la educación diferenciada como proyección de la libertad de

Anuncio
EDUCACIÓN DIFERENCIADA, IDEARIO Y LIBRE ELECCIÓN DE CENTRO*
Por
GLORIA MORENO BOTELLA
Profesora Titular de Derecho Eclesiástico del Estado
Universidad Autónoma de Madrid
[email protected]
Revista General de Derecho Canónico y Derecho Eclesiástico del Estado 20 (2009)
SUMARIO: I.- INTRODUCCIÓN; II.-LIBERTAD DE ENSEÑANZA Y DERECHO A LA
EDUCACIÓN; III.- EL DERECHO DE LOS PADRES A ESCOGER EL TIPO DE EDUCACIÓN; IV.EL CONTENIDO DE LA LIBERTAD DE ENSEÑANZA; V.- EDUCACIÓN DIFERENCIADA Y
CRITERIOS DE ADMISIÓN DE ALUMNOS; VI.- LA EDUCACIÓN DIFERENCIADA EN LA
JURISPRUDENCIA; 1.- LA EDUCACIÓN DIFERENCIADA EN LA JURISPRUDENCIA ANTERIOR
A LA LOE; 2.- LA EDUCACIÓN DIFERENCIADA EN LA JURISPRUDENCIA POSTERIOR A LA
LOE.
I.-INTRODUCCIÓN
A mediados de abril de 2009, conocíamos la noticia: la Consejería de Educación del
Gobierno de la Comunidad Autónoma de Cantabria no renovará el concierto a un colegio
privado pero subvencionado con fondos públicos, es decir, concertado, porque el citado
colegio sólo escolariza a niños varones. La razón. a juicio de la citada Consejería, es que
la educación separada entre niños y niñas, vulnera la normativa española en materia
educativa, en la que rige el principio de igualdad y no discriminación entre hombres y
mujeres.
Este hecho, no se ha producido de forma aislada. Desde que culminó el proceso de
traspaso de competencias en materia de educación a las distintas autonomías, sucesos
como éste se han producido en Cataluña, Asturias, Baleares, Andalucía, Galicia o
Castilla-La Mancha. En estas Comunidades, en desarrollo de la Ley Básica del Estado
en materia de educación, LOE de 3 de mayo de 2006, y a través de los Decretos
Autonómicos de Escolarización y Normas sobre Admisión de Alumnos en centros
públicos y concertados, se han intentado retirar o negar la financiación pública a aquéllos
*
Este trabajo ha sido elaborado en el marco del Proyecto de Investigación, I+D de la Comunidad
Autónoma de Madrid S2007/HUM-0403
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
colegios, cuyo modelo pedagógico no se basaba en la coeducación o educación mixta,
sino en la educación diferenciada.
En cuanto a los Tribunales, hasta el año 2007, año en el que el Tribunal Supremo
cambiará su doctrina en relación a la educación separada, todas las resoluciones y
sentencias de los Tribunales Superiores de Justicia de las CCAA, que se pronunciaron
sobre la educación diferenciada, fueron favorables a la misma por entender que la
enseñanza diferenciada es una cuestión de método que comporta una diferencia, pero
en ningún caso puede confundirse con lo que es discriminación. Esta interpretación fue
confirmada por una Sentencia del Tribunal Supremo de 26 de junio de 2006 ,
desestimatoria del recurso de casación interpuesto por UGT/FETE de Asturias contra la
sentencia de 20 de diciembre de 1999 de la sala de lo contencioso-administrativo de la
Audiencia Nacional en el recurso 617/97 sobre revocación y acceso al régimen de
concierto educativo de centros docentes privados.
Lo curioso del caso es que desde el año 1984 no existe en España ni un sólo colegio
público de enseñanza diferenciada, pese a que, históricamente, este es el modelo de
educación que hemos seguido la mayoría de los que, ahora, somos los encargados de
educar a los que se quiere imponer un único modelo de enseñanza. Esto resulta un tanto
sorprendente teniendo en cuenta que a partir de 1978 nos encontramos en un Estado de
Derecho, en el que priman valores como la libertad y el pluralismo, frente al Estado
totalitario de la época anterior, en el cual, los padres podían elegir el tipo de educación
mixta o separada que quisieran para sus hijos, pues tal diferenciación tenía cabida tanto
en la enseñanza pública como en la privada.
Por el contrario, hoy día, en España sólo existen poco más de un centenar de
colegios con educación separada por sexos, la mayoría son privados y muy pocos son
concertados, y éstos poseen un ideario religioso católico, es decir inspirado en la
doctrina de la Iglesia Católica. En el caso que nos ocupa, recordemos que la retirada de
los conciertos de forma masiva se ha llevado a cabo en colegios pertenecientes al Opus
Dei, lo que se esconde en realidad es un abierto rechazo a los planteamientos
doctrinales, sin embargo, tales planteamientos son objeto de protección por la libertad
ideológica y de enseñanza.
Frente a ese rechazo, no podemos olvidar que los titulares de centros privados tienen
derecho a establecer un ideario, es decir un cuerpo doctrinal o lo que es lo mismo, una
ideología, pues la enseñanza no es sólo transmisión de conocimientos y aptitudes, sino
también de valores, valores que no se limitan sólo a la enseñanza religiosa y moral, sino
que abarca y se extiende a toda la actividad educativa tal y como ha señalado la doctrina
del Tribunal Constitucional
1981,(fundamento jurídico,8).
2
español
en
la Sentencia de 13 de febrero
de
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
Por otro lado, los Convenios Internacionales de Derechos Humanos, como veremos,
y los Convenios de ámbito regional europeo, como el Convenio Europeo de Derechos
Humanos, y la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea, reconocen el
derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos de acuerdo con sus
convicciones religiosas, filosóficas o morales, e incluso el artículo 14,2 de la Carta de la
UE , va más allá, al añadir también, las preferencias pedagógicas de los padres. Así, la
educación separada aparece no sólo como una opción amparada en las convicciones
religiosas de los padres, sino también como una opción a elegir entre distintos modelos
pedagógicos.
La pregunta que nos hacemos es sí verdaderamente la educación diferenciada es un
supuesto de discriminación entre hombres y mujeres o por el contrario es un simple y
burdo refugio tras el que se esconde un ataque a los colegios católicos, consecuencia
del vasto movimiento anticlerical que acontece en el momento actual de nuestra
sociedad, y como un reflejo más de ese movimiento.
En cualquier caso, se trate o no de un atentado ideológico que, además sería
contrario al principio de laicidad de nuestro Estado, lo que sí es cierto es que se trata de
un verdadero ataque a la libertad en general y a la libertad de enseñanza y el derecho a
la libre elección de centro docente en particular.
A lo largo de estas páginas, es nuestro propósito poner de relieve la legalidad de la
educación separada por sexos tanto desde la perspectiva de nuestro Derecho Nacional
como de los Convenios Internacionales de Derechos Humanos suscritos por España en
estas materias, en los cuales, la educación separada por sexos, siempre que exista
libertad de elección, constituye una alternativa más, entre los distintos modelos
pedagógicos existentes y tan eficaz o más, que el de la coeducación o educación mixta.
Desde un punto de vista pedagógico se viene demostrando desde hace años, que la
educación separada por sexos contribuye al mejor aprovechamiento de las capacidades
intelectuales y personales, tanto en las etapas de formación obligatoria como en los
ciclos posteriores. En España, las últimas leyes sobre enseñanza con ese fin igualitarista
que persiguen y la influencia que ejerce la llamada ideología de género sobre la
enseñanza, al negar toda diferenciación, acentúa el problema del fracaso escolar y
además del fracaso asimétrico. Por el contrario, en los países de nuestro entorno más
cercano se impone cada vez con más fuerza el modelo de educación diferenciada.
Estados Unidos, Alemania, Suecia, Canadá, Australia, Argentina, Francia o Inglaterra, ya
han puesto en funcionamiento esta iniciativa. Los expertos en educación consideran que
es el mejor modelo para atajar el fracaso escolar, ya que el aprendizaje en este modelo
se basa en las diferencias biológicas, físicas y emotivas que existen por naturaleza entre
los niños y las niñas, cuyos ritmos de aprendizaje son muy distintos debido a esas
3
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
características y a la edad de maduración entre unos y otras, también distinta, lo que
contribuye a un mejor desarrollo adaptativo.
1
II.-LIBERTAD DE ENSEÑANZA Y DERECHO A LA EDUCACIÓN
Sí existe un tema polémico, y que siempre ha generado tensiones a lo largo de la
reciente historia de España, sin duda es, el de la educación. Desde la Constitución de
1812 hasta la vigente de 1978, la dialéctica está servida; unas veces, girará sobre sí la
enseñanza ha de ser pública o también al ser un servicio de interés general, hay que dar
paso a la iniciativa privada, otras girará en torno al carácter laico o confesional, otras en
fin sobre el contenido y naturaleza jurídica de la libertad de enseñanza.
Hay algo que es innegable, y es el carácter ideológico que la cuestión siempre ha
presentado. Durante el siglo XIX y mediados del XX, la pugna en esta materia no era
más que una proyección de la virulenta batalla que existía entre el antiguo y el nuevo
régimen, entre la Iglesia y el Estado.
2
La Constitución de 1978, va a reconocer en el artículo 27
de forma conjunta, el
derecho a la educación junto con la libertad de enseñanza Se trata de uno de los temas
que más debates originó durante los trabajos parlamentarios y sin duda uno de los que
supuso por parte de los partidos políticos tanto de izquierdas como de derechas,
mayores sacrificios y concesiones de cara a conseguir el llamado consenso.
1
Las últimas tendencias en la pedagogía de los países más avanzados de nuestra órbita cultural
se están caracterizando por una vuelta atrás del sistema de educación diferenciada como modelo
que, teniendo en cuenta las diferencias existentes entre los sexos como algo innegable y natural,
se organicen enseñanzas separadas que no distintas con el fin de potenciar al máximo las
capacidades de cada uno de los sexos sin imponer modelos de conducta o de educación idénticos.
Esta tendencia se puede observar en países como Nueva Gales del Sur, Alemania, Inglaterra,
Francia, Suecia, Estados Unidos…Sobre el tema de la educación diferenciada existe una
abundante bibliografía, entre otros Cfr. Calvo Charro, M., Educación mixta, educación diferenciada:
opciones en libertad, en Nuestro Tiempo, nº 612, 2005, pp.17-31; Torrico Gant, F., Los niños con
los niños...La educación diferenciada pide paso, en Diálogo: Familia Colegio, nº 264, 2006-2007,
pp.3-11; Varios Autores, Diferentes, iguales, juntos ,educación diferenciada, Coord. Enric Vidal,
2006; Varios Autores, La educación no formal y diferenciada: fundamentos didácticos y
organizativos,Coord. Torres Martín, C., y Pareja Fernández de la Reguera, J.A., 2007; Calvo
Charro, M., Educación diferenciada o Coeducación, en Revista Iberoamericana de Educación, vol.
46, nº 3, 2008; Esmenjaud L., Educación diferenciada en el siglo XXI, en Ecclesia, nº 1, 2008, pp.
35-46.
2
El máximo exponente de lo que decimos viene constituido por el sistema de enseñanza
unificado(se intentaba unir las diferentes etapas educativas como eslabones de una cadena de tal
modo que cada etapa no fuera un fin en sí misma sino un medio para acceder a la siguiente), laico
y plural (abierto a todos, con independencia de su origen y recursos económicos y basado en el
principio de igualdad de oportunidades) de la II República con la Constitución de 1931 que declara
en el artículo 3 la más absoluta y férrea laicidad. El ejemplo contrario viene de la mano del régimen
político surgido de la guerra civil y la instauración del nacional catolicismo, vigente hasta la muerte
del General Franco, durante el cual, la enseñanza religiosa católica era obligatoria en todos los
niveles y grados, incluido el universitario.
4
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
En torno a la naturaleza jurídica del derecho a la educación, de acuerdo con los
Documentos internacionales y del propio Tribunal Constitucional, es un derecho
fundamental y aparece o es proyección de la libertad de pensamiento, conciencia y
religión. Esta relación entre la libertad ideológica en sentido amplio considerado, y la
educación, estuvo presente en los debates parlamentarios en los que se puso de relieve
la necesidad de armonizar este derecho con los valores proclamados en los artículos 1 y
l6 del Texto Constitucional, afirmándose, la necesidad de respetar las propias
convicciones ideológicas y las distintas creencias como única manera de garantizar la
viabilidad de la pluralidad política y religiosa.
3
En este sentido, lejos de la polémica, lo que parecía evidente en los constituyentes
era su voluntad de poner en estrecha relación la libertad ideológica de la persona y el
derecho de ésta a la educación de acuerdo con el objeto y fin inmediato de la misma que
es el pleno desarrollo de la personalidad según dispone el artículo 27,2 de la CE. El
resultado de esta simbiosis, es el reconocimiento del derecho de los padres a escoger
para sus hijos el tipo de educación más conforme con sus propias convicciones
religiosas y filosóficas, derecho reconocido en el artículo 27 apartado 3 de la
Constitución.
El derecho a la educación es al tiempo que un derecho de libertad, es también un
derecho social cuya efectividad exige algún tipo de prestación por parte de los poderes
públicos. Dicho de otro modo, el derecho a la educación presenta una doble dimensión:“
Se trata de un derecho fundamental en cuya definición no se puede prescindir del
componente de libertad que le es consustancial. Esto unido a la cláusula del Estado
social que consagra nuestra Constitución y a sus artículos 9,2
y 53,2,
conduce a
reconocer la doble dimensión que define la naturaleza del derecho a la educación. En
cuanto derecho social reclama ciertas prestaciones...y en cuanto derecho de libertad,
reclama la garantía de la posibilidad de elegir educación”.
4
III.-DERECHO DE LOS PADRES A ESCOGER EL TIPO DE EDUCACIÓN
El derecho de los padres a elegir el tipo de educación que deseen para sus hijos se
encuentra reconocido en el apartado tercero del artículo 27
y se proyecta en dos
sentidos: por un lado, en el derecho a escoger la formación religiosa y moral de sus
3
Cfr. Silva Muñoz y Gómez De Las Roces, en Diario de Sesiones de 23 de mayo de 1978, nº
72,2602, Constitución Española. Trabajos Parlamentarios I,1144 y Diario de Sesiones del
Congreso de 7 de julio de 1978, nº 106, 4020, Constitución Española. Trabajos Parlamentarios II,
2092, respectivamente.
4
De Los Mozos Touya, Educación en libertad y concierto escolar, 1995, p.69.
5
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
hijos, y por otro, en el derecho a escoger un centro docente distinto de los creados por el
Estado.
Sobre la configuración jurídica de este derecho, no existe unanimidad doctrinal.
Algunos autores predican que se trata de un derecho que hay que situar en el marco de
la libertad de enseñanza; otros, en el marco del derecho a la educación, y en fin, otros
consideran que es un derecho de suficiente entidad como para considerarlo como
derecho autónomo. Por el contrario, es pacífico admitir que se trata de un derecho que
surge del pluralismo que propugna la Constitución como valor superior del Ordenamiento
Jurídico en el artículo 1 de la CE , que se trata de un derecho en íntima conexión con los
derechos y libertades reconocidos en el artículo 20 de la CE que reconoce la libertad de
expresión y a su vez con los derechos reconocidos en el artículo 16 de la misma, que
reconoce la libertad ideológica y religiosa de individuos y grupos. Por último, se trata de
un derecho cuya titularidad y como consecuencia del ejercicio de la patria potestad
durante la minoría de edad o incapacidad, corresponde a los padres que deberán
ejercerla en beneficio de sus hijos.
En cualquier caso, se trata de un derecho que, como señalábamos al principio, es un
derecho de libertad y a su vez un derecho de prestación, es decir, un derecho social
básico que se dirige al cumplimiento de un fin de interés general como es el que se
establece en el n.º 2 del artículo 27 de la CE cuando señala que el fin de la educación
es: ”el pleno desarrollo de la personalidad humana en los principios democráticos de
convivencia y a los derechos y libertades fundamentales” y sobre la base de los
principios o valores superiores del ordenamiento jurídico que señala el artículo 1,1 de la
misma, es decir la justicia, la igualdad, la libertad y el pluralismo político.
Como derecho de prestación exige que los poderes públicos destinen una cierta parte
de los presupuestos a satisfacer el cumplimiento de ese interés general que es la
educación. De acuerdo con los valores superiores del pluralismo y la libertad de nuestro
Estado, el sistema educativo español es pluralista y por tanto la financiación a cargo del
Estado no se reserva únicamente a los centros docentes creados por él, sino también
para aquellos que son de iniciativa privada. En este sentido el artículo 27,6 establece el
derecho de las personas físicas y jurídicas a la libre creación de centros docentes dentro
del respeto a los principios constitucionales. El mismo precepto en su número 9 dispone
que los poderes públicos ayudarán a los centros docentes que reúnan los requisitos que
la ley establezca.
De esta manera, si un centro docente cumple los requisitos que la ley establece, el
Estado tendrá que financiarlo de alguna forma, y ello con independencia de que el centro
sea de titularidad pública o privada. Igualmente, el ideario o la ideología en la que se
sustente dicho centro, no podrá ser un impedimento a la concesión de la ayuda estatal.
6
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
La cuestión a determinar es sí la educación separada por sexos, puede ser entendida
como una proyección de la libertad religiosa o ideológica en general. El Tribunal
Constitucional en la STC 5/1981, de 13 de febrero , ha interpretado la libertad de
enseñanza como una manifestación de la libertad de expresión al señalar: ”La libertad de
enseñanza que explícitamente reconoce nuestra Constitución (art.27) puede ser
entendida como una proyección de la libertad ideológica y religiosa y del derecho a
expresar y difundir libremente los pensamientos, ideas y opiniones que también
garantizan y protegen otros preceptos también constitucionales ( art.20 )…”interpretación
acorde con lo establecido en el artículo 9 del Convenio Europeo de Derechos Humanos y
en el artículo 2 del Protocolo Adicional al mismo, que forman parte de nuestro Derecho y
en virtud del cual y de los tratados internacionales ratificados por España sobre las
mismas materias habrán de interpretarse los derechos y libertades fundamentales tal
como establece el artículo 10 de la CE .
De acuerdo con lo anterior, el artículo 9,1 del Convenio Europeo de Derechos
Humanos garantiza el derecho de toda persona a ”la libertad de pensamiento, conciencia
y religión”. Especificando que,“ este derecho implica la libertad de cambiar de religión o
convicciones, así como la libertad de manifestar su religión o convicciones individual o
colectivamente, en público o en privado, por medio del culto, la enseñanza, la práctica y
la observancia de los ritos”.
Mientras que el término “religión” no parece plantear mayores problemas, la
jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha intentado definir el
significado del término “convicción”. Al interpretar la expresión” convicciones filosóficas”,
que el artículo 2 del Protocolo Adicional núm.1 menciona junto a “religiosas”, ha
manifestado que comprende las opiniones que alcanzan un cierto grado de
obligatoriedad, seriedad, de coherencia e importancia, merecen respeto en una sociedad
democrática, no son incompatibles con la dignidad de la persona y no se oponen al
5
derecho del menor a la educación” . Dada la correlación existente entre el artículo 9,1, el
cual habla de “convicciones” y el artículo 2 del Protocolo Adicional núm.1 que menciona
las “ convicciones filosóficas”, parece lógico entender que el término “ convicciones”
comprende no sólo las creencias agnósticas y ateas, sino también aquéllas que
desbordan la esfera de espiritualidad, siempre y cuando cumplan las características
6
mencionadas por el Tribunal . De forma que como señala la doctrina, en el ámbito de
aplicación de estos dos preceptos, más que tener en cuenta el contenido de la
convicción, habrá que tener en cuenta la relevancia sobre la esfera moral o intelectual de
5
Sentencia Campbell y Cosans contra el Reino Unido, de 25 de febrero de 1982, en Publications
de la Cour Européene des Droits de l ´Homme,48,p.46.
6
Sentencia Campbell y Cosans contra el Reino Unido, cit.
7
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
la persona, es decir sobre la base de que dicha convicción sea apta para guiar y
condicionar las conductas.
7
Por lo que se refiere al artículo 2 del Protocolo Adicional núm.1 relativo a la libertad
de enseñanza o instrucción, se plantea la cuestión de cuáles son las convicciones
religiosas y filosóficas de los padres, que el Estado debe respetar en el ámbito de la
enseñanza y qué obligaciones asume el Estado para respetar el derecho de los padres
de asegurar la educación y la enseñanza conforme a sus convicciones.
En relación a la enseñanza pública, el Estado o la escuela pública tiene prohibido
“perseguir un fin de adoctrinamiento que pueda considerarse que no respeta las
convicciones religiosas y filosóficas de los padres”
8
Estas obligaciones en materia de enseñanza se complementan con el reconocimiento
del derecho a fundar y dirigir centros docentes privados, que eviten un monopolio estatal
en materia de enseñanza y en el caso de que se concedan subvenciones a la enseñanza
privada el Estado no puede actuar de forma discriminatoria
9
Por otra parte, el derecho de libre elección de los padres sobre la educación de sus
hijos ha operado un cambio importante al extenderse, en la Carta de Derechos
Fundamentales de la Unión Europea (artículo II, 14), el respeto a las convicciones no
sólo religiosas y filosóficas sino también a las pedagógicas, concepto sobre el que no se
ha dado interpretación jurisprudencial, pero que sin duda ha de entenderse en el sentido
usual del término como modelo, sistema u organización metodológica en el que se basa
la forma o el diseño de llevar a cabo la enseñanza y que libremente pueden elegir, las
personas, grupos sociales e instituciones creadoras de otros centros docentes distintos
de los creados por el Estado.
De acuerdo con la referida interpretación, la libertad de enseñanza en definitiva se
traduce en libertad para transmitir unos conocimientos, es decir es consecuencia de la
libertad de expresión, que a su vez enlaza con el derecho a la libertad de conciencia y a
la libre formación de la misma. Esta libertad se ha de predicar tanto en relación a las
7
Morviducci,C, “ La protezione della libertá religiosa nell sistema del Consiglio d ´Europa”, en La
tutela della libertá di religione, a cura di S, Ferrari e T. Scovazzi, Padova,1988,p.46.Sobre la
protección de las libertades religiosa y de enseñanza,cfr. entre otros, Martín Sánchez,I., La
recepción por el Tribunal Constitucional español de la jurisprudencia sobre el Convenio Europeo de
Derechos Humanos respecto de las libertades de conciencia, religiosa y de enseñanza, Granada
2002. También, Martínez Torrón,J., El derecho de libertad religiosa en la jurisprudencia en torno al
Convenio Europeo de Derechos Humanos, en Anuario de Derecho Eclesiástico del Estado, II,
1986.
8
Sentencia de 7 de diciembre de 1976, en el caso Kjeldsen, Busk Madsen y Pedersen, en
Publications de la Cour Europçeene des Droits de l´ Homme,23; sobre este punto, cfr.Martínez
Torrón, J., El derecho de libertad religiosa en torno al Convenio de Derechos Humanos, art cit. p.
484 y 485.
9
Decisión 7782/ 77, en el caso X contra el Reino Unido, en Decisions and raports of the
European Comission of Human Rights, 14, p. 179.
8
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
personas físicas, como en relación a las personas jurídicas, libertad que, en este último
caso, se traduciría en la libertad de creación de centros docentes y por tanto en la
libertad de los titulares para dirigirlos, gestionarlos e imponer un determinado ideario
religioso, filosófico o pedagógico dentro del respeto a los principios y valores
Constitucionales.
Es decir, cuando se trata de centros docentes de iniciativa privada, éstos pueden
llevar aparejada una determinada ideología o concepción del mundo o una determinada
pedagogía diversa a la de los centros docentes públicos, que han de ser
ideológicamente neutrales. A los titulares de centros privados se les reconoce el derecho
a establecer un ideario o carácter propio. En dicho ideario, muy bien cabría incluirse el
sistema de educación separada por sexos, no pudiendo ser esta característica, un
obstáculo a la concesión de ayudas económicas por parte del Estado, a aquellos centros
que, en el ejercicio legítimo de su libertad, desarrollaran una educación diferenciada.
Una respuesta en sentido contrario, acabaría por poner en duda el sistema de
financiación estatal de otras tantas actividades de carácter ideológico, cultural o artístico
como cine, teatro, partidos políticos…actividades en las que rige el criterio de la máxima
libertad y la mínima restricción posible. Acabaría con el mismo principio en el que se
asienta nuestro Ordenamiento, el del pluralismo. Por tanto, la financiación de la
enseñanza, especialmente cuando ésta se ejerce a través de instituciones de titularidad
privada, y se concibe en aras de la libertad, también de expresión, religiosa o ideológica,
distinguiéndose por ello, de los parámetros de la escuela pública, ha de encontrar
necesariamente, la misma base o fundamento constitucional que la financiación de otras
actividades ideológicas.
El tema es complejo y la respuesta va a depender en gran medida de qué se entienda
por libertad de enseñanza como libertad de creación de centros docentes, y qué
derechos forman parte de la misma. Igualmente, dependerá de la configuración de la
libertad de enseñanza como un servicio de interés general, una garantía institucional que
ha de satisfacerse por los poderes públicos mediante un determinado coste económico,
a través de los llamados conciertos educativos, así como de su configuración y
naturaleza jurídica.
IV.-EL CONTENIDO DE LA LIBERTAD DE ENSEÑANZA
Sobre cuál sea el contenido de la libertad de enseñanza existe una amplísima
bibliografía, no existiendo unanimidad doctrinal al respecto.
10
Un sector de la doctrina
10
Cfr. Entre otros: Alzaga,O., Por la libertad de enseñanza, Barcelona 1985; Embid Irujo,A., Las
libertades de la enseñanza, Madrid 1983; Garrido Falla, Comentarios a la Constitución, Madrid
9
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
distingue entre derecho a la educación y libertad de enseñanza, mientras otro, interpreta
de manera unitaria el artículo 27 de la CE , es decir, el derecho a la educación y la
libertad de enseñanza con un planteamiento que tendría su apoyo en la libertad
ideológica y la libre formación de la conciencia como base para autodeterminarse en la
propia existencia. En este último sentido, aparece la libertad de enseñanza como una
necesaria libertad instrumental para la satisfacción del derecho a la educación en
libertad.
11
En cualquier caso, y teniendo en cuenta la doctrina del TC sobre este tema, la libertad
de enseñanza es un conjunto de derechos y libertades que ligados a la educación, forma
parte y es proyección de la libertad ideológica y religiosa y del derecho a expresar y
difundir libremente los pensamientos, ideas y opiniones ( STC 5/1981, fundamento
jurídico II.7 ), señalando entre su contenido, y entre otros, los siguientes derechos : el
derecho a crear y dirigir centros educativos, el derecho a definir el carácter propio e
ideología de estos centros, y el derecho de los padres a escoger libremente centros
docentes distintos de los creados por el Estado.
También en relación a la financiación estatal de la enseñanza el Tribunal
Constitucional se ha manifestado. Así, en relación a los conciertos educativos, el TC en
la Sentencia 77/1985 , afirma que “ el precepto constitucional que se expresa en
términos” los poderes públicos ayudarán a los centros docentes que reúnan los
requisitos que la ley establezca…” no puede interpretarse como una afirmación retórica,
de forma que quede en manos del legislador la posibilidad o no de conceder esta ayuda,
porque como señala el artículo 9 de la CE “ los poderes públicos están sujetos a la
Constitución y por esto, a los preceptos de esta que tienen fuerza vinculante para ellos” (
STC 77/ 1985, II.11 ).
Es por ello por lo que el TC en esa misma Sentencia 77/ 85 afirmará que la exigencia
de una autorización administrativa a una escuela para que ésta pueda implantar su
ideario o carácter propio, vulneraría la libertad de enseñanza y la libertad de creación de
centros docentes, pues el derecho a establecer el carácter propio es garantía del
derecho de que los creadores de la escuela puedan dirigir y administrar sus propios
centros, lo que significa que los poderes públicos no podrán intervenir nunca en las
1980,pp.141y ss; Martínez López Muñíz, J.l., La educación en la Constitución española, en
Persona y Derecho,1979,pp.215 y ss; Zumaquero,J.l., Los derechos educativos en la Constitución
española de 1978, Pamplona 1984, pp. 330 y ss.
11
Cfr .De Los Mozos Touya, Educación en libertad y concierto escolar... cit., p.32. Igualmente,
Martínez López-Muñiz, La educación en la Constitución española ( Derechos fundamentales y
libertades públicas en materia de enseñanza ), en Persona y Derecho nº 6,1979, pp.215 y ss.
10
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
cuestiones organizativas básicas de estos centros ( reglamentos internos, contratación
de profesorado, dirección administrativa, método pedagógico, admisión de alumnos...
12
En definitiva, según la jurisprudencia del Tribunal Constitucional, el derecho a la
educación en el marco de la libertad de enseñanza incluye el derecho a elegir el centro
docente que los padres deseen para sus hijos al ser una proyección de la libertad
ideológica y religiosa y este derecho es el derecho nuclear de la libertad de enseñanza,
es decir forma parte de su contenido esencial y es indisponible para el legislador que
habrá de respetarlo en cualquier caso.
13
El derecho a elegir escuela y por tanto el tipo de educación es un derecho reconocido
en nuestro ordenamiento como un derecho fundamental de los padres, ahora bien la
efectividad de este derecho pasa, como dijimos al principio, por la existencia de una
pluralidad de centros docentes con diferentes opciones educativas a las que los padres
puedan dirigirse libremente en condiciones de igualdad, y puesto que, todos los padres
no tienen los mismos recursos económicos, es lógico que el Estado financie la
enseñanza, también la enseñanza privada al ser un servicio de interés general.
La ayuda económica del Estado a los centros docentes se recoge en el artículo 27,9
de la CE que señala que “ los poderes públicos ayudarán a los centros docentes que
reúnan los requisitos que la ley establezca”.
Al margen de las discusiones doctrinales sobre sí existe o no existe un derecho
constitucional a la subvención de la enseñanza, lo que parece claro es que la norma del
artículo 27,9 , es una norma en blanco dirigida al legislador que es el que ha de
establecer los requisitos en orden a obtener la ayuda económica.
Esta es también la posición de la doctrina del TC en las Sentencias 77/1985 , sobre la
LODE y 86/1985, de 10 de julio , ( Órdenes Ministeriales de 16 de mayo de 1984
relativas al régimen de subvenciones a centros docentes ) al afirmar que de la libertad de
enseñanza no se deriva la existencia de un derecho constitucional a la subvención, la
subvención no surge directamente de la Constitución sino de la ley a la que el artículo
27,9 de la CE se remite. Sin embargo, como afirma el propio TC, el legislador no es libre
para imponer cualquier requisito que limite o merme la libertad de enseñanza o el
derecho a la educación, sino que por el contrario habrá de ajustarse a unos límites,
límites que se refieren según el Tribunal a los siguientes : gratuidad de la enseñanza
básica, distribución más equitativa de la renta regional y personal, efectividad del
derecho en igualdad y libertad…No obstante, como señala DÍAZ LEMA, lo más
importante es la declaración de que el legislador está obligado a aprobar un sistema de
12
Cfr. STC 77/1985, Fundamento Jurídico 11,21.
13
Cfr. Ortiz Díaz, J., La libertad de enseñanza, Málaga 1980.
11
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
ayudas a los centros privados, o lo que es lo mismo, la ley concretará los requisitos, pero
la ayuda económica en sí deriva de la Constitución.
14
Como consecuencia de lo dispuesto en el artículo 27,9 de la CE , la Ley Orgánica del
Derecho a la Educación, de 3 de julio de 1985, prevé en los artículos 47 y ss. el régimen
de conciertos educativos. Dicho artículo dispone:” Para el sostenimiento económico de
los centros privados con fondos públicos se establecerá un régimen de conciertos al que
podrán acogerse aquellos centros privados que, en orden a la prestación del servicio
público de la educación, en los términos previstos por esta Ley, impartan la educación
básica y reúnan los requisitos previstos en este Título”
En virtud de la autorización contenida en el apartado dos del artículo 47 de la LODE ,
el Gobierno dictó el Real Decreto 2377/1985, de 18 de diciembre, por el que se aprueba
el Reglamento de Normas Básicas sobre Conciertos Educativos .
15
En la LOGSE de 3 de octubre de 1990, el régimen de conciertos no varía salvo lo
dispuesto en la disposición transitoria tercera, sobre la ampliación y extensión de los
conciertos como consecuencia de la obligatoriedad de la enseñanza hasta los 16 años,
es decir, las unidades concertadas serán ampliadas o disminuidas según que los centros
cuenten o no con autorización para impartir la enseñanza secundaría obligatoria (se
equipara a ella la formación profesional, artículo 30,2 de la LOGSE ).
La vigente Ley Orgánica de Educación, LOE de 3 de mayo de 2006
establece
también que “ los centros privados que satisfagan necesidades de escolarización podrán
acogerse al régimen de conciertos ”, no obstante, existen algunas disposiciones que en
la práctica van a dificultar el que algunos centros privados puedan acogerse a las
subvenciones.
En este sentido, una primera limitación es la que deriva de lo dispuesto en el artículo
109 de la Ley, al condicionar la subvención a las consignaciones presupuestarias por un
lado y a la economía y eficiencia de los recursos públicos por otro, es decir a que el
concierto quede subordinado a la inexistencia de plazas vacantes en un colegio público.
También resulta imposible la consecución de un concierto por un colegio privado en las
“zonas de nueva población“, porque según la LOE, en esta zonas, el Estado ha de
proveer y garantizar la existencia de plazas exclusivamente públicas, omitiendo en el
14
Sobre este punto y en general sobre la financiación escolar, cfr. Díaz Lema, J.M., Los
Conciertos Educativos en el contexto de nuestro Derecho Nacional y en el Derecho Comparado,
Madrid 1992, pp54 y ss.
15
Cfr. Real Decreto 366/ 1997, de 14 de marzo, por el que se regula el Régimen de Elección de
Centro Educativo ( BOE de 15 de marzo de 1997; corr. err., BOE de 19 de marzo) y Orden de 26
de marzo de 1997, por la que se regula el Procedimiento para la Elección de Centro Educativo y la
Admisión de Alumnos en Centros Sostenidos con Fondos Públicos de Educación Infantil,
Educación Primaria y Educación Secundaria, (BOE de 1 de abril de 1997; corr. err. , BOE de 22 de
abril de 1997).
12
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
artículo 109,2, cualquier referencia a la oferta privada. De esta manera, al legislador
parece que se le olvida que la Administración tiene la obligación constitucional de
garantizar que todos los padres puedan elegir de forma libre y voluntaria, bien un colegio
público o bien un colegio privado, sin que su nivel de renta suponga una limitación para
poder llevar a cabo esta elección.
16
En relación a la libertad de elección de centro docente, otro límite que contiene la
LOE en relación a los centros docentes privados y la posibilidad de obtener ayuda
económica, es el que se refiere a los centros docentes que lleven a cabo una educación
diferenciada o separada por sexos, y es que el artículo 84,3 de la Ley incluye el sexo
entre las causas por las que no se puede discriminar a los alumnos a la admisión en
centros públicos y privados concertados. Dicho precepto, hay que ponerlo en relación
con la disposición adicional vigésimo quinta de la LOE, relativa al “ Fomento de la
igualdad efectiva entre hombres y mujeres”, que expresa que:” los centros que
desarrollen el principio de coeducación en todas las etapas educativas serán objeto de
atención preferente y prioritaria en la aplicación de las previsiones recogidas en la
presente Ley, sin perjuicio de lo dispuesto en los Convenios Internacionales suscritos por
España”.
De la normativa anterior se deduce que los colegios que sigan una educación de
carácter diferenciado entre niños y niñas, van a quedar en una situación menos favorable
que aquellos que sigan la enseñanza mixta, que van a ser objeto de atención preferente
en cuanto a las ayudas económicas. Esta injusta situación que relega a un segundo
plano a los centros que lleven a cabo una educación separada entre niños y niñas, frente
a los que siguen el principio de coeducación, se sustenta de manera paradójica en una
errónea interpretación del principio de igualdad y no discriminación que pretende igualar
todas las situaciones, olvidando que una cosa es la igualdad y otra bien distinta la
uniformidad, criterio de distinción básico en la doctrina jurisprudencial del Tribunal
Constitucional español
17
.
18
Y es que como el propio Tribunal Constitucional ha manifestado , sólo una diferencia
de trato se puede considerar discriminatoria cuando carece de una “justificación objetiva
y razonable, es decir sí no está basada en un fin legítimo y sí no existe una relación
razonable de proporcionalidad entre los medios empleados y el fin perseguido”. Este
criterio ha pasado desapercibido por Instituciones tan importantes como el propio
16
Cfr. González Pons, E., Políticas autonómicas y concierto escolar, en AAVV, Educación y
Democracia 2004, p.153.
17
Sobre el principio de igualdad y su significado, Cfr. entre otras, STC 24/1982, de 13 de mayo,
Fundamento Jurídico, nº 1 .
18
Sentencia del Tribunal Constitucional 141/2000, de 29 de mayo, Fundamento Jurídico nº 4 .
13
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
Consejo Escolar del Estado, según el cual es imprescindible” evitar la nefasta división del
alumnado en función del sexo que practican determinados centros, algunos de los cuales
son para colmo financiados con fondos públicos”.
19
En cualquier caso, la disposición vigésimo quinta de la Ley establece en materia de
conciertos económicos una atención prioritaria a los centros que desarrollen la
coeducación, es decir, no exclusiva, pero además, añade que, sin perjuicio de lo
dispuesto en los Convenios Internacionales suscritos por España.
Son muchos los Textos Internacionales sobre libertad de enseñanza, derecho
educativo paterno y no discriminación, sin embargo, a la lucha contra la discriminación
en la esfera de la enseñanza, con carácter específico, se refiere la Convención adoptada
por la UNESCO el 14 de diciembre de 1960 que señala en el artículo 2 como situaciones
que no serán consideradas como constitutivos de discriminación, las siguientes: a) La
creación o el mantenimiento de sistemas o centros de enseñanza separados por los
alumnos de sexo masculino y para los de sexo femenino, siempre que estos sistemas o
establecimientos ofrezcan facilidades equivalentes de acceso a la enseñanza, dispongan
de un personal docente igualmente cualificado, así como de locales escolares y un
equipo de igual calidad y permitan seguir los mismos programas de estudio o programas
equivalentes”.
Así pues, en primer lugar, la LOE no prohíbe la educación diferenciada por sexos, el
artículo 83,4, sólo la discrimina a favor de los centros que sigan el principio de
coeducación. Lo contrario, es decir, la retirada o exclusión de los conciertos económicos
a este tipo de centros, sería inconstitucional por suponer una flagrante violación de la
libertad de enseñanza, del derecho de los padres a elegir centro docente y del principio
de igualdad. Por otro lado, si la educación diferenciada no fuera una opción pedagógica
legítima, y al contrario, fuese discriminatoria, habría que prohibirla sin más y no excluirla
tan sólo del régimen de subvenciones, si es ilícita, lo es tanto para los concertados,
como para los privados no concertados.
A mayor abundamiento, los Convenios Internacionales admiten este tipo de
educación diferenciada, siempre que existan facilidades de acceso equivalentes a la
enseñanza, igual personal cualificado, y programas de estudios iguales o equivalentes.
Esto significa que si estas condiciones se cumplen, se está garantizando el principio de
igualdad y que tal principio sólo se conculcaría, por ejemplo, si los programas de estudio
19
Citado por Calvo Charro, M., en Apoyo de la jurisprudencia española a la educación
diferenciada como una opción legítima dentro de la libertad de elección de centro docente de los
padres, en La Ley nº 6711, de 11 de mayo de 2007. Este criterio de la no diferencia de sexos en la
escuela, es la misma línea que se sigue en la Ley 17/2004 de 28 de diciembre de Medidas de
Protección Integral contra la Violencia de Género, e igualmente la de la Ley Orgánica 3/2007, de
22 de marzo para la Igualdad Efectiva entre Hombres y Mujeres, entre cuyos objetivos se
encuentra prohibir la separación por sexos en los colegios.
14
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
entre niños y niñas no fueran los mismos (el Convenio de la UNESCO habla de
equivalentes), imponiendo a las niñas una asignatura como costura y a los niños
matemáticas, o los profesores, unos fueran licenciados y otros no, o que las niñas por
ejemplo tuvieran menos facilidad para acceder al sistema de becas y otros ejemplos
similares.
Es pues evidente, que tanto la educación diferenciada como la mixta son dos
modelos de enseñanza igualmente válidos a los que se debe poder acceder libremente
por los padres en función del derecho reconocido en el artículo 27,3 de la CE, por un
lado, y por otro, de la libertad que a los titulares de centros docentes privados les
corresponde para decidir sobre el sistema de organización, pedagogía y administración
de dichos centros como facultades derivadas de los derechos de dirección y gestión y
del derecho a establecer el carácter propio o un ideario.
En definitiva la educación diferenciada es una manifestación más del derecho de los
titulares a dirigir y gestionar un proyecto de enseñanza, es consecuencia del artículo
27,6 de la CE y por tanto de la libertad de enseñanza y el pluralismo de centros.
V.- EDUCACIÓN DIFERENCIADA Y CRITERIOS DE ADMISIÓN DE ALUMNOS
De acuerdo con la normativa básica del Estado en esta materia, los centros docentes
se clasifican en públicos, privados concertados y privados en sentido estricto. Los
centros privados “strictu sensu”, gozan de total autonomía en cuanto al procedimiento y
los requisitos para la admisión de alumnos, mientras que en el caso de los públicos y de
los concertados la admisión y los criterios están regulados por el Reglamento de Normas
Básicas sobre Conciertos Educativos, dictado por Real Decreto 2375/1985, de 18 de
diciembre , que desarrolló el artículo 47 de la LODE, aún vigente con algunas
modificaciones introducidas por las sucesivas leyes de educación, la LOGSE, la LOCE y
la vigente LOE.
El Reglamento establece en su artículo 7, la aplicación obligatoria del mismo en todo
el territorio nacional y determina que las administraciones educativas competentes
dictarán las medidas necesarias para su ejecución, de acuerdo con lo dispuesto en el
artículo 116,3 de la vigente LOE. Parecería evidente entonces, que no existiesen
diferencias significativas en materia de admisión de alumnos entre las distintas
Comunidades Autónomas y ello también por aplicación del principio de igualdad y no
discriminación entre todos los ciudadanos y del artículo 149,1.1 de la CE, que atribuye al
Estado la competencia exclusiva en la regulación de las condiciones básicas que
garanticen la igualdad de todos los españoles en el ejercicio de sus derechos.
Sin embargo, la realidad nos muestra una diversidad de situaciones entre los
ciudadanos según residan en una u otra comunidad autónoma como consecuencia del
15
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
traspaso de competencias en materia educativa y la dispersión normativa existente, así
como de las diferentes interpretaciones que, según el partido gobernante en la
respectiva comunidad autónoma, hacen de la extensión del régimen de conciertos
económicos a los centros privados concertados.
En este sentido, ni el Reglamento de Normas Básicas sobre Conciertos Educativos, ni
la LOE, ni sus antecesoras Leyes de Educación, establecían como condición o requisito
para que se obtuviera la ayuda económica estatal por los centros privados, el hecho de
que la educación tuviera que ser necesariamente mixta. Es más en la vigente Ley de
Educación, la única referencia a estos temas, es la que se contiene en la disposición
vigésimo quinta de la LOE, que en aras del fomento de la igualdad efectiva entre
hombres y mujeres, señala que los centros docentes que desarrollen el principio de
coeducación o educación mixta, serán objeto de atención preferente, lo que significa que
la educación mixta no es la única aunque se sitúe en una posición especial frente a otras
que como la diferenciada, la Ley no prohíbe.
A partir de la LOE y lo dispuesto en relación a la escolarización en centros públicos y
privados sostenidos con fondos públicos en el artículo 84,3, que establece que: “ en
ningún caso habrá discriminación por razón de nacimiento, raza, sexo, religión,
opinión…” se han producido distintas interpretaciones por parte de las CCAA, algunas de
las cuales, apoyándose en dicho precepto, han retirado el concierto a los colegios
privados que en uso de su libertad pedagógica y del derecho establecer un ideario,
mantenían una educación separada por sexos, otras en cambio, ya habían empezado su
andadura incluso antes de la entrada en vigor de la LOE, coincidiendo con el fin del
proceso de traspaso de competencias a las CCAA, en esta materia.
Cada Comunidad Autónoma, con la transferencia de competencias para la gestión del
sistema educativo, elabora y dicta sus propias normas sobre admisión de alumnos para
los centros sostenidos con fondos públicos y hacen depender del cumplimiento de estas
normas, diferentes según el gobierno de las distintas CCAA, la concesión de la
subvención o concierto económico.
20
20
De igual manera, las legislaciones de las distintas
Cfr. La Orden de la Junta de Andalucía de 22 de diciembre de 2008, sobre conciertos
educativos a partir del curso 2009.2010, BOJA de 5 de enero de 200’. Orden Ministerial 3876/2008,
de 18 de diciembre, por la que se dictan normas para la aplicación del régimen de conciertos
educativos para el curso 2009-2010, en la Ciudades de Ceuta y Melilla, BOE de 6 de enero de
2009. Orden 5753/2008, de 11 de diciembre, por la que se dictan normas para la concesión de
conciertos educativos con centros docentes privados de la Comunidad de Madrid. BOCM de 2 de
enero de 2009.Orden de 22 de julio de 2008, del Consejero de Educación, Universidades e
Investigación del País Vasco, que modifica la Orden sobre conciertos educativos para los cursos
de 2008 al 2012, BO del País Vasco de 21 de julio de 2008.Orden 5/ 2009 de 7 de enero por la que
se dictan normas para la aplicación del régimen de conciertos educativos a partir del curso 20092010 para la CA de Cantabria, BOC de 14 de enero de 2009.Orden de la Consejería de Educación
de la CA de Canarias de 9 de diciembre de 2008, sobre conciertos educativos, para los cursos
2009 al 2010 y 2012/13, BO de Canarias de 19 de febrero de 2008.Orden 272009, DE 15 de enero
16
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
CCAA establecen distintos criterios de baremación con diferentes puntuaciones, con lo
que la inseguridad jurídica de los padres a la hora de elegir un centro docente está
servida. Igualmente, el principio de igualdad entre todos los españoles en materia
educativa, se conculca con la multiplicidad de criterios que de forma discrecional impone
la legislación autonómica, algunos de los cuales, ni siquiera están recogidos en la
normativa básica del Estado, la LOE, como correspondería en este caso al tratarse de un
derecho fundamental.
Semejante estado de cosas ha hecho que muchas de esas disposiciones
autonómicas, hayan sido objeto de diferentes recursos ante los tribunales de justicia, con
el fin de anular aquellas disposiciones que, infringiendo la legislación básica en esta
materia, constituida fundamentalmente por la LOE y el Reglamento de Normas Básicas
sobre Conciertos Educativos de 18 de diciembre de 1985, y en contra de los actos
propios de la Administración, retiraban los conciertos económicos a un gran número de
colegios en su mayoría de ideario católico, al entender que la educación diferenciada por
sexos era un supuesto de desigualdad entre hombres y mujeres.
Las decisiones judiciales en esta materia han sido unánimes al señalar que la
educación diferenciada no supone un supuesto de discriminación. Hasta el año 2006 se
ha mantenido este criterio, sin embargo en el año 2007 y 2008, el Tribunal Supremo dará
un giro en su doctrina, abogando esta vez, por la educación mixta y en contra de la
diferenciada.
VI.-LA EDUCACIÓN DIFERENCIADA EN LA JURISPRUDENCIA
Sobre el tema de la educación diferenciada se podrá debatir sobre sí la misma forma
o no forma parte del contenido esencial de la libertad de enseñanza, pero lo que es
innegable es que en nuestro Ordenamiento Jurídico no existe ni una sola norma que
prohíba de forma expresa este tipo de enseñanza y que tratándose de un derecho
fundamental ha de regir el principio de la máxima libertad.
de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte de La Rioja, sobre conciertos educativos para el
curso 2009-2010, BO de La Rioja de 21 de enero de 2009.Orden de 26 de diciembre de 2008 de la
Consejería de Educación de la Comunidad Valenciana sobre conciertos educativos, DO de la
Comunidad Valenciana de 7 de enero de 2009.Resolución de 23 de enero de 2009, de la
Consejería de Educación y Ciencia del Principado de Asturias sobre conciertos educativos para los
cursos 2009-2010 a 2012 a 2013, BO del Principado de Asturias de 28 de enero de 2009.Orden
21/2009, de 8 de enero, sobre conciertos educativos para los cursos 2009.2010 y 2012. 2013,BO
de Castilla y León de 14 de enero de 2009.Resolución 367 2009, de 9 de febrero, del Director
General de Inspección y Servicios, de la Comunidad Foral de Navarra, sobre conciertos educativos
para el curso 2009-2010, BON de 1 de abril de 2009.Orden de 30 de diciembre de 2008, de la
Comunidad de Murcia, sobre conciertos educativos a partir del curso 2009.2010, BORM de 7 de
enero de 2009.Resolución del Departamento de Educación de la Generalidad de Cataluña
2976/2007 de 3 de octubre, DOGC de 9 de octubre de 2007. Orden de 9 de enero de 2009, para el
curso 2009-2010, DOG de 21 de enero.
17
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
Por otra parte, y al margen de lo anterior, lo que de ninguna forma se puede discutir
es que se trate de un derecho que es parte integrante del derecho de los padres a elegir
la educación de sus hijos de acuerdo con sus propias convicciones, derecho reconocido
en el artículo 27,3 de la CE. Al mismo tiempo es, como ha establecido el Tribunal
Constitucional en la Sentencia 77/1985 , y a la que más tarde nos referiremos, una
facultad inherente al derecho a establecer un ideario o carácter propio por parte de los
titulares de los centros docentes creados por la iniciativa privada, pues es ese carácter,
el que precisamente les dota de un contenido ideológico, lo que hace que la libertad de
creación de centros docentes, sea distinto de la mera libertad de empresa.
El derecho educativo paterno está recogido como hemos dicho en numerosos textos
internacionales de derechos humanos. La Declaración Universal de Derechos Humanos
en el artículo 26,3 afirma que “Los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo
de educación que deberá darse a sus hijos”. En igual sentido se pronuncia el Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos, en su artículo 13,3 y el Pacto Internacional
de Derechos Sociales, Económicos y Culturales., en su artículo 18. De particular
importancia resulta la Convención de la UNESCO, de 1960, tantas veces citada. En ella
se distingue lo que es discriminación, de lo que es educación diferenciada, admitiendo
esta última siempre que no suponga esa educación un trato desigual o injusto por
discriminatorio (artículo 2, apartado c).
En el ámbito europeo, el artículo 2 del Protocolo Adicional núm.1º al Convenio
Europeo de Derechos Humanos y Libertades Fundamentales, obliga a los Estados
Partes, y España lo es, a respetar el derecho de los padres a que la educación de sus
hijos sea conforme a sus convicciones religiosas y filosóficas, entendiendo el Tribunal
Europeo de Derechos Humanos, que dentro de dicha expresión se incluye todo tipo de
convicciones relevantes, y que las mismas, no se limitan a la religión o la moral sino que
se extienden a toda la actividad educativa, entre las que caben las de tipo pedagógico y
por tanto, a nuestro modo de ver,la educación diferenciada. Este mismo derecho de los
padres a elegir la educación de sus hijos de acuerdo con sus convicciones religiosa,
filosóficas y pedagógicas se recoge de manera expresa en el artículo II,14 apartado 3, de
la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea, que se ha recogido en el
Tratado de Lisboa de 13 de diciembre de 2007.
Pues bien, en nuestro país y de acuerdo tanto con la normativa nacional como
internacional, los tribunales de justicia habían avalado la educación diferenciada como
un sistema o tipo de educación, al que, junto con la educación mixta o coeducación,
libremente los padres podían optar. No obstante, esta línea jurisprudencial se ha visto
truncada a partir del año 2007 por una nueva orientación que entiende que el Gobierno,
que es el que financia, puede imponer limitaciones al poder de dirección de los titulares
18
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
de los centros docentes privados concertados, y por tanto, siempre según esa última
doctrina, la imposición de un sistema de coeducación como requisito para obtener la
ayuda económica o concierto, no comportaría lesión de ningún derecho fundamental.
1.- La educación diferenciada en la jurisprudencia anterior a la LOE
Es un hecho constatable que el tema de la ayuda a los centros docentes de
educación diferenciada se ha planteado en relación a colegios concertados de ideario
católico, y, en aquellas CCAA que son gobernadas por partidos de signo político
abiertamente contrarios a la Iglesia Católica y sus instituciones educativas. Se trata de
un alarde más, del respeto a la neutralidad ideológica de los poderes públicos y del
principio de laicidad del artículo 16 de la CE.
Con los Decretos sobre normas de admisión de alumnos, las CCAA han intentado
eliminar las subvenciones a aquellos colegios que entre sus métodos pedagógicos,
desarrollaban una educación separada entre niños y niñas. La primera Comunidad que
pretendió eliminar la financiación pública a los colegios que llevaran a cabo una
educación diferenciada fue Andalucía con la Orden de la Consejería de Educación y
Ciencia, de 16 de febrero de 1999, y más tarde con el Decreto 77/2004, de 24 de
febrero. Esta normativa obligaba a los centros concertados a escolarizar niños y niñas,
como uno de los criterios de admisión establecido en dichas normas.
Después, otras Comunidades Autónomas han seguido el ejemplo de Andalucía. Así y
entre otras se decantan por este criterio de admisión de alumnos, Castilla-La Mancha,
Cataluña, Asturias, La Rioja, Galicia, Cantabria…
Entre las resoluciones judiciales que se han pronunciado sobre este tema, caben
mencionar las siguientes: la Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de La Rioja de
25 de noviembre de 2002, la Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Valencia de
11 de febrero de 2003, el Auto del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña de 8 de
octubre de 2004, contra el Decreto 252/2004 de 1 de abril sobre admisión de alumnos,
las Sentencias nº 528 y nº 533 del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha,
de 10 de noviembre de 2004, que anulan el Decreto 22/2004 de 2 de marzo de admisión
de alumnos, la Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía de 11 de mayo
de 2006 que anula el Decreto 77/2004 de 24 de febrero sobre la obligatoriedad de la
educación mixta en los colegios concertados, la Sentencia 00537/2006, de 31 de mayo,
del Tribunal Superior de Justicia de Galicia que anula la Orden de la Consellería de
Educación que obligaba a matricular a un varón en una escuela de restauración
femenina y la Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha que
vuelve a anular el Decreto 22/2004 sobre admisión de alumnos de la citada Comunidad
Autónoma y la Orden que la desarrolla, aunque esta vez el recurso se interpone por la
19
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
vía de lo contencioso – administrativo, al no respetarse la reserva de la cuestión a Ley
Orgánica, tal como establece el artículo 81 de la CE, por tratarse de un derecho
fundamental
21
Sin embargo, en este apartado y por su interés, nos centramos únicamente en el
análisis de las Sentencias del Tribunal Superior de Justicia de Castilla – La Mancha de
10 de noviembre de 2004, no sólo por su argumentación jurídica sino por el iter procesal
que el origen del debate ha recorrido hasta llegar a la Sentencia del Tribunal Supremo
del año 2008.
Los hechos son los siguientes: La Confederación Española de Centros de Enseñanza
interpone recurso Contencioso-Administrativo contra el Decreto 22/2004, de 2 de Marzo
de la Junta de Castilla-La Mancha, y la Orden de 12 de marzo de 2004, de desarrollo del
proceso de admisión de alumnos en centros sostenidos con fondos públicos de
Enseñanza no Universitaria. La parte actora alega violación de los apartados 1,5 y 6 del
artículo 27 de la CE.
El Tribunal Superior de Justicia de Castilla- La Mancha, estimó parcialmente el
recurso por vulneración del derecho fundamental a la libertad de creación de centros
docentes, y anuló parcialmente algunas disposiciones del Decreto, objeto del recurso.
Una cuestión fundamental en el proceso, fue la modificación producida por el Decreto
22/2004 de 2 de marzo con respecto al anterior Decreto 86/2000, de 11 de abril, sobre
admisión de alumnos, que reconocía al titular del centro, la competencia para decidir
sobre la admisión de alumnos, debiendo el Consejo Escolar únicamente, garantizar el
cumplimiento de los requisitos establecidos en dicha norma.
Posteriormente, con el Decreto 22/2004, el proceso de selección cambia. En lugar de
ser dicho proceso una facultad de los titulares supervisada por el Consejo Escolar, pasa
a ser una facultad de la administración educativa, pues en la nueva normativa, tanto la
baremación como la decisión sobre la admisión de alumnos ya no corresponde a los
titulares del centro sino a los denominados Consejos de Escolarización provinciales y
locales.
En lo referente al tema que nos ocupa, esto es, el de la enseñanza diferenciada y su
legalidad, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, a priori manifestó que
en nuestro Ordenamiento Jurídico no existe una prohibición general de la educación
diferenciada y que tampoco a nivel internacional existe esa prohibición. Las leyes
21
Cfr. Calvo Charro, M., Apoyo de la jurisprudencia española a la educación diferenciada como
una opción legítima dentro de la libertad de elección de centro docente de los padres, en La Ley
…cit. Un minucioso y detallado examen sobre la jurisprudencia emitida sobre este tema hasta el
momento, puede verse en, Martínez López- Muñiz, J.L., Legalidad vigente y criterios
jurisprudenciales firmes en materia de educación diferenciada, en EASSE, Suplemento nº 1,
diciembre de 2008, pp.1-12.
20
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
orgánicas que desarrollan el derecho fundamental a la educación, cuando definen los
criterios sobre admisión de alumnos no contienen ninguna referencia al sexo y por lo
tanto, a juicio del Tribunal, la normativa autonómica ha incurrido en un exceso
competencial al introducir un nuevo criterio de admisión de alumnos no previsto en los
textos legales básicos, como es el mencionado criterio del sexo.
Al examinar si la normativa autonómica ha vulnerado la libertad de enseñanza, el
Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, afirma que: “ este derecho implica
para los titulares de los centros privados el reconocimiento a la dirección de los mismos,
así como que ese derecho de creación y dirección supone la posibilidad de definir el
carácter propio del centro y los contornos o líneas de su personalidad educativa, y la
posibilidad de asumir como forma propia de su proyecto educativo, la educación
diferenciada para los alumnos de sexo masculino y para los de sexo femenino”.
22
Más adelante, el Tribunal pone de manifiesto, que el derecho de libertad de
enseñanza no es absoluto e ilimitado, sino que al contrario, puede experimentar
limitaciones que derivarían fundamentalmente de la necesaria intervención estatal
avalada por el apartado 9 del artículo 27 que se refiere a la ayuda que los poderes
públicos prestarán a los centros docentes que reúnan los requisitos establecidos por la
ley. Sin embargo, el mismo Tribunal añade que estas limitaciones además de dejar a
salvo el contenido esencial del derecho, han de ser establecidas por ley, y las leyes de
educación vigentes en ese momento no establecían ninguna prohibición en materia de
educación diferenciada.
En otro lugar, el Tribunal hace unas precisiones muy interesantes sobre el contenido
esencial del derecho del titular del centro a la creación y dirección del mismo, e invoca
para ello la STC 77/1985, de 27 de junio , que resuelve un recurso de
inconstitucionalidad contra la LODE, y la STC 11/1981, de 8 de abril .
23
Tras sus argumentaciones, el Tribunal sostiene que los textos legales básicos en
materia educativa ( entonces la LODE ), no eliminan de entre los derechos del titular de
22
Sentencia del TSJ de Castilla-La Mancha de 17 de noviembre de 2004, Fundamento Jurídico
n.º 3.
23
En este sentido acerca del contenido esencial del derecho a la dirección de centros, siguiendo
la doctrina del TC en la Sentencia 77/1985, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha
en la Sentencia de 17 de noviembre de 2004, afirma que:“ puede precisarse tanto desde el punto
de vista positivo como desde una delimitación negativa. Desde la primera perspectiva, implica el
derecho a garantizar el respeto al carácter propio y de asumir en última instancia la
responsabilidad de la gestión, especialmente mediante el ejercicio de facultades decisorias en
relación con la propuesta de Estatutos y nombramiento y cese de los órganos de dirección
administrativa y pedagógica y del profesorado. Desde el punto de vista negativo, ese contenido
exige la ausencia de limitaciones absolutas o insalvables, o que lo despojen de la necesaria
protección. De ello se desprende que el titular no puede verse afectado por limitación alguna que,
aún respetando aparentemente un suficiente contenido discrecional a sus facultades decisorias
con respecto a las materias organizativas esenciales, conduzca en definitiva a una situación de
imposibilidad o grave dificultad objetiva para actuar en sentido positivo ese contenido discrecional”.
21
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
centros docentes privados, las facultades en materia de admisión de alumnos, a
diferencia de las normas autonómicas, y esto supone una clara vulneración de un
derecho fundamental que por vía meramente reglamentaria pretende imponer más
límites y restricciones, infringiendo de esta manera lo establecido en el artículo 53,1 de la
Constitución Española .
24
Otro supuesto parecido es el contemplado por la Sentencia de la Audiencia Nacional
de 20 de diciembre de 1999, que resuelve un recurso interpuesto por el Sindicato Unión
General de Trabajadores (Federación de Trabajadores de la Enseñanza) de Asturias,
contra la Orden del Ministerio de Educación y Cultura de 9 de mayo de 1997, por la que
se resuelve la renovación y el acceso al régimen de conciertos educativos de los centros
docentes: “Valmayor”, “Los Robles” y “ Peñaoubiña”.
Contra las pretensiones de la parte recurrente sosteniendo que la Orden impugnada
infringe los artículos 14, 16 y 27 de la Constitución , la Audiencia sostiene que:”La Ley
Orgánica 8/1985, de 3 de julio reguladora del Derecho a la Educación, desarrolló el
artículo 27,1 de la CE que reconoce a la vez, la libertad de enseñanza y el derecho a la
educación. En su preámbulo, establece una interpretación amplia de la libertad de
enseñanza como concepto complejo que abarca todo el conjunto de libertades y
derechos de la educación e incluye la libertad de los padres de elegir centro docente.
Pues bien, dentro de este contexto, el hecho de que en un centro docente se impartan
enseñanzas sólo a niños o sólo a niñas, no puede considerarse que suponga una
discriminación por razón de sexo desde el momento en que los padres o tutores pueden
elegir, dentro de un entorno gratuito de enseñanza, entre los diversos centros existentes
en un territorio. Sería la imposibilidad de elección, en igualdad de condiciones, lo que
permitiría declarar la discriminación alegada…Además el artículo 3 del Real Decreto
366/1997, de 14 de marzo, por el que se regula el régimen de elección de centro
educativo establece
que –en la admisión de alumnos no podrá establecerse
discriminación alguna por razones, ideológicas, religiosas, morales, sociales, de raza o
de nacimiento- sin referencia alguna al sexo. La libertad de elección de centro educativo
permite pues a padres y tutores y en su caso a los propios alumnos optar por uno u otro
centro, lo que no sería factible de estimar las alegaciones que vierte la demanda en el
sentido que se examina”
25
De manera acertada, la Sentencia de la Audiencia Nacional ha considerado que la
enseñanza diferenciada por sexos en los centros escolares, no supone ninguna
discriminación contraria a Derecho, tan sólo es una de las varias formas de organizar la
24
25
Cfr. STSJ de Castilla –La Mancha de 17 de noviembre de 2004.
Cfr. Sentencia de la Audiencia Nacional de 20 de diciembre de 1999, Sala de lo ContenciosoAdministrativo, Sección segunda, Fundamento Jurídico, 3, La Ley 4249/ 1997.
22
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
enseñanza tan legítima como puede ser la mixta y no conlleva necesariamente, el situar
en planos distintos a los educandos por motivos de género.
La configuración de las iniciativas escolares y de los centros docentes es un derecho
constitucionalmente garantizado, que, como cualquier otro ha de moverse dentro de los
límites fijados, límites que han de ser establecidos por ley y no por la vía de los
Reglamentos. Como señala Martínez López-Muñíz a propósito del establecimiento de
límites en materia de admisión de alumnos por la normativa autonómica: ” No hay
libertades absolutas en el sentido de ilimitadas o totalmente incondicionadas. Y esta
libertad además, ha de conjugarse, como bien se sabe, con otras diversas libertades y
derechos de cuantos, como docentes o receptores de la enseñanza, forman parte de la
vida real de cualquier organización escolar. Pero en materia de libertad el principio es
siempre -pro libertate- en la mayor medida de lo posible, de manera que sus
restricciones, condicionamientos o límites, como hemos dicho, deben tener su adecuada
fundamentación y han de fijarse en la ley”.
26
El tema de la educación separada por sexos y el discurso acerca de su posible
vulneración de la legalidad vigente por ser contraria al principio de igualdad entre
hombres y mujeres, también ha llegado al Tribunal Supremo. En dicha jurisdicción son
muchos los recursos planteados en relación a la libertad de elección de centro docente y
el alcance del derecho al ideario o carácter propio por parte de los titulares de centros
docentes privados sostenidos con fondos públicos.
27
Centrándonos en el tema de la educación diferenciada hay que destacar la Sentencia
del Tribunal Supremo de 26 de junio de 2006 , por la que se desestima el recurso de
casación interpuesto contra la Sentencia de la Audiencia Nacional de 20 de diciembre de
1999, que, a su vez había desestimado el recurso de casación contra la Orden del
Ministerio de Educación y Cultura de 9 de mayo de 1997, por la que se resolvió la
renovación de conciertos educativos a centros docentes privados.
En cuanto a los hechos, el Sindicato FETE de Asturias interpone el recurso de
casación y solicita que se anule la sentencia recurrida que anula parcialmente la Orden
26
Martínez López- Muñíz, J.L., Legitimidad de los colegios concertados especializados por razón
de sexo. Sentencia de la Audiencia Nacional de 20 de diciembre de 1999 en Diario La Ley,
Sección Doctrina, 2000, Ref. .D-81, t.2.
27
Cfr. Para el año 2008 y entre otras ,cfr, STS de 12 de diciembre de 2008 , desestimatoria del
recurso de casación interpuesto contra la Sentencia confirmatoria de la Generalidad Valenciana
por la que se desestimaron las solicitudes de acceso al sistema de conciertos; STS de 15 de
octubre de 2008 , por la que se revoca la Sentencia que estimó un recurso contencioso planteado
por la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras, contra el apartado 8 de la Orden 37/2000
de 5 de enero de la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid; STS de 22 de julio de
2008 ; STS de 21 de julio de 2008 ; STS de 16 de julio de 2008; STS de 23 de julio de 2008 ; STS
de 27 de febrero de 2008 , que confirma la Sentencia del TSJ de Valencia del año 2003; STS de
20 de febrero de 2008 …Base de datos de jurisprudencia iustel.com.
23
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
de 9 de mayo de 1997 por entender que es contrario a Derecho el que se financie a
determinados centros privados que llevan a cabo una educación diferenciada por sexos
por ser, a juicio del Sindicato, contrario al artículo 14 de la CE.
Frente a las alegaciones de la recurrente que invoca entre otros, el artículo 10,c) de la
Convención sobre Eliminación de todas las formas de Discriminación contra la Mujer de
18 de diciembre de 1979, conforme al cual los Estados han de promover la educación
mixta para facilitar la eliminación de cualquier concepto estereotipado de los papeles
masculino y femenino, el Tribunal Supremo entiende que no se puede asociar la
enseñanza separada con la discriminación por sexo, pues la Convención, no hace más
que indicar que la educación mixta es una de las posibles vías para evitar los
estereotipos de los papeles masculino y femenino, pero no la única. Al mismo tiempo y
por otro lado, a la citada Convención sobre la Mujer, el Tribunal opondrá al artículo 2, a)
de la Convención relativa a la lucha contra la Discriminación en la Esfera de la
Enseñanza de 14 de diciembre de 1960 que, como hemos visto anteriormente, admite la
educación diferenciada siempre que la enseñanza se haga en condiciones equivalentes
tanto para unos como para otros.
De acuerdo con la referida Sentencia, el Tribunal Supremo va a entender que la
educación diferenciada forma parte del derecho de los titulares a definir el carácter
propio y del derecho de los padres a elegir centro docente de acuerdo con los artículos
16 y 27 y 20,2 y 53, 2 de la LODE , respectivamente, y en este sentido afirmará que:
“el que la enseñanza obligatoria que se imparte en los centros públicos sea mixta no
significa que deba serlo también en todos los centros educativos. Se trata de una opción
que no debe ser impuesta. Especialmente cuando la Constitución reconoce a los padres
el derecho a elegir la educación que desean para sus hijos, garantiza la libertad de
creación de centros docentes y a partir de las previsiones de sus artículos 16 y 27, la
LODE ampara el derecho de los titulares de los centros privados a definir su carácter
propio. Es significativo a este respecto que las normas reguladoras del régimen de
admisión de alumnos en los centros públicos – y en los concertados – no hayan incluido
hasta ahora el sexo entre los motivos por los que no se puede discriminar a los alumnos
(artículos 20,2 y 53 de la LODE y 3 del Real Decreto 366/1997)”.
28
Es cierto que el Tribunal examina los hechos bajo la vigencia de la normativa anterior
a la nueva ley de educación, la LOE de 3 de mayo de 2006, y que en esta Ley ya se
contienen referencias a la no discriminación por sexo. En concreto, el artículo 83,4 de la
LOE , se refiere a la igualdad entre los sexos, y la disposición adicional vigésimo quinta,
habla de asegurar una atención preferente a los centros docentes que lleven a cabo una
28
Cfr. STS de 26 de junio de 2006, Sala Tercera, de lo Contencioso-Administrativo, Sección 7ª,
Fundamento Jurídico, 8, en La Ley 77400/ 2006 .
24
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
educación mixta, sin embargo, como hemos apuntado en un momento anterior, la
educación separada por sexos no supone en principio trato discriminatorio, sólo
diferenciado o específico.
Al respecto son muy interesantes las apreciaciones del Tribunal, cuando al poner en
relación la Convención sobre Eliminación de todas las formas de Discriminación de la
Mujer de 1979 y la Convención de la UNESCO sobre la lucha contra las
Discriminaciones en la Esfera de la Enseñanza de 14 de diciembre de 1969, señala que:
”no existe contradicción entre ambas Convenciones y es distinta la fuerza normativa que
despliegan vista la estructura de uno y otro precepto. En el último caso, se afirma
tajantemente que en las condiciones indicadas la enseñanza separada no discrimina por
razón de sexo. En el primero, se dice que la enseñanza mixta es un medio, no el único
de promover la eliminación de aspectos de la desigualdad por razón de sexo”
29
.
Como hemos apuntado antes, la jurisprudencia en materia de educación diferenciada
o separada por sexos, había seguido un mismo criterio al considerar a ésta como no
discriminatoria y amparada legalmente por nuestro Ordenamiento Jurídico. En efecto,
entendía que aquélla, era una consecuencia de la libertad de creación de centros
docentes y del derecho de los titulares de centros privados a establecer un carácter
propio. Por ello, y hasta ese momento, la enseñanza diferenciada aparecía como una
facultad de organización pedagógica tan legítima como cualquier otra, a la que
libremente se podía acoger el titular de un centro docente privado y los padres elegir sin
problemas dicho modelo.
Esta doctrina jurisprudencial se apoyaba además en la propia doctrina del Tribunal
Constitucional en materia de enseñanza, y en concreto, en la doctrina contenida en las
Sentencias de 13 de febrero de 1981 sobre el Estatuto de Centros Escolares y de 27 de
junio de 1985 sobre la Ley Orgánica del Derecho a la Educación. Dichas Sentencias
dejaron sentado que el derecho de los titulares de los centros privados para “establecer
un ideario educativo propio dentro del respeto a los principios y declaraciones de la
Constitución” forma parte de la libertad de creación de centros docentes, en cuanto
equivale a la posibilidad de dotar a estos de un carácter u orientación propios. Esta
especificidad explica la garantía constitucional de la libertad de creación de centros
docentes que, en otro caso, no sería más que una expresión concreta del principio de
libertad de empresa que también la Constitución ( artículo 38 ) consagra”
30
29
STS de 26 de junio de 2006, Fundamento Jurídico, 8 .
30
Cfr. Sentencia del Tribunal Constitucional de 13 de febrero de 1981, Fundamento Jurídico, 8.
25
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
En cuanto a las facultades propias del titular del centro, el Tribunal Constitucional en
la Sentencia de 27 de junio de 1985
31
señaló que: ”es forzoso reconocer la existencia de
un derecho de los titulares de centros privados a la dirección de los mismos, derecho
incardinado en el derecho a la libertad de enseñanza de los titulares de esos centros.
Aparte de que el acto de creación o fundación de un centro no se agota en sí mismo,
sino que tiene evidentemente un contenido que se proyecta en el tiempo y que se
traduce en una potestad de dirección del titular, cabe recordar que el cuarto y último
párrafo del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de 1966,
ratificado por España, señala expresamente que- nada de lo dispuesto en este artículo
se interpretará como una restricción de la libertad de los particulares para establecer y
dirigir instalaciones de enseñanza. Incluyendo así el concepto de -dirección- en un texto
con el valor interpretativo que le atribuye el artículo 10 número 2 de la C.E. Este derecho,
por otra parte, no se confunde con el de fijar un carácter propio del centro, sino por el
contrario, es más bien una garantía de este último, aparte de que tenga otros
contenidos”.
De acuerdo con ese criterio, la Sentencia de 27 de junio de 1985 precisa el contenido
esencial del derecho de dirección desde un punto de vista positivo y una vertiente
negativa, y al respecto señala que, desde una perspectiva positiva”...implica el derecho a
garantizar el respeto al carácter propio y de asumir en última instancia la responsabilidad
de la gestión, especialmente mediante el ejercicio de las facultades decisorias en
relación con la propuesta de Estatutos y nombramiento y cese de los órganos de
dirección administrativa y pedagógica y del profesorado. Desde el punto de vista
negativo, ese contenido exige la ausencia de limitaciones absolutas o insalvables, o que
lo despojen de la necesaria protección. De ello se desprende que el titular no puede
verse afectado por limitación alguna que, respetando aparentemente un suficiente
contenido discrecional a sus facultades decisorias con respecto a las materias
organizativas esenciales, conduzca en definitiva a una situación de imposibilidad objetiva
para actuar en sentido positivo ese contenido discrecional”
32
En consecuencia, podemos afirmar que de la doctrina del Tribunal Constitucional se
puede extraer con claridad que el derecho del titular al establecimiento de un ideario o
carácter propio, es decir de un proyecto ideológico, filosófico o moral de un centro
docente privado, es un derecho autónomo que forma parte de la libertad de enseñanza,
diferente del derecho de los padres a elegir la educación religiosa y moral que deseen
para sus hijos, respecto del cual no tiene un carácter instrumental, aunque existe una
31
Fundamento Jurídico, 20.
32
Fundamento Jurídico, 20
26
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
evidente relación entre ambos y en el que se incluyen determinadas facultades
decisorias con respecto a las materias organizativas esenciales que no pueden limitarse
hasta el punto de hacer impracticable el contenido positivo de esas facultades
discrecionales.
33
Dentro de esas facultades discrecionales que corresponderían al titular del centro y
que no pueden limitarse hasta impedir su ejercicio, se incluiría la posibilidad de organizar
la docencia en aulas separadas por niños y niñas como una faceta del poder de
dirección y la potestad de organización que, en materia pedagógica, ha de ostentar el
titular del centro, siempre dentro del respeto a los principios y valores constitucionales y
por supuesto al principio de igualdad de oportunidades.
34
A mayor abundamiento, durante años han venido impartiéndose por diversos centros
privados una educación diferenciada entre niños y niñas, como rasgo identificativo del
carácter propio del centro docente sin que el Estado o las Comunidades Autónomas
hayan considerado esa seña de identidad como algo que atenta al principio de igualdad.
35
La tesis sobre la facultad del titular de decidir en materia de alumnado y requisitos de
admisión, ya había sido establecida por el Tribunal Supremo hace más de una década
en la Sentencia de 15 de abril de 1994. En esa ocasión, el TS señaló que “en los centros
docentes privados concertados, el titular de cada centro es el responsable de llevar a
cabo el proceso de admisión de alumnos y una vez terminado el proceso dará
información al Consejo Escolar con el fin de que este Órgano de participación tenga
ocasión de verificar el cumplimiento de la normativa vigente” y añade que el proceso de
admisión de alumnos en un centro concertado supone la existencia de solicitud previa
“sin que en ningún momento pueda pensarse en adscripciones forzosas de alumnos, ni a
su destino por la Administración a un Centro determinado o, por supuesto, por
Comisiones creadas al efecto –STC 77/1985 -“.
36
33
Un exhaustivo examen sobre la jurisprudencia del Tribunal Constitucional en materia de
enseñanza, puede verse en: Martín Sánchez, I., La Libertad de Enseñanza en la Jurisprudencia del
Tribunal Constitucional español, en Anuario de Derecho Eclesiástico del Estado Español, vol. II,
1986.
34
Sobre este punto, Cfr. Calvo Charro, M., Apoyo de la jurisprudencia española a la educación
diferenciada…art. cit., en La Ley n.º 6711, de 11 de mayo de 2007.
35
Cfr. Auto del Tribunal Superior de Cataluña de 8 de octubre de 2004, el Tribunal después de
afirmar que la enseñanza diferenciada no es discriminatoria y forma parte del ideario del centro,
algo admitido durante años por la Administración Educativa, afirma que “ en consecuencia no se
puede admitir en principio que la Administración extraiga ahora de esos antecedentes una
interpretación diferente que le lleve a actuaciones diferentes como la que denuncia el recurrente,
contraria al funcionamiento de centros docentes diferenciados. Cfr. También el Auto del Tribunal
Superior de Justicia de Sevilla de 21 de febrero de 2000.
36
Sentencia del Tribunal Supremo de 15 de abril de 1994, Fundamento Jurídico nº 2, en La Ley
6184/ 1994.Cfr. también, la Sentencia del Tribunal Supremo de 9 de diciembre de 1987, sobre las
27
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
Sin embargo, esta corriente jurisprudencial ha dado un giro de 180 grados desde la
entrada en vigor de la Ley Orgánica de Educación de 3 de mayo de 2006 .
2.- la educación diferenciada en la jurisprudencia posterior a la LOE
Después de la entrada en vigor de la Ley de 3 de mayo de 2006, la enseñanza
diferenciada es considerada desde diversas instancias, también judiciales, como algo
que es contrario al sistema educativo español. Frente a las tesis anteriores, y al hecho
evidente de que hasta 1984, en España no se impone de manera generalizada la
enseñanza mixta, la cuestión que nos planteamos es la de cuáles han podido ser las
razones que han hecho que se modifiquen de forma tan radical estos planteamientos.
A nuestro modo de ver existen distintos motivos en los que apoyar ese giro, unos de
carácter ideológico-políticos, en los que no entramos, otros de carácter supuestamente
jurídico.
Un primer motivo se encuentra en la propia Ley Orgánica de Educación, (a pesar de
que los asuntos que se resuelven proceden de cuestiones planteadas antes de la
entrada en vigor de la LOE), que establece que los centros privados que satisfagan
necesidades de escolarización podrán acogerse al sistema de conciertos con el fin de
obtener la correspondiente subvención al igual que hacía la LODE en el artículo 47,1 .
En ambas leyes, la consideración de la educación como un servicio público es lo que
justificaría, en primer lugar, la financiación estatal y, en segundo lugar, la imposición de
límites derivados de aquélla (artículo 27,9 y 27,7 de la CE ). Se establece así, una cierta
asimilación entre los centros docentes públicos y los concertados, que olvida el
pluralismo educativo y la libertad de enseñanza.
37
La configuración de la educación como servicio público supone la consideración de
que la enseñanza es algo que corresponde exclusivamente al Estado, que en virtud de
sus competencias puede delegar la gestión del mismo a través de entes públicos o
privados, pero que desconoce en cualquier caso que estamos ante un auténtico derecho
fundamental, un derecho de contenido prestacional, que constituye un servicio de interés
general, y no un servicio público.
Junto con la consideración de la educación como servicio público, en la LOE existen
otros puntos conflictivos, que, a nuestro juicio, han hecho que la Jurisprudencia haya
dado un giro en relación a la enseñanza diferenciada, y ello, pese a que, como hemos
dicho, antes los asuntos que se han resuelto tuvieron lugar por actos producidos antes
llamadas “ Oficinas de Escolarización “ y la violación por parte de estas Oficinas del derecho
educativo paterno y del derecho de los titulares de centros privados a participar en el proceso de
admisión de alumnos.
37
Cfr. Díaz Lema, J.M., Los Conciertos Educativos en el Contexto de nuestro Derecho Nacional
y en el Derecho Comparado, op. cit. ,pp. 87 y ss.
28
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
de la entrada en vigor de la ley, aunque las resoluciones fueron dictadas en una fecha en
la que ya estaba vigente.
En efecto, uno de estos puntos es el que se refiere a las llamadas Comisiones de
Escolarización (artículo 86,2 de la LOE ), que son las encargadas de asignar el colegio
en aquellos casos en los que la demanda supere a la oferta de plazas en algún centro
escolar. De esta forma la libertad de elegir y decidir en último término ya no corresponde
a los padres sino a la Administración Central o a la Autonómica, ya que, en este último
caso, de acuerdo con el traspaso de competencias en materia de enseñanza, cada
Comunidad Autónoma es competente para dictar normas sobre los requisitos de
admisión de alumnos.
Por último, pero no menos importante, otro de los motivos que han dado lugar al
cambio de orientación por parte de nuestros tribunales sobre la enseñanza diferenciada,
ha sido la inclusión, a lo largo del articulado de la LOE, entre los principios, fines y
objetivos de la educación, el fomento de la igualdad efectiva entre hombres y mujeres.
38
Partiendo de lo que dispone el artículo 84, 3 en materia de admisión de alumnos en
centros docentes públicos y privados concertados acerca de la prohibición de
discriminación por razón de sexo, y la disposición adicional vigésimo quinta que señala
que en materia de conciertos tendrán atención preferente aquellos centros que fomenten
la coeducación frente a los que lleven a cabo una educación separada entre niños y
niñas, unido a los dos puntos anteriormente vistos sobre la consideración de la
educación como servicio público y el despliegue normativo de las distintas CCAA sobre
criterios de admisión de alumnos, se han dictado varias Sentencias del Tribunal
Supremo durante los años 2007 y 2008 que rompen la línea jurisprudencial anterior.
Por lo que se refiere a la primera de estas Sentencias, es decir, la Sentencia del
Tribunal Supremo de 28 de mayo de 2007, el debate tiene su origen en el recurso de
casación interpuesto por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha contra la
Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Albacete de 10 de noviembre de 2004 por
la que se anulan diversos preceptos del Decreto 22/2004, de 2 de marzo, de la Junta de
Comunidades de Castilla-La Mancha sobre admisión de alumnos por el cual y frente al
Decreto anterior de 11 de abril de 2004, la gestión de la selección de alumnos, se
administrativiza de tal manera que la decisión sobre este tema ya no se atribuye a los
titulares de los centros sino a los denominados Consejos de Escolarización.
En esta sentencia, el Tribunal Supremo, en contra de su doctrina anterior en relación
al mismo asunto, y en contra de la doctrina del TC sobre el contenido esencial del
derecho de los titulares de centros privados recogida en la Sentencia 77/1985 que
38
Cfr. Entre otros, el artículo 1,d); artículo 2,b); artículo 33,c); artículo 84, 3 ; y, la Disposición
Adicional Vigésimo Quinta.
29
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
señala que: “…el titular no puede verse afectado por limitación alguna que, aun
respetando aparentemente su suficiente contenido discrecional a las facultades
decisorias con respecto a las materias organizativas esenciales, conduzca en definitiva a
una imposibilidad grave dificultad para actuar ese sentido positivo ese contenido
discrecional”, ha estimado que caben limitaciones al derecho de dirección de los titulares
de los centros sostenidos con fondos públicos, se trata de una intervención estatal
respaldada por lo dispuesto en el artículo 27,9 de la CE.
Por ello entiende el Tribunal que:” Aun aceptando que el Tribunal Constitucional no
hace una relación exhaustiva del haz de facultades decisorias que delimitan
positivamente el contenido esencial del derecho, puede verse que la facultad de decidir
sobre la admisión de alumnos no se encuentra entre las que enumera la STC 77/1985; ni
hay base para afirmar que la atribución de esa competencia sea indispensable para
garantizar el respeto al carácter propio del centro o que sin ella quede cercenada la
potestad de dirección”.
39
Para nosotros, el Tribunal Supremo se olvida de la doctrina del TC que, en la
Sentencia 77/1985 al delimitar el contenido esencial del derecho del titular de un centro,
desde un punto de vista positivo, ha señalado que:” implica el derecho a garantizar el
respeto al carácter propio y de asumir en última instancia la responsabilidad de la
gestión, especialmente mediante el ejercicio de facultades decisorias en relación con la
propuesta de Estatutos y nombramiento y cese de los órganos de dirección
administrativa y pedagógica y del profesorado”.
No podemos estar de acuerdo con las afirmaciones del TS en la Sentencia de 28 de
mayo de 2007 , cuando señala que, entre el haz de facultades que enumera la STC
77/1985 , no se encuentra el derecho del titular a decidir sobre la admisión de alumnos,
y, sobre esta base afirma, que el derecho relativo a la admisión de alumnos, no forma
parte del derecho de dirección, que además el propio Tribunal juzga, como una facultad
no indispensable para garantizar el carácter propio del centro y que, a su juicio, no
cercena la potestad de dirección.
40
39
Cfr. Sentencia del Tribunal Supremo de 28 de mayo de 2007, Sala Tercera de lo ContenciosoAdministrativo, Fundamento Jurídico nº 7.
40
Al respecto, Cfr. La STS de 9 de diciembre de 1987, a la que se remite la STS de 28 de mayo
de 2007 cuando señala que:”…el titular de un centro concertado no tiene un derecho
constitucionalmente reconocido, a la admisión de alumnos. El derecho fundamental de crear y
dirigir centros docentes, dentro del respeto a los principios constitucionales, como una de las
manifestaciones de la libertad de enseñanza, no comprende el derecho a la elección del alumnado,
al menos cuando se trata de centros sostenidos con fondos públicos, sí no se quiere negar el
derecho de los padres o tutores a escoger centro docente que, como manifestación del derecho
fundamental a la educación, reconoce a todos el artículo 27,1 de la Constitución…”, Fundamento
Jurídico nº 3.
30
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
Por otra parte, se olvida el Tribunal que la cuestión que se debate, versa sobre el
contenido y los límites de un derecho fundamental ( artículo 27,6 de la CE ) y por tanto,
es obligado que el establecimiento de límites a su ejercicio sean fijados por ley, no por
vía reglamentaria, como acontece en el supuesto planteado, pues de lo contrario, se está
infringiendo lo que dispone el artículo 53,1 de la CE acerca de la reserva de ley orgánica
cuando estamos en presencia de un derecho fundamental.
Por último, el Tribunal entiende que no resulta afectado ningún derecho fundamental
en el caso que se juzga, y por tal motivo, en este ámbito, del proceso especial para la
protección de los derechos fundamentales, no tienen cabida pretensiones de nulidad
basadas en cuestiones de legalidad ordinaria.
De acuerdo con estas consideraciones, el Tribunal Supremo admite el recurso de
casación y anula la Sentencia anterior del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La
Mancha.
Los últimos pronunciamientos versan sobre el recurso anterior de la interposición de
casación por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha contra la Sentencia del
TSJ de Castilla-La Mancha de 17 de abril de 2004, se trata de las dos Sentencias del
Tribunal Supremo de 16 de abril , y, la de 11 de julio de 2008 , así como el Auto del
mismo, de 30 de septiembre de 2008.
En dichas Sentencias, el debate se centra sobre sí es contrario a la libertad de
enseñanza, el hecho de que se imponga para los centros docentes concertados, la
obligación de observar la enseñanza mixta. Dicho de otro modo, sí es lícito y entra
dentro del derecho de los titulares de los centros privados, como parte de la libertad de
enseñanza, el establecimiento de un método de enseñanza diferenciada.
Partiendo de los mismos argumentos que la Sentencia del Tribunal Supremo de 28 de
mayo de 2007 , las Sentencias de 2008 concluyen que: “ El sistema de educación
diferenciada, en lo que se refiere a los centros concertados, no forma parte del contenido
esencial del derecho de dirección que corresponde a sus titulares como una
manifestación del derecho de libertad de enseñanza reconocido en el artículo 27 de la
CE“.
41
De forma insólita, el TS en contra de su propia doctrina anterior, en estas tres últimas
Sentencias del 2007 y 2008, justifica unas limitaciones al poder de dirección del titular
sobre la base de los conciertos económicos. El planteamiento es el siguiente: como es el
Estado el que financia a los centros privados, éstos a cambio han de renunciar al
ejercicio de las facultades propias que les corresponderían como titulares y aquél puede
41
Sentencias del Tribunal Supremo de 16 de abril de 2008 , Fundamento Jurídico nº 9 . En igual
sentido, la STS de 11 de julio de 2008 y el Auto del TS de 30 de septiembre de 2008.
31
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
imponer cualquier límite. Sí los centros no respetan dichos límites, la Administración de
forma discrecional podrá no conceder o retirar el concierto.
Sobre la base de esas argumentaciones, el Tribunal va a entender además, que
como las facultades del titular sobre los criterios de admisión de alumnos no están
recogidas de forma expresa en la Ley, las mismas no forman parte del contenido
esencial del derecho de aquél y en consecuencia es la Administración la que decide.
De acuerdo con Martínez López-Muñiz,
42
las tres Sentencias adolecen de un defecto
procesal grave sobre el alcance de su competencia para conocer recursos contenciosos
por la vía del procedimiento del artículo 53,2 de la CE , olvidando la regulación legal de
este procedimiento contenida en los artículos 114,2 y 121,1 de la Ley 29/1998 de la
Jurisdicción Contencioso-Administrativa . Dichos preceptos hablan de establecer o
preservar derechos fundamentales que en una u otra medida hayan sido conculcados,
mientras la Sala entiende erróneamente que lo único que ha de protegerse en un
derecho es el contenido esencial del mismo, confundiendo así, contenido esencial de un
derecho con lo que es contenido regulado por ley orgánica, por esta razón, entiende
Martínez López – Muñiz, que el tribunal ha incurrido en un defecto procesal grave,
referido al alcance de su competencia y de los tribunales inferiores para resolver
recursos contenciosos-administrativos por el procedimiento especial exigido por el
artículo 53,2 de la CE, conculcando de esta manera, otro derecho fundamental como es
el derecho a la tutela judicial efectiva, reconocido en el artículo 24,1 de la CE .
43
Por otro lado, partiendo de una errónea interpretación del principio de igualdad y no
discriminación, que no tiene en cuenta la interpretación y significado que del mismo ha
hecho el Tribunal Constitucional que se refiere con nitidez a la diferencia entre igualdad y
diferenciación o trato específico, el Tribunal Supremo en las Sentencias de 2008, ha
llegado a afirmar de forma tajante, que la educación diferenciada es algo excluido de la
Constitución al menos para los centros concertados. De esta forma, podemos deducir
que, según la argumentación anterior, la educación diferenciada sí sería un derecho para
los titulares de los centros docentes que no reciben financiación del Estado, pero no para
los concertados, es decir que existiría un mismo derecho con distintas facultades según
42
Cfr. Martínez López- Muñiz, J. l., Legalidad vigente y criterios jurisprudenciales… art. cit, en
EASSE, diciembre 2008, pp. 1-12. El autor sostiene que la Sala parece entender que lo único que
es protegible en un derecho es su contenido esencial, de tal manera que confunden el contenido
esencial de un derecho con lo que se contiene o es regulado por Ley Orgánica y añade que la
distinción de la Sala sobre cuestiones de legalidad ordinaria y de orden constitucional, cuando se
habla de un derecho fundamental es arbitraria, pues a los Tribunales ordinarios les corresponde la
tutela efectiva de los derechos por infracción de la norma que lo desarrolla y por ello, concluye el
autor, en este caso, el Supremo lesiona otro derecho fundamental, el derecho a la tutela judicial
efectiva del artículo 24,1 de la CE, especialmente intenso en materia de derechos fundamentales (
art. 53,2 de la CE ).
43
32
Cfr. Martínez López –Muñiz, J.L., Legalidad…op.ult.cit.
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
que su titular reciba o no ayuda estatal, cuestión que a nuestro entender si conculcaría el
principio de igualdad.
Pero además, no parece razonable que el Tribunal acepte que puedan imponerse
límites a un derecho fundamental como es el de la libertad de creación de centros a
través de un Decreto Autonómico como es el Decreto de 2004 de Castilla-La Mancha,
cuando tales límites han de fijarse por ley orgánica y sin embargo, el Tribunal Supremo
no entra a examinar el fondo de la cuestión.
44
En nuestra opinión, y a modo de conclusión, la enseñanza diferenciada o
separada por sexos, no es una cuestión de desigualdad de género que conlleve a la
discriminación, simplemente es un modelo de organización pedagógica cuya
implantación o no en un centro docente privado, ha de corresponder al titular de dicho
centro como manifestación del derecho de dirección ,que a su vez, hace posible el
derecho de los padres a elegir centro docente dentro de una variedad de modelos como
corresponde a un sistema educativo plural.
Al respecto, señala el artículo 26,1 de la LOE al referirse a los principios pedagógicos
que:” Los centros elaborarán sus propuestas pedagógicas…dentro de la atención a la
diversidad y del acceso de todo el alumnado a la educación común. Asimismo arbitrarán
métodos que tengan en cuenta los diferentes ritmos de los alumnos, favorezcan la
capacidad de aprender por sí mismos y promuevan el trabajo en equipo”. Igualmente en
el artículo 120,1 de la Ley, se establece la autonomía pedagógica, de organización y de
gestión de los centros docentes.
El establecimiento de un método que imponga de forma facultativa un sistema en el
que se tengan en cuenta las diferencias neurofisiológicas entre niños y niñas que, por
otra parte, explican su diferente comportamiento, aptitud para determinadas materias o
grado de maduración, que sea libremente elegido por los padres y siempre que se
respete el principio de igualdad en cuanto a planes de estudio, titulación del profesorado,
locales…es algo que ha de formar parte ineludiblemente de la libertad de enseñanza del
artículo 27 de la CE .
Desde un punto de vista pedagógico, se ha demostrado que el modelo de educación
separada por sexos atiende mejor a las diferencias neurológicas existentes entre niños y
niñas, lo que potencia el mejor rendimiento intelectual y el desarrollo de las propias
habilidades, constituyendo un instrumento muy eficaz contra el fracaso escolar. Según
los investigadores, la mayoría de los colegios en el mundo que llevan a cabo una
enseñanza diferenciada son privado o concertados, siendo los resultados académicos de
44
Cfr. Martínez López - Muñiz, J.L., Legalidad…op. ult. Cit.
33
RGDCDEE 20 (2009) 1-35
Iustel
sus alumnos de un nivel y rendimiento muy superior al de los centros que desarrollan la
coeducación.
A diferencia de lo que ocurre en España que fomenta una política educativa basada
en la igualdad de género e ignora la diversidad existentes entre hombres y mujeres,
niños y niñas, los países que más a la cabeza están, en esta y otras materias, como
EEUU, Alemania, Inglaterra, Francia…muchos, ya han implantado el sistema de
enseñanza diferenciada en la escuela pública, y otros, están repensando la vuelta a
dicho sistema.
La libertad de enseñanza y el pluralismo educativo que nuestra Constitución
garantiza, supone el respeto por las diferentes opciones y metodologías en igualdad, se
trate de una educación inclusiva o coeducación, o se trate de una educación diferenciada
por sexos, lo verdaderamente importante es que a las mismas se pueda optar
libremente.
La conclusión por tanto en esta materia es que la educación separada por sexos no
es contraria al principio de igualdad entre hombres y mujeres, es simplemente una forma
de organización educativa, como puede ser la mixta, que se reconoce, tanto en nuestro
Ordenamiento, como en los Textos Internacionales de Derechos Humanos, al formar
parte del derecho de los titulares a la dirección y creación de centros docentes y del
derecho a la libre elección de centro docente de los apartados 6 y 3 del artículo 27 de la
CE .
En cuanto a la jurisprudencia, los Tribunales Superiores de Justicia de las CCAA han
resuelto a favor de la educación diferenciada y en contra de que las Administraciones
Educativas condicionen los conciertos escolares, al hecho de que en los mismos se lleve
a cabo la coeducación o educación mixta. Esta misma línea era la seguida por el
Tribunal Supremo. Se puede advertir que hasta el año 2006, la jurisprudencia del
Tribunal Supremo era la de considerar la educación diferenciada como un método o
sistema de organización pedagógica que aparecía como una facultad inherente al
derecho de los titulares y por tanto dentro de la libertad de enseñanza. En los años 2007
y 2008, ya vigente la LOE, el Tribunal ha dado un vuelco en su doctrina, al considerar
que la enseñanza diferenciada no forma parte del derecho de dirección de los titulares
de centros privados.
Por lo que se refiere al Tribunal Constitucional, por el momento no se ha pronunciado
sobre esta materia, aunque existen varios recursos interpuestos. No podemos aventurar
lo que se resuelva en esa sede, pero en buena lógica y sí el Tribunal Constitucional es
coherente con su propia doctrina, abierta con las Sentencias de 13 de febrero de 1981 y
27 de junio de 1985, es de suponer que se pronuncie favorablemente a la educación
diferenciada.
34
Moreno Botella - Educación diferenciada, ideario y libre elección de centro
35
Descargar