MERCADOS SECUNDARIOS. AFECTACIÓN DE LA COMPETENCIA O PROTECCIÓN DE LA LEALTAD EN EL MERCADO FRENTE A LOS COMPETIDORES Y LOS CONSUMIDORES (UN ESTUDIO DESDE EL DERECHO ECONÓMICO) CARLOS ANDRÉS URIBE PIEDRAHITA1 Resumen Este artículo trata la problemática de los mercados secundarios en la UE, en especial, la dificultad existente en un análisis de libre competencia a efectos del Art. 102 del TFUE para determinar un poder de mercado en mercados secundarios (v.gr. mercados de bienes y servicios postventa) cuando los mercados primarios (v.gr. bienes de larga duración) se encuentran en competencia. En el desarrollo de esta tarea, el estudio tratado en estas líneas identifica las diferentes clases de mercados donde existen relaciones entre bienes primarios y secundarios, en especial para reconocer que la problemática que más retos presenta en esta materia se encuentra en diferenciar la existencia de un mercado de sistemas de un mercado que se considere múltiple. Para llegar a comprender las dificultades que tal análisis presenta, tanto en el aspecto teórico como probatorio, se consideran las problemas en el análisis del mercado relevante, el comportamiento de los consumidores y las ideas económicas que soportan argumentos diferenciados sobre el alcance de la necesidad o no de intervención del derecho de la competencia para solucionar distorsiones en mercados secundarios que pueden ser considerados mercados propios de la empresa que compite en un mercado primario, a la luz de los abusos de explotación y exclusión. Por último, el artículo trata los asuntos más importantes que han sido estudiados por las autoridades de competencia Europeas y concluye indicando los principales retos y alcances de las consideraciones de economía normativa y política de competencia que fundamentan la aplicación del derecho de la competencia en materia de mercados secundarios. Palabras Claves Mercados secundarios, mercados de sistemas, mercados duales, mercados múltiples, abuso de la posición dominante. Contenido: I-INTRODUCCIÓN; a) Mercados secundarios en el Reglamento de Exención por categorías, b) Mercados secundarios y la nueva regulación en materia acuerdos de distribución de vehículos a motor y de distribución de recambios para vehículos a motor. II. LA DETERMINACIÓN DE LOS MERCADOS SECUNDARIOS O DE PIEZAS DE RECAMBIO, III. BENEFICIOS Y RESTRICCIONES EN EL MERCADO SECUNDARIO O DE PIEZAS DE RECAMBIO, a) Explicaciones a las restricciones en los mercados secundarios, b) Daños potenciales a la competencia y a los consumidores, IV. CONSIDERACIONES ECONÓMICAS DE LOS MERCADOS SECUNDARIOS O AFTERMARKETS, a) Requisitos para una comprensión de un mercado de sistemas, V. ASUNTOS DECIDIDOS POR LAS AUTORIDADES EUROPEAS EN MATERIA DE MERCADOS SECUNDARIOS, a) Asunto Hugin, b) Asunto Hilti, c) Asunto Tetra Pak II, d) Asunto Pelikan/Kyocera, e) Asunto CEAHR; VI. CONCLUSIÓN. Profesor de la Pontificia Universidad Javeriana, Bogotá – Colombia, Departamento de Derecho Económico, Doctor de la Universidad de Salamanca. 1 1 I. Introducción. Los mercados secundarios, también conocidos en su versión de mayor relevancia para el derecho de la competencia como mercados propios, mercados de sistemas o aftermarkets, son mercados caracterizados por la dependencia de un bien o servicio para ser usado con, o por razón de, un bien primario que es adquirido con anterioridad por un consumidor (Shapiro & Teece, 1994, p. 135)2. Los mercados secundaros también hacen alusión, aunque de forma menos precisa, a mejoras y productos accesorios que surgen durante la vida de un producto, por ejemplo, en el caso de productos de software se encuentra las actualizaciones y nuevas versiones a las que un usuario puede optar como mejora o como necesidad para mantener la estabilidad del sistema en su conjunto (Temple Lang, 2011, p. 200)3. Uno de los problemas que trata de resolver el derecho normativo de la competencia se concentra en definir si en mercados donde la empresa que enfrenta competencia en un mercado puede tener un poder de mercado –que le permita realizar comportamientos anticompetitivos- en su mercado secundario. Para identificar el contenido de este problema, como los elementos que se considera debe contener para que éste mismo se constituya en un objeto de estudio relevante para el derecho de la competencia, el documento tratará: en primer lugar, los asuntos más relevantes donde se ha identificado la doctrina en diferentes jurisdicciones; en segundo lugar, se explicarán los elementos (económicos y de competencia) que permiten construir el objeto de estudio; en tercer lugar, se considerarán diferentes escenarios que permitan concluir la relevancia de este objeto de estudio para el derecho de la competencia y; por último, se realizarán las conclusiones de este trabajo. Recientemente en los Estados Unidos (Desotech v. 3D Systems, No. 13-1298 (Fed. Cir. Apr. 18, 2014) y en Francia (Asunto Nespresso, Décision nº 14-D-09 du 4 septembre 2014, 2 Vid. (Coppi, 2007, p. 53); La Comisión Europea también los ha definido como los mercados que comprenden los productos complementarios que son comprados con posterioridad a la compra de un bien primario con el cual se relacionan. Vid. DG Competition Discussion Paper on the application of article 82 of the Treaty to exclusionary abuses, Diciembre de 2005. Considerando 243. 3 Vid. TEMPLE LANG, John. “Practical aspects of aftermarkets in european competition law”, Competition Policy International, Vol. 7, nº 1, 2011, págs. 199 – 241, pág. 200; BAUER, Joseph P. “Antitrust implications of aftermarkets”, Antitrust Bulletin, Spring 2007, págs. 31 – 51, pág. 32; 2 Autorité de la concurrence) han sido valorados como problemas de libre competencia diferentes asuntos relacionados con los mercados secundarios. Estos casos recuerdan la existencia de esta doctrina en el derecho de la competencia y su vigencia – y relativa sanidad - a los dos lados del Atlántico. La tipología de la casuística para la intervención del derecho de la competencia en mercados secundarios puede ser ilustrada como la existencia de un agente que compite en un mercado con otros agentes en la venta de productos de larga duración (mercado del bien primario), que además tiene la capacidad de establecer unos vínculos con los consumidores, motivados por el requerimiento de asistencia de éstos últimos que se fundamentan en la necesidad de mantener el bien en condiciones de seguridad, eficiencia y calidad (mercado secundario) a través de los requerimientos de un adecuado suministro de repuestos, servicios de asesoría o asistencia, consumibles, etc. Otro de los elementos característicos de la tipología de estos asuntos se encuentra en que existe la posibilidad de que terceros puedan participar en el suministro de la asistencia a los consumidores, pero que por razón de la empresa productora del bien en el mercado primario, ésta puede reservarse dicho mercado secundario para su propia explotación, algunas veces excluyendo a competidores que ya participaban en el mercado. Esta conducta puede ser vista como un cambio en la política de suministro o a través de la utilización de derechos de propiedad intelectual que dificultan la participación de los terceros en estos mercados. Uno de los aspectos que tienen alta importancia bajo esta tipología de casos, consiste en determinar si el análisis está dirigido a un solo mercado que incluye tanto el producto principal como los productos accesorios y/o complementarios, o si por el contrario, el análisis se concentra en la existencia de dos mercados separados. El hecho de poder diferenciar los dos mercados permite hablar de la existencia de un mercado primario y de otro mercado, denominado mercado secundario donde participan tanto el productor del mercado como empresas de servicios independientes. Este punto tiene su importancia porque por lo general las empresas productoras que participan en estos mercados se encuentran integradas verticalmente, mientras que las empresas de servicios independientes sólo participan en el mercado secundario, generándose una tensión, de un lado, de naturaleza estratégica para excluir a las empresas de servicios independientes del suministro de productos en los mercados secundarios, como de actividades de soporte y 3 mantenimiento. De otro lado, la tensión se presenta en la calificación como anticompetitiva por parte de las empresas de servicios independientes al desarrollo de las estrategias de las empresas productoras. La tensión entre productores y empresas de servicios independientes ha permitido el desarrollo de esquemas jurídicos y económicos de análisis tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea. Estos esquemas tratan de señalar el nivel de sustituibilidad de los bienes tanto en el mercado primario como secundario a través del bloqueo en el que se encuentran los consumidores o usuarios por razón del valor del bien en el mercado primario y el nivel de competencia en dicho mercado (lock-in), como también por los costos que tendría que enfrentar el consumidor si quisiera trasladarse a otro productor en el mercado primario (switching cost), tanto en razón de la adquisición del nuevo producto (costos directos), como también por razón del tiempo de aprendizaje y posibilidades de integrar el nuevo producto en un sistema más amplio o complejo (costos indirectos o variables según el consumidor). También la jurisprudencia ha tratado como puntos de análisis en la tensión entre productores y empresas de servicios independientes, los costos de información en que tienen que incurrir los consumidores para conocer de forma trasparente sus proyecciones de costos sobre el mercado secundario desde la capacidad que tenías éstos para identificar razonablemente lo que pretendían gastar al momento de la compra de dicho bien primario. Esta valoración permite señalar si existe algún tipo de explotación de los consumidores que se encuentran bloqueados en el producto del mercado primario, bien por la importancia de los costos de la información o del cambio de políticas de la empresa productora. Este artículo pretende abordar la problemática que se presenta en los mercados secundarios que son propiedad de una empresa que compite en un mercado primario. Con esto se quiere especificar los problemas que una autoridad de competencia (como también demandantes y/o demandados) debe afrontar al valorar el poder de mercado en un mercado secundario cuando una empresa afronta competencia en el mercado primario. Esta problemática ha sido abordada por la Comisión Europea, el Tribunal General y el Tribunal de Justicia, sin embargo las consideraciones jurídicas y la valoración económica no son muy específicas y quedan importantes alternativas en la valoración de comportamientos de poder de mercado en los aftermarkets. El análisis que se presenta ahora, trata de abordar las los principales elementos que deben ser considerados para establecer un mercado relevante 4 en mercados secundarios, la dominancia y un posible abuso de la posición dominante. Para lograr este objetivo, este estudio estudia las diferentes consideraciones de normativa económica que dan sustento vías opuestas sobre el grado intervención que se debe permitir en el derecho de la competencia a problemas de poder de mercado en aftermarkets. Los mercados de piezas de recambio (aftermarkets) son mercados para la oferta o distribución de productos o servicios necesarios para el uso de (o en conexión con) bienes de larga duración que han sido adquiridos con anterioridad4. Estos mercados incluyen la reparación, los servicios de mantenimiento, las piezas de recambio, bienes consumibles (películas fotográficas, cartuchos de impresora), aplicaciones (software), entre otros 5. El mercado de piezas de recambio es usualmente denominado como un mercado secundario, mientras que el mercado de los bienes duraderos o que fueron adquiridos con anterioridad se les conoce como el mercado primario6. Algunos de los problemas de libre competencia y de la distribución en los mercados de piezas de recambio comienzan por identificar el mercado y la dominancia en tales mercados secundarios7. Por ejemplo, algunas autoridades de competencia diferencian entre mercados de sistemas, mercados múltiples y mercados duales8. Los mercados de sistemas hacen referencia al conocimiento que el consumidor tiene sobre la vinculación estricta entre el mercado primario y el mercado secundario, como pueden ser los costes que se vinculan a 4 La Comisión Europea definió los aftermarkets en el documento de discusión de los abusos de exclusión en materia del artículo 102 como los mercados que comprenden los productos complementarios que son comprados con posterioridad a la compra de un bien primario con el cual se relacionan. Vid. DG Competition Discussion Paper on the application of article 82 of the Treaty to exclusionary abuses, Diciembre de 2005. Considerando 243 5 los mercados atermarkets también hacen alusión, aunque de forma menos precisa, a mejoras y productos accesorios que surgen durante la vida de un producto. En el caso del software se encuentran las actualizaciones y nuevas versiones a las cueles un usuario puede optar. Vid. TEMPLE LANG, John. “Practical aspects of aftermarkets in european competition law”, Competition Policy International, Vol. 7, nº 1, 2011, págs. 199 – 241, pág. 200; BAUER, Joseph P. “Antitrust implications of aftermarkets”, Antitrust Bulletin, Spring 2007, págs. 31 – 51, pág. 32; 6 Vid. DG Competition Discussion Paper on the application of article 82 of the Treaty to exclusionary abuses, Diciembre de 2005. Considerando 243 7 Vid. O’DONOGHUE, Robert y PADILLA, Jorge. The Law and Economics of Article 82. Harth Publishing, 2008, Oxford, págs. 103 y ss; 8 Office of Fair Trading (OFT), “Market Definition Guidelines. Understanding competition law”, 2004, Considerando 6.2 “Three possible types of market definition are often put forward as regards after markets: • a system market: a unified market for the primary product and the secondary product (e.g. a market for all razors and replacement heads) • multiple markets: a market for primary products and separate markets for the secondary product(s) associated with each primary product (e.g. one market for all razors, individual markets for each type of replacement head), and • dual markets: a market for the primary product and a separate market for the secondary product (e.g. one market for all razors, a separate market for all replacement heads)”. 5 la vida y uso del producto principal, estableciéndose un solo mercado de productos primarios y secundarios 9. Los mercados múltiples plantean la existencia de un mercado primario donde compiten los diferentes productos de larga duración y mercados secundarios individuales con productos que son compatibles con uno y solo uno de los productos de larga duración, no existiendo intercambiabilidad en este segundo mercado, también identificado el mercado secundario como un mercado de propiedad de un agente del mercado primario (proprietary market)10. Por último, los mercados duales consideran dos mercados, un mercado primario donde compiten todos los bienes de larga duración y un mercado secundario donde compiten todas las piezas de recambio, siendo estas intercambiables o compatibles con cualquiera de los bienes de larga duración del mercado primario11. Otros problemas relacionados con la libre competencia y la distribución dependen de las características de los comportamientos que las empresas adelantan en el mercado primario para extender un posible poder de mercado a un mercado secundario, sin decir con esto que cada vez que éstos comportamientos son adelantados por empresas en el mercado (con o sin poder de mercado) dan lugar a la existencia de una violación de las normas de libre competencia 12 . Entre estas prácticas se encuentran la conclusión de acuerdos exclusivos de abastecimiento de bienes o servicios del mismo productor o prestador del bien o servicio en el mercado primario, por ejemplo en acuerdos de distribución o compra En relación con los mercados de sistemas…; Vid, Comisión Europea, Directrices relativas a las restricciones verticales, 2010/C 130/01. Considerando 91 “[…] En la práctica, lo que debe decidirse es si una proporción significativa de compradores toman su decisión teniendo en cuenta los costes durante la vida del producto. En caso afirmativo, esto indica que existe un mercado conjunto para el equipo original y las piezas de recambio”; Vid. Comunicación de la Comisión relativa a la definición de mercado de referencia a efectos de la normativa comunitaria en materia de competencia DO C 372 de 9.12.1997, Considerando 86. 10 Office of Fair Trading (OFT). Market Definition Guidelines. Understanding competition law, Cit. Supra. Considerandp 6.2; DG Competition Discussion Paper on the application of article 82 of the Treaty to exclusionary abuses, Diciembre de 2005. Considerando 244 11 Office of Fair Trading (OFT). Market Definition Guidelines. Understanding competition law, Cit. Supra. Considerandp 6.2. 12 Vid. REY, Patric & TIROLE, Jean, A Primer on Foreclosure, Handbook of Industrial Organization. vol. III, North Holland, Amsterdam. 2007, (Ed. MARK ARMSTRONG & ROB PORTER), pág. 2148. “[...] the notion of foreclosure until recently had poor intellectual foundations. Indeed, the intellectual impetus in the late seventies (reflected in the American antitrust practice of the eighties) cast serious doubt about its validity”; BIJLSMA, Michiel; KOCSIS, Viktoria; SHESTALOVA, Victoria & ZWART, Gijsbert, Vertical Foreclosure: A Policy Framework, CPB Document. N° 157. Enero de 2008, pág. 96; Vid. ERGAS, Henry and RALPH, Eric Kodjo. New Models of Foreclosure: Should Antitrust Authorities Be Concerned? Febrero de 1998. Disponible en: SSRN: http://ssrn.com/abstract=55775 or DOI: 10.2139/ssrn.55775 9 6 exclusiva, acuerdos de franquicia, etc. 13 . Al igual que en materia de acuerdos se debe considerar los efectos que sobre el mercado se producen en relación con los bienes de los mercados secundarios, en procesos de concentraciones horizontales de empresas competidoras en mercados primarios, la valoración de las restricciones (los efectos) que se pueden producir en mercados secundarios son un criterio fundamental para establecer los efectos restrictivos –monopolización- que la autorización de una determinada concentración puede causar en el mercado14. Otra posible forma de comportamiento dirigida a la extensión de un poder de mercado a un mercado secundario consiste en las prácticas de vinculación de productos15, donde el comprador del producto principal para poder acceder a éste debe contratar otro bien que complementa o que funciona en conjunción (siendo un producto de un mercado secundario) con el producto del mercado primario. Comportamientos relacionados con negativas de suministro, especialmente cuando el bien principal y el bien secundario se encuentran protegidos o incorporan derechos de propiedad intelectual (igualmente se puede considerar comportamientos relacionados con el estrechamiento o compresión de márgenes en sectores regulados 16 ), donde el titular del derecho de propiedad intelectual se niega a licenciar los derechos de propiedad intelectual que incorporan los bienes secundarios, convirtiéndose así en la única fuente de suministro de éstos bienes17. Vid. JONES, Alison & SUFRIN, Brenda, “EC Competition Law. Text, Cases and Materials”. Third edition. Ed. Oxford University Press. Oxford, 2008, 475 y ss, 734 y ss; MALAMED, Duglas, Eclusionary Vertical Agreements, en The American Bar Association. Antitrust Section. Washington, D.C. Abril. 2, 1998. Disponible en: http://www.usdoj.gov/atr/public/speeches/1623.pdf 14 En es asunto General Electric, la Comisión discute con profundidad los efectos que la concentración podría generar en los mercados secundarios, Vid. Decisión de la Comisión, General Electric/Honeywell Asunto COMP/M.2220, 2004/134/CE, de 3 de julio de 2001, por la que se declara una concentración incompatible con el mercado común DO n° L 048 de 18/02/2004 p. 0001 – 0085 15 Para una revisión de la vinculación de productos, Vid. HERRERO SUÁREZ, Carmen. “Los contratos vinculados (Tying Agreements) en el derecho de la competencia”, La Ley, Madrid, 2006, pág. 448 y 462 16 Vid. Sentencia del Tribunal de Justicia, Konkurrensverket v TeliaSonera AB, Asunto C-52/09 del 17 de Febrero de 2011, Rec. Juris. 2011 17 DREXL, Josef. Refusal to deal. Answers to the questionnaire of the ICN unilateral conduct working group. 2010, pp. 12 – 13, disponible en: http://www.internationalcompetitionnetwork.org/uploads/questionnaires/uc%20refusals/drexl.pdf; Vid. HÖPPNER, Thomas, Abuse of Market Dominance: The Refusal to Supply Competitors under Article 82 EC, VDM, Verlag Dr. Müller, Saarbrücken, 2009, pp. 125. pp. 25-25, 68-70; DIEZ ESTELLA. F. La doctrina del abuso en los mercados conexos: del “monopoly leveragin” a las “essential facilities”. RDM. N° 248, Julio de 2003. pp. 555-604; VILLAR ROJAS. F. “Las Instalaciones Esenciales para la Competencia”, Comares. Granada. 2004. pp. 410; Conclusiones del Abogado General Jacobs. Oscar Bronner GmbH & Co. 13 7 Conductas relacionadas con la modificación de la compatibilidad, interoperabilidad o configuración entre bienes primarios y secundarios pueden generar los mismos efectos de apalancamiento de una posición de un mercado principal a un mercado secundario18. a) Mercados secundarios en el Reglamento de Exención por Categorías En relación a los mercados secundarios, el Reglamento de exención por categorías 330/2010 para ciertos acuerdos verticales identifica como una restricción especialmente grave las limitaciones que el comprador de componentes (piezas que se incorporan en un bien primario o equipo original) pueda imponer al proveedor de los mismos, para que éste niegue el suministro de tales componentes como piezas sueltas a usuarios finales o talleres de reparación independientes19. Es decir, que no se entiende exceptuada una cláusula que obligue al proveedor de piezas de recambio, incorporadas en un bien primario, a un suministro exclusivo a la cadena del fabricante en el sentido de someter al proveedor de las piezas a un acuerdo de marca única (más del 80% de la producción debe ser vendida a la cadena de distribución del fabricante de productos primarios). El efecto directo sería así, limitar estos componentes a la cadena de reparación o mantenimiento de los productos primarios a los que se han incorporado dichas piezas. Sin embargo, no se debe entender prohibido que el fabricante de los bienes primarios que incorpora dichos componentes imponga una obligación a su red de mantenimiento y reparación para que se abastezca exclusivamente de la red de distribución del fabricante de dichas piezas 20 . Esta consideración del Reglamento tiene por objeto estimular la competencia intermarcas de bienes primarios y, a su vez, limitar las restricciones de la competencia intramarca al KG v. Mediaprint Zeitungs- und Zeitschriftenverlag GmbH & Co. KG and Others, Asunto C-7/97, del 28 de mayo de 1998.. 18 Vid. JACOBSON, Jonathan; SHER, Scott & HOLMAN, Edward. Predatory Innovation: An Analysis of Allied Orthopedic v. Tyco in the Context of Section 2 Jurisprudence, Loyola Consumer Law Review, Vol. 23, Nº 1, 2010, págs. 1 – 33, pág. 2 “[…] behavior related to redesign or “innovation.” While innovation generates significant procompetitive benefits, courts must be sensitive to dominant firms’ ability to use purported “innovation” as a means to secure market dominance or impede competition in complementary markets, without any material benefit to consumers. In such instances, this type of conduct is exclusionary or predatory and violates the Sherman Act”.; DEVLIN, Alan J. & JACOBS, Michael S., Anticompetitive Innovation and the Quality of Invention, September 12 de 2011, próximamente en: Berkeley Technology Law Journal, Disponible en SSRN: http://ssrn.com/abstract=1926228; 19 Reglamento de la Comisión No 330/2010 de 20 de abril de 2010, Cit. Supra, Artículo 4.e) 20 Directrices relativas a las restricciones verticales, 2010/C 130/01, DO C 130/1-46, Considerando 59. 8 expandirse las fuentes de aprovisionamiento de los componentes en los mercados secundarios, favoreciendo del mismo modo la competencia en estos mercados para la prestación de servicios de mantenimiento, reparación y complementos. Desde otra perspectiva en mercados secundarios, se puede identificar que el Reglamento 330/2010 considera restricciones especialmente graves, las restricciones que el proveedor puede imponer al comprador (por ejemplo al distribuidor) en relación con el territorio o la clientela a la que puede vender los bienes objeto del contrato21. Sin embargo, y en especial en la comercialización de bienes en los mercados secundarios, el Reglamento exceptúa la limitación que el vendedor puede imponer a los distribuidores en relación con la venta de componentes suministrados con la finalidad de ser incorporados a un producto, cuando el comprador o cliente del distribuidor tenga como finalidad incorporar estos componentes en la fabricación de un bien competidor del fabricado por el proveedor 22. Dicho de otra forma, el Reglamento de exención por categorías autoriza restricciones en el suministro de componentes que puedan ser incorporados en otros bienes primarios competidores. b) Mercados secundarios y la nueva regulación en materia acuerdos de distribución de vehículos a motor y de distribución de recambios para vehículos a motor. El nuevo Reglamento 461/201023 de aplicación del artículo 101.3 del Tratado en materia de acuerdos verticales y prácticas concertadas en el sector de los vehículos a motor, incorpora como novedad importante la extensión por tres años más del Reglamento 1400/200224 y la incorporación del sector de vehículos a motor a partir de la finalización de 21 Reglamento de la Comisión No 330/2010 de 20 de abril de 2010. Cit. Supra. Artículo 4 b) Ibídem. Artículo 4 b) iv). 23 Reglamento de la Comisión, n° 461/2010, de 27 de mayo de 2010 , relativo a la aplicación del artículo 101, apartado 3, del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea a determinadas categorías de acuerdos verticales y prácticas concertadas en el sector de los vehículos de motor, DO L 129 de 28/05/2010 p. 0052 0057 24 Reglamento de la Comisión, n° 1400/2002, de 31 de julio de 2002, relativo a la aplicación del apartado 3 del artículo 81 del Tratado CE a determinadas categorías de acuerdos verticales y prácticas concertadas en el sector de los vehículos de motor , DO L 203 de 01/08/2002 p. 0030 – 0041; Comunicación de la Comisión 2010/C 138/05, Directrices suplementarias relativas a las restricciones verticales incluidas en los acuerdos de venta y reparación de vehículos de motor y de distribución de recambios para vehículos de motor, Diario Oficial n° C 138 de 28/05/2010 p. 0016 - 0027 22 9 dicho plazo a la Regulación común sobre acuerdos verticales, Reglamento 330/201025. Sin embargo, en materia de mercados secundarios la Comisión ha querido continuar con la existencia de reglas específicas para este sector, eliminando la posibilidad de un régimen general, sin excepciones, para el derecho de la competencia en materia de relaciones verticales. En este sentido son importantes las nuevas reglas que contienen una lista negra de acuerdos (hardcore restrictions) aplicables a los mercados secundarios de piezas de recambio y reparación. Las restricciones especialmente graves consideradas por el nuevo Reglamento en materia de mercados secundarios (mercado de postventa de vehículos a motor) se presentan en tres formas de comportamientos/acuerdos que conducen a la retirada del beneficio de la exención propuesta en éste. La primera, hace referencia a la prohibición de ventas pasivas por medio de una red de distribución selectiva a talleres de reparación independientes que utilicen dichos recambios para la reparación y mantenimiento de vehículos a motor. Esta limitación es importante en la medida que existiendo dicha cláusula, el titular de derechos de marca no podría alegar la violación de un contrato de licencia/distribución con el fin de que se determine una excepción al agotamiento del derecho de marca por razón del incumplimiento de una licencia de fabricación/distribución en el sentido del artículo 8.2 de la Directiva de marcas en relación con el artículo 7.1 de la misma Directiva26. En segundo lugar, el Reglamento considera como una restricción especialmente grave entre el fabricante de vehículos a motor y el proveedor de recambios, herramientas para reparaciones, equipos de diagnóstico, etc. que sean necesarios para adelantar estas operaciones en el mercado secundario, cuando las limitaciones que pueda imponer el fabricante de vehículos estén destinadas a limitar la venta de estos bienes a distribuidores 25 Reglamento de la Comisión nº 330/2010, de 20 de abril de 2010, relativo a la aplicación del artículo 101, apartado 3, del TFUE a determinadas categorías de acuerdos verticales y prácticas concertadas, DO L 102 de 23/04/2010 p. 0001 - 0007 26 Reglamento de la Comisión, n° 1400/2002, de 31 de julio de 2002, Cit. Supra. Artículo 5 “Restricciones que conllevan la retirada del beneficio de la exención por categorías (restricciones especialmente graves). La exención prevista en el artículo 4 no se aplicará a los acuerdos verticales que, directa o indirectamente, por sí solos o en combinación con otros factores bajo control de las partes, tengan por objeto: a) la restricción de las ventas de recambios para vehículos de motor por parte de los miembros de un sistema de distribución selectiva a talleres de reparación independientes que utilicen dichos recambios para la reparación y el mantenimiento de un vehículo de motor” 10 autorizados o independientes, a talleres de reparación autorizados, independientes o a usuarios finales27. En relación a los mercados secundario en el sector automotor, el objetivo es una liberalización a los servicios, no solo en cuento a las piezas de recambio sino también en cuanto todo el conjunto de bienes e información que sean requeridos como necesarias para prestar una atención segura y fiable a los consumidores, al igual que permitir que los mismos consumidores puedan adelantar sus propias reparaciones o asistencias28. En todo caso, es importante reconocer que tales consideraciones tienen algunos límites, por ejemplo, la posibilidad que tiene el fabricante de exigir en su red de distribución en los mercados secundarios, la utilización de piezas de calidad equivalente a las originales, como también la facultad de exigir en los períodos de garantía, en el mantenimiento gratuito y en las operaciones de retirada del mercado que se utilicen solamente los recambios suministrados por el fabricante29. Esta consideración, al igual que lo valorado anteriormente sobre el artículo 4.e) del Reglamento de exención por categorías en materia de acuerdos verticales, tiene por objeto estimular la competencia intermarcas en los bienes primarios y, a su vez, limitar las restricciones de la competencia intramarca al expandirse las fuentes de aprovisionamiento de recambios, herramientas para reparaciones, equipos de diagnóstico, etc. en los mercados “Reglamento de la Comisión, n° 1400/2002, de 31 de julio de 2002, Cit. Supra. Artículo 5 “Restricciones que conllevan la retirada del beneficio de la exención por categorías (restricciones especialmente graves). La exención prevista en el artículo 4 no se aplicará a los acuerdos verticales que, directa o indirectamente, por sí solos o en combinación con otros factores bajo control de las partes, tengan por objeto: […]b) la restricción convenida entre un proveedor de recambios, herramientas para reparaciones o equipos de diagnóstico o de otro tipo y un fabricante de vehículos de motor, que limite la capacidad del proveedor para vender dichos productos a distribuidores autorizados o independientes, a talleres de reparación autorizados o independientes o a usuarios finales” 28 Reglamento de la Comisión, n° 1400/2002, de 31 de julio de 2002, Cit. Supra. Artículo 5,b) “la restricción convenida entre un proveedor de recambios, herramientas para reparaciones o equipos de diagnóstico o de otro tipo y un fabricante de vehículos de motor, que limite la capacidad del proveedor para vender dichos productos a distribuidores autorizados o independientes, a talleres de reparación autorizados o independientes o a usuarios finales” 29 Reglamento de la Comisión, n° 1400/2002, de 31 de julio de 2002, Cit. Supra. Considerando 17. “[…] Ello no afecta a la responsabilidad de los fabricantes de recambios en aplicación del Derecho civil, o a la capacidad de los fabricantes de vehículos de exigir a los talleres de reparación autorizados incluidos en su sistema de distribución que solo utilicen recambios de calidad equivalente a la de los componentes empleados en el montaje de un determinado vehículo de motor. Por otra parte, teniendo en cuenta la implicación contractual directa de los fabricantes de vehículos en las reparaciones en período de garantía, el mantenimiento gratuito, y las operaciones de retirada del mercado, la exención debe abarcar los acuerdos que incluyan obligaciones para los talleres de reparación autorizados de utilizar solamente los recambios suministrados por el fabricante de vehículos para dichas reparaciones.” 27 11 secundarios, favoreciendo del mismo modo la competencia en estos mercados para la prestación de servicios de mantenimiento, reparación y complementos en beneficio de los consumidores. Por último, el Reglamento de vehículos a motor considera una restricción especialmente grave cuando el fabricante de vehículos que utilice componentes fabricados por un tercero, limite a éste último en contraseñar su marca o logotipo de forma efectiva y visible en los componentes suministrados o recambios que ésta fabrica30. Al considerar esta restricción de los fabricantes de vehículos a los fabricantes de piezas de recambio o componentes que se incorporan en los bienes principales (vehículos a motor) sobre la libertad para usar su marca de forma visible, pretende el incremento de la competencia intermarcas en los mercados secundarios, posibilitando que diferentes fabricantes de piezas que sean compatibles puedan competir en los mercados secundarios, bien porque son usadas en la fabricación de los bienes primarios de forma indistinta o porque entre los diferentes modelos y marcas de vehículos las piezas pueden ser intercambiables sin deterioro de la calidad y bajo una garantía propia de los terceros fabricantes. II. LA DETERMINACIÓN DE LOS MERCADOS SECUNDARIOS O DE PIEZAS DE RECAMBIO. Habiendo definido anteriormente los mercados donde se encuentran bienes o servicios primarios (mercado primario) y bienes o servicios secundarios (mercado secundario) como mercados de sistemas, mercados múltiples y mercados duales, según su posible encuadramiento desde la perspectiva de los usuarios finales, ahora se estudia el 30 Reglamento de la Comisión, n° 1400/2002, de 31 de julio de 2002, Cit. Supra. Artículo 5,c) “la restricción convenida entre un fabricante de vehículos de motor que utilice componentes para el montaje inicial de los vehículos de motor y el proveedor de estos componentes, que limite la capacidad del proveedor para poner su marca o logotipo de manera efectiva y fácilmente visible en los componentes suministrados o en los recambios”; Reglamento de la Comisión, n° 1400/2002, de 31 de julio de 2002, Cit. Supra. Considerando 18 “[…] para que los talleres de reparación autorizados e independientes y los usuarios finales puedan identificar al fabricante de los componentes o de los recambios de vehículos de motor y elegir entre piezas alternativas, la exención por categorías no debe abarcar los acuerdos por los que un fabricante de vehículos de motor limite la capacidad de un fabricante de componentes o de recambios originales de colocar de manera efectiva y visible su marca registrada o su logotipo en tales piezas”. 12 conjunto de características que, según ésta división, deben ser tenidos en cuenta para una valoración del mercado relevante. La Comisión en la Comunicación relativa a la definición del mercado de referencia plantea que al examinar mercados primarios y secundarios, especialmente en materia de abusos de posición dominante, cuando la compatibilidad sea un asunto de interés en la valoración de mercado, puede derivar a que se realice un estudio de mercado más restringido, pudiendo así definir un mercado específico para piezas de recambio como un mercado independiente del mercado primario31. Con ello, considera la Comisión que las limitaciones a la sustituibilidad del mercado secundario y la existencia de condiciones que dan lugar a que los consumidores se queden bloqueados (lock-in32) en el bien primario para optar por un cambio en éste mercado (switching cost33), aún existiendo un incremento de los precios relativos en el mercado secundario, deben ser reconocidas para la valoración definitiva de una definición del mercado primario y secundario a afectos de libre competencia34. Se puede comprender de la Comunicación que si el mercado primario es competitivo y el mercado secundario lo es igualmente, el análisis de mercado no requiere valoraciones más restringidas. Esto es, por ejemplo, si consideramos las impresoras y los cartuchos de tinta, se puede identificar lo siguiente: Puede existir solo un mercado que es el de las impresoras y sus cartuchos porque los consumidores conocen perfectamente los costes de elegir una impresora determinada, el número de impresiones que se realizarán, el valor de remplazar cada cartucho y los costes de servicios, reparaciones y piezas de 31 Comunicación de la Comisión relativa a la definición de mercado de referencia a efectos de la normativa comunitaria en materia de competencia (97/C 372/03), DO C 372 de 9.12.1997, p. 5/13, Considerando 56 32 Los efectos de Lock-in o de bloqueo pueden ser entendidos como el conjunto de costes hundidos que los consumidores han asumido para adquirir un bien. Por ejemplo, en mercados en red, los consumidores estarán más dispuestos a quedarse en la red a la que pertenecen si los costes que han asumido no son recuperables si deciden cambiarse a otra red. Cuando existe un dominio de un operador en una red específica, los efectos de red facilitan la existencia de efectos de bloqueo que a su vez refuerzan la posición de dominio de la empresa que ya es dominante. 33 Los costes de cambio hacen referencia al conjunto de costes que un consumidor debe asumir si ha de cambiar de producto. En la valoración de los costes de cambio se identifican los efectos de bloqueo y los efectos de red. Además de los costes de los bienes, se debe considerar las nuevas condiciones (conocimientos, instalaciones, capacitación, etc.) que deben ser adquiridas para aprovechar los nuevos bienes, como puede ser el conjunto de conocimientos que deben ser adquiridos para operar bajo un nuevo ambiente técnico, las fuentes de suministro existentes en los mercados secundarios y los servicios de atención postventa. 34 Vid. APOSTOLOPOULOS, Haris. Refusal-to-Deal Cases of IP Rights in the Aftermarket of US and EU Law: Convergence of Both Law Systems through Speaking the Same Language of Law and Economics, DePaul Business & Commercial Law Journal, Vol. 5, 2007, págs.. 237 y ss. 13 recambio. Por lo tanto se puede considerar que cada consumidor se encuentra comprometido con el producto durante toda su vida útil. Así, existe solo un mercado que incluiría ambos niveles, el del bien primario y el del bien secundario, que se enmarcaría en el que se ha denominado mercado de sistemas. Otro ejemplo puede ser considerar un mercado para todas las impresoras y un mercado para todos los cartuchos, pues el consumidor elige entre todas las impresoras la que mas se acomode a sus necesidades y restricciones presupuestarias, al igual que posteriormente puede elegir entre todos los cartuchos, pues éstos son intercambiables para cualquier impresora, por lo tanto en análisis de mercado que se haría tendría en cuenta dos mercados, el de las impresoras y el de los cartuchos. En este último ejemplo nos encontraríamos en mercados duales35. Los problemas de mercado que más atención pueden generar por sus particularidades se dan en el evento que no existiendo una sustituibilidad en el mercado secundario, los consumidores se quedan bloqueados en la elección realizada en el bien del mercado primario, como lo considera la Comunicación sobre el mercado relevante 36. Por ejemplo, los consumidores pueden elegir entre las diferentes impresoras y posteriormente se considera que existe un mercado para cada cartucho de tinta, pues los consumidores no pueden identificar de forma precisa los costes que asume la elección del mercado primario. En este ejemplo nos encontramos en el caso de mercados múltiples. Las circunstancias en cada caso particular que requieren ser identificadas se encuentran relacionadas con el alcance de la competencia en el mercado primario que pueda prevenir una explotación de los consumidores en el mercado secundario37. Como fue mencionado con anterioridad, la existencia de un mercado secundario donde los bienes y servicios son compatibles con cualquiera de los bienes del mercado primario, evita que los consumidores se encuentren bloqueados (lock-in) en el mercado primario y, como consecuencia, en las elecciones en el mercado secundario 38 . Situación diferente se O’Donogue y Padilla. The Law and Economics of Article 82. Cit. Supra. 102 y ss. Vid. Comunicación de la Comisión relativa a la definición de mercado de referencia… Cit. Supra. Considerando 56. “[…] El método para definir los mercados [cuando se examinan los mercados primario y secundario][…] es básicamente el mismo, esto es, se evalúan las reacciones de los clientes, basadas en sus decisiones de compra, a variaciones de los precios relativos, aunque teniendo en cuenta también las limitaciones por lo que respecta a la sustituibilidad que resultan de las condiciones imperantes en los mercados conexos” 37 Vid. O’Donogue y Padilla. “The Law and Economics of Article 82”. Cit. Supra. pág. 102-103; 38 Vid. Comisión Europea, Competition discussion paper on the application of Article 82 of the Treaty to exclusionary abuses, Bruselas, 2005, Considerandos 251– 263. 35 36 14 encuentra cuando en el mercado secundario los consumidores no encuentran bienes o servicios sustitutos o intercámbiales. De un lado, si los consumidores pueden prever el valor de los costes del mercado secundario cuando eligen el bien primario se debe recordar que se tiene en cuenta solo un mercado de sistemas y por ello la problemática del bloqueo (lock-in) se refiere solo a un mercado como el todo y por lo tanto no depende de una definición de mercados secundarios. En este sentido, se debe entender que el incremento de los precios en el mercado secundario afecta de forma importante la elección de los consumidores sobre el bien en el primer mercado, haciendo que los equilibrios de pérdida de clientes y beneficios del incremento de los precios en el mercado secundario sea negativo. De otro lado, si el consumidor no puede prever los costes del mercado secundario y a su vez un cambio en el mercado primario por otro bien competidor (switching cost) es excesivamente oneroso, los consumidores se encuentran bloqueados - por razón de los costes del mercado secundario - en el mercado primario. Sin embargo, para que este comportamiento pueda ser comprendido como racional por parte de la empresa productora de los bienes y servicios del mercado primario y secundario, se debe identificar que la empresa no perderá nuevos clientes por ésta política de incrementar los precios en el mercado secundario o por lo menos que el equilibrio entre la pérdida de nuevos clientes y las utilidades que se derivan de los incrementos de precios en el mercado secundario son positivas para la empresa que adelanta este tipo de comportamientos39. Por último, es necesario considerar si una empresa sin tener un poder de mercado en el mercado primario puede adelantar un comportamiento que sea considerado abusivo en el mercado secundario. Al valorar esta cuestión se deben hacer varias consideraciones. En 39 Temple Lang considera que para realizar una valoración de los costes durante la vida útil del producto se deben identificar diferentes circunstancias: (a) el nivel de sofisticación de algunos de los compradores; (b) los costes del bien en el mercado primario; (c) los costes relativos del bien en el mercado primario y los costes de los bienes y servicios en el mercado secundario durante la vida útil del bien principal; cuánto tiempo se va a usar el bien principal; (e) el conocimiento que los consumidores puedan tener de los costes de los bienes y servicios en el mercado secundario al momento de realizar la compra del bien principal; (f) la forma de los costes en el mercado secundario, si estos son rutinarios como en caso de los bienes consumibles o porque existen obligaciones periódicas de revisión (por ejemplo los motores de los aviones comerciales) o si son costes imprevistos como los de las reparaciones y cambio de piezas; (g) las variaciones entre nuevos consumidores y antiguos consumidores; (h) la posibilidad de discriminación de precios entre nuevos y antiguos consumidores; (i) la forma de acceso al bien principal, si se encuentra disponible exclusivamente para compra o si existen otras alternativas como los arrendamientos de estos bienes; (j) los costes del cambio del bien principal (switching cost) en los que tiene que incurrir el consumidor (nuevo conocimiento, entrenamiento, licencias, compatibilidad con otros bienes, efectos de red indirectos, tiempo de remplazo, etc.) y; (k) el rendimiento y duración de los bienes consumibles del mercado secundario. Vid. TEMPLE LANG, John. Practical aspects of aftermarkets in european competition law. Cit. Supra. pág. 103 15 primer lugar se debe identificar las condiciones del mercado primario y la situación de los consumidores frente a los comportamientos de explotación del fabricante de los bienes primarios. En segundo lugar, se debe considerar si los consumidores se encuentran en una posición compleja en relación al cambio o sustitución de bienes primarios competidores. Por último, se requiere conocer si era posible la identificación de los costes en el mercado secundario o, al menos, podían o no ser previsibles por los consumidores al momento de la adquisición de los bienes primarios y si existen posibilidades reales de intercambiabilidad o sustituibilidad en el mercado secundario. Al realizar estas consideraciones se puede reconocer que, un mercado primario que presenta barreras altas en términos de costes de cambio a los consumidores y que no puede ser considerado un mercado de sistemas donde los consumidores podían conocer con cierto grado de certeza los costes del mercado secundario, da lugar a una valoración de las condiciones del mercado secundario desde la perspectiva del artículo 102 del TFUE, sin que se requiera que la empresa deba ser dominante en el mercado primario. En relación a la complejidad que estas circunstancias pueden presentar para la valoración de una posición dominante en un mercado secundario, es importante identificar, primero, que el mercado del que se trata debe ser uno que se identifique con la no existencia de competencia en el mercado secundario (mercados múltiples) 40 . Esta consideración implica que los consumidores deben encontrarse bloqueados en el mercado secundario. En este sentido, se debe identificar en segundo lugar que los consumidores enfrentan importantes costes de cambio. Para realizar este análisis se requiere considerar, de un lado, las posibilidades de reventa del bien primario a un precio que compense el cambio a otro bien primario (el objetivo puede ser descartar la existencia de costes hundidos); de otro lado, se requiere identificar todo el conjunto de inversiones accesorias que debe realizar el consumidor al adquirir otro bien primario, por ejemplo, entrenamiento, instalaciones, complementos, etc.41. En tercer lugar, para determinar la dominancia, se debe considerar: (a) las barreras a la entrada en el mercado secundario y las estrategias de 40 Vid. DG Competition Discussion Paper on the application of article 82 of the Treaty to exclusionary abuses, Diciembre de 2005. Considerando “Aftermarkets typically appear in competition cases when they are “proprietary”, that is, when they are brand-specific in that secondary products that can be used with one brand of primary product cannot be used with another brand of primary product, although the primary products themselves are substitutes. The contentious issue is often that the supplier of a primary product attempts to reserve the secondary market for itself” 41 Ibídem. Considerando 249 16 competencia en este mercado dadas las barreras existentes. En este análisis se puede extender el estudio a las barreras del mercado primario y las restricciones que permitirían a los agentes participantes en el mercado primario reservarse su propio mercado secundario, en especial si existen derechos de propiedad intelectual que dificultan en el mismo sentido la competencia en el mercado primario, como el mercado secundario 42 . Estas consideraciones pueden estar fundadas en el grado de diferenciación de productos en el mercado primario que convierten los mercados secundarios en mercados más especializados. Otro factor que influiría en las valoraciones de las barreras a la entrada que requeriría ser analizado en función de las especificidades del mercado, se definiría por determinar si los consumidores existentes se encuentran en un mercado secundario que se ve afectado por efectos de red, los cuales pueden incidir de forma significativa en los costes de cambio y facilitar la explotación de los clientes existentes que se encontrarían bloqueados de forma especial en el mercado secundario. (b) En la valoración de la dominancia se debe considerar los efectos de los comportamientos sobre los consumidores en el entendido de una división entre consumidores existentes (aquellos que ya adquirieron el bien del mercado primario) y nuevos o potenciales consumidores. La valoración de estas consideraciones puede llevar a concluir que los incrementos de precios en los mercados secundarios traerían como consecuencia una pérdida sustancial de clientes nuevos en el mercado primario que no haría rentable el incremento de los precios a un nivel supracompetitivo en ese mercado secundario. Para valorar esta condición se requiere, primero, que la información de los precios y costes que se pueden incurrir en el mercado secundario sea permanente, accesible y transparente. En segundo lugar, los consumidores deben poder calcular, bien por cuenta propia o por medio de la información suministrada por los competidores en el mercado primario, la vida útil del producto principal y de los costes de los bienes y servicios en el mercado secundario durante su vida útil43. En esta consideración, también sería preciso diferenciar entre la posibilidad de discriminación en el 42 Otras consideraciones sobre las barreras a la entrada en relación con los mercados secundarios pueden ser identificadas en documento de discusión de la Comisión sobre abusos excluyentes, Vid. Ibídem. Considerandos 252 y 253. 43 Estas consideraciones pueden ser más comunes en relación con mercados secundarios cuando se trata de bienes consumibles, mientras que si se trata de servicios de reparación, piezas de cambio y servicios postventa, el conocimiento de todas estas variables puede afectar de en gran medida la percepción de los costes en el mercado secundario para clientes nuevos y, así, facilitar comportamientos abusivos en los mercados secundarios. Vid. Ibídem, Considerandos 257. 17 mercado secundario que pueda existir entre consumidores especializados y consumidores no especializados sobre los costes en la vida del producto del mercado primario. Las consideraciones anteriores se fundamentan en la relación existente entre el mercado primario y el mercado secundario, donde la competencia en el mercado primario funciona como límite al ejercicio de comportamientos abusivos en el mercado secundario. Sin embargo, puede existir un punto de análisis diferente de la relación mercado primario/mercado secundario. En este análisis se pretende identificar el oportunismo sobre los consumidores existentes (installed-base opportunsm) que pueda adelantar un agente económico en el mercado secundario. En esta consideración se requiere que la empresa o el mercado primario en su generalidad esté encaminado a desaparecer o a ser muy limitado. En todo caso, existiendo un marco para que una empresa pueda utilizar el oportunismo sobre los consumidores existentes, se requiere valorar por oposición los efectos que un comportamiento de esa naturaleza puede generar en la marca y reputación del agente económico. Por ejemplo, esta valoración sobre la reputación puede restringir las oportunidades de un agente económico de explotar los clientes existentes sobre una versión anterior de un bien primario al producir como efecto reacciones en la demanda de los nuevos bienes primarios. III. Beneficios y restricciones en el mercado secundario o de piezas de recambio Los agentes económicos disponen de diferentes alternativas o métodos para realizar restricciones en el mercado secundario. Entre estos comportamientos se encuentran conductas que pueden ser relacionadas con formas especiales de vinculación de productos, donde el vendedor de un producto en el mercado primario condiciona la venta de éste (el producto vinculante) a la compra de un producto o servicio –producto o servicio en el mercado secundario- relacionado con el producto del mercado primario (producto vinculado)44. Este comportamiento va destinado a un aprovisionamiento de forma exclusiva del productor del bien principal o vinculante (o de quién éste indique), bien estableciendo de forma expresa esta obligación o estableciendo consecuencias negativas sobre garantías, Vid. HERRERO SUÁREZ, Carmen. “Los contratos vinculados (Tying Agreements) en el derecho de la competencia” Cit. Supra. pág. 448 y ss. 44 18 financiación, reparación y aprovisionamiento de otros bienes al no usar los bienes producidos por el vendedor o distribuidos por este para el mercado secundario en conjunción con el bien del mercado primario. También se puede identificar comportamientos relacionados con negativas a contratar o negativas de licencia, especialmente cuando los productos del mercado secundario se encuentran protegidos por derechos de propiedad intelectual45. En este tipo de comportamientos el productor de los bienes del mercado principal y del mercado secundario se convierte en el único proveedor de los bienes o servicios del mercado secundario. Cuando intervienen derechos de propiedad intelectual el titular de los derechos puede optar por realizar modificaciones en los diseños y compatibilidades en los productos del mercado primario que permitan que sus productos del mercado secundario sean los únicos que puedan ser acoplados a éstos46. Comportamientos relacionados con la discriminación de precios pueden permitir al productor del bien en el mercado primario, obtener mayores beneficios en el mercado secundario, al discriminar durante la vida del producto del mercado principal, los costes de una eventual venta a precios excesivamente bajos que luego son recuperados por medio de los precios en el mercado secundario47. a) Explicaciones a las restricciones en los mercados secundarios Como fue presentado con anterioridad, la existencia de comportamientos que pretenden mantener una relación cercana entre el mercado primario y el mercado secundario bajo la forma que permite a una empresa tener un dominio sobre el mercado secundario al haber contratado con ella en el mercado primario, no son necesariamente Para una discusión amplia de las negativas a licenciar en aftermarkets, Vid. U.S. DEP’T OF JUSTICE & FED. TRADE COMM’N, Antitrust Enforcement and Intellectual Property Rights: Promoting Innovation and Competition, 2007. Disponible en: www.usdoj.gov/atr/public/hearings/ip/222655.pdf 46 Vid. Supra. Nota de pié de página 13; AYAL, Adi. Monopolization via voluntary network effects, Antitrust Law Journal, Vol. 76, Nº 3, 2010, págs. 799 – 822. 47 Vid. DIEZ ESTELLA, Fernando. La Discriminación de Precios en el Derecho de la Competencia, Ed. Thomson – Civitas, Madrid, 2003, 45 19 perjudiciales para la competencia y los consumidores 48 . En términos de los objetivos perseguidos por algunas de estas prácticas se encuentra que ellas son promovidas por la búsqueda de eficiencias y, en algunos casos, los efectos sobre la competencia son neutrales haciendo que no se amerite una intervención de las autoridades de libre competencia49. Las razones argumentadas por estas prácticas pretenden mantener un control sobre la calidad de los productos o proteger el buen nombre (goodwill) de la marca que se incorpora en estos bienes50. Estas consideraciones, calidad de productos y protección de la marca, reciben una importante atención en materia de contratos de franquicia cuando se trata de los bienes utilizados en la prestación de los servicios o en la producción de los bienes objeto de la franquicia51. Por ejemplo, las Directrices relativas a las restricciones verticales al tratar los acuerdos de franquicia reconocen que varias formas de restricciones verticales pueden concurrir en este tipo de contratos, entre ellas se encuentran formas de distribución selectiva, exclusiva y cláusulas de no competencia52. Las restricciones relativas al uso de las materias primas, productos y maquinaria suministradas por el franquiciador al franquiciado hacen parte de la excepción de no competencia que queda por fuera de la 48 Para una valoración de las dificultades de en el análisis de los comportamientos de empresas en mercados de nuevas tecnologías desde la perspectiva de la Escuela de Chicago, Vid. POSNER, Richard A. “Antitrust Law”, Second Edition, University Chicago Press, Chicago, 201, págs. 278 y ss. 49 Vid. KIKWOOD, John J. & LANDE, Robert H. The Chicago School’s foundations is flawed: Antitrust protects consumers, not efficiency, en: “How the Chicago School Overshot he Mark. The Effect of Conservative Economic Analysis on U.S. Antitrust Law”. Oxford University Press. 2008, Editado por: Robert Pitofsky. págs. 89 - 97 50 Para una consideración de los problemas de marca y el control sobre la calidad de los productos fabricados por un licenciatario, Vid. Sentencia del Tribunal de Justicia, IHT Internationale Heiztechnik GmbH y Uwe Danzinger contra Ideal-Standard GmbH y Wabco Standard GmbH. Asunto C-9/93de 22 de junio de 1994. Petición de decisión prejudicial: Oberlandesgericht Düsseldorf - Alemania Rec. Juris. 1994 p. I-02789 51 Algunas consideraciones importantes sobre las condiciones del franquiciador sobre el franquiciado en materia pre-contractual y post-contractual, pueden ser revisadas en: Vid. KLEIN, Benjamin, Market power in franchise cases in the wake of kodak: applying post-contract hold-up analysis to vertical relationships, En: Antitrust Law Journal, Vol. 67, 1999, pág. 383 y ss.; WARREN S. Grimes, Market Definition in Franchise Antitrust Claims: Relational Market Power and the Franchisor's Conflict of Interest, Antitrust Law Journal, Vol. 67, 1999, pág. 243 y ss. 52 Directrices sobre acuerdos verticales 2010/C 130/01, Cit. Supra. Considerandos 190 y 191, en especial el considerando 190 b) “Las obligaciones de no competencia en los bienes o servicios adquiridos por el franquiciado quedan fuera del ámbito de aplicación del artículo 101, apartado 1, cuando son necesarias a fin de mantener la identidad y reputación comunes de la red franquiciada. En estos casos tampoco es pertinente la duración de la obligación de no competencia con arreglo al artículo 101, apartado 1, siempre y cuando no exceda de la duración del propio acuerdo de franquicia”. 20 aplicación del artículo 101 (1) del Tratado cuando estas se encuentren destinadas a mantener la identidad y reputación de la franquicia53. Empresas productoras de un bien o servicio en el mercado primario pueden realizar comportamientos de discriminación de precios entre diferentes compradores o usuarios que adquieren el bien primario a un coste relativamente bajo, captando mayores ingresos en el mercado secundario al asegurarse que la utilización de bienes o servicios secundarios les permita obtener mayores utilidades 54 . Esta práctica tiene hoy importante atención en mercados donde el bien o servicio del mercado primario tiene costes relativos importantes que desalentarían el consumo masivo de los mismos 55 . Con ello, empresas que pueden lograr discriminar el bien principal que requiere ser usado con otros bienes o servicios secundarios consumibles o que para su mejor disfrute depende de la suma de bienes complementarios, puede utilizar una estrategia que les permita añadir un valor superior a su coste marginal a los bienes secundarios y con ello obtener unos mayores beneficios. Por ejemplo, estrategias de esta naturaleza se encuentran en las videoconsolas, la telefonía móvil prepago, máquinas y cuchillas de afeitar, etc. y, en especial, cuando intervienen 53 Sentencia del Tribunal de Justicia, Pronuptia de Paris GmbH v Pronuptia de Paris Irmgard Schillgallis, Asunto C-161/84 de 28 de Julio de 1986 “[…] En algunos casos, como sucede con los artículos de moda, puede resultar imposible establecer requisitos objetivos de calidad. Además, velar por la observancia de estos requisitos puede requerir gastos excesivos, dado el gran número de cesionarios. Por consiguiente, puede considerarse necesaria una cláusula que imponga al cesionario la obligación de vender únicamente mercancías suministradas por el cedente o por proveedores seleccionados por él, con el fin de proteger el prestigio de la red de distribución. Sin embargo, dicha cláusula no debe impedir al cesionario procurarse estas mercancías a través de otros cesionarios” 54 DIEZ ESTELLA, Fernando. La Discriminación de Precios en el Derecho de la Competencia, Ed. Thomson – Civitas, Madrid, 2003, págs. 416, pág. 232 “Una variable de este tipo de discriminación [discriminación de precios de segundo grado] es la denominada estrategia de bienes relacionados en la venta. […] Un mayor consumo del bien complementario indica una mayor disposición a pagar por el bien, con lo que las ventas del producto complementario sirven al productor para medir el precio de reserva. Así, el productor puede hacer uso de la estrategia de bienes relacionados en la venta para llevar a cabo una discriminación de precios de segundo grado”; una posición contraria puede ser revisada en: MACKIE-MASON, Jeffrey K., What to Do About Unilateral Refusals to License? Documento presentado en: FTC-DOJ Hearings on Competition and Intellectual Property Law and Policy in the Knowledge-Based Economy, en Mayo 1 de 2002, disponible en: www.ftc.gov/opp/intellect/020501mackie2.pdf 55 KLEIN, Benjamin & SHEPARD WILEY Jr., John, Competitive Price Discrimination as an Antitrust Justification for Intellectual Property Refusals to Deal. Antitrust Law Journal, Vol. 70, 2003, págs. 599 – 642, pág. 613 “[…] Intellectual property can be expensive to create due to high fixed R&D costs, but cheap to produce once created due to low marginal costs of production. Under such conditions, manufacturers have a large profit incentive to move down their demand curve by making incremental sales without losing the profit from existing sales. One technique to accomplish this is to reduce equipment price and transfer some of the return on their intellectual property to the service aftermarket. Manufacturer profit will increase if the service aftermarket indeed serves as a reasonable measure of product value, both across consumers and across units purchased by any individual consumer—that is, if relatively low-valued units of the product truly do use less aftermarket service”. 21 derechos de propiedad intelectual que limitan la entrada de competidores en el mercado secundario56. b) Daños potenciales a la competencia y a los consumidores Existe una discusión muy agitada entre quienes consideran que, las restricciones en los mercados secundarios no afectan a la competencia ni a los consumidores y, entre aquellos que, estas prácticas requieren valoraciones particulares que determinen los equilibrios entre los beneficios y las restricciones a la competencia y el bienestar de los consumidores57. Para los seguidores de la escuela de Chicago, la existencia de restricciones en la demanda y en la oferta hacen que sea poco probable que el productor de bienes primarios pueda encontrar rentable explotar el mercado secundario de forma supracompetitiva aunque los consumidores se encuentren bloqueados (lock in) en el mercado primario. Desde la perspectiva de Chicago, los consumidores suelen considerar los costes relacionados con la vida del producto cuando deciden comprar un bien en un mercado primario58. Este hecho, para la escuela de Chicago, limita de forma importante la libertad del productor del bien en el mercado primario para cargar precios supracompetivos en los mercados secundarios 59 . Además, las empresas en mercados que exhiben 56 Para una reflexión interesante sobre las estrategias de discriminación de precios en el mercado de las máquinas de afeitar y las cuchillas de afeitar en el contexto histórico de Gillette, Vid. PICKER, Randal C., The Razors-and-Blades Myth(s), En: The University of Chicago Law Review, Vol. 78, 2011, págs. 225 - 255 57 A favor de una regla per se de legalidad y a favor de una regla de la razón sobre los aftermarkets Vid. SCHLEICHER, Tara J. The U.S. Supreme Court’s use of Post-Chicago antitrust theory in Eastman Kodak v Image Technical Services: Implications for marketing practice, En: Journal of Public Policy & Marketing, Vol 16, Nº 2, 1997, págs. 310 – 318; Esta discusión es importante en el asunto Eastman Kodak en el disentimiento del Juez Scalia, Vid. Eastman Kodak v. Image Technical Servs. (90-1029), 504 U.S. 451 (1992). 58 Shapiro considera que los compradores de bienes primarios tienen importantes incentivos para obtener protecciones contractuales que los prevenga de explotaciones supracompetitivas en los mercados segundarios. Entre estas formas de protección se encuentran: (a) cubrimientos por garantía; (b) arrendamiento o leasing de los bienes primarios; (c) contratos de suministro de largo plazo de servicios de reparación; (d) Cláusulas no discriminatorias, en especial, aquellas relacionados con cláusulas de la nación más favorecida, donde el comprador de un bien primario se asegura que aquellos mejores servicios o productos ofrecidos a los nuevos clientes en el mercado secundario también le serán aplicados; (e) cláusulas relacionadas con libertad de fuentes de abastecimiento (second sourcing and open system), Vid. SHAPIRO, Carl Aftermarkets and consumer welfare: making sense after Kodak, En: Antitrust Law Journal, Vol. 63, 1995, págs. 483 – 411, págs. 488 - 489 59 Por ejemplo, este argumento es soportado por Shapiro y Teece en mercados con rápidos cambios tecnológicos, donde los consumidores pueden actuar ante incrementos supracompetitivos de los precios en los mercados secundarios. Además, consideran que esta situación se vería reforzada en mercados donde los 22 competencia en el mercado primario también tienen incentivos para revelar a los consumidores los costes de los bienes y servicios en el mercado secundario durante toda la vida del bien del mercado primario60. También considera la escuela de Chicago que, aún existiendo problemas en la determinación de los costes durante la vida del producto primario, la existencia de competencia en el mercado primario genera que los precios supracompetitivos en el mercado secundario sean descontados por los consumidores por razón de precios infracompetitivos en el mercado primario. Otro de los argumentos construidos por Chicago hace referencia a la existencia de explicaciones racionales para los comportamientos monopólicos en el mercado secundario que deben ser valoradas favorablemente debido a las incertidumbres de los comportamientos potencialmente anticompetitivos61. Por último, esta escuela considera que la intervención del derecho de la competencia en los mercados secundarios limitaría los procesos de innovación y desarrollo de nuevos productos, como también, el mejoramiento de los existentes (especialmente en el mercado primario). Esta observación se sustenta desde Chicago en la idea que los monopolios son la mejor fuente para la creación de bienestar a través de la innovación, pues los márgenes de beneficios sobre los costes marginales le permite a las empresas invertir en actividades de riesgo que traen como consecuencia nuevos productos al mercado y a los consumidores62. El análisis propuesto por los seguidores de Post-Chicago advierte que las empresas pueden adelantar comportamientos racionales anticompetitivos al realizar incrementos de los precios en los mercados secundarios a niveles supracompetitivos 63 . Esta escuela encuentra que no se puede suponer, como lo hacen los seguidores de Chicago, que las empresas que participan en un mercado primario y secundario al mismo tiempo, se verían consumidores son usuarios de diferentes marcas al mismo tiempo. Vid. SHAPIRO Carl & TEECE, David J. Systems competition and aftermarkets: An economic analysis of Kodak, En: Antitrust Bulletin, Vol. 39, Nº 1, 1994, págs. 135 – 162. 60 Ibídem. “Even households white goods take operating, service, and repair cost into account. As a consequence, producers will often make these features an explicit part of their marketing strategy”; COPPI, Lorenzo. Aftermarket monopolization: the emerging consensus in economics, En: Antitrust Bulletin, Vol. 52, Nº 1, 2007, págs. 53 – 71, pág. 57 61 . Vid. KIKWOOD, John J. & LANDE, Robert H. The Chicago School’s foundations is flawed: Antitrust protects consumers, not efficiency, Cit. Supra. págs. 90 y ss. 62 Para una lectura de los beneficios de los monopolios desde la perspectiva de Chicago, Vid. COPPI, Lorenzo. Aftermarket monopolization: the emerging consensus in economics, Cit. Supra. pág. 60 – 61 63 Para una revisión crítica de la escuela Post-Chicago, Vid. HOVENKAMP, Herbert. Post-Chicago Antitrust: A Review and Critique, Columbia Business Law Review, 2001, págs. 257 y ss. 23 cohibidas de realizar un comportamiento de incremento de precios en el mercado secundario debido a la pérdida de consumidores en el mercado primario64. Así, consideran los seguidores de Post-Chicago que las empresas se enfrentan ante un balance entre las pérdidas que puedan sufrir en la venta de nuevos bienes primarios y los beneficios que puedan obtener de los incrementos de precios en el mercado secundario, pudiendo así verse incentivados a adelantar comportamientos de explotación de las rentas de los consumidores en el mercado secundario. Esta escuela considera los incrementos en los precios como una consecuencia de otro conjunto de políticas que limitan la competencia en los mercados secundarios, en especial, comportamientos relacionados con la vinculación de productos, negativas de suministro y discriminación de precios. Es decir, Post-Chicago interpreta los beneficios monopólicos como un lugar donde el derecho de la competencia no tiene mucho para aportar, pero sí, cuando los comportamientos restrictivos tienen como consecuencia un incremento de los precios por medios diferentes a una competencia fundamentada en los méritos. Por ejemplo, una empresa puede obtener beneficios supracompetitivos discriminado en contra de los consumidores que ya han adquirido los bienes primarios al incrementar los precios de los bienes en el mercado secundario y disminuir los precios sobre los bienes primarios a los nuevos consumidores de estos bienes. Con ello, los consumidores que ya han adquirido los bienes en el mercado primario se encuentran bloqueados (lock-in), por los costes de cambio a otro bien primario (switching cost) que aún dada una disminución en los precios de los bienes primarios su valor sigue siendo un impedimento para realizar un cambio que compense al consumidor, estando en definitiva bloqueado en el mercado secundario y restringido a pagar los precios supracompetitivos de los bienes secundarios y no obtener ninguna compensación por la disminución del valor los bienes en el mercado primario65. Otra posibilidad que puede ser contemplada por parte de empresas que participan en los dos mercados, primario y secundario, que permite a éstas 64 Para una explicación de estos problemas desde los costes de transacción, Vid. DENOZZA, Francesco. Riasing Consumers’ cost as an antitrust problema: a sketch of the argument from Kodak to Microsoft (the European proceedings), En: Post-Chicago Developments in Antitrust Law, Editado por: Antoni Cucinotta, Roberto Pardolesi y, Roger Van den Bergh, Ed. Edward Elgar, 2002, Cheltenhan, págs. 197 – 212; 65 Es necesario considerar que aún con las reducciones de precios en el mercado primario, el monopolista en el mercado secundario puede obtener ingresos totales mayores al realizar incrementos mayores en el mercado secundario. Sería necesario considerar para determinar esta conclusión las pérdidas en el mercado primario y la disminución del consumo en el mercado secundario debido al incremento de precios de los bienes en este mercado. Vid. BORENSTEIN, Severin, MACKIE-MASON, Jeffrey K. & NETZ Janet S. Antitrust Policy in Aftermarkets En: Antitrust Law Journal, Vol. 63, 1995, págs. 455 – 482, págs. 461 - 462 24 considerar incrementos en los precios de los bienes del mercado secundario, como pueden ser las piezas de recambio y los servicios de reparación, ocurre cuando existe un cambio tecnológico y los nuevos productos del mercado primario pueden tener a su vez costes altos. Esta condición supone que la empresa puede incrementar los precios a niveles supracompetitivos de los bienes del mercado secundario, pues los consumidores que se encuentran bloqueados en el mercado se encuentran frente a costes de cambio altos y requieren seguir comprando los bienes del mercado secundario durante la vida útil del bien primario. Además de esta consideración, la empresa puede reducir los problemas de imagen y pérdida de clientes en el mercado primario debido a la información que se suministre sobre los nuevos productos principales y los valores de los bienes secundarios, explotando así a los consumidores en el mercado secundario que se encuentran bloqueados con menores consecuencias de pérdidas de nuevos clientes66. Consideraremos ahora otro tipo de restricciones a la competencia relacionadas con las negativas de suministro a las empresas de servicios de reparación independientes (independent services organizations –ISOs) 67 . Como es común destacar en materia de negativas a contratar, las empresas son libres de elegir sus socios comerciales y una negativa a contratar o licenciar no es un comportamiento que atente contra la libre competencia así éste fuese adelantado por una empresa con una posición dominante de mercado. Como ha sido manifestado por el Tribunal de Justicia, una negativa a contratar solo puede violar la normativa de libre competencia en circunstancias excepcionales68. La discusión de las negativas a contratar se concentra fundamentalmente en determinar la indispensabilidad del bien al que se requiere el acceso para participar en un mercado secundario o conexo al del bien requerido69. La principal preocupación en materia de libre 66 Ibídem. pág. 466 - 467 Vid. Supra. APOSTOLOPOULOS, Haris. Refusal-to-Deal Cases of IP Rights in the Aftermarket of US and EU Law: Convergence of Both Law Systems through Speaking the Same Language of Law and Economic… 68 Para una revisión de las circunstancias excepcionales que deben concurrir para establecer una negativa a contratar, Vid. Comisión Europea, Comunicación sobre las prioridades de control de la Comisión en su aplicación del artículo 82 del Tratado CE a la conducta excluyente abusiva de las empresas dominantes, 2009/C 45/02, DO n° C 045 de 24/02/2009 p. 0007 – 0020, Considerandos 81 y 87 69 No se quiere decir con esto que los demás requisitos que conforman las circunstancias excepcionales no sean importantes y no se tengan efectivamente en cuenta para valorar la ilegalidad de una negativa a contratar, de suministro o de licencia. El criterio que se quiere sostener se fundamenta en que las circunstancias de la existencia de una negativa y la eliminación de competencia en un mercado secundario o conexo, se deben reunir en el estudio de la indispensabilidad. Los criterios de la no existencia de una justificación objetiva y la utilización del recurso indispensable para la creación de un nuevo producto pueden tener una valoración 67 25 competencia en asuntos relacionados con negativas a contratar en mercados secundarios de piezas de recambio puede suceder en modificaciones del comportamiento, donde, como en el asunto Commercial Solvents 70 , las negativas a contratar o conceder una licencia se realizan con posterioridad a la existencia de relaciones contractuales previas entre la parte que solicita el acceso y la empresa que se niega a continuar una relación de suministro71. Si bien puede ocurrir que se establezca una negativa de suministro en sentido estricto con agentes con los que no se ha tenido una relación contractual previa, es poco probable que la misma produzca un daño a la competencia, en especial si se considera que la negativa está relacionada con derechos de propiedad intelectual, pues la exigencia de un nuevo producto para el que existe una demanda potencial - o en su criterio más laxo, la potencialidad de un nuevo producto para el que exista una demanda potencial72- restringe de forma significativa la posibilidad de identificar un falseamiento de la competencia por abuso de la posición dominante73. diferente a la indispensabilidad (para asuntos relacionados con derechos de propiedad intelectual) bien por que el primero se relaciona con la motivación de la negativa en términos de por qué esa negativa -atentando contra el derecho de la competencia- se encuentra justificada o puede ser excepcionada y, la segunda, la exigencia de un producto nuevo, porque tiene como objetivo proteger al titular de derechos de propiedad intelectual de una competencia que se limite a reproducir los bienes que incorporan los derechos, es decir, pretende que a su vez se creen eficiencias dinámicas (relacionadas con la innovación) y no solo eficiencias estáticas (relacionadas con la disminución de precios por incrementos en la oferta). 70 Vid. Sentencia del Tribunal de Justicia, Istituto Chemioterapico Italiano S.p.A. y Commercial Solvents Corporation contra Comisión de las Comunidades Europeas Asuntos acumulados 6 y 7-73 de 6 de marzo de 1974. Rec. Juris. 1974 p. 00223 71 Vid. Comisión Europea, Comunicación sobre las prioridades de control de la Comisión en su aplicación del artículo 82 del Tratado CE a la conducta excluyente abusiva de las empresas dominantes. Cit. Supra. Considerando 84. “[…] el hecho de poner fin a un acuerdo de suministro tendrá más probabilidades de ser considerado abusivo que si se trata de una denegación de novo […]” 72 Vid. Sentencia del Tribunal de Primera Instancia, Microsoft Corp. V. Comisión de las Comunidades Europeas Asunto T-201/04 de 17 de septiembre de 2007. Rec. Juris. II-03601, Considerando 335 “[…] el Tribunal de Justicia expuso en el apartado 44 de la sentencia IMS Health, citada en el apartado 107 supra, que bastaba que pudiera determinarse un mercado potencial, incluso hipotético, y que así sucedía cuando los productos o servicios eran indispensables para desarrollar una actividad determinada y existía una demanda efectiva de ellos por parte de las empresas que pretendían desempeñar esa actividad […]” 73 La problemática del producto nuevo parece concentrarse en el resultado del acceso requerido para identificar eficiencias dinámicas. Sin embargo, puede ocurrir que la negativa del suministro (licencia) bloquea un mercado por la naturaleza de los propios derechos de propiedad intelectual; posiblemente por existir una sobreprotección desde el derecho de propiedad intelectual, la competencia se ve limitada, no siendo tampoco éste el objeto de la normativa de propiedad intelectual. En circunstancias como éstas el derecho de la competencia tiene la función de servir como límite externo al derecho de la propiedad intelectual, incrementando los incentivos a innovar y competir en determinados mercados, sin que se pueda predicar que la intervención del derecho de la competencia lo que produce es una restricción a las innovaciones. En este doble juego de cuándo el derecho de la competencia, permitiendo el acceso a terceros a los recursos de un monopolista, incrementa o perjudica los incentivos a innovar se tiende el debate sobre las dificultades que enfrentan las autoridades o el juez de competencia para valorar las negativas a contratar 26 En el último supuesto, las negativas a contratar con empresas de servicios de reparación independientes, la problemática que se presenta en materia de libre competencia consiste en determinar si existe o no un daño a los consumidores. En principio puede considerarse que en materia de precios, el fabricante de los bienes del mercado secundario vendería estos a un precio que no permitiera a las empresas de servicios independientes competir en precios frente al fabricante. Esto es, los márgenes de utilidad en materia de las piezas de recambio tendería a cero, por ello el consumidor no podría verse beneficiado con menores precios, con ello, no se podría considerar que existe una limitación en la oferta y por ello el consumidor final no obtendría un beneficio propio de la competencia en precios. Sin embargo, se puede considerar que las empresas de servicios independientes podrían competir en otros aspectos relacionados con el mercado secundario que los consumidores valorarían positivamente para dirigirse a éstos en vez de al fabricante. Por ejemplo, se puede considerar que los consumidores valoren una atención más personalizada, unos tiempos de reparación menores, valores por los servicios o mano de obra más económicos, piezas de recambio estándares que pueden acoplarse a las piezas del fabricante de los bienes del mercado primario, etc. En definitiva, el consumidor puede verse afectado de forma indirecta por comportamientos relacionados con negativas a contratar o a licenciar de los fabricantes de piezas de recambio en el mercado secundario (en el evento de mercados múltiples) a las empresas de servicios de reparación independientes en razón de la limitación de una presión competitiva en la prestación de los servicios y piezas que acompañan los bienes que son de suministro exclusivo del fabricante del producto principal del mercado primario74. IV. Consideraciones Económicas de los mercados secundarios o aftermarkets Los conflictos e intereses económicos que se debaten en asuntos relacionados con los mercados secundarios se concentran principalmente en la coordinación de los hechos que se valoran y la elección de las teorías del poder de mercado en los aftermarkets que pretenden ser aplicadas a un caso concreto. De un lado las empresas que se encuentras investigadas (o demandadas) pretenden consolidar como materia de prueba -bajo el soporte 74 TEMPLE LANG, John. Practical aspects of aftermarkets in european competition law. Cit. Supra. pág. 216 27 de la teoría económica- que la existencia de competencia en los mercados primarios previene el ejercicio de algún poder de mercado en los mercados secundarios. En una línea menos estricta, pero que se fundamenta en la misma idea económica, se pretende identificar una presunción de la extrema dificultad del ejercicio de un poder de mercado en un mercado secundario cuando existe competencia en el mercado primario. De otro lado, la parte que acusa (o el demandante) argumentará que los hechos concuerdan con un conjunto de teorías económicas que demuestran que el fabricante de productos durables en mercados primarios puede monopolizar su mercado secundario, siendo así que no debe existir una presunción de la no existencia de poder de mercado en los mercados secundarios. Además de esta posibilidad, la parte demandante buscará identificar que existiendo la posibilidad de un poder de mercado en el mercado secundario, éste existe en el asunto que se encuentra bajo análisis y tal poder ha sido ejercido de forma abusiva. Estas dos tesis, en su base, se debaten entre establecer y diferenciar la existencia de un mercado de sistemas o uno que sea múltiple75. El estudio económico de la relación entre el mercado primario y secundario parte de la base que las empresas que participan en ambos mercados –en especial cuando la empresa que compite en el mercado primario controla su propio mercado secundario (proprietary market)-, maximizan sus utilidades teniendo en cuenta los precios de los bienes en ambos mercados. Bajo esta consideración se puede entender también que, la demanda de los bienes primarios se ve influenciada por los precios del mercado secundario. En este sentido, el debate sobre la teoría económica que soporta una política de competencia en materia del poder de mercado en la valoración de los mercados secundarios se concentra en definir el marco donde se debe estimar o desestimar la fortaleza del vínculo que existe entre éste mercado y el mercado primario. Se debe considerar entonces que, de formar general, el marco económico donde se asienta la discusión del posible poder de mercado en el mercado secundario (tanto desde la perspectiva de la parte que demanda como de la demandada), reconoce una relación causal consistente en que el incremento de los precios en el mercado secundario (o el conjunto de restricciones directas o indirectas que se puedan considerar con efecto sobre el bienestar de 75 Vid. MacKIE-MASON, Jeffrey & METZLER, John. Links between markets and aftermarkets: Kodak (1997), en “The Antitrust Revolution. Economics, Competition and Policy”, 4a Ed. (Edit. John E. Kwoka, Jr. & Lawrence J. White), Oxford University Press, 2004, Oxford, págs. 433 – 434; 28 los consumidores) creará una disminución en la demanda de los bienes del mercado primario. La razón que justifica esta apreciación consiste en que el potencial consumidor reconoce un incremento de los costes totales si decide comprometerse en la vida útil del producto de larga duración (el coste del producto del mercado primario más los costes del mercado secundario durante la vida útil del mismo) generando que la demanda disminuya. Sin embargo, el debate económico consiste en determinar si existiendo una correlación sobre el incremento de los precios en el mercado secundario y la respectiva disminución de la demanda en el mercado primario, ésta es lo suficientemente importante para contrarrestar los beneficios monopólicos del incremento de los precios en el mercado secundario, haciendo que los precios monopólicos de éste mercado no sean rentables. Aún reconociendo que este supuesto es probable, se puede considerar un conjunto de circunstancias que permiten que el comportamiento monopólico sea rentable desde la perspectiva de un abuso de la posición dominante en el mercado secundario. En todo caso, para que pueda considerarse la posibilidad de un poder de mercado en los mercados secundarios, se debe reconocer que una empresa puede incrementar los precios en el mercado secundario y su comportamiento debe ser rentable. Para que esto pueda ocurrir se requiere que existan, de un lado, barreras a la competencia en los mercados secundarios y, de otro lado, costes de cambio que incidan de forma considerable en el mercado primario76. En el supuesto de las barreras a la entrada en el mercado secundario, el incremento de los precios sólo puede cumplir su objetivo si fabricantes independientes de piezas de recambio (o prestadores de servicios de reparación) no pueden concurrir al mercado para satisfacer la demanda de estos bienes por los consumidores. En relación a los costes de cambio, se debe considerar, por ejemplo, las posibilidades de cambio del consumidor desde la perspectiva que el consumidor no puede vender en el mercado el bien primario de forma rentable que le permita cambiar a otro bien primario para no enfrentarse a una explotación del poder de mercado en el mercado secundario. Esta consideración implica que el mercado de segundas en los bienes secundarios no funciona de forma eficiente, en el sentido que el titular del bien primario no puede esperar a recobrar el valor total actual del bien primario Vid. MacKIE-MASON, Jeffrey & METZLER, John. Links between markets and aftermarkets… Cit. Supra. pág. 435 y 436 76 29 cuando éste lo vende 77 . Estos costes pueden ser identificados como el problema de los costes de cambio financieros78. También se debe considerar al valorar los costes de cambio, todas la inversiones complementarias que el cambio a otro bien primario trae con ellas. Estos costes de cambio deben considerarse como costes de cambio complementarios, también considerados como costes de cambio tecnológicos. Cuando los consumidores se encuentran en una posición que los costes de cambio son considerables para optar por un bien primario competidor, se debe reconocer que éstos se encuentran bloqueados en el bien primario. a) Requisitos para una comprensión de un mercado de sistemas. Presumir la existencia de un mercado de sistemas, como ha sido tratado, requiere la existencia de unos costes de cambio bajos y que los nuevos consumidores, como también los consumidores existentes que requieren adquirir tecnologías superiores o remplazar las existentes, pueden identificar los incrementos en los precios en el mercado secundario y optar por adquirir los bienes primarios de otros proveedores o restringir la demanda de éstos. Para establecer la existencia de un vínculo lo suficientemente importante entre el mercado primario y secundario, se deben considerar tres condiciones: La existencia de información suficiente y que no implique costes importantes; simultaneidad práctica entre el mercado primario y el mercado secundario y; competencia efectiva en el mercado primario79. La existencia de información suficiente, considera que los consumidores pueden realizar de forma razonablemente acertada unas expectativas de los costes conjuntos de mercado primario más los costes de los bienes secundarios durante la vida útil del bien primario. Igualmente, esta consideración puede soportarse en la calidad de información y comparaciones que las empresas que compiten en el mercado primario suministran a los Vid. AKERLOF, George. The market for “lemons”: Quality uncertainty and the market mechanism, en The Quarterly Journal of Economics, Vol. 40, Nº3, Agosto de 1970, págs.. 488-500. 78 Si el bien primario no tiene valor económico en el mercado de segundas (no hay demanda para este tipo de bienes), se debe considerar que no existen costes de cambio financieros, sino que la inversión fue un coste hundido. 79 Vid. MacKIE-MASON, Jeffrey & METZLER, John. Links between markets and aftermarkets… Cit. Supra. pág. 436 y 437 77 30 consumidores, permitiendo a éstos comparar con algún grado de precisión la demanda futura de bienes secundarios y sus costes. La simultaneidad efectiva implica una consideración como si los bienes primarios y secundarios fuesen adquiridos al mismo tiempo. Esta proposición precisa que los consumidores puedan establecer una decisión de compra simultánea de los bienes primarios y secundarios. Algunos mercados pueden facilitar estas consideraciones, en especial si los bienes primarios tienen una vida útil corta, hecho que obliga a los consumidores a realizar comparaciones constantes de los comportamientos de las empresas en los mercados primarios (eficiencia, productividad y reputación). Esta característica también puede identificarse si la expectativa de los consumidores nuevos supera los existentes (las expectativas de ventas de los bienes primarios supera a las realizadas hasta el momento). En este sentido, se debe identificar que las empresas no puedan discriminar entre los nuevos consumidores y los consumidores existentes. Además de estas posibilidades, cualquiera sea la naturaleza del vínculo, se puede considerar que existe una simultaneidad si los consumidores se encuentran amparados por contratos de garantías que operan sobre los bienes secundarios durante la vida útil del bien primario. Igualmente, si el consumidor se encuentra bajo contratos que no asignan un derecho de propiedad y que pueden ser terminados o rescindirse a un determinado tiempo como los contratos de arrendamiento y leasing. Por último, considerar que exista una competencia efectiva en el mercado primario es un elemento de gran importancia para la valoración de el vínculo entre los dos mercados, de lo contrario se podría analizar un comportamiento de posición dominante en el mercado primario donde los consumidores se encuentran bloqueados y por ello, son susceptibles de ser explotados en el mercado secundario, bien mediante la vinculación de productos o bien bajo comportamientos de discriminación abusiva. En este sentido se podría considerar también comportamientos de exclusión que permiten apalancar una posición dominante a un mercado secundario, debilitando o eliminando la competencia que pueda existir en el mercado secundario. 31 Teniendo en consideración las valoraciones realizadas en el asunto Pelikan/Kyocera80, se puede identificar que la Comisión pretendió reconocer un mercado de sistemas donde se identifica competencia en el mercado primario, una simultaneidad de la valoración de los costes de los productos durante la vida útil del bien primario y los costes de los bienes secundarios al momento de la compra del bien primario y, la no existencia de costes de cambio importantes al darse un incremento de los precios en los bienes secundarios. Al igual que en el asunto Pelikan/Kyocera, La Comisión trata de justificar en el asunto CEAHR81 que el mercado de los relojes de lujo y las piezas de recambio son un mercado de sistemas 82 . Sin embargo, el Tribunal General se opone a esta valoración identificando, en primer lugar, importantes costes de cambio, especialmente al considerar que los consumidores se encuentran bloqueados en el mercado primario por las diferencias de precios entre los bienes secundarios y los bienes primarios. En segundo lugar, considera el Tribunal General que los consumidores no se encuentran bien informados y no conocen con claridad los costes de los mercados secundarios, siendo así que no se pueda predicar que exista una simultaneidad efectiva sobre el conocimiento de los dos mercados al momento de la compra del bien primario83. V. Asuntos decididos por las autoridades europeas en materia de mercados secundarios Los principales asuntos adelantados por las autoridades Europeas que tratan la problemática de los mercados secundarios son, Hugin, Hilti, Tetra Pak, Pelikan/Kyosera y Confédération européenne des associations d’horlogers-réparateurs (CEAHR) contra Comisión Europea. A través de estos asuntos se puede verificar la problemática sobre la necesidad o no de una posición dominante en el mercado primario para determinar un abuso de la posición dominante en el mercado secundario, los efectos de bloqueo y los 80 Vid. Infra. Comisión Europea, XXV Informe sobre la política de competencia 1995, Bruselas, 1996, pág. 148 81 Vid. Infra. Decisión de la Comisión y Sentencia del Tribunal General en el asunto Confédération européenne des associations d’horlogers-réparateurs 82 Decisión de la Comisión, Independent Watches Repairers, Asunto COMP/39097 del 1 de Agosto de 2011, Considerando 17 y 18 83 Sentencia del Tribunal General, Confédération européenne des associations d’horlogers-réparateurs (CEAHR) contra Comisión Europea, Asunto T-427/08, Cit. Supra. Considerandos 91 – 109 32 costes de cambio. Después de que sean valorados éstos asuntos, se puede tener una idea de la ausencia de una doctrina uniforme sobre los abusos en los mercados secundarios, indicando con ello que desde la perspectiva de los efectos sobre la competencia y el bienestar de los consumidores, parece ser el caso por caso el punto decisivo en la valoración de los mercados secundarios sin que se pueda predicar, entonces, una guía clarificadora para la valoración de estos comportamientos que requiera o exima de la valoración de un poder de mercado en los mercados primarios para establecer las consecuencias de los comportamientos abusivos en los mercados secundarios. a) Asunto Hugin En el asunto Hugin84, el Tribunal de Justicia anula la Decisión de la Comisión que condenaba a Hugin por negarse a vender piezas de recambio de las cajas registradoras fabricadas por ella misma a Lipton y a otras empresas independientes de reparación de cajas registradoras85. Si bien el análisis del Tribunal no se concentra en los hechos de la negativa como violación del artículo 102 del TFUE, sino que estima que el comportamiento adelantado por Hugin no afecta el comercio entre los Estados miembros, requisito indispensable para la aplicación de las normas de competencia a nivel Europeo, el Tribunal, sin embargo, realiza una valoración sobre la posición de mercado de Hugin, señalando que ésta ostenta una posición dominante en el mercado de piezas de recambio, con independencia que su cuota de mercado en el mercado competitivo de la fabricación y venta de cajas registradoras (mercado primario) sea muy reducida86. Esta consideración nos permite identificar que, en principio, un abuso de la posición dominante en mercados múltiples puede ser analizado exclusivamente desde la consideración del comportamiento adelantado por una empresa con poder de mercado en el mercado secundario. Como fue revisado, este comportamiento permite identificar el grado de perjuicio que puedan tener 84 Sentencia del Tribunal de Justicia, Hugin Cassaregister AB & Hugin Cash Register v Comisión, Asunto 22/78 de 31 de Mayo de 1979 85 Decisión de la Comisión, Hugin/Liptons, Asunto 78/68/CEE de 8 de diciembre de 1977, IV/29.132, DO L 22 de 27.1.1978, p. 23/35 86 El Tribunal de Justicia encuentra que existe una demanda específica para las piezas de recambio de Hugin y a su vez que éstas no tienen sustitutos en el mercado. Con ello, identifica que el mercado relevante para una valoración de abuso de la posición dominante (hoy, Artículo 102 TFUE) consiste en el mercado de piezas de recambio para las cajas registradoras Hugin demandadas por empresas independientes. Vid. Ibídem, Considerandos 7 y 8 33 los consumidores que se encuentran bloqueados (lock-in) en el producto principal y sobre los cuales, un cambio en las políticas comerciales de la empresa dominante en el mercado secundario, podría conducir a una explotación abusiva del bienestar de los consumidores por medio de transferencias del excedente de los consumidores a la empresa dominante, sin que exista una justificación objetiva del beneficio que conlleva esa transferencia de bienestar para aquellos consumidores que se encuentran bloqueados en el producto del mercado principal87. b) Asunto Hilti A diferencia del asunto Hugin, la Comisión consideró en el asunto Hilti 88 la posición de mercado tanto en el mercado primario (pistolas grapadoras 89), como en los diferentes mercados secundarios (cartuchos y grapas90)91. En ambos mercados encontró que la posición de Hilti se correspondía con una posición de dominio, y que a su vez se veía reforzada por derechos de propiedad intelectual92 y diferentes estrategias comerciales que le 87 Vid. Supra. Notas de pié de página 14 y ss. y texto que lo acompaña. Sentencia del Tribunal de Justicia, Hilti AG contra Comisión de las Comunidades Europeas, Asunto C53/92P de 2 de marzo de 1994, Rec. Juris. I-00667; Sentencia del Tribunal de Primera Instancia, Hilti AG contra Comisión de las Comunidades Europeas, Asunto T-30/89, de 12 de diciembre de 1991. Rec. Juris. 1991, p. II-01439; Decisión de la Comisión Eurofix-Bauco contra Hilti, 88/138/CEE de 22 de diciembre de 1987, IV/30.787 y 31.488, DO L 65 de 11.3.1988, p. 19/44 89 Sentencia del Tribunal de Primera Instancia, Hilti AG contra Comisión de las Comunidades Europeas, Asunto T-30/89, Cit. Supra. Considerando 19. “[…] la cuota de Hilti en el mercado comunitario de pistolas grapadoras es aproximadamente de un 55 % de las ventas. En cuanto a las cartucheras y grapas en general, la Comisión considera que la cuota de mercado de Hilti en la CEE es como mínimo igual a la indicada para las pistolas grapadoras. Según la Decisión, la cuota de Hilti en el mercado comunitario de grapas y cartucheras compatibles con sus aparatos es superior a la que tiene en el mercado de grapas y cartucheras en general” 90 Ibídem. Considerando 92. La Comisión había considerado que las cuotas en el Reino Unido eran superiores y se encontraban entre el 70 y 80% 91 La Comisión rechazó el argumento de Hilti que pretendía el reconocimiento de la existencia de un solo mercado de sistemas de fijación mediante pólvora. La Comisión, y posteriormente el Tribunal General (Ex TPI), critican esta observación bajo el argumento que tal consideración equivaldría en la práctica a que los fabricantes de éstas pistolas impidieran la utilización en sus aparatos de productos consumibles que no sean de la misma marca. Desde el punto de vista del derecho de la competencia, para fabricar productos consumibles que puedan utilizarse en aparatos fabricados por otros, no existe ninguna limitación desde que no se viole un derecho de propiedad intelectual o normas que así lo prohíban. Además, el fabricante de los aparatos donde se usan los consumibles no puede tomar una decisión unilateral a falta de regulación para prohibir el uso de éstos alegando que las características del sistema pueden resultar afectadas. Sentencia del Tribunal de Primera Instancia, Hilti AG contra Comisión de las Comunidades Europeas, Asunto T-30/89, Cit. Supra, Considerando 68 92 Asunto Hilti. Las licencias a las que se hace referencia se encontraban en la categoría de licencias de derecho. Para la época de los hecho la política de patentes en el Reino Unido había cambiado el término de 88 34 permitían extender su poder de mercado, del mercado de pistolas grapadoras y cartucheras, al mercado de las grapas. Sin embargo, el análisis del mercado en el que se adelantaron las valoraciones sobre la determinación de la existencia de un abuso de la posición dominante, se concentró en el mercado de las grapas compatibles con las pistolas Hilti 93. Con esto, los comportamientos que se consideraron abusivos de la posición dominante de Hilti se relacionan con la vinculación de productos (las cartucheras como producto vinculante y las grapas como producto vinculado) 94 ; la discriminación en precios para aquellos consumidores que solicitaban cartuchos, limitando su poder de elección y restringiendo por objeto y/o por efecto la competencia de fabricantes independientes de grapas 95 ; la imposición de restricciones y límites al suministro de cartucheras a su red de distribución y a los distribuidores independientes para que no atendiesen solicitudes de suministro de fabricantes independientes en el Reino Unido, como también limitación de suministro a clientes que pudieran revender los cartuchos a fabricantes independientes de grapas 96 , prácticas dilatorias en el establecimiento de los valores de las licencias de pleno derecho a las que podían acceder los fabricantes independientes97, negativas al cumplimiento de las garantías de los bienes del mercado primario como una estrategia conducente a excluir la competencia de fabricantes independientes de grapas98; entre otras. El asunto Hilti, presentando diferencias fácticas importantes con el asunto Hugin, en especial, el poder de mercado existente en el asunto Hilti en relación al mercado primario (mercado de bienes de larga duración), no se aleja mucho de las consideraciones de un protección de 16 años a 20 años para mantener una uniformidad con los demás Estados miembros. Las patentes que ya habían sido concedidas con una duración de 16 años de protección, pasaban en los últimos cuatro años, para completar los 20 años de protección, a un régimen de licencias de pleno derecho. Para una revisión sobre las licencias de pleno derecho en el régimen español de patentes, Vid. Ley 11/1986 de Patentes, Capítulo 3 del Titulo VIII. 93 Sentencia del Tribunal de Primera Instancia, Hilti AG contra Comisión de las Comunidades Europeas, Asunto T-30/89, Cit. Supra, Considerando 74. “[…] Al limitar la competencia [sic] efectiva con respecto a nuevos productores, Hilti ha podido preservar su posición dominante. La posibilidad de llevar a cabo estas políticas ilegales se deriva de su poderío en el mercado de cartucheras y pistolas grapadoras compatibles con Hilti (donde su posición de mercado es más fuerte y las barreras para entrar son más altas) y va dirigida a reforzar su posición dominante en el mercado de grapas compatibles con Hilti (donde resulta potencialmente más vulnerable a la nueva competencia)”. 94 Vid. Decisión 88/138/CEE de la Comisión, de 22 de diciembre de 1987, relativa a un procedimiento de aplicación del artículo 86 del Tratado CEE (IV/30.787 y 31.488 — Eurofix-Bauco/Hilti) (DO 1988, L 65, p. 19), Considerando, 75 95 Ibídem. Decisión de la Comisión Considerando, 76 96 Ibídem. Decisión de la Comisión Considerando, 77 97 Ibídem. Decisión de la Comisión Considerando, 78 98 Ibídem. Decisión de la Comisión Considerando, 79 35 análisis de mercado fundamentado en el mercado secundario donde se valora la existencia de las restricciones a la competencia99. En el asunto Hilti se establecen las relaciones entre el mercado primario y el mercado secundario para limitar el grado de intercambiabilidad que puede existir en los mercados secundarios. Al determinarse la posición dominante en el mercado primario, la valoración posterior se concentra en el conjunto de bienes que pueden ser compatibles con ese mercado primario y, así, valorar la posición de mercado en el mercado secundario. En este análisis se considera la posibilidad de competencia en el mercado secundario y sí ésta ha sido excluida por medio de prácticas que no se corresponden con una competencia fundada en los méritos. Al determinarse que existen en ambos mercados posiciones de dominio (que para el caso era un mercado primario y dos secundarios, el de cartuchos y el de grapas), los comportamientos adelantados por la empresa dominante adquieren una mayor relevancia sobre los efectos excluyentes de la competencia, en especial bajo dos formas de análisis: Primero, porque la empresa dominante puede apalancar su posición dominante de un mercado primario a uno secundario o, como una alternativa relacionada con la misma lógica, la empresa dominante puede proteger la posición de dominio en el mercado secundario mediante el cierre de mercado a los bienes primarios de los fabricantes de bienes secundarios compatibles100. En segundo lugar, se considera si las restricciones en el mercado secundario presentan algún balance positivo entre las eficiencias que se pretenden obtener de las restricciones realizadas y los beneficios que pueden obtener los consumidores con la existencia de un mercado secundario competitivo. Si este balance es negativo, las restricciones adelantadas por la empresa dominante en el segundo mercado se consideran abusivas en los términos del artículo 102 del TFUE y no se encuentran justificadas objetivamente101. c) Asunto Tetra Pak II 99 Vid. Conclusiones del Abogado General Jacobs, Hilti AG contra Comisión de las Comunidades Europeas Asunto C-53/92 P. presentadas el 10 de noviembre de 1993, Rec. Juris. 1994 p. I-00667 100 El uso de estrategias de apalancamiento por parte de la empresa dominante pueden ser utilizadas para obtener mayores beneficios del mercado primario y secundario, y a su vez, al prevenir la competencia en el mercado secundario, especialmente en mercados con efectos de red y complementos, puede proteger la incursión de nuevos competidores en el mercado primario al incrementar los efectos de red indirectos. Vid. Sentencia del Tribunal de Primera Instancia, Microsoft Corp. contra Comisión de las Comunidades Europeas. Asunto T-201/04 de 17 de septiembre de 2007, Rec. Juris. 2007 página II-03601, Considerando 31 101 Vid. ALBORS-LLORENS, Albertina. The role of objective justification and efficiencies in the application of article 82 EC, Common Market Law Review, Vol. 44, 2007, págs. 1727–1761 36 En el asunto Tetra Pak II 102 , el Tribunal de Justicia sostiene las valoraciones realizadas por el Tribunal General y por la Comisión sobre los abusos de la posición dominante adelantados por Tetra Pak en el mercado aséptico (las máquinas para acondicionar los envases en condiciones asépticas y los envases de cartón) donde su cuota de mercado se encuentra alrededor del 90% al el 95%103 y, en el mercado diferenciado pero cercano, no aséptico (las máquinas para acondicionar productos alimenticios frescos y los envases de cartón) donde su cuota de mercado se encuentra entre el 50% y 55%104. Si bien el asunto Tetra Pak II hace referencia a un importante conjunto de prácticas anticompetitivas, como también a importantes problemáticas sobre la definición del mercado relevante, nos concentraremos en la relación entre los mercados primario y secundario y las restricciones que se pueden generar a la competencia desde esta relación, especialmente en los mercados secundarios105. Las prácticas adelantas por Tetra Pak en relación con los mercados secundarios consistían especialmente, de un lado, en la vinculación de los bienes consumibles (envases de cartón aséptico y no aséptico –producto vinculado-) con la adquisición o arrendamiento de las máquinas de envasado (producto vinculante)106 y, de otro lado, en la vinculación de las reparaciones y piezas de recambio (producto vinculado) con la adquisición o arrendamiento de las máquinas de envasado (producto vinculante)107. La Comisión, el Tribunal General y posteriormente el Tribunal de Justicia coincidieron en que, las prácticas adelantadas por Tetra Pak en sus cláusulas contractuales buscaban establecer una exclusividad que convirtieran los productos del mercado primario y del mercado secundario en productos indisociables, produciendo como efecto la exclusión de la competencia en el mercado secundario por medio de la vinculación 102 Sentencia del Tribunal de Justicia Tetra Pak International SA contra Comisión de las Comunidades Europeas, Asunto C-333/94 P de 14 de noviembre de 1996, Rec. Juris. 1996 p. I-05951 103 Decisión de la Comisión, Tetra Pak II, Asunto IV/31.04 de 24 de julio de 1991, 92/163/CEE DO L 72 de 18.3.1992, p. 1/68, Considerandos 11 a), 11 b) y, 12 104 Ibídem, Considerandos 11 c), 11 d) y, 13 105 Para una discusión del asunto Tetra Pak II, Vid. CURTO POLO, Mercedes, Hacia una noción ampliada del abuso de posición dominante (Comentario a la sentencia del TJCE de 14 de noviembre de 1996, en el caso Tetra Pak International, S. A., contra Comisión de las CE, Asunto C-333/94), En. Actas de Derecho Industrial y Derecho de Autor, Tomo 18, 1997, págs. 347 – 370; 106 Decisión de la Comisión, Tetra Pak II, Asunto IV/31.04 de 24 de julio de 1991, Cit. Supra. Considerandos. 116 - 120 107 Ibídem. Considerandos 108 y 109 37 de productos 108 . En materia del mercado aséptico, la Comisión consideró que las restricciones eran especialmente graves porque además de prevenir una competencia intermarcas, la forma de suministro se supeditaba al distribuidor que estableciera Tetra Pak, creando así limitaciones de competencia intramarca en un mercado donde la cuota de mercado es cuasimonopólica109. En relación con la exclusividad respecto al mantenimiento y las reparaciones, la Comisión observó que éstas prácticas se extendían más allá del término para la garantía, configurando una relación de dependencia entre el consumidor y Tetra Pak, como a su vez una exclusión de cualquier posibilidad de competencia en el mercado secundario de repuestos y servicios de reparación110. Además, esta práctica se unía a la imposibilidad de competencia intramarca en materia de repuestos, ya que su distribución se realizaba a través de un proveedor designado por ella111. El asunto Tetra Pak II presenta interesantes valoraciones sobre la identificación de los mercados secundarios y la importancia de la existencia de competencia que se puede esperar en estos mercados. En primer lugar, se encuentra que Tetra Pak pretendió demostrar que el producto ofrecido constituía un solo mercado (mercado de sistemas) presentándose como proveedor de “sistemas integrados de distribución para alimentos líquidos y semilíquidos destinados al consumo humano”112. En segundo lugar, Tetra Pak considera las ventajas de las economías de escala y la reducción de los costes de las materias primas debido a relaciones de largo plazo de compra exclusiva que se pueden considerar al establecer el mercado como un mercado de sistemas113. En tercer lugar, Tetra Pak presenta como argumento para las compras exclusivas una justificación técnica, argumentando que las relaciones que se tejen entre la tecnología de las máquinas, los envases de cartón y los productos que han de ser envasados, requieren un conocimiento amplio sobre el funcionamiento de las máquinas, los productos a ser envasados y sus interacciones. En este 108 Ibídem, Considerando 108, 109, 116 a 120; Sentencia del Tribunal de Primera Instancia, Tetra Pak International SA contra Comisión de las Comunidades Europeas, Asunto T-83/91 de 6 de octubre de 1994, Rec. Juris. p. II-00755 Considerando 135 y 136; Sentencia del Tribunal de Justicia Tetra Pak International SA contra Comisión de las Comunidades Europeas, Asunto C-333/94 P Cit. Supra. Considerandos 34 – 38; 109 Decisión de la Comisión, Tetra Pak II, Asunto IV/31.04 de 24 de julio de 1991, Cit. Supra. Considerandos 116 110 Ibídem. Considerando 108 111 Ibídem. Considerando 109 112 Ibídem. Considerando 118, Tetra Pak consideraba que los sistemas integrados comprendían los conocimientos técnicos, los bienes del mercado primario (bienes de equipo), los bienes del mercado secundario (recipientes), el servicio y la formación. 113 Ibídem. Considerando 118 38 sentido, considera Tetra Pak que las relaciones que se tejen entre el mercado primario y el mercado secundario (maquinas y envases) reflejan una “relación natural” que justifica las cláusulas de suministro exclusivo porque ellas dan lugar a la creación de sinergias en materia de investigación y desarrollo (innovación) y en relación con el servicio postventa114. En cuarto lugar, Tetra Pak identifica que al reconocer como un mercado de sistemas los productos ofrecidos por ella, trae consigo el beneficio de establecer una sola fuente de responsabilidad, evitando dilaciones sobre cuestiones complejas de reparto de responsabilidad entre el proveedor de los bienes primarios (las máquinas) y el proveedor de los bienes secundarios (los envases de cartón). En quinto lugar, Tetra Pak considera que las interacciones que se consiguen entre el mercado primario y el mercado secundario de sus productos, evita problemas sanitarios que beneficia a los consumidores 115 . Por último, identifica Tetra Pak que las razones técnicas y sanitarias argumentadas se encuentran en una relación muy importante con la reputación de la marca, por ello existe un interés legítimo en que se utilicen bienes en el mercado secundario procedentes ella misma como proveedora116. Las consideraciones ofrecidas por Tetra Pak, fueron interpretadas por la Comisión en tres vías y reconocidas igualmente por el Tribunal General y por el Tribunal de Justicia. En primer lugar, la Comisión considera que no se puede identificar una “relación natural”117 entre productos de características físicas totalmente diferentes y que proceden de procesos de producción distintos para justificar una relación de suministro exclusivo118. En segundo lugar, considera la Comisión que los vínculos técnicos entre el mercado primario y el secundario argumentados por Tetra Pak, si realmente existieran no requerirían la inclusión de las cláusulas de exclusividad y, además, si existen alternativas técnicas, los 114 Decisión de la Comisión, Tetra Pak II, Asunto IV/31.04 de 24 de julio de 1991, Cit. Supra. Considerando 118; Sentencia del Tribunal de Primera Instancia, Tetra Pak International SA contra Comisión de las Comunidades Europeas, Asunto T-83/91, Cit. Supra, Considerando 82, 83 y 138; Sentencia del Tribunal de Justicia Tetra Pak International SA contra Comisión de las Comunidades Europeas, Asunto C-333/94 P Cit. Supra. Considerandos 36 115 Decisión de la Comisión, Tetra Pak II, Asunto IV/31.04 de 24 de julio de 1991, Cit. Supra. Considerando. 118 116 Ibídem. 117 En el momento de la discusión del asunto, Tetra Pak pretendía la inclusión de una exención en relación con el Artículo 3 literal c) del Reglamento 1984/83, el cual fue considerado por la Comisión no aplicable por razón de que la regulación no preveía una exclusión de la aplicación de la normativa de competencia relacionada con el abuso de la posición dominante. 118 Decisión de la Comisión, Tetra Pak II, Asunto IV/31.04 de 24 de julio de 1991, Cit. Supra. Considerando. 119 39 consumidores deben ser los encargados de elegir entre las alternativas que puede haber en el mercado119. Esta misma consideración es realizada en relación con los argumentos de Tetra Pak en materia de sinergias, identificando que si tales resultados se pueden presentar por la utilización conjunta de productos de Tetra Pak, tal decisión corresponde a los consumidores y no al proveedor. Por último, considera la Comisión, al igual que en el asunto Hilti, las consideraciones sobre problemas técnicos, de seguridad y sanitarios no pueden ser decididos de forma unilateral por la empresa dominante cuando existen autoridades encargadas de adelantar tales procedimientos, y cuando la expedición de normas técnicas y especificaciones de uso por parte de Tetra Pak puede evitar la existencia de problemas de esta naturaleza120. d) Asunto Pelikan/Kyocera En el asunto Pelikan/Kyocera la Comisión desestimó la denuncia presentada por Pelikan contra Kyocera por abuso de la posición dominante y acuerdos restrictivos de la competencia entre Kyocera y sus distribuidores. Kyocera es una empresa que fabrica impresoras para ordenadores y fotocopiadoras, mientras que Pelikan fabrica cartuchos de tóner compatibles con las impresoras Kyocera que compiten con los propios cartuchos de tóner de Kyocera. Pelikan sostenía que Kyocera ejercía dos tipos de restricciones a la competencia: la primera hacía referencia a que las limitaciones impuestas por Kyocera a la garantía de sus impresoras cuando éstas fueran utilizadas con cartuchos de tóner diferentes a los de su propia marca y, en segundo lugar, acusaba que los descuentos por volumen al comprar paquetes de cartuchos restringían las posibilidades de competencia en el mercado secundario. Ante las acusaciones de Pelikan, la Comisión realizó unas importantes consideraciones sobre la relación entre los mercados primario y secundario. En primer lugar, la Comisión estableció que Kyocera no ocupaba una posición dominante en ninguno de los dos mercados, ni en el mercado primario de impresoras, ni en el mercado secundario 119 La Comisión considera que el mercado de productos no asépticos es un ejemplo que puede demostrar la utilización conjunta de un bien en un mercado primario con bienes de marcas diferentes en el mercado secundario. Además, la vinculación de exclusividad de Tetra Pak no se ha realizado únicamente con los bienes de su propia marca en el mercado primario, sino también con otras marcas que ella se encargaba de distribuir, 120 Decisión de la Comisión, Tetra Pak II, Asunto IV/31.04 de 24 de julio de 1991, Cit. Supra. Considerando. 119 40 de cartuchos de tóner y, además, contempla la Comisión que si Kyocera tuviera una posición dominante, los comportamientos adelantados por ella no se corresponden con un abuso de la posición dominante. En segundo lugar, la Comisión explica las razones por las cuales considera que Kyocera, teniendo una cuota de mercado alta en el mercado secundario, no podía disfrutar de una posición de dominio. Estas razones pueden ser divididas en cuatro razonamientos: (1) Las características de la competencia que enfrentaba Kyocera en el mercado primario (otras empresas productoras de impresoras) limitaba su comportamiento en el mercado secundario (el de los tóner de su propia marca); (2) Los compradores de los productos del mercado primario (impresoras) se encontraban bien informados de los precios de los bienes en el mercado secundario (cartuchos de tóner) y sus decisiones de compra se hacían en función de ambos criterios; (3) Los bienes del mercado primario y los bienes del mercado secundario se ajustaban a un equilibrio entre la vida útil del bien primario y los costes de los bienes secundarios durante su vida útil. Así que los consumidores al observar que los precios de los bienes del mercado secundario incrementaban, encontrarían incentivos para cambiar de producto en el mercado primario por una marca competidora; (4) La complejidad y los costes de los bienes del mercado primario, permitían que los costes de cambio no fuera excesivos121. e) Asunto CEAHR Recientemente, el Tribunal General resolvió un recurso de anulación en contra de una Decisión de la Comisión en el asunto CEAHR en relación con una denuncia de la Confederación Europea de la Asociación de Reparadores de Relojes sobre acuerdos anticompetitivos y abuso de la posición dominante de los fabricantes de relojes de lujo122. En este asunto la Comisión había considerado que los mercados de relojes de lujo estaban constituidos como «mercados de sistemas», en el entendido que tanto el mercado primario y el mercado secundario constituían un solo mercado que se veía afectado por los cambios en la oferta en cualquiera de los dos segmentos. Es decir, la Comisión consideró que un cambio en los precios de los servicios postventa (piezas de recambio y/o servicios de 121 Comisión Europea, XXV Informe sobre la política de competencia 1995, Bruselas, 1996, pág. 148 Sentencia del Tribunal General, Confédération européenne des associations d’horlogers-réparateurs (CEAHR) contra Comisión Europea, Asunto T-427/08, de 15 de diciembre de 2010, Rec. Juris. 2010 p. 00000 122 41 reparación) generaba un cambio en la demanda de los bienes primarios (mercado de los relojes de lujo) hacia otro competidor 123 . Los criterios utilizados por la Comisión para llegar a esta conclusión se fundamentaron en dos supuestos: (1) cuando un consumidor puede optar por los bienes o productos de otro competidor en el mercado secundario y, (2) cuando el consumidor puede cambiar de producto primario y evitar con ello precios más elevados en el mercado secundario124. Desde la perspectiva de la Comisión, estos supuestos se ven cumplimentados cuando, de un lado, los consumidores pueden abastecerse de diferentes fuentes en el mercado secundario diferentes a la propia fuente de suministro de la empresa del mercado primario, en el caso del supuesto primero y, de otro lado, cuando los consumidores tienen diferentes alternativas en el mercado primario y los costes de cambio no son extremadamente onerosos, bien porque existen alternativas de suministro (bienes usados, bienes de ocasión, etc.) o porque adquirir un bien nuevo compensa en relación a los incrementos en los precios de los bienes del mercado secundario, en el caso del segundo supuesto125. Sin embargo, el Tribunal General, aceptando la clasificación de la Comisión, considera que, en primer lugar, la Comisión no establece la existencia de sustituibilidad o intercambiabilidad en el mercado secundario de piezas de recambio. Por el contrario, considera el Tribunal que durante el procedimiento, tanto la Comisión, como la parte coadyuvante y algunas interpretaciones de autoridades de competencia nacionales (suiza y neerlandesa) habían señalado la no existencia de intercambiabilidad en el mercado secundario de piezas de recambio126. En segundo lugar, el Tribunal General considera, a diferencia de la Comisión, que los consumidores si se enfrentan a importantes costes de cambio dada la diferencia entre el valor del bien del mercado primario y el valor de los bienes del segundo mercado (servicio de reparación y piezas de recambio), donde éstos últimos son en proporción muy bajos con relación a un bien del mercado primario. Así, 123 Decisión de la Comisión, Independent Watches Repairers, Asunto COMP/39097 del 1 de Agosto de 2011, Considerando 17 y 18 124 Ibídem. Considerando 24 125 Ibídem Considerando 25 y 26; de igual forma el Tribunal General considera que la clasificación realizada por la Comisión en los dos supuestos tratados (intercambiabilidad en el mercado secundario y la no existencia de efectos de bloqueo) es acorde con la jurisprudencia del Tribunal de Justicia en materia de sustituibilidad y con la Comunicación sobre el mercado relevante en los considerandos 7, 17 y 56. Vid. Supra. Vid. Comunicación de la Comisión relativa a la definición de mercado de referencia a efectos de la normativa comunitaria en materia de competencia DO C 372 de 9.12.1997, Considerandos 7, 17 y 56 126 Sentencia del Tribunal General, Confédération européenne des associations d’horlogers-réparateurs (CEAHR) contra Comisión Europea, Asunto T-427/08, Cit. Supra. Considerandos 84 – 90 42 considera el Tribunal que la Comisión no demostró que los consumidores que ya han adquirido el bien primario tengan posibilidades de cambio reales sin asumir costes importantes y por ello no se encuentran bloqueados en el mercado primario127. Por último, el Tribunal establece que la consideración del mercado de los relojes de lujo como un «mercado de sistema», tampoco fue acreditada por la Comisión, en especial por que no se puede identificar del análisis de la Comisión que los consumidores al momento de adquirir los bienes primarios, tengan una especial consideración de los costes del mercado secundario, ni tampoco que existiendo un incremento en los precios del mercado secundario, los consumidores optarían por un bien del mercado primario de un competidor diferente128. 4. Conclusión Los mercados secundarios ofrecen un rico y complejo análisis de las relaciones que existen entre mercados separados pero conexos por relaciones de dependencia que se tejen entre competencia y poder de mercado. La presencia de estos vínculos entre mercados donde participa una empresa que se encuentra integrada verticalmente, establece retos importantes sobre el alcance de las consideraciones de economía normativa y política de competencia que fundamentan la aplicación del derecho de la competencia. Estas consideraciones, por ejemplo, tienen tanto de la idea del hombre racional que participa en el mercado como consumidor, bien bajo la consideración del agente económico capaz de medir con alta precisión las alternativas de comportamiento, elegir el comportamiento más eficiente y obtener las utilidades esperadas o asumir el riesgo de sus elecciones. Como también de la idea de racionalidad que considera el ruido del mercado y la naturaleza del comportamiento humano que inhibe al consumidor de un comportamiento capaz de medir con precisión todas las consecuencias de sus elecciones y los riesgos de determinadas elecciones. Estas ideas hacen parte del contenido que la política de competencia debe tener como derecho aplicable a los comportamientos en el mercado. Ibídem. Considerandos 91 – 102 Sentencia del Tribunal General, Confédération européenne des associations d’horlogers-réparateurs (CEAHR) contra Comisión Europea, Asunto T-427/08, de 15 de diciembre de 2010, Rec. Juris. 2010 p. 00000 Considerandos 103 – 109; Sentencia Hilti, Considerando 67 127 128 43 En este sentido, asumir que los consumidores no pueden encontrarse bloqueados en un mercado secundario por razón de la competencia en un mercado principal, de un lado, tal consideración se identifica con un consumidor capaz de adelantar significativas operaciones de cubrimiento de riesgo que no son acordes con la dinámica propia de los mercados. De otro lado, considerar que el consumidor puede disminuir las oportunidades de oportunismo adelantadas por las empresas que participan en dos mercados, en especial sobre el ejercicio de comportamientos de explotación por medio de relaciones contractuales de garantía, implica identificar un consumidor con poder de negociación frente a una empresa dominante en un mercado secundario. Desde la consideración de la estructura de los mercados, los consumidores pueden a su vez estar bloqueados por la naturaleza del propio mercado. Por ejemplo, consumidores en mercados que están relacionados con efectos de red, pueden encontrar muy oneroso las posibilidades de cambio a otros bienes primarios o redes que compiten en un mercado primario, incrementado así los costes de cambio y facilitando comportamientos de oportunidad sobre los consumidores instalados en una red. En definitiva, las empresas encuentran importantes restricciones para abusar de una posición dominante en un mercado secundario por la existencia de competencia en el mercado primario y por la importancia de la reputación de la marca. Sin embargo, las empresas pueden optar por comportamientos que facilitan la discriminación de consumidores, como por restricciones a la competencia en la forma de comportamientos de exclusión, que pueden ser explicados bajo una consideración de los efectos anticompetitivos de las conductas de una empresa dominante. En esta vía, la autoridad de la competencia debe ser celosa de los comportamientos en los mercados secundarios que permitan una rivalidad en los mismos y de la que los consumidores se pueden beneficiar, en especial, interviniendo frente a comportamientos de oportunismo sobre los consumidores instalados en un bien primario, como de las oportunidades de expansión que éstos mercados puedan tener para las empresas dominantes en perjuicio de la competencia (actual o potencial), al igual del beneficio que representa para los consumidores una mayor elección fundamentada en una competencia basada en los méritos. 44