CASO DE DENOMINACIÓN EPONIMA ción antropométrica. Si bien

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-
ANS.INST.PAT. Ser.Cs. Ss.. Punta Arenas
(Chile),
vol. 19. 1989-1990
EPONIMA
PATAGONES Y PATAGONIA: UN CASO DE DENOMINACIÓN
CON UNA ERRÓNEA ATRIBUCIÓN GEOGRÁFICA
RAMÓN MORALES
BREVE HISTORIA DEL PROBLEMA
INTRODUCCIÓN
En gran parte de la literatura
referida
a
temas
arraigada
"patagón"
la
de la
idea
la
Patagonia
historiográfica
se
atribuir
de
halla muy
término
al
etimología "pata grande"
o,
en
la derivación de esa supuesta condi
ción antropométrica. Si bien en los últimos años
este error había ido paulatinamente dejando de
último
caso,
cometerse,
se
le ha visto reaparecer
en
textos es
colares, semanarios periodísticos y otros medios
de difusión social; reiteración que obedece a que
aun
ninguna
disciplinas cientí
prehistoria americana,
correcto origen de esta
de las diversas
ocupan de la
ha acertado en indicar el
denominación, que recibieron los tehuelches
ficas que
se
me
ridionales de parte del insigne navegante portu
gués Fernando de Magallanes.
Como se trata de uno de los topónimos más
geográficamente
más extensos del continente, este trabajo se pro
descartando primero
pone resolver tal situación,
cada una de las hipótesis de orden etimológico y
filológico que han sido formuladas en torno a su
posible motivo o significado, y demostrando
nom
luego cuál fue la fuente que proporcionó el
de
los
tehuelches.
bautista
bre "patagón" al
antiguos,
*
más
Licenciado
Sección
importantes
en
y
Antropología. Investigador adjunto,
Antropología
del Museo Nacional de Histo
ria Natural, Casilla 787,
Santiago.
sabida que el autor de esta antropoencontraba en el litoral suroriental de
América, a mediados del año 1520, al mando de
Es
cosa
nimia
una
se
Según
hoy
lleva
en
Julián (49° 25' S
primera vez, tras
-
de
su
nombre.
Pigafetta, cronista
playas de la bahía San
el diario de Antonio
de la flota, fue
nal,
buscando el paso interoceá
española,
flota
nico que
67° 15' O) donde se avistó por
meses de fondeo inver
varios
hombre que
a un
sorprendente
tuvieron
las
junto
a
a
ellos
pareció
la distancia
Una
estatura.
pudieron
ser
que lo
confirmar la
vez
elevada talla que lo caracterizaba, de igual modo
se le suma
que la de sus compañeros que luego
ron. Este encuentro fue el punto de partida para
lo que
luego
se
convertiría
la existencia de
aseguraba
en
una
leyenda
una raza
de
que
gigantes
americanas
que habitaban las australes pampas
difusión
en
obtendría
Europa
y la
rápida
y que
En la centuria si
naciente Hispanoamérica.
inglés John Narborough, alrededor
practicó las primeras mediciones
en estos aborígenes, esta
confiables
corporales
guiente,
el
del año 1669,
bleciendo para la estatura
pies y diez
se de un
pulgadas,
promedio
es
es
una
muchos individuos alcanzaran
l,80m.
Pigafetta
Para
media de cinco
decir 1,75 m. Tratándo
totalmente factible que
confirmarlo
o
superaran el
basta seguir a
que más adelante habla de
una
según-
12
RAMÓN MORALES
da visita efectuada por otro aborigen, seis días
después del primer encuentro, y del que afirma
textualmente: "Este hombre
mejor
era
conformado que los otros"
Desde
más
grande
y
(1970:25).
talla bastante más
baja
armaduras que aún
de ropa y calzado)
época poseían
una
que la actual. A base de
(también piezas
se conservan
ha establecido que la es
Europa oscilaba entre 1,50 m
se
tatura
media
1,55
Ogbrum y Mimkroff (1958) sostienen
baja estatura en el Viejo Mundo era una
en
m.
que la
tacha física que
se
arrastraba desde la Edad
Media y que perduró hasta bien andado el siglo
XVII.
Convengamos en que Magallanes, al
igual que la mayoría de sus hombres, debió me
dir alrededor de 1,5" 2
de
uno
con
describen
más famosos que lo
biógrafos
sus
altura, de acuerdo
de
"...grueso, fornido y de talla
(Zweig, 1965). Al tratar de enten
como
corriente"
derse
m
con un
quinto
individuo que lo
soprepasaba
en un
de altura y que aparentaba ser más alto
aún, debido a su indumentaria compuesta de
larga capa de piel de guanaco, con la que se
envolvía desde los hombros hasta media pantouna
rrilla, debió impresionarse ya que nunca en
Europa, ni en región conocida a la fecha, había
vivido la
mente
to
experiencia
por
y
un
de
verse
hombre que
hacía
aspecto
superado física
tan
comportamien
con su
honor
a
estampa
su
corpulenta.
La consecuencia más inmediata que acarreó
entre europeos bajos y
fue
la
propagación del- mito de
aborígenes altos,
los hombres gigantes que habitaban las estepas
este
del
tes,
primer
encuentro
extremo sur
viajeros,
dignos,
se
americano. En los
"testimonios" la fábula
No faltaron los
a
siglos siguien
aventureros y cronistas poco fide
encargarían de alimentar
dibujos
los patagones
surgida
que
en
duplicando
se
en
en
con nuevos
San
Julián.
hacía aparecer
estatura
a
un
asombrado europeo. Mas sabemos hoy que la
exageración y la fantasía sobre lo descubierto, es
un
sesgo
psicológico
que
se
gran mayoría de los relatos
nos
han
legado
los
halla vertido
y diarios de
expedicionarios
todas las épocas
en
la
viajes que
y descubri
geográficos de
y regiones.
El propio Pigafetta es el mejor de todos los ejem
plos, cuando dice: "Este hombre era tan alto que
con la cabeza apenas le llegábamos a la cintura"
(1970:22). Para que tal aseveración hubiese sido
dores
medir
unos tres metros
de altura.
obstante, queda claro que fue la alta
No
es
lo que impresionó a los expedicionarios
Viejo Mundo, pero el testimonio escrito que
nos dejó Pigafetta, tras abandonar San Julián,
tatura
comienzo los europeos hablaron de
gigantes y aunque en ello hay una evidente exa
geración, conviene tener presente que los medi
un
terráneos y levantinos de la
cierta, el aborigen descrito habría tenido que
del
respecto del nombre que aplicaron
genes
tro
es
sólo
capitán
a
los aborí
"Nues
y concisa frase:
nombre
de Pa
el
pueblo
una e-cueta
dio
a este
tagones" (1970:29), sin que agregue explicación
alguna sobre la razón que tuvo Magallanes para
asignar tal
Junto al
denominación.
factor estatura y corpulencia, se verá
adelante
más
que la repelente pintura facial, la
voz gutural y lo salvaje y remoto
la
vestimenta,
del ambiente
papel
en
motivador
que vivían, también
la elección de
en
Andando el tiempo, la
arribó
la
leyenda
este
jugaron
de los
literatura
un
nombre.
gigantes
científica,
patagones
liberada ya del supuesto gigantismo, pero con la
La
curiosa referencia a los pies grandes.
a
pesquisa del origen de esta atribución etimoló
gica nos retrotrajo, de autor en autor, hasta un
contemporáneo de Magallanes: el capitán
Gonzalo Fernández de Oviedo y Valdés (14781557), consagrado como el primer cronista del
Nuevo
año de
Mundo, de quien se publica, el mismo
su fallecimiento, el Libro N° 20 de la
Segunda
de Las
Parte de
Indias,
en
Historia General y Natural
cuyo sexto capítulo narra las
su
Magallanes
Aréyzaga, integrante de la
clérigo Juan
expedición realizada en 1526 por Jofré de Loayza
y Sebastián Elcano, en un segundo intento por
llegar a las islas de la especiería y retornar a Es
vicisitudes vividas
por el
en
el estrecho de
de
paña por
la misma
página
día siguiente,
En la
abierta por
ruta
continuando
Magallanes.
capítulo se lee: "El
su jornada, perdieron
42 del referido
Johan Pérez de
Higuerola, y quedaron
clérigo y los otros dos
hombres: é quando quisso amanescer, vieron
más de dos mili patagones ó gigantes (este
nombre patagón fué á disparate puesto a esta
gente por los chrispstianos, porque tienen
grandes pies; pero no desproporcionados, segund
la altura de sus personas, aunque muy grandes
mas
que los nuestros); y venian hacia los chrisps
un
compañero, que
tianos, aleando las
embargo,
se
decía
el
manos
atendiéndonos
y
a
gritando...".
un
estricto
Sin
orden
ser ésta la primera versión en
etimológicamente a "patagón" con
"pie grande", pues cuatro años antes se había
editor,
que
se
no
resulta
asocia
publicado
la Historia General de Las Indias de
fc
13
PATAGONES Y PATAGONIA: UN CASO DE DENOMINACIÓN EPONIMA
Francisco
López
de Gomara
(1510-1566),
en
la
experiencia vivida por
Magallanes con los aborígenes de San Julián.
Del patagón capturado escribió lo siguiente: "...
y ocho hombres no lo pudieron atar; echáronle
cual
autor
su
refiere la
los daban para llevar, y
grillos,
entonces bramaba; no
quiso comer, de puro
unos
como
se
España
y murióse. Tomaron para traer á
coraje,
medida, ya que no podían la persona, y tuvo
once palmos de alto; dicen que los hay de trece
la
palmos,
grandísima,
estatura
pies,
disformes
patagones".
Hoy ya no
posible
es
los
llaman
originales
los
conocer
tienen
que
y
cual
lo
por
de
dos obras para hallar la fuente en que se ba
saron estos dos autores para atribuir tal motivo
estas
al
anatómico
incierta,
bastante
rigor
nombre
en
en ese entonces
todo caso, pues no era de
citar la documentación uti
garantizar
lizada para
Posibilidad
patagón.
la veracidad de los hechos
exponían.
(1901)
que
establece que Oviedo y Valdés había comenzado
la publicación de su extensa obra en 1535, de
se
modo que tampoco
Oviedo y Valdés
cuatro
Medina
resulta posible estable
nos
seguridad quién leyó
cer con
gones
Además,
a
haya publicado
años
más
tarde
quién,
aunque
sobre los pata
López de
que
Gomara.
Medio
del
siglo después
viaje
de
Loayza
y
Elcano, el corsario inglés Francis Drake también
tomó contacto
ta,
el
origen
con
capellán
los patagones, pero
a su
cronis
interpretó
Francis Fletcher,
del nombre
su
manera, o en su
el
idioma,
Pentagones,
(medida antigua equivalente a la dis
pues dice al respecto: "... el nombre
cinco codos
tancia
un
el codo y la extremidad de la mano),
pies y medio, describe la altura (sino
entre
decir 7
es
tanto
(1854:60).
más)
cambio
En
Anglería,
los más altos
de
nada
entre
Pedro
dice
también contemporáneo
ellos"
Mártir
a
estos
de
viajes
historiador de mayor influencia que todos los
En su
cronistas anteriores y posteriores a él.
e
Décadas del Nuevo
para
referirse
al
Mundo,
es
muy lacónico
descubrimiento
aborígenes, prefiriendo explayarse
de
con
estos
mayores
acerca de la drástica represión con que
Magallanes sofocó el motín que estalló durante
la prolongada estadía invernal en la bahía San
Julián. Sobre los naturales sólo narró lo siguien
detalles
te:
"Vieron allí chozas de
inculta, sin
errante
armas, que
sin asiento
fijo,
indígenas;
sólo
sin
se
ley,
pero es gente
cu"bre con pieles;
de alta
estatura:
se
genes
De
a
temporáneas
es
posibilidades,
estas tres
en
el nombre que los aborí
sí mismos.
patagón
daban
se
Al parecer
patagones" (1944:428).
llaman
tiende que
más
o menos con
estipulada,
sí, fue la
entre
tanto
de
por López
y
por
Gomara, la que ganó crédito y consagración en
la ya incipiente historiografía americana. Pron
to sería acatada
por los historiadores de las
Valdés
Oviedo
centurias
siguientes,
como
de Antonio de
excepción
a
Herrera (1615), quien respecto del episodio sanjulianense sólo menciona el bautismo cristiano
que se le impartió a uno de los aborígenes captu
rados, al que se impuso el nombre Juan Gigante
y luego se le embarcó en la nave San Antonio
tiempo.
donde falleció al poco
navegantes y viajeros que
posteriores
visitaron la
referían
la
grado
alternando el
mismo
a
estatura
tiempo
exageración
de los
comenzaron
entre
el
con
los
siglos
que
se
pero al
manifestar en su
aborígenes,
a
escritos cierto desconcierto respecto
consagrada
cuanto a
del Estrecho, fueron
zona
de
En
las décadas y
en
nombre
a
con
la relación
que
se
les
pies. El más
claro de todos para rebatir aquella asociación
fue el naturalista chileno Enrique Ibar Sierra,
quien a fines del siglo XIX recorrió la Patagonia
conviviendo un breve tiempo con sus aborígenes,
lo que le permitió obtener los siguientes resulta
conocía
dos
y el tamaño real de
antropométricos:
sus
altura mínima
1,75
m;
altura media 1,83 m; y altura máxima 1,92 m;
La podometria le reportó una longitud mínima
de 25 cm; longitud media de 27 cm; y una
longitud máxima de 30 cm. Pero estaba tan con
sagrada la asociación "patagón-pie grande", que
a manera
de conclusión recomendó el cambio de
nombre, ya que
patagones
no
patagón tiene el
(1979:43).
En
a su
es,
juicio:
sospecha
apropiado.
pie proporcionado
cambio, la alta
indumentaria)
"... el nombre de los
pues mui
no
a
(menos
estatura
El
la estatura"
aún la
consiguió despertar ninguna
que la relacionara con el nombre pata
gón, pese a que fue notoriamente magnificada
en dibujos y grabados
aparecidos en célebres pu
blicaciones (Pernety, 1769 y Fitz Roy, 1830,
entre
otros, aportaron los más
veremos
que,
posteriormente,
difundidos).
nuestros
Y así
historia
dores más clásicos harán suya,
sin el menor
atisbo de dudas, la referencia a los pies
grandes
como el único motivo del nombre
impuesto por
Magallanes: Amunátegui, 1861; Barros Arana,
1864; Medina, 1920; Encina,
1924; todos por
1-1
RAMÓN MORALES
igual
aceptan
ellos cite
permita
versión, sin que ninguno de
esta
alguna
fuente
diccionario que les
tal etimología para la
o
aseverar o acatar
palabra patagón.
Más tarde,
investigadores
más
modernos nada aportan o corrigen al respecto:
Cañáis Frau, 1953; Casamiquela, 1960; Silva,
partidarios de la misma expli
cación, la que a fuerza de repetirse y difundirse
ha terminado convirtiéndose en una pseudo
verdad científica de considerable arraigo en el
1984; y otros,
conocimiento
son
general.
Para demostrar lo errado de la asociación que
hace
"patagón"
entre
efectuaremos
término, atendiéndonos
pone dividirlo
a
"pie
y
etimológico
rastreo
un
que
su
grande",
de
gunda
"grande"
o
la
"gran"
han tenido
su
similar
los
en
"grande", "comprimido" y
Ninguno de estos tres últimos forma
alguno de los tres primeros la palabra bus
términos lusitanos
"crescido".
con
cada.
En el castellano de la
época,
como
en
la
ac
un
tualidad, "pata" designa
o un animal; pero "gon" o "go" nunca
han existido; y los términos "grande" y "gran" no
la extremidad de
a
mueble
eran
distintos
a como
los
conocemos en
la
actua
lidad.
porque "pata"
no
es
han conocido los términos
"gamba", "sopatrasca"
tampoco han existido y
plemente
hallamos
como
aquí
igualmente
existe y para
"pie"
se
"zampa", "piede",
"pianta"; "gon" o "go"
"grande" se designa sim
y
"gran".
De
igual
manera
los términos que uniéndolos
no
nos
algo parecido a "patagón" o "patago".
embargo, el Vocabulario Italiano de
Rigutini y Fanfani (1903) tiene incor-porado el
forme
Sin
"pataccóne-óna",
que
aparece
como
"persona obesa, lenta para
compuesto
definido
Bien sabemos que los tehuelches eran
nómades que vivían de la caza del ñandú y el
guanaco; no concuerda, entonces, caracterizar
operar".
los
como
Delgado
obesos y lentos.
También Linati y
el
término
incluye
"pataccone" en su
Diccionario
dolo como
de
materna
término que
vocablo
el
desuso)
"patacáo",
Italiano-Español (1887), definién
"patán"; vale decir, un término
según
que
Corominas y Pascual (1981) fue también voz
usual en la Francia e Italia medievales; su origen
desconocido
identificaba
e
del
portuguesa
del
derivarse
a
pobres,
término
como
de
se
Magallanes quedó
física de los
que
"Región
:
escaso
o
valer, por
moneda
"patacáo",
la época del
Esta posibilidad se descarta
descubrimiento".
si
(1955)
sostener
para
portuguesa de bajo valor usada
por sí sola,
moneda
una
Deodat
XVI.
tierra de los indios
tiene
en
consideración que
impresionado por la estampa
en
aborígenes,
poner que iba a escoger
denominarlos.
En castellano ha sido
es un
contrasentido
una voz
despectiva
postulada
su
para
la sinonimia
de so
"patagón"
"patón"; pero
lución también careció de base y prueba docu
mental que la sustentara cuando fue esgrimida.
de
esta suerte
con
Recién
En idioma italiano el resultado
negativo,
lengua
siglo
aplicaba este fundamento
Patagonia puede traducirse
transcripción de la se
palabra, consignamos que
los dos
en
Magallanes también
permitió formular una
poseyó
han
a
querido dar con la
explicación
quienes
Existió (ya en
razón del nombre patagón.
La
es
Inviniendo la
parte de
del sonido que la "g" ¿iempre ha tenido
idiomas de la península ibérica.
dis
en
escala de valo
nética, pues la doble "c" italiana se pronuncia
como la "ch" castellana, lo
que está bien distante
este
estructura
"pata" y en "gon".
En portugués "pata" se ha conocido como
"pate", "perna" y "pe'; "gon" y "go" nunca han
existido.
una
a
que resulta absurdo aplicarla a naturales o
aborígenes de tierras recién descubiertas.
Aunque el etnocentrismo fue falta habitual entre
los colonizadores, en este caso no ajusta la fo
res
un
ANÁLISIS ETIMOLÓGICO
se
peyorativo, perteneciente
versión de 1984, el Diccionario de la
en su
Real Academia de la
blece
a
"patagón"
cual debe
tratarse
consignada
en
riores que son
madamente '
indagar
Forcellini
o
solución
cada ocho años
lo
su
en
con
segundo
cs
hallan los términos
se
"patagium"
y
su
"patagus".
el adorno de
una
pieza
un
Latinitatis
adjetivo
pui islas de la
lengua.
re
vestido femenino:
de ropa
femenina;
"Y dicen que investigan lo que inventan"
de Unamuno, refiriéndose a los
Miguel
aproxi
adversos resultados, convie
en la
lengua madre de las
Lexican Tol/us
sostiene que el primero es un
lacionado
1
estos
también
anteriores, donde
(1833),
acuerdo
puesto que no aparece
ninguna de las ediciones ante
publicadas
"patagiatus",
el
un
esta
"patón";
.
No obstante
tres
de
sinónimo de
reciente
mamente
ne
Lengua Castellana,
como
y el
comenta
filólogos
y
7
15
EPONIMA
PATAGONES Y PATAGONIA: UN CASO DE DENOMINACIÓN
último
enfermedad grave y mortal. Es obvia
una
también aquí la total desvinculación
con
la
eti
mología antropométrica que nos ocupa.
Agotadas entonces las posibilidades en los
idiomas
corresponde revisar las
europeos,
del
Nuevo Mundo, que
lenguas aborígenes
también han sido escudriñadas
pocos
investigadores
Para el peruano Paz
el afán de
en
por resolver
no
misterio.
este
Soldán, por ejemplo, Pa
corrupción de la palabra quechua
tagonia
"pata-cuna", que significa: "pata", cerros no
altos; "cuna", partícula plural que otorgaría el
significado "muchos cerros no altos" (1885:369),
caracterizando bastante bien el paisaje de las
es
pampas
cercanas
al Estrecho. Tres años
antes,
el
Spegazzini, había dictado una conferencia
en el Instituto Geográfico Argentino abordando
este problema. El aporte del quechua -decía- es
Dr.
el término "patac", que significa "cien", al que
se suma "aónikenk" (denominación que los te
huelches meridionales
daban
se
a
mismos)
sí
para formar el binomio "patac-aonikenk", que
con el concurso del tiempo llegó a transformarse,
o
deformarse,
en
En cambio el Dr.
patagón.
Boeri, opta por
apartarse de la lengua
tehuelche, donde "pata" es el término "siete" y
"gon" designa a "codo"; o sea "hombres altos",
no
de
unos
"siete codos"
El
jesuíta
(2
aproximadamente).
m,
Pablo Pastells aporta la curiosidad de
palabra en "pa" y en "tagón"; lo prime
ro
significa en la lengua pampa "venir" o
"aproximarse" y lo segundo "roto" o "quebra
do"; de aquí entonces que patagón significaría
dividir la
que viene de la tierra quebrada o rota",
las que habrían tenido -según él- origen en
conmociones sísmicas habidas hace muchos
problema.
posible pasar por alto al
célebre Diccionario Yagan-Inglés del misionero
el
anglicano Thomas Bridge (1813-1887), en
cual divide Patagonia en "patag" y "ónia" que
traduce al inglés como "cualquier cosa o super
ficie ancha"; continúa con la frase "ókan ko-p.o-ta gómi", que fonéticamente tiene cierto pare
cido con Patagonia y que traduce como "en mi
casa hay una tabla"; del mismo modo forma bi
nomios con "p." (abreviatura de "patag") y
dacta para dar por terminado el
Finalmente,
"umóci", "se
antes, desde
Quien
más
se
tiempos muy
molestó
con
por revelar el desconocido
argentino
de la
antro-
fue el
por
Latzina, según
F.
Diccionario
declara que
origen
empeños
Magallanes
profesor
se
puede deducir de
Geográfico Argentino, donde
ponimia impuesta
su
estos
no
le
merecen
fe
"ninguno
de
estos
cuentos"; y en cuanto al difundido gigantismo de
los patagones, con toda intención escoge la
versión de marinos holandeses que aseguraban
haber visto
niños de sólo seis semanas que ya
de
caminar atrás de sus madres; "si
capaces
tales tragaderas tenían en el siglo pasado los
a
eran
sabios, imagínese el lector, cuales
brutos
nueve,
dad"
no
tendrían los
que constituían entonces el noventa y
nueve décimos porciento de la humani
(1899:509, 510),
es
cae una casa
cha"; "p."
parramar". Luego
formados
nomios
persistiendo
la conclusión que
re
continúa
construida"; "p.'
una cosa an
"unaina"
y
traducciones
las
en
con otros
"desparramarse"
geográficos (1933:372).
"ampliarse"
o
des
cinco bi
los términos "kataka"
con
"wia",
"undeka-a",
accidentes
mal
el agua sobre
en
y "ona", "acción de ensanchar
o
"unagulu"
la
idea
de
sobre variados
Dejaremos hasta aquí este breve recuento de
las más conocidas teorías que se han formulado,
tanto a base de vocablos europeos como aborí
genes, en torno a la posible
labra patagón. En nuestras
hallazgo
tó el
de
nota
una
etimología de la
indagaciones no
insólita,
a
pa
fal
cargo de
trabajo descrip
Jerman Wieghardt, quien
tivo sobre aborígenes fueguinos y patagones, sos
tuvo textualmente: "Los compañeros de Maga
en su
llanes llamaron patagones a cierta tribu
a causa desús anchos pies..." (1896:12).
EL ORIGEN EPONIMO
A
quien corresponde
partido)
origen
indígena
'l
el mérito
de haber sido el
lar el verdadero
remotos.
todos
es
y "unkona", "estar
"gente
siglos
no
primer
(al
menos com
autor en seña
del término
en
cuestión,
argentina María Rosa Lida
Malkiel (1910-1962), quien enunció (1952)
eponimia de la palabra patagón, pero con
es
a
la literata
de
la
la
insalvable limitante que significa el apoyo en una
fuente indirecta, pues la dedujo de la obra de la
ensayista inglesa, Mary Patchell,
The Palmerin
Romances in Elizabethan Prose Fiction
(1947), y
conseguir, por su parte, la prueba material
("rareza bibliográfica" la denominó) de la infor
le
mación que
proporcionaba ese ensayo
al
no
literario, fue tratada
que
generalmente
con
el amable descrédito
obtienen
las
verdades
Epónimo: personaje o héroe literario que
pueblo, una región o una época.
a un
a
da nombre
16
RAMÓN MORALES
medias3.
El último de sus connacionales en
desestimarla fue el historiador Juan Hilarión
Lenzi, según lo da
a
entender claramente
en su
Historia de Santa Cruz, donde hace un detenido
análisis sobre las posibles razones que habría te
Magallanes para llamar patagones "a los
habitantes de las desconocidas tierras que tenía a
estribor". Primero ironiza sobre los esfuerzos lin
nido
güísticos que le han precedido, a los que llama
"fantasías de sabios"; luego cita con cierta
incredulidad
Lida de Malkiel, más que nada,
ginó interminables ciclos de novelas. Entre
que lograron mayor fama y aceptación entre
los
los
halla el ciclo de los palmerines, inau
gurado por el Palmerín de Oliva, el año 1511, en
la ciudad de Salamanca.
Al año siguiente
aparece su segunda parte, con autoría anónima y
lectores
bajo
se
el título de Primaleón*
En
.
ella, el héroe,
arriba a una remota
isla donde traba buena amistad con el caballero
de la misma y su hijo Palantín. Entre los peligros
entre sus tantas aventuras,
por la contrariedad que 1" causa una explica
ción ajena a toda etimología, pero opta por su
que amenazan en este escenario insular se halla
la existencia de cierta población de personas que
llevan una vida apartada y semi salvaje, entre los
ción y "carente de
animal, de gran
a
descarte, considerando indemostrable tal suposi
razones
suficientes".
Finaliza
problema y
planteando una tajante conclusión: "El origen
del nombre no se conoce. Es secreto que Maga
llanes guardó hasta su muerte; uno de los varios
misterios que Pigafetta no explicó".
su
declarando insoluble el
resumen
Pigafetta
ha sido criticado como cronista de
dudosa confiabilidad. Su escrito aparece pobla
que destaca
explicación.
fallecido
en
Esto tiene
una
«...Y
la realidad de
su
y
de
muchos
tuvieron durante más de
tinente
Portugal
Canalejas,
tres
siglos a
casi
las
mas
en
abundante
en
conferencia
llama
un
la
dijo
toda
Palantín la
costa
de la
mar.
grandes montañas
moran en
otras
él les
era
ella
una
hay
que
gente
ella.
en
animales y son muy bravos y
cruda de lo que ellos cazan por
como
salvajes que
no
traen
sino
de los animales que matan, y
que es cosa maravillosa de ver
pieles
hombre que ahora
con un
Patagón
animal que
desemejado
y
hay
este
aquellas
en
hay
entre
dicen que lo
montañas que
patagón
el más
mujeres. Y' dicen que tuvo que ver con una de
aquellas patagonas que así las llamamos nosotros por
salvajes y que aquel animal engendró cn ella aquel hijo,
esto tiénenlo
por muv cierto según, salió desemejado
que tiene la cara como de can y las orejas grandes que
le llegan hasta los hombros v los dientes muy agudos y
y
grandes
pies
4
de
que le salen fuera de la boca retuertos, v los
de ciervo y corre tan ligero que no hay
manera
Novela caballeresca <¡ih'
Primaleón y su hermano
de
Oliva.
¡os grandes hechos de
Polendos, lujos de Palmerín
narra
Vio luz literaria
de
hazañas
y
Recepción injusta pues pasaron por alto que sólo tres
años más tarde obtuvo el convincente respaldo de M.
Bataillon. y la
nada
es
se
en
muy
cosas,
si
de las
un con
proezas, protagonizadas por caballeros ansiosos
de gloria y nobleza, consiguió que muchos
autores desbordaran su imaginación, lo
que ori3
así
señor
y
que hav en todo cl mundo salvo
que tiene muy gran entendimiento, v que es muv amigo
es
a
temática,
Esta
son
desemejantes
todo
engendró
1880;
el último título de moda.
como
vestiduras de
ellos que
verdadera fiebre de la que incluso pudo parti
cipar la numerosa población analfabeta de la
tadas
parte
todas las
esta
comen carne
montañas/y
son tan
entre
que los dueños de tabernas y po
sadas aseguraban mayor público consumidor
contratando a lectores que en voz alta ponían al
alcance de todos las aventuras caballerescas rela
así
hay
isla
esta
tiempo a
apartada de
unas
(Flandes, Francia, Inglaterra,
España, especialmente). Fueron una
época, gracias
grande aquella isla,
parte de
una
esquivos y
entero
y
era
porque viven
época, la
los libros de caballería
la
muy
especialistas (Alborg,
1966; Menéndez Pelayo, 1943;
Gayangos, 1857)
a
y de poco
historia de la literatura tenga memoria: los libros
y novelas de caballería.
decir
si
poblada que era viciosa. Mi buen
mayor población que ella tiene es
cual vivía el fenómeno literario de mayor consa
gración y arraigo en la cultura popular del que la
Al
braveza que tiene
la
día estando hablando de muchas
un
preguntó
El vicenzano, nacido en 1491 y
1534, como hombre culto no podía
estar desconectado de
a
personaje referido:
simple
clara y
corpulencia y
población.
A continuación
transcribimos literalmente parte de la página
142 (foja CXIii) del Capítulo CXXXIII, en que
Palantín impone a Primaleón sobre la gente y el
atemorizada
do de fantasías y exageraciones que le restan
exactitud al evaluársele como fuente de informa
ción histórica.
individuo, mitad hombre mitad
un
propia autora amplió su información
de publicación postuma (1976).
en Salamanca el 3 de
Julio de 1512,
siendo reeditada en los años 1516, 1524, 1528, 153-1.
1563, 1566, 1585 y 1588. Según Palau y Dulcet
restarían lies ejemplares que se hallan en la
Biblioteca de Fernando de Colón, en la Biblioteca
(1902),
Parisina de Londres
v
en
la
Biblioteca Nacional de
1.a biblioteca del Museo Nacional de Historia
Natural <le Santiago cuenta con un microfilm de la
Pai
in.
de 1524
edición
Raros
Paris).
y
(gentileza
Preciosos
de
la
del Servicio de Libros
Biblioteca Nacional de
0.
quien
lo
pueda alcanzar,
y
y trae
cazando y trae dos leones
con
que hace
muy
patago
este
se
montañas hace mucho daño cuando sale
no
crió
en
con
las
y tanto
daño y
hecho
es
hemos
juntado
muchos para matarlo
nada antes el nos ha hecho gran
como
trac un cuerno a su
aquellos
muchos de
cuello y tocándolo vienen
a ayudarle y hace gran
patagones
daño que no temen sus vidas, por manera que así lo
hemos dejado hasta que Dios que es poderoso lo quite
del mundo que mucho
descripción
Una
(también aparece
sería menester
reiterativa
como
Patago)
su muerte».
de
Patagón
la que
es
el
patagones que acuden
les lanza
a
después
los bramidos que
con
aquél
que es vencido. A continua
ción, transcribimos el breve pasaje de la segunda
columna, pág. 143 del citado capítulo,
entran en escena
«...Déjate
de
diablo
este
dos de
poder
en
semejantes:
que
dijo
eso
él y pensemos cómo llevaremos a
mucho holgaría de llevarlo ante
que
Gridonia. El está
maravilla
sus
mal herido
tan
hacer,
eso
mas
dijo
Purente que será
busquemos
todavía
cl
remedio para llevarlo, y él se apeó y fue por la cadena
en que el gran Patagón traía los leones y Primaleón
cuando la vio fue muy ledo/ y ambos dos fueron a
Patagón y echáronsele a la garganta, aunque hacía
tales
bramidos,
los
que
cosas
por
espantaba que
manera
aquellos patagones
de
su
que
acudieron
linaje,
y
cuchillos muy agudos que otras
mas eran muy fuertes y legeros.»
Para
sonaje,
completar
daba
allí
estos traían
armas no
la caracterización de
grandes
dos de
asi mismo
las tenían,
per
cuyo nombre lleva una vastísima región
transcribimos finalmente un
sudamericana,
párrafo del Capítulo 135, en el cual
alguno de sus rasgos psicológicos:
breve
ten
«...Sélvida que
señor de
espantada
ver
a
se
hija
llamaba la
vier
por mirarlo,
Patagón
espantó
antes en mirarle su hermosura fue
muy
mas
Y sabed que él tenia
de
no se
aquella
condición así
como
"patagón"
responde a
naje que lo
cular
con
aquella
que le
ella lo era, y
todos conocieron su placer con ella, y su padre le rogó
que se le allegase a él, ella con gran temor lo hizo,
Patagón fue
tanto
muy
ledo,
cuando
a
de sí la vio/ y
el miedo que de él
dulces palabras y
dejase
y él lo entendió bien, mas
rogábale que
no lo quizo hacer porque él mismo se CTitendía de curar
y sacó su lengua muy grande, y comenzó de lamer sus
se
curar
entero
por
es
nombre de
un
no
del perso
refiere en parti
alguna
posee, ni tampoco se
o tacha física
que exista
en
él.
POSIBLE ORIGEN DEL ERROR
Indudablemente que
etimológica
aclarado,
primeras
Patagón
que
mucho
en
la errónea atribución
investigación
esta
en
tuvieron
que
sílabas del nombre.
denominación
la
hemos
ver
las
dos
en
lugar
de
Si
hubiera
sido,
por
ejemplo, "Fanagón", nunca nadie habría caído
en confusión alguna con los pies de los
aboríge
nes.
Tal
todo
vez
homofonía y
no
más
sea
homografía
''
que
un
Lo más
.
según explicamos al comienzo de
este
de
caso
probable,
trabajo, es
que hayan sido López de Gomara y Oviedo y
Valdés los primeros autores en cometer el error
pie
interpretación a la
de los aborígenes,
sólo
era
cido
en
entre
parte de
sin
"pata"
como
imaginar,
o
alusiva al
saber, que
nombre de fantasía, apare
cierta literatura que no la consideraban
sus lecturas habituales.
El segundo error
tomar
equivalente
"grandes"
car su
un
voz
al monosílabo
o
"gran",
próxima.
simpatía
pañoles
de
su
que
a
"gon"
los
sin darse la
traducción, pese
tenían tan
de
portugués
tarea
como
el
conceptos
de verifi
que la
Una
patria lusitana la
prueba más de la es
Magallanes
los es
historiadores
tenía entre
época, incluyendo
a
tan cerca
perdió
halagar con
hizo que la doncella le
tenía, y comenzólo
como
sus
un
defecto
a
de alto nivel.
natural, especialmente
comentarios de
característica física
negar
extrañamente hermosa
.»
Patagón,
a
fantasía, desprovisto de toda etimología, que
casa
su
.
irán siendo
las referencias
haga
supo.
tiempo en sanar
del todo; pero para los propósitos de esta investi
gación la lectura de los tres párrafos citados es
suficiente para deducir, con holgada seguridad,
el animal que lo engendró de ser muy ledo con las
mujeres, y así lo fue Patagón con Sélvida que no pudo
pareció
escasas
y heridas que tardarán
habría sido
del caballero
la isla vino por verlo y extrañamente fue
ella,
manso.
así
se
más
salvo cuando Primaleón
de
este
vez
llagas
nueva
próximas páginas y capítulo
En las
cada
que
capítulo siguiente, y que es importan
porque al finalizar nos permite conocer otros
templa
te
nos
aquella
Primaleón fue muy ledo cuando
lo llano, y
a
halla hombre de acá de los nuestros
que no mata, y
aquella parte dejan de hacer sus labores por él. Y
veces nos
comiese y él lo hizo por ruego de la doncella, tanto era
manso con ella,
que lodos lo tenían por cosa extraña,
sus cazas
agudas
por
algunas
ella ni
continuo
un arco en sus manos con saetas
que hiere. Y desde que
heridas y decia que aquello le bastaría, mas su lenguaje
otro lo
podían entender y luego le trajeron que
que lo han visto
por los
algunos
dicen de él maravillas y el anda de
montes
17
AGONES Y PATAGONIA: UN CASO DE DENOMINACIÓN EPONIMA
PVI
Homofonia y
homografia
son
las dos
acepciones
que
palabras homónimas. La primera se refierc al sonido y la segunda a la escritura. En ambos
casos son dos
palabras que tienen sonido o escritura
iguales, pero su significado cs diferente.
tienen
las
18
RAMÓN MORALES
tos;llosrMcsDC mancraDederuoicoire
tolgauan cftrcmamcweconclyp:egiir¡iaíJi
lepo: nueuasD: erras ría rasiycl les ocjts
loqueíabia. í~pnDiacftandot?aD!andoeri
ron
cloo era piciofa.Z^j buen H:ño: Diro'j/b2lá*
ctséto arco cn fus manoseen
Úgeroq no a£ qui é lo pueda aleaban': al
gurK>sqlor>á>iíToDÍ}enDimarauíUasyel
mucl>ascofas:elIespjeguntoficrflgrandc antfoDecótinopalosmórescacádo'trrae
aquella y fia:'? fiera roda poblada que mu* dos leones Derraylla cóqr¿av: fus cacas <i
rínUmayo:poblarionquceIlarienccsenla
cc'írs ocla mar: a ala vna parre Della yfía ay
my^ grandes montañas y oc poco nempo
fldlapartcmoancnclla nía gente muya»
parrada ó rodas las otras quea y cnella : po?
faerasmufa
qfierc^oeíqeftc patago fecrío
(¿mías
mudjo&afío q Tale
en aqllas mótanos
slolíanoifno falla r¿ót&eoe acá oelosnf os
con
fa^r
qnornaxa:po:rriancraqlos^ótf?csnoron
feguros £ po: a qüa par re t5rá oe fajer liis la
quebiucaflicomoanimalestfonmuyb^ uojespoiel ^algunaspejesnosauemos
uosycfquíuosicomencarnccrüdQDeloc] jurado moctx>fpo: lo matar i taro es feclpo
ellos cacan postesmontanas/'t fon álfico' con)OB3daantcsclnos^aI?ecpográDario
moSálu í<¿c¿ que no traen fino pnaspeitídu n. tracvn cuerno a fu cuello i taracnd olo píe
ras dc pieles pelas animaliasQ tie m3ran: «i nen mudóos xx aqllos patagones a le syu*
fon ranpdTemriadas que cs cofa marauillo oar i fa^e gran Daño q no tem cn fu s pícTssj
raDCPcr/masrodoesn3daconpnr>omb:e poimanera qalTibau-cmosDeradofafraq
que aacaaay. entre ellos que fe llama |fbaa« Diosqcspc^eraroloqteDelmüdOQuemu
gonyeíte patagón Pisen queben^endropn ó}0 no3 feria mendi er 13 fu m ucrte.
animal que aren aquellas montañas que
.
.
.....
~.
cscTiñasp^cmcjido Qi\c ay en rodoTlmü
C€ap*C]CmU|.COmOp2imaiC
121-1 es nuiy amicho Dc'la's*'inuqcrcs.£D¿5cn
quceijo quer^aucrconpnaDcaqucllaspa^
paña fuero a caca poi ruego oe p:ímaleórz
comoo^puesDe anoct?efcídop:ímaleófea
do /faino que ricne muy eran emend ¡míen <
__
On^p3l3íínr1jo^cau3!lbc5orrarnüd?3c6
ragóasqueaíTilasllainamcTsnoforrospo: parto^Ues^tandádoófpuesacacflCO'nfu
faluaaesiqüeaquelani.Tiaicnp-.cñdrocne' efaidero tc^ al ^ patago ? lo pendo ?
Hoaquci ¡ojjo;y efro ri nic.n lo po; i nuy derío maro pos leot¿sq conel v>ema._
feguníalíoDcfcmcjado que nene la cara co* fKSjgp?») T tanta maria q grádesmaraui
moDeCanilasoícjasgrandcscudcUegan
folíalos borntEosilos Dientes muv aqu,
dos q grades q le falc fu era ocla boca"retü cr
Fig.
llasmeaucyscórado Díro£>>:í>
mateó ;;wgo pos q yo mucloo lo
WMSM qmaperpo: per cófaTan m srav
fojas exi y exii del Capítulo CXXXIII en que se describe al gran Patagón; y encabezamiento del
Capítulo CXXXI V en el cual el caballero Primaleón enfrentará y derrotará a Patagón
1. Parir de las
COMENTARIO FINAL
sus
Si bien hacer comentarios sobre fenómenos
literarios escapa
a
nuestra
especialidad
y
a
los
objetivos de este artículo, no queremos por ello
dejar de referirnos someramente al influjo
psicológico que en el proceso de conquista debe
haber tenido la literatura caballeresca.
vano
\$ff
fueron
contemporáneos
No
en
y coincidentes
en
máximos apogeos.
ibéricos que
tenía
llegaban
a
La
gran
mayoría de
"hacer la América"
no
intelectual que la
En cambio, las ideas rena
nutriente
mayor
literatura popular.
centistas, sobre lo que
tanto
nuestros
historiadores cuando
dualizar
a
la fuente de
cargan las tintas
se
trata
de indivi
principios
que motivaba
de las
quienes ejercían los liderazgos
sólo estaban incorporadas en una
a
campañas,
élite social
e
19
PATAGONES Y PATAGONIA: UN CASO DE DENOMINACIÓN EPONIMA
intelectual de aquella
época, minoría que
necesitó
moverse
de
horizontes.
De
participar
incluso
Europa
élite resulta difícil hacer
esta
a
en
nunca
mejores
busca de
capitanes
los
pue bien sabemos que
entre
conquista,
de
ellos fue falencia fre
el analfabetismo. Y si algún letrado, u
hombre culto, cruzaba el océano para incorpo
cuente
rarse
conquista,
la
a
bastante incentivado lo
hacía por la ilusión de hallar en los desconocidos
escenarios del Nuevo Mundo, las mismas fabu
descripciones que
losas
caballería. Así
nos
leían
en
los libros de
Irving
Conquistador
Leonard
maciza obra Los Libros del
en su
de la cual citaremos
que
se
lo demuestra
este autor
año 1519 estaba yo
Chiericato...
de Antonio
en
España...
Pigafetta:
"El
determiné
me
asegurarme por mis
de todo lo que se
a
De todos los comentarios que hemos conocido
relación a lo motivadora que fue la literatura
caballeresca para la conquista americana, el que
nos
parece más adecuado para concluir este
trabajo
de
es
Riquer
el que hace el
ensayista español
Martin
amenísimo estudio sobre la vida
en su
un
que habría perma
ignorado en las polvorientas
personaje ficticio; personaje
necido
eternamente
páginas
de
una
novela medieval, de no haber
eponimia cometida por
•sido por la espontánea
quien estaba próximo
convertirse
a
la
en
a
alcanzar la
a
gloria de
legar
el "amadís de los mares", al
navegación
oceánica,
la
mundial la
vez
la humanidad de
su
primera
una nueva
que
ruta trans
cosmovisión
a
época.
AGRADECIMIENTOS
Por los libros que yo había leído y
propios ojos de la veracidad
contaba..." (1953: 24, 25).
en
continuará llevando el fantasioso nombre de
monseñor
con
por las conversaciones que tuve con los sabios
que frecuentaban la casa del prelado supe que
navegando por el Océano se veían cosas mara
villosas y
vértice territorial y marítimo que forma parte
americano
continúa
sur
extremo
y
del
reveladora confesión
una
registra
,
el gigantes
patagones ya han desaparecido, pero
co
y obra de Cervantes, donde sostiene textualmen
te: "Los descubridores y colonizadores de Indias
estaban hasta tal punto influenciados por la lec
tura de libros de caballería
que bautizaban las
tierras que ganaban con nombres fingi
dos y fabulosos países que habían encontrado en
sus lecturas predilectas" (1967: 19, 20).
gratitud hacia
Deseo expresar mi
tes
siguien
los
funcionarios del Museo Nacional de Historia
Natural de
Encargada
Santiago:
de
terbibliotecarias
la Biblioteca Nacional de
ante
París; al Sr. Ariel
Sección
la Sra. Yakica Lucic,
diligencias in-
a
Biblioteca, por las
Camousseeight, Jefe
de la
Entomología,
por sus breves pero nece
sarias traducciones de la correspondencia fran
y al Sr. Francisco Silva, Coordinador Cien
tífico, por la obtención del financiamiento para
el microfilm utilizado. Asimismo, agradezco a la
Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museo el fi
cesa;
nanciamiento
proporcionado;
y
a
mi
colega
Mauricio Massone, la lectura crítica de este
ar
tículo.
FUENTES DE CONSULTA
nuevas
Tal fue el
Magallanes que
Julián no halló objeción
caso
bahía de San
de
en
cronista por denominar
espigados naturales que
de
arcos
les y
y
contrario,
tantas
no se
de
la
se
primera
con
a
de
aquellos
pieles de
pintura.
anima
Por el
la emoción que le cau
una de las
en su
literatura
predilecta,
registrar el nombre en su diario
que él aspiraba se convirtiera en
en
viaje; diario
paráfrasis más
real de todas las historias de
Tampoco dudaría
más
tarde
en
topónimo "Regione Patagona" sobre
primer mapa que se dibuja de aquellas tierras,
limitadas al sur con el "Streto Patagónico".
A casi cinco siglos de estos hechos los
escribir el
el
ABELLAN MARTÍNEZ.
Lengua Española.
1902. Rarezas de la
Madrid.
su
visualización real de
ficciones leídas
caballería.
con
alterados por la
Pigafetta,
demoró
lo hizo
remota
presentaron armados
flechas, envueltos
sus rostros
saba la
como
la
ALONSO,
A.
1953.
Estudios
Hispanoamericanos.
Romántica
Hispánica.
Temas
Enciclopedia
ALONSO, M. 1958.
Lingüísticos.
Biblioteca
Madrid.
del Idioma.
Diccionario Histórico y Moderno de la
Lengua Española (Siglos XII al XX).
Etimológico,
Tecnológico, Regional
Hispanoamericano.
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CANALEJAS,
Ma
Hispano.
Etimológico
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Castellano
e
Castellana
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Según
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Italiano-Spagnolo SpagnoloItaliano.
Compilato Sul Dizionario
Dell'Academia Spagnola e sui Migliori
Dizionari Spagnoli i Italiani. Milano.
Dizionario
e
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Tierra Firme del Mar Océano que llaman
HERRERA, A. 1901.
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Fondo
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Colección Historia
Tomo 27:
Bibliográfico J.
329-556.
T. Medina.
LATZINA, F. 1899. Diccionario
San
Geográfico Ar
gentino: Edit. J.Peuser. Buenos Aires.
LÁZARO, F, 1977. Diccionario de Términos Fi
lológicos.
cionario Italiano- Español.
Biblioteca
Romántica
His
Nuevo Dic
Redactado
en
vista de los Diccionarios de la Academia
Lengua Española, del
de la Italiana
de la Crusca, y de los mejores textos con
temporáneos italianos y españoles. Bar
celona.
LÓPEZ DE GOMARA, F. 1901. Historia Gene
ral de Las Indias
todo el descubri
con
notables que han acaecido
ganaron hasta el año 1551;
cosas
desde que se
con la
conquista de México y de la Nueva
Colección Historiadores de
España.
Chile.
J.T.
MEDINA
Océano
de
Medina.
Magallanes
SILVA,
Santiago.
El descubrimiento del
1920.
Pacífico.
Universitaria.
Dedicada
y
sus
A.
Agostinho de
Fernando
Imp.
Diccionario da
1858.
Lisboa.
Melhorada
desemnbarga-
muito accrescentada fedo
dos
a
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