Declaración Final de la Conferencia Internacional “Construyendo un mundo libre de Armas Nucleares” Adoptada en Astaná, el 29 de agosto de 2016 “El 29 de agosto de 1999, hace precisamente 25 años, el Presidente Nursultan Nazarbayev de Kazajistán junto con el apoyo del movimiento popular de la sociedad civil contra las pruebas nucleares cerraron el sitio de pruebas de Semipalatinsk, siendo el primer paso en su tipo en la historia mundial del desarme. Las 456 explosiones nucleares que llevó a cabo la Unión Soviética en el sitio de pruebas de Semipalatinsk en Kazajastán Oriental han tenido un impacto catastrófico en la salud humana y el medio ambiente tanto para las generaciones actuales como para las futuras. El legado de las pruebas nucleares en todo el mundo, incluyendo el Pacífico, Asia, Africa del Norte y Norte América además de las experiencias de los bombardeos nucleares de Hiroshima y Nagasaki y el riego de usar accidentalmente armas nucleares, por malos cálculos o por diseño establecen un imperativo global para abolir estas armas. Elogiamos el liderazgo del Presidente Nazarbayev y al pueblo de Kazajastán por renunciar de manera voluntaria al cuarto arsenal nuclear más grande del mundo, unirse al Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (TPCE), lograr una Zona Libre de Armas Nucleares en Asia Central y lanzar El Proyecto ATOM que tiene como finalidad educar al mundo sobre los peligros y consecuencias de largo aliento que tienen las pruebas nucleares, además de hacer que las Naciones Unidas establezca el 29 de agosto como el Día Internacional Contra las Pruebas Nucleares y adoptar una Declaración Universal por un Mundo Libre de Armas Nucleares, el año 2015 y promover un Manifiesto “El Mundo en el Siglo XXI” para terminar con el flagelo de la guerra. Apoyamos las ambiciosas intenciones expresadas en el Manifiesto que el principal objetivo de la humanidad en el siglo XXI debería ser tener un mundo libre de armas nucleares y que se debería lograr para el centenario de las Naciones Unidas en el 2045. Felicitamos a los líderes del mundo por tomar acciones a través de una serie de Cumbres de Seguridad Nuclear, además de otras acciones internacionales para evitar que las armas nucleares o sus componentes caigan en manos de terroristas. Sin embargo, los líderes mundiales deberían unirse al Presidente Nazarbayev y colocar una prioridad similar al alto al desarme nuclear. Deploramos las continuas pruebas de armas nucleares llevadas a cabo por la República Popular Democrática de Corea y manifestamos nuestra preocupación por la continua modernización de las armas nucleares por parte de todos los Estados poseedores de armamento nuclear. Considerando la creciente tensión que existe entre estos Estados, un incidente militar accidental o intencional podría llevar al mundo a una espiral de confrontaciones nucleares desastrosa. Reconocemos la especial responsabilidad de la legislación y de los legisladores alrededor del mundo para hacer mayores progresos en la no proliferación nuclear y el desarme a nivel mundial y para la adopción de una legislación de importancia. Felicitamos a la República de Kazajastán al ser elegida como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) para el periodo 2017-2018. Estamos seguros que Kazajastán trabajará de manera muy estrecha con los miembros del Consejo de Seguridad para evitar la proliferación nuclear y avanzar hacia la paz y la seguridad de un mundo libre de armas nucleares. Apoyamos la iniciativa planteada en esta conferencia por el Presidente Nazarbayev para establecer un premio de carácter internacional para premiar las contribuciones sobresalientes en materia de desarme nuclear y lograr un mundo libre de armas nucleares además del anuncio de la Cumbre de Paz de Astaná en 2016. Recibimos con beneplácito el progreso hecho por el Grupo de Trabajo de composición abierta sobre hacer avanzar las negociaciones multilaterales de desarme nuclear e instamos a los gobiernos del mundo a hacer más. Nosotros - en nuestra calidad de legisladores, líderes religiosos, representantes de organizaciones internacionales, académicos, científicos, profesionales de la salud, abogados, jóvenes y demás representantes de la sociedad civil – hacemos un especial llamado a los gobiernos a: 1. Firmar y ratificar el TPCE, en especial los Estados poseedores de armas nucleares, si aún no lo han hecho, considerando el simbolismo de esta conferencia que se realiza en el 25º aniversario del cierre del sitio de pruebas nucleares de Semipalatinsk y el 20º aniversario de la firma del TPCE; 2. Iniciar negociaciones y discusiones significativas de acuerdo con el Plan de Acción del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares (TNP) adoptado en 2010 y la obligación universal de negociar el desarme nuclear total ratificado por la Corte Internacional de Justicia en 1996; 3. Establecer un Zona en Medio Oriente libre de Armas Nucleares y otras Armas de Destrucción Masiva tal como se acordó en la Conferencia de Examen y Prórroga de 1995, y hacer un llamado al Secretario General de las Naciones Unidas a promover el cumplimiento de este Mandato; y establecer zonas libres de armas nucleares adicionales en áreas como en el norte de Asia Oriental, Europa y el Ártico; 4. Reducir el riesgo del uso de armas nucleares al retirarle a todas las fuerzas nucleares el estado de alta disponibilidad operacional adoptando las políticas de no ser los primeros en usar las armas y absteniéndose de amenazar con el uso de las armas nucleares; 5. Implementar completamente sus tratados y obligaciones consuetudinario para lograr tener cero armas nucleares; de derecho 6. Comenzar las negociaciones multilaterales en el 2017 para eliminar y prohibir las armas nucleares; 7. Apoyar medidas provisionales dispuestas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en relación al desarme nuclear incluyendo la prohibición de las pruebas nucleares y tener como objetivo nuclear zonas pobladas; 8. Desarrollar otros métodos y mecanismos para ratificar y hacer cumplir el desarme nuclear mundial incluyendo la participación en la Alianza Internacional para la Verificación del Desarme Nuclear; 9. Eliminar de las doctrinas de seguridad la dependencia en la disuasión nuclear y en su lugar resolver los conflictos internacionales por medio de la diplomacia, la ley, los mecanismos regionales, las Naciones Unidas y otros medios pacíficos; 10. Apelar a los estados poseedores de armas nucleares para que se comprometan a realizar profundos recortes en sus arsenales nucleares con el objeto de eliminarlas por completo lo antes posible y definitivamente antes del 100º aniversario de las Naciones Unidas. Estamos preparados para apoyar y cooperar con los gobiernos para abolir las armas nucleares. La cooperación entre los diferentes participantes de este evento internacional entrega una plataforma para construir el movimiento mundial para lograr el desarme nuclear. Al estar profundamente preocupados por el futuro de la humanidad y alentados por el ejemplo de Kazajistán en relación al desarme nuclear, ratificamos la posibilidad y la necesidad de alcanzar la paz y seguridad de un mundo libre de armas nucleares durante el curso de nuestras vidas”.