586-2009 Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia: San Salvador, a las ocho horas con treinta y tres minutos del día doce de febrero de dos mil diez. Analizada la demanda firmada por los abogados Lucio Albino Arias López y Mario Dennis Bruno Arias, en calidad de apoderados de la sociedad Fam, Sociedad Anónima de Capital Variable, junto con la documentación relacionada a folios ocho de este expediente judicial; así como también el escrito de fecha 10-II-2009 firmado por el abogado Arias López en el carácter recién apuntado, en virtud del cual reitera la demanda incoada y la solicitud de suspensión de los efectos del acto impugnado en el presente amparo; es necesario realizar las consideraciones siguientes: I. Los citados profesionales relatan que su patrocinada se dedica a la venta de combustibles y lubricantes a través de un establecimiento denominado HP–Horse Power Gas. Asimismo, manifiestan que el día 14-XI-2008, un fedatario de la administración tributaria informó a la Dirección General de Impuestos Internos sobre supuestas infracciones cometidas por su representada, consistentes en la omisión de generar factura o documento de conformidad con las exigencias establecidas en las normas relativas al Impuesto a la Transferencia de Bienes Muebles y a la Prestación de Servicios. Sostienen que, a partir de lo anterior, dieron inicio las diligencias judiciales para comprobar la comisión de dicha infracción, ante el Juzgado Cuarto de lo Civil de San Salvador bajo la referencia número 23-DV-09, las cuales concluyeron con el pronunciamiento de fecha 22-IV-2009 que declaró sin lugar la petición de cierre temporal solicitada respecto del establecimiento HP-Horse Power Gas, propiedad de la sociedad reclamante. Sin embargo, relatan que la agente auxiliar de la Fiscalía General de la República interpuso recurso de apelación ante la Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro, la cual admitió el referido recurso, revocó la resolución antes relacionada y, finalmente, ordenó el cierre temporal del aludido establecimiento comercial, no obstante que, según su criterio, no existe una habilitación legal que faculte a dicha Cámara para conocer de recursos de alzada contra las diligencias de cierre temporal a que hace alusión el artículo 257, inciso 4° del Código Tributario. Y es que, de conformidad con lo expuesto por los abogados de la sociedad impetrante, el citado procedimiento es una mera diligencia civil “… y no […] un proceso civil ordinario, ni sumario…”. Aunado a ello, afirman que la resolución emitida por el Juez Cuarto de lo Civil, tampoco es una interlocutoria con fuerza definitiva que pueda ser conocida “… en el recurso de „alzada‟…”, razón por la cual, aducen que dicha autoridad ha 1 dado trámite al “… objeto debatido, cuando la norma secundaria en ningún momento desarrolla la configuración de recursos…”. Por otra parte, los demandantes señalan que su representada interpuso un recurso de casación en el caso que nos ocupa, sin embargo, relatan que la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia, “… lejos de actuar con apego a la congruencia jurídica consignada constitucionalmente […], no admitió el recurso […] y procedió a declarar sin lugar el [mismo] y a ratificar la resolución que arbitrariamente pronunció la relacionada Cámara…”. En atención a las consideraciones expuestas, los abogados Arias López y Bruno Arias concluyen que a su poderdante se le ha vulnerado el principio de legalidad y los derechos fundamentales a la seguridad jurídica y propiedad. II. Delimitados los elementos que constituyen el relato de los hechos planteado por los abogados de la parte actora, conviene ahora, en primer lugar, exteriorizar brevemente los fundamentos jurídicos relativos al agravio trascendencia constitucional y los efectos de su ausencia en el proceso de amparo (1); para, posteriormente, concretizar dichas nociones al presente caso, particularmente, en lo relativo a la actuación que se atribuye a la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia (2). 1. En reiteradas oportunidades –verbigracia los autos de improcedencia de fecha 23VI-2003 y 17-II-2009, pronunciados en los amparos 281-2003 y 1-2009, respectivamente– esta Sala ha señalado que para la procedencia de la pretensión de amparo es necesario que el actor se autoatribuya liminarmente alteraciones difusas o concretas en su esfera jurídica, derivadas de los efectos de la existencia del acto reclamado, cualquiera que fuere su naturaleza; es decir, lo que en términos generales la jurisprudencia constitucional ha denominado de manera concreta “agravio”. Dicho agravio se funda en la concurrencia de dos elementos: el material y el jurídico, entendiéndose por el primero, cualquier daño, lesión, afectación o perjuicio definitivo que la persona sufra en forma personal y directa; y el segundo –el elemento jurídico– que el daño sea causado o producido en ocasión o mediante la real violación de derechos constitucionales atribuida a alguna autoridad o, inclusive, a un particular. Ahora bien, habrá casos en que la pretensión del actor no incluya los anteriores elementos –entiéndase por falta de agravio–. Dicha ausencia, en primer lugar, puede provenir de la inexistencia de un acto u omisión, ya que sólo de modo inverso pueden deducirse efectos concretos que posibiliten la concurrencia de un agravio; y en segundo lugar, puede ocurrir que no obstante la existencia real de una actuación u omisión, por la misma naturaleza de sus efectos, el sujeto activo de la pretensión no sufra perjuicio de trascendencia constitucional, directo ni reflejo, actual ni futuro, como por ejemplo en los 2 casos en que los efectos del acto reclamado no constituyen aspectos propios del marco constitucional. En efecto, para dar trámite a un proceso como el presente, es imprescindible que la omisión o el acto impugnado genere en la esfera jurídica del demandante un agravio o perjuicio definitivo e irreparable de trascendencia constitucional, pues de lo contrario resultaría infructuosa y contraproducente la sustanciación de un proceso cuya pretensión carezca de uno de los elementos esenciales para su adecuada configuración. 2. Ahora bien, de lo expuesto en la demanda se advierte que los apoderados de la sociedad interesada ubican a la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia en el extremo pasivo del presente amparo, por haber pronunciado la resolución de fecha 4-IX2009, en virtud de la cual se declaró improcedente el recurso de casación incoado por su patrocinada contra la decisión proveída por la Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro en las diligencias de cierre temporal previamente relacionadas. En síntesis, los profesionales en referencia alegan que tal actuación es inconstitucional debido a que la misma “… no admitió el recurso de casación…”, sino que ratificó “… la resolución que arbitrariamente pronunció la relacionada Cámara…”. Sin embargo, según se aprecia del contenido del proveído emitido por la Sala de lo Civil –agregado a este expediente judicial–, dicho tribunal sostuvo que: “… el procedimiento que [dio] origen a la resolución impugnada es un trámite sumarísimo que tiene por objeto imponer una sanción por incumplimiento de obligaciones tributarias…” y, en virtud de ello, acotó que de las resoluciones emanadas de dichos trámites “… la ley de casación no concede recurso, estando este limitado a los juicios ordinarios y sumarios y diligencias de jurisdicción voluntaria…”. En ese sentido, es posible afirmar que, contrario a lo afirmado por los abogados de la parte actora, la referida autoridad, lejos de confirmar o ratificar la actuación pronunciada por el tribunal inferior, descartó la posibilidad de conocer sobre el fondo de lo planteado en razón de su presunta falta de competencia legal para hacerlo; por lo tanto, ésta no ha desplegado específicas potestades decisorias para avalar la actuación de la Cámara demandada, ni para pronunciarse sobre las circunstancias que motivaron la actuación de ésta. Así las cosas, la actuación en estudio no parece ocasionar una afectación constitucional en la esfera jurídica de la sociedad interesada, sino que, por el contrario, en cierta medida, la misma parecería coincidir con la argumentación esgrimida por los abogados de la sociedad peticionaria referida a la inexistencia de un desarrollo normativo que habilite a la Cámara demandada para conocer del recurso de apelación en las diligencias de cierre temporal tramitadas de conformidad con el artículo 257 inciso 4° del Código Tributario. 3 En consecuencia, es válido sostener que, dadas las particularidades del presente caso, la actuación que se impugna y atribuye a la Sala de lo Civil antes relacionada no es susceptible de ocasionar una afectación directa al contenido de los derechos constitucionales que los abogados de la sociedad interesada aducen vulnerados o de impedir el ejercicio legítimo de los mismos. Por tanto, este extremo del reclamo incoado, pese a haberse presentado bajo el ropaje de una supuesta violación constitucional, configura una pretensión fundada exclusivamente en una decisión cuyos efectos no inciden directamente en la esfera jurídica de la sociedad demandante y, por consiguiente, es evidente la imposibilidad por parte de esta Sala de entrar a conocer la pretensión planteada, por cuanto la falta de agravio de trascendencia constitucional provoca un vicio en la misma y vuelve ineludible su rechazo inicial mediante la figura de la improcedencia. III. Efectuadas las consideraciones que preceden, este Tribunal advierte que la admisión de la presente demanda se circunscribirá al control de constitucionalidad de la sentencia pronunciada por la Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro el día 7-VII-2009, en virtud de la cual se revocó la resolución emitida por el Juez Cuarto de lo Civil de San Salvador en las diligencias tramitadas con la referencia número 23-DV-09 y, consecuentemente, se decretó el cierre del establecimiento comercial “HP-Horse Power Gas”, propiedad de la sociedad peticionaria. Dicha admisión se debe a que, según lo expuesto por los apoderados de la sociedad impetrante, no existe un desarrollo normativo que habilite a la citada Cámara para conocer de los recursos de apelación suscitados en torno a las diligencias especiales de cierre temporal que se tramitan de conformidad con el artículo 257, inciso 4° del Código Tributario y, por tanto, dicho tribunal habría actuado al margen de sus competencias legalmente establecidas. Lo anterior, a criterio de los referidos profesionales, habría ocasionado a la sociedad demandante la supuesta vulneración de sus derechos constitucionales de propiedad y seguridad jurídica, en vinculación con el principio de legalidad. IV. Expuestas las precedentes acotaciones, corresponde en este apartado examinar la posibilidad de decretar una medida precautoria en el presente amparo, para lo cual, resulta necesario señalar que la suspensión de los efectos del acto impugnado se enmarca dentro de la categoría de las medidas cautelares, cuya función es impedir la realización de actos que, de alguna manera, impidan o dificulten la efectiva satisfacción de la pretensión, la cual se lleva a cabo mediante una incidencia en la esfera jurídica del demandado o, incluso, de quien resulte beneficiado con el acto reclamado. En relación a ello, es necesario indicar que para la adopción de una medida cautelar deben concurrir al menos dos presupuestos básicos, a saber: la probable existencia de un 4 derecho amenazado -fumus bonis iuris- y el daño que ocasionaría el desarrollo temporal del proceso -periculum in mora-. En el presente caso, se puede advertir que existe apariencia de buen derecho en virtud de la invocación de una presunta violación a derechos constitucionales de la sociedad pretensora y la exposición de circunstancias fácticas y jurídicas en las que se hace descansar aquélla; de igual forma, se puede observar que existe un efectivo peligro en la demora, ya que de no paralizar los efectos de la normativa impugnada podría afectarse el patrimonio de ésta. En razón de lo anterior, resulta procedente ordenar la suspensión de los efectos de la actuación controvertida, en el sentido que, mientras se tramita este amparo, por un lado, el Juez Cuarto de lo Civil de esta ciudad deberá abstenerse de ejecutar la resolución emitida por la Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro el día fecha 7-VII2009, pronunciada en el recurso de apelación tramitado con la referencia 17-4°C-09-A, concretamente, deberá inhibirse de autorizar los sellos oficiales requeridos para la realización de tal diligencia; y, por otro lado, la Fiscalía General de la República –a través de los canales correspondientes– deberá abstenerse de efectuar el cierre temporal decretado en virtud de la actuación antes relacionada. Por todo lo expuesto y de conformidad a los artículos 12, 19, 20, 21, 22 y 79 inciso 2º de la Ley de Procedimientos Constitucionales, esta Sala RESUELVE: 1. Tiénese a los abogados Lucio Albino Arias López y Mario Dennis Bruno Arias como apoderados de la sociedad Fam, Sociedad Anónima de Capital Variable, por haber acreditado debidamente la personería con la que intervienen en el presente proceso. 2. Declárese improcedente la demanda incoada por los aludidos profesionales en el carácter antes indicado, contra la actuación imputada a la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia, es decir, la resolución de fecha 4-IX-2009 que declaró improcedente el recurso de casación interpuesto por la parte actora en el presente reclamo; de conformidad con lo expuesto en el considerando II de la presente resolución. 3. Admítese la demanda firmada por los abogados Arias López y Bruno Arias, en la calidad antes dicha, contra la resolución de fecha 7-VII-2009 emitida por la Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro, en los términos señalados en el considerando III de esta resolución, por la presunta violación a los derechos constitucionales de propiedad y a la seguridad jurídica –en conexión con el principio de legalidad–, de la sociedad Fam, Sociedad Anónima de Capital Variable, a quien se tiene por parte. 4. Suspéndense inmediata y provisionalmente los efectos de la actuación impugnada, medida cautelar que ha de entenderse en el sentido que, mientras se tramita este amparo, por un lado, el Juez Cuarto de lo Civil de esta ciudad deberá abstenerse de 5 ejecutar la resolución emitida por la Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro el día fecha 7-VII-2009, pronunciada en el recurso de apelación tramitado con la referencia 17-4°C-09-A, concretamente, deberá inhibirse de autorizar los sellos oficiales requeridos para la realización de tal diligencia; y, por otro lado, la Fiscalía General de la República –a través de los canales correspondientes– deberá abstenerse de efectuar el cierre temporal decretado en virtud de la actuación antes relacionada. 5. Informe dentro de veinticuatro horas la Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro quien deberá limitarse a expresar en su respectivo informe si son ciertos los hechos que se le atribuyen en la demanda. 6. Hágase saber la existencia de este amparo al Juez Cuarto de lo Civil de San Salvador y a la Fiscalía General de la República, a efectos de que –a través de la dependencia correspondiente– se conozca la medida cautelar adoptada dentro del mismo e informen sobre su cumplimiento. 7. Identifique la autoridad demandada el medio técnico mediante el cual desea recibir los actos procesales de comunicación. 8. Tome nota la Secretaría de esta Sala del lugar y medio técnico indicados por los apoderados de la sociedad demandante, para recibir los actos procesales de comunicación. 9. Notifíquese. ---F. MELÉNDEZ--- E. S. BLANCO R.---R. E. GONZÁLEZ B.---PRONUNCIADO POR LOS SEÑORES MAGISTRADOS QUE LO SUSCRIBEN---E. SOCORRO C.--RUBRICADAS. 6