*2224 Laboratorio Raymons 5/22/04 12:53 AM Page 4 ´ λογος Arlés 1888-1889 La explosión del color En el otoño de 1887 Vincent Van Gogh escribió a su hermana Wil desde París para comunicarle su deseo de pasar una temporada en el sur: “allí hay más color y más sol”. En febrero de 1888 Vincent salió de París en dirección a Arlés con ayuda de su hermano Theo. Ya conocía la región de Provenza, la vida sencilla, los trajes tradicionales, la danza en coro y las corridas de toros. Arlés había sido una ciudad importante desde la Antigüedad, una pequeña joya arquitectónica con notables edificios romanos y románticos. Pero Van Gogh no demostró el menor interés por ellos en su búsqueda de motivos. Le interesaban más la vida de la gente sencilla y los vastos campos y prados de los alrededores por los que deambulaba días enteros. de concluir los cuadros en un sólo día. La expresión inmediata le pareció más importante que la reproducción realista, ya se tratara de paisajes, retratos o un simple par de suecos de madera. Sin reparar en la fatiga y soportando estoicamente el intenso sol buscaba la descomposición impresionista del color y su desarrollo científico, el puntillismo. Arte y utopía La casa amarilla Poco después de su llegada a Arlés alquiló por 15 francos al mes una de las muchas casas que habían quedado vacías por la crisis económica que padecía la región. Pintada de amarillo, con la puerta y las ventanas verdes, El café de noche, 1888. Colección H.R. Hahnloser, Berna Acuarela sobre lienzo 44.4 x 63.2 cm La noche estrellada (cipreses y pueblo), 1889 The Metropolitan Museum of Modern Art, Nueva York Óleo sobre lienzo 73 x 192.2 cm las paredes interiores blancas y el suelo de ladrillo rojo, tenía cuatro habitaciones. Vincent le escribió a Theo y le habló de su casa amarilla como un lugar en el que pensaba fundar una sociedad de artistas. Tras la muerte de su tío Cent pudo arreglar la casa con su parte de la herencia y mudarse. Las ha- “En mi cuadro “Café de noche”, intenté expresar que el café es un sitio donde uno puede arruinarse, volverse loco, cometer crímenes. En realidad busqué, mediante contrastes de rosa tenue y rojo sangre y heces de vino, de verde suave Luis XV y Veronés en contrate con verdes amarillentos y verdes blanquecinos duros, todo junto en una atmósfera de horno infernal de azufre pálido, expresar algo así como la potencia tenebrosa de una taberna” VINCENT VAN GOGH 4 Medicamentos Mejores bitaciones no tardaron en convertirse en motivos de su pintura. Había colgado estampas japonesas y sobre todo retratos que habían sido pintados para su dormitorio. Las pinturas realizadas en 1888 y 1889 pertenecen al período creativo más importante de Van Gogh, que en casi 10 años pintaría más de 800 obras. En el sur de Francia consiguió reflejar en sus cuadros su afición a las estampas japonesas. Arlés fue su Japón. La Provenza ofrece un sol más intenso y una luz diferente. Durante el verano pasó días enteros pintando al aire libre con el propósito Los primeros días de estancia de Paul Gauguin en la casa amarilla durante el otoño de 1888, constituyeron una fuente de inspiración para Van Gogh. Pintó paisajes y naturalezas muertas muy expresivas jugando con los colores y volvió a los autorretratos que intercambió con Gauguin y otros artistas. Sin embargo, la idea de fundar una colonia de artistas en Arlés fue perdiendo fuerza a causa de las frecuentes peleas con Gauguin. Las vio- La habitación de Vincent en Arlés, 1889 Musée d’ Orsay, París Óleo sobre lienzo 72 x 90 cm lentas discusiones de los dos artistas culminaron con una fuerte crisis en diciembre de 1888: el pintor se cortó el lóbulo de la oreja derecha con una ho- *2224 Laboratorio Raymons 5/22/04 12:53 AM Page 5 Vincent Van Gogh Prado con puesta de sol (Detalle), 1888 Rijksmuseum Kröller-Müller, Ottrerlo Óleo sobre cartón 31.5 x 34.5 cm ja de afeitar en un ataque de locura. Fue atendido en el Hospital de Arlés y días después, cuando recibió el alta médica, regresó a la casa amarilla. Gauguin había partido. Van Gogh tuvo que enfrentarse al acoso de sus vecinos que querían encerrarlo en un manicomio. Luego de una visita a su hermano en París se instala en Auvers al cuidado del Dr. Gachet. Auvers-sur-Oise 1890 Vincent pensó en trasladarse a Auvers, porque además de estar a tan sólo una hora de París, contaba con la asistencia permanente del Dr. Gachet, pintor aficionado y admirador de los impresionistas. En Auvers Van Gogh pintó más de 80 obras. Poco a poco el mundo del arte fue tomando conciencia de su trabajo y prueba de ello es el artículo que publi- có Albert Aurier en el número de enero del “Mercure de France”. Es una lámpara de minero deslumbradora, frenética y que todo lo abarca; es la materia , la naturaleza al completo en torsiones dementes, en rabioso delirio, incrementadas hasta la máxima agitación; es forma convertida en sílfide, color convertido en llama, lava, piedra preciosa; es luz convertida en incendio, es vida, fiebre ardiente. Este es el único elogio público a su obra en vida y es también un anuncio de su enorme éxito póstumo y de su crucial incidencia en la historia del arte. En Auvers plasmó su tristeza en paisajes como Campo de trigo y cuervos. Finalmente dejó de encontrar sentido en la pintura y lamentó ser demasiado viejo para aprender otro oficio. “Si no fuera por tu amistad – escribió a Theo-, llegaría a cometer suicidio sin tener remordimientos de conciencia, y, aunque soy un cobarde, sé que acabaría haciéndolo”. El 27 julio del año 1890, preso de una inmensa soledad, se disparó un tiro y murió dos días después acompañado por su hermano Theo, quien muere seis meses después Van Gogh el suicidado por la sociedad “Van Gogh el suicidado por la sociedad” es un libro clave en la obra de Artaud. Éste se vio reflejado como en un espejo en el artista holandés. Es difícil encontrar un caso igual de identificación. Al indagar en la obra de Van Gogh se siente penetrar en un espíritu paralelo al suyo, se descubre a sí mismo. (…). Artaud nos muestra en su “Van Gogh” cómo el espíritu aprende a verse en las cosas más insignificantes, en todo lo que lo rodea, y el modo en que se refleja en ellas. Mediante la misteriosa alquimia del pintor el mundo se convierte en una imagen del hombre. El destino del gran maldito de la pintura es similar al de Artaud; similares fueron sus frustraciones, similares sus aspiraciones. (…). Así como Van Gogh hizo vivir las imágenes de las cosas, Artaud hizo vivir las palabras. Extraído de: Aldo Pellegrini, Antonin Artaud el enemigo de la sociedad, en Antonin Artaud, Van Gogh el suicidado por la sociedad, Alfaguara, 1998. El Grito, 1910 Autor: Edvard Munch Munch-museet, Oslo Óleo sobre lienzo 83.5 x 66 cm Edvard Munch (1863-1944) describió así la experiencia que lo llevó a pintar este cuadro: Caminaba yo con dos amigos por la carretera, entonces se puso el sol. De repente el cielo se volvió rojo como la sangre. Me detuve y me apoyé en la valla cansado. Lenguas de fuego y sangre se extendían sobre el fiordo negro azulado. Mis amigos siguieron caminando, mientras yo me quedaba atrás temblando de miedo, y sentí el grito enorme, infinito, de la Naturaleza Campo de trigo y cuervos, 1890 Rijksmuseum Vincent van Gogh, Amsterdam Óleo sobre lienzo 50.5 x 103 cm “Los cuervos pintados dos días antes de su muerte no le abrieron, más que sus otras telas, la puerta de cierta gloria póstuma, pero abren a la pintura pintada, o más bien a la naturaleza no pintada, la puerta oculta de un más allá posible, de una permanente realidad posible, a través de la puerta abierta por Van Gogh hacia un enigmático y pavoroso más allá” ANTONIN ARTAUD Antonin Artaud, poco antes de morir, pudo realizar la obra hiperlúcida, la obra maestra indiscutible que es su “Van Gogh”. El grito de Artaud, como el de Edvard Munch, surge de las “cavernas del ser”. La juventud reconocerá para siempre como suya esta oriflama calcinada. ANDRÉ BRETON Tanvimil C 5