222 Héctor Julio Prieto Cely quieran adquirir para lo cual cuenta con un plazo de sesenta días contados a partir del siguiente a la petición del cedente, en consecuencia, este término será de aproximadamente cuarenta y cinco días, por cuanto ya habrán transcurrido los quince días que le corresponden a los demás socios para su decisión. Si transcurridos los sesenta días no se logra perfeccionar la cesión, la ley amplia el plazo por otros veinte días y si aun así, dentro de ese tiempo no logra definitivamente perfeccionarse la cesión, no le quedará a los socios otro camino diferente que excluir de la sociedad al socio que desea ceder su cuota social, liquidándola como atrás quedó dicho o, algo aún más grave aún, los socios deberán proceder a la disolución de la sociedad. Cualquiera de las dos posibilidades que sea aprobada por los socios deberá encontrarse respaldada por la votación de por lo menos el setenta por ciento (70%) de las cuotas que conformen el capital social excluyendo de ellas, las que son objeto del negocio jurídico de cesión. No obstante lo anterior, si los socios no toman ninguna decisión sobre el punto, el socio oferente, con base en que nadie está obligado a vivir en sociedad podrá demandar a la sociedad para que el Juez, mediante un proceso ordinario dirima esta controversia, a menos que, en los estatutos se haya establecido otro procedimiento como el de recurrir a un tribunal de arbitramento. La cesión de las cuotas sociales implica una reforma estatutaria y como ya es sabido, toda reforma estatutaria requiere de escritura pública, la cual debe ser otorgada por el representante legal de la sociedad, el cedente y el cesionario. Si por alguna razón no se eleva a Escritura Pública, la cesión de las cuotas, el artículo 366 del Código de Comercio considera que el negocio jurídico será ineficaz87, de esta manera el legislador construye una excepción 87 Superintendencia de Sociedades Oficio 115-038798 del 9 de junio del 2008. En cuanto al punto sobre en qué consiste y cuáles son las consecuencias jurídicas del concepto de “INEFICACIA” a la que se refiere el artículo 366 del Código de Comercio, a punto de la interpretación de esta disposición la Superintendencia de Sociedades ha expresado: “Como es evidente no es menester acudir a fuentes distintas a la ley para llegar a la conclusión de que el precepto invocado (C. Co. art.366) constituye en verdad una excepción al principio general que en materia de reformas estatutarias contiene el artículo 158 del código mercantil en el sentido de las mismas tendrán efectos ante los asociados desde cuando se acuerden o pacten conforme a los estatutos. Debe entonces quedar perfectamente claro que mientras no se cumpla con los requisitos de solemnización de la cesión por escritura pública e inscripción de esta en el registro mercantil, los cesionarios no ostentan la calidad de asociados frente a la compañía ni a los socios que no intervinieron en el negocio jurídico como quiera que son terceros, según se desprende del citado artículo 366 “(Oficio 220-002007 de Enero 20 de 2005). En relación con la ineficacia de los actos jurídicos, el artículo 897 del estatuto