30 AÑOS EN EuROPA: uN bALANCE POSITIvO quE ExIgE PROfuNdAS REfORMAS Se cumplen 30 años de la entrada de España en la Unión Europea (UE), entonces Comunidades Europeas. Un tiempo en el que se han vivido acontecimientos relevantes de todo tipo como la firma en 1991 del Acuerdo de Schengen, el fuerte apoyo que recibió España de los fondos de cohesión y estructurales, o la creación del euro. En las tres décadas transcurridas, el balance desigualdades, tanto entre los Estados miembros ta el inicio de la crisis económica y financiera En el caso concreto de la economía española, puede considerarse positivo, por lo menos has- como dentro de ellos. en 2007. Así, durante estos años, el nuevo marco también hasta la aparición de la crisis económica miembros de la Unión una asignación más eficaz rápido crecimiento y convergencia con las econo- establecido permitió en general para todos los de los recursos, un mejor aprovechamiento de las economías de escala, una estabilidad en los precios, una mejora de la eficiencia, un incremento de la innovación tecnológica y una mayor liber- tad de elección para los consumidores y usuarios de bienes y servicios de calidad. Todo ello se tra- dujo en un mayor crecimiento de las economías y del empleo, en un impulso considerable para los países con menor renta y en el mantenimiento y financiera, esta disfrutó desde el año 1994 de un mías de mayor renta per cápita de la Unión Euro- pea. Y no cabe duda de que la participación en la UEM y la adopción del euro fueron importantes elementos impulsores de dicho crecimiento, por lo que, también para España, y a pesar de los pro- fundos y graves efectos que la crisis ha supuesto, la historia de estos 30 años puede considerarse un éxito. Así, la economía española ha doblado su Pro- del modelo social europeo de cohesión social, so- ducto Interior Bruto (PIB), pasando de 476.400 Sin embargo, esta favorable evolución escon- 2015. También, ha acortado la distancia con res- lidaridad e igualdad de oportunidades. día un error de partida y de diseño de la propia Unión Económica y Monetaria (UEM) que, en vez de generar convergencia económica, tal y como pretendía, ha provocado la actual situación de divergencia entre Estados miembros que la crisis ha revelado. millones de euros en 1986 a 1.081.190 millones en pecto al resto de integrantes de la UE en lo que se refiere al PIB. España ingresó en la Unión Europea con una renta per cápita equivalente al 72 por 100 de la media de la Unión Europea de entonces y en 2015 se situaba en el 98 por 100. Sin embargo, en el bienio 2006-2007 la renta En efecto, la actual crisis ha puesto de mani- per cápita llegó a equivaler al 105 por 100 de la nal de la UEM, en esencia una moneda única su- recuperado. De hecho, la economía española to- fiesto las disfunciones inherentes al marco origipranacional, una política monetaria única y unas políticas económicas nacionales, que han conducido a un exceso de divergencias, desequilibrios y media de la Unión Europea, un nivel todavía no davía no ha recuperado el nivel de PIB generado en el año 2007, el máximo hasta ahora. El con- senso de previsiones económicas sitúa entre los CONSEJO ECONÓMICO Y SOCIAL ESPAÑA [9 Desde 1986 España tiene 8 millones más de habitantes y la pirámide demográfica se ha transformado; la esperanza de vida hoy es de 83,2 años frente a los 76,4 de entonces. años 2016 y 2017 el punto en el que la economía española recuperará el mismo nivel de PIB que tenía antes del estallido de la crisis. No obstante, cuando se haya producido esa recuperación de renta solo se habrá logrado una reducción del desempleo en un tercio, persistiendo este en niveles próximos al 20 por 100. Desde 1986 España tiene 8 millones más de habitantes y la pirámide demográfica se ha transformado; la esperanza de vida hoy es de 83,2 años frente a los 76,4 de entonces. Los españoles con estudios universitarios han superado la media europea, la población activa ha aumentado y el empleo también (7 millones de empleos más; hubo casi 10 más antes de la crisis), la renta por habitante ha crecido (como ya se ha señalado, desde el 72 por 100 de la media europea en 1986 casi se ha alcanzado la renta media comunitaria en la UE-28, el 98 por 100) y se ha convergido con la media europea en indicadores importantes, en especial en materia de infraestructuras. En este periodo España ha multiplicado por nueve las exportaciones de bienes. En 1985 el peso de las exportaciones sobre el PIB era del 21,6 por 100 y actualmente es del 34,0 por 100, dos terceras partes del comercio español se realizan con sus socios comunitarios: Francia (16,6 por 100), Alemania (11,0 por 100), Portugal (7,8 por 100), Italia (7,4 por 100) y Reino Unido (7,3 por 100). Con la entrada en la Unión Europea vino la 10] CAuCES 32 apertura definitiva de la economía española y una mayor presencia en la escena internacional, especialmente fructífera desde el punto de vista de las exportaciones en las que la economía es- pañola desempeña un papel muy importante en sectores clave como el hortofrutícola, los bienes de equipo, los productos químicos o el automó- vil. En total, 1,3 millones de puestos de trabajo dependen directamente de las exportaciones y de ellos, el 60 por 100 se concentran en el sector servicios. En el conjunto de la Unión Europea, las exportaciones al resto del mundo sustentan un total de 31,1 millones de empleos. España, también, durante todos estos años no exentos de dificultades ha desarrollado el Estado de bienestar: pensiones, sanidad, educación y dependencia. Ha sido un periodo en el que se ha logrado multiplicar por tres el gasto social por habitante, algo que muy pocos países del mundo han conseguido y menos aún en ese periodo de tiempo. Los avances en derechos civiles y en igualdad han sido también muy importantes, dándose el caso de que en algunos ámbitos España haya sido pionera. Durante este periodo, la creación del euro tuvo efectos positivos sobre el empleo y la renta, y fue uno de los elementos que impulsó el creci- miento económico de entonces que, sostenible o no, contribuyó a transformar en gran medida la sociedad española. El aumento de la población vía inmigración es un buen ejemplo de ello, al contribuir a me- jorar la sostenibilidad del sistema de pensiones y a elevar el crecimiento potencial de la econo- mía. Sin embargo, el ciclo económico 1994-2008, 15 años consecutivos de crecimiento, lo fue tam- bién de desorientación en cuanto a la evolución que debía seguir el sistema productivo español, y también el del resto de Europa, aunque en menor medida. La elevada financiarización de la economía global en una etapa de tipos de interés a la baja provocó que la masiva entrada de flujos de capitales en la economía española alimentara una expansión del crédito, con el consiguiente aumento del endeudamiento privado, y un in- sar de la recuperación económica, los principales inmobiliario. La crisis que estalló a escala global no exclusivo de nuestro país. sostenible sobredimensionamiento del sector en el año 2008 y que en Europa adquirió tintes índices de desigualdad se mantengan, fenómeno La creciente divergencia de empleo y paro dramáticos a partir de 2009 demostró la insos- en los distintos Estados miembros ha sido más reorientar las variables de fondo de nuestra eco- gia que no ha contado con mecanismos de go- tenibilidad del camino elegido y la necesidad de nomía, para lo cual las instituciones de la Unión no siempre estuvieron a la altura esperada. Como ejemplo, la inversión en I+D+i es el indi- difícil de afrontar en el contexto de una estrate- bernanza adecuados para afrontar este tipo de situaciones a escala europea. En esta cualitativamente diferente senda de cador que mejor sintetiza la situación de eviden- crecimiento en un nuevo ciclo, las estadísticas y mide el verdadero desarrollo de un país y su ca- cho antes de que estallara la crisis, y con mucha en un entorno global cada vez más competitivo. una acumulación de renta y riqueza en los per- te retraso tecnológico español; un indicador que pacidad para generar renta y empleo de calidad Así en 1985 la inversión en I+D+i española equi- valía al 0,57 por 100 del PIB, y 30 años después el 1,24 por 100 del PIB. Sin embargo, en los últimos 10 años España ha caído en materia de I+D+i des- de la posición decimoquinta hasta la decimosép- tima entre los 28 Estados de la Unión Europea, ampliando la brecha respecto a la media europea y retrocediendo todo la distancia que se logró re- numerosos estudios1 muestran que desde mu- más intensidad después, se viene produciendo centiles más altos acompañada de un fenómeno de transferencia de renta desde abajo y el centro hacia arriba, así como de caída constante de la renta media y mediana. Todo ello está provocando un aumento de la desigualdad y de la pobreza y un evidente debilitamiento de la calidad de vida e indicadores sociales de la clase media. Con estos datos, el principal desafío al que cuperar hasta la crisis. se enfrenta España es potenciar el crecimiento 1985, la tasa de paro en España era del 20,6 por brios económicos, combatir la creciente des- Otro ejemplo es el del desempleo. A finales de 100 y la cifra de personas ocupadas era de 11 mi- llones. En la actualidad, estas cifras son del 21,0 por 100 de paro y de 18 millones de personas empleadas. La tasa de desempleo juvenil en España es una de las más altas de la Unión Europea, por lo que la creación de empleo, sobre todo entre los jóvenes, debería constituirse en una prioridad. El desempleo y la mejora de la calidad y na- económico y el empleo, corregir los desequiliigualdad ampliada por las consecuencias de la crisis y fortalecer las instituciones en este ámbito. Sin embargo, estos objetivos no podrán ser alcanzados sin las políticas europeas imprescin- dibles para ello. Políticas que deben ser ejecutadas de modo eficaz desde las instituciones de la Unión Europea. El aniversario de los treinta años de adhesión turaleza del empleo que se está generando son, de España a las entonces Comunidades Europeas pañola en el nuevo ciclo económico, una econo- se está rediseñando el sistema de gobernanza sin duda, los grandes retos de la economía esmía profundamente europeizada tras 30 años de pertenencia a Europa. La caída de las rentas del trabajo en medio de un fuerte proceso de moderación salarial y de generación de empleo de bajos salarios y con condiciones de trabajo de alta temporalidad y repunte del trabajo a tiempo parcial involuntario, han contribuido a que a pe- coincide en el tiempo con el momento en el que económica de la UEM. La crisis ha servido de aci- cate para transformar e intentar mejorar la gestión económica de la zona euro. 1 Distribución de la renta, crisis económica y políticas redistributivas” del BBVA e Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie). CONSEJO ECONÓMICO Y SOCIAL ESPAÑA [11 En un principio, la Unión Monetaria funcio- impuesta por los países llamados “acreedores”, crisis en el año 2008, inicio marcado simbólica- cálculo de los multiplicadores fiscales recono- nó aparentemente bien hasta el estallido de la mente por la caída de Lehman Brothers en Es- tados Unidos, aunque como se pudo demostrar pronto en Europa, la configuración de la propia Unión Monetaria había contribuido a agudizar ciendo implícitamente el error de la senda impuesta al “sur”, y en tercer lugar el diagnóstico sobre lo ocurrido, debate aún no cerrado. Así mismo, resulta oportuno recordar que el la crisis a este lado del Atlántico. Sin el euro no FMI dio el primer paso reconociendo en 2012 que española en aspectos tan importantes para la del ajuste que había promovido, aunque la Comi- es posible explicar lo ocurrido en la economía crisis como la pérdida de competitividad, el en- deudamiento del sector privado y de las familias, la entrada masiva de capitales con origen en el norte de Europa, el sobredimensionamiento del sector inmobiliario y la posterior crisis del siste- ma financiero español. Sin el euro tampoco es posible comprender las medidas adoptadas a es- cala europea y en particular en la zona euro para mitigar las consecuencias de la crisis, ni tampoco es posible entender la lógica con la que se inten- tó atajar una crisis asimétrica y de divergencias había subestimado los multiplicadores fiscales sión Europea todavía tardó un tiempo en asumirlo. Hoy la OCDE también reconoce públicamente que la política monetaria es insuficiente para garantizar el crecimiento, a pesar de que gracias a las medidas monetarias del Banco Central Europeo se disfruta de un relativo sosiego macroeconó- mico actual sustentado en el quantitative easing. Y todos parecen coincidir también en que es ne- cesario un claro impulso fiscal para promover el crecimiento de la productividad y el empleo. En este sentido, la inversión actual es insufi- que en cada Estado miembro respondía a unos ciente para garantizar tanto la demanda como la vos aplicando políticas similares, no coordinadas cindibles para que la economía europea genere elementos particulares y con frecuencia exclusie incluso insolidarias. La realidad es que existe una zona euro cada vez más integrada en lo monetario, y bancario como respuesta a la crisis, y, a la vez, una unión económica en la práctica inexistente salvo en lo referente al mercado único. La teoría económica argumentó hace tiempo que una zona moneta- ria no puede convivir con un elevado número de políticas económicas diferentes. La unión monetaria es de naturaleza federal, con un banco cen- tral independiente, pero la política económica si- mejora de la productividad, elementos impresempleo de calidad y sea más competitiva. Según el FMI, la inversión europea en infraestructuras es inferior a la necesaria para garantizar su man- tenimiento y desarrollo, así como el aumento de productividad. Europa necesita medidas urgentes que permitan canalizar ahorro privado hacia nuevas inversiones a partir de las instituciones públicas existentes como el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y desarrollando medidas como el Plan Juncker. En efecto, dado que el margen de maniobra gue siendo intergubernamental, y sigue estando de la política monetaria para consolidar la recu- vez menor capacidad fiscal y regulatoria propia. euro es muy limitado, sería necesario actuar de articulada desde unos Estados nación con cada Hoy, incluso desde las instituciones comuni- tarias, se reconoce que las políticas puestas en marcha tras el estallido de la crisis no fueron las más indicadas. Cronológicamente el intenso debate vivido desde 2008 ha tenido diferentes formas, en primer lugar la crítica a la austeridad 12] CAuCES 32 en segundo lugar la asunción de errores en el peración del crecimiento económico en la zona forma complementaria con medidas en el ámbi- to de la política fiscal junto con otras destinadas a consolidar la recuperación. El despliegue gene- ralizado de políticas fiscales contractivas implementadas desde el año 2010 ha dificultado la recuperación económica a corto plazo, poniendo Sin reformas profundas la Unión se arriesga a caer en un bucle de bajo crecimiento y pérdida de competitividad, alto desempleo y aumento de las desigualdades y de la pobreza. Un cuadro macroeconómico y social incompatible con el mantenimiento del modelo social europeo, el dinamismo de la sociedad, de sus empresas y sectores económicos, y con el papel geopolítico que Europa debe desempeñar en un mundo cada vez más interrelacionado y globalizado. en entredicho el crecimiento futuro de la Unión Europea debido a la caída, también generalizada, de la inversión pública. Por esta razón, la Unión Europea debiera transitar hacia un planteamiento menos restrictivo de la política fiscal que, sin cuestionar la necesaria consolidación fiscal, pro- picie un incremento sustancial de la inversión pública, tanto en el nivel de la zona euro como en el nacional, particularmente en los Estados más endeudados. Este impulso fiscal contribuiría a generar renta y empleo impulsando la inversión y generando demanda, medidas tanto más importantes cuanto mayor es la tasa de desempleo y más lejos se encuentra el producto de una economía de su potencial. En este contexto a escala europea, y mucho más en la zona euro, la política económica instrumentada no solo no ha sido la más adecuada sino que ha carecido de la efectividad necesaria para resolver unos problemas que estructural- mente todavía perduran, ni tampoco para promover el crecimiento y el empleo. El artículo 2 del Tratado de Lisboa establece que la Unión Europea “obrará en pro del desarrollo sostenible de Europa basado en un crecimien- to económico equilibrado y en la estabilidad de los precios, en una economía social de mercado altamente competitiva, tendente al pleno empleo y al progreso social”, y también que “com- batirá la exclusión social y la discriminación y fo- mentará la justicia y la protección sociales”, entre otros objetivos que hoy están muy alejados de la realidad. Y objetivos también muy difíciles de alcanzar si no se transforma en profundidad el es- quema actual de política económica de la Unión. Sin reformas profundas la Unión se arriesga a caer en un bucle de bajo crecimiento y pérdida de competitividad, alto desempleo y aumento de las desigualdades y de la pobreza. Un cuadro macro- económico y social incompatible con el mantenimiento del modelo social europeo, el dinamismo de la sociedad, de sus empresas y sectores econó- micos, y con el papel geopolítico que Europa debe desempeñar en un mundo cada vez más interrelacionado y globalizado. En una Unión Europea sigue sin existir una alternativa al esquema de gobernanza económi- ca aplicado desde 2008. Para superar ese patrón, la zona euro para la cual las previsiones de crecimiento son y probablemente sigan siendo excesivamente moderadas, debe ser capaz de ofrecer una oportunidad para retornar al crecimiento a los países ahora inmersos en una fase de práctico estancamiento alimentado por la deflación y las políticas procíclicas. La economía europea es vulnerable como de- muestran su bajo crecimiento potencial, las de- bilidades que aun presenta su sistema financiero CONSEJO ECONÓMICO Y SOCIAL ESPAÑA [13 Los 30 años de historia de España en Europa pueden calificarse de éxito, de consolidación de unos objetivos que durante buena parte del siglo xx parecían imposibles de alcanzar, sueños incluso. las instituciones europeas3 se reconoce que la unión monetaria es inviable sin unión económica y sin avanzar hacia la unión fiscal y social. El reto de las reformas en el 30 aniversario de la adhesión es el principal objetivo en el ám- bito europeo. Es más, algunos de los principales problemas que padece la economía española dependen del éxito de las transformaciones, del giro que la Unión Europea sea capaz de dar. En este momento existe un debate abierto acerca de hacia dónde debe evolucionar la Unión Europea y también, sobre cómo, a qué velocidad, y qué deben hacer los países del euro. En definitiva, los treinta años de historia de a pesar de la ingente inversión pública realizada España en Europa pueden calificarse de éxito, afecta gravemente a colectivos esenciales como te buena parte del siglo xx parecían imposibles corporativa, la morosidad en la banca, la brecha funda crisis económica, social e incluso política riesgos que quizás pueda deparar todavía la pro- sobre el que Europa y España como miembro para sanearlo, el alto desempleo registrado que de consolidación de unos objetivos que duran- el de los jóvenes, la alta deuda pública, familiar y de alcanzar, sueños incluso. Sin embargo, la pro- competitiva entre norte y sur, o los potenciales presente obliga a reflexionar acerca del modelo funda crisis de Grecia o el Brexit. fundamental de la misma quieren sustentar su No obstante, la evidencia de que la economía sociedad y su bienestar en el futuro. europea está al borde de una situación de estancamiento secular, la crisis de Grecia e incluso el Brexit pueden ser vistos como una oportunidad para acometer definitivamente los cambios que la gobernanza económica del euro y de Europa necesitan2, profundizando en la integración y avanzando en medidas de contenido político orientadas hacia la unión política y el refuerzo de su legitimidad democrática. Para lograr resolver este escollo que sin duda constituye el mayor tropiezo de la Unión desde su creación, y desde luego para España desde su adhesión hace hora 30 años ya se han dado pa- sos importantes que ahora deben consolidarse. Así, en el documento de los cinco presidentes de 2 Véase Informe CES 3/2012, Nueva gobernanza en la Unión Europea y crecimiento, Informe CES 1/2014, Evolución de la gobernanza económica de la Unión Europea: actualización del Informe CES 3/2012, e Informe CES 1/2016, Análisis de la gobernanza económica de la Unión Europea. 14] CAuCES 32 3 Comisión Europea, Informe de los 5 Presidentes sobre Realizar la Unión Económica y Monetaria europea, de 22 de junio de 2015.