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Marmora en los opera sectilia italicenses
Marmora en los opera sectilia italicenses
Daniel Becerra Fernández
Universidad de Sevilla
BIOGRAFÍA
Licenciado en Historia y Máster Universitario en Arqueología, está realizando el Doctorado en Historia con
un contrato de Personal Investigador
en Formación en el Departamento de
Prehistoria y Arque­ología de la Universidad de Sevilla. Su investigación
se centra en el estudio del mármol
en la Antigüedad. A lo largo de su vida
académica ha participado en el 64º
Curso de Arqueología de Ampurias y
en campañas arqueológicas como las
de la Villa del Casale (Piazza Armerina, Italia) y las del Patio de Banderas
(Se­villa, España). Además ha intervenido como conferenciante para diversas
instituciones entre las que se encuentran el Museo Arqueológico Provincial
de Sevilla y la Fundación Itálica de
Estudios Clásicos.
RESUMEN
Con el presente artículo pretendemos analizar y catalogar los revestimientos en opus
sectile hallados en el yacimiento de Itálica (Santiponce, Sevilla), así como identificar
mediante análisis macroscópicos los diversos materiales pétreos presentes en dichos
ejemplares, procedentes de todas las grandes regiones del Mediterráneo.
Palabras claves: Mármol, piedra, Itálica, opus sectile.
ABSTRACT
In this article, we examine and catalog the opus sectile-style facings uncovered in
Italica (Santiponce, Seville).We identify the Mediterranean origins of the diverse stone
materials found in these pieces using macroscopic analyses.
Keywords: Marble, stone, Italica, opus sectile.
1. INTRODUCCIÓN
Con el advenimiento de la dinastía de los Flavios a Roma, vemos un proceso de ascensión social de las elites locales debido al proceso de municipalización. Gracias a esto muchas
familias béticas fueron ostentando cargos de relevancia en la administración del Imperio,
llegando a su culmen con Trajano, el primer emperador de familia hispana. Estos linajes
que ascendían en los cargos del Imperio favorecieron notablemente a sus lugares de origen,
como vemos en el caso de Itálica.
Con todo ello observamos la importancia que fue adquiriendo la ciudad de Itálica en los
siglos I d.C. y II d.C., que se refleja en la expansión adrianea de la ciudad, la nova urbs. Una
ciudad con unos espacios públicos de primer nivel, en los que aparecen los principales marmora de importación que se difunden por el Mediterráneo (Beltrán, 2013: 125).
La gran variedad de materiales pétreos llegados a Itálica, ha llevado a la realización de
este estudio, debido a que en los opera sectilia italicense vemos unas tipologías marmóreas
que no aparece en otros soportes (Rodá, 1997: 166). Con todo ello pretendemos comprobar
cuáles son los materiales que se emplearon en la decoración italicense.
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2. CATÁLOGO DE LOS OPERA SECTILIA ITALICENSES
Opus sectile hallado en la calle Trajano (Véase anexo, Figura 1).
En la calle Trajano de Santiponce se halló este sectile que se encuentra dividido en tres
partes, una se conserva en el Museo Arqueológico Provincial de Sevilla, y las otras dos en el
Palacio de la Condesa de Lebrija, decorando las alas de Levante y de Poniente. La parte depositada en el Museo Arqueológico debe ser tenida como la más auténtica, ya que la propia
Condesa de Lebrija afirmó que los huecos perdidos de sus sectilia fueron rellenados con placas marmóreas que los propios habitantes de Santiponce se encontraban (Blanco, 1978: 48).
Aunque desconocemos sus dimensiones primitivas sabemos que tendría un gran tamaño. Sí conocemos el tamaño de sus módulos que es de 83’5 x 83 cm, por lo que estaríamos
ante un sectile de módulo medio, siendo aún así el opus sectile con unidades modulares más
grandes de los hallados en Itálica. Se compone de pequeñas placas marmóreas cortadas de
forma uniforme y combina rombos y círculos divisibles en unidades de 90 cm (Blanco, 1978:
48). El tema geométrico es complejo, Q(XDL)p (Guidobaldi, 2001: 64-70; Mañas, 2011: 81),
y muy similar, incluso en los mármoles empleados, al opus sectile de la “Casa del Amor y
Psiqué”, en Ostia, datada a finales del siglo III d.C. o principios del IV. También es similar a
un opus sectile hallado en la Villa Domitia de Giannutri (Rendini, 1998: fig. 9), al aparecido
en los Baños de la Reina de Calpe (Pasíes, 2007: 32) y al sectile cordobés de la Villa de Santa
Rosa (Gutiérrez Deza, 2007: 113 - 120). También vemos un paralelo muy claro en la plaza de
la Encarnación de Sevilla, datado en la segunda mitad del siglo IV o primera del V (González
Acuña, 2011: 390 fig. VII.227). La complejidad del modelo hace suponer que las placas vendrían elaboradas de talleres itálicos y montadas en un taller de Itálica (Guidobaldi, 1981)
por personas venidas posiblemente de Ostia (Pérez Olmedo, 1996: 164 -166). Los estudios
anteriores sobre este pavimento lo datan entre los siglos III y IV (Blanco, 1978: 48; Gutiérrez
Deza, 2006: 164), aunque cabe la posibilidad de que este revestimiento pétreo fuese realizado en siglos anteriores por el material marmóreo empleado.
Los materiales que aparecen en la parte del sectile depositado en el Museo Arqueológico
son el serpentino, giallo antico, pavonazzetto, porfido rosso, greco scritto y la lumachella
carnina o lioz encarnado; pero también hay fragmentos de un mármol blanco que a simple
vista no podemos identificar y una placa marmórea rosácea con restos de fósiles. En las partes que se encuentran en las galerías del Palacio de la Condesa de Lebrija vemos más materiales pétreos, pero no podemos estar seguros que fueran los tipos de marmora que estaban
en un principio, ya que la Condesa de Lebrija mandó rellenar los huecos con los mármoles
que aparecían en Itálica (Blanco, 1978: 49).
Los materiales que aparecen en el conjunto del opus sectile son los ya mencionados en
el fragmento depositado en el Museo Arqueológico, más el africano, el Buixcarró, occhio
di pavone pavonazzo, el verde antico, fragmentos de un mármol blanco no identificado y
rosso antico. Aparece una piedra ornamental que no podemos identificar sin un análisis
arqueométrico, muy semejante a la breccia dorata.
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Marmora en los opera sectilia italicenses
Los colores y los tipos empleados para la elaboración de este ejemplar son por lo general
muy similares, salvo en algunos módulos, y ello llevó a Gutiérrez Deza afirmar que el cambio
de color en algunos motivos centrales de los módulos de esta pieza se debería a la intencionalidad de resaltar ciertas partes del diseño (Gutiérrez Deza, 2006: 163).
Opus sectile de cuadricromía neroniana de la Casa de la Exedra (Véase anexo, Figura 2).
Este sectile fue hallado en 1924 y depositado en el Museo Arqueológico Provincial de
Sevilla. Se desconoce el lugar de procedencia de esta pieza, aunque seguramente provendría
de alrededor del peristilo (Parladé, 1926: 5, lám. III b) de la Casa de la Exedra. En este sectile
vemos cintas, discos centrales, estrellas, listones y triángulos. Constatamos además que el
esquema compositivo de este ejemplar es complejo, con un diseño cuadrado en Q(YLF+YB+WF)p (Guidobaldi, 2001: 64-70; Mañas, 2011: 28). Observamos que los motivos centrales circulares se alternan en la composición del sectile en una secuencia de colores claros y
oscuros, salvo una excepción. No siempre se usan los mismos tipos de mármoles, pero sí el
mismo color. Debemos mencionar que en una parte concreta de la pieza, al no contar con
materiales suficientes se emplearía una repetición del mismo. Los módulos del sectile tienen
un tamaño de 61 x 61 cm, por lo que estamos ante un opus sectile de módulo medio, con cuatro unidades modulares de ancho por siete módulos de largo. Una de las baldosas del sectile
es una incorporación posterior contemporánea. Este pavimento se data en el siglo II y no
tenemos paralelos exactos para esta pieza, aunque sí hay motivos similares por toda Italia
desde el siglo I d.C (Mañas, 2011: 28).
En todos los módulos de este opus sectile vemos giallo antico, serpentino, pavonazzetto,
un granito oscuro que no sabemos identificar y porfido rosso. Hay material pétreo que no
aparece en todos los módulos, como el greco scritto, el proconnesio, porfido serpentino
nero, porfido nero, palombino, lumachella carnina, granito claro que puede tratarse de granito del foro o granito de la Troade y un material petreo rojizo que aparece en ocasiones sustituyendo al porfido rosso y que se trataría de rosso antico. Además vemos un fragmento de
un material pétreo amarillento que puede ser giallo antico o un material muy parecido que
pretende aparentar ser el marmor numidicum. Salvo en dos ocasiones los módulos alternan motivos centrales circulares claros como el greco scritto, con motivos centrales oscuros
como el porfido nero (Véase anexo, Figura 2). Todos los materiales que observamos en este
opus sectile son mármoles de importación (Beltrán, 2013: 242) y sólo la lumachella carnina
es de Hispania, aunque también es usada en el resto del imperio romano. La utilización de
marmora de importación nos indica que el taller que fabricó esta pieza no era local (Pérez
Olmedo, 1996: 158 -159).
Opus sectile central del zaguán del Palacio de la Condesa de Lebrija (Véase anexo, Figura 3).
En el zaguán del Palacio de la Condesa de Lebrija nos encontramos con un revestimiento
marmóreo conformado, según nuestra interpretación, por cinco opera sectilia, de los cuales
uno aparece dividido en dos partes para adaptarse al acceso de este palacio sevillano ubica-
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do en la Calle Cuna y el resto se encontrarían colocados en diversos puntos del zaguán del
palacio.
El opus sectile principal del zaguán de la Casa-Palacio de la Condesa de Lebrija fue descubierto en 1902 en el número 23 de la calle de la Alegría de Santiponce. Tiene una forma
rectangular, mide 12’25 x 6’65 m (Blanco, 1978: 49) y los módulos que componen esta pieza
tienen un tamaño de 58 x 58 cm (opus sectile de módulo mediano). En el centro nos encontramos como emblema central un disco de granito azulado de 11 cm de radio, rodeado por
una circunferencia y una corona de rayos blancos con triángulos intermedios, a su vez esta
composición va inserta en un cuadrado de color rosáceo, un diseño QD19D según el esquema de Guidobaldi (Guidobaldi, 1985), muy parecido a unos módulos de las Pequeñas Termas de Villa Adriana (Guidobaldi, 1994: Tav. LXII/90) aunque con mármoles de diferente
tipo, salvo el giallo antico y el rosso antico. El diseño del sectile se basa en una composición
simple de círculos insertos en cuadrados [QD (Guidobaldi, 1985)], enmarcado por otro diseño distinto basado en un cuadrado listelado inserto sobre otro, con cuatro cuadrados de
menor tamaño en las esquinas de los módulos [Q3q (Guidobaldi, 1994: Tav. VII/1)]. A su
vez vemos un diseño diferente en las cuatro esquinas del sectile con un motivo complejo en
el que se ven rectángulos, dos cuadrados principales, cuatro secundarios y círculos (QqrQ2),
y en dos de ellos rombos insertos en los cuatro rectángulos (Qqr/b/Q2). Este último diseño
lo vemos en Villa Adriana en la “Piazza d’Oro”, en el ángulo norte del peristilo (Guidobaldi,
1994: Tav. L1/152).
La datación tradicional de este opus sectile es del siglo III o siglo IV (Blanco, 1978: 49),
algo que nos parece correcto, ya que nos encontramos con una piedra ornamental que podría
ser bianco e nero, que sólo se difunde a partir del siglo IV (Gnoli et alii, 2003: 154 – 156).
Los tipos de marmora presentes en la pieza son el giallo antico, el greco scritto, el mármol
blanco de Almadén, la breccia di Sciro, el rosso antico, el cipollino y sus variedades locales, la
lumachella carnina, el africano, el pavonazzetto, el palombino, el serpentino, el broccatello,
el portasanta, el verde antico, el mármol de Buixcarró, la breccia quintilina, el mármol de
Alconera, la breccia dorata, el nero antico, el bianco e nero, el porfido nero, la serpentina
moschinata, el castracane, el alabastro fiorito y el alabastro cotognino. También vemos un
granito que podría tratarse por su aspecto de granito del foro o de la Troade, aunque también existe la posibilidad de que se trate de un granito local, pero al aparecer en el emblema
central y rodeado de marmora de importación nos parece poco probable. Vemos en este
sectile materiales pétreos sin identificar como calizas rosas fosiliferas, mármoles blancos,
calizas negras, materiales pétreos negros con nódulos blancos, alabastros de distintos tipos,
y piedras ornamentales marrones, rosas, rojas, amarillas y grises. La presencia mayoritaria
de mármoles locales, junto a la posibilidad de que la Condesa de Lebrija mandara introducir
mármoles no procedentes de la misma pieza (pero sí de Itálica), nos hace ver que el origen de
este revestimiento marmóreo fue local (Pérez Olmedo, 1996: 158 -159) y en él se emplearían
marmora de importación reutilizados de otros espacios italicenses.
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Marmora en los opera sectilia italicenses
Opus sectile a la derecha e izquierda del acceso al zaguán del Palacio de la
Condesa de Lebrija (Véase anexo, Figura 4).
Como hemos mencionado anteriormente, analizando en profundidad el opus sectile,
hemos visto que en realidad se trata de varios opera sectilia, seguramente cinco, uno en
la entrada dividido por un segundo sectile con diseño en Q3p que lo partiría en dos, con el
mismo tamaño (61 x 61 cm) y distinto diseño (opus sectile de módulo medio), por lo que
podrían proceder ambos de una misma estancia. El diseño de este primer sectile en Q2r,
según el esquema de Guidobaldi, lo encontramos también en la Casa del Atrio de Herculano
(Guidobaldi y Olevano, 1998: 251, lám 11.2.). No hay mármoles que se repitan en todos los
módulos, y los materiales que constatamos con casi toda seguridad son lumachella carnina,
mármol de Almadén bandeado, africano, fragmentos de Buixcarrò, portasanta, pavonazzetto, giallo antico, breccia quintilina, y greco scritto. Tras el análisis visual creemos probable
que en este opus sectile estén presentes la breccia gialla nuvolata, la breccia gialla fibrosa
o el castracane; así como también el bianco e nero, el nero antico, el alabastro cotognino,
el cipollino marino, la breccia dorata y el alabastro fiorito. Este opus sectile está compuesto mayoritariamente por placas de marmor local, aunque aparecen fragmentos de muchos
marmora de importación, pero no en gran número, lo que nos mostraría que la elaboración
de la pieza también se llevó a cabo cerca de Itálica. La cronología de esta pieza es desconocida aunque podría datarse en el siglo III o en el IV, por tener una composición marmórea
similar a la del opus sectile central, aunque el diseño de la pieza sea anterior.
Opus sectile central en el acceso al zaguán del Palacio de la Condesa de
Lebrija (Véase anexo, Figura 5).
Esta pieza con diseño Q3p tiene un paralelo claro en Córdoba, ya que en la Plaza Colón
se halló un opus sectile con diseño Q3p y con otros esquemas, datado en siglo II y reformado
en el siglo III (Gutiérrez Deza, 2007: 103 – 107). Otro revestimiento con un esquema similar
a este sectile sería el de Casa de las Vestales de Roma (Guidobaldi, 1985: Tva. 4, 6) datado
en el siglo I.
Desconocemos la cronología para esta pieza, aunque con los paralelos que hemos visto,
pensamos que la datación podría establecerse en el siglo II d.C. El tamaño de los módulos
que componen el pavimento es de 61 x 61 cm (opus sectile de módulo medio). Los materiales
pétreos que aparecen en todos los módulos del opus sectile situado en el centro del acceso
al zaguán son el mármol bandeado de Almadén de color grisáceo, lumachella carnina y el
rosso antico. También vemos breccia quintilina alternándose en un módulo sí y en otro no,
así como una caliza rosácea que sustituye en algunas partes a la lumachella carnina, y una
breccia que podría tratarse de la breccia policroma di S. Benone, aunque necesitaríamos un
análisis arqueométrico para confirmarlo, y sustituiría a un cuadrado central de breccia quintilina según el diseño y la alternancia de materiales en el sectile.
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Opus sectile al final del zaguán del Palacio de la Condesa de Lebrija (Véase anexo, Figura 6).
El opus sectile que nos encontramos al final del zaguán del Palacio de la Condesa de
Lebrija tiene un diseño en Q3p. Está compuesto por varios módulos no originales, incorporados con posterioridad en los extremos de la pieza como lo demuestra el corte de las placas
pétreas. A la hora de investigar sobre esta pieza vimos que el diseño de este opus sectile
es muy similar al de la mayoría de los módulos del sectile central del zaguán, salvo por las
puntas de lanza y a que los módulos de esta pieza no tenían los listeles que enmarcaban las
baldosas del sectile central. Además, el número de módulos originales que se conservan
equivalen a la medida de uno de los lados cortos del opus sectile central del zaguán, por lo
que posiblemente se trataría de una pieza destinada a complementar la misma estancia en la
que estaría el revestimiento marmóreo mencionado1. Esta pieza tiene en el centro módulos
realizados con los mismos materiales o con la misma composición cromática que indican el
lugar adecuado para el acceso a la estancia. Los módulos de esta pieza son los mismos que
tenemos para el opus sectile del acceso al zaguán cuyo diseño era también en Q3p, pero la
cronología sería distinta, ya que esta pieza complementaría al sectile central y por lo tanto
sería del siglo III o IV. Los materiales pétreos que hallamos en esta pieza son con casi toda
seguridad el greco scritto, el pavonazzetto, la breccia quintilina, la lumachella carnina, el palombino y el cipollino. También vemos materiales que podrían estar presentes en esta pieza
como son el bianco e nero (y que confirmarían la datación propuesta) y el nero antico. Hay
materiales de origen local que son de color gris, rosa, rosa brechado, negro, blancos y calizas
fosilíferas. Debemos tener presente que hay módulos que serían introducidos en época contemporánea y que probablemente en esta pieza haya mármoles introducidos por la Condesa
de Lebrija, pero procedentes del yacimiento (Blanco, 1978: 48).
Opus sectile en los márgenes norte y sur del zaguán del Palacio de la Condesa de Lebrija (Véase anexo, Figura 7).
El último sectile del zaguán del Palacio de Lebrija sería el conformado por pequeñas
placas de mármol que nos encontramos en los laterales del mismo, tras cruzar la cancela
de acceso. Esta pieza no tiene un patrón determinado a la hora de usar los marmora y sólo
mantiene invariable el esquema geométrico, repetido por los márgenes del zaguán con un
diseño Q2 y un tamaño de módulo de 29 x 29 cm, por lo tanto nos encontramos con un opus
sectile de módulo pequeño. Con los elementos de los que disponemos no podemos datar la
pieza, ya que el diseño Q2 estuvo presente durante todo el Imperio y probablemente muchos
de los mármoles que aparecen y nos pueden dar una cronología, fueron incorporados por la
Condesa de Lebrija con materiales italicenses, pero no de la misma pieza.
En este opus sectile nos encontramos con greco scritto, posiblemente bianco e nero,
africano, giallo antico, cipollino y la variante local de Almadén, lumachella carnina, pavonazzetto, breccia quintilina, mármol blanco de Almadén, verde antico, portasanta, Buixcarró y
materiales pétreos sin identificar de color gris claro, gris oscuro, rosa, rojo, rosa brechado;
1
Valoración personal del Dr. Vargas en 2012.
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Marmora en los opera sectilia italicenses
granito y dos tipos de alabastros de los que desconocemos su procedencia. Hay además una
caliza fosilífera que podría tratarse de occhio di pavone pavonazzo. En esta pieza vemos tanto mármoles de importación, como mármoles de origen local.
Opus sectile de las galerías norte y sur del Palacio de la Condesa de Lebrija (Véase anexo, Figura 8).
Los corredores de las galerías norte y sur de la Casa de la Condesa de Lebrija albergan un
revestimiento marmóreo pavimental de la zona de los olivares de Itálica. El diseño está formado por óvalos y cuadrados de lados cóncavos y tenía una extensión considerable (Blanco,
1978: 49). Los mármoles que componen todos los módulos de esta obra son la lumachella
carnina, el rosso antico y el Almadén bandeado. En este opus sectile aparecen además greco scritto, portasanta, verde antico, Buixcarrò, africano, cipollino verde, giallo antico y hay
posibilidades de que estén presentes el occhio di pavone pavonazzo (tonalidad púrpura y
tonalidad roja), alabastro fiorito, castracane o breccia nuvolata gialla y lumachella pavonazza. Hay además materiales pétreos no identificados de color oscuro con venas blancas
y rosa brechado, caliza fosilífera y granito que por su aspecto podría ser local. La presencia
de marmora locales en el sectile nos muestra que esta pieza sería elaborada en un taller local. Las dimensiones del sectile son 81 x 81 cm de módulo (opus sectile de módulo medio)
y desconocemos la datación, pero es posible que la obra se realizase en el siglo II, ya que los
materiales que aparecen repetidos en todos los módulos del sectile son los mismos que nos
encontramos en el revestimiento marmóreo del siglo II y de diseño Q3p que se encuentra en
el acceso al zaguán del Palacio de la Condesa de Lebrija. No se conocen paralelos exactos de
esta pieza.
Opus sectile de los ángulos de las galerías del Palacio de la Condesa de
Lebrija (Véase anexo, Figura 9).
En los ángulos de las cuatro galerías del Palacio de Lebrija nos encontramos con fragmentos de un revestimiento marmóreo procedente de Itálica, muy cerca del número 35 de la
Calle Trajano que, como dijimos anteriormente, fue el lugar de hallazgo del opus sectile que
se encuentra en parte en la Casa de la Condesa de Lebrija y en el Museo Arqueológico. Tiene
un diseño cuadriculado de mármol blanco con manchas grises y azulonas, y triángulos rojizos y blancos. En los cruces de estas calles nos encontramos con baldosas cuadradas hechas
en palombino, broccatello y greco scritto. Se data la pieza entre los años finales del siglo III
y los primeros años del IV (Blanco, 1978: 49). Los materiales que componen la pieza son el
rosso antico, palombino y broccatello de Dertosa. Cada módulo mide unos 45 x 45 cm, por lo
tanto nos encontramos con un sectile de módulo medio. Esta pieza está compuesta por 137
módulos, repartidos en cuatro fragmentos y conformados todos ellos por los mismos marmora. En la esquina noreste del palacio nos encontramos un fragmento del sectile con 49
módulos, en la esquina noroeste del palacio nos encontramos con un fragmento compuesto
por 35 módulos, en la esquina sureste nos encontramos con 20 módulos en otro fragmento
del opus sectile y por último vemos en la esquina suroeste del palacio los últimos 25 módulos
de este ejemplar. También se encuentran ocho unidades modulares de este opus sectile en
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Daniel Becerra Fernández
los fondos del Museo Arqueológico de Sevilla, que han pasado desapercibidos hasta la actualidad. No encontramos paralelos exactos de este opus sectile, pero vemos un revestimiento
marmóreo similar del siglo II en el Valle di Tempe de Villa Adriana (Guidobaldi, 1994: 217
-218, Tav. VIII/3), que en vez de utilizar triángulos en los márgenes de los módulos usan
rombos y los materiales pétreos son distintos.
Opus sectile in situ (Véase anexo, Figura 10).
En el yacimiento de Itálica nos encontramos con un opus sectile del cual sólo se conservan quince módulos. El sectile se encuentra más concretamente en una de las dos estancias
simétricas a los lados de la habitación principal del peristilo, en la Casa de la Exedra.
Esta pieza tiene un tamaño de 4’40 x 2’40 metros y emblemas de un tamaño de 61 x 61
cm (mismo tamaño de módulo que el opus sectile del Museo Arqueológico que procedía de
la misma casa), por lo que nos encontramos con un opus sectile de tamaño medio, aunque si
añadimos a las medidas los elementos que pueden pertenecer a más de un módulo, podríamos tener un opus sectile de gran tamaño. Hay que tener en cuenta que entre cada unidad
hay elementos geométricos que forman parte del diseño, pero no de las distintas unidades
modulares. Tiene un esquema unitario con elementos circulares y cuadrangulares. En el
primer tipo emblema se ven dos círculos concéntricos y en el espacio anular que queda entre
ellos se sitúan doce pequeños círculos formados por hojas lanceoladas. El segundo tipo emblema que vemos está formado por dos hexágonos de lados curvos dentro de un círculo, continuando con el tercer tipo de emblema que podemos ver en este opus sectile, observamos
que se reproduce un esquema cuadrilobular con un cuadro en su interior. El cuarto modelo
está compuesto por una estrella de ocho puntas formada por dos cuadrados con un disco
inserto en su interior y el quinto tipo de emblema está formado por dos círculos concéntricos
(Mañas, 2011: 27). En una fotografía citada por Pérez Olmedo (Pérez Olmedo, 1996, 158) se
podía observar una fila más de baldosas con otro modelo de emblema que hoy por desgracia
no se conserva.
Este opus sectile se puede definir como poliemblema, ya que alterna muchos esquemas
distintos en la misma composición (Guidobaldi, 1985: 218). Los emblemas que aparecen
repetidos usan siempre los mismos colores, el mismo diseño y generalmente los mismos tipos de mármoles, aunque hay excepciones. Es destacable que el opus sectile de la Casa de la
Exedra limita al sur con un revestimiento marmóreo de greco scritto, aunque no forma parte
del sectile. Destaca por ser el único revestimiento en opus sectile de carácter poliembrema
en el yacimiento italicense.
Para esta pieza tenemos paralelos como el de la Ínsula de Giasone Magno en Cirene, datado en época severiana, para los motivos que hemos mencionado como primera, segunda,
tercera y quinta unidad modular (Gutiérrez Deza, 2006: 156). Un paralelo exacto para la tercera unidad lo vemos en la Mansión de la Cascade en Útica, del siglo III (Mañas, 2011: 27).
Un opus sectile que se halla en el Palacio Biscari de Catania, es un claro paralelo del cuarto
tipo de emblema del diseño (Branciforti, 2005: 98-106).
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Marmora en los opera sectilia italicenses
Nos encontramos con cenefas realizadas en rosso antico y mármoles blancos que rodean
al sectile, así como elementos rectangulares que rodean los motivos principales realizados
en pavonazzetto y en breccia di Sciro, así como algunos fragmentos de greco scritto o un tipo
de mármol local muy similar, rellenando huecos que en un principio estarían recubiertos
en pavonazzeto. También hay pequeños motivos con diseño Q2 que se han perdido o que
se conservan en muy mal estado, en los que sólo se ve rosso antico, pizarra local y mármol
blanco no identificado.
Los mármoles que nos encontramos en los emblemas de este revestimiento marmóreo
son verde antico, rosso antico, africano, pizarra de origen local, mármol blanco de Mijas, pavonazzetto, giallo antico, material pétreo de color crema seguramente mármol de Estremoz
y una brecha marrón desconocida. La datación tradicional de esta pieza ha sido del siglo III
o del siglo IV, pero teniendo en cuenta que el edificio en el que se sitúa es del siglo II y la
muralla se retrae en los años finales del siglo III d.C. o principios del IV, y que este edificio
quedaría extramuros (Rodríguez Hidalgo, 1997: 107), este opus sectile debería datarse en
el siglo III o como muy temprano a finales del II, debido a la datación de los paralelos de la
pieza. Debemos tener en cuenta la posibilidad de que el lienzo de muralla que dejaría extramuros la casa de la Exedra se construyera a principios del V (Hidalgo Prieto, 2003: 121-122).
Al ver en este ejemplar mármoles de importación y mármoles locales, interpretamos que la
realización de la pieza se llevaría a cabo en un taller local.
Opus sectile de los almacenes del Museo Arqueológico (Véase anexo, Figura 11).
El opus sectile que se conserva en los fondos del Museo Arqueológico Provincial de Sevilla sólo mantiene uno de sus módulos, y no en muy buen estado de conservación. El tamaño
del módulo es de 40 x 45 cm (Mañas, 2011: 81), por lo que estamos ante un sectile de tamaño
modular medio. Desconocemos el tamaño real de la pieza y en ella vemos serpentino, giallo
antico, pavonazzetto y en el motivo central cuadrangular vemos greco scritto. Se desconoce
en qué lugar de Santiponce apareció este ejemplar.
En 1903, este módulo junto con otros dos más del mismo opus sectile, entraron en el
Museo Arqueológico Provincial de Sevilla, aunque hoy en día los otros dos se han perdido
(Mañas, 2011: 81). El diseño del sectile sería complejo y en forma de Q(XDL)p (Guidobaldi,
2001:64 - 70). No se han encontrado paralelos exactos para este opus sectile, pero sí hay
un esquema parecido en un opus sectile de la Calle Saura de Cartagena (Mañas, 2011: 81),
menos complejo, con otros materiales y con menos decoración. También vemos ejemplos
parecidos en la ciudad de Roma (Guidobaldi, 1985: 194, FIG 13a) o en la Ronda de los Tejares de Córdoba (Pérez Olmedo, 1996: 100 – 110, N. 62 lám. XIV). La pieza sería realizada en
el siglo II (Mañas, 2011: 81).
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3. CONCLUSIONES
Tras el análisis de los revestimientos en opus sectile analizados en este artículo, vemos la
importancia de Itálica durante el Alto Imperio y el inicio de la Antigüedad Tardía, al constatar mediante análisis macroscópico la presencia de los marmora de las principales canteras
del Imperio. De Asia Menor hemos identificado el Africano de Teos, el Occhio di Pavone
Pavonazzo de Sakara, el Pavonazzetto frigio, el Palombino también de Frigia y el Proconesio
de la isla de Proconnessos en el Mar de Marmara. Los materiales marmóreos reconocidos
procedentes de Grecia son el Cipollino de Eubea, el Portasanta de Chios, el Rosso Antico
Tenaro del sur del Peloponeso, el Serpentino o Porfido Vede de Grecia de Laconia, el Verde
Antico de Tesalia y la Breccia di Sciro o de Settebasi de la isla de Scyro.
De las regiones africanas tenemos constatado el Alabastro Cotognino del Valle del río
Nilo, el Giallo Antico de Chentou, el Greco Scritto de Annaba (Hippo Regius), el Nero Antico
de Djebel Aziz en Túnez, el Porfido Nero y el Porfido Rosso de Gebel Dokhan (Mons Porphiretes) en el desierto oriental de Egipto, el Porfido Serpentino Nero de Uadi Umm Towat en
Egipto, el Castracane o Astracane Dorato de Thuburbo Maius en el actual Túnez y la Serpentina Moschinata de Uadi Atallah en el desierto oriental egipcio. En menor volumen tenemos
confirmados materiales procedentes de Italia y de la Galia, como la Breccia Quintilina o de
Tivoli, el Cipollino Marino italiano cuya cantera aún no se ha localizado en la actualidad, el
Bianco e Nero de los Pirineos y la Breccia Dorata de los Alpes.
También tenemos identificados materiales procedentes de la propia Hispania como son
el Broccatello o Jaspe de la Cinta de Dertosa (actual Tortosa), el Buixcarró de la Sierra de
Buixcarró en Valencia, la Lumachella Carnina posiblemente de Sintra, los diferentes litotipos del Mármol de Almadén de la Plata, el Mármol de Alconera y el Mármol de Mijas.
Las tipologías más empleadas en los sectilia italicenses son el greco scritto, el giallo
antico, el rosso antico, la lumachella carnina y pavonazzetto. Se ha de reseñar que los marmora de origen local más frecuentes en estos ejemplares son el mármol de Almadén, tanto el
blanco como los bandeados grisáceos, y el mármol de Mijas, éste último utilizado en grandes
cantidades para la elaboración del opus sectile in situ de la Casa de la Exedra. No hay ningún
tipo marmóreo que esté presente en la totalidad de los opera sectilia de Itálica y todos los
revestimientos analizados están realizados en marmora de importación, aunque en algunos
ejemplares aparecen juntos con materiales locales, lo que nos indicaría que estos últimos
serían realizados en Itálica, mientra que los elaborados exclusivamente en marmora de importación posiblemente procederían de Roma u otro lugar desde donde se enviarían a la
Bética (Pérez Olmedo, 1996: 158-159).
Los revestimientos que hemos analizados superan el pié romano2, 29’6 cm (Panerai,
1984: 122-123), a excepción del sectile de diseño Q2 del zaguán del Palacio de la Condesa del
Lebrija. Por lo tanto estamos ante sectilia de módulos de tamaño medio, que generalmente
se reservaban para espacios de carácter privado (Gutiérrez Deza, 2007: 40). El tamaño de
módulo que más se repite en las piezas analizadas es 61 x 61 cm, presente en los dos opera
2
Guidobaldi opta por redondear la medida del pie romano en 30 cm (Guidobaldi, 1985: 176).
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Marmora en los opera sectilia italicenses
sectilia procedentes de la Casa de la Exedra, en los dos ejemplares del acceso al zaguán del
Palacio de la Condesa de Lebrija y en el revestimiento posterior del mismo zaguán. En cuanto al diseño destaca el esquema Q3p, en tres de los sectilia del Palacio de Lebrija de Sevilla,
y los diseños complejos, presentes en los tres ejemplares depositados en el Museo Arqueológico de Sevilla y en los que pavimentan las galerías del palacio anteriormente mencionado.
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Daniel Becerra Fernández
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Marmora en los opera sectilia italicenses
5. ANEXOS
Figura 1. Módulo del opus sectile de la Calle Trajano
Figura 2. Módulos del opus sectile de cuadricromía neroniana de la Casa de la Exedra
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Figura 3. Opus sectile central del zaguán del Palacio de la Condesa de Lebrija
Figura 4. Módulo del opus sectile a la derecha e izquierda del acceso al zaguán del Palacio de la Condesa de Lebrija
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Marmora en los opera sectilia italicenses
Figura 5. Opus sectile central en el acceso al zaguán del Palacio de la Condesa de Lebrija.
Figura 6. Opus sectile al final del zaguán del Palacio de la Condesa de Lebrija
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Figura 7. Opus sectile en los márgenes norte y sur del zaguán del Palacio de la Condesa
de Lebrija
Figura 8. Opus sectile de las galerías norte y sur del Palacio de la Condesa de Lebrija
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Figura 9. Opus sectile de los ángulos de las galerías del Palacio de la Condesa de Lebrija.
Figura 10. Opus sectile in situ
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Figura 11. Módulo del opus sectile depositado en los almacenes del Museo Arqueológico Provincial de Sevilla
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