PROPUESTA METODOLÓGICA PARA DIAGNOSTICAR Y PRONOSTICAR LAS CONSECUENCIAS DE LAS ACTUACIONES HUMANAS EN EL ESTUARIO DEL GUADALQUIVIR Septiembre 2010 Capítulo 5: Sólidos en Suspensión y Turbidez Grupo de Dinámica de Flujos Ambientales (Centro Andaluz de Medio Ambiente — Universidad de Granada) Grupo de Dinámica Fluvial e Hidrología (Universidad de Córdoba) 1 2 Antecedentes El 24 de Mayo de 2007 se firmó el contrato de adjudicación del procedimiento negociado sin publicidad entre la Autoridad Portuaria de Sevilla y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas para el estudio titulado “PROPUESTA METODOLÓGICA PARA DIAGNOSTICAR Y PRONOSTICAR LAS CONSECUENCIAS DE LAS ACTUACIONES HUMANAS EN EL ESTUARIO DEL GUADALQUIVIR” coordinado por D. Javier Ruiz Segura (Instituto de Ciencias Marinas de Andalucía – Consejo Superior de Investigaciones Científicas) y D. Miguel Á. Losada (Grupo de Dinámica de Flujos Ambientales – Universidad de Granada). Con fecha 17 de enero de 2008, fueron firmados sendos Convenios de Colaboración entre el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y las Universidades de Granada y Córdoba para la participación del Grupo de Dinámica de Flujos Ambientales (GDFA) y del Grupo de Dinámica Fluvial e Hidrología (GDFH), respectivamente, en la realización del citado estudio. Inscrito en dicho marco de colaboración se encuentra el presente Informe que describe los sólidos en suspensión y turbidez, realizado por el GDFA. En este trabajo han participado, por el GDFA, los doctores Asunción Baquerizo Azofra, Simona Bramato, Manuel Díez Minguito, Miguel Á. Losada Rodríguez, Miguel Ortega Sánchez y, por el GDFH, la titulada Eva Contreras Arribas y la doctora María José Polo Gómez, actuando de ponentes del Informe la Dra. Simona Bramato y el Dr. Manuel Díez Minguito. Este informe estuvo dirigido por el Prof. Miguel Á. Losada Rodríguez. 3 4 Índice Índice............................................................................................................................... 5 Lista de Figuras ........................................................................................................... 6 Lista de Tablas ........................................................................................................... 10 Resumen ...................................................................................................................... 13 Estructura del capítulo y sus contenidos ........................................................... 14 5.1. Introducción........................................................................................................... 17 5.1.1. Descripción general de los procesos: erosión-depósito ......................... 18 5.1.2. Definiciones, escalas y máximo estuarino ................................................ 19 5.2. Formulación del problema .................................................................................. 21 5.2.1. Definición de variables, consecuencias y factores importantes ............ 21 5.2.2. Términos de erosión – depósito y floculación .......................................... 23 5.3. Datos y análisis .................................................................................................... 25 5.3.1. Variables instantáneas, básicas y promediadas (vertical y temporal).. 26 5.3.2. Análisis armónico y espectral...................................................................... 29 5.3.3. Análisis de los términos de erosión y sedimentación.............................. 33 5.3.3.1. Tasa de erosión del lecho ........................................................................ 33 5.3.3.2. Tasa de sedimentación en la columna de agua................................... 34 5.3.3.3. Balance erosión – sedimentación ........................................................... 34 5.4. Comportamiento de la turbidez según el eje del estuario con régimen de caudal bajo Q f < 100m / s ....................................................................................... 35 3 5.4.1. Variación espacial de las componentes armónicas de la turbidez ....... 35 5.4.2. Evolución temporal y espacial de la turbidez: mareas vivas y muertas37 5.4.3. Variación de la turbidez en la columna de agua ...................................... 38 5.4.4. Retardo y propagación de la turbidez........................................................ 39 5.4.5. Comportamiento de la turbidez frente a la marea vertical y horizontal 42 5.4.6. Comportamiento anual/plurianual............................................................... 45 5.5. Variabilidad vertical y transversal...................................................................... 47 5.5.1. Distorsión mareal llenante – vaciante ........................................................ 47 5.5.2. Asimetría transversal .................................................................................... 47 5.5.3. Velocidad de deposición .............................................................................. 48 5.6. Balances de sólidos en suspensión.................................................................. 51 5.6.1. Estimación del sedimento en suspensión en un evento de extrema turbidez 53 5.6.2. Flujos de sólidos en suspensión en régimen mareal .............................. 55 5.6.2.1. Resultados.................................................................................................. 56 5.7. Eventos de turbidez media y extrema: procesos generadores .................... 58 5.7.1. Situaciones desencadenantes .................................................................... 58 5.7.2. Descripción de eventos asociados al forzamiento mareal ..................... 59 5.7.2.1. Período I: desde el 04/04/2008 hasta el 03/06/2008........................... 59 5.7.2.2. Período II: desde el 01/06/2008 hasta el 21/07/2008.......................... 63 5.7.2.3. Período III: desde el 21/07/2008 al 21/09/2008.................................... 66 5.7.2.4. Período IV: desde el 30/08/2008 al 18/11/2008 ................................... 69 5.7.2.5. Período V: desde el 12/01/2009 al 12/03/2009 .................................... 71 5.7.2.6. Período VI: desde el 12/03/2009 al 12/06/2009 ................................... 74 5.8. Conclusiones parciales y trabajo futuro ........................................................... 80 5 Lista de Figuras Figura 5.1. Esquema definición de las variables empleadas en la ecuación del momento y transporte. ................................................................................................ 22 Figura 5.2. Ubicación a lo largo del cauce de los equipos instalados por el ICMAN-CSIC, además de los mareógrafos de la REDMAR. En rojo se muestran los CTDs, en amarillo se muestran los correntímetros ADCPs, en verde los mareógrafos TGs y en naranja la estación meteorológica de Salmedina. Se indica además la numeración de los equipos cuyos datos han sido usados en este informe. ..................................................................................... 26 Figura 5.3. Evolución temporal a 1 m de profundidad de la turbidez (FTU) en los CTD1 (Cepillos) y CTD5 (La Mata). Además se incluye la curva de caudales medios diarios vertidos desde la presa de Alcalá del Río. ................................... 27 Figura 5.4. Evolución temporal instantánea (con periodo de muestreo de 30min) a 4 profundidades de la turbidez en los CTD1 y CTD5 en régimen mareal. Los datos de caudal (panel superior) han sido interpolados linealmente a los tiempos de muestreo de los CTDs. ......................................................................... 28 Figura 5.5. Panel superior izquierdo: muestra de la serie registrada en CTD1 a 1m por debajo de la superficie libre. Panel superior derecho: ubicación del CTD1. Panel inferior izquierdo: resultado del análisis armónico en la posición del CTD1; las constituyentes marcadas en azul suman el 95% del contenido energético del registro. Panel inferior derecho: resultado en V 2 / hora del análisis espectral en la posición del CTD1. ........................................................................... 29 Figura 5.6. Panel superior izquierdo: muestra de la serie registrada en CTD2 a 1m por debajo de la superficie. Panel superior derecho: ubicación del CTD2. Panel inferior izquierdo: resultado del análisis armónico en la posición del CTD2; las constituyentes marcadas en azul suman el 95% del contenido energético del registro. Panel inferior derecho: resultado en V 2 / hora del análisis espectral en la posición del CTD2. ........................................................................... 30 Figura 5.7. Panel superior izquierdo: muestra de la serie registrada en CTD4 a 1m por debajo de la superficie libre. Panel superior derecho: ubicación del CTD4. Panel inferior izquierdo: resultado del análisis armónico en la posición del CTD4; las constituyentes marcadas en azul suman el 95% del contenido energético del registro. Panel inferior derecho: resultado en V 2 / hora del análisis espectral en la posición del CTD4. ........................................................................... 31 Figura 5.8. Panel superior izquierdo: muestra de la serie registrada en CTD5 a 1m por debajo de la superficie libre. Panel superior derecho: ubicación del CTD5. Panel inferior izquierdo: resultado del análisis armónico en la posición del CTD5; las constituyentes marcadas en azul suman el 95% del contenido energético del registro. Panel inferior derecho: resultado en V 2 / hora del análisis espectral en la posición del CTD5. ........................................................................... 31 Figura 5.9. Panel superior izquierdo: muestra de la serie registrada en CTD6 a 1m por debajo de la superficie libre. Panel superior derecho: ubicación del CTD6. Panel inferior izquierdo: resultado del análisis armónico en la posición del CTD6; las constituyentes marcadas en azul suman el 95% del contenido energético del registro. Panel inferior derecho: resultado en V 2 / hora del análisis espectral en la posición del CTD6. ........................................................................... 32 Figura 5.10. Amplitudes (columna izquierda) y fases (columna derecha) semidiurna M2, N2 y S2 (paneles superiores), diurna O1, K1, Q1 (paneles centrales) 6 y cuarto-diurna M4, MS4 y MN4 (paneles inferiores) de la señal de turbidez (en Voltios) medida a 1 m desde la superficie libre. ..................................................... 36 Figura 5.11. Turbidez máxima, promedio y mínima para el ciclo M2. Las oscilaciones de corto periodo están asociadas a variaciones diurnas de la señal. ............................................................................................................................. 37 Figura 5.12. Turbidez a escala mareal (promedio en M2) durante una marea viva (panel superior) y una marea muerta (panel central) y a la escala submareal Mm (panel inferior)................................................................................... 38 Figura 5.13. Perfiles verticales instantáneos medidos el 28 de Agosto de 2008 (durante marea muerta).............................................................................................. 39 Figura 5.14. Variación instantánea de la turbidez (desde arriba hasta abajo, desde el CTD1 hasta CTD6, respectivamente) durante marea viva (paneles en la columna derecha) y marea muerta (paneles en la columna derecha) en las cuatro profundidades. ................................................................................................. 41 Figura 5.15. Variación instantánea de la turbidez durante marea viva (panel inferior) y marea muerta (panel superior) para los CTDs a 1 m desde la superficie libre. ............................................................................................................. 41 Figura 5.16. Variación mareal de los registros de turbidez en las ubicaciones CTD1, CTD4 y CTD6 (Paneles 2, 4 y 6, respectivamente) a 4 profundidades respecto de la superficie libre: a 1m (azul), a 2m (verde), a 3m (rojo) y a 4m (cian). Para comparar se muestra el modulo de las velocidades promediadas en la vertical tomadas por los ADCPs más cercanos a cada CTD (paneles 1, 3 y 5). Las líneas en cada par de registros relacionan los máximos y los mínimos de velocidad con la turbidez. ..................................................................................... 42 Figura 5.17. Comparativa entre datos de Caudales de Alcalá del Rio (Q), marea astronómica en Bonanza (MarH) y valores de Temperatura (T), Salinidad (S) y Turbidez (Tur) registrados a 1m desde la superficie libre en el CTD1 desde 21/07/2008 hasta 21/09/2008. ................................................................................... 43 Figura 5.18. Evolución temporal de la turbidez medida a 1 m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) representados desde arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde el 21/07/2008 hasta el 21/09/2008. En la grafica inferior se muestra la variación de la turbidez medida en el CTD1 con la profundidad. ........................ 44 Figura 5.19. Desde arriba hacia abajo evolución temporal del desembalse medio diario (Alcalá del Rio en m3/s), de la marea astronómica en Bonanza (m) promediada en un ciclo de marea semi-diurna y de la turbidez (FTU) promediada en un ciclo de marea semi-diurna (desde la desembocadura CTD0 hacia Sevilla CTD7)..................................................................................................... 45 Figura 5.20. Registros diario (a) y mensual (b) de la turbidez en FTU medida en el CTD3. Registros anuales de 2 años de datos. Finalmente se presenta el desembalse desde la presa de Alcalá (c)................................................................ 46 Figura 5.21. Asimetría de onda de marea (17 de octubre de 2008). Panel superior: TG4, panel inferior: ADCP3. La descarga fue de 7m 3 / s durante el periodo mostrado. ........................................................................................................ 47 Figura 5.22. Esfuerzo tangencial en fondo en la zona de Tarfía (entre mareógrafos B3 y B4) determinado según la ecuación de conservación del momento a partir de los datos observados. ............................................................ 48 Figura 5.23. Velocidad de fricción en fondo determinada a partir del esfuerzo cortante en el fondo..................................................................................................... 48 7 Figura 5.24. Turbidez registrada en el CTD4 a profundidad z=-4m (cian), z=3m (rojo), z=-2m (verde), z=-1 (azul)........................................................................ 49 Figura 5.25. Exponente β = σTWs / ⎛⎜⎜⎝ku * ⎞⎟⎠⎟⎟ determinado a partir del ajuste por mínimos cuadrados de la concentración en función de la profundidad según Eq.(3.21). .......................................................................................................................... 50 Figura 5.26. De arriba a abajo: Esfuerzo tangencial instantáneo, turbidez promediada en ciclo semidiurno M2 a -1 (azul), -2 (verde), -3 (rojo) y -4m (cian) respecto de la superficie libre, exponente y velocidad de deposición. ............... 50 Figura 5.27. Equipos CTD considerados y tramos que los comprenden, definidos por las líneas color cian............................................................................. 52 Figura 5.28. Promedio mareal M2 de densidad de sólidos en suspensión (SES) en kg de sedimento por m 3 de agua....................................................................... 52 Figura 5.29. Promedio mareal Msf (panel izquierdo) y Mm (panel derecho) de densidad de sólidos en suspensión en kg de sedimento por m 3 de agua. Los extremos de turbidez están asociados a descargas desde Alcalá del Río. ....... 53 Figura 5.30. Masa total (y masa acumulada por tramos) de sólidos en suspensión promediada en ciclos mareales M2 en los tramos considerados... 54 Figura 5.31. Sólidos en suspensión obtenidos a partir de los datos de turbidez registrados en el CTD2 a -1m de profundidad respecto de la superficie libre... 55 Figura 5.32. Descomposición del flujo medio mareal en el CTD2....................... 57 Figura 5.33. Variación con la distancia a la desembocadura de los términos del flujo promediados en todo el intervalo temporal analizado................................... 57 Figura 5.34. Comparativa entre datos de caudal en Alcalá del Río (Q), precipitación media en la estación de Lebrija 1 (Prem), marea astronómica en el puerto de Bonanza (marH), altura de ola significante (Hm0), periodo de pico (Tp), dirección media de procedencia del oleaje (DirM), velocidad (VelV) y dirección del viento (DirV) simulados en el “ WANA” más cercano y valores de Salinidad (S) y Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1 para el periodo de estudio desde 04/04/2008 hasta 03/06/2008. ............ 60 Figura 5.35. Comparativa entre valores de Salinidad (S) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) representados de arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde 04/04/2008 hasta 03/06/2008............................................ 61 Figura 5.36. Comparativa entre valores de Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) representados de arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde 04/04/2008 hasta 03/06/2008............................................ 62 Figura 5.37. Comparativa entre datos de caudal en Alcalá del Río (Q), precipitación media en la estación de Lebrija 1(Prem), marea astronómica en el puerto de Bonanza (marH), altura de ola significante (Hm0), dirección media de procedencia del oleaje (DirM), velocidad (VelV) y dirección del viento (DirV) simulados en el WANA frente a la desembocadura y valores de Salinidad (S) y Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1 para el periodo de estudio desde 01/06/2008 hasta 21/07/2008. ..................................... 64 Figura 5.38. Imágenes vía satélite MERIS (ESA) antes y después de la caída de turbidez. La imagen tiene una luminosidad semejante puesto que ha sido tomada casi a la misma hora del día. En la imagen del día 8, la masa de agua turbia está mucho más confinada en el entorno de la desembocadura. ............ 65 8 Figura 5.39. Comparativa entre valores de Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) representados de arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde 01/06/2008 hasta 21/07/2008............................................ 65 Figura 5.40. Comparativa entre datos de Caudales de Alcalá del Rio (Q), marea astronómica en el puerto de Bonanza (marH) y valores de Temperatura (T), Salinidad (S) y Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1, desde 21/07/2008 hasta 21/09/2008. .......................................................... 66 Figura 5.41. Comparativa entre valores de salinididad (S) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde el CTD0 hasta CTD7) para el periodo de estudio que va desde 21/07/2008 hasta 21/09/2008. El cuadro inferior muestra la variación con la profundidad de la salinidad medida en el CTD1..................................................................................... 68 Figura 5.42. Comparativa entre valores de Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde el CTD0 hasta CTD7) para el periodo de estudio que va desde ............................. 69 Figura 5.43. Comparativa entre datos de caudales (Q) en Alcalá del Rio, de marea astronómica en el puerto de Bonanza (marH), velocidad de viento (VelV), dirección de viento (DirV), presión atmosférica (Ps), altura de ola significante espectral (Hm0), periodo de pico (Tp) y dirección media del oleaje (DirM) frente a la desembocadura (WANA3) y valores de Salinidad (S) y Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD0, desde 30/08/2008 hasta 18/11/2008. ................................................................................... 70 Figura 5.44. Comparativa entre valores de salinididad (S) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7, por orden de arriba abajo) representados de arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde 30/08/2008 hasta 18/11/2008. 71 Figura 5.45. Comparativa entre datos, de arriba abajo, de Caudales de Alcalá del Rio (Q), precipitación media en la estación Ría de Lebrija 1 (Prem), marea en el mareógrafo de Bonanza (MarH), parámetros atmosféricos (VelV, DirV, Ps) en Salmedina, parámetros de oleaje (Hmo, TP, DirM) en el WANA3 y valores de Salinidad (S) y Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1 para el periodo de estudio que va desde 12/01/2008 hasta 12/03/2009.72 Figura 5.46. Comparativa entre valores de Salinidad (S) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) para el periodo de estudio que va desde 12/01/2009 hasta 12/03/2009. ................................................................................................................... 73 Figura 5.47. Comparativa entre valores de Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) para el periodo de estudio que va de 12/01/2009 hasta 12/03/2009. ................................................................................................................... 74 Figura 5.48. Comparativa entre Caudal en Alcalà del Rio (Q), precipitación media en la estación Ria de Lebrija (Prem), marea astronómica en el puerto de Bonanza (marH), altura de ola significante espectral (Hm0),periodo de pico (Tp), dirección media de procedencia (DirM) del oleaje simulado en el punto “WANA” , velocidad (VelV) y direcciones (DirV) medias del viento, presión atmosférica en Salmedina y , finalmente, Salinidad (S) y Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1 (Cepillos). Las líneas rojas acotan los dos eventos de viento hacia el mar que dieron lugar a la caída de turbidez.......................................................................................................................... 75 9 Figura 5.49. Comparativa entre valores de Salinidad (S1) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) representados de arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde 12/03/2009 hasta 12/06/2009............................................. 76 Figura 5.50. Comparativa entre valores de Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) representados de arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde 12/03/2009 hasta 12/06/2009............................................. 77 Figura 5.51. Curva de marea astronómica medida en el puerto de Bonanza durante el periodo 25 de Mayo de 2009 - 05 de Junio de 2009. Los círculos rojos representan los instantes donde se han tomado las medidas de los parámetros climáticos representados en la Tabla 5.6 y la Tabla 5.7.................. 79 Lista de Tablas Tabla 5.1. Puntos kilométricos donde se ubican los equipos CTD en km desde la Broa. .......................................................................................................................... 25 Tabla 5.2. Amplitudes en Voltios de las constituyentes armónicas en cada CTD para la turbidez ( ×10−1 ) a 1m por debajo de la superficie libre. ........................... 32 Tabla 5.3. Fases en º Greenwich de las constituyentes armónicas en cada CTD para la turbidez a 1m por debajo de la superficie libre.......................................... 33 Tabla 5.4. Análisis granulométrico de Dragados y Construcciones. Información facilitada por la Autoridad Portuaria de Sevilla. ...................................................... 51 Tabla 5.5. Puntos kilométricos donde se ubican los equipos CTD en km (desde la Broa) y longitudes de los tramos correspondientes........................................... 52 Tabla 5.6. Comparativa de parámetros medidos a lo largo del cauce principal del estuario del Guadalquivir. .................................................................................... 78 Tabla 5.7. Comparativa de parámetros medidos y simulados fuera de la desembocadura ........................................................................................................... 78 10 11 12 Resumen La existencia de sólidos en suspensión en el agua provoca la pérdida de su transparencia, es decir, genera turbidez. Los sólidos en suspensión son partículas pequeñas e inmersas en un fluido el cual actúa sobre ellas contrarrestando la fuerza gravitatoria. El aporte de sólidos en suspensión al estuario proviene de distintas fuentes. La entrada de sólidos desde el mar depende de las condiciones oceanográficas en el exterior del estuario, principalmente, por el incremento de la capacidad de puesta en suspensión por oleaje y viento. En el cauce del estuario, y en condiciones normales, se produce, por el efecto de la circulación mareal y fluvial, la resuspensión de sedimentos y la decantación de los flóculos por la acción gravitatoria en el seno del agua. Durante las avenidas y algunas mareas vivas, además, se produce la erosión del lecho y, en consecuencia, el incremento de la masa de sedimentos circulando por el estuario. Consecuencia de esto es que la turbidez es mayor cerca del fondo que en superficie. Estas cantidades se completan con las provenientes de la erosión de las márgenes y de las aportaciones desde los caños, los esteros y las acequias de riego. Las descargas fluviales llevan asociadas, también, una descarga de sólidos en suspensión cuya cantidad total depende de las condiciones de la descarga de la regulación y control de los embalses del río por exceso de lluvia y del tiempo transcurrido desde la última descarga. La circulación de partículas en suspensión en el estuario se produce a diferentes escalas temporales, desde el corto hasta el largo plazo, asociadas a procesos continuos (dinámica mareal) o discontinuos (ocurrencia de precipitación y descargas). La dinámica se puede describir, caracterizar y cuantificar con las escalas de los movimientos de los agentes que la gobiernan y de la geometría del estuario. La concentración de sedimentos en suspensión depende de la marea, de las variaciones estacionales, de las descargas del río y de tormentas en el estuario. En el tiempo, la concentración de sólidos en suspensión evoluciona en un ciclo mareal (12.45 horas), se ve afectada de forma significativa por la componente cuartidiurna, M4, responde a la secuencia de mareas vivas y muertas (14 y 28 días) y, puntualmente, a la descarga fluvial y a las tormentas. De forma análoga, en el ámbito espacial varia a lo largo y ancho del estuario y, además, con la profundidad. En estuarios aluviales débilmente estratificados es habitual la presencia de zonas de elevadas concentraciones de sedimentos en suspensión y ubicadas donde se encuentra el límite de penetración de la salinidad. En el estuario del Guadalquivir se localizan dos zonas donde se producen máximos de turbidez, que se desplazan aguas arriba o abajo en el estuario de forma cíclica, siguiendo la marea y las descargas fluviales. Estos puntos de turbidez máxima identifican zonas donde el flujo mareal se reduce significativamente y donde los sedimentos transportados por la marea y aquellos transportados por el río se encuentran. El máximo de turbidez contiene un elevado contenido de partículas sólidas muy finas. El sedimento es cohesivo y las partículas floculan, formando agregados. A medida que su dimensión crece, la densidad disminuye y su velocidad de caída aumenta. Asociado a la ubicación del máximo de turbidez existe generalmente una zona de acumulación de sedimentos que produce asomeramiento y que a su vez puede inducir problemas de navegación y requerir dragado. Como ya se explicó en el Capítulo 3, el estuario transita entre un escenario de aguas bajas y de avenida. En ocasiones se producen conjuntamente una avenida y temporal en el mar cuyo comportamiento se traduce en un incremento de la capacidad de suspender sólidos y en un evento extremo de turbidez, dependiendo de las condiciones en la desembocadura, concretamente debido al viento y al transporte de Ekman asociado. La correlación entre eventos de extrema turbidez y descargas desde Alcalá del Río también ha sido puesta de manifiesto en el Capítulo 2. Los eventos extremos de turbidez afectan, prácticamente, a la totalidad del estuario. 13 Estructura del capítulo y sus contenidos En este informe se estudian las escalas espaciotemporales y magnitud de los procesos mareales, fluviales, atmosféricos y oceánicos que originan y controlan la dinámica de la turbidez y sólidos en suspensión en el estuario. Inicialmente se da una descripción general de los procesos y se trata con detalle el marco teórico. Seguidamente, y a partir de los datos registrados en las redes de medida, se ponen de manifiesto las variaciones cíclicas a escala mareal, submareal, sobremareal y anual e interanual a las que están sujetas los procesos del material en suspensión. Se estudia la variabilidad longitudinal y vertical en el estuario. Se determinan las velocidades de deposición del sedimento y los flujos de masa que gobiernan el movimiento del material en suspensión a lo largo del estuario, a saber, la deriva no mareal, deriva de Stokes, los términos de bombeo mareal y aquéllos asociados a la circulación vertical por gravedad y por variaciones de los perfiles verticales de la velocidad y concentración en un ciclo mareal. Finalmente, se describen y explican los procesos desencadenantes de eventos concretos de turbidez durante los últimos años. 14 15 16 5.1. Introducción La circulación de partículas en suspensión en el estuario se produce a diferentes escalas temporales, desde el corto hasta el largo plazo, asociadas a procesos continuos (dinámica mareal) o discontinuos (ocurrencia de precipitación y descargas). La concentración de partículas en suspensión se relaciona con otras variables de crucial importancia para la biodiversidad que caracteriza un estuario, como el oxígeno disuelto, la turbidez, la temperatura y la densidad. En el cauce del estuario del Guadalquivir, en condiciones normales en las que el agua dulce es 3 inferior a 100 m / s , se produce resuspensión de sedimentos, principalmente, por el efecto de la circulación mareal y por la agregación y la decantación de los flóculos por la acción gravitatoria en el seno del agua. La circulación en el estuario, su velocidad y sentido, y el nivel de las aguas está regulada por la propagación de la onda de marea. Las condiciones meteorológicas exteriores y la onda que genera el viento paralelo a la costa propagándose por el estuario acotan este funcionamiento, lo frenan e incluso lo pueden invertir o desfasar. En este caso, la cantidad de sólidos en suspensión en la desembocadura y sus inmediaciones es alta; activados por la acción marina, los sólidos se pueden propagar hacia el interior del estuario. En condiciones de avenida, con un caudal diario medio superior a los 1000 m 3 / s , la circulación en el estuario está controlada principalmente por la descarga fluvial, incluida la cantidad de sólidos en suspensión y la formación de una cuña salina en la desembocadura. Durante las avenidas y algunas mareas vivas, además, se produce la erosión del lecho y, en consecuencia, el incremento de la masa de sedimentos suspendidos y en circulación en el estuario. Estas cantidades se completan con las provenientes de la erosión de las márgenes y de las aportaciones desde los caños, los esteros y las acequias de riego. Algunas veces se produce el doble suceso, avenida y temporal en el mar (oleaje, viento y subida del nivel del mar) cuyo comportamiento se traduce en un incremento de la capacidad de suspender sólidos, pero también una mayor capacidad de transporte hacia el mar. A todo esto hay que añadir que el estuario del Guadalquivir representa una arteria de conexión cultural, económica y ecológica de la Andalucía sur occidental con el mar. Las modificaciones del río por la actividad del hombre han tenido y tienen repercusiones importantes en la dinámica morfo-sedimentaria fluvial, en las tasas de aporte de sedimentos a las marismas, en la frecuencia de inundación de las llanuras inter-mareales, en los ecosistemas asociados, etc. A estas modificaciones de la longitud del cauce hay que unir el proceso de eliminación de superficie marismeña y por tanto la reducción del prisma de marea que conlleva importantes alteraciones en los procesos de morfología sedimentaria del río y el litoral adyacente. La operatividad portuaria con el tránsito de buque hacia el puerto de Sevilla es un elemento más que condiciona la evolución morfológica y sedimentológica del estuario, así como la calidad de sus aguas. El efecto de la operatividad portuaria sobre el estuario se produce por tres aspectos: (i) la interacción buque-fondo, (ii) la capacidad erosiva de las ondas generadas por el barco y (iii) la ejecución de dragados de mantenimiento. Durante el tránsito, en función del tipo de buque, se produce un cambio morfológico del fondo, la re-suspensión de sedimentos y, eventualmente, la erosión de las márgenes, dependiendo del desplazamiento, la velocidad y el estado de carga del buque. La política de dragado y las técnicas empleadas repercuten en la morfología del estuario, el comportamiento mecánico del fondo y en la estabilidad de las márgenes. 17 5.1.1. Descripción general de los procesos: erosióndepósito La dinámica de sedimentos en el estuario del Guadalquivir se define a partir de: 18 Aportes fluviales: Se producen asociados a las descargas desde las presas y las cuencas vertientes al estuario, con concentraciones variables en función de la historia previa de acumulación de sedimentos y de la forma de la descarga, en el caso de embalses, y de las características de la precipitación en el caso de cuencas. Aportes desde el lecho y las márgenes del estuario por resuspensión y erosión: Se producen a escala instantánea asociados a la acción turbulenta y a la superación de umbrales de inicio de movimiento en un tramo dado del estuario, generada por la acción mareal y las descargas bruscas desde las presas o aportes intensos en los cauces aportadores. En la zona próxima a la desembocadura la re-suspensión y la erosión por la acción fluvial y mareal decrece al reducirse la velocidad y la turbulencia con el incremento de la profundidad y la anchura, pero se intensifica por la acción del oleaje. Asimismo, es posible que a escalas quincenales y mensuales, se produzca en el lecho y márgenes una erosión. Los procesos de re-suspensión y erosión de materiales finos tienen su contrapartida en la velocidad de caída o de decantación que produce un flujo de sedimentos hacia el lecho. Aportes desde la plataforma exterior y línea de costa: La entrada de sólidos en suspensión desde el mar depende de las condiciones oceanográficas en el exterior del estuario, principalmente por el incremento de la capacidad de puesta en suspensión, de las dinámicas de oleaje y viento (fenómenos de surgencia y hundimiento), de la forma de la pluma de descarga y del “taponamiento” de la descarga. La acción del oleaje y la dinámica mareal pueden introducir sedimentos tanto por erosión de la zona exterior como por transporte hacia el interior del estuario de los sólidos en suspensión previamente exportados desde el estuario. Estos aportes se producen de forma continua con los ciclos de marea y asociados a temporales en la costa. Pueden reintroducir en el estuario cantidades significativas de sólidos en suspensión de la pluma de sedimentos que se extiende desde la desembocadura en dirección transversal al eje del estuario y deformada según las corrientes dominantes. El transporte de sedimentos (esencialmente de arena) a lo largo de la línea de costa por la punta del Malandar, no es despreciable y su efecto se observa en el avance de la arena hacia el interior del estuario y la reducción de la sección de la desembocadura. Sedimentación: Con independencia del origen marino o terrestre de los sedimentos, una vez en el estuario los procesos de sedimentación o decantación y re-suspensión de las partículas previamente sedimentadas son controlados por el régimen del campo de velocidades y el tamaño efectivo de las partículas. La capacidad de transporte de un flujo de agua, así como el diámetro de las partículas que permanecen en suspensión, aumenta en términos medios con el módulo de su velocidad y viceversa. La velocidad neta de sedimentación depende del tamaño de partícula y de su densidad pero la relación entre estos parámetros varía según se trate de partículas de tamaño medio a grande o partículas finas. En general, cualquier sedimento de tamaño superior a 15 μm sedimentará rápidamente en agua (con una velocidad entre 70 cm/h y 50 cm/h, para tamaños inferiores y máximos, respectivamente); en el otro extremo, partículas de limo y arcilla de diámetro menor a 4 μm sedimentan mucho más lentamente (con velocidad entre 5 cm/h y 1 mm/día) y permanecen durante un intervalo de tiempo prolongado en el agua causando la turbidez característica de muchos estuarios. Por tanto, así como los tamaños mayores sedimentan con facilidad en el estuario y por tanto avanzan distancias pequeñas desde su punto de entrada al mismo, los tamaños muy finos se pueden mantener en suspensión durante varios ciclos de marea y progresar aguas arriba (si proceden del mar) o abajo (si proceden del río) en el estuario desde su punto de entrada. La presencia de sales en el agua influye en la dinámica de sedimentación favoreciendo la floculación de partículas de sedimentos finos y aumentando la densidad del agua. Floculación: Los sedimentos que dominan en un estuario son aquellos de tamaños finos que han superado las pérdidas de carga hidráulica del cauce principal a lo largo de su recorrido desde las cuencas de cabecera hasta el borde continental, y la retención de los embalses que regulan la red fluvial. Las condiciones salinas de las aguas del estuario favorecen la formación y mantenimiento de flóculos por aumento de su cohesividad y fomento de colisiones entre partículas individuales. Estos flóculos son agregados de partículas de arcilla y limos más finos de tamaño equivalente a los tamaños medios y mayores de la categoría limo (partículas individuales de diámetro 1.5 μm pueden formar agregados estables que sedimentan como diámetros equivalentes de 7.0 μm). La formación de flóculos se ve favorecida por la actividad biológica que puede aumentar la cohesividad de partículas por recubrimiento de su superficie exterior e inhibe la difusión turbulenta. 5.1.2. Definiciones, escalas y máximo estuarino La existencia de sólidos en suspensión en el agua provoca la pérdida de su transparencia, en otras palabras, genera turbidez. La turbidez se mide en Unidades Nefelométricas de Turbidez (Nefelometric Turbidity Unit, NTU). La turbidez proporciona, además, una estimación de la concentración de TSS (Sólidos Totales en Suspensión), lo que de otra forma es un parámetro complicado de medir. Los sólidos en suspensión son partículas pequeñas, inmersas en un fluido que actúa sobre la partícula con fuerzas en direcciones aleatorias, que contrarrestan la fuerza de la gravedad, impidiendo así que el sólido se deposite en el fondo. Los factores que hacen que una partícula no se decante en el fondo son el tamaño, densidad y forma de la partícula y la velocidad del agua. Uno de los aspectos distintivos de estuarios es la presencia de máximos de turbidez, i.e. zonas de elevadas concentraciones de sedimentos en suspensión y ubicadas donde se encuentra el límite de penetración de la salinidad hacia el interior del estuario. En un estuario se pueden localizar una o varias zonas donde se producen máximos de turbidez, que se desplazan aguas arriba o abajo en el estuario de forma cíclica, siguiendo la marea y las descargas fluviales. Estos puntos de turbidez máxima identifican zonas donde el flujo mareal se reduce significativamente y donde los sedimentos transportados por la marea y aquellos transportados por el río se encuentran. El máximo de turbidez contiene un elevado porcentaje de partículas sólidas muy finas. El sedimento es cohesivo y las partículas floculan, formando agregados. A medida que su dimensión crece, la densidad disminuye y su velocidad de caída aumenta. Por ello en el máximo de turbidez es importante la interacción entre las propiedades del flujo y las propiedades del sedimento. La concentración de sólidos en suspensión varía también en marea viva y muerta. Los elevados esfuerzos de corte durante marea viva pueden erosionar más sedimentos y producir más turbulencia. A medida que la amplitud de la marea decrece, los sedimentos se depositan progresivamente y no todo lo que se ha depositado se erosiona en la siguiente marea, induciendo la acumulación de un sedimento muy fino. Finalmente, la ubicación del máximo de turbidez depende del caudal del río y se mueve hacia la desembocadura cuando las descargas son elevadas. Asociado a la ubicación del máximo de turbidez existe generalmente una zona de acumulación de sedimentos que produce asomeramiento y que a su vez puede inducir problemas de navegación y requerir dragado. La dinámica de sedimentos en suspensión se puede describir, caracterizar y cuantificar con las escalas de los movimientos de los agentes que los gobiernan y de la geometría del estuario. La concentración de sedimentos en suspensión depende de la marea, de las variaciones estacionales, de las descargas del río y de tormentas en el estuario. En el tiempo, la 19 concentración de sólidos en suspensión evoluciona en un ciclo mareal (12.45 horas), se ve afectada de forma significativa por la componente cuartidiurna, M4, responde a la secuencia de mareas vivas y muertas (14 y 28 días) y, puntualmente, a la descarga fluvial y a las tormentas. De forma análoga, en el ámbito espacial, varia a lo largo y ancho del estuario y, además, con la profundidad. A la hora de definir un valor de turbidez a considerar extremo, se parte de la curva de frecuencias acumuladas de valores instantáneos de concentración de sólidos en suspensión en el punto de control de la red ICA situado en el tramo medio-bajo del estuario, La Señuela, elaborada para el período del que se dispone de datos, 1981-2008. Se observa que podrían agruparse los registros en 3 intervalos, encontrándose entre éstos el 50% de los datos del período en estudio, siendo: • Turbidez baja: Referida a valores de concentración situados entre 200 y 500 mg / l , aproximadamente el 50% de los datos no superan este umbral. • Turbidez media: Referida a valores de concentración de 500 − 900 mg / l , correspondiendo el límite inferior al percentil 80. • Turbidez extrema (picos): Se incluyen en este grupo valores de concentración superiores a 900 mg / l , dentro de los cuales tan sólo se encuentra un 10% de los registros, siendo el resto de las medidas inferior a este valor límite. En función del objetivo del análisis y de la información disponible en este capítulo se aplican diferentes promedios en el espacio y en el tiempo de las variables de estado. Estas cantidades medias son las que gobiernan el comportamiento medio de los sólidos en suspensión a lo largo del estuario y a lo largo del tiempo, así como la capacidad de limpieza o extracción de los sólidos en suspensión hacia el mar. Se define el promedio temporal de una variable instantánea ζ (x , y, z ;T ) = 1 T ζ como t +T ∫ ζ (x , y, z ; τ )d τ , (3.1) t siendo T el periodo de tiempo sobre el que se promedia. En este capítulo son relevantes los siguientes promedios temporales a escala • • • • • 20 Turbulenta: escala en la que se promedian los valores instantáneos para separar el valor medio y las fluctuaciones turbulentas (T= 1-3 s). En este estudio no se disponen de datos con una frecuencia de muestreo tan alta. Instrumental o de estado: escala de tiempo fijada por la resolución temporal proporcionada por los instrumentos instalados que, en el contexto mareal, se adopta como la duración del estado mareal o tiempo en el que se admite que la dinámica mareal es estacionaria. Mareal semidiurna: asociada a la variación semidiurna de la marea astronómica, M2, S2, N2, con TM 2 = 12.45 h . Sobremareal: movimientos a frecuencias múltiplos de la mareal semidiurna generadas por la interacción no lineal entre constituyentes semidiurnas entre sí. A frecuencia doble de la M2 se tiene la M4, TM 4 = TM 2 / 2 = 6.22 h , y con otras de periodo cercano MN4, MS4. Submareal: movimientos de baja frecuencia por interacción no lineal de las constituyentes mareales entre sí; Msf, Mm, con periodos significativos de TMsf = 14.22 días y TMm = 28.44 días . • • • Escalas meteorológicas: típicamente unos pocos días, asociadas a descargas fluviales, al paso de las borrascas extratropicales y al régimen de brisas locales y remotas. Estacional: con periodos de varios meses relacionados con la duración de las estaciones en el estuario del Guadalquivir y su entorno. Anual: con periodos de TAnual = 365 días . En cuanto a los espaciales, el promedio en la columna de agua de una variable instantánea ζ es: ζ= 1 η + h0 η ∫ −h0 ζ (x , y, z ; t )dz (3.2) siendo z la componente vertical. En este capítulo son relevantes los siguientes promedios espaciales (véase Capítulo 3) • En la profundidad η + h y se denota ζ . • En la anchura de la sección B , y se denota ζ . • En la sección A , y se denota ζ • En un tramo longitudinal del estuario Tr. 5.2. Formulación del problema La dinámica de sólidos en suspensión se describe empleando un modelo unidimensional. Los procesos relevantes se describen a través de tres ecuaciones: (i) movimiento del agua, (ii) balance de masa de partículas en suspensión, y (iii) modelo de floculación. 5.2.1. Definición de variables, consecuencias y factores importantes La ecuación unidimensional de momento horizontal de agua resulta: ∂u 1 ∂p ∂ + = ρ ∂x ∂t ∂z sk ⎡ ⎤ ⎢(υ + υ ) ∂u + τ xz ⎥ − 2 τsf , T ⎢ ρ ⎥⎥ ρ b ∂z ⎢⎣ ⎦ con las condiciones de contorno en el fondo y superficie libre: { τb = ρ (υ + υT ) ∂u + τxzsk ∂z } { ; τs = ρ (υ + υT ) z =Zbc ∂u + τxzsk ∂z (3.3) } , (3.4) z =Zs donde el sistema de coordenadas se especifica en el esquema de la Figura 5.1. 21 Figura 5.1. Esquema definición de las variables empleadas en la ecuación del momento y transporte. Las variables empleadas en las ecuaciones anteriores son la anchura del canal b , la presión p , el tiempo t , u la velocidad horizontal del flujo (positiva según el eje x , estuario arriba), z sk la coordenada vertical, ρ la densidad de la masa de agua, τ xz es el esfuerzo entre partículas υ la difusión molecular y υT es la viscosidad de remolino. 2 Esta última viene dada por un modelo estándar κ − ε de turbulencia como υT = cμκ ε , para la consolidación del fango, donde κ , ε y cμ representan, respectivamente, la energía cinética turbulenta, la disipación turbulenta y un coeficiente. sk El tensor de esfuerzo viene dado por τ xz = μmud ∂u / ∂z , donde μmud = Siendo ay = 0.02 , ay τy 1 + a y ∂u ∂z + μs , (3.5) ∂u ∂z = 10−3 s −1 , τxzsk = 0.95τy y μs = K μφpn . La resistencia del fango es 2 τy = K y φp3−nf . (3.6) En las expresiones anteriores existen tres parámetros empíricos: K μ , K y y n f , siendo esta última la dimensión fractal que puede variar entre 2 y 6 para diferentes tipos de fango. La concentración de una partícula unitaria o primaria de los flóculos está relacionada con la concentración de masa c y la densidad de sedimentos ρs según la relación φp = ∑(i ) c (i ) / ρs . El efecto de fricción inducido en las márgenes es τsf = λsf ρ u u , donde λsf es el coeficiente de fricción. Se desprecian los términos horizontales de advección y, por tanto, se supone que el número de Froude del flujo es pequeño. Además, se ha despreciado la componente vertical de la velocidad que se asume despreciable con respecto a la horizontal. Sin embargo, dicha componente puede llegar a ser del mismo orden de magnitud que la componente horizontal si se considera un fondo móvil que varía en el espacio. Asimismo, se consideran las velocidades verticales inducidas por las variaciones del nivel de agua en el tiempo. La concentración de sedimentos en suspensión promediada en la vertical al variar del nivel de agua se conserva. Sin embargo, la masa total, integrada en la columna de agua, no se conserva, pues los sedimentos pueden depositarse, ser resuspendidos o simplemente transportados. El término de presión se ajusta del siguiente modo para mantener una velocidad promediada en la vertical dependiente del tiempo: 22 τ − τb u(t ) − u 0 (t ) 1 ∂p = s + , ρ ∂x ρh Trel u(t ) = 1 Zs u(z ', t )dz ' , h ∫Zbc (3.7) donde Trel es el tiempo de relajación, u es la velocidad del flujo promediada en la vertical, u 0 la velocidad del flujo ajustada (también promediada en la vertical), Zbc la altura de rugosidad aparente, τb es el esfuerzo de corte en el fondo y τs es el esfuerzo de corte en superficie. Concretamente, τb = ρ u*b u*b , u*b = κu(Zbc + Δzb 2) ln(1 + Δzb 2 Zbc ) 5.2.2. donde κ es la constante de von Karman y . Términos de erosión – depósito y floculación La ecuación de balance de masa de los sedimentos en suspensión se modela con la siguiente la ecuación de advección – difusión para las diferentes fracciones de sedimentos, indicadas en la ecuación siguiente con el superíndice i (i ) ⎫ ∂c (i ) ∂ ∂ ⎪⎧⎪ (i ) (i ) (i ) (i ) ∂c ⎪ ⎪⎬ = 0. − − + Γ w c D { } ⎨( s s T ) ⎪ ∂t ∂z ∂z ⎩⎪ ∂z ⎪⎭⎪ (3.8) Aquí, Ds = kBT 6πμD es el coeficiente de difusión molecular de sedimentos, función de la −23 dimensión de la partícula D , de la constante de Boltzman kB = 1.38 ⋅ 10 J / K , de la temperatura absoluta del agua T y de la viscosidad dinámica de los sedimentos en suspensión μ . El coeficiente ΓT = υT / σT es la difusividad turbulenta, donde υT coeficiente de viscosidad turbulenta definido anteriormente y σT es el número turbulento de PrandtlSchmidt. El término de deposición está controlado por la velocidad efectiva de caída del sedimento ws . Las condiciones de contorno en la superficie libre y en el lecho implican que: {ws (i ) (i ) c } z =Zs = 0; (i ) ⎫ ⎧⎪⎪ (i ) (i ) ∂c ⎪ ⎪⎬ =0 ⎨(Ds + ΓT ) ⎪⎩⎪ ∂z ⎪⎭⎪ z =Z s (3.9) y {ws(i )c(i ) } z =Zb = Eb,c ; (i ) ⎫ ⎪⎧⎪ (i ) (i ) ∂c ⎪ ⎪⎬ ⎨(Ds + ΓT ) ⎪⎩⎪ ∂z ⎪⎭⎪ =0, (3.10) z =Zbc habiendo asumido que los términos difusivos son nulos en el lecho y en la superficie libre. En el lecho ( z = Zbc ), se aplica la fórmula clásica de Partheniades: Eb,c = −ws (i )c (i ) + M (i )S (θe(i ) − 1), (3.11) donde M es un parámetro empírico de erosión, θe = τb / τe es un esfuerzo de corte límite τe es el esfuerzo de corte límite para la erosión y S es una función paso, i.e. S = x para x > 0 y S = 0 para x ≤ 0 . (adimensional) para la deposición, Como se ha explicado anteriormente, la formación de flóculos favorece la deposición del sedimento. Este mecanismo se puede modelar con la siguiente ecuación: 23 ⎞⎟ ∂ ⎛ ∂N ⎞ ∂N ∂ ⎜⎛⎜(1 − φ* )(1 − φP ) ⎟⎟ − ⎟ ⎜ w N + s ,r ⎜ ⎟⎟ ∂z ⎜⎝⎜ΓT ∂z ⎟⎟⎠ = ∂t ∂z ⎜⎜⎝ (1 + 2.5φf ) ⎠ 3 nf = −kA' kN3 (1 − φ* )Gc N 2nf −3 nf p −1 1 ⎛ ⎞⎟ 2q nf −2q ' 2q q +1 ⎜ nf nf + kBkN G ⎜⎜kN c N − Dp ⎟⎟ c nf N nf , ⎟⎠ ⎜⎝ donde Dp es el diámetro de las partículas, G = (3.12) (ε υ) el parámetro de esfuerzo tangencial y kA' = 1.5eced π el parámetro de floculación. En este último, eced es el parámetro de eficiencia ' −p de floculación, kB = aeb Dp q (μ / Fy ) es el parámetro de rotura del flóculo, aeb el parámetro de eficiencia de rotura, Fy la resistencia de los flóculos y μ , ya definido anteriormente, la ( nf −3 viscosidad dinámica de los sedimentos en suspensión. El factor kN es Dp 1/ nf / fs ρs ) , N es el número de concentración de los flóculos, φ* = min {1, φ} y p = 3 − n f y q = 0.5 son coeficientes empíricos. El número de concentración diámetro del floculo Df se relacionan según N = N , la concentración de masa c y el 1 c nf −3 −nf Dp D f . fs ρs (3.13) La relación entre la concentración volumétrica φ y de masa c en función la densidad del floculo ρf es: ⎛ ρ − ρ ⎞⎟ c c ⎢⎡ Df ⎥⎤ w ⎟ φf = ⎜⎜⎜ s = ⎟ ρs ⎢⎢⎣ Dp ⎥⎦⎥ ⎝⎜ ρ f − ρw ⎟⎠ ρs 3−nf . (3.14) La relación entre la dimensión del floculo Df y la velocidad de caída de una partícula ws ,r en agua es: ws ,r Dfnf −1 α (ρs − ρw ) 3−nf = Dp , 18β 1 + 0.15 R 0.687 μ ef (3.15) donde R e f = w s ,r D f / υ es el número de Reynolds para el flóculo. Así pues, a partir de la formulación teórica, la evolución de la velocidad de caída se obtiene resolviendo simultáneamente el siguiente sistema de ecuaciones diferenciales: ⎧ (i ) ⎫ ⎪ ⎧ ∂c (i ) ∂ ∂ ⎪ ⎪ (i ) (i ) (i ) (i ) ∂c ⎪ ⎪ ⎪ ⎪ − − + Γ w c D { } ⎨( s ⎬= 0, s T ) ⎪ ⎪ ⎪ ⎪ ∂ ∂ ∂ ∂ t z z z ⎪ ⎪ ⎩ ⎭ ⎪ ⎪ ⎪ ⎛ ⎞ ⎪ ∂N ∂ ⎜⎜ (1 − φ* )(1 − φP ) ⎟ ∂ ⎛⎜ ∂N ⎞⎟ ⎪ ⎪ + ws ,r N ⎟⎟⎟ − ⎨ ⎟= ⎜ ⎜ΓT ⎪ ∂t ∂z ⎜⎝⎜ (1 + 2.5φf ) ∂z ⎠⎟ ⎟⎠ ∂z ⎝⎜ ⎪ ⎪ ⎪ p 3 2nf −3 1 −1 ⎪ ⎛ ⎞ 2q nf −2q ⎪ ⎟ ' 3 ' 2q q +1 ⎜ nf nf nf nf ⎪ −kAkN (1 − φ* )Gc N + kB kN G ⎜⎜kN c N − Dp ⎟⎟ c nf N nf , ⎪ ⎪ ⎟⎠ ⎜⎝ ⎪ ⎪ ⎩ 24 (3.16) donde el diámetro del floculo Df y la velocidad de caída ws ,r se obtienen con las expresiones anteriores (Eq. (3.13) y (3.15)). Para establecer la dimensión fractal de los fragmentos se emplea la Eq.(3.14). Las condiciones de contorno son las dadas en Eq.(3.9) y (3.10), y para el lecho Eq.(3.11). En la Eq.(3.16), el diámetro De y la densidad ρ f ,e de equilibrio del floculo se obtienen, respectivamente, como De = Dp + kAc , kB G (3.17) y ρf ,e ⎡D ⎤ = ρw + (ρs − ρw ) ⎢ p ⎥ ⎢ De ⎥ ⎣ ⎦ ( En estas expresiones kA = 0.75ec πed / fs ρs Dp )y 3−nf . (3.18) kB = kB' / n f . En general, para modelar el problema hay que especificar los siguientes parámetros empíricos: aeb , eced , Dp , Fy , fs , nf 1 , nf 2 , p , q , α y β . 5.3. Datos y análisis El estado del estuario se caracteriza por un conjunto de variables medidas a lo largo del mismo. La interacción de procesos meteorológicos, fluviales, mareales y litorales precisa destacar las diferentes escalas con que cada uno de ellos sucede para comprender su desfase/acoplamiento y las tendencias en la dinámica de los sólidos en suspensión en el estuario a corto, medio y largo plazo. Los equipos de la red de mareógrafos registran la presión en la columna de agua y la temperatura, están ubicados en estacas a lo largo del cauce (véase Figura 5.2) y referenciados respecto a los clavos del Instituto Geográfico Nacional. La red integra los equipos instalados para este trabajo y los dos equipos de la de Red de Mareógrafos del Estado (REDMAR) ubicados en Bonanza y en el Puerto de Sevilla. La Figura 5.2 incluye la ubicación de la estación meteorológica de Salmedina, ubicada frente a los bajos de Chipiona. Los correntímetros acústicos perfiladores (ADCPs) en el estuario interior, también instalados y mantenidos por el ICMAN-CSIC (véase ubicaciones en Figura 5.2) toman muestras de velocidad desde el 8 de enero de 2008 de la corriente euleriana por componentes (Norte, Este y vertical) cada 15 min a 1, 2, 3, 4, 5, 6 y 7 metros de la superficie libre. Los datos vienen dados en cm/s. Al igual que los equipos CTDs (descritos, además de en el Anejo A), los correntímetros están instalados en boyas de balizamiento de la Autoridad Portuaria de Sevilla. En el Anejo A se detallan las fuentes de datos utilizadas, haciendo referencia a su frecuencia y magnitud de medida, así como a las fuentes de las que han sido obtenidos y un resumen de los métodos de calibración. En la Figura 5.2 se presenta la ubicación de los equipos instalados a lo largo del estuario. En la Tabla 5.1 se muestran las ubicaciones de los CTD que registran las medidas de turbidez. CTD0 0 CTD1 17.30 CTD2 23.60 CTD3 26.20 CTD4 35.30 CTD5 47.10 CTD6 57.60 CTD7 84.30 Tabla 5.1. Puntos kilométricos donde se ubican los equipos CTD en km desde la Broa. 25 Figura 5.2. Ubicación a lo largo del cauce de los equipos instalados por el ICMAN-CSIC, además de los mareógrafos de la REDMAR. En rojo se muestran los CTDs, en amarillo se muestran los correntímetros ADCPs, en verde los mareógrafos TGs y en naranja la estación meteorológica de Salmedina. Se indica además la numeración de los equipos cuyos datos han sido usados en este informe. 5.3.1. Variables instantáneas, básicas y promediadas (vertical y temporal) El valor de la turbidez capturada por la red de boyas de medida (CTDs) está disponible en Voltios y en NTU, convertida a FTU (Formazine Turbidity Units). El valor en FTU es proporcional a la concentración de los sólidos en suspensión y es una variable instantánea que evoluciona en el tiempo, y varía en el espacio según el eje longitudinal del estuario y además varia en la profundidad. La Figura 5.3 muestra el registro de la turbidez medida en el CTD1 (Cepillos) y el CTD5 (La Mata) a un metro bajo la superficie del agua durante el año 2008-2009, representativos de las partes baja y alta del estuario. La Figura 5.3 incluye también la curva de caudales medios diarios vertidos desde la presa de Alcalá del Río. Se puede observar la variabilidad temporal de la turbidez durante dos regímenes de caudales: (i) régimen de caudales intermedio (con caudal desembalsado desde la presa de Alcalá 3 superior a 500 m / s ) con picos de turbidez que superan los 8000 FTU (régimen extremo) en el primer CTD1, llegando a saturar el instrumento, y que llegan hasta los 4000 FTU (también régimen extremo) en el segundo CTD5; (ii) régimen de caudales bajos (cuando los caudales 3 desembalsados están por debajo de 100 m / s ), con picos de turbidez que están siempre por debajo de 1000 FTU en ambos CTDs. Los registros muestran, aproximadamente dos veces al mes, máximos y mínimos relativos, relacionados con los ciclos de marea viva y muerta. Cuando se incrementa la descarga fluvial la turbidez asciende, necesitando de un cierto tiempo de relajación para regresar al patrón gobernado por al dinámica mareal. No obstante, durante el régimen de caudales intermedio la turbidez conserva el patrón de máximos y mínimos relativos. En la Figura 5.4 se muestra la evolución temporal de la turbidez en cuatro profundidades observada en los mismos CTDs durante un intervalo de tiempo de, aproximadamente, una semana de duración en régimen mareal. Como se puede observar, la turbidez varia con la profundidad y alcanza valores máximos cerca del fondo. 26 Q>500m3/s Q>500m3/s Q>100m3/s Q>150m3/s Figura 5.3. Evolución temporal a 1 m de profundidad de la turbidez (FTU) en los CTD1 (Cepillos) y CTD5 (La Mata). Además se incluye la curva de caudales medios diarios vertidos desde la presa de Alcalá del Río. La turbidez evoluciona con el ciclo de marea alcanzando valores máximos alrededor de media marea, llenante y vaciante, pero, a diferencia de la salinidad, puede presentar más de un pico de turbidez en el semiciclo mareal (Figura 5.4). Este comportamiento se intensifica hacia aguas arriba del estuario y se manifiesta, también en la toda la columna de agua. La turbidez máxima se alcanza en las inmediaciones del fondo. Analizada la variabilidad espacial y temporal de las variables instantáneas, éstas pueden promediarse en el tiempo y en el espacio siguiendo lo el apartado anterior. 27 27 26 25 Q (m3/s) 24 23 22 21 20 19 18 17 07/22/08 07/23/08 07/24/08 07/25/08 07/26/08 Fecha 07/27/08 07/28/08 07/29/08 1400 z=-1m z=-2m z=-3m z=-4m 1200 Turb CTD1 (FTU) 1000 800 600 400 200 0 07/22/08 07/23/08 07/24/08 07/25/08 07/26/08 Fecha 07/27/08 07/28/08 07/29/08 1000 z=-1m z=-2m z=-3m z=-4m 900 800 Turb CTD5 (FTU) 700 600 500 400 300 200 100 0 07/22/08 07/23/08 07/24/08 07/25/08 07/26/08 Fecha 07/27/08 07/28/08 07/29/08 Figura 5.4. Evolución temporal instantánea (con periodo de muestreo de 30min) a 4 profundidades de la turbidez en los CTD1 y CTD5 en régimen mareal. Los datos de caudal (panel superior) han sido interpolados linealmente a los tiempos de muestreo de los CTDs. 28 5.3.2. Análisis armónico y espectral Se han realizado los análisis espectral y armónico de series temporales de turbidez. Se han considerado registros de tres meses de duración en los que la descarga media diaria desde la 3 presa de cebecera fue inferior a 100 m / s , para que los análisis fueran representativos de la acción mareal. Los resultados obtenidos para los CTD1, CTD2, CTD4, CTD5 y CTD6, se muestran en la Figura 5.5, Figura 5.6, Figura 5.7, Figura 5.8 y Figura 5.9, respectivamente. Analizando las gráficas, se evidencia que las constituyentes más significativas en todos los registros del interior del estuario son las Msf (submarea), M4 (sobremarea) y M2 (semidiurna). En el CTD3, las constituyentes diurnas también son importantes a 1m de la superficie libre, mientras que a mayor profundidad dejan de serlo. Esto podría ser debido a vertidos puntuales en la zona procedentes de riego, aunque para comprobar este extremo sería necesario una campaña de campo específica. CTD1 Figura 5.5. Panel superior izquierdo: muestra de la serie registrada en CTD1 a 1m por debajo de la superficie libre. Panel superior derecho: ubicación del CTD1. Panel inferior izquierdo: resultado del análisis armónico en la posición del CTD1; las constituyentes marcadas en azul suman el 95% del contenido energético del registro. Panel inferior derecho: resultado en V 2 / hora del análisis espectral en la posición del CTD1. 29 CTD2 Figura 5.6. Panel superior izquierdo: muestra de la serie registrada en CTD2 a 1m por debajo de la superficie. Panel superior derecho: ubicación del CTD2. Panel inferior izquierdo: resultado del análisis armónico en la posición del CTD2; las constituyentes marcadas en azul suman el 95% del contenido energético del registro. Panel inferior derecho: resultado en V 2 / hora del análisis espectral en la posición del CTD2. CTD4 30 Figura 5.7. Panel superior izquierdo: muestra de la serie registrada en CTD4 a 1m por debajo de la superficie libre. Panel superior derecho: ubicación del CTD4. Panel inferior izquierdo: resultado del análisis armónico en la posición del CTD4; las constituyentes marcadas en azul suman el 95% del contenido energético del registro. Panel inferior derecho: resultado en V 2 / hora del análisis espectral en la posición del CTD4. CTD5 Figura 5.8. Panel superior izquierdo: muestra de la serie registrada en CTD5 a 1m por debajo de la superficie libre. Panel superior derecho: ubicación del CTD5. Panel inferior izquierdo: resultado del análisis armónico en la posición del CTD5; las constituyentes marcadas en azul suman el 95% del contenido energético del registro. Panel inferior derecho: resultado en V 2 / hora del análisis espectral en la posición del CTD5. 31 CTD6 Figura 5.9. Panel superior izquierdo: muestra de la serie registrada en CTD6 a 1m por debajo de la superficie libre. Panel superior derecho: ubicación del CTD6. Panel inferior izquierdo: resultado del análisis armónico en la posición del CTD6; las constituyentes marcadas en azul suman el 95% del contenido energético del registro. Panel inferior derecho: resultado en V 2 / hora del análisis espectral en la posición del CTD6. En la Tabla 5.2 y Tabla 5.3 se muestran los valores de la amplitud y la fase, respectivamente, de las constituyentes más representativas en los ocho puntos de medida, desde la desembocadura hasta la cabecera del estuario. CTD0 CTD1 CTD2 CTD3 CTD4 CTD5 CTD6 CTD7 M2 0.07± 0.01 0.87± 0.11 1.4± 0.2 0.8± 0.5 1.1± 0.3 0.6± 0.2 0.7± 0.3 2.0± 0.3 S2 0.04± 0.01 0.3± 0.1 0.6± 0.2 0.1± 0.4 0.1± 0.2 0.06± 0.15 0.17± 0.17 1.0± 0.3 N2 0.02± 0.01 0.25± 0.11 0.36± 0.19 0.2± 0.4 0.2± 0.3 0.1± 0.2 0.1± 0.2 0.6± 0.3 M4 0.025± 0.01 0.590± 0.25 0.805± 0.21 0.450± 0.40 0.407± 0.23 0.279± 0.20 0.369± 0.25 0.751± 0.28 MS4 0.02± 0.01 0.3± 0.2 0.4± 0.2 0.2± 0.3 0.2± 0.2 0.2± 0.2 0.2± 0.2 0.6± 0.3 MN4 0.01± 0.01 0.14± 0.19 0.3± 0.2 0.1± 0.3 0.2± 0.2 0.1± 0.1 0.2± 0.2 0.3± 0.3 K1 0.02± 0.01 0.10± 0.06 0.26± 0.07 0.5± 0.4 0.20± 0.16 0.07± 0.07 0.12± 0.12 0.20± 0.12 O1 0.01± 0.01 0.08± 0.06 0.09± 0.07 0.8± 0.4 0.11± 0.13 0.06± 0.06 0.2± 0.1 0.12± 0.11 Q1 0.004± 0.000 0.04± 0.05 0.06± 0.07 0.2± 0.3 0.03± 0.13 0.02± 0.04 0.02± 0.07 0.09± 0.11 Msf 0.04± 0.02 0.9± 0.2 1.7± 0.3 2.1± 0.2 0.8± 1.1 0.3± 0.4 0.6± 0.9 0.7± 0.3 Mm 0.02± 0.02 0.4± 0.2 0.8± 0.3 2± 3 0.8± 1.2 0.3± 0.4 0.6± 0.8 0.8± 0.3 −1 Tabla 5.2. Amplitudes en Voltios de las constituyentes armónicas en cada CTD para la turbidez ( ×10 por debajo de la superficie libre. 32 ) a 1m CTD0 CTD1 CTD2 CTD3 CTD4 CTD5 CTD6 CTD7 M2 230± 10 201± 7 309± 8 70± 50 291± 19 20± 20 60± 24 118± 9 S2 271± 16 260± 20 350± 20 340± 190 300± 200 170± 160 200± 80 175± 16 N2 240± 30 230± 20 300± 30 290± 140 300± 100 70± 100 120± 90 110± 30 M4 94± 20 3± 30 120± 20 260± 50 130± 40 120± 40 110± 40 240± 30 MS4 150± 30 40± 40 180± 30 110± 120 170± 60 150± 60 130± 60 300± 30 MN4 150± 50 30± 100 170± 50 260± 170 200± 80 120± 80 120± 90 250± 60 K1 78± 13 300± 30 190± 16 230± 40 330± 60 140± 60 280± 60 100± 30 O1 50± 40 120± 30 40± 50 160± 30 60± 90 350± 80 30± 30 270± 60 Q1 90± 90 20± 70 40± 80 330± 120 80± 200 50± 160 7± 190 70± 70 Msf 30± 30 65± 14 69± 12 340± 90 70± 80 50± 70 60± 80 60± 20 Mm 300± 40 40± 30 20± 20 70± 90 160± 80 200± 100 200± 90 50± 20 Tabla 5.3. Fases en º Greenwich de las constituyentes armónicas en cada CTD para la turbidez a 1m por debajo de la superficie libre. 5.3.3. Análisis sedimentación de los términos de erosión y Si bien el sistema de ecuaciones descrito en el apartado anterior permite la determinación completa del movimiento del agua y de los sedimentos, y su consecuencia en la turbidez y en el movimiento del lecho, se facilita el análisis de la señal medida y de los procesos que intervienen en ella, describiendo la estructura matemática de los términos de erosión y sedimentación, su dependencia del campo de velocidades y el balance entre ambos términos. 5.3.3.1. Tasa de erosión del lecho La tasa temporal de erosión del lecho Er (t ) debida a la acción de una corriente mareal o fluvial es proporcional a una potencia de la velocidad. Si, u (t ) > uc , Er (t ) ≈ ρ w f b u (t ) , y si u (t ) ≤ uc , Er (t ) = 0 ; en la expresión fb es el n coeficiente de fricción en el fondo, uc es la velocidad de inicio de movimiento (que a efectos prácticos del cálculo, se puede considerar nula) y la potencia de la velocidad toma valores en el intervalo 2 ≤ n < 5 . En el caso del Guadalquivir las dos componentes más energéticas de la onda de marea son las semidiurnas M2 y S2. Una estructura típica del campo de velocidades está formada por la superposición lineal de las velocidades debidas a aquellas componentes y la resultante de las corrientes residuales incluyendo la corriente fluvial. Adoptando el valor n = 2, la tasa temporal de erosión tiene la siguiente forma 33 (uM 2 cos ωM 2 t + uS2 cos ωS2 t + ur ) 2 = 1 = ur2 + uM2 2 (1 + cos ωM 4 t ) + 2 1 + uS22 (1 + cos ωS4 t ) + 2 + 2ur (uM 2 cos ωM 2 t + uS2 cos ωS2 t ) + (3.19) + uM 2 uS2 (cos ωM sf t + cos ωMS4 t ) , donde ur es la corriente asociada a la descarga fluvial. La señal de erosión en el lecho y, en consecuencia, la de la concentración de sólidos en suspensión, contiene información de las componentes semidiurnas, cuartidiurnas, quincenales y de las corrientes residuales. En el primer tramo del estuario, Broa – Bonanza dominan las componentes semidiurnas; pero en el tramo central, una vez que la amplitud de las componentes cuarto-diurnas es significativa, su contribución a la tasa de erosión es relevante. En el tramo de cabecera, se reduce la amplitud de estas componentes y la erosión se produce, principalmente, por la corriente residual y la componentes semidiurnas, amplificadas por las corrientes residuales y moduladas por los ciclos de mareas vivas y mareas muertas. Cuando las corrientes residuales están dominadas por las descargas del río, la tasa de erosión se puede escribir de la siguiente forma, Er (t ; x) ∼ [a (t ; x)U r + b(t ; x)]2 , donde los coeficientes modulan el potencial erosivo con el periodo semidiurno y quincenal, enmascarando el papel desempeñado por las corrientes cuarti-diurnas. Este análisis se puede extender para incluir el efecto de las componentes diurnas, especialmente la componente K1 , pero no añade sustancialmente ningún fenómeno nuevo al ya descrito. 5.3.3.2. Tasa de sedimentación en la columna de agua Por otra parte, la sedimentación depende del tamaño de grano, la floculación y del nivel de turbulencia de forma compleja. El cociente de los tiempos de sedimentación (advectiva) y resuspensión (turbulenta) se conoce como número de Peclet, K z / ( hws ) , donde ws es la velocidad de sedimentación. El coeficiente de viscosidad de remolino efectivo K z depende del coeficiente de arrastre, la amplitud de la corriente mareal y de la sección (profundidad y anchura), con lo que el número de Péclet se puede expresar como fU / ws , donde U es la amplitud de la velocidad de la marea. Una vez que el grano ha alcanzado el lecho, puede reflejarse o ser absorbido por él. En general, habrá un comportamiento intermedio: parte del sedimento será reflejado de nuevo hacia la superficie y parte quedará atrapado en el suelo, dependiendo del estado del suelo y de la dinámica mareal. 5.3.3.3. Balance erosión – sedimentación El estuario del Guadalquivir tiene las aguas bien mezcladas y la fracción fina del sedimento (dominante en todo el estuario, excepto en la desembocadura) alcanza la superficie y el número de Péclet es muy alto. Si la tasa de sedimentación varía exponencialmente en el tiempo, según la forma exp(− μ t ) , el decrecimiento de la concentración en el tiempo se puede suponer proporcional a la concentración − μ C (t ; x ) , y la evolución temporal para cada una de las componentes se puede expresar de la siguiente forma 34 Css (t ; x, ω ) Er (t ; x, ω ) h(t ; x) ω 2 + μ 2 (3.20) , donde μ es el coeficiente de proporcionalidad y ω es la frecuencia angular de las componentes relevantes en el proceso de erosión. Además, hay un desfase entre la erosión y la sedimentación dado por arctg (ω / μ ) . Para el tipo de sedimentos en el estuario, limo y arcilla, 10 < μ ( s ) < 10 y para las componentes diurnas, semidiurnas y cuartidiurnas, la reducción de la concentración depende principalmente del producto ω h . La reconstrucción del lecho es más lenta cuando ha sido erosionado por las componentes diurnas y más rápida cuando lo ha sido por las cuartidiurnas. −6 −1 −5 El desfase para estas componentes es de aproximadamente π / 2 , es decir, allí donde domina la componente Msf los valores máximos de la turbidez ocurrirán, aproximadamente, 3.5 días después de las corrientes máximas; si domina la componente semidiurna, el máximo de turbidez ocurrirá, aproximadamente, tres horas después de la presentación de las velocidades máximas, es decir, aproximadamente, en las estoas de pleamar y en de bajamar. Allí donde la componente cuartidiurna también es importante, pueden aparecer dos máximos en el ciclo semidiurno, desfasados, aproximadamente, una hora con respecto a los instantes de velocidad máxima. La asimetría entre la llenante y la vaciante también afecta al desfase entre los máximos relativos, ya que dependen del instante en el que ocurren las velocidades máximas. 5.4. Comportamiento de la turbidez según el eje del estuario con régimen de caudal bajo Q f < 100m3 / s Con caudales bajos, el estuario se encuentra bien mezclado y la distribución espacial de la turbidez está forzada por la dinámica mareal y la propagación y transformación de la onda de marea en el estuario, despreciando el efecto de la corriente fluvial. La variabilidad espaciotemporal de la concentración de los sólidos en suspensión depende de la dinámica mareal estuarina y sigue los ciclos de mareas vivas y muertas. Los máximos y mínimos relativos, así como su movilidad, son función, esencialmente, de la amplitud y la fase de cuatro componentes armónicas: M2, M4, K1 y Msf. 5.4.1. Variación espacial de las componentes armónicas de la turbidez En la Figura 5.10 se presentan respectivamente las amplitudes y las fases de las constituyentes armónicas semi-diurnas M2, N2 y S2, de las constituyentes armónicas diurnas O1, K1, Q1 y cuarto diurnas M4, MS4, MN4 para la señal de turbidez (en Voltios) de los CTDs capturada a 1m desde la superficie libre. A partir del km 50, las amplitudes, sobretodo semidiurnas y cuarto-diurnas, crecen linealmente con la distancia. Todas las componentes tienen su amplitud máxima entre los kilómetros 20 y 30 de distancia a la Broa, que es justamente donde se encuentra uno de los dos máximos de turbidez del estuario. Como se verá, la turbidez presenta otro máximo secundario de turbidez entre El Mármol y Sevilla asociado a la dinámica estacionaria del último tramo del estuario y al punto nulo de la intrusión salina. 35 En el estuario interior la señal de turbidez está forzada principalmente por tres componentes: Msf, M2 y M4. Entre la Broa y Cepillos la señal de turbidez no es muy intensa y las tres componentes contribuyen de forma análoga; sin embargo, a partir de Esparraguera, la contribución de la componente quincenal domina claramente la señal, alcanzando el valor máximo a la altura de Tarfía. A partir de ese tramo, la contribución de la componente M4 excede la contribución de la M2, pero sigue dominando la señal Msf. Este resultado sugiere que el movimiento de los sólidos en suspensión está gobernado, principalmente, por las componentes submareales y cuando la circulación asociada a ella se bloquea, por ejemplo, por la acción del viento local y regional o remoto, dependiendo de su persistencia, la turbidez puede permanecer con valores altos durante varios periodos consecutivos de quince días de duración. 0.2 400 M2 N2 S2 0.18 M2 N2 S2 350 0.16 300 Fase (°Greenwich) Amplitud (Voltios) 0.14 0.12 0.1 0.08 250 200 150 0.06 100 0.04 50 0.02 0 0 10 20 30 40 50 Distancia (km) 60 70 80 0 0 90 0.09 30 40 50 Distancia (km) 60 70 80 90 K1 O1 Q1 350 0.07 300 0.06 Fase (°Greenwich) Amplitud (Voltios) 20 400 K1 O1 Q1 0.08 0.05 0.04 0.03 250 200 150 100 0.02 50 0.01 0 0 10 10 20 30 40 50 Distancia (km) 60 70 80 0 0 90 0.09 10 20 30 40 50 Distancia (km) 60 70 80 90 300 M4 MS4 MN4 0.08 M4 MS4 MN4 250 0.06 Fase (°Greenwich) Amplitud (Voltios) 0.07 0.05 0.04 0.03 200 150 100 0.02 50 0.01 0 0 10 20 30 40 50 Distancia (km) 60 70 80 90 0 0 10 20 30 40 50 Distancia (km) 60 70 80 90 Figura 5.10. Amplitudes (columna izquierda) y fases (columna derecha) semi-diurna M2, N2 y S2 (paneles superiores), diurna O1, K1, Q1 (paneles centrales) y cuarto-diurna M4, MS4 y MN4 (paneles inferiores) de la señal de turbidez (en Voltios) medida a 1 m desde la superficie libre. 36 5.4.2. Evolución temporal y espacial de la turbidez: mareas vivas y muertas Se ha seleccionado un periodo de 1 mes (del 10 de agosto de 2008 al 10 de septiembre de 2008) representativo de 2 ciclos de marea viva - marea muerta. El promedio mensual del 3 desembalse diario desde la presa de Alcalá fue de 20 m / s . Se ha separado el registro de marea astronómica en el puerto de Bonanza en ondas individuales según el método de cruce ascendente por cero y por cada onda se ha calculado el promedio mareal de la turbidez medida a 1m desde la superficie libre en todos los CTDs (en un ciclo de marea M2, aproximadamente de 12.45h). En la Figura 5.11 se presenta para el CTD1, la turbidez máxima, mínima y promediada en el periodo semidiurno observándose claramente la variabilidad en vivas y en muertas. Las pequeñas oscilaciones que se aprecian en la turbidez tienen periodo diario por lo que parecen deberse al componente K1. 800 Promedio en ciclo M2 Maximo en ciclo M2 Minimo en ciclo M2 700 Turb en CTD1(FTU ) 600 500 400 300 200 100 0 08/10/08 08/15/08 08/20/08 08/25/08 08/30/08 Fecha 09/04/08 09/09/08 09/14/08 Figura 5.11. Turbidez máxima, promedio y mínima para el ciclo M2. Las oscilaciones de corto periodo están asociadas a variaciones diurnas de la señal. La evolución temporal de la señal sigue un patrón de funciones gaussianas, aunque en la fase de decrecimiento la señal puede aproximarse por una función exponencial de la forma exp(− μ t ) . En la Figura 5.12 se presenta la evolución a lo largo del estuario del valor de la turbidez a escala mareal (promediada en la M2). Los máximos de turbidez se desplazan con las mareas vivas y muertas en función de la intensidad de la velocidad de la corriente. 37 PROMEDIO MAREAL MV 1000 Turbidez promedio mareal(FTU) 900 800 700 600 500 400 300 200 100 0 0 10 20 30 40 50 Distancia (km) 60 70 80 90 60 70 80 90 60 70 80 90 PROMEDIO MAREAL MAREA MUERTA 500 Turbidez promedio mareal(FTU) 450 400 350 300 250 200 150 100 50 0 0 10 20 30 40 50 Distancia (km) PROMEDIO MENSUAL (Mm) 700 Turbidez promedio mensual(FTU) 600 500 400 300 200 100 0 0 10 20 30 40 50 Distancia (km) Figura 5.12. Turbidez a escala mareal (promedio en M2) durante una marea viva (panel superior) y una marea muerta (panel central) y a la escala submareal Mm (panel inferior). En la escala submareal Mm (28 días) y en régimen de caudal bajo, en promedio, coexisten también dos máximos de turbidez, uno próximo al CTD3 (Esparraguera) y el otro al CTD7 (Sevilla). 5.4.3. Variación de la turbidez en la columna de agua La turbidez crece con la profundidad. En la Figura 5.13 se muestran los perfiles verticales instantáneos medidos el 28 de agosto de 2008 (marea muerta). Como se puede observar, el 38 valor de la turbidez crece hacia el fondo; a -4m respecto de la superficie libre, se alcanzan valores dobles de los medidos a un metro de la superficie libre. Más próximos al fondo la turbidez es aún mayor. En las zonas más próximas al lecho para el CTD2 y CTD5 (datos a -3 y -4m) los valores para esa fecha difieren poco. En el CTD3 la turbidez mínima está medida a 2m desde la superficie libre y no a -1m, posiblemente debido a descargas de agua dulce en el entorno del instrumento. CTD2 (23.8km) -1 -1.5 -1.5 -2 -2 z (m) z (m) CTD1 (17.5km) -1 -2.5 -2.5 -3 -3 -3.5 -3.5 -4 350 -4 300 320 340 360 Turb (FTU) 380 400 400 450 -1.5 -1.5 -2 -2 -2.5 -3 -3.5 -3.5 500 600 700 Turb (FTU) 800 900 -4 300 1000 400 500 -1.5 -1.5 -2 -2 -2.5 -3 -3.5 -3.5 150 200 250 300 Turb (FTU) 600 700 Turb (FTU) 800 900 1000 1200 1300 1400 -2.5 -3 100 350 400 450 500 -4 700 800 900 1000 1100 Turb (FTU) Figura 5.13. Perfiles verticales instantáneos medidos el 28 de Agosto de 2008 (durante marea muerta). 5.4.4. 650 CTD6 (57.8km) -1 z (m) z (m) CTD5 (47.3km) -1 -4 50 600 -2.5 -3 400 550 CTD4 (35.5km) -1 z (m) z (m) CTD3 (26.4km) -1 -4 300 500 Turb (FTU) 420 Retardo y propagación de la turbidez La Figura 5.14 muestra la variación de la turbidez (curvas instantáneas desde el CTD1 hasta el CTD6) durante dos ciclos en marea viva (columna derecha 2-3 de agosto de 2008) y marea muerta (columna izquierda 27-28 de julio de 2008) a 4 profundidades con intervalos de 1 m de profundidad. Las líneas discontinuas marcan la tendencia de los picos de turbidez medidos a 1m desde la superficie libre. Las flechas marcan las tendencias de los desfases entre CTDs. Finalmente, las elipses enmarcan el desfase en la columna de agua y la flecha indica la tendencia.Se han marcado con elipses algunos ejemplos de desfase temporal en la profundidad. Durante marea muerta (gráficas izquierdas) hay un retardo de los picos de turbidez desde el fondo hacia la superficie, y viceversa, un adelantamiento en marea viva (véanse elipses y flechas de tendencias) 39 800 800 -1m -2m -3m -4m 700 600 CTD1 Turb (FTU) CTD1 Turb (FTU) 600 500 400 300 400 300 200 100 100 1200 27-Jul-2008 27-Jul-2008 27-Jul-2008 Fecha 28-Jul-2008 28-Jul-2008 28-Jul-2008 0 02-Aug-2008 02-Aug-2008 02-Aug-2008 02-Aug-2008 Fecha 03-Aug-2008 03-Aug-2008 03-Aug-2008 +1h +2h 2000 -1m -2m -3m -4m 1000 -1m -2m -3m -4m 1800 1600 1400 CTD2 Turb (FTU) 800 CTD2 Turb (FTU) 500 200 0 27-Jul-2008 -1m -2m -3m -4m 700 600 400 1200 1000 800 600 400 200 200 0 27-Jul-2008 27-Jul-2008 27-Jul-2008 27-Jul-2008 Fecha 28-Jul-2008 28-Jul-2008 28-Jul-2008 0 02-Aug-2008 +1h 1000 02-Aug-2008 02-Aug-2008 800 03-Aug-2008 03-Aug-2008 03-Aug-2008 +1h 2500 -1m -2m -3m -4m 900 02-Aug-2008 Fecha -1m -2m -3m -4m 2000 CTD3 Turb (FTU) CTD3 Turb (FTU) 700 600 500 400 1500 1000 300 200 500 100 0 27-Jul-2008 27-Jul-2008 27-Jul-2008 27-Jul-2008 Fecha 28-Jul-2008 28-Jul-2008 28-Jul-2008 0 02-Aug-2008 02-Aug-2008 02-Aug-2008 -1h 1000 03-Aug-2008 800 03-Aug-2008 -2h 3500 -1m -2m -3m -4m 900 3000 03-Aug-2008 -1m -2m -3m -4m 2500 CTD4 Turb (FTU) 700 CTD4 Turb (FTU) 02-Aug-2008 Fecha 600 500 400 300 2000 1500 1000 200 500 100 0 27-Jul-2008 27-Jul-2008 27-Jul-2008 27-Jul-2008 Fecha 28-Jul-2008 28-Jul-2008 28-Jul-2008 0 02-Aug-2008 600 02-Aug-2008 02-Aug-2008 02-Aug-2008 Fecha 03-Aug-2008 03-Aug-2008 03-Aug-2008 1400 -1m -2m -3m -4m 500 -1m -2m -3m -4m 1200 CTD5 Turb (FTU) CTD5 Turb (FTU) 1000 400 300 200 800 600 400 100 0 27-Jul-2008 200 27-Jul-2008 27-Jul-2008 27-Jul-2008 Fecha 28-Jul-2008 28-Jul-2008 28-Jul-2008 0 02-Aug-2008 1400 02-Aug-2008 02-Aug-2008 02-Aug-2008 Fecha 03-Aug-2008 03-Aug-2008 03-Aug-2008 6000 -1m -2m -3m -4m 1200 -1m -2m -3m -4m 5000 CTD6 Turb (FTU) CTD6 Turb (FTU) 1000 800 600 4000 3000 2000 400 1000 200 0 27-Jul-2008 40 27-Jul-2008 27-Jul-2008 27-Jul-2008 Fecha 28-Jul-2008 28-Jul-2008 28-Jul-2008 0 02-Aug-2008 02-Aug-2008 02-Aug-2008 02-Aug-2008 Fecha 03-Aug-2008 03-Aug-2008 03-Aug-2008 Figura 5.14. Variación instantánea de la turbidez (desde arriba hasta abajo, desde el CTD1 hasta CTD6, respectivamente) durante marea viva (paneles en la columna derecha) y marea muerta (paneles en la columna derecha) en las cuatro profundidades. A partir del CTD2 comienzan a aparecer los dobles picos en las señales de la turbidez y los desfases entre ellos varían de un CTD a otro, dependiendo de la relación de las amplitudes y los desfases entre las componentes. La Figura 5.15 es una ampliación de los picos de turbidez, medidos a 1m de la superficie libre, en los CTD1 al CTD6 en marea viva y muerta. 700 CTD6 CTD5 CTD4 CTD3 CTD2 CTD1 600 Turb (FTU) 500 400 300 200 100 0 27-Jul-2008 27-Jul-2008 Fecha 2500 CTD6 CTD5 CTD4 CTD3 CTD2 CTD1 Turb (FTU) 2000 1500 1000 500 0 02-Aug-2008 03-Aug-2008 Fecha Figura 5.15. Variación instantánea de la turbidez durante marea viva (panel inferior) y marea muerta (panel superior) para los CTDs a 1 m desde la superficie libre. Entre el CTD1, CTD2 y CTD3 el desfase temporal es positivo (retardo) y es del orden de 1 y 2 horas para mareas vivas y muertas, respectivamente. La principal diferencia entre los tres sensores, aparte de la magnitud absoluta de las componentes M2, M4 y Msf, es la importancia de la amplitud de K1 en el CTD3. A partir del CTD3 se observa una inversión de la tendencia en la propagación de los sólidos en suspensión, tal como queda registrado entre el CTD3 y CTD4 donde hay un desfase negativo (adelantamiento) del orden de 1 y 2 horas para marea muerta y viva, respectivamente. En este tramo del estuario predominan la Msf y la M4 lo que se refleja en la importancia de los dobles picos de turbidez en cada semiciclo de marea. Esta zona de inversión coincide con la zona donde se han registrados las máximas concentraciones de sólidos en suspensión. Entre el CTD4 y CTD6 no se observa apenas desfase. 41 5.4.5. Comportamiento de la turbidez frente a la marea vertical y horizontal Para identificar el efecto de la marea llenante y vaciante se han analizando conjuntamente el módulo de las velocidades promediadas en la vertical, medidas por los ADCPs más cercanos a los CTD1 (tramo bajo), CTD4 (tramo medio) y CTD6 (tramo alto) y valores de turbidez medidos por dichos CTDs a diferentes profundidades (desde 1 hasta 4 m desde la superficie libre). Los resultados obtenidos se presentan en la Figura 5.16, donde se muestra un intervalo de tiempo que va desde el 25 de agosto hasta el 10 de septiembre de 2008, representativo del régimen mareal o de aguas bajas. Figura 5.16. Variación mareal de los registros de turbidez en las ubicaciones CTD1, CTD4 y CTD6 (Paneles 2, 4 y 6, respectivamente) a 4 profundidades respecto de la superficie libre: a 1m (azul), a 2m (verde), a 3m (rojo) y a 4m (cian). Para comparar se muestra el modulo de las velocidades promediadas en la vertical tomadas por los ADCPs más cercanos a cada CTD (paneles 1, 3 y 5). Las líneas en cada par de registros relacionan los máximos y los mínimos de velocidad con la turbidez. Se puede observar que los máximos (mínimos) locales de turbidez, especialmente en los CTD4 y CTD6 están desfasados del orden de 1 hora con los módulos de las velocidades máximas (mínimas) en respuesta a la señal M4, aunque la correlación con la marea horizontal es clara. La variación de la envolvente de la turbidez máxima sigue las variaciones de mareas vivas y muertas. Durante mareas vivas, los esfuerzos de corte en el fondo son mayores que durante mareas muertas y, por tanto, se incrementa la resuspensión de sedimentos del fondo. En la Figura 5.17, referida al período que va desde el 21 de julio de 2008 hasta el 21 de septiembre de 2008, se muestran los siguientes datos: caudal en Alcalá del Río, marea astronómica en el puerto de Bonanza y turbidez medida a 1m desde la superficie libre por el CTD1. Se ha tomado como ejemplo el CTD1, aunque el comportamiento los demás CTD es similar, como así se muestra en las Figura 5.18 que presentan valores de turbidez medidos a 42 1m desde la superficie libre por todos los CTD. Para el CTD1 se presenta, además, la variación de dichos parámetros con la profundidad (Figura 5.18, panel inferior enmarcado). Durante este período, las descargas desde la presa de Alcalá del Río son constantes y con 3 valores medios de 25 m / s . En la Figura 5.18 se observa el efecto de la marea, pudiéndose detectar claramente las correlaciones existentes entre la ocurrencia de las mareas vivas (con mayores velocidades de entrada y salida) y los máximos en las envolventes de turbidez; y análogamente, para el caso de marea muerta. Figura 5.17. Comparativa entre datos de Caudales de Alcalá del Rio (Q), marea astronómica en Bonanza (MarH) y valores de Temperatura (T), Salinidad (S) y Turbidez (Tur) registrados a 1m desde la superficie libre en el CTD1 desde 21/07/2008 hasta 21/09/2008. 43 Figura 5.18. Evolución temporal de la turbidez medida a 1 m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) representados desde arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde el 21/07/2008 hasta el 21/09/2008. En la grafica inferior se muestra la variación de la turbidez medida en el CTD1 con la profundidad. 44 Finalmente, en la Figura 5.19 se muestra el promedio a escala mareal (M2) de la turbidez medida a 1m desde la superficie libre para los CTDs desde la desembocadura hacia Sevilla. Tanto antes de la descarga desde la presa de Alcalá producida en el ciclo 430, aproximadamente, como después de ella, se aprecian con claridad las variaciones de ciclos de vivas y muertas, más evidentes después de la misma. CTD0 CTD1 CTD2 CTD3 CTD4 CTD5 CTD6 CTD7 Números de ciclos de marea 3 Figura 5.19. Desde arriba hacia abajo evolución temporal del desembalse medio diario (Alcalá del Rio en m /s), de la marea astronómica en Bonanza (m) promediada en un ciclo de marea semi-diurna y de la turbidez (FTU) promediada en un ciclo de marea semi-diurna (desde la desembocadura CTD0 hacia Sevilla CTD7). 5.4.6. Comportamiento anual/plurianual En el estuario del Guadalquivir la concentración de sólidos en suspensión depende de agentes forzadores con diferentes escalas espaciotemporales características. En la Figura 5.20 se muestra la variabilidad asociada a la marea a escala semi-diurna y de 14 días, así como la variabilidad a escala anual y plurianual debido a una variación no periódica como la descarga 3 desde Alcalá del Río. Tras el paso de la borrasca y la descarga asociada (Q f ,d > 500 m / s ) el sistema comienza la recuperación. El tiempo de recuperación depende de las condiciones mareales y atmosféricas que han tenido lugar antes durante y después de la descarga, así como de la magnitud de la misma. La Figura 5.20 sugiere que los tiempos de recuperación se dilatan cuando la descarga es de corta duración (<5 días) seguida de un periodo seco de dominio mareal (véase febrero 2009). Sin embargo, una descarga del mismo volumen de agua con valores punta menores y mantenidos durante más tiempo producirían, en general, picos de turbidez menores. En cambio, durante la temporada de lluvias del invierno 2009-2010 las descargas desde la presa 3 en cabecera han sido muy cuantiosas, superando los 2000 m / s y teniendo un potencial de puesta en suspensión muy superior a la de febrero de 2009, aunque el tiempo de recuperación 45 ha sido sustancialmente menor (del orden de 1/3 del anterior). Al estar las descargas sostenidas durante un mayor periodo de tiempo, la capacidad de limpieza del río también se ha visto considerablemente incrementada, además de la capacidad de puesta en suspensión. (a) Ciclo de marea Vaciante Llenante 1 día 0 24 horas Ciclo de marea viva y muerta (b) 1 mes 30 días 0 (c) Años Seco Húmedo (d) Figura 5.20. Registros diario (a) y mensual (b) de la turbidez en FTU medida en el CTD3. Registros anuales de 2 años de datos. Finalmente se presenta el desembalse desde la presa de Alcalá (c). 46 5.5. Variabilidad vertical y transversal 5.5.1. Distorsión mareal llenante – vaciante La asimetría de la onda de marea se manifiesta por la desigualdad de la duración de la pleamar y de la bajamar y la desigualdad de las velocidades máximas de llenante y vaciante. Su ocurrencia está relacionada con la generación de las sobremareas. En la Figura 5.21 se representan los datos de velocidad y nivel en las proximidades de La Horcada en el tramo donde se produce el equilibrio entre la fricción y la convergencia del cauce y donde la amplitud de la sobremarea es máxima; se observa que tanto la curva de la velocidad como la de nivel son asimétricas. Tal y como ocurre en estuarios friccionados con geometría convergente con poca llanura de inundación, domina el flujo de llenante sobre el de vaciante, la duración de la pleamar es menor que la bajamar y la velocidad en llenante es mayor que la de vaciante. El efecto de dicha distorsión en la dinámica de transporte de sedimentos en suspensión implica que corrientes más pronunciadas en llenante (Figura 5.16) pueden inducir una mayor resuspensión de sedimentos del lecho, que se transportan consecuentemente en el estuario. Las corrientes en vaciante, al ser más débiles producen una menor re-suspensión y transporte de sedimentos. El resultado final es un transporte residual neto de sedimentos hacia aguas arriba en el estuario. Figura 5.21. Asimetría de onda de marea (17 de octubre de 2008). Panel superior: TG4, panel inferior: ADCP3. La descarga fue de 7m 3 / s durante el periodo mostrado. 5.5.2. Asimetría transversal En zonas de gran curvatura del cauce se puede llegar a inducir una evolución helicoidal del flujo, siendo relevantes a escala local las componentes verticales y laterales de la corriente. En los tramos curvos, el flujo se acelera incrementando la erosión en la margen exterior de la curva. De ahí que las profundidades medias en esos puntos sean mayores que en el resto del perfil. En los tramos curvos del río el flujo experimenta el efecto de la fuerza centrifuga hacia el exterior. La magnitud de dicha fuerza depende del inverso del radio de curvatura medio R de las líneas de corriente y será máxima en las curvas con reducido radio de curvatura. Dicha fuerza hacia fuera genera una sobreelevación de la superficie libre en la parte exterior de la curvatura que a su vez producirá una fuerza barotrópica de compensación con una situación de balance que ocurre sólo si se considera un flujo promediado en la vertical (Véase Capítulo 6) 47 5.5.3. Velocidad de deposición Haciendo uso de los datos de CTDs y correntímetros es posible determinar la velocidad de deposición del sedimento (Eq.(3.8)). A partir de los datos de tensión tangencial en el fondo τb (Figura 5.22) en la zona de Tarfía (CTD4), calculado a partir de la ecuación de conservación de la cantidad de momento (véase Capítulo 3), se determina la velocidad de fricción en el fondo u * (Figura 5.23). Para ello, se promedia la serie de tensión tangencial en ciclos M2. Figura 5.22. Esfuerzo tangencial en fondo en la zona de Tarfía (entre mareógrafos B3 y B4) determinado según la ecuación de conservación del momento a partir de los datos observados. Figura 5.23. Velocidad de fricción en fondo determinada a partir del esfuerzo cortante en el fondo. 48 Asumiendo (i) concentraciones bajas de sedimento (no hay interacción del sedimento con el fluido), (ii) tasas de deposición y erosión pequeñas en comparación con el flujo horizontal de sedimento por unidad de área, (iii) ausencia de estructuras tridimensionales en el movimiento de agua (incluido flóculos) y (iv) la velocidad de deposición es constante (no depende de la coordenada vertical), se puede estimar la velocidad de fricción en el fondo. Estas condiciones se dan parcialmente en régimen mareal. En este caso, la concentración de sedimentos en la vertical sigue la ecuación siguiente, con una difusividad turbulenta parabólica y perfil de velocidad logarítmico en la vertical: β ⎡ a / h(1 − z / h ) ⎤ c ⎥ , =⎢ ⎢ z / h(1 − a / h ) ⎥ ca ⎣ ⎦ (3.21) σTWs , siendo Ws la ku * velocidad de deposición, σT ≈ 2 el número de Prandtl-Schmidt turbulento y k ≈ 0.41 la donde ca es una concentración de referencia en el punto z = a y β = constante de von Kármán. Mediante un ajuste por mínimos cuadrados de la concentración promediada en ciclo M2 en función de la profundidad (dado por los datos del CTD4, Figura 5.24), se determina el exponente β (Figura 5.25). Figura 5.24. Turbidez registrada en el CTD4 a profundidad z=-4m (cian), z=-3m (rojo), z=-2m (verde), z=-1 (azul). 49 ⎛ ⎞ Figura 5.25. Exponente β = σTWs / ⎜⎜ku * ⎟⎟⎟ determinado a partir del ajuste por mínimos cuadrados de la ⎝ ⎠ concentración en función de la profundidad según Eq.(3.21). Figura 5.26. De arriba a abajo: Esfuerzo tangencial instantáneo, turbidez promediada en ciclo semidiurno M2 a 1 (azul), -2 (verde), -3 (rojo) y -4m (cian) respecto de la superficie libre, exponente y velocidad de deposición. 50 * Conocidos β y u se determina la velocidad de deposición Ws , mostrada en la Figura 5.26. El β crece (decrece) durante las mareas muertas (vivas), al igual que la velocidad de deposición Ws , aunque en este segundo caso la tendencia no sea tan marcada. Esto significa exponente que durante las mareas muertas, cuando la velocidad de fricción del fondo es menor, la velocidad de deposición se incrementa, favoreciendo la deposición sedimentaria. Al contrario ocurre durante las mareas vivas. A pesar de las aproximaciones realizadas en el cálculo, el orden de magnitud resultante (Ws ∼ 0.1mm / s ) es el correspondiente a un alto contenido en finos, similar al que se tiene en la zona de Tarfía. El resultado está de acuerdo con los análisis granulométricos de Dragados y Construcciones en la zona de Tarfía (CTD4), cuyos resultados se presentan en la Tabla 5.4 Nº MUES TRA ... 306 338 339 340 341 LOCALIZACIÓN 345 353 357 Tarfía Tarfía Tarfía 0 1 5 39 34 51 61 65 44 358 Tarfía 6 51 44 372 373 375 394 Tarfía Tarfía Tarfía Atravesada Canal 0 0 0 5 3 3 3 78 97 97 97 17 397 ... Atravesada Canal ... 0 ... 1 ... 99 ... ... El Yeso Tarfía Tarfía Tarfía Tarfía % % ARENA GRUESOS (0.074-2 (>2 mm) mm) ... ... 0 5 1 89 0 1 0 1 1 34 % FINOS (<0.074 mm) ... 95 10 99 99 65 TEXTURA ... ARCILLA ARENA ARCILLA FANGOSA ARCILLA FANGOSA ARENA MUY COMPACTA ARENA FANGOSA ARENA ARENA CONCHIFERA ARENA CONCHIFERA ARCILLA ARCILLA ARCILLA ARENA CON CONCHAS ARCILLA FANGOSA ... Tabla 5.4. Análisis granulométrico de Dragados y Construcciones. Información facilitada por la Autoridad Portuaria de Sevilla. 5.6. Balances de sólidos en suspensión Para determinar el balance de material en suspensión en el estuario se hace uso, entre otros equipos, de los CTD instalados. Se considera que las medidas de cada CTD son representativas del tramo o volumen de control que lo contiene. Los tramos han sido definidos considerando los puntos medios entre cada dos CTDs. Los volúmenes que contienen los CTDs primero y último son simétricos respecto a cada CTD (véase Figura 5.27). Los datos de corriente y elevación necesarios para realizar el balance se han tomado, respectivamente, de los correntímetros y mareógrafos más cercanos a los CTDs. Los puntos donde se ubican los CTDs y la longitud de los respectivos tramos se muestran en la Tabla 5.5. 51 Punto km (km) Longitud tramo (km) CTD1 17.30 6.3 CTD2 23.60 4.45 CTD3 26.20 5.85 CTD4 35.30 10.45 CTD5 47.10 11.15 CTD6 57.60 18.6 CTD7 84.30 26.7 Tabla 5.5. Puntos kilométricos donde se ubican los equipos CTD en km (desde la Broa) y longitudes de los tramos correspondientes. Figura 5.27. Equipos CTD considerados y tramos que los comprenden, definidos por las líneas color cian. Cuánta masa de sedimentos en suspensión pasan de un tramo a otro y se depositan o resuspenden, se puede estimar a partir de los datos de los promedios a escala mareal (Figura 5.28) y submareal (Figura 5.29). A escala mareal se pierden las variaciones de alta frecuencia, pero se mantienen aquéllas asociadas a los ciclos de mareas vivas y muertas. Las variaciones a escala submareal retienen la información de los eventos extremos de turbidez. Figura 5.28. Promedio mareal M2 de densidad de sólidos en suspensión (SES) en de agua. 52 kg de sedimento por m3 Figura 5.29. Promedio mareal Msf (panel izquierdo) y Mm (panel derecho) de densidad de sólidos en suspensión en kg de sedimento por m3 de agua. Los extremos de turbidez están asociados a descargas desde Alcalá del Río. 5.6.1. Estimación del sedimento en suspensión en un evento de extrema turbidez En el evento de turbidez extrema del 11 de febrero de 2009, generado, entre otros factores, por 3 las descargas desde Alcalá del Río, con caudales punta de Q f ,d = 531.2 m / s , se alcanzó 9 una masa en suspensión total de Mmax ∼ 1.7 ⋅ 10 kg (Figura 5.30) en los 83.5kms que comprenden los CTDs. Toda esa masa de sedimento fino está suspendida en un volumen de agua de V ∼ 2.3 ⋅ 108 m 3 , estimado a partir de la sección media (a media marea) por tramo multiplicado por la longitud del tramo. Considerando que el material son finos y fango y que su densidad en seco es de ρDRY ∼ 1500 kg / m 3 , se tiene que la masa es suspensión ocuparía un volumen en seco de VSES ∼ M max / ρDRY = 1.17 ⋅ 106 m 3 . 53 Figura 5.30. Masa total (y masa acumulada por tramos) de sólidos en suspensión promediada en ciclos mareales M2 en los tramos considerados. Para estimar cuánto sedimento erosionado del fondo contribuye a Mmax habría también que estimar el sedimento aportado desde la cuenca, aunque el volumen es ciertamente muy inferior al aportado por resuspensión de material del fondo. Para no subestimar la variación de profundidad tras la descarga ( Δh ), hay que tener en cuenta que para hacer este cálculo, sólo se disponen de serie completas de datos de turbidez a -1m respecto de la superficie, que son inferiores a los medidos a 4m y en el fondo (la turbidez aumenta con la profundidad). Además, hay que considerar que la resuspensión no es uniforme porque el flujo que circula por la sección transversal tampoco lo es, luego, en realidad, la superficie erosionada efectiva sería mucho menor a la sección completa. Esto último daría lugar a Δh mayores en algunos lugares que en otros. A la hora de estimar Δh habría que considerar también el grado de compactación del fondo, tamaños de grano, humedad. Además, en los datos instantáneos registrados por los equipos CTDs se observa un recorte de los datos máximos por saturación de los equipos (véase Figura 5.31) ya que los aparatos sólo son capaces de medir un rango de turbidez. Eso significa que las concentraciones máximas de sólidos en suspensión fueron mayores que las registradas. 54 Figura 5.31. Sólidos en suspensión obtenidos a partir de los datos de turbidez registrados en el CTD2 a -1m de profundidad respecto de la superficie libre. 5.6.2. Flujos de sólidos en suspensión en régimen mareal Para predecir las características estuarinas es necesario cuantificar la circulación de agua y los procesos de mezcla. Esto se realiza calculando los flujos de material en suspensión entrantes y salientes a través de secciones y evaluando el intercambio de masa dentro del volumen de control entre cada dos secciones. Para realizar este cálculo se ha considerado una dinámica unidimensional y una situación estacionaria (bajos caudales de descarga). En esas condiciones, el flujo instantáneo de sólidos en suspensión se cuantifica de la siguiente manera: F= ∫ η −h uc dz , (3.22) η la elevación, u y c son, respectivamente, la velocidad y la concentración de sedimento en agua. Promediando F sobre el ciclo semidiurno M2 ( F ) donde h es la profundidad media y se tiene: F = h ⋅ u ⋅ c + c ⋅ η ⋅ u + u ⋅ η ⋅ c + h ⋅ u ⋅ c + η ⋅ u ⋅ c + h ⋅ uv ⋅ cv + η ⋅ uv ⋅ cv , (3.23) T1 T2 T4 T3 T5 T6 T7 donde: El promedio en la columna de agua de una magnitud ξ= ξ se define como: 1 ξ dz , h ∫−h η y en tal caso la magnitud instantánea se puede descomponer a cada profundidad (3.24) z como: 55 ξ = ξ + ξv . ξ se define como T +TM 2 1 ξ= ξ dt . TM 2 ∫T (3.25) El promedio en el ciclo semidiurno de Así pues una magnitud instantánea puede descomponerse (en cada ξ =ξ+ξ . (3.26) z ) como (3.27) Así, una magnitud promediada en la vertical se descompone como: ξ =ξ+ξ . (3.28) El término T1 del flujo promediado en el ciclo M2 (Eq.(3.23)) es la deriva no mareal o deriva Euleriana. El término T2 es el flujo asociado a la deriva de Stokes. Los términos T3, T4 y T5 son los del bombeo mareal o tidal pumping. Estos términos se producen por las diferencias de fase entre la concentración de sedimento, velocidad y elevación, consecuencia de los retardos por umbral de resuspensión y erosión. El término T6 es la circulación vertical por gravedad, que surge por la correlación entre (i) la corriente media hacia la cabecera y la concentración elevada de sólidos en el fondo y (ii) la corriente de superficie hacia la desembocadura y concentraciones bajas. El término T7 surge de las variaciones de los perfiles verticales de la velocidad y concentración en un ciclo mareal, debido, principalmente, a los retardos de deposición y lavado del sedimento. Los términos de tidal pumping suelen ser del mismo orden de magnitud que los de circulación gravitacional y, en mucho casos, dominan sobre los de la circulación residual. En el estuario del Guadalquivir no ocurre esto, siendo los términos de circulación gravitacional muy inferiores, lo cual es consistente con una estratificación muy baja de la columna de agua. En general, en estuarios bien mezclados los términos de bombeo mareal son dominantes, aunque en estuarios parcialmente mezclados la circulación gravitacional es importante. 5.6.2.1. Resultados A continuación se muestran las series temporales de cada uno de los términos del flujo de sólidos en suspensión promediados en ciclo semidiurno M2, estos son, los descritos en Eq.(3.23). El signo del flujo indica el sentido del transporte: positivo estuario arriba y negativo estuario abajo. En todos los equipos, los términos T 6 y T 7 asociados con la variabilidad vertical del flujo, son muy inferiores al resto, lo cual es consistente con un estuario bien mezclado y poco estratificado. El término dominante es el T 1 asociado a la deriva euleriana, superior al resto (en promedio), aunque puede verse compensado por la suma de los términos T 2 y T 4 que son del mismo orden de magnitud, como en el CTD2 (véase Figura 5.32). Estos últimos términos representan la correlación entre la elevación y la corriente (T 2 , deriva de Stokes), cuyo desfase induce un transporte neto, siendo en todos los casos positivo (dominio de la llenante) y (T 4 , tidal pumping), que está producido por el transporte inducido por el desfase entre la corriente y la distribución del sedimento, típicamente asociado a los retardos, respecto de la corriente, en la deposición del sedimento y en el lavado o dispersión por la columna de agua del material erosionado. Las variaciones de mareas vivas y muestras son claramente observables en la descomposición por términos. En algunos casos, el sentido del flujo puede cambiar dependiendo del ciclo; así, por ejemplo, en el CTD2 durante mareas vivas el flujo es hacia la desembocadura mientras que en muertas el sentido es de menor magnitud y de sentido hacia cabecera. En todos los casos, el término asociado a la deriva de Stokes es siempre positivo, indicando un flujo dirigido hacia la cabecera. En la Figura 5.33 se muestra el promedio durante el periodo de tiempo completo considerado en este análisis (desde el 22/07/2008 al 16/08/2008) para cada uno de los 7 términos. El panel 56 inferior más a la derecha representa el flujo neto, suma de todos los términos. En él, se puede observar que durante el régimen de aguas bajas el transporte de sedimentos es en todo el estuario hacia la cabecera (positivo), tendiendo a colmatar el estuario, con la única excepción del dato en el CTD3, que es negativo. Eso implica que la concentración de sedimentos en las zonas del CTD2 y CTD3 debe ser alta porque ahí confluyen los flujos de sedimentos. De hecho, es justamente en esa zona (Puntal - Esparraguera) donde se encuentra la presencia de uno de los dos máximos de turbidez. Figura 5.32. Descomposición del flujo medio mareal en el CTD2. Figura 5.33. Variación con la distancia a la desembocadura de los términos del flujo promediados en todo el intervalo temporal analizado. 57 5.7. Eventos de turbidez media y extrema: procesos generadores En este apartado se analizan las causas que han dado lugar a los sucesos de turbidez media ( 200 − 500 mg / l ) y extrema ( > 900 mg / l ), por ser las situaciones cuya persistencia implicaría serios problemas en la dinámica y ecología del sistema estuarino. 5.7.1. Situaciones desencadenantes Los agentes forzadores del sistema son, fundamentalmente, meteorológicos (de clima marítimo y terrestre) y debidos a la acción del hombre, si bien estos últimos pueden estar relacionados con la secuencia meteorológica terrestre aguas arriba de la presa (descargas desde la presa de Alcalá del Río). En principio, se distinguen varias situaciones a efectos de sucesos extremos, todas ellas asociadas a un forzamiento intenso y rápido del sistema, típicamente a causa del paso de una borrasca que origina, dependiendo del tipo y la trayectoria, cambios bruscos en las condiciones de turbidez y salinidad a lo largo del estuario. Estos son: Temporal en la costa: Situación caracterizada por la ausencia de precipitación mayoritaria en el estuario, jugando un importante papel las variables atmosféricas y oceánicas, concretamente, velocidad y dirección de viento en la costa y la altura de la marea. Borrasca en el estuario: Con influencia en la costa y precipitación significativa en el estuario, las variables atmosféricas, marítima y de operación en el estuario son: velocidad y dirección de viento, precipitación, altura de ola y descarga desde la presa de Alcalá del Río. Borrasca en la cuenca media y alta del Guadalquivir Corresponde a un estado de ausencia de precipitación o viento significativos en el estuario, pero sí aguas arriba del mismo, con la consiguiente descarga desde la presa de Alcalá del Río. A continuación, se muestran distintas situaciones ejemplo de estos escenarios, analizando las variables forzadoras que en cada caso han podido originar los episodios de turbidez, utilizando para ello el conjunto de series de datos de calidad de agua pertenecientes a las distintas redes de medida de las que se dispone de información. A la hora de examinar los episodios ocurridos se encuentra la dificultad de disponer de información de todas de variables para algunas fechas concretas, siendo mayor la carencia de información a medida que se retrocede en el tiempo. Nos centraremos en el análisis de los eventos más recientes, por disponer desde 2008 de datos con una frecuencia de muestreo mayor (un dato cada 30min), a partir de los registros continuos de turbidez y salinidad que arrojan las boyas tipo CTD instaladas por el ICMAN Los eventos moderados y extremos de turbidez están fuertemente correlacionados con las descargas de la presa de cabecera. En la desembocadura (CTD0), debido a la dilución con el agua del mar, la turbidez es moderadamente baja; aún así, la subida de la misma está correlacionada de forma directa con las descargas producidas desde la presa, aproximadamente, 1 mes antes. La turbidez en el CTD1 está principalmente determinada por la resuspensión de sedimentos por parte de la marea, ya que existen numerosos episodios de turbidez media o moderada que se corresponden con muy bajas descargas (inferiores a 58 50 m 3 / s ). No obstante, caudales superiores a 100 m 3 / s están correlacionados con la subida de turbidez, elevándola en la mayoría de las ocasiones por encima de los 2V. En los de CTD2 a CTD5 existen menos episodios de turbidez correspondientes a pequeñas descargas (lo que denota la menor influencia de la marea en la resuspensión, con respecto al CTD1); la mayoría de las descargas pequeñas generan turbidez media-baja, inferiores a 1.5V (CTD2), 1V (CTD3) y 0.5V (CTD4 y CTD5). En cualquier caso, las descargas superiores a 100 m 3 / s , siguen generando elevada turbidez en estos tramos del estuario. El en CTD6, ya en el tramo medio, la mayor correlación de la elevada turbidez con el caudal sucede a un umbral de descarga menor ( 100 m 3 / s ). En general, a medida que se avanza aguas arriba, el desfase entre los picos de descargas y de elevada turbidez es menor, lo que muestra el fenómeno de retención de sedimentos en los distintos tramos del estuario. 5.7.2. Descripción de eventos asociados al forzamiento mareal 5.7.2.1. Período I: desde el 04/04/2008 hasta el 03/06/2008 En la Figura 5.34, referida al período que va desde el desde 04/04/2008 hasta 03/06/2008, se muestran los siguientes datos: (i) caudales de Alcalá del Río, precipitación media en la estación meteorológica de Lebrija 1, (ii) marea astronómica en el puerto de Bonanza, (iii) altura de ola significante espectral, periodo de pico, dirección media de procedencia del oleaje, (iv) velocidad del viento, dirección media de procedencia del viento, simulados en el WANA frente a la desembocadura y, finalmente, valores de (v) salinidad y turbidez medidos a 1m desde la superficie libre por el equipo CTD de Cepillos (CTD1). Durante este período se tienen dos eventos de lluvia en la zona, con precipitación media que llega a ser de 10mm. A consecuencia de las lluvias se producen dos descargas importantes 3 desde la presa de Alcalá del Río, con picos que alcanzan los Q f ,d = 500 m / s . En la Figura 5.34 las líneas verticales rojas representan las descargas. Entre la primera y la segunda descarga se presenta una marea muerta, mientras que la segunda descarga coincide con un periodo de marea viva. En el mar ocurren dos temporales con altura de ola significante espectral superior a los 2m y periodo de pico de 10s procedente, en promedio, del sector Oeste. Durante este periodo vientos de intensidad moderada de 10 m/s rolan de 360º desde Norte hacia el Oeste. El valor de la salinidad medida en el CTD1 decrece después de la primera descarga, luego empieza a subir hasta que después de la segunda descarga baja nuevamente. El valor de la turbidez medida en el CTD1 decrece inmediatamente después de la primera descarga y se mantiene bajo durante la segunda descarga. Se ha tomado como ejemplo el CTD1, pero en la Figura 5.35 y la Figura 5.36 se representan para su comparación los valores de dichos parámetros en todos los equipos CTD disponibles (0-7). El efecto de los caudales desembalsados en el río es una reducción drástica del valor de la salinidad; la ocurrencia del segundo vertido ralentiza sustancialmente su proceso de recuperación. La salinidad sigue los ciclos de mareas viva y muerta, que se ven reflejados en los máximos y mínimos de la turbidez (comportamiento particularmente visible a partir de los CTD3, CTD5 y CTD6) y responde a la descarga con un tiempo de recuperación TD que crece a medida que nos desplazamos aguas arriba (véase Figura 5.35). El efecto combinado de la segunda descarga y de la marea viva 59 contribuye a resuspender sedimentos y sustancias dentro del río. Este efecto produce en el estuario un aumento de los valores de turbidez, que al cesar la última descarga se mantienen elevados a causa de la ocurrencia de una nueva marea viva; la única excepción a este comportamiento de la turbidez se encuentra en la zona más próxima a la desembocadura (CTD1) donde el valor de turbidez decrece y se mantiene bajo durante la segunda descarga. Esto se puede explicar considerando la conjunción de una serie de factores: (i) la ocurrencia de un ciclo de marea muerta que induce una re-suspensión de sedimentos reducida, (ii) las menores velocidades en el lecho debido a una ensanchamiento de la sección del río a medida que nos acercamos a la desembocadura, (iii) vientos moderados del orden de 10m/s que, virando 360º y rolando de N hacia W, aportan agua limpia profunda y ayudan a mezclar las aguas turbias del estuario con las limpias de mar abierto. DESCARGA DESCARGA M. V. M. M. TEMPORAL TEMPORAL VIENTO de W VIENTO de W Figura 5.34. Comparativa entre datos de caudal en Alcalá del Río (Q), precipitación media en la estación de Lebrija 1 (Prem), marea astronómica en el puerto de Bonanza (marH), altura de ola significante (Hm0), periodo de pico (Tp), dirección media de procedencia del oleaje (DirM), velocidad (VelV) y dirección del viento (DirV) simulados en el “ WANA” más cercano y valores de Salinidad (S) y Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1 para el periodo de estudio desde 04/04/2008 hasta 03/06/2008. 60 MAR TD TIERRA Figura 5.35. Comparativa entre valores de Salinidad (S) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) representados de arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde 04/04/2008 hasta 03/06/2008. 61 M. V. M. M. M. V. M. M. M. M. M. V. M. M. Tiempo de relajación del pico de avenida + M.V. Figura 5.36. Comparativa entre valores de Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) representados de arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde 04/04/2008 hasta 03/06/2008. 62 5.7.2.2. Período II: desde el 01/06/2008 hasta el 21/07/2008 En la Figura 5.37, se muestran, al igual que en el periodo anterior, los siguientes datos: (i) caudales de Alcalá del Río, (ii) precipitación media en la estación meteorológica de Lebrija 1, (iii) marea astronómica en el puerto de Bonanza, (iv) altura de ola significante espectral, dirección media de procedencia del oleaje, simulados en WANA frente a la desembocadura, (v) la velocidad del viento, dirección media de procedencia del viento y presión atmosférica, medidos en la estación meteorológica de Salmedina, finalmente (vi) valores de salinidad y turbidez medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1. Las líneas rojas acotan el episodio de viento NNE sostenido que dio lugar a la caída de turbidez en los registros. Durante este período las descargas desde la presa de Alcalá del Río son constantes, con valores medios de 50 m 3 / s y la altura de ola significante es inferior a 1m. Existen vientos fuertes del orden de 10 m / s , sostenidos durante unas 12-14 horas, de componente NNE superpuestos a una bajada local de la presión atmosférica medida en la estación meteorológica de Salmedina. La Figura 5.37 muestra una caída brusca de turbidez registrada en el CTD1 entre los días 9 y 12 de junio de 2008 (marcado con líneas verticales), que se manifiesta en un intervalo de tiempo del orden de 120 horas. La caída de turbidez sigue una ley exponencial pasando, en este intervalo de tiempo, desde 2 hasta 0.10 voltios, por lo que la expresión matemática en el tiempo resulta dada por la expresión c(t ) = 2 ⋅ e −0.0249⋅t . Los vientos que proceden del N tienen una corriente de Ekman asociada en dirección W (dando una resultante para la corriente de SW que, a su vez, genera surgencia y mezcla con agua salada profunda). Esta corriente abre la desembocadura extrayendo el agua turbia confinada en los primeros tramos del río, como queda registrado en el CTD1. La bajada local de presión atmosférica incrementa la mezcla con agua limpia procedente de mar abierto. Además, dicho fenómeno coincide con un ciclo de marea muerta que tiene una menor capacidad de resuspender el sedimento. En las siguientes 12 horas, el viento vira 360º en sentido anti-horario, rolando de N hacia W, luego S, E y N. El proceso se repite en las siguientes 12 horas, aunque no se completa el giro completo. Este giro progresivo se refleja en la Figura 5.38, imagen del día 11/06/08, donde se observan vórtices en la pluma y su grado de dispersión en la desembocadura. 63 M. V. Vientos del W M. V. Vientos del NNE Figura 5.37. Comparativa entre datos de caudal en Alcalá del Río (Q), precipitación media en la estación de Lebrija 1(Prem), marea astronómica en el puerto de Bonanza (marH), altura de ola significante (Hm0), dirección media de procedencia del oleaje (DirM), velocidad (VelV) y dirección del viento (DirV) simulados en el WANA frente a la desembocadura y valores de Salinidad (S) y Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1 para el periodo de estudio desde 01/06/2008 hasta 21/07/2008. Antes: fecha 08/06/2008, hora 10:41:42 64 Después: fecha 11/06/2008, hora 10:47:23 Figura 5.38. Imágenes vía satélite MERIS (ESA) antes y después de la caída de turbidez. La imagen tiene una luminosidad semejante puesto que ha sido tomada casi a la misma hora del día. En la imagen del día 8, la masa de agua turbia está mucho más confinada en el entorno de la desembocadura. La Figura 5.39 muestra la caída de turbidez registrada en mayor o menor medida en todos los equipos entre los días 9 y 12 de junio de 2008 (marcado con líneas verticales). Sin embargo, a medida que nos alejamos de la desembocadura, es menor el tiempo de relajación y la influencia de los agentes marinos. Esto es indicativo de que el proceso desencadenante del descenso brusco de la turbidez es de origen marino. Figura 5.39. Comparativa entre valores de Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) representados de arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde 01/06/2008 hasta 21/07/2008. 65 5.7.2.3. Período III: desde el 21/07/2008 al 21/09/2008 En la Figura 5.40, referida al período que va desde el 21/07/2008 hasta el 21/09/2008, se muestran los siguientes datos: caudal en Alcalá del Río, marea astronómica en el puerto de Bonanza y valores de temperatura salinidad y turbidez medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1. Se ha tomado como ejemplo el CTD1 pero el comportamiento de los demás CTDs es muy similar, como se muestra en la Figura 5.41 y la Figura 5.42 que presentan, respectivamente, una comparativa entre valores de salinidad y turbidez medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7). Para el CTD1 se presenta, además, la variación de dichos parámetros con la profundidad. Durante este período, las descargas desde la presa de Alcalá del Río son constantes y con valores medios de 25 m 3 / s . En la Figura 5.40 se observa el efecto de la marea, pudiéndose detectar claramente las correlaciones existentes entre la ocurrencia de las mareas vivas (periodo de máximo intercambio de agua entre río y océano, con velocidades de entrada y salida mayores) y los máximos en las envolventes de salinidad y turbidez y, análogamente, para el caso de marea muerta. Asimismo, se observa cómo durante mareas vivas los máximos de salinidad aumentan significativamente y disminuyen ligeramente los mínimos (primera línea roja). Las mareas vivas y muertas también dejan sentir su efecto en el registro de temperatura, aunque depende de la estación y, más concretamente, de la diferencia de temperatura del agua que entra desde mar abierto y el agua del estuario. Por ejemplo, la marea viva produce una reducción local de la temperatura (observar líneas verticales en el mes de verano de julio) debido a que, en ese periodo, el agua que proviene de mar abierto tiene menor temperatura que las aguas continentales. En cambio, en el mismo periodo, con mareas muertas la temperatura en el registro presenta máximos locales. La temperatura muestra además una tendencia al enfriamiento desde julio hasta septiembre. Figura 5.40. Comparativa entre datos de Caudales de Alcalá del Rio (Q), marea astronómica en el puerto de Bonanza (marH) y valores de Temperatura (T), Salinidad (S) y Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1, desde 21/07/2008 hasta 21/09/2008. 21/07/2008 hasta 21/09/2008. El cuadro inferior muestra la variación con la profundidad de la turbidez medida en el CTD1. La Figura 5.41 y la Figura 5.42 exhiben un comportamiento usual debido a la marea (aguas bajas). También en la Figura 5.16 se puede observar que la turbidez crece, generalmente, con 66 la profundidad. Asimismo se observa de nuevo cómo la turbidez se incrementa durante la mareas vivas y decrece con las muertas en toda la columna de agua 67 Figura 5.41. Comparativa entre valores de salinididad (S) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde el CTD0 hasta CTD7) para el periodo de estudio que va desde 21/07/2008 hasta 21/09/2008. El cuadro inferior muestra la variación con la profundidad de la salinidad medida en el CTD1. 68 Figura 5.42. Comparativa entre valores de Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde el CTD0 hasta CTD7) para el periodo de estudio que va desde 5.7.2.4. Período IV: desde el 30/08/2008 al 18/11/2008 En la Figura 5.43 se muestra los siguientes datos desde 30/08/2008 hasta 18/11/2008: (i) caudales en Alcalá del Río, (ii) marea astronómica en el puerto de Bonanza, (iii) velocidad y dirección de viento, presión atmosférica en Salmedina, (iv) valores de salinidad (S) y turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD0 y (v) altura de ola significante espectral, periodo de pico y dirección media del oleaje frente a la desembocadura (WANA). La primera línea roja indica el paso de borrascas en la zona de estudio, que da lugar a vientos del orden de 20 m / s con direcciones de NNE. Este fenómeno favorece la emergencia de aguas profundas saladas dando lugar a un incremento leve de la salinidad a causa del fenómeno de surgencia y a un descenso de la turbidez (véase Periodo II). Nótese que, en el segundo caso (segunda línea roja) se generan también vientos muy intensos con dirección rolando desde NW hasta WSW, pero esto ocurre en un periodo entre mareas vivas y muertas que da lugar a mínimos de salinidad porque favorecen el intercambio de masas de agua entre mar abierto y estuario. Por tanto, en este último caso la marea fue capaz de contrarrestar el efecto de emergencia anteriormente definido. 69 Figura 5.43. Comparativa entre datos de caudales (Q) en Alcalá del Rio, de marea astronómica en el puerto de Bonanza (marH), velocidad de viento (VelV), dirección de viento (DirV), presión atmosférica (Ps), altura de ola significante espectral (Hm0), periodo de pico (Tp) y dirección media del oleaje (DirM) frente a la desembocadura (WANA3) y valores de Salinidad (S) y Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD0, desde 30/08/2008 hasta 18/11/2008. El mismo comportamiento se observa en la Figura 5.44 que muestra, para el periodo seleccionado, los valores de salinidad medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs desde 0 hasta 7 ubicados a lo largo del río. El incremento de salinidad a causa del primer evento de borrasca resulta más evidente a medidas que nos alejamos de la desembocadura. Asimismo, se hace más evidente la bajada de salinidad inducida por efecto de la descarga. Es decir, en la zona más cercana a la desembocadura los valores de salinidad no sólo se ven afectados por los aportes del río sino también por los aportes marinos y por el efecto del oleaje que llega con valores de altura de ola significante del orden de 2m. El descenso de salinidad inducido por efecto combinado del río y de la marea se refleja en todos los CTDs, excepto en el último. En la Figura 5.44 se muestra el descenso relativo de la salinidad frente al caudal del río, que pasa desde 13 g/l en el CTD0 hasta 1 g/l en el CTD6. 70 ΔS=13 g/l ΔS=12 g/l ΔS=6 g/l ΔS=1 g/l Figura 5.44. Comparativa entre valores de salinididad (S) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7, por orden de arriba abajo) representados de arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde 30/08/2008 hasta 18/11/2008. 5.7.2.5. Período V: desde el 12/01/2009 al 12/03/2009 En la Figura 5.45 se muestra los siguientes datos: caudales en Alcalá del Río, precipitación media en la estación RIA de Lebrija 1, marea en el mareógrafo de Bonanza, parámetros atmosféricos en Salmedina, parámetros de oleaje simulados en el WANA 3 frente a la desembocadura (altura significante, periodo de pico, dirección media), y valores de salinidad y turbidez medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1; representados de arriba hacia abajo, para el periodo de estudio que va desde 12/01/2009 hasta 12/03/2009. 71 PULSOS TEMPORAL DESCARGA Figura 5.45. Comparativa entre datos, de arriba abajo, de Caudales de Alcalá del Rio (Q), precipitación media en la estación Ría de Lebrija 1 (Prem), marea en el mareógrafo de Bonanza (MarH), parámetros atmosféricos (VelV, DirV, Ps) en Salmedina, parámetros de oleaje (Hmo, TP, DirM) en el WANA3 y valores de Salinidad (S) y Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1 para el periodo de estudio que va desde 12/01/2008 hasta 12/03/2009. En este caso, durante el periodo de estudio se observan fuertes lluvias asociadas al paso de una borrasca en el estuario (precipitación media del orden de 10mm). A causa de dicha precipitación, superpuesto a vientos persistentes de componente media hacia tierra y a la consiguiente descarga de ∼ 500 m 3 / s desde la presa de Alcalá, se registra una drástica reducción del valor de la salinidad. Se observa el efecto amplificador inducido por parte de la ocurrencia de una marea viva después de la descarga, periodo durante el cual los sedimentos son resuspendidos por las elevadas velocidades. Se observa que la siguiente marea muerta hizo decrecer considerablemente la turbidez, que luego vuelve a incrementarse en la siguente marea. 72 Finalmente, se presenta en la Figura 5.46 y la Figura 5.47 los valores de salinidad y turbidez medidos a 1m desde la superficie libre para todos los CTDs durante el periodo considerado, observándose un comportamiento similar de ambas variables, que disminuyen a medida que nos alejamos de la desembocadura. Análogamente, existe una correlación entre los valores de turbidez capturados a lo largo de todo el estuario (desde el CTD0 hasta el CTD7), que registran un incremento después de la descarga. DESCARGA Figura 5.46. Comparativa entre valores de Salinidad (S) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) para el periodo de estudio que va desde 12/01/2009 hasta 12/03/2009. 73 Figura 5.47. Comparativa entre valores de Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) para el periodo de estudio que va de 12/01/2009 hasta 12/03/2009. 5.7.2.6. Período VI: desde el 12/03/2009 al 12/06/2009 Del mismo modo que en los periodos anteriores, en la Figura 5.48, referida al período que va desde el desde 12/03/2009 hasta 12/06/2009, se muestra respectivamente desde arriba hacia abajo los siguientes datos de caudal en Alcalá del Río, precipitación media medida en la estación RIA de Lebrija, marea astronómica en el puerto de Bonanza, altura de ola significante espectral, período de pico, dirección media de procedencia del oleaje simulado en el punto WANA ubicado frente a la desembocadura, velocidad y direcciones medias del viento, presión atmosférica medida en la estación meteorológica de Salmedina, finalmente, salinidad y turbidez medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1. Durante dicho período, el río se encuentra en condiciones normales de aporte de agua dulce, con valores desembalsados inferiores a 100 m 3 / s , y la circulación en el estuario está regulada por la propagación de la onda de marea. Las líneas rojas acotan 3 eventos que 74 inducen refuerzo mareal por el viento (del orden de 10 m / s ) y producen incremento de la salinidad y descenso de turbidez en el CTD Cepillos (CTD1). Esto permite concluir, como anteriormente se ha evidenciado (véase Periodo II), que dichos vientos tienen una corriente de Ekman asociada que genera surgencia y mezcla con agua limpia profunda salada produciendo un incremento de la salinidad. Esta corriente abre la desembocadura extrayendo el agua turbia confinada en los primeros tramos del río, como queda registrado en el CTD1. La Figura 5.48 muestra además que las condiciones meteorológicas exteriores y el oleaje que se genera por el viento propagándose por el estuario elevan ocasionalmente los valores de turbidez, aunque esto habría de ser confirmado mediante una campaña de campo específica. Es importante resaltar cómo la ocurrencia de lluvia local (círculo rojo en la figura) podría tener influencia en la reducción de la turbidez. A partir del 12 de mayo existe una descarga uniforme del orden de 50 m 3 / s que, como muestra la gráfica, reduce progresivamente el valor de la salinidad y contribuye a mantener bajos los valores de turbidez. Descarga uniforme Lluvia local Vientos hacia el mar Figura 5.48. Comparativa entre Caudal en Alcalà del Rio (Q), precipitación media en la estación Ria de Lebrija (Prem), marea astronómica en el puerto de Bonanza (marH), altura de ola significante espectral (Hm0),periodo de pico (Tp), dirección media de procedencia (DirM) del oleaje simulado en el punto “WANA” , velocidad (VelV) 75 y direcciones (DirV) medias del viento, presión atmosférica en Salmedina y , finalmente, Salinidad (S) y Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por el CTD1 (Cepillos). Las líneas rojas acotan los dos eventos de viento hacia el mar que dieron lugar a la caída de turbidez. Figura 5.49. Comparativa entre valores de Salinidad (S1) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) representados de arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde 12/03/2009 hasta 12/06/2009. 76 Figura 5.50. Comparativa entre valores de Turbidez (Tur) medidos a 1m desde la superficie libre por los CTDs ubicados a lo largo del cauce principal (desde CTD0 hasta CTD7) representados de arriba hacia abajo para el periodo de estudio que va desde 12/03/2009 hasta 12/06/2009. En la Tabla 5.6 se muestran valores de caudal en Alcalá del Río, turbidez, salinidad y temperatura medidos a la profundidad de 1 m desde la superficie libre por los CTD1, CTD3 y CTD4 y CTD6. Los parámetros de oleaje (altura de ola significante espectral, periodo de pico y dirección media de procedencia simulados en el nodo WANA1054047) y los parámetros atmosféricos (modulo de velocidad de viento, dirección media de procedencia del viento, presión atmosférica) medidos en la estación meteorológica de Salmedina se presentan en la Tabla 5.7, y permiten caracterizar las condiciones oceanográficas y atmosféricas en el exterior del estuario. Los valores presentados en ambas tablas han sido obtenidos a partir de datos capturados durante la ocurrencia de una bajamar (Mín. en las tablas), de una pleamar (Máx. en las tablas) y de un punto intermedio entre bajamar y pleamar (cero en las tablas). Los valores se han obtenido para una marea viva (M.V. en las tablas) y una marea muerta (M.M. en las tablas). Para identificar dichos instantes se ha empleado un registro de marea astronómica medido en puerto de Bonanza el día 25 de mayo de 2009 (periodo de marea viva) y el día 02 de junio de 2009 (periodo de marea muerta). La Figura 5.51 muestra la curva de marea 77 astronómica empleada, los círculos rojos en la gráfica muestran los instantes donde se han realizado las medidas de los parámetros climáticos. Alcalá (Q- m3/s) CTD1 (S- g/l) CTD1 (Tur-Volt) CTD1 (T-°) CTD3 (S- g/l) CTD3 (Tur-Volt) CTD3 (T-°) CTD4 (S- g/l) CTD4 (Tur-Volt) CTD4 (T-°) CTD6 (S- g/l) CTD6 (Tur-Volt) CTD6 (T-°) Mín (M.V.) Cero (M.V.) Máx (M.V.) Mín (M.M.) Cero (M.M) Máx (M.M) 60.32 61.04 61.94 34.94 35.55 36.39 21.35 17.32 26.02 18.77 16.42 22.89 0.81 0.28 0.46 0.54 0.28 0.36 21.23 21.77 21.57 22.56 22.58 22.16 15.74 12.76 17.49 12.97 11.05 15.33 0.68 0.29 0.59 0.39 0.36 0.40 21.23 21.73 21.85 23.00 22.81 22.52 11.79 8.73 12.74 9.72 8.14 10.98 0.98 0.49 0.58 0.24 0.27 0.29 21.28 21.88 22.05 23.20 23.12 22.67 4.28 2.69 4.42 3.73 2.59 4.26 0.35 0.19 0.30 0.17 0.12 0.20 21.85 22.59 22.55 23.78 23.81 23.48 Tabla 5.6. Comparativa de parámetros medidos a lo largo del cauce principal del estuario del Guadalquivir. Mín Cero (M.V.) (M.V.) WANA3 (Hm0-m) WANA3 (Tp- s) WANA3 (DirM-°) SALM (Ps-mbar) SALM (VelV- m/s) SALM (DirV-°) Máx Mín Cero (M.V.) (M.M.) (M.M) Máx (M.M) 0.50 0.41 0.40 0.73 0.64 0.67 4.30 4.39 4.4 4.27 4.3 4.23 248.00 250.00 253.00 247.00 247.00 248.00 1020 1020 1018 1016 1016 1017 2.04 3.92 6.48 5.01 6.18 5.88 278 248 249 222 223 221 Tabla 5.7. Comparativa de parámetros medidos y simulados fuera de la desembocadura 78 Figura 5.51. Curva de marea astronómica medida en el puerto de Bonanza durante el periodo 25 de Mayo de 2009 - 05 de Junio de 2009. Los círculos rojos representan los instantes donde se han tomado las medidas de los parámetros climáticos representados en la Tabla 5.6 y la Tabla 5.7. Se ha observado que durante este período la precipitación ha sido escasa y, como consecuencia, las descargas desde la presa de Alcalá del Río constantes y con valores medios del orden 50 m 3 / s . La altura de ola significante durante el periodo fue siempre inferior a 1 m, con vientos principalmente del oeste de intensidad variable, entre 5 m / s y 10 m / s . La Tabla 5.6 muestra que la salinidad sigue los ciclos semi-diurnos de la marea con valores más elevados en los máximos de los niveles simulados en marea viva y marea muerta por el mareógrafo de Bonanza. La evolución temporal de la salinidad en un ciclo de marea semidiurno en marea viva y marea muerta muestra cómo máximos de salinidad y máximos de niveles presentan un desfase temporal, asociado al desfase entre velocidad y elevación. La Tabla 5.6 también muestra que la turbidez presenta un valor mínimo en las estoas de llenante y vaciante, pues coincide con los instantes en los que el esfuerzo tangencial en el fondo es nulo. Además, se puede apreciar que el módulo de la turbidez presenta dos picos (máximos absolutos) en un ciclo de marea que se corresponden a los máximos y mínimos de la curva de nivel y mínimo que se corresponde con los ceros de nivel. 79 5.8. Conclusiones parciales y trabajo futuro En este informe se han mostrado las escalas espaciotemporales y magnitud de los procesos mareales, fluviales, atmosféricos y oceánicos que gobiernan la dinámica de la turbidez y los sólidos en suspensión. Se ha descrito el marco teórico, las variaciones cíclicas de origen mareal a las que están sujetos y su variabilidad según el eje longitudinal del estuario y en la vertical. Se han calculado las velocidades de deposición del sedimento y los flujos de masa que gobiernan el movimiento del material en suspensión a lo largo del estuario, a saber, la deriva no mareal, deriva de Stokes, los términos de bombeo mareal y aquéllos asociados a la circulación vertical. Se han identificado eventos concretos de turbidez y se han explicado a partir de los forzamientos generadores y desencadenantes. El aporte de sólidos en suspensión al estuario proviene de distintas fuentes. La entrada de sólidos desde el mar depende de las condiciones oceanográficas en el exterior del estuario, principalmente, por el incremento de la capacidad de puesta en suspensión de las dinámicas de oleaje y viento y de la forma de la pluma de descarga. En el cauce del estuario y en condiciones normales se produce, por el efecto de la circulación mareal y fluvial, la resuspensión de sedimentos y la decantación de los flóculos por la acción gravitatoria en el seno del agua. Durante las avenidas y algunas mareas vivas, además, se produce la erosión del lecho y, en consecuencia, el incremento de la masa de sedimentos circulando por el estuario. Consecuencia de esto es que la turbidez es mayor cerca del fondo que en superficie. Estas cantidades se completan con las procedentes de la erosión de las márgenes y de las aportaciones desde los caños, los esteros y las acequias de riego. Las descargas fluviales llevan asociadas, también, una descarga de sólidos en suspensión cuya cantidad total depende de las condiciones de la descarga, de la regulación y control de los embalses del río por exceso de lluvia y del tiempo transcurrido desde la última descarga. En régimen de aguas bajas, la turbidez y los sólidos en suspensión están controlados por la dinámica mareal horizontal y vertical. Según las características geométricas e hidrodinámicas del estuario, la dinámica y transporte del material en suspensión es un proceso eminentemente unidimensional, aunque localmente puede haber efectos bidimensionales de importancia, especialmente, en los tramos con radios de curvatura pequeños. Los armónicos dominantes en los procesos de turbidez son aquellos a escala semidiurna (M2), submareal (Msf) y sobremareal (M4). El primero de ellos responde al dominio dinámico de esta constituyente en el estuario. Las variaciones submareales redundan en una variación importante de material en suspensión a lo largo del tiempo entre mareas vivas y muertas. Los esfuerzos de corte mayores que tienen lugar durante mareas vivas tienen una mayor capacidad de resuspender el sedimento del fondo. Igualmente, en el ciclo mareal se producen varios máximos de turbidez asociados, principalmente, a las corrientes llenantes y vaciantes y, en segundo lugar, a los desfases entre resuspensión, lavado y deposición del sedimento (constituyente M4). Los máximos relativos de turbidez en un ciclo semidiurno no son simétricos debido a la distorsión mareal asociada, fundamentalmente, a la fricción en fondo y márgenes. Asimismo, la distorsión mareal y el carácter progresivo de la propagación de la onda de marea da lugar a flujos de entrada positivos, es decir, existe un transporte neto de sedimentos hacia dentro del estuario, excepto entre la zona de Esparraguera y Tarfía. En cuanto a la distribución longitudinal promediada en el ciclo semidiurno, hay dos máximos de turbidez registrados por los instrumentos. El primero está ubicado en el tramo entre El Puntal – Esparraguera y el segundo estuario arriba entre El Mármol y Sevilla. Este último es debido a la dinámica estacionaria dominante en el último tramo del estuario y al punto nulo de la intrusión salina. La ocurrencia del primero está inducida por flujos convergentes de masa, entrantes en El Puntal y salientes en Esparraguera. Como ya se explicó en el Capítulo 3, dinámicamente, el estuario transita entre un escenario de aguas bajas y de avenida. Las condiciones de avenida se dan, habitualmente, entre los meses de octubre y abril, mientras que las condiciones de bonanza meteorológica y vientos persistentes marinos se dan a lo largo de todo el año. En ocasiones se produce el doble suceso: avenida y temporal en el mar cuyo comportamiento se traduce en un incremento de la capacidad de suspender sólidos y, dependiendo de las condiciones en la desembocadura, 80 concretamente debido a viento y al transporte de Ekman asociado, en un evento extremo de turbidez. Este comportamiento no es exclusivo del Guadalquivir, habiéndose dado previamente en otros estuarios. La correlación entre eventos de extrema turbidez y descargas desde Alcalá del Río también ha sido puesta de manifiesto en el Capítulo 2. Los eventos extremos de turbidez afectan, prácticamente, a la totalidad del estuario. En particular, el episodio de noviembre de 2007 - junio de 2008 se activa con una avenida en el río a finales de noviembre, tras un largo periodo estival sin lluvias, seguida de varias descargas de menor magnitud y espaciadas a lo largo del tiempo; en los largos intervalos de tiempo entre las descargas fluviales, las aportaciones de agua dulce fueron mínimas. Del lado del mar se presentaron vientos persistentes en la desembocadura, principalmente provenientes del Estrecho durante largos periodos de tiempo. La conjunción de ambas secuencias, propiciaron el incremento brusco de sólidos en suspensión durante las descargas fluviales, la reducción de la capacidad de limpieza por reducción del caudal fluvial y de las componentes mareales que colaboran en ello, y el incremento de la acción mareal hacia el interior por la presencia de la onda de Ekman generada por el viento y la resuspensión producida por el oleaje. Adicionalmente, como consecuencia del refuerzo mareal por el viento, se produjo un incremento de la salinidad en el estuario. En febrero 2009 vuelve a repetirse la situación anterior. La turbidez decrece bruscamente en los dias 9 y 12 de junio de 2008 debido, fundamentalmente, al desbloqueo de la desembocadura y la mezcla con aguas surgentes por vientos con componente de Ekman Oeste. Como trabajo futuro, sería deseable poder realizar varias campañas de campo de detalle. Una de ellas sería una campaña batimétrica en el tramo entre Sevilla y la presa de Alcalá del Río para detectar barras o concentraciones elevadas de sedimentos inducidas por la dinámica estacionaria en ese tramo del estuario. Otra campaña de detalle estaría dedicada a la recogida sistemática de sedimentos del fondo en el canal de navegación y las márgenes para determinar hasta donde alcanza el sedimento de origen mareal. Finalmente, comparar mediante batimetrías los efectos de las descargas de la presa de Alcalá del Río en las alteraciones morfológicas en el lecho del cauce. 81