Nº 20/02 Información previa al fin de semana del 13 y 14 de julio 6ª cita del europeo de turismos en Oeschersleben (Alemania) (Reportaje de Joaquín Folch al dorso) Jordi Gené: «Todo debe mejorar a partir de ahora» E l próximo fin de semana tendrá lugar en el circuito alemán de Oeschersleben la sexta cita, de un total de diez, del Campeonato de Europa de Turismos 2002. Ésta será una prueba realmente importante para el certamen, ya que en ella se introducirán una serie de novedades reglamentarias a nivel deportivo y técnico que lo convertirán, si cabe, en un campeonato más abierto y espectacular. Por las características de su vehículo, uno de los grandes beneficiados de dichos cambios será un Piloto RACC, Jordi Gené (BMW 320i), que llega a la prueba alemana ocupando la novena posición provisional, pero con muchas posibilidades de mejorar sus resultados a partir de ahora. El piloto del equipo ‘BMW Team Spain’, formación gestionada por el ex piloto italiano Roberto Ravaglia, hace una valoración de lo ocurrido hasta la fecha en su primera temporada como participante en el europeo de turismos: «La verdad es que al principio tuvimos muchos problemas, más de los que esperábamos. Los pilotos BMW fueron los absolutos dominadores la pasada campaña, pero este año lo estamos teniendo más complicado». El mejor resultado conseguido por el piloto de Sabadell ha sido la quinta posición de Anderstorp (Suecia), última prueba celebrada, con la que sumó sus dos primeros puntos de la temporada. Pese a esta pobre cosecha, Jordi Gené (5-12-1970) es optimista de cara al futuro, explicando que «los cambios que se introducirán en la próxima cita serán muy positivos para nosotros, y todo debe mejorar a partir de ahora. Nuestras expectativas son máximas de cara a conseguir un buen resultado de una vez por todas». Las modificaciones afectarán básicamente el aspecto técnico, con la introducción de un nuevo peso mínimo igual para todos los vehículos —pasando de 1.170 a 1.155 kilos, con piloto incluido, en el caso de su BMW—, la limitación del régimen de giro del motor, así como la incorporación de handicaps de peso para los pilotos de cabeza mejor clasificados. En esta misma línea, el mayor de los Gené —que cuenta con el italiano Fabrizio De Simone como compañero de equipo— Jordi Gené (BMW 320i) explica que «personalmente, prefiero que esta temporada finalice mejor de como empezó. Además, ahora ya estoy completamente adaptado a la competición y esto se notará en mi conducción y en los resultados». Sobre el circuito de Oeschersleben (3.667 metros), situado a unos 200 kilómetros de Hannover y con menos de seis años de existencia, Gené comenta que «no lo conozco, ya que nunca he competido allí. Se que es un trazado bastante virado en el que es muy complicado adelantar y, a la vez, muy moderno y con la máxima seguridad». Y este fin de semana, además... Donington Park (GB) y Laguna Seca (USA) esperan a los Pilotos RACC Sainz-Moya en el Safari: «Cualquier problema puede costarte mucho tiempo» L C En el otro lado del océano —concretamente en el trazado californiano de Laguna Seca (3.602 metros)— el RACC estará representado por Rubén Xaus (Ducati), que tomará parte en la novena cita del mundial de superbikes, certamen en el que ocupa la sexta plaza provisional. «En Grecia pudimos demostrar que el Focus es un coche fiable y fuerte, las cualidades que se necesitan para el Safari. Las largas secciones y la asistencia limitada significan que cualquier pequeño problema puede convertirse en uno mayor y costarte mucho tiempo», explica el bicampeón mundial. os Pilotos RACC del mundial de velocidad disputarán el G.P. de Gran Bretaña, en Donington Park (4.023 metros), con un objetivo claro: seguir maravillando. Las grandes atracciones serán Dani Pedrosa (Honda 125), Joan Olivé (Honda 125) y Toni Elías (Aprilia 250), que ya se ‘doctoraron’ en Assen. Completarán la presencia del RACC Jorge Lorenzo (Derbi 125), Emilio Alzamora (Honda 250), Raúl Jara (Aprilia 250) y Pere Riba (Yamaha MotoGP). arlos Sainz y Luis Moya participarán en el Safari Rally kenyata, prueba considerada como la más dura del mundial. Los Pilotos RACC, que con la victoria sumada en Argentina han llegado a la mítica cifra de 24 victorias mundialistas, se subirán de nuevo a su Focus RS WRC 02 con la intención de conseguir un nuevo triunfo que les convierta en el binomio más laureado del mundial de rallyes. Joaquín Folch, piloto del RACC en el FIA Thoroughbred Grand Prix Cuando histórico significa actual La camiseta del club Lotus le delata y su carrera de ingeniero industrial, también: “Soy un gran admirador de Lotus y, en especial, de Colin Chapman. Le conocí personalmente y tengo una buena amistad con su hijo, pero lo que más admiro de él es que fue el primero en dar un cambio tecnológico significativo a la Fórmula 1. En cierta manera puso fin a la escalada de potencia como sistema para aumentar prestaciones, orientando su visión hacia aspectos erróneamente sutiles hasta su llegada: La rebaja del peso, la utilización sofisticada de la aerodinámica, el empleo de materiales más ligeros pero más resistentes y a la vez más flexibles… Chapman consiguió marcar un nuevo camino a los ingenieros de la época fijando su objetivo en la evolución del chasis más que en la potencia bruta de los motores”. Para Folch, las carreras con monoplazas históricos no son diferentes del resto, aunque tienen el encanto especial de lo añejo. Comenta que, física y mentalmente, exigen lo mismo que la Fórmula 1 actual y la preparación y mantenimiento de los coches no deja de ser igual: “Aunque no pueda parecerlo, la conducción de monoplazas históricos de F1 requiere estar en muy buena forma física. Su mecánica obliga al mismo tipo de mantenimiento que un F1 actual; a final de temporada la estructura se desmonta por entero y todas las piezas que la FIA obliga por reglamento pasan los típicos crash-test de seguridad. Precisamente la seguridad es una prioridad en la FIA. Por dicho motivo, permite la aplicación de cualquier medida que mejore la seguridad del piloto aunque ello suponga utilizar modificaciones o aplicar tecnología moderna a los vehículos. Sólo dos cosas son de obligado cumplimiento en los F1 históricos: Demostrar documentalmente que el chasis haya estado presente en la parrilla de salida de, como mínimo, un Gran Premio real y, segundo, conservar enteramente la decoración original del monoplaza”. Piloto y coleccionista a partes iguales Este Piloto RACC, que se inició en competición con motos históricas y posteriormente, ya en las cuatro ruedas, consiguió proclamarse Campeón de Europa de la Copa FIA Sport histórica en los años 1993 y 1994, al volante del biplaza Lotus 23B, se considera “un auténtico amateur de las carreras”. Llegó a la competición de forma casual “por la insistencia de un amigo de que probase su Williams de F1. La experiencia me cautivó y me metí en los históricos de lleno. ¿Qué donde estaría ahora si hubiese empezado a competir con 18 años? No tengo ni idea; quizás ni tan siquiera me hubiese decidido por este tipo de coches con tanta historia. Lo que sí tengo claro es que estoy satisfecho con lo que he conseguido hasta ahora, reuniendo además una estupenda colección de monoplazas de F1 en la Fundación Can Costa, institución que se creó con la finalidad de preservar la historia del automóvil y de la motocicleta en España”. Paralelamente a una estupenda colección de coches y motos históricas, en Can Costa se editan libros, también en colaboración con el RACC. Por dicho motivo para Folch pesa por igual su faceta de coleccionista que la de piloto: “Desde pequeño mi sueño era tener un Lotus Elan S1 y precisamente éste fue el primer coche que restauré. Posteriormente, con un Lotus subí al podio final (3º) del Campeonato de Europa de GT Históricos del 1993”. Carlos Sainz probó su Williams-Ford La temporada 2002 empezó de la mejor manera para Joaquín Folch: Venció en la carrera inaugural, celebrada en el Jarama, logrando con ello la inmensa satisfacción de conseguir su primera carre- ra en la F-1 histórica. Paralelamente, un buen amigo suyo, el bicampeón del mundo de rallyes Carlos Sainz, probó en la pista madrileña su Williams FW08-05 exRosberg, prestando así todo su carisma para la popularización de la especialidad además de experimentar en persona las sensaciones que produce conducir un F-1 de principios de los 80. Comenta Joaquín Folch que Carlos Sainz, nada más bajarse del Williams-Ford, le manifestó su sorpresa por el esfuerzo y la técnica que se necesita para pilotar rápido un monoplaza de la Fórmula 1 histórica. Este es el mejor homenaje y, a la vez, el mejor espaldarazo que podía recibir tanto Joaquín Folch como la propia especialidad: “A menudo, cuando comentas que participas en carreras históricas el interlocutor se imagina que lo haces en eventos festivos o en exhibiciones de poca notoriedad deportiva, y eso no es así. Carlos sabe lo que vale rebajar este último segundo y lo mucho que cuesta hacerlo con un F-1 de los 80… aún sin ser imposible conseguirlo”. Hablando del tipo de conducción al que obligan las carreras de F1 históricas, Folch opina que “lo que realmente importa es tu habilidad y tu experiencia como piloto, ya que lo mismo conduces un vehículo del año 59 que otro del 64 o del 82. Lo bonito de este tipo de carreras es que magnifican tu flexibilidad, versatilidad y capacidad de acoplamiento a la máquina en función de sus características”. Desde que estas series se crearon en 1995 cada vez hay más participantes y la media es de 30 vehículos en cada parrilla de salida, con pilotos de muchas nacionalidades distintas. Correr con un F1 de hace 25 años ¿significa correr la F1 de hace 25 años? Folch sentencia: “Es muy difícil de comparar; primero porqué todos los circuitos han sido modificados en favor de la seguridad y, en consecuencia, también son algo más lentos. Si además tenemos en cuenta el hecho que ahora no llevamos faldillas, que tenemos la altura del suelo regulada a 40 mm y que no llevamos neumáticos radiales (para evitar su rápida degradación), los tiempos que logramos con esas máquinas son muy comparables a los que se conseguían en su epoca”. Y añade: “¿Que qué aspiraciones tengo hoy en competición? Hasta la prueba de abril en el Jarama mi máxima ilusión era ganar una carrera. Eso ya lo he conseguido, ahora mi meta es ganar una segunda...”. La próxima oportunidad de lograrlo será el 21 de julio en Imola, sede de la quinta prueba puntuable del TGP. Producido por JAS Info Service ([email protected]) D estacar en el deporte del motor a un cierto nivel no es un asunto fácil. Combinar esta actividad con la dirección de una gran empresa es más bien complejo. Pero practicar el deporte del automóvil participando en carreras de Fórmula 1 y, además, pilotando un monoplaza cargado de historia con toda la dificultad añadida que plantea la tecnología de hace más de dos décadas, ya es un asunto sólo al alcance de unos pocos. Joaquín Folch, barcelonés de 49 años, es uno de esos escasos ejemplos y el único español participante en el FIA Thoroughbred Grand Prix (TGP), el campeonato de carreras de monoplazas de Fórmula 1 construidos entre 1966 y 1985.