Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares

Anuncio
Gestionar la Nueva
Generación en las
Empresas Familiares
SOBRE EL AUTOR
Javier Macías
MBA de ESADE.
Profesor en EAE Business School, Consultor
de Familia Empresaria y miembro del Family
Firm Institute. Colaborador de las Cámaras de
Comercio del País Vasco y conferenciante en foros
internacionales de empresa familiar.
Supervisión:
Joan M. Amat
Coordinación:
Ane M. Cordero
www.forodeempresafamiliar.com
Colaboradores:
Yolanda Mora
Consultora de Empresa Familiar
Joaquín Uriach
Consejero de Empresa Familiar
Borja Raventós
Coach de Empresa Familiar
Julia Téllez
Abogada, Consultora y Consejera de Empresa Familiar
EUSKO GANBEREN
FAMILIA ENPRESAREN ERAKUNDEA
FORO DE EMPRESA FAMILIAR
DE LAS CÁMARAS VASCAS
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
Una inversión segura de presente y futuro
EDITA:
EUSKO GANBEREN FAMILIA ENPRESAREN ERAKUNDEA
FORO DE EMPRESA FAMILIAR DE LAS CÁMARAS VASCAS
› ARABAKO GANBERA
CÁMARA DE ÁLAVA
Dato, 38 · 01005 Vitoria - Gasteiz
Tel.: 945 141 800
[email protected]
› BILBOKO GANBERA
CÁMARA DE BILBAO
Alameda de Recalde 50, 48008 Bilbao
Tel.: 944 706 500
[email protected]
› GIPUZKOAKO GANBERA
CÁMARA DE GIPUZKOA
Avda. de Tolosa, 75 · 20018 Donostia - San Sebastián
Tel.: 943 000 300
[email protected]
Primera edición: Noviembre 2011
Número de ejemplares: 3.000
Diseño y maquetación: nu comunicación
Depósito legal: SS-1457-2011
© Foro de Empresa Familiar de las Cámaras Vascas
del País Vasco
Mario de Gandarillas
Abogado y Consultor de Empresa Familiar
Gipuzkoako Foru Aldundia
Diputación Foral de Gipuzkoa
Boris Matijas
Periodista experto en Empresa Familiar
INDUSTRIA, BERRIKUNTZA
MERKATARITZA ETA TURISMO SAILA
DEPARTAMENTO DE INDUSTRIA,
INNOVACIÓN, COMERCIO Y TURISMO
Eusko Ganberen Familia Enpresaren Erakundeak eskerrak
eman nahi dizkie Familia-Enpresa Eskuliburua egiten
lagundu duten pertsona eta entitate guztiei.
El Foro de Empresa Familiar de las Cámaras Vascas
desea expresar su agradecimiento a todas las personas
y entidades que han colaborado en la elaboración de
este Manual de la Empresa Familiar.
Gestionar la Nueva
Generación en las
Empresas Familiares
Una inversión segura de presente y futuro
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
Hitzaurrea
Prólogo
Euskal Herrian enpresa-sarearen 70 ehunaren
ingurua familiarra da, ez gehiago eta ez gutxiago. Enpresa munduan sartu ziren ekintzaileek garapen ingurunean hasitako sendotze
jardueren emaitza gara, ez bere familiarentzako bakarrik baita enpresari zuzenki lotuak
daudenentzako ere bai.
Enpresa hauen jarraipenerako lana egitea
arrazoi bikoitza dauka. Alde batetik, enpresasarearen portzentai haundia ordezkatzen dutelako eta bestetik, lurraldeari ematen dion
gizarte-onuragatik. Horrela, familia enpresak,
lana eta lurraldearekin lortzen duen konpromisua eta sozio-ekonomiko ehunari ematen dion
egonkortasuna bere epe luzerako ikuspegiagatik, Euskal Herriko ekonomian enpresa mota
hau duen garrantzia duen arrazoia da. Hala ere,
bere dimentsioa familia enpresak ez direnak
baino txikiagoa da, eta sektore tradizionaletan
oinarrituak izatea ahoultasun iturriak dira, eta
horregatik arreta haundiago behar dute.
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
Beste aldetik, Euskal Herrian bi familia-enpresen
herenak, familiarren menpe daudela esan dezakegu, enpresaren kapitalean familiaren kanpo eragilerik partehartu gabe. Komunikazioa,
ondoregotza, kudeaketa... gai guzti hauek
familia enpresa barruan kezkak planteatzen
ditu. Hori dela eta, era honetako liburuak beharrezkotzat antzematen dira.
Liburu honetan, belaunaldi berrien eraketa
aztertuko dugu. Zergatik? Familia enpresen
batez besteko bizi-itxaropena 24 urtekoa
delako, eta hirutik bat bakarrik iristen delako
bigarren belaunaldira. Gainera, %34’5 kasuetan bakarrik familia enpresak oinordekoa ezagutzen du. Honelako gidaliburuak datu hauek
aldatzea espero dugu.
En el País Vasco alrededor del 70 por ciento
del entramado empresarial es de carácter familiar, nada más y nada menos. Somos fruto
de la consolidación de las actividades iniciadas por esos emprendedores que se introdujeron en el oficio de empresarios como medio de desarrollo de la propia familia y de las
personas vinculadas directamente a la misma.
La razón para trabajar por la continuidad de
estas empresas es doble. Por un lado, por-
que representan un alto porcentaje del entramado empresarial y, por otro lado, por el
beneficio social que aportan al país. De esta
forma, la relevancia que en el empleo y en el
compromiso con el territorio adquieren las
empresas familiares, junto con la estabilidad
que dan al tejido socioeconómico por su visión a largo plazo, justifican la trascendencia
que para la economía del País Vasco tiene el
apoyo a este tipo de empresas. Sin embargo,
su dimensión relativamente inferior a la de
las empresas no familiares y su pertenencia
a sectores tradicionales, son fuente de debilidad en un entorno abierto y, precisamente
por ello, son motivo de mayor atención.
Por otra parte, podemos afirmar que en País
Vasco aproximadamente dos tercios de las
empresas familiares están bajo el control absoluto de la familia, sin ningún tipo de participación de agentes ajenos a la familia en el
capital de la empresa. La comunicación, las
sucesiones, la gestión… todas estas cuestiones plantean dudas en el seno de las empresas familiares. De ahí que se perfilen como
necesarios libros como este.
En el libro se reflexiona sobre la formación de
las Nuevas Generaciones. ¿Por qué? Porque
la expectativa media de vida de las empresas
familiares es de 24 años y sólo un tercio llega
a la segunda generación. Además sólo en un
34,5% de los casos la Empresa Familiar tiene al
sucesor identificado. Esperemos que manuales como este nos ayuden a modificar estos
datos.
Gregorio Rojo
Arabako Ganberako Lehendakaria
Presidente de la Cámara de Álava
José Ángel Corres
Bilboko Ganberako Lehendakaria
Presidente de la Cámara de Bilbao
Pedro Esnaola
Gipuzkoako Ganberako Lehendakaria
Presidente de la Cámara de Gipuzkoa
Índice
Gestionar la Nueva Generación
de Empresas Familiares
08 Introducción
11 Capítulo 1
Características de las Nuevas
Generaciones
12 1. Mitos de las Nuevas Generaciones
14 2. Segmentación de la Nueva Generación
2.1. Nuevos Líderes
2.2. Aspirantes
2.3. Exploradores
2.4. Expatriados
19 3. Ciclo Vital
3.1. Influencia del ciclo vital
3.2. Soluciones intentadas
3.3. Imprevistos del ciclo vital
29 Capítulo 2
Preparar la Empresa Familiar
para la Nueva Generación
30 4. Planificar la incorporación de
Nuevas Generaciones
4.1. Objetivos de la Familia Empresaria
4.2. Planificar la oferta de Planes de Carrera
35 5. Acuerdos familiares previos
5.1. La importancia de las reglas escritas
5.2. Cinco acuerdos preliminares
37 6. Políticas de entrada
6.1. Entrada por orden de nacimiento
6.2. Políticas de contratación
6.3. Políticas salariales
6.4. Evaluación del desempeño
6.5. Despido de familiares
6.6. Aplicación políticas de entrada
45 Capítulo 3
Preparar la Nueva Generación
para el Liderazgo
46 7. Educar la Nueva Generación
7.1. Educar desde la infancia
7.2. Comunicación congruente
7.3. Administración del dinero
7.4. Equipos de hermanos
51 8. Diseño del propio proyecto de vidas
8.1. Exploración de los valores personales
8.2. La especificación de objetivos
8.3. Desarrollo de la red social
8.4. Desarrollo de competencias
56 9. Desafíos de la Siguiente Generación
9.1. Actitudes de los que se incorporan
9.2. Riesgos de la incorporación temprana
9.3. Influencia de la familia de origen
10.1. Etapa de prueba
10.2. Asesoramiento de 360º
10.3. Coaching
10.4. Mentoring
68 11. La Nueva Generación y la Familia
de Origen
11.1. Cambio en la dinámica familiar
11.2. Relaciones padres e hijos
11.3. Comunicación familia y empresa
11.4. Riesgos de entrampamiento familiar
77 Capítulo 5
Los directivos no familiares
78 12. La Nueva Generación
y los directivos no familiares
12.1. Riesgos de rivalidad
12.2. Función de los directivos no familiares
12.3. Profesionalización
83 Conclusiones
84 Epílogo
86 Agradecimientos
87 Referencias Bibliográficas
63 Capítulo 4
Desafíos del trabajo conjunto
64 10. Trabajar en la Empresa
de forma planificada
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
08
09
Introducción
Este manual se presenta como una guía práctica de acciones posibles para motivar a las
Nuevas Generaciones de la Empresa Familiar
a involucrarse en el negocio y aportar todo su
potencial re-generador.
Las crisis económicas traen consigo muchas
amenazas, pero también muchas oportunidades. Para la Empresa Familiar las amenazas
se manifiestan en continuar haciendo las cosas como las veníamos haciendo. La oportunidad aparece en las nuevas formas de adaptarnos a un mercado que ha cambiado sus
reglas bruscamente.
La revolución tecnológica de la sociedad de
la información y la comunicación ha cambiado nuestra forma de relacionarnos con los
productos y servicios. Se destruyen puestos
de trabajo, pero se crean otros.
La forma de hacer negocios también está
cambiando. La internacionalización de los
mercados exige innovaciones tanto en la tecnología como en la forma de relacionarnos
unos con otros.
En este contexto es donde las Nuevas Generaciones tienen voz y voto. Al mismo tiempo
se trata de un contexto donde las Empresas
Familiares ancladas en las tradiciones y en el
“siempre lo hemos hecho así”, corren el mayor
peligro: o se transforman o desaparecen.
Las Nuevas Generaciones traen consigo esta
energía renovadora y serán sin duda los líderes en un futuro muy cercano. Es función de
la generación en el poder facilitar la transición
generacional y permitir que la motivación de
la Nueva Generación se alimente de sus pequeños logros diarios.
Con esta intención hemos diseñado este manual. Una guía orientada a acciones concretas que permita a la generación en el poder
relacionarse de una forma motivadora con la
Nueva Generación, al tiempo que todo ello
revierte en una mejora tanto del disfrute personal de los miembros de la familia como de
la rentabilidad del negocio.
En este manual nos hemos concentrado en
dos etapas del ciclo vital de las empresas familiares:
a) La entrada de familiares en la empresa.
b) El trabajo conjunto de generaciones diferentes.
El lector se sorprenderá de la cantidad de
reglas y normas que se le piden a las Nuevas
Generaciones. Entonces, ¿cómo podemos
hablar de motivación? Las generaciones en el
poder se sorprenderán de lo mucho que los
jóvenes necesitan normas claras y explícitas
en su relación con el negocio.
mente, negociar las reglas, registrar las reglas
por escrito y acordar quién se encargará de
aplicarlas.
Los jóvenes están acostumbrados a jugar y a
que, antes de iniciar el juego, un amigo les explique las reglas. De esta forma pueden jugar
con seguridad y superar etapas satisfactoriamente. Conocer las reglas del juego tiene un
enorme poder motivador.
De esta forma se inicia un avance del Protocolo Familiar que recoge la normativa respecto a la entrada de familiares en la empresa y
al trabajo conjunto. Un documento siempre
vivo, sujeto a revisión y que será complementario a otros documentos posteriores. Todos
ellos formarán un día el Protocolo Familiar.
Una de las herramientas que la Empresa Familiar
tiene para comunicar las normas a las Nuevas
Generaciones consiste en el Protocolo Familiar.
En este documento se recogen las normas de
relación entre familia y empresa. Dependiendo
del momento de la familia este documento se
orientará más a las relaciones laborales entre familiares o se orientará más hacia al gobierno y la
propiedad de la Empresa Familiar.
Los Protocolos Familiares suelen firmarse en
un momento dado de la vida de la Familia
Empresaria después de un proceso de negociación entre los familiares.
Las reglas y normas que se proponen en este
manual serán parte del Protocolo Familiar, sin
embargo, se recomienda a la Familia Empresaria no esperar a firmar el citado Protocolo
Familiar para empezar a comunicarse abierta-
Ahora bien, para que las normas puedan
cumplir su efecto motivador, su efecto de
“reglas del juego”, necesitan ir acompañadas
de afecto.
La necesidad de afecto es una constante en
las relaciones personales. El afecto o la carencia de él puede hacer que la misma regla
adquiera un valor positivo o negativo para la
misma persona. Cuando esta necesidad de
afecto la entendemos en el contexto de una
Familia Empresaria, entonces tiene un mayor
valor añadido, pues las reglas se están negociando con personas que son importantes
para la vida de cada uno.
Sentirse querido mejora el concepto que uno
tiene de sí mismo y la relación con los demás.
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
Todo ello redunda en el entusiasmo y la alegría de la persona. Variables indispensables
en la motivación.
Por ello, en este manual se pone un especial
énfasis en cómo comunicarse con la Nueva
Generación y en la necesidad de ambas generaciones de conocerse mutuamente para
poder comunicarse con afecto.
Asimismo, tal y como se repetirá en varias
ocasiones en este manual, debemos evitar
utilizar la empresa para solucionar asuntos
familiares no resueltos. Por ejemplo, trabajar
cerca del padre (o de los hijos) para obtener
afectos. Si esto ocurre estaremos perdiendo
de vista los objetivos de nuestra dedicación
profesional: generar beneficios económicos.
La madurez de la Nueva Generación y su relación satisfactoria con la Empresa Familiar
dependerá de una formación basada en una
correcta combinación de reglas y afectos. En
este manual encontrará algunas claves para
formar a las Nuevas Generaciones como gestores y propietarios responsables.
Características
de la Nueva
Generación
Capítulo 1
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
12
13
1. Mitos de
las Nuevas
Generaciones
Cada cultura tiene sus mitos. Numerosos refranes populares nos advierten del peligro de
trabajar con familiares y del riesgo de perder
el patrimonio de una generación a otra.
Si atendemos a las investigaciones recientes
acerca de los conflictos familiares y acerca de
las empresas que se pierden en el transcurso
de generaciones parece que los datos dan la
razón a estos dichos populares.
Una gran mayoría de las empresas familiares
fracasan debido a conflictos familiares y una
gran cantidad de empresas familiares no logran llegar a segunda o tercera generación.
A pesar de la tendencia, unas pocas logran
salir adelante y dar continuidad a su proyecto
familiar y empresarial. Empresas lideradas por
familias que desafiaron los mitos y construyeron su propia historia de éxito.
Permitir que la empresa trascienda a su fundador, es decir, que continúe su actividad más
allá del retiro o la jubilación del mismo genera
beneficios tanto sociales como económicos:
las personas pueden mantener puestos de
trabajo en una empresa madura que genera
riqueza.
Las empresas jóvenes también son importantes para la economía de un país. Ahora bien,
estas empresas no tienen su futuro asegurado, sino que deben hacer frente a momentos
inestables e inseguros, manteniendo rumbo
firme gracias a la visión del emprendedor.
Una comunidad, una región o un país con
afluencia de emprendedores, será una excelente apuesta para el futuro.
Así, para que una comunidad pueda gozar
de una estabilidad actual y visión de futuro,
necesitará una correcta combinación de empresas longevas que han llegado a estadios
de madurez y empresas jóvenes que ofrecen
esperanza de futuro.
Sin embargo, las empresas longevas con líderes llegados a la madurez, tienden a protegerse buscando posiciones seguras en el
mercado, lo cual corre el riesgo de estancar su
crecimiento. En un mercado cambiante y en
constante movimiento, asegurar posiciones y
apostar por hacer lo de siempre corre el riesgo de perder competitividad en el mercado.
En unas jornadas del Foro de Empresa Familiar de las Cámaras Vascas un conocido empresario decía: “si la empresa no crece, muere”.
El espíritu emprendedor no puede reducirse
a la etapa de fundación. La Empresa Familiar
necesita que este espíritu emprendedor permanezca vivo en las Nuevas Generaciones
para poder continuar su actividad y trascender generaciones satisfactoriamente.
Este espíritu de motivación, ilusión y continuidad es el que nos traen las Nuevas Generaciones. Generaciones que necesitan estar formadas para desarrollar su espíritu emprendedor,
renovando la empresa y adaptándola a las
siempre cambiantes necesidades del mercado.
En este proceso, las Nuevas Generaciones no
pueden esperar a que les concedan poderes
de un día para otro, sino que deben asumir
responsabilidades progresivamente.
Ahora bien, este plan es imposible si la Generación Predecente no facilita el camino a la
Nueva Generación. Algunos empresarios familiares no tienen claro si sus descendientes
van a poder gestionar la empresa como ellos
lo hicieron y... efectivamente nunca lograrán
hacerlo igual!
En el traspaso de una generación a otra, la
empresa se halla en un período en el que resultará importante organizar el crecimiento
de la etapa inicial. Sería un error que la Nueva
Generación siguiera gestionando la empresa
de la misma forma que la generación anterior.
El mercado es diferente, las reglas son diferentes.
La diferencia que muchas veces estos emprendedores ven entre ellos y sus descendientes les hace dudar de las capacidades de
la Nueva Generación para ponerse al frente
de la empresa el día de mañana. O ¿es que en
realidad dudan de su propia capacidad para
dejar la empresa?
La ambigüedad y la falta de un plan coherente con las Nuevas Generaciones origina situaciones de desconcierto general, tensiones
emocionales y, sobre todo, pérdida de competitividad.
La ambigüedad genera confusión y la confusión tensión emocional. Así podemos ver
a Nuevas Generaciones sufriendo insoportables niveles de ansiedad resultado de un crecimiento profesional y personal bloqueado
por las generaciones en el poder.
En estas situaciones uno puede encontrarse
con Nuevas Generaciones que sienten la obli-
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
14
15
gación de trabajar en la empresa de la familia
aunque ésta no les ofrezca ningún reto profesional y ni siquiera un proyecto de futuro.
En situaciones como ésta (o similares) encontraremos miembros de primera y segunda
generación trabajando conjuntamente, pero
ya no habrá miembros de tercera generación
interesados en trabajar en la empresa.
Y así comienza el mito del padre emprendedor, hijo ingeniero, nieto poeta.
Si usted quiere superar este mito y construir
una historia diferente, para usted, para su familia, para su empresa, para su comunidad,
comience hoy planificando su Empresa Familiar de tercera generación.
2. Segmentación
de la Nueva
Generación
Las empresas familiares que ganan posiciones
de liderazgo en el mercado y que trascienden
generaciones satisfactoriamente suelen organizarse en foros donde reflexionan y comparten experiencias que las hacen diferentes de
propiedad y gestión; fronteras que en empresas de primera generación suelen ser muy
difusas, ya que el/la fundador/a puede estar
realizando al mismo tiempo tareas de propiedad y tareas de gestión.
Una última implicación de esta clasificación
estaría relacionada con los retos a los que
hace frente la Nueva Generación a medida
que va ganando experiencia laboral y madurez emocional.
Por tanto, el trasvase a la Nueva Generación
puede ser una oportunidad para diferenciar
de mejor modo propiedad y gestión.
Así, el Family Business Network (FBN) agrupa
a los miembros de la Nueva Generación en
cuatro categorías:
Por ejemplo, un hijo o una hija pueden no
querer dedicarse al día a día de la empresa,
pero pueden poseer acciones en la misma y
querer participar en las reuniones de la Junta
de Accionistas, recibir dividendos, etc.
t/VFWPT-ÓEFSFT
t"TQJSBOUFT
t&YQMPSBEPSFT
t&YQBUSJBEPT
De acuerdo a la clasificación del FBN los nuevos líderes serán los familiares que trabajan en
la empresa y que han ido asumiendo responsabilidades progresivamente. Están a punto
de recibir el “testigo” y el proceso de sucesión
está avanzado. La media de edad se sitúa en
los treintena y tantos, casi cuarenta.
En esta definición entendemos que lo importante para la continuidad de la Empresa Familiar es que la propiedad continúe en manos
de la familia, independientemente de quien
se encargue de la gestión.
La segunda implicación de esta definición
ofrecida por la Red de Empresas Familiares
(FBN) consiste en la necesidad de la Nueva
Generación de convertirse en propietarios
responsables, es decir, aunque no trabajen
en la empresa serán conscientes de las necesidades de la empresa, participarán en las
reuniones oportunas (Junta de Accionistas,
Consejos, etc.) y se prepararán para ser profesionales con autonomía y no depender de
los dividendos de la Empresa Familiar o del
patrimonio familiar.
Esta definición tiene implicaciones importantes. Primero realiza una diferencia clara entre
Las tareas de gobierno en una Empresa Familiar
son tan importantes como la gestión del día a día.
las empresas no familiares.
El País Vasco sensibilizado con la importancia
de las empresas familiares en su tejido empresarial organiza periódicamente un Foro de
Empresa Familiar donde las familias empresarias pueden compartir sus experiencias.
Otro foro de Empresa Familiar, en este caso
internacional, el Family Business Network
(FBN) ha creado un foro específico para las
Nuevas Generaciones de Empresa Familiar,
entendiendo la importancia que las Nuevas
Generaciones tienen para la continuidad de
las empresas familiares.
Para ello han llegado a un acuerdo previo
acerca de lo que entendemos por Nueva Generación: “miembros familiares entre 18 y 40
años que sean propietarios o vayan a serlo en
un futuro y que pueden o no ocupar puestos
de gestión en la empresa”.
2.1. Nuevos Líderes
2.2. Aspirantes
Siguiendo con esta clasificación, los Aspirantes serán los miembros de la familia que
trabajan en la empresa o que acaban de incorporarse y cuentan con poca experiencia
laboral. La media de edad se encuentra en los
veintitantos o treinta y pocos.
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
16
17
2.3. Exploradores
Los Exploradores serán los miembros familiares que todavía están en periodo de formación, no se han incorporado al mercado
laboral o tienen muy poca experiencia laboral. Algunos puede que se encuentren en la
duda de si entrar a trabajar en la empresa de
la familia o no. Las edades suelen estar comprendidas entre los veinte y pocos.
2.4. Expatriados
Finalmente los Expatriados (traducido del
inglés: “Outsiders”) serán los miembros familiares propietarios o que participan del patrimonio familiar y que pueden llegar a ocupar
puestos de responsabilidad en los órganos de
gobierno.
Se trata del grupo más delicado de gestionar
y donde pueden llegar a localizarse frecuentes
desencuentros familiares. Este grupo puede
llegar a tener una sensación de que no comparte los momentos de “complicidad” que tienen los otros familiares que trabajan juntos.
Y así, dependiendo del tamaño de la familia
y la etapa de crecimiento de la empresa, se
pueden llegar a generar dos grupos: los familiares que trabajan dentro de la empresa y
los que no lo hacen. Una vez se genera esta
percepción se está abriendo el camino para
posibles rivalidades entre familiares.
Por tanto, el reto para la Generación Predecente será crear un solo grupo al que todos
pertenecen: “futuros herederos o propietarios
del patrimonio familiar”.
En el trabajo realizado con una muestra de
empresas del Foro de Empresa Familiar de las
Cámaras Vascas, se identificaron los siguientes desafíos.
NUEVAS GENERACIONES
Propietarios o futuros propietarios
(18 - 40 años)
Nuevos Líderes
40 años aprox.
Profesionales con experiencia en EF
Aspirantes
30 (y tantos) años
Corta experiencia en EF
Exploradores
18-20 (y tantos) años
Estudiantes / Elección EF si/no
Expatriados
Decisión: no trabajar en la EF
Responsabilidades de Gobierno
DESAFÍOS DE LAS NUEVAS GENERACIONES
PLAN DE ACCIÓN
NUEVOS LÍDERES
t-JEFSBSDPOIBCJMJEBEFNQSFTBZGBNJMJB
t$POTFHVJSFMBQPZPEFMB'BNJMJB&NQSFTBSJB
t$POTFHVJSFMSFDPOPDJNJFOUPEFMPTBTQJSBOUFT
t.PEFSBSMBFYQSFTJØOEFMBTFNPDJPOFT
t3FTQFUBSMBTEFDJTJPOFTEFPUSBTHFOFSBDJPOFT
t1SFQBSBSFMTJHVJFOUFSFMFWPHFOFSBDJPOBM
NUEVOS LÍDERES
t3FDPOPDFSFMQSPQJPMJEFSB[HPDPNPQSPQJP
t$PNVOJDBSDPODPOmBO[BZUSBORVJMJEBE
t$PNVOJDBSMBTGVUVSBTBDDJPOFT
t$PNVOJDBSMBTDMBWFTEFÏYJUPEFMBFNQSFTB
t'PSNVMBSVOBWJTJØOEFQSPZFDUPDPNQBSUJEP
t*OWPMVDSBSBMPTFRVJQPTFOFTUFQSPZFDUP
t%FMFHBSZEBSGBDJMJEBEFTBMPTBTQJSBOUFT
t1FEJSPQJOJØOZDPOTFKPBMPTGBNJMJBSFT
ASPIRANTES
t-JEFSBSBQBSUJSEFMBJOOPWBDJØO
t(FTUJPOBSMBTSFMBDJPOFT
t(BOBSDPOmBO[BEFMFRVJQPQSPGFTJPOBM
t(BOBSDPOmBO[BEFQSPWFFEPSFTZDMJFOUFT
t3JFTHPEFDBFSFOFMEFTFODBOUP
t4BDBSQBSUJEPEFMBDPSUBFYQFSJFODJB
EXPLORADORES
t%FmOJSVOQSPZFDUPQSPGFTJPOBMZQFSTPOBM
t"ERVJSJSFYQFSJFODJBGVFSBEFMB&NQSFTB'BNJMJBS
t"ERVJSJSDPODJFODJBEFMBSFBMJEBE
t%FTBSSPMMBSVODBSÈDUFSFNQSFOEFEPS
EXPATRIADOS
t"TVNJSSFTQPOTBCJMJEBEDPNPQSPQJFUBSJPT
t"TVNJSMBJNQPSUBDJBEFTVWJTJØOFYUFSOB
t$POPDFSWBMPSFTZGVODJPOBNJFOUPEFMBFNQSFTB
t$POPDFSTVTEFSFDIPTZPCMJHBDJPOFT
t$POmBSFOMPTHFTUPSFTEFMBFNQSFTB
t%FTBSSPMMBSVOQSPZFDUPQSPGFTJPOBMZQFSTPOBM
t(FTUJPOBSTVTOFDFTJEBEFTEFMJRVJEF[
A continuación sugirieron los siguientes planes de
acción para hacer frente a los desafíos anteriores:
ASPIRANTES
t"UFOEFSMBTSFMBDJPOFTQFSTPOBMFTFOMBFNQSFTB
t5PNBSJOJDJBUJWBTQBSBEFTBSSPMMBSIBCJMJEBEFT
t5PNBSJOJDJBUJWBTQBSBEFTBSSPMMBSDBQBDJEBEFT
t"TVNJSSFTQPOTBCJMJEBEFTQSPHSFTJWBNFOUF
EXPLORADORES
t'PSNBSTFZHBOBSFYQFSJFODJBGVFSBEFMB&'
t"QSFOEFSJEJPNBTZWJBKBSBPUSPTQBÓTFT
t"ZVEBSMFTBSFDJCJSJOGPSNBDJØOEFMBFNQSFTB
t"ZVEBSMFTBDPOPDFSMBFNQSFTB
t0GSFDFSMFTPQPSUVOJEBEFTEFGPSNBDJØO
t"ZVEBSMFTBDPNVOJDBSTFBCJFSUBNFOUF
t-MFHBSBBDVFSEPTEFGVUVSP
con la Generación Predecente
EXPATRIADOS
t0GSFDFSJOGPSNBDJØOTPCSFMBNBSDIBEFMBFNQSFTB
t0GSFDFSGPSNBDJØOFTQFDÓmDBFKMFFSCBMBODFT
t$PNVOJDBSGVUVSBTBDDJPOFTEFMBFNQSFTB
t0GSFDFSPQPSUVOJEBEFTEFQBSUJDJQBDJØO
(Órganos de Gobierno, actividades familiares, etc.)
t/FHPDJBSTVSFMBDJØODPOMBFNQSFTB
t-MFHBSBBDVFSEPTNVUVPT
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
18
19
La posición de la Generación Predecente determina la gestión de las relaciones personales con la Nueva Generación.
Algunas posiciones revelan la necesidad de la
Generación Predecente de que sus descendientes hagan lo mismo que hicieron ellos, es
decir, pasar por las mismas calamidades y penurias para convertirse en hombres y mujeres
con un porvenir.
Los miembros de la Nueva Generación que
se educan en esta percepción de la realidad,
corren el riesgo de sentir una cierta sensación
de injusticia. Pueden llegar a sentir que se están sacrificando innecesariamente sólo por
capricho de la Generación Predecente.
En el polo opuesto encontramos otra posición: “nosotros sufrimos muchas penurias
cuando éramos niños y jóvenes, así que no
quiero que mis hijos pasen por lo mismo”.
En este caso los miembros de la Nueva Generación corren el riesgo de perder el sentido de
la realidad, viviendo en la ilusión de que pueden conseguir todo lo que quieren sin necesidad de esforzarse. La Generación Predecente
siempre está ahí para conseguirlo por ellos.
Entre estos dos extremos de conductas y realidades creadas a partir de normas no escritas,
nos encontramos todo un universo de situaciones posibles que se van solventando en el
día a día y que van generando equilibrios, la
mayoría operativos para la empresa y el desarrollo personal de los familiares.
La responsabilidad de guiar, ayudar y facilitar
el camino de la Nueva Generación recaerá
siempre en la Generación Predecente.
Algunos lo hacen desde el “control exhaustivo”
sobre sus descendientes; otros a partir del
“dejar hacer” sin prestar demasiada atención; y
ninguno de ellos se muestra como el adecuado. Será en los términos intermedios donde
encontraremos el mejor equilibrio, es decir,
dotar de responsabilidad y evaluar resultados.
Algunos comportamientos que pueden servir de guía se muestran a continuación:
t%BSSFDPOPDJNJFOUPQPSTVTMPHSPT
t7BMPSBSTVEFTFNQF×P
t$PNVOJDBSTFDPOBGFDUP
t.PTUSBSTFEJTQPOJCMFT
t/PIBDFSDPNQBSBDJPOFT
t5SBUBSMPTDPNPFRVJQPEFIFSNBOPT
tFUD
3. Ciclo Vital
Entendemos por ciclo vital lo que coloquialmente llamamos “madurar”, es decir, superar
los desafíos de las diferentes etapas de nuestra vida.
La clasificación de la vida de las personas en
etapas ha sido un tema de atención de filósofos y psicólogos.
Por ejemplo, Levinson (1978) observa al hombre como un individuo que supera etapas en
su crecimiento correspondientes a las décadas
cronológicas, es decir, de 0 a 10 años, de 10 a
20 años, de 20 a 30 años, de 30 a 40 años, etc.
Cada etapa de la vida nos reservaría una serie
de pruebas o desafíos en nuestro desarrollo
que deberíamos superar. Aquellos asuntos
que dejaríamos por resolver en cada etapa se
convertirían en un “lastre” que vamos arrastrando a la etapa siguiente.
Algunas veces tendremos oportunidad de
volver atrás para dar solución a pruebas sin
resolver, pero otras veces no tendremos esta
oportunidad.
La etapa crucial en este modelo se refiere al
paso de los cuarenta años, momento en el
cual la persona hace una revisión de su vida y
evalúa si ha conseguido sus sueños o se quedaron por el camino.
Otro modelo de ciclo vital, complementario
con el anterior, lo propone Milton Erickson (Haley, 1980) . En este modelo M. Erickson observa
la familia como unidad sujeta a las etapas de la
vida y las clasifica de la siguiente forma:
t1FSÓPEPEFHBMBOUFPNPEJmDBDJØO
del adulto joven
t.BUSJNPOJPZTVTDPOTFDVFODJBT
t/BDJNJFOUPZFMUSBUPDPOMPTIJKPT
t.BUSJNPOJPZEJMFNBTGBNJMJBSFT
t&MEFTUFUFEFMPTQBESFT
t&MTVGSJNJFOUPEFMBWFKF[
De acuerdo a M. Erickson cada una de las etapas estaría sujeta a dificultades propias que la
familia debe encarar y encontrar la forma de
solucionarlas. El malestar llegaría cuando la
familia se “entrampa” en una de estas etapas
y no encuentra los recursos para evolucionar
hacia la etapa siguiente.
Otro modelo de ciclo vital, en este caso referido específicamente a familias empresarias, lo
explica Ivan Lansberg (1999) enfatizando en
el encuentro de generaciones diferentes en la
Empresa Familiar:
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
20
21
t'BNJMJBTFNQSFTBSJBTKØWFOFT
t(FTUJPOBSFOUSBEBEFGBNJMJBSFT
t(FOFSBDJPOFTFOUSBCBKPDPOKVOUP
t%FKBSJSZBTVNJSSFTQPOTBCJMJEBEFT
Dejar ir
y asumir
responsabilidad
Edad familiares junior
36-60
Trabajo
conjunto
26-35
Entrada de
Familiares
19-25
0-18
Familia
Empresaria
Joven
35-40
41-50
51-60
60 ó +
Edad familiares senior
De acuerdo a Lansberg (1999) cada etapa supone una serie de retos tanto para la Generación
Predecente como para las Nuevas Generaciones.
FAMILIAS EMPRESARIAS JÓVENES
En esta etapa la pareja de jóvenes adultos
está luchando por ganarse un sitio y un prestigio en la sociedad. Han pasado de ser los junior a ser los miembros senior legítimos con
autoridad y con una sola voz. El joven adulto
está haciendo frente a tres retos:
1. Liderazgo en la compañía y en el mercado.
2. Aprender a ser un padre eficiente.
3. Construir una relación marital duradera.
Sin embargo, a pesar de las tensiones y de
las demandas de esta etapa, el joven adulto
todavía puede hacer mucho para transmitir a
sus hijos los retos y las alegrías de trabajar en
la Empresa Familiar.
Gestionar la entrada de familiares
En esta etapa los hijos están en la escuela o
en la universidad a punto de graduarse y de
pensar en serio sobre su carrera futura.
Por su parte los padres se encuentran en un
momento de introspección y reflexión sobre
su vida: ¿Los sacrificios realizados han merecido la pena? Puede que hayan conseguido su
liderazgo pero cuestionan su sueño.
Este momento de cuestionamiento e introspección, propio de esta etapa de la vida, no
les hace los mejores candidatos para evaluar
a su descendencia o entrenarlos para entrar
en la empresa o no.
Generaciones trabajando juntas
Si la generación senior encontró respuestas a
sus preguntas y han llegado a un estado de
calma, entonces podrán asumir la tarea de
“mentor” o “entrenador” de las Nuevas Generaciones con relativa satisfacción.
Si no encontraron respuestas durante la etapa
de introspección, puede que la continuidad y
la sucesión estén en peligro.
En esta etapa la generación senior tiene su
última oportunidad para transmitir las aptitudes, las habilidades y los valores necesarios a
la generación junior.
La generación junior por su parte, en sus
treinta y tantos o cuarenta, empieza a tomarse la vida en serio, comprendiendo que
la etapa de experimentación quedó atrás. Si
creen que pueden realizar el Sueño entonces
se comprometerán con su realización profesional en el negocio familiar.
Dejar ir y asumir la responsabilidad
Esta etapa supone la última prueba para la
generación senior. Ahora deberán dejar paso
a una generación junior que ya ha cruzado la
barrera psicológica de los cuarenta.
Dejar el negocio y pasar a realizar tareas de
representación social o de “liderazgo espiritual” no es una tarea fácil, sobre todo en una
sociedad que premia los éxitos de la juventud
y desatiende la sabiduría de los mayores.
Algunos de los más prestigiosos líderes pueden llegar a desarrollar grandes resistencias
en esta etapa.
3.1. Influencia del Ciclo Vital
Los eventos transcurridos a lo largo del ciclo
vital en el seno de la familia, llegarán a repercutir en el medio o largo plazo en la empresa
de la familia.
Pongamos por ejemplo diferencias y conflictos surgidos en la adolescencia entre padres
e hijos.
Si la necesidad de mayor libertad y de cuestionamiento de las normas, propia de la adolescencia, no se negoció o gestionó correctamente con los padres, es probable que estos
conflictos se muestren con posterioridad en
el desempeño cuando ambas generaciones
vuelven a estar juntas en el día a día laboral
(Carlock y Ward, 2001).
Asuntos pendientes de resolver tenderán a
surgir en forma de explosiones emocionales
que provocarán desconcierto tanto en los
familiares como en los colaboradores no familiares.
Del mismo modo, la forma en cómo los familiares se relacionen en los entornos informa-
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
22
23
les, permanecerá inalterable en los entornos
formales. Si padre e hijo están acostumbrados a faltarse al respeto en privado, también
lo harán en la empresa. Si hay rivalidad entre
los hermanos en el hogar de los padres, igualmente lo habrá en la empresa.
Tratar de solucionar en la empresa asuntos
familiares que quedaron “entrampados” en el
pasado, suele provocar efectos contrarios, es
decir, las relaciones se deterioran cada vez más.
3.2. Soluciones intentadas
El grupo de Palo Alto (Fisch y Schlanger, 2002)
presta atención a las decisiones que “entrampan” a las familias en sus propias “soluciones
intentadas”, es decir, soluciones que más tarde se convierten en problemas.
de los padres; por otro lado, la buena intención de los padres de proteger a sus hijos,
los mantiene cercanos en relaciones de codependencia.
Esta constante en el ciclo vital de todas las familias se complica en las familias empresarias
cuando aparece la posibilidad de emplear al
hijo/a en la empresa de la familia, no como una
forma de hacer crecer el negocio y ofrecer una
carrera profesional al hijo/a, sino como una forma de continuar el instinto de protección de
los padres hacia sus hijos (Kaye, 2005). Saber diferenciar entre ambos motivos exige una grado de auto-conocimiento y de comunicación
honesta consigo mismo y con el entorno.
Por tanto, aquí aparecen los primeros desafíos
para ambas generaciones:
Podemos encontrar “soluciones intentadas”
en el origen de muchos de los problemas
que afectan a las familias, empresarias y no
empresarias.
Ahora bien, la Familia Empresaria tiene un
riesgo añadido en el momento de la independencia de la Siguiente Generación.
La Generación Predecente se cuestiona las
razones por las que desea contratar a la Siguiente Generación:
r{0GSF[DPVOUSBCBKPBNJIJKPBFOMBFNQSFTB EF MB GBNJMJB QPSRVF FODBKB DPO FM
QVFTUPWBDBOUF
En esta etapa de lucha por la independencia,
el adolescente está sometido a dos fuerzas
diametralmente opuestas: por una lado siente el impulso de independizarse del hogar
o por el contrario:
r{0GSF[DPVOUSBCBKPBNJIJKPBFOMBFNQSFTBEFMBGBNJMJBDPOJOUFODJØOEFQSPUFHFSMP
Del mismo modo, la Siguiente Generación
también reflexiona acerca de sus oportunidades de crecimiento personal y profesional:
t{%FTFPUSBCBKBSFOMBFNQSFTBEFMBGBNJMJBQPSRVFTFSÈVOSFUPQSPGFTJPOBMQBSBNÓ
o por el contrario:
t{%FTFPUSBCBKBSFOMBFNQSFTBEFMBGBNJMJBQPSRVFFTMPNÈTDØNPEP
Generación
Predecente
Nueva
Generación
Mi hijo/a encaja
con el puesto
La EF es un reto
profesional
Doy empleo
a mi hijo para
protegerlo
La EF es un
trabajo cómodo
Parece lógico que una Familia Empresaria que
apuesta por la continuidad de su empresa
ofrecerá a su Nueva Generación puestos que,
además de ser necesarios para el crecimiento
de la empresa, supongan un reto profesional
para los jóvenes emprendedores.
Estas posiciones suelen ser posiciones seguras tanto para la estabilidad emocional de los
miembros familiares como de los trabajadores, al tiempo que demuestran una clara delimitación de fronteras entre familia y empresa.
Sin embargo, algunas familias escogen otro
tipo de posiciones donde las motivaciones de
una generación y de otra no llegan a estar del
todo claras.
Algunos jóvenes pueden ver en la empresa
una contratación fácil y un desempeño cómodo que los protege de la incertidumbre laboral,
mientras que los padres han puesto todas las
expectativas en él/ella. Esta relación de escaso
compromiso por un lado y elevadas expectativas por otro, está llamada a generar conflictos
en las relaciones entre generaciones.
Asimismo, Nuevas Generaciones que entran
en la empresa con grandes esperanzas, proyectos e ideas innovadoras, corren el riesgo
de encontrarse con generaciones en el poder
cuya única ambición es mantener el control
familiar a través del dinero o del ejercicio de
poder en la empresa. Estos casos están llamados igualmente al conflicto entre generaciones.
No podemos asegurar que estas situaciones
supongan un riesgo para la continuidad de la
empresa, pero sí podemos adelantar que esta
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
24
25
confusión acerca de lo que ambas generaciones pueden ofrecer y recibir una de otra, será
fuente de conflictos en el corto plazo.
Ahora bien, ambas generaciones también
pueden estar de acuerdo en ofrecer puestos
en la empresa a la Nueva Generación con la
intención de protegerlos de modo que la
Nueva Generación no se compliquen la vida
con exigentes carreras profesionales.
más a la rentabilidad de la empresa y la satisfacción de la familia.
oportunas cuando esta impermanencia se
hace presente.
3.3. Imprevistos del Ciclo Vital
t{2VÏIBDFSTJFMGVOEBEPSEFTBQBSFDFSFQFOtinamente?
t{2VÏIBDFSTJFMTVDFTPSEFTBQBSFDFSFQFOtinamente?
t {2VÏ IBDFS TJ MBT QFSTPOBT DMBWF EF MB &Npresa Familiar desaparecen repentinamente?
Nuestra cultura de la sociedad de consumo
nos lleva a ocultar la muerte, a evitar el tema
como si no existiera.
Si bien, esta situación aboga por la seguridad de la
familia, quizá sea la posición más arriesgada para
la continuidad y la rentabilidad de la empresa.
Las conversaciones acerca de la muerte resultan difíciles y la imagen sigue siendo como
una mancha oscura rodeada de sombra y
tinieblas. Incluso escribir estas líneas puede
resultar un riesgo para que el lector continúe
leyendo.
La empresa progresivamente se irá llenando de
familiares sin expectativas de desarrollo profesional y estaremos poniendo en riesgo tanto la
capacidad competitiva de la empresa como la
maduración emocional de los familiares.
Sin embargo la muerte es parte de la vida,
nos pertenece a todos y llegaremos a ese estado algún día. Estar preparados para cuando
llegue ese momento es el entrenamiento de
muchas culturas y tradiciones religiosas.
Por tanto, será aconsejable que cuando la
empresa ofrezca un trabajo a su Nueva Generación, estemos hablando de un puesto o un
proyecto que la empresa necesita. Además,
los miembros de la Nueva Generación deben
estar convencidos y motivados para desarrollarse personal y profesionalmente.
La Empresa Familiar no es menos y también
necesita estar preparada para cuando llegue
ese momento, es más, debe estar preparada
por si un imprevisto provoca la pérdida de figuras clave como el presidente, el director general, el sucesor, el consultor de confianza, etc.
El resultado serán decisiones que evitan “soluciones intentadas” y que se acercan cada vez
Si el lenguaje de la empresa es un lenguaje
pragmático, pragmático es percibir la “impermanencia” de la vida y tomar las acciones
Dar respuesta a estas preguntas hoy, es un
síntoma de responsabilidad, compromiso y
pragmatismo.
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
26
27
Caso: Más Allá de La Empresa
Autora: Yolanda Mora
¿Qué diría que tienen en común estas
situaciones?...
“Nuestros hijos parecen desear que desaparezca de la empresa. Llevo más de treinta años levantando este negocio y ahora se diría que soy
el que menos sabe de todos. Me dicen que no
les dejo tomar decisiones, que estoy desfasado
y que el mercado exige actuar rápido. ¿Qué sabrán ellos lo que necesita esta compañía?”
“Mire Marta, me da igual lo que haya dicho la secretaria de mi hijo. ¡Aquí se hace lo que digo yo!”
“Ama ya no soy un niño. Agradezco a Aita todo
lo que ha hecho por mí, pero soy una persona
con una buena formación, llevo años trabajando aquí y tengo la responsabilidad de mantener
a mi propia familia. Ahora sólo le pido que deje
de darme órdenes, que confíe en mi y que me dé
por fin la oportunidad de desarrollar mi proyecto en la empresa.”
A primera vista, uno podría creer que son distintos retratos de una lucha de poder entre
dos generaciones que trabajan juntas en una
Empresa Familiar.
Sin embargo, si miramos más detenidamente,
descubriremos que se trata de dos generaciones que se acercan a una situación de cambio, el relevo generacional, cuya complejidad
deriva principalmente de las relaciones familiares y del ciclo de vida de los protagonistas.
Para entender la influencia de las relaciones
familiares, es necesario que nos hagamos esta
pregunta: ¿Cuándo deja uno de ser padre? La
respuesta, si nos basamos en el amor y en el
apoyo de un padre hacia su hijo, es “¡Nunca!”.
Si, en cambio, consideramos la relación de
jerarquía que se establece entre ambos,
cuya función es la de poder educar y guiar a
nuestros vástagos sin que tengan demasiado
derecho a réplica (prudente, dada su escasa
experiencia vital...), el horizonte temporal se
acorta ostensiblemente.
En efecto, ya en la adolescencia, los hijos empiezan a practicar la voluntad de autonomía
en sus decisiones. A menudo, mediante acaloradas discusiones. Otras veces, a través del
ensimismamiento. Pero siguen dependiendo
de los padres y esto acaba templando los ánimos.
Más tarde, ganan su independencia formando su propio hogar y familia, con sus propias
reglas. Este es un momento decisivo para que
la relación de jerarquía padre-hijo cambie a
otra en la que ya se vean como iguales.
La particularidad de las familias empresarias
en las que los hijos se incorporan a la Empresa Familiar radica en que este último paso se
desvirtúa, puesto que la relación de jerarquía
va a verse prolongada por el efecto jefe-empleado. Los hijos seguirán a las órdenes del
padre, que ahora es su jefe. Así, el ganar su
independencia va a resultarles más difícil y,
a veces, el momento tarda tanto que se ven
en la necesidad de llevar a cabo un “golpe de
estado”.
idea, luchando por hacerse un hueco en el
mercado y por mantenerse en él. Conocen
mejor que nadie el esfuerzo que ha supuesto
levantar todo eso. A veces, incluso a costa de
sacrificar su descanso y vida personal. Su compromiso ha sido tan absoluto, que rara vez
han dedicado tiempo a desarrollar una actividad de ocio y sus amigos se cuentan entre
proveedores, clientes y competidores.
El Ciclo de Vida es un importante factor que
determina las expectativas de las personas y,
por tanto, sus necesidades.
Rotundamente no: ellos se definen por su
obra. Fuera de los muros de su empresa sienten que no valen lo mismo. Su mundo de relaciones está vinculado al trabajo.
Si nos centramos en el momento del relevo
generacional, es frecuente encontrar a unos
hijos que rondan los cuarenta años, con su
propia familia creada y con una expectativa
profesional de consolidación, basada en la
necesidad de una seguridad económica, de
que se reconozca su aportación a la empresa
y de que se les permita desarrollar su propio
proyecto en ella.
¿A quién encontramos del lado de la llamada
Generación Saliente? A personas que han dedicado su ilusión y empeño a dar vida a una
¿Es frecuente que estos emprendedores decidan fácilmente apartarse de la empresa, dando paso a la Siguiente Generación?
{2VJÏOFTTFSÈOTJZBOPTPOFMKFGF {2VÏIBrán a partir de entonces? ¿Cuánto tardarán sus
amigos en dejar de llamarles si ya no comparten el mismo interés? Y no menos importante:
¿quién les asegura que sus hijos llevarán bien
la empresa y ellos podrán seguir manteniendo su nivel de vida?
Definitivamente, es una situación delicada
para ambas generaciones. Sin embargo, determinadas actitudes y acciones pueden suavizarla:
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
La principal recomendación es practicar la
empatía. Nada es tan efectivo como escuchar
al otro y ponerse en su piel, para empezar a
encontrar soluciones.
¿Qué pueden ofrecer los hijos a sus padres?
t&OUFOEFSTVTQSFPDVQBDJPOFTBDFSDBEFMB
jubilación y prestarles apoyo.
t3FDPOPDFSRVFTJOFMMPTOPIBCSÓBFNQSFTB
de la que hablar.
t/PFYDMVJSMFTEFMBNBSDIBEFMOFHPDJP
manteniéndoles informados, pidiéndoles
su parecer y, si es el caso, poniendo a su
disposición un cargo en el gobierno.
¿Y los padres a sus hijos?
t0GSFDFSMFTVOQMBOEFTVDFTJØORVF
definirán conjuntamente.
t&TUBSEJTQVFTUPTBBQPSUBSTVFYQFSJFODJB
t3FTQBMEBSMFTFOTVTFSSPSFTZNPTUSBSMFT
confianza en su futuro: nadie nace
enseñado.
Una vez conocí a un empresario que me dejó
atónita con la solución que él había encontrado:
“Verás Yolanda, está claro que por mucho que
uno crea que con los años sigue con las mismas
fuerzas y capacidades, esto no es así. Hay que
dejar que los jóvenes traigan energía e ideas
nuevas. Sabiendo esto, faltando cinco años para
la edad de jubilación, decidí tomarme el primer
año un día a la semana de ocio, buscándome
alguna actividad que me interesara. El segundo
año, me tomé un día más. Y así sucesivamente,
hasta el quinto. Al final, tenía tantas cosas que
hacer fuera de la empresa que mis hijos se las
veían y deseaban para encontrarme si necesitaban algún consejo.”
El final de la historia, hasta donde yo sé, es
que acabó montando una empresa... ¡Con los
nietos!
Preparar
la Empresa
Familiar para
la Nueva
Generación
Capítulo 2
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
30
31
4. Planificar la
incorporación
de Siguientes
Generaciones
4.1. Objetivos de la Familia Empresaria
Resulta difícil para la generación fundadora comunicar objetivos a futuro cuando ellos mismos
no tienen claro estos objetivos de largo plazo.
Una gran mayoría de las empresas familiares
comenzaron con una intención de superar el
desempleo o un empleo precario en una empresa de terceros, es decir, iniciaron la empresa como una forma de auto-empleo. En estos
casos la visión de futuro de la generación fundadora se corresponde más con “sacar una
familia adelante” que con dejar una empresa
a la Nueva Generación.
Por otro lado, encontramos empresas familiares que se fundaron con el convencimiento
claro de trascender generaciones. En este otro
extremo de la realidad nos encontramos con
fundadores que desde el inicio tuvieron muy
claro que su idea de negocio los convertiría en
líderes de mercado y este liderazgo se transmitiría de generación en generación .
Cuando a estos fundadores les preguntamos
por sus objetivos de largo plazo, nos hablan
de un sueño que comparten con su familia:
una historia que se transmite de generación
en generación a través del ejemplo. En las
empresas familiares donde la intención de
continuidad no está clara, los objetivos se comunican con ambigüedad lo que provoca el
desconcierto de mayores y pequeños.
A pesar de que no existe intención de continuidad, la empresa emplea a los miembros
de las Nuevas Generaciones. Muchas veces
el argumento consiste en que los familiares
ofrecen algo que los profesionales no familiares no pueden ofrecer: un trabajador de confianza y una mano de obra de coste flexible.
Además, dar trabajo a un familiar otorga satisfacción y estatus.
Todo va bien hasta que los miembros de la
Nueva Generación comienzan a preguntarse
por su futuro profesional y lo que es peor, por
el de sus hijos.
Es entonces cuando la Nueva Generación
pregunta a la Generación Predecente:
t{2VÏPCKFUJWPTUFOÏJTQBSBMB&NQSFTB'BNJliar en el largo plazo?
t{$ØNPUFOÏJTQSFWJTUPSFBMJ[BSFMUSBTQBTPEF
poderes?
Si la generación en el poder no tiene claros
sus objetivos de futuro, el riesgo de entrar en
situaciones de ambigüedad con respecto al
futuro es muy alto.
La Generación Predecente estará tentada a
ofrecer respuestas ambiguas que provocan la
ilusión de las Nuevas Generaciones, teniendo
fe en un futuro que nunca llega, o cuando llega ya es demasiado tarde para implementar
los cambios que el mercado actual requiere.
Se trata de respuestas que no consiguen declarar abiertamente: “la empresa morirá conmigo” o “moriré con las botas puestas”.
Si la Generación Predecente no ha traspasado
el testigo a tiempo a la Nueva Generación, se
corre el riesgo de transmitir una empresa obsoleta en una etapa de la vida carente de motivación e ilusión por renovar infraestructuras
y asumir riesgos económicos.
Por tanto, a fin de evitar riesgos innecesarios,
sugerimos que ambas generaciones detengan su frenética actividad diaria y se tomen
el tiempo necesario para responder a las preguntas siguientes:
t{.FHVTUBSÓBRVFNJTEFTDFOEJFOUFTDPOUJnuaran con la empresa?
t{$POGÓPFOFMMPTMPTVmDJFOUF
t{%FRVÏGPSNBNFHVTUBSÓBRVFMBDPOUJOVBSBO
t{$ØNPWFPMBFNQSFTBEFBRVÓBB×PT
Preguntas simples que algunos empresarios
no pueden responder de forma clara y sin reservas. Si este es el caso, puede que el empresario no tenga en mente la continuidad de su
empresa, al menos en este momento.
Sin embargo los empresarios con una clara
intención de continuidad podrán responder a
estas preguntas con claridad y contundencia.
Cuando la generación en el poder carece de
visión de futuro, será importante construirla.
El mejor momento es aprovechar la juventud
de la familia propietaria cuando todavía tiene
energía y empuje suficiente para involucrarse
en el diseño de un proyecto compartido que
incluya a todos.
Si el “sueño compartido” no existe desde un
inicio o no se trabaja sobre él en las etapas de
juventud de la familia, será muy difícil “crearlo”
cuando la Generación Predecente está pensando en su retiro de la vida laboral.
Llegado el caso será mejor para la Nueva
Generación buscar proyectos profesionales
alternativos, bien en otra empresa, o bien
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
32
33
como emprendedores que crean su propio
sueño para transmitirlo a las siguientes generaciones.
En resumen, el futuro de la Nueva Generación
dentro de la Empresa Familiar estará sujeto a
los objetivos que la Generación Predecente
haya marcado para la empresa. Corresponde
a la Generación Predecente definir y comunicar honestamente sus objetivos de futuro.
4.2. Planificar la oferta de Planes
de Carrera
Una vez que la Generación Predecente habla
del futuro de la empresa y de la Nueva Generación, el siguiente reto consistirá en ofrecer
puestos de trabajo que supongan un reto
profesional tanto para los miembros familiares como para los no familiares. En otras palabras: trabajar en la Empresa Familiar ha de
mejorar el perfil profesional del trabajador, se
le deben ofrecer oportunidades para desarrollar habilidades y aprendizajes que le hagan
más valioso en el mercado laboral.
ble, en crecimiento y con previsiones de futuro.
Si la empresa está asumiendo posiciones de
liderazgo en el mercado entonces será más
fácil diseñar Planes de Carrera para la Nueva
Generación.
Entendemos por Planes de Carrera las posibilidades de desarrollo profesional que se le
pueden ofrecer a un joven familiar que entra
a trabajar en la Empresa Familiar.
Por ejemplo, puede que para una persona
que aspire a un puesto de Dirección Financiera, se requiera que primero conozca cómo
funcionan los flujos del almacén, qué problemas ocurren con el personal, los inventarios,
contabilidad, archivos, auditorías, fiscal, etc.
De este modo, en función de las capacidades
y habilidades que se le supongan a un futuro
Director Financiero, el aspirante irá asumiendo responsabilidades progresivamente en
otros departamentos.
Trabajar en la Empresa Familiar ha de mejorar
la “empleabilidad” tanto de los profesionales
familiares como de los no familiares.
Los expertos Carlock y Ward (2001) recomiendan a la Generación Predecente hacerse las
siguientes preguntas cuando estén planificando los Planes de Carrera de la Nueva Generación:
Por tanto uno de los requisitos previos es que la
empresa ha de ser una empresa que sea renta-
1. ¿Cómo debería estructurarse la entrada del
miembro familiar en la organización?
2. ¿Cuál sería la mejor trayectoria para desarrollar el talento y las capacidades del miembro familiar para desempeñar roles de dirección general y de propiedad?
Un programa de desarrollo personal y profesional bien concebido facilita la experiencia
necesaria y ayuda a desarrollar un entendimiento razonable del potencial directivo en
cada miembro de la familia individualmente.
Crear este plan de desarrollo ayuda al sucesor
a responsabilizarse de su propio proceso.
También le ayuda a darse cuenta de sus propios intereses y potencial. El plan debe despertar en los sucesores la motivación necesaria para enfocarse al largo plazo mientras
enfrentan los retos del día a día.
La implementación de este plan prepara a los sucesores para el liderazgo de la empresa, promoviendo así un cambio de poder progresivo (Carlock
y Ward, 2001). El Plan de Carrera debe contener:
a. Desarrollar el conocimiento y las habilidades que necesitan para liderar la empresa.
b. Permitir desarrollar el propio estilo de liderazgo ganando progresivamente responsabilidades directivas.
c. Expandir la visión estratégica de la empresa
en lugar de duplicar el pasado.
El desarrollo personal de los sucesores a través
de su Plan de Carrera, debería estar evaluado
por alguien de fuera de la Familia Empresaria
y además proveer un contexto donde los sucesores puedan aprender las habilidades que
necesitarán en el futuro para liderar la empresa: liderar una unidad de negocio, establecer
objetivos, etc.
Deben recibir formación profesional continua y
participar en grupos de apoyo que les ayuden
a desarrollar sus habilidades y su perspectiva.
Es bueno que tomen iniciativas propias, mientras cuentan con el apoyo de la generación
senior para las responsabilidades operativas
de mayor envergadura.
Por otro lado también pueden ser útiles los
fondos de capital para jóvenes miembros familiares que quieren convertirse en emprendedores. Este método es utilizado por muchas familias empresarias como una forma de
expandir la riqueza de la familia.
En algunos casos este apoyo a los proyectos de la Nueva Generación permite que se
compartan recursos como personal u otros
recursos. Eventualmente los miembros de la
Nueva Generación crean empresas que forman sinergias con las de la familia.
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
34
35
¿A
SE QU
DIR IÉN
IGE
?
?
ES
EC
AY
IAS
R
TO
Oportunidad
de aprender:
· Conocimientos
· Habilidades
· Responsabilidad
liderazgo
Uno de los momentos clave en la evolución
de la Empresa Familiar será el paso de la tradición oral a la tradición escrita.
Algunas empresas familiares son ricas en burocracia, les gusta que todo quede por escrito
y que todas las operaciones queden registradas. Parece que se utiliza una cultura de escritura, pero en realidad la escritura es sólo un
medio para ejercer un control sobre las operaciones. Un control que es necesario para el
funcionamiento de un organismo constituido
por departamentos inter-dependientes.
TR
NID
O
PLAN
DE
CARRERA
La oferta de Planes de Carrera puede girar en
torno a las siguientes trayectorias:
a) Puestos directivos
b) Dirección general
c) Proyectos complementarios
d) Órganos de Gobierno
e) Fundaciones
5. Acuerdos
familiares previos
5.1. La importancia de las reglas escritas
UÉ
Finalmente, la oferta de Planes de Carrera
debe ser una oportunidad para desarrollar
las capacidades y habilidades laborales de los
miembros de la familia al tiempo que supone
un reto profesional para ellos mismos.
Nuevas
Generaciones
de Familiares
Propietaros
¿Q
En cualquier caso se debe poner cuidado en
las aspiraciones personales y en las demandas
asociadas a cada perfil. Por ejemplo, se puede desarrollar un programa específico para
aquellos familiares que están interesados en
puestos del Consejo de Administración para
desarrollar las habilidades necesarias como
consejero.
Posibles
trayectorias
de Desarrollo
Profesional
CO
NT
E
Finalmente también se pueden diseñar Planes
de Carrera para familiares que no tienen acceso o aspiraciones a puestos en la dirección. A
estos familiares se les puede ofrecer puestos
en el Consejo de Administración, en el Consejo
de Familia o en Fundaciones Familiares.
· Puestos directivos
· Dirección general
· Órganos de
gobierno
· Fundaciones
familiares
Algunas empresas familiares dan un paso más
allá y utilizan la escritura para registrar sus
procedimientos en forma de manuales que
sirven para formar a los nuevos empleados.
Así se le da un nuevo uso al recurso escrito:
“la transmisión de conocimiento”.
Sin embargo, pocas empresas familiares registran por escrito los acuerdos a los que llegan
en las negociaciones entre familiares.
Parece que a las personas nos gusta disfrutar de
la libertad de cambiar de opinión. Un acuerdo
por escrito implica asegurar hoy unas condiciones que no sé si voy a poder cumplir mañana.
Dejar los acuerdos por escrito ofrece seguridad e implica compromiso. Para la Siguiente
Generación será importante crecer y desarrollarse en un entorno de confianza y seguridad.
Dejar escritas las normas y reglas del juego
ofrecen confianza y seguridad a las siguientes
generaciones.
Poner por escrito las conductas deseadas y
las condiciones de relación entre empresa y
familia facilitan la comunicación honesta y
transparente generando un clima de seguridad y confianza mutua.
Además los documentos escritos pueden pasar de mano en mano transmitiendo así estas
reglas a las siguientes generaciones. Comunican la visión del fundador, sus valores y el
legado familiar. Pueden tener forma de documento formal (Protocolo Familiar) o forma
de documento creativo (ej: libros biográficos,
revista de la Familia Empresaria, etc).
Los documentos donde se indican reglas específicas como los referidos al Plan de Carrera o Políticas
de Contratación pueden ser documentos sujetos a revisión y cambio, previa aprobación por el
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
36
37
Comité que se haya asignado a cada proyecto.
Más adelante, si la Familia Empresaria decide
iniciar un proceso de Protocolo Familiar, podrá
adjuntar estos acuerdos escritos al documento
formal.
Las reglas escritas serán un excelente recurso para generar confianza y seguridad en los
miembros de la Siguiente Generación. Una regla que está escrita se puede cambiar. Una regla
que no está escrita resulta difícil de negociar.
5.2. Cinco acuerdos preliminares
Por tanto, la sugerencia será registrar por escrito las reglas que se comunican verbalmente en todo lo que se refiere al empleo de familiares en la empresa.
Antes de iniciar complejos acuerdos acerca
de los Planes de Carrera, la Familia Empresaria puede comenzar por las siguientes cinco
preguntas:
t {$VÈOEP Z CBKP RVÏ DJSDVOTUBODJBT MB 4Jguiente Generación puede entrar a trabajar
en la Empresa Familiar?
t&ODBTPEFFYJTUJSVOMÓNJUF{BQBSUJSEFRVÏFEBE
ya no es posible entrar a trabajar en la empresa?
t {1VFEFO MPT NJFNCSPT GBNJMJBSFT SFFOUSBS
en la Empresa Familiar después de una salida
voluntaria o involuntaria de la misma?
t{&TUBSÈQFSNJUJEPFMUSBCBKPBUJFNQPQBSDJBM
t{-PTGBNJMJBSFTQPMÓUJDPTQVFEFOJODPSQPSBSse a la empresa y si es así qué capacidades se
requieren?
La decisión acerca de cuándo y bajo qué
circunstancias la Nueva Generación puede
entrar a trabajar en la Empresa Familiar incluye, en primer lugar el nivel de estudios y la
experiencia previa necesaria; en segundo lugar requerirá acordar si entrará en la empresa
para cubrir un puesto vacante o se creará un
nuevo puesto para él/ella.
Las decisiones respecto a dejar entrar a familiares a trabajar en la empresa después de una salida voluntaria o involuntaria de la misma, incluirían dejar el trabajo para dedicarse a la crianza
de los hijos, para asistir a estudios universitarios
o de post-grado, o por serios desacuerdos con
otros miembros familiares. Será importante especificar cada una de estas condiciones.
También será importante llegar a estos acuerdos
antes de que se produzca el acontecimiento.
Delimitar fronteras entre la empresa y la familia
será importante tanto para la rentabilidad de la
empresa como para la satisfacción de la familia.
Por tanto, una forma de “des-familiarizar” la empresa será negociando con antelación y registrando por escrito, situaciones que tienen una
probabilidad muy alta de ocurrir.
6. Políticas
de entrada
A medida que la empresa va creciendo y haciéndose más compleja quizá se necesite una
mayor regulación del trabajo de los familiares
en la misma. La familia tiende a crecer en número a medida que pasa el tiempo y puede
llegar un momento en que la familia sea más
grande que la empresa.
Así, con el fin de evitar que los familiares se
sientan con derecho a trabajar en la empresa
sólo por ser miembros de la familia y producir
colas de familiares pidiendo trabajo en la empresa, conviene establecer unas políticas de
entrada que dejen claro las reglas de contratación, así como los compromisos y responsabilidades futuras.
corporen en puestos adecuados para su entrenamiento. Puestos en ventas, servicios u
operaciones suelen funcionar mejor en estos
inicios que puestos donde las responsabilidades y funciones no están muy claras, como
en puestos de asistente a dirección (Carlock
y Ward, 2001).
En cualquier caso el trabajo que se ofrezca al
miembro de la Nueva Generación ha de ser un
trabajo que la empresa necesite y no un puesto
que se cree específicamente para dar empleo
al miembro familiar (Carlock y Ward, 2001).
6.1. Entrada por orden de nacimiento
Aún en las empresas donde la entrada de la
Nueva Generación no está marcada por tradiciones en las que el hermano mayor era el
sucesor designado, el ciclo vital natural de la
familia expone a los hermanos mayores a entrar en la empresa por orden de nacimiento.
Estas políticas de entrada aclaran las posiciones y motivan a los miembros de la Siguiente
Generación a elegir con decisión si quieren
entrar a trabajar en la empresa de la familia o
si desean concentrarse en una carrera profesional diferente.
Además la diferencia de edad también tiene
un papel importante, pues a mayor diferencia de edad entre los hermanos, mayor es la
probabilidad de que el hermano mayor vaya
ganando más y más años de experiencia en la
empresa de la familia.
Una vez que la Nueva Generación se inicia
en la empresa parece importante que se in-
Sin embargo estos primogénitos que entran
en la empresa también están pagando el
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
38
39
precio de ser primerizos en todo y sentirse
utilizados como “conejillos de indias”. Es muy
probable que la empresa aprenda con él/ella
la gestión de la entrada de la Nueva Generación en la empresa, comenzando con él/ella
a realizarse preguntas como (Lansberg, 1999):
t{&ORVÏOJWFMEFMBPSHBOJ[BDJØOEFCFSÓBJOcorporarse la descendencia familiar?
t{$VÈMFTFMBEFDVBEPOJWFMEFSFTQPOTBCJMJdad y retribución?
t{$ØNPQVFEFFWBMVBSTFFMEFTFNQF×P
t {$ØNP TF QVFEF GBDJMJUBS VOB FWBMVBDJØO
efectiva?
t{$VÈMFTTFSÈOMPTEJSFDUJWPTTFOJPSDBQBDFTEF
entrenar la entrada de la Nueva Generación?
Los hermanos pequeños pueden tener envidia de los hermanos que llevan más tiempo
en la empresa. Puede que se preocupen de
que ya no queden oportunidades para ellos
en la Empresa Familiar. Sin embargo, cuando
a ellos les llegue el momento de ingresar en la
empresa, las reglas de contratación y desempeño requeridas para los miembros familiares
estarán más claras. También estarán más claras las formas de gestión de las carreras profesionales.
Por otro lado, si el mayor de los hermanos ya
está trabajando con los padres, será una ven-
taja para el resto de los hermanos pues ya no
sentirán la presión de trabajar en la empresa
para seguir el legado familiar. De este modo
el resto de los hermanos tendrán libertad
para explorar otras opciones profesionales
sin miedo a la desaprobación de sus padres
(Lansberg, 1999).
6.2. Políticas de contratación
Establecer unas políticas de contratación explícitas que regulen la entrada de los miembros jóvenes de la Nueva Generación en la
empresa son esenciales para el futuro de la
empresa y de la carrera profesional de los jóvenes (Lansberg, 1999).
En su forma ideal estas políticas de contratación deberían establecerse antes de que el
primer miembro de la Nueva Generación se
incorpora a trabajar en la empresa, aunque
esto no siempre es posible.
Uno de los primeros asuntos donde la familia
necesita llegar a un acuerdo es sobre el nivel
de estudios que requiere un familiar para incorporarse a la empresa de la familia.
Algunas familias defienden que los estudios
no son necesarios para trabajar en la empresa de la familia, mientras que otras piensan
que la formación universitaria es indispensa-
ble para poder optar a puestos de dirección.
Algunas incluso requieren una formación de
MBA para poder aspirar a puestos directivos
o ejecutivos.
Si pensamos que hoy en día, según dicen
los expertos, contamos con la “juventud más
formada de la historia”, carecer de estudios
universitarios se convierte en un posible
obstáculo para aquellos que deseen optar a
puestos de responsabilidad en la empresa.
Cada vez más empresas familiares piden a los
miembros de la Nueva Generación una experiencia mínima entre tres y cinco años fuera
de la Empresa Familiar donde han debido demostrar credibilidad como profesionales.
En algunos casos se les pedirá que adquieran experiencia en empresas del sector, más
grandes y más tecnológicas que la familiar, de
forma que cuando vuelvan traigan consigo el
“know-how” y la experiencia necesarias para
implementar las innovaciones propias del relevo generacional.
6.3. Políticas salariales
En estas políticas de entrada también conviene
establecer el salario inicial para el familiar que
se incorpora al negocio familiar. Si el miembro
familiar ha estado trabajando en otras empre-
sas, será más fácil determinar este salario.
Una vez que los miembros de la Nueva Generación trabajan en la empresa, su remuneración ha de equipararse al valor de mercado.
De esta forma se reduce la tendencia de los
padres a utilizar el dinero como instrumento
de comunicación con sus hijos.
Los padres, con sus repartos económicos
pueden querer comunicar el tratamiento
igualitario a sus hijos o incluso el sentimiento
de sacrificio que tienen que hacer en nombre
de la empresa (Poza, 2004).
Por tanto, la mejor forma de evitar estas confusiones entre los afectos y el dinero, será recompensar a los familiares por su trabajo a un
precio equiparable al valor de mercado.
6.4. Evaluación del desempeño
Acompañando a la remuneración a valor de mercado, debe acompañar una evaluación del desempeño de acuerdo a los objetivos marcados.
Además esta evaluación ha de ser igual tanto
para miembros familiares como para miembros
no familiares. De esta forma se refuerza el sentido de mérito en lugar de la cultura del derecho
(Poza, 2004). En algunas empresas familiares se
espera que el trabajador cumpla una serie de expectativas que el empleador tiene sobre él, pero
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
40
41
En términos generales se podría decir que el
“desempeño óptimo” se puede comparar con
el desempeño de otra persona que aspira a un
RIO
6.6. Aplicación políticas de entrada
Hay un refrán que dice:
“Del dicho al hecho, hay un trecho”.
La Familia Empresaria puede emplearse a fondo en las negociaciones y en el registro por
escrito de una excelente carta de intenciones,
pero no servirá de nada si estas normas no
pueden aplicarse oportunamente.
Opciones
a. Todos los
familiares igual
b. Valor de
mercado
EX
EM PER
PR IEN
ES CIA
AS
N
CIÓ
UA EO
AL PL
EV ESEM
D
Poder ser evaluado en términos de lo que ya
estoy haciendo bien y lo que necesito mejorar,
contribuye notoriamente al crecimiento personal y profesional del individuo. Será impor-
Por ello, se recomienda una correcta descripción del puesto de trabajo en base a la cual se
evaluará los resultados de la persona (familiar
o no), si ha conseguido o no lograr los objetivos deseados.
POLÍTICAS
DE ENTRADA
DESPIDO
FAMILIARES
t{2VÏTFFTQFSBEFNÓ
t{$ØNPNFWBOBFWBMVBS
En algunas familias empresarias el desempeño óptimo tiene poco que ver con los requerimientos del puesto.
N
Si la Generación Predecente no ofrece esta
oportunidad, la Nueva Generación puede optar por preguntar:
Cada familia tiene su propia definición de
desempeño óptimo; para algunas consistirá
en tener una excelente red de profesionales
de prestigio, para otras consistirá en ser querido por los trabajadores de la empresa, para
otras consistirá en difundir los valores familiares, etc.
La familia puede acordar algún tipo de política que ayude a los familiares que pierden
su puesto de trabajo en la Empresa Familiar.
Por ejemplo puede poner a disposición de los
familiares algún tipo de servicio que le permita reorientar su trayectoria laboral en otra
empresa (ej: servicios de coaching, “outplacement”, etc.)
IÓ
AC
RM
Por ello, comunicar con antelación los objetivos y la forma en cómo se evaluarán, contribuirá a reducir la ansiedad y dotar de seguridad a los miembros de la Nueva Generación.
Una vez evaluado el desempeño de un
miembro familiar, éste ha de estar preparado
para abandonar el negocio si no consigue los
estándares deseados, es decir, su “desempeño
óptimo”.
Opciones
a. No se requiere
b. Puestos de
responsabilidad
c. Puestos de valor
estratégico
d. Adquisición de
“Know-how”
Opciones
a. No se requiere
b. Técnica
c. Universitaria
d. MBA
FO
Este tipo de situaciones, en donde la Nueva
Generación tiene que “adivinar” lo que se espera de ellos, generan ansiedad y minan la
estabilidad emocional de los miembros de la
familia, sobre todo de los más jóvenes.
6.5. Despido de familiares
puesto de responsabilidad como directivo senior.
El familiar que trabaja en la empresa ha de ser
consciente de que su puesto de trabajo está
sometido a una evaluación y que es susceptible de ser despedido si no cumple los objetivos para los que ha sido contratado.
LA
Estas situaciones generan incomodidad tanto en
la generación en el poder como en la generación
que acaba de incorporarse: los primeros se sienten poco respetados porque no se ven correspondidos y los segundos se sienten inseguros
porque todo su avance es a base de prueba-error.
tante que en estas evaluaciones se evalúe lo
que la persona hace, y no lo que la persona es.
SA
que no se le han comunicado previamente.
Proceso
· Período de prueba
· Definir objetivos
· Comunicar objetivos
· “Feed-back” desempeño
· Evaluadores no familiares
Proceso
· Desempeño óptimo
· Definir motivos excedencias
· Definir posibilidad re-incorporación
· Comunicar “cómo se evaluará”
· Comunicar carencia “inmunidad”
· Coaching y/o “outsourcing”
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
42
43
La parte más difícil de todo el proceso será
poner en práctica los acuerdos que afectan
a las políticas de contratación y despido de
familiares.
Decir lo que se va a hacer y hacer lo que se ha
dicho, se convierte en la piedra angular de la
Empresa Familiar.
La Generación Predecente puede temer que las
Nuevas Generaciones vean un acto autocrático
el ejercicio del poder en las políticas de entrada. Así que, una forma de evitar que la Nueva
Generación se sienta amenazada por el ejercicio de políticas de poder, será involucrarlos en
la negociación de políticas de contratación y de
despido que les afectan a ellos mismos.
De esta forma se les estará transmitiendo la
importancia de la profesionalidad para la
empresa de la familia. Además las generaciones precedentes tienden a llevarse sorpresas
cuando descubren que las Nuevas Generaciones son los primeros a favor de establecer
reglas para la contratación de familiares.
No siempre se pueden implementar estas políticas de contratación desde la entrada del primer miembro de la Nueva Generación sino que,
en la mayoría de las ocasiones, se piensa en ellas
y se establecen una vez algunos miembros de
la Nueva Generación ya trabajan en la empresa.
En estos casos sugerimos sentarse a negociar
con los juniors y encontrar acuerdos creativos donde la empresa continúe optando por
la profesionalidad. Es importante que en este
proceso los junior sientan que están siendo reconocidos por sus generaciones precedentes.
Hacer partícipes a estos junior del establecimiento de las reglas es siempre aconsejable.
Además también se les puede encargar la
responsabilidad de comunicar y aplicar estas
reglas al resto de la familia.
Caso: Preparar la Empresa Familiar
para la Nueva Generación
Entrevista a: Joaquín Uriach
Laboratorios Uriach, Empresa Familiar farmacéutica.
Se fundó en 1838 en Barcelona.
Actualmente da trabajo a 700 empleados e invierte
el 14% de su facturación en I+D.
nuestro padre para preparar este paso y realizar la transición de cuarta a quinta generación. En este traspaso creamos primero un
Consejo Asesor y posteriormente, con ayuda
de un consultor, redactamos un Protocolo
Familiar. Finalmente creamos el Consejo de
Administración.
Cuando llega el momento de tratar la contratación de familiares en la empresa, es aconsejable que la Familia Empresaria hable y llegue
a acuerdos escritos sobre los siguientes temas:
Para nosotros, Laboratorios Uriach, es una empresa de quinta generación, o segunda generación enriquecida, con una historia, una cultura y un vínculo con el pasado. Nuestro padre
compró las acciones al resto de familiares. Por
ello, aunque la historia de nuestra empresa tiene más de 170 años, desde hace algunos años
se vive otra vez la segunda generación.
El proceso fue clave: reconocer el cambio,
contribuir y apoyar la cesión de liderazgo. Se
nos fue abriendo un espacio para aprender
y darnos confianza y autoridad. El Comité
Asesor representaba el apoyo de la cuarta
generación y actuó como puente hacia la siguiente. Con todo esto hecho, nos lanzamos
a redactar el protocolo.
t&TUVEJPTZFYQFSJFODJBQSFWJB
t4BMBSJPJOJDJBMZQPTUFSJPS
t&WBMVBDJØOEFTFNQF×P
t%FTQJEPEFGBNJMJBSFT
Nuestro padre ha distribuido entre sus hijos
parte del capital accionarial, está en el Consejo de Administración y es un apoyo crucial en
las grandes decisiones.
Tener definidas las reglas de entrada en el negocio así como exigir elevados estándares de
desempeño, puede intimidar a la Nueva Generación y evitar que busquen trabajo en la
Empresa Familiar. Sin embargo esto es mejor
que los miembros de la Nueva Generación rechacen la familia por no conocer los requisitos
del trabajo, sin saber cuál es la diferencia entre
un directivo competente y otro incompetente.
La empresa ahora está dirigida por cuatro hermanos y recientemente ha entrado una hermana en la propiedad. Cada hermano trata al
otro como igual, aceptamos nuestras diferencias y los diferentes roles que cada uno toma
en la empresa. Mi hermano Enrique actualmente ocupa el cargo de Director General.
Para reforzar el papel de los hermanos como
gerentes y como líderes trabajamos con
El Protocolo Familiar tiene un papel valioso
para nosotros, como quinta generación. Nos
ha permitido seguir consolidando nuestro
liderazgo y hemos aprendido a actuar con
consenso. Creo que es muy importante tomarse el tiempo para hacer las cosas. Las
cosas hechas deprisa no permiten usar una
metodología hacia el consenso.
El Protocolo nos ha ayudado a evitar conflictos
innecesarios. Llevar el apellido Uriach no es sinónimo de discriminación positiva o privilegio.
No se cobra por ser líder, sino por el papel que
cada uno cumple dentro de la empresa.
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
Tenemos una política de continuidad para ir
incorporando a los miembros de la sexta generación a nivel ejecutivo. Como en cualquier
empresa, han de cumplir una serie de requisitos: título universitario, experiencia profesional, etc.
Nuestro logro más reciente consiste en haber incorporado a tres consejeros independientes en el Consejo de Administración. Es
esencial en una empresa de hermanos. Una
persona externa te ayuda a comunicarte y
contribuye a la consolidación de la transición
generacional.
En resumen, hemos avanzado hacia un sistema más profesionalizado de hacer las cosas.
Ha habido un cambio prudente de un estilo
personal hacia una forma más profesional.
Ahora el equipo tiene un valor mayor que el
liderazgo personal.
Hay cuatro palabras claves para nosotros: colaboración, coordinación, compromiso y comunicación.
Preparar
a la Nueva
Generación
para el
liderazgo
Capítulo 3
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
46
47
7. Educar
a la Nueva
Generación
La tendencia de muchas familias empresarias
consiste en dejar para el final la educación de
sus sucesores, es decir, cuando ya no queda
más remedio que traspasar el poder y cuando
ya es demasiado tarde.
La carrera profesional de los sucesores se inicia en la infancia a través de una socialización
familiar en los valores de la empresa. Este
aprendizaje continúa después con su formación universitaria y sus experiencias laborales.
Poco a poco su interacción con el mundo laboral les permite ganar habilidades y confianza en sí mismos.
7.1. Educar desde la infancia
Los miembros de la Nueva Generación puede
que aprovechen los veranos para hacer prácticas en la empresa de la familia o desempeñando trabajos a tiempo parcial.
Después cuando terminan su formación universitaria y son contratados a pleno tiempo
van ganando pericia funcional y experiencia
en la toma de decisiones.
Una vez finalizada esta etapa ya pueden
ponerse al frente de unidades de negocio y
explorar recursos externos que les permitan
continuar con su desarrollo profesional (Carlock y Ward, 2001).
La educación de los hijos se convierte en el
núcleo central de cualquier familia.
Todas las familias tienen la responsabilidad de
educar “hijos responsables que sean capaces
de funcionar autónomamente” (Bork, 1986).
Sin embargo en la Familia Empresaria los descendientes deben aprender algo más: “ser
propietarios responsables” (Bork, 1986).
Esta educación como propietarios responsables, comienza en la infancia, ayudándoles en
dos tareas que serán fundamentales cuando
sean mayores:
t-BHFTUJØOEFMEJOFSP
t5SBCBKBSFOFRVJQPTEFiJHVBMFTw
Los principales responsables de esta educación serán los padres y la principal vía de
comunicación con sus hijos será a través del
ejemplo. Por ello se pide a las generaciones
precedentes que se esfuercen en transmitir
una comunicación congruente a sus Nuevas
Generaciones.
7.2. Comunicación congruente
Lo que la Generación Predecente comunica
verbal y no verbalmente a la Nueva Generación, tendrá un gran impacto en los intereses
y motivaciones de estos últimos. Los hijos están muy atentos a las contradicciones de sus
padres entre lo que dicen y lo que hacen.
El comportamiento de los padres comunica
más que la expresión verbal de creencias y
valores.
Aún más, el comportamiento que los padres
muestren con sus respectivos hermanos, tendrá una gran influencia en cómo los hijos se
comportan con sus hermanos. Asimismo, el
comportamiento que los padres muestren
con los abuelos, influenciará el modo en
que los hijos se comporten con sus padres
(Lansberg, 1999).
Un padre que regresa del trabajo amargado y
agotado cada noche maldiciendo su trabajo,
lanza a los hijos mensajes no verbales como el
siguiente: “Mantente apartado hasta que quieras ser tan miserable como tu padre”. Sin embargo puede que días más tarde el padre le hable a
su hijo/a sobre las ventajas que tendrá si decide
entrar a trabajar en la Empresa Familiar.
En algunas familias el poder de los mensajes
contradictorios puede ser tan poderoso hasta
el punto de crear una comunicación paradójica.
Por ejemplo en muchas familias empresarias
se glorifica el carácter del fundador, que tuvo
éxito gracias a su independencia, marchándose y fundando una empresa a pesar de la
oposición de muchos, etc.
Sin embargo, cuando los hijos van a trabajar a
la Empresa Familiar se encuentran que tienen
que subordinar su propias ideas y aspiraciones a las de sus padres. Además, de acuerdo al
modelo comunicado por los padres, los hijos,
para poder tener éxito, deben salir del negocio familiar y montar una exitosa empresa por
sí mismos.
Así, la Nueva Generación se encuentra atrapada: si subordinan sus propias ideas a las de sus
padres, no seguirán el modelo familiar; pero
si se rebelan no estarán siendo buenos hijos.
Por otro lado, si se quedan en la empresa no
estarán siguiendo el modelo familiar; pero
si se van estarán traicionando la lealtad a la
familia.
Escojan la opción que escojan nunca recibirán
la aprobación de los padres: “están atrapados”.
Ahora bien, los padres pueden transmitir mu-
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
48
49
chas lecciones positivas en el contexto de la
Empresa Familiar.
A través de historias y anécdotas de sacrifico
y compromiso de los fundadores durante los
primeros días de la empresa, los herederos
pueden entender el privilegio que supone la
riqueza y la responsabilidad de ser miembro
de una Familia Empresaria. A través de estas
historias también se les puede comunicar
que el orgullo y el disfrute también son particularidades del negocio familiar (Poza, 2004).
Además de contar historias que motiven el
orgullo de pertenencia a la Familia Empresaria, los padres también pueden escuchar a
los hijos sus opiniones e ideas para mejorar
el negocio y tomarlas en serio. No hace falta
esperar a que sean adultos para escuchar sus
ideas de mejora. Los padres pueden incluso
incentivar a los hijos desde pequeños para
que den su opinión sobre el negocio. De este
modo se les envía el mensaje de que no importa la fuente, siempre y cuando sirva para
mejorar el negocio.
Los niños son expertos en diversión, por tanto,
mostrar la empresa como un lugar potencial
donde divertirse y donde entusiasmarse facilitará
su atractivo. Claro está, un entusiasmo combinado con dosis de profesionalidad (Lansberg, 1999).
Si la generación senior desea que los sucesores muestren su tendencia a defender el
sueño compartido de la Familia Empresaria,
deberán por tanto mostrar su apoyo a este
sueño compartido. Algunas tendencias de
los padres consisten en presionar a sus hijos
con frases que aplastan el sueño compartido,
tales como:
ti5PEPFTUPMPIBHPQPSUJw
ti-MFHBSÈFMEÓBFORVFUPEPFTUPTFSÈUVZPw
Más adelante se darán cuenta de que estas
frases comunican algo más de lo que pretenden inicialmente y producen un efecto desmotivador en la Siguiente Generación.
Por el contrario, la Generación Predecente
puede hacer cosas diferentes, tales como:
t $SFBS VO FOUPSOP EPOEF MPT IJKPT QVFEBO
hablar libremente acerca de sus aspiraciones.
t$PNVOJDBSFMTVF×PBUSBWÏTEFMBQBMBCSBZ
el comportamiento.
t1SFTUBSBUFODJØOBMBFEVDBDJØOEFMPTIJKPT
(ej: límites).
t$PNVOJDBDJØODPOHSVFOUF
Los hijos deben sentir que tienen libertad
para perseguir sus propios sueños. Será destructivo para los hijos que los padres juzguen
o muestren desprecio ridiculizando las aspiraciones de sus hijos.
Sin la profesionalidad necesaria, hijos motivados no estarán preparados para llevar el
negocio. Ahora bien, si la familia sólo aboga
por el profesionalismo sin dar lugar a satisfacer la aspiraciones profundas de la Siguiente
Generación, el resultado más previsible en la
tercera generación será una abundancia de
accionistas pasivos y de ausencia de líderes
reales (Lansberg, 1999).
7.3. Administración del dinero
De acuerdo con los empresarios familiares
(Poza, 2004), uno de los mayores riesgos de
fracaso en el negocio familiar radica en el
sentimiento de derecho y las aspiraciones de
liquidez de la Siguiente Generación.
Por ello, los futuros propietarios deben recibir
desde jóvenes una educación específica, no
sólo en la ética del trabajo, sino también en
la necesidad de administrar el patrimonio y el
legado familiar, para que pueda ser transmitido a generaciones futuras.
Las rutinas de la infancia pueden ser momentos apropiados para comunicar tanto valores
empresariales como conceptos financieros.
Realizar una compra comparando precios, utilizar recursos escasos para conseguir un objetivo, planificar las decisiones en función de un
presupuesto determinado, invertir utilizando
criterios de responsabilidad y riesgo, generar
beneficios creando un pequeño negocio con
conocidos, etc (Carlock y Ward, 2001).
Más formas de desarrollar un sentido de la responsabilidad entre los jóvenes de la Siguiente
Generación consiste en proveerles una cuenta de gastos trimestral o bianual, sin posibilidades de depósitos adicionales cuando los
gastos excedan el presupuesto. A medida que
crecen las cantidades que necesitan para vivir
y estudiar se pueden negociar con ellos.
De esta forma los miembros de la Siguiente Generación se acostumbran a administrar sus actividades basadas en el presupuesto disponible.
Por otro lado, este tipo de actividades reduce
la tendencia de los padres a utilizar el dinero
para controlar a sus hijos a medida que crecen y ayudan a sus hijos a asumir responsabilidades personales y financieras a edad temprana (Poza, 2004).
Asimismo se les puede invitar a participar
en reuniones familiares, a programas de formación especial para propietarios familiares,
tempranas experiencias de gestión financiera,
etc. De esta forma los miembros de la Nueva
Generación, aprenden la necesidad de admi-
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
50
51
nistrar el patrimonio familiar para que perdure.
Los padres también pueden enseñar valores
a sus hijos involucrándoles en conversaciones sobre cómo financiar cosas que quiere
toda la familia, por ejemplo unas vacaciones
o unos estudios universitarios; o sobre cómo
pequeños sacrificios económicos presentes
pueden convertirse en grandes recompensas
posteriormente. Aprender de pequeños estas
experiencias en familia, sobre cómo llegar al
consenso entre los miembros de la familia,
facilita los primeros aprendizajes en las habilidades de gestión que después necesitarán
para gestionar el negocio familiar (Carlock y
Ward, 2001).
adquirir habilidades en el intercambio de
tiempo de trabajo por dinero.
El hogar familiar se convierte así en el primer
lugar donde los miembros de la Siguiente Generación aprenden las normas que les enseñan a relacionarse social y económicamente
con la sociedad circundante.
7.4. Equipos de hermanos
Del mismo modo, será necesario empezar desde una edad temprana a educar a la
descendencia con un sentido de equipo de
hermanos. A partir de los 8 años, los niños ya
están preparados para recibir tareas que repliquen situaciones del día a día.
Los jóvenes miembros de la Siguiente Generación necesitan experimentar el ganar un
salario por realizar tareas familiares, de modo
que redunde en un desarrollo personal de un
trabajo ético (Poza, 2004).
Aronoff, Astrachan, Mendoza y Ward (2011)
han diseñado tareas para educar a la Nueva
Generación como un equipo de hermanos
cuando se encuentran entre los 8 y los 18
años:
Por ejemplo, se puede asignar un valor a ciertos trabajos de mantenimiento que se necesiten en la casa. Cada uno de los trabajos se le
asignará una remuneración. Así los miembros
de la Siguiente Generación que deseen ganar
un dinero extra pueden realizar estas tareas.
Este tipo de situaciones que emulan la realidad de la sociedad actual, les preparan para
Ej. 1 Encargar al grupo de hermanos la tarea de
organizar las vacaciones, la fecha en que irán,
a dónde irán, el presupuesto requerido, etc. Informarles de la fecha de entrega del proyecto y
avisar que si no llegan a un acuerdo entre ellos,
sus padres se irán solos.
Ej. 2 Asignar al grupo de hermanos una can-
tidad de dinero (ej.: 1.000 €; 10.000 €; etc.) y pedirles que se pongan de acuerdo en un plan de
inversión en bolsa, que acuerden entre ellos qué
acciones comprar y que presenten un plan formal.
En las tareas que se les asignen a los hermanos conviene tener una entrevista en privado
con el menor de los hermanos y comprobar
que él también está de acuerdo con las decisiones. De ningún modo se puede permitir
en estas reuniones que el mayor imponga su
criterio.
Es difícil para los padres resistirse a la tentación de brindar las soluciones a sus hijos, pero
de este modo se contribuye a su aprendizaje. Los padres deben dejar a los hijos que se
involucren en tareas por ellos mismos, interviniendo sólo para asegurarse de que nadie
sale “herido”.
A los hijos por supuesto hay que darles tareas
importantes que les obliguen a trabajar sus
soluciones. Cuando los hijos llegan a los 30, se
les puede sugerir que ellos mismos diseñen el
plan de sucesión.
Algunos padres encargan a los hijos tareas
por separado con responsabilidades independientes. Sin embargo, lo que les hace fun-
cionar como un equipo es asignarles un trabajo conjunto donde ellos pueden desarrollar
sus relaciones de trabajo.
Los padres también pueden enseñar a sus hijos otros modelos de trabajo; pueden invitar a
representantes de otras empresas familiares;
organizar foros familiares donde discutir de
temas de interés social, etc.
En resumen se trata de ofrecer diferentes oportunidades a los hijos desde pequeños para explorar el mundo, equivocarse y aprender por
ellos mismos.
“El exceso de protección impide el crecimiento”.
8. Diseño del
propio proyecto
de vida
Una vez la Siguiente Generación comienza
a preguntarse por lo que quieren ser de mayores, la Generación Predecente deberá tener
cuidado de no imponer el trabajo en la Empresa Familiar como una obligación irrevocable.
Sin duda, la mejor de las opciones consistirá
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
52
53
en dejarles libertad para que ellos mismos elijan por su cuenta lo que más les satisface y les
llene de energía.
En este proceso, la función de los padres consistirá en mostrarse disponibles para poner a
su alcance todos los recursos necesarios para
acceder a la información y ganar experiencias
diversas.
Dependiendo de la ansiedad del joven, las experiencias a las que accede pueden ser muchas y muy variadas o por el contrario muy
pocas y muy concretas. En cualquier caso la
conducta de los padres más adecuada consistirá en legitimar estas conductas, encontrar
la intención positiva en todas ellas y recordar
al joven que se trata de una etapa de su vida,
una etapa de exploración.
8.1. Exploración de los valores
personales
Los valores resultan un tema fundamental en
las empresas familiares. Antes de la transmisión de la propiedad, la Familia Empresaria
transmite los valores que han hecho posible
la creación del “imperio familiar”. Algunas
veces estos valores se han especificado por
escrito en un Protocolo Familiar, otras veces
en los documentos institucionales de la empresa, etc.
Sin embargo, la mayoría de las veces los valores suelen no estar escritos y referirse a una
forma de actuar respetuosa con los demás y
con el entorno.
Por otro lado encontraremos los valores del
joven. Aunque este joven se haya criado en
una Familia Empresaria que comparte unos
valores (escritos o no), él también pertenece a
otro grupo que directa o indirectamente también le infunde sus propios valores: “su propia
generación de iguales”.
Así, si preguntamos a este joven por sus valores, aquello que le resulta importante en la
vida, nos encontraremos con un conjunto de
valores donde se mezclarán los transmitidos
por su Familia Empresaria, los aprendidos socialmente y los elaborados individualmente.
valores que realmente está defendiendo el
joven en esta etapa de su vida.
Tomando estos valores como punto de partida podemos motivar al joven para que explore posibilidades de acción que le pongan
en camino hacia los valores que él desea en
la vida.
Esta labor requiere un tutor, entrenador o
Coach, y será aconsejable una figura diferente
a los padres o los hermanos.
Este trabajo en ningún momento puede ser
interpretado como una confrontación, sino
como un trabajo importante para su desarrollo como persona.
El tono imperativo que algunos padres emplean
en la educación de sus hijos, puede ser un impedimento para que los jóvenes aprovechen al
máximo todas las oportunidades que les puede
brindar esta exploración de sus valores.
mente de un asesoramiento externo que le
ayude a tomar conciencia de la realidad, concretar las metas, utilizar un sistema de medida, ¿cómo sabré si he conseguido el objetivo?, etc.
Este es un trabajo que requiere del acompañamiento de un profesional que le confiera
reconocimiento y valoración cada vez que
consigue un objetivo. Además, con este profesional, el proceso se revisa constantemente,
calibrando cuándo necesitará nuevas modificaciones.
8.3. Desarrollo de la red social
De acuerdo a un estudio de Adecco (2009)
el 80% de los reclutamientos en empresas
corresponde a procesos informales de “networking” o red de conocidos y sólo el 20% corresponden a un proceso formal de selección
de personal.
Si pedimos que los ponga por escrito, la mayoría de las ocasiones encontraremos valores
ideales. Se trata de valores que representan
conductas deseables, pero que están lejos de
representar las conductas reales del joven.
8.2. La especificación de objetivos
Otro dato curioso es que a las personas les
gusta más hacer negocios con conocidos que
con personas que no conocen.
Si preguntamos al joven en qué emplea hoy
su tiempo, su energía y sus recursos económicos obtendremos respuestas muy diferentes. Esta nueva lista seguro que contiene una
serie de conductas que nos hablarán de los
La especificación de objetivos va íntimamente ligada a la exploración de valores. Una vez
que el joven conoce su punto de partida y los
valores ideales hacia los cuáles desea dirigirse,
puede empezar a marcarse objetivos.
La especificación de objetivos necesita igual-
Por ello, gozar de una buena red de contactos profesionales con quienes se han desarrollado relaciones de confianza resulta ser un
excelente activo para aquellos que optan a
puestos de liderazgo.
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
54
55
Por tanto, las redes de conocidos resultan un
excelente “ecosistema” donde cultivar habilidades de liderazgo, empatía, reconocimiento
y valoración, al tiempo que ofrece un acceso
directo a conocimientos y operaciones complejas facilitados por otros miembros de la
red a través de la comunicación y el diálogo.
En resumen, una red social rica en contactos personales y profesionales, que se puede
iniciar desde muy pronto y que no sólo nos
dará acceso a contactos de confianza sino
que, además, ayudará a la Nueva Generación
a desarrollar habilidades de representación,
comunicación y liderazgo social.
COMUNICACIÓN
CONGRUENTE
DEFINIR
OBJETIVOS
D
AL
CI
SO
O
ÓN ER
TI DIN
S
GE EL
D
NUEVAS
GENERACIONES
RE
Esta actividad social se puede iniciar a cualquier edad, pero será de gran ayuda comenzar en la Universidad participando en las
asociaciones que resulten interesantes. Esta
Una vez asumidos puestos de liderazgo en
la empresa, se puede continuar esta labor de
networking participando en asociaciones del
sector u otras asociaciones, como las de Empresa Familiar, y a su vez optando a cargos en
las juntas directivas.
DEOS
PO N
UI MA
EQ ER
H
Más aún, algunas asociaciones de emprendedores o de estudiantes, ofrecen cargos en
sus juntas directivas que los miembros pueden ocupar de forma voluntaria. Resulta una
excelente experiencia para los jóvenes entrenarse en las tareas de un Presidente, de un
Vice-presidente, un Secretario, un Relaciones
Públicas, etc. Durante la etapa de exploración,
todas estas experiencias serán de gran valor
para el desarrollo de habilidades posteriores
de liderazgo.
actividad se puede continuar una vez finalizados los estudios en las asociaciones de antiguos alumnos, los clubs sectoriales, de ayuda
social o de desarrollo de habilidades de comunicación y liderazgo.
E
VA XP
LO LO
RE RA
S R
Además, los estudios de Vygostsky (1978)
ponen de manifiesto que las personas desarrollan procesos mentales superiores y más
complejos no por la acumulación de conocimientos, sino por su participación en actividades que exigen interacción social.
8.4. Desarrollo de competencias
Esta vida social amplia y diversa facilitará que
el miembro familiar desarrolle unas competencias que serán necesarias para asumir
posiciones de liderazgo en la empresa y en la
familia.
Carlock y Ward (2001) definen siete competencias que deben tener los líderes familiares.
Tabla 1. Comportamientos que contribuyen al
rendimiento en los sucesores.
Consciencia
Demostrar un comportamiento ético al menos
cuando se trata de la familia y de la empresa
Credibilidad
En referencia a la familia y a la empresa, basada en
logros, rendimiento laboral y estilo personal
Coaching
Referido a la habilidad para enseñar y ayudar a otras
personas a desarrollar sus habilidades y su talento
Capacidad
El talento emocional e intelectual para su futuro
desarrollo como directivo y como líder
Compromiso
La decisión personal de apoyar los intereses de la
familia y de la empresa
Competencia
La habilidad técnica requerida para gestionar el
negocio
Comunicación
La habilidad para construir relaciones significativas
basadas en compartir información
La Consciencia se presenta como el comportamiento central dado que este modelo asume que la mayoría de las familias prefieren un
líder en quien puedan confiar y que demuestre integridad personal y un comportamiento
ético. Los otros seis comportamientos representan diferentes medidas de la efectividad
personal (Carlcock y Ward, 2001).
Resulta poco probable que todos estos comportamientos se concentren en una sola persona de la organización. Así, una de las responsabilidades de la familia propietaria y de
los directivos, consiste en priorizar los criterios
de selección basados en los valores fundamentales de la familia y en la situación del
negocio. Identificar los criterios de selección
y convertirlos en un acuerdo familiar ayuda
al equipo de sucesores a aceptar y apoyar el
desenlace del proceso de selección.
En familias grandes donde tienen diferenciado claramente la familia y el negocio, pueden
seleccionar dos o más miembros familiares
para las posiciones de liderazgo. Por ejemplo,
un familiar que haya demostrado competencia técnica puede ser un buen director ejecutivo, un familiar que demuestre un comportamiento ético puede ser un buen consejero
en el Consejo de Administración y un familiar
que haya demostrado sus habilidades para
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
56
57
construir y mantener relaciones de confianza
puede ser un buen consejero en el Consejo
de Familia.
En otros casos se puede optar por una rotación de los puestos de liderazgo basado en
premisas y reglas del juego aceptadas y conocidas por todos, de forma que se optimice
el talento familiar y se creen oportunidades
de participación.
9. Desafíos de
la Siguiente
Generación
9.1. Actitudes de los que se incorporan
Si los padres han hecho su trabajo en los primeros años, su descendencia entrará a la empresa con una actitud de humildad y sentido
por la jerarquía.
Ahora bien, se pueden dar casos en los que la
inseguridad de la Nueva Generación les lleve
a exagerar su experiencia y sus habilidades en
sus comunicaciones verbales, lo cual puede
ser visto como un signo de arrogancia por los
demás.
Si un joven empleado familiar se comporta
como si fuera el dueño, adoptando una posición de autoridad que no le corresponde,
creará resentimiento en el resto de trabajadores.
Aunque sean miembros familiares también
cometerán errores, no se espera que sean
perfectos. Sin embargo, sí se espera de ellos
que tengan respeto por la experiencia y la profesionalidad de los empleados no familiares.
Nada puede dañar más la imagen de los futuros sucesores como querer recibir un trato
de favor, tratar de influir en las decisiones de
sus supervisores o tratar de utilizar un rango
superior que no le corresponde.
Los miembros de la Siguiente Generación han
de estar abiertos a recibir críticas honestas y a
ser tratados como cualquier otro miembro de
su mismo nivel en la organización.
Por ello conviene que los padres eduquen
pronto a la Nueva Generación en valores y en
cómo su comportamiento va a ser interpretado por otros.
Es responsabilidad de los padres enseñar a
sus hijos cómo negociar un contrato psicológico acerca de lo que ellos pueden esperar de
la empresa y lo que la empresa puede esperar
de ellos (Lansberg, 1999)
La Siguiente Generación necesita recibir el siguiente mensaje:
i5ÞFSFTVOKPWFODPOUBMFOUPRVFUJFOFNVDIP
RVF PGSFDFS 5VT JEFBT JOOPWBEPSBT TFSÈO CJFOvenidas y te daremos espacio para que puedas
experimentar y crecer”.
Los jóvenes herederos sienten que son especiales, sin embargo se les debe hacer llegar el mensaje que se han de probar a sí mismos como
cualquier otra persona en la organización.
Como miembros de la familia pueden llegar
a pensar que en un futuro recibirán mejores
salarios o incluso acciones si realizan bien su
trabajo. Sin embargo, deben ser conscientes
de que esto puede no llegar a ocurrir y que el
riesgo de no llegar a la cumbre puede existir
(Lansberg, 1999).
La entrada de la Nueva Generación en la empresa los va a poner a prueba constantemente.
Por ello es importante que los hijos logren tareas importantes (en la empresa) para ganarse
el respeto del resto de los trabajadores. De esta
manera, los empleados pueden evaluar el potencial del futuro líder familiar (Jaffe, 1991).
Las primeras preguntas que debe hacerse el
familiar junior cuando se incorpora a la empresa deberían ser (Jaffe, 1991):
t{2VÏQVFEPPGSFDFSNÈTBMMÈEFMBQFMMJEPEF
la familia?
t{2VÏDPTBTDPODSFUBTQVFEPIBDFS
Una vez el junior está en la empresa debe poder hacerse una idea de la proyección de su
carrera profesional (Lansberg, 1999):
t{$VÈOUPUJFNQPQBTBSÏFOFTUBQPTJDJØOJOJDJBM
t{$ØNPTFEFUFSNJOBSÈONJTPCKFUJWPT
t{$ØNPWPZBTFSDBQB[EFDPOTFHVJSNJT
objetivos?
t{2VÏQVFTUPNFFTQFSBEFTQVÏT
t{2VÏPQPSUVOJEBEFTUFOESÏQBSBBERVJSJSFYperiencia como directivo?
t {2VÏ PQPSUVOJEBEFT UFOESÏ QBSB GBNJMJBSJzarme con los diferentes departamentos?
Los jóvenes herederos también necesitan
echar un vistazo al organigrama y observar las
edades de los directivos y determinar qué posiciones pueden quedar libres en un futuro.
Además la estrategia de la empresa también
debe prestar atención a la carrera profesional
de la Nueva Generación. Por ejemplo, si la empresa desea hacer negocios en un mercado
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
58
59
internacional en un futuro, los jóvenes herederos necesitarán tener experiencia en este
sentido, quizá obteniendo trabajos en un país
extranjero.
9.2. Riesgos de la incorporación
temprana
Cuando los miembros de la Siguiente Generación son jóvenes, sus experiencias del mundo que les rodea son ambivalentes, por un
lado es estimulante y por otro amenazador.
En estas circunstancias ingresar en el negocio
familiar puede llegar a retardar no sólo su desarrollo psicológico sino también su aprendizaje en el lugar de trabajo (Lansberg, 1999).
El nepotismo, o entrar en la Empresa Familiar
por ser miembro de la familia, erosiona rápidamente la autoestima del miembro de la
Nueva Generación sobre todo cuando esto
ocurre a una edad temprana. Además la torpeza asociada a la transición del mundo adolescente al mundo adulto, se ve incrementada bajo la presión del negocio familiar, donde
tenderá a cometer más errores que en otros
trabajos en empresas de terceros.
Entre los empleados no familiares se fomenta
la idea de la incompetencia de los miembros
de la Nueva Generación, convirtiéndose en
una profecía autocumplida. No se confía en
él/ella y no se le dan las responsabilidades ni
las oportunidades para poner a prueba su capacidad para aprender.
Uno puede encontrarse con miembros de
Nueva Generación etiquetados como ineficientes o ineficaces, que después, en empresas de terceros, desarrollan trabajos con profesionalidad y eficiencia (para su sorpresa y la
de otros).
Además, muchas veces, cuando se evalúa el
trabajo de los miembros de la Nueva Generación por sus compañeros de trabajo, raramente, este “feed-back” es verdadero, o se
dice que el familiar lo hace todo bien, o se
dice que lo hace todo mal.
Por tanto, será conveniente motivar a la Nueva Generación para que adquiera formación
y experiencia fuera de la Empresa Familiar. Incorporar estas experiencias en la vida de los
miembros de la Nueva Generación, será una
forma de ganarse el respeto tanto de familiares como de los profesionales no familiares
que trabajan en la Empresa Familiar.
9.3. Influencia de la familia
de origen
Padres muy involucrados en la Empresa Familiar, con sentimientos de culpa por haber
abandonado a sus hijos durante su infancia,
pueden llegar a amenazar la independencia
de los hijos cuando éstos comienzan a ser
adultos, presionándolos para que se involucren en el negocio familiar.
Muchas veces los padres tienen éxito con sus
presiones y los hijos dejan de lado sus propias
aspiraciones para cursar estudios que sean
acordes con el futuro desarrollo en la Empresa Familiar. Los intentos del hijo/a por buscar
su propio destino son continuamente boicoteados y finalmente el miembro de la Nueva
Generación acaba ocupando un puesto de
responsabilidad en la empresa de sus padres.
Como consecuencia, el miembro de la Nueva Generación frustrado, comienza a cometer
errores en su puesto de trabajo e incluso repercutiendo en pérdidas para la empresa de
MBGBNJMJB2VJ[ÈTFBÏTUBVOBGPSNBEFDBTUJgar a sus padres por haberle robado su propio
Sueño, y al mismo tiempo expiar las culpas de
sus continuas discusiones con su padre.
Después, este hijo frustrado, como padre,
tratará de que sus hijos continúen el legado
familiar. Típicamente, cuanto más prestigioso
es el negocio familiar, más presión se ejerce
sobre los hijos, acompañando las invitaciones
a involucrarse en el negocio familiar de promesas relativas a recompensas financieras (en
el borde del soborno).
Sin embargo un padre frustrado, enredado en
sus propias necesidades psicológicas, puede
llegar a trasladar a su descendencia todos
aquellos deseos y expectativas de lo que él
no pudo llegar a ser, todos sus Sueños incumplidos.
Por definición estos padres se sienten vulnerables y críticos consigo mismos y por extensión se muestran críticos con el desempeño
de su Nueva Generación. Así, si el miembro de
la Siguiente Generación se muestra confuso a
la hora de perseguir sus objetivos de adulto,
el padre puede mostrar su miedo a que aparezcan frustraciones como a él le ha ocurrido.
Por otro lado, si el hijo se convierte en una
persona de éxito, un padre así puede llegar
a mostrar su resentimiento de formas varias
(Lansberg, 1999).
Sin embargo, si el entorno familiar ha favorecido que sus miembros puedan discutir confortablemente acerca de sus oportunidades
de futuro en el negocio, cuando llegue el
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
60
61
momento de la Nueva Generación, al finalizar
sus estudios universitarios, tendrán una idea
clara de sus oportunidades, sus satisfacciones
y los riesgos potenciales de involucrarse en el
negocio familiar.
Los padres que han logrado superar las etapas de su transición vital satisfactoriamente,
por su parte habrán motivado a los hijos para
que se conviertan en las mejores personas
que puedan llegar a ser, orienten sus carreras profesionales dentro o fuera del negocio
familiar (Lansberg, 1999).
Caso: Coaching en la Nueva Generación
Autor: Borja Raventós
El Coaching es un proceso de mejora personal y profesional en donde se acompaña a
personas y familias en la consecución de sus
propios objetivos.
El Coach acompaña al cliente en un proceso
que le permite conocerse mejor a sí mismo,
profundizar en sus valores personales y descubrir su máximo potencial. Permite que el
cliente tenga más claridad para escoger que
es lo que realmente quiere hacer con su vida.
Solo así puede sentirse motivado para “atreverse” y hacer aquellos cambios que necesita
hacer para la conseguir sus objetivos.
El Coach es una herramienta especialmente
útil en el ámbito de la Empresa Familiar. Los
miembros de Familias Empresarias tienen que
vivir con una doble complejidad: liderar la empresa y liderar la familia. Pero antes de todo
esto, o en muchos casos al mismo tiempo, tienen que decidir sobre ellos mismos, conocer
su propio “sueño” o motivación personal.
Para trabajar con los Líderes de la próxima
generación es importante que éstos trabajen
previamente su proyecto personal y desde
ahí trabajar con su familia cuál es el proyec-
to empresarial o “visión” de la compañía. Solo
así serán personas satisfechas y motivadas
para afrontar la complejidad de la Empresa
Familiar. En muchas ocasiones, hay miembros
de Familias Empresarias que trabajan en la
compañía pero ésta no es su verdadera motivación. En algunos casos quizás serían más
felices siendo arquitectos o artistas, por poner
un ejemplo. En otros, tienen que haber pasado por el proceso de elegir por sí mismos
que realmente quieren trabajar en la Empresa
Familiar y sólo así lo harán con seguridad y
motivación. A aquellos que empiezan a trabajar en la compañía o bien a participar en
sus órganos de gobierno, aprenderán a vivir
positivamente en un entorno que los observa (su propia familia y empleados) y a ganar
seguridad y profesionalidad, siendo siempre
“ellos mismos”.
El Coaching ayuda a todos los miembros de
Familias Empresarias a encontrar cuál es su
verdadero “rol” dentro de la familia y como
propietario.
Todos los que hemos vivido en una Empresa
Familiar sabemos que los temas familiares y
empresariales se tratan en muchas ocasiones
en un mismo tiempo y, siempre con una gran
emocionalidad. El coaching ayuda a conocer
mejor nuestras emociones, a ver las cosas
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
desde diferentes perspectivas y así poder ver
con más claridad y objetividad. Así podremos
decidir, siendo más conscientes, de cuáles
son nuestras perspectivas, las del resto de
componentes de la Empresa Familiar y crecer
en armonía tanto de la empresa como de la
familia.
El Coaching ayuda a las personas a liderar su
propia vida y así poder construir líderes doblemente válidos para gestionar positivamente
la complejidad de la empresa y la familia.
Desafíos
del trabajo
conjunto
Capítulo 4
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
64
65
10. Trabajar
en la Empresa
de forma
planificada
Gran parte de los profesionales que empezaron como técnicos acostumbrados a realizar
y controlar todo el trabajo, después les resulta
difícil asumir puestos de gestión, donde deben
aprender a planificar, delegar y supervisar.
La planificación parece una asignatura pendiente en muchas empresas estresadas en las
urgencias del día a día, sin embargo, planificar
resulta una excelente práctica para reducir la
ansiedad, maximizar recursos y rentabilizar las
operaciones.
Las Nuevas Generaciones aprenderán el valor de la planificación si viven y se desarrollan
profesionalmente en entornos donde la planificación es un valor que se pone en práctica.
La Nueva Generación se enfrentará por primera vez a la experiencia de la planificación
en su Empresa Familiar cuando entre a trabajar en la empresa por primera vez: ¿cómo
se ha llevado a cabo esta incorporación? ¿de
forma improvisada o planificada?
Entrar de forma improvisada en la Empresa
Familiar o entrar de forma planificada tendrá
sus ventajas y sus inconvenientes. Si se improvisa la entrada de la Siguiente Generación, el
abanico de posibilidades es más amplio, muchas cosas por hacer y muchas posibilidades
por descubrir. Sin embargo, la Nueva Generación tendrá que hacer frente a la inseguridad
de lo se espera de ellos y a un aprendizaje a
base de excesivos errores que perjudicarán la
imagen de profesionalidad de estos jóvenes
luchadores.
Por otro lado, si la entrada de los jóvenes familiares sigue un proceso planificado se les
está dotando de seguridad y autonomía en
el desarrollo profesional. Las personas se benefician y la empresa también, al aumentar
la ventaja competitiva de ésta. Sin embargo
esta entrada planificada deja poco lugar para
la improvisación y la creatividad. De todas formas, siempre será más aconsejable una incorporación planificada que una incorporación
improvisada u “orgánica”.
La percepción de la planificación es tan importante como la planificación en sí misma,
por tanto, será aconsejable que el miembro
de la Nueva Generación perciba esta planificación, por ejemplo, comunicándole, bien
verbalmente, bien a través de un ritual de
paso, cada vez que supera una etapa y pasa
a la siguiente.
10.1. Etapa de prueba
La primera fase al entrar en la organización debería ser una etapa de prueba. Durante este
periodo se permite al empleado familiar que se
haga una idea realista de la empresa de la familia.
Una vez ganada cierta experiencia en determinados puestos, los empleados familiares
deberían ganar autonomía comprometiéndose y responsabilizándose en proyectos propios (ej: un nuevo territorio, una nueva tienda,
una nueva nave, etc.).
El reto en estos nuevos puestos será desarrollar al máximo todo su potencial de gestión.
En el caso de equipos de hermanos será también aconsejable que cada uno actúe por separado en proyectos diferentes, de modo que
evite el surgimiento de rivalidades entre ellos.
Los trabajos conjuntos entre hermanos y el trabajo en equipo en ciertas ocasiones será necesario,
pero será de un modo puntual que haga operativa las actividades de la organización. La frecuencia de estos equipos dependerá de la educación
recibida y de la relación pre-existente entre ellos.
Los equipos de hermanos en este período de
prueba han de formarse con cautela.
Una vez superada la etapa de prueba se puede tener una conversación con el empleado
familiar y evaluar su continuidad en el negocio familiar o su intención de dedicarse profesionalmente a otra cosa.
10.2. Asesoramiento de 360º
Cada familiar en la empresa ha de responsabilizarse de su propio desarrollo profesional
y su mayor reto consistirá en conseguir una
evaluación “feed-back” objetiva sobre su desempeño en la Empresa Familiar.
Resulta frecuente que tanto miembros de la
familia como trabajadores no familiares sean
reacios a ser sinceros cuando se les pide opinión acerca del desempeño de un tercero,
sobre todo si se trata de un miembro familiar.
Sin embargo, recibir estas evaluaciones y opiniones de los demás sirve de guía al sucesor en
aquellas áreas en las que necesita desarrollarse
más y elimina los miedos asociados a otro tipo
de evaluaciones posteriores escogidas para la
promoción profesional (Carlock y Ward, 2001).
El proceso de asesoramiento puede seguir los
siguientes pasos:
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
66
67
t%JTF×BSVOGPSNVMBSJPEFFWBMVBDJØO
t3FTQPOEFSBMGPSNVMBSJPBVUPFWBMVÈOEPTF
t1SFHVOUBSBUSFTDPMFHBTPTVQFSWJTPSFTTV
percepción siguiendo el formulario.
t$PNQBSBSMBTSFTQVFTUBTZEFCBUJSMPT
resultados con un mentor.
La discusión sobre la comparativa puede incluir las siguientes preguntas:
t {$ØNP FT NJ BVUPFWBMVBDJØO DPNQBSBEB
con la evaluación de los otros?
t {4JFOUP RVF FMMPT UJFOFO VOB QFSDFQDJØO
precisa de mis fortalezas y debilidades en la
gestión?
t{$ØNPQVFEPJOnVJSFOTViGFFECBDLwFOFM
futuro?
t {&OUJFOEP EF GPSNB SFBMJTUB MBT IBCJMJEBEFT
de gestión que la Empresa Familiar necesita?
t{2VÏBDDJPOFTTJFOUPRVFNFKPSBSÓBONJSFOdimiento y mi potencial en futuras responsabilidades adicionales?
Cada sucesor debe responsabilizarse de su
propio proceso de asesoramiento y de los resultados de su evaluación, ayudándolo así a
apoyar su propio plan de desarrollo.
Muchas empresas familiares utilizan un método
de evaluación de 360º para su línea de ejecutivos
como una forma de revisar su rendimiento anual.
La evaluación en 360º facilita un asesoramiento
de los empleados sobre sus directivos senior,
subordinados y colegas. Esta forma de evaluación amplía la perspectiva sobre la evaluación
del desempeño y obtiene información relevante para desarrollar actividades de formación y
desarrollo personal (Carlock y Ward, 2011).
Los resultados del estudio empírico indican
que las evaluaciones del desempeño de los
empleados familiares se realiza con menos
frecuencia que las evaluaciones del desempeño de los empleados no familiares. Esto tiene fácil explicación: un miembro familiar no
es la persona más cualificada para revisar el
desempeño de otro familiar y, por otro lado,
los directivos no familiares no quieren evaluar
el desempeño de un familiar que el día de
mañana puede ser su superior (Poza, 2004).
Los miembros familiares que no tienen acceso a esta evaluación del desempeño realmente están en desventaja.
Por ello será necesario poner a su disposición
ejecutivos senior que gocen de una posición
segura en la empresa, con confianza en sí mismos y con independencia de criterio para que
lleven a cabo la tarea de evaluar el desempeño
de los miembros familiares. Además no sólo
podrán evaluar el desempeño sino también
establecer los objetivos necesarios para el
próximo periodo de desarrollo (Poza, 2004).
10.3. Coaching
Las familias empresarias que gestionan de
una forma efectiva la entrada de juniors familiares en la empresa, a menudo seleccionan
un grupo de directivos senior no familiares
para que los entrenen en sus primeras etapas
en la empresa. Esta etapa no debe ser confundida con una etapa posterior de “Mentoring”.
El Coaching se emplea en una etapa inicial en
la que se facilita la incorporación y la adaptación de los jóvenes herederos a la empresa de
la familia.
En este proceso de Coaching, o entrenamiento, los directivos senior no familiares tienen la
oportunidad de formar y comunicar los valores y las actitudes a aquellos que posiblemente sean líderes de la Empresa Familiar el día
de mañana.
Uno de los grandes retos para los miembros
de la Siguiente Generación será desarrollar
relaciones laborales con un gran número de
ejecutivos no familiares clave y aprender a
respetar el buen juicio de éstos.
Los ejecutivos no familiares seleccionados
para entrenar a la Siguiente Generación en las
primeras etapas en la Empresa Familiar deben
saber que esta tarea es una parte importante
de su trabajo. Además se debe crear un clima
de confianza donde estos ejecutivos pueden
decir libremente a sus tutorizados la verdad
de lo que piensan acerca de su desempeño.
En empresas pequeñas con escasos puestos
directivos, este tipo de acciones pueden ser
vistas como una amenaza para el trabajo de
los senior no familiares. En este caso se debe
dejar claro a los directivos senior que no perderán su trabajo como consecuencia de esta
tarea y que cualquier esfuerzo por sabotear el
desarrollo profesional de los jóvenes de la Siguiente Generación no será permitido.
10.4. Mentoring
“Mentoring” es altamente recomendado para
ejecutivos que aspiran a posiciones senior en
grandes empresas no familiares. En empresas
familiares también.
El mentor elegido ha de ser diferente del padre, dado que, después de unos años, cuando
el empleado familiar va ganando experiencia
y criterio, la función del mentor va perdiendo efectividad y resulta más aconsejable que
el sucesor desarrolle su propia red de aseso-
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
68
69
res de confianza: miembros familiares, otros
ejecutivos, miembros del consejo o profesionales que prestan sus servicios a la firma
(Carlock y Ward, 2001).
Un buen mentor puede encontrarse fuera de
la Empresa Familiar con amplia experiencia
empresarial y dispuesto a apoyar a los jóvenes adultos en su proceso de aprendizaje en
la gestión de la empresa.
El mentor ideal será una directivo senior de
confianza que cuenta con una posición laboral sólida. Esta condición será necesaria para
poder actuar de forma honesta e independiente como un profesor y un tutor efectivo.
COACH
TRABAJO
CONJUNTO
MENTOR
“FEED-BACK”
ETAPA DE
PRUEBA
11. La Nueva
Generación y
la Familia de
Origen.
11.1. Cambio en la dinámica familiar
La entrada de un miembro familiar en la empresa cambia radicalmente las dinámicas familiares. Antes la empresa era el lugar donde
el padre o la madre trabajaban. Ahora todos
están interesados en lo que pasa en la empresa, mucho más que antes. Este creciente interés en la Nueva Generación corre el riesgo de
ser interpretado por el fundador como una
intrusión en sus asuntos. Sin embargo, al mismo tiempo es la vía para transmitir el Sueño.
Para transmitir este Sueño el padre ahora tiene que pagar el precio de verse expuesto a las
críticas de la familia. Ahora las discusiones sobre la empresa no las dirige el padre sino que
sus conversaciones también pueden verse
desde el punto de vista de los descendientes
que trabajan en ella. Todos estos movimientos pueden llegar a complicar la vida familiar.
Además la entrada de uno de los hijos en la
empresa puede llegar a suscitar rivalidades
entre los hermanos. Aunque se trate de una
empresa donde no se elige al primogénito
como sucesor, el mayor de los hermanos será
el que más probabilidades tendrá de entrar
en la empresa por razones de edad. Cuando
esto ocurre, su jerarquía dentro de la familia
se incrementa, confirmando o introduciendo
en la mente de los hermanos las preocupaciones de los posibles favoritismos del padre.
Por otro lado, la entrada de un hijo o una hija
en la Empresa Familiar puede hacer emerger
profundas emociones en los padres. Los padres pueden disfrutar al ver a sus hijos felices
trabajando a su lado y floreciendo profesionalmente en su empresa. Sin embargo, al
mismo tiempo, este trabajo se muestra como
el primer indicio del inevitable declive del padre. Además puede haber un miedo de que
las ideas de cambio del joven puedan poner
en entredicho la capacidad del padre o madre
(Lansberg, 1999).
El poder de las dinámicas familiares en la empresa es tan importante que las familias empresarias deben tener cuidado en este sentido,
anticiparse y responder con una comunicación
clara y con compasión (Jaffe, 2010).
11.2. Relaciones padres e hijos
De acuerdo al estudio Discovery Action Research Project: los miembros familiares menores de 30 años y mayores de 51 años, se
mostraban positivos acerca de la familia, del
negocio familiar y de las prácticas de gestión.
Los miembros familiares con edades comprendidas entre los 31 y los 50 años de edad,
no se mostraban tan positivos como los anteriores.
Así, los resultados de este estudio también
mostraban que las relaciones más armoniosas entre padres e hijos parecen estar cuando
el padre se encuentra en sus 50 y tantos y los
hijos se encuentran entre los 23 y los 33 años.
Davis y Tagiuri (1989), sugieren que la relación
se vuelve más problemática cuando el padre
está en sus 60 y tantos y el hijo está entre los
34 y los 40 años.
Así, los miembros de la Nueva Generación
que se encuentren en sus treinta y tantos o
cuarenta años puede que se encuentren con
conversaciones difíciles a medida que el ejecutivo avanza hacia sus 60 años.
Los hombres y mujeres de negocios tratan de
que sus decisiones estén basadas en un interés
propio racional. Ahora bien, la corriente emo-
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
70
71
cional de la familia puede llevar a que emociones establecidas en la juventud lideren los
comportamientos, los sentimientos y las elecciones de lo que es posible o no en el negocio
familiar. A menudo las realidades emocionales
de la familia son ignoradas o pasadas por alto.
Sin embargo, el centro emocional de la familia
debe ser atendido antes de que éste dirija la
realidad de la empresa (Jaffe, 2010).
hijo/a sea un “seguidor” y no un “innovador”.
Las dos variables de la Empresa Familiar: rentabilidad de la empresa y satisfacción de la
familia (Gimeno y Baulenas, 2009), deben ser
atendidas por igual para el triunfo tanto de la
empresa como de la familia. Detrás de una
empresa rentable se pueden ocultar variedad
de rencillas familiares que explotarán en momentos de tensión y estrés, sobre todo cuando este estrés esté ocasionado por pérdidas
en la posición competitiva en el mercado.
La forma en cómo se superen la diversidad de
conflictos familiares marcarán la pauta de crecimiento o decrecimiento de la Empresa Familiar.
De nuevo aparecen las contradicciones familiares. Si hago lo que siempre se ha hecho
no aportaré valor a la empresa; si apuesto por
la innovación me enfrentaré a las ideas de la
generación en el poder. Los hijos con talento
suelen optar por la segunda opción, dando
lugar a intensas batallas entre padre e hijo/a.
11.3. Comunicación familia y empresa
En una entrevista realizada a David Bork (2006)
explica la diferencia entre familia y empresa:
Prestar atención a las relaciones de la familia,
padres-hijos-hermanos, es de vital importancia para el futuro de la Familia Empresaria.
“La función de la familia consiste en educar
adultos que puedan funcionar autónomamente y la aceptación es incondicional mientras que
el objetivo de una empresa es generar beneficios
y para ello necesita empleados competentes”.
Muchas familias tienen que pasar por el sacrificio de la ausencia del progenitor como si
estuviera casado con la empresa y muy frecuentemente el fundador quiere que sus hijos sigan sus pasos: “Siempre lo hemos hecho
así”. Cuando esto ocurre se espera que el/la
Bork continúa su explicación diciendo que
el riesgo en la Empresa Familiar consiste en
tratar de resolver en la empresa asuntos que
corresponden a la familia. Por ejemplo ofrecer
un puesto de trabajo a un familiar para que
aprenda a valerse por sí mismo, estaría dentro
de estas conductas de riesgo.
En este proceso de diferenciación “empresafamilia” comunicar a los miembros familiares
desde pequeños la diferencia entre la familia
y la empresa, contribuye a que ellos mismos
perciban la diferencia entre lo que pertenece
a la familia y lo que pertenece a la empresa.
Así, la comunicación en la familia siempre
ha de transmitir la aceptación incondicional
de los miembros utilizando para ello una
comunicación con afecto, el aprendizaje en
normas de educación y de manejo en la sociedad acompañadas de reconocimiento y
valoración. A medida que los hijos van siendo
autónomos ya no necesitarán una educación
tan normativa pero seguirán necesitando el
afecto, el reconocimiento y la valoración de
sus padres.
La comunicación en la empresa, por el contrario, debería entenderse como una aceptación
condicionada al desempeño. El trabajador,
después de un periodo de aprendizaje, será
evaluado por su aportación a la empresa y podrá mantener su puesto de trabajo en cuanto
su aportación genere valor a la empresa.
Podemos comunicarnos con el trabajador
en los mismos términos que en la familia,
con afecto, reconocimiento y valoración,
dado que todas las personas lo necesitamos
y podremos actuar con mayor motivación si
nuestros compañeros de trabajo y superiores
se comportan de esta manera. Sin embargo,
si después de un periodo de aprendizaje, el
trabajador continúa cometiendo los mismos
errores reiteradamente y no llega a cumplir
los objetivos marcados para él, la empresa
no tendrá más remedio que prescindir de sus
servicios y sustituir a este trabajador por otro
que consiga los objetivos marcados.
La comunicación en la familia debe mostrar
aceptación incondicional, mientras que la comunicación en la empresa estará gobernada
por la aceptación en base a resultados. Aprender a vivir con ambos tipos de comunicaciones será el reto de todo empresario familiar.
11.4. Riesgos de entrampamiento
familiar
La Siguiente Generación muchas veces crece
reverenciando al “fundador”, midiéndose con
él y nunca llegando a estar a la altura. Esta lucha por parecerse a su progenitor tiene una
tremenda importancia en el desarrollo de la
identidad de los descendientes quienes se
derrumban con frecuencia (Amat, 1998). Muy
a menudo los padres no aprecian esta lucha
interna en sus hijos.
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
72
73
En familias sin empresa, los hijos tienen más
fácil elegir sus propios destinos al margen de
la familia. Sin embargo en algunas familias
empresarias, trabajar fuera de la empresa de
la familia puede ser interpretado como un rechazo a la familia. En estos casos y con una
identidad por construir, el dilema deja atrapado al descendiente:
“Escoja mi propio camino, escoja quedarme en
la empresa de la familia, pierdo”.
Además los padres pueden utilizar sus armas
de seducción:
t{$ØNPQVFEFTOPWFOJSBUSBCBKBSBMOFHPDJP
de la familia?
t{%ØOEFWBTBFTUBSNFKPSRVFBRVÓ
t {%ØOEF WBT B QPEFS EFTBSSPMMBSUF DPO NÈT
rapidez?
En algunas empresas familiares, familia y trabajo parecen tan armónicos que los puestos
en la empresa se asignan de acuerdo a la jerarquía familiar.
En familias de Oriente Medio o de la India, cada
heredero recibe la dirección de un negocio independiente. Algunos de estos negocios realmente ganan dinero mientras que otros simplemente sirven para mantener la autoestima.
Los factores importantes tienen que ver con el
reconocimiento y el favoritismo. El/la primer/a
hijo/a, el/la segundo/a, el/la tercero/a, etc. todos ellos llegaron en diferentes etapas en las
vidas de sus padres y por tanto son tratados
de forma diferente. Un pequeño daño puede
magnificarse cuando el sentimiento generalizado es que los padres no han estado física o
emocionalmente disponibles.
La empresa puede servir para cubrir estas carencias familiares: hijos/as que desean trabajar en la empresa de la familia para tener una
relación con su padre; hijos/as que trabajan
en la empresa para complacer a su padre y
obtener su aprobación; etc.
Ahora bien, si los miembros de la Siguiente
Generación han ganado experiencia en otras
empresas antes de incorporarse al negocio
familiar, habrán adquirido un sentimiento de
fortaleza interno y no estarán obsesionados
con ser reconocidos por sus padres.
FAMILIA
2
6
EMPRESA
3
5
7
4
INDIVIDUO
1
1 t ¿He definido mi proyecto vital?
2 t ¿La familia permite libertad de elección
a la NxG?
3 t ¿La empresa ofrece planes de carrera?
4 t ¿La empresa me ofrece desarrollo
profesional?
5 t ¿Puedo comunicar mis necesidades
a mi familia?
6 t ¿La empresa ha definido políticas
de contratación?
7 t ¿Estoy atrapado entre mi lealtad a la familia
y mi desarrollo profesional?
Si la familia tiene su mirada puesta dentro
del sistema familiar, es decir, buscando en los
padres el poder, el reconocimiento o el significado, ¿quién se preocupa por el mercado o
por los clientes? Muchas familias pierden su
orientación y su efectividad cuando se miran
demasiado a sí mismas (Jaffe, 2010).
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
74
75
Caso: Enseñar a hacer, hacer hacer, dejar hacer
Autor: Julia Téllez
Uno de los aspectos más relevantes a la hora
de planificar y acometer el relevo generacional en la Empresa Familiar es, precisamente, la
incorporación de la Siguiente Generación al
trabajo en la empresa.
Este proceso, que a menudo se produce de
forma natural y sin planificación previa, suele
implicar, de facto, varias fases sucesivas, que
se van produciendo a lo largo de los años en
los que conviven, en activo, ambas generaciones. Así, en la primera fase lo deseable es
que se “enseñe a hacer” a los que acaban de
incorporarse. Una vez que sepan desempeñar
los cometidos que les han sido asignados, los
mayores les “hacen hacer”, y cuando la generación que pasa el testigo decide que ha
llegado el momento de abandonar la gestión
del día a día, sabiendo que la empresa queda
en buenas manos, les “dejan hacer”.
Uno de mis queridos fundadores explica este
proceso de forma bien gráfica. Como le gusta
contar, para él su empresa es como un avión.
Él era el piloto y, cuando se incorporaron
sus hijos, los sentó como copilotos para que
aprendieran a su lado. Una vez tuvo la seguridad de que sabían llevar la nave, les cedió el
puesto de piloto, sentándose él en el de copiloto. Más adelante, decidió viajar con el resto
del pasaje, mientras sus hijos pilotaban. En algún momento, es posible incluso que decida
no subir al avión, aunque, eso sí, se reserva la
torre de control.
En mi experiencia con empresas familiares
de los más diversos sectores y distintas generaciones, he podido comprobar de primera
mano lo importante que resulta que la incorporación de la Siguiente Generación a la
empresa pase por las tres fases mencionadas.
Saltarse alguna de las fases, o no evolucionar
hacia la siguiente cuando ya se está maduro
para ello, provoca tensiones tanto en el seno
de la familia como en la propia empresa.
Recuerdo el caso de una empresa fundada
por cuatro hermanos a la que se fueron incorporando, espontáneamente y sin requisitos
previos de acceso, los quince miembros de
la Siguiente Generación. Varios sin estudios,
y otros al terminar sus correspondientes carreras. Transcurridos un buen número de años
trabajando juntos, la situación comenzó a hacerse ingobernable. Los mayores se fueron retirando, los directivos externos no se atrevían
a corregir a los familiares más jóvenes por temor a molestar a los socios fundadores, y, al
mismo tiempo, todos (familiares y externos)
confesaban ser conscientes de que se toleraban conductas inapropiadas en los familiares
y que la situación se había hecho insostenible.
Era urgente arbitrar soluciones y reconducirla,
con la disposición y el compromiso de todos.
Analizando este caso, se vio claro que la fase
de “enseñar a hacer”, simplemente, en la mayoría de los casos, había brillado por su ausencia. Los miembros de la Siguiente Generación se incorporaban a la empresa y, de una
forma u otra, “se iban buscando la vida”. Algunos trataron de reproducir los roles de sus padres, pero con un “pequeño” problema: ellos
no eran sus padres. Les faltaba la experiencia,
aún no habían ganado frente a la plantilla ni
la legitimidad ni la autoritas de la que sí gozaban sus progenitores. Y es que esa autoritas
no se hereda, como las acciones de la empresa. Hay que ganársela.
Los mayores cometieron el error de no “enseñarles a hacer”, no tutelarles a su incorporación, y les “dejaron hacer” desde el principio.
Los directivos externos no siempre les “hicieron hacer”, y miraron a otro lado cuando tocaba reprenderles por determinadas conductas,
en el convencimiento de que si no lo hacían
los padres, no lo iban a hacer ellos jugándose
el puesto, por muy negativo que fuera para
la empresa. Los jóvenes, simplemente, se pusieron a trabajar según su propio criterio, sin
saber, en realidad, qué se esperaba de ellos,
cuáles eran sus funciones y a quién debían
reportar. Cometieron, además, un error adicional: ejercer de dueños, no de empleados.
Aunque siempre es difícil romper con las inercias y asumir la necesidad de un cambio profundo, esta Familia Empresaria se concienció
de que no quedaba otra opción si querían llevar adelante el proyecto empresarial común.
Se elaboró un primer organigrama, con criterios profesionales, dando una oportunidad a
todos los familiares que estaban involucrados
en la gestión de la empresa pero dejando claro que la familia estaba al servicio de la empresa, no la empresa al servicio de la familia.
Cada empleado y directivo familiar conoció
sus funciones, se diferenciaron competencias y ámbitos de actuación para evitar solapamientos. Todos supieron a quien debían
reportar, y se pactó en el protocolo que los
familiares serían evaluados y retribuidos de
forma idéntica a los no familiares. Los socios
fundadores encomendaron expresamente
a los directivos externos la facultad de evaluar y, en su caso, reconocer y corregir a los
familiares. Para el futuro, se establecerán requisitos de entrada para poder trabajar en la
Empresa Familiar, evitando saturar de familiares la gestión e intentando captar y retener al
mejor talento, familiar y no familiar. Es un reto
para todos, lo sé, lo saben. Pero hay demasiado en juego como para no afrontarlo con el
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
máximo compromiso, confianza y lealtad.
En otros casos, el principal escollo es no “dejar
hacer” por el miedo del sucedido a sentirse
vacío una vez que abandone las responsabilidades del día a día, y, con ellas, una forma
de vivir que le ha tenido literalmente enganchado durante años, hasta el punto de que,
a veces, no tiene más hobby que su propia
Empresa Familiar, con el alto coste que ello
implica en el plano de la familia. Es donde
se siente como pez en el agua, y ¿qué pasa
cuando sacan al pez del agua?, se pregunta
a sí mismo con cierta angustia. Estas situaciones provocan, en ambas generaciones, ansiedad, expectativas incumplidas y frustración.
He conocido a incombustibles “jovencitos”
que se van acercando peligrosamente a los
ochenta y tantos y siguen al pie del cañón
ejerciendo de hombres orquesta y jurando
que morirán con las botas puestas. Y junto
a ellos, sus hijos, con treinta o cuarenta años
de trabajo en la Empresa Familiar, y con el
“síndrome del eterno aspirante al trono”, intentando asimilar que jamás les llegará su
momento porque tras ellos viene ya pisando
fuerte el nieto predilecto, y el abuelo no se
acaba de retirar… Esa generación que nunca
dirigirá la orquesta se plantea muchas veces
si su apuesta vital por la empresa mereció la
pena, y se arrepiente de no haber tenido el
valor de afrontar el tema abiertamente en el
momento oportuno. En otros casos, se queja
de que los mayores nunca quisieron o supieron delegar, y que sí, siguen siendo imprescindibles, porque se reservan para sí información
y “know-how” clave que sólo ellos conocen y
que, consciente o inconscientemente, se niegan a compartir con sus continuadores. Hasta
el punto de que – afirman – si al padre o a la
madre les pasara algo, todo se iría al traste por
dicho motivo. Triste, ¿verdad?
Por eso, es fundamental preparar con tiempo a los sucesores, pero también mentalizar
al sucedido, buscar fórmulas que compatibilicen la delegación de la gestión en la
Siguiente Generación o en externos con la
aportación de valor de los mayores desde el
Consejo de Administración, la Fundación de
la familia y foros y asociaciones en los que
ejerzan su papel de embajadores. Garantizar
su seguridad económica es también cuestión
irrenunciable para que puedan ceder el testigo con la necesaria y merecida tranquilidad. Y
que eso sea un proceso entrañable de estrecha convivencia entre dos generaciones, de
compartir y transmitir el legado, que el sucedido pueda monitorizarlo desde su particular
“torre de control”, poniendo así un generoso
broche de oro al esfuerzo de toda una vida.
Los directivos
no familiares
Capítulo 5
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
78
79
12. La Nueva
Generación y
los directivos no
familiares
Cuando la Nueva Generación entra en la empresa se encontrará directivos no familiares
con dilatada experiencia en la Empresa Familiar. Si ambos grupos consiguen complementarse, el futuro de la empresa estará asegurado.
12.1. Riesgos de rivalidad
En algunas compañías la entrada de miembros de la Siguiente Generación puede ser
vista como un signo de continuidad y estabilidad en la empresa.
Para ello se requieren varias condiciones:
1. La Generación Predecente ha legitimado
esta entrada, comunicando a los profesionales no familiares la entrada de miembros familiares.
2. La Generación Predecente ha planificado
con los profesionales no familiares la oferta
de Planes de Carrera para las Nuevas Generaciones de familiares.
3. Los profesionales no familiares que trabajan
en la empresa perciben a las Nuevas Genera-
ciones como futuros líderes competentes.
4. Las Nuevas Generaciones han desarrollado
excelentes habilidades relacionales y traen
una experiencia demostrable.
A pesar de los mitos que rodean a los fundadores en función de los cuales se cree que
han fundado una empresa de la nada por
méritos personales y con una actitud casi heroica, la verdad es que en la mayoría de las
ocasiones, la creación de la empresa ha sido
posible gracias a un grupo de profesionales
de confianza que rodeaba al líder.
Este equipo de profesionales de confianza
puede llegar a sentir una cierta propiedad
psicológica sobre la empresa que se verá
amenazada con la entrada de miembros de
la Nueva Generación. Esta entrada quizá les
esté recordando quién verdaderamente tiene
acceso a la propiedad accionarial, quién puede tener acceso a los puestos de dirección y
quién puede ser el director general en un futuro (Lansberg, 1999).
Por tanto, será importante para el buen funcionamiento de la empresa que estas Nuevas
Generaciones se incorporen con una actitud
de humildad, de aprendizaje, de escucha y,
sobre todo, de respeto hacia la sabiduría y la
lealtad que estos profesionales no familiares
han demostrado con su Familia Empresaria
durante todos los años anteriores.
Gracias a ellos, a su trabajo y a su apoyo incondicional al proyecto empresarial, la empresa
es hoy lo que es y la Nueva Generación tiene
la oportunidad de optar a puestos de liderazgo en esta organización.
12.2. Función de los directivos no
familiares
La función de los directivos no familiares será
clave para la gestión de la Nueva Generación.
Estos directivos pueden ayudar a los jóvenes
a adaptarse a la nueva realidad laboral enseñándoles y tutorizándoles acerca de los procesos y las conductas deseables para la empresa.
A medida que los jóvenes familiares van superando las pruebas de su periodo inicial de
aprendizaje, el profesional no familiar les puede ayudar a marcarse objetivos realistas para
su desarrollo profesional dentro de la empresa. También puede orientar al joven acerca
de las trayectorias profesionales posibles a las
que puede optar dentro de la empresa, sobre
todo, si conoce la oferta de Planes de Carrera
disponibles en la organización.
El joven de la Siguiente Generación debe
encontrar apoyo en los profesionales no familiares y permitirles actuar como consejeros
personales o mentores.
Este contacto frecuente con los profesionales
no familiares está cumpliendo dos funciones:
por un lado, está evitando el contacto con
miembros de su familia, los posibles conflictos familiares y, por tanto, la desmotivación
y desilusión del joven que se incorpora; por
otro lado, estará ganándose la confianza y
complicidad del equipo de profesionales que
actualmente ostentan el poder en la empresa.
De alguna manera, dependiendo del tamaño
de la empresa, la aceptación de los nuevos líderes familiares en toda la empresa dependerá en gran medida de la relación que el nuevo
líder familiar tenga con el equipo de directivos clave en la Empresa Familiar. Si este equipo de profesionales no familiares reconoce
los méritos de los nuevos líderes familiares, el
reconocimiento como nuevo líder por parte
de la Generación Predecente será automático.
12.3. Profesionalización
En la literatura de Empresa Familiar entendemos por profesionalización la contratación de
profesionales no familiares.
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
80
81
La incorporación de profesionales no familiares en una empresa donde los puestos directivos están ocupados por familiares, resultará
un cambio en la forma de hacer las cosas en
el día a día de la empresa. Dependiendo de
la complejidad del negocio, la necesidad de
estandarizar procesos, la cantidad de profesionales no familiares, etc. los profesionales
no familiares traerán consigo la pérdida de la
“familiaridad” en las operaciones del día a día.
PROFESIONAL
NO
FAMILIAR
EMPRESA
FAMILIAR
NUEVA
GENERACIÓN
En familias con una fuerte cohesión interna
el profesional no familiar corre el riesgo de
dejarse “fagocitar” por el sistema familiar, es
decir, convertirse en uno más de la familia y
perder la oportunidad de aportar conductas
diferentes.
Sin embargo, en la mayoría de las ocasiones,
la contratación de un profesional externo
producirá un cambio, por pequeño que sea:
las familias tienden a comportarse de una forma más cordial en presencia de no familiares.
Cuando la familia está contratando profesionales externos, deberá tener claro el objetivo
por el cual lo está contratando:
- Para ayudar a la familia.
- Para provocar un cambio en la empresa.
Si la Empresa Familiar está contratando a un
profesional externo para ayudar a la familia,
será muy importante que este profesional externo se adapte a la familiaridad de la Familia
Empresaria si quiere mantener su puesto de
trabajo.
Sin embargo, si la Empresa Familiar está contratando a este profesional externo para provocar un cambio en la empresa, será necesario que el profesional externo mantenga una
relación de cercanía y cordialidad con la familia, al tiempo que mantiene su individualidad
y la precisión de sus procedimientos.
Caso: Descalificación de familiares
Autor: Mario Gandarillas
La profesionalización de la Empresa Familiar
{2VÏEFCFNPTFOUFOEFS
1. Visión de un sucesor frustrado:
“Después de haberme dejado la piel durante
más de 15 años por esta empresa y por él, mi
padre me ha traicionado nombrando a un sucesor que no es de nuestra sangre”.
Tradicionalmente, la profesionalización de la
Empresa Familiar se ha asociado con la idea de
incorporar a profesionales externos que carezcan de lazos de parentesco con la propiedad.
Para algunos, esta característica otorga una
mejor actitud a la hora de ocupar un puesto de
responsabilidad dentro de la compañía, frente
a los miembros de la Siguiente Generación.
2. Visión de un padre:
“Los tres llevan tiempo aquí y están deseando
dirigir un día la empresa, aunque el mediano
está más preparado, ¿cómo puede un padre
elegir a uno de entre sus hijos? Tendré que
buscar a un profesional externo...”
“Mis hijos no son conscientes del nivel de
compromiso y exigencia que implica dirigir
esta compañía”.
3. Visión de un hijo propietario que trabaja a
las órdenes de un externo:
¿Cree que voy a obedecer sus órdenes? ¿Acaso no sabe quién le paga el sueldo?
4. Visión de un externo:
“Estoy muy harto porque, en lugar de luchar
por la empresa, he de luchar contra unos propietarios que esperan de mí que tome partido en sus disputas de familia. ¡Es como tener
al lobo en casa!”
Con independencia de que estemos o no de
acuerdo con esta idea, a mí me surge la siguiente duda: ¿el mero hecho de compartir el
apellido con los propietarios nos hace menos
profesionales y, por lo tanto, menos eficaces
para la gestión de su empresa?, ¿ser miembro
de la familia nos predispone genéticamente
para no poder actuar con profesionalidad?
Seguramente cada uno puede tener una visión diferente, condicionada por sus propias
experiencias o por las de algún conocido. Sin
embargo, creo que es importante cuando
hablemos de profesionalizar las empresas familiares, superar la miope visión que circunscribe esta idea exclusivamente a la llegada de
directivos externos que nada tienen que ver
con la propiedad. Partiendo de esta premisa
y, por lo tanto, defendiendo la tesis de que los
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
82
83
Conclusiones
de fuera no son necesariamente mejores que
los de dentro (hay algunos estudios que así lo
confirman), sí es recomendable que cuando
hablemos de profesionalizar la Empresa Familiar, a partir de la primera generación, tengamos en cuenta que ésta implica por lo menos
tres procesos que, además, deberían seguir
una secuencia cronológica determinada:
1. En primer lugar, aprender a profesionalizar
las relaciones familiares a través del desarrollo
de acuerdos y pactos de familia que ordenen,
clarifiquen y fijen un código de conducta
adecuado a las necesidades de la empresa y
a las expectativas de los accionistas/futuros
accionistas.
2. Desarrollar órganos y estructuras de gobierno para la empresa y para la familia que
permitan separar dónde, cuándo y quiénes
deben liderar el proceso de toma de decisiones (Consejo de Administración y Consejo
de Familia), informando al resto de socios y
miembros de la familia.
3. Encontrar y seleccionar a los mejores
profesionales externos que el mercado nos
pueda ofrecer.
Seguir estos pasos no implica necesariamente que el proceso de profesionalizar sea del
todo un éxito. Sin embargo, nos va a permitir
minimizar el posible impacto negativo que
puede tener para algunos miembros de la
familia, al haberse previamente analizado y
discutido cuestiones como:
- Por qué en un momento dado, la familia debe
dar un paso atrás.
-2VJÏOFTEFCFOGPSNBSQBSUFZDØNPTFEFCF
actuar en un Consejo de Administración o de
Familia.
- 2VJÏOFT TFSÈO MPT JOUFSMPDVUPSFT EF MB DPNpañía con los profesionales externos que finalmente incorporemos si realmente asumimos
que ésta es la mejor opción.
La incorporación de cualquier profesional dentro de una organización es difícil para todos,
pero no debemos olvidar una realidad: el que
va a tener mayores niveles de estrés es el recién
llegado y, en parte, la actitud de los propietarios
y el trato y la claridad de los mensajes que reciba, van a favorecer que un buen profesional se
consolide en su puesto y, en definitiva, cumpla
con creces las expectativas que todos han puesto en él en beneficio de la compañía. A partir de
ahora, la familia debería tener la última palabra...
Para la Generación Precedente:
tConfiar en el valor de la Nueva Generación como activos de presente y futuro.
tFacilitar a la Nueva Generación la toma de decisiones acerca de su futuro profesional.
tRespetar y apoyar las decisiones de la Nueva Generación.
tRegular la entrada de familiares en la Empresa Familiar.
tInvolucrar a la Nueva Generación en el establecimiento y aplicación de normas.
tOfrecer proyectos profesionales interesantes para la Nueva Generación.
tDefinir puestos de trabajo en función de las necesidades de la empresa.
tOfrecer salarios de acuerdo a la competitividad del mercado.
tComunicar a la Nueva Generación qué se espera de ellos.
tEvaluar el desempeño de la Nueva Generación y ofrecer oportunidades de aprendizaje.
tFacilitar la comunicación entre la Nueva Generación y los profesionales no familiares.
tDelegar en profesionales no familiares la formación de la Nueva Generación.
tPermitir la salida de familiares de la Empresa Familiar.
tRegistrar por escrito las normas y los acuerdos familiares.
Para la Nueva Generación:
tAprender de la Generación Predecente y tener paciencia.
tComunicarse con confianza y respeto con la Generación Predecente.
tPreguntar qué es lo que se espera de ellos y cómo los evaluarán.
tExplorar y ganar experiencia fuera de la Empresa Familiar.
tDefinir objetivos claros en cuanto a la dedicación profesional.
tDefinir objetivos a corto y medio plazo y revisarlos frecuentemente.
tExplorar los propios valores y cómo encajan con los valores de la familia.
tDesarrollar la propia red de contactos de confianza.
tDefinir la relación con la Empresa Familiar: directivo, consejero, accionista, etc.
tEvitar posiciones de ambigüedad y/o comodidad.
tApostar siempre por la autonomía y el desarrollo profesional.
tPedir consejo y aceptar ser evaluados.
tElegir la Empresa Familiar cuando está en línea con el propio desarrollo profesional.
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
84
85
Epílogo
En los últimos tiempos, el modelo basado en la
creencia de que el único propósito de la empresa
es generar beneficios económicos, ha sido superado por el modelo que considera la empresa
como una sociedad de personas.
Las personas componen los activos humanos
y los activos intelectuales son producto del esfuerzo y el trabajo de las generaciones anteriores. En la Empresa Familiar los activos humanos
aglutinan todos los aspectos relacionados con
los miembros de la familia. Y para evaluarlo hay
que tener en cuenta sus características, su salud
física y emocional, sus valores y su actitud.
Es por ello que el deseo de crear y trasmitir la riqueza a las Nuevas Generaciones ha de ir acompañado por un plan compartido y consensuado
con toda la Familia Empresaria.
Para entender mejor la relación entre empresa y
familia, siempre me gusta recordar la frase del
4S +BVNF 5PNÈT 4BCBUÏ GVOEBEPS EF 'VOEBción Nexia, fallecido el año pasado, quien decía:
“Si la familia está unida, la empresa es imparable”.
No podemos entender la Empresa Familiar sin
su intención de continuidad. Cada comienzo de
un proyecto nuevo es una aventura que requiere
un espíritu atrevido y fuerte. Durante este proceso, muchos empresarios exitosos, están tan in-
mersos en resolver las cuestiones que les plantea
la gestión del día a día de la empresa que se olvidan de la importancia que tiene la planificación
paralela: familia y empresa.
vivir íntegros los valores y la cultura de la familia
para impregnar toda la Empresa Familiar. Esta
responsabilidad pasa por insistir primero en ser
Propietarios Responsables.
La familia propietaria es el elemento que diferencia una Empresa Familiar de cualquier otro
tipo de empresa. Es el núcleo que dota todo el
sistema de la intención de continuar el legado y
el esfuerzo de las generaciones anteriores. Es la
voluntad de la familia de seguir mejorando la
sociedad a través de un instrumento de cambio,
que es la empresa. Y esto significa entender que,
para seguir adelante, la Familia Empresaria no
puede únicamente centrarse en el propósito de
conservar el capital económico de la familia,
sino también de preservar el capital humano e
intelectual.
En una Empresa Familiar sólo los fundadores eligen ser propietarios. Los demás miembros familiares heredan la propiedad y les otorga el poder
de decidir el futuro del proyecto empresarial. Este
poder no viene exento del sentido de responsabilidad. El proyecto empresarial de la familia debe
seguir generando riqueza, para la familia y para
la sociedad.
Preservando el capital humano e intelectual la
familia cumplirá con uno de los principales retos
que enfrenta en su camino hacia la longevidad
empresarial; traspasar generacionalmente la
capacidad emprendedora.
En la actual Economía de Conocimiento, el principal recurso de las empresas es justamente el
capital humano.
Una de las principales responsabilidades de la
Nueva Generación será liderar con el ejemplo y
Este es el papel principal de la Familia Empresaria; inculcar el sentido de responsabilidad a
todos los propietarios y ejercer como verdadera
escuela de “propietarios, administración y directivos”, cómo bien la define el profesor Miguel
Ángel Gallo. Es una escuela única, porque permite a los “alumnos” realizarse a través de Amor y
5SBCBKPMBTQSJODJQBMFTGVFOUFTEFBVUPFTUJNBZ
de placer en la Vida. Aprovéchenla para seguir
creando y creciendo.
Boris Matijas
Gestionar la Nueva Generación en las Empresas Familiares
86
87
Agradecimientos
Este manual ha sido posible gracias al entusiasmo de muchas personas que comparten
un ferviente interés por las empresas familiares; algunas han colaborado de forma directa
y otras indirectamente.
Debo agradecer a Pilar Saldaña, Directora de
la Cátedra de Empresa Familiar de la Universidad de Barcelona, su sana presión para sacarme de mi zona de confort: la comunicación y
los conflictos familiares, e indicarme otro área
dentro de la Empresa Familiar: “Las Nuevas
Generaciones”.
También debo agradecer a Miguel A. Gallo,
profesor emérito de IESE, las numerosas conversaciones acerca de la importancia de las
Nuevas Generaciones para el futuro de la
Empresa Familiar y sobre todo un concepto
básico que él da en llamar: “Solidaridad entre
Generaciones”.
También mis agradecimientos a mi mentor
David Bork, con quien puedo experimentar
de primera mano el significado de la Solidaridad entre Generaciones.
Referencias Bibliográficas
Mi agradecimiento también a Joan M. Amat,
Consultor de Empresa Familiar, autor de numerosos libros y Supervisor de este Manual,
quien me ha enseñado a modificar mi estilo
“barroco” para comunicar mis ideas de forma
más clara y directa.
También agradecer a todos los colaboradores
que participaron en el manual, que enviaron
sus aportaciones oportunamente y quienes
apoyaron emocionalmente el proceso de
construcción conjunta.
Una mención especial para nuestra Coordinadora, Ane Miren Cordero, quien gracias a su espíritu dinámico y motivador, se ha convertido
en el motor de todo un engranaje de colaboraciones que han hecho posible este Manual.
Finalmente, nuestro agradecimiento al Foro de
Empresa Familiar de las Cámaras Vascas por facilitar el espacio para que podamos intercambiar experiencias y conocimientos de Empresa
Familiar y en especial a Txetxo Prada por su entusiasmo, ilusión y apoyo a este Manual.
- Amat, J.M.(1998) La Continuidad de la Empresa
Familiar. Gestión 2000.
- Amat, J.M., Martinez, J.I. y Roure, J. (2008)
Transformarse o Desaparecer. Ediciones DEUSTO.
- Bork, D (1986) Family Business, Risky Business.
How to Make it Work. AMACON.
- Bork, D (2006) Entrevista en: The Today Show.
http://www.youtube.com/watch?v=Rmqn-Pqo22I.
- Carlock, R.S., Ward. J.L. (2001) La Planificación
Estratégica de la Familia Empresaria. Ediciones
DEUSTO.
- Dennis, T.J. (2007) Working with the Ones You
Love. Relative Solutions.
- Dennis, T.J. (2010) Stweardship in Your Family
Enterprise. Pioneer Imprints.
- Fisch, R. y Schlanger, K (2002) Cambiando lo
incambiable. La terapia breve en casos intimidantes.
Barcelona. Herder.
- Gersick, K.E. y Davis, J.A. (1997): Empresas familiares (generación a generación). McGraw-Hill, México.
- Gimeno, A., Baulenas, G. y Coma-Cros, J. (2009).
Modelos de Empresa Familiar. Ediciones DEUSTO.
Javier Macías
- Grupo Adecco, Creade-LHH (2009) Sólo un 20%
de las ofertas del mercado laboral son visibles. http://
www.adecco.es/_data/NotasPrensa/pdf/145.pdf
- Haley, J. (1980) Terapia no convencional.
Las técnicas de Milton H. Erickson. Buenos Aires.
Amorrortu.
- Haley, J. (1985) Trastornos de la emancipación
juvenil y terapia familiar. Buenos Aires. Amorrortu.
- Kaye, K., (2005) The Dynamics of Family Business.
Building Trust and Resolving Conflict. Iuniverse.
- Kenyon-Rouvinez, D., Gabs (2007) Who, Me?
Family Enterprise Publishers.
- Lansberg, I. (1999): Succeding Generations.
Harvard Business School Press.
- Levinson, D. J., with Darrow, C. N, Klein,
E. B. & Levinson, M. (1978). Seasons of a Man’s Life.
New York: Random House.
- Neubauer, F. Y Lank, A.G. (1999): La Empresa
Familiar: ¿cómo dirigirla para que perdure?. Deusto.
Bilbao.
- Poza, E.J. (2004) Family Business. Thomson
Southwestern.
- Vygotsky, L. S. (1978). Mind in society. Cambridge,
MA: Harvard University Press.
- Aronoff, C.E., Astrachan, J.H., Mendoza, D.S.,
Ward, J.L., (1997) Making Sibiling Teams Work. The
Next Generation. Family Business Publications.
www.forodeempresafamiliar.com
Descargar