captulo 1: el mar y las pesqueras: hacia un desarrollo

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Indice
CAPÍTULO 1: EL MAR Y LAS PESQUERÍAS: HACIA UN DESARROLLO
AMBIENTALMENTE AMIGABLE .....................................................................1
I.
La situación actual de los mares ........................................................................................ 1
II. La Tragedia de los Comunes aplicada a los recursos pesqueros ........................................ 3
III.
Causas Principales del agotamiento de los recursos marinos ......................................... 8
A. Consumo excesivo de recursos marinos por los seres humanos ..................................... 8
B. Sobrepesca generada por uso de tecnologías modernas y métodos de captura agresivos
8
C. Captura incidental ........................................................................................................... 9
D. Empleo de medios de pesca destructivos ........................................................................ 9
E. Destrucción y alteración de los hábitats........................................................................ 10
F. Presión demográfica en las zonas costeras ................................................................... 10
G. Contaminación .............................................................................................................. 10
H. La acuicultura................................................................................................................ 11
I. Ausencia de políticas adecuadas ................................................................................... 11
IV.
La pesca industrial, y el colapso pesquero .................................................................... 11
V. Algunas pesquerías colapsadas ......................................................................................... 13
A. El caso del bacalao ........................................................................................................ 14
B. El pez espada................................................................................................................. 17
C. Las anchovetas .............................................................................................................. 20
D. El mero rayado .............................................................................................................. 23
VI.
Principios de regulación internacional de los mares ..................................................... 24
A. CONVEMAR................................................................................................................ 24
B. Otros tratados internacionales ....................................................................................... 28
VI. Conclusión .......................................................................................................................... 29
CAPÍTULO 1: EL MAR Y LAS PESQUERÍAS: HACIA UN
DESARROLLO AMBIENTALMENTE AMIGABLE
I. LA SITUACIÓN ACTUAL DE LOS MARES
Algunas personas son conscientes que los océanos contienen 90% de la biomasa en el
mundo y que son fuente primaria de proteínas para tres mil millones de personas 1 . Otras
simplemente disfrutan de su belleza y dan por sentado que el mar es una fuente inagotable de
recursos. La realidad es que a pesar de que el planeta está en su mayoría cubierto por agua
1
DR. M. SOMMER ÖKOTECCUM, Kiel. Crisis marina global. Alemania. Disponible en:
<http://www.parlamentodelmar.cl/temas/crisiglobal_sommer.htm>. [Última visita el 15 de septiembre de 2003].
los recursos marinos contenidos en sus océanos son limitados, más aún si se continúan
extrayendo las 90 millones de toneladas de comida de mar que se consumen cada año en el
mundo 2 esta fuente de alimentos para la humanidad se sobreexplotará hasta su exterminio.
Científicos expertos afirman que la pesca comercial es la causa principal de la
desaparición del 90% de grandes especies de pelágicos como pez espada, bacalao, marlín y
tiburones. Una evaluación global de las reservas marinas silvestres demuestra que de 441
grupos de especies estudiadas 52% están totalmente explotadas, 25% sobreexplotadas y 20%
moderadamente explotadas 3 . Además, las capturas de los ocho principales países pesqueros
en el mundo han permanecido estáticas o han tendido a declinar, incluyendo países de
América Latina como Chile y Perú 4 .
Ante estos hechos las consecuentes preguntas que se deberían plantear son: ¿se tiene
conciencia del grado de explotación al que estamos sometiendo a los océanos y la
consecuencia de ello?, ¿tienen los océanos la capacidad productiva para responder a los
niveles de demanda actuales?, y principalmente ¿qué herramientas o mecanismos se pueden
implementar a escala nacional e internacional para detener la explotación irracional que
afecta a los océanos y sus recursos, y arrebata a las generaciones futuras su patrimonio
marino?
Esta publicación tiene como objetivo contestar a la tercera pregunta presentando
instrumentos legales y económicos de manejo, para la planificación, gestión y control de las
pesquerías de manera eficiente.
2
FAO. Estado Actual de las Pesquerías, 2005 y Revisión del estado de los recursos marinos, 2005. Disponible en <www.fao.org> y
<http://www.fao.org/docrep/009/a0699s/A0699S09.htm> [Ultima consulta 27 de septiembre de 2007].
DOULMAN, David. Funcionario de la Oficina de Pesca de la FAO. Una Mirada a los Recientes Datos Mundiales sobre el Estado de las
Poblaciones de Peces. Periódico electrónico del Departamento de Estado de Estados Unidos, Vol. 8, No. 1. Enero de 2003. Pág. 3.
4
Ibídem.
3
La ausencia de una legislación adecuada y de instrumentos económicos que protejan y
promuevan respectivamente el uso sostenible de los recursos marinos son consecuencia de
diferentes circunstancias: primero, la ignorancia sobre el hecho de que los recursos marinos
son producto de ecosistemas diversos y frágiles y que, como toda la vida silvestre, se ven
fuertemente afectados por las actividades humanas 5 ; segundo, la falta de políticas claras e
integrales que aborden el problema; tercero, la ausencia de mecanismos de control,
monitoreo y protección adecuada para estos recursos; y, cuarto, el bajo nivel de
cumplimiento de las leyes, regulaciones y tratados internacionales vigentes. Estas causas se
agudizan con el dilema de la “tragedia de los comunes” descrito por Garret Hardin en 1968 y
que explica parte de la grave problemática que azota a las pesquerías. A continuación, se
presenta un análisis que abarca cada una de las causas descritas. Finalmente, se concluye con
una revisión panorámica de la regulación internacional de los mares.
Es pertinente aclarar con relación a las causas descritas arriba, que esta publicación
enfatizará sobre los impactos al medio marino causados más directamente por el manejo
insostenible de las pesquerías, por lo cual nos enfocaremos a detalle sólo en los que sean
relevantes a este tema.
Asuntos de gran relevancia para la protección efectiva de los
ecosistemas marinos, como la contaminación por fuentes terrestres y marinas, y el desarrollo
de infraestructura en áreas costeras, rebasa el objeto de esta publicación, y por ende su
análisis no ha sido incluido.
II. LA TRAGEDIA DE LOS COMUNES APLICADA A LOS RECURSOS
PESQUEROS
Las pesquerías son un caso de estudio interesante pues su aprovechamiento refleja los
problemas económicos y ambientales asociados a la explotación de un recurso de uso
5
SAFINA, Carl. Song for the Blue Ocean, Henry Holt and Company, Inc. Primera Edición, Canadá, 1997, pág. 395.
común 6 ya que en el mar no existen derechos de propiedad definidos. Desde la perspectiva
económica, al no existir derechos de propiedad, cada pescador maximiza su captura sin
contabilizar los costos sociales asociados, es decir, cada unidad invertida en capturar más
recursos se refleja en una disminución de la captura de todos los usuarios. Así, todos actúan
racionalmente procurando aumentar su beneficio económico pero es precisamente esta
racionalidad individual la que lleva a los pescadores a la eventual sobreexplotación del
recurso. El resultado es una “tragedia”, es decir la dispersión de las rentas y escasez del
recurso.
En “La Tragedia de los Comunes”, formulada por el matemático William Foster en 1833
y posteriormente aplicada por el biólogo Garret Hardin 7 , señala que bajo un esquema de
recurso de uso común se generan los incentivos económicos para la explotación
indiscriminada del recurso y concluye que una forma de evitar la tragedia es la definición de
derechos de propiedad, de tal forma que se modifique el esquema de incentivos.
La paradoja está basada en un pastizal común y de libre acceso, en el cual varios pastores
mantienen sus rebaños. Con el fin de maximizar su ganancia, un pastor decide añadir otro
animal, asumiendo que un solo animal no causará un impacto en la capacidad de
recuperación del pastizal. Sin embargo, si la misma decisión es tomada por todos los
pastores, terminarán arruinando el pastizal al provocar sobrepastoreo y por tanto, el
agotamiento del recurso. Este caso evidencia que en materia de propiedad común no quedan
reguladas las externalidades 8 producidas sobre el bien general no se internalizan 9 . De esta
6
Un recurso de uso común es aquél que puede ser explotado por cualquiera sin poder excluir a otros de
aprovecharlo.
7
HARDIN, Garret, “The Tragedy of the Commons”, en Science, 162:1243-48, 1968.
8
Se entiende por “externalidad” el comportamiento de un agente que afecta el bienestar de otro, sin que este
último haya elegido o aceptado la modificación y sin que exista una contraprestación que le compense.
AZQUETA, Diego. Introducción a la Economía Ambiental. MacGraw-Hill, Madrid, 2002.
manera el comportamiento de un agente puede impactar la condición y disfrute del bien
común si no existen los balances necesarios.
Adicionalmente, en este análisis debe
considerarse que la afectación de los recursos compartidos no sólo tiene implicaciones para
los beneficiarios iniciales.
Las generaciones futuras también se verán afectadas por el
agotamiento de los recursos que impedirá su posterior disfrute provocando una gran
inseguridad alimentaria entre otros de los efectos que provoca la sobreexplotación de estos
recursos.
Si por analogía aplicamos esta paradoja a los recursos marinos, los océanos son el
pastizal, cada Estado es un pastor y los animales que se añaden sin consideración o análisis
de su impacto, son las embarcaciones de las flotas pesqueras. Dada la ausencia de estudios
sobre el impacto causado por cada embarcación, el océano se está devastando.
Hardin propone dos opciones para contrarrestar estos efectos. La primera, es manejar los
recursos como propiedad privada, de modo que, siguiendo el ejemplo del pastizal, a cada
pastor se le asigne el uso exclusivo de una sección del pastizal. La segunda opción es
manejar los recursos como propiedad pública, en donde se establezcan reglas claras y rígidas
que regulen la explotación del recurso.
Esta segunda opción requiere la existencia de
mecanismos efectivos para hacer cumplir las regulaciones.
En contraposición a la teoría de Hardin, Elinor Ostrom 10 plantea una alternativa basada
en la elaboración de un contrato vinculante que comprometa una estrategia de cooperación 11 .
Esta vía de resolución de conflictos sobre los comunes es especialmente interesante para
9
AZQUETA, Diego. Introducción a la Economía Ambiental. MacGraw-Hill. Madrid, 2002. Se entiende por
“internalización” la inclusión de los costos ambientales como uno de los costos en la estimación global de una
actividad.
10
OSTROM, E. El gobierno de los bienes Comunes: La evolución de las instituciones de acción colectiva, Fondo
de Cultura Económica. México, D.F. 2000. pág. 43.
11
Ibídem.
recursos de uso común de tamaño pequeño, en los cuales la apropiación de los recursos por
las comunidades locales se basa en fórmulas de cooperación, a veces muy ingeniosas en los
usos y prácticas tradicionales sostenibles 12 .
El aludir a esta fórmula de cooperación en el manejo local de los recursos pesqueros
permite enfatizar la capacidad de las comunidades pequeñas para resolver cuestiones
conflictivas de apropiación y de explotación de recursos escasos. En muchas ocasiones los
conocimientos tradicionales de las comunidades son enormemente respetuosos de la
sostenibilidad de los recursos. Las costumbres basadas en la experiencia y la necesidad de no
poner en riesgo su medio de vida hacen que las conductas de estos grupos permitan el
aprovechamiento y supervivencia de la pesca a largo plazo.
En los casos en que las poblaciones que viven de la pesca pueden verse afectadas por
medidas impuestas desde un poder central o bien por actuaciones nocivas de otros usuarios,
las autoridades deberían respetar y tener en cuenta a estas comunidades que han sobrevivido
a muchos años de explotación de sus recursos a través de sus propias reglas de autogestión.
De hecho, el daño de los sistemas de propiedad común es mucho más probable cuando estos
sistemas no son reconocidos por los regímenes políticos de los que son parte 13 .
En el caso de los recursos marinos a escala internacional, como una respuesta para evitar
la tragedia de los comunes, se ha intentado recurrir a las soluciones de manejo de recursos
12
Existe una pesquería en Alanya, Turquía, en la que aproximadamente 100 pescadores operan en barcos para dos
o tres personas y utilizan varios tipos de redes. La mitad pertenece a una cooperativa local de productores. La
viabilidad de la pesca empezó a estar amenazada en esta zona por dos factores: el ejercicio de la pesca sin
limitaciones, que llegó hasta violentos conflictos; y la competencia entre pescadores por las mejores áreas de
pesca, que desencadenó el aumento de los costos de producción y el nivel de incertidumbre respecto al rendimiento
de cada barco. Al inicio de la década de los setenta, la cooperativa local elabora un sistema para repartir las áreas
de pesca entre los pescadores locales, básicamente consiste en asignar por sorteo las áreas de septiembre a mayo.
De septiembre a enero cada pescador se mueve diariamente hacia el este en su lugar correspondiente. Después de
enero, los pescadores se mueven hacia el oeste. De esta manera los barcos tienen las mismas oportunidades de
pescar en los mejores lugares. BERKES, F., “Marine Inshore Fishery Management in Turkey”, Proceeding of the
Conference on Common Property Resource Mangement, Nacional Research Council, Washington, Nacional
Academy Press, 1986, pp. 63-83.
13
Vid. OSTROM, E., op. cit., p.64.
“privados” (nacionales) y recursos “comunes” (compartidos entre naciones), pero ninguna de
ellas ha eliminado los problemas de sobreexplotación de manera efectiva.
Por un lado, internacionalmente se implementó un modelo de propiedad privada para la
explotación de los recursos marinos, reflejado en la ampliación a 200 millas de la Zona
Económica Exclusiva (ZEE) de explotación de cada país. Esto implica la aplicación de un
sistema de uso y control exclusivo por parte de cada Estado con costa marina. Dentro de la
ZEE, cada país establece su propio sistema de manejo y supervisión de sus recursos, el cual
puede ser privado o de uso común. Lamentablemente, en la mayoría de los casos el manejo
nacional de estos recursos marinos “privados” no ha sido suficientemente estricto para
preservar los recursos para las generaciones futuras.
Por otra parte, los océanos son también considerados como bienes de uso público o
espacios públicos globales. Esta denominación se da a las zonas que se encuentran más allá
de los límites de la jurisdicción nacional, como la Antártida, el espacio aéreo exterior y la
capa de ozono, y en este caso la altamar. Estas zonas no son del dominio exclusivo de un
Estado en particular, sino que son administradas y explotadas globalmente, bajo la regulación
aplicable. Desgraciadamente, las autoridades y organizaciones internacionales establecidas
en convenios para manejar los recursos marinos compartidos no han tenido suficiente éxito
en prevenir su explotación no sostenible.
No obstante, en los últimos años ha habido algunos adelantos en el desarrollo de
iniciativas prometedoras como, por ejemplo, el Proyecto del Gran Ecosistema Marino del
Caribe. Este Proyecto nació por la necesidad de los países caribeños de manejar sus recursos
marinos vivos compartidos a nivel regional e internacional, a través de la participación en
acuerdos regionales y la firma de varios tratados y acuerdos internacionales 14 .
III. CAUSAS PRINCIPALES DEL AGOTAMIENTO DE LOS RECURSOS
MARINOS
El futuro de la humanidad ahora, como en el pasado, sigue dependiendo en gran medida
de la riqueza de recursos marinos. Sin embargo, las amenazas que se ciernen sobre los mares
y océanos continúan aumentando y las que ya estaban identificadas no han sido resueltas.
Las amenazas más graves que pueden afectar tanto de una manera directa como indirecta la
sostenibilidad de los recursos pesqueros son:
a) Consumo excesivo de recursos marinos por los seres humanos.
La alta demanda de recursos marinos en varios países, junto con la creciente
población global, implica una mayor presión sobre los mares y las especies marinas cada
día más frágiles.
Las poblaciones de los países “desarrollados” están consumiendo
pescado proveniente de áreas de pesca lejanas, después de prácticamente acabar con los
recursos locales en muchos países.
b) Sobrepesca generada por uso de tecnologías modernas y métodos de captura agresivos.
Para evitar la sobreexplotación, el volumen de captura, incluyendo la pesca
incidental, no debe rebasar la capacidad de producción del ecosistema. Sin embargo, en
las últimas décadas se ha pasado de pescar en embarcaciones pequeñas a hacerlo en
embarcaciones grandes y más eficientes, en términos de la cantidad de pesca obtenida.
Como resultado del empleo de sistemas de tecnología avanzada y el incremento en la
14
Proyecto del Gran Ecosistema Marino del Caribe. < http://www.cavehill.uwi.edu/cermes/clme_esp.html >
[Última consulta 29 de agosto de 2007].
capacidad de pesca de las embarcaciones, las reservas de peces han disminuido
significativamente. Dentro de las nuevas tecnologías utilizadas existen sonares muy
efectivos y helicópteros que se utilizan para encontrar bancos de peces, motores más
potentes, y una mejor técnica refrigerante a bordo. Estas novedades permiten viajes de
pesca de mayor duración y en regiones remotas, y por ende un incremento en el esfuerzo
pesquero.
c) Captura incidental
Son las especies de peces e invertebrados que no son objetivo de la pesca y quedan atrapados
en las redes. Parte de esta captura se comercializa, pero una gran parte se tira por la borda, lo que
resulta inconveniente desde un punto de vista ecológico y ambiental, ya que produce la muerte de
estos peces e invertebrados, y de otros mamíferos, tortugas y aves marinas 15 .
Con el
incremento en el esfuerzo pesquero y con el uso de tecnologías innovadoras para capturar
mayor número de peces, como redes de gran tamaño o líneas muy largas, también se ha
aumentado significativamente el nivel de pesca incidental. Además, se producen daños
considerables mediante la “pesca fantasma” (redes perdidas rasgadas o cortadas que
flotan en el mar y siguen “pescando” sin ningún objeto ni sentido alguno) 16 .
d) Empleo de medios de pesca destructivos
Existen prácticas como el arrastre de fondo, y la pesca por líneas largas y redes de
cerco de gran extensión que atentan contra la sostenibilidad de los ecosistemas marinos y
destruyen la diversidad de especies.
15
FAO Pesca reducción de la captura incidental. http://www.fao.org/fishery/gefshrimp/1,4/es. (Ültima consulta 1 de
julio 2009)
16
HOFRICHTER, R. El Mar Mediterráneo: Fauna, flora, ecología. I parte general. Ed. Omega, Barcelona, 2004.
e) Destrucción y alteración de los hábitats
Ecosistemas costeros marinos como los estuarios, manglares, praderas submarinas y
arrecifes de coral son muy vulnerables. Estos hábitats también son particularmente
importantes por que sirven como zonas de reproducción de muchas especies marinas, por
lo cual su protección y restauración es imperiosa. Sin embargo, existen muchas prácticas
de pesca y otras actividades humanas que atentan contra estos hábitats.
f) Presión demográfica en las zonas costeras
El desarrollo urbanístico y el turismo incontrolado propician el deterioro cada vez
mayor en los hábitats marino-costeros 17 , impactando además a las especies marinas que
habitan las zonas costeras. Por ejemplo, la tortuga baula, especie en peligro de extinción,
enfrenta problemas para reproducirse debido a la interferencia producida por la luz
proveniente de casas construidas en zonas cercanas o en sus áreas de desove 18 . Otras
creaciones del ser humano como las playas artificiales y plantas desalinizadoras pueden
provocar importantes alteraciones negativas si se realizan sin los adecuados planes de
gestión y monitoreo que prevengan efectos adversos en los ecosistemas.
g) Contaminación
La contaminación de fuentes terrestres y los vertimientos desde fuentes en el mar
(mareas negras), amenaza seriamente los hábitats marinos costeros. Las aguas residuales
urbanas, los vertidos industriales y las aguas de escorrentía procedentes de la agricultura
intensiva, entre otros, provocan efectos agresivos en hábitats cercanos a la costa. Por
ejemplo, los arrecifes de coral están siendo rápidamente deteriorados debido a este tipo
de contaminación.
17
Ídem, p. 528.
Ibídem..
18
h) La acuicultura
En la mayoría de los casos, las instalaciones de acuicultura tienen multitud de
repercusiones negativas en las ecosistemas costeros, como la acumulación de material
orgánico, la interacción de la red alimentaria natural, la alteración de especies que viven
en estado salvaje, la destrucción de hábitats, la introducción de sustancias bioactivas que
se acumulan en los tejidos de los peces o en el medio ambiente, o la creación de
resistencia a los antibióticos por parte de los individuos en los estanques acuícolas, entre
otros 19 .
i) Ausencia de políticas adecuadas
Una de las principales causas es la carencia de conocimiento sobre las políticas
pesqueras. Existen principalmente dos problemas: no se conocen ni implementan algunas
de las políticas existentes y muchas de las políticas existentes no son las necesarias para
una pesca sostenible, permitiendo los abusos y careciendo de sanciones adecuadas.
IV. LA PESCA INDUSTRIAL, Y EL COLAPSO PESQUERO
Como cualquier actividad industrial, la pesca moderna se basa en la maximización de la
relación costo/beneficio; es decir se busca reducir al mínimo los costos de la actividad, para
obtener las mayores ganancias económicas posibles.
Esto implica el surgimiento de
tecnologías pesqueras más eficientes que cubren mayores áreas marinas en menos tiempo,
agotando más rápidamente los recursos existentes.
19
HOFRICHTER, R. El Mar Mediterráneo. Fauna, Flora, Ecología I Parte General. Ed. Omega, Barcelona, 2004.
GIMÉNEZ,
F.
Impactos
en
el
Mediterráneo.
Disponible:
<http://www.aidaamericas.org/aida.php?page=aquaculture_medit> [Última visita: 28 de setiembre de 2007].
El impacto de la pesca industrial es tan alto que actualmente las flotas pesqueras son 40%
más grandes de lo que los océanos pueden sostener 20 ; existe un millón de buques pesqueros
en el mundo, que pescan el doble de lo que se pescaba hace 25 años 21 y existen tantas redes
pescando que si unimos la longitud de todas ellas miden 40,040 millas, lo que significa que
las redes activamente pescando en los océanos pueden dar la vuelta al planeta una y media
veces 22 . A este ritmo, no sorprende que las capturas de todas las pesquerías comerciales en
el mundo estén disminuyendo.
La tecnología y la innovación en los métodos de pesca industriales modernos, además de
la pesca excesiva de las poblaciones objetivo, también ocasionan la captura de otras especies.
De esta forma, mecanismos como los grandes palangres, inmensas redes a la deriva23 y redes
de lastre 24 atrapan todo lo que encuentren en el sitio donde son arrojadas, sin discriminación
alguna respecto de las especies que capturan 25 .
Se estima que la pesca incidental o
involuntaria de las grandes flotas pesqueras que explotan los mayores caladeros
internacionales es del orden de 25% de las capturas realizadas 26 . La captura incidental
incluye fauna acompañante de diversas especies, como tiburones y tortugas, estrellas de mar,
anémonas y cefalópodos (calamares y pulpos), e incluso aves marinas como los albatros 27 .
Asimismo, al margen de las capturas incidentales que se realizan, también se afecta el fondo
marino y los ecosistemas.
Desafortunadamente, herramientas como anzuelos especiales, redes manuales y otros
mecanismos que restringen las capturas a la especie objetivo y pueden controlar la pesca
20
Dr. M. Sommer Ökoteccum, Kiel, Alemania. Disponible en: <http://www.parlamentodelmar.cl/temas/crisiglobal_sommer.htm>. [Última
visita el 15 de septiembre de 2003].
21
ELLIS, pág. 13.
22
ELLIS, pág. 18.
23
Ver Apéndice No. 1 para mayor información.
24
Para mayor información acerca de artes de pesca, ver el Apéndice No. 1.
25
ELLIS, pág. 14.
26
Información de FAO y ONU. Disponible en: <http://www.fao.org/index_es.htm>. [Última visita: 17 de octubre de 2004].
27
ELLIS, pág. 16.
incidental no se usan de la manera en que se podría. Una de las razones para ello es que en
ocasiones estos mecanismos pueden ser menos eficientes, por lo cual se argumenta que eleva
los costos de operación en una industria con un pequeño margen de ganancias 28 . Por ende,
en la actualidad se abusa de la tecnología disponible, atrapando mayores cantidades de peces,
sin considerar en la mayoría de casos los tamaños, edades o el impacto en la reproducción de
la especie que condiciona la actividad pesquera en el futuro 29 .
Tanto la tecnología moderna como algunos métodos de pesca usados por los pescadores
artesanales ponen en peligro las poblaciones de peces. Un ejemplo de esto es el colapso de la
pesquería del mero rayado descrito en detalle abajo. Este pez es una fuente importante de
alimento y un artículo de mercado en todo el Mar Caribe. Los pescadores artesanales utilizan
arpones y redes agalleras 30 para capturarlos cuando los meros se concentran en un área
pequeña para reproducirse, impidiendo de tal manera su procreación. A diferencia de varias
especies afectadas por la pesca industrial, el mero rayado no ha sido diezmado por los
grandes barcos industriales sino más bien por la pesca artesanal practicada de forma tal que
las personas capturan la mayor cantidad de peces del océano que sea posible, sin pensar en el
impacto a mediano y largo plazo de estas capturas para la especie y para su actividad misma.
V. ALGUNAS PESQUERÍAS COLAPSADAS
Durante las últimas décadas varias pesquerías han entrado en crisis debido a la
sobreexplotación, poniendo en peligro de extinción comercial a las especies objetivo. En
este contexto se pueden identificar varias pesquerías colapsadas, con las correspondientes
consecuencias socio-económicas y ambientales que ello implica. A continuación se hace
28
Ibídem.
SAFINA, pág. 18.
30
Ver Apéndice No. 1.
29
referencia a algunos de los casos más severos de explotación no controlada de los recursos
del mar, de los cuales es urgente que aprendamos para evitar que la historia se repita con
consecuencias muy graves para la humanidad.
j) El caso del bacalao
En relación con la crisis global de las pesquerías, el análisis de los casos más graves
es de gran utilidad. Por ello, personas como Bernard Martin, un pescador de los 40,000
que quedaron arruinados por el colapso de la pesquería de bacalao en la costa atlántica de
América del Norte, tiene mucho que aportar 31 . Y es que después de la clausura de la
pesquería que le servía como sustento, Bernard se ha dedicado “a contar la historia del
fracaso en su comunidad advirtiendo a otros de los peligros de la pesca excesiva, del uso
inapropiado de la tecnología, y de las consecuencias sociales de las pesquerías
arruinadas” 32 .
El bacalao ha sido perseguido especialmente por el aceite de su hígado, cuyas
aplicaciones curativas son conocidas desde hace siglos, que van desde el tratamiento del
reumatismo, la artritis y la tuberculosis, hasta como refuerzo para el crecimiento en los
niños 33 . El uso medicinal del aceite de hígado de bacalao continúa hasta el momento 34 .
Asimismo, el bacalao es reconocido como un producto de consumo humano de alto valor
nutricional, que además aporta una elevada cantidad de proteínas 35 . Sin embargo, las
propiedades vitamínicas del hígado del bacalao no han sido suficientes para que el
bacalao derrote su propia extinción.
31
SAFINA, pág. 45.
MARTIN, Bernard. La historia de un pescador. Revista Nuestro Planeta del PNUMA.Tomo 9, No. 5, 1998.
33
ELLIS, pág. 62.
34
De acuerdo con la información del Website de Laboratorios Merck. Disponible en:
<http://www.merck.com.mx/farma/productosfarmac%E9uticos.pdf>. [Última visita el 22 de septiembre, 2003].
35
La carne del bacalao supone una importante fuente de minerales, principalmente potasio, fósforo, sodio, calcio y magnesio y también aporta
vitaminas A, E y del grupo B (B1, B2, B3, B6 y B12).
32
Bernard Martin, como la mayoría de pescadores de las costas de Terranova, nació en
una comunidad fundada en 1600 por inmigrantes ingleses e irlandeses que se
establecieron en esta zona con el fin de explotar la pesca de bacalao. En esta época, el
acercamiento del bacalao a las costas en el otoño para desovar era vital para enfrentar la
escasez de alimentos durante el invierno 36 , convirtiéndose en un próspero negocio de
intercambio comercial entre Europa y el “Nuevo Mundo” 37 . La abundancia del bacalao
en esta región era tal, que a finales de 1400 podía pescarse desde la proa de los barcos o
desde pequeñas embarcaciones con herramientas manuales 38 como sedales de mano y
sencillas trampas 39 .
Las herramientas de captura del bacalao de hace 400 años contrastan con la
inmensidad de los barcos y las redes kilométricas usadas en los años 1990, que
finalmente llevaron al colapso económico de la pesquería. Una de las primeras señales
de la afectación de la especie fue el tamaño de los individuos capturados. En 1895, en la
Costa de Massachussets se capturó el bacalao más grande que se haya registrado: pesó
211 libras 40 ; el récord de los tiempos modernos es de 98 libras de un pez atrapado en
1969 en New Hampshire 41 . En la actualidad estas cifras son ilusorias debido al colapso
total de la pesquería y su cierre indefinido.
Debido a la pesca excesiva y a la ausencia de regulación, la pesca de bacalao a
comienzos de los años 1990 se extinguió comercialmente en las costas noreste de
América del Norte. Por ello, los gobiernos de Estados Unidos y Canadá tuvieron que
36
ELLIS, pág. 61.
Íd., 62.
38
Íd., 60.
39
MARTIN, Bernard. “La historia de un pescador”, Revista Nuestro Planeta del PNUMA. Tomo 9, No. 5, 1998.
40
KURLANSKY, Mark. Cod: A Biography of the Fish that Changed the World. Penguin. 1997, pág. 49.
41
ELLIS, pág. 66.
37
clausurar indefinidamente la pesca de bacalao en estas zonas, convirtiéndose en “la
mayor muestra de pesquería mal manejada en el mundo” 42 .
Lo paradójico es que desde los años 70 existía información suficiente para
implementar las medidas preventivas y controlar la pesca excesiva del bacalao; sin
embargo, los gobiernos se negaron sistemáticamente a implementarlas, argumentando
que éstas iban a impactar negativamente la economía de las comunidades dependientes de
este recurso 43 . Como consecuencia de la omisión de acciones de manejo y gestión,
actualmente 60% de los pescadores del noreste de América del Norte se encuentran
desempleados 44 , razón por la cual los gobiernos de Estados Unidos y Canadá les han
tenido que destinar subsidios por USD 60 y USD 600 millones respectivamente 45 . Este
ejemplo muestra cómo las políticas flexibles de explotación pesquera que en el corto
plazo parecen beneficiar a los pescadores pueden convertirse en un boomerang que en el
largo plazo contribuyen a la destrucción de las comunidades pesqueras, afectando la vida
de miles de familias 46 .
Independientemente del colapso de la pesquería de bacalao por su pésimo manejo, es
importante extrapolar este caso a un país de América Latina u otro Estado del Sur o el
Este, donde se carece de recursos económicos para pagar subsidios y compensaciones
luego del colapso del recurso, lo que recrudecería la situación de los pescadores por lo
que la importancia de un buen manejo desde la perspectiva del principio precautorio y
con mecanismos de gestión eficientes son imprescindibles para evitar su colapso.
42
SAFINA, pág. 45, ver también ELLIS, pág. xii, citando a Edward Wilson, Future of Life.
Íd., pág. 91.
44
Íd., pág. 45.
45
ELLIS, pág. 70.
46
Ibíd.
43
k) El pez espada
El caso del pez espada (Xiphias gladius), especie emblemática de la pesca deportiva
por sus increíbles cualidades, es también muy interesante.
El pez espada puede
descender a grandes profundidades, manteniendo su cerebro y ojos tibios con el fin de
localizar y perseguir a sus presas, capacidad de la que otros peces carecen 47 . Los peces
espada pueden controlar el calor de su cuerpo de la misma forma en que controlan sus
movimientos al nadar. A pesar de ello, en ocasiones necesitan ascender a la superficie
para calentarse, lo cual los hace vulnerables a los barcos y aviones pesqueros 48 .
La captura del pez espada con fines comerciales y para entretenimiento solía ser muy
popular en las costas de América del Norte. En 1959, en la Bahía de Cape Cod,
Massachusetts, en un día normal un barco pesquero podía atrapar 16 peces espada. Dos
décadas después era casi imposible encontrarlos en la misma región, incluso para fines de
investigación 49 . La historia de la disminución acelerada del pez espada en esta zona, se
repite para toda la costa atlántica estadounidense, incluyendo los Bajos de George y el
Golfo de México, así como el Mar Caribe y el Océano Atlántico meridional 50 .
Ahora la situación del pez espada requiere atención urgente 51 . Con el paso del
tiempo los desembarques en la Costa Este de los Estados Unidos han disminuido, al igual
que la población de esta especie. Las cifras son claras, los desembarques pasaron de 10.2
millones de libras en 1988 a 6.3 millones de libras en 1995 52 . El tamaño promedio de las
47
SAFINA, pág. 75.
Íd., 17.
49
Íd., 76.
50
ELLIS, pág. 44.
51
NATURAL RESOURCES DEFENSE. The US Fishery for Atlantic Swordfish. Disponible en:
<http://www.nrdc.org/wildlife/fish/rnasword.asp#notes18>. [Última visita el 8 de febrero].
52
NATIONAL MARINE FISHERIES SERVICES, NMFS. Draft Ammedment 1 to the Fisheries Management
Plan for Atlantic Tuna , Swordfish and Sharks. Julio de 2003.Disponible en:
<http://www.flmnh.ufl.edu/fish/sharks/csop/July17.pdf>. [Última visita el 8 de febrero de 2005].
48
capturas comerciales de pez espada en Norteamérica también ha disminuido, pasó de 266
libras en 1963 a 90 libras en 1995 53 . Esta disminución en el tamaño promedio se debe a
que conforme aumenta la explotación del recurso, se torna más difícil para el pez espada
escabullirse de ser capturado, por lo cual no tiene tiempo suficiente para crecer 54 o para
reproducirse y aumentar la población 55 . Más de 83% de peces espada femeninos y más
de 36% de masculinos capturados en 1995 en los EE.UU. eran individuos inmaduros 56 .
En las costas de América del Sur, la Corriente de Humboldt propicia que la región sea
habitada por inmensos cardúmenes de anchoas que atraen peces espada y otras
especies 57 . De hecho, en 1953 fue en las costas de Iquique, Chile donde Lou Marron
impuso el récord del pez espada más grande capturado, con un peso de 1,182 libras 58 .
Las costas chilenas fueron consideradas el mejor lugar para atrapar peces espada, sin
embargo esto cambió en las últimas décadas debido a la pesca excesiva y a la ausencia de
reglamentación. Las historias de los pescadores latino americanos muestran el mismo
patrón vivido en las pesquerías del norte; escasez de peces y tamaños drásticamente
reducidos.
La pesca excesiva de los peces espada se debe no sólo a la cantidad de pescadores y
barcos en su búsqueda, sino también al cambio en la forma e instrumentos para
NMFS, 1997. Fisheries of the United States, 1996, pp. 20-23. Disponible en:
http://www.st.nmfs.gov/st1/fus/fus96/. Ultima visita el 8 de febrero de 2005.
53
NATIONAL MARINE FISHERIES SERVICES, NMFS. Draft Ammedment 1 to the Fisheries. Management
Plan for Atlantic Tuna Swordfish and Sharks. Julio 2003. Disponible en:
<http://www.flmnh.ufl.edu/fish/sharks/csop/July17.pdf>. [Última visita el 8 de febrero de 2005].
54
Ibídem.
55
Ibídem. “Reproductive dynamics of broadbill swordfish, Xiphias gladius, in the domestic longline fishery off
eastern AustraliaReproductive dynamics of broadbill swordfish, Xiphias gladius, in the domestic longline fishery
off eastern Australia”, disponible en: <http://www.publish.csiro.au/paper/MF02011.htm>. [Última visita el 8 de
febrero de 2005].
56
FISHERIES MANAGEMENT. Highly Migratory Species. Disponible en:
<http://www.pcouncil.org/hms/hmsback.html>. [Ultima visita el 8 de febrero 2005].
57
ELLIS, pág. 44.
58
Ídem, 44.
capturarlos. Tradicionalmente los pescadores capturaban estos peces solamente durante
la temporada anual, para lo cual usaban anzuelos y arpones en una rutina que demandaba
gran inversión de energía por el tamaño y la fuerza del pez. En la actualidad se usan
palangres y redes de varios kilómetros de extensión.
Estos sistemas simplifican la
captura y la extienden, pudiendo acceder a aguas más profundas y pescar durante todo el
año.
Sin embargo, la eficiencia de la tecnología es ilusoria, pues hoy en día se requieren
redes de alrededor de 65 Km. de palangre formadas por miles de anzuelos, que recorren
130 Km. o más para atrapar la misma cantidad de peces espada que hace décadas
atrapaba manualmente un solo hombre en medio día y a pocos metros de la costa 59 .
Algunas autoridades pesqueras argumentan la protección del empleo y de los
pescadores, para evadir la implementación de las medidas preventivas o reglamentarias
necesarias para el aprovechamiento sostenible de las pesquerías. Este argumento se
desvirtúa considerando que una verdadera protección para los pescadores no tiene sólo
alcance presente, sino que se extiende a las generaciones futuras e implica evitar el
colapso total de la actividad pesquera a mediano y largo plazo 60 .
La importancia de mantener poblaciones de pez espada en un nivel sostenible motivó
en los Estados Unidos a que personas de distintos sectores iniciaran una campaña en los
medios de comunicación, dirigida a los dueños de restaurantes y chefs, con el objetivo de
desmotivar su consumo y así reducir su captura. Esta campaña que comenzó en 1998 ha
ayudado a que la especie se recupere en 94% del nivel considerado saludable para el pez
59
60
SAFINA, pág. 72.
Ídem, 88.
espada del Atlántico Norte 61 .
Sin embargo, este caso es la excepción ya que las
poblaciones del pez espada siguen siendo muy reducidas en otras regiones, como por
ejemplo el Golfo de California de México 62 .
Una vez más la fragilidad de las pesquerías, evidenciada en el pez espada, demuestra
la necesidad de implementar mecanismos conjuntos y sostenidos para asegurar el manejo
racional de las especies.
l) Las anchovetas
Los peces como el bacalao y el pez espada, que se hallan en la cúspide de la cadena
alimenticia marina, no son los únicos que se encuentran en peligro por la pesca excesiva
y la falta de regulación. Por el contrario, especies como la anchoveta (Engraulis ringens)
que se encuentra en la base de la cadena alimenticia 63 presentan también problemas de
sobreexplotación. Dichos inconvenientes se derivan de la captura para diversos fines
como consumo humano, alimento para especies de acuicultura como el salmón 64 , y
fabricación de alimentos balanceados para otros animales incluyendo aves, ganado
vacuno y porcino.
61
Seaweb y el National Resources Defense Council, Comunicado de Prensa de octubre 3, 2002. Disponible en:
<http://www.seaweb.org/programs/swordfish/>. [Última visita el 20 de diciembre de 2004].
62
LLUCH-COTA et al. “The Gulf of California: Review of ecosystem status and sustainability challenges.” en
Progress
in
Oceanography,
2007,
p.
1-26.
<http://www.sciencedirect.com/science?_ob=ArticleURL&_udi=B6V7B-4MY0MDC1&_user=10&_coverDate=04%2F30%2F2007&_rdoc=1&_fmt=&_orig=search&_sort=d&view=c&_acct=C0000
50221&_version=1&_urlVersion=0&_userid=10&md5=7408818f702df38861b9ad4eef043b12>.
63
Las anchovetas son pelágicos menores, que se alimentan por filtración y de pequeñas especies como plancton
(animal y vegetal). La anchoveta ocupa el segundo y tercer nivel trófico en la cadena alimenticia en ecosistemas
pelágicos, juegan el papel tanto de herbívoros o consumidores primarios cuando se alimentan de fitoplancton, y de
carnívoros o consumidores secundarios cuando se alimentan de zooplankton. Disponible en:
<http://www.mty.itesm.mx/die/ddre/transferencia/Transferencia50/eli-02.htm>. [Última visita el 14 de diciembre.
2004].
64
ELLIS, pág. 23
En 1970, Perú era el líder mundial de pesca de anchoveta; disponía de una flota de
1,400 barcos, muy modernos para la época, que desembarcaban cerca de 14 millones de
toneladas anuales de anchoveta, equivalentes a 20% del total mundial de capturas de esta
especie. En 1971 las capturas peruanas de anchoveta superaron los 12,5 millones de
toneladas, cifra que cayó abruptamente a sólo 4 millones de toneladas en 1972 65 .
La pesca excesiva, agravada con el fenómeno de El Niño durante los años 1972-1973,
ocasionó el primer colapso de la pesquería de anchoveta peruana 66 . Si bien el fenómeno
de El Niño fue la principal causa del colapso, dicho evento resultó particularmente nocivo
por la vulnerabilidad de la anchoveta, provocada por la sobrepesca a la que había sido
expuesta en años anteriores 67 . A partir de 1988, poco antes de la apertura del sector
harinero a la inversión privada, la anchoveta empezó a mostrar signos de recuperación,
dando como resultado desembarques anuales por encima de los 6 millones de toneladas 68 .
Entre 1992 y 1997, en Perú se incrementó significativamente la capacidad total de
extracción de cerco y con ello la producción nacional de anchoveta. Este crecimiento en
las flotas estaba financiado principalmente mediante créditos, lo que generó mayor
presión sobre el recurso, pero con los niveles de pesca alcanzados hasta 1997 y las
condiciones económicas de entonces, los problemas en el sector no se hicieron visibles en
el momento.
Sin embargo, el Fenómeno del Niño, que se presentó nuevamente desde fines de 1997
hasta mediados de 1998, desembocó en una crisis severa en el sector pesquero peruano.
Con la reducida cantidad de anchovetas disponibles fue imposible para muchas de las
empresas pagar sus deudas, generando una crisis económica.
65
BIFANI, Paolo, Medio Ambiente y desarrollo sostenible, IEPALA, Madrid, 1999. Pag. 488.
ELLIS, pág.12
67
Ibíd.
68
HIDALGO, pág. 17.
66
En estos años, los
desembarques destinados a la producción de harina de pescado (fabricada a partir de
anchoveta), que en 1996 habían sido de 8.8 millones de toneladas métricas, pasaron de 7
millones en 1997 a 3.7 millones en 1998 69 .
Esta pesquería sigue con problemas, ya que existe un excedente de 50% de capacidad
de bodega y captura, mientras la capacidad de procesamiento de harina de pescado es dos
veces superior al necesario 70 . Mientras se mantenga esta capacidad excesiva y el sector
permanezca con grandes deudas, será muy difícil limitar las capturas a los niveles
requeridos para contribuir con una verdadera recuperación de las poblaciones.
No es solamente el sector pesquero el que ha sufrido los impactos de la enorme
reducción del stock de anchoveta. Actualmente las pesquerías toman hasta un 85% de la
anchoveta en aguas peruanas, dejando muy pocas para las especies silvestre que
dependen de ellas. Por ejemplo, poblaciones de aves marinas como el piquero peruano
(Sula variegata) y el pingüino peruano (Spheniscus humboldti) han disminuido
gravemente, de 60 a 80% desde 1998 71 .
La situación se torna aún más preocupante porque recientemente Argentina también
está considerando aumentar la pesca de anchoveta, lo que implicaría más presión sobre la
cadena alimentaria marina 72 . Esta situación demuestra que al tomar decisiones sobre los
niveles de captura los gobiernos deben considerar no sólo los niveles que puede soportar
una pesquería específica, sino también los posibles impactos sobre otras pesquerías,
ecosistemas y otras especies, además de actividades como el ecoturismo.
69
Íd., 19.
Íbíd., pág. 19.
71
“Peru’s marine life losing out to fishfarms,” Birdlife International, September
http://www.birdlife.org/news/news/2007/01/peru_wbw.pdf.
72
“Hold the anchovies-Magellani. Penguins need them”. Birdlife International, August
http://www.birdlife.org/news/news/2007/01/anchovy_overfishing.html.
70
2006,
2007.
m) El mero rayado 73
Cada año los meros rayados se congregan en lugares específicos para reproducirse.
Esta especie sigue las fases de la luna, y a mediados del invierno, suelen congregarse más
de 100,000 meros a engendrar en un mismo sitio y al mismo tiempo. Los habitantes de
estas regiones conocen los sitios y las épocas en que se congregan los meros, razón que
facilita su pesca. El uso de redes y arpones en pequeñas áreas hace que el trabajo sea
sencillo, pero este tipo de pesca ocasiona un tremendo impacto en las poblaciones de la
especie.
El mecanismo de reproducción por medio de congregaciones es el resultado de un
proceso de evolución que busca incrementar las posibilidades de reproducción de la
especie. Irónicamente, este método de reproducción también ha hecho al mero rayado
más vulnerable a la pesca, con lo cual el número de individuos aptos para reproducirse y
el tamaño de estos disminuyen 74 . Así, al pescar las congregaciones no sólo se mata a los
meros de la actualidad, sino que también se reduce su número en el futuro.
Los científicos consideran que un número mínimo de peces es necesario para formar
una congregación y que los lugares para congregarse con fines de reproducción son
limitados. A pesar que esas reuniones en el pasado ocurrían en todo el Caribe, hoy en día
un tercio de los sitios se ha perdido debido a la sobrepesca.
Con cada sitio de
congregación que desaparece, la posibilidad de que las poblaciones de meros rayados se
recupere son menores, llegando a una disminución de 80% desde 1975. Si la pesca de los
meros en el período de reproducción continúa, se calcula que las congregaciones para
reproducción desaparezcan para el año 2013.
73
Como puede notarse, los colapsos de las
SALA, Enric; BALLESTEROS, Enric; STARR, Richard M. “Rapid decline of Nassau grouper spawning
aggregations in Belize”. Fisheries, octubre 2001, Vol. 26, No. 10, pág. 23-30.
74
Las hembras más pequeñas son menos maduras para reproducirse y liberan menos huevos.
pesquerías son el resultado de varios factores que interactúan para generar la sobrepesca:
el consumo excesivo, tecnología arrasadora, prácticas de pesca no sostenibles y falta de
zonificación para la actividad pesquera (ya sea artesanal o industrial). Éstas, entre otras
razones, se suman a la inexistencia o falta de ejecución de reglas para el manejo
sostenible de las pesquerías, lo cual puede comprometer seriamente su existencia futura.
Las historias del bacalao, el pez espada y las anchovetas no son las únicas especies
marinas explotadas en exceso en el continente americano.
La merluza negra 75
(Dissostichus eleginoides), el atún 76 (Thunnus thynnus), el menhaden 77 (Ethmidium
maculatum), el abulón blanco 78 (Haliotis sorenseni) y diversas especies de tiburón79
(Carcharodon carcharias), sólo para mencionar algunos casos, también han sido objeto
de pesca excesiva.
Estos ejemplos de especies extinguidas a causa de pesquerías sobreexplotadas son
una de las razones por las cuales es necesario establecer regulaciones internacionales que
propicien la sostenibilidad en la actividad pesquera. La siguiente sección explica con
más detalle los tratados internacionales que regulan asuntos marinos y que pueden
contribuir hacia su sostenibilidad.
VI. PRINCIPIOS DE REGULACIÓN INTERNACIONAL DE LOS MARES
n) Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (CONVEMAR).
Existen distintos instrumentos internacionales que han sido utilizados para proteger
los recursos marinos comunes.
75
Uno de estos instrumentos internacionales es la
ELLIS, pág. 74.
Íd., 28-38.
Íd., 27.
78
Íd., 13.
79
WATTS, Ann “The END of the LINE? Global Threats to Sharks,” Wild Aid, February 2001. Disponible en:
<http://www.ecoworld.org/Home/articles2.cfm?TID=246>. [Última visita el 11 de enero de 2005].
76
77
CONVEMAR 80 que establece los derechos y obligaciones internacionales de los Estados
para el medio marino 81 . La CONVEMAR, a diferencia de los regímenes que imperan
dentro de las jurisdicciones de cada país, pretende la protección y el desarrollo sostenible
de los recursos marinos globales.
La CONVEMAR establece que la altamar no es objeto de apropiación exclusiva por
ningún Estado y que, en tal sentido, no se considera jurisdicción ni territorio de ninguno
en particular. Según lo estipulado en la CONVEMAR, la altamar se encuentra abierta a
todos los Estados, ya sean ribereños o no. Ello implica libertad de navegación y libertad
de pesca para todos los Estados, siempre y cuando se sujeten a las obligaciones
convencionales, a los derechos y deberes, y a los intereses de los ribereños 82 .
Otro de los aspectos más destacables en la CONVEMAR es la obligación de todos los
Estados a adoptar las medidas necesarias para la conservación de los recursos vivos de
altamar, y a cooperar con otros Estados para este fin 83 . En relación con este punto, la
CONVEMAR determina que los Estados deberán establecer los límites de captura
permisible sobre la base de información científica confiable y disponible, debiendo
también considerar los efectos sobre las especies asociadas con las especies capturadas o
dependientes de ellas.
Estas obligaciones están orientadas al mantenimiento o
restablecimiento de las poblaciones de especies. Asimismo, esta Convención consagra
disposiciones referidas a la protección de especies altamente migratorias, disponiendo la
80
La Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (CONVEMAR) también se conoce por sus
siglas en inglés UNCLOS (United Nations Convention for Law of the Sea). Esta Convención fue producto de
negociaciones iniciadas en la Tercera Conferencia sobre el Derecho del Mar (1973); el proceso de firmas y
adhesiones se inició en 1982 en Montego Bay, Jamaica. Actualmente cuenta con 158 países firmantes. Disponible
en: <http://www.cinu.org.mx/temas/Derint/dermar.htm>. [Última visita 11 de enero de 2005].
81
Agenda 21. Capítulo 17, pág. 289.
82
CONVEMAR. Art. 116-119.
83
Íd., Art. 117.
necesidad de asegurar la conservación y promover la utilización óptima de dichas
especies en toda la región tanto dentro como fuera de la ZEE 84 .
El principio imperante para la explotación de los recursos pesqueros en alta mar es el
“derecho de captura”, también regulado por la CONVEMAR 85 . El derecho de captura se
entiende como el derecho de propiedad que toda persona tiene sobre el pez u otro recurso
marino que capture en alta mar. La libertad de pesca es indiscutiblemente una de las más
importantes que se desarrollan en alta mar por las implicaciones económicas que tiene,
por lo cual requiere asimismo un control eficiente.
Lamentablemente, el derecho a la libre extracción de los recursos otorgado por la
libertad tradicional de los océanos, no se ha reflejado en responsabilidades paralelas de
trabajar colectivamente para la protección y conservación de los recursos marinos. Es
decir, que a pesar de la vigencia de los principios arriba mencionados, la falta de
obligaciones concretas ha impedido la aplicación efectiva de la normativa internacional
sobre los océanos, trayendo como consecuencia el uso no sostenible de los recursos.
De acuerdo con la CONVEMAR en lo que respecta al mar territorial y a la ZEE, los
recursos marinos dentro de la jurisdicción de un país pertenecen exclusivamente a éste y
están sujetos a sus disposiciones internas. En este sentido, el Estado tiene soberanía para
la exploración, explotación, conservación y administración de los recursos naturales,
tanto vivos como no vivos de las aguas suprayacentes al lecho y del lecho y el subsuelo
del mar 86 .
84
Íd., Art. 64.
Íd., Art. 116 al 120.
86
NAMIHAS, Sandra. Derecho del mar: Análisis de la Convención de 1982, Fondo Editorial, Pontificia
Universidad Católica del Perú, 2001, pág. 177.
85
A partir del derecho soberano de los Estados para explotar los recursos naturales en
estas zonas, los Estados comienzan a tener asimismo una responsabilidad ambiental bajo
la tutela de la CONVEMAR. En especial, en relación con la conservación de los recursos
vivos, la CONVEMAR enfatiza, por un lado, la necesidad de adoptar medidas de
protección para evitar la sobreexplotación de las ZEE y, por el otro, en las relaciones de
interdependencia y asociaciones de las poblaciones 87 .
Con las herramientas anteriormente descritas y de acuerdo con la paradoja de la
Tragedia de los comunes, la “nacionalización” de los recursos marinos por la creación de
la ZEE y sus correlativos derechos y obligaciones, la CONVEMAR debería haber
generado una mejora en su manejo. Sin embargo, por varias razones que se describen
brevemente a continuación, esto no ha dado resultado.
Primero, con la consagración de la ZEE muchos de los Estados empezaron a otorgar
subsidios para impulsar el desarrollo de las flotas pesqueras internas. Esto ocasionó una
intensa presión en ciertas zonas pesqueras, cuando ya el recurso era escaso.
Cabe
mencionar que con la reducción de muchas de las poblaciones de peces, varios Estados
del Sur, como por ejemplo Argentina, comenzaron a vender permisos de explotación de
recursos pesqueros dentro de su ZEE a los países industrializados. Debido al aumento de
la capacidad pesquera y la presencia de flotas extranjeras legales e ilegales dentro de las
ZEE, la pesca aumentó a índices insostenibles. Además de la explotación de las ZEE, se
explotaron áreas en altamar sin mayores controles, afectando de esta forma el espacio
público global.
Sin embargo, mientras muchos países han aprovechado el derecho a explotar las
poblaciones de peces dentro de su ZEE y han aumentado sus actividades pesqueras en
87
CONVEMAR, art. 61.
altamar, muy pocos han asumido los deberes que la CONVEMAR contempló para
generar el manejo sostenible del recurso. Así, la sobreexplotación, junto con la falta de
controles nacionales e internacionales sobre las pesquerías, ha causado en los últimos
años el colapso de los recursos pesqueros. Es por eso que ahora algunos científicos
hablan de los mares vacíos o los mares silenciosos 88 .
o) Otros tratados internacionales
Además de la CONVEMAR, existen varios acuerdos globales y regionales
relacionados con la conservación y la protección de los recursos y ecosistemas marinos.
Entre ellos pueden mencionarse la Convención Internacional sobre Comercio de Especies
Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) 89 , la Convención para la Conservación
de Especies Migratorias de Animales Silvestres 90 , la Convención Interamericana para la
Conservación y Protección de las Tortugas Marinas 91 , el Convenio de Diversidad
Biológica (CBD) 92 y el Convenio sobre Humedales de Importancia Internacional,
especialmente como Hábitat de Aves Acuáticas (Convenio de Ramsar), 93 entre otros.
También existe la Comisión Internacional para la Conservación del Atún del
Atlántico (ICCAT) 94 y la Comisión Interamericana del Atún Tropical (CIAT) 95 las cuales
88
JACKSON, Jeremy. Perspectives on Ocean Science: “Silent Ocean” (Video, 28 min). Disponible en:
http://www.ucsd.tv/library-test.asp?showID=8555. Última visita 11 de enero de 2004.
89
Firmado en Washington, EEUU, el 3 de marzo de 1973, entró en vigor el 1º de julio de 1975 y fue modificado en
Bonn, Alemania, el 22 de junio de 1979, cuenta con 167 Estados Parte. Disponible en:
http://www.cites.org/eng/disc/what.shtml. Última visita el 11 de enero de 2005.
90
Firmada en Bonn, Alemania el 23 de junio de 1979, entró en vigor el 1º de noviembre de 1983, cuenta con 88
Estados parte. Disponible en: http://www.cms.int/about/spanish/intro_sp.htm. Última visita 20 de diciembre de
2004.
91
Firmado en Caracas, Venezuela el 1º de diciembre de 1996. Disponible en:
http://www.seaturtle.org/iac/castellano/convencion.shtml. Última visita el 20 de diciembre de 2004.
92
Firmado en Río de Janeiro, Brasil, junio, 1992. Disponible en: http://www.biodiv.org/convention/default.shtml.
Última visita el 20 de diciembre de 2004.
93
Firmada en Ramsar, Irán, 2 de febrero de 1971, cuenta con 144 Estados Parte. Disponible en:
http://www.ramsar.org/index_about_ramsar.htm#intro. Última visita el 20 de diciembre de 2004.
94
COMISIÓN INTERAMERICANA DEL ATÚN TROPICAL. Disponible en: http://www.iccat.es/. Última visita
el 11 de enero de 2005.
intentan regular la pesca de las especies objeto de los tratados que se encuentran en
altamar. Estos tratados y sus implicaciones están discutidos en mayor detalle en el
Apéndice No. 1.
VI. CONCLUSIÓN
El grado de afectación a nivel global que enfrentan los recursos marinos es pues,
evidente. No hay duda que la pesca excesiva, la falta de reglamentación y el abuso de la
tecnología son tres de las grandes causas para ello. A pesar de la clara evidencia de lo
anterior, las medidas preventivas y de control necesarias no han sido suficientes para
disminuir la afectación de estos recursos. Por el contrario, el avance en el deterioro de las
pesquerías es tan rápido, que es posible que ocurran nuevos colapsos de pesquerías
comerciales en varias regiones del mundo.
La implementación de medidas como la extensión de la jurisdicción estatal a 200 millas,
con el fin de que los Estados tengan más control sobre los recursos de los océanos para poder
manejarlos, no ha dado suficientes resultados. Por el contrario, la explotación excesiva de
los océanos en las jurisdicciones de los Estados continúa, así como la ausencia de controles
efectivos en altamar. Queda en las manos de quienes formulan y aplican las políticas
pesqueras, así como de los sectores directamente afectados por ellas, incluyendo a los
pescadores mismos y los consumidores, la tarea de evitar mayores colapsos, y de asumir la
responsabilidad de evitar que otras especies y las comunidades que dependen de ellas repitan
la historia del bacalao en Norteamérica, cuya pesca está suspendida indefinidamente después
de su desplome sufrido a comienzos de los años 1990. Cada una de las herramientas
95
Ibíd.
descritas en los siguientes capítulos busca colaborar con el mejoramiento de esta situación
para arribar a una pesca cada vez más sostenible.
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