo que recurre a los recursos de más de un organismo. Pudiera involucrar una afiliación 71 entre individuos empleados por diferentes organismos o podría implicar la contratación de ciertas actividades a consultores u organizaciones no gubernamentales. Existen muchos ejemplos de las Fase de implementación: distintas maneras de asignar Estructuras jurídicas y administrativas personal y recursos de forma tal OBJETIVOS y ACTIVIDADES que se puedan lograr los objetivos del programa. Podría consistir de una oficina designada que cuenta OBJETIVO: con la autoridad para implementar todo o parte del programa. En la Establecer estructuras jurídicas y administrativas mayoría de los casos, las necesarias para implementar el programa para casos de funciones y las responsabilidades accidentes con productos químicos. se repartirán entre las distintas autoridades. Como ejemplo, el ACTIVIDADES SUGERIDAS: Ministerio del Medio Ambiente ▪ Considerar qué organismos (ministerios, agencias, etc.) podría encargarse de las están mejor preparados para implementar cada notificaciones y contratar a la elemento del programa (pudiera ser más de uno). universidad local para examinar y analizar los informes de seguridad, ▪ Aclarar cómo se mantendrá la coordinación y quién trabajar conjuntamente con el tiene el liderazgo en cada elemento. Ministerio de Trabajo para llevar a cabo las inspecciones, y trabajar con el Ministerio de Justicia para actividades de cumplimiento. Algunas funciones, como la planificación del uso del suelo, pueden ser asignadas a las agencias locales o regionales. Por consiguiente, no es necesario establecer nuevos organismos para implementar el programa para casos de accidentes con productos químicos; las estructuras existentes pueden ser usadas para estos propósitos o una combinación de los dos. Puede ser que las estructuras jurídicas y administrativas sean incorporadas por etapas durante un período en el cual el personal será contratado y capacitado. Al considerar las estructuras jurídicas y administrativas, es útil tener en cuenta que: el enfoque escogido debería ser consistente con el contexto jurídico y cultural del país y la experiencia; el proceso de adaptar las estructuras existentes, o de crear nuevas, debe ser transparente y estar bien publicitado; cada elemento del programa debería ser considerado y debe estar claro qué autoridad(es) tiene(n) la iniciativa para implementar y hacer cumplir cada elemento del programa; los sistemas deberían estar en funcionamiento para la coordinación y la consulta entre las autoridades; y cualquiera que sea el enfoque que se escoja, debe examinarse en forma periódica y cambiarlo, conforme sea necesario, para que cumpla con los objetivos del programa. 72 d. Liderazgo: facilitación de la implementación por la industria y otros Los organismos gubernamentales deberían motivar a otros actores para que reconozcan la importancia de la seguridad química y cumplan con sus funciones y responsabilidades relacionadas con la prevención y preparación en caso de accidentes químicos. El gobierno debe cooperar con los dueños/gerentes y con los trabajadores para facilitar la operación segura de instalaciones peligrosas y Fase de implementación: garantizar que la población reciba la información Liderazgo adecuada. OBJETIVO y ACTIVIDADES La función del gobierno en proporcionar el liderazgo está resumido en el Cuadro de texto 6 (Rol de liderazgo) en la página 76. Los organismos gubernamentales deberían desarrollar programas de comunicación para brindar información y obtener retroalimentación de la industria, el público y otros con respecto a la prevención y preparación en caso de accidentes con sustancias químicas. Estos programas de acercamiento deberían ser diseñados cuidadosamente tomando en cuenta las circunstancias locales y la población meta. OBJETIVO: Mejorar la comprensión del público sobre los riesgos de accidentes químicos y motivar a la industria y a otros para que tomen acciones adecuadas para prevenir dichos accidentes y se preparen adecuadamente para cualquier accidente que pudiera ocurrir. ACTIVIDADES SUGERIDAS: Establecer un programa de acercamiento para informarle a las industrias y a otros sobre la prevención y preparación en caso de accidentes químicos, así como sus funciones y responsabilidades bajo el programa para casos de accidentes con productos químicos. Crear mecanismos para facilitar una mejor prevención y preparación en caso de accidente, que incluye programas de capacitación, materiales de orientación, sitios Web, etc. Desarrollar un calendario para la implementación por parte de la industria que le permita contar con un plazo Relación con la industria: adecuado para cumplir con cualquier requisito. Debería haber cooperación permanente entre los Asegurarse que el público tiene información sobre funcionarios del gobierno y la instalaciones peligrosas y qué acciones tomar en caso industria, basado en una de un accidente. política de apertura, que incluye diálogos frecuentes e Brindar oportunidades para la participación pública. intercambios de información, y enfoques proactivos con Mantener cooperación continua con los actores. cernientes a la seguridad de las instalaciones peligrosas y Promover el intercambio de experiencias. la prevención de accidentes. Este tipo de cooperación ayudará a aumentar la confianza del público de que se están tomando las medidas adecuadas para limitar los riesgos de las sustancias peligrosas. El gobierno debería publicitar sus leyes, reglamentos, y políticas para que la industria esté pendiente de sus obligaciones y de los recursos disponibles para facilitar la implementación. El gobierno debería brindar orientación clara y fácil sobre cómo la industria puede cumplir con los objetivos y los requisitos. Esto incluye orientación para prevenir accidentes y la planificación de preparación. 73 Esta orientación puede ser preparada en cooperación con la industria. Puede aprovechar los materiales que tienen a disposición las organizaciones internacionales (tales como el PNUMA, la OIT, la OMS y la OCDE) y de otros países, los cuales generalmente están publicados en los sitios Web. Si se usan los materiales que están disponibles, las guías específicas para los países se pueden preparar en las lenguas y dialectos locales usando la terminología adecuada y tomando en cuenta el contexto cultural. Las autoridades gubernamentales deberían tratar de estimular la industria para que utilice tecnología de seguridad mejorada y prácticas de seguridad, y no solamente tratar de cumplir con los requisitos. Los requisitos deberían ser considerados como lo mínimo por hacer; se debe animar a la industria para que logre un nivel más alto de seguridad que el que sería alcanzado si se adhirieran a las normas establecidas. Una forma de promover una seguridad mejorada es permitirle a la industria algo de flexibilidad en los métodos usados para cumplir con los requisitos y las políticas, para que una empresa pueda usar los métodos más indicados para sus circunstancias particulares. El gobierno también debería promover el intercambio de experiencias entre las compañías relacionadas con los sistemas de manejo de seguridad, la experiencia de accidentes, las lecciones aprendidas de los accidentes e investigaciones, y otros asuntos que mejorarán la seguridad. El intercambio de información sobre accidentes pasados y lecciones aprendidas es clave para evitar accidentes similares en el futuro y mejorar las capacidades de respuestas. Existen muchas maneras de fomentar el aprendizaje a partir de la experiencia. Por ejemplo, las autoridades pueden: establecer un sitio Web amigable al usuario; convenir las reuniones / talleres de compañías que enfrentan riesgos similares; circular boletines periódicos en los que se resaltan las claves para la seguridad y las causas de accidentes; diseminar informes de investigación de accidentes; traducir y resumir informes relevantes de otros países; proporcionar asistencia técnica a las compañías; y animar la administración de productos y la tutoría de empresas más pequeñas por empresas más grandes. Relaciones con la población y otros actores: El gobierno también debería cooperar con todos los actores relevantes que tienen funciones importantes en ayudar a mejorar la seguridad en las instalaciones peligrosas. La cooperación con los actores ayuda a asegurar que se le brinde información y orientación útil a la industria y a la población, y ayuda a evitar la redundancia y los mensajes contradictorios. También les da la población y a otros actores, la confianza de que los riesgos con productos químicos están siendo tratados. Todos los actores necesitan información para ayudarles a desempeñar sus funciones y responsabilidades. Además de la industria y los trabajadores, estos actores incluyen a las asociaciones industriales, los sindicatos, los grupos ambientalistas, las universidades e institutos de investigación, las autoridades locales, grupos con organización comunitaria/comunidades y otras organizaciones no gubernamentales. Los organismos gubernamentales juegan una función especial en facilitar la educación del público, a fin de que las personas comprendan los riesgos que enfrentan, sepan dónde obtener información concerniente a las instalaciones peligrosas en sus comunidades, se sientan seguros que las medidas de seguridad están establecidas, sepan qué hacer en caso de un accidente, y puedan participar eficazmente en los procesos de toma de decisiones relevantes. Probablemente la concientización pública lleve a una reducción en el número y la severidad de los accidentes con productos químicos. Una población informada puede ser un incentivo para que la industria reduzca los riesgos de accidentes con productos químicos. Además, una población 74 informada puede brindar un estímulo para el diálogo entre la industria, los organismos gubernamentales, y la población, y una base para una participación eficaz del público en la toma de decisiones relacionadas con las instalaciones peligrosas. El hecho de que se le suministre información a la población aparenta ser muy directo, pero realmente requiere planificación para que los planes de información se adecúen a sus objetivos, sean repetidos y probados y sean actualizados conforme se requiera. Las organizaciones no gubernamentales a menudo están en una posición única para ayudar a diseminar información objetiva sobre productos químicos al público. También pueden trabajar con la industria para ayudar a desarrollar maneras innovadoras de mejorar la seguridad, así como ayudar a monitorear el desempeño de las autoridades gubernamentales e identificar interés sobre el programa para casos de accidentes con productos químicos y su implementación. El gobierno debería darle la oportunidad a la población y a otros grupos de actores para que participen en los procesos de toma de decisiones (tales como la planificación de uso del suelo y las decisiones sobre licencias). Para que estas oportunidades sean significativas, tiene que haber un aviso adecuado y acceso a la información que se necesita para que haya una participación eficaz. 75 Cuadro de texto 6 ROL DE LIDERAZGO Tal vez la función más importante del gobierno sea la de proporcionar liderazgo para crear una cultura que promueva la seguridad y motive a los actores a reconocer la importancia de la prevención y preparación en caso de accidentes, y cumpla con sus respectivas funciones y responsabilidades. El liderazgo se manifiesta de distintas maneras. Entre ellas se incluye la toma de acciones que indican que el gobierno toma en serio el tema de la seguridad de sustancias químicas. La combinación de actividades que puedan convencer a los electores que su gobierno toma en serio el mejoramiento de la prevención y preparación de accidentes depende de la cultura y de otros factores locales que normalmente involucraría una combinación de: • toma de decisiones gubernamentales transparentes, con retroalimentación de los distintos grupos de actores; • asignación de recursos que incluyen a personal competente para implementar un programa para casos de accidentes con productos químicos; • implementación del programa de forma justa y equitativa; • desarrollo y distribución de información y orientación que es adecuada para los grupos meta; • respuesta oportuna a problemas o intereses identificados; y • mejoramiento de la seguridad de instalaciones de propiedad del gobierno u operadas por él. La educación y concientización entre todos los sectores de la sociedad es crítico. El gobierno no necesita hacer todo el acercamiento a la comunidad y el intercambio de información por sí mismo, sino que debiera asegurarse que todos los actores relevantes reciben información adecuada que le es proporcionada. El gobierno también debería darle la oportunidad al público y a otros grupos de actores de participar en procesos de toma de decisión adecuados. e. Cumplimiento El cumplimiento de los requisitos establecidos en el programa para casos de accidentes con productos químicos es crítico para lograr los objetivos del programa. Los organismos gubernamentales deben estar preparados para hacer cumplir los requisitos y los recursos adecuados deberían estar disponibles para el monitoreo, las inspecciones, y otras actividades relacionadas con el cumplimiento. Una fuerte política de cumplimiento no solamente ayuda a asegurar que la industria cumplirá con los requisitos, sino que también se ganará la confianza del público. 76 Debería haber sanciones claras y adecuadas que se puedan aplicar en caso de incumplimiento. Esto puede incluir sanciones civiles y, en casos extremos, sanciones criminales. Existen diferentes tipos de sanciones civiles, dependiendo de la severidad de los intereses, incluso por ejemplo, las notificaciones, los acuerdos sobre acciones que deben tomarse con calendarios, citaciones, multas, y en los casos más graves, el cierre de las instalaciones. Los gobiernos deberían asegurarse que existe orientación disponible para que cualquiera que esté sujeto al programa para casos de accidentes con productos químicos sepa cómo cumplir con sus obligaciones. Esta guía debería reflejar el entendimiento común de lo que constituye una violación. Fase de implementación: cumplimiento OBJETIVO y ACTIVIDADES OBJETIVO: Asegurar que todas las empresas cumplen con los requisitos legales relacionados con la prevención y preparación en caso de accidentes químicos, que operan sus instalaciones para minimizar los riesgos de un accidente químico, y que están debidamente preparadas en caso de que ocurra un accidente. ACTIVIDADES SUGERIDAS: ▪ Identificar sanciones adecuadas para el incumplimiento de los requisitos (en la medida en que esto ya no está establecido en los instrumentos jurídicos). ▪ Establecer procedimientos de cumplimiento e implementar dichos procedimientos, según corresponda (inclusive el juicio por incumplimiento significativo). ▪ Revisar los informes de seguridad y otros informes de las instalaciones peligrosas que contienen información sobre el cumplimento y apoyar las actividades de inspección. ▪ Establecer procedimientos para llevar a cabo las inspecciones adecuadas conforme a la naturaleza y el alcance de los riesgos en el país. ▪ Crear protocolos comunes y guía para asegurar la capacidad de comparar distintas inspecciones. ▪ Establecer una estrategia para mantener la competencia de los inspectores y aprender de la experiencia. ▪ Establecer mecanismos para garantizar que se llevan a cabo las recomendaciones y medidas correctivas identificadas en los informes de inspección. ▪ Coordinar y compartir experiencias entre organizaciones relevantes (para minimizar la duplicación de esfuerzos, reducir la carga sobre la industria, y aprender de la experiencia de los demás). El cumplimento debe ser aplicado de forma justa y uniforme, ya sea que la instalación peligrosa sea de propiedad de una compañía nacional o extranjera, o de propiedad pública o privada. Las actividades de cumplimiento deberían complementar otras actividades por organismos gubernamentales para asegurarse que la industria cumple con todas las leyes y reglamentos necesarios (por ejemplo, programas de incentivos, asistencia técnica, actividades de información pública, etc.). Existen varias maneras de verificar si una instalación peligrosa está cumpliendo con los requisitos legales relevantes. Por ejemplo, las inspecciones les ofrecen una oportunidad a los funcionarios del 77 gobierno a revisar de primera mano la operación de la instalación y hacer preguntas sobre la administración y el personal. Además, una revisión de los informes de seguridad puede brindar mayor comprensión sobre la operación de la instalación, y si ésta está funcionando de manera consistente con los instrumentos jurídicos y de políticas, y si existe un sistema de gestión de seguridad adecuado. El informe de seguridad también proporciona información crítica de antecedentes para apoyar las inspecciones. Creación de programas de monitoreo e inspección: Un programa de inspección llevado a cabo por o en nombre del gobierno, es una herramienta de cumplimiento crítica para los programas para casos de accidentes químicos. Las inspecciones sirven para distintos propósitos. Los principales objetivos de las inspecciones es determinar si las instalaciones peligrosas están cumpliendo con los reglamentos, las normas y prácticas relevantes, y si los sistemas de gestión de seguridad están establecidos y operan adecuadamente. La inspección también permite que los organismos gubernamentales verifiquen la validez de los informes de seguridad. Las inspecciones también se pueden usar para ayudar a las compañías a identificar los problemas potenciales (aunque no sean sujetas a los requisitos legales). Los inspectores también deberían aprovechar la oportunidad de compartir experiencia y brindar asesoramiento. Debe quedar claro que la participación del gobierno en el monitoreo, incluso en las inspecciones, no reduce el hecho de que la responsabilidad primaria por la seguridad de las instalaciones peligrosas recae sobre la administración. La parte (c) (Inspecciones) de la Sección C3 del Capítulo C, en la página 97, contiene información adicional sobre los programas de inspección y, en particular, los aspectos claves de inspecciones exitosas. 78 B6: Fase de análisis y revisión Un programa para casos de accidentes con productos químicos – sus reglamentos, políticas y prácticas – debería ser revisado periódicamente para ver si está operando como se espera, cumpliendo con sus objetivos y dándole el mejor uso a los recursos que están disponibles. El examen permitirá que las autoridades determinen si debería haber un cambio en las prioridades y si el programa debería ser ampliado o modificado de otra forma, en vista de cualquier cambio en el nivel o la naturaleza del riesgo, la disponibilidad de recursos, la experiencia obtenida y/u otros factores. Fase de examen y revisión OBJETIVO y ACTIVIDADES OBJETIVO: Implementar un sistema para la revisión periódica del programa para casos de accidentes con productos químicos con el fin de probar si está funcionando cómo debería y revisar el programa, conforme corresponda. ACTIVIDADES SUGERIDAS: ▪ Establecer un proceso para revisar la eficacia de los elementos claves del programa para casos de accidentes con productos químicos (utilizando indicadores de desempeño). ▪ Consultar con otros actores para obtener retroalimentación sobre el programa para casos de accidentes con productos químicos. ▪ Hacer cambios en las actividades y prioridades del programa en vista de la experiencia, los cambios en las prioridades, el avance técnico e información nueva. La revisión debería tomar en cuenta una serie de factores, entre los cuales podemos mencionar: ▪ la experiencia obtenida por el gobierno, así como la industria y otros actores; ▪ los cambios significativos en el número o los tipos de instalaciones peligrosas; ▪ las historias de casos de accidentes y lecciones aprendidas en el mismo país o de otros países; ▪ los recursos que están disponibles y aquellos que es probable que estén disponibles en el futuro próximo; y ▪ los cambios en la tecnología y en los procedimientos de seguridad. El apoyo para dicho análisis se puede encontrar en la publicación de la OCDE que se titula: Guía para el desarrollo de indicadores sobre el desempeño de la seguridad para las autoridades públicas y las comunidades / el público, 2ª ed., 2008). 79 Capítulo C: ELEMENTOS DE UN PROGRAMA PARA CASOS DE ACCIDENTES CON PRODUCTOS QUÍMICOS C1: Introducción A continuación, se exponen los elementos que en general se encuentran dentro de un programa integral destinado a la prevención y la preparación para casos de accidentes con 20 productos químicos. Estos elementos se derivan de acuerdos internacionales , la Directiva 21 Seveso II de la Unión Europea , y las diversas leyes y reglamentaciones adoptadas por los 22 Estados Unidos , así como los muchos años de experiencia en varios países en la 23 implementación de esas leyes, políticas y acuerdos relevantes. Los elementos están organizados en cinco partes: i. el ámbito de aplicación del programa, que determina a qué tipo de industrias, establecimientos y/o sustancias está dirigido el programa; ii. la función de las autoridades competentes, que determina los tipos de actividades que generalmente realizan los organismos del gobierno identificados; iii. la función de la industria, que determina las clases de requerimientos impuestos generalmente a la industria (o que la industria asume a fin de cumplir con una obligación general para operar sus instalaciones en forma segura). En este contexto, las instalaciones podrían ser tanto propiedad del estado como privadas; iv. información a la población, que describe el tipo de información que debe suministrarse a aquellos potencialmente afectados en caso de accidente. La responsabilidad de llevar a cabo la divulgación de la información debe identificarse y normalmente implica un esfuerzo conjunto entre las autoridades y la industria, en colaboración con otros actores. v. informe del accidente, investigación y seguimiento, que describe las actividades que proporcionan una forma de aprender y compartir lecciones con el objeto de mejorar los niveles de seguridad. En general, también es una responsabilidad compartida de las autoridades y la industria, en colaboración con otros sectores. Las cinco partes son usadas como un medio para organizar los elementos para los propósitos de esta guía. En la Tabla V (Elementos de un programa de prevención y preparación para casos de accidentes con productos químicos) aparece un resumen de los elementos claves de cada una de las cinco partes (página 81). Sin embargo, esto no refleja cómo cada elemento es implementado en la práctica y cada país puede decidir cuál es la mejor manera de organizar sus leyes, reglamentos, políticas, programas, y otros instrumentos. Muchos, si no la mayoría de los elementos descritos en esta guía involucran una necesidad de cooperación y comunicación entre los actores. Por ejemplo, incluido en los “Requisitos de la 20 En particular, el Convenio Nº174 de la OIT sobre la Prevención de accidentes industriales mayores y el Convenio de la CEPE/ONU sobre los efectos transfronterizos de los accidentes industriales. 21 Directiva del Consejo 96/82/CE del 9 de diciembre de 1996 sobre el control de peligros de accidentes mayores que involucren sustancias peligrosas, extendida por la Directiva 2003/105/CE del Parlamento Europeo y el Consejo del 16 de diciembre de 2003, que modifica la Directiva del Consejo 96/82/CE. Visite: http://ec.europa.eu/environment/seveso/legislation.htm 22 Entre ellos se incluyen: Plan de Gestión de Riesgos (PGR): Sección 112(r) de la Ley de Aire Limpio enmendada, con sus reglamentaciones (40 CFR Parte 68); la Ley de Planificación para casos de Emergencia y del Derecho a la Información Comunitaria (EPCRA): 42 U.S.C. 116, con sus reglamentaciones (p. ej., 40 CFR 355, 40 CFR 370) 23 En todo el capítulo aparecen extractos de secciones relevantes de estos acuerdos y reglamentos. 80 Industria” se encuentran los elementos titulados “Notificación” e “Informes de seguridad.” Ambos requerirían que las empresas cubiertas por el programa de accidentes con sustancias químicas les proporcionaran información a las autoridades. Estas autoridades tendrían que tener sistemas establecidos para recabar y usar la información. Además, la “Cláusula de Obligación General” (GDC) está incluida en los “Requisitos de la Industria”; sin embargo, en algunos países, una GDC puede ser definida para que también involucre la obligación de las autoridades. La mayoría de los países con industrias químicas de consideración, u otra clase de instalaciones peligrosas, tienen instrumentos jurídicos y de políticas que tratan la mayoría, si no todos, los elementos descritos en este capítulo. Es posible que los países en desarrollo no estén en condiciones de implementar y hacer cumplir un programa integral para casos de accidentes con productos químicos. Este capítulo ha sido diseñado a fin de ayudar a identificar los elementos que pudieran ser adecuados para las circunstancias específicas de un país. La meta es establecer un programa cuya proporción sea cónsona con el nivel de riesgo del país, tomando en cuenta sus riesgos, la disponibilidad de recursos, los imperativos políticos y las costumbres locales de dicho país. Además, un país debería considerar cómo puede desarrollar de la forma más eficaz su programa de accidentes con productos químicos, desarrollarlo por etapas, centrándose primero en las cuestiones más prioritarias con el agregado de elementos (y/o mayor ámbito de aplicación) en la medida que los recursos y la experiencia lo permitan. TABLA V: Elementos de un programa de prevención y preparación para casos de accidentes con productos químicos Ámbito del programa Ámbito de aplicación Bajo el “Ámbito de aplicación”, se brinda la información relacionada con la definición de los tipos de industrias, las instalaciones, y/o sustancias cubiertas por un programa de prevención y preparación para casos de accidentes químicos. Función de las autoridades competentes Manejo de la información Inspecciones Planificación de la preparación Identificación del sitio y planificación del uso de suelo Bajo la “Función de las autoridades competentes”, se proporciona información con respecto a las actividades que generalmente llevan a cabo los organismos gubernamentales identificados. 81 Requisitos de la industria Cláusula de obligación general Notificación Política de prevención gestión de seguridad y sistemas de Identificación del peligro y evaluación del riesgo Bajo los “Requisitos de la industria”, se especifican los tipos de requisitos generalmente impuestos sobre la industria o asumidos por la industria para cumplir con la obligación de operar sus instalaciones con seguridad. Informes de seguridad Planificación de la preparación Información para el público Información para el público Esta sección describe los tipos de información que se le debiera dar a aquellos potencialmente afectados en caso de un accidente. Informes de accidentes, investigación y seguimiento Informes de accidentes, investigación y seguimiento Esta sección proporciona información sobre informes de accidentes e investigaciones que podrían llevarse a cabo, a fin de aprender y compartir lecciones para mejorar la seguridad. 82 C2: Ámbito de aplicación del programa Objetivo Determinar los criterios para la inclusión de una instalación peligrosa dentro del ámbito de aplicación del programa para casos de accidentes con productos químicos (incluso las definiciones de los términos claves). Por qué Éste es un elemento necesario para identificar qué instalaciones / sustancias químicas están sujetas a cualquier requisito o política establecida para un programa para casos de accidentes con productos químicos. Se emplea para clasificar qué actividades y qué sustancias peligrosas son de posible riesgo. La declaración del ámbito de aplicación debe ser inequívoca a fin de evitar confusiones respecto de si la empresa necesita realizar acciones específicas y suministrar orientación para la implementación y la puesta en vigor. Al momento de establecer el ámbito de aplicación, es útil tener presente la cantidad de instalaciones que se captarán a partir de cualquier determinación del ámbito de aplicación y los recursos que se encuentran disponibles para la implementación y la puesta en vigor. Se debe prestar atención al momento de decidir el ámbito de aplicación, ya que un ámbito de aplicación demasiado amplio puede traducirse en la imposición de obligaciones innecesarias sobre empresas que no plantean ninguna clase de riesgo de consideración y quizás sean más de las que pueda hacerse con los recursos disponibles (si se quita la atención de los riesgos más críticos) y un ámbito de aplicación demasiado reducido puede traducirse en pasar por alto instalaciones claves. Observar lo que se ha hecho en otros países, y en instrumentos internacionales, puede ser instructivo para establecer el ámbito de aplicación de un programa. Sin embargo, es importante que el ámbito de aplicación sea adecuado para el país, según los riesgos y los recursos disponibles. Cómo La identificación del ámbito de aplicación del programa para casos de accidentes con productos químicos generalmente tiene cuatro elementos primarios: 1. Definiciones de los términos claves (por ejemplo, instalación, operador, accidente, sustancias peligrosas). 2. Identificación de las actividades o tipos de instalaciones peligrosas que se incluirán en el ámbito de aplicación del programa. Para muchos países, su programa tiene una aplicación ilimitada a excepción de las exclusiones especificadas. Esto está combinado con las sustancias de interés y sus umbrales para centrarse en las instalaciones que presentan los mayores riesgos. Algunos países, especialmente aquellos con una industria limitada y/o recursos limitados, pueden decidir concentrar sus esfuerzos en sectores o industrias específicos, o en un tipo de proceso específico (por ejemplo, refinerías y depósitos de pesticidas). Otros pueden decidir limitar el ámbito de aplicación de su programa a instalaciones o áreas geográficas específicas. 83 3. Identificación de sustancias peligrosas de posible riesgo, combinadas con las cantidades umbral que deben estar presentes en una instalación para estar sujetas a los requerimientos del programa. Para la definición del ámbito de aplicación por una lista de sustancias químicas/umbrales, el resultado es que cualquier instalación que tiene cantidades de sustancias químicas (o grupos de sustancias químicas) identificadas sobre la cantidad especificada (umbral) están sujetas a ciertos requisitos y políticas. En algunos países, existen diferentes “niveles” de requisitos a partir de diferentes cantidades umbral (por ejemplo, diferentes requisitos de informes para diferentes niveles de riesgo). A continuación se discute este tema en más detalle. El Cuadro de texto 8 (Enfoques alternativos para especificar el ámbito de aplicación de un programa para casos de accidentes con productos químicos) en la página 87 contiene información adicional que describe distintas opciones para identificar las sustancias peligrosas de interés. Además, el Anexo III (Listas de sustancias químicas de interés) en la página 208, contiene las listas de sustancias químicas de la Directiva Seveso II y de los Estados Unidos. Estas dos leyes son usadas como ejemplo en este documento. El Anexo III también contiene el concepto suizo para definir umbrales y la lista coreana de sustancias químicas para ilustrar cómo otros países tratan el tema del ámbito de aplicación. Corea se centra en un grupo más limitado de sustancias químicas. 4. Las exclusiones claramente identifican qué tipos o clases de instalaciones no están sujetas al programa para casos de accidentes con productos químicos. Por ejemplo, en algunos casos, los países específicamente excluyen el transporte, las instalaciones nucleares y las instalaciones militares. Al decidir qué sustancias químicas incluir en la lista desarrollada según el elemento 3 (Identificación de sustancias peligrosas) en la página anterior, es útil considerar no solamente las características inherentes, sino también otros factores relevantes tales como el contexto en el cual se utilizan o manejan, los antecedentes de accidentes, la gravedad de los impactos potenciales y las medidas de control disponibles. Por ejemplo, algunas sustancias peligrosas se utilizan en grandes volúmenes pero como parte de procesos bien controlados, lo cual lleva a la conclusión razonable de que debe haber límites de umbrales más altos si se compara con sustancias de la misma clase que quizás estén sujetas a umbrales más bajos (por ejemplo, con frecuencia el GLP está regulado en un umbral más alto que otros gases inflamables). La fijación de umbrales adecuados ayuda a asegurar que el programa capture las instalaciones peligrosas que plantean riesgos reales pero que no son demasiado amplias (el establecimiento de obligaciones sobre las instalaciones que no plantean riesgos de consideración). Cuando se fijan los umbrales, los puntos de partida habituales incluyen los volúmenes en que las sustancias se almacenan o manejan (por ejemplo, el tamaño del tambor) y la cantidad mínima necesaria de una sustancia para generar un determinado efecto grave. El ámbito de aplicación del programa para casos de accidentes con productos químicos generalmente incluye clases de sustancias químicas (tóxicas, explosivas, inflamables, reactivas o peligrosas para el medio ambiente), que pueden complementarse con sustancias químicas específicas. Existen varias razones por las cuales se identifican las sustancias químicas por separado, además de las clases de sustancias químicas. Por ejemplo, es posible que la cantidad umbral de la sustancia química por separado sea diferente de la de otras sustancias químicas de esa clase por razones científicas, económicas o políticas. Como se indica en el Capítulo B, las sustancias químicas incluidas en el ámbito de aplicación del programa y sus umbrales pueden ser influenciadas por consideraciones políticas y pragmáticas, además de razones científicas. Por ejemplo, si la sustancia química fue la 84 fuente de un accidente reciente o bien conocido, pudiera haber presión para incluirla en el programa aunque por medidas objetivas no debería ser de alta prioridad. Para elaborar su propia lista de sustancias químicas con sus correspondientes umbrales que serán incluidos en el ámbito de aplicación del programa, podría ser útil para un país convocar a un grupo de expertos para que revisen la información técnica sobre las sustancias químicas que son producidas, usadas o almacenadas en el país y considerar su potencial para causar accidentes significativos. Además de decidir sobre los criterios de inclusión en el programa, otro tema relacionado con el ámbito de aplicación es decidir si la atención se pone sobre un sitio completo o sobre operaciones o instalaciones individuales. Esto último podría dar como resultado varias instalaciones reguladas dentro de un sitio. Por ejemplo, una refinería puede estar constituida por una serie de operaciones de posible riesgo como tanques de almacenamiento para líquidos inflamables, tanques para gases inflamables, unidades de refinación y almacenamiento de gases tóxicos. Un establecimiento de sustancias químicas puede tener tanques y depósitos para materias primas, varios reactores para el procesamiento de sustancias químicas y un depósito para el producto final. En cada caso, el sitio contiene varias instalaciones, cada una de las cuales podría regularse por separado o el lugar podría ser regulado como una unidad. Cada uno de estos enfoques tiene (centrado en el sitio completo o en operaciones individuales) sus ventajas y desventajas. Para la mayoría de los países, posiblemente sea más sencillo considerar los sitios completos como una entidad regulada para evitar tener que decidir sobre los límites entre las distintas instalaciones (por ejemplo, puede ser difícil determinar si un establecimiento de almacenamiento es parte del establecimiento de producción o si está separado de él). Dificultades La identificación del ámbito de aplicación del programa es un elemento fundamental y debe prestarse atención cuando se identifiquen las actividades, las sustancias y los umbrales de modo que las instalaciones de posible riesgo en el contexto del país estén incluidas (incluso las instalaciones peligrosas que puedan construirse en el futuro), pero que ese ámbito de aplicación no sea tan amplio que haga que el programa sea imposible de administrar o de hacer cumplir. En el Cuadro de texto 8 a continuación (Enfoques alternativos para especificar el ámbito de aplicación de un programa para casos de accidentes con productos químicos) en la página 87, se describen las ventajas y desventajas de los distintos enfoques para identificar las instalaciones que abarca el programa. Por ejemplo, una dificultad que implica el uso de una lista de sustancias químicas específicas, en lugar de clases de sustancias químicas, es que es posible que una sustancia química que no está incluida en la lista, inadvertidamente ocasione un peligro de consideración y, por ende, en forma involuntaria quede a salvo de la normativa. El Cuadro de texto 7 (Sistema Globalmente Armonizado (SGA) de Clasificación y Etiquetado de Productos Químicos) en la siguiente página, proporciona información sobre el “Sistema Globalmente Armonizado de Clasificación y Etiquetado de Productos Químicos”. Este sistema, desarrollado como un esfuerzo de cooperación de un grupo de organizaciones no gubernamentales, podría ayudar a los países a identificar sustancias químicas de riesgo particular. 85 Cuadro de texto 7 SISTEMA GLOBALMENTE ARMONIZADO (SGA) DE CLASIFICACIÓN Y ETIQUETADO DE PRODUCTOS QUÍMICOS El Sistema Globalmente Armonizado (SGA) de Clasificación y Etiquetado de Productos Químicos quizás puede proporcionar un punto de partida útil para identificar las sustancias químicas de posible riesgo aunque no fue desarrollado específicamente para tratar la prevención y preparación de accidentes con productos químicos. Por consiguiente, sería necesario determinar cómo el SGA pudiera ser adaptado a este contexto y a las necesidades específicas de un país. El SGA es una iniciativa mundial destinada a la promoción de criterios estándares para clasificar sustancias químicas según los peligros sanitarios, físicos y ambientales que plantean. Utiliza pictogramas, declaraciones de peligro y las palabras de aviso “Peligro” y “Advertencia” para comunicar, en forma lógica e integral, información de los peligros sobre las etiquetas de los productos y las hojas de datos relativos a la seguridad. El objetivo principal del SGA es mejorar la protección de la salud humana y el medio ambiente mediante el suministro de información completa y coherente sobre los peligros de las sustancias químicas para usuarios y quienes manipulen esa clase de sustancias. El SGA trata sobre la clasificación de sustancias químicas por tipos de peligros y propone elementos de comunicación armonizado sobre los peligros, incluso etiquetas y hojas de datos sobre seguridad. El objetivo del sistema es asegurar que la información sobre los peligros físicos y la toxicidad de las sustancias químicas se encuentra disponible a fin de mejorar la protección de la salud humana y el medio ambiente durante la manipulación, el transporte y el uso de esas sustancias. El SGA también ofrece una base para la armonización de las normas y las reglamentaciones sobre sustancias químicas a nivel nacional, regional y mundial. La primera edición del SGA se publicó en el 2003 y una segunda y tercera edición revisada se publicó en el 2007 y el 2009, respectivamente. La última (tercera edición revisada) toma en cuenta las enmiendas que se refieren a, entre otros: nuevas disposiciones para la asignación de declaraciones de peligro y para el etiquetado de paquetes pequeños; dos nuevas subcategorías para la sensibilización respiratoria y dermatológica; la revisión de los criterios de clasificación para peligros a largo plazo (toxicidad crónica) al medio acuático; y una nueva clase de peligro para sustancias y mezclas que son peligrosas para la capa de ozono. Véase: http://www.unece.org/trans/danger/publi/ghs/ghs_rev03/03files_e. html. Ejemplos de la aplicación del SGA: – Organización Mundial de la Salud: La clasificación recomendada por la OMS para pesticidas por el Sistema Global Armonizado (SGA) de Clasificación y Etiquetado de Productos Químicos establece un sistema de clasificación para distinguir entre las formas más o menos peligrosas de pesticidas seleccionados con base en el riesgo agudo a la salud humana (éste es el riesgo de una exposición única o múltiple durante un período relativamente corto). Toma en consideración la toxicidad del compuesto técnico y sus formulaciones comunes. El documento enumera pesticidas comunes de grado técnico y clasificaciones recomendadas, además de una lista de ingredientes activos que se consideran obsoletos o descontinuados para uso como pesticidas, pesticidas sujetos al procedimiento de consentimiento informado previo, limitaciones comerciales debido a la Convención COP y los fumigantes gaseosos o volátiles que no están clasificados bajo estas recomendaciones. La OMS está en el proceso de ajustar la Clasificación de Pesticidas para adecuarlo al SGA (véase anteriormente). Para más 86 información, consulte el enlace: http://www.who.int/ipcs/publications/pesticides_hazard/en/. – Unión Europea: Dentro de la UE, el Reglamento CE 1272/2008 para la clasificación, etiquetado y embalaje (CLP) se alinea con legislación previa de la UE sobre clasificación, etiquetado y embalaje de productos químicos al SGA. El Reglamento CLP se publicó en el Official Journal el 31 de diciembre del 2008 y entró en vigencia el 20 de enero del 2009. Según el Reglamento, la fecha límite para la clasificación de sustancias de acuerdo con las nuevas reglas será el 1.º de diciembre del 2010. Para las mezclas, la fecha límite será el 1.º de junio del 2015. El Reglamento CLP reemplazará en última instancia las reglas actuales sobre clasificación, embalaje y etiquetado de sustancias (Directriz 67/548/CEE) y preparados (Directriz 1999/45/CE) después de este período de transición. Más información está disponible en el enlace: http://ec.europa.eu/enterprise/sectors/chemicals/documents/classification/index_en.htm. La Directriz de Seveso II será ajustada al Reglamento CLP mediante enmienda por separado. Cuadro de texto 8 ENFOQUES ALTERNATIVOS PARA ESPECIFICAR EL ÁMBITO DE APLICACIÓN DE UN PROGRAMA PARA CASOS DE ACCIDENTES CON PRODUCTOS QUÍMICOS Este cuadro expone cuatro enfoques para establecer el ámbito de aplicación del programa para casos de accidentes con productos químicos, junto con algunas ventajas y desventajas de cada uno. Estos no son los únicos enfoques posibles. Opción 1: Desarrollar una lista de sustancias peligrosas seleccionadas con cantidades umbral Ventajas Una lista reconocida de sustancias seleccionadas significa que el ámbito de aplicación del programa puede definirse con facilidad. La primera versión de la Directiva Seveso (82/501/CEE), adoptada en 1982, seguía este principio y fue el modelo para convenios internacionales y para otras normativas nacionales. Desventajas El problema más serio con una lista de sustancias seleccionadas es que cada sustancia se trata por separado y quizás haya algunas sustancias importantes que no están incorporadas a la lista y, por ende, no incluidas en el programa. Si la lista se incluye en la legislación, podría ser difícil actualizar dicha lista. Además, en algunas instalaciones quizás haya varias sustancias peligrosas en cantidades que se encuentran apenas por debajo de los umbrales y, por ende, el programa no podría aplicarse a pesar del hecho de que la cantidad acumulada de sustancias peligrosas presente un nivel de riesgo alto. Ésa fue una de las razones para el cambio de enfoque de la Directiva Seveso II (96/82/CE). Opción 2: Desarrollar una lista de clases peligrosas con cantidades umbral Ventajas Si se consideran las clases peligrosas, es posible tratar los peligros de accidentes globalmente. Eso significa que se pueden evitar las desventajas de una lista cerrada de sustancias peligrosas. 87 Debido a que la cantidad de clases peligrosas es limitada, la implementación del programa puede simplificarse. Si se reclasifica una sustancia, normalmente no es necesaria una legislación nueva para asegurar la cobertura adecuada (o su exclusión). Desventajas El uso de clases peligrosas puede ser demasiado inclusivo debido a que, en general, las clases se han desarrollado para proteger la salud humana y no necesariamente están relacionadas con el nivel de peligros vinculados a los accidentes con productos químicos. Además, algunas sustancias tienen varias clasificaciones. Es posible que tal situación lleve a la incorporación en el programa de algunas instalaciones que no plantean un nivel de riesgo alto. Por ejemplo, el metanol es un líquido inflamable que también es tóxico. En los procesos industriales o comerciales, el riesgo tóxico por ingestión no es particularmente importante en términos de un accidente con productos químicos y, por ende, la combustibilidad se transforma en el factor dominante. Existen algunas sustancias peligrosas cuyo uso está generalizado en procesos estandarizados, por ejemplo, la gasolina o el diésel. Quizás no sea adecuado regular esas sustancias dentro de las clases peligrosas correspondientes. Opción 3: Desarrollar una selección de clases peligrosas junto con una lista de sustancias específicamente nombradas con las cantidades umbral Ventajas Al seleccionar algunas clases peligrosas y sustancias peligrosas específicas, se aprovechan las ventajas de la opción 1 y 2. La Directiva Seveso II y el Convenio de la CEPE/ONU siguen el enfoque descrito en la Opción 3. Desventajas Esta solución puede llevar a cálculos complicados para la evaluación de la aplicación del programa. El suministro de información, tablas y soluciones de software puede ayudar a minimizar esos problemas. Opción 4: Identificar los tipos de industrias que manipulan sustancias químicas peligrosas Ventajas Para países con una cantidad limitada de instalaciones o tipos de instalaciones que manipulan sustancias peligrosas, se presenta un enfoque muy simple destinado a centrar la atención en las industrias para las cuales los peligros son probables o para las cuales los peligros ya se han identificado. Las autoridades pueden examinar cada una de las instalaciones de las industrias especificadas a fin de determinar si se las incluye en el ámbito de aplicación del programa y pueden evaluar si deben establecerse cantidades umbral para las sustancias peligrosas presentes en esas instalaciones. Sería una buena manera de comenzar cuando los recursos son limitados y podría ofrecer una base para comprender qué límites de umbral serían adecuados en el futuro. Desventajas Este enfoque se limita a tratar las situaciones existentes y no hace referencia a instalaciones peligrosas nuevas que no se encuentran dentro de las industrias indicadas. Se debe prestar atención para evitar incorporar demasiadas instalaciones (es decir, aquellas dentro de la industria indicada pero que no tienen cantidades suficientes de sustancias químicas peligrosas como para plantear un riesgo considerable para la salud, el medio ambiente o la propiedad). También existe el riesgo de que el programa omita instalaciones peligrosas que las autoridades desconocen. 88 Extractos de instrumentos internacionales CONVENIO DE LA OIT PARTE I: ÁMBITO DE APLICACIÓN Y DEFINICIONES Artículo 1 1. El presente Convenio tiene por objeto la prevención de accidentes mayores que involucren sustancias peligrosas y la limitación de las consecuencias de dichos accidentes. 2. El Convenio se aplica a instalaciones expuestas a riesgos de accidentes mayores. 3. El Convenio no se aplica: a. a las instalaciones nucleares y fábricas de tratamiento de sustancias radiactivas, a excepción de los sectores de dichas instalaciones en los que se manipulen sustancias no radiactivas; b. a las instalaciones militares; c. al transporte fuera de la instalación distinto del transporte por tuberías. 4. Todo Miembro que ratifique el presente Convenio podrá, después de consultar a las organizaciones representativas de empleadores y de trabajadores interesadas, y a otras partes interesadas que pudieran ser afectadas, excluir de su campo de aplicación aquellas instalaciones o ramas de la actividad económica en las que se disponga de una protección equivalente. Artículo 3 Contiene definiciones que incluyen: a) la expresión sustancia peligrosa designa toda sustancia o mezcla que, en razón de propiedades químicas, físicas o toxicológicas, ya sea sola o en combinación con otras, entrañe un peligro; b) la expresión cantidad umbral designa respecto de una sustancia o categoría de sustancias peligrosas la cantidad fijada por la legislación nacional con referencia a condiciones específicas que, si se sobrepasa, identifica una instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores; c) la expresión instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores designa aquella que produzca, transforme, manipule, utilice, deseche, o almacene, de manera permanente o transitoria, una o varias sustancias o categorías de sustancias peligrosas, en cantidades que sobrepasen la cantidad umbral; d) la expresión accidente mayor designa todo acontecimiento repentino, como una emisión, un incendio o una explosión de gran magnitud, en el curso de una actividad dentro de una instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores, en el que estén implicadas una o varias sustancias peligrosas y que exponga a los trabajadores, a la población o al medio ambiente a un peligro grave, inmediato o diferido; 89 CONVENIO DE LA CEPE/ONU Artículo 1 – Definiciones “Actividad peligrosa”: cualquier actividad en la que estén o puedan estar presentes una o más sustancias peligrosas en cantidades iguales o superiores a las cantidades umbral enumeradas en el Anexo I al presente Convenio y que pueda causar efectos transfronterizos. Artículo 2 – Ámbito de aplicación El presente Convenio se aplicará a la prevención de los accidentes industriales que puedan tener efectos transfronterizos, incluidos los efectos de accidentes de dicho tipo provocados por desastres naturales, y a las medidas preparatorias y respuestas para hacerles frente, así como a la cooperación internacional en materia de asistencia mutua, investigación y desarrollo, intercambio de información y de tecnología con fines de prevención, preparación y respuesta. Artículo 1 – Definiciones “Actividad peligrosa”: cualquier actividad en la que estén o puedan estar presentes una o más sustancias peligrosas en cantidades iguales o superiores a las cantidades umbral enumeradas en el Anexo I al presente Convenio y que pueda causar efectos transfronterizos. Artículo 2 – Ámbito de aplicación El presente Convenio se aplicará a la prevención de los accidentes industriales que puedan tener efectos transfronterizos, incluidos los efectos de accidentes de dicho tipo provocados por desastres naturales, y a las medidas preparatorias y respuestas para hacerles frente, así como a la cooperación internacional en materia de asistencia mutua, investigación y desarrollo, intercambio de información y de tecnología con fines de prevención, preparación y respuesta. Existen excepciones para nueve tipos de establecimientos (por ejemplo, militares, rupturas de presas, accidentes con organismos con modificaciones genéticas, etc.). El Anexo I contiene la lista de sustancias destinadas a definir las actividades peligrosas. Esta lista concuerda con la lista de la Directiva Seveso ll. DIRECTIVA SEVESO II (véase el Anexo III para la lista de sustancias y los umbrales) Artículo 2: Ámbito de aplicación 1. Las disposiciones de la presente Directiva se aplicarán a los establecimientos en los que haya presentes sustancias peligrosas en cantidades iguales o superiores a las especificadas en la columna 2 de las partes 1 y 2 del Anexo I, con excepción de los artículos 9, 11 y 13, que se aplicarán a los establecimientos en los que haya presentes sustancias peligrosas en cantidades iguales o superiores a las especificadas en la columna 3 de las partes 1 y 2 del Anexo I. A efectos de la presente Directiva, se entenderá por «presencia de sustancias peligrosas» su presencia real o prevista en el establecimiento o la presencia de aquellas de las que se piensa que pueden generarse a consecuencia de la pérdida de control de un proceso industrial químico, en cantidades iguales o superiores a los umbrales indicados en las partes 1 y 2 del Anexo I. 90 2. Las disposiciones de la presente Directiva se aplicarán sin perjuicio de las disposiciones comunitarias relativas al medio de trabajo, en particular las de la Directiva 89/391/CEE del Consejo, de 12 de junio de 1989, relativa a la aplicación de medidas para promover la mejora de la seguridad y de la salud en los lugares de trabajo (8) (OJ No L 183, 29.61989, p.1). Artículo 3: Definiciones A efectos de la presente Directiva se entenderá por: 1. „establecimiento‟: la totalidad de la zona bajo el control de un industrial en la que se encuentren sustancias peligrosas en una o varias instalaciones, incluidas las infraestructuras o actividades comunes o conexas. 2. „instalación‟: una unidad técnica en el interior de un establecimiento en donde se produzcan, utilicen, manipulen o almacenen sustancias peligrosas. Incluye todos los equipos, estructuras, canalizaciones, maquinaria, instrumentos, ramales ferroviarios particulares, dársenas, muelles de carga o descarga para uso de la instalación, espigones, depósitos o estructuras similares, estén a flote o no, necesarios para el funcionamiento de la instalación. 3. „industrial‟: cualquier persona física o jurídica que explote o posea el establecimiento o la instalación o, si está previsto en la legislación nacional, cualquier persona en la que se haya delegado, en relación con el funcionamiento técnico, un poder económico determinante. 4. „sustancias peligrosas‟: las sustancias, mezclas o preparados enumerados en la parte 1 del Anexo I o que cumplan los criterios establecidos en la parte 2 del Anexo I, y que estén presentes en forma de materia prima, productos, subproductos, residuos o productos intermedios, incluidos aquellos de los que se pueda pensar justificadamente que se forman en caso de accidente. 5. „accidente grave‟: un hecho, como una emisión, incendio o explosión importantes, que resulte de un proceso no controlado durante el funcionamiento de cualquier establecimiento al que se aplique la presente Directiva, que suponga un peligro grave, y sea inmediato o diferido, para la salud humana o el medio ambiente, dentro o fuera del establecimiento, y en el que intervengan una o varias sustancias peligrosas. 6. „peligro‟: la capacidad intrínseca de una sustancia peligrosa o una situación física de ocasionar daños a la salud humana o al medio ambiente. 7. „riesgo‟: la probabilidad de que se produzca un efecto específico en un período de tiempo determinado o en circunstancias determinadas. 8. „almacenamiento‟: la presencia de una cantidad determinada de sustancias peligrosas con fines de almacenamiento, depósito en custodia o reserva. Artículo 4: Exclusiones La presente Directiva no se aplicará a: a) los establecimientos, las instalaciones o zonas de almacenamiento militares; b) los peligros creados por las radiaciones ionizantes; c) el transporte de sustancias peligrosas y el almacenamiento temporal intermedio por carretera, ferrocarril, vía navegable interior y marítima o aérea, incluidas las actividades de carga y descarga y el traslado desde y hacia otro tipo de transporte con destino a muelles, 91 embarcaderos o estaciones ferroviarias de clasificación fuera de los establecimientos a que se refiere la presente Directiva; d) el transporte de sustancias peligrosas por canalizaciones, incluidas las estaciones de bombeo, que se encuentren fuera de los establecimientos a que se refiere la presente Directiva; e) la explotación (exploración, extracción y procesamiento) de minerales en minas, canteras o por medio de barrenos, con la excepción de operaciones de procesamiento químico y térmico y almacenamiento relacionado con aquellas operaciones que involucran sustancias peligrosas, como se define en el Anexo 1; f) los vertederos de residuos. 24 LEGISLACIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS (Véase el Anexo III (Listas de sustancias químicas de interés) en la página 200 de la lista de sustancias químicas y umbrales) De acuerdo con la guía elaborada por la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos: Los propietarios y los operadores de fuentes estacionarias en las que sustancias reguladas o cualquier otra sustancia extremadamente peligrosa se encuentren presentes en un proceso, independientemente de la cantidad de la sustancia, están sujetos a la cláusula de obligación general de la sección 112 (r) (1). Esta cláusula de obligación general instruye a todos los dueños y operadores de fuentes estacionarias a identificar los peligros que pueden resultar de emisiones accidentales, para diseñar y mantener una instalación segura y minimizar las consecuencias de los derrames cuando ocurren. Los requisitos del Programa del Plan de Gestión de Riesgos (PGR) pueden aplicarse a los propietarios y los operadores de fuentes estacionarias que tienen más de una cantidad umbral de una sustancia regulada incluida en un proceso (40 CFR 68.115). La definición de „proceso‟ es muy amplia e incluye todo uso, almacenamiento, fabricación, manipulación, movimiento dentro del sitio o cualquier combinación de esas actividades. Todo grupo de recipientes interconectados o recipientes individuales ubicados de tal manera que una sustancia regulada pudiera intervenir en un derrame potencial, se considera un solo proceso. La reglamentación específicamente incluye a cualquier establecimiento que tenga una sustancia regulada que se encuentre por encima del umbral dentro de un proceso, al margen de si el propietario o el operador son un estado, una subdivisión política, el gobierno federal o una entidad privada. Las sustancias químicas y los umbrales del PGR se superponen con sustancias químicas especificadas en otras normas de los Estados Unidos pero no son idénticas a aquellas que se encuentran en ninguna otra lista. La lista de sustancias químicas del PGR y los umbrales 24 Las leyes y normativas de los Estados Unidos son difíciles de citar directamente porque están contenidos en distintos documentos y poseen lenguaje que es específico del contexto estadounidense. Por consiguiente, algunos de los extractos en este capítulo no contienen lenguaje directo de la legislación estadounidense. Algunas de las principales normativas estadounidenses son citadas en el Anexo VI (Bibliografía seleccionada) en la página 235 y todas las normativas están disponibles en el sitio Web de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos en: www.epa.gov.emergencies. 92 correspondientes para cada sustancia química están publicados en el 40 CFR 68.130, Tablas 1 y 2 (sustancias tóxicas) y Tablas 3 y 4 (sustancias inflamables) y se encuentran disponibles en el sitio Web de la Oficina de Administración de Emergencias (OEM) en: http://www.epa.gov/emergencies/. Las reglamentaciones contienen una cantidad de excepciones, incluso, por ejemplo, amoníaco utilizado como nutriente agrícola, si se encuentra en poder de agricultores, y sustancias inflamables utilizadas como combustible o para la venta como combustible en un establecimiento de venta al público. Las reglamentaciones contienen numerosas definiciones. 93 C3: Función de las autoridades competentes (gobierno)25 a. Información general Objetivos Identificar con claridad qué autoridades son responsables de cada elemento del programa para casos de accidentes con productos químicos. Asegurar que las autoridades tengan recursos (incluso niveles adecuados de personal capacitado) para cumplir con sus responsabilidades. Tomar las medidas necesarias a fin de implementar los elementos del programa para casos de accidentes con productos químicos y promover la seguridad química por todos los actores. Por qué Sin la designación de autoridades, ni la asignación de recursos, no es posible supervisar y hacer cumplir los elementos del programa para casos de accidentes con productos químicos. Las autoridades también deben asumir una función de liderazgo en relación a la motivación de los actores para reconocer la necesidad de la prevención de accidentes y tomar las medidas necesarias a fin de ayudar a desarrollar una cultura nacional que promueva la prevención de accidentes. Véase el Cuadro de texto 9 (Funciones claves de las autoridades competentes) en la página 95 que contiene un resumen de las funciones clave de las autoridades competentes. Cómo Asignar funciones y responsabilidades de manera que sea coherente con el contexto político y cultural existente. Por lo tanto, si bien la experiencia de otros países puede ser aleccionadora, no debe ser el factor determinante de la asignación. Iniciar este proceso mediante la realización de una evaluación de las funciones de las autoridades y los recursos necesarios, como parte del proceso de desarrollar el programa para casos de accidentes con productos químicos. Éste pudiera ser un proceso iterativo que trata sobre la función de las autoridades competentes a medida que se elaboran los distintos elementos. Cuando se deba asignar responsabilidades a las autoridades pertinentes, observe si más de una autoridad debe participar en la implementación de los distintos elementos del programa y cómo minimizar cualquier superposición y conflicto potencial entre las autoridades. 25 El término “autoridad competente” se refiere a la entidad gubernamental a la que se le ha delegado legalmente o designado para llevar a cabo las funciones identificadas. El término autoridad competente se utiliza en la Directiva Seveso II. 94 Asegurar que se cuente con personal calificado para cumplir con las funciones de las autoridades. Las funciones deben estar diferenciadas (por ejemplo, la tarea de un inspector no puede realizarla un administrador). Tener programas de capacitación para el personal (para capacitación inicial y capacitación permanente) a fin de asegurar el nivel de conocimiento continuo. Buscar ayuda de fuentes externas (por ejemplo, consultores) si la pericia necesaria para cumplir con sus responsabilidades no se encuentra disponible en el ámbito interno. Establecer un mecanismo para ayudar a asegurar la cooperación y la coordinación entre las autoridades, necesarias para una implementación eficaz. También puede tratar las consultas con actores vinculados a organizaciones no gubernamentales. Tratar la instauración de procedimientos para la puesta en vigor, incluso sanciones por el no cumplimiento de los requerimientos. Para más información sobre los requerimientos para las autoridades competentes cuando establecen un programa para casos de accidentes con productos químicos consulte la Sección B5 (Fase de implementación) del Capítulo B en la página 62. Dificultades Tener escasez de personal calificado para cada función (incluso, según corresponda, antecedentes y capacitación tecno-científica). Retener al personal calificado. Tener recursos insuficientes para que las autoridades cumplan con las funciones designadas. No lograr mantener el nivel tecnológico y de idoneidad. Tener conflictos o superposiciones entre las funciones de las distintas autoridades. No tener una coordinación eficaz entre las múltiples autoridades, lo cual conlleva a vacíos, actividades superpuestas y conflictos. Cuadro de texto 9 FUNCIONES CLAVES DE LAS AUTORIDADES COMPETENTES (GOBIERNO) desarrollar, implementar y perfeccionar en forma continua las leyes, las reglamentaciones, las políticas y las prácticas; hacer cumplir las leyes y las reglamentaciones; monitorear la industria, incluso efectuar inspecciones en el sitio, a fin de ayudar a asegurar el cumplimiento con los requerimientos y de controlar que los elementos del SGA funcionen correctamente; proporcionar liderazgo a fin de motivar a todos los actores para que cumplan con sus responsabilidades; tener un inventario de las instalaciones peligrosas; examinar la documentación suministrada por las instalaciones; crear e implementar acuerdos adecuados sobre la planificación relativa al uso del suelo; ofrecer orientación respecto de cómo cumplir con los requerimientos regulatorios; facilitar la educación y el intercambio de información y promover iniciativas voluntarias; asegurar que se suministre información al público; promover la coordinación y la cooperación entre las autoridades relevantes y con otros actores; 95 asegurar que se realiza la planificación de la preparación fuera del sitio; mitigar los efectos de los accidentes a través de medidas de respuesta adecuadas; mantener información (bases de datos) sobre accidentes; llevar adelante investigaciones de accidentes significativos, en particular de aquellos que pueden ofrecer lecciones importantes; y facilitar el intercambio de experiencias dentro del país y entre los países. b. Manejo de la información Objetivo Establecer sistemas destinados al manejo de la información necesaria en un programa para casos de accidentes con productos químicos. Por qué La información es fundamental en muchos aspectos de un programa eficaz para casos de accidentes con productos químicos a fin de evaluar los riesgos, determinar las prioridades y mejorar la seguridad. Entre los tipos de información necesarios, se incluyen: inventarios de instalaciones y sustancias químicas peligrosas; traducción de los nombres químicos en las lenguas locales; directorios que identifiquen las características de sustancias peligrosas; evaluaciones de riesgo e informes de seguridad; informes de inspecciones; antecedentes e investigaciones de accidentes; y material guía para la industria y para el público. Por ese motivo, se necesitan sistemas para recabar y mantener la información actualizada, así como para poder acceder a la información cuando sea necesario. Cómo Crear bases de datos y otros mecanismos para facilitar la recolección, el mantenimiento y la actualización de la información (incluso, por ejemplo: un inventario de instalaciones peligrosas; una base de datos sobre sustancias peligrosas de posible riesgo; evaluaciones de riesgo/ informes de seguridad y demás información sobre instalaciones individuales; informes de inspección; información necesaria para respuesta y tratamiento médico a las víctimas; bases de datos sobre accidentes; informes sobre investigaciones de accidentes). Recolectar, catalogar, registrar y revisar la información sistemáticamente. Acceder a información de las organizaciones internacionales (por ejemplo, sobre peligros de sustancias químicas). Establecer mecanismos para el intercambio de información dentro del país y entre los países con el objeto de perfeccionar la seguridad química (por ejemplo, entre distintas autoridades, entre las autoridades y la industria, entre inspectores). Participar en esfuerzos internacionales que promuevan el intercambio de información. 96 En la parte (b) (Acceso e intercambio de información) en la Sección B5 del Capítulo B en la página 70, se encuentra disponible más información. Nota: No hay extractos de instrumentos jurídicos para este elemento. Todos los países con programas para accidentes con productos químicos tienen sistemas para manejar la información. Esto es crítico para la implementación y generalmente la ley no lo ordena, sino más bien, es parte del proceso de implementación. Dificultades Recarga de información (por ejemplo, el personal de respuesta necesita información específica para tomar decisiones rápidas, no información completa sobre los riesgos de las sustancias químicas). Información incompleta o no actualizada. Información que se recopiló pero a la que no puede accederse. Memoria institucional que se pierde debido a que la información la conoce o tiene acceso a ella una cantidad limitada de empleados. c. Inspecciones Objetivo Mantener un programa de inspección eficaz para instalaciones peligrosas a fin de controlar el cumplimiento con los requisitos, garantizar prácticas de seguridad adecuadas y compartir la experiencia. Por qué Un programa de inspección puede ayudar a asegurar que las instalaciones peligrosas operan conforme a las normas establecidas en el programa y con buenas prácticas, y para determinar si se cuenta con sistemas de gestión de la seguridad y si estos operan dentro de los límites de seguridad aceptables. Las inspecciones brindan una oportunidad para que la industria y las autoridades intercambien experiencia y orientación, y para mejorar la confianza respecto de la seguridad de las instalaciones peligrosas. Además, las inspecciones pueden ayudar a determinar las prioridades para futuras inspecciones y, de forma general, al programa para casos de accidentes con productos químicos. Cómo Identificar las instalaciones sujetas a inspección. Establecer procedimientos para llevar a cabo auditorías/inspecciones adecuadas para los distintos tipos de actividades peligrosas, con objetivos definidos claramente. Deben existir protocolos y guías comunes a fin de asegurar la capacidad para comparar inspecciones diferentes. Llevar a cabo inspecciones periódicamente, en el marco de un programa de inspecciones que tome en cuenta los recursos y el personal disponible. Normalmente, los programas de inspección incluyen tanto inspecciones programadas como “control al azar” sin programación. 97 Las inspecciones también deben llevarse a cabo como resultado de “acontecimientos desencadenantes” (como por ejemplo, reclamos, accidentes o conocimientos nuevos). Planificar y organizar inspecciones regulares a fin de tomar en cuenta los recursos disponibles, así como las características de las instalaciones pertinentes (por ejemplo, tipos de operaciones, niveles de los riesgos, consideraciones exclusivas de una instalación en particular). La frecuencia de las inspecciones pueden realizarse en diferentes niveles de acuerdo con el nivel de riesgo. Se debe contar con estrategias y herramientas para asegurar que la cobertura y el centro de atención de las inspecciones mantenga coherencia con los objetivos del programa de accidentes químicos a lo largo del tiempo. Asegurar que las inspecciones aborden los aspectos técnicos, organizativos y gerenciales de la instalación. Asegurar que las autoridades de inspección tengan suficientes recursos y personal capacitado. Asegurar que los inspectores tengan la autoridad necesaria para ingresar en las instalaciones peligrosas e inspeccionarlas y obtener información necesaria. Asegurar que los inspectores tienen la información, el equipo y otros recursos que necesitan (tales como transporte, equipo de protección personal [EPP], computadoras y software). Contratar personal competente y capacitar a los inspectores a fin de que conozcan los protocolos y las técnicas de inspección y comprendan cómo inspeccionar el aspecto técnico, los factores humanos y otros aspectos relevantes. Establecer una estrategia para mantener la idoneidad del inspector y aprender de la experiencia. El intercambio de información sobre accidentes e inspecciones es clave. Desarrollar procedimientos que los inspectores deberán seguir antes de la inspección para que puedan estar debidamente preparados. Por ejemplo, los inspectores deberán examinar el(los) informes de seguridad pertinente(s), los informes de inspección anteriores, los permisos y otra documentación relacionada que haya sido proporcionada a las autoridades. La inspección también deberá ofrecerle a los inspectores la oportunidad de verificar la veracidad de las partes pertinentes del informe(s) de seguridad. Luego de cada inspección, solicitar la elaboración de un informe de inspección que identifique las deficiencias y recomiende acciones de remediación y medidas de cumplimiento. Compartir el informe con los propietarios/operadores. – • Las acciones de seguimiento deberán ser diseñadas para asegurar que las deficiencias identificadas son tratadas de manera adecuada y oportuna y se verifican las acciones tomadas. Establecer mecanismos para asegurar que se lleven a cabo las medidas de remediación. Proporcionar a los inspectores las herramientas adecuadas para abordar los posibles riesgos identificados, por ejemplo, agendas para la acción, citaciones, multas y, cuando existan deficiencias graves o la amenaza inminente de un accidente, la capacidad para detener las operaciones. Coordinar entre organizaciones de inspección pertinentes (por ejemplo, aquellos responsables por la protección ambiental, la salud y la seguridad ocupacional, la salud pública y la respuesta de emergencia a nivel nacional, regional y local) para minimizar la duplicación de esfuerzos, reducir la carga para la industria, compartir recursos y aprender de la experiencia de otros. Dicha cooperación también beneficia a la industria al evitar múltiples inspecciones y minimizar los resultados contrarios. Involucrar en el proceso de inspección a los empleados y, si corresponde, a otros actores. 98 Dificultades Es necesario asegurar Todos los programas de inspección deben tener elementos comunes que la inspección no que son críticos para su éxito. Específicamente, cada uno debiera tener: exime al propietario/ 26 metas claramente definidas; operador de la un ámbito de aplicación identificado; responsabilidad en un plan de trabajo (un plan de acción con plazos determinados); relación a la seguridad expertos idóneos que están capacitados y calificados para las tareas y de sus instalaciones metas específicas; peligrosas (esto es, análisis de la documentación adecuada, así como entrevistas con personal clave; eludir cualquier inferenuna identificación de las deficiencias y prácticas debidas; cia que hagan las un informe formal de los hallazgos; autoridades sobre las una revisión gerencial para definir claramente las responsabilidades responsabilidades para acciones de seguimiento y medios para garantizar que las acciones jurídicas por la se llevan a cabo; y seguridad de las una demostración de que se han llevado a cabo las acciones de instalaciones simpleseguimiento. mente porque éstas fueron sometidas a inspección). Se debe tener cuidado al establecer las prioridades adecuadas para las inspecciones y reconocer que no es posible inspeccionar todas las instalaciones cada año. Además, no es posible (o necesariamente productivo) inspeccionar cada aspecto de una instalación durante una misma inspección. Con frecuencia, las inspecciones se concentran en los aspectos técnicos del establecimiento y dejan de lado los factores humanos y la gestión de seguridad, etc. Puede existir una dependencia excesiva de las listas de control (elaboradas por ellos mismos). El uso de listas de control para realizar inspecciones puede llevar a inspecciones “cerradas” que evalúan problemas potenciales conocidos. El desarrollo de aptitudes y técnicas de inspección “abiertas” requiere experiencia y capacitación a fin de conocer las características de las “actividades peligrosas” o de una gestión de la seguridad limitada. Las inspecciones no pueden ser eficaces si los inspectores no están preparados, por ejemplo, si no han recibido información suficiente por adelantado para comprender las operaciones de la instalación y los peligros involucrados. Si el tiempo que se asigna a una inspección dentro de un sitio es insuficiente o si existe una falta de preparación, el resultado será una inspección superficial que no proporcionará una impresión verdadera de la seguridad de la instalación. 26 Para fines de esta Guía, “propietario/operador” se define como todo individuo o persona jurídica (pública o privada) con responsabilidad para la toma de decisiones de una instalación (incluso la administración). 99 Extractos de instrumentos internacionales CONVENIO DE LA OIT Artículo 18 1. La autoridad competente deberá disponer de personal debidamente calificado que cuente con una formación y competencia adecuadas y con el apoyo técnico y profesional suficiente para desempeñar sus funciones de inspección, investigación, evaluación y asesoría sobre los temas especificados en este Convenio, así como para asegurar el cumplimiento de la legislación nacional. 2. Los representantes del empleador y los representantes de los trabajadores de la instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores deberán tener la posibilidad de acompañar a los inspectores cuando controlen la aplicación de las medidas prescritas en virtud del presente Convenio, a menos que los inspectores estimen, a la luz de las directrices generales de la autoridad competente, que ello puede perjudicar el cumplimiento de sus funciones de control. CONVENIO DE LA CEPE/ONU Anexo IV: Medidas preventivas que estipula el Articulo 6 Se pueden llevar a cabo las siguientes medidas dependiendo de las leyes y prácticas nacionales por las partes, las autoridades competentes, los operadores y mediante esfuerzos conjuntos: … 9. El monitoreo y la auditoría de actividades peligrosas y la realización de inspecciones. DIRECTIVA SEVESO II Artículo 18: Inspecciones 1. Los Estados miembros velarán por que las autoridades competentes organicen un sistema de inspecciones u otras medidas de control adecuadas para el tipo de establecimiento de que se trate. Estas inspecciones o medidas de control no dependerán de la recepción del informe de seguridad ni de ningún otro informe presentado y deberán posibilitar un examen planificado y sistemático de los sistemas técnicos, de organización y de gestión aplicados en el establecimiento, a fin de que, en particular: • el industrial pueda demostrar que ha tomado las medidas adecuadas, habida cuenta de las diferentes actividades realizadas en el establecimiento, para prevenir accidentes graves; • el industrial pueda demostrar que ha tomado las medidas adecuadas para limitar las consecuencias de accidentes graves dentro y fuera del establecimiento; • los datos y la información facilitados en el informe de seguridad o en otro de los informes presentados, reflejen fielmente el estado del establecimiento; • se facilite al público la información que estipula el apartado 1 del artículo 13. 2. El sistema de inspección previsto en el apartado 1 deberá reunir, como mínimo, las condiciones siguientes: 100 a. deberá existir un programa de inspecciones para todos los establecimientos. Salvo que la autoridad competente haya establecido un programa de inspecciones sobre la base de una evaluación sistemática de los peligros inherentes a los accidentes graves relacionados con el establecimiento que se esté considerando, el programa incluirá al menos cada doce meses a una inspección in situ de cada establecimiento contemplado en el artículo 9, efectuada por la autoridad competente; b. después de cada inspección, la autoridad competente preparará un informe; c. el seguimiento de cada inspección realizada por la autoridad competente se efectuará, en su caso, en colaboración con la dirección del establecimiento dentro de un período de tiempo razonable después de la inspección. 3. La autoridad competente podrá exigir al industrial que proporcione la información complementaria necesaria para que la autoridad pueda evaluar con conocimiento de causa las posibilidades de que se produzca un accidente grave y determinar en qué medida pueden aumentar las probabilidades o agravarse las consecuencias de accidentes graves, y que permita preparar un plan de emergencia externo, y tomar en consideración las sustancias que, debido a su forma física, a sus condiciones especiales o a su ubicación, puedan exigir una atención especial. LEGISLACIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS Programa del Plan de Gestión del Riesgo § 68.220 Auditorías a. Además de las inspecciones a los efectos del desarrollo normativo y el cumplimiento de la Ley, la agencia implementadora deberá auditar periódicamente los PGR presentados en relación con la subparte G de esta parte para revisar la adecuación de dichos PGR y solicitar el análisis de los PGR cuando sea necesario para garantizar el cumplimiento de la subparte G de esta parte. b. La agencia implementadora deberá seleccionar las fuentes estacionarias para las auditorías sobre la base de cualquiera de los siguientes criterios: 1. Historia del accidente de la fuente fija; 2. Historia de accidentes de otras fuentes fijas en la misma industria; 3. Cantidad de sustancias reguladas que están presente en la fuente fija; 4. Ubicación de la fuente fija y su proximidad al público y a los receptores ambientales; 5. La presencia de determinadas sustancias reguladas; 6. Los peligros identificados en el PGR; y 7. Un plan que brinde una supervisión neutral y al azar. … d. La agencia implementadora deberá tener acceso a la fuente estacionaria, la documentación de apoyo, y cualquier área en la que pudiera ocurrir una emisión accidental. e. Sobre la base de la auditoría, la agencia implementadora podrá expedirle al propietario u operador de una fuente fija una determinación preliminar por escrito de la revisión necesaria de la PGR de la fuente fija para asegurarse que la PGR cumpla con los criterios de la subparte G de esta parte. La determinación preliminar deberá incluir una explicación de la base para las revisiones, lo que refleja las normas y directrices de la industria (tales como las 101 directrices de la AIChE/CCPS y las normas de ASME y API) en la medida en que tales normas y directrices se aplican, y deberá incluir un calendario para su implementación. f. La respuesta escrita a una determinación preliminar. (1) El propietario u operador deberá responder por escrito a una determinación preliminar realizada de conformidad con el apartado (e) de esta sección. La respuesta deberá indicar que el propietario u operador pondrá en práctica las revisiones contenidas en la determinación preliminar de conformidad con el calendario incluido en la determinación preliminar o se declarará que el propietario u operador rechaza las revisiones en su totalidad o en parte. Para cada revisión rechazada, el propietario u operador deberá indicar el fundamento para rechazar dicha revisión. Esta explicación puede incluir revisiones substitutas. … 2. La respuesta por escrito en virtud del párrafo (f) (1) de esta sección deberá ser recibida por la agencia implementadora dentro de los 90 días siguientes a la cuestión de la determinación preliminar o un período más corto de tiempo que la agencia implementadora especifica en la determinación preliminar como necesaria para proteger la salud pública y el medio ambiente. Antes de que la respuesta por escrito que se debe y previa solicitud por escrito del propietario u operador, la agencia implementadora puede presentar por escrito un plazo adicional para la respuesta que se reciba. g. Después de proporcionarle al propietario u operador la oportunidad de responder en virtud del párrafo (f) de esta sección, la agencia implementadora podrá emitirle al propietario u operador una determinación final por escrito de las revisiones necesarias del PGR de la fuente fija. La determinación final podrá adoptar o modificar las revisiones contenidas en la determinación preliminar en virtud del párrafo (e) de esta sección o puede adoptar o modificar las revisiones sustitutas previstas en la respuesta en virtud del párrafo (f) de esta sección. La determinación final que adopte una revisión rechazada por el propietario u operador deberá incluir una explicación de la base para la revisión. Una determinación final que falle en adoptar una revisión sustituta prevista en el párrafo (f) de esta sección, deberá incluir una explicación de la base para considerar dicha revisión sustituta inaceptable. h. Treinta días después de la finalización de las acciones detalladas en el cronograma de ejecución establecido en la determinación final en virtud del párrafo (g) de esta sección, el dueño o el operador estará en violación de la subparte G de esta parte y esta sección, a menos que el propietario u operador revise el PGR elaborado bajo la subparte G de esta parte como lo requiere la determinación final, y presenta el PGR como se estipula en §68.150. i. El público tendrá acceso a las determinaciones preliminares, las respuestas y determinaciones finales conforme a esta sección de forma coherente con §68.210. 102 d. Planificación de la preparación Objetivo Que todas las empresas cuenten con una planificación adecuada de las tareas de preparación dentro del sitio a fin de paliar cualquier efecto adverso de los accidentes con productos químicos dentro del sitio. Por qué No es posible eliminar por completo la posibilidad de que ocurran accidentes químicos en instalaciones peligrosas y, por consiguiente, es importante estar preparado por si sucede cualquier accidente a fin de minimizar los efectos adversos. Los propietarios/operadores son responsables de la planificación de las tareas de preparación para casos accidentes que no provoquen impactos fuera de los límites de la instalación (planes dentro del sitio) y de brindar la información que las autoridades necesiten para desarrollar planes fuera del sitio. Más información sobre la planificación de emergencia se encuentra en: ▪ Cuadro de texto 10 (Temas que deben tratarse en la planificación para la preparación en casos de emergencia) en la página 105; ▪ Cuadro de texto 11 (Ayuda internacional en caso de una emergencia ambiental / accidente industrial de gran magnitud) en la página 112; ▪ SG-3 (Guía sobre planificación de emergencias) en la página 178; y ▪ SG-4 (Guía sobre aspectos de salud de accidentes con productos químicos) en la página 182. Los programas eficaces para la preparación y la respuesta para casos de emergencias con productos químicos son la última defensa para proteger al público, el medio ambiente y la propiedad de las consecuencias de accidentes que involucren sustancias peligrosas luego de que hayan fallado las medidas técnicas y/o se hayan dado errores humanos. La planificación de las tareas de preparación es una responsabilidad conjunta de las autoridades gubernamentales, la industria y otros actores: ▪ Los propietarios/operadores deben ser responsables de la planificación de las tareas de preparación para casos de accidentes que no provoquen impactos fuera de los límites de la instalación (planes dentro del sitio) y de brindar la información que las autoridades necesiten para desarrollar planes fuera del sitio. ▪ En general, las autoridades públicas son responsables de la planificación de las tareas de preparación para proteger a la comunidad, el medio ambiente y la propiedad fuera de los límites de la instalación. Cómo ▪ ▪ Los propietarios/operadores de instalaciones peligrosas deben desarrollar planes dentro del sitio, a partir de la identificación y la evaluación de los riesgos potenciales y la elaboración de escenarios de accidentes posibles. Brindar orientación y normas para asistir a la industria. Esta guía debería tratar la manera de desarrollar, implementar, probar y actualizar los planes en el sitio. Las autoridades también deberían asegurarse que la población está consciente de los planes en el sitio. 103 ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ Se le debe solicitar a los propietarios/operadores que le brinden a las autoridades públicas la información que necesitan para desarrollar planes fuera del sitio. Desarrollar planes fuera del sitio a nivel local que identifican las instalaciones peligrosas y sus riesgos en la comunidad. Invitar a todas las partes potencialmente involucradas en la respuesta, así como a la población, a que participe en la preparación de los planes fuera del sitio. Esto incluiría al personal de respuesta de emergencias, así como a médicos y profesionales de la salud pública. Garantizar que la planificación para situaciones de emergencia refleje una evaluación realista de lo que se necesita para una respuesta adecuada a partir de una serie de escenarios de posibles accidentes. El proceso de planificación debería incluir una evaluación de las aptitudes, el equipo y otros recursos existentes que estén disponibles para los esfuerzos de respuesta y una evaluación de las aptitudes, el equipo y otros recursos que se necesiten para el esfuerzo de respuesta. La planificación para situaciones de emergencia debe tomar en consideración los factores posibles de complicación que podrían dificultar las tareas de respuesta (como, por ejemplo, condiciones meteorológicas extremas, desastres naturales, pérdida de suministro de agua o electricidad, problemas con los sistemas de comunicación y transporte y efectos dominó). En la planificación para situaciones de emergencia, se deben considerar respuestas flexibles para una variedad de situaciones posibles (desde pequeños accidentes hasta las situaciones más adversas). El plan de emergencias debe identificar las funciones y las responsabilidades de todas las partes involucradas y describir la cadena de mandos y las líneas de comunicación. Se debe incluir información sobre cómo advertirle e informarle a la población sobre qué debe hacer en caso de una emergencia. Se debe garantizar la integración y la coordinación de los planes dentro y fuera del sitio. Los planes deben probarse y examinarse periódicamente a fin de mantenerlos actualizados y tomar en cuenta lecciones aprendidas de accidentes. Se debe incluir disposiciones para ayuda mutua en los planes fuera del sitio, incluso los planes locales, regionales y nacionales. Dificultades ▪ La elaboración de planes de emergencia que se guardan en un cajón y no se toman en consideración hasta que ocurre una situación de emergencia. ▪ Planes de emergencia anacrónicos debido a cambios en los riesgos, los recursos o el personal involucrados. Es importante mantener actualizados los planes de emergencia, tomando en consideración los acontecimientos (nuevos riesgos, cambios en los recursos, cambios poblacionales, etc.), así como la experiencia obtenida en las tareas de respuesta y la realización de pruebas. ▪ Las personas encargadas de dar respuesta no están capacitadas adecuadamente: es necesario que exista una revisión, capacitación y ejercitación periódicas para que todas las personas involucradas conozcan cuáles son sus responsabilidades, no olviden ni se tornen displicentes. ▪ Planes de emergencia que presenten una evaluación ideal, más que realista, de los riesgos y de los recursos (incluso de los recursos humanos). ▪ El no tomar en consideración el hecho de que esos accidentes pueden ocurrir durante horarios no laborales y en condiciones meteorológicas desfavorables. Asimismo, los 104 accidentes pueden destruir los centros de comunicación y otros establecimientos involucrados en las tareas de respuesta. ▪ Falta de conocimiento acerca de cuándo pedir ayuda externa para las tareas de respuesta. Cuadro de texto 10 TEMAS QUE DEBEN TRATARSE EN LA PLANIFICACIÓN PARA LA PREPARACIÓN EN CASOS DE EMERGENCIA (Del Manual APPELL del PNUMA – INFORMACIÓN Y PREPARACIÓN PARA CASOS DE EMERGENCIA A NIVEL LOCAL) Identificar las agencias locales que conforman la red local de información potencial y de preparación de respuesta para casos de emergencia de la comunidad Departamento de bomberos Policía / milicia Servicio de salud para casos de emergencia vinculados con los hospitales locales o con los departamentos de bomberos y de policía Agencia de gestión de emergencias o de defensa civil Agencia de salud pública Agencia ambiental Departamentos de obras públicas y / o transporte Cruz Roja / Media Luna Roja Otros recursos comunitarios locales como vivienda pública, escuelas, servicios públicos, comunicaciones, organizaciones religiosas y organizaciones no gubernamentales (ONG). Identificar los peligros que puede provocar una situación de emergencia Aunque se suele pensar en establecimientos dedicados a la elaboración de productos químicos, también deben examinarse otras operaciones para identificar posibles peligros mayores. Entre ellos, pueden incluirse: Establecimientos industriales importantes (refinerías, plantas de laminación de acero y papeleras, entre otras) Establecimientos de procesamiento pequeños que puedan almacenar o utilizar materiales peligrosos Hospitales Establecimientos de transporte y depósito Determinar la situación actual de la planificación y la coordinación de la comunidad en relación a la preparación para casos de emergencia con materiales peligrosos y asegurar que se eviten posibles superposiciones en la planificación Existencia de organismos de planificación y coordinación de la comunidad; estructura y autoridad de esos organismos Existencia de evaluaciones de la capacidad actual de prevención y respuesta de la comunidad dentro de la red de respuesta para casos de emergencia Existencia de una biblioteca de consulta técnica actualizada sobre procedimientos de respuesta para materiales peligrosos, mantenida por la comunidad 105 Información sobre seminarios de capacitación, simulacros o incidentes de prueba anteriores que haya realizado la comunidad junto con la industria local y otras organizaciones (que incluya información relativa a la frecuencia, el lugar, la fecha y los comentarios sobre las supuestas víctimas) Identificar los puntos de contacto específicos de la comunidad y sus responsabilidades en caso de emergencia Listado de agencias que participan, área de responsabilidad, nombre del contacto, cargo, número de teléfono disponible las 24 horas y cadena de mando Disponibilidad de idoneidad específicamente en química o toxicología dentro de la comunidad, ya sea en la industria, facultades o universidades, centros de toxicología o control de envenenamiento o consultorios. Enumerar el tipo de equipos y materiales disponibles en el ámbito local para dar respuesta en casos de emergencia Poner el equipo, los materiales y el personal a disposición de usuarios capacitados en el lugar del incidente. Identificar la estructura organizativa para el manejo de situaciones de emergencia Planes de respuesta para casos de emergencias ya implementados Coordinación de los planes existentes para facilitar la eficacia y evitar que se produzcan vacíos en la respuesta organizada para cualquier emergencia Aclaración de la cadena de mando Verificar si la comunidad posee equipos especializados en brindar respuesta ante casos de emergencias a fin de responder a situaciones de liberación de materiales peligrosos Capacitación de los servicios de emergencia locales sobre materiales peligrosos Disponibilidad y uso de equipos especializados por parte de los servicios de emergencia locales Capacidad de los hospitales locales para descontaminar y tratar a numerosas víctimas por exposición de manera rápida y eficaz Existencia de equipos especializados en dar respuesta de la industria, equipos de respuesta del gobierno u otros equipos de respuesta dentro de la comunidad o cercanos a ella Tiempo promedio que tardan en llegar al lugar del hecho los equipos de respuesta en caso de emergencia Puesta a disposición de la comunidad de los recursos de la industria para ayudar a responder en casos de emergencia Definir la red de transporte de la comunidad para casos de emergencia 106 Designación de rutas de evacuación específicas para la comunidad Conciencia pública de las rutas de evacuación designadas Rutas de acceso específicas designadas para el personal de servicios y de respuesta para casos de emergencia, a fin de que pueda llegar a los establecimientos o los sitios donde haya ocurrido un incidente Determinar los procedimientos comunitarios para la protección de los ciudadanos durante las emergencias Instaurar un mecanismo que permita a los encargados de dar respuesta intercambiar información o ideas con otras entidades durante una emergencia 107 Extractos de instrumentos internacionales CONVENIO DE LA OIT Artículo 9 Respecto a cada instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores, los empleadores deberán establecer y mantener un sistema documentado de prevención de riesgos de accidentes mayores en el que se prevean, entro otras cosas: … (d) planes y procedimientos de emergencia que comprendan: i. la preparación de planes y procedimientos de emergencia eficaces, con inclusión de procedimientos médicos de emergencia, para su aplicación in situ en caso de accidente mayor o de peligro de accidente mayor, la verificación y evaluación periódica de su eficacia y su revisión cuando sea necesario; ii. el suministro de información sobre los accidentes posibles y sobre los planes de emergencia in situ a las autoridades y a los organismos encargados de establecer los planes y procedimientos de emergencia para proteger a la población y al medio ambiente en el exterior de la instalación; iii. todas las consultas necesarias con dichas autoridades y organismos; (e) medidas destinadas a limitar las consecuencias de un accidente mayor. Artículo 15 Tomando en cuenta la información proporcionada por el empleador, la autoridad competente deberá velar por que se establezcan y actualicen a intervalos apropiados, y se coordinen con las autoridades y organismos interesados, los planes y procedimientos de emergencia que contengan disposiciones para proteger a la población y al medio ambiente fuera del emplazamiento en que se encuentre cada instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores. CONVENIO DE LA CEPE/ONU Artículo 8: Preparativos para situaciones de emergencia 1. Las partes adoptarán las medidas apropiadas para establecer y mantener un sistema de preparativos de emergencia suficiente para hacer frente a los accidentes industriales. Las Partes se asegurarán de que se tomen medidas de preparación para paliar los efectos transfronterizos de dichos accidentes, siendo responsables los explotadores de las medidas en el interior del emplazamiento. Las medidas que podrán tomarse serán, entre otras, las mencionadas en el anexo VII al presente Convenio. En particular, las Partes interesadas se informarán recíprocamente de sus planes de emergencia. 2. La Parte de origen se encargará, por lo que respecta a las actividades peligrosas, de la elaboración y aplicación de los planes de emergencia para el interior del emplazamiento, incluidas las medidas adecuadas de respuesta y demás medidas para prevenir y minimizar los efectos transfronterizos. La Parte de origen proporcionará a las demás Partes interesadas los elementos con que cuenta para la elaboración de los planes de 108 contingencia. 3. Cada Parte, por lo que respecta a las actividades peligrosas, se encargará de la elaboración y aplicación de planes de emergencia fuera del emplazamiento en los que figuren las medidas que deberán tomarse dentro de su territorio para prevenir y minimizar los efectos transfronterizos. Al elaborar estos planes se tendrán en cuenta las conclusiones del análisis y de la evaluación, en particular los elementos mencionados en los números (1) a (5) del apartado 2 del Anexo V. Las Partes interesadas se esforzarán por hacer compatibles dichos planes. En su caso, se elaborarán planes conjuntos de contingencia para fuera del emplazamiento con el fin de facilitar la adopción de medidas de respuesta adecuadas. 4. Los planes de emergencia deberán ser revisados regularmente o cuando las circunstancias así lo exijan, a la vista de la experiencia adquirida en afrontar situaciones de emergencia reales. DIRECTIVA SEVESO II Artículo 11: Planes de emergencia 1. Los Estados miembros velarán por que, en todos los establecimientos sujetos a las disposiciones del artículo 9: a. el industrial elabore un plan de emergencia interno respecto de las medidas que deben tomarse en el interior del establecimiento: - para los nuevos establecimientos, antes de que se inicie su operación; - para los establecimientos existentes que no estén aún sujetos a lo dispuesto en la Directiva 82/501/CEE, en el plazo de tres años a partir de la fecha mencionada en el apartado 1 del artículo 24; - para los demás establecimientos, en un plazo de dos años a partir de la fecha mencionada en el apartado 1 del artículo 24; - para los establecimientos que entren posteriormente en el ámbito de aplicación de la presente Directiva, sin demora, y en todo caso un año después de la fecha en que la presente Directiva se aplique al establecimiento concreto, tal como se establece en el párrafo primero del apartado 1 del artículo 2. b. el industrial proporcione a las autoridades competentes la información necesaria para que éstas puedan elaborar planes de emergencia externos en los siguientes plazos: - para los nuevos establecimientos, antes de que se inicie su operación; - para los establecimientos existentes que no estén aún sujetos a lo dispuesto en la Directiva 82/501/CEE, en el plazo de tres años a partir de la fecha mencionada en el apartado 1 del artículo 24; - para los demás establecimientos, en un plazo de dos años a partir de la fecha mencionada en el apartado 1 del artículo 24; - para los establecimientos que entren posteriormente en el ámbito de aplicación de la presente Directiva, sin demora, y en todo caso un año después de la fecha en que la presente Directiva se aplique al establecimiento concreto, tal como se establece en 109 el párrafo primero del apartado 1 del artículo 2. c. las autoridades designadas a tal fin por los Estados miembros elaboren un plan de emergencia externo con respecto a las medidas que deben tomarse fuera del establecimiento. 2. Los planes de emergencia deberán establecerse con el fin de: – contener y controlar los incidentes de modo que sus efectos se reduzcan al mínimo, así como limitar los perjuicios para las personas, el medio ambiente y los bienes; – aplicar las medidas necesarias para proteger a las personas y al medio ambiente de los efectos de accidentes graves; – comunicar la información pertinente a la población y a los servicios o autoridades interesados de la zona; – prever el restablecimiento de las condiciones medioambientales y la limpieza del lugar tras un accidente grave. Los planes de emergencia contendrán la información que se especifica en el Anexo IV. 3. Sin perjuicio de las obligaciones de las autoridades competentes, los Estados miembros velarán por que los planes de emergencia internos previstos en la presente Directiva se elaboren consultando al personal que trabaje en el establecimiento, incluido el personal subcontratado a largo plazo afectado, y por que se consulte a la población sobre los planes de emergencia externos con ocasión de su elaboración o actualización. 4. Los Estados miembros instaurarán un sistema que garantice que los industriales y las autoridades designadas revisen, prueben y, en su caso, modifiquen y actualicen los planes de emergencia internos y externos, a intervalos apropiados que no deberán rebasar los tres años. La revisión tendrá en cuenta los cambios que se hayan producido en los establecimientos correspondientes, dentro de los servicios de emergencia, los nuevos 2 conocimientos técnicos y los conocimientos sobre las medidas que deban tomarse en caso de accidente grave. 4ª. Por lo que respecta a los planes de emergencia externos, los Estados miembros deberían tener en cuenta la necesidad de facilitar una cooperación reforzada en materia de ayuda en el ámbito de la protección civil en caso de emergencias graves. 5. Los Estados miembros instaurarán un sistema que garantice la inmediata aplicación de los planes de emergencia por parte del industrial y, en su caso, por la autoridad competente, designada a tal efecto, siempre que: - se produzca un accidente grave, o - se produzca un hecho incontrolado que por su naturaleza permita razonablemente pensar que va a dar lugar a un accidente grave. 6. La autoridad competente podrá decidir, justificando su decisión y a la vista de la información contenida en el informe de seguridad, que las disposiciones del apartado 1 relativas a la obligación de establecer un plan de emergencia externa no se apliquen. 110 ANEXO IV: Datos e información que deberán incluirse en los planes de emergencia mencionados en el artículo 11 1. Planes de emergencia internos a. Nombres o cargos de las personas autorizadas para poner en marcha procedimientos de emergencia y persona responsable de aplicar y coordinar in situ las medidas destinadas a paliar los efectos del accidente. b. Nombre o cargo de la persona responsable de la coordinación con la autoridad responsable del plan de emergencia externo. c. En cada circunstancia o acontecimiento que pueda llegar a propiciar un accidente grave, descripción de las medidas que deberán adoptarse para controlar la circunstancia o acontecimiento y limitar sus consecuencias, incluida una descripción del equipo de seguridad y los recursos disponibles. d. Medidas para limitar los riesgos para la personas in situ, incluido el sistema de alerta y el comportamiento que se espera observen las personas una vez desencadenada. e. Medidas para alertar rápidamente del incidente a la autoridad responsable de poner en marcha el plan de emergencia externo, el tipo de información que deberá facilitarse de inmediato y medidas para facilitar información más detallada a medida que se disponga de la misma. f. Medidas de formación del personal en las tareas que se espera que cumplan y, en su caso, de coordinación con los servicios de emergencia exteriores. g. Medidas para prestar asistencia a las operaciones paliativas externas. 2. Planes de emergencia externos a. Nombres o cargos de las personas autorizadas a poner en marcha procedimientos de emergencia y de personas autorizadas a dirigir y coordinar las operaciones externas. b. Medidas para recibir una información rápida de los incidentes y procedimientos de alerta y movilización de ayuda. c. Medidas para coordinar los recursos necesarios para aplicar el plan de emergencia externo. d. Medidas para prestar asistencia en las operaciones paliativas in situ. e. Medidas para operaciones paliativas externas. f. Medidas para facilitar al público información específica sobre el accidente y el comportamiento que debe observar. g. Medidas para facilitar información a los servicios de emergencia de otros Estados miembros en el caso de que se produzca un accidente grave con posibles consecuencias más allá de las fronteras. 111 Legislación de los Estados Unidos Conforme a la Ley de Planificación de las Emergencias y del Derecho a la Información Comunitaria (EPCRA) (42 USC 116), se requiere que los gobiernos locales preparen planes de respuesta a casos de emergencia con productos químicos y revisen los planes al menos una vez al año. La EPCRA requiere que los estados de los Estados Unidos creen Comisiones Estatales de Respuesta a Emergencias (State Emergency Response Commission, SERC) y requiere que las comunidades locales formen Comités Locales de Planificación para Casos de Emergencia (Local Emergency Planning Committee, LEPC) para preparar planes locales de respuesta a emergencias para accidentes químicos y periódicamente pruebe y ejercite los planes. Se requiere que los gobiernos estatales supervisen y coordinen los esfuerzos de planificación local y presenten informes de inventarios anuales e información sobre químicos peligrosos en la instalación a los SERC, LEPC y a los departamentos de bomberos locales. También se requiere que los LEPC suministren al público la debida información sobre el plan local de respuestas a emergencias y las sustancias químicas en su comunidad. Cuadro de texto 11 AYUDA INTERNACIONAL EN CASO DE UNA EMERGENCIA AMBIENTAL / ACCIDENTE INDUSTRIAL DE GRAN MAGNITUD La Unidad Ambiental Conjunta (JEU) del PNUMA/OCAH: La JEU es el mecanismo de las Naciones Unidas que fue creado para movilizar y coordinar la ayuda de emergencia para los países afectados por emergencias ambientales y desastres naturales que causen un gran impacto sobre el medio ambiente. La JEU tiene acceso total a las herramientas y los servicios de respuesta de la OCAH, incluso a los equipos de Evaluación y Coordinación para Casos de Desastres de las Naciones Unidas (United Nations Disaster Assessment and Coordination, UNDAC). La Unidad Ambiental Conjunta se vincula con el PNUMA a través de la División de Implementación de Políticas Ambientales (Division of Environmental Policy Implementation, DEPI), y su Oficina de Gestión de Desastres Posconflicto (Post-Conflict Disaster Management Branch, PCDMB) responsable de la implementación de políticas ambientales con el fin de promover el desarrollo sostenible en el ámbito global, regional y nacional. La Unidad Conjunta está disponible durante las 24 horas del día, 7 días de la semana y durante todo el año con el objeto de movilizar la ayuda para aquellos que afrontan situaciones de emergencias. La Unidad Conjunta sólo puede movilizar ayuda cuando un país afectado lo solicite específicamente. Puede solicitarse ayuda para emergencias ambientales al: Llene el formulario: „Notificación de Emergencia Ambiental/Solicitud de Ayuda Internacional‟. Las autoridades nacionales deben llenar este formulario y enviarlo a la Unidad Ambiental Conjunta. Comuníquese con la línea caliente para emergencias de la OCAH: +41/22 917 2010. Véase: http://ochaonline.un.org/ochaunep 112 El Centro de Monitoreo e Información (MIC), operado por la Comisión Europea en Bruselas: El MIC es el centro de las operaciones del Mecanismo Comunitario para la Protección Civil. Está disponible las 24 horas del día, siete días a la semana y está dotada de oficiales de servicio que trabajan turnos. Este centro les ofrece a los países acceso a la plataforma de protección civil de la comunidad. Cualquier país afectado por un desastre de gran magnitud – dentro o fuera de los Estados Unidos – puede hacer una solicitud de ayuda a través del MIC. Véase: http://ec.europa.eu/echo/civil_protection/civil/prote/mic.htm. 113 e. Identificación del sitio y planificación del uso de suelo Objetivo Garantizar que los establecimientos peligrosos estén localizados, a fin de minimizar los efectos adversos en caso de que ocurra un accidente y restringir la urbanización cerca de las instalaciones ya existentes con el objeto de mantener una distancia adecuada entre las instalaciones peligrosas y las áreas de uso público o ambientes susceptibles. Por qué La planificación adecuada del uso del suelo y la correcta identificación del sitio de instalaciones peligrosas puede contribuir con la minimización de los efectos adversos de los accidentes. La planificación del uso de suelo protege a la comunidad, el medio ambiente y los bienes que se encuentran fuera de los límites de la instalación de la exposición a los efectos directos e indirectos de los accidentes con productos químicos. La planificación del uso de suelo impide el incremento del riesgo asociado con un establecimiento en particular, mediante la gestión de la urbanización en los alrededores de las instalaciones peligrosas, especialmente debido a que existe una tendencia a construir casas y otros establecimientos cerca de las zonas industriales. Cómo Establecer principios claros de zonificación y uso del suelo en lo que respecta a la identificación de instalaciones nuevas y las modificaciones que se incorporan en instalaciones existentes. Establecer principios que exijan el escrutinio de cualquier propuesta de urbanización cercana a instalaciones peligrosas y limiten la construcción de nuevos establecimientos con acceso público cerca de dichas instalaciones (entre los que se incluyen residencias, comercios, escuelas, hospitales, infraestructura de transporte, etc.). Tomar en consideración las circunstancias locales específicas cuando se tomen decisiones acerca de la identificación de instalaciones, incluso la posibilidad de que ocurran desastres naturales en la zona. Examinar la ubicación de las instalaciones peligrosas existentes, con respecto a las urbanizaciones cercanas, a fin de decidir si existe una distancia segura y apropiada y, en caso de que no exista tal distancia, determinar qué medidas adicionales es necesario tomar para proteger la salud de las personas y el medio ambiente. Lograr la participación de la población en la toma de decisiones con respecto a la planificación del uso de suelo. 114 Dificultades ▪ ▪ ▪ • • ▪ La aplicación desequilibrada de los principios de planificación de uso de suelo. Esto puede darse cuando los principios y la orientación relacionada no son claros. Falla de los tomadores de decisión en tomar la seguridad de los productos químicos en cuenta. A menudo las políticas existentes relativas al uso del suelo no tratan los riesgos de accidentes con productos químicos, sino que han sido establecidas por otros motivos. Dificultad en la coordinación entre las autoridades. Por lo general, la autoridad responsable de la planificación del uso del suelo es distinta de las autoridades que se ocupan de otros aspectos de los accidentes con productos químicos (por ejemplo, las decisiones en cuanto a la identificación del sitio y el uso del suelo se toman en el ámbito local). Por consiguiente, la coordinación es importante a fin de que las autoridades de uso de suelo tengan la información necesaria para tomar decisiones informadas. Se debe reconocer que las personas tienden a mudarse hacia zonas cercanas a las instalaciones peligrosas para estar más cerca de las oportunidades de empleo y de los servicios públicos. Eso puede llevar a que existan urbanizaciones informales difíciles de controlar (como fue el caso del accidente de Bhopal). Las personas que se mudan cerca de instalaciones peligros existentes tienden a estar cerca de las oportunidades de empleo y los servicios públicos. Esto puede llevar a que existan urbanizaciones informales difíciles de controlar (como fue el caso del accidente de Bhopal). Instalaciones ubicadas en áreas pobladas como resultado de la urbanización histórica. Esto hace que sea difícil formular normas estrictas para la planificación de uso del suelo y, por consiguiente, es posible que resulte necesario realizar un abordaje caso por caso para los establecimientos existentes. Extractos de instrumentos internacionales CONVENIO DE LA OIT Artículo 17 La autoridad competente deberá elaborar una política global de emplazamiento que prevea una separación adecuada entre las instalaciones en proyecto que estén expuestas a riesgos de accidentes mayores y las áreas de trabajo, las zonas residenciales y los servicios públicos, y deberá adoptar disposiciones apropiadas al respecto en lo que atañe a las instalaciones existentes. Dicha política deberá inspirarse en los principios generales enunciados en la parte II de este Convenio. CONVENIO DE LA CEPE/ONU Artículo 7: Decisión sobre el emplazamiento En el marco de su ordenamiento jurídico, la Parte de origen procurará establecer normas para la elección del emplazamiento de las nuevas actividades peligrosas y para las modificaciones significativas de las actividades peligrosas ya existentes con el fin de limitar en la medida de lo posible el riesgo para la población y el medio ambiente de todas las Partes afectadas. En el marco de sus respectivos ordenamientos jurídicos, las Partes afectadas procurarán establecer normas para los grandes proyectos de ordenación en zonas que pudieran verse afectadas por los efectos transfronterizos de un accidente industrial resultante de una actividad peligrosa con el fin de minimizar los riesgos consiguientes. En la elaboración y el establecimiento de estas normas, 115 las Partes deberán tener en cuenta los elementos enumerados en los párrafos 1) a 8) del apartado 2 del anexo V y en el anexo VI al presente Convenio. DIRECTIVA SEVESO II Artículo 12: Planificación de uso del suelo 1. Los Estados miembros velarán por que se tengan en cuenta los objetivos de prevención de accidentes graves y de limitación de sus consecuencias en sus políticas de asignación o de utilización del suelo y en otras políticas pertinentes. Procurarán alcanzar tales objetivos mediante el control de: a. la implantación de los nuevos establecimientos, b. las modificaciones de los establecimientos existentes contempladas en el artículo 10, c. las nuevas obras realizadas en las proximidades de los establecimientos existentes, tales como vías de comunicación, lugares frecuentados por el público, zonas para viviendas, cuando el emplazamiento de las obras ejecutadas puedan aumentar el riesgo o las consecuencias de accidente grave. Los Estados miembros velarán por que su política de asignación o utilización del suelo y otras políticas pertinentes, así como los procedimientos de aplicación de dichas políticas, tengan en cuenta la necesidad, a largo plazo, de mantener las distancias adecuadas entre, por una parte, los establecimientos contemplados en la presente Directiva y, por otra, las zonas de vivienda, las zonas frecuentadas por el público y las zonas que presenten un interés particular de carácter especialmente delicado, y, para los establecimientos existentes, medidas técnicas complementarias de conformidad con el artículo 5, con el fin de no aumentar los riesgos para las personas. 1ª. Se invita a la Comisión a que, en estrecha colaboración con los Estados miembros, elabore directrices para definir una base de datos técnicos que permita evaluar la compatibilidad entre los establecimientos objeto de la presente Directiva y las zonas enumeradas en el apartado 1. Al establecer esta base de datos se deberán tener en cuenta las evaluaciones técnicas y científicas de los Estados miembros, la información recabada de los industriales y toda la demás información pertinente tales como los beneficios económicos del desarrollo y los efectos de mitigación de los planes de emergencia. 2. Los Estados miembros velarán por que todas las autoridades competentes y todos los servicios facultados para tomar decisiones en este ámbito establezcan procedimientos de consulta adecuados para facilitar la aplicación de las políticas adoptadas con arreglo al apartado 1. Los procedimientos serán tales que en el momento de tomar las decisiones se disponga de un dictamen técnico sobre los riesgos vinculados al establecimiento, basado en el estudio de casos concretos o en criterios generales. Legislación de los Estados Unidos En los Estados Unidos, el emplazamiento y uso del suelo son responsabilidades de los gobiernos locales. 116 C4: Requisitos de la industria (instalaciones peligrosas) a. Información general Objetivos Establecer una cultura de seguridad que se refleje en las políticas y los procedimientos y en la que todos los empleados comprendan la importancia de la seguridad y de actuar conforme a ella. Crear e implementar un sistema de gestión de la seguridad para identificar y evaluar los peligros y riesgos, para que se utilicen tecnologías adecuadas y los procesos debidos estén establecidos y exista una estructura organizacional eficaz. Prepararse para cualquier accidente que pudiera ocurrir. Buscar el perfeccionamiento continuo. Por qué Las industrias son responsables de la seguridad de sus instalaciones. Por lo tanto, la seguridad debería ser una parte integral de las operaciones de negocios de una empresa y todas las instalaciones peligrosas necesitan crear una cultura de seguridad complementada por la tecnología, las políticas, los procedimientos y sistemas que son adecuadas a sus circunstancias. En vista de que no es posible ni deseable que las autoridades sean responsables por la operación segura de las instalaciones peligrosas, las autoridades pueden promulgar leyes, desarrollar guías y establecer programas para alentar el manejo responsable y seguro de las sustancias químicas por todas las empresas. Las autoridades también se pueden comunicar con las empresas a fin de que los requisitos estén claros y sean relevantes y alcanzables. Las empresas deben cumplir con todos los requisitos y deben cooperar con las autoridades (así como con los trabajadores y otros actores) para lograr los objetivos y el espíritu de las leyes, los programas y las políticas. El hecho de que el programa para casos de accidentes con productos químicos esté establecido, y que las autoridades estén involucradas en las actividades de examen e inspección, no le resta responsabilidad por la seguridad de las instalaciones peligrosas a la empresa/industrial. Cómo A continuación se describen los pasos generales que los propietarios y operadores de instalaciones peligrosas deben tomar para mejorar la prevención y preparación de accidentes con productos químicos. Las autoridades pueden animar las siguientes prácticas en instalaciones peligrosas por medio de la información pública, la comunicación, los programas educativos y, donde se aplique, los requisitos y otros aspectos del programa para casos de accidentes con sustancias químicas. Conocer los peligros y los riesgos en los establecimientos donde se encuentran las sustancias peligrosas. Llevar a cabo actividades de análisis de riesgo para comprender los peligros potenciales y las consecuencias de un accidente. Promover una “cultura de la seguridad” que sea conocida y aceptada por toda la empresa. 117 Crear sistemas de gestión de la seguridad y monitorear /examinar su implementación. Utilizar principios “tecnológicos intrínsecamente más seguros” en el diseño y la operación 27 de instalaciones peligrosas. Ser especialmente cuidadoso con el manejo del cambio. Prepararse para cualquier clase de accidente que pudiera ocurrir. Ayudar a otros a cumplir con sus correspondientes funciones y responsabilidades. Buscar el perfeccionamiento continuo. Alentar a los trabajadores a mantenerse informados de los peligros de las sustancias químicas y suministrar e intercambiar información con la gerencia con respecto a los peligros y las medidas de seguridad. Ser proactivo con el objeto de ayudar a informar y educar a su comunidad. Las asociaciones industriales pueden ser una fuente valiosa de información y orientación para las instalaciones individuales que tal vez no puedan tener amplios recursos para una mejor gestión química y las organizaciones grandes pueden ayudar a mejorar la seguridad química a todo lo largo de su cadena de valor, al hacer que los proveedores y clientes participen en las actividades de seguridad química. Dificultades: Vencer la percepción de que la gestión mejorada de sustancias químicas es un impedimento para el éxito y el crecimiento financiero. Tener escasez de personal calificado. Evitar cualquier interferencia de que el gobierno es responsable de la seguridad en las instalaciones peligrosas porque ha estado involucrado en actividades normativas, inspecciones o esfuerzos relacionados. 27 En el Cuadro de texto 13 (Prevención sobre accidentes con sustancias químicas: seguridad inherente) en la página 130, aparece más información sobre la seguridad inherente. 118 b. Cláusula de obligación general Objetivo Establecer el principio como una cuestión de derecho que los propietarios/operadores de instalaciones peligrosas tienen la responsabilidad de garantizar el funcionamiento seguro de sus instalaciones. Por qué La seguridad de una instalación peligrosa debe ser responsabilidad del propietario/operador de la instalación. Una cláusula de obligación general le permite a un país establecer ese principio como una cuestión de derecho. Es importante porque no es posible que los instrumentos jurídicos traten sobre todos los peligros potenciales, o que especifiquen todo lo que un dueño/ operador debería hacer con respecto a la prevención y preparación de accidente. Es imposible que el gobierno 28 controle o hasta monitoree todas las instalaciones peligrosas. Resumen de algunas cláusulas de obligación general Directiva Seveso: Los Estados miembros velarán por que el operador esté obligado a tomar todas las medidas que sean necesarias para prevenir accidentes mayores y limitar sus consecuencias para el hombre y el medio ambiente. Plan de Gestión de Riesgos de los Estados Unidos: Los propietarios/operadores tienen el deber general de identificar peligros, diseñar y mantener una instalación segura, tomando los pasos que sean necesarios para prevenir las emisiones y minimizar las consecuencias de emisiones accidentales que ocurran. Ordenanza suiza: Requiere que el propietario de una instalación tome todas las medidas que sean necesarias para reducir el riesgo consistente con la tecnología de seguridad de punta y la experiencia personal. Deben tomar todas las medidas viables económicamente para reducir los peligros, prevenir los accidentes y limitar las consecuencias de posibles accidentes en caso de que ocurran.28 Por lo tanto, una cláusula de obligaciones generales complementa cualquier requisito específico del programa para casos de accidentes con productos químicos. Cada país debe considerar cuál es la mejor manera de expresar este principio de una forma que sea consistente con su contexto jurídico y cultural. El efecto práctico de una Cláusula de obligaciones generales es que el propietario/operador de cualquier instalación peligrosa deba llevar a cabo una evaluación de los peligros que pueden llegar a provocar un accidente y, luego, adopte medidas para prevenir dicho accidente o, en caso de que ocurra el accidente a pesar de que se hayan tomado esas medidas, para limitar las consecuencias para la salud, el medio ambiente y la propiedad. Cómo Establecer en el programa para casos de accidentes con productos químicos el principio de que los propietarios/operadores de instalaciones peligrosas son los responsables de garantizar la seguridad de sus instalaciones. Esta obligación puede establecerse en términos generales, por ejemplo, que el propietario/operador esté obligado a tomar las medidas que sean necesarias para garantizar el desempeño seguro de las actividades peligrosas y para 28 Véase Gmuender, Felix K, Meyer, Patrick y Schiess, Martin “The Control of Major Chemical Hazards in Switzerland in the Framework of Sustainable Development – Liquified Petroleum, Ammonia and Chlorine as Examples” en: http://www.gmuender.org/stfv/ControlMajorHazards.pdf 119 prevenir accidentes industriales, o que el propietario/operador es responsable del diseño, la construcción y la operación de la instalación de manera segura con respecto a los riesgos que se presenten. El programa puede incluir requisitos específicos como, por ejemplo, que el propietario/operador conserve la documentación para demostrar a las autoridades que está cumpliendo con esta obligación. Incluir medidas de cumplimiento o sanciones en leyes, reglamentaciones u otros instrumentos pertinentes, que puedan aplicarse si se descubre que un propietario/operador está operando una instalación de manera insegura. Brindar asistencia u orientación para ayudar a los propietarios/operadores a cumplir con sus responsabilidades. Dificultades Dificultad en hacer cumplir la Cláusula de obligación general porque el nivel de la carga de la prueba no es claro. La falta de claridad puede llevar a un cumplimiento inferior o superior al deseado, según las normas y los precedentes jurídicos del país en cuestión. Por ejemplo, puede resultar difícil hacer cumplir la Cláusula de obligaciones generales si se trata de requisitos que exigen que la autoridad establezca una determinada carga de la prueba. Por el contrario, si la carga de la prueba se coloca mayormente en el operador, entonces la falta de una interpretación clara de la Cláusula de obligaciones generales puede dar lugar a una exigencia excesiva de la autoridad gubernamental en esa zona. El problema de llegar a un entendimiento común de lo que significan los términos pertinentes como, por ejemplo, “todas las medidas necesarias”. Extractos de instrumentos internacionales CONVENIO DE LA OIT Convenio 155* – Artículo 16 1. Deberá exigirse a los empleadores que, en la medida en que sea razonable y factible, garanticen que los lugares de trabajo, la maquinaria, el equipo y las operaciones y procesos que estén bajo su control son seguros y no entrañan riesgo alguno para la seguridad y la salud de los trabajadores. 2. Deberá exigirse a los empleadores que, en la medida en que sea razonable y factible, garanticen que los agentes y las sustancias químicas, físicas y biológicas que estén bajo su control no entrañan riesgos para la salud cuando se toman medidas de protección adecuadas. Convenio 174 – Artículo 9 Respecto a cada instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores, los empleadores deberán establecer y mantener un sistema documentado de control de peligros mayores. * El Convenio 155 es el Convenio sobre seguridad y salud de los trabajadores y medio ambiente de trabajo. 120 CONVENIO DE LA CEPE/ONU Artículo 3: Disposiciones generales ... 3. Las Partes deberán garantizar que el operador tiene la obligación de tomar todas las medidas necesarias para garantizar el desempeño seguro de la actividad peligrosa y para prevenir accidentes industriales. DIRECTIVA SEVESO II Artículo 5: Obligaciones de carácter general del industrial 1. Los Estados miembros velarán por que el industrial esté obligado a tomar cuantas medidas sean necesarias para prevenir accidentes graves y limitar sus consecuencias para las personas y el medio ambiente. 2. Los Estados miembros velarán por que el industrial esté obligado a demostrar ante la autoridad competente, a que se refiere el artículo 16, en lo sucesivo denominada „autoridad competente‟, en cualquier momento, especialmente con motivo de los controles e inspecciones a que se refiere el artículo 18, que ha tomado todas las medidas necesarias previstas en la presente Directiva. LEGISLACIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS Ley de Aire Limpio, artículo 112 ... r. Prevención de emisiones accidentales 1. Propósito y obligaciones de carácter general – El objetivo de la reglamentación y los programas autorizados según el presente artículo deberá ser la prevención de emisiones accidentales y la minimización de las consecuencias de cualquier liberación de esa índole de una sustancia enumerada en el párrafo (3) o de cualquier otra sustancia extremadamente peligrosa. Los propietarios y los operadores de fuentes estacionarias que producen, procesan, manipulan o almacenan dichas sustancias tienen una obligación de carácter general – según el modo y la medida que se dispone en el artículo 654, título 29 del Código de los Estados Unidos –, que consiste en identificar peligros que puedan generarse de dichas liberaciones mediante la utilización de técnicas adecuadas de evaluación de peligros, diseñar y mantener un establecimiento seguro tomando todas las medidas que sean necesarias para prevenir cualquier clase de liberación y minimizar las consecuencias de las liberaciones accidentales que ocurran. Para obtener orientación acerca de la aplicación de la Cláusula de obligaciones generales, consulte http://www.epa.gov/compliance/resources/policies/civil/caa/gdc/gendutyclause-rpt.pdf. 121 c. Notificación Objetivo Garantizar que autoridades tengan conocimiento de todas las instalaciones incluidas en el ámbito de aplicación de los programas para casos de accidentes con productos químicos y cuenten con información básica sobre dichas instalaciones. Por qué Mediante el uso de un procedimiento de notificación, los países pueden adquirir la comprensión de la naturaleza y el alcance de los riesgos potenciales en su país. La información obtenida como resultado de las notificaciones también proporciona: una base para desarrollar un inventario de las instalaciones peligrosas que caen dentro del ámbito de aplicación del programa para casos de accidentes con productos químicos; información para ayudar a crear e implementar grados de requisitos basados en el nivel de riesgo que suponen las distintas instalaciones; y los datos necesarios para establecer prioridades y asignar recursos para la implementación y el cumplimiento y llevar a cabo la planificación de la preparación adecuada. Por lo general, la notificación es un requisito básico para cualquier instalación que cae dentro del ámbito de aplicación del programa para casos de accidentes con productos químicos (por ejemplo, cumplir con los criterios especificados y/o umbrales). El proceso de notificación puede desencadenar la aplicación de un enfoque “en grados”. Esto significa que las instalaciones peligrosas están divididas en dos o más grupos dependiendo de su nivel de riesgo y peligro. En el enfoque en grados, entre más alto es el riesgo, más información se requiere para presentarla como un seguimiento al proceso de notificación. Así que mientras todas las instalaciones incluidas dentro del ámbito de aplicación del programa estarían sujetas a los requisitos básicos de notificación, ciertas instalaciones que cumplen con los criterios establecidos podrían estar sujetas a presentaciones de informes más frecuentes que demuestren que la instalación está tomando medidas adecuadas para prevenir los accidentes. El hecho de estar en un nivel más alto podría desencadenar otras medidas tales como inspecciones más frecuentes. Asimismo, las instalaciones más peligrosas pueden estar sujetas a restricciones o a un sistema de permisos considerando la seriedad de los peligros asociados. Cómo Establecer el requisito de que los propietarios/operadores de instalaciones peligrosas notifiquen a las autoridades competentes la existencia de toda instalación incluida en el ámbito de aplicación del programa para casos de accidentes con productos químicos. Este requisito debe incluir tres elementos: – fecha límite para enviar la notificación de instalaciones ya existentes y nuevas (generalmente antes de que se construya la instalación) y de cualquier modificación significativa que se realice en dicha instalación; – la información que debe incluirse en la notificación. Normalmente, consiste en información sobre la naturaleza de los procesos y las sustancias en la instalación, así como información sobre el propietario/operador. 122 – las sanciones para los propietarios/operadores que no cumplan con el requisito de notificación. Garantizar que esté claro cuál es el ámbito de aplicación del programa. Establecer una estructura administrativa para recolectar y catalogar las notificaciones. Establecer un sistema para revisar las notificaciones y buscar aclaraciones o darle seguimiento a la información. Desarrollar una base de datos o sistema para manejar / retener la información de interés. En la parte (b) (Acceso e intercambio de información) de la Sección B5 del Capítulo B, en la página 70, y en la parte (b) (Manejo de la información) de la Sección C3 del Capítulo C, en la página 96, aparece más información sobre sistemas para el manejo de la información. Establecer criterios para aquellas instalaciones que pudieran estar sujetas a más requisitos de presentación de informes. En la parte (f) (Informes de seguridad) de la Sección C4 del Capítulo C, en la página 134, aparece más información sobre los tipos que información que las industrias deberían proporcionarle a las autoridades. Dificultades No contar con una identificación clara del ámbito de aplicación del programa. No contar con un sistema o no tener una cantidad suficiente de empleados capacitados para recibir, catalogar, y/o examinar las notificaciones. Extractos de instrumentos internacionales CONVENIO DE LA OIT Artículo 7 Los empleadores deberán identificar, de conformidad con el sistema mencionado en el artículo 5, toda instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores sujeta a su control. Artículo 8 1. Los empleadores deberán notificar a la autoridad competente toda instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores que hayan identificado: (a) dentro de un plazo fijo en el caso de una instalación ya existente; (b) antes de ponerla en funcionamiento en el caso de una nueva instalación. 2. Los empleadores también deberán notificar a la autoridad competente el cierre definitivo de una instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores antes de que éste ocurra. 123 DIRECTIVA SEVESO II Artículo 6: Notificación 1. Los Estados miembros velarán por que el industrial esté obligado a enviar una notificación a la autoridad competente: – en el caso de establecimientos nuevos, en un plazo razonable antes de que inicie la construcción o la explotación, – en el caso de los establecimientos existentes, en el plazo de un año a partir de la fecha indicada en el apartado 1 del artículo 24, – en el caso de establecimientos que entren posteriormente en el ámbito de aplicación de la presente Directiva, en el plazo de tres meses a partir de la fecha en que la presente Directiva se aplique al establecimiento concreto, tal como se establece en el párrafo primero del apartado 1 del artículo 2. 2. La notificación a que se refiere el apartado 1 contendrá los siguientes datos: a. nombre o razón social del industrial y dirección completa del establecimiento correspondientes; b. domicilio social del industrial y dirección completa; c. el nombre o cargo del responsable del establecimiento, si es una persona diferente del industrial al que se refiere la letra (a); d. información suficiente para identificar las sustancias peligrosas o la categoría de sustancias de que se trate; e. la cantidad y forma física de la sustancia o sustancias peligrosas de que se trate; f. la actividad ejercida o actividad prevista en la instalación o zona de almacenamiento; g. el entorno inmediato del establecimiento (elementos capaces de causar un accidente grave o de agravar sus consecuencias). 3. En el caso de establecimientos existentes respecto de los cuales el industrial haya proporcionado ya a la autoridad competente toda la información a que se refiere el apartado 2 en virtud de la legislación nacional vigente en la fecha de entrada en vigor de la presente Directiva, no se exigirá la notificación a que se refiere el apartado 1. 4. En caso de que: – aumente significativamente la cantidad o se modifiquen significativamente las características o la forma física de la sustancia peligrosa presente indicadas en la notificación enviada por el industrial en virtud del apartado 2 o de que se modifiquen los procedimientos que la activan, – se modifique un establecimiento o una instalación de forma que pudieran derivarse repercusiones significativas en los riesgos inherentes a los accidentes graves, o – cierre definitivamente la instalación, el industrial informará inmediatamente del cambio de la situación a la autoridad competente. 124 LEGISLACIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS Los Estados Unidos tiene varias leyes que requieren que los propietarios de instalaciones e industriales notifiquen a las autoridades competentes que ellos están sujetos al programa para casos de accidentes con productos químicos. Esas leyes incluyen la Ley sobre la Planificación para Casos de Emergencia y del Derecho a la Información Comunitaria (EPCRA) y el Programa del Plan de Gestión de Riesgo de la Ley de Aire Limpio (PGR). Bajo la EPCRA, las instalaciones con Sustancias Extremadamente Peligrosas (EHS) sobre su Cantidad para Planificar el Umbral deben notificar al LEPC para que su instalación pueda ser incluida en el proceso de planificación de emergencia local. Igualmente, bajo la Ley EPCRA, si una instalación tiene una sustancia química peligrosa sobre la cantidad umbral debe presentar un informe anual a sus SERC, LEPC y cuerpo de bomberos. Este informe contiene el nombre, la cantidad y ubicación de la sustancia química. Los requisitos del PGR se aplican a los procesos en las instalaciones que tienen más de una cantidad umbral de cualquiera de las 77 sustancias con toxicidad aguda, tales como el cloro y el amoníaco, y 63 sustancias inflamables altamente volátiles. Si una instalación cumple con estos requisitos, debe presentar un Plan de Gestión de Riesgo. d. Política de prevención y sistemas de gestión de la seguridad Objetivo Garantizar que los propietarios/operadores de instalaciones peligrosas tengan instaurados sistemas de gestión de la seguridad y políticas adecuados a fin de prevenir accidentes con productos químicos. Por qué La política de prevención es el núcleo central de un programa para casos de accidentes con productos químicos, en el que se trate la necesidad de que el propietario/operador de una instalación peligrosa: desarrolle, implemente y actualice, según corresponda, políticas de prevención de accidentes y documente las políticas para que las autoridades competentes puedan examinarlas. Cómo Se le debe exigir a cada empresa que establezca e implemente una Política de prevención, que proporcione una base para la prevención y preparación de accidentes diseñada para minimizar la probabilidad de que ocurra un accidente y proteger la salud humana, el medio ambiente y la propiedad. • • • Esta política es una declaración de intención y refleja el compromiso con la prevención de accidentes y la preparación de emergencia, el cumplimiento de todos los requisitos y el mejoramiento continuo. La política se debe comunicar a todos los empleados. La política debe ser revisada regularmente y actualizada a la luz de la experiencia y cualquier cambio en las tecnologías, leyes, reglamentos o cambios significativos en la instalación peligrosa. 125 Se les debe exigir a aquellas empresas que cumplen con los criterios especificados que desarrollen un Sistema de Gestión de la Seguridad (SMS), que incluya la organización y los arreglos para la implementación de la Política de Prevención. • Los elementos del SMS deben adecuarse a la naturaleza y el alcance de los riesgos que presenta la instalación peligrosa y tomar en cuenta los recursos que están disponibles. En el Cuadro de texto 12 aparece información adicional sobre los Sistemas de Gestión de la Seguridad en la página 129 y SG-1 (Guía sobre sistemas de gestión de la seguridad) en la página 165. Un enfoque que las industrias pueden usar para mejorar la seguridad en las instalaciones 29 peligrosas involucra el uso de procesos inherentemente más seguros. Más información sobre este enfoque se presenta en el Cuadro de texto 13 (Prevención de accidentes con productos químicos: seguridad inherente) en la página 130. Dificultades Se desarrolla un SMS en el papel, pero en la práctica no lo implementan. Los consultores externos recomiendan elementos estándar del SMS a las empresas que quizás no sean los adecuados para la situación específica (por ejemplo, el SMS quizás no sea proporcional a los riesgos o ni se adecue a la estructura de gestión existente del establecimiento). Es necesario reconocer que no existe algo así como una única fórmula que sea la adecuada para todos los sistemas de gestión de la seguridad. No poder involucrar adecuadamente a los trabajadores en el desarrollo del SMS. Sin la 30 participación de los trabajadores, es difícil esperar que el SMS funcione eficazmente. Extractos de instrumentos internacionales CONVENIO DE LA OIT Artículo 4 1. Todo Miembro deberá formular, adoptar y revisar periódicamente, habida cuenta de la legislación, las condiciones y la práctica nacionales, y en consulta con las organizaciones más representativas de empleadores y de trabajadores y con otras partes interesadas que pudieran ser afectadas, una política nacional coherente relativa a la protección de los trabajadores, la población y el medio ambiente, contra los riesgos de accidentes mayores. 2. Esta política deberá ser aplicada mediante disposiciones preventivas y de protección para las instalaciones expuestas a riesgos de accidentes mayores y, cuando sea posible, deberá promover la utilización de las mejores tecnologías de seguridad disponibles. DIRECTIVA SEVESO II Artículo 7: Política de prevención de accidentes graves 1. Los Estados miembros velarán por que los industriales estén obligados a redactar un 29 La seguridad inherente es la selección de procesos, diseños y materiales con la intención de reducir el riesgo de accidentes. Entre los métodos para mejorar la seguridad inherente se encuentra la reducción del inventario de productos químicos peligrosos o los procesos de diseño para que puedan tolerar mejor los errores humanos. 30 La Sección 3.2 de las Directrices de la OIT sobre seguridad ocupacional y el sistema de gestión de salud (ILO-OSH 2001) resalta este tema. 126 documento en el que se defina su política de prevención de accidentes graves y deberán asegurarse de su correcta aplicación. La política de prevención de accidentes graves puesta en práctica por los industriales tendrá por objeto garantizar un alto grado de protección de las personas y del medio ambiente a través de medios, estructuras y sistemas de gestión apropiados. 1ª. En el caso de los establecimientos que entren posteriormente en el ámbito de aplicación de la presente Directiva, el documento a que se refiere el apartado 1 se elaborará sin demora, y en todo caso en el plazo de tres meses a partir de la fecha en que la presente Directiva se aplique al establecimiento concreto, tal como se establece en el párrafo primero del apartado 1 del artículo 2. 2. El documento deberá tener en cuenta los principios mencionados en el Anexo III y se mantendrá a la disposición de las autoridades competentes con vistas en particular a la aplicación del apartado 2 del artículo 5 y del artículo 18. 3. El presente artículo no se aplicará a los establecimientos a que se refiere el artículo 9. Artículo 9: Informe de seguridad 1. Los Estados miembros velarán por que los industriales estén obligados a presentar un informe de seguridad que tenga por objeto: a. demostrar que se ha establecido una política de prevención de accidentes graves y un sistema de gestión de la seguridad para su aplicación de conformidad con los elementos que figuran en el Anexo III; Anexo III: Principios contemplados en el artículo 7 e información contemplada en el artículo 9 relativos al sistema de gestión y a la organización del establecimiento con miras a la prevención de accidentes graves Para la aplicación de la política de prevención de accidentes graves y del sistema de gestión de la seguridad elaborados por el industrial se tendrán en cuenta los elementos que figuran a continuación. Las prescripciones recogidas en el documento contemplado en el artículo 7 deberían ser proporcionales al riesgo de accidente grave que presente el establecimiento: a. La política de prevención de accidentes graves debería plasmarse por escrito y abarcar los objetivos y principios de actuación generales establecidos por el industrial en relación con el control de los riesgos de accidente grave. b. El sistema de gestión de la seguridad debería integrar la parte del sistema de gestión general que incluye la estructura organizativa, las responsabilidades, las prácticas, los procedimientos y los recursos que permiten definir y aplicar la política de prevención de accidentes graves. c. Se abordarán los siguientes puntos en el marco del sistema de gestión de la seguridad: i. la organización y el personal: las funciones y responsabilidades del personal asociado a la gestión de los riesgos de accidentes graves en todos los niveles de organización. La identificación de las necesidades en materia de formación de dicho personal y la organización de dicha formación. La participación de los empleados y del personal subcontratado que trabajen en el establecimiento. ii. la identificación y la evaluación de los riesgos de accidente grave: la adopción y la aplicación de procedimientos para la identificación sistemática de los riesgos de 127 accidentes graves que se puedan producir en caso de funcionamiento normal o anormal, así como la evaluación de su probabilidad y su gravedad; iii. el control de explotación; la adopción y la aplicación de procedimientos e instrucciones para el funcionamiento en condiciones seguras, también por lo que respecta al mantenimiento de las instalaciones, a los procedimientos, al equipo y a las paradas temporales; iv. la gestión de las modificaciones; la adopción y aplicación de procedimientos para la planificación de las modificaciones que deban efectuarse en las instalaciones o zonas de almacenamiento existentes o para el diseño de una nueva instalación, procedimiento o zona de almacenamiento; v. la planificación de las situaciones de emergencia: la adopción y aplicación de procedimientos destinados a identificar las emergencias previsibles merced a un análisis sistemático y a elaborar, experimentar y revisar los planes de emergencia para poder hacer frente a tales situaciones de emergencia y a proporcionar la formación ad hoc del personal afectado. Esta formación afectará a todo el personal que trabaje en el establecimiento, incluido el personal subcontratado pertinente. vi. la vigilancia de los resultados: la adopción y la aplicación de procedimientos encaminados a la evaluación permanente del cumplimiento de los objetivos fijados por el industrial en el marco de la política de prevención de accidentes graves y del sistema de gestión de la seguridad, y la instauración de mecanismos de investigación y de corrección en caso de incumplimiento. Los procedimientos deberían abarcar el sistema de notificación de accidentes graves o de accidentes evitados por escaso margen, en especial cuando se hayan producido fallos de las medidas de protección, las pesquisas realizadas al respecto y la actuación consecutiva, inspirándose en las experiencias del pasado; vii. el control y el análisis: la adopción y aplicación de procedimientos para la evaluación periódica sistemática de la política de prevención de accidentes graves y de la eficacia y adecuación del sistema de gestión de la seguridad; el análisis documentado por la dirección de los resultados de la política aplicada, del sistema de gestión de la seguridad y de su actualización. LEGISLACIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS Bajo el Programa del Plan de Gestión de Riesgos (PGR) de la Ley de Aire Limpio, se les pedirá a las instalaciones con procesos que tienen una sustancia regulada sobre una cantidad umbral a que lleven a cabo los siguientes elementos del programa de prevención para la planificación de la gestión de riesgo: • Examen y documentación de los químicos, los procesos y el equipo de la planta. • Análisis detallado del peligro del proceso para identificar los peligros, evaluar la probabilidad de las emisiones accidentales y evaluar las consecuencias de dichas emisiones. • Desarrollo de los procesos de funcionamiento estándar. • Capacitación de empleados sobre los procedimientos. 128 • Implementación de un programa de mantenimiento preventivo. • Gestión de los cambios en operación que pueden impactar la seguridad del sistema. • Examen sobre el inicio de un proceso y antes del inicio luego de la modificación de un proceso. • Investigación y documentación de accidentes. • Auditorías de seguridad periódicas para garantizar que se están siguiendo los procedimientos y las prácticas. Cuadro de texto 12 SISTEMAS DE GESTIÓN DE SEGURIDAD El Sistema de Gestión de la Seguridad (SMS) debería integrar la estructura organizativa, las prácticas, los procedimientos y los recursos que permiten implementar la Política de seguridad corporativa y debería incluir como mínimo lo siguiente: La estructura organizativa (incluso funciones, responsabilidades, capacitación, educación, calificaciones e interrelaciones de los individuos que participen en trabajos que afectan la seguridad). La identificación y la evaluación de peligros (mediante el desarrollo y la implementación de procedimientos formales para la identificación sistemática y la evaluación de los peligros – incluso la probabilidad de que ocurran y su gravedad – que surjan del funcionamiento normal y anormal, donde se incluyan los peligros originados por el manejo, la producción, el transporte, el almacenamiento o la disposición de sustancias peligrosas). El control operativo y de los establecimientos (que trate sobre el diseño y la construcción, así como los procedimientos para el funcionamiento en condiciones seguras, incluso el mantenimiento de la planta, los procesos, los equipos y las interrupciones temporarias). La gestión del cambio (planificación y control de cambios en: la organización; el personal; la planta; los procesos, incluso los análisis previos a la puesta en marcha, el mantenimiento y el desmantelamiento; los materiales; los equipos; los procedimientos; el software; el diseño y las circunstancias externas que puedan afectar la seguridad). La planificación para casos de emergencia (relativa al desarrollo, la adopción, la implementación, el estudio, la comprobación y, cuando corresponda, la revisión y la actualización de los planes de emergencia). El monitoreo de los resultados (que implica la evaluación continua del cumplimiento de la Política de Seguridad y el sistema de gestión de la seguridad, así como mecanismos para tomar medidas correctivas en caso de incumplimiento). El control y el análisis (que abordan la evaluación periódica sistemática de la Política de Seguridad y de la eficacia y la adecuación del sistema de gestión de la seguridad). La investigación de accidentes y el aprendizaje a partir de la experiencia. Esto se basa en los Principios rectores de la OCDE sobre la prevención, la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos, 2ª edición, 2003. 129 Cuadro de texto 13 PREVENCIÓN DE ACCIDENTES CON SUSTANCIAS QUÍMICAS: SEGURIDAD INHERENTE Algunos países le solicitan o animan a las empresas a usar tecnología “inherentemente segura” y / o tecnología de punta para reducir el riesgo de accidentes químicos. Esto se refiere a la selección cuidadosa del proceso, junto con el buen diseño de la instalación, a fin de, en efecto, reducir ciertos peligros; minimizar los efectos de los errores humanos, y tolerar mejor los errores que pudieran darse. Esto no significa que no haya un riesgo residual, sino más bien que las decisiones de diseño se toman con la intención de reducir el riesgo. Para cumplir con el objetivo de una tecnología inherentemente segura, se puede emplear una serie de conceptos, al punto que puedan disminuir el riesgo general. Éstas incluyen: • la reducción de los inventarios de sustancias peligrosas; • minimizar, hasta donde se pueda, el uso de sustancias peligrosas; • reemplazar los materiales peligrosos por materiales menos peligrosos; • usar los materiales peligrosos o procesos de forma tal que limite su potencial de peligro (por ejemplo, mediante sistemas cerrados, usando sustancias menos reactivas); • hacer que la planta y el proceso sean más sencillos de diseñar, construir y operar; • moderar las condiciones del proceso (por ejemplo, niveles de presión); • cambiar de sistemas complejos a sistemas más sencillos; • adaptar la naturaleza y el alcance del transporte dentro de, hacia y desde la instalación; • asegurar el uso de sistemas de seguridad redundantes; y • minimizar la producción de desechos peligrosos. Es importante considerar todas las consecuencias de las decisiones de diseño. Por ejemplo, mientras que la reducción de los inventarios puede reducir el riesgo de accidentes en el sitio, puede aumentar el riesgo de accidentes de transporte si hubiera la necesidad de aumentar el número de entregas por carretera o ferrocarril de la sustancia peligrosa. Esto se basa en la publicación Principios rectores de la OCDE sobre la prevención, la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos, 2ª edición, 2003. 130 e. Identificación del peligro y evaluación del riesgo Objetivo Garantizar que en todas las instalaciones peligrosas se realicen y se mantengan actualizadas tanto la identificación adecuada de los peligros como la evaluación de los riesgos. Por qué La gestión de la seguridad comienza con la identificación de los peligros y la evaluación de los riesgos en las instalaciones peligrosas. Esto constituye la base para el desarrollo de una política de prevención y un plan de preparación. La evaluación de los riesgos es una herramienta que se utiliza para comprender los riesgos e informar la selección y el orden de prioridad de las estrategias de prevención y control. Las evaluaciones de riesgos permiten clasificar los riesgos en base a una escala relativa y pueden evaluarse opciones para maximizar la seguridad química. Cómo Brindar orientación a las empresas sobre cómo llevar a cabo las evaluaciones de riesgos. Exigir a las empresas sujetas al programa para casos de accidentes con productos químicos que lleven a cabo identificaciones de peligros y evaluaciones de los riesgos. Existen varios enfoques distintos para llevar a cabo la identificación de los peligros y la evaluación de los riesgos, y cada empresa debe elegir el enfoque más apropiado para sus circunstancias. Las empresas deben desarrollar y adoptar procedimientos para la identificación de peligros y la evaluación de riesgos, en vista de las propiedades y las cantidades de sustancias presentes en la instalación, junto con los procesos involucrados. - Los procedimientos deben ser formales, sistemáticos y deben plasmarse por escrito. - La evaluación de los riesgos debe tomar en consideración todas las consecuencias posibles de los accidentes (incluso los efectos sobre la salud y el medio ambiente). Las evaluaciones de los riesgos deben analizarse y revisarse periódicamente y cada vez que se introduzca un cambio significativo en la instalación (por ejemplo, cambios en la tecnología o la información, un incidente), a fin de garantizar que la información refleje la situación real. Las empresas deben esforzarse por alcanzar la transparencia en el proceso de evaluación e incluir a especialistas, empleados y otros actores. En la parte SG-2 (Guía sobre evaluación de riesgo) en la página 171 aparece más información. Dificultades No usar procedimientos adecuados, lo cual se traduce en que la información sobre la que se basan las actividades de prevención y preparación sea insuficiente o imprecisa. No mantener al día la identificación de los peligros y la evaluación de los riesgos, a fin de que reflejen la situación real de la instalación peligrosa. 131 Extractos de instrumentos internacionales CONVENIO DE LA OIT Artículo 9 Respecto de cada instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores, los empleadores deberán establecer y mantener un sistema documentado de prevención de riesgos de accidentes mayores en el que se prevean: a. la identificación y el análisis de los peligros y la evaluación de los riesgos, teniendo en cuenta las posibles interacciones entre sustancias. CONVENIO DE LA CEPE/ONU Artículo 4: Identificación, consulta y dictamen 1. Con el fin de tomar medidas preventivas y establecer las de preparación, la Parte de origen tomará las disposiciones oportunas para identificar las actividades peligrosas que se desarrollen bajo su jurisdicción y para conseguir que a las Partes afectadas se les notifique cualquier actividad de este tipo propuesta o existente. 2. A propuesta de cualquiera de ellas, las Partes interesadas iniciarán conversaciones sobre la identificación de las actividades peligrosas que, razonablemente, puedan tener efectos transfronterizos. Si las Partes interesadas no se ponen de acuerdo sobre si una de esas actividades es peligrosa, cualquiera de ellas podrá someter esta cuestión al dictamen de una comisión de investigación de conformidad con lo dispuesto en el Anexo II al presente Convenio, a menos que las Partes interesadas acuerden otro método para resolver la cuestión. 3. Por lo que respecta a las actividades peligrosas, propuestas o existentes, las partes aplicarán los procedimientos expresados en el anexo III al presente Convenio. 4. Cuando una actividad peligrosa sea objeto de una evaluación de impacto medioambiental de conformidad con el Convenio sobre Evaluación del Impacto Medioambiental en un contexto transfronterizo y esa evaluación comprenda una valoración de los efectos transfronterizos de los accidentes industriales causados por una actividad peligrosas que se ejerza de conformidad con lo dispuesto en el presente Convenio, la decisión definitiva adoptada a efectos del Convenio sobre Evaluación del Impacto Medioambiental en un contexto transfronterizo se ajustará a las condiciones exigidas por el presente Convenio. 132 DIRECTIVA SEVESO II Anexo II: Datos e información mínimos que deben tenerse en cuenta en el informe de seguridad mencionado en el artículo 9 ... IV. Identificación y análisis de los riesgos de accidente y medios preventivos a. descripción detallada de las situaciones en que pueden presentarse los posibles accidentes y en qué condiciones se pueden producir, incluido el resumen de los acontecimientos que puedan desempeñar algún papel en la activación de cada una de las situaciones, ya sean las causes de origen interno o externo a la instalación; b. evaluación de la extensión y la gravedad de las consecuencias de los accidentes graves que puedan producirse; c. descripción de los parámetros técnicos y de los equipos instalados para la seguridad de las instalaciones. Anexo III: Principios contemplados en el artículo 7 e información contemplada en el artículo 9 relativos al sistema de gestión y a la organización del establecimiento con miras a la prevención de accidentes graves ... c. se abordarán los siguientes puntos en el marco del sistema de gestión de la seguridad: ... ii. identificación y la evaluación de los riesgos de accidente grave – la adopción y la aplicación de procedimientos para la identificación sistemática de los riesgos de accidentes graves que se puedan producir en caso de funcionamiento normal o anormal, así como la evaluación de su probabilidad y su gravedad. LEGISLACIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS De conformidad con el Programa del Plan de Gestión de Riesgo, se requiere que las instalaciones concluyan una evaluación de riesgo. La evaluación de riesgo consiste de dos componentes: (a) Un historial de cinco años de accidentes graves que involucra las sustancias reguladas. Cada instalación cubierta debe proporcionar información detallada sobre todos los accidentes graves que sucedieron en los cinco años anteriores y ocasionaron impactos específicos, ya sea en el lugar o en la comunidad vecina. (b) Descripciones de un escenario de derrame accidental potencial o más de uno, que involucre la sustancia regulada. Cada instalación debe analizar las consecuencias posibles fuera del sitio de un derrame (catastrófico) en el peor de los casos. 133 La Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos ha definido los parámetros de un escenario en el peor de los casos (tales como condiciones atmosféricas, efecto último del impacto ambiental y criterios de emisión) para este análisis. Además, en caso de que el escenario en el peor de los casos pudiera impactar al público, se deben examinar una o más emisiones alternativas que tienen más probabilidad de ocurrir. Para cada escenario de emisión, la instalación debe calcular la distancia mayor desde la instalación hasta un punto más allá del cual no se anticipan efectos agudos graves. La instalación también debe identificar las poblaciones y los ambientes potencialmente afectados. f. Informes de seguridad Objetivo Que los propietarios/operadores preparen informes que brinden una comprensión profunda sobre la reducción de los riesgos y el mejoramiento de la eficiencia y demuestran a las autoridades competentes que los riesgos presentados por sus instalaciones han sido evaluados sistemáticamente y que se han tomado las medidas adecuadas para reducir los riesgos y responder y mitigar los efectos causados por cualquier accidente. Por qué Los informes de seguridad pueden ser un elemento muy importante de cualquier programa para casos de accidentes con productos químicos. La elaboración de un informe de seguridad brinda al propietario/operador y a los empleados una importante comprensión de la instalación para identificar las oportunidades de mejorar la seguridad y funcionar de manera más eficaz. Preparar una identificación de los peligros y una evaluación de los riesgos sirve de base para determinar el desempeño, comprender si las medidas de seguridad funcionan como se esperaba y saber si la seguridad mejora o empeora con el paso del tiempo. Mediante la revisión de los informes de seguridad, las autoridades obtienen: apreciaciones o comprensión profunda para identificar las áreas prioritarias para las actividades de las autoridades; una base para establecer el programa de inspección; una comprensión acerca de qué medidas de cumplimiento probablemente haya que tomar; información relacionada con el riesgo que es necesaria para la planificación de uso del suelo; información que se puede utilizar para complementar el inventario de las instalaciones peligrosas; e importantes aportes para el proceso de planificación para situaciones de emergencia – tanto dentro como fuera del sitio–, que hacen posible que los planes de emergencia sean realistas. 134 Cómo Decidir qué instalaciones se encuentran sujetas a los requisitos de presentación de informes de seguridad. Es importante que esté claro el grupo objetivo de este requisito. 31 Especificar qué se debe incluir en el informe. Como mínimo, normalmente se requiere que el propietario/operador demuestre que la instalación ha realizado lo siguiente: identificado y evaluado los peligros/riesgos en la instalación; tomado medidas para prevenir posibles accidentes y limitar las consecuencias en caso de que ocurra un accidente; establecido una política de prevención de accidentes y un sistema de gestión de la seguridad; y demostrado que tienen plan interno de preparación adecuado. Decidir si debe solicitarse información diferente a las distintas instalaciones en función de cuál sea el nivel de peligro/riesgo de cada una mediante un sistema de niveles o individual. Establecer los requisitos en cuanto al plazo límite para la presentación de informes, incluso especificar cuándo será necesario elaborar actualizaciones (por ejemplo, periódicamente, cuando se identifiquen problemas, cuando se realicen modificaciones, etc.). Registrar y catalogar los informes de seguridad de manera sistemática. Brindar asesoramiento en cuanto a la elaboración de estos informes. Identificar a las autoridades responsables de recibir y analizar los informes. Establecer un proceso y criterios claros para el análisis de los informes de seguridad y brindar retroalimentación oportuna y precisa. Garantizar que exista una cantidad suficiente de personal competente para recolectar y analizar los informes que se presentan. Dificultades Es posible que exista la presunción de que una instalación funciona de manera segura por el simple hecho de que se ha presentado un informe de seguridad o un plan de gestión de riesgo. Informes de mala calidad. Es necesario tener cuidado en la elaboración del informe a fin de que éste brinde un panorama preciso y actualizado de la instalación y de sus operaciones. La calidad del informe es crítica; el sólo hecho de que un informe sea extenso y detallado no significa que sea de buena calidad. Informes no realistas. A menudo se utilizan asesores externos para elaborar los informes de seguridad (por razones pertinentes, entre las que se incluyen limitaciones en cuanto al tiempo y al personal). Es importante que los empleados de una instalación participen en la elaboración y el análisis del informe de seguridad para que el informe refleje de manera precisa la situación de la instalación y para que ellos aprendan de dicho informe. Falla en aprender de los informes de seguridad. Las autoridades también pueden contratar asesores externos para examinar y evaluar los informes si existe una cantidad limitada de personal interno. Si bien puede ser necesario utilizar asesores durante el proceso de análisis y evaluación, es necesario tener cuidado y asegurarse de que el personal de las autoridades se beneficie del proceso para aprender acerca de la seguridad de las instalaciones sujetas al programa para casos de accidentes con productos químicos. 31 Información adicional sobre los elementos típicos de los informes de seguridad aparecen en el Cuadro de texto 14 (Informes de seguridad) en la página 136. 135 Cuadro de texto 14 INFORMES DE SEGURIDAD Los informes de seguridad describen los peligros significativos de las sustancias químicas presentes en las instalaciones y demuestran que se han seguido los pasos adecuados para la gestión de dichos peligros y para la prevención de accidentes con sustancias químicas y la limitación de sus consecuencias. Los informes deben analizarse periódicamente y actualizarse, según corresponda. Normalmente, se requiere que los informes de seguridad incluyan una descripción de, o una referencia a documentos que traten sobre: • • • • • • • la instalación, que incluya su propósito, sus actividades, el diseño los peligros intrínsecos, las sustancias peligrosas, el personal, los servicios y el equipo técnico; la zona que rodea a la instalación, que incluya los ambientes sensibles, la población y las actividades de la zona (como las actividades comerciales, residenciales e industriales); la identificación de los peligros y la evaluación de riesgos de la instalación el plan de emergencia dentro del sitio, que incluye la relación con los planes fuera del sitio y la comunicación y coordinación con el personal encargado de dar respuesta ante emergencias; la política de seguridad corporativa; el sistema de gestión de la seguridad de la empresa; y los procedimientos para la presentación e informes internos de incidentes. Lo anterior se basa en los Principios rectores de la OCDE sobre la prevención, la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos, 2ª edición, 2003. Para obtener más guía sobre la preparación de informes de seguridad, véase el documento preparado por la Oficina de Riesgos de Accidentes Graves de la Comisión Europea: Guía para la preparación de un informe de seguridad a fin de cumplir con los requisitos de la Directiva Seveso II disponible en: http://mahb.jrc.ec.europa.eu/index.php?id=55. 136 Extractos de instrumentos internacionales CONVENIO DE LA OIT Artículo 9 Respecto a cada instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores, los empleadores deberán establecer y mantener un sistema documentado de prevención de riesgos de accidentes mayores en el que se prevean: a. la identificación y el estudio de los peligros y la evaluación de los riesgos, teniendo también en cuenta las posibles interacciones entre sustancias; b. las medidas técnicas que comprenden el diseño, los sistemas de seguridad, la construcción, la selección de sustancias químicas, el funcionamiento, el mantenimiento y la inspección sistemática de la instalación; c. las medidas de organización que comprendan la formación e instrucción del personal, el abastecimiento de equipos de protección destinados a garantizar su seguridad, una adecuada dotación de personal, los horarios de trabajo, la distribución de las responsabilidades y el control sobre los contratistas externos y los trabajadores temporales que intervengan dentro de la instalación; d. los planes y procedimientos de emergencia que comprendan: i. la preparación de planes y procedimientos de emergencia eficaces, con inclusión de procedimientos médicos de emergencia, para su aplicación in situ en caso de accidente mayor o de peligro de accidente mayor, la verificación y la evaluación periódica de su eficacia y su revisión cuando sea necesario; ii. el suministro de información sobre los accidentes posibles y sobre los planes de emergencia in situ a las autoridades y a los organismos encargados de establecer los planes y procedimientos de emergencia para proteger a la población y al medio ambiente en el exterior de la instalación; iii. todas las consultas necesarias con dichas autoridades y organismos; e. medidas destinadas a limitar las consecuencias de un accidente mayor; f. la consulta con los trabajadores y sus representantes; g. las disposiciones tendentes a mejorar el sistema, que comprendan medidas para la recopilación de información y para el análisis de accidentes y cuasi accidentes. La experiencia así adquirida deberá ser discutida con los trabajadores y sus representantes y deberá ser registrada, de conformidad con la legislación y la práctica nacional. Artículo 10 1. Los empleadores deberán redactar un informe de seguridad de acuerdo con las disposiciones del artículo 9. 2. El informe deberá redactarse: a. para las instalaciones ya existentes que estén expuestas a riesgos de peligros 137 mayores, dentro del plazo posterior a la notificación que prescriba la legislación nacional; b. para toda nueva instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores, antes de que se ponga en funcionamiento. Artículo 11 Los empleadores deberán revisar, actualizar y codiciar el informe de seguridad: a. en caso de una modificación que tenga una influencia significativa sobre el nivel de seguridad de la instalación o en los procedimientos de trabajo de la misma, o sobre las cantidades de sustancias peligrosas presentes; b. siempre que se justifiquen los conocimientos técnicos o en la evaluación de los peligros; c. en los intervalos prescritos por la legislación nacional; d. cuando así lo solicite la autoridad competente. Artículo 12 Los empleadores deberán transmitir o poner a la disposición de la autoridad competente los informes de seguridad a los que hace referencia en los artículos 10 y 11. CONVENIO DE LA CEPE/ONU Artículo 6: Prevención 1. Las Partes adoptarán las medidas oportunas para prevenir los accidentes industriales, incluidas las medidas destinadas a incitar a los explotadores a actuar con el fin de reducir el riesgo de tales accidentes. Entre esas medidas podrán figurar, entre otras, las mencionadas en el anexo V al presente Convenio. 2. Con respecto a cualquier actividad peligrosa, la Parte de origen exigirá al explotador que demuestre que está garantizada la seguridad en el desarrollo de la actividad peligrosa proporcionando informaciones tales como los detalles básicos del proceso, entre ellos, sin carácter limitativo, el análisis y la evaluación expresados en el anexo V al presente Convenio. Anexo IV: Medidas preventivas en aplicación con el artículo 6 Las siguientes medidas podrán ser aplicadas, según las leyes y prácticas nacionales, por las Partes, las autoridades competentes, los explotadores o mediante un empeño conjunto: 1. La fijación de objetivos generales o particulares en materia de seguridad; 2. La adopción de disposiciones legales o de directrices relativas a las medidas y normas de seguridad; 3. La identificación de las actividades peligrosas que exijan especiales medidas 138 preventivas, incluido un régimen de licencias o autorizaciones; 4. La evaluación de los análisis de riesgos o de los estudios de seguridad relativos a las actividades peligrosas y un plan de acción para la aplicación de las medidas necesarias; 5. Comunicación a las autoridades competentes de la información necesaria para evaluar los riesgos; 6. La aplicación de la tecnología más apropiada con el fin de prevenir los accidentes industriales y proteger a los seres humanos y al medio ambiente; 7. La impartición de la educación y formación adecuadas a todas las personas que participen en actividades peligrosas dentro del emplazamiento, tanto en condiciones normales como anormales, con el fin de prevenir accidentes industriales; 8. El establecimiento de estructuras y prácticas de gestión interna concebidas para aplicar y mantener efectivamente las normas de seguridad; 9. La supervisión y auditoría de las actividades peligrosas y la realización de inspecciones. Anexo V: Análisis y evaluación 1. El análisis y evaluación de la actividad peligrosa deberán realizarse con una amplitud y profundidad que variarán según la finalidad para la que se realicen. 2. En el siguiente cuadro se ilustran los elementos que deberán tenerse en cuenta en el análisis y evaluación a los efectos previstos en los correspondientes artículos: Propósito del análisis Temas de consideración Planificación de emergencia según el artículo 8 (1) Las cantidades y propiedades de las sustancias peligrosas presentes en el emplazamiento en virtud del artículo 8; (2) Breves escenarios descriptivos de una muestra representativa de los accidentes industriales que pueda provocar la actividad peligrosa, indicando la probabilidad de cada uno. (3) Respecto de cada escenario: a) La cantidad aproximada de la sustancia liberada. b) La amplitud y gravedad de las consecuencias resultantes, tanto para las personas como para el medio ambiente no humano, en condiciones favorables y desfavorables, incluida la amplitud de las zonas de riesgo resultantes. c) Los plazos dentro de los cuales el hecho desencadenante podría resultar en un accidente industrial. d) Cualquier acción que podría emprenderse para minimizar la probabilidad de agravación. (4) El tamaño y distribución de la población en los alrededores, incluida cualquier gran concentración de personas que puedan encontrarse en la zona de riesgo. (5) La edad, movilidad y vulnerabilidad de esa población. 139 Además de los anteriores puntos 1 a 5: Decisión sobre el emplazamiento según el artículo 7 Información al público según el artículo 9 Medidas preventivas según el artículo 6 (6) La gravedad del daño infligido a las personas y al medio ambiente, según la naturaleza y circunstancias del escape; (7) La distancia del lugar de la actividad peligrosa a la que, en caso de accidente industrial, puedan producirse razonablemente efectos novicios sobre personas y medio ambiente; (8) La misma información no sólo para la situación actual, sino también para otras que estén previstas o puedan razonablemente preverse para el futuro. Además de los anteriores puntos 1 a 4: (9) Las personas que puedan resultar afectadas por un accidente industrial. Además de los anteriores puntos 4 a 9, serán necesarios textos, más detallados de las descripciones y evaluaciones a que se refieren los puntos 1 a 3 con vistas a la adopción de medidas preventivas. Además de esas descripciones y evaluaciones, deberán tenerse en cuenta también los siguientes puntos: (10) Las condiciones y cantidades en que se manipulan las materias peligrosas. (11) Una lista de los escenarios para los tipos de accidentes industriales que tengan efectos graves, en los que se incluyan ejemplos de todas las variedades de magnitudes de incidentes y la posibilidad de efectos que puedan tener las actividades desarrolladas en las cercanías. (12) Respecto de cada escenario, una descripción de los acontecimientos que podrían desencadenar un accidente industrial y del encadenamiento de circunstancias que podrían conducir a su agravamiento. (13) Una evaluación, al menos en términos generales, de la probabilidad de que se produzca alguna de esas circunstancias, teniendo en cuenta las medidas previstas en el punto 14; (14) Una descripción de las medidas preventivas relativas tanto al material como a los procedimientos encaminados a minimizar la probabilidad de que se produzca cada una de esas circunstancias. (15) Una evaluación de los efectos que podrían tener las desviaciones de las condiciones normales de explotación, con las medidas consiguientes para interrumpir de forma segura la actividad peligrosa o cualquier parte de ella en una situación de emergencia, así como las necesidades de formación de personal para garantizar la identificación temprana de las desviaciones potencialmente graves y la adopción de medidas apropiadas. (16) Una evaluación de la medida en que las modificaciones, los trabajos de reparación y de mantenimiento que afecten a la actividad peligrosa podrían hacer peligrar las medidas de control, y las medidas consiguientes para garantizar el mantenimiento de ese control. 140 DIRECTIVA SEVESO II Artículo 9: Informe de seguridad 1. Los Estados miembros velarán por que los industriales estén obligados a presentar un informe de seguridad que tenga por objeto: a. demostrar que se ha establecido una política de prevención de accidentes graves y del sistema de gestión de la seguridad para su aplicación de conformidad con los elementos que figuran en el Anexo III; b. demostrar que se han identificado los peligros de accidente grave y que se han tomado las medidas necesarias para prevenirlos y para limitar sus consecuencias para las personas y el medio ambiente; c. demostrar que el diseño, la construcción, la explotación y el mantenimiento de toda instalación, zona de almacenamiento, equipos e infraestructura ligados a su funcionamiento y que estén relacionados con el peligro de accidente grave en el establecimiento, presentan una seguridad y fiabilidad suficientes; d. demonstrar que se han elaborado planes de emergencia internos y facilitar los elementos que posibiliten la elaboración del plan externo a fin de tomar las medidas necesarias en caso de accidente grave; e. proporcionar información suficiente a las autoridades competentes para que puedan tomar decisiones en materia de implantación de nuevas actividades o de ejecución de obras en las proximidades de los establecimientos existentes. 2. El informe de seguridad contendrá, como mínimo, los datos y la información a que se refiere el Anexo II. Indicará expresamente los nombres de las organizaciones pertinentes que hayan participado en su elaboración. Incluirá, además, el inventario actualizado de las sustancias peligrosas existentes en el establecimiento. Los informes de seguridad, los informes parciales, o cualesquiera otros informes equivalentes establecidos en virtud de otra legislación podrán fusionarse en un informe de seguridad único a los efectos del presente Artículo, cuando dicha fusión permita evitar duplicaciones innecesarias de la información y la repetición de los trabajos realizados por el industrial o la autoridad competente, siempre que se cumplan todos los requisitos del presente artículo. 3. El informe de seguridad previsto en el apartado 1 deberá enviarse a la autoridad competente dentro de los siguientes plazos: para los nuevos establecimientos, en un plazo razonable antes del comienzo de la construcción o la explotación, para los establecimientos existentes que no estén aún sujetos a lo dispuesto en la Directiva 82/501/CEE, en el plazo de tres años a partir de la fecha mencionada en el apartado 1 del artículo 24, para los demás establecimientos, en un plazo de dos años a partir de la fecha mencionada en el apartado 1 del artículo 24, 141 inmediatamente, después de la revisión periódica a que se refiere el apartado 5. 4. Antes de que el industrial inicie la construcción o la explotación del establecimiento, así como en los casos mencionados en el segundo, tercero y cuarto guiones del apartado 3, la autoridad competente, en un plazo razonable tras la recepción del informe: comunicará al industrial sus conclusiones sobre el examen del informe de seguridad, en su caso, previa solicitud de información complementaria o prohibirá la puesta en servicio o la continuación de la actividad del establecimiento de que se trate, de conformidad con las facultades y procedimientos previstos en el artículo 17. 5. El informe de seguridad deberá ser revisado, y en su caso, actualizado periódicamente, del siguiente modo: por lo menos cada cinco años, en cualquier momento a iniciativa del operador o a petición de la autoridad competente, cuando esté justificado por nuevos datos o con el fin de tener en cuenta los nuevos conocimientos técnicos sobre seguridad derivados, por ejemplo, del análisis de los cuasi accidentes, así como los últimos avances en evaluación del riesgo. 6.a. Cuando se demuestre a satisfacción de la autoridad competente que determinadas sustancias existentes en el establecimiento o que una parte del propio establecimiento no pueden presentar peligro alguno de accidente grave, el Estado miembro, de conformidad con los criterios mencionados en la letra (b), podrá limitar la información exigida en los informes de seguridad a los puntos relativos a la prevención de los peligros residuales de accidente grave y a la limitación de sus consecuencias para las personas y el medio ambiente. b. La comisión establecerá, antes de que comience a aplicarse la presente Directiva, de conformidad con el procedimiento previsto en el artículo 16 de la Directiva 82/501/CEE, criterios armonizados para la decisión de la autoridad competente de un establecimiento no podrá representar un peligro de accidente grave con arreglo a la letra (a). La letra (a) no será de aplicación en tanto que no se hayan establecido dichos criterios. c. Los Estados miembros velarán por que la autoridad competente transmita a la Comisión una lista motivada de los establecimientos afectados. La Comisión transmitirá anualmente dichas listas al Comité contemplado en el artículo 22. Anexo II: Datos e información mínimos que deben tenerse en cuenta en el informe de seguridad mencionado en el artículo 9 I. Información sobre el sistema de gestión y la organización del establecimiento con vistas a la prevención de accidentes graves Dicha información deberá abarcar los elementos contenidos en el Anexo III. II. Presentación del entorno del establecimiento a. descripción del lugar y de su entorno, incluida la localización geográfica, las condiciones meteorológicas, geológicas, hidrográficas y, en su caso, sus antecedentes; b. descripción de las instalaciones y demás actividades que dentro del establecimiento puedan presentar peligro de accidente grave; 142 c. descripción de las zonas que puedan verse afectadas por un accidente grave. III. Descripción de la instalación a. descripción de las principales actividades y producciones de las partes del establecimiento que sean importantes desde el punto de vista de la seguridad, de las fuentes de riesgo de accidentes graves y de las condiciones en las que dichos accidentes graves se puedan producir, acompañada de una descripción de las medidas preventivas previstas; b. descripción de los procedimientos, especialmente los modos operativos; c. descripción de las sustancias peligrosas: 1. inventario de las sustancias peligrosas, incluido lo siguiente: – identificación de las sustancias peligrosas: designación química, número CAS, designación en la nomenclatura IUPAC; – cantidad máxima de la(s) sustancia(s) presente(s) o que pueda(n) estar presentes); 2. características físicas, químicas, toxicológicas e indicación de los peligros, tanto inmediatos como diferidos para el hombre o el medio ambiente; 3. comportamiento físico o químico en condiciones normales de utilización o accidentales previsibles. IV. Identificación y análisis de los riesgos de accidente y medios preventivos a. descripción detallada de las situaciones en que pueden presentarse los posibles accidentes y en qué condiciones se pueden producir, incluido el resumen de los acontecimientos que puedan desempeñar algún papel en la activación de cada una de las situaciones, ya sean las causas de origen interno o externo a la instalación; b. evaluación de la extensión y la gravedad de las consecuencias de los accidentes graves, incluidos planos, imágenes o, en su caso, descripciones equivalentes en los que aparezcan las zonas que pueden verse afectadas por tales accidentes ocurridos en el establecimiento, a reserva de lo dispuesto en el apartado 4 del artículo 13 y en el artículo 20; c. descripción de los parámetros técnicos y de los equipos instalados para la seguridad de las instalaciones. V. Medidas de protección y de intervención para limitar las consecuencias del accidente a. descripción de los equipos con que cuenta la instalación para limitar las consecuencias de los accidentes graves; b. organización de la vigilancia y de la intervención; c. descripción de los medios internos o externos que puedan movilizarse; d. síntesis de los elementos descritos en las letras A, B y C necesarios para constituir el 143 plan de emergencia interno previsto en el artículo 11. Anexo III: Principios contemplados en el artículo 7 e información contemplada en el artículo 9 relativos al sistema de gestión y a la organización del establecimiento con miras a la prevención de accidentes graves Para la aplicación de la política de prevención de accidentes graves y del sistema de gestión de la seguridad elaborados por el industrial se tendrán en cuenta los elementos que figuran a continuación. Las prescripciones recogidas en el documento contemplado en el artículo 7 deberían ser proporcionales al riesgo de accidente grave que presente el establecimiento: a. la política de prevención de accidentes graves debería plasmarse por escrito y abarcar los objetivos y principios de actuación generales establecidos por el industrial en relación con el control de los riesgos de accidente grave. b. El sistema de gestión de la seguridad debería integrar la parte del sistema de gestión general que incluye la estructura organizativa, las responsabilidades, las prácticas, los procedimientos y los recursos que permiten definir y aplicar la política de prevención de accidentes graves. c. Se abordarán los siguientes puntos en el marco del sistema de gestión de la seguridad: i. la organización y el personal: las funciones y responsabilidades del personal asociado a la gestión de los riesgos de accidentes graves en todos los niveles de organización. La identificación de las necesidades en materia de formación de dicho personal y la organización de dicha formación. La participación de los empleados y del personal subcontratado que trabajen en el establecimiento. ii. la identificación y la evaluación de los riesgos de accidente grave: la adopción y la aplicación de procedimientos para la identificación sistemática de los riesgos de accidentes graves que se puedan producir en caso de funcionamiento normal o anormal, así como la evaluación de su probabilidad y su gravedad; iii. el control de explotación; la adopción y la aplicación de procedimientos e instrucciones para el funcionamiento en condiciones seguras, también por lo que respecta al mantenimiento de las instalaciones, a los procedimientos, al equipo y a las paradas temporales; iv. la gestión de las modificaciones; la adopción y aplicación de procedimientos para la planificación de las modificaciones que deban efectuarse en las instalaciones o zonas de almacenamiento existentes o para el diseño de una nueva instalación, procedimiento o zona de almacenamiento; v. la planificación de las situaciones de emergencia: la adopción y aplicación de procedimientos destinados a identificar las emergencias previsibles merced a un análisis sistemático y a elaborar, experimentar y revisar los planes de emergencia para poder hacer frente a tales situaciones de emergencia y a proporcionar la formación ad hoc del personal afectado. Esta formación afectará a todo el personal que trabaje en el establecimiento, incluido el personal subcontratado pertinente. vi. la vigilancia de los resultados: la adopción y la aplicación de procedimientos encaminados a la evaluación permanente del cumplimiento de los objetivos fijados por el industrial en el marco de la política de prevención de accidentes graves y del sistema de gestión de la seguridad, y la instauración de mecanismos de investigación y de corrección en caso de incumplimiento. Los procedimientos deberían abarcar el sistema 144 de notificación de accidentes graves o de accidentes evitados por escaso margen, en especial cuando se hayan producido fallos de las medidas de protección, las pesquisas realizadas al respecto y la actuación consecutiva, inspirándose en las experiencias del pasado; vii. el control y el análisis: la adopción y aplicación de procedimientos para la evaluación periódica sistemática de la política de prevención de accidentes graves y de la eficacia y adecuación del sistema de gestión de la seguridad; el análisis documentado por la dirección de los resultados de la política aplicada, del sistema de gestión de la seguridad y de su actualización. LEGISLACIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS Tomando como base el artículo 112 (r) de la Ley de Aire Limpio, las disposiciones sobre la Prevención de accidentes químicos exigen que los establecimientos que producen, manejan, procesan, distribuyen o almacenan determinados productos químicos desarrollen un Programa de Gestión de Riesgos, elaboren un Plan de Gestión de Riesgos (PGR) y presenten el PGR a la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA). La norma define tres niveles del Programa, sobre la base del potencial relativo de impactos públicos que tienen los procesos y el nivel de esfuerzo necesario para prevenir accidentes. Para cada nivel del Programa, la norma define los requisitos que reflejan el nivel de riesgo y esfuerzo asociado con los procesos en ese nivel. Los niveles del Programa son los siguientes: Programa 1: los procesos que no afectarían al público en caso de que ocurra uno de los peores casos de liberación o escape (según consta en la Parte 68, los procesos “sin receptores públicos dentro de la distancia hasta un objetivo desde uno de los peores casos de liberación o escape”) y sin accidentes con consecuencias externas específicas dentro de los últimos cinco años son elegibles para el Programa 1, que impone requisitos limitados de evaluación de peligros y requisitos mínimos de respuesta para casos de emergencia y prevención. Programa 2: los procesos no elegibles para el Programa 1 ni sujetos al Programa 3 se ubican en el Programa 2, que impone requisitos relativos a un programa de prevención racionalizado, así como otros requisitos adicionales de respuesta ante emergencias, gestiones de riesgos y evaluaciones de peligros. Programa 3: los procesos no elegibles para el Programa 1: y que estén o bien sujetos a la norma de Gestión de la Seguridad de los Procesos (PSM) de la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA) de los Estados Unidos, de conformidad con los programas federales o estaduales de la OSHA, o bien clasificados en uno de los diez códigos especificados del Sistema de Clasificación Industrial de Norteamérica (NAICS), se ubican en el Programa 3, que impone la norma de Gestión de la Seguridad de los Procesos (PSM) de la OSHA como el programa de prevención y otros requisitos adicionales de respuesta ante emergencias, gestiones de riesgos y evaluaciones de peligros. Orientación acerca de cómo determinar el nivel de programa de cada uno de los procesos cubiertos en su establecimiento. Cualquier establecimiento que tenga uno o más de los procesos cubiertos debe incluir en su Plan de Gestión de Riesgos (PGR) lo siguiente: un resumen ejecutivo (§ 68.155); la inscripción del establecimiento (§ 68.160); la declaración de certificación (§ 68.185); un análisis del caso más desfavorable para cada proceso del Programa 1; por lo menos un análisis del caso más desfavorable para cubrir todos los procesos de los Programas 2 y 3 que comprendan sustancias tóxicas reguladas; por lo menos un análisis del caso más 145 desfavorable para cubrir todos los procesos de los Programas 2 y 3 que comprendan sustancias inflamables reguladas (§ 68.165(a)); el antecedente quinquenal de accidentes para cada proceso (§ 68.168); y la información relativa a la respuesta ante emergencias del establecimiento (§ 68.180). Cualquier establecimiento con al menos uno de sus procesos cubiertos en el Programa 2 o 3 también deben incluir: Al menos un análisis de sucesos de liberación alternativo para cada sustancia tóxica regulada incluida en los procesos de los Programas 2 o 3 y al menos un análisis de sucesos de liberación alternativo para todas las sustancias inflamables reguladas incluidas en los procesos de los Programas 2 o 3 (§ 68.165(b)); un resumen del programa de prevención para cada proceso del Programa 2 (§ 68.170); y un resumen del programa de prevención para cada proceso del Programa 3 (§ 68.175). Los Planes de Gestión de Riesgos son presentados cada cinco años a las autoridades estadounidenses o cuando ocurren cambios significativos en la instalación (por ejemplo, cuando sucede un accidente, etc.). 146 g. Planificación de la preparación Objetivo Que todas las empresas cuenten con una planificación adecuada de las tareas de preparación dentro del sitio a fin de paliar cualquier efecto adverso de los accidentes con productos químicos dentro del sitio y de cooperar con las autoridades en sus esfuerzos de planificación fuera del sitio. Por qué No es posible eliminar por completo la posibilidad de que ocurran accidentes químicos en instalaciones peligrosas y, por consiguiente, es importante estar preparado por si sucede cualquier accidente a fin de minimizar los efectos adversos. Los propietarios/operadores son responsables de la planificación de las tareas de preparación para casos accidentes que no provoquen impactos fuera de los límites de la instalación (planes dentro del sitio) y de brindar la información que las autoridades necesiten para desarrollar planes fuera del sitio. En la parte (d) (Planificación de la preparación) en la página 103, Sección C3 del Capítulo 3 y en la SG-3 (Guía sobre planificación de emergencias) en la página 178, aparece más información. Cómo Los propietarios/operadores de instalaciones peligrosas deben desarrollar planes dentro del sitio, a partir de la identificación y la evaluación de los riesgos potenciales y la elaboración de escenarios de accidentes posibles. – La planificación para situaciones de emergencia debe reflejar una evaluación realista de las aptitudes, el equipo y otros recursos existentes que estén disponibles para los esfuerzos de respuesta y una evaluación de las aptitudes, el equipo y otros recursos que se necesiten, a partir de una serie de escenarios posibles. – La planificación para situaciones de emergencia debe tomar en consideración los factores posibles de complicación que podrían dificultar las tareas de respuesta (como, por ejemplo, condiciones meteorológicas extremas, desastres naturales, pérdida de suministro de agua o electricidad, problemas con los sistemas de comunicación y transporte, efectos dominó). – En la planificación para situaciones de emergencia, se deben considerar respuestas flexibles para una variedad de situaciones posibles (desde pequeños accidentes hasta las situaciones más adversas). – El plan de emergencias debe identificar las funciones y las responsabilidades de todas las partes involucradas y describir la cadena de mandos y las líneas de comunicación. Los propietarios/operadores deben brindar a las autoridades públicas la información que necesitan para desarrollar planes fuera del sitio. Se debe garantizar la integración y la coordinación de los planes dentro y fuera del sitio. Los planes deben probarse y examinarse periódicamente a fin de mantenerlos actualizados. 147 Dificultades La creación de planes de emergencia que se guardan en un cajón y no se toman en consideración hasta que ocurre una situación de emergencia. Planes de emergencia anacrónicos debido a cambios en los riesgos, los recursos o el personal involucrados. Es importante mantener actualizados los planes de emergencia, tomando en consideración los acontecimientos (nuevos riesgos, cambios en los recursos, cambios poblacionales, etc.), así como la experiencia obtenida en las tareas de respuesta y la realización de pruebas. Las personas encargadas de dar respuesta no están capacitadas adecuadamente: es necesario que exista una revisión, capacitación y ejercitación periódicas para que todas las personas involucradas conozcan cuáles son sus responsabilidades, no olviden ni se tornen displicentes. Planes de emergencia que presenten una evaluación ideal, más que realista, de los riesgos y de los recursos (incluso de los recursos humanos). El no tomar en consideración el hecho de que esos accidentes pueden ocurrir durante horarios no laborales y en condiciones meteorológicas desfavorables. Asimismo, los accidentes pueden destruir los centros de comunicación y otros establecimientos involucrados en las tareas de respuesta. Falta de conocimiento acerca de cuándo pedir ayuda externa para las tareas de respuesta. Extractos de instrumentos internacionales CONVENIO DE LA OIT ARREGLOS A NIVEL DE LA INSTALACIÓN Artículo 9 Respecto a cada instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores, los empleadores deberán establecer y mantener un sistema documentado de prevención de riesgos de accidentes mayores en el que se prevean, entro otras cosas: ... (d) planes y procedimientos de emergencia que comprendan: (i) la preparación de planes y procedimientos de emergencia eficaces, con inclusión de procedimientos médicos de emergencia, para su aplicación in situ en caso de accidente mayor o de peligro de accidente mayor, la verificación y evaluación periódica de su eficacia y su revisión cuando sea necesario; (ii) el suministro de información sobre los accidentes posibles y sobre los planes de emergencia in situ a las autoridades y a los organismos encargados de establecer los planes y procedimientos de emergencia para proteger a la población y al medio ambiente en el exterior de la instalación; (iii) todas las consultas necesarias con dichas autoridades y organismos; (e) medidas destinadas a limitar las consecuencias de un accidente mayor. 148 Artículo 15 Tomando en cuenta la información proporcionada por el empleador, la autoridad competente deberá velar por que se establezcan y actualicen a intervalos apropiados, y se coordinen con las autoridades y organismos interesados, los planes y procedimientos de emergencia que contengan disposiciones para proteger a la población y al medio ambiente fuera del emplazamiento en que se encuentre cada instalación expuesta a riesgos de accidentes mayores. CONVENIO DE LA CEPE/ONU Artículo 8: Preparativos para situaciones de emergencia 1. Las partes adoptarán las medidas apropiadas para establecer y mantener un sistema de preparativos de emergencia suficiente para hacer frente a los accidentes industriales. Las Partes se asegurarán de que se tomen medidas de preparación para paliar los efectos transfronterizos de dichos accidentes, siendo responsables los explotadores de las medidas en el interior del emplazamiento. Las medidas que podrán tomarse serán, entre otras, las mencionadas en el anexo VII al presente Convenio. En particular, las Partes interesadas se informarán recíprocamente de sus planes de emergencia. 2. La Parte de origen se encargará, por lo que respecta a las actividades peligrosas, de la elaboración y aplicación de los planes de emergencia para el interior del emplazamiento, incluidas las medidas adecuadas de respuesta y demás medidas para prevenir y minimizar los efectos transfronterizos. La Parte de origen proporcionará a las demás Partes interesadas los elementos con que cuenta para la elaboración de los planes de emergencia. 3. Cada Parte, por lo que respecta a las actividades peligrosas, se encargará de la elaboración y aplicación de planes de emergencia fuera del emplazamiento en los que figuren las medidas que deberán tomarse dentro de su territorio para prevenir y minimizar los efectos transfronterizos. Al elaborar estos planes se tendrán en cuenta las conclusiones del análisis y de la evaluación, en particular los elementos mencionados en los números (1) a (5) del apartado 2 del anexo V. Las Partes interesadas se esforzarán por hacer compatibles dichos planes. En su caso, se elaborarán planes conjuntos de emergencia para fuera del emplazamiento con el fin de facilitar la adopción de medidas de respuesta adecuadas. 4. Los planes de emergencia deberán ser revisados regularmente o, cuando las circunstancias así lo exijan, a la vista de la experiencia adquirida en afrontar situaciones de emergencia reales. DIRECTIVA SEVESO II Artículo 11: Planes de emergencia 1. Los Estados miembros velarán por que, en todos los establecimientos sujetos a las disposiciones del artículo 9: (a) el industrial elabore un plan de emergencia interno respecto de las medidas que deben tomarse en el interior del establecimiento: – para los nuevos establecimientos, antes de que se inicie su explotación; – para los establecimientos existentes que no estén aún sujetos a lo dispuesto en la Directiva 82/501/CEE, en el plazo de tres años a partir de la fecha mencionada en el apartado 1 del artículo 24; – para los demás establecimientos, en un plazo de dos años a partir de la fecha 149 mencionada en el apartado 1 del artículo 24; – para los establecimientos que entren posteriormente en el ámbito de aplicación de la presente Directiva, sin demora, y en todo caso un año después de la fecha en que la presente Directiva se aplique al establecimiento concreto, tal como se establece en el párrafo primero del apartado 1 del artículo 2. (b) el industrial proporcione a las autoridades competentes la información necesaria para que éstas puedan elaborar planes de emergencia externos en los siguientes plazos: – para los nuevos establecimientos, antes de que se inicie su explotación; – para los establecimientos existentes que no estén aún sujetos a lo dispuesto en la Directiva 82/501/CEE, en el plazo de tres años a partir de la fecha mencionada en el apartado 1 del artículo 24; – para los demás establecimientos, en un plazo de dos años a partir de la fecha mencionada en el apartado 1 del artículo 24; – para los establecimientos que entren posteriormente en el ámbito de aplicación de la presente Directiva, sin demora, y en todo caso un año después de la fecha en que la presente Directiva se aplique al establecimiento concreto, tal como se establece en el párrafo primero del apartado 1 del artículo 2. (c) las autoridades designadas a tal fin por los Estados miembros elaboren un plan de emergencia externo con respecto a las medidas que deben tomarse fuera del establecimiento. 2. Los planes de emergencia deberán establecerse con el fin de: – contener y controlar los incidentes de modo que sus efectos se reduzcan al mínimo, así como limitar los perjuicios para las personas, el medio ambiente y los bienes; – aplicar las medidas necesarias para proteger a las personas y al medio ambiente de los efectos de accidentes graves; – comunicar la información pertinente a la población y a los servicios o autoridades interesados de la zona; – prever el restablecimiento de las condiciones medioambientales y la limpieza del lugar tras un accidente grave. Los planes de emergencia contendrán la información que se especifica en el Anexo IV. 3. Sin perjuicio de las obligaciones de las autoridades competentes, los Estados miembros velarán por que los planes de emergencia internos previstos en la presente Directiva se elaboren consultando al personal que trabaje en el establecimiento, incluido el personal subcontratado a largo plazo afectado, y por que se consulte a la población sobre los planes de emergencia externos con ocasión de su elaboración o actualización. 4. Los Estados miembros instaurarán un sistema que garantice que los industriales y las autoridades designadas revisen, prueben y, en su caso, modifiquen y actualicen los planes de emergencia internos y externos, a intervalos apropiados que no deberán rebasar los tres años. La revisión tendrá en cuenta los cambios que se hayan producido en los establecimientos correspondientes, dentro de los servicios de emergencia, los nuevos conocimientos técnicos y los conocimientos sobre las medidas que deban tomarse en caso de accidente grave. 4ª. Por lo que respecta a los planes de emergencia externos, los Estados miembros deberían tener en cuenta la necesidad de facilitar una cooperación reforzada en materia de ayuda en el ámbito de la protección civil en caso de emergencias graves. 150 5. Los Estados miembros instaurarán un sistema que garantice la inmediata aplicación de los planes de emergencia por parte del industrial y, en su caso, por la autoridad competente, designada a tal efecto, siempre que: – se produzca un accidente grave, o – se produzca un hecho incontrolado que por su naturaleza permita razonablemente pensar que va a dar lugar a un accidente grave. 6. La autoridad competente podrá decidir, justificando su decisión y a la vista de la información contenida en el informe de seguridad, que las disposiciones del apartado 1 relativas a la obligación de establecer un plan de emergencia externa no se apliquen. Anexo IV: Datos e información que deberán incluirse en los planes de emergencia mencionados en el artículo 11 1. Planes de emergencia internos a. Nombres o cargos de las personas autorizadas para poner en marcha procedimientos de emergencia y persona responsable de aplicar y coordinar in situ las medidas destinadas a paliar los efectos del accidente. b. Nombre o cargo de la persona responsable de la coordinación con la autoridad responsable del plan de emergencia externo. c. En cada circunstancia o acontecimiento que pueda llegar a propiciar un accidente grave, descripción de las medidas que deberán adoptarse para controlar la circunstancia o acontecimiento y limitar sus consecuencias, incluida una descripción del equipo de seguridad y los recursos disponibles. d. Medidas para limitar los riesgos para la personas in situ, incluido el sistema de alerta y el comportamiento que se espera observen las personas una vez desencadenada. e. Medidas para alertar rápidamente del incidente a la autoridad responsable de poner en marcha el plan de emergencia externo, el tipo de información que deberá facilitarse de inmediato y medidas para facilitar información más detallada a medida que se disponga de la misma. f. Medidas de formación del personal en las tareas que se espera que cumplan y, en su caso, de coordinación con los servicios de emergencia exteriores. g. Medidas para prestar asistencia a las operaciones paliativas externas. 2. Planes de emergencia externos a. Nombres o cargos de las personas autorizadas a poner en marcha procedimientos de emergencia y de personas autorizadas a dirigir y coordinar las operaciones externas. b. Medidas para recibir una información rápida de los incidentes y procedimientos de alerta y movilización de ayuda. c. Medidas para coordinar los recursos necesarios para aplicar el plan de emergencia externa. d. Medidas para prestar asistencia en las operaciones paliativas in situ. e. Medidas para operaciones paliativas externas. f. Medidas para facilitar al público información específica sobre el accidente y el comportamiento que debe observar. g. Medidas para facilitar información a los servicios de emergencia de otros Estados miembros en el caso de que se produzca un accidente grave con posibles consecuencias más allá de las fronteras. 151 LEGISLACIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS De conformidad el Programa del Plan de Gestión de Riesgos (PGR) de la Ley de Aire Limpio, se requiere que las instalaciones desarrollen y apliquen un programa de respuesta de emergencia con el fin de proteger la salud pública y el ambiente. El programa de respuesta de emergencia debe incluir los siguientes elementos: 1. Un plan de respuesta de emergencia, que será mantenido en la fuente fija y contendrá al menos los siguientes elementos: i. Procedimientos para informar al público y a los organismos locales de respuesta de emergencias sobre derrames accidentales; ii. Documentación del debido tratamiento médico de primeros auxilios y de emergencia necesarios para tratar las exposiciones humanas accidentales; y iii. Procedimientos y medidas para respuesta de emergencias después del derrame accidental de una sustancia regulada; 2. Procedimientos para el uso de equipo de respuesta de emergencia y para su inspección, prueba y mantenimiento; 3. Capacitación de todos los empleados en los procedimientos relevantes; y 4. Procedimientos para analizar y actualizar, según corresponda, el plan de respuesta a emergencias para que refleje los cambios en la fuente fija y asegurarse que los empleados está informados de los cambios. Además, un plan por escrito que cumple con otros reglamentos de planes de contingencia/emergencia federal y que, entre otros temas, incluya los elementos dispuestos en el apartado (a) de esta sección, deberá satisfacer lo requisitos de esta sección si el propietario u operador también cumple con el apartado (c) de esta sección. Finalmente, el plan de respuesta de emergencia desarrollado en virtud del apartado (1) de esta sección, será coordinado con el plan de respuesta de emergencia de la comunidad, elaborado por el LEPC conforme a la Ley sobre la Planeación de Emergencias y del Derecho a la Información Comunitaria. A solicitud del comité local de planificación de emergencia o los funcionarios de respuesta a emergencias, el propietario u operador deberá proporcionar prontamente información a los funcionarios locales de respuesta a emergencia. Esta información es necesaria para elaborar y aplicar el plan de respuesta de emergencias de la comunidad. 152 C5: Información para el público Objetivo Que la población potencialmente afectada conozca cuáles son los riesgos para la comunidad y sepa cómo actuar en caso de que ocurra un accidente. Por qué Brindar información a la población es fundamental para paliar los efectos adversos externos en caso de que se produzca un accidente. La información también ayudará a tener confianza en las autoridades y la industria y en que ellas manejan los riesgos. Cómo: Identificar las instalaciones donde existe un potencial de que ocurran accidentes que causen efectos externos y definir cuál sería la población en riesgo relacionada en caso de accidente, a fin de dirigir la información a la audiencia que corresponde. Establecer un sistema para comunicarse con la población potencialmente afectada (que puede hacerlo la industria, las autoridades públicas o bien a través de terceros). La información debe identificar las acciones que deben realizarse luego de un accidente e incluso brindar orientación acerca de cómo se realizarán advertencias y se darán indicaciones a la población potencialmente afectada. - La información debe brindarse sin que se la solicite y repetirse periódicamente. - Es necesario que la información esté en un idioma y en una forma que sea comprensible para la población objetivo (tomando en consideración, por ejemplo, el idioma / la cultura, el bagaje educativo, etc.). En este aspecto, la información debe ser comprensible para individuos que no tengan capacitación ni conocimientos técnicos. - La información debe ser realista (por ejemplo, que los sistemas utilizados para advertir a la población en caso de accidente sean los mismos que los descriptos en la información brindada a la población). - Se debe usar diversos canales para hacer circular la información, según lo que sea apropiado para la comunidad (por ejemplo, en los periódicos, la radio o la televisión, materiales suministrados a los niños en edad escolar, avisos incluidos en las facturas de teléfono o de servicios públicos, concejos municipales, iglesias, etc.). Asignar la responsabilidad de comunicarse con la población a individuos que tengan los conocimientos y las aptitudes adecuados y que posean credibilidad. Garantizar que la información que se brindará a la población concuerda con las estrategias de planificación para situaciones de emergencia (para esto puede ser necesario consultar con las autoridades responsables de la respuesta para casos de emergencia y la protección civil). Comprobar la eficacia del esquema de comunicación periódicamente, a fin de aumentar las probabilidades de que la información llegue a la audiencia adecuada y que ésta retenga la información. 153 Brindar información a los medios de comunicación para que ellos cuenten con los conocimientos necesarios para transformarse en una fuente de información eficaz en caso de que se produzca un accidente. Establecer medios para que la población pueda comunicarse con las autoridades y la industria. Incluir a la población más allá de las fronteras si existieran riesgos de que ocurra un accidente con efectos transfronterizos. En el Cuadro de texto 15 a continuación, aparece información adicional (Información que se sugiere comunicar al público). Dificultades La información no le llega a la población objetivo. Es difícil encontrar canales de comunicación eficaces para llegar a la población objetivo de manera de ésta preste atención a la información. Un público confiado. Si no ha habido accidentes ni amenazas de accidente durante un tiempo, la población tiende a confiarse. Por lo tanto, es necesario reforzar la información de forma rutinaria utilizando canales distintos. Las personas no siguen las instrucciones cuando ocurre un accidente. La probabilidad y el alcance de los impactos fuera del sitio son subestimados por los propietarios / operadores. Cuadro de texto 15 INFORMACIÓN PARA EL PÚBLICO A continuación aparece una lista de la información que debería ser comunicada a la población concerniente a establecimientos peligrosos, basados en la Directiva Seveso II: 1. Nombre del operador y la dirección del establecimiento peligroso. 2. La identificación, por el puesto que ocupa, de la persona que suministra la información. 3. Una explicación en términos sencillos de la actividad o actividades realizadas en el establecimiento. 4. Los nombres comunes, los nombres genéricos o la clasificación general de peligrosidad de las sustancias peligrosas existentes en el establecimiento que puedan dar lugar a un accidente, con mención de sus principales características peligrosas. 5. Información general relacionada con las características de los peligros de accidente, que incluya sus efectos potenciales sobre la salud, el medio ambiente o los bienes. 6. Información adecuada sobre cómo se advertirá y se mantendrá informada a la población interesada en caso de que ocurra un accidente mayor. 7. Información adecuada sobre las medidas que la población afectada debe tomar y sobre el comportamiento que debe adoptar en caso de un accidente mayor. 8. La confirmación de que el operador debe tomar medidas adecuadas en el sitio, en coordinación particular con los servicios de emergencia, para ocuparse de los accidentes mayores y minimizar sus efectos. 154 9. Una referencia al plan de emergencia externa diseñado para lidiar con cualquier efecto fuera del sitio que haya sido provocado por un accidente. Esa referencia debe incluir recomendaciones para colaborar con todas las instrucciones o las necesidades de los servicios de emergencia en el momento en que ocurre un accidente. 10. Detalles acerca de dónde puede obtenerse información adicional pertinente, con sujeción a los requisitos de confidencialidad establecidos en la legislación nacional. Extractos de instrumentos internacionales CONVENIO DE LA OIT Artículo 16 La autoridad competente deberá velar por que: (a) se difunda entre los miembros de la población que estén expuestos a los efectos de un accidente mayor, sin que tengan que solicitarlo, la información sobre las medidas de seguridad que han de adoptarse y sobre la manera de comportarse en caso de accidente mayor, y por que se actualice y se difunda de nuevo dicha información a intervalos apropiados; (b) se dé la alarma cuanto antes al producirse un accidente mayor; (c) cuando las consecuencias de un accidente mayor puedan trascender las fronteras, se proporcione a los Estados afectados la información requerida en los apartados a) y b) con el fin de contribuir a las medidas de cooperación y coordinación. CONVENIO DE CEPE/ONU Artículo 9: Información y participación del público 1. Las Partes se asegurarán de que se dé al público información suficiente en las zonas que puedan verse afectadas por un accidente industrial resultante de una actividad peligrosa. Esta información se difundirá por los cauces que las Partes consideren oportunos y en ella deberán figurar los elementos a que se refiere el Anexo VIII al presente Convenio y tenerse en cuenta los aspectos expresados en los números 1 a 4 y 9 del punto 2 del Anexo V. 2. La Parte de origen, de conformidad con lo dispuesto en el presente Convenio y siempre que sea posible y oportuno, ofrecerá al público que se encuentre en las zonas que puedan verse afectadas la posibilidad de participar en los procedimientos pertinentes con el fin de conocer su opinión y sus preocupaciones sobre las medidas de prevención y preparación, y se asegurará de que al público de la Parte afectada se le dé una oportunidad equivalente a la que se dé al público de dicha Parte de origen. 3. Las Partes, de conformidad con su respectivo ordenamiento jurídico y, si lo desean, según el principio de reciprocidad, proporcionarán a las personas físicas o jurídicas que resulten o puedan resultar perjudicadas por los efectos transfronterizos de un accidente industrial en el territorio de una Parte, el acceso a los procedimientos administrativos y judiciales pertinentes 155 en condiciones equivalentes a las de que disponen las personas comprendidas en su propia jurisdicción, y un tratamiento en esas mismas condiciones de equivalencia, incluida la posibilidad de entablar acciones legales y de recurrir contra las decisiones que afecten a sus derechos. Anexo VIII: Información al público en aplicación del Artículo 9 1. La denominación de la empresa, la dirección del lugar en que se desarrolla la actividad peligrosa y la identificación, por el cargo que ocupa, de la persona que facilita la información; 2. Una explicación, en términos sencillos, de la actividad peligrosa, incluidos los riesgos; 3. Los nombres comunes o genéricos, o la clasificación general de peligrosidad de las sustancias y preparados que se utilizan en la actividad peligrosa, con indicación de sus principales características peligrosas; 4. La información general resultante de una evaluación de impacto medioambiental, de existir y ser pertinente; 5. La información general relativa a la índole de un accidente industrial que podría producirse en el marco de la actividad peligrosa, incluidos sus posibles efectos sobre la población y el medio ambiente; 6. Información adecuada sobre cómo se alertará a la población afectada y se la mantendrá informada en caso de accidente industrial; 7. Información adecuada sobre las medidas que debería tomar la población afectada y sobre el comportamiento que debería seguir en caso de accidente industrial; 8. Informaciones adecuadas sobre las medidas adoptadas en relación con la actividad peligrosa, incluido el enlace con los servicios de emergencia, con el fin de hacer frente a los accidentes industriales, de reducir su gravedad y de paliar sus efectos; 9. Información general sobre el plan de emergencia fuera del emplazamiento elaborado por los servicios de emergencia para hacer frente a los efectos fuera del emplazamiento, incluidos los efectos transfronterizos, de un accidente industrial; 10. Información general sobre las exigencias y condiciones especiales a que esté sujeta la actividad peligrosa según las reglamentaciones y/o disposiciones administrativas nacionales pertinentes, incluidos los regímenes de licencia y autorización; 11. Detalles sobre dónde puede obtenerse más información pertinente. 156 DIRECTIVA SEVESO II Artículo 13: Información relativa a las medidas de seguridad 1. Los Estados miembros velarán por que todas las personas y todos los establecimientos abiertos al público (tales como escuelas y hospitales) que puedan verse afectados por un accidente grave que se inicie en un establecimiento contemplado en el Artículo 9 reciban con regularidad y en la forma más apropiada, sin que tengan que solicitarlo, la información sobre las medidas de seguridad que deben tomarse y sobre el comportamiento que debe adoptarse en caso de accidente. Esa información se revisará cada tres años y, si fuera necesario, se renovará y actualizará, por lo menos cuando haya modificaciones con arreglo al artículo 10. La información estará a disposición del público de forma permanente. La información estará a disposición del público de forma permanente. La información al público se renovará a intervalos que no podrán superar en ningún caso los cinco años. La información recogerá al menos los datos que figuran en el Anexo V. 2. Los Estados miembros pondrán a disposición de los Estados miembros que pudiesen sufrir los efectos transfronterizos de un accidente grave producido en un establecimiento contemplado en el Artículo 9, las informaciones suficientes a fin de que el Estado miembro concernido pueda aplicar, en su caso, todas las disposiciones pertinentes de los Artículos 11 y 12 así como del presente artículo. 3. Cuando un Estado miembro afectado decida que un establecimiento cercano al territorio de otro Estado miembro no puede presentar peligro alguno de accidente grave fuera de su perímetro en el sentido del apartado 6 del Artículo 11 y que, por lo tanto, no requiere la elaboración de un plan de emergencia externo de conformidad con el Apartado 1 del Artículo 11, informará de ello al otro Estado miembro. 4. Los Estados miembros velarán por que el informe de seguridad esté a disposición del público. El industrial podrá solicitar de la autoridad competente que no divulgue al público determinadas partes del informe, por motivos de confidencialidad de carácter industrial, comercial o personal, de seguridad pública o de defensa nacional. En estos casos, con acuerdo de la autoridad competente, el industrial proporcionará a la autoridad y pondrá a disposición del público un informe modificado en el que se excluyan estas partes. 5. Los Estados miembros velarán por que el público pueda dar su parecer en los casos siguientes: • elaboración de proyectos de nuevos establecimientos contemplados en el artículo 9, • modificaciones de los establecimientos existentes a que se refiere el Artículo 10 cuando las modificaciones previstas estén sujetas a los requisitos de la presente Directiva en materia de ordenación del territorio, • ejecución de obras en las inmediaciones de los establecimientos ya existentes. 6. Cuando se trate de establecimientos sujetos a las disposiciones del artículo 9, los Estados miembros velarán por que se ponga a disposición del público el inventario de las sustancias 157 peligrosas previsto en el apartado 2 del artículo 9 con sujeción a las disposiciones del párrafo 4 de este artículo y al artículo 20. Anexo V: Datos que deberán facilitarse a la población en aplicación del apartado 1 del Artículo 13 1. Nombre y apellidos del industrial y dirección del establecimiento. 2. Identificación, expresando el cargo, de la persona que facilite la información. 3. Confirmación de que el establecimiento está sujeto a las disposiciones reglamentarias o administrativas de aplicación de la Directiva y de que se ha entregado a la autoridad competente la notificación contemplada en el apartado 3 del artículo 6 o el informe de seguridad mencionado en el apartado 1 del artículo 9. 4. Explicación en términos sencillos de la actividad o actividades llevadas a cabo en el establecimiento. 5. Nombres comunes o, en el caso de las sustancias peligrosas incluidas en la parte 2 del Anexo I, nombres genéricos o clasificación general de peligrosidad de las sustancias y preparados existentes en el establecimiento que puedan dar lugar a un accidente grave, con mención de sus principales características peligrosas. 6. Información general sobre el carácter de los principales riesgos de accidente grave, incluidos sus efectos potenciales en la población y el medio ambiente. 7. Información adecuada sobre cómo alertar y mantener informada a la población afectada en caso de accidente grave. 8. Información adecuada sobre las medidas que deberá adoptar y el comportamiento que deberá observar la población afectada en caso de accidente grave. 9. Confirmación de que el operador está obligado a tomar las medidas adecuadas en el lugar, incluido el contacto con los servicios de emergencia, a fin de actuar en caso de accidente grave y reducir al mínimo sus efectos. 10. Referencia al plan de emergencia externo elaborado para abordar cualesquiera efectos de un accidente fuera del lugar donde ocurra. Se incluirán recomendaciones de cooperación con toda instrucción o consigna formulada por los servicios de emergencia en el momento del accidente. 11. Información detallada sobre el modo de conseguir mayor información al respecto, sin perjuicio de los requisitos de confidencialidad establecidos en la legislación nacional. LEGISLACIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS De conformidad con la Ley sobre la Planeación de Emergencias y del Derecho a la Información Comunitaria (EPCRA) (Título 42, Capítulo 116 del Código de los Estados Unidos) Conforme a los aspectos del derecho de la comunidad a la información contemplados en la Ley EPCRA, los propietarios y los operadores de algunos establecimientos deben suministrar información detallada a diversas organizaciones estaduales y locales sobre los productos químicos presentes en sus instalaciones. Esas organizaciones incluyen la Comisión Estadual de Respuesta a Emergencias (State Emergency Response Commission, SERC), el Comité Local de Planificación para casos de Emergencia (Local Emergency Planning Committee, LEPC) y el cuerpo local de bomberos. Además, esos establecimientos deben informar a la Agencia de Protección Ambiental cada año acerca de cualquier rutina de emisiones de productos químicos tóxicos de sus instalaciones al medio ambiente. La EPA mantiene el 158 Programa de Inventario de Escapes o Derrames Tóxicos (Toxic Release Inventory, TRI) basada en esa información. Como parte de las disposiciones de la EPCRA sobre el derecho de la comunidad a la información, el público tiene derecho a acceder a toda esa información. El público puede acceder a información detallada sobre los productos químicos presentes en su comunidad dentro de las horas hábiles del LEPC y la SERC. El LEPC publica un aviso en los periódicos locales una vez al año a fin de informar al público sobre la disponibilidad y la ubicación de esa información. Además, la EPA publica cada año un informe impreso que resume la información recibida para el programa TRI anual, disponible en línea. Esos requisitos están diseñados para ayudar a los ciudadanos a comprender mejor los peligros presentes en sus comunidades y a mejorar la capacidad de respuesta en el ámbito local mediante avances en la coordinación y la planificación. 159 C6: Informes de accidentes, investigación y seguimiento Objetivo Aprender el origen y las causas fundamentales que contribuyen a los accidentes para aprender lecciones de ellos y mejorar la prevención, la preparación y la respuesta. Por qué Utilizar la información aprendida a partir de una revisión de informes de accidentes e investigaciones sobre accidentes puede ayudar a prevenir accidentes similares en el futuro. Los informes y las investigaciones sobre accidentes proporcionan conocimientos a fin de establecer prioridades para las acciones del gobierno y la industria. Aprender de la experiencia ayuda a aumentar la confianza pública respecto de que se siguen los pasos adecuados para evitar consecuencias futuras. Cómo Exigir la información inmediata a una autoridad pertinente de accidentes y cuasi accidentes de consideración que cumplan con los criterios especificados. Se recomienda utilizar un formulario estandarizado para permitir la recopilación y el análisis de la información en forma sistemática. - Llevar un registro nacional de informes y estadísticas de accidentes y realizar análisis adecuados de los accidentes. Los informes de accidentes pueden ser complementados con otra información disponible a las autoridades tales como registros médicos y de 32 hospitales. • • Aclarar qué accidentes/cuasi accidentes están sujetos al requisito de información. Describir los datos que deben informarse (por ejemplo, el tipo y la cantidad de sustancias peligrosas derramadas, la instalación involucrada, una descripción del accidente, las consecuencias para la salud, el medio ambiente o la propiedad, las causas del accidente, las medidas de respuesta para casos de emergencias que se tomaron). • Analizar los informes de accidentes para identificar las tendencias y las lecciones aprendidas. Exigir a los propietarios/operadores que investiguen los accidentes que cumplen con los criterios especificados a fin de determinar el origen y las causas fundamentales (incluso posibles aspectos técnicos, organizativos y gerenciales) e identificar las lecciones aprendidas. Las autoridades investigan accidentes clave con el potencial para identificar lecciones importantes, siguiendo los protocolos establecidos. • Garantizar que se disponga de los recursos adecuados (incluso personal capacitado) para hacerlo. – Hacer participar en la investigación a todas las autoridades gubernamentales y a las organizaciones no gubernamentales correspondientes y coordinar las autoridades. Reconocer las causas de accidentes que pueden ser muchas, complejas e interrelacionadas. Las prácticas gerenciales, las destrezas y conocimiento del trabajador, la 32 El Programa Internacional sobre Seguridad Química ha creado herramientas para ayudar a los países a manejar información relacionada con la salud. Véase: http://www.who.int/ipcs/emergencies/en/. 160 capacitación, las políticas y procedimientos existentes, el equipo, los procesos técnicos, los reglamentos gubernamentales y los factores externos pueden desempeñar una función. Promover el intercambio de información sobre accidentes e investigaciones y la aplicación de las lecciones aprendidas. – Los informes de investigación elaborados por las autoridades gubernamentales deben ser publicados y diseminados a lo largo de todo el país y entre países (con modificaciones para proteger la información empresarial confidencial). Muchos países 33 publican sus informes en sus sitios Web. Los ejemplos aparecen en la Sección (c) del Anexo VI (Bibliografía seleccionada – Informes de accidentes y estudios de casos) en la página 243. – Participar en iniciativas locales, regionales e internacionales para el intercambio de historias de accidentes entre gobiernos y entre empresas (por ejemplo, por medio de asociaciones industriales). En la página 189, SG-6 (Guía sobre investigación de accidentes), aparece más información. Dificultades Inconvenientes en hacer que se cumplan los requisitos para la presentación de informes, en especial si no se produjeron efectos fuera del sitio. Asegurarse de que las investigaciones se centren en identificar las causas fundamentales y participantes, no en evaluar la culpa. No compartir las lecciones aprendidas. Debe reconocerse que los esquemas de intercambio de información deben proteger la información comercial confidencial. Es necesario compartir la experiencia para prevenir accidentes similares en el futuro. 33 La Junta de Seguridad Química e Investigación de Riesgos (CSB) de los Estados Unidos ha preparado una serie de vídeos de seguridad basados en lecciones aprendidas de investigaciones que están disponibles para la población y, en algunos casos, han sido traducidos a otros idiomas y se pueden encontrar en: http://www.chemsafety.gov/. 161 Extractos de instrumentos internacionales CONVENIO DE LA OIT Artículo 13 Los empleadores deberán informar tan pronto como se produzca un accidente mayor a la autoridad competente y a los demás organismos que se designen con este objeto. Artículo 14 1. Tras un accidente mayor, los empleadores deberán, dentro de un plazo establecido previamente, presentar a la autoridad competente un informe detallado en el que se analicen las causas del accidente y se indiquen sus consecuencias inmediatas in situ, así como todas las medidas adoptadas para atenuar sus efectos. 2. El informe deberá incluir recomendaciones que describan en detalle las medidas que se vayan a llevar a cabo para impedir que el accidente vuelva a producirse. CONVENIO DE LA CEPE/ONU Artículo 10: Sistemas de notificación de los accidentes industriales 1. Con objeto de recibir y transmitir notificaciones de accidentes industriales con la información necesaria para contrarrestar los efectos transfronterizos, las Partes proveerán en los niveles apropiados, a la creación y funcionamiento de sistemas compatibles y eficientes para su notificación. 2. En caso de accidente industrial o amenaza inminente de accidente industrial que tenga o pueda tener efectos transfronterizos, la Parte de origen se asegurará de que se notifique sin demora a las Partes afectadas a los niveles apropiados mediante los sistemas de notificación de accidentes industriales. En dicha notificación figurarán los elementos consignados en el Anexo IX al presente Convenio. 3. Las Partes interesadas se asegurarán de que, en caso de accidente industrial o amenaza inminente del mismo, los planes de emergencia elaborados de conformidad con el artículo 8 entren en acción lo antes posible y en la medida en que lo exijan las circunstancias. DIRECTIVA SEVESO II Artículo 14: Información que deberá facilitar el industrial después de un accidente grave 1. Los Estados miembros velarán por que el industrial esté obligado a cumplir, tan pronto como sea posible después de un accidente grave y haciendo uso de los medios más adecuados, lo siguiente: a. Informar a las autoridades competentes; b. comunicarles la siguiente información tan pronto como disponga de ella: 162 – las circunstancias del accidente, – las sustancias peligrosas que intervengan en el mismo, – los datos disponibles para evaluar los efectos del accidente en las personas y el medio ambiente, y – las medidas de emergencia adoptadas; c. informarles de las medidas previstas para: – paliar los efectos del accidente a medio y largo plazo, – evitar que el accidente se repita; d. actualizar la información facilitada, en caso de que investigaciones más rigurosas pongan de manifiesto nuevos hechos que modifiquen dicha información o las conclusiones que dimanen de ella. 2. Los Estados miembros encomendarán a la autoridad competente: a. cerciorarse de que se adopten las medidas de emergencia y las medidas a medio y largo plazo que sean necesarias; b. recoger, mediante inspección, investigación u otros medios adecuados, la información necesaria para un análisis completo del accidente grave en los aspectos técnicos, de organización y de gestión; c. tomar las disposiciones adecuadas para que el industrial tome las medidas paliativas necesarias; y d. formular recomendaciones sobre futuras medidas de prevención. LEGISLACIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS Los establecimientos regulados deben informar las descargas de petróleo o los derrames de productos químicos a la EPA, a otras agencias federales y/o a las agencias gubernamentales estaduales o locales. El gobierno federal estableció Cantidades Informables (Reportable Quantities, RQ) para sustancias peligrosas listadas. Si se derrama una sustancia peligrosa al medio ambiente en una cantidad que iguala o supera su RQ, ese derrame debe informarse a las autoridades federales responsables de recabar y almacenar informes sobre derrames químicos y de hidrocarburos. Además, en el marco de la Ley de Planificación para casos de Emergencia y del Derecho a la Información Comunitaria (EPCRA) de 1986, el propietario o el operador de un establecimiento que derrama una sustancia peligrosa igual o superior a su RQ o una sustancia extremadamente peligrosa en una cantidad superior al valor de RQ establecido, debe informar sobre ese derrame a las autoridades correspondientes (en muchos casos, la Comisión Estadual de Respuesta a Emergencias (SERC), y el Comité Local de Planificación para Casos de Emergencia (LEPC) para que se ubique el lugar del incidente. Finalmente, bajo el Programa del Plan de Gestión de Riesgos (PGR) de la Ley de Aire Limpio, los establecimientos deben incluir en su PGR un historial de accidentes de cinco años de todos los derrames accidentales de procesos abarcados que resultaron en muertes, lesiones o daño significativo a la propiedad en el sitio, o muertes, lesiones, evacuaciones, asentamientos en el lugar, daños a la propiedad o daño ambiental conocido que se dio fuera del lugar. Los derrames de procesos no abarcados, aunque hayan involucrado sustancias reguladas o derrames de sustancias no listadas de procesos abarcados, no se incluyen. 163 Por cada derrame accidental que se reporte en la sección del historial del accidente del PGR, los establecimientos reportan información descriptiva estándar, así como información reciente sobre las condiciones climáticas, los impactos en el sitio y los impactos conocidos fuera del sitio, el evento que inició y los factores que contribuyeron, ya sea que el personal de respuesta fuera del sitio haya sido notificado, y cualquier cambio hecho en el establecimiento como resultado del accidente. Con respecto a la investigación del accidente, los requisitos del Programa PGR establecen que los propietarios u operadores deben investigar cada incidente que haya resultado en, o que pudo haber resultado en un derrame catastrófico. La investigación de este incidente se debe iniciar a más tardar 48 horas después que haya ocurrido el accidente y se debe preparar un resumen cuando concluya la investigación. Este resumen deberá incluir: la fecha del incidente, la fecha en la que comenzó la investigación, una descripción de incidente, los factores que contribuyeron con el incidente, y cualquier recomendación que resultó de la investigación. El propietario u operador deberá tratar prontamente y resolver los hallazgos de la investigación y las resoluciones deberán ser documentadas. Igualmente, los hallazgos serán analizados con todo el personal afectado cuyas tareas de trabajo serán afectadas por los hallazgos. Además de los requisitos de PGR para que los propietarios y operadores investiguen los accidentes en sus establecimientos, la sección 112® de la Ley de Aire Limpio solicitó el establecimiento de una Junta de Seguridad Química e Investigación de Riesgos (CSB), cuya función principal es investigar los accidentes para determinar las condiciones y circunstancias que llevaron al evento y a identificar la causa o las causas que contribuirán a impedir que se den eventos similares. Para más información sobre la CSB y las investigaciones puede visitar: www.csb.gov. 164 GUÍA COMPLEMENTARIA SG-1: Guía sobre sistemas de gestión de la seguridad De: Oficina de Riesgos de Accidentes Graves (CE), Directrices sobre una Política de Prevención de Accidentes Graves y un Sistema de Gestión de la Seguridad, según lo exige la Directiva del Consejo 96/82/CE (Seveso II) (http://mahbsrv.jrc.it/downloads34 pdf/smsf.pdf) A continuación aparecen descritos los siete elementos de los sistemas de gestión de la seguridad, conforme lo establecen las Directrices CE: 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. la organización y el personal; identificación y evaluación de los peligros; control operativo; gestión de cambio; planificación para emergencias; monitoreo del desempeño; y auditoría y análisis. Organización y personal Texto pertinente extraído de la Directiva: Se abordarán los siguientes puntos en el merco del sistema de gestión de la seguridad: La organización y el personal – las funciones y responsabilidades del personal asociado a la gestión de los riesgos de accidentes graves en todos los niveles de la organización. La identificación de las necesidades en materia de formación de dicho personal y la organización de dicha formación. La participación del personal y, en su caso, de los subcontratistas. El Sistema de Gestión de la Seguridad debe reflejar el compromiso de arriba hacia abajo y la cultura de la seguridad de la organización del operador, que se traducen en los recursos necesarios y las responsabilidades directas del personal involucrado con la gestión de los peligros mayores en todos los niveles de la organización. El operador debe identificar las aptitudes y las capacidades que necesita dicho personal y asegurarse de que efectivamente cuente con ellas. Deben definirse las funciones, las responsabilidades, la rendición de cuentas, la autoridad y la interrelación de todo el personal que gestiona, realiza o verifica las tareas que afectan a la seguridad, especialmente de los empleados responsables de: la provisión de recursos, incluso de recursos humanos, para el desarrollo y la implementación del SGS; la toma de medidas para garantizar la concientización del personal en cuanto a los peligros y el cumplimiento de la política de seguridad del operador; la identificación, el registro y el seguimiento de medidas correctivas o de mejoramiento; el control de situaciones anormales, incluso emergencias; 34 Al momento de la redacción, el CE MAHB estaba en el proceso de actualizar su sitio Web y algunas direcciones de Internet en este documento pudieran cambiar. Una vez que el sitio Web esté actualizado, las Directrices del sistema de gestión de seguridad estarán disponibles en: http://mahb.jrc.ec.europa.eu/index.php?id=55. 165 la identificación de la necesidad de capacitación, la provisión de capacitación y la evaluación de su eficacia; la coordinación de la implementación del sistema y la presentación de informes a la alta gerencia. El operador debe garantizar la participación de los empleados y, cuando corresponda, de los contratistas o de otras partes presentes en el establecimiento, tanto en la determinación como en la implementación de la política de seguridad. En especial, el operador debe garantizar que los contratistas reciban la información y la capacitación necesaria para poder tomar conciencia de los peligros asociados y para cumplir con la política de seguridad. Identificación y evaluación de los peligros Texto pertinente extraído de la Directiva: Se abordarán los siguientes puntos en el marco del sistema de gestión de la seguridad: La identificación y evaluación de los riesgos de accidente grave – la adopción y la aplicación de procedimientos para la identificación sistemática de los riesgos de accidentes graves que se puedan producir en caso de funcionamiento normal o anormal, así como la evaluación de su probabilidad y su gravedad. El operador debe desarrollar e implementar procedimientos para identificar y evaluar sistemáticamente los peligros que surjan de las actividades realizadas y de las sustancias y los materiales que allí se manipulan o producen. Para la identificación y la evaluación de los peligros deben utilizarse procedimientos formales, sistemáticos y críticos. También deben existir procedimientos sistemáticos para la definición de medidas tanto de prevención de incidentes como de mitigación de sus consecuencias. El contenido detallado de los procedimientos para la identificación y la evaluación de los peligros está fuera del alcance de este documento de orientación en particular. No obstante, el „sistema de gestión‟ debe incluir una evaluación de las aptitudes y los conocimientos requeridos, incluso, cuando corresponda, un enfoque de equipo, con el objeto de encontrar la combinación y la amplitud de conocimientos teóricos y prácticos necesarios para desarrollar e implementar los procedimientos adecuados. Los procedimientos de identificación y evaluación de los peligros deben aplicarse a todas las etapas relevantes, desde la concepción del proyecto hasta el desmantelamiento, que incluyen: los peligros potenciales que surjan o se identifiquen en el transcurso de las actividades de planificación, diseño, ingeniería, construcción, puesta en servicio y desarrollo; el rango normal de condiciones operativas de los procesos, los peligros de las operaciones rutinarias y de situaciones no rutinarias, en especial la puesta en marcha, el mantenimiento y la clausura; los incidentes y las posibles emergencias, incluso aquellos que se originen debido a fallas en los componentes o los materiales, acontecimientos externos y factores humanos, entre los que se incluyen las fallas en el propio SGS; peligros de desmantelamiento, abandono y disposición; peligros potenciales derivados de actividades previas; peligros externos, que incluyen los que tienen su origen en peligros naturales (tales como temperaturas anormales, incendios, inundaciones, terremotos, vientos fuertes, maremotos y otros), operaciones de transporte como la carga y la descarga, actividades de los alrededores y acciones no autorizadas o malintencionadas. 166 Se debe prestar la debida atención a las lecciones aprendidas de incidentes y accidentes anteriores (tanto dentro como fuera de la organización en cuestión), de experiencias operativas de la instalación en cuestión o de otras similares y de las inspecciones y las auditorías de seguridad previas. Control operativo Texto pertinente extraído de la Directiva: Se abordarán los siguientes puntos en el marco del sistema de gestión de la seguridad: El control de explotación - la adopción y la aplicación de procedimientos e instrucciones para el funcionamiento en condiciones seguras, también por lo que respecta al mantenimiento de las instalaciones, a los procedimientos, al equipo y a las paradas temporales. El operador debe preparar y mantener actualizada y fácilmente disponible la información relativa a los peligros de los procesos y a los límites y los controles, tanto operativos como de diseño, que resultan de los procedimientos de identificación de los peligros y la evaluación de los riesgos. En base a ellos, deben elaborarse e implementarse procedimientos documentados a fin de garantizar el diseño y la operación seguros de la planta, los procesos, los equipos y los establecimientos de almacenamiento. En especial, dichos procedimientos deben abarcar lo siguiente: la puesta en servicio el arranque y el cierre periódico normal todas las fases de las operaciones normales, incluso las pruebas, el mantenimiento y la inspección la detección de todas las desviaciones de las condiciones operativas normales y la respuesta a dichas desviaciones las operaciones temporarias o especiales la operación en condiciones de mantenimiento las operaciones de emergencia el desmantelamiento. Deben definirse prácticas de trabajo seguras para todas las actividades relevantes para la seguridad operativa. Los procedimientos, las instrucciones y los métodos de trabajo deben desarrollarse en cooperación con las personas a las que se les exige que los cumplan y deben estar expresados de una manera comprensible para ellos. El operador debe garantizar que se implementen esos procedimientos y brindar la capacitación necesaria. Esos procedimientos escritos deben estar a disposición de todo el personal que sea directa o indirectamente responsable de la operación y, cuando corresponda, a disposición de otras personas involucradas como, por ejemplo, el personal de mantenimiento. También deben estar sujetos a una revisión periódica para asegurarse de que estén actualizados y sean acertados y, además, para asegurarse de que efectivamente se cumplan. 167 Gestión de las modificaciones Texto pertinente extraído de la Directiva: Se abordarán los siguientes puntos en el marco del sistema de gestión de la seguridad: La gestión de las modificaciones – la adopción y aplicación de procedimientos para la planificación de las modificaciones que deban efectuarse en las instalaciones, procedimientos o zonas de almacenamiento existentes o para el diseño de una nueva instalación, procedimiento o zona de almacenamiento. El operador debe adoptar e implementar procedimientos de gestión para la planificación y el control de todos los cambios en las personas, la planta, los procesos y las variables en los procesos, los materiales, los equipos, los procedimientos, el software, el diseño o las circunstancias externas que tengan la capacidad de afectar el control de los peligros de accidentes mayores. El presente enfoque debe abarcar los cambios operativos permanentes, temporarios y urgentes, y debe abocarse a: la definición de lo que constituye un cambio la asignación de responsabilidades y autoridades para iniciar el cambio la identificación y la documentación del cambio propuesto y de su implementación cuando corresponda, la identificación y el análisis de todas la implicancias para la seguridad que tenga el cambio propuesto la definición, la explicación cuando corresponda, la documentación y la implementación de las medidas de seguridad que se consideren apropiadas, incluso los requisitos de información y capacitación, así como los cambios necesarios para los procedimientos operativos la definición y la implementación de los procedimientos de análisis y los mecanismos correctivos adecuados posteriores al cambio y el monitoreo subsiguiente. También se debe aplicar la gestión de procedimientos de cambio durante el diseño y la construcción de nuevas instalaciones, procesos e instalaciones de almacenamiento. Planificación para casos de emergencia Texto pertinente extraído de la Directiva: Se abordarán los siguientes puntos en el marco del sistema de gestión de la seguridad: La planificación de las situaciones de emergencia - la adopción y aplicación de procedimientos destinados a identificar las emergencias previsibles mediante un análisis sistemático y a elaborar, experimentar y revisar los planes de emergencia para poder hacer frente a tales situaciones de emergencia. El contenido detallado del plan de emergencia no está dentro del alcance del presente documento de orientación en particular. (Los detalles relativos a los datos y la información que deben incluirse en un Plan de Emergencias se especifican en el Anexo IV de la Directiva.) Sin embargo, el Sistema de Gestión de la Seguridad sí prevé los procedimientos necesarios para garantizar el desarrollo, la adopción, la implementación, el análisis, la prueba y, cuando sea necesario, la revisión y actualización adecuados para un plan de emergencias. Dichos procedimientos definirán las aptitudes y las capacidades requeridas e incluirán, cuando sea necesario, un enfoque de equipo para encontrar la combinación necesaria de conocimientos teóricos y prácticos. El operador debe desarrollar y mantener procedimientos para identificar, mediante el análisis sistemático a partir del proceso de identificación de los peligros, las 168 emergencias previsibles que surgirán de sus actividades o en relación a ellas, y para registrar y mantener actualizados los resultados de dicho análisis. Deben elaborarse planes para responder a dichas emergencias potenciales y deben incluirse medidas a fin de que se realicen pruebas y análisis periódicamente dentro del Sistema de Gestión de la Seguridad. Los procedimientos también deben abarcar las medidas necesarias para la comunicación de los planes a todos aquellos que muy probablemente se vean afectados por una emergencia. Monitoreo de los resultados Texto pertinente extraído de la Directiva: Se abordarán los siguientes puntos en el marco del sistema de gestión de la seguridad: La vigilancia de los resultados - la adopción y la aplicación de procedimientos encaminados a la evaluación permanente del cumplimiento de los objetivos fijados por el operador en el marco de la política de prevención de accidentes graves y del sistema de gestión de la seguridad, y la instauración de mecanismos de investigación y de corrección en caso de incumplimiento. Los procedimientos deberían abarcar el sistema de notificación de accidentes graves o de accidentes evitados por escaso margen, en especial cuando se hayan producido fallos de las medidas de protección, las pesquisas realizadas al respecto y la actuación consecutiva, inspirándose en las experiencias del pasado. El operador debe mantener procedimientos tendientes a garantizar que los resultados en materia de seguridad puedan monitorearse y compararse con los objetivos de seguridad definidos. Eso debe incluir la determinación acerca de si se cumple o no con los planes y los objetivos, y si se implementan medidas para controlar los riesgos antes de que ocurra un incidente o accidente (monitoreo activo), así como la presentación de informes y la investigación de las fallas que ocasionaron los incidentes o los accidentes (monitoreo reactivo). El monitoreo activo debe incluir inspecciones de la planta, los equipos y el instrumental que sean críticos para la seguridad, así como una evaluación del cumplimiento con la capacitación, las instrucciones y las prácticas de trabajo seguras. El monitoreo reactivo requiere de un sistema efectivo de informe de incidentes y accidentes y un sistema de investigación que defina no sólo las causas inmediatas sino también las fallas subyacentes que ocasionaron el hecho. Debe prestarse especial atención a los casos de falla en las medidas de protección (incluso las fallas operativas y de gestión) y deben incluirse la investigación, el análisis y el seguimiento (incluso la transferencia de información al personal involucrado) a fin de garantizar que las lecciones aprendidas se apliquen en las operaciones futuras. El operador debe definir la responsabilidad de iniciar una investigación y de tomar medidas correctivas en caso incumplimiento de cualquier parte del SGS. Eso debe incluir especialmente la revisión, cuando sea necesario, de los procedimientos o los sistemas con el objeto de impedir la repetición. La información del monitoreo de resultados también debe ser un aporte significativo para los procesos de auditoría y análisis (véase más adelante). 169 Auditoría y análisis Texto pertinente extraído de la Directiva: Se abordarán los siguientes puntos en el marco del sistema de gestión de la seguridad: La auditoría y el análisis – la adopción y aplicación de procedimientos para la evaluación periódica sistemática de la política de prevención de accidentes graves y de la eficacia y adecuación del sistema de gestión de la seguridad; el análisis documentado por la dirección de los resultados de la política aplicada, del sistema de gestión de la seguridad y de su actualización. En el presente documento, los términos “auditoría” y “análisis” se utilizan para dos actividades diferentes. La auditoría tiene como finalidad garantizar que la organización, los procesos y los procedimientos definidos y efectivamente llevados a cabo concuerden con el Sistema de Gestión de la Seguridad; la auditoría deben realizarla personas que sean suficientemente independientes de la gestión operativa de la unidad sujeta a auditoría, a fin de garantizar que realicen una evaluación objetiva. El análisis es un estudio más fundamental que tiene como fin determinar si el Sistema de Gestión de la Seguridad resulta adecuado para cumplir con la política y los objetivos del operador, y puede extenderse a considerar si la política y los objetivos en sí mismos deben modificarse. Auditoría Además del monitoreo rutinario de los resultados, el operador debe efectuar auditorías periódicas de su SGS como parte habitual de sus actividades comerciales. La auditoría debe determinar si los resultados globales del Sistema de Gestión de la Seguridad se ajustan a los requerimientos, tanto externos como del operador. Los resultados de dichas auditorías deben utilizarse para decidir qué mejoras deben introducirse a los elementos del SGS y su implementación. Para tal fin, el operador debe adoptar e implementar un plan de auditoría que abarque los puntos del 1 al 6. Dicho plan, que debe examinarse periódicamente, debe definir: las áreas y las actividades que deben someterse a la auditoría la frecuencia con que se realizarán las auditorías en cada área correspondiente la responsabilidad de cada auditoría los recursos y el personal necesarios para cada auditoría, tomando en consideración que es necesario contar con pericia, independencia operativa y soporte técnico los protocolos de auditoría que se utilizarán (que pueden incluir cuestionarios, listas de control, entrevistas tanto abiertas como estructuradas, mediciones y observaciones) los procedimientos para la presentación de informes sobre los resultados de las auditorías y los procedimientos de seguimiento. Análisis La alta gerencia debe analizar oportunamente la política de seguridad global y la estrategia para el control de los peligros de accidentes mayores del operador, así como todos los aspectos del SGS, a fin de garantizar la concordancia entre ellos. El análisis también debe abocarse a la asignación de recursos para la implementación del SGS y debe considerar los cambios en la organización, así como también los cambios en la tecnología, las normas y la legislación. 170 SG-2: Guía sobre evaluación de riesgo En el presente contexto, la evaluación del riesgo es una herramienta que se utiliza en la gestión de riesgos con el objeto de comprender los riesgos e informar la selección y el orden de prioridades de las estrategias de prevención y control. Con la evaluación del riesgo, es posible categorizar a los riesgos en base a una escala relativa y evaluar las opciones técnicas, organizativas, de políticas, a fin de poder aprovechar al máximo los resultados en términos de una mayor seguridad. Esto contribuye a la elección de las opciones. Asimismo, la evaluación de riesgos brinda información a los responsables de formular políticas, la cual los ayuda a desarrollar criterios de aceptabilidad o tolerabilidad de riesgos y, en relación con dichos criterios, es posible evaluar los distintos objetivos o programas. La evaluación de riesgos es un proceso que comprende una serie de pasos secuenciales, a saber: identificación de los peligros, evaluación del escenario del hecho, evaluación de las consecuencias, evaluación de las probabilidades, e integración y comparación de los riesgos. Los propietarios/operadores deben realizar una identificación de los peligros y una evaluación de los riesgos en todas las instalaciones peligrosas. Cuando realicen la evaluación de los riesgos, es importante considerar detenidamente los diversos enfoques posibles y los métodos disponibles, y elegir un método/enfoque que sea adecuado para las circunstancias particulares, ya que cada enfoque/método posee fortalezas y debilidades, y ninguno es perfecto. La elección de un enfoque/método en particular debe realizarse sobre la base de una serie de factores, entre los que se incluyen: el objetivo/propósito de la evaluación de riesgos; la naturaleza estimada del riesgo; la disponibilidad y la adecuación de los datos; la pericia y los recursos necesarios para un enfoque/método determinado y su disponibilidad; los antecedentes de incidentes en la instalación y en otras instalaciones vinculadas; las restricciones inevitables en el proceso; el contexto sociopolítico en el que se realizará la evaluación; y las hipótesis en las que se basa el enfoque/método. Las evaluaciones de riesgos deben ir acompañadas por información relativa a las hipótesis, las limitaciones en relación a los datos y las incertidumbres arraigadas en los enfoques/métodos de evaluación de riesgos, así como en los procesos de toma de decisiones, a fin de que los resultados de las evaluaciones de riesgos puedan utilizarse apropiadamente. Es importante tratar las posibles limitaciones de los datos y la selección inapropiada de datos para que los resultados de las evaluaciones sean confiables y exhaustivos. Por ejemplo, pueden existir vacíos e insuficiencias en los datos disponibles acerca de, por ejemplo, modos e índices de fallas en los equipos, predicciones de errores humanos, efectos en el largo plazo o efectos tardíos sobre la salud como consecuencia de exposiciones agudas y efectos de los productos químicos sobre el medio ambiente, etc. Las limitaciones en cuanto a los datos pueden manejarse, en parte, mediante el uso de enfoques/métodos menos detallados y más genéricos o el uso de evaluaciones comparativas para ayudar a elegir entre distintas opciones alternativas. Normalmente, el uso de evaluaciones comparativas supone hipótesis, limitaciones e incertidumbres similares y, por consiguiente, su efecto sobre los resultados de las evaluaciones se disipa. 171 La evaluación de riesgos debe ser un proceso continuo y evolutivo. Las evaluaciones deben analizarse y reevaluarse periódicamente, y cuando existan indicios de que es necesario llevar a cabo una revisión. Es posible que sea necesario revisar la evaluación de riesgos cuando, por ejemplo: se hayan modificado los procesos o existan procesos nuevos en las instalaciones peligrosas o haya cambios significativos en el transporte de sustancias peligrosas; ocurra un incidente; se den cambios en la organización; las nuevas tecnologías ofrezcan una posibilidad de introducir mejoras; la experiencia de los trabajadores y/o de la gerencia no concuerde con la evaluación de riesgos; se encuentre disponible información nueva sobre el comportamiento o los efectos de sustancias y procesos; y existan propuestas de construcciones nuevas o de otras urbanizaciones dentro de los predios de la instalación o en las cercanías. En la siguiente página aparece un flujograma que describe los pasos secuenciales de la evaluación de riesgos, seguidos de una descripción de los métodos de evaluación de riesgos. 172 Identificación sistemática de peligros y evaluación de riesgos La identificación de peligros y la evaluación de los riesgos son dos elementos fundamentales del proceso de gestión de riesgos. Son necesarios para poder tomar decisiones relativas a riesgos como, por ejemplo, evitar, reducir o transferir un riesgo o aceptar el riesgo residual. Recolección de datos básicos (datos químicos, físicos, toxicológicos y técnicos) Determinación de condiciones seguras de operación de procesos Identificación de peligros con métodos sistemáticos Evaluación de los peligros según sus consecuencias y evaluación de la frecuencia esperada Riesgo Determinar medidas para la reducción de los riesgos (técnicas, organizativas, de gestión) Riesgo residual Dentro del proceso de gestión de riesgos, es necesario llevar a cabo investigaciones con respecto a los peligros. El origen del peligro, la posibilidad de un efecto negativo (daño), junto con la frecuencia esperada y la probabilidad de que ocurra un suceso negativo y el grado de daños son datos de particular interés. La metodología usada para esos procesos se conoce como evaluaciones de riesgos y análisis de riesgos. La variedad de métodos específicos es amplia y abarca diversos niveles de profundidad y complejidad en el análisis, así como varios sistemas de investigación. Algunos métodos son cuantitativos y utilizan cálculos numéricos, mientras que otros son de naturaleza cualitativa. Métodos de evaluación de riesgos A continuación, se analizan algunos de los métodos de evaluación de riesgos que generalmente se utilizan en la industria de los procesos químicos. Con el tiempo, ha habido variaciones y evoluciones en esos métodos a fin de cumplir con los requerimientos de operadores o grupos de usuarios específicos. Los métodos aplicados deben mostrar un enfoque sistemático y posible. Por lo general, no se utiliza un único método para todos los pasos, desde la identificación de los peligros hasta la identificación de los criterios de iniciación de eventos y la determinación de los efectos y las consecuencias. Los diversos métodos poseen distintos principios subyacentes en virtud de los cuales funcionan y, por consiguiente, tienen usos distintos. 1. Mapeo de peligros Uno de los métodos más simples de evaluación de los peligros es el mapeo de peligros, en el cual se utiliza como base un plano del establecimiento (o la comunidad) para documentar la cantidad y el tipo de producto químico peligroso implicado en relación con la ubicación de ese producto. Su realización permite obtener una perspectiva general de la distribución y de la respectiva concentración de cada sustancia peligrosa, y realizar una evaluación inicial. 173 En el presente método, no se toman en consideración las tecnologías ni los procesos relacionados con las sustancias peligrosas, ni tampoco la frecuencia de ocurrencia de cualquier suceso de liberación de sustancias. Por consiguiente, el método no posee la capacidad de brindar un indicio de los riesgos causados por las sustancias peligrosas. 2. Listas de control Las listas de control se utilizan para verificar el nivel de terminación/finalización de determinadas operaciones como, por ejemplo, las entregas; el cumplimiento de determinadas reglamentaciones; las medidas que deben tomarse, tales como el mantenimiento regular; la aplicación de los procesos de gestión del cambio; etc. Cuando se utilizan listas de control, es importante conocer sus limitaciones. Las listas de control sólo pueden probar lo que ya se conoce. No permiten reconocer ni evaluar las consecuencias de los cambios ni de situaciones dinámicas. Por lo general, las preguntas de una lista de control se responden con Sí o No, lo cual también restringe la profundidad que podría alcanzar cualquier investigación. Como primera medida, las listas de control deben crearse. Además, deben ser tan específicas como sea posible en todas las tareas en cuestión; de lo contrario, se perdería la profundidad de investigación necesaria. Una de las principales debilidades de las listas de control es que pueden llevar a una visión estrecha de la situación y es posible que no se tomen en consideración aspectos que estén más allá de las preguntas formuladas. 3. Análisis de peligros y operabilidad – HAZOP El proceso de Análisis de peligros y operabilidad HAZOP (Hazard and Operability Study) es un enfoque sistemático para descubrir desviaciones y peligros en sistemas de todo tipo. Es un método que se ha arraigado fuertemente en la industria del procesamiento de sustancias químicas. El análisis HAZOP se lleva a cabo en un equipo formado por diversos departamentos involucrados en el proyecto o de la instalación que debe evaluarse (por ejemplo, planificación, operación, mantenimiento, seguridad). En primer lugar, el sistema que se debe examinar se divide en secciones funcionales que puedan manejarse fácilmente. A continuación, se describe la función deseada (operación) de la primera sección. Por ejemplo: bombear un total de 20 m³ de sustancia A a 20 °C con un caudal de flujo de 3m³/h y una presión máxima de 3 bar desde el tanque de almacenamiento hacia el reactor. Entonces, el elemento clave del análisis HAZOP es la aplicación sucesiva de “palabras de guía” a la operación deseada para desarrollar desviaciones hipotéticas. Las “palabras de guía” son: no (ninguno/a) más menos parcialmente además de inverso distinto de. Los aspectos de la operación que pueden tomarse en consideración son, por ejemplo: la temperatura, la presión, el nivel, la identidad química, el caudal de flujo, el volumen, la densidad, el material, etc. A continuación del desarrollo de las desviaciones hipotéticas, se investigan aquéllas que sean sucesos realistas en lo que respecta a las causas y las consecuencias de su ocurrencia. Este 174 proceso se repite para cada una de las secciones funcionales que se desea examinar. Después, se determinan las medidas para eliminar los peligros o reducir su impacto. Las ventajas que presenta el uso del análisis HAZOP en particular residen en el enfoque sistemático y la diversidad de fallas y desviaciones que pueden incluirse dentro de los procesos químicos. La principal desventaja son los requerimientos de tiempo y documentación. En particular, la capacitación y la experiencia del líder del equipo de HAZOP son importantes para garantizar que el análisis no se pierda en detalles sutiles ni, por el contrario, se quede en un nivel superficial donde no se consideren los peligros de manera adecuada. El Estudio HAZOP, por sí solo, no mejora la seguridad de la instalación. Por experiencia, uno de los aspectos más difíciles parece ser la descripción adecuada de la operación deseada, que incluya todos los parámetros relevantes. Si no se incluyen en el estudio los parámetros críticos o relevantes para la seguridad, entonces es imposible analizar las consecuencias de la desviación de esos parámetros de la operación deseada. El análisis HAZOP no toma en consideración la frecuencia con que se espera que ocurran las desviaciones. Para evaluar los riesgos de manera completa, se necesitan otros métodos. 4. ¿Qué pasa si…? El análisis con preguntas del tipo “¿Qué pasa si…? es un enfoque basado en escenarios para la identificación de los peligros y la evaluación de las consecuencias. Por ejemplo: ¿Qué pasa si el nivel asciende por encima de x? ¿Qué pasa si la temperatura es mayor que t °C? ¿Qué pasa si el <parámetro> es <comparación><estado deseado>? En algunos aspectos, es similar al análisis HAZOP; sin embargo, depende en gran medida del conocimiento y la experiencia de los que desarrollan los escenarios que se considerarán mediante la pregunta “¿Qué pasa si...?”. Sólo pueden generarse respuestas para las preguntas que se formulan. No existe un control interno dentro del método que identifique el nivel de finalización del análisis. El sistema es adecuado para sistemas simples y bien entendidos o como una técnica de “tormenta de ideas” (o brainstorming). Sin embargo, es débil para generar nuevos conocimientos a partir de la información existente. 5. Matriz de riesgo Mediante la utilización de una “Matriz de riesgos”, es posible comparar diversos peligros en relación con sus consecuencias y la frecuencia con la que se espera que ocurran. El análisis se lleva a cabo en equipo. El paso más importante es la identificación de los peligros. Eso puede realizarse, por ejemplo, con un método sistemático como el análisis HAZOP. Las consecuencias se clasifican en categorías, por ejemplo: 1. 2. 3. 4. catastróficas críticas leves insignificantes De manera similar, las frecuencias pueden clasificarse en clases relativas tanto basadas en datos numéricos probabilísticos o en la experiencia; por ejemplo: 175 A. B. C. D. E. F. frecuentemente periódicamente ocasionalmente casi nunca poco probable prácticamente imposible Dentro de la matriz de riesgos, los peligros se ubican según su frecuencia y consecuencias. Si se establece un nivel de riesgo objetivo como una diagonal dentro de la matriz, es posible determinar qué peligros deben o bien eliminarse por completo o bien reducir sus consecuencias o la frecuencia de ocurrencia. Una ventaja de este enfoque es que no depende de números de frecuencia para la evaluación de los riesgos. Sin embargo, sí requiere de un cierto grado de habilidad y experiencia para garantizar la coherencia de la evaluación de los riesgos. La clasificación de los peligros debe llevarse a cabo en equipo a fin de garantizar el mejor uso posible de la experiencia. Este método también permite al equipo observar dónde es más importante y más eficaz aplicar medidas de reducción de los riesgos para que disminuya el riesgo total del establecimiento. 176 Ejemplo de una matriz de riesgos Frecuentemente Regularmente Casi nunca Poco probable Prácticamente imposible Frecuencia Ocasionalmente I II III IV V VI Consecuencias Conse cuencias: Niveles de Riesgo: I: insignificantes Ampliamente aceptable II: mínimas III: medias Aceptable, pero es necesario reducir los riesgos tanto como sea posible IV: grandes V: muy grandes Intolerable VI: catastróficas 177 SG-3: Guía sobre planificación de emergencias Existe una variedad de publicaciones internacionales que brindan orientación sobre la planificación para casos de emergencia relacionados con accidentes con productos químicos. Entre esas publicaciones, se incluyen documentos de: ▪ El PNUMA que incluye el Manual APELL (1988), Buenas prácticas de preparación y respuesta para casos de emergencia (PNUMA e ICMM 2006), y material adicional relacionado con el proceso APELL. ▪ La Unidad Ambiental Conjunta PNUMA/OCAH, que incluye, Pautas para el desarrollo de un plan nacional de contingencia ambiental. ▪ La OIT que incluye el Código de prácticas para la prevención de accidentes industriales mayores (1991). ▪ La OMS que incluye el Manual para la gestión de la salud pública de incidentes con productos químicos (2009). ▪ La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que incluye los Principios Guía para la Prevención, Preparación y Respuesta a Accidentes Químicos (2ª ed., 2003). El Cuadro de texto 10 (Temas que deben tratarse en la planificación para la preparación en casos de emergencia) en la página 105 contiene una perspectiva general de los temas que deben abordarse en la planificación para casos de emergencia, a partir de la orientación que ofrece el Manual APELL. A continuación se detallan algunos principios generales adicionales con respecto a la planificación para casos de emergencia (de la OCDE los Principios Guía para la Prevención, Preparación y Respuesta a Accidentes Químicos (2ª ed., 2003). En los siguientes puntos, el término “autoridades públicas” se utiliza para abarcar a los organismos gubernamentales de los diferentes niveles: ▪ Las autoridades públicas deben garantizar el desarrollo, la implementación, la prueba y la actualización de planes de emergencia dentro y fuera del sitio, en coordinación con la gestión de instalaciones peligrosas y, si corresponde, con la participación de empleados y representantes de comunidades pertinentes. ▪ El plan de emergencia fuera del sitio y todos los planes de emergencia pertinentes dentro del sitio deben ser coherentes y estar integrados, y debe existir una colaboración estrecha entre los responsables de la planificación para casos de emergencia dentro y fuera del sitio. ▪ Las autoridades públicas deben establecer pautas y normas para el desarrollo de planes de emergencia dentro y fuera del sitio. ▪ El objetivo de las actividades y los programas de planificación para casos de emergencia debe ser implementar los preparativos necesarios para localizar cualquier accidente que ocurra y, si es posible, contenerlo a fin de minimizar sus efectos nocivos para la salud, el medio ambiente y la propiedad. ▪ Uno de los requisitos previos a fin de lograr una planificación eficaz para casos de emergencia es identificar las instalaciones peligrosas ubicadas dentro del área que cubrirá el plan de emergencia. 178 ▪ En la planificación para casos de emergencia para instalaciones peligrosas, deben tomarse en cuenta otros riesgos, como los riesgos de accidentes de transporte que involucren sustancias peligrosas y los desastres naturales. ▪ Como parte del proceso de planificación para casos de emergencia, debe existir una elaboración de los escenarios posibles y una identificación de los riesgos potenciales y las zonas geográficas donde es más probable que se produzcan los efectos en caso de accidente. ▪ El proceso de planificación para casos de emergencia debe incluir la evaluación de las posibles consecuencias ambientales de los accidentes, así como las posibles consecuencias para la salud. Esa evaluación debe tomar en cuenta la posibilidad de que ocurran efectos adversos como resultado de: contacto directo con sustancias tóxicas o irritantes; radiación térmica o presión excesiva; exposición indirecta (por ejemplo, mediante la ingestión de alimentos o agua contaminados); o lesiones indirectas (por ejemplo, por el derrumbe de estructuras, proyectiles o fuego). ▪ La planificación para casos de emergencia debe tomar en cuenta la situación especial de instituciones locales que quizás tengan poblaciones particularmente sensibles e infraestructura crítica, como escuelas, hospitales, hogares para adultos mayores y cárceles. ▪ La planificación para casos de emergencia debe considerar los posibles factores que obstaculizan y que pueden estar asociados con accidentes en instalaciones peligrosas, así como con factores que pueden dificultar la respuesta. Esos factores incluyen, por ejemplo, condiciones climáticas desfavorables, desastres naturales, pérdida de suministro de energía o de agua, problemas con los sistemas de comunicación y transporte, efectos sinérgicos de accidentes con sustancias múltiples, “efectos dominó” y sabotaje. ▪ Los planes de emergencia deben proporcionar la orientación necesaria para permitir una respuesta flexible a una variedad de situaciones posibles (de accidentes menores al peor de los casos). Un plan de emergencia no puede suministrar instrucciones preceptivas para la respuesta, ya que cada accidente tendrá características diferentes y, con frecuencia, involucrará una combinación de aspectos que pueden haberse pasado por alto durante el proceso de planificación. ▪ Durante el proceso de planificación para casos de emergencia, debe efectuarse una evaluación realista de las habilidades, los equipos y otros recursos existentes que se encuentren disponibles para un esfuerzo de respuesta, así como una evaluación de las habilidades, los equipos y otros recursos necesarios sobre la base de la variedad de los posibles escenarios de accidentes, incluso el peor de los casos. Esas evaluaciones permitirán descubrir qué habilidades, equipos y recursos adicionales son necesarios. ▪ Los planes de emergencia (dentro y fuera del sitio) deben identificar los roles y las responsabilidades de todas las partes interesadas y deben indicar la cadena de mando, las líneas de comunicación, la coordinación entre las partes y los medios para obtener la información, los recursos y los equipos necesarios. ▪ Como parte del proceso de planificación para casos de emergencia, debe garantizarse la disponibilidad de servicios médicos adecuados, que incluyan servicios de transporte. ▪ Todas las partes que participarán en un esfuerzo de respuesta para casos de emergencia (por ejemplo, bomberos, policías, profesionales de la salud) deben participar también en el proceso de planificación para casos de emergencia. Deben existir oportunidades a fin de que representantes del público ofrezcan aportes para el proceso de planificación para casos 179 de emergencia. Los representantes de los medios de comunicación también deben participar del proceso de desarrollo de los planes de emergencia. ▪ El personal de salud que pueda participar en una respuesta a emergencias que involucre sustancias peligrosas debe conocer las sustancias peligrosas que se producen, utilizan, transportan o manipulan en cantidades importantes en su comunidad. El personal médico/de la salud también debe ser consciente de los aspectos relevantes de los planes de emergencia locales y de su función dentro de esos planes. ▪ Todo el personal que participe en el proceso de respuesta a emergencias (entre ellos, por ejemplo, los primeros en responder como la policía, los bomberos y el personal de ambulancias) debe recibir capacitación e instrucción en forma continua a fin de garantizar que se mantengan alertas y listos para actuar frente a una variedad de contingencias. ▪ Los planes de emergencia dentro y fuera del sitio deben probarse y examinarse frecuentemente, actualizarse si corresponde y mantenerse al día tomando en cuenta, por ejemplo, cambios en las características de los riesgos, nuevos desarrollos residenciales y comerciales en la zona, mejoras en la tecnología y la capacidad de respuesta, lecciones aprendidas a partir de ejercicios o pruebas y de la aplicación de planes durante accidentes, cuasi accidentes y cambios de personal. ▪ Es fundamental probar los planes de emergencia a intervalos apropiados a fin de garantizar que sean adecuados, completos y realistas, y que los diversos planes aplicables en una misma zona (dentro y fuera del sitio) sean compatibles. La prueba también proporciona una medio para identificar vacíos o necesidades en cuanto a la disponibilidad de personal adecuado (que incluye las necesidades de capacitación), equipos, insumos e información. Además, la prueba aumenta la confianza del personal de respuesta para poder enfrentar las emergencias reales. ▪ Los individuos que participarán en caso de accidente deben participar también en las pruebas y los ejercicios. ▪ Realizar ejercicios o pruebas en un “entorno libre de culpa” (es decir, sin culpar por los errores o los problemas identificados) permite obtener el máximo beneficio. En ese caso, todos los participantes tienen la libertad de ser abiertos y sinceros en sus evaluaciones sin temer a las consecuencias. ▪ Todas las partes responsables deben garantizar que los recursos humanos, los equipos (que incluyen los equipos de comunicación y de protección personal) y los recursos financieros, así como otros recursos necesarios para llevar a cabo planes de emergencia, estén rápidamente disponibles para su activación inmediata en caso de accidente o amenaza inminente de accidente. ▪ Las autoridades públicas de las comunidades vecinas (dentro de un mismo país o entre países limítrofes) deben aunar recursos (incluso equipos, expertos, recursos relacionados con la salud y la información) a fin de optimizar el uso de las capacidades de respuesta. ▪ Deben establecerse mecanismos para brindar ayuda, por parte de comunidades vecinas u otras comunidades relacionadas dentro del mismo país o entre países limítrofes, en caso de que un accidente supere la capacidad de respuesta local. ▪ Las autoridades públicas deben garantizar que quienes responden en caso de emergencia tienen acceso a fuentes de información (como centros de información designados) capaces de suministrar la información necesaria en una emergencia para el diagnóstico, el 180 tratamiento y la rehabilitación de personas que hayan sufrido lesiones provocadas por sustancias peligrosas. ▪ Se debe contar con sistemas y procedimientos para la detección rápida de un accidente o una amenaza inminente de accidente y para la inmediata notificación del personal de respuesta a emergencias. ▪ El proceso de planificación para casos de emergencia debe incluir una elaboración de los métodos que se utilizarán para informar al público sobre qué se debe hacer en caso de emergencia y cómo se informará al público cuando ocurre un accidente. Deberá notificarse al público potencialmente afectado sobre los sistemas que se utilizarán para alertarlos en caso de emergencia, y los sistemas deben probarse con anticipación. ▪ Cuando reciben el alerta de un accidente con sustancias peligrosas, las autoridades de respuesta deben activar sus planes de emergencia, que incluyen los mecanismos para garantizar que se notifique e informe al público sobre las medidas que deben tomarse para minimizar las consecuencias adversas. ▪ Un plan de emergencia, aunque sea sólido en teoría, puede fallar en su aplicación por alguno de los siguientes motivos, entre otros: no tomar en cuenta la falta de información disponible en el momento del accidente; capacitación insuficiente, coordinación insuficiente; interrupciones en la comunicación; dificultades para reconocer las limitaciones de los individuos en situaciones de mucha tensión o un plan demasiado complejo o que exige demasiado de determinados individuos. 181 SG-4: Guía sobre aspectos de salud de accidentes con productos químicos A continuación se presentan algunos principios generales adicionales con respecto a los aspectos de salud de los accidentes con productos químicos de la publicación (de la OCDE Principios 35 Rectores para la Prevención, Preparación y Respuesta a Accidentes Químicos (2ª ed., 2003). El documento de la OMS titulado Manual for the Public Health Management of Chemical Incidents (2009), ofrece más orientación al respecto. En los siguientes puntos, el término “autoridades públicas” se utiliza para abarcar a los organismos gubernamentales de los diferentes niveles. Planificación para caso de emergencia – aspectos generales ▪ Las autoridades públicas deben identificar a todas las partes que se espera que participen en una respuesta en caso de emergencia como parte del desarrollo de un plan de emergencias fuera del sitio. Además, las funciones, los recursos y las capacidades de estos participantes deberán ser establecidas de forma realista y se deberán comprometer. Estos participantes deben incluir, entre otros, servicios médicos (incluso hospitales), servicios de bienestar, y organismos de salud pública y ambiental. ▪ Los planes de emergencia deben incluir información detallada para los miembros de los equipos de respuesta a emergencias sobre, entre otras cosas, cómo los distintos grupos de respuestas (que incluyen a personal de salud/médico) deben trabajar juntos, y cómo llevar a cabo la identificación, triaje y tratamiento inicial de las víctimas. ▪ La planificación para casos de emergencias debe tomar en cuenta el rango de posibles efectos sobre la salud (efectos agudos, efectos a largo plazo y efectos psicológicos) que pudieran resultar de accidentes con productos químicos, y las acciones de respuesta que se debieran tomar para tratar estos efectos en el personal de respuesta, los empleados y la comunidad. – – Se debiera tomar en cuenta que los efectos a la salud en las poblaciones expuestas pueden ser a corto plazo y / o a largo plazo. Los efectos adversos pueden aparecer inmediatamente o algún tiempo después del accidente. Dichos efectos pueden ser directos o indirectos. Los efectos psicológicos, no necesariamente relacionados con la exposición a las sustancias peligrosas, pueden aparecer durante o después del accidente. La planificación para casos de emergencia también debe tomar en cuenta mecanismos para reducir el estrés y proporcionar servicios de consejería para aquellas personas que son responsables por el manejo de la crisis y la comunicación. ▪ El proceso para la planificación en casos de emergencia deberá tomar en consideración la necesidad de proteger a los trabajadores de la salud de la exposición a las sustancias peligrosas. – – Dicha exposición podría resultar de tratar a las víctimas que no han sido debidamente descontaminadas o de exposición inesperada en el sitio debido a cambios en la dirección del viento, por ejemplo. El personal de salud normalmente no debiera entrar en áreas contaminadas, a manos que existan circunstancias excepcionales (por ejemplo, para triaje o procedimientos para salvar 35 Esta guía se deriva de: el IPCS, la OCDE, el PNUMA, la OMS (Publicación conjunta): Aspectos de la salud de los accidentes químicos – orientación en accidente de sensibilización química, preparación y respuesta para profesionales de la salud y el personal de respuesta (OCDE, Paris, 1994). 182 vidas). En estos casos, debieran estar totalmente protegidos y acompañados de personal de rescate, y no se les debe permitir que excedan los límites de exposición establecidos. ▪ Los hospitales y otras instalaciones de tratamiento, a quienes se les pudiera pedir ayuda durante la respuesta a un accidente que involucre sustancias peligrosas, deberán desarrollar planes de emergencia (coordinados con el plan local fuera del sitio). – – – Estos planes deben describir los sistemas/procedimientos para recibir y manejar grandes números de pacientes en determinado momento. Estos sistemas / procedimientos deben tratar, por ejemplo: triaje; arreglos para la identificación y documentación de pacientes y su posible descontaminación. Las autoridades públicas deben garantizar que estos planes estén establecidos y deben asistir en su desarrollo. ▪ La organización y la planificación de la respuesta relacionada a la salud en caso de accidentes debe involucrar a veterinarios, biólogos y a otras personas que están familiarizadas con el trabajo con ganado, mascotas y vida silvestre, con el fin de proteger a los animales y dar apoyo a sus dueños y a las personas que los cuidan. Capacitación ▪ La capacitación e instrucción de respuesta en caso de emergencias deberían permitirle al personal de respuesta que tome medidas adecuadas para minimizar los efectos adversos a la salud y al medio ambiente en caso de accidentes que involucren sustancias peligrosas. También les deberá permitir que mejoren su capacidad para recabar información concerniente a los efectos adversos posibles en la salud o el medio ambiente. – La capacitación e instrucción para dar respuesta en caso de emergencias debería, como mínimo, permitirle a los miembros de los equipos de respuesta rápida que se familiaricen con: ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ – – el (los) plan(es) local de emergencia; las instalaciones peligrosas en la comunidad, incluso los resultados de la evaluación de riesgo de estas instalaciones; la necesidad de adoptar medidas de protección cuando se responde a accidentes que involucran sustancias peligrosas, incluidos el uso de ropa y equipo de protección; las propiedades importantes de diferentes sustancias peligrosas en sus comunidades, y los medios para responder a accidentes que involucran dichas sustancias; los peligros de contaminación y procedimientos para la descontaminación; las medidas específicas de primeros auxilios; y los posibles efectos sicológicos adversos en las víctimas, personal de respuesta a emergencias y la población. El personal de salud deberá contribuir, según corresponda, a capacitar a aquellas personas fuera del sector de la salud quienes probablemente participen en actividades de respuesta en caso de emergencias. Debería haber capacitación y ejercicios conjuntos entre los actores que pudieran participar en la respuesta en caso de emergencias (que incluye, por ejemplo, a personal de respuesta y a personal de salud / médico). ▪ Las autoridades de la salud pública y la educación deberán asegurar la capacitación básica de todos los profesionales relevantes de la salud / médicos y paramédicos en los principios de la toxicología médica y la medicina en caso de emergencias. Esta capacitación e instrucción debería ser continua, con actualizaciones regulares, tomando en cuenta los cambios en los 183 planes y arreglos de emergencia, los riesgos que existen en la comunidad, los recursos disponibles y otros factores relevantes. Acceso a la información y experiencia profesional ▪ Las autoridades públicas deberán garantizar que el personal de respuesta en caso de emergencias tiene acceso a fuentes de información (tales como centros de información designados) capaces de proporcionar la información que se necesita en una emergencia para el diagnóstico, el tratamiento y la rehabilitación de personas lesionadas por sustancias peligrosas. – Estos centros u otras fuentes, deberán tener información sobre: ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ – – – – – – – las sustancias peligrosas involucradas en el accidente; primeros auxilios y tratamiento médico; instalaciones médicas y medios para transportar a las víctimas; cómo y cuándo comunicarse con los servicios básicos; la estructura de comando para la respuesta; y listas de expertos disponibles. Las autoridades públicas deberán determinar el mejor enfoque para garantizar el acceso a la información básica. Las fuentes de información pueden incluir centros especializados establecidos para organizar la obtención, recopilación y diseminación de información sobre planificación en caso de emergencia y respuesta, concerniente a la exposición de humanos a sustancias peligrosas, tales como Centros de Información sobre Venenos (PIC). También podrían incluir instituciones académicas, organizaciones industriales u otras fuentes. Se deberían mantener listas de fuentes de información en diferentes campos. Debería haber información disponible de las fuentes / centros de información designados las 24 horas del día, durante todo el año. Los representantes de las fuentes / centros de información deberían estar disponibles para participar o contribuir con el proceso para la planificación en caso de emergencias, según corresponda. Donde haya más de una fuente / centro de información designado en un país, deberían estar relacionados de forma adecuada. Se debería promover el trabajo en red entre las fuentes de información. Las fuentes / centros de información en diferentes países deberían compartir información y experiencia. Se debe mantener una lista actualizada de expertos nacionales e internacionales en varios campos relacionados con la preparación para casos de emergencia y respuesta. Además, debería haber una lista internacional de grupos de expertos que están disponibles para viajar a los países que requieren de asistencia en caso de una emergencia. 184 Acceso a recursos médicos ▪ ▪ Como parte del proceso para la planificación en caso de emergencia, debería haber una evaluación de los tipos de recursos médicos de emergencia que se necesitan para responder a los diferentes tipos de emergencias y a distintos tipos de víctimas fatales. Se deberá garantizar que las instalaciones médicas adecuadas están disponibles, incluidas las facilidades de transporte, así como el equipo de descontaminación para usar en el sitio y en el hospital y, según corresponda, equipo protector para personal médico de respuesta en caso de emergencias. – Las autoridades públicas, en cooperación con los hospitales e instalaciones de tratamiento, deberán establecer procedimientos de respaldo y sistemas para mover y tratar un gran número de víctimas en caso de que los hospitales y las instalaciones de tratamiento sean inadecuadas (por ejemplo, capacidad insuficiente o falta de instalaciones especializadas). – Con el fin de atender las necesidades de emergencia, se deben tomar medidas para la rápida transformación de instalaciones que normalmente se usan para otros propósitos. Por ejemplo, cuando el acceso a los hospitales es limitado, los predios alternativos tales como escuelas, instalaciones deportivas y tiendas de campaña deberán ser identificadas como lugares donde se pudiera dar atención médica temporal a las víctimas de un accidente. – Los planes de emergencia deberán indicar las medidas de protección que se debieran tomar en caso de que un hospital u otra instalación para tratamiento esté contaminado, o se vea amenazado de otra manera como resultado de un accidente (por ejemplo, la pérdida de electricidad, daños estructurales, o cuando el hospital está en dirección al viento en un derrame de sustancias peligrosas). ▪ Los hospitales / instalaciones de tratamiento deberán tomar las medidas necesarias para evacuar a los pacientes o para descontaminar en caso de que las instalaciones resulten contaminadas. ▪ Los hospitales también deber estar conscientes de que puedan tener que tomar precauciones especiales si tienen sustancias peligrosas en el sitio, o si reciben a pacientes contaminados. Como parte del proceso para la planificación de emergencias, se debe asegurar la disponibilidad de oxígeno, así como de antídotos actualizados y otras sustancias farmacéuticas necesarias para el tratamiento de personas afectadas por sustancias peligrosas. – Los antídotos y otras sustancias farmacéuticas deberán almacenarse de forma que permanezcan vigentes (por ejemplo, deberán ser debidamente almacenados y no deberán mantenerse una vez venza su vida útil recomendada). – Las autoridades públicas y la administración de instalaciones peligrosas deberán promover el desarrollo de antídotos eficaces para aquellas sustancias peligrosas que no tienen antídotos (o son insuficientes). ▪ Tanto las autoridades de la industria como las autoridades públicas deberán establecer mecanismos para facilitar la agrupación y / o el compartir recursos médicos en caso de un accidente (dentro de una comunidad, entre comunidades vecinas y entre países). Estos recursos médicos podrían incluir instalaciones, equipo, suministros, información y personal. 185 SG-5: Guía sobre conductos A continuación se presentan algunos principios generales adicionales con respecto a la seguridad de los conductos de la publicación de la OCDE Principios rectores para la prevención, preparación y respuesta a accidentes químicos 2ª ed., 2003. Para obtener más orientación se puede consultar el documento de la CEPE/ONU titulado: Prevention of Accidental Water Pollution – Safety Guidelines and Good Practices for Pipelines, presentado por el Grupo de expertos conjunto sobre agua y accidentes industriales (2006). Mientras que la Guía contenida en este Marco Flexible generalmente se aplica a conductos, este documento trata sobre preocupaciones especiales con respecto a los conductos que transportan sustancias peligrosas. Para los propósitos de esta publicación, los conductos se definen de forma que incluyan las instalaciones auxiliares, tales como las estaciones de bombeo y de compresión. Los enfoques normativos a los conductos difieren significativamente entre países aunque existan elementos comunes en la mayoría de los enfoques (incluso una obligación general de operar con seguridad). No obstante las diferencias en los enfoques normativos, la industria pareciera tener prácticas de seguridad similares en distintos países a fin de mantener la integridad de las redes de conductos. ▪ Los conductos para transportar sustancias peligrosas deberían ser diseñados, construidos, operados, mantenidos y monitoreados para reducir la frecuencia de los accidentes y mitigar las consecuencias de los accidentes que sí ocurren. - • Los conductos deberían ser diseñados, construidos y operados de conformidad con códigos, normas y orientación reconocidos a nivel nacional e internacional, así como con especificaciones de compañías. - • Se debe tomar en cuenta varios aspectos que podrían tener un impacto en la seguridad de un conducto, incluso, por ejemplo, factores de diseño y estrés, calidad del material, el grosor las paredes, la profundidad del conducto en la tierra, la protección contra el impacto en el exterior, las marcas, la selección de la ruta y el monitoreo. - • Se debiera hacer una evaluación comparativa de los riesgos a fin de escoger entre diferentes materiales y otras opciones. - • Los conductos deberían ser construidos con los materiales más adecuados que estén disponibles para garantizar su integridad inicialmente y durante su ciclo de vida. Se debería utilizar la debida tecnología de seguridad tales como sistemas de cierre automático (en caso de un escape o accidente) o sistemas de escape de seguridad. - • Se deben instalar signos de seguridad adecuados a lo largo de la ruta del conducto. ▪ Se deben tomar en cuenta consideraciones y evaluaciones de riesgo para la planificación del uso del suelo tanto en la ruta que tendrán los nuevos conductos (por ejemplo, para limitar la proximidad a las áreas pobladas en la medida de lo posible), y en decisiones concernientes a las propuestas para nuevas obras/construcciones en la proximidad de los conductos existentes. - • También se debe tomar en consideración el estudio de impacto ambiental para los peligros geológicos a fin de evitar (en la medida de lo posible) ambientes geológicos peligrosos, tales como áreas susceptibles a hundimientos y actividad sísmica. - • Se debe escoger la ruta de los conductos con el fin de minimizar los impactos adversos en caso de un accidente, y facilitar el acceso al mantenimiento y al personal de respuesta en caso de emergencia. 186 La industria debe desarrollar sistemas de gestión de seguridad para cumplir con los objetivos de seguridad durante el diseño, la construcción, la operación, el mantenimiento y el desmantelamiento de los conductos. – Los elementos de los sistemas de gestión de seguridad para los conductos incluyen: objetivos y políticas claras; una organización adecuada con definiciones claras sobre la propiedad de activos y responsabilidades relacionadas; personal competente y educación y capacitación eficaz; normas y procedimientos adecuados; monitoreo del desempeño y procedimientos de auditoría/análisis apropiados para identificar deficiencias y hacer correcciones; procedimientos de respuesta en caso de emergencia, que son probados y examinados regularmente e investigaciones de accidentes. – • La industria debe seguir compartiendo sus experiencias con respecto al uso de los sistemas de gestión de seguridad para conductos, y mejorar la eficacia de los elementos/técnicas individuales de estos sistemas, con el fin de reducir aún más los accidentes de conductos. ▪ La integridad de los conductos se deberá mantener mediante el mantenimiento, la inspección y monitoreo adecuado y una gestión cónsona. – – – – Los medios para la inspección y el monitoreo incluyen el uso de “dispositivos inteligentes” (dispositivos que son insertados dentro del conducto y viajan a lo largo del mismo gracias al flujo del producto), el patrullaje y la vigilancia aérea. Además del mantenimiento regular, el objetivo del mejoramiento continuo en el desempeño de la seguridad se puede lograr con la inspección y el monitoreo, un intercambio más amplio de información entre los operadores, tomando en cuenta las lecciones aprendidas de los incidentes reportados, y la utilización de nuevas tecnologías y otros adelantos. A medida que los conductos envejecen, es posible que se requieran de más monitoreo para seguir asegurando su integridad. Se debe tener en cuenta la revisión y revalidación de los conductos y sus condiciones operativas una vez que lleguen al final de la vida para la cual fueron originalmente diseñados. Debe haber políticas establecidas para reemplazar los conductos o partes de los mismos, que probablemente no cumplan con las normas de seguridad o hayan llegado al límite de su vida útil. ▪ Mientras los principios generales que se aplican a la planificación en caso de emergencia para instalaciones peligrosas también se aplican a los conductos, pudiera ser necesario hacer mayores esfuerzos, tomando en cuenta la situación específica de los conductos que incluyen, por ejemplo, los peligros asociados con la sustancia que transportan. – – La planificación para casos de emergencia para conductos pudiera ser complicado debido a algunas de sus características que incluyen, por ejemplo: el hecho de que los conductos normalmente no cuentan con operadores; la longitud y ubicación de los conductos; la necesidad de poder cerrar o despresurizar el flujo de materiales; y la necesidad de garantizar el acceso al personal de respuesta en caso de emergencia. Además, se debe tomar en cuenta las obras cercanas. Por ejemplo, cuando los conductos cruzan o corren paralelos a las líneas del ferrocarril, es importante tener conocimiento de los planes/planos de la industria ferroviaria. La planificación en caso de emergencia deberá tomar en cuenta una evaluación de riesgo del sistema de conductos. 187 – A la luz de estas complejidades, es importante obtener opiniones del personal de respuesta en caso de emergencias cuando se preparan, analizan y revisan los planes de emergencia relacionados con los conductos. La industria responsable de los conductos deberá revisar y, según sea necesario, desarrollar y aplicar sistemas para reducir la conexión de terceras partes, en vista de que ésta es una causa principal de accidentes. – • Esto deberá hacerse en cooperación con las autoridades públicas en todas las regiones / países. – • Los sistemas para reducir la interferencia de terceras partes involucran garantizar que la debida información se circula entre las partes interesadas concerniente a las ubicaciones de los conductos en una determinada área. Además, es importante facilitar la comunicación entre el operador del conducto y terceras partes, así como de los sistemas de una sola llamada que proporcionan información sobre conductos en una fuente bien conocida. Para facilitar el aprendizaje a partir de la experiencia, la industria responsable de los conductos (así como las autoridades públicas y otros actores) deben mejorar la manera de compartir la información sobre cómo mejorar la seguridad de los conductos y sobre historias de casos de accidentes / cuasi accidentes. – – – Esto deberá incluir información sobre los conductos que llegan al final de su vida útil o para la cual fueron diseñados. Las opciones para tratar con conductos que ya no están en uso incluyen la remoción, el abandono total o el abandono con acciones adicionales. Se debe tener cuidado en evaluar debidamente los riesgos asociados de cada opción, de forma individual, reconociendo que la mejor solución en una situación en particular pudiera ser una combinación de métodos. La información también debería ser agrupada y compartida con respecto al alcance de los sistemas de conductos, la cantidad de materiales que transportan, y el análisis estadístico en cuanto al uso de los conductos para transportar sustancias peligrosas. Se debiera recabar información y ponerla a disposición para que se conozca la relación entre la falla y las características del conducto, a fin de comprender mejor la naturaleza y las causas de los accidentes (por ejemplo, la edad, el tamaño, la ubicación y la construcción del conducto). 188 SG-6: Guía sobre investigación de accidentes A continuación se presentan algunos principios generales adicionales con respecto a las investigaciones de accidentes (Principios rectores de la OCDE para la prevención, la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos (2ª ed., 2003). Una investigación debería ser una actividad para encontrar los hechos y aprender de la experiencia, no un ejercicio para hallar a los culpables o atribuirle responsabilidad a alguien. Aquellos que participan en ella deben ser asegurados sobre esto. Debe haber una cooperación total entre el personal operativo en la instalación y aquellos involucrados en la investigación. El énfasis en llevar a cabo las investigaciones debiera radicar en la identificación de las causas subyacentes (algunas veces llamada la causa “fundamental”) en una cadena de eventos que conducen a un accidente, las lecciones que deben ser aprendidas, y formas de impedir accidentes similares en el futuro. La investigación no debería estar limitada a determinar la causa(s) inmediata o aparente. Se debiera reconocer que los accidentes por lo general son la etapa final de una larga secuencia de eventos en los cuales hay un interacción compleja entre defectos técnicos, errores humanos y una organización / gestión insuficiente. Donde hay “errores humanos”, la causa no debería ser registrada de manera tan sencilla. Los investigadores más bien deberían determinar exactamente qué elementos contribuyeron a cualquier error humano. Tales elementos podrían incluir, por ejemplo, aburrimiento, estrés, exceso de trabajo o capacitación insuficiente. Otras causas fundamentales podrían ser: que el sistema no era lo suficientemente tolerante a errores; los procedimientos no estaban disponibles por escrito o no estaban actualizados; los procedimientos no eran realistas, creaban circunstancias difíciles o requerían acciones ilógicas por parte del operador; la ergonomía del diseño del sistema / tecnología era pobre; el diseño del proceso no le proporcionaba al operador con suficientes datos o le proporcionaba demasiados datos para esperar una respuesta adecuada; la dotación de personal era insuficiente; había presión indebida sobre el operador o el gerente para sacrificar la seguridad por mayor productividad; o una reorganización o un cambio en el personal no se manejó debidamente. Los errores humanos no se limitan a errores del operadores sino que pueden ocurrir en distintos puntos en la jerarquía de la empresa, incluso, por ejemplo, a nivel de aquellos responsables por el mantenimiento, la gestión del cambio o los permisos a los sistemas de trabajo, o a nivel de los supervisores y la administración. Los ejemplos de fallas humanas, además de errores del operador pueden involucrar: problemas con la transmisión del conocimiento, especialmente cuando se jubilan los especialistas con experiencia; la complejidad del sistema, inclusive el diseño e ingeniería del proceso; el envejecimiento de las plantas y las reparaciones relacionadas, sin el debido mantenimiento e inspección; y la necesidad de lidiar con los cambios en la organización o la tecnología, incluso la automatización. El procedimiento de las investigaciones para determinar la causa fundamental de los accidentes debería ser sistemático, minucioso y justo. Los procedimientos deben consistir de cuatro fases principales: – • La primera fase es antes de que se tenga acceso al lugar del accidente, cuando se pueden tomar una serie de pasos para adelantar la investigación, incluidos: la organización del equipo de investigación; la entrevista de testigos; la organización del sistema de información y rastreo; la organización de listas de factores que podrían haber 189 influenciado el evento; el desarrollo de la lista preliminar de escenarios; la coordinación con el equipo de respuesta en caso de emergencias para garantizar la preservación de las pruebas; llevar a cabo las investigaciones fuera de las áreas restringidas; la preparación para grandes volúmenes de información; y la toma de fotografías aéreas. – • La segunda fase consiste de la visita inicial al sitio, cuando resulta importante documentar la condición del lugar, revisar los planes de la investigación e identificar las pruebas en las que el factor tiempo es crucial. – La tercera fase se da durante una investigación que se está llevando a cabo, cuando se concentran en la recuperación de las pruebas, la reconstrucción, el análisis, las pruebas y la simulación de escenarios, y cuando se afirman o niegan sistemáticamente los escenarios. – La cuarta fase involucra la preparación del informe de la investigación y las recomendaciones, que deberían concluir de manera oportuna para evitar demoras en la aplicación de las mejoras. ▪ Al diseñar y aplicar las investigaciones de causas fundamentales, se deben hacer esfuerzos por tratar las posibles limitaciones o retos para llevar a cabo investigaciones eficaces, tales como: – • la destrucción o deterioro de las pruebas debido a la posible distorsión de la memoria de los testigos a largo del tiempo, y el hecho de que la investigación se da durante circunstancias estresantes y puede durar por varios meses; – • la limitación de posibles escenarios examinados, y por consiguiente, sesgar la obtención de las pruebas para tratar de equipararlas con los escenarios escogidos; – • leyes diseñadas para promover el acceso público a la información, así como leyes para proteger la información empresarial confidencial, lo cual puede representar obstáculos en la recopilación e intercambio de pruebas relevantes; – • restricciones debido a recursos financieros o humanos limitados, relativos a la complejidad de la investigación; falta de confianza entre las partes involucradas; – • problemas de responsabilidad; y – • acciones tomadas para hacer que el sitio sea seguro. ▪ El uso de una base de datos de computadora para almacenar los elementos clave de los incidentes puede facilitar su análisis. Se pueden resaltar tendencias particulares y se pueden usar datos históricos en forma proactiva en la prevención de accidentes, por ejemplo al orientar la capacitación de seguridad a fin de evitar el tipo de incidentes que han ocurrido. 190 Anexo I: Definición de términos Las definiciones a continuación son solamente para fines de esta Guía. No debieran ser considerados como definiciones acordadas. Salvo que se indique lo contrario, se han tomado de los Principios rectores de la OCDE sobre la prevención, la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos (2ª edición, 2003). Otros documentos internacionales y diversos países pueden definir estos términos de diferentes maneras. Cada país debe decidir cómo definir los términos en sus leyes, políticas y programas, a la luz de su contexto jurídico y cultural. Accidente o accidente con productos químicos: Cualquier acontecimiento imprevisto (tales como derrames, emisiones, incendio o explosión) que involucre sustancias peligrosas que causan o pueden causar daño a la salud, el medio ambiente o la propiedad. Esto excluye todos los acontecimientos a largo plazo (como la contaminación crónica). Ejemplos de tipos de accidentes con productos químicos: Explosión: Liberación violenta de energía como resultado de una reacción química rápida. Fuego: Combustión de un material con generación de calor, luz, humo, etc. Fuga: Pérdida de gas, líquido o sólido que surge de un defecto en un recipiente o en un conducto. Derrame: Liberación involuntaria de gas, líquido o sólido de un contenedor o un conducto indemne. Accidente transfronterizo: Accidente que involucra sustancias peligrosas, que se produce en una jurisdicción y provoca consecuencias (efectos) sanitarias o ambientales adversas, o tiene el potencial para provocar esas consecuencias en otra jurisdicción (dentro de un mismo país o más allá de las fronteras nacionales). Actor: Todo individuo, grupo u organización que participe, esté interesado o se vea potencialmente afectado por la prevención, la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos. Análisis del peligro: Identificación de los peligros individuales de un sistema, determinación de los mecanismos por los cuales esos peligros pueden provocar acontecimientos no deseados y evaluación de las consecuencias de esos acontecimientos para la salud (incluso la salud pública), el medio ambiente y la propiedad. Autoridades públicas: Organismos gubernamentales del ámbito nacional, regional, local e internacional. Causa fundamental: La razón principal que lleva a un acto o estado inseguro y que tiene como resultado un accidente o cuasi accidente. En otras palabras, una causa fundamental es una causa que, si fuera eliminada, evitaría que el escenario avance hacia un accidente. Entre las causas fundamentales se pueden incluir, por ejemplo, las deficiencias en los sistemas de gestión que llevan a un diseño o un mantenimiento defectuoso, o que provocan una selección de personal inadecuada. 191 Comunidad(es): Individuos que viven o trabajan cerca de instalaciones peligrosas que pueden verse afectados en caso de que ocurra un accidente con productos químicos. Comunicación del riesgo: Intercambio de información o diálogo entre los actores sobre cuestiones relacionadas con la prevención, la preparación y la respuesta a accidentes con productos químicos, que incluye, por ejemplo: riesgos sanitarios y ambientales y su importancia; políticas y estrategias orientadas a la gestión de los riesgos y la prevención de accidentes; y medidas que deben tomarse para mitigar los efectos de un accidente. A los efectos del presente documento, la comunicación del riesgo incluye el diálogo y el intercambio de información entre el público, las autoridades públicas, la industria y demás actores. Conducto: Tubería, generalmente cilíndrica, por la que fluye una sustancia peligrosa de un punto a otro. A los efectos de la presente publicación, los conductos incluyen todos los establecimientos auxiliares como las estaciones de bombeo y compresión. Conexión de transporte: Áreas fijas (identificadas) donde las sustancias peligrosas (mercancías peligrosas) se transfieren de un modo de transporte a otro (por ejemplo, por carretera a ferrocarril, o buque a conducto); dentro de un mismo modo de transporte, de un equipo a otro (por ejemplo, de un camión a otro); de un modo de transporte a una instalación fija o de la instalación a un modo de transporte; o se almacenan en forma temporaria durante la transferencia entre modos de transporte o equipos. Por consiguiente, la conexión de transporte implica, por ejemplo, operaciones de carga y descarga, establecimientos de transferencia, retención o mantenimiento temporario de sustancias peligrosas durante la transferencia de la carga (por ejemplo, almacenamiento), y la manipulación de vehículos dañados o mercadería derramada. Entre los ejemplos se incluyen: centros ferroviarios de clasificación, zonas portuarias, dársenas de recepción o carga en instalaciones peligrosas, terminales para carreteras y para transporte intermodal entre carretera y ferrocarril, aeropuertos y establecimientos de transferencia en instalaciones fijas. Consecuencia: Resultado de un evento específico. Cuasi accidente: Cualquier acontecimiento imprevisto que, de no haber sido por los efectos de mitigación de los sistemas o procedimientos de seguridad, podría haber provocado un daño a la salud, el medio ambiente o la propiedad, o podría haber significado una pérdida de contención que posiblemente provocara efectos adversos que involucraran sustancias peligrosas. Empleado: Todo individuo que trabaje en una instalación peligrosa o por cuenta y orden de una instalación 36 peligrosa pero no es parte de la administración. Eso incluye a los (sub)contratistas. 36 Esta Guía usa el término “trabajadores” donde los Principios rectores de la OCDE usa el término “trabajo”. 192 Empresa: Compañía o sociedad (incluso sociedades transnacionales) cuya operación supone la producción, el procesamiento, la manipulación, el almacenamiento, el uso y/o la disposición de sustancias peligrosas. Establecimientos de almacenamiento: Depósitos, áreas de tanques y otros establecimientos que contienen sustancias peligrosas. Evaluación del riesgo: Juicio de valor informado sobre la importancia de un riesgo, identificado mediante un análisis del riesgo, tomando en cuenta todos los criterios pertinentes. Gestión de riesgos: Acciones tomadas para lograr o mejorar la seguridad de una instalación y su operación. Informe de seguridad: Presentación por escrito de la información técnica, administrativa y operativa sobre los peligros de una instalación peligrosa y su control a favor de una justificación para la seguridad de la instalación. Instalación peligrosa: Planta o sitio industrial fijo en donde se producen, procesan, manipulan, almacenan, usan o desechan sustancias peligrosas, en formas y volúmenes que presentan un riesgo de accidente que involucre sustancia(s) peligrosa(s) y que puede provocar un daño grave a la salud humana o al medio ambiente, incluso a la propiedad. Peligro: Propiedad inherente de una sustancia, un agente una fuente de energía o una situación que tiene el potencial para provocar consecuencias no deseadas. Plan de preparación para casos de emergencia (o) plan de emergencia: Plan formal escrito que, sobre la base de accidentes potenciales identificados junto con sus consecuencias, describe cómo deben manejarse tales accidentes y sus consecuencias, ya sea dentro o fuera del sitio. Planificación de uso de suelo: Consta de diversos procedimientos para lograr tanto la zonificación general como la planificación física, así como la toma de decisiones caso por caso con respecto al establecimiento de una instalación o de otros desarrollos. Presencia de sustancia peligrosa: La presencia real o anticipada de una sustancia en una instalación o la presencia de aquellas sustancias que se cree que pueden ser generadas durante una pérdida de control de un proceso químico industrial, en cantidades iguales o superiores a las de los umbrales establecidos (esto se basa en la Directiva Seveso II). 193 Probabilidad: La posibilidad de que un hecho considerado tenga lugar. Productor(es) (de productos químicos): Empresas que fabrican o formulan productos químicos (incluso productos químicos básicos y especialidades, productos de venta libre, agroquímicos, petroquímicos y fármacos). Programa de accidentes químicos: Abarca una recopilación de leyes, reglamentos, políticas, guías y otros instrumentos desarrollados por un país para tratar los diferentes aspectos de la prevención, preparación, respuesta y recuperación en caso de accidentes con productos químicos. Estos pueden ser administrados por distintas autoridades a nivel nacional, regional, y/o local. (Nota: esta definición fue desarrollada para esta Guía.) Propietario/operador: Todo individuo o persona jurídica (pública o privada) con responsabilidad para la toma de 37 decisiones de una instalación (incluso la administración). Razonablemente factible: Todo aquello que sea posible sujeto a la salvedad de que los costos de las medidas supuestas no sean extremadamente desmesurados en relación con el valor de los beneficios obtenidos a partir de tales medidas. Riesgo: Combinación de una consecuencia y la probabilidad de que ocurra. Sistema de gestión de la seguridad: Parte del sistema general de gestión de una empresa que incluye la estructura organizativa, las responsabilidades, las prácticas, los procedimientos, los procesos y los recursos para determinar e implementar una política de prevención de accidentes con productos químicos. Normalmente, el sistema de gestión de seguridad aborda una serie de temas que incluyen, entre otros: organización y personal; identificación y evaluación de peligros y riesgos; control operativo; gestión del cambio; planificación para casos de emergencia; desempeño del monitoreo; auditoría y análisis. Sustancia peligrosa: Elemento, compuesto, mezcla o preparación que constituye un peligro, en virtud de sus propiedades químicas, físicas o (eco) toxicológicas. Entre las sustancias peligrosas también se incluyen las sustancias que no se consideran peligrosas normalmente pero que, en circunstancias específicas (por ejemplo, incendio, reacciones fuera de control), reaccionan con otras sustancias u otras condiciones de operación (temperatura, presión) para generar sustancias peligrosas. Zona portuaria: El área territorial y marítima establecida por ley. (Nota: algunas zonas portuarias pueden superponerse. Los requisitos legales deben considerar esa posibilidad). 37 Ésta es la definición de la OCDE para gestión. 194 Anexo II: Siglas Este Anexo consta de dos partes: La Parte A contiene las siglas generales relacionadas con la prevención y preparación en caso de accidentes con productos químicos. La Parte B contiene las siglas de las agencias y organizaciones internacionales a las que hace referencia esta Guía. La Bibliografía también contiene una lista de organizaciones y sus sitios Web. a. Siglas generales APELL: Awareness and Preparedness for Emergencies at the Local Level (UNEP) Concientización y preparación para emergencias a nivel local (PNUMA) (www.unep.fr/apell) BLEVE: Boiling liquid expanding vapour explosion Explosión por la expansión de vapores de los líquidos en ebullición CNG: Compressed natural gas Gas natural comprimido GHS: The Globally Harmonized System of Classification and Labelling of Chemicals SGA: Sistema Globalmente Armonizado de Clasificación y Etiquetado de Productos Químicos HAZOP: Hazard and operability studies Estudios para el análisis del peligro y la operabilidad LNG: Liquefied natural gas GNL: Gas natural licuado LPG: Liquefied petroleum gas GLP: Gas licuado de petróleo RMP: Risk Management Plan (US EPA) (www.epa.gov/emergencies) Plan de Gestión de Riesgos de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos SAICM: Strategic Approach to International Chemicals Management (www.saicm.org) Enfoque Estratégico para la Gestión de las Sustancias Químicas a Nivel Internacional SMEs: Small and medium-sized enterprises 195 PyME: Pequeñas y medianas empresas SMS: Safety Management Systems SGS: Sistemas de Gestión de la Seguridad SPI: Safety Performance Indicators IDS: Indicadores de Desempeño de la Seguridad TDG: Transport of Dangerous Goods (UNECE) (http://www.unece.org/trans/danger/danger.htm) Transporte de Materiales Peligrosos (CEPE/ONU) UVCE: Unconfined vapour cloud explosion Explosión de nube de vapor no confinada VCE: Vapour cloud explosion Explosión de nube de vapor b. Siglas de organizaciones a las que se hace referencia en esta Guía ADPC: Asian Disaster Preparedness Centre (http://www.adpc.net/v2007/) Centro Asiático de Preparación para Desastres CCPS: Center for Chemical Process Safety (http://www.aiche.org) Centro para la Seguridad del Proceso Químico CETEM/CYTED: Centre for Mineral Technology/Latin American Science and Technology Development Programme (http://cyted.org/) (www.cetem.gov.br) (Centro de Tecnología Mineral/Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo) EC: European Commission (http://ec.europa.eu) (http://ec.europa.eu/environment/seveso) Véase también MAHB CE: Comisión Europea EPA: Environmental Protection Agency (US) (www.epa.gov/emergencies) Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos 196 EPSC: European Process Safety Centre (www.epsc.org) Centro Europeo para la Seguridad del Proceso EU: European Union (http://europa.eu) UE: Unión Europea IMOC: Inter-Organization Programme for the Sound Management of Chemicals (www.who.int/iomc) Programa Interinstitucional de Gestión Racional de los Productos Químicos IATA: International Air Transport Association (http://www.iata.org) Asociación Internacional de Transporte Aéreo ICAO: International Civil Aviation Organization (http://www.icao.int/) Organización Internacional de Aviación Civil ICCA: International Council of Chemical Associations (http://www.icca-chem.org/) Consejo Internacional de Asociaciones Químicas ICMM: The International Council on Mining and Metals (www.icmm.com) Consejo Internacional de Minería y Metales IchemE: Institution of Chemical Engineers (http://cms.icheme.org) Institución de Ingenieros Químicos IFCS: Intergovernmental Forum on Chemical Safety (http://www.who.int/ifcs/en/) Foro Intergubernamental sobre Seguridad Química IPCS: International Programme on Chemical Safety (www.who.int/pcs) Programa Internacional sobre Seguridad Química ILO: International Labour Organization (www.ilo.org) OIT: Organización Internacional del Trabajo 197 ISO: International Organization for Standardization (www.iso.org) Organización Internacional para la Normalización JEU: Joint UNEP/OCHA Environment Unit (http://ochaonline.un.org/ochaunep/) Unidad Ambiental Conjunta del PNUMA/OCAH JRC: Joint Research Centre (EC) (www.jrc.ec.europa.eu) Centro de Investigación Conjunta (CE) MAHB: Major Accident Hazards Bureau (http://mahb.jrc.ec.europa.eu/) Oficina de Riesgos de Accidentes Graves MSB: Swedish Civil Contingencies Agency (http://www.msb.se/en/) (Myndigheten för samhällsskydd och beredskap) Agencia Sueca de Contingencia Civil OCHA: United Nations Office for the Coordination of Humanitarian Affairs (http://ochaonline.un.org) OCAH: Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios OECD: Organisation for Economic Co-operation and Development (www.oecd.org/ehs) OCDE: Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico UN: United Nations (www.un.org) ONU: Organización de las Naciones Unidas UNECE: UN Economic Commission for Europe (www.unece.org) (www.unece.org/env/teia) CEPE/ONU: Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa UNEP: United Nations Environment Programme (www.unep.org) PNUMA: Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente UNEP DTIE: UNEP Division of Technology, Industry and Economics (www.unep.fr) DTIE PNUMA: División de Tecnología, Industria y Economía del PNUMA 198 UNIDO: United Nations Industrial Development Organization (www.unido.org) ONUDI: Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial UNITAR: United Nations Institute for Training and Research (http://www.unitar.org/) Instituto de las Naciones Unidas para la Formación Profesional e Investigaciones WHO: World Health Organization (www.who.int) OMS: Organización Mundial de la Salud 199 Anexo III: Listas de sustancias químicas de interés Este Anexo contiene copias de las listas de sustancias con sujeción a los programas en caso de accidentes con productos químicos de: a. Directiva Seveso II (Unión Europea) que también se utiliza como base para el Convenio de la CEPE/ONU b. Programa de Gestión de Riesgos de los Estados Unidos; c. Ordenanza Suiza sobre protección contra los accidentes mayores; y 38 d. Ley de Seguridad Industrial y Salud de Corea. a. Unión Europea: LISTA DE SUSTANCIAS QUÍMICAS y UMBRALES Directiva Seveso II ANEXO I: APLICACIÓN DE LA DIRECTIVA Introducción 1. El presente Anexo se aplica a la presencia de sustancias peligrosas en todo establecimiento, con arreglo a lo dispuesto en el artículo 3 de la presente Directiva, y determina la aplicación de los artículos correspondientes. 2. Las mezclas y preparados se tratarán del misma modo que las sustancias puras siempre que se ajusten a los límites de concentración establecidos con arreglo a sus propiedades según las Directivas correspondientes indicadas en la Nota 1 de la Parte 2, o a la última adaptación al avance técnico, a menos que se indique específicamente una composición porcentual u otra descripción. 3. Las cantidades que se indican a continuación como umbral se refieren a cada establecimiento. 4. Las cantidades a tener en cuenta para la aplicación de los artículos pertinentes son las cantidades máximas que estén presentes, o puedan estarlo, en un momento dado. Para el cálculo de la cantidad total presente no se tendrán en cuenta las sustancias peligrosas existentes en un establecimiento únicamente en una cantidad igual o inferior al 2 % de la cantidad indicada como umbral, si su ubicación dentro del establecimiento es tal que no puede llegar a provocar un accidente grave en ningún otro lugar del establecimiento. 5. Las normas que figuran en la Nota 4 de la Parte 2, que regulan la adición de sustancias peligrosas o categorías de sustancias peligrosas, serán de aplicación cuando sea conveniente. 6. A los efectos de la presente Directiva, se entiende por gas cualquier sustancia que tenga una presión de vapor absoluta igual o superior a 101,3 kPa a una temperatura de 20º C. 7. A los efectos de la presente Directiva, se entiende por líquido cualquier sustancia que no se haya definido como gas y que no esté en estado sólido a una temperatura de 20º C y a una presión estándar de 101,3 kPa. 38 Debido a que la ley coreana no está disponible en inglés, solamente se incluye una tabla que contiene químicos de interés, mientras que el lenguaje que se relaciona en el texto de la ley no ha sido traducido. 200 Parte 1: Relación de sustancias En caso de una sustancia o grupo de sustancias enumeradas en la Parte 1 corresponda también a una categoría de la Parte 2, deberán tenerse en cuenta las cantidades umbral indicadas en la Parte 1. Columna 1 Sustancias peligrosas Nitrato de amonio (véase nota 1) Nitrato de amonio (véase nota 2) Nitrato de amonio (véase nota 3) Nitrato de amonio (véase nota 4) Nitrato de potasio (véase nota 5) Nitrato de potasio (ver nota 6) Bromo Cloro Compuestos de níquel en forma de polvo inhalable (monóxido de níquel, dióxido de níquel, sulfuro de níquel, disulfuro de triníquel, trióxido de diníquel) Etilenimina Flúor Formaldehído (concentración ≥ 90 %) Hidrógeno Cloruro de hidrógeno (gas licuado) Alquilos de plomo Gases licuados extremadamente inflamables (incluye GLP) y gas natural Acetileno Óxido de etileno Óxido de propileno Metanol 4, 4-Metilenbis (2-cloroanilina) y/o sales, en forma de polvo Isocianato de metilo Oxígeno Diisocianato de toluileno Dicloruro de carbonilo (fosgeno) Trihidruro de arsénico (arsina) Trihidruro de fósforo (fosfina) Dicloruro de azufre Trióxido de azufre Policlorodibenzofuranos y policlorodibenzodioxinas (incluye TCDD), calculados en equivalente TCDD Las siguientes sustancias CANCERÍGENAS en concentraciones mayores al 5% por peso: 4- Aminobifenilo y/o sus sales, Triclorome-tilbenceno, Bencidina y/o sales, Éter bis (clorometílico), Éter clorometil-metilo, 1,2-Dibromoetano, Sulfato de dietilo, Sulfato de dimetilo, Cloruro de dimetilcarbamoilo, 1,2- Dibromo3-cloropropano, 1,2-Dimetilhidracina, Dimetilnitrosamina, Hexametiltriamida fosfórica, Hidracina, 2- Naftilamina y/o sales, 4-Nitrodifenilo, y 1,3 Propanosultona Columna 2 Columna 3 Cantidad umbral (en toneladas) para la aplicación de: Artículos 6 y 7 Artículo 9 5,000 10,000 1,250 5,000 350 2,500 10 50 5,000 10,000 1,250 5,000 20 100 10 25 - 1 10 10 5 5 25 5 20 20 50 50 250 50 50 200 5 5 5 500 50 50 50 5000 - 0.01 200 10 0.3 0.2 0.2 1 15 0.15 2,000 100 0.75 1 1 1 75 - 0.001 0.5 2 201 Productos del petróleo: (a) gasolinas y naftas, (b) querosene (incluye aerokerosenes), (c) gasoils (incluyen combustibles diesel, fuel oil doméstico y gas oil como lubricante para mezclas) 2,500 25,000 NOTAS 1. Nitrato de amonio (5,000/10,000): abonos susceptibles de autodescomposición Se aplica a los abonos compuestos y complejos de base de nitrato de amonio (los abonos compuestos y complejos que contienen nitrato de amonio con fosfato y/o potasa) cuyo contenido de nitrógeno debido al nitrato de amonio represente: ▪ entre el 15,75 % (1) y el 24,5 % (2) en peso, y que o bien contengan un máximo de 0,4 % en total de materiales combustibles u orgánicos, o bien cumplan los requisitos del Anexo II de la Directiva 80/876/CEE, y ▪ el 15,75 % (3) o menos en peso y con materiales combustibles no sujetos a restricciones, y que sean susceptibles de autodescomposición según el ensayo con cubeta de las Naciones Unidas (véase Recomendaciones de las Naciones Unidas sobre el Transporte de Mercancías Peligrosas: Manual de Pruebas y Criterios, parte III, punto 38.2). 1 ( ) Contenido de 15.75% de nitrógeno en peso como resultado de nitrato de amonio corresponde a 45% de nitrato de amonio. 2 ( ) Contenido de 24.5% de nitrógeno en peso como resultado de nitrato de amonio corresponde a 70% de nitrato de amonio. 3 ( ) Contenido de 15.75% de nitrógeno en peso como resultado de nitrato de amonio corresponde a 45% de nitrato de amonio. 2. Nitrato de amonio (1,250/5,000): calidad para abonos Se aplica a los abonos simples a base de nitrato de amonio y a los abonos compuestos y complejos a base de nitrato de amonio cuyo contenido de nitrógeno debido al nitrato de amonio sea: ▪ superior al 24.5% en peso, salvo las mezclas de nitrato de amonio con dolomita, piedra caliza y/o carbonato cálcico de una pureza del 90% como mínimo; ▪ superior al 15.75% en peso para las mezclas de nitrato de amonio y sulfato de amonio; y ▪ superior al 28% (4) en peso para las mezclas de nitrato de amonio con dolomita, piedra caliza y/o carbonato cálcico de una pureza del 90% como mínimo, y que cumplen con los requisitos del Anexo II de la Directiva 80/876/CEE. 4 ( ) Contenido de 28% de nitrógeno en peso como resultado de nitrato de amonio corresponde a 80% de nitrato de amonio. 3. Nitrato de amonio (350/2,500): calidad técnica Se aplica a: el nitrato de amonio y los preparados de nitrato de amonio cuyo contenido de nitrógeno debido al nitrato de amonio represente: - entre el 24.5% y el 28% en peso y que contengan como máximo un 0.4% de sustancias combustibles; - más del 28% en peso y que contengan como máximo un 0.2% de sustancias comestibles; y 4. las soluciones acuosas de nitrato de amonio cuya concentración de nitrato de amonio supere el 80% en peso. Nitrato de amonio (10/50): materiales „fuera de especificación‟ y abonos que no superen la prueba de detonabilidad. 202 Se aplica a: 5. 6. 7. ▪ el material de desecho del proceso de fabricación y el nitrato de amonio y los preparados de nitrato de amonio, abonos simples a base de nitrato de amonio y abonos compuestos o complejos a base de nitrato de amonio a que se refieren las Notas 2 y 3 que sean o que hayan sido devueltos por el usuario final a un fabricante, a un lugar de almacenamiento temporal o a una instalación de transformación para su reelaboración, reciclado o tratamiento para poder utilizarlos en condiciones seguras, por haber dejado de cumplir las especificaciones de las Notas 2 y 3; y ▪ los abonos a que se refieren el primer guión de la Nota 1 y la Nota 2 que no cumplan los requisitos del Anexo II de la Directiva 80/876/CEE. Nitrato de potasio (5,000/10,000): abonos compuestos a base de nitrato de potasio constituidos por nitrato de potasio en forma comprimida/granulada Nitrato de potasio (1,250/5,000): abonos compuestos a base de nitrato de potasio constituidos por nitrato de potasio en forma cristalina Policlorodibenzofuranos y policlorodibenzodioxinas Las cantidades de policlorodibenzofuranos y policlorodibenzodioxinas se calculan a partir de los siguientes factores: Factores internacionales de equivalencia tóxica (ITEF) para las familias de sustancias de posible riesgo (OTAN/CCMS) 2,3,7,8-TCDD 1,2,3,7,8-PeDD 1 0.5 1,2,3,4,7,8-HxCDD 1,2,3,6,7,8-HxCDD 1,2,3,7,8,9-HxCDD 0.1 1,2,3,4,6,7,8-HpCDD 0.01 OCDD 0.001 2,3,7,8-TCDF 2,3,4,7,8-PeCDF 1,2,3,7,8-PeCDF 1,2,3,4,7,8-HxCDF 1,2,3,7,8,9-HxCDF 1,2,3,6,7,8-HxCDF 2,3,4,6,7,8-HxCDF 1,2,3,4,6,7,8-HpCDF 1,2,3,4,7,8,9-HpCDF OCDF 0.1 0.5 0.05 0.1 0.01 0.001 (T = tetra, P = penta, Hx = hexa, HP = hepta, O = octa) 203 Parte 2: Categorías de sustancias y preparados no denominados específicamente en la Parte 1 Columna 1 Columna 2 Categorías de sustancias peligrosas Cantidad umbral (en toneladas) de sustancias peligrosas según lo expresado en el Apartado 4 del Artículo 3, para la aplicación de: Artículos 6 y 7 Artículo 9 5 20 50 200 50 200 1. MUY TÓXICA 2. TÓXICA 3. COMBURENTE 4. EXPLOSIVA (véase nota 2) cuando la sustancia, el preparado o el objeto se encuentre contemplado en la División 1.4 del Acuerdo Europeo sobre el transporte internacional de cargas peligrosas por vía terrestre (ADR) de la ONU. 5. EXPLOSIVA (ver nota 2) cuando la sustancia, el preparado o el objeto se encuentre contemplado alguno de los siguientes documentos: Divisiones 1.1, 1.2, 1.3, 1.5 o 1.6 del ADR/ONU o enunciados de riesgo R2 o R3. 6. INFLAMABLE (cuando la sustancia o preparado se encuentre contemplado en la definición expresada en el punto (a) de la Nota 3. 7 a. ALTAMENTE INFLAMABLE (cuando la sustancia o preparado se encuentre contemplado en la definición expresada en el punto (b) (1) de la Nota 3). 7 b. ALTAMENTE INFLAMABLE (cuando la sustancia o preparado se encuentre contemplado en la definición expresada en el punto (b) (2) de la Nota 3). 8. EXTREMADAMENTE INFLAMABLE (cuando la sustancia o preparado se encuentre contemplado en la definición expresada en el punto (c) de la Nota 3) 9. PELIGROSA PARA EL MEDIO AMBIENTE enunciados de riesgo: (i) R50: „Muy tóxica para los organismos acuáticos‟ (R50/53 inclusive) (ii) R51/53: „Tóxica para los organismos acuáticos; puede provocar efectos negativos en el medio ambiente acuático en el largo plazo‟ 10. TODA CLASIFICACIÓN no contemplada en las anteriores en combinación con los enunciados de riesgo: (i) R14: „Reacciona violentamente con el agua‟ (R14/15 inclusive) (ii) R29: „en contacto con el agua, libera gases tóxicos‟ Columna 3 50 200 10 50 5000 50,000 50 200 5,000 50,000 10 50 100 200 200 500 100 500 50 200 204 NOTAS 1. Las sustancias y preparados se clasifican de acuerdo con las siguientes Directivas y a su adaptación actual al progreso técnico: ▪ Directiva 67/548/CEE del Consejo, de 27 de junio de 1967, relativa a la aproximación de las disposiciones legales, reglamentarias y administrativas en materia de clasificación, embalaje y (1). etiquetado de las sustancias peligrosas ▪ Directiva 1999/45/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 31 de mayo de 1999, relativa a la aproximación de las disposiciones legales, reglamentarias y administrativa de los Estados miembros en (2) materia de clasificación, embalaje y etiquetado de las sustancias peligrosas . Cuando se trate de sustancias y preparados que no estén clasificados como peligrosos con arreglo a ninguna de las Directivas mencionadas, por ejemplo residuos, pero que estén presentes en un establecimiento o puedan estarlo, y que posean, o puedan poseer, en las condiciones del establecimiento, propiedades equivalentes para originar accidentes graves, los procedimientos para la clasificación provisional se llevarán a cabo de conformidad con el artículo pertinente de la Directiva correspondiente. Cuando se trate de sustancias y preparados cuyas propiedades permitan clasificarlos de más de un modo, se aplicarán las cantidades umbrales más bajas a efectos de la presenta Directiva. No obstante, para la aplicación de la regla de la Nota 4, la cantidad umbral utilizada será siempre la aplicable a la clasificación correspondiente. A efectos de la presente Directiva, la Comisión preparará y mantendrá actualizada una lista de las sustancias que se hayan clasificado en las categorías anteriores mediante decisión armonizada con arreglo a la Directiva 67/548/CEE. 2. Se entenderá por „explosivo‟: ▪ una sustancia o preparado que cree riesgos de explosión por choque, fricción, fuego u otras fuentes de ignición (enunciado de riesgo R2); ▪ una sustancia o preparado que cree grandes riesgos de explosión por choque, fricción, fuego u otras fuentes de ignición (enunciado de riesgo R3); o ▪ una sustancia, preparado u objeto considerado en la Clase 1 del Acuerdo Europeo sobre Transporte Internacional de Mercancías Peligrosas por Carretera (ADR, Naciones Unidas), celebrado el 30 de septiembre de 1957, con sus modificaciones, tal como se incorporó a la Directiva 94/55/CE del Consejo, de 21 de noviembre de 1994, sobre la aproximación de las legislaciones de los Estados miembros con (1) respecto al transporte de mercancías peligrosas por carretera . Se incluyen en esta definición las sustancias pirotécnicas que, a los efectos de la presente Directiva, se definen como sustancias (o mezclas de sustancias) destinadas a producir un efecto calorífico, luminoso, sonoro, gaseoso o fumígeno o una combinación de esos efectos, mediante reacciones químicas exotérmicas y autosostenidas. Cuando una sustancia o un preparado esté clasificado tanto en el ADR como en los enunciados de riesgo R2 o R3, la clasificación del ADR tendrá preferencia con respecto a la asignación del enunciado de riesgo. Las sustancias y objetos de la Clase 1 están clasificados en alguna de las divisiones 1.1 a 1.6 de acuerdo con el sistema de clasificación del ADR. Esas divisiones son las siguientes: División 1.1: „Sustancias y objetos que presentan un riesgo de explosión en masa (una explosión en masa es una explosión que afecta de manera prácticamente instantánea a casi toda la carga)‟. División 1.2: „Sustancias y objetos que presentan un riesgo de proyección sin riesgo de explosión en masa‟. (1) (2) DO 196 de 16.8.1967, p. 1; Directiva cuya última modificación la constituye el Reglamento (CE) No. 807/2003 (DO L 122 de 16.5.2003, p. 36). DO L 200 de 30.7.1999, p. 1; Directiva cuya última modificación la constituye la Directiva de la Comisión 2001/60/CE (DO L 226 de 22.8.2001, p. 5). 205 División 1.3: „Sustancias y objetos que presentan un riesgo de incendio con ligero riesgo de efectos de onda expansiva o de proyección o de ambos efectos, pero sin riesgo de explosión en masa: (a) (b) cuya combustión da lugar a una radiación térmica considerable; o que arden unos a continuación de otros con efectos mínimos de onda expansiva o de proyección o de ambos efectos‟. División 1.4: „Sustancias y objetos que sólo presentan un pequeño riesgo de explosión en caso de ignición o cebado durante el transporte. Los efectos se limitan esencialmente a los bultos y normalmente no dan lugar a la proyección de fragmentos de tamaño apreciable ni a grandes distancias. Un incendio exterior no debe provocar la explosión prácticamente instantánea de la casi totalidad del contenido de los bultos‟. División 1.5: „Sustancias muy poco sensibles que presentan un riesgo de explosión en masa, con una sensibilidad tal que, en condiciones normales de transporte, sólo existe una probabilidad muy reducida de cebado o de que su combustión se transforme en detonación. Se exige como mínimo que no exploten cuando se las someta a la prueba de fuego exterior‟. División 1.6: „Objetos extremadamente poco sensibles que no supongan riesgo de explosión en masa. Dichos objetos no contendrán más que sustancias detonantes extremadamente poco sensibles y que presenten una probabilidad insignificante de cebado o de propagación accidental. El riesgo queda limitado a la explosión de un objeto único‟. En esta definición también se incluyen las sustancias o preparados explosivos o pirotécnicos contenidos en objetos. En el caso de objetos que contengan sustancias o preparados explosivos o pirotécnicos, si se conoce la cantidad de la sustancia o preparado contenida en el objeto, se considerará tal cantidad a los efectos de la presente Directiva. Si no se conoce la cantidad, a los efectos de la presente Directiva, se tratará todo el objeto como explosivo. (1) 3. DO L 319 de 12.12.1994, p. 7.; Directiva cuya última modificación la constituye la Directiva 2003/28/CE (DO L 90 de 8.4.2003, p. 45). Por sustancias „inflamables‟, „muy inflamables‟ y „extremadamente inflamables‟ (categorías 6, 7 y 8), se entenderá: (a) líquidos inflamables: - sustancias y preparados cuyo punto de inflamación sea igual o superior a 21º C e inferior o igual a 55º C (enunciado de riesgo R 10), y que mantengan la combustión; (b) líquidos altamente inflamables: - sustancias y preparados que puedan calentarse y llegar a inflamarse en contacto con el aire a temperatura ambiente sin ningún tipo de energía añadida (enunciado de riesgo R 17); - sustancias y preparados cuyo punto de inflamación sea inferior a 55º C y que permanezcan en estado líquido bajo presión, cuando determinadas formas de tratamiento, por ejemplo, presión o temperatura elevadas, puedan crear riesgos de accidentes graves; - sustancias y preparados cuyo punto de inflamación sea inferior a 21º C y que no sean extremadamente inflamables (enunciado de riesgo R 11, segundo guión); (c) gases y líquidos extremadamente inflamables: - sustancias y preparados líquidos cuyo punto de inflamación sea inferior a 0º C cuyo punto de ebullición (o cuando se trate de una gama de ebulliciones, el punto de ebullición inicial) a presión normal sea inferior o igual a 35º C (enunciado de riesgo R 12, primer guión); - gases inflamables al contacto con el aire a temperatura y presión ambientes (enunciado de riesgo R12, segundo guión), que se encuentran en estado gaseoso o supercrítico; y - sustancias y preparados líquidos inflamables y altamente inflamables mantenidos a una temperatura superior a su punto de ebullición. 206 4. En el caso de un establecimiento en el que no esté presente ninguna sustancia o preparado en cantidad igual o superior a la cantidad umbral correspondiente, se aplicará la siguiente regla para determinar si son aplicables a dicho establecimiento los requisitos pertinentes de la presente Directiva. Se aplicará la presente Directiva si la suma q1/QU1 + q2/QU2 + q3/QU3 + q4/QU4 + q5/QU5 +... es igual o mayor que 1, siendo qx = la cantidad de la sustancia peligrosa x (o categoría de sustancias peligrosas) contemplada en las Partes 1 o 2 del presente Anexo, y QUX = la cantidad umbral pertinente para la sustancia o categoría x de la columna 3 de las Partes 1 o 2. La presente Directiva se aplicará, con excepción de los Artículos 9, 11 y 13, si la suma q1/QL1 + q2/QL2 + q3/QL3 + q4/QL4 + q5/QL5 +... es igual o mayor que 1, siendo qx = la cantidad de la sustancia peligrosa x (o categoría de sustancias peligrosas) contemplada en las Partes 1 o 2 del presente Anexo, y QLX = la cantidad umbral pertinente para la sustancia o categoría x de la columna 2 de las Partes 1 o 2. Esta regla se aplicará para evaluar los peligros generales relacionados con la toxicidad, la inflamabilidad y la ecotoxicidad. Por lo tanto, deberá aplicarse tres veces: (a) para la suma de sustancias y preparados contemplados en la Parte 1 y clasificados como tóxicos o muy tóxicos, junto con sustancias y preparados contemplados en las categorías 1 o 2; (b) para la suma de sustancias y preparados contemplados en la Parte 1 y clasificados como comburentes, explosivos, inflamables, muy inflamables o extremadamente inflamables, junto con sustancias y preparados de las categorías 3, 4, 5, 6, 7ª, 7b u 8; y (c) para la suma de sustancias y preparados contemplados en la Parte 1 y clasificados como peligrosos para el medio ambiente [R50 (R50/53 inclusive) o R51/53], junto con las sustancias y preparados de las categorías 9 (i) o 9 (ii); Se aplicarán las disposiciones pertinentes de la presente Directiva si alguna de las sumas obtenidas de (a), (b) o (c) es igual o mayor que 1. 207 b. ESTADOS UNIDOS: LISTA DE SUSTANCIAS QUÍMICAS Y UMBRALES Programa del Plan de Gestión de Riesgos (PGR) En los Estados Unidos existen varias listas diferentes relacionadas con la preparación y la prevención de accidentes químicos, según el propósito de la lista y la legislación relacionada (por ejemplo, existe una lista diferente para las actividades de prevención, otra lista para determinadas actividades de preparación, etc.). Existe una superposición sustancial entre esas listas y los Estados Unidos creó una “lista de listas” que compara los productos químicos y los umbrales detallados esas listas. Consulte el sitio: www.epa.gov/emergencies. A continuación aparecen las listas relacionadas con el Programa del Plan de Gestión de Riesgos: PARTE 68 – Disposiciones sobre la prevención de accidentes químicos – Índice Subparte F –Sustancias reguladas para la prevención de escapes o derrames accidentales Sec. 68.130 Lista de sustancias: a. Las sustancias tóxicas e inflamables reguladas comprendidas en la sección 112(r) de la Ley de Aire Limpio son las sustancias enumeradas en las Tablas 1, 2, 3 y 4. Las cantidades umbral para las sustancias tóxicas e inflamables enumeradas se especifican en las tablas. b. Los fundamentos para incluir las sustancias tóxicas e inflamables en la lista de sustancias reguladas se explican en las notas adjuntas a la lista. Tabla 1 de la Sec. 68.130: Lista de sustancias tóxicas reguladas y cantidades umbral para la prevención de escapes o derrames accidentales [En orden alfabético – 77 sustancias] Nombre del producto químico Acroleína [2-Propenal] Acrilonitrilo [2-Propenonitrilo] Cloruro de acriloilo [2-Cloruro de propanoilo] Alcohol alílico [2-Propen-1-ol] Alilamina [2-Propen-1-amina] Amoníaco (anhidro) Amoníaco (conc 20% o mayor) Tricloruro de arsénico Arsina Tricloruro de boro [Borano, tricloro-] Trifluoruro de boro [Borano, trifluor-] Trifluoruro de boro con metil éter (1:1) [Borano, trifluor [oxibis [metano]]-, T-4-] Bromo Disulfuro de carbono Cloro Dióxido de cloro [Óxido de cloro (ClO2)] Cloroformo [Metano, tricloro-] Éter clorometil [metano, oxibis [cloro-]] Éter clorometil-metilo [Metano, clorometoxi-] Crotonaldehído [2-Butenal] Crotonaldehído, (E)- [2-Butenal, (E)-] Cloruro de cianógeno Diborano N° de CAS Cantidad umbral (libras) Motivo de incluísión en el listado 107-02-8 107-13-1 814-68-6 107-18-61 107-11-9 7664-41-7 7664-41-7 7784-34-1 7784-42-1 10294-34-5 7637-07-2 353-42-4 5,000 20,000 5,000 15,000 10,000 10,000 20,000 15,000 1,000 5,000 5,000 15,000 B B B B B a, b a, b B B B b b 7726-95-6 75-15-0 7782-50-5 10049-04-4 67-66-3 542-88-1 107-30-2 4170-30-3 123-73-9 506-77-4 19287-45-7 10,000 20,000 2,500 1,000 20,000 1,000 5,000 20,000 20,000 10,000 2,500 a, b b a, b C B b b b b C B 208 Tabla 1 de la Sec. 68.130: Lista de sustancias tóxicas reguladas y cantidades umbral para la prevención de escapes o derrames accidentales (continuación) Nombre químico No. de CAS 75-78-5 57-14-7 106-89-8 107-15-3 151-56-4 75-21-8 7782-41-4 50-00-0 110-00-9 302-01-2 7647-01-0 74-90-8 7647-01-0 7664-39-3 Cantidad umbral (libras) 5,000 15,000 20,000 20,000 10,000 10,000 1,000 15,000 5,000 15,000 15,000 2,500 5,000 1,000 Motivo de inclusión en el listado b b b b b a, b b b b b d a, b a a, b Dimetildiclorosilano [Silano, diclorodimetil-] 1,1-Dimetilhidracina [Hidracina, 1,1-dimetil-] Epiclorohidrina [Oxirano, (clorometil)-] Etilendiamina [1,2-Etanodiamina] Etilenimina [Aziridina] Óxido de etileno [Oxirano] Flúor Formaldehído (solución) Furano Hidracina Ácido clorhídrico (conc 37% o mayor) Ácido cianhídrico Cloruro de hidrógeno (anhidro) [Ácido clorhídrico] Fluoruro de hidrógeno/Ácido fluorhídrico (conc 50% o mayor) [Ácido fluorhídrico] Selenuro de hidrógeno Sulfuro de hidrógeno Ferropentacarbonilo-[Ferrocarbonilo (Fe(CO)5), (TB-511)] Isobutironitrilo [Propanonitrilo, 2-metil-] Cloroformiato de isopropilo [Ácido carbonoclorídico, 1-metiletil éster] Metacrilonitrilo [2-Propenonitrilo, 2-metil-] Cloruro de metilo [Metano, cloro-] Cloroformiato de metilo [Ácido carbonoclorídico, metiléster] Metil hidracina [Hidracina, metil-] Isocianato de metilo [Metano, isocianato-] Metil mercaptano [Metanotiol] Metil tiocianato [Ácido tiocínico, metil éster] Metil Triclorosilano [Silano, triclorometil-] Carbonilo de níquel Ácido nítrico (conc 80% o mayor) Óxido nítrico [Óxido de nitrógeno (NO)] Óleum (Ácido sulfúrico fumante) [Ácido sulfúrico, mezcla con trióxido de azufre] (1) Ácido peracético [Ácido etanoperoxoico] Perclorometil mercaptano [Cloruro de metanosulfonilo, tricloro-] Fosgeno [Dicloruro carbónico] Fosfina Oxicloruro de fósforo [Cloruro de fosforilo] Tricloruro de fósforo [Tricloruro fosforoso] Piperidina Propionitrilo [Propanonitrilo] Propil cloroformiato [Ácido carbonoclorídico, propil éster] Propilenimina [Aziridina, 2-metil-] Óxido de propileno [Oxirano, metil-] Dióxido de azufre (anhidro) 7783-07-5 7783-06-4 13463-40-6 78-82-0 108-23-6 500 10,000 2,500 20,000 15,000 b a, b b b b 126-98-7 74-87-3 79-22-1 60-34-4 624-83-9 74-93-1 556-64-9 75-79-6 13463-39-3 7697-37-2 10102-43-9 8014-95-7 10,000 10,000 5,000 15,000 10,000 10,000 20,000 5,000 1,000 15,000 10,000 10,000 b a b b a, b b b b b b b e 79-21-0 594-42-3 75-44-5 7803-51-2 10025-87-3 7719-12-2 110-89-4 107-12-0 109-61-5 75-55-8 75-56-9 7446-09-5 10,000 10,000 500 5,000 5,000 15,000 15,000 10,000 15,000 10,000 10,000 5,000 b b a, b b b b b b b b b a, b Tetrafluoruro de azufre [Fluoruro de azufre (SF4), (T-4)-] 7783-60-0 2,500 b 209 Tabla 1 a Sec. 68.130: Lista de sustancias tóxicas reguladas y cantidades umbral para la prevención de escapes o derrames accidentales (continuación) Nombre químico No. de CAS Cantidad umbral (libras) Trióxido de azufre Tetrametil de plomo [Hidruro de plomo, tetrametil-] Tetranitrometano [Metano, tetranitro-] Tetracloruro de titanio [Cloruro de titanio (TiCl4) (T-4)-] 2,4-Diisocianato de tolueno [Benceno, 2,4-diisocianato- 1metil-] (1) 2,6-Diisocianato de tolueno [Benceno, 1,3-diisocianato- 2metil-] (1) Diisocianato de tolueno (isómero no especificado) [Benceno, 1,3-diisocianato metil-] (1) Trimetilclorosilano [Silano, clorotrimetil-] Monómero de acetato de vinilo [Éster etenílico del ácido acético] 7446-11-9 75-74-1 509-14-8 7550-45-0 584-84-9 10,000 10,000 10,000 2,500 10,000 Motivo de inclusión en el listado a, b b b b a 91-08-7 10,000 a 26471-62-5 10,000 a 75-77-4 108-05-4 10,000 15,000 b b 1 ( ) La exención para mezclas establecida en la Sec. 68.115 (b) (1) no se aplica a la sustancia. Nota: Motivo de inclusión en el listado: a. b. c. d. e. Inclusión exigida por el Congreso. En la lista de sustancias extremadamente peligrosas (Extremely Hazardous Substances, EHS), presión de vapor de 10 mmHg o superior. Gas tóxico. Toxicidad del cloruro de hidrógeno, potencial para despedir cloruro de hidrógeno y antecedentes de accidentes. Toxicidad del trióxido de azufre y del ácido sulfúrico, potencial para despedir trióxido de azufre y antecedentes de accidentes. Tabla 2 de la Sec. 68.130: Lista de sustancias tóxicas reguladas y cantidades umbral para la prevención de escapes o derrames accidentales [Ordenado por Nº de CAS - 77 sustancias] No. de CAS Nombre del producto químico Cantidad umbral (libras) 50-00-0 57-14-7 1,1 60-34-4 67-66-3 74-87-3 74-90-8 74-93-1 75-15-0 75-21-8 75-44-5 75-55-8 75-56-9 75-74-1 75-77-4 75-78-5 Formaldehído (solución) 1,1-Dimetilhidracina [Hidracina, 1,1-dimetil-] Metil hidracina [Hidracina, metil-] Cloroformo [Metano, tricloro-] Cloruro de metilo [Metano, cloro-] Ácido cianhídrico Metil mercaptano [Metanotiol] Disulfuro de carbono Óxido de etileno [Oxirano] Fosgeno [Dicloruro carbónico] Propilenimina [Aziridina, 2-metil-] Óxido de propileno [Oxirano, metil-] Tetrametil de plomo [Hidruro de plomo, tetrametil-] Trimetilclorosilano [Silano, clorotrimetil-] Dimetildiclorosilano [Silano, diclorodimetil-] 15,000 15,000 15,000 20,000 10,000 2,500 10,000 20,000 10,000 500 10,000 10,000 10,000 10,000 5,000 Motivo de inclusión en el listado B b b b a a, b b b a, b a, b B B B b b 210 Tabla 2 de la Sec. 68.130: Lista de sustancias tóxicas reguladas y cantidades umbral para la prevención de escapes o derrames accidentales (continuación) No. de CAS Nombre del producto químico Cantidad umbral (libras) 75-79-6 78-82-0 79-21-0 79-22-1 Metil triclorosilano [Silano, triclorometil-] Isobutironitrilo [Propanonitrilo, 2-metil-] Ácido peracético [Ácido etanoperoxoico] Cloroformiato de metilo [Ácido carbonoclorídico, metiléster] 2,6-Diisocianato de tolueno [Benceno, 1,3- diisocianato2-metil-] (1) Epiclorohidrina [Oxirano, (clorometil)-] Acroleína [2-Propenal] Alilamina [2-Propen-1-amina] Propionitrilo [Propanonitrilo] Acrilonitrilo [2-Propenonitrilo] Etilendiamina [1,2-Etanodiamina] Alcohol alílico [2-Propen-1-ol] Éter clorometil-metilo [Metano, clorometoxi-] Monómero de acetato de vinilo [Éster etenílico del ácido acético] Cloroformiato de isopropilo [Ácido carbonoclorídico, 1metiletil éster] Ciclohexilamina [Ciclohexanamina] Propil cloroformiato [Ácido carbonoclorídico, propil éster] Furano Piperidina Crotonaldehído, (E)- [2-Butenal, (E)-] Metacrilonitrilo [2-Propenonitrilo, 2-metil-] Etilenimina [Aziridina] Hidracina Trifluoruro de boro con metil éter (1:1) [Borano,trifluor [oxibis [metano]]-, T-4-] Cloruro de cianógeno Tetranitrometano [Metano, tetranitro-] Éter clorometil [metano, oxibis [cloro-]] Metil tiocianato [Ácido tiocínico, metil éster] 2,4-Diisocianato de tolueno [Benceno, 2,4-diisocianato1-metil-] (1) Perclorometil mercaptano [Cloruro de metanosulfonilo, tricloro-] Isocianato de metilo [Metano, isocianato-] Cloruro de acriloilo [2-Cloruro de propanoilo] Crotonaldehído [2-Butenal] Dióxido de azufre (anhidro) Trióxido de azufre Tetracloruro de titanio [Cloruro de titanio (TiCl4) (T- 4)-] Trifluoruro de boro [Borano, trifluor-] Ácido clorhídrico (conc 37% o mayor) Cloruro de hidrógeno (anhidro) [Ácido clorhídrico] 5,000 20,000 10,000 5,000 Motivo de inclusión en el listado b b b b 10,000 a 20,000 5,000 10,000 10,000 20,000 20,000 15,000 5,000 15,000 b b b b b b b b b 15,000 b 15,000 15,000 b b 5,000 15,000 20,000 10,000 10,000 15,000 15,000 b b b b b b b 10,000 10,000 1,000 20,000 10,000 c b b b a 10,000 b 10,000 5,000 20,000 5,000 10,000 2,500 5,000 15,000 5,000 a, b b b a, b a, b b b d a Fluoruro de hidrógeno/Ácido fluorhídrico (conc . 50% o mayor) [Ácido fluorhídrico] Amoníaco (anhidro) 1,000 a, b 10,000 a, b 91-08-7 106-89-8 107-02-8 107-11-9 107-12-0 107-13-1 107-15-3 107-18-6 107-30-2 108-05-4 108-23-6 108-91-8 109-61-5 110-00-9 110-89-4 123-73-9 126-98-7 151-56-4 302-01-2 353-42-4 506-77-4 509-14-8 542-88-1 556-64-9 584-84-9 594-42-3 624-83-9 814-68-6 4170-30-3 7446-09-5 7446-11-9 7550-45-0 7637-07-2 7647-01-0 7647-01-0 7664-39-3 7664-41-7 211 Tabla 2 de la Sec. 68.130: Lista de sustancias tóxicas reguladas y cantidades umbral para la prevención de escapes o derrames accidentales (continuación) No. de CAS Nombre del producto químico Cantidad umbral (libras) Motivo de inclusión en el listado 7664-41-7 7697-37-2 7719-12-2 7726-95-6 7782-41-4 7782-50-5 7783-06-4 7783-07-5 7783-60-0 7784-34-1 7784-42-1 7803-51-2 8014-95-7 Amoníaco (conc. 20% o mayor) Ácido nítrico (conc. 80% o mayor) Tricloruro de fósforo [Tricloruro fosforoso] Bromo Flúor Cloro Sulfuro de hidrógeno Selenuro de hidrógeno Tetrafluoruro de azufre [Fluoruro de azufre (SF4), (T- 4)-] Tricloruro arsénico Arsina Fosfina Óleum (Ácido sulfúrico fumante) [Ácido sulfúrico, mezcla con trióxido de azufre] (1) Oxicloruro de fósforo [Cloruro de fosforilo] Dióxido de cloro [Óxido de cloro (ClO2)] Óxido nítrico [Óxido de nitrógeno (NO)] Tricloruro de boro [Borano, tricloro-] Carbonilo de níquel Ferropentacarbonilo- [Ferrocarbonilo (Fe(CO)5), (TB- 5-11)-] Diborano Diisocianato de tolueno (isómero no especificado) [Benceno,1,3 diisocianato metil-] (1) 20,000 15,000 15,000 10,000 1,000 2,500 10,000 500 2,500 15,000 1,000 5,000 10,000 a, b b b a, b b a, b a, b b b b b b e 5,000 1,000 10,000 5,000 1,000 2,500 2,500 10,000 b c b b b b b a 10025-87-3 10049-04-4 10102-43-9 10294-34-5 13463-39-3 13463-40-6 19287-45-7 26471-62-5 1 ( ) La exención para mezclas establecida en la Sec. 68.115 (b) (1) no se aplica a la sustancia. Nota: Motivo de inclusión en el listado: a. b. c. d. Inclusión exigida por el Congreso. En la lista de sustancias extremadamente peligrosas, presión de vapor de 10 mmHg o superior. Gas tóxico. Toxicidad del cloruro de hidrógeno, potencial para liberar cloruro de hidrógeno y antecedentes de accidentes. e. Toxicidad del trióxido de azufre y del ácido sulfúrico, potencial para despedir trióxido de azufre y antecedentes de accidentes. 212 Tabla 3 a Sec. 68.130: 1 Lista de sustancias inflamables reguladas ( ) y cantidades umbral para la prevención de escapes o derrames accidentales [Ordenado alfabéticamente - 63 sustancias] Nombre químico No. de CAS Cantidad umbral (libras) Acetaldehído Acetileno [Etino] Bromotrifluoroetileno [Eteno, bromotrifluoro-] 1,3-Butadieno Butano 1-Buteno 2-Buteno Buteno cis-2-Buteno trans-2-Buteno [2-Buteno, (E)] Oxisulfuro de carbono [sulfuro de óxido de carbono (COS)] Monóxido de cloro [Óxido de cloro] 2-Cloropropileno [1-Propeno, 2-cloro-] 1-Cloropropileno [1-Propeno, 1-cloro-] Cianógeno [Etanodinitrilo] Ciclopropano Dicloro silano [Silano, dicloro-] Difluoro etano [Etano, 1,1-difluoro-] Dimetil amina [Metanamina, N-metil-] 2,2-Dimetilpropano [Propano,2,2-dimetil-] Etano Etil acetileno [1-Butino] Etilamina [Etanamina] Cloruro de etilo [Etano, cloro-] Etileno [Eteno] Éter etílico [Etano, 1,1‟-oxibis-] Etil mercaptano [Etanotiol] Nitrito de etilo [Ácido nitroso, éster etílico] Hidrógeno Isobutano [Propano, 2-metil] Isopentano [Butano, 2-metil] Isopreno [1,3-Butadieno, 2-metil-] Isopropilamina [2-Propanamina] Cloruro de isopropilo [Propano, 2-cloro-] Metano Metilamina [Metanamina] 3-Metil-1-buteno 2-Metil-1-buteno Éter metílico [Metano, oxibis-] Formiato de metilo [Ácido fórmico, metil éster] 2-Metilpropeno [1-Propeno, 2-metil-] 1,3-Pentadieno Pentano 1-Penteno 2-Penteno, (E)2-Penteno, (Z)Propadieno [1,2-Propadieno] 75-07-0 74-86-2 598-73-2 106-99-0 106-97-8 106-98-9 107-01-7 25167-67-3 590-18-1 624-64-6 463-58-1 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 Motivo de inclusión en el listado g f f f f f f f f f f 7791-21-1 557-98-2 590-21-6 460-19-5 75-19-4 4109-96-0 75-37-6 124-40-3 463-82-1 74-84-0 107-00-6 75-04-7 75-00-3 74-85-1 60-29-7 75-08-1 109-95-5 1333-74-0 75-28-5 78-78-4 78-79-5 75-31-0 75-29-6 74-82-8 74-89-5 563-45-1 563-46-2 115-10-6 107-31-3 115-11-7 504-60-9 109-66-0 109-67-1 646-04-8 627-20-3 463-49-0 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 f g g f f f f f f f f f f f g g f f f g g g g f f f g f g f f g g g g f 213 Tabla 3 a Sec. 68.130: Lista de sustancias tóxicas reguladas ( prevención de escapes o derrames accidentales (continuación) 1) y cantidades umbral para la Nombre químico No. de CAS Cantidad umbral en (libras) Motivo de inclusión en el listado Propano Propileno [1-Propeno] Propino [1-Propino] Silano Tetrafluoroetileno [Eteno, tetrafluoro-] Tetrametilsilano [Silano, tetrametil-] Triclorosilano [Silano, tricloro-] Trifluorocloroetileno [Eteno, clorotrifluoro-] Trimetilamina [Metanamina, N,N-dimetil-] Vinilacetileno [1-Buten-3-ino] Cloruro de vinilo [Eteno, cloro-] Éter etil vinílico [Eteno, etoxi-] Fluoruro de vinilo [Eteno, fluoro-] Cloruro de vinilideno [Eteno, 1,1-dicloro-] Fluoruro de vinilideno [Eteno, 1,1-difluoro-] Éter metil vinílico [Eteno, metoxi-] 74-98-6 115-07-1 74-99-7 7803-62-5 116-14-3 75-76-3 10025-78-2 79-38-9 75-50-3 689-97-4 75-01-4 109-92-2 75-02-5 75-35-4 75-38-7 107-25-5 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 f f f f f g g f f f a, f g f g f f (1) Se excluye de todas las disposiciones de esta parte a cualquier sustancia inflamable que se utilice como combustible o se reserve para la venta minorista como combustible (véase Sec. 68.126). Nota: Motivo de inclusión en el listado: a. Inclusión exigida por el Congreso f. Gas inflamable. g. Líquido volátil inflamable. 214 Tabla 4 de la Sec. 68.130: 1 Lista de sustancias tóxicas reguladas ( ) y cantidades umbral para la prevención de escapes o derrames accidentales [Ordenado por Nº de CAS - 63 sustancias] No. de CAS Nombre químico Cantidad umbral (en libras) 60-29-7 74-82-8 74-84-0 74-85-1 74-86-2 74-89-5 74-98-6 74-99-7 75-00-3 75-01-4 75-02-5 75-04-7 75-07-0 75-08-1 75-19-4 75-28-5 75-29-6 75-31-0 75-35-4 75-37-6 75-38-7 75-50-3 75-76-3 78-78-4 78-79-5 79-38-9 106-97-8 106-98-9 196-99-0 107-00-6 107-01-7 107-25-5 107-31-3 109-66-0 109-67-1 109-92-2 109-95-5 115-07-1 115-10-6 115-11-7 116-14-3 124-40-3 460-19-5 463-49-0 463-58-1 Éter etílico [Etano, 1,1‟-oxibis-] Metano Etano Etileno [Eteno] Acetileno [Etino] Metilamina [Metanamina] Propano Propino [1-Propino] Cloruro de etilo [Etano, cloro-] Cloruro de vinilo [Eteno, cloro-] Fluoruro de vinilo [Eteno, fluoro-] Etilamina [Etanamina] Acetaldehído Etil mercaptano [Etanotiol] Ciclopropano Isobutano [Propano, 2-metil] Cloruro de isopropilo [Propano, cloro-] Isopropilamina [2-Propanamina] Cloruro de vinilideno [Eteno, 1,1-dicloro-] Difluoro etano [Etano, 1,1-difluoro-] Fluoruro de vinilideno [Eteno, 1,1-difluoro-] Trimetilamina [Metanamina, N,N-dimetil-] Tetrametilsilano [Silano, tetrametil-] Isopentano [Butano, 2-metil] Isopreno [1,3-Butadieno, 2-metil-] Trifluorocloroetileno [Eteno, clorotrifluoro-] Butano 1-Buteno 1,3-Butadieno Etil acetileno [1-Butino] 2-Buteno Éter metil vinílico [Eteno, metoxi-] Formiato de metilo [Ácido fórmico, metil éster] Pentano 1-Penteno Éter etil vinílico [Eteno, etoxi-] Nitrito de etilo [Ácido nitroso, éster etílico] Propileno [1-Propeno] Éter metílico [Metano, oxibis-] 2-Metilpropeno [1-Propeno, 2-metil-] Tetrafluoroetileno [Eteno, tetrafluoro-] Dimetil amina [Metanamina, N-metil-] Cianógeno [Etanodinitrilo] Propadieno [1,2-Propadieno] Oxisulfuro de carbono [sulfuro de óxido de carbono (COS)] 2,2-Dimetilpropano [Propano,2,2-dimetil-] 1,3-Pentadieno 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 Motivo de inclusión en el listado g f f f f f f f f a, f f f g g f f g g g f f f g g g f f f f f f f g g g g f f f f f f f f f 10,000 10,000 f f 463-82-1 504-60-9 215 Tabla 4 de la Sec. 68.130: 1 Lista de sustancias tóxicas reguladas ( ) y cantidades umbral para la prevención de escapes o derrames accidentales No. de CAS Nombre químico Cantidad umbral (en libras) 557-98-2 563-45-1 563-46-2 590-18-1 590-21-6 598-73-2 624-64-6 627-20-3 646-04-8 689-97-4 1333-74-0 4109-96-0 7791-21-1 7803-62-5 10025-78-2 25167-67-3 2-Cloropropileno [1-Propeno, 2-cloro-] 3-Metil-1-buteno 2-Metil-1-buteno cis-2-Buteno 1-Cloropropileno [1-Propeno, 1-cloro-] Bromotrifluoroetileno [Eteno, bromotrifluoro-] trans-2-Buteno [2-Buteno, (E)] 2-Penteno, (Z)2-Penteno, (E)Vinilacetileno [1-Buten-3-ino] Hidrógeno Dicloro silano [Silano, dicloro-] Monóxido de cloro [Óxido de cloro] Silano Triclorosilano [Silano, tricloro-] Buteno 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 Motivo de inclusión en el listado g f g f g f f g g f f f f f g f 1 ( ) Se excluye de todas las disposiciones de esta parte a cualquier sustancia inflamable que se utilice como combustible o se reserve para la venta minorista como combustible (véase Sec. 68.126). Nota: Motivo de inclusión en el listado: a. Inclusión exigida por el Congreso f. Gas inflamable. g. Líquido volátil inflamable [Registro Federal (FR) Vol. 59 Nº 4493 de 31 de enero de 1994. Reformado en el RF, Vol. 61 Nº 31717 de 20 de junio de 1996, según modificaciones en el RF, Vol. 62 Nº 45132 de 25 de agosto de 1997; RF, Vol. 63 Nº 645 de 6 de enero de 1998; y RF, Vol. 65 Nº 13250 de 13 de marzo de 2000] 216 c. SUIZA: CRITERIO PARA UMBRALES Y LISTA DE EXCEPCIONES Ordenanza sobre “Protección contra los accidentes mayores” (MAO, 1991) 39 La Ordenanza Suiza sobre Protección contra los Accidentes Mayores (MAO) se fundamenta en el concepto de peligro potencial, el cual está determinado por las propiedades de la sustancia peligrosa (producto o desecho) y la cantidad de la sustancia en el sitio. Los valores del umbral se determinan usando criterios establecidos en la MAO, que toma en cuenta las propiedades de las sustancias químicas (tales como toxicidad o los valores del punto de inflamación). Los criterios se fundamentan en estas tres propiedades de la sustancia: toxicidad; características de fuego/explosión y ecotoxicidad. Si una sustancia muestra múltiples características peligrosas (por ejemplo si es tóxica e inflamable), entonces se determina el valor umbral usando el proceso para cada característica de riesgo relevante, y se usa el valor de umbral más bajo. Las tablas a continuación muestran los criterios proporcionados en el Apéndice 1 de la MAO para determinar los 40 umbrales. Los criterios de cada propiedad aparecen de la propiedad más alta a la más baja: por ejemplo, si el criterio a está disponible, entonces el umbral se determina usando el criterio a y no es necesario usar los criterios restantes. Sin embargo, si el criterio a no está disponible para un químico en particular, entonces se puede usar el criterio b para determinar el umbral. Toxicidad Umbral a. Clasificación de Unión Europea b. Toxicidad aguda – oral (mg/kg) – dérmica (mg/kg) – inhalación (mg/l 4h) 1 c. Clasificación SDR( ) – Kl. 8 – Kl. 6.1 (1) 2 () 200 kg 2,000 kg 20,000 kg 200,000 kg ↑ T+ < 25 ↑ T,C 25 a ≤ 200 ↑ Xn 200 a ≤ 2000 ↑ Xi < 50 < 0,5 50 a ≤ 400 0,5 a ≤ 2 (2) VG I, II (2) VG II 400 a ≤ 2000 2 a ≤ 20 (2) VG I (2) VG (2) VG III III La Ordenanza Suiza para el transporte de sustancias peligrosas por carretera (es casi idéntica al ADR para el transporte internacional por carretera VG = grupo de embalajes Características de incendio y explosión Umbral 1 a. Riesgo de incendio según SI( ) b. Clasificación de Unión Europea c. Punto de inflamación °C 2 d. SDR( ) clasificación – Kl. 3 200 kg 2,000 kg 20,000 kg 200,000 kg ↑ T+ ↑ E1 ↑ E2, AF, HF, F1, F2, O1, O2 F+, F, O, R10 ≤ 55 ↑ F3, F4, O3 E 3 VG( ) I, II > 55 3 VG( ) III 1 ( ) Sicherheitsinstitut = Instituto de Seguridad, el mismo sistema de clasificación como el que usa la Federación Europea de Seguros y Reaseguros (CEA); www.cea.eu 2 ( ) Ordenanza Suiza para el transporte de sustancias peligrosas por carretera (casi idéntica al ADR para el transporte internacional por carretera) 3 ( ) VG = grupo de embalajes 39 El texto completo de la MAO está disponible en inglés en: http://www.admin.ch/ch/e/rs/c814_012.html. 40 Se puede acceder en francés a una lista oficial de sustancias y productos (incluso el número de CAS) con umbrales desarrollados con los criterios dados en: http://www.bafu.admin.ch/publikationen/publikation/00010/index.html?lang=fr 217 Ecotoxicidad Umbral 200 kg ↑ 1 a. toxicidad aguda para daphnia: EC50( ) (mg/l) después de un día 2 3 b. toxicidad aguda para peces: ( ) LC50( ) (mg/l) después de dos a cuatro días (1) (2) (3) 2,000 kg ↑ ≤ 10 20,000 kg ↑ 200,000 kg ↑ ≤ 10 Concentración eficaz mediana por la pérdida de la capacidad de nadar para 50% de la daphnia Se tienen que respetar los requisitos de la legislación para la protección de animales Concentración mediana letal El Anexo I de la MAO también contiene una lista de excepciones a los procesos antes descritos. El mismo contiene umbrales más altos para algunos productos de petróleo (gasolina, combustible para calefacción/diesel y queroseno), en vista de su uso generalizado en grandes cantidades y la amplia experiencia en el manejo de dichos químicos. Otras excepciones incluyen un umbral más bajo para el cloro y los umbrales ajustados para sustancias químicas que son reguladas más estrictamente bajo la legislación de la Unión Europea. Estas sustancias y sus límites de umbral asociados, aparecen listados en la tabla a continuación. Lista de excepciones en la OMA suiza (Anexo 1) 1 No. Nombre de la sustancia No. de CAS.( ) 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 Acetileno 4-Aminodifenilo y sus sales Óxido de arsénico (III), ácido de arsénico (III) y sus sales Óxido de arsénico (V), ácido de arsénico (V) y/o sus sales Bencidina y sus sales Gasolina (regular y súper) Bis (chlorometil) éter Cloro Clorometil metil éter Cloruro de dimetilcarbamoilo Dimetilnitrosamina Combustible de calefacción, diesel Hexametiltriamida fosfórica Queroseno 4,4 „-metilen (2-cloroanilina) y sus sales, en forma de polvo 2-naftilamina y sus sales Compuestos de níquel en forma de polvo inhalable (monóxido de níquel, dióxido de níquel, sulfuro de níquel, sulfuro de trinickel, trióxido de dinickel) 4 Nitrodiphenyl Isocianato de metilo Policlorodibenzofuranos, calculados como equivalentes de TCDD Policlorodibenzodioxinas (incluida la TCDD), calculado como TCDD equivalentes 1,3-Propansultona Dicloruro de azufre Hidrógeno 74-86-2 18 19 20 21 22 23 24 542-88-1 7782-50-5 107-30-2 79-44-7 62-75-9 Umbral (kg) 5,000 1 100 1 000 1 00,000 1 200 1 1 1 500,000 680-31-9 1 200,000 10 1,000 92-93-3 624-83-9 1 150 1 1 1120-71-4 10545-99-0 1333-74-0 1 1,000 5,000 (1) Número de identificación de una sustancia en el Sistema Químico Abstracto 218 d. COREA: LISTA DE SUSTANCIAS QUÍMICAS y UMBRALES Ley de Seguridad Industrial y Salud (modificada el 5 de enero de 1995) Materiales peligrosos y cantidades umbral Producto químico Cantidad umbral (kg) Gases inflamables Manejo: 5,000 por día Almacenamiento: 200,000 Líquidos combustibles Manejo: 5,000 por día Almacenamiento: 200,000 Isocianato de metilo 150 Fosgeno 750 Acrilonitrilo 20,000 Amoníaco 200,000 Cloro 20,000 Dióxido de azufre 250,000 Trióxido de azufre 75,000 Disulfuro de carbono 5,000 Cianuro de hidrógeno 1,000 Fluoruro de hidrógeno 1,000 Cloruro de hidrógeno 20,000 Sulfuro de hidrógeno 1,000 Nitrato de amonio 500,000 Nitroglicerina 10,000 Trinitrotolueno 50,000 Hidrógeno 50,000 Óxido de etileno 10,000 Fosfina 50 Sileno 50 219 Anexo IV: Lista consolidada de actividades para desarrollar un programa en caso de accidentes con productos químicos Fase Metas Actividades sugeridas Fase inicial: Compromisos, cooperación y consultas • Disponer de todos los prerrequisitos políticos y administrativos necesarios para desarrollar, perfeccionar o examinar un programa para casos de accidentes con productos químicos • Preparar un plan de trabajo para desarrollar el programa. • Asegurar el compromiso político adecuado para este esfuerzo. • Identificar las autoridades gubernamentales clave a nivel nacional, local y regional y establecer un proceso de cooperación. • Organizar consultas dentro del gobierno y con otros actores, a fin de aumentar el nivel de conciencia y evaluar las necesidades y los riesgos. • Identificar los recursos necesarios (personas, fondos, tiempo) para cada etapa del proceso con el objeto de desarrollar o examinar un programa para casos de accidentes con productos químicos. • Elaborar por escrito una declaración de intención y un plan de trabajo, incluso un calendario y metas intermedias. Fase de evaluación Lograr una comprensión general de: • la naturaleza y el alcance de los riesgos de los accidentes con productos químicos en el país; • el contexto jurídico y de las políticas existentes relacionadas con la seguridad química; y • los recursos que podrían estar disponibles para apoyar un programa para casos de accidentes con productos químicos. • Consultar con los actores. • Considerar las preguntas identificadas en esta Guía. • Identificar las fuentes de información disponibles dentro de las agencias de gobierno, las autoridades locales y otras fuentes (incluso los registros industriales). • Designar personal experto para recabar y examinar la información. • Establecer criterios/modelos para determinar qué instalaciones son de gran interés. • Preparar una lista de instalaciones de interés, y, si es posible, identificar las más importantes y mapear su ubicación. • Hacer una encuesta de los mandatos de organismos gubernamentales relevantes. • Hacer una encuesta de los programas, las leyes, los reglamentos, las políticas, las obligaciones internacionales, y otros instrumentos existentes (evaluarlos para identificar superposiciones, brechas, inconsistencias, etc.). • Identificar recursos que podrían estar disponibles (humanos, financieros, técnicos, etc.) desde el país o de fuentes externas. • Desarrollar una matriz, tabla, base de datos o informe con esta información. Fase de desarrollo • Desarrollar una estrategia y un cronograma para avanzar, basado en la determinación de prioridades, recursos, y el contexto político, jurídico y cultural. • ▪ ▪ ▪ ▪ Implementar el plan de trabajo y desarrollar un programa adecuado para casos de accidentes con productos químicos. Examinar la información recabada en la Fase de Evaluación. Consultar con los actores claves. Asegurar la continuidad del compromiso político. Examinar los imperativos políticos, las consideraciones locales y las actividades relacionadas dentro y fuera del gobierno. ▪ Desarrollar una estrategia para avanzar, mediante la identificación de los pasos a seguir, las cuestiones que deben tratarse, la necesidad de recursos, las metas intermedias y los plazos. ▪ Revisar el Capítulo C para escoger elementos y adaptarlos a las circunstancias específicas del país. ▪ Preparar un borrador del programa para casos de accidentes con productos químicos (para revisión de otras agencias y grupos de actores). 220 Fase Fase de implementación: Requisitos de recursos Metas Identificar y luego asegurar los recursos necesarios para implementar eficazmente el programa para casos de accidentes con productos químicos. Los recursos incluyen el personal, el presupuesto y el equipo/ tecnología (en el siguiente paso se abordará la información). Actividades sugeridas Personal: • Identificar las cantidades y los tipos de personal que se necesitan teniendo en cuenta las funciones identificadas en el programa para casos de accidentes con productos químicos, y la naturaleza y el alcance de los riesgos. ▪ Asignar o contratar a más personal (o, según sea necesario, usar consultores) para cumplir con estas necesidades. ▪ Establecer y mantener un programa adecuado de capacitación de personal. Presupuesto: ▪ Preparar un presupuesto realista para llevar a cabo las responsabilidades asignadas. ▪ Revisar las opciones que existen para asegurar los fondos. Tecnología, equipo, etc.: ▪ Identificar la tecnología, el equipo y otros recursos necesarios (además del personal, el financiamiento y la información). ▪ Determinar dónde y cómo se puede tener acceso a estos recursos, conforme se necesitan. Fase de implementación: Acceso e intercambio de información Asegurar que la información necesaria para la implementación eficaz del programa para casos de accidentes con productos químicos esté disponible y desarrollar mecanismos para compartir información con otros actores. • Categorizar los tipos de información que se necesitan para el programa para casos de accidentes con productos químicos. ▪ Identificar las fuentes de información. ▪ Recabar y registrar información sistemáticamente. ▪ Establecer un inventario de instalaciones peligrosas. ▪ Establecer estructuras administrativas, bases de datos y otros mecanismos para facilitar la recolección, análisis, mantenimiento y actualización de información de notificaciones e informes de seguridad. ▪ Establecer un esquema para informar sobre los accidentes. ▪ Establecer un mecanismo para compartir información entre los organismos gubernamentales involucrados en el programa para casos de accidentes con productos químicos. ▪ Crear procedimientos para compartir información y consultas, con todos los actores, incluso la industria, los trabajadores, el público y las organizaciones no gubernamentales. ▪ Asegurar que la información le llegue de forma eficaz al público potencialmente afectado. ▪ Establecer mecanismos para el intercambio de información dentro del país y entre países. ▪ Promover el intercambio de las experiencias y las lecciones aprendidas. Fase de implementación: Estructuras jurídicas y administrativas Establecer estructuras jurídicas y administrativas necesarias para implementar el programa para casos de accidentes con productos químicos. ▪ Considerar qué organismos (ministerios, agencias, etc.) están mejor preparados para implementar cada elemento del programa (pudiera ser más de uno). ▪ Aclarar cómo se mantendrá la coordinación y quién tiene el liderazgo en cada elemento. 221 Fase de implementación: Liderazgo Fase de implementación: Cumplimiento Mejorar la comprensión del público sobre los riesgos de accidentes químicos y motivar a la industria y a otros para que tomen las debidas acciones para prevenir dichos accidentes y se preparen adecuadamente para cualquier accidente que pudiera ocurrir. Asegurar que todas las empresas cumplen con los requisitos legales relacionados con la prevención y preparación en caso de accidentes químicos, que operan sus instalaciones para minimizar los riesgos de un accidente químico, y que están debidamente preparadas en caso de que ocurra un accidente. ▪ Establecer un programa de acercamiento para informarle a las industrias y a otros sobre la prevención y preparación en caso de accidentes químicos, así como sus funciones y responsabilidades bajo el programa para casos de accidentes con productos químicos. ▪ Crear mecanismos para facilitar una mejor prevención y preparación en caso de accidente, que incluye programas de capacitación, materiales de orientación, sitios Web, etc. ▪ Desarrollar un calendario para la implementación por parte de la industria que le permita contar con un plazo adecuado para cumplir con cualquier requisito. ▪ Asegurarse que el público tiene información sobre instalaciones peligrosas y qué acciones tomar en caso de un accidente. ▪ Brindar oportunidades para la participación pública. ▪ Mantener cooperación continua con los actores. ▪ Promover el intercambio de experiencias. ▪ Identificar sanciones adecuadas para el incumplimiento de los requisitos (en la medida en que esto ya no está establecido en los instrumentos jurídicos). ▪ Establecer procedimientos de cumplimiento e implementar dichos procedimientos, según corresponda (inclusive el juicio por incumplimiento significativo). ▪ Revisar los informes de seguridad y otros informes de las instalaciones peligrosas que contienen información sobre el cumplimento y apoyar las actividades de inspección. ▪ Establecer procedimientos para llevar a cabo las inspecciones adecuadas conforme a la naturaleza y el alcance de los riesgos en el país. ▪ Crear protocolos comunes y guía para asegurar la capacidad de comparar distintas inspecciones. ▪ Establecer una estrategia para mantener la competencia de los inspectores y aprender de la experiencia. ▪ Establecer mecanismos para garantizar que se llevan a cabo las recomendaciones y medidas correctivas identificadas en los informes de inspección. ▪ Coordinar y compartir experiencias entre organizaciones relevantes (para minimizar la duplicación de esfuerzos, reducir la carga sobre la industria, y aprender de la experiencia de los demás). 222 Lista consolidada de actividades para desarrollar un programa de accidentes con productos químicos Fase Objetivos Fase de análisis y revisión Implementar un sistema para la revisión periódica del programa para casos de accidentes con productos químicos con el fin de probar si está funcionando cómo debería y revisar el programa, conforme corresponda. Actividades sugeridas ▪ Establecer un proceso para revisar la eficacia de los elementos claves del programa para casos de accidentes con productos químicos (utilizando indicadores de desempeño). ▪ Consultar con otros actores para obtener retroalimentación sobre el programa para casos de accidentes con productos químicos. ▪ Hacer cambios en las actividades y prioridades del programa en vista de la experiencia, los cambios en las prioridades, el avance técnico e información nueva. 223 Anexo V: Otras iniciativas internacionales Una serie de organizaciones internacionales – tanto intergubernamentales como no gubernamentales –tienen proyectos significativos diseñados para ayudar a otros a mejor la prevención, preparación y respuestas en caso de accidentes con productos químicos. Este Anexo describe varias de ellas: • • • • • • • • • • • DTIE PNUMA Programa APELL del PNUMA TI CEPE/ONU JEU PNUMA/OCAH ONUDI UNITAR OMS OCDE CE – MAHB Marco del Programa Responsible Care del Consejo Internacional de Asociaciones Químicas (que representan a la industria química). Este Anexo también incluye información adicional sobre la cooperación internacional para la prevención y preparación de accidentes. División de Tecnología, Industria y Economía del PNUMA A lo largo de su historia, la División de Tecnología, Industria y Economía (DTIE) del PNUMA ha trabajado con los gobiernos, las empresas, la industria y la sociedad civil para proteger la base de recursos naturales de nuestro planeta, resaltando el interés comercial para el desarrollo sostenible. Las actividades de la DTIE se han centrado tradicionalmente en la concientización, el mejoramiento de la transferencia de conocimiento e información, el incentivo de la cooperación tecnológica y las asociaciones, facilitar la implementación de convenios y acuerdos internacionales. La visión de la DTIE es la de desvincular el crecimiento económico de la degradación ambiental mediante la promoción de tecnologías ambientalmente cónsonas/racionales, nuevos conceptos empresariales para la industria, la integración del medio ambiente en la economía, la creación de mercados y el cambio de comportamiento. La estrategia de la DTIE para lograr estas metas es la promoción de la toma de decisiones informadas por medio de asociaciones con otras organizaciones internacionales, las autoridades gubernamentales, los negocios y la industria, y las organizaciones no gubernamentales; el apoyo a la implementación de los convenios; y la creación de capacidad en los países en vías de desarrollo. Las actividades de la DTIE están orientadas en torno a tres prioridades temáticas transversales: el cambio climático, la eficiencia de los recursos y sustancias dañinas y los desechos peligrosos. Programas específicos dentro de la DTIE apoyan a las autoridades y a las industrias en el uso de los recursos naturales de manera eficiente, garantizando el manejo ambiental racional de los productos químicos, la reducción de la contaminación y los riesgos a las personas y al medio ambiente, permitiendo la implementación de convenios y acuerdos internacionales e incorporando los costos ambientales en las decisiones económicas. Los proyectos dirigidos a mejorar la prevención, preparación y respuesta en caso de accidentes con productos químicos incluyen la Producción Responsable, que está dirigida a que los negocios y la cadena de suministro participen en una producción más segura, la comunicación de riesgo y la preparación ante casos de emergencia, y el Programa APELL, que se describe a continuación. 224 Información y preparación para casos de emergencia a nivel local El Programa de Concienciación y Preparación para Emergencias a Nivel Local (APELL) fue creado inicialmente en 1986 luego de una serie de accidentes industriales que ocurrieron tanto en países desarrollados como en países en vías de desarrollo y demostraron la necesidad de tener mejores sistemas para prevenir y responder a emergencias con productos químicos. El proceso APELL fue desarrollado para asistirle a las comunidades con peligros químicos en la prevención y preparación de accidentes industriales. Desde su inicio, el programa ha sido usado exitosamente en diferentes situaciones alrededor del mundo. El proceso APELL es una herramienta metodológica que se enfoca en el nivel local para identificar posibles peligros industriales, crear conciencia sobre la seguridad y establecer la capacidad local para dar respuestas inmediatas de organismos múltiples en caso de que ocurra una emergencia. La meta de APELL es promover un marco orientado hacia la comunidad para identificar y crear conciencia sobre los riesgos en comunidades industrializadas, iniciar medidas para la reducción y mitigación del riesgo, y desarrollar una preparación coordinada entre las industrias, las autoridades locales y las comunidades, mediante la creación de asociaciones locales entre actores. En vista de que los riesgos, las capacidades, los actores y la situación normativa de una comunidad varían de un lugar a otro, el proceso fue diseñado para adaptarlo a las condiciones locales. Actualmente, el proceso APELL ha sido promocionado en más de 40 países y se han desarrollado asociaciones clave con las agencias del gobierno y con organizaciones intergubernamentales responsables de la seguridad industrial y la protección de la salud humana y el medio ambiente. Se han desarrollado una serie de aplicaciones específicas del sector de APELL, que incluyen herramientas para áreas de transporte y áreas portuarias. La publicación APELL para Áreas Portuarias fue publicado en 1996, y TransAPELL Guía para el Transporte de Artículos Peligrosos: Planeamiento de Emergencia en una Comunidad Local, se publicó en el 2000. Desde el 2001, una cooperación más estrecha con sectores particulares de la industria resultó en el desarrollo de directrices y herramientas específicas tales como APELL para Minería publicado conjuntamente con el ICMM en el 2001 y la publicación conjunta del PNUMA/ICMM: Good practice in emergency preparedness and response, del 2005. Otras publicaciones del PNUMA relacionadas con APELL incluyen los informes: Identification and Evaluation in a Local Community”, “Storage of Hazardous Materials: a Technical Guide for Safe Warehousing of Hazardous Materials” y “Management of Industrial Accident Prevention and Preparedness: A Training Resource Package”. Una publicación más reciente, “Assessing the Vulnerabilities of Local Communities”, fue desarrollado en conjunto con el Institut National de l’Environnement Industriel et des Risques (INERIS) de Francia y publicado por el PNUMA en el 2008. Organización Internacional del Trabajo La Organización Internacional del Trabajo (OIT) trata sobre la seguridad química como parte de su mandato con respecto a la protección de los trabajadores. La Convención de la OIT No. 174 (1993) sobre la Prevención de Accidentes Industriales Graves constituye la base de las políticas de la OIT relacionadas con la prevención de accidentes con productos químicos. La OIT promueve los esfuerzos por mejorar la gestión de productos químicos por medio de las siguientes herramientas: ▪ ▪ ▪ ▪ Convenios y recomendaciones Códigos de prácticas y directrices La estrategia global sobre seguridad y salud ocupacional Servicios de consultoría y capacitación 225 ▪ Directrices relativas a los Sistemas de Gestión de Seguridad y la Salud en el Trabajo (ILOOSH 2001) ▪ El Proyecto Internacional de Tarjetas de Seguridad Química del IPCS ▪ Centro Internacional de Información sobre Seguridad y Salud en eI Trabajo (CIS). Además, el Programa de la OIT sobre Seguridad y Salud en el Trabajo y el Medio Ambiente (SAFEWORK) tiene como objetivo crear conciencia a nivel mundial sobre las dimensiones y consecuencias de accidentes y enfermedades relacionadas con el trabajo; colocar la seguridad y la salud ocupacional (OSH) en las agendas internacionales y nacional; y brindar apoyo a los esfuerzos nacionales para el mejoramiento de los sistemas y los programas nacionales de OSH de conformidad con las normas laborales internacionales relevantes. Las metas del programa incluyen el desarrollo de políticas y programas de prevención para proteger a los trabajadores en ocupaciones y sectores peligrosos, extendiendo la protección hacia grupos vulnerables de trabajadores que están fuera del alcance de las medidas de protección tradicionales, y garantizando que los impactos sociales y económicos debido a una mejor protección de los trabajadores sean reconocidas por los legisladores y personas responsables de tomar decisiones. Para lograr estas metas, el programa promueve e implementa la investigación innovadora, los estudios estadísticos, y las actividades relacionadas con los medios y proporciona asistencia técnica para apoyar la acción nacional. CEPE/ONU – Convenio sobre los efectos transfronterizos de accidentes industriales El principal objetivo del Convenio de la CEPE sobre los efectos transfronterizos de los accidentes industriales es mejorar la seguridad industrial en toda la región de la CEPE/ONU, especialmente mediante la prevención de los accidentes industriales con consecuencias transfronterizas. La Conferencia de las Partes del Convenio tomó nota de la complejidad de implementar algunos requisitos del Convenio, especialmente aquellos que requieren la participación coordinada de varias autoridades competentes a nivel nacional. Ciertas tareas bajo el Convenio también requieren la coordinación vertical entre las autoridades nacionales, regionales y locales, así como de la industria y el público, tomando en consideración la cooperación transfronteriza. Algunos países, especialmente de Europa Oriental, el Cáucaso y Asia Central (EECCA), y el Sureste de Europa (SEE), experimentan dificultades en la implementación del Convenio. Por esta razón, la Conferencia de las Partes adoptó un Programa de Asistencia en el 2004 cuyo objetivo es mejorar las capacidades de los países del EECCA y el SEE para implementar el Convenio. El Programa se basa en el principio de que la asistencia puede ser eficaz solamente si un país receptor es capaz de recibirla y está listo para aprovecharla. Por consiguiente, el Programa se divide en dos fases. En la primera fase (fase preparatoria) el objetivo es asegurar el compromiso de los países que participan en el Programa a implementar el Convenio y verificar que todos tienen el mismo nivel básico de implementación del Convenio. Los países, habiendo finalizado exitosamente la fase preparatoria, entran a la segunda fase (fase de implementación). En esta fase, la asistencia se da para ayudarles a los países a resolver los problemas que encuentran con tareas complejas bajo el Convenio. La organización de las actividades se lleva a cabo en base a las necesidades donde los países por sí mismos identifican las áreas de prioridad para la implementación del Convenio y, cuando se requiere, solicitan apoyo externo. Para ayudarles a los países en esta tarea, la Conferencia de las Partes bajo este Convenio adoptó un Enfoque Estratégico que esboza el mecanismo para identificar las deficiencias y las brechas por medio de indicadores y criterios. Esto permitiría la planificación a corto y a largo plazo de 226 actividades y la medición del avance logrado. También constituye el fundamento para apoyar una planificación financiera adecuada. Entre las actividades pasadas se pueden mencionar: Sesión de capacitación sobre la identificación de actividades peligrosas según el Anexo I en virtud del Convenio; Actividad para desarrollar la capacidad con el objetivo de iniciar un proceso para fortalecer aún más los marcos jurídicos e institucionales para implementar el Convenio en los países pertenecientes al EECCA y el SEE; Sesión de Capacitación sobre Enfoques Integrados para la Prevención de Peligros Graves; y Un proyecto para Bulgaria, Rumanía y Serbia sobre gestión conjunta de las emergencias transfronterizas de derrames de sustancias peligrosas en el río Danubio. Unidad Conjunta para el Medio Ambiente del PNUMA/OCAH Luego de respuestas en su mayoría ad hoc y bilaterales a los accidentes industriales, en 1993 los Estados miembros de Naciones Unidas solicitaron un nuevo mecanismo para tratar con los aspectos ambientales de los desastres; y por consiguiente, se estableció la Unidad Ambiental Conjunta (JEU) del PNUMA/OCAH para responder a las emergencias ambientales. A lo largo de los años, la JEU ha colaborado con los gobiernos, las industrias y los actores para responder a emergencias tales como accidentes con productos químicos, así como contribuir a los esfuerzos nacionales de preparación en general. La JEU trabaja con países afectados para identificar y mitigar los impactos negativos agudos, y también promover la cooperación tecnológica y las asociaciones por medio de su coordinación de la respuesta internacional a las emergencias ambientales. Además, colabora con las organizaciones dedicadas a la rehabilitación a mediano y largo plazo para asegurar una transición imperceptible hacia el proceso de recuperación del desastre. Las actividades de la JEU se enfocan en torno de dos áreas temáticas; a saber: la respuesta y la preparación. Además de los despliegues para dar respuesta, Ias capacitaciones son organizadas a fin de permitir que expertos ambientales nacionales puedan responder a las emergencias ambientales internacionales. La última área del programa tiene como objetivo mejorar la respuesta en países particularmente vulnerables a los desastres naturales. Esto se logra mediante talleres de preparación que desarrollan la capacidad dentro de los gobiernos nacionales para responder y prepararse para eventos como accidentes con productos químicos. La JEU trabaja con la preparación para emergencias, principalmente a través del programa APELL (iniciado por el PNUMA), los gobiernos y la industria, con el propósito de minimizar la ocurrencia y los efecto dañinos de los accidentes tecnológicos y las emergencias ambientales. Un resumen de las actividades de respuesta llevadas a cabo por la JEU durante los últimos cinco años incluyen, entre otros, la explosión en una planta petroquímica en la provincia de Jilin, en China en el 2005; un derrame de hidrocarburo causado por el bombardeo de la central de energía de Jiyeh en el Líbano en el 2006; el vertido de desechos tóxicos en Costa de Marfil en el 2006; un derrame tóxico de cianuro sódico de las actividades de minería de oro en Mongolia en el 2007; un derrame de hidrocarburo en el estrecho de Kerch en Ucrania en el 2007; un derrame de hidrocarburo frente a la costa oeste de la República de Corea del Norte en el 2007; una explosión de un depósito de municiones en Tirana, Albania en el 2008; y un derrame de pesticidas tóxicos de 227 un transbordador (ferry) que naufragó luego del tifón Fengshen en el 2008. En cada una de estas instancias, la JEU se comunicó con los respectivos gobiernos y en algunas ocasiones colaboró con el Centro de Monitoreo e Información de la CE, la Oficina de Gestión de Posconflictos y Desastres del PNUMA y otros actores. Algunos de los accidentes que afectaron instalaciones peligrosas tuvieron efectos transfronterizos y la cooperación con países vecinos fue vital. Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial La Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI) es la agencia especializada del sistema de las Naciones Unidas que promueve el desarrollo industrial para la reducción de la pobreza, inclusive la globalización y la protección ambiental. En respuesta a los desafíos más apremiantes en cuanto al medio ambiente y a los recursos, la ONUDI lanzó su Iniciativa para una industria más verde en toda la organización. La agenda de la Industria Verde cubre tanto el “enverdecimiento” de las industrias: la reducción de desechos, las emisiones, el uso energético y el consumo de materiales de cualquier empresa, así como el apoyo para el desarrollo de las industrias “verdes”, los proveedores de bienes y servicios ambientales, tales como reciclaje y los negocios de energía renovable. Un programa insignia de la Industria Verde de ONUDI involucra el apoyo a los Centros Nacionales de Producción más Limpia (NCPC, por su sigla en inglés), bajo el programa conjunto con el PNUMA para una Producción más limpia y eficiente en el uso de los recursos en países en vías de desarrollo y países en transición. Los NCPC ofrecen capacidad nacional para la promoción, adaptación y la adopción de prácticas preventivas de gestión ambiental y de productividad para contribuir de manera individual y sinérgica con los tres objetivos de sostenibilidad del uso productivo de los recursos naturales (que incluyen los materiales, la energía y el agua), la reducción de los desechos y emisiones, y prácticas de producción seguras y responsables. Estos NCPC operan en más de 45 países y asisten a las empresas en la identificación, evaluación e implementación de opciones prácticas para una producción más limpia, mientras apoyan a los gobiernos en la introducción de cambios en las políticas de apoyo y permiten acceder a tecnologías innovadores y ambientalmente racionales. La ONUDI implementa programas complementarios relacionados con los productos químicos, la energía y el agua. En el área de los productos químicos, la ONUDI apoya la implementación de acuerdos multilaterales, inclusive el Convenio de Estocolmo, el Protocolo de Montreal y el Enfoque Estratégico para la Gestión Internacional de Productos Químicos. Las actividades están orientadas hacia el mejoramiento de los sistemas de gestión y regímenes de políticas, la diseminación de las mejores técnicas disponibles, y la transferencia de tecnologías limpias sustitutas y químicas de procesamiento. El portafolio de la ONUDI incluye la energía renovable y la eficiencia energética en la medida en que éstas se aplican a los sectores productivos, por medio de actividades transversales, que incluyen la promoción de normas del sistema de gestión de energía y la optimización del sistema, así como actividades específicas del sector y/o la tecnología. En el área del agua, la ONUDI se mantiene activa en la promoción de prácticas de gestión basadas en el ecosistema para aguas (internacionales), incluso la reducción de la carga de contaminación de las fuentes basadas en tierra, como las industrias y el turismo costero. Instituto de las Naciones Unidas para la Capacitación y la Investigación El Programa de Capacitación y Creación de Capacidad en Gestión de Desechos y Productos Químicos del Instituto de las Naciones Unidas para la Formación Profesional e Investigaciones (UNITAR) enfatiza la cooperación entre los actores nacionales y las organizaciones de socios internacionales con el fin de promover un enfoque integrado en gestión de químicos y creación de 228 capacidad. Parte de este esfuerzo incluye el Programa de Apoyo de Perfiles Nacionales, que brinda asistencia a los países en la evaluación y el diagnóstico de la infraestructura existente para la gestión racional de los químicos como un paso importante hacia la creación de capacidad nacional de manera sistemática. El Programa de Apoyo de Perfiles Nacionales proporciona orientación, capacitación y apoyo técnico para asistirle a los países en la evaluación de sus infraestructuras jurídicas, institucionales, administrativas y técnicas relevantes. Esta información es usada para desarrollar Perfiles Nacionales de Gestión de Productos Químicos e implementar Programas Nacionales de Acción para la Gestión Integrada de Productos Químicos. El desarrollo de un Perfil Nacional para la Gestión de Productos Químicos ha sido reconocido en los resultados de la Conferencia Internacional sobre Gestión de los Productos Químicos (ICCM) como una actividad clave que permite apoyar la implementación del SAICM. Para enero del 2010, aproximadamente 140 países habrán preparado o están preparando un Perfil Nacional en seguimiento al Documento de Orientación del Perfil Nacional de UNITAR. A nivel internacional, los Perfiles Nacionales les brindan a otros una mejor comprensión de las capacidades existentes de los países, así como de sus necesidades. No obstante los Perfiles Nacionales traten sobre una amplia área temática y pueden asistir en la identificación de las prioridades nacionales, también pueden proporcionar una comprensión importante durante el desarrollo y la implementación de un programa para accidentes con productos químicos. Además, un nuevo capítulo sobre “Preparación, respuesta y seguimiento en caso de emergencias con productos químicos,” está siendo elaborado para incluirlo en una versión revisada del Documento de orientación. Organización Mundial de la Salud El trabajo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre seguridad de productos químicos lo lleva a cabo en gran parte el Departamento de Salud Púbica y Medio Ambiente (PHE) en la sede de la OMS. Las áreas de actividad incluyen evaluaciones de los riesgos químicos a la salud humana y el ambiente, las metodologías para la evaluación del riesgo, creación de capacidad para la gestión racional de los productos químicos y la reducción de riesgos, el desarrollo del centro de venenos y los incidentes y emergencias químicas. El Equipo de Químicos del PHE analiza de manera rutinaria la inteligencia mundial de la salud para eventos químicos de interés por la salud pública, evalúa y verifica los eventos detectados y alerta a los socios para tomar acción oportuna. A solicitud de los Estados miembro de la OMS, el Equipo de Químicos también proporciona y coordina las funciones de respuesta ante incidentes con productos químicos. Otras actividades que realiza el Equipo de Químicos están dirigidas a fortalecer las capacidades nacionales para la gestión de la salud pública de incidentes y emergencias con productos químicos, particularmente en países en desarrollo y países con economías en transición, así como el desarrollo de redes globales de expertos, que incluye a ChemiNet, una red de expertos de la salud que brindan respuesta en caso de emergencias con productos químicos. Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico El Programa de Químicos de la OCDE fue establecido en 1978. Sus principales objetivos son apoyar los esfuerzos de los Estados miembros de la OCDE para proteger la salud humana y el ambiente mediante el mejoramiento de seguridad química; hacer que las políticas de control de productos químicos sea más transparente y eficiente para ahorrarle recursos a los gobiernos y la industria; y prevenir distorsiones innecesarias en el comercio de químicos y productos químicos. Mientras que un enfoque importante del trabajo es en la producción, el procesamiento y el uso de 229 químicos industriales, algunos aspectos incluyen trabajo sobre pesticidas, accidentes con productos químicos y biotecnología. El Programa de Accidentes Químicos de la OCDE ayuda a las autoridades públicas, la industria, a los trabajadores y otros actores a prevenir y/o prepararse para accidentes que involucran productos químicos y responder adecuadamente a aquellos que ocurran. El Programa de Accidentes Químicos trabaja en tres áreas, en cooperación con otras organizaciones internacionales: ▪ desarrollar principios comunes y orientación de políticas sobre la prevención, preparación y respuesta a los accidentes químicos; ▪ analizar los temas de interés y hacer recomendaciones concernientes a las mejores prácticas; y ▪ facilitar el intercambio de información y la experiencia entre la OCDE y los países no miembros. El Programa de Accidentes Químicos ha desarrollado la publicación de la OCDE: Principios rectores sobre la prevención, la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos (Paris, 2ª edición, 2003), que trata todos los aspectos para prevenir y manejar los accidentes con productos químicos, y la Guía de la OCDE para el desarrollo de indicadores sobre a el desempeño de la seguridad (2 ed., 2008), que sirve como una guía para que los actores claves determinen si su implementación de los principios rectores ha llevado a una mejor seguridad química. El Programa de Accidentes Químicos organiza talleres sobre temas específicos para recabar información y hacer recomendaciones concernientes a las mejores prácticas. Algunos de los temas tratados incluyen: investigación de accidentes; salud y aspectos ambientales de los accidentes químicos; auditorías e inspecciones de instalaciones peligrosas; capacitación de ingenieros en gestión de riesgos; uso de informes de seguridad en el control de los peligros de accidentes mayores; lecciones aprendidas de; gestión integrada de seguridad, salud, medio ambiente y calidad; evaluación de prácticas de riesgo de sustancias peligrosas involucradas en derrames accidentales; los factores humanos en accidentes e incidentes químicos; y seguridad en los centros ferroviarios de clasificación. El Programa de Accidentes Químicos ayuda a los países a compartir información y aprender de las experiencias de los demás en cuanto al desarrollo de bases de datos; el intercambio de información en área de seguridad química, evaluación de riesgo, gestión de riesgo, y comunicación de riesgo; el intercambio de experiencias con respecto a tecnologías relevantes, prácticas y políticas para la prevención, preparación y respuesta en caso de accidentes con productos químicos; la creación de grupos de discusión/foros electrónicos sobre temas específicos; y la recopilación y el análisis de datos sobre accidentes químicos, incluso datos económicos. Comisión Europea – Oficina de Peligros de Accidentes Mayores La Comisión Europea – el Centro de Investigación Conjunta – la Oficina de Peligros de Accidentes Mayores (MAHB) brinda apoyo técnico y científico a la Dirección General del Ambiente para la implementación y monitoreo de la Directiva Seveso II. Como parte de sus actividades, el MAHB maneja el Sistema de Información sobre Accidentes Graves (MARS), que fue establecido para manejar la información sobre accidentes mayores presentada por los Estados miembros de la 230 Unión Europea a la Comisión Europea de conformidad con las disposiciones de la Directiva Seveso II. Actualmente, el MARS contiene información sobre más de 450 accidentes mayores. Los usuarios pueden buscar en la base de datos del MARS para información sobre el tipo de accidente, la industria y la actividad involucrada, las causas inmediatas y subyacentes y las consecuencias y medidas de emergencia tomadas y las lecciones aprendidas. La información también se usa para analizar los datos obtenidos a partir de lecciones aprendidas en las que se identifiquen dependencias significativas y patrones generales en los datos. El MAHB también maneja el Centro de Documentación Comunitario y el Centro de Riesgo Industrial (CDCIR) cuyo objetivo es crear un ambiente bibliográfico y científico que facilite el intercambio de información entre los Estados miembros sobre el control de las actividades industriales de peligros mayores, y obtener el máximo conocimiento de los esfuerzos europeos comunes hacia la seguridad industrial. El CDCIR contiene más de 3,000 documentos públicos cuidadosamente analizados y resumidos, emitidos por las instituciones gubernamentales, la industria y los institutos de investigación. Los usuarios pueden buscar información en el CDCIR sobre un aspecto en particular del riesgo industrial, y el MAHB también prepara un boletín regular con detalles y resúmenes de material adquirido. Finalmente, el MAHB también incluye Grupos Técnicos de Trabajo que brindan orientación sobre varios aspectos de implementación de la Directiva Seveso II. Estos grupos han sido establecidos para proporcionar un foro de discusión y comparación de enfoques nacionales a varios aspectos de las Directivas Seveso. En la mayoría de los casos, los grupos incluyen a representantes de las autoridades nacionales y partes interesadas, tales como grupos de la industria química o petroquímica u organizaciones específicamente preocupadas por los temas de seguridad y ambiente. Actualmente, los Grupos de Trabajo existen en los sistemas de inspección, en los sistemas de gestión de seguridad, la planificación de uso del suelo, las sustancias peligrosas para el ambiente y otros temas relacionados con el riesgo industrial. Los documentos de orientación sobre Informes de Seguridad y Sistemas de Gestión de Seguridad (resultados de los Grupos de Trabajo correspondientes) están disponibles en el sitio Web de la MAHB. El Programa Responsible Care de la industria química Un ejemplo de una iniciativa voluntaria en el marco del cuidado responsable de la industria química comenzó en Canadá en 1985, El Programa Responsible Care es un compromiso voluntario de la industria química de ir más allá de los requisitos legales. En el marco de este programa, las compañías trabajan a través de sus asociaciones nacionales en una búsqueda continua por mejorar su salud, seguridad y desempeño ambiental, promoviendo la comunicación con sus actores en cuanto a los productos y procesos. El marco de trabajo de Responsible Care cree en un enfoque en reunirse e ir más allá del cumplimiento legislativo y normativo, comprende el compromiso específico al mejoramiento continuo de la salud, la seguridad y el desempeño ambiental, y a la apertura y transparencia con los actores. Responsible Care ayuda a las compañías a mejorar el desempeño al identificar y divulgar buenas prácticas gerenciales y promueve el apoyo mutuo entre las compañías y las asociaciones por medio del intercambio de experiencias y la presión de los pares. Responsible Care exhorta al diálogo y la cooperación con los actores a nivel local, nacional e internacional, y ha ayudado a la industria a trabajar mucho más estrechamente con las comunidades locales, los gobiernos, los sindicatos, las organizaciones internacionales, los grupos ambientalistas y otros, para comprender y tratar sus preocupaciones. Responsible Care también 231 promueve la cooperación con gobiernos y organizaciones en el desarrollo e implementación de reglamentos y normas eficaces y ayuda a las compañías en todas las etapas de la cadena de productos a cumplir o sobrepasar estos requisitos. El marco original de Responsible Care incluye seis Códigos de Práctica: i. ii. iii. iv. v. vi. Seguridad del proceso Salud y seguridad del empleado Prevención de la contaminación Respuesta a emergencia Distribución Tutela del producto El nuevo Responsible Care Global Charter (RCGC) fue lanzado por el Consejo Internacional de Asociaciones Químicas (ICCA) en la Conferencia Internacional sobre Gestión de Productos Químicos del PNUMA celebrada en Dubai en febrero del 2006, junto con la nueva iniciativa de la Estrategia Mundial de Productos (GPS). La Declaración Global de Responsible Care extiende los elementos originales de Responsible Care, y se centra en retos nuevos e importantes que enfrenta la industria química y la sociedad entre los cuales se encuentran el desarrollo sostenible, la gestión eficaz de los productos químicos a lo largo de la cadena de valor, temas de salud pública relacionados con el uso de los productos químicos, la necesidad de una mayor transparencia en la industria, y la oportunidad de lograr una mayor armonización y consistencia entre los programas de Responsible Care alrededor del mundo. La nueva iniciativa de la Estrategia Mundial de Productos (GPS) se centra en la tutela de los productos y en la extensión de Responsible Care a lo largo de la cadena de valor. En el 2007, el ICCA lanzó sus Directrices de Tutela de Producto para apoyar a las compañías en el diseño e implementación de los programas de tutela de productos mediante un enfoque de sistemas de gestión. Cooperación internacional Cooperación transfronteriza: Los países vecinos deberán intercambiar información, y consultar unos con otros, con el objetivo de prevenir accidentes capaces de causar un daño transfronterizo 41 y reducir los efectos adversos en caso de que tal accidente pudiera darse. Con este propósito, un país donde se ubica o está planificada una instalación peligrosa (“país anfitrión”) debería proporcionar a todos los países potencialmente afectados con información relevante concerniente a instalaciones peligrosas existentes o planificadas. Los países potencialmente afectados deberían proporcionarle al país anfitrión con información relevante concerniente al área bajo su jurisdicción que podría verse afectada por un daño transfronterizo en caso de un accidente. Para casos en los que un accidente en una instalación peligrosa pudiera tener efectos transfronterizos, la planificación y respuesta a emergencias se deberían llevar a cabo en cooperación con los países vecinos. Los países deberán consultar los unos a los otros con miras a coordinar la planificación de emergencias fuera del sitio. Deben informarse mutuamente 41 Véase por ejemplo, los Convenios de la CEPE/ONU sobre los efectos transfronterizos de los accidentes industriales y la protección y utilización de cursos de agua transfronterizos y lagos internacionales. 232 sobre los sistemas de comunicación que se usarán, las principales características de sus planes de emergencia, y los medios disponibles para la respuesta a emergencias en caso de un accidente. Debe haber mecanismos establecidos para garantizar que esa información se les brinda a todos los actores en ambos lados de la frontera potencialmente afectada en caso de un accidente. Los gobiernos vecinos deberían establecer mecanismos para facilitar la agrupación y/o compartir las respuestas (incluso recursos médicos) en caso de un accidente que es muy grande para ser manejado solamente por el país anfitrión. Se deben desarrollar procedimientos para facilitar el tránsito por su territorio del personal y equipo que serán usados para ayuda mutua en caso de un accidente que involucre sustancias peligrosas. Participación en actividades internacionales: El gobierno, la industria y otros actores deberían participar en actividades de cooperación multinacionales y regionales adecuadas, relacionadas con la prevención de accidentes y/o la planificación de emergencia, a fin de compartir la experiencia, mejorar la planificación, y facilitar la coordinación de respuesta a emergencia en caso de un accidente. Las organizaciones intergubernamentales juegan un papel importante en ejercer influencia y apoyar en la implementación de prácticas racionales de seguridad de productos químicos, y en animar el uso de y facilitar el acceso a información y orientación para ayudar en este proceso. En particular, las organizaciones intergubernamentales pueden servir como un enlace entre los países para compartir las lecciones aprendidas y asegurar que los países son capaces de aprovechar los muchos recursos técnicos y la experiencia profesional que existe en el área de la seguridad química. En particular, las organizaciones intergubernamentales pueden: ofrecer un foro para el intercambio de información y experiencia; facilitar la colaboración, la asistencia, el apoyo financiero y el acceso a la información y la experiencia técnica; facilitar información y asistencia entre donantes y receptores; apoyar a los proyectos para crear capacidad (a nivel local y regional); animar y apoyar el desarrollo de procedimientos y herramientas para implementar la orientación relevante; coordinar la asistencia multilateral para asegurar que se satisfagan las necesidades y se evite la duplicación; crear conciencia sobre la importancia de instituir programas adecuados; apoyar la adaptación de los programas y las herramientas que se usarán en los países en desarrollo; movilizar y coordinar la asistencia internacional para aquellos que enfrentan emergencias, particularmente cuando se excede la capacidad doméstica y/o se requieren evaluaciones neutrales e independientes; llevar a cabo o patrocinar los análisis globales de desempeño de seguridad; 233 promover la participación adecuada de actores en las iniciativas de prevención, preparación y respuesta; facilitar la transferencia de tecnología en aquellos que tienen mayor necesidad (entre países desarrollados y países en vías de desarrollo); y proporcionar un vínculo práctico con las organizaciones industriales y profesionales para promover un mayor uso de los materiales internacionales de orientación y la salud, y de sistemas ambientales por industria y facilitar la estandarización internacional de los sistemas de preparación de informes y gestión y herramientas. 234 Anexo VI: Bibliografía seleccionada Esta bibliografía está dividida en cuatro partes como sigue: a. Publicaciones (i) General (ii) Temas a. b. c. d. e. f. g. h. i. j. k. l. m. n. o. p. q. r. s. Concientización de la comunidad/información para la población Preparación para emergencias Respuesta a emergencias Cláusula de obligación general Peligro y evaluación de riesgo Aspectos de salud Información sobre los productos químicos Seguridad inherente Inspecciones Planificación del uso de suelo Lista de sustancias químicas / ámbito de aplicación Minería Conductos Análisis y evaluación Sistemas de gestión de la seguridad Elaboración de informes de seguridad Seguridad del sitio Almacenamiento de sustancias peligrosas Transporte de sustancias peligrosas (incluso áreas portuarias) b. Instrumentos jurídicos c. Informes de accidentes y estudios de caso d. Organizaciones y sus sitios Web a. Publicaciones (i) General ILO, Preventing Major Industrial Accidents in Asia: A Guide (Bangkok, 2000): http://www.ilo.org/public/english/region/asro/bangkok/asiaosh/ilorepor/prevt/indexpv.htm ILO, Prevention of Major Accident Hazards (Geneva, 1991): http://www.ilo.org/safework/normative/codes/lang--en/docName--WCMS_107829/index.htm ILO, Major Hazard Control: A Practical Manual (Geneva, 1988), ISBN: 9221064328 OCDE, Principios rectores sobre la prevención, la preparación y la respuesta para casos de accidentes con productos químicos (Paris, 2ª edición, 2003): www.oecd.org/ehs Swedish Rescue Services Agency (SRSA), Proactive Risk Management in a Dynamic Society (Räddningsverket, 2000), ISBN: 91-7253-084-7: http://www2.msb.se/Shopping/pdf/16252.pdf UNEP, APELL Handbook (Paris, 1988), ISBN: 92 807 1183 0: http://www.unep.fr/scp/publications/details.asp?id=WEB/0064/PA 235 UNEP, Management of Industrial Accident Prevention and Preparedness: A Training Resource Package (Paris, 1996), ISBN: 92-807-1609-3: http://www.unep.fr/scp/publications/details.asp?id=WEB/0110/PA US EPA, Chemicals in Your Community (1999): http://www.epa.gov/emergencies/docs/chem/chem-in-comm.pdf (ii) Temas a. Concientización de la comunidad/Información para la población MAHB, General Guideline on the Content of Information to the Public (Luxembourg,1994), ISBN: 92-826- 9053-9: http://mahbsrv.jrc.it/downloads-pdf/EN-info.pdf b. Preparación para emergencias JEU, Guidelines for the Development of a National Environmental Contingency Plan: http://ochaonline.un.org/OchaLinkClick.aspx?link=ocha&DocId=1005356 WHO, Manual for the Public Health Management of Chemical Incidents (Geneva, 2009), ISBN: 978 92 4 159814 9: http://www.who.int/environmental_health_emergencies/publications/Manual_Chemical_Inci dents/en/index.html c. Respuesta a emergencias ChemTrec: proporciona asistencia a personal de respuesta a emergencias responsables de incidentes que involucran materiales y bienes peligrosos: www.chemtrec.com JEU, Guidelines for Environmental Assessment following Chemical Emergencies: http://ochaonline.un.org/OchaLinkClick.aspx?link=ocha&DocId=1001277 JEU, Guidelines for Environmental Emergencies: Version 1 (New York and Geneva, 2009): http://ochaonline.un.org/OchaLinkClick.aspx?link=ocha&docId=1135171 Agencia Sueca de Contingencia Civil: capacitación para respuesta a emergencias (incluye como tratar emergencias que involucran sustancias peligrosas): http://www.msb.se/en/Training--Exercises/Courses/ Página Web de la Agencia Sueca de Contingencia Civil: incluye información sobre sustancias peligrosas y preparación para emergencias: http://www.msb.se/en/Civil-contingencies/ 236 d. Cláusula de obligación general Van Gils, Erik and Hailwood, Mark, How to move closer towards a harmonized 42 understanding of Seveso II requirements? (2008): http://mahbsrv.jrc.it/downloads-pdf/Document%2020-3-5%20Magic%20Words%20_3.pdf US EPA, Guidance for the Implementation of the General Duty Clause Section 112®(1) (2008): http://www.pneac.org/compliance/EPA/guidancegendutycaa.pdf US EPA, Fact Sheet on the General Duty Clause (2009): http://epa.gov/emergencies/docs/chem/gdc-fact.pdf e. Peligro y evaluación de riesgo European Process Safety Centre (EPSC), Brian J. Tyler, Frank Crawley, and Malcolm L. nd Preston, ed., HAZOP: Guide to Best Practice (2 ed., 2008), ISBN: 9780852955253 th Lewis, Richard J., Sax’s Dangerous Properties of Industrial Materials (10 ed.) and th Hawley‟s Condensed Chemical Dictionary (13 ed.) CD-ROM Network 6-10 (2000) Software, ISBN: 978-0-471-37998-0 Mannan, Sam, ed., Lees’ Loss Prevention in the Process Industries, Hazard Identification, Assessment and Control, Mary Kay O‟Connor Process Safety Center, Department of Chemical Engineering, Texas A&M University (College Station, Texas, 2004), ISBN-13: 978-0-7506-7555-0; ISBN-10: 0-7506-7555 UNEP and INERIS, Assessing the Vulnerability of Local Communities (Paris, 2008): http://www.unep.org/publications/search/pub_details_s.asp?ID=4095 UNEP, Hazard Identification and Evaluation in a Local Community (Paris, 1992), ISBN: 92807-1331-0: http://www.unep.fr/scp/publications/details.asp?id=WEB/0062/PA th Urben, Peter, ed., Bretherick’s Handbook of Reactive Chemical Hazards, Volumes 1-2 (7 ed., Swizerland, 2006), ISBN-13: 978-0-12-372563-9; ISBN-10: 0-12-372563-1 f. Aspectos de salud IPCS, OECD, UNEP, and WHO, Health Aspects of Chemical Accidents: Guidance on Chemical Accident Awareness, Preparedness and Response for Health Professionals and Emergency Responders, Environmental Monograph No. 81 (Paris, 1994): http://helid.desastres.net/en/d/Js13456e/ WHO, Assessing the Health Consequences of Major Chemical Incidents: Epidemiological Approaches, Regional Publications, European Series No. 79 (1997) ISBN: 92 890 1343 5: http://apps.who.int/bookorders/anglais/detart1.jsp?sesslan=1&codlan=1&codcol=31&codcc h=79 WHO, Effective Media Communication during Public Health Emergencies (Handbook, Field Guide, and Wall chart), (2005): 42 Al momento de la redacción, el MAHB de la CE estaba en el proceso de actualizar su sitio Web y algunas direcciones de Internet en este documento pudieran cambiar. Una vez que el sitio Web esté actualizado, todos los documentos a los que se hace referencia aquí estarán disponibles en: http://mahb.jrc.ec.europa.eu. 237 http://www.who.int/csr/resources/publications/WHO_CDS_2005_31/en/index.html WHO, Environmental Health in Emergencies and Disasters: A Practical Guide (Geneva, 2002), ISBN: 92 4 154541 0: http://www.who.int/water_sanitation_health/emergencies/emergencies2002/en/index.html WHO, Human Risk Assessment Toolkit for Chemicals (2010 – in preparation): http://www.who.int/ipcs/methods/harmonization/areas/ra_toolkit/en/index.html WHO, International Health Regulations (Geneva, 2 http://www.who.int/ihr/en/ nd ed., 2005), ISBN: 978 92 4 158041 0: WHO, Manual for the Public Health Management of Chemical Incidents (Geneva, 2009), ISBN: 978 92 4 159814 9: http://www.who.int/environmental_health_emergencies/publications/Manual_Chemical_Inci dents/en/index.html g. Información sobre los productos químicos International Programme on Chemical Safety, INCHEM: Chemical Safety Information from Intergovernmental Organizations: www.inchem.org JRC, Classification and Labelling Database under Directive 67/548/EEC (multi-lingual): http://ecb.jrc.ec.europa.eu/classification-labelling/ OCDE, eChemPortal: http://webnet3.oecd.org/echemportal UNECE, Globally Harmonized System of Classification and Labelling of Chemicals (GHS): http://www.unece.org/trans/danger/publi/ghs/ghs_welcome_e.html h. Seguridad inherente Crowl, Daniel, ed., Inherently Safer Chemical Processes (New York, 1997), pp. 39-40, ISBN-13: 978- 0816907038 Hendershot, Dennis C., “Conflicts and decisions in the search for inherently safer process options,” Process Safety Progress (1995), Vol. 14, Issue 1, pp. 52-56 Hendershot, Dennis C., “Inherently safer chemical process design,” Journal of Loss Prevention (1997), Vol. 10, Issue 3, pp. 151-157 Kletz, Trevor A., “Inherently Safer Design: The growth of an idea,” Process Safety Progress (1996), Vol. 15, Issue 1, pp. 5-8 Kletz, Trevor A., Process Plants: A Handbook for Inherently Safer Design (Philadelphia, 1998), p. 193, ISBN: 1560326190 238 Kletz, Trevor A., “What You Don‟t Have, Can‟t Leak,” Chemistry and Industry (1978), Vol. 6, pp. 287-292 Ashford, N.A. and Zwetsloot, G., “Encouraging Inherently Safer Production in European Firms: a Report from the Field,” Journal of Hazardous Materials (1999) Vol.78, Issues 1-3, pp. 123-144: http://mahbsrv.jrc.it/Proceedings/Greece-Nov-1999/E1-ASHFORD-z.pdf Mannan, M.S., Hendershot, D. and Kletz, T.A., “Fundamentals of Process Safety and Riesgo Management,” Encyclopedia of Chemical Processing and Design (New York, 2002), Vol. 69, Supplement 1, pp. 49-94 i. Inspecciones MAHB, Guidance on Inspections as Required by Article 18 of the Council Directive 96/82/EC (Seveso II) (1999): http://mahb.jrc.ec.europa.eu/index.php?id=55 j. Planificación del uso de suelo MAHB, Land Use Planning Guidelines in the Context of Article 12 of the Seveso II Directive 96/82/EC as Amended by Directive 105/2003/EC (2006): http://mahb.jrc.ec.europa.eu/index.php?id=55 k. Lista de sustancias químicas/ámbito de aplicación Maria Smeder, MAHB, Seveso Directive Annex III Substances in the Seveso II Directive (Italy): http://mahbsrv.jrc.it/downloads-pdf/Seveso2-Anexo3.pdf Maria Smeder, MAHB, Substances covered by Part 1, Annex I, of the Seveso II Directive (Italy): http://mahbsrv.jrc.it/downloads-pdf/Seveso2-Anexo1.pdf US EPA, Accidental Release Prevention Requirements: Risk Management Programs Under the Clean Air Act, Section 112®(7); List of Regulated Substances and Thresholds for Accidental Release Prevention, Stay of Effectiveness; and Accidental Release Prevention Requirements: Risk Management Programs Under Section 112®(7) of the Clean Air Act as Amended, Guidelines; Final Rules and Notice. 61 FR 31667 (20 de junio de 1996): http://www.epa.gov/fedrgstr/EPA-AIR/1996/June/Day-20/pr-23439.pdf l. Minería UNEP and the International Council on Mining and Metals (ICMM), APELL for Mining (Paris, 2001): http://www.unep.fr/scp/sp/publications/ UNEP and ICMM, Good Practice in Emergency Preparedness and Response (United Kingdom, 2005): http://www.icmm.com/document/8 m. Conductos UNECE Joint Expert Group on Water and Industrial Accidents, Prevention of Accidental Water Pollution, Safety Guidelines and Good Practices for Pipelines (2006): http://www.unece.org/env/documents/2006/teia/ECE_CP.TEIA_2006_11%20E.pdf n. Análisis y evaluación 239 The Centre for Chemical Process Safety (CCPS), Process Safety Leading and Lagging Metrics – You Don’t Improve What You Don’t Measure (New York, 2008): http://www.aiche.org/uploadedFiles/CCPS/Metrics/CCPS_metrics%205.16.08.pdf OECD, Guidance on Developing Safety Performance Indicators for Industry (Paris, 2 2008): http://www.oecd.org/dataoecd/6/57/41269710.pdf nd ed., Guía de la OCDE para el desarrollo de indicadores de desempeño de seguridad para la industria, 2ª ed., 2008 OECD, Guidance on Developing Safety Performance Indicators for Public Authorities and nd Communities/Public (Paris, 2 ed., 2008): http://www.oecd.org/dataoecd/7/15/41269639.pdf Guía de la OCDE para el desarrollo de indicadores sobre el desempeño de la seguridad para las autoridades públicas y las comunidades/el público, 2ª ed., 2008). United Kingdom Health and Safety Executive and Chemical Industries Association, Developing Process Safety Indicators: A step-by-step guide for chemical and major hazard industries (2006), ISBN: 0717661806: http://www.hse.gov.uk/pubns/priced/hsg254.pdf o. Sistemas de Gestión de la Seguridad ILO, Guidelines on Occupational Safety and Health Management Systems ILO – OSH 2001 (Geneva, 2001), ISBN: 92-2-111634-4: http://www.ilo.org/safework/normative/codes/lang--en/docName--WCMS_107727/index.htm MAHB, Guidelines on a Major Accident Prevention Policy and Safety Management System, as Required by Council Directive 96/82/EC (Seveso II), ISBN: 92-828-4664-4: http://mahb.jrc.ec.europa.eu/index.php?id=55 p. Elaboración de informes de seguridad MAHB, Guidance on the Preparation of a Safety Report to Meet the Requirements of Council Directive 96/82/EC (Seveso II) (Luxembourg, 1997), ISBN: 92-828-1451-3: http://mahb.jrc.ec.europa.eu/index.php?id=55 United Kingdom Health and Safety Executive, COMAH Guidance (Safety report assessment manual, safety report assessment guides, and technical aspects): http://www.hse.gov.uk/comah/guidance.htm US EPA, Guidance for Auditing Risk Management Plans/Programs under Clean Air Act Section 112(r) (1999): http://www.epa.gov/emergencies/docs/chem/audit_gd.pdf q. Seguridad del sitio American Chemistry Council, Responsible Care Security Code of Management Practices: http://www.americanchemistry.com/s_responsiblecare/doc.asp?CID=1298&DID=5085 CCPS, Security and Vulnerability Analysis (SVA) website: http://www.aiche.org/ccps/knowledgebase/securityvul.aspx 240 r. Almacenamiento de sustancias peligrosas UNEP, Storage of Hazardous Materials: A Technical Guide for Safe Warehousing of Hazardous Materials (Paris, 1990), ISBN: 928071239X: http://www.unep.org/publications/search/pub_details_s.asp?ID=1083 s. Transporte de sustancias peligrosas (incluso áreas portuarias) Departamento de Transporte del Reino Unido, sitio Web sobre el transporte de materiales peligrosos (orientación sobre ADR, RID, IMDG y OACI TI): http://www.dft.gov.uk/pgr/freight/dgt1/ Intergovernmental Organisation for International Carriage by Rail, Convention concerning International Carriage by Rail (COTIF); Appendix C: Regulation concerning the International Carriage of Dangerous Goods by Rail (RID) (1999): http://www.otif.org/en/publications.html International Air Transport Association (IATA), Dangerous Good Regulations (DGR) (2010 ed.): http://www.iata.org/ps/publications/dgr/ CEPE/ONU, página principal sobre mercancías peligrosas http://www.unece.org/trans/danger/danger.htm 43 CEPE/ONU, publicaciones sobre mercancías peligrosas: http://www.unece.org/trans/danger/publi/dg_publications.html CEPE/ONU, Acuerdo europeo relativo al transporte internacional de artículos peligrosos por carretera (ADR) (2009): http://www.unece.org/trans/danger/publi/adr/adr_e.html International Civil Aviation Organization (ICAO), Technical Instructions for the Safe Transport of Dangerous Goods by Air (2009-2010 ed.): http://www.icao.int/anb/fl s/dangerousgoods/TechnicalInstructions/ International Maritime Organisation, International Maritime Dangerous Goods (IMDG) Code: http://www.imo.org/safety/mainframe.asp?topic_id=158 NU, Recomendaciones relativas al transporte de mercancías peligrosas – Reglamentación modelo (16ª ed., 2009): http://www.unece.org/trans/danger/publi/unrec/rev13/13nature_e.html OECD, Safety in Tunnels – Transport of Dangerous Goods through Road Tunnels (2001), ISBN:9789264196513: http://www.oecdbookshop.org/oecd/display.asp?K=5LMQCR2KC17F&DS=Safety-inTunnels Switzerland Federal Office of the Environment, Forests and Landscape, Risk Evaluation Criteria for Transport Routes (2001): http://www.bafu.admin.ch/publikationen/publikation/00553/index.html?lang=fr (en francés; también disponible en italiano y alemán) 43 La página Web de mercancías peligrosas de la CEPE/ONU proporciona un resumen de los reglamentos con respecto al transporte de mercancías peligrosas, así como actividades y orientación. Esta página también ofrece documentos normativos y de orientación específicos a los usuarios que buscan documentación en particular. 241 United Kingdom Health and Safety Executive, Carriage of Dangerous Goods Manual (guidance on ADR): http://www.hse.gov.uk/cdg/manual/index.htm UNECE Inland Transport Committee, Industry Guidelines for the Security of the Transport of Dangerous Goods by Road (2005): http://www.unece.org/trans/doc/2005/wp15/TRANS-WP15-78-inf10e.pdf UNEP, APELL for Port Areas: Preparedness and Response to Chemical Accidents in Ports (Paris, 1996): http://www.unep.fr/scp/sp/publications/ UNEP, TransAPELL: Guidance for Dangerous Goods Transport: Emergency Planning in a Local Community (Paris, 2000), ISBN: 92 807 1907 6: http://www.unep.fr/scp/sp/publications/ b. Instrumentos jurídicos OIT: http://www.ilo.org/ilolex/english/convdisp1.htm Convenio No. 187 sobre el marco promocional para la seguridad y salud en el trabajo (2006) Convenio No. 174 sobre la prevención de accidentes industriales mayores (1993) Recomendación No. 181 sobre la prevención de accidentes industriales mayores (1993) Convenio No. 170 sobre la seguridad en la utilización de los productos químicos en el trabajo (1990) Convenio No. 155 sobre la seguridad y salud de los trabajadores y medio ambiente de trabajo (1981) PNUMA: http://www.unep.org/DEC/Links/Chemicalsandwastes.asp Convenio de Basilea sobre el control de los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y su eliminación Convenio de Estocolmo sobre contaminantes orgánicos persistentes Convenio de Rotterdam sobre el procedimiento de consentimiento informado previo aplicable a ciertos plaguicidas y productos químicos peligrosos objeto de comercio internacional (secretaría interina conjunta con la FAO) CEPE/ONU: http://www.unece.org/env/teia/welcome.html Convenio sobre los efectos transfronterizos de los accidentes industriales (1992) OMS: http://www.who.int/ihr/en/ Reglamento Sanitario Internacional de 2005 (RSI 2005) Unión Europea: http://ec.europa.eu/environment/seveso/legislation.htm 242 Directiva 96/82/CE del Consejo, de 9 de diciembre de 1996, relativa al control de los riesgos inherentes a los accidentes graves en los que intervengan sustancias peligrosas, modificada por la Directiva 2003/105/CE del Parlamento Europeo y del Consejo de 16 de diciembre de 2003. Estados Unidos: http://www.epa.gov/emergencies/lawsregs.htm Programa de Gestión de Riesgo (PGR): Sección 112(r) de la Ley del Aire Limpio en su forma enmendada, con sus reglamentos (40 CFR Parte 68); y Ley de Planificación de las Emergencias y del Derecho a la Información Comunitaria (EPCRA): 42 U.S.C. 116, con sus reglamentos (por ejemplo, 40 CFR 355, 40 CFR 370). c. Informes de accidentes y estudios de caso CCPS, archivo Process Safety Beacon: www.sache.org Ministerio francés de Ecología y Desarrollo Sostenible, Base de datos Aria de informes de accidentes industriales: http://www.aria.developpement-durable.gouv.fr/ (disponible en francés e inglés) IchemE, Loss Prevention Bulletin: http://www.icheme.org/lpb IchemE, United Kingdom Health and Safety Executive accident reports: http://cms.icheme.org/mainwebsite/generalbara492fef27d8d4c3d56cb34e1.aspx?map=38404a676f b2f4baeec91a305f73c39 (fuera de impresión informes de accidentes están disponibles para descargar) Kletz, Trevor, Still Going Wrong! Case Histories of Process Plant Disasters and How They Could Have Been Avoided (1st ed., 2003), ISBN: 0750677090 th Kletz, Trevor, What Went Wrong?: Case Histories of Process Plant Disasters (4 ed., 1998), ISBN:0884159205 Sanders, Roy E., Chemical Process Safety – Learning from Case Histories (3rd ed., 2005): http://knovel.com/web/portal/browse/display?_EXT_KNOVEL_DISPLAY_bookid=1881&VerticalID= 0 UK Health and Safety Executive, Control of Major Accident Hazards (COMAH) accident reports: http://www.hse.gov.uk/comah/accidents.htm Junta de Seguridad Química e Investigación de Riesgos de los Estados Unidos (CSB), investigaciones terminadas: http://www.csb.gov/investigations/investigations.aspx?Type=2&F_All=y 243 d. Organizaciones y sus sitios Web CCPS: Centro de Seguridad de Procesos Químicos del (Instituto Americano de Ingenieros Químicos) (www.aiche.org/ccps) CE: Comisión Europea (http://ec.europa.eu) (http://ec.europa.eu/environment/seveso) DTIE PNUMA: División de Tecnología, Industria y Economía del PNUMA (www.unep.fr) IChemE: Instituto de Ingenieros Químicos (http://www.icheme.org/safety) IOMC: Programa Interinstitucional de Gestión Racional de los Productos Químicos (www.who.int/iomc) IPCS: Programa Internacional de Seguridad de las Sustancias Químicas (http://www.who.int/ipcs/emergencies/en/) JEU: Unidad Conjunta para el Medio Ambiente del PNUMA/OCAH (http://ochaonline.un.org/ochaunep) JRC: Centro de Investigación Conjunta (www.jrc.ec.europa.eu) MAHB: Oficina de Riesgos de Accidentes Graves (http://mahb.jrc.ec.europa.eu) MSB: Agencia Sueca de Contingencia Civil (http://www.msb.se/en/) OCAH: Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (http://ochaonline.un.org) OCDE: Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (www.oecd.org/ehs) OIT: Organización Internacional del Trabajo (www.ilo.org/public/english/protection/safework/index.htm) 244 Producción más segura del PNUMA Incluye la Concientización y Preparación para Emergencias a Nivel Local (APELL) (www.unep.fr/scp/sp) OMS: Organización Mundial de la Salud (www.who.int/environmental_health_emergencies/en/index.html) ONUDI: Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (www.unido.org) UNECE: Convenio de la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa sobre los efectos transfronterizos de los accidentes industriales (www.unece.org/env/teia) USCSB: Junta de Seguridad Química e Investigación de Riesgos de los Estados Unidos (www.chemsafety.gov) US EPA: Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (www.epa.gov/emergencies) 245 Sobre la División de Tecnología, Industria y Economía del PNUMA La División de Tecnología, Industria y Economía (DTIE) del PNUMA ayuda a los gobiernos, autoridades locales y los tomadores de decisiones en los negocios y la industria, a desarrollar e implementar políticas y prácticas centradas en el desarrollo sostenible. La División trabaja para promover: ˃el consumo y la producción sostenible, ˃el uso eficiente de energías renovables, ˃el uso adecuado de productos químicos, ˃la integración de los costos ambientales en las políticas de desarrollo. La Oficina del Director, ubicada en Paris, coordina actividades a través de: ˃ El Centro Internacional de Tecnología Ambiental (IETC, por su sigla en inglés) (Osaka, Shiga), el cual implementa programas de manejo integral de residuos, programas de manejo de agua y desastres, enfocándose particularmente en Asia. ˃ Consumo y Producción Sostenible (Paris), la cual promueve patrones de consumo y producción sostenible como una contribución al desarrollo humano a través de mercados globales. ˃ Químicos (Ginebra), la cual cataliza acciones globales para lograr el manejo seguro de productos químicos, así como el mejoramiento de la seguridad química en todo el mundo. ˃ Energía (Paris), la cual fomenta las políticas energéticas y de transporte a favor del desarrollo sostenible y promueve la inversión en energías renovables y la eficiencia energética. ˃ Acción Ozono (Paris), la cual apoya la eliminación de sustancias que provocan el adelgazamiento de la capa de ozono en países en vías de desarrollo y en países con economías en transición, para así asegurar la implementación del Protocolo de Montreal. ˃ Economía y Comercio (Ginebra), la cual ayuda a los países a integrar consideraciones ambientales en sus políticas económicas y comerciales y trabaja con el sector financiero para incorporar políticas de desarrollo sostenible. Las actividades de la DTIE del PNUMA se centran en la sensibilización, en mejorar la transferencia de conocimientos e información, fomentar la cooperación y las sociedades tecnológicas e implementar las convenciones y los acuerdos internacionales. Para más información, Véase www.PNUMA.fr 246 Los accidentes industriales relacionados con químicos tales como derrames, explosiones, incendios o nubes de vapor pueden causar daños significativos a la propiedad, el ambiente y la economía local. Un programa eficaz en caso de accidentes con productos químicos ayudará a evitar accidentes y minimizar los impactos adversos en caso de que ocurran. La prevención de accidentes con productos químicos y la gestión proactiva de los riesgos químicos son aspectos importantes del desarrollo sostenible y la promoción de la industria responsable. Como parte de una iniciativa dirigida por el PNUMA, se ha desarrollado un Marco Flexible para tratar la Prevención y Preparación en caso de accidentes con productos químicos, que ofrece orientación para aquellos gobiernos que desean desarrollar, examinar o fortalecer sus programas nacionales de prevención y preparación para casos de accidentes con productos químicos. Esta Guía ofrece información detallada sobre elementos importantes del Programa para la Prevención y Preparación de Accidentes con Productos Químicos (CAPP), incluso las funciones que la industria y el gobierno deberían desempeñar en mejorar la seguridad de los productos químicos. Además, proporciona un conjunto de directrices que esboza un procedimiento para el desarrollo y la implementación de un Programa CAPP eficaz. Para más información, comuníquese con: DTIE PNUMA División de Producción y Consumo Sostenible (SCP) 15 rue de Milan 75441 Paris CEDEX 09 Francia Tel: +33 1 4437 1450 Fax: +33 1 4437 1474 Correo electrónico: [email protected] www.unep.fr/scp ISBN: 978-92-807-3094-4 DTI/1285/PA 247