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Environmental
Health
P E R S P E C T I V E S
Nanotecnología:
Mirando
Mientras
Saltamos
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Ciencia & Trabajo
www.cienciaytrabajo.cl | AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 |
ehp | Nanotecnología
D
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esde 1989, cuando investigadores de IBM
demostraron caprichosamente un avance científico
espectacular construyendo una representación de 35
átomos del logo de la empresa, la capacidad de
manipular átomos individuales ha generado una
marejada de investigación y desarrollo a escala nano (de
la palabra griega para “enano”). Los nanomateriales son
aquéllos que tienen al menos una dimensión de 100
nanómetros o menos — aproximadamente el tamaño de
un virus promedio. La nanotecnología — la creación,
manipulación y aplicación de materiales a nanoescala —
involucra la capacidad de modificar, controlar y explotar
las propiedades químicas, físicas y eléctricas únicas que
emergen de las partículas artificiales infinitesimalmente
diminutas.
Las nanopartículas no se comportan ni como sólidos, ni
como líquidos, ni como gases y existen en el extraordinariamente confuso mundo de la física cuántica, la que rige
aquellos moradores lo suficientemente pequeños como
para haber escapado de las leyes de la física Newtoniana.
Esto les permite realizar sus actos casi mágicos de conductividad, reactividad y sensibilidad óptica, entre otros.
“Ésa es la razón por la que los nanomateriales son útiles e interesantes y están tan de moda actualmente”, dice
Kristen Kulinowski, directora ejecutiva para la educación
y política en el Centro para la Nanotecnología Biológica y
Ambiental (CBEN) de la Universidad Rice. “Estar en
este régimen cuántico permite que emerjan nuevas
propiedades que no son posibles o no son exhibidas por
aquellos mismos productos químicos cuando son mucho
más pequeños o mucho más grandes. Éstas incluyen diferentes colores, propiedades electrónicas, magnéticas y
mecánicas — dependiendo de la partícula, cualquiera de
éstas puede ser alterada a nanoescala. Ése es el poder de la
nanotecnología”.
Muchos observadores no dados normalmente a la
exageración están refiriéndose a la nanotecnología como “la
próxima Revolución Industrial”. La Iniciativa Nacional de
Nanotecnología (NNI), el consorcio interagencias del gobierno federal que supervisa las difundidas y bien financiadas
actividades de nanotecnología, ha predicho que para el año
2015 o antes, este campo generará US$ 1 billón solamente
para la economía de los EE.UU. Es evidente que la nanotecnología está lista para convertirse en el factor principal
en la economía mundial y en parte de nuestra vida cotidiana en el futuro cercano. La ciencia de lo muy pequeño será
muy grande, muy pronto.
El Trampolín
Las primeras marejadas que presagian la cercanía del maremoto de la Nanotecnología ya han llegado a la costa.
Nanopartículas modificadas ya están siendo producidas,
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& Trabajo
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| AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 | www.cienciaytrabajo.cl
Artículo de Difusión | ehp
accionadores especiales,
dispositivos de administración de drogas, y
nuevos tipos de transistores y sensores.
Como evidencia del
avance hacia esta segunda fase, un equipo de
químicos de la Universidad del Noreste liderado por Chad Mirkin,
anunció recientemente
que han descubierto
formas de construir con
precisión bloques constitutivos a nanoescala
que se ensamblan en estructuras planas o cur- Pequeña Curva de Aprendizaje. El auto-ensamblaje de nanotubos de
polímero de oro deriva en una estructura curva. La capacidad de controvas. La capacidad de lar el tamaño y curvatura de las nanoestructuras podría ayudar en aplicrear nanoestructuras caciones de suministro de drogas y electrónica.
inusuales, como haces,
enormes beneficios en términos de aplicaláminas y tubos, promete nuevos y
ciones favorables, pero hay riesgos inhepoderosos sistemas de administración de
rentes también. ¿Qué sucederá cuando los
drogas, circuitos electrónicos, catalizadores
nanomateriales y nanopartículas entren en
y materiales recolectores de luz.
nuestro suelo, agua y aire, como muy seguPara el año 2010, dice Roco, llegará la
ramente ocurrirá, ya sea deliberada o accitercera generación, que incluirá nanosisdentalmente? ¿Qué sucederá cuando entren
temas con miles de componentes interacinevitablemente en nuestros cuerpos, ya sea
tuantes. Y unos pocos años después de eso,
a través de exposiciones al medio ambiente
aparecerán los primeros nanodispositivos
o aplicaciones intencionales? Las respuestas
“moleculares” que estarán compuestos de
a estas preguntas vitales siguen en gran
sistemas dentro de sistemas, operando de
medida pendientes, aunque algunas
manera muy parecida a una célula.
conclusiones iniciales son menos que tranA medida que se perfeccionen y auquilizadoras, como lo demuestra un
menten los métodos de fabricación, se esreciente estudio que involucró fulerenos en
pera que la nanotecnología pronto inestrés oxidativo en el cerebro del róbalo de
vada, y a menudo revolucione,
boca grande [“Fulerenos and Cerebros de
virtualmente todos los sectores de la
Peces: Los Nanomateriales Causan Estrés
actividad industrial, desde la elecOxidativo”, EHP 112:A568 (2004)].
trónica a la guerra, desde la medicina
También es necesario responder prea la agricultura, desde la energía que
guntas de otra clase. ¿Hay alguien
utilizamos para propulsar nuestros
considerando estos asuntos de salud y
automóviles e iluminar nuestros
seguridad? y, ¿puede obtenerse a tiempo suhogares, hasta el agua que bebemos y
ficiente conocimiento sólido y confiable soel alimento que comemos. La nanobre evaluación de riesgo para garantizar que
tecnología es la versión actual de la
el público estará — o, incluso, que debiera
carrera espacial, y los países alrededor
estar — cómodo con la proliferación de la
del mundo están invirtiendo con entecnología? ¿Cambiará el paradigma de
tusiasmo miles de millones de dólares
manera fluida hacia el mundo nano, o la
para apoyar la investigación, desarronanotecnología estará rodeada con controverllo y comercialización.
sias por asuntos de seguridad y confianza que
En términos del medio ambiente
Para Propósitos de Comparación. Una micrografía y la salud humana, la nanotecnología
pueden obstaculizar su potencial, como ha
muestra un nanoalambre formando un lazo enfrente de
sucedido en el pasado con logros tales
presenta el mismo problema de difícil
un cabello humano. Los nanoalambres pueden ser tan
como los organismos genéticamente modifidelgados como 50 nanómetros, aproximadamente una solución que los grandes avances teccados (OGM)?
nológicos del pasado: puede haber
milésima del ancho de un cabello.
De arriba hacia abajo: Chad Mirkin/Universidad del Noroeste; Liming Tong/Universidad de Harvard
vendidas y utilizadas comercialmente en
productos tales como artículos deportivos,
neumáticos y ropa resistente a las manchas.
Nanomateriales modificados, diseñados
para proporcionar neutralización no-tóxica,
no-corrosiva,
y
no-inflamable
de
derrames químicos o agentes de guerra
química están actualmente en el mercado.
Incluso los filtros solares se han convertido
en nano — algunos contienen ahora
partículas a nanoescala de dióxido de titanio
u óxido de zinc, las que, a diferencia de sus
encarnaciones más grandes blancas y
opacas, son transparentes, a la vez que aún
bloquean los rayos ultravioleta de manera
efectiva. Los fulerenos, que se utilizan en
productos comerciales desde semiconductores a revestimientos para bolos de boliche,
están siendo producidos por toneladas en la
planta Mitsubishi en Japón.
Dentro de pocos años, afirman los expertos, estas incursiones iniciales en el mercado parecerán tan extrañas como las cintas
de audio de ocho pistas. Según Mihail
Roco, asesor principal sobre nanotecnología
para la Fundación Nacional para la Ciencia
(NSF) y coordinador del NNI, la nanotecnología tendrá cuatro generaciones o fases
de desarrollo. Ya estamos en la primera,
consistente en nanoestructuras “pasivas” —
partículas simples diseñadas para realizar
una tarea. Roco predice que la segunda fase
comenzará en el año 2005, con la aparición
de prototipos comerciales de nanoestructuras
“activas”
tales
como
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Kulinowski expresa los sentimientos
casi universales de los defensores del campo:
“Creemos que la nanotecnología tiene un
enorme potencial para beneficiar a la sociedad en una amplia variedad de sectores y
aplicaciones, desde el próximo tratamiento
del cáncer, a las aplicaciones ambientales,
hasta la energía — usted elija. Por lo tanto,
no queremos ver ese potencial limitado o
eliminado por factores de riesgo reales o
percibidos, asociados con los nanomateriales modificados”. Para garantizar que la
nanotecnología prospere responsablemente
y con fuerte apoyo público, dice
Kulinowski, los defensores piensan que es
muy importante reunir datos sobre riesgos,
de manera que las preguntas puedan
contestarse y los problemas abordarse
tempranamente en el inicio de la trayectoria de desarrollo de la tecnología.
Sean Murdock, director ejecutivo de la
Alianza de Nanonegocios, una asociación
comercializadora de nanotecnología, piensa
que es posible evitar el error cometido en el
pasado, de sacar una nueva tecnología con
demasiada anticipación a la disponibilidad
de información de salud y seguridad. “Los
riesgos están ahí, son reales, pero son manejables”, afirma. “Y en el balance, con los
procesos correctos listos, seremos capaces de
enfrentar todos esos riesgos; vamos a atenuar esos riesgos, y vamos a hacer realidad la
parte positiva del potencial”.
nológico de la acometida. El financiamiento
para los centros de US$ 6 millones anuales
comenzará en septiembre de 2005.
Actualmente, las metas de largo plazo de
la iniciativa suenan como escenarios sacados
directamente del Viaje Fantástico de Isaac
Asimov: nanorobots que pueden buscar y
destruir células cancerosas antes de que
puedan formar tumores. . . nanomáquinas
que pueden remover y reemplazar partes
celulares dañadas. . . bombas implantadas de
tamaño molecular que pueden suministrar
dosis de drogas dirigidas con precisión cuándo y dónde se necesitan. . . incluso nanosensores “inteligentes” que pueden detectar
patología o alteración en cualquiera y cada
una de las células del cuerpo e instantáneamente comunicar esa información a los médicos. La ciencia ficción pronto puede convertirse en ciencia de hecho — éstas y muchas
otras innovaciones de la iniciativa de
nanomedicina están actualmente en
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Nanomedicina: Una Dosis Diminuta
para la Salud
Una de las aplicaciones más prometedoras
de la nanotecnología, conocida como
nanomedicina, implica el desarrollo de
herramientas y máquinas a nanoescala diseñadas para monitorear la salud, administrar drogas, curar enfermedades y reparar
tejidos dañados, todo dentro de las fábricas
moleculares de las células vivas y organelos.
El Mapa Caminero para Investigación
Médica del NIH [Instituto Nacional de
Salud de los EE.UU.] — el plan maestro de
la agencia para acelerar el ritmo de descubrimiento y velocidad de aplicación del
nuevo conocimiento a estrategias de prevención biomédica, diagnósticos y
tratamientos — contiene una importante
iniciativa que comenzará con la creación de
3-4 Centros de Desarrollo de Nanome- dicina. Estas instalaciones multidisciplina- rias
servirán como el núcleo intelectual y tec-
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desarrollo y el NIH predice que su iniciativa en este campo comenzará a producir beneficios médicos ya en los próximos
10 años. Roco también prevé que para el
año 2015 la mitad de todos los descubrimientos de drogas y tecnología de administración estará basada en la nanotecnología.
Los expertos predicen que los nanosensores también proporcionarán herramientas
significativamente mejores para determinar
exposiciones tanto internas como externas
en tiempo real, evaluar riesgo, vincular exposición a la etiología de una enfermedad,
caracterizar interacciones gene-medio ambiente y finalmente mejorar la salud públi-
ca. El NIEHS [Instituto Nacional de
Ciencia de Salud Ambiental de los
EE.UU.], a través de subvenciones externas
y el Programa de Superfondos para
Investigación Básica, están financiando
investigaciones que buscan desarrollar
muchas de estas esperadas innovaciones.
Por ejemplo, con una subvención de
Investigación en Innovación para Empresas
Pequeñas, el instituto está apoyando a
Platypus Technologies de Madison,
Wisconsin, en su trabajo con nanosensores
inteligentes diseñados para actuar como
dosímetros personales para exposición en
tiempo real y acumulativa a compuestos
tóxicos. Combinando foto-óptica reducida y
nanomateriales para formar una plataforma
singularmente sensible de detección de exposición, el prototipo inicial del dispositivo
tiene el propósito de detectar incluso exposiciones muy bajas a pesticidas
organofosforados. El sensor, que se espera
esté disponible comercialmente dentro de
dos años, es pequeño, liviano, pasivo,
económico y fácil de operar — una aplicación inmediata será el monitoreo de los
ambientes químicos de los niños.
Barbara Israel, CEO [Ejecutivo en Jefe]
de Platypus, señala: “Nuestro producto es
‘ajustable’ para monitorear diferentes rangos
anticipados de concentración y períodos de
tiempo. Por lo tanto, puede usarse para monitorear tanto la exposición de trabajadores a
compuestos
tóxicos
durante
su
fabricación, como la de trabajadores agrícolas
en el campo”. La empresa está también desarrollando sensores que responderán
inmediatamente a la presencia de concentraciones muy bajas de otros agentes tóxicos en
el ambiente, y espera que miles de unidades
serán interconectadas en los sistemas de
seguridad de instalaciones como aeropuertos
y estaciones ferroviarias, así como también
tendrán aplicaciones industriales.
“Esta tecnología va a revolucionar la forma en que hacemos negocios” — el negocio
de la ciencia de la salud ambiental — de
acuerdo a William Suk, director del Centro
para Ciencias Integradas y Riesgo, dentro de
la División de Investigación Externa y
Capacitación del NIEHS. Suk fiscaliza
muchas de las subvenciones externas del
instituto que involucran nanotecnología.
“Uno de los reales potenciales de esta
tecnología es ser realmente capaces de comprender las interacciones entre los genes y el
medio ambiente, ser capaces de tomar la
revolución ‘nomica’ y reducir su escala de tal
manera que se tenga un enfoque global para
comprender cómo las cosas calzan”, dice.
“Estamos considerando el uso de estas
tecnologías en los sistemas biológicos, para
comprender cómo los sistemas se comunican
— cómo las células se comunican entre sí y
dentro de sí, y con otros sistemas celulares
dentro de nuestro cuerpo. Todo está
conectado”.
Una amplia variedad de nanobiosensores
extraordinariamente sofisticados, que calzan
en la visión de Suk, están bastante avanzados
en su desarrollo entre los subvencionados del
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ehp | Nanotecnología
Christopher Burke/Instituto de Ciencias de la Vida de la Universidad de Michigan
instituto. Por ejemplo, el neurotoxicólogo
Martin Philbert, de la Universidad de
Michigan, está perfeccionando un sensor que
mide e identifica las alteraciones químicas
dentro de las mitocondrias de las neuronas y
puede, eventualmente, permitir la intervención o prevención de tales alteraciones celulares. Roger Tsien, un profesor de farmacología, bioquímica y química de la
Universidad de California, San Diego, está
desarrollando sensores de toxicidad que
pueden indicar exposiciones y las alteraciones
que causan a nivel genómico en tiempo real.
Kenneth Turtletaub, un científico del
Laboratorio Nacional Lawrence Livermore,
utiliza un espectrómetro acele- rador de masa
para observar nanoestructuras en busca de
biomarcadores de exposición a agentes
químicos cancerígenos, caracterizando las alteraciones a nivel atómico. Según Suk, éstos y
otros nanodispositivos estarán haciendo
grandes aportes al campo de la salud ambiental dentro de los próximos cinco años.
Cuando la Nanotecnología alcance su máximo impacto, dice, la toxicogenómica evolucionará más allá de su infancia y comenzará a
cumplir su promesa de progreso significativo
en la salud pública.
dedicó,
discrecionalmente
una
pequeña proporción de su presupuesto para
subvencionar proyectos de nanotecnología:
“decidimos primero, hacer aplicaciones con
respecto al medio ambiente”, dice Barbara
Karn, quien supervisa el área nanotecnología
del programa. “Queríamos demostrar que la
nueva tecnología es útil para los asuntos de
legado de la EPA”.
El suelo y el agua subterránea contaminados están entre los asuntos más destacados de
ese legado, y ha habido un considerable progreso en los métodos de corrección basados en
nanotecnología. El ingeniero ambientalista
Wei-xian Zhang, de la Universidad Lehigh,
un subvencionado por STAR que también
recibe financiamiento de la NSF,
ha estado trabajando desde 1996 para desarrollar un método de corrección empleando
partículas metálicas a nanoescala, especialmente nanopartículas de hierro, descubiertas
por él como poderosas reductoras. “Si algún
contaminante puede ser degradado o
transformado por reducción”, afirma, “usted
puede usar las nanopartículas de hierro”. Él
ha estado probando en terreno el método desde el año 2000, tanto en estudios pilotos como en varios sitios industriales contaminados
con tóxicos tales como bifenilos policlorados,
DDT y dioxina, y los resultados han sido
alentadores.
La nanocorrección de Zhang ofrece varias
ventajas potenciales sobre los métodos existentes. La implementación es muy simple —
las nanopartículas son suspendidas en
lodo y básicamente bombeadas directamente
al corazón de un sitio contaminado. Por comparación, los métodos actuales a menudo implican cavar el suelo y tratarlo. “Usted puede
inyectar
[las
nanopartículas]
en
algunas situaciones difíciles, por ejemplo,
bajo una pista de aterrizaje, bajo un edificio u
otros lugares en que los métodos típicos de
ingeniería pueden no ser factibles”, dice
Zhang.
Los nanomateriales tienen una gran
proporción de átomos de superficie, y es en
la superficie de cualquier material donde se
observan las reacciones. Debido a la enorme
área de superficie de las nanopartículas y,
por lo tanto, muy elevada actividad de superficial, los trabajadores pueden, potencialmente, usar mucho menos material. La
cantidad de superficie permite también una
rápida reacción en menos tiempo para que
se formen los compuestos intermedios —
un beneficio en biodegradación, donde los
productos intermedios son a veces más tóxicos
que
el
compuesto original. Finalmente, el método
Pequeños Progresos en un Mundo
de Zhang es también mucho más rápido.
Grande
“Debido a la mayor actividad, toma mucho
Aunque la investigación y desarrollo de
menos tiempo alcanzar las metas de
aplicaciones ambientales es todavía un
corrección que la tecnología convenárea de trabajo relativamente estrecha de
cional, la cual, empleando procesos
la nanotecnología, está creciendo rápidabiológicos, puede tomar años”, dice.
mente, y los nanomateriales prometen
Con las nanopartículas de hierro, en la
un conjunto de beneficios tan deslummayoría de los casos, el equipo
brantes aquí como en otros campos. La
observó que los contaminantes se neunanotecnología se aplicará a ambos
tralizaron en componentes benignos
extremos del espectro ambiental, para
en unos pocos días.
limpiar la polución existente y para
Zhang está actualmente concendisminuir o impedir su generación.
trado en aumentar la producción de
También se espera que contribuya a dar
nanopartículas de hierro para hacerlas
saltos significativos hacia adelante en
más competitivas en función del
monitoreo y salud ambiental en el futuro
costo y planea establecer un negocio
cercano.
basado en sus técnicas. El suyo es
El programa de Ciencia para Lograr
sólo uno de las docenas de métodos de
Resultados (STAR) de la agencia para la
nanocorrección que se están desaProtección del Medio Ambiente (EPA)
rrollando, pero es probablemente el
de los EE.UU., administrado por el
más cercano al desarrollo en gran
Centro Nacional Para la Investigación
escala — él espera que dentro de uno
del Medio Ambiente de la propia agen- Sondeos reveladores. Las nanosondas llenas con moléculas o dos años haya decenas a centenas de
cia, fue de los primeros que realizaron que fijan iones, tales como el zinc, calcio y potasio, se inyectan proyectos empleando la tecnología de
inversiones y promovieron las aplica- en las células para revelar los patrones de intercambio de iones nanopartículas metálicas. Y este tipo
que las hacen funcionar. Se emplean modelos computacionales
ciones ambientales de la nanotecnología. para interpretar las señales fluorescentes que las sondas emiten de aplicación “pasiva” es sólo el
Comenzando en al año 2001, la agencia cuando capturan un ión objetivo.
comienzo.
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futuro, brindando la oportunidad
Oregon, patentó recientemente un método
d
e
más benigno (y más rápido y más barato) para
“reinventar la infraestructura de
producir nanopartículas de oro, las que son
energía que mueve la economía, la
especialmente importantes en la industria de
que en última instancia ha estado
los semiconductores.
generando muchos de los probleKarn está entusiasmado con éste y otros
mas... que han estado preocupando
avance similares: “Realmente tenemos una
a los ambientalistas en las últimas
gran oportunidad con esta nueva tecnología,
décadas”. Los materiales y disposide hacerlo sin desperdicio, de hacer partículas
tivos a nanoescala podrían derivar
en una forma ambientalmente amigable, de
en inventos decisivos que cambien
manera que no tengamos que preocuparnos
las reglas del juego en la producción
por las emisiones [y] no tengamos que prede energía a través del desarrollo de
ocuparnos por limpiar después”.
las provenientes del hidrógeno y del
Una Luz Amarilla
sol, y podrían incluso producir
Formas y Tamaños. Visualización de un pistón nanohidráuliLas mismas propiedades que le confieren
grandes mejoramientos en la
co que consiste en componentes comunes de
tan increíble utilidad a las nanopartículas
Nanotecnología, incluyendo un nanotubo de carbón (azul), eficiencia y limpieza de la energía
átomos de helio (verde), y una molécula "buckyball" (gris).
modificadas son las que generan preocupabasada en el carbono. Se habla
ciones acerca de la naturaleza de sus
seriamente, por ejemplo, de que la
“En el futuro”, dice Zhang, “tendremos
interacciones con sistemas biológicos: su
nanotecnología podría hacer posible expandir
dispositivos más sofisticados que podrán
tamaño, sus formas, su elevada reactividad,
sustentablemente el uso del carbón en la profuncionar no solamente como dispositivos de
cómo están recubiertas y otras característiducción de energía, empleando un nanocataltratamiento, sino también como sensores con
cas únicas que podrían resultar dañinas en
izador que convierta el carbón directamente
funciones de detección y capacidad de comualgunas circunstancias fisiológicas. Varios
en combustible diesel y gasolina de comnicación que uno puede poner en la tierra y
estudios recientes han aparecido en la
bustión más limpia.
obtener retroalimentación sobre diferentes
literatura demostrando que algunos nanoPor otro lado, la iluminación basada en
parámetros ambientales”. Ese tipo de disposimateriales no son inherentemente benignanotecnología es ya una realidad — semátivo dará a las personas que trabajan
nos. Algunos pueden viajar fácilmente a
foros en todo el país usan ahora minúsculas
corrigiendo los problemas ambientales, la
través del cuerpo, depositarse en sistemas
pantallas de diodo emisoras de luz que
capacidad de determinar cuándo un
orgánicos y penetrar células individuales,
permanecen en servicio más tiempo y usan
tratamiento ha sido completado adecuaday podrían desencadenar respuestas
menos energía que las ampolletas. La NNI ha
mente, lo que actualmente es una decisión
inflamatorias similares a aquéllas vistas en
proyectado que la proliferación de la
difícil de tomar. Están en desarrollo
nanopartículas ambientes — mejor conocitecnología para iluminación residencial y de
nanosensores similares que permitirán la
das en la ciencia ambiental como partículas
oficinas podría reducir el consumo de energía
detección y análisis in situ en tiempo real
ultrafinas —, las que se sabe son a menudo
en los EE.UU. hasta en un 10%, reduciendo
de contaminantes para propósitos de
mucho más tóxicas que sus contrapartes
las emisiones de carbono hasta en 200
monitoreo ambiental.
más grandes. La principal diferencia entre
millones de toneladas al año.
Los beneficios ambientales augurados
las nanopartículas ambientales y las modifiCon su extremadamente alta reactividad,
por la nanotecnología van más allá aun. Los
los nanomateriales también
mejoramientos en la tecnología de mempueden permitir química
brana proporcionados por los nanomateria“verde” y fabricación “exacta”,
les, por ejemplo, permitirán una mucho
en la cual los agentes químicos
mejor filtración de agua, desalinización, y
y otros productos se fabrican
tratamiento de aguas servidas a través de
desde el principio, átomo por
filtrado selectivo más fino y “más inátomo. Este avance permitiría la
teligente”. La tecnología que se espera que
creación de productos menos
prolifere también se prevé muy simple y
tóxicos, a la vez que reduciría o
muy económica. Se espera que estos adelaneliminaría tanto los desechos
t
o
s
peligrosos como la necesidad de
finalmente contribuyan en gran medida a
grandes cantidades de materia
aliviar la escasez de agua potable limpia,
prima tóxica — la llamada reabundante y de bajo costo que aflige a
ducción de fuente. El concepto
muchas regiones del mundo.
de química verde se aplica a la Diminutos quitasoles. Una microesfera de dióxido de titanio
Murdock dice que es probable que la
misma producción de nanopar- (aproximadamente 1-50 micrones de diámetro) con inclusiones
esféricas apretadas funciona en los filtros solares como un
nanotecnología también ayude a prevenir
tículas. James Hutchinson, pequeño “cristalito fotónico”, reflejando la luz de manera muy
una gran cantidad de contaminación en el
químico de la Universidad de efectiva.
De arriba hacia abajo: Laboratorio Nacional de Oak Ridge; Sascha Klein, Fred Lange, and David Pine/Universidad de California, Santa Barbara
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cadas es que las primeras tienen formas,
tamaños y composiciones que varían
mucho, mientras que las últimas son
compuestos simples, uniformes.
Günter Oberdörster, toxicólogo ambiental de la Universidad de Rochester,
ha demostrado en estudios con roedores,
publicados en junio de 2004 en Inhalation
Toxicology, que las nanopartículas inhaladas se
acumulan en los conductos nasales, pulmones
y cerebros de las ratas. Y en la edición de enero de 2004 de Toxicological Sciences, el científico de la Administración Nacional de
Aeronáutica y el Espacio [NASA] ChiuWing Lam informó recientemente que una
suspensión de nanotubos de carbono (una de
las nanopartículas modificadas más ampliamente utilizadas e investigadas) puesta
directamente en los pulmones de ratón causó
granulomas, lesiones poco comunes que
pueden interferir con la absorción de oxígeno.
David Warheit, un investigador de DuPont,
realizó un experimento similar en ratas, publicado en la misma edición de Toxicological
Sciences,
y
descubrió
células
inmunes reuniéndose alrededor de grupos de
nanotubos en los pulmones de los animales.
Con la dosis más alta, el 15% de las ratas,
simplemente, se asfixió debido a la agrupación de los nanotubos que habían bloqueado los conductos bronquiales. Aunque los estudios de Lam y Warheit no reflejaron exposiciones potenciales del mundo real, sus resultados fueron, sin embargo, preocupantes,
demostrando
al
menos
que
los
nanotubos son biológicamente activos y posiblemente tóxicos.
Un estudio publicado en la edición de
julio de 2004 de EHP, documentando el
estrés oxidativo (un signo de inflamación) en
los cerebros de los róbalos de boca grande
expuestos a fulerenos acuosos, es el que tal vez
ha recibido la mayor atención y ha provocado
la mayor cantidad de advertencias que
cualquier otro experimento sobre la implicancia del nanomaterial en la salud hasta la
fecha. Eva Oberdörster (hija de Günter),
toxicóloga ambiental de la Universidad
Metodista del Sur, se describe a sí misma como “impactada” por la importante cobertura
de prensa nacional que ha recibido su estudio.
Ella se apresura en enfatizar que, aunque algunos informes han descrito “daño
cerebral” o incluso “daño cerebral grave” en
los peces, ella, lo que realmente ha hecho es
caracterizar sus conclusiones como “daño
significativo en el cerebro, lo cual es muy
distinto de daño cerebral”. Después de 48 horas de exposición a dosis bastante altas de
fulerenos, los peces probablemente tuvieron
el mismo efecto que un dolor de cabeza muy
fuerte, dice ella, pero sobrevivieron a la
exposición. En cuanto a la inflamación,
Oberdörster dice que pudo haber sido una respuesta apropiada a un estresante externo o
un síntoma de daño fisiológico real. Ella
piensa estudiar más este asunto en experimentos de micro-ordenación de genes
diseñados para caracterizar más adecuadamente la respuesta inflamatoria involucrada,
y ver si los peces podrían realmente metabolizar y eliminar las partículas.
Oberdörster ha descrito las conclusiones
como “una luz amarilla, no roja”, y explica
además que hay algunos indicios, derivados
de los estudios de inhalación y peces, de que
existe el potencial para que las nanopartículas
reaccionen con los tejidos y produzcan
inflamación. “De manera que el próximo paso es, entonces, considerarlos en un espectro
más amplio antes que lancemos todos estos
productos al mercado, para cerciorarnos
de que son seguros, de manera que los
consumidores estén protegidos”, dice ella.
Kulinowski piensa que los primeros estudios producen más preguntas que respuestas
y advierte sobre la interpretación inadecuada
de estudios individuales. Sin embargo, ella es
optimista en que, con los avances tecnológicos, los potenciales impactos negativos de las
nanopartículas modificadas pueden reducirse
al mínimo o eliminarse completamente. “La
buena noticia que yo veo es que, con el control que tenemos sobre las nanopartículas,
podemos ser capaces de modificarlas para que
produzcan los beneficios, pero no los riesgos,
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Nanotecno-información
Centros e Iniciativas
Otros Recursos
Iniciativa Nacional de Nanotecnología (NNI)
Consorcio de 19 agencias que fiscaliza las difundidas y bien
financiadas actividades de Nanotecnología del gobierno
federal.
http://www.nano.gov/
Alianza de Nanonegocios
Esta asociación de comercio de Nanotecnología está
desarrollando una variedad de iniciativas para apoyar y
fortalecer a la comunidad del negocio de
Nanotecnología.
http://www.nanobusiness.org/
Centro para la Nanotecnología Biológica y Ambiental
(CBEN)
El CBEN, con sede en la Universidad Rice en Houston, fue
iniciado en el año 2001 como uno de seis Centros de
Ingeniería y Ciencia a Nanoescala creados por el NSF.
http://www.ruf.rice.edu/~cben/
Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional
(NIOSH)
El NIOSH está especialmente interesado en nanomateriales
con respecto a seguridad ocupacional y salud. Esta página
incluye información sobre el Programa de Investigación de
Seguridad y Salud de la Nanotecnología y el Centro de
Investigación de Nanotecnología de NIOSH.
http://www.cdc.gov/niosh/topics/nanotech/
Mapa Caminero para la Investigación Médica del NIH:
Nanomedicina
El Mapa Caminero para la Investigación Médica proporciona
un marco para las prioridades de investigación del NIH en
los próximos años. El mapa caminero contiene una iniciativa
significativa de nanomedicina que incluye la creación de
centros de desarrollo de nanomedicina multidisciplinarios.
http://nihroadmap.nih.gov/nanomedicine/index.asp
Sociedad de Tecnología Visión 2020 de la Industria
Química
Este consorcio, conducido por la industria, apunta a acelerar
la innovación y desarrollo de la tecnología en la industria
química. El consorcio, en cooperación con el NNI y la Oficina
de Eficiencia de la Energía y Energía Renovable del
Departamento de Energía de los EE.UU., publicó en el año
2003 un documento llamado el Mapa Caminero de la
Investigación y Desarrollo de la Industria Química para el
Diseño de los Nanomateriales: Desde los Fundamentos hasta
el Funcionamiento.
http://www.chemicalvision2020.org/pdfs/
nano_roadmap.pdf
Programa Nacional de Toxicología (NTP). Evaluación de
Seguridad de la Nanotecnología
El CBEN identificó materiales a nanoescala para estudio por
el NTP. Basándose en esta nominación, el NTP está desarrollando materiales y protocolos para poner a prueba un
amplio espectro de materiales a nanoescala en busca de toxicidad en modelos animales, en los próximos años.
http://www.niehs.nih.gov/oc/factsheets/nano.htm
Grupo de Acción sobre Erosión, Tecnología, y
Concentración (Grupo ETC)
Este grupo canadiense de activistas ambientales ha
llamado a una moratoria mundial en la investigación y
comercialización de nanomateriales modificados.
http://www.etcgroup.org/
Eventos Recientes
Tecnología y Salud Ambiental: Implicancias de la
Discusión Pública de la Nanotecnología
Los participantes de esta reunión de mayo de 2004 de la
Mesa Redonda sobre Ciencias de la Salud Ambiental,
Investigación y Medicina del Instituto de Medicina
analizaron las implicancias para la salud humana y
ambiental de la Nanotecnología, así como asuntos
legislativos y sociales.
http://www.iom.edu/subpage.asp?id=19612
Diálogo Internacional sobre Investigación y Desarrollo
Responsable de la Nanotecnología
El NNI reunió a los líderes de los programas de
Nanotecnología de todo el mundo en este taller de junio
de 2004.
http://www.nsf.gov/home/crssprgm/nano/
dialog.htm
Primer Simposio Internacional sobre Implicancias en la
Salud Ocupacional de los Nanomateriales
Este taller, convocado por el NIOSH, el Laboratorio de
Salud y Seguridad del RU [Reino Unido], y el Ejecutivo de
Salud y Seguridad del RU, tuvo lugar en el Reino Unido
en octubre del 2004 para analizar asuntos del lugar de
trabajo relacionados con los nanomateriales.
http://www.hsl.gov.uk/news/nanosy mp.htm
El NTP, en asociación con la Universidad de Florida,
planificó también un taller para noviembre de 2004, para
concentrarse en cuestiones acerca de cómo evaluar mejor
la exposición a los nanomateriales y evaluar su toxicidad y
seguridad.
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Ciencia & Trabajo
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ehp | Nanotecnología
no los peligros”. Repito, añade ella, todo
tiene que ver con la superficie: “si podemos
controlar las propiedades de la
superficie de las nanopartículas, podemos ser
capaces de eliminar la toxicidad. . . Es como
deslizar el interruptor atenuador de luz en
una lámpara — usted puede, simplemente,
disminuir su intensidad hasta un nivel bastante más allá de nuestra capacidad para
medirla”.
Brand X Pictures
Grandes Asuntos para la
Nanotecnología
Los logros de la Nanotecnología podrían
pronto afectar a cada persona en el planeta.
Pero la opinión es virtualmente unánime,
entre los partidarios y escépticos por igual,
de que la realización plena de los beneficios
potenciales de la nanotecnología está
amenazada por preocupaciones acerca de los
efectos potencialmente negativos que los
nanomateriales podrían tener sobre la salud
humana y el medio ambiente. Se
están buscando aplicaciones con mucha
energía. La pregunta es, ¿irá a la par el
conocimiento de los efectos?
En agosto del año 2002, el Grupo de
Acción sobre Erosión, Tecnología y
Concentración (Grupo ETC), un grupo
activista ambiental Canadiense que jugó un
rol clave en la batalla contra la aceptación de
OGM [organismos modificados genéticamente] en la década de 1990, pidió una
moratoria mundial en la investigación
y comercialización de nanomateriales
modificados hasta que se hayan establecido
protocolos para proteger a los trabajadores,
incluyendo trabajadores de laboratorio. Ellos
citaron una escasez de datos de investigación
acerca de las potenciales implicancias negativas de los nanomateriales, y la carencia de
fiscalización normativa específica o de buenas
prácticas establecidas en la manipulación de
nanopartículas, ya sea en el laboratorio o en el
ambiente de fabricación.
Tal vez coincidentemente, en los dos años
desde el llamado a moratoria del grupo ETC
ha habido un aumento palpable en la investigación y actividad burocrática respecto a las
piezas faltantes del puzzle. Todos
los grupos de interés, echando una mirada
vigilante a la experiencia OGM, están
aparentemente de acuerdo en que los abundantes beneficios de la nanotecnología no
pueden ser cosechados sin una caracterización
completa y transparente de los riesgos que
podrían significar para la salud humana y el
medio ambiente.
“A la larga estaremos mucho mejor si nos
aseguramos de abordar las preocupaciones y
asuntos de manera proactiva”, dice Murdock.
“Eso no significa que deberíamos ser
hipersensibles y temerosos de explorar nuevas
áreas, debido a que avanzamos fundamentalmente a través de la exploración. Pero necesita que sea balanceada y moderada con un
examen permanente de las implicancias”.
Roco, quien ha sido mediador en la atención de la NNI tanto en las implicancias de
seguridad como en los potenciales impactos
de la nanotecnología en la sociedad en todo el
mundo, está de acuerdo en que el momento
para una evaluación responsable del riesgo es
ahora: “Esto ya no es algo que uno hace después de los hechos, después que uno hace la
otra investigación, sino que tiene que hacerse
desde el principio, para que sea parte integral
de la investigación. Cuando usted crea algo,
tiene que mirar el ciclo completo de la actividad, no solamente la primera fase”.
El CBEN ha estado investigando el destino ambiental de las nanopartículas desde su
inicio en el año 2001, como uno de los seis
Centros de Ciencia e Ingeniería a Nanoescala
establecido por la NSF, y Kulinowski ha
notado la reciente explosión en el interés y
financiamiento en la investigación de seguridad y salud ambiental de la nanotecnología.
“Hemos visto un tremendo movimiento en
este asunto en el último año y medio, desde
un momento en que casi sentíamos como si
estuviéramos gritando en la oscuridad, hasta
el punto en que la gente está ahora avanzando de manera independiente”, dice ella. “La
respuesta del gobierno federal ha sido muy
alentadora. También hemos visto una enorme
respuesta de la industria. . . que nos da la
esperanza de que, a medida que avanzamos
hacia la comercialización de los productos de
nanotecnología, estos asuntos serán abordados tempranamente en su desarrollo, antes o
cuando los productos entren al mercado”.
Los críticos e incluso algunos defensores,
sostienen que el financiamiento de la investigación de las implicancias es aún insuficiente
en proporción a los casi US$ mil millones que
el gobierno está actualmente invirtiendo en
desarrollo de nanotecnología. Pero los esfuerzos para comprender mejor las implicancias
de la nanotecnología están claramente
tomando impulso. Se están poniendo en marcha importantes iniciativas nuevas de
investigación, y la coordinación y colaboración está aumentando entre las agencias
federales reguladoras y las organizaciones de
investigación involucradas.
El NNI es el lugar central, con gran
cantidad de agencias participantes.
Representantes de varias de aquellas agencias,
incluyendo el NIEHS, la EPA y el Instituto
Nacional de Seguridad y Salud Ocupacional
(NIOSH), han formado un grupo de
trabajo sobre el impacto de la nanotecnología
en la salud y medio ambiente. El grupo se
reúne mensualmente para compartir
conocimiento, coordinar actividades, identificar vacíos y metas de la investigación, y
abordar temas urgentes, como la regulación y
la nomenclatura.
Otras dos iniciativas importantes de
investigación, diseñadas para establecer el
conocimiento fundamental acerca de las
propiedades toxicológicas de los nanomateriales modificados, están en sus etapas
iniciales. Ambas contribuirán significativamente a crear la base de conocimiento y
permitirán una evaluación de riesgo más
racional en el futuro.
La primera de estas importantes iniciativas surgió de la nominación del año 2003 del
CBEN de nanomateriales para estudio por el
Programa Nacional de Toxicología (NTP). El
NTP, con sede en el NIEHS, se ha
embarcado en un programa de investigación
que involucra estudios de seguridad de nanomateriales manufacturados representativos.
“El objetivo de nuestro programa”, dice
Nigel Walker, científico líder de la investigación “es realmente ayudar a guiar a la
industria de los nanomateriales a identificar
los parámetros fundamentales que llevan a la
biocompatibilidad de los nanomateriales,
comparado con la toxicidad de ellos, de manera que podamos evitar tener problemas
como los del alimento genéticamente modificado, donde la industria y la tecnología
se adelantaron a los asuntos de biocompatibilidad”.
El programa del NTP se centrará inicialmente en estudios de nanotubos de carbono
de pared simple, dióxido de titanio, puntos
cuánticos (nanocristales semiconductores fluorescentes empleados en equipos de
imagenología), y fulerenos. Debido a que la
ruta más probable de exposición a esos nanomateriales, tal como se usan actualmente, es a
través de la piel, varios estudios se concentrarán en la toxicidad dérmica. También se
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& Trabajo
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| AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 | www.cienciaytrabajo.cl
Artículo de Difusión | ehp
examinarán otras rutas de exposición, todas
apuntando, sin embargo, a niveles de
exposición generales, agudos, subcrónicos y
crónicos.
Una de las metas más amplias de la
iniciativa NTP es crear modelos de las
propiedades químicas, físicas y farmacocinéticas de los nanomateriales que puedan
ser utilizados para ayudar a evaluar nuevas
nanoestructuras
modificadas
a
medida que aparecen. Según John Bucher,
subdirector del programa de Toxicología
Ambiental del NIEHS, el propósito de esta
iniciativa no es prevenir o comprender la
toxicidad de cada material que pueda ser
fabricado bajo el rótulo “nano”. En vez de
eso, dice, “lo que estamos tratando de hacer
es comprender algunas de las propiedades
fundamentales de los nanomateriales —
cómo se desplazan, qué tipo de toxicidad
poseen, qué tipos de sistemas orgánicos
son atacados, cuáles son los efectos de los
revestimientos de superficie. . . No estamos
tratando de proteger al mundo de la
nanotecnología, ni creemos que el mundo está necesariamente en gran riesgo por los
nanomateriales en este momento, o incluso
potencialmente en el futuro. Pero la ausencia
total de información hace de ésta un área que
simplemente tenemos que investigar”.
El NTP, en asociación con la
Universidad de Florida, planificó un taller
para noviembre del año 2004, diseñado
para reunir científicos de la comunidad toxicológica, ingenieros ambientales y
representantes de la industria farmacéutica
y química. El taller se centró en preguntas
acerca de cómo evaluar de la mejor manera
la exposición a los nanomateriales y
evaluar su toxicidad y seguridad.
Walker piensa que estos esfuerzos
están perfectamente sincronizados. “Si
hubiéramos intentado hacer esto hace dos o
tres años, podríamos haber estado realmente
apuntando a cosas que no eran importantes”,
dice. “Usted no quiere estar demasiado pronto en la curva, pero luego no quiere estar
demasiado tarde. Éste es el momento correcto. . . y nosotros estamos siendo muy abiertos
acerca de cómo están avanzando las cosas,
porque el NTP está completamente abierto,
y todos los datos son, finalmente, del
público”.
La segunda iniciativa importante
— investigación sobre riesgos para la salud
ocupacional asociados con la fabricación y
empleo de nanomateriales — está siendo
encabezada por el NIOSH. El instituto
organizó recientemente un Centro de
Investigación de Nanotecnología para coordinar, seguir y medir los resultados, y
difundir el producto de las actividades
relacionadas con la nanotecnología a través de
todo el instituto.
El NIOSH ha iniciado también un
proyecto multidisciplinario de cinco años
conocido como Programa de Investigación
de Seguridad y Salud de la Nanotecnología
de NIOSH. Al igual que en los esfuerzos
del NTP, la idea es caracterizar tempranamente los riesgos en el desarrollo de la industria, y el lugar de trabajo es actualmente
la ubicación más probable para que
ocurran las exposiciones. “Hay alguna
preocupación de que estos materiales tengan un efecto desconocido y existe interés
en obtener pronto medidas de higiene
industrial, de control generalizadas, y las
mejores prácticas de trabajo”, dice Vincent
Castranova, quien es el investigador principal del proyecto coordinador del programa,
así como de un estudio separado que
explora el área de la superficie de la
partícula como un medidor de dosis.
“Normalmente, el interés en estos elementos se ha presentado después que han
provocado una enfermedad. Ésta es una
situación en que las preocupaciones son suficientes como para hacer que la industria y
las agencias gubernamentales traten de
poner en primer plano buenas prácticas de
trabajo y medidas de prevención, antes de
que conozcamos las consecuencias sobre la
salud”.
Otro científico de NIOSH, Andrew
Maynard, está investigando métodos para
caracterizar y monitorear nanopartículas
transportadas por el aire. “Parte de mi
proyecto, dice Maynard, es desarrollar y usar
las técnicas de caracterización, de manera que
podamos comprender con mucha exactitud la
naturaleza química y física de las partículas, y
también las concentraciones de partículas
que se están empleando en estos experimentos. También veremos cómo podemos monitorear de manera efectiva las exposiciones en
el lugar de trabajo, de tal modo que podamos
contar
con
técnicas
simples, vigorosas y económicas que la gente
pueda usar en el lugar de trabajo”.
Aunque la exposición dérmica a los
nanomateriales está ocurriendo como
resultado de su uso en protectores solares y
algunos cosméticos, se sospecha que la
inhalación es la ruta más probable de exposición en el lugar de trabajo, de manera
que otros proyectos en el programa se
concentrarán en aspectos de toxicidad
pulmonar, especialmente en relación con
nanotubos de carbono. Estas interrogantes
serán engañosas, nuevamente debido a las
características únicas de los nanomateriales
— que son técnicamente partículas ultrafinas, pero ¿pueden ellos ser evaluados de la
misma manera?
“Ésta es una de las áreas importantes del
debate en este momento”, dice Maynard. ¿en
qué medida usted trata las nanopartículas
modificadas simplemente como otra partícula ultrafina? Es justo decir que la mayoría de
nuestras preocupaciones por los nanomateriales está siendo impulsada por nuestras experiencias con partículas ultrafinas, las cuales
son substancialmente más inflamatorias y
tóxicas que las partículas finas”.
“Otro asunto no resuelto es el que estas
nanopartículas tienden a juntarse, y los
agregados a menudo tienden a no tener un
diámetro inferior a cien nanometros”, añade
Castranova. Entonces, ¿ellas se comportan
como partículas finas, más que como ultrafinas? Eso depende de si acaso se desagregan,
ya sea durante la manipulación, o una vez que
están en el pulmón, lo que se desconoce. Su
capacidad para entrar a los pulmones, cruzar
la barrera aire-sangre, o para causar
inflamación sería afectada por [la desagregación]”. NIOSH ayudó a organizar el
Primer Simposio Internacional sobre
Implicancias de los Nanomateriales sobre la
Salud Ocupacional, realizado en octubre en el
Reino Unido para discutir estas materias.
El Efecto de Propagación
Las iniciativas NTP y NIOSH son los programas nuevos principales en preparación,
pero una gran cantidad de actividades está
continuando o comenzando en otros círculos
también. El NNI está expandiendo su apoyo
a la investigación de implicancias, y recientemente
realizó
una
importante
reunión internacional que reunió a líderes de
los programas de nanotecnología de 25
países y la Unión Europea. El Diálogo
Internacional sobre Investigación y Desarrollo Responsable de la Nanotecnología tuvo
lugar entre el 17-18 de junio de 2004 en
Arlington, Virginia, y fue concebido para
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Ciencia & Trabajo
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ehp | Nanotecnología
ayudar a desarrollar una visión global de
cómo la tecnología puede ser fomentada con
la atención adecuada y respeto por las
preocupaciones que interesan a la sociedad, y
las implicancias para el medio ambiente, la
salud y seguridad.
Roco, quien calificó la reunión como un
“acontecimiento histórico”, propuso la
creación de una organización internacional
dedicada al desarrollo responsable de la
nanotecnología. Los participantes acordaron
formar un “grupo preparatorio” encargado de
explorar posibles acciones, mecanismos, plazos, marcos institucionales y principios involucrados en la construcción de una institución permanente, diseñada para garantizar el
diálogo y cooperación internacional, y la coordinación en la investigación y desarrollo de
la nanotecnología.
Pat Mooney, director ejecutivo del Grupo
ETC, también reaccionó favorablemente a la
reunión: “Es la primera vez que hemos tenido
una reunión internacional como ésta, y creo
que es una señal muy alentadora”.
Señales alentadoras de compromiso y
progreso se hicieron evidentes también en
dos importantes eventos realizados con anterioridad, este mismo año. En marzo, el
NIEHS realizó un taller llamado Tecnologías
para una Mejor Estratificación de Riesgo y
Prevención de Enfermedades, que reunió a
un grupo de expertos para formular
recomendaciones específicas sobre cómo el
Instituto debería incorporar nanotecnología
en su agenda de investigaciones en los próximos años. Los participantes aceptaron la idea
de que el NIEHS debería mostrar el camino
en el desarrollo de una plataforma simple de
pequeña escala para detectar exposiciones
individuales a agentes químicos, eliminar
tóxicos del sistema, e intervenir para revertir
cualquier efecto dañino que pudiera haber
sido iniciado por la exposición. Luego, en
mayo, la Mesa Redonda sobre Ciencias de
Salud Ambiental y Medicina del Instituto de
Medicina realizó un debate público de un día
de duración, en el cual expertos y miembros
del público exploraron los asuntos planteados por la nanotecnología desde una
perspectiva de salud pública. La discusión
evidenció los potenciales beneficios para la
salud pública, a la vez que reconoció
recientes preocupaciones toxicológicas.
Eventos como éstos sirven para informar a la
comunidad científica, y también al público,
fomentando un desarrollo responsable de la
tecnología.
Reconociendo las enormes oportunidades
que se presentan a la mano, la
industria química también está dando una alta prioridad a la investigación de las implicancias de la nanotecnología. Un consorcio
llamado Asociación Tecnológica Visión 2020
de la Industria Química, en cooperación con
la NNI y la oficina de Eficiencia de la Energía
y Energía Renovable del Depar- tamento de
Energía de los EE.UU., publicó en el año
2003 un artículo titulado “Industria
Química R&D Mapa de Ruta para Diseño de
Nanomateriales: Desde los Fundamentos
hasta el Funcionamiento” [Chemical
Industry R&D Roadmap for Nanomaterials
by Design: From Fundamen- tals to
Function].
Este
documento
pide
un nivel sin precedentes de cooperación y
colaboración entre las empresas químicas de
los EE.UU. para fomentar el éxito a largo
plazo de la industria nanoquímica y hace hincapié en que el medio ambiente, la
seguridad y el conocimiento en salud serán
componentes esenciales. “El crecimiento previsto en la utilización de nanopartículas justifica esfuerzos paralelos en la identificación
de riesgos, evaluación de exposición y evaluación de riesgo”, afirma el documento. “Las
empresas químicas están preparadas para
cumplir un rol principal en este proceso como líderes en la caracterización de
materiales, identificando sus potenciales
riesgos, y proporcionando pautas para su
utilización segura y eficiente”.
El programa STAR de la EPA está planificando conceder pronto nuevas subvenciones para investigación de implicancias de
la nanotecnología, y el CBEN sigue con
su trabajo sobre lo que llama “la interfaz
húmeda-seca” las interacciones entre nanomateriales modificados y sistemas que son activos en ambientes acuosos o basados en el
agua, incluyendo ecosistemas y seres
vivientes. “Tenemos varios proyectos de
investigación que caracterizaríamos como
investigación de implicancias”, dice
Kulinowski, “observando qué sucede cuando
los nanomateriales entran al suelo o a una
fuente de agua”. Comprendiendo cómo las
nanopartículas (que son típicamente insolubles en agua, de aquí el lado “seco”) interactúan con ambientes acuosos (el lado “húmedo”), los investigadores esperan crear tecnologías que mejorarán la salud humana
y el medio ambiente, tal como las
nanopartículas biocompatibles o catalizadores nanoestructurados que descompondrán los contaminantes orgánicos. La
interfaz húmedo-seca también juega un rol
importante en la determinación del destino
ambiental y transporte de nanomateriales.
Agencias reguladoras, tales como la EPA,
la FDA y la Administración de Seguridad y
Salud Ocupacional [OSHA], están participando en la NNI, siguiendo atentamente el
progreso de la investigación y construyendo
sus propias bases de conocimiento con miras
al desarrollo final e implementación de
marcos regulatorios específicos para los nanomateriales, dentro de sus esferas de competencia. En este momento, el consenso parece
ser que las actuales regulaciones son lo suficientemente fuertes como para abordar las
preocupaciones relacionadas con los nanomateriales, pero como los riesgos y peligros están siendo caracterizados con mayor detalle,
esta posición podría cambiar.
Incluso el grupo ETC, aunque no ha
rescindido su llamado a moratoria, parece
motivado por los avances recientes.
“Efectivamente, sentimos que hemos tenido
una respuesta razonable — tan razonable
como sería de esperar — de los gobiernos”,
dice Mooney, “y hay trabajo en marcha para
tratar de corregir los problemas que hemos
identificado”. Mooney señala que a medida
que cada nación ponga en funcionamiento
protocolos de laboratorio específicos para
nanomateriales, su grupo no llamará más a
una moratoria en esos países.
Parece que toda esta actividad de investigación está alcanzando la masa crítica justo en
el momento apropiado. El tren súper rápido
de la nanotecnología ha salido de la estación
con la potencia necesaria para llevarnos a
algunos lugares mágicos que ni siquiera
hemos soñado. Aunque la desconfianza pública por la tecnología podría potencialmente
descarrilar el tren, muchos pasajeros esperan
que una mayor comprensión, tanto de sus
beneficios como de sus peligros, lo mantendrá
en la vía y permitirá que continúe el viaje hacia el descubrimiento.
Ernie Hood
Artículo original en Environmental Health
Perspectives – volumen 112/número 13/septiembre
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| AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 | www.cienciaytrabajo.cl
Artículo de Difusión | Ciencia & Trabajo
NANOTECNOLOGÍA:
LA REVOLUCIÓN INVISIBLE
El desarrollo de esta nueva área de la ciencia ha revelado un mundo nuevo y
diminuto que promete ser la solución para la gran mayoría de los problemas
actuales. Desde la creación de estructuras más livianas y resistentes, hasta la
construcción de diminutos robots que viajen al interior de nuestro cuerpo en busca
de microbios o células cancerígenas, son algunas de las propuestas de lo que se cree
será la gran revolución científica del siglo XXI.
Si hace diez años alguien nos hubiese
dicho que íbamos a poder comprar un
teléfono móvil, no más grande que la
palma de nuestra mano, que no sólo
sirviera para hablar, sino que también
para sacar fotos y, además, para enviarlas
de inmediato a un amigo en cualquier
parte del mundo, seguramente hubiésemos
pensado que esa persona estaba loca y que
lo que nos relataba lo había sacado de una
película de ciencia ficción.
Hoy eso es una realidad y, efectivamente, los teléfonos celulares, así como
los computadores, son cada vez más
pequeños y más eficientes. Parece ser que
el hombre se cansó de investigar lo macro
que lo rodea y desvió su mirada hacia lo
micro e incluso hacia lo nano. Es así como
desde ese momento, y provistos de
microscopios cada vez más precisos y
potentes, los científicos nos develaron un
mundo nuevo y desconocido que nuestros
ojos no alcanzaban a ver.
Si bien el descubrimiento del mundo
microscópico tuvo innumerables consecuencias positivas en la vida del ser
humano, nada parece detener a los investigadores. De hecho, ahora su objetivo es
otro: manipular y trabajar con las estructuras moleculares y sus átomos, para reordenarlos como ellos quieran.
De este modo, la creación no sería
exclusividad de la naturaleza, sino que
Corral de átomos que muestra un patrón de ondas de electrones.
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Ciencia & Trabajo
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Ciencia & Trabajo | Nanotecnología
quedaría también en manos del hombre, el
que tendría la habilidad de “jugar” con los
átomos y ordenarlos con el propósito de
obtener lo que se quiera.
Pero por muy atractivo que parezca,
hay quienes lo creen improbable. Paulette
Conget, directora del Instituto de Ciencias
Biomédicas de la Facultad de Ciencias de
la Salud de la Universidad del Desarrollo,
asegura que “siempre la naturaleza se
resiste” y que “no en vano hemos pasado
la historia natural que tenemos, para llegar
a la condición actual”.
Para ella, el mayor obstáculo de los
nanotecnólogos es la propia evolución, la
que ha demostrado requerir de mucho
tiempo para llegar al estado actual. Sin
embargo, reconoce que entre los nanotecnólogos existe la seguridad de lograr sus
principales objetivos: reordenar los átomos
y moléculas y hacer que eso sea estable. De
ser así, explica la bioquímica Paulette
Conget, el hombre pasaría a una categoría
divina, donde jugaría “a ser Dios”.
A pesar de que este panorama da para
que muchos asocien la nanotecnología al
mundo de la ciencia-ficción, pocos la
perciben en la vida cotidiana, donde
convivimos a diario con materiales nanoestructurados, como por ejemplo cristales
de autolimpiado, ropa deportiva antisudor
o electrodomésticos que "nos protegen” de
las bacterias.
Una Definición “Confusa” e
“Incompleta”
Esta nueva “locura” científica, que consiste
en la manipulación de los átomos de la
materia, se ha denominado nanotecnología y a pesar de que su definición es aún
incompleta, se ha transformado en la
ambición de muchos investigadores en el
mundo, que sueñan con diseñar y modificar materiales a escala de nanómetros.
Vale decir, “algo” un millón de veces más
pequeño que la cabeza de un alfiler.
El origen de esta inquietud científica
fue propuesto por el premio Nóbel Richard
Feynman en 1959 en su discurso “Hay
espacio de sobra aquí dentro”. En esa
oportunidad, el físico advirtió que no hay
nada en las leyes físicas que impidan al
hombre manipular, diseñar y controlar
cosas a escalas microscópicas.
Su discurso es visionario: “(…) Pero no
me atemoriza considerar la gran pregunta
de si, en definitiva, en un futuro distante
podamos arreglar los átomos de la manera
que queramos; los mismos átomos, ¡la
unidad fundamental! ¿Qué pasaría si pudié-
ramos arreglar los átomos uno por
uno, a voluntad?… No puedo entrever
exactamente qué pasaría, pero no me
cabe duda de que cuando tengamos
algún control de los arreglos de cosas
a pequeña escala obtendremos un
rango enormemente mayor de posibles propiedades que las sustancias
puedan tener…”
Mario Molina, físico de la
Facultad de Ciencias de la
Universidad de Chile, escribe en su
ensayo “Nanotecnología, Ciencia de
lo Diminuto”, que “éstas son las palabras visionarias que le vienen a uno a
la mente al contemplar un grupo de
átomos individuales que han sido
depositados sobre una superficie ‘uno
a uno’, formando lo que se conoce
hoy como un corral cuántico”.
Al momento de definir nanotecnología, Mario Molina no duda en decir que
“las definiciones son, en el mejor de los
casos, incompletas”; sin embargo, cree que
“en este momento, definiría la nanotecnología como la habilidad para diseñar,
controlar y modificar materiales y
procesos a nivel cuasi-microscópico o
mesoscópico”.
Algo similar opina Paulette Conget,
quien cree que la nanotecnología no es tan
distinta de la bioquímica o la biología
molecular, ya que en ambos casos “uno
igual juega con moléculas”, pero que la
diferencia está en “el énfasis en la tecnología”. De ahí que la definición de nanotecnología más adecuada sería una “tecnología usando nanopartículas”.
Distinto piensa Antonio Zárate, físico y
académico de la Facultad de Ciencias de la
Universidad Católica del Norte, quien en
abril de este año hizo noticia junto a la
química Sandra Fuentes al lograr sintetizar
nanotubos (reducción ultramicrométrica)
mediante una reacción química a través de
un proceso hidrotermal, cuyo funciona-
Un nanotubo de carbón individual en 7 electrodos
Imágen virtual de un supuesto nanorobot.
miento se asemeja al de una olla a
presión. Para él, la nanotecnología es “la
capacidad de trabajar con estas nanoestructuras tubulares y poder fabricar
dispositivos con ellas”.
Si bien estas tres definiciones parecen
distintas, las tres apuntan en una misma
dirección: manipular los átomos, para lo
cual es necesario construir nanomáquinas
cuya función sea justamente colocar los
átomos como nosotros queramos y así
tener el control sobre la materia.
“El ejemplo más claro o que hace más
sentido es el carbón y el diamante”, enfatiza la bioquímica Paulette Conget, quien
explica que “los dos están formados por
átomos de carbono, pero tienen una
distribución en el espacio distinta, que
hace que uno sea carbón y otro diamante,
pero en el fondo, son átomos de carbón”.
De este modo, se deja entrever que si
fuésemos capaces de manipular estos
átomos y distribuirlos de determinada
manera, podríamos hacer diamantes
cuando quisiéramos. De nuevo, esto
parece haber salido de una película de
ciencia ficción.
Pero por más imposible que parezca,
no hay ninguna ley física que lo impida.
De ahí que es probable que, en algún
momento, el hombre tenga la habilidad
de manipular los átomos y así solucionar
la gran mayoría de sus problemas cotidianos. Paulette Conget explica que
“mucha de la nanotecnología viene del
cómo reutilizar la basura, por ejemplo” y
que “la propuesta de los nanotecnólogos
es hacer con materias primas de desechos, o sea muy baratas, cosas muy
caras”.
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Artículo de Difusión | Ciencia & Trabajo
Las potenciales aplicaciones de esta nueva
área de la investigación científica son muy
amplias. El físico Mario Molina cree que
“son innumerables” y que “basta
mencionar el caso de los materiales inteligentes, en los cuales la meta es la habilidad
de producir materiales o estructuras con la
capacidad de percibir el medio ambiente y
responder de una manera predeterminada”.
Meta que en parte ya se ha logrado en
Australia, donde un grupo de investigadores, científicos, ingenieros, arquitectos,
diseñadores y constructores, junto a la
UTS (University of Technology Sydney),
construyen la Nanohouse: Una casa cuyo
objetivo es explorar los nuevos materiales
que surgen de la nanotecnología. En ella
es posible encontrar ventanas que perciben
el calor y reaccionan de una determinada
manera, o muebles de cocina que se
limpian automáticamente, sin necesidad
Paulette Conget explica que, por lo
general, las grandes marcas prefieren no
poner en la etiqueta la palabra nanotecnología, ya que eso podría alertar a una
población impregnada de mitos en torno
al tema, como por ejemplo, la supuesta
invasión de los nanorrobots de la que
hablaba el futurólogo Eric Drexler en su
libro “Máquinas de la Creación”, donde
imagina un mundo que cambia constantemente gracias a la nanotecnología y
donde “ensambladores”, pequeñísimos
robots, tienen la habilidad de tomar moléculas en forma individual y ponerlas
donde quieran con el fin de crear cualquier estructura.
La empresa Daewoo Electronics ha
sido un poco más osada y ha presentado
su nueva tecnología antibacterias en lavadoras y refrigeradores con el nombre de
Nanosilver. Pero ni el término “nano” ni la
publicidad, donde se ve una imagen de la
de pasarles un paño. Esto último es una de
las cosas que asombra a Paulette Conget,
quien asegura también que en Estados
Unidos ya existen pantalones que no se
ensucian, ya que si les cae una gota de
aceite, por ejemplo, ésta desaparece rápidamente.
Pero sin ir más lejos, en Chile la nanotecnología también convive diariamente
con nosotros. Efectivamente, no es raro
que alguien compre una polera antitranspirante o “dry-fit” y prefiera una lavadora
o un refrigerador con tecnología antibacterias. En ambos casos, los compradores
los prefieren porque en cierta medida
mejoran la calidad de vida y por los beneficios de los que tanto les hablan los
vendedores.
En el caso de las poleras, la gran
mayoría intuye que se trata de un nuevo
material, pero pocos saben que están
usando nanotecnología. La bioquímica
nueva lavadora rodeada de partículas de
plata, logran que el espectador entienda
que se trata de nanotecnología.
Es así como al momento de comprar,
eligen productos con nanotecnología sólo
porque el vendedor les aseguró que el
lavado será más profundo o, en el caso del
refrigerador, porque la frescura de los
alimentos durará más tiempo.
Lo que ignoran es que estas características que actualmente son catalogadas
como un lujo más, se deben a la aplicación
de nanopartículas de plata, las que a escala
nanométrica, aumentan algunas de sus
propiedades. En este caso, su capacidad
desodorante y antibiótica. De este modo,
las nanopartículas de plata permiten frenar
el crecimiento y el aumento de una gran
cantidad de bacterias, además de eliminar
olores.
El físico Mario Molina, explica que “a
escala grande o microscópica, las propie-
La Nanotecnología que nos Rodea
dades de los materiales son determinadas
por unos pocos parámetros”, y que otros
efectos potencialmente interesantes, como
por ejemplo efectos de superficie,
desorden, ruido térmico o no linealidad,
“son meras perturbaciones”, pero que “a
escala mesoscópica estos efectos que antes
eran pequeñas perturbaciones pasan a ser
importantes como todos los demás”. Esto
explicaría en parte el hecho de que se apliquen partículas de plata a escala nanométricas para fines antibióticos.
Investigación y Desarrollo
de la Nanotecnología en Chile
Según el portal español de ciencia y tecnología www.100cia.com, “en 1997, los
países de la Unión Europea acordaron una
inversión de 130 millones de euros para la
investigación nanotecnológica. En 1998,
la inversión fue de 139 millones. Al año
siguiente, la cantidad ascendió a 164 y el
año pasado el presupuesto otorgado fue de
184 millones”.
Esta preocupación por la investigación
y el desarrollo de la nanotecnología se
hace aun más evidente en el caso de
Estados Unidos, el que realiza una inversión en esta área que supone el doble de la
europea. Efectivamente, ya en el año 2002,
los norteamericanos invirtieron más de
600 millones de dólares en nanotecnología, mientras que los japoneses invirtieron unos 750 millones.
Si bien este panorama deja entrever
que la nanotecnología es un campo al que
se le debería dar mucha importancia, en
Chile la realidad es otra. A diferencia de
Estados Unidos, acá no existen programas
financiados por el Estado para el desarrollo
y la investigación de esta nueva ciencia. El
físico Mario Molina explica que en Chile
“cualquier programa de nanotecnología
tiene que competir por financiamiento de
igual a igual con otros programas en boga
actualmente”. Efectivamente, el académico
Antonio Zárate enfatiza el hecho de que,
además de la Fundación Andes y algunas
universidades, “existen instituciones que
financian proyectos de investigación aquí
en Chile en todas las áreas del conocimiento, tales como la Comisión Nacional
de Ciencia y Tecnología (CONICYT) a
través de sus modalidades de proyectos
FONDECYT, FONDEF, FONDAP, NÚCLEOS
MILENIOS”.
Pero la ausencia de un programa
estatal para el desarrollo de la nanotecnología se explica en parte por la inexistencia de agrupaciones dedicadas a su
PDFA78
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Ciencia & Trabajo
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Ciencia & Trabajo | Nanotecnología
estudio. De hecho, Mario Molina afirma
que en Chile “lo que hay son investigadores en distintas universidades académicas a través de todo el país, interesados
en problemas específicos del ámbito nanotecnológico”. Un ejemplo de esto último es
el trabajo que se realiza en el departamento de Física de la Universidad de Chile,
donde, según explica el académico, “el
profesor Eduardo Meléndez está investigando cómo optimizar el funcionamiento
de una celda solar de polímeros conjugados, la cual es dopada con partículas
semiconductoras nanométricas”, campo en
el que según Mario Molina “se está realmente copiando a la naturaleza, puesto
que se imita el proceso de fotosíntesis”.
Otro grupo que actualmente trabaja
con nanotecnología pertenece al departamento de física de la misma casa de estudios. Éste, liderado por el profesor Marcelo
Campos, está, según explica Mario Molina,
“abocado a la tarea de investigar, diseñar y
construir un sensor para contaminación
medioambiental, con técnicas nanométricas, el cual sería enormemente sensible y
específico para ciertos contaminantes”.
Pero no todos los esfuerzos se concentran en la capital. En la Facultad de
Ciencias de la Universidad Católica del
Norte, el físico y académico Antonio Zárate
también trabaja a escala nanométrica. Éste
asegura que su grupo, conformado por 4
investigadores del área experimental de
Física y Química y 3 investigadores, es uno
de los más grandes en Chile, junto a los de
la Universidad de Chile y la Universidad
Técnica Federico Santa María, donde,
según explica el físico, “comienzan a
conformarse grupos de investigadores en
nano-ciencia de físicos y químicos del área
experimental”.
que algo muy similar forme parte del
mundo real.
Efectivamente, es común que al buscar
información sobre nanotecnología lo
primero que leamos sea lo más increíble: la
construcción de pequeños robots que
viajen en el torrente sanguíneo y que
limpien nuestro cuerpo. Lo segundo, que
estas nanoestructuras serían capaces de
detectar células cancerígenas para luego
eliminarlas. Ambas corresponden a la
nanomedicina, o la nanotecnología aplicada a la medicina, que promete lo que
hace algunas décadas era sólo ciencia
ficción. Esto se complementa con injertos
biocompatibles y exámenes tan sencillos
que puedan realizarse en la casa.
A pesar de que la bioquímica Paulette
Conget no se cierra a la posibilidad de que
los científicos logren la construcción de los
nano-robots, cree que la piedra de tope
está en “nuestro propio conocimiento de
las cosas”, ya que “estos nano-robots
harán lo que el hombre les diga que
hagan”. Lo que sin duda implicaría, por
parte del hombre, un conocimiento
acabado del cuerpo humano y así pedirle a
estos nano-robots que nos cuiden de lo
que nos hace daño. Lamentablemente, eso
aún no forma parte de la realidad.
Actualmente, se pretende que la nanomedicina sea capaz de reducir el tamaño
de los aparatos con los cuales se realizan
exámenes invasivos o hacer más eficientes
algunos instrumentos utilizados en medicina. Y es que las partículas a nanoescala
se comportan diferentes a las partículas del
mismo material a escala macroscópica. De
hecho, los materiales pueden ser más
fuertes o más livianos, más resistentes al
calor o mejores conductores de electricidad, por ejemplo.
Nanomedicina
El Enorme Futuro de lo Nano
En los años sesenta, la película “Viaje
Alucinante” presentaba la historia de unos
científicos soviéticos que descubren la
manera de reducir la materia, miniaturizan
a un grupo de médicos en un submarino y
los introducen en el torrente sanguíneo de
una persona. Luego, en los ochenta, “El
Chip Prodigioso” nos mostraba en la
pantalla grande a un grupo de especialistas
entrando en el organismo de alguien para
reparar algunos daños producto de enfermedades o accidentes.
Si bien estas películas son sólo ciencia
ficción, ya que sus argumentos eran
hazañas que todos creían imposibles, en la
actualidad los científicos se empeñan en
Parece increíble, pero la nanotecnología,
algo tan diminuto, promete lo que muchos
alguna vez soñaron. Efectivamente,
mediante la fabricación molecular se
podrían resolver dificultades tan serias
como la escasez de agua si se logran introducir nanopartículas o nano-robots encargados de eliminar los contaminantes.
Es así como la nanotecnología cautiva
a muchos países como Estados Unidos,
Japón, Suiza, Holanda, Suecia o Alemania,
los que no dudan en realizar importantes
inversiones en ella.
Para el físico Mario Molina, lo más
importante es “no engañar a la gente”
haciéndoles creer que la nanotecnología
Un ábaco molecular. Cada átomo puede
moverse igual que como lo hacemos en un
ábaco convencional
será la gran solución o alertándolos sobre
una posible invasión de nano-robots, ya
que si bien el hombre ha podido extraer
nanopartículas, aún no ha podido dar con la
manera de ensamblarlas fácilmente.
La bioquímica Paulette Conget se refiere
a lo mismo cuando asegura que “una cosa
es tomar las moléculas y ‘ordenarlas’, pero
otra muy distinta es hacer que esto sea
estable”. Mario Molina, en su ensayo
“Nanotecnología, Ciencia de lo Diminuto”,
explica que “el posicionar moléculas a
mano formando un determinado patrón, se
convierte en una labor agotadora, dada la
presencia de la fuerza intermolecular que a
esta escala es imposible de ignorar o
escudar” y agrega que “esta fuerza, es de
origen cuántico y, por ende, sumamente
difícil de manejar”. A esto se le debe agregar
el hecho de que a temperatura ambiente los
átomos se agitan a gran velocidad,
haciendo aun más difícil la posibilidad de
pedirles que se queden donde uno quiera.
De ahí que la construcción de nano-robots
capaces de agarrar átomos y partículas y
reordenarlos como se les diga es algo más
bien lejano.
Es así como la nanotecnología es, por
ahora, más bien una nanociencia, donde
quienes se dedican a su estudio y desarrollo
aún buscan dar con la manera de manipular
y controlar la materia en una escala que el
ojo humano no puede discernir, la escala de
los nanómetros. Pero esto no quiere decir
que no convivamos diariamente con alguna
de sus aplicaciones.
Paula García Miranda
PDFCiencia
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& Trabajo
A79
| AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 | www.cienciaytrabajo.cl
Artículo de Difusión | Ciencia & Trabajo
TRASTORNOS PSICOSOCIALES:
SALUD MENTAL EN EL TRABAJO
En la vida, es frecuente que las personas se enfrenten a demandas cotidianas y otras
que alteran su rutina diaria. Lo importante es aprender a desenvolverse asertivamente,
para salir airoso de situaciones que causan perturbación
El trabajo, además de ser una necesidad de
subsistencia, permite bienestar individual y
social. Esto explicaría que una de las
mayores preocupaciones de los individuos
sea la búsqueda de un trabajo que les
permita desarrollar sus potencialidades,
generar vínculos con sus pares y sentirse
útiles para la sociedad. Sin embargo, las
condiciones psicosociales del individuo
pueden generar alteraciones en su salud
mental, provocando baja productividad en
el trabajo.
El ambiente laboral también influye en
las respuestas fisiológicas de los trabajadores. El Dr. Marcelo Trucco, director
médico del Hospital del Trabajador, señala
en su artículo El Estrés y la Salud Mental en
el Trabajo, que las características personales de los trabajadores son un factor
determinante en la generación de un trastorno mental y agrega que “a la relación
entre aquellos factores propios del trabajo y
la salud se debe agregar aquélla que se
produce entre el trabajo y la vida personal,
familiar y social del trabajador, así como
aquélla entre el ambiente y las vulnerabilidades psicológicas y genéticas de cada
individuo”.
En el caso de una persona mentalmente
sana, sus emociones no la alteran, puede
aceptar una decepción y adaptarse a situaciones nuevas. Además, conoce sus limitaciones y trabaja para superarlas, sin abrumarse ante un fracaso. Según la terapeuta
ocupacional de la Universidad de Chile,
Beatriz Galdámez, “una persona normal
que en un momento determinado se sienta
insatisfecha con su rol en el medio laboral,
puede pensar positivamente y tomar deter-
A80
minaciones para mejorar su condición, lo
que no sucede con una persona con antecedentes de depresión, alteraciones de la
personalidad u otro tipo de enfermedad
metal”.
Si bien las anteriores apreciaciones son
ciertas, no se puede dejar de mencionar la
relación entre salud y trabajo. Según
plantea el psicólogo Arturo Juárez en su
artículo Factores Psicosociales Relacionados
con la Salud Mental en Profesionales de
Servicios Humanos en México, desde los
tiempos de Hipócrates se ha consultado a
los individuos la actividad laboral que
desempeñan, antes de efectuar un diagnóstico. Para el especialista, esta preocupación por el oficio y su posible consecuencia
en la salud se ve reflejada en el surgimiento
de disciplinas como salud ocupacional, la
cual debe velar por prevenir los accidentes
y enfermedades laborales, buscando
mejorar las condiciones de trabajo de las
personas.
Accidentes Laborales: el Regreso al
Trabajo
La interrupción de la vida laboral producto
de un accidente, además de afectar económicamente a una empresa, tiene una clara
repercusión en la vida personal y social de
una persona. Esto sin enfocarse netamente
en el marco económico, puesto que en la
mayoría de las ocasiones el trabajador
www.cienciaytrabajo.cl | AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 | Ciencia & Trabajo
Ciencia & Trabajo | Trastornos Psicosociales
afectado por un accidente sigue teniendo
apoyo económico según lo establece la
legislación laboral en Chile.
Beatriz Galdámez, terapeuta ocupacional, agrega que “además de las condiciones individuales de la persona para
enfrentar un evento traumático, están las
influencias de su entorno y cómo su
ambiente social lo ayuda a recuperarse de
un shock, ya que si es rechazado en alguna
medida por quienes lo rodean, su recuperación será más lenta”.
La alteración emocional del paciente,
en estos casos, proviene del accidente, que
es el factor estresante que los inhabilita
para avanzar en su recuperación.
De hecho, es necesario establecer y/o
hacer una búsqueda de los factores que
pudieron traer como consecuencia un incidente/accidente. De ahí que, la mejor forma
de prevenir es tomar conciencia y retroalimentarse de los sucesos que pudieron
afectar a un trabajador.
Los Problemas de Adaptación y el
Estrés
A diferencia del accidente, la enfermedad
mental tiene un desarrollo lento y constante. Es decir, no aparece de un día para
otro, sino que es la respuesta a una o más
causas que persisten en el tiempo.
El estrés corresponde a una reacción
física y psicológica ante un estímulo excesivo. Si bien es cierto que una cuota de
tensión es necesaria para estar alerta ante
un posible riesgo, estar expuesto constantemente a una situación de tensión puede
ocasionar daños mentales y fisiológicos.
La psicóloga Laura Schwartzmann, en
su artículo Estrés Laboral, Síndrome de
Desgaste (quemado), Depresión: ¿Estamos
Hablando de lo Mismo? señala que “la
reacción del organismo ante la tensión está
determinada por la interacción de múltiples
sistemas fisiológicos que incluyen además
al sistema inmunológico, produciéndose la
respuesta psico-neuro-inmuno-endocrinológica”.
En el caso de las enfermedades
mentales, que por lo general tienen como
base el estrés, su diagnóstico es complejo y
determinar que el trabajo ha sido el
causante del trastorno es muy difícil. Para
la psiquiatra del Ministerio de Salud,
Patricia Barceló, “el estrés ocupacional no
tiene una causa determinada, es multicausal”. Así lo ratifica el doctor Marcelo
Trucco en su artículo El Estrés y la Salud
Mental en el Trabajo al señalar que el estrés
“es producto de la interacción entre el
individuo y su medio ambiente, estilo de
vida; y se asocia a diferentes situaciones,
conflictos, pérdidas o amenazas que lo
impactan en determinados momentos o
periodos de su vida”. Es por esto que determinar que el trabajo es el único potenciador de estrés es una afirmación compleja
e improbable.
En su artículo Salud Mental y Trabajo,
el médico psiquiatra Manuel Parra enfatiza
el carácter promotor del trabajo, pero no
deja de mencionar los modelos que han
propuesto otros investigadores para estudiar el estrés en el espacio laboral. Entre los
puntos que trata el especialista están las
repercusiones que tiene el estrés laboral en
la salud del trabajador: enfermedades
cardiovasculares, trastornos músculoesqueléticos, trastornos de ansiedad, trastornos depresivos, molestias psicológicas y
somáticas que, sin constituir enfermedad,
producen deterioro del bienestar. Y es que,
según Beatriz Galdámez, terapeuta ocupacional, “suele ocurrir que trabajadores
descontentos en su trabajo somaticen este
descontento en manifestaciones clínicas de
una tendinitis, lumbago o disfonía, por
ejemplo”.
Con respecto a este último trastorno, la
Asociación Chilena de Seguridad (ACHS)
viene desarrollando desde hace más de 10
años un programa de manejo y prevención
de la disfonía en profesores, por ser éste el
grupo profesional más afectado.
Si bien es importante el diagnóstico
precoz de este tipo de enfermedades,
también es primordial que los empleadores
y empleados evalúen las condiciones laborales negativas, como por ejemplo la carga
de trabajo, y así prevenir problemas.
La psiquiatra del Ministerio de Salud,
Patricia Barceló, es enfática en señalar que
tanto la sobrecarga como la infracarga de
trabajo pueden ser negativas: “si el
volumen de trabajo está muy por debajo de
las capacidades de la persona, se puede
producir una desmotivación, que si se
mantiene en el tiempo, se traduce en un
trastorno psicosocial”.
En el caso del exceso de trabajo se
puede producir un fenómeno que en
psiquiatría es conocido como burnout
(estar quemado). La psicóloga Laura
Schwartzmann señala que, a diferencia del
estrés emocional, el burnout, tiene una
clara respuesta en lo emocional, un
desgaste que se da en este ámbito, y que no
sólo depende del trabajo, sino que además
de las características de las personas.
Ciencia & Trabajo | AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 | www.cienciaytrabajo.cl
Asimismo, concuerda a través de su trabajo
con Barceló, en que este trastorno afecta a
aquellas personas en cuyo trabajo establecen una relación de asistencia a los
demás.
Distintos estudios han reseñado múltiples causas para este complejo trastorno.
Entre ellos destacan las bajas condiciones
económicas y las crisis en la carrera profesional: el aburrimiento y estrés; la sobrecarga de trabajo y ocupación monótona; el
aislamiento y poca participación en toma
de decisiones; las pocas perspectivas de
desarrollo en la profesión; los conflictos
con compañeros; la falta de medios para
realizar las tareas y la excesiva burocracia.
Pero la presencia de estrés no implica la
generación de burnout, ya que si la labor
cotidiana es exigente y entrega una retroalimentación positiva al trabajador, es poco
probable que se produzcan alteraciones en
su salud mental. Además, las características
personales de cada individuo son un factor
importante en el desarrollo de un trastorno
mental. Es decir, la importancia de realizar
tests psicológicos al postular a un empleo
radica en ubicar a una persona con características adecuadas para el trabajo que va
a desempeñar.
En ese mismo sentido, es relevante el
trabajo realizado por organismos como el
Centro Integral de Evaluación Laboral
(CIEL) perteneciente a la ACHS. A este lugar
acuden las empresas para solicitar evaluaciones a los posibles futuros empleados.
Como señala el psicólogo Eduardo Correa,
“la importancia de las evaluaciones psicológicas es que son una orientación para los
empleadores, ya que además de cumplir
con requisitos académicos o de experiencias, las personas tienen que poseer ciertas
características que estén de acuerdo con el
tipo de trabajo a realizar”.
Los test no se aplican en forma estandarizada a todos los trabajadores, puesto
que dentro de una misma profesión existen
distintas áreas o tipos de trabajo, y dependiendo de ellos, es el tipo de evaluación que
se utilizará.
Se debe entender que pasar el proceso
de pruebas psicológicas en forma positiva
no quiere decir que el trabajador a lo largo
de su experiencia laboral no presentará
problemas de salud mental. Correa explica
que los test “no se tratan de una apuesta
probabilística, ya que una persona puede
ser apta para un trabajo, pero luego, en el
camino, pueden aparecer ciertos factores
profesionales, sociales y/o personales, que
provoquen alguna alteración al trabajador”.
A81
Artículo de Difusión | Ciencia & Trabajo
Pero, ¿qué pasa con las personas que
realizan un trabajo informal? En el artículo
El Sector Informal en Chile: Una Visión
Estadística, de Marlene Sánchez y Javier
Labbé, se presenta un análisis socioeconómico de Chile, con el fin de evaluar y dar a
conocer esta realidad. Sánchez y Labbé,
teniendo como base la definición oficial
entregada por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), señalan que el
trabajo informal son “todas las iniciativas
laborales que requieren pocas calificaciones, escaso capital, utilizan técnicas
artesanales, rinden ingresos bajos e inestables y que, además, en la mayoría de los
casos, se desarrollan al margen de la ley
quedando, casi siempre, excluidas de toda
protección social y laboral”. Se indica
además que el 46,6 % de los trabajadores
del país tiene como trabajo principal un
empleo informal.
La importancia del estudio realizado
por Sánchez y Labbé, sumado a los elaborados por organismos internacionales, dan
cuenta de la preocupación que existe sobre
el tema, y de la necesidad de legislar, más
aun si se toma en cuenta que este tipo de
trabajo marginal no tiene protección social.
Las personas que participan en estos
trabajos son en su mayoría mujeres y con
escolaridad incompleta, por lo que pertenecen a un grupo socioeconómico bajo, lo
que no les permite acceder a un sistema de
salud óptimo, rápido y constante. Los
problemas sociales que enfrentan los individuos en este sector pueden ocasionar un
estado negativo en su salud mental. En la
mayoría de los casos, no existe un horario
determinado y la escasa firmeza del trabajo
puede afectar su integridad psíquica. Esto
reafirma lo señalado por los especialistas ya
que, como señala Beatriz Galdámez, “si
estás contento con un trabajo y éste cumple
tus expectativas, no tendrán relevancia las
horas que gastas en tu trabajo, ya que estás
invirtiendo en tu bienestar psicológico”.
¿Qué Hacer Ante un Trabajador con
Trastorno Psicosocial?
Ante la aparición de un trastorno mental,
es importante considerar los elementos que
permitirán una mejora en la salud del
trabajador, como también la prevención de
estas anomalías. La terapeuta ocupacional
Beatriz Galdámez señala que “es necesario
que el empleador invierta en mejorar la
infraestructura y en organizar actividades
recreativas donde los empleados se puedan
conocer en otro ambiente que no sea el
A82
trabajo”. Los encargados del personal no
son los únicos responsables en la construcción de un clima laboral apropiado, o
trabajo decente. El médico psiquiatra y
especialista en Salud Ocupacional, Manuel
Cifuentes, autor del artículo Condiciones
Laborales Psicosociales Decentes: Cómo
Pasar de lo Valórico a lo Operacional,
señala que además de los empleadores y
sus representantes, existen tres actores en el
proceso de mejoramiento de las condiciones laborales o mejoramiento de la
decencia en el trabajo: los expertos, encargados de regular y mejorar las condiciones
de trabajo en las distintas áreas de especialización, llegando a un fin único que es la
prevención de accidentes y enfermedades
profesionales; los trabajadores, cuyas
destrezas, responsabilidad y entrega por el
trabajo les puede permitir obtener beneficios que estén de acuerdo a sus necesidades, y el Estado, cuya labor es contribuir
a respetar la normativa para resguardar los
derechos de los trabajadores y sus empleadores.
Manuel Cifuentes agrega que existen
una infinidad de situaciones que deben ser
consideradas como promotoras o perjudiciales para el bienestar de los trabajadores,
y que van en directa asociación con las
relaciones interpersonales. La psiquiatra del
Ministerio de Salud, Patricia Barceló,
concuerda con él y enfatiza que las relaciones interpersonales también pueden ser
desencadenantes de estrés: “si una persona
se siente aislada del grupo de trabajo o
siente que no encaja, que sus opiniones no
son escuchadas, se puede generar en él una
inseguridad, que se transforma en una
tensión constante, y que se traduce en
estrés”.
En la actualidad, se ha identificado un
fenómeno negativo dentro de las organizaciones: el mobbing. Éste se traduce como
un hostigamiento laboral o acoso psicológico que se da en tres situaciones: ascendente, horizontal y descendente. La primera
es cuando una persona con grado jerárquico superior se ve hostigada por subalternos, ya que éstos no están de acuerdo
con su posición dentro de la empresa o
porque sus ideas no son aceptadas. La horizontal se genera cuando una persona es
amedrentada por otra de su mismo nivel
jerárquico. Finalmente, la situación descendente es cuando una persona subalterna se
ve acosado por su superior.
Este tipo de acoso, sutil y constante,
tiene como objetivo intimidar a la persona
y por lo general se produce con la llegada
de nuevos trabajadores, lo que puede
generar celos entre sus compañeros de
trabajo que, de alguna forma, se sienten
amenazados por este “intruso”. Este fenómeno, al igual que cualquier agente psicosocial negativo, produce ansiedad y estrés.
Es por esto que los encargados de salud
ocupacional deben realizar estudios de
puesto de trabajo. La terapeuta ocupacional
Beatriz Galdámez cree que ésta es una de
las cosas básicas que debe hacer un especialista para encontrar la raíz del problema,
siempre pensando que puede haber más de
una causa”. Estos estudios consisten en
evaluar el lugar físico de trabajo, las características personales del individuo, la relación con sus compañeros y superiores, los
turnos y horas extras, por ejemplo.
Finalmente, Galdámez indica que “es
necesario aprender a descansar para que la
fatiga no se produzca. Y no se trata sólo de
un descanso físico, sino que también de un
reposo intelectual”. También es importante
que las personas aprendan a controlar el
estrés, “la práctica de actividad deportiva,
la lectura o trabajos manuales, pueden
ayudar para que la persona se desconecte
del trabajo”.
Ma. Fernanda Arévalo Vega
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Artículo Original
Promoción y Protección de la Salud Mental
en el Trabajo: Análisis Conceptual
y Sugerencias de Acción
PROMOTION AND PROTECTION OF MENTAL HEALTH AT WORK: CONCEPTUAL ANALYSIS AND SUGGESTIONS
Manuel Parra Garrido
Médico–psiquiatra y especialista en Salud Ocupacional.
Jefe de Servicio de Psiquiatría CDT Hospital Clínico San Borja–Arriarán.
Docente invitado en el Diplomado de Salud Ocupacional Instituto de Salud Pública de Chile.
RESUMEN
ABSTRACT
La relación salud mental y trabajo es una preocupación recurrente
en el mundo laboral, sin que los intereses en el tema hayan podido
converger ni cristalizar en una visión homogénea y ampliamente
compartida. La noción de estrés laboral ha ganado terreno en investigaciones y en propuestas de intervención, como un concepto comprensible y operacional, aunque las visiones acerca de lo que constituye estrés tampoco han sido suficientemente consensuadas; pragmáticamente se opta por asimilar estrés a la interacción entre ambiente e individuo que sobrepasa el límite de ser un estímulo para
la supervivencia, convirtiéndose en un riesgo para la salud. Vista la
salud mental desde la óptica de la enfermedad, cabe en la actualidad preocuparse especialmente de la depresión, por su alto costo
individual y social. Se revisa además el tema de la violencia en el
trabajo como factor de riesgo, que no emerge con nitidez en las
evaluaciones de estrés pese a su alta frecuencia y al impacto en la
salud; particular atención se presta al acoso sexual. A pesar de las
limitaciones teóricas, hoy se cuenta con modelos explicativos y de
intervención útiles para la promoción integral de la salud mental en
el trabajo y para la prevención.
The relationship between mental health and work is a recurrent concern in the labor world, though interests on the subject have not yet
been crystallized in a homogeneous and widely shared vision. The
notion of work-related stress has gained ground in investigations
and intervention proposals, as a comprehensible and operational
concept, even though visions about what stress means have not been
sufficiently agreed upon. It has been pragmatically decided to assimilate stress to that environment/individual interaction which exceeds
the limit of being a stimulus for survival to become a health hazard.
Looking at mental health from the disease viewpoint, concern, on
these days, should be specially placed on depression because of its
high individual and social cost. In this paper, violence at the workplace is also reviewed as a risk factor that is not clearly evident in
stress evaluations, in spite of its high frequency and ill effect on
health, with particular attention given to sexual harassment.
Nowadays, in spite of theoretical limitations, there are useful
explanatory models and useful intervention activities in place in
order to develop integral promotion and prevention of mental health
at work.
(Parra M. 2004. Promoción y protección de la salud mental en el
trabajo: análisis conceptual y sugerencias de acción. Cienc Trab.
Oct-Dic; 6 (14): 153-161)
Descriptors: STRESS; DEPRESSION; VIOLENCE; SEXUAL HARASSMENT; MENTAL HEALTH; WORKING ENVIRONMENT; HEALTH
PROMOTION.
Descriptores: ESTRÉS; DEPRESIÓN; VIOLENCIA; ACOSO SEXUAL;
SALUD MENTAL; AMBIENTE DE TRABAJO; PROMOCIÓN DE LA
SALUD.
RELACIÓN ENTRE TRABAJO Y SALUD MENTAL
La salud mental no se refiere a la ausencia de enfermedad mental
ni menos se debe usar el término para referirse a la enfermedad
mental; es un concepto amplio que tiene que ver con el bienestar
psicológico como parte del bienestar global; alude a temas como
la satisfacción con la calidad de vida, la mantención de una
Correspondencia:
Dr. Manuel Parra Garrido
Cirujano Videla 1569 A, Depto. E, Ñuñoa, Santiago, Chile
Tel: (56-2) 2055320 • Fax (56-2) 5446630
e-mail: [email protected]
Recibido: noviembre 2004 / Aprobado: noviembre 2004
Ciencia & Trabajo | AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 | www.cienciaytrabajo.cl
adecuada moral y la autoestima (Scottish Forum for Public
Health Medicine 1997). En el campo laboral, el predominio del
enfoque de causalidad directa que exige la medicina del trabajo
y su correlato en los sistemas de compensación, que reconocen el
daño a la salud como indemnizable cuando dicha causalidad
directa se demuestra sin lugar a dudas, lleva con frecuencia al
estudio de la salud mental en el trabajo a un camino que inevitablemente se estrecha y deja fuera los aspectos más relevantes
para el bienestar. Lleva también a una búsqueda a veces infructuosa de enfermedades mentales específicas al trabajo, con independencia de factores individuales o ambientales externos al
trabajo (Bensaid and Dejours 1994, Parra 2001).
Por otra parte, el trabajo es una actividad social humana en
donde el conflicto, la negociación y el acuerdo moldean en cierta
153
Artículo Original | Parra Manuel
medida el campo de estudio. En ese sentido, la constatación
antigua de que el trabajo puede tener efectos negativos en el
bienestar psicológico –lo que ya se insinúa con claridad en los
escritos de tratadistas de los siglos XVIII y XIX (Parra 2001)– ha
sido un estímulo para la acción de organizaciones laborales y
también ha sido motivo de preocupación en los niveles gerenciales en las últimas décadas, al hacerse visibles los costos involucrados; la disposición al acuerdo ha permitido que en países
escandinavos se pase desde los estudios de la respuesta fisiológica ante las presiones del trabajo, al establecimiento de un
marco protector de la salud mental ocupacional en su sentido
más amplio (Martínez 1997).
Un lugar central en el estudio de la salud mental en el trabajo es
ocupado por el concepto de estrés, el que no está exento de ambigüedades. Al inicio, la teoría del estrés permitió a la fisiología
salir de la impasse provocada por los diversos enfoques que
intentaban explicar los intercambios de energía en el sistema
nervioso y, por esa vía, darle un sustento a la noción de fatiga
mental que, por complementariedad, se asimilaba a la noción
claramente demostrable de fatiga física (Spaeth 1919, McDowall
1929, Hogue 1989); con el marco de la teoría de la reacción
general de adaptación planteada por Selye deja de ser necesario
plantear las hipótesis del desgaste de energía, de disminución del
tono eléctrico o del sobreuso de sinapsis para tener una explicación coherente de las reacciones psicológicas observadas ante las
presiones ambientales.
La noción de estrés ha servido para estudiar la interfase
biológica–psicológica–social, planteándose que el medio laboral
no es natural y por lo tanto, una respuesta biológica que evolutivamente es adaptativa ahora se torna inadecuada en un medio
socialmente construido; factores estresores del trabajo ponen de
relevancia este carácter no natural del trabajo: ruido ensordecedor, suciedad, incomodidad postural, entre otros (Frankenhaeuser 1989, Levi 1998). Esta perspectiva ha enfatizado la
búsqueda del daño y se opta pragmáticamente por llamar estrés a
las interacciones entre individuo y ambiente que han sobrepasado
el punto en que dichos intercambios tienen un efecto positivo,
estimulante y beneficioso para la salud. Levi et al (1999), sugieren
que ya se ha investigado mucho sobre estrés en el trabajo; por lo
tanto, una de las líneas futuras en esta materia tendría que ser el
desarrollo de formas de investigación orientada a los cambios que
admitan reformulaciones durante el propio proceso de investigación antes que enredarse en la demostración o refutación de hipótesis que ya han sido investigadas previamente.
Desde un enfoque que considera la abundante información aportada por los estudios sobre estrés –en medio laboral y en medio
extralaboral– se ha comenzado a usar el término para referirse a
todos los aspectos relacionados con la salud mental en el trabajo,
en el sentido amplio señalado al inicio, aceptando que puede
afectar cualquier aspecto del bienestar y no estar limitado a la
producción de enfermedad y que constituye un concepto que se
puede manejar operacionalmente (Scottish Forum for Public
Health Medicine 1997, Cox et al 2000).
Los enfoques que enfatizan el daño o que, pretendiendo ser más
amplios recurren a la noción de estrés, no permiten hacer visibles los aspectos positivos del trabajo. El trabajo posee un
154
carácter promotor y protector de la salud mental que se
evidencia muy claramente en las personas expuestas a situaciones de desempleo o de inestabilidad del puesto de trabajo
actual; esto no depende solamente del beneficio económico que
aporta, sino también porque es estructurante de la personalidad,
favorece los intercambios sociales, crea lazos que sirven de
soporte en situaciones de crisis y es la forma compartida de
valoración en la sociedad (Bensaid y Dejours 1994). Un tema
particular para la salud mental dentro de esta perspectiva es la
inserción laboral de personas con discapacidad psíquica, para
quienes es difícil ejercer el derecho a un trabajo decente,
productivo, en condiciones de equidad, libertad, seguridad y
dignidad (Liimatainen 2000).
MODELOS DE ESTUDIO DEL ESTRÉS EN EL TRABAJO
Así como se han desarrollado muchas definiciones sobre lo que
constituye estrés en el trabajo, se han propuesto modelos y
formas de estudio. De las diversas propuestas, se resumen dos: el
modelo de control–demanda (Karasek y Theorell 1990) y el
modelo transaccional (Cooper, Cox 2000).
a. El Modelo de Control–Demanda
La propuesta de este modelo, en forma resumida, plantea que el
estrés surge de la interacción entre las demandas físicas-psicológicas del trabajo y la capacidad de los individuos para controlar
el uso de sus capacidades y habilidades. Se puede representar
gráficamente en una tabla de doble entrada, según se muestra en
la Figura Nº 1. Predice que un trabajo que combina la latitud
“Alta demanda” con la latitud “Baja capacidad de control” constituye un trabajo de alta presión, en el cual se produce el mayor
riesgo de sufrir problemas a consecuencia del estrés.
Figura 1.
Modelo de Control-Demanda (Karasek y Theorell 1990).
Latitud de
CONTROL
BAJO
ALTO
Latitud DEMANDAS
BAJAS
ALTAS
Trabajo pasivo
Trabajo
de alta presión
Trabajo
Trabajo activo
de baja presión
Destaca la capacidad de control como un mecanismo para transformar el trabajo en una actividad que promueve el bienestar y
la salud. El modelo permite describir las características psicosociales del trabajo con cierto grado de comparabilidad y ha dado
origen a una investigación que comprueba los efectos deletéreos
del trabajo situado en la latitud de alta presión, especialmente en
el plano cardiovascular (Karasek 1998).
b. Modelos Transaccionales
El modelo de control–demanda ha recibido críticas porque no
considera las capacidades de afrontamiento que los individuos
pueden desarrollar y desplegar ante una situación de estrés (Cox
et al 2000). La propuesta transaccional plantea que el estrés es
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un estado psicológico negativo que involucra aspectos cognitivos
y emocionales; el individuo, ante una interacción con su
ambiente que puede ser amenazante, realiza una valoración
(appraisal) y le otorga significado a la interacción; el significado
está presidido por dos preguntas implícitas o explícitas básicas:
¿tengo un problema?, ¿qué pienso hacer con él?
Aparece estrés cuando la persona percibe que no puede afrontar
adecuadamente el problema, cuando el afrontamiento moviliza
importantes recursos de energía, cognitivos y emocionales, o
cuando las dificultades que surgen en el proceso de afrontamiento causan preocupación o ansiedad.
Esta propuesta predice que si la persona no se da cuenta de la
amenaza (“no tiene un problema”) o si, dándose cuenta, no le
importa, no está en situación de estrés (Cox et al 2000). Al poner
énfasis en la respuesta individual, promueve el estudio del estrés
laboral con una perspectiva local: los factores de riesgo de estrés
que son válidos para una realidad, pueden no ser aplicables en
otra (Scottish Forum for Public Health Medicine 1997).
Basándose en este enfoque, Cooper desarrolla una propuesta de
estudio del estrés en el trabajo que combina los supuestos
psicológicos señalados con las formas tradicionales de estudio
de los riesgos del trabajo: el ciclo de control (Tabla Nº 1). Esta
alternativa logra resolver un aspecto importante del modelo
transaccional, a saber, si la respuesta de estrés depende de capacidades de afrontamiento individuales, se haría prácticamente
imposible la intervención organizacional.
Tabla 1.
Ciclo de Control (Cox et al 2000).
1. Identificación de los peligros potenciales
2. Evaluación de los riesgos para la salud asociados
3. Implementación de estrategias de control adecuadas,
razonables y practicables
4. Monitorización de la efectividad de las estrategias de control
5. Reevaluación de los riesgos
6. Revisión de las necesidades de información y de
entrenamiento de los empleados expuestos a peligros
La evaluación de los peligros potenciales se hace fundamentalmente a partir del autorreporte, mediante cuestionarios especialmente diseñados para cada caso, basados en entrevistas y observaciones previas. Lo que interesa es que mediante el cuestionario
las personas expresan su valoración, es decir, llegan a aclarar la
pregunta de lo que constituye un problema; como se trata de una
valoración individual en contexto organizacional, el método
exige un amplio consenso (sobre 50%) para considerar el
problema percibido como un estresor.
La ventaja del método es que permite una valoración del riesgo
y luego comenzar a gestionarlo como cualquier otro riesgo del
trabajo.
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CONSECUENCIAS DEL ESTRÉS EN EL TRABAJO
Existe una gran cantidad de reportes sobre efectos negativos del
estrés laboral en la calidad de vida de las personas y en los resultados productivos de las organizaciones. Con independencia del
grado de reconocimiento que otorguen los sistemas de compensación a los problemas de salud relacionados con el trabajo,
existe la certeza de que el estrés se relaciona con un importante
nivel de ausentismo; se ha advertido en diversos foros acerca de
un crecimiento sostenido de problemas asociados al estrés, en
correspondencia a los cambios que se experimentan en el trabajo
actualmente (Firth-Cozens 2000, National Institute of Occupational Safety and Health 1999, Sauter et al 1998).
Entre los principales problemas de salud con que se ha relacionado el estrés en el trabajo se encuentran (Karasek 1998, Brinert
y Fingret 2000, Landsbergis 2003):
• Enfermedad cardiovascular
• Hábitos no saludables (sedentarismo, consumo de tabaco,
consumo de alcohol, consumo de tranquilizantes)
• Trastornos musculoesqueléticos
• Trastornos de ansiedad
• Trastornos depresivos
• Molestias psicológicas y somáticas que, sin constituir enfermedad, producen deterioro del bienestar
TRASTORNOS DEPRESIVOS Y SALUD MENTAL
EN EL TRABAJO
En esta revisión de los temas más importantes relacionados con
la salud mental en el trabajo, es conveniente prestar atención
privilegiada a los trastornos depresivos, dado que son un
problema de salud mental importante en la población en edad de
trabajar; con independencia de si los factores del trabajo contribuyen o no a su génesis.
En años recientes se le ha puesto atención en el mundo laboral
por su impacto en ausentismo y en disminución del rendimiento
en el trabajo. En Estados Unidos se ha observado que alrededor
del 50% de las causas de discapacidad temporal por enfermedad
psiquiátrica, en población trabajadora, corresponden a depresión
(Dewa et al 2002). Los días de trabajo perdidos por depresión en
el mismo país representan alrededor de un 40% de los costos
totales anuales ocasionados por esta enfermedad (American
College of Occupational and Environmental Medicine 2003).
Además del ausentismo, adquiere un interés creciente el impacto
del presentismo (American College of Occupational and
Environmental Medicine 2003, Druss et al 2001, Goetzel et al
2002), es decir, la conducta de seguir trabajando a pesar de
problemas de salud evidentes, lo que se traduce en dificultades
para mantener los niveles habituales de calidad y cantidad del
trabajo y en un mayor riesgo para la salud de las personas; se
estima que la depresión es una de las condiciones de salud que
genera mayores niveles de presentismo.
Las personas afectadas por depresión enfrentan diversas barreras
que dificultan una resolución oportuna y efectiva de la enfermedad: a los problemas de falta de información y de acceso a tratamientos adecuados se agregan síntomas de la propia enfermedad
155
Artículo Original | Parra Manuel
que por sí mismos influyen en no buscar ayuda a tiempo (deseperanza, falta de motivación, entre otros). Un factor de peso es el
estigma que se asocia al diagnóstico de cualquier enfermedad
mental, que en el caso extremo puede llevar a la pérdida del
trabajo; ante tales perspectivas, resulta comprensible aunque
dañina la opción por el presentismo.
Goetzel et al (2002) plantean que se justifica una preocupación
especial de parte de los empleadores en orden a facilitar el acceso
oportuno a tratamientos eficaces, no sólo por el beneficio evidente
en términos de bienestar para trabajadores y trabajadoras, sino
por la reducción de costos para la propia organización; ello obliga
a superar el punto de vista que considera que los problemas de
salud que no son causados de manera exclusiva y directa por el
trabajo, son de resolución individual, en particular los problemas
de salud mental (Kenny y Cooper 2003). Algunos aspectos críticos
para lograr un convencimiento y participación de empleadores y
trabajadores en programas de pesquisa y manejo de la depresión
son, de una parte, la información acerca de los vínculos entre
rendimientos laborales y depresión no tratada o tratada parcialmente y, de otra parte, un mayor desarrollo de la evidencia de que
dichos programas son efectivos.
El retorno al trabajo de las personas con depresión representa un
desafío que compromete no sólo a los propios afectados, sino
también a los prestadores de servicios sanitarios y sociales y a las
estructuras directivas de las empresas; si se considera que la
conducta de presentismo en una persona con síntomas depresivos es una estrategia de resolución individual, la otra cara de la
conducta individual es el retiro, abandono o pérdida del trabajo
de la persona afectada de depresión; Dewa et al (2002) muestran
que la depresión predice este tipo de conducta.
Desde el punto de vista de la salud pública se justifica impulsar
intervenciones activas desde el centro laboral, entre otras razones
por la relación estrecha existente entre depresión y enfermedad
física, principalmente con la enfermedad cardiovascular, una de
las primeras causas de mortalidad en muchas partes del mundo;
dicha relación es clara desde antes de la existencia de tratamientos farmacológicos modernos. Las personas con depresión no
tratada o tratada inadecuadamente exhiben una mayor mortalidad por enfermedad cardíaca que la población general, particularmente por infarto miocárdico. Desde la óptica de la enfermedad
cardiovascular se observa una tendencia similar: en personas
controladas por enfermedad coronaria, la presencia de síntomas
depresivos o depresión clínica predice eventos cardíacos serios y
mayor mortalidad (Seiner y Mallya 1999, Williams 1998).
¿Puede el Medio Laboral Ser un Factor Causal de la
Depresión o Contribuir a su Aparición o Mantención?
En un enfoque preventivo, esta pregunta es de gran interés, pues
abre la posibilidad de desarrollar programas que no sólo
reduzcan, sino que eviten los costos sociales, productivos e individuales de la depresión.
La revisión del tema, efectuada por Tennant (2001), explora la
posible relación entre factores de estrés laboral y depresión,
malestar psicológico y fatiga/burnout; concluye que a pesar de
diferencias en los ambientes físicos de trabajo entre diversos
grupos ocupacionales, las investigaciones tienden a coincidir en
que algunas características del ambiente social (conflictos en las
relaciones, bajo apoyo social) parecen predecir un estado de
ánimo deprimido. La Tabla 2 resume algunas de las informaciones entregadas por Tennant. Sin embargo, es necesario tomar
los datos con cautela, por las fuentes de sesgo en la información
generada por las investigaciones:
Tabla 2.
Relación entre Factores Laborales y Trastornos Depresivos (de acuerdo a Tennant, 2001)
Estudio
Grupo laboral
Número de personas
Indicador de depresión
Factores predictivos de depresión
Kawakami,
Japón
(1990, 1992)
obreros
468
Escala de Zung
Falta de control sobre el trabajo
Submuestra
de la anterior
Evaluación por psiquiatra
Tarea inapropiada
Malas relaciones en el lugar de trabajo
Conflicto interpersonal en el
trabajo (RR= 2.18)
Romanov et al.,
Finlandia (1996)
empleados
15530
Heinisch y Jex
(1997)
Empleados
gerenciales
442
Registros de hospital,
prescripciones de psicotrópicos,
suicidios
Cuestionario
Parkes (1990)
Profesores
nuevos
n.i.(b)
GHQ (a)
Prosser et al
(1997)
Equipos de
salud mental
n.i.
GHQ
Carga de trabajo
Ambigüedad del rol
Demandas del trabajo
Falta de apoyo
Pocos recursos para el trabajo
Sobrecarga
Insatisfacción
(a) GHQ.: General Health Questionnaire, también conocido como Cuestionario de Salud General, de Goldberg.
(b) n.i.: no informado
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Artículo Original | Promoción y Protección de la Salud Mental en el Trabajo
• Cuando el diagnóstico de depresión se deduce de puntajes en
cuestionarios vs. el diagnóstico hecho por psiquiatra,
• Al usar el autorreporte como fuente de datos para los
síntomas y para la medición de los factores estresores
asociados, se corre el riesgo del sesgo de un “método común”,
es decir, con el mismo error para dos aspectos cuya asociación se quiere medir,
• La depresión influye en la percepción o experiencia de los
estresores,
• Se informa escasa evaluación de la variable “personalidad”,
que puede contribuir a una sobrevaloración, pero también a
minimizar la percepción de estresores y de síntomas.
los grupos de intervención comparados con los grupos de
control. Si bien parece un valor pequeño, se trata de programas
preventivos aplicados a población con y sin factores de riesgo.
Aunque no se trata de intervenciones en centro laboral, entrega
ideas para la prevención en este nivel: contar con apoyo especializado en la intervención, combinar diversos métodos, destinar
un período de tiempo suficiente para el desarrollo de los
programas. Esto no difiere en esencia de programas diseñados
para prevención y manejo del estrés, que tienen un mayor desarrollo en intervenciones laborales.
La variable personalidad ha sido explorada en el estudio de
Paterniti et al (2002). Aquí se ha establecido una cohorte de
seguimiento a partir del año 1989, en trabajadores de la
Compañía Nacional de Gas y Electricidad de Francia (EDF-GDF);
usando escalas validadas para pesquisa de síntomas depresivos,
factores psicosociales y características de personalidad, muestran
que después de 3 años de seguimiento hay una asociación clara
entre síntomas depresivos y bajo apoyo social y alta demanda del
trabajo, con independencia de los rasgos de personalidad; de
éstos, los rasgos de hostilidad y baja autoestima predicen en
forma independiente el puntaje en la escala de síntomas depresivos, sin ser factores de confusión en la influencia de los
factores psicosociales sobre la misma escala.
VIOLENCIA EN EL LUGAR DE TRABAJO
En cualquier caso, las influencias psicosociales en la depresión han
sido extensamente estudiadas en el campo extralaboral. Cooper y
Paykel (1993), a partir de la revisión de la literatura, destacan como
principales factores sociales en el comienzo y mantención de los
trastornos depresivos la existencia de eventos vitales significativos
y la falta de apoyo social percibido; hacen la advertencia sobre su
carácter inespecífico, ya que la investigación muestra que también
actúan como factores en otras condiciones psiquiátricas. Una serie
de líneas de investigación se abren en este terreno, a partir de las
teorías de eventos vitales y apoyo social en la depresión: eventos
vitales como el acoso sexual, las situaciones de maltrato en el
trabajo, la amenaza de pérdida del empleo en contextos de crisis y
reorganización del trabajo; apoyo social expresado en la asignación
de recursos, en el reconocimiento y en las facilidades para la interacción dentro del grupo laboral.
Existe un amplio consenso en que el acoso sexual en contra de
mujeres tiene un efecto muy perverso en el bienestar de las
personas afectadas y en que se trata de un problema ampliamente
expandido, pero escasamente denunciado (Jorgenson y Wahl
2000, Schneider et al 1997). La literatura norteamericana
propone dos formas de conceptualización: una sigue el modelo
legal y la otra se amplía desde una óptica psicosocial.
Aunque los datos se tomen con reservas en lo que respecta a
causalidad directa, los estudios sugieren que la intervención en el
centro laboral debería ser efectiva en la prevención de la depresión entre la población inserta en la fuerza de trabajo activa. El
meta-análisis efectuado por Jane-Llopis et al (2003), sobre
eficacia de los programas de prevención de la depresión, arroja
algunas claves para orientar actividades efectivas en adultos en
edad de trabajar; en la Tabla Nº 3 se presenta un resumen, extractado de la información recopilada por los autores.
En la tipología de Fitzgerald se agrega una tercera forma de
acoso sexual, si bien legalmente contenido en el ambiente hostil,
y se denomina “acoso de género”; consiste en actitudes derogatorias y ofensivas alusivas a mujeres (fotos, comentarios misóginos, ofensivos y hostiles en relación al género) (Avina y
O’Donohue 2002, Crocker y Kalemba 1999). Se ha podido documentar claramente que las mujeres víctimas de acoso, en sus
diversas formas, son capaces de afrontar el problema y desarrollar conductas asertivas (“confrontar al acosador”) o evitativas
(“ignorar y esquivar al acosador”); pero también muestran que la
denuncia es muy baja y que los efectos psicológicos y organizacionales perduran.
En población adulta se han demostrado más eficaces los
programas que combinan diversos métodos de intervención y que
contemplan más de 8 sesiones; funcionan mejor cuando hay
apoyo especializado de profesionales de la salud. En la revisión
de Jané-Llopis et al. se incluyen además programas para niños,
adolescentes y adultos mayores; el valor “tamaño del efecto
global” fue de 0,22, lo cual implica un 11% de mejoramiento en
Ciencia & Trabajo | AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 | www.cienciaytrabajo.cl
Un tópico especial que adquiere interés en los estudios de salud
mental en el trabajo es la violencia en centros laborales. El
enfoque basado en el estrés, ya sea siguiendo el modelo de
control-demanda o el del ciclo de control, arriesga dejar fuera del
análisis y, por tanto, de la prevención, este factor de riesgo.
Dependiendo de la gravedad de los actos de violencia, tiene
importancia la presencia del riesgo, más que su magnitud. Siendo
el tema muy amplio, se revisarán dos subtítulos: el acoso sexual
que afecta fundamentalmente a mujeres trabajadoras y el acoso
moral (también conocido como “mobbing”).
a. Acoso Sexual en el Trabajo.
El acoso sexual “quid pro quo”, implica la solicitud de un favor
sexual a cambio de un beneficio o del retiro de una amenaza; el
primer caso es reconocido en 1976 en la jurisprudencia. La
segunda forma legal es lo que se conoce como “ambiente hostil”
y se refiere a alusiones de naturaleza sexual que son repetidas y
no son bienvenidas; el primer caso en la jurisprudencia norteamericana es de 1986 (Avina y O’Donohue 2002).
El enfoque psicosocial enfatiza que, con excepción de la violación y el ataque físico, las otras formas de acoso sexual tienen
igual gravedad y que no habría una gradación como deja
entrever la legislación: lo que importa es el impacto en las
157
Artículo Original | Parra Manuel
Tabla 3.
Eficacia de Programas de Prevención Primaria de Trastornos Depresivos en Adultos en Edad de Trabajar (extractado de Jane-Llopis, 2003).
Estudio
Intervención
Método usado
(a)
Equipo
(b)
N° sesiones
Duración de
Effect size (c) Calidad de
sesiones (min) Promedio en la investigación
adultos 0,21 (score)
Allart et
al. 2003
Curso
“Afrontamiento
de la Depresión”
Prof.
>8
> 90
0,54
9 (alto)
Harris et al.
1998
Consejería de
colegas y
entrenamiento
en liderazgo
Afrontamiento
de Depresión
Solución
de problemas
Taller de trabajo
Conductual
Cognitivo
Competencia
Educación
Conductual
Cognitivo
Competencia
Educación
Cognitivo
Competencia
Cognitivo
Prof.
>8
60 – 90
0,31
9 (alto)
Prof.
8
> 90
0,28
9 (alto)
Prof.
>8
> 90
0,22
9 (alto)
Conductual
Educación
Apoyo social
Conductual
Cognitivo
Competencia
Conductual
Cognitivo
Competencia
Educación
Conductual
Prof.
8
> 90
0,16
9 (alto)
Lego
8
> 90
0,84
8 (alto)
Conductual
Cognitivo
Competencia
Apoyo social
Enriquecimiento
Conductual
padre–hijo
Educación
Apoyo social
Acondicionamiento Conductual
aeróbico
Gestión del estrés Conductual
Competencia
Educación
Apoyo social
Muñoz et al
1995
Lovett y
Gallagher.1988
Seligman
et al. 1999
Foa et al.
1995
Peters y
Carlson.
1999
Intervención en
Estrés
Postraumático
Entrenamiento
en gestión
del estrés
Partonen
et al. 1998
Price et al.
1992
Entrenamiento
en ejercicios
Búsqueda
de trabajo
Barth et al.
1988
Di Lorenzo
et al. 1999
TrzcienieckaGreen y
Steptoe
1996
Prof. y Lego
>8
60 - 90
0,58
8 (alto)
Prof.
>8
60 - 90
0,22
8 (alto)
Lego
8
> 90
0,20
8 (alto)
Lego
>8
n.i.
0,08
8 (alto)
Prof. y Lego
>8
< 60
0,74
7 (bajo)
Prof.
>8
n.i.
0,40
7 (bajo)
>8
n.i.
0,22
7 (bajo)
> 90
-0,03
7 (bajo)
n.i.
0,06
6 (bajo)
Elderen-vanKemenade et al.
1994
Educación
en salud
Conductual
Cognitivo
Educación
Prof.
Mignone y
Guidotti. 1999
Grupo de apoyo
Apoyo social
n.i. (e)
Levy et al.
1993
Grupo de apoyo
Apoyo social
en caso de pérdida
n.i.
8
n.i
(a) Métodos de intervención: Conductual: Cambio de conducta, modelamiento, actividades placenteras. Cognitivo: Reestructuración cognitiva,
consejería, entrenamiento en estilos explicativos. Competencia: Actividades orientadas al aumento de capacidades de los participantes.
Educación: Instrucción directa, conferencias, talleres de trabajo. Apoyo social: Estimular socialización, redes.
(b) Equipo: Prof.: Personal profesional de salud física y mental. Lego: Colegas, familiares, profesores.
(c) Effect size: medida que relaciona casos con resultados favorables y desfavorables, considerando las desviaciones estándares, en grupo de intervención y de control; más cercano a 1 indica mayor eficacia de la intervención.
(d) Calidad de la investigación: se clasificaron siguiendo criterios Cochrane, de 9 ítems.
(e) n.i: no informado
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víctimas; las mujeres afectadas, por otra parte, no exhiben características particulares de sensitividad que las hagan malinterpretar un
ambiente normal como hostil. El concepto de acoso de género
además predice que las organizaciones tolerantes a las prácticas de
acoso y con un desbalance marcado de género tienen más probabilidad de ser escenario de acoso sexual (Fitzgerald et al 1997).
La prevención sólo se puede realizar si se comienza por reconocer
que el problema existe, que es frecuente, que es predecible, que
en general no se denuncia, que tiene un alto costo para la salud
mental de las trabajadoras, que tiene costos no medidos para la
organización.
b. Acoso Moral, Mobbing, Bullying.
La palabra “mobbing” (mob = multitud u horda) fue usada primero
en estudios sobre ataques colectivos de animales contra predadores
y a veces contra miembros de la misma especie. Posteriormente se
introdujo en estudios sobre agresividad humana, para describir la
exposición de un individuo a ataques repetidos, intencionales, de
parte de uno o varios sujetos por un período prolongado de tiempo.
Un término cercano es “bullying” (bully = muchacho que actúa
agresivamente), usado en estudios del comportamiento de escolares
cuando ejercen hostigamiento sistemático contra algún compañero
de curso; en contexto laboral, se aplica a situaciones en que una
persona es sometida a aislamiento social o exclusión, sus trabajos o
esfuerzos son devaluados, o sufre amenazas frecuentes (Schuster
1996, Kivimäk et al 2000).
En los estudios sobre este tipo de conducta en centros laborales
se ha destacado como elementos característicos:
• Actos repetidos y sistemáticos en el tiempo.
• Dirigidos con intención negativa y con precisión en contra de
uno o más individuos por otro individuo o por un grupo.
• Provocan efectos negativos en la víctima.
• La víctima se encuentra en una situación en que le resulta
difícil defenderse por sí misma en la situación de acoso.
• Variabilidad impredecible.
• Sutileza que impide a los demás detectar la conducta.
Lo anterior permite diferenciar la situación de acoso de
conductas cotidianas en cualquier grupo humano y relación
interpersonal (naturalmente con más o menos fricciones), en que
faltan elementos de acción sistemática y de sometimiento. Este
último aspecto ha sido relacionado con la percepción que tiene la
víctima de que no se puede defender, ya sea por razones jerárquicas, incapacidad física, falta de habilidades sociales, razones
económicas o razones psicológicas (por su falta de ser o por la
forma de ser del agresor). La Tabla Nº 4 muestra conductas típicas
estudiadas bajo el concepto de mobbing (Einarsen 2000).
Un aspecto clave en las definiciones actuales es la diferencia de
poder percibida por la víctima, la cual guarda relación con la
distribución real de poder al interior de una organización.
Los estudios en escolares y en prisiones muestran un claro
impacto del acoso sobre el ánimo de la víctima, que en los casos
más graves (en prisiones) llega al suicidio. Evidentemente el
ambiente laboral tiene diferencias con los 2 anteriores, por lo
cual los datos no se pueden extrapolar, pero sí han orientado la
investigación. Datos:
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Tabla 4.
Formas Típicas de Mobbing en el Trabajo (Según Einarsen, 2000)
Autor
Brodsky (USA)
Conductas típicas
Uso de chivo expiatorio
Abuso verbal (denominaciones
denigratorias, por ejemplo)
Abuso físico
Presión en el trabajo
Acoso sexual
Leymann (Suecia) Manipular la reputación de la víctima
Afectar las posibilidades de ejecutar el trabajo
Afectar las posibilidades de comunicación
de la víctima
Afectar sus circunstancias sociales
Coerción física (ataques, amenazas)
Einarsen (Noruega) Esparcir chismes y rumores
Exclusión social
Asignar tareas muy simples o escasas
Crítica permanente sobre el trabajo y
resultados de la persona
Violencia física o amenaza
Insinuaciones acerca de la salud mental
de la persona
• Síntomas de malestar físico inespecíficos (sensación de debilidad, de falta de fuerza, dolores diversos).
y síntomas relacionados, incluyendo alteraciones
del sueño y desesperanza.
• Síntomas psicológicos que no llegan a constituir enfermedad,
pero incapacitan (hostilidad, evitación, aislamiento, nerviosismo).
• Depresión
Además, han interesado los efectos organizacionales: la pérdida de
productividad directa de la víctima y del grupo, más los costos de
intervenciones, pueden ascender en Suecia a US$ 30.000–100.000
por año, por persona afectada. La organización, además ve aumentar
el ausentismo y la rotación de trabajadores (Einarsen 2000).
En la prevención de esta forma de violencia, como en otros
aspectos que involucran a las conductas en el trabajo, los enfoques se mueven entre un polo que enfatiza los rasgos de personalidad y otro que enfatiza los aspectos organizacionales. No
existe ninguna duda que en ambientes institucionalizados puede
haber mayor influencia de rasgos de personalidad (prisiones,
internados), pero incluso allí, medidas ambientales como vigilancia de baños y dormitorios disminuyen la frecuencia del
acoso. Otro enfoque ha planteado una visión pesimista, de reconocer el acoso como una conducta agresiva inherente a algunas
especies que nos incluye.
Pero el enfoque en países nórdicos ha enfatizado el rol de los
factores organizacionales en la prevención del acoso; por
ejemplo:
• Problemas de liderazgo
• Mal manejo de conflictos de rol
• Capacidad de control sobre el propio trabajo
• Demandas ambiguas o incompatibles
• Estilos autoritarios
• Permisividad a conductas agresivas
159
Artículo Original | Parra Manuel
PROMOCIÓN DE LA SALUD MENTAL EN EL TRABAJO
A lo largo de este artículo se ha insistido en que es necesario
realizar una labor promocional de la salud mental en la empresa,
de modo que se puedan prevenir los problemas que emergen
cuando el bienestar psicológico se encuentra en riesgo.
Volvemos a la noción de estrés laboral, que ahora resulta útil en
el planteamiento de la promoción y la prevención.
Cooper y Cartwright (1998) clasifican las intervenciones preventivas en tres tipos:
• Primaria: Dirigida a eliminar o reducir los factores de estrés y
promover un ambiente de trabajo saludable y solidario.
• Secundaria: Detección y tratamiento precoz de la depresión y
ansiedad
• Terciaria: Rehabilitación y recuperación de personas que han
sufrido problemas graves de salud por el estrés.
Tabla 5. Niveles de Prevención del Estrés en el Trabajo
Nivel
Primario
Pasos
Diagnóstico
o auditoría
de estrés
Herramientas
Cuestionarios autoaplicados
Reuniones
Cuestionarios semiestructurados
Diario del estrés
Crear entornos Informar a trabajadores sobre
saludables y
mecanismos de apoyo y asesoramiento
redes de apoyo Incorporar aspectos de desarrollo
personal a los sistemas de valoración
Entrenar a los directivos
Secundario Educación
en gestión
del estrés
Vigilancia y
promoción
de la salud
Terciario
Van der Klink et al (2001), por una parte, y Reynolds (2000), por
otra, realizan meta-análisis de intervenciones orientadas al
manejo del estrés en lugares de trabajo, concluyendo ambos que
las intervenciones focalizadas en los individuos exhiben mejores
resultados que las organizacionales; en el primero de ellos se
plantea que las intervenciones individuales cognitivo-conductuales tienen mejor efecto que las de relajación.
Las conclusiones señaladas sorprenden en cierto modo a los
propios autores, pues se esperaba un mejor rendimiento de las
intervenciones organizacionales. El punto a considerar es que la
comparabilidad de los resultados entre diversas acciones organizacionales se diluye por las diferencias en realidades locales que,
como se señaló más arriba, constituyen un elemento central en
un adecuado programa de manejo del estrés y de prevención del
riesgo.
La conclusión más importante es que, a pesar de las discrepancias teóricas, existe consenso en que es posible asegurar una
mejor calidad de vida y bienestar y al mismo tiempo obtener
mejores resultados organizacionales, mediante programas bien
diseñados para la promoción de la salud mental en el trabajo y
de prevención del estrés en sus diversos niveles.
Técnicas simples de relajación
Asesoría y planificación sobre
formas de vida
Técnicas de administración del tiempo
Destrezas para la resolución de
problemas
Chequeos periódicos
Menús "saludables"
Instalaciones deportivas, educación
física
Programas de protección cardiovascular
Asesoramiento Servicios confidenciales
Reincorporación Entrevista de reincorporación
al trabajo
Planes de incorporación parcial
Los cuestionarios autoaplicados estandarizados se recomiendan
para grandes grupos, pero en contingentes laborales pequeños
pueden bastar entrevistas en reuniones y cuestionarios semiestructurados. Las alternativas de prevención secundaria y terciaria
se ha sugerido que funcionan mejor frente a problemas que
existen en la organización, pero que no tienen solución (como la
inestabilidad del empleo, los bajos salarios) y frente a problemas
que surgen de una fuente extralaboral, pero que repercuten en la
organización.
160
www.cienciaytrabajo.cl | AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 | Ciencia & Trabajo
Artículo Original | Promoción y Protección de la Salud Mental en el Trabajo
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Artículo Original
Factores Psicosociales Relacionados con la
Salud Mental en Profesionales de Servicios
Humanos en México
PSYCHOSOCIAL FACTORS RELATED TO MENTAL HEALTH IN HUMAN SERVICES PROFESIONAL'S IN MEXICO.
Arturo Juárez García
Psicólogo, Candidato a Doctor en Psicología por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Investigador del Proyecto Psicología del Trabajo y Salud Ocupacional de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala, UNAM.
RESUMEN
ABSTRACT
Las Organizaciones del Servicio Humano (OSH) se caracterizan por
las demandas emocionales y psicosociales que imponen a los profesionales que ahí laboran, impactando gravemente su productividad, calidad de vida y salud mental; pero también representa consecuencias importantes para los usuarios, sus familias, las instituciones y la sociedad en general. Por lo tanto, resulta necesario identificar los factores psicosociales relacionados con el estatus de salud
mental en profesionales de OSH, objetivo del presente trabajo. Para
ello, se evaluaron profesionales de Enfermería, Psicología,
Medicina, Trabajo Social, etc. de diferentes centros sociales en
México (N=179). Se utilizaron diversas escalas validadas para la
evaluación de factores psicosociales relevantes para la salud según
la literatura contemporánea. Los resultados mostraron que la
autoeficacia, el control emocional y la inseguridad laboral (incertidumbre por la conservación del empleo) fueron las únicas variables
asociadas. La inseguridad laboral fue el predictor estadístico más
importante. Se concluye que las variables psicosociales, sean personales o propias de la actividad laboral, representan factores esenciales en la definición del estatus de salud mental en profesionales
de OSH y resulta importante considerar aquéllas particularmente
relevantes en determinados contextos socioeconómicos-culturales,
como lo es el gran problema de la inseguridad laboral en países de
Latinoamérica.
Human Services Organizations (HSO) are characterized by the emotional and psychosocial demands imposed on professionals who
work in this field. These demands have a serious repercussion on
their productivity, life quality and mental health, and they also have
considerable consequences on the users of HSO, their families, health
institutions and society as a whole. Therefore, it is necessary to identify psychosocial causes related to the mental health status of professionals who work in the HSO -aim of the current work. For this
reason, professionals such as registered nurses, psychologists, medical
doctors, social workers, etc., from different social centers in Mexico
were evaluated (N=179). Different validated scales were used for the
evaluation of psychosocial elements relevant for health, according to
current information. Results showed that self-effectiveness, emotional control and labor insecurity (uncertainty to keep the job) were
the only associated variables. Labor insecurity was the most important statistical predictor. In conclusion, psychosocial variables –
both personal or work-related - represent essential causes when
defining the mental health status of HSO professionals. It is important to consider those variables which are specially relevant in specific socioeconomic and cultural situations, such as labor insecurity, a great problem in Latin American countries.
Descriptors: MENTAL HEALTH; STRESS, PSYCHOLOGICAL;
PERSONALITY; HEALTH SERVICES; OCCUPATIONAL DISEASES
(Juárez A. 2004. Factores Psicosociales Relacionados con la Salud
Mental en Profesionales de Servicios Humanos en México. Cienc
Trab. Oct-Dic; 6 (14):189-196)
Descriptores: SALUD MENTAL, ESTRÉS PSICOLÓGICO,
PERSONALIDAD, SERVICIOS DE SALUD, ENFERMEDADES
OCUPACIONALES, INSEGURIDAD LABORAL.
INTRODUCCIÓN
Acerca del Concepto de Salud
Correspondencia:
Arturo Juárez García
5ª Privada de Acónitos N° 721, Villa de las Flores, Municipio de Coacalco,
Estado de México, México.
Código Postal 55710.
Tel. (52- 55) 5623 12 93 ext.408
e-mail: [email protected], [email protected]
Recibido: noviembre 2004 / Aprobado: noviembre 2004
Ciencia & Trabajo | AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 | www.cienciaytrabajo.cl
Es bien sabido que en el pasado existió un amplio dominio del
modelo biomédico respecto al concepto de salud y su enfoque del
dualismo cuerpo-mente, en donde había una fuerte tendencia
centrada en la enfermedad; esta última se entendía en términos
exclusivamente biológicos que, a su vez, podían tener consecuencias psicológicas, pero lo psicológico no podía derivar en un
problema de salud físico. Desde esta perspectiva, la salud se
definía como ausencia de enfermedad o aflicción del cuerpo por
189
Artículo Original | Juárez Arturo
causas biológicas que poco tienen que ver con procesos psicológicos y sociales; asimismo, las quejas o síntomas subjetivos del
individuo se consideraban la consecuencia o expresión de un
desequilibrio biológico subyacente (León 2003).
Sin embargo, ante el surgimiento de alteraciones funcionales de
tipo esencial, es decir, aquellos trastornos que no podían ser explicados en términos orgánicos, surge la necesidad de dar espacio al
análisis de la enfermedad desde el enfoque mental o psicológico,
análisis que tanto caracterizaron los trabajos de Freud y Charcot
en los años veintes (Freud 2000). De esta forma, aunque con
estructuras teóricas poco aceptadas y ciertas resistencias, nace el
concepto de lo “psicosomático” para dar cabida a la influencia de
lo mental (psico) en lo físico (soma=cuerpo). Junto con éste y
muchos otros fenómenos científicos y sociales, fue creciendo el
enfoque que considera que la salud está determinada no sólo por
aspectos biológicos, sino también por aspectos psicológicos y
sociales que conforman interacciones dinámicas y complejas que
determinan el estatus de salud de los individuos.
Basta con ver las cifras en las últimas décadas de morbi-mortalidad para dar cuenta de la importancia del papel de los aspectos
psicológicos y sociales en estos procesos, pues las enfermedades
crónico-degenerativas y los accidentes representan las primeras
causas de morbi-mortalidad en el mundo industrializado
(Instituto Nacional de Geografía e Informática y Secretaría de
Salud 2002), los que, ciertamente, están determinados por
conductas o comportamientos psicosociales que incluyen malos
hábitos de salud, estilos de vida insalubres y condiciones de existencia deterioradas o, incluso, pobreza extrema.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define a la Salud
como “un estado completo de bienestar físico, mental y social, y
no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades” (Cook
1993). De esta forma, además de la concepción integral de las
diferentes áreas que conforman la salud, se propone no sólo un
ataque frontal a las enfermedades, sino un trabajo permanente de
promoción a la salud, lo que mejora el paradigma biomédico
tradicional y se conforma en un modelo biopsicosocial.
De acuerdo con Noack y Kaznachev (Almirall 1996), es necesario
retomar el enfoque sistémico para conceptualizar al fenómeno de
la salud y proponen que ésta es un estado donde hay un balance
o equilibrio productivo entre este estado y otros sistemas o
subsistemas, tales como un órgano, otra persona, grupo social o
comunidad; además es un proceso de conservación y desarrollo
de las capacidades biológicas y psicológicas, fisiológicas y
psíquicas del hombre, su capacidad laboral óptima y una actividad social adecuada durante la prolongación máxima de la
vida.
TRABAJO Y SALUD
El ser humano, eminentemente social, posee diversos sistemas o
esferas de su actividad social cotidiana que determinan su modo
de vivir y su salud, tales como la familia, el grupo religioso, los
amigos y el trabajo. Es este último el que ha jugado un papel
primordial respecto al proceso salud-enfermedad. Desde la anti-
190
güedad, Hipócrates y Galeno preguntaban siempre a sus
pacientes, como parte de su diagnóstico, la actividad laboral que
éstos ejercían (Trejo 1996), encontrando muchas veces el origen
de la enfermedad en este rubro. Esta relación salud-trabajo ha
llevado al surgimiento de disciplinas como la salud ocupacional,
cuya misión es prevenir de manera adecuada las enfermedades y
accidentes que éste puede generar, favoreciendo las mejores
condiciones de trabajo y facilitando el desarrollo de las facultades físicas y mentales que nos caracterizan como seres
humanos y en donde los elementos psicológicos y ambientales
son factores decisivos para alcanzar aquellos objetivos que nos
hemos planteado (Organización Internacional del Trabajo 1988).
El concepto de salud, y particularmente la salud mental, incluye
necesariamente, como se ha tratado de enunciar, la realización de
las potencialidades humanas, donde la productividad resulta un
reflejo y de ahí que, a pesar de que el trabajo puede representar
un elemento morbídico por su tipo y condiciones, por el área
donde se realiza, por las condiciones ambientales o peligros que
entraña, por las características propias del contrato laboral, por
los métodos, medios y sitios donde hay que realizarlo, o por las
repercusiones en la salud o en la familia que de él puedan
derivar, el trabajo representa, en todos los sentidos, la alternativa
a la productividad y a la salud mental tanto individual como
colectiva (Souza y Machorro 1988).
En México, desafortunadamente, son pocos los estudios de salud
mental ocupacional; sin embargo, aunque escasos y un tanto
antiguos, se encuentran difundidos algunos escritos de gran
importancia (Tecla 1982, Matrajt, 1994, Laurell 1983, Noriega et
al. 2000, Gutiérrez et al 2003). Actualmente se encuentra en
prensa una publicación derivada de una reunión nacional, donde
se presentan investigaciones de factores psicosociales llevadas a
cabo por investigadores de toda la república Mexicana (Juárez et
al 2004).
EL TRABAJO EN ORGANIZACIONES DE SERVICIO
HUMANO (OSH)
Algunos estudios muestran las afectaciones en la salud mental
que se propician en diferentes actividades laborales, como es el
caso de trabajadores operativos o manuales (obreros) (Karasek y
Theorell 1990), los empleados técnicos y administrativos
(Gutiérrez 2001); y, en especial, las actividades en Organizaciones
de Servicio Humano (Arita y Arauz 2001, Burke 1992, Garcés de
los Fayos 2000, Ruiz 2003).
Las Organizaciones de Servicio Humano (OSH) pueden ser definidas de acuerdo a su función social o diseño gubernamental, o
simplemente lugares de trabajo de profesionales que ofrecen
servicio humano. Este tipo de organizaciones tiene como función
principal proteger, mantener e incrementar el bienestar personal
de los individuos mediante la definición, moldeo o alteración de
sus atributos personales (Soderfeldt et al 1996). Además, hay dos
propiedades principales que distinguen a las OSH de otras burocracias: 1) se trabaja directamente con la gente (cara a cara) y 2)
se debe proteger y promover el bienestar de esa gente. De esta
forma:
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Artículo Original | Factores Psicosociales Relacionados con la Salud Mental
1)La materia prima, así como los productos del trabajo, consiste
en personas, lo que tiene importantísimas implicaciones en la
toma de decisiones, pues una decisión que es de rutina en
cualquier otra organización, en una OSH se convierte en caso
de vida o muerte.
2)Los objetivos en las OSH son vagos y ambiguos debido a la
naturaleza del trabajo. Es imposible pensar en la analogía de
objetivos clásicos de “productividad = número de piezas”
(tradicional en organizaciones productivas). Es difícil medir
los resultados de este tipo de trabajo, ya que se basan en
muchas nociones de carácter cualitativo (e. g. calidad de
atención).
3)La parte medular de este tipo de trabajo es la relación entre
el trabajador y el usuario y la calidad de esa relación es esencial para el resultado de ese trabajo. Sin embargo, hay
complicaciones debido a que en ocasiones el rol del usuario
es involuntario y, por tanto, los intereses del usuario y las
OSH pueden ser incompatibles.
4)Variables humanas como los intereses, necesidades, actitudes,
sentimientos, emociones, estrés, depresión, dolor e incluso la
muerte de usuarios de los servicios representan una carga
emocional adicional para los profesionales de las OSH,
además de su carga cuantitativa.
Esta concepción de las OSH se aplica a diversas organizaciones,
tales como escuelas, agencias de policía, hospitales e institutos
varios, entre otros. Entre las profesiones que laboran en estas
organizaciones se encuentran los trabajadores sociales, maestros,
policías, enfermeras, médicos, psicoterapeutas, psiquiatras, psicólogos, encargados de prisiones, abogados, entre otras. Todas estas
profesiones están caracterizadas por las altas exigencias emocionales y sus consecuencias al desempeño, la salud y la calidad de
vida de estos trabajadores.
Existen numerosas investigaciones realizadas en estos profesionales en distintos países en donde se demuestra que el contacto
continuo con otras personas y la alta carga afectiva propician
una gran afectación en la salud mental de estos trabajadores
(Burke J. 1992, Garcés de los Fayos, E. 2000, Ruiz J. 2003,
Gil-Monte y Peiró 1997, Maslach 2004).
En México se ha demostrado el impacto en la salud mental que
tienen estos profesionales, particularmente en aquéllos que
laboran en servicios de salud (Gutiérrez et al 2003, Jiménez 2000,
Lartigue y Fernández 1998, Téllez 2001). No obstante, son necesarias investigaciones en profesionales que laboran en otras OSH,
tales como Centros de Readaptación Social (prisiones) u otros
centros de Ayuda Social.
FACTORES PSICOSOCIALES DE RIESGO A LA SALUD
MENTAL EN OSH
Gil Monte y Peiró (Gil-Monte y Peiró 1997) sugieren que existe
una serie de factores psicosociales que inciden en la salud mental
de los profesionales de OSH, especialmente la escasez de personal
que supone sobrecarga laboral, trabajo en turnos, trato con usuarios problemáticos, contacto directo con la enfermedad, el dolor
y la muerte, falta de especificidad de funciones y tareas, lo que
supone conflicto y ambigüedad de rol, falta de autonomía y
autoridad en el trabajo para poder tomar decisiones, rápidos
cambios tecnológicos, diversas variables de carácter demográfico, el tipo de profesión, la utilización de medios tecnológicos en
el trabajo, clima laboral, contenido del puesto, características de
personalidad, entre otras.
En diversos instituciones de Atención Social, como por ejemplo
de atención al Maltrato Intrafamiliar y Sexual, prevalecen ciertos
factores estresantes para los trabajadores de estos centros como
son: la permanente práctica con víctimas en lugares inhóspitos,
con escasos recursos para el trato con las víctimas y para ellos
mismos, sobrellevando frío o calor excesivos, no siempre cuentan
con computadoras que les permitan ordenar la tarea, y padecen
la exigencia de horarios excesivos y dificultades de índole administrativa. Otra fuente de tensión es la falta de normas claras para
operar en el campo, además de la naturaleza del trabajo, articulada con características de algunos profesionales que se
auto-exigen en busca de excelencia (Barría 2002).
En otro ejemplo institucional (Ruiz 2003), Ruiz, J. ha analizado
el ámbito concreto de las instituciones penitenciarias y plantea
ciertas variables que inciden en la salud psíquica de estos trabajadores; entre ellas menciona: el antagonismo percibido de la
comunidad, riesgo de sufrir agresiones y de verse atrapados en
motines, responsabilidad directa por “personas” y sus conductas,
la percepción de resultados pobres (como ‘ver’ que los delincuentes salen y entran de nuevo en la cárcel), el grado de apoyo
y reconocimiento percibido en los superiores, la peligrosidad del
trabajo, la existencia de reglas obsoletas, el elevado número de
personas a atender, falta de recursos, la falta de guías claras para
realizar el trabajo o la antigüedad en el trabajo.
Resulta evidente que el deterioro de la salud mental en los
profesionales de las OSH conlleva grandes consecuencias
directas e indirectas, tanto en los mismos profesionales, las
OSH, los usuarios, las familias de los usuarios y para la sociedad
en general.
Lo claro es que en cualquier institución, tratándose de OSH, los
profesionales deben implicarse durante largas horas en
problemas y preocupaciones de las personas con las que se relacionan profesionalmente. Frecuentemente la interacción del
profesional con el receptor del servicio se centra en los problemas
actuales de éste (en el campo de la salud, de la higiene mental,
de las relaciones familiares, sociales o laborales), y los receptores
vienen cargados con muy diversos sentimientos, tales como la
preocupación, el miedo, el rechazo, la desesperación, entre otros
(Labrocca y Méndez 2001). Por lo tanto, como se puede observar
la mayoría de las demandas impuestas a los profesionales de OSH
es de carácter psicosocial.
Dado lo anterior, es imprescindible prevenir de manera adecuada
los daños a la salud mental en estos profesionales mediante
diversas estrategias, siendo primordial la identificación de aquellos factores que influyen de manera negativa en el estatus de
salud mental de estos trabajadores.
Maslach (Maslach 2004) menciona que recientes investigaciones
muestran que existen demandas psicosociales “universales” que
afectan a la salud de los trabajadores de forma crónica, las que
podrían generalizarse a distintas ocupaciones independientemente de las características específicas de la actividad laboral, y
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Artículo Original | Juárez Arturo
plantea que entre los principales factores que influyen en la salud
mental se encuentran: la falta de recompensas, las falsas expectativas y, principalmente, la carga de trabajo, el grado de control
del trabajador, las relaciones interpersonales y el apoyo social en
el trabajo.
De igual forma, en un estudio en trabajadoras de maquila en
México, Cedillo (Cedillo 1999) encontró que el mejor predictor de
salud psicológica fue la inseguridad laboral, de entre varios estresores psicosociales que evaluó, incluyendo las variables del
modelo Demanda/Control/Apoyo Social.
En 1979, Karasek publicó el modelo de “Demanda/Control”, en el
que propone que las variables psicosociales del medio laboral, a
las que llamó Demanda Psicológica y Latitud de Decisión, determinan en gran medida el estatus de salud de los trabajadores. Por
demanda psicológica hace referencia a la carga de trabajo percibida por el trabajador, que combinada con una escasa utilización
de habilidades y baja autonomía (latitud de decisión) representan
un efecto psicosocial laboral inherente al que llamó Tensión
Psicológica, mismo que produce un deterioro a corto y largo
plazo en la salud física y mental de los individuos. Entre 1972 y
1979, Karasek realizó una extensa investigación con miles de
trabajadores basada en la “Quality of Employment Survey”, y
demostró que el modelo Demanda/Control tiene impactos relevantes en la salud mental de trabajadores norteamericanos y
suecos (Karasek y Theorell 1990).
Por otra parte, se ha demostrado también que algunas variables
psicosociales de carácter personal, específicamente aquellas
variables disposicionales o rasgos, están asociadas íntimamente
al estatus de la salud mental, ya sea de forma directa (Hayes y
Joseph 2003) o en su carácter moderador (Ebert et al 2002).
Incluso, algunos estudios longitudinales han evidenciado que
estos factores son los mejores predictores de salud mental
(Kalimo et al 2002).
Sin duda alguna, dicho modelo es el de mayor trascendencia en
la actualidad en el terreno psicosocial laboral, por sus amplias
evidencias empíricas en relación a los procesos de morbi-mortalidad en países como EE.UU., Suecia, Inglaterra, Canadá, Japón,
Australia, etc. En los últimos años ha habido, más que nunca,
diversas investigaciones que confirman la hipótesis de este
modelo, y precisamente en su relación con la salud mental (Akker
et al 2000, Petterson y Arnetz 1997, Schnall et al 2000). De igual
forma, la relación del modelo Demanda/Control-Salud mental se
ha demostrado en países latinoamericanos como México y
Colombia (Cedillo 1999, Román y Fernández 2003).
En 1986, Jhonson propuso una extensión del modelo
Demanda/Control para incluir la variable de “Apoyo Social”,
referente al soporte emocional y psicológico que brindan los
compañeros y el jefe en el trabajo. Con evidencias empíricas
importantes, queda manifiesto que el apoyo social es un
componente que fortalece el modelo DC y está asociado íntimamente al estado de salud de los trabajadores (Karasek y
Theorell 1990).
Particularmente, las variables Autoeficacia y Control Emocional
han estado relacionadas con salud mental en diversos estudios
(Juárez 2004a, Bandura 1997, Grau et al 2001, Mc Cabe A et al
2003). Por Autoeficacia se entiende la creencia que se tiene
respecto a que se cuenta con las habilidades y capacidades
idóneas para enfrentar una demanda específica y por Control
Emocional a la disminuida tendencia o disposición para ser
hostil, irritable o colérico. Lo anterior implica una importante
relevancia de los procesos cognitivos (autoeficacia) y emocionales (autocontrol de ira) en el proceso salud-enfermedad.
Dado lo anterior, resulta necesario determinar si variables psicosociales tales como la demanda psicológica, la latitud de decisión, el apoyo social, la inseguridad laboral, y el control personal
cognitivo (Autoeficacia) y emocional (Control Emocional) están
asociados estadísticamente con la salud mental en profesionales
que laboran en OSH.
MATERIAL Y MÉTODOS
Objetivo: Determinar si existe una relación estadísticamente
significativa entre distintos factores psicosociales y la salud
mental en profesionales de servicios humanos.
Específicos:
• Determinar
No obstante, se ha insistido anteriormente que el modelo
Demanda/Control/Apoyo Social debe incorporar otras variables
características de otros contextos sociales (e. g. la inseguridad de
conservar el empleo en países subdesarrollados) y otras relacionadas a la personalidad del individuo (Juárez A. 2004a).
si existen diferencias en las puntuaciones del
cuestionario de salud mental según sexo, institución o actividad laboral de los participantes.
• Determinar si existen relaciones significativas entre la edad,
la antigüedad laboral y los indicadores de salud mental.
• Identificar relaciones estadísticas significativas entre los
factores psicosociales siguientes: demandas psicológicas,
latitud de decisión laboral, apoyo social en el trabajo, inseguridad laboral, control emocional y autoeficacia con los
indicadores de salud mental.
• Identificar el mejor predictor psicosocial (variable con mayor
asociación estadística) de los indicadores de salud mental.
Mohr (Mohr 2000), en un estudio longitudinal, buscó el mejor
predictor del estatus de salud mental en trabajadores manuales y
encontró que, de entre varios estresores, la inseguridad laboral
(incertidumbre por conservar el empleo) fue la variable con
mayor peso en esta predicción.
Se trata de un estudio observacional no-experimental, transeccional, descriptivo y correlacional. Participaron 179 profesionales
que laboran en distintas organizaciones de servicio humano
(Hospital, Centro de Readaptación Social y Centro de Atención al
Maltrato Intrafamiliar y Sexual), de las áreas de Enfermería,
Además de un amplio cuerpo de evidencias en diversos países del
mundo, en México también se ha demostrado la importancia del
apoyo social para trabajadores de distintas ocupaciones (Juárez y
Andrade 2004), así como su sobresaliente relación con la salud
(Gutiérrez et al 2003).
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Artículo Original | Factores Psicosociales Relacionados con la Salud Mental
Psicología, Medicina, Trabajo Social, Educación y Vigilancia.
Todos los participantes lo hicieron de forma voluntaria respondiendo a un llamado de invitación a incluirse en la investigación.
La selección fue por conveniencia, por lo que no se realizó muestreo probabilístico.
Figura 1.
Porcentaje de Participantes en el Estudio de Acuerdo a las Áreas de
Actividad Laboral.
Instrumentos
• Cuestionario de Contenido del Trabajo (JCQ por sus siglas en
inglés) de Karasek (Karasek et al 1998), que incluye las variables de demandas psicológicas, latitud de decisión, apoyo
social laboral e inseguridad laboral. Validado en México
previamente (Cedillo 1999).
• Cuestionario de Control Personal (Juárez 2004a). Incluye las
variables de control emocional y autoeficacia, con estudios de
validez recientes (Juárez 2004a).
• Cuestionario General de Salud Mental (GHQ). Incluye las
variables de síntomas somáticos, disfunción social, depresión
y problemas de sueño. Dicho cuestionario en su versión de 28
reactivos fue validado en México por Medina Mora y Cols.
(Medina et al 1983).
Todos los cuestionarios contienen 4 opciones de respuesta tipo
Likert que van desde: “Totalmente en Desacuerdo” (León 2003),
hasta: “Totalmente de Acuerdo” (Cook 1993).
Procedimiento
Se aplicaron los cuestionarios en una sola vez, en los mismos
centros de trabajo donde pertenecían los trabajadores. La aplicación se realizó en grupos de entre 6 y 10 personas y en pocos
casos se hizo de forma individual. Los cuestionarios se vaciaron
en una base de datos del programa Statical Package for Social
Sciences (SPSS) versión 11.
Para el análisis de resultados se utilizó estadística descriptiva,
análisis de varianza y la prueba “t” de student para verificar diferencias entre ocupaciones, instituciones y sexo. También se utilizó
el coeficiente de correlación Pearson y la técnica de regresión
múltiple por el método paso por paso (stepwise), con el fin de verificar las relaciones entre variables, así como identificar los mejores
predictores estadísticos de la salud mental (Hair et al 1999).
Resultados
En cuanto a las características de la población, aproximadamente
el 60% de los participantes pertenecía a un hospital público,
mientras que el 30% laboraba en un Centro de Readaptación
Social y el 10% en un Centro de Asistencia Social para mujeres
maltratadas. El promedio de edad fue de 38 años, la mayoría de
los participantes era de sexo femenino (87%) y el 58% era
casado. La escolaridad predominante fue de estudios universitarios (45%), mientras que en menor proporción hubo personas con
grados menores (33%) o mayores –fueran especialidad o maestría– (22%). Respecto a los tipos de ocupaciones participantes, la
mayoría tenía actividades laborales de enfermería (60%), tal y
como se muestra en la Figura 1.
En lo relativo a la posible influencia de las variables sociodemográficas en los puntajes de salud mental, motivo del primer objetivo, los resultados mostraron que no existen diferencias según la
institución donde se labora, la ocupación o el sexo. Tampoco
hubo asociaciones significativas entre la edad, la antigüedad y
los puntajes totales en el cuestionario de salud mental general.
Por otra parte, en el análisis de la posible correlación entre los
factores psicosociales evaluados y la salud mental, se encontró
que estuvieron relacionados de forma significativa sólo las variables de inseguridad laboral (r= -.338), la Autoeficacia (r= -.152)
y el Control Emocional (r= -.261). Dichas variables se encuentran, asimismo, relacionadas significativamente entre ellas, tal
como se muestra a continuación en la Tabla 1.
Para la identificación de los mejores predictores de salud mental
(factores psicosociales con mayor asociación estadística), se realizaron varias regresiones múltiples con el método paso por paso
para cada una de las subescalas del cuestionario de salud mental
(síntomas somáticos, disfunción social, depresión y problemas de
sueño) y también para el puntaje total general. Los resultados
mostraron que la variable con mayor asociación, tanto para el
Tabla 1.
Coeficientes de Correlación Pearson entre las Variables Analizadas.
X
DE
1
1. Salud Mental General
29.70
7.43
1.00
2. Latitud de decisión
74.46
12.19
-.008
1.00
3. Demandas Psicológicas
30.04
7.04
.088
-.071
4. Apoyo Social laboral
21.82
4.21
-.107
5. Inseguridad Laboral
4.89
1.35
6. Autoeficacia
22.86
2.99
-.152*
.114
7. Control Emocional
17.49
3.85
-.261**
.149*
.338**
2
3
4
5
6
7
1.00
.298**
-.057
-.261**
.081
.247**
-.142
1.00
-.192*
1.00
.120
-.208**
1.00
.020
-.216**
-.271**
1.00
*p=<.05, **p=<.01, ***p=<.001 (Sig. 1-cola)
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Artículo Original | Juárez Arturo
Tabla 2.
Resultados de los Análisis de las Escalas de Salud con Variables Correlacionadas (N=179).
Variables de Salud
Salud Mental
(Puntaje total CGS)
Variables Únicas que Entraron Utilizando el Método Stepwise
B
F
Cambio R2
Inseguridad Laboral
Control Emocional
0.296***
-0.197**
22.85***
15.71***
0.11***
0.04**
Control Emocional
Inseguridad Laboral
-0.280***
0.242**
13.33***
10.60***
0.11***
0.05**
Inseguridad Laboral
Autoeficacia
0.238***
-0.168**
14.20***
9.90***
0.07***
0.03**
Inseguridad Laboral
0.357***
15.58***
0.12***
Control Emocional
Inseguridad Laboral
-0.225**
0.189*
8.19**
6.23**
0.07**
0.03*
Subescalas
Síntomas Somáticos
Disfunción Social
Depresión
Problemas de Sueño
*p=<.05, **p=<.01, ***p=<.001 (Sig. 1-cola)
puntaje total de salud mental como para la mayoría de las subescalas, fue la inseguridad laboral, seguida del control emocional,
con varianzas explicadas (R2) que van del 10 al 15%, como se
muestra en la Tabla 2.
Discusión
Como se observa en los resultados, aunque con correlaciones
bajas (de r=0.15 a r=0.33), se encontraron asociaciones estadísticas altamente significativas entre los puntajes obtenidos en la
escala de salud mental y variables psicosociales laborales (inseguridad laboral) y personales (control emocional y autoeficacia),
lo que significa que aquellos profesionales que se encuentran en
una situación inestable de empleo, poseen niveles de hostilidad e
irritabilidad fuera de su control y creen que no poseen las capacidades para ejecutar ciertos cursos de acción requeridos para
manejar efectivamente situaciones en su trabajo, son más vulnerables a las afectaciones en su salud mental. Esto confirma la
importancia de estas variables y, por tanto, su inminente consideración en la elaboración de programas de prevención, vigilancia e intervención de salud mental ocupacional en
Organizaciones de Servicio Humano.
Especial énfasis merecen los hallazgos en términos de la combinación variables laborales-personales, pues algunas aproximaciones dan prioridad al contexto social laboral en el proceso de
salud-enfermedad y subestiman o minimizan el papel de la
personalidad en este proceso (Noriega 2000, Friedman et al 2001)
o, por el contrario, otras propuestas maximizan el papel de las
diferencias individuales e infravaloran las del contexto (Dejours
1990). Lo encontrado en este estudio demuestra que un enfoque
que considera ambas variables (del contexto y de la persona)
puede otorgar una mayor potencia predictiva en términos de su
papel e influencia en la salud mental. Tal enfoque de interacción
entorno-persona ha sido también propuesto por otros autores
(Juárez 2004a, Kalimo et al 2002, Caplan 1998).
194
Por otro lado, y de manera inesperada, las variables del modelo
Demanda/Control/Apoyo Social de Karasek no tuvieron una
asociación significativa con la escala de Salud Mental en los
profesionales de OSH evaluados, lo que contradice los hallazgos
de otros estudios hechos fuera del país (Karasek 1990); no
obstante, confirma lo encontrado en otro estudio en México
(Cedillo 1999), donde se demostró que la inseguridad laboral fue
el estresor más nocivo para la salud psicológica en comparación
con las variables del modelo de Karasek. Tal hecho, implica que
probablemente el contexto socioeconómico y cultural influya en
la nocividad de ciertas variables, pues aunque el modelo de
Karasek considera que sus variables son “universales”, en lo que
refiere al menos a la salud mental en empleados de OSH y otros
trabajadores mexicanos, parece que son más relevantes otras
propias de nuestra historia y devenir actual, como lo es la gran
incertidumbre en la estabilidad de los empleos y la inseguridad
provocada por la situación socioeconómica y política por la que
atraviesa nuestro país, la que ciertamente no difiere considerablemente de la mayoría de los países de Latinoamérica, pero sí de
países más desarrollados, de donde se originó el modelo de
Karasek (Estados Unidos y Suecia), y donde, de acuerdo al clásico
modelo Maslow, los trabajadores podrían estar más preocupados
de necesidades y motivaciones propiamente autorrealizadoras
(autonomía en el trabajo–o latitud de decisión-), en contraste con
las básicas de seguridad (inseguridad en la conservación del
empleo).
Cabe señalar, de manera importante, que otro estudio hecho en
México con el Modelo Demanda/Control de Karasek ha mostrado
evidencias empíricas de su relación con indicadores de salud más
objetivos como la tensión arterial sistólica y diastólica (Juárez
2004b), lo que pudiera implicar su viabilidad en el caso de la
salud física o biológica, pero débil en el caso de la no menos
importante salud mental. Futuros estudios ayudarán a confirmar
estos hallazgos y definir la relevancia del modelo de Karasek con
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Artículo Original | Factores Psicosociales Relacionados con la Salud Mental
indicadores de salud biológicos y objetivos vs su debilidad con
indicadores mentales y subjetivos en trabajadores latinos.
Entre tanto, queda claro el papel primordial de la inseguridad
laboral como predictor estadístico relevante de los niveles de
salud mental aunque, en cierto sentido, podría surgir la discusión
respecto a la dirección de la relación causal inseguridad laboralsalud mental o salud mental-inseguridad laboral, y en donde un
diseño transeccional como el empleado en el presente estudio
ciertamente no podría resolver; sin embargo, autores como
Hellgren y Sverke (Hellgren y Sverke 2003) han mostrado
evidencia empírica suficiente por medio de estudios longitudinales, en donde se confirma que la inseguridad laboral antecede a
la aparición de síntomas nocivos de salud mental y no viceversa.
Finalmente, se deben señalar las limitaciones propias del diseño
del estudio, como lo es el diseño transeccional y, esencialmente,
la falta de una idónea aleatoriedad en la selección de los sujetos,
característica de los estudios sociales donde en muchas ocasiones
el acceso a la evaluación de las poblaciones es apenas permisible
y/o viable. Por ello y otras razones, es de destacar la necesidad
de continuar la investigación en el tema de factores psicosociales
y su relación con la salud en trabajadores de OSH, e incluso de
diferentes actividades laborales, en pro del desarrollo humano,
institucional, económico y, sobretodo, de calidad de vida de las
sociedades latinoamericanas.
AGRADECIMIENTOS
El autor agradece infinitamente el apoyo de las tesistas del
Proyecto Psicología del Trabajo y Salud Ocupacional de la FES
Iztacala UNAM, Ivette Hernández y Guadalupe Barragán, por el
apoyo en la recolección y captura de datos; a la Mtra. Elena
Hernández, por sus gestiones para obtener el apoyo de los
profesionales que participaron en este estudio, y a la Mtra. Leticia
Cuevas por sus valiosos comentarios al presente escrito.
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Artículo Original
Vigilancia Epidemiológica de los Factores
Psicosociales. Aproximación Conceptual
y Valorativa
EPIDEMIOLOGICAL SURVEILLANCE OF PSYCHOSOCIAL FACTORS: CONCEPTUAL AND VALUATING APPROACHS
Gloria H. Villalobos F.
Psicóloga PhD. Pontificia Universidad Javeriana Bogotá – Colombia
RESUMEN
ABSTRACT
Los factores psicosociales han cobrado especial importancia por
cuanto los estudios acerca del estrés y sus secuelas han mostrado el
crecimiento de afecciones de salud en la población y con mayor
énfasis en la trabajadora, en la que la exposición a condiciones de
laborales deteriorantes alcanza cifras que pueden catalogarse como
un problema emergente de la salud pública. La atención y la prevención de los efectos adversos del estrés ocupacional suponen su
comprensión y su abordaje bajo un modelo sistémico, que permita
dar cuenta tanto de la red de factores causales como de los impactos
tanto en el nivel subjetivo como colectivo. La Vigilancia
Epidemiológica de los factores psicosociales se vislumbra como una
alternativa que permite de forma sistemática tomar información de
las características de la organización, de la tarea del grupo social y
de las condiciones de salud de los trabajadores, a fin de realizar
acciones de intervención, que con adecuado seguimiento permitan
mostrar su impacto y den soporte a los procesos de atención y al
mismo tiempo de investigación en las cohortes ocupacionales.
Psychosocial factors have gained special importance since studies on
stress and its sequelae have shown the growth of health affections in
the population, specially in workers, whose exposure to deteriorating work conditions reaches figures that could be classified as an
emerging public health problem. Attention to and prevention of
adverse effects of occupational stress imply understanding it and
addressing it in a systemic model, which would allow to explain both
the network of causal factors and its impacts on the subjective as
well as on the collective levels. Epidemiological Surveillance of psychosocial factors appears as a systematic alternative to collect information on organization characteristics, social group task and workers health conditions, in order to develop interventions which, with
an adequate follow up, could demonstrate its impact and at the same
time provide support to the attention processes and research in occupational cohorts.
Descriptors: WORK-PSYCHOLOGY ; STRESS;QUALITY OF LIFE; EPIDEMIOLOGIC SURVEILLANCE; LATIN AMERICA.
(Villalobos G. 2004. Vigilancia epidemiológica de los factores
psicosociales. Aproximación conceptual y valorativa. Cienc Trab.
Oct-Dic; 6(14):197-201)
Descriptores: TRABAJO-PSICOLOGÍA; ESTRÉS; CALIDAD DE VIDA;
VIGILANCIA EPIDEMIOLÓGICA; AMÉRICA LATINA.
FACTORES PSICOSOCIALES
El interés por el estudio de los factores psicosociales relacionados
con el trabajo se ha ido ampliando en el curso de los últimos
años; las razones principales que están detrás de este desarrollo
son:
• El avance de las evidencias en favor de la relación saludtrabajo, y particularmente en la salud mental, dada la relevancia del clima psicosocial en el que se ejecuta el trabajo
Correspondencia:
Correspondencia:
Gloria H. Villalobos F.
Carrera 11 No. 78-22 Apto 403
Tel: (571) 3208320 extensión 5514
Fax: extensión 5523
e-mail: [email protected]
Recibido: octubre 2004 / Aprobado octubre 2004
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dado que es dominante en cuanto a la exposición en la vida
del sujeto (Karvonen 1986, citado por Román 1997).
• Los resultados de los estudios epidemiológicos, tanto los
realizados en el contexto del trabajo como de la salud
pública, han demostrado el influjo de las condiciones psicosociales propias de la vida del trabajo en el incremento de
procesos mórbidos.
• La pérdida en la calidad de vida, reportada en informes de
organismos internacionales como la CEPAL (Comisión
Económica para América Latina) (2000) que refiere 241
millones de pobres en Latinoamérica y la proporción de
población dedicada a la economía informal, que entre los
años 1990 al 2000 oscila entre el 43 y el 56%, según datos
del informe del BID y la CEPAL de los años 1998 y 2000,
respectivamente (Villalobos 2001).
• La falta de integración social y la generación de comportamientos que no se ajustan a las normas de convivencia
generan fenómenos de patología social, representados
también en las tasas de violencia, que para el caso de América
197
Artículo Original | Villalobos Gloria
Latina y el Caribe mostraba a inicios de los años 90 una tasa
de 20 homicidios por cada 100.000 habitantes, tasas que para
1994 aumentaron, aunque con gran heterogeneidad según la
región, siendo más altas en el área andina (51,9), seguida por
América Central y Caribe latino (21,1) y, en último lugar, el
Cono Sur (6,2) (CEPAL 2000, citado por Villalobos 2001).
• El incremento desmesurado del trabajo infantil, muchas veces
fomentado por la migración y el desplazamiento forzado
causado por fenómenos de violencia.
Pese a lo anterior, la importancia de las enfermedades causadas
por el estrés no se ha visto suficientemente reflejada en el desarrollo normativo de los países; así por ejemplo, en la Unión
Europea y en Estados Unidos, si bien se observa una tendencia al
reconocimiento de casos de mobbing, burnout, enfermedades
mentales y algunas cardiovasculares, tales reconocimientos
suelen hacerse luego que el trabajador ha interpuesto un proceso
judicial y ha aportado pruebas suficientes para demostrar la
presencia de condiciones de trabajo estresantes. En España y
otros países del mundo como Alemania, Suecia, Finlandia y
Noruega es posible encontrar jurisprudencia que ejemplifica la
nueva tendencia al reconocimiento del estrés laboral como causa
de padecimientos.
En Japón existe un término denominado “Karoshi” para referirse
a aquellos casos de enfermedad, suicidio o muertes inducidos por
el estrés laboral que no resulta soportable para la constitución
psíquica de un individuo. La legislación laboral y en especial la
jurisprudencia de este país asiático ha incorporando algunos
criterios que permiten el reconocimiento de indemnizaciones en
favor de la familia del trabajador que fallece de esta manera.
En Australia, la legislación prevé definiciones genéricas de las
enfermedades profesionales, contexto en el cual cualquier afección puede considerarse de origen profesional siempre que se
establezca la relación con el trabajo; es así como las demandas
por enfermedades causadas por el estrés en el trabajo representaron el 2,2% de las indemnizaciones pagadas a trabajadores
entre 1998 y 1999.
En Chile, el reconocimiento de una enfermedad como profesional
está reglamentado en el Decreto Supremo 109 del Ministerio de
Trabajo y Previsión Social, del 7 de junio de 1969. En el numeral
13 del artículo 19 se reconocen las Neurosis Profesionales incapacitantes como enfermedad profesional en "todos los trabajos
que se expongan al riesgo de tensión psíquica y se compruebe
relación de causa a efecto".
La lista de enfermedades profesionales establecida en Colombia
está compuesta por más de cuarenta patologías que se han
venido recopilando mediante resoluciones como la 1832 de 1994.
El artículo 42 de la citada resolución establece la existencia de
“patologías causadas por estrés en el trabajo: trabajos con sobrecarga cuantitativa, demasiado trabajo en relación con el tiempo
para ejecutarlo, trabajo repetitivo combinado con sobrecarga de
trabajo. Trabajos con técnicas de producción en masa, repetitivos
o monótonos, o combinados con ritmo o control impuesto por la
máquina. Trabajos por turnos, nocturno y trabajo con estresantes
físicos con efectos psicosociales, que produzcan estados de
ansiedad y depresión, infarto del miocardio y otras urgencias
198
cardiovasculares, hipertensión arterial, enfermedad acidopéptica
grave o colon irritable".
Lo anterior ha generado un movimiento importante en relación
con la búsqueda de criterios diagnósticos que permitan la calificación del origen –común o profesional– de tales patologías. Los
datos aportados por 10 Administradoras de Riesgos Profesionales
en Colombia, correspondientes a los casos de enfermedades
profesionales generadas por estrés en el trabajo, correspondientes
al periodo 1994–2002 (primer trimestre), muestran 48 eventos
calificados, de los cuales 44 (91%) fueron trabajadores hombres
y 4 (9%) mujeres. El 40% de los eventos ocurrieron en el personal
de servicios de seguridad del Estado (prisiones e inteligencia
civil), le siguen trabajadores de distintas empresas de servicios
(financiero, energía, educación, comunicación, servicios temporales y vigilancia), que cobijan el 33% de los casos. En cuanto a
las patologías calificadas, llama la atención que en el 40% de los
casos se determinó como estrés prostraumático secundario a
explosión y accidente de trabajo. Los demás casos incluyeron
episodios de depresión (6%), trastornos secundarios a secuestros
(20%) y crisis de ansiedad (30%) (Villalobos 2004).
Puede afirmarse que la existencia del estrés no puede ser desconocida; no obstante, la decisión de incluir una enfermedad
causada por el mismo a una lista de enfermedades profesionales
implica disponer de elementos científicos que respalden tal decisión y de un protocolo que facilite este proceso, como el recientemente publicado por el Ministerio de la Protección Social de
Colombia (2004).
La investigación en materia de factores psicosociales supone el
acercamiento a un conjunto de modelos diversos en sus enfoques, pero similares muchos de ellos en la concepción de la
realidad, extendida más allá de las fronteras de los sitios de
trabajo para comprender la situación del “hombre” como ser
integral e inmerso en una realidad histórica, determinada por las
condiciones sociales y los medios de producción. Cabe, sin
embargo, afirmar que se encuentran mayores desarrollos en
modelos de aproximación al estrés que en concepciones mismas
de los factores psicosociales.
Román (1996) hace un interesante recorrido histórico sobre los
antecedentes de la aproximación psicosocial del trabajo. Inicia
citando la obra del médico y filósofo español Juan de Dios Huarte
(1575), quien resaltó la importancia de la coincidencia de los
“talentos individuales y los oficios correspondientes”. Engels, en
su obra “La situación de la clase obrera en Inglaterra” (1845),
llama la atención sobre las condiciones infrahumanas a las que
eran sometidos los obreros, a cambio de incrementar su productividad y deteriorar su salud.
La vertiente psiquiátrica ha hecho aportes importantes al campo
de los factores psicosociales (M. Sherman, McLean, Halliday) y La
IX Revisión de la Clasificación Internacional de Enfermedades
(1975), con la Clasificación Suplementaria V, recoge otras clases
de motivos de consulta psiquiátrica adicionales a las entidades
nosológicas tradicionales, denominadas en el apartado V62 como
“Otras circunstancias psicosociales”, entre las que menciona:
“efectos adversos del trabajo”, “insatisfacción con el trabajo”,
“desmotivación con el trabajo” y otros (Román 1996).
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Artículo Original | Vigilancia Epidemiológica de los Factores Psicosociales
Los organismos internacionales también han hecho su aporte al
estudio de los factores psicosociales (Román 1996). En 1950, la
Primera Reunión del Comité Mixto de la Organización
Internacional del Trabajo (OIT) y de la Organización Mundial de
la Salud (OMS) sobre Medicina del Trabajo, significó la importancia de los factores psicosociales. En 1982 se realiza un estudio
de la Organización Mundial de la Salud sobre los factores psicosociales y la prevención de accidentes y en 1984 se publica el
documento "Identificación y control de los factores psicosociales
nocivos en el trabajo", que reúne la experiencia y conocimientos
adquiridos hasta ese momento acerca de la identificación,
evaluación y efectos de los factores psicosociales, y sugiere
acciones de promoción de la salud y el bienestar de los trabajadores.
El concepto de estrés ha tenido importante desarrollo. Desde su
aproximación biológica y como mecanismo adaptativo de Seyle,
hasta otros como el modelo de demanda-control de Karasek y el
de esfuerzo-recompensa de Siegrist. Cox y Mckay (1981, citados
por Peiró et. al. 1994) realizaron una clasificación de las definiciones de estrés, distinguiendo entre las que conceptualizan el
estrés como estímulo, como respuesta, como percepción o como
interacción persona-ambiente.
• En el primer grupo, el estrés es definido como fuerzas
externas al individuo que producen efectos transitorios o
permanentes.
• En el segundo grupo, el estrés es definido como una serie de
respuestas del individuo (sean fisiológicas o psicológicas)
ante determinados estímulos o "estresores" (Selye, 1956;
Matteson e Ivancevich, 1987).
• Un tercer grupo de definiciones caracterizan el estrés por la
existencia de procesos perceptuales y cognitivos que
producen secuelas físicas o psicológicas: Lazarus (1966).
La acción de los factores psicosociales incluye lo relativo a sus
efectos nocivos y positivos, pero requiere una aproximación
denominada comúnmente como “epidemiología social”, que
implica considerar los aspectos macro y microsociales y los individuales, para avanzar en la construcción de un modelo, aún en
elaboración, que permita la aproximación cuantitativa y la cualitativa de los fenómenos de salud-enfermedad, en un contexto
que dé cuenta de la realidad histórica. Tal concepción permite
ampliar la búsqueda de los factores etiológicos de la enfermedad,
dejando de lado la antigua visión de la “etiología específica”, que
buscaba una relación biunívoca entre factor de riesgo y enfermedad, permitiendo así la consideración de lo “psicosocial” como
factor influyente en el proceso de salud-enfermedad.
Coherente con lo anterior, los factores de riesgo psicosocial
pueden entenderse como la “condición o condiciones del individuo, del medio extralaboral o del medio laboral, que bajo determinadas condiciones de intensidad y tiempo de exposición
generan efectos negativos en el trabajador o trabajadores, en la
organización y en los grupos y, por último, producen estrés, el
cual tiene efectos a nivel emocional, cognoscitivo, del comportamiento social y laboral y fisiológico” (Villalobos 1997).
En la misma línea de la definición anterior, el “modelo dinámico
de factores de riesgo psicosocial” contempla sus componentes
agrupados en “fuentes de riesgo”, de los cuales se derivan
Ciencia & Trabajo | AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 | www.cienciaytrabajo.cl
subfuentes que a su vez dan origen a los factores de riesgo. Las
fuentes se describen como condiciones propias del trabajo, del
individuo o del entorno. Los factores de riesgo se describen como
una condición lesiva que tiene su origen en las distintas fuentes
(Villalobos 1997).
La transformación de los factores psicosociales en factores de riesgo
supone la consideración de varios de los siguientes criterios: la
duración o tiempo de exposición a la condición que se percibe riesgosa; la intensidad del factor de riesgo; la frecuencia de presentación; y, el potencial dañino o grado en que un factor de riesgo es
capaz de producir efectos negativos en la salud y el bienestar.
Según lo anterior pueden presentarse factores de riesgo psicosocial de diverso tipo (Aguayo y Lama 1996, citado por Villalobos
1999):
a) Factores de riesgo que producen efectos agudos y que se
caracterizan porque tienen un tiempo de exposición corto,
escasa frecuencia de ocurrencia y alta intensidad.
b) Factores de riesgo que producen efectos crónicos, que se
caracterizan porque tienen alta frecuencia de ocurrencia,
tiempo de exposición e intensidad variables.
c) Condiciones cotidianas que, aunque generan efectos de estrés
leves, no pueden considerarse como factores de riesgo psicosocial, porque a pesar de presentarse con alta frecuencia, el
tiempo de exposición y la intensidad son bajas.
VIGILANCIA EPIDEMIOLÓGICA DE LOS FACTORES
PSICOSOCIALES
El análisis de los factores de riesgo psicosocial presenta dos alternativas: Primero, su identificación e intervención para propiciar
bienestar en la población de trabajadores. En segundo lugar, su
identificación e intervención, no sólo para mejorar las condiciones de bienestar, sino para prevenir la enfermedad derivada de
los mismos. Bajo este escenario, se requiere el establecimiento de
un sistema de vigilancia epidemiológica, que permita monitorear
el factor de riesgo en función de prevenir la ocurrencia de patologías o, en su defecto, para disponer la rehabilitación.
Los beneficios de la vigilancia epidemiológica consideran el conocimiento de la distribución de la enfermedad en una población y las
que condicionan su presentación, así como el aporte de datos para
investigaciones de tipo epidemiológico, que permitan establecer
asociaciones causales y por tanto aporten elementos para la definición de políticas de prevención y control. Finalmente, la vigilancia
epidemiológica facilita el seguimiento a las acciones de intervención y permite evaluar el impacto de la prevención, así como definir
necesidades de investigación en salud.
Para el desarrollo de un sistema de vigilancia epidemiológica de
factores de riesgo psicosocial se requiere tener claramente definidos
sus objetivos y procedimientos, los criterios para clasificar los casos
y para identificar y valorar los factores de riesgo, todo lo cual debe
estar respaldado por un modelo teórico que dé el marco de acción
a la intervención. En segundo lugar, debe disponerse de un sistema
de información, que incluya las herramientas para la recolección, el
procesamiento de los datos, la toma de decisiones y el reporte de
199
Artículo Original | Villalobos Gloria
casos. Un tercer componente del sistema de vigilancia son los criterios y procedimientos para su evaluación.
tivos, evitando la mezcla de los dos, pues cada uno tiene sus propios
aportes a la estimación de la realidad psicosocial.
Para lograr los fines perseguidos con la vigilancia epidemiológica
se requiere la definición de recursos y roles para la administración del sistema y para la planeación de actividades, tanto de
medición como de intervención. Finalmente, el sistema de vigilancia epidemiológica debe estar integrado a la operación de la
empresa y debe ser capaz de aportar valor a los objetivos estratégicos de la misma.
Para complementar la información “subjetiva” que aportan los
trabajadores, se utilizan otras técnicas como los cuestionarios, los
grupos de discusión y la entrevista, que permiten la ampliación
de información y también la constatación de aspectos significativos para el grupo con las opiniones individuales y con los datos
“objetivos” referidos por el experto. También se emplean instrumentos complementarios, entre ellos, los cuestionarios de clima
organizacional, de satisfacción en el trabajo, de estilos de afrontamiento, de patrones de comportamiento, de experiencias
recientes y eventos vitales.
EVALUACIÓN DE LOS FACTORES PSICOSOCIALES Y
SUS EFECTOS
Cuando se habla de evaluación de los riesgos psicosociales se parte
de confusiones en el objeto mismo de medición, que van desde los
síntomas del estrés hasta la identificación de los estresores. Para la
medición es necesario diseñar una metodología de evaluación, lo
cual es muy diferente al simple uso de instrumentos. La metodología contempla con claridad la interrelación entre los instrumentos
y permite crear un modelo de análisis de los datos.
Cirujano (2000) define la evaluación de riesgos laborales como
“El proceso dirigido a estimar la magnitud de aquellos riegos que
no hayan podido evitarse, obteniendo la información necesaria
para que el empresario esté en condiciones de tomar una decisión
apropiada sobre la necesidad de adoptar medidas preventivas y,
en el caso, sobre el tipo de medidas que deben adoptarse". Esto
implica conocer y valorar los aspectos que influyen en la salud
de los trabajadores antes de tomar acciones de intervención.
La medición supone iniciar con un esfuerzo para definir aquello
que se quiere medir, así como el objetivo de la evaluación, que
puede ser la prevención, la identificación de consecuencias o la
intervención misma.
Laurell (1991) plantea que el estudio del proceso laboral se debe
hacer a través de la observación directa. Su finalidad es validar lo
vertido por los trabajadores en otros instrumentos aplicados a ellos.
A su vez, otras fuentes de datos para identificar el perfil de morbilidad de un colectivo de trabajadores son los llamados “exámenes
médicos periódicos” y sus análisis en relación con la antigüedad y
el área de trabajo. La evaluación de los riesgos psicosociales supone
entonces un proceso de consolidación de la información tomada a
través del análisis de los factores de riesgo (datos “objetivos” de las
condiciones de trabajo), los resultados de los indicadores de riesgo
(accidentes, enfermedades, quejas, resultados de las encuestas, etc.)
y la aplicación de los criterios de evaluación específicos.
Algunos errores que pueden cometerse al recopilar información de
los factores psicosociales derivan de la expectativa de intervención
individual, la falta de interés legítimo de la dirección de la empresa
en la atención de los factores psicosociales y la confusión de datos
“objetivos” con los “subjetivos” de los informantes. El desconocer
los datos subjetivos es otro error de igual magnitud a los ya
mencionados, por cuanto el estrés y los factores causales no pueden
estimarse separadamente de la percepción del sujeto que los padece.
La evaluación implica entonces considerar datos objetivos y subje-
200
De otra parte, la evaluación de las reacciones de estrés implica
considerar criterios clínicos, biológicos, electrofisiológicos y
funcionales (Martínez 2001). La evaluación clínica se hace
mediante entrevista personal y permite detectar formas de reacción
ante el estrés. La evaluación biológica se basa en la determinación
analítica de ciertas hormonas y sustancias propias de las reacciones de estrés, así como en la posible valoración de la función
inmune. La evaluación electrofisiológica consiste en el registro de
la actividad eléctrica generada en diversos procesos fisiológicos. La
evaluación funcional se basa, fundamentalmente, en el estudio de
la respuesta cardiovascular (frecuencia cardiaca, tensión arterial y
volumen del pulso periférico) y respiratoria (volumen corriente,
frecuencia respiratoria, resistencia de las vías aéreas).
Para iniciar la evaluación de riesgos psicosociales se requiere un
buen conocimiento del entorno de la organización, la actividad
económica, la estructura, la distribución general de cargas de
trabajo, las características de la cultura, las fortalezas y problemáticas más frecuentes. También se requiere conocer aspectos de
la distribución demográfica de la población de trabajadores, los
riesgos ocupacionales más importantes, las acciones de intervención de factores psicosociales que se hayan hecho previamente, y
las expectativas y necesidades que mueven la evaluación de las
condiciones de trabajo desde el enfoque psicosocial.
Un segundo momento implica conocer la información de la
morbilidad, tanto la referente a los accidentes como a las enfermedades (comunes y profesionales). Otras fuentes importantes de
datos son los procesos disciplinarios, las quejas (de los empleados
y los clientes), la rotación y los resultados mismos de productividad. Los datos anteriores requieren de un análisis secundario
que permita formular hipótesis explicativas que puedan indicar
la presencia de condiciones psicosociales riesgosas o protectoras.
El tercer paso es la evaluación de condiciones de trabajo, tarea
en la cual es útil guiarse por la organización de procesos productivos y dentro de ellos analizar las condiciones de cada cargo.
Generalmente, para estos fines se utiliza una guía de análisis de
condiciones de trabajo, que diligencia un experto con datos recogidos mediante observación, entrevistas y consulta de información complementaria.
La comparación de los factores de riesgo (tanto los identificados
con el análisis de condiciones de trabajo como por la evaluación
subjetiva de los trabajadores), y la información de la morbilidad,
la de otros indicadores de presencia de riesgo y la percepción
subjetiva de efectos, permite establecer prioridades y crear grupos
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Artículo Original | Vigilancia Epidemiológica de los Factores Psicosociales
homogéneos de vigilancia según riesgo, así como diseñar
acciones de intervención focalizadas.
La última fase se refiere al uso de técnicas estadísticas para el
análisis de los datos, que no sólo enriquece la etapa de evaluación, sino que le da sentido. Bajo esta premisa se utilizan dos
tipos de análisis: estadístico descriptivo y epidemiológico
(ocurrencia de enfermedades, asociación y significancia estadística). Se complementa el análisis mediante la comparación entre
grupos específicos (edad, género, sección, etc.). Son útiles otras
pruebas estadísticas según el objetivo previsto con los datos, por
ejemplo, la correlación entre resultados de evaluación de factores
psicosociales y de efectos, y la comparación de resultados antes
y después de la intervención.
Una vez valorados los factores de riesgo y sus efectos, se procede
a la intervención, pero para estimar la importancia de los factores
de riesgo psicosocial se consideran criterios similares a los usados
en la valoración de otros factores de riesgo: número de trabajadores expuestos, frecuencia de exposición, intensidad y potencial
dañino (probabilidad de producción de efectos adversos).
EFECTOS DE LOS FACTORES DE RIESGO PSICOSOCIAL
Los efectos de los factores de riesgo psicosocial son diversos y
dependen de las características de las personas, de la apreciación
de la situación y de los mecanismos de resistencia, así como de
las características mismas del factor de riesgo.
En general se pueden identificar dos tipos de respuestas ante los
factores psicosociales:
• Las respuestas de acomodación pasiva, que conducen a una
reducción del interés por participar y cambiar la realidad,
sumiendo al individuo en un ciclo de empobrecimiento
personal que limita su capacidad de lucha.
• Las respuestas de estrés, que tienen componentes subjetivos,
fisiológicos y motores.
Los sistemas orgánicos iniciales y principales que se activan
como respuesta al estrés son el sistema nervioso y el sistema
endocrino. Ambos se conocen como el sistema neuro-endocrino.
Otros, como el inmunológico, el cardiovascular y el gastrointestinal, se involucran y son eventualmente afectados por la
presencia de las reacciones de estrés.
Según Martínez (2001), el estrés puede producir enfermedad a
través de dos vías: estados afectivos negativos (ansiedad, depresión), consecuencia del estrés mismo, que actúan mediante
procesos biológicos hormonales o conductas de riesgo. Y
mediante respuestas de coping o afrontamiento que pueden
llevar a conductas de riesgo (como fumar, ingerir alcohol) y a
respuestas biológicas hormonales. De otra parte, el estrés puede
convertirse en generador de conductas de enfermedad por el
aumento de activación que origina, a través de la interpretación
que la persona con estrés hace de sensaciones que no tienen nada
que ver con los síntomas. Finalmente, el estrés podría conducir a
la persona a diversos comportamientos en relación con el proceso
de enfermedad, tales como consultas médicas repetidas.
La intervención incluye la prevención primaria y secundaria de
la enfermedad, así como la rehabilitación de las secuelas. En este
sentido, Glass (2000) menciona cinco tipos de intervención: las
de cambio comportamental, las de apoyo social, las de manejo de
la enfermedad, las de alivio del distress y las de mejoramiento del
control y la eficacia personal.
El grupo más grande de estudios de intervención psicosocial se
ha dirigido hacia la modificación de comportamientos específicos, que representan factores de riesgo en el surgimiento o recurrencia de una enfermedad.
La acción del profesional de la Salud Ocupacional se ve influida
por la demanda creciente que representa la identificación, valoración y atención de los factores psicosociales del trabajo, como
una forma de prevenir y controlar las innumerables manifestaciones del estrés, que cada día toman mayor relevancia como
fenómeno no sólo ocupacional sino también de Salud Pública.
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riesgo psicosocial en el trabajo. La Habana, Cuba: Instituto Superior de
Ciencias Médicas de La Habana, Instituto Nacional de Salud de los
Trabajadores.
201
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Artículo de Educación
Metodología de la Investigación Científica.
Capítulo IV
SCIENTIFIC RESEARCH METHODOLOGY. CHAPTER IV
Gustavo Contreras Tudela MD
Especialista en Enfermedades Respiratorias y Ocupacionales. Director Ejecutivo de la Fundación Científica y Tecnológica ACHS.
RESUMEN
ABSTRACT
En el cuarto y último capítulo de esta serie dedicada a comentar los
aspectos más relevantes del proceso de investigación científica, se
exponen brevemente los elementos más significativos de la comunicación de resultados.
In the fourth and final chapter of this series focused on the most
important aspects of the scientific research process, result communication is reviewed briefly.
(Contreras G. 2004. Metodología de la Investigación Científica.
Capítulo IV. Cienc Trab. Oct-Dic 6 (14): 209–211)
Descriptors: RESEARCH, COMMUNICATION; EDITORIAL POLICIES;
PERIODICALS.
Descriptores: INVESTIGACIÓN; COMUNICACIÓN; POLÍTICAS EDITORIALES; PUBLICACIONES PERIÓDICAS.
INTRODUCCIÓN
Éste es el último capítulo de la serie dedicada a la muy breve
revisión de los aspectos fundamentales de la metodología de la
investigación. En esta oportunidad se revisará lo relativo a la
comunicación de resultados (figura 1).
Figura 1.
Comunicación de Resultados
Pregunta de Investigación
Diseño del Estudio
COMUNICACIÓN DE RESULTADOS
La comunicación de resultados se caracteriza por dos aspectos
fundamentales: la forma y el contenido.
El primer aspecto dice relación con quién recibirá el documento
con los resultados de la investigación. En el ámbito de lo puramente científico, el documento es enviado a una revista científica, a la institución que financió la investigación o a una institución académica. En todos estos casos, existirá un formato en el
cual se debe presentar los resultados.
Correspondencia:
Gustavo R. Contreras
Fundación Científica y Tecnológica
Asociación Chilena de Seguridad.
Jofré 039, oficina 31, Providencia, Santiago, Chile.
Tel: (56-2) 6853234 • Fax: (56-2) 6853192
e-mail: [email protected]
Recibido: diciembre 2004 / Aceptado: diciembre 2004
Ciencia & Trabajo | AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 | www.cienciaytrabajo.cl
Evaluación por Pares
Ejecución del Estudio
Comunicación de Resultados
Por ejemplo, la Fundación Científica y Tecnológica (FUCYT)
requiere que aquellos investigadores que han recibido financiamiento de ésta para ejecutar su proyecto de investigación comuniquen sus resultados en un “informe final”, el que debe contener
las siguientes secciones:
• Título e investigadores
• Resumen (máximo 200 palabras)
• Introducción
• Objetivos, hipótesis
• Método
209
Artículo de Educación | Contreras Gustavo
• Resultados
• Discusión
• Bibliografía
El documento debe ser escrito en formato Microsoft Word 97 o
superior con letra Times New Roman tamaño 14, espaciado
normal, y deberá ser acompañado por todas las bases de datos
que haya generado el proyecto. Exige, además, que todos los
documentos sean enviados en formato electrónico.
Las instituciones académicas suelen requerir mayor detalle en la
comunicación de resultados, por lo que la lista de secciones que
debe contener el informe final es mucho más larga.
En el caso de las revistas científicas, el investigador debe revisar
cuidadosamente la sección “Instrucciones a los autores”, ya que
allí se detalla cada aspecto del formato que la revista exige en sus
publicaciones. En cualquiera de los casos mencionados, el investigador deberá ser extremadamente cuidadoso al seguir las
instrucciones de formato ya que, en especial con las revistas
científicas, errores en la confección del documento determinan
rechazo automático del mismo. En la mayor parte de las revistas
científicas, la revisión de formato es efectuada por personal no
científico, el que no presta atención al contenido del artículo. Así,
un muy buen artículo científico será rechazado si presenta fallas
de formato.
El aspecto técnico, si bien más importante que el formal, siempre
es considerado en segundo lugar. Paradójicamente, si la revista
no cuenta con un comité editorial de científicos bien entrenados,
será posible publicar un artículo formalmente bien escrito, pero
de pobre contenido científico. Este fenómeno es más frecuente de
lo esperado, y es por ello que se ha creado una disciplina o estrategia conocida como “lectura crítica de la literatura”, que permite
a los lectores identificar los trabajos científicos que no presentan
errores técnicos (lo que garantiza la utilidad de su contenido).
Un buen ejemplo del ejercicio de análisis crítico de la literatura
puede ser revisado por el lector interesado en la publicación “Work
Related Musculoskeletal Disorders” publicado por el National
Institute for Occupational Safety and Health (NIOSH) de los Estados
Unidos en 1997 (http://www.cdc.gov/niosh/muskdsfs.html). La revisión de este documento pone muy de manifiesto la enorme abundancia de trabajos “científicos” publicados en revistas de circulación internacional, que no constituyen una real contribución a la
ciencia.
En términos generales, la comunicación de resultados debe considerar al menos seis aspectos.
El documento debe comenzar por presentar en forma muy
sucinta, pero estrictamente fundamentada, las razones por las
cuales los investigadores realizaron el proyecto cuyos resultados
están comunicando. En general, esta sección se llama “introducción” y su longitud debe ser lo más corta posible, en general no
más de dos páginas del documento original (el documento publicado suele ser considerablemente más corto que el original, dado
que la revista científica utiliza tamaños de letras y espaciados
muy compactos). En la introducción, el o los investigadores
deben convencer al lector de la importancia de responder la
210
pregunta de investigación en los términos que fueron planteados
en el proyecto original. Generalmente, el objetivo principal y los
específicos son incluidos en la introducción. Si el o los autores
del artículo no ofrecen buen sostén a sus argumentos, el lector
no continuará leyendo el artículo. Un buen ejemplo de lo ya
señalado se encuentra en Busco (2004).
El paso siguiente es presentar el diseño y método usado en el
estudio. Ambos suelen incluirse en la sección “método”. En ésta,
los investigadores deben entregar la mayor cantidad posible de
detalles respecto de cómo se efectuó la investigación; incluso es
necesario indicar la marca y procedencia de los instrumentos
utilizados. Lo que los autores del artículo deben tener en mente
al escribir esta sección es que, si otro científico desea replicar el
estudio, debe poder hacerlo. Si se parte de la premisa de que un
artículo científico debe ser una contribución al conocimiento, es
absolutamente fundamental que el experimento o la observación
pueda ser replicada. Ningún fenómeno científico pasa a ser parte
del legado de la humanidad si no ha sido replicado por más de
un equipo de investigadores. Incluso en la física, donde los fenómenos estudiados suelen estar fuera de la escala humana, las
teorías no son aceptadas hasta que son probadas de alguna
manera. En el artículo de Busco (Busco 2004), se puede apreciar
que la sección “método” está diseñada con el objeto de que el
trabajo pueda ser replicado por otros autores.
Una vez que los investigadores han convencido a sus lectores de
que la pregunta de investigación es relevante y que el diseño de
estudio ha sido el adecuado, corresponde presentar los resultados.
Sin dudas que ésta es la sección más difícil de sistematizar ya que
la naturaleza de los resultados es muy variada; sin embargo, unas
pocas reglas básicas aplican a todos los estudios. Una descripción
general de las características de los sujetos de estudio o de las
unidades de análisis es siempre recomendable. Esta información
es relevante, ya que el o los investigadores deben demostrar que
lo que se procuró realizar (y que fue descrito en la sección
método), se logró. No es infrecuente que una investigación
proponga estudiar un grupo determinado de personas, pero en la
práctica termine comunicando los resultados de un grupo menor
y desafortunadamente insuficiente de casos. Si esto ocurre, lo
esperable es que el artículo no sea publicado por una revista científica de buen nivel, pero la realidad muestra que ello no es así.
Otro aspecto importante en la comunicación de resultados es la
claridad de los mismos. Los autores, al momento de escribir su
artículo, deben mantener siempre presente que su investigación
tiene una pregunta traducida en objetivos generales y específicos,
los que deben ser respondidos rápidamente en los resultados. El
texto y las figuras deben complementarse en la entrega de información que responda las inquietudes planteadas en la introducción. Las imágenes suelen comunicar mucha más información
que las palabras, por lo que ellas deben ser usadas con cuidado.
La información de las figuras debe ser clara y precisa. Si la figura
debe ser explicada en detalle en el texto, es recomendable evaluar
si la figura debe ser modificada o incluso eliminada. En el artículo de Busco 2004, los autores decidieron generar una figura
(figura 7 del artículo) que resume todos los resultados del estudio
y permite generar la conclusión de que uno de los laboratorios es
el más preciso y exacto. Podrá observarse que los autores no
describen la figura y que ésta efectivamente contiene mucha
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Artículo de Educación | Metodología de la Investigación Científica
Figura 2.
Reproducción del Gráfico 7 del Artículo de Busco et al 2004
sus deducciones con lo efectivamente publicado por Busco y
colaboradores.
Gráfico 7. Representación Gráfica de la Precisión y Exactitud de las
Mediciones de Arsénico en Orina para los Tres Laboratorios
Otro aspecto relevante de la comunicación de resultados es
considerar las posibles fuentes de error, ya que algunos resultados pueden ser producidos sólo por azar o estar fundados sobre
errores. En la sección “resultados”, el o los autores del artículo
deben aportar la información necesaria para que el lector pueda
obtener sus propias conclusiones.
La penúltima sección de un artículo científico es la “discusión”.
En ella, los autores del trabajo comentarán sus resultados, las
implicancias que ellos tienen y las futuras investigaciones que se
requerirán para resolver las preguntas que no hayan sido
respondidas por el estudio actual. Esta sección no debe ser usada
sólo para describir los resultados del estudio, ya que ello se hizo
en la sección anterior. Los resultados deben ser comentados
buscando destacar aquellos hechos que los autores consideran
más relevantes y que responden las preguntas originales del
estudio.
La última sección del artículo es la “bibliografía” o “referencias”,
donde el o los autores del trabajo científico listan, en el formato
requerido por la revista, toda la literatura que sustenta las afirmaciones u observaciones usadas en todas las secciones del artículo. El análisis de la literatura usada por los investigadores
ayuda al lector a formarse una idea de lo detallada y actualizada
que es la información usada en la investigación, confiriéndole
mayor o menor credibilidad a los resultados.
CIERRE
información. Con fines didácticos, la figura mencionada se reproduce en este artículo (figura 2) para que el lector trate de deducir,
a partir de ella, cuál fue el diseño del estudio y cuáles sus resultados. Una vez hecho el análisis, se invita al lector a comparar
Al finalizar esta serie de artículos sobre metodología de la investigación, los autores reiteran que su propósito no fue realizar
una revisión exhaustiva del tema, sino más bien aportar una
guía rápida y basada en la experiencia de los autores sobre este
tema.
REFERENCIAS
Busco I, Cumsille F, Contreras G. 2004. Determinación de Arsénico Total en
Orina en Chile: Comparación de Laboratorios. Cienc Trab. ene.mar.;6(11):28-36.
Ciencia & Trabajo | AÑO 6 | NÚMERO 14 | OCTUBRE/DICIEMBRE 2004 | www.cienciaytrabajo.cl
National Institute for Occupational Safety and Health. 1997. Work Related
Musculoskeletal Disorders. USA: NIOSH. Disponible en Internet:
http://www.cdc.gov/niosh/muskdsfs.html.
211
Resúmenes
Resúmenes de Trabajos Presentados
en el Encuentro Regional Latinoamericano
Formación e Investigación Internacional
en Salud Ambiental y Ocupacional
INTERNATIONAL TRAINING AND RESEARCH IN ENVIRONMENTAL AND OCCUPATIONAL HEALTH (ITREOH)
PARTE II
Entre el 9 y 11 de agosto de este año, los centros participantes del programa de Formación e Investigación
Internacional en Salud Ambiental y Ocupacional (ITREOH), financiado por la Fundación Fogarty de Estados Unidos,
se reunieron en Santiago de Chile para compartir las experiencias de los investigadores latinoamericanos beneficiados por este programa. En este número de C&T, Ciencia y Trabajo, se incluyen los últimos 15 resúmenes de este
encuentro.
Efectos en la Salud de Niños Expuestos a Arsénico,
Plomo y Cadmio en la Ciudad de San Luis Potosí,
México
Presentador: Jacqueline Calderón
Autores adicionales: Leticia Carrizales, Fernando Díaz-Barriga
Desde 1998, varios estudios han mostrado exposición a arsénico
(As), plomo (Pb) y cadmio (Cd) en niños que viven alrededor de un
complejo minero-metalúrgico ubicado en San Luis Potosí, México.
Evaluamos los efectos de esta mezcla (As, Pb y Cd) en el sistema
nervioso central (SNC) y en el sistema nervioso periférico (SNP)
teniendo en consideración el nivel nutricional de los niños que
vivían en dos áreas: 1) Morales, un área urbana a 1,5 Km del lugar
de fundición y 2) G.I. Martínez, un área urbana localizada a 7 Km
del lugar de fundición y ubicada contra los vientos reinantes. El
plomo fue medido en la sangre (Pb-S), el arsénico en la orina (AsO) y el cadmio en el pelo (Cd-P). Todos los análisis se hicieron por
medio de espectrometría de absorción atómica en horno de grafito
o por generación de hidruro. Se obtuvo saturación de transferencia (ST) y medidas antropométricas. El SNC fue evaluado por
medio de la Escala de Inteligencia de Wechsler para Niños Versión
Revisada para México (WISC-RM) y el Test de Rendimiento
Continuo (TRC). También se midieron los Potenciales Auditivos
214
Evocados de Tronco-encéfalo (PAET) y la Velocidad de
Conducción Nerviosa (VCN). En los niños de la zona de Morales,
el nivel medio de arsénico en la orina (As-O) fue de 62,9 + 0,03
mg As/g creatinina; el nivel medio de plomo en la sangre (Pb-S)
fue de 8,9 + 0,03 y el nivel medio de cadmio en el pelo (Cd-P)
fue de 0,40 + 0,35; mientras que para los niños provenientes del
área de G.I. Martínez el nivel medio de As-O fue de 40,2 + 0,003
mg As/g creatinina; el del Pb-S fue de 9,7 + 0,03 y el del Cd-P
de 0,17 + 0,01. Después de controlar por confundentes significativos, el As-O fue inversamente asociado con resultados del C.I.
para los niños de Morales, mientras que el Pb-S se correlacionó
inversamente con los resultados de atención en ambas poblaciones. Los resultados sugieren que el plomo en niveles medios
bajo 10 mg/dL afecta el proceso de atención y el arsénico puede
disminuir las capacidades verbales en estos niños. Después de
este estudio, se inició un programa con el objeto de reducir la
exposición de estos niños.
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Resúmenes | Ciencia & Trabajo
Globalización y la Transferencia de la Industria
Peligrosa: El Caso del Asbesto en México, 1979-2000
Presentador: Guadalupe Aguilar-Madrid
Autores adicionales: Cuauhtémoc A. Juárez-Pérez, Steven Markowitz, Mauricio Hernández-Ávila, Francisco Raúl Sánchez
Román, Juan Humberto Vázquez Grameix.
Antecedentes: El uso del asbesto y la exposición del trabajador
persiste en países en desarrollo tales como México. La enfermedad relacionada con el asbesto no ha sido hasta ahora bien
documentada en Latinoamérica.
Objetivos: Este estudio intenta cuantificar el uso del asbesto en
México en la década pasada y evaluar la información disponible
sobre mortalidad a causa del mesotelioma maligno de la pleura
en México entre los años 1979 y 2000.
Metodología: Los datos de mortalidad fueron analizados a partir
de las bases de datos secundarias provenientes del Sistema de
Seguridad Social Mexicano y del Ministerio de Salud. Los datos
sobre importación y exportación de asbesto en México se obtuvieron del Ministerio de Comercio y de la Cámara de Comercio y
Desarrollo Industrial de México.
Resultados: Las tasas de muertes debido al mesotelioma pleural
han aumentado en forma significativa en las últimas dos
décadas. Aunque la importación de asbesto ha bajado en la
última década, el número de productos mexicanos que lo
contienen se ha triplicado en el mismo período. La exportación a
Centro América de productos mexicanos que contienen asbesto
ha crecido rápidamente en los últimos 10 años.
Conclusiones: El uso de asbesto en México continúa en forma
considerable y ha experimentado un aumento significativo en la
tasa de mortalidad relacionada con el asbesto, el mesotelioma
maligno de la pleura. Debido a las multifacéticas limitaciones en
el control de las exposiciones peligrosas en el trabajo en México,
la prohibición al asbesto es el medio más factible para limitar
una epidemia de enfermedad relacionada con el asbesto en
México.
Prácticas de Sustentabilidad Realizadas por la Industria
Manufacturera en México: Un Estudio de Caso en la
Ciudad de Hermosillo y en la Ciudad Fronteriza de
Nogales, Sonora, México
Presentador: Nora Munguia.
Autores adicionales: Luis Eduardo Velásquez Contreras, Alberto Platt Carrillo, Jorge Taddei Bringas
Las maquiladoras hicieron su aparición en México hace aproximadamente tres décadas atrás como una manera de impulsar el
desarrollo económico y disminuir el desempleo, pero ha
surgido mucha inquietud sobre las prácticas en salud ocupacional y ambiental en este tipo de industria.
La finalidad de esta presentación es identificar las prácticas
divergentes en prevención de la contaminación, seguridad y
salud ocupacional emprendida por la administración de las
maquiladoras que participan en este estudio para ser capaces de
producir información útil para facilitar la adopción de estrategias de producción sustentable para el manejo responsable de
productos, procesos y operaciones en la industria maquiladora.
Esto no es un estudio epidemiológico que compara dos plantas
en dos ciudades diferentes. Lo que el proyecto está investigando es cómo las políticas y estructuras organizacionales y
resultados en salud ambiental y ocupacional son manejadas en
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la industria maquiladora de un sector (la industria electrónica).
La calidad del manejo ocupacional y ambiental es comparada
en dos zonas geográficas (Nogales, en la frontera, y Hermosillo,
en el interior). Para investigar las políticas de las administraciones, tres estudios de casos fueron seleccionados en cada
ciudad dentro del mismo sector industrial.
Los resultados muestran la calidad relativa de las políticas
ocupacionales (Evaluación OSHA PEP) y ambientales (índice de
producción más limpia) de cada empresa y dan a conocer los
obstáculos y motivaciones que determinan tales políticas y
resultados.
La investigación no está dirigida sólo a los resultados habituales en el campo laboral y ambiental, sino que también al
contexto económico y social de la industria. Esto incluye temas
financieros, el trabajo de la mujer y sustentabilidad, además de
indicadores ambientales y ocupacionales.
215
Resúmenes | Ciencia & Trabajo
Prevalencia de Asma Relacionada a la Densidad del
Tráfico en Escolares en el Norte de Lima, Perú
Presentador: Luz A. Carbajal Arroyo
Autores adicionales: Albino Barraza-Villarreal, Rubén Durand Pardo, Hortensia Moreno, Rocío Espinoza, Pascual Chiarella,
Isabelle Romieu
Objetivos: Determinar la prevalencia de asma y los principales
factores de riesgo asociados definidos por la densidad del
tráfico en estudiantes cuyas edades fluctúan entre los 6-7 años
y entre los 13-14 años.
Material y métodos: Un estudio transversal fue realizado entre
junio y noviembre del año 2003 en la zona norte de Lima, Perú,
entre 6.130 niños, de 32 colegios seleccionados al azar. La
metodología del Estudio Internacional de Asma y Alergia en
Niños (ISAAC) (Fase I) fue aplicada para determinar la prevalencia y gravedad del asma. Las madres de los niños entre los
6-7 años y de adolescentes entre los 13-14 años completaron
cuestionarios en forma independiente para proporcionar información sobre el asma. Para el diseño de la muestra, la densidad
del tráfico cercano al colegio fue definida como baja, media o
alta; y en el análisis, la estratificación por la proximidad de las
casas a las calles principales fue agregada como índice de estos
factores.
Resultados: La prevalencia acumulada de asma según diagnóstico médico (el diagnóstico clínico que los médicos entregaron
previamente) en niños entre los 6-7 años fue del 12,07% y la
presencia de sibilancia en algún momento (si alguna vez los
niños han presentado sibilancias) fue de 35,27 y en los adolescentes estos porcentajes fueron de 14,31 y 39,36%, respectivamente (P<0,01). Cuando se estratificó de acuerdo a la proximidad del colegio con las calles definidas por densidad de
tráfico (I, II, III), la prevalencia de asma, según diagnóstico
médico, en ambos grupos aumentó de acuerdo a densidad del
tráfico (niños: 9,86%, 10,30% y 15,31% según densidades I, II y
III, respectivamente (P<0,001); y en adolescentes: 12,54%,
13,31% y 17,06% respectivamente (P<0,05). Observamos que
cuando el modelo fue ajustado según densidad del tráfico y
humedad, éste evidenció una asociación mayor en niños con
historia familiar de asma.
Conclusiones: La prevalencia de asma aumentó de acuerdo con
la densidad del tráfico e historia familiar de asma.
Daño al ADN Relacionado al Estrés Oxidativo y Contaminación del Aire en Trabajadores Urbanos en México
Presentador: J. Horacio Tovalin
Antecedentes: Los trabajadores urbanos puertas afuera están
expuestos por largos períodos de tiempo a contaminantes ambientales oxidantes. Este estudio examina el nivel diferencial de daño
en el ADN relacionado con agentes contaminantes del aire en
trabajadores puertas afuera y puertas adentro en las Ciudades de
México y Puebla.
Métodos: Una muestra de 20 trabajadores puertas afuera (taxistas y
vendedores ambulantes) y de 19 oficinistas fue analizada en Ciudad
de México, y 8 choferes de bus y 7 oficinistas en Puebla. El daño
del ADN fue determinado en células sanguíneas usando el Ensayo
Cometa. El daño provocado por el estrés oxidativo fue medido realizando el ensayo en pH 13 y 12,1 y con enzimas de restricción. Las
exposiciones personales a PM2.5 fueron monitoreadas al igual que
VOC seleccionados. Se obtuvo información sobre el hábito tabáquico, número de cigarrillos consumidos, exposición a tabaco
ambiental (TA), exposición a emisiones de otras fuentes y actividades diarias por medio de un registro de tiempo-lugar-actividad
realizado por los trabajadores.
216
Resultados: Los trabajadores puertas afuera tenían Largo de Cola
(LC) mayores que los trabajadores puertas adentro (46,7 mm y 27,7
mm respectivamente) en Ciudad de México, no así en Puebla (46,68
y 41,04 respectivamente) con una correlación positiva entre exposición personal a los contaminantes ambientales y magnitud del LC.
Diferencias entre LC a pH 13,0 y 12,1 y después del tratamiento con
enzimas fueron significativas sólo para los trabajadores puertas
afuera en ambas ciudades. No se encontró ninguna diferencia significativa en LC entre fumadores y no fumadores o entre estar o no
expuesto a TA. Estos resultados sugieren una asociación entre daño
al ADN relacionado a estrés oxidativo y exposición a contaminantes
ambientales.
Acciones futuras: Investigaremos además los mecanismos asociados
con el daño observado al ADN tales como el nivel antioxidante y la
expresión genética.
Agradecimientos: Estudio apoyado por el Centro Internacional
NIH/Fogarty 5 D43TW00644 y CDC/NIOSH T42/CCT610417
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Resúmenes | Ciencia & Trabajo
Prevalencia de Silicosis en Canteras, Río de Janeiro,
Brasil
Presentador: Alberto Araujo
Autores adicionales: Steven Markowitz, Alfred Lemle, Hermano Castro, Luis Carlos Correa.
Antecedentes: la silicosis ha disminuido importantemente en los
países desarrollados en las últimas décadas, aunque aún perduran
ciertas industrias que presentan el peligro continuo de estar
expuesto a la sílice. Mientras tanto, la silicosis ha sido la neumoconiosis dominante en muchos países en desarrollo, donde la exposición a sílice persiste en canteras, pulido con chorro de arena,
extracción de piedras preciosas. Se han efectuado pocos estudios
sobre la silicosis en trabajadores de Canteras en Brasil. Franco
estudió a 220 trabajadores y encontró una prevalencia de silicosis
de 3,5% [1978]. Mendes analizó 177 casos de silicosis, en un censo
realizado en Sao Paulo sobre enfermedades pulmonares, de los
cuales 27 (15,2%) correspondían a trabajadores de canteras [1980].
Ambos utilizaron el criterio OIT (1/0 o mayor).
Métodos: Se realizó un estudio transversal en 405 trabajadores, en
seis canteras. Se aplicaron cuestionarios ocupacionales y del
BRMC, previo firma del consentimiento informado, de acuerdo a
los Principios de Helsinki. La silicosis fue definida como opacidades
redondas en profusión 1/0 o superior de acuerdo a los criterios
OIT-80 para la lectura de radiografías.
Resultados: La población estudiada fue mayormente masculina
(92%); _ de ellos no tenía más de 8 años de escolaridad, edad
media: 41,6+11,9 años; exposición a sílice: 11,69+10,4 años. Se
detectó silicosis en 66 trabajadores (16,3%), de los cuales 54
(81,8%) estaban en la categoría 1 OIT. La silicosis fue mayor entre
los perforadores (22,8%) y los trituradores (21,4%) y se incrementó
con el aumento de la duración del empleo en la cantera. La prevalencia de la silicosis fue mayor; la mayoría de los casos fue leve y
1/3 ocurrió en trabajadores con 20 ó más años de exposición a la
sílice; la silicosis avanzada ocurrió en trabajadores mayores que
trabajaron por largo tiempo en las canteras, y limitados a los
puestos de trabajo con mayor exposición a la sílice.
Acciones Futuras: los datos serán usados para el grado de
Doctorado y para un seguimiento de 5 años de trabajadores de
canteras con silicosis.
Tensión Laboral y Otros Estresores Psicosociales
Asociados con Presión Sanguínea y Consecuencias en
la Salud Mental en Enfermeras Mexicanas
Presentador: Arturo Juárez García
En México se han realizado pocos estudios para analizar la relación
entre los factores psicosociales en el trabajo y las consecuencias en
la salud ya que la investigación en salud ocupacional está más
enfocada a las características físicas, químicas y biológicas del
ambiente como las principales fuentes de riesgo. Es necesario
realizar investigación sobre los estresores psicosociales, ya que se
ha demostrado ampliamente que las características estresantes del
trabajo están relacionadas con algunas enfermedades tales como la
hipertensión (Schnall y cols., 2000). El Modelo de Tensión en el
Trabajo es de gran interés para la comunidad de salud ocupacional
en todo el mundo por su parsimonia y sus buenos resultados empíricos de investigación (Karasek y Theorell, 1991). La expansión del
modelo para incluir otras variables psicosociales ha sido sugerida.
(Kristensen, 1995). El actual estudio piloto examinó la asociación
entre tensión en el trabajo y varios factores psicosociales con la
presión sanguínea (PS) y diversas consecuencias en la salud mental
(CSM) tales como burnout (estar quemado), compromiso, síntomas
cardiovasculares y estado de angustia mental en enfermeras
mexicanas (n=109).
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Los resultados preliminares mostraron que: 1) La tensión en el
trabajo estaba significativamente asociada con la PS sistólica-diastólica después de controlar por los factores tradicionales de riesgo;
2) Los estresores asociados con CSM fueron diferentes, dependiendo
de la consecuencia mental; así el burnout fue asociado con el estilo
de supervisión de control, la autoeficacia y la ira; el compromiso
con el lugar de control, disponibilidad de herramientas, autoeficacia
y tensión en el trabajo; los síntomas cardiovasculares y el Estado de
Distrés Mental se asociaron con la inseguridad laboral y la falta de
reconocimiento; 3) Se encontró una importante combinación entre
control laboral y autoeficacia asociada con la PS y CSM. Los
hallazgos sugieren que la relación entre tensión en el trabajo y PS
es válida en trabajadores mexicanos y es aparente que para las CSM
se debe considerar otras variables psicosociales. Un próximo estudio
buscará verificar estos resultados y examinar otras hipótesis de
interacción.
217
Resúmenes | Ciencia & Trabajo
Efectos del Hidroarsenicismo sobre la Decondensación
Cromática en Espermatozoides Humanos en Hombres
Expuestos Endémicamente
Presentador: Javier Morán-Martínez
Autores adicionales: A. Soto-Domínguez, E.A. Pazos-Mendoza, S. Bassol-Mayogoitía, R.M. Cerda-Flores y J.A. Heredia-Rojas
Introducción: Las funciones moleculares y celulares en espermatozoides humanos asociados con hidroarsenismo no han sido ampliamente informadas. La región de la Lagunera, en el estado de
Coahuila en el norte de México, tiene un serio problema con el
Hidroarsenismo Endémico (natural) (HE). En efecto, los últimos
estudios muestran en algunas áreas rurales una concentración
media de arsénico (As) en el agua de 115,4 y 125,0 mg/L (El
máximo permitido por la Organización Mundial de la Salud es de
50 mg/L.). La estabilidad de condensación cromatínica es una
buena prueba funcional para la maduración de espermatozoides y
podría ser un indicador del daño a la espermatogénesis asociado a
factores ambientales.
Objetivo: Este estudio se realizó para determinar la asociación entre
arsénico y decondensación de cromatina (DC) en hombres
expuestos.
Métodos: Se incluyeron 125 sujetos del área HE (grupo expuesto
GE); 74 sujetos provenientes de una área urbana fueron el grupo
control (GC). El arsénico fue medido por Espectrofotometría de
Absorción Atómica (EAA) en la orina. La determinación de DC fue
realizada con la técnica de Kvist y cols., (1980). En una muestra de
semen no más del 20% de los espermatozoides presentan cromatina inestable. El control de calidad fue evaluado duplicando las
medidas de cada muestra, con un coeficiente de variación <5%. La
calidad del semen (CS) fue medida según las pautas de la
Organización Mundial de la Salud. Se utilizó Anova para evaluar
las diferencias entre los grupos. Los resultados son presentados
como promedio y error estándar.
Resultados: La concentración de arsénico en la orina en el GC fue
de 88 +27 y 2.058 + 833 mg/L respectivamente (p<0,001). En el
agua, la media en el GE= 139 +66 mg/L y en el GC= 21 + 6,7mg/L
(p<0,01). El porcentaje de DC fue de 11 células normales en el GE,
hinchadas 34 y muy hinchadas 55 versus células normales 70,
hinchadas 12, muy hinchadas 18 en el GC. La diferencia significativa fue determinada entre grupos por parámetro (célula normal
p<0,001; hinchadas y muy hinchadas p<0,05). Se encontró una
correlación entre la concentración de arsénico en la orina y células
muy hinchadas (r=0,431; p<0,05). La CS muestra diferencias estadísticas; por ejemplo, la concentración de espermios fue de 98+/65,2 y 34,8+/-18,9 x 106 células/ml GC y GE respectivamente
(p<0,001); la movilidad de los espermios fue en el GC=71,8+/-21,3
y en el GE=39+/-11,7% (p<0,001); la viabilidad de los espermios
67,4+/-16,5 y 48,3+/-7,7% para GC y GE respectivamente (p<0,05).
Conclusión: Los resultados muestran una asociación entre el As y
la DC y un efecto importante del As con la CS.
Estimación de Exposición Personal a Ozono en Niños
Asmáticos que Viven en Ciudad de México
Presentador: Matiana Ramírez-Aguilar
Autores adicionales: Hortensia Moreno, Arthur Winer, Pablo Cicero, Juan Sierra, Isabelle Romieu
Antecedentes: Dado que los niveles medidos en estaciones fijas no
reflejan la exposición personal al ozono, condujimos un estudio
para evaluar la exposición personal que incluía los factores contribuyentes en los niños asmáticos en Ciudad de México.
Métodos: 158 niños fueron reclutados en uno de los hospitales más
grandes de la ciudad (1998-2000) usando placas pasivas para las
mediciones personales de ozono. En un diario se registraron los
patrones de actividad. La concentración promedio de ozono
personal (O3p) fue medida con cromatografía iónica. Las medidas
diarias de ozono (O3e) se obtuvieron de la estación fija correspondiente de acuerdo con el lugar de residencia de los niños. Los
niveles promedio de O3e para el período total de muestreo y los
niveles calculados de ozono (O3w) medidos por el tiempo invertido
218
en los diferentes microambientes, fueron usados como variables
independientes para la O3p modelada.
Resultados: Los participantes pasaron la mayor parte de su tiempo
dentro de sus casas (81%). Las concentraciones medias de ozono
fueron de 7,8 ppb para O3p, de 33,3 ppb para O3e y de 6,6 ppb para
O3w. Usando un modelo de efectos combinados, encontramos que
el tiempo pasado puertas adentro, la distancia de la residencia a la
estación fija ambiental y el grupo de seguimiento (total R2 = 0,50,
p<0,05) eran variables explicativas importantes para el O3p.
Acciones futuras: En el futuro se deberían realizar más investigaciones entre las poblaciones expuestas con el objeto de comprender
mejor los factores que influyen en la exposición personal al aire
contaminado.
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Resúmenes | Ciencia & Trabajo
Implementación de un Sistema Nacional de Vigilancia
Epidemiológica para accidentes laborales fatales
en Chile
Presentador: María Elisa León Carrasco
Autores adicionales: Santiago Mansilla Pérez, Juan Pablo Espina Tellier
Objetivo: comprender el perfil de las muertes ocasionadas por accidentes laborales en Chile por medio de la implementación de un
Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica para Accidentes
Laborales Fatales cuyo propósito es tomar las medidas apropiadas
para prevenir su ocurrencia.
Pasos que se siguieron:
• Definición del caso.
• Identificación de las fuentes de información, en el ámbito
regional y nacional, y su integración al sistema.
• Diseño y validación de los formularios de notificación y de los
formularios de transferencia de la información.
• Entrenamiento de los miembros del Sistema.
• Consolidación y análisis de los datos.
Resultados para el 2001: hubo 431 muertes por accidentes laborales
lo que representa una tasa nacional de 8,9 por 100.000 trabajadores. De ellos, el 71% estaba en el trabajo y un 28% camino al
trabajo, con un 1% de los casos de los cuales no se tiene esta infor-
mación. El promedio de muertes informadas en nuestro país es
menor que el promedio de la región de Latinoamérica (13,5 por
cada 100.000 trabajadores); pero casi 50% más alto que la de los
países del Primer Mundo (5,3% por cada 100.000 trabajadores),
(Takala, Epidemiology 1999). Estos resultados están de acuerdo con
nuestro estado actual de desarrollo económico.
• La distribución de acuerdo al género fue de 94% de hombres y
de 6% de mujeres cuyo porcentaje fue de 10,4 y 1,4 por cada
100.000 trabajadores respectivamente.
• Los trabajos con la más alta tasa de mortalidad laboral (excluyendo las muertes causadas en el trayecto) fueron la minería,
construcción y el transporte.
• No se obtuvieron grandes diferencias según el tamaño de la
compañía en nuestro análisis de accidentes notificados.
• Con relación a la ocupación, los accidentes fatales se concentraron entre los trabajadores menos calificados.
• Los resultados para los años 2002 y 2003 se están procesando
y deberían estar disponibles en muy breve tiempo.
Molestias Músculo Esqueléticas Producidas Durante
la Manufactura de Bolsas de Aire
Presentador: Agustín Sánchez
Autores adicionales: Víctor Liu, Salvador Morales
Antecedentes: la elaboración de bolsas de aire (airbags) incluye
actividades como coser y doblar bolsas hechas de nylon o
poliéster. Estudios en países desarrollados han demostrado que
los operadores de máquinas de coser son propensos a sufrir
molestias músculo esqueléticas. Es probable que los trabajadores
que fabrican bolsas de aire corran también el riesgo de sufrir
molestias músculo esqueléticas similares. En una planta manufacturera, se realizó un estudio para perfilar las características de
las molestias entre 121 trabajadores fabricantes de bolsas de aire
(90 operadores de máquinas de coser, 24 dobladores de bolsas y
otros 7). Los operadores costureros cosían con hilo nylon las
bolsas de aire. Los dobladores de bolsas lo hacían de acuerdo a
un modelo determinado para facilitar el despliegue de la bolsa de
aire en caso de un accidente.
Resultados: El 76,9% de los 121 trabajadores reportó al menos una
molestia en alguna de las partes mencionadas del cuerpo. Molestias
en la muñeca y en la espalda fueron las más comunes informadas
por los operarios. El 47,7% de los operarios encargados de coser las
bolsas se quejó de molestias en la muñeca, mientras que el 68,2% de
los operadores encargados de doblar las bolsas sufría de molestias en
las muñecas. Los análisis de Chi-cuadrado mostraron que las
mujeres eran más propensas que los hombres para sufrir dolores de
hombro, 46,5% versus 28,3% ( c2=3,85, p=0,049). Los resultados
también indicaron que las costureras eran más propensas que los
costureros a sufrir molestias en la espalda, 52,4% versus 25,9%
(x2=5,30, p=0,021). La prevalencia de molestias músculo esqueléticas en el período de un mes encontrada en este estudio fue mayor
que la informada por otros estudios sobre costureros.
Métodos: los operadores evaluaron en una escala de 0-5 las molestias músculo esqueléticas percibidas en la espalda, hombros, codos,
muñecas y manos en un período de un mes antes y durante el
tiempo en que se desarrolló el estudio.
Acciones futuras: El protocolo de Evaluación Rápida del Cuerpo
Entero (Rapid Entire Body Assessment) se está aplicando en las actividades laborales filmadas con el objeto de identificar los requerimientos físicos necesarios para la elaboración de bolsas de aire.
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Resúmenes | Ciencia & Trabajo
Determinación de las Capacidades para Manejo Manual
de Materiales para los Trabajadores en Colombia
Presentador: Leonardo Quintana
Autores adicionales: Daniel Suárez, Lawrence J.H. Schulze, George Delclos
levantamiento para mujeres con experiencia fue de 15 Kg, mientras
que para hombres con experiencia fue de 23 Kg. La ley actual en
Colombia establece para los hombres una carga de 25 Kg y de 15
Kg para las mujeres, sin considerar frecuencia, altura o entrenamiento previo. La simulación de transporte fue realizada por 51
participantes (24 hombres y 27 mujeres). Se estudiaron los efectos
de la frecuencia, distancia y altura del peso transportado; las variables de respuesta para el experimento realizado incluyeron el
consumo de oxígeno, ventilación pulmonar, ritmo cardíaco y la
clasificación del esfuerzo percibido. Se registraron las respuestas
fisiológicas y psicológicas. Las variables de control mostraron una
respuesta estadísticamente significativa relacionada con la carga
física de trabajo. La capacidad promedio de transporte fue de 21 Kg
para los hombres y de 17 para las mujeres. Los estándares actuales
de Colombia indican que 50 Kg es el peso máximo permitido para
ser transportado por hombres y de 20 Kg por mujeres. Modelos de
regresión se desarrollaron para predecir los pesos aceptables de
elevación y transporte como función de las frecuencias, las distancias y las características de antropométricas. Los modelos también
incluían el consumo de oxígeno para las tareas de transporte. Se
identificó la necesidad de revisar las actuales leyes de Colombia
sobre el MMM con el objeto de proteger a los actuales trabajadores
de la fuerza laboral y a los que están por venir.
Los límites adecuados para el manejo de material no han sido
previamente establecidos por la población de Latinoamérica o, más
específicamente, por la población trabajadora de Colombia. El
estudio del Manejo Manual de Materiales ha sido el punto central
de investigación en el Centro de Estudios Ergonómicos de la
Pontificia Universidad Javeriana, en Bogotá, Colombia. El Manejo
Manual de Materiales (MMM) es conocido por ser uno de los
factores que más influyen en el desarrollo de los trastornos
músculo esqueléticos. Las tareas del MMM fueron divididas en actividades individuales, tales como levantamiento y transporte para el
propósito de esta investigación y comparaciones adicionales con
estándares internacionales. Las tareas de manejo se realizaron en
un ambiente de laboratorio por una serie de tratamientos presentados al azar. Diferentes grupos objetivos, los que incluían hombres
con y sin experiencia, y mujeres con y sin experiencia, realizaron
estas tareas simuladas. El método psicofísico se usó para determinar el peso máximo aceptable de elevación y transporte. Una
encuesta sobre Disconfort en Segmentos Corporales entregó información sobre el esfuerzo percibido asociado con la tarea. Las variables de respuesta fueron el peso real levantado o transportado y las
respuestas fisiológicas, ritmo cardíaco, presión sanguínea y
consumo de oxígeno. Un total de 68 participantes (29 hombres y
39 mujeres) iniciaron y completaron las tareas de levantamiento a
una altura y frecuencia controlados. La capacidad promedio de
Género, Trabajo y Salud: Morbilidad y su Asociación con
el Trabajo Nocturno, Largas Jornadas Laborales y Carga
de Trabajo Doméstico entre el Personal de Enfermería
Presentador: Lucía Rotenberg
Autores adicionales: Paul Landsbergis, Luciana Fernández Portela.
Este proyecto estudia los casos de trabajos en turnos nocturno y
largas jornadas laborales, considerando la interacción de los
quehaceres domésticos remunerados en mujeres. Se describe una
investigación de tipo transversal (n=1.300 enfermeras), que
busca determinar si la salud física/mental, y quejas sobre sueño
y falta de tiempo están asociados con el trabajo nocturno, largas
jornadas laborales y quehacer doméstico pesado. Los datos serán
recopilados en un formulario estructurado. El manejo estadístico
incluye métodos de regresión logística múltiple. La presión
sanguínea será investigada en el lugar de trabajo para verificar
la posible asociación a factores de estrés. El proyecto cuenta con
los resultados preliminares concernientes a la morbilidad en el
personal de enfermería (n=280). Debido a lo reducido de la
muestra, el análisis de los datos se limitó a estimar la prevalencia
220
con un intervalo de confianza de 95%, sin ajuste por edad o por
cualquier otra variable. A pesar de las limitaciones del estudio,
algunos resultados merecen una investigación adicional, como
son las asociaciones significativas (p<0,05) entre a) trabajar más
de 40 horas/semana y el informe de várices, b) más de 28
horas/semana y quejas de migraña y graves alteraciones emocionales y c) más de 84 horas/semana de trabajo (profesional y
doméstico) y el informe de várices. Considerando exclusivamente
los trabajadores nocturnos en la actualidad, tasas altas de colesterol eran más frecuentes entre aquellos con más de 10 años de
experiencia, tal como el informe de migraña que fue más
frecuente entre los trabajadores diurnos comparados con los
trabajadores nocturnos.
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Tensión Laboral y Otros Estresores Psicosociales
Asociados con Presión Sanguínea y Consecuencias en la
Salud Mental en Enfermeras Mexicanas
Presentador: Arturo Juárez García
En México, se ha realizado pocos estudios para analizar la relación
entre los factores psicosociales en el trabajo y las consecuencias en
la salud ya que la investigación en salud ocupacional está más
enfocada a las características físicas, químicas y biológicas del
ambiente como las principales fuentes de riesgo. Es necesario
realizar investigación sobre los estresores psicosociales, ya que se
ha demostrado ampliamente que las características estresantes del
trabajo están relacionadas con algunas enfermedades tales como la
hipertensión (Schnall y cols., 2000) . El Modelo de Tensión en el
Trabajo es de gran interés para la comunidad de salud ocupacional
en todo el mundo por su parsimonia y sus buenos resultados empíricos de investigación (Karasek y Theorell, 1991). La expansión del
modelo para incluir otras variables psicosociales han sido sugerida.
(Kristensen, 1995). El actual estudio piloto examinó la asociación
entre tensión en el trabajo y varios factores psicosociales con la
presión sanguínea (PS) y diversas consecuencias en la salud mental
(CSM) tales como burnout, engagement, síntomas cardiovasculares
y estado de angustia mental en enfermeras Mexicanas (n=109).
Los resultados preliminares mostraron que: 1) la tensión en el
trabajo estaba significativamente asociado con la PS sistólica
diastólica después de controlar por los factores tradicionales de
riesgo; 2) Los estresores asociados con CSM fueron diferentes
dependiendo de la consecuencia mental, así el burnout fue
asociado con el estilo de supervisión de control, la auto-eficacia
y la ira; engagement con el lugar de control, disponibilidad de
herramientas, autoeficacia y tensión en el trabajo; los síntomas
cardiovasculares y el Estado de Distrés Mental se asociaron con
la inseguridad laboral y la falta de reconocimiento; 3) se
encontró una importante combinación entre control laboral y
auto eficacia asociada con la PS y CSM. Los hallazgos sugieren
que la relación entre tensión en el trabajo y PS es válida en
trabajadores Mexicanos y es aparente que para las CSM se debe
considerar otras variables psicosociales. Un próximo estudio
buscará verificar estos resultados y examinar otras hipótesis de
interacción.
Caracterización de la Exposición a Mercurio en Mineros
Informales de Oro en Perú
Presentador: Arturo Juárez GarcíaaPresentador: Jasmín Hurtado
Autores adicionales: Arturo Berastain
Antecedentes: La minería informal de oro en Perú incluye dos actividades relacionadas directamente con el uso de mercurio: la
quema de amalgama para recuperar oro y el procesamiento artesanal de minerales: quimbalateo
Objetivo: determinar la exposición a mercurio durante la quema y
quimbalateo.
Metodología: el estudio investigó los niveles de mercurio en la
orina (primer sitio) en 30 adultos y niños que viven y trabajan en
áreas mineras informales en Tulín y Chaparra, al sur de Perú, y 15
mediciones ambientales de exposición a mercurio. (OSHA método
ID-140).
Resultados: el nivel medio en orina de 11 quemadores y personas
que vivían alrededor de un lugar donde se practicaba la quema fue
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de 364,7 mg/L (1.662,4-45,8). En un segundo grupo de 13 personas
proveniente de los quimbalates fue de 16,48 mg/L (25,13-8,42);
usando el test de ANOVA no se encontró diferencia en los niveles
urinarios en 7 adultos y 6 niños provenientes de este grupo aunque
4 de 7 adultos practicaban quemas una vez al mes. Un tercer grupo
de 5 personas que vivían en estas áreas pero no relacionadas con el
trabajo minero mostraron un nivel de mercurio en la orina de 7,75
(SD =1,85) y un cuarto grupo (control) de 6 personas que viven en
Chaco y Nazca tenían un nivel de 4,540 (SD=1,39). La exposición a
mercurio ambiental durante la quema tenía una media de 3.000 Hg
mg/m3 (4.360-2.002) y de 28 Hg mg/m3 (44-12) durante el quimbalateo.
Acciones futuras: Identificaremos cuáles son las actividades de
riesgo durante el quimbalateo y la quema para entregar recomendaciones a la comunidad minera.
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