SEA 29 10/5/07 18:07 Página 1 h t t p ://SEA.AM.UB.ES En astrofísica se denomina medio interestelar a la región galáctica que nos queda si eliminamos los objetos compactos como estrellas, planetas... Si pensamos en nuestra galaxia, la Vía Láctea, debemos imaginar una estructura mayoritariamente vacía. De hecho, si tomamos como unidad de medida nuestro sistema solar, todas las estrellas y sus sistemas planetarios asociados existentes en nuestra galaxia ocupan, aproximadamente, una cienmillonésima parte del espacio disponible. En cuanto a sus componentes, se estima (sin tener en cuenta la materia oscura) que la composición de la Vía Láctea es: 99% gas (74% H, 20% He, y el otro 5% de distintos elementos), 0,9% polvo (silicatos y grafitos de radio medio unas 100 veces menor que el tamaño de una célula típica) y el resto radiación (rayos cósmicos, radiación ultravioleta, rayos X, etc.). La distribución del gas y del polvo no es uniforme sino que se encuentra concentrada en regiones densas que se contraponen a otras zonas Imagen de la Nebulosa del Águila tomada por el más “vacías”, conocidas como medio interestelar denso y difuso, res- telescopio espacial Hubble. Este objeto es una torre de gas y polvo que mide aproximadamente pectivamente. Las condiciones varían drásticamente de unas zonas a unos 9,5 años luz (unas dos veces la distancia otras pero, en general, se puede decir que el medio interestelar es muy entre el Sol y la estrella más próxima). frío (más frío que 200 grados centígrados bajo cero, pese a que existen zonas con una temperatura cercana al millón de grados centígrados) y resulta muy vacío (varios millones de veces menor que las densidades de la atmósfera terrestre). Sin embargo, a pesar de estas condiciones adversas, encontramos una riqueza química inusitada. Hasta el momento se han detectado más de un centenar de moléculas interestelares que van, desde las más simples (H2, H2O, CO, CO2...) hasta algunas tan complejas como las largas cadenas de hidrocarburos. Fue a partir de la década de 1980 cuando, utilizando la espectroscopia infrarroja, se empezaron a detectar un gran número de estas especies químicas, como los mantos de hielo que se forman sobre la superficie de los granos de polvo medio interestelar denso. Además, se descubrió que se podían formar nuevos compuestos a partir de otros más simples por distintos métodos, principalmente, por la acción energética de la radiación presente en el medio interestelar. El medio interestelar juega un papel fundamental en la evolución de una galaxia debido a tres razones: por la gran variedad de fenómenos fisicoquímicos que en él se producen; porque controla el balance térmico del gas galáctico mediante procesos de absorción y re-emisión de la radiación y, finalmente, porque es el sustrato en el que se produce la formación de nuevas moléculas, siendo este creciente enriquecimiento químico crucial para entender su evolución. Debido a su gran importancia, en los últimos años se está desarrollando una nueva rama de la astronomía denominada astroquímica, que estudia estos procesos fisicoquímicos. Además, existen distintos laboratorios de astrofísica experimental donde se intenta comprender la formación de estas especies químicas y entender los procesos que tienen lugar en el medio interestelar. José CANTÓ DOMÉNECH Departamento de Física Aplicada Escuela Politécnica Superior de Alcoy (Universidad Politécnica de Valencia) Espacio coordinado por la SOCIEDAD ESPAÑOLA DE ASTRONOMÍA HTTP://SEA.AM.UB.ES © Hubble WFPC2/NASA EL MEDIO INTERESTELAR: RELLENANDO EL VACÍO