El ARTE Y LA GUERRA - hdiseno-ga2011-2

El ARTE
Y
LA GUERRA
Tanto el arte como la guerra, son 2 actividades que siempre han estado presentes en la vida del ser
humano, desde tiempos inmemoriables hasta nuestra época, han estado también estrechamente ligados.
A lo largo de la historia, el arte ha sido uno de los medios mas utilizados para
expresar sentimientos y pensamientos de los seres humanos; en tiempos de guerra (tantos a lo
largo de la existencia humana), éstos sentimientos y sus representaciones se han hecho presentes.
Desde el hombre de las cavernas, que utilizaba el el arte rupestre como medio de expresión y la guerra (no tanto
como la guerra como se le conoce hoy en día, sino como el uso de la fuerza violenta para conseguir algo) en su entorno,
un enfrentamiento contra la naturaleza por la supervivencia, vemos que en su arte expresa valores de guerra; pues
retrata en las cavernas imágenes de caza (cómo derrotar al enemigo, el cual para ellos eran los demás depredadores.Se
pretende en esta publicación crear una especie de galería, donde se muestran obras y diseños tanto históricos como
actuales sobre la influencia de la guerra en la comunicación gráfica así como la utilidad del arte para la acrividad armada.
GALERÍA
Frida Kahlo
y
Diego Rivera
Francisco de Goya
Los horrores de la gue-
rra dejaron una profunda huella en Goya, que
contempló personalmente
las batallas entre soldados franceses y ciudadanos españoles durante los
años de la ocupación napoleónica. En 1814 realizó
El dos de mayo de 1808,
la lucha contra los mamelucos y El tres de mayo
de 1808, los fusilamientos
en la montaña de Príncipe
Pío (ambos en el Museo
del Prado). Estas pinturas
reflejan el horror y dramatismo de las brutales
masacres de grupos de españoles desarmados que luchaban en las calles de Madrid contra los soldados franceses. Ambas están pintadas,
como muchas de las últimas obras de Goya, con pinceladas de grueso empaste de tonalidades oscuras y con puntos de amarillo y rojo brillante. Sencillez y honestidad directas también se aprecian en los retratos que pintó en la
cúspide de su carrera, como Carlos IV con su familia (1800, Museo del Prado), donde se muestra a la familia real
sin la idealización habitual. Las célebres
Pinturas negras (c. 1820, Museo del Prado) reciben su nombre por su espantoso
contenido y no tanto por su colorido y son
las obras más sobresalientes de sus últimos años. Originalmente estaban pintadas al fresco en los muros de la casa que
Goya poseía en las afueras de Madrid y
fueron trasladadas a lienzo en 1873. Destacan, entre ellas, Saturno devorando a un
hijo (c. 1821-1823), Aquelarre (escena sabática) (1821-1823). Predominan los tonos
negros, marrones y grises y demuestran
que su carácter era cada vez más sombrío.
Polémicos
personajes dieron
otra utilidad para el arte más
que retratar los hechos violentos
por medio de sus pinturas, éstos murales tenían una función en
si. Murales de revolución, donde
se esperaba que el espectador se inspirara de sentimientos revolucionarios encontra de un sistema
opresor y cambiara su
conducta para así engrosar las filas
Segunda
Guerra
Mundial
Revolución
Rusa
En la revolución rusa, debido al pensamiento constructivista, los artistas tomaron mayor protagonismo en la vida
política y militar. Inspirados en que la función del artista no debe ser simplemente estética-creadora, sino que debe
tener un rol crítico-constructivo para la formación del estado y su sociedad, aparecieron los
afiches de propaganda, donde se decoraban
las calles para incitar a una revolución y hacer parte de un
nuevo partido gobernante. El arte deja de ser exclusivamente para unos pocos que atienden las exposiciones y
galerías, y pasa a formar parte de toda la sociedad, cualquier
persona que transite por la calle (independientemente de su religión, partido político, nivel económico, etc, tiene que hacer uso de las
calles) puede apreciar el nuevo arte de revolución y ser
influenciado por este, donde entran
a jugar factores como orgullo, patriotismo, responsabilidad social, entre otros.
Para la segunda guerra mundial (1938
- 1945) donde el mundo había sido totalmente industrializado, al igual que el arte
y las artes gráficas, existió una masiva
producción de propaganda para engrosar
las filas de combatientes. Los dirigentes se
dieron cuenta del impacto de dicha propaganda en la sociedad para influir su comportamiento frente a lo que sería su enemigo
transmitiendo un mensaje de patriotismo
y defensa de los principios de la sociedad.
Tanto en el caso de los aliados y las potencias del eje, utilizaron mensajes de patriotismo y defensa de sus valores propios,
tornando la guerra más a intereses personales y pacíficos que políticos, haciendo que
el espectador se sintiera identificado con su
ejército y a su vez identificara al enemigo
que debía combatir, quien era todo lo contrario a sus creencias y representaba el mal.
ACTUALIDAD
Colombia
Nuestro país, que ha sufrido tanto las consecuencias del
conflicto armado no es la excepción frente a los usos del arte
y el diseño como propaganda para fortalecer a las tropas
del ejército nacional e impulsar un sentimiento de
repudio por parte de la ciudadanía frente a
los grupos insurgentes. Fotografías,
comerciales, hasta “concursos”
en revistas realzando la valentía y
trabajo de los soldados colombianos
en la preservación de la paz. Uno de los
más conocidos sistemas de propaganda
es aquella consigna que reza: “Los héroes
en Colombia SÍ existen”, muy conocido por
todos y que genera sentimientos de orgullo
y apoyo a las tropas que parten al combate.