Canales | Arquitectura Sostenible | Introducción Introducción Considerando que nos encontramos en una sociedad desarrollada, y una vez cubiertas las necesidades básicas en lo que se refiere a la salubridad e higiene en los edificios, se produce una reflexión sobre los anteriormente olvidados aspectos medioambientales que lleva al replanteamiento de todos los procesos de producción industrial, siendo la construcción uno de los sectores clave, y como consecuencia, uno en los que más interés se ha puesto para la modificación de hábitos y procesos. La evaluación de los ya numerosos proyectos de Arquitectura Bioclimática nos ha permitido comprobar, por un lado, la viabilidad económica de estos planteamientos, y por otro, las grandes ventajas medioambientales y de ahorro a medio y largo plazo. Existen datos que hablan de hasta un 70% de ahorro de energía de los proyectos bioclimáticos frente a los procedimientos de construcción tradicionales, cuyo comportamiento medioambiental no se tiene en cuenta. Y aunque al hablar de Arquitectura Bioclimática tendemos a destacar las cuestiones relacionadas con la gestión y ahorro de la energía, la tendencia actual es la consideración global de todos los aspectos que intervienen en el proceso arquitectónico valorando su adecuación ambiental. A pesar de las ventajas demostradas, la Arquitectura Bioclimática no ha dejado de ser, hasta la fecha, más que un concepto con gran proyección mediática que no acababa de materializarse como alternativa. El carácter conservador del sector de la construcción, el escaso apoyo público y la escasez de concienciación social han contribuido a que el desarrollo de estas iniciativas haya sido muy limitado a pesar del gran crecimiento edificatorio experimentado en los últimos años. Panorama actual El desarrollo paralelo del aumento de la conciencia social respecto a temas ambientales y la investigación, desarrollo y puesta en práctica de soluciones técnicas ya viables, sumados a un creciente apoyo por parte de las administraciones públicas están contribuyendo de manera tangible a un resurgir de las iniciativas y planteamientos que contribuirán indudablemente a un desarrollo sostenible de nuestra arquitectura. Arquitectura bioclimática Cuando hablamos de arquitectura bioclimática no nos referimos a un tipo de arquitectura específico, con un diseño determinado y una estética identificable. La arquitectura bioclimática es una filosofía aplicable a todo el concepto de arquitectura y lo que pretende es conseguir que los objetos resultantes de la misma se adecuen a su entorno desde los orígenes de su concepción. El elemento arquitectónico así diseñado se integrará en el lugar adaptándose física y climáticamente a su entorno; materiales, colores, soluciones constructivas, serán valorados también desde una perspectiva de ahorro de energía y de adaptación al medioambiente, y todo ello sin dejar de lado requerimientos estéticos, funcionales o de cualquier otra índole, a tener en cuenta en cualquier creación arquitectónica. La arquitectura bioclimática será entonces un proceso continuo y cíclico, desde el inicio proyectual de su idea, su concreción física durante la obra y el transcurso de su vida útil siendo utilizado por sus usuarios. De lo anterior se deduce que no existe un prototipo de vivienda bioclimática. Los modelos a seguir serán tan diversos como los que podamos plantear en una arquitectura convencional acorde al lugar y al medioambiente que imposibilita adoptar la misma solución con condiciones geográficas diferentes. Técnicas bioclimáticas Ubicación La ubicación sobre el terreno del elemento arquitectónico es un parámetro clave en su comportamiento climático. El análisis pormenorizado de las condiciones climáticas es imprescindible para valorar su influencia en las condiciones de confort. Estas condiciones climáticas deben ser analizadas tanto desde el punto de vista macroclimático como desde el microclimático. Condiciones macroclimáticas: Son consecuencia de la zona del planeta donde nos situemos y dependientes de factores como la latitud, longitud y la región climática. Se encuentran definidas por medio de: Temperaturas medias, máximas y mínimas en invierno o verano. Diurnas y nocturnas. Régimen pluviométrico y grado de humedad. Índice de radiación solar, insolación directa o difusa. Dirección y velocidad media del viento dominante. Infiltraciones en invierno, aprovechamiento de corrientes de aire en verano. Condiciones microclimáticas: Están influidas por los accidentes geográficos del entorno local inmediato y pueden contribuir en gran manera a la modificación de los factores macroclimáticos. Algunos ejemplos pueden ser: Las elevaciones del terreno que pueden actuar como barreras protectoras del sol y del viento. La cercanía de masas de agua que tienden a estabilizar las temperaturas y a aumentar la humedad ambiental. La presencia de bosques o vegetación especial en el entorno próximo. La presencia de edificaciones. Las pendientes del terreno, etc. La elección de la ubicación de los edificios, en base a parámetros macro y microclimáticos es fundamental y condicionante del proceso de diseño posterior de los mismos. El estudio de las condiciones ambientales nos permite plantear las estrategias arquitectónicas necesarias para conseguir el objetivo de obtener los mayores beneficios bioclimáticos y la adecuada sensación de confort. Aislamiento y masa térmica El tipo de materiales, el grosor de los mismos y las soluciones de aislamiento aplicadas en los elementos constructivos de un edificio son cuestiones fundamentales a la hora de encontrar una solución bioclimática adecuada. Hay que tener presente que a mayor masa térmica el comportamiento climático es más estable y el objetivo debe ser saber aprovechar este hecho para conseguir mediante una elección adecuada de materiales y soluciones constructivas que el ambiente interior sea agradable. Destacar que una elevada masa térmica es sólo aconsejable en viviendas de carácter permanente por su efecto de retardo y porque las viviendas de uso esporádico necesitan ser calentadas o enfriadas con carácter más inmediato. El aislamiento térmico contribuye a que la transmisión de calor desde el interior al exterior o viceversa sea más dificultosa. Normalmente está conformado con materiales de poca masa como espumas o plásticos, que deben ser colocados de manera eficiente para que se eviten en lo posible las pérdidas caloríficas generadas por las infiltraciones y los puentes térmicos. La localización más adecuada térmicamente del aislamiento es en la parte exterior de la masa térmica, recubriendo los cerramientos, aunque esta ubicación no siempre resulta la más adecuada a nivel constructivo. Ventilación Los objetivos de la ventilación como mecanismo bioclimático son varios: Cubrir la necesidad de renovación del aire interior. Ayudar al confort térmico en períodos de calor. Contribuir a la climatización. Dependiendo de la forma en la que se produzca la ventilación podemos distinguir varios tipos: Ventilación natural - La ventilación natural es la generada de forma espontánea mediante corrientes de aire producidas por el viento al abrir los huecos existentes en el cerramiento de los edificios. Para que la ventilación natural sea lo más eficaz posible las aperturas de huecos deberían localizarse en fachadas opuestas transversales a la dirección del viento dominante. Ventilación forzada - La ventilación convectiva o forzada se basa en las diferencias de temperatura de las masas de aire. El aire caliente tiende a ascender y sustituye al aire frío generando corrientes de aire. Estas corrientes pueden ser provocadas mediante la apertura de huecos en la parte superior del edificio de manera que el aire caliente pueda salir al exterior. Esta salida puede ser potenciada mediante calentamiento (chimeneas solares). El aire de renovación debe ser de menor temperatura por lo que debe proceder de un lugar fresco por ejemplo de un patio, un sótano o mediante tubos enterrados aprovechando la inercia del suelo. Es necesario establecer un mecanismo de control de la renovación de aire para que ésta no llegue a producir una sensación de disconfort. Una ejemplo de solución constructiva donde se pueden aprovechar los beneficios de la ventilación por convección es la denominada fachada ventilada, conformada por una lámina exterior separada del muro mediante una cámara de aire abierta en sus extremos lo que genera una corriente de aire convectiva que contribuye al enfriamiento y al aislamiento interior. Aprovechamiento climático del suelo La elevada inercia térmica del suelo puede ser aprovechada climáticamente mediante algunos mecanismos que se beneficien de la estabilidad de temperatura del mismo a cierta profundidad La temperatura del suelo suele ser menor que la temperatura exterior en verano, y mayor que la exterior en invierno. El semienterramiento de alguna fachada, preferiblemente la fachada norte que suele ser la más fría, o tubos de aire enterrados a la mayor profundidad posible en el suelo para aprovechar la diferencia de temperatura y las corrientes de convección, son algunas de las posibilidades bioclimáticas del terreno. Espacios tapón Los espacios tapón son espacios son espacios adosados colindantes a los habitables, normalmente no acondicionados térmicamente, utilizados esporádicamente y que actúan como barreras aislantes frente al exterior. Ejemplos de espacios tapnó pueden ser los bajocubierta sin uso específico, los garajesy trasteros, espacios deshabitados, etc. La adecuada ubicación de estos espacios en la vivienda puede contribuir positivamente a la climatización de la misma. Protección contra la radiación de verano La ganancia calorífica producida por la energía solar debe ser reducida al mínimo en períodos estivales. El aislamiento y los espacios tapón son eficaces también en verano, aunque el gran problema es invertir la filosofía de los sistemas de captación solar pasiva que en verano deberán evitar la penetración de la radiación solar en vez de fomentar su captación. El hecho de que el sol se encuentre durante el solsticio de verano en una posición más elevada que en el invierno contribuye a que los rayos directos no sean tan oblicuos y sea más fácil protegerse de los mismos. Deberemos tener en cuenta todos los tipos de radiación solar directa, difusa y reflejada ya que todos ellos tienen incidencia directa en el calentamiento de los ambientes. Algunas posibilidades de protección pueden ser: Alero fijo sobre huecos acristaladados cuyas dimensiones deberán ser cuidadosamente estudiadas de manera que se impida en gran parte la penetración solar en verano y permita lo más posible en invierno. Toldos, persianas y contraventanas, regulados automática o manualmente en función de las condiciones de radiación exterior. Vegetación y arbolado preferentemente de hoja caduca. Los huecos de fachada deberán situarse en mayor medida y como criterio en la fachada sur que es la que supone mayor ganancia térmica en invierno, reduciendo en lo posible los huecos en fachadas este y oeste, con poca ganancia térmica en invierno, y elevada en verano al estar expuestas a gran cantidad de radiación solar. Sistemas evaporativos de refrigeración La energía solar puede ser utilizada para evaporar el agua y ésta en su proceso de evaporación puede contribuir a refrescar el ambiente. La vegetación durante el día expulsa humedad lo que puede contribuir también a contrarrestar la sensación de calor. El efecto será mayor si se combinan el agua y los elementos vegetales. Los sistemas evaporativos bien dimensionados pueden resultar muy útiles en la refrigeración aunque hay que tener en cuenta que un exceso de humedad combinada con altas temperaturas puede también disminuir la sensación de confort. Tratamiento y selección de residuos Para que un proyecto arquitectónico sea considerando bioclimáticamente adecuado es imprescindible realizar en el una gestión adecuada de los residuos que genera, disponer de un sistema separativo de aguas (grises y negras) y procurar dentro de lo posible potenciar el compostaje y la depuración. Se planteará en la edificación una doble red de desagüe, de agua procedente exclusivamente de precipitaciones pluviales y de agua procedente de uso doméstico. El agua resultante de la acumulación de la lluvia puede ser reutilizada para riego o usos auxiliares dentro del propio edificio, o a nivel municipal si estos mecanismos de acumulación están urbanísticamente previstos. Los residuos líquidos domésticos irán directamente a la red de alcantarillado municipal. Como líneas generales en el tema de los residuos se debería tener, ya en proyecto, una planificación clara de la recuperación y depuración de los mismos así como un programa de reciclado, facilitando la selección como mínimo en vidrio, papel y derivados, plástico y metales y materia orgánica. Algunos comentarios generales En la práctica los datos climáticos son en ocasiones difíciles de conseguir o bien por que no existen en determinadas zonas, o por el hecho de ser excesivamente generales. Hay que considerar además que estos datos deben analizarse en relación al microclima local lo que puede contribuir a la modificación de los parámetros iniciales. Por lo tanto para que los arquitectos encargados del desarrollo de un proyecto arquitectónico y los usuarios finales del mismo puedan beneficiarse de los condicionantes climáticos relativos a su entorno es necesario que estén dotados en una formación específica en arquitectura bioclimática y además dispongan de información concreta relativa al clima y entorno ambiental de su ubicación. Conceptos básicos Varios son los conceptos bioclimáticos básicos que nos permiten entender y aplicar las técnicas bioclimáticas. A continuación pasamos a exponer algunos de ellos: Clima El clima se puede definir como el conjunto de condiciones atmosféricas de carácter cíclico anual que caracterizan una zona o región. Las condiciones atmosféricas a consideran para identificar un tipo de clima son: la temperatura del aire, la humedad relativa, la radiación solar recibida, la cantidad de precipitaciones y la dirección e intensidad del viento. Se puede hacer una clasificación climática en tres grandes grupos o tipos de clima: cálidos, fríos y templados. Estas clasificaciones climáticas orientan sobre los parámetros ambientales de grandes áreas geográficas, pero es imprescindible analizar dentro de ellas el microclima del lugar que puede hacer variar las condiciones climáticas y en consecuencia de diseño del edificio. Clima cálido - Temperaturas agradables incluso en los meses fríos pudiendo distinguir entre climas cálidos secos o humedos, el primero con humedad muy baja y precipitaciones casi nulas ( zonas desérticas cercanas al ecuador) y el segundo con un alto grado de humedad y precipitaciones fuertes e irregulares (zonas subtropicales marítimas). Clima frío - Su parámetros característicos son la alta latitud, bajas temperaturas, reducida radiación solar y vientos desagradables procedentes de los polos. Clima templado - Es el tipo de clima más complejo por la variabilidad de sus parámetros, aunque en general la radiación solar es intensa, los veranos secos y los inviernos lluviosos y más fríos en el interior que en las zonas costeras. Dentro de este tipo de clima se incluye el clima mediterráneo. Nuestro país a causa de su geografía es una de las zonas mediterráneas con mayor variedad de climas. Confort térmico El confort térmico es una sensación neutra de la persona respecto a un ambiente térmico determinado. Según la norma ISO 7730 el confort térmico “es una condición mental en la que se expresa la satisfacción con el ambiente térmico”. El confort térmico depende de varios parámetros globales externos, como la temperatura del aire, la velocidad del mismo y la humedad relativa, y otros específicos internos como la actividad física desarrollada, la cantidad de ropa o el metabolismo de cada individuo. Para llegar a la sensación de confort, el balance global de perdidas y ganancias de calor debe ser nulo conservando de esta forma nuestra temperatura normal, es decir se alcanza el equilibrio térmico. A continuación exponemos algunos intervalos de valor de los parámetros de confort externos que interactúan entre sí para la consecución del confort térmico y que se encuentran representados en las Cartas bioclimáticas: Temperatura del aire ambiente: entre 18 y 26 ºC Temperatura radiante media superficies del local: entre 18 y 26 ºC Velocidad den aire: entre 0 y 2 m/s Humedad relativa: entre el 40 y el 65 % Cartas Bioclimáticas Los Diagramas bioclimáticos también denominados cartas bioclimáticas son sistemas de representación gráfica de las relaciones entre las diferentes variables térmicas que influyen en la sensación del confort térmico. Básicamente se trata de diagramas psicrométricos, es decir relacionan temperatura y humedad, sobre los que se establecen las condiciones de confort en función de los índices térmicos. Una de las cartas bioclimáticas más habituales es la Carta Bioclimática de Olgyay. Esta carta es un diagrama de condiciones básicas donde el eje de abscisas representa la humedad relativa y el de coordenadas la temperatura. Dentro de este diagrama se localiza una zona denominada de confort con cuyos valores temperatura-humedad del cuerpo humano tiene una sensación térmica agradable. Cada zona dispone de una carta bioclimática específica, dependiendo de las condiciones particulares de temperatura y humedad, representativa del clima. Sobre dicha carta se pueden estudiar las desviaciones respecto a la zona de confort y cómo actuar para volver a la misma. Mecanismos de transmisión del calor El calor es una energía que se transmite de unos cuerpos a otros mediante tres tipos de mecanismos diferentes: Conducción - La conducción es la manera de transferir calor desde una masa de temperatura más elevada a otra de temperatura inferior por contacto directo. El coeficiente de conducción de un material mide la capacidad del mismo para conducir el calor a través de la masa del mismo. Los materiales aislantes tienen un coeficiente de conducción pequeño por lo que su capacidad para conducir el calor es reducida, de ahí su utilidad. Convección - La transmisión de calor por convección es un intercambio de calor entre el aire y una masa material que se encuentran a diferentes temperaturas. El transporte del calor se produce por movimientos naturales debidos a la diferencia de temperaturas, el aire caliente tiende a subir y el aire frío baja, o bien mediante mecanismos de convección forzada. Radiación - Es un mecanismo de transmisión de calor en el que el intercambio se produce mediante la absorción y emisión de energía por ondas electromagnéticas, por lo que no existe la necesidad de que exista un medio material para el transporte de la energía. El sol aporta energía exclusivamente por radiación. Inercia térmica La inercia térmica es la capacidad que tiene la masa de conservar la energía térmica recibida e ir liberándola progresivamente, disminuyendo de esta forma la necesidad de aportación de climatización. La inercia térmica o capacidad de almacenar energía de un material depende de su masa, su densidad y su calor específico. Edificios de gran inercia térmica tienen variaciones térmicas más estables ya que el calor acumulado durante el día se libera en el período nocturno, esto quiere decir que a mayor inercia térmica mayor estabilidad térmica. La inercia térmica es un concepto clave en las técnicas bioclimáticas ya que la capacidad de acumulación térmica de las soluciones que conforman un elemento arquitectónico es básica para conseguir eldecuado nivel de confort y la continuidad en las instalaciones de climatización. La inercia térmica conlleva dos fenómenos, uno de ellos es el de la amortiguación en la variación de las temperaturas y otro es el retardo de la temperatura interior respecto a la exterior. Un ejemplo de gran inercia térmica es el suelo, cuyo efecto climático puede ser utilizado ya que amortigua y retarda la variación de temperatura que se produce entre el día y la noche. El semienterramiento de edificios puede llegar a aprovechar la capacidad de acumulación calorífica del suelo. Tipos de radiación solar La radiación solar se puede manifestar de tres formas distintas dependiendo de cómo se recibe en los objetos: Radiación directa: Es la que procede directamente del sol. Radiación difusa: Es la que se recibe de la atmósfera debido a la dispersión de la radiación solar en la misma. Radiación reflejada: Es la que se refleja en la superficie terrestre. La superficies horizontales reciben más radiación difusa que reflejada y las superficies verticales más reflejada que difusa. Trayectoria solar La trayectoria solar es un concepto dependiente de la variabilidad del ángulo que forma el eje de rotación de la tierra, que no siempre es perpendicular, con el plano de su trayectoria de traslación con respecto al sol. La inclinación de este eje es lo que produce las estaciones del año, las variaciones en horas solares y el ángulo de la radiación solar . Calor de vaporización El agua durante el proceso de evaporación, paso de estado líquido a gaseoso, necesita absorber una cierta cantidad de calor de su entorno inmediato lo que resulta en un enfriamiento del mismo. El calor absorbido recibe el nombre de calor de vaporización. Un efecto parecido producen las plantas que transpiran permanentemente eliminando el agua en forma de vapor. El agua y las plantas por esta razón producen una sensación de frescor . Muro Trombe El muro trombe es un elemento constructivo situado entre una zona exterior y un espacio que deseamos climatizar actuando en realidad como un colector de la energía del sol. El muro trombe está conformado por dos hojas separadas entre sí por medio de una cámara de aire de unos 10 cm. La hoja o cara exterior del muro es de material transparente, vidrio o plástico, habitualmente de un color oscuro para lograr una mayor absorción de la energía solar. Después de la cámara de aire se sitúa un material de alta inercia térmica como ladrillo, piedra, etc. En la parte superior e inferior del muro se localizan orificos de ventilación que permiten la circulación del aire caliente de unos espacios a otros. Su funcionamiento se basa en la captación de la energía solar a través de la superficie transparente que produce el calentamiento del aire en la cámara interior. Este aire se distribuye por convección desde los orificios superiores de ventilación al interior de las estancias, expulsándose el aire frío por las aberturas inferiores. Una parte del calor generado es absorbida por el muro interior por conducción trasladándose también al espacio interior. Aislamiento térmico El aislamiento térmico tiene como objetivo el dificultar las trasmisiones de calor del interior al exterior y viceversa para evitar las pérdidas de calor en períodos fríos y la ganancia del mismo en épocas cálidas. El aislamiento es fundamental tanto en los muros como en los huecos acristalados que también deben ser aislados, con por ejemplo, un doble acristalamiento. En el caso de los muros se localiza normalmente en su hoja exterior para mantener la inercia térmica del interior y hay que hacer especial hincapié en la reducción de los puentes térmicos que suelen tener menor resistencia térmica Puente térmico El puente térmico es una junta entre materiales de diferentes características que produce una discontinuidad en la capa aislante que puede producir pérdidas de calor. Ventilación natural La ventilación natural es un mecanismo utilizado en climas cálidos para eliminar el exceso de calor de los espacios interiores. Se consigue normalmente mediante aperturas en muros exteriores opuestos que contribuyen a la formación de corrientes de aire cruzadas. Para conseguir que la ventilación natural sea óptima los muros abiertos deberán estar orientados a la zona de viento dominante del entorno. La ventilación, sin embargo debe realizarse de una manera controlada para que la pérdida de calor que produce sea admisible con la sensación de confort. Las juntas de las aperturas de muros para ventilar también deben ser tratadas para evitar las infiltraciones de aire sobre todo en momentos de mucho viento. masCanalesArquitectura Sostenible: Introducción Arquitectura bioclimática Técnicas bioclimáticas Conceptos bioclimáticos básicos