UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD LICENCIATURA EN MEDICINA EFECTO SOBRE LA FUNCIÓN RENAL BASAL A LOS 12 Y 24 MESES EN PACIENTES VIH/SIDA QUE RECIBEN TRATAMIENTO ANTIRRETROVIRAL CON TENOFOVIR, LOPINAVIR/RITONAVIR. Hospital Roosevelt, Guatemala, junio 2014. TESIS DE GRADO JOSSELIN TATIANA MORALES ROSSIL CARNET 10689-08 GUATEMALA DE LA ASUNCIÓN, SEPTIEMBRE DE 2014 CAMPUS CENTRAL UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD LICENCIATURA EN MEDICINA EFECTO SOBRE LA FUNCIÓN RENAL BASAL A LOS 12 Y 24 MESES EN PACIENTES VIH/SIDA QUE RECIBEN TRATAMIENTO ANTIRRETROVIRAL CON TENOFOVIR, LOPINAVIR/RITONAVIR. Hospital Roosevelt, Guatemala, junio 2014. TESIS DE GRADO TRABAJO PRESENTADO AL CONSEJO DE LA FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD POR JOSSELIN TATIANA MORALES ROSSIL PREVIO A CONFERÍRSELE EL TÍTULO DE MÉDICA Y CIRUJANA EN EL GRADO ACADÉMICO DE LICENCIADA GUATEMALA DE LA ASUNCIÓN, SEPTIEMBRE DE 2014 CAMPUS CENTRAL AUTORIDADES DE LA UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR RECTOR: P. EDUARDO VALDES BARRIA, S. J. VICERRECTORA ACADÉMICA: DRA. MARTA LUCRECIA MÉNDEZ GONZÁLEZ DE PENEDO VICERRECTOR DE INVESTIGACIÓN Y PROYECCIÓN: DR. CARLOS RAFAEL CABARRÚS PELLECER, S. J. VICERRECTOR DE INTEGRACIÓN UNIVERSITARIA: P. JULIO ENRIQUE MOREIRA CHAVARRÍA, S. J. VICERRECTOR ADMINISTRATIVO: LIC. ARIEL RIVERA IRÍAS SECRETARIA GENERAL: LIC. FABIOLA DE LA LUZ PADILLA BELTRANENA DE LORENZANA AUTORIDADES DE LA FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD DECANO: DR. CLAUDIO AMANDO RAMÍREZ RODRIGUEZ VICEDECANO: MGTR. GUSTAVO ADOLFO ESTRADA GALINDO SECRETARIA: MGTR. SILVIA MARIA CRUZ PÉREZ DE MARÍN DIRECTOR DE CARRERA: MGTR. EDGAR ENRIQUE CHÁVEZ BARILLAS NOMBRE DEL ASESOR DE TRABAJO DE GRADUACIÓN LIC. CARLOS RODOLFO MEJIA VILLATORO TERNA QUE PRACTICÓ LA EVALUACIÓN MGTR. GUSTAVO ADOLFO ESTRADA GALINDO LICDA. JOHANNA DEL ROSARIO MELENDEZ MOLLINEDO LICDA. NANCY VIRGINIA SANDOVAL PAIZ DEDICATORIA A Dios y mis padres por ser mis guías durante este camino, por brindarme la fuerza y el apoyo que necesité. AGRADECIMIENTOS A Dios por acompañarme e iluminarme durante este proceso, por ser mi fuerza día a día para seguir adelante. A mis padres y hermana que estuvieron conmigo siempre, que me apoyaron, ayudaron y motivaron durante estos años impulsándome alcanzar mis metas. A mis abuelitos, especialmente a mi abuelita Graciela de Morales (Q.E.P.D) que aunque ya no está físicamente con nosotros siempre estuvo orgullosa de tener una nieta doctora. A mis amigos que fueron parte importante de este camino, por su apoyo, comprensión, ayuda y paciencia durante estos años. Al doctor Carlos Mejía por asesorarme durante la realización de esta investigación, por facilitarme los procedimientos en el trabajo de campo, por orientarme y apoyarme durante el proceso. Al licenciado André Chocó y al ingeniero Miguel Aguilar por su asesoramiento en la parte estadística de la investigación, por su apoyo y orientación. RESUMEN Antecedentes: Medicamentos como Tenofovir y Lopinavir/Ritonavir son fármacos de elección comprendidos en el tratamiento antirretroviral de pacientes con VIH; actualmente Tenofovir es asociado con alteraciones renales. Objetivo: Determinar la función renal basal y su seguimiento durante 12 y 24 meses en pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral con Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir. Diseño: Estudio longitudinal, cohorte retrospectivo, analítico. Lugar: Clínica de Infectología del Hospital Roosevelt. Material y método: Se revisaron 857 expedientes clínicos de pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento con Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir y un grupo control, la información se recolectó en SPS, se representó con medidas de tendencia central y pruebas no paramétricas como el Test de Kruskal Wallis, Friedman, ji2 y RR. Resultados: De los pacientes incluidos en el estudio el sexo masculino presentó un porcentaje mayor (63%) respecto al sexo femenino (37%). El 52% de los pacientes se encontraban en estadio C3 según el CDC, el 68% presentó FG basales normales, a los 12 y 24 meses dicho porcentaje aumentó al 86%; el 12% presentó disminución leve del FG. La edad, TARAA y la carga viral basal son factores causales de alteraciones en el FG con diferencias estadísticamente significativas. Limitaciones: Disponibilidad de expedientes, estado de pacientes y seguimiento de 24 meses. Conclusiones: La utilización de Tenofovir no tiene relación estadísticamente significativa con la tasa de FG de los pacientes VIH/SIDA, en el seguimiento hasta los 24 meses, y la asociación con Lopinavir/Ritonavir no aumenta el riesgo de alteración renal. Palabras clave: VIH: Virus de inmunodeficiencia humana, SIDA: Síndrome de inmunodeficiencia adquirido, TARAA: tratamiento antirretroviral altamente activo, FG: Filtrado glomerular, RR: riesgo relativo. ÍNDICE 1. Introducción ................................................................................................ 01 2. Marco teórico.............................................................................................. 02 VIH/SIDA 2.1.1 Antecedentes históricos ............................................................. 02 2.1.2 Características generales del VIH .............................................. 02 2.1.3 Taxonomia .................................................................................. 02 2.1.4 Estructura .................................................................................. 02 2.1.5 Ciclo biológico del VIH ............................................................... 03 2.1.6 Genoma del VIH ........................................................................ 03 2.1.7 Heterogenicidad molecular del VIH ............................................ 03 2.1.8 Fisiopatología y patogenia ......................................................... 04 2.1.9 Diagnóstico de la infección por VIH ........................................... 05 2.1.10 Manifestaciones clínicas .......................................................... 06 Síndrome agudo por VIH .................................................... 06 Estadio asintomático: latencia clínica .................................. 06 Enfermedad sintómatica ..................................................... 07 Enfermedades del aparato respiratorio ............................... 07 Enfermedades del aparato cardiovascular ......................... 08 Enfermedades de la bucofaringe y del aparto digestivo ..... 08 Enfermedades del riñón y del aparato genitourinario ......... 09 Enfermedades del sistema hematopoyético ....................... 10 Trastornos dermatológicos ................................................. 10 Enfermedades neurológicas ............................................... 11 2.2 Síndrome inflamatorio de reconstitución inmune (IRIS) ................ 12 2.2.1 Epidemiología ............................................................................ 13 2.2.2 Inmunopatogenia ....................................................................... 14 2.2.3 Cuadro clínico ....................................................................... 14-15 2.2.4 Manifestación infecciosas y no infecciosas ................................ 16 2.2.5 Tratamiento ................................................................................ 16 2.3 Clasificación clínica e inmunológica de pacientes con VIH ........... 17 2.4 Clasificación clínica de la infección por VIH .................................. 18 2.5 Medicamentos antirretrovirales ..................................................... 19 2.5.1 Objetivos de la terapia antirretroviral .................................... 20-21 2.5.2 Inhibidores de la transcripatasa inversa analógos de nucleósidos y nucleótidos (ITIAN) ............................................................................. 22 2.5.3 Inhibidores de la transcriptasa inversa no análogos de nucleósidos y nucleótidos (ITINN) ............................................................................. 23 2.5.4 Inhibidores de la proteasa ..................................................... 24-25 2.5.5 Inhibidores de la fusión .............................................................. 26 2.5.6 Antagonistas de los correceptores CCR5 .................................. 26 2.5.7.Inhibidores de la integrasa ......................................................... 26 2.6 Esquema de primera línea ............................................................ 27 2.7 Criterios de fracasa terapéutico del esquema de primera línea .... 28 2.8 Esquema de segunda línea .......................................................... 29 2.9 Esquema de tercera línea ........................................................ 30-31 2.10 Nefropatía por antirretrovirales ................................................... 32 2.11 Valoración de la función renal ................................................ 33-35 2.12 Tenofovir ..................................................................................... 36 2.12.1 Farmacocinética ....................................................................... 36 2.12.1.1 Absorción .............................................................................. 36 2.12.1.2 Distribución ........................................................................... 37 2.12.1.3 Eliminación ............................................................................ 37 2.12.1.4 Dosificación ........................................................................... 38 2.13 Lopinavir /Ritonavir ..................................................................... 38 3. Objetivos ................................................................................................... 39 4. Hipótesis .................................................................................................... 40 5. Metodología 5.1 Diseño del estudio .............................................................................. 40 5.2 Unidad de muestro ............................................................................. 40 5.3 Unidad de análisis .............................................................................. 41 5.4 Muestra .............................................................................................. 41 5.5 Tipo de muestra ................................................................................. 42 5.6 Marco muestral .................................................................................. 42 5.7 Plan de muestreo ............................................................................... 42 6. Criterios de inclusión y exclusión 6.1 Criterios de inclusión .......................................................................... 42 6.2 Criterios de exclusión ......................................................................... 43 7. Definición y operacionalización de variables ............................................. 43 7.1 Conceptualización y operacionalización de variables ................... 44 8. Instrumento ............................................................................................... 45 9. Plan de procesamiento y análisis de datos ............................................... 46 10. Procedimiento ......................................................................................... 48 11. Alcances y límites 11.1 Alcance ....................................................................................... 49 11.2 Límites ........................................................................................ 50 12. Aspectos éticos de la investigación ......................................................... 51 13. Resultados ......................................................................................... 52-68 14. Análisis de resultados ......................................................................... 69-72 15. Conclusiones ........................................................................................... 73 16. Recomendaciones ................................................................................... 74 17. Bibliografía ......................................................................................... 75.76 18. Anexos ............................................................................................... 77-78 INTRODUCCIÓN La infección por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) continúa en expansión, considerándose aproximadamente 26.978 personas diagnosticadas con VIH según el Centro Nacional de Epidemiología, del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social. Sin embargo, las estimaciones y proyecciones de VIH para el año 2012 indican que son más de 72.400 las personas con VIH en el país. Esto coloca a Guatemala en el país de Centroamérica con mayor número de personas con VIH(12). Por esto la importancia del acceso temprano al tratamiento ya que no sólo mejora la calidad de vida de las personas con VIH, sino que permite reducir hasta en un 96% las probabilidades de transmisión del virus(12).. Los medicamentos como Tenofovir, Lopinavir/ Ritonavir son algunos de los fármacos de elección comprendidos en el esquema del tratamiento antirretroviral altamente activo (TARAA) que se utiliza en pacientes afectados por el virus de inmunodeficiencia humana, los cuales tienen como objetivo mantener una carga viral indetectable y reducir la morbi-mortalidad asociada a la enfermedad. Algunos de los efectos adversos de los antirretrovirales incluyen alteraciones renales, hepáticas, óseas, hematológicas, lipidicas, etc debido a la toxicidad que producen estos fármacos, aumentando así el riesgo de morbilidad en estos pacientes. Según un estudio suizo realizado en el año 2001, un 47% de los pacientes tratados sufren efectos clínicos adversos, un 27% alteraciones de laboratorio, siendo el 9 y el 16% de ellos respectivamente de grado importante. La toxicidad es la primera causa de interrupción y modificación del TARAA. Se han realizado estudios donde Tenofovir ha sido asociado a alteraciones de la función renal, causando generalmente tubulopatía proximal (Síndrome de Fanconi; hipopotasemia, hipofosfatemia, acidosis metabólica, proteinuria, glucosuria, calciuria) y consecuentemente a esto insuficiencia renal aguda que puede progresar a crónica en pacientes con VIH/SIDA (3). Lopinavir/Ritonavir como otros inhibidores de la proteasa no se han asociado directamente con alteraciones de la función renal sin embargo se considera que dichos fármacos incrementan los niveles plasmáticos de Tenofovir; por consiguiente es posible establecer que la asociación de Lopinavir/Ritonavir asociado a Tenofovir provoca mayor alteración en la función renal de los pacientes con VIH/SIDA(1). El presente estudio pretende investigar el efecto sobre la función renal basal, a los 12 y 24 meses en pacientes con VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral altamente activo con Tenofovir, Lopinavir /Ritonavir que acudieron a la clínica de infectología del Hospital Roosevelt durante los años 2008-2010. 1 2. Marco teórico 2.1 VIH/SIDA 2.1.1 Antecedente históricos El SIDA fue identificado por primera vez en Estados Unidos en 1981 cuando los US Centers for Disase Control and Prevention (CDC) reportaron la aparición de neumonía inexplicada por Pneumocystis jiroveci en varones homosexuales y casos de Sarcoma de Kaposi. En pocos meses la enfermedad comenzó a describirse en varones y mujeres adictos a drogas por vía parenteral y posteriormente en receptores de transfusiones sanguíneas. En 1983 se aisló el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) a partir de un paciente con adenopatía linfática y en 1984 se demostró que dicho virus era el agente causal del SIDA. (1) El sistema de clasificación actual del CDC para adolescentes y adultos infectados con VIH incluye a personas con base en las enfermedades asociadas con la infección con VIH y los recuentos de linfocitos T CD4.(1) 2.1.2 Característica generales del VIH 2.1.3 Taxonomía El VIH 1 y VIH 2 pertenecen a la familia Retroviridae, subfamilia lentivirus y son los únicos lentivirus de los que se sabe infectan a los seres humanos. La causa más frecuente de enfermedad por el VIH en todo el mundo es el VIH1, que comprende varios subtipos con distinta distribución geográfica. El VIH2 tiene una relación filogenética más estrecha con el virus de inmunodeficiencia de simio. (1) 2.1.4 Estructura El virión del VIH es una estructura icosaédrica, formado por dos proteínas principales de cubierta, la gp 120 externa y la gp 41 transmembrana. El virión se incorpora a diferentes proteínas del hospedador, entre las que se encuentran los antígenos del complejo mayor de histocompatibilidad I y II. (1) 2 2.1.5 Ciclo biológico del VIH El VIH es un virus ARN cuya característica esencial es la transcripción inversa de su ARN genómico a ADN por la función de la transcriptasa inversa. El ciclo comienza con la unión de alta afinidad de la proteína gp 120 cerca del N-terminal, a su receptor la superficie de la célula hospedadora, la molécula CD4. (1) La molécula CD4 es la proteína de 55 kDa que se encuentra predominantemente en los linfocitos T, pero también se puede expresar en la superficie de los macrófagos/monocitos, células dendríticas y de Langergans. (1) Una vez la gp120 se fija a la molécula CD4 experimenta un cambio de configuración que facilita su fijación al correceptor CCR5 y CXCR4, posteriormente ocurre la fusión con la membrana de las células del hospedador a través de una nueva exposición a la molécula gp41 la cual penetra a la membrana plasmática de la célula y se enrolla sobre si misma para mantener unidos al virión y a la célula afectada, ocurre una fusión del ARN vírico y de enzimas víricas y el citoplasma de la célula afectada, debido a esto la enzima transcriptasa inversa cataliza la transcripción inversa del ARN genómico en ADN y la cubierta proteínica se abre para liberar el ADN de VIH de doble hebra. El ADN se integra a los cromosomas de la célula hospedadora por acción de la enzima vírica codificada integrasa, por ello el provirus puede permanecer inactivo desde el punto de vista de transcripción latente o manifestarse en grados variables de expresión genética, hasta la producción activa del virus. (1) 2.1.6 Genoma del VIH VIH1 disponen de genes que codifican sus proteínas estructurales: gag codifica las proteínas que forman el centro del virión (antígeno p24), pol que codifica enzimas encargadas de la transcripción inversa y de integración y env codifica las glucoproteínas de la cubierta. (1) 2.1.7 Heterogenicidad molecular del VIH1 Son tres los grupos del VIH1 el grupo M (mayor) que es el causante de la mayor parte de las infecciones en el mundo. 3 El grupo O (atípico), forma vírica raro que se encuentra en Francia, Camerún y grupo N que se encuentra generalmente en mujeres de Camerún que manifestaban SIDA. El grupo M comprende nueve subtipos designados como A, B, C, D, F, G, H, J y K.(1) 2.1.8 Fisiopatología y patogenia La enfermedad causada por el VIH es la profunda inmunodeficiencia que se deriva de un déficit progresivo, cuantitativo y cualitativo de la subpoblación de linfocitos T, la principal célula receptora del VIH.(4) La interacción inicial se produce entre gp120 y CD4 que inducen una serie de cambios conformacionales que exponen el dominio V3 y regiones adyacentes que forman el dominio de unión de la gp120 a los receptores de quimiocinas. Una segunda interacción induce nuevos cambios en la estructura de la gp41 que expone en la región N-terminal un dominio altamente hidrofóbico que se ancla en la membrana plasmática.(4) Esta estructura inestable genera un movimiento de unión de los dominios heptaméricos de la gp41 y durante este proceso de cierre o plegamiento la membrana plasmática y viral se aproximan y fusionan. El VIH utiliza dos correceptores fundamentales para la fusión y la entrada, estos correceptores también son receptores fundamentales para ciertas citocinas de atracción química los dos fundamentales del VIH son CCR5 y CXCR4.(4) El proceso de síntesis de ADN a partir del ARN viral o retrotranscripción es realizado por el complejo enzimático de la transcriptasa inversa. Sin embargo, en un linfocito «en reposo» la retrotranscripción se produce de forma incompleta y es necesario «activar» la célula infectada para que finalice, ya que este proceso depende de los niveles de nucleótidos y la acción de factores celulares que se inducen en el curso de los procesos de activación y proliferación celular. Si la activación no se produce, el ARN y el ADN incompletamente retrotranscritos son degradados entre 3 y 15 días por las nucleasas celulares.(4) Una vez sintetizado, el ADN proviral se acopla a una serie de factores celulares y virales (Vpr) formando el complejo de preintegración. Este complejo es transportado al núcleo, donde se integra en el genoma del hospedador, constituyendo la forma proviral del VIH. El ADN no integrado representa el 90% del ADN viral existente en linfocitos circulantes y en su forma lineal constituye un reservorio susceptible de integración si la célula es adecuadamente activada.(4) 4 Una vez fusionadas las membranas viral y celular, se produce la internalización de la nucleocápside y la decapsidación del genoma vírico. En este proceso, las proteínas de la cápside se desensamblan y liberan el genoma viral. A partir del estado de integración, el VIH puede permanecer latente, replicarse de forma controlada o experimentar una replicación masiva con el consiguiente efecto citopático sobre la célula infectada. A partir del estado de provirus integrado, la replicación del VIH comienza mediante la transcripción del genoma viral. La parte inicial de este proceso, denominada iniciación de la transcripción, depende de factores celulares y se produce en ausencia de proteínas virales. El principal factor celular que interviene en el paso de la fase de latencia viral a la de reactivación es NF-κB, una familia de proteínas que regulan la expresión de múltiples genes celulares que participan en los procesos de reconocimiento y activación inmunitarios. Este factor no existe en forma activa en los linfocitos CD4 en estado de reposo y es inducido en el curso de los procesos de activación inmunológica. Una vez iniciada la síntesis del ARN viral, la expresión de la proteína viral Tat aumenta la tasa de transcripción del genoma del VIH y permite la elongación completa del ARN viral. El ARNm del VIH se sintetiza en forma de un único transcrito que debe ser transportado al citosol y procesado en ARN de distinto tamaño. Procesamiento y transporte, son regulados por la proteína viral, Rev, que tiene una localización preferentemente nuclear.(4) La maduración final de los viriones y el ensamblaje correcto de las proteínas virales se produce durante el proceso de gemación a través de la membrana celular mediante la acción de la proteasa viral que procesa las poliproteínas gag y gag-pol y permite formar partículas virales maduras. Una vez que se produce la gemación de los viriones, éstos son liberados al espacio extracelular gracias al bloqueo de una proteína de membrana, la tetherina que actúa como un «secuestrador» de viriones en la membrana celular. La proteína Vpu del VIH-1 disminuye la expresión de los niveles de tetherina en la superficie celular permitiendo así la liberación de los viriones al medio extracelular.(4) 2.1.9 Diagnóstico de la infección por VIH El diagnóstico se basa en la detección de los anticuerpos Anti-VIH, en la detección directa del VIH o de alguno de sus componentes, o ambos. Los anticuerpos anti-VIH suelen aparecer en la circulación entre 2 y 12 semanas después de la infección. 5 La prueba convencional de detección sistemática de VIH es la prueba de inmunoabsorción ligada a enzimas (ELISA) con una sensibilidad mayor al 99%. Los resultados de las pruebas de ELISA suelen expresarse como positivo si hubo una reacción intensa, negativos si hubo una reacción nula o indeterminados reacción parcial. La prueba de confirmación más usada es la imunotransferencia, ya que identifica antígenos del VIH con diferentes pesos moleculares, además, detecta la existencia de anticuerpos contra los tres genes principales del VIH (gag, pol y env) por lo que es una prueba concluyente de infección por VIH. (1) 2.1.10 Manifestaciones clínicas Síndrome agudo por VIH Se estima que del 50-70% de los individuos con infección por el VIH padecen de un síndrome clínico agudo 3 a 6 semanas después de la infección primaria caracterizada por fiebre, erupción cutánea, faringitis y mialgias. (1) El síndrome agudo por VIH se acompaña de varios trastornos inmunitarios como las alteraciones del número de poblaciones linfocitarias circulantes, al principio disminuyen el número total de linfocitos y todas las poblaciones de linfocitos T (CD4 y CD8). Posteriormente aparece una inversión del cociente CD4/CD8 debido a la elevación de las células TCD8, el número total de linfocitos CD8 circulantes puede mantenerse elevado o volver a la normalidad sin embargo los niveles de CD4 suelen permanecer disminuidos. (1) Estadio asintomático: latencia clínica Este periodo dura aproximadamente 10 años para los pacientes no tratados, los pacientes que tiene niveles elevados de ARN vírico progresan a la enfermedad sintomática con mayor rapidez que aquellos con niveles bajos, algunas personas se denominan sin progresión a largo plazo ya que tiene un escaso o nulo descenso de número de linfocitos CD4 durante un periodo prolongado. Los individuos permanecen totalmente asintomáticos a pesar de que sus células CD4 desciendan a cifras extraordinariamente bajas, las cifras de linfocitos CD4 descienden en forma progresiva durante este periodo asintomático a una velocidad aproximada de 50 células/ml al año. (1) 6 Enfermedad sintomática Las complicaciones más graves y potencialmente letales de la infección por el VIH aparecen en los pacientes con recuentos por debajo de 200 células. El diagnóstico de SIDA se establece en todo aquel que presenta una infección por el VIH y un recuento de linfocitos CD4 menor de 200 y en cualquiera con infección por el VIH que adquiere una de las enfermedades asociadas. Menos del 50% de las muertes en pacientes con SIDA son consecuencia directa de las enfermedades que definen al SIDA, el promedio de células CD4 en pacientes infectados con VIH al momento de la muerte se encuentra arriba de 300 células. (1) Enfermedad del aparato respiratorio Bronquitis aguda y sinusitis las cuales pueden presentarse durante todas las fases de la infección por VIH las cuales pueden secundarias a infecciones por Haemophilus influenzae y Streptococcus pneumoniae. La incidencia de neumonía neumococica es 6 veces superior y la incidencia de bacteriemia por neumococos es 100 veces superior que en las personas sanas. La incidencia de neumonía por Pneumocystis es común pero actualmente ha disminuido por terapia antirretroviral, sin embargo, el 79% de los pacientes con Pneumocystis tiene un recuento de CD4 menor de 100 y presentan síntomas como fiebre recurrente, sudoración nocturna, pérdida de peso, tos no productiva o con expectoración blanquecina, dolor retroesternal. En la gasometría arterial puede identificarse hipoxemia con un descenso de la PaO2 y un aumento del gradiente arterial-alveolar por lo que está indicado tratamiento profiláxico contra Pneumocystis con Trimetoprim(1) Sulfametoxazol. La infección por VIH aumenta el riesgo de tuberculosis activa, en los enfermos por infección de VIH no tratada y una prueba de PPD positiva, generalmente tienen una reactivación anual entre el 7 y 10%. La tuberculosis activa es más frecuente al aparecer en los pacientes de 25 a 44 años los pacientes pueden presentar fiebre, tos disnea, diaforesis, pérdida de peso y lesión apical cavitada en la radiografía de tórax. Aproximadamente del 60 al 80% de los enfermos contrae tuberculosis pulmonar y 30 a 40% sufren tuberculosis extrapulmonar. Las infecciones por micobacterias atípicas aumentan en los pacientes infectados por VIH las más frecuentes M. avium o especies M. intracellulare.(1) 7 Las aspergilosis invasora no es una enfermedad que define al SIDA y habitualmente no se observan en estos pacientes, si estos no presentan neutropenia o no están recibiendo glucocorticoides. Las histoplasmosis puede presentarse como una infección pulmonar primaria pero puede causar infección diseminada debido a una reactivación, los pacientes pueden presentar tos y disnea y el 50% presentan alteraciones en la radiografía de tórax que se caracteriza por infiltrado intersticial difuso o pequeños nódulos. (1) Enfermedades del aparato cardiovascular La alteración clínica más frecuente es miocardiopatía dilatada con insuficiencia cardíaca congestiva, es una complicación tardía de la infección por VIH e histológicamente se asemeja a la miocarditis, se caracteriza por edema y disnea. El Sarcoma de Kaposi la enfermedad de Chagas, la Criptocococis y la Toxoplasmosis pueden afectar el miocardio provocando miocardiopatia. En casos de infección avanzada se pueden encontrar derrames pericárdicos que tiene como factores predisponentes, tuberculosis, insuficiencia cardiaca congestiva, infección pulmonar y linfoma, la pericarditis se presenta solo 5% en los pacientes con VIH.(1) Enfermedades de la bucofaringe y el aparato digestivo Lesiones como la candidiosis, leucoplasia vellosa (causada por virus de Epstein Barr) y las ulceras aftosas son frecuentes en la infección por VIH. La candidiosis aparece como un exudado blanco caseoso situado sobre la mucosa eritematosa en la porción posterior de la bucofaringe y paladar blando. La leucoplasia vellosa bucal se manifiesta por una lesión blanca filamentosa, situada en los bordes laterales de la lengua. Algunas ulceras gingivales del paladar de la lengua pueden asociarse a criptococo o histoplasmosis. La esofagitis puede manifestarse por odinofagia y dolor retroesternal y puede ser causada por Candida, Citomegalovirus o Herpes simple. Las infecciones por enterobacterias como Salmonella, Shigella y Campylobacter son más frecuentes en los varones homosexuales y a menudo más graves y con más posibilidades de recaída en los pacientes infectados por VIH. Cryptosporidium, Mycrosporidium e Isospora belli son los protozoos oportunistas que con más frecuencia afectan las vías gastrointestinales y producen diarrea. 8 Las colitis por Citomegalovirus son consecuencia de la inmunodeficiencia avanzada en el 5 a 10% de los pacientes con SIDA se manifiestan por dolor abdominal, fiebre, pérdida de peso y anorexia. Las lesiones del recto son frecuentes en los enfermos por VIH sobretodo las úlceras y las lesión peri rectales secundarias a una reactivación del herpes simple. (1) Enfermedades hepatobiliares El 90% de los pacientes infectados por VIH tiene evidencia de infección por el virus de la hepatitis B (HBV). Del 5 al 50% de los pacientes tiene co-infección con el virus de la hepatitis C (HVC), esto se asocia con un aumento triple del desarrollo de antigenemia de superficie de la hepatitis B persistente. Se identificó que la asociación de HBV y VIH incrementó de 4 a 10 veces la mortalidad por hepatopatía en comparación con los individuos que solo tenían cualquiera de estas infecciones. Los niveles de HVC se encuentran casi 10 veces por arriba que en los pacientes negativos para VIH y existe un aumento de 10 veces en el riesgo de muerte por hepatopatía en pacientes con co-infección. Se describen casos de enfermedad en conducto biliar y colangitis esclerosante por Cryptosporidium, Citomegalovirus y Sarcoma de Kaposi.(1) Enfermedad del riñón y aparato genitourinario Dichas enfermedades son consecuencia directa de infección por el VIH, la proteinuria es el dato más característico del trastorno renal, histológicamente presentan glomeruloesclerosis segmentaria focal en el 80% de los casos y proliferación mensangial en el 10 al 15 % de los casos.(1) También ha aumentado la incidencia de enfermedad renal por antirretrovirales como: Adefovir, Cidofovir y Tenofovir, y otros medicamentos como Anfotericina y Trimetoprim. Las infecciones del aparato genitourinario se manifiestan por disuria, hematuria, piuria. Es común encontrar infecciones por Treponema pallidium el agente etiológico de la Sífilis caracterizado por ulceras y chancros blandos. La forma más frecuente de presentación son los condilomas planos, una forma de sífilis secundaria. La candidiosis bulvovaginal puede presentarse con prurito, molestias vaginales, dispareunia y disuria. (1) 9 Enfermedades del sistema hematopoyético Los trastornos como las linfadenopatias, la anemia, leucopenia y trombocitopenia son frecuentes a lo largo de la evolución de la infección por el VIH y pueden ser una consecuencia directa del virus. Algunos pacientes pueden presentar linfadenopatía generalizada persistente que se define por la presencia de ganglios linfáticos aumentados de tamaño (>1cm) en dos o más localizaciones extrainguinales durante más de tres meses y sin causa evidente. Las adenopatías se deben a la intensa hiperplasia folicular que aparece en el ganglio en respuesta a la infección y suelen consistir en ganglios independientes y móviles, el diagnóstico diferencial debe abarcar linfomas, infección por micobacterias, Toxoplasmosis.(1) La anemia es la anomalía más común entre sus causas se encuentran toxicidad farmacológica, infecciones fúngicas y micobacterias sistémicas, carencias nutricionales e infecciones por parvovirus B-19. La Zidovudina puede bloquear la maduración eritroide antes de ejercer sus efectos sobre otros elementos de la medula ósea. La elevación del volumen corpuscular medio (VCM) es característica de este tratamiento.(1) Los niveles de vitamina B-12 pueden disminuir en los enfermos con SIDA probablemente como consecuencia de la acloridia prolongada y la mal absorción. La neutropenia ocurre aproximadamente en la mitad de los pacientes con VIH y puede observarse en pacientes infectados con aspergilosis o mucormicosis, cerca del 3% de los pacientes infectados tiene recuentos de plaquetas menores a 150,000 debido a que en la superficie de las plaquetas de los individuos con infección por VIH se han encontrado inmunocomplejos que contienen anticuerpos anti-gp120, asociado a un efecto directo de VIH sobre los megacariocitos(1). Trastornos dermatológicos Aparecen en más del 90% de los pacientes infectados por VIH entre ellos se encuentran el exantema maculoso, la dermatitis seborreica, la foliculitis pustulosa eosinofílica, vasculitis necrosante, la reactivación del herpes zoster que ocurre en un 10 al 20% la cual suele ser la primera manifestación clínica de inmunodeficiencia.(1) 10 El virus herpes simple también puede provocar lesiones buco-labiales, genitales y perianales, recurrentes como parte de los síndromes de reactivación, las lesiones suelen tener un color rojo fuerte, son dolorosas también pueden provocar vesículas o erosiones extensas. Es importante considerar también las erupciones cutáneas difusas causadas por el molusco contagioso, los condilomas acuminados, la eritrodermia y síndrome de Steven-Johnson pueden ocurrir debido a reacciones medicamentosas especialmente con las sulfamidas y los inhibidores de la transcriptasa inversa no análogos de nucleósidos.(1) Enfermedades neurológicas Entre las enfermedades oportunistas que afectan el sistema nerviosos central se encuentra la toxoplasmosis, la criptococosis, la leucoencefalopatia multifocal progresiva y los linfomas primarios del sistema nervioso central (SNC). (1) Las lesiones del SNC pueden resultado de la infección vírica de los macrófagos o de las células gliales del SNC, o pueden ser secundarias a la liberación de neurotoxinas y citocinas potencialmente neurotóxicas como en la interleucina 1 (IL-1), interleucina 6 (IL-5) y factor de necrosis tumoral alfa (FNT).(1) Cryptococcus neoformans es la etiología infecciosa de meningitis en pacientes con SIDA se presenta como fiebre, nausea, vomito, trastornos mentales, cefalea y signos meníngeos. La encefalopatía por VIH llamada también demencia relacionada con el VIH, puede observarse en pacientes que tiene más de 350 CD4 y se define como una disminución de la capacidad cognitiva con respecto a su nivel anterior, puede manifestarse con deterioro de la capacidad de concentrarse, mayor tendencia al olvido, dislexia o incapacidad para cumplir tareas complejas, entre los problemas motores son la marcha insegura dificultades para mantener el equilibrio y asincronía de movimientos; la encefalopatía por el VIH es la primera enfermedad definitoria de SIDA.(1) Toxoplasmosis, es una de las causas más frecuentes secundarias del SNC en pacientes con SIDA representa un síndrome de reactivación y consiste en fiebre, cefalea y defectos neurológicos focales como, convulsión, hemiparesia, afasia, confusión y demencia.(1) 11 Poliomavirus JC, es el agente etiológico de la leucoencefalopatia multifocal progresiva, se caracteriza por ser una enfermedad desmielinizante que comenta en forma de pequeños focos y que puede afectar hemisferios cerebrales, cerebelo y tronco encefálico; puede presentarse con manifestaciones como, convulsiones, ataxia, hemiparesia afasia y déficit sensitivo.(1) Enfermedades neoplásicas Las más comunes son Sarcoma de Kaposi y linfoma no Hodgkin. El Sarcoma de Kaposi es una neoplasia multicéntrica formada por varios nódulos vasculares, que aparecen el piel, mucosas y vísceras, se caracteriza por equimosis, maculas elevadas, linfaedema circundante y un cambio de coloración de la mucosa bucal; aparte de la piel, los ganglios linfáticos, las vías gastrointestinales y los pulmones son los órganos más afectados por el Sarcoma de Kaposi.(1) 2.2 Síndrome inflamatorio de reconstitución inmune (IRIS) El síndrome inflamatorio de reconstitución inmune (SIRI o IRIS por sus siglas en inglés), es llamado también síndrome de reconstitución inmune, enfermedad de inmunorestitución o enfermedad de restauración inmune.(5) La Organización Mundial de la Salud lo define como un grupo de signos y síntomas que resultan de la capacidad de presentar una respuesta inmune a antígenos y organismos infecciosos asociados con la recuperación inmune y “El Glosario de Términos Relacionados con VIH/SIDA del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EUA”, lo define como una reacción inflamatoria que puede ocurrir cuando el sistema inmune mejora al iniciar el tratamiento antirretroviral y experimenta una elevación en el conteo de linfocitos CD4.(5) Fue reconocido en la década de los 90 cuando se introdujo el uso de la Zidovudina, y asociado principalmente con el complejo Mycobacterium avium. El número de reportes aumentó a finales de la misma década con el advenimiento de la terapia antirretroviral altamente activa (TARAA).(5) 12 El IRIS puede presentarse cuando un paciente: Ha sido tratado previamente por una infección oportunista que ya se había curado antes de recibir tratamiento antirretroviral. Al inicio de la terapia antirretroviral y cuando se hace manifiesta una infección oportunista subclínica. Si el paciente está bajo tratamiento para una infección oportunista y se agrava al iniciar la terapia antirretroviral. 2.2.1 Epidemiología La incidencia es del 10 al 25% en todos los pacientes que inician la terapia antirretroviral, incluyendo a los que pertenece la edad pediátrica, y hasta en el 45% de quienes son diagnosticados con una infección oportunista. Se observa con más frecuencia cuando el conteo de linfocitos CD4+ es bajo (<50 cel/mm3), cuando la recuperación en dicho conteo es más rápido, con una disminución de >1 log10 de la carga viral, o con conteos elevados de linfocitos CD8+ y niveles bajos de hemoglobina. Las manifestaciones del IRIS en la piel ocurren en promedio en un 50%.(5) 2.2.2 Inmunopatogenia Es desconocida, sin embargo se observa con más frecuencia cuando los conteos de CD4+ antes del inicio de la terapia antirretroviral son bajos (<50 cel/mm3), y cuando la recuperación en la cifra de los mismos y la disminución en los niveles de la carga viral son rápidas.(5) La elevación inicial de los linfocitos CD4+ refleja predominantemente una redistribución de las células de memoria (CD45RO-positivos) en el tejido linfoide, que va seguida de una restauración más gradual de células primitivas (CD45RApositivas), producidas en el timo.(5) La IL6 se encuentra elevada en el IRIS, y el antígeno CD30 soluble está incrementado cuando el IRIS está relacionado con Citomegalovirus; se considera también que la reacción es desencadenada por la presencia de antígenos residuales de infecciones oportunistas preexistentes o activas, o bien por una producción elevada de los mismos durante la destrucción masiva de los microorganismos presentes. 13 Otra hipótesis es que hay una producción elevada de citocinas proinflamatorias o una alteración en su regulación. También está relacionado con una recuperación en capacidad de producir granulomas o en la respuesta inmune retardada. Finalmente se han encontrado algunos tipos de HLA que se supone que regulan la expresión de las citocinas, o bien que predisponen de manera general a una recuperación rápida e intensa de la respuesta inmune.(5) 2.2.3 Cuadro clínico Las manifestaciones aparecen de 2 a 12 semanas después del inicio de la terapia antirretroviral, aunque esto puede ocurrir hasta un año después, y su duración es de semanas a meses. La mayoría de los casos son leves y se resuelven espontáneamente, pero algunos son graves e inclusive pueden causar la muerte.(5) En general las manifestaciones consisten en un agravamiento paradójico del estado clínico y lesiones con una respuesta inflamatoria exagerada y agrandamiento de las mismas, generalmente acompañadas de fiebre.(5) Las lesiones pueden ser nuevas, como en las infecciones oportunistas subclínicas, agravarse si ya estaban presentes, o recaer si estaban aparentemente curadas; pueden ser localizadas o diseminadas, en cuyo caso puede haber daño orgánico severo. Las manifestaciones varían considerablemente, dependiendo del agente infeccioso implicado, y de los órganos diana blanco. En los casos con afección sistémica con más frecuencia se relacionan con los siguientes microorganismos: M. avium. Las manifestaciones consisten en: fiebre, dolor abdominal, fatiga, pérdida de peso, linfadenopatía sintomática, nódulos subcutáneos, sudoración nocturna, diarrea, náuseas, vómito y erupciones cutáneas. Los sitios afectados más frecuentes son ganglios linfáticos, tanto periféricos como abdominales; aparato gastrointestinal e hígado y médula ósea.(5) M. tuberculosis. El IRIS se presenta hasta en el 12% de los pacientes que tienen coinfección con VIH y tuberculosis. La manifestación más frecuente es un crecimiento de los ganglios linfáticos (mediastínicos o periféricos), alteraciones radiográficas mayores a las preexistentes, artritis y osteomielitis, afección del sistema nervioso central, fiebre; y cambios cutáneos.(5) 14 Citomegalovirus. Las alteraciones más frecuentes se observan en las diferentes estructuras del globo ocular (retinitis, uveítis, vitreítis), también es frecuente la afección del sistema nervioso central (ventriculoencefalitis) y se han informado casos con polirradiculoneuropatía ascendente.(5) Herpes simple 1 y 2. Aun no existe una definición de caso de herpes simple relacionado con IRIS, pero se cree que existe un incremento en la frecuencia y la gravedad de los episodios, principalmente de localización anogenital; las lesiones pueden ser extensas, erosivas, hemorrágicas y asociarse con fiebre y puede haber resistencia al tratamiento para herpes. (5) Sarcoma de Kaposi. Las manifestaciones asociadas a IRIS consiste en aparición de nuevas lesiones, inflamación o agrandamiento de lesiones preexistentes, desarrollo de linfaedema. Las manifestaciones pueden ser mucocutáneas o viscerales. Se cree que su relación con el IRIS se debe a la disminución de la carga viral. (5) Los síntomas y signos presentes de daño en el sistema nervioso central en IRIS son inespecíficos y pueden incluir: debilidad, palidez, alteraciones sensoriales, disnea, confusión, disartria, cefalea, ataxia, y alteraciones cognoscitivas en el habla y la marcha.(5) El Poliomavirus BK puede causar daño orgánico múltiple y Poliomavirus JC puede asociarse a leucoencefalopatía multifocal progresiva, ambos producen alteraciones graves e incluso la muerte cuando están relacionados con el IRIS.(5) Las infecciones micóticas asociadas con más frecuencia son las causadas por Cryptococcus neoformans e Histoplasma capsulatum; también hay casos aislados por Pneumocystis jiroveci e inclusive Penicillium marnefei. Es importante mencionar que las manifestaciones clínicas pueden ser atípicas y que pueden invadir el sistema nervioso central, como Cryptococcus que causa meningoencefalitis recurrentes y pueden aparecer sin historia previa de criptococosis.(5) Las alteraciones orales debidas a la infección por VIH/SIDA han disminuido hasta en un 30% gracias a la utilización de la terapia altamente activa, pero diferentes autores consideran que el incremento observado en el número de infecciones por el virus del palpiloma humano, así como algunas enfermedades salivares, como el síndrome de linfocitosis infiltrativa difusa, son manifestaciones del IRIS. 15 Ya que se reconoce un aumento de hasta 6 veces de la incidencia de verrugas orales secundario a la restauración de la inmunidad mediada por células, resultante de una respuesta inflamatoria dirigida contra una infección latente por papiloma virus.(5) 2.2.4 Manifestaciones infecciosas y no infecciosas del IRIS Tabla 1 Manifestaciones infecciosas y no infecciosas del IRIS INFECCIOSAS Virales Herpes simple Herpes zoster Herpes asociado a Sarcoma de Kaposi Citomegalovirus Virus del papiloma humano Molusco contagioso Hepatitis B y C Leucoencefalitis multifocal progresiva Parvovirus Poliomavirus BK y JC NO INFECCIOSAS Artritis Reumatoide Lupus eritematoso sistémico Enfermedad de Graves Enfermedad tiroidea autoinmune Sarcoidosis Síndrome de Guillain Barré Sinusitis Foliculitis eosinofilica Acné Micobacterias Micobacterias tuberculosis Complejo M. avium Hongos Cryptococcus neoformans Pneumocystis jirovechi Histoplasma capsulatum Candida sp Parásitos Toxoplasma gondii Leishmania sp Stongilioides stercoralis 2.2.5 Tratamiento Es difícil definir un caso de IRIS, y debido a que las manifestaciones del mismo pueden ser muy variadas, las opciones de tratamiento son múltiples. Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud ha emitido las siguientes recomendaciones generales: 16 Continuar con la terapia antirretroviral. Tratar las infecciones oportunistas. Recordar que la mayoría de los síntomas del IRIS se resuelven espontáneamente en el transcurso de unas semanas, pero si las reacciones son graves o ponen en peligro la vida, puede requerirse el uso de ciclos cortos con corticoesteroides como prednisona a dosis de 0.5-1 mg/kg/día por 5 a 10 días para suprimir las reacciones inflamatorias exageradas.(5) En algunos casos ha sido necesario suspender temporalmente la terapia antirretroviral cuando no hay mejoría o cuando hay síntomas neurológicos, aunque ésta medida conlleve riesgos al retrasar la recuperación del sistema inmune. Sin embargo, la medida puede ser útil, ya que se ha observado que disminuye la gravedad de la respuesta inflamatoria. El tratamiento de las infecciones oportunistas puede requerir adecuación en forma empírica y por lo general se recomienda mantenerlo hasta que desaparecen los síntomas del IRIS.(5) Además de la prednisona, se ha empleado metilprednisolona (40 mg cada 12 horas por vía intravenosa hasta por 5 a 12 semanas), o antiinflamatorios no esteroideos si la gravedad del IRIS lo amerita.(5) 2.3 CLASIFICACIÓN CLÍNICA E INMUNOLÓGICA DE PACIENTES CON INFECCIÓN POR EL VIH La clasificación de la infección por VIH está basada en las condiciones clínicas que presentan los pacientes y en el recuento de CD4, los cuales sirven como criterios para iniciar TARV y la identificación de riesgos de infecciones oportunistas. El Ministerio de Salud utiliza la tabla del CDC (Control of deseases center 1,993), que combina los resultados clínicos con los de CD4 para decidir el inicio de la terapia antirretroviral. Tabla 2 Clasificación clínica e inmunológica de pacientes con infección por VIH. Categoría 1 2 3 Células CD4 > 500mm2 200-499 mm2 <200 mm2 A A1 A2 A3 Estadio Clínico B B1 B2 B3 C C1 C2 C3 17 2.4 CLASIFICACIÓN CLÍNICA DE LA INFECCIÓN POR VIH Tabla 3 Clasificación clínica de la infección por VIH Categoría A Infección por VIH asintomática Linfadenopatía generalizada persistente (LGP) Nódulos en 2 ó más lugares extra inguinales, de 1 cm de diámetro por 3 meses o más. Enfermedad aguda (primaria) por VIH. Categoría B Condiciones sintomáticas no incluidas en la categoría A ni C y que: Son atribuidas a la infección por VIH o que indican un defecto en la inmunidad celular, o que tienen una evolución clínica o manejo específico por estar complicados por el VIH. Incluye pero no se limitan a: o Angiomatosis bacilar o Candidiasis vulvovaginal persistente (> 1 mes), con mala respuesta al tratamiento. o Candidiasis orofaríngea o Displasia cervical grave o carcinoma in situ o Síndrome constitucional, ejemplo, fiebre (38.5°C), o diarrea > de 1 mes o Leucoplaquia pilosa bucal o Herpes zoster (2 episodios distintos en más de un dermatoma) o Púrpura trombocitopénica idiopática o Listeriosis o Neuropatía periférica Enfermedad pélvica inflamatoria complicada. Categoría C Candidiasis de tráquea, de bronquios o pulmonar Candidiasis esofágica Coccidiodomicosis extrapulmonar/generalizada Cáncer cervical invasivo Cryptococosis extrapulmonar Criptosporidiasis intestinal crónica (> 1 mes) Enfermedad por Citomegalovirus (excepto hepática, esplénica o de ganglios linfáticos) Herpes simplex con úlcera muco- cutánea (> 1 mes), o bronquitis, neumonitis o esofagitis Encefalopatía por VIH Histoplasmosis diseminada o extrapulmonar Isosporiasis intestinal crónica (> 1 mes) Sarcoma de Kaposi Linfoma de Burkitt, linfoma inmunoblástico, linfoma primario del cerebro Mycobacterium avium o kansasii extrapulmonar Mycobacterium tuberculosis pulmonar o extrapulmonar Mycobacterium, otras especies, diseminadas o extra pulmonares Neumonía por Pneumocystis jirovecci Neumonía bacteriana recurrente (2 ó + episodios en 1 año) Leucoencefalopatía multifocal progresiva Septicemia por Salmonella recurrente Toxoplasmosis cerebral Síndrome de desgaste 18 2.5 MEDICAMENTOS ANTIRRETROVIRALES En 1987 se publicó el primer ensayo clínico de terapia antirretroviral que demostró que el tratamiento con Zidovudina conseguía reducir la mortalidad en pacientes con infección por VIH, aunque el beneficio clínico declinaba con el tiempo. El uso simultáneo de 2 inhibidores de la transcriptasa inversa análogos de nucleósidos (ITIAN) demostró un mayor beneficio clínico e inmunológico, aunque no conseguía reducir la carga viral hasta formas indetectables, por ello a finales de 1995 se demostró que la asociación de un inhibidor de la proteasa (IP) y dos (ITIAN) controlaba de forma sostenida la replicación viral, evitando o revirtiendo el daño inmunológico ocasionado por el VIH. Este tratamiento antirretroviral de gran eficacia o de alta actividad (TARGA/TARAA); denominado en la literatura anglosajona como (highly activite antiretroviral therapy HAART).(6) La terapéutica combinada o el tratamiento antirretroviral de alta actividad (TARAA) pretende reducir 1log (10 veces) de los valores plasmáticos de ARN del VIH en los primeros dos meses y finalmente una reducción de los valores plasmáticos del ADN de VIH hasta menos de 50 copias/ml. Se estima que el tiempo necesario para que TARAA consiga la erradicación del VIH es de 7-10 años con respuesta viral sostenida. Es por esto que el objetivo principal de TARAA en la actualidad no consiste en la erradicación del virus, sino en conseguir una respuesta viral sostenida que impida el deterioro inmunitario de los pacientes y con ello el desarrollo de infecciones oportunistas, la progresión a SIDA y la mortalidad. (6) La disponibilidad de diferentes fármacos activos frente al VIH modificó radicalmente la evolución de la infección, con una reducción espectacular de su morbimortalidad y una eficacia progresiva para controlar la replicación del VIH1. Actualmente la combinación adecuada de diferentes fármacos antirretrovirales (ARV) permite controlar la replicación viral y preservar o restaurar el sistema inmune en la gran mayoría de pacientes, de manera que la esperanza de vida se aproxima cada vez más a la de la población general. A pesar de ello, persisten importantes desafíos tales como la imposibilidad de erradicar el virus del organismo, para lo que se requiere tratamiento por largo periodo de tiempo; además de la complejidad de algunos regímenes y sus efectos adversos que dificulta la adherencia terapéutica y aumenta la aparición de resistencias a diferentes fármacos, y por el elevado costo de estos medicamentos, la dificultad para su administración en los países en vías de desarrollo es enorme.(6) 19 En noviembre de 2010, se encuentran comercializados en España 22 fármacos ARV, que pertenecen a 6 familias o clases según su mecanismo de acción: 1) inhibidores de la transcriptasa inversa análogos de nucleósidos y nucleótidos (ITIAN) (Abacavir, Didanosina, Emtricitabina, Estavudina, Lamivudina, Zidovudina y Tenofovir), 2) inhibidores de la transcriptasa inversa no análogos de nucleósidos (ITINN) (Efavirenz, Etravirina y Nevirapina), 3) inhibidores de la proteasa (IP) (Atazanavir, Darunavir, Fosamprenavir, Indinavir, Lopinavir, Nelfinavir, Ritonavir, Saquinavir, Tipranavir), 4) inhibidores de la fusión (Enfuvirtida), 5) inhibidores de los correceptoresCCR5 (Maraviroc) y 6) inhibidores de la integrasa (Raltegravir).(6) Todos ellos se encuentran indicados en el tratamiento de la infección por el VIH-1, en combinación con otros ARV. La mayoría de ellos han demostrado ser también activos frente al VIH-2 (excepto los inhibidores de la transcriptasa inversa no análogos de nucleósidos, Enfuvirtida y Maraviroc) y algunos son activos frente al virus de la hepatitis B (Lamivudina, Emtricitabina y Tenofovir). Habitualmente se emplean combinaciones de tres fármacos activos, variables en función de las características individuales y del escenario clínico (inducción, rescate) y de la posibilidad de resistencia a algunos fármacos.(6) Muy excepcionalmente se utilizan más de tres fármacos. Actualmente se están estudiando algunas combinaciones de dos fármacos e incluso existen ya datos de eficacia de la administración de un IP en monoterapia en determinadas circunstancias.(6) 2.5.1 Objetivos del tratamiento antirretroviral Clínicos Mejorar la calidad de vida del paciente Reducir la morbimortalidad asociada a la infección por VIH Virológicos e inmunológicos Supresión completa y mantenida de la replicación viral Restauración del sistema inmune 20 Existen familias de medicamentos antirretrovirales agrupados según los mecanismos de acción en la terapéutica de la infección por VIH: Tabla 4 Clasificación de los medicamentos antirretrovirales Inhibidores de la transcriptasa inversa análogos de nucleósidos (ITIAN) • Abacavir (ABC) • Lamivudina (3TC) • Zidovudina (AZT) • Didanosina (ddl) • Emtricitabina (FTC) • Tenofovir (TDF) • Estavudina (d4T) Inhibidores de la transcriptasa inversa no nucleósidos (ITINN) • Efavirenz (EFV) • Nevirapina (NVP) • Etravirina (ETV) Inhibidores de la proteasa (IP) • Atazanavir (ATZ) • Fosamprenavir (FPV) • Indinavir (IDV) • Lopinavir + Ritonavir (LPV/r) • Nelfinavir (NFV) • Ritonavir (RTV) • Saquinavir (SQV) • Tipranavir (TPV) • Amprenavir (APV) • Darunavir (DRV) Inhibidores de la fusión (IF) • Enfuvirtida (T-20) Inhibidores del receptor CCR5 • Maraviroc (MRV) Inhibidores de la integrasa • Raltegravir (RTV) 21 2.5.2 Inhibidores de la transcriptasa inversa análogos de nucleósidos y nucleótidos (ITIAN) Son fármacos que inhiben la transcriptasa inversa del VIH por un mecanismo competitivo con los nucleósidos/nucleótidos fisiológicos, de los que difieren únicamente en pequeños cambios en la molécula de ribosa. Los ITIAN se incorporan a la cadena de DNA viral, interrumpiendo la elongación de la misma y, como consecuencia, la replicación viral.(6) Se dividen en análogos de bases púricas: Adenosina (Didanosina) y Guanosina (Abacavir) y análogos de bases pirimidínicas: Timidina (Zidovudina y Estavudina) y Citidina (Emtricitabina, Lamivudina).(6) Estos fármacos requieren tres fosforilaciones en el interior de la célula para activarse. En cambio, Tenofovir es un análogo de nucleótidos (análogo de adenina), por lo que requiere una fosforilación menos para activarse. (6) En el metabolismo de los ITIAN no interviene el sistema enzimático del citocromo P450 y estos fármacos son poco susceptibles de padecer interacciones metabólicas relevantes. Zidovudina y Abacavir se glucuronidan, por lo que otros fármacos que afecten la glucuronidación pueden modificar sus concentraciones. Sin embargo, las interacciones de los análogos de nucleósidos se deben fundamentalmente a la potenciación de su toxicidad.(6) Los efectos adversos más característicos de los ITIAN aparecen a largo plazo y se relacionan con su toxicidad mitocondrial. Los mecanismos de disfunción mitocondrial y celular son complejos, destacando entre otros el hecho de que estos fármacos, además de inhibir la transcriptasa inversa viral, pueden inhibir la DNA polimerasa gamma mitocondrial. Aunque por su mecanismo de acción todos los análogos pueden producir toxicidad mitocondrial, se produce con más frecuencia con los análogos de timidina. Dependiendo del fármaco y del tejido implicado, las manifestaciones clínicas pueden ser muy variables: miopatía (Zidovudina), neuropatía (Estavudina, Didanosina), esteatosis hepática y acidosis láctica (Didanosina, Estavudina, Zidovudina), pancreatitis (Didanosina, Estavudina) y lipoatrofia periférica (posiblemente todos los análogos pero predominantemente con Estavudina y también Zidovudina). La mayoría de los ITIAN tienen algún efecto adverso más o menos característico.(6) 22 Se han comercializado un total de 8 ITIAN, uno de los cuales (zalcitabina, ddC) se retiró del mercado por su toxicidad y compleja posología. Actualmente están disponibles 7, que por orden alfabético son: Abacavir, Didanosina, Emtricitabina, Estavudina, Lamivudina, Tenofovir y Zidovudina.(6) 2.5.3 Inhibidores de la transcriptasa inversa no análogos de nucleósidos (ITINN) Son fármacos que inhiben la transcriptasa inversa del VIH por un mecanismo no competitivo. Constituyen un grupo heterogéneo desde el punto de vista molecular y se unen directamente y de manera reversible al centro catalítico de la transcriptasa inversa o en un lugar cercano al mismo, provocando un cambio conformacional en la enzima e inhibiendo su actividad DNA polimerasa, tanto la dependiente del DNA como del RNA. A diferencia de los ITIAN, los ITINN son directamente activos, sin necesidad de ser modificados por enzimas celulares. Son específicos del VIH-1, sin que sean activos frente a cepas del VIH-1 del grupo O, ni frente al VIH-2, ni frente a retrovirus animales.(6) Son metabolizados fundamentalmente a nivel hepático, con intervención de diferentes isoenzimas del citocromo P450, especialmente de CYP3A4, y también por glucuronoconjugación.(6) Además, son potentes inductores de CYP3A4 y de otras enzimas, pudiendo producirse interacciones metabólicas muy relevantes. En algunos casos pueden comportarse además como inhibidores de algunas isoenzimas, dando lugar a interacciones complejas y difícilmente predecibles. El efecto inductor de los no nucleósidos sobre el CYP3A4 puede dar lugar a reducción de la eficacia de muchos fármacos, como anticonceptivos orales, estatinas o antimicrobianos como Claritromicina, Itraconazol o Ketoconazol. Efavirenz y Nevirapina disminuyen considerablemente las concentraciones plasmáticas de metadona, siendo necesario un aumento notable de dosis para evitar o paliar el síndrome de abstinencia a opiáceos. Esta interacción no se observa con Etravirina. (6) Las reacciones de hipersensibilidad, especialmente en forma de exantema cutáneo, son los efectos adversos más frecuentemente asociados al tratamiento con ITINN, especialmente a Nevirapina y Etravirina. La hepatotoxicidad también aparece con cierta frecuencia, particularmente con Nevirapina. Las alteraciones del sistema nervioso central son características de Efavirenz.(6) Se han comercializado un total de 4 ITINN: tres de primera generación (Delavirdina, Efavirenz y Nevirapina) y uno de segunda generación (Etravirina). (6) 23 2.5.4 Inhibidores de la proteasa (IP) Los IP bloquean la proteasa del VIH, impidiendo la maduración de las proteínas virales e inhibiendo de forma potente la replicación viral. La proteasa es una enzima que actúa fragmentando las proteínas precursoras de gag y gag-pol para formar los componentes polipeptídicos virales funcionales. La inhibición de la proteasa no impide que se sinteticen los grandes polipéptidos virales codificados por gag y gag-pol, pero al no fragmentarse no son funcionales y se producen virus con capacidad infectiva. Los IP tienen una estructura química parecida a los péptidos virales sustrato de la proteasa, con una elevada afinidad para el dominio activo de la misma, inhibiendo su actividad catalítica. Actúan de forma directa, sin necesitar ninguna transformación en la célula.(6) Los primeros IP tenían grandes inconvenientes (efectos secundarios, concentraciones plasmáticas en el límite inferior del rango terapéutico, posología compleja) que limitaban enormemente su eficacia terapéutica. Con el descubrimiento del uso del Ritonavir a dosis bajas como potenciador de los otros IP, aumentando sus concentraciones plasmáticas por su efecto inhibidor sobre el sistema enzimático del citocromo P450, cambió radicalmente la eficiencia de los fármacos de esta familia.(6) Los IP se metabolizan fundamentalmente a través del CYP3A4 y son transportados por proteínas como la glucoproteína P. No requieren ajuste de dosis en caso de insuficiencia renal. En la mayoría de ocasiones se utilizan potenciados con Ritonavir, comportándose como potentes inhibidores de CYP3A4 y de otras isoenzimas y proteínas transportadoras. Por este motivo se producen interacciones farmacocinéticas muy relevantes con importantes aumentos de las concentraciones de fármacos tales como los inmunodepresores (Ciclosporina, Tacrolimus, Sirolimus), las estatinas o los antagonistas del calcio, entre otros. Por este motivo, no se recomienda asociar IP potenciados con Ritonavir por riesgo de aumento de toxicidad con los siguientes fármacos: Amiodarona, analgésicos opiáceos (Dextropropoxifeno, Meperidina) antiarrítmicos (Encainida, Flecainida, Propafenona, Quinidina), antihistamínicos (Terfenadina), benzodiacepinas (Diacepam, Estazolam, Fluracepam, Midazolam, triazolam), Colchicina (en caso de insuficiencia renal o hepática), derivados de la ergotamina, drogas de abuso (éxtasis, Metanfetamina), estatinas (Lovastatina, Simvastatina), halofantrina, lumefantrina, pimozida, piroxicam, sildenafilo (pueden emplearse en dosis reducidas para la disfunción eréctil, pero su uso está contraindicado en la hipertensión pulmonar).(6) 24 También se halla contraindicado el uso de los IP potenciados con Ritonavir con algunos fármacos inhalados como Fluticasona (múltiples casos descritos de síndrome de Cushing) o Salmeterol (riesgo de prolongación del intervalo QT). Por otro lado, Ritonavir también tiene un efecto inductor de varias isoenzimas del citocromo P450 como el CYP1A2 o 2C9/19, así como de la glucuronidación. Por este motivo, puede reducir la eficacia de algunos fármacos que se eliminan por estas vías como el Voriconazol.(6) En pacientes coinfectados por VIH y tuberculosis, no debe emplearse rifampicina si están recibiendo IP por riesgo de reducción de la eficacia del tratamiento antirretroviral.(6) Una característica importante de los IP potenciados es su elevada barrera genética para el desarrollo de resistencias, debiendo acumularse múltiples mutaciones para que el virus sea resistente. Esta elevada barrera genética conduce a dos hechos destacables: En los pacientes que presentan fallo virológico tras un tratamiento inicial con IP en ausencia de mutaciones basales el virus no suele seleccionar ninguna mutación en la proteasa.(6) En determinadas situaciones resulta eficaz la monoterapia con un IP potenciado, hecho impensable con otras familias de ARV. Cuando ya existen mutaciones de resistencia en la proteasa la barrera genética se reduce y en los fallos virológicos pueden aparecer nuevas mutaciones. En esta situación se ha observado que los IP de última generación, especialmente DRV, ofrecen una barrera genética más elevada que los otros IP34.(6) Algunos efectos adversos de los IP se han considerado de clase, especialmente las alteraciones digestivas (diarrea, náuseas, vómitos, dolor abdominal) y metabólicas (dislipidemia, resistencia a la insulina, diabetes mellitus). A pesar de ello, existen diferencias notables entre los diferentes IP. Los IP que con mayor frecuencia se asocian con diarrea y otras alteraciones digestivas de intensidad moderada a grave son Nelfinavir, Lopinavir/Ritonavir (LPV/r), Fosamprenavir/r (FPV/r) y Tipranavir/r (TPV/r), mientras que con Saquinavir/r (SQV/r), Atazanavir/r (ATV/r) o Darunavir/r (DRV/r) la incidencia es considerablemente inferior. Asimismo, los IP con un mejor perfil metabólico son ATV/r y DRV/r. También se considera un efecto secundario de clase de los IP un aumento del riesgo de hemorragias que se ha observado en los pacientes con hemofilia.(6) 25 La familia de los IP es la que más ARV nuevos ha aportado a lo largo de la última década, mejorando notablemente la tolerabilidad y la posología. Actualmente están comercializados 9 IP, que por orden alfabético son: ATV, DRV, FPV, Indinavir, LPV, Nelfinavir, Ritonavir (RTV), SQV y TPV. IDV y NFV ya prácticamente no se utilizan en ningún escenario clínico y no se comentarán. Actualmente RTV tampoco se utiliza como fármaco ARV, pero se utiliza a pequeñas dosis infraterapéuticas como potenciador de prácticamente todos los IP. 2.5.5 Inhibidores de la fusión (Enfuvirtida) La biodisponibilidad tras su administración subcutánea es del 80%. Se elimina mediante catabolismo de sus aminoácidos constituyentes y no es sustrato ni influye en la actividad de ninguno de los sistemas metabólicos de los otros ARV, por lo que no es susceptible de presentar interacciones metabólicas relevantes. No se requiere ajuste de dosis en insuficiencia hepática ni probablemente tampoco en insuficiencia renal.(6) 2.5.6 Antagonistas de los correceptores CCR5 (Maraviroc) Actualmente solo se dispone de un inhibidor de los correceptores CCR5: Maraviroc (MVC) está indicado en el tratamiento de la infección por el VIH-1 con tropismo CCR5 detectable mediante test tropismo validado y en combinación con otros fármacos ARV. Actúa bloqueando la entrada del VIH a las células humanas. No es eficaz frente a virus con tropismo dual, mixto o X4.(6) Hasta el momento se han descrito dos mecanismos principales de resistencia. El primero y más frecuente es la emergencia de virus con tropismo X4 preexistentes como población minoritaria al inicio del tratamiento. El segundo mecanismo resulta de la selección de mutaciones en diferentes regiones de la envoltura (gp 120) que impiden la interacción entre el virus y el receptor CCR546. Es un fármaco habitualmente muy bien tolerado, con un excelente perfil metabólico y de tolerabilidad digestiva y sin efectos adversos particulares.(6) 2.5.7 Inhibidores de la integrasa (Raltegravir) RAL actúa bloqueando la actividad de la enzima integrasa, evitando la integración del virus en el DNA celular. Está indicado en el tratamiento de la infección por el VIH-1, VIH-2, tropismo R5, X4 y dual, en combinación con otros fármacos antirretrovirales.(6) 26 2.6 CRITERIOS PARA EL INICIO DE TERAPIA ANTIRRETROVIRAL Tabla 5 Criterios para iniciar tratamiento antirretroviral según GESIDA 2002 Clínica Sintomático CD4 Cualquier valor Carga Viral Cualquier valor Recomendación Tratar Asintomático <200 Cualquier valor Tratar Asintomáticos 200 - 350 Cualquier valor Tratar Asintomáticos <350 Cualquier valor Diferir tratamiento Controles periódicos Carga viral <50,000 copias/ml (iniciar tratamiento) Embarazada Cualquier valor Cualquier valor Tratar después de las 14 semanas de gestación 2.7 ESQUEMA DE PRIMERA LÍNEA El esquema está seleccionado para garantizar una buena garantizando la biodisponibilidad y la estabilidad de la molécula. adherencia, Tabla 6 Esquema de primera línea Opción 1 Opción 2 Opción 3 A + B Tenofovir 300mg + Efavirenz 600 mg c/24 hrs ó + Nevirapina 200mg c/12 hrs* Emtricitabina 200mg c/24 hrs. En caso de contraindicación al esquema 1 evaluar: Zidovudina 300mg + Efavirenz 600 mg c/24 hrs ó + Nevirapina 200mg c/12 hrs* Lamivudina 150mg c/12 hrs En caso de contraindicación a la opción 1 ó 2 utilizar: Abacavir 300mg + Efavirenz 600 mg c/24 hrs ó + Nevirapina 200mg c/12 hrs* Lamivudina 150mg c/12 hrs *La dosis de inicio para Nevirapina es de 200 mg c/24 hrs por 15 días, si no hay efectos adversos que contraindiquen su uso se sigue con 200 mg c/12 hrs. 27 Es importante considerar que aunque se utilice terapia con antirretrovirales pueden surgir fallos en el tratamiento los cuales pueden deberse a diferentes factores como problemas de dosificación, adherencia, acceso al medicamento, interacciones farmacológicas, etc, estos deben descartarse para considerar la existencia de fracaso terapéutico al esquema de primera línea, y así poder cambiar el esquema a segunda línea.(7) 2.7.1 Criterios de fracaso terapéutico del esquema de primera línea • FRACASO CLÍNICO: progresión de la infección por el VIH por la aparición de nuevas enfermedades de la clasificación definitorias de SIDA a pesar de recibir terapia antirretroviral.(7) • FRACASO VIROLÓGICO: Carga viral mayor de 1000 copias luego de 6 meses de recibir terapia antirretroviral, o que después de presentar carga viral indetectables presente un incremento de este valor comprobado en 2 controles consecutivos no mayores de 1 mes de diferencia.(7) • FRACASO INMUNOLÓGICO: Caída progresiva de los niveles de CD4 al nivel basal o inferior a pesar de la terapia antirretroviral o valores persistentes de CD4 menores de 100 células/mm3 o caída de CD4 menores del 50% del conteo previo.(7) La modificación del tratamiento antirretroviral por un fracaso terapéutico (progresión clínica o empeoramiento de los parámetros analíticos) implica el suministro de un régimen con al menos dos fármacos nuevos. Esta decisión puede ser guiada por pruebas de resistencia. Cuando la modificación obedece a una toxicidad farmacológica, lo más conveniente es cambiar un solo fármaco, esta toxicidad suele empezar a mostrar signos de inversión en una o dos semanas. Antes de modificar un régimen terapéutico por un fracaso farmacológico es muy importante verificar que el paciente ha cumplido el régimen pre-escrito. Entre las indicaciones para cambiar el tratamiento se encuentran: descenso inferior a 1log del ARN del VIH después de 4 semanas de iniciar tratamiento, cantidad de CD4 con disminución persistente, deterioro clínico y efectos adversos.(1) 28 2.8 ESQUEMA DE SEGUNDA LÍNEA El esquema de segunda línea se debe iniciar según el esquema de primera línea utilizado, por ello se recomiendan lo siguiente: Tabla 7 Esquema de segunda línea Opción de tratamiento de primera línea A Abacavir 300 mg c/12 hrs + ***Lamivudina 150 mg c/12 hrs + B Lopinavir/Ritonavir 400/100 mg c/12 hrs En caso fallo a opción 1 Abacavir 300 mg c/12 hrs + Didanosina 250 o 400 mg c/24 hrs ó Zidovudina 300 mg c/12 hrs + Didanosina 250 0 400 mg c/24 hrs Saquinavir/Ritonavir** 1000/100 mg c/12 hrs Abacavir 300 mg c/12 hrs + ***Lamivudina 150 mg c/12 hrs Lopinavir/Ritonavir 400/100 mg c/12 hrs Abacavir 300 mg c/12 hrs + Didanosina 250 o 400 mg c/24 hrs ó Saquinavir/Ritonavir** 1000/100 mg c/12 hrs Didanosina 250 o 400 mg c/24 hrs + ***Lamivudina 150 mg c/12 hrs Lopinavir/Ritonavir 400/100 mg c/12 hrs Tenofovir 300 mg c/24 hrs + ***Lamivudina 150 mg c/12 hrs ó Zidovudina 300 mg c/12 hrs + Didanosina 250 0 400 mg c/24 hrs Saquinavir/Ritonavir** 1000/100 mg c/12 hrs En caso fallo a opción 2 En caso fallo a opción 3 **Se utilizará en casos de intolerancia o efecto adverso a lopinavir/ritonavir. *** Este esquema se podrá utilizar cuando se diagnostique el fallo en los tres primeros meses. 29 2.9 ESQUEMA DE TERCERA LÍNEA Si existe fallo en el tratamiento de segunda línea basado en las definiciones descritas anteriormente, el esquema de seguimiento se realizará de forma individualizada. Es importante considerar que aunque exista falla virológica el paciente debe continuar con el esquema de segunda línea. En algunos casos se considera agregar Lamivudina si el esquema actual no lo incluye. (7) 2.10 NEFROPATÍA POR ANTIRRETROVIRALES Las complicaciones renales generalmente están relacionadas con las complicaciones sistémicas del SIDA y su tratamiento. La afección renal es frecuente en pacientes VIH, la nefropatía por antirretrovirales asociada a VIH se ha convertido en una causa frecuente de insuficiencia renal aguda, enfermedad renal crónica y puede convertirse en nefropatía terminal que requiere diálisis.(8) Tabla 8 Nefropatía por antirretrovirales. Abacavir Atazanavir Didanosina Estavudina Indinavir Lamivudina Nelfinavir Ritonavir Tenofovir Nefritis intersticial aguda, asociada a reacción de hipersensibilidad Nefrolitiasis, nefritis intersticial aguda Disfunción tubular proximal Disfunción tubular proximal Nefrolitiasis, nefritis intersticial aguda Disfunción tubular proximal Nefrolitiasis Insuficiencia renal aguda Disfunción tubular proximal, necrosis tubular aguda, insuficiencia renal La nefrotoxicidad por antirretrovirales es poco frecuente, aunque se ha descrito con numerosos fármacos. Las manifestaciones son variadas e incluyen cuadros de presentación aguda y de disfunción crónica asintomática. Los cuadros mejor caracterizados son los asociados con algunos inhibidores de la proteasa, como el Indinavir o el ATV, y los ITIAN, especialmente con Tenofovir. El Indinavir y, con mucha menor frecuencia, el ATV pueden producir nefrolitiasis y nefropatías por depósito intratubular de cristales mientras que la toxicidad de los ITIAN se produce preferentemente por disfunción tubular debida a la acumulación intracelular del fármaco y puede manifestarse por diversas alteraciones tubulares que pueden conformar un síndrome de Fanconi.(8) 30 Se ha descrito también nefritis intersticial, en ocasiones mediada por un mecanismo inmunoalérgico, con diversos ARV, y glomérulo nefritis membranoproliferativa.(8) La exposición a Indinavir o Tenofovir se ha asociado también con insuficiencia renal crónica. Se han publicado numerosos casos de síndrome de Fanconi, la mayoría asociados con Tenofovir, pero también se han descrito casos asociados con otros ITIAN, como Didanosina y Estavudina. En estos casos, el daño tubular suele ser reversible tras la retirada del fármaco causante. (8) La incidencia de nefrotoxicidad asociada con el uso de Tenofovir en los ensayos clínicos ha sido muy baja, comparable a la observada en el grupo control. En algunos estudios observacionales se ha comunicado una reducción en la filtración glomerular durante el tratamiento con Tenofovir aunque la incidencia de toxicidad renal clínicamente significativa en la mayoría de las cohortes ha sido también baja. En un análisis de más de 10.000 pacientes que participaron en el programa de acceso expandido de Tenofovir, sólo el 0.5% de los casos presentó un acontecimiento adverso renal grave y el 2.2%, una elevación de la creatinina de más de 0.5mg/dl.(8) Los factores favorecedores de la nefrotoxicidad por Tenofovir fueron la presencia de enfermedad renal crónica previa, el uso concomitante de otros fármacos nefrotóxicos, un peso corporal bajo, la edad avanzada y un recuento bajo de linfocitos CD4. Se ha indicado que determinadas variaciones en los genes que codifican las proteínas transportadoras de Tenofovir en las células de los túbulos proximales renales (MRP2, hOAT1yMPR4) podrían condicionar una mayor susceptibilidad a la toxicidad renal asociada con el uso de este fármaco. En un estudio reciente se ha observado una reducción del aclaramiento de Tenofovir y un aumento de las concentraciones intracelulares del fármaco en los portadores del polimorfismo 3463G del gen ABCC4 (MRP4). Por otro lado, determinados haplotipos del gen ABCC2 (MRP2) se han relacionado también con una mayor susceptibilidad a la tubulopatía proximal asociada con el Tenofovir. (8) El antecedente de infecciones oportunistas, la presencia de comorbilidad, la hipertensión arterial, el dolor crónico (un marcador de uso de antiinflamatorios no esteroideos), el uso simultáneo de Didanosina y la coadministración de inhibidores de la proteasa potenciados se han asociado también con un mayor riesgo de nefrotoxicidad con Tenofovir. Los inhibidores de la proteasa potenciados pueden disminuir el aclaramiento renal de Tenofovir y favorecer su acumulación en las células del epitelio tubular.(8) 31 En una revisión reciente de 164 casos de síndrome de Fanconi asociado a Tenofovir, el 84% estaba recibiendo simultáneamente inhibidores de la proteasa, en la mayoría de los casos potenciados con Ritonavir.(8) La identificación precoz de los pacientes que desarrollan disfunción renal durante el tratamiento ARV es importante para establecer medidas de protección orientadas a reducir el riesgo de progresión de la enfermedad renal. Para esto debe evaluarse de forma periódica la función renal en todos los pacientes que reciben tratamiento ARV.(8) La European AIDS Clinical Society recomienda una evaluación antes del inicio del tratamiento, a las 4 semanas y a los 6 meses, y posteriormente cada año, si se mantiene dentro de la normalidad.(8) Desde el inicio de la era del tratamiento antirretroviral de alta actividad (TARAA), existe la evidencia de que el factor más importante que ha limitado la indudable eficacia del TARAA ha sido la toxicidad secundaria al tratamiento. Dicha toxicidad puede adoptar dos perfiles temporales: la toxicidad precoz, a corto plazo o tolerabilidad, y la toxicidad a largo plazo o toxicidad crónica. Ambos tipos de toxicidades son importantes no sólo por la carga adicional de comorbilidad que suponen, sino también por el hecho de que frecuentemente el paciente establece la relación entre la toma de medicamentos y la aparición de síntomas o signos de toxicidad. Este hecho puede suponer, en muchos casos, una disminución de la adherencia del paciente al TARAA y precipitar un fracaso virológico. En el caso de la toxicidad crónica, su aparición se verá favorecida por la exposición continuada a los fármacos de forma indefinida.(8) 2.10.1 Nefrotoxicidad TDF puede inducir toxicidad renal en una pequeña proporción de pacientes. Su incidencia en estudios de cohorte es mayor que la observada en ensayos clínicos, en los que solamente se ha encontrado una reducción discreta (aproximadamente del 10%) y no progresiva del filtrado glomerular.(9) Esta complicación consiste en una disfunción tubular y se manifiesta como un síndrome de Fanconi acompañado de una disminución del filtrado glomerular. Es más frecuente cuando coincide con otros factores de riesgo (insuficiencia renal previa o concomitante, diabetes, hipertensión arterial, fármacos nefrotóxicos, edad avanzada, bajo peso corporal y cifras bajas de CD4).(9) 32 La nefrotoxicidad por TDF suele revertir al retirar el fármaco, aunque dicha reversión puede no ser completa y precisar un largo intervalo de tiempo. IDV y, con mucha menor frecuencia, ATV producen nefrolitiasis por depósito tubular de cristales.(9) No existen intervenciones para corregir la toxicidad renal por antirretrovirales más allá de la retirada del fármaco ofensor y su sustitución por otro agente sin capacidad nefrotóxica, el control de los factores que afectan a la función renal (hipertensión arterial, homeostasis de la glucosa, otros fármacos y especialmente AINE, etc.), mantener un estado adecuado de hidratación y, en casos graves, medidas de sustitución de la función renal.(9) 2.11 VALORACIÓN DE LA FUNCIÓN RENAL La creatinina sérica es un producto metabólicamente inerte del músculo y un marcador importante del filtrado glomerular o de la función renal, es el más utilizado hasta ahora en la práctica clínica. Sin embargo la creatinina sérica no es una herramienta exacta para evaluar el filtrado glomerular debido a que puede presentar variaciones debido a cambios en factores como masa muscular, sexo, edad, raza, peso, el uso de fármacos, etc. Numerosos estudios indican que el error de predecir el filtrado glomerular a partir de ecuaciones que incluyen la creatinina plasmática es menor que el error que se produce al medir el aclaramiento de creatinina, no sólo por los errores en la recogida de orina sino también por las variaciones diarias en el filtrado glomerular y en la excreción de creatinina. Se han desarrollado numerosas fórmulas para estimar el aclaramiento de creatinina a partir de la concentración de la creatinina plasmática. En todas ellas se considera el inverso de la creatinina plasmática como la variable independiente con mayor peso para calcular el filtrado glomerular, pero la variabilidad en la creatinina sérica representa un 80% de la variabilidad del filtrado glomerular.(9) Las fórmulas incluyen el peso o la altura, el sexo, la edad, la raza y otras variables multiplicadas por distintos factores de corrección. Estas fórmulas se basan en la idea de que la excreción de creatinina es constante, igual a la producción de creatinina, que, a su vez, es proporcional a la masa muscular, y se puede estimar a partir de la edad, sexo y peso del individuo. La fórmula más simple, y la más utilizada hasta ahora ha sido la de Cockcroft y Gault.(9) 33 Esta ecuación se derivó del estudio de 249 pacientes sin enfermedad renal y se diseñó para predecir el aclaramiento de creatinina. Aunque presentaba buena correlación con el filtrado glomerular calculado con yodotalamato, sobrestimaba el filtrado glomerular en los valores bajos y presentaba gran dispersión de los datos.(9) Además de sobrestimar el filtrado glomerular en hasta un 23%, el cálculo mediante la fórmula de Cockcroft-Gault presenta una alta variabilidad. Sin embargo, el aclaramiento de creatinina con recogida de orina de 24 horas es menos preciso para estimar el filtrado glomerular (variabilidad 22%) que la estimación mediante la fórmula de Cockcroft (variabilidad 10%) Por lo anterior se han desarrollado una serie de fórmulas para la determinación más exacta del filtrado glomerular, que a pesar de ser precisas presentan limitaciones, estas formulas no han sido validadas para pacientes con VIH pero actualmente se utilizan en ensayos clínicos y se consideran fiables en la práctica clínica. (9) Aclaramiento de creatinina Fórmula de Cockcroft y Gault: [(140 - edad (años)) x Peso(kg)] Multiplicado por 0.85 para mujeres [Cr plasma (mg/dl) x 72] Basándose en datos del estudio MDRD (Modification of Diet in Renal Disease) se han desarrollado varias ecuaciones que predicen el filtrado glomerular a partir de una combinación de variables demográficas (edad, sexo, raza) y bioquímicas (creatinina, albúmina, nitrógeno ureico en sangre y orina) verificadas en un gran número de pacientes (más de 500), con características diversas y diversos grados de insuficiencia renal, aunque no en pacientes sin enfermedad renal. En dicho estudio la técnica de medida del filtrado glomerular de referencia fue el aclaramiento urinario de yodotalamato. La fórmula derivada de este estudio que menos diferencias presentaba respecto del filtrado glomerular incluía variables que implican la recogida de orina, por lo que se estima como más práctico utilizar la fórmula que incluye sólo variables séricas y demográficas y sólo era ligeramente menos precisa. Derivada de este estudio, Levey y cols. desarrollaron una fórmula abreviada que precisa sólo la edad, la raza, el sexo y la creatinina plasmática para estimar el filtrado glomerular.(9) 34 MDRD Derivada de pacientes con nefropatía crónica con tasas de filtración glomerular de (20-60 ml/min/1.73m2) que utiliza como referencia el aclaramiento de yodotalamato. 186 x Cr -1.154 x edad -0.203 x (0.742 si mujer y/o 1.210 afroamericanos) 2.11.1 Clasificación de daño renal Tabla 9 Clasificación de daño renal Estadio Descripción FG (ml/min/1.73m2) >90 I Daño renal con tasa de filtración glomerular normal o alta II Dalo renal con disminución leve de filtración glomerular 60-89 III Daño renal con disminución moderada del filtrado glomerular 30-59 IV Daño renal con disminución grave del filtrado glomerular 15-29 V Insuficiencia renal o diálisis 15 Valoración de la proteinuria La proteinuria se define como la presencia de una cantidad anómala de proteínas en la orina, (principalmente albúmina) que se debe generalmente a daño glomerular. Existen tres formas para la cuantificación de proteínas en orina. (9) Mediante el uso de tiras reactivas que están disponibles y de uso accesible, en las que se detectan valores de microalbúmina de (30 – 300 mg/dl). Recolección de orina de 24 horas. Cociente proteína/creatinina en orina. 35 2.12 TENOFOVIR Es actualmente el ITIAN más ampliamente utilizado en la práctica clínica, junto con Emtricitabina o Lamivudina.(9) El Tenofovir disoproxil fumarato es el primer inhibidor de la transcriptasa inversa análogos de los nucleósidos, Tenofovir tiene diferente actividad frente a variantes del VIH1, VIH2 y VHB. En pacientes coinfectados con el VHB se puede producir una exacerbación de la infección por el VHB si se interrumpe el tratamiento con Tenofovir.(9) Tenofovir es una fármaco antirretroviral con estructura de nucleótido acíclico (9-[(R)-2-(fosfonometoxi) propil] adenosina monohidrato). El Tenofovir tiene un profarmaco, el disoproxil fumarato que permite su administración por vía oral. La fórmula molecular es C19H30N5O10P*C4H4O4 y su peso molecular es de 287.2 daltons. El profármaco precisa de la hidrólisis del diéster para convertirse en Tenofovir y las posteriores fosforilaciones por enzimas intracelulares para convertirse en Tenofovir difosfato, a diferencia de los otros análagos de nucleósidos, precisa solo dos fosforilaciones para ser activo.(9) El Tenofovir es un difosfato inhibe la transcriptasa inversa del VIH compitiendo por el sustrato natural, deoxiadenosina 5´-trifosfato. Tras su incorporación a la cadena de ADN da lugar la terminación de esta. El Tenofovir difosfato es un inhibidor débil de las ADN-polimerasas A y B humanas. (9) 2.12.1 Farmacocinética 2.12.1.1 Absorción La molécula de Tenofovir presenta una baja disponibilidad. Administrado como profármaco, Tenofovir presenta una disponibilidad mayor del 25% si se toma en ayunas. Administrado con alimentos ricos en grasas, la biodisponibilidad aumenta hasta un 40%. El profármaco es estable en medio ácido por lo que se mantiene inalterado en el estómago. En el plasma el profármaco es hidrolizado por esterasas plasmáticas y se convierte en Tenofovir y formaldehído. El tiempo necesario para alcanzar la concentración máxima es de 1+/-4 horas en ayunas y 2 horas con alimentos.(9) 36 2.12.1.2 Distribución El Tenofovir se une a proteínas plasmáticas (<7.2%) y presenta un volumen de distribución elevado en estado de equilibrio. Se distribuye por la mayoría de los tejidos y las concentraciones más altas se encuentran en el riñón, hígado y contenido intestinal. El profármaco es más lipófilico por lo que in vitro penetra fácil y rápidamente al interior del linfocito, donde se convierte en Tenofovir. Las concentraciones de Tenofovir difosfato que se alcanzan en el interior del linfocito son 1000 veces superiores a las plasmáticas. Su capacidad lipofilica y el contener una fosforilación menos le proporciona ventajas sobre los otros análogos de los nucleósidos para inhibir la replicación viral. Estas características son más relevantes en los macrófagos porque estas células tienen capacidad de fosforilación reducida y son importantes en el establecimiento de la infección por VIH en el sistema nervioso central. (9) 2.12.1.3 Eliminación El metabolismo sistémico del Tenofovir es escaso. El metabolismo no es sustrato del citocromo P450, por lo tanto no altera el metabolismo de otros fármacos a este nivel. La mayor parte del fármaco (70-80%) se excreta inalterado a través de la orina por filtración glomerular y secreción activa a través del transportador de aniones orgánicos humanos 1 (hOAT1). (9) La vida media de la eliminación es de 4 a 8 horas tras su administración por vía intravenosa y de 12 a 13 horas tras su administración oral en ayunas como profármacos y de 10 a 14 horas tras su administración oral con alimentos. La vida media de eliminación del Tenofovir difosfato en el interior del linfocito activado es de 12-15 horas y de 33-35 horas en el resto del linfocito.(9) La mayor parte del fármaco se excreta inalterado en orina (70-80%), tanto por filtración como por un sistema de transporte tubular activo, y la dosis debe ajustarse en caso de insuficiencia renal. Al igual que los otros ITIAN es un fármaco con poco potencial de interacciones relevantes, aunque pueden producirse algunas interacciones a priori poco esperables.(9) 37 Así Tenofovir aumenta la biodisponibilidad de Didanosina, siendo recomendable disminuir su dosis en caso de coadministración, disminuye las concentraciones de Atazanavir, no siendo recomendable coadministrarlo con Atazanavir no potenciado sin monitorización de sus concentraciones plasmáticas y aumenta considerablemente las concentraciones de Raltegravir, sin que sea preciso ajustar las dosis. Los inhibidores de la proteasa potenciados aumentan ligeramente las concentraciones de Tenofovir sin que sea preciso ajustar las dosis.(9) Es un fármaco generalmente muy bien tolerado, con un excelente perfil metabólico y sin potencial toxicidad mitocondrial. La toxicidad renal es su efecto adverso más característico, potenciándose si se coadministra con otros fármacos nefrotóxicos. También se ha descrito una mayor pérdida de densidad mineral ósea que con otros ITIAN, aunque ello se produce al inicio del tratamiento, sin que parezca progresar tras un seguimiento prolongado y sin que se haya asociado a alteraciones clínicas.(9) 2.12.1.4 Dosificación La dosis habitual de Tenofovir es de 300 mg una vez al día junto con alimentos, preferiblemente rico en grasas. Es importante tener especial atención en pacientes mayores de 65 años. No se ha establecido de forma definitiva la eficacia ni la seguridad en niños. En los pacientes con aclaramiento de creatinina menor de 50 ml/min es necesario un ajuste de dosis.(9) Considerando el embarazo y la lactancia, el Tenofovir pertenece a la categoría B de la FDA. Es estudios experimentales se ha demostrado una tasa de transferencia placentaria de Tenofovir en todos los estadios prenatales evaluados.(9) 2.13 LOPINAVIR / RITONAVIR Es una combinación de dosis fija de inhibidores de la proteasa de Lopinavir 200 mg y Ritonavir 50 mg. Se autorizó en el año 2000 para el tratamiento de la infección por VIH-1 en adultos y en niños en combinación con otros fármacos. Su principal ventaja es que combina el efecto farmacológico con dosis bajas de Ritonavir con un segundo inhibidor de la proteasa en una sola cápsula. Su principal complicación son las molestias gastrointestinales y la hiperlipidemia. (1) 38 3 Objetivos Objetivo General Determinar la función renal basal y su seguimiento durante 12 y 24 meses en pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral con Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir que asistieron a la clínica de infectología del Hospital Roosevelt durante los años 2008-2010. Objetivos Especificos 1. Determinar en qué proporción de pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral con Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir se identifica alteración en la función renal, según las concentraciones de creatinina y niveles de filtración glomerular en la clínica de infectología del Hospital Roosevelt durante los años 2008-2010. 2. Establecer si existen diferencias en la función renal de los pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral con Tenofovir, y Tenofovir asociado a Lopinavir/Ritonavir. 3. Establecer el riesgo de alteraciones en la función renal en los pacientes que reciben tratamiento antirretroviral con Tenofovir y Tenofovir asociado a Lopinavir/Ritonavir. 39 4. Hipótesis El uso de tratamiento antirretroviral con Tenofovir tiene efecto sobre la función renal, y la asociación de este con Lopinavir /Ritonavir causa mayor alteración en la función renal en los pacientes VIH/SIDA. 4.1 Hipótesis nula El uso de tratamiento antirretroviral con Tenofovir no tiene efecto sobre la función renal, y la asociación de este con Lopinavir/Ritonavir no causa mayor alteración en la función renal en los pacientes VIH/SIDA. 4.2 Hipótesis alternativa El uso de tratamiento antirretroviral con Tenofovir sí tiene efecto sobre la función renal, y la asociación de este con Lopinavir/Ritonavir sí causa mayor alteración en la función renal en los pacientes VIH/SIDA. 5. Metodología a. Diseño del estudio: Estudio longitudinal, cohorte retrospectivo, analítico. 5.2 Unidad de muestreo La presente investigación se realizó en base a los datos recolectados de los expedientes clínicos de los pacientes VIH/SIDA que acudieron a la clínica de Infectología del Hospital Roosevelt y que recibieron tratamiento antirretroviral con Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir, o cualquier esquema de primera línea que no incluya Tenofovir, durante los años 2008 – 2010. 40 5.3 Unidad de análisis La unidad de análisis se realizó en base a las variaciones en los niveles de creatinina y de la tasa de filtración glomerular, basales, a los 12 y 24 meses, de los pacientes VIH/SIDA que recibieron tratamiento antirretroviral con Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir o cualquier esquema de primera línea que no incluya Tenofovir. 5.4 Muestra La muestra fue tomada del total de pacientes con VIH/SIDA que acudieron a la clínica de infectología del Hospital Roosevelt que recibieron tratamiento antirretroviral con Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir durante los años 2008 – 2010 y de pacientes que utilizaran algún otro esquema antirretroviral de primera línea que no incluya Tenofovir, para el grupo control. Para un total de 2000 pacientes VIH/SIDA que asisten a la clínica de infecciosas se tomó una muestra aproximada de 1000 pacientes según el cálculo, con base a una prueba de hipótesis, expuesta en el anexo 1, de estos, 143 pacientes cumplían con criterios de exclusión por lo cual no formaron parte del estudio. El tamaño de muestra se calculó por medio del programa G*Power 3.1.6 utilizando los test de la familia F, es decir las pruebas de análisis de varianza; de ellas, se utilizar el modelo ANOVA: factores fijos para análisis de varianza de una vía. Ya que el factor a evaluar es el tratamiento o esquema antirretroviral que contendrá o no Tenofovir, así como Tenofovir más Lopinavir/Ritonavir. Al establecerse tres categorías de la variable independiente, se ingresa a los parámetros solicitados por el software 3 grupos; se trabaja con un nivel de confianza del 95%; y un poder del 80%, dado que es una investigación exploratoria. Se espera que el tamaño de efecto o diferencia de la variable numérica dependiente, en este caso, tasa de filtración glomerular, sea pequeño, obteniéndose así, una muestra bastante grande. 41 Este total de pacientes se dividió proporcionalmente según las estadísticas de la clínica de enfermedades infecciosas en relación a la proporción de pacientes con esquemas de primera línea que no incluyan Tenofovir; proporción de pacientes con esquemas de primera línea que incluyan Tenofovir; y proporción de pacientes con esquemas de segunda línea que incluyan Tenofovir + Lopinavir/Ritonavir (muestreo estratificado con afijación proporcional). 5.5 Tipo de muestra Afijación proporcional del tamaño de muestra según estratos. 5.6 Marco muestral Bases de datos en Excel donde se documentan el tipo de esquema antirretroviral, la fecha de inicio del tratamiento, cambios en la terapia antirretroviral, estado del paciente, entre otros datos. Total de pacientes que podrían ser candidatos a participar en el estudio. 5.7 Plan de muestreo La muestra que se utilizó fue seleccionada partiendo por todos los expedientes de pacientes que cumplan con los criterios de inclusión desde el año 2010 hacia los expedientes de los pacientes 2008, según los estratos de interés: 1. Terapia antirretroviral con esquemas de primera línea que no incluyan Tenofovir. 2. Terapia antirretroviral con esquemas de primera línea que incluyan Tenofovir. 3. Terapia antirretroviral con Tenofovir, asociado a Lopinavir/Ritonavir. 6. Criterios de inclusión y exclusión a. Criterios de inclusión Pacientes con diagnóstico de VIH/SIDA. Pacientes diagnosticados con VIH/SIDA que acudieron a la clínica de infecciosas del Hospital Roosevelt durante los años 2008-2010. Pacientes que recibieron tratamiento antirretroviral con Tenofovir + Emtricitabina + Efavirenz o Nevirapina. 42 Pacientes que recibieron tratamiento antirretroviral con Tenofovir + Emtricitabina o Laminovudina + Lopinavir/Ritonavir. Pacientes que tengan resultados de creatinina sérica, peso y edad registradas para estimar la depuración de creatinina. b. Criterios de exclusión Pacientes VIH/SIDA que abandonaron la terapia antirretroviral o su seguimiento, en la clínica de infecciosas durante los años 20082010. Pacientes VIH/SIDA que además de la terapia antirretroviral recibieron tratamiento con algún otro medicamento nefrotóxico, como Aminoglucósidos, Anfotericina B, durante los años 2008-2010. Pacientes con diagnóstico de Diabetes Mellitus, Hipertensión Arterial o Enfermedad Renal Crónica. Paciente con falla renal pre-existente. Pacientes que fallecieron en el momento del estudio por otra causa que no incluye alguna alteración renal. 7. Definición y operacionalización de variables a. Conceptuación y operacionalización de variables VARIABLE INDEPENDIENTE o Uso de terapia antirretroviral altamente activa con Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir. VARIABLE DEPENDIENTE o Función renal: Se considera como alteración de la función renal a los valores registrados por arriba de los valores normales de las variables a comparar como la creatinina y una disminución de la tasa de filtración glomerular. 43 Tabla 10 Conceptualización y operacionalización de las variables Variable Creatinina Tasa de Filtración Glomerular TFG Definición conceptual Definición operacional Es un compuesto orgánico generado a partir de la degradación de la creatina. Dato obtenido de la creatinina basal a los 12 y 24 meses del expediente de cada paciente Producto de desecho del metabolismo normal de los músculos, que se filtra en los riñones y se excreta en la orina. Es el volumen de fluido filtrado por unidad de tiempo desde los capilares glomerularesrenales hacia el interior de la cápsula de Bowman. Medida de la función renal. Tipo de variable y escala de medición Cuantitativa De razón Indicador 0.40 a mg/ml 1.50 Cuantitativa De razón Hombres: 97 137 ml/min Mujeres 88 – 128 ml/min Datos obtenidos del expediente Dato obtenido del expediente del paciente Cuantitativa De razón Kilogramos (Kg) Fórmula de Cockcroft-Gault (140 – edad) x peso (en kilogramos) / 72 x creatinina en plasma (mg/dl) x 0.85 si es mujer Peso Medida de la masa corporal utilizada para la evaluación nutricional. Edad Tiempo de vida transcurrido desde el nacimiento. Calculo de la edad a partir de la fecha de nacimiento Cuantitativa De razón Años Sexo Diferencia biológica entre hombres y mujeres, basada en sus caracteres sexuales. Dato obtenido del expediente del paciente Cualitativa Nominal Hombre y Mujer Indica el número de células CD4 en el organismo. Dato obtenido de CD4 basales, a los 12 y 23 meses del expediente de cada paciente Cuantitativa De razón Número de células 600-1200 ml3 Dato obtenido de la carga viral, basal a los 12 y 24 meses del expediente de cada paciente Cuantitativa De razón Entre 50 a 10X10 Copias/ml Recuento CD4 de Una célula CD4 es un tipo especial de linfocito responsables de la respuesta inmune y célula blanco del VIH/SIDA. Carga Viral Cantidad de VIH que está circulando por la sangre. La prueba de carga viral mide la cantidad de VIH por mililitro (ml) en la sangre y puede detectar hasta un mínimo de 40 copias de VIH por mililitro. 44 6 Síndrome inflamatorio de reconstitución inmune IRIS La OMS lo define como un grupo de signos y síntomas que resultan de la capacidad de presentar una respuesta inmune a antígenos y organismos infecciosos asociados con la recuperación inmune. Dato obtenido del expediente de cada paciente Cualitativa Nominal Si No 8. INSTRUMENTO DE RECOLECCIÓN DE DATOS El instrumento de recolección de datos pretende recopilar la información necesaria para el estudio y su posterior análisis, basado en los objetivos planteados, el cual fue utilizado únicamente por el investigador ya que dicha información fue tomada específicamente del expediente de cada paciente, para lo cual se realizaron visitas continuas a la clínica de infecciosas del Hospital Roosevelt, con el fin de realizar dicha búsqueda. El instrumento de recolección de datos que se utilizó consta de tres partes, la primera parte en la que se incluyen los datos generales del paciente como: Nombre Registro Edad Sexo Originario y Residente En la segunda parte se incluye información general relacionada con la patología del paciente como: CD4 basales Estadio del CDC en el diagnóstico Esquema del tratamiento antirretroviral del paciente Comorbilidades asociadas Infecciones oportunistas IRIS (síndrome inflamatorio de reconstitución inmune) 45 La tercera parte del instrumento corresponde a una tabla que incluye información sobre el seguimiento que se le realiza a cada paciente, el cual se dividió en etapas que corresponden a las mediciones basales y a las mediciones realizadas cada 12 meses después que el paciente inicia su tratamiento antirretroviral; esta es la parte fundamental del instrumento en la cual se encuentran los datos cuantitativos del estudio, además de algunos datos que deben incluirse en la fórmula que representa la función renal del paciente. 9. PLAN DE PROCESAMIENTO Y ANÁLISIS DE DATOS Se elaboró una plantilla en la cual se ingresaron los datos recolectados a partir de la información obtenida por medio del instrumento de recolección de datos, se procedió a tomar dichos datos y se ingresaron en una plantilla de Microsoft Excel los cuales posteriormente fueron tabulados de la siguiente manera: Se procedió a ordenar la información según el esquema de terapia antirretroviral. Se tabularon los datos de los pacientes que estaba incluidos en el esquema de primera línea y posteriormente los que estaban incluidos en un esquema de segunda línea y los pacientes incluidos en el grupo control. Se analizaron los datos considerando algunas variables como: sexo, carga viral, recuento de CD4 y se compararon con los niveles de creatinina y la tasa de filtración glomerular. Los resultados obtenidos se representaron en tablas y gráficas según las variables del estudio. Se realizaron asociaciones estadísticas entre las variables dependiente e independiente con el objetivo de identificar si existe relación, para ello se utilizó el Test de Kruskal Wallis y Friedman (no paramétricos), los cuales son pruebas estadísticas que evalúan si los grupos difieren entre sí de manera significativa respecto a sus medianas, estos se basan en la distribución muestral de diferencia de medianas, y esta distribución se identifica según el número de maneras que los datos pueden variar libremente y que las variables sean medidas al menos en una escala ordinal. Con esto podrá aprobarse o rechazarse la hipótesis nula. Previo a la realización de dichas pruebas se realizó un análisis para determinar la distribución de probabilidad de los datos y la igualdad de varianzas (10). 46 Posteriormente para identificar si existe alteración renal en los pacientes que tienen tratamiento antirretroviral con Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir se utilizó una prueba no paramétrica como ji cuadrada (x2) la cual es una prueba estadística que evalúa hipótesis acerca de la relación entre dos variables categóricas, con el fin de establecer correlación. Las frecuencias observadas se anotaron en tablas de contingencia. Para evaluar la asociación entre la variable dependiente e independiente, fue necesario establecer un grupo “control” el cual fue representado por los pacientes VIH/SIDA que acudieron a la clínica de infecciosas del 2008-2010 y que recibieron tratamiento antirretroviral con los esquemas de primera línea que no incluya Tenofovir, este grupo control fue utilizado únicamente con el fin de tener un parámetro de los cambios en la función renal y poder aplicar así la prueba estadística de x2. Posterior a la identificación de la existencia de alteración en la función renal se midió el Riesgo Relativo (RR): el cual indica la asociación entre exposición y enfermedad, es decir, cuántas veces es más probable que las personas expuestas desarrollen alteración en la función renal en relación con las no expuestas al tratamiento con Tenofovir. Variable Independiente Variable Dependiente Esquema con Tenofovir Esquema con Tenofovir, Tasa de filtración glomerular Lopinavir/Ritonavir Niveles de creatinina Prueba Estadística Test de Kruskal Wallis Test Friedman Ji cuadrada Riesgo Relativo 47 10. PROCEDIMIENTO Primera etapa: Obtención del aval institucional. Obtención de permiso correspondiente por parte de la Clínica de Infecciosas del Hospital Roosevelt para tener acceso a los expedientes de los pacientes con diagnóstico de VIH/SIDA que acudieron a dicho centro en el año 2008 – 2010 y que recibieron tratamiento antirretroviral con Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir. Segunda etapa: Identificación de los participantes Se realizaron revisiones periódicas de los expedientes de los pacientes VIH/SIDA que acudieron a la clínica de infecciosas del Hospital Roosevelt del año 2008-2010 y que recibieron tratamiento antirretroviral con Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir. Tercera etapa: Revisión de expedientes Se revisaron los expedientes de los pacientes que cumplieron con los criterios de inclusión y se realizó la medición de creatinina y la tasa de filtración glomerular basal, a los 12 y 24 meses en los pacientes que reciben tratamiento antirretroviral con Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir. Cuarto etapa: Tabulación y presentación de resultados Se tomó en cuenta tanto el esquema antirretroviral de primera línea que incluye Tenofovir + Emtricitabina + Efavirens o Nevirapina y el esquema de segunda línea que incluye Tenofovir + Lamidovudina o Emtricitabina + Lopinavir/Ritonavir. Y se analizaron en que pacientes se presenta mayor alteración en la función renal. Posteriormente a la recolección los datos, se realizó la medición de la tasa de filtración glomerular con la siguiente fórmula CockcroftGault: Aclaramiento Creatinina = (140 – edad) x peso (en kilogramos) x 0.85 si es mujer 72 x creatinina en plasma (mg/dl) 48 Con la obtención de los resultados se procedió analizar los datos identificando si existe diferencia en la creatinina y en la tasa de filtración glomerular basal a los 12 y 24 meses en los pacientes que recibieron terapia antirretroviral con Tenofovir, y posteriormente se analizaron los datos de los pacientes que tienen en su esquema Tenofovir asociado a Lopinavir /Ritonavir, con el fin de determinar si existe mayor alteración en la tasa de filtración glomerular y en los valores de creatinina en los pacientes que recibieron un esquema de segunda línea en comparación con los que recibieron un esquema de primera línea, considerando que Lopinavir/Ritonavir son fármacos que potencian la acción de Tenofovir. Los resultados del estudio se analizaron de acuerdo con los objetivos y variables del mismo, utilizando el método estadístico de regresión logistica. Se ordenaron y presentaron los datos en tablas o gráficas, según el tipo de variable, para observar la distribución general de los valores encontrados en cada una de las variables del estudio. 11. ALCANCES Y LIMITES DE LA INVESTIGACIÓN a. Alcances En Guatemala no existen actualmente estudios sobre los efectos secundarios que tienen los antirretrovirales sobre los pacientes VIH/SIDA que los utilizan. Es por ello que la presente investigación es de importancia ya que a través de ella puede identificarse si la utilización de estos causa algún deterioro de la función renal específicamente en el caso de Tenofovir, Lopinavir/ Ritonavir los cuales son el objetivo del estudio. La presente investigación pretende evaluar si el uso de Tenofovir causa daño renal en pacientes VIH/SIDA que utilizan tratamiento antirretroviral altamente activo (TARAA) ya que es el antirretroviral de mayor uso y que se incluye en los esquemas de primera línea, por lo anterior es importante identificar si realmente su efecto es mejor y si los beneficios son mayores en comparación con los efectos secundarios que dicho fármaco podría causar. 49 Además en algunos estudios basados en Tenofovir realizados en otros países no se tiene un adecuado seguimiento del tiempo en el que los pacientes han sido expuestos a dicho fármaco y como esto repercute en su función renal, por ello en la presente investigación se realizará el seguimiento de los niveles de creatinina y los cambios en la tasa de filtración glomerular hasta los 24 meses, considerando que dichos cambios podrían identificarse después de los 6 meses de su utilización. El estudio tendrá como aporte importante además la identificación de los pacientes que se encuentran en el esquema de segunda línea, los cuales son pacientes que presentaron fracaso terapéutico al esquema de primera línea y la determinación de la función renal utilizando Tenofovir asociado a Lopinavir/Ritonavir considerando que estos últimos potencian la acción de Tenofovir y esto aumenta el riesgo de daño renal. Por todo lo anterior se pretende que el estudio pueda aportar posibles sugerencias en aspectos relacionados con los esquemas de antirretrovirales y con esto determinar en qué proporción de pacientes existe alteración en la función renal y si esta es significativa o no para que pueda seguir incluyéndose en los esquemas de primera línea. b. Limites Algunos de los marcadores de la función renal como la creatinina y la tasa de filtración glomerular no son parámetros específicos para determinar daño renal ya que pueden verse afectados por otros factores como el sexo, la masa corporal, la edad, el peso, etc; por lo anterior considerando que la principal alteración que presentan los pacientes con antirretrovirales como Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir es una tubulopatía proximal representada como un Síndrome de Fanconi la determinación más efectiva de la función renal se basa en marcadores como orina de 24 horas, examen general de orina, niveles de fosfato, aminoácidos, glucosa y ácido úrico en orina. La cantidad de pacientes evaluados, ya que algunos de los expedientes no estaban disponibles, o eran de pacientes en abandono o fallecidos. 50 Factores como la falta de apego de los pacientes al tratamiento antirretroviral altamente activo, y por consiguiente el inadecuado seguimiento proporcionado. Algunos pacientes tenían dos o tres expedientes y esto limitó la búsqueda de información, además de la falta de datos como la medición de creatinina cada 6 meses, el peso, los niveles de CD4 y la carga viral que debe realizársele a los pacientes que acuden a consulta, ya que es información incluida en el instrumento de recolección y necesaria para el análisis del estudio. 12. Aspectos éticos de la investigación La presente investigación pretendía evaluar si la utilización de antirretrovirales como Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir; en pacientes VIH/SIDA causa alteraciones en la función renal, para esto es importante mencionar que la información necesaria para la realización del estudio fue tomada únicamente de los expedientes de los pacientes por lo cual no fue necesario la realización de un consentimiento informado, por ello se consideraron únicamente los datos que se requieren para el estudio y estos fueron utilizados exclusiva y específicamente para la interpretación y el análisis de la investigación, por lo anterior no se publicaron nombres, ni resultados de los pacientes, ya que es importante mantener la integridad de cada paciente, principalmente en el caso de dicho estudio en el cual la población son pacientes VIH/SIDA. Por lo anterior se considera que el estudio tiene un alto grado de confiabilidad, ya que la información recopilada fue utilizada únicamente por los investigadores. Además con el estudio se aplicaron los principios éticos de beneficiencia y no maleficiencia ya que a través de dicha investigación se busca identificar si los antirretrovirales como Tenofovir, Lopinavir/Ritonavir, los cuales han sido ampliamente utilizados ya que se incluyen en los esquemas de primera y segunda línea para tratamiento de pacientes VIH/SIDA causan alteración en la función renal considerando que los pacientes son expuestos a dichos medicamentos durante largos periodos de tiempo, y esto puede ser nocivo, por lo anterior se analizó si los beneficios que aportan para inhibir la replicación del virus son mayores que el daño que estos puedan causar en la función renal y como esto repercute en la calidad de vida del paciente. 51 13. RESULTADOS Tabla 12. Caracterización de pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral de la clínica de infectología del Hospital Roosevelt según esquemas 2008-2010 (n=857) GÉNERO FRECUENCIA PORCETAJE Masculino 542 63.2 Femenino 315 36.8 FRECUENCIA PORCENTAJE 16-25 años 94 11.0 26-35 años 335 39.1 36-45 años 247 28.8 46-55 años 122 14.2 56-65 años 48 5.6 66-75 años 10 1.2 76-85 años 1 .1 857 100 EDAD TOTAL Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. En la tabla no.12 se describen las características generales de los pacientes incluidos en el estudio, obteniéndose que para un total de 857 pacientes, el sexo masculino presentó un porcentaje mayor (63%) respecto a un (37%) del sexo femenino. La media de las edades para los pacientes estuvo comprendida entre los 26 a 45 años. 52 Tabla 13. Lugar de origen de pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral de la clínica de infectología del Hospital Roosevelt del 2008-2010 (n=857) DEPARTAMENTO FRECUENCIA PORCENTAJE Guatemala 259 30.2 Escuintla 136 15.9 Quiché 63 7.4 Jutiapa 50 5.8 Santa Rosa 45 5.3 Extranjeros 21 2.5 Otros 283 33.1 TOTAL 857 100 Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. Tabla 14. Lugar de residencia de pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral de la clínica de infectología del Hospital Roosevelt del 2008-2010 (n=857) DEPARTAMENTO FRECUENCIA PORCENTAJE Guatemala 439 51.2 Escuintla 121 14.1 Sacatepéquez 37 4.3 Quiché 34 4.0 Jutiapa 28 3.3 Otros 198 23.2 TOTAL 857 100 Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. 53 En las tablas 13 y 14 se representa el lugar de origen y residencia de los pacientes incluidos en el estudio, obteniéndose que entre los departamentos con más casos de VIH/SIDA se encuentra Guatemala con un 51%, Escuintla con un 14% y Sacatepéquez con un 4% respectivamente. Tabla 15. Evolución de la carga viral basal, 12 y 24 meses, de pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral de la clínica de infectología del 2008-2010 (n=857) CV BASAL FRECUENCIA PORCENTAJE Indetectable 130 15.2 Menos de 100,000 copias 413 48.2 Más de 100,000 copias 314 36.6 Total 857 100.0 FRECUENCIA PORCENTAJE Indetectable 742 86.6 Menos de 1000 copias 102 11.9 Más de 1000 copias 13 1.5 Total 857 100.0 FRECUENCIA PORCENTAJE Indetectable 750 87.5 Menos de 1000 copias 92 10.7 Más de 1000 copias 15 1.8 Total 857 100.0 CV 12 MESES CV 24 MESES CV: Carga viral Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. 54 En la presente tabla se representa la evolución de la carga viral de los pacientes incluidos en el estudio, considerándose carga viral basal (como el número de copias del virus antes de iniciar tratamiento antirretroviral), la carga viral a los 12 y 24 meses (el número de copias del virus después de utilizar tratamiento antirretroviral), obteniéndose que el 48.2% de los pacientes presentaron cargas virales basales menores a las 100,000 copias, 36.6% mayores de 100,000 porcentaje que se invierte en el seguimiento de los 12 y 24 meses obteniéndose que el 86.6 y 87.5% de los pacientes presentaron cargas virales indetectables respectivamente; es decir menos de 40 copias del virus, independientemente del esquema que utilizaran. Tabla 16. Recuento de CD4 basales, 12 y 24 meses de los pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral de la clínica de infectología del 2008-2010 (n=857) Mínimo Percentil 25 Mediana Percentil 75 Máximo CD4 basales -1 54 152 264 961 CD4 12 meses 1 194 296 426 999 CD4 24 meses 45 252 362 512 1698 Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. En la tabla 16 se representan los valores de CD4 basales (niveles de CD4 antes de iniciar tratamiento antirretroviral) y el seguimiento de estos a los 12 y 24 meses después de la utilización de antirretrovirales, de todos los pacientes del estudio sin diferenciar los esquemas en los que se encontraban; puede observarse que los niveles aumentaron progresivamente después de la utilización de tratamiento antirretroviral y que estas diferencias fueron estadísticamente significativas (P=.000) según el Test de Friedman. 55 Considerándose la mediana de los CD4 basales de 152. El valor basal mínimo de CD4 que presentaron los pacientes incluidos en el estudio fue de -1 célula y el valor máximo de CD4 que presentaron los pacientes fue de 1698 células con una mediana de 362, veinticuatro meses después de la utilización de terapia antirretroviral. Tabla 17. Evolución de CD4 basales, 12 y 24 meses de los pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral de la clínica de infectología del 2008-2010 (n=857) CD4 BASALES FRECUENCIA PORCENTAJE 218 104 535 25.4 12.1 62.4 857 FRECUENCIA 100.0 PORCENTAJE Menos de 50 6 .7 50 y menor de 100 22 2.6 Mayor de 100 829 96.7 Total 857 100.0 FRECUENCIA PORCENTAJE Menos de 50 2 .2 50 y menor de 100 13 1.5 Mayor de 100 842 98.2 Total 857 100.0 Menos de 50 50 y menor de 100 Mayor de 100 Total CD4 12 MESES CD4 24 MESES Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. En la tabla 17 se presenta la evolución de los CD4, considerándose que el 62.4% de los pacientes presentó niveles de CD4 basales mayores a 100, y el 25.4% de los pacientes menos de 50 células/mm3. A los 12 y 24 meses después del TARAA el 96.7% y 98.2% de los pacientes presentaron niveles mayores a 100. 56 Tabla 18. Estadio del CDC diagnóstico de los pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral de la clínica de infectología del Hospital Roosevelt 2008-2010 (n=857) ESTADIO CDC FEMENINO MASCULINO PORCENTAJE A1 11 6 2.0 A2 65 67 15.4 A3 40 55 11.1 B1 1 3 .5 B2 32 30 7.2 B3 19 31 5.8 C1 3 0 .4 C2 17 30 5.5 C3 127 320 52.2 TOTAL 315 542 100.0 Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevellt En la tabla 18 se representa el estadio del CDC en el momento del diagnóstico, considerándose para este el recuento de CD4 y la evolución clínica de la enfermedad, observándose que el 52% de los pacientes se encontraban en estadio C3, siguiendo en orden de frecuencia el estadio A2 y A3 con un 15 y 11%, estos pacientes generalmente fueron asintomáticos y se detectaron por la realización de pruebas de tamizaje. 57 Tabla 19. Principales comorbilidades que presentan los pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral de la clínica de infectología del Hospital Roosevelt 2008-2010 (n=857) COMORBILIDADES FRECUENCIA PORCENTAJE Dislipidemia 367 41.7% Enfermedad péptica 169 19.2% Neuropatía 137 15.6% Sífilis 46 5.2% Anemia 36 4.1% NIC I 19 2.2% NIC II 17 1.9% Hepatitis B 10 1.1% Obesidad 12 1.4% Síndrome convulsivo 8 0.9% Sinusitis 6 0.7% HPB 5 0.6% Hepatitis C 3 0.3% Osteomielitis 2 0.2% Otras 43 4.9% 857 100.0% TOTAL NIC I y II: Neoplasia intracervical I y II. HPB: Hipertrofia prostática benigna. Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. En la tabla se encuentran las principales comorbilidades que presentaban los pacientes VIH/SIDA incluidos en el estudio observándose que la Dislipidemia (41.7%), Enfermedad Péptica (19.2%) y Neuropatía no clasificada (15%) fueron las morbilidades asociadas que se presentaron con mayor frecuencia durante el seguimiento de los pacientes. Puede observarse únicamente que el 0.8% de los pacientes presentó Hepatitis B y el 0.2% Hepatitis C infecciones que pueden relacionarse con daño renal. 58 Tabla 20. Principales infecciones oportunistas en el diagnostico de los pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral en la clínica de infectología del Hospital Roosevelt (n=857) INF. OPORTUNISTAS SDC y síndrome de desgaste Candidiasis oral FOD TB pulmonar Herpes zóster Histoplasmosis Toxoplasmosis cerebral Herpes simple TB extrapulmonar Leucoplaquia vellosa Candidiasis esofágica Criptococosis meníngea Papilomatosis anal Pneumocystis CMV ocular TB ganglionar Linfoma Hodgkin Encefalitis por VIH Otras TOTAL N 271 152 99 95 34 31 29 25 20 18 15 14 10 8 7 7 2 2 18 859 PORCENTAJE 31.5 17.7 11.5 11.1 4.0 3.6 3.4 2.9 2.3 2.1 1.7 1.6 1.2 0.9 0.8 0.8 0.2 0.2 2.1 100.0 SDC: Síndrome diarreico crónico. FOD: Fiebre de origen desconocido. TB: Tuberculosis CMV: Citomegalovirus Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. En la tabla 20 se incluyen las principales infecciones oportunistas asociadas que presentaban los pacientes al realizárseles el diagnostico de VIH; generalmente fueron las principales causas por las que consultaron dichos pacientes en los cuales la enfermedad progresó a fase SIDA, encontrándose que 31.5% de los pacientes presentó síndrome diarreico crónico asociado a síndrome de desgaste, el 17.7% candidiasis oral, 11.5% fiebre de origen desconocido y 11.1% tuberculosis pulmonar. 59 Tabla 21. Evolución de la TFG basal, 12 y 24 meses de los pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral según esquemas en la clinica de infectología del Hospital Roosevelt 2008-2010 (n=857) TFG basal TFG 12 meses TFG 24 meses AZT + 3TC + EFV (n: 98) AZT + 3TC + NVP (n: 19) EMT + TDF + EFV (n: 624) EMT + TDF + NVP (n: 58) EMT + TDF + Lopi/Rito (n: 58) Percentile 25 92.03 65.48 82.39 87.06 93.06 Mediana 119.55 86.56 106.40 111.80 113.53 Percentil 75 143.45 130.99 135.62 129.73 133.51 Percentil 25 110.60 71.21 100.73 93.41 100.08 Mediana 131.39 113.26 122.72 118.99 114.90 Percentil 75 146.37 143.38 144.92 134.96 130.16 Percentil 25 108.38 78.13 102.30 100.64 104.09 Mediana 129.75 109.54 123.48 126.67 115.22 Percentil 75 147.56 132.91 146.34 151.66 137.94 AZT: Zidovudina. 3TC: Lamivudina. EFV: Efavirenz. NVP: Nevirapina. EMT: Emtricitabina. TDF: Tenofovir. Lopi/Rito: Lopinavir/Ritonavir En la tabla 21 se observa la evolución de la tasa de filtración glomerular basal, a los 12 y 24 meses de los pacientes incluidos en el estudio, según esquema de antirretrovirales; obteniéndose que en el esquema de AZT+3TC+EFV la mediana de la TFG basal fue de 119.55 ml/min a los 12 meses 131.39 ml/min y 24 meses 129.75 ml/min. AZT+3TC+NVP la mediana de la TFG basal fue de 86.56 ml/min, a los 12 meses 113.26 ml/min, y 24 meses 109.54 ml/min, considerándose estos como grupo control; se observa que los pacientes que recibían esquema antirretroviral con AZT+3TC+NVP presentaron las medianas de TFG más bajas con respecto a los otros grupos. Se puede observar también que los valores de la TFG aumentaron progresivamente después de iniciar el uso de antirretrovirales en todos los grupos sin importar el esquema que utilizaron. El grupo de interés EMT+TDF+EFV presentó una TFG basal de 106.40 ml/min, a los 12 meses de 122.72 ml/min y a los 24 meses de 123.48 ml/min y EMT+TDF+NVP (111.80 ml/min, 118.99 ml/min y 126.67 ml/min), lo cual no representa alteración en la TFG en dichos esquemas ni en asociación con Lopinavir/Ritonavir (113.53 ml/min, 114.90 ml/min, 115.22 ml/min), por lo que no se encontró asociación estadísticamente significativa en los pacientes que utilizaron Tenofovir en relación con los que utilizaron otro esquema. 60 Tabla 22. Clasificación de la TFG basal, 12 y 24 meses de pacientes VIH/SIDA que reciben tratamiento antirretroviral de la clínica de infectología del Hospital Roosevelt 2008-2010 (n=857) TFG BASAL FRECUENCIA PORCENTAJE >90 583 68.0 60-89 216 25.2 30-59 56 6.5 <30 2 .2 Total 857 100.0 FRECUENCIA PORCENTAJE >90 738 86.1 60-89 103 12.0 30-59 16 1.9 Total 857 100.0 FRECUENCIA PORCENTAJE >90 739 86.2 60-89 103 12.0 30-59 14 1.6 Total 857 100.0 TFG 12 MESES TFG 24 MESES TFG: Tasa de filtración glomerular En la tabla 22 se clasificó la TFG según KDOQUI, considerándose grado I >90 ml/min (tasa de filtración glomerular normal o alta), grado II 60-89 ml/min (disminución leve del filtrado glomerular), grado III 30-59 ml/min (disminución moderada del filtrado glomerular) y grado IV <30 ml/min, (disminución grave del filtrado glomerular), obteniéndose que en la TFG basal el 68% de los pacientes presentaron filtración normal o alta y fue únicamente en esta medición donde dos pacientes presentaron disminución grave del filtrado glomerular la cual no se considera significativa ya que esta mejoró en los seguimientos posteriores. A los 12 meses el 86% de los pacientes presentaron TFG normal o alta y únicamente el 12% presentó disminución leve del filtrado glomerular, resultados que no presentaron variación a los 24 meses. 61 Tabla 23. Alteración de la tasa de filtración glomerular basal según esquemas de pacientes VIH/SIDA (n=857) ALTERACIÓN DE LA TASA DE FILTRACIÓN GLOMERULAR BASAL NO Esquema AZT + 3TC + EFV AZT + 3TC + NVP EMT + TDF + EFV EMT + TDF + NVP EMT + TDF + Lopi/Rito TOTAL 75 76.5% 8 42.1% 414 66.3% 42 72.4% 45 77.6% 584 68.1% SÍ 23 23.5% 11 57.9% 210 33.7% 16 27.6% 13 22.4% 273 31.9% AZT: Zidovudina. 3TC: Lamivudina. EFV: Efavirenz. NVP: Nevirapina. EMT: Emtricitabina. TDF: Tenofovir. Lopi/Rito: Lopinavir/Ritonavir Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. En la tabla 23 se identifica la alteración en la tasa de filtración glomerular que presentaron los pacientes antes de la utilización de tratamiento antirretroviral en cada esquema y se observa que el grupo de AZT+ 3TC + NVP fue el grupo que presentó mayor alteración (57.9%) en el filtrado glomerular. Esto a través de una prueba de ji2 con una diferencia estadísticamente significativa (P=.012). 62 Tabla 24. Alteración de la tasa de filtración glomerular a los 12 meses según esquemas de pacientes VIH/SIDA (n=857) ALTERACIÓN DE LA TASA DE FILTRACIÓN GLOMERULAR A LOS 12 MESES NO SÍ Esquema AZT + 3TC + EFV 90 8 91.8% 8.2% AZT + 3TC + NVP 11 8 57.9% 42.1% EMT + TDF + EFV 539 85 86.4% 13.6% EMT + TDF + NVP 46 12 79.3% 20.7% EMT + TDF + Lopi/Rito 52 6 89.7% 10.3% Total 738 119 86.1% 13.9% AZT: Zidovudina. 3TC: Lamivudina. EFV: Efavirenz. NVP: Nevirapina. EMT: Emtricitabina. TDF: Tenofovir. Lopi/Rito: Lopinavir/Ritonavir Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. En la tabla 24 se observa que doce meses después de la utilización de tratamiento antirretroviral las alteraciones en la tasa de filtración glomerular disminuyeron después de la utilización de antirretrovirales encontrándose alteración en el 13.9% de los pacientes, persistiendo la mayor alteración en el grupo con AZT + 3TC + NVP, como en la medición basal; estas diferencias estadísticamente significativas (P=.001) según la prueba de ji2. 63 Tabla 25. Alteración de la tasa de filtración glomerular a los 24 meses según esquemas de pacientes VIH/SIDA (n=857) ALTERACIÓN DE LA TASA DE FILTRACIÓN GLOMERULAR A LOS 24 MESES NO SÍ Esquema AZT + 3TC + EFV 90 8 91.8% 8.2% AZT + 3TC + NVP 14 5 73.7% 26.3% EMT + TDF + EFV 535 89 85.7% 14.3% EMT + TDF + NVP 50 8 86.2% 13.8% EMT + TDF + Lopi/Rito 51 7 87.9% 12.1% Total 740 117 86.3% 13.7% AZT: Zidovudina. 3TC: Lamivudina. EFV: Efavirenz. NVP: Nevirapina. EMT: Emtricitabina. TDF: Tenofovir. Lopi/Rito: Lopinavir/Ritonavir Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. En la tabla 25 se presentan las alteraciones en la tasa de filtración glomerular de los pacientes incluidos en cada esquema 24 meses después de la utilización de tratamiento antirretroviral, como puede observarse los resultados no presentaron variación en relación a las mediciones de los 12 meses (tabla 24). (P=.248) 64 Tabla 26. Diferencias entre las tasas de filtración glomerular y creatinina de pacientes con tratamiento antirretroviral de la clínica de infectología del Hospital Roosevelt 2008-2010 (n=857) TFG basal TFG BASAL TFG 12 MESES TFG 24 MESES Creatinina basal Creatinina 12 meses Creatinina 24 meses Chi-Square 9.331 11.492 7.965 90.223 305.373 280.934 Significancia .053 .022 .093 .000 .000 .000 Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. En la presente tabla se observa que las tasas de filtración glomerular presentaron variaciones estadísticamente significativas (P=.022) en todos los pacientes después de 12 meses de utilización de tratamiento antirretroviral, independientemente del esquema que utilizaran. Al igual que la creatinina, ya que también presentó variación estadísticamente significativa (P=.000) de los niveles basales a los seguimientos posteriores según el test de Kruskall Wallis. Tabla 27. Regresión logística con los factores predictores de alteración de la tasa de filtración glomerular en pacientes VIH/SIDA de la clínica de infectología del Hospital Roosevelt 2008-2010. (n=857) VARIABLES EDAD 16-25 26-35 36-45 46-55 56-65 ESQUEMA AZT + 3TC + EFV AZT + 3TC + NVP EMT + TDF + EFV EMT + TDF + NVP CV BASAL S.E .920 .892 .891 .919 .952 .717 .789 .542 .635 .000 P=<0.05 .003 .001 .000 .000 .000 .001 .029 .715 .055 .523 .070 .006 AZT: Zidovudina. 3TC: Lamivudina. EFV: Efavirenz. NVP: Nevirapina. EMT: Emtricitabina. TDF: Tenofovir. CV: Carga viral Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. 65 En la tabla 27 se presentan las variables que tienen efecto directo sobre la tasa de filtración glomerular de los pacientes incluidos en el estudio, de estas se identificó que la edad (P=.003), el tratamiento antirretroviral (P=.029) y la carga viral basal (P=.006) presentaron diferencias estadísticamente significativas según la prueba de regresión logística. Gráfica 1. Intervalos de confianza para la tasa de filtración glomerular basal, a los 12 y 24 meses según esquema de pacientes VIH/SIDA (n=857) ml/min AZT: Zidovudina. 3TC: Lamivudina. EFV: Efavirenz. NVP: Nevirapina. EMT: Emtricitabina. TDF: Tenofovir. Lopi/Rito: Lopinavir/Ritonavir Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. 66 En la gráfica no. 1 se representan los intervalos de confianza del 95% en la cual no se observa traslape de valores en las tasas de filtración glomerular basales, a los 12 y 24 meses en los diferentes esquemas de tratamiento por lo que no se espera que existan diferencias en la media poblacional. Es importante observar la mejoría de la tasa de filtración glomerular 12 meses después de la utilización de antirretrovirales independientemente del esquema. Gráfica 2. Intervalos de confianza para las creatininas basales, a los 12 y 24 meses según esquema de pacientes VIH/SIDA (n=857) mg/ml AZT: Zidovudina. 3TC: Lamivudina. EFV: Efavirenz. NVP: Nevirapina. EMT: Emtricitabina. TDF: Tenofovir. Lopi/Rito: Lopinavir/Ritonavir Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. En la gráfica no. 2 se representan los intervalos de confianza del 95% de los valores de creatinina donde se identifica que no se presenta traslape de valores por lo que no se espera que exista diferencia en la media poblacional. 67 Tabla 28. Riesgo Relativo de desarrollar daño renal a los 12 meses de utilizar tratamiento antirretroviral por esquemas de los pacientes VIH/SIDA de la clínica de infectología del Hospital Roosevelt 2008-2010 (n=857) Nivel de exposición RR IC(95.0%) AZT + 3TC + EFV 1.0000 - AZT + 3TC + NVP 5.1579 2.2091 12.0427 EMT + TDF+ EFV 1.6687 0.8346 3.3363 EMT + TDF + NVP 2. 5345 1.1012 5.8333 EMT + TDF + Lopi/Rito 1.2672 0.4627 3.4705 - RR: Riesgo Relativo AZT: Zidovudina. 3TC: Lamivudina. EFV: Efavirenz. NVP: Nevirapina. EMT: Emtricitabina. TDF: Tenofovir. Lopi/Rito: Lopinavir/Ritonavir Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. En la muestra la utilización de AZT + 3TC + EFV se constituyó como la categoría de menor riesgo y la utilización de AZT + 3TC + NVP de mayor riesgo. Los intervalos de confianza para el RR para las otras categorías incluyeron al valor uno, lo que indica que no hay asociación poblacional o aumento del riesgo al utilizar estos esquemas. Sin embargo la exposición a AZT + 3TC + NVP representa 5 veces el riesgo de desarrollar daño renal 12 meses después de su utilización. 68 Tabla 29. Riesgo Relativo de desarrollar daño renal a los 24 meses de utilizar tratamiento antirretroviral por esquemas de los pacientes VIH/SIDA de la clínica de infectología del Hospital Roosevelt 2008-2010 (n=857) Nivel de exposición RR IC(95.0%) AZT + 3TC + EFV 1.0000 - - AZT + 3TC + NVP 3.2237 1.1817 8.7940 EMT + TDF+ EFV 1.7472 0.8752 3.4882 EMT + TDF + NVP 1.6897 0.6703 4.2595 EMT + TDF + Lopi/Rito 1.4784 0.5655 3.8651 RR: Riesgo Relativo AZT: Zidovudina. 3TC: Lamivudina. EFV: Efavirenz. NVP: Nevirapina. EMT: Emtricitabina. TDF: Tenofovir. Lopi/Rito: Lopinavir/Ritonavir Fuente: Boleta de datos. Expediente clínico. Clínica de infectología del Hospital Roosevelt. El intervalo de confianza calculado para el RR de los niveles de mayor riesgo en función del nivel de referencia (AZT + 3TC + EFV), no incluye al valor 1, lo cual indica que el esquema AZT + 3TC + NVP se constituye como un factor de riesgo poblacional para la presentación de daño renal. Por lo que los pacientes expuestos a dicho esquema tienen 3 veces el riesgo de desarrollo de alteración renal en relación a AZT + 3TC + EFV, 24 meses después de la utilización de antirretrovirales. 69 14. ANÁLISIS DE RESULTADOS Según los datos obtenidos de los pacientes de la clínica de infectología del Hospital Roosevelt el sexo masculino se presentó en mayor porcentaje (63%) en relación al sexo femenino (37%); considerando el informe sobre situación del VIH y la violencia basada en género, la infección por VIH en mujeres se ha triplicado en los últimos 22 años, ya que la relación de masculinidad, que antes de 1996 era de 5-7 hombres por cada mujer, actualmente es de dos hombres por cada mujer, lo cual corresponde con los datos recolectados.(12) El 39% de los pacientes se encuentran comprendidos entre los 26 y 35 años, esto puede relacionarse con los datos del Informe Nacional de Desarrollo Humano 2011-2012 el cual indica que el 40% de las personas con VIH en Guatemala tienen de 15 a 29 años.(12) Existe una evidente correlación entre los niveles de ARN viral y el estadio de la enfermedad, ya que los pacientes que desarrollan SIDA tienen niveles significativamente más altos de ARN viral que los pacientes asintomáticos, en los datos recolectados se obtuvo que el 48% de los pacientes presentaron cargas virales basales menores a 100,000 copias, el 36.6% mayores de 100,000 y únicamente el 15.2 fueron cargas virales indetectables, este personaje corresponde a los pacientes que son detectados en estadios tempranos de la enfermedad o que fueron previamente tratados en otro centro y trasladados al Hospital Roosevelt para su seguimiento. La carga viral mayor a 100,000 copias incrementa el riesgo de progresión a SIDA, independientemente del conteo de células CD4. En el seguimiento a los 12 y 24 meses posteriores a la utilización de tratamiento antirretroviral el 86.6 y 87.5% de los pacientes presentaron cargas virales indetectables lo cual representa una adecuada respuesta al tratamiento, sin importar el esquema que utilizaron, con esto se pretende disminuir la progresión o muerte en el 30% de los casos.(3) El virus de inmunodeficiencia humana se caracteriza por presentar un defecto en la inmunidad mediada por células, causando una reducción en el número y función de los linfocitos CD4, en el estudio se observó que los pacientes presentaron una elevación estadísticamente significativa (P=.000) de los niveles de CD4 después de la utilización de tratamiento antirretroviral, independientemente del esquema, considerar tal restauración inmunitaria representa consecuencias clínicas importantes, dado que sólo los pacientes en los que los CD4 se recuperan por encima de las 500 células/mm3 alcanzan el mismo nivel de mortalidad de la población general.(1) 70 Se analizaron las principales comorbilidades que presentaban los pacientes en el diagnóstico y en los seguimientos posteriores identificándose que la mayor asociación se presentó con dislipidemia (41.7%), enfermedad péptica (19.2%) y neuropatía no clasificada (15.6%) esto podría relacionarse con el efecto del propio virus o con el uso de tratamiento antirretroviral con Zidovudina (AZT), Efavirenz y Lopinavir/Ritonavir. De las infecciones que pueden asociarse con daño renal únicamente el 0.8% de los pacientes presentó Hepatitis B y el 0.2% Hepatitis C. Las infecciones oportunistas que presentaron los pacientes en el momento del diagnostico asociadas con el VIH fueron síndrome diarreico crónico asociado a síndrome de desgaste (31.5%), candidiasis oral (17.7%), fiebre de origen desconocido (11.5%) y tuberculosis pulmonar (11%) información que tiene relación con datos de ONUSIDA 2012 donde se estima que, del total de personas con VIH en Guatemala, el 12% tiene tuberculosis.(12) La información recolectada indica que la utilización de Tenofovir no representa asociación estadísticamente significativa con daño renal en comparación con otros esquemas en la población que acude al hospital Roosevelt lo cual habrá que corroborar en un seguimiento posterior anual hasta 5 o más años del uso de Tenofovir. Los pacientes que utilizaron Emtricitabina + Tenofovir + Efavirenz presentaron medianas de TFG basales de 106.40 ml/min, a los 12 meses de 122.72 ml/min y a los 24 meses de 123.48 ml/min, resultados similares al grupo de pacientes con Emtricitabina + Tenofovir + Nevirapina con TFG basales de 111.80 ml/min, a los 12 meses de 118.99 ml/min y a los 24 meses de 126.67 ml/min, lo que representa un filtrado glomerular normal, dichos resultados no presentaron variación en la asociación de Tenofovir con Lopinavir/Ritonavir los cuales presentaron tasas de 113.53 ml/min, 114.90 ml/min, 115.22 ml/min respectivamente. Es posible mencionar que pudo no encontrarse asociación ya que la alteración renal más común asociada a Tenofovir en pacientes VIH/SIDA es la tubulopatía proximal la cual se presenta principalmente como Síndrome de Fanconi, por lo que para identificar una alteración renal antes de detectar variaciones en la creatinina o en la TFG es importante la realización de un examen general de orina ya que es aquí donde pueden detectarse los primeros cambios en el sedimento urinario como proteinuria, glucosuria, calciuria, hiperfosfaturia; por consiguiente los valores de estos en sangre pueden encontrarse disminuidos por lo que es recomendable que como pruebas de gabinete se incluya la realización de un examen general de orina en todo paciente con diagnóstico de VIH, y su correspondiente seguimiento. 71 Debe considerarse también que en dicho estudio se excluyeron a los pacientes que presentaban comorbilidades como hipertensión arterial, diabetes mellitus, enfermedad renal previa, factores que asociados a la utilización de Tenofovir aumentan el riesgo de desarrollar daño renal. Es importante resaltar también que el seguimiento que se les realizó a los pacientes fue de dos años, por lo que es posible que el daño renal (establecido como un aumento de creatinina y/o disminución del filtrado glomerular) pueda observarse en los próximos años cuando la exposición a dicho medicamento se prolongue por más tiempo. Además de los esquemas que incluían Tenofovir y Tenofovir asociado a Lopinavir/Ritonavir se utilizó un grupo control; al cual correspondían los pacientes que utilizaban el esquema antirretroviral con Zidovudina + Lamivudina + Efavirenz/Nevirapina y fue en los pacientes que utilizaron dicho esquema con Nevirapina en los que se encontraron los niveles más bajos de filtración glomerular basal (86.56 ml/min), a los 12 meses (113.26 ml/min) y 24 meses (109 ml/min) con respecto a los otros esquemas, esto podría relacionarse con la presencia de predisposición previa de estos pacientes por lo cual fueron incluidos en este grupo y no en algún esquema con Tenofovir. Al evaluar la tasa de filtración glomerular de los pacientes comprendidos en los diferentes esquemas se identificó que en todos los grupos la TFG aumentó progresivamente después de iniciar tratamiento antirretroviral principalmente después de 12 meses de seguimiento (P=.022) asociación estadísticamente significativa; esta mejoría podría relacionarse con la disminución de la carga viral, por el control de infecciones oportunistas, control de la deshidratación provocada por la diarrea crónica, así como la disminución progresiva del uso de medicamentos potencialmente nefrotóxicos que se requiere para el tratamiento de los síntomas relacionados, situación que será importante investigar en el futuro en nuestra población. Los niveles de creatinina no presentaron elevaciones significativas entre los diferentes grupos lo cual puede relacionarse con la cohorte del estudio Chelsea y Westminster en 2004, en el que concluyeron que la probabilidad de desarrollar un ascenso de la creatinina sérica era similar entre aquellos individuos expuestos y no expuestos a Tenofovir. 72 Para determinar si existió daño renal y la clasificación de este, se utilizó la escala de KDOQUI en la cual el 68% de los pacientes presentaron TFG basal normal, 25% disminución leve del filtrado glomerular y 6% disminución moderada del filtrado glomerular, y únicamente el 0.2% presentaron disminución severa del filtrado glomerular la cual no se consideró como daño ya que esta disminución no presentó progresión en el seguimiento posterior. A los 12 y 24 meses el 86% de los pacientes presentaron una TFG normal o alta y únicamente el 12% presentó disminución leve del filtrado glomerular. En un análisis de más de 10.000 pacientes que participaron en el programa de acceso expandido de Tenofovir, sólo el 0.5% de los casos presentó un acontecimiento adverso renal grave y el 2.2%, una elevación de la creatinina de más de 0.5 mg/dl. Al relacionar las diferentes variables como sexo, edad, recuento de CD4, carga viral, utilización de tratamiento antirretroviral, infecciones oportunistas basales y comorbilidades (excluyendo hipertensión arterial, diabetes mellitus, enfermedad renal previa) como factores que pueden afectar la función renal se identificó que únicamente la edad (P=.003), el tratamiento antirretroviral (P=.029) y la carga viral basal (P=.006) presentaron diferencias estadísticamente significativas por lo cual la importancia de iniciar tratamiento antirretroviral oportuno. Al calcular el riesgo relativo se identificó que la exposición a Zidovudina + Lamivudina y Nevirapina representa 5 veces el riesgo de desarrollo de alteración renal a los 12 meses de utilización y a los 24 meses tienen 3 veces el riesgo. 73 15. CONCLUSIONES Según los datos recolectados en la clínica de Infectología del Hospital Roosevelt la utilización de Tenofovir en los diferentes esquemas de terapia antirretroviral altamente activa no tiene relación estadísticamente significativa con la tasa de filtración glomerular y los niveles de creatinina de los pacientes VIH/SIDA, por lo que la exposición a dicho medicamento no representó un riesgo de daño renal en el seguimiento hasta los 24 meses. La asociación de Tenofovir con algunos inhibidores de la proteasa como Lopinavir/Ritonavir no aumentó el riesgo de alteración renal en pacientes que utilizan la combinación de estos antirretrovirales en los diferentes esquemas en el seguimiento durante 24 meses. En todos los grupos analizados se observó que los pacientes con diagnóstico de VIH/SIDA aumentaron sus niveles de filtración glomerular después de la utilización de tratamiento antirretroviral independientemente del esquema que utilizaran, situación que puede relacionarse con la disminución de la carga viral. La edad, la utilización de tratamiento antirretroviral y la carga viral basal pueden considerarse factores de riesgo para el desarrollo de alteraciones en la tasa de filtración glomerular de pacientes VIH/SIDA ya que presentaron diferencias estadísticamente significativas (P=.003, P=.029, P=.006) con relación a otras variables. El 68% de los pacientes presentaron tasas de filtración glomerular basal normal (grado I) según la clasificación de KDOQUI, porcentaje que aumentó en el seguimiento de los 12 y 24 meses al 86%. El 25% de los pacientes presentó disminución leve del filtrado glomerular (KDOQUI grado II) en la TFG basal; porcentaje que disminuyó a los 12 y 24 meses a 12% después de la utilización de tratamiento antirretroviral altamente activo. La utilización de antirretrovirales como Zidovudina + Lamivudina + Nevirapina representa 5 veces el riesgo de desarrollar alteración renal 12 meses después de la exposición y a los 24 meses 3 veces el riesgo. 74 16. RECOMENDACIONES Incluir como parte de las pruebas de gabinete que se les realiza a los pacientes VIH/SIDA el examen general de orina, ya que las primeras manifestaciones de daño renal pueden detectarse en alteraciones del sedimento urinario como proteinuria, glucosuria, hiperfosfaturia, calciuria, etc. Detectar adecuadamente a los pacientes VIH/SIDA que presentan comorbilidades como hipertensión arterial, diabetes mellitus, hepatitis B o C, enfermedad renal previa asociadas a la utilización de tratamiento antirretroviral con Tenofovir pues en estos pacientes podría aumentar el riesgo de daño renal según el tiempo de exposición, monitorizar cada seis meses la tasa de filtración glomerular. Realizar el seguimiento correspondiente a los pacientes según el tiempo de exposición a Tenofovir pues en este estudio las mediciones consideradas fueron hasta los 24 meses, factor que puede no representar significativamente la presencia de daño renal. Realizar seguimiento de los pacientes incluidos en el esquema con Zidovudina + Lamivudina y Nevirapina ya que presentaron mayor riesgo de desarrollar daño renal en relación a los otros esquemas, y determinar la existencia de factores predisponentes en este grupo. 75 17. BIBLIOGRAFÍA 1. Fauci, Braunwald. Harrison Principios de Medicina Interna. 17 edición. México. Mc Graw Hill, Interamericana. 2009: vol. 1 p: 1137-1203. 2. Chorda R, Poquet J. Nefropatía del Tubulo Intersticial por Tenofovir. [En línea] vol. II Farmacoterapia de la Comunidad Valenciana. 2011 (accesado el 15 de agosto de 2012) Disponible en: http://san.gva.es/cas/prod/dgf/farmacia/pdf/Terapeutico09.pdf 3. Medical Press. Tenofovir, medicamento contra el VIH relacionado con daño renal. 2012. [en línea] (accesado el 15 de agosto de 2012) Disponible en: http://www.medicalpress.es/tenofovir-medicamento-contra-el-vihrelacionado-con-daño-renal 4. Alcamí J. Coiras M. 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ANEXO 1 Anexo 2 GRUPO CONTROL: pacientes con diagnostico VIH/SIDA que acudieron a la clínica de infecciosas del Hospital Roosevelt y que recibieron terapia antirretroviral con cualquier esquema de primera línea que no incluya Tenofovir del año 2008 – 2010, y que cumplan con los criterios de inclusión. 78 ANEXO 3 NOMBRE: REGISTRO: EDAD: SEXO: M F ORIGINARIO: Cd4 basales: Residente: Estadio del CDC en el diagnostico: ESQUEMA DE TRATAMIENTO ARV: Zidovudina + Lamivudina + Efavirenz Zidovudina + lamivudina + nevirapina Emtricitabina + Tenofovir + efavirenz Emtricitabina + Tenofovir + nevirapina Emtricitabina + Tenofovir + lopinavir/ritonavir Comorbilidades: Infecciones oportunistas basales: BASAL PESO Edad RECUENTO DE CD4 RECUENTO DE CARGA VIRAL CREATININA TFG 12 MESES 24 MESES 79 IRIS SI NO