Poder Judicial de la Nación AMPARO.GAS.ABSTENCIÓN DE

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Poder Judicial de la Nación
AMPARO.GAS.ABSTENCIÓN
DE
PERCEPCIÓN
FIJOS
DE
FEDICOMISO
CARGOS
GAS
EXIGIR
POR
EXPASIONES
2006-
208.INCONSTITUCIONALIDAD DTO.1216/06
REGLAMENTARIO
DE
LA
LEY
26.095.COOPERATIVA.
Admisibilidad
formal
de
la
acción
de
amparo.La
existencia de un daño grave e irreparable.Idoneidad
de la vía elegida. Plazo de la acción de amparo.Las
USO OFICIAL
normas
cuestionadas.Su
constitucionalidad
inconstitucionalidad.Naturaleza
cargos
específicos
jurídica
creados
por
e
de
los
la
Ley
26.095.Doctrina.Jurisprudencia.Debate Parlamentario.
Principio
de
legalidad
tributaria.(Dr.NOGUEIRA,con
adhesión del Dr.PACILIO)
Adhesión.La
admisibilidad
escogida.Consideración
demandada.El
de
principio
de
los
de
la
vía
argumentos
reserva
delegación
de
de
la
la
ley.La
legislativa.Otras
consideraciones.(Dr.VALLEFÍN
con
adhesión
Dr.PACILIO)
En el caso el Tribunal confirmó la decisión del a
quo hizo lugar a la acción de amparo interpuesta por
la accionante y declaró la inconstitucionalidad de
la
ley
26.095
ordenando
exigir
que
la
y
las
las
normas
dictadas
codemandadas
percepción
de
se
los
al
efecto,
abstengan
cargos
de
fijos
cuestionados en relación a la actora.
PODER JUDICIAL DE LA NACIÓN
R.S.3 T 178 f*66
///la ciudad de La Plata, a los 7 días del mes de diciembre
del año dos mil nueve, reunidos en Acuerdo los señores Jueces
que
integran
la
Sala
Tercera
de
esta
Cámara
Federal
de
Apelaciones de La Plata, toman en consideración el expediente
n°
15.897/08,
LIMITADA
C/
P.
“COOPERATIVA
E.
N.
S/
DE
TRABAJO
AMPARO”,
QUÍMICA
procedente
DEL
del
SUR
Juzgado
Federal de Primera Instancia, Secretaría n° 6, de Quilmes.
Practicado el sorteo el orden de votación resultó: doctores
Carlos Alberto Nogueira, Carlos Alberto Vallefín y Antonio
Pacilio.
EL DOCTOR NOGUEIRA DIJO:
I. Antecedentes.
1.
La
Cooperativa
de
Trabajo
Química
del
Sur
Limitada, inició acción de amparo contra el Poder Ejecutivo
Nacional.
Solicitó
declaración de
inconstitucionalidad
del
Decreto n° 1216/06, reglamentario de la ley 26.095 y de los
actos administrativos dispuestos como consecuencia. Ello con
fundamento en que dichas disposiciones normativas afectan su
derecho a trabajar, ejercer industria lícita y su derecho de
propiedad (arts. 14 y 17 de la Constitución Nacional).
Expresa que la empresa recibió una nota de Metrogas
S.A.
en
donde
se
informaba
que
dicha
cooperativa
debía
facturar y percibir, a partir del 1 de enero de 2007, el
cargo
por
Fideicomiso
Gas
expansiones
encontrarse
categorizada
como
cliente
afectada
ese
Se
indicaba
a
régimen.
SPG3
2006-2008,
y,
allí
por
que,
por
tanto,
para
su
categoría de usuario, el módulo de cálculo era de 0,170968
$/m3, aunque sin aportar mayores datos sobre cuál era el
monto total a abonar y la modalidad de pago.
Prosiguió
su
relato
diciendo
que
la
cooperativa
recibió una factura de la empresa Metrogas S.A., en la que se
le exigía el pago de un importe de pesos, cuyo vencimiento
operaba
sustento
el
26
de
marzo
legal
en
la
de
ley
2007,
26.095,
obligación
que
el
1216/06,
Decreto
tendría
la
Resolución del MPFIPyF 2008/06 y la Resolución de Enargas
3689/07.
Alegó
que
dicha
factura
carecería
de
sustento
normativo, atento que el elevado importe no resulta acorde
con la legislación vigente en la materia.
Refirió que solicitó información –vía telefónica- a
Metrogas S.A., donde le indicaron que la cooperativa debería
abonar dicha suma por un lapso de 16 meses, lo que implicaría
–ante la importancia del valor facturado- el cierre de la
cooperativa.
Poder Judicial de la Nación
Asimismo,
confiscatorio,
sostuvo
violando
que
así
el
el
monto
reclamado
derecho
de
sería
propiedad
y
provocando un serio peligro al derecho a trabajar y ejercer
una industria lícita y que ello aparecería agravado por la
ausencia de un sistema de cálculo claro y predeterminado en
la normativa cuestionada, principalmente en lo que se refiere
al
monto,
plazo
y
modo
de
pago,
lo
que
implicaría
una
imposición arbitraria por parte del poder administrador .
2. En
cautelar,
la demanda, también solicitó
consistente
aplicación
del
en
Decreto
la
inmediata
1216/06
y
una
medida
suspensión
demás
de
resoluciones
administrativas, dejándose sin efecto la exigibilidad de la
factura de Metrogas S.A., por la que se le reclamaba –en
concepto de cargo específico- la suma de pesos.
USO OFICIAL
Esta
medida
fue
denegada
por
el
a
quo
,
por
considerar que no se encontraban reunidos los presupuestos
que la ley procesal exige para su viabilidad (art. 230 y
ctes. del CPCC).
3.
,
la
actora
planteó
como
hecho
nuevo
haber
recibido de Metrogas S.A., con fecha 31 de mayo de 2007, una
intimación a cancelar la deuda de pesos, correspondiente al
cargo fijo por fideicomiso, bajo apercibimiento de cortar el
suministro de gas. Como consecuencia de ello,
reiteró el
pedido de medida cautelar, el que fue rechazado por el a quo
.
4.
La
demandada
(Estado
Nacional-Ministerio
Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios),
de
en el
informe circunstanciado , sostuvo: 1) la inadmisibilidad del
amparo, por los siguientes fundamentos: a) no resultaría la
vía
idónea
conocimiento-
para
la
debatir
política
–en
su
estrecho
energética
nacional,
marco
de
pues
se
trataría de una cuestión cuya complejidad técnica requeriría
un
proceso
comprometería
más
dilatado;
el
desarrollo
b)
la
de
normativa
cuestionada
actividades
esenciales,
configurándose el supuesto previsto en el art. 2, inc. c), de
la
ley
16.986;
2)
la
ausencia
de
fundamentación
de
la
inconstitucionalidad de la normativa cuestionada, pues los
“cargos específicos” reclamados no entrarían en la categoría
tributaria, sino que estarían sometidos a un régimen jurídico
propio, autónomo y deberían ser interpretados en armonía con
la situación de emergencia.
5. , ante la existencia de hechos controvertidos,
se fijó la audiencia prevista en el art. 360 del CPCC y se
dispuso abrir la causa a prueba.
Efectuada
la
audiencia
y
producida
la
prueba
ofrecida, se corrió vista a la fiscal federal, a fin de que
se expida sobre el planteo de inconstitucionalidad efectuado
por la actora, quien solicitó se deje sin efecto la vista y
se disponga el litisconsorcio pasivo necesario entre el Poder
Ejecutivo Nacional, Enargas y Metrogas S.A..
6. , el a quo ordenó integrar la litis con Enargas
y Metrogas S.A., requiriéndoles el informe circunstanciado
del art. 8 de la ley 16.986.
6.1. En su presentación , Metrogas S.A. planteó su
falta
de
legitimación
pasiva,
pues
sería
ajena
a
las
cuestiones ventiladas en el sub lite, ya que se limitaría al
cumplimiento de las obligaciones que le fueron impuestas por
las normas en cuestión, sin participación alguna en ellas.
6.2.
Por
su
parte,
Enargas
–en
su
informe
circunstanciado - planteó: 1) la inadmisibilidad del amparo,
con base en los siguientes argumentos: a) el amparo no sería
la vía más idónea para discutir cuestiones que requieren
amplitud del debate y que tienen gran complejidad técnica; b)
la caducidad de la acción, pues se habría iniciado vencido el
plazo de 15 días hábiles del art. 2, inc. e), de la ley
16.986 y que habría un consentimiento tácito del actor por el
tiempo que dejó transcurrir desde la recepción de la primer
factura, con vencimiento en abril de 2007 y el inicio del
proceso; 2) la inexistencia de arbitrariedad o ilegalidad
manifiesta,
pues
no
habría
lesión
irreparable
porque
el
accionante podría pagar bajo protesto y luego efectuar su
reclamo por las vías pertinentes.
7.
dictaminó
a
Conferida
nueva
favor
la
de
vista
a
la
fiscal
inconstitucionalidad
federal,
de
la
ley
26.095, el decreto n° 1216/2006, la Resolución n° 2008/06 del
Ministerio
de
Planificación
Federal,
Inversión
Servicios y la Resolución n° 3689/07 de Enargas.
II. La decisión recurrida y los agravios.
Pública
y
Poder Judicial de la Nación
1.
El
a
quo
hizo
lugar
a
la
acción
de
amparo
interpuesta por la Cooperativa de Trabajo Química del Sur
Limitada y declaró la inconstitucionalidad de la ley 26.095 y
las normas dictadas al efecto, ordenando que las codemandadas
se abstengan de exigir la percepción de los cargos fijos
cuestionados en relación a la actora e imponiendo las costas
en el orden causado, atento la complejidad y naturaleza de
las cuestiones debatidas.
1.1. Para así decidir consideró, en primer lugar,
que
no
amparo.
existían
Ello
óbices
con
formales
fundamento
en
para
que
la
la
procedencia
del
incorporación
del
instituto del amparo al art. 43 de la Constitución Nacional
implicó la configuración de un medio idóneo y novedoso para
el examen y eventual declaración de inconstitucionalidad de
USO OFICIAL
normas emanadas de los Poderes Ejecutivo o Legislativo, como
modo de brindar una tutela constitucional inmediata y eficaz
y que si bien subsisten los recaudos de admisibilidad de la
ley 16.986, estos deben examinarse con un criterio amplio
para no contrariar el espíritu de la reforma constitucional.
En razón de ello entendió que carecía de entidad
la
pretensión
de
constitucionalidad
de
que
—para
normas
expedirse
aquí
sobre
cuestionadas—
la
fuera
necesario recurrir a un proceso en el que pueda darse una
mayor amplitud al debate o prueba a esgrimirse al respecto.
En cuanto a la caducidad de la acción, consideró
que, en el caso, se trataba de cuestiones reiteradas a lo
largo del tiempo, circunstancia que debía tenerse en cuenta
para el cómputo del plazo, el que no podía aplicarse de
manera estricta como pretendía Enargas.
1.2. En cuanto a la cuestión de fondo, en primer
lugar aclaró que, si bien la actora solicitó la declaración
de inconstitucionalidad del decreto 1216/06, dicha cuestión
dependía de la constitucionalidad o no de la ley 26.095,
puesto
que
la
inconstitucionalidad
de
una
ley
contagia
necesariamente de igual efecto a su decreto reglamentario.
1.2.1. Sentado ello, examinó la naturaleza jurídica
de los “cargos
Entendió
que
específicos” regulados por la ley 26.095.
tenían
un
claro
contenido
tributario
y
especificó que, en particular, se trataría de contribuciones
especiales, pues
estarían destinados al pago de obras de
ampliación que beneficiarían al conjunto de los consumidores
de gas. Como consecuencia de dicho carácter, los elementos
esenciales
de
dichos
cargos
deberían
estar
determinados
legalmente, en función del principio de legalidad imperante
en materia tributaria y previsto en los arts. 17, 52, 75,
inciso 2), 76 y 99 de la Constitución Nacional.
1.2.2. Precisó que la competencia del Congreso en
materia
tributaria
creación
del
no
se
tributo,
limitaría
sino
que
exclusivamente
además
a
la
comprendería
la
determinación de sus elementos esenciales.
En
determinaba
dicha
quiénes
línea
destacó
serían
los
que
la
sujetos
ley
26.095
exentos,
no
dejándolo
librado a la reglamentación; así como tampoco la alícuota, ni
el modo en que dicha imposición se afectará a cada obra.
Señaló, asimismo, que la ley dejaría abierta la posibilidad
de continuar creando cargos en forma indefinida, con lo que
la
carga
tributaria
se
haría
variable
a
voluntad
de
organismos de gobierno distintos del Congreso Nacional. Por
último,
advirtió
fideicomisos
que
el
resultaría
plazo
para
indeterminado
constituir
por
la
los
norma
cuestionada.
1.2.3. Por todo ello, el a quo concluyó que la
amplitud de la delegación efectuada por la ley 26.095, sin
indicar
restricciones
claras,
no
podía
admitirse,
pues
existía una limitación constitucional infranqueable derivada
del principio de reserva legal
prevalece
y
no
podía
ser
en materia impositiva que
alterado
ni
siquiera
en
una
situación de emergencia energética del país .
2.
Contra
dicha
resolución,
dedujo
recurso
de
apelación el representante legal de Enargas , con simultánea
expresión de agravios, el que fue concedido .
Los
agravios,
en
sustancial
síntesis,
pueden
exponerse así: 1) en cuanto a la admisibilidad formal del
amparo sostuvo: a) que no se trataría de la vía adecuada para
debatir
cuestiones
técnicas
complejas
y
que
el
a
quo
no
consideró que no está probado el daño grave e irreparable que
le provocaría a la empresa el pago de los cargos específicos
ni la situación de urgencia objetiva que habilitaría la vía
excepcional y b) que lo que se refiere al plazo de caducidad,
el juez incurrió en el error de no reconocer que se trataría
Poder Judicial de la Nación
de
un
mismo
hecho
extemporáneamente;
2)
y
que
en
la
acción
relación
a
fue
la
presentada
declaración
de
inconstitucionalidad, alegó que era improcedente porque el
cargo en cuestión no podría encuadrarse en ninguna de las
categorías en las que se clasifican los tributos (impuestos,
tasas y contribuciones), sino que tendría un régimen propio
con una finalidad específica y que, en lo que se refiere a la
posibilidad de delegación legislativa, el a quo realizó un
razonamiento antojadizo que no consideraba la excepcionalidad
de la situación energética nacional.
III. Consideración de los agravios.
1. Admisibilidad formal de la acción de amparo.
1.1. La existencia de un daño grave e irreparable.
1.1.1.
La
recurrente
alegó
que
no
era
USO OFICIAL
posible utilizar la vía del amparo si no se alegaba y fundaba
específicamente un daño grave e irreparable, lo que no se
encontraría
podría
probado
haber
en
el
efectuado
posteriormente,
si
fuera
sub
sus
el
lite.
Adujo
pagos
caso,
que
bajo
la
actora
protesto
recuperar
los
y,
montos
abonados.
1.1.2. El agravio no puede prosperar. En efecto, de
las constancias de la causa deja en claro la urgencia que
impone la cuantía de los importes facturados (pesos,), así
como el álea al que quedan sometidos los importes por venir.
Esto porque la ley 26.095 no precisó límites temporales y
delegó la facultad de fijar el monto de las sumas a recaudar
al Poder Ejecutivo.
Esta
situación,
analizada
en
conjunto
con
los
reiterados anuncios de Metrogas S.A. de un próximo corte del
servicio de gas si no se pagaban los cargos específicos (…),
resulta
más
que
suficiente
para
dar
por
demostrada
la
existencia de un perjuicio material de inmediata concreción,
que habilita la vía del amparo.
1.2. Idoneidad de la vía elegida.
1.2.1. El apelante insistió en que existirían otras
vías más idóneas para dilucidar la cuestión debatida y que no
existiría una ilegalidad manifiesta que no requiera de mayor
amplitud
de
debate
y
prueba.
Agregó
que
se
afectaría
la
prestación de un servicio público esencial y citó en su apoyo
precedentes judiciales en los que —en relación a la misma
legislación aquí cuestionada— se resolvió que el amparo era
inadmisible, en virtud de la complejidad técnica del asunto
planteado.
1.2.2. Al respecto, cabe destacar que en el sub
examine no se observa un supuesto que requiera mayor amplitud
de debate o prueba, toda vez que la cuestión debatida resulta
ser prácticamente de puro derecho. En efecto, para resolver
la validez o invalidez de las normas cuestionadas basta con
el examen de los textos legales en juego y su interpretación
armónica y coherente.
1.2.3. En este sentido, cabe recordar lo dispuesto
por la Corte Suprema de Justicia de La Nación en cuanto a que
“El
art.
2,
inc.
constitucional
d),
en
de
la
tanto
inconstitucionalidad
en
ley
se
el
16.986
halla
admita
el
del
proceso
ámbito
su
quicio
debate
de
de
amparo
cuando al momento de dictar sentencia, se pueda establecer si
las disposiciones impugnadas resultan o no clara, palmaria y
manifiestamente violatorias de las garantías constitucionales
que este remedio tiende a proteger” y que “el amparo (…) no
puede
recibir
un
límite
legal
que
impida
su
finalidad
esencial cuando ésta requiere que se alcance la cima de la
función judicial, como es el control de constitucionalidad de
normas infraconstitucionales” (Fallos: 313: 1513).
1.2.4.
Observado
ello
se
advierte
que
la
complejidad técnica del asunto —a la que hace referencia la
recurrente—
procesal
no
puede
ser
a
procedencia
válida
la
aceptada
como
de
una
esta
restricción
acción.
Máxime
cuando la prueba incorporada al expediente resulta suficiente
para
estar
en
condiciones
de
pronunciarse
sobre
la
inconstitucionalidad planteada. En consecuencia, el agravio
debe rechazarse.
1.3. Plazo de la acción de amparo.
1.3.1. La demandada Enargas señaló que el a quo
incurrió en un error al no reconocer que el hecho es siempre
el
mismo
previsto
y
que,
por
excepciones
la
para
si
la
ley,
darle
acción
no
no
se
podría
viabilidad
inició
el
a
en
el
magistrado
una
acción
plazo
crear
que
fue
extemporánea.
1.3.2. En primer término, corresponde señalar que
el
recurrente
se
equivoca
al
afirmar
que
la
acción
fue
Poder Judicial de la Nación
iniciada fuera del plazo que prevé el art. 2, inc. e), de la
ley 16.986.
1.3.2.1. En este sentido, se advierte que en el
informe circunstanciado presentado por Enargas, ésta sostuvo
que “(a)tento el tiempo transcurrido entre que la parte se
considerada (sic) perjudicada, o sea, desde el momento de la
percepción de la primer factura, con vencimiento en el mes de
abril de 2007, en la que se le ha agregado el cobro de los
cargos
específicos
presente
proceso,
de
los
fideicomisos,
no
cabe
duda
alguna
y
el
que
inicio
del
corresponde
presumir que ha renunciado a su impugnación” (…).
1.3.2.2. Sin embargo, dicha afirmación es errónea.
Basta tener en cuenta la fecha de vencimiento que consta en
la factura (esto es, 26 de marzo de 2007) y la fecha que la
USO OFICIAL
propia demandada indica como de vencimiento (abril de 2007) y
que la acción de amparo fue iniciada con fecha 30 de marzo de
2007 (…); con dichos datos, indubitables, cabe la conclusión
que el plazo del art. 2, inc. e), de la ley 16.986 no había
vencido.
1.3.3.
A
ello
cabe
agregar
que,
tal
como
fue
expresado por el magistrado, se trata aquí de “cuestiones
reiteradas
en
el
tiempo”
o
de
la
denominada
“ilegalidad
continuada”, supuesto en el cual la Corte Suprema de Justicia
de la Nación tiene dicho que “(E)l escollo que se deduce de
la prescripción del art. 2, inc. e, de la ley 16.986, que
establece el plazo de quince días hábiles, no es insalvable
en la medida en que con la acción incoada se enjuicia una
arbitrariedad
o
ilegalidad
continuada,
sin
solución
de
continuidad originada tiempo antes de recurrir a la justicia
pero mantenida al momento de accionar y también en el tiempo
siguiente” (Fallos: 329: 4918).
En consecuencia, el agravio debe ser rechazado.
2. La cuestión de fondo.
La
determinación
de
la
constitucionalidad
o
inconstitucionalidad de las normas cuestionadas en el sub
examine, aconseja realizar un examen de sus disposiciones.
2.1. Las normas cuestionadas.
2.1.1. La legislación con vinculación al tema en
estudio refiere a la aplicación de "cargos específicos" para
el desarrollo de la infraestructura energética, la expansión
del sistema de generación, transporte y/o distribución de los
servicios de gas y la aplicación de los valores de dichos
cargos a partir de enero de 2007.
Vale recordar que —a consecuencia de la emergencia
económica
y
financiera—
en
conjunción
con
la
crisis
energética que atravesó el país, se dictaron una serie de
medidas para conjurar tales efectos en los servicios públicos
vinculados al gas natural. Así se dictó el Decreto 180/2004
que
creó
el
"Fondo
Fiduciario",
destinado
a
atender
inversiones en el transporte y distribución de gas. Dicho
fondo se integra, entre otros recursos, por los cargos de las
tarifas a pagar por los usuarios de los servicios regulados
de transporte y/o distribución.
2.1.2.
“cargos
Es
la
específicos”.
“(d)esarrollo
de
obras
ley
En
26.095
su
de
la
artículo
que
1º
dispuso
dispone
infraestructura
dichos
que
energética
el
que
atiendan a la expansión del sistema de generación, transporte
y/o distribución de los servicios de gas natural, gas licuado
y/o electricidad, constituye un objetivo prioritario y de
interés del Estado Nacional”. El artículo siguiente dispone
crear “(c)argos específicos para el desarrollo de las obras
mencionadas
en
el
artículo
precedente
como
aporte
a
los
fondos de los fideicomisos constituidos o a constituirse para
el desarrollo de obras de infraestructura de los servicios de
gas y electricidad”.
El artículo 4º, por su parte, faculta “(a)l Poder
Ejecutivo Nacional a fijar el valor de los cargos específicos
y a ajustarlos, en la medida que resulte necesario, a fin de
atender
el
repago
de
las
inversiones
y
cualquier
otra
erogación que se devengue con motivo de la ejecución de las
obras aludidas en el artículo 1°”.
En
el
artículo
9º
se
previó
que
los
“cargos
específicos” serán aplicables una vez definido el proyecto o
iniciada la construcción de las obras asociadas a él o, en su
caso, desde que el o los beneficiarios de aquéllas puedan
disponer del uso y goce de las mismas. Dispone, además, que
el Poder Ejecutivo Nacional podrá exceptuar a las categorías
de pequeños usuarios que determine, del pago de los “cargos
específicos” para el desarrollo de obras de infraestructura
energética.
Poder Judicial de la Nación
2.1.3. El decreto 1216/06, reglamentario de la ley
citada,
faculta
al
Ministerio
de
Planificación
Federal,
Inversión Pública y Servicios —con asistencia técnica de la
Secretaría de Energía y de los entes reguladores— a fijar el
valor y ajuste de los cargos de que se trata, aprobados por
Resolución n° 2008/06 de dicho ministerio.
Establece que a “(l)os efectos del artículo 2º de
la Ley Nº 26.095, se entenderá que los cargos específicos
podrán
aplicarse
para
construir,
ampliar
o
expandir
instalaciones de transporte y distribución afectados a la
prestación
de
los
servicios
públicos
de
gas
natural
y/o
electricidad regulados por las Leyes Nº 24.076, y Nº 24.065,
de gas licuado de petróleo regulado por la Ley Nº 26.020, y
para
construir
nuevas
plantas
de
generación
de
energía
USO OFICIAL
eléctrica o ampliar las existentes” (art. 1).
El artículo 4º prescribe que a “(l)os efectos del
artículo
4º
de
la
ley
Nº
26.095,
el
MINISTERIO
DE
PLANIFICACION FEDERAL, INVERSION PUBLICA Y SERVICIOS, con la
asistencia
técnica
de
la
SECRETARIA
DE
ENERGIA
bajo
su
dependencia y de los respectivos Entes Reguladores fijará el
valor
y
el
afectación
correspondiente
específica
al
ajuste
desarrollo
de
de
los
los
cargos
proyectos
con
de
infraestructura mencionados en el artículo precedente, a fin
de atender el repago de las inversiones y cualquier otra
erogación que se devengue con motivo de la ejecución de las
aludidas obras”.
2.1.4.
La
resolución
2008/06
del
Ministro
de
Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios aprobó
lo actuado por la Secretaría de Energía y el ENARGAS con
“(r)elación a los cargos específicos establecidos en la Ley
Nº 26.095 destinados a repagar las obras de ampliación de la
capacidad de transporte de gas natural 2006-2008 sobre los
sistemas de Transportadora de Gas del Norte SOCIEDAD ANONIMA
y de Transportadora de Gas del Sur SOCIEDAD ANONIMA”.
2.1.5. Finalmente la resolución
nº 3689/07 del
ENARGAS estableció “(c)on vigencia a partir del 1º de enero
de 2007, los cargos específicos que se encuentran detallados
en los Anexos I y II”.
2.2. Su constitucionalidad o inconstitucionalidad.
Reseñada
ahora
la
expedirse
normativa
acerca
de
en
cuestión,
su
corresponde
constitucionalidad
o
inconstitucionalidad. Para ello resulta necesario definir la
naturaleza jurídica de los “cargos específicos”, en tanto su
determinación permitirá decidir si, en verdad, la delegación
legislativa
efectuada
por
la
ley
26.095
se
ajusta
a
los
principios constitucionales imperantes en esta materia.
2.2.1.
Se
ha
dicho
que
el
tributo
es
“(u)na
prestación obligatoria, comúnmente en dinero, exigida por el
Estado en virtud de su poder de imperio y que da lugar a
relaciones
jurídicas
de
derecho
público”.
Su
elemento
primordial es “(l)a coerción por parte del Estado, ya que es
creado por la voluntad soberana de aquél con prescindencia de
la voluntad individual, circunstancia que lo distingue de los
ingresos
Carlos
de
M.,
tipo
patrimonial”
Derecho
Financiero,
(conf.,
7ª
GIULIANI
Edición,
FONROUGE,
Buenos
Aires,
Ediciones Depalma, 2001, Volumen 1, pág. 315 y ss.).
En el mismo sentido se ha pronunciado, muchos años
atrás,
la
Corte
Suprema
de
Justicia
de
la
Nación:
“(n)o
existe acuerdo alguno de voluntades entre el Estado y los
individuos
sujetos
a
su
jurisdicción,
con
respecto
al
ejercicio del poder tributario implicado en sus relaciones.
Los
impuestos
no
son
obligaciones
que
emerjan
de
los
contratos; su imposición y la fuerza compulsiva para el cobro
son actos de gobierno y de potestad pública” (Fallos: 218:
596). También expresó que “(l)as diversas formas o modos de
imposición
son,
en
verdad,
una
manifestación
de
voluntad
exclusiva del Estado desde que el contribuyente sólo tiene
deberes, y obligaciones, pero aquél, como órgano de derecho
que es, tiene que respetar la supremacía de la Constitución
Nacional” (Fallos: 218: 694).
2.2.2.
Dentro
del
género
tributo,
se
reconocen
distintas especies: impuestos, tasas y contribuciones. Son
impuestos
“(l)as
prestaciones
en
dinero
o
en
especie,
exigidas por el Estado en virtud del poder de imperio, a
quienes se hallen en las situaciones consideradas por la ley
como hechos imponibles”; tasa es “(l)a prestación pecuniaria
exigida compulsivamente por el Estado y relacionada con la
prestación efectiva o potencial de una actividad de interés
público que afecta al obligado”; contribuciones especiales
Poder Judicial de la Nación
constituyen prestaciones obligatorias “(d)ebidas en razón de
beneficios individuales o de grupos sociales, derivados de la
realización de obras públicas o de especiales actividades del
Estado” (GIULIANI FONROUGE, Carlos M., ob. cit., pp. 323 y
ss.).
2.2.3.
Precisado
lo
anterior,
corresponde
ahora
señalar que respecto de los “cargos específicos”, creados por
la ley 26.095, no existe acuerdo en la doctrina, ni en la
jurisprudencia, en cuanto a su naturaleza jurídica.
2.2.3.1.
Ello
recibió
opiniones
diversas
en
su
debate parlamentario. Algunos sostuvieron que “(e)stos cargos
que
se
crean
tienen
por
objeto
financiar
obras
de
infraestructura para la generación, transporte y distribución
de electricidad y gas: es decir, conllevan una afectación
USO OFICIAL
específica. Es decir: es una contribución especial porque se
trata de una prestación obligatoria debida por los usuarios y
que
se
deriva
de
obras
públicas.
Esta
es
claramente
la
naturaleza jurídica del instituto”.
Otros, en cambio, alegaron que no era un tributo,
sino que se trataba de una “extensión del concepto de tarifa,
que tiene por objeto el repago de una obra perfectamente
planificada”.
2.2.3.2. Fuera del debate parlamentario, distintos
autores que comentaron la ley 26.095, en lo que se refiere a
la
naturaleza
coincidieron
jurídica
en
que
de
estos
constituyen
“cargos
recursos
específicos”
de
carácter
tributario (conf., PICO TERRERO, Javier, Cargos específicos
para obras energéticas de gas y electricidad, publicado en
PET
[Periódico
OKLANDER,
Económico
Juan,
Cargos
Tributario]
específicos
2009
[mayo-419],
para
mejorar
1;
la
infraestructura energética, publicado en PET 2006 [mayo-349],
1).
2.2.3.3. En la jurisprudencia, se reprodujeron las
mismas opiniones que en su debate parlamentario, puesto que
algunos
fallos
se
inclinaron
por
otorgarle
tributaria y otros, lo incluyeron dentro del
naturaleza
concepto de
tarifa.
Así, se sostuvo que los “cargos específicos” podían
incluirse
dentro
de
la
categoría
de
“contribuciones
especiales”, pues se advierte la existencia en el caso de
actividad estatal, plasmada en obras que se destinan a los
beneficiarios
de
la
expansión
de
la
infraestructura
energética (conf. Cám. Nac. Cont. Adm. Fed., Sala II, causa
n° 10.158/07, “Rendering S.A. c/E.N. –ley 26.095 Dto 1216/06
M° P –rs 2008/06-Enargas 3689/07 s/amparo ley 16.986”, del
19/05/09).
En
sentido
contrario,
se
expresó
que
“(l)a
ley
26.095, al establecer que dichas obras de expansión serán
ejecutadas en la forma y bajo la modalidad en ella dispuesta,
no ha modificado las obligaciones de los usuarios, habiéndose
limitado
a
efectuar
una
distinción
entre
la
tarifa
que
remunera al concesionario por las actuales prestaciones del
servicio público que se encuentran a su cargo y la tarifa que
deben abonar los usuarios, a la que adiciona el importe de
los
cargos
tarifarios
creados
por
la
última
norma
legal
citada a los efectos de la construcción de las obras en
expansión cuya ejecución el Estado ha decidido no exigir a
las licenciatarias” (conf. Cám. Nac. Cont. Adm. Fed., Sala I,
causa
n°
8.563/07,
“INTA
S.A.
c/E.N.
–Ley
26.095-M°
Planificación- Resol 2008 y/otros s/amparo ley 16.986”, del
08/07/08).
2.2.4. Es del caso recordar que “(n)o importa la
calificación que se utilice para denominar la realidad de las
cosas, si se advierte que las
instituciones jurídicas no
dependen del nomen iuris que se le dé o asigne por los
otorgantes
verdadera
del
acto
esencia
o
el
jurídica
legislador
incluso,
económica,
y
sino
entonces,
de
su
cuando
medie ausencia de correlación entre nombre y realidad debe
desestimarse el primero y privilegiarse la segunda” (Fallos:
21: 498; 289: 67, entre otros).
2.2.4.1.
denominación
que
Consecuentemente,
la
ley
26.095
sin
otorgó
perjuicio
a
los
de
la
“cargos
específicos”, examinadas sus características se advierte que
no
pueden
excluirse
del
género
tributo,
toda
vez
que
se
observa en ellos la presencia de su elemento esencial: la
coacción ejercida por el Estado –por sí mismo o por medio de
otros
entes-
para
detraer
parte
de
la
riqueza
de
los
habitantes para la satisfacción de determinadas necesidades
públicas.
Poder Judicial de la Nación
2.2.4.2. Concretamente, dentro de la clasificación
de
los
recursos
doctrina
tributarios
nacional
coinciden
en
del
mayoritaria—
sus
Estado
los
caracteres
—que
“cargos
con
adopta
la
específicos”
las
denominadas
“contribuciones especiales”, que se destinan específicamente
al cumplimiento de determinados fines estatales, sociales o
económicos y “(a) las que la doctrina y jurisprudencia les
atribuye,
sin
establecidas
imperio,
excepción,
por
se
obligatoria
el
Estado
aplican
por
carácter
en
tributario,
ejercicio
coactivamente,
quienes
se
de
son
encuentran
ya
en
su
que
son
poder
de
de
observancia
las
situaciones
previstas por la norma creadora y se destinan a financiar
objetivos del Estado” (Fallos: 320: 1426).
2.2.5. A ello se suma que, la postura que considera
USO OFICIAL
a los “cargos específicos” como una extensión del concepto
tarifa, carece de todo sustento legal.
2.2.5.1. En efecto, teniendo en consideración que
bajo el término “tarifa” se engloban los precios y tasas que
se
pagan
por
un
servicio
público
que
es
efectivamente
recibido, se evidencia que las características de los “cargos
específicos” creados por la ley 26.095 no permiten incluirlos
en tal concepto, según resulta claro.
2.2.5.2. Asimismo, si se tratara de una extensión
del concepto de tarifa no se advierte la necesidad de que
hubiera sido fijada por una ley del Congreso, pues “(d)ado
que
la
facultad
para
fijar
o
aprobar
tarifas
es
una
consecuencia de la atribución para “organizar” el servicio
público, la fijación o aprobación de aquéllas corresponde al
órgano
ejecutivo
de
gobierno,
que
es
el
competente
para
“organizar” los servicios públicos. De modo que la tarifa es
un
acto
administrativo”
(conf.,
MARIENHOFF,
Miguel
S.,
Tratado de Derecho Administrativo, 4ta. Edición actualizada,
Buenos Aires, Editorial Abeledo-Perrot, 1993, Tomo II, pág.
154).
2.2.5.3.
En
el
mismo
sentido
se
ha
pronunciado
también la Corte Suprema de Justicia de la Nación: “(E)n todo
régimen de prestación de servicios públicos por medio de
concesionarios, las tarifas son fijadas o aprobadas por el
poder público” y que “ello es una atribución y no una mera
facultad del Estado” (Fallos: 262: 555).
2.3.
Precisada
la
naturaleza
jurídica
de
los
“cargos específicos”, resta examinar si la ley 26.095 cumple
con el principio de legalidad
tributaria imperante en la
materia.
2.3.1. Este principio (nullum tributum sine lege),
contenido en los arts. 17 y 19 de la Constitución Nacional,
“exige que una ley formal tipifique el hecho que se considere
imponible
y
que
constituya
la
posterior
causa
de
la
obligación tributaria” (Fallos: 329: 59, entre muchos otros).
2.3.2. Al respecto, tiene dicho la Corte Suprema de
Justicia de la Nación que “(e)l principio de legalidad o de
reserva de la ley no es sólo una expresión jurídico formal de
la tributación, sino que constituye una garantía substancial
en este campo, en la medida en que su esencia viene dada por
la representatividad de los contribuyentes. En tal sentido
este principio de raigambre constitucional abarca tanto a la
creación de impuestos, tasas o
contribuciones
como a las
modificaciones de los elementos esenciales que componen el
tributo,
es
decir
el
hecho
imponible,
la
alícuota,
los
sujetos alcanzados y las exenciones”.
2.4. Se advierte que la ley 26.095 delega en el
Poder Ejecutivo la facultad de: a) “(f)ijar el valor de los
cargos específicos y a ajustarlos, en la medida que resulte
necesario (…)” (art. 4º); b) “(d)eterminar la asignación de
los cargos específicos creados por la presente ley entre los
distintos fondos fiduciarios constituidos o a constituirse”
(art.
6º);
c)
“(e)xceptuar
a
las
categorías
de
pequeños
usuarios que determine, del pago de los cargos específicos
para el desarrollo de obras de infraestructura energética”
(art. 9º).
2.4.1. Por otra parte, se advierte que en la ley
26.095 no se encuentra definido el aspecto temporal, pues el
art.
9º
establece
aplicables
una
vez
que
los
definido
cargos
el
específicos
proyecto
o
“(s)erán
iniciada
la
construcción de las obras asociadas al mismo o en su caso,
desde el momento en que el o los beneficiarios de aquéllas
puedan disponer del uso y goce de las mismas”.
2.4.2. En síntesis, la ley sólo determina el hecho
imponible, pero no la base imponible, ni la alícuota, los
sujetos exentos, así como tampoco determina con precisión el
Poder Judicial de la Nación
tiempo
de
vigencia.
incompatible
con
el
Todo
ello,
principio
de
resulta
legalidad,
claramente
cuyo
alcance
fuera precisado en los párrafos precedentes.
2.5.
La
pretensión
del
recurrente
de
que
los
“cargos específicos” no encajan en ninguna de las categorías
de tributo, sino que tendrían un régimen propio, con una
finalidad específica, carece de mínimo sustento.
2.5.1. En este sentido, se ha dicho que “(a)ntes de
reconocer el nacimiento de una
nueva figura jurídica, lo
metodológicamente
analizar
correcto
es
si
la
cuestión
planteada no encuentra respuesta dentro del modelo disponible
para su estudio” y que “(s)i el juzgador advierte que el
instituto controvertido encuadra dentro de una determinada
figura jurídica, su deber se agota en dicha tarea” (conf.
USO OFICIAL
Cám.
Nac.
“Rendering
Cont.
Adm.
Fed.,
S.A.
c/E.N.
–ley
Sala
II,
26.095
causa
Dto
n°
10.158/07,
1216/06
2008/06-Enargas 3689/07 s/amparo ley 16.986”,
M°
P
–rs
del 19/05/09).
2.5.2. A ello se añade que el recurrente se limitó
a expresar su disconformidad con las conclusiones a las que
arribó el a quo en cuanto a la naturaleza jurídica de los
“cargos específicos”, sin precisar el error o desacierto en
que habría incurrido el magistrado en su pronunciamiento, ni
atacar
en
forma
concreta
los
fundamentos
del
fallo.
En
consecuencia, el agravio no puede prosperar.
3. En virtud de las consideraciones precedentes,
propongo
al
Acuerdo:
1)
Confirmar
la
decisión
,
en
todo
cuanto fuera materia de agravio; 2) Sin costas de Alzada,
atento la ausencia de réplica y la complejidad y naturaleza
de las cuestiones debatidas.
Así lo voto.
EL DOCTOR VALLEFÍN DIJO:
I. Adhesión.
Como lo hace el voto precedente, juzgo también que
la
acción
de
amparo
promovida
debe
estimarse
y,
consecuentemente, confirmarse la sentencia apelada.
II. Consideración de los agravios.
1. La admisibilidad de la vía escogida.
Las
objeciones
de
orden
formal
dirigidas
a
cuestionar la vía del amparo elegida por la actora deben
desestimarse tal como concluye el voto precedente. Es que el
caso planteado llega hasta esta instancia judicial sin otra
complejidad
que
la
que
demanda
la
determinación
de
la
inconstitucionalidad de las normas impugnadas. Esto es, se
trata de una típica cuestión de puro derecho y su derivación
hacia otro cauce procesal no encuentra justificación. Decidir
en
ese
acción
sentido,
de
traduciría
amparo
una
contraria
apreciación
al
ritual
artículo
18
de
de
la
la
Constitucional Nacional.
Consecuentemente, los agravios expresados en este
sentido deben rechazarse.
2. La cuestión de fondo.
2.1. Los argumentos de la demandada.
La
naturaleza
defensa
que
específicos.
le
Dijo
del
Estado
atribuye
así:
“No
Nacional
a
se
los
trata
descansa
denominados
de
un
en
la
cargos
tributo.
Los
tributos se clasifican en impuestos, que el Estado aplica
ejerciendo su poder de coacción, sin una vinculación directa
respecto de la
prestación de un servicio determinado. En
segundo lugar, la tasa, que es la contraprestación que recibe
el ente ejecutor de un determinado tipo de servicio a partir
de la cual tiene que percibir un recurso correspondiente. El
caso
típico
es
contribuciones
el
de
de
las
tasas
distintas
municipales
características.
contribución, porque ella es el
o
tasas
de
es
una
No
pago vía contribución de
mejoras, que tiene cierta apropiación desde el punto de vista
de los beneficiarios en materia zonal”.
Prosiguió
trata
de
una
en
tarifa,
estos
la
términos:
tarifa
sirve
“Claramente
para
el
no
pago
se
del
servicio, del uso y goce de un determinado tipo de servicio,
lo cual implica cubrir los costos del servicio. El cargo
específico se paga en forma conjunta con la tarifa pero se
separa perfectamente de la factura y va a un fideicomiso y la
empresa cobra por cuenta y orden del fideicomiso”.
Y concluyó así: “Es una ley la que le ordena al
Ejecutivo
desarrollar
obras
de
expansión
de
la
infraestructura energética. Es la ley la que establece que el
financiamiento
será
a
partir
de
aportes
a
fideicomiso mediante cargos especiales. Es la
un
fondo
de
ley la que
determina que el importe se habrá de fijar por la autoridad
administrativa según resulte necesario para atender al repago
Poder Judicial de la Nación
de las inversiones que demande la ejecución de las obras
programadas” (énfasis añadido).
2.2.
Consideración
de
dichos
argumentos.
El
principio de reserva de la ley. La delegación legislativa.
2.2.1.
Constituye
una
clásica
distinción
en
el
derecho tributario argentino –con arraigado fundamento en la
jurisprudencia
y
en
tripartición
entre
cierto,
hay
no
el
pensamiento
impuestos,
de
tasas
obstáculo
para
y
los
autores-
la
contribuciones.
que,
reunidas
Por
ciertas
condiciones, se recepten nuevas categorías. Pero es en este
punto en que la argumentación del Estado Nacional se debilita
porque no suministra ninguna razón consistente que autorice a
atribuirle una naturaleza distinta de las recordadas. Es más,
el esfuerzo argumental en dotar a los cargos específicos de
USO OFICIAL
una
nueva
naturaleza
parece
orientado
a
liberarse
del
cumplimiento de las exigencias constitucionales y legales que
se derivarían de considerarlo un tributo o una tarifa pero
sin aportar ninguna explicación que justifique la recepción
de esta nueva figura en el derecho público argentino. El
nomen
juris
que
se
le
ha
asignado
es
irrelevante
para
desconocer el carácter tributario del cargo en cuestión: se
trata de una prestación pecuniaria obligatoria destinada a la
realización de obras públicas.
2.2.2.
El
Estado
Nacional
ha
invocado
con
insistencia que “estos cargos específicos no han sido creados
por ninguna autoridad administrativa. Fue el Congreso de la
Nación quien, apreciando la necesidad pública consistente en
el suministro adecuado de gas, los creó”.
Pues
bien,
la
existencia
de
una
ley
es
una
condición necesaria pero no suficiente para imponer el pago
de este cargo.
En efecto tal como se ha sostenido (véase “Fallos”
326:4251 y el dictamen del Procurador General, punto VII;
también publicado en “La Ley” 2004-D-230, con el comentario
de
Rodolfo
R.
Spisso,
“Principio
de
reserva
de
ley
y
delegación de facultades legislativas en materia tributaria”)
es pacífica la doctrina de los autores en cuanto a que la
garantía
constitucional
contribuciones
rige
de
reserva
plenamente
y
legal
que
en
"decir
cuestión
que
no
de
debe
existir tributo sin ley, significa que sólo la ley puede
establecer la obligación tributaria y los elementos de la
relación tributaria" (véase Dino Jarach, Curso de Derecho
Tributario, Buenos Aires, Ediciones Cima, 1980, p. 80), y que
"es la ley la que debe definir los hechos imponibles en su
acepción objetiva y también en la esfera subjetiva, o sea,
cuáles son los sujetos pasivos de la obligación que va a
nacer. Debe ser la ley la que debe establecer el objeto y la
cantidad de la prestación, es decir, el criterio con que debe
valuarse la materia imponible para aplicar luego el impuesto
en un monto determinado y es también la ley la que debe
definir ese monto" (op. cit., p. 80), precisando respecto de
la forma de cuantificar la obligación tributaria, que la ley
debe
contener
llamada
"en
también
parámetros
que
tercer
base
término,
imponible,
sirvan
para
la
esto
valorar
base
es,
de
la
medición,
adopción
cuantitativamente
de
los
hechos cuya verificación origina la obligación; en cuarto
término, la delimitación en el espacio y en el tiempo de esos
hechos; en quinto término, la cantidad expresada en una suma
finita o bien en un porcentaje o alícuota aplicable a la base
imponible, que representa o arroja como resultado el quantum
de la obligación tributaria" (op. cit., p. 136/137).
2.2.3. La lectura de la ley 26.095 revela que estos
contenidos indispensables se encuentran ausentes.
En palabras de la Corte Suprema de Justicia de la
Nación: “resulta inaceptable la tesis sostenida por el Fisco
Nacional en cuanto pretende limitar la exclusiva competencia
que la Constitución Nacional asigna al Congreso en materia
tributaria
a
lo
impuestos.
En
referente
efecto,
tal
al
establecimiento
interpretación
de
llevaría
nuevos
a
la
absurda consecuencia de suponer que una vez establecido un
gravamen
por
sustanciales
el
de
Congreso
aquél
de
definidos
la
Nación,
por
la
los
ley
elementos
podrían
ser
alterados a su arbitrio por otro de los poderes del gobierno,
con lo que se desvirtuaría la raíz histórica de la mencionada
garantía constitucional y se la vaciaría de buena parte de su
contenido útil, ya que el despojo o exacción violatorios del
derecho de propiedad que -en palabras de la Corte- representa
el cobro de un impuesto sin ley que lo autorice (Fallos:
180:384;
183:19,
entre
otros)
se
verificaría
-de
modo
análogo- tanto en uno como en otro supuesto, en la medida en
Poder Judicial de la Nación
que
la
pretensión
del
Fisco
carezca
de
sustento
legal”
(Fallos 319:3400, in re “La Bellaca S.A.”, consid. 9º).
2.2.3.1. El artículo 1 de la ley 26.095 proclama
que el “desarrollo de obras de infraestructura energética”
será
“un
objetivo
prioritario
y
de
interés
del
Estado
Nacional”. El artículo 2 crea los cargos específicos
“como
aporte a los fondos de los fideicomisos constituidos o a
constituirse para el desarrollo de obras de infraestructura
de los servicios de gas y electricidad”.
El artículo 4 faculta “al Poder Ejecutivo Nacional
a fijar el valor de los cargos específicos y a ajustarlos, en
la medida que resulte necesario, a fin de atender el repago
de las inversiones”. Y el siguiente establece que “los cargos
específicos se mantendrán vigentes hasta que se verifique el
USO OFICIAL
pago
en
forma
íntegra
de
los
títulos
emitidos
por
los
fideicomisos constituidos o que se constituyan para atender
las inversiones relativas a las obras de infraestructura del
sector energético”.
2.2.3.2.
La
transcripción
parcial
de
las
principales normas de la ley revela que el Congreso sólo ha
establecido el cargo y lo ha hecho por un plazo indefinido.
Nada más. Este déficit contrasta, por ejemplo con la Ley de
Impuesto a las Ganancias (texto ordenado por decreto 649/97)
cuya
lectura
revela
la
cuidadosa
definición
del
hecho
imponible, los sujetos obligados, las exenciones, los mínimos
no
imponibles,
Impuesto
al
etc.
Valor
O,
en
igual
agregado
sentido,
(texto
con
ordenado
la
Ley
de
por
decreto
la
validez
280/97).
2.2.4.
No
es
tampoco
constitucional
de
los
principios
la
delegación
de
cargos
posible
salvar
específicos
acudiendo
legislativa.
Ello
a
los
supone
la
sanción regular de un tributo y, en el caso, el Congreso se
ha limitado a establecerlo, omitiendo -como ya se expusolegislar sobre los demás requisitos (supra 2.2.3).
Y
aunque
se
considerase
suficiente
el
acto
legislativo para la imposición del tributo no existe ningún
standard inteligible que gobierne la delegación. Basta con la
lectura de los decretos (por ejemplo, 1216/06), resoluciones
ministeriales
(por
ejemplo,
2008/06)
y
del
ENARGAS
(por
ejemplo, 3689/07) dictados con posterioridad a la ley para
concluir que éstos fijan, con absoluta discreción, el valor y
ajuste de los cargos. Se trataría entonces –admitido este
supuesto-
de
una
delegación
constitucionalmente
prohibida
pues el Congreso no ha fijado base alguna a la cual deba
sujetarse
el
Poder
Ejecutivo
(“Fallos”
331:2406,
in
re
“Colegio Público de Abogados de Capital Federal”; también
publicado en “La Ley” 2009-A-161 con el comentario de María
Angélica
Gelli,
“Control
estricto
en
la
delegación
legislativa. En el caso "Colegio Público de Abogados de la
Capital Federal").
3. Otras consideraciones.
Sin dudas, debe compartirse la confesada finalidad
de mejorar la generación, transporte y distribución de gas en
el país. Con las palabras del Congreso de la Nación empleadas
en el artículo 1 de la ley 26.095: el desarrollo de obras de
infraestructura energética constituye un objetivo prioritario
y de interés del Estado Nacional.
Ahora
bien,
los
cargos
específicos
ideados
como
instrumentos para tal fin no pueden colocarse a extramuros de
la Constitución. Y como se expuso en los pasajes precedentes,
su exigencia vulnera el principio de legalidad o de reserva
en
materia
tributaria.
Ello
los
torna
claramente
inconstitucionales (art. 4 de la Constitución Nacional).
III. Conclusiones.
Tras lo expuesto cabe concluir que la acción de
amparo
vulnera
promovida
los
debe
derechos
prosperar
del
actor
pues
del
el
modo
acto
impugnado
exigido
por
el
artículo 43 de la Constitución Nacional y 1 de la ley 16.986.
Voto pues por confirmar la sentencia apelada, con
costas en el orden causado.
EL DOCTOR PACILIO DIJO:
Que adhiere a los votos precedentes.
Con lo que terminó el acto firmando los señores
Jueces
intervinientes
y
la
Secretaria
autorizante.Firmado
Jueces Sala III Dres.Carlos Alberto Vallefin.Antonio Pacilio
Carlos Alberto Nogueira
Ante mí: Dra. Concepción Di Piazza de Fortín.Secretaria.
La Plata, 7 de diciembre de 2009.
Y VISTOS:
Poder Judicial de la Nación
POR TANTO, En mérito a lo que resulta del Acuerdo
cuya copia autenticada antecede, SE RESUELVE: 1) Confirmar la
decisión, en todo cuanto fuera materia de agravio; 2) Sin
costas
de
Alzada,
atento
la
ausencia
de
réplica
y
la
complejidad y naturaleza de las cuestiones debatidas.
Regístrese, notifíquese y devuélvase.Firmado: Dres.
Carlos Alberto Vallefin – Antonio Pacilio – Carlos Alberto
Nogueira.
USO OFICIAL
Ante mí: Dra. Concepción Di Piazza de Fortín.Secretaria.
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