Volcanes Los volcanes son cerros producidos por la acumulación de material surgido desde el interior de la Tierra. En los volcanes hay una CÁMARA MAGMÁTICA donde se acumula material fundido; una CHIMENEA, a través de la cual asciende el magma (roca fundida) a la superficie, y un CRÁTER ubicado en la parte superior del volcán, por el cual emerge el material y el CONO que son las laderas del volcán. Según el tipo de erupción, los volcanes se clasifican en: • VOLCANES HAWAIANOS: son volcanes redondeados en la punta, surgidos por erupciones tranquilas. Estas erupciones ocurren cuando emerge lava muy líquida, que recorre grandes extensiones y se va depositando en delgadas capas. • VOLCANES VULCANIANOS: estos son de forma cónica, generados por erupciones explosivas, que arrojan grandes nubes de cenizas. En estas erupciones emerge una lava de características viscosas, que no fluye con facilidad y que lleva consigo gases encerrados a presión. • VOLCANES PELEANOS: son aquellos en los cuales el magma extremadamente denso sube muy lentamente. A causa de ello, el material se solidifica en su ascenso, tapando el cráter. El vulcanismo se produce cuando el magma se eleva a través de la corteza terrestre. Por qué se produce, cuándo y dónde fueron cuestiones misteriosas hasta la aparición de la moderna teoría de la tectónica de placas. Ahora se sabe que los “CINTURONES DE FUEGO”, DE LA TIERRA suelen seguir los límites de las placas geológicas. El noventa por ciento de todos los volcanes activos se encuentran bien a lo largo de las líneas de expansión (como en Islandia) o en las zonas de subducción (los Andes, Japón). En las ZONAS DE EXPANSIÓN se forma nueva corteza cuando el magma se eleva desde el manto, mientras que en LAS ZONAS DE SUBDUCCIÓN se destruye al ser empujada hacia el manto y refundirse con él. El magma del que se formaron los VOLCANES DE LOS ANDES, por ejemplo, está formado principalmente de corteza “reciclada”. Los puntos calientes que originan las cadenas de volcanes cuando la corteza terrestre se desliza sobre ellos siguen constituyendo un enigma científico. Dan la impresión de llevar millones de años en el mismo punto del manto. El dibujo muestra las islas hawaianas, que son parte de un cordón de islas volcánicas, ubicadas en el centro de la placa Pacífica. La naturaleza del vulcanismo varía según la composición del magma. Determinados VOLCANES, además de expeler gases, tales como: nitrógeno, vapor de agua y azufre gasificado, producen principalmente piedras, “bombas” volcánicas, pequeños “lapilli” y cenizas. Un ejemplo es el Vesubio, que sepultó a Pompeya en el año 79. Es este tipo de volcán el que forma el perfil característico de cono abrupto. Otros volcanes arrojan nubes de gas incandescente, como el Monte Pelée de la Martinica, que mató a treinta mil personas en 1902. La lava muy líquida produce los escudos volcánicos de contornos menos profundos. Otros fenómenos característicos son los DOMOS DE LAVA ORIGINADOS por las introducciones de MAGMA, LOS GÉISERES Y LAS FUMAROLAS. GASES VOLCÁNICOS Y GÉISERES Comprender que los gases se disuelven en el magma es tan difícil como entender por qué los volcanes entran en erupción. El magma se levanta en la corteza hasta alcanzar una punta de flotabilidad neutral. LA EXPANSIÓN DE LOS GASES LLEVA AL MAGMA MÁS CERCANO A LA SUPERFICIE Y CONDUCE LAS ERUPCIONES. La interacción entre la viscosidad, la temperatura del magma y el contenido del gas determina si UNA ERUPCIÓN ES EFUSIVA O EXPLOSIVA. En una escala global, los gases volcánicos produjeron nuestra atmósfera y nuestros océanos. Sin la atmósfera y los océanos, la vida no se habría desarrollado. Los volcanes emiten gases durante las erupciones e incluso cuando no estallan en erupción. Las grietas u orificios en el terreno permiten que los gases y el vapor de agua, presurizados en el interior del volcán, alcancen la superficie formando lo que se conoce como FUMAROLAS. Las fumarolas están constituidas por vapor de agua en un gran porcentaje (90 por ciento) que proviene de las lluvias. Otros gases volcánicos comunes son: dióxido de carbono, dióxido de azufre, ácido sulfhídrico, hidrógeno y flúor. El géiser más grande del mundo, el Steamboat, en el Parque Nacional de Yellowstone. EL DIÓXIDO DE AZUFRE puede reaccionar con las gotas de agua atmosférica y así formar la llamada LLUVIA ÁCIDA, que es causante de la corrosión y que además daña la vegetación. En cambio, el dióxido de carbono es más pesado que el aire y se ubica en áreas bajas y en altas concentraciones puede terminar con la vida de las personas, animales y plantas. Por otra parte, el flúor en altas concentraciones es tóxico y puede ser absorbido por PARTÍCULAS DE CENIZA VOLCÁNICA que posteriormente caen sobre el terreno, resultando nocivo para los vegetales y campos de pastoreo, pudiendo también contaminar reservas de aguas de riego y de alimentación. Los gases emitidos por los volcanes continúan influyendo la atmósfera pero no al fragmento de fuentes artificiales. Estos también plantean un peligro en muchos volcanes. En algunos volcanes, el desbloqueo gradual del gas actúa como irritante y puede plantear un peligro para la salud a largo plazo. LOS GÉISERES ¿Qué son los géiseres y por qué son tan raros? Es una pregunta que intentaremos contestar ahora. Podemos decir que es como un resorte caliente que entra en erupción periódicamente y que lanza el agua al aire. Esto parece ser simple, pero de hecho no lo es. Los géiseres son extremadamente raros. En todo el mundo, hay solamente un total de setecientos géiseres. Ej: en Chile los GEISERES de EL TATIO Algunas de las condiciones que se deben dar para que haya un géiser son: una fuente abundante de agua, una fuente intensa de calor y ductos naturales adecuados. El agua, que parece bastante fácil de encontrar en la naturaleza, cuando se encuentra caliente puede venir de actividad volcánica, pero es posible que no existan los ductos adecuados. Para que el agua sea lanzada al aire, el sistema del géiser debe tener agua que pueda salir por un ducto, y a presión. Los científicos encontraron la respuesta en rico un componente volcánico llamado RHYOLITE, rico en contenido de silicona, la que puede depositar un sello hermético a lo largo de las paredes por donde circula el géiser. El parque nacional de Yellowstone contiene este tipo de géiseres. LOS GASES MÁS COMUNES PROVENIENTES DE LAS EMANACIONES VOLCÁNICAS SON: el vapor de agua (H2O), el dióxido de carbono (CO2) y el dióxido de sulfuro (SO2). Existen otros gases que se encuentran en menor cantidad, como: monóxido de carbono (CO), sulfuro de hidrógeno (H2S), sulfuro de carbono (CS), disulfuro de carbono (CS2), cloruro de hidrógeno (HCI), hidrógeno (H2), metano (CH4), floruro de hidrógeno (HF), boro (B), bromuro de hidrógeno (HBr), vapor de mercurio (Hg) y algunos compuestos orgánicos, incluso el oro. Fumarolas en El Tatio